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UNIVERSIDAD NACIONAL DE LA PLATA FACULTAD DE CIENCIAS VETERINARIAS
Trabajo de Tesis realizado como requisito para optar al título de
DOCTOR EN CIENCIAS VETERINARIAS
ASOCIACIÓN ENTRE LA CONCENTRACIÓN SÉRICA DEL PÉPTIDO NATRIURÉTICO NT-proBNP Y VARIABLES CONSTITUTIVAS EN CANINOS
SANOS DE LA CIUDAD DE GENERAL PICO PROVINCIA DE LA PAMPA
AUTOR: M.V. MEDER, Alberto Ramón
DIRECTOR: Dra. ARAUZ, María Sandra CODIRECTOR: Prof. M.V. DESMARÁS, Eduardo
LUGAR/RES DE TRABAJO: • Hospital Escuela de Animales Pequeños de la Facultad de Ciencias Veterinarias de la
Universidad Nacional de La Pampa. • Servicio Central de Laboratorio del Hospital Escuela de la Facultad de Ciencias
Veterinarias de la Universidad Nacional de La Plata. MIEMBROS DEL JURADO APELLIDO Y NOMBRES: MATTIOLI, Guillermo Alberto. APELLIDO Y NOMBRES: MORTOLA, Eduardo Carlos. APELLIDO Y NOMBRES: MUCHA, Carlos José.
AÑO 2014
I
DEDICATORIA
Lo dedico a:
mi hija Margarita, por ser mi razón de todos los días,
a mi compañera de vida, María Silvia, por su amor y apoyo incondicional,
a mi mamá, Margarita, por su cariño y gran esfuerzo para que yo cumpla con mis sueños,
al Dr. Juan Enrique Romero, por su generosidad y lucha inquebrantable por la profesión
II
AGRADECIMIENTOS
• A mi Directora de Tesis, Dra. María Sandra Arauz, por acompañarme, dirigirme y
guiarme en esta tan importante empresa y por ser un faro de claridad ante mis momentos
de ansiedad.
• A mi Co-Director de Tesis, Profesor Eduardo Desmarás, por su apoyo, confianza y
generosidad.
• A mis auxiliares de investigación, Gabriela Poblete, Cecilia Lapuyade, Paula Olondriz,
Juan Manuel Montenegro y Paula Lezcano, por estar siempre que los necesite, por
compartir mi amor por la cardiología veterinaria y por su incondicionalidad con este
trabajo de tesis.
• A mis compañeros de cátedra, Juan Tomás Wheeler, Lilia Adagio, José Hierro y Daniela
Lattanzi por su confianza, aliento y disponibilidad para escucharme y brindarme sus
consejos.
• A la secretaria de Ciencia, Técnica, Investigación y Posgrado de la Facultad de Ciencias
Veterinarias de la Universidad Nacional de La Pampa, por apoyarme económicamente y
por dejar siempre la puerta abierta a mis consultas.
• A Dr. Hugo Álvarez por apoyarme cuando apenas me conocía y proponer al cuerpo de
gestión mi ingreso a la carrera de doctorado financiada a partir de una beca del Proyecto
de Mejoramiento de la Medicina Veterinaria – Programa de Acreditación de la Carrera de
Medicina Veterinarias de la UNLPam.
• Al Dr. Eduardo Mórtola por ayudarme, a partir de su experiencia en investigación, en la
interpretación y realización de los Kits ELISA empleados en este trabajo de Tesis
Doctoral.
III
• A los integrantes del Laboratorio Central del Hospital Escuela de la Facultad de Ciencias
Veterinarias de la Universidad Nacional de La Plata por ayudarme con el análisis
bioquímico de las muestras de los caninos utilizados en el trabajo.
• Al Ricardo Toso y Germán Molina por colaborar con este trabajo a partir de la
conservación de la muestras séricas y su vigilancia permanente en el Centro de
Investigación y Desarrollo de Fármacos (CIDEF).
• A Juan Enrique Romero por apoyarme y brindarme las instalaciones del Hospital Escuela
de Animales Pequeños de la FCV – UNLPam.
• A todos los propietarios de los caninos empleados en este trabajo por darme su
consentimiento para realizar los estudios en los mismos.
• A mi amigo, Ignacio Kotani, por apoyarme económicamente desde su función de gestión
en el Ministerio de Producción del Gobierno de La Pampa.
IV
CITAS BIBLIOGRÁFICAS
• Meder, A.R.; Adagio, L.M.; Desmarás, E.A.; Poblete, G.E.; Lapuyade, C.L.; Olondriz,
P.A.; Montenegro, J.M.; Lezcano, P.A.; Arauz, M.S., 2012. Asociación entre la presión
arterial sistólica y el estado de conducta del paciente durante el registro. XIII Jornadas de
Divulgación Técnico-Científicas 2012 de la Facultad de Ciencias Veterinarias – UNR.
Pág. 203-204. ISSN 1667-9326.
• Meder AR; Adágio LM; Desmarás EA; Arauz MS. Interés de los péptidos natriuréticos
en cardiología veterinaria. Revista ANALECTA VETERINARIA. Facultad de Ciencias
Veterinarias de la Universidad Nacional de La Plata. Vol 32, N° 1, Pág. 33-43, Año 2012.
ISSN 0365514-8 Versión Impresa, ISSN 1514-2590 Versión Electrónica y ISSN
1666259-4 Versión CD-ROM.
• Meder, A.R.; Lapuyade, C.L.; Olondriz, P.A.; Montenegro, J.M.; Lezcano, P.A.; Poblete,
G.E. (2012). Presión arterial sistólica en caninos sanos. INFOVET - Revista del Colegio
Médico Veterinario de La Pampa. Editorial REI. Pág. 23-24. Boletín N° 128.
• Meder, A.R.; Olondriz, P.A.; Montenegro, J.M.; Lezcano, P.A.; Poblete, G.E.; Lapuyade,
C.L.; Romero, J.E.; Adagio, L.M.; Wheeler, J.T.; Lattanzi, L.D.; Desmarás, E.; Arauz,
M.S. Intervalo P-R largo en la raza canina Boyero de Berna: Presentación preliminar.
Memorias del XII Congreso Nacional de AVEACA. Pág. 305. Año 2012.
• Meder, A.R.; Lezcano, P.A.; Poblete, G.E.; Lapuyade, C.L.; Olondriz, P.A.; Montenegro,
J.M.; Romero, J.E.; Adagio, L.M.; Wheeler, J.T.; Lattanzi, L.D.; Desmarás, E.A.; Arauz,
M.S. Valores de presión arterial sistólica, método Doppler Vascular Pulsado, en caninos
sanos conscientes. Revista Ciencia Veterinaria. ISSN 1515 - 1883. Volumen 14. Número
1. Pág. 62 - 67. Año 2012.
V
• Meder, A.R.; Lezcano, P.A.; Poblete, G.E.; Lapuyade, C.L.; Olondriz, P.A.; Montenegro,
J.M. Parámetros objetivos en la evaluación radiológica del aparato cardiovascular.
INFOVET La Pampa. Revista del Colegio Médico Veterinario de La Pampa. ISSN 2344-
9608. N° 131. Pp. 27-31. Año 2013.
• Meder, A.R.; Romero, J.E.; Wheeler, J.T.; Adagio, L.M.; Arauz, M.S. Patrones de
comparación estándar en la evaluación radiológica del sistema cardiovascular en caninos
sanos. Libro de Resúmenes de las XIV Jornadas de Divulgación Técnico – Científicas
2013 de la Facultad de Ciencias Veterinarias de la Universidad Nacional de Rosario. ISSN
1667-9326. Pág. 243-244. Año 2013.
• Meder, A.R.; Lattanzi, L.D.; Rio, F.J.; Adagio, L.M. Relación largo 5° vértebra toráxica
y diámetro traqueal interno en caninos sanos mesocefálicos y dolicocefálicos. 9° Jornadas
veterinarias latinoamericanas del interior. Modalidad Póster. 7 y 8 de Junio de 2013.
Rosario. Provincia de Santa Fe.
• Meder, A.R.; Olondriz, P.A.; Lapuyade, C.L.; Poblete, G.E.; Montenegro, J.M.; Lezcano,
P.A.; Romero, J.E.; Adagio, L.M.; Wheeler, J.T.; Lattanzi, L.D.; Desmarás, E.A.; Arauz,
M.S. Distancia EPSS en caninos sanos conscientes. Modalidad póster. XIII Congreso
Nacional de AVEACA. Ciudad Autónoma de Bs. As. 19 y 20 de Septiembre de 2013.
• Meder, A.R.; Wheeler, J.T.; Romero, J.E.; Adagio, L.M.; Lattanzi, L.D.; Hierro, J.A.;
Maisterrena, V.D.; Sereno, D.P.; Mariani, L.E.; Rio, F.J.; Vaquero, P.G.; Mengelle, P.;
Miguel, M.C.; Desmarás, E.A.; Arauz, M.S. Asociación entre distancia septal al punto E
(EPSS) y diámetro diastólico final del ventrículo izquierdo (DVID) en caninos sanos. VIII
Jornadas de Ciencia y Técnica – I Jornada Interinstitucional. Facultad de Ciencias
Veterinarias – Facultad de Ingeniería. UNLPam. Diciembre de 2013. Res. CD 334/13.
VI
ÍNDICE DE CONTENIDOS
RESUMEN
1
ABSTRACT
3
INTRODUCCIÓN
5
MATERIALES Y MÉTODOS
32
RESULTADOS
40
DISCUSIÓN
67
CONCLUSIONES FINALES
71
BIBLIOGRAFÍA
72
VII
ABREVIATURAS Y SÍMBOLOS
NSA: Nodo sinusal
NAV: Nodo auriculoventricular
ATP: Adenosin trifosfato
VAV: Valvulas auriculoventriculares
VS: Valvular sigmoideas o semilunares
IC: Insuficiencia cardíaca
ICI: Insuficiencia cardíaca izquierda
ICD: Insuficiencia cardíaca derecha
Na+: Sodio
Ca++: Calcio
ECG: Electrocardiograma
VHS: Escala cardíaca vertebral
IVM: Insuficiencia valvular mitral
PN: Péptido natriuréticos
ANP: Péptido natriurético atrial
BNP: Péptido natriurético tipo B
CNP: Péptido natriurético tipo C
C-ANP: Fracción carboxiloterminal del péptido natriurético atrial
C-BNP: Fracción carboxiloterminal del péptido natriurético tipo B
NT-proBNP: Fracción aminoterminal del péptido natriurético tipo B
NT-proANP: Fracción aminoterminal del péptido natriurético atrial
AST: Aspartato aminotranfersa
VIII
LDH: Lactado deshidrogenasa
CPK: Creatinfosfoquinasa
CK-MB: Creatinfosfoquinasa MB
CVD: Enfermedad valvular crónica
pmol/lts: Picomoles por litro
pg/ml: Picogramos por mililitro
Ao: Diámetro aórtico
AI: Diámetro anteroposterior del atrio izquierdo
DVID: Diámetro del ventrículo izquierdo en final de diástole
DVIS: Diámetro del ventrículo izquierdo en final de sístole
ISACHC: International Small Animal Cardiac Health Council Heart Failure Classification
PDE5: Fosfodiesterasa 5
NPR-C: Receptores de péptidos natriuréticos tipo C
NPR-A: Receptores de péptidos natriuréticos tipo A
GMPc: Guanosil monofosfato cíclico.
CMD: Cardiomiopatía dilatada
LLD: Incidencia laterolateral izquierda-derecha
VD: Incidencia ventrodorsal
RX LLD: Imagen radiológica toráxica obtenida desde la incidencia laterolateral izquierda-
derecha.
RX VD: Imagen radiológica de tórax obtenida desde la incidencia ventrodorsal.
EL: Eje cardíaco largo registrado sobre RX LLD.
EC: Eje cardíaco corto registrada sobre RX LLD.
VCC1: Diámetro de la vena cava caudal registrada sobre RX LLD.
IX
VCC2: Diámetro de la vena cava caudal registrada sobre RX VD.
L5ta: Largo de la quinta vértebra toráxica registrada sobre RX LLD.
A5ta: Alto de la quinta vértebra toráxica registrada sobre RX LLD.
APCr: Diámetro de las arterias pulmonares craneales, a nivel de su intersección con el cuerpo
de la cuarta costilla, registrada sobre RX LLD.
VPCr: Diámetro de las venas pulmonares craneales, a nivel de su intersección con el cuerpo
de la cuarta costilla, registrada sobre RX LLD.
C4ta: Ancho del cuello de la cuarta costilla registrada sobre RX LLD.
APCa: Diámetro de las arterias pulmonares caudales, a nivel de su intersección con el cuerpo
de la novela costilla, registrado sobre RX VD.
VPCa: Diámetro de las venas pulmonares caudales, a nivel de su intersección con el cuerpo
de la novela costilla, registrado sobre RX VD.
C9na: Ancho del cuerpo de la novena costilla, a nivel de su intersección con el cuerpo de la
novela costilla, registrado sobre RX VD.
1
ASOCIACIÓN ENTRE LA CONCENTRACIÓN SÉRICA DEL PÉPTIDO
NATRIURÉTICO NT-proBNP Y VARIABLES CONSTITUTIVAS EN CANINOS
SANOS DE LA CIUDAD DE GENERAL PICO PROVINCIA DE LA PAMPA.
PALABRAS CLAVES: Caninos sanos, péptido natriurético, edad, sexo, peso corporal y
tamaño cardíaco.
RESUMEN
Los péptidos natriuréticos son una familia de hormonas que juegan un importante rol en la
homeostasis cardiovascular y renal. El objetivo de este trabajo fue analizar la asociación entre
la concentración sérica del péptido natriurético NT-proBNP y variables constitutivas en
caninos sanos. La hipótesis fue que su concentración no varía con el peso corporal ni el
tamaño cardíaco pero sí con la edad y el sexo. Se utilizaron 159 caninos -80 machos y 79
hembras, 80 menores de 7 años y 79 mayores de 7 años, 53 de talla pequeña (<12kg) – 53 de
talla mediana (12kg-25kg) – 53 de talla grande (>25kg)- con condición corporal 2.5-3.5. Se
consideró sanos a los que presentaron exploración clínica y estudios complementarios -
presión arterial, electrocardiografía, radiología toráxica, ecocardiografía, hematología y
bioquímica- dentro de parámetros normales de acuerdo a bibliografía. El análisis estadístico
se realizó mediante un software público R&R Commander (Rcmdr) versión i386-3.0.1. La
concentración media de NT-proBNP fue 260.28 pmol/lts +/-135.48 pmol/lts. Se observaron
diferencias significativas para sexo (machos: 281.31 pmol/lts +/144.84, hembras: 238.99
pmol/lts +/123.52, p=0.0392) y edad (<7 años: 235.19 pmol/lts +/-119.72, >7 años: 285.69
2
pmol/lts +/-146.97, p=0.0124), pero no para peso/talla (<12kg: 235.78 pmol/lts +/-129.18, 12-
25kg: 281.85 pmol/lts +/134.34, >25kg: 263.21 pmol/lts +/142.46, p=0.183). La
concentración no se asoció al VHS (r=0.078, p=0.329) ni a parámetros ecocardiográficos:
DVID (r=0.070, p=0.375), EPLVI (r=-0.034, p=0.666), EPSS (r=0.132, p=0.095), ESIVD
(r=0.0296, p=0.71), LVID (r=0.139, p=0.081), VVID (r=0.084, p=0.289), FA (r=-0.0259,
p=0.745), FE (r=-0.0211, p=0.791), FEPLVI (r=0.141, p=0.076) y FESIV (r=0.134,
p=0.091). En este estudio se demostró que la concentración sérica de NT-proBNP es afectada
por edad y sexo en caninos sanos pero no por peso/talla y que estas diferencias, deben
considerarse en condiciones de salud y enfermedad. Además que las concentraciones no se
correlacionan con variables radiológicas ni ecocardiográficas asociadas a la variabilidad del
tamaño en caninos.
3
ASSOCIATION BETWEEN NATRIURETIC PEPTIDE NT-proBNP SERUM
CONCENTRATION AND CONSTITUENT VARIABLES IN HEALTHY CANINE IN
THE CITY GENERAL PICO, PROVINCE OF LA PAMPA
PALABRAS CLAVE: Healthy dogs, natriuretic peptide, age, sex, body weight and heart
size.
ABSTRACT
Natriuretic peptides are a family of hormones that play an important role in cardiovascular
and renal homeostasis. The aim of this study was to analyze the association between
natriuretic peptide NT-proBNP serum concentration and constituent variables in healthy dogs.
We hypothesized that NT-proBNP serum concentration does not vary with the bodyweight or
the heart size but it does with the age and sex. 159 dogs were used, 80 males and 79 females,
80 under 7 years old and 79 older than 7, 53 of small size (<12kg) – 53 of medium size (12-
25kg) - 53 of big size (>25kg) with a body condition score 2.5-3.5. It was considered a
healthy canine those patients who had a clinical examination and complementary studies –
blood pressure, electrocardiography, chest radiography, echocardiography, hematologic and
biochemical- within normal parameters according to literature. Statistical analysis was
performed using the public domain software R&R Commander (Rcmdr) i386 version 3.0.1.
