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Reportaje | Béisbol Andalucía

El béisbol también existeLa historia andaluza del palo y la pelota

Fanáticos del béisbol luchan diariamente pormantener a flote una práctica poco conocida en nuestra tierra pero con varias décadas de tradición

Ignacio LancharroSergio Armenteros

Cuando oímos la palabrabéisbol se produce ennuestra mente algo asícomo un acto reflejo querelaciona este deporte conuna práctica que se encie-rra entre las fronteras ame-ricanas. Si ahondamos unpoco en su historia cono-cemos la leyenda de AbnerDoubleday, un militar aquien se le atribuye la in-vención de este deporte,pero nada más lejos de larealidad, es una pura in-vención popular. En lo queciertamente no pensamoses en que a pocos kilóme-tros de nuestra casa, en unrincón de cada ciudad an-daluza, algunos “enfer-mos” sacan su bate y supelota cada tarde y se mar-chan a practicar su deportepreferido, o mejor dicho,su pasión. Y es que en nuestra tierraexiste el béisbol desde fi-nales de la década de loscuarenta, concretamentelos primeros registros re-cogen la existencia de undelegado de Cádiz en laAsamblea General de laFederación Española debéisbol y softbol en el año1947. En España, la Fede-ración de béisbol y de soft-bol es una de las másantiguas que existen. Es deprincipios del siglo XX,poco más reciente que lade fútbol.Curiosamente, desde ese

creto una foto de un par-tido en Chapina, datan deuna liga regular en 1967,aunque hay personas quehablan de la existencia deun equipo de béisbol enSevilla en 1964.A partir de la siguiente dé-

con Paco Pepe, CarmeloMolina o Manolín (este úl-timo lanzador de las selec-ciones españolas y del FCBarcelona, después mana-ger de las categorías me-nores de este equipo); SanAgustín, Golden Falcons,

concreto, el equipo Al-Án-dalus estuvo a punto deconseguir el ascenso a Di-visión de Honor (la má-xima competición enEspaña). No pudo dadoque un tren que iba a fun-cionar en la Expo atrave-

Medias Rojas en el campeonato de España Juvenil en Pamplona

año 1947 hasta veinte añosdespués, en 1967, no setiene constancia escrita dela práctica del béisbol enAndalucía al perderse losdocumentos con la trans-formación de ser una De-legación de FederaciónNacional a ser Federaciónterritorial, pero sí se sabeque ya por aquel entoncesse jugaba en la base deRota. Con esto, los archi-vos más antiguos, en con-

cada, desde 1972, sí existemayor número de fuentesorales que acreditan laexistencia en Sevilla deequipos de béisbol como

Instituto de Lenguas Mo-dernas, CB San Pablo,Scorpions CB o MediasRojas, con jugadores comoAntonio “El Dominicano”,Manolo Guerra, ManuelEspina o “El americano”(del barrio del Tardón).Hacia finales de los setentay principios de losochenta, había más de 500licencias en la ciudad detodas las categorías, desdealevines hasta sénior. En

Distrito VII, en cuya plan-tilla figuraban Capi o LuisCisneros; Charlie Brown,

El béisbol en Andalucía data del año 1947

A principios de los80 había más de500 licencias en laciudad de Sevilla

saba justamente el terrenode juego del club, por loque Sevilla se quedó sinsitio para practicar el béis-bol. Ahí comenzó a decaereste deporte en la ciudad,hasta quedar un grupo re-ducido a finales de esa dé-cada. En esa épocatambién existieron equiposcomo Altair, Dos Herma-nas o Scorpions. Por otra parte, el softboltambién estuvo presente enaquellos años, con elequipo Distrito X, con Fer-nando Martín y Elena delPozo. En los años setentase jugaba una liga extraor-dinaria en Sevilla. Repre-sentantes de las diversasfacultades y nacionalida-des que existían en la Uni-versidad de Sevilla sereunían para jugar en elEstadio de la Macarena oen Chapina.Mientras tanto, en eselapso de tiempo dondedecae este deporte en Sevi-lla, entre los años 1985-1989 aproximadamente, sesigue jugando en Morón y

en Rota, y empieza a ju-garse en un pueblo de Cór-doba llamado Benamejí,donde destaca el trabajo dela familia Espejo, encabe-zada por Antonio Espejo,quien da nombre a sucampo.Es en esta época cuandocomienza a funcionar la

