tiempo cíclico griego

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Revista Acta Académica Universidad Autónoma de Centro América Conceptos básicos del pensamiento griego sobre el tiempo Susana Trejos Marín I. Introducción El pensamiento griego es vasto, variado, complejo, profundo. [1] No podemos esquematizarlo sin correr el riesgo de caricaturizarlo. Por tanto, lo que vamos a señalar aquí debe tomarse más como rasgo predominante de esa cultura que como característica única. Nos limitaremos a explicar cuatro características generales que perfilan a grandes rasgos algunas tendencias predominantes de este pensamiento, para luego derivar de ellas las principales concepciones griegas sobre el tiempo. 1. La idea del eterno retorno es una constante del pensamiento griego. [2] Un universo circular, que gira sobre sí mismo con un movimiento también circular, que es el movimiento perfecto porque es el más parecido al reposo, que es el estado "natural" y realmente perfecto de las cosas. El tiempo es asimilado a este movimiento circular, y por consiguiente, es considerado como una sucesión espacializada. Este tiempo circular se repite a sí mismo perennemente, por lo que la noción cíclica del tiempo impide que en él se dé lo verdaderamente nuevo, lo

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Conceptos básicos del pensamiento griego sobre el tiempo

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  • Revista

    Acta Acadmica

    Universidad Autnoma de Centro Amrica

    Conceptos bsicos del pensamiento

    griego sobre el tiempo

    Susana Trejos Marn

    I. Introduccin

    El pensamiento griego es vasto, variado, complejo, profundo. [1] No podemos

    esquematizarlo sin correr el riesgo de caricaturizarlo. Por tanto, lo que vamos a

    sealar aqu debe tomarse ms como rasgo predominante de esa cultura que

    como caracterstica nica. Nos limitaremos a explicar cuatro caractersticas

    generales que perfilan a grandes rasgos algunas tendencias predominantes de

    este pensamiento, para luego derivar de ellas las principales concepciones griegas

    sobre el tiempo.

    1. La idea del eterno retorno es una constante del pensamiento griego. [2] Un

    universo circular, que gira sobre s mismo con un movimiento tambin circular, que

    es el movimiento perfecto porque es el ms parecido al reposo, que es el estado

    "natural" y realmente perfecto de las cosas. El tiempo es asimilado a este

    movimiento circular, y por consiguiente, es considerado como una sucesin

    espacializada. Este tiempo circular se repite a s mismo perennemente, por lo que

    la nocin cclica del tiempo impide que en l se d lo verdaderamente nuevo, lo

  • irrepetible. La idea pitagrica del ciclo universal de todas las cosas ilustra bien

    esta posicin:

    Si se debiera creer a los pitagricos, de la misma manera que las cosas

    idnticas por el nmero, as, yo tambin volver a hablar, teniendo este

    bastoncillo en la mano, y vosotros estaris sentados como ahora, y de la

    misma manera se comportarn todas las dems cosas, y hay que pensar que

    el tiempo sea el mismo. Pues, siendo tambin uno solo el movimiento

    mismo, igualmente, de muchas cosas iguales, sern una e idntica la anterior

    y la sucesiva, y tambin su nmero; todas las cosas las mismas, incluyendo

    tambin el tiempo.[3]

    De ah que est presente en muy diversos autores la idea de necesidad y de

    destino. Las cosas que ocurren en el presente no tienen en realidad sentido

    propio, puesto que todo se repetir a s mismo eternamente. El concepto de eterno

    retorno est estrechamente ligado al deseo griego de aprehender intelectualmente

    el tiempo, inmovilizando lo ms posible su fluir. Esta idea paraliza tambin la

    historia y hace imposible cualquier progreso real en ella. El eterno retorno se

    fundamenta, a su vez, en la idea de una sustancia universal como principio

    primordial permanente de todas las cosas. Aristteles seala que la mayora de

    los filsofos (principalmente los presocrticos) suponen que el principio de todas

    las cosas se encuentra en una especie de sustancia material (el agua, para Tales

    de Mileto, el aire, para Anaximandro, el fuego, para Herclito, etc.) y que esta

    sustancia permanece siempre la misma en el cambiar permanente de sus

    modalidades. As, nada nace ni perece, porque subsiste siempre esa naturaleza

    (Metafsica I,3).

    2. El pensar filosfico griego intenta distinguir el tiempo de la eternidad. En las

    mltiples formas y direcciones que asume la concepcin de la eternidad y del

    tiempo en ellos hay un carcter comn: el de la superioridad que le atribuyen a la

    eternidad sobre la temporalidad. El tiempo es concebido como infinito, en su

    inacabable rotacin circular, y de esta manera se asemeja a la perennidad de la

    eternidad. Asimismo, la eternidad es concebida como perpetua duracin, lo cual la

    hace temporal. El pensamiento griego est permeado hasta lo ms hondo de

    temporalidad, no puede ni definir ni concebir la eternidad sin ligarla de una o de

  • otra manera al tiempo, sin remitirla a categoras temporales. No obstante, intenta

    distinguir entre tiempo y eternidad, y para ello trata de asimilar el tiempo, por

    medio de la concepcin de un tiempo circular, a la perennidad de la eternidad, la

    cual, como veremos, ms que concebirse como algo totalmente diferente del

    tiempo, es vista ante todo como duracin continua, lo cual, como ya hemos

    sealado, la remite de nuevo a la temporalidad.

    3. La idea del eterno retorno est vinculada tambin con el sentido de los

    lmites y la vocacin de finitud y racionalidad propias del espritu griego.

    Este pensamiento busca explicar el fenmeno de la mutacin. Desde Tales,

    vemos que la racionalidad griega busca un principio nico que d razn de la

    multiplicidad indefinida. Para ellos, lo particular solo tiene sentido en el mbito de

    la totalidad. De ah el inters por la physis, es decir, por una realidad estable con

    leyes que ordenen lo mltiple, que haya existido siempre, de la cual salgan y a la

    cual retornen todas las cosas. El griego busca lo estable, lo permanente. El eterno

    retorno hace que el movimiento bsico sea el circular, que es el ms parecido al

    reposo, lo que hace tambin que este movimiento distienda un tiempo cclico, que

    es el ms parecido a la inmutabilidad de la eternidad.

    Por otra parte, la bsqueda del lmite se convierte a la vez en pensamiento y

    atraccin por lo que trasciende el lmite. Este sentido de mesura, de equilibrio,

    unidad y racionalidad, contrasta en el espritu griego con el sentido de

    desbordamiento, desequilibrio, con la atraccin, y a la vez, el temor por lo

    indefinido e ilimitado. De modo que el carcter polifactico y variado de este

    pensamiento impide que pueda ser aprehendido en una visin nica y lineal. Pero

    podemos decir, en trminos generales, que por una parte el griego busca, como

    ideal, la finitud, la determinacin, lo que se puede pensar, y que, al mismo tiempo,

    habita en su espritu, como pesimismo ante el ilimitado poder del destino, el temor

    al infinito, a lo indeterminado, que no por ser temor deja de estar presente en su

    pensamiento. Esta contraposicin se manifiesta tambin en el tratamiento de los

    problemas que plantea lo finito y lo infinito, y en los de la eternidad y el tiempo.

    Podemos afirmar que la relacin entre el tiempo y la eternidad se presenta en los

    griegos unida al problema de lo infinito y lo finito. El griego toma conciencia de la

  • relacin ntima entre ambos problemas y se plantea el problema de lo infinito unido

    al del tiempo, el cual es considerado como infinito, infinito que es vinculado con lo

    negativo, el caos, el vaco, ya que la finitud es la completitud. En su cosmologa

    predominan diferentes formas de referir el tiempo a la eternidad, que manifiestan

    la necesidad griega de abarcar la infinitud temporal con una cierta eternidad que

    sea racional e inteligible.

    4. En el mundo griego se sostuvieron dos opiniones opuestas sobre el espacio

    y el tiempo:

    ... o el espacio y el tiempo son infinitamente divisibles, en cuyo caso el movimiento es continuo y uniforme, o se componen de mnimos

    indivisibles, y entonces el movimiento (...) consta de una sucesin de

    diminutos saltos.[4]

    Este problema de la continuidad o discontinuidad del tiempo subyace en la

    reflexin de los diferentes filsofos griegos a propsito del tiempo, principalmente

    en Zenn de Elea y en Aristteles, cada uno con posiciones diferentes al respecto.

    Las consideraciones sobre la continuidad o discontinuidad del tiempo llevan a la

    polmica sobre la homogeneidad o heterogeneidad del tiempo.

    En los apartados siguientes analizaremos ms en detalle las ideas esbozadas

    hasta aqu, y las estudiaremos en el pensamiento de cuatro filsofos griegos, a

    saber: Parmnides, Herclito, Platn y Aristteles. Este pequeo anlisis tendr

    como idea eje el tratamiento que ellos dan al problema del tiempo.