The mean serum concentration of NT-proBNP was 260.28 pmol/lts +/-135.48 pmol/lts.
Statistically significant differences were observed according to sex (males: 281.31 pmol/lts
+/-144.84 , females: 238.99 pmol/lts +/-123.52, p=0.0392) and age (<7 years old: 235.19
4
pmol/lts +/-119.72 , > 7 years old: 285.69 pmol/lts +/-146.97, p=0.0124), but not statistically
significant to weight/size (<12kg: 235.78 pmol/lts +/-129.18; 12-25kg: 281.85 pmol/lts +/-
134.34; >25kg: 263.21 pmol/lts +/-142.46, p=0.183). The concentration of NT-proBNP was
not associated with VHS (r=0.078, p=0.329) or with echocardiographic parameters as DVID
(r=0.070, p=0.375), EPLVI (r=-0.034, p=0.666), EPSS (r=0.132, p=0.095), ESIVD
(r=0.0296, p=0.71), LVID (r=0.139, p=0.081), VVID (r=0.084, p=0.289), FA (r=-0.0259,
p=0.745), EF (r=-0.0211, p=0.791), FEPLVI (r=0.141, p=0.076) and FESIV (r=0.134,
p=0.091). This study shows that the concentration of NT-proBNP is affected by age/sex in
healthy dogs but not by the weight/size and that these differences must be taken into account
in health and disease. Furthermore, the concentrations do not correlate with radiological or
echocardiographic variables determined by the variability in the size of healthy dogs.
5
INTRODUCCIÓN
Los animales de compañía, caninos y felinos domésticos, ocupan un lugar destacado
dentro del ámbito familiar. En la actualidad, la atención y el cuidado de las mascotas han
alcanzado niveles de exigencia que representan importantes desafíos para la medicina
veterinaria contemporánea. En la clínica diaria, por su parte, es habitual el hallazgo de
enfermedades que afectan al aparato cardiovascular. Las mismas, representan el 11.3% de
todas las patologías presentes en caninos domésticos (114), correspondiendo un 65-70% a las
patologías valvulares, un 15-20% a patologías miocárdicas y el resto a otras cardiopatías (45).
Un conocimiento preciso de la anatomía, histología, fisiología y fisiopatología del aparato
cardiovascular es necesario para arribar a un diagnóstico clínico presuntivo, así como una
adecuada selección e interpretación de los métodos complementarios es indispensable para
descartar probables diagnósticos diferenciales y determinar el diagnóstico definitivo de la
cardiopatía que afecta al paciente.
Anatomía
El corazón se encuentra ubicado dentro de la cavidad toráxica en el espacio
mediastínico medio, está cubierto parcialmente por los lóbulos pulmonares y sostenido por los
grandes vasos sanguíneos (109). Su peso relativo, en caninos, depende del tamaño y de la raza
del animal, correspondiendo aproximadamente al 0.65-0.76% (152), 0.45-1.1% (109), 0.5-
2.2% (62) del peso corporal. Se sitúa asimétricamente en el tórax, con la mayor parte sobre la
izquierda del plano medio, estando su base a craneodorsal y su vértice a caudoventral. Su eje
mayor se dirige en dirección craneodorsalderecha hacia caudoventralizquierda (51). Se
encuentra rodeado por el pericardio, saco fibroso formado por dos capas, una parietal y otra
6
visceral, entre las cuales se presenta una pequeña cantidad de líquido que colabora en los
movimientos cardíacos (109).
Está constituido por cuatro cámaras, atrios derecho e izquierdo y ventrículos derecho e
izquierdo, las cuales están separadas por medio de válvulas, el tabique interatrial y el septum
interventricular, respectivamente. Asimismo, los atrios se separan de los ventrículos por un
esqueleto fibroso, cuyo único punto de contacto directo, entre ambos, es el orificio de pasaje
del fascículo auriculoventricular del tejido especializado de conducción. Este esqueleto
fibroso se forma por la conjunción de los cuatro anillos valvulares que rodean los cuatro
orificios cardiacos (51). Cada uno de estos últimos, presentan válvulas cardiacas
unidireccionales, dos atrioventriculares –mitral y tricúspide- que separan atrios de ventrículos
y dos sigmoides o semilunares –aórtica y pulmonar- que separan las cámaras ventriculares de
las arterias aorta y pulmonar, respectivamente (109).
Los atrios presentan el músculo atrial, que se organiza en fascículos superficiales y
profundos, los primeros son comunes a las dos cavidades y el segundo se limita a cada una en
particular. El atrio derecho recibe sangre de las venas cavas caudal y craneal, venas coronarias
y de la vena ácigos derecha y la envía al ventrículo derecho a través de la válvula
atrioventricular derecha o tricúspide. El atrio izquierdo recibe sangre de las venas pulmonares
y la envía a través de la válvula atrioventricular izquierda o mitral a la cavidad del ventrículo
izquierdo (51).
Los ventrículos están rodeados por el músculo ventricular, que presenta también
fascículos superficiales y profundos. Los primeros rodean a las dos cámaras ventriculares
utilizando al tabique interventricular para completar una figura con forma de ocho y los
segundos son exclusivos de cada una de las cavidades (51). La cavidad del ventrículo derecho
es triangular al corte longitudinal, de forma semilunar al corte transversal y no se extiende, en
7
condiciones normales, hasta el ápice cardíaco. Presenta en su pared trabéculas cárnicas, tres
músculos papilares que se unen a los bordes de las válvas atrioventriculares a través de
cuerdas tendinosas y una trabécula septomarginal que cruza la cámara desde el septum
interventricular hasta la pared libre. El ventrículo izquierdo es cónico, se extiende hasta el
vértice del corazón, presenta también trabéculas cárnicas, dos músculos papilares,
subauricular y subatrial, los cuales se unen a las valvas atrioventriculares a partir de cuerdas
tendinosas (62).
El sistema especializado en la conducción del impulso cardíaco está constituido por el
nodo sinusal (NSA) o marcapasos cardíaco, los fascículos internodales, el nodo
auriculoventricular (NAV), el has de His con sus ramas derecha e izquierda y las fibras de
Purkinge (152).
El corazón recibe su irrigación a partir de las arterias coronarias derecha e izquierda,
que ocupan, luego de su nacimiento en la aorta, los surcos atrioventriculares primeramente y
los surcos interventriculares posteriormente, llegando a todas las partes del corazón desde la
cara epicárdica (152).
Histología
El corazón está conformado, básicamente, por tejido muscular contráctil y por un
tejido especializado en la conducción del impulso eléctrico. Las paredes cardiacas presentan
una capa interna o endocardio, una media o miocardio y una externa o epicardio. El
miocardio, tejido muscular estriado cardíaco, presenta fibras musculares constituidas por
células que se ramifican y forman en conjunto una red tridimensional. Las células están
unidas cola con cola por discos intercalares, que facilitan la difusión rápida de los iones,
formando en conjunto un sincitio funcional. Las fibras musculares cardíacas, en un corte
8
transversal, son de aspecto ovoideo irregular y en el corte longitudinal, donde su recorrido es
bastante paralelo, se observan ramificaciones que se comunican con las fibras vecinas. Los
ases musculares se encuentran separados entre sí por la presencia de una abundante cantidad
de mitocondrias y retículo sarcoplásmico. Los núcleos son grandes, ovales, claros y se
encuentran en la parte media de cada célula. Se distingue un nítido estriado longitudinal con
el microscopio óptico, asimismo, el patrón de estriado transversal se corresponde con el
presente en la musculatura esquelética, aunque no es tan notable. Un rasgo característico son
los discos intercalares, que se observan como gruesas líneas transversales que atraviesan todo
el ancho de la fibra, presentando el aspecto semejante a una escalera (78).
Las miofibrillas cardiacas presentan un estriado transversal, representado por bandas
oscuras o bandas A y bandas claras o bandas I. Cada banda A posee una zona transversal
menor o banda H y en el centro de la misma una línea angosta o línea M que une las bandas
A. Cada banda I es cortada, a su vez, por una línea Z, lugar este donde se encuentran los
túmulos T. Al segmento ubicado entre dos líneas Z se lo conoce como sarcómero y representa
la unidad estructural y funcional del miocardio. Asimismo, las miofibrillas, están formadas
por miofilamentos de dos tipos, gruesos o de miosina y finos o de actina. En la banda A los
filamentos de miosina y actina están entrelazados. Los filamentos de actina parten de cada
disco Z, desde donde se extienden para formar la banda I y se continúan dentro de la banda A
entre los filamentos de miosina. Éstos, faltan en la banda H, la cual está compuesta por la
porción media de la banda A donde solo hay filamentos de miosina.
Durante la contracción los filamentos de actina se deslizan hacia el centro de la banda
A, acortando el sarcómero, de este modo se hacen más angostas las bandas H e I,
permaneciendo constante la longitud de la banda A. El mecanismo de contracción es regulado
por la Tropomiosina y la Troponina. Ésta última, presenta tres polipéptidos, la Troponina C
9
que se liga al Calcio, la Troponina T que se une a la Tropomiosina y la Troponina I que se une
a la actina e inhibe la contracción. El proceso se lleva a cabo a través del suministro de ATP
por las mitocondrias y de Ca++ a partir del retículo sarcoplasmático y del líquido extracelular
(15).
En preparaciones analizadas bajo microscopia electrónica se observan, tanto en
miocitos atriales como ventriculares, la presencia de granulaciones citoplasmáticas que
contienen péptidos vasoactivos como en péptido natriurético atrial, el péptido natriurético tipo
B y el péptido natriurético tipo C (55).
Fisiología
El corazón, desde un punto de vista hemodinámico, esta constituido por dos bombas:
un corazón derecho que impulsa la sangre desde el ventrículo derecho hacia el territorio
pulmonar donde se realizará la hematosis sanguínea y un corazón izquierdo que bombea la
sangre oxigenada desde el ventrículo izquierdo hacia el territorio corporal sistémico. Ambos
procesos se realizan simultáneamente en cada ciclo cardíaco. Se entiende por este, al período
de tiempo desde el comienzo de un latido hasta el comienzo del latido siguiente (71).
El ciclo cardiaco consta de un período de relajación, denominado diástole, durante el
cual el corazón se llena de sangre, seguido de un período de contracción o sístole, donde la
sangre es expulsada a la circulación pulmonar y sistémica (173). Durante la sístole cardiaca se
acumula sangre en los atrios, provenientes del territorio venoso, debido a que las válvulas
auriculoventriculares (VAV) permanecen cerradas impidiendo el flujo retrógrado de la sangre
desde los ventrículos hacia los atrios. Cuando la sístole termina y la presión dentro de las
cámaras ventriculares cae a valores diastólicos, una presión auricular superior abre las VAV
permitiendo que la sangre fluya rápidamente hacia los ventrículos durante la fase de llenado
10
ventricular rápido, correspondiendo al primer tercio de la diástole. Luego, en el tercio medio,
fluye a los ventrículos una pequeña cantidad de sangre, la que continúa llegando a los atrios
procedente de las venas, pasando directamente a los mismos a través de las VAV abiertas. En
la etapa final de la diástole, el último tercio, las aurículas se contraen e inyectan entre un 7% a
un 10% del volumen diastólico final en reposo, pudiendo llegar a un 25% en el ejercicio
máximo o submáximo (44).
Finalizada la diástole, comienza la contracción ventricular la cual genera que la
presión dentro de estas cámaras aumente rápidamente provocando el cierre de las VAV. En un
principio, se produce la contracción del miocardio ventricular sin el vaciamiento o la
modificación del volumen ventricular, período denominado contracción isovolumétrica. Es al
final de la misma, donde la presión se eleva lo suficiente como para abrir las VS aórtica y
pulmonar (71, 173).
Cuando las VS se abren, porque la presión en los ventrículos supera a la presentada
por las arterias aórtica y pulmonar, comienza la fase de expulsión o de eyección. Ésta, durante
el 1º tercio es rápida, denominándose período de expulsión rápido, y durante los dos tercios
restantes es lenta, conociéndose como período de expulsión lenta. Todo este período se
conoce como Sístole Cardiaca (71, 173).
Al final de la sístole comienza la relajación muscular con lo cual disminuyen
rápidamente las presiones dentro de las cámaras ventriculares. Las elevadas presiones
registradas en las arterias aorta y pulmonar empujan y provocan el cierre de las VS e impiden
el flujo retrógrado de la sangre hacia los ventrículos durante la diástole. Luego, el miocardio
continúa relajándose sin generar variaciones en el volumen ventricular, lo que da lugar al
período conocido como relajación isovolumétrica. Las presiones intraventriculares vuelven
11
rápidamente a los valores diastólicos, lo cual genera por diferencia de presiones la apertura de
la VAV, dando lugar al comienzo de un nuevo ciclo cardíaco (71).
El tejido especializado en la conducción del impulso eléctrico es el responsable de la
coordinación de la serie de pasos descriptos en el ciclo cardíaco. Las células marcapasos del
NSA inician la onda de despolarización del corazón. Ésta, corre por las aurículas a través de
tractos anatómicos especializados y por células miocárdicas auriculares comunes hasta el
NAV. En el mismo, el impulso eléctrico, sufre un retraso fisiológico indispensable, desde el
punto de vista hemodinámico, para que se produzca la contracción de las aurículas antes que
la de los ventrículos. La onda de despolarización, al emerger del NAV, se continúa con el has
de His que atraviesa el anillo fibroso y pasa a los ventrículos donde se divide en las ramas
derecha e izquierda. Las mismas, se ramifican y dan origen a las fibras de Purkinge que llevan
el impulso a todo el miocardio ventricular. Este sistema complejo, es responsable del origen
del impulso cardiaco y su distribución a todo el corazón. Asimismo, permite la contracción
secuencial de las aurículas y los ventrículos y provoca rápidamente la contracción coordinada
de la masa miocárdica completa de ambos ventrículos (127).
Fisiopatología
La insuficiencia cardíaca (IC) se define como la incapacidad del corazón de mantener
un volumen minuto adecuado a las necesidades del organismo. Si esta incapacidad recae
sobre el corazón derecho se genera insuficiencia cardíaca derecha con la consecuente
congestión venosa a nivel sistémico, si la misma recae sobre el corazón izquierdo se genera
insuficiencia cardíaca izquierda con acumulación de edema a nivel pulmonar y si la
incapacidad, por último, afecta a todo el corazón, es decir, a ambos ventrículos, se presenta
insuficiencia cardíaca global (71).
12
Cuando la función y el volumen minuto cardíaco declinan, una compleja interacción
de respuestas compensatorias se ponen en marcha para restaurar el descenso de la presión
arterial sistémica. El sistema nervioso simpático es el primero en reaccionar, elevando la
frecuencia cardíaca, aumentando la contracción del corazón y generando vasoconstricción
periférica. No obstante, el mantenimiento de la presión arterial tiene prioridad sobre el
mantenimiento del volumen minuto cardíaco presentándose, en la disfunción ventricular
temprana, una disminución de la presión arterial sistólica, media y diastólica (112), a pesar de
la puesta en marcha de mecanismos compensadores rápidos (71).
La vasoconstricción periférica genera hipoperfusión renal perpetuando el ciclo de
expansión progresiva de la volemia. El volumen de filtración glomerular, a pesar de
mecanismos intrínsecos del riñón, también disminuye. Esta situación genera la reducción de
la oferta de Na+ a la arteriola eferente y estimula la liberación de renina a partir del aparato
yustaglomerular (55). La renina, una vez liberada al torrente sanguíneo, actúa sobre el
angiotensinógeno, globulina sérica, para producir angiotensina I. En la circulación pulmonar,
esta última, es transformada en angiotensina II a partir de la acción catalítica de la enzima
conversora de angiotensina. La angiotensina II aumenta la presión arterial sistémica a partir
de su poderoso efecto vasoconstrictor y mediante la liberación de aldosterona, la cual
promueve el aumento de la volemia a partir de la reabsorción de sodio, cloro y agua del riñón.
Las sobrecargas de volumen y de presión sobre las cámaras cardíacas, como
consecuencia de la IC crónica, estimulan la liberación de péptidos cardíacos con acción
natriurética, vasodilatadora y de mantenimiento del equilibrio hidrosalino. Estos, representan
el mecanismo de contrafuerza con el cual responde el miocardio ante los trastornos
hemodinámicos señalados anteriormente (136). El péptido natriurético atrial (ANP) es
liberado principalmente del tejido auricular en respuesta al estiramiento del miocardio y al
13
aumento de presión transmural (69) y el péptido natriurético tipo B (BNP) es liberado
primariamente del tejido ventricular cardíaco en respuesta a aumentos del estrés parietal
(184).
