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  • Adrede EditoraSeminario #295, Providencia

    Santiago de Chile

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    adrededitora.cl

    ISSN: 0719-3270Santiago de Chile

    Asesora digital:A Pie

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    Santiago de Chile

    Imagen portada:Cortesa de Javier Rodrguez

    Licencia:Algunos derechos reservados.

    Revista Arte y Crtica se encuentra bajo una Licencia Creative Commons:

    Atribucin / No Comercial / Sin derivadas / 3.0 / Internacional.

  • La crtica picaresca en un mundo post-apocalptico o lo mejor y lo peor del 2012 ..... 4

    El espacio y el cuerpo de la tortura: algunos casos de su representacin artstica en

    Latinoamrica (Primera parte) .......................................... 6

    Trabajo en equipo. Sobre las muestras colectivas del ao 2012 .................. 8

    Amores y desamores de la crtica: la produccin pictrica del 2012 en la escena local

    ................................................................ 10

    Lo Innombrable: Las mejores y peores exposiciones individuales ................ 13

    2012: Fuera de tiempo / Fuera de espacio. Arte, pblico e intervenciones urbanas ... 17

    Importados 2012. Cinco observaciones a los querellantes de Peggy Guggenheim en

    Chile ............................................................ 20

    Vicios y Triunfos, lo mejor y lo peor de los premios y concursos ................. 23

    Compensaciones museales. Sobre las retrospectivas de Nicanor Plaza y Dinora

    Doudtchitzky ...................................................... 25

  • LA CRTICA PICARESCA EN UN MUNDOPOST-APOCALPTICO O LO MEJOR Y LOPEOR DEL 2012Comenzamos un nuevo ao en un mundo post-apocalptico, post-humano, post-histrico y, dado nuestra competencia, post-curatorial. La efervescencia yexplosin cualitativa del arte chileno de los ltimos aos se condice con unmundo abducido por una fiebre por cantar hasta que la noche se acabe.

    por Ignacio Szmulewicz

    enero 2013

    I

    El 2012 fue un ao marcado por el vrtigode un inminente final. El sino trgico dealgunos fue contrapesado por la comediade quienes dudan de todo. Unos vieron elmundo como un terreno pantanoso, adportas de caerse o bien acabar; otrossintieron que el cierre del teln ms valarecibirlo con humor e irona.

    Comenzamos un nuevo ao en un mundopost-apocalptico, post-humano, post-histrico y, dado nuestra competencia, post-curatorial. La efervescencia y explosincualitativa del arte chileno de los ltimosaos se condice con un mundo abducidopor una fiebre, por cantar hasta que lanoche se acabe. Es momento de calmar lasaguas y saber que ninguna fecha quevaticine el cataclismo universal puedeperturbar esa altanera y realista manera devivir que caracteriza al gnero humano.

    Frente a esta idea, Patricio Fernndezdescribe el ambiente post-terremoto en lazona central del pas: lo curioso, sinembargo, era que ah la vida continuaba.Sus moradores deambulaban por las callescon esa calma propia de las zonas rurales,donde al parecer la gente sabe rendirseante lo irremediable sin mayoresaspavientos. En el que fuera un excelentediario de vida literario, La calle me distrajo,el director del semanario The Clinic supocaptar esas personalidades que removancon palas los escombros como si barrieranhojas de patio.

    II

    As, el mundo contina y con la enrgica vozde Freddy Mercury decimos The Show mustgo on. En este punto entra en escenaarteycritica.org y su propuesta de unamirada post-curatorial. Dependiente de ese

    fervor meterico que pareci envolver almundo del arte por el ao 2012, sinembargo, suficientemente distante comopara captar el entramado tras losaspavientos de las muchedumbres quevisitan exposiciones, inauguraciones,lanzamientos o ccteles.

    El nmero que lanzamos ahora es parte deuna intencin de la revista por remover lasaguas, levantar el lodo estancado bajo el ro,resarcir el silencio que por tanto tiempo haguardado la escena artstica.Acostumbrados al cuchicheo local, lacomidilla de los comentarios de pasillo,hemos propuesto un nmero dedicado aobservar atentamente el ao 2012 sintemor a lanzar dardos hacia aquellasmanifestaciones artsticas que han pasadoimpunes, u otras que sin pena ni gloriallegaron a la orilla contraria del caudal y alas que desde una potencia silenciosa seinscribieron en la retina del ojo atento quegoza del arte.

  • Post Curatoriales

    Encontr recientemente en un artculo deKiko Amat en el suplemento Cultura/s de LaVanguardia un impulso destacable en elpremio creado el pasado ao por la crticaliteraria inglesa como Hatchet Job of theYear (Hachazo del ao). Descrito comouna cruzada contra el aburrimiento, ladeferencia excesiva y la vagancia intelectual.Se premia a los crticos que tienensuficiente coraje para contradecir el aplausogeneral, y que adems lo hacen con estilo,el premio se otorg a las plumas msdesplumadas de la crtica literaria que, sintemor alguno, se hubiese lanzado hacia untexto del ao.

    III

    Los artculos que se renen en estenmero, titulado Casi famosos: lo mejor ylo peor, pueden ser ledo bajo eseparticular espritu tan arraigado en elhumor ingls. Se arrojan con fervor, furia yfuror hacia el terreno de las artes visualeslocales. Con la mayor de las picardas ypicarescas los textos que se despliegan acontinuacin son parte de un impulso dadopor la revista a que los acontecimientos delpasado ao, en trminos artsticos, nopasaran impunemente sin la mirada dedistintos interlocutores atentos y deseososde transcribir sus opiniones, juicios ysalvedades sobre lo percibido.

    Los artculos que dan cuerpo a estenmero se inmiscuyen con las diferentesmanifestaciones artsticas que poblaron elterruo local durante el ao expositivo del2012 (desde marzo a enero del aosiguiente). Sin temor a polemizar, CarolIllanes revisa y analiza la categora deimportados centrndose en la presenciaabrumadora y problemtica de la coleccinde Peggy Guggenheim en el Centro CulturalPalacio La Moneda bajo el ttulo deGrandes Modernos. Y esa escritura sinpelos en la lengua puede ser ejemplificadade la siguiente manera: En cierto sentidoGrandes Modernos es tambin una oda almecenazgo, en los tiempos en quecualquier tipo de mecenazgo esabiertamente rechazado.

    Con un poco ms de picaresca que depicarda, Juan Jos Santos da cuenta de unaasertiva lista de los top five, hacindose ecode la clsica pelcula High Fidelityprotagonizada por John Cusack y uninolvidable Jack Black. La pluma de Juan JosSantos logra reunir los comentarios geeks ysnobs del tro de la tienda ChampionshipVinyl con las maliciosas enseanzas deLarry David en Whatever Works.

    La crtica de Lucy Quezada se centra en lasparadojas de las intervenciones urbanas

    que, usualmente, pasan desapercibidas deun juicio crtico an cuando propongan unimpacto pblico mayor. En este sentido, eltexto de Lucy Quezada propone analizar lossignos y operaciones de dichasintervenciones (el Festival Hecho en casa ylas flores de Casasempere tituladas Out ofSync). Destaca, como en el caso de Illanes ySantos, la aguda escritura que rene unafuerza sonora y una potenciaconfrontacional. Un botn de muestra enrelacin al decorado de Casasempere:Cndidas e inocentes, ingenuas ydesmemoriadas. As son estas esculturalesflores residuales, totalmente fuera deltiempo y del espacio.

    Andrea Lathrop y Matas Allende compartenuna cierta mirada hacia la curatora, con unalto grado de anlisis y comprensin hacialo que significa el ejercicio curatorial. Desdedos veredas cercanas, las muestrascolectivas en Lathrop y las retrospectivas enAllende, los textos dialogan generando uninteresante cruce conceptual. A su vez, losdos textos otorgan un lugar especial allugar del espectador, sus expectivas, deseosy necesidades al momento de enfrentarseal fenmeno del arte.

    Finalmente, Daniel Reyes Len se aventuraen el terreno ms peligroso y, en esto, sesuma a la larga tradicin de crticaconfrontacional en la esfera pblica comofuera desarrollada en el siglo XVIII porAddison o en el siglo XIX por Baudelaire. Eneste, se oye el eco de las diatribas de JustoPastor Mellado y su famoso campo debatalla. Reyes Len entrega sus msafiladas palabras sin temor a la acidez delos ctricos (como lo ilustra la imagen que dasentido a este nmero): las obrascomenzaron a tener cola de cerdo y, comoen toda endogamia familiar, se acercaron alretardo mental que caracteriz a lasmonarquas europeas del medioevo.

    IV

    arteycrtica.org ha buscado estar en unlugar intermedio entre los medios dedifusin masiva y el mundo acadmico,cada uno marcado por intereses y cdigosdistintos. El desafo de nuestra revista haconsistido siempre en colocarcuidadosamente los cimientos de unpuente que permita ser transitado por elpblico general y por la opininespecializada, las voces autorizadas y lapercepcin ampliada. En este sentido,aboga y habla tanto por las mayorassilenciosas como por los habitantes delOlimpo.

    Por ende, el nmero se apronta a formaruna prctica de la recepcin, una

    interlocucin que demuestra la necesidadde un otro situado en un lugar cercanotanto para los gritos como para lossusurros. Como fue enunciado con ironahace un tiempo por la escritoranorteamericana Nicole Krauss: porque siescribes y no mucha gente te lee, quizdeberas hacer otra cosa que fuese ms tilpara el mundo.

    V

    A diferencia de lo que unos puedan creer yesperar, la tinta no se malgasta en eldesprecio, la ira o la rabia an cuando aveces surgen de ello los mejoresresultados sino que esos ros de tinta sonparte del deseo de algo ms, un campoms nutrido, de mayor calidad en todos losaspectos, en todos lo matices y en todas laspropuestas. Desde aquel que provee losmateriales, pasando por el que prepara unasala o bien el que disea un catlogo, todoslos que forman parte de la cadenaproductiva del arte han de colocar en lavara ms alta la pulsin por la calidad.

    As, la crtica de arte no implica slo lacostumbre de la escritura de un malestarcon ciertos aspectos del arte o la visualidad,sino que se piensa esperanzadora dehabitar en el exttico mundo del goce y elplacer, promete el encuentro con unaexperiencia artstica dionisiaca.

    Arte y Crtica | 5

  • Post Curatoriales

    Signometraje: Tentativa Artaud, 1974, cortesa Ronald Kay.

    EL ESPACIO Y EL CUERPO DE LA TORTURA:ALGUNOS CASOS DE SU REPRESENTACINARTSTICA EN LATINOAMRICA (PRIMERAPARTE) En el contexto de las dictaduras latinoamericanas, el compromiso por generarconciencia sobre los atropellos a los derechos humanos adquiri diversas formas.En esta columna ejemplificar con los casos de la artista argentina GracielaCarnevale, la experiencia performtica chilena "Signometraje: Tentativa Artaud" yla obra del grupo mexicano Proceso Pentgono.

    por Sebastin Vidal Valenzuela

    enero 2013

    Arte y Crtica | 6

  • Columnistas

    El lugar de la tortura

    Dentro de las representaciones de loslugares de la tortura en las dictaduraslatinoamericanas, una de las propuestasvisuales ms interesantes se desarroll enla ciudad de Rosario en el ao 1968. En eseao, el Grupo de Arte de Vanguardia deRosario desarroll diversas accionesmancomunadas para denunciar larepresin que viva el pas. Por aquellosaos, la dictadura del general golpistaCarlos Ongana pretendi alejar el fantasmadel peronismo a travs de una serie demedidas que apuntaron a debilitar el poderde sindicatos, congelar los sueldos, reprimira los estudiantes y censurar espaciosculturales. Al ver el estrangulamiento social,los artistas del Grupo de Artistas deVanguardia, con financiamiento del InstitutoDi Tella, propusieron un Ciclo de arteexperimental que ofreci algunas de lasobras ms radicales del arte argentino enlos aos 60.

