la comunicacion en los procesos de desarrollo territorial

EdicionesInstituto Nacional deTecnología Agropecuaria

Documento de trabajo Nº 3ISBN 978-987-521-317-3ISSN 1851-6319

Programa Nacional de Apoyo al Desarrollo de los Territorios

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La comunicación en los procesos de desarrollo

territorial

La comunicación en los porcesos de desarrollo territorial. - La comunicación en los procesos de desarrollo territorial Programa Nacional de Apoyo al Desarrollo de los Territorios 1a ed. - Buenos Aires : Inst. Nacional de Tecnología

Agropecuaria - INTA, 2008.Coordinador: Ing. Agr. Julio Catullo

40 p. ; 28x20 cm. - (Documento de trabajo; 3)Proyecto específico "Gestión de procesos de comunicación en apoyo al

desarrollo territorial" ISBN 978-987-521-317-3

Coordinador. Lic. Guillermo Torres 1. Desarrollo Regional. Referentes: María Laura Agüero, Lucio Ahuad, Carlos Belles, Héctor CDD 338.9

Boccanera, Néstor Brignole, Jorge Cefarelli, José Luis Cortón, Raúl

Di Giuseppe, Ivana Maldonado, Mariana Mascotti, Silvina Odetto,

Programa Nacional de Apoyo al Desarrollo de los Territorios Mariana Piola, Jorge Silva Colomer, Horacio Tapia y Alfredo Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria Vazquez.Chile 460 (C1098AAJ). Ciudad. Autónoma de Buenos AiresArgentina / Tel: 011 4339 0600http: www.inta.gov.ar/extension/transferencia/htm

Documento elaborado en el marco del Proyecto Específico “Gestión de procesos de comunicación en apoyo al desarrollo territorial” (PNTER 1314). http://www.inta.gov.ar/extension/pndt/pe4.htmCoordinador Lic. Guillermo Torres. El PNTER 1314 pertenece al

Proyecto Integrado (PNTER 1) Innovación Tecnológica y

Organizacional del Programa Nacional de Apoyo al Desarrollo de los

Territorios.

Contenidos y diseño de comunicación educativa: David Burin

Se contó con la colaboración de Soledad Marcos, Mariana Mascotti,

Ivana Maldonado, Julieta Calí, Guillermo Torres, Carolina Piscione y

Carlos Bellés para la realización de este documento.Se agradece a Héctor Varela, Oscar Frank y Constanza Rozemblum

por sus comentarios y aportes.

Diseño y diagramación: Sebastián Izaguirre (Comunicaciones EEA Alto Valle)

La comunicación en los procesos de desarrollo territorial

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Introducción ............................................................................................................................................... 2

Dos escenas para empezar ....................................................................................................................... 3Ejercicio 1: La escena más deseada… y la más temida ...................................................................... 3

Modelos de desarrollo, de extensión rural y de comunicación ........................................................... 5Ejercicio 2: La línea de tiempo .............................................................................................................. 5El desarrollismo. 1945/1968 .................................................................................................................. 6La crítica al desarrollismo. 1968/1976 ................................................................................................ 10Ejercicio 3: Revisando modelos .......................................................................................................... 12El neoliberalismo. 1976/2002 .............................................................................................................. 14Los otros modelos de desarrollo. 2002/2008 ...................................................................................... 17

La comunicación en los procesos de desarrollo territorial ............................................................... 19Análisis de caso1. La Asociación de Pequeños Productores Minifundistas de Tucumán ................. 21Análisis de caso 2: Limitaciones en la implementación de un Programa de Desarrollo Rural ......... 22Una experiencia en la provincia de Buenos Aires ............................................................................... 24

Los medios de comunicación como dispositivos que facilitan el desarrollo .................................. 25Radios en comunidades campesinas en Santiago del Estero ........................................................... 25Periódico mural “Cultivando redes solidarias” ..................................................................................... 26Utilización de la pedagogía masiva audiovisual para capacitar sobre huerta orgánica y cría de pollos ........................................................................................................................................... 28

Bibliografía ............................................................................................................................................... 33

Índice


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Esta serie de cartillas sobre comunicación estádestinada a ustedes, las personas que acompañanprocesos de desarrollo que involucran a comuni-dades rurales y en algunos casos urbanas.

La elaboración de estos materiales parte de talleresde relevamiento de necesidades de capacitaciónen comunicación que compartimos con numero-sos extensionistas, comunicadores y algunos in-vestigadores de todo el país durante 2007. Estosespacios nos permitieron conocer mejor las dificul-tades que encuentran para apropiarse de las expe-riencias y las herramientas de comunicaciónpuestas al servicio de los proyectos de desarrollo.

Al relevar experiencias de comunicación para el de-sarrollo, llevadas adelante por equipos de exten-sión del INTA, identificamos algunas prácticasparticipativas e innovadoras donde se reconocenprocesos de diálogo, en las que es posible hallarnuevos modos de convocar o coordinar reuniones,o de utilizar materiales de comunicación originalesy diferentes a los habituales, acciones que facilitanla relación entre los diversos actores que participande ellas. Algunas, si bien no contemplaron el com-ponente de comunicación expresamente en el pro-yecto de trabajo, se transformaron en verdaderosaprendizajes a partir de la forma de relacionarse,participar y actuar. Otras se plantearon como obje-tivo central fortalecer la imagen de la instituciónfrente a la comunidad o dar a conocer sus accio-nes, y en algunos casos la estrategia se centró úni-camente en la difusión de conocimientos técnicos.También hemos encontrado estrategias de comu-nicación que se propusieron incrementar la parti-cipación de la población rural, promover el diálogoy la acción colectiva.

En tanto, al evaluar las demandas de capacitaciónque surgieron en los talleres por parte de los equi-pos de extensión, nos encontramos con una dis-persión de necesidades sentidas:

•Algunas cuestiones íntimamente relacionadascon el enfoque estratégico de la Comunicaciónpara el Desarrollo, como contar con herramien-

tas de sociología y economía rural para enten-der mejor las dinámicas que se dan en el terri-torio, o conocer metodologías de diagnósticoparticipativo y de planificación estratégica de lacomunicación.

•Demandas de capacitación en metodologíaspara generar la participación de los productoreso comunidades, desde estrategias de interven-ción inicial para abordar una comunidad, hastatécnicas de dinámica grupal y formación de for-madores.

•Por último, una enorme variedad de pedidosvinculados con la capacitación en producciónde medios o en el desarrollo expresivo (elabo-ración de materiales gráficos y audiovisuales,oratoria, redacción).

El objetivo de esta cartilla, la primera de una seriede tres, es intentar satisfacer algunas de estas de-mandas, para mejorar las prácticas cotidianas y fa-cilitar la tarea de dar real participación yprotagonismo a los actores del territorio en los pro-yectos de desarrollo.

Para la producción de estos materiales el INTA tra-bajó junto a un equipo externo que se integró alequipo del Proyecto de Comunicación para el De-sarrollo en la definición de contenidos, formatos ytratamiento pedagógico.

En este documento de trabajo se verá qué papelentendemos puede y debería tener la comunica-ción en el marco de los proyectos de desarrolloque hoy deben encarar los servicios de extensiónrural. Para llegar a esa definición, primero haremosun recorrido histórico de la evolución de los enfo-ques acerca del desarrollo, la extensión rural y lacomunicación, de forma tal de darle una perspec-tiva a esta definición, que nos permita entender dedónde venimos y hacia dónde vamos.

Esperamos sus comentarios para mejorar estosmateriales en próximas ediciones, así como paradefinir nuevos títulos.

Introducción


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Dos escenas para empezar

¿Cuáles fueron los resulta-dos de los talleres?Las escenas más deseadasotorgaron un lugar principal a:

•los espacios de negocia-ción de intereses, •la construcción conjuntade las propuestas, •la búsqueda de las bre-chas entre lo normativo ylas necesidades de los par-ticipantes, •la escucha, •la flexibilidad.

Las escenas más temidas que eligieron los partici-pantes incluyeron:

•la falta de coordinación y claridad en los obje-tivos de las acciones de comunicación, •las desarticulaciones entre los intereses de di-sertantes, organizadores, participantes de esasacciones, •la utilización de formas de comunicación in-adecuadas para el propósito y los actores par-ticipantes, •la falta de flexibilidad para readaptar lo planifi-cado en función de los intereses de la gente,

•el desconocimiento del otrocon el que nos interesa comu-nicarnos.

Al recuperar nuestras expe-riencias de todos los días, pu-dimos conceptualizar ideassobre comunicación que sealejan de la ilusión de que conel hecho de transmitir informa-ción podremos transformar larealidad local, y se hacencargo de que se trata de unespacio conflictivo en el quees posible participar articu-lando intereses y percepcio-

nes que se reconocen como distintas, entre losactores y en el marco de un problema.

A continuación compartiremos con ustedes una re-visión acerca de cómo se han relacionado:

•los modelos de desarrollo por los que transitóel país en los últimos cincuenta años, •los modelos de extensión rural implementadospor organismos y programas de desarrollorural,•los modelos de comunicación que esas expe-riencias de extensión utilizaron.

Ejercicio Nº 1: La escena másdeseada y la más temida

En los talleres que realiza-mos en 2007, en diferentesregiones del país, propusi-mos este mismo ejercicio.Los invitamos a pensar y di-bujar (o si se animan, a dra-matizar con sus compañe-ros) las que consideran la es-cena cotidiana más deseaday la más temida al momentode comunicarnos. Despuéspueden seguir leyendo estacartilla.


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Desde que se creó el INTA en1956, sus extensionistas hanvivido un proceso que fue re-flejo de los períodos históricosdel país y del mundo. Fueroncambiando las políticas y lasideologías que les daban sus-tento –especialmente las eco-nómicas– y las relaciones conlos organismos y las agenciasde financiamiento internacio-nal. Paralelamente también va-riaron los enfoques de laextensión rural, y esto se re-fleja al preguntarnos:

•con quién o para quién setrabajaba, •de qué manera, •con qué objetivos, •quiénes y cuántos gana-ban o perdían con el efectodel trabajo de extensión,tanto a corto como a me-diano y largo plazo.