A medida que avanza la IC la expansión de la volemia, la retensión hidrosalina y los
desequilibrios en los gradientes de presión hidrostática van favoreciendo el movimiento de
líquido hacia el espacio intersticial, tejidos y cavidades corporales (71). Esta acumulación
genera edema, el cual se deposita en distintos territorios corporales que responden al patrón de
insuficiencia cardíaca dominante, así se presenta edema pulmonar en la ICI y ascitis en la
ICD. Esta situación es sostenida por los mecanismos compensatorios, los cuales se vuelven
contraproducentes y estimulan el progresivo avance de la IC. Si un nuevo equilibrio
hemodinámico no es alcanzado, el sistema renina-angiotensina-aldosterona continúa
exacerbando el proceso con la consecuente falla cardíaca congestiva fulminante y la muerte
del animal (165).
Diagnóstico
El diagnóstico de las enfermedades cardíacas así como la determinación objetiva del
verdadero estado de salud del paciente –sano versus enfermo- comienza con la realización de
un exhaustivo examen clínico. Una reseña precisa, anamnesis detallada y exploración física
sistemática son claves para elaborar criteriosamente un diagnóstico presuntivo. En este
sentido, el examen clínico del paciente es soberano no pudiendo ser reemplazado por ninguna
metodología diagnóstica complementaria (105). Sin embargo, el aporte de éstos últimos a la
clínica representa una contribución significativa a la hora de establecer un diagnóstico
definitivo de la patología cardiovascular o determinar el estatus de animal sano o libre de
14
enfermedad. Asimismo, permiten realizar un tratamiento más adecuado al tipo de patología,
evaluar su evolución y emitir un pronóstico con mayor exactitud (67).
Métodos diagnósticos complementarios
Electrocardiografía
El electrocardiograma (ECG) es el test diagnóstico más comúnmente utilizado en
cardiología veterinaria. Registra los potenciales eléctricos generados por el corazón desde la
superficie corporal a partir de la utilización de un electrocardiógrafo (185).
Su interpretación aporta datos sobre la frecuencia y ritmo cardíacos, estado del sistema
de conducción del impulso eléctrico y de la presencia, origen y frecuencia de las arritmias
(124). También puede sugerir la presencia de sobrecargas camerales específicas, enfermedad
miocárdica y pericárdica, isquemia, desequilibrios electrolíticos y toxicidades
medicamentosas.
Sin embargo, aporta información limitada sobre la función mecánica del corazón,
etiología de la enfermedad cardíaca, gravedad del proceso morboso y pronóstico del paciente.
Los valores normales para caninos y felinos domésticos se encuentran estandarizados (188).
Radiología
El examen radiológico del tórax permite evaluar la silueta, el tamaño y la posición del
corazón, el diámetro y la proyección de los grandes vasos sanguíneos asociados, descubrir
signos relacionados a la presencia de insuficiencia cardíaca congestiva, diferenciar la
enfermedad cardíaca de una patología extracardíaca -pulmonar, pleural o mediastínica- y
colaborar en la distinción entre patología cardíaca derecha, izquierda o global (43).
15
La evaluación del tamaño cardíaco radiológico -escala cardíaca vertebral (VHS)- y del
diámetro de los grandes vasos sanguíneos –arterias y venas apicales, arterias y venas caudales,
vena cava caudal- sobre la base de estructuras que no presentan modificaciones debidas a los
movimientos respiratorios –cuerpos vertebrales toráxicos y ancho de las costillas- constituye
un método objetivo para descartar signos de cardiomegalia radiológica y patrones vasculares
de hipertensión y/o congestión pulmonar (161, 185). El tamaño cardíaco vertebral, observado
en caninos con IVM, presenta una correlación positiva con los parámetros ecocardiográficos y
con la concentración sérica de fracción amino terminal del péptido natriurético tipo B (NT-
proBNP) en pacientes con insuficiencia cardíaca congestiva (141).
Sin embargo, y a pesar de que los valores normales para caninos y felinos se
encuentran estandarizados (185), una silueta cardíaca radiológicamente normal se puede
corresponder con un animal enfermo ya que muchas enfermedades cardiacas no
necesariamente producen signos radiográficos y a que varias anormalidades radiográficas son
sólo en realidad variaciones individuales, de conformación ó circunstanciales, como las
originadas a partir de las fases del ciclo cardíaco o de los movimientos respiratorios (68).
Ecocardiografía
La incorporación de la ultrasonografía cardíaca amplió el panorama diagnóstico de las
patologías del corazón, permitiendo la visualización no invasiva y no ionizante de su
estructura interna (20). Imágenes dinámicas del ciclo cardíaco son obtenidas en Modo B-
Dimensional y Modo M o en movimiento, convirtiéndose en una herramienta primordial en la
evaluación de pacientes con enfermedad cardíaca (80).
Un estudio ecocardiográfico sistemático permite observar la presencia de lesiones
valvulares, shunts sanguíneos, masas cardíacas y extracardíacas, efusiones pericárdicas y
16
pleurales, enfermedades miocárdicas y lesiones estenóticas. De mayor importancia, la
ecocardiografía, evalúa el tamaño de las cámaras cardíacas (diámetros internos sistólicos y
diastólicos, áreas y volúmenes), espesores parietales, movimientos murales, fracción de
acortamiento y de eyección del ventrículo izquierdo, fracción de engrosamiento de las paredes
ventriculares y relación Ao/AI (11, 36, 155, 161) brindando información sobre el estado
hemodinámico y la extensión de los procesos de enfermedad (20, 76, 189).
Asimismo, los exámenes ecocardiográficos permiten el seguimiento de los cambios
anatómicos producidos en el corazón, adquiridos o congénitos (189), y las estructuras
relacionadas a través del tiempo (20, 76).
Sin embargo, un estudio ecocardiográfico preciso requiere de pericia técnica,
resultando obvia la importancia de la experiencia del operador y el conocimiento de la
anatomía, fisiología y fisiopatología cardiovascular (20, 56, 141, 189). Por otra parte, la
ecocardiografía no aporta datos objetivos sobre el grado de estrés parietal que soportan las
cámaras cardiacas (80, 118) y no es el método complementario ideal para seguir un
tratamiento y emitir un pronóstico sobre la cardiopatía (194). Asimismo, aporta datos acerca
de la etiología de la enfermedad (149). En pacientes con insuficiencia cardíaca y severa
disfunción ventricular izquierda, sus parámetros son predictores significativos de mortalidad
(80).
La ecocardiografía doppler permite determinar la dirección y velocidad de la sangre
dentro del corazón y los grandes vasos y diferenciar entre flujos laminares y turbulentos (20).
Esta técnica diagnóstica, también colabora con la ecocardiografía convencional, en la
detección de shunts sanguíneos, regurgitaciones y estenosis valvulares, en la evaluación de la
función sistólica y diastólica del ventrículo izquierdo y en la estimación de la gravedad de la
cardiopatía (8). Asimismo, los estudios doppler permiten calcular el volumen y la fracción de
17
regurgitación y a partir de estos, estimar gradientes de presión y calcular índices que permitan
contar con mayor información sobre la función sistólica y diastólica ventricular (20). En
caninos con IVM se presenta una estrecha relación entre el grado o tamaño del jet de
regurgitación mitral y la gravedad de la alteración valvular (4) y una correlación
estadísticamente significativa con la concentración sérica del péptido natriurético NT-proBNP
(183).
Los exámenes doppler demandan tiempo, son técnicamente exigentes y requieren un
buen conocimiento de la anatomía cardiaca y de los principios hemodinámicas (189). Pero, al
igual que la ecocardiografía convencional, no aportan datos objetivos sobre el grado de estrés
parietal que soportan las cámaras cardiacas (80) y del estado hemodinámico del organismo
(118).
Los valores normales para caninos y felinos domésticos para los parámetros
ecocardiográficos se encuentran estandarizados (20).
Biomarcadores cardíacos
En las últimas décadas, se ha prestado especial atención a la utilización de
biomarcadores que reflejen el estado y funcionamiento del aparato cardiovascular (142). Los
mayores avances se han generado en el campo de la medicina humana, donde los marcadores
de necrosis miocárdica isquémica cobran real importancia dentro del diagnóstico, tratamiento
y pronóstico de los pacientes. Entre estos, se encuentran las enzimas AST, LDH, CPK y CK-
MB como las más antiguas y la Troponina C, T e I (142, 149), endotelinas (118, 142) y
proteína C reactiva (70, 93, 158) como los nuevos marcadores de necrosis miocárdica. Sin
embargo, en medicina veterinaria, las patologías isquémicas son sumamente raras, siendo su
incidencia menor al 0.15% de las patologías que afectan al corazón (46, 54).
18
En forma similar a la importancia estadística que cobran las patologías isquémicas
agudas en medicina humana, se presentan las afecciones cardiovasculares crónicas,
congénitas y adquiridas, en medicina veterinaria. Este estado de situación, trajo aparejada la
búsqueda de otro tipo de marcadores de enfermedad cardíaca capaces de posibilitar el
diagnóstico, registrar el progreso y evaluar la respuesta al tratamiento de cada paciente (142).
Se los denomino biomarcadores cardiacos hemodinámicas y son sintetizados, almacenados y
secretados por el miocardio cardíaco. Son considerados como tales el péptido natriurético
atrial (ANP) y el péptido natriurético tipo B (BNP). En la actualidad, estos proporcionan
nuevas y prometedoras perspectivas en cuanto a la utilidad diagnóstica, tratamiento y
pronóstico de las patologías cardíacas en caninos domésticos (118).
Péptidos Natriuréticos
Los péptidos natriuréticos (NP) son una familia de hormonas (191) que juegan un
importante rol en la regulación de la homeostasis cardiovascular y renal (101), a partir de su
actividad vasodilatadora, natriurética, antagonista del sistema renina angiotensina aldosterona
(17, 171, 187), lusinotrópica (17) e inhibitoria de la fibrosis cardíaca (181). El primero en ser
descubierto (40) y secuenciado (140) fue el péptido natriuréticos atrial (ANP). Los restantes
miembros, péptido Natriuréticos tipo B (BNP) y péptido Natriuréticos tipo C (CNP), fueron
caracterizados en 1989 (162) y en 1990 (176). El ANP se presenta en mayor concentración en
el tejido cardíaco atrial (40, 140) y es almacenado en forma de gránulos de rápida liberación
(26, 40). El BNP, originalmente descubierto en tejido cerebral porcino (175), es sintetizado y
liberado, tanto por miocitos atriales como ventriculares sin un proceso de almacenamiento
extenso (6, 121, 135). El CNP, el miembro más recientemente descubierto, es sintetizado en
las células endoteliales vasculares (33) y presenta una alta concentración en el sistema
19
nervioso central en comparación con los bajos niveles que se observan tanto en tejido
cardíaco como sanguíneo (176).
El análisis estructural muestra que todos los NP presentan un anillo central común,
constituido por 17 aminoácidos, y dos cadenas peptídicas, adheridas a este, en las cuales se
expresan las principales diferencias moleculares (140, 176). El ANP es sintetizado como un
polipétido precursor de 126 aminoácidos (proANP-126), el cual, luego de su liberación a
sangre, es escindido en dos fragmentos menores, la fracción carboxilo terminal
biológicamente activa de 28 aminoácidos (C-ANP 99-126) y la fracción aminoterminal
residual e inactiva de 98 aminoácidos residual (NT-proANP 1-98) (194). El BNP, de forma
similar al ANP, es sintetizado y liberado a la circulación como una prohormona glicosilada
(164) de 108 aminoácidos denominada proBNP (63, 103, 171). Esta prohormona, una vez en
el torrente sanguíneo, es proteolíticamente dividida en dos fragmentos por una proteasa sérica
(193) ubicada en la membrana de los miocitos cardíacos (83), la fracción carboxilo terminal
no glicosilada (164) de 32 aminoácidos, biológicamente activa, denominada C-BNP o BNP 1-
32 (66, 166) y un fragmento amino terminal no glicosilado residual (163) de 76 aminoácidos
inactivo, denominado NT-proBNP (66, 81, 117, 167). El BNP 1-32, luego de cumplir su
actividad biológica, es clivado por una dipeptidil aminopeptidasa IV (DPP4) a BNP 3-32 (23).
Ya que este último presenta acciones significativamente inferiores al C-BNP, esta molécula se
considera el primer paso en el proceso de degradación del BNP 1-32 (17).
Los péptidos natriuréticos ejercen su actividad biológica al unirse a receptores
celulares específicos presentes en el endotelio y en las células musculares lisas de los vasos
sanguíneos (159), riñones, pulmones y miocitos cardiacos (27). Tres tipos de receptores han
sido caracterizados (97, 154). Dos de estos, el receptor de péptidos natriuréticos tipo A (NPR-
A) y el receptor de péptidos natriuréticos tipo B (NPR-B), presentan actividad guanil ciclasa
20
(CG) y median su acción a partir de la producción del segundo mensajero guanosil
monofosfato cíclico (GMPc) (82). Por su parte, el tercero, denominado receptor de péptidos
natriuréticos tipo C (NPR-C), tiene como función remover de la sangre las formas
biológicamente activas de los péptidos natriuréticos (2, 117). Esta última función, es
compartida con endopeptidasas neutras presentes en la circulación sanguínea, aunque a
diferencia de NPR-C, éstas degradan ANP fundamentalmente y en menor proporción BNP
(92, 145). ANP y BNP estimulan la producción de GMPc a partir de la activación del receptor
NPR-A (98, 99, 195). CNP, en cambio, estimula la producción de GMPc a partir de su acción
específica sobre el receptor NPR-B (97). El GMPc generado, a partir de la activación de la
CG, es degradado, luego de cumplir con su actividad biológica, por enzimas con actividad
fosfodiesterasa, como la PDE5 (98), la cual se encuentra en los riñones, corazón y vasos
sanguíneos (180). Los fragmentos inactivos NT-proANP y NT-proBNP, por su parte, son
excretados sin modificaciones vía renal, en contraste con la eliminación vía receptores
específicos y/o enzimas de degradación que sufren los fragmentos activos (111). Presentan,
además, una menor variabilidad biológica (58, 125) y una mayor vida media que las
fracciones activas (146).
ANP y BNP son liberados por el tejido cardíaco en respuesta a incrementos en el
estrés parietal de atrios y ventrículos (157). La síntesis, regulación y liberación de éstos
péptidos presentan diferencias puntuales entre sí (112). El estímulo primario para la liberación
de ANP es la sobrecarga de volumen y/o de presión que soportan los atrios cardíacos,
independientemente de cuál sea la etiología de la patología cardiovascular. En respuesta a la
misma, los niveles sanguíneos de ANP aumentan rápidamente como consecuencia, en primer
lugar, de la rápida descarga a partir de los gránulos de reserva ubicados en los miocitos
atriales y, en segundo lugar, por el incremento de su síntesis (120). A pesar de ésta pronta
21
respuesta y de la elevación temprana de los niveles sanguíneos, frente a patologías cardíacas
crónicas los niveles de ANP no se elevan en la misma proporción que en los primeros estadios
(112). En animales sanos, la mayor parte del BNP circulante se origina, en forma primaria y
de manera similar a ANP, a partir de la síntesis y liberación de miocitos atriales y, en forma
secundaria, de miocitos ventriculares (120). Una diferencia significativa entre ANP y BNP
radica en que, este último, no presenta un proceso de almacenamiento extenso en las células
cardíacas que le permitan una rápida liberación frente a condiciones patológicas (111). De
esta forma, el estiramiento de la pared atrial y, principalmente, el estrés parietal ventricular
desencadenan la síntesis y liberación gradual de BNP con el consecuente aumento de su
concentración plasmática (117). Aumentos marcados, como los que se observan en pacientes
con insuficiencia cardíaca crónica, son provocados, a su vez, por el incremento de la síntesis
proteica a partir de una mayor regulación génica en ventrículos cardíacos, primariamente
(132, 171). Así, y a diferencia de ANP, los niveles de BNP incrementan de una manera más
lenta, pero más persistente, como consecuencia de cambios hemodinámicas crónicos (111,
132). La síntesis y secreción de BNP se incrementa, de esta forma, en respuesta a fuerzas
hemodinámicas como las que se generan a partir de la sobrecarga de volumen y/o presión que
soportan las cámaras ventriculares principalmente (115). En síntesis, los niveles circulantes de
BNP se correlacionan positivamente con la severidad de la insuficiencia cardíaca (156) y
proporcionan un sensible biomarcador para el diagnóstico, seguimiento y pronóstico de la
insuficiencia cardíaca (12, 66, 165).
