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UNIVERSIDAD VERACRUZANA Instituto de Investigaciones Histórico-Sociales
Doctorado en Historia y Estudios Regionales
Estrategias y redes de los empresarios textiles de la Compañía Industrial de Orizaba S.A. 1889-1930
Tesis que para obtener el título de Doctor en Historia y Estudios Regionales:
Presenta Mtra. Erika Yesica Galán Amaro
Director de tesis: Dr. Feliciano García Aguirre
Xalapa, Veracruz, Agosto 2010.
ii
A mi asesor: Por su paciencia y conocimiento
A mis maestros:
Por sus enseñanzas
A mi familia, compañeros y amigos Por su apoyo incondicional
Y a todos los que contribuyeron a que logrará esta meta
iii
INDICE Introducción 1 Capitulo 1. Experiencias historiográficas 10
Miradas Nacionales 12 Miradas Regionales 27 Empresarios barcelonnettes 53 Consideraciones teóricas 59
Capitulo 2: Importancia de una red 68
Comerciantes 72 Fundación de la Cía. Industrial de Orizaba SA (CIDOSA) 81 Sociedades fundadoras 93 Los principales socios 116 Redes de negocios 123
Red de negocios interpersonal 135 Red de negocios interinstitucional 138
Capitulo 3: Estrategias de los empresarios en CIDOSA 148
En la producción 150 Principales fábricas y compañías textiles en México 150 Recursos 166
Agua 166 Procesos de trabajo 178 Patentes 186
En la comercialización 190 Marcas. 190 Redes de distribución 196
Laborales 203 Salarios y el papel del Estado 203 Prestaciones y seguridad social. 210
Financieras 214 Inversiones y rendimientos 214 Dividendos y capital 221
Capitulo 4: Efectos regionales 230
Importancia de CIDOSA 233 Industria textil de algodón 233 CIDOSA en el Valle de Orizaba 244 Derrama económica 250
Un acercamiento a la urbanización de Orizaba 256 Conclusiones 266
iv
Bibliografía 274 Fuentes: 284 ANEXOS 285 Anexo A. Datos sobre la Industria textil Nacional 1917-1933 286 Anexo B. Maquinaría 287 Anexo C. Salarios 300 Anexo D. Balances 343 Anexo E. Resultados del Primer censo industrial, 1930 344 Anexo F. Datos de la industria textil de algodón en los Estados 347
en México, 1926-1939.
1
Introducción
Las primeras organizaciones consideradas empresas en Occidente fueron
las ferias y las bolsas de mercancías, o ferias permanentes como la de la ciudad
de Brujas. En éstas se podía contratar mercancías, valores y títulos. Los primeros
comerciantes diversificaron sus actividades en comercio al menudeo, posesión de
minas, propiedades rústicas, créditos a artesanos, municipios y hasta en la
monarquía. Algunas, como las compañías marinas holandesas, en el comercio
internacional.
Sin embargo, a pesar de esa diversidad, algunas empresas se
especializaron en el comercio de lana, hierro, trigo, tejidos y otras mercancías. Los
primeros comerciantes fueron dueños, gestores y administradores de sus
negocios. Fue a partir del siglo XVI que contrataron comisionistas para realizar
tratos ajenos.1
En lo que respecta a las unidades productoras, éstas se organizaban como:
A. Industrias domésticas y familiares2, en las que se producían artículos no
agrícolas para el autoconsumo. B. Talleres artesanales, en éstos los aprendices,
oficiales y maestros elaboraban artículos textiles, metales, cuero, alimentos,
artículos de construcción y de madera para vender en el mercado. C. Industrias
concentradas, como en el caso de la industria de la seda, la porcelana o de
barcos, en éstas y debido al alto costo de su materia prima, el secreto de sus
diseños, o por las dimensiones de su operación, los bienes debían elaborarse en
un mismo taller o edificio, bajo la vigilancia de un director. D. Industrias rurales (a
domicilio), en las que un empresario mercader repartía las materias primas en
1 García Ruiz, José Luis (Coor.).Historia de la empresa mundial y de España. Serie Historia Económica.
Editorial Síntesis, España, 1998. Capítulo 1 y 2, pp. 15-67. 2 En la literatura económica se ha confundido la firma familiar con una empresa pequeña y/o artesanal, pero lo
importante no es el tamaño de la firma, sino la distinción entre propiedad y control. Se dice que una empresa
es propiedad familiar cuando un porcentaje suficiente de socios con derecho a voto tiene vínculos familiares
(sanguíneos o políticos). Se dice que una empresa está controlada de forma familiar cuando el gerente
general, ejecutivo en jefe, y/o las posiciones claves de dirección son controladas por miembros que pertenecen
a una familia. Los miembros de la familia que pertenezcan a la empresa como socios o directores no
necesariamente deben ser la mayoría, pero sí los que tengan el mayor poder de decisión (Casson, Mark. “The
family firm in analysis of the dynastic motive” en Casson Mark. Enterprise and leadership: studies on firms,
markets and networks. Cheltenham Edward Elgar, 2000, pp. 197-235).
2
diferentes hogares, para que las trabajarán. Posteriormente, recogía los productos
que él mismo comercializaba en la región.
Con el desarrollo de sistemas legales e institucionales que permitían la
asociación de capitales (como el Código de Comercio napoleónico de 18073), el
desarrollo de algunos medios de transporte y comunicaciones -el telégrafo y los
ferrocarriles (1820-1850)-, pero sobre todo con el impulso de la primera
Revolución industrial (en Inglaterra a finales del siglo XVIII), se generó un nuevo
tipo de empresa, mecanizada, con grandes instalaciones, un gran número de
obreros, con múltiples departamentos y técnicas especializadas de contabilidad,
almacenaje, distribución, y concentración de los procesos productivos en un solo
edificio. Es decir, el sistema centralizado de la fábrica moderna, o gran empresa.4
Las primeras grandes empresas modernas en el mundo fueron las compañías
ferroviarias, mineras y de textiles de algodón. Las compañías ferrocarrileras desde
sus inicios necesitaron grandes sumas de capital y miles de trabajadores para
operar y dar mantenimiento a las vías y a los vagones de los trenes. También
requirieron de supervisores y directores de tiempo completo para controlar y
coordinar el trabajo de los empleados operativos. Además, en el terreno de la
administración, necesitaron innovadores procedimientos contables y de control
interno, así como nuevas estructuras organizacionales.
Las compañías ferroviarias fueron algunas de las primeras en crear las
jerarquías administrativas, introducir organismos asesores y establecer la división
de funciones en departamentos más especializados: control de tráfico,
mantenimiento, almacenes de materiales, contabilidad de costos y finanzas.5
3 El código napoleónico identificaba tres tipos de sociedades: la sociedad colectiva, donde todos los socios
son responsables de las deudas y gestión de la empresa; la sociedad comanditaria, en la que algunos socios
aportan el capital, pero no participan en su gestión, y la sociedad anónima, constituida por accionistas con
responsabilidad limitada. Sin embargo, desde el siglo XVI ya encontramos la figura de la commenda (donde
varios socios se agrupan por un tiempo determinado y negocio concreto, aportando dinero o capital, y siendo
responsable sólo por el capital aportado), la compagnia (donde varios mercaderes crean una sociedad con u
fin y un periodo de años concreto, cada uno aporta un determinado capital y participa en la gestión de la
compañía) y las compañías por acciones. (García Ruiz, Op.cit. 1998, pp.21-23,52-53). 4 Idem, pp. 15-67.
5 Chandler, Alfred D. La mano visible: la revolución en la dirección de la empresa norteamericana. Tr.
Ángeles Conde. Madrid, Ministerio de Trabajo y Seguridad Social, 1987, p.131.
3
En el caso de la minería, es posible identificar innovaciones de capitalización y
organizacionales en los inicios de la Revolución Industrial. El crecimiento de la
demanda de carbón hizo que fuera necesario aumentar el tamaño de las minas,
con un mayor número de máquinas, la construcción del ferrocarril para transportar
personas y materiales, numerosos obreros, y una compleja estructura
organizacional con mandos medios.
En cuanto a la industria textil algodonera, constituyó uno los primeros
sectores que se mecanizó, debido a la producción artesanal que existía en esa
rama, y porque los primeros inventos de la Revolución Industrial eran aplicados en
ella (telar mecánico, 1785, la lanzadora volante, 1733, hiladora mecánica, 1764-
67, etc.). Es importante señalar que las primeras empresas textiles en su mayoría
fueron de tamaño medio (entre 100 y 200 obreros). Requirieron poca
capitalización por la sencillez de las primeras máquinas de hilado y tejido y fueron
familiares, no había una clara división entre la propiedad y la dirección. Asimismo,
en ellas el dueño fungía como administrador. Los familiares eran los empleados
directivos, y se confundían las estrategias empresariales con las familiares. Por
ejemplo, eran frecuentes los matrimonios para expandirse.
Las primeras empresas textiles no requirieron grandes capitales. Cuando
esto se hizo necesario, los empresarios usaron la reinversión de sus ganancias, el
préstamo de redes de amigos, familiares, o el contrato de créditos a corto plazo
con alguna institución financiera. Manchester fue de las primeras regiones que
desarrolló fábricas textiles movidas por maquinaria. No obstante, el proceso de
industrialización, en general, y el agrandamiento del tamaño de las fábricas fue
lento y progresivo. Hasta mediados del siglo XIX lo que predominó en el sector
industrial de la mayor parte de los países europeos, así como en Estados Unidos,
fue la pequeña y mediana empresa.
Antes del año de 1850 sólo empresas como Atkinson, McConnel y
Kennedy, Ashworth, Dolfus-Mie, Motte y Bossut, y la fábrica de Robert Owen, en
New Lanark (con 1600 obreros), en el sector textil; Guest de Dowlais, Cyfarthfa y
los complejos minero metalúrgicos de Cokeril, en Bélgica, o las minas de Chauncy
Townsend, fueron casos de empresas de gran tamaño, elevado número de
4
empleados y con integración vertical parcial: por un lado, eran proveedores de sus
propias materias primas y, por otro, sus propios distribuidores. Al mismo tiempo,
en lo que concierne a su integración horizontal, fundaron empresas similares para
controlar la competencia.6
Años después, se facilitó la posibilidad de fabricar a gran escala con: I) la
segunda Revolución Industrial (1880-1900), que generó principalmente
innovaciones tecnológicas en la química, el petróleo y la electricidad. II) La
disminución de los costos de transporte por la expansión de las líneas del
ferrocarril. III) La ampliación de los mercados, en buena medida por el crecimiento
de la población. IV) La ampliación del sector financiero (tan sólo en EU los bancos
se incrementaron de 87, en 1812, a 700, en 1826) e instrumentos bursátiles como
obligaciones, opciones, acciones convertibles, etcétera.
La producción a gran escala difirió de la producción fabril en que la
maquinaria y equipo no substituyeron a las operaciones manuales, sino que
posibilitaron una producción mayor en cada una de sus fases. En estas
compañías, la maquinaria se situaba y utilizaba, de manera que las distintas fases
estaban integradas y coordinadas tecnológica y administrativamente dentro de un
mismo establecimiento industrial. Por eso el flujo de materiales y productos era
mayor en cada fase que si cada una de ellas se hubiera realizado en
establecimientos independientes.7
Además, a medida que crecía la producción, la empresa establecía para
cada proceso productivo un departamento principal con maquinaria especializada,
una fuente central de energía (hidroeléctrica, eléctrica), un control y coordinación
de cada subunidad, una producción integrada vertical y horizontalmente, así como
una oficina central dentro de la fábrica. No obstante, los grandes rendimientos de
estas empresas no provenían del tamaño del establecimiento (en términos de
número de trabajadores o valor del equipo), sino del incremento de la velocidad y
6 García Ruiz, José Luis. Op. Cit.,1998 pp. 42-43. y Chandler, Alfred. Scale and Scope: The dynamics of
industrial capitalism. Cambridge, Mass. Belknap Press, 1990. 7 Chandler, Op.cit.1987, pp.340-349. Este aspecto que nuestro autor destaca claramente, en realidad tiene que
ver con las posibilidades de extracción de plusvalía absoluta y relativa, descubierta y expuesta por Carlos
Marx en El Capital Sección 4 y 5, Siglo XXI, México, 1979 pp. 379-645. Estos mismos fenómenos habrían
de revalorarse en la medida que otras formas de organización empresarial y tecnológica apareciense en la
historia económica moderna, como sucedió con el taylorismo y el fordismo.
5
en el volumen del flujo de materiales, que disminuía los costos y aumentaba la
producción por trabajador y por maquinaria.8
En México, las grandes empresas, en términos de capital, número de obreros
y complejidad de organización, existieron desde fines del siglo XVIII. Fueron las
grandes casas mercantiles pertenecientes a los consulados de comercio de
México o Veracruz, el monopolio de tabaco que tenía 8000 operarios, más 500
empleados administrativos y varios millares de estanquilleros. Y la compañía
minera La Valenciana, en Guanajuato, que contó con 3000 operarios, y un alto
volumen de inversiones. En estas empresas sus trabajadores fueron asalariados.
Contaron con una singular división y especialización del trabajo, con una
elaborada estructura financiera y contable, así como un sistema productivo y
comercial integrado.9
En el siglo XIX se unieron a estas grandes empresas, las fábricas textiles y el
ferrocarril. Éste último nació en 1837, con la concesión otorgada a Manuel
Escandón para construir la vía México-Veracruz, la cual debido al atraso
tecnológico, la mano de obra no calificada, la falta de financiamiento (inversiones
internas) y la no clara regulación e inexistentes instituciones dirigidas al sector, fue
terminada en 1873. Fue hasta 1880, con las concesiones10 otorgadas al capital
privado en su mayoría extranjero, que el sector ferroviario cobró auge.
Empresas como las estadounidenses: Nickerson, Atchinson, Topeca y Santa
Fe Railroad, construyeron el Ferrocarril Central Mexicano (1884), que poseía la
ruta México-Ciudad Juárez. La Cía. Palmer y Sullivan fundaron el Ferrocarril
Nacional Mexicano (1888), el cual viajaba de México a Nuevo Laredo. La
8 Ídem.
9 Marichal, Carlos y Cerutti, Mario. Historia de las grandes empresas en México, 1850-1930, UANL y FCE,
México, 1997, pp.20-21. Los aspectos relacionados con las grandes empresas mercantiles han sido estudiadas
en Veracruz por Camen Blázquez, Abel Juárez, Soledad García, Filiberta Gómez y Yolanda Molohua. 10
Las concesiones otorgadas a los ferrocarriles eran por 99 años o más. El estado se comprometía a otorgarles
una subvención para ayudar a construir las vías ($6 a $8,000/Km.), les concedía el derecho de vía de 70
metros hacia cada lado de la línea, les regalaban terrenos para la construcción de oficinas, talleres, etc.; y
también podían contar con materiales para la construcción gratis (piedra, arena, madera) que encontraran en
sus rutas. Además, no pagaban impuestos a la importación de maquinaría y material para su funcionamiento
por 20 años, así como una exención del impuesto a la producción y capital por el mismo periodo de tiempo
(San Juan Victoria, Carlos y Velásquez Ramírez, Salvador. “X. El Estado y las políticas económicas en el
Porfiriato”, en Cardoso, Ciro (Coordinador). México en el siglo XIX (1821-1910). Historia económica y de la
estructura social. Nueva Imagen, México 1980, pp.291).
6
Huntihgton Southern Pacific Company construyó el Ferrocarril Internacional
(1888), que iba de Piedras Negras a Torreón, conectando al ferrocarril Central.
Estas tres líneas, junto con el Ferrocarril Interoceánico que viajaba México-
Veracruz (igual que el Ferrocarril Mexicano), fueron las principales del sistema
ferroviario mexicano.11
En el ramo textil, las primeras fábricas de algodón en México fueron la fábrica
de Colima fundada en 1826 propiedad del inglés George A. Resol, “La Aurora
Yucateca” construida en 1833 y propiedad de Abarda y Cía. y “La Constancia
Mexicana”, propiedad de Esteban de Antuñano y establecida en 1835; ambas
ubicadas en Puebla; “La Magdalena Contreras”, de Antonio Garay, Lozada
Carrera y el inglés Archivaldo Hope que se situó en el Valle de México e inició
operaciones en 1836; al igual que “Cocolapan” localizada en Orizaba, propiedad
de Lucas Alamán y los hermanos Legrand; “La Abeja” de los ingleses L.
Hammekan y Gradison, y la fábrica “La Colmena” propiedad del inglés Hope y del
francés Massie, ambas ubicadas en el Estado de México y fundadas en 1839. De
estas fábricas la que más sobresalió fue Cocolapan. En 1841, fue “la hilandería
más grande del país con 240 telares, su propio sistema de iluminación y alrededor
de 600 empleados que trabajaban en tres turnos”.12
A pesar de estos ejemplos, la mayoría de las empresas en México durante los
siglos XVIII y XIX fueron unidades productivas del tipo familiar, con menos de 100
empleados y tecnología tradicional.13 Fue a partir de 1876, con Porfirio Díaz en el
poder, que se aceleró la formación de manufactureras de producción a gran
escala porque se generó la infraestructura urbana (telégrafo, electrificación, vías
de comunicación, puertos, etc.), la red de transporte ferroviario, algunas
instituciones financieras con sucursales en todo el país (como el Banco Nacional
de México en 1884, Banco de Londres y México en 1889, Banco Central Mexicano
11
Herrera Canales, Inés. “XV. La circulación (comercio y transporte en México entre los años 1880-1910)”,
en Cardoso, Ciro, Op.cit. 1980, p. 439 12
Rivera Carbó, Eulalia. Herencia colonial y modernidad burguesa en un espacio urbano. El caso de Orizaba
en el siglo XIX. Colección historia urbana y regional. Instituto Mora. México, 2002, pp.64 y 66. Es necesario
no perder de vista, la importancia del Banco de Avío (1830-1842) y su papel como financiero. 13
Marichal, Carlos y Cerutti, Mario. Op.cit., 1997 pp.20-22 Estos autores utilizan este concepto para describir
los sistemas de trabajo artesanales utilizados en los obrajes, en las pequeñas y medianas compañías mineras y
en la mayoría de las haciendas, latifundios y plantaciones de principios del siglo XIX.
7
en 1898, entre otros), oficinas de gobierno (Secretaría de Obras Públicas y de
fomento) y leyes necesarias para la expansión de este sector (Código de
Comercio, Ley de instituciones de Créditos).
Las manufacturas a gran escala que más sobresalieron en el país de 1890 a
1930 fueron: la Fábrica Vidriera de Monterrey (1909); la Cía. Industrial Jabonera
de La Laguna (1896); la Cía. de Papel San Rafael y Anexas (1890); la Cervecería
Cuauhtémoc (1890); la Cía. Cigarrera El Buen Tono (1873), y las compañías
textiles de San Antonio Abad (1892), San Idelfonso (1895); Cía. Industrial de
Atlixco (1902); Cía. Industrial de Guadalajara (1899); Cía. Industrial
Manufacturera, Cía. Industrial de Orizaba SA (CIDOSA, 1899), y la Cía. Industrial
Veracruzana SA (CIVSA, 1892).14
Se han realizado numerosos estudios que describen la historia del
desarrollo industrial en México, gracias a esas investigaciones quienes
actualmente nos hemos interesado por estudiar algunos casos concretos del
desarrollo industrial y empresarial, nos hemos visto grandemente beneficiados y
estimulados. Algunos de estos estudios se han enfocado a la industria en general,
otros al análisis de un solo sector industrial, y otros a una empresa concreta, como
Mario Cerrutti que estudio los casos de la Cía. Fundidora de fierro y Acero de
Monterrey S.A. para los años de 1900 a 1930 y el de la Cía. Industrial de la
Laguna para el periodo 1880-1925.
La presente investigación está orientada a estudiar la experiencia que nos
ha legado la Compañía Industrial de Orizaba SA (CIDOSA). Usaremos como hilo
conductor del presente estudio las redes y estrategias de negocios utilizadas por
sus empresarios para crecer y sostenerse durante los años que van de 1889 a
1930. Se eligió a esta compañía como objeto de estudio debido a su importancia
en la economía nacional de la época y por el destacado papel de sus empresarios,
inmigrantes franceses provenientes del Valle de Ubaye, conocidos como
barcelonnettes.
14
De acuerdo a Haber, éstas fueron las 12 corporaciones industriales que obtuvieron las mayores ganancias en
México durante el periodo de 1890-1940. Haber, Stephen. Industria y subdesarrollo. La industrialización de
México 1890-1940. Alianza Editorial Mexicana. México, 1992, pp.109-151.
8
El periodo de estudio se definió tomando como punto de partida la firma del
acta constitutiva de CIDOSA (1889) y se termina en 1930, por la conjugación de
una serie de circunstancias: una de ellas y tal vez la más importante, es sin duda
el poder apreciar en el sistema contable de la empresa en este año una caída en
su nivel final de ventas y por ende en sus ganancias; aspecto que se conjugó con
los vientos de crisis internacional iniciada el año anterior en Estados Unidos. Estos
fenómenos sin duda se enlazaron con las dificultades del inicio de la vida
republicana que en esos años se reflejaron en crecimientos negativos del producto
interno bruto y las dificultades de financiamiento de los programas de gobierno.
Adicionalmente y en términos prácticos, la imposibilidad de consultar los archivos
notariales de la Ciudad de México en fechas posteriores a la década de 193015.
Por ello, nuestro periodo de análisis se ajustó a los años trascurridos entre 1889 y
1930.
La presente investigación pretende demostrar que en el caso de la Cía.
Industrial de Orizaba SA, la red fue uno de los instrumentos más aptos para
adaptarse en contextos impredecibles y de cambios turbulentos. La red de
intereses comerciales, industriales y financieros, permitió a CIDOSA convertir la
incertidumbre en riesgos y maximizar sus ganancias. Fueron las redes creadas
por sus propietarios las que condujeron al éxito económico, amén de los apoyos y
políticas gubernamentales de la época.
Con la finalidad de probar la hipótesis enunciada, se revisaron los estudios
historiográficos realizados por otros investigadores, referentes al objeto de estudio.
Esto permitió una mirada integral de las formas y los métodos empleados por
quiénes me han precedido en este camino. También se tuvo acceso a fuentes
primarias documentales como: los contratos de alianzas y fusiones depositados en
el Registro Público de la propiedad de los municipios de Orizaba, Nogales, Ciudad
Mendoza y Río Blanco, Veracruz y en las escrituras del Archivo Histórico de
Notarías de la Ciudad de México. El Archivo General de la Nación, Archivo
Histórico del Centro de Estudios de Historia de México CARSO, Archivo Histórico
15
Es necesario aclarar que el reglamento de consulta de los mencionados archivos indica que solo se puede
tener acceso a los libros notariales con setenta años de antelación. Para el momento que esta investigación se
había concluido, se pudo tener acceso a la década de 1940.
9
del Agua, Archivo Plutarco Elías Calles y Fernando Torreblanca, Archivos
Históricos de BANAMEX y Archivos Históricos de patentes del Instituto Mexicano
de la Propiedad Industrial. Adicionalmente, gracias a la asistencia de ciertos
coloquios nacionales e internacionales y al acercamiento con especialistas
destacados. Se efectuaron algunas entrevistas a investigadores que continúan
indagando diversos aspectos de la historia de la industria y desarrollo empresarial.
Dichas entrevistas permitieron ubicar aspectos no contemplados en el diseño
original de esta indagación.
Con el propósito de presentar los resultados obtenidos, se realizará el
siguiente recorrido capitular: en el Capítulo uno titulado Enseñanzas
historiográficas, se efectúa una valoración de la producción historiográfica nacional
referida al desarrollo industrial y empresarial para la época que nos ocupa. Lo cual
permitió explorar la manera en que han sido analizados las empresas y los
empresarios de la industria textil. Un doble objetivo se prefiguró con este análisis.
Primero examinar los asideros teóricos, empíricos y epistemológicos de otros
autores y segundo hurgar en la manera en que se ha estudiado el papel de los
empresarios en tanto actores de una trama, con estrategias y formas de
relacionarse.
En el Capítulo dos bajo el titulo Empresarios Barcelonnettes, se describen
los antecedentes y el entorno sociopolítico y económico que influyeron en la forma
organizacional bajo la cual se fundó y trabajó el grupo empresarial propietario de
CIDOSA, de 1889 a 1910. En el Capítulo tres, nombrado Estrategias de los
empresarios textiles del Valle de Orizaba se estudian a profundidad las estrategias
que los empresarios de CIDOSA aplicaron en sus fábricas durante el periodo de
1911-1930. En el Capítulo cuatro, titulado Efectos regionales son descritas las
influencias que empresas como CIDOSA ocasionaron en el entorno social, cultural
y económico de la región de Orizaba. Para finalizar, se ofrecerán una serie de
conclusiones, que sintetizan cada uno de los recorridos anteriores.
10
Capítulo: 1.Experiencias historiográficas
El periodo transcurrido entre el inicio del siglo XIX y principios del XX ha
sido considerado por los historiadores occidentales como el de los años dorados
del capitalismo industrial.16 En América Latina, el siglo XIX fue el siglo de la
liberación y construcciones nacionales, momento de convulsiones sociales, golpes
de Estado, invasiones, mutilaciones territoriales. También fue el periodo en el que
con más fuerza se impulsó la modernización de las instituciones, los sistemas
productivos, medios de transporte, tecnología empleada por la fuerza productiva y
los sistemas financieros. Fueron los años de elaboración de constituciones,
reglamentaciones y de presencia de legendarios personajes orientados a abrir
espacio al capital, sobre todo transnacional.
En este sentido histórico quienes promovieron el reconocimiento de México
como nación en los países centrales se encargaron, también, de ofrecer el país a
los inversionistas extranjeros. En el caso de México las élites ilustradas de la
época, liberales y conservadores por igual, desde 1830 en adelante impulsaron
reformas, entre ellas la desamortización de los bienes de la Iglesia, que ampliaron
el mercado interno de mercancías y crearon condiciones para la acumulación de
capital en manos de comerciantes y hacendados, como Juan Antonio Béistegui,
Manuel Escandón, la familia Martínez del Río, Cayetano Rubio, Antonio Garay,
Gregorio Mier y Terán, entre otros. Estos comerciantes participaron activamente -
haciendo valer su poder económico-, en la dirigencia del país en un periodo
favorable a sus intereses, como fue el Porfiriato.
Durante esta época, las fuerzas políticas y económicas de México se
amoldaron a la cambiante realidad de Europa y América. Los cambios
tecnológicos, la utilización del vapor y del acero, impactaron el transporte de
mercancías ultramarinas. La expansión ferrocarrilera generó la más grande
acumulación del capital ocurrida en el mundo durante ese periodo, y las primeras
industrias, las fábricas textiles, llegaron a México impulsadas por este oleaje
capitalista.
16
Wallerstein, Immanuel. El capitalismo histórico. XXI: México, 5ª. Edición, 2003.
11
La industria textil, identificada como un emblema de la modernización
capitalista por el valor agregado que generaba, se instaló inicialmente en el centro
de Veracruz, justo en la segunda década después de consumada la
independencia de España. Posteriormente, en la ciudad de Puebla, Valle de
México, Guadalajara y Querétaro. Se eligieron estos lugares porque los
inversionistas los consideraban estratégicos, con agua en abundancia, clima
benigno, accesibilidad a los mercados nacionales y extranjeros y, por supuesto,
con facilidades administrativas, burocráticas e institucionales otorgadas por parte
de las autoridades políticas y militares.
Entre los promotores de la industrialización en México se ha identificado a
Lucas Alamán, Esteban de Antuñado, y los hermanos Escandón. Ellos pusieron
especial énfasis en el transporte de personas y mercancías entre el puerto de
Veracruz y la Ciudad de México.
El recorrido histórico de la experiencia industrializadora antes referido, fue
identificado como la vía promisorio para lograr el desarrollo económico. Este
fenómeno historiográfico se ha explorado con acuciosidad. La intención de tales
búsquedas pretende identificar los motivos que condujeron al desarrollo industrial.
Así, se ha podido centrar la atención en los factores institucionales importantes; en
los entornos sociohistóricos; en la importancia coyuntural de un factor productivo;
en las penurias de pueblos enteros; el tamaño y consolidación del mercado
interno; en la importancia de los triunfos militares o en el papel del espíritu
empresarial emprendedor. Incluso, en el factor religioso o en la laboriosidad e
inventiva de los pobladores, etc. De la misma manera, se ha destacado la
importancia de la prontitud con que fue asumido el régimen de producción
capitalista y las capacidades locales para difundir sus efectos socioculturales al
resto de las regiones de un país.
Sin la intención de agotar la extensa y compleja problemática aludida, se
procederá a la revisión general del legado historiográfico mexicano referido a la
historia económica nacional y regional de la industria textil, tratando de responder
a las siguientes preguntas: ¿Cuáles fueron las primeras fábricas? ¿Dónde se
establecieron? ¿Cuál fue su organización? ¿Cuál el entorno institucional en el que
12
operaron? ¿Quiénes fueron los sujetos sociales implicados en su desarrollo? Y,
finalmente, ¿qué posturas teóricas se han utilizado para estudiarlas?
Miradas Nacionales
Entre las obras más importantes que nos han legado conocimientos sobre
la industria y el desarrollo industrial destacan, Keremitsis Dawn (1973), Walter
Bernecker (1992), Aurora Gómez-Galvarriato (1999), John Coastwoth (1992),
Stephen Haber (1992) y Manuel Plana (2004). También aquellos que han
estudiado las condiciones en que el desarrollo del país se ha llevado a cabo: Ciro
Cardoso (1981), Mario Ramírez (1987), Aldo Musacchio y Ian Read (2007).
Una de las obras precursora e imprescindible de conocer, si se realizan
estudios sobre la industria textil, es el libro de Dawn Keremitsis, La industria textil
mexicana en el siglo XIX. Para realizar esta investigación, Keremitsis consultó
fuentes de la Biblioteca Bancroft, de la Universidad de California, en Berkeley, del
Centro de Estudios de Historia de México de Condumex, del Archivo General de la
Nación, de la Biblioteca Nacional, la Hemeroteca Nacional, de la Biblioteca de la
Secretaría de Hacienda y del Colegio de México. En esta obra, el autor realiza una
descripción y análisis de los factores que impulsaron u obstaculizaron el proceso
de crecimiento de la industria textil en México desde la Colonia hasta los primeros
años del siglo XX.
Para Keremitsis, los factores que impulsaron el desarrollo de la industria
textil fueron el uso de la energía eléctrica, la importación de maquinaria
mecanizada, la asociación entre inversionistas franceses, españoles y asturianos,
y la política gubernamental de Porfirio Díaz. Durante el Porfiriato se impulsó la
industrialización a través de: I. La estabilidad política y económica que impuso el
régimen; II. La implementación de derechos aduanales e impuestos arancelarios
para proteger la industria nacional; III. El otorgamiento de concesiones y privilegios
a inversionistas extranjeros que instalaran fábricas en el país; IV. La creación de
estructuras institucionales y legales (como el Código de Comercio, reformado en
1883 y 1886) que fomentaban la creación de sociedades económicas; V. La
13
fundación de escuelas técnicas y comerciales; VI. El establecimiento de una
burocracia más eficiente.
A la vez el mismo autor señala que, los obstáculos al desarrollo fueron: los
periodos de inestabilidad política y económica -como la Reforma, la intervención
francesa, la pérdida de Texas y la Revolución Mexicana-, la falta de mano de obra,
pero sobre todo la falta del algodón. Esta obra a pesar de ser no tan reciente,
sigue contando con elementos explicativos vigentes del desarrollo de la industria
textil.
Otra obra importante que analiza el desarrollo industrial del país desde
1500 hasta 1990’s, es la escrita por Manuel Plana, Las industrias siglos XVI al XX.
El autor basado en fuentes secundarias elabora una significativa síntesis del
mencionado desarrollo, enfatizando los siguientes aspectos: 1. Las manufacturas
e industrias intensivas de recursos naturales renovables es decir, el obraje y la
industria textil; 2. Las manufacturas e industrias de transformación de productos
primarios donde incluye al ingenio azucarero, las fábricas de tabaco, las fábricas
cerveceras, de papel, jabones y calzado; 3. Las industrias de recursos naturales
no renovables e intensivas de tecnología siderúrgica y química; 4. Las industrias
de transformación de bienes de consumo final mecánica, secundaria y automotriz.
Éste es uno de los esfuerzos con mayor alcance temporal del que se dispone
hasta el momento.
Respecto a la industria textil, Plana menciona que el proceso productivo de
algodón era más sencillo que el de la lana. Fue por eso que este último se
desarrolló con fuerza para el siglo XVIII. Sin embargo, -describe el autor- para
1804 el aumento de las importaciones de algodón de Inglaterra y el inicio del
movimiento de independencia en 1810, frenaron el crecimiento de la naciente
industria textil.
El autor menciona que los industriales textiles durante la primera mitad del
siglo XIX, debieron enfrentar la escasez de algodón, el aumento de las empresas
fabriles y, consecuentemente con ello, el aumento de la producción de hilados, las
tarifas internas sobre el comercio, las importaciones y el contrabando. A diferencia
de otros estudiosos, Plana reconoce que México sí contaba con mano de obra
14
capacitada para realizar el trabajo textil; especialmente la mano de obra poblana,
como afirmó Jan Bazan17. Afirma que la fuerza de trabajo que utilizaron las
primeras empresas textiles fue la misma que usaron en los países centrales, por lo
que ese no fue jamás un obstáculo para la industrialización de este tipo. No
sucedía lo mismo con el capital, que en cambio sí podía influir en la forma, uso y
funcionamiento de todos los componentes de la actividad económica específica.
De ahí la importancia de analizar el comportamiento de las empresas textiles
como unidades específicas de producción.
Según el autor, otros elementos que impulsaron a la industria textil entre
1889 y 1911, fueron la creación y ampliación de la red ferroviaria, el incremento de
inversión extranjera directa a las minas y los servicios públicos, la energía eléctrica
pero principalmente la disponibilidad de algodón; como fueron los cultivos de
algodón en la región de La Laguna, Mexicali, Baja California Norte y Camargo,
Chihuahua.18
Plana concluye que desde el inicio de la Revolución Mexicana hasta la
segunda Guerra Mundial, la industria textil mexicana seguía dependiendo de las
importaciones. Además afirma que con la crisis de 1929, los empresarios
decidieron disminuir los salarios y los empleos para continuar con el mismo
margen de ganancia. Así, a pesar de que Plana realiza un análisis ágil y adecuado
del desarrollo de la industria textil desde la Colonia a la actualidad, su estudio
queda como una visión muy general. No profundiza en aspectos claves del
proceso de industrialización como: actores sociales, condiciones institucionales,
cambios tecnológicos y estrategias empresariales, etc. Sin embargo, esto no
demerita su obra, ya que finalmente cumple con el objetivo planteado desde su
inicio: realizar una síntesis del desarrollo de las industrias en México, que es muy
importante para quienes estudiamos la historia industria y la industrialización en
nuestro país.
Otra obra especialmente importante, dedicada a estudiar el proceso de
industrialización en México y enfatizando los obstáculos del desarrollo económico
17
Bazant, Jan. “Evolución de la industria textil poblana (1544-1845)” en Historia Mexicana, Vol. XIII, No. 4.
El Colegio de México, México, abril-junio 1964. 18
Plana, Manuel. Op.cit. 2004 pp.43-44
15
en el periodo de 1800 a 1880, es el libro de John Coastsworth, Los orígenes del
atraso. Nueve ensayos de historia económica de México en los siglos XVIII y XIX.
Los textos reunidos en esta obra, fueron en su mayoría publicados con antelación
en revistas o libros de México, España (Revista de Historia Económica), República
Federal de Alemania (Reinhard, Liehr. América Latina en la época de Simón
Bolívar. La formación de las economías nacionales y los intereses económicos
europeos 1800-1850) y Estados Unidos (American Historical Review) en el periodo
de 1975 a 1989.
No obstante Coastsworth en el ensayo Los orígenes del atraso, señala que
no fueron la Iglesia, ni la organización de la tierra ni el colonialismo español, los
elementos que limitaron el desarrollo económico de México a principios del siglo
XIX, sino la geografía accidentada, montañas, mesetas, valles y la falta de
transportes adecuados. México no contaba con suficientes ríos navegables para
transportar las mercancías que generalmente se producían en los valles alejados
del mar. Además, registraba una ineficiente organización económica, pues las
instituciones y políticas gubernamentales, como la alteración de precios, controles
de producción, aduanas e impuestos internos, así como las leyes que prohibían la
movilidad de la mano de obra, entorpecían las actividades productivas en vez de
fomentarlas.
Un estudio más, que retoma la explicación de los obstáculos de desarrollo
industrial mexicano es el libro de Sthepen Haber, Industria y subdesarrollo. La
industrialización de México 1890-1940. En esta obra se realiza el estudio de las
estructuras de producción, estrategias empresariales y rendimientos económicos
de las doce corporaciones industriales que obtuvieron las mayores ganancias en
México durante el periodo de 1890-1940, las cuales fueron: Fábrica Vidriera de
Monterrey (1909); Cía. Industrial Jabonera de La Laguna (1896); Cía. San Rafael y
Anexas (1890); Cía. Nacional Mexicana de Dinamita y Explosivos (1901);
Cementos Hidalgo (1906); Cementos Cruz Azul (1907); Cementos Tolteca (1909);
Cervecería Cuauhtémoc (1890); Cervecería Moctezuma (1890); Cía. Cerveza de
Toluca y México (1865); Cía. Cigarrera El Buen Tono (1873); Cigarrera Mexicana,
Tabacalera Mexicana, Cía. San Antonio Abad (1892); Cía. San Idelfonso (1895);
16
Cía. Industrial de Atlixco (1902); Cía. Industrial de Guadalajara (1899), Cía.
Industrial Manufacturera (1899), Compañía Industrial de Orizaba SA (CIDOSA,
1889) y la Compañía Industrial Veracruzana SA (CIVSA,1892).
En base a datos obtenidos, principalmente de los archivos de las empresas, de
los informes de la Bolsa Mexicana de Valores y los publicados por el periódico El
Economista Mexicano, de los años 1895-1911, el autor calcula que estas
empresas obtuvieron tasas de rendimiento promedio del 5 por ciento de 1896-
1910 y 4.7 por ciento de 1901-1910. Haber explica que estas tasas eran bajas
debido a que no podían ocupar toda su capacidad productiva porque el mercado
interno era estrecho y, además, no les era posible exportar por sus altos costos de
producción, derivados de la escasez de capital financiero, la importación de
maquinaria y la baja productividad de la mano de obra mexicana. Para poder
aumentar sus ganancias, estas manufactureras decidieron repartirse el mercado
interno, organizándose en oligopolios y monopolios a través de la integración
vertical y horizontal, la compra o fusión de la competencia y la limitación de la
participación de otras empresas en el mercado, a través del bloqueo al acceso de
la tecnología, materia prima, protección gubernamental y red de
comercialización.19
El autor afirma que con la revolución de 1910, se reforzó la estructura
industrial del Porfiriato. Es decir, los oligopolios integrados verticalmente. Durante
los primeros años de guerra civil (1910-1913), los empresarios disminuyeron su
producción, enfrentaron la ocupación de sus fábricas por los ejércitos
revolucionarios y la destrucción de los sistemas de transportes. No obstante, no
dejaron de producir. Incluso, fábricas de telas y cigarros generaron utilidades y
repartieron dividendos. Por lo tanto no fue una etapa de destrucción y caos total
como otros autores indican.
El mismo autor refiere que en el periodo de 1926 y 1932 la producción, la
demanda y la inversión en México disminuyeron principalmente por: 1. Los
conflictos políticos; 2. La organización de la clase obrera (CROM); 3. La
desconfianza en las nuevas leyes (Constitución de 1917, Ley del trabajo, etc.); 4.
19
Haber, Sthepen. Op.cit. 1992, pp.109-151.
17
Aumentos de salarios para los obreros sindicalizados, 5. Disminución de las Cías.
petroleras extranjeras, que emigraron a Venezuela, donde la extracción del
petróleo era más barata y más fácil; 6. Caída de los precios internacionales de la
plata, el cobre y el plomo; 7. Deportación de los trabajadores mexicanos de EU; 8.
Caída en los ingresos del gobierno por reducirse las exportaciones de minerales y
petróleo y 9. La aplicación de una política monetaria y fiscal restrictiva por parte
del gobierno mexicano.
Estos factores, junto con la contracción de la demanda en Occidente, por la
crisis del 29, provocaron que en México las industrias que mayormente
disminuyesen sus operaciones fueran: las de bienes de consumo, textiles de
algodón, tabacaleras y cerveceras y no las de bienes intermedios materiales de
construcción como cemento y acero, como al principio del siglo XIX.
El libro de Haber presenta un análisis novedoso del desarrollo del proceso de
industrialización en México, al basar su explicación en las estructuras de
producción, finanzas y estrategias empresariales de las 12 compañías que
menciona el estudio. Sin embargo, su obra sólo da prioridad al enfoque
económico-financiero, sin considerar la actuación y el contexto social, cultural y
político de los empresarios.
Dentro de esta misma línea de investigación –obstáculos al desarrollo
industrial-, aparece el libro: La Industria textil en México, compilado por Aurora
Gómez Galvarriato. El libro incluye los siguientes ensayos: I. Protoindustria
colonial, de Manuel Miño Grijalva; Continuidad y cambio en la industria
manufacturera mexicana, 1800-1870, de Guy P.C. Thomson; Industria versus
comercio: ¿Orientación hacia el interior o hacia el exterior?, de Walter L.
Bernecker; Fragilidad institucional y subdesarrollo: la industria textil mexicana en el
siglo XIX, de ella misma; Mercados financieros y desarrollo industrial en Brasil y en
México, 1840-1930, de Stephen Haber, y Los momentos de la actividad textil, de
Leticia Gamboa.20 Las obras de Leticia Gamboa y Aurora Gómez serán revisadas
más adelante cuando se aborde el análisis regional.
20
Todos esos ensayos ya habían sido publicados anteriormente en obras de los propios autores, pero al
reunirlos en esta antología se pretende contribuir al mejor entendimiento del desarrollo de la industria textil.
El de Manuel Miño en un artículo de la Revista Historia Mexicana, del Colmex, en su volumen XXXVIII,
18
En el ensayo de Guy Thomson, señala que las primeras fábricas textiles en
México debieron enfrentar dos grandes obstáculos: la falta de insumos productivos
y energéticos, así como la escasez de mano de obra. El primero de estos
obstáculos fue un problema temporal que pudo resolverse con el algodón cultivado
en la región de La Laguna, el uso de la fuerza hidráulica, así como el
descubrimiento de unos depósitos de carbón en Coahuila. El segundo fue un
problema estructural, debido a que no sólo se refería a la escasez física de mano
de obra, que algunas veces se resolvió con migraciones, sino también a la falta de
experiencia y resistencia a la disciplina y trabajo fabril que presentaban los
primeros obreros textiles- en su mayoría campesinos-. Este problema se resolvió
importando mano de obra de Gran Bretaña y Estados Unidos, sobre todo para
puestos administrativos y técnicos encargados de la instalación, operación y
mantenimiento de la maquinaria. Este trabajo contrasta con las tesis desarrolladas
por Viqueria, Jan Bazan y Manuel Plana que afirman que la mano de obra nunca
fue un verdadero obstáculo, ya que existían ciertas destrezas entre la población
creadas por los obrajes.
Otros problemas estructurales de la industria textil durante el periodo 1830-
1870, señalados por él mismo fueron: I. El bajo poder adquisitivo de las clases
rurales que representaban el principal mercado de la industria textil, sobre todo los
hombres que consumían manta para sus trajes diarios. II. La falta de una
infraestructura de transportes y comunicaciones internas que limitaban la amplitud
y profundidad del mercado interno. III. La baja calidad y altos precios de los
textiles nacionales que limitaban el mercado externo y frenaban el crecimiento de
la industria.21
En el ensayo de Gómez-Galvarriato, Fragilidad institucional y subdesarrollo:
la industria textil mexicana en el siglo XIX, sostiene que la industria textil en
No. 4 de 1989; el de Guy Thompson, en el libro de Jean Batou: Between development and
underdevelopmente: the precocious attemps at industrialization of the periphery, 1800-1810. editado por
Librarie Doz, Ginebra, 1991. El de Haber en su libro “How Latin America fell behind?”, publicado en 1997
por la Universidad de Stanford. El de Bernecker en su libro “De agiotistas y empresarios. En torno de la
temprana industrialización mexicana (siglo XIX.)”, que se analiza más adelante. El de Gamboa en su libro
“Los empresarios de ayer. El grupo dominante en la industria textil de Puebla, 1906-1929”. El ensayo de
Gómez Galvarriato fue una traducción de un apartado del primer capítulo de su tesis doctoral: “The impact of
revolution: Busines and labor in the Mexican textil industry, Orizaba Veracruz 1900-1930”. 21
Thomson, Guy, Op.cit. 1999, pp. 81-82.
19
México durante el periodo vio obstaculizado su desarrollo debido a la inexistencia
de un régimen de leyes que estableciera de manera eficaz los derechos de
propiedad. Las políticas gubernamentales cambiaron constantemente, afectando
los aranceles a la importación del algodón, beneficiando a unos cuantos
empresarios, quienes fueron los que monopolizaron el mercado, como Antonio
Béistegui, Manuel Escandón, Cayetano Rubio Antonio Garay, Gregorio Mier y
Terán y Patricio Milmo.22 Este estudio, al igual que el de Coastsworth, intenta
explicar el crecimiento económico mediante el sistema institucional establecido
con anterioridad al desarrollo capitalista.
Un libro publicado con antelación, dedicado a analizar los casos de algunos
de los empresarios que fueron beneficiados por las políticas gubernamentales, es
el coordinado por Ciro Cardoso, Formación y desarrollo de la burguesía en México
Siglo XIX. Éste se ha convertido en una obra obligada para conocer la historia de
los primeros inversionistas en la industria textil del siglo XIX. El libro se conforma
con los ensayos de Margarita Urías Hermosillo: Manuel Escandón: de las
diligencias al ferrocarril 1833-1862; Guillermo Beato: La casa Martínez del Río, del
comercio colonial a la industria fabril 1829-1864; Rosa María Meyer: Los Béistegui,
especuladores y mineros 1830-1869; Shanti Oyarzábal: Gregorio Mier y Terán en
el país de los especuladores, 1830-1869; Mario Cerutti: Patricio Milmo, empresario
regiomontano del Siglo XIX. En torno a la acumulación de capitales en Monterrey
(1845-1890), y Roberto Hernández Elizondo: Comercio e industria textil en Nuevo
León, 1852-1890. Un empresario: Valentín Rivero.
Margarita Urías identificó que Manuel Escandón de 1833 a 1862 fue
propietario del primer negocio de diligencias en la región Veracruz-Puebla-México,
de la Mina Real del Monte en Pachuca, Hidalgo, del estanco de tabaco y la fábrica
textil de Cocolapan, en Orizaba, y de la concesión para construir el ferrocarril
México-Veracruz. En palabras de la autora, Escandón decidió invertir en las ramas
básicas, de la minería y el transporte, para poder monopolizarlas e integrarlas.
Pero también invirtió en productos como el tabaco, pues de esa manera podía
aprovechar un mercado cautivo. Asimismo, los préstamos y contratos celebrados
22
Gómez Galvarriato, Aurora. Op.cit., 1999, pp. 142-182.
20
con el gobierno y las diferentes relaciones económicas estratégicas con grupos de
poder militar, redes de parentesco y capitalistas extranjeros, le permitieron
mantener el control de ciertos mercados y aumentar constantemente sus
ganancias.23
Guillermo Beato utilizó fuentes del Archivo de Notarías de la Ciudad de México
y del Archivo Judicial de 1830 a 1870, para describir cómo la familia Martínez del
Río, ingresaron a México desde 1829 e invirtieron en la Cía. Restauradora del
Mineral de Tlalpujahua, 10 minas en Tepejupilco, Mineral del Chico y Santos
Ángeles Custodios o Zopilote, en Pachuca, Hidalgo, donde se asociaron con
Manuel Escandón. También analiza cómo se convirtieron de comerciantes a
agiotistas y posteriormente a industriales textiles, al fundar en el Distrito Federal,
en 1840, la fábrica textil Miraflores, la cual entre 1840-1855 se ubicó en el quinto
lugar en la producción nacional.24
Rosa María Meyer estudió a Juan Antonio Béistegui, quien de 1820 a 1846
prestó dinero con la condición de que si no se pagaba a tiempo, se apropiaba de
los bienes. Además también actuó como banco al recibir dinero, invertirlo y pagar
por ello un interés del seis por ciento anual. Bajo estas prácticas de especulación,
Juan A. Béistegui logró adquirir el estanco de tabaco en Sinaloa y la mina La
Purísima, en Guanajuato. También se asoció con Archivaldo y Cuthberto Hope y
Eduardo Keon para fundar la fábrica de hilados y tejidos de algodón “La Abeja” y
“La Colmena”. Asimismo, en 1855 participó como socio de la fábrica de hilados y
tejidos de San Idelfonso, la Cía. Real del Monte, Cía. Mineral de oro y Tlalpujahua,
Mineral de Catorce y del Estanco de Tabaco de México, donde era socio de
Manuel Escandón, Miguel Bringas, Ewen Mackinstosh25. La autora afirma que a
pesar de ser socio en estos negocios, el principal destino para invertir de Juan
Béistegui eran los bonos de caminos en Europa, que eran más seguros y no tan
23
Urías Hermosillo, Margarita. Op.cit. 1981, pp. 25-56. 24
Beato, Guillermo. Op.cit, 1981, p.57-107. 25
Ewen C. Mackintosh fue el cónsul inglés en la Ciudad de México, y otorgó varios préstamos al gobierno y
a la Iglesia, además de ser socio en la casa comercial Manning y Mackintosh.
21
redituables, en comparación con los negocios afectados por la inestabilidad
política de México.26
Shanti Oyarzábal investigó a Gregorio Mier y Terán, quién llegó a México en
1818 y contó con la ayuda de su tío Antonio Terán, que poseía casas de comercio.
De acuerdo a la autora, Gregorio Terán hizo su fortuna otorgando préstamos al
gobierno, empresas, iglesias, comerciantes y hacendados. También participó en la
minería, los ferrocarriles y el telégrafo.27
Mario Cerutti analizó el caso de Patricio Milmo, quién casó con la hija del
gobernador de Nuevo León, Santiago Vidaurri. Debido a la guerra entre México-
EU (1846) que acercó a Monterrey a la frontera, la política arancelaria de su
suegro (zona libre) y la Guerra de Secesión de EU (1860-65), Milmo logró vender
a través de sus casas comerciales de Piedras Negras y Matamoros productos
manufacturados, alimentos, etc., con los estados del sur a cambio de algodón, que
durante ese periodo fue muy escaso y por ello fue vendido a precios elevados.
Con esto, Milmo logró obtener cuantiosas ganancias que invirtió en préstamos
dirigidos al gobierno y a los empresarios. Gracias a la falta de pago en algunos de
estos préstamos, Milmo adquirió acciones de la Cía. Fundidora de Fierro y
Manufactura de Monterrey; Cía. Ladrillera de la Silla, y Cía. Industrial de
Monterrey.28
Roberto Hernández estudió a Valentín Rivero, quien en 1852 residía en
Monterrey y ocupaba el cargo de Vicecónsul de España. Este empresario fue el
primero en establecer una fábrica textil en Nuevo León, en 1854: “La Fama”.
Posteriormente, en 1871, participó en la fundación de la fábrica textil “El Porvenir”,
que fue en 1889 la más grande del estado, con 5,000 husos y de 30 a 40,000
piezas de producción anual29.
Como se puede deducir en este recorrido historiográfico, el empresariado
mexicano del siglo XIX estuvo integrado por inversionistas extranjeros y
nacionales. Ellos amasaron sus capitales en las actividades comerciales y en los
26
Meyer, Rosa, María.Op.cit, 1981, pp. 108-139. 27
Oyarzábal, Shanti. Op.cit, 1981, pp. 140-163. 28
Cerutti, Mario. Op.cit, 1981, pp.231-266. 29
Hernández Elizondo, Roberto. Op.cit. 1981, pp. 167-286.
22
préstamos a empresarios, Iglesia y Gobierno. Se sirvieron como es bien sabido,
de sus relaciones familiares, políticas y asociaciones entre ellos.
Otra publicación que profundiza sobre el comportamiento de los primeros
empresarios durante el siglo XIX, es el libro de Walter Bernecker, De agiotistas y
empresarios. En torno de la temprana industrialización mexicana. En esta obra el
autor utiliza diversas fuentes documentales en archivos de Alemania, Francia y
México. La tesis principal que defiende este autor es, que los verdaderos
protagonistas del proceso de industrialización en México fueron los comerciantes
(extranjeros y mexicanos), que tenían suficiente capital para prestar a los
industriales a altas tasas de interés. Los cual les permitió apropiarse de las
fábricas cuando estos últimos no tenían para pagarles. Empero, la mayoría de
estos personajes no sabían nada sobre la industria.
Bernecker señala que el empresariado textil no era un empresario en el sentido
industrial, sino que era al mismo tiempo especulador, acreedor y partícipe de las
consideraciones políticas-económicas y, por tanto, muchos de ellos
probablemente no estaban interesados en eliminar los obstáculos institucionales –
que muchas veces les favorecían- para permitir una rápida y amplia
industrialización.30
Otra obra que refuerza la idea de que los empresarios textiles aprovecharon
la existencia de obstáculos institucionales en México para obtener beneficios
económicos es la de Mario Ramírez Rancaño, Burguesía textil y política en la
Revolución mexicana. En esta obra el autor prueba que de 1906 a 1918 la
burguesía textil en México “fue capaz de negociar con los diferentes gobiernos
revolucionarios para retener sus intereses y propiedades. Además demuestra que
fue por los conflictos obreros y la falta de materia prima que la burguesía textil
sufrió mayores embates, y no por el conflicto revolucionario en sí, ya que
generalmente el gobierno en turno protegió a la burguesía con tal de atraerla a su
causa”.31 Las fuentes utilizadas para probar lo anterior fueron periódicos y revistas
de la Biblioteca Lerdo de Tejada de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público de
30
Bernecker, Walter. Op.cit. 1992, pp. 163-191. 31
Ramírez Rancaño, Mario. Op.cit. 1987, p.8.
23
1906 a 1907; información del ramo de trabajo y gobernación del Archivo General
de la Nación de 1911 a 1914; periódicos de la Hemeroteca Nacional de la UNAM,
el Diario de Debates de la Cámara de Diputados y Senadores y el Archivo
Histórico del Centro de Estudios de Historia de México, Condumex, de 1915-1918.
Ramírez eligió el periodo de estudio de 1906 a 1918 porque coincide con la
formación del Centro Industrial Mexicano de Puebla, el final del Porfiriato y la
Revolución Mexicana, hechos que en palabras del autor “obligaron a la burguesía
textil a reordenar sus fuerzas y redefinir nuevas estrategias de acción y de
supervivencia para navegar contra la guerra civil”.32 Termina en 1918, cuando se
constituye la Confederación Nacional de Cámaras Industriales de los Estados
Unidos Mexicanos.
En esta obra, Ramírez coincide con otros autores que afirman que los
industriales extranjeros consiguieron aliarse con la dictadura de Porfirio Díaz para
gozar de su protección y ser favorecidos. Además mantuvieron una compleja red
de comercio-industria-banca-tierra y fundaron sus propias organizaciones para
defender sus intereses, como el Centro Industrial Mexicano en Puebla, en 1906.33
Con todo, entre los empresarios también surgieron divisiones, como señala
Ramírez al describir que un grupo de empresarios textiles opositores al Centro
Industrial Mexicano constituyeron el 8 de mayo de 1912 la Confederación Fabril
Nacional Mexicana, con sede en la Ciudad de México. En este grupo se
encontraban Antonio Reynaud, de CIDOSA; Félix Vinatier, de CIVSA, León
Barbaroux, de La Hormiga, SA; Luis Veyan, de Veyan Jean y Cía; Anselmo Morín,
de la Cía. Industrial Manufacturera, entre otros.34
Ramírez también afirma que “todos los gobiernos que asumieron la
Presidencia de México, de 1912 a 1920, sin importar su ideología fueron
generosos con la burguesía textil. Por ejemplo, Madero propone a la Cámara de
Diputados un impuesto del 8 por ciento sobre la venta de hilados y tejidos, el cual
se reintegrará en un 50 por ciento si el empresario cumple con las tarifas del
reglamento autorizado por la Segunda Convención en julio de 1912. Con este
32
Ídem, p. 7 33
Ídem, pp.7, 13-14. 34
Ídem, p.62
24
impuesto, el gobierno maderista resultó ser más generoso que el de Díaz al
disminuir, en una tercera parte, las cargas impositivas”. 35
Otro caso fue el del gobierno de Victoriano Huerta, que “era de mayor
coincidencia con los industriales debido a la política de mano dura hacia los
obreros que compartía con la dictadura de Díaz, represión, uso de la policía local y
especial para resguardar las fábricas textiles, y el establecimiento de propios
cuerpos de seguridad rural para defender sus propiedades si el gobierno local no
acudiera a su rescate”.36 Inclusive, “el gobierno de Carranza también manifestó su
apoyo a la burguesía textil con el decreto del 16 de noviembre de 1915, en que
obligó a los productores de algodón a vender su cosecha al gobierno, para que
éste la distribuyera a las fabricas, y donde además se amenazó con la
expropiación a todos aquellos productores que se negaran a vender su fibra al
gobierno. Así el autor destaca que el gobierno de Carranza favorecía a la
burguesía en general y especial a la textil que era su consentida.37
A pesar de que el libro de Ramírez es rico en detalles cuando narra las
relaciones entre los industriales y el gobierno, no abunda en el estudio de casos
individuales, como los empresarios de CIDOSA o de cualquier otra empresa. No
obstante, la importancia de este trabajo -como lo afirma el propio autor- es que “no
existen estudios sobre la burguesía industrial nacional para esa etapa”.38
Una obra más reciente sobre la colusión de empresarios con el gobierno es
el artículo de Aldo Musacchio y Ian Read, Bankers, industrialists and their cliques
elite network in Mexico and Brazil during early industrialitation. En este texto, los
autores comparan las redes de hombres de negocios de México y Brasil en el
periodo de 1890-1913. Para construir la red de empresarios en México, los autores
utilizaron los datos de 98 empresas del Mexican Yearbook, de 1909. En él,
identificaban si uno o más miembros de los Consejos de Administración de una
empresa pertenecían a los consejos de otras compañías. Si esto era así, el
hombre de negocios formaba parte de la red. Los autores mencionan que “las
35
Ídem, pp.87 36
Ídem, pp. 98-101. 37
Ídem, pp. 185-187 38
, Ídem, p.8
25
redes de hombres de negocios fueron cruciales para una iniciar la industrialización
en México. De estas redes se obtenían capitales o información, y estaban
formadas por prominentes políticos, quienes ayudaban a los empresarios a
obtener concesiones y privilegios".39
En virtud de que el artículo de estos autores todavía no es muy conocido
conviene tener presente sus contenidos. El texto se divide en cuatro secciones: la
primera es una introducción a la situación política y económica de cada país. La
segunda explica las diferencias institucionales entre México y Brasil. La tercera
señala la metodología del estudio. La cuarta presenta los resultados y
conclusiones obtenidas. Aunque el artículo menciona que “no va a teorizar sobre
la relación entre redes e instituciones, porque los resultado no muestran con
certeza si la ausencia de instituciones guían una fuerte alianza económica en
redes o si la larga tradición de los agentes económicos, operando a través de
redes, debilitan el establecimiento de instituciones formales, sí logra demostrar
que en México los hacedores de leyes también eran los empresarios que más
beneficios obtenían, por lo que podría pensarse que estos intentaban continuar
con una estructura institucional débil para seguir obteniendo ganancias de sus
redes. Éstas fueron más informales, más densas, con mayor número de
conexiones y con mayor influencia política que las de Brasil, donde sí existió un
sofisticado sistema de instituciones formales”. 40
Si bien el artículo de Musacchio y Read muestra elementos relevantes en la
aplicación de la teoría de redes para el caso de la industrialización mexicana,
adolece de las mismas fallas que el estudio de Haber, al no considerar las
relaciones sociales, de amistad y parentesco de los hombres de negocios.
Las obras enumeradas de Keremitsis, Plana, Haber, Coatsworth, Gómez-
Galvarriato, Cardoso, Bernecker, Ramírez, Musacchio y Read fueron publicadas
entre los años 1979 y 2007. Todas analizan los factores que impulsaron y los que
obstaculizaron el desarrollo industrial capitalista de nuestro país durante el siglo
XIX y principios del siglo XX, sólo que Keremitsis, Bernecker, Gómez-Galvarriato y
39
Musacchio. Aldo y Read, Ian. Op.cit. 2007, pp. 842-880. 40
Ídem, pp.842-847.
26
Ramírez únicamente describen y analizan los que afectaron a la industria y
empresarios textiles nacionales, mientras que Plana, Haber, Coatsworth, Cardoso,
Musacchio y Read los que afectaron a toda los empresarios y a todas las
industrias. Plana realiza su obra sobre la base de una síntesis de otros libros, pero
todos los demás autores construyeron su investigación con fuentes documentales
obtenidas en diversos archivos, fuentes hemerográficas y estadísticas. Algunos,
como Haber y Gómez Galvarriato, lo hicieron directamente de los archivos de
empresas. En el caso de Bernecker, él no sólo consulta archivos nacionales, sino
también de Alemania y Francia.
Respecto a sus posturas teóricas, Bernecker utiliza la teoría de la dependencia
versus la “autonomía”, para explicar el papel de los comerciantes extranjeros en
México, que de 1820-1850 se convirtieron en industriales, invirtieron a largo plazo
sus capitales en el país anfitrión, se volvieron miembros de la burguesía y
renunciaron a su papel de agentes del poder “dominante”, que les asigna la teoría
de la dependencia.41 Coatsworth y Gómez-Galvarriato utilizan la teoría del
desarrollo del marco institucional de Douglas North, para explicar cómo la falta de
leyes e instituciones favoreció la creación de monopolios textiles durante la
segunda mitad del siglo XIX. Musacchio y Read utilizan la teoría de redes. En el
caso de los trabajos de Keremitsis, Cardoso, Ramírez, Plana y Haber, por ser de
carácter monográfico no se identifican con una postura teórica en especial.
Más allá de los elementos que señalan los estudios nacionales, es
necesario identificar pormenorizadamente en dónde se establecieron las primeras
fábricas textiles. ¿Cuáles fueron las regiones pioneras en el desarrollo industrial?
¿Qué actores locales y regionales participaron en su establecimiento y
consolidación? Para ello, es forzoso acudir a los estudios regionales.
41
Bernecker , Op.cit., 1992, p. 273.
27
Miradas Regionales
Las regiones textileras más relevantes del país de 1890 a 1930 fueron
Orizaba, Puebla, Guadalajara y el Valle de México. Existen numerosos estudios
acerca de las empresas y empresarios que en ellas operaban. Para los fines de
esta investigación se analiza parte de la obra de Eulalia Rivera Carbó, Bernardo
García Díaz y Aurora Gómez-Galvarriato para la región de Orizaba; para Puebla,
la de Leticia Gamboa, Angelina Alonso y Coralia Gutiérrez; para Guadalajara,
Jalisco, la de Guillermo Beato, Jaime Olveda y Sergio Valerio; y para el Valle de
México, la de Mario Trujillo Bolio y María Eugenia Romero Ibarra. También se
incluyen, por su importancia en los estudios regionales, algunos libros de Mario
Cerutti sobre el norte del país.
La primera fábrica textil moderna, al estilo inglés, se instaló en Orizaba
Veracruz. Se eligió Orizaba por su ubicación junto a corrientes de agua
caudalosas que la hacían idónea para la industria mecanizada y por su cercanía
con la Ciudad de México. En el libro de Rivera Carbo, Herencia colonial y
modernidad burguesa en un espacio urbano. El caso de Orizaba en el siglo XIX,
se analizan los elementos básicos que definieron la estructura y la actividad de la
ciudad de Orizaba durante el siglo XIX, haciendo énfasis en los grupos sociales
con poder que incidieron en su evolución.
Utilizando fuentes del Archivo Municipal de Orizaba y de la Biblioteca Hayden,
de la Universidad Estatal de Arizona, Rivera Carbo describe que el Banco de Avío
hizo un préstamo al empresario Lucas Alamán para que asociado a los hermanos
Legrand, originarios de Francia, instalara en 1836 la Fábrica de Cocolapan.42
Cocolapan se convirtió en la hilandería más grande del país en 1841, con 600
empleados que trabajaban en tres turnos. Debido a los servicios y oficios que
requería de forma directa e indirecta la fábrica, impulsó el desarrollo de empresas
de construcción y transportes en la zona. Sin embargo, por la falta de materia
prima, la competencia de los productos extranjeros que eran más baratos y la
42
Rivera Carbó, Eulalia. Op.cit. 2002, p. 15
28
deficiencia en comunicaciones que presentaba la región, la fábrica disminuyó su
producción. En 1848 fue comprada por Manuel Escandón.43
Rivera indica que “los grandes capitales detrás de la industria textil de la
primera mitad del siglo XIX (Escandón, Alamán y Legrand) no tenían interés en
Orizaba, más que en lo que podía afectar directamente al desempeño de su
empresa. Fue hasta las últimas décadas del siglo XIX, con la llegada del
ferrocarril, del comercio exterior, los distintos servicios públicos y de la política
industrial impulsada por el Porfiriato y con la instalación de otras fábricas textiles
en la región (“Cerritos” (1882), la “San Lorenzo” (1882) y “Río Blanco” (1892),
“Santa Gertrudis (1893)”; “Santa Rosa” (1899)) que la estructura premoderna de
Orizaba se modificó a fondo”.44
Dentro de los estudios regionales, referentes a los trabajadores de las
fábricas textiles de la región de Orizaba, se encuentran obras como la de Bernardo
García Díaz, Un pueblo fabril del Porfiriato: Santa Rosa, Veracruz. En la cual el
autor ofrece una mirada amplia de las formas y los estilos de vida, sí como los
avatares de la lucha obrera en las fábricas textiles Cerritos, San Lorenzo, Río
Blanco, Cocolapan, pertenecientes a CIDOSA, Santa Gertrudis, Mirafuentes, y
Santa Rosa, propiedad de CIVSA. También destaca el papel de todas estas
empresas en la transformación del entorno urbano de Orizaba.
Utilizando fuentes hemerográficas (periódico El Paladín, El Cosmopolita, El
Reproductor, El Imparcial, La Revolución Social) y documentales obtenidas del
Archivo General del Estado de Veracruz, del Archivo General de la Nación, del
Archivo Municipal y Archivo del Registro Civil de Ciudad Mendoza, Archivo de La
Parroquia Santa Rosa de Lima, Archivo Municipal de Nogales, y Orizaba, del
archivo de CIVSA, y de la Colección General Porfirio Díaz, de la Universidad de
las Américas, Puebla, el autor identifica que una estrategia efectiva para la
acumulación de riqueza por parte de los barcelonnettes durante finales del siglo
XIX e inicios del XX fue la de estandarizar el proceso productivo con un mayor
control sobre los trabajadores. García narra que en las fábricas de Santa Rosa y
43
Ídem, pp.64-66. 44
Ídem, p.301.
29
Río Blanco los obreros mexicanos percibieron bajos salarios por laborar extensas
jornadas y fueron tratados de manera despótica y hasta recibieron maltrato físico
por parte de los jefes.
García también describe que en estas fábricas las casas habitación de los
empleados mexicanos fueron de espacios limitados y condiciones insalubres.
Asimismo, señala que los empresarios barcelonnettes para asegurar rentas
monopólicas y recuperar el gasto en salarios, obligaron a sus empleados
mexicanos a realizar sus compras en las tiendas de raya de las fábricas, que eran
propiedad de socios o parientes de los dueños. Estas condiciones de trabajo
dieron pauta para el desarrollo de organizaciones sindicales que sentaron las
bases para la creación de los sindicatos de Santa Rosa y Río Blanco (como el
Club Melchor Ocampo, el Gran Círculo de Obreros Libres y la Casa del Obrero
Mundial), y suscitaron la huelga de Río Blanco (1907) y la Gran Huelga de Orizaba
(1919)45, que junto con la Huelga de Cananea, se consideran los conflictos
laborales de mayor relevancia histórica del país. En este libro, García Díaz cuenta
con una redacción atrayente, pero mayormente descriptiva. Aún así constituye un
valioso legado para conocer las estructuras organizacionales de las fábricas de
CIDOSA, objeto de estudio de esta investigación.
Otra obra dedicada al estudio a la industria textil es la tesis doctoral de
Aurora Gómez Galvarriato, The impact of revolution: Busines and labor in the
Mexican textil industry, Orizaba Veracruz 1900-1930”. En su tesis doctoral,
Gómez-Galvarriato identifica cuáles fueron los efectos de la Revolución Mexicana
en el desarrollo económico del país, además de cuestionar el mejoramiento de los
trabajadores a causa de la revolución. Para ello, estudia el caso de la Compañía
Industrial Veracruzana SA (CIVSA), de 1900 a 1929. Elige a esta empresa porque
representa un ejemplo de un sector el textil en la temprana industrialización de
México, además que se ubica en el pueblo de Santa Rosa, localizado en la región
de Orizaba, Veracruz, cuyo movimiento obrero se asocia con el inicio de la
Revolución.
45
Una profundización mayor sobre la huelga de Río Blanco y la organización de los trabajadores textiles,
sobre la cual volveremos más adelante, fue compilada por Bernardo García Díaz en el 2007.
30
Para probar su hipótesis la autora desarrolló modelos econométricos,
económicos, estadísticos y financieros. En su opinión, “los números proporcionan
resultados precisos que la sola narración, aunque deben ser utilizados con
cuidado y suspicacia”.46 Las fuentes que utilizó fueron los Archivos de CIVSA y en
menor parte los de CIDOSA, el Archivo Municipal de Orizaba, el Archivo del
Departamento del trabajo del AGN, la Colección de Porfirio Díaz, de la Universidad
Iberoamericana, el Archivo del Banco Nacional de México (Banamex), el fondo
especial de la Biblioteca Lerdo de Tejada, la Biblioteca de la Secretaría de
Finanzas, el Archivo de Condumex, la Biblioteca del Banco de México, la
Biblioteca “Benito Juárez”, de Ciudad Mendoza, y la Biblioteca de Harvard
University.
En virtud de que su obra ha sido básica para el desarrollo de la presente
investigación, dedicaremos especial atención al enfoque utilizado por Gómez
Galvarriato. Ella basa su estudio en la propuesta teórica de Alfred Chandler para
explicar la evolución de la estructura organizacional y las estrategias de la
empresa. La estructura organizacional de CIVSA, según la autora, poseía
características de una empresa capitalista y una familiar. Se acompañó de una red
de relaciones étnicas, que le permitieron el aumento de capital y la disminución del
riesgo de fraude, en un contexto de subdesarrollo financiero y de instituciones
legales. La tesis de Gómez Galvarriato aporta valiosos análisis pormenorizados de
los estados financieros, las actas de consejo, las nóminas de la empresa, de la
historia de los dueños y de los trabajadores de CIVSA. No obstante, falta la
comparación de esta empresa con similares de otras regiones textileras del país y
la comparación de sus empresarios con más dueños de fábricas textiles de la
época.
Estas comparaciones las efectúa en el artículo electrónico divulgado en la
página del CIDE: La revolución en la distribución y en la producción de textiles en
México durante el Porfiriato. Gómez analiza las estrategias de producción,
condiciones tecnológicas, operación, distribución y financiamiento de las: 1.
Compañía Industrial de Orizaba, propietaria de las fábricas Cocolapan, San
46
Gómez, Galvarriato, Aurora. Op.cit. 1999a, p. 1-5.
31
Lorenzo, Cerritos y Río Blanco en el Estado de Veracruz; 2. La compañía
Industrial Veracruzana SA, a la que pertenecía la fábrica Santa Rosa ubicada, en
el estado de Veracruz; 3. La Compañía Industrial de Manufacturera SA, cuyos
dueños también poseían las fábricas textiles Hércules, San Antonio y Río Grande,
ubicadas las dos primeras en Querétaro y la última en Jalisco; 4. La Compañía
Industrial San Antonio Abad SA, propietaria de las fábricas San Antonio Abad, La
Colmena y Miraflores, ubicadas en el DF y el Estado de México. 5. La Compañía
Industrial de Atlixco SA, (CIASA), dueña de la Fábrica de Metepec, Puebla. 6. La
Compañía Industrial San Idelfonso SA, que poseía la fábrica de San Idelfonso, de
la Ciudad de México. 7. La Hormiga SA, propietaria de la fábrica La Hormiga, en el
DF. 8. La Compañía Industrial de Guadalajara SA, propietaria de las fábricas Río
Blanco, La Experiencia y Atemajac, en Jalisco. 9. En 1898, de la sociedad Veyan
Jean y Cía S. En C. Propietarios de la fábrica de La Magdalena, en el DF.
