ESQUEMA DE LA INVESTIGACIÓN

1. Título2. Resumen3. Preguntas y objetivos de la investigación4. Marco teórico5. Metodología6. Proceso de investigación

6.1. Elección del álbum6.2. Análisis del álbum6.3. Elección del grupo de sujetos/lectores6.4. Instrumentos de recogida de datos: elaboración y diseño6.5. Recogida de datos:

6.5.1. Realización del grupo de discusión6.5.2. Aplicación del cuestionario

6.6. Análisis e interpretación de los datos

7. Conclusiones8. Bibliografía

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“Álbumes para adolescentes” ¿Les gustan los álbumes a los adolescentes?Álbumes, adolescentes y lectura: tres conceptos complejos y confusos ResumenPartiendo del concepto o mejor dicho, “conceptos” de álbum y de las características de la lectura en la adolescencia que aportan los estudios consultados, en este artículo pretendo comprobar que el álbum ilustrado, como género literario de la literatura infantil y juvenil, en cuanto contenido y forma específicos y especiales, es una opción de lectura válida y de interés para los adolescentes de hoy. Para ello he partido del análisis del álbum El enemigo de Davide Cali y Serge Bloch, editado por SM en 2008, mediante la observación, y la recogida de opinión de dos grupos adolescentes, a través de la realización de grupos de discusión y de cuestionarios, he podido comprobar que el álbum era para ellos un género desconocido y que ha despertado interés y aceptación entre estos adolescentes en concreto. Creo que el álbum ilustrado como producto cultural y como opción de lectura puede ser válida para fomentar y enriquecer la experiencia lectora de los adolescentes.

IntroducciónLa motivación que me ha llevado a investigar sobre la adecuación de los álbumes ilustrados para la lectura de los adolescentes surge de una necesidad de organización y de una observación permanente y duradera en el tiempo. Desde mi profesión de bibliotecaria en biblioteca pública1 he utilizado el álbum ilustrado como formato de difusión y acercamiento de la lectura a los niños, fundamentalmente a los más pequeños: pre-lectores y primeros lectores. A finales de los noventa fueron apareciendo algunos títulos de álbumes en versiones no tan infantiles, que a nivel profesional eran de compleja clasificación en las estanterías de la biblioteca. En algunos foros de bibliotecarios y de especialistas en literatura infantil y juvenil2 se han elaborado bibliografías de álbumes recomendados para adultos...y se han ubicado en las salas de adultos o juveniles en algunas bibliotecas. Por otro lado el día a día en la sala infantil/juvenil de la biblioteca me ha permitido observar el comportamiento de los adolescentes y la elección de sus lecturas, muchos de ellos, sobre todo los menos lectores se acercan a las estanterías de la zona infantil en busca de lecturas fáciles, pero rechazaban los álbumes por considerarlos excesivamente infantiles, incluso cuando algunos de estos libros se traspasaron a las estanterías de la zona juvenil con la signatura J-N3 siguieron siendo poco utilizados por los jóvenes lectores usuarios de la biblioteca.Un hecho observado y constatado a lo largo de estos años de profesión y de colaboración directa con los centros escolares y directamente con las bibliotecas escolares y los profesores que se responsabilizan de su puesta en marcha, con todas las dificultades que conlleva y la falta de recursos, pero también con mucho esfuerzo e interés por parte del profesorado, ha sido la casi inexistencia de los álbumes en estas bibliotecas y el desconocimiento de este formato.

1 Biblioteca municipal de Mejorada del Campo (Madrid) de 1987 a 2006 Biblioteca pública Villa de Vallecas (Madrid) desde 20072 LIJ3 Juvenil-narrativa

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Algunas preguntas a responder:

El objeto de esta investigación es comprobar la pertinencia y adecuación de los álbumes ilustrados como producto cultural concreto que pueden contribuir a satisfacer las necesidades lectoras de los adolescentes y a su desarrollo lector.

¿Pueden los álbumes ser un reclamo para el acercamiento del adolescente al libro y a la lectura?

¿Pueden los álbumes contribuir a enriquecer la experiencia literaria de los adolescentes de hoy?

¿Qué características debe tener el álbum para constituirse en un producto válido e interesante para los adolescentes?

