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CURSO: METODOLOGIA DE INVESTIGACION CIENTIFICA 2014

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el síndrome de Down es el más frecuente y de una gran complejidad, afectando aproximadamente a 1 de cada 800 a 1000 nacidos vivos. La esperanza de vida media ha pasado de 9 años aproximadamente en 1929 a 40 años en la década de los ochenta.

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CURSO: METODOLOGIA DE INVESTIGACION CIENTIFICA

2014

INTRODUCCIÓN

De los defectos congénitos, el síndrome de Down es el más frecuente y de una

gran complejidad, afectando aproximadamente a 1 de cada 800 a 1000 nacidos

vivos. La esperanza de vida media ha pasado de 9 años aproximadamente en

1929 a 40 años en la década de los ochenta para llegar a una vida media de

60-64 años en 1996.

En estas personas es durante los primeros años de vida en los que la tasa de

mortalidad es más alta, principalmente debido a infecciones respiratorias,

leucemia o malformaciones congénitas suficientemente importantes como para

incompatibilizar con la vida y en concreto, con respecto a la leucemia, el

porcentaje de posibilidades de padecer dicha enfermedad en los bebés con SD

es mucho más alto que en el resto de bebés.

La expresión fenotípica consecuente de la malformación genética del SD es de

una gran variabilidad, característica. Existen casos descritos en la literatura con

representaciones fenotípicas de incluso sólo dos rasgos fenotípicos, el caso de

una persona con SD con trisomía regular en la que aparecían únicamente

braquicefalia y ausencia del puente nasal.

El fenotipo del SD muestra una variable penetrancia, afectando a numerosos

órganos como el cerebro, la musculatura, el corazón, la estructura esquelética

y la sangre. De todas las características que suelen aparecer en las personas

con SD, se puede decir que la afección en el cerebro, que ocasiona

discapacidad intelectual, es la que está presente en todos los casos junto con

la presencia de modificaciones neuropatológicas similares a las de la

enfermedad de Alzheimer, y debemos añadir que en el espectro de la

discapacidad intelectual, la variabilidad entre sujetos es enorme, variabilidad

que se explicaría principalmente debido a factores internos, es decir, aunque la

alteración cromosómica sea la misma en distintos individuos, los procesos de

formación del desarrollo neurobiológico son distintos en cada persona, y

aunque exista una cierta similitud entre estructuras cerebrales afectadas, no se

encuentran dichas alteraciones estructurales y funcionales en el 100% de los

casos.

Las características fenotípicas se expresan en la cara, manos, pies,

extremidades. Son muy frecuentes alteraciones cardiovasculares, problemas

de visión y audición, tono muscular afectado, un retraso mental que afecta a

todas las áreas intelectuales, un envejecimiento acelerado con un porcentaje

alto de personas que padecen la sintomatología clínica propia de la demencia

tipo Alzheimer en edades relativamente precoces (50-55 años).

El fenotipo de la trisomía 21 (SD) presenta dos aspectos clínicos presentes en

prácticamente todos los casos:

Retraso mental

Hipotonía muscular

La causa de la alteración que da lugar al SD reside en el cromosoma 21, el

más pequeño de los cromosomas que portan las células del ser humano y

ocupa el 1,5% del genoma humano. Todas las células del organismo en su

núcleo portan 23 pares de cromosomas, es decir, 46 cromosomas. En el SD el

par 21, de los 23 que hay, tiene tres cromosomas en lugar de dos, que es lo

que origina la cromosomopatía (exceso o defecto de material genético).

Además de la trisomía 21 existen otros tipos de trisomías mucho menos

frecuentes, como son la 13 y 18, en la mayor parte de los casos estas

alteraciones son incompatibles con la vida y se producen abortos espontáneos.

En estos cromosomas, el material genético en exceso desencadena

malformaciones mayores o de mayor gravedad que implican un mayor

desorden orgánico, dado que el número de genes de estos cromosomas es

mucho mayor que el que porta el C21.

RESEÑA HISTÓRICA

Esta anomalía hereditaria se presume que fue descrita por primera vez en 1838

por Esquirol, cuando detalló las características de un niño que aparentemente

padecía de síndrome de Down. Por otro lado, se conoce con mayor exactitud

que durante una conferencia realizada en 1846, Séguin hizo referencia a

ciertos rasgos particulares de uno de sus pacientes y denominó la afección

como idiocia furfurácea.

Es a John Langdon Down (1866) al que se le atribuye el mayor aporte en

cuanto a la descripción de fenotipo basada en mediciones de diámetros

cefálicos y registros fotográficos, entre otros datos, con el objeto de explicar

científicamente la anomalía al verla como una entidad nosológica, en vez de

definirla bajo una ideología teológica como era la costumbre de la época. Este

médico inglés publicó su investigación en London Hospital Reports bajo el título

de Observaciones en un grupo étnico. Allí no sólo mencionó las posibles

causas que darían origen a la patología, sino que detalló las características

físicas de los pacientes, resaltó la dificultad que presentaban en la

comunicación oral y la descoordinación neuromuscular; así como también

destacó la capacidad de imitación que desarrollaban diferenciándolos

definitivamente de otros tipos de discapacidad intelectual.

Del mismo modo, en ese reporte, Down, influenciado por las corrientes

científicas que comenzaban a despertar de la mano de Charles Darwin y su

libro El origen de las especies (1856), se atrevió a afirmar que las personas que

presentaban estas características eran ejemplo de un tipo de degeneración de

la especie humana pues representaban una forma primitiva del hombre, es

decir un retroceso en la evolución. Observando la singular forma de los ojos de

las personas que padecían de este síndrome, sugirió que esta especie poco

evolucionada descendía de los mongoles y basado en esto, hizo una

clasificación de los mismos en:

Etíopes que poseían “ojos prominentes, labios gruesos y mentón

retraído,”

Malayos que tenían “cabello rizado, maxilar superior prominente y boca

espaciosa”.

Indoamericanos presentaban “frente acortada, mejillas prominentes,

mirada profunda, y nariz ligeramente simiesca”.

En la actualidad esta clasificación está rechazada; sin embargo, es así como

surge el término idiocia mongólica, comúnmente conocido como mongolismo,

con el cual se referirían a este síndrome por más de un siglo.

Una década después, se celebró en Edimburgo un congreso donde Fraser y

Mitchell (1876) realizaron la primera comunicación médica acerca del síndrome

de Down. En el informe recalcaron, después de estudiar 62 pacientes con esta

afección, la tendencia a la braquicefalia, la baja esperanza de vida de estas

personas y el curioso dato sobre el orden del nacimiento pues observaron que

la mayoría de los pacientes eran los hijos menores de las parejas. Luego en

1896, Smith describió la morfología de la mano de las personas con síndrome

de Down e hizo énfasis en la curvatura que presentan en el dedo meñique.

Más tarde, en 1909, Shuttleworth, después de estudiar 350 pacientes,

denominó a los portadores del síndrome como niños incompletos y destacó la

influencia de la edad de la madre pues la mayor parte de los casos eran hijos

de mujeres próximas al climaterio. Luego, en 1932, se hizo referencia por

primera vez a la posible etiología del síndrome de Down. Fue Waanderburg.

MARCO TEÓRICO

SÍNDROME DOWN

El síndrome de Down (SD) es un trastorno genético causado por la presencia

de una copia extra del cromosoma 21 (o una parte del mismo), en vez de los

dos habituales, por ello se denomina también trisomía del par 21. Se

caracteriza por la presencia de un grado variable de discapacidad cognitiva y

unos rasgos físicos peculiares que le dan un aspecto reconocible. Es la causa

más frecuente de discapacidad cognitiva psíquica congénita.

No se conocen con exactitud las causas que provocan el exceso cromosómico,

aunque se relaciona estadísticamente con una edad materna superior a los 35

años. Las personas con síndrome de Down tienen una probabilidad algo

superior a la de la población general de padecer algunas enfermedades,

especialmente de corazón, sistema digestivo y sistema endocrino, debido al

exceso de proteínas sintetizadas por el cromosoma de más. Los avances

actuales en el descifrado del genoma humano están desvelando algunos de los

procesos bioquímicos subyacentes a la discapacidad cognitiva, pero en la

actualidad no existe ningún tratamiento farmacológico que haya demostrado

mejorar las capacidades intelectuales de estas personas. Las terapias de

estimulación precoz y el cambio en la mentalidad de la sociedad, por el

contrario, sí están suponiendo un cambio positivo en su calidad de vida.