    Como ejemplo de lo anterior y en el marcode dicho evento, la artista GracielaCarnevale present una controversialaccin conocida como Encierro y escape. Laobra en un inicio consisti en invitar atravs de anuncios en prensa escrita a lainauguracin, lugar donde Carnevaleliteralmente encerr a los asistentes. Conuna temeraria accin Carnevale le pusocandado a la mampara del local y en virtudde que nadie acuda a abrirlo, losespectadores ahora prisioneroscomenzaron a desesperarse, generndoseuna tensin con quienes los observabandesde afuera. Segn cuentan Ana Longoni yMariano Mestman en su libro Del Di Tella aTucumn Arde: Vanguardia artstica ypoltica en el 68 argentino, una sbitapatada desde el exterior quebr lamampara permitiendo la fuga.

    Ahora bien, consignemos que la obra nopretenda en ningn caso un riesgo para losasistentes, ms bien su trasfondo apel agenerar una experiencia de prisin fuera dela prisin. Los sujetos eran observadosdesde afuera como un experimento dearte. El filsofo Michel Foucault seala, enVigilar y Castigar, que la prisin contieneuna doble condicin de adentro y afuera,siendo el lugar donde los individuoscastigados siempre son observados. Laobra tambin motiv la reaccin de escapetambin desde afuera consumando de estaforma la pieza de Carnevale.

    Algunos aos despus del 68 argentino,Chile experiment uno de los momentosms oscuros de su historia reciente. Milesde chilenos sufrieron el encierro y la torturaen campos de concentracin durante ladictadura de Pinochet. Mientras los medioslocales omitan esta informacin, la prensainternacional daba cuenta del trgico

    destino de personas e incluso familiascompletas al interior de los recintos dedetencin. Un ao despus del golpe deEstado, un grupo de investigadores yartistas visuales realizaron una experienciaperformtica que propona asimilar el dolordel encierro y la tortura. La pieza se llamSignometraje: Tentativa Artaud y fuerealizada en el Departamento de EstudiosHumansticos [DEH] de la Universidad deChile por la artista Catalina Parra, el filsofoRonald Kay y el poeta Ral Zurita, entreotros participantes. En el inhspito tico delDEH los miembros de esta experienciaprocedieron a realizar una accin basadaen tcnicas vocales y corporales tomadasde la obra de Antonin Artaud El teatro y sudoble con la idea de asimilar el dolor pormedio de la expulsin del lenguaje formal.

    A principio de los aos 70 en Alemania,Ronald Kay y Catalina Parra habanentablado una relacin de trabajo y amistadcon el videsta Wolf Vostell. Kay y Parraconocan en detalle el trabajo de Vostell, elcual integraba mltiples elementos visuales,desde televisores hasta bloques deconcreto (como resultado de esta relacinde trabajo, la instalacin El Huevo fuepresentada en Chile durante los meses deseptiembre y octubre de 1977 en Galerapoca). En funcin de esto, en el ticodispusieron elementos bsicos comocuerdas, plsticos y tierra, los que secombinaron con un televisor, grabadoras,cintas magnetofnicas y un micrfono. Laexperiencia procedi en una catarsisindividual y colectiva que emul lasensacin de encierro y tortura. Para ellolos participantes se envolvieron entreplsticos y cuerdas y repitieroninterminablemente el poema Ratara deArtaud, que no es ms que la reiteracin depalabras y sonidos totalmenteinentendibles. La idea principal era expulsarla lgica del lenguaje para con ellodesplazar el acto teatral alcanzando untrance fsico y emocional que asimilase eldolor fsico y psicolgico. En palabras delpropio Kay, exponerse a la alta tensin delo que se viva por aquellos das.

    Por instantes aquel tico evoc un centrode tortura. Dos aos despus y por esasironas del destino, el DEH fue tomado porlos militares transformndose en un cuartelde la DINA (Direccin Nacional deInteligencia), organismo encargado de ladesaparicin de militantes y simpatizantesdel partido comunista. La performance eneste caso vaticin el oscuro destino dellugar. Actualmente el edificio alberga lasdependencias del Museo de la SolidaridadSalvador Allende. Esta pieza permaneci enel silencio de la historiografa chilena porms de 30 aos, hasta que el ao 2008Ronald Kay expone los archivos de laexperiencia en la muestra Tentativa Artauden el Museo Nacional de Bellas Artes.

    Otro interesante caso de representacindel lugar de tortura acontece en el ao1977. El grupo mexicano ProcesoPentgono (compuesto por los artistasFelipe Ehrenberg, Carlos Finck, Jos AntonioHernndez y Vctor Muoz) realiz unaprovocadora pieza llamada La cmara detortura. Tomando como antecedente losatropellos a los derechos humanosocurridos en Tlatelolco en 1968 y losasesinatos de estudiantes a manos delgrupo Los Halcones en 1971, ProcesoPentgono desarroll diversas estrategiasde corte conceptual para explorar ladenuncia poltica y la crtica a lainstitucionalidad cultural. La cmara detortura fue realizada para la X Bienal deJvenes de Pars que tuvo lugar en el Palaisde Tokyo. El grupo recibi una invitacin departe del curador uruguayo ngelKalenberg (quien por esos aos simpatizabacon la dictadura cvico militar de Uruguay)para participar como invitados al clebreevento parisino. Las simpatas polticas deKalenberg no fueron vistas con buenos ojospor los miembros de Pentgono. Debido enparte a esta relacin es que los jvenesmexicanos presentan una sala pentagonal(con la connotacin irnica al edificio de laoficina de inteligencia de Estados Unidos)que simul ser una sala de tortura policial.

    La sala dispona de una silla deinterrogacin, lmparas para iluminar a losinterrogados, adems de una serie deelementos elctricos que emulaban objetosde tortura. En los muros los artistasdispusieron peridicos con la informacinacerca de las protestas que se realizan enMxico y en las distintas dictaduras deLatinoamrica. En los muros exteriores sepodan apreciar siluetas de personasannimas que observaban el interior de lasala como una forma de alegorizar elsilencio cmplice de los medios decomunicacin. La obra era un llamado deatencin sobre la represin policial,entendiendo con ello que cuando losmilitares asumen y ejercen el poder, lapolica suele ser un silencioso cmplice.

    Podemos leer que la oficina policial deProceso Pentgono, en el marco de unevento internacional de institucionalidadcultural como la Bienal de Pars, proponaevidenciar en el marco de la cpula culturalparisina el revs de lo difundido por losmedios oficiales. El grupo de Ehrenbergdej al descubierto los mecanismos deopresin que se daban en Mxico y en todoel continente. El lugar de la tortura fue msall del local, el tico o el cuartel, sepresent como la validacin institucionalotorgada a partir del silencio cmplice demuchos poderes fcticos que se vieronbeneficiados por aquellas dictaduras yregmenes autoritarios.

    Arte y Crtica | 7

  • Columnistas

    Chris Larson, Deep North, 2008, cortesa del artista y a Galera Magnus Mller.

    TRABAJO EN EQUIPO. SOBRE LASMUESTRAS COLECTIVAS DEL AO 2012De acuerdo al ao recin pasado, donde podramos acordar unnimemente uncrecimiento exponencial en la cantidad de exposiciones que se realizaron,revisamos ciertas muestras colectivas a la luz de sus propuestas curatoriales yseleccin de artistas.

    por Andrea Lathrop

    enero 2013

    De las muestras colectivas que se hicierondurante el ao recin pasado, podemosevidenciar un importante nfasis en elcarcter retrospectivo, vale decir, serealizaron a partir de un pie forzadohistrico que buscaba reactualizar obras deartistas con trayectoria, o bien las quebuscaban aunar en un mismo lugar aartistas conocidos, no teniendo siempreuna curatora bien articulada, guiada, enmuchos casos, por el gusto de agrupar otrabajar con una serie de artistas en unlugar determinado.

    Del mismo modo tambin se pudo ver uncreciente inters por parte de lasinstituciones lase Museo de ArteContemporneo, Museo Nacional BellasArtes, Centro Cultural Palacio La Moneda,

    entre otros de las que podramos llamarasesoras extranjeras, donde curadoreseran invitados a realizar muestras ennuestro pas (compuestas tanto de artistaschilenos, como extranjeros). Tenemosentonces, dentro de la categora decolectividad, un sinnmero de muestrasque bien responden a los parmetrosrecin dados.

    Ahora bien, correlativo a todo fin de ao ypor qu no, a los medios, es usual hacerun recuento, tratar de rescatar aquello quefue bueno entindase, atractivo,innovador, etc. y aquello que no lo fuetanto. Y, si bien la intencin no es arrogarseel rol de salvavidas, si es hacer un breverecuento basado en el gusto, aunquetambin ms all de este para destacar

    ciertas muestras colectivas dentro del ao2012.

    Una de las muestras descritas acontinuacin constituye una curatorainteresante y bien configurada que, ms allde presentar ciertos problemas comosiempre los hay, mantienen su valorplstico gracias al corpus de obra elegidopor los curadores y el sentido que a estasse les da, como siempre ha debido ser. Yotras, que ms all de los buenos artistasque convocaron, no lograron constituirpropuestas potentes, quedndose ms enla seleccin que en la propuesta curatorial.

    Dentro de lo que cabe destacar, me pareceque Poetas en tiempo de escasez,muestra colectiva curada por Alfons Hug y

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  • Crticas de Arte

    Paz Guevara, inaugurada el 1 de diciembredel 2012 en el Museo de ArteContemporneo (MAC), sede QuintaNormal, es una muestra que se articula demanera original, a partir de la obra de 9artistas, tanto chilenos como extranjeros,que reflexionan sobre la frase que le da sunombre, escrita por el romntico alemnFriedrich Hlderlin. Aqu, los tiempos deescasez estn representados por procesosindustriales fallidos, obreros trabajando enempresas que parecieran no tener sentido,procesos mecanizados, todo en vistas dereflexionar sobre la importancia de lamanufactura y la mano de obra en laeconoma actual.

    As obras de reconocidos directores, comolo es el alemn Harun Farocki que nospresenta un video sobre la construccin deladrillo en diferentes fbricas del mundo (InComparison), se entremezcla con otraspoticas productivas; como la de ChrisLarson (Deep North), donde tres mujerestrabajan en una fbrica en la cual todo estcongelado, intentando, intilmente, hacerfuncionar los engranajes; y la de MarkFormanek (Standard Time) que filma a ungrupo de obreros alemanes que construyeny deconstruyen un reloj de madera,evidenciando una empresa sin sentido queavanza minuto a minuto. Mientras que, enel mbito nacional, Joaqun Cocia yCristbal Len nos muestran algunosvideos realizados para la serie El TercerMundo, donde figuras de papel mache, nosremiten a una labor estrictamente manualdel oficio de la animacin que, por mediode la tecnologa, ha sido automatizada,asimilando la extenuante e ininterrumpidalabor de la mquina.