Partiendo de la premisa que el formato “álbum ilustrado” fue en principio un producto concebido para pre-lectores o primeros lectores, me pregunto si este tipo de libros podría ser atractivo y demandado por los adolescentes en función de sus características específicas:

Diseño rompedor e innovador Lectura en dos códigos: textual y de imágenes Contenidos sugerentes y transgresores Formato especial, diferente al libro Mensaje impactante y directo

Marco teórico que sustenta la investigación

MARCO TEÓRICO: Álbum, lectura y adolescencia

Al plantearme el estudio del álbum ilustrado como un producto de interés para los adolescentes, me apoyo en la literatura existente sobre el tema, solo he encontrado un estudio teórico que aborde ambos temas en conjunto (COLOMER, 2007)4 y una experiencia práctica con álbumes ilustrados y adolescentes (DELGADO ALMANSA,2008)5. Por lo que apoyo mi reflexión teórica además de en estos dos trabajos, en estudios que abordan las dos vertientes objeto del estudio por separado: por un lado los que definen y sitúan el álbum ilustrado en el panorama de la LIJ y por otro los que aportan información sobre la adolescencia y el proceso lector de los jóvenes y adolescentes de hoy.Al hablar de lectura y adolescencia (Colomer, 2007-5) se refiere a la imprecisión de ambos términos, define la adolescencia como el paso de un modelo de identificación con sus padres a un modelo de experimentación6 y alude también, como una característica que define la adolescencia, a la conformidad con las normas del grupo de iguales, incluso en sus prácticas culturales como la lectura. Constata que en la actualidad hay una mayor proporción de libros ilustrados para jóvenes que en el pasado, hasta ahora no se han considerado estos libros como una opción de lectura para jóvenes. Yo creo que en este momento esto se empieza a aceptar, aunque muy lentamente a nivel teórico, pero en la práctica, por ejemplo en las aulas de secundaria hay todavía mucho

4 COLOMER, Teresa (2008): Lectures adolescents. Barcelona: Graó5 DELGADO ALMANSA, María Cruz (2008): “Álbumes ilustrados que hacen soñar a los adolescentes”, Educación y biblioteca, 164. 22-25.6 Galland, 1999

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recorrido pendiente en este sentido, una gran parte de los profesores de secundaria siguen entendiendo la LIJ como un subgénero, el álbum ilustrado es el gran desconocido, cuando no rechazado. La generación que ha crecido interactuando con las pantallas requiere las imágenes para acercarse a los libros (Silva-Díaz, 2007:149-150).

La generació que ha crescutinteractuant amb les pantallesrequeriex les imatges per acostar-se als libres. Els libres il-lustrats comencen a ser considerats pels mediadors com una opció, i alguns d´elles com a lectures de quqlitat adecuades al public juvenil; en conseqüència, s´han anat incorporant de mica en mica a les aules i a les biblioteques dels instituts.

Los libros ilustrados que forman parte de la oferta de lecturas para jóvenes proporcionan a estos lectores las competencias lectoras necesarias para considerarlos plenamente alfabetizados. La complejidad de los álbumes, que en principio iban dirigidos al público infantil, ha aumentado en la experimentación entre texto e imagen, generando libros que exigen lectores con mayor competencia lectora. Esta teoría que postula Silva-Díaz7 es la que yo trato de demostrar en este artículo a través del estudio del álbum El enemigo y de la opinión recogida entre un grupo de 35 adolescentes.Silva-Díaz diferencia dos vertientes en la oferta de libros ilustrados para adolescentes:La que proviene de la literatura infantil, compuesta fundamentalmente por los álbumes y la que engloba los cómics, novelas gráficas, cuentos clásicos en formato álbum, poesía ilustrada etc.

7 Silva-Díaz, Cecilia (2008): “Entre el text i la imatge” Lectures adolescents

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Para dar apoyo teórico a este trabajo propongo:1. Definiciones y características del álbum ilustrado que estudiosos del tema han

aportado a la literatura especializada, destacando aquellas ideas o definiciones que ahondan en la concepción del álbum como producto de interés para jóvenes y adolescentes.

2. Reflexiones y teorías sobre la adolescencia y el proceso lector de los adolescentes.

BAJOUR y CARRANZA8 Plantean el álbum como un desafío, yo he podido comprobar que el álbum El enemigo ha supuesto un desafío y en parte una provocación en las aulas de adolescentes en las que lo he introducido.

La primera característica que "salta a la vista" (literalmente) y que nos inclina hacia una definición es la presencia notable de la imagen. El texto suele ser breve o en algunos casos inexistente. El diálogo entre dos códigos simultáneos (imagen y texto) para la producción del sentido, originado quizás en la necesidad de acceder a un lector recién iniciado en el manejo del código escrito, ha llevado a este tipo de libros hacia terrenos de experimentación innovadores en el campo de la literatura infantil. Paradójicamente, los libros para "más pequeños" resultan los más transgresores y desafiantes frente a reglas literarias y estéticas.

La fuerza experimental de los procedimientos formales en los libros-álbum, desde el punto de vista plástico y literario (y en el diálogo entre ambos códigos), pero también en su diseño y construcción como objeto, genera la necesidad de una lectura que trascienda lo meramente temático y argumental; una lectura más ligada al juego con las formas y el lenguaje, más atenta al placer estético de la palabra y la imagen.

