analizar el proceso de emancipaciÓn, para la
TRANSCRIPT
1
ANALIZAR EL PROCESO DE EMANCIPACIÓN, PARA LA DECOLONIALIDAD
DEL SUJETO LATINOAMERICANO1
Hernán Darío Herrera Pérez.2
Universidad Católica de Pereira
Resumen
Sustentado en el acercamiento a la obra de Enrique Dussel y su filosofía de la liberación,
donde ha enmarcado y trabajado un pensamiento desde el otro, y la emancipación de las
periferias, en el campo filosófico, pedagógico, político y ahora estético; especialmente la
emancipación entendida en la interpretación de la alteridad (ser-otro), dentro de un
reconocimiento del sujeto latinoamericano, buscando romper el discurso eurocéntrico para
la distinción de las culturas y pensamientos que oprimieron en esa colonización de las
periferias. Desde allí un abordaje a los pensamientos del sur, y el surgimiento de colectivos,
y de pedagogías críticas que se replantea y expone el trabajo en la educación, en lo social y
lo cultural, para sustentar la importancia de las voces de los otros dentro de sus propias
culturas, y pensamientos que se encuentran en ese otro, el oprimido, el pobre, el indígena, el
otro; puesto que el individuo necesita del otro, para emerger en los discursos sociales, y hacer
parte de la historia. Puesto que se debe interpretar y entender completamente ese otro (rostro
del otro, o ser-otro) para finalmente entendernos como un igual (alteridad), articulando el
discurso del centro y las periferias.
1 Este trabajo es un proceso de pensamiento emancipatorio, y decolonial en el desarrollo del sujeto
latinoamericano que emerge desde lecturas de algunas obras de filosofía de la liberación del autor Enrique
Dussel. Trabajo asesorado por el Dr. En antropología y etnólogo Fabian Felipe Villota Galeano, Mag.
Antropología social de la Universidad de Antioquia y antropólogo de la Universidad de Caldas. 2 Licenciado en español y literatura, UTP (2012). Especialista en Pedagogía y Desarrollo Humano, UCP 2019.
Articulo para optar al título de magister en pedagogía y desarrollo humano, cohorte XVI. UCP 2020.
2
Palabras claves:
Periferia, emancipación, analéctica, cultura, sujeto latinoamericano, pedagogía crítica.
Abstract
Supported by the approach to the work of Enrique Dussel and his philosophy of liberation,
where he has framed and worked one thought from the other, and the emancipation of the
peripheries, in the philosophical, pedagogical, political and now aesthetic field; especially
emancipation understood in the interpretation of alterity (being-other), within a recognition
of the Latin American subject, seeking to break the Eurocentric discourse for the distinction
of the cultures and thoughts that oppressed in that colonization of the peripheries. From there
an approach to the thoughts of the south, and the emergence of collectives, and critical
pedagogies that rethinks and exposes the work in education, in the social and cultural, to
sustain the importance of the voices of others within their own cultures, and thoughts found
in that other, the oppressed, the poor, the indigenous, the other; since the individual needs
the other, to emerge in social discourses, and become part of history. Since that other (face
of the other, or being-other) must be fully interpreted and understood to finally understand
ourselves as an equal (alterity), articulating the discourse of the center and the peripheries.
Keywords:
Periphery, emancipation, analectics, culture, Latin American subject, critical pedagogy.
3
Introducción
Las líneas de reflexión relacionadas con la emancipación y la liberación, sustentan en la
propuesta filosófica de Enrique Dussel un sentido que propone demostrar que el individuo
necesita del otro (relación alterativa) para constituir su propio ser, es decir la necesidad de la
intersubjetividad para el enriquecimiento cultural, educativo y social. Por ello, en este
artículo se propone el análisis de la emancipación, desde el pensamiento decolonial que busca
la posición de las voces de los otros, en el contexto periférico, ese otro relacionado con la
postura filosófica y pedagógica de Dussel, para liberar el sujeto oprimido por el pensamiento
y discurso eurocéntrico. Y donde estos relatos, y procesos traen un pensamiento
emancipador, y se hace necesario un análisis desde un modelo analéctico, entendido como
herramienta posibilitadora de un más allá, de un encuentro con el otro. Sustentados en el
hecho de que en el devenir histórico de la literatura se pueden señalar momentos
fundamentales en los que emergen relatos que logran de manera sustancial cautivar el
pensamiento humano, enriqueciendo las perspectivas e influyendo especialmente en las
percepciones de mundo de quienes leen, interpretan, y buscan dentro de su cultura , una voz
propia desde el otro, desde la identidad misma y el reconocimiento como ser-otro; de esta
manera debe surgir el pensamiento emancipador en la población latinoamericana, a partir
de las voces de los otros, de la culturalidad del otro, de las prácticas de los otros y de la
literatura filosófica latinoamericana y como se puede generar las percepciones de mundo
que tiene el pensamiento latinoamericano.
