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UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DE MADRID. VARIA 9. I er Congreso Internacional de Arqueología Ibérica Bastetana Madrid 2008, pp. 375-385 LA RED DE ESPACIOS CULTURALES DE ANDALUCÍA Y EL PATRIMONIO IBÉRICO JAVIER VERDUGO SANTOS CONSEJERÍA DE CULTURA. JUNTA DE ANDALUCÍA 375 RESUMEN Desde que la Junta de Andalucía asumió la gestión del patrimonio histórico en general y arqueológico en particular, se han elaborado ya dos leyes para la tutela del rico y extenso patrimonio andaluz; la última recién estrenada en diciembre de 2007 establece una serie de figuras que permitirán la mo- dernización y protección de los sitios arqueológicos, agilizando la interconexión entre la investigación, protección, conservación y difusión de los mismos. Palabras clave: legislación, gestión, protección, puesta en valor. RESUMÉ Etant donné que le gouvernement de l’Andalousie a pris en charge la gestion du patrimoine histori- que en général et archéologique en particulier, ont déjà mis au point deux lois pour la protection de la riche et vaste patrimoine de l’Andalousie, la dernière nouvellement créée en Décembre 2007 énonce une série de figures qui permeteron la modernization et la protection des sites archéologiques, ren- dron plus agile l’interface entre la recherche, la protection, la conservation et la diffusion. Mots clefs: législation, gestion, protection, mis en valeur. ESPACIO CULTURAL Y ZONA PATRIMONIAL La Ley 14/2007, de 26 de noviembre, del Patrimonio Histórico de Andalucía (BOJA, nº 248 de 19 de diciembre de 2007) establece en su artículo 75 que forman parte de las Instituciones del Patrimonio Histórico, los denominados Espacios Culturales, que se definen en el artículo 76 como: aquellos in-

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  • UNIVERSIDAD AUTNOMA DE MADRID. VARIA 9.Ier Congreso Internacional de Arqueologa Ibrica Bastetana

    Madrid 2008, pp. 375-385

    LA RED DE ESPACIOS CULTURALES DE ANDALUCA Y EL PATRIMONIO IBRICO

    JAVIER VERDUGO SANTOSCONSEJERA DE CULTURA. JUNTA DE ANDALUCA

    375

    RESUMENDesde que la Junta de Andaluca asumi la gestin del patrimonio histrico en general y arqueolgicoen particular, se han elaborado ya dos leyes para la tutela del rico y extenso patrimonio andaluz; laltima recin estrenada en diciembre de 2007 establece una serie de figuras que permitirn la mo-dernizacin y proteccin de los sitios arqueolgicos, agilizando la interconexin entre la investigacin,proteccin, conservacin y difusin de los mismos.

    Palabras clave: legislacin, gestin, proteccin, puesta en valor.

    RESUMEtant donn que le gouvernement de lAndalousie a pris en charge la gestion du patrimoine histori-que en gnral et archologique en particulier, ont dj mis au point deux lois pour la protection dela riche et vaste patrimoine de lAndalousie, la dernire nouvellement cre en Dcembre 2007 nonceune srie de figures qui permeteron la modernization et la protection des sites archologiques, ren-dron plus agile linterface entre la recherche, la protection, la conservation et la diffusion.

    Mots clefs: lgislation, gestion, protection, mis en valeur.

    ESPACIO CULTURAL Y ZONA PATRIMONIAL

    La Ley 14/2007, de 26 de noviembre, del Patrimonio Histrico de Andaluca (BOJA, n 248 de 19 dediciembre de 2007) establece en su artculo 75 que forman parte de las Instituciones del PatrimonioHistrico, los denominados Espacios Culturales, que se definen en el artculo 76 como: aquellos in-

  • Javier Verdugo Santos

    muebles de titularidad pblica o privada inscritos en el Catlogo General del Patrimonio HistricoAndaluz, o agrupaciones de los mismos, que por su relevancia o significado en el territorio donde seemplazan se acuerde su puesta en valor y difusin al pblico, es decir, la nueva ley contempla unanueva figura de gestin del patrimonio, junto con los museos, las bibliotecas y los archivos. Estos Es-pacios Culturales se clasifican en Conjuntos Culturales y Parques Culturales. De este modo se conso-lidan los Conjuntos, ya contemplados en la Ley 1/91, aadindoles la obligacin de dotarse de unplan director y de un rgano de gestin propio, y se incorpora la figura de los Parques Culturales quese definen en el artculo 81 como aquellos Espacios Culturales que abarcan la totalidad de una o msZonas Patrimoniales que por su importancia cultural requieran la constitucin de un rgano degestin en el que participen las administraciones y sectores implicados.

