abdominales fuertes

2
Con los abdominales hipopresivos conseguirás unos abdominales tonificados y reducirás cintura, sin hacerte daño. La gimnasia abdominal hipopresiva (GAH) es una técnica desarrollada por el doctor Marcel Caufriez en los años 80. En los últimos años se ha generalizado por los numerosos beneficios que aporta al organismo y por su capacidad para reducir la cintura. La diferencia de la GAH respecto a los abdominales tradicionales es que su práctica disminuye la presión de la cavidad abdominal, evitando que se debilite la musculatura de la faja abdominal y del suelo pélvico. También se reduce el riesgo de lesiones de espalda (cervicales y lumbares) que pueden producir los abdominales convencionales. Los beneficios son visibles en dos meses de práctica regular. Veinte minutos, dos días a la semana, tonifican la faja abdominal, minimizan la compresión de las vértebras y mejoran la curvatura lumbar y cervical. Pueden reducir hasta un 9% del perímetro de la cintura. Además, su capacidad para fortalecer el suelo pélvico los hace especialmente indicados para las mujeres. Pero no es una tabla de gimnasia al uso. Mejor si te inicias con un profesional que te ayude a dominar las dos claves de los hipopresivos: la respiración y la postura.

Upload: adriva67

Post on 25-Dec-2015

13 views

Category:

Documents


1 download

DESCRIPTION

Ejercicios para fortalecer el abdomen

TRANSCRIPT

Page 1: Abdominales fuertes

 

Con los abdominales hipopresivos conseguirás unos abdominales tonificados y

reducirás cintura, sin hacerte daño. La gimnasia abdominal hipopresiva (GAH) es una

técnica desarrollada por el doctor Marcel Caufriez en los años 80. En los últimos años

se ha generalizado por los numerosos beneficios que aporta al organismo y por su

capacidad para reducir la cintura. La diferencia de la GAH respecto a los abdominales

tradicionales es que su práctica disminuye la presión de la cavidad abdominal,

evitando que se debilite la musculatura de la faja abdominal y del suelo pélvico.

También se reduce el riesgo de lesiones de espalda (cervicales y lumbares) que

pueden producir los abdominales convencionales.

Los beneficios son visibles en dos meses de práctica regular. Veinte minutos, dos días a

la semana, tonifican la faja abdominal, minimizan la compresión de las vértebras y

mejoran la curvatura lumbar y cervical. Pueden reducir hasta un 9% del perímetro de la

cintura. Además, su capacidad para fortalecer el suelo pélvico los hace especialmente

indicados para las mujeres. Pero no es una tabla de gimnasia al uso. Mejor si te inicias

con un profesional que te ayude a dominar las dos claves de los hipopresivos: la

respiración y la postura.

Hay diferentes posturas para conseguir el mismo efecto: favorecer la hipopresión

abdominal. Toma buena nota de la secuencia. Con los pies paralelos y las rodillas

Page 2: Abdominales fuertes

semiflexionadas, estira la columna, el cuello y las cervicales. Pon la barbilla hacia

dentro, generando el efecto de doble mentón. Abre los brazos a la altura del pecho, sin

subir los hombros y empuja con los codos hacia el exterior. Inicia la secuencia de la

respiración.

3 Posturas para hacerlos

1. De pie con los pies paralelos: a la altura de las caderas. Con los brazos a la

altura del pecho espira todo el aire. Sube los brazos y, en apnea, mete el abdomen.

Mantén la postura 8 segundos e inspira de nuevo.

2. Sentada repite la secuencia: primero con los brazos en el centro espira, y luego

en apnea sube los brazos y mete el abdomen. Puedes sentarte en una silla. Si usas un

balón, trabajas también el equilibrio.

3. Tumbada sobre una esterilla: coloca primero los brazos a la altura de la cadera y

espira. Luego, sube los brazos a la altura del pecho, separando bienlas escápulas y, sin

respirar, comprime el abdomen hacia dentro. Mantén 8 seg.

 

¿Lo estás haciendo bien? ¡Compruébalo!

1. Escápulas: Al abrir los brazos con una postura relajada debes notar cómo se separan

las escápulas.

2. Subir ombligo: Para lograrlo, debes vaciar todo el aire, abrir las costillas y subir el

ombligo. Aguanta así sin respirar 10 segundos.

3. Peso en los pies: Nota cómo se traslada todo el peso del cuerpo a la punta de los

pies, sin subir los talones.

 

¿Cómo respirar bien?

En la mayoría de los ejercicios convencionales se usa la respiración para ayudar a la

contracción muscular. En la técnica de la GAH se trabaja en apnea, “sin aire”. Toma

buena nota de la secuencia.

1. Inspira y coge aire: Primero, coge aire, inspirando durante 2 segundos.

2. Vaciar, en apnea: Después, realiza una espiración forzada, soltando todo el aire

por la boca durante 4 segundos, como si quisiéramos apagar las velas de un pastel. Ya

tienes los pulmones sin aire, en fase de apnea.

3. Esconder el abdomen: Siente la sensación de estar “envasada al vacío”. Cierra la

glotis y abre las costillas como si quisieras volver a respirar, pero recuerda, no puedes

coger aire. Con ello, provocamos que se esconda el abdomen y asciendan las vísceras.