    Lo destacable que presenta esta muestra,dentro de las muchas que se realizan apartir del video, es una curatora que anauna variedad de obras, donde artistasconsolidados de diversas nacionalidadescomo es el caso de Harun Farocki,reconocido documentalista se proponenjunto a otros ms nuevos como PabloLobato, artista brasilero, no siendo lainternacionalidad aquello que ms seenfatiza y constituye, sino las obras, quems all de su dismil contexto productivo,parecen apuntar todas, de diferentesmaneras y por medio de diversos recursosaplicados al video, a la mecanicidad y laindustrializacin de las sociedades actualesy, muchas veces, al sinsentido de estas.

    Y si bien todos aquellos que visitamosregularmente las muestras que se exhibenen Santiago, entre ellas las del MAC,especficamente en su sede de QuintaNormal, sabemos que por falta depresupuesto estas presentan ciertosproblemas por ejemplo, falta de bancas yasientos para observar los videos que, enalgunos casos, duraban ms de 40minutos, la curatora demuestra que para

    realizar una muestra bien cohesionada,donde cada uno de los artistas y sus obraspresentan un eje claro hacia la propuestacuratorial en este caso los tiempos deescasez, es suficiente para articular unamuestra colectiva que logre innovar, tantoen la variedad de artistas escogidos, comoen la calidad de las obras presentadas,pasando a ser las faltas presupuestarias undetalle.

    As, si pensamos en muestras colectivas quecontaban con mayor presupuesto y lapromesa de importantes artistasinternacionales, como lo fue IdentidadFemenina en la Coleccin del IVAM,inaugurada el 20 de marzo del mismo aoen el MAC, sede Parque Forestal, podemosdar cuenta que los grandes artistas no sonlo fundamental al momento de desarrollaruna buena curatora. Ac obras dereconocidas artistas, como Diane Arbus yCindy Sherman entre muchas otrasarticulaban una muestra que, ms all delalero de lo femenino sea lo que seaesto, no tenan nada ms en comn. Deesta manera, la muestra, a pesar de tenerbuenas obras, no lograba realizar undiscurso coherente ni dirigido, sino msbien pona a disposicin una serie de obrascuyo nico factor comn era la manufacturafemenina.

    De forma similar, aunque con unpresupuesto mayor, la muestra Ionisation,realizada en la Galera XS, inaugurada enmarzo del 2012, es una demostracin deldeseo de un curador, en este caso CristinSilva, por agrupar a diferentes artistas ensu mayora jvenes emergentes, aunqueotros ms consolidados bajo un mismotecho. Aqu, si bien haba un corpus de obraimportante (la muestra, literalmente, seencontraba abarrotaba en la pequeagalera) que se conformaba a partir de lapropuesta de Silva, quien afirma: lo quebusco en Ionisation es confrontar esos doso ms acercamientos entre sonoridad yvisualidad, muchas de ellas efectivamenteremitan a dicha relacin interesante por lodems, mientras que otras simplementeparecan no tener lugar en la muestra, osimplemente remitan a un algo msgeneral, bajo la premisa de arte y msica.As, obras que referan de manerainteresante a dicha relacin, como losbosquejos de Rainer Krause, mientras queotras no juntaban ni pegaban con lopropuesto por Silva, evidenciando ms undeseo por agrupar a varias personalidadesdel circuito local de las artes visualessantiaguinas, que hacerlo bajo unapropuesta que cohesionara lo all expuesto.

    Habiendo dicho lo anterior, hay querecordar que una buena muestra secompone tanto de un buen corpus de obra,como de una buena curatora, donde lasegunda de estas debe siempre tener enmente que la realizacin de una exhibicin

    no es solo juntar buenos artistas u obrasbajo un mismo lugar, sino configurar undiscurso visualmente dirigido y coherente,en relacin a aquello que se expone.

    De este modo, Poetas en tiempos deescasez cierra un ao lleno deexhibiciones, demostrando que pararealizar una lograda muestra colectiva, losgrandes presupuestos no son siemprenecesarios y que una curatora bienconstituida supera todos los desperfectostcnicos que, en este caso, el MAC puedapresentar.

    Arte y Crtica | 9

  • Crticas de Arte

    Jos Pedro Godoy, El triunfo del amor, 2012, cortesa del artista.

    AMORES Y DESAMORES DE LA CRTICA: LAPRODUCCIN PICTRICA DEL 2012 EN LAESCENA LOCAL Entendido como una operacin propia de un pensamiento arcaico, burgus,cannico y, por qu no, academicista, el juicio se ha vuelto el lugar al que nadiequiere llegar, del que nadie declara venir y hacia el que nadie parece dirigirse. Apropsito de las pinturas de Carlos Leppe, Jos Pedro Godoy y el Papas Fritas.

    por Ignacio Szmulewicz

    enero 2013

    I

    En Chile gran parte de la crtica de arte delltimo tiempo y tambin la escritura, teoray pensamiento sobre obras de arte se hadesprendido paulatinamente delenjuiciamiento. Entendido como unaoperacin propia de un pensamientoarcaico, burgus, cannico y, por qu no,academicista, el juicio se ha vuelto el lugaral que nadie quiere llegar, del que nadiedeclara venir y hacia el que nadie parecedirigirse. Si tuviese que graficarse podra ser

    ese personaje en las aeropostales deDittborn, el que desde una isla observa unmundo imperceptible, lejano e inalcanzable.Solo, aislado y abandonado, miraincansablemente hacia el horizonte (NicolsMiranda arroj a una isla a un grupo depersonajes de la vieja guardia del artechileno). Cual Robinson Crusoe, el juiciocrtico, tan afn a las artes visuales desdeprincipios del siglo XVIII y, con particularfuerza, en el siglo XIX en la pluma deBaudelaire, ha cado en desgracia.

    El presente nmero nos obliga a tomar

    partido; salir del lugar seguro y abstractodel pensamiento y la reflexin terica (si esque alguna vez ese lugar ha estado liberadode disputas y micro-polticas de poder) paraentrar en lo que Justo Pastor Mellado llamcampo de batalla o lo que Eugenia Britodenomin campo minado para referirse ala literatura post-golpe. Un tanto marcial elpensamiento de las artes visuales, pugilistadira Arthur Cravan, sin embargo, de esevanguardismo (pensando en el sentidooriginal del trmino avant-garde) emergeuna ldica condicin de campo; parecido alsentido revolucionario del museo como

    Arte y Crtica | 10

  • Crticas de Arte

    continuacin de la plaza pblica. Estamos,en la escena artstica, para desgracia dealgunos, como en un cuadro de WilliamHogarth o una caricatura de HonorDaumier.

    II

    Me encontr recientemente con esta joyade la diatriba, tan cercana a la crtica dearte, que en el escenario local algunosejercen con los ms eximios resultados (porejemplo, el perfil que dibujase GuillermoMachuca de Justo Pastor Mellado en el TheClinic, los textos del Chilote Epistemolgicoen el sitio web esonomastedigo.com y, msreciente an, la devastadora resea dellibro Das contados de Carlos PrezVillalobos realizada por Patricia Espinosa).Me refiero a las cidas palabras queBaudelaire le dedicase al pintor J.F. Millet enocasin del saln parisino de 1859: El estilole trae mala suerte. Sus campesinos sonpedantes que tienen una opinin elevadade s mismos. Muestra un embrutecimientosombro y fatal que da ganas de odiarlos. Yasea que cosechen, siembren, hagan pastara las vacas o esquilen a los animales tienensiempre el aspecto de estar diciendo:Pobres desheredados de este mundo,somos nosotros quienes los fecundamos!Cumplimos una misin, ejercemos unsacerdocio!.

    En estas lneas, Baudelaire deja entrever unejercicio magistral de crtica y tambin dediatriba que saca de la forma visual y eltema toda una lectura que permite articularun concepto de artista y de contexto. Suspalabras, elocuentes, transmitenclaramente una sensacin de despreciomezclada con una sobredosis de maldad(esa justa temporada en el infierno, enpalabras de Rimbaud). Sin embargo, comobien lo expresa Roberto Calasso en sumonografa sobre Baudelaire, ese tonoirritado encuentra un equilibrio perfectocon el mayor de los objetivos de suescritura: Glorificar el culto de las imgenes(mi grande, mi nica, mi primitiva pasin).Es precisamente esa desmedida pasin deBaudelaire por las imgenes y laimaginacin como facultad la que permitetales desbordes de escritura sobre aquellaspinturas.

    III

    Mi cometido en este texto va a ser precisaraquella obra pictrica que ms se hayadestacado a mis ojos y, por desgracia de losmismos, la que menos lo haya hecho.Espero argumentar que esa cualidad no es

    solamente ocular sino que tambin decorte intelectual. En el arco superior seencuentra la monumental tela de JosPedro Godoy El triunfo del amor querepresenta una orga animal. En el arcoinferior, las austeras composiciones deChristian Olivares en el MAC-ParqueForestal.

    Permtanme ir por parte. El ao expositivoque recin termina ha estado marcado, eneste terreno, por la presencia de tresgrandes nombres (ntese que dijenombres, no obras): Jos Pedro Godoy,Francisco Papas Fritas y Carlos Leppe. Enlos tres casos, opiniones extremas se hanvolcado y no he escuchado todava ningunadiscusin argumentativa al respecto. Paraalgunos, la presencia pictrica de PapasFritas fue lo ms destacado de la feria dearte Ch.ACO; para otros, lo ms deplorablede la existencia fueron las mal pintadastelas de Jos Pedro Godoy en el MAVI. Enambos casos, encuentro absolutamentebanal y atemporal calificar de mal pintadoo brillantes ambas presencias como si seestuvieran disputando galardones en uncertamen acadmico (cuyas bases seexplicitaban en las destrezas ohabilidades del concursante).

    Por otro lado, gran parte de la comunidadartstica se manifest contraria a la muestrade Leppe, pinturas elegidas especialmentepara la coleccin de Pedro Montes. Esto pordos razones: un desprecio hacia la obrapictrica del autor o bien un apreciodesmedido hacia la obra corporal delmismo. A diferencia de tales sesgadasopiniones creo que el trabajo pictrico deLeppe es contundente, en ningn gradoaparte de su aspecto performtico, y, sobretodo, complejo. Esa complejidad merece untexto aparte. Dejo enunciado solo unaobservacin: en mayo pasado, TomsFernndez present una obra para lacuradura Matadero en la Librera MetalesPesados que citaba una ya clsica fotografade Leppe botado, rasgado y cubierto degazas a los pies de una baera (fotografaque fue parte del ineludible Cuerpocorreccional de Nelly Richard). La muestrade Leppe en la galera D21 comenzaba conuna cita al monumental cuadro de JacquesLouis David La coronacin de Napoleon de1808 (de ms est decir que el mismoLeppe se coron con excrementos el ao2000 en la performance que fue parte deChile 100 aos). Esa trama de relaciones,Leppe-Fernndez, est lejos de estaranalizada.