    Dos condiciones se imponen para su formulacin, la primera, la existencia de una o ms ZonasPatrimoniales y la segunda, su importancia cultural. Precisamente esta categora de proteccin es otrade las novedades de la naciente Ley que recoge la relacin entre el patrimonio y territorio. Las ZonasPatrimoniales se definen en el artculo 26.8 como aquellos territorios o espacios que constituyen unconjunto patrimonial, diverso y complementario, integrado por bienes diacrnicos representativos dela evolucin humana, que poseen un valor de uso y disfrute para la colectividad y, en su caso, va-lores paisajsticos y ambientales. La Zona Patrimonial es por tanto un Bien de Inters Cultural, que cons-tituye un conjunto patrimonial diverso y diacrnico, cuya declaracin, comporta su inscripcin en elCatlogo General del Patrimonio Histrico Andaluz. La estructura y rgano de gestin de un ParqueCultural, de acuerdo con lo previsto en el artculo 82, vienen establecidos en su norma de creacinpudiendo adoptar cualquiera de las formas con o sin personalidad jurdica prevista en la legislacin.Pueden existir, por tanto, parques culturales que funcionen a travs de una fundacin, un organismoautnomo, una oficina tcnica o uno de los consorcios interadministrativos, previstos en el artculo 95de la nueva Ley de Patrimonio o a travs de las llamadas entidades instrumentales reguladas en lareciente Ley 9/2007, de 22 de octubre, de la Administracin de la Junta de Andaluca (BOJA, 215, de31 de octubre de 2007).

    LA RED DE ESPACIOS CULTURALES DE ANDALUCA

    Por otro lado, la nueva Ley de Patrimonio Histrico en su artculo 83 crea la Red de Espacios Cultu-rales de Andaluca (RECA) constituida por un sistema integrado y unitario formado por aquellos Es-pacios Culturales ubicados en el territorio de la Comunidad Autnoma que sean incluidos en lamisma por la Consejera competente en materia de patrimonio histrico, as como aquellos enclavesabiertos al pblico que por sus condiciones y caractersticas no requieran la dotacin de un rganode gestin propio. La existencia de la Red significa que slo aquellos espacios o enclaves que la Con-sejera determine forman parte del sistema.

    Los Espacios Culturales que se integren en la RECA estarn constituidos por aquellos inmueblesde titularidad pblica o privada inscritos en el Catlogo General del Patrimonio Histrico Andaluz, oagrupaciones de los mismos, que por su relevancia o significado en el territorio donde se emplazanse acuerde su puesta en valor y difusin al pblico, es decir, debern estar inscritos como Bien de In-ters Cultural o Bien de Catalogacin General, que son las dos figuras de proteccin contempladas enel artculo 7 de la nueva Ley 14/2007, de 26 de noviembre.

    En una aproximacin a la futura organizacin y funcionamiento de la Red de Espacios Cultura-les de Andaluca (Verdugo, 2008), que deber ser objeto de desarrollo reglamentario de acuerdo conel mandato del artculo 83.2 de la nueva Ley, podemos afirmar que la RECA integrar a los ConjuntosArqueolgicos y Monumentales dependientes de la Consejera de Cultura y a los actuales enclaves

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  • La Red de Espacios Culturales de Andaluca y el patrimonio ibrico

    que se agrupan en torno al programa Red de Yacimientos Arqueolgicos de Andaluca (RAYA), quese extinguir.

