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  • HONDURAS PEDIÁTRICA Publicación de la Asociación Pediátrica Hondureña

    AUSPICIADA POR EL PATRONATO NACIONAL DE LA INFANCIA

    DIRECTOR: DR. ROBERTO MEJIA DURON - ADMINISTRADOR: DR. ALBERTO C. BENDECK EDITORES: DR. LUIS A. BARAHONA - DR. DANILO CASTILLO M. - DR. MANUEL E. LARIOS

    APARTADO POSTAL 105-C- TEGUCIGALPA. D. C,, HONDURAS*. C. A.

    TODOS LOS MIEMBROS DE LA

    ASOCIACION PEDIÁTRICA HONDUREÑA

    VOL. 4 DICIEMBRE DE 1969 — ENERO — FEBRERO — MARZO DE 1970 Nº 3

    S U M A R I O Pag.

    NOTAS EDITORIALES:

    IX Congreso Centroamericano de Pediatría ................................. 126 Dr. Alberto C. Bendeck Nimer.

    ARTÍCULOS ORIGINALES: Tiabendazole en el Tratamiento de Tricocefalosis y Uncinariasis 128

    Doctores Alberto C. Bendeck N. Gustavo A. Barahona, José Atuán S. y Bachilleres Rene Stefan y Roberto Sandoval.

    PRESENTACIÓN DE CASOS:

    Uso de la Metroclopramida en Pediatría ..................................... 143 Doctores Carlos A. Delgado, José Atuán Simón y Bachiller Leónidas Padilla.

    AL TRAVÉS DE LA LITERATURA PEDIÁTRICA:

    Nuevos Planteos en las Pruebas Bacteriológicas de la Infección Urinaria ............................................................................................... 151

    SECCIÓN INFORMATIVA ............................................................ 152

    LISTA DE SOCIOS........................................................................... 153

    LISTA DE ANUNCIANTES .......................................................... 155

    HONDURAS PEDIÁTRICA 125

  • HONDURAS PEDIÁTRICA Publicación de la Asociación Pediátrica Hondureña

    AUSPICIADA POR EL PATRONATO NACIONAL DE LA INFANCIA

    DIRECTOR: DR. ROBERTO MEJIA DURON - ADMINISTRADOR: DR. ALBERTO C. BENDECK

    EDITORES: DR. LUIS A. BARAHONA - DR. DANILO CASTILLO M. - DR. MANUEL E. LARIOS

    APARTADO POSTAL 105-C- TEGUCIGALPA. D. C,, HONDURAS*. C. A.

    TODOS LOS MIEMBROS DE LA

    ASOCIACION PEDIÁTRICA HONDUREÑA

    VOL. 4 DICIEMBRE DE 1969 — ENERO — FEBRERO — MARZO DE 1970 Nº 3

    NOTAS EDITORIALES

    IX CONGRESO CENTROAMERICANO DE PEDIATRÍA

    Por el Dr. Alberto C. Bendeck Nimer.

    En la ciudad de Guatemala, del 30 de noviembre al 6 de diciembre de T969, asistimos a una nueva etapa de los Congresos Centroamericanos de Pediatría, donde se pre-sentaron los mejores trabajos científicos del área centro-americana en e! campo pediátrico. Tuvimos oportunidad de oír y aprender de los conferencistas invitados, como los doctores J. Alex Haller Júnior, Profesor de Cirugía Pediátrica, The John Hopkins Hospital, Baltimore, Esta-dos Unidos; Profesor Ettore Rossi, Clínica de Niños, Uni-versidad de Berna, Suiza; Dr. Howard Pearson, Profesor de Pediatría, Escuela de Medicina de la Universidad de Yale, New Haven, Connectícut, Estados Unidos; Profesor Henri Mathieu, Clínica de Nefrología, París, Francia, quienes disertaron sobre Cirugía Pediátrica, los Síndro-mes de la mala absorción, Hematología Pediátrica y Ne-frología Infantil, respectivamente, interesantes mesas redondas como "Poliomielitis", presentado por Nicara-gua; "Anemia Falciforme", por Panamá; "39 años de

    HONDURAS PEDIÁTRICA 126

  • lucha antituberculosa en Guatemala", por Guatemala; "Inmunizaciones" por Honduras; pero merece especial felicitación la Mesa Redonda de Costa Rica, "Mordeduras de serpientes", por lo original y bien documentada pre-sentación.