La determinación de las concentraciones circulantes de los péptidos natriuréticos se
considera parte de los análisis que se realizan para diagnosticar enfermedades cardíacas en el
hombre (142). El requisito fundamental para utilizar un péptido como biomarmador es que
exista una prueba confiable, tanto en sensibilidad como en su especificidad (163). Los
22
polipéptidos precursores, así como los fragmentos activos e inactivos, presentan diferencias
significativas, tanto en ANP como en BNP, que van más allá de su actividad biológica y que
son determinantes a la hora de cuantificar las concentraciones séricas o plasmáticas de los
mismos. Estas diferencias muestran que los fragmentos inactivos, NT-proANP y NT-proBNP,
son utilizados como test diagnóstico en pacientes humanos, en lugar de los fragmentos activos
C-ANP y C-BNP, ya que son mas estables a temperatura ambiente (25) y presentan una vida
media mas larga que los fragmentos activos (184). Así, a modo de ejemplo, la vida media de
C-BNP en caninos es de 1.5 minutos, considerablemente inferior que la del fragmento
inactivo (174) y la de GMPc, generado a partir de su acción biológica, es de unos 30 minutos
(16). Las determinaciones de los péptidos natriuréticos en suero y plasma muestran resultados
discrepantes a partir de distintos estudios. Algunas investigaciones demostraron
concentraciones mas altas en muestras séricas en comparación con las plasmáticas, obtenidas
de forma pareada a partir de pacientes caninos sanos (91), en contraposición con otros
resultados, también en caninos sanos, donde no se observaron diferencias significativas (22).
La secuencia molecular de ANP y BNP, por otra parte, a pesar de estar altamente conservada
entre las especies mamíferas, presentan diferencias significativas. Así, por ejemplo, el ANP
canino muestra un 87% de homología con el ANP humano (107), mientras que BNP muestra
sólo un 43% de homología entre estas especies (6, 7, 140). Esto generó dificultades, en un
principio, para determinar los niveles circulantes de los NP, en caninos y felinos, cuando se
empleaban test humanos específicos. Por esta razón, se han desarrollado test caninos y felinos
específicos (14), tanto para los fragmentos activos como residuales de los péptidos ANP (22)
y BNP (100, 164) y se encuentran disponibles comercialmente, en la actualidad, por
diferentes laboratorios. A pesar de estos recientes ensayos, y de la alta especificidad y
sensibilidad que poseen, los mismos son incapaces de distinguir entre las formas circulantes
23
de C-ANP versus proANP, C-BNP versus proBNP, NT-proANP versus proANP y NT-
proBNP versus proBNP (104). La razón para esto es que el fragmento activo y el inactivo
comparten, cada uno por separado, con el polipéptido precursor los extremos carboxilo
terminal y amino terminal, respectivamente. Lo expresado aquí determina que, cuando se
cuantifica el fragmento activo, por ejemplo, los valores hallados son el resultado de la suma
de la fracción activa y del precursor polipeptídico que da origen a la misma (104).
En los últimos años los NP ocupan un lugar destacado dentro del diagnóstico de las
cardiopatías humanas. Su determinación es recomendada como uno de los primeros pasos del
examen clínico cardiológico (49, 87, 177, 178) y es utilizada, a su vez, como guía para
evaluar el tratamiento y el pronóstico en esos pacientes (24, 38, 49, 80, 89, 134, 169). En
pacientes caninos los NP permiten realizar el diagnóstico, evaluación y monitorear el
tratamiento de la enfermedad cardíaca (141, 142), con ciertas limitaciones puntuales. Los
niveles sanguíneos de C-ANP (69, 188), NT-proANP (21, 22), C-BNP (118) y NT-proBNP
(143) permiten diferenciar caninos con enfermedad cardíaca, � Clase II de la International
Small Animal Cardiac Health Council Heart Failure Classification (ISACHC), de caninos
sanos, correlacionándose, dicha concentración, con el grado de murmullo cardíaco, los
hallazgos en el examen físico, radiológico y ecocardiográfico. Permiten distinguir, a su vez,
entre caninos con insuficiencia cardíaca congestiva, Clase II o III (ISACHC), de pacientes con
enfermedad cardíaca sin signos de congestión (6, 72, 73, 79, 118, 142). La concentración de
los NP, de igual forma, se encuentra más elevada en pacientes Clase II con enfermedad
cardíaca activa que en pacientes Clase II con enfermedad cardíaca compensada, sugiriendo
que la concentración de los NP (NT-proBNP) disminuye en respuesta al tratamiento (142) y
aumenta significativamente a medida que se hace más severa la enfermedad cardíaca (74, 91,
142, 170). En estos pacientes, por otra parte, las concentraciones de C-BNP (149), NT-
24
proANP (149) y NT-proBNP (57) permiten distinguir si la causa de tos y disnea obedecen a
un origen cardíaco o no cardíaco (pulmonar). En pacientes Clase Ia (ISACHC), por otro lado,
la concentración de los NP (NT-proBNP) es comparativamente inferior que en pacientes
caninos Clase Ib (pacientes con enfermedad cardíaca subclínica con exámenes
complementarios que evidencian la presencia de enfermedad cardíaca). Es, en la sensibilidad
de los NP en estos últimos pacientes, donde se presenta la zona más gris de la utilidad clínica
de este biomarcador. Los valores de corte establecidos por distintos laboratorios son
claramente eficaces en distinguir entre caninos sanos de los Clase II y III, pero, en los de
Clase I, tanto Ia como Ib, se encuentra una proporción importante de falsos positivos y
negativos, que no hacen posible, hasta el momento, su uso como único medio para realizar el
diagnóstico de enfermedad cardíaca con certeza. Esta variabilidad puede obedecer a causas
raciales (75, 141, 142) ó a factores que deben ser más profundamente estudiados como la
edad, el sexo, etc. (179). Dentro de las principales patologías cardíacas, que afectan a los
animales domésticos, los NP también presentan hallazgos significativos. En pacientes con
enfermedad valvular crónica (CVD) las concentraciones de los NP (NT-proANP y NT-
proBNP) permiten diferenciar entre caninos con severa regurgitación mitral de aquellos con
leve a moderada regurgitación mitral (22, 183). Cuando los pacientes con CVD presentan, a
su vez, insuficiencia cardíaca congestiva se manifiesta una positiva correlación entre la
concentración de los NP circulantes y la severidad de la patología valvular, el grado de
mortalidad y el tamaño del jet de regurgitación (68, 118, 183). Las concentraciones de los NP
(NT-proBNP), por ejemplo, para los estadios Clase Ia, Ib, II y IIIa (ISACHC) fueron de 302,8
pmol/lts± 257,1, 634,2 pmol/lts ± 642,5, 1277,9 pmol/lts ± 756,2 y 1908,9 pmol/lts ± 538,8,
respectivamente. Esto pone en evidencia que la concentración en pacientes Ib, o más grave,
fue significativamente mas alta que en los controles sanos y que en pacientes asintomáticos
25
con exámenes complementarios normales. La misma aumenta, a su vez, con la severidad de la
insuficiencia cardíaca y se asocia con la clasificación del estado de la función cardíaca
realizada por la ISACHC (179). En pacientes con soplos cardíacos de grado 1/6 a 2/6, por otra
parte, no se observaron diferencias significativas en la concentración de NT-proBNP
comparada con los controles sanos. En caninos con soplos 3/6 o mayores, en cambio, la
concentración de los NP fue significativamente más elevada que en los controles sanos y se
correlacionó positivamente con la intensidad del soplo cardíaco (31, 32, 57). La concentración
circulante de NT-proBNP se correlacionó positivamente con la frecuencia cardíaca, la
frecuencia respiratoria, el tamaño cardíaco vertebral (VHS), la relación Ao/AI (57, 77, 110,
192), la relación Ao/DVID, la relación Ao/DVIS, la uremia, la creatininemia y negativamente
con la cloremia en estos pacientes (142, 183). De esta manera, los hallazgos en el diagnóstico
por imágenes y los niveles de los NP (NT-proBNP) se asocian positivamente con la severidad
de la CVD (179). En este tipo de patología, por último, la concentración de los NP (NT-
proBNP) fue significativamente mayor en pacientes con hipertensión pulmonar asociada a
insuficiencia valvular mitral comparada con caninos sanos y disminuyó significativamente a
partir de la terapia con pimobendan en las primeras etapas del tratamiento. Nuevos estudios,
sugieren que, además, caninos con hipertensión pulmonar asociada a patología cardíaca o no,
presentan concentraciones de NP (NT-proBNP) significativamente más elevadas en
comparación con pacientes caninos afectados de enfermedades respiratorias primarias (57,
142, 183). Esta hipótesis se refuerza al observar que en caninos con insuficiencia cardíaca el
inhibidor específico de la PDE5, Sildenafil, mejoró los efectos hemodinámicas de los NP
exógenos (C-BNP) en la circulación pulmonar. Estos hallazgos soportan la idea del rol de la
PDE5 como desensibilizante de la acción de los NP sobre su actividad en la vasculatura
sistémica (59). Esta última actividad, sumada a la disminución concomitante de la síntesis de
26
GMPc en pacientes con insuficiencia cardíaca, genera efectos adversos como la disminución
de la actividad de los receptores NPR-A, una mayor acción de los receptores NPR-C y un
incremento en el catabolismo de GMPc por una mayor producción de PDE5 (147). Dentro de
las restantes causas de enfermedad cardíaca, presentes en caninos domésticos, se evidencian
los mismos hallazgos que para la CVD, pero se presentan particularidades que merecen su
consideración. Las concentraciones de C-BNP y NT-proBNP (142, 144) permiten diferenciar,
significativamente, entre las distintas causas de enfermedad cardíaca y muestran que los
pacientes con cardiomiopatía dilatada (CMD) presentan niveles de NP mucho más elevados
que aquellos afectados por otras causas de enfermedad cardíaca, independientemente de la
severidad que presente la patología. En caninos de la raza Bóxer con cardiomiopatía
arritmogénica de ventrículo derecho, una variante de cardiomiopatía dilatada, la
concentración de NP (C-BNP) se halla sensiblemente más baja cuando se la compara con los
niveles circulantes de NP presentes en otras razas caninas con cardiomiopatía dilatada y en
similares estadios de la enfermedad (9). En caninos Doberman pinschers, con CMD
idiopática, en cambio, las concentraciones de los NP (C-ANP y NT-proBNP) se hallan
significativamente más elevadas en comparación con caninos de otras razas gigantes con esta
misma afección (138, 144, 190). Otros estudios realizados en una colonia de Golden retriever
con miocardiopatía distrófica oculta mostraron, además, un incremento en los niveles
circulantes de C-BNP cuando se comparaba a estos pacientes con controles sanos (31). En
modelos caninos experimentales de estenosis aórtica, que originan cambios a nivel
miocárdico, se observo que las concentraciones de C-ANP se incrementa en forma temprana
ante sobrecargas de volumen y/o de presión sobre las cámaras cardíacas, en cambio, C-BNP
se eleva mas lentamente pero de forma más constante y sus niveles se correlacionan
significativamente con las alteraciones halladas a partir del examen ecocardiográfico (84).
27
Estas observaciones concuerdan con las halladas en pacientes humanos con enfermedad
cardíaca en donde una de las mayores causas de incremento de C-BNP es el aumento del
estrés parietal que sufre la pared ventricular izquierda al final de la diástole (88). Así, en estos
modelos caninos, la presión diastólica final del ventrículo izquierdo y el espesor del septum
interventricular en diástole son predoctores de la concentración de los NP (NT-proBNP) (84,
85). El taponamiento cardíaco, por último, no presenta niveles significativos de C-BNP que
permitan diferenciarlo de un paciente sano y/o de pacientes con enfermedad cardíaca
asintomática leve a moderada. Iguales hallazgos se han obtenido en pacientes humanos (102).
Los NP, como se menciono anteriormente, juegan un importante rol en la regulación
de la homeostasis cardiovascular y renal (65, 66). Modificaciones en la función de órganos no
miocárdicos o variables sistémicas, como el riñón (136) y la presión arterial, respectivamente,
alteran los niveles circulantes de NP, de manera independiente de la función cardíaca. En
caninos la concentración de NP se correlaciona con la función renal. En estos pacientes, con
insuficiencia renal crónica, los niveles de NP (NT-proBNP) se hallaron dos veces más
elevados comparados con caninos sanos (188), en concordancia con estudios realizados en
humanos con C-BNP (133, 134). En estos últimos, se observó una fuerte correlación negativa
con el grado de filtración glomerular (3, 41, 123, 129, 150) y que, además, las mismas están
afectadas por el índice de masa corporal y la edad del paciente (108, 174). En estudios
realizados en caninos y felinos, se demostró que la concentración de los NP se correlaciona
positivamente con los niveles séricos de urea y creatinina, tanto en pacientes caninos sanos
como en los que presentan enfermedad renal, enfermedad cardiaca (22) o cuando se presentan
ambas disfunciones juntas. La función renal, por lo tanto, puede influenciar los valores de
corte para el diagnóstico de enfermedades cardíacas puras y/o mixtas. La presión sistémica es
otra variable orgánica que incide sobre la concentración circulante de los NP. Los niveles
28
séricos de los NP (NT-proANP y NT-proBNP) se correlacionan positivamente con la presión
arterial sistólica en felinos domésticos y sus determinaciones permiten diferenciar entre
pacientes normotensos con enfermedad renal crónica, de hipertensos con enfermedad renal
crónica y de pacientes felinos sanos. En lo que respecta a las distintas determinaciones
utilizadas, sólo NT-proBNP fue estadísticamente significativo para diferenciar felinos
normotensos de hipertensos, ambos con enfermedad renal crónica, estando más elevada en
estos últimos. De esta manera, tanto la hipertensión arterial como las patologías renales
producen aumentos en la concentración de los NP.
Los niveles circulantes de NP, publicados en los distintos ensayos hasta el momento,
se han asociado con resultados diferentes a las variables constitutivas y raciales. En lo que
respecta a las primeras, edad, sexo, estado reproductivo, peso y tamaño corporal, varios
ensayos no hallaron correlación entre estas y la concentración sérica o plasmática de los NP
(NT-proBNP) tanto en pacientes con enfermedad cardíaca como en pacientes sanos (22, 52,
53, 91, 100, 128, 142, 183). Si, en cambio, observaron diferencias entre caninos de raza pura
y mestizos, estando, la concentración de los NP (NT-proBNP), más elevada en los primeros
en la población general sanos-enfermos (142). Por su parte, sobre un estudio de 330 caninos
(sanos + enfermos cardíacos + enfermos no cardíacos), De Francesco et al., hallaron
diferencias en relación a la edad y el sexo de los pacientes de manera similar a otros ensayos
(42, 179). En este, se observó que los machos presentaban niveles ¼ más elevados que las
hembras en igual forma que los mayores de 8 años con respecto a los menores de 8 años de
edad. En pacientes humanos, por su parte, se presentan correlaciones significativas con la
edad, el sexo, la raza, la condición corporal y la función renal. Se observan mayores niveles
en mujeres que en hombres y en adultos que en jóvenes (94, 151, 153). Es importante
mencionar que estos estudios son multicéntricos y presentan un muestreo muy amplio. La
29
obesidad en estos pacientes, se correlaciona negativamente, a su vez, con la concentración de
los NP a causa, probablemente, de una disminución en la síntesis o secreción de los NP (NT-
proBNP) (10). En caninos de la raza Cavalier King Charles Spaniels con regurgitación mitral
adquirida se observa una relación inversa entre el peso corporal y las concentraciones de los
NP (NT-proANP y NT-proBNP). La razón para estos hallazgos es probablemente la pérdida
ponderal que sufren estos pacientes a causa de la enfermedad cardíaca (183). Por último, se
observa una amplia variabilidad individual y semanal, en las concentraciones de los NP (NT-
proBNP) en caninos sanos (91). Estos hallazgos concuerdan con resultados obtenidos en
pacientes humanos (130), en los cuales las variaciones diarias en los niveles de los NP (NT-
proBNP) son hasta del 50% en pacientes con enfermedad cardíaca compensada, pudiendo
claramente influir en la interpretación de los resultados (137). Estas mismas variaciones, en
caninos, quedan aún por ser estudiadas.
Considerando que las patologías cardíacas crónicas representan más del 95% de las
afecciones cardiológicas en caninos domésticos, no cabe duda que los biomarcadores antes
señalados formen parte de los estudios complementarios de diagnóstico. En este marco, ¿Cuál
sería el problema para su utilización fiable?: la estandarización de los valores de base.
Recientemente se han validado los Kits canino específicos que permiten un uso confiable en
esta especie. Pudiendo afirmarse 1): Que confirman tanto desde el punto de vista diagnóstico
como del pronóstico los datos obtenidos por el resto del arsenal de que dispone la medicina
cardiológica a la fecha, 2): A través de su concentración, más la de urea y creatinina sérica, se
relacionan las funciones renales y cardíacas, 3) Que los valores obtenidos no son afectados
por la técnica de recolección ni por la utilización de anticoagulantes, y si lo son, por los
fármacos utilizados para tratar la enfermedad cardiovascular primaria.
30
Un hallazgo común es la amplia variabilidad en la concentración de estos péptidos en
las distintas investigaciones. Los valores de referencia y puntos de corte no se encuentran
claramente establecidos, observándose además, una sobreposición en los valores medios;
apareciendo en el diagnóstico un porcentaje de pacientes falsos positivos sin enfermedad
cardíaca. Esto podría deberse a que en los estudios realizados se han utilizado poblaciones
muy heterogéneas y de pequeño tamaño, en los grupos correspondientes a los animales sanos,
no teniendo en cuenta variables como la raza, edad, sexo, peso/talla y estado reproductivo, las
cuales pudiesen ser responsables de la variabilidad encontrada.