    Entre sus objetivos la Red como sistema deber contemplar al menos, los siguientes:

    a) La coordinacin de los sistemas generales de gestin de los espacios y enclaves culturales in-tegrados en la Red a travs de los correspondientes Planes Directores.

    b) La promocin externa de los espacios culturales y enclaves integrados en la Red de forma ho-mognea y conjunta.

    c) La colaboracin en programas estatales e internacionales de conservacin de espacios y en-claves culturales de similar naturaleza, que posean un valor de uso y disfrute para la colecti-vidad.

    d) El intercambio de informacin con otras redes o sistemas de proteccin del patrimonio hist-rico, as como con aquellas organizaciones nacionales o internacionales relacionadas con laproteccin, conservacin y puesta en valor de espacios y enclaves culturales de similar natu-raleza.

    e) El fomento de las buenas prcticas en la proteccin y gestin del patrimonio histrico enten-dido como parte del ecosistema humano, a travs de la puesta en valor y dinamizacin de losespacios y enclaves culturales de la Red.

    f) La promocin y desarrollo sostenible de los espacios y enclaves culturales integrados en laRed en funcin de sus valores y singularidades, la diversidad cultural y el desarrollo local.

    La Red de Espacios Culturales de Andaluca se articular en tres ejes:

    a) El aprovechamiento sostenible de los espacios y enclaves como recursos culturales a travs desu tutela, conservacin y puesta en valor.

    b) El fomento del conocimiento cientfico de sus valores generando su investigacin.c) El impulso de iniciativas de desarrollo local y territorial basado en la difusin y revalorizacin

    de los espacios y enclaves culturales integrados en la Red.

    La Red de Espacios Culturales de Andaluca podr incardinarse total o parcialmente en otrasredes similares de mbito territorial superior, ya sean nacionales, transnacionales o europeas. Encuanto a su funcionamiento, la Red de Espacios Culturales de Andaluca debe constituirse como unprograma transversal de la Consejera de Cultura adscrito a Secretara General de Polticas Culturalesy a la Direccin General de Bienes Culturales en coordinacin y cooperacin con los otros serviciosde la Direccin General de Bienes Culturales, Secretara General Tcnica, Delegaciones Provinciales,y especialmente el Instituto Andaluz del Patrimonio Histrico y la Empresa Pblica de Gestin de Pro-gramas Culturales quienes mediante las oportunas encomiendas de funciones podrn participar en elasesoramiento y gestin de los espacios y enclaves culturales integrados en la Red.

    Su organizacin deber estructurarse a travs de una Coordinacin General, una Comisin Tc-nica y un Plan Director de la Red, instrumento de planificacin que deber disear su ordenacin enel territorio; las lneas estratgicas y los programas necesarios para el cumplimiento de sus objetivosdirigidos de manera especial al aprovechamiento sostenible de los espacios y enclaves como recur-sos culturales a travs de su tutela y valorizacin; al impulso del conocimiento cientfico de sus valo-res promoviendo la investigacin y al fomento de iniciativas de desarrollo local y territorial basadasen la difusin de los espacios y enclaves integrados en la Red.

    Junto al Plan Director de la RECA y de acuerdo con sus directrices se redactar un plan directorpor cada uno de los espacios y enclaves en ella incluidos. Los Planes Directores de los Espacios Cul-turales y Enclaves debern tener, al menos, una vigencia de ocho aos, debiendo ser verificados cada

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    cuatro aos elaborndose sobre ellos una auditora de gestin. Los planes debern establecer el pro-cedimiento para corregir o adaptar el plan a necesidades estratgicas superiores, a nuevas contingen-cias no previstas en su formulacin y a las disponibilidades presupuestarias. Los planes di rectoresdebern contemplar el desarrollo de programas en materia de investigacin, proteccin, conservacin,difusin y gestin de los bienes tutelados. Los planes constarn de un documento de formulacin enel que se establezca el diagnstico de la institucin, la metodologa para su confeccin y las fases deelaboracin; instrumentos de anlisis, participacin de agentes y alcance del plan con la formulacinde los objetivos, las lneas estratgicas, programas operativos y propuestas; un documento de avanceen el que se concreten las propuestas recogidas en el plan de formulacin que ser sometido a infor-macin pblica y un documento definitivo en el que se establecer el desarrollo y alcance de los pro-gramas con un cronograma de las actuaciones y las dotaciones presupuestarias correspondientes.