    IV

    Pero vuelvo a lo dicho recientemente. Lamuestra de Jos Pedro Godoy dej en el

    ambiente artstico una sensacin incmoda,mezcla de malestar y estupefaccin que nose ha podido procesar an. Mi opinin es lasiguiente: el conjunto de las telas es unaatrevida, arrojada y potente declaracinsobre la pintura y sobre el cuerpo en unasociedad post-Acuerdo de Vida en Pareja.Ms que hablar de ese flash-back hacia elrococ (como lo pudiese hacer el cine deSofia Coppola, sin ser por eso algo menoscontemporneo o contextual), me pareceleer en esos cuadros cuestiones muchoms complejas que las enunciadas por elpropio autor. En principio la tubular, fra yescenogrfica representacin de loscuerpos humanos da cuenta ms que deuna pulsin hacia la geografa odorfica unahacia el cuerpo pasado por elordenamiento de los juegos infantiles;playmobiles, barbies, legos, incluso lasabstracciones de los video-juegos o de lasprimeras animaciones digitales de los video-clip. En el fondo, el mundo a los ojos deGodoy se asemeja a un estante de juguetesarticulados inexpresivos con los que sepuede pasar un rato distendidamente (en laorilla opuesta estara la pelcula Joven yalocada de Marialy Rivas donde la pulsinhacia lo ertico pasaba por una pulsinhacia sus emanaciones, carnaciones yfluidos).

    Sin embargo, la exposicin cerraba con unainmensa tela que representaba un conjuntoamplio de miembros del reino animal (y deinsectos) en la ms feliz de las cpulas. Meparece increble que en trminos deresultado visual (textura, color, escala,composicin y densidad) la obra que msresalte sea una sinfona de sodomasanimales (una versin pictrica y algozooflica de la conocida accin de SantiagoSierra). Y en este punto creo ver uno de losvalores ms atractivos de la muestra Elprogreso del amor. El ojo de un espectadorapagado, inerte, percibe en exposiciones deeste tipo simplificaciones, mistificaciones yjuicios pobremente elaborados, quiereentrar a un recinto donde las respuestas ylas ironas sean lo ms esperables y rpidasposibles, chistes breves y rpidos como losde facebook o twitter (quizs eso expliqueel xito del Papas Fritas). Creo que un ojoinquieto busca las primeras y segundaslecturas de obras que, como en el caso dela de Godoy, tienen una densidad y unatrama de interpretaciones mucho mayores(me pregunto, por ejemplo, cmointerpretar la presencia de Pablo Simonettien la inauguracin de la muestra teniendo ala vista la pintura del reino de la sodomaanimal).

    V

    En definitiva, creo que uno de los valoresms destacables de ciertas obras (y en esto

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  • Crticas de Arte

    no hay nada ms que juicios) est en laposibilidad de abrirse a interpretaciones obien a paradojas (sigue estando pendienteuna revisin crtica a la presencia del PapasFritas en feria Ch.ACO y su consiguientemovida de organizar una muestra anti-mercado titulada Dilogos deEmancipacin en la Galera Metropolitana).Pensando en esto, en la vereda opuesta seencuentra la muestra de Christian Olivaresdonde se incluye una decena de telas degran formato de temticas de la naturaleza(aunque reducidas en su mayora arboles), de una parquedad absoluta, sin elmenor atisbo de arrojo o profundidad.Lamentablemente, a veces los hechos sonconfirmados por los lugares y no puedoencontrar justificacin a que el Museo deArte Contemporneo invierta tiempo,energa y espacio en una muestra donde eladjetivo y sustantivo contemporneo es loms lejano y extico.

    Me he encontrado en ms de unainauguracin increpado por espectadoresque buscan juicios rpidos y certeros sobreobras que apenas son vistas por el cmulode personas que busca un trago o unescueto comestible. Me gustara pensar queen este espacio se puede invertir un tiempoestimable en el debate sobre ciertascuestiones que slo quedan comocomentarios de pasillo, a los que unosasientes sonrientes y otros arrancanapresurados. La invitacin est hecha adiscutir los juicios, poner en duda losveredictos.

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  • Crticas de Arte

    Juan Castillo, Otro da, 2012, cortesa Museo de la Solidaridad Salvador Allende.

    LO INNOMBRABLE: LAS MEJORES YPEORES EXPOSICIONES INDIVIDUALESMe piden un recuento de las mejores y las peores exposiciones individuales delao y tengo que citar a un perro, un terico muerto, una chica que al parecerdebe de ser poltica y...a lo innombrable. Porque lo no-nombrado va tambin enotro sentido al inicial...tendrn que leer hasta el final.

    por Juan Jos Santos

    enero 2013

    Intento nombrar, aunque sea en voz baja,las exposiciones individuales que he visto yque merecen ser recordadas y las palabrasse evaporan en mi boca justo antes devestirse con sonidos. Se buscan artistas quedesarrollen trabajos ambiciosos, series devarias piezas en torno a un tema, proyectosa uno, dos o tres aos que tengan calado yprofundidad. Algo que se pueda nombrar,no ya renombrar. Parapetados, diluyendoresponsabilidades en exposicionescolectivas los artistas jvenes, mayores,medianos, sin prestigio, prestigiados oprestigiosos, desprestigiados, alguien.

    Me piden un recuento de las mejores y laspeores exposiciones individuales del ao ytengo que citar a un perro, un tericomuerto, una chica que al parecer debe deser poltica ya lo innombrable. Porque lono-nombrado va tambin en otro sentido alinicialtendrn que leer hasta el final.

    Pido disculpas; no puedo incluir nada ni delos dos primeros meses del 2012, al noestar en Chile, ni de regiones; nada pudever en mis viajes fuera de Santiago. Por esascarencias una parte de lo ocurrido queda

    innombrado.

    Las peores exposicionesindividuales

    5.- Lotus Eaters II: La muerte deKilly Lilly, Cynthia Marinkovic,MAC Parque Forestal

    Una exposicin pretenciosa, un universo sinteologa, en un lugar inapropiado. Pero

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  • Crticas de Arte

    menciono esta exposicin como una de laspeores del ao no tanto por el montajecitado, que tambin, sino comorepresentante de las exhibicionesindividuales de Museo de ArteContemporneo. Ni tan siquiera en nombredel presupuesto bajo cero se puede tolerarla bajsima calidad en la oferta del Museoque, por otro lado, sufre de la enfermedadde la anasognosia desconocimiento de laenfermedad. Proponen muestrasinteresadas y no interesantes en unaasombrosa operacin de des-empata conel espectador. Promueven artistas que sesacan de la chistera del nepotismo detercer grado, y no son conscientes de ello.

    Se presupone que el MAC es el Museo deArte Contemporneo de Chile: en caso deque haya vida en el despacho, es elresponsable de hacer visible una poltica deexposiciones individuales confusa, de unnivel psimo, algunas, ni siquieraconcebibles en una cafetera. Entre ellas lacitada Lotus Eaters II, calificada comoinstalacin grfica sonora. Una experienciadarketa indescriptible generada paraestimular pesadillas a los pobres nios quela visitaran, y una indeleble cara de ocho alos adultos que viven en el mundocognoscible. Virgen de los gticos, que nohaya un Resurrection: Lotus Eaters III.

    4.- Deco, Rodrigo Canala,Galera Patricia Ready

    Aqu iba a situar a Samy Benmayor, comorepresentante del arte entrete y colorinche,en su expo en una galera para artistojipis;la Malborough, que titul Mucho ms de loque esperaba. Samy tiene bajas lasexpectativas. Pero me decanto por el arteneo-post-irnico y ultra-aburrido deRodrigo Canala. Unas obras que al parecerson sarcsticas, ya que son una burla delentorno en el que tiene lugar la exposicin(tiendas de decoracin). Para ser irnico esnecesario poner en tensin, complicar,acusar y superar. Deco no consigue nadade eso, y me temo que tampoco logragenerar reflexin alguna, una emocin o undeleite en la simple observacin. Soloprovoca una abulia dolorosa. En Chile sonmuchos lo artistas que, en nombre de lairona, utilizan una iconografa industrialpara, a travs del conceptualismo,deconstruir su significado en un juegolcido. Pocos lo alcanzan y demasiados lointentan. El origen, en la universidad.Volviendo a Canala, y una vez desmentidosu carcter pardico, esforcmonos en almenos rescatar un sentido puramentevisual. Relajemos los msculos, imposible.Su nica victoria, concebir una obratotalmente Anti-deco.

    En su dossier personal leo lo siguiente; Mitrabajo, pienso, genera en el espectadoruna mezcla entre quietud y expectacin, o

    lo que llamo inercia ptica. Se trata de unaapariencia cautivante, hipntica, bella y, a lavez, provocativa o amenazante, en la que seesconde en ltimo trmino, una crticapardica a una contingencia tendiente alespectculo y a la exclusin, manifiesta nosolo en el cotidiano y los mass media, sinotambin en el mismo arte.

    3.- Abu Ghraib, FernandoBotero, Museo de la Memoria

    El horror, la tortura, la injusticia, el dolorcausado al hombre, el castigodesproporcionado, el maltrato innecesario.Con estas palabras no me refiero a lasdeleznables y nauseabundas prcticasinhumanas que ocurrieron en Abu Ghraib,sino a la obra de Fernando Botero.

    Es una pena porque el Museo de laMemoria no merece estar aqu; varias desus exposiciones han sido valiosas. Pero nome puedo creer que una institucin sigadando cobijo a Fernando Botero. El artistade la banalizacin polisaturada, del comiccmico convertido en pieza de coleccinpor arte de engorde. El artista que vendeuna frmula caducada como productodelicatessen. Deforma a sus retratados demanera similar al embuchador que cebapor sonda a los gansos con alimento debaja calidad hasta la explosin, para luegoconvertir su hgado en el ms exquisito foiegras.

    El proceso es el mismo. En su serie AbuGhraib lo que importa es alterar a losprotagonistas y convertirlos en obesos,estableciendo dilogos fallidos en mi mente,entre comida basura, Estados Unidos,imperialismo y torturas. Todos los caminosme llevan a caminar maniatado sobre unatabla de madera en cuyo extremo seadivina un mar lleno de tiburones,dialcticas monstruosas que se muerden lacola. La espada del pirata Botero me obligaa seguir avanzando hacia la dolosairresponsabilidad adjudicada por el sinbandera. Muy tuerto hay que estar paraimponer un estilo, manierista einexplicablemente no agotado, a la violacinde los derechos humanos. Encima estaexposicin viaj para ser expuesta en lasregiones de Chile. Por una vez que unmontaje se considera como itinerante, tieneque ser esta.

    2.- Constelaciones, WalterBenjamin, Centro Cultural GAM

    Voy a intentar domar mis pasiones y serelegante en mi crtica. Estoy harto de WalterBenjamin. De l y de Guy Debord, JacquesDerrida y de Gilles Deleuze y sus MilMojones. El GAM organiz en unarizomtica operacin una muestra sobre

    Walter Benjamin, producida por el Circulode Bellas Artes de Espaa y que, sospecho,se traslad solo en parte o con un rediseodefectuoso. Ya es suficientemente penosointentar hacer entretenido y visual a unterico, algo que se fuerza aqu,convirtiendo algunos de sus conceptos enesculturas o elementos decorativos, de talmanera que la cosa qued como si fuera unjardn infantil para nios desmaterializados.