    II. Herclito (floreci alrededor del 504-500 a.C.)

    En Herclito encontramos de manera bastante marcada el entrelazamiento de

    los conceptos de tiempo y eternidad. Su conceptualizacin de la nocin de

    eternidad se realiza con nociones tales como "ayer", "hoy" y "maana". Niega que

    el cosmos haya tenido un origen:

  • Este cosmos, uno mismo para todos los seres, no lo hizo ninguno de los

    dioses ni de los hombres, sino que siempre ha sido, es y ser fuego

    eternamente viviente, que se enciende segn medidas y se apaga segn

    medidas (frag. 30).

    El cosmos que Herclito declara perenne no es el caduco ordenamiento

    presente, ya que para l "en nuestra esencia fluyente somos y no somos" (frag.

    20), sino "la universalidad de las existencias reales".[5] Si bien no es posible

    "descender dos veces al mismo ro", lo Uno, por mandato de la Razn, es todas

    las cosas (frag. 50). Afirma que el mundo es inengendrado, nico, y que encierra

    en s todo lo existente (frag. 22). Contra la idea de un demiurgo y de un cosmos

    originado de un caos precedente, Herclito opone la existencia perenne ("eterna")

    del cosmos y del fuego siempre viviente. La eternidad se presenta como infinita

    duracin del tiempo, concebido cclicamente, dentro de la concepcin del eterno

    retorno de todas las cosas. La eternidad es, pues, la perpetua cadena de los ciclos

    del cosmos. Al decir que el fuego es "siempre viviente", concibe la eternidad como

    infinitud temporal del ser. El verbo ser, en el fue y en el ser, manifiesta que la

    realidad es la misma en el pasado, el presente y el futuro, o sea, que el cosmos ha

    existido a lo largo de todo el tiempo, y que, como tal, es perenne. En l, entonces,

    la eternidad viene a ser la existencia perpetua a lo largo de toda la duracin

    temporal en el pasado, el presente y el futuro, dentro de un tiempo cclico que se

    repite sin cesar.

    III. Parmnides

    En Parmnides se contraponen de manera irreconciliable tanto la physis y lo

    particular, como el conocimiento racional, que proporciona la verdad, y el

    conocimiento sensible, carente de ella. Hay que rechazar el no-ser, pero las

    apariencias, si bien no dan la verdad, no son el no-ser.

    El tiempo forma parte de este mundo aparencial. Por tanto, ni es propiamente

    hablando, ni se puede decir de l nada cierto, por lo que Parmnides prefiere

  • negar el tiempo, en aras de la eternidad del Ser. El Ser, inengendrado e

    indestructible, est fuera del tiempo y de la sucesin, es inmutable eternamente, y

    se mantiene en un presente inalterable:

    Ya solo un mito como camino queda: lo que es.

    Y en este hay indicios

    numerosos de que el ente es inengendrado e imperecedero,

    pues completo e inmvil y ya ahora perpetuo.

    Ni fue ni ser, ya que es ahora todo al mismo tiempo,

    uno, continuo (Poema 8, 1-4)

    Parmnides trata de excluir del Ser toda temporalidad y de hacerlo eterno.

    Pero al afirmar que el Ser "ni fue ni ser, sino que es ahora", concibe esa

    eternidad como un presente permanente, y como el presente es "parte" del

    tiempo, la eternidad queda as temporalizada. El ser es eterno en cuanto excluye

    todo cambio y toda sucesin (8,27-28), porque es completo, nada le falta, y por

    tanto no puede tener futuro (8,32-33). Parmnides parece concebir la eternidad del

    Ser como lo que est totalmente fuera del tiempo y de la sucesin; pero ms que

    concebirla fuera del tiempo, la concibe como inmutable presente. Este eterno

    presente niega todo lmite temporal, su duracin no tiene ni principio ni final, es

    infinita, y por ser infinita vemos que en Parmnides la trascendencia del tiempo no

    es tan fuerte como para que no se tenga que recurrrir a l para considerar la

    eternidad, en cuanto, como hemos visto, el tiempo significa infinitud e indefinicin

    y la eternidad significa finitud y completitud. Segn la concepcin parmendea, en

    la eternidad hay sucesin, puesto que su presente es posible gracias a que se da

    a lo largo de todo el tiempo, es incompleta en cuanto requiere del transcurrir para

    ser siempre presente, "ya que es ahora, toda al mismo tiempo", igual que el ahora,

    es decir, igual que el instante. El ser "es ahora". Ser el presente de esta

    eternidad parmendea tan frgil como el instante? La eternidad como aquello que

    trasciende el tiempo se presenta solo como negacin del pasado y del futuro,

    como permanencia en el presente del ser que es, lo cual, como ya hemos

    sealado, lo refiere nuevamente al tiempo.

  • "El Ser" es un permanecer idntico en lo idntico, por lo que excluye el pasado

    en cuanto destruccin y el futuro en cuanto nacimiento, pero no excluye el antes y

    el despus de la permanencia constante de su realidad. As, la afirmacin de la

    extemporalidad es la afirmacin de la infinitud del permanecer en la infinitud

    temporal".[6]

    IV. Platn. (428-7, 347a.C). El Timeo

    Este sucinto anlisis del concepto de tiempo en Platn se va a centrar en el

    Timeo. Ciertamente, las ideas del Timeo no siempre estn acordes con las ideas

    astronmicas expresadas por Platn en otras obras, como Fedn, Repblica o

    Leyes. Adems, su pensamiento se expresa a menudo bajo la forma de alegoras

    en las que no es fcil determinar el sentido preciso.[7]

    "Cuando el Padre que haba engendrado el Mundo comprendi que se mova y

    viva, hecho imagen nacida de los dioses eternos, se alegr con ello y, en su

    alegra, pens en los medios de hacerlo ms semejante an a su modelo. Y de la

    misma manera que ese modelo es un Viviente eterno, se esforz, en la medida de

    su poder, por hacer igualmente eterno ese mismo todo. Ahora bien: lo que en

    realidad era eterno, como hemos visto, era la substancia del Viviente modelo, y

    era imposible adaptar enteramente esta eternidad a un Mundo generado. Por esta

    razn, su autor se preocup de hacer una especie de imitacin mvil de la

    eternidad y, mientras organizaba el cielo, hizo, a semejanza de la eternidad

    inmvil y una, esta imagen eterna que progresa segn las leyes de los Nmeros,

    esto que nosotros llamamos el Tiempo. En efecto, los das y las noches, los

    meses y las estaciones no existan en manera alguna antes del nacimiento del

    Cielo, sino que su nacimiento se orden al tiempo mismo en que se construa el

    Cielo. Todo eso son, en efecto, divisiones del Tiempo" (Timeo 37c-37e)

    1. Dificultades para conocer el tiempo

  • Segn Platn, hay tres gneros del ser (Timeo 49a-53d), a los cuales

    corresponden tres tipos o categoras de conocimiento: el que tiene una forma

    inmutable, que solo el entendimiento puede contemplar. El que es engendrado,

    que est siempre en movimiento y nace en un lugar determinado para en seguida

    desaparecer, accesible a la opinin unida a la sensacin, y el lugar, que es aquello

    donde lo engendrado es engendrado, perceptible gracias a una especie de

    razonamiento hbrido. El espacio es intermediario entre el mundo inteligible y el

    sensible, "... introduce lo mltiple con relacin al mundo inteligible y en (l)

    interfieren, en cierta manera, las Ideas", lo que Platn expresa matemticamente

    como la "dyada indefinida de lo grande y de lo pequeo". [8]

    En cuanto al devenir, que pertenece al segundo orden de seres, no se hallar

    nunca una verdad estable. Los razonamientos que se refieren a lo que es copia

    del ser, sern verosmiles proporcionalmente a la verdad de los primeros. Por

    tanto, en las cuestiones relativas al nacimiento del cosmos y del tiempo no se

    hallarn razonamientos totalmente coherentes y estables.

    2. El mundo y el tiempo tienen origen

    Platn se pregunta si el mundo ha tenido nacimiento o si es inengendrado, y

    da por un hecho que el mundo ha sido engendrado y que por lo tanto ha tenido un

    origen, porque tiene cuerpo, y todo lo que tiene cuerpo es causado (Timeo 28,b).

    El Demiurgo es su causa; es bueno, y por tanto ha puesto su mirada en el modelo

    eterno para formarlo, por lo que es necesario que este mundo sea la imagen de

    otro mundo. El tiempo es del orden de lo causado, y pareciera, por ser causado

    por el Demiurgo, que tambin ha de ser bello y bueno, a menos que sea

    justamente la contingencia y la limitacin de este mundo. El tiempo es hecho con

    el fin de asemejar lo ms posible el mundo a su Modelo, pero al mismo tiempo

    manifiesta la imposibilidad de que la imagen sea consistente.