Todas las afecciones del aparato cardíaco terminan incidiendo en la función
ventricular, con el consecuente estrés parietal de esta cámara, por lo tanto, el indicador más
apropiado de enfermedad ventricular cardíaca en caninos, dentro de la familia de péptidos
natriuréticos, es la porción amino terminal del Péptido Natriurético Tipo B (NT-proBNP),
siendo su indicación primaria el diagnóstico, evaluación del tratamiento y pronóstico de los
pacientes caninos con enfermedad cardíaca.
Sobre la base del marco teórico expuesto este trabajo de tesis presentó como:
Objetivo general:
• Estudiar la asociación entre la concentración sérica de NT-proBNP y factores
constitutivos (peso vivo, sexo, edad y tamaño cardíaco) en una población de caninos
sanos.
Objetivos particulares:
• Estudiar la variabilidad de la concentración sérica de NT-proBNP en caninos sanos
dentro de cada grupo en base a las variables constitutivas sexo y edad.
• Determinar la concentración sérica del péptido natriurético NT-proBNP en caninos
sanos para establecer los valores fisiológicos normales.
31
• Relacionar las determinaciones cuantitativas ecocardiográficas con la concentración
sérica del péptido natriurético NT-proBNP a medida que aumenta el peso y el tamaño
corporal en caninos sanos con una condición corporal no mayor a 3.5.
• Correlacionar el tamaño cardíaco radiológico relativo (VHS) con la concentración
sérica de NT-proBNP a medida que aumenta la talla/peso en caninos sanos con
condición corporal no mayor de 3.5
32
MATERIALES Y MÉTODOS
Animales
Se estudiaron 159 caninos sanos, 80 machos y 79 hembras, 80 menores de 7 años y 79
mayores de 7 años, 53 de talla pequeña y peso menor de 12 kg. – 53 de talla mediana y peso
corporal entre 12 kg. y 25 kg. – 53 de talla grande y peso corporal mayor de 25 kg., 107
enteros y 52 castrados. Todos los animales utilizados contaron con el consentimiento de su
propietario para la realización de los estudios correspondientes enmarcados en este trabajo de
tesis.
Los 159 caninos se dividieron en 12 grupos según sexo, edad y peso/talla corporal.
- El Grupo I (machos – menores de 7 años – talla pequeña y peso menor de 12 kg.).
- Grupo II (machos – menores de 7 años – talla mediada y peso entre 12 - 25 kg.).
- Grupo III (machos – menores de 7 años – talla grande y peso mayor de 25 kg.).
- Grupo IV (hembras – menores de 7 años – talla pequeña y peso menor de 12 kg.).
- Grupo V (hembras – menores de 7 años – talla mediana y peso entre 12 – 25 kg.).
- Grupo VI (hembras – menores de 7 años – talla grande y peso mayor de 25 kg.).
- Grupo VII (machos – mayores de 7 años – talla pequeña y peso menor de 12 kg.).
- Grupo VIII (machos – mayores de 7 años – talla mediana y peso entre 12 – 25 kg.).
- Grupo IX (machos – mayores de 7 años – talla grande y peso mayor de 25 kg.).
- Grupo X (hembras – mayores de 7 años – talla pequeña y peso menor de 12 kg.).
- Grupo XI (hembras – mayores de 7 años – talla mediana y peso entre 12 – 25 kg.).
- Grupo XII (hembras – mayores de 7 años – talla grande y peso mayor de 25 kg.).
La selección de los animales, es decir, la definición de canino sano estuvo sujeta a la
valoración de un examen clínico y estudios complementarios de diagnóstico dentro de los
33
parámetros normales para la especie. A cada animal incluido se le realizó una exploración
física exhaustiva, luego de una anamnesis detallada con sus propietarios, para descartar signos
clínicos de enfermedad. Todo canino con signos clínicos o sospecha de enfermedad
asintomática fue descartado del ensayo.
Los estudios diagnósticos complementarios efectuados a los animales fueron, en orden
de realización, los siguientes: 1) Registro de presión arterial sistólica; 2) Registro
electrocardiográfico; 3) Evaluación ecocardiográfica; 4) Evaluación radiológica de tórax; 5)
Hemograma y 6) Bioquímica sérica.
1) Presión arterial sistólica
El registro de presión arterial sistólica sistémica se realizó mediante la utilización de
un equipo Doppler Vascular Pulsado (Marca MEDMEGA® – Modelo DV 610), manguitos
perivasculares de distintos tamaños (Marca SURGI-CUF® – Modelos 5201-5202-5203-5204-
5205), manómetro neumático (Marca HEINE® – Modelo Gamma 4.5) y gel para trasmisión
de ultrasonido (Marca CARBOGEL®).
La medición de la presión arterial se realizó sobre el miembro posterior derecho, con
el animal en decúbito lateral derecho, sobre la arteria metatarsiana dorsal derecha. Todos los
pacientes fueron rasurados sobre la zona topográfica correspondiente con cuchillas N°50
(Marca OSTER®) para mejorar el contacto con el transductor. El tamaño del manguito
utilizado, en cada canino, se determinó en base a la circunferencia de la epífisis proximal del
metatarso derecho (ancho del manguito � a la mitad de la circunferencia). A cada animal se le
realizaron 6 registros simultáneos y consecutivos. Dependiendo del carácter y estado del
animal al momento del registro se lo sujeto por 1, 2 y/o 3 auxiliares de investigación.
34
2) Electrocardiografía
El registro electrocardiográfico se realizó mediante la utilización de 2 equipos de
electrocardiografía (Marca TEMIS® – Modelos TM 300 y TM 1210). Todos los animales
fueron colocados en decúbito lateral derecho para la toma del registro.
Se estudiaron las derivaciones I, II, III, AVr, AVl, AVf y CV6LU. Las mediciones se
realizaron sobre la derivación II a una velocidad de 50 mm/seg. y 10 mm/1 milivolt (TEMIS®
TM 300). El estudio del ritmo cardíaco se realizó a las velocidades de 12.5 mm/seg. y 25
mm/seg.
3) Radiología toráxica
La evaluación radiológica del aparato cardiovascular y sistema respiratorio inferior se
realizó mediante la utilización de un equipo de radiología fijo (Marca LADEM® – Modelo
REMS 200). Todos los animales se posicionaron en decúbito lateral derecho y decúbito dorsal
para la obtención de las incidencias laterolateral izquierda-derecha (LLD) y ventrodorsal
(VD), respectivamente. Los caninos no fueron sedados ni anestesiados para la realización del
estudio. Para la técnica radiográfica se fijaron como constantes el miliamperaje (100 mA) y el
tiempo de exposición (0.04 seg.) y se varió el kilovoltaje de acuerdo al ancho y el alto del
tórax de cada paciente. Estas medidas se tomaron a nivel del ángulo caudal de la escápula con
los miembros anteriores en extensión craneal, ídem ubicación para la focalización del haz de
incidencia radiológico.
Se midieron, en base a parámetros pre-establecidos (185), las siguientes estructuras:
eje cardiaco largo (EL), eje cardíaco corto (EC), vena cava caudal sobre RX LLD (VCC1),
vena cava caudal sobre RX VD (VCC2), largo de la quinta vértebra torácica (L5ta), alto de la
quinta vértebra torácica (A5ta), arterias pulmonares craneales (APCr), venas pulmonares
35
craneales (VPCr), cuello de la cuarta costilla (C4ta), arterias pulmonares caudales (APCa),
venas pulmonares caudales (VPCa) y cuerpo de la novena costilla (C9na). Se establecieron, a
su vez, las siguientes relaciones: VHS, EL/EC, L5ta/A5ta, L5ta/VCC1, L5ta/VCC2, C4ta/APCr,
C4ta/VPCr, C9na/APCa y C9na/VPCa.
4) Ecocardiografía
La evaluación ecocardiográfica se realizó mediante la utilización de un equipo
ecocardiográfico convencional portátil (Marca MINDRAY® – Modelo DP 6900) y, la
evaluación doppler, realizada en forma posterior a los animales seleccionados, con un equipo
doppler (Marca SONOSCAPE® – Modelo S6V – Transductores 2P1 y 5P1).
Los animales examinados no fueron sedados ni anestesiados para la realización de los
estudios. Las determinaciones camerales ventriculares izquierdas se realizaron durante 3 (tres)
ciclos cardíacos consecutivos y se promediaron sus resultados. Los animales se colocaron en
decúbito lateral derecho e izquierdo y se examinaron, luego de rasurar ambos precordios, las
ventanas paraesternal derecha, apical y caudal izquierda,
Se midieron, en base a parámetros pre-establecidos (20), las siguientes estructuras:
diámetro del ventrículo izquierdo en diástole (DVID), diámetro del ventrículo izquierdo en
sístole (DVIS), espesor del septum interventricular en diástole (SIVD), espesor del septum
interventricular en sístole (SIVS), espesor de la pared libre del ventrículo izquierdo en
diástole (PLVID), espesor de la pared libre del ventrículo izquierdo en sístole (PLVIS),
distancia EPSS (distancia entre el punto e y el septum interventricular), distancia APSS
(distancia entre el punto a y el septum interventricular), AO (diámetro aórtico plano 5 cámaras
tracto de salida del ventrículo izquierdo), AI (diámetro del atrio izquierdo plano 5 cámaras
tracto de salida del ventrículo izquierdo), VVID (volumen del ventrículo izquierdo en
36
diástole), VVIS (volumen del ventrículo izquierdo en sístole) y LVID (largo del ventrículo
izquierdo en diástole). Se establecieron, a su vez, las siguientes relaciones: FA (fracción de
acortamiento del ventrículo izquierdo), FESIV (fracción de engrosamiento del septum
interventricular), FEPLVI (fracción de engrosamiento de la pared libre del ventrículo
izquierdo), relación AI/AO, FE (fracción de eyección del ventrículo izquierdo).
Extracción de muestra
A cada canino se le extrajo 5 ml de sangre venosa a partir de las venas cefálica
antebraquial ó yugular, colectando 1 ml en un tubo con anticoagulante EDTA 3K+ (Marca
DVS®) y 4ml en un tubo sin anticoagulante.
5) Hemograma
La muestra con EDTA fue refrigerada a 4°C y analizada dentro de las 24hs posteriores
a la extracción. Los parámetros determinados fueron: Recuento de Glóbulos Rojos, Recuento
de Glóbulos Blancos, Hemoglobina, Hematocrito y Fórmula Leucocitaria Relativa y
Absoluta. Las determinaciones se realizaron mediante la utilización de un equipo de
hematología automático (Marca SYSMEX® – Modelo XS1000). Para la observación del frotis
sanguíneo se utilizó la coloración de May-Gründwall-Giemnsa.
6) Bioquímica Sérica
Las muestras obtenidas en tubos sin anticoagulante fueron refrigeradas a 4°C durante
60 min. Posteriormente se realizó la centrifugación a 2500 rpm durante 15 min, para la
obtención del suero. El mismo fue dividido en dos eppendorf de 1.5 ml de capacidad y se lo
conservó entre -20°C a -28°C hasta su procesamiento. Uno de ellos se utilizó para obtener
37
las siguientes determinaciones: Glucosa, Urea, Creatinina, ALT, AST, Proteínas Totales,
Albúmina, Globulinas y relación Albúmina/Globulina. Todas las muestras fueron
identificadas de acuerdo al paciente. Para su procesamiento se utilizaron reactivos
comerciales (Laboratorio BIOSYSTEMS®) y un espectrofotómetro (Marca METROLAB® –
Modelo PLUS 1600).
Determinación de NT-proBNP
La determinación de la concentración sérica de la fracción amino terminal del péptido
natriurético Tipo B (NT-proBNP) se realizó mediante un Kit ELISA (Enzyme Linked
Immunosorbent Assay) en sándwich canino específico (Marca USCN® Life Science Inc. –
Catálogo: E90485Ca – Canis familiaris: Canine / Dog) (Imagen 1). Los valores obtenidos
fueron expresados en pmol/lts, unidad internacionalmente utilizada para la determinación de
la concentración sérica de esta molécula, sobre la base de un peso molecular de NT-proBNP
de 8.500 gr/mol (8.5 KDa) y un factor de conversión de 8.5 pg/ml = 1 pmol/lts (37, 169).
Para la realización de la técnica se siguieron estrictamente las indicaciones
recomendadas por el fabricante en el manual de instrucciones (Imagen 2) y cada una de las
determinaciones se realizó por duplicado (Imagen 3). Se utilizó el suero conservado a -20ºC
durante un período máximo de 10 meses. El cálculo de la concentración final de cada grupo se
obtuvo promediando los resultados obtenidos.
38
Análisis Estadístico
Se realizó un análisis estadístico analítico, aplicando modelos de asociación, para
evaluar la relación entre la concentración sérica del NT-proBNP y el peso/talla corporal, la
edad, el sexo, variables radiológicas y ecocardiográficas en caninos sanos.
Estos análisis se realizaron mediante un software de dominio público: R & R
Commander (R cmdr) versión i386 - 3.0.1.
Imagen 1. Kit ELISA en sándwich Marca USCN® Life Science Inc. – Catálogo: E90485Ca.
39
Imagen 2. Lectura de la Técnica de ELISA en las instalaciones del laboratorio de Virología de la Facultad de Ciencias Veterinarias de la Universidad Nacional de La Plata
Imagen 3. Los 4 Kit ELISA utilizados para la obtención de 159 valores por duplicado. Arriba a la izquierda el manual de instrucciones.
40
RESULTADOS
La presentación de resultados respetará al siguiente orden:
1) Descripción de características (peso y edad) de los 12 grupos de caninos sanos estudiados.
2) Presentación de valores medios y desviación estándar de los parámetros registrados en los
estudios diagnósticos complementarios.
3) Descripción de la concentración sérica de NT-proBNP para las variables constitutivas.
4) Obtención de correlaciones y análisis de significancia estadística.
Población muestral
Se presentan en la Tabla 1 el número de individuos para cada uno de los 12 grupos y
los parámetros correspondientes a las variables peso y edad: media, rango y valores mínimos
y máximos. Todos los caninos incluidos tenían una condición corporal mayor a 2.5 y menor a
3.5 (Score corporal 1 – 5) (47).
Tabla 1. Parámetros de peso y edad (media, rango y mínimo-máximo) de cada uno de los 12 grupos incluidos en el estudio.
I II III IV V VI VII VIII IX X XI XII
N 13 14 14 13 13 13 13 13 13 14 13 13
PM 7.42 19.1 36.4 6.4 17.1 30.4 8.9 19.7 32.8 7.9 18.6 32.8
Rango 8.9 8.5 21.6 9.1 10.5 11.9 5.6 10.5 18.5 7.8 12.7 19.3
Min -
Max
3.0 -
11.9
13.8 -
22.3
26.7 -
48.3
2.9 -
12.0
13.1 -
23.6
25.0 -
36.9
6.4 -
12.0
14.7 -
25.2
26.0 -
44.5
3.8 -
11.6
13.1 -
25.8
26.8 -
46.1 ED 2.8 3.5 3.1 3.2 3.6 3.9 9.5 9.4 9.2 10.5 10.7 9.1
Rango 3.8 5.3 4.5 4.5 4.8 4.5 6.8 5.8 8.5 7.0 7.8 5.5
Min -
Max
1.2 -
5.0
1.2 -
6.5
1.5 -
6.0
1.5 -
6.0
1.2 -
6.0
1.5 -
6.0
7.2 -
14.0
7.2 -
13.0
7.5 -
16.0
7.5 -
14.5
7.2 -
15.0
7.5 -
13.0
Ref.: N: Número de individuos por grupo, PM: Peso promedio, Min - Max: Valores mínimos y máximos y ED: Edad Promedio.
41
Estudios Diagnósticos Complementarios
Presión arterial sistólica sistémica
Se exponen, en la Tabla 2, la frecuencia cardíaca media de cada grupo y la media para
cada una de las 6 determinaciones de presión arterial sistólica sistémica. Se presentan,
además, la media general del grupo, el desvío estándar y los valores mínimos y máximos para
cada uno de los 12 grupos incluidos en el ensayo.
Tabla 2. Valores de presión arterial sistólica sistémica en mmHg correspondientes a los 12 grupos analizados.