No encontraremos respuestasuniversales a estas preguntas,aplicables a todo el sistema deextensión. Si bien se dierontendencias muy marcadas encada período histórico, siem-pre convivieron formas distin-tas de actuar y de pensar. ElINTA es una institución muy di-versa, así como lo son la geo-grafía y las realidades socialesy productivas de nuestro país.No es lo mismo trabajar en laPampa Húmeda con grandesproductores sojeros, que en laPuna catamarqueña o jujeñacon comunidades aborígenes. Pero detrás de cual-quier actuación profesional, de forma reflexiva o in-conciente, hay una respuesta para cada una deestas preguntas, y esas respuestas son las queguían la acción.

Según nuestra idea, el modelode desarrollo que se tengacomo marco guiará el modelode extensión que se pone enjuego, y éste a su vez definiráel modelo de comunicaciónque se implemente.

Modelo de desarrollo

Modelo de extensión

Modelo de comunicación

Entonces, cuando tenemosque definir qué es la comuni-cación para el desarrollo esfundamental entender primeroque hubo y hay muchas for-mas de pensar el desarrollo,así como la extensión y la co-municación.

En esta cartilla veremos preci-samente esta evolución: cómofueron cambiando las concep-ciones y modelos de desarro-llo a lo largo de cincuentaaños, cómo se fueron modifi-cando los modelos de exten-sión y cómo pueden versecambios en las teorías y prác-ticas de la comunicación ten-dientes a promover procesosde desarrollo. Antes de avan-zar con la lectura, realicemosun ejercicio en forma indivi-dual o grupal.

A continuación, una mirada histórica sobre mode-los de desarrollo y comunicación.

Modelos de desarrollo, de extensión rural y decomunicación

Ejercicio Nº 2: La línea detiempoLes proponemos reconstruircómo fueron evolucionandoel contexto político econó-mico y el trabajo de exten-sión durante la historia delINTA. Para eso, piensen unalínea de tiempo y traten dedefinir los años en que se die-ron quiebres o momentos decambio importantes, basán-dose en su propia experien-cia. Luego respondan a lassiguientes preguntas paracada período histórico en queles haya quedado divididadicha línea:¿Quién gobernaba?¿Cuál era la política institu-cional acerca del trabajo deextensión?¿Qué pasaba en la práctica?Sea de modo conciente o in-consciente ¿quién se benefi-ció con nuestro trabajo?¿Cómo fue cambiando la re-lación con los productores encada período?


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El desarrollismo.1945 / 19681. El modelo de desarrollo

Las teorías del desarrollo surgieron entre 1945 y1960. Su preocupación principal fue extender lamodernización a todos los países y su población.Esta modernización partió de tres ideas fuerza:

•la forma capitalista de pensar las relacioneseconómicas: hay que pasar de los sistemas de

autoconsumo, trueque y subsistencia a la inclu-sión de la totalidad de la población en el mer-cado, para lo cual se debe contar conproducción para vender, de manera de dispo-ner luego de dinero para consumir. Se valora elprogreso individual, es decir, que las familias olas personas tengan mayor cantidad de bienesde consumo, más que el bien común, la comu-nidad y el espíritu solidario.

Ilustrador Gustavo Damiani


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•el utilitarismo: el modelo anterior es el que sejuzga mejor por unos pocos economistas, funcio-narios y empresarios para la mayoría de las perso-nas, y por lo tanto no importa que una minoríadesee vivir de otro modo, por fuera del mercado yel consumo, con pautas culturales basadas enotros valores. Hay que convencerla de lo contrarioporque lo tradicional (opuesto a lo moderno) es ne-gativo para toda la sociedad.

•el mayor peso que van adquiriendo la ciencia y latecnología sobre la religión, particularmente comosustento de la idea de que el hombre puede domi-nar a la naturaleza, extraer recursos de manera ili-mitada y transformarla para su provecho, lo quelleva a la idea de progreso sin límites.

Estos principios trasladados a la lógica empresarialse tradujeron en máxima productividad, ahorro einversión. Los resultados económicos fueron acu-mulados por pocos empresarios que operaron envarios países al mismo tiempo (trasnacionales).

El desarrollismo propuso un tipo de sociedad mo-derna como “ideal”: el modelo de desarrollo de lospaíses centrales era el estado máximo de evolu-ción y cada país debía tratar de llegar a ese tipoideal a través de un proceso de evolución lineal.

Para lograrlo, el economista norteamericano WaltRostow planteó un camino previsible en su libroLas etapas del crecimiento económico: una recetaque suponía podía aplicarse universalmente, sinimportar la cultura, la geografía o la historia decada país. Según los desarrollistas, esta sociedadideal podía medirse con un conjunto de indicado-res universales. Así, se definió el Producto BrutoInterno (PBI) como patrón de medida de los países

desarrollados y los subdesarrollados. El PBI es el“valor monetario de bienes y servicios finales pro-ducidos por una economía en un período determi-nado”. A partir de los ‘40 el Banco Mundialempezó a definir naciones pobres basándose ensu PBI.

La pobreza dejó de ser un fenómeno humano condiversas dimensiones para convertirse en una pa-tología universal asociada a la falta de ingresosmonetarios. Se pueden tener tierras y rebaños,pero si no se tiene dinero se es pobre. El PBI midesólo los bienes y servicios que se negocian en elmercado. Por lo tanto no toma en cuenta aquellosque se intercambian por trueque o son consumi-dos por los propios productores: aunque un paísgenere muchos bienes, estos no se consideran sino se venden por dinero.

Ilustrador Gustavo Damiani


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El PBI toma como medida los precios de las cosaso los servicios que se venden y compran, pero notiene en cuenta cómo son los mecanismos para fijaresos precios, muchas veces injustos, porque eneste proceso inciden las relaciones de poder entrelos países centrales –productores de tecnología– yperiféricos –productores de materias primas–.

Lo que no se integraba a este modelo pasó a serprimitivo y había que hacer un esfuerzo por inte-grarlo. A ningún funcionario o ciudadano inmersoen los valores del progreso se le ocurría que gru-pos humanos no quisieran integrarse a esta socie-dad, simplemente por considerar sus sistemas devalores mejores que los que se deseaban imponer.Por lo tanto, la marginalidad es vista como una limi-tación y una amenaza para la sociedad industrial.Así, las naciones con poco PBI fueron declaradascomo necesitadas de asistencia. Con el consenti-miento de sus élites, dicha asistencia estuvo con-dicionada a la aplicación de políticas tecnocráticasy aculturales: recetas abstractas y universales sepusieron en práctica a través de políticas de em-pleo, de educación, de salud y también de exten-sión rural.

2. El modelo de extensión rural en este período

Desde este enfoque, muchos extensionistas, asícomo el personal médico, los docentes o los técni-cos de distintos programas sociales asumieron elmandato de modificar conductas y transmitir capa-cidades a las familias e individuos vinculados con elsector rural, como paso previo necesario para queestos puedan definir sus intereses y necesidades.

En toda América comenzaron a surgir organismosde investigación y extensión. Según el extensio-nista del INTA Carlos Alemany, el Servicio Nacionalde Extensión de este organismo se creó en 1956con la misión explícita de organizar una verdaderacruzada educativa para demostrar los beneficiosde la modernidad y ayudar a salir del estanca-miento y los bajos niveles de vida al sector rural.

La unidad familiar fue el eje sobre el cual se imple-mentó esta propuesta educativa. Interesaban tantolos problemas relacionados con la agricultura,como las condiciones de vida y el bienestar de lapoblación rural, su situación económica y social,su alimentación, vivienda y recreación, y se tomócomo base el modelo del Desarrollo Rural Integral.

La propuesta operativa, basada en las Agencias deExtensión norteamericanas, tuvo como eje la orga-nización de las familias en componentes separa-dos y de acuerdo con sus intereses comunes. Secrearon grupos de hombres para mejorar las for-mas de producir, grupos de mujeres para tratar losproblemas del hogar y desarrollar actividades so-cioculturales (Clubes Hogar Rural), y grupos de jó-venes, denominados Clubes 4 A (adiestramiento,acción, ayuda y amistad).

País PBI per cápita en dólares 1997

Suiza 44.320

Japón 37.850

Noruega 36.090

Estados Unidos 28.740

Alemania 28.260

Argentina 8.570

Arabia Saudita 6.790

Brasil 4.720

Costa Rica 2.640

Guatemala 1.500

Indonesia 1.110

India 390

Haití 240

Etiopía 110

Mozambique 90

Promedio Mundial 5130

Archivo INTA


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Esta propuesta logró un importante despliegue ycobertura territorial a través de las Agencias de Ex-tensión Rural (AER). Los encargados de impulsareste enfoque integraban el equipo extensionista:un Jefe de Agencia, una Asesora de Hogar Ruralcon formación en economía doméstica y un Asesorde Clubes 4 A especializado en trabajar con juven-tudes rurales.

La metodología central del trabajo de extensión enel INTA consistió en fortalecer y desarrollar los lide-razgos locales y apoyarse en la influencia que estoslíderes tenían sobre la población rural para obtenersu colaboración y facilitar el proceso de difusión deconocimientos y cambio de mentalidades.

3. El modelo de comunicación

Según la opinión del extensionista del INTA NiloSchaller, desde el punto de vista pedagógico se in-tentaba incidir sobre estos líderes para que adopta-ran y repitieran lo que se consideraban “verdades”.Muchos de los líderes formados de esta manera, sibien aplicaban dinámicas de grupo y promovían laorganización, no generaban espacios de discusiónpara analizar esas “verdades” de manera crítica.

Esta forma de concebir la comunicación fue cohe-rente con el Modelo de Información de Shannony Weaver elaborado por estos dos teóricos en ladécada del ‘40. Según relata el especialista en co-municación para el desarrollo Calvelo Ríos, esteesquema se ideó con el fin de mejorar los sistemaspara enviar órdenes a los aviones aliados durantela Segunda Guerra Mundial, y tenía tres compo-nentes centrales:

emisor – medio – receptor

a los que se agregaban la retroalimentación parasaber si el mensaje había sido recibido correcta-mente y algunos otros ingredientes necesarioscomo el mensaje, el código, los codificadores, de-codificadores y las interferencias o ruidos –quepueden ser físicos, psicológicos o culturales–.