    El número de temas libres fue numeroso, siendo muy interesantes los presentados por el INCAP de Guate-mala, en que por primera vez los estudios presentaban interés práctico y con aplicaciones directas a la Clínica y a la Salud Pública; los trabajos presentados por los colegas Pediatras del Hospital de Niños de San José de Costa Rica, en su mayoría de estudios estadísticos de ese hospital, tratando de buscar cuál es la Patología más fre-cuente en nuestro medio. Honduras sólo presentó un trabajo libre titulado "Tiabendazole en el tratamiento de tricocefalosis y uncinariasis", cuyo autor es el que escribe el presente editorial.

    El Comité Organizador de este Congreso nos hizo conocer del Folklore de Guatemala la "Velación y la Siembra del Maíz" y "El Cofrade de Santa María", ritos de los indios kekchies y de la tribu de Sotzil (Sololà), En una forma magnífica nos presentaron la escenifica-ción de la "Historia de la Marimba" desde sus comien-zos, su metamorfosis, hasta nuestros días.

    Sería largo pormenorizar todos los atractivos de este IX Congreso Centroamericano de Pediatría celebra-do en la ciudad de Guatemala, acogedora ciudad, llena de atenciones para los visitantes, pero no queremos ter-minar estas notas sin hacer un reconocimiento de la gran labor desplegada por el Comité Organizador de ese Con-greso y muy especialmente al Dr. Ernesto Cofiño, Presi-dente Honorario de dicho Comité y trabajador infatiga-ble en favor de la Pediatría centroamericana.

    Honduras se prepara desde ahora para el próximo X Congreso Centroamericano de Pediatría, a celebrarse en noviembre de 1971.

    HONDURAS PEDIÁTRICA 127

  • TIABENDAZOLE EN EL TRATAMIENTO DE TRICOCEFALOSIS Y UNCINARIASIS ( * )

    Doctores: Alberto C. Bendeck N.,** Gustavo A. Barahona** José Atuán S.**** Bachilleres:

    Rene Stefan,*— Roberto Sandoval.*****"

    I.—INTRODUCCIÓN

    En nuestro medio, las infecciones por Trichura Trichura y Anquilostoma Duodenale ocupan un lugar preponderante en la morbilidad dentro de la consulta pediátrica y como causa de enfermedad diarreica y anemia secundaria (1). Estas enfermedades parasitarias en particular son muy serias en niños. Esta severidad está relacionada con la can-tidad de parásitos, de tal manera que los parásitos toman una mayor proporción de la sangre o las proteínas del pa-ciente.

    Este efecto es particularmente mayor cuando ocurre en períodos de demandas aumentadas por el crecimiento y la maduración de la niñez. En nuestro medio hondureño y cen-troamericano, debido a la ingesta baja de proteínas y ali-mentos que contienen hierro, en niños con infección por tri-cocefalosis y uncinariasis, adquiere grandes proporciones. Al consumir éstos las pocas cantidades de que estos nutrien-tes existen, debilitando así más por diarrea, siendo un factor decisivo en la cadena de la desnutrición.

    II.—PERSONAL, MATERIAL Y MÉTODO

    Este estudio se llevó a cabo en el Hospital Materno-In-fantil de Tegucigalpa, Honduras, en 117 niños cuyas edades fluctuaban entre 1 a 15 años (Tabla 1).

    * Trabajo presentado en el IX Congreso Centroamericano de Pediatría. Ciudad de Guatemala, Guatemala.

    ** Médico Pediatra del Hospital Materno-Infantil. profesor de Pediatría de la Escuela de Medicina.

    *** Sub-Jefe de Laboratorio del Hospital Materno-Infantil, **** Médico Residente del Hospital Materno-Infantil. **** Tesis para obtener el título de Médico y Cirujano.