La autora afirma que “estas empresas textiles, elaboraron en 1912 el 36.2
por ciento de la producción de telas en México. Contaron con más del 40 por
ciento del total de husos y telares que existían en el país y tuvieron el 38.1 por
ciento del total del mercado nacional de productos textiles”.47 Lo cual le sirvió para
describir los factores que impulsaron el desarrollo de estas compañías textiles.48
También, señala que “los grandes cambios tecnológicos en comunicaciones
y transportes junto con los importantes cambios políticos en México ayudaron a
integrar un mercado nacional, y para abastecer este mercado más amplio, hubo
que transformar los negocios de fabricación para producir grandes volúmenes de
artículos y desarrollar redes de comercialización y distribución nacional, que
permitieron generar economías de alcance49. Claro que esto sólo fue posible con
47
Ídem, p.59 48
Según la autora, debido a la maquinación de los procesos de trabajo aumentó el tamaño de las fábricas
textiles en México a un ritmo sin precedente: mientras en el periodo de 1843 a 1879 el número de husos
había aumentado en 138 por ciento, en los 35 años siguientes (1879-1913) aumentaron en 194 por ciento.
Igualmente los medios de transporte y comunicaciones, permitió a las fábricas textiles disminuir sus costos de
transportes y aumentar sus economías de alcance. Ídem. 49
Es necesario hacer la distinción del concepto de economía de escala y economía de alcance. Para Alfred
Chandler, las economías de escala se producen cuando al aumentar el tamaño de una sola unidad de
producción o distribución o de un solo producto se reducen los costos de producción o distribución. Mientras
que las economías de alcance resultan de usar una sola unidad de negocios para producir o distribuir varios
productos y con esto reducir los costos de transacción. Chandler, Alfred. D. Scale and scope: the dynamics of
industrial capitalism. Cambridge, Mass., Belknap Press, 1990, pp. 17-18.
32
grandes capitales, por lo que los empresarios textiles –en su mayoría de origen
barcelonnette- integraron sus negocios comerciales a sus compañías textiles y a
bancos en donde la participación de los empresarios franceses fue mayoritaria”.50
El artículo de Gómez demuestra que el producir a grandes volúmenes
(economías de escala) y comercializar mediante redes de distribución nacional e
internacional (economías de alcance) resultaron ser las estrategias adecuadas
para el desarrollo de las compañías textiles en México, durante y poco después
del Porfiriato (1876-1912).
Un libro que debe ser mencionado, aunque sólo resulte una publicación de
aniversario, es la obra de Luis Everaer (1990), Río Blanco. Compañía Industrial de
Orizaba SA, Centenario, 1899.-1989. En este libro el autor utiliza fuentes
documentales de la empresa y estudios de otros investigadores para narrar la
historia la Compañía Industrial de Orizaba SA (CIDOSA). La obra inicia con una
historia descriptiva de la industria textil en México desde la época prehispánica
hasta la Independencia. Continúa con la descripción de la región de Orizaba,
donde los empresarios barcelonnettes, socios de CIDOSA, decidieron llevar a
cabo su estrategia principal de comprar y modernizar las fábricas textiles activas
de Cerritos, San Lorenzo y Cocolapan, así como fundar, la Fábrica de Río Blanco.
Posteriormente relata el nacimiento, vicisitudes y estrategias de renovación que
aplicaron los dueños de CIDOSA para permanecer compitiendo, a pesar de los
vaivenes de la economía nacional y su atraso tecnológico. Finalmente aporta
ciertos testimonios documentales, como los resúmenes de los informes del
Consejo de Administración de 1903 a 1944, y un análisis pormenorizado de las
áreas de trabajo de cada una de las fábricas – ambos piezas fundamentales para
este estudio- que enriquecen y fortalecen el objetivo principal de la obra: contar la
historia del centenario CIDOSA.
Otra región que fue uno de los centros de producción textil más importantes
desde la Colonia hasta el siglo XIX fueron las ciudades poblanas de Puebla y
Atlixco. Las fábricas textiles se instalaron ahí por las siguientes razones: A. Era la
ruta entre el puerto de Veracruz y el DF, con lo cual se ofrecía a los inversionistas
50
Gómez, Galvarriato, Aurora. Op.cit. 1999a, pp. 60-64
33
la cercanía con las ciudades más densamente pobladas y, por lo tanto, su
mercado; B. Fue de las primeras regiones en ser colonizadas y contaba con
infraestructura como molinos y haciendas para instalar fábricas; C. Disponía de
ríos, como Atoyac y San Baltasar –entre otros- que atravesaban las ciudades de
Puebla y Atlixco y les proporcionaban a esos molinos y haciendas energía
hidráulica, y posteriormente energía hidroeléctrica a las fábricas textiles; D. Podía
disponerse de materia prima rápidamente debido a la proximidad del algodón
importado que arribaba al puerto de Veracruz, o al cultivado en el Papaloapan que
era el principal abastecedor antes de La Laguna, E. Pero principalmente por la
tradición de mano de obra capacitada en el trabajo de hilanderos y tejedores, que
además trabajaban por bajos salarios. Los industriales textiles en Puebla entre
1880-1890, pagaban 25 centavos de salario mínimo mientras que en Orizaba era
de 35 centavos. Igualmente, la tradición textilera de Puebla como factor de
localización proporcionaba a los inversionistas una red comercial y circuitos
mercantiles establecidos con antelación.51
Leticia Gamboa, en su tesis de maestría, Los empresarios de ayer. El grupo
dominante en la industria textil de Puebla 1906-1929, proporciona un
acercamiento a la historia de un grupo de empresarios de la región de Puebla
durante las primeras tres décadas del siglo XX. Para ello, la autora utilizó el tomo
1 al 18 del libro 3 de Comercio (1876-1930) del Archivo Público de la Propiedad
del Estado de Puebla, documentos de 1911-1912 del Archivo Judicial del Estado
de Puebla, documentos de 1911-1925 del Archivo General de la Nación, y algunos
documentos de la Junta de Conciliación y arbitraje.
Inicia su análisis comparando a Puebla con otras regiones textiles como
Veracruz (específicamente Orizaba) y el Distrito Federal (DF), para identificar las
razones por las que Puebla mantenía la primacía de la industria textil mexicana.
Con estas comparaciones, Gamboa determina que las fábricas poblanas tenían
menor capacidad de producción que las veracruzanas y, por ello, compensaban su
pequeñez con numerosidad, por lo cual Puebla siempre mantuvo el mayor
porcentaje de fábricas textiles que las otras regiones. Después de este apartado,
51
Gamboa Ojeda, Leticia, Op.cit. 1985, pp. 40.
34
analiza varios hechos del periodo para ubicar el contexto en el que los
empresarios debieron actuar. Examina los cierres por saqueos y daños de la
Revolución Mexicana, la escasez de algodón, los incendios de las fábricas, los
movimientos obreros, los gobiernos y las crisis mundiales.52
En la segunda parte del libro, ofrece el estudio de los empresarios textiles,
en su mayoría españoles provenientes del norte (familia Rivera-Quijano, Conde-
Conde, Díaz Rubín y Gabito Méndez), algunos franceses originarios mayormente
del pueblo de Barcelonnette (Lions, Reynaud, Sibilot) y mexicanos (Conde-Conde,
De Velasco, Gavito-Méndez, Mantiezo, Ritter) que ostentaban el poder económico,
social y político en Puebla de 1906-1929. Estos empresarios, indica Gamboa,
participaron en el comercio (La Ciudad de México), la industria textil (CIDOSA, la
Perfeccionada, San Idelfonso), haciendas, agroindustrias, bancos (Banco Oriental
de Puebla), petróleo (Cía. Pánuco del comercio de Puebla), cemento (Cía.
Manufacturera de Cemento Eiva SA) y Comunicaciones (Cía. Telefónica de
Puebla). Es decir, constituyeron oligopolios diversificando sus inversiones, pero
siempre tratando de mantener sus negocios en sociedades familiares o con
personas allegadas (amigos, otros compatriotas). Afirma Gamboa, fueron grupos
cerrados que mantenían su composición étnica por el matrimonio endogámico, la
creación de instituciones culturales y religiosas. Aunque no muchos de ellos
tuvieron puestos públicos, mantuvieron relaciones cercanas al gobierno, lo cual
garantizó y fomentó su poder oligárquico.
En su último apartado, Gamboa realiza un estudio puntual de las familias
Rivera Quijano y Familia Conde-Conde. Sin embargo, a pesar de ser una obra con
una redacción y análisis espléndidos, no considera la política industrial y la
organización empresarial de los fabricantes pues menciona la propia autora, eso
es tarea de otra investigación.
Otro libro de la misma autora, donde sí examina a la organización
empresarial de las fábricas textiles de la familia Rivera-Quijano, es Empresas y
empresarios textiles de Puebla. Análisis de dos casos. El interés primordial de
Gamboa en este ensayo se centra en el de las formas jurídicas y sus
52
Ídem, pp. 32.
35
implicaciones económicas en el caso de la industria textil poblana. En esta obra la
autora describe cómo la industria textil en el siglo XIX comenzó organizándose a
través de las sociedades de personas en dos modalidades: sociedad de nombre
colectivo limitado y sociedad en comandita simple. Después, las de mayor capital
en sociedades anónimas.53
Un tercer trabajo referente al comportamiento y estructura de los
empresarios textiles de Puebla es la obra de Angelina Alonso, Los libaneses y la
industria textil en Puebla. El objetivo general de este trabajo fue estudiar las
características de las minorías étnicas no indígenas en México, sus procesos de
integración al país y las relaciones entre su cultura de minoría y la cultura
dominante en México. En particular analizó las características de la industria textil
en la ciudad de Puebla, estableciendo los mecanismos de inserción de los
inmigrantes libaneses en esa rama. Las fuentes que utilizó fueron materiales del
Departamento de Extranjería del Archivo del Ayuntamiento de Puebla, el Archivo
General de Notarías de Puebla, fuentes hemerográficas y entrevistas a la
comunidad libanesa de la primera, segunda y tercera generación.
A lo largo de esta obra, la autora determina que los libaneses ingresaron a
México a partir de 1860 y se dedicaron inicialmente al comercio ambulante y,
posteriormente, al fijo. Entre 1925-1940 estos inmigrantes invirtieron de manera
importante en la industria textil, aprovechando la coyuntura de la crisis. Entre
1907-1908 compraron varias fábricas ya establecidas (La Regla, El Patriotismo, La
Campana, entre otras) y las equiparon con nueva maquinaria. Al igual que los
españoles también diversificaron sus inversiones en copropiedad con otros
libaneses; se integraron hacia atrás y hacia adelante, es decir incorporaron a la
estructura de la empresa las actividades de obtención de materias primas, al
producir su propio algodón que surtía a sus fábricas de ropa, la cual también ellos
mismos comercializaban. Sus gerentes y administradores fueron sus hijos.
También crearon sus propias instituciones para fortalecer su cohesión, como la
Cámara de Comercio Libanesa, el Centro Libanés en Puebla (1969), la Sociedad
Financiera para proporcionar capital, el Club Femenino Libanés en Puebla, la
53
Gamboa, Leticia, y Estrada, Rosalina. Op.cit. 1986, pp. 55.
36
Unión Mutualista Libanesa, entre otros. El texto de Alonso es un ensayo
descriptivo de fácil lectura e interesantes propuestas. Estudia a un grupo de
empresarios libaneses que hasta ese momento no habían sido analizados.
Un libro más reciente sobre los empresarios textiles en la región de Puebla
es el de Coralia Gutiérrez, Experiencias contrastadas. Industrialización y conflicto
en los textiles del centro-oriente de México, 1884-1917. El objetivo de este trabajo
es probar que el proceso de producción de la industria en México se ha construido
socialmente por la interacción entre empresarios y obreros. Para ello, se toma
como caso de estudio las fábricas textiles de Puebla y Tlaxcala, de 1884-1917. En
esta obra, la autora reconstruye un grupo empresarial en una región definida y en
una rama de la economía, tratando aspectos del poder o de otros grupos
relacionados. También realiza un análisis de las relaciones obrero-empresarios,
obrero-Estado, y empresarios-Estado en periodos de trastornos sociales, porque
es en estos momentos cuando son más nítidas, ya que es en las coyunturas
donde mejor se observa cómo se integra y actúa el grupo, pero primordialmente
cómo ejerce el poder.
Las fuentes que utiliza para su investigación son: en el ámbito nacional, la
Colección General Porfirio Díaz, los documentos de la Embajada de España en
México, los archivos del Centro de Estudios de Historia de México de Condumex,
(Venustiano Carranza, Francisco León de la Barra, General Jenaro Amezcua,
Ramón Corral, Manuel González) los fondos de Gobernación, Presidentes,
Revolución y Trabajo del Archivo General de la Nación, el Archivo de la
Revolución Mexicana y el de Francisco I. Madero del INAH, el Archivo Histórico de
la Secretaría de la Defensa Nacional. En el ámbito regional, el archivo privado del
gobernador de Puebla, de 1892-1811, Mucio Martínez (que no se había utilizado
para estudiar a los empresarios), el del notable empresario de la época en Puebla
y Tlaxcala Andrés Matienzo, el Archivo del Congreso del Estado de Puebla, el
Archivo del Ayuntamiento de la ciudad de Puebla, el Archivo Histórico de la
Cámara de la Industria textil de Puebla y Tlaxcala y el Archivo General de Notarías
de Puebla. Gutiérrez menciona que el análisis de los protocolos notariales le
permitió vislumbrar aspectos de los empresarios que hasta la fecha se sabía poco,
37
como las relaciones endógenas y políticas de los años noventas del siglo XIX, el
origen del capital, la diversificación y la dinámica de las inversiones.
En palabras de la autora, los estudios de empresarios, aunque abundantes
y muchos de ellos con gran riqueza monográfica y documental, se han ocupado
básicamente de sus actividades económicas y cuando han tratado aspectos del
poder o de otros grupos relacionados con ellos, ha sido casi siempre sin elegirlos
como punto central de análisis.54 Por eso a su juicio, al incluir en este libro las
relaciones de poder que generan las actividades económicas junto con los
avances obtenidos por los estudios regionales de historia empresarial de otros
investigadores, le permiten aportar varias ideas que contribuyan a explicar algunos
ejes articuladores del conjunto de la burguesía mexicana en el ámbito intra e
interregional, así como nacional, además de los lazos estrechos que ésta tenía
con el Porfiriato.55
Para Coralia Gutiérrez, desde el nacimiento como actores sociales y
políticos, los industriales estuvieron ligados al Estado. Posteriormente, con la
llegada de Porfirio Díaz al poder, se impulsó el proceso de industrialización a
través de capitales extranjeros, con lo que se subordinó el desarrollo del país a los
intereses capitalistas de Europa y Estados Unidos (EU), y además se otorgó
prestigio político a estos empresarios debido a que desde la perspectiva de “los
científicos”, los empresarios eran agentes centrales del progreso. El resultado de
la política económica del Porfiriato, en este aspecto, fue la coincidencia entre el
grupo gobernante y los empresarios.
La autora señala que los empresarios textiles de Puebla en su mayoría eran
españoles, que llegaban a México trabajando por algún tiempo como
dependientes en tiendas de otros compatriotas, luego conseguían algún préstamo
y se establecían por su cuenta. De acuerdo a Gutiérrez, las fortunas que estos
empresarios amasaron fueron principalmente generadas en la época de la
Reforma y la República restaurada mediante el comercio, el matrimonio y
54
Gutiérrez Álvarez, Coralia. Op.cit. 2000, p.20 55
Ídem, pp. 21-26
38
aprovechando la desamortización de bienes de la Iglesia, pero además por la
diversificación e integración de sus inversiones.
La diversificación de sus inversiones se visualiza cuando la autora describe
cómo a partir de la segunda mitad del siglo XIX los empresarios españoles
controlaban en Puebla la industria textil y mantenían inversiones en la industria
química (blanqueadores para los textiles), la de alimentos (harina, aceites, azúcar,
piloncillo, bebidas alcohólicas, tabaco, chocolate, aguas gaseosas, galletas,
pastas), actividades minero metalúrgicas (cobre, hierro, plomo, oro, plata) e
instituciones de crédito (Banco Oriental). Así, identifica que a diferencia de los
empresarios que antecedieron al grupo analizado, esta generación estimulaba la
inversión, diversificándola y contando con el apoyo del gobierno.
Con respecto a la integración, se describe que casi todos estos empresarios
mantuvieron sus negocios comerciales. Entonces ellos mismos se encargaban de
la distribución de sus productos, sobre todo respecto a los textiles que se vendían
en la ciudad de Puebla. Asimismo, cuando estos empresarios necesitaban
recursos financieros para incrementar sus inversiones, los obtenían de las
relaciones familiares y de paisanaje y del Banco Oriental, fundado por ellos
mismos, con lo cual cerraban la cadena producción-distribución-financiamiento.
Justamente el Banco Oriental fue el que otorgó préstamos al gobierno, lo cual
consolidó el poder de este grupo empresarial. Los vínculos esenciales entre
empresarios poblanos con el régimen rebasaban al Gobierno del Estado de
Puebla, ya que estos empresarios se las ingeniaban para mantener vínculos con
Porfirio Díaz y los científicos como Joaquín Casasús, que fue representante de la
firma más importante de Puebla (Quijano-Rivera Cía.), fue accionista del Banco
Oriental y también fue colaborador del gobierno central.
En el ámbito local, la autora describe que algunos empresarios textiles
ocuparon el ayuntamiento y el Congreso de Puebla, pero no hubo muchos
empresarios textiles que participaran directamente en la política poblana de
manera directa y convencional, sino que su influencia se daba por medio de
acreditados abogados liberales que fueron sus voceros, enlaces y apoderados,
como Félix Bestegui, Antonio Pérez Marín, Rafael Isunza y Miguel López Fuentes.
39
Tener la supremacía del poder local, aunque compartido con la élite económica y
política, significaba no sólo una forma de obtener prestigio social y riqueza, sino
contar con una estructura para acumular poder y relaciones que los empresarios
heredaban a sus hijos, un legado de gestión.56 Con estos recursos políticos los
empresarios lograron beneficios económicos: rebajas a las pensiones de aguas
vigentes o la cobertura institucional para controlar las localidades donde estaban
situadas las fábricas textiles por medio de jueces de paz.57
Coralia Gutiérrez también realiza un análisis pormenorizado de los
conflictos obreros en las fábricas textiles de Puebla y Tlaxcala, mencionando los
principales líderes obreros, políticos y empresarios que participaron en ellos. Entre
los empresarios menciona a Ignacio Morales, Tomás Benítez Furlog, Luis Arias,
Adrián Reynaud, Enrique Tron, José Signoret, y Manuel Rivera Collada, heredero
de los Quijano Rivera y principal empresario textil de Puebla, dueño de las fábricas
“La Esperanza” y “El Mayorazgo”, ubicadas en la Ciudad de Puebla; “La Maravilla”,
en la Ciudad de México, y “Vistahermosa”, en Oaxaca. Concluye que el desarrollo
de algunos grupos empresariales supuso vínculos estrechos con los científicos
como el grupo de Puebla. Las características de todos los grupos eran similares.
En el caso de los empresarios de Puebla y Tlaxcala el poder económico y político
se reveló en distintas adscripciones organizativas del ramo económico (agricultura,
comercio, industria y banca), político (funcionarios, asesores, etc.) y de clase
(Centro Industrial Mexicano). Posteriormente con la crisis del régimen, la
Revolución y el cambio de gobierno, los empresarios de Puebla y Tlaxcala no
perdieron influencia en el gobierno, sino que nuevos sectores, como las
organizaciones obreras, ganaron poderío al incorporarse a la oposición política. La
solidez de la organización de los empresarios y la debilidad de los obreros les
permitió a los primeros seguir obteniendo ciertas concesiones gubernamentales,
sólo que ahora en forma de instituciones.58
El libro de Coralia Gutiérrez representa un loable esfuerzo por integrar un
análisis regional de tres actores (empresarios, obreros, Estado) en un determinado
56
Ídem, pp.122, 127. 57
Ídem, p. 130. 58
Ídem, pp. 351-352.
40
periodo. En algunas secciones de su obra profundiza en algunos detalles de
empresas y empresarios particulares, pero la mayor parte del libro está enfocado a
un estudio general de las relaciones de poder entre los empresarios y el Estado
como el libro de Ramírez Rancaño.
Una tercera región textilera importante del siglo XIX era la del Valle de
México. Referente a esta región, se eligió la obra de Mario Trujillo Bolio, porque
este autor se enfoca a analizar a los trabajadores, empresas y empresarios textiles
del Estado de México y el Distrito Federal durante el siglo XIX.
En primer lugar había de poner atención a su tesis de maestría, Operarios
fabriles en el Valle de México 1864-1884 espacio, trabajo, protesta y cultura
obrera. En este trabajo, Trujillo Bolio utiliza fuentes documentales obtenidas de la
Dirección General de las Industrias Nacionales y de los Anales del Ministerio de
Fomento, para tratar de recrear el entorno del trabajo fabril de los obreros de la
Fábrica La Magdalena Contreras. A través de su obra, se muestran los episodios
que les permitieron aflorar a los obreros, sus demandas colectivas, métodos de
autodefensa, protesta organizada y sus manifestaciones culturales59. Para ello se
sirve de abundantes estadísticas y gráficos, sin embargo adolece de un análisis
pormenorizado de las estrategias de negocios de sus propietarios.
Estas se analizan en el artículo La Fábrica Magdalena Contreras (1836-
1910). Una empresa textil precursora en el Valle de México. En este ensayo, el
autor utiliza documentos proporcionados por la propia fábrica para describir su
funcionamiento desde 1836 hasta el periodo revolucionario. Trujillo afirma que
esta fábrica se estableció estratégicamente en un espacio económico en el que se
había realizado la manufactura artesanal de paños durante la época colonial. Tuvo
como socio principal a Antonio Garay, empresario español que figuró como
prestamista del gobierno, socio mayoritario en compañías mineras, el estanco de
tabaco y el contrato de construcción del camino de hierro entre Perote y Veracruz,
así como uno de los hombres de negocios que ocupó mayor número de cargos en
los gobiernos. Fue responsable de la Dirección de Colonización e Industria (1846),
59
Trujillo Bolio, Mario. Op.cit. 1997.
41
de la Dirección General de Industrias, Ministro de Hacienda (1834 y 1846) y formó
parte de la Junta Directiva del Ramo de Peajes (1846).
En lo que respecta al funcionamiento de la fábrica, el autor señala que tenía
integrada su operación: desde el sembradío de algodón, la producción de telas en
la fábrica, hasta los cajones de ropa donde se distribuían y comercializaban sus
productos. Asimismo, describe que debido a problemas financieros, entre 1856 y
1863, la fábrica Magdalena Contreras fue vendida en 1864 a Pío Bermenejillo,
quien en 1898 la vendió a Meyran Donnadie y Cía., y en 1912 a Adrián Jean y Luis
Veyan, los cuales continuaron con ganancias considerables aún después de la
Revolución.60
Otra obra más reciente de Trujillo Bolio es el libro Empresariado y manufactura
textil en la Ciudad de México y su periferia S XIX. Los ejes centrales del quehacer
histórico de esta obra -en palabras del autor- son: “1) Las conexiones causales
que se refieren a las formas productivas que adquirió la manufactura textil en la
Ciudad de México y zonas aledañas. 2) La forma en que se llevo a cabo el abasto
de las fibras textiles y la realización comercial de hilados y tejidos y ropa. 3) El tipo
de empresariado que emergió en la readecuación y establecimiento de los centros
fabriles. 4) Las relaciones sociales que se dieron entre las esferas públicas y
privadas para atender los asuntos de la industria textil”.61 Para cumplir con estos
ejes Trujillo estudia la Fábrica de San Idelfonso, y de la Magdalena Contreras.
Obtiene gran parte de sus datos de sus libros anteriores y del Inventario de
existencias de estas dos fábricas en el Archivo del Tribunal de Justicia del Distrito
Federal.
En esta obra nuevamente describe la historia de la fábrica de La Magdalena
Contreras, sus dueños, y funcionamiento, sólo que ahora incluye información de
los circuitos comerciales de textiles en la región, de los vínculos entre empresarios
textiles con algunos gobernantes y la descripción del funcionamiento de la fábrica
San Idelfonso. Además anexa a la mitad de la obra magníficas ilustraciones de las
fábricas, algunas tomadas por el mismo autor, que enriquecen el relato. Una de
60
Trujillo Bolio, Mario. Op.cit. 1997, pp.245-274. 61
Trujillo Bolio, Mario. Op.cit. 2000, p.15.
42
sus aportaciones más valiosas, desde nuestra perspectiva es, que permite
identificar algunas de las estrategias productivas en cuanto a tecnología y
disposición de la planta productiva de estas dos fábricas.
Otra obra historiográfica que estudia la actividad empresarial en general del
Estado de México y del estado de Sinaloa en los siglos XIX y XX es la de María
Eugenia Romero Ibarra. De esta autora es importante destacar los aportes de dos
de sus obras relacionados con el marco teórico de esta investigación: la teoría de
redes. La primera, Hombres de negocios y cambio institucional en el Estado de
México, 1880-1910. En este texto la autora indica que su objetivo es estudiar la
historia de la actividad empresarial y su interrelación con los cambios del aparato
institucional en el Estado de México en el último tercio del siglo XIX. Las preguntas
que guían su investigación son: ¿De qué forma se produjo la tardía
industrialización de esta región y cuáles fueron las características del proceso?
¿Quiénes fueron los hombres que lo iniciaron y cómo se relacionan con el poder
del Estado? 62
De acuerdo a Romero Ibarra, la industria del Estado de México inició a finales
del siglo XIX por un grupo de hombres de negocios ligados al poder porfirista de la
región. Esos hombres tenían en común su origen agrario. Fueron dueños de
haciendas agrícolas y se dedicaron al comercio. En general, fueron empresarios
de fortunas medianas, a excepción de Íñigo Noriega (industrial textil) e Ignacio de
la Torre, quienes destacaron a nivel nacional por su riqueza y sus relaciones con
otros empresarios. Asimismo, se mantuvieron ligados al poder de la región
mediante alianzas e inversiones estatales en infraestructura y comunicaciones que
benefició el desarrollo de sus negocios, pero que también impulsó la urbanización
de la zona.63
La autora señala que los empresarios que destacaron a nivel estatal fueron:
Henkel, Graff, Pliego, Riba y Echeverría, De la Torre y Mier, Medina Garduño,
Cortina, Pichardo, Pagaza y otros. Algunos de origen y raíces coloniales, con
fuertes vínculos con el antiguo grupo de poder económico: los hacendados de la
62
Romero, Ibarra, María Eugenia. Op.cit. 1999, pp. 123-124. 63
“En 1880 el Gobierno del Estado, a cargo de Zubieta, introdujo agua potable y drenaje, alumbrado, telégrafo
y teléfono y reorganizo las fuerzas de seguridad y se construyo el ferrocarril en mayo de 1882” (Ídem).
43
región de Lerma. Después de 1890 algunos de estos empresarios formaron
grupos con relaciones sociales y políticas que no eran permanentes y que se
aglutinaban de acuerdo a los conflictos políticos o económicos que se
presentaban. Así, se formaron dos grupos: uno encabezado por los hermanos
Henkel, ligados al gobierno de Villada, y otro no siempre cohesionado de
empresarios innovadores y liberales al que pertenecía Manuel Medina y que no
gozaba de los favores de la administración estatal. Después, con la Revolución,
los empresarios no continuaron con la reproducción del capital, hasta 1934,
cuando empezaron a recuperarse.64
La segunda obra, Redes empresariales, industria azucarera y políticas
públicas en México. 1900-1940. En este texto, la autora estudia cómo la
producción azucarera en México durante el siglo XIX enfrentó diferentes crisis de
producción y consumo y para 1910 debió hacer frente también, a los problemas de
financiamiento y de comercialización. Romero afirma que debido a estas crisis,
surgieron las asociaciones de empresarios azucareros regionales (Sinaloa,
Morelos, etc.) que buscaron enfrentar a los acaparadores que controlaban el
mercado del Distrito Federal; regular los precios y crear sus propias redes de
comercialización y distribución. Estas redes se apoyaron en el Estado para lograr
sus objetivos y, además, al productor que no aceptara las condiciones de la red,
se le sancionaba sin créditos, sin mercado y vetándoles los permisos de venta.
Estas asociaciones impusieron cuotas de producción, se encargaron de exportar
el excedente y de presionar al gobierno para evitar la importación de azúcar con
aranceles. Su éxito se baso en la disciplina de los empresarios y la aceptación de
sus acuerdos.65
Romero señala que las redes fueron el mejor medio disponible para resolver y
enfrentar la crisis de la industria del azúcar hasta la Revolución. Asimismo un
medio muy eficaz para comprender la forma que se asumieron posteriores
integraciones con otras asociaciones de empresarios azucareros que compitieron
entre ellas y debilitaron el cumplimiento de los acuerdos hasta 1931. En un
64
Ídem, pp. 132-141. 65
Romero Ibarra, María Eugenia, Op.cit. 2006, pp. 309-355.
44
momento en el cual la crisis del 1929 condujo a asociarse nuevamente en la
Asociación Azúcar SA.66
En estos ensayos Romero Ibarra logra demostrar que cuando los
empresarios enfrentan entornos complejos con altos niveles de incertidumbre,
optan por asociarse entre ellos, con el gobierno o con otros grupos de poder para
sobrevivir y aumentar sus ganancias.
Por lo que hace a la región más occidental del país, las fábricas textiles se
instalaron en Guadalajara, debido a su situación geográfica, la cual les permitía
distribuir sus mercancías hacia el noroeste (Durango, Zacatecas, Colima, Nayarit,
Sinaloa) y el centro de México (Guanajuato, México DF). Algunos de los autores
que investigan a las empresas y a los empresarios textiles de Jalisco son Jaime
Olveda, Guillermo Beato y Sergio Valerio Ulloa.
Jaime Olveda ha realizado una extensa investigación sobre la región de
Guadalajara. Entre sus obras destacan el libro compilado por él y José María
Muría, Industria y Comercio. En este libro se reunieron los trabajos elaborados por
distintos historiadores para explicar el desarrollo de la industria y el comercio en la
región. De estos estudios, resaltan los textos de Jorge Durand: La Industria textil
en el siglo XIX; el del propio Jaime Olveda, El monopolio rebocero Guadalajara-
Zamora; el de Luisa Gabayet, La industria textil, y el de Patricia Arias, El proceso
de industrialización: siglo XX.
Jorge Durand utilizó los protocolos de notarios del Archivo de Instrumentos
Públicos de Guadalajara para relatar cómo surgieron las fábricas textiles en
Jalisco. De acuerdo al autor, las primeras manufacturas textiles fueron la de
“Jauja”, propiedad de la Casa Barron Forbes y Cía., instalada en 1838, y la
“Bellavista”, propiedad de la Casa comercial Castaños, en 1841, ambas
establecidas en el cantón de Tepic. En Guadalajara, “La Escoba”, de Manuel
Olasagarre, y “la Prosperidad Jalisciense”, mejor conocida como “Atemajac”, de
José Palomar, ambas inauguradas en 1841. Posteriormente, en 1866 se fundó
“Río Blanco”, propiedad de Lowere Hermanos, y “La Experiencia”, también
propiedad de Manuel Olassagarre y Sotero Prieto y Cía. Estas cuatro fábricas
66
Ídem.
45
constituyeron la gran industria de esa época y tuvieron a su alrededor talleres que
las abastecieron de hilo e hilaza. Fueron financiadas por capitalistas locales que
habían hecho sus fortuna en el comercio, haciendas, minas y cualquier actividad
que les generara dividendos. En 1889, las fábricas de “La Escoba”, “Río Blanco” y
“Atemajac” fueron compradas por la Cía. Industrial de Jalisco SA. Esta empresa
fue un holding67 y en 1899 se transformó en la Cía. Industrial de Guadalajara SA
(CIGSA).
En 1896 surgió la Cía. Industrial Manufacturera, liderada por la familia Martínez
Negrete, dueños de la fábrica Río Grande. Debido a las deudas de esta familia
con el Banco de Jalisco, la compañía se declaró en quiebra en 1904 y la fábrica
textil pasó a manos de los franceses Cuzin, Fortoul Bec, Lebré y Brun, quienes
posteriormente compraron la fábrica “Hércules”, de Querétaro, y formaron un
holding similar al de CIGSA.68
Jaime Olveda utilizó información del Archivo de Instrumentos Públicos del
Estado de Jalisco y del Archivo Histórico Municipal de Guadalajara para estudiar el
monopolio rebocero de Guadalajara-Zamora. De acuerdo a Olveda, la rebocería
figuró como uno de los principales oficios tapatíos de mediados del siglo XIX. La
producción de rebozos de Guadalajara cubrió la demanda local y de los estados
de Sinaloa, Sonora, Durango y Zacatecas. Inicialmente su producción fue
artesanal, hasta que un grupo de franceses (Carlos Tarel, Luis Lyon, Santiago
Fortul y Carlos Durpat) invirtieron en el ramo y la elaboración se cambió de talleres
familiares a manufacturas de rebozos, como la fábrica de rebozos de seda de
Tarel y Cía. Sus socios mantuvieron el monopolio de hacer rebozos durante el
siglo XIX, ya que habían comprado en 1849 la patente para hacerlos a Vicente
Munguía, artesano de Zamora, Jalisco.69
Luisa Gabayet empleó datos del Archivo Histórico del Estado de Jalisco para
explicar el papel de los empresarios franceses, en especial los provenientes del
Valle de Ubaye, los barcelonnettes, en el desarrollo de la industria textil y la
urbanización de Guadalajara. La autora menciona que estos empresarios
67
Es una empresa cuyo capital consiste sólo en acciones de otras firmas, las cuales están bajo su control. 68
Jorge Durand, Op.cit. 1993, pp. 21-32. 69
Olveda, Jaime. Op.cit. 1993, pp. 33-53.
46
establecieron en Guadalajara “Las Fábricas de Francia”, una de las primeras
tiendas departamentales de la región y que ha operado en gran escala desde
1886. Esta tienda vendía a los estados vecinos del Noroeste y el Pacífico.
También señala que los barcelonnettes invirtieron en la industria textil de algodón
porque recibieron diferentes concesiones del gobierno local. Por ejemplo, la
Compañía Industrial de Guadalajara, obtuvo una exención de impuestos por 10
años con la condición de hacer funcionar una planta hidroeléctrica que debían
alimentar de electricidad a sus dos fábricas textiles y a la ciudad de Guadalajara.
La empresa tuvo dos fuentes de ingreso: la producción textil y la venta de
electricidad. La empresa también construyó y operó un ferrocarril eléctrico, por lo
cual recibió una concesión de impuestos por 20 años. En 1907 la compañía vendió
los derechos de propiedad del ferrocarril.
Gabayet afirma que los mercaderes franceses tuvieron una notable influenza
en el desarrollo urbano de Guadalajara y participaron en las negociaciones para la
terminación del ferrocarril México-Guadalajara y su extensión hacia Colima.
También hicieron posible el tranvía, el alumbrado público, los teléfonos, telégrafos
y el sistema de autobuses urbanos.70
Patricia Arias estudia el proceso de industrialización de Jalisco en el siglo XX.
Para ello utiliza información extraída del Archivo Histórico del Estado de Jalisco.
La autora señala que en Guadalajara coexiste la producción de bienes de
consumo, de bienes intermedios y de capital. El proceso de industrialización de los
bienes de consumo inició a partir de 1930 por pequeños capitales locales, con
unidades productivas de pequeña escala que utilizaron intensivamente mano de
obra familiar y asalariada. La de los bienes intermedios y de capital inició en 1960
y estuvo ligada con capitales extralocales y transnacionales. En los bienes de
consumo sobresalieron el tejido de punto, el calzado y la ropa. En la de los bienes
intermedios, la metal-mecánica.
La industria se desarrolló en Guadalajara, porque de acuerdo a la autora esta
ciudad proporcionó la infraestructura urbana y el crecimiento demográfico que se
necesitaba. En 1900 Guadalajara tenía 100,000 habitantes y fue la segunda más
70
Gabayet, Luisa. Op.cit. 1993, pp. 55-73.
47
poblada del país después del DF. Además contaba con agua y electricidad desde
1883, así como teléfono y transporte eléctrico desde 1896. Por sus
comunicaciones atrajo a pequeños industriales de Colima, Tepic, Mazatlán y
Zacatecas, lo que a su vez aumentó la migración de mano de obra y el mercado.
Patricia Arias destaca que desde mediados del siglo XIX, Guadalajara
abasteció de manufacturas a todo el noroeste del país y al interior del estado de
Jalisco, por medio de los comerciantes propietarios de las grandes casas
comerciales de la ciudad, que enviaban convoyes viajeros a todas esas regiones.
Estas casas vendieron principalmente manufacturas importadas de Europa y
Estados Unidos. El mercado que atendieron fueron los grupos sociales de altos
ingresos. La tendencia del siglo XX fue la de crear y consolidar un mercado
regional amplio y masivo. El sector social que lo hizo fueron los pequeños
industriales y comerciantes locales, basados en una amplia red de relaciones
sociales con los productores urbanos. Estas redes estuvieron constituidas en el
comercio de calzado y textil por los inmigrantes judíos y libaneses.71
De acuerdo a los análisis de los autores anteriores el crecimiento de la
industria textil en Guadalajara, fue similar a la de Puebla, al ser impulsada por las
pequeñas y grandes fábricas propiedad de empresarios extranjeros que se aliaban
con otros empresarios para obtener concesiones del gobierno.
Otro libro de Olveda, más reciente es Guadalajara, Abasto, religión y
empresarios. En él se recopilan varios artículos presentados anteriormente, para
identificar los elementos que hicieron de la ciudad de Guadalajara la capital que
construyó la región noroccidental de México. De este libro es de mi interés el texto
VII. Franceses y afrancesamiento a finales del siglo XIX. En este artículo Olveda
señala que entre los grupos de inmigrantes que llegaron a Guadalajara durante el
Porfiriato destacaron los inversionistas provenientes del Valle de Barcelonnette, en
Francia. Éstos fueron en su mayoría empresarios modestos que se dedicaron al
comercio en pequeña escala hasta 1850. Sin embargo, con la guerra de Reforma
y la desamortización de los bienes, algunos, como Emilio Signoret, se hicieron de
varias propiedades que les permitieron ampliar sus fortunas y fundar grandes
71
Arias, Patricia. Op.cit., 1993, pp. 75-.109.
48
casas de comercio, como “La Ciudad de Londres”, constituida en 1856 y
propiedad de Lébre y Cía. También “El Sombrero Colorado”, creada en 1878 por
Fortoul, Honnorat y Gariel y Parra, y “Las Fábricas de Francia”, establecida en
1877, pero la cual después de 1887 fue dirigida por Fortoul, Chapuy y Cía. y cuyo
éxito, según el autor, sirvió de modelo para que otros franceses fundaran otras
tiendas de ropa y lencería (Las fábricas de México, El Nuevo Mundo, El Progreso,
El Nuevo París, etc.) e invirtieran como accionistas de las fabricas textiles de “La
Escoba”, “Atemajac” y “Río Blanco”. Con estas y otras inversiones, los franceses
controlaron la actividad productiva de los textiles, modernizaron las prácticas de su
comercialización e impusieron la moda en la región.72
Respecto a la obra de Beato, comentaremos el artículo, Los inicios de la gran
industria y la burguesía en Jalisco. En él analiza el proceso de formación de la
burguesía jalisciense, a través del estudio de la Compañía Industrial de
Guadalajara SA (CIGSA). Utilizó fuentes del Archivo de Instrumentos Públicos de
Jalisco, Archivos de la Compañía depositados en la Universidad Iberoamericana,
para describir el proceso productivo y aspectos organizativos de la fábrica. De
acuerdo al autor, CIGSA aportó innovaciones organizativas al desarrollo de la
industria textil de Jalisco, ya que desde el inicio su capital se distribuyó no entre
individuos particulares que se asociaron, sino entre empresas (Fortoul, Chapuy y
Cía, L. Gas y Cía, E. Lebre y Cía, Bellón, Agorreca y Cía, Laurens Brun y Cía.).
Esta transformación conllevó a la sustitución de los antiguos empresarios locales
que administraban sus propios negocios por accionistas extranjeros (franceses en
su mayoría), que las operaron desde el exterior a través de representantes.73 Su
obra aporta elementos valiosos para conocer lo socios, tipos de sociedad y
evolución de la burguesía en Jalisco.
De Sergio Valerio destaca el libro, Empresarios extranjeros en Guadalajara
durante el Porfiriato. Ésta es una obra rica en detalles, en él se analizan las
experiencias de los inmigrantes franceses, alemanes y españoles que llegaron a
convertirse en importantes empresarios de Guadalajara a finales del XIX. El autor
72
Olveda, Jaime. Op.cit. 2006. 73
Beato, Guillermo. Op.cit. 1986, pp. 273-277.
49
consultó principalmente documentos localizados en el Archivo de Instrumentos
Públicos del Estado de Jalisco, para realizar una descripción pormenorizada de los
montos de las inversiones, fechas de constitución, quiebra, firma de sociedades y
testamentos de los empresarios franceses Alberto Abbadie, Teófilo Fortuol.
Alemanes: Teodoro Kunhardt, hermanos Collignon, Carlos Behn, Blume y Cía. Y
españoles, Francisco Martínez Negrete, los hermanos Fernández Somellera y
Fernández del Valle, así como de las empresas francesas: Fábricas de Francia, La
Ciudad de México, El Nuevo Mundo, Compañía de Fomento de Bienes y Raíces
de Guadalajara, E. Lebre, Barriere y Cía., El Sombrero Colorado. Alemanas: Casa
Siemes en México, Cervecería La Estrella. Y españolas: fábrica textil La
experiencia, Atemajac, La Escoba, Río Grande, y Fábrica de Papel El Batan, así
como también empresas fundadas en conjunto por estos empresarios: Cía.
Industrial de Jalisco, Cía. Industrial de Guadalajara y el Banco de Jalisco.
A través del análisis de estos tres grupos de empresarios extranjeros, el
autor identifica las siguientes similitudes entre ellos: A. Generalmente llegaron a
México jóvenes, solteros y sin un capital, sino que por el contrario, éste lo
producían en México mediante su trabajo; B. Sus primeros trabajos fueron en
comercios o negocios de familiares, amigos y paisanos, que seguían el mismo
patrón de “migración en cadena” que se había seguido los españoles desde la
Colonia, el cual consistió en que los inmigrantes ya establecidos traían de su país
parientes más jóvenes que aprendían el oficio y luego extendían las redes del
comercio familiar. Dicho patrón migratorio no fue exclusivo de los españoles, ya
que tanto franceses como alemanes lo siguieron, C. Después de juntar cierto
capital, se unieron a familiares, amigos y paisanos para formar pequeñas
sociedades comerciales de 3 a 4 socios en comandita simple. De estos socios uno
o dos eran socios capitalistas y uno sólo era el industrial. Es decir, el que se
encargaba de la administración de la empresa. Estas sociedades se planeaban
por 5 años (o menos), pero podían terminar antes por la muerte o la salida de
algún socio, con lo cual se establecía una nueva sociedad con otros socios para
seguir operando la empresa. Estas sociedades fueron la base de las posteriores
sociedades anónimas industriales de las fábricas textiles, almacenes comerciales,
50
compañías de bienes raíces y otras empresas; D. Finalmente, el autor concluye
que todos estos empresarios fueron innovadores, en el sentido shumpeteriano, al
aplicar nuevos métodos de producción, introducir nuevas tecnologías en sus
fábricas, establecer nuevos circuitos mercantiles, otras formas de organización y,
en general, realizar nuevas combinaciones entre los factores productivos.
Reconoce que no fueron los únicos que innovaron.
Otra región que impulsó el desarrollo industrial del país fue la conformada
por Nuevo León, Durango, Coahuila y Tamaulipas. Esta región ha sido estudiada
minuciosamente por Mario Cerutti, investigador que ha marcado pauta en los
estudios regionales y que cuenta con innumerables libros, artículos, ponencias y
trabajos sobre empresas, empresarios, e industrias de esta región. Para los fines
de esta investigación sólo citaré dos de sus principales obras: Burguesía, capitales
e industria en el norte de México. Monterrey y su ámbito regional (1850-1910) y
Propietarios, empresarios y empresas en el norte de México.
En el primer libro utilizó como fuentes al Archivo General del Estado de
Nuevo León, del Estado de Tamaulipas y el archivo de la Compañía Fundidora de
Fierro y acero, para analizar mediante la teoría regional los mecanismos que
permitieron la aparición y consolidación de los grupos burgueses. De acuerdo al
autor, dichos mecanismos fueron el comercio legal e ilegal, la apropiación de
tierras por expulsión y exterminio de los indígenas, el aprovechamiento y
especulación, así como el poder político y militar.
Cerutti presenta su obra en tres partes: la primera llamada Nueva frontera y
formación de capitales en Monterrey (1850-1890). En ella explica cómo la guerra
de EU y México de 1846-1847 acercó la frontera a Monterrey y con eso se
provocó un aumento del comercio legal e ilegal. Además, señala cómo el
gobernador Vidaurri instaló un arancel especial a las mercancías extranjeras, con
el que logró mayores recursos para el Estado, así como préstamos de los
empresarios que les pagaba a cambio de concesiones en los impuestos
aduanales y arancelarios.
En la segunda parte, Burguesía productora e industria (1890-1910), analiza
el proceso de formación de los diez grupos empresariales dueños de los
51
principales establecimientos manufactureros de la región. Estos grupos se
asociaron entre ellos por inversiones y lazos matrimoniales, y dentro de los
nombres que más sobresalieron se encuentra a la familia Ferrara, Garza, Sada,
Zambrano, Hernández-Mendirichaga, Madero, Milmo y Calderón. En esta apartado
también describe cómo la política del gobernador Bernardo Reyes impulsó una
legislación abierta y favorable a la instalación y expansión de manufacturas.
La tercera parte, Individuos y proceso en el gran norte Oriental, incluye el
estudio de dos principales empresarios: Evaristo Madero y el general Treviño.
Cerutti concluye que en Monterrey se concretaron ciertas características que la
transformaron en una de las ciudades de mayor atractivo para la industria: la
existencia de un ferrocarril que la comunicaba con el mercado de Estados Unidos;
la dotación de minerales que desarrolló la industria metal-mecánica; el gobierno
local y su legislación. Ésta exentaba de impuestos hasta por 30 años,
dependiendo del monto de la inversión. Y las características del empresariado
regiomontano, quienes para diversificar sus inversiones y así participar en
negocios más redituables: la industria, minería, transporte, bancos, comercio y el
ramo agropecuario, se asociaron entre sí en repetidas y múltiples maneras, así
como con otros empresarios poderosos (Enrique C. Creel, Joaquín Casasús,
Tomás Braniff, León Signoret y Antonio Basagotti).74
En el segundo libro, Cerutti considera que el desarrollo industrial de
Monterrey se debió a las redes familiares, a los vínculos con Estados Unidos,
especialmente con Texas; a la capacitación del empresariado y a su alta
capacidad de adaptación. Cerutti narra que de 1820 a 1850 la población de
Monterrey se dedicó principalmente al cultivo y exportación de caña, maíz y frijol.
Aunque también existió la ganadería y las actividades artesanales: zapateros,
herreros, curtidores, etcétera.
Posteriormente, con la habilitación de Matamoros, Tamaulipas como puerto,
aumentó el comercio entre New Orleans-Matamoros y el Golfo, con lo cual todos
los productos se trasladaron por Monterrey, desde donde se distribuían a San Luis
Potosí, Durango, Chihuahua y Jalisco. Durante la Guerra de Reforma y la
74
Cerutti, Mario. Op.cit. 1992.
52
intervención francesa, se demandaron cuantiosos recursos para los soldados
(alimentos, animales, monturas, mochilas, etc.). Para mantener a su ejército el
gobernador de Nuevo León Vidaurri acudió a las rentas del Estado por impuestos
aduanales, a la de las exportaciones de plata y a los préstamos forzados o
voluntarios de los comerciantes del área. También instaló puestos aduanales en el
Río Bravo y un arancel especial para las importaciones.
Durante la Guerra de Secesión en Estados Unidos (1860-1865), los
empresarios de Monterrey y Matamoros, como Patricio Milmo, Luis Terrazas,
Enrique C. Creel y Evaristo Madero, se beneficiaron del comercio de algodón a
cambio de surtir al Ejército Confederado de alimentos, armas, animales y otros
productos que venían de Europa.
Para Cerrutti, otros factores que impulsaron el crecimiento de la región
fueron: la línea del ferrocarril Central que unía a EU, Piedras Negras, Torreón,
Tampico y Monterrey, y el desarrollo de la industria pesada, que permitió operar a
las empresas Fundidora de Fierro y Acero de Monterrey SA, la Cía. Industrial
Jabonera de La Laguna SA, Cementos Hidalgo, y Vidriera de Monterrey SA,
utilizando el gas como combustible y se vieron beneficiados por las leyes
estatales. Los empresarios de la región en general no sufrieron grandes daños con
la Revolución, pero sí se anticiparon a sus efectos. Fundaron un sindicato blanco
para evitar la influencia de las organizaciones obreras nacionales que se
construirían en el periodo posrevolucionario y fundaron la Confederación patronal
mexicana (COPARMEX) en 1929.
De acuerdo al autor, las empresas en Monterrey crecieron con las fusiones
e integraciones, con sucursales en otras partes del país y agregando nuevos
socios de otras familias. Cerutti afirma que, los conglomerados como Cemex;
Vitro; Alfa, etc., en 1970 siguieron usando las mismas estrategias de las SA de
1895, redes familiares, entrelazamiento familiar y alianzas estratégicas para
resolver la coyuntura de las fisuras del modelo económico de sustitución de
importaciones y de la crisis del petróleo de 1974-1975.75
75
Cerutti, Mario. Op.cit. 2000.
53
Los estudios regionales analizados han aportado en este momento,
sugerentes formas de abordar los análisis empresariales, en un periodo en el cual
se cristalizaron comportamientos visibles más allá del periodo que nos ocupa. Casi
todos ellos describen la región en donde se encuentran instaladas las empresas,
la operación de las mismas, la conformación del grupo de propietarios en
burguesía regional y nacional; así como las relaciones y conflictos entre el capital
y el trabajo. Destacan por supuesto la importancia de las políticas económicas
gubernamentales y de las leyes que les benefician. De ellos aprendemos que los
empresarios de las diferentes regiones del país tienen un comportamiento similar
al organizarse en redes familiares, diversificando sus inversiones siempre
relacionados con los círculos del poder político. Sin embargo, las estrategias de
los empresarios referidas a la organización empresarial muestran algunos
faltantes, que pudieran ayudarnos a responder a algunas interrogantes por
ejemplo: cuáles eran a sus prácticas religiosas, como se vincularon con las
fuerzas armadas, cuáles fueron las características y extensión de la red de su
negocios, como se vincularon y hasta donde con los intereses extranjeros.
Empresarios barcelonnettes
Una vez efectuado el recuento de los legados historiográficos sobre la
industria textil regional y nacional de México, se procederá a revisar el conjunto de
aportes destinados a analizar el comportamiento de los empresarios
barcelonnettes, principales accionistas de CIDOSA.
Dentro de los libros publicados en nuestro país sobre los barcelonnettes se
encuentra el de Maurice Proal y Pierre Charpenel: Los barcelonnettes en México.76
Inicia con una descripción del proceso histórico de la fundación del Valle de Ubaye
-de donde provenían estos empresarios- para explicar las razones del
comportamiento social y el sistema de valores que poseían estos inmigrantes.
76
Este libro es una síntesis de la obra autobiográfica de Arnaud, Francois Charpenel, Anselme y Martín,
León. “Les Barcelonnettes au Mexique recit er temolgnagnes”. Barcelonnette, Sabenca de la Valéla. 1891 y el
libro Patrice Gouy, “Peregrinations des barcelonnettes au Mexique”, publicado por la Universitaries de
Grenoble, en 1980.
54
Posteriormente, expone las causas y el desarrollo de la migración a México.
Finalmente detalla el comportamiento económico, político, social y cultural de
estos empresarios en México, sobre todo durante su periodo de auge económico:
1880-1910. Esta obra es una descripción agradable, ilustrada, pero de contenido
general.
En el año 2001 y 2004 se publicaron respectivamente dos obras de corte
literario: De Barcelonnette llegaron y De Barcelonnette llegaron: la generación
mexicana, escritas por Marcelo Derbéz Amézquita. En ambas, el autor narra,
mediante una historia de amor, la vida de alguno de sus antepasados que se
estableció en México a finales del siglo XIX. A pesar de que el autor advierte que
los hechos presentados en sus obras son ficticios, la lectura de estas novelas
permite identificar patrones de comportamiento de estos inmigrantes
documentados por otros autores, como la red de trabajo de paisanaje.
Otros libros, artículos en revistas y electrónicos publicados en México y que
hacen referencia a los empresarios barcelonnettes, son: Los franceses en México
durante el Siglo XIX, de Jean Meyer; el libro México-Francia. Memoria de una
sensibilidad común. Siglo XIX-XX, coordinado por Javier Pérez Siller y el artículo
electrónico también de Pérez Siller La migración francesa de los siglos XIX y XX,
una contribución a la modernidad”. Estas tres obras presentan semejanzas y
diferencias. Semejanzas al definir el comportamiento de los empresarios
barcelonnettes en México y diferencias en los elementos de análisis que utilizan
para llegar a sus conclusiones.
Las publicaciones mencionadas despertaron mi interés por estudiar a este
grupo de empresarios y sirvieron de base para desarrollar la investigación de mi
autoría: Los barcelonnettes en México. Un ejemplo de espíritu empresarial. 1821-
1930. A través de este trabajo de investigación y siguiendo los supuestos de la
Teoría de Inserción Social (Castañeda 2002) y la Teoría de Redes de los
inmigrantes (Kyung Yoo, 1998) probé que las condiciones socioeconómicas de
México durante 1820-1930, aunadas a la cultura empresarial de los barcelonnettes
y los recursos de capital social que estos obtuvieron de la red que implementaron
en México, constituyeron los factores que impulsaron su éxito y posterior declive
55
económico. Utilizando sólo fuentes secundarias, logré identificar -al igual que
señala Gouy (1980)- que los barcelonnettes durante el periodo de 1881 a 1910
formaron en México dos grandes grupos económicos77: el integrado por los
accionistas de CIDOSA y el integrado por los accionistas de CIVSA. Los miembros
y las empresas que formaban el grupo empresarial de CIDOSA eran propietarios
de 13 tiendas de comercio, 7 fábricas textiles y socios de 2 bancos y 4 sociedades
financieras. Mientras que los socios de CIVSA eran de 12 tiendas, 9 fábricas.
Otra obra sobre estos empresarios es la de Gonzalo Castañeda “The
barcelonnettes: an example of Networrk entrepreneurs in XIX century México. An
expanation basad on a theory of bounded rational Choice with Social
embeddedness. En ella Castañeda demuestra mediante el uso de un modelo
matemático -basado en la teoría de juegos y la teoría de la racionalidad limitada-,
la existencia de un empresariado que al momento de tomar sus decisiones
considera las normas sociales para aumentar sus ganancias.
Otra obra que no ha sido publicada en México, es la de Emile Verdell, Les
Barcelonnettes au Mexique: réussite et déclin. Coment interpréter la réussite et le
déclindes Barcelonnettes par una approche manageriale? Verdell menciona que
los motivos que le llevaron a elegir este tema fueron el querer trabajar con una
problemática histórica, económica, comercial y de gestión. Aunque al principio se
interesó por las empresas francesas en México, al estudiarlas descubrió el peso
de los barcelonnettes en la economía mexicana. Si bien otros historiadores y
miembros de la comunidad han estudiado a este grupo de inmigrantes, ninguno lo
ha hecho desde la perspectiva de la gestión administrativa. Por ello se propone a
través de las teorías de la contingencia, los clusters, redes empresariales y
estrategia de la competitividad, identificar los factores y elementos que influyeron
en el éxito y declive de los empresarios barcelonnettes.78
77
De acuerdo a Castañeda, los grupos económicos son redes de empresas relacionadas por vínculos
familiares, étnicos o de amistad, que poseen una estructura autoritaria y centralizada con una jerarquía
vertical, donde sólo los miembros de la familia, clan o grupo de control ocupan los puestos más altos, y donde
sus empresas se integran vertical y horizontalmente para disminuir costos de transacción, aprovechar
economías de escala y obtener ventajas monopólicas. Castañeda, Gonzalo. Fundamentos microsociales del
comportamiento económico, las instituciones y su evolución. UDLA, 20002 Cholula, Puebla. México 78
Verdell, Emile, Op.cit. Juin 2005, pp 4-9.
56
Identifica que factores externos como la independencia de México, las
relaciones comerciales entre México y Francia, la intervención francesa, el
gobierno de Porfirio Díaz, influyeron en el éxito económico de los barcelonnettes, y
por otro lado la Revolución, la Primera Guerra Mundial (PGM), la política
migratoria de México a partir de 1913 y la Gran Depresión, influyeron en su
declive. Destaca que a pesar de los factores enunciados, el papel de los
barcelonnettes no se puede reducir a simples empresarios que se adaptan o
reaccionan pasivamente al ambiente, pues tuvieron la capacidad y libertad de
elegir sus decisiones y de influir en el medio.79
Por la importancia que este trabajo tiene en la presente investigación,
habremos de hacer una pausa para revisar su experiencia con la teoría de las
redes y cluster.80 La teoría de las redes es utilizada para explicar el desarrollo y
evolución de las tiendas comerciales “El Palacio de Hierro”, “Liverpool” y las
fábricas textiles CIDOSA y CIVSA. La teoría de los cluster la desarrolla con el
objetivo de responder a preguntas tales como: ¿el cluster, considerado una forma
de organización, favorece realmente a la competitividad de las empresas que
forman parte de él?
Para el caso de los barcelonnettes Verdell señala que estos se beneficiaron de
los clusters, al obtener capital de bancos de su propiedad, préstamos de la red a la
que pertenecían y capitales europeos, principalmente de Francia, así como mano
de obra calificada (jóvenes educados en escuelas técnicas del Valle de Ubaye),
escasos en México. Pero también les trajo desventajas: el no permitir la
innovación que les exige la competencia y al terminarse el flujo migratorio del
Valle, ya no contar con más capital ni mano de obra.81
79
Ídem, pp. 11-23. 80
Verdell (:42), utiliza las nociones de Michael Porter sobre las redes y los cluster. Este autor define a las
redes sociales como el conjunto recurrente de asociaciones entre grupos de individuos vinculados por lazos
ocupacionales, familiares, culturales y afectivos, que contienen generalizaciones morales, creencias sobre el
comportamiento o metanormas de confianza social que permiten que el comportamiento de sus miembros sea
predecible. Los clusters son “concentraciones geográficas de empresas interconectadas, proveedores
especializados, proveedores de servicios, empresas de sectores afiliados e instituciones conexas en
competencia, pero cooperando al mismo tiempo. Los cluster se integran para facilitar el proceso de
producción o de venta, y pueden ser horizontales cuando se forman por empresas que realizan la misma
actividad; verticales cuando se integran procesos de la cadena de producción, y laterales cuando las empresas
similares pertenecientes al sector son capaces de realizar juntas sinergias. 81
Ídem., pp.44-49.
57
Finaliza con el análisis a través de la teoría de la competitividad. Esta teoría
señala que una empresa está dotada con recursos y competencias82 que le
permiten elaborar una estrategia para permanecer en su mercado. En el caso de
los barcelonnettes, al iniciar con las fábricas textiles no contaban con experiencia y
conocimientos en procesos industriales, hubieron de construirlos al expandir sus
intereses con la adquisición de fábricas que ya estaban operando.
Los autores hasta aquí citados coinciden en que los barcelonnettes en México,
entre 1881 y 1910, constituyeron una colonia de inmigrantes cerrada, que
mantenía su cohesión basándose en la creación de sus propias instituciones y
organizaciones económicas (fábricas textiles, bancos, comercios), sociales y
culturales (Sociedad de Beneficencia, Casino Francés, Parroquia Francesa de
Nuestra Señora de Lourdes, etc.), en las que sólo participaban familiares, amigos
u otros inmigrantes provenientes del Valle. Estas mismas instituciones, junto con
el sistema de valores desarrollado desde la fundación del Valle, permitieron a
estos inmigrantes obtener ventajas monopólicas y cuantiosas ganancias
económicas.
Otras obras más recientes que también han contribuido a esclarecer el
intrincado mundo de los negocios y de las cuales hemos obtenido sugerentes
puntos de vista son las obras de Leticia Gamboa, Jean Louis De Anglade y
Patricia Martínez Gutiérrez a ellas me voy a referir sucintamente.
El libro de Leticia Gamboa: “Au delà de l’océan. Les barclonnettes à Puebla.
1845-1928. Desmitifica la idea de que los barcelonnettes fundaron una colonia
cerrada, al menos en la ciudad de Puebla para ello utiliza fuentes documentales
francesas además de los fondos que ella ya había consultado para sus obras
anteriores. Analiza las redes sociales, particularidades, familias, estrategias como
empresarios y el comportamiento humano y social de la colonia barcelonnette en
la región de Puebla, de 1840 a 1930.
82
Los recursos que posee una empresa pueden ser tangibles como el capital financiero, la inversión en
maquinaría etc., e intangibles como las capacidades de sus recursos humanos, su reputación en el mercado, su
cultura organizacional, etc. La competencia es algo que hace bien la empresa por encima de sus competidores.
Ídem.
58
Gamboa estudia la migración de los barcelonnettes desde el lugar al que arriba
y no sólo del que lo expulsa, como es el caso de la mayoría de los estudios de
migración. Además cuenta la historia económica y social de estos inmigrantes,
aplicando las dicotomías de migración individual (el caso de Joseph Couttolenc)
contra colectiva, solitaria o en cadena, dirigida u organizada contra libre o
espontánea, selectiva contra indiferente, temporal y definitiva.83
El libro más reciente sobre los empresarios barcelonnettes es el de Jean Louis
De Anglade, Un gran patron barcelonnette au Mexique. Joseph Ollivier et sa
famille. Esta publicación es una historia de familia que utiliza archivos personales y
testimonios de la Familia Ollivier (los hermanos José y Mario Ollivier, el sobrino
Sebastián Robert, los hijos Luisa Maquet, Jacqueline Campio-Moenneclaer y Luis
Ollivier), León Signoret, Genevieve Berau Suberville y Mauricio Proal. También
utiliza archivos de México y Francia, como el Archivo General de Notarías de
Distrito Federal, el Registro civil, Archivo Notarial de París, el Archivo
Departamental de Los Alpes, Archivo de La Legión de Honor, entre otros. En
palabras de Leticia Gamboa- “un aporte importante para quienes realizan historia
compartida entre México y Francia”.84
Otra obra que recientemente se publicó es la tesis de maestría de Patricia
Martínez Gutiérrez: El Palacio de Hierro, arranque de la modernidad arquitectónica
de la ciudad de México. En este texto se utilizan documentos del archivo de El
Palacio de Hierro SA y de otros archivos para analizar, desde una perspectiva de
historia del arte, “el impacto que el edificio del Palacio de Hierro representó en la
concepción urbana y arquitectónica de la ciudad de México”.85
Los libros y artículos sobre los empresarios barcelonnettes que han sido
enumerados en los párrafos anteriores son en su mayoría estudios monográficos y
descriptivos. Están basados en la historia del comportamiento socioeconómico de
algunos barcelonnettes (familia Lions, Reynaud, Tron, Ollivier, Signoret, Ebrad,
Garcín, etc.), que no representaban el comportamiento generalizado de estos
inmigrantes en México, pero que sí figuraban como socios o propietarios de las
83
Gamboa, Leticia. Op.cit. 2004, pp.13-17. 84
De Anglade, Jean-Louis. Op.cit, 2006, pp. 11. 85
Martínez Gutiérrez, Patricia. Op.cit. 2005, p.19.
59
empresas de mayor peso en economía nacional y regional de fines del siglo XIX y
principios del XX: las tiendas comerciales “El Palacio de Hierro”, “Fábricas de
Francia”, “Liverpool”, compañías textiles como CIDOSA, CIVSA, Compañía
Industrial de Atlixco, Cía. Industrial Manufacturera, Cía. Industrial de Guadalajara,
Cía. Industrial de San Idelfonso y bancos como Banamex, Banco de Londres y
México, entre otros.
Concluido el análisis historiográfico -nacional y regional-, sobre las empresas y
empresarios textiles en México, así como de los empresarios barcelonnettes, es
importante enfatizar las teorías explícitamente empleadas por nuestros autores,
con la finalidad de apreciar sus alcances y debilidades en la interpretación de
fenómenos históricos complejos, como son las estrategias y las redes de
expansión empresarial.
Consideraciones teóricas
La importancia de la industrialización capitalista ha sido destacada
históricamente. Dos casos emblemáticos en la historiografía occidental han sido
referentes de la mayor parte de los estudios realizados en México y América
Latina. Estos son el Reino Unido y los Estados Unidos de Norteamérica. Uno por
su papel pionero en el desarrollo del capitalismo y otro por las innovaciones
empleadas en los procesos productivos. En ambos casos el estudio de las
estrategias utilizadas por los empresarios, el entorno institucional y
gubernamental, han sido acuciosamente analizadas.
Como se ha podido apreciar en el conjunto de autores revisados
anteriormente, algunos de ellos implícitamente tuvieron presentes los casos
emblemáticos de la industrialización antes aludidos, sobre todo para ubicar el
conjunto de factores que incidieron en el proceso de industrialización (Haber,
Bernecker, Keremitsis, Coastworth, Marichal, Cerrutti, Romero, Ramírez, etc.).
Otros más eligieron la ruta promisoria del análisis regional, analizando a
profundidad casos concretos de empresas y empresarios, los factores
institucionales y su papel en la industrialización (Cerutti, Gamboa, Gómez-
60
Galvarriato, Gutiérrez, García, Olveda, Arias, Romero, Beato, Valerio, Alonso,
Trujillo, etc.). Ello nos ha permitido tener acceso a una serie de estudios
novedosos que emplearon explícitamente nociones teóricas que hasta entonces
no habían sido utilizados en los análisis historiográficos.
Por la importancia que para esta investigación tienen los análisis regionales
entorno a las empresas y los empresarios, destacare en enseguida las teorías en
ellos empleadas. En ese conjunto, es posible identificar dos principales corrientes
teóricas. La primera, denominada el “paradigma” de Chandler, que consiste en el
análisis histórico de la evolución de la estrategia y estructura de las grandes
corporaciones, haciendo especial énfasis en la organización compleja de
administración de las grandes empresas (Gómez-Galvarriato).
La segunda teoría desarrollada por Douglas North, centra la explicación del
proceso empresarial en el desarrollo del marco institucional de la economía, en
especial los condicionantes de las normas políticas, legales y conductuales en el
desempeño económico (Gómez Galvarriato, Coastworth, etc.).
Adicionalmente y de manera implícita, otros autores utilizan la teoría de los
costos de transacción, expuesta principalmente por Ronald Coase y Oliver
Williamson. Esta teoría explica el funcionamiento de las empresas y su relación
con la economía a nivel de los mercados y su dinámica. Sin embargo el uso de
esta explicación teórica se combina con la teoría de redes para comprender el
comportamiento de los grupos de empresarios analizados (Ramírez, Romero
Ibarra, Alonso, Gutiérrez, Gamboa, etc.).
Las sugerentes propuestas teóricas disponibles, si bien nos han dotado de
conceptos y ángulos de mirada importantes, ante el análisis de experiencias
concretas se perciben vacíos difíciles de llenar. La conjunción de elementos -
administrativos, económicos, histórico, regionales, políticos, sociales y culturales-,
vinculados a las experiencias empresariales que tuvieron lugar en México, durante
los años 1889 a 1930, muestra claramente su incomplitud. Por ello enseguida se
realiza una exposición sucinta de los autores y las teorías que fueron empleadas
en la presente investigación.
61
Alfred Chandler señala en su obra La mano visible: la revolución en la
dirección de la empresa norteamericana, que antes del siglo XIX sólo existían
empresas que se ocupaban de una única función económica como comercializar
una línea de producto; en una unidad operativa como taller, fábrica, banco o en un
área geográfica limitada y cuyas actividades eran coordinadas y controladas por
los mecanismos del mercado y precios. Estas empresas eran propiedad de una
familia y sus miembros cercanos, los cuales mantenían una relación estrecha con
sus directivos y un papel fundamental en las decisiones administrativas del
negocio. Funcionaba en un sistema de capitalismo patronal o familiar.
Posteriormente, con el surgimiento de las instituciones bancarias, se separó la
dirección de las empresas de su propiedad y se desarrolló el sistema de
capitalismo financiero. En éste los inversionistas influían en las decisiones de las
empresas, de acuerdo a la participación que tuvieran en el consejo de
administración de las mismas. Sin embargo, fue a partir del nacimiento del
ferrocarril (1840) que se desarrolló el sistema de capitalismo gerencial y las
denominadas “empresas modernas”.86
Para el autor, el capitalismo gerencial se identifica cuando la propiedad de
las empresas se encuentra dispersa entre numerosos accionistas que no poseen
el conocimiento, experiencia, influencia y voluntad para tomar parte de la alta
dirección, por lo cual los directivos, profesionales capacitados para administrar una
empresa, toman el control de la misma. Estas poseen dos características
específicas: constan de muchas unidades operativas y son dirigidas y controladas
por una jerarquía de ejecutivos asalariados de tiempo completo, que rinden cuenta
a numerosos accionistas que ya no forman parte del organismo regulador de la
empresa.
Estos negocios cuentan con diferentes unidades operativas, lo cual las
convierte en organizaciones multiunitarias, donde sus empleados coordinan y
controlan las actividades productivas y de distribución y en donde cada unidad
teóricamente puede funcionar como una empresa independiente.87 La empresa
86
Chandler, Op.cit, 1987, pp. 16-28. 87
Ídem
62
multiunitaria reemplazó a la pequeña empresa tradicional; cuando la coordinación
administrativa disminuyó los costos de operación y aumentó la productividad, que
se tradujo en un incremento sustancial de las ganancias. Esto impulsó la creación
de nuevas empresas que lograron controlar sectores fundamentales y aumentar
su poderío en la economía en general. Para Chandler, algunos profesionales se
han preocupado más por estudiar la continuidad del capitalismo familiar y
financiero que por el capitalismo gerencial, siendo que es este último el que
verdaderamente controla a las empresas y, por ende, a la economía, ya que
aunque las empresas modernas no han sustituido al mercado como fuerza
principal en la producción de bienes y servicios, sí lo han reemplazado en la
coordinación e integración del flujo de los servicios y mercancías, al crear grandes
empresas integradas que realizan desde la obtención de materia prima, pasando
por los diferentes procesos de transformación, hasta la venta al consumidor final.88
La decisión de integrar a la estructura de la empresa las actividades de
obtención de materias primas y distribución-venta del producto final, se explica por
la disminución de costos que la coordinación administrativa genera respecto a los
mecanismos de mercado. Es decir, por la explicación teórica y conceptual que
ofrece la teoría de los costos de transacción de Ronald Coase (1937, 1988) y
Olliver Williamson (1989).
Los costos de transacción refieren “los costos de la administración del
sistema económico”. Los más comunes son los costos de información, costos de
negociar, costo de hacer cumplir los contratos o el riesgo de un comportamiento
oportunista post-contractual y el costo de control y supervisión de la empresa. El
propósito principal y el efecto de las instituciones económicas del capitalismo
(incluyendo la empresa) es el de reducir los costos de transacción. Por ello,
cuando el internalizar alguna etapa del proceso productivo signifique menores
costos que efectuarla en el mercado, la empresa optará por integrarla
selectivamente, hacia atrás (obtención de materiales), lateralmente (fabricación de
componentes) o hacia delante (distribución y venta al consumidor final del
producto). El grado de integración de la empresa dependerá de los beneficios
88
Ídem, p.26.
63
obtenidos no por los costos de producción de la empresa, sino por los ahorros de
los costos de transacción que se generen con la integración.89
El ahorro de costos de transacción por internalizar las actividades de
producción y distribución en las empresas se hicieron efectivas al crearse una
jerarquía administrativa. Los directores no sólo coordinaron a los mandos medios,
sino que inventaron nuevos métodos operativos para asignar recursos a la
producción y distribución de mercancías, planeando la producción futura y
controlando la producción actual.90 Algunos de los métodos para controlar
eficientemente la producción fueron el taylorismo y el fordismo.