    En lo referente a la inclusin o cancelacin de un espacio o un enclave cultural en la Red de Es-pacios Culturales de Andaluca, aquella se realizar de oficio por Resolucin de la persona titular dela Consejera de Cultura en el caso de los Enclaves y por Decreto del Consejo de Gobierno en el delos Conjuntos y Parques Culturales, procedimiento cuyo precedente es el establecido en la derogadaLey 1/91 para los Conjuntos. Tambin podr solicitarse a instancia de parte la inclusin de un deter-minado espacio o enclave cultural en la Red, de acuerdo con el procedimiento que reglamentaria-mente se establezca.

    Finalmente, debemos referirnos a los espacios con que inicialmente se conforma la RECA (figura1), y que son los Conjuntos Culturales de la Alhambra y Generalife de Granada; Italica en Santiponce(Sevilla); Madinat Al-Zahra en Crdoba; Baelo Claudia en Cdiz; Necrpolis y Anfiteatro de Car-mona (Sevilla); Alcazaba de Almera; Dlmenes de Antequera (Mlaga) y los enclaves de Millares enSanta F de Mondjar y Castillo de Vlez Blanco ambos en la provincia de Almera; Gades romano enCdz capital; Castillo de Doa Blanca en el Puerto de Santa Mara y Carteia en San Roque ambos enla provincia de Cdz; Cercadilla, Ategua y Sinagoga en Crdoba; Tutugi-Castelln Alto en Galera(Granada); Turobriga en Aroche (Huelva) y Ruta Dolmnica de la provincia de Huelva; Cstulo en Li-nares (Jan); Teatro romano de Mlaga y Acinipo en Ronda (Mlaga) y Monasterio de San Isidoro delCampo en Santiponce (Sevilla).

    Cul es el futuro de la Red, en cuanto a los criterios de integracin en la misma, es una cuestina plantear. Si tenemos en cuenta que uno de sus fines ms importantes sino el que ms, es la puestaen valor de bienes patrimoniales para su difusin, parece lgico que la inclusin de los bienes respondaa criterios de pedagoga cultural ms que de oportunidad. Salvado afortunadamente el criterio de obli-gacin por traspaso de competencias que es definido por Castieira (2008) y tratado de forma ex-presiva por dicho autor, es lgico que se establezcan determinadas estrategias y se racionalice laimplantacin territorial de la Red. Lgicamente, esos criterios debern ser definidos por su Plan Di-rector, pero antes de redactar dicho plan la Administracin competente en materia de patrimonio his-trico deber fijar pautas que orienten a sus redactores. Aproximarnos a cules deben ser esos criterios,es lo que vamos a hacer a continuacin. En primer lugar, debe establecerse un criterio de territoriali-dad (Verdugo, 2005) e importancia cultural para los Parques Culturales, que abarcarn una o msZonas Patrimoniales. En cuanto a los Conjuntos Culturales stos deben responder en su creacin noslo a su importancia cultural e histrica sino tambin a su grado de conocimiento y complejidad desu tutela, que aconsejen dotarlos de un rgano de gestin propio. Por ltimo, los Enclaves no debenser tratados como un cajn de sastre donde incluir todo aquel patrimonio que es propiedad de laJunta de Andaluca, sino que lo prctico debe ser su puesta en valor en funcin de una difusin ade-cuada del mismo basada en sus valores especficos.

    Hasta ahora hemos visto unos criterios endgenos de integracin en funcin de los valores delos bienes. Sin embargo, debemos tambin establecer que los bienes pertenecientes a la Red deben

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  • La Red de Espacios Culturales de Andaluca y el patrimonio ibrico

    estar sometidos a unas estrategias exgenas de carcter general o transversal. Nos referimos a la ne-cesidad de que respondan a un discurso de pedagoga cultural. La propia Ley 14/2007, en su Dis-posicin Adicional Sptima, ya orienta en lo referente a los Bienes de Inters Turstico, a la necesidadde que las Consejeras competentes en materia de turismo y cultura, fomenten frmulas de colabora-cin y asistencia mutua para la difusin de bienes integrantes del Patrimonio Histrico Andaluz de es-pecial inters turstico. Adems, la planificacin del territorio, los programas de desarrollo rural o losplanes de desarrollo sostenible de los bienes ambientales protegidos establecen estrategias de desarrollobasadas en la puesta en valor de bienes patrimoniales (Fernndez Cacho, 2008). Esto significa, que conindependencia de la Red de Espacios Culturales de Andaluca ya hay en marcha programas basadosen la difusin del patrimonio que desarrollan otros actores. Esta circunstancia debe ser tenida encuenta a la hora de tejer la trama territorial de la Red.