ETIOLOGÍA

Tres son los tipos de trisomías que originan el SD: la trisomía primaria o regular

aproximadamente el 95% de los casos, la trisomía por translocación 4% de los

casos y por mosaicismo el 1% de los casos.

TRISOMÍA REGULAR

Se origina como consecuencia de la no disyunción del cromosoma par 21 al

formarse el gameto masculino o femenino, o bien en la primera división celular

posterior a la fecundación.

El embrión se forma a partir de una primera célula, dicha célula contiene tres

cromosomas del par 21, consecuentemente este cromosoma extra estará

presente en todas las células del organismo. Esta trisomía se produce por

errores en la segregación equitativa de los cromosomas en la división meiótica.

Dicha segregación desigual se llama “no disyunción”, lo origina que las células

descendientes de esta célula germinal (paterna o materna) añadan dos copias

del C21 en lugar de una; así, una vez que los dos gametos se han unido para

formar el embrión, se produce la trisomía, apareciendo los 47 cromosomas en

todas las células del organismo.

La no-disyunción se da con mayor frecuencia en las células germinales

femeninas que en las masculinas, de forma que la trisomía es principalmente

de origen materno.

TRANSLOCACIÓN

Las translocaciones suponen la separación de un fragmento de ADN de un

cromosoma y su posterior unión a otro cromosoma. Aquí el C21 extra o parte

de él está adherido a otro cromosoma, que normalmente suele ser el 14.

Las translocaciones pueden dividirse en Robertsonianas (TR) y no

Robertsonianas (TnR). En las TR existe una fusión de los brazos largos a nivel

del centrómero o de los brazos cortos. Aproximadamente el 50% de las TR que

aparecen en el SD entre el C21 y un cromosoma del grupo D (13, 14 ó 15) son

de origen familiar.

Las TnR pueden ser de dos tipos: las recíprocas o en equilibrio del C21, en las

que se produce un intercambio de material entre el C21 y cualquier otro

cromosoma, autosoma o cromosoma sexual; estas translocaciones pueden no

tener consecuencias fenotípicas. Al transmitir las translocaciones recíprocas a

la descendencia es cuando existe riesgo de originar un desequilibrio

cromosómico.

El C21 extra, o parte de él, está adherido a otro cromosoma, frecuentemente al

14. En una tercera parte aproximadamente de los casos con translocación, uno

de los progenitores es portador de la anomalía. En este caso, ser portador

implica un defecto en la arquitectura cromosómica, pero no implica presencia

de material genético de más, es decir, no presenta el síndrome. El portador

puede formar gametos con material genético de más, lo que originaría la

trisomía uniéndose con otro gameto normal.

MOSAICISMO O TRISOMÍA PARCIAL

en el mosaicismo se da en la segunda o en la tercera célula. Así, el embrión

creado resulta de la división simultánea de células normales y de células con

carga extra del par 21 y dependiendo de en qué célula se dé la disfunción,

habrá mayor o menor afección; dicho de otra manera, en el mosaicismo la

dotación cromosómica no es la máxima en todas las células de un mismo

individuo. Existirán en un mismo individuo dos poblaciones celulares, células

con 46 y con 47 cromosomas.

Las personas con trisomía parcial parecen tener un desarrollo no tan afectado

como en otras trisomías, resulta lógico dado que el número de células

normales es más numeroso que en la trisomía regular, mejor dicho, posee

células normales y la trisomía regular no.

Este tipo de trisomía puede darse por una no-disyunción meiótica o mitótica. La

no-disyunción meiótica se da poco tiempo después de la fecundación, así,

aparecerán dos tipos de células. En la no-disyunción mitótica el cromosoma

extra de una célula se pierde poco después de la fecundación; según parece,

un alto porcentaje del mosaicismo identificado fenotipicamente tiene un origen

mitótico en un 20 % de los casos.

Se debe resaltar la gran variabilidad del fenotipo en el mosaicismo, que puede

ir desde casos típicos de SD a casos con pequeños dimorfismos, curiosamente

no se han descrito casos de mosaicismo con defectos cardiacos de naturaleza

congénita.

El análisis molecular de este tipo de trisomía ha permitido la definición de

regiones del C21 asociadas a determinados aspectos fenotípicos del SD,

determinados genes han de ser los responsables directos de esos aspectos

clínicos. Esimportante poder establecer correlaciones entre el fenotipo y el

genotipo, y conseguir definir la aportación de cada gen al fenotipo.

MANIFESTACIONES CLÍNICAS

El SD es la causa más frecuente de discapacidad cognitiva psíquica congénita.

Representa el 25% de todos los casos de discapacidad cognitiva. Como rasgos

comunes se pueden reseñar su fisiognomía peculiar, una hipotonía muscular

generalizada, un grado variable de discapacidad cognitiva y retardo en el

crecimiento.

En cuanto al fenotipo han sido descritos más de 100 rasgos peculiares

asociados al SD, pudiendo presentarse en un individuo un número muy

variable de ellos. De hecho ninguno se considera constante o patognomónico

aunque la evaluación conjunta de los que aparecen suele ser suficiente para el

diagnóstico.

Algunos de los rasgos más importantes son:

Hipotonía generalizada

Laxitud articular

Perfil facial y occipital planos

Braquiocefalia

Hendiduras palpebrales oblicuas

Raíz nasal deprimida

Pliegues epicánticos (pliegue de piel en el canto interno de los ojos)

Cuello corto

Pliegue epidérmico nucal

Clinodactilia del quinto dedo de las manos (crecimiento recurvado hacia

el dedo anular)

Pliegue palmar único

Separación entre el primer y segundo dedo del pie

Orejas displasicas

Protrusión lingual macroglosia

Maxilar pequeño

Desarmonía oclusal clase II

Agenesia

Microdoncia

Problemas periodontales

Retraso de la erupción de los dientes

Alta incidencia de gingivitis

Uvula bífida

Las enfermedades que se asocian con más frecuencia son las cardiopatías

congénitas y enfermedades del tracto digestivo (celiaquía, atresia/estenosis

esofágica o duodenal, colitis ulcerosa).

Los únicos rasgos presentes en todos los casos son la hipotonía muscular

generalizada en grados muy variables. Presentan, además, un riesgo superior

al de la población general, para el desarrollo de enfermedades como leucemia

(leucemia mieloide aguda), diabetes, hipotiroidismo, miopía, o luxación

atloaxoidea (inestabilidad de la articulación entre las dos primeras vértebras,

atlas y axis, secundaria a la hipotonía muscular y a la laxitud ligamentosa).

EFECTOS SOBRE LA SALUD DEL SÍNDROME DOWN

La carga genética del cromosoma 21 triplemente representado es el origen del

desequilibrio que condiciona las alteraciones del desarrollo, estructura y función

de diversos sistemas y órganos, destacando el retraso mental en mayor o

menor intensidad de la persona con síndrome de Down.

Son diversas las posibles patologías y problemas de salud que pueden sufrir

los individuos con síndrome de Down.

ALTERACIONES DE LA FUNCIÓN TIROIDEA

Las alteraciones que, con más frecuencia, se encuentran en la función tiroidea

de individuos con síndrome de Down, son las siguientes:

Hipotiroidismo congénito primario persistente

Disfunción tiroidea compensada o subclínica, también denominada

"hipertirotropinemia idiopática", que es caracterizada por niveles de hormona

estimulante del tiroides (TSH) elevada y niveles de tiroxina (T4) normales o

ligeramente disminuidos, pudiendo estar presente en un 50% de los individuos

con síndrome de Down, Un 40% de los casos evolucionan hacia niveles de

normalidad, por lo que se recomiendan controles cada 6 meses que confirmen

un estado de hipotiroidismo franco.

Hipotiroidismo adquirido: generalmente por causa autoinmune

Hipertiroidismo: patología poco frecuente en esta población.

