OBJETIVOS

Hemos tomado como grupos de análisis por una parte a la comunidad terapéutica de

Colombia, y por otra parte a dos familias bogotanas,

En el primer caso pretendemos describir los tipos de conductas desviadas según el tipo de

adaptación individual y el grado de anomia que tenga cada uno de los miembros, con tres

casos claros sobre conducta desviada.

En el segundo caso queremos establecer los lineamientos teóricos para analizar un conflicto

determinado, determinar todas las fases por las que atraviesa, y aplicarlas al nuestro en

particular, tratando de evaluar todos los aspectos, causas y posibles efectos.

Otro de los objetivos planteados, aunque un poco más difícil de alcanzar, debido a que no

somos mediadores o no solucionaremos el conflicto directamente, es el de plantear posibles

soluciones al conflicto en cuestión.

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INTRODUCCIÓN

Durante el tratamiento de adicción a las drogas, se habla continuamente de la necesidad de

ser honestos. Es importante preguntarse el por que del énfasis sobre la honestidad ¿Cuál es

la gran significación que hace la honestidad tan crucialmente importante? Aunque se hable

repetidamente de honestidad, dado que es la palabra que expresa la actitud y la motivación

deseada, no es la honestidad como fin en si mismo lo que es importante sino mas bien

aquella condición que es favorecida y alimentada por la honestidad, y sin la cual la

comunidad Terapéutica no podría ser eficaz, es decir la confianza ( Honestidad como

fundamento de la confianza) Cuando se habla de ambiente terapéutico de la COTECOL se

habla de un ambiente en el cual las personas aprenden antes que nada a reconocerse, luego

a respetarse y finalmente a fiarse de los demás.

Después de haber interiorizado la Honestidad, podemos deducir que los objetivos

propuestos de parte de la comunidad hacia los residentes van encaminados hacia el

conocimiento de si mismo, basándose en que el paciente que llega a comunidad por

diferentes causas, se encuentra desorientado, lo cual es tratado en la primera etapa llamada

“Acogida”, de la mano de un terapeuta, por lo que es importante el reconocer el problema

que se tiene y a partir de ello, al residente se le adecua al sistema de normas y valores que

rigen a la comunidad (antes explicados en el trabajo anterior “Definición de Grupo”).

Ya inducido el residente en este aspecto, es remitido a la segunda Etapa “Internado”, el cual

se enfoca a la interacción de grupo, donde es casi imposible aislarse a si mismo dentro del

grupo, ha de ser activo en su implicación y así recibe señalamientos (confrontaciones) sobre

su conducta y actitudes. El residente aprende a desenvolverse en distintos roles sociales

dentro de esta etapa (explicados en el anterior trabajo), para luego reinsertarse socialmente,

con autonomía alimentada durante el tratamiento transcurrido, para realizar constantemente

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introspecciones de su propia conducta, aceptando las consecuencias de las mismas; a esta

etapa se le denomina “Reinserción”.

Más adelante profundizaremos sobre estas etapas cruciales en el proceso del residente.

El conflicto se ha presentado en los hombres desde que éste no vive solo, es decir, que la

presencia de otro ser humano supone que en algún momento pueden entrar en conflicto, si

se relacionan de alguna manera.

La teoría del conflicto nos dice que la realidad esta sometida a hechos conflictivos, debido a

la misma vida en sociedad, y que para que exista un conflicto las dos partes afectadas deben

percibir la existencia del mismo. En palabras de Stephne Robbins, se define el conflicto

como “Un proceso que se inicia cuando una parte percibe que otra la ha afectado de

manera negativa, o que está a punto de afectar de manera negativa, alguno de sus

intereses”.

El enfoque interactivo moderno dado a la teoría del conflicto dice que éste es algo “natural”

y que es bueno fomentarlo en cierta medida, en un grado manejable para incentivar la

creatividad, la disposición al cambio, la toma de decisiones, el trabajo en equipo, en fin,

todo aquello que pretenda alcanzar metas en determinado tiempo.

El conflicto en si no es bueno ni malo, sino que las reacciones o consecuencias que se

deriven del mismo son las que determinan si el conflicto es bueno o es malo.

Esto nos lleva a clasificar los conflictos en dos grupos, dependiendo de qué puede hacer

éste por las partes afectadas: Conflictos funcionales y disfuncionales.

Entre los conflictos funcionales se encuentran los que permiten fomentar la creatividad de

las partes, o los que posibilitan un medio para hacer aflorar los problemas, eliminar

tensiones o fomentar la transformación de las partes.

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Los conflictos disfuncionales por su parte, son los que conllevan a prácticas destructivas, o

los que impiden un buen entendimiento de las partes a futuro. Además afectan el equilibrio

emocional y físico de las partes, e incluso dentro de un grupo puede llevar a la

autodestrucción.

De otra parte, la teoría nos permite establecer diferentes fases para un conflicto, lo que nos

puede permitir analizarlo para encontrar posibles soluciones.

Según S. Robines las fases del conflicto son:

1. Génesis y actores.

2. Causas o fuentes.

3. Conocimiento y personalización

4. Tipos de conflicto

5. Formas de resolución

6. Posturas: posiciones e intereses

Según estas fases es posible analizar un conflicto, conocer sus causas, protagonistas, puntos

de vista y de la misma forma generar posibilidades de solución.

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1. VALORES Y METAS DE LA COTECOL

Además de ser la honestidad uno de los valores que mas se destacan en la eficacia del

tratamiento, hay un desglose de valores que son implícitamente cargados en la dinámica

social diaria del grupo en general. Aunque son importantes, cada residente elige como

fundamentarlos, estos son:

Espiritualidad: Herramienta empleada para el crecimiento integral de la

persona. (en muchos de los casos interiorizada). Se corre con el riesgo que

se encuentra con personas, que tal es su grado de retraimiento, que se

consideran ateas.