4
Emancipación y liberación.
Emancipación y liberación son dos conceptos en la obra de Enrique Dussel3, que se
sustentan y dan sentido en proponer y demostrar que el individuo se comienza a repensar, a
partir del pensamiento de emancipación que se trabaja desde las periferias, donde esa
construcción va en la búsqueda de romper los conceptos de modernidad, del capitalismo y
el mismo liberalismo social donde el sujeto aún se encuentra inmerso en ese devenir y
constructo social que emerge a finales del siglo XVIII, por ello se hace necesario pensar el
individuo desde su identidad, aquellos que están en un alejarse de la totalidad, es decir, el
sujeto oprimido, y comenzar a nombrar al otro como individuo, persona o ser. Esto se logra
desde un pensamiento crítico hacia el centro, un repensar que surja desde las periferias
sociales, para ello se debe interpretar el centro como lo expone Dussel.
Para Aristóteles, el gran filósofo de la época clásica, en tiempo de una formación
social esclavista auto-centrada, el griego que representa al “hombre”; no lo es el
bárbaro europeo (Europa es todavía toda la barbarie), porque le falta habilidad; ni lo
es tampoco el asiático, porque le falta fuerza y carácter, tampoco son hombres los
esclavos, a medias o es la mujer y el niño solo en potencia. Hombre es el varón libre
de la polis. Dussel (2011).
3 La emancipación y liberación dentro de la obra de Dussel se aproxima y devela al sujeto como un ser que debe
replantearse, transformarse, descolonizarse y decolonizarce, de todo pensamiento céntrico, rompiendo las
periferias, para la búsqueda de su origen como otro. Dussel, E. introducción a la filosofía de la liberación.
Bogotá 1995. Dussel, E. filosofía de la liberación. México 2011. Dussel, E. Para una ética de la liberación
latinoamericana, Tomo I y II. México 1973. Dussel, E. Filosofías del sur, descolonización y transmodernidad.
México 2017.
5
De esta forma, se comienza a trabajar la importancia del individuo, como lo estudia y analiza
Dussel, como un sujeto con el otro, donde se repiensa la subjetividad central, es decir como
los constructos sociales devenidos del centro o eurocentrismo, los cuales pone al individuo
desde el liberalismo democrático perteneciente a una sociedad, o comunidad, olvidando que
hace parte de una comunicación más afectiva, y debe abrirse a posibilidades otras desde su
intersubjetividad que le permitan explorar las relaciones sociales constantemente, una
aproximación a la alteridad y la transmodernidad, puesto que el sujeto céntrico quizás no se
ha permitido una condición más humana, y el repensar el otro, permite reconocerse primero
como individuo dentro de un proceso social.
Ahora bien, este repensar es la búsqueda desde la emancipación que Dussel presenta como
el reconocimiento de ese otro, en la filosofía latinoamericana, la cual comienza a lograrse en
ese descubrir otro de su identidad, puesto que ese discurso desde la cultura, desde la historia,
desde la descolonización, desde las identidades, permite dentro de una dialéctica Dusseliana
interpretar un proceso histórico en la búsqueda de las raíces precolombinas, las cuales
permiten reconocerse el inicio de la intersubjetividad, puesto que ya hay una construcción
del reconocimiento del otro desde la aproximación a su origen.
Aproximarse es surgir desde el más allá del origen del mundo. Es un acto anárquico
(si arjé es el origen anterior a todo origen). Es anterioridad anterior a toda
anterioridad. Si el sistema o el mundo es lo anterior a las cosas que habitan en él; si
la responsabilidad por el otro es anterior al propio mundo, aproximarse a la
inmediatez de la proximidad es la anterioridad de toda anterioridad…es ir en
búsqueda del origen del significado-significante, es presentarse con lo mismo, con el
6
otro. Aproximarse en la justicia es siempre un riesgo porque es acortar distancia hacia
una libertad distinta, “más allá de la esencia”. Dussel (2011).
A medida que el individuo, se permita el encuentro con el otro, y que se represente o se ha
definido fuera de estos constructos, y se abra a esas posibilidades otras, a esas condiciones
de la voz del otro, del sujeto moderno, que esas voces del otro le sean muy claras, y así se
hace necesario el respeto por el otro como ese otro, por aquí se empieza a dar posición e
importancia a la exterioridad del otro. Lo que incide a un pensar el individuo contemporáneo
y moderno como un individuo transmoderno, es decir que esta por fuera.