La observación de disfunción tiroidea se incrementa con la edad,

particularmente por encima de los 25 años, siendo escaso el número de

individuos con síndrome de Down (apenas el 15-30%) en los que se realiza

cribado sistemático de disfunción tiroidea a lo largo de su vida.

ALTERACIÓN DEL CRECIMIENTO

Los niños y adultos con síndrome de Down son, generalmente, bajos de

estatura. Son muchos los factores potenciales que pueden originar un

crecimiento escaso y un desarrollo lento en los niños con síndrome de Down. A

pesar de que algunos se conocen, como las anomalías en el sistema de

hormona de crecimiento/factor de crecimiento tipo insulina, el hipotiroidismo y

la enfermedad celiaca.

ALTERACIÓN DEL METABOLISMO LIPÍDICO

Pueschel et al. (1994) demostraron, en un estudio de los lípidos y lipoproteínas

en personas con síndrome de Down, que los niveles de triglicéridos estaban

elevados en este colectivo frente a un grupo control. Además, se observó una

disminución del HDLcolesterol, colesterol total, apolipoproteínas AI y del índice

HDL-colesterol/colesterol total. Por otra parte, no hubo diferencias significativas

entre ambos grupos en el colesterol total en suero, LDL-colesterol,

apolipoproteínas B y tampoco en la relación entre la apolipoproteína AI y B.

Estos perfiles lipídicos, en teoría, están asociados a un incremento de riesgo de

enfermedad cardiovascular. Aceptando el hecho de que en el síndrome de

Down existe menor prevalencia de enfermedades arteroscleróticas, los autores

de estos estudios concluyen que la reducción de riesgo no puede ser explicada

por los niveles de lípidos y lipoproteínas observadas en su estudio.

HIPERURICEMIA

Los niveles de ácido úrico que se observan en el colectivo de síndrome de

Down se encuentran elevadas. Sin embargo, son muy pocos los estudios en

los que estos altos niveles de ácido úrico dan lugar a síntomas de gota. El

aumento de los niveles de ácido úrico se debe a un incremento de la actividad

de la enzima adenosindesaminasa en los eritrocitos y linfocitos.

ALTERACIONES DEL SISTEMA NERVIOSO

Existen alteraciones estructurales y funcionales en el sistema nervioso central

de los individuos con síndrome de Down. Así, se pueden encontrar retrasos en

el desarrollo, trastornos de la maduración del sistema nervioso central,

disgenesia cortical, disminución del número de neuronas y anomalías en las

sinapsis. Todas estas deficiencias estructurales hacen que la información no se

transmita adecuadamente, incluso en áreas que por sí mismas no hubiesen

sido afectadas directamente por la alteración genética.

A medida que avanza la edad de la persona con síndrome de Down, su cerebro

sufre un número creciente de alteraciones neuroquímicas. Así, se observa un

depósito pertinaz y progresivo de la proteína β-amiloide en el cerebro, su

posterior fragmentación y desprendimiento de fracciones con capacidad

neurotóxica, la lesión de extensos grupos neuronales y la alteración de

numerosos sistemas neuroquímicos, como noradrenérgico, colinérgico y

serotonérgico entre otros. Existe también una reducción de receptores

determinados de neurotransmisores.

Por otra parte, se ha demostrado que, a partir de los 40 años, hay un declive en

el N-acetilaspartato que puede ser expresión del comienzo de degeneración

neuronal. El estudio de estos marcadores neuroquímicos permite concluir que

los sistemas colinérgicos, noradrenérgicos y serotoninérgicos son

particularmente vulnerables a las alteraciones genéticas presentes en el

síndrome de Down, hecho que sirve para explicar, aunque sea parcialmente, la

patogenia del retraso mental y las alteraciones cognitivas de estas personas.

A nivel neurofisiológico se sabe que existen alteraciones en el patrón de la

transmisión sináptica en las personas con síndrome de Down, lo que puede

explicarse por la estructura anómala de la sinapsis, demostrada en estudios

morfológicos.

En cuanto a las convulsiones, nunca han llamado especialmente la atención

como ocurre en otras formas de retraso mental. Los trastornos epileptoides

más frecuentes son los espasmos infantiles (generalmente febriles) en la

primera infancia, crisis de reflejos en el adulto (ante un estímulo, no

espontáneas) y crisis asociadas a la enfermedad de Alzheimer en adultos de

mayor edad.

CARDIOPATÍAS CONGÉNITAS

La frecuencia de aparición de cardiopatías congénitas es muy alta entre los

individuos con síndrome de Down situándose entre un 40-50% de la población

que padece esta discapacidad. Debido a ello es muy importante un

seguimiento continuo de las personas con síndrome de Down mediante

exploraciones físicas y ecocardiografías, pues a veces un examen de rutina

puede arrojar resultados normales.

SISTEMA INMUNOLÓGICO

El síndrome de Down va acompañado de una elevada incidencia de

infecciones víricas y bacterianas, fenómenos autoinmunes, enfermedades

malignas y trastornos hematológicos. La morbilidad y mortalidad debidas a

enfermedades infecciosas son todavía altas en estos individuos, si se compara

con controles de la misma edad y sexo que vivan en las mismas condiciones

ambientales, a pesar de los progresos realizados en quimioterapia y en

atención sanitaria.

ENFERMEDADES HEMATOLÓGICAS

Existe una asociación entre síndrome de Down y leucemia conocida desde

hace tiempo. La persona con síndrome de Down tiene más probabilidades de

presentar leucemia aguda, tanto en niños como en adultos y, al igual que en la

población general, es más frecuente la de tipo linfocítico en la infancia.

Además, en la población con síndrome de Down, la tolerancia a los

medicamentos antineoplásicos es baja, por lo que las pautas de tratamiento se

hacen más dificultosas.

SISTEMA GASTROINTESTINAL

Las malformaciones gastrointestinales son frecuentes en este grupo de

población siendo la tercera causa de muerte después de las cardiopatías

congénitas y las infecciones. Es posible la existencia, de manera simultánea,

de varias malformaciones gastrointestinales que puedan llegar a afectar tanto

al tracto superior como al inferior.

Las alteraciones más frecuentes relacionadas con el tracto superior son las

obstrucciones de duodeno, ya sean por atresia congénita, estenosis de tipo

intrínseco, o de tipo extrínseco. Este hecho hay que tenerlo presente en caso

de vómitos de forma crónica.

Respecto al tracto inferior, existen varios tipos de alteraciones entre las que

destacan la enfermedad de Hirschsprung (megacolon agangliónico), estenosis

congénita del recto y ano imperforado.

Por último, existe una mayor probabilidad de malabsorción en sujetos con

síndrome de Down en distintos grados y en diferentes nutrientes (vitamina B12

y vitamina A). A pesar de ello, hacen falta nuevas investigaciones que

corroboren estos datos.

ALTERACIONES BUCALES

La boca del individuo con síndrome de Down es pequeña, con el paladar

arqueado y estrecho, y la mandíbula poco desarrollada. La lengua es normal al

nacer pero, al crecer, aparece una hipertrofia de las papilas y hacia los 4-5

años se hacen evidentes las fisuras linguales. La lengua parece grande debido

al tamaño relativamente reducido de la cavidad bucal, junto con la hipoplasia

mandibular y la estrechez del paladar.

Los labios están engrosados, evertidos y agrietados y la postura frecuente de

las personas con síndrome de Down es con la boca abierta y la lengua fuera.

Se han descrito problemas en las habilidades de comida y alimentación,

principalmente dificultades de masticación, lo que les lleva a preferir la comida

triturada y a dar lugar a alteraciones en los movimientos de la lengua durante la

comida.

ASPECTOS DE PERSONALIDAD Y SOCIO-AFECTIVOS

En los niños con Síndrome de Down, como en el resto de la población, al

momento de interpretar una conducta o limitación cognitiva se debe considerar

no sólo la alteración sino también los mecanismos psicológicos que utiliza la

persona en concreto, la historia de éxitos o de fracasos sucesivos que

acumula, los refuerzos que recibe, las expectativas propias que se ha ido

creando a partir de las familiares y sociales que ha ido percibiendo hacia su

persona, etc.