Respeto: Impulsada al cumplimiento de las normas ya interiorizadas (reglas

de oro de la comunidad: no consumo de drogas, no afectividad entre sus

miembros y no agresión física ni verbal entre sus miembros), haciendo

énfasis en la ultima de ellas.

Responsabilidad: De acuerdo al crecimiento de cada miembro se le asigna

labores en el que implique la presión, la honestidad y la eficacia en las

funciones propuestas.

Solidaridad: cada uno de los miembros se ve reflejado en cada miembro de

la comunidad, lo cual están en la capacidad de dar y recibir apoyo de cada

uno, en el momento que los necesite.

Esto es a grandes rasgos los valores que esperaría la comunidad inyectar en cada miembro

que ingresa a su organización.

La respuesta por parte de los miembros respecto a estos objetivos, mezclado con relaciones

formales dentro de un ambiente de rigidez de normas institucionales, es una clara tendencia

hacia la conducta desviada dentro de subgrupos de carácter informal (debido a contratos

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negativos concretados por dos o mas miembros de la organización) para menguar el

ritualismo, como lo exige la dinámica (no olvidemos que son individuos que se han

retraído, gracias a su incapacidad de ingresar al sistema competitivo).

a. La familia sustitutiva: Ofrece al residente un ambiente seguro, totalmente alejado

de factores externos sociales (aislamiento). Comunidad en general.

b. La filosofía Consistente: Se refiere a una filosofía que es fácilmente entendible,

explicable y apoyada por todos los miembros. Es de importancia ojear, en el anexo

1, la gran importancia que se le da a esta filosofía.

c. La estructura Terapéutica: El ambiente proporciona la presión suficiente para el

aprendizaje, pero además, una estructura suficiente para prevenir el caos. El

residente puede dentro de la estructura de la COTECOL, inclinarse hacia posiciones

de responsabilidad creciente en función de sus distintos niveles de desarrollo o hacia

el mismo liderazgo.

d. Aprendizaje a través de la crisis: se fomenta el aprendizaje a través de una

experiencia en situaciones de crisis. De acuerdo con su conducta desviada (grado

de anomia), el residente puede crecer personalmente pero con la condición de que

sea honesto consigo mismo y ante el grupo, de esta manera se puede realizar un

trabajo terapéutico profundo.

e. Confrontación: La confrontación y presión impuesta a las personas recién

admitidas deberían ser de carácter limitado, a fin de evitar que un exceso les haga

abandonar la comunidad Terapéutica. La vida al interior de la Cotecol conlleva en

sí misma mucha presión que el nuevo residente asume. Cuando el residente

empieza a desenvolverse en el proceso terapéutico, se nota que su confianza en el

programa va en alza y que se deshace de sus defensas.

La confrontación consiste en señalamientos en el terreno, donde se especifica la

acción inadecuada que cometió en el instante y además se le ofrece una posible

alternativa para dicho hecho.

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Es bueno aclarar que este grupo, tiene características de grupo formal, por el tipo de

relaciones con la misma comunidad (autoridades del sistema de rehabilitación, tales como:

el director, los terapeutas, psicólogos y trabajadores sociales), además se pueden observar

otro tipo de relaciones entre los miembros (adictos en rehabilitación), que se generan por

afinidades varias.

2. ETAPAS DE LA COTECOL Y TIPOS DE ADAPTACIÓN

El proceso de rehabilitación se realiza en tres etapas que le darán al usuario las bases

necesarias para reconocer su problema y de actuar de manera objetiva, de acuerdo a sus

debilidades internas y externas.

La primera de ellas es denominada Acogida, (ambulatorio “comunidad-casa, casa-

comunidad), con ubicación en la ciudad de Bogotá, es donde el futuro miembro conoce

parte del sistema preliminar del tratamiento. Se le realiza la inducción pertinente,

enseñándole la filosofía de la comunidad (anexo1), normas que se tienen cumplir en la

estadía en casa y en el diario vivir durante esta etapa; además se le induce a que realice

confrontaciones para hacer parte de la dinámica de grupo. Después de asimilada esta

etapa, es remitido a la etapa dos – eso lo decide el grupo de terapeutas-, donde pasa de un

estado ambulatorio a un estado de internado, allí se le asume miembro de la organización

pero no aun dentro del grupo ya que no ha existido comunicación, ni tiempo con los demás

miembros. Al igual que la trascendida etapa se le realiza una nueva una capacitación donde

se le indica como actuar dentro del lugar (reglas, normas, valores y énfasis en la filosofía de

la comunidad). Al recién llegado se le realiza una entrevista, por parte del terapeuta de

turno y tres miembros mas (de los cuales uno de ellos será su hermano mayor), donde se le

hace énfasis en que necesita ayuda y en las problemáticas observadas en la etapa primera.