De estas dos citas se desprenden dos conclusiones importantes: una que los álbumes no están destinados exclusivamente al lector infantil, sino que puede y debe dirigirse a lectores de todas las edades, y la otra que el álbum es un material valioso para la formación de lectores.

SILVA-DÍAZ9 utiliza el término “sinergia”10 para explicar el efecto de la imagen y el

texto cuando interactúan en el álbum. Aporta la siguiente definición aludiendo a la

trayectoria y concepto de álbum.Tal vez debido a que el interés es reciente, aún no existe consenso en darle nombre, definición y genealogía

a este producto editorial. Es así como, por ejemplo, bajo la denominación de álbumes se suelen incluir

libros muy diversos: narraciones visuales, cuentos populares ilustrados, libros de listas y catálogos, libros

de imágenes, pop-ups y hasta libros de no-ficción. A pesar de la diversidad de libros a los que llamamos

“álbumes” y las dificultades para clasificarlos, permanecen rasgos estables en el conjunto como la

preponderancia de la imagen en la mayoría de las páginas y la confluencia de dos códigos, el léxico y el

visual.

La práctica totalidad de los autores que aportan definiciones de álbum y se cuestionan

sobre sus características, aluden al doble código, a las características del formato y a los

contenidos que aborda:El álbum es el arte visual de imágenes secuenciales fijas e impresas afianzado en la estructura de libro, cuya unidad es la página, la ilustración es primordial y el texto puede ser subyacente. (Emma Bosch, 2007: 25-45)

8 BAJOUR, Cecilia y CARRANZA, Maite (2003): Libros-álbum: libros para el desafío9 SILVA-DÍAZ, Cecilia (2006): “La función de la imagen en el álbum” Peonza, 75/76-2310 Sipe, ya lo utiliza en 1998

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El álbum sería una forma de expresión que presenta una interacción entre textos(que pueden ser subyacentes) e imágenes (especialmente preponderantes) en el seno de un soporte libro, caracterizado por su libre organización de la doble página, la diversidad de sus realizaciones materiales y la sucesión fluida y coherente de sus páginas.(VAN DER LINDEN:2006)

Duran define el álbum como ámbito cultural lleno de opciones libres, lúdicas e ingeniosas. (Duran, 1999)

Artefacto cultural en forma de libro, fruto de una esmerada experimentación entre la narratología acaecida por la interpretación entre sí de los lenguajes visual y textual …, dirigido a un público no forzosamente pueril, que puede contemplarse como testimonio de la evolución cultural, social, tecnológica y artística de la Era de la Comunicación.

Objeto cultural representativo, que da testimonio de la evolución social, artística y tecnológica de nuestro tiempo. El carácter lúdico del álbum deriva del ingenio de su contenido, y el ingenio es una cualidad que va en aumento con los años.

El álbum rompe inercias tanto dentro de la práctica editorial como dentro de la práctica lectora.

Durante la lectura olvidamos la dimensión material del libro, pero en realidad ésta envuelve la lectura y la condiciona (Goldin:2005). Este concepto ha estado muy presente en el proceso de la observación y recogida de datos del grupo de discusión de adolescentes sobre el libro El enemigo. Destaca también Goldin la diferencia de ritmo en la lectura de imágenes y de texto ¿Cuándo hemos terminado de leer una imagen? El lector de un álbum experimenta la tensión que le produce la lectura de palabras y la lectura de imágenes.

Un álbum explora la relación compleja de la palabra con la imagen, o mejor aún, dos formas del discurso narrativo, una a través de imágenes y la otra de palabras. …El lector de álbum por una parte quiere seguir la historia por otra es retenido por las imágenes Al sufrir esta tensión vamos comprendiendo que hay algo que no está ni en las palabras ni en las imágenes, una especie de silencio cargado de sentido, lleno de luz y preñado de palabras, que es el verdadero sentido del arte del libro álbum. No son palabras ni imágenes, pero no podemos llegar a él sino a partir de ellas.

En cuanto a las características que identifican al álbum, (Goldin: 2005) diferencia por un lado las referentes al texto: Una extraordinaria economía, debe narrar una historia, dejar espacios de libertad al lector, tiene que tener un argumento, pocas palabras, claras y evocadoras, texto sugerente y poético, abierto a múltiples interpretaciones; en cuanto a las referentes a la imágenes destaca: sutilezas, matices, convoca el arte de la atención.

Otros caracterizan los álbumes a través de acciones que provocan en los lectores 11 Excitan, provocan, tranquilizan, arman o denuncian por medio de mensajes implícitos. Todas estas acciones que definen al álbum tienen mucho que ver con aspectos que caracterizan la adolescencia.

