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1 Ensayo Crisis Educativa en Costa Rica Alumno: Ruddy Muñoz Venegas Marzo 2005

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Ensayo sobre el problema de la educación en Costa Rica

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Ensayo

Crisis Educativa en Costa Rica

Alumno: Ruddy Muñoz Venegas

Marzo 2005

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Introducción

Va dirigido el siguiente ensayo a todas aquellas personas que de una u otra forma están relacionadas con el proceso educativo de nuestro país. Un proceso que se inicia en el seno familiar y que continua en las aulas de nuestros centros educativos, en donde debemos estar preparados para dar respuestas a ese ejército de mentes abiertas, que desean explorar y conocer maravillas antes vedadas; maravillas como el saber leer y escribir. Comunicar sus sentimientos, en algunos casos heridos y flagelados, por la maldad de un mundo cruel y hostil, y que solamente, estará en manos de ellos, los niños, cambiar. Si, un mundo competitivo, donde la solidaridad y el amor se han enfriado y donde la llama de la esperanza parece que está a punto de apagarse. Donde los valores se están perdiendo y se vive para el momento, sin importar la manera de sobrevivir, pues la realidad nos dicta, que aunque sea por encima de los otros, hay que hacerlo. Talvez sea un poco negativo en algunos aspectos desde mi punto de vista, pero lo que si es cierto es, que el cambio será necesario hacerlo y quien mejor que nosotros, en franca cooperación con la familia y la comunidad. Dejo la iniciativa para que desde nuestra palestra, empecemos ahora mismo a forjar una Costa Rica mejor para todos, pues el momento es ya. No podemos postergarlo para que otros lo hagan.

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Ensayo

SOÑAR NO CUESTA NADA PERO ESPERO EL CAMBIO

Me acuerdo de los días de mi niñez, cuando compartía con mis maestros, quienes eran accesibles. Algunos no tan amables, pero si sinceros, queriendo ayudarnos. Talvez sin mucha experiencia ni conocimientos, pero con una decisión en su corazón, el ver a sus alumnos convertidos en grandes hombres. Miro la realidad actual y siento que se ha perdido la mística. Se mira al educando como un objeto, “ uno más”. Ya no existe mucho tiempo para compartir con ellos. El trajín de la vida provoca que del aula hacia fuera ya no se piense en ellos, en sus problemas, en sus necesidades. La sociedad ha cambiado, se ha vuelto una sociedad de consumo. Consumo de odio, de pertenencias, de sexo, de violencia, de desamor. Tal vez por esto deseo cumplido un sueño: que volvamos a la senda antigua. Que los educadores dejen de llenar de información la mente de los alumnos. Que no se trate de “ enseñar ” en un poco tiempo, cantidad de información muchas veces innecesarias, que lo que provocan es un alumno que estudia no para aprender sino solo para realizar una prueba, que al fin de cuentas no le beneficiará mucho, pues pronto la olvidará. Que la sociedad realice un alto en su rumbo; que se comprenda que es lo que estamos creando en las aulas. Que los gobiernos entiendan su papel primordial en la educación y que no solo piensen en lo económico, en tratar de educar para su propio bienestar, sino que las ideas fluyan entre los pensadores, para detener la catástrofe que se aproxima de no existir un cambio. Alabo en mucho políticas educativas novedosas, que aunque con no mucha profundidad tratan de rescatar la educación. Políticas dirigidas a transformar a los educadores, hacerlos más sensibles, con valores éticos, morales, cívicos, los cuales serán los que determinarán en algún momento, como serán sus educandos. Políticas que tratan de mejorar la calidad de la educación, desde una perspectiva más exacta. Conocer que rumbo se lleva; es el determinar que nosotros los docentes somos los llamados a mejorarla, no para vanagloria de algunas figuras, sino más bien para que el grueso de la población, se sienta también involucrado y traten de imitarnos, en nuestro profesionalismo, siendo a la vez el modelo ideal a imitar; cosa difícil, dirán muchos, pero se debe iniciar sin demora. Sin miedo al reto, debemos tomar la bandera. Bandera como un baluarte, que persigue situaciones concretas. Dejar de andar con rodeos, en la enseñanza. Empezar a motivarnos como el “gran ejército” que somos. Llevar adelante nuestros principios en