Terminado esto, le es asignado un compañero – hermano mayor -, para que le sea de guía

en la dinámica de comunidad , así mismo la función del hermano mayor será la de adecuar

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al “marginado” – según ensayo de Elias Norberth “ensayo sobre los establecidos y los

marginados – de las reglas irrompibles durante el tiempo de estadía (no consumo de drogas,

no afectividad entre los miembros, no agresividad verbal ni física), al igual que esta

persona, lo va estar acompañando durante 1 mes aproximadamente ( este es el primer rol

que se asume en la dinámica psico-socio-terapéutica). Después de sobrepasar esto, el

terapeuta evalúa, el crecimiento que ha obtenido el miembro, y si es afirmativo, se asume

ahora como hermano mayor. (Cualquier ascenso a otro rol, se evalúa de acuerdo al

crecimiento personal, al grado de pertenencia, el tiempo transcurrido y a su cambio de

actitudes – “recompensa” -). Vale acotar que los roles son terapéuticos, es decir, van a

influir de manera mas precisa hacia el crecimiento personal y además van enfocados a

abrirse a espacios de liderazgo (por ende los grados de tolerancia a la desviación, según

normas institucionalizadas, son mas altos ya que se les da cierta libertad que antes no se

podía tener), cuando los terapeutas creen que el residente ya se encuentra apto para asumir

de nuevo su vida con reguladores asumidos en la etapa de internado, se le remite de nuevo a

la acogida, pero ya no como un futuro miembro, sino un líder que debe guiar (como lo

hicieron con el), este proceso de los recién llegados; a esta etapa se le denomina

“Reinserción”, donde al igual que las otras etapas, se le es explicado las normas, (algunas

de ellas cambian de connotación, por ejemplo, el residente puede escuchar música y ver

televisión), ya que se trata que el residente, se asuma como tal, con las herramientas con

que fue dotado durante la etapa de Internado. Para concluir el tratamiento es necesario,

sustentar ante las autoridades competentes de la organización, el estado personal en el que

se encuentra y que después de abordada la tercera etapa, esta apto para asumir su libertad,

de acuerdo a sus objetivos de vida. De esta manera concluye, las relaciones formales con la

entidad pero si desea puede seguir asistiendo pero ya no con la intensidad de antes sino mas

mermado y teniendo en cuenta, el estado informal de las relaciones entre los miembros.

Es realmente interesante a medida que transcurre el proceso, el papel de las conductas

divergentes de los miembros. En la primera etapa, se puede observar como los tipos de

adaptación individual -Según Merton “Estudio sobre estructura social y cultural”, se

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congregan de acuerdo a los objetivos que cada uno de los miembros posea (esta etapa tiene

alrededor de 5 a 10 recién llegados, junto con dos monitores), recordemos que el

tratamiento es especifico y que los medios no los proporciona el mismo individuo sino

están presentes en el sistema. Existirán disyunciones ya sea por los fines o por los medios,

es la tarea a investigar, pero por ahora nos podemos adelantar a describir dos de las mas

frecuentes tipos de adaptación de los miembros del grupo. Estas son:

a. Retraimiento: Al no encontrar de ninguna manera los medios para lograr su meta, al

verse obstaculizado por su fracaso, el individuo se retrae; creando conflictos internos, y

obligado abandonar por completo sus metas y los medios. Esto se ve reflejado, en los

residentes en el consumo de drogas y alcohol de manera descontrolada.

b. Innovación: Se puede observar también este tipo de conducta, que lleva al individuo a

resaltar sus metas por encima de los medios, es decir, es necesario que a pesar de los

obstáculos u oportunidades que se tengan de lograr lo que se quiere, se realice lo más

óptimo que se pueda. Este tipo de adaptación, es claramente identificable en la dinámica de

comunidad, por ejemplo, al residente Diego Silva (miembro de 2 etapa), se le preguntó el

¿Por qué el consumo de drogas? A lo cual responde: Soy estudiante de bellas artes, por

mantener el fin creativo empecé a consumir marihuana para lograrlo. Para los terapeutas

lo primero que hay que tratar es este tipo de paradigmas que han creado el mudo de la

adicción, para poder lograr el nivel de conciencia necesario para salir de este reto tan

apabullante para muchos.

Con respecto a lo anteriormente dicho, es pertinente, mencionar que como se trata de un

centro de rehabilitación para pacientes con graves problemas en el consumo de

psicoactivos, podemos aclarar que la convivencia no es nada fluida, ya que los miembros

vienen con parámetros de conducta desviada muy marcada en sus antecedentes. Durante la

etapa de Acogida, existe un conflicto entre el futuro miembro y las normas, por lo cual es

necesario que el individuo se aleje completamente de la vida social, llevándolo a asumir las

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normas que le fueron impuestas; no escuchar música, no ver televisión, no consumir

bebidas negras, no el consumo de drogas o bebidas alcohólicas, no fumar tabaco, no recibir

visitas ni llamadas por teléfono y no salir a la calle.

Como es de esperar, el individuo choca con el sistema inicialmente, ya que se le restringe

totalmente de la libertad, pero todo esto tiene el propósito de atacar la Conducta divergente

de cada uno de los individuos, acatando las normas y las autoridades, tanto de casa como de

la comunidad. Es importante a esta altura preguntarnos, Siendo una asociación de

individuos primeramente – etapa acogida – ¿como son las relaciones entre sus miembros,

refiriéndonos a la aversión generalizada al control de sus vidas?

Según lo observado en la acogida, asisten 6 personas (4 hombres y dos mujeres) entre los

19 años y los 44 años, con el apoyo de dos monitores pertenecientes a la tercera etapa;

cada uno de ellos con una ocupación, un 50% asalariados, y el otro 50% estudiantes,

sustentados aun por sus padres. A continuación referidos:

Nombre Edad Tiempo de consumo Ocupación

Diego Silva 22 años 6 años Estudiante de bellas artes

Henry Gacha 19 años 3 años Estudiante de bachillerato

Zully Bernal 23 años 5 años Empleada

Victoria Villa 26 años 10 años Profesora de Música

Santiago Restrepo 44 años 24 años Ingeniero Electrónico

Germán Gómez 25 años 7 años Estudiante de Veterinaria

* Dos monitores que no referenciamos.

