“TE ODIERO”

Érase una vez en un país muy muy cercano un inmundo salvaje y una dulza princesa. Se vieron se conocieron se enamoraron, todo era idílico en el país de los encantos. Ella lo amaba a el y el la amaba a ella. El mundo era azul y la vida feliz entre sus dedos, entre sus brazos, entre sus besos. Se querían tanto y tantísimo que nada les podía separar, pero, tanto ella como él poseían tristes defectos… Y llego el día, soleado y tenebroso, el aire estaba cargado de divorcio. Ese día era uno mas, como todos los demás, y de hecho ocurrió lo que ocurría en los demás: la idílica armonía, que unía sus cuerpos, placida y machacada desde el alba de los tiempos, por un rayo de ira lanzado de la mano de dios derrumbó su concordia para hacerla pedazos. Por un instante el caos resonó por la tierra, en un interminable abrazo, ambos dos atraparon la cotidianidad. Amenazados por si mismos, repetidamente inéditos y similares, la torpe confrontación de sus cuerpos intentarían resolver. ¿Que aspecto tienen las fantasías cuando nos embarcamos en ellas? Un poco cuentos y un poco realidad, intentamos reinventar el mundo y reinventarnos a través de la confrontación escénica. Cuentos de nosotros, de cuerpos que cuestionan sus límites, movimientos que comparten sus deseos, formas que confunden sus sentimientos.

CANDELARIA ANTELO Nace en Buenos Aires, Argentina, ciudad en la que

empieza sus estudios en danza contemporánea, en la

escuela Arte XXI de Oscar Araiz. En 2004 viaja a

Inglaterra donde obtiene el grado superior de danza

contemporánea en la escuela The Northern School of

Contemporary Dance en Leeds. Tiempo después se

traslada a España donde trabaja profesionalmente en la

ciudad de Cádiz con el coreógrafo Jivsko Jeliazkov en

la compañía Derida Dance. En Madrid colabora con

directores como Miguel Angel Alvarez, Sebnem Yuksem

y Lucyanna Pettengyl. En 2008 empieza a trabajar con

la compañía Dani Pannullo Dance Theatre y realiza una

continua colaboración con la Cia. Laboratorio C dirigida

por Francisco Leiva. En 2009 integra la línea

coreográfica del conservatorio superior María de Ávila

donde conoce a Arthur Bernard Bazin junto a quien crea

la pieza “Discordio” ganadora del primer certamen

coreográfico de Vallecas.

ARTHUR BERNARD BAZIN Iniciado al arte dramático en las afueras de París, sigue

formándose en la capital francesa compaginando el

teatro con los estudios plásticos y obtiene un Diploma

Universitario General en Artes Plásticas (DUG). En el

año 2007 llega a Madrid donde profundiza y amplía su

formación teatral y corporal a través de la escuela LA

USINA y de la enseñanza de Camille C. Hanson. Ese

mismo año empieza su colaboración con la compañía

LADINAMO DANZA y al año siguiente con la compañía

LA PHARMACO. En el otoño del 2009 forma parte del

Conservatorio Superior María de Ávila en Madrid y en

2011 participa con Sharon Fridman, director artístico de

PROJECT IN MOVEMENT en la creación de la obra “Al

menos dos caras”. A lo largo del año 2010 empieza a

investigar con Candelaria Antelo y en Junio 2011 están

invitados por el Centro Coreográfico de La Gomera.

“Artistas Residentes” del Departamento Coreográfico del Centro Coreográfico de

La Gomera

“TE ODIERO”

Creación e Interpretación: Arthur Bernard & Candelaria Antelo

Viernes 8 de julio 2011 a las 21:00h en la sede del Centro Coreográfico de La Gomera.

En colaboración con:

El Centro Coreográfico de La Gomera se ramifica en varios Departamentos para poder cumplir en diferentes contextos socio-culturales y educativos con su misión de sensibilización a la Danza, al cuerpo. En concreto el Departamento Coreográfico se divide a su vez en tres módulos: Compañía Residente: La Compañía Residente del Centro Coreográfico de La Gomera es un lugar de experimentación creativa, un laboratorio de ideas, un lugar en el que se cuestionan y replantean constantemente los factores que giran en torno a la presencia escénica contemporánea. Su objetivo es el de sensibilizar al publico a nuevos lenguajes corporales llevando la compañía hasta las poblaciones mas pequeñas de la comunidad así como a espacios y festivales nacionales e internacionales. La figura, la labor y la razón de ser del intérprete bailarín se cuestionan y se replantean también constantemente. Los bailarines de la compañía residente necesitan una formación sólida y coherente, experiencia profesional y una gran comprensión del cuerpo humano, susceptible de ser utilizada en múltiples acciones con diferentes colectivos del

municipio, donde los objetivos giran en torno a la transmisión de conocimientos hacia la conciencia corporal. Los bailarines de la compañía residente tienen un contrato laboral anual. La singularidad de las obligaciones de este contrato es que el bailarín no solo trabaje la creación coreográfica sino que participe, de diferentes formas, al funcionamiento general del Centro Coreográfico de la Gomera. Esto hace posible llevar a cabo la campaña de sensibilización a la Danza y al Cuerpo que tiene como objetivo el CCG.

Residencias Artísticas: Nuestras Residencias Artísticas nacen con el objetivo de acoger a creadores durante cortos periodos de forma que podamos colaborar al desarrollo de sus creaciones en nuestras instalaciones. Ofrecemos nuestra sede, estancia y dietas. A cambio sólo pedimos una muestra pública del trabajo en el momento del proceso en que se encuentre. De esta forma los habitantes de nuestro municipio pueden disfrutar del variado panorama regional, nacional e internacional de danza y artes del movimiento. Estamos abiertos a recibir toda propuesta relacionada con las artes del movimiento.

Nuestro criterio de selección actúa con relación a la argumentación y razones que fundamentan todo proyecto presentado.

Residencias Pedagógicas:

El Centro Coreográfico de la Gomera insiste en el valor y la importancia de la pedagogía en la danza. La importancia de crear espacios de pensamientos sobre el fenómeno de la danza. Nuestras Residencias Pedagógicas quieren fomentar en nuestros Residentes la necesidad de profundizar en los contenidos actitudinales, en el saber ser. La pedagogía de la danza y las artes del movimiento del presente necesitan un replanteamiento que vaya al encuentro de nuevas necesidades y preocupaciones. Nuestros futuros creadores dependen de nuestros futuros pedagogos. Es importante darles la oportunidad de pensar, darles tiempo de cuestionarse sin trabas, sin prisas, sin presión.