  • 3. El Alma del Mundo

    Lo primero que el Demiugo forma es el Alma del Mundo, en cuya constitucin

    interviene la esencia de lo que es y no deviene y la de lo que no es y deviene

    (Timeo, 34a-36c). Est constituida por un factor ideal y por uno espacial. Posee

    espacialidad; su pensamiento se realiza en procesos circulares. En la medida en

    que su movimiento se dirige a lo inteligible es "movimiento circular de lo mismo", y

    en la medida en que se dirige a lo espacial y corpreo, es "movimiento circular de

    lo otro"; ambos movimientos son en realidad uno solo y encierran una estructura

    espacial. El movimiento del Cosmos es fundamentalmente el del Alma, que incluye

    tambin el movimiento del tiempo, el cual est regido por el Nmero, por lo que el

    tiempo tiene un fundamento espacial. Despus de formar el alma del mundo, el

    Demiurgo model el universo fsico, a travs del cual difundi el Alma universal,

    agregando finalmente a todo ello el tiempo csmico. Luego que el Alma fue

    difundida, que rode en crculo el Cosmos girando sobre s misma, "comenz con

    un comienzo divino su vida inextinguible y razonable, para toda la duracin de los

    tiempos"(Timeo 36c-37e).

    4. El tiempo es anterior o simultneo al cosmos?

    Segn el texto citado inicialmente, el Mundo est ya organizado cuando el

    Demiurgo forma el tiempo: por lo tanto, este mundo, primeramente, fue un mundo

    sin tiempo, o al menos sin el tiempo que el Demiurgo forj despus de organizar el

    Cosmos. El Mundo de las Ideas, el Demiurgo, la materia catica, el lugar y el Cielo

    estn antes de ese tiempo que surge despus del Cosmos: "... existe el ser

    absoluto, el lugar en que nace o es engendrado el ser relativo y lo que nace, tres

    trminos que existen en tres maneras distintas y que han sido hechos antes que el

    Cielo" (Timeo 52b).

    En cuanto a la materia catica, a los fundamentos supuestamente atmicos de

    los cuatro elementos, si preexistan al ordenamiento del cosmos (Timeo 30a-32a),

  • parece entonces, en consecuencia, que en Platn se puede distinguir un "tiempo"

    amorfo y catico, propio de la materia informe que existe antes de que la obra

    ordenadora del Demiurgo la convierta en un cosmos temporal y forme el tiempo

    armnico propio del cosmos. Al decir Platn: "... mientras organizaba el cielo ...",

    no deja claro si el tiempo es simultneo a la organizacin del cielo o si precede o

    antecede. En cuanto al Demiurgo, seala Platn repetidas veces que es bueno, y

    "... al que es ptimo no le estaba ni le est permitido hacer sino lo que es ms

    bello" (ib.). Si a l no le "estaba" ni le "est" permitido hacer sino lo bello, su accin

    y su ser mismo se inscriben en el tiempo, en un tiempo que estaba antes del

    surgimiento del cosmos, lo cual nos hace pensar, junto con Conrad-Martius:

    Tienen el tiempo y el mundo realmente un comienzo temporal, en cuyo caso su

    formacin debera ser simultnea?" Platn no tiene ante los ojos el tiempo mismo

    sino el tiempo en cuanto medido csmicamente por la estructura astronmica del

    universo?".[9] El tiempo que forma el Demiurgo es medido por el movimiento del

    cosmos; el tiempo todava no medido csmicamente quizs no es para Platn un

    verdadero tiempo.

    5. La definicin del tiempo toma como parangn la eternidad

    En el Timeo Platn se interesa por establecer una relacin entre ambos. El

    mundo temporal es copia de la eternidad; por tanto, en cuanto copia, es. El

    Demiurgo, al tratar de hacer su obra lo ms semejante posible a su modelo, top

    con la dificultad de que lo nico realmente eterno era el modelo. El tiempo, como

    imitacin de la eternidad del modelo, surge de la imposibilidad del Demiurgo de

    hacer perfecto el cosmos. El tiempo manifiesta esta limitacin.

    "Pero la eternidad del modelo originario no se pudo transponer al universo

    creado. El constructor del universo slo pudo crear una copia de la eternidad, que

    permanece en la unidad, es decir, una copia eterna que avanza progresivamente

    segn la pluralidad del nmero. El tiempo como imagen eterna de la eternidad!

    Esta conexin peculiar entre la eternidad y el tiempo, que aqu ya se indica,

  • proyecta una sombra significativa. La concepcin de un tiempo eterno, es decir,

    csmico, o tambin, de una eternidad temporal".

    El Demiurgo se esfuerza por hacer el cosmos lo ms semejante posible a su

    modelo, que es uno y total. Por esto el mundo ha de responder a la idea de

    totalidad y no a la de parte, ya que solo tiene razn de ser aquello que es

    contenido por la unidad, por el todo; la multiplicidad solo adquiere sentido por la

    unidad, y dentro de la totalidad. Incluso lo que todava no se ha dado y pertenece

    al futuro es comprendido necesariamente por el Todo (Timeo 41b). La totalidad va

    unida a la unidad. Por esto solo hay un mundo, y por la misma razn, ha de ser

    esfrico, ha de tener movimiento circular, y su tiempo ha de asimilarse a la

    eternidad.

    En su esfuerzo por perfeccionar el cosmos, su autor trat de hacer una

    especie de imitacin mvil de la eternidad, que es el tiempo. La eternidad es

    inmvil, es el permanecer en s misma, y el tiempo es movimiento, cambio, y se

    mueve porque, como no es perfecto, no puede permanecer en s mismo. Pero la

    perennidad del tiempo garantiza la mayor semejanza posible con el Modelo, y por

    tanto, mayor perfeccin. Segn esto, la diferencia ms clara entre la eternidad y el

    tiempo es la movilidad. El tiempo solo se manifiesta tal dentro del movimiento del

    mundo. Ahora bien, el movimiento es un bien y hace posible la semejanza entre el

    ser y el devenir, pero la eternidad es inmvil si bien, en cuanto es, participa del ser

    (Teeteto, 152d. ss.). Esta imagen eterna es imagen eterna porque es perenne,

    infinita. El tiempo es infinito a pesar de que ha tenido principio. Este principio no

    limita su existencia ya que tiempo y mundo han sido hechos con base en un

    modelo que es permanente por toda la eternidad, y no existe en Platn una clara

    distincin entre ese modelo y su imagen, porque en l, y en todo el pensamiento

    griego, est ausente la nocin de creacin, la cual proviene de la tradicin judeo-

    cristiana. En Platn, el Demiurgo no crea el mundo. l solo organiza el cosmos

    sobre la base del caos preexistente. Es necesaria una causa inteligente de la que

    dependa la ordenacin del caos en formas que imiten las ideas eternas, y el

    principio cronolgico que afirma Platn parece responder a la necesidad de atribuir

    la ordenacin a un principio inteligente. Su doctrina, pues, desemboca en una

  • concepcin de la infinitud del tiempo, segn la cual se confunde con la eternidad.

    Adems, este tiempo ordenado que es imagen mvil de la eternidad supone

    necesariamente otro tiempo que no es ni segn el nmero, ni ordenado, sino

    desordenado en cuanto en l se da el caos precedente al cosmos, y en tanto es

    sucesin de movimientos caticos. As , aunque el tiempo ordenado segn las

    leyes de los nmeros haya tenido principio, el tiempo es infinito porque est antes

    en el caos y despus en el cosmos. El tiempo es "eterno" por ser imitacin de la

    eternidad, gracias a su permanencia por medio del orden cclico, y a que es

    infinito, o sea, perenne. As, el tiempo es infinito en cuanto es perenne, la

    eternidad es temporal en cuanto es infinita.

    El pasado y el futuro son especies del tiempo que son generadas y que no

    podemos aplicar a la eternidad. De sta no podemos decir que "exista" ni que

    "existir". El paso del futuro al pasado evidencia cambios, y la eternidad es

    inmutable, inmvil, inengendrada, y no est sujeta a ninguno de los accidentes

    que implica el devenir. De la eternidad solo se predica el presente, y del tiempo

    solo se predican propiamente el pasado y el futuro (cf. Timeo 37e-39a).

    La eternidad, por su permanecer invariado, implica una confrontacin entre el

    antes y el despus de su permanencia, que se renueva al infinito de manera

    cclica, y as su perenne presencialidad implica tambin un antes y un despus,

    comparables con los del tiempo; pueden incluirlo, y as la eternidad puede ser

    "modelo" para su "imagen" perenne, que es el tiempo en su moverse segn el

    nmero. Adems, Platn define al ser eterno como existir para toda la eternidad:

    "... el modelo es ser por toda la eternidad" (Tim. 38 b), lo que convierte la

    eternidad en una "suma infinita de infinitos momentos de la inmutable

    existencia".[10] En el Parmnides (141a ss., 151e ss), Platn afirma que participar

    del ser es necesariamente participar del tiempo. Si la eternidad es, y si el ser

    participa del tiempo, la identificacin entre tiempo y eternidad es aun mayor.