11 Cencerrado y Yuste, 2009 “Selección de libros infantiles y juveniles” curso impartido en la FGSR

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Teresa Colomer, ahonda en la idea de desafío que caracteriza al álbum, en cuanto a los temas que aborda, los mensajes implícitos que incorpora y la apelación a la experiencia adulta 12. Por otro lado, adopta para el álbum la acepción de género literario y aporta la connotación de producto destinado también a los lectores adultos.

El género que parecía destinado a ser el más sencillo y amable de la literatura infantil ha producido las mayores tensiones sociales y estéticas, porque ha aprovechado los recursos de los dos códigos simultáneos y porque ha implicado a dos audiencias distintas. Las características literarias específicas de los álbumes son las que derivan de su relación con la imagen. La combinación de los dos códigos abrió un nuevo campo de recursos que ha sido aprovechado, tanto para la creación de libros adecuados a lectores con escasa capacidad de lectura autónoma, como para la experimentalidad literaria y artística. (Colomer, 1996)

Una de las características de los álbumes es la síntesis en el texto, el texto debe ser depurado y preciso, los álbumes requieren un lector activo, despierto, un lector coautor. Es por ello que en función del lector la lectura será única para cada uno de ellos (Silveyra, 2007:39-46), y en esta línea los adolescentes podrán descubrir lecturas distintas de las que harían niños más pequeños o adultos de los mismos libros.

El texto no puede entenderse del todo sin las imágenes, las imágenes no pueden entenderse del todo sin el texto, y ambos no pueden entenderse del todo sin los significados que aportan los lectores, los significados que cada lector suma, parafraseando a Heráclito, no leemos dos veces el mismo texto.

Ahondando en la defensa del álbum como lectura de interés y del aporte de esta lectura para el enriquecimiento de los adolescentes y de su desarrollo lector. Un buen álbum no deja indiferente al lector (Duran, 2007:31-38) Tampoco al adolescente.En la actualidad existen nuevas formas de recibir un mensaje, nuevas formas de elaborarlo, los jóvenes de hoy viven en un mundo dominado por la imagen; el cine, la televisión, la publicidad, los juegos electrónicos, las comunicaciones on line (facebook, el messenger …) Los códigos gráficos, la lectura e interpretación de las imágenes parecen asumidas por el hombre de hoy y muy especialmente por los jóvenes , pero paradójicamente, las imágenes son devoradas por ellos pero rara vez interpretadas, analizadas o cuestionadas.

La aparición del álbum coincide con la aparición del cine y del cómic (Duran, 2007:31-38) en un principio y durante algunas décadas el álbum, al igual que el tebeo en España, estuvo dirigido a los primeros lectores o incluso como motivación y apoyo en el aprendizaje de la lectura. Los álbumes evolucionan, cada vez los textos se van depurando, el lenguaje visual se va enriqueciendo y haciendo más complejo, los límites espacio temporales se van distorsionando, los temas abordados se van complicando y endureciendo (muerte, guerra, xenofobia etc.), el mensaje más sutil y enigmático; el lector al que se dirigen ya

12 COLOMER, Teresa (1996):” El álbum y el texto” Peonza 39, 27-31.

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no es únicamente infantil, cualquier lector es un potencial lector de álbum, los jóvenes y adolescentes especialmente.

No es que los lectores de libros como “El ´libro triste”, “la isla”, “Greta la loca” o “Emigrantes” no puedan ser niños, sino que lo que se les exige es una competente interpretación de la narrativa gráfica…y de sus representaciones cognitivas (Duran, 2007) .

Muchos teóricos y estudiosos de la LIJ, incluso muchos autores y revistas

especializadas coinciden en que estamos asistiendo a un nuevo florecimiento del Álbum

ilustrado, repunte de la producción de álbumes a finales de los 90 (Silva-Díaz, 2006: 23-

33) La producción de álbumes, tal como los entendemos hoy en día, se inicia en los años sesenta, pero no es

sino a partir de los años ochenta cuando comienza a dedicársele mayor atención parte de la crítica

apareciendo los primero estudios exhaustivos que intentan dilucidar sus características y las implicaciones

que este tipo de libros tienen para los lectores.

Creo que además en este resurgimiento está proliferando no solo el álbum dirigido a los

más pequeños, como herramienta de acceso a la lectura, sino que además se está

publicando un gran número de álbumes que por su temática, complejidad en el texto y

en las imágenes, simbolismo, aspecto crítico, denuncia etc., requieren una participación

activa del lector y presuponen una madurez lectora no propia de la primera infancia. Me

atrevería a decir que son propuestas dirigidas al lector adulto, o por lo menos al lector

maduro y experimentado. Varias revistas especializadas en LIJ, como Primeras noticias,

Peonza o CLIJ, han sacado monográficos sobre el álbum ilustrado. En las bibliotecas

públicas ya se pueden encontrar muchos de los títulos más significativos de este género,

dando por supuesto que estamos ante un género específico, diferente al libro ilustrado,

al cómic o a otras propuestas que también combinan la imagen con el texto. Sin

embargo, todavía no es un género muy conocido y difundido entre los lectores, incluso

he podido comprobar que en las bibliotecas escolares es casi un género inexistente.

