rumbo a la cumbre 3
DESCRIPTION
ÂTRANSCRIPT
-
Utilizando el poder inspiracional del Bagahad
Gita para crear excelencia profesional
-
Rumbo a la Cumbre 3
www.emprende7joven.com.mx
Rumbo a la Cumbre 3
Todos los derechos reservados por el autor 2014
Primera edicin
Se permite la reproduccin total o parcial de la presente obra,
as como su comunicacin pblica, divulgacin o transmisin,
mediante cualquier sistema o mtodo, electrnico o mecnico
[incluyendo el fotocopiado, la grabacin o cualquier sistema
de recuperacin y almacenamiento de informacin],
siempre y cuando esto sea sin fines de lucro
y con la condicin que se seale la fuente
Registro en el Instituto Nacional de Derechos de Autor 03-2014-112811230600-01
-
INDICE
PALABRAS INICIALES ....................................................................................... 1
TERMINANDO EL VIAJE .................................................................................... 2
CERRANDO CICLOS .......................................................................................... 7
ABRIENDO CICLOS ............................................................................................ 21
TRASCENDIENDO CICLOS ................................................................................ 35
EN LA CUMBRE .................................................................................................. 49
ACERCA DEL AUTOR ........................................................................................ 54
ALGUNAS OTRAS PUBLICACIONES GRATUITAS DEL AUTOR .................... 56
-
1
PALABRAS INICIALES
Dicen que no hay nada mejor para poner las cosas en perspectiva que el tiempo.
A dos aos del primer Rumbo a la Cumbre y uno de la segunda parte muchas
cosas han pasado, muchas cosas han cambiado, pero el destino sigue siendo el
mismo: esa cumbre de nuestra existencia que simboliza la bsqueda de la
excelencia personal reflejada en nuestra vida profesional. Y es que no podemos,
como en ocasiones sucede, hablar de excelencia profesional cuando las bases de
ello, la persona misma, est descuidada. Es como querer construir sobre la arena
o fincar una casa sin cimientos.
El primer Rumbo a la Cumbre, que tomaba como referente las bienaventuranzas
enunciadas por Jess, planteaba un reto considerable pues implicaba sacar del
contexto religioso que generalmente se aplica a esa historia bblica y darle una
visin de aplicacin prctica en la vida personal y profesional de cada quien. La
segunda parte de Rumbo a la Cumbre no se qued atrs pues buscaba en la
reflexin del camino ctuple del Buda los elementos para esa excelencia
profesional sustentada en la impecabilidad de nuestra persona.
Todo camino tiene un final, aunque ste no necesariamente sea el fin de todo, en
este sentido este Rumbo a la Cumbre es la ltima entrega de esta saga que debo
reconocer y agradecer fue acogida por los lectores de una forma que todava me
abruma ya que mi intencin era de compartir una serie de reflexiones sin pensar
jams en que las mismas fuera a tener la extremadamente favorable respuesta
que recibi.
En esta tercera y ltima parte de Rumbo a la Cumbre, las bases que permiten ir
hilando una reflexin de vida y de profesin estn dadas por el Bagahad Gita,
texto sagrado hinduista escrito alrededor del siglo III a. C. Su contenido es la
conversacin entre Krisn -a quien los hinduistas consideran una encarnacin de
Visn (mientras que los krisnastas lo consideran el origen de Visn)- y su primo y
-
2
amigo ryuna en el campo de batalla en los instantes previos al inicio de la guerra
de Kurukshetra. Respondiendo a la confusin y el dilema moral de ryuna, Krisn
explica a ste sus deberes como guerrero y prncipe, hacindolo con ejemplos y
analogas de doctrinas yguicas y vednticas. Esto ha hecho que el Bhgavad-
guit sea considerado un resumen breve de las doctrinas hinduistas. Durante su
discurso, Krisn revela su identidad como el mismsimo Dios (suaiam Bhagavn),
bendiciendo a ryuna con una impresionante visin de su divina forma universal.
Como ven, el reto se mantiene ya que los referentes religiosos son tomados para
una reflexin de vida que tenga su impacto final en nuestra vida profesional.
Y es que en eso se resume todo: la manera en que construyamos a la persona
tendr un impacto en el profesionista, y ese impacto en el profesionista vendr a
impactar a su vez en la sociedad, as que si queremos mejorar uno o lo otro
tenemos que empezar por la persona y, curiosamente, terminar con esa misma
persona, ya que uno viene siendo el origen y destino de todo proceso.
Con esto en mente tomemos del mundo lo mejor que nos ofrece y a la vez
ofrezcamos lo mejor que tenemos, y cuando no encontremos lo uno ni lo otro
trabajemos por transmutar lo que hay en algo de mejor vala, esa es la idea central
de los Rumbo a la Cumbre.
Concluyamos con el relato, concluyamos este tramo de vida, concluyamos nuestro
camino Rumbo a la Cumbre.
-
2
TERMINANDO EL VIAJE
Necesitaba salir un momento. Senta que la oficina me abrumaba. Hace ya un
tiempo que esa sensacin no me deja. El da comienza bien. Me levanto, me
alisto, desayuno, platico un rato con mi esposa y llego a mi oficina. Pero conforme
pasan las horas ese sentimiento de desasosiego comienza a crecer hasta
convertirse en una sensacin incmoda.
Realmente no tengo idea de cundo comenz esto. Comenc a achacrselo al
hecho de que hace ya seis aos de que me tom un tiempo para m mismo.
Recuerdo fuimos a la playa. Y antes de esa ocasin, algunos aos atrs, me haba
tomado un tiempo subiendo una montaa. Pero ya han pasado varios aos desde
esas ocasiones. Seis aos. Pareciera fue ayer que caminaba por esa playa, que
suba esa montaa. Cierro los ojos y puedo sentir la fresca sensacin de la
vegetacin o bien la calidez de los rayos del sol, depende del lugar que recuerde.
Seis aos. Yo crea se deba a eso, pero la otra vez me tom unos das. No sal de
la ciudad peor s me di a la tarea de descansar, pero la sensacin no se me quit.
Me incomoda, me ahoga. Es una turbacin desconocida. No le hallo razn, pero s
me afecta en mi vida.
Mi vida, qu de cambios se han sucedido desde esa ltima vez en que hace seis
aos fuimos a la playa! Me jubil, puse mi propio negocio, mi hijo mayor se cambi
de ciudad. Ah, que de sensaciones tan fuertes! Treinta aos de trabajar para una
empresa y llega el momento de irse. Uno lo ve tan lejano y cuando menos lo
piensa todos los amigos le desean lo mejor a uno y sale a una nueva etapa de
vida.
Y mi negocio. Siempre quise poner un negocio. No me imaginaba sentado en casa
una vez jubilado sin hacer nada, viendo pasar los das. Lo habl con mi esposa la
cual me apoy y juntos nos embarcamos en esta nueva aventura. Un comenzar
-
3
ms ligero, pensaba yo, despus de todo la jubilacin resolva mis necesidades
econmicas, los hijos ya haban volado del nido y solo nos quedaba continuar a mi
esposa y a m nuestra vida juntos. Ms ligero?, para nada. Este andar se me ha
vuelto ms pesado.
Ms pesado. Y la partida de mi hijo mayor. Me alegra que haya encontrado una
excelente oportunidad laboral, pero el irse a vivir fuera s me entristeci. Siempre
pensamos como padres que estamos dispuestos a dejar volar a nuestros hijos con
alas propias, pero cuando llega ese momento uno se da cuenta de que en realidad
no est preparado. Y mi nieta. Eso me pudo mucho. Recuerdo como me deca que
todos los das me hablara por telfono cuando estuviera en la nueva ciudad. Y as
fue al principio. Ya luego el tiempo fue tomando el lugar que antes tenan esas
llamadas, que antes tena su presencia. Si los veo, pero una o dos veces al ao.
Tal vez sean todas esas emociones las que me han estado abrumando. Tena que
salir de la oficina. Tena que caminar. Hacia dnde? Es lo de menos. Solo quiero
andar. La ventaja de crecer, se hacerse mayor, al menos en mi caso, es que uno
va soltando. Esa aprensin de que las cosas se hagan para lograr siempre algo
que en mi juventud tena va cediendo el lugar a un sentimiento de confianza, s de
compromiso con la vida y con el hacer bien y el ser bien, pero de confianza en que
las cosas, la vida misma, ser lo que tenga que ser y ser, por cierto, lo mejor que
pueda ser. Quiero caminar, solo caminar, sin un destino fijo, recorrer unas tres,
cuatro, cinco cuadras, darme este tiempo y este espacio simplemente para ver,
para escuchar, para sentir.
Me da risa mi propia idea: ver, escuchar y sentir en la ciudad? No es una
montaa o una playa, qu tanto puedo ver, escuchar y sentir en la ciudad?,
ruido, autos, gentes? Me ro ante la sola idea. Pero, qu es ese aroma? Que
agradable: pan y caf. Pero, de dnde viene?
-
4
Esta cafetera no la haba visto y mira que est a solo tres cuadras de mi oficina!
No es una franquicia, se ve ms bien negocio familiar. Que pintoresco lugar. Las
mesas, mitad dentro mitad en la banqueta, hechas de madera. Las sillas del
mismo material aunque el asiento y el respaldo forrados para hacer ms
confortable la estancia. Cada mesa cuenta con una pequea maceta con flores en
el centro. Flores de verdad. En un mundo donde lo artificial cobra cada vez ms
espacios es un gusto encontrar flores de verdad adornando una mesa. O ser
que mis gustos arcaicos valoran ms lo natural?
Pero bueno. Yo iba a caminar. Creo continuar. Aunque, por qu no tomar un
tiempo? Yo mismo me argumento ya que si la flexibilidad me ha permitido una vida
ms confiada no veo por qu en este momento no puedan cambiar mis planes.
Finalmente eso reflejara que soy dueo de mi vida ya que puedo darme el lujo de
disponer de mi tiempo a como quiera. S, me tomar un momento para disfrutar de
este lugar, para tomarme una taza de caf y para disfrutar de ese pan que me ha
llamado con su aroma.
Esta mesa se ve vaca. Aqu me sentar. Que cartas tan ornamentales. Se ve que
han sido hechas a manos. Veamos: caf, pan con eso tengo. Mientras me
atienden me tomar ese tiempo para ver qu pasa conmigo, hacia donde va mi
vida, qu tengo y qu me falta, que pero qu es esto?, un libro? Veamos:
Bagahad Gita. Y esta pintura que lo adorna en su portada? Un tipo azul que
parece un dios o un rey hablando con otro. Azul? Qu raro.
S, por favor, un caf y pan, por favor!... bueno al menos ya orden oiga, este
libro es de aqu?... bueno, ni el mesero ni yo sabemos de quien es este libro
ms bien librillo veamos 124 pginas no son tantas Lo ms probable es
que alguien que previamente se sent aqu lo haya dejado. El que est remarcado
en algunas lneas con marcador amarillo me confirma esto.