El taylorismo corresponde a las primeras teorías administrativas (1890-
1910) diseñadas por ingenieros para acrecentar los beneficios de las empresas
mediante la racionalización o estandarización de los procesos productivos, la
extensión del ritmo de trabajo y la introducción de maquinaria, con el fin de
disminuir el costo de la producción. El gran logro del taylorismo fue despojar al
obrero de su conocimiento del oficio y del control de los modos operatorios
individuales, para instalar en su lugar la ley y normas patronales. Primero se
dividieron las tareas en actividades para permitir que los obreros no calificados
(que no sabían el oficio) ingresaran al taller. Después se instauró el movimiento
“open shop” (1903), que ingresó obreros no sindicalizados. Esto debilitó la
organización económica y política de los sindicatos y terminó por prevalecer una
mano de obra sin oficio, no organizada, que no contaba con instrumentos políticos
para defender sus derechos contra el capital. El tercer paso fue eliminar los
tiempos muertos entre las actividades y, con ello, controlar el ritmo de trabajo del
obrero de un “sistema de holgazanería”-según palabras de Taylor- a un sistema
productivo eficaz, regido por la lógica del cronómetro. Así, el capital ganaba más
al: 1) Transformar las condiciones del ejercicio de trabajo. 2) Cambiar la
composición de la clase obrera requerida. 3) Alargar la duración de la jornada de
trabajo, aumentando la explotación.91
89
Williamson, Olivier. Las Instituciones económicas del capitalismo. México, FCE, 1989, pp.29-167. 90
Chandler, Op.cit. 1987, pp. 26. 91
Coriat, Benjamín. El taller y el cronómetro. Ensayo sobre el taylorismo, el fordismo y la producción en
masa. Siglo XXI, México, 1982, pp. 23-37.
64
El fordismo (1910-1920) fue más allá del taylorismo, al controlar no sólo los
tiempos y movimientos del trabajador, sino también determinar la cadencia o
velocidad del trabajo. Lo hizo de manera totalmente mecánica y externa al obrero
mediante la línea de montaje y la velocidad que se le dio a ésta. Henri Ford
estableció una línea o cadena de montaje que servía de transportador de piezas,
las cuales pasaban delante del obrero para que estos fijaran pieza por pieza hasta
que al final del transportador, el producto quedara totalmente armado. Empero, las
verdaderas dificultades que retrasaron la introducción de la línea de producción no
se presentaron en el montaje, sino en el mecanizado. Para que todas las piezas
pudieran ser fijadas, unas tras otras, en el transportador era preciso que fuesen
rigurosamente idénticas e intercambiables. En pocas palabras, era necesario que
la producción de piezas y el mecanizado fueran estandarizados. Además del
mecanizado al montaje se suscitó el perfeccionamiento del transportador de cintas
y de cadena, de las grúas de puente, las máquinas especializadas, las redes
aéreas de herramientas, y de la fábrica racionalizada.92
Posterior a estos sistemas de fabricación, y a partir del auge de la
producción en masa (1940-1980), se han desarrollado teorías administrativas que
centran su atención en una visión psico-sociológicas de las relaciones humanas
(Elton Mayo) y en una visión cultural (Barnard), las cuales definen a los
trabajadores como seres humanos con sentimientos y valores, y la fábrica como
un sistema social en equilibrio, donde se fomente la cohesión, la cooperación y la
solidaridad. Es decir, la creación de redes sociales.93
Existen numerosos autores que han desarrollado la teoría de redes. Para
fines de esta investigación se utilizarán los aportes de Portes, Casson, Boltansky y
Chiapello. Portes indica que las redes sociales son el conjunto recurrente de
asociaciones entre grupos de individuos vinculados por lazos ocupacionales,
familiares, culturales y afectivos, que contienen generalizaciones morales,
creencias sobre el comportamiento o metanormas de confianza social que
permiten que el comportamiento de sus miembros sea predecible. Al compartir
92
Ídem, pp. 41y 42. 93
Chanlat, Jean F. Ciencias sociales y administración. En defensa de una antropología general. Tr. Luz
Elena Arango. Fondo editorial Universidad EAFIT, Colombia, Mayo, 2002, pp.35-51
65
normas sobre el actuar de los miembros, ayuda a determinar lo que es
socialmente aceptado y lo que es incorrecto, y la sanción que se recibe por ello.94
Entonces, gracias a este sistema de normas y sanciones, las redes sociales se
vuelven un recurso económico que permite a sus miembros realizar intercambios
en el mercado con bajos costos de transacción (por menores o casi nulos costos
de monitoreo para detectar comportamientos oportunistas) y, por lo tanto, motivar
la asociación de individuos y empresas.
Casson señala que las asociaciones de empresas o de negocios, son redes
cuyos miembros comparten total o parcialmente su interés por los negocios.
Surgen de la formalización de los clubes y asociaciones que generan ganancias a
sus miembros. Se pueden formar por personas (red interpersonal) o por
compañías (red inter-institucional), que se encuentran localizadas en una región
particular (redes regionales), o en lugares geográficos lejanos (red interregional), y
en ocasiones se especializan en procesar información (redes metropolitanas).
Todas las redes de negocios buscan promover la coordinación y los lazos de
confianza, a través de flujos de información, flujos de producción y flujos de
factores productivos que disminuyan los costos de transacción y permitan la
integración vertical de las empresas. Estas redes se definen por la confianza, que
es garantía mutua de cumplir con ciertos acuerdos. La eficacia de la red –señala el
autor- depende de las sanciones morales y sociales (exclusión de otras
transacciones, pérdida de reputación) que emplee para que sus miembros no
traicionen la confianza del grupo (es decir, incumplan convenios) y con esto se
eleven los costos de transacción.95
Boltansky y Chiapello revelan que todos los seres humanos tienen la
necesidad de conexión (de contacto con otros). Ésta es la razón por la cual
pueden insertarse en redes. Por otro lado, el individuo desea profundamente
libertad, autonomía e independencia, pero también tiene una profunda convicción
de que la vida no tiene sentido más que cuando es compartida con otros. Por eso,
94
Portes, Alejandro. The economiic sociology of inmigratios. Essays on Networks, Ethinicity and
entrepreneurship. Rusell Sage Foundation, 1995, p.8 95
Casson Mark. Enterprise and leadership: studies on firms, markets and networks. Cheltenham Edward
Elgar, 2000.
66
la forma más natural para cumplir ambos propósitos es la red. Las redes han
existido desde siempre. Son organizaciones primitivas y universales: la familia, los
amigos, los compañeros del colegio, los miembros de organizaciones religiosas,
etc. En la empresa anteriormente la red eran grupos informales en contra de la
organización oficial, pero actualmente ya no se utiliza este enfoque. Ahora se
considera la gestión empresarial en red como algo benéfico para el desarrollo de
una empresa.96
Para ambos autores, el concepto de red empresarial se ha tratado en las
ciencias humanas a través de tres líneas: la de la comunicación (Habermas,
Bateson y Watzlawick), la complejidad (Dupuy, Edgar Morin) y la del caos y
autoorganización (Prigogine, Stengers, Atlan, Heisenber, Hofstadter y Varela).
Anteriormente el concepto de red se usaba como peyorativo (mafia), sin
transparencia interna y externa, con relaciones secretas que beneficiaban a unos
cuantos en detrimento del bien público. Sin embargo, en la actualidad la red en los
libros de gestión empresarial ya no hace referencia a un clan cerrado y exclusivo
con sistema de enchufe, sino a un sistema unificador de agentes de diferentes
servicios, con centros de interés común.97
Para Boltanski y Chiapello, el desarrollo del capitalismo se explica por sus
espíritus. El primer espíritu del capitalismo encomiaba una moral del ahorro. El
segundo, una moral de trabajo y competencia. El nuevo espíritu del capitalismo,
un cambio en la relación con el dinero y el trabajo. De 1800-1930, el ahorro
constituía la principal vía de acceso al mundo del capital y el instrumento más
importante para la promoción social. La estabilidad y la restricción eran a
preciadas por las empresas. Sin embargo, en el mundo del tercer espíritu, el
mundo en red, el tiempo es el recurso escaso e invertirlo en relaciones que
generen dinero es lo ideal.98
La red supone la capacidad para establecer y estabilizar relaciones de
interdependencia y de confianza a largo plazo. La confianza es el argumento
estelar de los defensores de la red. Otra ventaja es que con la red se tiene la
96
Boltansky y Chiapello. El nuevo espíritu del capitalismo. Akal, Madrid, España, 2002, pp 185-187. 97
. Idem, 228-229. 98
Idem, pp.230
67
posibilidad de compartir información precisa entre sus miembros. Además se limita
la búsqueda de ganancias puramente egoístas. En la red las conexiones son útiles
y enriquecedoras cuando tienen la capacidad de modificar a los seres que entran
en la relación. Es intercambiando información como la conexión modifica a los
individuos que entran en relación. La relación modifica la información que cada
uno de los colaboradores tiene del otro, pudiendo cambiar la representación que
uno tiene del otro. A este proceso evolutivo se hace referencia cuando se habla de
ganar o perder la confianza de alguien, lo cual abre o cierra el acceso a recursos
(bienes, servicios, créditos, reputaciones). En un mundo interconectado, los
productos no son diferenciados de las personas. Nadie sabe de golpe lo que
puede ganar o perder en la relación. Por eso la flexibilidad, capacidad para
aprender y adaptarse a situaciones cambiantes, se convierten en las cualidades
más importantes que deben poseer los individuos y las empresas para generar
ganancias económicas.99
Como se ha podido apreciar todas estas teorías enfatizan algunos de los
aspectos relacionados con el funcionamiento de las empresas, las organizaciones
empresariales y sus alcances en el desarrollo industrial. Por eso serán empleadas
para el análisis que me propongo realizar en torno a la Compañía Industrial de
Orizaba S.A. Habida en cuenta ninguna de ellas por sí sola es capaz de lograr una
explicación del conjunto.
Miradas Nacionales ......................................................................................................... 12 Miradas Regionales ......................................................................................................... 27
Empresarios barcelonnettes ............................................................................................. 53 Consideraciones teóricas ................................................................................................. 59
99
Ídem, pp.193
68
Capítulo 2: Importancia de una red.
Siguiendo el ejemplo de Inglaterra, México apostó por industrializarse para
alcanzar el desarrollo económico. Para ello, el gobierno de Porfirio Díaz creó
estructuras institucionales y legales que fomentaban la integración de mercados
regionales y la creación de sociedades económicas, tales como:
a) El Código de Minería, formulado en 1892, que permitía a los particulares
ser dueños de los recursos naturales de la Nación, y que incrementó las
inversiones de los ingleses en las minas y de los norteamericanos en el
petróleo.
b) La Ley de Terrenos Baldíos (1894), en la que al declararse baldío un
terreno, podía adquirirse sólo deslindando. Además se eliminaba el límite
para la adquisición de tierras por parte de particulares, sin la obligación de
cultivarlas. Esto contribuyó al acaparamiento de la propiedad agraria en
manos de los grandes terratenientes.100
c) El Código de Comercio (expedido en 1884 y reformado en 1889) autorizó
las sociedades anónimas por acciones, y permitió la creación de empresas
de mayor tamaño que requerían de mayor inversión, como las siderúrgicas.
d) La Ley del Timbre (1893), que imponía un impuesto indirecto al consumo y
eliminó las alcabalas y aduanas internas (1896), para contribuir a la
integración de mercados regionales y a una mayor circulación de
mercancías.
e) La Ley General de Instituciones de Crédito (1897), que permitió al gobierno
otorgar concesiones para el establecimiento de bancos en el país, regular el
funcionamiento de ya existentes e impulsar el desarrollo del sistema
financiero del país.
f) La Secretaría de Obras Públicas y Comunicaciones, fundada en 1891 como
encargada del control y fomento de puertos, puentes, caminos, líneas de
navegación, vías fluviales, etcétera.
100
Rosenzweig, Fernando. “La evolución económica de México 1870-1940” en El Trimestre Económico,
No.221 Ene-Marzo, 1989, pp.11-56.
69
g) La Secretaría de Fomento, la cual a partir de 1891 se encargaría de
fomentar la industria a través de ferias, exposiciones, obtención de
estadísticas y registro de patentes.101
El gobierno porfirista también decidió aplicar una política proteccionista,
primeramente para aumentar los ingresos del Estado y después para proteger la
industria local, principalmente de textiles y alimentos elaborados. Durante la
década de 1880 los aranceles a las importaciones de algunos bienes de consumo
que aplicaba el gobierno de México aumentaron hasta convertirse casi en los más
altos del mundo, sólo superados por Rusia y Brasil, y por el contrario los aranceles
a la importación de maquinaria, materia prima e insumos productivos (como
químicos) que necesitaban las fábricas para operar, disminuyeron o fueron
eliminados de la legislación, con el fin de fomentar el crecimiento de la industria
nacional.102
Igualmente con el fin de incrementar la inversión industrial, el gobierno
disminuyó los impuestos a las grandes empresas, exentó a las nuevas industrias,
con capital mayor de $250,000, del pago de impuestos directos y derechos
aduanales sobre maquinaria y otros materiales necesarios para la construcción de
sus fábricas, obsequió terrenos y materiales gratis. Además, otorgó concesiones
por 99 años o más en los ferrocarriles, minas y otras industrias extractivas. Todas
estas facilidades y privilegios atrajeron a la inversión extranjera a la industria
mexicana, lo cual era una de las estrategias del general Díaz para lograr los
objetivos de crecimiento económico planteados.
Los extranjeros que más invirtieron en estas empresas durante el Porfiriato
fueron los de origen norteamericano (38.2%), inglés (29.2%) y francés (26.7%).103
Los estadounidenses invirtieron principalmente en minas y ferrocarriles. Los
ingleses en minería, agricultura para la exportación y ferrocarriles. Y los franceses
en el comercio, bancos, industria y deuda pública. Entre estos empresarios galos,
101
Connolly, Priscila. “S. Pearson & Son: contratista de obras públicas” en Marichal, Carlos y Cerutti, Mario.
Op.cit, 1997, pp.107-135. 102
Herrera Canales, Inés. “XV. La circulación (comercio y transporte en México entre los años 1880-1910)”
en Cardoso, Ciro (Coordinador). Op.cit, 1980, p.456. 103
Ídem.
70
se encontraron los provenientes del pueblo de Barcelonnette, ubicado en el Valle
de Ubaye, en los bajos Alpes franceses (ver Mapa 1), los cuales fueron
identificados con el nombre de "barcelonnettes”.
Los barcelonnettes lograron figurar como uno de los grupos extranjeros con
mayor riqueza y poderío en el México de la postrimería del siglo XIX. Fueron
propietarios y/o socios de negocios: Liverpool, Fábricas de Francia, El Palacio de
Hierro, Compañía Industrial de Orizaba SA, Compañía Industrial Veracruzana SA,
Fábrica de San Idelfonso, Cía. Industrial de Atlixco, Cigarrera El Buen Tono,
Fábrica de Papel San Rafael, Banco Nacional de México, y Banco de Londres y
México -entre otros-. Con estos negocios consiguieron un poder monopólico en el
comercio de textiles (1870). Controlaban más de la mitad de la producción de telas
nacionales (1890) y poseían, con otros inversionistas franceses, dos tercios del
capital bancario del país (1910).104
En este capítulo he puesto atención en conocer: ¿cómo se comportaron los
empresarios barcelonnettes en México105? ¿Cuáles negocios poseían y dónde los
establecieron? ¿Quiénes fueron los empresarios que invirtieron en la “Compañía
Industrial de Orizaba SA (CIDOSA)? ¿Qué los motivó a crear esta compañía? Y,
particularmente, ¿cómo se organizaron para hacer frente a las condiciones
político-socio- económicas del país?
Para dar respuesta a estas interrogantes, se analiza primero el
comportamiento de comerciantes barcelonnettes en general. Después la historia
de las empresas y los empresarios que constituyeron CIDOSA y, finalmente, las
redes de negocios de las que formaron parte de 1889-1910.
Al contar la historia de estos empresarios y describir las estructuras
organizacionales que seleccionaron para hacer frente al entorno sociopolítico y
104
Pérez Siller, Javier (Coor). México-Francia. Memoria de una sensibilidad común. Siglo XIX-XX. Ed.
BUAP, El Colegio de San Luis A.C. y el Centro Francés de estudios mexicanos y centroamericanos. México,
Octubre 1998. 105
Cabe señalar que en esta investigación sólo se describirá y analizará el comportamiento socioeconómico
que adoptaron algunos de los empresarios barcelonnette socios de CIDOSA en México en el periodo de 1889-
1930. Para conocer más sobre el comportamiento de los inmigrantes barcelonnettes, en general, se
recomienda consultar Arnaud, Francois Charpenel, Anselme y Martín, León. Les Barcelonnetttes au Mexique
recit er temolgnagnes. Barcelonnette, Sabenca de la Valéla. 1891, Gouy, Patrice. Peregrinations des
barcelonnettes au Mexique. Grenobre, Press. Universitaries de Grenoble, 1980 y Proal, Maurice y Charpenel,
M. Pierre. Los Barcelonnettes en México. Clío. México, 1998.
71
económico bajo los cuales operó la compañía, pretendo demostrar, que amén de
los apoyos a la industrialización de la época ofrecidos por el Estado, lo que
condujo a su éxito económico fue la construcción de redes de negocios creadas
por sus propietarios en un medio complicado e incierto.
Mapa 1. . Valle de Ubaye, Francia.
Fuente: uk.alpes-haute-provence.com/geographie/213.htm
72
Comerciantes
Los barcelonnettes lograron figurar como uno de los grupos extranjeros con
mayor riqueza y poderío en el México de finales del siglo XIX. Sus conocimientos
empresariales en la producción y venta de telas, su cultura de trabajo, frugalidad y
lazos solidarios, así como su red de negocios, les permitieron alcanzar altos
rendimientos económicos en diferentes sectores de la economía mexicana.
De acuerdo a Pérez Siller, la migración francesa del siglo XIX se debió a las
condiciones internas de Francia (las guerras napoleónicas, las revoluciones de
1830 y 1848, el expansionismo de Luis Napoleón Bonaparte (1850-1870), la
guerra franco-prusiana de 1870-1871 y la política colonialista de la Tercera
República) y a las concesiones (terrenos gratuitos, excepción de impuestos, etc.)
que algunos países como México les otorgaban a los extranjeros de origen latino.
Aunado a estas circunstancias, otro factor que incrementó la migración de
barcelonnettes a México fue la caída en las ventas de las sederías y talleres de
hilados, ya que debido a que las telas que producían sus pequeñas fábricas eran
de baja calidad y burda confección, no podían competir con las telas delgadas y
lujosas mayormente comercializables de las fábricas textiles de Inglaterra.106
Los pocos ingresos que generaban los talleres de hilados provocaron el cierre
de varios de ellos, como la sedería en Jausier, propiedad de Francois Arnaud,
quien decide terminar con el negocio y emigrar a México para convertirse en el
proveedor del Ejército estadounidense, con la intención de obtener mayores
ingresos. Al llegar a la Ciudad de México funda la tienda de ropa y novedades “Las
Siete Puertas”.107
Los primeros negocios en México propiedad de los barcelonnettes fueron en su
mayoría tiendas que comercializaban telas, ropa y novedades provenientes de
Francia. Estas tiendas no eran lujosas, tenían un solo cuarto, sin vitrinas y
divididas en dos por un mostrador. Contaban una insignia en una manta colgada
106
Pérez Siller, Javier. La migración francesa de los siglos XIX y XX una contribución a la modernidad.
Octubre, 1999 (www.cultura.df.gob.mx/babel/fran/Siller.htm). 107
Arnaud, Francois Charpenel, Anselme y Martín, León. Op.cit. 1891.
73
sobre un cuadro de madera, y abajo de 3, 5, o 6 grandes letreros de abierto, sus
ventas eran al detalle, a precios bajos y dirigidos a todas las clases sociales del
país.108 En estas tiendas sólo se contrataba a familiares, amigos y/o compatriotas,
con quienes se compartía una identidad de paisanaje109 y en quienes se confiaba
totalmente. De acuerdo a Arnaud, en las tiendas de ropa de los barcelonnettes “en
la noche se juntaba el dinero en la gaveta para entregarlo al patrón o al cajero, si
es que había uno. No se llevaba un control, ni se anotaban las ventas diarias en
un cuaderno. Había una confianza total, que rara vez, muy rara vez era
traicionada”.110 La mayoría de los empleados eran apadrinados. Es decir, algún
empresario les pagaba su boleto a México, a cambio de que trabajaran para él.
Estos trabajadores debían esforzarse mucho, aguantar malos tratos, ser sumisos y
leales con el empresario que los contrataba. Incluso solidarizarse con disminución
de sus salarios en épocas malas para la empresa, porque debían pagar la deuda
del boleto y someterse a las reglas. De lo contrario serían despedidos y se les
prohibía volver a instalarse en otro comercio barcelonnette.111
Otra práctica común entre los dueños de negocios barcelonnettes en México
era permitir y contribuir a la movilización social y económica de otros compatriotas,
así como facilitar el flujo de información relevante. De acuerdo a Arnaud, los
empresarios del Valle de Ubaye no obstaculizaron el desarrollo de otros miembros
de su clan. Al contrario, les otorgaron empleos, financiamiento en inventarios y en
capital para que fundaran su propia empresa. A la larga esto contribuía a expandir
los vínculos laborales y de negocios entre miembros de la colonia. Por ejemplo, la
tienda de telas y novedades "El Cajón de Ropa de las Siete Puertas", fundada en
1821, en la Ciudad de México, por los hermanos Arnuad, contrató en 1830 a
Eugene Caire, Alphonse Jauffres y Tessier, quienes con los ahorros obtenidos por
su trabajo y asociándose con Gabriel Derbéz fundaron en 1838 también en el
108
Ídem. 109
Desde inicios de la creación del Valle de Ubaye, los barcelonnettes desarrollaron una identidad colectiva
que los ayudaba hacer frente a las adversidades naturales, económicas, políticas y religiosas. La gente del
Valle vivía en un espacio y bajo reglas de solidaridad determinadas que señalaba que la importancia de ser
barcelonnette era: I) Hacer de pocos recursos económicos, empresas competitivas. II) constituirse en un grupo
estable que compartiera principios de confianza, solidaridad, esfuerzo, dedicación y lealtad (Gouy, Patrice.
Op.cit, 1980.) 110
Arnaud, Op.cit. 1891. 111
.Gouy, Op.cit.,1980
74
Distrito Federal la tienda de ropa “El portal de las Flores”. En ésta, a su vez,
otorgaron trabajo a otros coterráneos que continuaron migrando y cumpliendo el
proceso de trabajo, ahorro y asociación para crear más empresas. Otro ejemplo es
la tienda de Fábricas Universales, en Puebla, fundada en 1903 por Juan Pedro
Chaix, que recibía créditos con mayores plazos, grandes descuentos en
mercancías de su casa matriz en la Ciudad de México y, a la vez, les aseguraba a
los socios de la matriz la expansión de las ventas hacia los estados del Puebla y
Tlaxcala112. A pesar de estas medidas de cooperación, también existía un sistema
de sanciones y recompensas, el cual estipulaba –entre algunas cosas- que ningún
comerciante del Valle tenía el derecho de aprovisionarse fuera de los círculos
comerciales barcelonnette, pero a cambio recibía de sus paisanos buenas
facilidades de pago y ayuda para la ampliación o creación de nuevas empresas.113
Bajo estas estrategias de negocios y laborales -comunes entre grupos de
inmigrantes- los comerciantes barcelonnette lograron establecer en 1864, 18
tiendas de novedades en la Ciudad de México y 25 en la provincia; en 1890 un
total de 110 en todo el país y en 1910 eran 214114. De estas tiendas las que más
sobresalieron fueron: “La Ciudad de Londres”, “El puerto de Liverpool”, “El Correo
Francés”, “El Puerto de Veracruz“, “La Reforma del Comercio”, “El Palacio de
Hierro”, “El Gran Oriental”, “Fabricas de Francia”, “El Centro Mercantil” y “Las
Fábricas Universales”, todas ellas ubicadas en el primer cuadro de la Ciudad de
México.115 Las fachadas de los edificios, los nombres, años de inicio, y datos de
las sociedades que eran dueñas de estas tiendas de 1879 a 1904 se encuentran
especificados en la Imagen y el Cuadro 1.
La imagen 1 muestra los membretes que utilizaban las tiendas del “El Puerto
de Veracruz”, “El Gran Oriental” y “La Ciudad de Londres” en su papelería oficial;
así como la publicidad de las tiendas “El Puerto de Liverpool”, “El Palacio de
Hierro” y “El Centro Mercantil”, publicada en periódicos franceses de la época. En
estas iconografías resaltan los edificios de las tiendas, sus direcciones en la
112
Gamboa, Leticia. “Los barcelonnettes en la ciudad de Puebla: panorama de sus actividades económicas en
el Porfirato”, en Pérez Siller, Javier (Coor). Op.cit, 1998.pp. 171-193. 113
Gouy, Op. cit , 1980 114
Ídem. 115
Arnaud, Op. cit., 1891.
75
Ciudad de México y el listado de los servicios y productos que ofrecían,
recalcando que muchos de ellos eran importados.
El Cuadro 1 muestra la fecha de constitución, el tipo de sociedad legal,
duración, montos de capital, datos personales y responsabilidades de los socios
de las principales tiendas de los barcelonnettes. En él, es posible observar que los
socios que tenían menor aportación de capital en esas tiendas eran hombres
solteros, de entre 25 a 40 años. Los que poseían mayor aportación (del 30 al 40%
del capital) eran hombres casados mayores de 40, que radicaban en Francia. Esto
obedeció a que cuando los barcelonnettes eran empleados, no se casaban “por
miedo a que las cargas familiares no les permitieran cumplir con su propósito de
hacer fortuna y regresar a la patria”.116
Las ganancias generadas por las actividades comerciales y la lógica del
ahorro y reinversión usada por estos inmigrantes, así como algunos factores
externos (guerra de secesión de EU de 1860-1865, la invasión francesa a México
de 1862-1867 y guerra franco-alemana de 1870), aunado a que en 1883 un
importante grupo de casas alemanas dedicadas al comercio de ropa al mayoreo
compró a las fábricas textiles mexicanas la totalidad de su producción, impulsó a
estos inmigrantes galos a invertir en la creación de sus propias fábricas textiles.117
116
Ídem. 117
Meyer, Jean. “Los franceses en México durante el Siglo XIX”. Tr. Pastora Rodríguez. Relaciones. Vol. 1,
No.2, México 1980.
76
Imagen 1. Publicidad de las principales tiendas barcelonnettes en la Ciudad de
México, 1879-1913.
El Puerto de Veracruz Signoret, Honnorat y cía. El Gran Oriental Garcín, Fuadon y cía.
La Ciudad de Londres J.Ollivier y cía.
77
El Puerto de Liverpool J.B. Ebrard y cía.
78
El Palacio de Hierro J.Tron y cía.
79
Fuente: Archivo General de la Nación (AGN), Fondo Texidor, Tx.1-036 y Tx. 1-030 y Hemeroteca, Periódico El centro Mercantil, Caja 42. Archivo Plutarco Elías Calles y Fernando Torreblanca (APC y FT), Fondo Joaquín Amaro, Proveedores Serie 205, Inventario 105 Legajo 3.
El Centro Mercantil S. Robert y cía.
80
Nombre Edad Estado
Civil
Domicilio Capital
aportado
Porcentaje
de utilidad
Sueldo
Mensual1
Puesto
Tienda El Puerto de Liverpool Juan B. Ebrad 41 Casado París 40,000$ 40% Gerente Superior
Sociedad J.B. Ebrard y cía Antonio Proal 42 Soltero D.F. 20,000$ 20% Gerente-Admdor
Fundación 28-3-1888 Francisco Proal 40 Soltero D.F. 20,000$ 20% Gerente-Admdor
Tipo de sociedad Colectiva Honnorato Beraud 40 Soltero D.F. 20,000$ 20% Gerente-Admdor
Duración 5 años TOTAL 100,000$ 100%
Tienda La Ciudad de Londrés José Ollivier París $ 20,000 38% $ 1,000 Gerente-Admdor
Sociedad J.Olliver y cía Sebastian Robert D.F. $ 15,000 28% $ 100 Gerente-Admdor
Fundación 15/1/1879 Mario Robert D.F. $ 8,000 16% $ 100 Encargado de vtas.
Tipo de sociedad Colectiva-mercantil Silvano Balp Veracruz $ 7,000 18% $ 150 Gte.- Mostrador
Duración 5 años TOTAL $ 50,000 100% Encargado de vtas.
Tienda El Palacio de Hierro José Leautaud 40 Casado París 50,000$ 20% 100$ Gerente-Admdor
Sociedad J.Tron y Cía. José Tron 39 Soltero D.F. 20,000$ 20% 100$ Gerente superior
Fundación 30-1-1888 Julio Tron D.F. 15,000$ 20% 100$ Gerente-Admdor
Tipo de sociedad Colectiva Enrique Tron 25 Soltero D.F. 10,000$ 25% 100$ Gerente-Admdor
Duración 4 años Damián Proal 35 Soltero D.F. 5,000$ 15% 100$ Gerente-Admdor
TOTAL 100,000$ 15% 500$
Tienda El Puerto de Veracruz
Sociedad Signoret, Honnorat y cía León Signoret 31 Soltero D.F. 4,000$ 35% 150$ Gerente-Admdor
Fundación 28-3-1887 Antonio Signoret 36 Soltero D.F. 4,000$ 35% 150$ Gerente-Admdor
Tipo de sociedad Colectiva-mercantil León Honnorat 27 Soltero D.F. 4,000$ 30% 150$ Gerente-Admdor
Duración 5 años TOTAL 12,000$ 100% 450$
Tienda El Correo Francés Mateo Lambert* 33 Soltero D.F. 4,000$ 40% 100$ Gerente superior
Sociedad Lambert, Reynaud y cía Casimiro Reynaud 31 Soltero D.F. 4,000$ 36% 100$ Gerente-Admdor
Fundación 7-3-1889 Graciano Guichard 32 Soltero D.F. 2,000$ 14% 80$ Gerente-Admdor
Tipo de sociedad Colectiva Julio Beraud 34 Soltero D.F. 2,000$ 10% 70$ Gerente-Admdor
Duración 3 años TOTAL 12,000$ 100% 350$
Tienda El Gran Oriental
Sociedad Garcín, Faudon y cía Eduardo Garcín 26 Soltero D.F. 5,000$ 33.33% 50$ Gerente-Admdor
Fundación 22-2-1886 León Faudón 25 Soltero D.F. 5,000$ 33.33% 50$ Gerente-Admdor
Tipo de sociedad Colectiva Mario Plésant 33 Soltero D.F. 5,000$ 33.33% 50$ Gerente-Admdor
Duración 5 años TOTAL 15,000$ 100% 150$
Tienda Las fábricas Universales José Signoret 40 Casado D.F. 10,000$ 25.00% 1,000$
Sociedad A.Reynuad y cía Alejandro Reynaud Casado D.F. 20,000$ 25.00% 200$
Fundación 4-5-1896 Eugenio Signoret 37 Soltero D.F. 10,000$ 25.00% 200$
Tipo de sociedad Colectiva -mercantil Juan Derbez 37 Soltero D.F. 5,000$ 25.00% 150$
Duración 5 años TOTAL 45,000$ 100.00%
Tienda La Reforma del Comercio Adolfo Richaud 56 Casado DF/Paris 20,000$ 25% 100$
Sociedad A. Richaud y cía Agustín Garcín 37 Soltero DF 20,000$ 25% 100$
Fundación 4-2-1899 Emilio André 31 Soltero DF 20,000$ 25% 100$
Tipo de sociedad Colectiva-mercantil Juan Thomé 31 Soltero DF 10,000$ 12.5% 100$
Duración 5 años Emilio Audiffred 37 Soltero DF 10,000$ 12.5% 100$
TOTAL 80,000$ 100%
Tienda La Valenciana Sebastian Robert Francia 100,000$
Sociedad S. Robert y cía Fermin Manuel 35,000$ Gerente-Admon
Fundación 3/01/1889 José Pinoncely 35,000$ Admón. Personal
Duración 4 años TOTAL 170,000$
Tienda El Centro mercantil Sebastian Robert 56 Casado Francia 160,000$ 44%
Sociedad S. Robert y cía Emilio Meyran 70,000$ 25% 140$
Fundación 23/02/1904 Santiago Arechederra 40,000$ 18% 100$
Pedro A. Chain** 30,000$ 13% 100$
TOTAL 300,000$ 100%
* De origen italiano ** De origen español 1
1. Se encuentra expresado en Francos para José Ollivier de la tienda de la Ciudad de Londres y para José Signoret de Las Fábricas Universales
Fuente: Archivo Histórico de Notarías de la Ciudad de México (AHNM)
Notaría Notario Fondo Volumen Escritura Fecha Sociedad
444 Rafael Morales Antiguo 3023 56 28/03/1888 J.B. Ebrard y cía
99 Ignacio Burgoa Antiguo 34 15/01/1879 J.Olliver y cía
99 Ignacio Burgoa Antiguo 655 34 30/01/1888 J.Tron y Cía.
294 Miguel María Garduña Antiguo 2006 54 28/03/1887 Signoret, Honnorat y cía
697 Agustín Roldan Antiguo 9225 107 07/03/1889 Lambert, Reynaud y cía
99 Ignacio Burgoa Antiguo 651 78 22/02/1886 Garcín, Faudon y cía
31 Fco Diez Bonilla Antiguo 1 50 04/05/1896 A.Reynuad y cía
25 Juan M. Villeda Antiguo 13 38 04/02/1899 A. Richaud y cía
725 José Villela Antiguo 2 03/01/1889 S. Robert y cía
5 Bernando Cornejo Contemporáneo 8 23/02/1904 S. Robert y cía
Datos de la Sociedad
Datos de los socios
Cuadro 1. Principales tiendas propiedad de barcelonnettes en México 1879-1904 (pesos corrientes).
81
Fundación de la Cía. Industrial de Orizaba SA (CIDOSA).
Antes de 1870, los comerciantes barcelonnettes importaban sus mercancías a
Europa o las compraban a industriales españoles establecidos en México. Sin
embargo, con la intervención francesa (1862-1867) se estableció una línea
marítima de San Nazaire a Veracruz, con la cual los comerciantes galos
consiguieron comprar directamente a proveedores en Francia y abandonar a los
alemanes, españoles e ingleses. Además, durante esta etapa abastecían de
mercancías y servicios al ejército francés que se encontraba en México, y con ello
mantenían un mercado cautivo. Esto cambió por el término del imperio de
Maximiliano (1864-1867) y por la guerra franco-alemana (1870), que dificultó
proveerse de Francia.118
Por otro lado, con la Guerra de Secesión norteamericana (1860-1865) se
abarató el algodón y se permitió que algunos comerciantes barcelonnettes como J.
Ollivier y cía. y Ebrard, Fortoulis y Cía., entre otros, se enriquecieran lo suficiente
para iniciar ellos mismos sus propias importaciones, y se adueñaran de gran parte
del comercio de importación y distribución de textiles a partir de 1873.119
El siguiente paso lógico, para que prosperaran, era que ellos mismos
fabricaran los productos que vendían. Para ello tenían dos caminos. El inmediato
consistía en la adquisición de una fábrica de hilados, tejidos y acabados que
estuviera funcionando y se encontrará en buenas condiciones. El de largo plazo,
construir, equipar y operar una fábrica que respondiera a sus requerimientos de
producir y comercializar artículos de más alta calidad que las mantas crudas.120
Debido a la nula experiencia en el campo fabril, los empresarios barcelonnettes
118
Ídem. 119
Everaer, Luis, Río Blanco. Compañía Industrial de Orizaba S. A. Centenario, 1899.-1989. Salvat México.
El marqués, Querétaro, 1990, p.64. 120
Ídem.
82
decidieron comprar la fábrica ya establecida: “San Juan de Cerritos”, propiedad de
Enrique L. Wiechers, situada en Orizaba, Veracruz.121
Cerritos elaboraba mantas, tejidos y estampados de algodón. Surtía a tiendas
de la capital, como “La Ciudad de Londres”, propiedad de J. Ollivier y Cía. En sus
terrenos de treinta cuartillas de tierra (44 mil 800 metros cuadrados) contaba con
oficinas, casas y almacenes (ver Imagen 2). También tenía la concesión del
ferrocarril urbano que unía a la fábrica con la estación del puerto de Veracruz, y el
derecho de uso de dos bueyes de agua del río Orizaba, concedida por el
Ayuntamiento de Orizaba, y por lo que pagaba $100 pesos anualmente. Estos
activos, junto con la maquinaria, enseres, útiles y construcciones de los
departamentos de la fábrica, fueron vendidos el 20 de abril de 1886 a la Compañía
Manufacturera de Cerritos SA a un precio de $400,000; y pagados la mitad en
efectivo y la mitad en abonos semestrales. El precio de venta no incluyó las
existencias de algodón en rama, manta blanqueada, algodón en telares, leña y
otros materiales que se encontraban en la fábrica al momento de la venta; ni los
cilindros y piezas de refacción que estaban en camino.122
La Compañía Manufacturera de Cerritos SA fue constituida el 19 de abril de
1886 por Signoret, Boujarc y Cía., dueños de la tienda “El Puerto de Veracruz”,
Lambert, Reynaud y Cía., propietarios de “El Correo Francés”; Garcín, Faudon y
Cía., dueños de “El Gran Oriental”, Antonio Aubert Sucesores, M. Bellon y Cía. y
Meyran hermanos. Esta empresa tenía un capital de $500,000, representados por
500 acciones de $1,000 cada una. Su objeto principal era comprar y administrar la
fábrica textil de “San Juan de Cerritos”. 123
Los comerciantes barcelonnette eligieron formar una sociedad anónima,
porque a diferencia de las sociedades colectivas, la Sociedad Anónima es más
estable y su duración no es por periodos cortos y renovables. Asimismo, en una
sociedad anónima se aportan mayores capitales y por tener mayor duración se
121
Orizaba se encuentra situada en la latitud 18°50’59’’ y longitud 097°06’13’’. Su altura es de 1230 metros
sobre el nivel del mar. Es una región montañosa de clima templado-húmedo, con una temperatura media
anual de 18.2°C y una precipitación pluvial promedio de 2,043 ml por año. 122
Archivo Histórico del Agua (AHA), Fondo Aprovechamientos Superficiales, caja 1436, expediente 19546. 123
Ídem.
83
evita que periódicamente entren y se retiren los socios, obligando a la empresa a
hacer ajustes frecuentes a su capital.124
En 1887, los socios Antonio Aubert y Sucesores, M. Bellon y Cía., y Meyran
Hermanos cedieron sus acciones a Signoret, Honnorat y Cía.125, Lambert,
Reynaud y Cía., y Garcín, Faudon y Cía., quienes se convirtieron en los dueños
exclusivos de la Cía. Manufacturera de Cerritos S.A126. Dos años bastaron para
comprobar lo acertado de la decisión de conservar sus acciones, y para persuadir
a otros empresarios a construir una empresa que no sólo adquiriera fábricas en
producción, sino que se comprometiera a crear una fábrica textil con la tecnología
más avanzada. Para ello, se invitó a otros comerciantes barcelonnettes, los
señores Escandón, dueños de la fábrica de Cocolapan, ubicada en Orizaba (ver
Imagen 2) y a Tomás Braniff, propietario de la fábrica de San Lorenzo, ubicada en
Nogales, a 30 kilómetros al poniente de Orizaba, Veracruz127 (ver Imagen 2). Los
señores Escandón no aceptaron, pero los demás empresarios sí estuvieron de
acuerdo.
El 28 de junio de 1889, el norteamericano Tomás Braniff, dueño de la fábrica
textil de San Lorenzo, Antonio Proal, gerente de J. B. Ebrard y Cía., propietarios
de la tienda comercial “El puerto de Liverpool”, Juan E. Dachary gerente de J.
Ollivier y Cía. dueños de “La Ciudad de Londres”, José Tron gerente de J. Tron y
Cía. dueños de “El Palacio de Hierro”, León Signoret, gerente de Signoret,
Honnorat y Cía., propietarios de “El puerto de Veracruz”, Mateo Lambert, italiano,
y gerente de Lambert, Reynaud y Cía., dueños de “El Correo Francés”, León
Faudon, gerente de Garcín, Faudon y Cía., propietarios de “El Gran Oriental” y
Juan Quinn, se reunieron en la Ciudad de México para fundar la Compañía
Industrial de Orizaba SA (CIDOSA). Esta compañía era un negocio independiente
y separado de los establecimientos que representaban. Contaba con un capital
inicial de $2,550,000, dividido en 25,500 acciones de $100 cada una. Su objeto
124
De Anglade, Jean-Louis, Op.cit., 2006, p.205. 125
Sociedad sucesora de Signoret, Boujarc, cía. según AHNM, Escritura 53, volumen 2006 de la Notaria 294
a cargo de Miguel Ma. Garduña, 28/3/1887 126
Archivo Histórico del Agua (AHA), Fondo Aprovechamientos superficiales, caja 1436, expediente 19546. 127
Everaer, Luis, Op. Cit.1990, p. 64
84
principal era la explotación en la República Mexicana de fábricas de hilado, tejido y
estampado y de cualquier género que la compañía levantara, adquiriera o tuviera
por compra y/o arrendamiento. Su domicilio legal era la Ciudad de México, pero se
le permitía tener consejos consultivos en el extranjero o en los lugares que
convinieran a sus intereses. Su duración se estableció en 30 años, con opción de
prórroga. Aunque también podía terminarse si se perdía la mitad del capital social,
se fusionaba con otras sociedades, o en los casos que la ley pronunciaba la
disolución. Se convino que la administración estuviera a cargo de un Consejo de
Administración compuesto por cinco accionistas propietarios y cinco suplentes.
También se acordó que, de las utilidades anuales que obtuviera la compañía, el
10% se quedaría en reserva hasta que se alcanzara la quinta parte del capital
social exhibido.128 Los accionistas fundadores de CIDOSA, los montos de capital
aportados, y las tiendas y/o empresas que representaban se encuentran
especificados en el Cuadro 2.
Cuadro 2. Accionistas fundadores de CIDOSA, 1889 (pesos corrientes).
128
Archivo Histórico de Notarías de la Ciudad de México (AHNM), Escritura 155 del Volumen 3025, Notaría
444 a cargo de Rafael Morales, 28/6/1889.
Nombre Capital aportado Número de
acciones Valor
$100
% de acciones
que posee
Tienda que administraban y/o
empresas que representaban Ubicación
Nombre CIDOSA Tomás Braniff 700,000$ 7,000 27.45% Fábrica Textil San Lorenzo Nogales, Ver.
Fundación 28-6-1889
Sociedad Anónima (S.A.) J.B. Ebrad y cía $ 323,000 3,230 12.67% El Puerto de Liverpool México, D.F.
Duración 30 años
J.Olliver y cía $ 323,000 3,230 12.67% La Ciudad de Londrés México, D.F.
La Ciudad de Londrés Veracruz, Ver.
La Ciudad de Londrés Paris
Molino de Río Hondo
Casas de alquiler México, D.F.
J.Tron y Cía. $ 323,000 3,230 12.67% El Palacio de Hierro México, D.F.
Signoret, Honnorat y cía $ 323,000 3,230 12.67% El Puerto de Veracruz México, D.F.
El Zafiro México, D.F.
Cía. Manufacturera de
Cerritos S.A.
Orizaba, Ver.
Lambert, Reynaud y cía $ 242,000 2,420 9.49% El Correo Francés México, D.F.
Garcín, Faudon y cía $ 216,000 2,160 8.47% El Gran Oriental México, D.F.
Juan Quinn $ 100,000 1,000 3.92%
TOTAL 2,550,000$ 25,500 100%
Fuente: Archivo histórico de Notarías de la Ciudad de México
Notaría Notario Fondo Volumen Escritura Fecha
444 Rafael Morales Antiguo 3025 155 28/06/1889
Accionistas
Datos de la empresa
85
En este cuadro se observa la fecha de constitución de CIDOSA y el tipo de
sociedad en que se organizó, así como los socios que la conformaron, el capital
que aportaron, las tiendas o negocios que representaban y el porcentaje de
acciones que poseían. De acuerdo a estos datos, las tiendas de los comerciantes
barcelonnettes poseían en conjunto entre el 68 y el 69% de las acciones de
CIDOSA. Aunque individualmente su participación accionaria era menor que la de
Tomás Braniff (27.45%, debido a que éste aportó el capital y activos de la Fábrica
de San Lorenzo), eran las sociedades de J. B. Ebrard y Cía., J. Ollivier y Cía., J.
Tron y Cía., Signoret, Honnorat y Cía., Lambert, Reynaud y Cía. y Garcín, Faudon
y Cía., las que tomaban las decisiones.
“El objetivo de los comerciantes que fundaron CIDOSA, fue crear fábricas
que produjeran un mayor volumen de prendas textiles y operaran con un mayor
grado de eficiencia que las fábricas actuales. Por estas razones, eligieron como
estrategia principal, adquirir y modernizar fábricas textiles ya activas (“San
Lorenzo”, “Cerritos” y “Cocolapan”), así como construir nuevas fábricas con
maquinaria mecanizada (telares y husos) y donde se utilizaría otras fuentes de
energía diferente al carbón (vapor y energía eléctrica), como en el caso de la
fábrica de Río Blanco (ver Imagen 2).129
La fábrica de San Lorenzo pasó de inmediato a ser parte de CIDOSA.
Contaba con un edificio de dos pisos, el primero dedicado a la hilatura y la
preparación de tejidos y el segundo para los telares. También tenía un local aparte
para el departamento de acabado.130 El valor al que se tomaron sus activos fue de
$700,000, que corresponde al capital aportado por Tomás Braniff.
La fábrica de San Juan de Cerritos fue comprada el 12 Julio de 1889 a
Signoret, Honnorat y Cía., Lambert, Reynaud y Cía. y Garcín, Faundon y cía. -
accionistas de la Cía. Manufacturera de Cerritos SA-. Se les pagó en efectivo la
cantidad de $70,000 por el inmueble (terrenos y edificios); $330,000 por la
maquinaria, telares, útiles, herramientas, muebles y enseres; y $214,946.77 por
las existencias de estampados, mantas, drogas (no especifica cuáles, pero se
129
Gómez Galvarriato, Aurora. “La Revolución en la distribución y en la producción de textiles en México
durante el Porfiriato” (s/f) en www.cide.mx, p.38. 130
Everaer, Luis, Op. Cit.1990, p. 59.
86
piensa que eran productos químicos relacionados con los textiles), algodón en
telares y en pacas, leña y por el crédito hipotecario a cargo de don Ángel Jiménez,
sobre la línea de ferrocarril urbano de Orizaba. En total, $614,646.76.131
La fábrica de Río Blanco inició su construcción en 1889, en Tenango, de
Río Blanco, Veracruz (ver Imagen 2). Fue planeada como una de las fábricas
textiles más grandes de México. Poseía al momento de su inauguración -el 9 de
octubre de 1892- 1,000 telares y 34,000 husos; así como una capacidad de
producción comparable a las fábricas europeas de principios del siglo XIX.132
Contaba con una producción totalmente integrada: desde la generación de energía
para sus procesos productivos con sus plantas hidroeléctricas, el cardado del
algodón, la producción, hasta la venta de las telas. Tenía talleres y servicios
anexos de carpintería, fundición, caldera, bomberas, así como toda una
infraestructura (casa para los empleados, iglesias y enfermería) que permitió a las
familias vivir alrededor de la fábrica.133
La inversión que se necesitó para finalizar la construcción de la Fábrica de
Río Blanco obligó a los socios a incrementar el capital social en $450,000. En
asamblea general extraordinaria del 27 de agosto de 1892, Tomás Braniff (a su
nombre), Honorato Beraud, de J. B. Ebrard y Cía., Mario Ollivier, de J. Ollivier y
Cía., León Signoret, de Signoret, Honnorat y Cía., Enrique Tron, de J. Tron y Cía.,
Eduardo Garcín, de Garcín, Faudon y Cía., Mateo Lambert, de Lambert, Reynaud
y Cía., así como los nuevos socios Arturo Durand (a su nombre y como apoderado
de Alfonso Leimenstoll y Oscar Herman) y Antonio Aubert, en representación de
Richaud, Aubert y cía., deciden emitir 4,500 acciones adicionales, para distribuir
de manera proporcionar entre los socios ya existentes, y conformar un nuevo
capital de $3,000,000, representado por 30,000 acciones con valor de $100 cada
una. Ese capital fue destinado para la Fábrica de Río Blanco, y se acordó que las
utilidades de las nuevas acciones se contarían a partir del 1 de Julio de 1892, y
con ello sólo considerarían el 50% del dividendo para ese año.134
131
AHA, Fondo Aprovechamientos superficiales, caja 1436, expediente 19546. 132
García, Bernardo, Op.cit, 1980. 133
Proal, Op.cit ,1998. 134
AHNM, Escritura 122 del Volumen 3032, Notaría 444 a cargo de Rafael Morales, 27/8/1892.
87
En el Cuadro 2A es posible identificar los socios, el monto inicial aportado y
el aumento que efectuaron en 1892 al capital de CIDOSA, así como el porcentaje
de acciones que les correspondían. El cuadro también muestra que el capital
aportado por Juan Quinn (antiguo administrador de la fábrica de San Lorenzo)
permaneció igual, a pesar del incremento.
Cuadro 2A. Accionistas de CIDOSA, 1892 (pesos corrientes).
El 5 de agosto de 1899, los dueños de CIDOSA adquirieron la fábrica de
Cocolapan. Esta manufactura era propiedad de Manuel, Vicente, Guadalupe y
Dolores Escandón y Arango. Tenía una extensión de 61 hectáreas, 4 aras y 44
metros2. Su precio de compra fue de $670,000; de los cuales correspondieron:
$270,000 por los edificios, terrenos, derechos y aprovechamiento de las aguas del
río Blanco otorgados por el Ayuntamiento de Orizaba, las presas, canales, zanjas,
acueductos, compuertas y demás obras hidráulicas. La misma cantidad por las
máquinas de hilados, tejidos, las herramientas, útiles, aperos, refacciones y la
fábrica de papel. $20,000 por los muebles de casa y capilla, el ganado vacuno,
animales de tiro, siembra y existencia de café y de frutas. $110,000 por las
máquinas, turbinas, dinamos, postes, alambres, lámparas en las calles, edificios
públicos y casas particulares, así como el traspaso de la concesión de la
negociación de Luz Eléctrica de la Ciudad de Orizaba. Los inventarios de papel de
estraza, manta y algodón en almacén y máquinas se vendieron por la cantidad de
$28,425.32. Este último monto, junto con $220,000, fueron pagados en efectivo.
Fecha Nombre Capital anterior Capital
aportado
Capital Actual Número de
acciones Valor
$100
% de
acciones
que posee
Tienda que administraban y/o
empresas que representaban
Ubicación
14-10-1892 Tomás Braniff 700,000$ 105,900$ 805,900$ 8,059 26.86% Fábrica Textil San Lorenzo Nogales, Ver.
J.B. Ebrad y cía $ 323,000 $ 57,000 $ 380,000 3,800 12.67% El Puerto de Liverpool México, D.F.
J.Olliver y cía $ 323,000 $ 57,000 $ 380,000 3,800 12.67% La Ciudad de Londrés México, D.F.
J.Tron y Cía. $ 323,000 $ 57,000 $ 380,000 3,800 12.67% El Palacio de Hierro México, D.F.
Signoret, Honnorat y cía $ 323,000 $ 64,600 $ 387,600 3,876 12.92% El Puerto de Veracruz México, D.F.
Lambert, Reynaud y cía 242,000$ $ 37,900 $ 279,900 2,799 9.33% El Correo Francés México, D.F.
Garcín, Faudon y cía 216,000$ $ 35,300 $ 251,300 2,513 8.38% El Gran Oriental México, D.F.
Richaud, Aubert y cía. 22,100$ 22,100$ 221 0.74%
Oscar Herman 5,300$ $ 5,300 53 0.18%
J. B. Signoret 3,500$ $ 3,500 35 0.12%
Arturo Durand 2,600$ $ 2,600 26 0.09%
Alfonso Leimenstoll 1,800$ $ 1,800 18 0.06%
Juan Quinn 100,000$ $ 100,000 1,000 3.33%
TOTAL 2,550,000$ 450,000$ 3,000,000$ 30,000 100%
Fuente: Archivo Historíco de Notarías de la Ciudad de México
Notaría Notario Volumen Escritura
444 Rafael Morales 3032 122
444 Rafael Morales 3035 157
Accionistas
88
Lo demás se liquidó por cinco bonos anuales de $90,000 cada uno, a una tasa de
interés de 6 por ciento.135
Imagen 2. Fábricas propiedad de CIDOSA 1889-1892.
135
AHA, Fondo Aprovechamientos superficiales, caja 1436, expediente 19546.
Fábrica de Río Blanco Fábrica de Cocolápam
Fábrica de San Lorenzo Fábrica de Cerritos
Fuentes: San Lorenzo: Archivo Municipal de Nogales, Veracruz.
Cerritos: Archivo General del Estado de Veracruz (AGEV), Fondo Orizaba, Foto 72 negativo 11.
Río Blanco: Archivo General de la Nación (AGN), Fondo Propiedad artística y literaria , Briquet A .No.2
Cocolápam : Archivo General del Estado de Veracruz (AGEV), Fondo Orizaba, Foto 61 negativo 0
89
La modernización de las fábricas de San Lorenzo y Cerritos, así como la
compra de la fábrica de Cocolapan, también requirió de continuos aumentos en el
capital. El primero se efectuó el 9 de febrero de 1894, cuando la Asamblea
General decidió aumentar el capital en $500,000, haciendo un total de $3,500,000.
Para este aumento se acordó que las acciones serían vendidas a los socios
preferentes. Sólo si resultaban acciones sobrantes, se vendería a extraños a la
compañía y bajo lo que señalan los parámetros de la escritura constitutiva del 28
de junio de 1889.136 El segundo se realizó el 15 de mayo de 1896 y fue por $3,
000, 000.137 El tercero fue en 1898, cuando los accionistas de CIDOSA acordaron
participar en la Bolsa de valores de Ginebra y París, cuidando que el control
permaneciera en las sociedades fundadoras.138 El cuarto se autorizó en la
asamblea del 14 de junio de 1901 y fue por $2, 000, 000. En esta asamblea se
cambiaron los estatutos de la compañía, ampliando su duración a 50 años, con
opción de prórroga.139 El último de los incrementos de capital de CIDOSA durante
el Porfiriato (1876-1910), se solicitó el 21 de febrero de 1908, cuando en la sesión
del Consejo de Administración, los socios Enrique Tron, Eugenio Tron, Mauricio
Honnorat, Adran David, y Antonio Reynaud, señalaron que:
Importantes y costosas formas de mejoramiento se han efectuado en nuestras fábricas, no sólo en su dotación de maquinaria sino también en la ampliación de sus edificios. Se han adquirido y consolidado importantes derechos a la propiedad de aguas que en su mayor parte emplean como fuerza motriz en nuestros establecimientos industriales, todos estos elementos de acción constituyen importantes medios de producción que dan una situación sólida y segura a nuestras fábricas en el presente a la vez que son factores que garantizan y aseguran el porvenir de nuestra compañía. Nos ha sido posible alcanzar el punto de perfección que tiene nuestra empresa, debido a la inversión de crecidas sumas y a la erogación de gastos importantes. Estas inversiones que constituyen por sí mismas la movilización de fuertes capitales, han dado por resultado un aumento del valor de los bienes de la compañía. Inspirándose en esta idea, proponemos a esta asamblea, la aprobación de un aumento al capital social de $6 ,500, 000 para incrementarlo a $15,000,000. (AHNM, Escritura 2436 del Volumen 35, Notaría 5 a cargo de Bernardo Cornejo, 24/4/1908).
136
AHNM, Escritura 157 del volumen 3035, Notaría 444 a cargo de Rafael Morales, 9/2/1894. 137
AHNM, Notaria 543, a cargo de Agustín Pérez Roldán, 15/5/1896. 138
Everaer, Luis. Op. cit, 1990, pp. 78-79. 139
AHNM, Escritura 13, volumen 1, Notaría 5 a cargo de Bernardo Cornejo, 26/04/1902.
90
Para justificar esta petición, los socios mencionados presentaron un estudio
de valuación realizado el 20 de febrero de 1908 por el arquitecto Miguel Ángel de
Quevedo y el ingeniero Manuel Oyarxbal, donde se calculaba que “el valor de las
cuatro fábricas y las dos instalaciones hidroeléctricas (con los terrenos, edificios y
maquinaria), ascendía a $16, 336 475.81”140, como se muestra en el Cuadro 2 B.
El monto de la inversión que corresponde a cada fábrica es la suma del valor de la
maquinaria, terrenos, edificios, tubería hidráulica, casas de los empleados
administrativos y obreros, bodegas, tiendas, iglesias y terrenos anexos a la
fábrica.
Cuadro 2B. Estudio de Valuación de los activos de CIDOSA, 1907 (pesos
corrientes).
140
AHNM, Escritura 2436 del Volumen 35, Notaría 5 a cargo de Bernardo Cornejo, 24/4/1908.
FÁBRICA RÍO BLANCO FÁBRICA CERRITOS
Inmuebles Inmuebles
Edificio de la fabrica 3,200,000.00$ Edificio de la fabrica 130,000.00$
Casas habitación de empleados y admon 225,000.00$ Casas habitación interiores 20,000.00$
Bodegas 250,000.00$ Bodegas 20,000.00$
Presas, turbinas, tuberías y tuneles 450,000.00$ Acueductos, turbinas, etc. 120,000.00$
Tuberia de la laguna Ojo de agua 100,000.00$ Terrenos 30,000.00$
Terrenos anexos a la fabrica 500,000.00$ Casas de operarios 10,000.00$
Casas de operarios, tiendas, iglesia 1,037,452.93$ Maquinaría
Maquinaría Hilados y tejidos (transmición) 465,000.00$
Hilados y tejidos (transmición) 2,400,000.00$ SUBTOTAL 795,000.00$
Estampado, acabados, carpitenría 2,100,000.00$
mécanica, calderas (electrico y trasnmisión) FÁBRICA COCOLAPAN
SUBTOTAL 10,262,452.93$ Inmuebles
Edificio de la fabrica, casas 478,000.00$
FÁBRICA SAN LORENZO habitación interiores, bodegas, e
Inmuebles instalación antigua y canal
Edificio de la fabrica 600,000.00$ Casas para operarios, rancho y 413,000.00$
Canal, presa, turbinas, etc. 280,000.00$ terrenos
Bodegas 40,000.00$ Maquinaría
Casas habitación interiores 80,000.00$ Hilados y tejidos (transmición) 563,022.88$
Casas exteriores para operarios 25,000.00$ SUBTOTAL 1,454,022.88$
Terrenos anexos a la fabrica 200,000.00$
Maquinaría Instalación eléctrica Cocolapan 400,000.00$
Hilados y tejidos (transmición) 1,400,000.00$ Instlación hidroeléctrica Rincón Grande 800,000.00$ SUBTOTAL 2,625,000.00$ TOTAL 16,336,475.81$
Fuente: Archivo Historíco de Notarías de la Ciudad de México
Notario Notaría Volumen Escritura Fecha
Bernando Cornejo 5 35 2436 24/04/1908
91
De acuerdo a este estudio y por el monto que alcanzaban las reservas de
los libros de la compañía, fue autorizado por la asamblea del 23 de abril de 1908
aumentar el capital de $8, 5000, 000 a $15,000,000. Este aumento se generó del
fondo de previsión en $3, 000 ,000 y el resto en emisión de acciones, con valor
nominal de $100, y distribuidas a los actuales socios en una proporción de 13 por
17.141 Los aumentos de capital de CIDOSA ocurridos durante el periodo de 1889 a
1908 se encuentran resumidos en el cuadro 2C e Imagen 3. En el cuadro se
muestra la fecha, el tipo de modificación, los montos y porcentajes de cambio del
capital. De acuerdo a su información, el incremento de 1896 fue el alto del periodo
de 1892 a 1908, y representando el 85% del capital anterior. La Imagen 3 muestra
el membrete impreso en la papelería oficial de la empresa a partir de 1908, el cual
incluye el edificio de la fábrica de Río Blanco, una imagen de un León, que era su
marca registrada, la lista de sus fábricas e instalaciones hidroeléctricas y el monto
de capital que ascendía a $15,000,000.
Cuadro 2C. Incrementos al capital de CIDOSA, 1892-1908 (pesos corrientes).
141
AHNM, Escritura 2436 del Volumen 35, Notaría 5 a cargo de Bernardo Cornejo, 24/4/1908.
Fecha Tipo de Modificación
Capital anterior Capital
aportado
Capital Actual % del cambio
14/10/1892 Incremento 2,550,000$ 450,000$ 3,000,000$ 17.65%
14/4/1894 Incremento 3,000,000$ 500,000$ 3,500,000$ 16.67%
15/5/1896 Incremento 3,500,000$ 3,000,000$ 6,500,000$ 85.71%
26/04/1902 Incremento 6,500,000$ 2,000,000$ 8,500,000$ 30.77%
24/04/1908 Incremento 8,500,000$ 6,500,000$ 15,000,000$ 76.47%
Fuente: Archivo Histórico de Notarías de la Ciudad de México
Notaría Notario Fondo Volumen Escritura Fecha
444 Rafael Morales Antiguo 3025 155 28/06/1889
444 Rafael Morales Antiguo 3032 122 14/10/1892
444 Rafael Morales Antiguo 3035 157 14/04/1894
543 Agustín Peréz Antiguo 15/05/1896
5 Bernando Cornejo Contemporáneo 1 13 26/04/1902
5 Bernando Cornejo Contemporáneo 35 2436 24/04/1908
92
Imagen 3. Ilustración de CIDOSA, publicada en su papelería oficial.
Los incrementos al capital de CIDOSA de 1892 a 1908 fueron posibles
porque los empresarios del Valle de Ubaye desarrollaron un modelo capitalista
que inició con negocios de bajo capital físico y financiero en el comercio, con los
cuales pudieron ahorrar las utilidades suficientes para acumular capital que
invirtieron en la industria, donde aplicaron la misma estrategia de ahorro.
Igualmente contaban con socios en Francia, que les brindaban mercancías y
financiamiento a costos bajos. Además como la falta de un mercado formal de
capitales limitaba la expansión de las empresas en el país, decidieron invertir o
crear sus propias instituciones financieras. Este comportamiento se describe en el
siguiente apartado, que enumera la evolución organizativa de las sociedades
fundadoras de CIDOSA.
Fuente: AGN, Presidentes, Madero, Caja 51. Carpeta 1439-3
93
Sociedades fundadoras
Como se determinó en el apartado anterior, las sociedades J. B. Ebrard y Cía.,
J. Ollivier y Cía., J. Tron y Cía., Signoret, Honnorat y Cía., Lambert, Reynaud y
Cía. y Garcín, Faudon y Cía., fueron los socios fundadores y mayoritarios de
CIDOSA durante el periodo de 1889-1930.
J.B. Ebrard y Cía. surgió en el DF como una sociedad en comandita, donde el
socio comanditario (quien aportaba el capital) era Juan Bautista Ebrard y el
comanditado (quién aportaba trabajo) era Eduardo Ebrard. Este último se
encargaba de administrar la tienda de novedades “El Puerto de Liverpool”, ubicada
en la Ciudad de México. Debido a algunos problemas que tuvo la sociedad en
Londres con la Cía. Gassier y Baunno fue liquidada en enero de 1888 y el 28
marzo del mismo año Juan Bautista Ebrard decidió constituir una nueva sociedad:
J.B. Ebrard, Sociedad Colectiva, que poseyó un capital inicial de $100,000 pesos.
Sus socios fueron Juan Bautista Ebrard, Antonio y Francisco Proal y Honorato
Beraud. Todos fueron considerados socios, gerentes y administradores. Sin
embargo, como la nueva sociedad absorbió el activo y pasivo de la tienda “El
Puerto de Liverpool”, se designó como gerente superior a Juan Bautista Ebrard,
quien vivía en París y se encargaba de las compras en Europa. La sociedad
inicialmente acordó una duración de 5 años, pero con opción de prórroga.142
El 14 de marzo de 1893, los socios declararon que deseaban continuar en la
sociedad, pero ahora bajo el nombre de J. B. Ebrard y Cía. Sucesores; e integrada
por un nuevo socio: Alfonso Michel. Juan B. Ebrard ya había fallecido. Esta nueva
sociedad siguió operando el comercio de “El Puerto de Liverpool”. Continuó como
una sociedad colectiva, pero ahora tuvo una duración de 3 años, prorrogable cada
año, a menos que alguno de sus socios decidiera separarse. Sus miembros
acordaron que no podían formar parte de otras empresas de manera particular,
pero sí la sociedad como tal. Además, se decidió que el nuevo socio, Alfonso
142
AHNM, Escritura 56 del volumen 3023 de la Notaría 444 a cargo de Rafael Morales, 28/3/1888.
94
Michel, tenía que vivir en México y ser el director de los negocios. Los demás
podían residir en Europa, pero los debía consultar para decisiones importantes.143
El 5 de marzo de 1907 llegó a su término la sociedad J. B. Ebrard y Cía.
Sucesores. Los socios convinieron en constituir la sociedad en comandita simple
J. B. Ebrard y Cía. Sucesores, la cual tenía de socios comanditarios a Antonio y
Francisco Proal y Honorato Beraud, y de comanditados Alfonso Michel, Juan
Bautista Ebrard Jr, y Antonio Jaubert. La nueva sociedad asumió por objeto
explotar el giro mercantil y almacenes del “El Puerto de Liverpool”, y continuar con
la administración de los negocios, bienes y valores de la anterior sociedad J.B.
Ebrard y Cía. Sucesores (ver Cuadro 4). Los socios comanditados debieron
radicar en el país, pues estuvieron a cargo de la gerencia de los negocios
comerciales, administrativos y judiciales, así como el uso de la firma social de la
compañía, pero les quedó estrictamente prohibido hacer uso de dicha firma para
negocios particulares o ajenos al objeto de la sociedad. Sí esto sucedía se les
separaba inmediatamente. Los socios comanditarios radicaron fuera del país, pero
debieron permanecer en él al menos 6 meses. La duración de la sociedad fue de 5
años, con opción de prórroga.144
La evolución de sociedad J.B. Ebard y Cía., así como la información de sus
socios, capitales aportados, utilidades y sueldos que les correspondieron, se
encuentran en el Cuadro 3. En este cuadro se observa que el porcentaje de
utilidad asignado a los socios fundadores Ebrard y Proal y Berau era superior al de
los demás. Para 1907 éstos tenían 59 y 61 años, vivían todos en Francia y
estaban casados.
Además de la tienda de novedades “El Puerto de Liverpool”, J.B. Ebrard y Cía.
Sucesores también participó como accionista del Banco Central Mexicano y otras
compañías manufactureras, las cuales se enumeran en el Cuadro 4. En este
cuadro se señala la fecha en que aparece como socio y el número de acciones
que poseía, excepto para la Fábrica de Papel San Rafael y Anexas SA y la
Fábrica de Tejidos de Lana San Idelfonso SA, donde no se logró obtener ese dato.
143
AHNM, Escritura 102 del volumen 3033 de la Notaría 444 a cargo de Rafael Morales, 14/3/1893. 144
AHNM, Escritura 1366 Volumen 31, del 5/3/1907 y Escritura 4249, volumen 54 del 15/11/1910 Notaría 5
a cargo de Bernardo Cornejo.
95
Cuadro 3. Evolución organizativa de la sociedad J.B. Ebrard y cía. 1888-1907
(pesos corrientes).
Cuadro 4. Acciones propiedad de la sociedad J.B. Ebrard y Cía. 1892-1909
(pesos corrientes).
Nombre Edad Estado
Civil
Domicilio Capital
aportado
Porcentaje
de utilidad
Sueldo
Anual
Puesto
Nombre J.B. Ebrard y cía
Tienda El Puerto de Liverpool Juan B. Ebrad 41 Casado París 40,000$ 40% Gerente Superior
Fundación 28-3-1888 Antonio Proal 42 Soltero D.F. 20,000$ 20% Gerente-Admdor
Sociedad Colectiva Francisco Proal 40 Soltero D.F. 20,000$ 20% Gerente-Admdor
Duración 5 años Honnorato Beraud 40 Soltero D.F. 20,000$ 20% Gerente-Admdor
TOTAL 100,000$ 100%
Nombre J.B. Ebrard y Cía. Sucesores
Tienda El Puerto de Liverpool Antonio Proal 48 Soltero D.F. 25,000$ 26.66% 4,000$ Gerente-Admdor
Fundación 14/3/1893 Honnorato Beraud 45 Soltero D.F. 25,000$ 26.66% 4,000$ Gerente-Admdor
Sociedad Colectiva Alfonso Michel 27 Soltero D.F. 25,000$ 20.0% 4,000$ Gerente-Admdor
Duración 3 años Francisco Proal 45 Casdao D.F. 25,000$ 26.66% 4,000$ Gerente-Admdor
TOTAL 100,000$ 100%
Nombre J.B. Ebrard y Cía. Sucesores
en comandita Antonio Proal 61 Casado París 225,000$ 22% Socio comanditario
Tienda El Puerto de Liverpool Honnorato Beraud 59 Casado París 325,000$ 22% Socio comanditario
Prórroga 05/03/1907 Francisco Proal 59 Casado Barcelonnette 325,000$ 22% Socio comanditario
Sociedad Comandita simple Alfonso Michel 41 Casado D.F. 20,000$ 6% 6,000$ Gerente-Admdor
Duración 5 años Juan B. Ebrad jr. 39 Soltero D.F. 20,000$ 15% 2,400$ Gerente-Admdor
Antonio Jaubert 38 Soltero 20,000$ 13% 2,400$ Gerente-Admdor
TOTAL 935,000$ 100%
Fuente: Archivo Histórico de Notarías de la Ciudad de México
Notaría Notario Fondo Volumen Escritura Fecha
444 Rafael Morales Antiguo 3023 56 28/03/1888
444 Rafael Morales Antiguo 3033 102 14/3/1893
5 Bernando Cornejo Contemporáneo 31 1366 05/03/1907
Datos de los socios
Datos de la sociedad
Fecha No. de
acciones
Valor
nominal
Capital
CIDOSA1
14/10/1892 3,800 $100 380,000$
Cía. explotadora de las fuerzas hidroeléctricas 23/07/1903 550 $100 $ 55,000
de San Idelfonso S.A.1
Banco Central Mexicano1
13/05/1904 52 $100 5,200$
Compañía Bancaria de París y México S.A. 28/10/1909 3,620 $100 362,000$
Fábrica de Papel de San Rafael y Anexas S.A.2
San Idelfonso Fábrica de tejidos de Lana S.A.2
-$
8,022
1. Aumento de Capital 2. Datos de The Mexican Year Book 1909-1910.
Fuente: Archivo Histórico de Notarías de la Ciudad de México
Notaría Compañía Fondo Notario Vol Escritura
444 CIDOSA Antiguo Rafael Morales 3032 122
729 Banco Central Mexicano Antiguo Jose del Villar 5087 8
3 Cía. explotadora de las fuerzas hidroeléctricas Contemporáneo Ramón Ruiz 14 650
de San Idelfonso S.A.
3 Banco Central Mexicano Contemporáneo Ramón Ruiz 30 1,138
3 Banco Central Mexicano Contemporáneo Ramón Ruiz 37 1,670
5 Compañía Bancaria de París y México S.A. Contemporáneo B. Cornejo 3,542 51
5 Compañía Bancaria de París y México S.A. Contemporáneo B. Cornejo 3,694 53
Empresa
TOTAL
96
J. Ollivier y Cía.145 fue constituida en la Ciudad de México el 15 de enero de
1879, por José Ollivier, Silvano Balp, Sebastián Robert y Juan Dachary,
representante de Mario Robert. Esta compañía administró la tienda de novedades
“La Ciudad de Londres”, en París, el DF y su sucursal en el puerto de Veracruz,
algunas casas de alquiler y la sociedad con Isidro de la Torre, “El Molino de Río
Hondo”. El 18 de febrero de 1884 los socios decidieron disolver esta sociedad y
asignar el activo y el pasivo de todos sus negocios a José Ollivier y Silvano Balp,
quienes junto a Mario y Antonio Ollivier y Juan Dachary constituyeron en esa
misma fecha la sociedad colectiva y mercantil J. Ollivier y Cía., con un capital
inicial de $75,000 pesos.
