conquista cristiana - ¡capacitando líderes para la acción! -...

17
Segundo trimestre 2012 Segundo trimestre 2012

Upload: others

Post on 26-Apr-2020

2 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

Page 1: Conquista Cristiana - ¡Capacitando Líderes para la Acción! - …conquistacristiana.org/wp-content/uploads/2012/05/rev-8... · éxito no será la congregación, sino el que nos

CRISTIANACRISTIANACONQUISTACONQUISTA¨̈

Segundo trimestre 2012Segundo trimestre 2012

L a r e v i s t a p a r a l � d e r e sL a r e v i s t a p a r a l � d e r e sq u e s e p r e p a r a n p a r a l a a c c i � nq u e s e p r e p a r a n p a r a l a a c c i � n

Page 2: Conquista Cristiana - ¡Capacitando Líderes para la Acción! - …conquistacristiana.org/wp-content/uploads/2012/05/rev-8... · éxito no será la congregación, sino el que nos

2

Volumen 8 N¼ 18 Segundo trimestre2012

Director: Carlos ZelayaEditora: Grace Mart�nezAdministradora: Roc�o Le�n

Publicaci�n trimestral del Centro para Desarrollo Cristiano, que perte-nece a la Fraternidad de Ministerios e Iglesias del Pacto Ñ © Derechos Reservados.

Los puntos de vista expresados re-presentan la opini�n de sus escrito-res y no necesariamente del director o editor.

A menos que se indique de otra manera, las citas corresponden a la Biblia Reina Valera Revisada o la Reina Valera 1995.

Agradecemos a nuestroscolaboradores el env�o de trabajospara ser publicados. Seleccionaremos s�lo art�culosrecibidos oportunamente.

Una vez publicados, los art�culos nopodr�n reproducirse con alteraciones orevisiones de ninguna forma. S�lopodr�n reproducirse en su totalidadpara la circulaci�n gratuita y con eldebido cr�dito de fuente y autor.

Contenido

3. Pensamientos sobre La Predicación

Por Charles V. Simpson

8. Cielos abiertos

Por Hugo M. Zelaya

12. Generaciones

Por Carlos Zelaya

Invitamosa pastores y ministerios

para que colaboren con

art�culos deactualidad

que sirvan de bendici�n

al cuerpo de Cristo.

Env�e los

art�culos a:

Grace Mart�nez

Barrientos Editora de Conquista Cristiana

Apdo 200- 2150 Moravia, Costa

Rica

E-mail:

[email protected]

Las cartas y donaciones debe

enviarlas al Apartado 618-2200

Coronado, Costa Rica

E-mail:

[email protected]

Page 3: Conquista Cristiana - ¡Capacitando Líderes para la Acción! - …conquistacristiana.org/wp-content/uploads/2012/05/rev-8... · éxito no será la congregación, sino el que nos

3

RRecientemente, un joven pastor,mientras com�amos juntos, mepidi� que compartiera algunos

pensamientos acerca de la predicaci�n.Me sorprendi�, pero me sent� halagadode que me lo pidiera. As� que empec�con el tema sin ninguna preparaci�n.Luego, mientras reflexionaba sobre laconversaci�n, pens� que escribir�aalgunas otras opiniones sobre el tema.

No soy un experto en la materia,y no pretendo que lo que escribo seacompleto ni b�blicamente exhaustivo.Son simplemente los pensamientos dealguien que ha predicado desde 1955. Mipadre empez� en 1931, y mi hijo mayorha tomado la batuta desde los a�os 1980.

La predicaci�n ha cambiado atrav�s de las �ltimas tres generaciones, y

los retos tambi�n. El mundo y la culturahan cambiado m�s que en cualquier otrotiempo similar en la historia. Porsupuesto que la tecnolog�a y la sicolog�acultural han sido protagonistas en esoscambios. Sin embargo, la predicaci�nsigue siendo tan distintiva como laspersonas que lo hacen, pero permanecenlos principios fundamentales.

O� decir a Les Brown, unconferencista motivacional: ÒLosm�todos son muchos, los principios sonpocos; los m�todos siempre cambian,pero los principios noÓ.

ÀQu� es la predicaci�n?La predicaci�n no es exclusiva

de los cristianos, muchas religiones lausan, pero lo que escribir� s� lo es. Definola predicaci�n simplemente como ladeclaraci�n del Evangelio de Jesucristo.

El ap�stol Pablo describe lapredicaci�n como ÒlocuraÓ para los queno creen (1» Corintios 1). A veces,tambi�n le pudiera parecer locura a loscreyentes, y hasta a los que predican.Pero no es el hablar en p�blico lo queparece locura; sino el evangelio cuandoconfronta la mente natural. As� que, lapredicaci�n debe ser tanto fiel alevangelio como persuasivo para laspersonas. Aunque la predicaci�n leparezca locura a muchos, ha cambiadomuchas vidas y la historia misma y, a�nm�s, contin�a haci�ndolo.

El ap�stol Pablo le dijo aTimoteo: ÒTe encarezcoÉque prediquesla palabraÓ. Pedro y Juan dijeron: ÉÒloque hemos visto y o�do, eso osanunciamosÓ. As� que, la predicaci�n dela palabra es eficaz cuando el predicadorha experimentado su poder. La

P e n s a m i e n t o s s o b r e P e n s a m i e n t o s s o b r e l a p r e d i c a c i ó nl a p r e d i c a c i ó n

Por Charles Simpson

Page 4: Conquista Cristiana - ¡Capacitando Líderes para la Acción! - …conquistacristiana.org/wp-content/uploads/2012/05/rev-8... · éxito no será la congregación, sino el que nos

4

predicaci�n eficaz es declararpersuasivamente la palabra de Diospor alguien que conoce su poder.

Hace muchos a�os, la iglesia quepastoreaba pasaba por una crisis. Mipadre, quien era mi pastor, me dijo:ÒEl p�lpito es el lugar de mayor poderen el mundo cuando predicas lapalabra de DiosÓ. Lo cre� entonces, ylo creo ahora.

Los profetas, nuestro Se�or, ylos ap�stoles, eran todos predicadoresy cambiaron el mundo. Jes�s, porsupuesto, era el Verbo encarnado, ys�lo hac�a y dec�a lo que ve�a y o�a alPadre hacer y decir. Fue crucificado,los profetas y los ap�stoles fueronmartirizados (eso nos deber�a alertar),pero la palabra de Dios hapermanecido y ha sido confirmada atrav�s de la historia. As� que la granpredicaci�n no es s�lo para el mundode hoy, es para Dios y para la historia.

Tambi�n nos convieneexaminar a los falsos profetas quefueron seducidos por la fama; esatentaci�n a�n acosa a los predicadoreshoy en d�a. Nuestra �nica autoridadviene del llamado de Dios de hablarde �l y por �l. He o�do decir queadoramos para una audiencia de Uno.La predicaci�n es lo mismo.

Mi padre sol�a contar unahistoria de tres predicadores quehablaban de sus predicadoresfavoritos. Los primeros dosmencionaron a dos predicadores muyconocidos, y se volvieron al tercero,esperando su elecci�n. Despu�s deuna breve pausa, dijo: ÒBueno, cuandome sale bien, prefiero o�rme a m�mismo m�s que a ningunoÓ. Tambi�nten�a Òuna audiencia de unoÓ Ð unaaudiencia muy peque�a.

La conciencia de s� mismo no tienecabida en el p�lpito; no se trata delmensajero, sino del mensaje. Observarla audiencia puede ser �til a veces,pero eso tambi�n tiene sus peligros.Dios le dijo a Ezequiel: Òno temasdelante de ellosÓ. Podemos mirarlospara asegurarnos que nos estamoscomunicando, pero nuestro mensajeno debe convertirse en mendigaraprobaci�n. Un ÒamenÓ nos anima,

pero el predicar para recibir amenesnos distrae del Òam�nÓ que m�s vale Ðel testimonio del Esp�ritu Santo.

Grandes predicadoresCuando empezaba en el

ministerio, le� mucho de Spurgeon, yle tengo un gran respeto. Como erabautista, me impresionaban dosgrandes predicadores bautistas, R. G.Lee y W. A. Crisswell. Aunque meinspiraban los ministerios de estosgrandes hombres, nunca intent�imitarlos. George Whitefield es uno demis preferidos, Ápero yo no soyning�n Whitefield! He sido bendecidopor estos y otros, incluyendo a mipropio padre. Pero me di cuenta queDios me llam� a ser aut�ntico; tuveque aceptarlo, y llegar a ser lo que �lme llam� a ser y hacer.

Desde los a�os 60 hastamediados de los 80, trabaj� con cuatropredicadores, Ern Baxter, DerekPrince, Bob Mumford, y Don Basham.Cada uno ten�a su estilo ; yo losamaba y aprend� de cada uno de ellos,pero no nos copi�bamos el uno al otro.Los grandes predicadores no buscanser grandes; son humildes y fieles a sullamado. El �xito viene de Dios.

