didactica 2

Upload: miguelcruzm

Post on 12-Oct-2015

2 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

Universidad Nacional Autnoma de MxicoFacultad de Filosofa y Letras

Espaol 5Dra. Ana Mara Maqueo y Uriarte

Miguel ngel Cruz Martnez

Reporte de lectura de Para darle sentido a la lectura

Fran Smith presenta en este libro muchos aspectos que caracterizan a la lectura como un proceso complejo en el que intervienen una gran variedad de factores mismos que van definiendo qu es el proceso de lectura, cmo se llevan a cabo algunos tipos de procesos internos y en general logra describir, en trminos generales, el funcionamiento de la lectura. El primer tema en ser abordado es el funcionamiento de los ojos en relacin a la lectura. Se indica que hay dos tipos diferentes de informacin: la visual y la no visual. La primera es la informacin que es captada a travs de los ojos, un sealamiento oportuno advierte que sta no es suficiente para poder leer, porque es necesaria cierta informacin no visual que incluye entre otras cosas, la comprensin del idioma en que est escrito el texto, la familiaridad con el tema tratado y alguna habilidad general para la lectura. Entre ambas informaciones hay un equilibrio muy preciso: cuanta ms informacin no visual se tiene al leer, menos informacin visual se necesita y cuantas menos informacin no visual se tiene al leer, ms informacin se necesita. Conviene sealar que hay un lmite bien definido de la cantidad de informacin visual que el cerebro puede procesar. Segn los experimentos que se explican en el texto, los ojos estn limitados por un determinado patrn de movimientos que ocurren en un rango preciso de tiempo. Adems se mencionan dos ideas centrales: 1. hay un lmite a lo que podemos ver en cualquier momento y 2. hay un lmite para la velocidad a la que el cerebro es capaz de identificar letras al azar en la lectura y ese lmite es de cuatro o cinco letras por segundo. No obstante, ocurre que cuando se lee algo, se emplea informacin no visual adems de lo que recogen los ojos; al utilizar la informacin visual, es posible ampliar considerablemente los alcances de la escasa informacin visual que el cerebro puede procesar, y as ver y comprender mejor. La reducida capacidad para manejar nueva informacin constituye una de las mayores limitaciones del cerebro.Un fenmeno muy peculiar llamado visin encapsulada en un problema cuya correcta correccin garantiza un mejor desempeo en el acto de la lectura. Esta deficiencia no es propiamente un caso de disfuncin orgnica de los ojos, ni es consecuencia de ninguna debilidad del sistema visual. El tener que manejar un excesivo volumen de datos causa visin encapsulada y sobrecarga la memoria a corto plazo. En este caso, el cerebro opta por depender de decisiones que ha tomado en el pasado, ms que desarrollar tareas complejas en forma reiterada. Este es un problema muy recurrente en los lectores incipientes, sin embargo no es difcil que se presente el caso de adultos que leen algo que no comprenden del todo. Por otra parte, hay algunas circunstancias en las que es muy comn este fenmeno: 1. la lectura sin sentido ya que si no se entiende, se vuelve casi imposible hacer predicciones y de este modo evitar decodificar casi letra por letra. 2. La ausencia de conocimientos relevantes provoca visin encapsulada. 3. La reticencia a utilizar la informacin no visual; la causa fundamental de esta reticencia a utilizar adecuadamente la informacin no visual es la ansiedad. 4. Los hbitos de lectura deficiente producen visin encapsulada; puede ser un ejemplo el leer muy lento, porque el sistema visual quedar saturado rpidamente de toda la informacin visual que se intenta extraer de la pgina. A manera de recomendacin se sugiere que aquellos que sufren de visin encapsulada por no tener suficientes conocimientos previos acerca de lo que se les pide que lean, se les debe proporcionar de algn modo esta informacin; un gran error que se comete frecuentemente es adjudicarle al lector lecturas imposibles.Por otra parte, se indica, en cuanto al significado de un texto, que ste es algo que uno aporta al lenguaje escrito en lugar de extrelo de l, tanto un oyente como un lector han de aportar el significado a lo que se oye o se lee respectivamente. Para descodificar un escrito, se usaba anteriormente el mtodo fontico, el cual presenta algunos problemas insuperables, lo que lo vuelve un mtodo poco adecuado para enseanza de determinadas lenguas como el ingls que presenta una complejidad fontica muy particular, lo cual dificulta enormemente el uso del mtodo fontico; no obstante, el espaol presenta una relacin ms transparente entre sonido y grafa. El mtodo fontico es til en cierta medida cuando se tiene una idea rudimentaria de cmo es una palabra.Posteriormente, se explica que las palabra no son traducidas en fonemas, sino que de acuerdo con el autor, stas son reconocidas de la misma manera que reconocemos todas las cosas u objetos de nuestro universo visual. Es posible reconocer los varios miles de palabras con las que se est familiarizado por la misma razn que podemos reconocer los miles de objetos que nos rodean: porque ha sido aprendido su aspecto. De esta forma, la mayor o menor facilidad con que cuenta un lector est estrechamente vinculado con cunto es lo que sabe de antemano el lector. En este panorama, la ortografa de las palabras es una convencin que traspasa varios cientos de fronteras dialectales, es por ello que el lenguaje escrito es ms consistente que el hablado a travs del tiempo y las distancias. Como lo expresa el autor, la funcin bsica de la ortografa no es la de representar sonidos, sino significados. Dado que los lectores reconocen las palabras en vez de decodificar los fonemas es pertinente cuestionarse cmo un lector puede engrosar su listados de palabras; segn el texto de Smith, su puede usar el contexto para arrojar alguna luz sobre las palabras novedosas esa es la manera en que todos aprenden la mayor parte de las palabras. Otra que a pesar de ser muy simple es verdaderamente efectiva es el mtodo consistente en preguntar a alguien ms.Para el estudio propio del lenguaje, se propone que existen dos tipos bsicos de estructura, la superficial que la constituye en el discurso hablado son las ondas sonoras, mientras que en el lenguaje escrito es la informacin visual que los ojos recogen en cada fijacin realizada durante la lectura. El segundo tipo es la estructura profunda que es bsicamente un trmino alterno para significado. Entre ambas no hay una correspondencia directa sino que puede haber diferencias en el significado sin que haya diferencias en las caractersticas fsicas del lenguaje y las caractersticas fsicas del lenguaje pueden variar sin ninguna diferencia en el significado.