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bien de esta sociedad tan maltratada por pensamientos errados y políticas desastrosas, que en muchos casos han venido a socavar las bases de la verdadera democracia. Hombres y mujeres listos en las trincheras de la educación. Valerosos, sin miedo a enfrentar al enemigo, portadores de un mensaje: volvamos a los valores nuestros. Ya basta de ver como nuestros jóvenes van rumbo a lo incierto, sin una preparación idónea para enfrentar al mundo, que fríamente los espera, para muchas veces envolverlos y devorarlos como un animal, sin sentimientos. Sueño el día cuando podamos mirar a nuestros alumnos a los ojos, sin vergüenza de nuestros actos, que se sientan protegidos, amados y que su futuro sea planeado, con sus metas a corto y largo plazo, bien fundamentadas. Es sonreír con ellos, que vean que no somos perfectos, que nos equivocamos, pero que somos sinceros en nuestros sentimientos. Es enseñarles lo bueno que hay en sus vidas, como pueden lograr seguir aprendiendo en todo momento. Qué espera su familia y la sociedad de ellos. Como pueden revertir positivamente sus fracasos en la vida. Talvez sueño demasiado, aunque pienso que no es justo para ellos, que quienes realmente pueden ayudarlos, no lo están haciendo, pues nos limitamos a otras tareas que aunque necesarias, no están llenando sus expectativas. Difícil será conseguirlo, más no imposible; crear en ellos esos valores que se han perdido no sé en que momento, de manera gradual muchas veces y otros por egoísmos insanos que conllevan toda una realidad nacional y mundial. Sociedad y familia, el reto es nuestro. Es el momento de detener lo que no deseamos, los odios y rencores, la pérdida de valores, la ignorancia solapada, que causa tanto mal en nuestra sociedad. Es fácil achacar los problemas a otras situaciones, pues se habla hoy en día de que los avances tecnológicos, como la televisión, Internet, medios electrónicos, han venido a cambiar los valores, pero no debemos engañarnos, pues sino enseñamos bases firmes, cualquier viento de tecnología o de mediocridad, los hará caer, pues aunque la tentación es mucha, se debe tomar estas tecnologías para utilizarlas en provecho, de una manera adecuada y conociendo, que todos los alumnos no son iguales, y poder así adecuar esos medios para enfrentar a los alumnos con la realidad y no que vivan en la pura imaginación. Los años pasan rápidamente y las oportunidades muchas veces se presentan de manera tal que no las logramos divisar y es ahí donde el educando, tendrá que enfrentarse a sí mismo; deberá conocerse y conocer su medio. Entonces ¿ cómo se podrá pretender que su futuro cambie? si ni siquiera él comprende su medio. ¿ cómo comportarse en él ? que se espera de su persona, ¿que cualidades posee y ha llegado a reforzar? Su tarea no es fácil, pero si comenzamos a realizar bien nuestro trabajo, sentiremos que no los hemos defraudado, que aunque algunos no lo lograrán, la gran mayoría serán en el futuro, hombres de bien, honestos y trabajadores, respetuosos de los demás y por consiguiente amantes de Dios y de la Patria.