Mi definici�n de buenapredicaci�n es declarar la palabra deDios claramente, con compasi�n, yconvincentemente, que motive a laspersonas a responder a Dios. Lapredicaci�n debe venir del coraz�n deDios, a trav�s del coraz�n delpredicador, y alcanzar el coraz�n delque escucha. El que mide nuestro�xito no ser� la congregaci�n, sino elque nos envi�. C�mo responde lagente queda entre ellos y Dios. Porsupuesto, que nos importa, y oramospara que as� lo hagan, pero mantengala respuesta de la gente en el lugaradecuado. No se olvide de losprofetas, y no se convierta en unpredicador mercenario.

RetosEn t�rminos generales, los

predicadores evang�licos permanecenen una congregaci�n por dos a�os.Espero que usted y yo lo hagamosmejor. Muchas iglesias, cuandobuscan un pastor, le piden que

predique sermones de prueba.Prefiero jugar al boliche o algo as�.Desear�a que todo miembro de lacongregaci�n pudiera tomarse suturno detr�s del Òescritorio sagradoÓ.El hablar en p�blico se mencionacomo el temor m�s com�n entre laspersonas. Pero predicarÉeso est� aotro nivel.

Muchos pastores sedesaniman, en parte porque buscan lafuente de �nimo por otra parte. Davidbuscaba su �nimo en el Se�or. Mipadre pastore� su �ltimacongregaci�n por 35 a�os en unaiglesia que no hab�a podido retener alos pastores anteriores por m�s de dosa�os, y super� muchas temporadas dedes�nimo. Su predecesor dur� un a�o.En el funeral de mi padre, m�s de unose me acerc� para decir: ÒFue el mejorpastor que hemos tenidoÓ.Desafortunadamente, muchos no sedieron cuenta en el momento.

Los �nicos profetas deaclamaci�n popular son falsos oest�n muertos

Los tiempos han cambiadomucho desde 1931 cuando pap�empez� a predicar, o desde 1955cuando empec� yo. El predicador yano predica a bautistas, cat�licos, opentecostales, sino a Òclientes de unacafeter�aÓ quienes son probadores ycatadores, conocedores de ministerios.A diferencia de los tiempos de anta�o,las audiencias son expuestas a efectosvisuales y de sonido. La televisi�n seinterrumpe cada 7 u 8 minutos, y todala naci�n tiene d�ficit de atenci�n.

El predicador se haconvertido en una parte muy peque�adel men� de la iglesia, junto con otrosequipos, programas, edificios,ministerios, y el estacionamiento. Sitiene �xito, puede ser que se conviertaen el director ejecutivo de unaempresa, dirigiendo el tr�fico y dandouna breve palabra a los clientes. Lom�s que puede esperar es poderinspirar, animar, o por lo menos noofender a alg�n oidor sensible, yesperar que vuelva el pr�ximodomingo.

Entonces, Àdeber�amos

Page 5: Conquista Cristiana - ¡Capacitando Líderes para la Acción! - …conquistacristiana.org/wp-content/uploads/2012/05/rev-8... · éxito no será la congregación, sino el que nos

renunciar? Algunos lo han hecho.Pero a menos que Dios, cuyos dones yllamamiento son irrevocables, lo diga,Áabsolutamente no! Alguien dijo: ÒLosl�deres no nacen, son acorraladosÓ.Somos acorralados por nuestracultura secular, fragmentada ymoralmente confusa. La palabra deDios y el siervo de Dios son probadospor el fuego y muchos sienten el calor.O nos amargamos o mejoramos. La�ltima es la intenci�n de Dios.

Cuando la congregaci�nparece tener la capacidad de atenci�nde un colibr�, hay un sonido quepuede captarla; es el trueno y el rayode la palabra de Dios. Recuerde quetodo lo que existe, fue creado por lapalabra de Dios. El sonido tiene poderÐ y m�s a�n cuando viene del cielo(Salmo 29 y Hechos 2). La creaci�n yla cultura necesitan o�r ese sonido otravez.

La cultura se desintegra antenuestros ojos. El caos de la culturamoderna radica en la p�rdida delpoder prof�tico del profeta. Elfundamento moral est� quebrado. Esees nuestro llamado. R.G. Lee dijo: ÒSila iglesia hiciera lo que debe hacer, losÒ-ismosÓ (filosof�as mundanas) ya noser�anÓ. La palabra de Dios,proclamada con denuedo, es nuestra�nica esperanza para elrestablecimiento moral al nivel delGran Despertar. La palabra de Diosdebe sonar dentro y fuera de la iglesiapara que haga efecto en nuestracultura colapsada. ÁLas piedras vivasdeben clamar!

Me da verg�enza cuando mecomparo a m� mismo y a miscontempor�neos con nuestrospredecesores y aquellos que est�n enlugares hostiles, que arriesgan su vidapor el evangelio. S�lo tenemos quemirar hacia lugares como China,Sud�n, el Medio Oriente, o Nigeria,para ver que a�n existe la guerra entreel bien y el mal; y la guerra tienev�ctimas. Apocalipsis 12:11 nos diceclaramente c�mo podemos vencer enesta guerra: por la sangre del Cordero,la palabra de nuestro testimonio, ymenospreciar nuestra vida hasta lamuerte.

Ning�n premio que no demandenuestro mayor esfuerzo vale la pena.

La preparaci�nLa preparaci�n personal

precede a la preparaci�n del serm�n.Un mensaje bien preparado dealguien que no se preparapersonalmente puede ser entretenido,pero no ser� efectivo. Dios trabaja ennosotros mucho antes de que nosotrostrabajemos en nuestro mensaje. Somostransformados en lo que �l yaconsidera que somos. Tenemos queÒaprenderÓ a Cristo, no s�lo aprenderalg�n concepto espiritual. Nuestrameta de aprendizaje no puede ser m�salta que ser un disc�pulo del GranPredicador. Cuando dijo: Òs�guemeÓ,no quer�a decir que lo siguiera enTwitter (red social de internet).

Seguir a Jes�s significa quenos guiar� por el Esp�ritu Santo, porcircunstancias en las que puedaense�arnos y llevarnos a toda verdad.La vida es una experiencia deaprendizaje. Debemos aprender acaminar con �l antes de poderrepresentarlo. El Esp�ritu Santo esCristo en nosotros. El Esp�ritu Santopone el coraz�n de Dios en nosotros,el coraz�n de la verdad en amor,justicia, paz y gozo. Somos hombres ymujeres del reino de Dios,embajadores de Cristo a una culturaextra�a. Lo representamos a �l, no anosotros mismos. Estamos muertos anosotros mismos.

La preparaci�n principal delpredicador es vivir en el Esp�ritu deCristo Ð la Palabra Eterna encarnada.Jes�s es el modelo. Significa que laoraci�n es continua, y la sensibilidadconstante. No se trata s�lo de lo que ledecimos a Dios, es m�s importante loque �l nos dice. Cuando oro, mepregunto: ÒÀCon qu� clase de mentevoy a hablar?Ó Dios a�n crea galaxias.A�n as�, conoce el n�mero de cabellosen mi cabeza. La preparaci�nespiritual es estar sintonizado por elarquitecto y maestro de todo lo queexiste.

La preparaci�n mental es quenuestra capacidad intelectual seaestirada por Aquel que sin esfuerzo

puede hacer explotar nuestro cerebro.Mi padre sol�a decir de alg�nconocido: ÒÁCuando se le ocurre unaidea, le explota la cabeza!Ó Finneydijo, cuando fue bautizado en elEsp�ritu Santo: ÒGrit� los torrentesindecibles de mi almaÓ (suena comoPentecost�s). Su mente y su voz nopod�an expresar el poder y larevelaci�n de esa experiencia.

Dios quiere ampliar nuestracapacidad mental Ð la mente es un�rea vital de nuestra pr�cticadevocional. Leer la palabra de Dios ymeditar en ella renueva nuestra mentey nos transforma. El esp�ritu es elviento que nos mueve, la mente es laherramienta que dirige. Llenar lamente de la palabra de Dios nos gu�aa sus pensamientos y caminos. Es laluz a nuestros pies y l�mpara anuestro camino.

Conoc� a mi amigo KenSumrall en 1960. Muy pronto me dicuenta que cualquier pasaje de laescritura al que yo pudiera hacerreferencia, �l sab�a exactamente dondese encontraba. �l oraba m�s Biblia delo que muchos predican. Recordar aDios con sus palabras es unfundamento fuerte para la oraci�n.Pablo le dijo a Timoteo: ÒÉpredica lapalabraÓ. Tambi�n es bueno Òorar lapalabraÓ. Mis padres tambi�n lohac�an.

Adem�s de la palabra deDios, la lectura amplia puede ser �til.En 1972, invit� a Ern Baxter a mi casa,donde tambi�n estaba mi oficina.Cuando entr�, dijo: ÒEsta es unahabitaci�n muy bonita, podr�as poneraqu� tu biblioteca.Ó Lo mir�avergonzado. ÒMi biblioteca ya est�aqu�Ó, dije. Entend� el mensaje. Ahoraintento leer una gama amplia de librosy revistas: biograf�as, econom�a,ciencias, filosof�a, as� como autoresreligiosos. Mi criterio es que no seasimplemente ficci�n o fantas�a, sinoque sea por o acerca de alguien quehizo algo significativo.

La preparaci�n f�sica tambi�nes importante. Muchos ministrosbuenos han tenido poca circulaci�ndebido a su pobre salud. Yo creo en lasanidad, pero prefiero la prevenci�n.