En cuanto a la percepcin de segmentos ms amplios que la palabra, se indica que la explicacin ms frecuente es que las frases son entendidas por medio del mecanismo de yuxtaposicin los significados de cada palabra por separado. Sin embargo, cuando asimilamos cualquier frase y es entendida, en efecto se hace algo ms que simplemente yuxtaponer los significados de cada palabra por separado. El autor percibe que en lugar de ser las palabras lo que otorga el significado a las frases, fueran las frases las que confieren significado a las palabras. Dicho de otra manera, ni las palabras por separado, su secuencia o su funcin gramatical pueden considerarse la fuente del significado en el lenguaje y, por tanto, de la comprensin en la lectura. Ni tampoco es factible descodificar los sonidos del discurso hablado a partir de la estructura superficial carente de significado que conforma la escritura, ello para rastrear hacia atrs una ruta que conduzca al significado.En el texto se menciona que hay una variedad considerable de tipos distintos de textos escritos, cada uno de ellos tiene caractersticas propias que si el lector sabe aprovechar, estos elementos facilitaran la comprensin del texto. As como hay diferentes tipos de textos, tambin hay diferentes objetivos de lecturas, no obstante todas ellas comparten el mismo mecanismo para ser comprendidas por medio de la resolucin de constantes preguntas que el lector se va planteando acerca del texto a lo largo del proceso de lectura.

Fuente:

Smith, Frank. Para darle sentido a la lectura. Madrid: Visor, 1990.

2