Cada uno de ellos consumieron psicotrópicos, anti-depresivos y tabaco. Solo Germán

Gómez se destaca por su problema en la adicción a la bebida. Con respecto, a la tabla,

deducimos otra categoría donde nos podemos enfocar ya que las diferencias entre las

edades son muy marcadas. El tiempo de consumo entre Diego Silva, Henry Gacha, Zully

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Bernal, Germán Gómez es muy cercano, además que sus ocupaciones (excepto Zully),

están ligadas. Al examinar la relación entre Diego Silva y Henry Gacha es muy cercana (lo

que en comunidad denomina “guetto”), al igual que Diego Silva y Zully Bernal es cercana,

y al igual Diego Silva con Germán Gómez, conformando “guetto”. El residente Diego

Silva, mantiene relaciones cercanas con el 50% del total de la Etapa, para el terapeuta,

Diego debe ser confrontado y aislado del resto, por ser considerado, el promotor de la

confianza, cosa que en comunidad es muy objetivo en cuanto a este tipo de circunstancias.

Por lo tanto se deduce que el grado de desviación y el tiempo de consumo, están asociados;

una explicación de ello puede ser, que durante el tiempo que consumieron, pudieron tener

parecidas experiencias de vida de consumo, además para establecer estas relaciones

también deben tener afinidades para compartir más cercanamente con cada uno de los

guettos conformados.

3. DEFINICIÓN DE CONDUCTA DESVIADA

La conducta desviada es entendida, como el rompimiento de la estructura cultural, que tiene

en particular una disyunción aguda entre las normas y los objetivos culturales y las

capacidades socialmente estructuradas de los individuos de grupo para obrar de acuerdo

con aquellos.

Dentro de COTECOL, se asume como conducta desviada aquellos comportamientos que

afectan directamente la dinámica de grupo. Se puede diferenciar en dos: Conducta

desviada y conducta desviada extrema; la primera hace énfasis en comportamientos que

afectan implícitamente la dinámica de grupo, ejemplo, no asumir una norma técnica

impuesta; y la segunda es mucho mas profunda, ya que la afección es directamente al

grupo, donde genera una inestabilidad, a la vez que un cuestionamiento colectivo del

proceso (desconfianza) ejemplo, el consumo de drogas realizando la etapa de Internado.

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Existen distinciones entre los grados de desviación, según la falla. La confrontación, es

uno de los medios donde se regulan actitudes no aptas para la convivencia, pero que

tampoco afecta directamente la dinámica. Las actitudes señaladas van encaminadas a la

aversión a instrucciones dadas y normas técnicas establecidas no cumplidas y/o pasadas por

alto, por parte del confrontado. Si es renuente, la falla se le pasa un informe al terapeuta

(tramite según conducto regular), donde se le especifique la falla y la acción cometida, allí

el terapeuta evaluara la conducta y sancionara con algún castigo que implique esfuerzo

físico y donde realice un seminario (cartelera) explicando su conducta y alternativas para

modificarla, esto con el propósito terapéutico.

4. CASOS PARTICULARES

Caso 1.

Aclaraciones: Este tipo de conductas son más tenidas en cuenta durante la segunda etapa.

En acogida el individuo, esta entendiendo el sistema de la organización, y no asimilaría su

falla como en la segunda etapa, además no esta en la capacidad de recibir presión entre

pares. Durante la tercera etapa el residente esta fortaleciendo su propia toma de decisiones

y adquiere una conciencia de sus errores, es decir, esta en la autonomía de continuar con su

conducta o modificarla.

En la Segunda Etapa, es imprescindible que pase este tipo de circunstancias. Los

señalamientos que se realizan en el terreno, tienen un carácter formal, inclinados hacia

acciones que se cometen en el instante. Un residente que no va al ritmo que va la

comunidad (desplazamiento de alojamiento – comedor), y que hace todo lo que se le antoja,

es inmediatamente señalado como una conducta desviada, ya que afecta el tiempo que los

demás disponen. Se le confronta, su “actitud” rebelde y su falta de armonía con el grupo, si

reincide y no retoma los señalamientos, es alejado del grupo y confrontado por el cuerpo de

roles de autoridad del momento, donde se le hace ver profundamente su actitud, su manejo

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de estados de animo y su poco compromiso con el cambio, en pocas palabras se le

cuestiona y lo reintegran al grupo. Hasta este momento, la autoridad competente

(terapeuta) no lo denomina como conducta desviada porque hace parte de la dinámica de

comunidad, y este tipo de casos suelen ocurrir muy seguido, tomando todo esto dentro del

grupo como tal; porque seria totalmente distinto si se tratara del mismo caso pero en la

tercera etapa (cuando se tiene un crecimiento mayor), donde el terapeuta cuestionaría, lo

vivido y lo modificado durante el programa; y fácilmente engancha al residente por el

temor de una recaída temprana por ese tipo de actitudes; lo que no ocurre en la segunda

etapa.

El terapeuta definiría en este caso, al grupo (excepto el confrontado) como conducta

desviada por la actitud tomada, ya que se violaría uno de los valores que rigen en la

comunidad -la solidaridad-, además confrontaría al grupo por la pésima utilización de la

herramienta de confrontación por presionar de una manera hostigante al residente y arguye

que parecen “buitres compitiendo por un pedazo de carne descompuesta”.

Ahora si el infractor, comete esta serie de errores y se le ve en su actitud ese propósito, el

terapeuta no lo duda, define la falla como desviada, al igual que el grupo. Pero en el caso

en que el infractor cometa la falla con intención y que el grupo, no se percate de lo que esta

sucediendo, son denominados los dos como conducta desviada, y confrontados por parte

del terapeuta.