    Es loable la inquietud por hacer llegar alpblico a un terico, pero creo que unaconferencia o simplemente, el visionado deldocumental de la exposicin, son msadecuados que levantar una muestra de lanada, gastando un dinero necesario paraotros menesteres. Y, desde luego, se podrahacer llegar al pblico a otro terico,porque tanto Benjamin como Debord,Derrida y Deleuze son las Argandoas delarte. Son citados hasta ms no poder porlos profesores locales, que parece quetodava no han pasado de la D en susbibliografas sugeridas. Tal es la saturacinque me he comprometido a no parafraseara ninguno de ellos en ningn texto, pormuchos flaneur que llamen a mi puerta.

    Las Argandoas del arte son totalmentenecesarias para entender la creacinposmoderna, pero a partir de ah, a leerotras fuentes, que existen: Berger, Zizek,Brea, Koestler, Lippard, Foster, Hughes,Fontcuberta, Osborne, Marchn Fiz, JamesElkins, Stephen Wright, Gavin Butt, Millar,Molesworth, Connor, Wolfe, Sontag,Kaprow, Papini, Mosquera, Camnitzer,Canclini, Ticio Escobar, yo que s,Bernardita Ossandn.

    1.- Bernardita Ossandn, RevistaPaula

    La poltica ha deshauciado la democraciacon una infiltracin txica y disfrazada trasuna performance; una sonrisa. La obra deBernardita ha traspasado las pginas de laRevista Paula para introducirse de llenocomo una expresin de artecontemporneo. Por su minimalismoconceptual, casi arte pvera conceptual. Suentrevista compite con el video de la RosaEspinoza como lo ms comentado del ao.

    http://www.paula.cl/entrevista/bernardita-paul-ossandon-ossandon/

    Fjense en el dominio de la fotografa, en lasutileza al colocar como teln de fondo unaobra de op art, te hipnotiza, te marea, tesucciona, y quieres votarla, yvotarlayvotarlay Bernardita se present ala elecciones como concejala en Puente Altoy, antes de la campaa, concedi unaentrevista a la Revista Paula en la que,imagino, fueron previamente amordazadosy secuestrados sus asesores. Lanz joyas

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  • Crticas de Arte

    dialcticas como las que siguen:

    Tengo el servicio pblico en la sangre (noseran hemoglobitos?).

    Organic la fiesta de Navidad para losfuncionarios municipales; cort tickets,saqu fotocopias y envolv los regalos (unaminera de la poltica).

    Por ser Ossandn s que voy a salir electa(y que vas a ir a muchos cocteles).

    Estuve en el colegio Los Andes, un colegiodel Opus Dei muy choro que generapersonas valientes (y choras).

    Las dos ltimas respuestas que no incluyoaqu, por vergenza propia y ajena, sonpara taturselas en el corazn.

    La peor exposicin individual del ao salielegida concejala. Y como la novenaconcejala ms votada, por 7612 personas.Pero Bernardita no me acuerdo como seapellidaba, aparece aqu como Killy Lilly(sugerente asociacin), no por su creacinindividual, que tambin, sino comorepresentante de un colectivo. En este casolas peores exposiciones individuales son los7612 votos que obtuvo, como muestra deque este pas est poblado por personas deun gran minimalismo conceptual, casi artepvera conceptual. Pero muy choras.Concluyo que el gran peligro del Opus Deies que tienen tantos hijos que nos van aacabar ganando en nmero; como no nospongamos a procrear como Geden no va ahaber manera de ganar unas elecciones.

    Las mejores exposicionesindividuales

    5.- Rucio, el perro del Mac, MacQuinta Normal. Todo el ao

    Los de Arte y Crtica se olvidaron deespecificar si los seleccionados tenan queser humanos. Rucio es el perro que vive enel jardn del Museo de ArteContemporneo. Durante su performance,de gestos austeros pero significativos,deambula, babea, persigue moscas, serasca, fornica con otros perros, hace lasiesta, grue, come, se chupa su rosadofalo. Acciones que le acercan a otrosartistas como a Regina Galindo por sureivindicacin del cuerpo, a Vito Aconcci porsu acto repetitivo, a Ana Mendieta por loviolento, a Marina Abramovich por sumirada potica o al accionismo viens porsu fiereza cruda. Sus frecuentesventosidades establecen conexiones con lasaeropostales de Eugenio Dittborn. Suexposicin individual destaca por la rebelda

    y los guios a otras importantes obras de lahistoria del arte. Suele cagar y mear en lafachada del Museo, en un acto poltico-subversivo.

    Esa provocacin, ese deseo de sealar a lainstitucin como desactivadora/mitificadoradel objeto artstico, le vale para serconsiderado como un perro artistarealmente independiente. Muchos le hancriticado por no estar presente en OffChacoff. Sin embargo, es un ejemplo paraotros artistas; expone en el Mac (fuera ydentro, gracias a un video de la artistabritnica Lucy Skaer que ha registrado susperrunos movimientos) y sigue con suactitud humilde & piojos. Ve acercarse aJuan Yarur y ni se inmuta. Ladra a lostericos del arte que se acercan, sobre todosi llevan algn libro de Walter Benjamin. Porlas noches cruje su mandbula mientrassuea con que se est comiendo aWaldemar Sommer. Como dicen los AsesFalsos en su ltimo disco JuventudAmericana, los animales no se equivocan,son portadores de la sinceridad del cosmos.

    4.- Marabunta de ReginaGalindo, Galera Gonzlez yGonzlez

    Se puede alegar que la Galera Gonzlez yGonzlez no difunde con acierto susexposiciones, que es un espacio demasiadopequeo, que siempre van los mismos a lasinauguraciones (lo que me hace sospecharque esos invitados viven en la Galera), oque en el sentido estricto de la palabra, noes una galera. Pero es la sala en la que seexhiben obras de los artistas msinteresantes de Latinoamerica. Ya legustara al Museo de Arte Contemporneoexponer a Dario Escobar, Moris, o JotaCastro, en el mismo ao. Y a artistaschilenos como Bavarovic y Foschino. Yadems a la guatemalteca Regina Galindo,mostrando dos vdeos donde el humor, lottrico, lo femenino y lo violento secombinan de forma magistral. Unaoportunidad de disfrutar y conocer obrasfundamentales para entender el devenir delarte contemporneo latinoamericano, delas que se pueden sacar muchasconclusiones enriquecedoras para elcircuito local.

    3.- Cuerpos de Obra de CamilaRamrez, MAC Quinta Normal

    Es sin duda la artista revelacin del ao, conun corpus artstico unitario y coherente.Durante el 2012 ha mostrado en diferentesexposiciones individuales y colectivas y endiversos espacios un conjunto de piezasque dialogan unas con otras y todas ellascon el pblico. El juego, el trabajo y el arteson los tres extremos del tringulo de una

    artista poltica que ha dado una leccin desencillez, compromiso y brillantez a losartistas consagrados del pas.

    2.- Minimal Barroco y OtroDa, Juan Castillo, GaleraMetropolitana, MSSA

    Minimal Barroco es una obra en donde eltrnsito urbano, las zonas marginales, elcombate contra la lava globalizadora, la re-instauracin del individuo y su rescate delanonimato y el viaje, entran en disputa. Unsumidero de reflexiones que ha encontradoel nido ms adecuado en la GaleraMetropolitana. La envidia de Chile (capital yregiones) de gestin y generacin deproyectos necesarios desde el presupuestobajo cero. Otra buena poltica expositiva latiene el Museo de la Solidaridad SalvadorAllende, que tambin hizo hueco a Castillocon la exposicin Otro da. Una muestra enla lnea de la anterior (como reivindicacindel individuo) pero en un sentido msonrico e irreal. Dos montajes que nospermiten disfrutar del mejor Juan Castillo, yaunque no sean sus ltimas creaciones,destacan en el ao chileno. Se podraaadir su propuesta en el alternativoEspacio Flor, aunque no sea estrictamenteindividual. Pero de alguna manera tengoque aplaudir el trabajo de esa pequea eindependiente galera, que, entre otras,tambin ha mostrado una buena pieza deNicols Rupcich.

    1.- Lo Innombrable. Pero que yovoy a nombrar

    La no-exposicin individual de Pablo Ferreren la Sala Gasco. En el ao 1990 JosephKosuth organiz una muestra en el Museode Brooklyn. Alrededor de 100 trabajosescogidos por el artista de entre lacoleccin de ese Museo. Desde objetosegipcios hasta fotografas contemporneas.Obras susceptibles de polmica pormotivos religiosos, polticos o sociales.Principalmente, por su contenido ertico.Pero que sin embargo formaban parte de lacoleccin de la institucin.

    Esas cien piezas fueron exhibidas sin mayorproblema, pero algo deba de pasar; lasalarmas se dispararon en forma deagresivas entrevistas, artculos en llamas, lafuria del director el telfono de Kosuthescupa azufre. La exposicin erareivindicativa: se solidarizaba con unmontaje anterior organizado en el mismomuseo de siete fotografas de RobertMappelthorpe. Fueron censuradas por unpresunto contenido homosexual.

    Kosuth sealaba con el dedo: la hipocresade una institucin que censuraba unasfotografas por considerarlas indecentes y

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    no tena problema en mostrar piezas anms erticas por ser parte de la Historia delArte. Kosuth titul su exposicin LoInnombrable.

    La censura contina en el 2012, aunqueparezca increble. Sala Gasco censur laexposicin individual de Pablo Ferrer pordos lienzos de contenido indecente. Yo hevisto una de esas obras; una mujer que sololleva unas medias puestas tumbada en unbosque. Pero no se ven ni los pechos, ni elculo, ni la vagina. Podra salir en losTeletubbies. Es deleznable, penoso que secensure una obra as. Y lamentable que lohaga una de las pocas empresas privadasque apoya el arte en Chile. Innombrable.Por solidaridad, la no-expo de Pablo Ferreres la mejor individual del ao.

    Con motivo de este artculo, lanc estamisma pregunta (cules son lasmejores/peores exposiciones individualesen Chile en 2012) a Justo Pastor Mellado;sta fue su respuesta.

    es que no hay ni peor ni mejoresa es la verdado seani da para peor ni para mejorsolo medianamediocridades un panorama realmente desolador

    no rescatas nada? ninguna expoindividual de un mnimo inters?

    es decirsi te digo que la de Leppees demasiado cercano

    lo peor: la Feria Faxxilo mejor: Cristbal Traslavia en el MAC

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    King Kong, Colectivo Casagrande, Hecho en Casa Primer Festival de Intervencin Urbana, Frontis Museo Nacional de Bellas Artes, 2012, cortesa Casagrande.