En los primeros años de su vida no son tan hábiles como los niños y niñas de

desarrollo normal al utilizar recursos para conectar e interactuar con el

ambiente que les rodea.

Suelen tender a relacionarse más con los adultos que con el grupo de iguales,

y la persona adulta debe conocer estas características genéricas que provoca

el síndrome, para ajustar sus expectativas y seguir estimulando a pesar de la

posiblemente escasa respuesta, en comparación con los niños o niñas de

desarrollo normal.

Según la imagen que el “entorno” le devuelva a partir de esas características,

se irá formando la imagen de sí mismo. Se suele decir que algunos rasgos de

la personalidad de estas personas es la obstinación, la terquedad, la

testarudez, la falta de flexibilidad, la resistencia a los cambios..., pero tal vez

sea interesante analizar estas actitudes también como resultado de un contexto

interactivo, teniendo en cuenta que:

La mayor parte de la conducta humana es aprendida y una gran parte

de ella por imitación.

Todo ser humano aprende si se le enseña, aunque el nivel de logro o

profundización sea cuantitativa y cualitativamente individual.

Todos los niños y niñas tienen ganas de aprender; este deseo tiende

naturalmente a desaparecer si lo que se le enseña no es significativo

para él o ella.

Las conductas que se refuerzan tienden a estabilizarse.

La sobreprotección inhibe la acción propia.

Es preciso cuestionarse no sólo sus limitaciones para aprender, sino las del

adulto para enseñar, para ir acoplando las ayudas a las necesidades.

Dice Enrico Montobbio “El rol como tal es un comportamiento interactivo, que el

sujeto aprende de forma progresiva y a condición de que sea capaz de

anticipar en sí mismo la actitud de los demás y la respuesta que su acción

determina en ellos”

Uno de los fines de la educación es ayudar a que las personas alcancen la

autonomía, esto no es sin embargo algo que se logra de pronto, por llegar a

una edad determinada, sino algo que se va forjando “desde la más tierna edad,

permitiendo las posibilidades que desde pequeño tienen el niño y la niña para

desenvolverse por sí mismos a nivel motriz, cognitivo y socio-afectivo”.

Las posturas sobreproteccionistas enfatizan la deficiencia y ayudan a mantener

la conciencia social e individual de ver y verse como eternos niños. La

protección excesiva, que impide crecer, parte del convencimiento de que hay

que hacerlo por ellos o ellas (privarles del derecho a intentarlo y a equivocarse)

porque estas personas son incapaces (se les juzga desde la minusvalía como

si fuese su única característica personal).

Es necesario que las personas adultas, familia, profesorado... etc, recuerden

las altas expectativas de vida que tienen los que hoy son niños y niñas, que

van a ser durante mucho tiempo personas adultas y que, sin un proceso

educativo tendente al logro de la autonomía, les va a costar mucho valerse por

sí mismas en la mayor parte de ambientes habituales.

En el sentido de su personalidad los niños con Síndrome de Down nacen

alegres, son muy sociables, se sienten muy orgullosos de sus logros y tienen

clara sensibilidad musical, el único aspecto en cierta forma desagradable de su

personalidad es el hecho de que son claramente obstinados y muy tercos,

como se mencionó anteriormente, lo que es la parte más difícil de manejar;

pero en general sus cambios de humor son muy esporádicos y estos niños son

muy afectivos con su familia y todos con los que se han sentido en un ambiente

familiar, por lo que por su alegría de vivir en general las familias no se hacen

grandes problemas en aceptarlos.

CARACTERISTICAS BUCALES EN PACIENTES CON SÍNDROME DE DOWN

a. Labios:

Se pueden encontrar voluminosos resecos y agrietados, debido a la respiración

bucal que este tipo de niños en gran número presentan. Hay queilitis con

frecuencia, especialmente fisurada. El cierre labial puede ser incompleto debido

a la protrusión lingual, algunos niños presentan cicatrices sobre todo en el labio

inferior debido al hábito de morderse los labios.

b. Carrillos:

Se estima que un 90% de los casos de los pacientes portadores de este

síndrome presentaban una mucosa de consistencia endurecida, además se

observó la existencia de la línea alba en muchas personas con este

padecimiento.

c. Paladar duro:

Clínicamente se va a encontrar un paladar ojival, en un estudio clínico métrico

del paladar se determina que se trata además de un paladar pequeño en su

conjunto (ancho, largo y altura). Las variaciones morfológicas de la bóveda

palatina pueden estar condicionadas por dos razones fundamentales: la causa

congénita y las dificultades respiratorias.

d. Paladar blando:

Se puede observar la mucosa palatina congestiva debido a la respiración bucal.

e. Orofaringe:

Úvula: Durante la etapa de unión de los procesos palatinos, puede

darse una fusión incompleta, resultado en el mejor de los casos una

úvula bífida o fisurada.

Amígdalas: Suelen estar hipertróficas, estrechando la Orofaringe y

dificultando aún más el paso del aire.

f. Lengua:

Puede ser de tamaño normal o algo más agrandada, aparenta ser

macroglósica por no tener cabida en la cavidad bucal. En algunos casos suele

ser larga y delgada o gruesa, y ancha y en el tercio de los casos de aspecto

cerebriforme o escrotal.

Se puede encontrar papilas atrofiadas, aumento de volumen de las papilas

caliciformes, indentaciones en las caras laterales de la lengua e inclusive una

lengua saburral.

g. Dientes:

Los pacientes portadores del Síndrome de Down presentan características muy

particulares de la dentición como por ejemplo se puede observar un retardo en

la erupción de los dientes temporarios pues el inicio de la erupción en ellos

empieza aproximadamente a los 9 meses y por lo general complementa su

erupción a los 4 o 5 años, la erupción de los dientes permanentes suele ser

más regular.

La microdoncia es el defecto morfológico más común y se puede ubicar con

mayor frecuencia a nivel de premolares y molares permanentes.

Los dientes son uniformemente hipo desarrollados con sus coronas a menudo

mal formadas tal como los dientes en clavija. Los pacientes presentan defectos

en la calcificación o hipoplasia del esmalte sobre todo a nivel de las molares.

h. Oclusión:

Los problemas oclusales son muy variados se observa una hipoplasia maxilar

respecto a la mandíbula, se presenta mesioclusión debido al prognatismo

relativo, mordida cruzada posterior, mordida abierta, apiñamiento dental

anterior.

i. Gíngiva:

Aunque en los niños con Síndrome de Down se observa retraso del brote de

los dientes en su configuración y a veces, ausencia congénita o fusión entre

ellos, el problema dental más preocupante tiene que ver con las encías.

Los pacientes con Síndrome Down tienen gran prevalencia de enfermedad

periodontal y su inicio suele ser desde edades muy tempranas, por ello es

frecuente encontrar gingivitis marginal inflamatoria crónica difusa y formación

de bolsas en la región de los incisivos inferiores.

Existen factores condicionantes de estas alteraciones como son: la mal

posición dentaria, la deficiente higiene oral y una mayor susceptibilidad a las

infecciones. Otra característica interesante es la elevada incidencia de gingivitis

ulceronecrotizante aguda, observándose papilas interdentarias ulceradas

cubiertas de una capa grisácea.

ALTERACIONES CAUSADAS POR LA DEFICIENCIA PSICOMOTRIZ

Las enfermedades dentales son prevenibles y el dolor bucal innecesario. Una

generación sin enfermedades bucales podría ser realidad.

La caries y la enfermedad periodontal tienen su inicio en constante aposición

sobre la superficie del diente de glicoproteínas que forman la placa bacteriana y

por tanto la remoción de la misma es la premisa principal en la prevención de

aquellas.

CARIES DENTAL

El desarrollo de la caries dental es un proceso dinámico de desmineralización

de los tejidos dentales duros a cargo de los productos del metabolismo

bacteriano, alternado con periodos de remineralización. Este proceso

patológico tiene lugar de manera continua y cualquier lesión puede variar

desde cambios a nivel molecular hasta destrucción tisular y formación de

cavidad macroscópica.