Esta nueva sociedad tuvo como objeto explotar el comercio en la tienda de
novedades “La Ciudad de Londres”. En ella, se designó como administrador de la
casa y compras de París a José Ollivier, quien ahí vivía, y a Silvano Balp de las
casas comerciales del DF y del puerto de Veracruz. Balp también debía comprar
mercancías y designar funciones a los empleados. En el caso de Juan Dachary lo
eligió para atender el mostrador y ser el responsable de la vigilancia. A Mario y
Antonio Ollivier los nombró encargados de ventas. Sus obligaciones comprendían
levantar pedidos, atender a clientes y realizar las notas. Si alguno de los socios
desmereciere de la confianza de sus consorcios por la infracción de los deberes
que les corresponde por mala conducta, por el juego, la embriaguez u otra causa
que dañara a la sociedad y reportara el descrédito sobre la razón social, sería
separado por acuerdo unánime y se liquidaría hasta que se disolviera la sociedad.
J.Ollivier y Cía. fue establecida por un periodo de 5 años, pero fue prorrogada en
1888.146
El 30 de Marzo de 1889, los señores José Ollivier, Juan Dachary, Marius y
Antonio Ollivier decidieron continuar con la sociedad J. Ollivier y Cía. por 5 años
más. José Ollivier siguió administrando la casa de París y los demás socios
debían consultarlo para las decisiones importantes de los negocios en México,
145
Para conocer la historia completa de J. Olliver y Cía., ver De Anglade, Jean-Louis, Un Gran patrón
barcelonnette au Mexique. Joseph Ollivier et sa famille. Sabenca de la Valeia y Jean –Louis D’Anglade.
Barcelonnette, 2006. 146
AHNM, Escritura. 75 y 76 del volumen 647 de la Notaría 99 a cargo de Ignacio Burgoa, 18/2/1884.
97
como la compra de bienes inmuebles, la asociación con otras personas o
compañías. Juan Dachary, Marius y Antonio Ollivier permanecieron en México y
después de 2 años Juan Dachary fue a vivir a París y recibía 10,000 francos para
gastos. También se estipuló que en caso de uso indebido de la firma social o por
separación voluntaria de algún socio, éste no podía exigir el pago del capital que
tuviera con la sociedad a la fecha de su separación, sino hasta la conclusión de la
misma. La utilidades se establecieron en 30% para José Ollivier y 23.33% para los
demás. Sin embargo, éstas tampoco podían recibirse, sino hasta el término de la
sociedad. Asimismo, por el capital que aportaban los socios recibían el 5% de
interés anual (éstos sí podían retirarse). Si los socios otorgaban préstamos a la
sociedad recibían el 6% de interés anual, pero sólo podían retirarlo de manera
prudente para que no perjudicara al negocio. La sociedad no se disolvió por el
fallecimiento de los socios, sino hasta que se cumplió el tiempo acordado.147
En 1894, se prorrogó como sociedad colectiva J. Ollivier y Cía., pero ahora
incorporando como socios a Juan B. Bellón, León y Teófilo Ollivier, hermanos de
Mario Ollivier y sobrinos de José Ollivier. Esta nueva sociedad tuvo un capital de
$83,000 y una duración de 5 años. En 1898 antes de volver a renovar la sociedad,
José Ollivier, de 70 años, decidió disolverla y no entregar la parte que le
correspondía de los negocios propiedad de J. Ollivier y Cía. a sus sobrinos Mario y
León (ver Cuadro 6). Esto porque incumplieron con la Cláusula 17, que les
impedía viajar a Francia y dejar de vivir en México, ya que eran responsables de la
administración de los negocios de la sociedad en el país, y además por asignarse
un sueldo como si aún trabajara en la tienda de la Ciudad de Londres. Estas
acciones molestaron tanto a José Ollivier que dispuso romper con la sucesión
familiar en los negocios e invitar a Eugenio Roux, José Spitalier y Armando
Desvignes a formar parte de la nueva J. Ollivier y Cía., constituida en abril de
1898, con un capital de $160,000. 148
El capital aportado, los porcentajes de utilidad y los sueldos asignados a cada
socio en la evolución histórica de J. Ollivier y Cía. de 1879 a 1910 se encuentran
147
AHNM, Escritura 56 del volumen 14, Notaria 40 a cargo de Eugenio Pérez, 30/3/1889. 148
D´Anglade, Jean Louis, Op.cit, 2006, pp. 261-262.
98
especificados en el Cuadro 5. En este cuadro resalta que José Ollivier se mantuvo
al frente de la sociedad hasta 1910, a pesar de tener 80 años. Aunque residía en
París desde 1879, regresó a vivir a la Ciudad de México en 1894 por los
problemas con sus sobrinos, como se explicó anteriormente.
El conflicto entre José Ollivier y sus sobrinos se arregló bajo las reglas que
barcelonnettes tenían para estos casos: asignando a otros empresarios del Valle
de alta reputación como árbitros del conflicto. Los designados fueron Enrique Tron
y Eduardo Garcín, quienes como amigos de José Ollivier le dieron la razón a él,
pero le estipularon una indemnización para sus sobrinos. Mario Ollivier tenía
derecho como capital e intereses en los negocios de México a la suma de
$858,419 pesos, y en los de París en 684,136 francos. León debía recibir
$548,420 pesos por las empresas de México y de 190,110 francos por las
empresas francesas.149
Las empresas en México donde participó como accionista J. Ollivier y Cía.
antes de la salida de sus sobrinos en 1898 se especifican en el Cuadro 6. En él se
incluye el nombre de la empresa y el número y valor de las acciones que poseía.
Si comparamos esta información con la del Cuadro 6A, que también señala las
acciones que ostentaba J. Ollivier y Cía. en México, pero para el periodo de 1899-
1909, es posible identificar que por la indemnización que pagó José Ollivier a
Mario y León Ollivier su participación en CIDOSA bajó un 10%, ya que de poseer
7,698 acciones, quedó con 6,928. Lo mismo sucedió para la Cía. de loza del Niño
Perdido, donde perdió 76 acciones, y en el Banco de Jalisco, en que disminuyó su
participación de 100 a 90 acciones. J. Ollivier y Cía. también era socio de J.B.
Ebrard y Cía. en la Fábrica de Papel San Rafael, Fábrica de Lana San Idelfonso, y
Cía. Eléctrica e Irrigadora de Hidalgo SA y en el Banco Central Mexicano.
Lamentablemente no poseemos información sobre los negocios en que J.
Ollivier y Cía. y las demás sociedades barcelonnettes participaban en Francia, lo
cual podría resolverse en otra investigación, donde se consulten los archivos
notariales de París.
149
Ídem.
99
Cuadro 5. Evolución organizativa de la sociedad J. Ollivier y Cía. 1879-1910
(pesos corrientes).
Nombre Edad Estado
Civil
Domicilio Capital
aportado
Porcentaje
de utilidad
Sueldo
Anual1Puesto
Nombre J.Olliver y cía José Ollivier París $ 20,000 38% $ 1,000
Tienda La Ciudad de Londrés Sebastian Robert D.F. $ 15,000 28% $ 1,200
Fundación 15/1/1879 Mario Robert D.F. $ 8,000 16% $ 1,200
Sociedad Colectiva-mercantil Silvano Balp Veracruz $ 7,000 18% $ 1,800
Duración 5 años TOTAL $ 50,000 100%
Nombre J.Olliver y cía José Ollivier París 30,000$ 34% 1,800$ Gerente-Admdor
Tienda La Ciudad de Londrés Sivano Balph D.F. 25,000$ 25% 1,200$ Gerente-Admdor
Fundación 18-2-1884 Mario Ollivier D.F. 12,000$ 14.5% 1,200$ Encargado de vtas.
Sociedad Colectiva-mercantil Juan Dachary D.F. 5,000$ 14.5% 1,200$ Gerente y mostrador
Duración 5 años Antonio Ollivier D.F. 3,000$ 12% 1,200$ Encargado de vtas.
TOTAL 75,000$ 100% 6,600$
Nombre J.Olliver y cía
Tienda La Ciudad de Londrés José Ollivier 59 Casado París 25,000$ 26.66% 12,000$ Gerente-Admdor
Prórroga 30/3/1889 Juan Dachary 38 Casado D.F. 5,000$ 26.66% 2,400$ Gerente-Admdor
Sociedad Colectiva-mercantil Mario Ollivier 32 Soltero D.F. 5,000$ 20.0% 1,800$ Gerente-Admdor
Duración 5 años Antonio Ollivier 31 Soltero D.F. 5,000$ 26.66% 1,200$ Gerente-Admdor
TOTAL 40,000$ 100%
Nombre J.Olliver y cía José Ollivier 64 Casado D.F. 40,000$ 30% 12,000$ Director superior
Tienda La Ciudad de Londrés Mario Ollvier 36 Soltero D.F. 20,000$ 30% 2,400$ Gerente-Admdor
Prórroga 26/2/1894 Antonio Ollivier 35 Soltero París 5,000$ 8,000$ Gerente-Admdor
Sociedad Colectiva-mercantil Léon Ollivier 28 Soltero D.F. 10,000$ 20% 1,560$ Gerente-Admdor
Duración 5 años Téofilo Ollivier 26 Soltero D.F. 5,000$ 10% 1,200$ Gerente-Admdor
Juan Buatista Bellón 33 Soltero D.F. 3,000$ 10% 1,200$ Gerente-Admdor
TOTAL 83,000$ 100%
Nombre J.Olliver y cía Jose Ollivier 70 Casado París 100,000$ 40% 12,000$ Director superior
Tienda La Ciudad de Londrés Juan Buatista Bellón D.F. 50,000$ 30% 2,400$ Gerente-Admdor
Fundación 28/4/1898 Eugenio Roux D.F. 10,000$ 22% 1,800$ Gerente-Admdor
Sociedad Colectiva-mercantil Jose Spitalier D.F. 4,000$ 8% 1,560$ Gerente-Admdor
Duración 5 años Armando Desvignes París 2,000$ 6,000$ Gerente-Admdor
TOTAL 166,000$ 100%
Nombre J.Olliver y cía Jose Ollivier 75 Casado Paris 100,000$ 25% 12,000$ Director superior
Tienda La Ciudad de Londrés Juan Buatista Bellón 43 Casado Paris 50,000$ 25% 10,000$ Gerente-Admdor
Fundación 28/02/1904 Eugenio Roux 41 Casado D.F. 10,000$ 20% 3,600$ Gerente-Admdor
Sociedad Colectiva-mercantil Jose Spitalier 37 Soltero D.F. 4,000$ 12% 2,400$ Gerente-Admdor
Duración 6 años Armando Desvignes Paris 2,000$ 12% 2,400$ Gerente-Admdor
Federico Proal D.F. 4,000$ 6% 2,100$ Gerente-Admdor
TOTAL 170,000$ 100%
Nombre J.Olliver y cía Jose Ollivier 80 Casado Paris 100,000$ 28% 12,000$ Director superior
Tienda La Ciudad de Londrés Eugenio Roux 49 Casado D.F. 10,000$ 26% 4,000$ Gerente-Admdor
Fundación 17/02/1910 Armando Desvignes Paris 2,000$ 16% 10,000$ Gerente-Admdor
Sociedad Colectiva-mercantil Jose Spitalier 43 Soltero D.F. 4,000$ 16% 3,000$ Gerente-Admdor
Duración 3 años Federico Proal 40 Soltero D.F. 4,000$ 14% 3,000$ Gerente-Admdor
TOTAL 120,000$ 100%
1. Se encuentra expresado en Francos para José Ollivier, Armando Desvignes, Eugenio Roux y Juan B. Bellon en 1879,1889, 1894,1898,1904,1910.
Fuente:
De Anglade, Jean-Louis. Un Gran patrón barcelonnette au Mexique. Joseph Ollivier et sa famille . Sabenca de la Valeia y D'Anglade. Barcelonnette, 2006
Archivo Histórico de Notarías de la Ciudad de México:
Notaría Notario Fondo Volumen Escritura Fecha
99 Ignacio Burgoa Antiguo 34 15/1/1879
99 Ignacio Burgoa Antiguo 647 75 18/2/1884
99 Ignacio Burgoa Antiguo 647 76 18/2/1884
99 Ignacio Burgoa Antiguo 657 135 30/3/1899
40 Eugenio Pérez Antiguo 39 26/2/1894
5 Bernando Cornejo Antiguo 36 28/4/1899
5 Bernando Cornejo Antiguo 10 04/04/1904
5 Bernando Cornejo Contemporáneo 50 3746 03/02/1910
5 Bernando Cornejo Contemporáneo 53 3769 17/02/1910
Datos de los socios
Datos de la sociedad
100
Cuadro 6. Acciones propiedad de J. Ollivier y Cía. al 31/12/1898 (pesos
corrientes).
Cuadro 6A. Acciones propiedad de J. Ollivier y Cía. 1899-1909 (pesos corrientes).
En México, J. Ollivier y Cía. continuó renovándose por dos ocasiones más:
una en febrero de 1904, cuando aumentó su capital a $170,000, y otra el 3 de
febrero de 1910, en que disminuyó su capital a $120,000. La sociedad de 1910
estuvo integrada por José Ollivier, Eugenio Roux, Armando Designer, José
Empresa No. de acciones Valor Capital
CIDOSA 7,698 245$ 1,886,000$
Banco de Londres y México 1,031 150$ 155,000$
San Rafael S.A. 2,346 128$ 300,000$
San Idelfonso S.A. 1,350 107$ 144,000$
Compañía Eléctrica, Irrigadora de Hidalgo S.A. 442 72$ 32,000$
La Teja 555 45$ 25,000$
Cía. de Loza del Niño perdido 764 65$ 50,000$
Banco de Jalisco 100 75$ 7,500$
TOTAL 14,286 2,599,500$
Fuente: De Anglade (2006), pp. 249.
Compañía Fecha No. de
acciones
Valor nominal Capital
CIDOSA 1899 6,928 100$ 692,800$
Banco de Londrés y México1
14/7/1896 1,031 100$ 103,100$
Cía. Irrigadora del Estado de Hidalgo S.A.1
29/04/1899 45 100$ 4,500$
Cía. Francesa de Porcelana S.A. El niño pérdido 1899 688 65$ 44,720$
Banco de Jalisco 1899 90
Azucarera del Panúco S.A.1
20/08/1900 150 100$ 15,000$
Azucarera del Panúco S.A.1
20/08/1900 400 100$ 40,000$
Cía. explotadora de las fuerzas hidroeléctricas 23/07/1903 450 100$ 45,000$
de San Idelfonso S.A.1
San Idelfonso Fábrica de Tejidos de Lana S.A.1
28/09/1903 1,900 100$ 190,000$
Banco Central Mexicano1
13/05/1904 22 100$ 2,200$
Compañía Bancaria de París y México S.A. 28/10/1909 9,770 100$ 977,000$
TOTAL 21,474
1. Aumento de Capital
Fuente: De Anglade, Jean-Louis (2006) pp. 145-153, 205, 238-250, 265, 274-279, 307 -315, 347.
Archivo Histórico de Notarías de la Ciudad de México
Compañía Fondo Notario Vol Escritura
Cía. explotadora de las fuerzas hidroeléctricas Contemporáneo Ramón Ruiz 14 650
de San Idelfonso S.A.
Banco de Londrés y México Antiguo Rafael Morales 3026 2
Compañía Bancaria de París y México S.A. Contemporáneo B. Cornejo 3,542 51
Compañía Bancaria de París y México S.A. Contemporáneo B. Cornejo 3,694 53
San Idelfonso Fábrica de tejidos de lana S.A. Contemporáneo Ramón Ruiz 19 752
Cía Irrigadora del Estado de Hidalgo S.A. Antiguo Ramon Ruiz 27 120
Banco Central Mexicano Contemporáneo Ramón Ruiz 30 1,138
Banco Central Mexicano Contemporáneo Ramón Ruiz 37 1,670
101
Spitalier y Federico Proal. Fue una sociedad mercantil de nombre colectivo que
continuó con los negocios y establecimientos comerciales en las ciudades de
México y París de la anterior sociedad (ver Cuadro 6). Su duración fue de tres
años y su capital fue de menor monto que su antecesora debido al retiro de Juan
Bautista Bellón. En esta sociedad se designó a José Ollivier y Armando Designer
para administrar los negocios en París y los demás socios para los negocios en
México. Los cinco socios se obligaron a dedicar tiempo, trabajo y empeño a los
negocios de la sociedad, absteniéndose de participar por cuenta propia en otros
que distrajeran su atención, excepto en aquellos que le interesaran a la sociedad y
fueran aprobados por José Ollivier, quien sí podía participar en otras empresas
individualmente. 150
Además, se acordó que si alguno de los socios se separaba voluntariamente;
o hiciera mal uso del capital social, las utilidades; o presentará mala conducta
(calificada por la mayoría de los socios), no tendría derecho a recibir el capital ni
utilidades generadas, sino hasta el término de la sociedad. El capital aportado por
cada socio recibiría un 5% de interés anual. La sociedad no se disolvería por el
fallecimiento de alguno de sus socios. Si José Ollivier fallecía, su esposa
Enriqueta Ouri de Ollivier continuaría con la sociedad, pero sólo con derecho a
12% de las utilidades. El resto que le correspondía a su esposo, se repartiría entre
los demás socios.151
José Ollivier falleció el 4 de abril de 1910. Su esposa Enriqueta asumió la
administración de los negocios, bajo la sociedad J. Ollivier y Cía. Sucesores. Sin
embargo, por la crisis financiera de 1907, el estallido de la Revolución Mexicana
(1910) y la Primera Guerra Mundial (1914-1918), los negocios sufrieron un
decrecimiento y en 1919, al morir la viuda de José Ollivier, los socios restantes
decidieron dividir a la sociedad en dos empresas: la primera con sede en París y
de tipo colectivo. La segunda, con domicilio en México y del tipo comanditario.152
150
AHNM, Escritura 3746, volumen 50 Notaría 5, Bernardo García, 3/2/1910. 151
Ídem. 152
D´Anglade, Jean Louis, Op.cit, 2006, pp. 324.
102
La sociedad J. Tron y Cía. inició en la Ciudad de México, en 1876, con
renovaciones cada 3 años.153 El 28 de febrero de 1885, José Léautaud, José y
Enrique Tron, hermano y representante de Julio Tron, y Francisco Donnadieu, la
constituyeron como una sociedad en comandita simple. José Léautaud fue el socio
comanditario. Después, el 30 de enero de 1888, Francisco Donnadieu decidió
separarse de esta sociedad. Los socios restantes constituyen J. Tron y Cía. como
una sociedad colectiva dedicada al comercio, con un capital inicial de $100,000
pesos. La nueva sociedad se conformó por José Léautaud, José, Julio y Enrique
Tron, y Damián Proal. José Tron fue el socio de mayor peso en la dirección del
negocio y José Léautaud el que realizó las operaciones en París. Léautaud, Julio y
José Tron fueron los socios colectivos que podían o no permanecer en México.
Todos fueron gerentes y administradores, así como socios industriales y
capitalistas. Debían dedicar su tiempo a “El Palacio de Hierro” de la Ciudad de
México y se les prohibía hacer otros negocios. La duración de la sociedad fue de 4
años y 11 meses.154
El 25 de febrero de 1892, José Léautaud, Julio y Enrique Tron, este último
representante de José Tron y José Signoret, firmaron la continuidad de la
sociedad colectiva J. Tron y Cía., pero ahora integrada por un nuevo socio: José
Signoret. Damián Proal se separó el 19 de enero de 1892. El capital de la
sociedad continuó en $100,000, y su objeto siguió siendo el administrar el
comercio “El Palacio de Hierro” y demás negocios de J. Tron y Cía. Los socios
Enrique Tron y José Signoret se obligaron a emplear toda su aptitud, tiempo y
trabajo en la compañía. Por ello se les consideró socios industriales y capitalistas
y se les prohibió participar de manera individual en otros negocios ajenos a los de
la sociedad. Los socios José Tron, José Léautaud y Julio Tron se consideraron
socios colectivos y administradores. Tenían libertad para permanecer en el país o
en Europa, pero estaban obligados a presidir la administración de los negocios en
Europa y México si Enrique Tron y José Signoret se enfermaban o no podían
153
Martínez Gutiérrez, Patricia. El Palacio de Hierro. Arranque de la modernidad arquitectónica en la
Ciudad de México. Fac.de Arquitectura y el Instituto de Investigaciones Estéticas de la UNAM, México,
2005, p. 39 154
AHNM, Escritura 33 y 34 del Volumen 655 de la Notaría 99 a cargo de Ignacio Burgoa, 30/1/1888.
103
llevar a cabo su labor. Se acordó que la sociedad duraría siete años, terminando el
31 de diciembre de 1898. En caso de fallecimiento de algún socio la sociedad
continuaría operando y se les otorgaría a los herederos el capital del socio
fallecido, ya sea en dinero o en bonos o valores equivalentes en acciones de
CIDOSA, Bancos y otras compañías que haya adquirido la sociedad (ver Cuadro
8). Si en octubre y noviembre de 1898 los socios de común acuerdo decidían dar
prórroga a la sociedad, se debía realizar una nueva escritura. Si decidían darla por
terminada, debían designar un árbitro para que recibiera los sobres con la oferta
de cada socio para ver quién se quedaba con la sociedad. Si no hubiera ofertas, el
1 de enero de 1899 se liquidaría la sociedad.155
El 6 de abril de 1898 los socios de J. Tron y Cía. decidieron modificar por
completo a la sociedad, convirtiéndola en una sociedad anónima denominada “El
Palacio de Hierro SA”. El objeto de esta compañía fue continuar con la
explotación, ampliación y desarrollo de la tienda El Palacio de Hierro, así como de
todos los demás negocios, bienes y valores de que era propietaria y tenía a su
cargo la sociedad liquidada J. Tron y Cía. (ver Cuadro 8). Su capital inicial fue de
$4, 000, 000, distribuidos en 40, 000 acciones al portador de un valor de $100
cada una. Su duración fue de 50 años, con opción de prórroga.156 En 1908, el
capital de esta sociedad aumentó a 5 millones de pesos.157 Los datos de las
diferentes tipos de organización jurídica que adquirió J. Tron y Cía., así como la
información de los socios que formaron parte de ella, se encuentran sintetizados
en el Cuadro 7.
En este cuadro se observa que cuando J. Tron y Cía. se convirtió en SA, los
socios fundadores José Léautaud, José, Julio y Enrique Tron, así como José
Signoret, aportaron la mayor parte del capital. También se observa que los nuevos
accionistas, en su mayoría, eran familiares, amigos, empresarios provenientes del
Valle de Ubaye o antiguos socios de otros negocios: Justino Tron, Julio y José II
Signoret, Alejandro Genin, Benveninto Derbez, Juan B. Ollivier, Antonio Reynaud,
Domingo Meyran, Caire, Félix Suberville, Camilo Maure, Isidoro y José Caire.
155
AHNM, Escritura 38 Volumen 15 Notaría 40 a cargo de Eugenio Pérez, 25/2/1892. 156
AHNM, Escritura 75 Volumen 27 Notaría 40 a cargo de Eugenio Pérez, 6/4/1898. 157
AHNM, Escritura 2866 volumen 43 Notaría 5 a cargo de Berrando Cornejo, 5/11/1908.
104
Cuadro 7. Evolución organizativa de la sociedad J. Tron y cía. 1888-1898 (pesos
corrientes)
Nombre Edad Estado
Civil
Domicilio Capital
aportado
Porcentaje
de utilidad
Sueldo
Anual
Puesto
Nombre J.Tron y Cía. José Leautaud 40 Casado París 50,000$ 20% 1,200$ Gerente-Admdor
Tienda El Palacio de Hierro José Tron 39 Soltero D.F. 20,000$ 20% 1,200$ Gerente superior
Fundación 30-1-1888 Julio Tron 32 D.F. 15,000$ 20% 1,200$ Gerente-Admdor
Sociedad Colectiva Enrique Tron 25 Soltero D.F. 10,000$ 25% 1,200$ Gerente-Admdor
Duración 4 años Damián Proal 35 Soltero D.F. 5,000$ 15% 1,200$ Gerente-Admdor
TOTAL 100,000$ 15% 6,000$
Nombre J.Tron y Cía. José Leautaud 44 Casado 50,000$ 16% 1,200$ Gerente-Admdor
Tienda El Palacio de Hierro José Tron 43 Casado 20,000$ 16% 1,200$ Gerente-Admdor
Prórroga 7-5-1892 Julio Tron 36 Casado 15,000$ 20% 1,200$ Gerente-Admdor
Sociedad Colectiva Enrique Tron 28 Soltero 10,000$ 28% 1,200$ Gerente-Admdor
Duración 7 años José Signoret 33 Soltero 5,000$ 20% 1,200$ Gerente-Admdor
TOTAL 100,000$ 100%
Nombre El palacio de Hierro S.A. José Tron 861,500$
Tienda El palacio de Hierro S.A. José Leautaud 787,400$
Fundación 6/4/1898 Julio Tron 550,000$
Sociedad Anónoma Enrique Tron 567,800$
Duración 50 años José Signoret 335,000$
Juan B. Ollivier 276,300$
Justino Tron 250,000$
Leon Reminsat 100,000$
José Ollivier 50,000$
Antonio Reynaud 35,000$
Benveninto Derbez 30,000$
Domingo Meyran 21,000$
Felix canin 8,000$
Jose signoret II 25,000$
Julio Signoret 20,000$
Guillermo Franz 10,000$
Felix Suberville 10,000$
Mariano F. Jáuregui 8,000$
Estella Peker 10,000$
p.R. Sentenal 5,000$
Isidoro Caire 5,000$
Leon Bense 5,000$
F. Larradel 5,000$
Cayetano Costes 4,000$
Vicente Herrera 4,000$
Eugenio A. Gilly 4,000$
Alejandro Genin 4,000$
Jose Caire 4,000$
Camilo Maure 3,000$
Genaro Velasco 2,000$
TOTAL 4,000,000$
Fuente: Archivo Histórico de Notarías de la Ciudad de México
Notaría Notario Fondo Volumen Escritura Fecha
99 Ignacio Burgoa Antiguo 655 34 30/1/1888
40 Eugenio Pérez Antiguo 16 38 7/5/1892
40 Eugenio Pérez Antiguo 27 75 6/4/1898
Datos de los socios
Datos de la sociedad
105
Las acciones que poseía J. Tron y Cía. al momento de su liquidación se
enumeran en el Cuadro 8. En él se especifica la empresa, el número y valor de
acciones que poseía al 31 de diciembre de 1897. Cabe resaltar que si
comparamos su participación accionaria en CIDOSA con la que poseía J. Ollivier y
Cía. para 1898, ésta era muy semejante en número de acciones: 7767 para J.
Tron y Cía. y 7698 para J. Ollivier y cía. Además, al igual que esta compañía los
socios de J. Tron y Cía. invirtieron en el Banco de Londres y México y en la Cía.
Eléctrica e irrigadora SA y en la Fábrica de Lana San Idelfonso.
Cuadro 8. Acciones propiedad de J. Tron y Cía., al 31/12/1897 (pesos corrientes).
Signoret, Honnorat y Cía. se creó en la Ciudad de México el 28 de marzo de
1887, cuando Antonio Bounfac decidió por voluntad propia separarse de la
sociedad Signoret, Bourafac y Cía. Esta sociedad mercantil comercializaba ropa,
casimires, paraguas y bonetería en las tiendas “El Puerto de Veracruz” y “El
Zafiro”, del DF. También manejaba la representación de sus socios en la sociedad
anónima Cía. Manufacturera de Cerritos, dueña de la fábrica de Cerritos en
Orizaba, Veracruz. La nueva sociedad Signoret, Honnorat y Cía., tuvo como
socios a León y Antonio Signoret y a León Honnorat. Su capital inicial fue de
$12,000 pesos. Todos los socios aportaron la misma cantidad de capital y por ello
todos fueron considerados gerentes-administradores de la tienda “El Puerto de
Veracruz”. La sociedad se estableció con una duración de 5 años y se estipuló que
Empresa No. de
acciones
Valor Capital
CIDOSA 7,767 130 $ 1,009,742.5 $ Banco de Londres y México 2,110 120 $ 253,200.0 $ San Idelfonso S.A. 50 100 $ 5,000.0 $ Compañía Eléctrica, Irrigadora S.A. 350 10 $ 3,500.0 $
TOTAL 10,277 1,271,442.5 $
Fuente: Escritura 75 Volumen 27, notaría 40 de Eugenio Pérez, AHNM, 6/4/1898
106
en los últimos 2 años de su existencia cada socio debía recibir un 33.33% de la
utilidad.158
El primero de enero de 1892, los socios de Signoret, Honnorat y Cía.
decidieron continuar con la sociedad, pero ahora integrando a Agustín Honnorat y
aumentando el capital a $100,000. Esta nueva sociedad colectiva tuvo una
duración de 5 años y siguió explotando el comercio de “El puerto de Veracruz”. Se
acordó que los socios Desiderio Signoret, León y Agustín Honnorat estaban
obligados a emplear todo su empeño, tiempo y trabajo en la sociedad, y que no se
les permitía formar parte de otras sociedades individualmente, pero sí como parte
de la sociedad. León y Antonio Signoret no quedaron obligados a dedicar todo su
esfuerzo a la compañía, por lo que podían o no permanecer en México. La
sociedad terminaría el 31 de diciembre de 1896, pero podía ser prorrogada con
consentimiento de los socios. De ser liquidada, el 27 de febrero de 1897 se les
permitiría a León y Antonio Signoret, así como a León Honnorat, tomar –si así les
conviniere- cada uno para sí un 25% de las acciones de CIDOSA, que tenía la
sociedad de Signoret, Honnorat y Cía., al precio de costo de adquisición.159
Esta sociedad siguió renovándose hasta el 30 de junio de 1912, que llegó a su
fin. Sus socios decidieron disolverla y poner en subasta cerrada entre ellos la
tienda “El Puerto de Veracruz”. Acordaron que mientras se otorgaba la escritura de
disolución y adjudicación respectiva, los socios que adquirieran la tienda podrían
seguir usando la razón social Signoret, Honnorat y Cía., agregándole “Sucesores”,
pero solamente durante el plazo que se fijara al contrato de la sociedad que se
organizara. Terminado ese plazo, no podía seguir usando la razón social
mencionada. También acordaron que los cargos de vocal en los consejos de
Administración de CIDOSA y del Banco de Londres y México, los seguiría
ejerciendo León Signoret.
La subasta fue ganada por Antonio Signoret, quien ofreció $855,000.00.
Antonio Signoret se unió a Mariano Allegre, Antonio Donnadieu y Domingo
Gastunel y Amado Martel, para fundar la sociedad Signoret, Honnorat y Cía.
158
AHNM, Escritura 53 y 54 del volumen 2006 de la Notaria 294 a cargo de Miguel Ma. Garduña, 28/3/1887. 159
AHNM, Escritura 1 del volumen 15 Notaría 30 a cargo de Eugenio Pérez, 1/1/1892.
107
Sucesores, con duración de 8 años, con opción de prórroga de 5 años más. En
esta sociedad Antonio Signoret fue el gerente superior y tenía la opción de no
radicar en el país, mientras que los otros 4 socios debían vivir en México y
hacerse cargo de la administración de la tienda “El Puerto de Veracruz”, poniendo
todo su tiempo, actitud e inteligencia y no participando en otros negocios ajenos a
la sociedad de manera particular. Respecto a las utilidades que se obtuvieran, se
apartarían 20,000 pesos para amortiguar la deuda del costo de los inmuebles,
además se acordó repartir sólo el 70% entre los socios y el 30% restante utilizarlo
para títulos de gratificaciones entre los apoderados y demás empleados de la
compañía en los términos que pactaran los socios.160
Los datos de los socios que pertenecieron a la Signoret, Honnorat y Cía., así
como los capitales que aportaron se describen en el Cuadro 9. En este cuadro se
observa que a diferencia de las otras sociedades mercantiles analizadas hasta
ahora, en Signoret, Honnorat y Cía., de 1887 a 1912 todos los socios aportaron la
misma cantidad de capital. Sin embargo, se les asignaba diferente porcentaje de
utilidad, de acuerdo a la antigüedad y conocimiento del negocio.
Además de la tienda de novedades “El Puerto de Veracruz”, Signoret,
Honnorat y Cía. participó como accionista de las empresas que se enumeran en el
Cuadro 10. En este cuadro identificamos que esta sociedad en 1892 poseía 3876
acciones de CIDOSA, que de acuerdo al Cuadro 2A eran un poco más de las
acciones que poseían J. Ebrard y Cía., J. Tron y Cía. y J. Ollivier y Cía., las cuales
tenían 3800 acciones cada una. Al igual que las sociedades anteriores, los
asociados de Signoret, Honnorat y Cía. también invirtieron en el Banco de Londres
y México, la Fábrica de Lana San Idelfonso y la Cía. Eléctrica e Irrigadora del
Estado de Hidalgo. Además de la Cía. Bancaria de París y México.
160
AHNM, Escritura 5435, Volumen 64 Notaría 5 a cargo de Eugenio Pérez, 11/9/1912.
108
Cuadro 9. Evolución organizativa de la sociedad Signoret, Honnorat y Cía. 1887-
1912 (pesos corrientes).
Cuadro 10. Acciones propiedad de Signoret, Honnorat y Cía. 1892-1909 (pesos
corrientes).
Nombre Edad Estado
Civil
Domicilio Capital
aportado
Porcentaje
de utilidad
Sueldo
Mensual
Puesto
Nombre Signoret, Honnorat y cía
Tienda El Puerto de Veracruz León Signoret 31 Soltero D.F. 4,000$ 35% 150$ Gerente-Admdor
Fundación 28-3-1887 Antonio Signoret 36 Soltero D.F. 4,000$ 35% 150$ Gerente-Admdor
Sociedad Colectiva-mercantil León Honnorat 27 Soltero D.F. 4,000$ 30% 150$ Gerente-Admdor
Duración 5 años TOTAL 12,000$ 100% 450$
Nombre Signoret, Honnorat y cía León Signoret 35 Soltero D.F. 20,000$ 23%
Tienda El Puerto de Veracruz Antonio Signoret 40 Soltero D.F. 20,000$ 17%
Prórroga 1-1-1892 León Honnorat 32 Casado D.F. 20,000$ 26%
Sociedad Colectiva-mercantil Agustín Honnorat 21 Soltero D.F. 20,000$ 17%
Duración 5 años Desiderio Signoret 38 Soltero D.F. 20,000$ 17%
TOTAL 100,000$ 100% -$
Nombre Signoret, Honnorat y cía.
sucesores Antonio signoret 71 Casado D.F. 30,000$ 16%
Tienda El Puerto de Veracruz Mariano Allegre 46 Casado D.F. 30,000$ 18%
Fundación 11/09/1912 Antonio Donnadiue 46 Casado D.F. 30,000$ 15%
Sociedad Colectiva-mercantil Domingo Gatunel 33 Soltero D.F. 30,000$ 11%
Duración 8 años Amado Martel 31 Soltero D.F. 30,000$ 10%
TOTAL 150,000$ 70%
Fuente: Archivo Histórico de Notarías de la Ciudad de México
Notaría Notario Fondo Volumen Escritura Fecha
294 Miguel María Garduña Antiguo 2006 54 28/03/1887
40 Eugenio Pérez Antiguo 15 1 01/01/1892
5 Bernando Cornejo Contemparáneo 2 5 12/04/1902
2 Jesús Trujillo Contemparáneo 19 1436 19/11/1906
5 Bernando Cornejo Contemparáneo 64 5435 11/09/1912
Datos de los socios
Datos de la sociedad
Compañía Fecha No. de
acciones
Valor
nominal
Capital
CIDOSA1
14/10/1892 3,876 100$ 387,600$
Banco de Londrés y México1
14/07/1896 100$ -$
Cía. Irrigadora del Estado de Hidalgo S.A.1
29/04/1899 212 100$ 21,200$
San Idelfonso Fábrica de Tejidos de Lana S.A.1
28/09/1903 590 100$ 59,000$
Cía. explotadora de las fuerzas hidroeléctricas 23/07/1903 300 100$ 30,000$
de San Idelfonso S.A.1
Compañía Bancaria de París y México S.A. 28/10/1909 3,260 100$ 326,000$
TOTAL 8,238
1. Aumento de Capital
Fuente: Archivo Histórico de Notarías de la Ciudad de México
Compañía Fondo Notario Vol Escritura
CIDOSA Antiguo Rafael Morales 3032 122
Cía. explotadora de las fuerzas hidroeléctricas Contemporáneo Ramón Ruiz 14 650
de San Idelfonso S.A.
Banco de Londrés y México Antiguo Rafael Morales 3026 2
Compañía Bancaria de París y México S.A. Contemporáneo B. Cornejo 3,542 51
Compañía Bancaria de París y México S.A. Contemporáneo B. Cornejo 3,694 53
San Idelfonso Fábrica de tejidos de lana S.A. Contemporáneo Ramón Ruiz 19 752
Cía Irrigadora del Estado de Hidalgo S.A. Antiguo Ramon Ruiz 27 120
109
Lambert, Reynaud y Cía. se fundó el 7 de marzo de 1889 como una sociedad
colectiva cuyo objeto fue la venta de lencería nacional y extranjera en la tienda “El
Correo Francés”, ubicada en la ciudad de México. Su capital inicial fue de $12,000
pesos. Sus socios fueron Mateo Lambert, Casimiro Reynaud, Graciano Guichard y
Julio Beraud. Todos fueron considerados socios administradores y directores, pero
Mateo Lambert fue el gerente superior. Lambert y Reynaud fueron los socios con
mayor aportación de capital, por lo que debían autorizar las operaciones más
importantes. Además dado que el señor Lambert, Reynaud y Guichard no
conocían la aptitud física y moral del señor Beraud para el desempeño de las
obligaciones y trabajos que este contrato le imponía, quedó pactado que si Beraud
no cumplía con lo asignado, no se le haría acreedor a participar en las utilidades
hasta que reparara el daño o cumpliera lo estipulado. Lambert, Reynaud y Cía.
tuvo una duración de 3 años, finalizando el 31 de diciembre de 1892, pero con
opción de prórroga.161
Después de 1892, Lambert, Reynaud y Cía. continuó operando, pero se
transformó en M. Lambert y Cía. Esta sociedad también tuvo por objeto la
administración del cajón de ropa “El Correo Francés” y demás negocios de la
antigua sociedad Lambert, Reynaud y Cía. Fue una sociedad mercantil colectiva,
con un capital de 10,000 y una duración de 5 años. El capital aportado por cada
socio generó un interés del 6% anual, que se pagó con cargo a la cuenta de
pérdidas y ganancias. Además del capital aportado, los socios Guichard, Beruad y
Francisco Reynaud se obligaron a emplear toda su aptitud, tiempo, trabajo y
empeño a favor de la sociedad, dado que tenían el carácter de socios industriales
y capitalistas. Asimismo, no podían ocuparse en otros negocios por su cuenta,
excepto aquellos que aprobara Mateo Lambert. Este último tenía la capacidad de
realizar negocios diferentes a la sociedad de manera individual y de radicar fuera
del país.162
Al fallecer Mateo Lambert, los demás socios decidieron disolver esta sociedad
y fundar el 28 de diciembre de 1903, M. Lambert y Cía. Sucesores. Esta nueva
161
AHNM, Escritura 107 del volumen 9225 de la Notaria 617 a cargo de Agustín Roldán, 7/3/1889. 162
AHNM, Escritura 36, volumen 740 Notaría 40 a cargo de Eugenio Pérez, 1/2/1899.
110
organización incluyó a Casimiro Reynaud, Graciano Guichard, Julio Beraud y
Adrian David. Fue una sociedad colectiva mercantil que tuvo por objeto el
comercio, explotación, compra y venta de artículos de lencería extranjeros y del
país en la tienda “El Correo Francés” y demás negocios que tuviera la anterior
sociedad (ver Cuadro 12). Los cuatro socios tenían a su cargo la administración,
gerencia y dirección de los negocios de la compañía, así como el uso de la firma
social, considerando que para pactar negocios ajenos al objeto de la compañía,
debía consultarse previamente a Graciano Guichard y Julio Beraud. El capital
aportado a esta sociedad fue de $4,000 por parte de Guichard y Beraud y $2,000
de los demás socios. Este capital generó un interés del 6% anual, que se pagó
con cargo a la partida de pérdidas y ganancias. Los socios Francisco Reynaud y
Adrian David debían emplear toda su aptitud, tiempo, trabajo y empeño a favor de
la sociedad (eran socios capitalistas e industriales), no podían formar parte de
otras sociedades, ni emprender de manera particular otros negocios, excepto
aquellos que previa autorización de Guichard y Beraud, fueran de interés para la
sociedad. Guichard y Beraud sí podían emprender negocios por su cuenta y se les
concedía el derecho de vivir fuera del país. Asimismo, durante cualquier plazo de
esta sociedad, Guichard y Beruad tenían la facultad de admitir como asociados a
las personas que designaran, sin necesidad de liquidarla. Vencido el plazo de la
sociedad, estos mismos socios podían optar por quedarse con “El Correo Francés”
(liquidando con la parte que les correspondía a los demás socios) u optar por
disolverla. M. Lambert y Cía. tuvo una duración de 3 años, con opción de prórroga
hasta de 5 años, si los socios así lo decidían. No se disolvió por la muerte de
alguno de los socios, ni porque alguno de ellos presentara incapacidad física o
moral para realizar sus funciones de gerente-administrador. Se acordó que en el
caso de que un socio hiciera un acto indebido que perjudicara a los intereses de la
compañía, como el dar un uso indebido de la firma social, sería separado sin
derecho a participar en las utilidades generadas.163
Los datos de los socios que pertenecieron a la Lambert, Reynaud y Cía., así
como los capitales que aportaron se describen en el Cuadro 11.
163
AHNM, Escritura 154 Volumen 7, Notaría 5 a cargo de Bernardo Cornejo, 28/12/1903.
111
El cuadro 11 recopila los datos de los socios y capitales que conformaron
Lambert, Reynaud y Cía. de 1889 a 1904. De acuerdo con su información, Mateo
Lambert y Casimiro Reynaud fueron los socios que aportaron mayor capital y a los
que les correspondía mayor porcentaje de utilidad hasta 1899, cuando Graciano
Guichard y Julio Beraud se convirtieron en los socios principales por la muerte de
Lambert. A diferencia de las demás sociedades mercantiles descritas, su socio
principal no era de origen barcelonnette (Lambert era italiano) y además sus
asociados permanecieron en México todo el tiempo que existió la tienda “El correo
Francés”.
M. Lambert y cía. también participó como accionista de las empresas que se
muestran en el Cuadro 12. En este cuadro se observa que M. Lambert y Cía.
poseía en 1892 menor número de acciones de CIDOSA que las sociedades
mercantiles anteriores, pero también fue socio de Cía. irrigadora, de la Fábrica de
San Idelfonso y de la Cía. Bancaria de París y México.
Cuadro 11. Evolución organizativa de la sociedad Lambert, Reynaud y Cía. 1889-
1904 (pesos corrientes).
Nombre Edad Estado
Civil
Domicilio Capital
aportado
Porcentaje
de utilidad
Sueldo
Mensual
Puesto
Nombre Lambert, Reynaud y cía Mateo Lambert 33 Soltero D.F. 4,000$ 40% 100$ Gerente superior
Tienda El Correo Francés Casimiro Reynaud 31 Soltero D.F. 4,000$ 36% 100$ Gerente-Admdor
Fundación 7-3-1889 Graciano Guichard 32 Soltero D.F. 2,000$ 14% 80$ Gerente-Admdor
Sociedad Colectiva Julio Beraud 34 Soltero D.F. 2,000$ 10% 70$ Gerente-Admdor
Duración 3 años TOTAL 12,000$ 100% 350$
Nombre M. Lambert y cía. Mateo Lambert 43 Casado D.F. 4,000$ 38.89% 100$
Tienda El Correo francés Graciano guichard 43 Casado D.F. 2,000$ 30% 50$
Fundación 1/2/1899 Julio Beraud 43 Soltero D.F. 2,000$ 20% 50$
Sociedad Colectiva Francisco Reynaud 37 Soltero D.F. 2,000$ 11% 50$
Duración 5 años TOTAL 10,000$ 100% 250$
Nombre M. Lambert y cía. sucesores Graciano guichard* 48 Casado D.F. 4,000$ 30% 500$ Gerente superior
Tienda El Correo francés Julio Beraud* 48 Soltero D.F. 4,000$ 30% 500$ Gerente superior
Fundación 01/01/1904 Francisco Reynaud 41 Casado D.F. 2,000$ 24% 100$ Gerente-Admdor
Sociedad Colectiva Adrian David 32 Soltero D.F. 2,000$ 16% 50$ Gerente-Admdor
Duración 3 años TOTAL 12,000$ 100% 1,150$
* El sueldo que se especifica es si vivien en la Ciudad de México, si radican en otro lado, sería de $100
Fuente: Archivo Histórico de Notarías de la Ciudad de México
Notaría Notario Fondo Volumen Escritura Fecha
697 Agustín Roldan Antiguo 9225 107 07/03/1889
40 Eugenio Pérez Antiguo 740 36 01/02/1899
5 Bernando Cornejo Contemporáneo 7 154 28/12/1903
5 Bernando Cornejo Contemporáneo 12 216 18/08/1904
Datos de los socios
Datos de la sociedad
112
Cuadro 12. Acciones propiedad de M. Lambert y Cía. 1892-1909 (pesos
corrientes).
Garcín Faudon y Cía. sociedad colectiva fue constituía en la Ciudad de México
por Eduardo Garcín, León Faudon y Mario Pléasant con el objeto de ejercer el
comercio de lencería nacional y extranjera en la tienda “El Gran Oriental”. En 1885
Adolfo Garcín y Emilio Faudon eran dueños únicos del cajón de ropa “El Gran
Oriental”, bajo la razón social Argentin, Faudon y Cía. Sucesores, pero el 25 de
febrero de 1886 disolvieron la sociedad, enajenando, cediendo y traspasando en
toda forma a favor de Garcín, Faudon y Cía. los inventarios, activos y pasivos de
“El gran Oriental”. Éste fue vendido en $39,420 pesos liquidables en pagares. En
la nueva sociedad Garcín, Faudon y Cía. se contó con un capital inicial de $15,000
pesos y se acordó una duración de 5 años con opción a prórroga. Además se
pactó no disponer de las utilidades que generara la tienda hasta el término de la
sociedad para aumentar el capital social.164
El 31 de marzo de 1891, Eduardo Garcín, León Faudon y Mario Plésant
continuaron con la sociedad Garcín, Faudon y Cía., pero con un capital de
$30,000 (cada socio aporta $10,000), y con una duración de 8 años, contados
desde el 1 de enero de 1891 hasta el 31 diciembre de 1898. También pactaron
que a los socios no se les permitiera participar individualmente en otros negocios,
pero sí a la sociedad como tal. Acordaron que la sociedad no se disolvería si
fallecía alguno de los socios, y se le concedió a Mario Plésant la opción de
164
AHNM, Escritura 78 y 79 del volumen 651 de la Notaría 99 a cargo de Ignacio Burgoa, 25/2/1886.
Compañía Fecha No. de
acciones
Valor
nominal
Capital
CIDOSA1
14/10/1892 2,799 100$ 279,900$
Cía. Irrigadora del Estado de Hidalgo S.A.1
29/04/1899 273 100$ 27,300$
San Idelfonso Fábrica de Tejidos de Lana S.A.1
28/09/1903 608 100$ 60,800$
Compañía Bancaria de París y México S.A. 28/10/1909 3,260 100$ 326,000$
TOTAL 6,940
1. Aumento de Capital
Fuente: Archivo Histórico de Notarías de la Ciudad de México
Compañía Fondo Notario Vol Escritura
CIDOSA Antiguo Rafael Morales 3,032 122
Compañía Bancaria de París y México S.A. Contemporáneo B. Cornejo 3,542 51
Compañía Bancaria de París y México S.A. Contemporáneo B. Cornejo 3,694 53
San Idelfonso Fábrica de tejidos de lana S.A. Contemporáneo Ramón Ruiz 19 752
Cía Irrigadora del Estado de Hidalgo S.A. Antiguo Ramon Ruiz 27 120
113
separarse en los 3 primeros años. Al término de los ocho años, Eduardo Garcín se
haría cargo de la sociedad, a menos que no le conviniera a sus intereses, caso en
el cual León Faudon se haría cargo de ella.165
Garcín, Faudon y Cía., se transformó el 14 de marzo de 1905 a L. Faudon y
Cía. sucesores. Esta nueva sociedad se formó por Camilo Plésant, Luciano
Faudon y Francisco Rougon. Tenía como objetivo la administración de la tienda
“El Gran Oriental” y demás negocios que tuviera la anterior sociedad (ver Cuadro
14). Fue declarada en quiebra en 1911 y vendió todos sus activos (que ascendían
a $133,953.35) en el 50% de su valor (es decir, $76,976.67) a la compañía P. J.
Jacques, sucesores, sociedad en comandita. José Ollivier estaba dispuesto a
hacer una oferta para adquirir las mercancías, créditos activos, enseres y útiles de
la organización “El Gran Oriental”, pero sólo ofreció pagar el 49% de su valor. 166
Los datos de fechas de fundación, capital, datos personales de los socios
(nombres, edad, estado civil, domicilio, lugar de origen), puestos, sueldos
asignados y porcentajes de utilidades que les correspondía se encuentran
especificados en el Cuadro 13. En él se observa que los socios de Garcín, Faudon
y Cía., al igual que Signoret, Honnorat y Cía. aportaron el mismo monto de capital,
pero con la diferencia de que en esta sociedad se les otorgó el mismo porcentaje
de utilidad y no se hizo distinción por su experiencia o conocimiento. Otra
característica que la distinguía es que a diferencia de las demás sociedades cuyo
capital seguía creciendo en 1910, ésta se declaró en quiebra en 1911.
Además de la tienda de “El Gran Oriental”, L. Faudon y Cía. participó como
accionista en las empresas que se enumeran en el Cuadro 14. En él se observa
que la sociedad, en 1892, poseía sólo 2513 acciones de CIDOSA, mientras que
las sociedades anteriores tenían 3800 y 2799 M. Lambert y Cía. También era
accionista en menor proporción a sus antecesoras en las Cía. Explotadora de las
fuerzas hidroeléctricas de San Idelfonso SA, el Banco Central Mexicano y la
Compañía Bancaria de París y México SA.
165
AHNM, Escritura 56 del volumen 14 Notaría 40 a cargo de Eugenio Pérez, 31/3/1891. 166
AHNM, Escritura 4539, volumen 54, Notaría 5 a cargo de Bernardo Cornejo, 22/4/1911.
114
Cuadro 13. Evolución organizativa de la sociedad Garcín, Faudon y Cía. 1896-
1905 (pesos corrientes)
Cuadro 14. Acciones propiedad de L. Faudon y Cía. 1892-1909 (pesos
corrientes).
Nombre Edad Estado
Civil
Domicilio Capital
aportado
Porcentaje
de utilidad
Sueldo
Mensual
Puesto
Nombre Garcín, Faudon y cía
Tienda El Gran Oriental Eduardo Garcín 26 Soltero D.F. 5,000$ 33.33% 50$ Gerente-Admdor
Fundación 22-2-1886 León Faudón 25 Soltero D.F. 5,000$ 33.33% 50$ Gerente-Admdor
Sociedad Colectiva Mario Plésant 33 Soltero D.F. 5,000$ 33.33% 50$ Gerente-Admdor
Duración 5 años TOTAL 15,000$ 100% 150$
Nombre Garcín, Faudon y cía
Tienda El Gran Oriental Eduardo Garcín 31 Soltero D.F. 10,000$ 33.33% 100$
Fundación 31/3/1891 León Faudón 29 Soltero D.F. 10,000$ 33.33% 100$
Sociedad Colectiva Mario Plésant 38 Soltero D.F. 10,000$ 33.33% 100$
Duración 8 años TOTAL 30,000$ 100% 300$
Nombre L. Faudon y cía. sucesores
Tienda El Gran Oriental Camilo Plesant
Fundación 14/03/1905 Luciano Faudon
Sociedad Colectiva Francisco Rougon
Duración TOTAL 133,953.35$
Fuente: Archivo Histórico de Notarías de la Ciudad de México
Notaría Notario Fondo Volumen Escritura Fecha
99 Ignacio Burgoa Antiguo 651 78 22/02/1886
40 Eugenio Pérez Antiguo 14 56 31/03/1891
5 Bernando Cornejo Contemporáneo 50 3541 28/10/1909
5 Bernando Cornejo Contemporáneo 49 3670 04/01/1910
5 Bernando Cornejo Contemporáneo 54 4539 22/04/1911
Datos de los socios
Datos de la sociedad
Compañía Fecha No. de
acciones
Valor
nominal
Capital
CIDOSA1
14/10/1892 2,513 100$ 251,300$
Cía. explotadora de las fuerzas hidroeléctricas 23/07/1903 200 100$ 20,000$
de San Idelfonso S.A.1
Banco Central Mexicano1
13/05/1904 175 100$ 17,500$
Compañía Bancaria de París y México S.A. 28/10/1909 650 100$ 65,000$
TOTAL 3,538
1. Aumento de Capital
Fuente: Archivo Histórico de Notarías de la Ciudad de México
Compañía Fondo Notario Vol Escritura
CIDOSA Antiguo Rafael Morales 3,032 122
Compañía Bancaria de París y México S.A. Contemporáneo B. Cornejo 3,542 51
Compañía Bancaria de París y México S.A. Contemporáneo B. Cornejo 3,694 53
Banco Central Mexicano Contemporáneo Ramón Ruiz 30 1,138
Banco Central Mexicano Contemporáneo Ramón Ruiz 37 1,670
Cía. explotadora de las fuerzas hidroeléctricas Contemporáneo Ramón Ruiz 14 650
de San Idelfonso S.A.
115
En general todas estas tiendas comerciales, se organizaron como sociedades
colectivas o como sociedades comanditarias. En el primer tipo de organización,
todos los socios eran responsables de las deudas y gestión de la empresa. En el
segundo, algunos socios eran responsables de la administración y otros de aportar
el capital, pero no participaban en la gestión.
En el caso de las sociedades colectivas, éstas “tuvieron plazos cortos (de 3 a
5 años), generaron un interés por el capital aportados (entre el 5 y 6%) y sólo se
permitió a sus socios retirar las utilidades hasta que finalizaba la sociedad. En
ellas los socios se asignaban sueldos muy bajos (ver Cuadro 3 al 10), y si alguien
decidía salirse sólo se le pagaba un porcentaje de su utilidad para que no se
descapitalizara la sociedad, o se invitaba a otro socio y con el capital que éste
aportaba se pagaba al socio saliente, pero en menor cantidad. Estas sociedades
contaban con socios en Francia y con un manejo de negocios en Europa que les
permitían aumentar sus importaciones. Además pasaban de empresas familiares a
corporaciones con socios que no eran ajenos, sino que se conocían entre ellos.
De hecho, si alguien quería vender, primero ofrecía su parte dentro de la misma
sociedad. Asimismo, a pesar de que sus empresas cambiaban de dueños el
negocio continuaba operando como antes”.167
En las sociedades en comandita, los socios comanditarios debían radicar en el
país porque quedaban a cargo de los negocios comerciales, administrativos y
judiciales, así como el uso de la firma social de la compañía. Les quedaba
estrictamente prohibido hacer uso de dicha firma para negocios particulares o
ajenos al objeto de la sociedad. Sí esto sucedía se les separaba inmediatamente.
En el caso de los socios comanditados podían radicar fuera del país, pero debían
hacerse cargo de los negocios, si los primeros faltaban.
Durante el periodo de 1889 a 1910 sólo la sociedad de J. Tron y Cía. se
organizó como una Sociedad Anónima (SA).168 Esto porque la tienda “El Palacio
de Hierro” se transformó en una tienda de departamentos y se requirió de grandes
capitales para ello. Las sociedades anónimas se forman por accionistas con
167
Entrevista a Aurora Gómez Galvarriato Julio 2007. 168
En 1898, J.Tron y Cía. se convirtió en El Palacio de Hierro S.A.; y el 30/9/1925, J. Ollivier y Cía. se
transformó en Almacenes de Ropa “La Ciudad de Londres” sucursal de J.Ollivier y cía. SA.
116
responsabilidad limitada, que designan a un consejo de administración y/o
administradores profesionales, para que lleven a cabo la gestión de sus negocios.
A pesar de las diferencias de cada tipo de organización, todas las
asociaciones entre barcelonnettes estaban condicionadas por la confianza que se
les tenía a los futuros socios y por las ganancias que se recibirían por hacer un
nuevo negocio. Si la confianza no era plena o era traicionada, se aplicaban
sanciones con altos costos económicos. Además, tanto en las sociedades
colectivas como en las comanditarias resaltaba la figura del socio fundador, quien
aportaba mayor capital, tomaba las decisiones más importantes (inversiones en
bienes inmuebles, asociaciones con otras empresas, etc.) y al que sí se le permitía
participar por su cuenta en otros negocios. Los socios fundadores más
sobresalientes se identifican en el siguiente apartado.
Los principales socios
Gómez Galvarriato señala que el estudio de los archivos de CIDOSA indica que
desde su conformación esta compañía estaba administrada por gerentes, que a su
vez eran supervisados por un consejo de administración formado por altos
ejecutivos de las empresas comerciales barcelonnettes, sus principales
accionistas. La autora señala que las actas de consejo permiten observar que “en
sus consejos directivos no se sentaban individuos a título personal, sino
representantes de las compañías comerciales que la mayoría de las veces no eran
los principales propietarios, sino sus gerentes”.169 Por ejemplo, el primer consejo
de administración170 de CIDOSA se formó por Tomás Braniff, Juan F. Dachary, de
J. Ollivier y Cía., Antonio Proal, de J.B. Ebrard y Cía., Mateo Lambert, de Lambert,
Reynaud y Cía., León Faudon, de Garcín, Faudon y Cía., como propietarios, y
Mario Ollivier, de J. Ollivier y Cía., Honorato Beraud, de J.B. Ebrard y Cía.
Graciano Guichard, de Lambert, Reynaud y Cía., y Eduardo Garcín, de Garcín,
169
Gómez Galvarriato, Aurora. Op.cit, (s/f) p.43 170
Para conocer los accionistas que formaron los Consejo de Administración de CIDOSA de 1905-1932,
consultar los anexos de Gómez Galvarriato, Aurora. “The impact of revolution: Busines and labor in the
Mexican textil industry, Orizaba Veracruz 1900-1930”. Tesis de doctor en Historia. Harvard University.
Cambridge, Massachussets, Diciembre 1999a, pp. 631-632.
117
Faudon y Cía. como suplentes”. 171 Estos representantes – como se observa en
los Cuadros 3 al 10- ocupaban los puestos de gerente y atención del mostrador en
el caso de Juan Dachary, encargado de ventas en el caso de Mario Ollivier, ambos
en la tienda de “La Ciudad de Londres”; gerente superior de la tienda “El Correo
Francés”, en el caso de Mateo Lambert, y gerente administrador, en el caso de
todos los demás, en las tiendas de “El puerto de Liverpool”, “El Palacio de Hierro”
y “El Gran Oriental.
De ellos sólo Mateo Lambert (de origen italiano) era el propietario principal de
la tienda que representaba. Todos los demás eran accionistas minoritarios que no
contaban con el capital ni con la experiencia de los principales socios de las
tiendas comerciales accionarias de CIDOSA.
Los socios fundadores de las tiendas accionarias de CIDOSA fueron Juan
Bautista Ebrard, quien aportó el 40% del capital a J.B. Ebrard y Cía., propietaria de
la tienda comercial “El Puerto de Liverpool”; José Ollivier, gerente superior de J.
Ollivier y Cía. y dueño del 40% del capital de la tienda “La Ciudad de Londres”;
José Léautaud, quien poseía el 50% del capital de J. Tron y Cía., dueños de “El
Palacio de Hierro”, y León Signoret, gerente de Signoret, Honnorat y Cía.,
propietarios de “El puerto de Veracruz”. Aunque aportó la misma cantidad de
capital que sus correspondientes socios, le correspondía un mayor porcentaje de
las utilidad (35%), dada su experiencia. Las fotografías de algunos de estos
barcelonnettes se muestran en la Imagen 4.
Imagen 4. Fotografías de los principales socios de las tiendas accionarias de
CIDOSA, 1889-1911.
Fuente: Proal (1998) y Foto 222 Negativos 2-4 del Fondo Santa Rosa del AGEV.
171
AHNM, Escritura 155, del Volumen 3025, Notaría 444 a cargo de Rafael Morales, 28/06/1889.
León Signoret
118
De los socios fundadores mencionados, sobresalieron por su visión de
negocios y fortunas alcanzadas José Ollivier, José Léautaud y León Signoret.
José Ollivier emigró a México en 1850. Trabajó como empleado de la casa de
novedades de “La Ciudad de Londres (1838)”. Cuatro años después estableció su
propia tienda en la Ciudad de México: “La Estrella de Santo Domingo (1854)”. Esta
casa de comercio la vendió y se asoció con Ferdinando Jauffred para administrar
la misma tienda donde había sido empleado (La Ciudad de Londres, 1863). En
1903 adquirió dos casas de novedades más: “La Sorpresa” y “La Primavera”.
Posteriormente, con las ganancias generadas por estos y otros negocios como
Cristalería La Moderna (1904) y la Cía. Francesa de Porcelana (1890) ubicada en
la calle del Niño Perdido, en México, DF, una casa de novedades en Veracruz y
una hacienda en Monterrey, participa en la creación de la Fábrica de Papel San
Rafael (1890), la Cía. Azucarera El Pánuco (1898), y las fábricas textiles de
CIDOSA (1889) y San Idelfonso (1895). No sólo tenía negocios en México, sino
también en Inglaterra y París. Por ello, “debido a sus cualidades y al papel
destacado que desempeño en México, el gobierno francés le otorgó en 1894 la
Cruz de la Legión de Honor”.172
José Ollivier también poseía una gran visión para apostar por las finanzas. Por
ello creó la Sociedad Financiera para la Industria en México (1898) y la Cía.
Bancaria de París y México (1909). También participó como accionista del Banco
de Londres y México y del Banco de Jalisco. Este empresario jugó un rol
importante en la definición de las estrategias de sus negocios y su capacidad de
emprender siguió intacta hasta su muerte en 1910.173
José Léautaud y los hermanos Tron (José, Julio y Enrique) desembarcaron en
México en 1864, 1872 y 1873, respectivamente. José Léautaud trabajó diez años
como empleado de la tienda “La Valenciana”, y los hermanos Tron en la tienda de
“Las Fábricas de Francia (1842)”, de la Ciudad de México, la cual compraron en
1880, al relacionarse con Léautaud en la sociedad J. Tron y Cía. Las ganancias
generadas por el desempeño y venta de esta tienda les permitió obtener el
172
Proal, Maurice y Charpenel, M. Pierre. Op.cit, 1998. 173
D´Anglade, Jean Louis, Op.cit, 2006, pp. 324
119
suficiente capital para participar como accionistas de la tienda de novedades El
Palacio de Hierro SA -la cual sigue siendo en la actualidad una de las más
importantes de México- CIDOSA, Fábrica de Papel San Rafael, Fábrica Textil La
Perfeccionada, Compañía Trigadora de Hidalgo, Cía. Eléctrica e Irrigadora del
Estado de Hidalgo y Cía. Industrial San Idelfonso.174 En 1898, cuando J. Tron se
convirtió en Sociedad Anónima, José Léautaud se retiró a Francia y se ocupó de
las compras en París, hasta 1963 cuando se vendió la empresa.175
León Signoret ingresó a México en 1873 y trabajó en la tienda de las Fábricas
de Francia, ya en propiedad de J. Tron y Cía. Posteriormente se asoció con su
hermano Antonio y con León Honnorat para fundar la tienda de novedades “El
Puerto de Veracruz”. También participó como administrador del “Banco de
Londres y México” y fue socio de CIDOSA, “Fábrica de Papel San Rafael”, “Cía.
Industrial San Idelfonso”, “Banco Central Mexicano (1899)”, “Cía. Bancaria de
París y México”, “Cía. Eléctrica e Irrigadora del Estado de Hidalgo”, “Cía. del
Ferrocarril Eléctrico de Lerdo”, “Compañía Manufacturera de Jabón la Unión”, y de
la “Fundición de Fierro y Acero de Monterrey” (1900). Gracias a esta última
empresa León Signoret se vinculó con algunos miembros del grupo de industriales
de mayor poder económico y político al norte del país a finales del siglo XIX, como
Vicente Ferrara y Patricio Milmo176.
León Signoret falleció en Barcelonnette, Bajos Alpes, Francia, el 30 de
agosto de 1919. En su testamento designó como herederos a su esposa Athemais
Reynaud viuda de Signoret, a su hermano Antonio Signoret, a sus hijos Luis
Andrés y Alberto Signoret.177
Otros empresarios barcelonnettes que no fueron socios fundadores, pero que
también sobresalieron por su visión de negocios y fortunas alcanzadas fueron
Sebastián Robert y Enrique Tron (ver Imagen 4).
Sebastián Robert -sobrino de José Ollivier- ingresó a México en 1865. Fue
contratado como un simple empleado por la casa de novedades de Jauffred y
174
Proal, Maurice y Charpenel, M. Pierre. Op.cit, 1998. 175
Martínez, G., Patricia, Op.cit., 2005, p. 39. 176
Gómez Galvarriato, Aurora. La industria textil en México. Lecturas de Historia Económica Mexicana.
Instituto Mora, Colmich, Colmex, IIH-UNAM, México, 1999. 177
AHNM, Escritura 9428, volumen 54, Notaría 5 a cargo de Bernardo Cornejo, 25/10/1920.
120
Ollivier y Cía. Poco tiempo después, se convirtió en uno de los socios principales
de la tienda “La Ciudad de Londres”. Posteriormente, se asocia con Émile Meyran
y crean S. Robert y Cía., sociedad que administraba la tienda de novedades “La
Valenciana”, y en 1884 “El Centro Mercantil”. Estas tiendas se ubicaron en la
Ciudad de México. Ambas fueron consideradas dentro de los centros comerciales
más importantes del país, tanto en la venta al mayoreo como al menudeo.178
Sebastián Robert, representando a S. Robert y Cía., junto con Alejandro
Reynaud, José y Eugenio Signoret, y Juan Derbez, socios de A. Reynaud y Cía.
propietarios de la tienda “Las Fábricas Universales”, y otros inversionistas
fundaron en la Ciudad de México, el 24 de Noviembre de 1896, la Compañía
Industrial Veracruzana SA (CIVSA.)179 Los accionistas de CIVSA optaron por
construir su propia fábrica textil: “Santa Rosa”, inaugurada en 1898 en Ciudad
Mendoza, Veracruz.
Las fábricas de Río Blanco, de CIDOSA, y Santa Rosa, de CIVSA, fueron las
fábricas textiles más grandes de México a finales del siglo XIX180. Sebastián
Robert también invirtió en las fábricas textiles de “La Hormiga”, “La Alpina” y “La
Corona”, donde se manufacturaba el algodón, se elaboraban sábanas y bonetería,
respectivamente. Fue el primer barcelonnette en participar como socio en un
banco mexicano: el Banco Nacional Mexicano (1881), que años más tarde, en
1884, cambió su nombre a Banco Nacional de México (Banamex).181.
Sebastián Robert murió el 7 de marzo de 1908, a los 60 años. Este
empresario, -al contrario de su tío José Ollivier- mantuvo un mayor control con los
socios que invitaba a sus negocios. Le asignaba menores sueldos ($1,200 a
$1,680 pesos por año, y J. Ollivier pagaba de $2,100 a $3,600), les exigía los
comprobantes de gastos cuando realizaban viajes a Europa; les prohibía participar
en otros negocios y estipulaba por escrito las normas que debían regular su
comportamiento.182
178
Proal, Op. cit.,1998. 179
Para un estudio pormenorizado de los socios y funcionamiento de CIVSA, ver Gómez Galvarriato, Aurora.
Op.cit, 1999a 180
García Díaz, Bernardo. Op.cit, 1981 181
Meyer, Op. cit. 1980. 182
D´Anglade, Jean Louis, Op.cit, 2006, pp. 378-380.
121
Enrique Tron participó como miembro de los consejos de Administración del
“Banco de Londres y México”, Fábrica de Cigarros “El Buen Tono (1873)”, la
“Compañía Nacional Mexicana de Dinamitas y Explosivos (1901)”, la “Sociedad
Financiera para la Industria en México (1898)”, la “Compañía Bancaria de Obras,
Bienes Raíces” y del “Intermediario Minero Franco-Mexicano”. Fue presidente de
la Cámara de Comercio Francesa en México. Formó parte de la comisión
monetaria que trabajó con el ministro de finanzas José Yves Limantour, durante el
gobierno de Porfirio Díaz (1876-1910). Además fue consejero del ministerio de
Comercio Exterior de Francia y caballero de la Legión de Honor desde 1906.183
José Ollivier, León Signoret, Enrique Tron y Sebastián Robert, aplicaron “una
reinversión constante de sus ganancias mediante un proceso de acumulación,
donde el producto sobrante fue atesorado en dinero o mercancías durante dos o
tres generaciones, manteniendo un excedente que no alcanzaba para una riqueza
de lujo ni de ostentación, para que cuando se fuera poseedor de un capital
considerable, se retornara a la aldea de origen entregando el negocio a hermanos,
hijos, sobrinos o paisanos que repetirán una y muchas veces más el mismo
proceso”.184
Las empresas que fundaron y/o en las que fueron socios los cinco
empresarios barcelonnettes anteriormente mencionados, se encuentran
enumeradas en el Cuadro 15. En él se especifica la ciudad donde se situaban
estas empresas, cuál era su actividad principal y en qué año se asociaron los
barcelonnettes que se han aludido.
183
Ídem. 184
Salazar, Roberto. Los franceses en la formación de la Burguesía industrial. Colmex. México, Diciembre
1978, p.6.
122
Barcelonnette NOMBRE DE LA EMPRESA GIRO DE LA
EMPRESA
CIUDAD AÑO EN QUE
SE ASOCIO
Joseph Ollivier La Estrella Telas y novedades México, D.F. 1854
La Ciudad de Londres en México Telas y novedades México, D.F. 1863
Cía. Industrial de Orizaba S.A. (CIDOSA) Fábrica textil Orizaba, Ver. 1889
Fábrica de papel San Rafael Papel México, D.F. 1890
Cía. Francesa de Porcelana Fábrica de loza México, D.F. 1890
Cía. Industrial San Idelfonso Fábrica textil México, D.F. 1895
Banco de Londres y México Banca México, D.F. 1896
Cía Eléctrica e Irrigadora del Edo. De Hidalgo Eléctricidad Hidalgo 1897
Cía Azucarera El pánuco Alimentos México, D.F. 1898
Soc. Financiera para la Industria en México (SFIM) Banca México, D.F. 1898
Banco Central Mexicano Banca México, D.F. 1899
La Primavera Telas y novedades Puebla, Pue 1903
La sorpresa Telas y novedades México, D.F. 1903
Cristalería La Moderna Cristal México, D.F. 1904
Cía. Bancaria de Paris y México Banca México, D.F. 1909
Banco de Jalisco Banca México, D.F.
Hacienda Agrícultura Monterrey, N.L.
La Teja Fábrica Textil
La Ciudad de Londres en Ver Telas y novedades Veracruz, Ver.
Joseph Léautaud Cía. Industrial de Orizaba S.A. (CIDOSA) Fábrica textil Orizaba, Ver. 1889
Fábrica de papel San Rafael Papel México, D.F. 1890
Cía Eléctrica e Irrigadora del Edo. De Hidalgo Eléctricidad Hidalgo 1897
El Palacio de Hierro Telas y novedades México, D.F. 1898
Tienda de novedades Telas y novedades Lagos, Jal.
Tienda de novedades Telas y novedades Aguascalientes
Tienda de novedades Telas y novedades Monterrey, N.L.
La Perfeccionada Fábrica textil México, D.F.