    2012: FUERA DE TIEMPO / FUERA DEESPACIO. ARTE, PBLICO EINTERVENCIONES URBANASEntre residuos minerales y la representacin liviana y hueca de Augusto Pinochet,las intervenciones urbanas pasan a formar parte de un repertorio cercano alpaisajismo sitico de la decoracin de jardines y al escaparate de una absurda yparticular juguetera. Sobre Out of Sync y King Kong.

    por Lucy Quezada

    enero 2013

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  • Crticas de Arte

    Si se piensa en la relacin entre el chilenomedio y el arte contemporneo, larespuesta cannica es la del desinters y elhasto de un pblico frente a algo de lo cualpoco y nada entendera. Sea este undiagnstico acertado o no, lo cierto es queexistieron dos botones de muestra dentrodel pasado 2012 que lo tocan. En elprimero aparece Tanza Varela, modelofarandulera que pasa de protagonista deromances futboleros y realitys a exhibir apartir de su meditica figura ladesvinculacin entre el arte y el pblicochileno. La compaa telefnica VirginMobile ser la responsable de hacerlaaparecer, al presentar en la contratapa dela edicin de junio de la revista del CentroCultural Gabriela Mistral institucin de laque la compaa telefnica era un recienteauspiciador la siguiente frase: Ms danza,menos Tanza.

    Varela dedic por Twitter varias cpsulas de140 caracteres, refirindose al arte chileno,su inscripcin en el mercado, su amistadcon la familia Benmayor, entre otras cosas.Pero los dichos ms llamativos al respectola modelo los expondr en una entrevistadada a The Clinic durante el mismo mes dejunio: Si los artistas siguen tan apartados,el arte se lo van a tener que meter por elhoyo. Algunos dirn ante tamao consejoque Tanza Varela tena razn(proyectotanza.tumblr.com). Otros, si bienno responden directamente a los dichos deVarela, s aparecen como una felizcoincidencia. Hablo aqu de la muestra queocup el Museo de la Solidaridad SalvadorAllende entre el 16 de agosto y el 3 deoctubre; la exposicin En Medio: Arte ySociedad que, bajo una curatora que armaun panorama de artistas chilenosemergentes y consagrados, buscareflexionar en torno al vnculo problemticoentre arte y sociedad.

    La costura de estos dos botones exhibeasuntos, problemas y encrucijadas quepodran leerse desde un trnsito primordial:el de este chileno medio desvindose de laruta tradicional de domingo hacia el mall,para terminar en lugares como un museo ogalera. Dejando aparte estas perspectivasilusas y romnticas, existen intentos queirrumpen en el espacio pblico parasituarse en los trnsitos cotidianos. Habloaqu de dos que funcionaron en un espacio-temporal comn. Un circuito de espaciosespecficos en un radio reducido de lacapital: el Museo Nacional de Bellas Artes, laCasa Central de la Universidad de Chile y elPalacio de La Moneda. Ambasintervenciones ocurrieron en noviembre,siendo paradjicamente simultneas.

    Seamos cronolgicos. Desde principios denoviembre, tras las vallas papales que

    frente a su inutilidad parecen adornar msLa Moneda que resguardarla el pasto querecubre la Plaza de la Ciudadana comenza sufrir una extraa mutacin: montculosde pasto emergan y un par de seores losregaban sagradamente todas las tardes. Lagente mira y los turistas, como siempre,toman fotos. Durante la tarde del 7 denoviembre el misterio de los montculos depasto se devel: cientos de flores crecieronsobre ellos, creadas por el escultor chilenoradicado en Londres desde 1997Fernando Casasempere. La intervencintitulada Out of Sync es trada a Chile porcortesa de la Direccin de AsuntosCulturales (DIRAC), la Fundacin SociedadNacional de Minera (SONAMI) y AntofagastaMinerals. Es decir, es pagada por el Estadode Chile y por el ala minera de labrillantemente emprendedora familiaLuksic.

    Out of Sync adems de estar fuera detiempo como refiere el ttulo- parece estartambin fuera de espacio. En una iniciativaque exhibe el peor ejemplo de lo quepodra llegar a llamarse un arte ecolgico,Antofagasta Minerals cede a Casasemperelos residuos procedentes de sus minas paraque con ellos el artista de forma a susesculturas que, en este caso, adornaronhasta el 30 de noviembre del ao pasadolos jardines de Palacio que dan a laAlameda. Paradoja impotente, si se piensaque esos mismos residuos son los que selanzan con toda licencia sobre los tranquesdel norte chileno, siendo la denuncia por eltranque Los Pelambres la msemblemtica. Paradoja trgica, s son floressecas las que adornan el jardn de Cecilia,pero ya no en ese martes 11 de septiembrede 1973; martes de horror al que le cantanLos Tres.

    Intervencin urbana? Escultura en elespacio pblico?: decoracin ABC1 pseudo-ecolgica, en el jardn de una duea de casaque pareciera querer expiar culpas con unaexhibicin que representa la alegra por laprimavera, el goce esttico y elaprovechamiento de los espacios pblicos.Cndidas e inocentes, ingenuas ydesmemoriadas. As son estas esculturalesflores residuales, totalmente fuera deltiempo y del espacio.

    Pero volvamos al mismo tiempo y al mismoespacio. Unos pasos ms all de LaMoneda, y luego de exactas dos semanasde la instalacin de las flores deCasasempere, un mueco inflable de diezmetros de largo con las caractersticas deAugusto Pinochet se instal en el frontis dela Casa Central de la Universidad de Chile.Esta intervencin estuvo a cargo delcolectivo Casagrande, famosos en todo elmundo por bombardear poemas desde lasalturas, en una especie de eterna cita alCADA (la ltima vez fue en los JuegosOlmpicos de Londres. La relacin entre

    Casagrande y Casasempere de nuevo tocaa Londres si se piensa en que Out of Syncfue pensada originalmente para los jardinesde la Somerset House de la misma ciudad,durante un concurso de intervencionesurbanas en el marco nuevamente de losJuegos Olmpicos del ao pasado). Duranteesa semana, el centro de Santiago fue elespacio de esta y otras intervencionesenmarcadas en el 1er Festival deIntervenciones Urbanas Hecho en Casa.

    King Kong ser el nombre dado por elcolectivo a la intervencin, argumentandoque en la figura del ya mtico gorila de lapantalla grande se encarna la toma delpoder por la fuerza, algo que representaratambin la figura del golpista AugustoPinochet en la historia de Chile. Extraoenlace de referencias, si pensamos que enKing Kong se encuentran ms encarnadossus captores que el mismo gorila, los cualespara causar furor en los espectculosnocturnos de Nueva York, quieren llevar a laciudad a una bestia salvaje, sacndola de latranquilidad de su hbitat para exhibirlacomo el trofeo que demuestra el poder y laomnipotencia del ser humano sobre unafuerza natural que parece incontrolable. Elmueco inflable tipo mono porfiadoinfantiliza el debate, al punto en quepodramos hacer a este King Kong desfilaren un evento como el Paris Parade, junto asendos muecos inflables de Tulio Trivio yHello Kitty.

    Inicialmente la intervencin fue pensadapara ocupar el Palacio de La Moneda y elMuseo Nacional de Bellas Artes. A esteltimo edificio lograr llegar, peronicamente para ser exhibido a un costadode la fachada, sin ninguna conexin nialianza con el Museo. Adems, los dibujospreparatorios de la artista polaca AgataRaczynska evidencian la diferencia entre elproyecto original y su ejecucin: el muecode 10 metros efectivamente subira al techode estos edificios, emulando a King Kongsobre el Empire State. Pero ni eso ltimoocurre, ni tampoco la llegada de esteenorme globo a La Moneda. Quizs entrelas flores de Casasempere y un muecoinflable de diez metros de un militar, elpaisaje se hubiera transformado realmenteen el jardn de una casa, en donde en vezde fuentes, esculturas y cermicas tipoBlancanieves y los 7 enanitos, se exhibe ladecoracin floral de la duea de casa y elabsurdo tamao del juguete de moda delmenor de la familia, que deja los soldaditosde plomo por un nico mueco hueco,gigante y lleno de aire.

    Entre residuos minerales y larepresentacin liviana y hueca de AugustoPinochet encarnado en un globo que debeser afirmado al piso por hilos para evitarque se escape, las intervenciones urbanaspasan a formar parte de un repertoriocercano al paisajismo sitico de la

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    decoracin de jardines, y al escaparate deuna absurda y particular juguetera. Entre ladecoracin artstica-ecolgica y el ltimogenocida de la historia de Chile hechomueco inflable, el ciudadano de a piequeda completamente fuera de tiempo yfuera de espacio, ante tamaasintervenciones que no irrumpen ni mediannada, sino que nicamente anulancualquier relacin crtica entre su existenciadentro de un paisaje urbano que encarna ala historia en edificios como La Moneda. Desoldaditos de plomo a un soldadote de aire,se interviene con mala conciencia la historiaantes que el espacio pblico.

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    Muro Y t, qu opinas?, Exposicin Grandes Modernos, Coleccin Peggy Guggenheim, Centro Cultural Palacio La Moneda, 2012.

    IMPORTADOS 2012. CINCOOBSERVACIONES A LOS QUERELLANTESDE PEGGY GUGGENHEIM EN CHILEPorque todos sabemos que la msica nunca suena tan bien como en el concierto,a pesar de que el gordo te empuje, el alto del frente te obstruya la visin alescenario y la gritona de al lado no te deje escuchar completamente y, sobretodo, porque en vivo pareciera que la escuchsemos por primera vez, pese ahaberlo hecho mil veces en el reproductor.

    por Carol Illanes

    enero 2013

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    Cuestiones de ponderacin

    Al recibir el encargo de enjuiciar la categorade las exposiciones internacionales tradasa Chile durante el ao 2012, lasimportadas, pensando en las opcionesinmediatas, no pude evitar recordar unaconversacin que tuve con Sergio Rojashace unos aos, relacionada con la eleccindel Premio Nacional de Literatura. Locontroversial del galardn era que sudisputa se llevaba en una inevitablepolaridad: Isabel Allende versus DiamelaEltit. l resuma los polares motivos por losque ambas lo merecan en una frase muysencilla, cuando Eltit ha creado escritores,Isabel Allende ha creado lectores.

    Muy cierto, pero lamentable, hacer ese tipode separacin nos empuja a un agujerocomplejo de otras polaridades bastantelimitantes; experimentalidad y artisticidadversus mercado y recepcin masiva,bsicamente. Pero hay una infinidad degrises entre el blanco y el negro, y tantosaos de lucidez sobre la administracin dela cultura si bien no le ha enseado anuestro pas a capitalizar sus recursos, sdebiera ensearle que entre arte ymercado la dupla cultura y economa dirFoster hay peculiares e infinitos traspasos.

    Cuestiones de incomodidad

    Lo interesante de hacer estos ejercicios dediagnstico y revisin es que contra nuestroinvoluntario y castrador pudor para ejercerla sancin de lo que es destacable y lo quees dbil (eufemismos para decir lo buenoy lo malo), a momentos dicha decisin seda casi por s sola, es decir, se nosaparecen, lo destacable y lo dbil, casicomo evidentes bajo una especie desentido comn. Por ende, lo que se depuraante la crtica no es ms que un ajuste decriterios, ya que las cosas estn ah y soloson subrayadas por los comentarios ms omenos astutos que de ellas puedendesglosarse. Y si en la crtica se juega algoesto es la capacidad de hacer verosmil elenjuiciamiento, cuya osada y, por lo tanto,seduccin, ser sin embargo inversamenteproporcional a lo lejos o cerca que est deese sentido comn.