    HONDURAS PEDIÁTRICA 128

  • TABLA Nº 1

    GRUPOS DE EDAD DE LOS PACIENTES ESTUDIADOS SEGÚN SEXO Y POSITIVIDAD

    HOSPITAL MATERNO-INFANTIL - TEGUCIGALPA, D. C, HONDURAS, C. A., 1969

    Se usó el Tiabendazole****, que es una substancia cris-talina, blanca, poco soluble en el agua, ligeramente soluble en alcohol, éteres y disolventes clorados, muy estable. Su fórmula empírica es C10 H7 N3S.

    El Tiabendazole, estudiado por sus descubridores en animales de experimentación y domésticos, resultó ser poco tóxico. La LD50, determinados en ratas, ratones y conejos, fue de 3.85 gramos por kilogramo, cantidades 77 mayores que la dosis terapéutica de 50 miligramos por kilogramo. Después de su administración oral a humanos, el Tiabenda-zole es absorbido y excretado así: El nivel más alto plasmá-tico se presenta de 4 a 8 horas después de la ingestión y prácticamente desaparece en 24 horas después de una dosis única de 50 mg. por kilo. Forma suspensión 20%.

    Los metabolitos de Tiabendazole se excretan en la ori-na en el 75% de la dosis y el resto por las heces.

    Este medicamento ha sido ensayado en el tratamiento de infecciones helmínticas desde 1961 (3) y gran cantidad de otros investigadores (4, 5, 6, 7), cuyos informes sobrepa-san 5.000 pacientes.

    Enfocamos la atención especialmente en los que se en-contraban parasitados con tricocéfalos y uncinada. Los pa-cientes se dividieron en 2 grupos, de acuerdo con las dosis empleadas: un grupo I, con 69 pacientes, 50 gr. X mgr. X kilogramo de peso corporal diaria X dosis total dividida en

    ***• Mintezol. Merck Sharp and Dohme.

    HONDURAS PEDIÁTRICA 129

  • GRÁFICA Nº 1

    POSITIVIDAD POR EDADES DE UNCINARIASIS Y TRICOCEFALOSIS

    HOSPITAL MATERNO-INFANTIL — TEGUCIGALPA, D. C. HONDURAS, C. A., 1969

    3 días consecutivos; el grupo II, con 48 pacientes, 50 mg. X mgr. X kilogramo de peso corporal al día,, durante cinco días consecutivos.

    MÉTODOS

    a) Examen de materias fecales antes del tratamiento. Se tomó un primer examen de heces que sirvió para selec-cionar el paciente que presentaba una de estas dos pa-rasitosis y posteriormente se tomó una segunda muestra de heces en que se hizo recuento de huevecillos según la

    HONDURAS PEDIÁTRICA 130

  • técnica de Stool, que reporta el número de huevecillos por gramo de materia fecal; además, los exámenes de orina y hematológico.

    b) Exámenes después del tratamiento. Después de 15 a 20 días de haber terminado de dar el medicamento, se pro-cedió a tomar una segunda muestra de heces, que fue para hacer un recuento de huevecillos según la técnica de Stool. Además se hizo un control hematológico 15 a 20 días después del tratamiento. La administración de la droga se hizo siempre inmediatamente después de una abundante comida.

    CLASIFICACIÓN DEL GRADO DE INFECCIÓN

    Hemos tomado la siguiente clasificación, que nos pare-ce la más adecuada a nuestro medio: infección mínima de 100 a 2.000 huevos por gramo de materia fecal, infección li-gera de 2.000 a 4.000 huevos por gramo de materia fecal, infección moderada de más de 4.000 huevos por gramo de materia fecal.

    Esta clasificación la usamos tanto para tricocéfalos como para uncinada.

    RESULTADOS

    En la tabla 2 puede apreciarse la distribución del nú-mero de casos para estas dos parasitosis, siendo la de mayor incidencia la tricocefalosis, durante los meses de mayo, junio y septiembre, y para uncinariasis en mayo, junio y julio (ver Tabla N º 2 y Gráfica Nº 2).

    En el primer grupo, que nosotros llamamos primera muestra, se tomaron 51 casos con tricocefalosis y 11 casos con uncinariasis (Ver Tabla 7).

    En la Tabla 4 puede observarse la reducción de hueve-cillos en el primer grupo, tratados con Tiabendazole con 50 mg. por kg. de peso en 3 días consecutivos, en que hay una reducción de un 61%.