5

Page 6: Conquista Cristiana - ¡Capacitando Líderes para la Acción! - …conquistacristiana.org/wp-content/uploads/2012/05/rev-8... · éxito no será la congregación, sino el que nos

6

Necesitamos un ÒcarroÓ que puedallevar la carga, y el ministerio es unacarga. Jes�s sab�a cu�ndo descansar,pero tambi�n caminaba mucho.Caminar y orar es una buenacombinaci�n de dos formas depreparaci�n.

Recuerde que la gente lo ve,luego lo escucha. El buen estado f�sicotiene muchas ventajas de salud y deejemplo a otros. Es una gran parte dela resistencia en tiempos dif�ciles. Elesp�ritu, el alma y el cuerpo son todosparte de nosotros. Una buena dieta yel ejercicio pueden quitar toxinastanto espirituales como qu�micas.

Recientemente, Olivia Wardgan� el concurso en televisi�n de ElGran Perdedor (The Biggest Loser[concurso para perder de peso]). Suhermana, Hannah Curlee, quedo ensegundo lugar. Cada una perdi�alrededor de 150 libras (68kilogramos), y los resultados fueronhermosos en muchas maneras. Suspadres perdieron mucho peso, y elesposo de Olivia perdi� 90 libras (41kilogramos). Juntos, la familia perdi�m�s de 500 libras (227 kilogramos).Dieron su testimonio en nuestraiglesia, y lo m�s asombroso fue elaspecto espiritual de su esfuerzo. Susentrenadores no eran ÒpersonasespiritualesÓ en el sentido usual. Sepodr�a llamar Òterapia de la realidadÓ.Sus resultados fueron espirituales ymentales, as� como f�sicos.

Hace varios a�os, me compr�una nueva libreta de direcciones. Alpasar los nombres de la vieja a lanueva, me sorprend� de ver cu�ntosya no estaban con nosotros o, los quea�n viv�an pero no estaban en elministerio por problemas de salud. Loconsider� como una advertencia, juntocon una derivaci�n vascularcu�druple que tuve poco tiempodespu�s.

Hay otro tipo de preparaci�ndel que har� menci�n breve: lafamilia. Es dif�cil tener una familiatumultuosa y tener un ministerioefectivo. Impartimos lo queverdaderamente somos en el hogar.La ley de la impartici�n es simple: si

tienes paperas, podr�s predicar acercade sarampi�n, pero les dar�s paperas.Si est�s nervioso, podr�s predicarsobre la paz, pero recibir�n elnerviosismo a�n cuando prediquesotra cosa.

Dios me dio una esposahermosa, de mucha clase y gracia.Siempre intent� proteger laprivacidad de la familia y proveerpara las necesidades de mi esposa ymis tres hijos. Siempre me apoyaron ymi hogar era un santuario. Pero,aunque no deb�a hacerlo, a vecesllevaba mi estr�s a casa. Por eso y porotras razones, mi hijo mayor dice quelos hijos de predicadores necesitanterapia. Yo tambi�n lo fui, y estoy deacuerdo.

Existen tres �reas importantesen el matrimonio, as� como unapersona tiene esp�ritu, alma y cuerpo.Orar juntos, lo cual trae unidad deesp�ritu; la comunicaci�n que edifica launidad del alma, y el afecto f�sico queproduce la uni�n f�sica. El perd�n,r�pido y completo, permite que lagracia de Dios llene cada una de estas�reas.

Por supuesto que hay muchoslibros sobre el tema del matrimonio, yeste no es un compendio de sabidur�asobre el tema, pero si usted est�casado, no intente salvar el mundo siva a perder a su esposa o sus hijos.Ellos son su gloria y la manifestaci�nde su sabidur�a.

Preparaci�n del serm�nYa dije que somos llamados a

predicar la palabra de Dios. Esoelimina muchas otras posibilidades.Nuestra �nica autoridad est� enAquel que nos llam�. Debemos hablarde y para Dios, o deber�amos ofreceralguna frase aclaratoria como: ÒLo quevoy a decir, no es de DiosÓ.

Asumiendo que Dios nosprepara y nos habla, Àc�mo debemosenfocar el mensaje? Dios habla atrav�s de la Biblia y la oraci�n, perotambi�n puede usar otros medios. Enel Antiguo Testamento habl� pormedio de un asno (y a veces los siguehaciendo hoy). La clave es conocer suvoz (Juan 10).

Yo busco tres cosas: lainspiraci�n (el aliento del Esp�ritu), larevelaci�n (la percepci�n del Esp�rituSanto), y claridad (la habilidad de very decir las cosas concisamente).Cuando estos tres elementos est�npresentes, o por lo menos los primerosdos, empiezo a tomar notas, luegoagrego algunas ideas relevantes.Despu�s hago las investigacionesb�blicas e hist�ricas pertinentes.Intento verificar los hechos (todo estosin ning�n orden espec�fico). Luegotomo algunas notas acerca dehistorias, testimonios, y hastaan�cdotas jocosas (el humor es ladistancia m�s corta entre dospersonas). Cuando he terminado esteproceso, tengo una especie deÒmont�n de piedrasÓ de donde seconstruye y clarifica el mensaje.

Debo decir que hay otros quelo hacen de formas diferentes, y esoest� bien si es que creen que ese es elm�todo de Dios para ellos. Algunossimplemente Òllenan el pozoÓ y lodejan fluir el domingo. Otrosamontonan Ògrandes rocasÓ y las tiranel domingo. Lo que voy a describir esel m�todo que es m�s c�modo para m�en el Esp�ritu Santo.

Primero, paso un rato orandoen el Esp�ritu por confirmaci�n ydirecci�n. Necesito la paz de Dios eneste proceso. De otro modo, lo pongoa un lado. Lo que busco es el por qu�.ÀPor qu� est� hablando Dios esto, si esque lo est� diciendo? ÀQu� es lo que�l quiere que le diga a la gente? Buscola claridad del prop�sito. Si voy aÒclavar el clavoÓ, quiero que la puntaest� afilada. No quiero ÒmartillarÓ envano. Y quiero que el martilleo seaapasionado, no s�lo la transferenciade conocimiento de mis notas a las deellos.

Una vez que tengo claridad ypuedo expresar mi prop�sito en pocaspalabras, empiezo la construcci�n delmensaje. Algunos son mejores que yopara poner t�tulos, pero el t�tulo de mimensaje es el tema o una frase deltexto que usar�.

Mi introducci�n puedeempezar con una an�cdota, unapregunta o una declaraci�n simple del

Page 7: Conquista Cristiana - ¡Capacitando Líderes para la Acción! - …conquistacristiana.org/wp-content/uploads/2012/05/rev-8... · éxito no será la congregación, sino el que nos

prop�sito del mensaje. Tengo unmensaje que titul� ÒEl camino desalidaÓ de 1» Pedro 2:9-12. Se trata deque somos peregrinos llamados a salirde las tinieblas. Empiezo con el relatode cuando mi padre se perdi� en unpantano, y c�mo pudo salir alescuchar la voz de su amigo que lollamaba.

Luego, contin�o con unejemplo de personas que fuerondestruidas porque no pudieron salirde una mala situaci�n, y c�mo elenemigo quiere encerrarnos ydestruirnos. Uso ejemplos de c�moDios llam� a su pueblo a salir de Ur,Egipto, Israel, etc. Mi prop�sito es queoigamos a Dios que nos llama a salir aun peregrinaje. Mi bosquejo tiene trespuntos para salir: la unidad, el poder,y la misi�n.

Algunos dicen que un buenmensaje es decir a la gente lo que vasa decir, decirlo, y decirles lo quedijiste. No est� mal, pero no es todo loque hay que hacer.

A menudo, la manera queconstruyo es con un argumento parala verdad del mensaje que concluyecon una raz�n irresistible pararesponder a Dios. Muchas vecesempiezo por definir el problema,luego propongo la estrategia pararesolverlo, y concluyo con las posiblesrecompensas. Me pregunto: ÒSi fueraun jurado, Àdar�a mi veredicto a favorde la presentaci�n?Ó Busco tanto elpoder en el Esp�ritu como el poder depersuasi�n para el prop�sito de Dios.Al usar el martillo, no quiero fallar odoblar el clavo. Por supuesto quequiero martillar la verdad, no al que laoye.

Si se necesita una definici�nde t�rminos, lo hago al principio,breve y claramente. Confieso quetengo una Òmente militarÓ. Eso me lodijo un profesor de ciencias pol�ticas.

ÒÀCu�l es la alternativa?Ó le pregunt�.

ÒUna mente democr�tica,Ó me dijo.

ÒGraciasÓ, le respond�.

As� que, intento predicarestrat�gicamente. Muchos hoy en d�ausan un estilo m�s conversacional y

muy interactivo, y eso est� bien si as�es su personalidad. Ellos tendr�n,quiz�s, una mente m�s Òdemocr�ticaÓ.

Mis conclusiones son breves y puedeque incluya una an�cdota o ilustraci�nde alguien que hizo o no hizo lo queDios dijo. Pero no prolongo laconclusi�n, como el que dijo: ÒAhorapara seguir terminandoÉÓ Si laatenci�n de la gente est� arriba, no labajo extendiendo m�s el mensaje. Sino est� arriba, no quiero hacer peor lascosas.