-
5
Veamos de qu puede tratar este libro? A ver: El Bhagavad-Gita, Canto del
Seor, cuyo ttulo completo es Srimadbhagavadgita-upanishad, (Enseanzas
impartidas en el Canto Supremo del Seor) se encuentra en el libro VI
Bhismaparvan, seccin 6 del Mahabharata. Se trata de un Upanishad
(Enseanza a los Pies del Maestro). Es decir, es una revelacin espiritual de
una enseanza secreta impartida por Krishna.
Krishna, Krishna, Krishna como que me suena ese nombre qu no son esos
tipos raros en tnica que a veces me he encontrado en algunos aeropuertos
cantando?... pero cmo va ese canto?... no me acuerdo qu ms dice
aqu? A ver: Los dieciocho breves captulos del Gita versan sobre el dilogo que
mantuvieron Krishna y Arjuna ante el desfallecimiento de este ltimo, breves
instantes antes de la batalla final, que decidira la victoria de uno de los dos
bandos. Arjuna, el ms diestro de los hijos de Pandu, siente flaquear su nimo
cuando ve a la mayora de sus familiares y amigos entre las filas enemigas. El
cuerpo central de este bello poema filosfico-espiritual es la respuesta de Krishna
ante el desaliento del valiente Arjuna, que se niega a luchar a muerte contra sus
seres queridos. Krishna le habla a Arjuna acerca del Universo, de quin es l y su
condicin en medio del Cosmos, adems de la Misin que debe desarrollar el
hombre en la tierra y de cmo han de comprenderse los misterios de la vida y de
la muerte.
Ah, s. Oiga: gracias por el caf y el pan!
Ya tengo para comer, para beber y para leer. Que excelente. Y pensar que solo
hace unos momentos andaba sin rumbo, caminando noms por ah, y ahora ya
tengo algo que hacer, y lo que es mejor: hacerlo solo por el placer de hacerlo.
Krishna, Krishna, Krishna me sigue sonando ese nombre creo era una deidad
hind, pero la verdad nunca he abordado las creencias hindes como para saber
de qu se tratan.
-
6
Vaya, si que est rico este pan y el caf ni se diga! Me encanta la taza de barro
cocido en que me la han servido, y la mesa la mesa en un lugar que no podra
estar mejor: puedo ver hacia la calle, la banqueta, en un lugar donde no pega el
sol de lleno pero tampoco las sombras como para hacer incomodo estar aqu.
Disfrutar este momento y leer un poco este libro, despus de todo si lleg a mis
manos ha de ser por algo. Como aquellas veces en la montaa y en la playa
mensajes que llegan en el momento preciso pero que uno debe entender a
veces siento como si esos mensajes fueran el pretexto para buscar en el interior
de uno las respuestas a las dudas que uno trae sin saber que tambin carga ya
con las respuestas.
Pero bueno 124 pginas no voy a estar todo el da aqu leyendo este libro
adems ni bien s de las creencias hindes como para entenderlo Le dar una
ojeada y tal vez la mirada de otra persona pueda ayudarme la persona que dej
remarcada ciertas lneas en ese libro leer lo que remarc igual si no me
gusta lo dejo a un lado y sigo disfrutando de este delicioso caf y este pan, me
pregunto si ser pan casero? As me parece.
-
7
CERRANDO CICLOS
Este aroma de caf me trae tantos recuerdos tantos. Mi oficina. Treinta aos de
verla, de sentirla, de sufrirla, de gozarla. Cada da llegar y tener mi caf esperando
sobre mi escritorio. Mis amigos, mis compaeros. Se me vienen a la mente con un
golpe emocional demasiado fuerte.
Recuerdo cuando empec en ese trabajo. Yo joven, con apenas estudios tcnicos
pero con todas las ganas de comerme el mundo. Llegu y me present creyendo
que todo dependa que dijera quera una oportunidad. Siempre he pensado qu
hubiera sido de mi vida si me hubieran dado esa oportunidad en alguna de las
otras seis empresas que visit antes que en la que me vinieron dando esa
oportunidad. Para empezar quien sabe con quin me hubiera casado.
Todava recuerdo el primer da cuando me presentaron a los 12 que componan la
oficina. Fulatino, Zutanito, Perenganito mucho gusto mucho gusto a la
orden Y bam!... el flechazo no recuerdo ni que dije cuando me la
presentaron ah estaba ella luego me dijo que ni bien me vio pens este no
-
8
durar ni una semana y miren que me qued 30 aos, la hice mi esposa y forj
una familia.
Pretextos para verla me faltaban no sabes si ya lleg un paquete que estoy
esperando? qu paquete ni que nada!... como si alguien me fuera a mandar un
paquete pero ese no, an no me llega nada, pero en cuanto llegue algo te
aviso, te urge? era ms que suficiente para cambiarme el da. Te urge?,
cuantas veces o de nuevo eso ya casados. Era su manera de decirme calma, ve
bien las cosas, si no ocupas correr ahorita para qu te desesperas. Yo
intempestivo, ella calmada. Extremos. Complementarios. Difcil al inicio,
enriquecedor con el tiempo.
Ese caf, este caf. 30 aos pesan mucho. Recuerdo mi ltimo da. Todo
transcurri en cmara lenta. Los abrazos, los parabienes, una que otra lgrima
aqu, una palabra entrecortada all. As es la vida deca- todo ciclo termina por
cumplirse. Muy hombrecito yo, muy filsofo. Ah, pero fui el ltimo ese da. No
quera irme sin agradecer. Recorr los escritorios sobre los que tantas veces junto
con otros compaeros llenbamos los pedidos, rechazbamos embarques,
hacamos citas de negocios, e incluso hasta comamos.
La planta aquella, el garrafn de agua este, este apagador, aquella puerta que
siempre rechinaba, el gabinete que nunca cerrbamos, la luz que siempre
quedaba prendida. Ese ltimo da todo lo v tan grande, tan vivo, tan doloroso. No
quera irme. As se lo hice saber a esa oficina, a ese montn de muebles. El da
que me jubile va a ser el mejor da de mi vida, dnde estaba ahora esa frase
que tantas veces dije durante tantos aos.
No haba nadie. Mejor as. Llorar no siempre es fcil, menos cuando son treinta
aos de sentimientos contenidos. Maldita sea!, por qu me dueles oficina
esclavista? El silencio de la oficina sin nadie era la nica respuesta. Un silencio
que si lo oa me deca tanto. Cunto estuve as? No s, una hora, dos. Al final
-
9
sal sintiendo que mucho de m se quedaba ah y que no poda recogerlo,
llevrmelo conmigo pues ya no era mo. Lo haba ofrendado gustoso en esas
reuniones de oficina sea de trabajo o convivencia y ya no me perteneca. Cmo
puede un lugar llegar a significar tanto para uno? Treinta aos no es poca cosa.
Maldicin, ahora no. Ya fueron suficientes lgrimas. Lo bueno es que aqu hay
servilletas. Ah, s!, y este libro. Veamos hoja por hoja hasta encontrar lo que su
anterior dueo remarc, qu sera eso tan importante para l?
La vida y la muerte no son diferentes. Siempre hemos existido: tanto yo, como t,
como esos reyes. Y existiremos por siempre y para siempre. Al igual que el alma
experimenta la infancia, la juventud y la vejez, sin verse afectada por las
mutaciones de este cuerpo; as tambin tomar otro cuerpo despus de la muerte.
En un sabio no cabe duda acerca de esto. Oh, Arjuna! El mundo de los sentidos
nos produce sensaciones de fro y de calor, de placer y de dolor. Todas estas
sensaciones vienen y se van; son transitorias. Elvate sobre ellas, alma vigorosa!
El hombre que no es afectado por los sentidos; ni por el placer ni por el dolor, ste
es merecedor de vida eterna. Lo irreal nunca ha existido; lo real nunca ha dejado
de existir. Con certeza, esta verdad slo la han podido entender los autnticos
buscadores de la verdad. El Espritu es indestructible e imperecedero; todo lo
penetra. Nadie puede destruir ese Ser Inmutable
S que en India la idea de la transmigracin de las almas es algo bsico, de ah se
deriva la idea de la reencarnacin. Pero al leer eso no puedo menos que pensar
de nuevo en esos 30 aos en mi empleo. Siempre hemos existido: tanto yo, como
t, como esos reyes. Y existiremos por siempre y para siempre. Ya no estoy en
mi oficina de 30 aos ms sin embargo parte de ella se ha quedado conmigo y
parte de m se ha quedado con ella.
Cuando pienso en esto no puedo menos que sentir la vorgine del pensamiento
que me genera. Mi esposa siempre ha dicho que pienso mucho las cosas, yo en
-
10
broma le respondo que ms bien creo que son las cosas las que me piensan a m
mucho. Pero cuando analizo cosas como esta no puedo menos que pensar en que
en vez de decir que somos seres finitos ms bien me parece que somos seres
eternos, si no, cmo nos explicamos que conforme avanzamos nuestros pasos
quedan para siempre marcados en la eternidad?
No puedo cambiar esos 30 aos que pas en la oficina, vaya, ni siquiera puedo
cambiar el hecho de la mordida que le acabo de dar a este pan. Ya quedaron
ambos hechos para siempre en la historia personal de uno y en la historia del
mundo y del universo. La eternidad nos rodea, ms que el tiempo. El mundo de
los sentidos nos produce sensaciones de fro y de calor, de placer y de dolor, ah
es donde est mi dolor, mi nostalgia, mi extraar, en el mundo de los sentidos. Me
duele aquello que he perdido, extrao aquello que he conocido, siento nostalgia de
lo bueno que fue y ya no es, pero ese mundo no lo es todo porque tambin puedo
recordar momentos agradables y convertir esos sentimientos en momentos de
alegra, de motivacin, de paz. Me muevo en esos dos mundos, uno temporal que
disfruto y sufro, y uno eterno donde lo que hago y lo que hacen conmigo queda
para siempre.
Nada se va, nada se queda, todo simplemente es. Luego entonces puedo decidir
qu traigo a la realidad, a mi realidad: lo que ya no es y me duele o lo que ya no
es pero me gusta. Como aquella fiesta sorpresa que me prepararon en la oficina,
creo fue la de mis primeros diez aos en ella, coincida en el mes con mi
cumpleaos y todos se pusieron de acuerdo para hacerme esa fiesta. Un
momento muy agradable, muy bonito, de mucho compaerismo, por qu debo
recordar lo que me pone triste cuando hay tanto que agradecer? Si, es cierto, eso
ya no es, pero tambin cuando la fiesta sorpresa termin sta dej de ser y an
as la sensacin agradable persisti.