Entre los estudios que avalan la teoría de que el álbum es un material de lectura válido e interesante para los adolescentes quiero destacar el de Denise Escarpit13, Escarpit deja claro en su artículo que el álbum es un género literario y que no solo es para niños, aunque para algunos no está tan clara su pertenencia a la Literatura, todavía muchos profesores, especialmente de Secundaria y Bachillerato consideran la LJ como un subgénero con muy poco valor literario, ni que decir tiene que no consideran el álbum ilustrado como lectura que se precie y sea válida para otro lector que no sea el niño que está accediendo a la lectura.

Se puede constatar que el álbum ilustrado, a pesar de todo lo que se afirma, no siempre se considera como perteneciente a la literatura. La imagen no tiene la dignidad de lo escrito. El álbum no puede hacerse notar por la crítica literaria. Pero es otra forma de relato, incluso para jóvenes: existe como género literario, y es digno de ser leído desde una perspectiva crítica (Escarpit, 2006)

13 profesora y directora de la revista “Nous voulons lire”.

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En cuanto a los estudios y aportaciones teóricas sobre los adolescentes y la lectura me refiero a las siguientes reflexiones:

El adolescente es uno de los principales destinatarios de la mercadotecnia por su nivel de consumo. El relato, el libro se convierte en marca. (Lluch, 2007:26-36)La literatura, sobre todo la infantil juvenil forma parte de la industria cultural. Uno de los medios de comunicación de los productos culturales, al igual que el resto de productos, es Internet, que une a la comunidad de lectores, fundamentalmente de lectores jóvenes y adolescentes. Los foros de Internet son la mayor aportación de los últimos años en el fomento de la lectura. Para los adolescentes sentir que forman parte de la comunidad lectora es muy importante, Internet facilita el intercambio, en la adolescencia encontrarse entre iguales es decisivo en el acercamiento a la lectura.Frente al ritmo rápido, la estructura repetitiva, el relato extenso de la llamada “fantasía épica” tan demandada por los adolescentes, el “álbum” exige una lectura tranquila, sosegada, una lectura basada en la observación atenta del código visual y textual, con una condensación de mensajes contenidos en un escueto y depurado texto y con una riqueza de imágenes.

Jesús Ballaz14 reflexiona sobre las condiciones para que los adolescentes sean lectores y sobre el papel y la función de la lectura en su vida en la sociedad actual, que él denomina post-industrial y post-racionalista.

En el futuro los adolescentes, sobre todo las chicas, leerán más, el libro estará presente como algo cotidiano en sus vidas, será un vehículo de comunicaciones auténticas, llenará de contenido sus conversaciones, etc

Si en algún momento de la vida se crea la propia identidad es en la adolescencia, edad en que uno elabora el relato de lo que para él es el mundo. El relato toma elementos de las experiencias que se han vivido y, en gran parte, de las ficciones que se han escuchado o se han leído. En efecto, las operaciones mentales que implica el leer no se alejan mucho de las operaciones de entender el mundo.

El lector se identifica con los personajes y se implica emocionalmente en lo que les ocurre. No se olvide que su participación es muy alta porque es él quien construye los personajes en su mente con el andamiaje que le da el autor. Para el adolescente, esto es muy importante porque tiene la impresión de que crece a medida que lee.

Se habla mucho y se acepta la existencia de “crisis lectora” en la adolescencia, cuando los chicos llegan a secundaria dejan de leer, aunque hay opiniones divergentes, algunas estadísticas arrojan datos contradictorios a esta opinión, exponiendo que el índice más elevado del hábito lector se da entre de 14 a 24 años.15

¿Por qué a los adolescentes les motivan menos los libros?La adolescencia es una etapa en que priman las relaciones sociales y la lectura conlleva soledad, es un acto íntimo. La lectura requiere una actitud de concentración, de reflexión y los adolescentes son dinámicos, activos, impacientes.

14 BALLAZ, Jesús ( 1999): “La lectura de los adolescentes en el futuro”, CLIJ, 112, 17-21

15 Estudio de la Federación de Gremio de Editores de España “Barómetro de hábitos de lectura y compra de libros, 2007.

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Leer ocupa la penúltima posición en las preferencias de los jóvenes en la utilización de su tiempo libre, solo superada por el “no hacer nada”. Parece claro que lo jóvenes optan por utilizar su tiempo libre para salir con amigos, escuchar música, ir a discotecas, hacer deporte, antes que leer (TENA, 2004:5-6) Yo añadiría ver tv, juegos electrónicos.