Tipos de caries:

Agudas

Crónicas

Detenidas

a) Agudas:

No dan tiempo para formar dentina esclerótica, por lo tanto llega al tiro a la

pulpa. Se ven de color gris. Tienen un punto de entrada pequeño y avanza

rápidamente en profundidad.

b) Crónicas:

Se forma una barrera de dentina esclerótica(es lisa, dura y brillante) que hace

que el avance sea más lento. Además gracias a la saliva que tiene flúor, IgA,

losozimas y otras enzimas se mantienen más controlados.

c) Detenida:

Dentina dura y lisa y brillante, la sonda se resbala, pero eso no indica que no

haya que tratarla.

Existen ciertas diferencias anatómicas en piezas primarias, tales como cámara

pulpares extremadamente grandes, cuernos pulpares prominentes y su

proximidad a la superficie externa de las piezas que hacen imperativo descubrir

inicialmente lesiones incipientes y que se traten con prontitud.

La detección de caries en las piezas puede enfocar por varios métodos. Con un

espejo y un explorador afilado se puede detectar caries con fosa y fisuras, y

también caries en cervicales. Si se quieren descubrir lesiones interproximales,

son esenciales las radiografías especialmente entre los amplios contactos de

molares primarios.

Las caries rampantes fue definida por Massler como un tipo de caries de

aparición súbita, extendida y rápidamente horadante, que da por resultado un

compromiso temprano de la pulpa y que afecta también a aquellos dientes que

generalmente se consideran inmunes a la caries ordinarias.

La baja de azucares refinados puede, explicar la baja prevalencia de caries.

Jay afirma que hay evidencia indiscutible de que la caries rampante es causada

por exceso de azúcar en la dieta y que la situación puede ser controlada

mediante la regulación cuidadosa de la ingesta de azucares refinados.

El fluoruro ayuda a prevenir la caries al proteger el esmalte y acelerar el

proceso de remineralización. Algunas fuentes comunes de fluoruro son el agua

potable con flúor, la pasta de dientes y algunos enjuagues bucales. Para

ayudar a prevenir las etapas iniciales del deterioro de los dientes, se deben

cepillar con regularidad con una pasta de dientes con flúor.

En general los niños con síndrome de Down no tienen más tendencia de caries

que los otros niños.

El desarrollo de la caries dental en los niños con síndrome de Down se

relaciona a la mala higiene que presentan los niños que ya que por su falta de

motricidad para cepillarse los dientes no lo realizan periódicamente el cepillado

dental.

El tratamiento puede ayudar a impedir que el daño a los dientes lleve a caries

dentales.

El tratamiento puede involucrar:

Obturaciones

Coronas

Tratamiento de conductos

ANOMALIAS DENTARIAS

Las anomalías son origen biológico y se perpetúan filogenéticamente. Como

las variaciones son naturales o adquiridas y sólo pueden observarse en las

coronas completamente formadas.

En la dentición primaria y permanente permiten ver:

Anomalías de número:

Agenesia Denaria: Cuando no erupcionan los dientes porque no se han

formado, que no es lo mismo que una inclusión dentaria.

Inclusión dentaria: Es aquel diente que se ha formado, y que no ha

erupcionado cuando cronológicamente le correspondía. En una radiografía

nunca encontraremos el diente no formado (agenesia), y si veremos el diente

incluido.

Hipodoncias (Disminución en el número de dientes) e Hiperodoncias

(Formación de mayor número de dientes), las cuales constituyen uno de los

factores locales asociados a la etiología de maloclusiones, ya que pueden

causar alteraciones en la alineación dentaria y crear problemas más complejos

de maloclusión.

Los dientes supernumerarios, en la dentadura del hombre, son los que hacen

erupción sobrepasando el número normal, tales como un tercer incisivo central

superior, un tercer canino superior, un tercer premolar.

Los supernumerarios pueden ser por la variación numérica de las series con

respecto a la simetría bilateralmente, pero con más frecuencia no lo es.

Con relativa frecuencia se encuentra también cordones epiteliales

irregularmente colocados que nacen de lámina dental, los cuales, si logran

colocarse en una región apropiada para que se desarrollen, puede dar origen a

órganos del esmalte y, por lo tanto, formar dientes supernumerarios.

Anomalías de tamaño:

Macrodoncias: Cuando erupcionan dientes más grandes de lo normal y no

caben en los maxilares.

Microdoncias: Cuando los dientes son más pequeños de lo normal, sobra

espacio en los maxilares y los dientes se separan.

Anomalías de forma:

Fusión: Es la unión de 2 ó 3 gérmenes dentarios o dientes que no han

terminado su desarrollo y que después de esta unión, completan su formación

como un solo diente.

Geminación: Es la división de un germen dentario dando origen a un diente de

corona bífida, aunque también se considera que es la unión de un diente con

un diente accesorio, el número de dientes permanentes permanece sin

alteración, la cámara pulpar puede estar unida o parcialmente dividida.

Dientes Cónicos

Dens in dens

Taurodontismo

Anomalías de erupción:

Transposiciones: Cuando hay cambio de dos piezas que erupcionan una en

sitio de otra, es más frecuente a nivel anterior.

Dientes retenidos

Anomalías del desarrollo, de origen genético y ambiental (síndromes).

MALOCLUSIONES DENTARIAS

En los niños con síndrome de Down es mayor el desarrollo mandibular, puede

producir maloclusiones dentarias futuras, ya que el empuje de esa lengua más

grande produce un mayor adelantamiento mandibular respecto al maxilar

superior, mientras que en una maloclusión correcta (forma en que muerden los

dientes), el maxilar superior está un poco más adelantado y los dientes

superiores 1-2 mm por delante de los inferiores, técnicamente esa mandíbula

adelantada se conoce como una maloclusión tipo III o prognatismo mandibular.

GINGIVITIS

La Gíngiva según fue descrita por Goldman y Cohen, es la membrana mucosa

que se extiende desde la porción cervical de los dientes hasta el surco mucoso.

La Gíngiva o encía se divide en porción papilar, que ocupa el espacio

interdental; porción marginal, que forma el collar de encía libre alrededor del

cuello del diente y la encía adherente, que es la porción adherida por tejido

conectivo denso al hueso alveolar situado por debajo.

La gingivitis es una inflamación que abarca solamente el tejido gingival próximo

al diente. Microscópicamente se caracteriza por la presencia de un exudado

inflamatorio y edema, ciertas destrucción de fibras colágenas gingivales,

ulceración, proliferación del epitelio que enfrenta al diente y la adherencia

epitelial.

Las enfermedades periodontales ocurren a cualquier edad, son generalmente

muy lentos y sus fases iniciales son comunes antes de pubertad. El término

“enfermedad periodontal” se ha asociado con las etapas finales de la

enfermedad: pérdida dental, bolsas profundas, formación de pus y graves

pérdidas óseas.

BRUXISMO

El bruxismo que se considera usualmente un hábito oral en los niños, es un

rechazamiento o frotación de los dientes, no funcional. Reding Rubringht y

Zimmerman comunicaron que el 15% de los niños y de los adultos jóvenes en

su grupo en estudio practicaban el bruxismo en cierto grado. El hábito ocurre

generalmente por la noche y si continua durante un tiempo prolongado, puede

dar como resultado la abrasión de los dientes permanentes y de los

temporarios. Cuando el hábito continúa hasta la adultez, puede producirse

enfermedades periodontal y aun trastorno de la articulación

temporomandibular.

Los niños nerviosos pueden desarrollar bruxismo, que puede continuar de

manera consciente o inconsciente durante tiempos indefinidos, no es necesario

ningún tratamiento, ya que no pasa nada porque se desgasten los dientes de

leche, de hecho, es normal que se desgasten un poco en todos los niños.

Bruxista diurno es el paciente que durante el día lo hace de forma

subconsciente y puede considerarse hábito, como apretamiento dentario

diurno, morder un lápiz, uñas, lengua, etc.

ANODONCIAS

La anodoncia, que implica la falta total de desarrollo de los dientes, es una

situación rara. Hay comunicación sobre ella como una manifestación de

displasia ectodérmica grave.