El hombre que no es afectado por los sentidos; ni por el placer ni por el dolor,
ste es merecedor de vida eterna, vaya frase, me imagino alguien inmutable ante
-
11
la vida, casi muerto, habr quien pueda llegar a este estado? Yo por lo menos no
creo que pueda, por ejemplo, disfruto de este caf, sorbo a sorbo, en este estado
que se menciona aqu ya no lo disfrutara? Aunque claramente dice afectado, a
lo mejor se refiere que uno sigue percibiendo el mundo pero capta la
trascendentalidad de l. Como ahorita dije: vivimos en el tiempo, pero estamos
rodeados de eternidad.
Me gusta la idea de la persona que re y llora, pero sabe que l no es esa risa ni
ese llanto y que incluso est por encima de eso. S, claro, disfruta o sufre pero no
se ve afectado, afectado en el sentido de que la emocin arrolle su proyecto de
vida y lo haga dar traspis.
El Espritu es indestructible e imperecedero; todo lo penetra. Nadie puede destruir
ese Ser Inmutable. Me gusta esa frase de Ser Inmutable, si yo soy o formo parte
de ese Ser Inmutable, por qu afectar mi vida con un sufrir o gozar que me
trastoque cuando yo soy todo y todo es en m?
A veces he pensado en esto, ahora lo veo aqu expresado en esto del Ser
Inmutable. Si me muevo sea buscando lo que me gusta o rechazando lo que me
disgusta, no soy dueo de mi destino sino que son los factores externos los que
me dominan. Trascender esos factores me lleva a un pleno dominio de mi vida.
Como esos 30 aos en la oficina. Son mos y yo soy de ellos, pero al mismo
tiempo los trasciendo: agradezco lo vivido, dejo ir y avanzo. Decido sobre mi vida,
sobre mis recuerdos, sobre mis emociones y estiro la mano por lo que viene.
Qu fcil se oye, pero 30 aos! An as creo es cuestin de tener la mirada fija en
el horizonte y darle tiempo al tiempo. Darle tiempo al tiempo cuando heme aqu
hablando de la eternidad! Veo para atrs y mi estado de nimo es muy distinto de
cuando me jubil. Al principio estaba eufrico, luego se me vino la pesadez de los
recuerdos, la nostalgia de la rutina, el extraar la camaradera del trabajo. Ahora
-
12
veo como eso se va superando. No tanto por lo que yo haga sino por lo que deje
que la vida misma haga conmigo, ah, pero eso s!, con la idea muy clara en el
horizonte. Algo as como sentarse a ver germinar una planta que se convertir en
rbol: simplemente dejo que sucede, pero si adopto otra actitud y me desespero
puedo dar al traste con el proceso.
Aqu hay ms remarcado: El Espritu nunca nace y nunca muere: es eterno.
Nunca ha nacido, est ms all del tiempo; del que ha pasado y el que ha de
venir. No muere cuando el cuerpo muere. Cuando un hombre reconoce el Espritu
como no nacido, imperecedero, inmutable e indestructible, cmo podra este
hombre matar o ser muerto? Al igual que un hombre se quita un vestido viejo y se
pone otro nuevo, el Espritu abandona su cuerpo mortal para tomar otro nuevo.
Ningn arma puede herir al Espritu, ni el fuego puede quemarlo, ni el agua
pueden mojarlo, ni el viento puede arrastrarlo. Ms all del poder del fuego, de la
espada, del agua y del viento, el Espritu es eterno, inmutable, omnipresente,
inamovible, y siempre uno.
Me gusta eso de que Al igual que un hombre se quita un vestido viejo y se pone
otro nuevo, el Espritu abandona su cuerpo mortal para tomar otro nuevo, as me
siento ahorita, como alguien que est dejando un vestido viejo, mis 30 aos de
trabajo en mi empleo, pero que se reviste de un traje nuevo con los nuevos
proyectos que tengo. Si la pienso ms detenidamente, en realidad eso es algo de
todos los das. Por ejemplo cuando trabajaba todos los das inicibamos
proyectos, cerrbamos otros, pero siempre con el dinamismo de lo que empieza y
termina sin dejar nunca de ser nosotros mismos. Claro que hay eventos ms
significativos, como en este caso mi jubilacin, pero que vistos de esta forma solo
forman parte de una larga cadena de eventos, un eslabn ms en las vivencias
que el destino me tiene contemplado vivir, un paso ms de cientos, miles, millones
que dar en toda mi vida y con esta perspectiva dar esos pasos de la forma ms
ligera posible, sin tantas nostalgias y aoranzas que me detienen pero s, tal vez,
sentimientos de alegra y agradecimiento por lo vivido ya que eso me motiva.
-
13
Ningn arma puede herir al Espritu, ni el fuego puede quemarlo, ni el agua
pueden mojarlo, ni el viento puede arrastrarlo, yo agregara: ni una jubilacin
terminarlo, ja ja ja, si mi esposa me oyera me dijera que ya estoy con mis cosas,
pero acaso no es el humor el lubricante en el engranaje de nuestra existencia?
Esa jubilacin no me defini. Al igual que todos los proyectos que he iniciado y
terminado no me definido: yo los he hecho a ellos, no ellos a m. Aunque dej mi
oficina en realidad no la he perdido. Todo lo que viv sigue aqu, conmigo, de ah la
nocin de la eternidad. Solo es cuestin de que yo, como dueo de todo eso
precisamente opte por sacar, por usar aquello que me sirva. Como cuando haca
algn proyecto, como cuando iniciaba algn trabajo: pona mi pasin en ello, lo
mejor de mi parte y las mejores cosas con que dispona en ese momento. Una vez
terminado yo segua y sigo con ese nimo.
La vida es un sinfn de ciclos, pero, haciendo eco de lo aqu ledo, nada se crea ni
se destruye, todo es y en todo somos.
Ah, qu rica brisa de la maana, que aroma de caf, que delicia de pan!
Me encanta que los pajarito se me queden viendo. Ah sobre la banqueta, a cierta
distancia, picando aqu y picando all, como buscando ver que encuentran, pero
tambin como sabiendo que lo que tengo aqu en mi mano es alimento, un rico,
sabroso y nutritivo alimento en la forma de pan. Ah les va un pedacito. Como que
saban que les iba a arrojar un poco de pan pues bien que se quedaron quietos
esperando les tirara la miga para ir tras ella. Cada uno toma un poco, pelean por
un pedazo, y se alejan volando.
Qu sera de aquella barra de granola que hace aos dej en aquel viaje por la
montaa? A veces me pongo a pensar lo abismal de las cosas que forman parte
de nuestra existencia pero que ignoramos completamente. Por ejemplo, estos
-
14
pajaritos que acabo de alimentar. De dnde son, dnde viven, tendrn familia, los
volver a ver? De aquella barra de granola que dej en aquel viaje por la montaa,
quin se la habr comido, le habr gustado, que habr sido de l? Cientos, miles,
millones de cosas, de vivencias, de situaciones tienen que ver con uno pero
simplemente nos encontramos como en una encrucijada, interrelacionamos y
luego cada quien, cada cosa, cada vivencia, sigue su camino tejiendo el estambre
de la existencia como una compleja tela de araa infinita.
Aqu hay ms: Aunque el alma estuviese destinada irremisiblemente al ciclo de
nacimientos y muertes una y otra vez, no deberas, an as, sentirte turbado por la
tristeza. Ciertamente, todo lo que tiene un principio ha de tener un fin. La muerte
es el final seguro para quien ha nacido. Pero es igualmente seguro que quien ha
muerto ha de renacer. As pues, no deberas afligirte por lo inevitable. Invisibles
son todos los seres antes de su nacimiento, e invisibles volvern a ser despus de
su muerte. Slo en el transcurso entre estos dos estados invisibles, resulta posible
que los podamos ver. Siendo esto verdad, por qu afligirse? Alguien puede creer
en el Espritu, como la visin de una maravilla, y nos lo describe como tal.
Mientras que otros tan slo han odo que es maravilloso; pero an habindolo
odo, ninguno de los dos lo conoce en verdad. El Espritu inmortal mora en todos
los seres y la muerte no puede afectarlo. Reponte, pues, de tu tristeza.
Todo tiene un principio y un final, pero cul es ese principio y cul ese final?
Pudiramos decir que mi interaccin con los pajaritos inici cuando llegaron y los
vi y termin cuando se fueron y dej de verlos, pero eso es solo ver parte del hilo
de la vida y creer que es toda la madeja. Ellos siguen su vida, tal vez estn ahorita
comindose el pan, o compartindolo con sus cros, o volando en otras partes, no
s, pero sigue su existencia. De la misma forma antes de que llegaran y yo los
viera ellos existan. Todo existe, no solo cuando interacta con nosotros. Los 30
aos de mi trabajo, son parte de ese hilo de la vida, no es todo, me duele cuando
pienso que es todo, pero si me alejo un poco ms, si creo, con base en lo que esto
analizando que eso forma parte de algo ms grande, me siento dichoso y pleno
-
15
por el enorme privilegio que se me otorg para vivir esos 30 aos, para ser
consciente de ellos, para actuar como testigo de honor de su existencia y de su
interaccin conmigo, pero hay ms, mucho ms, tal vez algo tan grande que no
puedo verlo, pero puedo intuirlo, y ese tan grande me permite ser parte de l,
aunque sean 30 aos y aunque sea un trabajo de oficina. Visto as esos 30 aos
se transforman en parte de algo eterno y ese trabajo de oficina en una labor
trascendental. Que hermosa visin: yo, testigo durante 30 aos de la eternidad
que pasaba ante mis ojos.
Aqu hay ms, parece ser lo ltimo de este captulo: As pues, escucha la
sabidura del Yoga: camino de la libertad de ataduras y de lo eterno. sta es la
sabidura Sankhya: la visin de lo eterno. En este camino, ningn esfuerzo es
baldo, ni existe posibilidad de desgracia. Hasta el ms mnimo progreso supone
liberacin de tus miedos. El nico pensamiento que debe ocupar la mente de
quien anda este camino es determinacin. Determinacin. Me gusta ms la
palabra carcter. Ha de significar lo mismo por la manera en que aqu est
expresado. Actuar con determinacin, ser uno dueo de su propio destino. Pero
para ello uno debe salir un poco del corralito mental, de la visin enclaustrada, y
ver todo con esos ojos de eternidad que se esconde detrs de cada accin, de
cada emocin, de cada pensamiento.
Testigo de la eternidad. Me gusta.
De alguna manera ste pensamiento refleja mi filosofa de trabajo pues siempre
he tratado de hacer las cosas no lo mejor posible sino lo ms excelentemente
posible. En el transcurso de mis 30 aos en la empresa vea como es que nos
daban cursos de servicio al cliente, calidad total y esas cosas sin que dichos
cursos hicieran algn cambio notable y permanente en mis compaeros, la
respuesta que pude concluir es que todos esos cursos llegaban como olas a
romper en las rocas que eran la manera en que cada quien tena deber la vida.