Andalucía cuentacon siete equiposen su liga regional

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Bateador del Club de Béisbol SevillaFederación andaluza debéisbol y softbol, cuyo pri-mer presidente fue JoséMaría Ruiz, apodadocomo ‘Yeye’.Desde entonces hastanuestros días, por diversasrazones, el béisbol ha idoperdiendo adeptos. Todoaquel contingente de per-sonas comenzaron a for-mar el que es hoy el Clubde Béisbol y Softbol deSevilla, que junto alequipo de Dos Hermanasmantiene esta práctica enla antigua Híspalis. La coyuntura actualActualmente en el resto deAndalucía existen cincoclubes en Cádiz, donde po-demos citar el Club deOsos de Chiclana, lideradopor Francisco Rodríguez, olos Venenciadores deJerez. El béisbol en estaprovincia está claramenteinfluenciado por la base deRota, con Ricardo Sánchezy Ángel Rivera. Además,está el de Benamejí enCórdoba, dos en Málaga(Industriales y Tiburones)con Miguel Padrón, un an-daluz receptor de la selec-ción española en losochenta, y el Club Nave-gantes de Almería, cam-peón de España endistintas categorías inferio-res. Cabe destacar su espe-cial apuesta por el béisbolescolar y el softbol.

José Manuel Egüés es elque lleva el equipo sobresus espaldas, ayudado porsu familia.Aparte, existe un béisbolno federado en nuestra tie-rra. La colonia caribeña ysudamericana juega albéisbol y softbol en cual-quier lugar. En Granada,en La Línea, en Marbella,en El Ejido, en Almería yen Huelva. Lugares a losque no puede llegar la Fe-deración por su escasafuerza económica.La razón principal que ex-plica esta decadencia es lafalta de recursos económi-cos. Según explica el Pre-sidente de la FederaciónAndaluza, Ángel Martí-nez, la situación actual esde supervivencia. “La Fe-deración recibe 8.000 €anuales, de los cuales2.600€ son para pagar lasede, en la que estamosobligados a estar parapoder recibir la subven-ción. Con el dinero res-tante es imposiblesobrevivir, teniendo encuenta los gatos fijos (mó-viles e internet) más elcoste de los traslados, elhospedaje…y eso que losárbitros cobran cuando ar-bitran y si hay dinero”.Además, para ahorrar trá-mites burocráticos, losequipos pagan los arbitra-jes con la Federación

como intermediaria. Yaclara: “Por supuesto, nin-gún cargo cobra, ni el pre-sidente, ni la secretaria ninadie. Debemos el alquilerde la sede desde enero de2014”."En Andalucía, ahoramismo, no hay potencialpara mantener un equipoen División de Honor. Enotros lugares las Federa-ciones de béisbol recibensubvenciones que multipli-can hasta por diez el dineroque nosotros recibimos, apesar de superar a otras ennúmero de licencias”, ex-plica el presidente. Y esque, a pesar de las dificul-

tades económicas, nuestracomunidad cuenta con laliga territorial más fuertede España. La primera di-visión se ha estructuradode forma territorial: Cata-luña tiene seis equipos ju-gando entre ellos, el GrupoNorte (País Vasco, Nava-rra) tiene cinco equipos;Galicia y Asturias tienensiete; Madrid y Cantabriatienen 5; la Parte Este tieneotros tantos; y Andalucía,siete.Como apunta Ángel Mar-tínez, “somos la única ligaque jugamos al estilo desiempre, dos partidos porencuentro, es decir, se jue-gan dos partidos un mismodía, siendo uno de ellosmás largo que otro. Una delas razones de esta formade juego es para ahorrargastos. Y también paraasentar el espíritu de quepara jugar al béisbol se ne-cesita tener un equipo ensu máxima expresión, sindepender de ningún juga-dor”.La Federación Andaluzaestá haciendo una laborimportante en el desarrollode este deporte. En Alcaláde Guadaira existen dosescuelas deportivas y seestá intentando montar unaen la capital. “Los niñospagan diez euros, y coneso es difícil mantenerse,