Lo de “trans” quiere indicar que no sólo es posterior a la modernidad central
occidental, sino que nace fuera, más allá, desde una fuente creadora…señala una
alternativa imposible a la modernidad y la postmodernidad…una alternativa posible
y creativa a partir de “la exterioridad” de dicha modernidad, pero en dialogo
permanente con ella. Dussel (2007).
Teniendo en cuenta la identidad cultural o la visibilidad del sujeto latinoamericana, que se
hace como sujeto transmoderno, pensado como otro y que permite darse a conocer como ser
periférico, que se dé la importancia de sujeto social latinoamericano, donde sea representado
por su identidad, su cultura, su cosmovisión, su ser; y que no sea visto desde los procesos
de colonización con los pensamientos con los discursos de poder, que se encuentran en la
historia, impuestos en el eurocentrismo; puesto que el sujeto transmoderno necesita del otro
(relación alterativa) para constituir su propio ser, es decir la necesidad de la intersubjetividad
7
para el enriquecimiento social que se matricula en las propuestas de las emancipadores, es
decir desde una visión de pedagogía crítica como se encuentra en Freire, cuando en un nivel
ético, político y educativo, pone al sujeto a dialogar con el otro.
Para ello se debe interpretar y analizar este concepto, desde los años 60 y 70, donde
comenzaron a romperse esas visiones eurocéntricas y se asumió un una búsqueda contra la
ontología clásica del centro, desde Hegel hasta J. Habermas, por nombrar lo más lúcido de
Europa, se levanta un contra-discurso, una Filosofía de la Liberación de la periferia, de los
oprimidos, de los excluidos, la sombra que la luz del ser no ha podido iluminar, el silencio
interpelante sin palabra todavía. Desde el no-ser, la nada, lo opaco, el otro, la exterioridad, el
excluido, el misterio del sinsentido, desde el grito del pobre parte nuestro pensar. Dussel,
(2011). Con respecto a los discursos de poder, y donde surgió entonces un pensamiento
crítico latinoamericano, desde las pedagogías del sur, los pensamientos filosóficos desde la
periferia, no solo de Latinoamérica misma, sino desde la periferia entendida en América
latina, África y Asia, y otras.
Por lo tanto desde el concepto de emancipación se busca decolonizar el sujeto
latinoamericano para hacerlo un sujeto visible, un sujeto social, critico, pensante, que salga
de su estado de oprimido y se piense desde el otro y sus procesos de resistencia frente a la
colonización, por ende se hace necesario, ese acercamiento a la obra de Dussel cuando nos
habla de emancipación del sujeto desde la periferia, y donde está enmarcado un pensamiento
liberador, suscrito dentro de la filosofía de la liberación la cual tiene como inicio finales de
los años 60 en el siglo XX, en el cual, Dussel y Freire ponían en sus discursos, la voz para
representar el oprimido, el pobre, el otro, el pueblo, buscando que se reconozca el sujetos
8
sociales dentro de América latina, es decir que siempre este el otro presente en todos los
ámbitos culturales, políticos, educativos, o todo aquel espacio donde debe hacerse visible
siempre ese otro.
Por ello, es importante dentro de este artículo el concepto de emancipación, como análisis
emergente en nuestra contemporaneidad y enmarcado en definir una sociedad éticamente
cuestionable en la crítica latinoamericana, para indagar por la posibilidad de promover, desde
esos relatos, procesos de pensamiento emancipador, usando para ello el método analéctico
que trabaja Dussel en su pensamiento filosófico latinoamericano, esto permite el saber
ubicarse, para que, desde las condiciones de posibilidad de revelación, se pueda acceder con
justa interpretación, a la palabra del otro. El método analéctico es entendido como
herramienta posibilitadora de un más allá, de un encuentro con el otro (alteridad), el momento
analéctico nos abre así al ámbito metafísico (que no es el óntico de las ciencias fácticas ni el
ontológico de la dialéctica), refiriéndose semánticamente al otro. Su categoría propia es la
exterioridad, la exterioridad del otro; su principio no es la identidad sino el de separación,
distinción. Dussel (2011).
Es así que sustentados, o analizados estos hechos; desde ese devenir histórico de la
ancestralidad, desde el ser antes de la colonización, o desde la percepción o distinción del
sujeto latinoamericano, se pueden señalar momentos fundamentales en los que emergen
estos relatos que logran de manera sustancial cautivar el pensamiento humano,
enriqueciendo las perspectivas e influyendo especialmente en las percepciones de mundo de
quienes lo leen, de manera que se proyectó la tarea de encontrar rasgos de pensamiento
emancipador en la población latinoamericana, a partir de las influencias de las teorías de
emancipación, y de las pedagogías críticas del sur.