Los adolescentes más disconformes con sus relaciones sociales son también quienes más leen. La lectura puede ser un refugio para jóvenes con problemas de adaptación social (TENA, 2004:14)

Los jóvenes son los que más leen con más frecuencia…la finalización de la enseñanza secundaria obligatoria incide negativamente en el hábito lector de nuestros adolescentes (OLAZIREGUI, 1998:7-12)

La adolescencia, una época de cambios y descubrimientos, puede resultar un estupendo momento para dejarse sorprender por las palabras, las ideas o las aventuras que esperan en los libros.(Arellano, 2008)

La juventud sigue siendo el periodo de la vida en que hay una mayor actividad lectora,

aunque constata (Petit, 1999)16 que la proporción de lectores asiduos ha disminuido. La

lectura ayuda a los jóvenes a construirse y a imaginarse otros mundos posibles, a soñar,

a pensar, en definitiva se encuentran mejor equipados para resistir mejor los procesos de

marginación. Define la adolescencia como “crecimiento pulsional” y como una etapa de

la vida de inseguridad y miedoTodos se enfrentan con emociones, deseos, pulsiones que temen no poder controlar. Tienen miedo de si

mismos. Miedo del miedo que inspiran a los adultos, esos adultos por los que se sientes radicalmente

incomprendidos. Miedo de ser los únicos en el mundo que sienten lo que les ocurre. Creo que la soledad del

adolescente puede resultar temible. Aun cuando en esa época se viva muchas veces en pandilla.

En este momento de vértigo social y dadas las características por un alado de la adolescencia y por otro lado las que el mundo actual imponen, la lectura de álbumes puede ser una alternativa de lectura para chicos y chicas que les cuesta afrontar un texto largo y por su puesto y fundamentalmente para constituirse en una alternativa de lectura diferente. La lectura como ocio debe competir hoy día con otras alternativas mucho más sofisticadas (TV, chats, blogs, etc.) que por otra parte también constituyen otra forma de leer, imponen otros códigos lectores.

La adolescencia, es una etapa de apertura y búsqueda de cosas nuevas, los adolescentes están, en principio, abiertos a nuevas ofertas y opciones. Cualquier género es válido para facilitar ese encuentro de los adolescentes con la lectura: relato, poesía, álbum ilustrado, libro documental, cómic, revistas, formatos electrónicos.

La experiencia que Delgado Almansa17 realiza con álbumes y adolescentes18

aborda directamente la cuestión del álbum como material de lectura dirigido a los adolescentes, Delgado plantea que características tienen los álbumes para que sean atractivos para los alumnos de secundaria, es decir adolescentes.

Si bien algunos de estos libros van dirigidos a niños pequeños para que descubran la lectura, existen algunos que por su temática y apuesta estética se les podría considerar sin edad. Los álbumes conectan con

16 Michèle Petit ha trabajado e investigado sobre el proceso lector y la lectura en los jóvenes y de manera

especial en la población marginal.

17 María Cruz Delgado Almansa es profesora de Literatura 18 IES Las Américas de Parla, Madrid

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los jóvenes porque descubren importantes experimentos en el terreno gráfico, heredados tanto de la pintura, como del cine, la televisión y la publicidad.(Delgado Almansa, 2008:23-25)

Los álbumes postulan situaciones afectivas que no tienen edad: la soledad, el miedo, la pérdida, la amistad, el amor, son libros capaces de llegar a cualquier lector, yo creo que los adolescentes son o están especialmente afectados por estos sentimientos.

Las características del álbum por las que considero que este género de la LIJ puede constituir una opción de lectura válida y enriquecedora para los adolescentes son:

Formato atractivo, diferente/ Texto rico, cuidado, conciso/ Temas sugerentes, transgresores/ Requieren un lector activo, que interactúe con el álbum/ Resalta el aspecto afectivo, despierta emociones/ Lectura compleja del doble código textual y de imágenes que interactúan/ Aspectos simbólicos entre la realidad y la ficción.

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consideraciones sobre el método empleado19

El estudio consta de dos partes que hacen referencia a los elementos objeto de investigación, por una parte el álbum ilustrado como género literario aportado por la LIJ y por otra parte los adolecentes como sujetos posibles lectores y consumidores de este producto cultural de formato y contenido especial llamado álbum.Para analizar el álbum objeto de estudio, El enemigo, he elegido el modelo de análisis propuesto por Isabel Tejerina Lobo20