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  • En el segundo grupo la reducción fue de un 45%. En la Tabla Nº 5 se observan las curaciones en el primer grupo, que para tricocefalosis fue de un 27.5% y para el segundo grupo de un 55% y para uncinariasis en el primer grupo la curación es de un 80% y para el segundo grupo de un 100%. (Tabla 10).

    Las reacciones desfavorables (Tabla Nº 9 y Gráfico Nº 3) observadas fueron transitorias y no requirieron nin-gún tratamiento. La más frecuente fue mareos, cefalea, náuseas y vómito. Estas reacciones mínimas se presentaron en menos del 48% de los casos. La mayoría de las reaccio-

    ríes se presentaron en aquellos pacientes a los cuales se les dio el medicamento antes de haber comido y que no obser-varon las indicaciones a este respecto. Debemos suponer que estas reacciones desfavorables que el medicamento pro-duce, se deben a desnutrición masiva de estos parásitos, los cuales por mecanismos aún no claramente establecidos pro-ducirían material tóxico para el organismo humano. De todas maneras, quiero dejar bien establecida esta interro-

    HONDURAS PEDIÁTRICA 132

  • HONDURAS PEDIÁTRICA 133

  • Técnica de Stoll. Huevecillos X Gr. de heces. NOTA: En este cuadro no se han incluido 17 casos con primera muestra positiva por parásitos

    en vista de que no se logró conseguir segunda muestra de control.

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  • HONDURAS PEDIÁTRICA 135

  • NOTA: En este cuadro no se incluyen 8 casos con primera muestra positiva por parásitos en vista de que no se logró conseguir segunda muestra de control.

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  • HONDURAS PEDIÁTRICA 139

  • ■ Reinfestación identifica. Casos ya curados que volvieron a adquirir la enfermedad en

    contacto con la fuente de infestación.

    gante. Esta teoría se ve sostenida por el hecho de que las reacciones desfavorables son más frecuentes en niños bien nutridos que desnutridos.

    EOSINOFILIA

    En 22 casos hubo normalización del número de Eosinó-filos; en 9 casos hubo un aumento de los Eosinófilos y no sufrió alteración en 9 casos. No hubo Eosinofilia en 6 casos.

    RESULTADOS

    Reducción (disminución del recuento de huevos en un 80% o más del examen final). (Tabla 10).

    Para Tricocéfalos ler. Grupo 2do. Grupo Reducción de huevos 61.0% 55% Curaciones 27.5 % 45 %

    Para Uncinaria ler. Grupo 2do. Grupo Reducción de huevos 20% Curaciones 80% 100%

    HONDURAS PEDIÁTRICA 140

  • RESUMEN Y CONCLUSIONES

    El Tiabendazole fármaco de actividad antihelmíntica fue ensayado en la forma de suspensión en concentración del 20% (1 gr. por cada 5 mi.)

    Se ensayaron dosis mínimas y máximas para tricocéfa-los y uncinarias un grupo I, 69 pacientes, 25 mg. de Tiaben-dazole por kg. de peso corporal dividido durante tres días consecutivos; grupo II, 48 pacientes, 50 mg. por kg. de peso al día durante cinco días consecutivos.

    1—Las reacciones desfavorables fueron de un 48%, siendo lo más frecuente el mareo, la cefalea, las náuseas y vó-mito; todas estas reacciones no requirieron de ningún tratamiento. En la mayoría de los casos hubo estas reac-ciones debido a que el medicamento se ingirió con el estómago vacío, por lo que recomendamos dar el medi-camento siempre con o después de una camída.

    2.—Creemos que el Tiabendazole a dosis de 50 gr. por kg. de peso, durante 5 días consecutivos, es 100% efectivo en el tratamiento de uncinariasis.

    3.—El Tiabendazole en dosis de 50 mg. por kg. de peso al día, durante 5 días consecutivos, en infección por trico-céfalos, tiene una curación de un 55% y una reducción en el 80% o más de los huevecillos en el 45% de los casos. Por esta razón consideramos que el Tiabendazole es la droga antihelmíntica más efectiva en tricocefalosis dentro del arsenal terapéutico con que contamos hasta estos momentos.