La Presentaci�nUn curso de c�mo hablar en

p�blico puede ser �til. Lo que se dicees vital, pero c�mo se dice tambi�n esmuy importante. Los equipos desonido y la arquitecturacontempor�nea han removido muchoel contacto entre el que habla y el queescucha. Los recintos m�s viejosfueron dise�ados m�s ac�sticamente,y los oradores se proyectaban conmayor fuerza. Aunque ya no tenemosque hablar tan fuerte, a�n debemosproyectarnos. Le animo a que hableusando el diafragma y no s�lo de lagarganta.

Mi primera profesora de oratoria mellev� al gimnasio y me coloc� en unaplataforma sin micr�fono, ella se fueal extremo contrario y yo ten�a quedar mi discurso. La ac�stica era mala,pero ella quer�a o�r cada palabraclaramente. Mi acento era rural, y ellame gritaba instrucciones ycorrecciones desde donde estaba. Yovivo agradecido con ella.

La claridad y el uso vigorosode las palabras son imperativos,aunque debemos aprender a variar elvolumen y el tono de la voz. El serestridente puede convertirse enh�bito, pero elimina la efectividad delvolumen. Yo creo que el sonido de lavoz humana, usada apropiadamente,es el m�s hermoso de los instrumentosmusicales.

La respuestaLa respuesta no siempre se

puede medir inmediatamente.Queremos emoci�n, pero no elÒemocionalismoÓ. Queremos una

decisi�n basada en la convicci�n delEsp�ritu Santo que perdure m�s all�de las puertas del edificio. Casisiempre hago una invitaci�n para quela gente responda f�sicamente y recibaoraci�n. Dar seguimiento es bueno.Sin embargo, ha habido veces en lasque si hubiera dicho: ÒSi ama a sumadre, pase al frenteÓ, nadie lohubiera hecho. Ha habido vecescuando la gente pas� al frente antes deque hiciera la invitaci�n. La verdaderamedida del mensaje vendr� muchodespu�s, si es que hubo un cambioreal.

Las invitaciones deben serbreves y claras, pero tambi�n debemosentender que Dios pudo haber dichoalgo que no era parte de la pr�dica, yque la gente necesita responder.

Una invitaci�nEstos han sido algunos

pensamientos acerca de lapredicaci�n. He descrito lo que es, hedado ejemplos de grades predicadoresy algunos retos, he escrito acerca de lapreparaci�n personal y del serm�n, lapresentaci�n, las invitaciones, lasconclusiones, y la respuesta de lagente. Lo he presentado como lo heo�do y hecho. He re�do, he llorado, yse han re�do de m�. He causadocontroversia y consuelo, algunos sehan salvado, han sido llenados,sanados, liberados; y en algunosdomingos, hasta he Òlevantado a losmuertosÓ.

Ahora le invito a queresponda, uni�ndose a m� paraintentar hacerlo mejor. Alg�n d�a,muy pronto, veremos en persona alque nos llam� y nos envi�. Yo esperoque no diga: ÒDisfrut� tu mensajeÓ.Sino que espero o�r: ÒBien, buen siervoy fielÓ. Si as� lo dijera, ser�a solamentepor su asombrosa gracia, y estar� porsiempre agradecido por sumaravillosa y eterna palabrasalvadora. ∆

Charles V. Simpson es maestro con unministerio internacional y director de larevista One-to-One.

7

Page 8: Conquista Cristiana - ¡Capacitando Líderes para la Acción! - …conquistacristiana.org/wp-content/uploads/2012/05/rev-8... · éxito no será la congregación, sino el que nos

ÇDe cierto, de cierto les digo, que deaqu� en adelante ver�n el cielo abierto,y a los �ngeles de Dios subir y bajarsobre el Hijo del HombreÈ (Juan1.51).

DDios hab�a escogidosoberanamente a Jacobantes de que �ste naciera,

pero su vida no comienza a darevidencias de su selecci�n hastaque entra en una situaci�n dondeotros est�n haciendo con �l lo que�l hizo con su padre y con suhermano. La verdad es que a todosnos escogi� Dios desde Òantes dela fundaci�n del mundoÓ (Efesios1.4) y, como Jacob, hemos tenidoque pasar por experiencias que nosvan formando a la imagen deAqu�l que nos predestin� a serhijos suyos. Dios no nos escogeporque seamos algo o alguien, sinopor lo que �l puede hacer connosotros. Su elecci�n se basa en supoder de hacernos de nuevo.

En G�nesis 24, Abrahammanda a su criado Eliezer, concamellos cargados de regalos, a latierra de sus parientes con el fin de

buscarle esposa a su hijo Isaac.Hay todo un ÒdramaÓ que sedesarrolla en el cumplimiento deeste encargo, hasta el regreso conRebeca que se convierte en esposade Isaac. Algunos eclesi�sticos hanrelacionado la historia con elNuevo Testamento y han visto eneste suceso una representaci�n dela Trinidad: el Padre, enviando alEsp�ritu Santo a encontrar unaesposa (la Iglesia) para su Hijo.

No conviene llevar muy lejosla comparaci�n con la Iglesia. Locierto es que Isaac rog� al Se�orpor Rebeca, su mujer, porque eraest�ril; y el Se�or escuch� susruegos, y ella concibi�. Pero loshijos luchaban dentro de ella.(G�nesis 25.21). La fecundidad dela Iglesia es de Dios. �l es quiennos hace f�rtiles.

Rebeca ten�a gemelos y Dios ledijo que el mayor servir�a al menor(vs. 21). Esa� naci� primero ydespu�s sali� Jacob agarrado deltal�n de su hermano mayor. Entiempos antiguos los nombresrepresentaban algo. Esa� significaÒvelludoÓ. M�s tarde recibi� elsobrenombre de Edom que

significa ÒrojoÓ, por el guiso rojoque le dio Jacob a cambio de laprimogenitura (ver G�nesis 25.29).Jacob quiere decir Òel que toma deltal�nÓ o ÒsuplantadorÓ. Dios lecambi� su hombre a Israel quesignifica Òel que lucha con DiosÓ oÒreinar� con DiosÓ. Isaac yRebeca tomaban parte en eldestructivo juego de los hijospreferidos. Parece que Jacob nuncase liber� de esta costumbre y lahizo una pr�ctica con sus propioshijos, prefiriendo a Jos� y m�starde a Benjam�n.

Esa� fue cazador y era elfavorito del padre. Jacob era elfavorito de la madre. Eran hijos delmismo padre y la misma madre,pero eran totalmente diferentes. AEsa� no le importaban losderechos del primog�nito, perocorrespond�a al amor de su padre.En un momento de debilidad lecedi� los derechos de primog�nitoa su hermano gemelo, sin meditarque de esa manera perd�a labendici�n de su padre. Esto ledoli� a Esa� en extremo, y exclamacon profundo dolor: ÇPadrem�o,Àacaso no tienes m�s que una

8

CC ii ee ll oo ss CC ii ee ll oo ss aa bb ii ee rr tt oo ssaa bb ii ee rr tt oo ss

Por Hugo M.Zelaya

Page 9: Conquista Cristiana - ¡Capacitando Líderes para la Acción! - …conquistacristiana.org/wp-content/uploads/2012/05/rev-8... · éxito no será la congregación, sino el que nos

9

sola bendici�n? ÁBend�ceme tambi�n a m�, padre m�o!Y levant� Esa� el tono de su voz, y llor�È (G�nesis27.38).

Esta tiene que ser una de las escenas m�sdesgarradoras en la Biblia. Hebreos 12.16 llamalibertino y profano a Esa�. El vers�culo 17 dice que yano hab�a oportunidad de echar atr�s: ÇAunquedeseaba heredar la bendici�n, fue rechazado y notuvo ya la oportunidad de arrepentirse, aun cuandocon l�grimas busc� la bendici�nÈ . Esta descripci�nde Esa� explica por qu� Dios lo rechaz� y favoreci� aJacob.

Esa� hizo planes de matar a su hermano tan prontofalleciera su padre. Para salvarlo, Isaac y Rebeca lomandan a la casa de su t�o Lab�n donde Jacob pasa 20a�os aprendiendo que Dios no necesita de la astuciahumana para cumplir con su prop�sito. Lab�nenga�a repetidas veces a su sobrino, pero Dios estabacon Jacob. Durante estos a�os, Esa� ha perdonado asu hermano. Cuando Jacob regresa, lo recibe en paz,y cuando Isaac sucumbe ambos entierran a su padreen un ambiente fraternal.