El modelo fue tomado por otras disciplinas, comola cibernética, y luego se comenzó a aplicar dentrode las organizaciones y los medios de comunica-ción, como la radio y la TV, sin una mirada críticaprevia.

El mismo Calvelo Ríos analiza que éste: “Nace enuna estructura militar, que es una de las estructurasmás verticales que ha producido la sociedad; seorigina en la necesidad de dar órdenes, que se dapor supuesto serán acatadas sin cuestionamientoalguno; envía mensajes del que tiene poder al queobedece, del que manda al que acata, del superioral inferior, del dominante al dominado, del que sabeal ignorante, de la cúspide a la base de la pirámide.Son mensajes para una “caja negra”: si la respuestaes positiva recibirá algún tipo de gratificación; si esnegativa, una sanción”.

Más adelante, agrega: “Tenemos así una nomen-clatura militar. El receptor es denominado “Públicoobjetivo” o “blanco” y, claro está, cuando se tieneun objetivo o un blanco se le disparan los cañona-zos de carácter comunicativo más poderosos deque se dispone. Se tira a matar. Es parte del funda-mento ideológico del modelo (…) El emisor cosificaal receptor, lo transforma en objeto contra el cualdispara sus mensajes”.

Archivo INTA

Instituto de Assistência Técnica e Estensão Rural do Río Grande do Norte-

EMATER. Ver: http://www.rn.gov.br/sistemnoticias/noticias.asp?idnoticia=12844


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Continuando con el planteo de Schaller y CalveloRíos, el tipo de circuito que seguía la informaciónera vertical. Primero del extensionista a los grupos,y una vez definido el líder, del extensionista al lídery de éste a su grupo:

Muchas de las instituciones que trabajaron coneste modelo de extensión no lograron el impactoconcreto esperado, en parte por el contexto socio-político y económico que se dio en este período,pero quizás también debido a este esquema de co-municación.

Sucede que la llamada “resistencia al cambio tec-nológico” muchas veces obedece a que los pro-ductores no quieren o no pueden correr riesgos omanejan una tecnología que hasta el momento lesha dado resultados y suponen –muchas veces co-rrectamente– que las tecnologías traídas por forá-neos les van a generar más problemas quesoluciones. Del otro lado, los técnicos no siemprese interesan en entender la lógica que manejan losproductores. Estos diferentes paradigmas generanincomunicación.

Como dice Calvelo Ríos, quienes trabajaron desdeeste enfoque eligieron frecuentermente como lídera aquella persona con la cual la comunicación eramás fluida pero que no tenía real liderazgo en sucomunidad. Otras veces no se trabajó en con-fianza, consultando y acordando con la gente cuá-les eran sus verdaderas necesidades o losobstáculos para que comprendieran lo que el ex-tensionista proponía: los materiales de comunica-ción que se usaban no eran validados, los códigosnuevos no eran explicados, el lenguaje científicodistanciaba la posibilidad de comprensión, el nivel

o la forma de organizar la información eran dema-siado complejos para lo que necesitaban conocerlos productores. Cuando el objetivo es convenceral interlocutor, se evita dar espacio de discusiónhorizontal porque es factible que aparezcan cues-tionamientos, y eso puede poner en juego la posi-ción de poder que exige el modelo.

Veamos ahora qué ocurrió en la siguiente etapa.

La crítica al desarrollismo.1968 / 19761. El modelo de desarrollo

En los años ’60 y ’70 se confirmó que los benefi-cios esperados a partir de este modelo de desarro-llo no se concretaban. Al contrario, el resultado fueun crecimiento desigual entre países centrales yperiféricos. Un grupo de economistas de la Comi-sión Económica para América Latina (CEPAL) for-muló la teoría del desarrollo desigual y combinado(hay países desarrollados porque hay países sub-desarrollados, ya que aquellos se desarrollan conlos flujos de capital que extraen de los últimos) yplanteó que esto se debía a la ampliación progre-siva de la brecha de los precios entre las materiasprimas que se exportaban y la tecnología que seimportaba a los países subdesarrollados. La pro-puesta de estos economistas fue mejorar los tér-minos de este intercambio, como forma de lograruna mayor equidad y desarrollo. Inclusive dentrode estos países, se ampliaron las desigualdadesentre regiones, con ciudades “desarrolladas” y uninterior sub-desarrollado, procesos de migraciónrural-urbana y la conformación de villas miseria.

El planteo que surgió de esta nueva teoría econó-mica era que los países productores de materiasprimas se debían nuclear para forzar un cambio enlas relaciones de intercambio.


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Al comienzo de los ’70 se formó el bloque de losNo Alineados: un grupo numeroso de países queproponían tomar distancia tanto con los EstadosUnidos y Europa como con la Unión Soviética paraplantear la necesidad de una negociación Norte-Sur, en lugar de Occidente capitalista-Este comu-nista. La Organización de Países Exportadores dePetróleo (OPEP) provocó el aumento de precio deeste combustible, que generó una fuerte crisis dela economía mundial y dio contexto a la guerra deMedio Oriente. Esta época estuvo marcada por laGuerra Fría, que comenzó a calentarse con lasguerras de Corea y Vietnam y con la RevoluciónCubana. Se dispararon el Mayo Francés y la revo-lución cultural que significó el pacifismo, el rock yel hippismo. También en China Mao impulsó su Re-volución Cultural y comenzó a apoyar a movimien-tos campesinos en otros países. En todaLatinoamérica los trabajadores, campesinos y es-

tudiantes comenzaron a organizarse. Las LigasAgrarias y otros grupos políticos propusieron rea-lizar una reforma agraria.

2. y 3. El modelo de extensión rural y de co-municación en este período

Fue en esta misma época, entre 1965 y 1968, queel educador Paulo Freire publicó sus dos clásicos:Educación como práctica de la libertad y Pedago-gía del Oprimido, que marcaron el trabajo de nu-merosos militantes, extensionistas, alfabetizadoresy trabajadores sociales. Algunos equipos del INTAtomaron estas ideas y modificaron la orientaciónde la extensión.

A continuación presentamos brevemente las ideas deFreire en contraposición a la educación tradicional:

Aspecto

Lógica acerca del procesode aprendizaje

Cantidad y complejidad decontenidos

Criterio central

Resultados educativos

Educación Tradicional

Educación “bancaria”: se trata de depositar infor-mación en la memoria de los alumnos, sin proble-matizar ni desarrollar un pensamiento crítico. Lospobres saben que el sistema formal no está pre-parado para ellos y vienen de varias generacionesfrustradas. A los padres no les interesa que loschicos aprendan sino que aprueben.

La educación se concibe como la transmisión deun repertorio de contenidos preelaborados por ex-pertos, abstracto y desvinculado de la situaciónen la que se encuentran los participantes

Reproduce los roles asignados según la clase so-cial: los que tienen mayores ingresos acceden amejor calidad de educación y a más bienes cul-turales. Esto se refuerza por los contenidos, lasrelaciones sociales entre maestros y alumnos, losrecursos disponibles.

Hay un alto nivel de deserción y repitencia espe-cialmente por parte de los alumnos más pobres.Se miden cuantitativamente.

Freire – Educación popular

El aprendizaje es progresivo y no trata delograr que se memoricen datos. Se ne-cesita el compromiso del que aprende,ya que se partirá de problematizar supropia realidad, tomando conciencia deésta para transformarse como sujeto ypoder así cambiar su situación.

No existen contenidos previos. Los con-tenidos van surgiendo a medida que jun-tos, educador y educando, problematizanla realidad de los participantes.

La educación popular tiene como obje-tivo producir conocimiento con intenciónliberadora y despertar la conciencia crí-tica sobre la manera en que se organizala sociedad de forma tal de generar poderpopular para superar la brecha social.

Se reducen en forma notable los índicesde analfabetismo. La educación estápensada especialmente para incluir atodos.


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Aspecto

Adaptación a la diversidad

Criterios de evaluaciónpara aprobar el curso

Cómo asegurar que no de-serten

Sistemas de control (disciplina)

Requisitos

Instalaciones

Relación entre el docente ylos destinatarios

Objetivo

Cuándo y cómo se evalúa

Qué se considera éxitoeducativo

Educación Tradicional

Deja a los alumnos librados a su suerte, en casode que no tengan las capacidades consideradasestándar para cumplir con las tareas y exigenciasdefinidas verticalmente. Pocas veces se atiende alos chicos con problemas nutricionales o que pro-vienen de culturas diferentes.

Desconfía del saber de los alumnos. Supone quetratarán de estafar al docente y huir con buenasnotas aunque no sepan nada. El sistema de pun-taje y evaluación desvirtúa los objetivos educati-vos. No hay interés por aprender.

Los alumnos van a la escuela por obligación legaly porque saben que necesitarán un título paraconseguir trabajo.

El docente ejerce control sobre cada alumno enforma individual, y eso genera competencia entreellos y promueve el individualismo.

La carga administrativa es abrumadora: planillas,formularios, registros, autorizaciones, etc. Estocondiciona la libertad y flexibilidad.

Las escuelas son el centro de la educación for-mal. A veces los alumnos deben recorrer grandesdistancias para acceder a ellas.

El maestro del sistema formal no sale de la es-cuela. No conoce ni entiende las lógicas de la co-munidad donde enseña. Muchas veces no generavínculos con las familias.

Socialización en el sentido de enseñar normas deconducta y convivencia.

Mensual o trimestral con el boletín.

Mantener la matrícula de alumnos y que apruebela mayor cantidad de alumnos posible. A vecesse evalúa bien a los alumnos aunque no tenganbuen rendimiento para promoverlos.

Freire – Educación popular

Los métodos se basan en el trabajo engrupo y técnicas de ayuda mutua. Es unaeducación democrática e inclusiva, hori-zontal y autogestiva, vivencial (aprenderhaciendo), creativa, multicultural, paraaprender a pensar y a organizarse.