    No obstante, hay un mbito que no ha sido desarrollado hasta ahora, nos referimos al discurso his-trico de Andaluca inmerso en el del resto de la Pennsula Ibrica. La Red tiene ante s el reto de mostrarpedaggicamente ese transcurrir de nuestra historia a travs de la puesta en valor de los bienes que la in-tegran, es decir, los Espacios y Enclaves deben estar articulados en torno a un discurso didctico, mos-trando de forma transversal a travs del territorio de la Comunidad la secuencia histrica que ha tenidolugar en Andaluca, por medio de bienes representativos de esa sucesin temporal convenientementerestaurados. Estos ejes transversales debern apoyarse unas veces en Centros de Interpretacin de la Co-munidad, que a modo de cabecera muestren hitos o perodos culturales importantes, y otras a travs deItinerarios Culturales que permitan un viaje en el tiempo. De este modo todos los bienes que integran laRed se hallarn articulados a esos centros o itinerarios, adems de mostrar sus propios valores.

    En este discurso, tendrn especial importancia los Parques Culturales, por que adems de cons-tituir un territorio que contiene elementos diacrnicos relevantes del patrimonio histrico, con valo-

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    Figura 1.- Red de Espacios Culturales de Andaluca.

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    res paisajsticos y/o ambientales en su caso, que han merecido ser tutelados a travs de una o ms ZonasPatrimoniales, debe poseer una importancia cultural que requiere su declaracin como parque y cons-tituir un rgano de gestin en el que participen las Administraciones y sectores implicados, que orien-tar sus actuaciones hacia la investigacin, tutela y conservacin de los recursos patrimoniales, laaccin cultural, el desarrollo rural sostenible y el equilibrio territorial, y de forma especial estimularel conocimiento del pblico, promoviendo la informacin y la difusin cultural y turstica de los va-lores patrimoniales y el mximo desarrollo de actividades culturales, tanto autctonas, como de ini-ciativa externa, as como desarrollar actividades pedaggicas sobre el patrimonio con escolares,asociaciones y pblico en general, promoviendo tambin la investigacin cientfica y la divulgacinde sus resultados.

    Los Parques Culturales constituyen pues uno de los vrtices ms importantes de ese discurso pe-daggico que se pretende dar por medio de la Red a la ciudadana. Mientras que los itinerarios o loscentros de interpretacin darn una informacin sincrnica de la cultura de Andaluca, los parques pre-sentarn un discurso diacrnico presentando el patrimonio de un territorio determinado a lo largo detoda la Historia. Mostrar la secuencia histrica y cultural de Andaluca, con los grandes hitos: Prehis-toria, Megalitismo, Tartessos, Iberos, Fenicios y Griegos, Romanizacin, Islamizacin, Cristianismo,Judasmo, Renacimiento, Barroco, Patrimonio Industrial y Etnogrfico, Arquitectura moderna, serla principal misin de la Red de Espacios Culturales de Andaluca.

    EL PATRIMONIO IBRICO DE ANDALUCA

    En el desarrollo de ese discurso pedaggico, eje central de la funcin cultural de la RECA, el patrimonioibrico de Andaluca tiene una especial importancia. Por fortuna se cuenta hoy con un estado de lainvestigacin (Ruiz y Mollinos, 1984; Lpez Palomo, 1987; Ruiz, Serrano Pea y Molinos, 1995; Gutirrez,1998; Lpez Marcos y Adroher, 2002) que permite tener un importante grado de conocimiento de loque supuso la cultura ibrica, que se desarroll en reas distantes desde Huelva al levante peninsu-lar.