porque el béisbol es un de-porte caro, y aquí quienesjuegan son personas declase baja”, apunta Martí-nez.Las personas de la Federa-ción van a los colegios adifundir y dar conoci-miento de este deporte.Además está el aporte deaquellos inmigrantes pro-cedentes de países en losque el béisbol es un de-porte arraigado fuerte-mente en la sociedad. Sinir más lejos, el propio Pre-sidente de la Federación esde origen holandés. Así, suafición le nació viendo al

“En otros sitios elbéisbol recibe diezveces más de subvención”

Neptuno, un gran equipode los Países Bajos que esla principal potencia euro-pea en este deporte.La presidenta corajeOtro de los grandes nom-bres propios en la materiaes el de Baldomera Peña,Baldo para quienes bien laconocen. Hablar de ellaimplica ineludiblementehacerlo sobre béisbol. Esuna de las veteranas deeste deporte en Andalucía.Lleva varias décadas tra-bajando por y para el juego"del palo y la pelota", sin

Barrio de Santa Clara. Distrito VII contra Base de Morón (1980)

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descanso, redoblando es-fuerzos y haciendo lo im-posible por evitar que estedeporte caiga en el extra-vío. Para descubrir el mo-mento en el que el béisbolabsorbió por completó aBaldo hay que remontarseunos veinte años en eltiempo. Por aquel enton-ces, su hijo, que llevabapegado a un bate desdeque era niño, entró a for-mar parte del equipo debéisbol de Amate, así queella echó raíces en el cluby pronto formó un vínculoque ahora mismo se adi-vina inquebrantable. Baldo comenzó por po-nerse a disposición del en-trenador que en aquelmomento dirigía a los chi-cos, y a partir de ahí fuedesempeñando todas laslabores que uno se puedaimaginar relacionadas conun club de béisbol. Ha sido

secretaria, vicepresidenta,vocal y ahora presidentadel Club Béisbol Sevilla.Yello al mismo tiempo quedesempeña una nueva fun-ción en la administraciónde la Federación Andaluza.Lo hace por amor a ese de-porte que tanto le cautiva,no vayan a pensar que de-trás de toda esta laboriosatarea existe un trasfondoeconómico. Nada máslejos de la realidad, sim-plemente pasión.A diferencia de lo que mu-chos puedan pensar por lapoca carga mediática queeste deporte genera en laciudad, el Club BéisbolSevilla, más conocido enla actualidad como RedSox (medias rojas en in-glés), lleva desde el año 95asentado en la capital an-daluza. Vivieron momen-tos fascinantes, llegando ajugar en División deHonor en 2011. Pero desdeentonces, el club lo únicoque puede hacer es luchar

El Club de BéisbolSevilla, consiguiójugar en Divisiónde Honor en el año 2011

por su supervivencia.Pudiera parecer que alcan-zar la cúspide estamentaldel béisbol nacional fue uninstante de gloria para laentidad, pero lejos de elloaquella temporada en laélite se convirtió en un in-fierno por las adversidadesque progresivamente tu-vieron que ir superando.Es por ello que Baldo noguarda un recuerdo dema-siado amable de esa época."Fue bonita la experienciapero demasiado dura", co-menta.El "patatal" de campo en elque venían jugando obligóa esta presidenta coraje a

luchar por uno acorde a lanueva división en la que sehallaba el equipo, y aun-que José Manuel García

(concejal de IU) accedió aconstruirles el nuevo re-cinto que demandaban, ellargo periodo que impli-caba realizar la obra forzóal club a jugar sus partidosen Benamejí (Córdoba)durante prácticamente la