Se parte del saber de las personas quequieren participar en el proceso educativo.Se da una relación de paridad entre edu-cador y educando: ambos enseñan, apren-den y construyen el aprendizaje juntos.

La gente está motivada y desea participar.Se genera un espíritu de grupo que forta-lece los lazos entre los participantes.

Las técnicas participativas de la educa-ción popular generan un clima interno enel grupo que facilita el apoyo mutuo y lacontención.

No hay que completar ningún requisito,salvo la disponibilidad de tiempo y las ganas.

Los educadores trabajan y coordinan lasactividades de capacitación en las comu-nidades.

El educador popular trabaja en el campo oen los barrios donde viven y trabajan losparticipantes. Se compromete personal-mente y continúa en contacto con ellos.

Concientización. Tratar que los pobrestomen conciencia de las causas socialesy políticas que generan su situación y seorganicen para superarla.

La evaluación es de ambas partes luegode cada reunión. No existe un criterio pu-nitorio o de exclusión.

Aumentar el nivel de conciencia y organi-zación de los participantes para mejorarsu nivel de vida.


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A partir de los planteos de Freire, cada vez quecomo extensionistas colocamos entre los objetivosde los proyectos la palabra “concientizar”, será ne-cesario tener en cuenta que no lo lograremos condiscursos y con transmisión de información, sinohabilitando espacios de problematización a partirde la experiencia (aprender haciendo).

A todos nos resulta difícil aceptar e incorporar ennuestra práctica las ideas de Freire porque fuimoseducados en el sistema tradicional y tenemos in-ternalizados los hábitos y la cultura de la educaciónformal. Sin embargo, es necesario reflexionarsobre estas diferencias y ver cómo inciden en el re-sultado del trabajo de extensión.

En este período se crearon varias ONG’s de desa-rrollo que trabajaron de manera constante en ám-bitos rurales con el enfoque de la educaciónpopular como INCUPO, FUNDAPAZ, INDES,CADIF1 entre otras, especialmente en las regionesNEA y NOA. Estas prácticas se fueron difundiendoentre otros equipos de extensión.

Un caso a destacar dentro del INTA fue la expe-riencia desarrollada por la AER Famaillá a media-dos de los años ‘60, cuando promovió yacompañó el desarrollo de la experiencia coopera-tiva de Campo de Herrera luego de la crisis de losingenios azucareros.

Ejercicio Nº 3: Revisando mo-delos

Traten de recordar situacionesespecíficas que hayan generadoen ustedes aprendizajes signifi-cativos, de cualquier tipo. Consignificativos queremos decir:que hayan provocado cambiosde rumbo en sus vidas, modifi-caciones de actitudes, decisionestrascendentes, identificacionesprofesionales o que los hayanllevado a tomar posiciones polí-ticas o ideológicas, incorporarun marco para ver la realidad ydominar técnicas y formas deresolver problemas.

Les proponemos luego que revi-sen esas situaciones e identifi-quen quiénes fueron las personasque lograron que ustedes apren-dieran esas cosas. A continuaciónpiensen qué hicieron esos “maes-tros” para lograrlo, cómo eran,qué estrategias usaron, cómo serelacionaban con ustedes.

Traten de identificar ahora, porel contrario, quiénes fueron suspeores docentes y cómo eran.Por último, comparen los resul-tados anteriores con las des-cripciones de los dos modeloseducativos y reflexionen sobreesos resultados.

1 INCUPO: Instituto de Cultura Popular. FUNDAPAZ: Fundaciónpara el Desarrollo en Justicia y Paz. INDES: Instituto de Desarro-llo Social y Promoción Humana. CADIF: Centro Andino de Desa-rrollo, Investigación y Formación.

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El Neoliberalismo.1976 / 2002Frente a las críticas de los economistas de laCEPAL, otros economistas contra-argumentaronque existían diversos obstáculos para llegar al de-sarrollo por parte de los países subdesarrollados,que eran las verdaderas causas del fracaso delmodelo desarrollista: escaso nivel educativo de lamano de obra, falta de inversiones suficientes –seapor el poco atractivo que ofrece el país o por la es-casa capacidad de ahorro interno– o falta de espí-ritu empresario (esto último es el eje del planteodel economista alemán Schumpeter).

El Fondo Monetario Internacional y el Banco Mun-dial cuestionaron al Estado Benefactor e impusie-ron políticas de ajuste en las cuentas fiscales ycontraer deuda externa. Esta situación se acrecentóen las décadas de los ‘80 y ‘90. Aumentó la deso-cupación, creció el empleo precario, se recortaronprestaciones y derechos sociales universales y seinició una época de políticas sociales “focalizadas”que dieron pie a diversas formas de clientelismo.

Este modelo supuso que para promover el desa-rrollo se debían subordinar todas las actividades ala economía, regida por “la mano invisible” delmercado. De esa forma, la riqueza generada luegose “derramaría” hacia el resto de la sociedad. Lametáfora visual que reflejaba esta concepción fueuna pirámide de copas que van colmándose dearriba hacia abajo.

En la etapa anterior, uno de los supuestos obstácu-los de los países “subdesarrollados” fue la falta deinversiones. Con la excusa de atraer capitales, porejemplo en Argentina, el Estado abrió la economía

sosteniendo un tipo de cambio fijo (el “uno a uno”)y reguló solamente a favor de quienes tenían el ca-pital: redujo impuestos al capital y generó impues-tos al consumo, quitó derechos adquiridos a lostrabajadores, privatizó subvaluando activos del Es-tado, perjudicó a la banca cooperativa y delegó enprovincias y municipios servicios públicos destina-dos a la población pobre sin aportar fondos parasu gestión, con la idea de reducir el gasto público.También se impulsaron algunos programas de de-sarrollo de capacidades emprendedoras y otros decapacitación laboral, aunque simultáneamente sedesarticuló el sistema de educación tecnológica.

El derrame de la riqueza nunca se produjo y, por elcontrario, aumentó la desigualdad social y la seg-mentación. Esto generó grandes bolsones de po-breza y nuevas dinámicas de marginación yexclusión. La pobreza y la brecha entre ricos y po-bres persistió y se incrementó aún más. Esto ocu-rrió especialmente con la pobreza rural, uno de losindicadores más claros del fracaso de los modelos.

El final del período, en diciembre de 2001, repre-sentó la crisis más profunda de la historia nacional.Veamos algunas cifras que muestran esta evolución.


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En miles de millones de dólares (Fuente: Kosacoff, B. 2007)

Fuente: Benza, Gabriela y Calvi, Gabriel, 2005

Fuente: Giacobone, G. y Sorokin, I., 2005

El índice GINI mide la desigualdad

en la distribución

de la riqueza o del ingreso.

Es un número entre 0 y 1, donde 0

se corresponde con la perfecta

igualdad (todos tienen los mismos

ingresos) y 1 se corresponde con la

perfecta desigualdad (una persona

tiene todos los ingresos y los

demás ninguno). Cuanto más cerca

de uno más desigual es la distribu-

ción de la riqueza.


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En el ámbito rural se dio un proceso progresivo deconcentración y transnacionalización de la tenenciade la tierra y una revolución científico-tecnológica,que en muchos casos estuvo al servicio del modelode acumulación capitalista y redujo puestos de tra-bajo, socavó la soberanía alimentaria y expulsó delcampo a los pequeños productores que no pudieronrealizar las inversiones necesarias para competir.


A mediados de los ’70 la extensión se orientó haciaun modelo dirigido a aumentar la productividadagropecuaria, que se impuso rápidamente, y se prio-rizó el trabajo con medianos y grandes productores.En los ’80, con la continuidad del mismo modeloeconómico, se siguió implementando este enfoque. En los ’90, el ajuste fiscal se profundizó y se redu-jeron los presupuestos. Los proyectos de exten-sión siguieron centrados en la transferencia detecnología con el sector privado como principalsostén financiero.

Para dar respuesta a las necesidades surgidas apartir del nuevo escenario socioeconómico, el INTAagregó nuevos componentes a las actividades deextensión: los Programas Minifundio, CambioRural, y Pro-Huerta. En estos Programas, diversos extensionistas orien-taban su tarea en el marco del desarrollo local, a

través de promover la organización de los produc-tores y la articulación con otras instituciones de lasdistintas regiones del país.

A estos equipos se integraron profesionales de lasciencias sociales, que incluyeron un enfoque socioorganizacional novedoso.

3. El modelo de comunicación

Entre 1976 y 1983 se impuso el enfoque difusio-nista. Se repitió el modelo de comunicación tradi-cional emisor-receptor. Con la vuelta de lademocracia, este modelo convivió con otros queincluían mayor participación, en particular en aque-llas zonas donde predominaban los pequeños pro-ductores minifundistas y en los equipos de losprogramas destinados a este sector o a poblaciónen situación de pobreza. Tanto en Minifundio, Pro-Huerta y Cambio Rural se implementaron estrate-gias de comunicación y participación querecuperaron saberes y favorecieron la organizacióny autonomía de los grupos de productores, lo queimplicaba un mayor compromiso y tiempo porparte de los extensionistas.

Ver:http://www.agroterra.com/foro/foros/forum_posts.asp?TID=5090&PN=3

Silvia Corral

Archivo INTA

Archivo INTA

Archivo INTA


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Otras visiones del desarrollo.2002 / 20081. Los modelos de desarrollo

De modo paralelo a la caída del Muro de Berlín,desde fines de los ’80 aparecieron, en respuesta almodelo neoliberal, algunos conceptos alternativossobre el desarrollo. En 1986 el economista chilenoManfred Max Neff y otros colaboradores escribie-ron Desarrollo a Escala Humana: una opción parael futuro. Allí distinguieron necesidades humanasde satisfactores, al plantear que diversas culturaspueden desarrollar satisfactores diferentes para lasmismas necesidades, y clasificaron los satisfacto-res en distintas categorías según sirvan para una ovarias necesidades o inhiban otras. El modelo sir-vió para comparar críticamente el desarrollo pro-puesto por la sociedad moderna con otros modosde vida posibles.