    La duracin, la persistencia en el tiempo es solo la representacin de la validez

    intemporal de la eternidad; la duracin es la imagen de la eternidad. Unicamente la

    perpetuidad, la inalterabilidad, puede ser el smbolo de la eternidad. El ser como

    persistencia y duracin presenta a la eternidad en un esquema temporal, en una

  • imagen temporal, representa en el tiempo a la eternidad (...) As, pues, lo

    importante es que lo mltiple participe de la uno, lo que deviene de lo permanente;

    est en juego la relativa eternizacin de lo temporal. Pero, no importa lo

    eterno?[11]

    6. El instante

    El mundo temporal es copia de la eternidad. Lo cambiante persiste por la

    participacin de lo eterno, y lo eterno se vincula con lo temporal al sustentarlo.

    Eternidad y tiempo se conectan. En qu punto se realiza este trnsito de lo

    eterno a lo temporal? "Dnde" se realiza la participacin? Esto abre la reflexin a

    uno de los problemas fundamentales del eleatismo, y que Platn plantea con gran

    precisin en el Parmnides. Este problema es el del paso de la Unidad a la

    pluralidad. Si suponemos que la Unidad existe y que de ella se deriva la

    multiplicidad, conviene determinar dnde se produce este trnsito entre lo uno y lo

    mltiple. Si lo Uno se hace mltiple, es porque hay movimiento. Pero pasar de la

    inmovilidad al movimiento o vice versa solo es posible en un momento fuera del

    tiempo, ya que no hay un tiempo en el que un mismo ser pueda estar,

    simultneamente, en movimiento y en reposo.

    Cuando se est es movimiento, inmovilizarse, y cuando se est inmvil,

    ponerse en movimiento, puede hacerse tan solo en un momento en que se

    est fuera del tiempo (...) Digo que no hay ciertamente un tiempo en el que

    un mismo ser pueda a la vez no estar en movimiento ni estar inmvil (...)

    Por tanto, ni siquiera cambiar puede sin cambio. (Parmnides, 156 a-b).

    Vemos que la conversin no ocurre en el tiempo, pues se trata precisamente

    de convertir la eternidad en tiempo. Por lo que Platn ubica este momento del

    cambio en el instante, en lo repentino:

    No es, pues, algo extrao ese momento en el que se produce el cambio? (...)

    Este momento que llamamos el instante es, segn parece, esto: el punto en

    que se pasa de un cambio a otro (...) Esta naturaleza extraa de lo

    instantneo viene a encontarse situada entre el movimiento y lo inmvil,

  • fuera por completo del tiempo, y es como el punto en el que se pasa del

    movimiento a lo inmvil y de lo inmvil al movimiento. (ib)

    La transicin entre el reposo y el movimiento es aqu el gran problema. Si sta

    solo puede darse en el instante, la dificultad es an ms grande, porque la nocin

    de instante escapa a las categoras de ser y de no-ser. Al situar el instante

    totalmente fuera del tiempo, Platn hace de l aquello por donde la eternidad

    irrumpe en el tiempo. De la eternidad, decamos, solo se puede afirmar que es, y

    como lo nico que es (presente) es el instante, resulta que instante y eternidad se

    identifican. El instante, en este sentido, "es la participacin como proceso, no

    como estado, la participacin de lo temporal en lo eterno, de la mltiple

    representacin en lo mltiple por representar".[12]

    7. El movimiento circular

    La medida del tiempo est constituida esencialmente por el movimiento de los

    cuerpos celestes. El sol, la luna y las estrellas nacieron para definir "los nmeros

    del Tiempo, y para garantizar su conservacin" (Tim. 39a). El "nmero" perfecto

    del tiempo se cumple en el "ao perfecto" cuando se regresa al punto inicial, y

    luego, cuando comienza otra revolucin se inicia otro Gran Ao, y comienza otra

    numeracin del tiempo. As las cosas, pareciera que el tiempo de la revolucin

    anterior es diferente del de la nueva. A esto se agrega el hecho de que la

    indisolubilidad del cosmos se ve afectada peridicamente. Unas veces por obra

    del fuego, otras por obra del agua, la tierra toda es destruida. No siempre la

    divinidad gua su marcha, y cuando no lo hace, "el universo vuelve entonces a

    comenzar por s mismo, en sentido inverso, su ruta circular" (Poltico, 269c ss.).

    As, si bien la eternidad no puede ser imitada completamente por el tiempo, el

    movimiento cclico simboliza una unidad y totalidad cerradas El punto del ciclo

    vara constantemente, pero el movimiento total ocupa siempre el mismo espacio.

    Se repite sin cesar la misma trayectoria. "El movimiento circular realiza en verdad

  • la imagen de lo que permanece en la unidad a travs de lo que se mueve segn

    la pluralidad del nmero".[13]

    8. El tiempo se desarrolla en crculo siguiendo el nmero

    El tiempo que organiza el Demiurgo est vinculado al cambio, pero no a todo

    cambio, sino solo al organizado segn el nmero. Qu significa aqu el nmero, es

    cosa preada de misterio, como lo es el concepto de nmero en Platn, y en el

    pitagorismo en general. As lo expresa Martin Gottfried: "La teora platnica del

    nmero, y por consiguiente, la de la aritmtica, es tan complicada que quiz nunca

    ser completamente clarificada".[14] Lo que constituye el ncleo de la teora

    platnica sobre el nmero es que todo nmero es Idea. Hay una idea de lo uno,

    que no siempre es vlido como nmero para el griego. Si los nmeros tienen un

    ser ideal, el problema es cmo se dan, siendo as que las ideas se aplican

    distributivamente a unidades y el nmero no. En su madurez, Platn pens que los

    nmeros derivan de principios (Parmnides 143 c ss.), que los identifica ms con

    un elemento de participacin. La relacin del tiempo con el nmero est muy

    ligada al problema de la medida del tiempo. Para poder medir el tiempo es

    necesario discontinuarlo, y esto es lo que hace el nmero. Intemporiza el tiempo e

    inmoviliza el movimiento, los asemeja a la eternidad. El nmero sera el mediador

    entre el tiempo y los conceptos, el intermediario matemtico entre lo sensible y la

    Idea. El tiempo csmico se constituye con ayuda del nmero, como medida y

    principio de orden y perfeccin, es la organizacin temporal del mundo. Los ciclos

    celestes, en el perpetuo girar del eterno retorno, hacen del universo un gran reloj,

    que con su rtmico y constante repetirse imita la eternidad.

    9. Sntesis

    En sntesis, podemos decir, en primer lugar, que de lo generado y sensible no

    cabe un conocimiento firme y verdadero, por lo que el estudio del tiempo se

  • inscribe en el conocimiento inseguro, de opinin, si bien el dilogo Timeo se

    esfuerza por tratar el tiempo y el cosmos de manera lgica y rigurosa. El

    ordenamiento del cosmos es el resultado de un insigne esfuerzo del Demiurgo,

    que por bondad ha deseado organizar el caos, pero cuyo poder es limitado,

    precario, dbil y perecedero. Es la organizacin de la materia catica precedente,

    a fuerza de asemejarla a un modelo inteligible eterno, incapaz de mantenerse en

    orden si se abandona a sus propias fuerzas, y que peridicamente ha de ser

    restaurado y renovado en un nuevo y trabajoso ordenamiento. El tiempo que se

    mueve segn el nmero, imagen mvil de la eternidad, representa el punto

    mximo de acercamiento al modelo y ha sido formado para esto. Es una imagen

    flaqueante de la eternidad, manifiesta la incapacidad del Demiurgo de hacer un

    cosmos lo suficientemente consistente y perfectible como para que pueda tener la

    permanencia del paradigma, pero que a pesar de toda esta imperfeccin ayuda al

    cosmos a asemejarse al modelo eterno. Mas el tiempo no puede asemejarse a la

    eternidad sino solo asemejndola a s mismo. Pareciera que lo que distingue el

    tiempo de la eternidad es el movimiento; pero lo que se mueve es lo que est en el

    tiempo, principalmente los astros; el tiempo no es el movimiento, tampoco es el

    nmero, que ms bien lo intemporiza y discontina. No se puede identificar ni con

    el movimiento, ni con lo que se mueve, ni con el nmero. No queda claro ni qu es

    el tiempo ni qu es la eternidad.

    Lo que es inmortal es el deseo del Demiurgo de organizar el caos. El tiempo

    es infinito porque se da siempre en el devenir cclico del caos al cosmos, como

    esfuerzo perenne de mantener la imagen del Modelo.

    La eternidad del Modelo es el perenne presente de su inmutabilidad. Ambos,

    tiempo y eternidad, son un permanecer; uno, en el devenir, la otra, en la

    inmovilidad; el ser de la eternidad es un es y todo lo que es participa del tiempo.

    La eternidad se asimila al tiempo del cual es modelo. El ordenamiento del caos se

    hace con base en un modelo que no se distingue claramente de lo modelado. La

    trascendencia del Modelo y la consistencia del cosmos no quedan salvadas.

  • V. Aristteles

    A. El plano fsico

    Aristteles comienza a estudiar el tiempo desde un punto de vista metafsico.