Cuando Jacob huye de Esa�, y va camino de suforzado exilio, tiene su primer encuentro con Diospor medio de un sue�o. La Biblia lo describe de estamanera:

ÒEntonces tuvo un sue�o, en el que ve�a unaescalera apoyada en la tierra, y cuyo extremo tocabael cielo, y ve�a que los �ngeles de Dios sub�an ybajaban por ella. En lo alto de la escalera, ve�a alSe�or, que le dec�a: ÇYo soy el Se�or, el Dios de tupadre Abraham y el Dios de Isaac. A ti y a tudescendencia les dar� la tierra donde ahora est�sacostado. Tu descendencia ser� como el polvo de latierra, y te esparcir�s hacia el occidente y el oriente,hacia el norte y el sur. En ti y en tu simiente ser�nbendecidas todas las familias de la tierra. Date cuentade que yo estoy contigo. Yo te proteger� pordondequiera que vayas, y volver� a traerte a estatierra. No te dejar� ni un momento, hasta que hayahecho lo que te he dichoÈ. (G�nesis 28.12-15)

El cielo y la tierra se tocan

Esta realidad est� representada por la escaleraque Jacob ve en su sue�o. El cielo y la tierra est�nunidos en esa escalera. Un extremo toca la tierra y elotro el cielo. Hay una conexi�n perfecta entre estos.La escalera representa la intenci�n de Dios y todo lo

que �l tiene para el hombre. Hay una libreconcurrencia entre los dos. Por ella suben y bajan los�ngeles de Dios.

Los �ngeles son seres sobrenaturales, celestiales,creados mayores que el hombre, y mucho menoresque Jesucristo (Ver Hebreos 1.4-14). Son Òesp�ritusministradores, enviados para servir a quienes ser�nlos herederos de la salvaci�nÓ. Los �ngeles de Dios nopermiten que los hombres los adoren (verApocalipsis 19.10).

No hay nada que impida que Dios cumpla con suprop�sito original para el hombre. La desobedienciadel primer Ad�n fue apenas un peque�ocontratiempo para Dios, si bien no para el hombre.Dios nunca cambi� su idea original. Nada ni nadiedetiene su prop�sito. Su voluntad es perfecta desde elprincipio. Nunca se equivoca, ni nada lo sorprende.

Esta es la primera vez que Dios se revela a Jacob.Todo este tiempo, Jacob hab�a operado en la carne, noporque desconociera la voluntad de Dios, pues no semostr� sorprendido cuando Rebeca, su madre, lepropuso que enga�aran a Isaac, su padre. Es muyprobable que ella lo habr�a estado predisponiendorefiri�ndole lo que Dios le hab�a dicho cuando �l yEsa� todav�a no hab�an nacido. Jacob estaba poriniciar un proceso al final del cual, el Dios deAbraham y de Isaac se convertir�a tambi�n en el Diosde Jacob, y Dios se le aparece, no para felicitarlo porlo que ha hecho, sino para declararle su prop�sito apesar de lo que hizo.

Todas las promesas hechas a sus antepasadosser�an suyas tambi�n. Adem�s, Dios agrega algo queusted y yo podemos reclamar para nosotros: ÒNo tedejar� ni un momento, hasta que haya hecho lo que tehe dichoÓ (G�nesis 28.15). Dondequiera que el cielo yla tierra se toquen, est� la promesa de Dios de nodejarnos ni un momento hasta que �l cumpla loprometido (ver Mateo 28.20). Y no tenemos que sercomo Jacob que quiso ayudar a Dios como si �l nopudiera hacerlo sin nosotros. Expresiones humanascomo Òorando y con el martillo dandoÓ; Òponiendopatitas a nuestras oracionesÓ s�lo muestran el orgulloy la ignorancia del hombre al querer ayudarle a Diosen la carne. Obediencia es otra cosa y demandaacci�n.

Un sue�o hecho realidadEn Juan 1, Jes�s relaciona el sue�o de Jacob

consigo mismo. El contexto es los primeros d�as de su

Page 10: Conquista Cristiana - ¡Capacitando Líderes para la Acción! - …conquistacristiana.org/wp-content/uploads/2012/05/rev-8... · éxito no será la congregación, sino el que nos

ministerio dedicados a llamar a loshombres quienes ser�an susdisc�pulos. Jes�s llama a Felipe yeste le cuenta a Natanael, y lo instapara que vaya a verlo despu�s deque Natanael expres� duda sobresi Òde Nazaret salga algo buenoÓ.Cuando Jes�s le dice que lo hab�avisto antes de que Felipe lollamara, Natanael es librado de susdudas y cree en �l. Jes�s lo animaa�n m�s dici�ndole: ÒDe cierto, decierto les digo, que de aqu� enadelante ver�n el cielo abierto, y alos �ngeles de Dios subir y bajarsobre el Hijo del HombreÓ (vs 43-51).

Es la misma figura de G�nesis28. Jes�s interpreta que la escaleraes �l. Todo lo malo del hombre esllevado al cielo para ser tratadopor Dios, y todo lo bueno de Diosbaja por medio de �l a nosotros.Cristo ha unido el cielo y la tierraen su Persona resucitada. ÒAl queno cometi� ning�n pecado, pornosotros Dios lo hizo pecado, paraque en �l nosotros fu�ramoshechos justicia de DiosÓ (2»Corintios 5.21).

El pecado separ� al hombre deDios y Jes�s se encarg� de esepecado cuando muri� en la cruz.Los �ngeles sub�an y bajabanllevando el pecado perdonado alcielo y trayendo la justicia de Diosa la tierra. Ya no hay separaci�nentre Dios y el hombre. ÒYtambi�n a ustedes, que en otrotiempo eran extranjeros yenemigos, tanto en suspensamientos como en susacciones, ahora los ha reconciliadocompletamente en su cuerpof�sico, por medio de la muerte,para present�rselos a s� mismosantos, sin mancha eirreprensiblesÓ (Colosenses 1.21-22).

Cielos abiertosLos cielos se abrieron por su

sacrificio en la cruz. Lo normal enla vida del cristiano es ver a los�ngeles de Dios subiendo ybajando del cielo. No m�s cieloscerrados. En �l se fueron laslimitaciones y las barreras que nosimped�an alcanzar a Dios. EnCristo hemos sido reconciliadoscon Dios a quien ofendimos connuestra desobediencia. En �lfuimos devueltos a la condici�noriginal en la que fuimos creados.En �l se cumple la promesa deDios dada en Deuteronomio 28.12a los que obedecen susmandamientos: ÒEl Se�or te abrir�su tesoro de bondad, que es elcielo, y en su tiempo te enviar� lalluvia a tu tierra, y bendecir� todolo que hagas con tus manos. Har�spr�stamos a muchas naciones,pero t� no pedir�s prestado nadaÓ.

Cielos abiertos significa suÒtesoro de bondadÓ para nosotros.Cosechas abundantes para el quesiembra y bendiciones para el quetrabaja con sus manos para quetenga suficiente para susnecesidades y m�s para dar.

Cielos abiertos significa que enCristo Jes�s la iglesia ser� tomadade la mano por �l para cumplircon su prop�sito en las naciones yno habr� nada que la detenga. �lvestir� a su Iglesia para la batalla,ir� siempre delante de ella, leentregar� Òtesoros escondidosÓ, yle Òdar� a conocer secretosrec�nditosÓ, para que el mundosepa que �l es el Se�or, no s�lo dela Iglesia sino de toda la creaci�n(ver Isa�as 45.1-7).

Cielos abiertos significa tierraabierta tambi�n para recibir todolo que manda el cielo. ÒUstedes,cielos, dejen caer su lluvia; yustedes, nubes, derramen justicia;y t�, tierra, �brete y deja que brote

la salvaci�n junto con la justicia.Yo, el Se�or, soy su creadorÓ(Isa�as 45.8).

Cielos abiertos permiten ver laprotecci�n de Dios sobre sussiervos: ÒEl Se�or abri� los ojos delcriado, y �ste mir� a su alrededory vio que en torno a Eliseo elmonte estaba lleno de gente de acaballo, y de carros de fuegoÓ (2Reyes 6.17).

Cielos abiertos significa queDios cambiar� el hambre porsaciedad y la necesidad porabundancia (ver 2 Reyes 7.1-20).

Cielos abiertos significaderramamiento de grandesbendiciones (ver Malaqu�as 3.1)

Los cielos se abrieron el d�aque Jes�s fue bautizado y elEsp�ritu Santo descendi� sobre �len forma de paloma. Entoncesvino una voz del cielo, que dec�a:ÇT� eres mi Hijo amado, en quienme complazcoÈ (Lucas 3.22).Cuando los cielos se abren, Dioshabla (Juan 12.28).

Los cielos se abrieron el d�a dePentecost�s cuando el Esp�rituSanto vino sobre los 120 queesperaban en Jerusal�n. La Iglesiacomparte la unci�n de Cristo. Elmismo Esp�ritu Santo que estabasobre el Se�or fue derramadosobre la Iglesia, su cuerpo; todaunci�n est� en �l. Debemoscuidarnos de buscar una unci�npersonal aparte de �l; si creerecibirla, no es de Dios. El Esp�rituSanto viene sobre nosotros porquevino sobre �l.

Los cielos se abrieron a Jes�sporque �l complaci� a su Padrecon su perfecta obediencia.Siempre hizo la voluntad de suPadre. Los cielos est�n abiertos anosotros su Iglesia porque �l losabri� con su vida intachable y susacrificio en la cruz.

10

Page 11: Conquista Cristiana - ¡Capacitando Líderes para la Acción! - …conquistacristiana.org/wp-content/uploads/2012/05/rev-8... · éxito no será la congregación, sino el que nos

Los cielos se abrieron a Esteban y �l vio al Hijodel Hombre a la derecha de Dios (Hechos 7.56).