A principios de los ’90, el Programa de las Nacio-nes Unidas para el Desarrollo (PNUD) relativizó alPBI como única medida del desarrollo, y propusoa cambio el Índice de Desarrollo Humano, que res-cata indicadores sociales y dimensiones comocondiciones y expectativa de vida. Se definió al de-sarrollo como un proceso de ampliación de la ca-pacidad de elección de la gente. Más que generarcapacidades distintas, implica potenciar las exis-tentes e identificar oportunidades a las que las co-munidades puedan acceder. El desarrollo humanodebe contemplar el “empoderamiento” de las per-sonas, el sentimiento de pertenencia comunitariay el gozar de dignidad y respeto.

En cuanto a cómo lograr este tipo de desarrollo, seplantearon distintas miradas complementarias:

•El desarrollo endógeno, o desarrollo econó-mico local, que se centra en analizar no sólo lasnecesidades locales sino también un conjuntode recursos locales y en ver de qué forma estosrecursos e instituciones pueden movilizarse ypotenciarse entre sí de manera articulada.

•La economía social agrega que esta moviliza-ción tiene que apuntar primero que nada a for-talecer al sector más pobre o débil de la

sociedad local. El economista José Luis Cora-ggio propone hacerlo mejorando la productivi-dad de las actividades económicas popularesque no siempre están vinculadas con el mer-cado, y potenciando la articulación de este sec-tor de economía popular con la economía demercado y la economía pública. Como vemos,a diferencia de la visión monetarista, en estecaso se valoriza la economía social e informal.

•El desarrollo territorial suma al concepto de de-sarrollo local la puesta en marcha de procesosde planificación estratégica, que incluyen la de-finición de cadenas o tramas productivas quepueden y deben ser promovidas en el territoriode manera acordada por todos los actores, a lavez que incorpora la definición del territorio notanto en función de los límites municipales, de-partamentales o provinciales sino sobre la basede características socioculturales, ambientalesy productivas.

•El desarrollo socio-territorial plantea que losprogramas y organismos de apoyo al desarrollono tienen que participar de estas decisiones,sino que son las organizaciones campesinasquienes deben definir en el territorio sus moda-lidades de gestión, y los programas debenacompañar y facilitar los niveles de participación.

Para profundizar el enfoque de desarrollo territorialsugerimos analizar el Documento de trabajo Nº 1del Programa Nacional de Apoyo al Desarrollo delos Territorios “Enfoque de Desarrollo Territorial”,disponible en:http://www.inta.gov.ar/extension/doc/trabajo1.pdf.Este documento fue elaborado por el Proyecto Es-pecífico “Promoción y fortalecimiento de Proyectosde apoyo al Desarrollo Territorial para la mejora dela competitividad sistémica regional”.


El modelo de extensión productivista o transferen-cista incorpora ahora nuevas técnicas: se pruebanvariedades de semillas y agroquímicos con la ideade la demostración en campos de productores,con intervención directa de las empresas produc-toras de insumos, lo que implica una mayor parti-cipación de los productores interesados.


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Estas herramientas son utilizadas a partir delmismo modelo comunicacional emisor-receptor.

Este paradigma convive con los nuevos enfoquesteórico-metodológicos utilizados por los extensio-nistas que trabajan en proyectos de desarrollo te-rritorial. La educación y la comunicación popular,los estudios étnico culturales, el desarrollo de sis-temas sustentables de agricultura familiar, la inves-tigación-acción participativa, entre otros, hanbrindado nuevas herramientas para el trabajo decampo cotidiano y nuevas posibilidades de acción.

Ambos enfoques aprovechan los avances tecnoló-gicos en el campo de la comunicación como Inter-net, el video digital, el celular, el power point u otrosprogramas de autoedición fáciles de utilizar, quepermiten democratizar el acceso y el uso de me-dios de comunicación.

En el segundo caso, se rescatan algunas experien-cias de períodos anteriores, donde en diversasAgencias hubo equipos que llevaron adelante unmodelo de extensión que estuvo en sintonía conestos nuevos modelos de desarrollo “de abajohacia arriba”.

3. El modelo de Comunicación para el Desarrollo

A diferencia de los modelos de comunicación ver-tical, la Comunicación para el Desarrollo proponeun tipo de relación diferente con las personas y co-munidades con quienes se trabaja, ya que parte desuponer que los productores tienen una identidadcultural, un conocimiento y una tecnología quedeben ser respetados y valorados.

Si superamos el prejuicio de que lo único válido esel conocimiento científico académico, podremosconstruir con ellos, interactuando de manera cola-borativa, las soluciones que sean más útiles encada contexto, tomando en cuenta lógicas y tiem-pos propios de las comunidades. Pero esto me-rece un capítulo específico.

En este caso, los interlocutores ya no son emisoresy receptores, sino actores de un proceso de comu-nicación que se va construyendo como una reddonde todos pueden expresarse y todos debenaprender a escucharse y a escuchar a los demás,

lo que permite poner en duda y revisar las propiascreencias, lógicas y motivaciones.

Para terminar este apartado, es necesario entenderque cada enfoque tuvo su validez y utilidad bajo elparadigma predominante de cada época y de cadaregión, que obedecía a determinadas formas deentender la realidad social, económica y política.Tomando en cuenta este enfoque situacional es ne-cesario reconocer los aportes de décadas anterio-res y a lo que se hizo en cada contexto, ya que esposible integrar hoy muchos de los aprendizajesque fueron generando equipos de la institución ensus prácticas de extensión y de comunicación.


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Además de estas definiciones generadas al calorde los talleres, encontramos otras de expertos en eltema:

“Aquella que facilita los procesos de diálogo a tra-vés de los cuales las personas definen quiénesson, qué desean, qué necesitan y cómo puedenactuar colectivamente para satisfacer sus necesi-dades y mejorar sus vidas. Apoya a los procesos de toma de decisiones y ac-ción colectiva en las bases de la sociedad y cons-truye ambientes de comunicación favorables alcrecimiento del poder de la sociedad”.

Juan Díaz Bordenave

“La Comunicación para el Desarrollo es el diseño yuso sistemático de actividades que promueven laparticipación, los enfoques comunicacionales, losmétodos y medios para compartir información y co-nocimiento entre los actores de los procesos dedesarrollo rural, para asegurar el entendimientomutuo y el consenso que lleva a la acción. Su ob-jetivo es facilitar la participación de la gente entodos los niveles de decisión, identificando e im-plementando políticas, programas y tecnologíaspara reducir la pobreza, garantizar la sustentabili-dad y mejorar la productividad de los productoresrurales”.

Adaptada de "Participatory Communication RuralAppraisal, Starting with people, a handbook" de la FAO.

La comunicación en los procesos de desarrolloterritorialDurante los talleres de relevamiento de necesida-des realizados en 2007, en diversos lugares delpaís, buscamos una definición acerca de qué es laComunicación para el Desarrollo. Compartamos al-gunas de ellas:


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Volvamos a las preguntas del principio, y trate-mos de responderlas pensando cuál es el rol dela comunicación en los procesos de desarrollo te-rritorial:

1. Con quiénes trabajamos: con los diferentesactores sociales en las problemáticas que nosconvocan en el territorio, tomando como pre-misa central (el objetivo a lograr) la búsquedade la equidad. El enfoque coincide con el “de-sarrollo desde abajo”.

2. De qué manera: involucrando a estos acto-res en la planificación de las acciones de co-municación (la elección de los mensajes, laproducción de los materiales, la gestión de losmedios que se utilicen, la organización de lasreuniones y los temarios que se van a tratar, ladifusión de las conclusiones y la ejecución delo acordado).

3. Con qué objetivos: aportar a que los actoresdesarrollen sus capacidades como agentes decambio (se tengan confianza, asuman que pue-den expresarse y decir lo que piensan, influ-yendo en los procesos de desarrollo).

Proponemos analizar cómo funciona la comunica-ción entre los distintos actores que intervienen enprocesos de desarrollo territorial y qué estrategiasdeberían implementarse para que estos procesosse desarrollen y profundicen. Veamos dos casospara tomar en cuenta:


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En 1992 una ONG tucumana puso en marcha unproyecto –financiado con fondos europeos– con laidea de promover y organizar al sector frutihortícoladel sur de la provincia. Al implementarse el Pro-grama Social Agropecuario (PSA) en 1994, variostécnicos de esta ONG iniciaron su trabajo contrata-dos por este Programa, lo que facilitó la articula-ción entre ambos equipos y la transferencia defondos para compra de maquinarias y sistemas deriego. Comenzaron con pequeños grupos de 6 a 8productores que se articularon entre sí luego de 4años. Con la crisis de 2000/2001 los programas es-tatales se desfinanciaron, pero este trabajo progre-sivo permitió que los productores decidieranfundar una Asociación, la APPMT, que nucleó amás de 280 familias en un comienzo.

En el marco de la crisis alimentaria en Tucumán lo-graron que el Ministerio de Desarrollo Social de laNación les otorgara un subsidio para atender ladesnutrición en la zona y comprar nueva maquina-ria que les permitió cultivar “papa semilla” propiaen Tafí del Valle. Esto hizo posible que el GobiernoNacional diera a conocer resultados en la provinciay fortaleció a la Asociación al mostrar que podíanadministrar fondos importantes.

En 2006 se puso en marcha el PRODERNOA, coor-dinado por uno de los técnicos que había trabajadocon este sector desde el principio. Los productoresdecidieron avanzar aún más en la cadena produc-tiva: los técnicos del PSA y PRODERNOA colabora-ron en el diseño de un proyecto presentado aManos a la Obra para instalar cámaras de frío.

Las relaciones positivas entre técnicos de los distin-

tos programas permitieron organizar una mesa dearticulación sobre desarrollo rural, con la participa-ción del INTA, para coordinar acciones en terreno.Al tener ya 15 años de trayectoria, la APPMT co-menzó a ser convocada como interlocutora. Se aso-ció a Federación Agraria y participó en un consorciopara la construcción de un mercado frutihortícolajunto con la Municipalidad de Aguilares, tambiénapoyada por los técnicos de los programas.