    BIBLIOGRAFÍA

    1.—Bendeck, A. C.: Anomias Ferroprivas de diversas etiologías tra-tadas con un preparado de hierro intramuscular. Honduras Pe-diátrica. Vol. 1, N? 6, Pág. 11. 1965.

    2.—Brown, H. D. y Colé: Antiparasitic drugs. IV 2-(4' Thiazolyl)

    benzimidazole. A new antihelmintic. J. Amer. Chem. Soc. 63: 1764 (USA). (1961).

    3.—Fra,nz, K. H.: Clinical trails with thiabendazole against human strongyloidiasis. Amer. J. Trop. Med. 12: 211-214. (USA). March 1963.

    HONDURAS PEDIÁTRICA 141

  • 4.—Campos, R.; Crose, J.; Amato, Neto V.: Tratamiento de Tricos-trongiliase humana pelo tiabendazole. (Ttreatment of human trichostrangylus with thiabendazole). O'Hospital 64: 261-264. (Brasil). Julio 1963.

    5.—Peña Chevarría, A.: Experiencia; con varias drogas en el trata-miento de las tres principales heímintiasis observadas en Costa Rica. (Experience with various drugs in the treatment of the tree principal helminths observed in Costa Rica). Presented al VII Congress of Tropical Medicine and Malaria. Río de Jajieiro. Septiembre de 1963. (Costa Rica).

    6.—Stone, O. J. y Mullins, J. F.: First use of thiabendazole in creep-ing eruption. Texas reports on biol. and Med. 21: 422424. (USA). Falla 1963.

    7.—Escobar, J. J.: Tiabendazole. "Antioquia Médica", Vol. 14, N° 5. Junio de 1964.

    8.—Vargas Díaz, J. y Cois.: Ensayos clínicos con Tiabendazol. Vol. V 170, Enero 1963.

    9.—Bui-Ouoc-Hucah y Cols.: Actividad antihelmíntica del 2-(4'c Tia-zolil)-Benzimidazole, en el hombre. Chemoterapia, Vol. 5. N? 5-6 (1962). S. Karger, Basel,, New York.

    HONDURAS PEDIÁTRICA 142

  • PRESENTACIÓN DE CASOS

    Uso de la Metoclopramida en Pediatría Dr. Carlos A. Delgado * Dr. José Atuán Simón ** Br. Leónidas Padilla ***

    El vómito es un síntoma de aparición frecuente en el niño al comienzo o en el curso de enfermedades de muy di-versa etiología. Se deberá tratar lo más precozmente posi-ble, sin esperar conocer la causa que lo motive, ya que su persistencia puede conducir a graves desórdenes en el orga-nismo infantil (alteraciones del equilibrio hidroiónico, pér-didas importantes de peso, etc.) El centro del vómito es activado por la estimulación que determinadas sustancias circulantes ejercen sobre la zona quimio sensible situada en el suelo del cuarto ventrículo o próxima al citado centro. El vómito central se origina por estimulación traumática (lesiones de la cabeza, mayor presión intracraneal, tumor cerebral o irritación meníngea). Se le llama vómito en pro-yectil y se presenta sin náuseas previas y sin la intervención de los músculos voluntarios.

    En el vómito del niño predomina el antiperistaltismo y la relajación del cardias; es el tipo más primitivo del vómi-to: se realiza por la actividad exclusiva del estómago y re-cuerda el de ciertos animales inferiores, tales como peces y batracios, los cuales no tienen diafragma (Burke).

    Ante un síntoma patológico tna frecuente, molesto y a veces grave, como es el vómito en el niño, ha de interesar-nos todo lo que al mismo se refiera. Por esta razón, al co-nocer la acción farmacodinámica de la "Metoclopramida", principio activo del Prinperán, decidimos dedicar neustra

    * Jefe del Departamento de Pediatría del Hospital General San Felipe. ** Residente del Departamento de Pediatría. *** Practicante Interno de Pediatría.

    HONDURAS PEDIÁTRICA 143

  • atención a este preparado y observar sus propiedades antie-méticas (1).