    El conocimiento de su hbitat (Ruiz, 1987), acompaado de la adquisicin por parte de las dis-tintas administraciones de importantes yacimientos, permite disponer de una serie de zonas arqueo-lgicas de titularidad pblica susceptibles de ser incluidas en la Red como Conjuntos Culturales ocomo Enclaves. Nos referimos a los oppida de Ategua (Crdoba), Torreparedones (Baena) (figura 2),Cerro de la Cruz (Almedinilla), Puente Tablas (Jan) (figura 3), o Cstulo (Linares) (figura 4), entre otros.Todos ellos, por lo general, son asentamientos de claro carcter estratgico, dotados de potentes y com-plejas fortificaciones y desarrollados sistemas de urbanizacin, pensados para controlar el territorio,con amplia visibilidad que los convierte en elementos paisajsticos de gran valor y que renen un granpotencial para su presentacin al pblico, que se extienden al menos desde el siglo VII a.C. tanto enla Campia de Jan como en la de Crdoba y en el rea de la Vega del Guadalquivir (Molinos y Ruiz,1999; Ruiz, 2004).

    Especial importancia en el discurso pedaggico de la Red tienen los monumentos heroicos, comoel del Pajarillo en Huelma (Molinos et alii, 1998), o las esculturas de Porcuna (Gonzlez Navarrete, 1987;Negueruela, 1990) y los monumentos funerarios de la necrpolis de Toya (Ruiz, Hornos y Risquez, 1992),principalmente, que mostraran las transformaciones que en el periodo de transicin del siglo VI al Va.C., se produjeron en el tratamiento de la imagen esttica de los reyes, que pasan de dioses a hroes,tal y como se advierte en el conjunto escultrico de Porcuna (Negueruela, 1991; Ruiz, 1998) y que vaacompaada de una forma de ocupacin del territorio en el que la unidad de hbitat principal fue eloppidum.

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  • La Red de Espacios Culturales de Andaluca y el patrimonio ibrico

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    Figura 4.- Muralla de Cstulo (Linares, Jan).

    Figura 3.- Vista area de Puente Tablas (Jan).

    Figura 2.- Muralla deTorreparedones

    (Baena, Crdoba).

  • Javier Verdugo Santos

    Este hecho nos indica una poltica por la que los aristcratas (Ruiz, 1998) mostraban su poder porel nmero de clientes que les rodeaban y les reconocan como reyes. As se manifiesta tambin en PuenteTablas donde en la zona que caa en pendiente sobre el ro hubo una zona de carcter singular, quelos investigadores (Ruiz, 1995; Ruiz y Molinos, 1992) consideran un espacio residencial aristocrtico.

    Mostrar la sociedad aristocrtica ibrica a travs de la presentacin al pblico de estas estructu-ras espaciales (figura 5) y simblicas donde se dirimieron los conflictos que sin duda se plantearon entrelos aristcratas y sus clientes en una sociedad de marcada desigualdad con la mayora de la poblacinsometida al rgimen de la servidumbre clientelar (Ruiz, 1995), ser misin de la Red de Espacios Cul-turales de Andaluca.

    Especial importancia tambin tendr el monumento heroico de El Pajarillo (figura 6) por su ca-rcter de monumento intencionado, que posee una clave poltica y de poder, ya que su clara defini-cin de puerta, de control econmico de una ruta que mova productos indicadores de poder y decoincidencia con un momento en que se transform el poblamiento del valle, no son sino la suma decircunstancias que definieron el camino que las aristocracias de la zona oriental de Jan emprendie-ron. Por ello la construccin de su Centro de Interpretacin en el mbito del programa de Viaje alTiempo de los Iberos tiene una gran trascendencia en el discurso histrico de la RECA.

    Adems de los recursos que hemos sealado, se cuenta con dos grandes proyectos de difusinde la cultura ibrica que debern incorporarse a la Red. Nos referimos, en primer lugar, a la ruta de-nominada: Viaje al Tiempo de los Iberos, que liderada por la Diputacin Provincial de Jan y el Cen-tro Andaluz de Arqueologa Ibrica, va a poner en valor y dotar de centros de interpretacin a unimportante conjunto de yacimientos y en segundo lugar, el proyecto museogrfico denominado:Museo del Arte Ibrico que est construyendo en Jan, la Consejera de Cultura, a travs de la Direc-cin General de Museos y Arte Emergente.