Durante el proceso resultó importante la continui-dad en la relación con el equipo técnico, que, apesar de los cambios producidos a lo largo deltiempo en el marco de sus instituciones, pudo sos-tener el trabajo en terreno. También facilitó el pro-ceso el conocimiento entre los funcionarios de losdistintos programas por haber participado varios deellos en el equipo inicial de trabajo con este sector.Los productores pudieron crear una Asociación, to-mando decisiones de forma democrática, a vecesen contra de lo recomendado por los técnicos. Enun punto de esta evolución generaron un nivel deautonomía tal que comenzaron a desarrollar pro-puestas de mayor alcance, apuntando a modificarpolíticas de tierras, fiscales y laborales específicaspara los pequeños productores, o impulsando la re-alización de obras de infraestructura como canaliza-ción de ríos para evitar inundaciones.

En este caso se da una situación ideal: quienesocupan cargos políticos han sido antes técnicos ycomparten una misma visión acerca de los proce-sos de desarrollo, además de conocer a los pro-ductores personalmente. Estos vínculos deconfianza facilitan la comunicación entre todas laspartes.

Análisis de caso 1: La Asociación de Pequeños Productores Minifundistas de Tucumán(APPMT)

Waldo Ernesto Guerrero Waldo Ernesto Guerrero


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Este caso corresponde a la implementación de unprograma de desarrollo rural con financiamiento in-ternacional en un país latinoamericano. Al ser laejecución descentralizada existía una Unidad Cen-tral, pero las autoridades locales podían modificarsus condiciones de aplicación.

Uno de los responsables locales del programa,que asumió preocupado por la proximidad de laselecciones locales, con lógica política decidió dis-minuir el monto máximo de financiamiento quepodía otorgarse a cada productor para poder dis-tribuir los fondos entre más beneficiarios. Estohacía prácticamente inviable cualquier proyecto. Almismo tiempo ofreció a los técnicos contratos derenovación periódica, que establecían un pago porcada proyecto “participativo” formulado en con-junto con los productores, pero el monto de hono-rarios por esta tarea era muy bajo y se exigíarapidez en su diseño.

No se formaron equipos técnicos ya que se esta-blecía una comunicación radial entre el coordina-dor del programa y cada uno de ellos, sinreuniones ni evaluaciones. Los técnicos optaronpor no desarrollar procesos participativos, y en vezde esto estimularon a varios productores a imple-mentar el mismo proyecto.

Como se debían formar grupos solidarios, el apurohacía que se reunieran productores que no se co-nocían entre sí.

Los fondos fueron efectivamente adjudicados enplazos muy cortos, aunque luego, por problemasrelacionados con las rendiciones anteriores y eldesembolso de fondos por parte del organismo in-ternacional, se tardó en algunos casos más de dosaños en concretar el desembolso.

En muchos casos el dinero llegó en mal momento,ya que había pasado el período de siembra, enotros había bajado mucho el precio del productoen el mercado y los productores habían decididocambiar de rubro. La mayor parte de ellos queda-ron endeudados y con proyectos inviables. Mu-chos grupos se disolvieron y algunos productoresdebieron pagar las deudas de los morosos.

Vemos en este caso que la lógica política de tipoclientelar y los tiempos burocráticos y económicosprimaron sobre la lógica técnica. No hubo inten-ción de organizar a los productores ni de generarprocesos de autonomía.

Análisis de caso 2: Limitaciones en la implementación de un Programa de Desarrollo Rural

Como vemos, la posición que tengan los actoresdentro de las redes de poder locales y la formaen que se establezca la comunicación dentro dela red, puede facilitar u obstaculizar la articulaciónentre distintas lógicas y tiempos. De nuestra ex-periencia podemos observar que en la mayorparte de los proyectos de desarrollo aparecen almenos las siguientes lógicas, motivaciones ytiempos:

•Políticos, marcados por los calendarios electo-rales, las elecciones internas, la opinión pública,las pujas de poder, los cambios en las alianzaspolíticas, el alineamiento con tal o cual línea par-tidaria, las relaciones muchas veces clientelaresque se establecen con la población. Esta lógicaes marcada en los representantes de los go-

biernos locales, pero también rige dentro de lasorganizaciones que asisten al desarrollo rural.

•De los técnicos que asisten en lo productivo,que están marcados por los tiempos de los pro-gramas y las instituciones a las que perteneceny por los ciclos de producción (siembra, riego,cosecha, acopio, venta), e influenciados por lascondiciones climáticas, los precios del mer-cado, entre otros.

•De los técnicos que asisten en aspectos socioorganizacionales, que están marcados por losprocesos de organización de los productoresy las comunidades, que se relacionan con lageneración de confianza entre ellos, se acele-ran en situaciones de emergencia colectiva y


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se retrasan con la intervención de la lógica po-lítica sectorial o de agentes externos que pue-den verse afectados con dicha organización.

•Burocrático-administrativos de la institución yde los proyectos, influidos por las normativaspara la rendición de cuentas, la necesidad depresentar determinados formularios o formasde pedir los fondos, la dificultad frecuente quepresenta trabajar en zonas donde la economíainformal está muy extendida, etc.

•De los ciclos económicos y presupuestariosde los proyectos, que están marcados por los

tiempos y las lógicas de evaluación de estos yde la asignación de fondos, y luego la disponi-bilidad de esos fondos para su ejecución segúnlo planificado.

•De los propios productores y de la comunidad,que además de los relacionados con los ciclosproductivos, suman festividades, dinámicas fa-miliares, tiempos para procesar información, ur-gencias médicas, atención a los efectos decatástrofes climáticas, problemas con la tenen-cia de la tierra, etc.


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Es posible identificar otras lógicas en juego: las delos grandes actores económicos del mercado(acopiadores, competidores, proveedores, etc.), lalógica fiscal y de control de algunos organismosdel Estado, etc.

Al participar de procesos de Desarrollo Territorial, elINTA no actúa solo. Además de sus equipos de ex-tensión y de los productores, intervienen en estos pro-yectos las diversas organizaciones de productores,los intendentes o comisionados municipales locales,otros programas de Desarrollo Rural. Es en esta redde relaciones que la dimensión comunicativa, comoespacio de puesta en juego de lógicas diferentes,

surge como espacio de intervención posible.

¿Cómo se puede intervenir en el conflicto que ge-neran las diferentes lógicas de los actores en elmarco de una situación problemática?Es importante que los agentes de desarrollo sepropongan estrategias de comunicación con los di-ferentes interlocutores para lograr la viabilidad delos proyectos en los que se está trabajando. Estasestrategias deberán tomar como punto de partidalo que cada uno puede escuchar en la situación,para tratar de lograr la articulación de los diferentesactores y aportar a la transformación de los víncu-los y relaciones.

En el año 2001 comenzó un proceso de capacita-ción de dirigentes rurales que integraban la Federa-ción de Centros Educativos para la Producción Total(FACEPT), una organización que nuclea a producto-res y padres de 22 comunidades rurales que coges-tionan con el gobierno escuelas agrotécnicas dealternancia en la provincia de Buenos Aires. Uno delos ejes de la capacitación era el tema del desarrollolocal y de la planificación del desarrollo. Como acti-vidad se propuso dramatizar una situación dondese reunían representantes de distintas organizacio-nes locales para analizar una agenda de desarrollode la comunidad: el intendente y su secretario deHacienda, un dirigente rural, el gerente del BancoNación local, un empresario importante de la zona,una representante de Cáritas, un representante delRotary Club, la directora de la escuela técnica, el de-legado gremial de UATRE, etc. Cada rol era repre-sentado por un participante de la capacitación, alque se le daba una consigna para interpretar al per-sonaje y se le sugería un vestuario, el uso de objetosque identificaran su carácter y las motivaciones prin-cipales que debían guiar la actuación: el intendenteestaba preocupado por mostrar su poder hablandoen forma permanente por celular con personas evi-dentemente importantes, el secretario de Haciendaquería aumentar la recaudación fiscal del municipio,el gerente del banco prefería no otorgar créditos a

menos de tener una garantía sólida ya que arries-gaba su posición, los dirigentes rurales alentabanun proyecto de desarrollo de una zona empobre-cida, los sindicalistas presionaban por blanquear atodos los que realizaban trabajo eventual, etc.

Al realizarse la dramatización, resultaba evidenteque esa combinación de motivaciones contrapues-tas no conducía a nada. Dos dirigentes llevaron lapropuesta a su Centro Educativo y trabajaron y en-sayaron la misma dramatización con un grupo dealumnos y docentes. Una vez que tenían ajustada laobra, comenzaron a organizar una primera reuniónpara trabajar precisamente en un plan estratégicode desarrollo regional, y convocaron para ello a lasmismas figuras de la obra: el intendente, los dirigen-tes rurales, el gerente del banco, etc. Lograron unagran convocatoria, pero antes de comenzar la reu-nión abrieron el telón y comenzó la obra… Los invi-tados se rieron a más no poder de la escenificacióny de la crítica que expresaban los alumnos y docen-tes, y luego de terminado el teatro quedaron inhibi-dos de repetir las mismas frases y posiciones quehabían visto, e incluso se disculparon ante los alum-nos por proyectar esa imagen negativa y egoísta a lajuventud. Esto permitió una gran apertura y capaci-dad de escucha entre los participantes y se pudoavanzar en la formulación del Plan de Desarrollo.

Una experiencia en la provincia de Buenos Aires

Este tema es el que profundizaremos en el próximocuaderno de esta serie, titulado “Cómo planificarproyectos y estrategias de comunicación en pro-cesos de desarrollo territorial”. Para finalizar, mos-tramos algunos ejemplos de cómo apoyar estos

procesos utilizando medios de comunicación, sibien el enfoque de Comunicación para el Desarro-llo incluye también dispositivos grupales y la co-municación interpersonal como alternativas.