    Brillantes experimentos realizados sobre la acción anti-emética demostraron que la Metoclopramida tiene induda-blemente un efecto en los núcleos del tronco cerebral. También es probable que el ''Efecto Metoclopramida" sobre la motilidad gastrointestinal se desarrolle con un mecanis-mo central. Algunos datos farmacológicos permiten formu-lar la hipótesis de que exista también un efecto periférico (emanaciones del sistema neuro-vegetativo y/o musculatura lisa del aparato digestivo). (2).

    MATERIAL Y MÉTODOS

    En el presente trabajo se hace una evaluación del Fármaco Metoclopramida, cuyo nombre comercial es Plasil (Le-petit Ena, Milán, Italia). A fin de comprobar sus efectos antieméticos como ya han sido mencionados por otros au-tores. ■

    Para la administración del fármaco se usó la vía oral y la vía parenteral (I.M.) únicamente, así como en forma com-binada, haciendo constar que cada cucharadita de 5 mi. con-tiene 5 mg. y la ampolleta de 2 ce. contiene 10 mg. .

    Se estudiaron 50 pacientes pediátricos que ingresaron al servicio de Terapia Intensiva del Hospital General San Felipe presentando vómitos, los cuales eran de etiología va-riada y que fueron tratados con la Metoclopramida. Además del empleo de Fármaco se usó en estos pacientes suero glu-cosado al 5% y suero fisiológico, debido al estado de deshi-dratación en que se encontraban, usando para hidratación la vía endovenosa.

    Las dosis recomendadas para la Metoclopramida es de 1 mg. por kilo de peso (1). En nuestro trabajo empleamos 5 mg. de entrada, ya sea por vía oral o I.M., como primera dosis; luego, si persistían los vómitos, se usaban 5 mg., ya sea por vía oral o I.M. cada 6 horas, hasta que desaparecie-ran los vómitos. Solamente en 2 casos se usó como primera dosis 2.5 mg., con el fin de demostrar el efecto del Fármaco con dosis menores.

    HONDURAS PEDIÁTRICA 144

  • Los pacientes sometidos a esta experiencia fueron de ambos sexos y la edad oscila entre los 4 meses y los 10 años.

    EDAD La edad en que más frecuentemente se presentó el vó-

    mito fue de los 0 meses a 1 año. 27 casos que representaron un 54%.

    SEXO Predominó el sexo femenino, 32 casos con 64% y el sexo

    masculino 18 casos con un 36%. CUADRO Nº1

    ETIOLOGÍA

    La mayor incidencia de los vómitos, fueron debidos a Gastroenteritis; 42 casos que representó un 84%. Los 8 ca-sos restantes fueron de etiología diversa, representando un 16%.

    RESULTADOS

    De los 42 casos que presentaron Gastroenteritis se ob-tuvieron 37 resultados buenos y 5 resultados parciales. En los 8 casos restantes con vómitos de diversa etiología, los resultados fueron buenos.

    HONDURAS PEDIATRICA 145

  • USO DE LA METOCLOPRAMIDA EN PEDIATRÍA

    Etiología y Resultados

    CUADRO Nº 2

    VIA USADA

    Para la administración del Fármaco se usó la. vía oral y la vía parenteral (I.M.) únicamente, así como también en forma combinada.

    USO DE LA METOCLOPRAMIDA EN PEDIATRÍA

    Vía Usada CASOS

    HONDURAS PEDIÁTRICA 146

  • NUMERO DE DOSIS EMPLEADAS

    Las dosis necesarias para la cesación de los vómitos, en el presente estudio fue variada. 30 casos requirieron una sola dosis, 17 casos 2 dosis y 3 casos 3 dosis.

    USO DE LA METOCLOPRAMIDA EN PEDIATRÍA

    Número de Dosis Empleadas

    El promedio de días previo al ingreso hospitalario en los pacientes que presentaron vómitos fue de 2 días. Las dosis orales totales fueron variables; en 3 casos se empleó 30 mg. (6%), en otros 3 casos se usó 5 mg. (6%), en 7 casos se empleó 10 mg. (14%) y en 4 casos se usó 15 mg. (o/o8).