    En primer lugar, se pregunta si el tiempo es o no es, si pertenece al mbito del ser

    o al del no-ser. Qu relacin tiene el tiempo con el ser? Podra suponerse que el

    tiempo no es, porque no existe de modo absoluto: ha sido y ya no es (pasado), va

    a ser pero todava no es (futuro), y lo que est "constituido" por no-seres no

    participa de la substancia (Fsica, 218 a ss.) . Sin embargo, el tiempo es divisible,

    y lo que tiene esta cualidad supone la existencia de al menos una de sus partes.

    Pero ninguna parte del tiempo es, aunque sea divisible, porque el instante que es

    (presente) no es una parte del tiempo, ni es divisible. Si el tiempo estuviera

    constituido de instantes, sera una realidad puntual, y no un continuo, como lo

    supone Aristteles. Por tanto, en el plano metafsico, el tiempo no tiene ser, no

    tiene substancia. Por esto Aristteles retrotrae su anlisis al plano fsico, y analiza

    el tiempo desde el movimiento. De ah que defina al tiempo como "el nmero del

    movimiento segn el antes y el despus" (Fsica, 219b). A lo largo de su anlisis

    sobre la relacin entre el tiempo y el nmero distingue cuatro elementos: 1. Lo que

    es numerado, que es el movimiento. 2. Lo numerable de lo que es numerado, que

    es el tiempo. 3. Aquello con lo que se numera, que es el instante. 4. Y quien

    numera, que es el intelecto. Veamos:

    1. El movimiento

    El problema del tiempo se ubica en el mbito de la fsica, porque el tiempo se

    deriva del movimiento de los entes fsicos. Para l, la naturaleza es "un impulso

    innato al movimiento" (ib.). El universo entero se mueve, atrado por el primer

    motor inmvil, primer principio que mueve todo por amor (Metafsica, 1072 b), y

  • que logra en plenitud el modo de ser perfecto: la inmovilidad total. La esfera

    celeste, que es la ms cercana al primer motor, no reproduce a cabalidad este

    gnero de vida, pero se acera a l lo ms posible movindose con el movimiento

    fsico perfecto que es el de traslacin circular, movimiento que realiza sin violencia

    alguna (Del Cielo 276a).

    Aristteles sostiene a la vez la realidad, la continuidad y la razn de ser del

    movimiento.[15] El movimiento es fundamentalmente el paso de la potencia al acto,

    el trnsito de un estado a otro, requiere del lugar y del tiempo, y no existe fuera de

    las cosas (Fsica 200b). Presupone la forma, la privacin y la materia (Met.1071a).

    La privacin se entiende no como un elemento ms, sino como aquello que no

    tiene en acto y hacia lo cual tiende la cosa que cambia y que ya es en potencia.

    Por tanto, "el movimiento es una especie de acto" (Fis. 201b), y como el acto

    precede a la potencia (Met. 1072 a), el movimiento es eterno, porque es la

    perenne tendencia del universo hacia el acto puro, el primer motor inmvil. Lo

    eterno es actual y anterior a lo perecedero, por lo que nada pasa de la potencia al

    acto sin la accin de alguna cosa actual. "Todo lo que se mueve es cambio desde

    algo hacia algo, y estas cosas, es decir, el desde qu y el a qu del camino,

    difieren especficamente" (Del Cielo 277a).

    Esto hace que el movimiento circular no sea un movimiento propiamente

    dicho, porque el desde y el hacia son un mismo punto. Por esto, no existe ningn

    movimiento que sea contrario al de rotacin. En este sentido, equivale al reposo, a

    la inmovilidad del primer motor.

    Niega que el tiempo sea el movimiento del todo o universo, o que sea la esfera

    misma del universo. El tiempo no es ni el movimiento ni el cambio, que para el

    caso son lo mismo. El movimiento de cada ser est solo en la cosa que cambia o

    donde se encuentra, mientras que el tiempo est en todas partes de la misma

    manera, aunque el cambio sea ms rpido o ms lento, pues la lentitud y la

    rapidez son definidas por el tiempo: "el tiempo no es el movimiento ni existe sin el

    movimiento" (Fis. 218b).

    Toda magnitud es continua para Aristteles. El movimiento tambin es

    continuo, y gracias a la continuidad del movimiento tambin es continuo el tiempo.

  • La magnitud espacial es continua y constituye el continuo primordial; el

    movimiento es continuo porque es movimiento a travs de un espacio continuo, y

    el tiempo es continuo porque est ocupado por un movimiento continuo. Cmo

    es que, si el nmero hace discontinuo el tiempo, y para Aristteles el tiempo es

    continuo, el tiempo es nmero, medida? Del mismo modo, lo anterior y lo posterior

    se originan en el lugar y se refieren al orden de la posicin. Ahora, como lo que

    est antes o despus en el espacio es una magnitud, y en la magnitud est el

    movimiento, la anterioridad y la posterioridad se relacionan, en segundo lugar, con

    el movimiento, y como el movimiento y el tiempo se siguen mutuamente uno del

    otro, la anterioridad y la posterioridad se relacionan, en tercer lugar, con el tiempo.

    La relacin anterior-posterior, si bien no es el movimiento, se da en el movimiento

    de la cosa que se mueve (Fis. 218b-219a). Por la continuidad del movimiento y la

    posibilidad de determinarlo segn lo anterior y lo posterior llegamos al

    conocimiento del tiempo; sabemos que ha transcurrido un tiempo cuando

    captamos en el movimiento una relacin de anterioridad y posterioridad, lo cual

    manifiesta que tomamos la anterioridad como un trmino distinto de la

    posterioridad y que reconocemos en medio un intervalo distinto de ambos

    trminos. As, cuando distinguimos dos instantes, uno anterior y otro posterior,

    reconocemos que hay un tiempo; en otras palabras, podemos reconocer un lapso

    cuando distinguimos un antes y un despus, cuando distinguimos dos instantes y

    un intervalo entre ellos, porque lo que est limitado por instantes es tiempo, y solo

    cuando hacemos esta distincin reconocemos el tiempo. Por esto el tiempo es "el

    nmero del movimiento segn el antes y el despus". Al decir Aristteles que

    reconocemos un lapso cuando distinguimos dos instantes, uno anterior y otro

    posterior, pareciera referirse a la percepcin interna del tiempo, a la distincin que

    hace el sujeto, pero este aspecto del problema no lo desarrolla. Pero ya ha dicho

    que es percibiendo el movimiento como percibimos el tiempo, y concluir que el

    tiempo es algo perteneciente al movimiento. El tiempo est primordialmente en el

    mundo fsico, el sujeto que lo percibe est en otro plano, y solo funciona en l si lo

    hace de la misma manera que en las dems cosas. El tiempo no es el movimiento,

    pero solo existe en cuanto el movimiento implica un nmero; prueba de ello es que

  • el nmero nos permite distinguir el ms y el menos, y el tiempo nos permite

    determinar el ms y el menos del movimiento. Por esto el tiempo es nmero, no

    como aquello por lo cual se numera, como nmero puro, sino como el aspecto

    numerable del movimiento, como lo contable del movimiento. El instante permite

    medir el tiempo, as como el punto permite medir la lnea, y gracias al instante el

    tiempo puede ser numerado. Por lo que cabe suponer que, si el instante, que no

    es parte del tiempo, es lo que permite medir el movimiento, y el tiempo es la

    medida del movimiento, el tiempo es definido en Aristteles por aquello que no

    forma parte del tiempo.

    2. El infinito

    El movimiento es un continuo, y el infinito hace su aparicin primera en lo que

    es continuo (Fs. 200b). Aristteles se opone a la idea de que el espacio y el

    tiempo estn constituidos de mnimos indivisibles (el instante en el caso del

    tiempo), e intenta sustentarlo en algo continuo, que es la esfera celeste mvil y

    eterna. Distingue el infinito como adicin interminable de partes, infinito por

    composicin, y el infinito por divisin, como aquello que es divisible ad infinitum. El

    nmero es infinito por adicin, el espacio por divisin, y el tiempo lo es en ambos

    sentidos (Fis. 206b).

    En el Del Cielo (270b-284a) se dedica Artitteles a demostrar la finitud

    espacial y la unicidad del universo, as como la infinitud temporal o perennidad de

    su duracin. Sustenta estos argumentos en principios lgicos como el de identidad

    y en teoras como la del lugar natural, del reposo, de los cuatro elementos

    fundamentales, de la ausencia de vaco, y del valor de la verdad en la experiencia

    sensible. Demuestra que es imposible que exista un cuerpo infinito, que no puede

    haber ms que un mundo y que este es inengendrado e incorruptible. En la Fsica

    (203b ss.) da los argumentos que demuestran que afirmar el infinito en acto

    conduce a imposibles y a absurdos. Hay que determinar, entonces, si existe o si

    no existe, y, si existe de qu manera existe.