Cía. Trigadora de Hidalgo Alimentos Hidalgo
Leon Signoret Cía. Manufacturera Cerritos Fábrica textil Orizaba, Ver. 1886
Cía. Industrial de Orizaba S.A. (CIDOSA) Fábrica textil Orizaba 1889
Fábrica de papel San Rafael Papel México, D.F. 1890
Cía. Francesa de Porcelana Fábrica de loza México, D.F. 1890
Banco de Londrés y México (BLM) Banca México, D.F. 1896
Cía. Industrial San Idelfonso Fábrica textil México, D.F. 1896
Cía Eléctrica e Irrigadora del Edo. De Hidalgo Eléctricidad Hidalgo 1897
Banco Central Mexicano (BCM) Banca México, D.F. 1899
Fundición de Fierro y Acero Monterrey Acero Monterrey 1900
Cía. Bancaria de París y México (CBPM) Banca México, D.F. 1909
Cía. Del Ferrocarril eléctrico de Lerdo Transporte Torreón
Compañía manufacturara de jabón La Unión Jabón Torreón
Sebastian Robert Banco Nacional de México (BANAMEX) Banca México, D.F. 1884
El Centro mercantil Telas y novedades México, D.F. 1884
La Valenciana Telas y novedades México, D.F. 1884
Cía. Manufacturera Cerritos Fábrica textil Orizaba, Ver. 1886
Cía.Industrial Veracruzana S.A. (CIVSA) Fábrica textil Necoxtla, Ver. 1896
Banco de Morelos (BM) Banca Cuernavaca, Mor. 1897
Banco Central Mexicano Banca México, D.F. 1899
Cía. Bancaria de París y México (CBPM) Banca México, D.F. 1909
La Alpina (sábanas) Fábrica textil México, D.F.
La Corona (bonetería) Fábrica textil México, D.F.
La hormiga (algodón) Fábrica textil México, D.F.
Henri Tron Cía. Industrial de Orizaba S.A. (CIDOSA) Fábrica textil Orizaba, Ver. 1889
Cigarrera El Buen Tono Cigarros México, D.F. 1893
Cía. Industrial San Idelfonso Fábrica textil México, D.F. 1896
Cervecería Moctezuma Cerveza Orizaba, Ver. 1896
Cía Eléctrica e Irrigadora del Edo. De Hidalgo Eléctricidad Hidalgo 1897
Fábrica de papel San Rafael Papel México, D.F. 1898
El Palacio de Hierro S.A. Telas y novedades México, D.F. 1898
Soc. Financiera para la Industria en México (SFIM) Banca México, D.F. 1900
Cía. Nal. Mexicana de dinamita y explosivos Manufactura México 1901
Cía. Maderera de la Sierra de Durango Forestal Durango 1907
La Perfeccionada Fábrica textil México, D.F.
Intermediario minero Franco-mexicano Minería México
Cía. Bancaria de Obras y bienes raíces (CBOBR) Banca México, D.F.
Fuente: Construído en base a Cuadro 1,2,3,4,5 de Galán (2002).
Cuadro 15. Empresas en las que participaron los principales socios barcelonnettes de las tiendas accionarias de CIDOSA, 1889-1911.
123
Como se observa en el Cuadro 15, los empresarios barcelonnettes
continuamente se asociaban entre ellos, y/o se unían a otros grupos de
empresarios para formar parte de los negocios más rentables de la época (la Cía.
de papel San Rafael y Anexas, (1890), la Cervecería Cuauhtémoc (1890), la Cía.
Cigarrera El Buen Tono, (1873), y las compañías textiles de San Antonio Abad
(1892); San Idelfonso (1895), Cía. Industrial de Orizaba SA (CIDOSA, 1899) y la
Cía. Industrial Veracruzana S.A. (CIVSA, 1892)185); esto para formar redes
sociales y de negocios, que les ayudarán a obtener mayores beneficios
económicos en un medio complicado e incierto. En el siguiente apartado, se
analizará el funcionamiento de estas redes.
Redes de negocios
En México, durante casi todo el siglo XIX, existió una sociedad con inequitativa
distribución del ingreso. No se tuvo un mercado nacional integrado (sólo mercados
locales y regionales fragmentados). Los sistemas legales fueron deficientes,
provocando que los derechos de propiedad fueran poco transparentes y el sistema
bancario no logró consolidarse hasta 1880.186 Ante este escenario y teniendo
como base su cultura (los habitantes del Valle de Ubaye compartían principios de
confianza, solidaridad, movilización social, esfuerzo, dedicación, lealtad y le daban
gran importancia al valor de la reputación187) y su espíritu empresarial (experiencia
en la producción y venta de telas, actitud frugal y de esfuerzo en el trabajo), los
empresarios barcelonnettes crearon redes sociales188 y de negocios189, cuyas
185
De acuerdo a Haber, estas empresas formaron parte de las 12 corporaciones industriales con mayores
ganancias en México durante el periodo de 1890-1940. Haber, Sthepen. Industria y subdesarrollo. La
industrialización de México 1890-1940. Alianza editorial mexicana. México, 1992, pp.109-151. 186
Ver Marichal, Carlos. “El nacimiento de la banca mexicana en el contexto latinoamericano: problemas de
periodización en Ludlow, Leonor y Marichal, Carlos. La Banca en México 1820-1920. Colección Lecturas de
Historia Económica Mexicana. Instituto Mora, El colegio de Michoacán, COLMEX e IIH-UNAM. México,
1998, pp. 112-141. 187
Gouy, Op.cit., 1980. 188
Para Portes las redes sociales son “el conjunto recurrente de asociaciones entre grupos de individuos
vinculados por lazos ocupacionales, familiares, culturales y afectivos, que contienen generalizaciones
morales, creencias sobre el comportamiento o metanormas de confianza social que permiten determinar lo que
es socialmente aceptado, lo que es incorrecto, y la sanción que se recibe por ello. Portes, Alejandro. The
124
metanormas de confianza recompensaban a quienes las cumplían, pero
sancionaban gravosamente a los que no.
La red social establecida por los empresarios barcelonnettes en México entre
1889 y 1910 fue una red que cumplía con el modelo de coordinación económica
de los clanes o grupos económicos190. Inició su formación con lazos familiares y
de paisanaje y, posteriormente, incrementó el número y la fuerza de sus lazos, al
crear redes de distribución y producción entre compañías propiedad de diferentes
empresarios –de origen barcelonnette o no- , con las cuales mantenían una
interdependencia social y económica entre sus miembros.191 Aunque era una red
grande en número de participantes, tenía el poder centralizado en los miembros
de mayor riqueza: José Ollivier, Ernesto Pugibet, Augusto Genin, Enrique Tron,
León y José Signoret, Sebastián Robert y José Léautaud.
La migración de los barcelonnettes a México inició con los hermanos Arnuad,
quienes establecieron en la Ciudad de México la tienda de Las Siete Puertas, en
1821. En esta tienda se contrata a Gabriel Derbez, Alphonse Jauffred, y Eugenio
Caire, quienes con el dinero obtenido por su trabajo, en 1838, establecieron su
propia tienda de novedades: “El portal de las Flores”. En esta tienda se continuó
economiic sociology of inmigratios. Essays on Networks, Ethinicity and entrepreneurship. Rusell Sage
Foundation, 1995, p.8 189
Casson define a las redes de negocios como asociaciones entre personas (interpersonales) o entre
compañías (inter-institucionales), que buscan disminuir los costos de transacción y permitir la integración
vertical de sus empresas, a través de flujos de información, flujos de producción y flujos de factores
productivos que promuevan la coordinación y los lazos de confianza entre sus miembros. Además, señala que
la red de negocios al igual que cualquier otra red, establece sanciones morales y sociales (exclusión de otras
transacciones, pérdida de reputación), que evitan que sus miembros traicionen la confianza del grupo (es decir
incumplan convenios) y con esto se eleven los costos de transacción. Casson Mark. Enterprise and
leadership: studies on firms, markets and networks. Cheltenham Edward Elgar, 2000. 190
Los grupos económicos (GE's) son redes de empresas relacionadas por vínculos familiares, étnicos o de
amistad, que poseen una estructura autoritaria y centralizada con una jerarquía vertical, donde sólo los
miembros de la familia, clan o grupo de control ocupan los puestos más altos, y donde sus empresas se
integran vertical y horizontalmente para disminuir costos de transacción, aprovechar economías de escala y
obtener ventajas monopólicas, Castañeda, Gonzalo. Fundamentos microsociales del comportamiento
económico, las instituciones y su evolución. UDLA, 2002 Cholula, Puebla. México. 191
Boltansky y Chiapello, mencionan que una red –de cualquier tipo-, se basa siempre en relaciones
interpersonales fuertes que se sitúan más allá de lazos profesionales. Se basan en la confianza surgida por
situaciones vividas en conjunto por sus miembros en el pasado; por la pertenencia a una misma institución,
por la existencia de un objetivo o proyecto común, o por relaciones de amistad y de estima mutua. En las
redes cada ser existe en función del número y del valor de las conexiones que pasan por él. Por esta razón la
mayor sanción es el rechazo o exclusión, la cual priva a las personas de sus vínculos y la expulsa a los límites
de la red donde las conexiones son escasas y sin valor. Excluir a alguien significa que la persona depende de
los demás, pero de él ya nadie depende, no es buscado ni invitado por nadie. Boltansky y Chiapello. El nuevo
espíritu del capitalismo. Akal, Madrid, España, 2002, pp. 18-185.
125
contratando a otros inmigrantes del Valle, quienes posteriormente fundaron sus
propias empresas o se asociaron con otros compatriotas para crear más negocios.
Sin embargo, aunque los barcelonnettes apoyaban la movilidad social de sus
compatriotas, aplicaron en sus empresas una ideología de mantener el status quo,
a través de una estructura jerárquica centralizada y autoritaria. Generalmente los
socios y los empleados con puestos más importantes192 eran los miembros de la
familia, clan o grupo de control (ver cuadros del 3 al 10).
Los empresarios barcelonnettes siempre buscaron primero asociarse con sus
familiares y, posteriormente, con otros migrantes del Valle que demostraran cierta
reputación. Por ejemplo, José Ollivier formó la sociedad J. Olliver y Cía. con su
hermano Antonio y con sus sobrinos Mario, León y Teófilo, hasta 1898, cuando
estos tres últimos incumplieron con el contrato pactado (viajaron a Francia cuando
no se les era permitido), y entonces se asoció con Eugenio Roux, Ernesto Spitalier
y Juan B. Bellon (ver Cuadro 5). José Ollivier también le dio la oportunidad a su
sobrino Sebastián Robert de trabajar en la tienda de “La Ciudad de Londres” y
participar con él en otros negocios.
Robert también estaba unido por lazos familiares a Julio Tron, ya que el hijo
de su hermana Elisa Robert y uno de sus herederos, León Barbaroux, se casó con
Elena Tron, hija de Julio Tron.
Del mismo modo, Julio Tron y José Léautaud estaban unidos por lazos
familiares, ya que el hijo de José Leáutaud, Emile, contrajo matrimonio con
Mathilde Tron, hija de su socio Julio Tron.
La lista de los familiares directos padres, hermanos e hijos, así como de
algunos de los familiares políticos de los principales socios de las tiendas
accionarias de CIDOSA se incluye en el Cuadro 16. En él se especifica en la
columna de observaciones cuando estos familiares estaban asociados. Este
cuadro nos ayuda a darnos cuenta que algunos de estos empresarios no tuvieron
hijos, por lo que elegían a sus sobrinos como sus herederos, como en el caso de
Sebastián Robert. Tal vez el hecho de que estos inmigrantes contraían matrimonio
192
Proal menciona que sólo los parientes de los dueños de las tiendas podían ocupar los puestos
administrativos de mayor jerarquía Proal, Op. Cit., 1998.
126
hasta regresar al Valle después de hacer su fortuna en México, lo cual ocurría
generalmente cuando estos tenían edades de entre 45 y 55 años, pudo haber
influido en su falta de paternidad.
Por otra parte, el Cuadro 16 identifica que los empresarios barcelonentte
mencionados también se vincularon por lazos familiares, de amistad y por
cuestiones económicas a otros empresarios dominantes de la época. Por ejemplo,
el caso de Enrique Tron, que se vinculó familiar y económicamente con Ernesto
Pugibet al casarse este con su hija Adriana, y al ser ambos socios de la Cía.
Nacional Mexicana de Dinamita y Explosivos, la Cía. San Idelfonso, Fábrica de
Tejidos de Lana San Idelfonso, la Cía. Cigarrera El Buen Tono y la Sociedad
Financiera para la Industria en México. Por estos mismos negocios, Henri Tron
estaba asociado con Porfirio Díaz Jr, Hugo Scherer, Fernando Pimentel y Fagoada
y Agusto Genin.
La lista de algunas de las corporaciones donde los principales socios de las
tiendas accionarias de CIDOSA se unieron a los empresarios mencionados se
encuentra en el Cuadro 17. Éste incluye los datos de año de fundación, capital
inicial y duración de cada compañía, así como la lista de socios y las acciones –en
número y porcentaje- que cada uno de ellos poseía. Esta información sirve para
identificar en cuántos y en qué tipos de negocios eran socios y de cuánto fue su
aportación al capital a dichas empresas.
Por ejemplo, León Signoret, se asoció con su hermano José Signoret, con su
paisano José Ollvier y con Enrique Creel, Joaquín Casasús, Hugo Scherer y
Fernando Pimentel en el Banco Central Mexicano y la Cía. Bancaria de París y
México SA, y con Vicente Ferrara y Patricio Milmo en la Fundición de Fierro y
Acero Monterrey. José Signoret, a su vez, se asoció a Luis Elguero en la
Compañía Bancaria Mexicana. José Ollvier se asoció con José Yves y Julio
Limantour, en la Azucarera de Pánuco SA y la Cristalería La Moderna.
127
Cuadro 16. Familias de los principales socios de las tiendas accionarias de
CIDOSA
Empresario Parientes Relación Observación
Joseph Ollivier Jean Antoine Ollivier Padre
Magdelaine Pinoncely Madre
Antonio Ollivier Hermanos Socio de J. Ollivier y cía
Elizabeth Olliver Hermanos
Josephine Olliver Hermanos Madre de Sebastian Robert
Henriette Ollivier Hermanos
Henriette Ouri Esposa
Madeleine Ollivier Hijos Muere a los 18 años
Ferdinand Ollivier Hijos Muere a los 5 años
Jeannne Olliver Hijos
Henriette Ollivier Hijos
Germaine Ollivier Hijos
Elizabeth Ollivier Joseph Ollivier Conte Esposo
Marius Ollivier Hijos Socio de J. Ollivier y cía
Jean Olliver Hijos Socio de J. Ollivier y cía
León Ollivier Hijos Socio de J. Ollivier y cía
Théophile Ollivier Hijos Socio de J. Ollivier y cía
Jules- Joseph Olliver Hijos
Sebastian Robert Jean Batiste Robert Padre
Sebastian Robert Josephine Olliver Madre Hermana de Joseph Ollivier
Sebastian Robert Elisa Marie Robert Hermanos Ferdinand Bardaroux (esposo)
Sebastian Robert Remy Robert Hermanos
Sebastian Robert Marius Robert Hermanos Josephine Antoinnette Camille Ollivier (Esposa)
Sebastian Robert Anne Marie Berthe Ollivier Esposa Prima, hija de Antoine Ollivier
Elisa Marie Robert Jean Paul Barbaroux Hijos Sobrino Heredero de Sebastian Robert
Elisa Marie Robert Leon Barbaroux Hijos Socio y Hererdero de Sebastian Robert.
Esposo de Hélene Tron (hija de Jules Tron)
Elisa Marie Robert Fernand Barbaroux Robert hijos Sobrino Heredero de Sebastian Robert
Jose Leáutaud Jean Pier Leáutaud Padre
Jose Leáutaud Virginie Leáutaud Madre
Jose Leáutaud Maria Catalina Leáutaud Esposa Prima
Jose Leáutaud Emile Leáutaud Hijos Esposo de Mathilde Tron, hija de Julio Tron
Jose Leáutaud Jeannne Leáutaud Hijos
Jose Leáutaud Josephine Leáutaud Hijos
Henri Tron Louis Fabien Tron Padre
Henri Tron Joséphine Caire Madre
Henri Tron Joseph Tron Hermanos Socio de J. Tron y cía.
Henri Tron Jules Tron Hermanos Socio de J. Tron y cía.
Henri Tron Elisa Tron Hermanos
Henri Tron Justin Tron Hermanos
Henri Tron Leóntine Genin Esposa Hija de Augusto Genin
Henri Tron Henriette Tron Hijos Alberto Fraikin (esposo)
Henri Tron Suzanne Tron Hijos
Henri Tron Adrianne Tron Hijos Ernest Pugibet (esposo)
Henri Tron Margueritte Tron Hijos Pierre Deniau (Esposo)
Henri Tron Georgette Tron Hijos
Henri Tron Henri Tron (JR) Hijos Helene Vent Salazar (esposa)
Henri Tron Yvonne Tron Hijos Jacques Deniau
Henri Tron Marcelle Tron Hijos Henri Proal (esposo)
Henri Tron Lucette Tron Hijos Jacques Laroche Joubert (esposo)
Henri Tron Hubertte Tron Hijos Andres Revol (esposa)
Henri Tron Joseph Tron G. Hijos Denise Gasne (esposa)
Henri Tron Suzanne Tron (2) Hijos
128
Cuadro 16. Familias de los principales socios de las tiendas accionarias de CIDOSA
Empresario Parientes Relación Observación
Joseph Tron Florence St Aubyn Esposa
Joseph Tron Marie Loise Tron Hijos Jacques Robert (Esposo)
Joseph Tron Georges Tron Hijos Marcelo Lacaille (Esposa)
Jules Tron Julia Michel Esposa
Jules Tron Louis Tron Hijos Yvonne Strill (Esposa)
Jules Tron Hélene Tron Hijos Leon Barbaroux (esposo)
Jules Tron Florence Tron Hijos Maxime Guichard (esposo)
Jules Tron Mathilde Tron Hijos Emile Leautaud (esposo)
Jules Tron Germaine Tron Hijos Andre Reynaud (esposo)
Elisa Tron Hyppolyte Signoret Esposo
Elisa Tron Honotinne Signoret Tron Hijos
Elisa Tron Isabelle Signoret tron Hijos
Elisa Tron Joseph Signoret Tron Hijos
Elisa Tron Jules Signoret Tron Hijos
Elisa Tron Hyppolyte Signoret Tron Hijos
Elisa Tron Claire Signoret Tron Hijos
Justin Tron Henrriette Genin Esposa Hija de Augusto Genin
Justin Tron Auguste Tron Hijos
Justin Tron Marcel Tron Hijos Yvonne Pettit (esposa)
Justin Tron Charles Tron Hijos Ana Maria Michel (esposa)
Justin Tron Albert Tron Hijos
Justin Tron Maurice Tron Hijos
Leon Signoret Surrain Signoret Padre
Leon Signoret Briggete Brunn de Signoret Madre
Leon Signoret Aline Signoret de Vialel Hermanos
Antonio Signoret Hermanos
Joseph Signoret Hermanos
Athemais Reynaud Esposa
Leon Signoret Luis Andrés Signoret Hijos
Leon Signoret Alberto Signoret Hijos
Leon Signoret Andre Vialel y Signoret Sobrino Hijo de Aline Signnoret
Joseph Signoret Carolina Lacouture Esposa
Jean Signoret Lacouture Hijos
Joseph Signoret Josephine Signoret Lacoture Hijos
Fuentes:
Testamento de León Signoret, Escritura 9428, Volumen 113 de Notaría 5 de Bernando Cornejo, AHNM, 25/10/1920
Archivos de Raíces Francesas en México A.C. Proporcionados por Minouche Suberville
De Anglade, Jean-Louis. Un Gran patrón barcelonnette au Mexique. Joseph Ollivier et sa famille . Sabenca de la Valeia
y Jean -Louis D'Anglade. Barcelonnette, 2006. pp. 25-30, 97-107 y 130-141.
129
Cuadro 17. Algunas de las corporaciones de México con socios barcelonnette, 1898-1920.
Socios
No. %
Nombre Azucarera del Panúco S.A.1 J. Ollivier y cía (México) 150 1.2%
Fecha 20/08/1900 J. Ollivier y cía (Paris) 400 3.1%
Duración 20 Alfonso Michel 400 3.1%
Capital total $1,300,000 J.Limantour (Frank y Wolfshon) 300 2.3%
Valor nominal de $100 Banco de Suiza en Francia 3,827 29.4%
la acción Dionisio Ollivier 530 4.1%
Dionisio Ollivier e Antonio Ollivier 750 5.8%
F.Martínez Arauna 450 3.5%
A-Hritlinger 500 3.8%
Nombre Banco Central Mexicano Ramon Alcazar 1,100 1.8%
Fecha de 06/02/1899 Enrique Creel 3,650 6.1%
Duración 40 Guillermo Vernechren 1,000 1.7%
Capital total $6,000,000 Carlos Bracho 1,350 2.3%
Valor nominal de $100 Deutuche Bank 19,800 33.0%
la acción L. Bleichrocder 9,900 16.5%
Olegario Molino 1,500 2.5%
Jose Gabriel Escalante 200 0.3%
Jose Castellot 250 0.4%
Viviano villareal 250 0.4%
Joaquín Casasús 500 0.8%
Ramiro Trueba 800 1.3%
León Signoret 350 0.6%
Prospero Gloner 250 0.4%
Pablo Kosidousler 330 0.6%
José Signoret 250 0.4%
Emilio Meyran 250 0.4%
Agustin filuo 250 0.4%
José Ollivier 250 0.4%
Fernando Pimentel 100 0.2%
Pablo Guzman 100 0.2%
Hugo Scherer 500 0.8%
Nombre Cervecería Moctezuma S.A.1 Sociedad Financiera para la industria en México 7,500 44.3%
Fecha 08/09/1910 Adrian Carranza 1,353 8.0%
Duración José Mt. Estape 1,250 7.4%
Capital total $2,000,000 Henri Tron 953 5.6%
Valor nominal de $118 Vivente Roji 194 1.1%
la acción Felipe Suberbie 135 0.8%
Augusto Genin 80 0.5%
Gustavo A, Mondragon 50 0.3%
Alfonso Riveri 25 0.1%
Eugenio Ituarte 25 0.1%
Antonio bustillo 4 0.0%
Nombre Cía. Fundidora de Fierro y acero de Monterrey S.A. León Signoret 19,000 19.0%
Fecha 07/05/1900 Vicente Ferrara 2,148 2.1%
Duración Patricio Milmo e hijos sucesores 10,000 10.0%
Capital total 5,000,000 (doláres) Eugenio Kelly 13,444 13.4%
Valor nominal de Antonio Basagotti 21,500 21.5%
la acción Manuel C.Treviño 680 0.7%
Tomás Kelly 4,173 4.2%
José Negrete 2,000 2.0%
Antonio ferrera 1,000 1.0%
Miguel Ferrara 1,500 1.5%
Isaac Garza 1,200 1.2%
Adolfo Zambrano 500 0.5%
Francisco Sada 650 0.7%
Valentin Rivero 1,900 1.9%
Tomás Mendinchaga 3,000 3.0%
Ernesto Madero y hnos. 700 0.7%
AccionesDatos de la compañía
130
Cuadro 17. Algunas de las corporaciones de México con socios barcelonnette, 1898-1920.
Socios
No. %
Nombre Cía. explotadora de las fuerzas Eugenio Signoret 5,000 25.0%
hidroeléctricas de San Idelfonso S.A.1
Tomás Braniff 1,000 5.0%
Fecha 23/07/1903 J.B. Bellon 560 2.8%
Duración J.B. Ebrard y cía. 550 2.8%
Capital total $2,000,000 J. Ollivier y cía 450 2.3%
Valor nominal de $100 A. Reynaud y Cía 400 2.0%
la acción Eduardo Garcín 350 1.8%
Signoret, Honnorat y cía 300 1.5%
Porfirio Díaz jr. 300 1.5%
Henri Tron 300 1.5%
L. Faudon y cía 200 1.0%
Emilio Pinsón 184 0.9%
Max Chauvet 100 0.5%
Banco Central Mexicano 2,000 10.0%
Sociedad Financiera para la industria en México 3,000 15.0%
San idelfonso fábrica de tejidos de Lana 3,000 15.0%
Ernesto Pugibet 1,000 5.0%
Hugo Scherer jr. 1,000 5.0%
Nombre Sociedad para la Industria en México S.A. (SFIM) Eduardo Noetzelin nd nd
Fecha 02/02/1900 Tomás Braniff nd nd
Duración 75 Ernesto Pugibet nd nd
Capital total3
$5,000,000 Henri Tron nd nd
Valor nominal de $250 Alfredo Cherneviere nd nd
la acción3
Guillermo Pichet nd nd
Albert Socretinne nd nd
Nombre Cía. Maderera de la Sierra Pimentel Hnos. 900 3.9%
de Durango S.A. Fernando Pimentel y Fagoaga 64 0.3%
Fecha 23/03/1907 Henri Tron 964 4.2%
Duración 50 Luis Barbosa Asiad 964 4.2%
Capital total $2,300,000 Hugo Scherer y cía 900 3.9%
Valor nominal de $100 Hugo Scherer jr. 64 0.3%
la acción Federico Kladf 964 4.2%
Banco de Durango 964 4.2%
Banco Central Mexicano 964 4.2%
Xavier Ycaza 964 4.2%
Angel Lopez Negrete 964 4.2%
Eduardo Hastman 964 4.2%
Jesús Salcido y Aviles 60 0.3%
Nombre Compañía manufacturera de cigarros Tomas Braniff 4527 18.1%
El Buen Tono S.A. Henry C.Walters 300 1.2%
Fecha 01/02/1899 José Callado 263 1.1%
Duración 25 Francisco peréz Vizcaíno 1500 6.0%
Capital total $2,500,000 Ernesto Pugibet 176 0.7%
Valor nominal de $100 Andres Eizaguirre 323 1.3%
la acción Rafael Donde 282 1.1%
Manuel Gonzalez Cosío 104 0.4%
Porfirio Díaz jr. 74 0.3%
Henri Tron 74 0.3%
Hugo Scherer y cía 100 0.4%
Indalecio Sánchez Gavito 510 2.0%
Nombre Cristalería La Moderna Julio Limantuor nd nd
Fecha 17/05/1904 Henri Cruciere nd nd
Duración Charles Deselle nd nd
Capital total $36,000 José Ollivier nd nd
Hugo Scherer nd nd
Nombre Fábrica de Papel de San Rafael y Anexas S.A.2
Henri Tron nd nd
Fecha 1898 Tomás Braniff nd nd
Duración Oscar Braniff nd nd
Capital total $7,000,000 Eugenio Roux nd nd
Valor nominal de $100 Fernando Pimentel y Fagoaga nd nd
la acción J.B. Ebrard nd nd
José de la Macorra nd nd
AccionesDatos de la compañía
131
Cuadro 17. Algunas de las corporaciones de México con socios barcelonnette, 1898-1920.
Socios
No. %
Nombre San Idelfonso Fábrica de Tejidos de Lana S.A.1 Accionistas Ginebra 7,508 25.0%
Fecha 28/09/1903 Ernesto Pugibet 4,099 13.7%
Duración 99 Henri Tron 2,257 7.5%
Capital total $3,000,000 J. Ollivier y cía 1,900 6.3%
Valor nominal de $100 Alfonso Michel 1,760 5.9%
la acción Hugo Scherer y cía 1,322 4.4%
Tomás Braniff 1,300 4.3%
Max Chauvet 1,200 4.0%
M. Lambert y cía. 608 2.0%
Signoret, Honnorat y cía 590 2.0%
Sociedad Financiera para la industria en México 429 1.4%
M. Bellon y cía sucesores 200 0.7%
Leon Hupon 200 0.7%
A. Reynaud y Cía 100 0.3%
Daniel Ituarte 76 0.3%
Eduardo Tellez 53 0.2%
Julio Beraud 50 0.2%
Nombre Banco de Londrés y México1 J. Ollivier y cía nd nd
Fecha 14/06/1896 Signoret, Honnorat y cía nd nd
Duración 50 El Palacio de Hierro S.A. nd nd
Capital total $10,000,000 Mateo Lambert nd nd
Valor nominal de $100 León honnorat nd nd
la acción Alfonso Michel nd nd
Antonio Bassagotti nd nd
Rafael Dondé nd nd
Rosendo Pineda nd nd
Ignacio Torre y Meier nd nd
H.C. Walters nd nd
Nombre Banco Nacional de México Antonio Mier y Celis nd nd
Fecha 15/05/1884 Nicolás de Teresa nd nd
Duración 50 Bénito Arena nd nd
Capital total $20,000,000 José María Bermenejillo nd nd
Valor nominal de $100 Félix Cuevas nd nd
la acción Antonio Escandón nd nd
Genaro de la Fuente nd nd
José Gargollo nd nd
Manuel Ibáñez nd nd
Pedro Martín nd nd
Juan J. Martínez Zorilla nd nd
Rafael Ortiz de la Huerta nd nd
Frnacisco M. Prida nd nd
Gustavo Struck nd nd
Leo Stein nd nd
Francisco Iturbide nd nd
Sebástian Camacho nd nd
Jose María Roa Bárcena nd nd
Pedro Pelaéx nd nd
Francisco Cortinza Icaza nd nd
Luis Lavie nd nd
Pedro Suinaga nd nd
ricardo Sainz nd nd
Eduadro Ebrard nd nd
Raimundo de la Mora nd nd
José V. de Collado nd nd
Pablo Macedo nd nd
Indalecio Sánchez Gavito nd nd
AccionesDatos de la compañía
132
Cuadro 17. Algunas de las corporaciones de México con socios barcelonnette, 1898-1920.
Socios
No. %
Nombre Compañía Bancaria de París y México S.A. J. Ollivier y cía 9,770 9.8%
Fecha 28/10/1909 S. Robert y cía 9,770 9.8%
Duración 50 Carlos Markassuza 8,140 8.1%
Capital total $10,000,000 Hauser Zivy y Cía 6,510 6.5%
Valor nominal de $100 Antonio signoret 6,510 6.5%
la acción Clemente Jacques y cía 4,890 4.9%
P.J. Jacques sociedad en comandita 4,230 4.2%
Fabre Hermanos 4,230 4.2%
A. Reynaud y cía 3,260 3.3%
A. Richaud y cía. 3,260 3.3%
M. Lambert y cía. 3,260 3.3%
M. Bellon y cía 3,260 3.3%
Tardan Hermanos 3,260 3.3%
Veyan, Jean y cía 3,260 3.3%
J.B. Ebrard y cía. 3,260 3.3%
Signoret, Honnorat y cía 3,260 3.3%
Leon signoret 3,260 3.3%
Humberto Audiaguez 3,260 3.3%
Jose G. Escandon 1,630 1.6%
Mariano Allegre 1,630 1.6%
Abril de Greiguiel 1,630 1.6%
Hijos de Max Chauvet y cía 1,630 1.6%
F. Manuel y cía 1,300 1.3%
F. Sánchez y cía sucesores 1,140 1.1%
Hipolito Duran 980 1.0%
Bernando Albuneda 970 1.0%
Ailland y cía 810 0.8%
E. Manuel y cía 650 0.7%
L. Faudon y cía 650 0.7%
Manuel Levy 330 0.3%
Nombre Compañía Bancaria Mexicana S.A. Mariano Allegre 500 7.1%
Fecha 02/01/1920 Guillermo Brack 1,000 14.3%
Duración 50 Luis Elguero 500 7.1%
Capital total $350,000 Alberto Gonzalez Montalvo 500 7.1%
Valor nominal de $50 Agustín Legorreta 1,500 21.4%
la acción Alfredo Y. Main 500 7.1%
Luis Riba y Cervantes 500 7.1%
Hugo Rose 500 7.1%
José Signoret 500 7.1%
Baltazar Marquez 500 7.1%
1. Aumento de Capital 3. Francos
2. Datos de The Mexican Year Book 1909-1910. nd. No disponible
Fuentes. De Anglade, Jean-Louis (2006) pp. 145-153, 205, 238-250, 265, 274-279, 307 -315, 347, Goméz Galvarriato (1999a), Cerutti (1992),
pp. 339, Miscelanea de Bancos, volumen 6. Centro de Estudios de Historia de México, CARSO. Ludlow, Leonor (1998), pp. 170.
Archivo Histórico de Notarías de la Ciudad de México
Fondo Compañía Notaría-Notario /fecha Escritura Vol
Antiguo Banco Central Mexicano 729. Jose del Villar 6/2/1889 8 5087
Contemporáneo Banco Central Mexicano 3. Ruiz 13/5/1904 1,138 30
Contemporáneo Banco Central Mexicano 3. Ramón Ruiz 8/9/1910 1,670 37
Contemporáneo Cervecería Moctezuma S.A. 3. Ramón Ruiz 29/6/1905 4,939 115
Contemporáneo Cía. explotadora de las fzas hidroeléctricas de San Idelfonso S.A. 3. Ramón Ruiz 23/7/1903 650 14
Contemporáneo Cía. Maderera de la Sierra de Durango S.A. 2. Jesús Trujillo 23/3/1907 1,554 19
Antiguo Cía. Manufacturera de cigarros "El Buen Tono" S.A. 3. Ramón Ruiz 01/2/1899 30 27
Contemporáneo Cía. Manufacturera de cigarros "El Buen Tono" S.A. 3 Ramón Ruiz 27/12/1902 368 7
Contemporáneo Cía. Manufacturera de cigarros "El Buen Tono" S.A. 3. Ramón Ruiz 07/11/1907 2,662 64
Antiguo San Idelfonso Fabrica de Tejidos de lana S.A. 3. Ramon Ruiz 28/12/1895 171 20
Contemporáneo San Idelfonso Fábrica de tejidos de lana S.A. 3. Ramón Ruiz 28/9/1903 752 19
Contemporáneo San Idelfonso Fábrica de tejidos de Lana S.A. 3. Ramón Ruiz 10/09/1906 2,493 56
Antiguo Sociedad Financiera para la Industria en México S.A. 5. Bernando Cornejo 02/02/1900 11
Contemporáneo Cía.Fundidora de Fierro y Acero de Monterrey S.A. 3. Ramón Ruiz 27/01/1928 19,697 352
Antiguo Banco de Londres y México 444. Rafael Morales 01/07/1889 2 3026
Contemporáneo Compañía Bancaria de París y México S.A. 5. Bernando Cornejo 28/10/1909 3,542 51
Contemporáneo Compañía Bancaria de París y México S.A. 5. Bernando Cornejo 21/01/1910 3,694 53
Contemporáneo Compañía Bancaria Mexicana S,A, 3. Ramón Ruiz 02/01/1920 11,437 227
AccionesDatos de la compañía
133
José Yves Limantour fue el secretario de Finanzas del gobierno de Porfirio
Díaz. Era socio y amigo cercano de Ernesto Pugibet, Hugo Scherer, José Ollvier y
Enrique Tron. Estos empresarios aprovechaban sus relaciones para solicitarle
ciertas concesiones. Por ejemplo, “en 1900, la sociedad J. Ollivier y Cía. le solicitó
a Limantour les anulara una multa por 212 bultos que se encontraban en la
aduana de Tampico. Éste se las concedió.”193 También en 1905, la compañía “El
Buen Tono” tenía problemas con unas patentes y Limantour solicitó a la Secretaría
de Fomento “le diera facilidades a la empresa para obtenerlas”.194
Del mismo modo, José Yves solicitaba constantemente a J. Ollivier y Cía. de
París le enviaran objetos de Europa. Por lo general eran artículos para su casa
(muebles, candelabros, tapicería, etc.) o artículos de uso personal (ropa,
zapatos).195 Sólo en ciertas ocasiones hizo pedidos especiales. Por ejemplo, en
1904, el 9 de junio, solicitó instrumentos de música para la Secretaría de Guerra;
el 18 del mismo solicitó una enfermera, que mandó a buscar personalmente con la
Señora Iturbide. El 21 de noviembre ordenó le compraran un diccionario
Larousse.196 En 1908 requirió que le fuera enviada “una lápida de granito para su
amigo Eduardo Cañas, accesorios para su automóvil, terciopelo, telas, árboles de
Francia para sembrar en el Bosque de Chapultepec”197 y “un chasis para el
automóvil de la esposa de Porfirio Díaz”.198 Durante su exilio, mantuvo
correspondencia con Enrique Tron, Ernesto Pugibet y Hugo Scherer para conocer
la marcha de los negocios que tenían en conjunto y sobre la situación del país en
general.199
Pablo Macedo (senador), Hugo Scherer (miembro de la Comisión Monetaria),
Fernando Pimentel y Fagoada (miembro de la Comisión Monetaria), Enrique Creel
193
Centro de Estudios de Historia de México, CARSO, Fondo José Y. Limantour, Rollo 1, 2a.Serie, 1900. 194
Centro de Estudios de Historia de México, CARSO, Fondo José Y. Limantour, Rollo 31, 2a.Serie,
1905. 195
Centro de Estudios de Historia de México, CARSO, Fondo José Y. Limantour, Rollo 1, 2a.Serie, 1900. 196
Centro de Estudios de Historia de México, CARSO, Fondo José Y. Limantour, Rollo 26, 2a.Serie,
1904. 197
Centro de Estudios de Historia de México, CARSO, Fondo José Y. Limantour, Rollo 53, 2a.Serie,
1908. 198
Centro de Estudios de Historia de México, CARSO, Fondo José Y. Limantour, Rollo 49, 2a.Serie, 1908 199
Centro de Estudios de Historia de México, CARSO, Fondo José Y. Limantour, Rollo 72 y 73, 3a.Serie,
1911
134
(gobernador de Chihuahua y senador), Porfirio Díaz Jr., Joaquín Casasús
(senador), José y León Signoret y Enrique Tron formaron parte de los hombres
que tuvieron mayor riqueza y conexiones políticas durante el Porfiriato. Se
desempeñaron como políticos y directores de empresas debido a su “alta
capacidad de administración, pero sobre todo a su alta capacidad para conseguir
préstamos e información”.200
Invirtieron en algunas de las compañías industriales más redituables del
periodo: Cervecería Moctezuma, S.A., Cía. Fundidora de Fierro y Acero de
Monterrey, Cía. cigarrera El Buen Tono SA, Fábrica de Papel de San Rafael y
anexas SA, Fábrica de tejidos de Lana San Idelfonso201. Aunque con una
participación accionaria menor al 10% del capital. Sólo en el caso de León
Signoret fue de 19% para la Cía. Fundidora de Fierro y Acero de Monterrey.
De acuerdo a Cerutti, “la Cía. Fundidora fue un ejemplo nítido de articulación
entre los más prominente burgueses locales, los de otras áreas de México y de los
representantes de las burguesías de países avanzados. En sus años iníciales
contó con un alto horno para la producción de lingotes de hierro con 350 toneladas
de capacidad diaria. Su trabajo comenzó en febrero de 1903, anticipándose en
décadas a lo que ocurriría en otras fábricas integradas de hierro y acero en
América Latina. Su fundación sintetizó abiertamente las tendencias del desarrollo
capitalista con eje en Monterrey, su imbricación con las tendencias de la economía
mundial y las exigencias que en materia de división especializada del trabajo que
generaba ya el capitalismo en México”.202
Otras empresas que se formaron por la unión de burgueses locales y
extranjeros y que sobresalieron por fomentar el crecimiento del capitalismo
industrial de finales del siglo XIX y principios del XX, fueron la Sociedad Financiera
para la Industria en México y el Banco Central Mexicano. Estas empresas, junto
con las demás enlistadas en el Cuadro 17 formaron parte de la red de negocios
200
Musacchio. Aldo y Read, Ian. “Bankers, industrialists and their cliques: elites network in Mexico and
Brazil during early industrialization” in Enterprise and Society. Vol. 8 No. 4, USA, 2007, pp. 842-880. 201
Haber, Stephen. Op.cit. 1992, pp.109-151. 202
Cerutti, Mario. Burguesía, capitales e industria en el norte de México. Monterrey y su ámbito regional
(1850-1910).Alianza / Raíces y Razones; y la Facultad de Filosofía y Letras de la UANL, México, 1992, pp.
187.
135
(interpersonales) y entre compañías (inter-institucionales) de los tres principales
empresarios barcelonnette socios de CIDOSA, Enrique Tron, José Ollivier y León
Signoret, las cuales se describirán a continuación.
Red de negocios interpersonal
Basados en las relaciones familiares y de negocios que unían a Enrique Tron,
José Ollivier y León Signoret con los empresarios y políticos mencionados en el
Cuadro 16 y 17, se elaboró la red social de la Figura 1. En esta representación
gráfica, se observa que Tron, Signoret y Ollivier (ubicados al costado izquierdo) se
encontraban unidos entre ellos y con José Signoret, José Léautaud, Augusto
Genin y Alfonso Michel (costado derecho), por negocios al ser socios en dos o
más empresas; lazos familiares al ser parientes directos o por haberse realizado
matrimonios entre sus hijos y por paisanaje, al ser originarios de la misma región
geográfica con lo cual compartían cultura y normas sociales.
En esta figura también se aprecia que Enrique Tron, José Ollivier y León
Signoret se asociaban por amistad y por motivos económicos, al ser socios en dos
o más compañías, con empresarios como Pablo Macedo, Hugo Scherer, Fernando
Pimentel y Fagoada, Enrique Creel, Porfirio Díaz Jr., Joaquín Casasús, José Yves
Limantour, Rafael Donde, Vicente Ferrara, Patricio Milmo, Xavier Ycaza y Luis
Elguero.
De hecho, estos empresarios barcelonnettes junto con otros miembros
prominentes de la colonia francesa en la ciudad de México y de la élite en general,
además de asociarse entre ellos para formar empresas, establecieron
organizaciones y prácticas sociales que les ayudaron a mantenerse cohesionados
y aumentar sus oportunidades de negocios. Algunas de estas organizaciones
fueron la Sociedad de Beneficencia, el círculo francés, el Casino francés de Santa
Clara y la Parroquia Francesa de Nuestra Señora de Lourdes.
136
Figura 1. Red de negocios interpersonal de León Signoret, Enrique Tron y José Ollivier, 1889-1910.
Fuente: Elaborada con el programa Pajek. (http://vlado.fmf.uni-lj.si/pub/networks/pajek/)
La Sociedad de Beneficencia fue la "embajada informal" de la colonia
francesa. Se le identificó como la organización más importante de socialización,
enlace y creación de identidad de los inmigrantes franceses en México. Esta
asociación se adjudicó el rol moral de órgano de control de la colonia, ya que no
sólo vigiló las cuentas y el buen funcionamiento de las instituciones, sino que
también reenvió a los elementos malos de la colonia a Francia, con el fin de evitar
escándalos y que la falla de los compatriotas no destiñera el brillo de la colonia. La
Sociedad de beneficencia fue fundada en 1842 y contó con una caja de ahorro, un
hospital, una casa de ancianos, y un cementerio (Panteón de La Piedad, y
posteriormente en 1942 el Cementerio de San Joaquín). En sus primeros años,
proporcionó servicios de orientación, de transporte, alojamiento, trabajo, atención
médica y préstamos a los afiliados por una módica cuota. Posteriormente en la
137
época de auge industrial de 1890 a 1910, cambio su papel de sólo ofrecer ayuda
económica y facilitar la instalación de los nuevos miembros, a un organismo que
sustituyera la falta de familia y ausencia de relaciones de los inmigrantes.203
El Círculo francés funcionó desde 1870, fue la casa matriz de la colonia
francesa. Sirvió para unir a los miembros adinerados de la comunidad. En él se
respiraba un ambiente de cooperación y refinamiento. Los "solterones" se
encargaban de organizar los torneos de boliche, las veladas literarias, los bailes y
las tardeadas. Con el tiempo el Casino fue un escaparate de la "cultura francesa"
al que asistieron las elites mexicanas y algunos miembros distinguidos de las
demás colonias extranjeras. Su funcionamiento favoreció la creación de varios
clubes: la Sociedad filarmónica y dramática francesa, la asociación musical Lyre
Galoise, la Sociedad de Gimnasia y la Sociedad Hípica Francesa, el Velo-club, el
Club-France, el Orfeón francés, la Sociedad del 14 de julio, la Amicale Française.
Todas fundadas con el afán de crear espacios para el esparcimiento de galos,
ayudarlos a conservar un estilo de vida y a integrarse a la sociedad de México.204
El Casino francés de Santa Clara fue donde se organizó la fiesta del 14 de
Julio (La Toma de la Bastilla), a la cual alguna vez asistieron el general Porfirio
Díaz acompañado de su familia y todo el gabinete y más de dos mil invitados de lo
más prominente de la sociedad y de las comunidades extranjeras de la Ciudad de
México.
La Parroquia Francesa de Nuestra Señora de Lourdes, sirvió no sólo para
asistir a misa los domingos, sino también para conocer futuros socios, empleados
o proveedores.
Al existir entre los miembros de una red, dos o más tipos de relaciones (de
trabajo, familiares, religiosas, culturales, paisanaje) se dice que es una red
densa205, con multiplicidad de relaciones y una reputación multilateral.
203
Pérez Siller, Javier. La migración francesa de los siglos XIX y XX una contribución a la modernidad.
Octubre,1999. (www.cultura.df.gob.mx/babel/fran/Siller.htm). 204
Ídem. 205
Las redes sociales pueden clasificarse por: 1) Su tamaño o número de participantes (grandes o pequeñas),
2) Su número de lazos entre los miembros de una red. 3) Su centralismo o grado de centralización en el
control por parte de algunos miembros de la red (centralizada o descentralizada). Las redes sociales con
mayor número de lazos entre sus miembros se consideran densas; y sí sus participantes presentan relaciones
traslapadas desde distintos ámbitos son de carácter múltiplex. Portes, Op.cit, 1995.
138
La multiplicidad de relaciones de la red provoca que el oportunismo en una
relación contamine la reputación establecida en otras relaciones. Por ejemplo, en
el ámbito empresarial: cuando los socios llegaban a cometer algún
comportamiento deshonesto, eran expulsados de la empresa, de la familia, del
Club social, equipo deportivo, incluso de Iglesia del grupo, como en el caso de
Mario y León Ollivier.
Por otra parte, la reputación multilateral se presenta cuando los individuos
para no perder posibles relaciones económicas ventajosas, son menos propensos
a actuar de forma oportunista. En el caso de los barcelonnettes, esto se ve
reflejado cuando actuaban de forma honesta y frugalmente en la tienda donde
trabajan para que los dueños los observaran y los eligieran para ser socios de sus
empresas.206
Además de los mecanismos de reputación, esta red social proporcionó flujos
de información, de capital y de factores productivos que promovieron la integración
y diversificación de la red de negocios de sus miembros, la cual se describe a
continuación.
Red de negocios interinstitucional
La red de negocios de Enrique Tron, León Signoret, José Ollivier y sus
demás socios, se muestra en la Figura 2. En esta representación, se indica con
círculos a las tiendas comerciales, con rectángulos a las empresas
manufactureras y con cuadrados a las instituciones financieras. Algunos bancos e
instituciones financieras se encuentran situados en medio de la figura y
conectando a ambos subconjuntos (1 y 2), porque sus socios compartían acciones
en estos bancos. La red se integra de manera: horizontal y vertical. Horizontal
porque agrupa empresas que realizan la misma actividad (las tiendas comerciales)
y vertical porque incluye las empresas que elaboran sus insumos (las fábricas
textiles, hidroeléctricas) y a sus propias instituciones financieras (bancos). La red
206
Arnaud, Op.cit., 1891.
139
también muestra que los empresarios diversificaban sus inversiones en textiles,
fábricas de papel, cervecerías, cigarreras, etc.
La red de negocios de los empresarios barcelonnettes de la figura 2 era
estable e interna207, porque creaban sus propios mercados de manera contractual,
como el caso de CIDOSA y CIVSA, “que establecía contratos de ventas con sus
clientes por muchos años, pero cada año el Consejo de directores, establecía la
escala de descuentos que daría a sus clientes anualmente. Por ejemplo en el caso
de CIVSA a sus compradores especiales como A. Reynaud y Cía.; S. Robert y
Cía. y F. Manuel y Cía. dueños de las tiendas “Las Fábricas Universales”, “El
Centro Mercantil” y “La Valenciana” les ofreció descuentos extras de 2 a 3% en
pagos en efectivos y créditos de 60 días”.208
En México, el acceso al capital209 fue tal vez la barrera más importante para
la creación y desarrollo de las empresas industriales. Por eso sus dueños
dependieron de un mercado externo o de conexiones con cierta gente importante
para tener acceso a grandes cantidades de capital. Es aquí donde surgieron las
redes de negocios corporativas (entre firmas) y entre élites (o individuos), cuyo
centro fueron los instituciones financieras que proporcionaron créditos baratos y
les sirvieron como ventanilla de fondeo las empresas manufactureras. 210
207
Para Miles y Snow, la red de negocios puede formarse por largo plazo y de manera estable, mediante
contratos que mantienen los lazos; pero que tiene la desventaja de que sí los proveedores y distribuidores solo
se concentran en las firmas de la red, pierden la oportunidad de tener una participación más amplia en el
mercado y se vuelven dependientes de la red. También se integran de forma interna, cuando las empresas
crean su propio mercado. En él, las empresas compran y venden bienes y servicios a los mismos precios
establecidos en el mercado externo pero con arreglos especiales (descuentos, plazos, etc.). Su falla más común
es la sobre-extensión de la red, que abarca más de lo que le conviene ó por los errores cometidos por sus
administradores al implementarla. Miles, Raymond y Snow C. Charles. “Causes of failure in network
organizations” en California management review. Summer, 1992, p.55-61. 208
Gómez Galvarriato, Aurora, Op.Cit, 1999A, pp. 177-183 209
En el país durante finales del siglo XIX, los bancos ejecutaron la concentración y centralización del capital
monetario de una sociedad en manos de unos cuantos hombres, que Limantour bautizó como Oligarquía
financiera. Estos disfrutaban del poder de emitir moneda y de controlar y canalizar el crédito a su antojo. Los
préstamos de los bancos generalmente fueron asignados por la política del privilegio y el abuso privado a los
accionistas, o a los selectos miembros de los consejos de administración de las propias instituciones
financieras, sin considerar la posibilidad real de la recuperación de los mismos. Ese uso y forma del sistema
bancario, se bautizo como plutocrática. Canudas Sandoval, Enrique. Las venas de plata en la historia de
México. Síntesis de Historia Económica del Siglo XIX. Editorial Utopía y Universidad Juárez Autónoma de
Tabasco. Villahermosa Tabasco, Julio 2005, pp. 1023-1025. 210
Musacchio. Aldo y Read, Ian , Op.cit, 2007, p. 851.
140
Figura 2. Red de negocios interinstitucional de José Signoret, Enrique Tron y José
Ollivier de 1889-1920.
Fuente: Elaborado en base a Figura 2 de Galán 2002, p. 82A.
En el caso de la red corporativa de los empresarios que se están estudiando,
tuvieron su centro en el Banco Nacional de México (Banamex), Banco de Londres
y México (BLM), Banco Central Mexicano (BCM), la Sociedad Financiera para la
Industria en México (SFIM), la Compañía Bancaria de París y México (CBPM) y la
Compañía Bancaria Mexicana SA (CBM).
El Banco Nacional de México (Banamex), surgió en la Ciudad de México en
1884 de la unión del Banco Mercantil Mexicano (1882) y el Banco Nacional
Mexicano (1882). Su capital fue de $20,000,000 de pesos suscritos en 200,000
acciones de 100 pesos. Tuvo una concesión por 50 años y fue el único con una
cuenta asignada a la Tesorería. Esta cuenta se garantizó con los derechos de las
aduanas. Banamex también fue el único que: “emitía billetes que aceptaban las
Fundidora de
Fierro -Acero
Maderera de
la Sierra
Durango
Cervecería
Moctezuma
Azucarera
del Pánuco
Hidroeléctrica
San Idelfonso
Cigarrera El
Buen Tono
Cristalería
La moderna
Fábrica papel
San Rafael
La Cd. De
Londres
El puerto de
Liverpool
El Correo
Francés
El Palacio
de Hierro
El Puerto
de Veracruz
El Gran
Oriental
Fábricas
Universales
El Centro
Mercantil
La Reforma
del Comercio
La
Valenciana
Banco
Central
SFIMCBPMCBM
BANAMEXBanco deLondres yMéxico
CIDOSA
I
N
T
E
GR
A
C
I
ON
V
E
RT
I
C
A
L
Subconjunto 2
Diversificación
Subconjunto 1
Integración
Horizontal
141
instituciones de gobierno, hacía monedas y era el responsable para arreglar
contratos especiales para el servicio de la deuda pública interna y externa; así
como para el pago de los impuestos con la federación, estados y municipios”.211
Algunos de sus socios y miembros del Consejo de Administración fueron:
Antonio de Mier y Celis, José María Bermenejillo, Félix Cuevas, Ramón G.
Guzmán, Eduardo Ebrard, Antonio Escandón, Gustavo Scutck y Pablo Macedo.212
Banamex, otorgó préstamos con mayores concesiones a las empresas de sus
socios. Por ejemplo, en 1901 autorizó aumentar el crédito de la Cía. Industrial
Manufacturera de Pablo Macedo a $380,000, el cual se otorgó como crédito
hipotecario conjuntamente con el Banco de Londres y México.213 Esta misma
compañía en 1909 debía al banco $457, 959.71 como parte de la hipoteca de su
fábrica de Juanacatlán, Jalisco, pero aún así solicitó que se le aumentara a
$1,000,000 garantizándolo con la hipoteca de sus fábricas de Querétaro. El banco
lo autorizó y le cobró una tasa de 7.5 % anual de interés en bonos hipotecarios.214
Banamex también participó como accionista en varias compañías
manufactureras. Tuvo 11,200 acciones de la Cía. Industrial de San Antonio Abad,
las cuales vendió en 1922 a $40 pesos cada una.215 Y en 1923 fue propietario de
3,501 acciones de CIVSA, 477 de CIDOSA, 500 de la Cía. Fundidora de Fierro y
Acero de Monterrey, 48 de la Cía. Minera Angustias, Dolores y anexas y 10 de la
Cía. Minera Santa María de la Paz.216
Respecto a la forma en que Banamex financió a los socios de CIDOSA,
encontramos que en 1891 autorizó un préstamo de $200,000 a $250,000 a la Cía.
Manufacturera de Cerritos SA, aunque ésta ya debía para esa fecha $144,000.217.
En 1921 le abrió a J. Ollivier y Cía. sucesores un crédito en cuenta corriente de
$100,000 con garantía de 2,000 acciones de CIDOSA.218 Y en 1928, le otorgó a
211
Ludlow, Leonor. “La Formación del Banco Nacional de México: Aspectos institucionales y sociales” en
Ludlow, Leonor y Marichal, Carlos. Op.cit., 1998, pp. 168-178. 212
Ídem. 213
AHBANAMEX, Libro 6 Acta del 09/10/1901 214
AHBANAMEX, Libro 8 Acta del 19/10/1909. 215
AHBANAMEX, Libro 9 Acta del 16/10/1922. 216
AHBANAMEX, Libro 9 Acta del 13/02/1923. 217
Archivo Histórico del Banco Nacional de México (AHBANAMEX), Libro 4 Acta del 20/10/1891. 218
AHBANAMEX, Libro 9 Acta del 05/04/1921.
142
esta misma firma un préstamo de $60,000 con garantía de CIDOSA y CIVSA.219
Asimismo en 1922, aprobó la apertura de un crédito comercial por 75,000 dólares
a favor del Banco de Montreal, el cual había sido solicitado por los socios de
CIDOSA.220
El Banco de Londres, México y Sudamérica “fue el primer banco fundado en
México (1864). Se apoyó en el intenso tejido de contactos mercantiles, mineros y
políticos de la firma inglesa Manning y Mackintosh para controlar los canales de
intercambio de mercancía y metálico del país”.221
En 1884 sus socios, se inconformaron por el monopolio de emisión fiduciaria
otorgada a Banamex, y decidieron “recurrir al amparo de la justicia federal contra
actos de la Secretaría de Hacienda. Alegando que el Código de comercio de 1884
no podía tener efectos retroactivos sobre su concesión de banco de emisión
otorgada 20 años atrás. El Banco de Londres ganó el amparo en primera instancia
y desató un debate jurídico económico sobre la cuestión del monopolio o la libre
concurrencia. Porfirio Díaz ordenó en diciembre de 1884 al secretario de hacienda,
Manuel Dublán, que negociara con ambos bancos un acuerdo de conciliación para
que las dos instituciones continuaran prestando sus servicios de emisión. Dublán
obtuvo del Congreso facultades extraordinarias que permitieron al Ejecutivo
establecer nuevos bancos de emisión, abrogando ésta parte de las disposiciones
restrictivas del Código de 1884. Cinco años más tarde, el Ejecutivo encargó a una
comisión presidida por Joaquín Casasús, la elaboración de un nuevo Código de
Comercio”.222
Dublan informó al Banco de Londres el plazo que tenía para ajustarse a la ley
o suspender sus actividades. Para consolidar su posición el Banco de Londres
México y Sudamérica planeó adquirir las acciones de otro banco, el Banco de
Empleados. No fue fácil porque Banamex entró a la puja también, pero mediante
la decidida ayuda de José Ives Limantour, el Banco de Londres pudo obtener en
219
AHBANAMEX, Libro 9 Acta del 19/08/1928. 220
AHBANAMEX, Libro 9 Acta del 27/12/1922. 221
Marichal, Carlos. “El nacimiento de la banca mexicana en el contexto latinoamericano: problemas de
periodización” en Ludlow, Leonor y Marichal, Carlos, Op.cit, 1998, pp. 118. 222
Canudas, Enrique, Op.cit, 2005, pp. 951-953.
143
1886 la concesión del Banco de Empleados y modificó su denominación a Banco
de Londres y México SA (BLM).223
El BLM se reorganizó como una sociedad Anónima de Responsabilidad
limitada en julio de 1889. Su capital inicial fue de $1,500,000. Este ascendió en
1891 a $5,000,000, en 1896 a $10,000,000 y en 1899 a $15,000,000.224 En este
mismo año, el Banco de Londres, México y Sudamérica -representado por Enrique
C. Walters-, otorgó a Thomas Braniff, Juan Llamedo e Ignacio de la Torre y Mier,
la concesión para que operaran dicho banco en la Ciudad de México y en las
provincias de Puebla, Veracruz, Querétaro, Michoacán, Guanajuato, Jalisco y San
Luis Potosí.225
Los socios del BLM invirtieron en “el ferrocarril de Monterrey al Golfo, 45,000
libras esterlinas y 25,000 dólares oro para que pudiesen concluir las obras de esa
vía y dotarla del material necesario para su tráfico. También invirtió en los
Almacenes Generales de Consignación y Depósito en la Ciudad de México; y le
abrió una línea de crédito por $300,000 a la Fundidora de Fierro y Acero de
Monterrey”.226
El Banco Central Mexicano fue un banco refaccionario, cuya concesión fue
otorgada el 12 de octubre de 1898 por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público
a Ramón Alcázar, Enrique C. Creel, Guillermo Vernechren, Antonio V. Hernández,
Carlos Bracho y al Deutuche Bank. Estos representantes tenían la obligación de
establecer el banco en la Ciudad de México, y no fundar sucursales en donde
existieran bancos de emisión, tenedores de acciones de la serie B del Banco
Central Mexicano. Su duración era de 40 años y su capital de $6, 000,000
divididos en 60,000 acciones de $100 de la serie A y B. La serie B correspondía
los bancos establecidos en la República.227 La importancia del Banco Central
Mexicano radicó en que dado que “la legislación bancaria de 1897 no podía
resolver un problema práctico fundamental, del intercambio de los billetes emitidos
por las instituciones estatales fuera del ámbito geográfico dentro del cual estaban
223
Ídem, p.953 224
Ídem. 225
AHNM, Escritura 2, del Volumen 3026, Notaría444 a cargo de Rafael Morales, 01/07/1899. 226
Canudas, Enrique, Op.cit, 2005, p. 254. 227
AHNM, Escritura 8, del Volumen 5087, Notaría729 a cargo de José del Villar, 06/02/1899.
144
autorizados a operar, el Banco Central Mexicano asumió la responsabilidad de
llevar a cabo el intercambio de los billetes de todos los bancos provinciales de
emisión”.228 Además el Banco Central Mexicano -al igual que Banamex y BLM-,
también invirtió y otorgó créditos baratos a las empresas manufactureras de sus
socios. Por ejemplo, en 1903 poseía el 10% de las acciones en la Cía.
Explotadora de Fuerzas Hidroeléctricas de Hidalgo SA y en 1907 poseía el 4.19%
de las acciones de la Cía. Maderera de la Sierra de Durango.
La Sociedad Financiera para la Industria en México (SFIM) fue fundada el 2 de
febrero de 1900. Su domicilio estaba en Ginebra, con sucursal en México. Tenía
un capital de 5 millones de francos, divididos en 20,000 acciones de 250 francos.
Su duración se estableció en 75 años. Tuvo como objetivo principal hacer toda
clase de operaciones, negocios y empresas comerciales, financieras e industriales
aún con inmuebles y toda clase de empresas de trabajo público en todos los
países, especialmente en México, ya sea por su cuenta o por terceros.229 Contó
con un Consejo de Administración en París, formado por Eduardo Noetzelin,
Etitenne Maller; en México, por Thomas Braniff, Ernesto Pugibet y Enrique Tron, y
en Ginebra por Alfredo Cheneriére, Guillermo Pichet y Albert Curreltini.230
En 1903 poseía el 15% de las acciones de la Cía. Explotadora de fuerzas
hidroeléctricas de Hidalgo SA y en 1910 era el principal accionista de Cervecería
Moctezuma, con el 44.25 % de las acciones. Además frecuentemente concedió
préstamos en francos a otras compañías manufactureras importantes de México,
especialmente de aquellas fábricas que pertenecían a sus socios. Por ejemplo, en
1907 otorgó un préstamo de 5,000,000 de francos a la Cía. Algodonera e Industrial
de La Laguna SA. El préstamo se confirió a través de una emisión de bonos al
portador de 500 francos cada uno, pagaderos por semestre a una tasa del 6%
anual, así como una garantía hipotecaría de la Hacienda Santa Clara y de un
inmueble ubicado en la Ciudad Gómez Palacios, Durango.231 En 1908 concedió
otro préstamo de 6,000,000 de francos oro a la Cía. de las Fábricas de Papel de
228
Marichal, Carlos, y Mario Cerutti. “Estudio introductorio” en Marichal, Carlos y Mario Cerutti
(compiladores). La Banca Regional en México (1870-1930). Colmex, FCE, México, 2003, pp.29. 229
AHNM, Escritura s/n, del Volumen 11, Notaría 5 a cargo de Bernardo Cornejo, 2/02/1900. 230
AHNM, Escritura 1972, del Volumen 49, Notaría 3 a cargo de Ramón Ruiz, 30/12/1905. 231
AHNM, Escritura 3420, del Volumen 84, Notaría 3 a cargo de Ramón Ruiz, 7/01/1907.
145
San Rafael y Anexas SA, a través de bonos al portador de 500 francos cada uno,
pagaderos a 6 meses, con un 6% de interés anual.232
La Compañía Bancaria de París y México SA (CBPM) fue fundada en 1909
por José Olllivier, León Signoret, José Escandón y otros empresarios (Ver Cuadro
17). A diferencia del SFIM que fue un banco de financiación a largo plazo, la
Compañía bancaria de París y México fue exclusivamente comercial y de corto
plazo. Se dedicó a tramitar pagarés, préstamos al comercio y a la industria,
administrar los movimientos de capitales y los órdenes de crédito y actuar como
mandatario en las operaciones comerciales. Fue un banco clásico de
financiamiento cuyo objetivo era reforzar la tesorería de sus clientes y ayudarlos a
administra sus flujos financieros.233
Otra empresa, que también fomentó el crecimiento de la industria, pero ya
para 1920, fue la Compañía Bancaria Mexicana SA (CBM), que tenía por objeto
negociar préstamos descuentos, giros, compra y venta de acciones y bonos y
cualquier clase de valor, así como cualquier clase de operación bancaria y
mercantil. Su duración se estableció en 50 años y su capital era de $350,000
divididos en 7,000 acciones de $50 pesos cada uno. Entre sus socios destacaron
José Signoret, Luis Elguero y Agustín Legorreta. 234
Todas estas instituciones financieras, tuvieron en común que otorgaban
créditos con privilegios a las empresas de sus accionistas, “que eran al mismo
tiempo, los más importantes comerciantes, latifundistas e industriales de México”.
De acuerdo a Haber, el sector manufacturero mexicano se desarrolló en
oligopolios o en una estructura industrial no competitiva235, porque la escala de
tecnología de la que se echaba mano era inapropiada para el tamaño del
232
AHNM, Escritura 3642, del Volumen 86, Notaría 3 a cargo de Ramón Ruiz, 01/0 71908. 233
De Anglade, Jean-Louis, Op.cit., 2006, pp.324-327. 234
AHNM, Escritura 11437, volumen 227, Notaría 3 a cargo de Ramón Ruiz, 02/01/1920. 235
Haber explica que las empresas manufactureras no podían ocupar el exceso de su capacidad productiva
porque el mercado interno era estrecho, y además no les era posible exportar por sus altos costos de
producción (derivados de la escasez de capital financiero, la importación de maquinaria y la baja
productividad de la mano de obra mexicana). Entonces, para poder aumentar sus ganancias, estás
manufactureras decidieron repartirse el mercado interno, organizándose en oligopolios y monopolios a través
de la integraron vertical y horizontal, la compra o fusión de la competencia y la limitación de la participación
de otras empresas en el mercado, a través del bloqueo al acceso de la tecnología, materia prima, protección
gubernamental y red de comercialización. Haber, Op.cit, 1992, pp.109-151.
146
mercado, y porque un pequeño grupo de financieros, hábiles en la manipulación
tanto del mercado como del Estado, poseía un grado poco común de poder
económico y político. Como élite, se trataba de un gremio impenetrable cuyos
integrantes se asociaban entre sí una y otra vez en nuevas empresas. De manera
simultánea, el escaso desarrollo de los mercados de capital impedía que otros
grupos desafiaran su control sobre la industria, puesto que el núcleo comercial-
financiero era el único grupo lo suficientemente adinerado como para financiar
nuevas compañías industriales.236
Por ejemplo, “en 1890 Augusto Genin solicitó a José Yves Limantour una
audiencia para informarle que varios franceses deseaban invertir en México. Entre
ellos León Signoret -como representante del Banco Francés Mexicano- que desea
aportar 400,000 francos, a la creación de una fábrica de carburo de calcio, una de
cloruro de potasio y una de explosivos industriales en Necaxa, Estado de México.
La compañía que se propone llevaría el nombre de Sociedad de negocios
mexicanos e iniciaría con un capital de 20 millones de francos a cargo de Emile
Dumont”.237
Como se vio anteriormente, León Signoret ya poseía acciones en las
principales compañías manufactureras de la época (Cía. Fundidora de fierro y
Acero de Monterrey, CIDOSA, Fábrica de Papel San Rafael, fábrica San
Idelfonso), y aún así quería seguir invirtiendo en nuevas empresas industriales no
sólo porque poseía el capital, sino también porque contaba con las relaciones
políticas que se lo consentían.
Los barcelonnettes, al igual que otros grupos empresariales tuvieron “la
habilidad para obtener del poder político el privilegio de la monopolización del
mercado, que era determinante para asegurar una actividad empresarial exitosa.
Esto lo consiguieron solamente garantizando la exclusividad en permisos y
236
Idem, p.109 237
Centro de Estudios de Historia de México, CARSO, Fondo José Y. Limantour, Rollo 7,1a.Serie, 1890.
147
concesiones del gobierno y/o a través del establecimiento de buenas relaciones
con los representantes”.238
En este momento podemos destacar algunos rasgos importantes: los
empresarios barcelonnettes en México, entre 1889 y 1910, constituyeron una red
de negocios vinculados por lazos familiares y de paisanaje, donde sus empresas
se integraban vertical y horizontalmente para ampliar sus mercados, obtener
insumos y financiamientos productivos. Pero sobre todo para disminuir costos de
monitoreo y transacción, reducir los incentivos a quienes no cumplían los
compromisos, aprovechar economías de escala y obtener ventajas frente a sus
competidores.
Al convertirse en uno de los grupos con mayores fortunas en la sociedad
mexicana de su tiempo, lograron fundar y participar en algunas de las empresas
industriales y financieras más importantes de la economía de la época, como: la
Compañía Industrial de Orizaba SA, la Cía. Fundidora de Fierro y Acero de
Monterrey, la Sociedad Financiera para la Industria en México y el Banco Central
Mexicano. La importancia cobrada de las redes construidas y estrategias
empleadas por estos empresarios, demandan a un estudio detallado de las
mismas, lo cual se realizará en el siguiente capítulo.
Capítulo 2: Importancia de una red. .................................................................................... 68
Comerciantes ................................................................................................................... 72 Fundación de la Cía. Industrial de Orizaba SA (CIDOSA). ............................................ 81
Sociedades fundadoras .................................................................................................... 93 Los principales socios .................................................................................................... 116
Redes de negocios ......................................................................................................... 123 Red de negocios interpersonal ....................................................................................... 135
Red de negocios interinstitucional ....................................................................... 138
238
Romero, Ibarra, María Eugenia. “Hombres de negocios y cambio institucional, Estado de México, 1880-
1910” en Romero Ibarra, María Eugenia. Las regiones en la historia económica mexicana. Siglo XXI y
Facultad de Economía UNAM, México, 1999, pp. 130.
148
Capítulo 3: Estrategias de los empresarios de CIDOSA
Las primeras fábricas textiles de algodón en México fueron la fábrica de
Colima, fundada en 1826, propiedad del inglés George A. Resol, y “Aurora
Yucateca”, construida en 1833 y propiedad de Abarda y Cía. “La Constancia
Mexicana”, propiedad de Esteban de Antuñano y establecida en 1835, ambas
ubicadas en Puebla; “La Magdalena Contreras”, de Antonio Garay, Lozada
Carrera y el inglés Archivaldo Hope, que se situó en el Valle de México e inició
operaciones desde 1836; “Cocolapan”, localizada en Orizaba desde 1836,
propiedad de Lucas Alamán y los hermanos Legrand; “La Abeja”, de los ingleses
L. Hammekan y Gradison, y la fábrica “La Colmena”, propiedad del inglés Hope y
del francés Massie, ambas fundadas en 1839.
Durante el Porfiriato (1876-1910), “las fábricas textiles crecieron a un ritmo sin
precedente, ya que mientras en el periodo de 1843 a 1879 el número de husos
había aumentado en 138%, en los 35 años siguientes (1879-1913) aumentaron en
194%. Esto debido a los cambios tecnológicos de la Revolución Industrial, el
desarrollo de los medios de transporte y de comunicación (como el barco de
vapor, el ferrocarril y el telégrafo), la apertura de los mercados regionales, el
incremento de inversionistas extranjeros, el desarrollo de mercados de capitales y
la creación de nuevos marcos institucionales para las actividades económicas
(como el Código de Comercio, en 1884, la Ley de instituciones de Crédito en
1897, etc.)”239.
Las fábricas de tejidos de algodón que más destacaron a finales del siglo
XIX, principios del XX, fueron: “Río Blanco”, propiedad de la Compañía Industrial
de Orizaba SA (CIDOSA), “Santa Rosa”, de la Compañía Industrial Veracruzana
SA (CIVSA); “Hércules”, de la Compañía Industrial de Manufacturera SA; la “San
Antonio Abad”, de Compañía Industrial San Antonio Abad SA; “Metepec”, de la
Compañía industrial de Atlixco SA; “La Hormiga”, de La Hormiga SA, y “La
Magdalena”, de J.L. Veyan y Cía.
239 Goméz-Galvarriato, “La Revolución en la distribución y en la producción de textiles en México durante el Porfiriato”
(s/f) en www.cide.mx, p.5.
149
Estas compañías textiles “contaban con más del 40% del total de husos y
telares que existían en el país. Elaboraban el 36.2 % de la producción de telas en
México y poseían el 38.1 % del total del mercado nacional de productos
textiles”.240
En este capítulo se realiza una comparación entre estas compañías textiles
y CIDOSA para conocer: ¿Cuál de estas compañías llevaba el liderazgo
tecnológico y en el mercado? ¿Qué sistemas de producción empleaban? ¿Cómo
organizaban, controlaban y remuneraban a sus trabajadores? ¿Qué ganancias
obtuvieron con estas formas de trabajo? Y, sobre todo, ¿existían diferencias o
semejanzas entre ellas? Para contestar estas interrogantes, se iniciará
describiendo el funcionamiento de las principales fábricas y compañías de hilados
y tejidos de algodón en México de 1843 a 1913. Después se realizará un análisis
de las patentes, maquinaria, y tipos de estrategias laborales y de comercialización
que los empresarios utilizaron en las manufacturas de CIDOSA, de 1900 a 1928.
Finalmente, se hace una comparación de los rendimientos económicos de
CIDOSA con otras compañías.
Al analizar las estrategias de las compañías textiles intento identificar los
recursos y capacidades que hicieron de CIDOSA una de las empresas más
redituable del periodo de 1890-1930.