    Pensaba en las exposiciones Movimientosde Louis von Adelsheim y GrandesModernos de la Coleccin de PeggyGuggenheim, pero evidentemente algo noencaja al compararla con la sensata frasede Rojas. El valor intelectual o esttico de laproduccin en general se ha visto mermadouna y otra vez en el campo local, cuandocualquier ndice de aceptacin masiva afloraen los eventos de arte. Miedo alespectculo, miedo a lo simple, miedo a loamable, miedo a lo conocido, comoresultado del esnobismo aldeano del

    circuito nacional del que hablaba Mosquera,en forma de una desconfianza ydisconformidad a priori.

    Y esos miedos se manifiestan en un viciorecurrente: el rechazo inmediato aldespilfarro. Fue el caso de la premiadacomo mejor exposicin internacional por elCrculo de Crticos de Arte, la de Adelsheimen el Museo de Arte Contemporneo de laQuinta Normal, la cual antes de serevaluada segn su inscripcin local o segnlos lenguajes mediales puestos en tensincon contenidos polticos especficos, fueevaluada por muchos respecto a cmo todoeso le haca o no justicia a la inversin delcapital puesto all. Es por lo menos graciosoque incluso la mirada cientfica de losentendidos en artes visuales haya sidocapturada, por ejemplo, por el conteo delnmero de proyectores por sala. Laostentosidad resulta a ratos extraamenteindigerible en nuestro pas, por qu esaespecie de culpa frente a la ostentosidad?pudor?, resentimiento?, envidia? Algunaspersonas tambin decan en el ao 72durante la construccin del edificio de laUNCTAD III y quizs cuantas casas podranhaberse construido con el dinero invertidoen esa cuestin.

    They love Peggy

    Pero si lo de Adelsheim, por este motivo,quizs no sea el Diamela Eltit de lasexposiciones internacionales del pasadoao (pese a su contemporaneidad)definitivamente Grandes Modernos en elCentro Cultural Palacio la Moneda, es elIsabel Allende.

    En trminos econmicos, el beneficiodirecto de la importacin es que el ahorroque implica el traslado del producto para eluso interno sirva a la estrategia de inversinde esos capitales restantes. Pero qudesalentador sera comenzar a estimar estorespecto a la exposicin internacional mssignificativa del ao (suspendo la deRembrandt en Las Condes por suaislamiento, y Agenda Santiago tambin dela Quinta por ser ms in situ queinternacional). En suelo latinoamericano porprimera vez desde Venecia, la coleccin quetrae 170 obras entre pinturas, esculturas,fotografas y documentos (con laincorporacin de piezas del Guggenheim deNueva York) deposita en el subterrneo delCCPLM por casi cuatro meses el patrimoniodel arte moderno de una de lascoleccionistas ms importantes del arteuniversal. Argan, Gombrich y de Michelipara recorrerse en una tarde.

    Peggy Guggenheim sera de esospersonajes que creemos saber como

    fueron, pero de los cuales en realidadllenamos tambin con nuestras infantilesfantasas sobre el arte y la vida de esosaos, inevitable de alguien cuya apuestahilvanaba el devenir de la vanguardiaeuropea. La heredera viaj, admir, aposty padeci en funcin a ella. Y por supuestocompr, compr y compr. Toda su vida.

    En cierto sentido, Grandes Modernos estambin una oda al mecenazgo, en lostiempos en que cualquier tipo demecenazgo es abiertamente rechazado, yen especial ac. La distancia histrica alparecer autoriza esa contradiccin. Por unlado, nos dejamos cautivar por la vida deesta mecenas, este personaje clave en lainscripcin de los nombres de lamodernidad artstica pero, por otro,trasladado al hoy en una importacin,cuando ese concepto es desterritorializadoy desnudado en base a capitalesdeterminados, cuyo funcionamiento esaltamente visible y conocido hace variosaos, nos escandaliza la relacin que aquChile tiene con la inversin. Lo menciono apropsito de la infinidad de comentariosque me ha tocado escuchar sobre cmo seinstal la exposicin, sobre la precariedaddel recinto, el tono didctico, etc. Noscuesta aceptar que ese es el tipo deinversin escogida.

    Y la tendencia pedaggica que adopta unaexposicin de este tipo, si bien tienerelacin con el contexto institucional en elque se estaciona, a la larga se relaciona conuna cuestin estructural. An as, es esoreprochable? O ms bien, inevitable? Si nopodemos tener estudiantes de enseanzamedia con una sensibilidad artstica comoquisiramos, al menos podemos aspirar aque tengan un Picasso o un Kandinsky ensus narices. Y algo, lo que sea, pasar all. Afin de cuentas, casi nadie va aprender algode arte, ni en el colegio, ni en un centrocultural: se espera que otra cosa pase encambio. Pero no sabemos muy bien qu, nicmo.

    Y mientras tanto el artemoderno

    Por otro lado, est de ms decir que unaexposicin as aparte de estar repleta dejuicios preconcebidos, est sumida en unmar de predisposiciones. Como yendo aFantasilandia, uno ms o menos intuye a loque va; sabemos que deberemosdetenernos un momento en el Pollock, elMalvich y el Magritte; y otro tanto en elDuchamp y el Vasarely. Justo y necesario.Quien lo niegue estar mintiendo.

    Sin embargo, y casi sin darnos cuenta,contra el excepticismo y a favor de lasauratizantes expectativas, sin querer, esmuy probable que nos magneticen las

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    costras y los raspados de Ernst; nosconfunda la incorprea liviandad alrededorde las curvas del Boccioni; nos aturdir laestoicidad de van Doesburg y nosesforzaremos un poco para ver el mundo atravs de los ojos porfiados de Mondrian;los rostros de las fotografas nos hablarnde algo, nuevamente, sobre elenardecimiento de la poca como parteineludible del repaso de esa todavainacabada historia de desfragmentacin delmundo, mediante operaciones pictricas.Aqu solo jugaremos a ver cmo esadeconstruccin va tomando formas, lasformas del asesinato y la infinitaresucitacin de la representacin, lasformas del fin. Y as, esa universalidad, tanodiada poltica y discursivamente, sernatural que nos calme, solo por una tarde.

    Pare de sufrir

    S, San Pollock y San Duchamp, como lesdeca Sebastin Leyton, debieron pasar porla tierra (parafraseando a Heidegger) y enese camino, claro, vemos las limitacionespara acogerlos.

    Pero, independientemente de las paredesfalsas y los tabiques al aire de las salas, delmolesto tono wikipdico de susdescripciones en la fichas y muros, de lasfotos del presidente y la primera dama en lainauguracin y las cacofnicas coberturasde la prensa chilena, tendramos que darleel premio al Isabel Allende. Porque creoque lo que aparece de Chile en el guardia-gua discriminador que te recuerda que nopuedes entrar con mochila una vez que yahas bajado al nivel-3 (como dice la crticade losdiez.net de Grandes Modernos,sagazmente titulada Crtica a GrandesModernos, y de la cual no podra estar msen desacuerdo) es algo cuyaresponsabilidad cala mucho ms hondo, ynos duele tanto y est tan presente en losespacios locales cuando invierten en estaclase de exposiciones, que es difcildepurarlo de eso para otorgarle algn tipode reconocimiento.

    Cuestin paradjica si pensamos en quecuriosamente esos detalles no le molestanen absoluto a la mayora del pblicovisitante. El asunto es que la siemprepresente precariedad que tanto nosavergenza, no le compete a Brancusi, ni aBraque ni a Giacometti. Y no cambiar portener mejores o peores cuidadores (quepor lo menos tiernamente repiten frasescomo el flash daa las obras) porque nocambiar nada al corto plazo, como a todosnos gustara.

    Adems siempre puedes mentirles diciendoque eres alguien importante si no quierespagar la entrada porque crees que no lovale, hacerte pasar por crtico de arte, por

    ejemplo. Si no, de todas formas, mil o dospesos no es tanto dinero, porque todossabemos que la msica nunca suena tanbien como en el concierto, a pesar de queel gordo te empuje, el alto del frente teobstruya la visin del escenario y la gritonadel lado no te deje escucharcompletamente y, sobre todo, porque envivo pareciera que la escuchsemos porprimera vez, pese a haberlo hecho mil vecesen el reproductor.

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    Alejandra Prieto, Relacin de aspecto, 2012, cortesa Sala de Arte CCU.

    VICIOS Y TRIUNFOS, LO MEJOR Y LO PEORDE LOS PREMIOS Y CONCURSOSEl pie forzado hace omitir, tal como los concursos terminan solo hablando de losgalardonados. En lo mejor y lo peor de los concursos quisimos ir ms all delpremio y centrar la mirada en las gestiones que hacen de un premio, beca oconcurso, un aporte o una devaluacin de las obras, sus procesos y el desarrolloque, finalmente, se quiere para el arte local.

    por Daniel Reyes Len

    enero 2013

    Lo Mejor: becas de apoyo aproyectos y seguimiento deartistas

    Lo mejor de todo es que se est ampliandola cantidad de concursos y premios de arteque permiten hacer circular las obras y losartistas. Es importante destacar que lamodalidad de premio o concurso es algoque, hecho con suficiente esmero yatendiendo los vaivenes del contexto, ha

    permitido la entrada de empresas yorganizaciones privadas que anteriormenteno tenan una participacin en el impulso yapoyo del arte contemporneo. En estesentido, la masa crtica ya ha asumido laasociacin del arte con una marca, y stasltimas han prestado ms atencin a losrequerimientos propios del quehacerartstico contemporneo.

    Si bien esta asociacin data desde hacemuchos aos, podemos ver que iniciativas

    municipales, de museos, ferias o empresasprivadas, as como becas, se hanconsolidado como una plataforma dondelos artistas sin dejar de desarrollarproyectos pueden crear un canal deinsercin en la escena local, sin necesidadde pasar por las programaciones degaleras o espacios de arte. En muchoscasos, el premio es la misma exhibicin y laproduccin de sta; en otros, el ganadoraccede a beneficios de produccininexistentes en el pas.

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    En este sentido comenzar por destacar elpremio bianual de la beca CCU, el cualevidencia una gran preocupacin, previa ahacer pblico el concurso, por disear unaestrategia completa de promocin para elartista ganador. La primera beneficiada, ycon justa razn, fue Alejandra Prieto, quinen diciembre de 2012 nos presentRelacin de Aspecto, muestra realizada enla sala de Arte CCU y que desarrollpatrocinada por esta beca, luego de residiren Nueva York durante ms de tres meses.Si bien debo remitirme a hablar de losconcurso en s, el hecho que el premio de labeca CCU implique una residencia y unaexposicin en Nueva York y otra enSantiago, permite articular un itinerariopara el artista, estableciendo un precedentepara que no solo se premie una obra demanera estacionaria, sino como un modode apoyar y promocionar el desarrollo deun proyecto.

    Hasta hace poco tiempo, las nociones conlas cuales se basaban los premios de artelocal estaban dadas por un rditonetamente econmico. En algunos casos secompra la obra, en otros se entrega unacantidad de dinero. Sin embargo, lapropuesta de CCU, muy similar a la becaAMA que tambin sumo a lo mejor de losconcursos y premios, y consiste en unabeca de residencia y produccin auspiciadapor Juan Yarur y el Museo de ArtesVisuales establece un vnculo deproduccin, acogiendo al artista ganadorpara ser apadrinado durante un perodo, yno solo a nivel econmico, sino dndoleacceso a circuitos de circulacin nacionalese internacionales.