9
La idea de la emancipación y como emerge el otro
Dentro de las problemáticas sociales, culturales y políticas latinoamericanas, se evidencia
una serie de procesos de cambios en las estructuras sociales, las cuales han venido
transformando nuestro continente, es allí donde deben emerger nuevamente unas posturas
que ya se han venido trabajando dentro del pensamiento filosófico latinoamericano, la
emancipación, las cual permite ver al otro (alteridad), en torno a una visión de
reconocimiento, desde su límite, su palabra, y desde allí desde el ser, por ello, es importante
volver a retomar generalmente un proceso de observar y reconocer la historia dentro de
América antes de la colonializacón, es decir de volver a los pensamientos ancestrales, a la
cosmogonía y códices que emergen en las culturas precolombinas, amerindias o indígenas la
cual ponen y da un criterio cultural propio, el cual tenían las tribus, los antepasados, un
proyecto expuesto por los cronistas de las indias.
Nos cuenta el Inca Garcilaso que, en el imperio, el Inca era el dios Sol o mejor dicho el hijo
del Sol, y que dirigía su imperio con una distribución justa de sus bienes (Dussel. 1995). Por
eso es de suma importancia esa mirada en la cosmogonía universal a la cultura prehispánica
(Aztecas, Mayas, Muiscas, Incas), y en todas las crónicas de indias que dejaron pensadores
como Bartolomé de las Casas, que defiende los derechos de esta cultura en la colonización,
y desde allí las barbaries que llevaron a la perdida de cultura, los derechos territoriales, la
identidad, la pertenencia, la cosificación del sujeto, y también el surgimiento del discurso
de poder colonizado, que aún se vive en estos tiempos, por ello se hace necesario dentro de
los discursos académicos, y pedagógicos el proceso de emancipación entendido pensarse
10
desde un pasado, para así, entender un presente y vislumbrar un futuro con historia para el
pueblo latinoamericano.
Ahora bien, para abordar esta conciencia colonizada y llevar al sujeto a una emancipación
desde su desarrollo social, critico, cultural, económico y político, es necesario primero pasar
por un proceso de emancipación y decolonización de saberes eurocéntricos, y reconocerse
como pensador periférico, ya que el sujeto decolonial es el que debe estar abierto a volver al
pensamiento ancestral. Es así que se busca analizar e identificar en el proceso de
emancipación para entender el sujeto latinoamericano desde una postura teórica de Dussel,
para entender la emancipación que se inscriba en el discurso pedagógico del docente hoy, y
que enmarque en sus prácticas pedagógicas la ruptura a esos paradigmas de la enseñanza
céntrica, reconociendo la multiculturalidad en América latina.
De esta forma, las estructuras universales, culturales, educativas y sociales, hoy deben
armarse de conceptos, de posturas, de apreciaciones, de lecturas propias y críticas, que
cautiven el interés del otro, por educarse, formarse, e identificar en el pensamiento
latinoamericano, no solo desde los epistémico, puesto como lo plantea Bonaventura es difícil
pensarnos desde nuestra ancestralidad puesto que hubo un epistemícidio de los códices
indígenas y allí se perdió gran parte de la historia de Abya Yala (tierra en plena
madurez o tierra de sangre vital), origen del nombre puestos por tribus indígenas de Panamá
y Colombia antes de la colonización.
11
Por ello se propone una postura emancipatoria desde el eurocentrismo no como revolución
de la colonización del saber europeo, desde una visión analéctica del asunto colonial, puesto
que, se muestra que éramos espejos del “centro” y alineadores del pueblo. Nuestro pueblo es
la única garantía de autenticidad, en tanto que nosotros ya no sabemos qué somos auténticos
y en que somos inauténticos. Dussel (2011). La autenticidad o la perdida de identidad como
periferia se aborda desde el abuso de poder, desde los genocidios, desde la barbarie y los
millones de asesinatos a nuestros ancestros; y esa allí donde se debe asumir la postura crítica
frente a los sucesos históricos, como otro invisibilizado, y que se reconozca como ese ser
latinoamericano, que también piensa, produce, es crítico, transforma y se construye en su
cosmogonía de la historia antes de la conquista, puesto que debe trascender en sus
condiciones de vida.
Todo y esto, puede ser o será posible cuando se da el paso inicial de comprender a fondo la
realidad en la que se vive, desprendido de versiones de mundo acomodadas e impuestas por
el sistema céntrico, que desde la historia de las colonización Europea ha permeado todas las
culturas periféricas como la India, África, China, y América Latina, esto evidenciado en las
historia universal de la cultura que plantea Dussel y rompe esta visión céntrica poniendo al
oriente y a las periferias, como inicio de la civilización mundial y el camino de la cultura
hacia el este, es decir que existía antes del surgimiento del pensamiento filosófico occidental.