240 Gómez Galvarriato, Idem. Cuadro 8. Principales compañías textiles de algodón en México, 1912, pp.59.
150
En la producción
Principales fábricas y compañías textiles en México 1843-1920.
A continuación se realizará una breve descripción de las principales fábricas
textiles que existieron en México de 1843 a 1893, con el propósito de compararlas
con las compañías textiles organizadas en SA que se fundaron de 1889-1906.
Esto para identificar semejanzas y diferencias entre ellas.
Durante la década de los años 1830’s, las fábricas textiles de algodón del país
sólo hilaban y producían manta de forma manual en los telares de los artesanos.
Fue hasta 1840´s que se inició con el estampado manual, el blanqueado (1842), y
algunas fábricas de Puebla y Querétaro con los telares mecánicos (1843) y con los
teñidos (1845). De hecho, el estampado se realizó a mano hasta 1860, cuando un
manufacturero de Tenancingo introdujo el empleo de anilinas y un cilindro francés
para hacer estampados. 241 Las fábricas textiles que más rápidamente
incorporaron las máquinas mecánicas y los procesos de tejido y estampado
fueron: “La Constancia Mexicana”, “La Magdalena Contreras”, “Miraflores”,
“Cocolapan” y “Hércules”.
La Constancia Mexicana fue inaugurada el 7 de enero de 1835 en la Ciudad de
Puebla. Estuvo ubicada en el molino de trigo de la hacienda de Santo Domingo, en
las riberas del Río Atoyac, en el estado de Puebla. Contó con energía hidráulica y
vapor para mover su maquinaria. Empezó a operar sólo con el departamento de
hilado. Dos años después, al intentar comprar más maquinaria, la empresa sufrió
pérdidas por tres naufragios, pero a pesar de ello en 1839 la fábrica tuvo en
operación 7 680 husos y en el área de tejido 90 telares. Más tarde, en el año de
1843, esta cifra aumentó a 113 y su producción a 600 piezas de manta
semanalmente242. La fábrica de La Constancia Mexicana y la de “Economía”
fueron propiedad de Esteban de Antuñano hasta 1857, cuando pasaron a manos
241 Keremitsis, Dawn. La industria textil mexicana en el siglo XIX. Colección Sepsetentas, SEP México, 1973, pp. 20-23. 242 http: //morgan.iia.unam.mx /usr /Industrial /BOL%209/ VENTURA.HTML
151
de sus herederos. En esos años, la fábrica mantuvo una inversión de $1,400,000;
y según cálculos de Keremetsis, “dejó un beneficio del 2 % sobre la inversión”.243
En 1836 los hermanos Legrand, originarios de Francia, y el empresario Lucas
Alamán inauguraron en una antigua fábrica de papel en Orizaba, Veracruz la
Fábrica de Cocolapan que en 1843 tuvo 11,500 husos, 300 telares y 600
empleados que trabajaban en tres turnos. Cocolapan producía con energía
hidráulica y vapor casi 40,000 piezas de mantas. En 1848 fue vendida a Manuel
Escandón quien declaró, para 1850, “una inversión de $890,000, y un beneficio del
7 %”.244
La fábrica de La Magdalena Contreras se situó en el Valle de México, en un
espacio económico en el que se había realizado la manufactura artesanal de
paños durante la época colonial. Inició operaciones desde 1836, bajo la
Administración de Garay y Cía, cuyos socios eran los españoles Antonio Garay,
Lozada Carrera y el inglés Archivaldo Hope. Su proceso productivo estaba
integrado verticalmente hacia atrás y hacia adelante, ya que contaba con sus
propios sembradíos de algodón de donde obtenía su materia prima, la cual
procesaba en su fábrica y, finalmente, la distribuía y comercializaba en sus
cajones de ropa. En 1850 tuvo un valor de $1, 200, 000 pero, entre 1856 y 1865,
sufrió una crisis financiera y fue vendida a Pío Bemerejillo (español) quien, en
1898, la vendió a Meyran Donnadie y Cía., y en 1903 a Adrián Jean y Luis
Veyan245.
La fábrica Magdalena Contreras contó “desde sus inicios con todas las
innovaciones tecnológicas que se habían producido en el ramo textil desde la
Revolución Industrial: energía hidráulica y de vapor, bastidores mecánicos de la
misma calidad que los inventados por Richard Arkwright, telares iguales a los
inventados por James Hargreaves, procedimientos innovadores para efectuar el
243 Keremitsis, Op.cit. 1973, pp. 74-75. 244 Ídem 245 Trujillo Bolio, Mario. “La fábrica la Magdalena Contreras (1836-1910). Una empresa textil precursora en el Valle de
México”, en Marichal, Carlos y Cerutti, Mario. Historia de las grandes empresas en México, 1850-1930, UANL y FCE,
México,1997, pp.245-274
152
acabado, blanqueado y teñido, etc.. Toda esta maquinaria se encontraba
distribuida en un área de 14 919 mts2 destinados a la fábrica de algodón”.246
En el Distrito Federal La Magdalena Contreras y Miraflores eran las mayores y
más adelantadas técnicamente de todas las fábricas mexicanas. Exhibieron sus
productos en la Exposición de París en 1854 y a menudo las encontramos
mencionadas por la calidad de sus productos.247
La fábrica de Miraflores, propiedad de la familia Martínez del Río, fue fundada
en 1840 en el Estado de México. Utilizó energía hidráulica y de vapor. Entre 1845
y 1854 produjo más de 465,000 piezas de manta y mantuvo una inversión de
$500,000, con un beneficio de 7.4%248.
En Querétaro, en 1843, se creó la fábrica textil Hércules, propiedad de
Cayetano Rubio, la cual fue la más importante durante la Reforma y el Imperio.
Abasteció de textiles al mercado de Guanajuato. Como carecía de una fuente de
energía adecuada se construyó un túnel a través de las montañas para mover la
fábrica con fuerza hidráulica. Su inversión para 1850 ascendió a $1,000, 000 y su
beneficio al 9.3%.249
Los datos de años de fundación, propietarios, ubicación, inversión, maquinaria,
mano de obra, materia prima y volumen de producción de estas cuatro fábricas
textiles, de 1843 a 1887, se encuentran resumidos en el Cuadro 1.
246 Trujillo Bolio, Mario. Empresariado y manufactura textil en la Ciudad de México y su periferia. Siglo XIX. CIESAS,
México, 2000, pp. 56-63. 247 Keremitsis, Op.cit. 1973, pp. 75. 248 Keremitsis, Op.cit. 1973, pp. 75. 249 Keremitsis, Op.cit. 1973, pp. 61, 75.
153
Cuadro 1. Principales fábricas textiles de algodón en México, 1843-1893.
Año Algodón
consumido
kilos1
Producción
de manta
(pzas)2
Producción
de hilaza en
kilos2
Husos Telares No. de
obreros
Potencia Valor del
establecimiento
(Inversión)
Piezas de
manta por
obrero
Kilos de
hilaza x kl
algodón
Nombre La Constancia Mexicana 1843 302,851 31,200 301,392 7,680 113 340 Agua 91.76 1.00
Fundación 07/01/1835 1850 538,668 156,000 1,092,009 7,680 122 434 Agua 1,400,000$ 359.45 0.49
Ubicación Puebla, Puebla 1879 75,029 7,000 130 180 Agua y vapor 240,000$
Propietarios Esteban de Antuñano y José Saviñon 1885 104,000 Agua y vapor 364,000$
Testamentaria de Antuñano (1857)
Pedro Borges (1879)
Nombre La Magdalena 1843 328,265 8,320 334,880 8,600 90 0.98
Fundación 1836 1850 192,932 54,870 520,147 8,472 326 800 Agua 1,200,000$ 68.59 0.37
Ubicación San Angel, D.F. 1879 414,225 6,768 304 520 Agua y vapor 350,000$
Propietarios Garay y Cía. (1850) 1885 120,000 Agua y vapor 420,000$
Pio Bermenejillo (1864) 1893 400,000 7,768 304 320 Agua y vapor 400,000$
Nombre Cocolapan 1843 387,565 39,156 468,832 11,500 300 600 65.26 0.83
Fundación 1839 1850 351,055 52,017 699,838 11,784 446 600 Agua 890,000$ 86.70 0.50
Ubicación Orizaba, Veracruz 1879 342,990 13,000 300 345 Agua y vapor
Propietarios Lucas Alaman y Legrand hermanos 1887 276,240 60,000 200,000 9,840 200 400 Agua y vapor 178,200$ 150.00 1.38
Escandón Hnos. (1848-1899) 1893 276,000 9,840 200 450 Agua
Nombre Miraflores
Fundación 1840 1850 239,408 40,544 465,470 5,700 160 400 Agua 500,000$ 101.36 0.51
Ubicación Cuatitlán, Edo. De México 1879 125,621 6,894 263 430 Agua 168,775$
Propietarios Martínez del Río hermanos 1887 104,000 300 Agua 178,775$ 346.67
J.H. Robertson y cía. (1874-1893) 1893 650,000 8,436 320 350 Agua y vapor
Nombre Hércules3 1843 291,203 20,800 239,200 8,400 112 1.22
Fundación 1843 1850 351,055 100,000 1,400,000 7,500 500 3,000 Agua 1,000,000$ 33.33 0.25
Ubicación La Cañada, Querétaro 1879 471,612 10,000 600 495 Agua y vapor
Propietarios Cayetano Rubio 1893 1,200,000 68,531 9,000 650 1,080 Agua y vapor
PROMEDIOS DE 1843-1893 379,722 68,531 572,177 8,730 286 614 144.79 0.75
1. Los datos de 1850 estaban en quintales, por lo que se múltiplicaron por 46.04 para convertirlos a kilos
2. Para los años 1843, el dato era por semana, así que para calcular el dato anual se multiplicó por 52 semanas
3. Los datos de los años 1879 y 1893 incluyen las fábricas de Hércules, Purísima y San Antonio
Fuentes: Apendice de Trujillo (1992), pp. 270-272. y Keremetsis (1973), pp. 51-77.
Cuadro 1. Estado que manifiesta las fabricas de hilados y tejidos de algodon de la República Mexicana , 1850 en Soberanis (1988), p. 44
Cuadro 4. Grandes Fábricas textiles, 1879-1912 de Goméz-Galvarriato (s/f), p. 40
Archivo General de la Nación (AGN), Departamento del Trabajo, Caja 49.
Datos de la fábrica
Datos de Producción Productividad
En este cuadro se observa que: I) La fábricas tenían mayor cantidad de husos
que telares, porque producían más hilaza que telas. II) Utilizaron energía
hidráulica y/o vapor. III) La producción en La Magdalena, Miraflores y Cocolapan
disminuyó en periodos de inestabilidad como la Guerra de Reforma (1857-1860) y
la intervención francesa (1864-1867). De hecho la producción de Cocolapan se
mantuvo a la baja de 1843 a 1893. IV) Los obreros de todas las fábricas fueron
incrementando su producción individual de piezas de manta (productividad250).
Esto más por la incorporación de maquinaria que por un uso eficiente de los
insumos. Por ejemplo, en el caso del algodón la mayoría de las fábricas producía
menos de un kilo de hilaza por cada kilo de algodón que utilizaba.
250 Productividad es el cociente que se obtiene al dividir la producción por uno de los factores productivos. (mano de
obra, materiales, etc.). El incremento de la producción es un aumento de las mercancías elaboradas con los mismos o
menos recursos y significa una disminución de los costos unitarios. Para Coriat, un incremento en la productividad es
cuando dentro de un mismo ritmo de trabajo, la misma cantidad de trabajadores produce mayor cantidad de productos
debido a la mayor eficacia técnica de los medios de producción utilizados. Coriat, Benjamín. El taller y el cronometro.
Ensayo sobre el taylorismo, el fordismo y la producción en masa. Siglo XXI, 10ª. Edición, México, 1982.
154
Después de 1890, éstas y otras fábricas textiles fueron adquiridas por
sociedades anónimas que se dedicaban a construir o remodelar fábricas ya
existentes. Las compañías de este tipo que más se destacaron fueron: A)
CIDOSA, que compró en 1889 las fábricas de “San Lorenzo” y “Cerritos”, en 1899
“Cocolapan”, y construyó en 1892 la fábrica de “Río Blanco”, todas ubicadas en la
región de Orizaba en el Estado de Veracruz. B) La Compañía Industrial
Veracruzana SA, que edificó en 1896 la fábrica Santa Rosa en Necoxtla (Ciudad
Mendoza), Veracruz. C) La Compañía Industrial de Manufacturera SA, dueños
desde 1899 de las fábricas textiles “Hércules”, “San Antonio” y “Río Grande”,
ubicadas las dos primeras en Querétaro y la última Jalisco. D) La Compañía
Industrial San Antonio Abad SA, propietarios a partir de 1892 de las fábricas “San
Antonio Abad”, “La Colmena” y “Miraflores”, ubicadas en el DF y el Estado de
México. E) La Compañía industrial de Atlixco SA, que erigió en 1902 la Fábrica de
Metepec, en Atlixco Puebla. F) La Compañía Industrial de Guadalajara SA,
propietaria desde 1899 de las fábricas “Río Blanco”, “La Experiencia” y “Atemajac”
en Jalisco. F) La sociedad Veyan Jean y Cía. Sociedad en Comandita propietaria
desde 1903 de la fábrica “La Magdalena”, en el DF. G) La Hormiga SA, que poseía
la fábrica del mismo nombre, ubicada en San Ángel, DF. Los datos de años de
fundación, accionistas, ubicación de fábricas textiles propiedad de estas
compañías se encuentran resumidos en el Cuadro 2.
En este cuadro se observa que estas compañías fueron fundadas de 1889
a 1906 por empresarios que al igual que los socios de CIDOSA, “eran parte de los
financieros-industriales, que ocupaban posiciones en las juntas directivas de los
bancos más importantes del país”251 y/o que eran dueños de las principales casas
de comercio en México, como Sebastián Robert, Alejandro Reynaud, Rafael
Donde, Luis Barrosos, Íñigo Noriega (ver redes sociales y de negocios del capítulo
anterior). También se identifica que el monto de las inversiones (capital) aumentó,
debido a los cambios tecnológicos de la Revolución Industrial, el desarrollo de los
ferrocarriles y los cambios en la legislación económica.
251 Haber, op.cit, 1992.
155
Cuadro 2. Principales Compañías textiles de algodón en México, 1889-1906.
Socios Capital
aportado
% Fábrica textil Ubicación
Nombre CIDOSA Tomás Braniff 700,000$ 27.45% Cocolapan Orizaba, Ver.
Sociedad Anónima (S.A.) J.B. Ebrard y cía $ 323,000 12.67% San Lorenzo Nogales, Ver.
Fundación 28-6-1889 J.Olliver y cía $ 323,000 12.67% Cerritos Orizaba, Ver.
Duración 30 años J.Tron y Cía. $ 323,000 12.67% Rio Blanco Tenango, Ver.
Capital $2,550,000 Signoret, Honnorat y cía $ 323,000 12.67%
Lambert, Reynaud y cía 242,000$ 9.49%
Garcín, Faudon y cía 216,000$ 8.47%
Juan Quinn 100,000$ 3.92%
TOTAL 2,550,000$ 100%
Nombre Compañía Industral de Remigio Noriega y hmnos 500,000$ 50.0% Miraflores Cuatitlán, México
San Antonio Abad S.A. Antonio Basagotti 60,000$ 6.0% La colmena y Tlanepantla, México
Sociedad Anónima (S.A.) Enrique L. Walters 10,000$ 1.0% Barrón Cuatitlán, México
Fundación 28/01/1892 Luis Barroso 20,000$ 2.0% San Antonio D.F.
Duración 30 años Remigio Noriega 200,000$ 20.0% Abad
Capital $1,000,000 Iñigo Noriega 200,000$ 20.0%
Laureano Gomez Entería 10,000$ 1.0%
TOTAL 1,000,000$ 100.0%
Nombre Compañía Industrial A. Reynaud y Cía 300,000$ 25.0% Santa Rosa Necoxtla, Ver.
Veracruzana S.A. S. Robert y cía 150,000$ 12.5%
Sociedad Anónima (S.A.) Alejandro Reynaud 120,000$ 10.0%
Fundación 24/11/1896 Enrique Reynaud 100,000$ 8.3%
Duración Audiffred Hnos. 50,000$ 4.2%
Capital $1,200,000 F.Manuel y cía 50,000$ 4.2%
Jauffred y Gariel 40,000$ 3.3%
Enrique Fleury 35,000$ 2.9%
Honorato Reynaud 30,000$ 2.5%
Paulino Richaud 30,000$ 2.5%
Antonio Reynaud 25,000$ 2.1%
Bellón Agorreca y Cía 25,000$ 2.1%
Hauser Zivy y Cía 25,000$ 2.1%
Rivero y Liaño 25,000$ 2.1%
J.P. Jacques y cía 22,000$ 1.8%
Desdier Sibilot y cía. 20,000$ 1.7%
Agustin Clariond 15,000$ 1.3%
León Rebattu 15,000$ 1.3%
Borelly Grez y cía. 10,000$ 0.8%
Derbez y Borell 10,000$ 0.8%
Juan B. Detchandy 10,000$ 0.8%
Fernando Donadieu 10,000$ 0.8%
Adolfo Fabre 10,000$ 0.8%
Ollivier Hnos 10,000$ 0.8%
Bartolomeo Rebattu 10,000$ 0.8%
Marcos Rueff 10,000$ 0.8%
Gaymard Sapitalier 10,000$ 0.8%
Zaldo Hnos y Cía. 10,000$ 0.8%
Francisco Charanconnet 5,000$ 0.4%
Vendrell B.A. 5,000$ 0.4%
Emilio Donadie 2,000$ 0.2%
José André 2,000$ 0.2%
Enrique Praderé 2,000$ 0.2%
Pacual Roux 2,000$ 0.2%
Chabrand y Caffarel 3,000$ 0.3%
Casimiro Balp 1,000$ 0.1%
Fellix Vinatier 1,000$ 0.1%
TOTAL 1,200,000$ 100%
Datos de la empresa
156
Cuadro 2. Principales Compañías textiles de algodón en México, 1889-1906.
Socios Capital
aportado
% Fábrica textil Ubicación
Nombre Compañía Industrial Santiago Sréchaga 150,000$ 7.5% Metepec Atlixco, Pue.
de Atlixco S.A. B. Roves y cia. Sucursales 750,000$ 37.5%
Sociedad Anónima (S.A.) A. Richaud y cía. 350,000$ 17.5%
Fundación 05/01/1899 S. De Lambelz y cía. 22,500$ 0.8%
Duración 50 años Solana Barranche y cía. 30,000$ 1.5%
Capital $2,000,000 Antonio Basagotti 150,000$ 7.5%
Luis Barroso 10,000$ 0.5%
Agustín Garcín 10,000$ 0.5%
Felix Martino Arias 240,000$ 12.0%
Benjamín D. Aragan 170,000$ 8.5%
Leopoldo Gavito 50,000$ 2.5%
Iñigo Noriega 22,500$ 1.1%
Sotero de Juamblez 10,000$ 0.5%
Constantino Noriega 5,000$ 0.3%
Emilio Andre 10,000$ 0.5%
Eduardo Vega 10,000$ 0.5%
Vicente Barrencho 10,000$ 0.5%
TOTAL 2,000,000$ 100% -$
Nombre Cía industrial Rafael Dondé Hércules La cañada, Qro.
Manufacturera S.A.de R.L. Carlos de Varona La Purísima La cañada, Qro.
Sociedad Anónima (S.A.) Enrique L. Walters San Antonio Querétaro, Qro.
Fundación 04/08/1899 Eduardo Ebrard Rio Grande Juanacatlán, Jal.
Duración 30 años Enrique Hernandez
Capital $4,300,000 Jose Maria Bemenejillo
Juan A. de Azurmendi
Nombre Cía. Industrial de Fortoul Chapuy y cía. 600,000$ 30.0% Rio Blanco Zapopan, Jal.
Gualajara S.A. L. Gas y cía. 600,000$ 30.0% Atemajac Guadalajara, Jal.
Sociedad Anónima (S.A.) Lawrens Brun y cía. 220,000$ 11.0% La experiencia Zapopan, Jal.
Fundación 2/12/1899 Bellón Agorreca y cía. 290,000$ 14.5%
Duración 25 años E.Lebre y cía. 290,000$ 14.5%
Capital $2,000,000 TOTAL 2,000,000$ 100.0%
Nombre Veyan Jean y cía. S.en C. Adrien y Camilo Jean 500,000$ 20.4% La Magdalena San Angel, D.F.
Sociedad En comandita (S. en C.) Luis Veyan 1,550,000$ 63.3%
Fundación 1903 León Meyran 400,000$ 16.3%
Duración TOTAL 2,450,000$ 100.0%
Capital $2,450,000
Nombre La Hormiga S.A. Sebastian Robert 440,000$ 44% La Hormiga Tlalpan, D.F.
Sociedad Anónima (S.A.) Emilio Meyran 250,000$ 25%
Fundación 05/09/1906 Santiago Archerrera 180,000$ 18%
Duración Pedro A. chain 130,000$ 13%
Capital $1,000,000 TOTAL 1,000,000$ 100%
Fuente: Tabla 1. Distribution of CIVSA's Shares 1896-98., pp. 111. Gomez Galvarriato (1999a), De anglade (2006) pp. 374,
Cuadro 4. Grandes Fábricas textiles, 1879-1912 de Goméz-Galvarriato (s/f), p. 40, Trujillo Bolio (2000), p. 149 y Olveda (2006) , pp. 190.
Archivo Histórico de Notarías de la Ciudad de México
Compañía Notario Notaría Escritura Volumen Fondo
Compañía Industrial Manufacturera S.A. Ramón Ruiz 3 36 28 Antiguo
Cía. industrial de Atlixco S.A. Juan M. Villeda 25 5 13 Antiguo
Cía. San Antonio Abad S.A. Jose Villela 725 37 890 Antiguo
Cía. Industrial de Orizaba S.A. Rafael Morales 444 3025 155 Antiguo
La Hormiga S.A. Bernando Cornejo 5 1028 26 Contemporáneo
Datos de la empresa
157
La Revolución Industrial permitió el uso de energía hidroeléctrica y de
maquinaria automática, como la hiladora Rabbeth, los telares Northrop (1895), y
las máquinas de estampado norteamericanas252. Ambos factores impulsaron la
construcción de fábricas más eficientes que producían en grandes volúmenes para
alcanzar economías de escala.
Otro de los factores que impulsó el proceso de industrialización fue la
construcción de transportes, específicamente los ferrocarriles.253 Estos, al igual
que la minería, los bancos, la industria petrolera, y la agricultura comercial (el
algodón de La Laguna, el henequén en Yucatán, etc.) cobraron auge al final de
siglo XIX y principios del XX.
Los ferrocarriles aumentaron las exportaciones mexicanas pero también
incrementaron las importaciones de equipos para desarrollar infraestructura y, con
ello, una mayor dependencia de la economía mexicana al sector externo.
Asimismo, contribuyeron a la comercialización de la agricultura y la disminución de
los costos de transporte de carga de 10 centavos por tonelada/kilómetro en viaje
de carreta en 1878 a 2.3 centavos de tonelada/kilómetro en ferrocarril en 1910.
Acortaron las distancias y ampliaron las dimensiones del mercado local y regional,
hasta integrarlos en un mercado nacional que, junto con la disminución de los
costos de transportes, estimuló el aumento de la producción industrial.254
Por su parte el Código de Comercio creado en 1884 y reformado en 1889, les
permitió a los inversionistas conjuntarse en sociedades por acciones; y la Ley de
Instituciones de Crédito de 1897, establecer bancos de los que obtenían grandes
cantidades de capitales para crear manufacturas de mayor tamaño, como las
fábricas textiles de algodón que se enlistan en el Cuadro 3.
252 Keremitsis, Op.cit. 1973, pp. 100-121. 253 De 1880 a 1908, las principales compañías ferroviarias del país fueron las estadounidenses Nickerson, Atchinson,
Topeca y Santa Fe Raiload, propietaria del Ferrocarril Central Mexicano, que poseía la ruta México-Ciudad Juárez; la Cía.
Palmer y Sullivan propietaria del Ferrocarril Nacional Mexicano, que viajaba de México a Nuevo Laredo; y la Huntihgton
Southern Pacif Company, dueña del Ferrocarril Internacional, que iba de Piedras Negras a Torreón conectando al
ferrocarril Central. También existió el Ferrocarril Interoceánico que viajaba México-Veracruz (igual que el Ferrocarril
Mexicano), el Mexicano del Sur (Puebla a Oaxaca), y varias líneas regionales o locales en Sonora, Chihuahua, Hidalgo,
Yucatán, Zacatecas, etc. Herrera Canales, Inés. “XV. La circulación (comercio y transporte en México entre los años
1880-1910)”, en Cardoso, Ciro (Coordinador). México en el siglo XIX (1821-1910). Historia económica y de la
estructura social. Nueva Imagen, México, 1980, p. 439 254 Haber, Sthepen. Industria y subdesarrollo. La industrialización de México 1890-1940. Alianza editorial mexicana.
México, 1992, p.29.
158
En este cuadro se detallan los datos de volumen de producción,
maquinaría, mano de obra y materia prima utilizada por las principales fábricas
textiles de México en 1893, 1912 y 1913. También se señala la productividad de
piezas de manta por obrero que se realizaba en cada fábrica. Con estos datos es
posible comparar la producción de las fábricas textiles que existieron en México de
1843 a 1890 (que se presenta en el Cuadro 1) con la de las compañías textiles
que operaron a partir de 1889.
De acuerdo a la información del Cuadro 1 y 3 se observa que, para la
primera década del siglo XX, las fábricas textiles de algodón: A) Aumentaron su
número de telares en un 135%y el número de husos en 116%255. (Esto porque
cambiaron su producción hacia el tejido y el estampado, disminuyendo la
elaboración de hilaza). B) Incrementaron su producción de piezas de manta en un
126%, al pasar de un promedio de producción de 68,531 piezas de manta, durante
el período de 1843-1887, a 155,025 piezas, de 1893-1913. C) Elevaron la
productividad (piezas de manta por obrero) en un 46%: de 144 piezas promedio
por obrero, de 1843-1887, a 212 piezas, de 1893-1913. Ese aumento es de menor
magnitud que los anteriores, porque al igual que sus antecesoras acrecentaron su
producción comprando más máquinas y no siendo más eficientes al utilizarlas.
Todas las fábricas enlistadas en el Cuadro 3 integraron su producción hacia
adelante y hacia atrás, como las fábricas que operaron de 1843 a 1890. Sin
embargo a diferencia de sus antecesoras: 1) Utilizaron energía hidroeléctrica y
maquinaria moderna. 2) Produjeron a mayor escala. 3) Fueron administradas por
gerentes supervisados por un consejo de Administración formado por altos
ejecutivos de las empresas comerciales que eran sus principales accionistas.256 4)
Algunas de ellas incrementaron su producción en etapas de inestabilidad social
y/o política como la Revolución Mexicana (1910-1917).
255 Considerando solo los telares y husos modernos 256 Goméz-Galvarriato, Op.cit. (s/f), p.43.
159
Cuadro 3. Producción de las principales compañías textiles de algodón en México, 1893-1913.
Productividad
Empresa Fábricas Kilos algodón No. de Potencia Pzas de manta
consumidos pzas hilaza (kilos) Antiguos Modernos Antiguos Modernos Antinguas Modernas obreros por obrero
CIDOSA 1893 1,683,240 50,088 1,481 2,090
Cía. Industrial San Lorenzo 207,000 11,088 300 470 Agua y vapor
de Orizaba S.A. Cerritos1 276,240 5,000 181 400 Agua
Río Blanco 1,200,000 34,000 1,000 1,220 Agua y vapor
1902 1,790,673 714,214 70,516 2,550 11,092 3,718 -
San Lorenzo 551,335 212,585 17,412 896 11,088 918 231.57
Cerritos 313,940 159,533 7,576 550 290.06
Río Blanco 925,398 342,096 45,528 1,654 4 2,250 152.04
1912 1,795,036 918,254 3,468 89,240 181 3,718 4 6 4,284
Cocolapan 256,199 188,080 20,048 872 602 Hidroeléctrica 312.43
San Lorenzo 381,033 269,400 19,048 1,036 642 Hidroeléctrica 419.63
Cerritos 300,826 170,981 3,468 7,576 181 125 465 Hidroeléctrica 367.70
Rio Blanco 856,978 289,793 42,568 1,685 4 6 2,575 Hidroeléctrica 112.54
1913 1,926,118 829,169 0 92,708 0 3,899 4 6 4,278
Cocolapan 465,063 162,377 20,048 872 600 Hidroeléctrica 270.63
San Lorenzo 374,625 218,758 19,048 1,036 642 Hidroeléctrica 340.74
Cerritos 231,059 130,391 11,044 306 469 Hidroeléctrica 278.02
Rio Blanco 855,371 317,643 42,568 1,685 4 6 2,567 Hidroeléctrica 123.74
Cía. Industrial San 1893 1,400,000 20,540 750 1,100
Antonio Abad S.A. La colmena y Barron 400,000 8,600 400 500 Agua y vapor -
San Antonio Abad 1,000,000 11,940 350 600 Vapor -
1912 597,230 279,963 0 38,280 0 1,233 0 4 1,024
Miraflores 186,010 53,765 4,323 11,460 - 331 0 348 154.50
La colmena y Barron 250,560 113,748 0 14,160 - 550 0 355 320.42
San Antonio Abad 160,660 112,450 0 12,660 - 352 4 321 350.31
1913 698,698 300,232 0 38,280 0 1,233 0 4 1,818
Miraflores 186,483 36,572 22,237 11,400 331 359 101.87
La colmena y Barron 253,521 129,413 14,160 550 555 233.18
San Antonio Abad 258,694 134,247 12,720 352 4 904 148.50
Veyan Jean y Cía 1912
S. En C. La Magdalena 426,353 302,314 0 17,128 - 667 2 1,000 Hidroeléctrica 302.31
Datos de producción
Productos Husos Telares Estampado
160
Productividad
Empresa Fábricas Kilos algodón No. de Potencia Pzas de manta
consumidos pzas hilaza (kilos) Antiguos Modernos Antiguos Modernos Antinguas Modernas obreros por obrero
Cía. Industrial 1912 482,576 230,159 0 40,918 988 387 0 3 1,170
Manufacturera S.A. Hércules 161,532 46,261 21,958 433 - 0 400 Hidroeléctrica 115.65
La Purísima 25,203 - 200 - 0 70 360.04
San Antonio 40,932 - - - 3 100 409.32
Rio Grande 321,044 117,763 18,960 355 387 0 600 Hidroeléctrica 196.27
1913 593,737 247,476 0 46,318 1,088 387 0 4 1,100
Hércules 169,498 100,919 21,958 633 425 237.46
La Purísima Hidroeléctrica
San Antonio
Rio Grande 424,239 146,557 24,360 455 387 4 675 217.12
Cía. Industrial 1912
Veracruzana S.A. Santa Rosa 676,832 281,685 0 40,184 - 1,410 4 1,560 Hidroeléctrica 180.57
1913
Santa Rosa 891,531 370,849 40,592 1,420 4 1,600 Hidroeléctrica 231.78
Cía. Industrial de 1912 270,740 122,239 0 24,168 0 769 0 2 900
Guadalajara S.A. Rio Blanco 59,014 17,363 63,020 3,800 - 98 0 120 144.69
Atemajac 6,240 31,637 63,020 9,016 - 250 2 300 105.46
La experiencia 205,486 73,239 63,020 11,352 - 421 0 480 152.58
1913 405,269 119,320 0 24,168 0 801 0 2 817
Rio Blanco 108,274 16,953 3,800 98 121 Hidroeléctrica 140.11
Atemajac 105,166 41,770 9,016 250 2 242 172.60
La experiencia 191,829 60,597 11,352 453 454 133.47
Cía.Industrial 1912
de Atlixco S.A. Metepec 465,885 263,690 0 34,472 - 1,565 5 1368 Hidroeléctrica 192.76
1913
Metepec 626,425 314,035 34,452 1,487 5 1230 Hidroeléctrica 255.31
La Hormiga S.A. 1912
La Hormiga 381,132 140,163 22,800 23,300 - 650 0 1,000 Hidroeléctrica 140.16
1913
La Hormiga 417,689 147,134 32,013 23,562 672 1,000 Hidroeléctrica 147.13
PROMEDIO 1893-1913 398,184 155,025 20,803 10,585 18,841 195 672 3 484,757 757 211.65
1. Datos de 1887
Fuente: AGN, Departamento del Trabajo, Caja 5, Exp. 3. Censo Industrial de fábricas de hilados y tejidos en México, 1912 y 1913. Cuadro 4. Grandes fábricas textiles, 1879-19178 de Goméz-Galvarriato (s/f)
y datos reportados al director general del timbre del semestre de 1 de noviembre de 1901 al 30 abril de 1902, reproducido en Everaert, D.Luis, 1989, pp. 158-159
Datos de producción
Productos Husos Telares Estampado
Cuadro 3. Producción de las principales compañías textiles de algodón en México, 1893-1913
161
Haber señala que durante los primeros años de la Revolución Mexicana (1910-
1913) las empresas manufactureras disminuyeron su producción por la ocupación de
sus fábricas por los ejércitos revolucionarios y la destrucción de los sistemas de
transportes. Sin embargo no dejaron de producir. Incluso algunas, como las fábricas
de telas y cigarros, generaron ganancias y repartieron dividendos. Por ejemplo en el
caso de CIDOSA esta cía. incrementó la producción en 10% en su fábrica de Río
Blanco. Tuvo un rendimiento promedio sobre sus acciones de 1910-1913 de 5.22%.
Repartió dividendos en 1912 de $20.02 y de $11.26 en 1913. La fábrica de Metepec
de Cía. Industrial de Atlixco aumentó su fabricación de mantas en 19% y entregó
dividendos por $3.00 en ambos años con un rendimiento promedio de sus acciones
de 3.55%. Santa Rosa de CIVSA incrementó su fabricación en 32%; mantuvo un
rendimiento promedio de 5.97% y entregó dividendos por $12.00 y $12.60
respectivamente.257
San Antonio Abad, la Colmena y Barron de la Cía. San Antonio Abad SA,
incrementaron su producción en 19% y 14%, pero la compañía no repartió
dividendos, aunque sí tuvo un rendimiento positivo de sus acciones que en promedio
fue de 4.35%.258
De 1914 a 1916 continuaron los ataques a los sistemas de transportes, la
ocupación de las plantas y los préstamos obligados que disminuyeron la producción
industrial de las fábricas de telas de algodón, papel, cerveza y vidrio. Por su parte la
industria del acero y del cemento permanecieron cerradas durante todo el periodo.259
Además, por el levantamiento de Venustiano Carranza en el norte, se provocó
una escasez de algodón para las fábricas textiles del centro del país. Esta escasez
obligó a San Antonio Abad, La Colmena y Barrón a cerrar sus puertas el 18 de
agosto de 1913. Otras 86 fábricas solicitaron ayuda al gobierno de Huerta para evitar
el cierre. Ante esta situación el Departamento de Trabajo propuso como solución
restablecer el transporte de algodón de La Laguna a los centros fabriles e importar,
temporalmente, algodón de Estados Unidos sin pagar derechos de importación. Aún
con estas medidas el algodón siguió escaseando y esto motivó a los empresarios de
257 Haber, op.cit, 1992, pp. 146-170. 258. Ídem 259 Ídem
162
la Confederación Fabril Nacional Mexicana a sostener una reunión con Huerta, el 14
de septiembre de 1913, para ofrecer su apoyo económico a cambio del
restablecimiento del tráfico de algodón. A pesar de ese apoyo económico, Huerta no
pudo restablecer el abasto de algodón, ni de otros insumos, como el combustible.260
Lamentablemente no se poseen datos numéricos para ejemplificar la caída en
la producción de las compañías textiles por la escasez de algodón durante este
periodo; sólo se cuenta con alguna información cualitativa sobre las fábricas de
CIDOSA y CIVSA.
De acuerdo a los informes del Consejo de Administración de CIDOSA, las
dificultades aumentaron a partir de 1914, debido a las frecuentes interrupciones del
tráfico, que complicaron el transporte de productos y provocaron escasez de
materias primas, de combustibles y de otros insumos imprescindibles en la
fabricación. 261
Por ejemplo, en Abril de 1914, CIDOSA solicitó a la Secretaría de
Comunicaciones un carro de ferrocarril para arrastrar ácido sulfúrico y carros para
aceite que le compró a la Cía. petrolera “El Águila” para la fábrica de Río Blanco.
CIVSA también solicitó carros de ferrocarril para transportar combustible a Santa
Rosa. Ambas peticiones se autorizaron y la Secretaría de Comunicaciones le ordenó
a la Cía. del Ferrocarril Mexicano que hiciera entrega de ellos.262
Por otra parte, cuando fue posible aprovechar el tráfico, hubo de hacerse
siempre con grandes riesgos debido a los frecuentes ataques de que eran objeto los
convoyes, y a la desorganización de los ferrocarriles, que hicieron que se perdieran
algunos envíos de productos manufacturados y materias primas263, como el ocurrido
en agosto de ese mismo año, cuando los accionistas de CIVSA solicitaron apoyo
para localizar los carros de algodón pedidos en Torreón y que se les transportó por
error a otra compañía.264
260 Ramírez Rancaño, Mario. Burguesía textil y política en la Revolución Mexicana. Serie de Sociología y política en México,
Instituto de Investigaciones Sociales. UNAM, México, 1987, pp. 98-101. 261 Informe rendido por el Consejo de Administración en 1914. Everaer, Luis. Río Blanco. Compañía Industrial de Orizaba
S. A. Centenario, 1899.-1989. Salvat México. El marqués, Querétaro, 1990, pp.88. 262 Archivo General de la Nación (AGN), Departamento del trabajo, Caja 81, Expediente 23, 1914. 263 Informe rendido por el Consejo de Administración en 1914. Everaer, Luis. Op.cit., pp. 88-89 264 AGN, Departamento del trabajo, Caja 79, Expediente 34, 1914.
163
Con el aumento del conflicto civil y la caída de Huerta en 1914, los industriales
debieron acercarse al gobierno de Venustiano Carranza. Al primer encuentro de los
industriales con Carranza, convocado por el gobierno en septiembre de 1914, sólo
acudió el 40% de los representantes de las fábricas. Entre ellos no estaban los más
importantes (CIDOSA, CIVSA, Cía. Industrial Manufacturera SA, etc.). Carranza
inició las sesiones poniendo énfasis en el monopolio del algodón cuando a los
industriales les preocupaba el arrastre del algodón de La Laguna al centro fabril y la
falta de insumos, como el combustible.265
En julio de 1915, CIDOSA solicitó apoyo a la Secretaría de Comunicaciones
para transportar algodón por ferrocarril ya que por falta de materia prima había
disminuido su producción y estaban a punto de suspenderla. La Secretaría le
contestó que no había material rodante pero que se atendería tan pronto fuera
posible. CIVSA padeció las mismas circunstancias para la fábrica de Santa Rosa.266
Asimismo para evitar pérdidas por la inestabilidad monetaria de los diferentes
gobiernos, los accionistas de CIDOSA y CIVSA tomaron la decisión de realizar todas
sus transacciones en peso oro.267
Aunque, “la constante baja de la moneda fiduciaria no tuvo consecuencias tan
directas gracias a las medidas que se tomaron en previsión, sí dio lugar a
dificultades para reunir las cantidades necesarias de moneda metálica para el pago
de los salarios (obligatorio por decreto)”.268 Por ejemplo en 1916, Juan Michel
apoderado de CIVSA, solicitó de $4,000 a $6,000 pesos en plata a la semana para
el pago de raya a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP). Dado que
BANAMEX sólo le ofrecía $1,500.00. La SHCP autorizó la petición y la envió a la
comisión de cambios y monedas.269
En 1917, el país volvió al orden constitucional con Carranza, pero las
comunicaciones ferroviarias siguieron siendo inseguras e inconstantes. CIDOSA
reportó en su informe de 1916, “la pérdida de una importante partida de algodón que
265 Ramírez, Rancaño, Op.cit., 1987, pp. 185-187. 266 AGN, Departamento del trabajo, Caja 101, Expediente 35 y 36, 1915. 267 Gómez Galvarriato, Aurora. “The impact of revolution: Busines and labor in the Mexican textil industry, Orizaba
Veracruz 1900-1930”. Tesis para doctor en Historia. Harvard University. Cambridge, Massachussets, Diciembre 1999ª, pp.
540-542. 268 Informe rendido por el Consejo de Administración en 1916. Everaer, Luis. Op.cit., pp. 90. 269 AGN, Departamento del trabajo, Caja 43, Expediente 19, 1916.
164
fue reducida a cenizas en uno de los ataques consumados en la línea del ferrocarril
Mexicano.270 El 9 de octubre de 1917 CIDOSA y otras compañías solicitaron al
gobierno carros de ferrocarril para transportar 500 pacas de algodón varadas.271
Además, el 24 de julio de 1920, el Gobierno de Veracruz solicitó apoyo al
Departamento de Trabajo para el arrastre de carros de combustible y algodón que,
de no llegar pronto, provocarían el cierre de la Fábrica de Santa Rosa de CIVSA.272
Los empresarios textiles también debieron enfrentar la exención de pago de los
derechos a los tejidos de algodón importados que provocaron la suspensión de las
transacciones, por seis meses, hasta que se establecieron los derechos abolidos.273
El 19 de julio de 1917 Carranza permitió la importación de productos textiles y
causó una guerra contra esta industria. La lucha inició con la Ley de Incautación de
las Fábricas, de septiembre de 1917, que amenazaba con expropiar las fábricas que
sostuvieran paros no justificados por parte de los propietarios, según la fracción XIX
del Artículo 123 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos. Esta
ley nunca se llevó a cabo dadas las protestas legales de los empresarios y la lentitud
de los senadores para aprobarla. Casi para terminar 1917, Carranza y los
industriales limaron asperezas en el Primer Congreso Nacional de Industriales,
organizado en noviembre. En éste los empresarios textiles, petroleros y mineros
lograron cierta benevolencia de Carranza al suprimir los decretos librecambistas,
aunque sólo faltaban 15 días para que expiraran.274
Otro problema fue la promulgación de leyes que protegían los intereses de los
trabajadores, como el artículo 123 de la Constitución de 1917 y la Ley de Trabajo del
Estado de Veracruz promulgada en 1918. Esta última provocó actos de indisciplina y
atentados contra personas e intereses de CIDOSA y CIVSA.275
En septiembre de 1919, 23 obreros tejedores de la fábrica de Santa Rosa, con
uso de violencia, cortaron la tela de los telares antes de que terminara el rollo y
colocaron una de distinto ancho. Alegaron que la fábrica a propósito cambio la tela
270 Informe rendido por el Consejo de Administración en 1916. Everaer, Luis. Op.cit., pp. 90. 271 Centro de estudios de Historia de México, CARSO, Fondo Venustiano Carranza, Carpeta 54, Legajo 6077. 272 AGN, Departamento del trabajo, Caja 209, Expediente 39. 273 Informe rendido por el Consejo de Administración en 1917. Everaer, Luis. Op.cit., pp. 91. 274 Ídem. 275 Informe rendido por el Consejo de Administración en 1918. Everaer, Luis. Op.cit., pp. 91.
165
por una menos ancha para disminuir el salario a los trabajadores. Ante esto Camilo
Maurer representante de CIVSA decidió cerrar la fábrica.276
La Junta de Conciliación de Arbitraje, por haber cerrado la fábrica, impuso a
Camilo Maurer pagar multa de $100 ó ir a la cárcel por 36 horas. Maurer solicitó
amparo para evitarlo, exponiendo que en CIVSA tanto la tela de 62 cm como la de
72 cm tenían el mismo pago, $1.40 los cien metros que estaba por encima de 99
centavos que pagaban otras fábricas.277
Más allá de estos conflictos, “lo que mayores perjuicios ocasionó a la producción
fue la suspensión de los trabajos nocturnos a causa del precepto de la Ley
Veracruzana que impuso que dichos trabajos fueran pagados con un aumento de 50
por ciento en el tipo de salarios. Fue hasta febrero de 1919 que se restableció
parcialmente el segundo turno en Río Blanco y en San Lorenzo, y completo en
Cerritos. Además CIDOSA también recibió daños por un incendio en el edificio de
acabados de Río Blanco en septiembre y una huelga general que duró cinco
semanas en octubre y noviembre.278
Fue hasta la década de 1920 que la producción textil logró recuperarse por
completo porque el gobierno de Calles (1924-1928) volvió a beneficiar a los
empresarios con tarifas proteccionistas para la industria y con la sustitución de
importaciones, entre ellas la de artículos de algodón, para poder disponer de fondos
para importaciones más básicas como la maquinaría.279
Los volúmenes de producción de la industria textil de algodón nacional de 1917
a 1930 se pueden consultar en el Anexo A. En él se observa que de 1917 a 1923 el
promedio de producción fue de 25,481,601 piezas, mientras que durante el 1925 a
1928 la producción alcanzó un volumen de 35,785,116 piezas.
En el siguiente apartado se analizarán los recursos y capacidades que hicieron a
las fábricas textiles de CIDOSA las de mayor producción y ganancias de 1889-1930.
276 Archivo General del Estado de Veracruz (AGEV), Sección Fomento, Serie Industria, Caja 170 (603), Expediente 53 de
1920. 277 Ídem. 278 Informe rendido por el Consejo de Administración en 1918 y 1919. Everaer, Luis. Op.cit., pp. 91-92. 279 Keremitsis, Op.cit, 1973, pp.228-229
166
Recursos
Agua
La industria textil mexicana dependió de la energía hidráulica desde que se
fundaron las primeras fábricas en el siglo XIX. En Puebla, las manufacturas
aprovechaban las aguas del río Atoyac; en el DF las del río Tlalnepantla; en Jalisco
las del Lerma-Santiago280
y en Orizaba la de los ríos Orizaba, Tlilapan y Blanco (Ver
Imagen 1). Las compañías que obtuvieron los derechos del agua de estos ríos
fueron CIDOSA, CIVSA y The Santa Gertrudis Jute Mill Company Limited.
Imagen 1. Río Blanco, alrededores de Orizaba.
Fuente: Archivo General de la Nación (AGN), Fototeca, propiedad artística y literaria.
Briquet A. No. 2.
La primera concesión de las aguas del río Orizaba fue otorgada el 7 de
noviembre de 1881 al señor Enrique Wiechers para el uso de la planta de Cerritos.
Fue por 624 litros por segundo, con un pago anual de $100. El 20 de abril de 1886 el
280 Keremitsis, Op.cit. 1973, pp. 99-108.
167
señor Wiechers vendió la fábrica con la concesión a la Cía. Manufacturera de
Cerritos, que -a su vez- las vendió a CIDOSA el 12 de julio de 1889.281
Signoret, Honnorat y Cía. Obtuvo mediante cesión de Enrique Camacho las
concesiones para las aguas del río Blanco y Salado, así como del manantial
denominado “La Laguna”, otorgadas por el municipio de Nogales el 4 de mayo de
1889 y por el 8 de abril de 1894. Estas concesiones pasaron inmediatamente a
CIDOSA.282
Con el objetivo de aumentar la fuerza motriz de sus fábricas los accionistas de
CIDOSA solicitaron concesiones adicionales a las ya mencionadas. El 28 de agosto
de 1895 requirieron al Ayuntamiento de Ixhuatlancillo les otorgara el permiso
correspondiente para tomar las aguas de los ríos Pala y Orizaba. La concesión que
recibió fue para establecer una toma de agua a 200 varas de distancia del puente
del municipio, con el compromiso de no modificar el curso del río y de devolver la
misma cantidad de agua que recoja. Asimismo, debía pagar por esta concesión la
suma de $100 adelantados a la Tesorería del municipio. No podía traspasar la
concesión sin permiso del ayuntamiento, ni usar el agua para fines distintos a los
convenidos.283 Posteriormente, el 6 de febrero de 1896 requirieron otra concesión:
ahora sobre el agua del río Blanco al municipio de San Juan del Río. Este Gobierno
les permitió tomar el agua que caía después del desagüe de la turbina del señor
Miguel Bringas, hasta antes de la toma que tiene la fábrica de yute Santa Gertrudis,
por un pago anual de $200.284 El 30 de octubre de 1897 la compañía firma un
contrato con el señor Bringas para que cediera de las aguas del Río Blanco a su
cargo, la cantidad de 5,000 litros de agua por segundo en tiempo de secas y hasta
10,000 litros por segundo en época de lluvias.285
Sin embargo, los ríos tenían muchas fluctuaciones en su caudal y a menudo
no resultaban suficientes para mover la maquinaría pesada. Esto cambió con el uso
de la energía hidroeléctrica que, además, permitió a las fábricas trabajar jornadas
281 Archivo Histórico del Agua (AHA), Fondo Aprovechamientos superficiales, caja 1436, expediente 19546. 282 AHA Fondo Aprovechamientos Superficiales, Caja 4516, Expediente 59830 y 59832. 283AHA, Fondo Aprovechamientos superficiales, Caja 1436, expediente 19546 284 AHA, Fondo Aprovechamientos Superficiales, Caja 1440, Expediente 19588. 285 AHA, Fondo Aprovechamientos Superficiales, Caja 4457, Expediente 58825.
168
más largas con un control más riguroso de las temperaturas, y disminuir el peligro de
incendios de los almacenes de algodón.286
La primera hidroeléctrica en la industria de tejidos de algodón fue la
instalación de Rincón Grande (ver Imagen 2) propiedad de CIDOSA. Esta planta fue
inaugurada en 1897. Contaba con 4 turbinas que accionaban 4 generadores
eléctricos de 550 caballos de fuerza (HP), encargados de distribuir energía a las tres
fábricas propiedad de la compañía.287.
Fuente AGEV, Fondo Orizaba, Foto 92, Negativo 31.
CIDOSA también contó, a partir de 1910, con la hidroeléctrica de Cocolapan
que utilizó las aguas del Río Blanco y tuvo una capacidad de 2,200 caballos de
fuerza. Y la planta de Boquerón que se ubicó en un punto intermedio entre Río
Blanco y las okantas Cocolapan y Rincón Grande288. Esta instalación aprovechó las
aguas del río Blanco después de su confluencia con el río Orizaba. Su canal tuvo
286 Keremitsis, Op.cit. 1973, pp. 99-108. 287 Sothworth, John. Veracruz Ilustrado. Editora de Gobierno de Veracruz, México, 2005, pp.122. 288 Los planos de los canales, acueductos, instalaciones y de las obras hidráulicas e hidroeléctricas de CIDOSA se encuentran
en el fondo de Aprovechamientos Superficiales del AHA.
Imagen 2. Hidroeléctrica de Rincón Grande
169
una capacidad de 7,800 litros por segundo y producía 2,800 caballos de fuerza. Las
líneas de transmisión tuvieron una longitud de 21 kilómetros.289
Las hidroeléctricas de CIDOSA se abastecieron de las diferentes concesiones
de agua que ya se enumeraron y de otras más que le otorgaron y/o adquirió
CIDOSA entre de 1899 y 1911, como la que consiguen con la compra de la fábrica
de Cocolapan, en 1899, por “hasta 8,125 litros por segundo como máximo de las
aguas del río Blanco”290, o la del 24 de enero de 1902, cuando la Secretaría de
Fomento le concede usar 4,000 litros más de agua del río Blanco y 7,509 litros del
río Salado291, y la de 1908, cuando el señor Adolfo Díaz Rugama les traspasó la
concesión de las aguas del río Blanco, del tramo de la Cía. de Yute hasta la caída de
Tuxpango, con lo cual CIDOSA obtuvo el derecho de utilizar 10,000 litros más por
segundo.292
Otras compañías que tenían hidroeléctricas y concesiones sobre los ríos en
Orizaba fueron la compañía Manufacturera de Yute Santa Gertrudis SA y la
Compañía Industrial Veracruzana SA (CIVSA). Santa Gertrudis obtuvo el 19 de
mayo de 1909 el derecho de utilizar 18,000 litros por segundo de las aguas del río
Blanco. La concesión fue por 99 años y la utilizaba para dotar de la corriente a su
planta hidroeléctrica que se ubicaba en el margen izquierdo del río Blanco, en el
fondo de la barranca del mismo nombre, entre los municipios de Ixtaczoquitlán y
Orizaba. Esta instalación tenía una superficie de 183,345 metros2 de terreno y 47,
472 metros2 sobre el río.293
CIVSA contó con dos concesiones sobre el uso del agua del río Blanco: una
por 5,000 litros por segundo, otorgada en 1895 a Víctor Garcín, quien la cedió a la
compañía; y otra hasta por 2,500 litros, concedida en 1897 para el aprovechamiento
del agua para producir energía eléctrica en su instalación de Zoquitlán.294
Las diferentes concesiones sobre las aguas de los ríos de la región de
Orizaba otorgadas de 1889 a 1911 a CIDOSA y otras compañías se encuentran
289 Archivo Histórico de Notarías de la Ciudad de México (AHNM), Notaría 5 a cargo de Bernardo Cornejo, Escritura 9378,
volumen 113, 11/9/1920. 290 AHA, Fondo Aprovechamientos superficiales, caja 1436, expediente 19546. 291 AHA, Fondo Aprovechamientos Superficiales, Caja 172, Expediente 4020 292 AHA, Fondo Aprovechamientos Superficiales, Caja 4528, Expediente 59779 293 AHA, Fondo Aprovechamientos Superficiales, Caja 4513, Expediente 59678 294 AHA, Fondo Aprovechamientos Superficiales, Caja 4513, Expediente 59773
170
resumidas en el Cuadro 4. De acuerdo a la información que en él se presenta, se
observa que CIDOSA tenía autorizados 45,489 litros por segundo de agua en época
de secas, mientras que Santa Gertrudis sólo contaba con 18,000 litros y CIVSA con
12,500. Es decir, CIDOSA gozaba de 153% más volumen de agua que las otras
compañías concesionadas de la región.
Cuadro 4. Concesiones de agua de los ríos de la región de Orizaba, de 1889 a 1911. Compañía Fecha de la
concesión
Río Temporada
o periodo
Volumen de
agua (lts x
segundo)
Pago
anual
Persona o compañía
que cedió /dependencia
que otorgo
Fábrica o hidroeléctrica
donde se utilizaron
CIDOSA 12/07/1889 Orizaba 624 $ 100.00 Municipio de Orizaba Cerritos
04/05/1889 Blanco y Salado Signoret, Honnorat y cía. Río Blanco
08/04/1894 La Laguna Signoret, Honnorat y cía. Usos industriales
28/08/1895 Pala y Orizaba 100.00$ Mpio. Ixhuatlancillo Cerritos
06/02/1896 Tlilapan y Blanco 200.00$ Mpio. San Juan del Río Rincon Grande
26/08/1897 Tlilapan y Blanco Secas 10,000 Scría. Fomento Rincon Grande
26/08/1897 Tlilapan y Blanco lluvías 20,000 Scría. Fomento Rincon Grande
30/10/1897 Blanco y Orizaba secas 5,000 Sr. Bringas Río Blanco
30/10/1897 Blanco y Orizaba lluvías 10,000 Sr. Bringas Río Blanco
11/01/1900 Blanco 8,125 Escandon, Hmnos. Cocolapam
06/10/1903 Blanco 4,000 Scría. Fomento Hidroeléctrica Cocolápam
29/01/1907 Blanco y salado 7,509 Scría. Fomento Río Blanco
24/01/1908 Blanco 10,000 Adolfo Díaz Rugama San Lorenzo
29/12/1908 Laguna Nogales 71 Mpio. Nogales Usos industriales
19/10/1908 Salado Jun-Nov 100 Mpio. Nogales Usos industriales
19/10/1908 Salado Dic-May 60 Mpio. Nogales Usos industriales
TOTAL (secas) 45,489
The Santa 11/05/1909 Blanco 18,000 Mpio. Ixtaczoquitlán Santa Gertrudis
Gertrudis Jute mill
company limited
CIVSA 22/12/1897 Blanco Secas 2,500
20/10/1898 Blanco 5,000 Víctor Garcín Santa Rosa
25/11/1911 Blanco Secas 10,000 Scría. Fomento Zoquitlán
lluvías 13,000
TOTAL (secas) 12,500
Fuente: Archivo histórico del Agua (AHA)
Fondo Caja Expediente
Aprovechamientos Superficiales 172 4,020
Aprovechamientos Superficiales 4505 59,644
Aprovechamientos Superficiales 1440 19,588
Aprovechamientos Superficiales 4516 58,830
Aprovechamientos Superficiales 4528 60,052
Aprovechamientos Superficiales 4457 58,825
Aprovechamientos Superficiales 4506 59,678
Aprovechamientos Superficiales 4513 59,779
Aprovechamientos Superficiales 4513 59,773 De acuerdo a este mismo cuadro, el agua concesionada a CIDOSA se
utilizaba de la siguiente forma:
1. Las aguas del río Salado y del río Blanco, en la Fábrica de Río Blanco, ubicada en el municipio de Tenango. Esta manufactura tenía cinco turbinas y 15 motores eléctricos que recibían la fuerza de la instalación de Rincón Grande.
2. Otra parte de las aguas del Río Blanco (10,000 litros) se usaba en la fábrica de San Lorenzo, ubicada en la municipalidad de Nogales. Esta recibía la fuerza motriz de 3 turbinas y dos motores eléctricos accionados por la instalación de Rincón grande.
171
3. Las aguas de los ríos Pala y Orizaba en la fábrica de Cerritos situada en la municipalidad de Orizaba. Cerritos tenía dos turbinas que eran movidas por las aguas del río Orizaba que llegaban a través de un acueducto (ver imagen 3). Y contaba un motor eléctrico que recibía energía de Rincón Grande.
4. 12,125 litros de las aguas de Río Blanco en la fábrica e hidroeléctrica de Cocolapan ubicadas en el municipio de Orizaba. La fábrica tenía dos turbinas y era casi toda movida por electricidad. La instalación eléctrica de Cocolapan producía 2,200 caballos y contaba con un canal y tubos de transmisión (ver Imagen 3).
5. -Las aguas del río Tlilipan en la hidroeléctrica de Rincón Grande ubicada en el municipio de San Juan del Río. Rincón Grande producía una fuerza de 2,250 caballos. Y contaba con una concesión para reunir a las aguas del río de Tlilipan a las del río Blanco para ser utilizadas en su totalidad con un costo relativamente pequeño, atendiendo las necesidades del canal existente.295
La ubicación de las fábricas textiles, hidroeléctricas y fuentes de agua propiedad
de CIDOSA se encuentran señaladas en el mapa 1. En él se muestra la cercanía
con los ríos y con las vías del ferrocarril en su ruta Veracruz- Ciudad de México.
Mapa 1. Ubicación de las fábricas, hidroeléctricas y fuentes de agua de CIDOSA,
1900-1930.
Amatlánde los Reyes
CÓRDOBAAtzacán
IxtaczoquitlánRafael
DelgadoNogales
CD. MENDOZA
Maltrata
ORIZABA
Zongolica
0 5 10 15 20 25 50 75 km
® Derechos Reservados. Secretaria de Comunicaciones y Transportes.
Fuente: http://portal.veracruz.gob.mx/portal/
295 AHNM, notaría 5 a cargo de Bernardo Cornejo, Escritura 2436, Volumen 35 del 24/4/1908 y Sothworth, John. Op.cit.
2005, pp.122.
172
Imagen 3. Pasillo de transmisión de Cocolapan y acueducto de Cerritos.
Fuente: AGEV, Fondo Orizaba, Foto 67 y 71..
173
En enero de 1912, Antonio Reynaud, Director General de CIDOSA solicitó a la
Secretaría de Fomento que extendiera sus concesiones de uso de agua para fines
industriales de los ríos Blanco, Tlilipan, Salado y de la laguna de Nogales en
Orizaba, Veracruz, a 99 años. Argumentó que de acuerdo al balance de 1911 (ver
Anexo D), las obras hidráulicas, eléctricas y a las de la industria misma,
representaban un capital invertido de más de $18, 000, 000, y por lo cual “no había
en todo el país un conjunto de obras, edificios y maquinaría de tal importancia” 296.
El valor de las cuatro fábricas y las tres instalaciones hidroeléctricas de CIDOSA
presentados en el balance de 1911 se encuentra especificado en el Cuadro 5. Si
comparamos esos valores con el estudio de evaluación realizado -a petición de los
propios accionistas- por el arquitecto Miguel Ángel De Quevedo y el Ingeniero
Oyarxbal en 1907, se observa que los valores asignados a las inversiones de
CIDOSA fueron muy similares. Excepto para la fábrica de Cocolapan que fue
remodelada y reinició operaciones en 1910, por lo cual aumentó su valor. Y para la
hidroeléctrica de Boquerón que empezó a operar en ese mismo año.
La Secretaría estudió la solicitud de CIDOSA y la aprobó el 13 de junio de
1912.297
CIVSA también solicitó a la Secretaría de Fomento en noviembre de 1911 que
prorrogara sus concesiones a 99 años y que aumentara el volumen autorizado hasta
por 10,000 litros en seca y 13,000 en lluvias.298 Justificó su petición entregando
informes en que demostraba que sus inversiones equivalían a $6,030,000 pesos, de
los cuales la obra hidráulica representaba $1,039,000. La petición de 99 años no fue
autorizada y sólo se le otorgaron 70 años, que debían ser contados a partir del 26 de
abril de 1911.299.
296 AHA, Fondo Aprovechamientos Superficiales, Caja 4528, Expediente 60,052. 297 Ídem. 298 AHA, Fondo Aprovechamientos Superficiales, Caja 4523, Expediente 59970. 299 AHA, Fondo Aprovechamientos superficiales, caja 4523, expediente 59972
174
Cuadro 5. Inversión en planta de CIDOSA 1907-1911 (pesos corrientes).
1907 1911
Fábrica Río Blanco 10,262,452.93$ 10,951,872.38$
Fábrica San Lorenzo 2,625,000.00$ 2,630,697.39$
Fábrica Cerritos 795,000.00$ 798,723.31$
Fábrica Cocolápan 1,454,022.88$ 2,410,354.21$
Instalación eléctrica Cocolapan 400,000.00$ 497,086.81$
Instalación hidroeléctrica Rincón Grande 800,000.00$ 973,902.60$
Instalación hidroeléctrica Boquerón 158,620.62$
Muebles y enseres 8,809.53$
16,336,475.81$ 18,430,066.85$
Fuente: AHA, Aprovechamientos Superficiales, Caja 4528, Expediente 60052
Archivo Histórico de Notarías de la Ciudad de México
Notaría / Notario Fecha Volumen Escritura
5. Bernando Cornejo 24/04/1908 35 2436
TOTAL
Activo
Por el uso del agua concesionada a 99 años, CIDOSA pagó a la Secretaría de
Fomento $9,727.25, en 1917 y de $1,333.60 para 1918. El monto de un año a otro
disminuyó drásticamente, debido a que CIDOSA y algunas otras empresas
hidroeléctricas solicitaron a la Dirección de Aguas se le eximiera del pago de la
fuerza teórica que amparan sus concesiones, pues por causas de fuerza mayor, no
podían hacer uso de todas las dotaciones de agua a que tenían derecho. Esta
petición fue autorizada por el presidente Venustiano Carranza, el 14 de noviembre
de 1918.300
Los pagos correspondientes por uso de agua de CIDOSA de 1917 a 1927 a la
Secretaría de Fomento se especifican en el Cuadro 7. En este cuadro se muestran
los datos de fuerza efectiva y de fuerza teórica tanto para las fábricas como para las
instalaciones hidroeléctricas. A partir de 1918 el total de contribución anual sólo
incluye el uso de la fuerza efectiva. El cuadro también indica que la electricidad
generada se destinaba para uso propio y para la venta. Rincón Grande vendía 130
HP a las villas de Río Blanco y Nogales para alumbrado y Cocolapan 46 HP de su
fuerza efectiva al municipio de Orizaba. Ambas hidroeléctricas cobraban $1 pesos
por cada HP.301
300 AHA, Fondo Aprovechamientos superficiales, caja 4020, expediente 172 301 Ídem.
175
En el año de 1924 las plantas hidroeléctricas de Cocolapan, Rincón Grande y
Boquerón, produjeron la mayor cantidad de fuerza efectiva del periodo de 1917 a
1927. La cantidad de kilo wat (KW) que corresponde a esa fuerza efectiva se
presenta en el Cuadro 6. En él se incluye la producción mensual de las
hidroeléctricas de CIDOSA para 1924 y de la planta Zoquitlán de CIVSA para 1935.
Se presentan datos de diferentes años porque no fue posible localizarlos para la
misma fecha. Aún así es posible compararlos dado que ambos representan
volúmenes de producción en unidades.
Cuadro 6. Energía eléctrica en KW producida por CIDOSA y CIVSA, 1924 y 1935.
CIVSA 1935
MES COCOLAPAN RINCON GRANDE BOQUERON TOTAL ZOQUITLÁN
Enero 83,040 230,400 118,560 432,000 301,650
Febrero 117,152 246,900 37,440 401,492 287,790
Marzo 152000 306,800 458,800 303,790
Abril 184,288 284,400 468,688 274,560
Mayo 170,016 331,400 501,416 122,720
Junio 164,864 300,100 107,040 572,004 183,920
Julio 89,280 263,700 76,640 429,620 191,580
Agosto 178,000 102,400 280,400 178,220
Septiembre 49,856 224,300 189,800 463,956 159,310
Octubre 334,706 212,500 547,206 180,570
Noviembre 327,586 176,700 504,286 164,360
Diciembre 341,293 187,600 528,893 110,290
Totales 2,014,081 2,942,800 631,880 5,588,761 2,458,760
Fuente: AHA, Fondo Aprovechamientos supeerficiales, Caja 172, Expediente 4020, y
Caja 1817, Expediente 27165.
CIDOSA 1924
De acuerdo al Cuadro 6, la planta de CIVSA superaba en producción de
energía a Cocolapan y Boquerón. Pero si las comparamos contra el total de energía
producida por las tres hidroeléctricas de CIDOSA, se observa que su producción era
56% menor.
A continuación se revisará los procesos de trabajo en los cuales se utilizó la
energía producida por las hidroeléctricas de CIDOSA.
176
Cuadro 7 . Impuestos pagados por el uso de agua de las fábricas textiles e instalaciones hidroeléctricas de CIDOSA, 1917-1927 (pesos corrientes)
FÁBRICAS SAN LORENZO RIO BLANCO Uso Industrial 1 SAN LORENZO RIO BLANCO Uso Industrial 1 SAN LORENZO RIO BLANCO Uso Industrial 1
FUERZA EFECTIVA Volumen máximo concedido 4,761.936 4,000 7509 4,761.936 780 1,266.10 4,761.936 Gto. minimo del rio Blanco/Orizaba/Tilapan
2,000 3,500
Promedio aprovechable 3,000 5,504.50 Altura de caida 26 23 Capacidad máxima 940 1588 780 1,266.10 Mitad de la anterior 390 633.1 390 633.1 Menos 75 Caballos efect. 315 558.1 315 558.1 A .75 en 1917 y .5 H.P. otros 705.00 $ 1,191.00 $ 238.05 $ 157.50 $ 279.05 $ 238.10 $ 157.50 $ 279.05 $ 238.10 $ FUERZA TEORICA Caballos teoricos corresp. 940 1,588 520 844.1 520 844.1 a .025 el H.P./$0.05 millar 470.00 $ 794.00 $ 130.00 $ 211.03 $ 130.00 $ 211.03 $ HIDROELÉCTRICAS COCOLAPAN RINCON
GRANDE BOQUERON COCOLAPAN RINCON
GRANDE BOQUERON COCOLAPAN RINCON
GRANDE BOQUERON
FUERZA EFECTIVA Producida para uso propio 2114 2705 388.50 724.60 279.80 552.60 726.46 198.90 Producida a la vta (pago $1) Menos 75 Cab. Efec 204.80 A .75 en 1917 y .5 H.P. otros 1,585.50 $ 3,762.00 $ 2,028.75 $ 194.25 $ 362.30 $ 102.40 $ 276.30 $ 363.23 $ 99.45 $ FUERZA TEORICA Volumen concedido 8,125.00 10,000.00 7,733.00 Gto. minimo del rio Blanco/Orizaba/Tilapan 3,800.00 8,000.00 Promedio aprovechable 5,962.50 9,000.00 Altura de caida 27.88 41.80 27.60 Capacidad máxima 1,662.30 3,762.00 2,134.00 Menos fza producida 388.50 724.60 279.80 Total HP efectivos 1,273.80 3,037.40 1,854.30 1,273.80 1,854.30 3,037.40 Cab.teorico equivalentes 2,114 7,424 2,705 1,698.40 4,049.90 2,472.40 1,698.40 2,472.40 4,049.90 a .5 en 1917 y .25 H.P. otros 1,057 $ 3,712 $ 1,353 $ 424.60 $ 1,012.47 $ 618.10 $ 424.60 $ 618.10 $ 1,012.47 $ AGUAS TORRENCIALES NO APROVECHAS Volumen medio aprovechable 3,500.00 Altura de caida 41.80 Capacidad teorica durante 6 meses
1,950.70 1950.7
En un año 975.40 A .25 H.P. 243.85 $ 243.85 $ Contribucion anual total 9,272.25 $ 1,333.60 $ 2,640.04 $ 1. Las fuentes de uso industrial son la Laguna de Nogales y el Canal de Mirafuentes. Se miden en metros cúbicos y su pago es de $ 0.05 por millar Fuente: Archivo histórico del agua (AHA) Fondo Aprovechamientos superficiales, caja 172 Expediente 4020.
1918 1919 1917
177
Cuadro 7 . Impuestos pagados por el uso de agua de las fábricas textiles e instalaciones hidroeléctricas de CIDOSA, 1917-1927 (pesos corrientes)
FÁBRICAS San Lorenzo Rio Blanco Uso Industrial San Lorenzo Rio Blanco Uso Industrial San Lorenzo Rio Blanco Uso Industrial FUERZA EFECTIVA Volumen máximo concedido 4,000 7,509 4,761,936 4,000 7,509 4,761,936 4,000 7,509 4,761,936 Gto. minimo del rio Blanco/Orizaba/Tilapan 2,000 3,500 2,000 3,500 2,000 3,500 Promedio aprovechable 3,000 5,504.50 3,000 5,504.50 3,000 Altura de caida 26 23 26 23 26 Capacidad máxima 780 1,266.10 780 1,266.10 780 Mitad de la anterior Menos 75 Caballos efect. 705.00 1,191.10 705.00 1,191.10 A .75 en 1917 y .5 H.P. otros 352.50 $ 595.53 $ 238.10 $ 352.50 $ 595.53 $ 238.10 $ 390.00 $ 863.54 $ 238.10 $ FUERZA TEORICA Caballos teoricos corresp. 1,040.00 1,727.07 a .025 el H.P./$0.05 millar 520.00 $ 863.54 $ HIDROELÉCTRICAS COCOLAPAN RINCON
GRANDE BOQUERON COCOLAPAN RINCON
GRANDE BOQUERON COCOLAPAN RINCON
GRANDE BOQUERON
FUERZA EFECTIVA Producida para uso propio 611.17 731.63 659.61 435.76 370.23 708.33 695.01 323.10 540.46 Producida a la vta (pago $1) 46 130.00 46 130.00 Menos 75 Cab. Efec A .75 en 1917 y .5 H.P. otros 305.58 $ 365.81 $ 329.80 $ 263.88 $ 315.12 $ 354.17 $ 393.50 $ 291.55 $ 270.23 $ FUERZA TEORICA Volumen concedido Gto. minimo del rio Blanco/Orizaba/Tilapan Promedio aprovechable Altura de caida Capacidad máxima Menos fza producida Total HP efectivos Cab.teorico equivalentes 2,032.32 6919.87 2039.39 a .5 en 1917 y .25 H.P. otros 215.84 $ 890.53 $ 203.94 $ AGUAS TORRENCIALES NO APROVECHAS Volumen medio aprovechable Altura de caida Capacidad teorica durante 6 meses En un año A .25 H.P. Contribucion anual total 2,097.12 $ 2,119.29 $ 3,887.23 $ 1. Las fuentes de uso industrial son la Laguna de Nogales y el Canal de Mirafuentes. Se miden en metros cúbicos y su pago es de $ 0.05 por millar Fuente: Archivo histórico del agua (AHA) Fondo Aprovechamientos superficiales, caja 172 Expediente 4020.
1927 1924 1925
178
Procesos de trabajo.