Retomando el caso de la displicencia del residente frente a comunidad (conducta desviada

referida del grupo al residente, en contraposición del terapeuta – residente), es retomado

por el terapeuta, donde exprese su estado de ánimo, y pueda descargar esa pesadez que le

impide estar dentro del grupo de comunidad. Después de realizado esto se puede observar

dos conductas: el residente retomo de lo dicho por el terapeuta o el residente sigue

reincidiendo. Tomando la posibilidad dos, donde el residente esta completamente cerrado

al grupo en general, se aplica una de las sanciones terapéuticas mas pesadas. Por parte del

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grupo Staff (grupo de terapeutas, director de la comunidad, asistente de dirección, terapeuta

de familia, esto solo es en segunda etapa) se expone la actitud del residente, y allí definen

como actuar con el implicado, se le aplica una experiencia educativa (la experiencia

educativa, es una tarea vivencial, donde es absolutamente importante la presión del resto

del grupo, en hacerle evidente su conducta desviada, hasta alcanzar inestabilizar al

residente implicado, para poder retomarlo sin la barrera social que mantenía), si de esta

manera el residente no asume su papel estaría peligrando su estadía.

Caso 2.

Aclaraciones: El siguiente caso se da en la segunda etapa y la transición hacia la etapa 3.

Así que es importante ver como las relaciones cambian a partir del ascenso de etapas y los

tipos de adaptación.

Tres residentes que pertenecen a la misma acogida, crearon una alianza (relación muy

cercana, donde prevalece la lealtad) donde les permitía comunicarse fluidamente entre

ellos, además sus secretos, no eran secretos entre ellos; sino ante los demás (teniendo en

cuenta que como reglas de oro de la comunidad, estaba expresamente prohibido, mantener

relaciones afectivas; cualquiera que pase por encima de eso, se dice que, es una conducta

desviada extrema, estigmatizada por los terapeutas, que la definen de alto riesgo de

consumo, ya que se trata de abusadores de drogas, que pueden reforzar las ansias). Cada

uno de ellos, fueron remitidos al Internado, sin que nadie sospechara de las deshonestidades

que estaban cometiendo desde inicio de programa. Durante el transcurso del proceso, nadie

de la segunda etapa evidencio este hecho, por el contrario estaban tan en buen concepto,

que ascendieron sin ningún problema a desempeñar roles de autoridad. En sus labores de

ejemplo moral ante los demás, otro residente, recién desempacado de la etapa de acogida,

se contrata con los tres miembros, conformando un cuarteto. Los roles de autoridad, tienen

dentro de la finca cierta libertad de desplazamiento (cosa que no tienen los otros roles que

no ejercen autoridad), lo que les daba mayor libertad a sus relaciones; se encontraban en un

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lugar alejado de la finca y habían pactado, que de la alacena de la cocina se iban a fumar un

sobre de té, lo lograron sin ningún problema. Al pasar el tiempo, la alianza se convirtió en

un refuerzo negativo entre mezclando sus ansias de consumir, con lo cual se desplazaron a

donde habitaban las vacas, en busca de hongos alucinógenos, para poder consumir entre los

cuatro, así lo hicieron en una noche y al parecer nadie se enteró.

Como podemos observar se trata de un problema grave dentro de los principios de

comunidad. Primero, fue violada totalmente la honestidad (valor por el cual comunidad se

rige, fue violado la primera regla de oro de comunidad “no consumir” y la segunda “no

relaciones afectivas”). Podemos enunciar que entre estos cuatro personajes, crearon un

subgrupo dentro del grupo grande, tergiversando normas institucionales y una

transvalorización con la utilización de medios que brinda el grupo como tal. Se puede

desglosar el conflicto que viven estos cuatro residentes, por la renuencia de un cambio,

además se puede acotar que el impulso que los llevó a realizar un tratamiento de

rehabilitación no fue propio de ellos sino de sus padres. Retomando, la tabla anteriormente

expuesta, nuestros personajes son los siguientes: Diego Silva, Henry Gacha y Germán

Gómez, los tres pertenecientes a la misma acogida. El siguiente implicado llego después de

7 meses, su nombre es Jorge Pregonero:

Nombre Edad Tiempo de consumo Ocupación

Jorge Pregonero 19 años 7 años Empleado independiente

Jorge discrepa con la autonomía de sus otros compañeros, porque el no fue obligado a

realizar el tratamiento, ya que era conciente de su problema desde hacia tres años (por poco

encuentra la muerte, en una sobredosis; hace tres años), se tardo tiempo en tomar la

decisión, pero el la tomo. Al llegar a comunidad se sintió orgulloso y muy enérgico del

cambio que iba a dar (inicio acogida con total voluntad y esmero), al ser remitido a 2 etapa,

observó que no eran tan limpias las relaciones con las personas y que los medios no eran

los mas accesibles a todos, así que regresionó y se retrajo. Así conoció a Diego Silva,

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Henry Gacha y Germán Gómez y termina cediendo por la frustración de ver lo que quiso

ver.