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Partamos del hecho de que se ha visto, como la educación se ha desmejorado. Algunos dirán, por culpa de los gobiernos, otros muchos, por culpa de la inmigración, pero si es determinante, que no podemos continuar así. La educación debe marcarnos en nuestra vida, será lo que nos diferenciará de los otros. Una verdadera educación no deberá estar por encima de los intereses individuales, será más bien el tratar de que se pueda poner a servicio de los demás sus conocimientos. Conocimientos cimentados en valores, los cuales han sido aplicados por educadores que han utilizado las mejores estrategias metodológicas y significativas, logrando así un ser humano integral, en el amplio sentido de la palabra; que se sienta realizado pero no humillando a los demás, sino más bien, siendo él mismo un ejemplo de honradez y valentía humana, para poder cambiar su destino y crearse uno de acuerdo a lo que conviene. Existirán demasiados obstáculos para todo aquel que mire con placer estos cambios. Será precisamente ahí donde se conocerá de que madera está formado su carácter, si será uno de los que obstruirá o más bien será un engranaje más en el motor de impulso hacia ese cambio tan radical que debemos lograr. Metas que para muchos serán inalcanzables, pero que otros las verán desde una óptica anuente, pues cansados ya de ser parte del problema, sentirán en sus cimientos que si no lo hacen estarían engañándose en su profesión y vendrían a convertirse en seres cobardes y pusilánimes, que muy pronto dejarían de ser seres humanos. El fin de todo lo educativo será siempre el mismo, el educando. El educador podrá conocer al final que clase de alumno resultó, y sería vergonzoso que sabiendo que estamos haciéndolo mal, persistiéramos en seguir realizándolo. Sería como el sembrador que cuando cultiva no escogiera la mejor semilla, sino que utilizaría cualquier mediocridad, lo que traería al final un fruto seco, sin buen tamaño y que aunque buena tierra, no quiso empezar con lo básico, una buena semilla. En este particular un punto que no se está tomando en cuenta, es la educación para aquellos niños con problemas físicos o cognitivos y que requieran Adecuaciones Curriculares. Ante la realidad de que el Estado debe velar por la educación de todos los niños, sin importar su trasfondo cultural o social, es importante recalcar que hay una división de la normativa legad (ley 7600) y la realidad de nuestros centros educativos. El Ministerio exige que todos estos niños deben recibir una educación obligatoria y gratuita, pero no invierte en transformar los centros de estudio y mucho menos en la formación profesional de los docente. Ante ello lo que se está creando es un retroceso, pues es verdad que los niños con problemas deben recibir una educación incluyente, pero la realidad en que se ven es otra, pues es fácil exigir resultados, lo difícil es permitir a los docentes que en su multitud de funciones y alumnos en muchos casos, puedan atender más positivamente a estos niños, pues es tal la cantidad de papelería que deben hacer, que lo verdaderamente importante no se realice en su totalidad. Doloroso resultará que no tomemos en cuenta las señales de alerta que nos está dando la sociedad. Ésta se desmorona y es una realidad que junto a los padres, somos

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quizás los únicos que podemos contribuir a revertir y a mejorar esta situación. Poseemos los medios en nuestras manos y se hará realidad solamente cuando comprendamos la enorme responsabilidad puesta en nosotros. Por eso es que sigo soñando, no con aquellos tiempos idos, sino con los que vendrán, espero que mejores para los educandos o por lo menos un poco más positivos. Que en su visión esté plasmada, la perseverancia que influyó en un educador. Que pueda volver a mirar hacia atrás y decir: gracias a mis maestros por todo lo que me inculcaron. No sintiéndose inútil sino con la mirada puesta en sus capacidades, seguro en el andar y esperando cualquier oportunidad que le muestre la vida para tomarla. Una vida llena de esperanzas y sanas ambiciones, sin olvidar jamás que es debido a su educación, que logrará lo que se proponga en su mente y en su vida. Los docentes enseñamos para que el alumno comprenda, pero no solamente una enseñanza sin profundidad, sino más bien con un fin real y positivo. Pero comprender no es necesariamente tener un conocimiento o una idea, es que el alumno pueda determinar que es lo mejor para él y que puede poner en práctica lo aprendido en algún momento de su vida. Es conocimiento que ponemos en sus mano no es solamente información a mano, sino duradera, pues su comprensión implica un desempeño flexible de esa habilidad, es decir, aplicar el conocimiento toda vez que se requiera y en los contextos más diversos. Se logrará, lo sé. Son más los que quieren estos retos que los que no lo desean. La educación triunfará, es determinante este pensamiento. Basado todo en la buena planificación de los entes educativos, con sus normativas y enfoques, sus ejes transversales de Derechos Humanos, de Paz, de Desarrollo Integral, de Salud; de sus Valores, como la Solidaridad, el Respeto, la Democracia y muchos otros, que converjan en un entorno, donde los principios sean respetados, sobre todo en un mundo tan cambiante y globalizado. Un mundo en donde prioriza las diferencias tan enmarcadas, sin respeto alguno por la niñez, sin importar la calidad de vida de sus gentes y por sobre todo sin espiritualidad. Para finalizar este breve ensayo debo permitirme decir que nadie es apto para enseñar, sino está dispuesto para aprender y que mejor enseñanza que la que nos dan esos pequeños que vienen a nosotros desconfiados al principio, y que pronto notarán como los recibimos. ¿Será abiertamente o con restricciones? ¿Con amor o con despreocupación? Dejo la respuesta en sus corazones, para que tengamos un espíritu conciliador y honesto ante el reto que nos aguarda.