  • Aristteles entiende el infinito en dos sentidos:

    a. "Lo que no puede ser trascendido ni excedido, porque no es naturalmente apto para ser abarcado o medido" (Fis. 234a), lo cual es un defecto, no una cualidad: "El todo

    y lo perfecto son absolutamente lo mismo, o al menos son naturalmente afines entre

    s. Ahora bien, no hay nada perfecto sin un lmite, y el lmite es un trmino"

    (ib.207a).

    La idea de infinito contradice la de totalidad abarcable y por ende la de

    racionalidad. El todo ha de abarcarlo todo para ser el todo, y el infinito no puede

    abarcarlo todo porque no tiene lmites: "Infinito es aquello en que, tomada una

    determinada cantidad, siempre es posible tomar algo ms fuera de ella. Por el

    contrario, aquello fuera de lo cual no existe nada, eso es perfecto y es un todo. En

    efecto, as definimos el todo: aquello a quien no le falta nada..." (ib.).

    Aquello que requiere siempre de algo nuevo no es autosuficiente; al considerar

    Aristteles el infinito como aquello a lo cual siempre le falta algo, lo define como

    privacin y no como completitud, como carencia y no como acabamiento. Al

    alejarse de la totalidad, el infinito se aleja de la perfeccin.

    Si bien el infinito no es el todo, s es potencialmente un todo, y esto posibilita

    que sea en algn sentido, y lo es, gracias a otro ser distinto de l: la cosa finita

    potencialmente divisible al infinito. El infinito no contiene todos los seres, sino que,

    por el contrario, es comprendido, en cuanto es infinito, por el ser finito, que es

    parte de la totalidad, es en s mismo un todo en acto, y por ser potencialmente

    divisible al infinito, permite y contiene la existencia del infinito potencial. "De donde

    es evidente que el infinito tiene preferentemente razn de parte y no de todo" (ib.).

    En conclusin, el infinito no se puede dar de una manera actual, sino que

    existe solo como accidente.

    b. Por otra parte, la negacin de la existencia del infinito, provoca una serie de consecuencias inaceptables, tales como la finitud del tiempo y del nmero, la

    indivisibilidad de los cuerpos, y la discontinuidad del movimiento y del tiempo. Un

    tiempo con principio y fin, lineal, anula la perennidad del movimiento del universo,

    al par que todo cuerpo debe ser en potencia divisible al infinito. El infinito existe,

    entonces, en su segundo sentido, "como aquello cuyo evolucin no tiene

    trmino"(Fsica 234a), como lo es el tiempo.

  • 3. El instante

    Desde que inicia el estudio del tiempo, Aristteles lo vincula con el problema

    del instante (en griego: el "ahora"), y esto en virtud de su relacin con el

    movimiento. El instante no es una parte del tiempo, porque el instante no tiene

    extensin, y la parte es una medida del todo. Se pregunta si el instante que divide

    el pasado del futuro es siempre el mismo o es siempre nuevo, y esta pregunta lo

    lleva irremediablemente a una antinomia: o bien el instante se est convirtiendo

    constantemente en otro diferente, o permanece siempre el mismo. Si partimos del

    supuesto de que ningn intervalo del tiempo puede coexistir con otro y que lo que

    ya ha pasado debe haber sido destruido, tampoco los instantes podrn coexistir y

    el que precede habr de ser destruido. Pero no puede ser destruido en s mismo,

    porque entonces no existira, y tampoco puede ser destruido en otro, porque no

    pueden coexistir. Por esto la sucesin de los instantes es imposible, no se pueden

    alinear como si fueran una sucesin de puntos. Por otra parte, si el instante fuera

    el mismo, coexistiran el pasado, el presente y el futuro, y entonces no existira el

    tiempo, ya que el tiempo es tiempo precisamente porque pasa (Fsica 218 a) .

    Cmo puede hacerse pasado aquello cuya esencia es ser presente?

    "Qu es lo que realmente se ha extinguido en el cambio de presente a

    pasado dentro del flujo continuo del tiempo? El ahora presente mismo, y en

    cuanto tal, ciertamente no. Ese ahora solo se ha movido a otro lugar de la

    corriente del tiempo. O, dicho exactamente, ha cambiado su lugar con el flujo del

    tiempo. Nada ms. El mismo, en cuanto elemento del tiempo cualificado como

    ahora ha permanecido idntico consigo mismo".[16]

    El ahora no puede convertirse ahora en un no-ahora. Si un instante no dejara

    de existir cuando llega el siguiente y coexistiera con l, existira simultneamente

    con el infinito nmero de instantes que hay entre los dos, cosa imposible; y

    adems, un instante no podra continuar siendo porque entonces ya no sera

    instante. Este es el problema de la identificacin del instante: el tiempo se hace

  • continuo por medio del instante y se divide por medio del instante. Todo el flujo

    continuo del tiempo parece ser una contradiccin en s mismo, del que solo

    podemos sealar su carcter dialctico, razn por la cual Aristteles retrotrae su

    anlisis al plano fsico.

    El tiempo, en su constante suceder, es siempre distinto, y tomado en conjunto,

    es uno y el mismo, pues cada momento (ahora) del tiempo es instante en su

    esencia, como todos los otros momentos, pero es un instante diferente, y puede

    medir el tiempo porque el anterior es diferente del posterior, de igual manera como

    el punto permite conocer la anterioridad y la posterioridad del movimiento. El

    instante como sujeto es una identidad aunque admite distintos atributos; mide el

    tiempo en tanto el tiempo abarca el antes y el despus, y mantiene su continuidad.

    Por lo que se ve que el problema del instante est estrechamente relacionado con

    el problema de la continuidad. La magnitud contiene los caracteres de continuidad

    y divisibilidad, y por esto lo tienen el movimiento y el tiempo (Fis.221a). As como

    en el movimiento la cosa que es transportada es la misma, pero su esencia difiere

    segn su posicin anterior o posterior, as en el tiempo, el ser transportado es el

    instante, y es este el que permite conocer la anterioridad y la posterioridad del

    tiempo; tenemos el instante en cuanto la anterioridad y la posterioridad son

    numerables. Por esto el instante es el mismo como sujeto y en cuanto a su

    esencia.

    "El tiempo es, en efecto, el nmero del movimiento de traslacin, y el instante,

    lo mismo que el ser transportado, es como la unidad del nmero (...) El instante

    es, por una parte, divisin en potencia del tiempo; por otra parte es el lmite y el

    nexo de unin de las partes. Ahora bien, en cuanto al sujeto, la divisin y la

    unificacin son una misma cosa, aunque no lo son por lo que respecta a la

    esencia"(ib.)

    Por ser el tiempo y el espacio divisibles al infinito, no existe ni un tiempo ni un

    lmite mnimo. El tiempo puede ser largo o corto, mucho o poco, pero no puede ser

    rpido ni lento, pues l es el nmero que mide el movimiento, su rapidez o lentitud,

    y no hay ningn nmero que mida la velocidad del tiempo. Es el mismo en todas

    partes, pero es distinto a cada momento. Es nmero como cantidad numerada o

  • medida en la diversidad del instante anterior o posterior; en cambio, el nmero

    matemtico es siempre el mismo.

    4. Negatividad del tiempo

    Para el movimiento, estar en el tiempo es ser medido por l mientras existe,

    mientras algo se mueve, con base en una unidad de medida que es un lapso del

    mismo movimiento, es ser medido en virtud de s mismo. Para los dems seres,

    estar en el tiempo es ser medido en sus existencias bajo la accin del tiempo, es

    estar contenido por el tiempo, tener una existencia temporal; la existencia en el

    tiempo no es coexistir con el tiempo sino existir en un determinado tiempo. El

    tiempo contiene y envuelve todo lo que en l existe y lo modifica; su accin

    consume y envejece, todo lo borra, es "causa de destruccin, ya que l es el

    nmero del movimiento y el movimiento deshace lo que existe" (ib. 221b).

    Todo cambio es inestable, y en el tiempo todo se engendra y se destruye; es

    causa ms de la destruccin que de la generacin porque por s mismo es

    inestable y agotador. Aristteles quiere considerar al tiempo como ms destructor

    an que el movimiento, para lo cual seala que ningn ser deviene sin ser movido

    y que en cambio una cosa puede ser destruida sin ser movida (ib. 222b). Pero,

    qu cosa puede ser destruida sin ser movida? Aristteles valora el tiempo solo

    desde el punto de vista negativo, y esto porque el movimiento tambin lo es. La

    existencia plena es la del motor inmvil; el movimiento existe porque las cosas lo

    buscan sin lograr alcanzarlo. El tiempo solo existe por privacin, en potencia. Por

    tanto, los seres que son siempre no existen en el tiempo, no estn contenidos, ni

    medidos, ni influenciados por l.