I II III IV V VI VII VIII IX X XI XII
FC 114 121 110 121 117 116 122 107 109 127.9 119 115
1° 145.5 154.7 155.4 133.4 141.0 147.8 141.1 151.3 148.6 139.8 147.9 141.6
2° 147.7 154.0 151.1 135.0 141.5 147.9 142.8 152.1 151.1 138.7 148.4 145.3
3° 149.8 154.1 153.1 135.4 144.2 145.1 141.2 157.7 149.1 138.7 149.1 144.0
4° 149.5 153.5 154.9 139.1 142.5 145.7 142.0 154.9 148.5 139.5 150.5 147.2
5° 151.2 156.9 153.3 137.7 145.6 146.3 143.2 157.2 149.2 139.6 150.5 147.4
6° 148.8 157.9 152.9 134.9 144.5 146.5 140.6 157.4 147.5 139.1 149.7 147.6
M 148.8 155.2 153.4 135.9 143.2 146.5 139.3 155.1 149.0 139.3 149.3 145.6
DS 21.0 17.3 13.9 17.6 16.6 12.9 27.2 15.4 16.2 23.7 15.6 22.9
Min -
Max
127.8 -
169.8
137.9 -
172.6* 139.5 -167.4
118.3 -
153.5
126.6 -
158.9
133.5 -
159.4
112.1 -
166.4
139.7 -
170.5*
132.8 -
165.2
115.6 -
162.9
133.7 -
164.9
122.6 -
168.5
Registro Electrocardiográfico
La Tabla 3 presenta los valores de amplitud (milivolt) y tiempo (segundos) para cada
una de las ondas, segmentos, complejos e intervalos. Se presentan la media y el desvío
estándar para cada uno de los registros de los 12 grupos presentados en el ensayo.
Ref.: FC: Frecuencia cardíaca, 1°- 6°: Registros consecutivos, M: Media; DS: Desviación estándar y Min – Max: Valores mínimos y máximos registrados. Con (*) se presentan valores extremos que fueron incluidos en el ensayo.
42
Tabla 3. Valores medios y desviación estándar de las ondas, segmentos, complejos e intervalos electrocardiográficos analizados.
I II III IV V VI VII VIII IX X XI XII
P(a) 0.29
±0.07
0.25
±0.09
0.24
±0.07
0.24
±0.06
0.27
±0.08
0.24
±0.05
0.22
±0.09
0.25
±0.07
0.23
±0.07
0.31
±0.08
0.27
±0.08
0.24
±0.07
P(t) 0.03
±0.003
0.04
±0.005
0.04
±0.003
0.03
±0.003
0.04
±0.007
0.04
±0.004
0.03
±0.004
0.04
±0.005
0.04
±0.006
0.03
±0.003
0.04
±0.004
0.04
±0.006
P-Q 0.09
±0.02
0.10
±0.015
0.11
±0.019
0.08
±0.014
0.10
±0.018
0.11
±0.024
0.08
±0.013
0.10
±0.013
0.10
±0.02
0.09
±0.019
0.10
±0.017
0.10
±0.03
Q(a) 0.48
±0.17
0.54
±0.21
0.24
±0.26
0.36
±0.15
0.59
±0.25
0.44
±0.23
0.41
±0.31
0.39
±0.23
0.26
±0.13
0.39
±0.21
0.53
±0.16
0.39
±0.18
QRS
(a) 1.42
±0.46
1.52
±0.45
1.49
±0.61
1.25
±0.58
1.61
±0.49
1.69
±0.55
1.48
±0.63
1.46
±0.47
1.53
±0.47
1.61
±0.65
1.55
±0.46
1.38
±0.51
QRS
(t) 0.04
±0.003
0.04
±0.005
0.05
±0.004
0.04
±0.004
0.04
±0.004
0.05
±0.005
0.04
±0.005
0.04
±0.004
0.05
±0.005
0.04
±0.004
0.04
±0.003
0.05
±0.006
T(a) 0.33
±0.14
0.42
±0.22
0.34
±0.13
0.29
±0.16
0.28
±0.13
0.35
±0.18
0.42
±0.13
0.41
±0.13
0.29
±0.12
0.36
±0.22
0.38
±0.21
0.35
±0.16
Q-T 0.20
±0.016
0.20
±0.055
0.22
±0.011
0.20
±0.016
0.21
±0.016
0.21
±0.014
0.21
±0.019
0.22
±0.013
0.22
±0.011
0.20
±0.02
0.21
±0.015
0.21
±0.014
Los caninos incluidos en el ensayo presentaron ritmo sinusal o arritmia sinusal
respiratoria, frecuencia cardiaca dentro de los parámetros normales para la especie, talla y
edad del animal (186). No se evidenció la presencia de arritmias debidas a trastornos en la
conducción, origen del impulso o ritmo cardíaco.
Radiología Torácica
La Tabla 4 muestra, para los 12 grupos de caninos analizados, la media y la desviación
estándar de las variables y relaciones estudiadas en el examen radiológico de tórax. Las
variables se presentan en milímetros y las relaciones como cocientes entre variables.
Ref.: P(a): Amplitud de la onda P (pre-sístole); P(t): Tiempo de la onda P; P-Q: Intervalo P-Q (suma de onda P y segmento P-Q); Q(a): Amplitud de la onda Q; QRS(a): Amplitud del complejo QRS (despolarización ventricular); QRS(t): Tiempo del complejo QRS; T(a): Amplitud de la onda T (repolarización ventricular) y Q-T: Intervalo Q-T (suma de complejo QRS – segmento S-T y onda T).
43
Tabla 4. Valores medios y desviación estándar de las variables y relaciones radiológicas analizadas.
I II III IV V VI VII VIII IX X XI XII
EL 71.8
±9.1
102.6
±9.05
128.2
±9.6
70.3
±11.2
97.3
±12.5
121.2
±10.7
69.7
±7.78
98.0
±8.86
117.7
±13.2
68.6
±8.8
95.0
±11.9
118.2
±10.7
EC 59.9
±8.6
86.8
±7.3
104.4
±11.8
56.9
±8.8
79.9
±8.3
99.9
±7.5
62.2
±5.9
82.4
±7.1
103.7
±10.1
60.1
±8.9
82.4
±10.6
102.8
±10.2
VCC1 9.9
±1.6
15.1
±1.59
18.8
±1.74
9.6
±1.99
13.3
±2.31
16.9
±2.19
10.9
±1.71
15.0
±2.12
17.1
±2.33
10.2
±1.34
14.3
±2.54
17.1
±1.81
VCC2 9.7
±2.1
14.8
±2.27
1.85
±2.88
9.4
±1.53
12.3
±2.43
17.5
±1.75
11.0
±1.11
15.3
±2.17
17.5
±2.83
10.6
±1.68
14.3
±2.83
17.7
±1.89
L5ta 13.1
±2.13
17.1
±1.49
20.3
±1.91
12.0
±1.68
16.8
±1.32
19.7
±1.46
13.1
±1.28
17.1
±1.57
19.9
±1.72
12.3
±1.29
16.8
±2.14
20.2
±2.04
A5ta 8.0
±0.77
12.1
±1.39
14.2
±1.85
7.7
±1.33
11.4
±1.62
13.6
±1.15
9.2
±1.12
12.6
±1.46
14.8
±1.94
7.9
±1.27
12.2
±2.01
14.5
±2.21
APCr 2.3
±0.52
3.9
±0.53
5.1
±0.72
2.5
±0.72
3.9
±0.58
5.3
±1.01
2.9
±0.42
4.4
±0.62
5.0
±1.03
2.8
±0.50
4.2
±0.12
5.0
±0.80
VPCr 2.4
±0.51
3.9
±0.53
5.2
±0.10
2.3
±0.69
3.7
±0.39
5.3
±0.91
2.9
±0.40
4.5
±0.56
5.2
±0.92
2.7
±0.50
4.2
±0.12
5.1
±0.80
C4ta 3.4
±0.98
5.4
±0.76
7.0
±0.98
3.1
±0.74
5.0
±0.75
7.2
±0.69
4.0
±0.56
5.7
±0.95
7.3
±0.128
3.4
±0.55
5.5
±0.13
7.2
±1.18
APCa 2.5
±0.6
3.8
±0.43
5.0
±0.81
2.8
±0.72
3.3
±0.55
4.8
±0.61
3.0
±0.63
4.3
±0.56
5.2
±0.85
2.8
±0.40
4.0
±0.66
5.2
±0.9
VPCa 2.6
±0.7
3.8
±0.43
5.2
±0.80
2.8
±0.72
3.5
±0.43
4.7
±0.72
3.0
±0.63
4.3
±0.47
5.2
±0.86
2.8
±0.50
4.0
±0.66
5.2
±1.0
C9na 3.3
±0.93
5.0
±0.41
7.0
±0.102
3.3
±0.69
4.5
±0.35
6.0
±0.57
3.9
±0.57
5.5
±0.54
6.7
±0.77
3.6
±0.51
5.0
±0.79
6.6
±0.84
VHS 9.46
±0.55
9.91
±0.44
10.24
±0.43
9.62
±0.48
9.62
±0.61
10.0
±0.42
9.3
±0.77
9.59
±0.51
10.12
±0.67
9.41
±0.61
9.56
±0.60
10.04
±0.38
EL/EC 1.20
±0.096
1.18
±0.072
1.24
±0.114
1.24
±0.082
1.22
±0.113
1.22
±0.112
1.12
±0.066
1.19
±0.064
1.14
±0.110
1.15
±0.113
1.16
±0.067
1.15
±0.073
L5ta/A5ta 1.64
±0.18
1.42
±0.16
1.45
±0.13
1.57
±0.14
1.49
±0.16
1.45
±0.12
1.44
±0.111
1.37
±0.14
1.36
±0.17
1.56
±0.16
1.4
±0.14
1.41
±0.15
L5ta/VCC1 1.34
±0.204
1.14
±0.102
1.08
±0.078
1.26
±0.159
1.29
±0.234
1.19
±0.191
1.22
±0.172
1.16
±0.131
1.18
±0.148
1.21
±0.157
1.20
±0.153
1.19
±0.148
L5ta/VCC2 1.38
±0.255
1.17
±0.148
1.11
±0.148
1.29
±0.146
1.41
±0.274
1.13
±0.112
1.20
±0.100
1.14
±0.203
1.16
±0.161
1.18
±0.201
1.20
±0.167
1.15
±0.097
C4ta/APCr 1.44
±0.246
1.40
±0.136
1.42
±0.226
1.30
±0.289
1.30
±0.137
1.40
±0.224
1.36
±0.074
1.32
±0.189
1.49
±0.296
1.27
±0.169
1.35
±0.215
1.46
±0.218
C4ta/VPCr 1.42
±0.257
1.41
±0.135
1.36
±0.208
1.36
±0.264
1.35
±0.092
1.37
±0.147
1.36
±0.076
1.29
±0.196
1.44
±0.220
1.29
±0.170
1.34
±0.224
1.43
±0.243
C9na/APCa 1.33
±0.25
1.33
±0.141
1.43
±0.293
1.19
±0.115
1.39
±0.355
1.27
±0.175
1.31
±0.169
1.29
±0.137
1.30
±0.164
1.31
±0.153
1.24
±0.101
1.29
±0.141
C9na/APCa 1.29
±0.25
1.33
±0.140
1.36
±0.217
1.19
±0.115
1.32
±0.170
1.29
±0.186
1.31
±0.166
1.27
±0.122
1.29
±0.161
1.29
±0.159
1.24
±0.101
1.31
±0.193
Ref.: Para interpretación de siglas dirigirse al listado de abreviaturas de las páginas VII-IX.
44
Todos los caninos estudiados presentaron variables y relaciones dentro de los
parámetros normales para la especie, talla/peso y conformación toráxica del animal sobre la
base de parámetros pre-establecidos (185).
Ecocardiografía
Las determinaciones ecocardiográficos registradas, para cada uno de los 12 grupos
analizados, se presentan en la Tabla 5. Se exponen la media y la desviación estándar de las
variables y relaciones estudiadas. Las primeras se expresan en milímetros y las últimas como
cocientes entre variables.
Todos los caninos estudiados presentaron variables y relaciones dentro de los
parámetros normales para la especie y talla del animal, sobre la base de parámetros pre-
establecidos (20).
45
Tabla 5. Valores medios y desviación estándar de las variables y relaciones ecocardiográficos analizadas.
I II III IV V VI VII VIII IX X XI XII
DVID 25.46
±3.07
36.61
±3.42
45.61
±3.70
25.74
±4.24
36.39
±5.34
41.52
±4.09
25.82
±3.17
34.94
±3.06
42.05
±3.64
26.60
±4.46
35.12
±5.59
43.05
±4.42
DVIS 15.59
±2.22
24.46
±2.55
29.56
±2.43
16.48
±3.67
24.57
±5.92
26.94
±2.59
16.06
±2.78
22.40
±1.47
26.58
±1.78
16.93
±3.44
22.65
±4.02
27.70
±3.17
FA 38.72
±5.26
33.19
±2.61
35.10
±3.73
36.39
±5.41
33.22
±5.76
34.95
±4.53
37.93
±5.54
35.69
±3.51
36.62
±3.02
36.72
±4.58
35.59
±3.53
35.62
±3.87
SIVD 5.95
±1.02
8.31
±0.62
11.54
±1.43
5.62
±0.83
7.79
±0.43
10.81
±1.75
6.35
±1.33
8.62
±0.68
11.06
±1.75
6.04
±0.98
8.25
±0.81
10.01
±1.38
SIVS 9.30
±1.20
12.95
±1.13
15.89
±1.95
8.79
±1.31
11.16
±0.93
15.35
±1.91
9.18
±2.06
13.54
±1.47
15.89
±1.79
9.46
±1.49
12.57
±1.36
15.48
±2.02
FESIV 36.16
±6.93
35.68
±4.22
27.20
±6.01
35.55
±9.48
29.92
±4.62
29.68
±6.26
33.80
±7.92
36.03
±4.37
30.57
±6.28
35.77
±6.69
34.16
±4.03
35.23
±5.57
PVID 5.35
±1.08
8.23
±0.93
11.04
±1.91
5.65
±0.87
7.87
±0.88
10.85
±1.46
6.20
±1.78
8.78
±0.79
10.50
±1.53
6.52
±1.18
8.39
±1.08
10.19
±1.66
PVIS 8.71
±1.41
12.83
±1.11
15.79
±2.09
8.80
±0.76
11.22
±0.94
15.13
±1.37
9.05
±2.03
13.20
±1.05
15.35
±1.39
10.31
±1.97
12.32
±1.49
14.71
±2.1
FEPLVI 34.57
±6.35
35.75
±3.87
29.97
±8.56
35.84
±7.10
29.65
±7.85
28.29
±6.89
32.06
±9.43
33.47
±3.93
31.62
±7.35
36.44
±5.73
31.64
±6.58
30.82
±3.86
EPSS 2.06
±0.50
3.55
±0.63
4.87
±0.80
2.36
±0.67
3.08
±0.80
4.24
±0.70
2.23
±0.73
3.67
±0.83
4.28
±0.66
2.29
±0.50
3.47
±0.76
4.38
±1.00
APSS 6.65
±1.52
9.54
±2.15
12.31
±2.77
7.20
±1.89
10.10
±3.45
12.28
±3.03
6.30
±2.21
9.35
±2.05
10.72
±2.76
5.92
±2.49
8.68
±2.16
11.97
±3.43
AO 13.88
±2.36
19.77
±1.78
25.04
±3.04
13.68
±1.87
19.95
±2.40
23.55
±2.34
13.93
±1.68
21.98
±3.32
25.00
±3.47
14.12
±2.01
20.82
±2.59
25.71
±3.13
AI 14.66
±2.23
20.30
±1.96
25.71
±2.87
14.42
±1.89
20.65
±2.47
24.45
±1.79
14.64
±1.70
23.06
±3.33
25.99
±3.41
14.56
±2.13
21.44
±2.90
26.55
±2.60
AI/AO 1.06
±0.054
1.03
±0.045
1.03
±0.036
1.06
±0.049
10.4
±0.032
1.04
±0.037
1.05
±0.047
1.05
±0.043
1.04
±0.028
1.02
±0.026
1.03
±0.033
1.04
±0.043
VVID 17.08
±7.09
41.34
±9.08
74.23
±14.03
16.06
±7.55
38.83
±11.24
57.90
±12.17
17.90
±6.09
41.71
±10.49
71.70
±19.25
16.27
±5.29
39.13
±14.04
63.03
±18.09
VVIS 7.03
±3.02
17.78
±5.31
33.22
±10.86
6.76
±3.55
17.05
±5.41
25.29
±4.40
7.44
±2.38
18.34
±5.17
32.47
±7.92
6.95
±2.96
16.74
±6.67
30.18
±14.56
FE 59.0
±4.10
57.7
±4.52
55.91
±8.75
58.49
±4.44
56.39
±4.08
55.76
±5.28
55.62
±7.24
55.97
±5.63
54.21
±4.97
55.28
±12.39
57.47
±4.40
53.48
±8.06
LVID 41.6
±6.0
58.0
±5.8
63.4
±6.2
40.6
±6.7
55.4
±3.3
63.3
±5.4
40.8
±5.4
56.4
±4.6
67.7
±6.0
38.7
±4.2
54.1
±5.9
61.6
±8.2
Ref.: Para interpretación de siglas dirigirse al listado de abreviaturas de las páginas VII-IX.