    Pero todo lo expuesto no habra sido posible sin el fuerte dinamismo impulsado por la Univer-sidad de Jan, a travs del Centro Andaluz de Arqueologa Ibrica, colaborador activo en los proyec-tos referidos, y que no slo se dedica a la investigacin arqueolgica sino que tambin impulsaproyectos de innovacin y nuevas tecnologas de presentacin del patrimonio a travs del programaeuropeo EPOCH, en colaboracin con instituciones y entidades privadas. A este respecto tambin de-

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    Figura 5.- Paisaje de Torreparedones (Baena, Crdoba).

  • La Red de Espacios Culturales de Andaluca y el patrimonio ibrico

    bemos traer aqu los esfuerzos realizados por la Delegacin de la Consejera de Cultura en Jan, cuyoequipo tcnico lleva aos elaborando modelos de gestin y alternativas para una mejor presentacinpblica del patrimonio arqueolgico de la provincia (Hornos, Zafra y Castro, 1998)

    Por otra parte, y en la Bastetania, la Universidad de Granada (Adroher y Gonzlez Romn, 1997;Adroher y Lpez Marcos, 2002; Lpez Marcos, Pachn Romero y Adroher, 2002) a travs de su De-partamento de Prehistoria lleva aos investigando e inventariando numerosos enclaves ibricos comoel de Loma Linda en la Vega de Granada (Rodrguez Ariza, 1992) y otros como Tutugi en Galera (Ro-drguez Ariza et alii, 2008) ya integrados en la Red, lo que permitir desplegar una estrategia slidade incorporacin de numerosos enclaves a la Red, o su integracin en un posible parque cultural entorno a la zona de Guadix-Baza.

    Las perspectivas de futuro son muy positivas. En estos momentos se hallan incluidos en la RECA, losEnclaves de Ategua, Cstulo y Puente Tablas, todos ellos propiedad de la Consejera de Cultura de laJunta de Andaluca y est prevista en breve, la incorporacin de Torreparedones y Cerro de la Cruz a tra-vs de los oportunos convenios con los ayuntamientos de Baena y Almedinilla. De especial importanciaes tambin el convenio suscrito con el ayuntamiento de Galera, para la puesta en valor de Tutugi, quecomplementa la oferta en la zona con el yacimiento de Castelln Alto (Molina Gonzlez et alii, 2000).

    La colaboracin con los ayuntamientos no se limita a aquellos que aportan un yacimiento sinoque tambin extiende la colaboracin a la cooperacin municipal en yacimientos de titularidad au-tonmica como ocurre con Linares, respecto a Cstulo. Precisamente el yacimiento de Cstulo est re-cibiendo un fuerte impulso, tanto desde la Consejera de Cultura y el Ayuntamiento de Linares, comode la Diputacin Provincial, que est construyendo el Centro de Recepcin de Visitantes del Enclavede Cstulo, incluido dentro del itinerario: Viaje al Tiempo de los Iberos.

    En este sentido, existe un inters mutuo de colaboracin entre la Consejera de Cultura y la Di-putacin de Jan para coordinar todo lo referente a la creacin de los centros de recepcin e inter-pretacin incluidos en el programa: Viaje al Tiempo de los Iberos con su incardinacin en la Red deEspacios Culturales de Andaluca como Itinerario.

    En el futuro, y conforme avance la investigacin y la disponibilidad de yacimientos de titularidadpblica, se irn incorporando a la Red otros asentamientos con una tipologa distinta a los oppida, como

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    Figura 6.- Fragmento escultrico de ElPajarillo (Huelma, Jan).

  • Javier Verdugo Santos

    los asentamientos en llano, que aparecen a finales del siglo VII a.C., de ms reducida dimensin comoel de Calaas de Marmolejo (Molinos et alii, 1994), cuya investigacin ha permitido fijar la tipologade los asentamientos en terreno llano vinculados a las mejores tierras de la Campia y Vega del Gua-dalquivir y sus afluentes desde el sur, que no presentan fortificacin alguna y tienen una clara vincu-lacin al sector agrcola que se deduce de su propia ubicacin y de la tecnologa asociada a su culturamaterial. Del mismo modo tambin se interpretarn santuarios y lugares de culto que muestren elimaginario religioso de los iberos (Prados Torreira, 1994). De este modo la Red cumplir con su mi-sin pedaggica de mostrar toda la riqueza del patrimonio ibrico de Andaluca.

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