As, mientras no hubiera una filosofa de vida que sirviera de soporte a las ideas
-
16
que nos daban era como tratar de plantar semillas no digo en tierra agreste sino
incluso en concreto o pavimento.
Cada paso, cada accin que uno da en este mundo, en este momento, queda para
siempre en la eternidad. Un mal trato a un cliente, un mal trabajo por desidia, un
problema de negocios sin resolver, una oportunidad de desarrollo sin aprovechar,
queda para siempre en la historia personal de uno, del mundo y del universo.
Incluso, al menos as lo veo yo, aunque uno busque resarcir eso lo hecho, hecho
est, y no hay manera de cambiar eso.
Claro que me doy cuenta que el mundo actual ha entrado en una dinmica donde
a todos los actores participantes se les exige cada da ms: ms calidad, ms
servicio, ms rapidez, eso es lo que el mundo exige, pero qu hay con lo que nos
exigimos nosotros mismos? Cuando la gente recibe ms de lo que espera se
genera una reaccin de reconocimiento y de lealtad. La satisfaccin con creces de
las necesidades y expectativas de quienes procuran bienes y servicios permite la
rplica del xito a travs de la misma promocin de quienes, satisfechos por lo
recibido, harn con sus allegados.
Tambin veo que curiosa y paradjicamente hay un fenmeno donde las personas
buscan dar el mnimo en su esfuerzo. El pensamiento cortoplacista indica que el
mnimo esfuerzo con la mxima ganancia dar el mayor rendimiento, pero
convencido estoy que ese pensamiento no contempla la relacin en el largo plazo
tanto a nivel grupal como individual ni el desarrollo de los proyectos individuales y
profesionales que se tengan. Si de manera personal, el servicio, desempeo e
interrelacin personal, social y empresarial que uno tenga ser la mejor carta de
presentacin que se tenga, con mayor razn cuando el liderazgo y el
emprendedurismo son las guas de nuestras acciones.
No se puede ser lder regateando, no se puede ser emprendedor buscando el
mnimo esfuerzo, entendamos que ambas acepciones por su misma definicin
-
17
implican un extra en nuestras acciones, un plus adicional que permitir a quienes
lo den el llegar a la cima. Este plus, este extra, necesaria y forzosamente
requieren esfuerzo, constancia y dedicacin, y permitir en el tiempo no solo
conseguir las metas que nos propongamos sino hacernos de una forma de ser y
vivir a prueba de obstculos, dndonos algo que no tiene precio y que es carcter.
Vindome a m y viendo a los dems observo como el ser humano est hecho de
deseos prcticamente ilimitados. Todos quisiramos tener ms, ser ms, incluso
vivir ms. Cuando enlistamos todas aquellas cosas que quisiramos lograr lo
lgico es que algunas nos parezcan sino irrealizables casi imposibles, pero si
valen la pena, por qu no intentarlo?
Cuntas veces he escuchado la frase: "no cre que fuera posible"? Frente a
hechos o logros de otras personas lo ms natural es que se nos vengan dos ideas
a nuestra mente: lo fcil y realizable que parece el hecho una vez realizado y el
por qu no fuimos nosotros quienes lo hicimos.
A veces pareciera que ante los retos solo estaramos dispuestos a correr aquellos
riesgos siempre y cuando tuviramos la certeza de conquistar. Si as fuera
dejaran de ser riesgos! Un riesgo implica la posibilidad de ganar o perder, si solo
intentramos aquellos por lo que tuviramos certeza de lograr la vida sera harta
aburrida, pero no solo eso, en realidad nunca creceramos como personas.
El intentarlo nos permite ver hasta dnde podemos llegar, pero lo que es mejor,
desarrollar con la prctica capacidades que nos van haciendo mejores, y no
mejores con relacin a los dems, sino mejores con relacin a nosotros mismos.
Este ser mejor abarca crecer en miras, en sueos, en confianza, desarrollar
carcter, valor, compromiso, superar nuestros miedos, obstculos y lmites, y
finalmente llegar a ser los seres de excelencia que estamos llamados a ser.
-
18
Recuerdo una vez que al inicio de mi recorrer profesional por esos treinta aos vi
eso de la trascendencia de mis acciones una manera muy clara y muy sencilla.
Tenamos que llevar una carga a un cliente, pero por cuestiones de organizacin
interna no pudimos llegar a la hora que habamos convenido con lo que el cliente,
con razn justificada, nos rechaz el embarque. Todava recuerdo sus palabras:
lo ocupaba para las 12. Nosotros no pudimos llegar a las 12 y ya la venta no se
pudo hacer. Es as como me di cuenta y lo adopt como impulso motivador el que
todo lo que uno hace debe ser lo ms excelentemente posible, aspirando a una
perfeccin no porque uno la pueda alcanzar o no, sino porque es lo mnimo que
uno merece y que merecen los dems.
Ese impulso motivador que todos buscamos para alentar nuestro andar por la vida
debe ir en dos sentidos para estar equilibrado: hacia afuera al logro de metas y
objetivos y hacia adentro para transformarnos constantemente en mejores y ms
trascendentes personas.
Entiendo que en ocasiones el trmino y sentido de lo que entendemos por
motivacin est profundamente relacionado con lo externo, con el logro de las
metas y objetivos tangibles que nos hemos trazado: un proyecto, una formacin,
una familia, un trabajo, un negocio, un sueo. Pero de la misma forma todos esos
logros deben ser el reflejo de las mejoras internas e intangibles que como
personas estamos experimentando, algo as como lograr cada vez ms siendo
cada vez mejores.
Todos conocemos el trmino de el camino fcil, y no solo el trmino sino incluso
la idea que resulta bastante tentadora de lograr lo que queremos de la vida de una
manera fcil y rpida, aunque en ocasiones eso significa renunciar a lo mejor de
nosotros mismos como personas.
Curiosamente ese camino fcil tambin es el camino ms corto, no solo hacia la
meta sino tambin de nuestro desarrollo persona. Lograr algo de una manera fcil
-
19
(con todas las acepciones que ese trmino implica) no nos permite recorrer la vida
a travs del esfuerzo y la dedicacin y por lo tanto no crecer en carcter como
personas.
Es como la historia del que de repente se saca la lotera y termina despilfarrando
la fortuna pues sta no fue fruto del esfuerzo y la dedicacin. En el caso del
camino fcil lo que se despilfarra no es otra cosa que nuestra propia vida, finita y
limitada en la cual estamos llamados a dar frutos y frutos en abundancia.
Recuerdo un breve relato de una pareja de esposos que estn juntos viendo el
atardecer y el esposo le comenta a la esposa que algn da sern ricos, entonces
la esposa le responde que ya son ricos, inmensamente ricos, pues se tienen el
uno al otro, que en todo caso tal vez algn da tengan dinero.
El mundo actual vaciado hacia el logro personal y la conquista a travs del
esfuerzo puede llevarnos a descuidar eso que nos hace verdaderamente ricos y
que, curiosamente es invaluable, y que es nuestra propia persona. Nuestros
valores, nuestros ideales, nuestro carcter; todo eso son cuestiones que la vida
pondr a prueba, como el fuego al acero, para templarnos, para hacernos ms
fuertes y, sobre todo, para hacernos mejores.
Claro que es bueno el tener, es bueno el lograr, es bueno el ganar, pero todo ello
debe ser el reflejo de nuestro crecimiento como personas por lo que debe ir de la
mano con la mejora interna de nuestro propio ser y mostrarnos y hablarnos de
aquello que no podemos ver ni escuchar de otra forma.
As como el fuego libera de las impurezas al oro, as las pruebas de la vida nos
liberan del oro que hemos acumulado y que brilla bastante, pero que no somos
nosotros pues nuestra esencia no es lo que llegamos a tener sino lo que llegamos
a ser, o como una vez escuch, el nico resplandor que queda al final es el del
brillo que hayamos logrado sacar a nuestra alma.
-
20
Esos treinta aos estn en mi vida, muchos momentos en ellos me enorgullecen,
otros no tanto, pero lo que s puedo decir es que siempre trat de hacer las cosas
impecablemente. Hasta ahorita no haba comprendido la trascendencia de eso
pero estas palabras, esta lectura, me permite ver que el aqu y ahora es una
ilusin que nos permite funcionar pero que en realidad estamos parados en la
eternidad y que todo lo que hagamos, bueno o malo, perfecto o imperfecto,
quedar por siempre y para siempre y de eso no habr nadie que sea responsable
ms que yo.
-
21
ABRIENDO CICLOS
Si, por favor. Ya me lo termin. Est muy rico, podra traerme tambin otro pan
dulce? Gracias
Que agradable estos tiempos que puedo darme, y ms an ese disfrute que he ido
adquiriendo conforme mi vida ha ido avanzando. Me acuerdo cuando joven, todo
era velocidad, rapidez, un correr por aqu y por all. Apenas y si me fijaba, por
ejemplo, en este trinar de aves que escucho en los rboles de enfrente. Cunta
gente los estar realmente escuchando, apreciando? Por lo menos yo no veo que
nadie ms est prestando atencin a esta meloda de la naturaleza.
All est aquella persona hablando por su celular, estos de la mesa de a lado
estn platicando, aquel otro con sus audfonos dudo mucho pueda or siquiera su
respiracin. Qu maravilla. Como si ese concierto fuera para m. Mi momento. Que
belleza.
-
22
Gracias, muy rico el pan por cierto!
Mi segunda taza, mi segundo pan mi segundo trabajo!
La verdad yo siempre cre que cuando me jubilara me iba a retirar a vivir mi vida
en paz, pero caray!, uno no piensa llegar a la jubilacin con tanta energa, con
tantos sueos. Todava me acuerdo que faltaban un par de aos para que me
jubilara y mi esposa y yo hablamos de ello. Veme consiguiendo una hamaca y
unas pantuflas, bromeaba yo. Ya cuando faltaban algunos meses nos pusimos a
hablar en serio de esa idea de emprender juntos un negocio. Para qu quieres
seguir trabajando, papa?!, me haban preguntado mis hijos. Y la verdad no saba
que responderles. Acaso era como el burrito de noria que acostumbrado a dar
vueltas y vueltas quera seguir sintiendo el yugo sobre mi espalda? Cmo pens
en eso, pero la verdad es que uno conforme avanza por la vida se va dando
cuenta que algn da este caminar llegar a su fin y la verdad no quera estarme
lamentando en mis ltimos momentos de no haber intentado aquello que quera
hacer, y vaya que ese negocio era algo que mi esposa y yo trajimos durante aos
en mente? A veces nos ponamos a hablar como si ya tuviramos el negocio
diciendo qu haramos, qu pondramos, incluso como responderamos a los
problemas que enfrentramos! Esto tambin me fascina de mi existencia como
persona: como si no tuviera suficiente con la vida presente que vive, uno todava
se pone a pensar en otras vidas que aunque no sean nos permiten interactuar con
nosotros mismos y con los dems en una realidad alterna!