Vemos el caso concreto de América latina. El indio tenia una cultura, una
pedagogía y tradiciones propias. Cuando llega el español las considera nada y
se siente responsable de civilizar al indio dándole lo propio, hispanizándolo.
Se le enseña castellano, se le integra a la ciudad en que traza calles y cuadras,
12
pretende convertirlo al cristianismo y, de este modo, destruye todo lo que el
indio es. Le enseña “lo mismo” que el español es y no lo respeta en su
alteridad. Dussel (1995).
Sin embargo, la emancipación busca poner en dialogo una postura periférica desde América
latina y allí entra en escena la el otro (alteridad) o la analéctica en palabras de Dussel, la cual
se propone, tal y como lo plantea el filósofo buscar e interpretar las lecturas de mundo desde
el propio contexto, y desde allí evidenciar cuáles son las problemáticas, sociales, culturales,
políticas, económicas, teóricas, pedagógicas que permitan realizar un análisis del contexto
en el que se lee; de esta forma se logra o se empieza un proceso que lleva a la emancipación
del pensamiento en el sujeto latinoamericano a través de múltiples lecturas, todo ello advierte
lo difícil de la tarea del pensar. Si el pensar quiere ser un pensar crítico de la totalidad: ¿cómo
pensarla críticamente, sino saliéndonos de ella? Dussel (1995). Por eso América latina está a
la intemperie y nunca ha sido pensada, es necesario pensarla desde una emancipación o
filosofía de la liberación, que tiene como tema al pobre el oprimido, al no-ser más allá de
“lo mismo”.
Ahora bien, dentro de lo que propone la pedagogía critica, o las pedagogías del sur, se debe
replantearse los conocimientos eurocéntricos o céntricos, para volver a un pensamiento
ancestral y se debe de conectar nuevamente con esos universales o pensamientos
cosmogónicos, de la madre tierra o nuestra tribu, para reconocerse como pueblo, y así tener
una postura desde la resistencia y critica dentro del trabajo de la emancipación. Hablar de
emancipación desde América latina, también es entender de un proceso decolonial, es volver
a retornar a la colonización de los siglos XIV y XIX; en los cuales como se planteó
13
anteriormente se habla de una colonización de territorio, y no un descubrimiento como lo ha
planteado la historia, y a partir de allí y toda esa historicidad avasallante en el discurso de
poder, y como se cosifico el sujeto (indio) y se perdió el sentido humano del colonizado,
tratado como objeto y por ello llevado a la esclavitud, a la perdida humana de más de 40
millones de indígenas en nuestro territorio Abya Yala, al igual que los procesos de
colonización de saberes, de creencias, de sentidos, de culturas, y el empoderamiento de
territorios colonizados por el reino de la corona española, llevando a perderse la identidad
como pueblo originario.
Toda esta historia como muestra de los saqueos de las riquezas amerindias, que había en
nuestro continente, y por lo tanto un poder más hegemónico desde el centro europeo. De esta
forma, se empieza en el siglo XX, en los años 40, 50 y 60. A escuchar el concepto del otro
como latinoamericano, no solo como persona, o clase social, sino como pueblo, como cultura
periférica, es allí donde emerge entonces la búsqueda del desarrollo social y humano del
sujeto latinoamericano, en los procesos de emancipación, desde la literatura, el arte, la
cultura, la filosofía, la identidad y otras. No deberíamos festejar el 12 de octubre y, sin
embargo, lo hacemos. 12 de octubre “fiesta de la raza” ¿de qué raza? Si es de la india, mal
podemos festejar, porque en esa fecha fue oprimida. Entonces estamos festejando la raza de
los españoles (Dussel. 1995).
Desde este momento, debe ponerse a América latina como concepto en el pensamiento
filosófico latinoamericano, puesto que no puede estar más a la intemperie y ser pensada
dentro de la auténtica liberación, es decir que tenga como temas como lo plantea Dussel, y
Freire, al pobre, al oprimido, al olvidado, al no-ser, a reconocerse como sujeto social. Es por
14
ello que, en el proceso histórico planteado desde mediados del siglo XX, comienzan a surgir
la compresión geopolítica de la opresión, de la liberación, de las ideologías, y con ellas
también ya una serie de sucesos para estos pensadores latinoamericanos que pusieron su
filosofía y pedagogía, a conversar con otras miradas de la cultura, de las ciencias sociales,
desde otros conceptos. Develando la realidad y la denuncia de todo lo que lleva la
emancipación; abordado posturas de estos exiliados como Dussel, Freire y otros no solo en
el campo filosófico sino en el literario, en el artístico, en las múltiples posturas de todos los
colectivos culturales y sociales que emergieron en contra de las dictaduras latinoamericanas,
puesto como se plantea pasamos de un pensamiento colonizador eurocéntrico, a uno
periférico un discurso de poder hegemónico que podría aun evidenciarse en estos momentos.