Hay un proceso dentro del sistema de comunidad, para alimentar la honestidad, allí es

llamado “quema de culpas” (examen de conciencia), donde se toma a todo el grupo de

miembros, separados entre si delante de una hoja blanca y un esfero, según instrucciones de

los terapeutas, pueden comenzar a quemar: deshonestidades, contratos negativos, diálogos

de consumo, cosas raras que han visto en los otros referente a las deshonestidades. En

Jorge Pregonero prevaleció su valor de honestidad por encima de la lealtad entre su

subgrupo (amigos), así que se destapo la falta, y cada uno de los cuatro fueron separados,

(mientras los tres primeros “Diego, Henry y Germán”, prevaleció la lealtad no dijeron

nada), pero que ya eran concientes que Jorge había sido honesto, por ende lo consideraron

un enemigo y lo estigmatizaron como “sapo”, un conflicto intragrupal; al igual el resto de

comunidad entro en un proceso de asumir por sus deshonestidades (no tan graves como las

del cuarteto), llamado “casa cerrada”, donde se restringe al residente de: horarios

establecidos de alimento, ropa de trabajo todo el día, se destituyen a todos los residentes de

los roles, además que nadie tiene derecho hablar y ganarse la comida con trabajo. Henry y

Germán Gómez, no soportaron la presión que los terapeutas ejercieron sobre ellos, y

decidieron evadirse de comunidad, mientras que Diego Silva continúo allí, soportando todo

y asumiendo de manera responsable su falla al igual que Jorge pregonero.

La comunidad en si, se vio afectada por la falla del cuarteto, y se vieron muy cuestionados

por los verdaderos valores que se asumen en la relación entre ellos, ya que al igual que el

valor que rige entre la comunidad (y no la organización) es la lealtad, si se quebranta esto

se deslegitimiza el poder ya legitimado por los otros. Las sanciones por parte del grupo

hacia el cuarteto, van desde la pérdida de capacidad de liderazgo y perdida de respeto, hasta

una alianza inconsciente entre el resto de grupo para presionar hasta excluir a los

sindicados, esto lo pudieron lograr con Henry Gacha y Germán Gómez que se alejaron de la

ubicación geográfica y social de comunidad.

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Por otra parte las sanciones de las terapeutas son mayores, ya que ellos son las autoridades

formales y tienen toda la libertad necesaria de decidir sobre que hacer, además son

totalmente legitimas por el grupo de la comunidad de tóxicos, A Diego Silva lo excluyeron

del grupo (aislamiento total), mientras que a Jorge Pregonero, fueron mas laxos (por lo

anteriormente explicado) y el castigo no fue tan severo y jamás lo alejaron del grupo.

Es curioso que con Jorge Pregonero, el grupo no haya sido tan letal como lo que paso con

los otros tres. Puede explicarse, el poco tiempo que llevaba en comunidad, aun no era

aceptado como miembro oficial de parte del grupo, mientras los otros si, ya que tenían

posiciones de liderazgo. Después de ser retomada la comunidad menos Diego Silva, el

grupo staff se reunió y dictamino que Diego violo una regla de oro, lo cual hace que sea

regresado a la familia, puesto que si se le perdonaría, perdería abruptamente la legalidad de

las normas de oro y se convertiría constantemente el grupo en conductas desviadas

extremas, y de esto no se trata el proceso de rehabilitación (repetirían lo que vivían en la

calle de consumo). Se llamó la familia y le fue entregado el residente, la comunidad aún

movida por lo que ocurrió, se consterno, ya que legitimaron la actitud de Diego al quedarse

hasta la última decisión de los terapeutas, y quedo con la imagen de “guerrero” (Otro valor

clave entre la comunidad como grupo).

Esto no tiene puntos de giro donde se pueda ver, simplemente fue una conducta divergente

extrema que afecto directamente el sistema y por ende los resultados del mismo. La visión

de parte de los terapeutas frente a los residentes implicados, no es decepción (pero si

conducta desviada), sino una oportunidad para dos cosas: salir adelante a pesar de los

errores (sobriedad) o la recaída como proceso interno de la culpa. Dentro de los residentes,

existe otro tipo de connotación, los que se desertaron, ya están fuera del sistema; y todo se

hizo por la auto-preservación del grupo, y por el otro lado teniendo afecto hacia la actitud

de Diego Silva, ven falencias en el sistema que les genera dudas, pero gracias a la

adaptación ritualista, no es peligroso.

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4. CONFLICTO

De acuerdo con nuestro marco teórico, definiremos primero que todo los orígenes de

nuestro conflicto a analizar.

El objeto de estudio de este análisis se centra en dos grupos formalmente identificados, que

son dos familias bogotanas, cuyo conflicto ha tenido una duración prolongada y se

manifiesta de diversas formas, pero atendiendo a la clasificación primaria del conflicto, éste

es de tipo disfuncional.

La familia Jiménez Rocha, se encuentra constituida por los siguientes miembros:

Carlos Jiménez Edad: 52 Padre

Empleado

Carmen Rocha Edad: 49 Madre

Ama de Casa

Mauricio Jiménez Edad: 25 Hijo

Empleado

Pilar Sánchez Edad: 19 Nuera

Ama de casa

Clara Jiménez Edad: 17 Hija

Estudiante

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La familia Salcedo Rincón esta conformada por:

Guillermo Salcedo Edad: 51 Padre

Comerciante

MA. Helena Rincón Edad 49 Madre

Ama de casa

Patricia Salcedo Edad 26 Hija

Empleada

Manuel Salcedo Edad 21 Hijo

Empleado

Nohora Saavedra Edad 18 Nuera

Ama de Casa

Laura Salcedo Edad 19 Hija

Empleada

Estas familias son consideradas como grupos en si, puesto que la familia es el grupo

primario por excelencia.

Para el análisis del problema es necesario ubicar tanto física como socialmente a las dos

familias en cuestión.

Para ello verificamos que las dos familias pertenecen a un sector de estrato bajo, ubicado en

el barrio Kennedy, donde las condiciones sociales son adversas, puesto que existe alrededor

inseguridad, pandillas y en fin, factores que contribuyen a la inestabilidad social. Estas dos

familias son vecinas, pero indirectamente, puesto que una de las propiedades de la familia

Salcedo esta junto a la residencia de la familia Jiménez.