Pero al fin lleg el da de saltar de una liana para agarrarme de otra. Que pesado
al principio. Igual yo siempre he estado habituado al trabajo, pero unas cosas son
las responsabilidades como empleado y otra ya como dueo. Qu hermoso se
vea nuestro negocio hace unos meses cuando lo inauguramos. Ya habamos
estado haciendo labor con posibles clientes as que cuando abrimos todo fue
cuestin de darle continuidad a la relacin y permitir el negocio avanzara, pero a
veces me remuerde la conciencia pues tambin con la perspectiva de que mi vida
-
23
terminar por qu no dejo todo esto y me pongo a disfrutarla? La respuesta me
asalta casi inmediatamente: pues por qu ests haciendo precisamente lo que te
gusta, aunque esto sea trabajar!
Uno piensa que ya con la edad ciertas cosas no le pasarn, por ejemplo, esos
nervios que sent antes de la inauguracin y esa ansiedad las semanas siguientes.
Si bien la vida nunca nos deja estar tranquilos, haca rato que ese tipo de
preocupaciones no llegaba al lmite de hacerme perder el sueo o mortificarme.
Poco a poco las cosas fueron tomando su cauce y el nerviosismo y la ansiedad
inicial dieron pasos al trabajo y a una especie de satisfaccin.
Si bien en mi trabajo siempre trat de demostrar esa excelencia que he
compartido de visin sobre la vida, ahora de jefe he podido aplicar digamos al
100% todo lo aprendido. Cosas incluso que ni yo saba que tena, como es
habilidad para los nmeros y las cuentas que me permiti las primeras semanas
pagar los sueldos y los gastos del negocio en tanto ste comenzaba a dar algo.
Me gusta pensar que la vida est hecha de los sueos que tengamos. Este
negocio es eso, un sueo que como puente, una vez concluido el anterior, me
permite seguir avanzando en mi existencia, a la vez que hago lo que quiero, lo que
me gusta.
Pero, dnde me qued en esto que lea? A ver, aqu hay varias hojas donde,
quien dej este libro aqu, no remarc nada. Veamos. Veamos. Ah, aqu
comienza de nuevo a remarcar! A ver. Cuando un hombre se libera de todos los
deseos que anidaban en su corazn, y por la gracia de Dios encuentra la dicha
divina, entonces su alma descansa definitivamente en paz. El que no es
perturbado por las penas ni anhela las alegras, ya desapegado de los placeres y
estando ms all de la pasin: ste es un sabio de mente equilibrada. Quien no se
regocija en la fortuna y los bienes, ni se apena en el infortunio o la enfermedad;
-
24
aqul que donde quiera que est est libre de ataduras, sin duda posee suprema
sabidura.
Paz. No puedo decir que estoy en paz. A menos que mi visin de paz sea muy
exigente. Siempre tengo alguna preocupacin. En este nuevo trabajo los sueldos,
la luz, el agua, la gasolina de los autos, el internet, tantas cosas que pensar! Y
claro, sin olvidar la preocupacin ms grande e importante: los clientes. Cuando
escucho estar en paz me viene a la mente un estado soporfero donde uno est
casi sin hacer nada. Tal vez y s soy demasiado exigente. Aqu por lo que leo es
una paz dinmica, una paz que nace del entendimiento propio de lo que es uno,
de lo que son los dems y del significado de la vida y la existencia misma. Ah,
que reflexivo me vi!, pero acaso uno puede llegar a saber cul es el sentido de
todo? Nunca me ha gustado reflexionar mucho, se me hace que quien piensa
mucho vive poco y a m me ha mantenido la vida muy ocupado como para
pasrmela pensando. Trabajar, mi esposa, mis hijos, mi vida, todo ha sido un
continuo devenir de situaciones que trato de enfrentar con el mejor de los nimos,
aunque a veces la vida misma me aplaste, y sin embargo, pensando un poco las
cosa, creo que estoy en paz.
No esa paz casi sepulcral que me imaginaba, sino una paz que emana de mi
conocimiento, de la satisfaccin de lo logrado, algo as como el capitn que an en
la peor de las tormentas se siente seguro pues sabe que la travesa incluye esos
vaivenes. Me gusta esa idea: Cmo disfrutar de una travesa por el ancho mar
sin sortear tormentas? Imposible, casi casi equivaldra a nunca salir del puerto.
Cuando un hombre se libera de todos los deseos que anidaban en su corazn, y
por la gracia de Dios encuentra la dicha divina, entonces su alma descansa
definitivamente en paz los deseos de su corazn los deseos de su
corazn, siempre me he imaginado a esos santos e iluminados sin eso que
nosotros conocemos como deseos de su corazn, gente desprendida de las
pasiones, pero cmo seguiran vivos sin nada que los aferrara a la vida misma?,
-
25
no s si se pueda llegar a ese nivel de desprendimiento, realmente no desear
nada, se me hace casi imposible. Pero reflexionando en mi vida siento ahora la
calma de la tormenta que ha pasado y me permite disfrutar del aroma de la tierra
mojada y de la naturaleza lmpida que con la lluvia ha quedado. Esa tormenta no
es ms que mis pasiones de joven, la misma fuerza que me empujaba adelante
veo que como huracn ha amainado. Ya no siento es aprensin, soy capaz de
escuchar, de pensar, de dejar que no sean mis emociones ni mis pensamientos
los que a trompicones me hagan ir se aqu all, sino permitir que las cosas
adquieran su propia naturaleza y se encaucen de una manera sencilla para
descubrir lo mejor que uno puede hacer.
Recuerdo la primera pelea que tuve con mi esposa. Yo siempre dejaba mi ropa
acomodada en cierta forma. Me levant atrasado para ir a mi empleo y a la seora
se le haba ocurrido cambiar el acomodo de mis cosas. Ah, como discutimos en
esa ocasin y luego como nos arrepentimos! Lloramos y nos disculpamos, y
bueno, la vida sigui. Pero ahora lo veo y casi casi veo a otra persona, otro yo
diferente donde los exabruptos eran cosa de todos los das y donde las emociones
estaban a flor de piel.
Quin tiene la razn? Uno podra pelear y pelear y pelear si tuviera la certeza de
tener esa razn, pero quin tiene la razn? Me cost mucho tiempo entender que
en el mundo de los negocios es de suma importancia tener la razn, pero no en la
familia, ah es mejor estar en paz. En el mundo de los negocios la inteligencia
predomina, en la familia son los sentimientos los que estn por encima de todo.
De qu vale tener la razn y defenderla a costo de todo- en la familia si con ello
se perder esa tranquilidad? Bueno pues as lo veo hoy. Esa paz que tengo no es
por esa carencia absoluta de deseos, sino porque se han ido esos deseos que
ms que liberarme me constrean como si ellos mandaran sobre mi vida. Y me
siento en paz.
-
26
Pero incluso esa paz que ahora siento no ha sido un obstculo para que avance
decididamente en las nuevas metas que me he propuesto, al contrario, esa
tranquilidad me ha dado lucidez mental que me permite pensar bien las cosas y
actuar como dicen con pies de plomo.
Quien no se regocija en la fortuna y los bienes, ni se apena en el infortunio o la
enfermedad; aqul que donde quiera que est est libre de ataduras, sin duda
posee suprema sabidura, bueno, bueno, no creo ser sabio ni nada de eso pero
me he dado cuenta que la vida es por s misma y que debo aprovechar mi
momento aqu ms que sacrificarlo por una carrera loca en pos de lo que no soy
yo ni puedo llevarme cuando me marche.
Curiosamente esta forma de pensar que para alguien pudiera sonarle como
desapegada de los logros y las conquistas o el llegar a obtener no me ha hecho
menos capaz, menos competitivo, o menos profesional, al contrario, me ha
liberado para lograr esto ltimo en funcin de mi persona, es decir, los logros y las
conquistas estn para m, no yo para los logros y las conquistas.
De la misma forma, aunque pareciera ir en sentido contrario, esto me ha permitido
un mayor nivel de excelencia y profesionalismo pues ya no busco solo el beneficio
inmediato que pudiera obtener de algn cliente sino entablar una relacin de largo
plazo con l, lo cual solo puede darse con el servicio, la calidad y la calidez,
relacin que por ser de largo plazo redituar mayormente en beneficio de ambos
que si tan solo buscar la ganancia aqu y ahora.
Recuerdo que esto lo aprend en mi empleo, en los primeros meses, cuando una
vez el que era el dueo se me acerc mientras un cliente haca una reclamacin,
mi jefe pregunt que si qu pasaba a lo que yo le hice ver que el cliente estaba
reclamando como garanta del producto que acababa de adquirir algo que no era
cubierto por la empresa, s que no era mucho el importe involucrado, pero la
garanta era la garanta y lo que quera el cliente no era cubierto por ella.
-
27
Recuerdo que mi jefe le dijo al cliente que no se preocupara, que la empresa
correra con responderle en cuanto lo que solicitaba. Cuando el cliente se retir
recuerdo que mi jefe me dijo, y ahora lo entiendo, que si bien yo tena la razn en
cuanto a la relacin con los clientes deba tambin tener la visin: lo que el cliente
solicitaba si bien no era procedente conforme a la garanta no implicaba realmente
un quebranto financiero para la empresa, y s, si nos negbamos nos
ahorraramos eso pero perderamos un cliente, y seal esa frase que se me ha
quedado grabada, que la entiendo ahora, que la vivo en lo que hago y que,
curiosamente tiene que ver con esto que estoy leyendo: el cliente es ms
importante que unos pesos. Lgica: el cliente puede traer muchos pesos ms en
el futuro, pero unos cuantos pesos hoy pueden hacer perder a un buen cliente.
Recuerdo cuando le platiqu esto a un amigo el amigo se burl de mi jefe diciendo
que por eso no tena ms dinero, ms dinero?, si mi jefe estaba forrado en dinero
o al menos viva mucho mejor que todos nosotros, en cuanto a mi amigo, pues la
verdad es que ahora con el tiempo no veo que esa filosofa le haya dado ms
dinero, al contrario, el sentido de ganancia inmediata le ha hecho perder buenos
clientes y uno que otro proveedor. Tal vez esa sabidura a la que se hace aqu
referencia, sabidura como el saber algo, pero saberlo bien, completo, total. Una
ganancia inmediata en el aqu y ahora no es una visin amplia de los sucesos. A
veces creo que por visiones as se ha echado a perder muchas cosas en nuestro
mundo, por ejemplo lo del medio ambiente. Las ganancias inmediatas que
pudieran obtenerse de expoliar al medio ambiente vuelven con el tiempo para
cobrarnos factura y en ocasiones, sino es que siempre, con intereses. Es as como
esa sustentabilidad de la que ahora se habla busca precisamente equilibrar esas
ganancias del aqu con los beneficios futuros del maana. Igual con la relacin con
los clientes. Me gusta pensar en eso en trminos iguales de sustentabilidad:
calidez, calidad y servicio.