    El tiempo es nmero del movimiento continuo en general, y no de ningn

    movimiento en particular (ib.222a). Es el nmero del movimiento de traslacin

    circular uniforme de la esfera celeste, cuyo movimiento es el que ms se asemeja

    a la inmovilidad del primer motor (ib. 223b). Es imposible que el tiempo se agote

    porque el movimiento existe siempre. Tampoco es posible que el tiempo se repita

  • peridicamente porque es igual que el movimiento y "... si el movimiento, en un

    tiempo determinado, es nico e idntico, tambin el tiempo ser nico e idntico;

    si no lo es el movimiento, tampoco el tiempo" (ib. 222b). Por lo que la

    irrepetibilidad del tiempo depende de la del movimiento y, a la vez, la irrepetibilidad

    del movimiento depende de la del tiempo.

    5. El tiempo, medida del reposo

    Puesto que el tiempo es medida del movimiento, es tambin medida del

    reposo, ya que "todo reposo est en el tiempo" (ib. 221), pues el tiempo es nmero

    del movimiento y en el nmero del movimiento puede existir tambin lo que est

    en reposo, ya que solo puede estar en reposo lo que tiene posibilidad de

    movimiento. El movimiento solo abarca las cosas que estn en movimiento o

    reposo y solo mide la cantidad de movimiento y de reposo de las mismas, y no la

    cantidad o magnitud del cuerpo en movimiento o en reposo. As, pues, "el tiempo

    es medida del reposo y del movimiento", por lo que el acto puro no est ni en

    movimiento ni en reposo sino que trasciende estas categoras. Asimismo, el no-ser

    no estar en el tiempo a menos que llegue a ser (ib).

    6. El primer motor inmvil

    El mundo es eterno porque la sustancia eterna eternamente lleva a cabo su

    capacidad de obrar; la atraccin que ejerce sobre el mundo es eterna (Met.

    1072b). Ahora bien, Aristteles demuestra la existencia del primer motor por la

    necesaria existencia del movimiento y del tiempo. Si bien piensa la finitud como

    positiva, argumenta la existencia de la suma perfeccin basndose en la necesaria

    infinitud del cambio y del tiempo. Demuestra la necesidad de la eternidad o

    infinitud del tiempo, por la necesidad de la eternidad del movimiento, esta, por la

    eterna atraccin del primer motor, y la existencia de este por la necesaria

    eternidad del movimiento y del tiempo.

  • El primer principio es el mejor, es la causa de la eterna constancia e igualdad.

    Gracias a l, el primer cielo es eterno, y esta eternidad consiste en su inagotable

    movimiento, del cual el tiempo es un nmero; por esto, tiempo y eternidad se

    confunden. "El primer motor es esencia pura y acto puro y mueve a manera de lo

    que es objeto de amor" (Met. 1072b), porque es bello y deseable. Posee la

    duracin y la vida en sumo grado porque siempre es y porque el placer es su acto,

    y por esto es feliz. No tiene materia, por lo que es uno, "es una entelequia, un ser

    perfecto o actual" (Met. 1074a), su unicidad determina la del universo, es

    pensamiento del pensamiento (Met 1074b), y es bueno porque "en todos los seres

    el principio por excelencia es el bien mismo" (Met.1075a). Aristteles define la

    eternidad as:

    ... el fin del cielo entero, el lmite o fin que contiene todo el tiempo y la

    infinitud, es la eternidad, nombre derivado de ser siempre; eternidad

    inmortal y divina. De ella depende, para los dems, en unos con mayor

    claridad, en otros ms confusamente, el ser y el vivir. Es divina, se mueve

    con un movimiento incesable de rotacin (Del Cielo 279a).

    Vemos aqu que la eternidad puede ser entendida en dos sentidos: como el

    acto puro, el primer motor inmvil que acta siempre del mismo modo, que se

    concibe como tal por la necesidad que tiene el cosmos de l, y como la esfera de

    las estrellas fijas o primer cielo.

    7. Tiempo y eternidad

    La extratemporalidad se concibe y se prueba por la temporalidad. Aristteles

    excluye a la eternidad de toda limitacin temporal, pero con esto no la confronta

    con el infinito transcurrir del tiempo; las cosas eternas existen "para toda la

    eternidad" lo cual la transforma en un infinito temporal, o sea, considera en la

    eternidad la infinita duracin.

    "Hay, por consiguiente, en el cosmos, la eternidad del ser y la eternidad del

    devenir; pero, por la inescindibilidad que los liga recprocamente en el cosmos,

    tambin el ser de este cae en el tiempo y su eternidad es infinitud temporal". [17]

  • Su eternidad se confunde con la del tiempo. Aristteles quiere mostrar el

    absurdo del regressus ad infinitum (Fis. 242b), la existencia eterna del movimiento,

    y la necesidad de detenerse en una causa primera. Es necesario reconocer un

    motor inmvil, que es primero no cronolgicamente sino ontolgicamente, fin y

    razn de todo orden de los movimientos csmicos.

    Su esfuerzo por fundar la infinitud del tiempo y la eternidad del mundo sobre la

    eternidad divina, manifiesta que la infinitud del tiempo es superior a la limitacin en

    la duracin, y la infinita rotacin del cielo es superior a todo otro movimiento.

    "Hay, por consiguiente, un campo en el cual tambin Aristteles no duda en

    reconocer una excelencia mayor a lo infinito que a lo limitado: perfecto e inmortal

    equivalen".[18]

    Aristteles no solo es cumbre del proceso de finitizacin de la concepcin

    griega del cosmos, sino que piensa lo infinito, tal como lo ha precisado, no solo

    como lo negativo, sino tambin como positivo y necesario.

    B. El plano psquico

    Finalmente, Aristteles seala la importancia de las relaciones del tiempo con

    el alma. Si no existe nada que verifique la operacin de contar, no habr nada

    susceptible de ser contado y por consiguiente, tampoco habr nmero. Si solo el

    intelecto, en el alma, puede contar, sin alma no puede haber tiempo como lo

    numerable del movimiento:

    Pero la cuestin ms embarazosa es la de saber si existira el tiempo sin el

    alma o no existira, pues si no puede existir nada que verifique la operacin

    de contar, tampoco habr nada susceptible de ser contado, y por

    consiguiente, tampoco habr nmero, ya que nmero es o bien lo que es

    susceptible de ser numerado o lo que es numerado. Pero si no existe nada

    que por su naturaleza pueda contar fuera del alma, y en el alma la

    inteligencia, no puede haber tiempo sin el alma, excepto por lo que se refiere

    al sujeto del tiempo, como si, por ejemplo, se dijera que el movimiento

    puede existir sin el alma. Lo anterior-posterior, pues, est en el movimiento,

    y en cuanto se puede numerar o contar, constituye el tiempo (Fis. 223a).

  • Aristteles seala que si no existe nada que verifique la operacin de contar,

    tampoco habr nada susceptible de ser contado. Es decir, sin sujeto consciente de

    la temporalidad, el tiempo no existira como medida de nada. Por lo que no puede

    haber tiempo sin alma. Seala esto, pero no lo analiza ms. Solo insina el

    problema en este texto, pero parece pasar de largo ante el problema que plantea,

    puesto que no lo desarrolla. Este problema queda apenas sealado aqu,

    justamente porque Aristteles solo lo indica, no lo profundiza y no saca de l todas

    sus consecuencias.[19]

    VI. A modo de conclusin

    Herclito se refiere a la eternidad con nociones tales como "ayer", "hoy" y

    "maana". En l la eternidad se presenta como infinita duracin del tiempo. La

    eternidad es la perpetua cadena de los ciclos csmicos. Parmnides temporaliza

    la eternidad al hacerla presente permanente. La concibe como inmutable presente,

    presente que es posible gracias a que se da a lo largo de todo el tiempo, es decir,

    requiere del transcurrir para ser siempre presente. Platn da por un hecho que el

    mundo es engendrado y que ha tenido origen. El movimiento del cosmos es

    fundamentalmente el del Alma, que incluye tambin el movimiento del tiempo,

    regido por el Nmero, por lo que el tiempo tiene un fundamento espacial. Es, solo

    en cuanto es imagen del Modelo. Es "eterno", por ser imitacin de la eternidad. De

    la eternidad solo se puede decir que es, como en Parmnides. Por lo que la eterna

    presencialidad tiende a convertirse en perenne duracin presente, que implica una

    referencia a la sucesin temporal. La participacin de lo eterno en lo temporal se

    hace en el instante. El instante permite el ingreso en el tiempo, por lo que l

    mismo no es tiempo.

    Aristteles centra su estudio del tiempo en el plano fsico. Es la medida del

    movimiento de la esfera de las estrellas fijas. Es nmero en cuanto es el aspecto

    numerable del movimiento. Es infinito tanto como adicin como por divisin. El

    instante permite que el tiempo pueda ser numerado; es el continuo y el lmite del

  • tiempo. Por un lado, divide potencialmente al tiempo, y por otro, garantiza su

    continuidad. Demuestra la necesidad de la eternidad o infinitud del tiempo, por la

    necesidad de la eternidad del movimiento, esta, por la eterna atraccin de primer

    motor, y la existencia de este por la necesidad de la eternidad del movimiento del

    tiempo.