    HONDURAS PEDIÁTRICA 147

  • USO DE LA METOCLOPRAMIDA EN PEDIATRÍA Uso oral de la Metoclopramida

  • COMENTARIOS

    Se hace uso del Fármaco Metoclopramida para compro-bar su efecto beneficioso en el vómito y se comprueba que es carente de toxicidad y de efectos colaterales, ya que se usó inclusive en un niño de 1 mes de edad y los resultados fueron altamente satisfactorios, pues se logró un control ab-soluto del vómito en 45 casos, que representó un 90%, y parciales 5 casos, que representó un 10%. No se observa-ron resultados nulos. En 18 casos se usó la vía oral, que correspondió a un 36%. En 17-casos se usó la vía I.M., un 34%, y se usó la vía forma combinada en 15 casos, que co-rrespondió a un 30%. La dosis media de mg. orales necesa1-rios para la supresión del vómito fue de 12 mg. y en la vía I.M. la dosis media fue de 6.5 mg. El promedio de días de iniciado el vómito, antes del ingreso hospitalario, fue de 4 a 5 días.

    RESUMEN ■

    La Metoclopramida (Plasil) es un fármaco que perte-nece al grupo de las ortopramidas; es una substancia cris-talina, estable y soluble. Se estudia el efecto de la Metoclo-pramida en 50 pacientes pediátricos que ingresaron con vó-mitos de diversa etiología al servicio de Terapia Intensiva del Hospital General San Felipe. Se observó el efecto anti-emético del fármaco en 45 casos, que representó un 90%, y resultados parciales en 5 casos, representando un 10%. Du-rante el tratamiento con la Metaclopramida no se observa-ron efectos colaterales de ninguna índole.

    SUMMARY

    Metoclopramida isc a new drug thats belogs to the ar-thopramides group: This papel work is the study of the effect of this drug in 50 pediatric patient, that cometo the hospital for vomiting of diferent etiology.

    Results were excellent in 45 cases that represent 90%, and partial in 5 cases 10%. During treatment no side effects were observed.

    HONDURAS PEDIÁTRICA 149

  • BIBLIOGRAFÍA

    1.—L. y G. Vilar Gallego y R. Roger Vilar: Consideración sobre la acción antiemética del Prinperán.

    2.—Folleto de la Casa, Lepetil, Pág. N* 10.

    HONDURAS PEDIÁTRICA 150

  • AL TRAVÉS DE LA LITERATURA PEDIÁTRICA NUEVOS PLANTEOS EN LAS PRUEBAS

    BACTERIOLÓGICAS DE LA INFECCIÓN URINARIA

    Dr. M. A. Caria.—Hospital de Niños "Profesor F. Escardó", Buenos Aires, Argentina.

    La demostración de la presencia de bacterias en una muestra de orina, constituye uno de los criterios en que se fundamenta el diagnóstico de la infección urinaria. En este trabajo se menciona la experiencia en 220 casos, en control ambulatorio y con probable diagnóstico de PIELONE-FRITIS.

    En el estudio se recoge la orina en recipientes estériles con los cuidados del caso y se pone la muestra en el refrige-rador. No deben pasar más de 3 horas para hacer la siembra. Hay varias pruebas indicadoras de BACTERIURIA: 1.—La Reacción de Griess: Las bacterias reducen los nitritos a nitratos. 2.—La técnica de flotación por discos de papel. 3.—La reducción del cloruro de trifenil-tetrasodium: Reduc-

    ción del tetrafenil tetrasodium soluble o insoluble. 4.—Repuestos de leucocitos: normal 10 leucocitos por mm.

    cúbico. 5.—Examen directo. 6.—Cultivo de orina con recuento de colonias. 7.—Uso de membrana filtrante Millipore.

    En todas estas pruebas hay una serie de factores que pueden influir en su interpretación: A) Retención vesical con proliferación bacteriana. B) Poliura intensa. C) Obs-trucción urinaria que impida la llegada de bacterias a la orina. D) pH muy bajo que provoque la muerte de algunas bacterias. E) Tiempo excesivo entre la recolección de la muestra y su siembra. F) Tratamiento antibiótico o quimio-terápico.

    HONDURAS PEDIÁTRICA 151