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Tomando el enfoque anterior, se ha implementadoen diversos Programas de Desarrollo Rural que tra-bajan con productores y comunidades rurales unalínea de trabajo que introduce el uso de medios decomunicación masiva sea para fortalecer la organi-zación, para difundir las propuestas de este sectora la sociedad o para facilitar el intercambio de sa-

beres entre productores y técnicos o entre los mis-mos productores. Veamos tres proyectos comoejemplo. El primero, lo tomamos de un folleto ela-borado por Miriam Sánchez, comunicadora de In-vernada Sur, del equipo de ComunicadoresPopulares de Radios Base en el Departamento deFigueroa, Santiago del Estero.

Los medios de comunicación como dispositivosque facilitan el desarrollo

Así empezó la experiencia: En el DepartamentoFigueroa, Santiago del Estero, existe un equipo decomunicación, formado por 21 comunicadores dedistintas zonas. El equipo se origina desde la or-ganización “Comisiones Unidas de Pequeños Pro-ductores Agropecuarios de Figueroa”, CUPPAF, enel año 1996. El Programa Minifundio de INTA fuequien apoyó a dar los primeros pasos y a aprendera caminar, con capacitaciones en comunicaciónpopular con representantes de cada zona.

Las experiencias, que fueron muchas, comenzaroncon la pregunta ¿por qué comunicación? Desdelos representantes surgieron las ideas de trabajo, amedida que, participando de las capacitaciones,se adquirían conocimientos. Ya formado el equipo,se bautizó con el nombre de “Akuish Rimaj Figue-roa Manta”, que significa Hablemos de Figueroa.

Se hicieron revistas a mano, con textos e imáge-nes. Las noticias eran realizadas por los comuni-cadores de cada zona, y mostraban lasnecesidades que había en común.

Una vez listas las revistas, cosa que no era ni fácilni rápida, se las repartía a cada integrante de losgrupos en las zonas. Minifundio colaboró con losgastos de la reproducción de ejemplares, que sehacían cada 2 meses.

Se animan a la Radio FM: El siguiente logro fue elprograma de radio en FM Creativa de Bandera Ba-jada, que se sumaba a las publicaciones. El espa-cio, que llevaba el mismo nombre de la revista,salía al aire una vez por semana. Las organizacio-nes comenzaron a tener voz, al poder tener su pro-

pio programa donde se podía comentar, informarsobre los días de reuniones, las capacitaciones re-cibidas, sobre cómo trabaja cada grupo con lasiembra, la cría de animales, las cosechas, los pro-blemas de riego, las sequías, las inundaciones ylos trabajos con programas e instituciones como elPSA, el Fondo Participativo de Inversión Social(FOPAR), el Pro-Huerta y Minifundio del INTA, co-mentando el desarrollo de los proyectos y las ges-tiones que se realizaban ante autoridadesprovinciales, nacionales o zonales.

Mensajes y radios desde las Comunidades: Sepresentó un proyecto al FOPAR, gracias al cual seadquirió equipamiento y capacitación: se compra-ron grabadores, receptores UHF, y un “porta estu-dio”; además, se recibió una capacitación de cincomeses, a cuatro horas por semana, que incluyóuna pasantía de dos días en Villa la Punta, San-tiago del Estero. Con estos fondos se financió tam-bién el último número de la revista.

La Secretaría de Desarrollo Social de la Nación, através del proyecto Animadores Comunitarios deFortalecimiento de la Sociedad Civil, financió lacompra de ocho radios VHF. Luego se pudo equi-par a las comunidades integrantes de las organi-zaciones UNPEPROF (Unión de PequeñosProductores de Figueroa) y DUFINOC (DelegadosUnidos de Figueroa Norte de Once Comisiones)con diez radios más.

Se afianzó así la comunicación saliendo al airedesde las Radios Base por FM Creativa, al serviciode las comunidades, con mensajes, ofertas de ani-males, fardos, sulkis, zorras, anuncios de carreras,

Radios en comunidades campesinas en Santiago del Estero


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El Departamento Figueroa es el más pobre de laprovincia. El equipo de comunicadores está in-tegrado por miembros de familias humildes, quetrabajan voluntariamente, superando las dificul-tades que significan el mal tiempo en verano ylas lluvias que dejan los caminos intransitables,el mantenimiento de los equipos, la distribucióndel tiempo entre las obligaciones para el mante-nimiento familiar y el trabajo voluntario. Lamayor parte del equipo no supera la educaciónprimaria, por esto, la participación de los másjóvenes, que pueden leer y escribir, es muy im-portante.

Los comunicadores apoyan también a los dele-gados, promotores y técnicos que trabajan en lazona, favoreciendo la circulación de la informa-ción con los grupos y las familias organizadas.La comunicación también facilita las ventas delos pequeños productores y ayuda a los gruposa trabajar e incentiva al resto de las familias a or-ganizarse en sus zonas.

Los comunicadores tienen una responsabilidadmuy grande. Deben estar al servicio a cualquierhora, sobre todo en situaciones de emergencia,ya sea por un enfermo u otros casos graves.Son la voz de los que necesitan. El equipo tra-baja unido desde hace varios años. En 2003 segrabó el Radio Teatro “Esta Tierra es Nuestra” di-fundido por varios medios. Participa activamentede encuentros, ferias y eventos, tanto como or-ganización, como equipo de comunicadores po-pulares.

A la luz de este caso es interesante cuestionarsepor qué los Programas de Desarrollo Rural sólorecientemente admiten realizar inversiones eninfraestructura de comunicación como los equi-pos para instalar una FM.

El compromiso como comunicadores Periódico mural “Cultivando redes solidarias”

En 1995, el Programa Pro-Huerta recibió un subsi-dio de la UNESCO para la edición de un boletín opublicación periódica. La tirada debía alcanzarcomo mínimo los 20.000 ejemplares y su produc-ción debía ser económica. Se decidió utilizar unformato de periódico mural, para evitar su encua-dernación. Como debía servir tanto para técnicoscomo para promotores y beneficiarios, se diferen-ciaba la información que se publicaba: una faz delperiódico se dirigía a los técnicos, con informacióngenerada desde la Coordinación Nacional (enfo-que de difusión de información del centro a la pe-riferia) o con fichas técnicas, referenciasbibliográficas y propuestas de mayor complejidad,mientras que la otra se destinaba a promotores vo-luntarios y horticultores.

Para compaginar este lado del periódico se trabajócon el enfoque de comunicación “de la base a labase”, con información que llegaba por correo en-viada por promotores, maestras, dirigentes barria-les y horticultores de todo el país. En esas cartas,donde se incluían fotografías, relatos y diagramas,contaban sus experiencias, describían instrumen-tos, aparatos o ideas que se les ocurrían y envia-ban recetas de cocina realizadas con productos dela huerta y de la granja.

CUPPAF


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La publicación no tenía fecha de salida precisa,sino que se emitía cuando la cantidad de informa-ción acumulada lo justificaba. Se editaron diez nú-meros en total, a lo largo de cuatro años. Sobre elfinal de esta etapa el tamaño del periódico se du-plicó hasta un formato doble sábana (75 x 120 cm),y se editó en color. En el diseño original del pro-yecto se preveía, en una segunda etapa, la capaci-tación de comunicadores populares ocorresponsales horticultores en todas las provin-cias. Esto comenzó a trabajarse en un taller reali-zado con 250 técnicos enla localidad de Los Cocos,Córdoba, en 2000. Sinembargo, los cambios po-líticos y el desfinancia-miento del Programainterrumpieron el procesohacia fines de ese año.Cuatro años después, alrealizar una evaluacióncon promotores de diver-sas provincias, la publica-ción aún era recordada yla mayoría de los consulta-dos recomendaba volver aeditarla.

Un espacio importante delperiódico se destinaba asistematizar aplicacionesde las experiencias de hor-ticultura en diversas institu-ciones: escuelas, institutospsiquiátricos, cárceles einstituciones de recupera-ción de drogadependien-tes. En cada caso seincluían los datos de quie-nes enviaban la informa-ción para que pudiesentomar contacto con lostécnicos y promotores deotras zonas del país, con laidea de promover redessociales y profesionales.

Otra sección fija se desti-naba al rescate de tecno-logías apropiadas llevadasa cabo en muchos casospor los mismos huerteros.

En cada número se incluía una ficha técnica de in-novaciones desarrolladas en distintos puntos delpaís: desde la fabricación de invernáculos con bo-tellas de PET en Jujuy, la construcción de piletaspara piscicultura en Formosa, el plano para armaruna huerta transportable en una camioneta, diver-sos modelos de espantapájaros, hasta un disposi-tivo que facilitaba el trabajo de ancianos y gentecon problemas de columna.


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La pedagogía masiva audiovisual es una metodo-logía y un proceso que permite recuperar, producir,conservar y reproducir el conocimiento campesinoe integrarlo al conocimiento científico para difun-dirlo y capacitar a otras comunidades.

El Pro-Huerta de Tucumán decidió producir dospaquetes pedagógicos con esta metodología. Setrabajó junto a promotores voluntariospara diseñar guiones, y se produjeronprogramas en video y cartillas conabundante información gráfica, fotos ytextos sencillos.

Este material fue validado con pobla-dores que no conocían del tema: seevaluaron el grado de comprensión ylas dificultades que presentaba. Unavez corregido a partir de los resultadosde la validación, fue reproducido y secapacitó a decenas de promotores endiferentes zonas, para que pudieranusarlo con independencia del técnico.Esto permitió ampliar rápidamente lacantidad de participantes del Pro-grama y cuadruplicar la cobertura enpocos meses.

Fue especialmente importante que los protagonis-tas de los videos fueran otros productores. Presen-taron la información en lenguaje sencillo y fueronvistos como pares por los destinatarios del mate-rial, lo que generó confianza e incrementó la auto-estima. Los mismos promotores también sesintieron así valorados y con capacidad de decir yhacer.

Utilización de la pedagogía masiva audiovisualpara capacitar sobre huerta orgánica y cría depollos

¿Qué tienen en común los casos presentados?