46
Hemograma
A continuación se exponen, en la Tabla 6, la media y la desviación estándar de los
parámetros analizados. Debajo de cada determinación se expresan las unidades
correspondientes.
Tabla 6. Valores medios y desviación estándar correspondientes a la serie hematológica roja y blanca.
I II III IV V VI VII VIII IX X XI XII
GR (x 106 /µl)
7.10
±0.53
6.95
±0.84
6.29
±0.60
6.87
±0.71
7.10
±0.77
6.57
±0.92
7.30
±0.54
7.11
±0.56
7.05
±0.71
7.34
±0.67
7.30
±0.55
7.30
±0.80
Hb (gr%)
16.68
±1.01
15.66
±2.19
14.55
±1.12
15.52
±1.48
16.59
±1.92
15.13
±2.11
16.40
±1.36
15.85
±1.95
15.97
±1.73
16.92
±4.69
16.70
±1.34
16.23
±1.49
Hto (%)
48.62
±2.93
47.00
±5.91
43.50
±3.46
45.46
±3.66
42.31
±5.18
45.08
±5.00
46.77
±4.11
47.62
±5.31
47.85
±4.99
49.50
±4.09
50.23
±4.08
44.62
±4.15
VCM (fl)
68.62
±3.18
67.64
±3.25
68.86
±3.06
66.38
±3.45
69.92
±4.07
68.85
±4.32
70.23
±3.14
69.08
±3.35
68.08
±2.72
69.14
±3.86
68.92
±2.56
67.54
±2.22
HCM (pg)
23.46
±0.88
22.57
±1.09
23.07
±1.00
22.69
±1.31
23.46
±0.87
23.08
±1.04
22.62
±1.12
22.92
±1.11
22.62
±0.87
23.29
±1.54
23.00
±0.57
22.46
±0.66
CHCM (%)
34.15
±1.21
33.14
±1.35
33.71
±1.14
34.15
±1.41
33.54
±1.05
33.54
±1.61
32.62
±0.65
33.08
±0.64
33.31
±1.12
33.71
±1.07
33.23
±1.16
33.15
±0.9
GB (x 103/µl)
10.69
±2.1
11.16
±2.2
11.89
±1.9
11.02
±1.7
9.42
±2.3
11.79
±2.8
10.22
±2.53
9.72
±2.21
10.26
±2.73
9.86
±3.23
9.66
±2.59
9.69
±3.07
NB (%)
1.23
±0.93
1.21
±1.19
1.00
±0.68
1.00
±0.82
0.54
±0.78
0.92
±1.12
1.31
±0.85
0.92
±0.76
0.92
±0.64
0.79
±0.89
0.69
±0.85
0.92
±0.95
NSeg (%)
67.15
±7.03
67.21
±5.60
66.86
±4.47
65.92
±7.93
63.38
±5.42
68.23
±4.59
69.69
±5.79
67.23
±5.19
69.23
±3.44
69.71
±7.52
66.85
±6.32
67.54
±6.23
Eos (%)
2.85
±1.10
2.43
±0.85
2.86
±1.00
2.77
±0.83
2.38
±1.26
2.62
±1.1
2.62
±0.96
2.69
±1.44
3.23
±1.30
2.71
±1.70
3.00
±0.82
2.38
±1.30
Bas (%)
0.23
±0.44
0.07
±0.27
0.07
±0.27
0.08
±0.28
0.15
±0.38
0.00
±0.00
0.00
±0.00
0.08
±0.28
0.00
±0.00
0.07
±0.27
0.08
±0.28
0.08
±0.28
Linf (%)
27.08
±6.69
27.43
±6.12
27.64
±4.73
28.85
±7.64
31.92
±6.14
26.77
±5.23
25.08
±6.47
27.92
±5.17
25.15
±3.87
25.21
±7.14
27.92
±6.33
27.62
±5.12
Mon (%)
1.46
±1.20
1.64
±0.63
1.57
±1.00
1.38
±0.87
1.62
±0.65
1.46
±0.8
1.31
±0.75
1.23
±0.83
1.46
±0.78
1.50
±0.80
1.23
±0.44
1.54
±0.80
Ref.: GR: Glóbulos rojos, Hb: Hemoglobina, Hto: Hematocrito, VCM: Volumen corpuscular medio, HCM: Hemoglobina corpuscular media, CHCM: Concentración de hemoglobina corpuscular media, GB: Glóbulos blancos, NEnc: Neutrófilos en cayado, NSeg: Neutrófilos segmentados, Eos: Eosinófilos, Bas: Basófilos, Linf: Linfocitos, Mon: Monocitos. Debajo de cada determinación se indican las unidades correspondientes.
47
Todos los caninos estudiados presentaron valores dentro de los parámetros normales
para la especie y edad del animal de acuerdo a la bibliografía (50).
Bioquímica Sérica
La Tabla 7 expone, para los 12 grupos analizados, la media y la desviación estándar de
las determinaciones bioquímicas analizadas. Debajo de cada determinación se expresan las
unidades correspondientes.
Tabla 7. Valores medios y desviación estándar correspondientes a la determinaciones bioquímicas analizadas.
I II III IV V VI VII VIII IX X XI XII
Glu (gr/l)
0.98
±0.124
1.01
±0.249
0.93
±0.186
0.95
±0.214
1.05
±0.222
1.00
±0.242
1.01
±0.229
1.04
±0.161
0.98
±0.192
0.99
±0.110
1.02
±0.128
0.92
±0.130
Urea (gr/l)
0.35
±0.145
0.41
±0.188
0.39
±0.112
0.36
±0.122
0.42
±0.112
0.41
±0.138
0.47
±0.126
0.40
±0.112
0.36
±0.117
0.37
±0.115
0.38
±0.124
0.37
±0.096
Cre (mg/dl)
1.23
±0.251
1.11
±0.284
1.26
±0.224
1.25
±0.209
1.22
±0.169
1.18
±0.213
1.19
±0.165
1.12
±0.270
1.23
±0.175
1.16
±0.268
1.07
±0.357
1.30
±0.196
ALT (UI/L)
31.65
±13.15
21.40
±5.30
31.19
±13.31
22.82
±7.33
22.98
±7.65
23.00
±6.82
31.20
±15.73
26.86
±7.47
33.91
±15.48
42.84
±17.94
26.82
±8.42
28.69
±13.84
Pt (gr/dl)
6.72
±0.71
6.54
±0.33
6.65
±0.54
7.13
±0.69
6.75
±0.32
6.42
±0.49
6.69
±0.58
6.69
±0.64
6.63
±0.71
6.65
±0.58
6.47
±0.39
6.45
±0.58
Alb (gr/dl)
3.30
±0.286
2.96
±0.412
3.00
±0.445
3.19
±0.482
3.09
±0.229
2.78
±0.314
3.04
±0.602
3.11
±0.645
3.22
±0.456
3.06
±0.517
3.05
±0.419
3.24
±0.328
Todos los caninos estudiados presentaron valores dentro de los parámetros normales
para la especie y edad del animal (90).
Ref.: Glu: Glucosa, Cre: Creatinina, ALT: Alanina amino transferasa, Pt: Proteínas totales, Alb: Albumina. Debajo de cada determinación se indican las unidades correspondientes.
48
Concentración Sérica de NT-proBNP
La concentración media sérica de NT-proBNP en la muestra de caninos sanos
analizados fue de 260.28 pmol/lts con una desviación estándar de +/- 135.48 pmol/lts y
valores mínimo de 42.16 pmol/lts y máximo de 603.71 pmol/lts. Ver Gráfico 1.
La concentración sérica media de NT-proBNP, según sexo, para las hembras fue de
238.99 pmol/lts, con una desviación estándar de +/- 123.52 pmol/lts y valores mínimo de
66.55 pmol/lts y máximo de 587.74 pmol/lts. En tanto que, para los machos, la media sérica
fue de 281.31 pmol/lts, con una desviación estándar de +/- 144.84 pmol/lts y valores mínimo
de 42.16 pmol/lts y máximo de 603.71 pmol/lts. Ver Gráficos 2 y 3.
100
200
300
400
500
600
NT
prob
BN
P
144.87 pmol/lts
347.79 pmol/lts
241.73 pmol/lts
Gráfico 1. Diagrama de caja que muestra la distribución levemente asimétrica de la variable hacia los límites superiores, la ausencia de valores atípicos y los valores que presentan la mediana (241.73 pmol/lts), el 1° cuartil (144.87 pmol/lts) y el 3° cuartil (347.79 pmol/lts).
Con
cent
raci
ón d
e N
T-p
roB
NP
49
Plot of Means
ntprobnp$SEXO
mea
n of
ntp
robn
p$N
Tpr
obB
NP
240
260
280
300
H M
SEXO
Con
cent
raci
ón d
e N
T-p
roB
NP
Gráfico 2. Plot para medias que muestra las diferencias presentes en las concentración sérica de NT-proBNP para el grupo de caninos hembras y machos.
H M
100
200
300
400
500
600
SEXO
NTp
robB
NP
Con
cent
raci
ón d
e N
T-p
roB
NP
Gráfico 3. Diagrama de cajas que muestra la homogeneidad de varianzas entre los dos grupos analizados (hembras y machos) y la ausencia de valores atípicos. En cada caja se exponen los valores de la mediana de cada grupo.
SEXO
221,31 pmol/lts
285.50 pmol/lts
50
La concentración sérica media de NT-proBNP, según edad, para los caninos menores
de 7 años fue de 235.19 pmol/lts, con una desviación estándar de +/- 119.72 pmol/lts y
valores mínimo de 72.06 pmol/lts y máximo de 575.89 pmol/lts. En tanto que, para los
mayores de 7 años, la media sérica fue de 285.69 pmol/lts, con una desviación estándar de +/-
146.97 pmol/lts y valores mínimo de 42.16 pmol/lts y máximo de 603.71 pmol/lts. Ver
Gráficos 4 y 5.
Plot of Means
ntprobnp$EDAD
mea
n of
ntp
robn
p$N
Tpr
obB
NP
220
240
260
280
300
< 7 años > 7 años
EDAD
Con
cent
raci
ón d
e N
T-p
roB
NP
Gráfico 4. Plot para medias que muestra las diferencias presentes en las concentración sérica de NT-proBNP para el grupo de caninos menores de 7 años y mayores de 7 años.
51
La concentración sérica media de NT-proBNP, según talla/peso con condición
corporal 2.5 – 3.5, para los caninos menores de 12 kg fue de 235.78 pmol/lts, con una
desviación estándar de +/- 129.18 pmol/lts y valores mínimo de 42.16 pmol/lts y máximo de
587.74 pmol/lts; para caninos entre 12 kg y 25 kg la media fue de 281.85 pmol/lts, con una
desviación estándar de +/- 134.34 pmol/lts y valores mínimo de 44.83 pmol/lts y máximo de
575.89 pmol/lts y; para caninos mayores de 25 kg la media fue de 263.21 pmol/lts, con una
desviación estándar de +/- 142.46 pmol/lts y valores mínimo de 49.81 pmol/lts y máximo de
603.81 pmol/lts. Ver Gráfico 6 y 7.
< 7 años > 7 años
100
200
300
400
500
600
EDAD
NTp
robB
NP
Gráfico 5. Diagrama de cajas que muestra la homogeneidad de varianzas entre los dos grupos analizados (< 7 años y > 7 años) y la ausencia de valores atípicos. En cada caja se exponen los valores de la mediana de cada grupo.
EDAD
Con
cent
raci
ón d
e N
T-p
roB
NP
210.95 pmol/lts
293.60 pmol/lts
52
G M P
100
200
300
400
500
600
TAMAÑO
NTpr
obBN
P
87
Gráfico 7. Diagrama de cajas que muestra la homogeneidad de varianzas entre los tres grupos analizados y la presencia de 1 valor atípico en la muestra de caninos menores de 12 kg. Se exponen los valores de la mediana de cada grupo.
TALLA / PESO
Con
cent
raci
ón d
e N
T-p
roB
NP
240.08 pmol/lts
291.34 pmol/lts
202.53 pmol/lts
Plot of Means
ntprobnp$TAMAÑO
mea
n of
ntp
robn
p$N
Tpr
obBN
P
220
240
260
280
300
G M P
TALLA / PESO
Con
cent
raci
ón d
e N
T-p
roB
NP
Gráfico 6. Plot para medias que muestra las diferencias presentes en las concentración sérica de NT-proBNP para el grupo de caninos menores de 12 kg (P), entre 12 – 25 kg (M) y mayores de 25 kg (G).
53
Las concentraciones séricas de NT-proBNP, para los 12 grupos de caninos sanos
analizados, se presentan como la media, desviación estándar y valores mínimos y máximos.
Ver Tabla 8 y Gráfico 8.
Tabla 8: Concentraciones séricas de NT-proBNP correspondientes a los 12 grupos incluidos en el ensayo.
I II III IV V VI VII VIII IX X XI XII
Media 211.0 315.3 192.7 214.0 259.9 215.3 269.5 342.5 361.0 247.0 207.1 289.2
DS 108.7 143.0 98.7 102.6 121.5 112.7 140.1 140.6 164.9 160.1 98.2 134.4
Mínimo 90.9 92.1 72.1 107.2 120.5 83.56 42.16 44.83 49.81 80.93 66.55 104.3
Máximo 467.4 575.9 395.9 403.4 466.1 461.8 492.9 552.7 603.7 587.7 333.5 553.2
Ref.: DS: Desviación estándar. Los valores son expresados en pmol/lts.
Gráfico 8. Diagrama de cajas para los 12 grupos incluidos en el ensayo. Abreviaturas: G = Canino talla grande con peso mayor a 25 kg; M = Canino talla mediana con peso entre 12 – 25 kg; P = Canino talla pequeña con peso menor a 12 kg; H = Canino sexo hembra; M = Canino sexo macho; J = Canino edad menor de 7 años y A = Canino edad mayor de 7 años. Se observan la homocedasticidad de varianzas (Levene’s Test p = 0.718) y la presencia de valores atípicos en algunos de los grupos.
GHA GHJ GMA GMJ MHA MHJ MMA MMJ PHA PHJ PMA PMJ
100
200
300
400
500
600
GRUPO
NT
prob
BN
P
77
80
150
158 87
GRUPO
Con
cent
raci
ón d
e N
T-p
roB
NP
54
La concentración media sérica para caninos de raza pura fue de 251.58 pmol/lts, con
una desviación estándar de +/- 136.19 pmol/lts y valores mínimo y máximo de 44.83 pmol/lts
y 603.71 pmol/lts. En tanto que, para caninos de raza indefinida y mestizos, la media sérica de
NT-proBNP fue de 266.78 pmol/lts, con una desviación estándar de +/- 136.09 pmol/lts y
valores mínimo y máximo de 42.16 pmol/lts y 575.89 pmol/lts. Ver Gráficos 9 y 10.
Plot of Means
res$RAZA
mea
n of
res$
NTpr
oBN
P
240
250
260
270
280
INDEFINIDA RAZA PURA
RAZA
Con
cent
raci
ón d
e N
T-p
roB
NP
PUROS INDEFINIDOS / MESTIZOS
Gráfico 9. Plot para comparación de medias de las concentraciones séricas de NT-proBNP entre caninos de razas puras y caninos mestizos o sin raza definida.
55
Análisis de correlaciones y significancia estadística
La concentración sérica de NT-proBNP, en la muestra de caninos sanos utilizados en
el presente trabajo de tesis, presentó diferencias estadísticamente significativas respecto al
sexo (p = 0.0392) y a la edad (p = 0.0124) como se aprecia en el Gráfico 11; pero no respecto
a la talla/peso del animal (p = 0.183), como se presenta en el Grafico 12, sobre la base de un
análisis de varianza individual.
INDEFINIDA RAZA PURA
100
200
300
400
500
600
RAZA
NTpr
oBNP
PUROS INDEFINIDOS / MESTIZOS
RAZA
Con
cent
raci
ón d
e N
T-p
roB
NP
Gráfico 10. Diagrama de cajas que muestran la ausencia de valores atípicos en ambos grupos y la homocedasticidad de varianzas. Se expone, tanto para caninos puros como caninos sin raza definida o mestizos, el valor de la mediada.
246.14 pmol/lts
220.56 pmol/lts
56
100 200 300 400 500 600
1020
3040
50
NTproBNP
PES
O
TALLA
GRANDE MEDIANOPEQUEÑA
Gráfico 12. Rectas de correlación, establecida para caninos de talla grande (> 25kg, identificados con círculos), talla mediana (12 – 25 kg, identificados con triángulos) y pequeña (< 12 kg, identificados con signo positivo), establecidas entre talla/peso y la concentración sérica de NT-proBNP. Condición corporal de los caninos 2.5 – 3.5 ( Escala 1 – 5).
CONCENTRACIÓN DE NT-proBNP
PESO
5 10 15
100
200
300
400
500
600
EDAD
NT
proB
NP
SEXO
HM
EDAD
Con
cent
raci
ón d
e N
T-p
roB
NP
Gráfico 11. Rectas de correlación, para machos (triángulos) y hembras (círculos), establecidas entre la edad y la concentración sérica de NT-proBNP.