Entiendo que una cualidad del ser humano es su constante inconformidad ante la
vida, esto nos ha empujado tanto como de manera individual como grupal, a los
-
28
cambios y evoluciones que han mejorado nuestra vida y nuestro entorno, an as
siempre tenemos esa inconformidad presente en nuestra vida que nos recuerda
que solo estaremos tranquilos cuando la excelencia y perfeccin sea alcanzada.
Cuntas veces nos ha sucedido que ante alguna tarea que se nos ha
encomendado simple y sencillamente no nos ha gustado y hemos empezado de
nuevo de cero la misma? Un escrito, un dibujo, una pintura, un discurso, todo lo
que hacemos es susceptible de, como coloquialmente se dice, "no llenarnos el
ojo" y simplemente deshacerlo para volver a hacerlo. Lo anterior, que supongo
todos en algn momento hemos experimentado, es un reflejo del sentido de
excelencia y perfeccin que tenemos ante la vida, las relaciones y todo aquello
que realizamos.
Esto tiene un mucho de positivo pues nos empuja a mejorarnos constantemente, a
superarnos a nosotros mismos y a tratar de alcanzar esa excelencia a la que todos
aspiramos, pero de la misma forma agrega una presin considerable pues de la
misma manera nos condiciona para exigir a los dems ese grado de perfeccin
que pocas veces es alcanzado.
Recuerdo una historia de un guila que cay de su nido y desde pequea fue
criada por las gallinas, cuenta la historia que una vez que creci el guila se
comportaba como gallina, escarbaba el suelo en busca de semillas y apenas y si
daba unos tmidos revoloteos. En una ocasin ve un guila en lo alto y se asombra
de lo bella, hermosa e imponente que es, a lo que las gallinas le dicen que se trata
de un guila, el rey de las aves, pero que ni suee porque ellas son gallinas y no
pueden aspirar ms que a vivir al ras del suelo.
En nuestro interior todos sentimos que no somos solo esto que vemos y tenemos,
sentimos, como el guila de la historia, que a pesar de andar al ras el cielo nos
llama, hay algo que retumba constantemente en lo que hacemos, incluso en los
problemas que enfrentamos, que nos dice lo grandioso que somos y que estamos
llamados a ser.
-
29
Pero de la misma forma que la historia, constantemente vemos, sentimos y omos
ese llamado a seguir al ras del suelo, a no pensar en volar (al menos no volar
mucho) y en conformarnos cuando de inicio no estamos llamados a eso sino al
contrario, es con todo eso que tengamos en contra como al final nos daremos
cuenta que nuestro lugar no est al ras del suelo, sino en lo alto del cielo.
Este llamado a la excelencia no es imperativo de lo que hacemos, sino de lo que
somos, somos seres de trascendencia, podemos ver hacia el pasado y construir
hacia el futuro, podemos hundirnos completamente en la oscuridad para luego
salir volando hacia la luz, podemos experimentar en nuestro interior lo mismo el
cielo que el infierno, en una palabra podemos sentir constantemente la necesidad
de la plenitud, de la totalidad, de la trascendentalidad.
Con esta manera de pensar he desarrollado una accin para cuando me llega la
frustracin: cuando ese momento llega, es decir, cuando me siento inconforme,
cuando siento un revs en mi vida, me detengo un momento y me doy cuenta que
ese sentimiento que siento es un grito ahogado de mi interior que me dice que no
pertenezco a ah, que estoy llamado a ser ms y mejor, que no debo ni puedo
conformarme con menos que la excelencia, pero de la misma forma, que an
sintiendo ese abatimiento de mi deben salir las fuerzas necesarias para
levantarme y remontar mi camino.
Los momento de oscuridad en nuestra vida nos hacen sentir de manera palpable
el hecho de que estamos llamados a la luz, de la misma forma la inconformidad
que experimentamos es un reflejo de nuestra vocacin hacia la excelencia y la
trascendentalidad.
Qu ms est aqu remarcado?, veamos, el apego surge del deleite en los
placeres de los sentidos; del apego surge el deseo y del deseo, la lujuria y el ansia
de posesin; y esto conduce a la pasin y a la ira. La pasin turba a la mente y
-
30
merma la memoria, hacindonos olvidar nuestro deber. Esto acarrea la
insensatez, y la insensatez lleva al hombre a la destruccin. Pero el alma que a
pesar de estar en el mundo de los sentidos, mantiene sus sentidos bajo control
est libre de apego y descansa serena. Supongo se refiere a esa ambicin
desmedida que uno puede experimentar en la vida. Una vez le, no s dnde, que
alguien haba dicho que la tierra tena recursos para sostener la vida de millones,
pero no para satisfacer la ambicin de unos cuantos. Creo es verdad. El siempre
querer tener ms no tiene fin, como decimos, no tiene llenadera. En los negocios
he visto eso, como aquella vez que se quera cambiar el empaque de cierto
producto por otro, no era mejor el empaque ni nada de eso, ah!, pero el diseo
permita ponerle un poquito menos aunque se vendiera al mismo precio. Al final el
sentido tico de la empresa se impuso y s se cambio el empaque pero tambin se
ajust el precio. Ahora veo en ocasiones que no es as, cada vez cosas con
menos contenido o de menor calidad pero precios ms y ms altos, por eso no
hay clientes leales, porque no hay empresas leales!
Pero no puedo generalizar. Este caf, este pan, este lugar y el servicio atento me
hacen ver que no todos son as, pero en nosotros est el premiar y reconocer a
quienes nos ofrezcan esto que por lo visto ahora se puede considerar un plus
cuando ms bien debera ser lo mnimo a esperar en una relacin, s comercial,
pero tambin de respeto. La pasin turba a la mente y merma la memoria,
hacindonos olvidar nuestro deber. Esto acarrea la insensatez, y la insensatez
lleva al hombre a la destruccin. La calidad en el servicio, en los productos, es lo
contario a esta ambicin, pero igual implica un deseo por hacer las cosas de
manera excelente, quien no puede ver esto es preso de sus propios instintos, o
pasiones o pasiones como aqu dice. Y esta destruccin igual puede ser en la vida
personal o profesional, en esta ltima en los negocios y las relaciones que con
nuestros proveedores, nuestros clientes, nuestros jefes y nuestros empleados
entablemos.
-
31
Pasin, supongo se refiere al sentimiento avasallador connatural de la ambicin
por que tambin existe esa pasin donde uno pone el corazn, como decimos, en
todo lo que hace lo que permite darle un sentido a lo que hacemos y a lo que
somos. Pero viendo as las cosas entonces debemos tratar de hacer lo mejor que
podamos lo que hacemos pues eso mismo ser lo que somos y nos llevar por
senderos donde al final nos sentiremos satisfechos o no de lo logrado, yo al
menos deseo sentirme satisfecho. Satisfecho como ahorita, sentado aqu,
sintiendo este aire tan agradable que marca el momento en que el da comienza a
cambiar de la frescura de la maana a esos bochornos de medioda, medioda?,
an faltan unas horas pero igual que bien me la he pasado. Me doy cuenta como
estos espacios conmigo mismo me permiten pensar en lo que he hecho, en lo que
puedo hacer, pararme por as decirlo a la mitad de una cuerda floja que estoy
surcando para ver donde he estado y hacia dnde puedo ir pero siempre teniendo
la conciencia de donde estoy para no caer.
Pero el alma que a pesar de estar en el mundo de los sentidos, mantiene sus
sentidos bajo control est libre de apego y descansa serena, me gusta pensar en
esa serenidad como algo a mi alcance, por ejemplo, este momento. Gente que
camina de aqu para all con sus manos cargadas de cosas y sus mentes llenas
de ideas, autos que recorren las calles en un interminable tiovivo con personas sin
nocin unas de otras, maquinaria que se oye a lo lejos tal vez de una construccin
o bien de servicios pblicos, pero detrs de esos sonidos y esas imgenes hay
otro mundo, un mundo que ah ha estado, un mundo que ah est, un mundo que
descansa sereno en s mismo invitndonos a nosotros a esa serenidad. Ese grillo
que canta, por ejemplo. No lo veo. No s donde estar. S s de donde viene su
sonido. Parece que de esas plantas. An as no lo veo, pero s ah est. Pero ya
estaba antes ah, antes de que yo me diera cuenta, antes de las gentes, los autos
y la maquinaria. Un grillo que solo se tiene a l y su corta existencia. Y yo, ser
ms que un grillo? Mi vida llena de problemas, de angustias, de pesares, acaso
debo cargar tanto? Tambin tengo alegras, esperanza, momentos de paz, acaso
no puedo elegir? No digo elegir lo que me pase sino ms bien elegir cmo
-
32
reaccionar ante lo que me pase. El grillo canta y yo no puedo cantar?, Cmo iba
aquella cancin de mi juventud? La letra no la recuerdo, pero la tonada era
mmmmmm mmmmm mmmmm, mmmm mmmm mmmmmm, mmmm mmmmmm,
mmmmmm, algo as. Este momento de este mi canto, mi momento, dur unos
segundos, ni el mundo cambio ni mi vida: la gente, los autos, la maquinaria todo
sigue aqu, igual mis pendientes, mis proyectos, mis dudas, mis anhelos, pero por
un momento hice todo a un lado y solo exista mi canto. El grillo vuelve a cantar.
Mmmmmm mmmmm mmmmm, mmmm mmmm mmmmmm, mmmm mmmmmm,
mmmmmm l y yo cantamos. l con su crepitante sonido, yo con un tmido
tarareo de una cancin que no recuerdo su letra pero que an retumba en mi
corazn. No busqu superar su canto, al contrario, me gustaba orlo como parte
del mo. Respeto y tolerancia. Y si puedo respetar y tolerar a un grillo, no podr
respetar y tolerar ms a una persona? Mi familia, mis amigos, mis clientes! As es,
mis clientes. Clientes que son personas al fin de cuentas y que de una u otra
forma confan en los servicios que se les dan, en los productos que se les ofrecen.
La calidad, la calidez y el servicio forman parte de ese respeto que les doy, pero
que tambin me doy a m mismo pues s que estoy llamado a la excelencia y por
lo tanto no me conformo con menos.