Los factores sociales que circundan el lugar de residencia de las dos familias fomentan un

ambiente propicio para el conflicto, puesto que debido a la situación geográfica y

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económica, este sector y la forma de vivir en el mismo, o sea las condiciones de vida que

no son nada fáciles, hacen que la actitud conflictiva esté a la orden del día, presentándose

problemas a todos los niveles. Intrafamiliares, intergrupales, entre vecinos, “amigos”,

familiares, en fin, se crea un ambiente tenso para las relaciones interpersonales, y mucho

más para las relaciones intergrupales, ya que es muy común que los problemas personales

afecten la vida social y por ende las relaciones con los demás.

En la zona donde residen estas dos familias podemos encontrar sitios de expendio y

consumo de drogas (ollas), un parque invadido por grupos de pandillas,

Estos factores afectan la convivencia en el sector, porque son factores generadores de

violencia e inseguridad, que desembocan en inestabilidad para las familias y la sociedad

que está conformada alrededor del barrio.

Por último, los orígenes del problema se remontan a aproximadamente unos 6 años atrás,

puesto que antes de esta época las dos familias se comportaban de manera “normal”, como

se pueden comportar grupos de familias bajo las condiciones ya descritas.

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5. ANTECEDENTES

Las causas del conflicto entre las dos familias son muy diferentes desde el punto de vista de

cada grupo, puesto que cada uno ve lesionados sus intereses, y cada grupo pretende

legitimar sus motivos, porque considera que tienen la razón.

Por una parte, para la familia Jiménez, la causa principal del conflicto se encuentra en que

la propiedad de los Salcedo ubicada al pie de su casa, genera malestar e incomodidad,

debido a que allí funciona una empresa de carácter familiar, propiedad de los Salcedo. Esta

industria es una carpintería, que desde el punto de vista de los Jiménez les genera

incomodidades tales como ruido, desperdicios, polución y suciedad para su propiedad.

Por el lado de la familia Salcedo, el conflicto se da por factores de índole personal, porque

aducen ellos que la base del problema es la siguiente: “en una época en que las cosas no

marchaban muy bien, le negamos la posibilidad de vincularse laboralmente a Mauricio

Jiménez, quien estaba muy necesitado porque estaban esperando un hijo con su pareja,

pero no nos era posible emplearlo, porque al hacerlo desplazaríamos de su lugar a nuestro

hijo en la empresa”.

El problema aquí es que la familia Jiménez aprovecha cualquier oportunidad para tratar de

que alguna autoridad llegue a la propiedad de los Salcedo y ejerza autoridad de una u otra

manera. La familia Jiménez muchas veces no tiene bases sólidas para interponer una queja,

pero se valen de cualquier pretexto para convocar el uso de la autoridad.

- en este apartado podemos ver de manifiesto la legitimación del Estado, puesto que un

grupo que ve vulnerados sus derechos, no hace justicia por mano propia, sino que acude a

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quien tiene legítimamente el poder, es decir, los organismos de gobierno con capacidad de

ejercer autoridad.-

En cuanto al punto de vista de los Jiménez, los Salcedo dicen que no comprenden cómo

esta familia puede oponerse al funcionamiento de esta industria, ya que es fuente

generadora de empleo para al menos tres familias directamente, y para muchas otras

personas de manera indirecta.

Resumiendo, las causas del conflicto están determinadas por factores estructurales,

mediando también las causas personales para motivar el conflicto.

6. CONOCIMIENTO Y PERSONALIZACIÓN.

Aquí definimos cómo ve cada parte a la otra, es decir, la imagen que se forma cada grupo

del otro.

Ambas partes perciben que sus intereses se hallan lesionados, surgiendo emociones y

sentimientos precedentes de un enfrentamiento.

Es decir, las partes interiorizan lo que sucede en el entorno y particularmente con el otro

grupo, lo que desencadena sentimientos negativos entre las partes, y estos sentimientos

crean la imagen de la contraparte.

Para la Familia Jiménez, la Familia Salcedo está conformada por personas que “no tienen

escrúpulos, no tienen sentido de solidaridad, y que pueden pasar por encima de quien sea

con tal de lograr sus objetivos”.

De otra parte, la Familia Salcedo define a los Jiménez como “Gente que no puede vivir con

lo que tienen, que tratan de molestar a los demás de cualquier forma, porque que no

soportan sus condiciones de vida”.

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7. TIPO DE CONFLICTO

Para dar un posible espectro de soluciones se hace necesario determinar el tipo de conflicto

del que estamos tratando.

Según la teoría del conflicto, estos pueden ser de dos tipos: Reales o Irreales.

Para los primeros decimos que son los originados por problemas de percepción o problemas

de comunicación.

Los conflictos reales en cambio, son los que se generan por causas estructurales o del

entorno.

Nuestro conflicto encaja perfectamente en este último tipo, puesto que ambas partes tienen

razones reales y temporalmente concordantes, para sentir que sus intereses están

mutuamente amenazados.

8. FORMAS DE RESOLUCIÓN Y CONSECUENCIAS

Un a de las consecuencias a las que puede llevar este conflicto, es que si persiste, muchas

personas que derivan su sustento de la fábrica de la familia Salcedo, pueden perder sus

puestos laborales, o más adelante, se pueden llegar a agresiones físicas por parte de la

Familia Jiménez, ya que han buscado hacer cerrar este negocio infructuosamente, lo que los

llevaría a deslegitimar los aparatos de control del estado, y aplicar “justicia” por mano

propia.

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Para comenzar, la familia Jiménez se queja del alto ruido que producen las máquinas

ubicadas junto a su casa, se quejan de la cantidad de desechos generados por esa industria,

y en fin, buscan todo lo que los pueda afectar físicamente para incentivar el conflicto.