“Jugar la máximacompeticion fueuna experienciabonita pero demasiado dura”

totalidad de la campaña.Esa coyuntura se traducíaen un gasto extra para lainstitución (1.000 eurostodas las semanas) e impo-sibilitaba que la plantilla sepudiera ejercitar para pre-parar los compromisos li-gueros. Sin la posibilidadde entrenar no es de extra-ñar que el combinado sevi-llano concluyera lacompetición en última po-sición.A la conclusión de lamisma, buena parte de losjugadores que habían for-mado parte de la plantillaabandonaron la institución.Algunos están ahora ju-

vuelta y no sé lo que va apasar porque el Ayunta-miento nos dice que si nopagamos la deuda contra-ída por el campo no nosvan a dejar entrar". Es unejemplo de lo anómalo delcaso. A día de hoy los RedSox cuentan con uno de losmejores campos de la re-gión, pero es propiedad delconsistorio de la ciudad.En realidad cualquier ciu-dadano podría hacer usodel mismo alquilándolopor horas previamente, aligual que sucede con otrosmuchos recintos deporti-vos. El problema es que elClub Béisbol Sevilla hacetiempo que no puede asu-mir los pagos al no teneringresos a los que afe-rrarse. La situación es verdadera-mente descarnada. Dehecho, hubo momentos enlos que desde el club seplantearon abandonar lacompetición y ni siquieracomenzar la liga. Única-

gando fuera, como IvánPeña, al que no hacemucho le concedieron elGuante de Oro de la Bun-desliga austriaca, galardónque acredita al mejor cat-cher de la competición. Esun hecho que revela la pro-pia Baldo cuando explicala situación por la que atra-vesó el equipo, como sicon ello quisiera dar a en-tender que los Red Soxcontaron con un plantel dejugadores mejor del quepodamos imaginar. La me-moria de Baldo conservabien toda esa clase de re-cuerdos. Ahora las cosas son másduras, si cabe. La tesituracomplica sobremanera laviabilidad del club, peroninguno de quienes lo in-tegran parece dispuesto adejarlo perecer. Lo explicala presidenta con crudeza."Empieza la segunda

“Si no pagamosla deuda, el Ayuntamiento diceque no nos dejaráentrar al campo”

Pitcher tras lanzar una pelota en un partido

Partido de béisbol en el campo de Amate

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Reportaje | Béisbol Andalucíamente la capacidad de con-vicción del resto de inte-grantes de la PrimeraDivisión evitó que Baldo ylos suyos arrojaran la toa-lla. Sin embargo no pudie-ron hacer lo mismo con losequipos de divisiones infe-riores, que no pudieron en-trar en competición porcuestiones presupuestarias.Con todo, se entiende queel club haya pasado de po-seer más de 150 licenciasallá por 2010 a las pocomás de 60 de las que dis-pone ahora. Una reducciónsumamente drástica que noactúa más que como re-flejo de las circunstanciasque rodean a la entidad."Hemos sido un equipomuy bueno pero la econo-

mía nos ha matado. Nocreía que el dinero fuera unfactor tan determinantepara la supervivencia", selamenta Baldo, no sinantes reconocer que otrosmuchos deportes minorita-rios viven una situaciónparecida. No obstante, lapersonalidad de la presi-denta ejemplifica que lasdificultades fortalecen alas personas. Es por elloque Baldo no desiste en suempeño por proteger aaquello que tanto ama."Por el beisbol estoy ha-ciendo cosas que en mivida iba a imaginar que lasiba a hacer", argumenta ensu discurso. Ella sigue acudiendo aAmate con la misma ilu-sión y dedicación que alprincipio. Le gusta estarpresente en los entrena-mientos del equipo, dehecho, suele ser la últimaen abandonar el recintodespués de que previa-mente lo hayan hecho losjugadores. Resguardadadetrás del banquillo, ob-serva cómo se preparansus chicos y entre bateo ybateo tiene tiempo inclusopara entablar pequeñas

chicas de Dos Hermanashan de conformarse concoger el bate en los entre-namientos que sí siguencelebrando. Quizá por eso,Luna lleva un año siendoanotadora (el árbitro encar-gado de las estadísticas delpartido y el que plasma enel papel todas y cada una

lo mucho que disfruta deljuego en todas sus vertien-tes. Y lo hace con una son-risa cómplice que nopuede evitar que se dibujeen su rostro cada vez queel béisbol se convierte entema de conversación."Este deporte engancha",añade en última instancia.