Por esto, la comprensión de este pensamiento de emancipación está continuamente el e
movimiento, es decir, desde una posición emancipatoria, un pensamiento pedagógico crítico
dentro de las pedagogías del sur, y así; ahora podemos apreciar el problema que se presenta
cuando decimos que “conocemos” algo. Puedo afirmar que conozco algo del horizonte, pero
inmediatamente otro horizonte fluye como futuro o como especialmente incomprensible, lo
que nos hace ver que esta comprensión esta en ese continuo movimiento. Dussel (1995). Por
lo tanto, ese discurso otro, debe permear el campo de lo cultural, lo social, lo político y lo
pedagógico, para que se replantee, o repiense la forma de enseñar la historia, a través del
conocimiento y posturas que se implementan desde esas teorías públicas, que permean los
discursos académicos. Y de esta forma dentro de las pedagogías del sur, conocer el
pensamiento de la periferia, para reconocer las identidades y el surgir del sujeto
latinoamericano.
15
América latina ha sido hasta ahora mediación del proyecto de aquellos que
nos han interiorizado o alineado en su modo como entes o cosas desde su
fundamento. Para nosotros va a ser muy importante esclarecer cuál es el
fundamento de ese hombre que nos ha constituido como entes o cosas, para
entendernos como latinoamericanos y poder plantearnos la posibilidad de la
liberación, de abrirnos un camino a la exterioridad. Dussel (2011).
Por ello, la importancia de las pedagogías del sur, dentro de los discursos de la academia, y
del maestro hoy. Puesto que este, debe considerarse como ese otro exterior, para entender
todo aquello que deviene en los colectivos, grupos, comunidades, movimientos, sociales,
étnicos, urbanos, y otros, que están permitiendo el surgimiento del otro colonizado, con una
postura emancipadora dentro de los trabajos dentro de América latina, que busca posicionar
el pensamiento otro, desde las teorías del sur.
El otro – sujeto Latinoamericano
Ahora bien, es de suma importancia no solo leer, sino interiorizar las teorías de
emancipación, liberación, saberes del sur, dentro de las misma pedagogías criticas o
pedagogía del sur, especialmente la de latinoamericana, para que se incluya la inserción al
sujeto en un mundo de posibilidades que se sustentan en elementos fundamentales propios
de la esencia de la analéctica (el otro) que se constituye en el marco de la filosofía de la
liberación, la cual, como lo plantea su creador más destacado, se estructura a partir de las
dictaduras del sur las cuales llevan una carga ideológica de libertad desde la cual analizar los
procesos que han marcado las historias del sur (Dussel. E, 2011), sin embargo, en esa
pluralidad de posibilidades, uno de sus énfasis es, como lo dice Heidegger, la comprensión
16
de la realidad desde las experiencias vividas, es decir que cada individuo constituye
perspectivas desde sus vivencias, sus historias, sus prácticas sociales, su cultura y sus lecturas
de mundo. Por ello, afirma el mismo (Dussel, E. 2011) que cuando se habla de emancipación
del pensar, es necesario que haya una descentralización del pensamiento con respecto a
referentes europeos y norteamericanos y enfocarse en las experiencias como países latinos,
con problemáticas diferentes, con posturas teóricas diferentes, con otro tipo de lecturas
sociales según el contexto.
Por consiguiente es necesario partir de un pensamiento constituido desde lo propio donde se
planteen categorías de interpretación según las vivencias que se están generando dentro de la
historia particular, dentro del contexto social y cómo este puede permitir pensar el mundo
desde lo propio, y ver el mundo de hoy a través de los momentos que experimenta América
Latina, donde el distintivo de periferias da razón de una opresión constante y creciente,
asunto que reitera la necesidad de fortalecer, dese los medios culturales y sociales, la
emancipación del pensamiento.
Cuando me reconozco finito y cuando reconozco al otro como otro (más allá
de la visión y de la luz, de la inteligencia y razón europeas, de la razón de
Hegel), puedo avanzar hacia el otro como él es. Levinas, un filósofo todavía
europeo, pero ya en la exterioridad de Europa, llama désir lo que querría
traducir como “amor-de-justicia”; es el amor al otro como otro por el hecho
de ser alguien, es decir, de ser hombre, aunque todavía no lo conozca; aunque
de él no sepa nada porque el respeto del otro como otro es un acto que no
puede ir en la línea de la razón o de la inteligencia. (Dussel. E. 1995)
17
De esta forma, y como consecuencia de lo anterior, es menester abogar por una pedagogía
liberadora a través de diálogos de saberes, de prácticas de aula, prácticas sociales, y
culturales, que permitan asumir nuevas posturas a través del análisis de contenido que estos
autores nos muestran en sus investigaciones y aportes a los pensamientos filosóficos,
pedagógicos y conceptuales latinoamericanos, que permitan el acercamiento ameno a
interpretaciones de la realidad.