De aquí derivan otros problemas como por ejemplo las afecciones físicas que puedan llegar

a tener sus miembros, o las consecuencias sicológicas creadas en los individuos motivados

mayoritariamente por el conflicto.

Una de las formas de solucionar el conflicto entre las dos familias, es la de que cada familia

plantee sus inquietudes y la forma en la que ellos ven afectados sus intereses, para que, de

acuerdo con un tercero, se pueda llegar a un consenso que permita solucionar los

problemas. Este proceso no sería inmediato, sino que se daría por etapas, puesto que son

varios los problemas que involucran a las dos familias.

Otra solución, aunque un poco más radical, sería trasladar el negocio de la familia Salcedo

a otra ubicación, puesto que la zona donde está ubicado es considerada zona residencial, y

no es permitido tener este tipo de establecimientos allí. Obviamente el costo de esta

solución sería elevado económicamente, pero al final sería ideal puesto que no afectarían a

otras personas en el futuro.

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9. CONCLUSIONES

La conducta divergente puede unir lazos entre los miembros, pero esto no es permitido

dentro de la comunidad, ya que afirman que se pueden hacer daño y el proceso se podría ir

a una recaída en conjunto, por no comunicarlo ante los terapeutas.

Al infringir normas institucionalizadas tan rígidas como las de COTECOl, cae todo su peso,

al infractor, de allí se deduce que el cumplimiento de las normas es debido al temor a la

sanción, es decir, que en una gran generalidad después de mantener una adaptación por

retraimiento, existe una transición lo que conlleva a una adaptación por ritualismo (se da

mas énfasis en los medios institucionales y poco a las metas propuestas), puesto que al

subir de rol se enajenan de poder que pueden ejercer (ser autoridad moral), que pierden la

esencia del mismo residente.

Los grados de tolerancia a la desviación afectan de manera directa el funcionamiento de la

estructura de grupo. Para poder asumir un rol dentro de comunidad se requiere tener

avances en la honestidad y ser claro con las metas. Problema grave es saber cuando un

residente esta siendo fraudulento con los demás pero no afecta la legitimidad mientras los

demás no lo sepan (pero es un riesgo el que lo intente, puede perder completamente la

membresía de grupo).

El conflicto puede ser manejado por un mediador de acuerdo a las pautas que de su análisis,

y generalmente su resolución puede darse poniendo de común acuerdo a las partes, y

haciendo que cada una ceda un poco en sus pretensiones, de manera que los intereses no se

vena afectados, o por lo menos, este daño se atenúe de forma que no incomode a las partes

involucradas.

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BIBLIOGRAFÍA

Bauman, Zygmunt, Pensando Sociológicamente, Buenos Aires, 1994, Ed. Nueva

Visión.

Romero Galvez, Antonio, Teoría del Conflicto Social, Lima, 2004,

http://www.gestiopolis.com/recursos4/docs/ger/tenegouno.htm.

Bernard, Jessie, La Sociología del Conflicto, México D.F., 1958, Instituto de

Investigaciones Sociales, Universidad Nacional Autónoma de México.

Oelmsted, Michael, El pequeño grupo, Buenos Aires, 1963, Ed. Paidos.

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ANEXO1

FILOSOFÍA DE LA COMUNIDAD

Es aquí donde podemos observar los objetivos en conjunto de la comunidad, donde es

interiorizada por cada uno de los miembros y así mismo ejercida durante el tratamiento y

después de el.

PORQUE ESTAMOS AQUÍ?

La cuestión que lleva a concientizar al residente

Estamos aquí porque no existe refugio alguno donde escondernos de nosotros mismos.

Debido a lo vivido en la época de consumo, el residente se da cuenta que tomar la droga

como refugio no es un buen escondite y necesita hallar una solución.

Mientras la persona no se confronte en los ojos y en el corazón de los demás, esta

escapando.

Ya cuando se encuentra en comunidad, se hace evidente socializar desde un aspecto

terapéutico los conflictos de los demás y afrontarlos para si mismo.

Mientras no comunique sus secretos, no hallara reposo.

Mientras no se sea honesto el tratamiento no funciona y esta propenso a rehacer de nuevo

en consumo.

El hombre que teme ser conocido, no puede conocerse a si mismo, ni conocer a los

demás, esta solo.

Mientras no se viva con total naturalidad la experiencia desmontados de paradigmas del

pasado, no seria eficaz el tratamiento. Se haría cimientos en las nubes

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Fuera de nuestros puntos comunes, ¿Dónde mas podemos hallar tal espejo?

Sin la comunidad donde mas podremos crecer (sentido de pertenencia)

Reunidos aquí, la persona puede al fin de cuentas manifestarse claramente a si misma,

no como el gigante de sus sueños, ni como el enano de sus temores, sino como un

hombre parte de un todo, con su contribución para ofrecer.

De acuerdo al crecimiento que se obtenga, el residente podrá poner los pies sobre la tierra, a

través de la interacción social, manejo de roles, legitimar liderazgo.

Sobre este terreno todos podemos echar raíces y crecer, ya no solos como en la muerte,

sino vivos para nosotros mismos y para los demás.

Después de culminado parte del programa, el residente se halla en la responsabilidad de ser

objetivo en su vida social y para si mismo, cualquier conducta divergente podría causar un

declive en el residente.

Es interesante que esta filosofía es concientizada por todo el grupo, y proclamada

constantemente, con el objetivo de ser incisivos en los fines del tratamiento y pronunciando

los medios con que se puede efectuar.

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ANEXO 2

UBICACIÓN GEOGRÁFICA FAMILIAS EN CONFLICTO

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