Aqu sigue lo remarcado, Un hombre sin disciplina, jams obtendr sabidura, ni
tampoco contemplacin. Sin contemplacin no puede haber paz, y sin paz, cmo
puede haber gozo? Pues cuando la mente vaga tras los placeres de los sentidos,
la pasin perturba su sabidura, igual que el viento empuja un cascarn sobre las
aguas. El hombre que aparta sus sentidos de los placeres externos obtiene serena
sabidura. Cuando es noche para los dems seres, el hombre disciplinado
despierta a la Luz. Y lo que es da para los dems seres, para el sabio que puede
ver, es noche. Al igual que todas las aguas fluyen hacia el ocano, y no por eso el
ocano se desborda, el sabio, aunque le surjan deseos, permanece en unidad
inquebrantable con su paz interior. El hombre que abandona el orgullo de la
posesin, libre del sentimiento del yo y de lo mo, alcanza la paz suprema.
-
33
Siempre he pensado, y as se los he transmitido a mis hijos, que todo en esta vida
requiere de dos cosas: constancia y disciplina. Bueno, no siempre, esto se me
tuvo que inculcar por mis padres. Recuerdo cuando una vez le dije a mi madre que
no deseaba ir ms a la escuela. No me gustaba adems que haba chicos que se
la pasaban molestndome, por qu aguantar todo eso? Muy bien me dijo mi
madre- solo que de ahora en adelante debes pagarme por comer en esta casa,
porque te tenga tu ropa limpia, por tener un lugar donde dormir Cuando le
pregunte que si por qu tena que hacer todo eso me aclar que antes mi
obligacin era estudiar, prepararme, ese era el pago que yo les haca por todo lo
que ellos me daban, pero si ya no quera pagarles con ese esfuerzo entonces
haba que cambiar la moneda. Ni que decir que mi deseo por desertar de la
escuela se esfum y comprend que uno debe seguir adelante en sus metas sin
dejarse detener por los embates que de la misma vida pueda recibir.
Primaria, secundaria, preparatoria. Yo crea tener muy arraigado eso de la
constancia y la disciplina, pero vino la carrera y la oportunidad de trabajar.
Cuando estaba estudiando la carrera me surgi la oportunidad de trabajar medio
tiempo, lo cual hice con gusto, aunque me costaba un esfuerzo adicional pues
tena que trabajar y estudiar, pero al fin poda disponer de mi dinero. Cuando se
me ofreci la posibilidad muy tentadora de trabajo de tiempo completo fue mi
padre quien me arroj luz. Es tu decisin, hijo, solo considera esto. Estudiar
ahorita es como ahorrar. Tal vez te prives de algunas cosas, como esta
oportunidad de trabajar tiempo completo, pero a la larga poseers un capital para
adquirir cosas mayores y ms valiosas. Pero igual, si no deseas esperar puedes
ahorita mismo gastarte ese capital, dejar la escuela y comenzar a trabajar, solo
que igual que el ejemplo, dinero que se va ya no vuelve, piensa bien en que lo
gastas. Tres das me llev tomar la decisin pero al final opt por continuar mi
carrera. La verdad no puedo decir que si hubiera dejado la carrera me hubiera ido
mal, eso no lo s. Amigos que dejaron los estudios les ha ido bien, lo nico que
puedo decir es que mi constancia y mi disciplina se fortalecieron y hasta la fecha
-
34
tengo herramientas profesionales que me han servido para construir mi proyecto
de vida.
Cuando es noche para los dems seres, el hombre disciplinado despierta a la
Luz, que cierta esa frase, el menos como la entiendo, es decir, que la disciplina,
ms bien la constancia y la disciplina, pueden transmutar los eventos que uno
enfrenta en la vida. Muchas veces me ha tocado ver compaeros que se abaten
ante lo que les pasa, igual yo me llego a sentir mal, triste o deprimido, pero no dejo
que las circunstancias sean las que decidan lo que debo hacer. En todo caso el
paso que hay de dar lo doy aunque no tenga gana, esta constancia y disciplina
cuando se llega a arraigar en uno con base en el ejercicio continuo de la misma
llega a formar lo que llamo carcter. No quiere decir que si las cosas van mal, si
las circunstancias son adversas, uno haga como si todo estuviera bien, para nada,
tampoco se trata de fingir o que no es, por el contrario, o al menos as lo veo yo y
as lo he vivido yo, se trata de que a pesar de lo que nos toque vivir uno sigue
avanzando. Una vez le por all que en ocasiones uno debe seguir caminando
incluso cuando se halla hecho de noche y es algo con lo que estoy de acuerdo.
Tal vez ambas frases se refieren a lo mismo: esa capacidad inherente en cada
uno de nosotros de hacerse dueo de su propio destino.
Claro que no he llegado a esta paz que aqu se menciona, ojal algn da lo haga,
a veces me desespero, me turbo, me angustio, como en los primeros das de mi
negocio en que no saba siquiera si tendra para pagar la luz, el agua, los
proveedores, los sueldos y un sinfn de cuentas que parecan acumularse mientras
los ingresos llegaban a cuentagotas, pero s he llegado a esa paz basada en un
confianza, no de que las cosas van a salir bien a como yo quiero o pienso, sino
que van a salir bien a como necesito vivirlas y es as, de mi vida, de donde saco
las lecciones que me permiten crecer como persona, como profesionista.
Mientras puedo darme el lujo de sentarme, como aqu, tomarme un caf, como
este, y simplemente ser, como ahora.
-
35
TRASCENDIENDO CICLOS
Con razn senta ese calorcito en mi espalda, no me he dado cuenta y el sol ha
comenzado a pegarme de lleno, pero ah veo otra mesa desocupada, ms en la
sombra de aquellos rboles, an no quiero irme, estoy muy a gusto, este es mi
momento.
Oiga!, voy a cambiarme de mesa, me llevar estos panes, que por cierto estn
muy sabrosos, pero trigame, por favor un poco ms de caf.
Ya con esta seran tres tazas y tres panes, pero, que rico est!
Viendo este ltimo pan que me queda no puedo menos que pensar en mi nieta, ya
lejos de aqu, y cmo le gustaba el pan dulce! Recuerdo el da que mi hijo me dijo
se cambiara de ciudad. Un mejor trabajo, una mejor oportunidad. Qu padre
-
36
puede no sentirse feliz por algo as? No te alegras, pap?, estas palabras me
sacaron del shock que el anuncio me haba producido. Claro que s, mi hijo, me
da gusto, has trabajado mucho y s que puedes dar ms. Los pasitos de mi nieta
que se oan en la cocina y su voz preguntando cosas, tratando de devorar el
mundo con su curiosidad, eran la razn de los sentimientos encontrados que en
ese momento experimentaba.
El marasmo de pensamientos se agolpaban en mi mente, igual que ahorita lo
hacen: la noticia de que iba a ser abuelo, cuando pude sostener a mi nieta por
primera vez en mis brazos, su primer llanto, su primera enfermedad, sus primeros
pasos. Maldicin, no ahora, no ms lgrimas! Lo bueno es que aqu hay
servilletas. Como me he vuelto llorn ahora de viejo. En momentos como este
siento ese sentimiento en mi interior y lo abrazo pues es algo tan maravilloso, tan
abrumador, tan doloroso y a la vez tan amoroso.
Ya han pasado algunos meses y an no me acostumbro. Los primeros das
llamadas diarias, luego cada tres das, ahora cada semana. Internet, videos,
celulares, todo esto ha hecho un poco ms llevadera la carga emocional de tener
a mi nieta lejos, pareciera estamos cada da a su lado viviendo lo que ella vive y
sintindonos parte de una vida que aunque lejos no deja de ser nuestra. An as
me hace falta ese pedacito de carne acurrucado en mis piernas preguntndome
como conoc a su abuela, como las aves vuelan y los peces respiran en el agua o
por qu rezamos cada noche.
Que torpe me he sentido ante las preguntas de una nia de aos. Yo un adulto
que cree saber del mundo, que cree entender de la vida, tratando de responder a
donde se fue su bisabuela, mi mam, cuando nos despedimos por ltima vez de
ella. Mi nieta me ha hecho ver a travs de sus ojos de inocencia que el inocente
soy yo, pues creyendo saber no s y creyendo entender no entiendo. Construyo,
como todos, respuestas para hacer este mundo ms llevadero, pero s tanto de la
vida como una hormiga pudiera saber del funcionamiento del universo. Y an as
-
37
me siento tan orgulloso, tan enormemente orgulloso de que yo, siendo esa
hormiga existencial, pueda tomar en mis brazos a mi nietecita y darle una
explicacin que si bien no le responde toda su duda a cabalidad le da algo ms
importante: seguridad, estabilidad, confianza y esperanza.
Ah!, gracias. El caf est muy rico. Ya va a ser sta la ltima taza. Y gracias por
el pan, ya puede llevarse esto. No, no voy a querer ms, ya con esta sern tres
piezas y mi esposa me va a matar si me lleno y le dejo toda la comida servida.
Gracias.
Sigo con la lectura de lo remarcado. Al igual que todas las aguas fluyen hacia el
ocano, y no por eso el ocano se desborda, el sabio, aunque le surjan deseos,
permanece en unidad inquebrantable con su paz interior. El hombre que abandona
el orgullo de la posesin, libre del sentimiento del yo y de lo mo, alcanza la paz
suprema. Este es, oh Arjuna, el hombre que descansa en Brahman. Al reconocerle
desaparece toda ilusin. Aunque esto ocurriese en el ltimo momento de la vida
de un hombre sobre esta tierra, ste puede alcanzar el Nirvana Supremo: este
hombre encontrar paz en la unin con Dios.
Comparado con mi vida siento llegar a un momento de mi existencia donde este
remanso, si no alcanzado, es alcanzable. Ya no siento esas vicisitudes propias de
mi juventud, donde la pasin e impaciencia se conjuntaban junto con los deseos y
la ambicin, sino que veo, siento y valoro la paz misma que me da ser y vivir. Me
fascinan los proyectos que empiezo, como el de este negocio, pero ahora lo hago
por gusto, con un sentido de compromiso conmigo mismo y con los dems, y con
una visin no solo prospectiva sino trascendente.
Aqu sigue. Antes te he hablado, oh prncipe sin mcula, de dos caminos que
conducen a la perfeccin, el de la sabidura de los Sankhyas, Jana Yoga, y el
camino de la accin de los yoguis, el Karma Yoga. El desapego en la accin no es
alcanzable mediante la pasiva inactividad. Ni la suprema perfeccin es alcanzable
-
38
por la mera renuncia. Pues el hombre no puede estar inactivo ni por un momento.
Todo es impulsado a la accin irremediablemente por las tres fuerzas de la
naturaleza: los tres Gunas. Aqul que se abstiene de la accin, mas no aparta su
mente de los placeres de los sentidos, vive en la ilusin y es un falso seguidor del
Camino. Pero aqul que, manteniendo todos sus sentidos bajo control y libre de
apego, se entrega al camino del Karma Yoga, de la accin sin apego, ste es un
gran hombre en verdad.