Este reto se hace patente a través del análisis y acercamiento a la lectura, la literatura
académica latinoamericana, lectura que sumerge al individuo en una visión de la s realidades
otra. Así que, se hace indispensable promover estrategias que rompan con paradigmas
obsoletos y descontextualizados en educación y permitan ampliar los espacios de interacción
personal en los que, con base en el acercamiento a las obras propuestas, se estructuren nuevas
visiones, o visiones colonizadas que deben de emerger nuevamente al mundo y se asuman,
desde las nuevas metas pedagógicas, manera más libre de pensamiento y acción.
Es justamente, a la inversa, aquellos que son capaces de ser discípulos del
pueblo, los que están dispuestos a vivir toda la tradición que nos han conocido
antes, porque no la han estudiado en aula alguna; aquellos capaces de escuchar
el pueblo, son los que descubrirán en el pueblo el proyecto real de liberación.
Y solo después de haberlo escuchado, se estará en condiciones de formularlo
parcialmente con conciencia crítica y volcarse a ese pueblo con cierta eficacia
científica, que les permita colaborar en el camino de la liberación. Dussel
(1995)
18
En suma, pues, la pretensión de impulsar la emancipación y que se suscribe en una pedagogía
critica del sur, como práctica de pensamiento liberador, debe permitir que el sujeto que se
forma vaya asumiendo una conciencia crítica, que le suministre fundamentos para que pueda
ser escuchado, y tenido en cuenta como otro, en particular por el poder que le otorgue el
argumento, la palabra, y ante todo su ser. “Yo-soy-el-mundo”, pero en realidad lo soy desde
mi pasado, que me condiciona, y ese pasado es el de mi vida; pero además es el de mi familia,
el de mi pueblo, el de mi tribu y, por ultimo el de toda la historia humana. (Dussel. E. 1973)
De esta forma, la sociedad actual es entonces, un escenario en el que las problemáticas
abundan y se agitan como efecto de las experiencias que sus integrantes viven en sus
relaciones sociales, culturales, económicas, ambientales, etc., convirtiéndose en una
atmósfera saturada de experiencias de opresión cuyos protagonistas se constituyen en
artífices de su propia emancipación en virtud de procesos que la sociedad orienta con apoyo
en herramientas determinantes como, para este caso, la lectura de teorías propias
latinoamericanas.
por eso, el surgir del sujeto latinoamericano, debe plantearse desde ese otro, y asumir el ser
(otro), como una implicación del individuo latinoamericano, asumiendo la identidad, la
cultura la historia, la cosmovisión, las prácticas, la socialización, la culturalidad social, los
colectivos y todo aquello que hace al otro, como postura de trabajo, de interpretación, dentro
del pensamiento filosófico latinoamericano. De modo, pues que la metodología analéctica
(el Otro) con sustento en el pensamiento emancipador, de las pedagogías del sur u oprimidas,
y puesta en la escena social, cultural y educativa, se deben generar novedades a partir de la
interpretación que se logra por parte de individuos que experimentan una realidad agobiada
y dominada que debe partir para su liberación del rompimiento de dialécticas de control (en
19
nuestro contexto dialécticas eurocéntricas) que apoyen, según lo pone en contexto Dussel, la
experiencia de sujetos libres que puedan construir su propia historia a partir de la
emancipación de experiencias alienantes tanto en lo político, como en lo social, económico
y fundamentalmente pedagógico.
Conclusión
Se ha presentado entonces un análisis, e interpretación de la emancipación y liberación
dentro de una parte del contexto histórico, que plantea Dussel como el reconocimiento del
Otro, y desde allí, comenzar a ser visible nuevamente las culturas periféricas, para llevar a
repensar el concepto de sujeto, de ser, de individuo, de persona, dentro de Latinoamérica
como sur; y abordar o entender ese otro como ser-otro, que es así como debe de interpretarse,
para entender al ser como sujeto (ser-otro; desde su alteridad, desde su modelo analéctico,
desde el rostro del otro). Para ello fue necesario poner en el orden histórico, una explicación
del sujeto como “lo mismo” en la colonización de su pensar, de su sentir, de su cosmogonía,
desde la invasión de Abya yala.