Cielos abiertos significa que tenemos accesodirecto a Dios (Hebreos 10.19-22). Podemosacercarnos para alcanzar misericordia y hallar graciapara cuando necesitemos ayuda (Hebreos 4.16).

Cielos abiertos significa conocimiento de lo queest� por venir (ver Apocalipsis 4.1)

La realidad de la Iglesia son los cielos abiertos

La Iglesia no es un edificio especial para hacercultos. Tampoco es una instituci�n especial. La iglesiaes la uni�n viviente del Cristo resucitado con lossuyos. El vers�culo medular en este tema es Mateo18.20: ÒDonde dos o tres se re�nen en mi nombre, all�estoy yo, en medio de ellosÓ. El contexto se extiendedel vers�culo 15 al 22. Tiene que ver con perdonar alhermano, y el respaldo del cielo para atar y desataren la tierra (vs. 18).

Esta es la realidad, no la figura. No hay limitaci�ncuando estamos reunidos en su nombre. En sunombre los cielos est�n abiertos. En su nombre somossacados de una dimensi�n con todas las limitacioneshumanas a una dimensi�n celestial con el poder deatar y desatar. En su nombre dejamos la dimensi�nde meros mortales y entramos en capacidad de hacercosas prodigiosas. Lo que no podemos hacernaturalmente, el poder del Esp�ritu Santo lo haceporque estamos conectados con el cielo por medio deCristo.

Cuando la Iglesia se re�ne en su nombre, Diossacude todo lo que puede ser sacudido (ver Hebreos12.27-28). El poder de la iglesia est� unido al poderdivino cuando se junta para orar en su nombre.Estamos unidos con el Cristo resucitado declaradocon toda potestad (ver Mateo 28.18).

ÒDe cierto, de cierto les digo: El que cree en m�,har� tambi�n las obras que yo hago; y aun mayoresobras har�, porque yo voy al Padre. Y todo lo quepidan al Padre en mi nombre, lo har�, para que elPadre sea glorificado en el Hijo. Si algo piden en minombre, yo lo har�Ó (Juan 14.12-14).

Cielos abiertos significa acceso a Dios

El pecado separa al pecador de Dios. G�nesis 3.24dice que Dios ÒÉpuso querubines, y una espadaencendida que giraba hacia todos lados, para

resguardar el camino del �rbol de la vidaÓ [emblemade su presencia]. En el Sina�, Dios orden� que elpueblo se mantuviera alejado de �l y s�lo accedi� aque Mois�s subiera hasta su presencia (�xodo 19.20,23). A los israelitas no les era permitido entrar allugar sant�simo en el tabern�culo. S�lo el sumosacerdote pod�a entrar una vez al a�o (�xodo 30.10).De muchas otras maneras Dios hizo patente que elpecado obstru�a todo acceso a �l.

Adem�s, el mismo pecador carece de deseos deacercarse a �l, por el contrario, se va lo m�s lejosposible de su presencia. La culpa del pecado carga suconciencia y lo aparta del Dios santo (ver G�nesiscap�tulo 3). No obstante, el acceso a Dios es posiblehasta para el m�s grande de los pecadores por mediode nuestro mediador, Cristo Jes�s (ver Juan 14.6 yRomanos 5. 1,2). Pero ese acceso no se abreindiscriminadamente. Sin �nimo de ser legalista, hayrequisitos y cumplimientos. No vamos a ahondar eneste tema porque no es el que nos corresponde eneste art�culo. S�lo mencionaremos tres de los m�sesenciales: Primero, nacer de nuevo (Juan 3.3); estonos da el derecho o autorizaci�n de acceso al Padre.Segundo, debemos tener la capacidad moral osantidad para hacerlo (ver Hebreos 12. 14 y Salmo18.26). Tercero, el ejercicio de la fe para buscarlo yagradarlo (ver Hebreos 11.6). Los tres requisitos sonincuestionablemente obra del Esp�ritu Santo.

Ahora que sabemos que hay una escalerapermanente entre el cielo y la tierra, pidamos a Diosque nos ayude a querer acercarnos a �l para serliberados de todas las limitaciones de la carne y vivirvictoriosos como hijos de Dios.

ÒAc�rquense a Dios, y �l se acercar� a ustedes.ÁL�mpiense las manos, pecadores! Y ustedes, lospusil�nimes, Ápurifiquen su coraz�n! ÁLloren,afl�janse, hagan lamentos! ÁConviertan su risa enllanto, y su alegr�a en tristeza! ÁHum�llense ante elSe�or, y �l los exaltar�!Ó (Santiago 4.8-10). ∆

Citas de Reina-Valera Contempor�nea

Hugo M. Zelaya es pastor de la Iglesia de Pacto NuevaEsperanza en San Jos�, Costa Rica. Es el fundador de laFraternidad de Iglesias y Ministerios del Pacto que da coberturaa varias iglesias en Costa Rica. Actualmente reside con suesposa y su hija, en Alajuela, Costa Rica.

11

Page 12: Conquista Cristiana - ¡Capacitando Líderes para la Acción! - …conquistacristiana.org/wp-content/uploads/2012/05/rev-8... · éxito no será la congregación, sino el que nos

12

G e n e r a c i o n e sG e n e r a c i o n e sPor Carlos Zelaya

Page 13: Conquista Cristiana - ¡Capacitando Líderes para la Acción! - …conquistacristiana.org/wp-content/uploads/2012/05/rev-8... · éxito no será la congregación, sino el que nos

LLa Biblia no se lee como un cuento de hadas. Losprotagonistas y los h�roes tienen sus fallas ydebilidades. El �nico perfecto es nuestro Se�or

Jesucristo, quien vino a protagonizar, no s�lo el relatob�blico, sino toda la historia. Pero la cr�nica de lahumanidad en general, y del pueblo de Dios enparticular, est� llena de altibajos. Nos lleva desde elinicio de todas las cosas, cuando el Esp�ritu de Dioshabl� para crear el universo de la nada, hasta laconsumaci�n del tiempo cuando Dios llame a supresencia a los que hemos confesado a su Hijo comonuestro Se�or y Salvador. Lo interesante es que Dioshaya escogido al hombre para revelar, a trav�s de �l,su voluntad activa.

La voluntad de Dios es individual, y es colectiva. Cadapersona tiene un llamado a servir a Dios en algoparticular - un don, ministerio, u operaci�n. Pero esellamado no est� desligado de la voluntad de Dios parasu Iglesia. Mi opini�n es que el que lo hace todo y elque no hace nada en la iglesia son igualmenteculpables de desobediencia (ver 1» Corintios 12).Igualmente, el que cree que no necesita ser parte de laIglesia, tiene una visi�n equivocada del plan de Dios.

A trav�s de la historia Dios ha levantado generacionesque le sirven. Cada una de estas generaciones tiene suspropias caracter�sticas, aunque sean de una mismanaci�n. En una generaci�n, los individuos de unperiodo hist�rico en particular est�n ligados por algoen com�n - ya sea un ancestro, una nacionalidad,caracter�sticas sociales, un evento especial, o unavocaci�n. Y los individuos que las componen nopierden su identidad, aunque compartan esascaracter�sticas en com�n. El t�rmino Çgeneraci�nÈ, enhebreo, connota un ciclo de tiempo, una edad; tambi�nsignifica descendencia o familia.

Dios escogi� a un pueblo para que sirviese de marcode referencia para el resto de la humanidad. La naci�nde Israel, y luego la Iglesia universal, fue la elegidapara ejemplificar el reino de Dios en el mundo. Lavisi�n de la Iglesia es reflejar a Cristo, y nuestramisi�n es ir y hacer disc�pulos para que �stos hagan lomismo. Pero la naci�n elegida se inici� con un pactoespecial entre Dios y un solo hombre.

El pacto que marca la pauta

En G�nesis 17:1-8 se describe el pacto que Dios hacecon su amigo Abraham. El pacto fue renovado conIsaac, Jacob, y las generaciones siguientes, ypermanece hasta el d�a de hoy. El pacto es el

fundamento de la relaci�n de Dios con su pueblo, sinimportar los cambios culturales o filos�ficos que sehayan dado a trav�s del tiempo. Por eso es vital quecada generaci�n tenga claro el car�cter firme ypermanente de este fundamento. Exploremos algunasde las caracter�sticas de este pacto, que nos dan unaclave de lo que Dios quer�a desde un principio:

o Dios le cambia de nombre - cuando entramos en unpacto con Dios, nuestra identidad cambia para reflejarnuestro nuevo prop�sito de vida. En la antig�edad, elnombre de una persona ten�a un significado especial,y Dios le declara a un hombre sin prole que ser�a elpadre de una multitud. Yo creo que Dios tiene unsentido del humor, pero esto no era broma. Laidentidad de Abraham cambi�; pas� de ser un ancianosin prole a ser padre de una naci�n. Lo curioso es queen ese momento s�lo ten�a una promesa que crey� contodo su coraz�n, y un nombre que lo identificabacomo el Òpadre de una multitudÓ. En la eternidad deDios, las cosas declaradas por �l ya son, aunque en eltiempo a�n no lo sean (ver Romanos 4). Entonces,nuestra identidad pasa de ser limitada por el tiempo yel espacio, a ser transformada a su imagen y gloria -una naturaleza eterna. Y junto con una nuevanaturaleza, recibimos un nuevo prop�sito de vida.