Dado que la ausencia de dientes predispone al niño a una falta de desarrollo de

los procesos alveolares, la construcción de prótesis es difícil. La displasia

ectodérmica, las estructuras esqueléticas son normales.

Radiografías seriadas demuestran que el desarrollo de los maxilares de

manera esencialmente normales

ALTERACIONES PSICOLÓGICAS

En cuanto al ritmo de los procesos de desarrollo en el síndrome de Down, se

sabe que son más lentos, lo que implica que el punto final del desarrollo estará

en un nivel inferior y, además, lo alcanzará más tarde. Se ha demostrado que,

en el caso de existir una intervención educativa correcta, se llegan a adquirir

determinadas habilidades a niveles normalizados pero de una forma más

tardía. Debido a las características de los cerebros de las personas con

síndrome de Down, aparece una hipofunción a diversas escalas entre las que

se encuentran las siguientes:

Mecanismos de atención, estado de alerta y actitud de iniciativa

El procesamiento de los estímulos en el individuo con síndrome de Down es

más lento por lo que la respuesta a éstos es tardía. Así, se puede apreciar en

estos sujetos falta de iniciativa, inconstancia, fácil distracción, hiperactividad y

movimientos sin objetivos claros.

Sociabilidad

La limitación de la actividad prefrontal se expresa como una disminución o

pérdida de las funciones inhibidoras del comportamiento, lo cual puede producir

alteraciones en la conducta social.

Existe la idea generalizada de que las personas con síndrome de Down son

sociables, con capacidad de imitación (que se utiliza para el aprendizaje),

amables, alegres, obedientes o sumisos. Sin embargo, conforme avanza la

edad aparecen rasgos de timidez, dificultad para la interacción positiva, apatía

y negatividad, pudiéndose mostrar hoscos y taciturnos. Si el ambiente no es el

apropiado, aumentan las conductas incorrectas o no constructivas, incluso las

que implican agresión u otras para llamar la atención.

El adolescente fácilmente puede llegar a aislarse. Si la educación no ha

asegurado su sociabilidad y el sentirse parte de un grupo de amigos, el

resultado será el repliegue y la soledad.

Recientes estudios han demostrado como aquellas personas con síndrome de

Down que vivían en grupo, donde el nivel de sociabilidad es mayor,

presentaban un menor índice de obesidad que aquellos que residían en su

residencia familiar.

Procesos de memoria

El procesamiento de la información requiere un mínimo grado de atención y

estado de alerta, y estará a su vez influenciado por los sistemas endógenos de

carácter afectivo e intelectivo.

En el síndrome de Down existen suficientes alteraciones cerebrales,

morfológicas y funcionales, para comprometer los sistemas de memoria a corto

y largo plazo. La información auditiva es menos eficaz que la visual.

La enseñanza de forma paciente consigue que se alcancen cotas de ciertas

formas de memoria, como la procedimental u operativa, que les permite realizar

tareas secuenciales con buena precisión.

Procesos de correlación, análisis, cálculo y pensamiento abstracto

Existen serias dificultades para el cálculo, las operaciones aritméticas y las

matemáticas. Lo abstracto y la capacidad para generalizar a partir de un

aprendizaje concreto resultan especialmente dificultosos.

ENFERMEDAD DE ALZHEIMER

La asociación entre demencia y síndrome de Down se conoce desde hace

varias décadas. Aunque se encuentran hallazgos neuropatológicos similares a

los de la enfermedad de Alzheimer, en casi todos los cerebros de personas con

síndrome de Down mayores de 40 años se presenta deterioro neurológico.

Otros autores hablan del factor temporal, manteniendo la hipótesis de que si

persistiera el incremento en la supervivencia, todas las personas con síndrome

de Down desarrollarían una demencia. La preexistencia de anomalías

congénitas asociadas a las lesiones neuropatológicas similares a las de la

enfermedad de Alzheimer podría facilitar la aparición de un deterioro en edades

medias de las personas con síndrome de Down.

También se ha señalado la posible influencia del envejecimiento como

facilitador, ya que éste ocurre a edades tempranas en el síndrome de Down. A

diferencia de la enfermedad de Alzheimer, donde el envejecimiento afecta a un

cuerpo que por lo demás puede ser normal, en el síndrome de Down hay una

afectación generalizada en todos los órganos.

Es conocida la existencia de una correlación entre la demencia, la densidad de

placas y entramados del cerebro y la edad del individuo. Así, en el síndrome de

Down, las placas y los entramados se han desarrollado entre 20 y 30 años

antes de aparecer la demencia clínicamente. Así mismo, se observa la

aparición de esta demencia con una frecuencia tres veces superior en el

síndrome de Down respecto al resto de la población.

En lo que se refiere al sistema colinérgico, se han podido detectar respuestas

anormales en pacientes con síndrome de Down. En los ancianos con síndrome

de Down y enfermedad de Alzheimer asociada, se detectaron niveles reducidos

de noradrenalina en el hipotálamo, y reducción de neuronas noradrenérgicas.

De todos modos, es difícil determinar si estas alteraciones son propias del

síndrome de Down o reflejan un proceso degenerativo a nivel de sistema

nervioso que está presente en la enfermedad de Alzheimer.

En la actualidad se encuentran todavía en curso estudios longitudinales,

apreciándose que no sólo los factores genéticos tienen gran importancia en el

desarrollo de la enfermedad de Alzheimer, sino también los ambientales.

ESTRÉS OXIDATIVO

Puesto que se trata de una alteración por dosis genética, la hiperproducción de

ciertas proteínas codificadas por los genes situados en el cromosoma 21 extra

ocasiona una distorsión del delicado equilibrio entre algunas vías metabólicas

que son importantes para el desarrollo y función de los órganos afectados por

el síndrome de Down.

Uno de los genes asignados al cromosoma 21 es el gen de la

superóxidodismutasa (SOD). El mapa de este gen está en 21q22.1. Esto queda

fuera del segmento del cromosoma responsable del fenotipo del síndrome de

Down, el llamado “segmento específico del síndrome de Down”. La SOD es

una enzima limpiadora en el sistema antioxidante, y se ha propuesto que su

hiperproducción ocasiona un incremento de peroxidación de lípidos en el

cerebro.

Las SODs catalizan la dismutación del anión superóxido (O¯2) en peróxido de

hidrógeno (H2O2), que a su vez se reduce a agua. El peróxido de hidrógeno es

metabolizado principalmente por dos enzimas, la catalasa soluble y la

glutatiónperoxidasa citoplasmática y mitocondrial. La primera de ellas reduce el

H2O2 y la segunda tiene la capacidad de catalizar tanto la degradación del

H2O2 como de peróxidos orgánicos. La enzima glutatión-peroxidasa (GSH-Px)

citoplasmática y mitocondrial contiene cuatro átomos de selenio en forma de

selenocisteína, siendo la única proteína humana conocida que contiene

selenio. La GSH-Px mitocondrial es selenio-dependiente y su actividad refleja

el estado del selenio.

El exceso de SOD en relación con la peroxidasa podría terminar en

unincremento con acumulación de H2O2, mientras que la deficiencia relativa de

SOD ocasionaría la acumulación de su radical O¯2. Los dos sucesos terminan

produciendo aumento de radicales de oxígeno y lesión celular.

Dado el papel central de la SOD-1 en la producción de H2O2 y radical hidroxilo

(•OH), se ha sugerido que el aumento de actividad de la SOD-1 en la trisomía

21 humana provocaría un exceso de producción de H2O2 y un aumento en la

peroxidación de lípido. Además, se ha propuesto que la demencia presenil

podría deberse, al menos en parte, al aumento de la peroxidación de lípidos en

el cerebro, pero no está aclarado todavía el mecanismo exacto de esta

influencia.

Las personas con síndrome de Down tienen elevada 1,5 veces la actividad de

la SOD-1, como efecto primario dependiente de dosis génica, en todas las

células y tejidos. Además, el aumento de dicha actividad puede inducir la

disminución de los niveles de neurotransmisores como la serotonina. Aunque

se ha estudiado el metabolismo del oxígeno en las personas con síndrome de

Down más que cualquier sistema metabólico, no están todavía bien definidos

los efectos de la hiperproducción de SOD-1, por lo que necesitan ser

estudiados con mayor profundidad.