Pues bien, entender ese devenir histórico, no solo desde una periferia latinoamericana, sino
todas las periferias globales, es saber interpretar el otro, a través de la lectura de su cultura,
de su pensamiento, de su historia, de su ancestralidad, y el trabajo se convierte en un análisis
de una literatura vasta, o expresándolo de otro modo, desde una Literanalectica4, una lectura
de la interioridad otra, para llegar al exterioridad otra; es decir, para adentrarse en la mirada
desde el interior de ese otro, una lectura y discusión de las palabras del otro, una puesta en
4 Literanalectica: (descubrir al otro desde la lectura, despertando y emancipando mi pensamiento, desde las voces de los otros, y desde la literatura para ahondar en el auto-conocimiento) concepto propio que emerge en el ejercicio del análisis, de la interpretación de las obras, y el ejercicio discursivo en la participación en los seminarios de la maestría.
20
común de la sabiduría del otro, un autoconocimiento continuo también como otro, en ese
mundo del oprimido, del pobre, del sujeto aun sujetado.
Por ello, siempre se hará necesario, romper ese discurso céntrico, o eurocéntrico, para
escuchar las voces de la periferia, como lo plantea Dussel, sin caer en visiones utópicas de
las comunidades, sino que emerja un pensamiento de igualdad, de alteridad, de derechos, de
oportunidad, y de reconocernos como esos Otros, que también estuvieron e hicieron parte de
la historia, que aun hace falta por contar.
21
Referencias:
Libros
• Dussel, E. (2017). Filosofías del sur, descolonización y transmodernidad. Ediciones
Akal. México
• Dussel, E. (2011). Filosofía de la liberación. Fondo cultural Económica. México
• Dussel, E. (1995). Introducción a Filosofía de la liberación. Editorial Nueva América.
Bogotá, Colombia.
• Dussel, E. (1973). Para una ética de la liberación latinoamericana, tomo I. siglos
editores. México.
• Dussel, E. (1973). Para una ética de la liberación latinoamericana, tomo II. siglos
editores. México.
• Méndez, J. Mendoza, E. (2017). Del sujeto moderno al sujeto decolonial. Una
aproximación epistémica para la emancipación de la filosófica latinoamericana.
Fondo editorial UNERMB. Venezuela.
22
• Restrepo, E. Rojas, A. (2010) inflexión decolonial: fuentes, conceptos y
cuestionamientos. Editorial, Universidad del cauca. Colombia.
Artículos:
• Barón, G. Cuervo, M. Martínez, V. Alteridad latinoamericana y sujeto- pueblo en la
obra temprana de Enrique Dussel. Franciscanum. Revista de las ciencias del espíritu,
vol. LIV, núm. 158, julio-diciembre, 2012, pp. 141-164. Universidad de San
Buenaventura Bogotá, Colombia.
• Leones, E. (2018). Aproximación a los principios éticos de liberación del sujeto
latinoamericano en el pensamiento de Enrique Dussel. Amauta, 16(31), 47-68.
http://dx.doi.org/10.15648/am.31.2018.4.
• Martin, E. Diaz. Año VI, número 19 (2008). Colonización biopolítica y tutelaje
epistémico: una mirada desde Latinoamérica. Konvergencias filosofía, Argentina.
• Santos. M. (2015). alteridad y sujeto. educar desde una realidad rota. DOI:
10.13042/Bordon.2016.68301. Fecha de recepción: 08/03/2015 • Fecha de
aceptación: 02/11/2015.
• Cuesta M. Gómez Melo. (2014). Frases que racializan, excluyen y minimizan al
sujeto en el lenguaje cotidiano de un grupo de jóvenes de Bogotá. Prospectiva No.
19: 143-166, octubre 2014 ISSN 0122-1213.
23
• Santos, M. (2008). Ideas filosóficas que fundamentan la pedagogía de Paulo Freire.
Revista iberoamericana de educación, enero abril. Número 046. Pp. 155-173. Madrid,
España.
• Marcos Santos Gómez. Universidad de Granada. Departamento de Pedagogía.
Facultad de Ciencias de la Educación. Campus Universitario de Cartuja, S/N. 18071
Granada. Fecha de recepción: marzo de 2010. Fecha de aceptación definitiva: julio
de 2010. Biblid [(1130-3743) 22, 2-2010, 63-84].
• Dussel. E. La filosofía de la liberación en Argentina, irrupción de una nueva
generación. Revista de filosofía latinoamericana. Tomo I Julio de 1975. Argentina.
• Cabaluz, J. (2016). Pedagogías críticas latinoamericanas y filosofía de la liberación:
potencialidades de un diálogo teórico-político. Educ, educ. 19(1), 67-88. DOI:
10.5294/edu.2016.19.1.4
• López, P. (2002). Pueblos indígenas y decolonialidad sobre la colonización
epistemológica occidental. Volumen 10, número 22, mayo-agosto, 2013, pp. 305-
331.