Para la recogida de datos he utilizado diferentes instrumentos o técnicas: El grupo de discusión, el cuestionario y la observación directa de los adolescentes a lo largo del proceso. Las preguntas de los grupos de discusión y del cuestionario han sido elaboradas basándome en las propuestas por Chambers en las “conversaciones literarias”21. Los grupos de sujetos elegidos para el estudio han sido dos grupos de alumnos de secundaria de dos institutos públicos, uno de ellos de 15 alumnos de segundo curso y otro de 20 alumnos de tercer curso, por supuesto ambos grupos mixtos en cuanto a sexo y de diferentes nacionalidades, esta variables no han sido tenidas en cuenta en el estudio, un grupo era de Getafe (Madrid) y el otro de Cangas de Onís (Asturias). Los sujetos elegidos para el estudio no constituyen una muestra representativa de ningún colectivo porque no es esa la intención del estudio, son dos grupos elegidos en función de la edad, adolescentes entre 13 y 15 años, cuyas profesoras se han mostrado interesadas por los álbumes como oferta de lectura para sus alumnos y seducidas por la propuesta de lectura que suponen los álbumes.

La dinámica de las sesiones ha sido similar en ambos casos, realizándose cuatro procesos:

1. Presentación y lectura colectiva del álbum2. Una segunda lectura del álbum por parejas (disponía de un álbum

para cada dos lectores). Fase de recogida de datos mediante observación directa

3. Grupo de discusión, con uno de los grupos de adolescentes, el más numerosos se realizaron dos grupos de discusión debido al número de componentes, las profesoras tomaba notas de las aportaciones de los adolescentes y yo que moderaba la discusión. Las conversaciones fueron grabadas.

4. Contestación individual del cuestionario

Los datos a observar en el desarrollo del grupo de discusión y a lo largo de la lectura del álbum son: el grado de participación, la actitud de los lectores, los comentarios realizados entre ellos, el interés que muestran.El grupo de discusión: se realizó en todos los casos inmediatamente después de la lectura del álbum, y duró alrededor de veinte minutos, previamente había diseñado una batería de 15

19 Basado en BELL, Judith (2005) Cómo hacer tu primer trabajo de investigación. Barcelona, Gedisa20 TEJERINA LOBO, Isabel (2008) analiza el álbum “Siete ratones ciegos” de Ed Young en la revista CLIJ, 215. Es catedrática de didáctica la Lengua y la Literatura en la Facultad de Educación de la Universidad de Cantabria.21 Basados en las preguntas propuestas por CHAMBERS, 200? En su libro Dime, en el que explica la dinámica de las “Conversaciones literarias”

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preguntas abiertas encaminadas a dirigir la discusión, provocar la reflexión sobre aspectos del álbum y fomentar la participación de los adolescentes.El cuestionario: pasado a los 35 alumnos de los dos cursos de secundaria constaba de 12 preguntas diseñadas con la finalidad de obtener los datos suficientes para contestar a las preguntas planteadas en la investigación, algunas de estas preguntas ya se habían planteado, aunque no estaban formuladas de la misma manera, en la discusión con la finalidad de incidir en algunos aspectos de interés. La ventaja del cuestionario es que ofrece la posibilidad de recoger la opinión de todos los miembros del grupo, mientras que en la discusión solo participan de forma activa algunos miembros del grupo, el resto asiente y asume el papel de observador. La elección del grupo de sujetos que leyeron el álbum seleccionado, participaron en los grupos de discusión y contestaron al cuestionario fue, como ya he dicho, una decisión en función del interés que mostraron las profesoras de ambos grupos por conocer el álbum como opción de lectura y ofrecérsela a sus alumnos como oferta válida para ellos. En ambos casos además del álbum El enemigo, han leído y debatido sobre otros álbumes, ante la demanda planteada por los alumnos, incorporando a las lecturas realizadas en clase y a la biblioteca escolar títulos como La isla22, La cosa perdida23; Guernica24; Desencuentros25. Los grupos que han participado en el estudio con el álbum El enemigo son: alumnos de tercero de secundaria del IES de Getafe, Madrid y alumnos de segundo de secundaria del IES Rey Pelayo de Cangas de Onís, Asturias. Los componentes de estos dos grupos son adolescentes entre 13 y 15 años con un nivel lector medio, que nunca se habían enfrentado a la lectura de un álbum o si lo habían hecho era de muy pequeños. Los dos grupos de chavales leen en clase habitualmente.

La elección del álbum objeto de la investigación fue un proceso de reflexión, debate y toma de decisión, que explicaré detalladamente en el siguiente apartado.

¿Cómo se desarrolló el proceso de la investigación?

Esta fase del estudio abarca por un lado la observación de las conductas lectoras de dos grupos de adolescentes, la recogida de datos de sus respuestas y opiniones ante la propuesta de lectura del álbum elegido a través de un proceso de selección y por otro lado el análisis del álbum ilustrado El enemigo de Davide Cali y Serge Bloch seleccionado en la fase anterior. El análisis e interpretación de los datos obtenidos a través de la observación, de los grupos de discusión y del cuestionario serán capaces de dar respuestas a las preguntas que se plantea este trabajo de investigación y llegar a formular unas conclusiones válidas para este caso concreto y en estas circunstancias, no necesariamente extrapolables a otras situaciones.Por tanto este proceso tiene tres partes bien diferenciadas:

Todo el proceso referido a los álbumes, en cuanto proceso de elección de un álbum para el estudio y su posterior análisis.