LA OBESIDAD EN EL SÍNDROME DE DOWN

Debido a la alta prevalencia que tiene la obesidad en las personas con

síndromede Do wn y a los objetivos establecidos en esta tesis doctoral, hemos

considerado oportuno realizar un apartado especial a la obesidad dentro de las

patologías asociadas a este síndrome.

La obesidad constituye uno de los mayores problemas a los que se enfrentan

las sociedades modernas. El sobrepeso es el factor de riesgo más importante

para numerosas enfermedades crónicas, incluidas las cardíacas, la diabetes

tipo 2 y la artritis. También contribuyen a empeorar otros problemas de salud,

como la hipertensión arterial, la hipercolesterolemia y el asma. A pesar de que

la obesidad afecta sobre todo a los países desarrollados, no hay que olvidar

que el crecimiento económico en otras zonas en vías de desarrollo conlleva

muchas veces un incremento de su prevalencia. Los datos epidemiológicos de

los que disponemos indican un aumento de la prevalencia de la obesidad en la

mayor parte de países del mundo, hecho que comporta un aumento de la

morbimortalidad asociada. Este hecho ha provocado que la obesidad sea

considerada la “epidemia del siglo XXI”.

Muchas enfermedades genéticas que se acompañan de retraso mental se

asocian a sobrepeso y obesidad. Son varios los estudios que demuestran como

la prevalencia de obesidad es mayor en poblaciones con discapacidad

intelectual en comparación con la población general. Estos estudios muestran

como esta prevalencia aumenta a medida que el nivel de discapacidad es

menor y el nivel de independencia o autonomía aumenta.

Dentro de las enfermedades mentales, algunos estudios demuestran como

existeun mayor grado de obesidad en las personas que tienen síndrome de

Down frente a las que presentan otro tipo de discapacidad intelectual. Sin

embargo, otros autores afirman que no existen diferencias en el grado de

sobrepeso de las personas que presentan distintos tipos de discapacidad

intelectual, por lo que este hecho debe ser sujeto a nuevas investigaciones.

A pesar de la gran importancia que el sobrepeso tiene en las personas con

síndrome de Down, su prevalencia está disminuyendo en las últimas décadas

gracias a la sensibilización de las familias ante el problema, a la aplicación de

programas de prevención y a los cambios que se han producido en el estilo de

vida de estas personas. Según varios autores, la causa de la obesidad en las

personas con síndrome de Down se debe a varios factores, encontrándose

implicados tanto factores genéticos como ambientales. Los más importantes

son la disminución del gasto metabólico basal, la menor actividad física que

suelen realizar, su mayor tendencia a hacer una vida sedentaria, y la mayor

incidencia de hipotiroidismo en esa población. Por otra parte, otros estudios

incluyen dentro de los factores ambientales que tienen gran importancia dentro

del sobrepeso de este colectivo al grado de sociabilidad, los factores

socioeconómicos, el tipo de residencia, etc.

DIAGNOSTICO

A partir de 1979 se dispone en los laboratorios de una prueba en sangre que

permite establecer una sospecha diagnóstica para varios defectos congénitos

(espina bífida y otros defectos del tubo neural). Esta prueba es la

determinación de los valores de AFP (Alfa-fetoproteína), que se encuentran

aumentados en los embriones que presentan estos trastornos del desarrollo.

Varios años después se establece una relación estadística entre valores bajos

de esta proteína y la aparición de trastornos cromosómicos, en especial del SD.

En años posteriores se descubrieron algunas asociaciones similares con otras

sustancias en sangre materna. Hoy día es común la determinación de AFP,

estriol y hCG (Gonadotropina coriónica humana) para determinar el riesgo de

aparición del SD. A esto se le llama “triple prueba”. Algunos laboratorios

incluyen la determinación de inhibina (cuádruple prueba). Los valores de estas

sustancias en sangre, así como datos acerca de la edad materna y los

antecedentes personales y familiares permiten calcular un riesgo de aparición

de SD, pero no suponen un diagnóstico de certeza. Determinadas mediciones

que se realizan durante las ecografías (longitud del fémur, grosor del pliegue

nucal, y otras) también aportan información para el cálculo de ese riesgo, pero

tampoco permiten establecer el diagnóstico definitivo.

Para detectar la anormalidad cromosómica durante el periodo prenatal de

forma inequívoca se emplean técnicas de conteo cromosómico, por lo que es

necesario disponer de alguna célula fetal. El acceso al material celular

embrionario puede suponer un cierto riesgo, tanto para la madre como para el

feto, por lo que su indicación se circunscribe a aquellos embarazos en los que

se haya detectado un riesgo de aparición de la trisomía superior al de la

población general (triple prueba positiva, edad materna superior a 35 años o

paterna superior a 50, antecedentes familiares o personales de SD, o

progenitores portadores de una traslocación equilibrada u otras alteraciones

cromosómicas).

La técnica más frecuentemente utilizada para la obtención de material genético

fetal es la Amniocentesis. Esta técnica se empezó a generalizar en la década

de los 60, y consiste en la punción ecoguiada de la cavidad amniótica por vía

abdominal. Se consigue así una muestra de líquido amniótico, de donde es

posible obtener células fetales para su estudio. Debe realizarse

preferentemente entre las semanas 14 a 17 del embarazo. Es una técnica

relativamente inocua y poco molesta pero comporta un riesgo del 1-2% de

aborto, lesión fetal, o infección materna.

A mediados de los 80 se comenzó a usar otra técnica, denominada Biopsia de

vellosidades coriónicas: se obtiene un fragmento de material placentario por vía

vaginal o a través del abdomen, normalmente entre las semanas 8 y 11 del

embarazo. Esta técnica se puede realizar antes de que exista la suficiente

cantidad de líquido amniótico necesaria para que se pueda llevar a cabo la

amniocentesis, y el estudio cromosómico es más rápido pues no se necesita el

cultivo celular para obtener una muestra suficientemente grande. Presenta un

riesgo para la madre y el feto similar al de la amniocentesis.

TRATAMIENTO

A medida que va creciendo un niño con síndrome Down necesitara de cuidados

y ayuda, mas allá de lo que un niño normal necesita, un niño con retraso

mental no crecerá ni adquirirá el grado de inteligencia de un niño normal. Aun

asi muchos pueden aprender a hablar vestirse solos, a cuidar sus funciones

corporales y a interactuar con los miembros de la familia y otros niños. Ante

esta esta situación, diversos profesionales deberán formar parte del equipo

interdisciplinario de atención de estas persona.

La mejoría en los tratamientos de las enfermedades asociadas al SD ha

aumentado la esperanza de vida de estas personas, desde los 14 años hace

unas décadas, hasta casi la normalidad (60 años, en países desarrollados) en

la actualidad. A lo largo de los últimos 150 años se han postulado diferentes

tratamientos empíricos (hormona tiroidea, hormona del crecimiento, ácido

glutámico, dimetilsulfóxido, complejos vitamínicos y minerales, 5-

Hidroxitriptófano o piracetam) sin que ninguno haya demostrado en estudios

longitudinales a doble ciego que su administración provoque ningún efecto

positivo significativo en el desarrollo motor, social, intelectual o de expresión

verbal de las personas con SD. No existe hasta la fecha ningún tratamiento

farmacológico eficaz para el SD.

Los únicos tratamientos que han demostrado una influencia significativa en el

desarrollo de los niños con SD son los programas de Atención Temprana,

orientados a la estimulación precoz del sistema nervioso central durante los

seis primeros años de vida. Especialmente durante los dos primeros años el

SNC presenta un grado de plasticidad muy alto lo que resulta útil para

potenciar mecanismos de aprendizaje y de comportamiento adaptativo.

Los individuos con grandes dificultades para el aprendizaje a menudo han sido

internados en instituciones, pero se ha comprobado que deben vivir en su

domicilio, donde desarrollan de forma más completa todo su potencial. La

adaptación curricular permite en muchos casos una integración normalizada en

colegios habituales, aunque deben tenerse en cuenta sus necesidades

educativas especiales. La edad mental que pueden alcanzar está todavía por

descubrir, y depende directamente del ambiente educativo y social en el que se

desarrollan. Cuando este es demasiado protector, los chicos y chicas tienden

(al igual que ocurriría en una persona sin SD) a dejarse llevar, descubriendo

escasamente sus potencialidades. Los contextos estimulantes ayudan a que se

generen conductas de superación que impulsan el desarrollo de la inteligencia.