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Conclusiones

1- El Estado debe invertir más en Educación y solventar la necesidad económica que requieren las familias más pobres para salir adelante. Que el porcentaje dado a la educación del PIB sea más elevado. El financiamiento que se haga permitirá crear mayores oportunidades a las que menos tienen. Por ejemplo que se amplíe mejor la cobertura del servicio educativo a otros lugares que antes estaban siendo discriminadas u olvidadas. Mejor infraestructura y una buena canalización de los recursos.

2- Reducir la diferencia entre la calidad de la educación privada y pública, por medio de los textos, para que permitan estar acordes con la realidad social de cada individuo, lo que permitirá competir eficazmente en la economía globalizada y en el desarrollo de valores humanos-éticos y de convivencia social, que privilegian la canalización de la democracia en un país donde el recurso educativo es escaso o donde no se le ha dado la importancia que amerita

3- El docente es una piedra angular en todos los procesos de aprendizaje, es el factor determinante en el éxito que tengan las innovaciones y los cambios que se proponen para mejorar los resultados educativos en el aula y en la escuela. El Estado debe buscar los medios para capacitar en forma idónea a los docentes incluyendo a los del área rural. Debido a ello se debe mejorar la calidad universitaria, desarrollo del currículo, ya que la formación y capacitación influye en los resultados de su labor pedagógica. Para que todo funcione, los directores de los centros educativos, deben asumir un rol de liderazgo institucional, que junto con sus docentes logren aumentar la motivación y el desempeño. Debe buscar capacitaciones y nuevas tecnologías educativas, debe insertar a la comunidad en el proceso educativo, debe mejorar la administración local. Debe hacer participe de todos las reformas educativas a la sociedad civil, facilitar el acceso a la educación de una manera más adecuada. Que el alumnado sienta que es parte importante del proceso, tratando de introducir nuevas modalidades de atención.

4- Se debe impulsar una política cultural integral que permita fortalecer la identidad nacional y fomente la participación de la familia en la formación de valores y por ende que la calidad de la educación sea compartida, para que se vea como inversión productiva, para el desarrollo social y económico de nuestro país, pues serían más las personas involucradas y beneficiadas en sus servicios.

5- Los retos de hoy exigen que los docentes comiencen a incorporar la tecnología en sus labores cotidianas, pues su verdadero valor depende de su integración pedagógica al currículum, y más importante aún, de qué tan preparados están para usarla.

6- Mejorar la planeación de corto, mediano y largo plazo y permitiendo optimizar los recursos de las instituciones educativas, en donde la premisa sea la formación de valores y la autoestima de los discentes.

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BIBLIOGRAFÍA

[email protected] Coordinadora Tecnológica - Colegio Rochester Bogotá, Colombia Folleto” Programa Nacional de Formación de Valores” Ministerio de Educación Pública, 2003