La elección de los dos grupos de sujetos adolescentes, entre 13 y 15 años, estudiantes de secundaria.

La elaboración y diseño de los instrumentos de recogida de datos, que van a provocar la relación de los sujetos con el álbum; la observación, el grupo de discusión y el cuestionario.

22 La isla Salamanca: Loguez23 La cosa perdida24 Guernica25 Desencuentros

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Elección del álbum

Criterios a tener en cuenta a la hora de elegir los álbumes26:

La variedad de género, desde el realismo social al intimista y de la fantasía épica a la ciencia ficción.

La calidad literaria del texto

La riqueza narrativa de la historia

La identificación del lector con los personajes y situaciones

Las propuestas literarias deben tener riesgo, que provoquen y amplíen el imaginario del lector

El equilibrio en la dualidad: texto/ imagen

El atractivo de la propuesta a nivel gráfico

Basándome en estos criterios, teniendo en cuenta un listado de álbumes para adultos y jóvenes elaborado en el grupo de lectura del Seminario de LIJ de Guadalajara en febrero de 2008 y con la colaboración de expertos27 en LIJ, que me aportaron ideas y opiniones en cuanto a títulos de álbumes que en su opinión podrían ser de interés para adolescentes, de esta forma surgió una lista de nueve álbumes: El árbol rojo28, El libro triste29, La cosa perdida, La isla, Zorro30, Noche de tormenta31, El enemigo, El pato y la muerte32, La parte que falta33. Estos nueve álbumes fueron sometidos a valoración siguiendo el criterio de selección de Yuste y Cencerrado y cuyo resultado se refleja en la tabla de análisis de álbumes 34. De los nueve álbumes analizados elijo los cinco que obtienen mejor puntuación en función de los criterios de análisis aplicados. Los álbumes seleccionados son: El árbol rojo, La cosa perdida, La isla, El enemigo y el pato y la muerte.Los cinco álbumes seleccionados en esta primera fasese debatieron y valoraron en un grupo de discusión de lectores adolescentes con buen nivel lector, componentes de una tertulia35. En este grupo de discusión se leyeron y valoraron los cinco títulos, de acuerdo

26 Basados en propuestas aportadas por Yuste, Elisa y Cencerrado, Luis Miguel (2008) en “Cómo plantear la labor de selección en las bibliotecas para niños y jóvenes” curso impartido en CITA de la FGSR.27 Bibliotecarias de la biblioteca municipal de Mejorada del Campo/ componentes del Seminario de LIJ de Guadalajara/ componentes de la tertulia “El rincón de monstruos” de la Libreía Kirikú de Madrid, compuesta por libreras especialistas en LIJ, escritor@s de LIJ, bibliotecri@s, maestras, editoras y lectores habituales de LIJ.28 TAN, S El árbol rojo29 El libro triste30 Zorro31 Noche de tormenta32 El pato y la muerte33 La parte que falta34 Anexo 1: Tabla de análisis de álbumes35 Tertulia de adolescentes de la librería Kirikú de Madrid, especializada en LIJ.

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a la siguiente ficha de análisis36. La sesión de discusión con los “adolescentes expertos” de la tertulia tuvo una duración de dos horas, los aspectos a analizar planteados a este grupo para la valoración y elección del álbum fueron las siguientes:

El tema que trata cada álbum El interés de la historia que se cuenta en cada uno de los álbumes propuestos La valoración del texto La valoración de las imágenes El equilibro entre texto e ilustración ¿Qué destaca en cada álbum? Qué les aporta cada álbum Valoración del formato Elección definitiva de cada miembro del grupo de un álbum

Como resultado de esta valoración se eligieron por unanimidad dos títulos de los cinco propuestos: El enemigo y El pato y la muerte. Ambos álbumes pasaron a una siguiente ronda de discusión y valoración, basándose en sus preferencias como lectores, después de este proceso el álbum elegido fue El enemigo, álbum que paso a analizar en el siguiente apartado y que se pasó a la lectura, discusión y valoración en los dos grupos de adolescentes elegidos para la investigación.

Análisis del álbum

Instrumentos de recogida de datos: la observación directa, el grupo de discusión y el cuestionario.OBSERVACIÓNGRUPO DE DISCUSIÓN:37

CUESTIONARIO38

Análisis e interpretación de los datos

CONCLUSIONES

36 Anexo 2: ficha de valoración de álbumes37 Anexo 3: grupo de discusión38 Anexo 4: cuestionario

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