o Dios establece su promesa de relaci�n - el pacto esmucho m�s que un contrato (un acuerdo legal entredos partes), es una relaci�n personal e �ntima. Nuestrarelaci�n con Dios no es religiosa. El pacto establecidoentre Dios y su pueblo conlleva ciertos requisitos yunos beneficios muy buenos. Pero muchos seequivocan al pensar que el simple cumplimiento de lasformas externas es suficiente para relacionarnos conDios. Jes�s dijo que en el juicio final habr�a aquellosque, habiendo hecho muchas cosas buenas en elnombre de Dios, reclamar�an sus derechos yrecompensas eternas; pero los rechazar�a porqueser�an desconocidos para �l (ver Mateo 7:21-23).Abraham no era un desconocido, y nosotros tampocolo somos. Cuando dijo que ser�a su Dios y el de sudescendencia, hablaba de una conexi�n tal que cuandose ve�a a uno, se ve�a al otro. Cuando la gente ve�a aAbraham, sab�a que representaba a Dios. ÀA qui�n venlas personas en nosotros cuando nos miran?

o Dios da su promesa de bendici�n - el llamado deDios para servirle viene con algunas recompensas(claro est� que la iniciativa es de Dios, no nuestra; ycuando lo hacemos con ambiciones deshonestas,acarreamos sobre nosotros maldici�n en vez de

13

Page 14: Conquista Cristiana - ¡Capacitando Líderes para la Acción! - …conquistacristiana.org/wp-content/uploads/2012/05/rev-8... · éxito no será la congregación, sino el que nos

bendici�n). Cuando Dios llama,tambi�n equipa; nos da lo quenecesitamos para hacer lo quefuimos llamados a hacer. Si nofuera as�, lo har�amos en nuestrapropia fuerza, y estar�amosdestinados a fracasar. Est� claroque la bendici�n que recibimos nopermanece en nuestra bolsa, sinoque se usa para sembrar y bendecira otros. Dios le dijo a Abraham enG�nesis 12:2-3: ÒÉy ser�n benditasen ti todas las familias de la tierraÓ.Esa es la misi�n de todas lasgeneraciones. La gran comisi�n(Mateo 28:18-20) es precisamenteun llamado a bendecir.

o Dios requiere obediencia - Òandadelante de m� y s� perfectoÓ es unaexigencia muy rigurosa para unhombre. Pero Dios es claro, no hayambivalencias ni sorpresas. En losanuncios comerciales ponen enletras grandes y coloridas todos losÒbeneficiosÓ y las ÒconvenienciasÓdel producto; pero ponen en letradiminuta, casi ilegible, loslimitantes, los requisitos y lascondiciones que deben cumplirse.Dios no es as�; lo que espera denosotros es obediencia a su palabracon coraz�n puro y manos limpias(ver Salmo 24:3-6). A veces lasiglesias Òvenden barataÓ lasalvaci�n de Dios, prometiendo lasventajas que Dios ofrece; peroesconden el requisito de la muertedel yo y el de cumplir susmandamientos, ambos necesariospara alcanzar la plenitud de lo queDios nos ha llamado a ser y a hacer.El resultado es que levantamos unageneraci�n que no conoce a Dios.

o Dios promete una heredad - ladescendencia de Abraham notendr�a que andar errante parasiempre; Dios prepar� una tierra enla que hallar�an su favorabundante, y que los distinguir�a

como su pueblo escogido. Dios selo mostr� y prometi� a Abraham, yluego se lo llev� a otra parte. Mediomilenio m�s tarde, el pueblo hizosu entrada triunfal al lugar exactoque Dios hab�a designado. No erasecreto que Cana�n ser�a su lugarde destino; las generacionesanteriores lo hab�an sabido desdeque Abraham se lo dijo a su hijo,este al suyo, y as� sucesivamente.En Cristo tambi�n tenemos unaheredad, un lugar de bendici�n quenos pertenece a nosotros y anuestros hijos. Es de vitalimportancia que sepamos cu�l esesa heredad, y transmitirla a lageneraci�n que se levanta,advirti�ndoles que, de no cuidarla,la perder�n (igual que el pueblo deIsrael, por su desobediencia). Doyinfinitas gracias a Dios por habercrecido en un hogar cristiano, en elque mis padres me ense�aron consus palabras y su ejemplo losprincipios del reino de Dios, y quesoy heredero de las promesas queel Se�or ofrece a sus hijos. Meesfuerzo de todo coraz�n por hacerlo mismo con mis hijos. ÁOjal� esofuera lo normal dentro de la Iglesiadel Se�or!

o Dios dio una se�al - paraAbraham la se�al del pacto fue lacircuncisi�n, la mutilaci�nvoluntaria de la parte m�s �ntima,que marcaba al hombre comopertenencia de Dios. Igualmente, laaplicaci�n espiritual de esteprototipo es la muerte de Cristo enla cruz, la que aceptamos por fecomo sacrificio sustitutivo pornuestros pecados (ver Romanos 2, 3y 4). La fe nos justifica, pero lasobras son la evidencia de ella. Enotras palabras, podemos estudiar laBiblia, meditar sobre su verdad, ytener claros los principios del reinode Dios; pero si no ponemos por

obra lo que dice, negamos lalegitimidad de nuestra fe (verSantiago 2:14-26). La fe en Jes�s nostransforma en lo m�s profundo e�ntimo de nuestra vida, y nosconstri�e a Òir y hacer disc�pulosÓ -a poner por obra el amor de Dios.En �ltima instancia, la se�al debeapuntar hacia Dios. Si nuestra vidaes luz y sal, debe dar testimonio dela gracia y la bondad de Dios parala humanidad por medio de la obravicaria de Cristo.

Una triste realidad

Dios cumpli� su promesa aAbraham e hizo de �l una grannaci�n - no solo en n�mero, sino enprop�sito. G�nesis nos relata que elpacto personal fue extendido aIsaac y a Jacob, y que lasgeneraciones siguientes selevantaron sabiendo que hab�ansido escogidos por Dios como supueblo especial.

Pero su convicci�n se fuediluyendo hasta que olvidaron suidentidad en Dios, y aceptaron sucondici�n de esclavos en una tierraque no formaba parte de suheredad prometida. Dios redimi� lasituaci�n, como muchas veces lohace, y la volvi� en una grandemostraci�n de su gloria, librandoa su pueblo.

Despu�s de las grandes maravillasque hizo Dios para sacar a supueblo de la esclavitud, y llevarlosa una tierra de promesa,encontramos una declaraci�nverdaderamente triste: ÒY selevant� despu�s de ellos otrageneraci�n que no conoc�a aJehov�, ni la obra que �l hab�ahecho por IsraelÓ (Jueces 2:10).ÀC�mo puede ser que dentro delpueblo escogido de Dios se levantetoda una generaci�n que no leconozca? ÀQu� clase de

14

Page 15: Conquista Cristiana - ¡Capacitando Líderes para la Acción! - …conquistacristiana.org/wp-content/uploads/2012/05/rev-8... · éxito no será la congregación, sino el que nos

15

desmoronamiento espiritual existi�para que eso sucediera? ÀSer�posible que vuelva a suceder algoas� en la Iglesia?

El consejo de David

David, uno de los h�roes de laBiblia, al final de su vida, daalgunas indicaciones al pueblo deIsrael y a su hijo, Salom�n, quienser�a su sucesor al trono.Personalmente, me parecen muyinteresantes las declaraciones de losque ven pr�xima su propia muerte.Tal es el caso de Pablo cuando leescribe a Timoteo (2» Timoteo) y dePedro (1» y 2» Pedro). EstasÒdeclaraciones de muerteÓ depersonas que han tenido una granjornada con Dios a trav�s de susvidas, est�n llenas de gemas paraaquellos que no son demasiadoorgullosos para recibirlas.

I Cr�nicas 28:8, dice as�:

ÒAhora, pues, ante los ojos de todoIsrael, congregaci�n de Jehov�, y eno�dos de nuestro Dios, guardad einquirid todos los preceptos deJehov� vuestro Dios, para quepose�is la buena tierra, y la dej�isen herencia a vuestros hijosdespu�s de vosotrosperpetuamenteÓ (�nfasis agregadopor el autor).

Cuando David se dirige al pueblo,les dice tres cosas: Primero, debenguardar e inquirir losmandamientos de Dios. Unageneraci�n que conoce a Dios buscay obedece su palabra. Estaspalabras se escribieron en tiemposcuando no hab�a una copia de laBiblia para cada persona. Hoy end�a, tenemos acceso a toda clase deinformaci�n (incluyendo el textob�blico) en forma personal einstant�nea. Debemos estarplantados en la palabra de Dios yconocer a Dios a trav�s de supalabra. La certeza de nuestras

acciones depende de ello.

Segundo, deben poseer la buenatierra. Esto habla de la misi�n de lanaci�n. David entend�a, porexperiencia propia, que losenemigos de Israel asechabanconstantemente para privarlos delo que Dios hab�a separado paraellos. La Iglesia debe tomarposesi�n de las promesas de Dios.No siempre vienen en bandeja deplata. Jueces 3:1-2 nos da unaperspectiva del pensamiento deDios:

ÒEstas, pues, son las naciones quedej� Jehov� para probar con ellas aIsrael, a todos aquellos que nohab�an conocido todas las guerrasde Cana�n; solamente para que ellinaje [misma palabra que en otraspartes se traduce generaciones] delos hijos de Israel conociese laguerra, para que la ense�asen a losque antes no la hab�an conocidoÓ.