faceta femenina. Cuentaque hasta hace no muchodisputaban una liga decuatro con el otro equipode la provincia y los otrosdos que hay en la baseamericana de Rota. Puedeparecer un cifra irrisoria,pero en la actualidad ni si-quiera tienen la posibilidadde entrar en competicióndado que no poseen un nú-mero suficiente de jugado-ras. Así las cosas, las

de las acciones que suce-den en cada choque), paralo cual hubo de concluircon éxito el curso que serequiere para poder actuarcomo tal en partidos ofi-ciales. Luna consigue algode dinero por cada partidoen el que ejerce de anota-dora, aunque ella insiste enque no es el aspecto eco-nómico el que le mueve enesta tarea. Simplemente selimita a hacer hincapié en

Sevilla ha pasadode tener 150 licencias en 2010,a tener hoy en díapoco más de 60

conversaciones con ellos.Conoce a la perfección lahistoria de cada uno deellos, y eso que el planteles de lo más diverso. Cadajugador tiene una historiaparticular. Una de las cosasmás llamativas quizás seael método de captación, yes que a nivel amateur noes necesario tener una ha-bilidad previa con el batepara entrar a formar partedel equipo. Es más, aun-que no lo hayas practicadonunca seguramente te reci-birán con los brazos abier-tos. Así pues, a los nuevosse les va enseñando poco apoco, sobre la marcha.Uno de los jugadores quemás tiempo llevan en losRed Sox es ‘Pipe’. Él cono-ció el béisbol a través de supadre y lleva jugándolo enSevilla desde los 15 años.Actualmente hace tambiénlas veces de entrenador delos Medias Rojas, dedicán-dole todo el tiempo que sutrabajo le permite, puestoque ha de compaginar elempleo que le da de comercon ese deporte que tan"enganchado" le tiene. Sulongevidad en el club con-trasta con la de Neiro, elcatcher del equipo. Él hasido uno de los últimos enllegar. Aterrizó en Sevillaen diciembre y en cuantose enteró de que había unequipo de béisbol en laciudad no hesitó lo másmínimo. Al día siguienteestaba ya entrenando. Ve-nezolano de nacimiento,sus raíces sudamericanashacen que Neiro haya te-nido un nexo con la mano-pla de receptor desde lainfancia. Reconoce elmenor nivel que ofrece lacompetición en Andalucía,aunque ello no le impidesentirse satisfecho y con-tento por haber descu-bierto a los Red Sox.Pero la variedad de paísesrepresentados por jugado-res del Béisbol Sevilla noacaba ahí. Otro de los forá-neos es Donald García, ni-caragüense, e inclusocuentan con un suizo denacimiento en sus filas,Jorge, aunque realmente

este último es más deTriana que de cualquierotro lugar. Su caso no esmenos curioso que los an-teriores. Después de todala vida viendo partidos te-levisados (ni siquiera élmismo sabe explicar concerteza el porqué de estaafición) llegó un momentoen el que creyó oportunotrasladar la teoría a la prác-tica. A través de las redessociales se puso en con-tacto con Baldo y no hubomucho más que añadir, alos pocos días estaba enAmate ataviado con la in-dumentaria oportuna y dis-puesto a recorrer las bases.Básicamente esta es laesencia del club, dondetodos los "locos por elbéisbol" son bienvenidos.La faceta femeninaDespués de comprobar elpanorama que se ciernesobre el béisbol masculinoen Andalucía uno se puedehacer a la idea de cómofuncionan las cosascuando es el otro género elprotagonista. Aquí la situa-ción se torna todavía másenrevesada. De los tresequipos femeninos quehasta hace poco existían enla provincia de Sevilla ac-tualmente quedan dos.Uno de ellos es el Club deDos Hermanas, cuya situa-ción precisamente tam-poco es para echar cohetes,y eso que el Ayuntamientode la localidad les concedeuna cantidad simbólica dedinero a modo de subven-ción. Luna es una de las ju-gadoras del equipo que havisto en primera persona elproceso de crisis por el queatraviesa este deporte en su

Catcher y árbitro en el campo de Amate

Béisbol en la Universidad Laboral de Málaga