Como consecuencia, es imposible determinar los trabajos y desempeños que

pueden conseguir durante la vida adulta. Potenciar sus iniciativas y romper con

los planteamientos estáticos que históricamente les han perseguido son

compromisos sociales ineludibles que las sociedades actuales deben atender.

ATENCIÓN TEMPRANA

Todos los niños precisan de estímulos para el correcto desarrollo de sus

capacidades motrices, cognitivas, emocionales y adaptativas. Los niños con SD

no son una excepción, aunque sus procesos de percepción y adquisición de

conocimientos son algo diferentes a los del resto de la población: Las

capacidades visuales de los niños con SD son, por ejemplo, superiores a las

auditivas, y su capacidad comprensiva es superior a la de expresión, por lo que

su lenguaje es escaso y aparece con cierto retraso, aunque compensan sus

deficiencias verbales con aptitudes más desarrolladas en lenguaje no verbal,

como el contacto visual, la sonrisa social o el empleo de señas para hacerse

entender. La atonía muscular determina también diferencias en el desarrollo de

la habilidad de caminar, o en la motricidad fina. Todos esos aspectos deben ser

contemplados en programas específicos de atención temprana (durante los

primeros seis años de vida) para estimular al máximo los mecanismos

adaptativos y de aprendizaje más apropiados. Intentar enseñar a leer a un niño

con SD utilizando métodos convencionales, por ejemplo, puede convertirse en

una tarea muy difícil, si no se tiene en cuenta su superior capacidad visual. Hoy

día existen métodos gráficos (a partir de tarjetas, o fichas, que asocian imagen

y palabra) que están consiguiendo resultados muy superiores al clásico

encadenado de letras en estos niños. Además el objetivo de estos programas

no es tan sólo la adquisición de habilidades, sino que estas se alcancen mucho

antes, permitiendo continuar con programas educativos que integren al máximo

a la persona con SD en entornos normalizados.

CAPITULO IV

HIPOTESIS

Las principales alteraciones bucales que presentan los niños con Síndrome de Down son la caries y las maloclusiones.

DEFINICION Y OPERACIONALIZACION DE VARIABLES

VARIABLES DEPENDIENTES:

Alteraciones dentales

VARIABLES INDEPENDIENTES:

Niños con Síndrome de Down

OPERACIONALIZACION DE VARIABLES

VARIABLE

INDEPENDIENTEDEFINICIÓN DIMENSIÓN INDICADORES

Síndrome de Down

Es un grupo de síntomas mentales y físicos que resultan por tener una copia adicional del cromosoma 21.

Niños con Síndrome de Down de la Escuela de educación especial Ricardo Bentin de Rimac

Estado actual de los niños

VARIABLE

DEPENDIENTE

DEFINICIÓN DIMENSIÓN INDICADORES

Alteraciones dentales

Son alteraciones y malformaciones dentales en la cavidad bucal

Patologías alteraciones y malformaciones dentales bucales presentes en los niños.

Principales alteraciones dentales

CAPITULO V: MATERIAL Y METODOS

DISEÑO DE LA INVESTIGACIÓN

DESCRIPTIVO: Porque se demostrará el estado de la cavidad bucal en niños con Síndrome de Down.

COMPARATIVO: Puesto que se realizó un estudio de comparación en base a los resultados.

ANALITICO: Debido a que los datos obtenidos fueron analizados detalladamente para comprobar cuáles son las principales manifestaciones bucales en niños con Síndrome de Down.

5.2.- UNIVERSO DE TRABAJO

Niños con Síndrome de Down de la Escuela de Educación especial Ricardo Bentin de Rimac.

TAMAÑO DE LA MUESTRA

06 niños con Síndrome de Down de la Escuela de Educación especial Ricardo Bentin de Rimac.

5.4.- CRITERIOS DE INCLUSIÓN Y EXCLUSIÓN

CRITERIOS DE INCLUSIÓN

Tener la edad de 8-10 años.

Ser un niño con Síndrome de Down.

Que los padres permitan participar en el estudio.

CRITERIOS DE EXCLUSIÓN

Niños que no presenten Síndrome de Down.

5.5.- METODOLOGÍA

Una vez seleccionados los pacientes de acuerdo a los criterios de inclusión, se procede a entregar el consentimiento informado a los padres, los cuales serán informados del procedimiento a seguir en el estudio.

Se realizará un cuestionario que constará de 9 preguntas abiertas que serán contestadas por los padres de los niños con Síndrome de Down. A través del

cual se pretende dar a conocer la frecuencia con la cual los niños acuden al odontólogo y la frecuencia en que realizan el cepillado dental.

Se hará una revisión bucal en la cual se llenará una historia clínica de Odontopediatría, los padres de cada niño contestarán algunos apartados de dicha historia. Posteriormente se registrará la revisión clínica para determinar las manifestaciones bucales en lo niños con Síndrome de Down.

CAPITULO VI

Análisis estadístico

Para realizar el análisis de datos se revisaron las historias clínicas y el cuestionario realizado a los padres de los niños con Síndrome de Down para conocer las malformaciones bucales que se encuentran con más frecuencia en los niños con este padecimiento.

Terminada la revisión bucal y finalizando el interrogatorio se prosiguió a analizar cada pregunta de cada una de las historia clínicas para graficar los resultados y así conocer los principales padecimientos y anomalías que presentan los niños con Síndrome de Down en su cavidad bucal.

1 vez 2 veces 3veces nuncafrecuencia de cepillado

0

0.5

1

1.5

2

2.5

3

Series1

past

a de

ntal

hilo

enju

ague

ning

una

implementos que acompaña

012345

Series1

si nose cepilla con ayuda

0

1

2

3

4

5

6

7

Series1

1 vez al año 2 veces al año 3 veces al año nuncavisita al odontologo

00.5

11.5

22.5

33.5

44.5

5

Series1

ALTERACIONES DENTALESMALOCLUSION CARIES GINGIVITIS ALTERACIONES TAMAÑO ALTERACIONES DE FORMA

5 1 4 3 11 5 2 3 56 6 6 6 6

83% 17% 67% 50% 17%17% 83% 33% 50% 83%

35% 7% 28% 21% 7%28%

ANEXOS

BIBLIOGRAFÍA

Asesoramiento Genético en la Practica Medica – Delgado, Galan, Guillen – 2011

Fundamentos de Genética Conceptos y Relaciones – Benjamín A. Pierce – 2011

Articulo - sindrome down - Mercé Artigas López

Articulo - Sindrome down - Mercé Artigas López

PREGUNTAS

1. El síndrome down es de causada por:

a) Bacterias

b) Virus

c) Hongos

d) Malformación cromosómica R

2. El síndrome down es causada por la malformación de:

a. Cromosoma 11

b. Cromosoma 13

c. Cromosoma 21 R

d. Cromosoma 24

3. Cual es la epidimiologia del síndrome down

a. 1 de cada 1000 nacidos

b. 2 de cada 1500 nacidos vivos

c. 1 de cada 500 vivos

d. 1 de cada 800 – 1000 nacidos vivos R

4.El cuadro clínico mas perceptivo en SD es:

a. Retraso mental R

b. Defectos renales

c. Defectos respiratorios

d. hipotiroidismo

5.el síndrome down tiene tratamiento farmacologico

V ( ) F ( X )

6. El trisomi regular es causada por

a. Disyunción del cromosoma 21b. Disyunción del cromosoma23c. Sepracion del cromosoma 21d. No disyunción del cromosoma 21 R

7. La adhesión de un fragmento de cromosoma 21 a otro cromosoma corresponde a:

a. Traslocacion Rb. Mosaicismoc. Trisomía regular

8. El crecimiento del paciente con SD, en comparación con pacientes si alteraciones genéticas es:

a. Normalb. Lentoc. Rápidod. igual