Ese apego es el que sent, el que siento con mi nieta. Como me doli cuando se
fue. Todo en la casa me la recordaba. En esos momentos, como en otros, como
ahora, he llegado a pensar que la vida nos da y que la vida nos quita en un vaivn
sinfn de olas existenciales para erosionar el ego de nuestra existencia y quitarnos
poco a poco ese apego que aqu se menciona.
Cuando triste me senta por no tener a mi nia recordaba como yo tambin en su
momento alc mi vuelo cuando era joven y vol con alas propias, claro que yo no
me fui de ciudad estando tan pequeo como mi nietecita, pero los ojos de mis
padres se anegaron de lgrimas cuando les dije que me iba a la universidad a otra
ciudad. Yo ya estaba grande y crea que mis padres estaban ms bien distantes
de m. Mi pap siempre fue un hombre duro, mi madre si bien ms emocional ya
me vea como un hombrecito, con sus propios espacios y sus propias ideas, ideas
que muchas veces chocaron con las que ellos tenan. Pero esa vez que les dije
que me iba a estudiar fuera vi una mirada que no haba visto en mi vida, como si el
mar se asomara por sus ojos y las manos se detuvieran para impedir mi partida,
pero en vez de lamentos y reproches recuerdo ese abrazo de mi padre y la
bendicin de mi madre desendome lo mejor. No quise volver la vista cuando
tom el autobs, saba que si lo haca se daran cuenta de las lgrimas que
tambin rodaban por mis mejillas, ellos estaran igual? Ah, pero que tonto es
uno! Claro que me hubiera gustado que me vieran lloran y abrazarlos y besar sus
lagrimas con devocin de un hijo que agradece todo lo que sus padres han hecho
y todo lo que le han dado, pero no fue as, y esa imagen de m partiendo sin
-
39
voltear me golpe la vez que vi a mi madre en su lecho final. Ah s llor, por lo
que no pudo ser, por lo que no sera y al final agradec, agradec ese espacio de la
existencia que me permiti compartir con ella, agradec sus cantos cuando nio,
sus caricias cuando enfermo, sus castigos cuando erraba. No pregunt por qu?,
ms bien dije gracias. Y en ese momento me d cuenta, no que la olvidaba, sino
que trascenda lo que yo era y me haca uno con la imagen de lo que mi madre
signific en mi vida. Me levant ligero, sabiendo que a donde fuera la llevara
siempre conmigo. Descubr que ese gracias me liberaba de un dolor que me
abrumaba, que me constrea, y que al mismo tiempo no me permita vivir a
plenitud lo que mi madre haba sido y lo que seguira siendo para m.
Ahora con mi nieta me siento en este momento de agradecer y de trascender.
Como dice aqu, uno no puede estar sin accin. La vida misma es dinmica, es
cambiante, si nunca cambiara no pudiramos apreciarla. En esta ocasin esta
partida de mi nieta me da la oportunidad de entender, de experimentar esos
cambios, de agradecer su presencia en mi vida y de confiar en que las cosas son
como debera ser. Accin sin apego, en otras ocasiones ledo y escuchado esta
frase, y siempre se me ha hecho algo contradictorio, pero cada da la entiendo
ms. Mi nia se ha ido pero sigue aqu, si yo me negar a ese hecho, es decir, si
ese apego que aqu se menciona me hiciera rebelarme contra las circunstancias,
en realidad yo no fuera un ser libre ni dejara ser un ser libre a los dems y sin esa
libertad no podra amar a plenitud y a cabalidad. As que cuando el golpe de la
noticia de que mi hijo y su familia se mudaban pas, vino la calma de entender, de
comprender y de agradecer.
Ese mismo espritu es el que se ha ido impregnando en mi vida profesional,
curiosamente, dndome mayores satisfacciones. Digo curiosamente pues uno
esperara que la ambicin competitiva llevara a cada quien a ser ms y tener ms,
pero en mi caso he visto que no es as, y no solo en mi caso, sino tambin en el
de mis compaeros. Aunque siempre he tenido la idea vaga, no es sino hasta
ahora ya en mi madurez, que me he dado cuenta a cabalidad que aquello que
-
40
deseas se vuelve por as decirlo tu dueo y seor. En mi vida profesional he visto
ir y venir amigos y compaeros que no buscaban ser ms y mejores sino tener
ms y ms y al final vea en ellos ese desencanto, de la misma forma he visto y
me he visto buscando siempre y en todo momento ser lo mejor de lo que puedo
ser, sintindome satisfecho solo con eso, pero adems vindome sobre
recompensado con las ganancias adicionales que ello trae.
Ahora entiendo, o creo entender, que esa bsqueda externa de obtencin y
posesin, si no lleva un soporte interno de sensacin y satisfaccin, conduce a un
callejn sin salida que tarde que temprano traer un estado de nimo ominoso a
nuestras vidas. Si uno hace y hace bien, con excelencia e impecabilidad, lo que
tiene que hacer porque le gusta, porque cree en ello, porque se siente satisfecho,
y si adems de eso se le paga o uno gana dinero, es como una copa existencial
cuyo gozo la desbordara. Por el contrario si uno hace lo que tiene que hacer solo
porque algo externo conseguir, ese espacio interior no llenado traer en algn
momento dado enojo o frustracin.
De aqu se deriva esa actividad que creo entender en esto que estoy leyendo
donde hay un desapego en el sentido de la ambicin externa pero que s se
sustenta en un deseo de encontrase con uno mismo y desarrollar todo su
potencial, una vida, por decirlo de otra forma, vivida en libertad. Al menos eso es
lo que entiendo por eso de accin sin apego, o como dice ac, remarcado de
manera aparte en esta pgina: El sabio no debe confundir la mente de los
ignorantes que actan apegados al resultado de sus acciones; ms bien, debe
ejecutar sus acciones con desapego y devocin y as estimularlos a que hagan lo
mismo.
Respecto de esa libertad, cuando hablamos de vivir nuestras vidas todos
quisiramos tener el referente de una libertad casi total para ello, pero al ser parte
de un sistema social son muchos los factores que inciden en nuestras decisiones,
en la medida que la ltima decisin sea de nosotros ms dueos de nuestra vida
-
41
seremos. En todas las pocas han existido aquellos que se autocatalogan como
"rebeldes", gente que no est de acuerdo con el estatus quo de la sociedad y
quiere vivir, segn ellos, sin ataduras, libres, pero si uno analiza esos grupos lo
nico que hacen es salir de un sistema social para entrar en otros, en otros que
tambin tiene sus reglas, sus normas, acciones que reconoce y acciones que
sanciona.
De lo anterior lo rescatable es esa sensacin que el ser humano trae como parte
de su propia naturaleza de querer ser dueo de su propio destino, es as como
muchos buscan romper tantos lazos como le sean posibles con el mundo para
lograr eso, lo cual es prcticamente es imposible. Vivimos en un sistema social,
nos relacionamos con personas, y es en esa relacin que existe por decirlo as un
intercambio entre lo que damos y lo que recibimos. Este dar y recibir no se
circunscribe a las relaciones sociales sino tambin a las laborales y a las
personales, y no hay nada de malo en ello, as es como funciona la sociedad y las
personas, el problema radica cuando los factores externos tienen tal peso en
nuestras decisiones que prcticamente son ellos los que comandan nuestra vida.
En cuestin laboral, apagar nuestros deseos de realizacin personal en tal o cual
actividad por otra que nos d ms dinero solo implica que hacemos dueo de
nuestra vida a aquel que pueda pagarnos por ella; de la misma forma en la
cuestin social, el acallar nuestra forma de ser para agradar y ser aceptado
implica una traicin a nuestro ser interno a cambio de una aceptacin comunitaria;
por ltimo, en la cuestin personal, ceder a las exigencias de la relacin entre
amigos, pareja, etc. solo implica que es otro quien decide por nosotros.
Ahora bien, todo esto no quiere decir que no deban de considerarse todos esos
factores externos, entiendo que vivimos en una sociedad, necesitamos de los
dems tanto como ellos necesitan de nosotros, el problema es ceder cmoda y
convenencieramente las decisiones de nuestra vida a los factores externos que
inciden en ella. Siempre existirn esos factores externos, hay que valorarlos y
-
42
analizarlos, para finalmente ser uno quien tome la decisin final sobre las acciones
que hagamos. Que quede claro que todos los factores externos, absolutamente
todos, van de paso por nuestra vida, ninguno se quedar toda nuestra existencia,
al final nuestra lo nico nuestro es nuestra vida, es por ello que las decisiones
finales deben tambin serlo. La madurez de carcter implica que, al igual en un
barco de velas con el viento que encuentra, uno es capaz de utilizar lo que la vida
le pone para llegar a donde uno desea.
El ejemplo por excelencia que vi en mi vida de esa accin sin apego aunque
cargada de mucho amor fue las de mis padres. A mi viejo s se lo dije, meses
despus de la partida de mam, estaba en su casa y de repente me brot el
abrazarlo, el decirle lo mucho que lo quera y lo mucho que le agradeca. Mi padre,
ese hombre duro, fuerte, seco a veces, se derrumb en mis brazos anegado en
lgrimas dicindome lo mucho que siempre espero un momento como ese.
Maldicin!, por qu esperar siempre el momento ideal cuando cada momento
de la vida lo es? En esa ocasin el viejo y yo nos quedamos hasta la madrugada
hablando de la vida, de lo que uno cree que es, de lo que realmente es, de los
gozos y sinsabores que uno lleva y trae, de todo lo que uno termina cargando y de
esa balanza que al final de la vida pesa tanto entre lo que se hizo, lo que se quiso
hacer y lo que debi hacerse.
Como me hubiera gustado tener ese mismo momento con mi madre. Cuando mi
padre me habl para darme la noticia de su partida ya no haba mucho que hacer.
Recuerdo me qued sentando en la cama horas. No poda creerlo, ms bien no
quera. Cuando me despeda de ella las lgrimas limpiaron lo que pude y no hice y
lo que quise y no pude, an as si pudiera cambiar algo sera eso, decirle a mi
madre lo que le dije a mi padre: lo orgulloso que estaba de ellos, lo mucho que les
agradeca, y lo enormemente que los amaba.
Y esta brisa?, y esta frescura?, y estos sentimientos? Siento este viento que
de repente me acaricia y se me viene a mi mente la caricia de mi madre, como si
-
43
en este momento me dijera con esto que todo est bien, igual que cuando me
asustaba la noche, todo est bien, aqu estoy, y con eso me tranquilizaba. Soy
un tonto tal vez, este aire puede tener una explicacin lgica, fsica, pero esa