57
El análisis de varianza para múltiples factores mostró que no se presentan diferencias
estadísticamente significativas para las combinaciones edad/sexo (p = 0.107), sexo/tamaño (p
= 0.189) y edad/sexo/tamaño (p = 0.765). Asimismo, si se presentaron diferencias
estadísticamente significativas entre edad/tamaño (p = 0.030). Ver Gráficos 13 y 14.
HM
EDAD
100 300 500
510
15
100
300
500 NTproBNP
5 10 15 10 20 30 40 50
1020
3040
50PESO
Gráfico 13. Diagrama de matriz de dispersión que asocia las variables concentración sérica de NT-proBNP, peso vivo, sexo y edad de los caninos analizados.
58
El análisis realizado muestra que, además de aumentar la concentración sérica de NT-
proBNP con la edad (caninos mayores de 7 años presentan concentraciones séricas,
estadísticamente significativas, más altas que caninos menores de 7 años) y el sexo (machos
presentan concentraciones séricas mayores que las hembras, siendo estas diferencias
estadísticamente significativas), la concentración sérica aumenta con la edad y el incremento
de la talla/peso, analizados como variables relacionadas.
GRANDE MEDIANOPEQUEÑA
EDAD
100 300 500
510
15
100
300
500 NTproBNP
5 10 15 10 20 30 40 50
1020
3040
50
PESO
Gráfico 14. Diagrama de matriz de dispersión que asocia las variables concentración sérica de NT-proBNP, talla, peso vivo y edad de los caninos analizados.
59
El análisis de varianza para los 12 grupos incluidos en el trabajo muestra diferencias
estadísticamente significativas (p = 0.0062). Las mismas se presentaron, puntualmente, entre
caninos machos menores de 7 años de más de 25 kg de peso y caninos machos mayores de 7
años de más de 25 kg de peso (p = 0.0412), como se aprecia en el Gráfico 15. En contraste,
entre el resto de los grupos evaluados a partir de un análisis múltiple de comparación de
medias (Tukey Contrasts), no se obtuvieron diferencias estadísticamente significativas (p >
0.05). Entre los caninos de razas puras versus los caninos sin raza definida y mestizos no se
presentaron diferencias estadísticamente significativas (p = 0.487).
5 10 15
100
200
300
400
500
600
EDAD
NT.
proB
NP
Gráfico 15. Diagrama de dispersión para la variable concentración sérica de NT-proBNP y edad en caninos machos mayores de 25 kg de peso vivo.
Con
cent
raci
ón d
e N
T-p
roB
NP
60
La escala cardiaca vertebral (VHS) no presentó diferencias estadísticamente
significativas respecto al estado reproductivo (castrados – enteros), el sexo (machos –
hembras), la edad (menores de 7 años – mayores de 7 años) y la talla/peso (pequeña –
mediana – grande), en la muestra de caninos analizados (p > 0.05). Ver Gráfico 17.
La concentración sérica de NT-proBNP no se asoció, en el presente ensayo, con la
escala cardíaca vertebral – VHS (p = 0.329), como se aprecia en el Gráfico 18.
Gráfico 17. Diagramas de cajas que muestran la distribución de la variable VHS respecto al estado reproductivo (A), el sexo (B), la talla (C) y la edad (D). No se presentaron diferencias significativas en el análisis de homogeneidad de varianzas (p > 0.05) en los grupos estudiados. NO: Enteros, SI: Castrados, H: Hembras, M: Machos.
GRANDE MEDIANO PEQUEÑA
8.0
8.5
9.0
9.5
10.0
11.0
TALLA
VH
S
148
< 7 años > 7 años
8.0
8.5
9.0
9.5
10.0
11.0
EDAD
VH
S
148
C D
NO SI
8.0
8.5
9.0
9.5
10.0
11.0
CASTRADA
VH
S
131
148
117
H M8.
08.
59.
09.
510
.011
.0SEXO
VH
S
A B
ESTADO REPRODUCTIVO SEXO
TALLA EDAD
61
La concentración sérica de NT-proBNP no se asoció con el diámetro diastólico del
ventrículo izquierdo (r = 0.070, p = 0.375) ni con el espesor de la pared libre del ventrículo
izquierdo al final de la diástole cameral (r = -0.034, p = 0.666), como puede apreciarse en los
diagramas A - A’ y C - C’, respectivamente, del Gráfico 19.
100 200 300 400 500 600
8.0
8.5
9.0
9.5
10.0
10.5
11.0
11.5
NTproBNP
VH
S
Gráfico 18. Diagrama de dispersión que muestra la falta de correlación entre la variable VHS y la concentración sérica de NT-proBNP en caninos sanos.
NT-proBNP
62
La concentración sérica de NT-proBNP no se asoció con la distancia septal al punto e
(EPSS) (r = 0.132, p = 0.095) ni con el espesor del septum interventricular en final de
diástole (r = 0.0296, p = 0.71), como puede apreciarse en los diagramas B – B’ y C - C’,
respectivamente, del Gráfico 20.
HM
DVIDias
100 300 500
2030
4050
100
300
500 NTproBNP
20 30 40 50 6 8 10 12 14
68
1012
14
PLVIDias
Gráfico 19. Diagrama de matriz de dispersión que asocia las variables concentración sérica de NT-proBNP, diámetro del ventrículo izquierdo en diástole (DVID) y espesor de la pared libre del ventrículo izquierdo en diástole (EPLVID).
A
A’
B
B’
C
C’
63
La concentración sérica de NT-proBNP no se asoció con el largo del ventrículo
izquierdo al final de la diástole (LVID) (r = 0.139, p = 0.081) ni con el volumen del
ventrículo izquierdo al final de la diástole (VVID) (r = 0.084, p = 0.289), como puede
apreciarse en los diagramas A – A’ y B - B’, respectivamente, del Gráfico 21.
HM
E.S
4 6 8 10 12 14
12
34
56
46
810
1214
ESIDias
1 2 3 4 5 6 100 300 500
100
300
500NTproBNP
Gráfico 20. Diagrama de matriz de dispersión que asocia las variables concentración sérica de NT-proBNP, distancia septal al punto e (EPSS) y espesor del septum interventricular en diástole (ESIVD).
A
A’
B
B’
C
C’
64
La concentración sérica de NT-proBNP no se asoció con la fracción de acortamiento
del ventrículo izquierdo (FA) (r = -0.0259, p = 0.745) ni con la fracción de eyección del
ventrículo izquierdo (FE) (r = -0.0211, p = 0.791), como puede apreciarse en los diagramas B
– B’ y C - C’, respectivamente, del Gráfico 22.
HM
LVID
100 300 500
34
56
78
100
300
500 NTproBNP
3 4 5 6 7 8 20 40 60 80
2040
6080
VolVID
Gráfico 21. Diagrama de matriz de dispersión que asocia las variables concentración sérica de NT-proBNP, largo del ventrículo izquierdo en diástole (LVID) y volumen diastólico final del ventrículo izquierdo (VVID).
A
A’ B
B’
C
C’
65
La concentración sérica de NT-proBNP no se asoció con la fracción de engrosamiento
de la pared libre del ventrículo izquierdo (FEPLVI) (r = 0.141, p = 0.076) ni con la fracción
de engrosamiento del septum interventricular (FESIV) (r = 0.134, p = 0.091), como puede
apreciarse en los diagramas B – B’ y C - C’, respectivamente, del Gráfico 23.
HM
FA
20 30 40 50 60 70
2535
45
2030
4050
6070
FE
25 35 45 100 300 500
100
300
500NTproBNP
Gráfico 22. Diagrama de matriz de dispersión que asocia las variables concentración sérica de NT-proBNP, fracción de acortamiento del ventrículo izquierdo (FA) y fracción de eyección del ventrículo izquierdo (FE).
B
B’
C
C’
A
A’
66
Gráfico 23. Diagrama de matriz de dispersión que asocia las variables concentración sérica de NT-proBNP, fracción de engrosamiento de la pared libre del ventrículo izquierdo (FEPLVI) y la fracción de engrosamiento del septum interventricular (FESIV).
HM
F.E.PVI
20 30 40 50
1020
3040
50
2030
4050 F.E.SIV
10 20 30 40 50 100 300 500
100
300
500NTproBNP
A
A’
B
B’
C
C’
67
DISCUSIÓN
En el presente trabajo de tesis doctoral, la concentración sérica de la fracción amino
terminar del péptido natriurético tipo B (NT-proBNP) fue determinada en una población de
159 caninos adultos sanos, utilizando procedimientos pre-establecidos bajo estrictos criterios
de inclusión y exclusión con la finalidad de minimizar las causas de variaciones previas a la
determinación, no asociadas a las variables en análisis.
A pesar de estas precauciones, la concentración sérica de NT-proBNP presentó un
coeficiente de variación de 52%, de forma similar a lo observado por otros investigadores en
su población de caninos controles sanos, pero con un número muestral inferior a 30 animales
(32, 38, 91, 79, 165). El rango más amplio en la variación de la concentración sérica de NT-
proBNP se observó en la población de caninos mayores de 25 kg de peso, sobre todo en los
machos, en los cuales, además, se observaron diferencias significativas asociadas a sexo/talla.
Estos hallazgos muestran que la variabilidad observada no está asociada a la talla o peso del
animal.
La concentración sérica media observada en la muestra analizada fue similar a las
observadas por otros investigadores (142, 170, 179, 183). Por su parte, los valores máximos
hallados no se corresponden con valores de corte establecidos por algunas marcas comerciales
alternativas no empleadas en este trabajo. En este sentido, el 58% de los caninos sanos
analizados tuvieron una concentración sérica media de NT-proBNP superior a 210 pmol/lts
(valor de corte del Test ELISA comercialmente provisto por VetSign Canine CardioScreen,
Guildhay) y un 9 % presentaron un valor superior a 445 pmol/lts (valor de corte del Test
ELISA comercialmente provisto por IDEXX). Sin embargo, el valor máximo hallado en este
trabajo fue similar al observado por otros investigadores (142).
68
La concentración sérica de NT-proBNP presentó diferencias estadísticamente
significativas asociadas al sexo y a la edad, de manera similar a estudios multicéntricos
realizados en humanos, por otros investigadores, en poblaciones muestrales que contaron con
entre 2.000 y 5.000 pacientes (94, 108, 151, 153). A diferencia de estos trabajos y de otras
investigaciones recientes en caninos (128, 192), donde la concentración sérica y/o plasmática,
tanto de C-BNP como de NT-proBNP, se presentó más elevada en las mujeres y en las
hembras caninas respectivamente; en este ensayo, son los machos caninos los que muestran
una concentración sérica de NT-proBNP más alta que las hembras. Asimismo, en ambas
especies, es la población de adultos gerontes y caninos mayores de 7 (siete) años, los que
mostraron concentraciones de NT-proBNP más elevadas que los pacientes jóvenes, al igual
que en el presente estudio. A pesar de esta similitud y de observarse diferencias
estadísticamente significativas como las expuestas, las mismas no representan la magnitud
observada en pacientes humanos en los cuales se evidencian variaciones entre dos y tres veces
en la concentración de los péptidos natriuréticos a favor de los adultos gerontes respecto a las
poblaciones jóvenes. En este estudio solo se demostró un aumento del 30% en la
concentración, a favor de los caninos mayores de 7 años. En investigaciones realizadas por,
Misbach et al 2013 sobre 154 caninos sanos de raza pura y talla pequeña (menores de 12 kg
de peso), se observó ausencia de diferencias significativas asociadas a la edad. Este hallazgo
no concordante con los resultados obtenidos aquí, podría asociarse a que los animales adultos
en ese ensayo, no presentaron una edad mayor de 8 años, en comparación con una edad media
adulta de 9.75 años (rango 7.2 a 16 años) muestreada en este estudio. Esta última afirmación,
es sostenida, además, por Wess et al. 2011 cuando demostró que en caninos de la raza
Doberman Pinscher sanos la concentración de NT-proBNP incrementaba significativamente
cuando superaban los 8 años. A pesar de estas observaciones, los resultados presentados en
69
distintas investigaciones, tanto en el grupo control de caninos sanos como en el de enfermos
cardíacos, respecto a las variables constitutivas de sexo y edad, muestran resultados diversos.
Un importante número de trabajos no observan diferencias significativas asociadas a estas
variables tanto en caninos de raza pura (183) como en animales mestizos o sin raza definida
(22, 53, 142), a pesar de observar una tendencia a presentarse mas incrementada en la
población de adultos gerontes (42, 52). Por su parte, considero que las diferencias
estadísticamente significativas observadas en este trabajo, como en otros con hallazgos
similares, se corresponden con un muestreo homogéneo tanto en las características
constitutivas de los animales analizados como en el tamaño de cada uno de los grupos.
El peso corporal y la talla del animal no se asociaron a variaciones en la concentración
sérica de NT-proBNP en los caninos sanos analizados, a pesar de presentarse diferencias entre
las medias de los grupos estudiados (< 12kg / 12-25 kg = 46.07 pmol/lts; 12-25 kg / > 25 kg =
18.64 pmol/lts; < 12 kg / > 25 kg = 27.43 pmol/lts). Todos los animales analizados
presentaban una condición corporal entre 2.5 a 3.5, score que se consideró como pre-requisito
en la selección de los caninos utilizados en este ensayo. Sin embargo, esta situación puede
entenderse como una limitación, ya que no permite evaluar si la concentración de NT-
proBNP, en una población de caninos sanos que tenga una condición corporal enmarcada en
un rango más amplio, presentará variaciones estadísticamente significativas asociadas al
efecto de la grasa corporal, como se ha observado en otras investigaciones tanto en caninos
como en felinos (183, 192).
La concentración sérica de NT-proBNP no se correlacionó con el tamaño cardíaco
vertebral en los distintos grupos de animales estudiados (p = 0.329). Estos resultados
colaboran con hallazgos presentados por otros investigadores que evidencian una correlación
positiva, entre ambas variables, en pacientes que presentan tanto patologías cardíacas
70
congénitas (77) como adquiridas (110, 142) y anula el sesgo que pudiese originarse a partir
del efecto peso / talla corporal en los grupos controles sanos utilizados. Asimismo, es
importante señalar que los caninos utilizados en el presente estudio presentaban una condición
corporal entre 2.5 a 3.5, en los cuales la talla guardó una correlación positiva con el peso
corporal en los animales seleccionados (r = 0.87; r2 = 0.76). Una limitante que presentó este
ensayo es que la asociación entre NT-proBNP y el tamaño cardíaco vertebral no fue estudiada
sobre la base de la conformación torácica, dependiente de las características raciales de los
caninos, situación de análisis que requiere futuras investigaciones.
Las variables ecocardiográficas asociadas al tamaño cardíaco ventricular (DVID,
SIVD, PLVID, EPSS, VVID y LVID) no se correlacionaron con las concentraciones séricas
de NT-proBNP en los caninos sanos estudiados. Estos hallazgos permiten afirmar, desde la
base de que los miocitos ventriculares son los que en forma prioritaria sintetizan y liberan el
péptido natriurético tipo B (100, 146), que la masa ventricular de pacientes sanos no es
responsable de una mayor concentración sérica. En este sentido, es razonable sostener que una
mayor producción de NT-proBNP es esperable en masas ventriculares mayores como las
observadas en caninos de mayor talla o peso corporal, pero que la misma experimenta, como
es lógico, un efecto de dilución al presentar estos pacientes una mayor volemia o volumen de
distribución. Y, por último, concuerdan con los hallazgos observados por otros investigadores
en la afirmación de que son las alteraciones que se generan a consecuencia de patologías
cardíacas, las que modifican tanto las cámaras como las paredes cardíacas, siendo las
responsables de las variaciones analizadas en la concentración sérica de los NP (21, 22, 32,
53, 80, 142, 192).
71
CONCLUSIONES FINALES
Los resultados observados en este trabajo de tesis muestran que
• La concentración de NT-proBNP en caninos sanos muestra variaciones
asociadas al sexo, considerándose mayor en los machos.
• La concentración de NT-proBNP en caninos sanos muestra variaciones
asociadas a la edad, considerándose mayor en los animales de más de 7 años.
• Ambas variables deben ser consideradas al realizar la interpretación de la
concentración de NT-proBNP tanto en pacientes sanos como enfermos, pero
que requiere de un mayor número de trabajos para determinar los factores de
ajuste.
• La concentración sérica de NT-proBNP en caninos sanos presentó una media
de 260.28 pmol/lts con una desviación estándar de +/-135.48 pmol/lts y
valores mínimo de 42.16 pmol/lts y máximo de 603.71 pmol/lts (ELISA -
Marca USCN® Life Science Inc. – Catálogo: E90485Ca – Canis familiaris:
Canine / Dog).
• La concentración sérica de NT-proBNP en caninos sanos, considerando la
talla, el peso, así como el tamaño cardíaco vertebral (VHS) y las variables
ecocardiográficas, que se relacionan con las dimensiones cardíacas, no
muestran asociación.
72
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