    El diseo general del premio beca CCU es,desde mi punto de vista, lo ms destacabledel ao 2012 y, si bien esto se vienegestando desde el 2011, hoy, ante hechosconsumados, podemos ver que se trata deuna modalidad arriesgada, pero que hadado sus frutos y ha apoyado a unaexcelente artista. Del mismo modo esinteresante destacar al segundo y a losterceros premios de este concurso. IsidoraCorrea, quien entre marzo y mayo de 2009present la instalacin Reserva en la salaCCU, as como Soledad Pinto y GianfrancoFoschino el tercer premio compartidoartistas que estn cumpliendo a cabalidadcon el hecho de haber sido en algnmomento promesas.

    Lo Peor: la endogmia

    Lo peor de los concursos implica una tramams compleja, vinculada a las esferasacadmicas y asistenciales del arte, ascomo lo que mencion en el texto post-curatorial del nmero anterior dearteycritica.org como la nueva definicin dela tica artstica establecido a partir deldominio de la irona. Si bien no tengo

    ningn reparo con las obras ganadoras del7 Premio de Arte Joven del Museo de ArtesVisuales (MAVI) y Minera Escondida, meparece poco astuto y que no le hace honoral trabajo de los artistas ganadores, queambos hayan sido ayudantes en mbitosacadmicos y de taller de CristinSalineros y Alicia Villarreal, stos ltimos,quienes oficiaron de jurado en el concurso.

    Debo recurrir a mi propia experienciacuando fui a la inauguracin de la muestra,donde lo primero que me dicen, antes desiquiera entrar, fue que los ganadores son ofueron ayudantes de los jurados. Enprincipio lo archiv como el tpicoresentimiento de quienes no ganaron, peroluego me percat que casi todas laspersonas vinculadas de uno u otro modo alconcurso, saban de esta situacin,argumento por el cual devaluaban a lostrabajos ganadores, a los artistas y a todo elentorno del concurso en s. Me parecelamentable que el trabajo de artistas conmuchsimo potencial y con una obraconsistente, sesuda y, en el caso de la obrade Leonhardt Pasos en Falso, muyacuciosa en la observacin de la culturacomo un espacio ampliado de reflexin, sevea empaado por esta endogamia propiade una novela de lo real mgico.

    A mi parecer, las obras comenzaron a tenercola de cerdo y, como en toda endogamiafamiliar, se acercaron al retardo mental quecaracteriz a las monarquas europeas delmedioevo. Sin ms, y con el riesgo de hacerpublico algo que nace como copucha, peroque termina por ser determinante paraconocer nuestra escena local, me pareceque estos favores son lo peor de losconcursos de este recin pasado 2012.

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    Nicanor Plaza, Eplogo, 2012, cortesa MNBA.

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    COMPENSACIONES MUSEALES. SOBRELAS RETROSPECTIVAS DE NICANOR PLAZAY DINORA DOUDTCHITZKYPlaza en el MNBA y Doudtchitzky en el MAC, fueron muestras tan desequilibradascomo la desigualdad presente en una lectura comparativa entre ellas. Un tramade aciertos y desaciertos, que no pasa por las obras sino por decisionescuratoriales, museogrficas y de produccin, que se hilvana ms con lasinstituciones que con los artistas.

    por Matas Allende

    enero 2013

    El ao recin pasado present, tal vez comonunca antes, una cantidad de muestras enespacios muchas veces no reconocidos ycon tcticas de visibilidad algo novedosas,sin embargo, en la mayora de los casos,infructferas. S, pareciera ser que lainfraestructura que otorga lainstitucionalidad cultural contina siendo elespacio reconocible y accesible para unpblico que no se relacionafrecuentemente con las artes visuales. Sontambin estas instituciones las que,respondiendo al cometido republicano queles impulsa, evidencian la historia de laplstica nacional, tejiendo el telar de laproduccin visual de Chile, lo que seagradece.

    La tarea de conformar un discursohistoriogrfico del arte nacional no pasa,solamente, por renovar y exhumar cuerposde obra de perodos distintos y distantes.Lo anterior, por supuesto, suena dePerogrullo; pero sin embargo, solo suena.Pues no enfrascndome en la tpicaprrroga de una nueva y constanteproduccin de literatura en la disciplina, esla disposicin de las obras, nuevamente,bajo miradas reflexivas y museogrficasnovedosas, lo que da frescura a losdestacados pero muchas vecesdesconocidos exponentes de la plsticanacional.

    Una de las tareas de los museos esactualizar y visibilizar sus colecciones. Laspiezas elaboran discursos sobre estasmismas instituciones y configuran lasrelaciones que operan en los organismosconstituyentes, su magma primordial, loprimero, lo fundacional. Los dos museosms importantes de nuestro pas, el MuseoNacional de Bellas Artes (MNBA) y El Museode Arte Contemporneo (MAC), son

    poseedores de colecciones riqusimas quepocas veces tenemos la suerte deatestiguar (ello por la carencia de uncatlogo razonado que permita elconocimiento cabal de las obras enpropiedad, lo que nos coloca en el peligrosolugar de los supuestos).

    Pero volviendo a lo que nos convoca,ambos museos prometieron durante el aopasado dos muestras retrospectivasimportantes, la de Nicanor Plaza en elMNBA y la de Dinora Doudtchitzky en elMAC sede Parque Forestal. Ahora bien,fueron las expectativas satisfechas?, lacalidad de las muestras logra conquistar aun pblico no cautivo de las instituciones?, yfinalmente Plaza o Doudtchitzky recibieronlos laureles meritorios dentro de lasmuestras acontecidas este ao?

    Entre el 18 de mayo y el 29 de julio, con casi30 piezas, se iniciaba la primera y msgrande retrospectiva del padre de laescultura chilena, Nicanor Plaza. Maestrode escultores. La curadura de FranciscoGazita y Pedro Zamorano estuvo centradaen demostrar la versatilidad en el uso de losmateriales del escultor y la gran laborpedaggica que tuvo en la Academia deBellas Artes (entre sus estudiantes secuentan Virginio Arias y Simn Gonzlez),un objetivo donde la participacin en lamuseografa del arquitecto Jos Prez deArce fue radical. Casi paralelamente, con unmes de desfase y siguiendo la poltica derescate patrimonial de los grandesgrabadores nacionales, el Museo de ArteContemporneo inaugur DinoraDoudtchitzky. El imaginario persistente.Nuevamente, la primera retrospectiva a laartista de origen ucraniano radicada enChile, ayudante de Nemesio Antnez, unade las fundadoras del Taller 99, maestra enel uso de la tcnica Hayter, es decir, una

    pieza fundamental en el desarrollo delgrabado en Chile, sin embargo, unaabsoluta desconocida. 19 pinturas y 95grabados conformaron esta exposicin queocup prcticamente todo el segundo pisodel MAC.

    Independiente del carcter curatorial quese imprimi con mayor fuerza en unamuestra que en la otra, es el peso de lapalabra retrospectiva lo que nos interesa.Una exposicin de carcter histrico dondese pretende evidenciar el desarrollo delartista, de su produccin acompasada conla vida del mismo, una suerte de lecturatestimonial desde las obras para el ejecutor,nudo que me gustara rescatar y queretomar enseguida. Tambin, hay quetener en cuenta los datos entregados por eldiario El Mercurio el 16 de diciembre del2012 que, en una suerte de recuento,comentaba la cantidad de visitantes quetuvieron las instituciones culturales. Enaquel artculo se seal la cantidad depblico y las muestras ms visitadas deambas instituciones, es as como el MNBAes uno de los museos con mayor cantidadde visitas en el pas; mientras el MAC,destacaba por ser el caso contrario, lossantiaguinos van poco, ms si pensamosque dicho museo tiene dos sedes.

    En lo anterior radican dos problemas, pues,si como muestras retrospectivas sondispares, son tambin dismiles en sucapacidad de captar pblico. Nicanor Plaza.Maestro de escultores fue una muestrainteresante, con una cuidada puesta enescena, donde las piezas Prlogo y Eplogoadems de Quimera, estaban dispuestascon un sensual juego de luces, lo quepermita que cada ngulo y detalle en elmrmol emergiera y que, a su vez, hicieraque el espectador acondicionara su miradapara contemplar mil veces las obras.

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    Destacaba tambin una reconstitucin delmtodo de Plaza para realizar su pieza msfamosa, el Caupolicn, lo quedidcticamente fue acertado(fundamentalmente para estudiantes deescultura e historia del arte). Sin embargo,como retrospectiva no funciona que elmuseo disponga 30 piezas de un escultorinagotable, deja gusto a poco. Tratar dereconstruir su vida, obra y relaciones quedaal debe.

    Por el otro lado, Dinora Doudtchitzky. Elimaginario persistente fue una experienciade descubrimiento con una artistainteresantsima. Sus unidades csmicas nosproyectaban un imaginario tan lejano comorico, al igual que sus ciudades fantsticas,las cuales eran mapas de urbanizacionesdonde la artista mezclaba una iglesia deOdessa, con un barrio de Buenos Aires y lasavenidas de Santiago. Adems de un uso dela tcnica Hayter como poca gente lo halogrado. Una vida de produccin einvestigacin que se dispone all,hermosamente, permitiendo hurgar en laobra de Dinora.

    Retomando el maldito problema del acceso,qu paso aqu? No digo que la muestra deNicanor Plaza haya sido un completofracaso, pero como retrospectiva nocumpli todas las expectativas que gener,mientras que Dinora Doudtchitzky, s. Perolos claros problemas de captacin deaudiencia en el MAC no permiten visibilizaruna exposicin y artista de gran calidadreconociendo la desventaja queDoudtchitzky es mucho menos conocidaque Plaza. El problema no radica en lamuestra, sino en general con el museo.Dando la vuelta al edificio, Maestro deescultores super las expectativas de lainstitucin, pero se cae justamente en lainfraestructura y disposicin de recursos.En ambos casos, no gana ni pierde nadie,slo se sacan lecciones: ambos museospresentaron falencias cuando expusieroncolecciones capitales. Para concluir, quedaclaro que las retrospectivas comopropuestas museogrficas necesitan msrecursos, tanto para la disposicin de lasobras como para la captacin de pblico.En este caso Mies van der Rohe seequivoca: no es cierto que menos es ms,menos es menos, y ms es ms.

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    IndiceLa crtica picaresca en un mundo post-apocalptico o lo mejor y lo peor del 2012El espacio y el cuerpo de la tortura: algunos casos de su representacin artstica en Latinoamrica (Primera parte)Trabajo en equipo. Sobre las muestras colectivas del ao 2012Amores y desamores de la crtica: la produccin pictrica del 2012 en la escena localLo Innombrable: Las mejores y peores exposiciones individuales2012: Fuera de tiempo / Fuera de espacio. Arte, pblico e intervenciones urbanasImportados 2012. Cinco observaciones a los querellantes de Peggy Guggenheim en ChileVicios y Triunfos, lo mejor y lo peor de los premios y concursosCompensaciones museales. Sobre las retrospectivas de Nicanor Plaza y Dinora Doudtchitzky