El proceso de trabajo de hilados y tejidos de algodón en las grandes fábricas
inicia con “la limpieza del algodón en las batientes y la separación de fibras y
eliminación de la borra por medio de cardas. Después se realiza el doblado y
estirado de las fibras (en los estiradores y veloces) para uniformarlas y hacer más
delgadas. De ahí se procede a la hilatura, en donde se estiran y tuercen las fibras en
los husos hasta conseguir el tamaño del hilo deseado. Se tejen los hilos en los
telares y, finalmente, se destina al blanqueo, tintura, estampado y doblado para que
le den la presentación final a la tela”.302
La maquinaria y los procesos de trabajo que las fábricas de tejidos e hilados de
algodón utilizaron en México a partir de 1910, fueron:
1) Cargadora para colocar las pacas de algodón que alimentan la abridora 2) Abridora: da apertura a las pacas de algodón, desintegra el algodón que
viene comprimido y hace las hebras. Si se desea obtener diferentes hilos se mezclan los algodones de diferentes calidades. Las fibras más resistentes y finas se utilizaban para hilo de pie, y las menos resistentes y gruesas para hilo de trama
3) Batiente: enrolla las hebras. 4) Cardas, que peinan, limpian perfectamente el algodón y separan, una por
una, las fibras de modo que al salir forma una cinta. 5) Reunidora de telas: cuando se da doble cardado, se debe pasar por las
reundidoras, que junta las cintas en una napa para el doble cardado. 6) Peinadoras. 7) Manuares o estiradoras que doblas y estiran 8) Pabiladoras o veloces gruesos que doblan y estiran 9) Máquinas de hilar o tróciles para estirar, torcer y generar hilo. Los tróciles
tienen canillas. 10) Carretero de canilla, que pasa los hilos de canilla a carrete para limpiarlos y
acumularlos en los carretos especiales del urdidor. 11) Urdidor, bastidores que peinan y donde se colocan los hilos. 12) Máquina engomadora, para reunir todos los hilos que componen el ancho de
la tela. 13) Bastidores de atado y de repasado, para formar la tela de acuerdo al dibujo. 14) Telares, que tejen los hilos. 15) Dobladoras, que mediante operaciones mecánicas miden la tela y le dan la
presentación final.
302 Chavez, Orozco. Monografía económico-industrial de la fabricación de hilados y tejidos de algodón. Secretaría de la
Economía Nacional, Departamento de Industrias, México, 1933, pp. 43-51 (Biblioteca del Centro de estudios de Historia de
México, CARSO).
179
16) Foulares (rodillos) y Jigger (tinta con rodillos) para el tinte. 17) Aprestos y tórculos para el estampado.303
Estas máquinas se agruparon por tipo de operación o por procesos y se
organizaron físicamente en “departamentos donde se juntaron las máquinas
especializadas en una sola operación o en una sola pieza”304, como el departamento
de preparación e hilados, donde se instalaron las máquinas abridoras de las pacas
de algodón, los batientes, las cardas y demás maquinaria que limpiaban e hilaban el
algodón. El departamento de tejidos, que tenía los telares, urdidores y engomadoras.
El departamento de blanqueo, con sus ollas, estufas y secadoras se encargó de
hacer la costura de piezas y el chamuscado para eliminar borras. 305
En el desengomado se lavaba con sosa para eliminar el pegamento de los hilos.
Posteriormente se secaría. La tintorería, con los tanques, las rociadoras y
oxidadoras se encargaban de agregar colores sustantivos o distractos y colores
básicos que no se fijaban directamente al algodón pero daban tonos muy vivos. El
departamento de estampado realizaba con los aprestos, tórculos, engomadoras, y
dobladoras, el color, vaporizado, lavado, ensanchado y presentación final de la
tela.306
En CIDOSA de 1892 a 1920, la fábrica de Río blanco estuvo destinada a la
elaboración de hilados tejidos y estampados de algodón. Sus principales
departamentos fueron los de hilados, tejidos, blanqueo, tintorería, estampe y
acabados. El departamento de hilados se formó por 14 batientes dobles y las
correspondientes máquinas sacudidoras; 117 cardas, 11 estiradoras y 80
pabiladores o veloces y 116 troxiles. Este departamento surtía de hilazas a 1,685
telares modernos cuyos productos pasaban para su acabado al departamento de
blanqueo, tintorería y a 10 máquinas de estampe.307
Río Blanco también contó con almacenes muy amplios para las telas elaboradas,
para la materia prima, materiales, refacciones, productos químicos. También tenía
303 Idem 304 Coriat, Op. cit, 1982, pp. 42. 305 Chavez, Orozco, Op.cit, 1933, pp.43-51 306 Idem 307 AGN, Departamento del trabajo, Caja 275, expediente 1 y Caja 603 Expediente 2, 1921.
180
talleres de mecánica, fundición, carpintería, departamentos de tintoreras, calderas y
maquinaria eléctrica. La dirección, la administración, y el personal superior tenían
habitaciones bien acondicionadas en el mismo perímetro de la fábrica. Fuera de
éstos se encontraban las casas del personal secundario: empleados y obreros con
sus familias, el mercado, la iglesia. Estas casas formaban un pueblo de importancia
que cubría una gran extensión de terreno (47,555 mts2). Tenía calles amplias,
jardines, escuelas y demás servicio públicos (alumbrado público o privado y agua).
Poseía extensos terrenos en los poblados de alrededor y contaba con obras
hidráulicas que desarrollaron una fuerza de 1,580 HP.308
La fábrica de San Lorenzo estuvo igualmente destinada a la elaboración de
hilados y tejidos de algodón pero no contó con tintorería ni estampado. Sus 1536
telares y demás maquinaria de hilados se encontraban situados en amplios salones,
a lado de almacenes de materias primas y productos, oficinas y casa para la
dirección, empleados y obreros. Las obras hidráulicas con toma de agua propia del
río Blanco le proporcionaron fuerza directa de 1,040 caballos de fuerza. 309
La fábrica de Cocolapan fue destinada como las demás fábricas de la compañía
a la elaboración de hilados y tejidos de algodón. Tuvo 1079 telares fabricados en
Europa y contó con maquinaria para elaborar tejidos de fantasía. Toda su
maquinaria fue movida por fuerza eléctrica, generada por la antigua instalación
hidráulica. Debido a que se ubicaba muy cerca del centro de la ciudad de Orizaba,
su edificio y terrenos aledaños, tenían un valor comparativamente mayor que los de
las demás fábricas. 310
La fábrica de Cerritos utilizó las aguas del río Orizaba y el Pala, de donde obtenía
una fuerza de 316 caballos de fuerza. Disponía de 306 telares entre antiguos y
modernos. No contaba con estampado ni tintorería. El edificio de la fábrica era una
instalación antigua, así como los departamentos de administración y la casa de los
obreros y empleados.311 Los departamentos de hilados, tejidos y estampados de las
fábricas de CIDOSA se muestran en la Imagen 5.
308 AHNM, Notaría 5 a cargo de Bernardo Cornejo, Escritura 9378, volumen 113, 11/9/1920. 309 Ídem. 310 Ídem. 311 Ídem.
181
La imagen 5 se forma por las máquinas de batientes, hilados, telares y urdidores
del departamento de hilados y tejidos y por las afelpadoras y estampadoras del
departamento de estampados. Las fotografías muestran que los salones de las
fábricas eran de grandes dimensiones, pues debían dar cabida a cientos o miles de
estas máquinas, además del material y personal que necesitaban para operarlas.
Tan sólo en Río Blanco existían “en su salón de hilatura 35,000 husos, además de
columnas, flechas, poleas, bandas, horquillas y otras máquinas que resultaban de
gran impacto visual, acrecentado por el intenso y persistente estruendo que
producían los telares”.312
En el caso de las demás compañías su maquinaria y organización de sus plantas
fueron similares a los utilizados por las fábricas de CIDOSA. Por ejemplo en Santa
Rosa, propiedad de CIVSA, se tenían los departamentos de: recepción de
materiales, distribución de productos terminados, gerencia, un taller de
mantenimiento y los de hilados, tejidos, estampe, acabados, blanqueado y
tintorería.313 El departamento de hilados contaba con 13 batientes, 103 cardas, 10
estiradores, 74 veloces y 103 tróxiles. El departamento de tejidos contaba con 1435
telares y 4 máquinas de estampe.314
Tanto CIDOSA como CIVSA tenían en sus fábricas una integración vertical de
hilados, tejidos y estampados. Sin embrago esta integración solo fue parcial, ya que
no producían su principal materia prima, que era el algodón.
Las máquinas que poseían Rio Blanco y Santa Rosa en sus departamentos de
hilados y tejidos entre 1912-1913, se enumeran en el Cuadro 8.
312 Everaer, Luis. Río Blanco. Compañía Industrial de Orizaba S. A. Centenario, 1899.-1989. Salvat México. El marqués,
Querétaro, 1990, pp. 72. 313 Goméz- Galvarriato, Aurora, Op.cit.,1999ª, pp.168. 314 AGN, Departamento del trabajo, Caja 275, expediente 1 y Caja 603 Expediente 2.
182
Cuadro 8. Maquinaría de CIVSA y CIDOSA, 1912-1913.
Departamentos
CIVSA CIDOSA
Santa Rosa Río Blanco
Hilados
Abridoras 1 nd
Batiente 13 14
Cardas 103 117
Estiradores 10 11
Veloces 74 80
trociles 103 116
Husos 40,592 42,528
Tejidos
Cañoneros 8 nd
Urididores 18 nd
Engomadoras 7 nd
Telares 1,435 1,654
Estampe 4 10
Fuente: AGN, Departamento del trabajo, Caja 275, exp 1
Caja 603, Expediente 2 y AHA, Caja 4523 Expediente 59972.
1912
Sólo se incluyó a Río Blanco y Santa Rosa en el cuadro anterior porque eran casi
iguales en capacidad de producción –más de 40,000 husos y 1,000 telares-. Las
demás fábricas de las otras compañías se presentan en el anexo B. En él se incluye
una lista detallada de las máquinas y departamentos de las fábricas de Hércules y
Río Grande de la Cía. Industrial Manufacturera SA y de La Experiencia, Atemajac y
Río Blanco de la Cía. Industrial de Guadalajara SA (CIGSA). Estas listas especifican
la capacidad, marca y potencia de cada máquina.
Las listas, junto con el Cuadro 8, nos revelan que las fábricas textiles en México
de 1890 a 1930 aplicaban una organización funcional que consistía en
“departamentos especializados integrados hacia atrás y hacia adelante; para
asegurar un flujo continuo de materias primas y productos. Sin embargo, este tipo de
organización les generó altos costos de coordinación y un gran número de activos
especializados”315, como ciertas máquinas o patentes. Las patentes e inventos que
se desarrollaron en las fábricas, o por los socios accionistas de CIDOSA, se
enumeran en el siguiente apartado.
315 Miles, Raymond y Snow C. Charles. Causes of failure in network organizations” en California management review.
Summer, 1992, p.61.
183
Imagen 5. Departamento de hilados y departamento de tejido de la fábrica de
Cerritos
Fuente: AGEV, Fondo Orizaba, fotos 77,78,81
184
Imagen 5. Departamento de hilados de la fábrica de Cocolapan.
Fuente: AGEV, Fondo Orizaba foto 69 y 70.
Hilados
Urdidores
185
Imagen 5. Departamento de estampado de la fábrica de Río Blanco.
Fuente: Museo del Valle de Barcelonnette, Francia mostradas en García Díaz, Bernardo (2007), pp. 61, 69.
Afelpadoras
Estampadoras
186
Patentes
De 1890 a 1920 las compañías textiles utilizaron maquinaría y procesos de
trabajo importados de Estados Unidos o de Inglaterra. Debido a las facilidades para
comprarlas (exención de aranceles, precios bajos, etc.) y que ninguna compañía
invirtió en construir maquinaría textil o desarrollar tecnología.316 Sólo realizaron
ciertas mejoras a los procesos de trabajo y diseñaron algunos productos. Por
ejemplo, en el caso de CIVSA, ésta perfeccionó los picaros para telares y un molde
para el estampado de pecheras, cuellos y puños de camisa. Pero optó por comprar
telares tradicionales ingleses, sobre los automáticos norteamericanos, debido a su
menor precio de compra y menor costo de mantenimiento ante la falta de técnicos no
capacitados en México, así como la falta de piezas.317
CIDOSA, a su vez, patentó una mejora a la teñidura de algodón y utilizó
maquinaria de origen inglés, norteamericano y de Alsacia.
El Palacio de Hierro SA desarrolló un procedimiento para rizar fibras y un
sistema de falda ajustable invisible, etc.. Las mejoras patentadas por éstas y otras
compañías y tiendas de textiles se muestran en el Cuadro 9 e Imagen 6.
En los datos que muestra el Cuadro 9 se indica el nombre de la compañía y
las patentes obtenidas por sus inventos. Así lo denomina la Secretaría de Fomento
en 1890. Sin embargo, como se mencionó anteriormente, en realidad fueron mejoras
a procesos de trabajo y no inventos.318.
316 Keremtsis, Op.cit, 1973, pp.110-111. 317 Goméz- Galvarriato, Aurora, Op.cit.,1999ª, pp.148-150. 318 Un invento es el descubrimiento original básico que hace posible un cambio en los métodos productivos. La innovación es
la aplicación de este nuevo invento en la actividad económica práctica. De acuerdo a Schumpeter, son las innovaciones las
que producen las olas o picos relevantes en la historia, que se traducen en desarrollo. Por otra parte, no todas las invenciones
conducen a innovaciones. No todas las innovaciones son productos de las invenciones. Por lo tanto, la invención por sí sola
no produce ningún efecto, ya que debe conjugarse con las innovaciones y con la actitud y acciones de los hombres de
negocios (es decir, el dinamismo tecnológico de los empresarios) para generar las olas de desarrollo. Dean, Phyllis. La
primera revolución industrial. TR. J. Solé Tura, Península, Barcelona, España, 1968, p.109.
187
Cuadro 9. Patentes registradas en México por compañías y tiendas de textiles, de
1898-1920.
Compañía Número Invento Inventor Fecha
Compañía Industrial de
Orizaba S.A.
Mejora a teñidura algodón y
otras fibras textiles
Diego Mattel 08/02/1898
1709 Dibujo industrial de percales y
estampados
1890-1903
1800 Dibujo industrial de percales y
estampados
1890-1903
1801 Dibujo industrial de percales y
estampados
1890-1903
Compañía Industrial
Veracruzana S.A.
15322 Molde para estampado de
pecheras, cuellos y puños para
camisas
Sr. A. Pellizza 16/08/1912
18994 Mejoras en tacos picker o
picaros para telares
Bénito Suárez
Arguelles
16/03/1920
Cía. San Antonio Abad
S.A.
4888 Dibujo Industrial para pañuelo 1913
5258 Dibujo Industrial para pañuelo 1913
5259 Dibujo Industrial para pañuelo 1913
5260 Dibujo Industrial para pañuelo 1913
El Palacio de Hierro S.A. 12874 Sistema de falda ajustable,
invisible
11/04/1912
Procedimiento para rizar fibras
vegetales por medio de lavado
20/10/1913
J.B. Ebrard y cía. 4439/
4440
Corte de blusa en dos partes 24/10/1912
4448 Cuello postizo 03/03/1913
Gas, L. y cía. 19229 Camiseta- calzon 1912
Fuente: Instituto Mexicano de Patentes Industriales (IMPI). Gacetas de invenciones y marcas.
Oficina de Patentes y Marcas. Sría. de Fomento, 1890-1931 y AGN, Marcas y patentes Caja 171-173
Patentes obtenidas
Las fotografías de la Imagen 6 muestran:
1) El sistema de molde y estampado para pecheras, cuellos y puños de camisa
de CIVSA, que consistía en disponer las distintas piezas en alguna de las
formas marcadas. Las líneas llenas indicaban dónde debían hacerse los
cortes y las punteadas, los dobleces. El espacio comprendido dentro de los
perímetros es el que se debía estampar319.
2) El sistema de falda ajustable de El Palacio de Hierro SA. Esta pieza se
sujetaba con cinta, debajo de la cintura y no era visible. El frente tenía
broches ajustables para hacer la holgura necesaria, sin que se deformara la
319 AGN, Marcas y patentes, Clase 43.1 Caja 171, Expediente 21, 16/8/1912.
188
pieza. La parte de atrás se formaba por varios pliegues que quedaban en la
cintura320.
3) Modelo para cuello postizo de J.B. Ebrard y Cía., que consistía en una punta
larga que servía para mantener el cuello perfectamente cerrado. Se colocaba
con botones y tuvo una duración como invento de 5 años321.
4) Dibujo para corte de blusa en dos partes de J.B.Ebrard y Cía. Esta pieza se
cortaba en la pieza A (que era el cuerpo de la blusa, y la pieza b, que era una
tira que servía para formar la manga de la blusa. Tenía un corte de media
luna y en el centro llevaba un dibujo en forma de “Y”. Su duración como
invento fue de 5 años.322
Como es fácil deducir ninguna de estas mejoras sirvió para detonar el desarrollo
tecnológico del sector, pero sí para aumentar las ventas de sus mercancías. Las
estrategias de comercialización que utilizaron los socios de CIDOSA se analizan en
el siguiente apartado.
320 AGN, Marcas y patentes, Clase 43.1 Caja 171, Expediente 92, 11/4/1912 321 AGN, Marcas y patentes, Clase 43.6 Caja 173, Expediente 80, 3/3/1913 322 AGN, Marcas y patentes, Clase 43.3 Caja 171, Expediente 93, 24/10/1912
189
CIVSA, Sistema de estampado El Palacio de Hierro, Falda ajustable
J.B. Ebrard, Cuello postizo J.B. Ebrard, Corte de blusa
Fuente: AGN, Marcas y patentes, clase 43.1 y 43.3. Caja 171 y 173, expedientes 21,92,93 y 80.
Imagen 6. Inventos patentados por tiendas y compañías textiles en México, 1898-1920
190
En la comercialización
Marcas.
Durante el siglo XIX la mayoría de las fábricas textiles en México concentraban
su producción en el hilado y tejido de manta. Sin embargo, para 1890-1900 algunas
fábricas se especializaron en ciertos productos. Otras manufacturaban toda una
variedad de textiles de calidad. Fue el caso de CIDOSA, que elaboraba calicós,
sábanas, telas de colores para camisas, cretonas, franelas, crepé, tela de toallas,
muselinas, telas elegantes, casimires, driles, holandas de lino y encajes en toda
variedad de colores y estilos.323
Con estos productos CIDOSA fue premiada en la Exposición Universal de
Chicago, de 1893, y sus productos llamaron la atención en la exposición de París, de
1900.324.
Además de la calidad y variedad, CIDOSA distinguía sus mercancías
registrando las marcas y los diseños con los cuales se comercializaban.
Anteriormente las tiendas de textiles, como “Las Fábricas Universales” de A.
Reynaud y Cía.; “El Puerto de Liverpool”, administrada por J. B. Ebrard y Cía., o “El
Palacio de Hiero”, propiedad de J. Tron y Cía. –entre otras-, ya habían registrado
ante la Secretaría de Fomento sus marcas para telas y camisas (M.R. 155 y 265).
Sin embargo, fue CIDOSA la primera compañía textil en contar con una marca
registrada para sus productos. Esta marca fue la de “La Yucateca” (MR 377), la cual
utilizó para comercializar mantas, en 1892.
CIDOSA también inscribió marcas para hilados, tejidos, telas y hasta para su
fábrica de Río Blanco (MR 22701,22702). Los nombres que más elegía para sus
marcas eran los nombres de las telas en francés (Tulle de France para Calicot, Belle
Buse, Toile D’Orizaba, Tissage Mecanique Teinture, Toile de Mulhouse, Toile du
Nord, Toile de France, Toile de Soie, y Toile de Irlande) y los nombres de sus
fábricas San Lorenzo y Río Blanco. Entre los diseños de telas “resaltaron las telas de
323 Keremitsis, Op.cit. 1973, pp. 120-121. 324 Southworth, op.cit, 2005, pp.123.
191
Vichy, llamadas en México mascotas, nombre registrado en 1902”.325 Las marcas y
diseños de las telas se registraban para evitar falsificaciones. Las marcas
registradas por CIDOSA y por otras compañías y tiendas textiles en México, de
1890 a 1931, se enlistan en el Cuadro 10.
En la lista de marcas del Cuadro 10 sobresalen aquéllas que fueron
diseñadas y nombradas como ciertos animales (oso blanco, mariposa, león, etc.). De
hecho, las figuras de los animales eran las que más utilizaban los empresarios
textiles para diseñar etiquetas que colocaban sobre las telas, membretes, circulares,
listas de precios, envases, envolturas y cajas de empaque. Estas etiquetas eran
grabadas, pintadas, impresas, litografiadas o estampadas por cualquier
procedimiento manual o mecánico en cualquier tamaño, color o combinación de
colores. Asimismo, la compañía se reservaba el derecho exclusivo de reproducirlas y
de utilizarlas con cualquier otra leyenda, dibujo o detalles.326
En el caso de CIDOSA, usó la representación del oso, mariposa, pájaro, pero
sobre todo la de “el león en sus diversas posiciones, diseños y colores”. 327 La Cía.
Industrial de Atlixco SA utilizó el venado, Cía. Industrial de San Antonio Abad SA el
toro; Veyan, Jean y Cía, Suc. S. en C. el pavo real, y la Hormiga SA utilizaba el
caballo. Sólo la Cía. Industrial Manufacturera SA manejó la figura de “Moctezuma”.
Independientemente de la figura en la etiqueta, las marcas les permitieron a las
compañías textiles diferenciar sus productos y atraer más clientes.
Algunas de las marcas ilustradas con figuras de animales registradas en la
Secretaría de Fomento de 1903 a 1924 se muestran en la Imagen 7. De estas
litografías resalta la MR 8105 de CIDOSA, que muestra un león a color, y que se
utiliza como símbolo de esta compañía hasta la fecha.
325 Everaer, Luis. Río Blanco. Compañía Industrial de Orizaba S. A. Centenario, 1899.-1989. Salvat México. El marqués,
Querétaro, 1990, pp.91. 326 IMPI, Gaceta de invenciones y marcas, 1922, pp. 291-292. 327 IMPI, Gaceta de invenciones y marcas, 1908, pp. 238-239.
192
Cuadro 10. Marcas registradas por las compañías y tiendas de textiles en México, 1890-1931.
Compañía Número Nombre Producto que ampara Fecha Compañía Industrial de Orizaba S.A. 377 La yucateca Mantas 21/11/1892
540 Tulle de France para calicot Calicot 1890-1903 541 San Lorenzo Telas 1890-1903 542 Belle buse Telas 1890-1903 543 San Lorenzo Mantas 16/12/1893 544 Madagnilam Telas 1890-1903 545 Sin denominación Telas 1890-1903 546 Mexicana Telas 1890-1903 547 Madaplant fort Telas 1890-1903 548 Extre.fort Telas 1890-1903 549 Cretone englais Telas 1890-1903 550 Grano de oro Telas 1890-1903 551 Cretona Inglesa Telas 1890-1903 552 San Lorenzo Telas 1890-1903 553 Tela mexicana Telas 1890-1903
1226 Sin denominación Percales 9/11/1897 1227 Sin denominación Percales y estampados 10/11/1897 1228 Sin denominación Percales y estampados 10/11/1897 1229 Sin denominación Percales y estampados 10/11/1897 1275 Sin denominación Hilados y tejidos 29/12/1897 1276 Brandon extra drillings Hilados y tejidos 29/12/1897 1277 León Hilados y tejidos 29/12/1897 1278 San Lorenzo 26,82 Telas 29/12/1897 3167 Río Blanco Telas Blancas 05/02/1903 3269 Leon Telas 21/04/1903 3284 Sin denominación Telas 22/05/1903 3416 Sin denominación Telas 05/08/1903 4121 Sin denominación Hilados, tejidos y estampados 22/01/1904 4266 Sin denominación Telas 01/10/1903 4267 Sin denominación Percales estampados 01/10/1903 4517 Dos cisnes Tejidos de algodón 01/10/1903 4518 Sin denominación Telas 01/10/1903 4519 Sin denominación Telas 01/10/1903 4520 Sin denominación Hilados y tejidos 01/10/1903 4521 Faro Telas 01/10/1903 4522 Rio Blanco Telas 01/10/1903 4523 Tissage Mecanique Teinture Telas 01/10/1903 4524 Rio Blanco S.S. Telas 01/10/1903 4525 Bandon Extra drillings N.D. Telas 01/10/1903 6999 Oso Blanco Hilados y tejidos 07/02/1907 7000 La mariposa Hilados y tejidos 07/02/1907 7814 Alsaciana Tejidos de algodón 27/12/1907 8105 Sin denominación Tejidos de algodón 03/04/1908 13135 Sin denominación Tejidos de algodón 10/03/1913 19433 Sin denominación Telas de algodón 17/05/1921 19913 Sin denominación Telas de algodón 06/09/1921 20598 CIDOSA Telas de algodón 13/02/1921 20671 Sin denominación Telas de algodón 24/03/1922 20889 Río Blanco Telas de algodón 31/05/1922 21755 Río Blanco Telas de algodón 08/02/1923 22629 Tela de Rosa Calicot 14/09/1923 22630 Silesia Inglesa Calicot 14/09/1923 22631 El ideal Calicot 14/09/1923 22632 Tela del hogar 15 Calicot 14/09/1923 22633 Grano de oro Calicot 14/09/1923 22634 Toile D'Orizaba Calicot 14/09/1923 22635 Nasou 500 Calicot 14/09/1923 22701 Fábrica Río Blanco Fábrica 02/10/1923 22702 Fábrica Río Blanco Fábrica 02/10/1923 22706 Río Blanco Mantas 27/09/1923 22718 Toile de Mulhouse Calicot 01/10/1923 22719 Tela Costeña Calicot 01/10/1923 22720 Tela Russel Calicot 01/10/1923 22723 Tela del sur Calicot 01/10/1923 22893 Toile du Nord Calicot 02/10/1923 22894 Tela suprema Calicot 02/10/1923 22943 Cretona extra Calicot 14/09/1923 23015 Extra fort Calicot 19/12/1923 25177 Sin denominación Tejidos de algodón 23/10/1925 25308 Toile de France Telas Blancas 07/12/1925 25309 Toile de Soie Telas Blancas 07/12/1925 25332 Toile de Irlande Telas Blancas 07/12/1925 31122 El sol de México Telas 02/02/1931
Datos de las Marcas
193
Cuadro 10. Marcas registradas por las compañías y tiendas de textiles en México, 1890-1931.
Compañía Número Nombre Producto que ampara Fecha Compañía Industrial de Atlixco S.A. 12319 Sin denominación Tejidos de algodón 22/05/1912
12320 Sin denominación Fábrica Metepec 22/05/1912 20870 Lienzo de Metepec Telas 29/05/1922 20871 Lienzo de Metepec Telas 29/05/1922 20872 Lienzo de Metepec Telas 29/05/1922 20873 Lienzo de Metepec Telas 29/05/1922 20874 Lienzo de Metepec Telas 29/05/1922 29774 Sin denominación Telas 10/07/1929 29973 Sin denominación Telas 10/07/1929
Compañía Industrial de Guadalajara S.A. 11852 Sin denominación Telas 18/12/1911 11853 Sin denominación Telas 18/12/1911 11854 Sin denominación Telas 18/12/1911 11855 Sin denominación Telas 18/12/1911 11856 Sin denominación Telas 18/12/1911 11857 Sin denominación Telas 18/12/1911 11858 Sin denominación Telas 18/12/1911 25511 Fábrica Río Blanco Fábrica 17/02/1926 25512 Fábrica Río Blanco Fábrica 17/02/1926 28774 La competidora Telas 11/12/1928 28775 Perla de oro Telas 11/12/1928 28776 Superior Telas 11/12/1928 28777 Silesia Francesa Telas 11/12/1928
Compañía Industrial Manufacturera S.A. 2381 Telas 1890-1903 9016 Sin denominación Telas 01/10/1903 9017 Sin denominación Telas 01/10/1903 9018 Sin denominación Telas 01/10/1903 9019 Sin denominación Telas 01/10/1903 9020 Sin denominación Telas 01/10/1903 9021 Sin denominación Telas 01/10/1903 9022 Sin denominación Telas 01/10/1903 9023 Sin denominación Telas 01/10/1903 9024 Sin denominación Telas 01/10/1903 9025 Sin denominación Telas 01/10/1903
18170 Sin denominación Fábrica 28/05/1920 22373 Moctezuma Telas 19/07/1923 27999 Moctezuma Telas 17/05/1928
Compañía Industrial San Antonio Abad S.A. 17774 Sin denominación Fábrica 12/02/1920 27574 Tela del norte Telas 24/12/1927 27575 Toile de France Telas 24/12/1927 27576 Toile Russe Telas 24/12/1927 27577 Extra Fort Telas 24/12/1927 28191 Olan china Telas 03/07/1928 28192 Manta Blanca 2 Telas 03/07/1928 28193 Manta Blanca 1 Telas 03/07/1928 28490 Manta lavado espcializado Telas 08/10/1928 28491 Tela de novia 3 Telas 08/10/1928 28492 Manta Blanca especial 6000 Telas 08/10/1928
Compañía Industrial Veracruzana S.A. 2121 Sin denominación Telas 21/09/1900 2123 Sin denominación Telas 27/01/1900 2124 Sin denominación Telas 27/01/1900
Veyan, Jean y Cía. Sucs. S.en C. 23354 Sin denominación Telas 04/04/1924 23355 Sin denominación Telas 04/04/1924 23356 Sin denominación Telas 04/04/1924
La hormiga S.A. 27300 Sin denominación Camisas 29/09/1927 27301 Sin rival Telas 29/09/1927 27302 Tela costeña Telas 29/09/1927 27303 Invencible 50 Telas 29/09/1927 27304 Invencible 45 Telas 29/09/1927 27305 invencible 2 Telas 29/09/1927 27480 Invencible 1 Telas 26/11/1927 27481 Perla del pacífico 1 Telas 26/11/1927 27482 Extra fort 2 Telas 26/11/1927 27483 Grano de oro Telas 26/11/1927
A. Reynaud y cía 155 La madrileña Telas 1890-1903 1701 Tejidos de algodón 1890-1903 1706 Corbatas 19/04/1899
J. Tron y Cía 265 Marca para camisas camisas 1890-1903 Signoret, Honnorat y cía 2321 Telas 08/04/1901
2455 Camisería 1890-1903 2455 Telas 03/08/1901
18908 Al Puerto de Veracruz Tienda 07/12/1920 M. Lambert y cía 23311 El correo Fránces Tienda 01/04/1924 Fuente : Instituto Mexicano de Patentes Industriales (IMPI). Gacetas de invenciones y marcas. Oficina de Patentes y Marcas Secretaría de Fomento, 1890-1931.
Datos de las Marcas
194
“El Oso Blanco” M.R. 6999 “La Mariposa” M.R.7000
CIDOSA “ M.R. 20598
“El león” M.R. 3269 M. R. 8105 (sin denominación)
Fuente: IMPI, Gacetas de invenciones y marcas, 1903, 1907, pp.76-77, y 1922, pp.291-292, y AGN, Fototeca,
fondo Texidor, Tx.4-001 Fuente: IMPI, Gacetas de invenciones y marcas, 1903, 1907, pp.76-77, y 1922, pp.291-292, y AGN, Fototeca,
fondo Texidor, Tx.4-001
Imagen 7. Etiquetas de las compañías textiles en México, 1903-1924.
195
Imagen 7. Etiquetas de las compañías textiles en México, 1903-1924.
Cía. Industrial de Atlixco La Hormiga S.A. M. R. 13444 (sin denominación) M.R. 27304 (sin denominación)
Cía. Industrial San Antonio Abad Veyan, Jean y cía. Sucs. S. en C.
“El toro” M. R. 17774 M.R. 23554 (sin denominación)
Fuente: IMPI, Gacetas de invenciones y marcas, 1912, pp.382-383; 1927 pp. 715; 1920, pp.182-183 y 1924, pp. 223.
196
Imagen 7. Etiquetas de las compañías textiles en México, 1903-1924.
Cía. Industrial Manufacturera S.A. CIDOSA “Moctezuma” M.R. 22373 M.R. 22702
Fuente. IMPI, Gacetas de invenciones y marcas, 1923 pp. 918-919 y 1923 pp. 1312-1313.
Redes de distribución
Las compañías textiles distribuían sus productos a través de las propias
tiendas de novedades que las fundaron. En el caso de CIDOSA, ésta comercializaba
telas y ropa al mayoreo y menudeo a través del seis tiendas principalmente: “El
Palacio de Hierro”, “La Ciudad de Londres”, “El Puerto de Liverpool”, “El Puerto de
Veracruz”, “El Correo Francés” y “El Gran Oriental” ubicadas en la Ciudad de
México.328 En el caso de CIVSA, en cuatro, “Las Fábricas Universales”, “El centro
Mercantil”, “La Reforma del comercio” y “la Ciudad de México” del D.F.329.
Para La Hormiga SA, en dos, “El centro mercantil” y “La Valenciana” también
en el D.F. La compañía industrial de Guadalajara en “La ciudad de Londres” y “Las
fábricas de Francia” ubicadas en Guadalajara”. La cía. San Antonio abad, la Cía.
328 Everaer, Luis. Op.cit, 1990, pp.78. 329 De acuerdo a Goméz Galvarriato, CIVSA no contaba con un departamento de ventas, publicidad o distribución, ya que la
mayoría de sus ventas (el 93% en 1905 y el 91% en 1925) eran para las compañías miembros del consejo, como A. Reynaud
y Cía. propietarios de “Las Fábricas Universales” y S. Robert y Cía., dueños de “El Centro Mercantil” y “la Valenciana”.
Gómez Galvarriato, Op.cit., Diciembre 1999ª, pp. 170.
197
Industrial de Atlixco y la compañía Industrial Manufacturera en la tienda de “la
Reforma de Comercio” de la ciudad de México. Aunque esta última compañía
también distribuía sus productos en los comercios de “las Fábricas Universales” y “la
Ciudad de Londres, Guadalajara”. Finalmente la compañía Industrial de San
Idelfonso comercializaba sus telas en la tienda “El puerto de Liverpool” y en la
“Francia Marítima”.330
Estas tiendas, a su vez, tenían como distribuidores a sus propias sucursales o
agentes de ventas que se encontrarán repartidos a lo largo del territorio mexicano,
practicando la arraigada costumbre de las ventas ambulantes. La venta personal y
por sucursales les permitió acercarse a pueblos aislados y obtener ganancias de
mercados locales y regionales. Un ejemplo de esta distribución regional, las
sucursales que mantenían en Veracruz, San Luis Potosí y en Jalisco la tienda de
comercio “La Cuidad de Londres”, que se dedicaba a la venta al menudeo y
mayoreo de artículos de bonetería y rebocería, abarcando el mercado de la Ciudad
de México, Veracruz, Michoacán, Sinaloa, Sonora, Durango, Zacatecas, Guanajuato,
Tepic y Baja California”.331
También instalaron sucursales, o hacían convenios con tiendas locales de otros
comerciantes para aumentar la distribución de sus productos (integración horizontal)
y obtener altos rendimientos por ventajas monopólicas. Por ejemplo, Proal menciona
que los comerciantes del Valle lograron rendimientos económicos por encima de sus
competidores ingleses y alemanes porque contaban con sucursales y vendedores
ambulantes a lo largo de la República Mexicana, que les permitía conocer los gustos
y demanda de cada uno de los pueblos del país, mientras que sus competidores
sólo se concentraban en ciertas ciudades
Los ingresos de ventas que las principales compañías textiles en México,
lograron con estas cadenas de distribución regional se enumeran en el Cuadro 10.A.
En él se observa que CIDOSA fue la compañía que alcanzó mayores ingresos en
1912 y 1913. En promedio 133 por ciento más altos que los de CIVSA, su principal
competidor. Esto gracias a que poseía cuatro fábricas textiles cuya producción
superaba las 800,000 piezas, mientras que CIVSA sólo tenía una fábrica y su
330 Goméz-Galvarriato, s/f. Op.cit., Cuadro 2. De los cajones de Ropa a los Grandes Almacenes, pp.25 331 Proal, Maurice y Charpenel, M. Pierre. Los Barcelonnettes en México. Clío. México, 1998.
198
producción era de alrededor de 300,000 piezas pero, además, porque contaba con
más tiendas para distribuir sus productos.
Por otra parte, es importante mencionar que otras formas de aumentar las
ganancias en las tiendas fue el utilizarlas como bancos y el formar monopolios. Por
ejemplo, las tiendas del “El Palacio de Hierro”, “La Ciudad de Londres´”, “El Puerto
de Liverpool”, “Al puerto de Veracruz”, “La Reforma del Comercio”, “Al puerto de
Veracruz”, “El correo francés”, “El Gran Oriental”, “El Centro Mercantil”, y “La
Valenciana”;funcionaron como bancos al recibir dinero de sus socios y el ahorro de
sus empleados, por el cual pagaba un rédito anual. Asimismo se organizaron con
otros comerciantes franceses para realizar compras en conjunto y así fijar precios y
existencias en sus diferentes comercios.332
Cuadro 10.A. Ingresos por ventas de las principales compañías textiles en México,
1912-1913 (pesos corrientes).
Compañía 1912 1913
CIDOSA $ 3,558,194.06 $ 4,209,106.96
CIVSA $ 1,656,632.79 $ 1,681,121.30
San Antonio Abad $ 999,813.88 $ 1,366,980.31
Veyan, Jean y Cía. S.en C. $ 736,946.17 ND
Cía.Industrial
Manufacturera
$ 771,536.65 $ 677,656.76
Cía. Industrial de
Guadalajara
$ 409,677.89 $ 448,912.65
Cía.Industrial de Atlixco $ 1,300,835.96 $ 1,309,573.45
La Hormiga S.A. $ 611,323.64 $ 549,881.38
TOTAL $ 10,044,961.04 $ 10,243,232.81
Fuente: AGN, Departamento del Trabajo, Caja 5
Otros clientes importantes de las tiendas comerciales socios de las
compañías textiles eran las clases en el poder y las clases altas de la sociedad
mexicana que buscaban telas, prendas y, en general, artículos considerados de
"lujo", que provenían de Europa.333 Por ejemplo, en el caso de la tienda “La Ciudad
de Londres´”, uno de sus clientes más asiduos fue el general Joaquín Amaro,
332
Martínez Gutiérrez, Patricia. Op.Cit.,2005, pp. 40-105. 333 Ídem.
199
Subsecretario y Secretario de Guerra y Marina de 1920 a 1931. “El general Amaro
empezó a ser cliente de La Cuidad de Londres desde julio de 1917. Desde entonces
la Cía. le ofreció un crédito casi ilimitado. Debido a sus gustos delicados y exquisitos,
la tienda siempre procuró poner avíos muy finos a sus prendas y confiarlas a los
mejores operarios; como los trajes elaborados en julio de 1921, que tenían insignias
bordadas en seda y botones y presillas en oro”.334
El general Amaro también le compraba a esta tienda espadas, cinturones,
cortinas, muebles y el vestuario, zapatos, gorras y fundas para armas del personal
militar a su cargo. Así lo evidencia un oficio del 16 de abril de 1922, en el que les
solicita 200 uniformes que se repartirían entre coroneles de Caballería (5), tenientes
de Caballería (5), mayores de Caballería (5), capitanes de primera (25), de segunda
(25), tenientes (60) y subtenientes (70), 5 más para repartir según el criterio del
general Amaro.335
En la imagen 8 se incluye la fotografía de una muestra de gabardina enviada
al Gral., para la elaboración de uniformes militares; así como el formato que debía
llenarse durante la toma de medidas de los oficiales.
A partir de 1924, Joaquín Amaro es nombrado Secretario de Guerra y Marina
y elige a las tiendas “El Palacio de Hierro” y “High Life”, en Monterrey Nuevo León,
para sus confecciones personales, aunque “La Ciudad de Londres” seguía
confeccionando los uniformes del personal militar.336 De hecho, el 5 de agosto de
1929 el director de la tienda, el señor Arnaud, envía una carta al general Amaro,
preguntándole el motivo por el cual dejó de visitar la tienda,
“He notado con sincera pena que de un tiempo a esta parte nos ha privado usted de sus estimables compras dando la preferencia casas similares en el ramo. Tratándose de un buen amigo mío como lo es usted, me mortifica doblemente el olvido en que está usted relegando esta su casa, donde como siempre ha sido un verdadero placer, y sobre todo para mí en lo particular, atender las órdenes con que ha tenido a bien honrarnos hasta hace poco. Deseo muy cordialmente que el motivo que nos priva del agrado de servirle, no se deba a alguna incorrección de parte de alguno de nuestros empleados, y de ser así le agradecería lo indicará. Vuelvo a reiterar a usted el vivo deseo que tenemos de volverlo
334 Archivo Plutarco Elías Calles y Fernando Torreblanca (APC y FT), Fondo Joaquín Amaro, Proveedores, Serie 205,
Inventario 105 Legajo 10-21. 335 APC y FT, Fondo Joaquín Amaro, Proveedores, Serie 205, Inventario 105 Legajo 3-5. 336 APC y FT, Fondo Joaquín Amaro, Proveedores, Serie 204, Inventario 105 Legajo 3-5.
200
a ver pronto por esta su casa y recibir en breve sus gratas órdenes que siempre han sido objeto por parte nuestra de toda la atención y cuidado que se le debe a un antiguo y muy estimado amigo como lo es usted…… El general responde que el motivo de su ausencia son algunas deficiencias en el Departamento de Sastrería”.337
Imagen 8. Muestra de tela para uniformes y plantilla para toma de medidas.
Fuente: Archivo Plutarco Elías Calles y Fernando Torreblanca (APC y FT), Fondo Joaquín Amaro, Proveedores, Serie 205, Inventario 105 Legajo 3.
Las compras que realizó el general Amaro en la tienda “La Ciudad de
Londres”, “El Palacio de Hierro” y “High Life”, de 1920-1928, se enlistan en el Cuadro
11. Dentro de estas compras destacan por sus montos las de uniformes para el
personal militar que el general Amaro realizó, en su calidad de Secretario de Guerra,
a la tienda “La Ciudad de Londres”. Aunque CIDOSA no era el único proveedor de
esta tienda, sí era uno de los más importantes, por lo que puede deducirse que parte
de la tela con la que confeccionaron estos uniformes fue elaborada y distribuida por
CIDOSA.
337 APC y FT, Fondo Joaquín Amaro, Proveedores, Serie 306, Legajo 34.
201
Por lo tanto, el que a través de las redes de distribución de CIDOSA
(Fábricas- tienda comercial mayorista y/o minorista- agente de ventas- consumidor)
se surtiera de mercancías al Secretario de Guerra y a su personal militar, aumentaba
substancialmente las ventas y permitía contar con aliados poderosos para controlar
cualquier problema legal que pudiera presentarse. Por ejemplo, en 1924 A. León le
solicitó al Gobierno de Plutarco Elías Calles que le ayudara a recuperar unos bultos
de mantas y géneros de las tiendas del “El Correo Francés” y de “las Fábricas
Universales” que le robaron en Tierra Blanca. A cambio le ofrece su ayuda para que
triunfe en las próximas elecciones en Ocozucautla, Jalisco.338 En 1925, J. Ollivier y
cía. le solicitó al Gral. Amaro intercediera por su velador en Lagos de Jalisco, el Sr.
Serrano, para que pudiera portar un arma, debido a la creciente inseguridad en esa
zona. También en 1927 le solicitan su ayuda para un salvoconducto para que su
personal acuda a cuidar la cosecha de la hacienda de la tienda en Lagos de
Morelos, debido a que se prohibió el paso por conflictos armados en la región. El
Gral. Amaro intercede y se les concede ambos.339 El Gobierno también ayudó a los
empresarios textiles, a controlar y resolver los conflictos laborales. Esto se estudiará
en el siguiente apartado.
338 APC y FT, Fondo Plutarco Elías Calles, Expediente 110, Inventario 3168. 339 APC y FT, Fondo Joaquín Amaro, Proveedores, Inventario 306, Legajo 33.
202
Cuadro.11. Compras del general Joaquín Amaro a diferentes tiendas en México, de 1920-1928.
Fecha No. Descripción Valor Fecha No. Descripción Valor Fecha No. Descripción Valor
29/05/1920 Cuentas pendientes de 1917 y 1918 11,916.40$
29/05/1920 Mercancía 1,245.00$
31/05/1920 Uniformes 9,161.40$
04/10/1920 Compostura de trajes 4,185.70$
25/10/1920 Uniformes 3,587.85$
30/11/1920 Compostura de trajes 552.75$
09/04/1921 16 Uniformes 5,055.00$
30/04/1921 3 Uniformes 675.00$
16/03/1922 Cuenta de la división 900.00$
16/03/1922 Cuenta partícular 13,874.53$
17/03/1922 Uniformes 904.60$
19/04/1922 Uniformes 3,482.40$
30/05/1922 200 Uniformes 46,159.65$
17/07/1922 Uniformes 2,713.50$
28/07/1922 Uniformes 2,222.10$
15/11/1922 Cuenta división 15,316.00$
12/01/1923 Vestidos y sombreros 305.00$
30/04/1924 32 Uniformes 1,662.10$
31/05/1924 Abrigos, casimires 1,472.10$
23/07/1924 Sombreros, chalecos 288.50$
20/08/1924 Trajes casimir 392.15$
22/08/1924 Compostura de trajes 527.95$
30/08/1924 Factura 77141 251.40$
12/09/1924 6 Trajes casimir 1,005.50$
18/09/1924 Muebles 1,951.75$
26/11/1924 4 Trajes casimir 829.60$
28/11/1924 Factura 78099 829.60$
19/12/1924 Muebles 730.05$
27/01/1925 Factura 19479 24.00$ 04/04/1925 Zapatos 30.40$ 18/04/1925 Batas, calcetines 577.40$
28/01/1925 Factura 19489 20.00$ 27/04/1925 botas 80.44$ 04/05/1925 Trajes 291.60$
08/05/1925 Factura 79682 55.33$ 29/04/1925 Trajes 762.18$ 15/06/1925 Trajes 2,086.69$
29/05/1925 Uniformes 864.73$ 16/06/1925 868.00$ 19/06/1925 Muebles 35.05$
17/07/1925 Uniformes 311.71$ 26/06/1925 Juegos 80.44$
30/07/1925 2 Hechura de trajes 246.38$ 29/06/1925 Calzado 1,015.46$
31/07/1925 Factura 8509 246.38$
31/07/1925 Factura 22113 35.00$ 09/07/1925 Camisas 479.64$
20/08/1925 Factura 80652 799.90$
26/08/1925 Hechura de trajes 799.90$ 16/07/1925 Tela gabardina 75.64$
26/09/1925 Factura 22825 12.00$
30/09/1925 Factura 22992 22.00$
21/10/1925 7 Uniformes 1,478.09$
30/11/1925 1 Capote 259.43$
17/12/1925 Factura 81884 975.34$
30/12/1925 Trajes casimir 231.27$
TOTAL 6,381.46$ TOTAL 3,392.20$ TOTAL 2,990.74$
16/01/1926 Facrura 24555 34.50$
30/03/1926 Uniformes 811.46$
29/04/1926 2 Uniformes 734.02$
26/07/1926 1 Trajes casimir 120.66$
10/10/1926 Uniformes 125.72$
10/10/1926 Trajes casimir 270.00$
10/10/1926 8 Trajes casimir 2,171.88$
10/10/1926 5 Trajes casimir 542.97$
05/11/1926 4 Abrigos, casimires 668.69$
07/12/1926 1 Trajes, sombrero y calzado 270.00$
20/12/1926 Trajes, sombrero y calzado 718.96$
06/01/1927 1 Uniformes 211.16$
12/03/1927 2 Uniformes 231.21$
13/04/1927 2 Uniformes 321.76$
08/06/1927 2 Uniformes 280.00$
09/07/1927 9 Capas para torear 497.75$
31/08/1927 1 Uniformes 110.61$
31/08/1927 1 Uniformes 359.98$
27/02/1928 Compostura de trajes 89.50$
17/03/1928 1 Trajes casimir 186.04$
19/04/1928 Uniformes 226.27$
26/04/1928 1 Trajes casimir 180.99$
23/07/1928 2 Uniformes 472.59$
18/08/1928 12 pantalones 365.54$
TOTAL 326
Fuente: Archivo Plutarco Elías Calles y Fernando Torreblanca
Serie Exp. Fondo Inventario Legajo
306 1 Proveedores 286 34 de 63
306 2 Proveedores 287 11 DE 11
306 1 Proveedores 286 33 de 63
306 1 Proveedores 286 25 de 63
205 3 Proveedores 105 3 de 5
205 2 Proveedores 104 3 de 6
105 2 Proveedores 62 11 de 21
105 2 Proveedores 62 10 de 21
LA CIUDAD DE LONDRES HIGH LIFE EL PALACIO DE HIERRO
203
Laborales
Salarios y el papel del Estado
En las fábricas textiles -a diferencia de sus negocios comerciales- los accionistas
de CIDOSA: I) No actuaban como administradores, sólo como accionistas. II) No
vivían en la ciudad en que estaba la fábrica. Radicaban en la Ciudad de México o en
Francia. III) Contrataban personal que no era de origen barcelonnette. Las
manufacturas requerían de personal técnico especializado y de grandes cantidades
de trabajadores operativos. Por ello se optó por contratar extranjeros para los
puestos técnicos y administrativos. Y mexicanos, para los puestos operativos, como
se especifica en el Cuadro 12. En él es posible observar que CIDOSA siempre
necesitó mayor cantidad de mano de obra que las demás compañías, por el tamaño
de la fábrica de Río Blanco, la más grande de la época.
Los primeros obreros de Río Blanco eran indígenas, campesinos, obreros,
tejedores de otras zonas, artesanos, etc. La mayoría de ellos sin experiencia y
disciplina en el trabajo organizado y la producción capitalista. Además, el trato que
recibían era rígido, autoritario y en ocasiones hasta recibían maltrato físico por parte
de los jefes. Las jornadas laborales eran de 6:00 AM a 8:00 PM, bajo condiciones de
trabajo insalubres (excesivo ruido y polvo) y con un salario diario que iba de $0.5 a
$2 pesos (ver Anexo C. Salarios). Existía un sistema de multas y castigos por la
ruptura de mercancías, descomposturas de maquinaria, hablar con los compañeros,
observar a las mujeres o cantar. Asimismo se les obligaba a comprar en las tiendas
de raya de las fábricas, que eran propiedad de socios o parientes de los dueños,
para recuperar el gasto en salarios.340
340 García Díaz, Bernardo. Un pueblo fabril del Porfiriato: Santa Rosa, Veracruz. Ed. FCE, México, 1981.
204
Empresa Fábrica TOTAL Mexicanos Extranjeros Hombres Mujeres Niños TOTAL Mexicanos Extranjeros Hombres Mujeres Niños
CIDOSA 1920 180 142 38 180 0 11 4,320 4,320 0 4,081 82 284 Cía. Industrial de Cocolapan 18 15 3 18 0 - 688 688 654 34 68 Orizaba S.A. San Lorenzo 16 13 3 16 0 - 740 740 712 28 32
Cerritos 12 11 1 12 0 - 445 445 445 0 27 Rio Blanco 134 103 31 134 0 11 2,447 2,447 2,270 20 157
1923 112 103 9 0 0 0 4,816 4,816 0 4,431 112 273 Cocolapan 5 5 847 847 754 35 58 San Lorenzo 8 7 1 784 784 711 30 43 Cerritos 5 4 1 439 439 403 36 Rio Blanco 94 87 7 2,746 2,746 2,563 47 136
1927 4,450 Cocolapan 807 San Lorenzo 825 Cerritos 451 Rio Blanco 2,367
Cía. Industrial San 1920 35 22 13 35 - - 1,141 1,141 - 851 290 0 Antonio Abad S.A. San Antonio
Abad 25 15 10 25 - - 501 501 391 110 0
La Colmena y Barron
10 7 3 10 - - 640 640 460 180 0
1923 12 9 3 12 - - 1,157 1,157 - 832 273 52 San Antonio Abad
9 7 2 9 - - 552 552 427 73 52
La Colmena y Barron
3 2 1 3 - - 605 605 405 200
1927 1,064 San Antonio Abad
537
La Colmena y Barron
527
CIVSA 1920 Cía. Industrial Santa Rosa 83 57 26 83 - - 1,729 1,559 1,463 96 170 Veracruzana S.A. 1923 2,957 2,778 4 2,588 99 270
Santa Rosa 1,540 1540 1,346 99 95 El León 452 383 4 387 0 65 La Covadonga 965 855 855 0 110
1927 Santa Rosa 1,662
Cía. Industrial de 1920 26 22 4 24 2 - 702 702 - 176 526 184 Guadalajara S.A. Rio Blanco 4 4 0 4 0 - 98 98 51 47 25
Atemajac 10 7 3 10 0 - 245 245 40 205 80 La Experiencia 12 11 1 10 2 - 359 359 85 274 79
1923 1,001 1,001 - 364 480 157 Rio Blanco 138 138 72 58 8 Atemajac 248 248 48 122 78 La experiencia 615 615 244 300 71
Cía. Industrial 1920 21 17 4 21 - - 2,310 2,310 - 1,464 715 211 Manufacturera S.A. Rio Grande 8 8 8 1,110 1,110 717 393 70
Hércules 13 9 4 13 1,200 1,200 - 747 322 141 1923 25 21 4 25 - - 2,445 2,433 12 1,482 629 330
Hércules 10 8 2 10 1,071 1,069 2 698 240 139 Rio Grande 15 13 2 15 1,374 1,364 10 784 389 191
1927 2,336 Hércules 1,136 Rio Grande 1,200
Cía.Industrial de 1920 Atlixco S.A. Metepec 1,154
1923 Metepec 1,525 1,399 0 126
Veyan Jean y Cía 1920 S. En C. La Magdalena 13 10 3 10 - - 1,050 1050 - 850 100 100
1923 La Magdalena 8 4 4 8 - - 1,055 1055 675 210 170
Caja Expediente Caja Expediente Caja Expediente Caja Expediente 62 11 274 4 395 3 435 2
106 39 277 1 405 1 637 2 207 33,44 279 5 409 3 1171 1 208 33 288 12 426 4 209 16,39,41,42 299 1 430 1,5
Cuadro 12 . Empleados y obreros que trabajaban en las compañías textiles de México, 1920-1927
Fuente : Archivo General de la Nación, Departamento del Trabajo:
Empleados administrativos Obreros
205
Estas condiciones de trabajo originaron diversos conflictos con los obreros
(huelgas, paros, etc.) y dieron la pauta para el nacimiento de agrupaciones que se
dedicaban a defender los derechos de los trabajadores: “El Círculo Mutualista
Recreativo de Morelos”, “Club Melchor Ocampo”, “Gran Círculo de Obreros Libres” y
la “Casa del Obrero Mundial”. Estas dos últimas agrupaciones sentaron las bases
para crear los sindicatos de las fábricas de Santa Rosa y Río Blanco.341
La Constitución de 1857 en sus artículos cuarto y quinto, otorgaron libertad de
trabajo; el sexto y séptimo brindaron la oportunidad de manifestar ideas y el noveno,
estableció que: “a nadie se le puede coartar el derecho de asociarse o de reunirse
pacíficamente con cualquier objeto lícito”.342. Sin embargo, en el Código Penal de
1871, tipificó como delito “la reunión de los trabajadores que formen tumultos o motín
o cualquier otro medio de violencia física o moral con el objeto de hacer que
aumenten los salarios, disminuyan los jornales o impidan el libre ejercicio de la
industria”.343 Esto ocasionó que los trabajadores de 1870 a 1910, sólo formaran
asociaciones mutualistas y cajas de ahorro.
Los primeros sindicatos en México surgieron en 1911 cuando Madero reconoció
los artículos 4º, 5º, 6º, 7º y 9º de la Constitución de 1857, y se fortalecieron con la
inclusión de la fracción XVI del artículo 123 en la Constitución de 1917. Los
sindicatos impulsaron con mayor fuerza los conflictos laborales, porque ahora los
trabajadores contaban con una organización legal que respaldaba sus demandas.
Sin embargo desde antes de su existencia, la organización y movimiento obrero ya
había manifestado una presencia importante en la escena nacional, como en la
huelga en Río Blanco, de 1907, y en la huelga de Cananea. Ambos considerados los
conflictos laborales de mayor relevancia histórica del país.
El conflicto obrero-patronal de 1907 inició en Puebla cuando los industriales del
Centro Industrial Mexicano (CIM) publicaron, en diciembre de 1906, un reglamento
para las fábricas de Puebla-Tlaxcala que empeoraba las condiciones de trabajo y
limitaba la libertad personal de los obreros. El 4 de diciembre de 1906 el Gran
Círculo de Obreros Libres (GCOL) de Puebla declara huelga y los obreros preparan
341 Ídem. 342 López Aparicio. Movimiento Obrero en México. Jus, México, 1958.,pp.85-97. 343 Ídem.
206
un contra-reglamento. Los empresarios se niegan a negociar y en ese mismo mes se
anuncia el cierre de todas las fábricas textiles de la región Puebla-Tlaxcala, de
Orizaba, Distrito Federal y Querétaro. Ante tal magnitud del conflicto, Porfirio Díaz
decide intervenir como árbitro y el 4 de enero de 1907 emite un laudo que disminuía
el poder del obrero al cerrarle la posibilidad de huelga y calificar por medio de
libretas la actividad sindical de los obreros. Estas medidas provocaron el
descontento de los obreros de las fábricas de CIDOSA y CIVSA; y el 7 de enero
atacaron las tiendas de raya y los comercios “El Centro Comercial”, “El Puerto de
Veracruz”, “El Modelo” de Víctor Garcín y la casa de Empeño de Lauro Machorro.344
En la madrugada de ese día llegó el Ejército bajo el mando del Subsecretario de
Guerra, General Rosalindo Martínez, y fusilaron a Rafael Moreno presidente, Manuel
Juárez, vicepresidente del GCOL de Santa Rosa, Rafael Troncoso compañero de la
filial de Santa Rosa y otros cuatro obreros no identificados. Encarcelaron a Pascual
González, Ismael Cornazari directivos de las sucursales de Orizaba; Manuel Nava
presidente del GCOL de Santa Gertrudis, José Neira militante del Partido Liberal
Mexicano y fundador del GCOL, Pedro Martínez, Paulino Martínez editor del
periódico opositor el Colmillo Público, José Rumbia pastor metodista y Eduardo
Cancino. Y obligaron a los obreros a regresar a su trabajo”.345
Con la caída de la dictadura (1911) los empresarios no contaban más con la
estrategia del golpe y represión de Díaz por lo que varios –entre ellos los dueños de
CIDOSA- decidieron cambiar sus estrategias laborales y empezaron a ceder a
ciertas peticiones de los obreros, además de ponerse a las órdenes del nuevo
gobierno cuando éste convocó el 20 de enero de 1912 a la Primera Junta de
Industriales y Obreros Textiles para solucionar la huelga textil del país.346
En esta convención se acordó disminuir la jornada de trabajo a 10 horas y
aumentar los salarios en 10%. No obstante, los problemas con los obreros
continuaron, sobre todo por los salarios y las condiciones laborales (como las
tiendas de raya, las multas, etc.), por lo que el Gobierno Federal emplazó a una
344 García Díaz, Bernando, “La revuelta de Río Blanco”en García Díaz, Bernardo. La Huelga de Río Blanco (1907-2007).
Gobierno del Esto de Veracruz-Llave, Universidad Veracruzana y Secretaria de la Educación de Veracruz, México, 2007,
pp.201-217. 345 Ídem, pp. 218-222. 346 Ramírez Rancaño, Mario. Op.cit., 1987. p.39
207
segunda reunión en julio de 1912. En ésta los industriales presentaron su proyecto
de reglamento de trabajo, el cual fue el único que se presentó (ninguno por parte de
los obreros o el gobierno). En este reglamento se regulaba la duración de la jornada
de trabajo en 10 horas, la hora de entrada al trabajo, la conducta de los obreros, los
días de descanso, el trabajo de los menores, la abolición de las multas y el pago con
vales, entre otras cosas. Sin embargo, no se especificaba el aumento al salario real,
lo que buscaban los trabajadores. Sólo se decidió formar una comisión que
determinaría una tarifa única. Esta medida desagradó a los industriales y a los
obreros por igual. Los primeros porque alegaban que cada región mantenía
diferentes circunstancias de impuestos, de vías de comunicación y de acceso a
materias primas. Advirtieron que al pagar el mismo jornal que otras fábricas que
gozaban de menores impuestos o mejores vías de comunicación, se les ponía en
desventaja. Por parte de los obreros, éstos rechazaban la tarifa porque representaba
la disminución de salarios para algunos y ningún aumento de salario para otros. A
pesar de estas protestas, al momento de la votación la tarifa fue aceptada por todos
los industriales y el gobierno optó por convencer a los trabajadores, explicando que
sí bien en una minoría se disminuía el salario o permanecía igual, una gran mayoría
(90%) aumentaría su salario.347
Para motivar a los empresarios al cumplimiento del reglamento del gobierno,
Madero propone a la Cámara de Diputados un impuesto del 8% sobre la venta de
hilados y tejidos, el cual se reintegrará en un 50% sí el empresario cumple con las
tarifas del Reglamento autorizado. Con este impuesto, “el gobierno de Madero
(1911-1913) resultó ser más generoso que el de Díaz al disminuir el impuesto
especial del 5% sobre ventas de hilados y tejidos de algodón establecido en 1893.
Además a Francisco I. Madero también le interesaba dar continuidad a la
acumulación de capitales, sólo que ahora utilizando la vía institucional. Por ello
fundó el Departamento del Trabajo. Los empresarios vieron con buenos ojos esta
medida, porque ahora negociarían todos los conflictos obreros con este organismo,
347 Ramirez, Op.cit, 1987, pp.82-83.
208
que además les proporcionaría informes sobre empresas, climas, población y
enlazaría a los desempleados con la oferta de trabajo”.348
Todos los gobiernos de 1912 a 1920, sin importar su ideología, fueron generosos
con la burguesía textil. Pero el gobierno de Victoriano Huerta (1913-1914) fue el de
mayor coincidencia con los industriales debido a la política de mano dura y represión
hacia los obreros que compartía con la dictadura de Díaz. Sólo el gobierno de
Carranza también trató de imponer ciertos decretos de los jefes militares -como
Pablo González en Puebla, Francisco Murguía en México y Cándido Aguilar en
Veracruz-, que buscaban mejorar las condiciones de vida de los obreros e ir en
contra de los intereses de los empresarios. Estos decretos no surtieron
necesariamente efecto por la confusión de la época que no permitió aplicarlos y por
la intervención del gobierno de Carranza que declaró, el 8 de septiembre de 1916, la
nulidad de las leyes o disposiciones dictados por los gobernadores en el ramo de
fomento.349
Conjuntamente en 1917, con el artículo 123 en la Constitución, Carranza
desapareció el Departamento de Trabajo, dejando la responsabilidad de la solución
del conflicto obrero-patronal a las juntas de Conciliación y Arbitraje regionales y a los
gobiernos de los estados.
Más tarde, durante el gobierno de Plutarco Elías Calles (1924-1928) se llevó a
cabo la Segunda convención textil en 1925-1927. En esta reunión se acordó que la
industria de hilados, tejidos y estampados de algodón, se dividiera en dos grupos. El
primero, formado por las fábricas de Sinaloa, Sonora, Veracruz, Hidalgo, Chihuahua,
Nuevo León, Jalisco y Distrito Federal. El segundo, por manufacturas de Puebla,
Querétaro, Oaxaca, Tlaxcala, Guanajuato, Estado de México, Coahuila, Chiapas,
Guerrero, Colima, Michoacán, Durango y Nayarit. Los salarios que debían pagarse
en las fábricas de ambos grupos fueron los que se describen en el Cuadro 13.
348 Ramirez, Op.cit, 1987, pp.87. 349 Idem, pp. 185-187
209
Cuadro 13. Salarios aprobados por la Convención Textil de 1925-1927.
Grupos Monto Aumento (%)
Peón
Primero 1.00$ 100%
Segundo 1.00$ 65%
Obrero a jornal
encargado de máquina
Primero 1.00$ 120%
Segundo 1.00$ 100%
Destajos en tejidos y
preparación
Primero Tarifa 100%
Segundo Tarifa 85%
Mudadores
Primero 0.50$ 150%
Segundo 0.50$ 110%
Fuente: Pruneda, Fernando (1942), pp.40
Salarios Mínimos
Todos los demás salarios no contemplados debían aumentar 5 por ciento en
salarios mayores a $7.00. En salarios menores a $7.00, en 10 por ciento (cláusula
3). Estos acuerdos se aprobaron en mayo de 1926. En agosto de 1927 se decretó
un impuesto extraordinario de 5 por ciento sobre las ventas para las fábricas que
adoptaran las tarifas de la convención y de un 13 por ciento para las que no las
aplicaran. Esto fue para obligar a las fábricas a implementarlas como se había hecho
en 1912.
Pero los empresarios textiles se ampararon ante ese impuesto y ganaron el
juicio. Los conflictos aumentaron y fue necesario que el presidente Calles nombrara
una comisión técnica en octubre de 1928, para que estudiara a la industria y
determinara sus recomendaciones. Los salarios fueron ratificados por la comisión en
1929, pero no fueron aceptados por el segundo grupo, que representado a través del
Centro Industrial Mexicano (Cía. y Fábricas de Puebla, principalmente) pidieron al
Presidente no se aplicaran. Por su lado, los industriales del primer grupo, a través de
la Cámara Nacional de la Industria textil (que incluía a los empresarios de CIDOSA),
enviaron otro memorándum a Calles para refutar al Centro Industrial Mexicano. Y se
agudizó la división entre fabricantes textiles.350
El ajuste a los salarios de la Convención de 1925-27 no representaba ningún
incremento para los empresarios del primer grupo. Ellos ya pagaban salarios por
350 Pruneda, Fernando. La industria textil del algodón en México. SHCP, México, 1942, pp. 40-42.
210
esos montos y hasta más altos (ver Anexo C, salarios por puesto). Pero para los
empresarios del segundo grupo sí constituía un aumento. Por ello, “en 1931 lograron
negociar con las autoridades y con sus trabajadores para firmar un convenio en el
que se estableció la supresión de los efectos de la cláusula 3 para sus fábricas. Ese
acuerdo no duró mucho: en 1934 los obreros lograron desaparecer los grupos y se
establecieron los salarios del primer grupo en todo el país”.351
Además de los salarios, los empresarios debieron negociar con el gobierno
otras prestaciones económicas y de seguridad social para los trabajadores.
Prestaciones y seguridad social.
La seguridad social nació en Alemania con el Gobierno de Bismarck (1883-
1889). Estaba orientada a brindar una compensación económica y en especie a los
trabajadores por las enfermedades y accidentes de trabajo e incapacidad por vejez.
El hecho de que la gran industria requiera de mano de obra numerosa,
constante y resistente a su ritmo de trabajo, obliga a los empresarios a ofrecer
ventajas especiales a los obreros por encima de otros oficios. Esas ventajas pueden
ser pensión por jubilación o por enfermedades, caja de ahorros y servicio médico.352
En México las empresas manufactureras debieron proporcionar esas
prestaciones debido a las demandas de los trabajadores y para cumplir con la
legislación que se promulgó al respecto. En 1904 en el Estado de México se
proclamó la Ley de obligaciones pecuniarias de los patrones en caso de accidente
del trabajo o enfermedades, esta ley obligaba a los empresarios a pagar salarios y
atención médica a los trabajadores incapacitados hasta por 15 días.
En Nuevo León, Bernardo Reyes expidió en noviembre de 1906 la Ley sobre
accidentes profesionales y enfermedades de los trabajadores. La cual especificó que
los patrones debían proporcionar servicio médico y medicinas hasta por 6 meses.
Además de cubrir la capacidad total temporal con medio salario por dos años, la
351 Ídem. 352 Coriat, Op.cit, 1982, pp. 55-65.
211
incapacidad total permanente con dos años de salario completo y la muerte con
salario completo desde 10 meses hasta 2 años.
En enero de 1918, en el Estado de Veracruz el gobernador Cándido Aguilar
promulgó la Ley del Trabajo para el estado. Y en 1921, Adalberto Tejeda la Ley de
Enfermedades Profesionales y No Profesionales y el reparto de utilidades. Esta ley
obligaba a las empresas a pagar los gastos de las enfermedades profesionales y
comunes de los trabajadores.353
Algunas de las prestaciones y conceptos de seguridad social que pagaron las
compañías textiles a sus empleados en 1920-1923 se enlistan en el Cuadro 14. En
él se indica que en 1920 todas la Compañías textiles les pagaban a sus trabajadores
–además del salario-, el tiempo extra, los accidentes de trabajo. Sólo la Compañía
Industrial Manufacturera SA costeaba la pensión por invalidez o vejez. Aunque
ninguna empresa repartía utilidades, algunas de ellas proporcionaban escuela,
alojamiento y la posibilidad de tener una caja de ahorro. Asimismo, todas les
permitían descansar entre semana, algunas inclusive en los días festivos.
En el caso de los trabajadores de CIDOSA, ellos recibían salarios más altos
que los de otras compañías, con excepción algunos puestos administrativos de la
fábrica de “San Antonio”, de la Cía. Industrial de San Antonio Abad, “Hércules”, de la
Cía. Industrial Manufacturera SA y “La Magdalena”, de Veyan, Jean y Cía. S en C.
Les pagaban el tiempo extra duplicándoles el sueldo, al igual que CIVSA, y les
cubrían gastos médicos, medicinas y medio sueldo en cuanto accidentes como
muchas otras Cías. También les permitían descansar los domingos y les ofrecían
casas con agua y electricidad, escuelas y cajas de ahorro. Aunque estas
prestaciones eran iguales, y en algunos casos inferiores a las ofrecidas por otras
compañías textiles, les sirvieron a CIDOSA para retener a los trabajadores y
aminorar las presiones de los sindicatos.
353 Blasquez, Carmen y Corzo, Ricardo. Colección de Leyes y decretos de Veracruz 1824-1919. Universidad Veracruzana,
Xalapa, Ver, 1997.
212
Empresa Fábrica Empleado Obrero hombre
Obrero mujer
Obrero niños
Adultos Niños Noche Tiempo Extra
Pago por accidentes o enfermedad de trabajo
Pensión (temporal, permanente o vejez)
% utilidad
Escuela Descanso semanal
Alojamiento Caja de Ahorro
CIDOSA 1920 Cía. Industrial de Orizaba S.A.
Cocolapan 5.00 2.91 2.91 2.91 8 8 7 doble salario
Media raya, médico y medicinas
no hay antecedentes
no Sí Sí Ninguno Sí
San Lorenzo 5.00 2.68 2.68 2.68 8 8 7 doble salario
Media raya, médico y medicinas
no hay antecedentes
no Sí Sí Casas, Luz y agua
Sí
Cerritos 5.00 2.91 2.91 2.91 8 8 7 doble salario
Media raya, médico y medicinas
no hay antecedentes
no Sí Sí Casas, Luz y agua
Sí
Rio Blanco 5.00 2.91 2.91 2.91 8 8 7 doble salario
Media raya, médico y medicinas
no hay antecedentes
no Sí Sí Casas, Luz y agua
Sí
1921 Cocolapan 5.00 2.36 2.36 0.94 8 8 7 doble
salario Medio salario, médico y medicinas
No no Si Si Ninguno Si
San Lorenzo 5.00 2.36 2.36 0.92 8 8 7 doble salario
Medio salario, médico y medicinas
No no Si Si Ninguno Si
Cerritos 5.00 2.36 2.36 0.85 8 8 7 doble
salario
Medio salario,
médico y medicinas
No no Si Si Casas electricidad y agua
Si
Rio Blanco 5.00 2.36 2.36 0.96 8 8 7 doble
salario
Medio salario,
médico y medicinas
No no Si Si Casas electricidad y agua
Si
Cía. Industrial San 1921 Antonio Abad S.A. San Antonio
Abad 7.76 2.78 2.78 8 8 7 Convenio Según el caso raya,
media y médico No no no si Ninguno No
La Colmena y
Barron
4.50 1.50 1.50 8 8 7 Convenio Según el caso raya o media, medicinas y médico
No no no si Ninguno No
CIVSA 1920 Cía. Industrial Veracruzana S.A.