    Vemos as que el pensar filosfico griego intenta distinguir el tiempo de la

    eternidad. El tiempo es concebido como infinito, ya sea real o potencialmente,

    segn los diferentes pensadores. El tiempo es concebido como perenne, y la

    eternidad, como perpetua duracin.

    Hemos visto tambin cmo la idea del eterno retorno est a la base de las

    consideraciones griegas sobre el tiempo. La nocin cclica del tiempo impide que

    en l se d lo nuevo, lo irrepetible. Est presente en los diferentes pensadores la

    idea de necesidad y de destino. La idea del eterno retorno est vinculada tambin

    con el sentido de los lmites y la vocacin de finitud y de racionalidad propias del

    espritu griego. El eterno retorno hace que el movimiento bsico sea el circular,

    que es el movimiento ms semejante al reposo, y hace que este movimiento

    distienda un tiempo cclico, que es el ms parecido a la inmutabilidad.

    La relacin entre el tiempo y la eternidad se presenta en los griegos unida al

    problema de lo infinito y lo finito. El tiempo es ligado a lo infinito y la eternidad a lo

    finito y racional. Por lo que cabe preguntarse si el pensamiento griego capt

    verdaderamente la temporalidad del tiempo. A este respecto, vale la pena citar la

    afirmacin de Bergson:

    "La ciencia de los antiguos es esttica. O considera en bloque el cambio que

    estudia, o, si lo divide en perodos, hace de cada uno de esos perodos un

    bloque de nuevo: lo que deja decir que su ciencia no toma en cuenta el

    tiempo".[20]

    Notas de pie de pgina

    [1] La riqueza del pensamiento griego revela no solo la riqueza propia, sino la enorme influencia que recibieron de otras culturas. "En sus comienzos, la historia de la

  • filosofa griega se encuentra frente al muy discutido problema de los orgenes, que se refiere particularmente a las relaciones de la ciencia y de la filosofa helnicas, con la

    precedente sabidura oriental. Las grandes civilizaciones orientales (es decir, sumeria y

    caldea o asirio-babilnica, irania, egipcia, fenicia, etc.), con las cuales la civilizacin

    prehelnica (egea o creto-minoica) haba estado ya en relaciones directas o indirectas,

    han ejercido influencias reconocida por todos, tambin en la cultura helnica, en los

    distintos campos de la tcnica y del arte, de los mitos y de las ideas religiosas" Rodolfo

    Mondolfo, El pensamiento antiguo (Buenos Aires: Losada, 1964) vol. I, p.11. As por

    ejemplo, Herodoto seala que los griegos aprendieron de los caldeos el uso del

    cuadrante solar, el gnomon y las doce partes del da. (II, 109). "El punto de partida de

    los pensadores naturalistas del s. VI era el problema del origen, la physis, que dio su

    nombre a la totalidad del movimiento espiritual y a la forma de la especulacin a que

    dio lugar (...) Su inters fundamental era, en verdad, lo que en nuestro lenguaje

    ordinario denominamos metafsica." Werner Jaeger, Paideia, los ideales de la cultura

    griega. (Mxico, Fondo de Cultura Econmica, 1957) pp. 154-155.

    [2] Ejemplos: Anaximandro, para quien el infinito (peiron) es el principio y el elemento primordial de todas las cosas, del cual se separan los contrarios ( fro y calor, seco y

    hmedo, etc.), por obra del movimiento eterno, que es un movimiento rotatorio o de

    torbellino. Anaximandro, para quien todo proviene del aire, el cual est siempre en

    movimiento, "pues si no lo estuviere, no presentara tantos cambios como los que

    presenta" Cf. Mondolfo, op.cit. p.42 a 45.

    [3] Eudemo, Fsica, II, 3.fr.51. En Mondolfo, op. cit., p.73.

    [4] J.A. Kirk y J.E. Raven, Los filsofos presocrticos, (Madrid, Gredos, 1974), p.408

    [5] Rodolfo Mondolfo, Herclito (Mxico, Siglo XXI Editores S.A., 1966) p. 250.

    [6] Rodolfo Mondolfo, El infinito en el pensamiento de la antigedad clsica (Buenos Aires: Imn, 1952) p. 100.

    [7] Pirre Duhem, Les Systmes du Monde (tomo I, Pars, Editorial Hermann, sin fecha).

    [8] Abel Rey, La madurez del pensamiento cientfico en Grecia (Mxico, UTEHA, Col. La evolucin de la humanidad, t. 168) p.164.

    [9] Hedwig Conrad-Martius, El tiempo (Madrid: Revista de Occidente, 1958) p. 125.

    [10] Mondolfo, El infinito..., p. 151.

    [11] Max Meller, "Tiempo y eternidad" (En : Dianoia, Mxico, F.C.E., 1970) pp. 4-5.

    [12] Op. cit., p. 6.

    [13] Conrad-Martius, op. cit, p. 152.

    [14] Martin Gottfried, General Metaphysics (Great Britain, George Allar and Unwid Ltd., 1968) p.166.

    [15] "Nada se mueve, en efecto, sin razn". Metafsica 1072a.

    [16] Conrad-Martius, op.cit., p.50.

    [17] Mondolfo, op.cit., p.130.

    [18] Loc. cit., p. 141.

    [19] En el libro XI de sus Confesiones, San Agustn desarrolla profundamente este tema, con el aporte cristiano de la nocin de sujeto y de persona.

  • [20] Henri Bergson, Lvolution cratrice (Pars, Presses Universitaires de France, 1959) p. 777.

    Bibliografa

    Aristteles

    Del Cielo, Fsica, Metafsica En Obras Completas. Madrid, Editorial Aguilar, 1967.

    Bergson, Henri

    Lvolution creatrice. Pars, Presses Universitaires de France, 1959. Conrad-Martius, Hedwig

    El tiempo Madrid: Revista de Occidente, 1958.

    Duhem, Pirre

    Les Systme du Monde . Tomo I, Pars, Editorial Hermann, s. f.

    Gottfried, Martin

    General Metaphysics, Great Britain, George Allar and Unwid Ltd., 1968.

    Jaeger, Werner

    Paideia, los ideales de la cultura griega. Mxico, Fondo de Cultura Econmica,

    1957.

    Kirk , J.A., y Raven, J.E.

    Los filsofos presocrticos, Madrid, Editorial Gredos, 1974.

    Mondolfo, Rodolfo

    El infinito en el pensamiento de la antigedad clsica. Buenos Aires, Ed. Imn,

    1952.

    El pensamiento antiguo Buenos Aires: Editorial Losada, 1964.

    Herclito Mxico, Siglo XXI Editores S.A., 1966.

    Mller, Max

    "Tiempo y eternidad". En : Dianoia, Mxico, F.C.E., 1970.

    Platn

    Parmnides, Poltico, Timeo. En Obras Completas. Editorial Aguilar, 1966.

    Rey, Abel

    La madurez del pensamiento cientfico en Grecia. Mxico, UTEHA, Col. La

    evolucin de la humanidad, t. 168.

    Indice

    [I] Introduccin

    [II] Herclito (floreci alrededor del 504-500 a.C.)

    [III] Parmnides

    [IV] Platn. (428-7, 347a.C). El Timeo

    [1] Dificultades para conocer el tiempo

  • [2] El mundo y el tiempo tienen origen

    [3] El Alma del Mundo

    [4] El tiempo es anterior o simultneo al cosmos?

    [5] La definicin del tiempo toma como parangn la eternidad

    [6] El instante

    [7] El movimiento circular

    [8] El tiempo se desarrolla en crculo siguiendo el nmero

    [9] Sntesis

    [V] Aristteles

    [A] El plano fsico

    [1] El movimiento

    [2] El infinito

    [3] El instante

    [4] Negatividad del tiempo

    [5] El tiempo, medida del reposo

    [6] El primer motor inmvil

    [7] Tiempo y eternidad

    [B] El plano psquico

    [VI] A modo de conclusin

    Notas de pie de pgina

    Bibliografa

    Indice

    Acerca de la autora

    Acerca de este documento

    Principio Indice Final

  • Acerca de la autora

    Susana Trejos Marn: Doctora en Filosofa por la Universit de Paris I, Panthon-

    Sorbonne. Profesora de la U.C.R. por muchos aos. Miembro del Consejo Universitario.

    Autora de varias publicaciones.

    Susana Trejos Marn

    Acerca de este documento

    Referencia: Trejos Marn, Susana: Conceptos bsicos del pensamiento griego sobre el tiempo, Revista Acta Acadmica, Universidad Autnoma de Centro Amrica,

    Nmero 26, pp [213-226], ISSN 1017-7507, Mayo 2000.

    Internet: http://www.uaca.ac.cr/acta/2000may/strejos.htm

    Autor: Susana Trejos Marn

    Contacto: Apdo 7637-1000, San Jos Costa Rica Tel: (506) 234-0701 Fax: (506) 224-0391

    Revisin: UACA, Mayo, 2000.

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