Poseer las promesas de Dios aveces significa que tenemos queluchar por ellas. La victoria deDios se revela en la guerra. Sinlucha no hay victoria.

Tercero, la palabra y las promesasde Dios son para nosotros y paranuestros hijos. La heredad quevayamos a dejar a la generaci�nque sigue depende mucho denosotros. Si somos fieles parainquirir y obedecer, y para poseer,tendremos algo hermoso queheredar a nuestros hijos. As� lo hizoDavid. Lo interesante es que laherencia era para toda la naci�n, nos�lo para algunos individuosprivilegiados. Una generaci�npodr� tener algunas caracter�sticaspropias, pero su misi�n es la mismaque la de la naci�n entera.

En el vers�culo 9, y los siguientes,David le habla directamente aSalom�n:

ÒY t�, Salom�n, hijo m�o, reconoce

al Dios de tu padre, y s�rvele concoraz�n perfecto y con �nimovoluntario; porque Jehov�escudri�a los corazones de todos, yentiende todo intento de lospensamientos. Si t� le buscares, lohallar�s; mas si lo dejares, �l tedesechar� para siempreÓ (�nfasisagregado por el autor).

Las claves del �xito de Salom�neran tres: Primero, reconocer a Dios- al Dios de su padre. La palabrareconocer significa Òconocer al verÓ- es decir, saber a qui�n est�viendo. Adem�s, la revelaci�n deDios no era diferente paraSalom�n, era la misma que paraDavid. La generaci�n que creetener una Ònueva revelaci�nÓ esuna que peligra en su relaci�n conDios. La misi�n es la misma,aunque los m�todos cambien degeneraci�n a generaci�n. Por esolas generaciones ÒviejaÓ y ÒnuevaÓno se comprenden. La ÒviejaÓquiere seguir haciendo las mismascosas que antes, y la ÒnuevaÓ creetener una mejor visi�n. Losresultados son que la iglesia sevuelve irrelevante, o pierde surumbo y se deja influenciar porcorrientes da�inas. Es esencialmantener los ojos en Jes�s paramantener nuestro enfoque. Ypermanecer atentos a la voz delEsp�ritu Santo para ser guiados entoda circunstancia.

Segundo, Salom�n deb�a servir aDios. El pastorado es servir. Esm�s, la palabra ministro se traduceliteralmente como ÒsiervoÓ. Este esun tema que la iglesia debe retomar- no s�lo para el pastor, sino paratodo el pueblo de Dios. Un amigodec�a recientemente: ÒEl que nosirve, no sirve.Ó El que no sacrificasu tiempo, esfuerzo y recursos parael llamado supremo, no alcanzar�lo que Dios tiene para �l. Es elejemplo que recibimos del se�or

Page 16: Conquista Cristiana - ¡Capacitando Líderes para la Acción! - …conquistacristiana.org/wp-content/uploads/2012/05/rev-8... · éxito no será la congregación, sino el que nos

Jes�s.

ÒMas entre vosotros no ser� as�,sino que el que quiera hacersegrande entre vosotros ser� vuestroservidor, y el que quiera ser elprimero entre vosotros ser� vuestrosiervo; como el Hijo del Hombre novino para ser servido, sino paraservir, y para dar su vida en rescatepor muchosÓ (Mateo 20:26-28).

Tercero, David le recomienda a suhijo que busque a Dios. La Biblianos dice que Salom�n oy� elconsejo de su padre y clam� a Diospor sabidur�a, ÒÉy agrad� delantedel Se�or que Salom�n pidieseestoÓ (ver I Reyes 3:3-15). Lapromesa es que si lo buscamos, nos�lo lo hallaremos, sino que nosbendecir� m�s all� de lo quepodamos pensar o pedir (Efesios3:20). Aunque la bendici�n no seala meta final, es importanterecibirla para poder darla. As� loexpresaron Juan y Pedro alparal�tico en la puerta del templo,cuando dijeron: ÒNo tengo plata nioro, pero lo que tengo te doy; en elnombre de Jesucristo de Nazaret,lev�ntate y andaÓ (Hechos 3:6). Lamisi�n no ha cambiado desdeAbraham - es bendecir a todas lasfamilias de la tierra.

La tarea de la ÒviejaÓ generaci�n

Consideremos los vers�culos quesiguen, I Cr�nicas 28:10-21; Davidsigue hablando con Salom�n.

ÒMira, pues, ahora, que Jehov� teha elegido para que edifiques casapara el santuario; esfu�rzate, yhazlaÓ.

El prop�sito de Salom�n eraedificar la casa de Dios. La Iglesiaedifica el reino de Dios. Losrequisitos son el esfuerzo y laacci�n. Una generaci�n que notiene claro su prop�sito no logra suobjetivo, y se esfuerza por algo que

no da fruto; y una iglesia pasiva nocumple su prop�sito.

En los vers�culos del 11 al 13, Davidle muestra los planos del templo; esdecir, transmite a su hijo la visi�nque Dios le dio. No es suficientecumplir con los protocolos delculto. Jes�s llam� a los que as�hac�an Ògeneraci�n de v�boras,mala, ad�ltera, incr�dula, perversa,pecadora, serpientes, y sepulcrosblanqueadosÓ. ÁAs� se refer�a a losl�deres religiosos de sus d�as! Qu�f�cil se nos hace apuntar el dedoacusador a los que no reconocieronal Cristo que esperaban por cientosde a�os. Pero, igual que David aSalom�n en el vers�culo 9, debemosense�ar a nuestros hijos a reconoceral Se�or y la visi�n que hemosrecibido de �l.

De los vers�culos del 14 al 18,David le entreg� a Salom�n el oroque hab�a recogido a trav�s de losa�os. Los recursos necesariosvienen de Dios, y �l los suple enabundancia para que se cumpla laobra. Las generaciones esforzadasrecogen recursos y los ponen atrabajar para el reino de Dios. Lasgeneraciones venideras no debenempezar de cero, deben heredar lasriquezas que hemos captado. Eltesoro del reino es abundante yeterno, y nos mantiene firmes ennuestro llamado (ver Mateo 6:19-21). Es de vital importancia quenuestros hijos tengan acceso a esetesoro.

David conoc�a bien lo inextricableque era reinar; los Salmos est�nllenos de momentos de des�nimoque se resuelven en la presencia deDios. As� David alienta a Salom�n,dici�ndole:

ÒAn�mate y esfu�rzate, y manos ala obra; no temas, ni desmayes,porque Jehov� Dios, mi Dios, estar�

contigo; �l no te dejar� ni tedesamparar�, hasta que acabestoda la obra para el servicio de lacasa de Jehov�Ó (vers�culo 20).

Anime a los j�venes, y demuestresu confianza en la fidelidad de Diosen todo momento. Deposite sobreellos, poco a poco, los rigores delservicio a Dios, caminando junto aellos y siendo un mentor y una vozde sabidur�a y �nimo.

Finalmente, en el vers�culo 21,David le regala una joya desabidur�a a Salom�n - rod�ate depersonas que comparten la visi�n yla misi�n de la iglesia. No es obrade una sola persona; todos tienensu funci�n, todos tienen sullamado, todos tienen su unci�n.As� es la generaci�n que Dioslevanta para edificar su reino en latierra. David lo resume de estamanera en el Salmo 24:3-6:

ÒÀQui�n subir� al monte de Jehov�?

ÀY qui�n estar� en su lugar santo?

El limpio de manos y puro decoraz�n;

El que no ha elevado su alma acosas vanas,

Ni jurado con enga�o.

�l recibir� bendici�n de Jehov�,

Y justicia del Dios de salvaci�n.

Tal es la generaci�n de los que lebuscan,

De los que buscan tu rostro, ohDios de JacobÓ.Æ

Carlos Zelaya ha servido en elministerio por m�s de 15 a�os. Residecon su esposa e hijos en San Jose, CostaRica.

16

Page 17: Conquista Cristiana - ¡Capacitando Líderes para la Acción! - …conquistacristiana.org/wp-content/uploads/2012/05/rev-8... · éxito no será la congregación, sino el que nos

CONQUISTACONQUISTA¨̈

CRISTIANACRISTIANA

Exc lu s i vamen t e e n la WebExc lu s i vamen t e e n la Web

¥ Vea la revista a todo color¥ Revise n�meros anteriores de

Conquista Cristiana¥ Accese las ediciones de Vino Nuevo¥ Deje un comentario¥ Actualice su suscripci�n¥ Haga una donaci�n

Queremos saber de usted. Comun�quese pormedio de nuestra direcci�n electr�nica:[email protected]

Por correo tradicional al: Apartado Postal 618-2200, Coronado, Costa RicaTel�fono: (506) 22947324 Fax; (506) 22922951

LLaa rreevviissttaa ppaarraa llííddeerreess qquuee ssee pprreeppaarraann ppaarraa llaa aacccciióónn..

www.conquistac

ristiana.org