En el primer ejemplo, se acompañó a varias orga-nizaciones para facilitar el acceso y la gestión deun medio de comunicación propio. Los que dise-ñaron los mensajes fueron los mismos productoresrurales, que de ese modo tuvieron un medio parahacerse oír, capacitarse, organizarse. La comuni-cación se dio entre ellos, y los técnicos acompa-ñaron a través del aporte de algunos contenidosacordados en común.

En el segundo ejemplo se puede ver otra de lascaracterísticas de la Comunicación para el Desa-rrollo: cualquier organización puede transformarseen una “organización inteligente” si todos los ac-

tores involucrados pueden proponer ideas, cues-tionar premisas y prejuicios, tratar a los demáscomo pares, evaluar abiertamente los resultadossin sentir miedo a ser eliminados o castigados. Elmodelo de Comunicación para el Desarrollo in-cluye estas premisas. A diferencia de la concep-ción vertical del modelo de Información deShannon y Weaver, este enfoque estimula y prevéla comunicación “de la base a la base” y “de la pe-riferia al centro”, tanto como la comunicación “delcentro a la periferia”, y en muchos casos saltea lasjerarquías y permite que los destinatarios de losprogramas se comuniquen directamente con losdecisores centrales sin mediación alguna. La cir-culación de la información es notablemente dis-tinta:

Archivo INTA. Pro-Huerta Tucumán


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En el tercer caso, si bien se parte de una necesi-dad detectada por la Coordinación de un pro-grama, la forma de producir los materialeseducativos es bien diferente al modelo vertical: setrabajan los guiones con los promotores volunta-rios, no profesionales, ellos son los protagonistasde los videos y el proceso tiende a generar unamayor autonomía.

El origen del concepto de Comunicación para elDesarrollo puede rastrearse en la labor que desa-rrolló la Comisión Internacional sobre problemasde la Comunicación, en el marco de la UNESCO, afines de los ’70. Esta Comisión editó un amplio do-cumento conocido como Informe McBride, dondehizo una crítica profunda a la forma en que se de-saprovechaba el potencial de los medios para eldesarrollo de la humanidad en función de ampliarlas ganancias de unos pocos grupos económicos.Este informe provocó que en 1985 Estados Unidosabandonara la UNESCO, hasta que en 1987, con larenuncia de su Director, el senegalés Amadou-Mahtar M'Bow, se reorientó el trabajo del orga-nismo. Allí se propusieron cuatro métodos paralograr una participación democrática en las deci-siones sobre el contenido y el control de los me-dios de comunicación:

•Promover un mayor acceso popular a los me-dios, a través del derecho de réplica y crítica yla implementación de sistemas de retroalimen-tación y contacto entre los responsables de losmedios y el público.

•Favorecer la participación de no profesionalesen la producción y emisión de los medios ma-sivos.

•Apoyar nuevos medios de comunicación loca-les, autogestionados por comunidades étnicaso lingüísticas minoritarias.

•Generar organismos donde puedan participarrepresentantes de la colectividad y los usuariosque estén a cargo de la gestión y toma de de-cisiones sobre la programación.

Como podemos ver, en todos los casos se apuntaa una comunicación “de la base a la base” o “de laperiferia al centro” como forma de contrarrestar latendencia inversa.


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En 1981, a partir de una sistematización de casosdonde se aplica el enfoque de Comunicación parael Desarrollo, la documentalista e investigadoraFrances Berrigan afirmaba que “los medios de co-municación pueden constituir el método más ba-rato y rápido de llegar a las comunidades rurales [ypobres] y de suministrarles una competencia téc-nica que antes no existía (…) En el uso de los me-dios de comunicación en Programas de desarrollose ha hecho más hincapié en decir y en enseñarque en un intercambio de peticiones e ideas entreel centro y la periferia”2.

Si analizamos los casos expuestos y las sistemati-zaciones consultadas, encontraremos al menosdos características comunes a todos los proyectosde Comunicación para el Desarrollo, que podemostomar como “condiciones” para que un proyectocomparta este enfoque:

1. Debe potenciar las posibilidades de comuni-cación “de la base a la base” y “de la periferiaal centro”. Esto no quiere decir que el proyectono pueda también direccionar mensajes delcentro a la periferia, pero si se limita a esta di-rección en el flujo de comunicación, no habla-mos de Comunicación para el Desarrollo.

2. Debe pensarse desde el comienzo la formaen que las comunidades irán asumiendo pro-gresivamente un papel protagónico en el pro-ceso de desarrollo, incrementando suparticipación en todos los niveles, y también, enla gestión de los medios y en la organización delas actividades o al menos en la definición y enla elaboración de los contenidos, de forma talde generar procesos de autonomía. La tecnolo-gía debe ser sencilla de manejar, fácil de enten-

der y no crear dependencia hacia los técnicos.Si es tan cara o complicada que no es posiblede dominar, no estamos frente a un proyecto deComunicación para el Desarrollo. Al abaratarsela tecnología y al mismo tiempo ser cada vezmás sencillo su uso, esta barrera es más fácilde franquear.

En muchos de estos proyectos se incorpora el usode un medio de comunicación (radio, televisión,paquetes pedagógicos multimediales, afiches, dia-rios murales, periódicos, cuadernillos, obras de te-atro o títeres).

Sabiendo que una imagen vale más que mil pala-bras, para terminar esta cartilla veamos algunasfotos que son muy elocuentes en cuanto a los ob-jetivos que proponemos:

2 Existen diversas experiencias que confirman la potencialidad de este enfoque: Se puede encontrar una sistematización realizada por la misma FrancesBerrigan sobre las tribunas de audición de casetes en Tanzanía, la experiencia del CEPAC en Perú coordinada por Calvelo Ríos, la experiencia de KhedaTV en la India en su documento La comunicación comunitaria, disponible en www.incluirong.org.ar/Berrigan%20Comunicaci%F3n%20comunitaria.pdf

El enfoque de la Educomunicación desarrollado por Mario Kaplún en diversos países de América Latina con el programa de radio “Jurado 13” (en el linkhttp://www.radioteca.net/verserie.php?id=807 se pueden escuchar algunos programas), los Cassette-Foro y los talleres de Educación para los Medioscon su método de la Lectura Crítica, son otro ejemplo de este marco de trabajo. También se pueden consultar diversas experiencias de este tipo en lapágina web “El son de Tambora” (http://www.comminit.com/es/sections/terms/37%2C10/253/q), o en la compilación de experiencias realizada por Gu-mucio Dagron (ver bibliografía). Radios y televisoras comunitarias, grupos de teatro popular, redes de medios, sistemas de altavoces comunitarios o agen-cias de noticias alternativas son algunos ejemplos que se pueden hallar. En nuestro país son contadas las experiencias de esta clase, si bien han afloradocon fuerza en los últimos años diversos grupos que las promueven.

Jóvenes de Villa 31 filmando un documental en el marco delProyecto Imágenes para la Identidad y la Inclusión (Incluir /Secretaría de Cultura de la Nación). Foto: Silvia Corral.


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Integrantes de la ONG AME (Agricultura Man Ecology Foun-dation) enseñándole a usar una cámara digital a una cam-pesina en India, para documentar las experiencias deorganización rural en la región. Foto: K. V. S. Prasad

En Ghana, un grupo de campesinos aprenden a usar la cá-mara de video. Foto: Chris Lunch.De la ONG Insight: http://www.insightshare.org

Escenas de producción radial por parte de integrantes decomunidades rurales en el marco de la red de radios esco-lares rurales de la Oficina de Coordinación para el DesarrolloEducativo Rural (OER) del Ministerio de Educación del Perú.


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La cartilla que hoy tienen en sus manos forma parte de la Serie de

Materiales sobre Comunicación para el Desarrollo, producida en

el marco del Proyecto Gestión de procesos de comunicación en

apoyo al Desarrollo Territorial para la capacitación de

extensionistas que trabajan dentro y fuera del INTA.

Su objetivo es fortalecer las capacidades de los equipos de

extensión rural a través de la formación en diversos temas

relacionados con la Comunicación para el Desarrollo, para

mejorar su labor en terreno con comunidades rurales y la

articulación con otras instituciones y organismos que operan en

el mismo territorio.

La Serie está integrada por tres cuadernos de trabajo:

• La Comunicación en los procesos de Desarrollo Territorial;

• Cómo planificar proyectos y estrategias de Comunicación en

procesos de Desarrollo Territorial;

• Cómo evaluar estrategias, materiales y acciones en

proyectos de Comunicación para el Desarrollo.

Programa Nacional de Apoyo a Desarrollo de los Territorios

En la actualidad, el INTA implementa una estrategia de desarrollo rural con enfoque territorial a través del Programa Nacional de Apoyo al Desarrollo de los Territorios. Se promueve no solo el aumento de la cantidad y la calidad de la producción, sino también la consolidación de procesos de organización social. Se aportan tecnologías de procesos y productos, pero también se favorecen nuevas formas de organización, información, comunicación, financiación y comercialización. El fin es contribuir a mejorar la calidad de vida de la población.

El Programa Nacional de Apoyo al Desarrollo de los Territorios integra las estrategias del ProFeder –Cambio Rural, Minifundio, Pro-Huerta, Profam, Proyectos Integrados y de Desarrollo Local- con otras que buscan optimizar las capacidades de los técnicos de la institución para acompañar procesos de desarrollo, readecuar las estrategias e implementar nuevas líneas de acción para la innovación tecnológica y organizacional.

Esta propuesta se articula con los proyectos implementados en los Centros Regionales del INTA, que atienden demandas y problemas de los sistemas de producción y las cadenas de valor. A lo largo y ancho del país, se efectúan acciones orientadas a capacitar, experimentar y transferir tecnologías para las empresas agropecuarias. Se trabaja con profesionales, organizaciones de productores, PyMES y universidades, entre otros, con el fin de potenciar las capacidades institucionales y conformar sistemas locales y regionales de innovación.


Chile 460 (C1098AAJ). Ciudad. Autónoma de Buenos Aires / Argentina

Tel: 011 4339 0600 / http: www.inta.gov.ar/extension/transferencia/htm

la comunicacion en los procesos de desarrollo territorial

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