Santa Rosa 5.05 2.08 2.15 0.825 8 8 6 doble salario
Medio sueldo y médico en Fábrica
no hay antecedentes
no No Sí Casas No
1923 Extranjero Máximo Mínimo Promedio Santa Rosa 4.06 2.42 8 7 Los de ley El León 3.44 2.57 3.00 8 7 Domingo y
días festivos La Covadonga 3.29 2.52 2.90 8 7 Domingo días
de Ley Cía. Industrial de 1920 Guadalajara S.A. Rio Blanco 4.09 1.18 1.18 0.80 8 Medio sueldo más
consulta médica No aplica (NA) NA Sí Si Cuarto y
cocina No
Atemajac 4.03 1.33 1.33 1.00 8 Medio sueldo más consulta médica
No aplica (NA) NA Sí Si Cuarto y cocina
No
La Experiencia 4.03 1.53 1.53 1.00 8 Medio sueldo más consulta médica
No aplica (NA) NA Sí Si Cuarto y cocina
No
Cía. Industrial 1920 Manufacturera S.A. Rio Grande 3.50 1.66 1.66 0.80 8 Sueldo completo,
médico y medicinas Sueldo completo por accidente
NA Sí Si Casas No
Hércules 3.8 a
6.75
1 a 1.5 1 a 1.5 .5 a 1 8 8 7 o 7.5 50% Medio sueldo más consulta médica y medicinas
Medio sueldo o
cambio de trabajo
No No Sí Cuarto y
casas
No
Cía.Industrial de 1922 Extranjero Máximo Mínimo Promedio Atlixco S.A. Metepec 2.25 1.99 2.12 8 7 Domingo y
días festivos Veyan Jean y Cía 1920 S. En C. La Magdalena 3 a 10 1.5 a 2 .9 a 1.5 .9 a 1 8 6 a 8 7 10% Raya o media raya
según el caso no hay antecedentes
no Sí Sí Casas No
Caja Expediente Caja Expediente Caja Expediente Caja Expediente 62 11 208 33 405 1 430 1,5
106 39 209 16,39,41,42 409 3 435 2 207 33,44 395 3 426 4 637 2
Otras prestaciones Prestaciones económicas
Fuente : Archivo General de la Nación, Departamento del Trabajo:
Sueldo promedio diario Hrs. Trabajo Cuadro 14 . Sueldos y prestaciones otorgadas por las Compañías textiles a sus trabajadores, 1920-1923.
213
En 1928 Mauricio Chane, Director general de CIDOSA, propuso que para
resolver el pago por enfermedades profesionales y comunes, la empresa y los
trabajadores aportaran a una cooperativa $ 1.50 por mes por cada obrero, ya que
a la fecha la compañía pagaba todos los gastos de acuerdo a la Legislación
estatal. 354 CIVSA también sugirió que la pensión por accidente y vejez fuera
pagada por el gobierno, los obreros y la fábrica, y que se les concientice a los
obreros de los daños que causan a la industria las huelgas.355 Ese mismo año el
Presidente Calles dicta un laudo para evitar conflictos por enfermedad entre
obreros e industriales, donde obliga a los segundos a pagar los gastos.
CIDOSA solicitó al gobierno federalizara las leyes del trabajo y fomentara a
través de ellas las cajas de ahorro, seguros médicos, jubilaciones. Esto para evitar
huelgas y conflictos injustificados provocados por agitadores.356 Dada la
importancia de la industria textil en el país, en diciembre de 1932 se aprobó esta
solicitud en el Congreso, y los Conflictos obrero-patronales textiles fueron
competencia federal. 357
Además de la seguridad social, los empresarios debieron enfrentar en la
década de los treinta la falta de consumo nacional, la sobreproducción y algunas
crisis agrícolas.358 Los efectos que estos factores tuvieron sobre las ganancias e
inversiones de las compañías textiles, -en especial de CIDOSA- se analizan en el
siguiente apartado.
354 AGN, Presidentes: Plutarco Elías Calles, CIDOSA, 5690. 355 AGN, Departamento del Trabajo, Caja 209, Expediente 41. 356 AGN, Departamento del Trabajo, Caja 209, Expediente 39. 357 AGN, Presidentes: Abelardo L. Rodríguez, CIDOSA 017(011), Expediente 20, feb.1933. 358 Camiro, Max. “La industria textil de México y política económica del Estado 1933 a 1943. La situación en 1944”. Las
perspectivas en Jornadas 48. Cuestiones Industriales de México, COLMEX, México, 1945, pp.55.
214
Financieras
Inversiones y rendimientos
Después de la revolución se generó en México una crisis de confianza en
los empresarios por la aplicación de las nuevas leyes como la Constitución de
1917 y la Ley del Trabajo. La Constitución establecía ciertos derechos de
propiedad del Estado sobre recursos naturales como el petróleo y la tierra. Y la
Ley del trabajo, otorgaba ciertos derechos a los trabajadores: salarios y jornadas
de trabajo mínimas, vacaciones, prestaciones, derecho a organizarse en
sindicatos, derecho a la huelga, etc. Estas leyes permitieron a otros grupos de
interés, como campesinos y obreros, acceder al poder. Y los empresarios optaron
por no crear plantas nuevas, no cambiar maquinaria y desacelerar las inversiones
fabriles.359
En el caso de los socios de CIDOSA éstos, desde de su fundación en 1889
y hasta 1911, habían invertido el capital de la compañía principalmente en las
instalaciones fabriles y sus componentes (edificios, maquinaria, materia prima,
herramientas, etc.). Sin embargo a partir de 1920 la composición de sus
inversiones se modificó. El Cuadro 15 nos muestra la inversión destinada a los
diferentes activos de la empresa de 1889 a 1920.
De acuerdo a este Cuadro, en 1889 se invirtió el 51% del capital inicial en
adquirir las instalaciones fabriles de San Lorenzo y Cerritos. Después en 1911,
con la remodelación de Cocolapan, el capital invertido en las fabricas incluyendo
las hidroeléctricas aumentó al 69.32% del total de los activos de la compañía.
Siendo la fábrica de Río Blanco la de mayor inversión por su tamaño (más del
40%). Esto cambió para 1920 cuando la inversión destinada a las fábricas y las
hidroeléctricas se redujo al 43.92% del total del activo de CIDOSA. La decisión de
disminuir la inversión en las instalaciones fabriles fue –además de la depreciación-
porque sus empresarios se dieron cuenta que a nivel mundial el padrón de
359 Haber, Op.cit., 1992, p.191.
215
acumulación había cambiado de textiles a petróleo, y aunque las fábricas seguían
siendo redituables por las redes, sus rendimientos empezaban a decrecer.
Cuadro 15. Inversión en Activos fijos y circulantes de CIDOSA, 1889-1920 (pesos
corrientes).
Activo 1889 % 1911 % 1920 %
TOTAL 2,550,000.00$ 100% 26,574,175.08$ 100% 25,138,803.32$ 100%
Fábrica Río Blanco 10,951,872.38$ 41.21% 6,182,617.11$ 24.59%
Fábrica San Lorenzo 700,000.00$ 27.5% 2,630,697.39$ 9.90% 1,220,817.38$ 4.86%
Fábrica Cerritos 614,646.76$ 24.1% 798,723.31$ 3.01% 1,671,717.79$ 6.65%
Fábrica Cocolápan 2,410,354.21$ 9.07% 415,675.29$ 1.65%
Hidroeléctrica Cocolapan 497,086.81$ 1.87% 825,579.50$ 3.28%
Hidroeléctrica Rincón Grande 973,902.60$ 3.66% 401,791.24$ 1.60%
Hidroeléctrica Boquerón 158,620.62$ 0.60% 321,710.34$ 1.28%
Muebles y enseres 8,809.53$ 0.03% 0.00%Líneas de transmisión
eléctrica 0.00%
$ 43,281.02 0.17%
Alumbrado Nogales 0.00% $ 19,521.56 0.08%Terrenos en la Ciudad de
México 0.00% $ 177,000.00 0.70%
Oficinas en México 0.00% $ 13,497.41 0.05%
Construcción en Veracruz 0.00% $ 9,270.00 0.04%
Terrenos en Veracruz Pto. 0.00% $ 13,523.00 0.05%
Efectivo $ 58,194.55 0.22% $ 168,342.70 0.67%
Dividendos anticipados 483,948.50$ 1.82% 0.00%
Existencias generales $ 3,667,120.24 13.80% $ 6,695,107.39 26.63%
Cuentas Deudoras $ 3,934,844.94 14.81% $ 6,959,351.59 27.68%
Fuente: AHA, Fondo Aprovechamientos Superficiales, Caja 4528, Expediente 60052 y Caja 1436 Expediente 19546
AHNM, Notaría 5 a cargo de Bernando Cornejo, Escritura 9378, Volumen 113 del 11/9/1920
En el Cuadro 16 se muestran algunos de los rendimientos sobre la inversión
de CIDOSA y CIVSA, durante el periodo de 1905 a 1931. Lamentablemente no se
cuenta con todos los datos del periodo porque no se pudo acceder a los archivos
de la empresa. Sin embargo con la información localizada en otros acervos y en
obras de otros investigadores, se lograron calcular algunos rendimientos.
De acuerdo a la información del Cuadro 16, CIDOSA fue más redituable en
su inversión que CIVSA en 1905, 1906, y 1911. Sólo en 1920 CIVSA obtuvo
rendimientos superiores. Ambas compañías disminuyeron sus rendimientos en
casi la mitad, al concluir el Porfiriato en 1911 y, aunque para 1920 tuvieron un
ligero repunte, las ganancias no lograron recuperarse. De hecho con la crisis de
sobreproducción de 1929 CIDOSA registra su primera pérdida en 1931 y CIVSA
en 1930.
216
Cuadro 16. Rendimientos sobre la inversión de CIDOSA y CIVSA, 1905-1931.
Año Capital Ganancias Rendimiento
sobre la
inversion
1905 $ 8,500,000 $2,244,094.90 26.40%
1906 $ 8,500,000 $2,453,692.67 28.87%
1911 $ 15,000,000 $1,761,569.45 11.74%
1920 $ 22,500,000 $2,894,701.26 12.87%
1931 $ 14,625,000 -$1,523,122.85 -10.41%
Año Capital Ganancias Rendimiento
sobre la
inversion 1905 $ 3,350,000 $ 751,272.66 22.43%
1906 $ 3,350,000 $ 497,184.47 14.84%
1911 $ 3,350,000 $ 306,154.98 9.14%
1920 $ 9,045,000 $1,400,984.49 15.49%
1930 $ 9,045,000 -$ 341,399.74 -3.77%
Fuentes: Actas de asambleas de Accionistas, en Everaer, (1990),
pp. 85-94, y AGN, Departamento del Trabajo, Caja 5 Expediente 3
y Goméz Galvarriato, aurora (1999a), pp. 524-526, 542-544 y 556-557 .
CIVSA
CIDOSA
Los empresarios textiles también dirigieron parte de sus inversiones a
bienes raíces, que eran más seguros y en algunos casos más redituables. Por
ejemplo los socios de CIDOSA desde la fundación de sus fábricas compraron
terrenos en los municipios de Río Blanco, Nogales, Orizaba y el Puerto de
Veracruz. Estos terrenos se enlistan en el Cuadro 17. En él se observa que la
mayor extensión de tierra que poseía la empresa se encontraba en los municipios
de Tenango de Río Blanco (más de 92,000 mts2) y Nogales (17,000 mts2). Aunque
también poseían terrenos en la Ciudad de México (1,017 metros en las Haciendas
Isabela Católica y Uruguay) y en el Puerto de Veracruz (la manzana 39,91, 92 y 93
con una superficie de 33 807.59 metros).360
360
AHNM, Escritura 8977, Volumen 192, de la Notaría 3 a cargo de Ramón Rúiz, 28/2/1916.
217
Fecha de
compra
Dueño anterior Extensión del
terreno (mts2)
Colonia Ubicación Fecha de
venta
Nuevo dueño Precio de
venta
8/1/1895 Toribio Hernandez 568.75 Nogales 09/06/1932 Francisco Alvaréz 227.50$
11/1/1898 Víctor Garcín 354.00 Unión y progeso Río Blanco 06/09/1932 Mauro Monter Oreao 113.28$
8/1/1898 Víctor Garcín 432.00 Barrio Nuevo Río Blanco 26/07/1932 Martín Morter Orea 860.44$
Unión y progeso Río Blanco 26/07/1932 Martín Morter Orea 83.34$
8/12/1898 435.00 Juárez Río Blanco 10/06/1933 Franciso García Sainz 156.50$
770.00 Juárez Río Blanco 10/06/1933 Franciso García Sainz 308.00$
9/12/1898 1,423.30 Orizaba 27/07/1933 Sindicato de Obreros 50.00$
Nogales y similares de Río Blanco
Río Blanco
15/7/1889 Tomás Braniff 813.00 Nogales 10/08/1933 Jesús Vazquez Espinoza 120.93$
8/7/1889 Tomás Braniff 900.00 Nogales 10/08/1933 Gregorio Valencia 116.88$
15/7/1889 Tomás Braniff 900.00 Nogales 10/08/1933 Miguel Cruz 133.94$
15/7/1889 Tomás Braniff 900.00 Nogales 10/08/1933 Jose Domínguez 134.87$
3/8/1889 900.00 Nogales 10/08/1933 José Iglesias 133.94$
15/7/1889 Tomás Braniff 857.00 Nogales 10/08/1933 Francisco Trujillo 128.61$
15/6/1889 Tomás Braniff 900.00 Emilio Carranza Nogales 10/08/1933 Sacramento Sanchez 133.94$
3/8/1889 886.00 Emilio Carranza Nogales 10/08/1933 Adolfo Ramírez 134.87$
15/7/1889 900.00 Nogales 10/08/1933 José Naranjo 125.00$
15/7/1889 900.00 Nogales 10/08/1933 Miguel Corona 125.87$
15/7/1889 892.00 Nogales 10/08/1933 Dario C. Martínez 137.50$
15/7/1889 900.00 Nogales 10/08/1933 Agustín Gutierrez 125.00$
15/7/1889 900.00 Nogales 10/08/1933 Placido Vazquez 125.00$
15/7/1889 900.00 Nogales 10/08/1933 Andres Medina 182.00$
15/7/1889 900.00 Nogales 10/08/1933 Magdalena Ramírez 182.00$
24/09/1900 Felipe Loyo 2,370.00 Río Blanco 01/08/1933 Blandina Reyes 355.50$
15/7/1889 900.00 Río Blanco 01/08/1933 Julio Luna 116.88$
15/7/1889 900.00 Río Blanco 01/08/1933 Marcelino Pliego 134.87$
15/7/1889 900.00 Río Blanco 01/08/1933 Asunción Garrido 140.00$
15/7/1889 900.00 Río Blanco 01/08/1933 Ascencióm Sanchez 125.01$
15/7/1889 900.00 Río Blanco 01/08/1933 Consuelo Ramírez 125.01$
15/7/1889 676.00 Río Blanco 01/08/1933 Isabel Beltrán 87.75$
15/7/1889 890.00 Río Blanco 01/08/1933 Jacinto Salazar 136.03$
15/7/1889 693.00 Río Blanco 01/08/1933 Juan Sancez 85.28$
15/7/1889 900.00 Río Blanco 01/08/1933 Miguel Morales 131.01$
15/7/1889 900.00 Río Blanco 01/08/1933 Julian Flores 116.88$
15/7/1889 900.00 Río Blanco 01/08/1933 Leobardo Vazquez 125.87$
15/7/1889 584.00 Río Blanco 01/08/1933 Miguel Sanchez 135.42$
15/7/1889 777.00 Río Blanco 01/08/1933 Plutarco Vazquez 108.72$
15/7/1889 900.00 Río Blanco 01/08/1933 Modesto Flores 116.88$
15/7/1889 900.00 Río Blanco 01/08/1933 Juan García 125.87$
15/7/1889 900.00 Río Blanco 01/08/1933 Jesús H. Vasquez 133.94$
15/7/1889 918.00 Río Blanco 01/08/1933 Anastacio Escalante 128.97$
15/7/1889 900.00 Río Blanco 01/08/1933 Gonzalo Díaz 135.00$
15/7/1889 1,096.00 Río Blanco 01/08/1933 Raquel Ramírez Rodriguez 156.67$
10/2/1898 7,936.00 Río Blanco 17/04/1933 H.Ayuntamiento de Río Blanco 50.00$
10/2/1898 18,606.00 Morelos Río Blanco 29/05/1933 Hugo Torres 1,860.60$
02/05/1907 Felipe Loyo 1,569.80 Santa Catarina Río Blanco 14/12/1933 Gonzalo Lopez 156.98$
02/05/1907 Felipe Loyo 1,743.21 Santa Catarina Río Blanco 14/12/1933 Juan Lopez 174.32$
02/05/1907 Felipe Loyo 1,923.00 Santa Catarina Río Blanco 15/02/1934 Vicente Bueno 195.60$
02/05/1907 Felipe Loyo 1,539.65 Santa Catarina Río Blanco 12/01/1935 Magdaleno Castillo 153.97$
02/05/1907 Felipe Loyo 1,467.31 Santa Catarina Río Blanco 12/01/1935 Cenobio Crabal 146.73$
02/05/1907 Felipe Loyo 1,919.00 Santa Catarina Río Blanco 12/01/1935 Tomás Juárez 195.60$
02/05/1907 Felipe Loyo 1,680.35 Santa Catarina Río Blanco 12/01/1935 Angel Durán 168.04$
02/05/1907 Felipe Loyo 1,814.00 Santa Catarina Río Blanco 12/01/1935 Antonio Pérez 189.30$
02/05/1907 Felipe Loyo 1,884.05 Santa Catarina Río Blanco 22/01/1935 Pedro Montiel García 188.41$
02/05/1907 Felipe Loyo 1,241.00 Santa Catarina Río Blanco 22/01/1935 Gregorio Castro 124.10$
02/05/1907 Felipe Loyo 1,239.70 Santa Catarina Río Blanco 22/01/1935 Bernade Hernandez 123.97$
02/05/1907 Felipe Loyo 1,504.00 Santa Catarina Río Blanco 22/01/1935 Manuel Amador 150.47$
02/05/1907 Felipe Loyo 1,905.00 Santa Catarina Río Blanco 22/01/1935 Pablo Ramírez 192.50$
02/05/1907 Felipe Loyo 2,129.36 Santa Catarina Río Blanco 22/01/1935 Miguel Díaz 212.94$
02/05/1907 Felipe Loyo 1,820.00 Santa Catarina Río Blanco 22/01/1935 Jseús Varela 180.40$
02/05/1907 Felipe Loyo 1,813.90 Santa Catarina Río Blanco 22/01/1935 Salvador Vivar 183.19$
02/05/1907 Felipe Loyo 1,984.00 Santa Catarina Río Blanco 22/01/1935 Ignacio Espitiu G. 199.20$
02/05/1907 3,129.35 Santa Catarina Río Blanco 22/01/1935 Julían Vega 312.94$
02/05/1907 2,032.80 Santa Catarina Río Blanco 22/01/1935 Enrique Ajuris 203.28$
02/05/1907 1,919.00 Santa Catarina Río Blanco 22/01/1935 José Samaniego y Valencia 195.60$
02/05/1907 1,787.45 Santa Catarina Río Blanco 22/01/1935 Evodio Herrera 178.75$
02/05/1907 1,563.93 Santa Catarina Río Blanco 22/01/1935 Daniel Castillo 156.40$
02/05/1907 1,863.40 Santa Catarina Río Blanco 22/01/1935 Pavlino Ocaña 186.34$
02/05/1907 1,886.00 Santa Catarina Río Blanco 22/01/1935 Daniel Torres 188.60$
02/05/1907 1,980.00 Santa Catarina Río Blanco 22/01/1935 Sotero Vazquez 186.90$
Cuadro 17. Terrenos propiedad de CIDOSA, 1889-1932
218
Cuadro 17. Terrenos propiedad de CIDOSA, 1889-1932.
Fecha de
compra
Dueño anterior Extensión del
terreno (mts2)
Colonia Ubicación Fecha de
venta
Nuevo dueño Precio de
venta
425.86 Salvador Gonzalo García Río Blanco 14/11/1935 Fidel Blanco 43.36$
2,785.30 Salvador Gonzalo García Río Blanco 14/11/1935 Clemente Virueta 28.83$
1,508.60 Salvador Gonzalo García Río Blanco 14/11/1935 Bernardino García 150.19$
1,353.40 Salvador Gonzalo García Río Blanco 14/11/1935 Florencio Guameros 205.30$
1,495.50 Salvador Gonzalo García Río Blanco 14/11/1935 Atanasio Morales 180.16$
1,721.40 Salvador Gonzalo García Río Blanco 14/11/1935 Francisco Tlapacoyos 205.73$
1,655.40 Salvador Gonzalo García Río Blanco 14/11/1935 Isabel Maldonado 202.62$
2,823.00 Salvador Gonzalo García Río Blanco 14/11/1935 Fortino Ramos 287.75$
1,722.40 Salvador Gonzalo García Río Blanco 14/11/1935 Andres Tecama 172.14$
1,427.80 Salvador Gonzalo García Río Blanco 14/11/1935 Benjamin Huerta 144.78$
1,780.00 Salvador Gonzalo García Río Blanco 14/11/1935 Feliciano Trujillo 267.93$
471.15 Salvador Gonzalo García Río Blanco 14/11/1935 José Morales 70.95$
1,320.00 Salvador Gonzalo García Río Blanco 14/11/1935 Modesto Munuve 201.11$
1,982.90 Salvador Gonzalo García Río Blanco 14/11/1935 Delfino Zamora 197.17$
2,329.80 Salvador Gonzalo García Río Blanco 14/11/1935 Felipe Osorio 236.34$
1,222.40 Salvador Gonzalo García Río Blanco 14/11/1935 Pedro Serrano 183.26$
3,435.40 Salvador Gonzalo García Río Blanco 14/11/1935 Pedro Mellado 349.55$
2,000.00 Salvador Gonzalo García Río Blanco 14/11/1935 Eligio Martinez 80.00$
2,809.00 Salvador Gonzalo García Río Blanco 14/11/1935 Fructuoso García 112.36$
1,168.00 Salvador Gonzalo García Río Blanco 14/11/1935 Rafael Tecama Chaltzi 141.45$
1,870.30 Salvador Gonzalo García Río Blanco 14/11/1935 Jseus Vara 185.53$
1,110.00 Salvador Gonzalo García Río Blanco 14/11/1935 Luis N. Blanco 106.15$
1,427.30 Salvador Gonzalo García Río Blanco 14/11/1935 Miguel Lima 143.21$
611.00 Salvador Gonzalo García Río Blanco 14/11/1935 Basilisa Rodelas 93.39$
1,623.80 Salvador Gonzalo García Río Blanco 14/11/1935 Rueprto García 161.38$
1,217.20 Salvador Gonzalo García Río Blanco 14/11/1935 Clotilde Soriano 183.26$
1,718.40 Salvador Gonzalo García Río Blanco 14/11/1935 Jesús Rosales 205.97$
1,718.40 Salvador Gonzalo García Río Blanco 14/11/1935 Nicolas Hernandez 245.03$
2,176.00 Salvador Gonzalo García Río Blanco 14/11/1935 German Zuñiga 219.13$
2,000.00 Independencia Río Blanco 14/11/1935 Lucio Cabrera 80.00$
70.00 Piedra Gacha Río Blanco 14/11/1935 Aurelio Martinez 7.00$
810.75 Independencia Río Blanco 14/11/1935 Julio Porras 32.43$
388.50 Independencia Río Blanco 14/11/1935 Juan Rojas 15.54$
498.00 Independencia Río Blanco 14/11/1935 Angel castillo 19.92$
1,000.00 Independencia Río Blanco 14/11/1935 Paula Enriquez 40.00$
4,000.00 Independencia Río Blanco 14/11/1935 Mnauel Merino 160.00$
1,185.00 Independencia Río Blanco 14/11/1935 Juan Rojas 47.40$
1,250.00 Independencia Río Blanco 14/11/1935 Ricardo Hernandez 50.00$
1,270.00 Independencia Río Blanco 14/11/1935 Lucio Cabrera 50.80$
2,528.00 Independencia Río Blanco 14/11/1935 Feliz Lopez 101.12$
2,639.00 Independencia Río Blanco 14/11/1935 Agustin Gonzalez 105.56$
175.00 Piedra Gacha Río Blanco 28/02/1936 Ruben Medina 70.00$
El Aguila Nogales
54.00 Felipe carrillo Puerto Río Blanco 11/11/1936 Diego Pérez 82.94$
180.40 Felipe carrillo Puerto Río Blanco 11/11/1936 Jose Maria de Jesús 85.84$
783.80 Felipe carrillo Puerto Río Blanco 11/11/1936 Martín Ramos 86.21$
781.20 Felipe carrillo Puerto Río Blanco 11/11/1936 Tomás Pérez 5.93$
792.00 Felipe carrillo Puerto Río Blanco 11/11/1936 Lázaro Gonzalez 87.14$
1,431.55 Felipe carrillo Puerto Río Blanco 11/11/1936 Domingo Gonzalez 157.47$
753.50 Felipe carrillo Puerto Río Blanco 11/11/1936 Tomás Martínez 82.88$
1,277.35 Felipe carrillo Puerto Río Blanco 11/11/1936 Lorenzo Contreras 139.40$
1,210.00 Felipe carrillo Puerto Río Blanco 11/11/1936 Sabino Pateiro 133.10$
792.50 Felipe carrillo Puerto Río Blanco 11/11/1936 Ernesto garcía 87.17$
797.50 Felipe carrillo Puerto Río Blanco 11/11/1936 Tomás Pérez 87.72$
1,997.76 Felipe carrillo Puerto Río Blanco 11/11/1936 AbelRamírez 131.75$
1,520.40 Felipe carrillo Puerto Río Blanco 11/11/1936 Sabino Pateiro 167.24$
1,082.00 Felipe carrillo Puerto Río Blanco 11/11/1936 Samuel Hernandez 119.06$
1,504.00 Felipe carrillo Puerto Río Blanco 11/11/1936 Camilo Bello 165.51$
750.00 Felipe carrillo Puerto Río Blanco 11/11/1936 Antonio Sanchez 82.55$
1,017.00 Uruguay e Isabela Católica México D.F.
28/02/1916 Sra. Rosa Luz Tejeda de Díaz33,809.59 Manzana 39,91,92 y 93 Veracruz, Ver.
TOTAL 225,274.82
Fuente: Libros de comercio del Registro Público de la Propiedad de Orizaba, Veracrzu (RPPO) y AHNM Notaría 3, Notarío Ramón Ruiz, vol. 192.
Escritura 8977 del 28/2/1916
219
En los terrenos de Río Blanco, los socios de CIDOSA construyeron
aproximadamente 1,100 casas para rentarlas a sus obreros y empleados. En 1924
el Gobierno de Veracruz, invitó a los propietarios de terrenos baldíos a donarlos al
Estado para construir casas de bajo costo. Ante estas circunstancias CIDOSA,
que era un importante terrateniente, decide en 1925 conservar los terrenos más
valiosos y vender los demás a sus trabajadores o donarlos a los sindicatos. Esto
como parte de su estrategia para evitar la expropiación de la reforma agraria ya
que sus terrenos eran la mejor tierra para propósitos agrícolas. La importancia de
la venta de terrenos para CIDOSA fue tal que en 1927 los pagos de colonos eran
mayores a la cantidad que la compañía recibía por su alquiler. Tal vez porque ese
año se efectuaron los enganches. Para 1928 los pagos parecían normalizados
siendo del 56% de lo que obtenía por el alquiler.361
Las ventas y/o donaciones de terrenos de CIDOSA se acentuaron en la
década de los treinta. Siendo una de las más importantes la que ocurrió en abril de
1933 cuando CIDOSA vende al H. Ayuntamiento de Río Blanco un terreno de
7,936 mts.2 a un precio de $50 para que se construyera una escuela; o la de julio
de 1933, cuando el consejo de Administración de CIDOSA faculta a Juan
Lacouture, para que vendiera algunos terrenos de la compañía (1423 mts.2)
ubicados en los municipios de Orizaba, Nogales y Río Blanco, al Sindicato de
Obreros y similares de Río Blanco, a un precio de $50 con valor fiscal de
$1,008.00, para que fueran ocupados por las oficinas del sindicato, y cuya única
condición de la empresa fue que no quedaran dentro de las zonas de protección a
los canales, o con proximidad a la fábrica o a las casas de los obreros, ya que
éstos podrían necesitarse para ampliaciones.362
El cuadro 17, también muestra las fechas, precios y personas a las que les
fueron vendidos o cedidos estos terrenos a partir de 1932, cuando la empresa
registró un periodo de decaimiento en sus ganancias y eso la obligó a reducir
también sus inversiones en bienes raíces.
361 Gómez Galvarriato, Aurora. “La transformación de los pueblos fabriles del Valle de Orizaba” en 20/10 Memoria de las
Revoluciones en México. Primavera, 2009. México, pp.102. 362
Registro Público de la Propiedad de Orizaba (RPPO), Libro de comercio, 27/7/1933.
220
Por su parte el Consejo de CIVSA considera en 1927 “que las casas de la
compañía no son redituables y pide a los gerentes estudiar la posibilidad de
venderlas a los mismos obreros que las rentan. Ellos argumentan que los obreros
serían buenos compradores, además podría causarse un problema si no se les
vende a ellos. CIVSA implementó esta idea cerca de 1970, aproximadamente 50
años después de que CIDOSA lo hizo”.363
Otra parte de los terrenos propiedad de CIDOSA, fueron rentados a los
Gobiernos municipales para que construyeran edificios públicos. “En 1922
CIDOSA reportó ser propietaria de la parroquia católica y del mercado. Por este
último, CIDOSA cobraba a la municipalidad de Río Blanco $96 pesos mensuales
en 1926”.364
Otra forma en que los socios de CIDOSA obtuvieron ingresos, desde la
fundación de sus fábricas hasta 1912 fueron las tiendas de raya. Estos negocios
les servían a los empresarios para recuperar parte de los salarios de los obreros,
al obligarlos a comprar en ellas los alimentos, ropa y otros bienes que
necesitaban. Existían en la Fábrica de San Lorenzo, en Río Blanco y Santa Rosa,
pero sólo podían comprar sus respectivos obreros. Las tiendas de raya recibían
los vales emitidos por las compañías textiles como adelanto del salario a solicitud
del obrero. Los vales se podían canjear por mercancías o por dinero al 90% de su
valor. El sábado siguiente el monto adelantado a los trabajadores se descontaba
de sus salarios para pagar la deuda. CIDOSA concesionó su tienda de raya de la
fábrica de Río Blanco a Víctor Garcín, y CIVSA la concesionó a la familia Fuentes,
a cambio de $150 mensuales y una comisión de 5% sobre los descuentos
semanales que hicieran a la raya de los obreros por comprar mercancía en la
tienda.365
Después de los conflictos de 1907, donde los obreros quemaron las tiendas
de Víctor Garcín. Él decidió vender su propiedad a Manuel Diez y abandono la
zona. Mientras que los socios de CIVSA ordenaron al Director general de la
363
Gómez Galvarriato, Aurora. 1999ª, Op,cit, pp. 476. 364 Gómez Galvarriato, Aurora. 2009, Op,cit, pp.98. 365 Ídem, pp. 102.
221
fábrica de Santa Rosa anular cualquier obligación de la compañía con la tienda de
raya. 366
En 1912 las tiendas de raya fueron prohibidas por la Convención de
Industriales y obreros textiles y en 1914 por el Gobernador de Veracruz, Cándido
Aguilar y por la Constitución de 1917. 367
Las tiendas de raya y los bienes inmuebles formaron parte de los negocios
de los socios de CIDOSA que ayudaron a esta compañía a aumentar sus
ganancias y los dividendos que repartían a sus socios, los cuales se describen a
continuación.
Dividendos y capital, 1895-1936.
CIDOSA, CIVSA, Cía. Industrial San Antonio Abad y Cía. Industrial de
Atlixco, fueron de las compañías manufactureras con mayores utilidades durante
el periodo de 1900-1930. Inclusive, durante la Revolución éstas mantuvieron cierto
margen de ganancia que les permitió repartir dividendos a sus socios368. Los
dividendos repartidos por estas y otras empresas manufactureras de 1895 a 1925
se muestran en el Cuadro 18.
De acuerdo a los datos del Cuadro 18, las compañías que otorgaron a sus
accionistas los más altos de dividendos de 1901 a 1925 fueron la Cía. Industrial La
Laguna, Cía. Cigarrera El Buen Tono y CIDOSA. Está última repartió dividendos
superiores a las de las demás compañías textiles porque obtuvo mayores
ganancias (ver cuadro 16).
Sin embargo, a pesar de los montos repartidos en dividendos, los dueños
de las compañías textiles continuaron aplicando en sus fábricas la lógica del
ahorro y de reinversión de sus tiendas comerciales. Casi todas conservaron parte
de sus ganancias en fondos, lo cuales usaron para financiar el crecimiento de sus
manufacturas. Por ejemplo los dueños de la Cía. Industrial de Atlixco y los de
CIDOSA establecieron desde su fundación un fondo de reserva por el 10% de las
366 Ídem, pp. 103. 367 Ídem, pp. 103. 368 Ver Haber, S. Op.cit, 1992.
222
utilidades anuales que obtuviera la compañía, hasta por un monto máximo de la
quinta parte del capital social exhibido.369
Cuadro 18. Dividendos de compañías manufactureras de México, 1895-1925
(pesos corrientes).
En el caso de CIVSA, sus socios acordaron conservar parte de sus
ganancias para hacer frente a los riesgos futuros. Para ello, establecieron el fondo
preventivo, el del riesgo imprevisto, el de la fluctuación sobre divisas, el del seguro
y el de penalización sobre deudores. 370
Estos fondos también sirvieron para aumentar el capital y realizar nuevas
inversiones. Por ejemplo, en 1913, el capital de CIVSA se incrementó en 80% de
369 AHNM, Escritura 155 del Volumen 3025, Notaría 444 a cargo de Rafael Morales, 28/6/1889 y Escritura 5 Volumen 13
Notaría 25, a cargo de Juan M. Villeda, 5/1/1899. 370 Gómez Galvarriato, Aurora. 1999ª, Op,cit, pp. 116.
Año Cía. de Cigarros El buen tono
Fábrica de lana San Idelfonso
CIDOSA San Antonio
Abad
Atlixco CIVSA Cía. Jabonera de La Laguna
Cervecería
Moctezuma 1895 60.00 $ - $ - $ 72.00 $ - $ - $ - $ - $ 1896 64.00 $ - $ 16.00 $ 85.00 $ - $ - $ - $ - $ 1897 58.00 $ - $ 18.00 $ 51.00 $ - $ - $ - $ - $ 1898 65.00 $ 18.00 $ - $ 49.00 $ - $ - $ - $ - $ 1899 68.00 $ 20.00 $ - $ - $ - $ - $ - $ - $ 1900 77.00 $ 18.00 $ - $ - $ - $ - $ - $ - $ 1901 62.00 $ - $ 32.00 $ - $ - $ 37.00 $ 50.00 $ - $ 1902 24.00 $ - $ 23.00 $ - $ - $ 29.00 $ 85.00 $ 15.00 $ 1903 24.00 $ - $ 54.00 $ - $ - $ 29.00 $ 49.00 $ 5.00 $ 1904 50.00 $ - $ 56.00 $ - $ - $ 33.00 $ 88.00 $ 45.00 $ 1905 45.00 $ - $ 50.00 $ - $ - $ 27.00 $ 78.00 $ 22.00 $ 1906 57.00 $ 57.00 $ 50.00 $ 9.00 $ 20.00 $ 27.00 $ 80.00 $ 27.00 $ 1907 68.00 $ 8.00 $ 59.00 $ 11.00 $ 20.00 $ 30.00 $ 80.00 $ 32.00 $ 1908 66.00 $ 8.00 $ 47.00 $ 11.00 $ 20.00 $ 29.00 $ 111.00 $ 22.00 $ 1909 62.00 $ - $ 42.00 $ - $ - $ 27.00 $ 104.00 $ 17.00 $ 1910 31.00 $ 4.00 $ 36.00 $ 9.00 $ - $ 23.00 $ 89.00 $ 32.00 $ 1911 30.00 $ 2.00 $ 20.02 $ 5.00 $ 4.00 $ 13.00 $ 40.00 $ 14.00 $ 1912 30.00 $ 2.00 $ 20.02 $ - $ 3.00 $ 12.00 $ 50.00 $ 12.00 $ 1913 - $ 3.00 $ 11.26 $ - $ 3.00 $ 12.60 $ 20.00 $ 8.00 $ 1914 14.60 $ 20.02 $ - $ - $ 5.40 $ - $ 8.00 $ 1915 - $ 3.00 $ 20.02 $ - $ - $ - $ - $ - $ 1916 - $ 0.60 $ - $ 2.00 $ - $ - $ - $ - $ 1917 23.44 $ - $ 14.34 $ 6.00 $ - $ - $ 41.02 $ - $ 1918 23.44 $ 2.72 $ 13.59 $ 11.46 $ - $ 5.30 $ 21.72 $ 10.16 $ 1919 23.44 $ 2.99 $ 34.87 $ 8.00 $ - $ 14.33 $ 55.72 $ 37.24 $ 1920 39.84 $ 4.02 $ 40.25 $ 6.00 $ 6.00 $ 21.79 $ 76.38 $ 23.94 $ 1921 46.88 $ 7.14 $ 53.62 $ 12.00 $ 3.00 $ 22.03 $ 16.32 $ 37.24 $ 1922 46.88 $ 5.13 $ 34.48 $ - $ 3.00 $ 30.31 $ - $ 33.25 $ 1923 46.88 $ 4.12 $ 38.67 $ - $ 6.00 $ 13.91 $ 40.00 $ 19.95 $ 1924 46.88 $ 4.14 $ 15.54 $ - $ 6.00 $ 21.92 $ 51.75 $ 19.95 $ 1925 46.88 $ 2.03 $ 15.24 $ - $ - $ 8.22 $ - $ 19.95 $
Fuente : Haber (1992) Cuadro 7.4. y Cuadro 8.7. pp. 146 y 170.
223
$3,350, 000 a $6,030,000, y se utilizaron $2,680,000 de un total de $3,667,770.31
de las ganancias retenidas en los fondos en 1912. También en 1919 cuando el
capital de CIVSA aumenta en un 50% de $6 030,000 a $9, 045,000, se utilizaron
$3,015,000 de un total de $3,428,748.84 que se tenían en 1918.371
CIDOSA también contó con un fondo de previsión, uno de amortización y
uno de seguro. Los montos de estos fondos para 1911 y 1919, se enumeran en el
Cuadro 19. En este cuadro se observa que los fondos representaban el 58% del
total de capital social de 1911 y el 40% en 1919. Además comparándola con la
información del Activo, se observa que la suma de todos los fondos de capital
representaba el 32.90% de la inversión que la compañía tenía en 1911 y el 24%
en 1919.
Los socios de CIDOSA utilizaron los recursos de estos fondos para los
aumentos del capital de 1920 a 1936 y para realizar nuevas inversiones. De hecho
como se observa en el Cuadro 19, el grado de apalancamiento o el financiamiento
de los activos a través de pasivos solo representó para CIDOSA un poco más del
4%. Esto indica que la mayor fuente de capital para CIDOSA –al igual que para
CIVSA- fue la reinversión de utilidades.
Cuadro 19. Activos, cuentas de capital y pasivos de CIDOSA, 1911 y 1919.
371 Gómez Galvarriato, Aurora. 1999ª, Op,cit, pp. 118-122.
Activo Total 26,574,175.08 $ 100% 25,138,803.32 $ 100%
Capital social 15,000,000.00 $ 56% 15,000,000.00 $ 60%
Fondo reserva 2,721,591.54 $ 10.2% 2,628,582.13 $ 10.5%
Fondo previsión 1,558,097.35 $ 5.9% 634,608.50 $ 2.5%
Fondo amortización 3,960,683.04 $ 14.9% 0.0%
Fondo seguro 490,613.36 $ 1.85% 474,029.70 $ 1.89%
Cuentas de garantía 2,304,714.37 $ 9.17%
Total de fondos 8,730,985.29 $ 32.9% 6,041,934.70 $ 24.0%
Pasivo (ctas. Acreedoras) 1,081,620.34 $ 4.07% 1,083,040.14 $ 4.31% Fuente : AHA, Aprovechamientos Superficiales, Caja 4528, Expediente 60052
y Caja 1436 Expediente 19546. AHNM, Notaría 5 a cargo de Bernardo Cornejo,
Escritura 9378, Volumen 113 del 11/9/1920
1919 1911
224
La primera reinversión de utilidades importante que aplicaron los socios de
CIDOSA fue en 1908, cuando se aumentó el capital de $8, 5000, 000 a $15, 000,
000, tomándose del fondo de previsión $3, 000, 000 y el resto de la emisión de
acciones.372
Después, en 1920, se decidió disponer de recursos de diferentes fondos de
la empresa, para incrementar el capital social de $15, 000, 000 a $22, 500, 000. El
balance del 31 de diciembre de 1919 (ver Anexo D) mostraba como importe total
de los valores, bienes muebles e inmuebles de la compañía $11, 316, 001.56.
Según estudio hecho por peritos, el valor real ascendía a $16, 755, 756.66. 373 La
diferencia constituía por sí misma un valor que pertenecía a los accionistas y
debía consolidarse a su capital. La asamblea general de accionistas del 30 de
agosto de 1920 acordó que la cantidad de $5, 439, 755.10 se aplicaría para cubrir
parte del aumento del capital social que se había acordado. Como el fondo de
previsión poseía en ese momento un total de $956, 620.12, y por pertenecer
igualmente a los accionistas, se pactó que también podía aplicarse. Asimismo, de
varias cuentas de garantía se tomó $1, 115, 714.25, que sumado a lo anterior dio
un total de: $7, 512, 089.47. De éstos, $7, 500, 000 se utilizaron para incrementar
el capital y los $12, 089.47 se destinaron al fondo de reserva. 374
Las acciones que respaldaron el nuevo capital se canjearon en proporción
de dos de las anteriores por tres de las nuevas, conservando su valor de $100
cada una.375 Este aumento del capital fue el último registrado por CIDOSA de
1920 a 1933, tal como se observa en el Cuadro 20. De acuerdo a este cuadro,
durante la década de 1930, CIDOSA registra una pérdida de capital del 35 por
ciento en 1931 y del 23 en 1933. Esto fue debido la crisis de demanda de bienes
de consumo que se sufrió en 1929.
372 AHNM, Escritura 2436 del Volumen 35, Notaría 5 a cargo de Bernardo Cornejo, 24/4/1908. 373 La inflación para 1918 fue de 124.36 por ciento y en 1920 de 5%. Super tabla histórica, del Ing. Manuel Aguirre
Botello, www.mexicomaxico.org. 374 AHNM, Escritura 9378 del Volumen 113, Notaría 5 a cargo de Bernardo Cornejo, 11/09/1920. 375 Ídem.
225
Cuadro 20. Modificaciones al capital de CIDOSA, 1920-1974 (pesos corrientes).
Fecha Tipo de Modificación Capital anterior Capital
aportado
Capital Actual % del cambio
11/09/1920 Aumento 15,000,000$ 7,500,000$ 22,500,000$ 50.00%
04/09/1931 Disminución 22,500,000$ 7,875,000-$ 14,625,000$ -35.00%
18/07/1933 Disminución 14,625,000$ 3,375,000-$ 11,250,000$ -23.08%
14/11/1936 Aumento 11,250,000$ 5,625,000$ 16,875,000$ 50.00%
13/06/1949 Aumento 16,875,000$ 25,312,500$ 42,187,500$ 150.00%
20/05/1957 Aumento 42,187,500$ 42,187,500$ 84,375,000$ 100.00%
05/06/1971 Aumento 84,375,000$ 5,625,000$ 90,000,000$ 6.67%
05/11/1974 Aumento 90,000,000$ 20,000,000$ 110,000,000$ 22.22%
Fuente: AHA, Fondo Aprovechamientos Superficiales, Caja 4506, Expediente 59678
Archivo Histórico de Notarías de la Ciudad de México
Notaría/Notario Fondo Volumen Escritura Fecha
5.Bernando Cornejo Contemporáneo 113 9378 11/09/1920
32.Rafael Rebollar Contemporáneo 89 6799 04/09/1931
48.Rafael del Paso Contemporáneo 99 6705 18/07/1933
48.Rafael del Paso Contemporáneo 141 9141 14/11/1936
En el mundo, la producción de bienes superó las necesidades reales de
consumo de 1925 a 1930, sobre todo en los Estados Unidos, donde las
mercancías aumentaban conforme se reconstruían las economías europeas. Las
causas de la sobreproducción fueron: A. La distribución desigual de las rentas,
que llevaba implícita la limitación del consumo a las capas sociales más ricas, que
en la mayor parte de los países no eran muy numerosas. Galbraith señala que en
los Estados Unidos el 5 por 100 de la población recibía la tercera parte de la renta
nacional. B. El mantenimiento de precios de monopolio, tipo cartel, que obligaba a
la existencia de grandes cantidades de mercancías sin vender, al comprometerse
los fabricantes a mantener unos precios pactados de antemano. C. Desfase entre
precios agrícolas e industriales: los primeros crecieron más lentamente que los
segundos e hicieron disminuir, el poder adquisitivo de los campesinos, importante
clientela de la industria.376
En México, de 1926 a 1932, las ventas de tejidos de algodón cayeron y las
existencias se acumularon. En el Cuadro 17, se presentan las ventas semestrales
de tejidos de algodón en el país de 1923 a 1934. En él se observa que del
segundo semestre de 1926 al primer semestre de1929, las ventas fueron menores
a los $50,000,000, y que los años de menor monto de venta fueron 1931 y 1932.
376 www.zonaeconómica.com/crisis-29
226
Cuadro 17. Ventas de tejidos de algodón en México 1923-1934.
AÑO
1923 1 sem 49,193,142.75$
2 sem 47,755,705.39$
1924 1 sem 40,172,453.99$
2 sem 56,262,583.61$
1925 1 sem 57,291,058.68$
2 sem 51,104,545.64$
1926 1 sem 51,378,639.06$
2 sem 44,059,233.30$
1927 1 sem 44,901,353.98$
2 sem 46,167,226.73$
1928 1 sem 48,272,507.61$
2 sem 48,020,903.18$
1929 1 sem 44,815,202.07$
2 sem 52,196,571.04$
1930 1 sem 50,416,370.62$
2 sem 44,185,673.38$
1931 1 sem 40,689,549.34$
2 sem 39,408,484.35$
1932 1 sem 40,389,448.92$
2 sem 41,615,356.63$
1933 1 sem 46,767,370.07$
2 sem 55,305,860.47$
1934 1 sem 68,723,568.91$
Fuente: Biblioteca Miguel Lerdo de Tejada de la SHCP
Archivos Económicos. Diario de los negocios, 3-dic-1934.
Ventas (pesos corrientes)
Durante el periodo de 1926 a 1932, la industria textil solicitó al gobierno
cerrar temporalmente por sobreproducción. Pero no le fue concedido, por lo que
debió operar un turno por día, acumular inventarios que disminuían sus precios y
pagar un incremento salarial de entre el 10 y 25 por ciento a los trabajadores,
porque el gobierno del presidente Calles los obligó.377
Haber afirma que la economía mexicana se contrajo en 1926, -antes de la
Gran Depresión- e inició su recuperación a partir de 1932 debido a que: 1. Gran
parte de la población de México vivía en pequeñas comunidades y producía para
la subsistencia, lo que sirvió para que el colapso de las exportaciones y la crisis
del 29 tuvieran un menor impacto que en otros países. 2. Los precios del petróleo
377 Haber, S. Op.cit., 1992, pp.208-212.
227
y la plata se recuperaron rápidamente, permitiendo a la economía mexicana
incrementar sus ingresos por la misma vía que los había perdido.378
En el caso de CIDOSA sus mercancías se empezaron acumular a partir de
1929 porque elaboraba principalmente telas de color para casimires y driles
dirigidas a clases altas. Las cuales vendía a precios ya pactados a las tiendas
comerciales de sus socios (ver apartado de estrategias de comercialización). En el
Consejo de Administración de 1930 los socios comentan que “la situación del país
era poco propicia para la venta de sus productos y solicitaron a las autoridades
permiso de parar temporalmente las fábricas para intentar reducir las
existencias”.379 La Secretaría de Industria, Comercio y Trabajo les autorizó laborar
sólo cuatro días por semana. Aun así, por la depresión económica que se sufría,
los altos costos de la mano de obra y las elevadas existencias de los productos
terminados, los socios proponen reducir el capital social.380
El 29 de junio de 1931 los socios de CIDOSA celebraron una asamblea
general extraordinaria. Ahí acordaron reducir el capital a la suma de $14, 625, 000,
representado por 225 mil acciones de $65 cada una. Pactaron que no se emitirán
nuevos títulos, sólo se aplicaría a los actuales un sello en el que expresara la
reducción del capital.381
Entre 1931 y 1932 las fábricas de CIDOSA permanecieron cerradas
diciembre, enero y febrero. Sólo trabajaron 27 horas por semana, y se volvió a
disminuir el capital social de la compañía, quedando ahora en $11, 250, 000,
representado por 225 mil acciones, de $50 cada una.382.
Ante este panorama los socios se plantearon la disolución y liquidación
anticipada de la empresa, lo que condujo al gobierno federal a intervenir y firmar
un acuerdo para igualar los salarios textiles con los de las industrias similares en
el país y trabajar sólo 219 jornadas laborales, en vez de 302 que se venían
realizando.383
378 Ídem. 379 Actas de Asambleas del Consejo de Administración de CIDOSA 1929 y 1930, en Everear, op.cit, 1990, pp. 92-93 380 Ídem. 381 AHNM, Escritura 6799 del Volumen 89, Notaría 32 a cargo de Rafael Rebollar, 04/09/1931. 382 AHNM, Escritura 6705 del Volumen 99, Notaría 48 a cargo de Rafael Del Paso, 18/07/1933 383Actas de Asambleas del Consejo de Administración de CIDOSA 1931 y 1932, en Everear, op.cit, 1990, pp. 92-93.
228
Fue hasta 1935 que se restableció la semana de trabajo completa y hasta
noviembre de 1936, que el capital volvió incrementarse a un monto de $16,
875,000, representado por 337,500 acciones, con valor de $50 cada una. El monto
del aumento fue de $5,625,000, el cual equivalía al revaluó del activo fijo.384
Para este aumento de capital se crearon 112,500 acciones de $50, que se
entregaron a razón de una acción nueva por dos de las antiguas y con
participación en las ganancias a partir del 1 de enero de 1936. También se acordó
que se prorrogaría la duración de la sociedad por 34 años, desde el 26 de abril de
1952, fecha en que expiraba el plazo anterior, hasta el 26 de marzo de 1986.385
Las modificaciones al capital de CIDOSA de 1936 en adelante no se
incluyen en este análisis porque rebasan los límites temporales de este trabajo.
Sin embargo de acuerdo a lo investigado, después de la segunda guerra mundial
(1942-1945), el deterioro y vejez de la maquinaria y equipo, así como por el
desmantelamiento de sus departamentos386, provocó que CIDOSA disminuyera
sus ganancias y fuera vendida en 1962 a Jerónimo Arango, Carlos Trouyet y
Manuel Senderos, quienes continuaron operando las fábricas en Orizaba hasta
1993, cuando la empresa fue declarada en quiebra.
Las compañías textiles en México de 1889 a 1930, lograron aumentar su
producción porque integraron sus procesos productivos (hilado, tejido y
estampado), usaron nuevas tecnologías (energía hidráulica y eléctrica) e
incorporaron mayor número de obreros -aunque no elevaron su productividad.387
384 Actas de Asambleas del Consejo de Administración de CIDOSA 1936, en Everear, op.cit, 1990, pp. 94. 385 AHNM, Escritura 9141 del Volumen 141, Notaría 48 a cargo de Rafael Del Paso, 14/11/1936 386
En 1950, los socios de CIDOSA reorganizaron sus fábricas textiles. Desmantelaron el departamento de
acabados y su maquinaria y fuerza laboral fueron trasladados a la Ciudad de México, donde se fundo la
sociedad Acabados México S.A. Esta empresa se ubicó en Calzada de Xochimilco y se encargó de la
presentación final de las telas a través del blanqueo, apresto, almidonado, estampado y tinte. También
desmantelaron sus talleres de mantenimiento dado que la nueva maquinaria norteamericana ya no requería los
servicios de carpintería, fundición, etc. Everear, op.cit, 1990. 387
Chandler señala que en las industrias mecánicas, como la textil, la producción total aumenta más por la incorporación
de personal y maquinaria que por la innovación continuada en la tecnología y la organización. Por esta razón, la
ampliación del tamaño de la empresa genera pocas ventajas en lo que se refiere al aumento de la productividad y
disminución de costos. Chandler, Op.cit, 1987, p.349. En México, para la primera década del siglo XX, las fábricas
textiles de algodón: A) Aumentaron su número de telares en un 135%y el número de husos en 116% . (Esto porque
cambiaron su producción hacia el tejido y el estampado, disminuyendo la elaboración de hilaza). B) Incrementaron su
producción de piezas de manta en un 126%, al pasar de un promedio de producción de 68,531 piezas de manta, durante el
período de 1843-1887, a 155,025 piezas, de 1893-1913. C) Elevaron la productividad (piezas de manta por obrero) en un
46%: de 144 piezas promedio por obrero, de 1843-1887, a 212 piezas, de 1893-1913. Ese aumento es de menor magnitud
229
En el caso de CIDOSA, fue la pionera en uso de energía eléctrica y creación
de fábricas de gran escala (Río Blanco) que requirieron nuevas estructuras
organizativas. De acuerdo a Gómez Galvarriato, CIVSA imitó en su estrategia y
estructura a CIDOSA, porque a pesar de que CIVSA sólo controlaba una fábrica
hasta 1920 y CIDOSA varias, CIDOSA tuvo que desarrollar ciertas prácticas
contables y administrativas que luego adoptó CIVSA y que le generaron ganancias
derivadas de la experiencia previa de CIDOSA. 388 Una forma de apreciar la
importancia de las estrategias organizacionales y la construcción de las redes de
los empresarios de CIDOSA es pasar revista a los efectos regionales en un lugar
como el Valle de Orizaba en Veracruz.
Capítulo 3: Estrategias de los empresarios de CIDOSA ................................................... 148
En la producción ......................................................................................................... 150
Principales fábricas y compañías textiles en México 1843-1920. .................. 150
Recursos .................................................................................................................. 166
Agua .......................................................................................................................... 166
Procesos de trabajo ................................................................................................ 178 Patentes ................................................................................................................... 186
En la comercialización ............................................................................................... 190 Marcas. ..................................................................................................................... 190
Redes de distribución ............................................................................................. 196 Laborales ...................................................................................................................... 203
Salarios y el papel del Estado .............................................................................. 203 Prestaciones y seguridad social. .......................................................................... 210
Financieras .................................................................................................................. 214
Inversiones y rendimientos .................................................................................... 214 Dividendos y capital, 1895-1936. .............................................................................. 221
que los anteriores, porque al igual que sus antecesoras acrecentaron su producción comprando más máquinas y no siendo
más eficientes al utilizarlas. 388 En 1920 las ventas se incrementan y el consejo de CIVSA decide rentar la fábrica de La Covadonga en Puebla, así
como subcontratar producción de ropa en Amatlán y en La Claudina en Perote Veracruz. También compra la fábrica de El
León ubicada en Puebla. Con estas decisiones, su producción se incrementó entre 25 y 30 millones de metros de ropa por
año entre 1920 y 1923. Gómez Galvarriato, Aurora. Op.cit,1999ª, p.539.
230
Capítulo 4: Efectos regionales
El Valle de Orizaba389 fue un entorno geográfico y sociocultural propicio al
desarrollo de los negocios. Sus características físicas, a las que se añadía
paradójicamente una accidentada orografía, la dotaron de abundantes fuentes de
agua y de un clima templado húmedo. Eso contribuyó a que desde muy temprano
en la Colonia fuese usado como área de reposo y descanso de largas travesías
ultramarinas, así como depósito de productos agrícolas muy importantes, como
sucediese con el tabaco.390
El Valle poseía además otras características estratégicas que lo hicieron
deseable: como era su relativa cercanía a las ciudades de Veracruz, Puebla y
México; la estrechez de sus caminos que permitía tener un mayor control sobre el
tráfico de mercancías y servicios de transporte como el ferrocarril. Lo cual hacia de
él un sitio privilegiado para el desarrollo de una serie de actividades económicas
de carácter industrial como serían la fabricación de textiles, cerveza, chocolate,
tabaco, etc.
En ese contexto geográfico, regional, muy temprano a escasos doce años
de haber obtenido la Independencia de España, se inició el establecimiento
sistemático de empresas textiles. Sin embargo, y aún cuando existía desde 1810
la fábrica Lucas Martín en Xalapa, esta zona nunca alcanzó a tener la importancia
que tendría la industria establecida en Orizaba a finales del siglo XIX. El proyecto
de industrialización impulsado por el gobierno de Porfirio Díaz, propició el
establecimiento otras primeras fábricas textiles estilo europeo como: Cerritos
(1882), San Lorenzo (1883) y Río Blanco (1892), la Compañía limitada de
389
Para efectos de este estudio comprende los municipios de Orizaba, Río Blanco, Nogales y Ciudad
Mendoza. 390
En 1764 el Gobierno Virreinal instaló el Real Monopolio de Tabaco en Orizaba. El Real Monopolio, fue la
primera empresa que transformó sustancialmente la estructura económica y la vida de los habitantes de la
región, porque propició el fraccionamiento del suelo a través del arrendamiento, proporcionó créditos a
pequeños agricultores para que fueran independientes e incorporó a los indios a al economía de mercado al
pagarles un jornal de 2 a 4 reales. Este salario fue casi el doble del promedio durante el siglo XVIII, por lo
cual atrajo a muchos trabajadores a la región, y en 1774 Orizaba fue declarada villa. Del Valle, Pavón,
Guillermina. “El cultivo de tabaco y la transformación de la jurisdicción de Orizaba a fines del siglo XVIII”
en Silva Riquer, Jorge. Los mercados regionales de México en los siglos XVIII y XIX. CONACULTA e
Instituto Mora, México, 2003, pp.89-124.
231
manufacturas de Yute (1892), la Fábrica de Santa Gertrudis (1895) y la fábrica de
Santa Rosa (1896).
Mapa 1. Ubicación del Valle de Orizaba.
Fuente: INEGI. Carta Fisiográfica, 1:1 000 000
232
El hecho de que operaran todas estas compañías textiles en la región del
Valle de Orizaba, nos permite reflexionar en varios sentidos. ¿Fue la región natural
lo que hizo posible que en esta zona se establecieran siete fábricas textiles que
contribuyeron a crear un entorno industrial textil, o fueron acaso las políticas
gubernamentales porfiristas las que crearon el entorno propicio a dicho
establecimiento? ¿Fueron acaso las suspicacias de los productores las que
decidieron la localización de esta industria? ¿Fueron las condiciones materiales
expresadas en vías de comunicación, acceso a mano de obra barata y alimentos
para una población creciente? ¿Fueron acaso todos estos factores juntos y las
propias expectativas generadas por las fábricas como fuentes de trabajo las que
gestaron un entorno favorable, proclive al desarrollo industrial en esta rama? ¿Es
posible medir los efectos regionales ocasionados por la industria textil de estos
años?
Algunas respuestas podemos adelantar en este momento gracias a los
aportes legados por la historiografía nacional y regional. Entre los factores de
localización industrial destacados están sin duda, el establecimiento de vías del
ferrocarril mexicano, el acceso a abundantes recursos hídricos, mano de obra,
fuentes de alimentos y políticas gubernamentales del régimen. Sin embargo estos
no pudieron ser aprovechados racionalmente sin la perspicacia empresarial,
impregnada de una cultura que lo ligaba estrechamente al mundo de los negocios
en la escala en que fueron evolucionando.
Conviene tener presente que el empresariado de entonces estaba más
estrechamente vinculado al control, supervisión y expansión de sus negocios.
Aunque en el caso concreto que nos ocupa, cuando los pioneros lograron a
amasar una cierta fortuna dejaron al frente de sus negocios a sus parientes y
socios, que ya sabíamos respetaban los acuerdos de la red. Sin embargo, estos
factores generales de localización si bien nos permiten comprender qué fue lo que
hizo posible en parte el desarrollo de la industria textil, no nos explica las maneras
en las cuales se fraguaron sus efectos en el Valle de Orizaba. A esto se intenta
atisbar algunas explicaciones.
233
Importancia de CIDOSA
El establecimiento de la industria textil en México fue producto de una serie
de acontecimientos históricos que le precedieron: 1. La liberación de la propiedad
por la desamortización de los bienes de la iglesia. 2. La capacitación de los
trabajadores en los obrajes391. 3. El mejoramiento de las vías de comunicación. 4.
Un sistema de crédito con el Banco de avío. 5. Consolidación del Estado
Mexicano. 6. Creación de la Constitución de 1857 e instituciones nacionales. 7.
Entrada de la Inversión extranjera. 8. Instauración de un gobierno central y por su
disposición política a las necesidades de expansión del capital transnacional. 9.
Política proteccionista a la industria nacional.
Antes de proceder a la revisión concreta del Valle de Orizaba, es importante
destacar el peso de la región en el contexto industrial más amplio tanto nacional
como estatal. Como se ha mostrado antes, la dificultad material de analizar todo el
periodo de estudio sin fisuras y no disponer de series estadísticas continuas, en
seguida nos referiremos al ámbito más amplio con series parciales para las
regiones que consideramos de mayor importancia respectivamente: Puebla,
México D.F., Veracruz, Jalisco y Querétaro.
Industria textil de algodón
La industria textil estuvo constituida por todas las operaciones relativas a las
fabricación de hilos, hilazas, cordeles, cuerdas, cables, redes, tapices y toda clase
de tejidos y mallas elaboradas con fibras vegetales, animales y sintéticas. En
México, desde el siglo XIX la industria textil integró a las fábricas del hilado y
391 El obraje se refiera a que un solo individuo, empresario o artesano-maestro, era dueño de los medios de producción y
reunía bajo un solo techo y en un mismo tiempo, a un número de trabajadores, quienes mediante un salario elaboraban
telas para el dueño. Los obrajes permitieron una división simple de trabajo, pues diferentes personas en el interior del
taller se dedicaban a diferentes fases del proceso de elaboración de una tela: lavado, cardado, hilado y finalmente el tejido,
siendo este último exclusivamente trabajo de hombres, mientras que las primeras tareas, especialmente la transformación
de la fibra de hilo, eran en su mayoría realizadas por mujeres. Estos primeros trabajos se distribuían en talleres u obrajes
más pequeños que estaban sometidos a los grandes, así había obrajes dedicados al cardado, otros realizaban todas las
operaciones hasta el hilado y vendían parte o todo su hilo a otros obrajes dedicados principalmente al tejido o algún
trabajo como el hilado de la lana, que era distribuido a trabajadores a domicilio www.mexcostura.com/13/erase.html).
234
tejidos de algodón, lana, artícela, seda, fibras duras: ixtle, henequén y yute; y a
partir de 1930, fibras sintéticas.392
De estas ramas, el tejido de algodón ha sido siempre el de mayor producción.
Aún antes de la Colonia, los artesanos mexicanos ya hilaban y tejían algodón.
Pero fue hasta los siglos XVI y XVII que surgieron en México los obrajes de lana y
de algodón. Los obrajes de algodón se formaron por los talleres que producían
manta y que se encontraban principalmente en la ciudad de Puebla, que ha sido el
mayor centro de producción de los textiles de algodón del país.393
Desde la colonia Puebla siempre mantuvo el mayor volumen de producción y el
mayor porcentaje de fábricas textiles de algodón que las otras regiones, porque
“era la ruta entre el puerto de Veracruz y el DF, con lo cual ofrecía a los
inversionistas la cercanía al mercado y a la principal materia prima, el algodón
importado que arribaba al Puerto de Veracruz y el que se cultivaba en el
Papaloapan. Además disponía de molinos y haciendas que sirvieron para instalar
manufacturas textiles movidas por energía hidráulica e hidroeléctrica y
principalmente porque contaba con mano de obra capacitada en el trabajo de
hilanderos y tejedores, que además trabajaban por bajos salarios. Los industriales
textiles en Puebla entre 1880-1890, pagaban 25 centavos de salario mínimo
mientras que en Orizaba era de 35 centavos. 394
El Distrito Federal, fue el segundo territorio con mayor número de fábricas
textiles de algodón del país. Las manufacturas se instalaban ahí, porque era –y
siempre ha sido- el territorio más densamente poblado, y por tanto el mejor
mercado.
La tercera región más importante en la producción de tejidos de algodón fue el
Valle de Orizaba en el Estado de Veracruz. Los empresarios eligieron operar sus
manufacturas ahí, por las razones antes mencionadas. También porque
obtuvieron diversas concesiones de terrenos por parte del Gobierno del Estado de
Veracruz y porque a diferencia de Puebla, las fábricas que operaron en Orizaba,
392
Camiro, Max. “La industria textil de México y política económica del Estado 1933 a 1943. La situación en
1944”. Las perspectivas en Jornadas 48. Cuestiones Industriales de México, COLMEX, México, 1945, pp.55. 393 Keremitsis, Dawn. Op.cit, 1973, pp. 20-23. 394
Gamboa Ojeda, Leticia, Op.cit, 1985, pp. 40.
235
desde sus inicios apostaron por la producción mecanizada a gran escala, la cual
necesitó de grandes extensiones de tierra y prácticamente la fundación de nuevos
poblados, como el municipio de Tenango de Río Blanco y de Santa Rosa
Necoxtla.
Otras regiones textiles importante del país fueron Guadalajara, Jalisco y
Querétaro, Querétaro. Guadalajara –durante el periodo de estudio- fue la segunda
ciudad más poblada del país después del DF. Contaba con la infraestructura
urbana y el crecimiento demográfico que la industria necesitaba para
desarrollarse, y además, debido a su situación geográfica, permitía a las empresas
distribuir sus mercancías hacia el noroeste (Durango, Zacatecas, Colima, Nayarit,
Sinaloa) y el centro de México (Guanajuato, México DF).395 Querétaro por su
parte, también cuenta con una larga tradición en los obrajes y una ubicación
privilegiada, que le han permitido -desde la Reforma- abastecer de textiles al
mercado de Guanajuato y la Ciudad de México.
En el Cuadro 1 se enlistan el total de fábricas de tejidos de algodón por Estado.
Los estados se encuentran clasificados según su ubicación geográfica en el país:
centro, norte, golfo y pacifico. De acuerdo a este cuadro en 1850, Puebla tuvo 17
fábricas de tejidos de algodón, en 1898-1899 fueron 21, en 1910-1911 fueron 44 y
en 1926-1927, 51. Sin embargo a pesar de contar con numerosas fábricas, estas
siempre tuvieron menor capacidad de producción, comparadas con las del Distrito
Federal y las de Veracruz. Tan solo por citar un ejemplo, en 1843 la fábrica de la
Constancia Mexicana poseía 7,680 husos, mientras que Cocolapan en Veracruz,
poseía 11,784 husos y La Magdalena en el Distrito Federal 8,472. Este tipo de
información ha sido referida y analizada por diversos estudiosos del tema, sin
embargo la siguiente inserción ha sido una construcción propia con el fin de
destacar la región objeto de estudio
395
Guadalajara contaba con agua y electricidad desde 1883, así como teléfono y transporte eléctrico desde
1896. Arias, Patricia. Op.cit., 1993, pp. 75-.109.
236
Cuadro 1. Fábricas de Hilados y tejidos de algodón en México, 1850-1927
ESTADOS 1850a 1898-1899 1902-1903 1907-1908 1910-1911 1926-1927
CENTRO
Distrito Federal 7 13 9 14 12 23
Guanajuato 1 6 5 6 6 4
Hidalgo 2 3 3 2 2
Mexico 6 9 8 7 7
Puebla 17 21 32 38 44 51
Queretaro 1 1 1 1 1 2
San Luis Potosí 1 2 1 1 1
Tlaxcala 9 9 8 8 8
Suma 26 59 70 79 81 98
NORTE
Coahuila 1 9 11 8 9 9
Chihuahua 3 4 4 4 3
Durango 5 10 10 8 7 3
Nuevo Leon 4 4 4 4 4
Sonora 1 1 1 1 1 1
Tamaulipas 1
Suma 7 27 30 25 25 21
GOLFO
Veracruz 8 10 12 14 14 11
PACIFICO
Colima 3 3 2 2
Chiapas 1 1 1 1 1
Guerrero 1 2 2 2
Jalisco 4 6 6 5 5 5
Michoacan 5 5 5 5 3
Nayarit 4 4 3 1 2
Oaxaca 3 3 3 3 1
Sinaloa 3 3 3 2 1
Suma 4 26 27 24 21 13
Resumen
Centro 26 59 70 79 81 98
Norte 7 27 30 25 25 21
Golfo 8 10 12 14 14 11
Pacifico 4 26 27 24 21 13
TOTAL 45 122 139 142 141 143
Fuente: Elaboración propia con datos de Estadísticas Económicas del Porfiriato y Soberanis (1988),
p.44 AGN y La Industria, el comercio y el trabajo en México 1925-1927. Tomo I-V de la Secretaria
de Industria, Comercio y Trabajo, pp.58. AGEV
a. Para este año, se agrupan las fábricas del Estado de México en las del DF y las de Tlaxcala
con las de Puebla.
237
Entre 1850, el Distrito Federal tenía 7 fábricas, en 1898 eran 13, de 1910-1911
fueron 12 y en 1926-1927 fueron 23. Estas manufacturas también tuvieron menor
capacidad instalada que las fábricas ubicadas en Veracruz. Por ejemplo Río
Blanco en 1912 tenía 42,568 husos y 2654 telares; mientras que la Magdalena
tenía 17,128 husos y 667 telares.
Veracruz en 1850 tenía 8, en 1898 eran 10, y de 1910-1911, fueron 14, y 1926-
1927, disminuyeron a 11. El Estado de Veracruz con menor número de fábricas
fue capaz de obtener un mayor volumen de producción de textiles de algodón que
Puebla y el Distrito Federal porque sus fábricas fueron de mayores tamaños y más
eficientes económicamente hablando. Eficiencia que como ya se ha dicho fue
resultado de la amplitud de la red de intereses de los empresarios.
Querétaro y Jalisco, por su parte, mantuvieron en promedio 1 y 5 fábricas a lo
largo de casi todo periodo. A pesar de esto, el volumen de ventas y capacidad
instalada de las fábricas situadas en estos territorios fueron mayores que las de la
mayoría de las fábricas poblanas y del D.F. Por ejemplo, la fábrica Hércules
ubicada en La Cañada en Querétaro, de 1850 a 1879 poseía 500 telares mientras
que La Constancia Mexicana solo contaba con 130 y la Magdalena con 326.
El total de fábricas textiles en cada uno de los Estados anteriores durante el
periodo de 1850 a 1926, se representa en la gráfica 1. En ella se puede apreciar
más claramente que, Puebla siempre mantuvo una tendencia al alza en el
crecimiento de su industria textil, mientras que el D.F. mostró altibajos y Veracruz,
Querétaro y Jalisco casi se mantuvieron constantes, con el mismo número
fábricas.
238
Gráfica 1. Número de fábricas de tejidos de algodón de los principales Estados
productores, 1926-1927.
Para el periodo de 1889-1930, no se cuenta con la información detallada de la
capacidad instalada de cada una de las fábricas textiles ubicadas en los Estados
de Puebla, Veracruz, Jalisco, Querétaro y el D.F. Sin embargo se conoce el total
de maquinaría así como el capital invertido en maquinaria y edificios de las
fábricas de tejidos de algodón en cada Estado para 1926-1927. Esta información
se describe en el del cuadro 2.
0
10
20
30
40
50
60
1850 1898 1902 1907 1910 1926
Distrito Federal Puebla Queretaro Veracruz Jalisco
239
ESTADOS DEL BA
TIE
NT
ES
CA
RD
AS
MA
NU
AR
ES
VE
LO
CE
S
UR
DID
OR
ES
EN
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TR
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PO
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OT
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S
TO
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L
CAPITAL
INVERTIDO EN
MAQUINARIA Y
EDIFICIOS
CENTRO
Distrito Federal 43 349 56 230 61 24 272 91 119,741 3,466 12 921 62 66 815 7,152 905 8,872 9,639,421.88$
Guanajuato 5 37 9 18 13 3 20 3 8,364 368 200 298 498 1,350,692.21$
Hidalgo 6 40 8 30 7 4 24 11 14,914 533 4 60 1,060 1,120 746,897.30$
Mexico 13 137 27 85 20 10 86 46 44,674 1,408 853 360 1,213 1,292,245.70$
Puebla 116 720 106 454 122 55 414 248 240,324 9,315 11 450 5,106 8,840 312 14,258 26,745,704.02$
Queretaro 7 58 9 31 10 4 40 15 17,876 647 224 80 615 40 735 1,111,029.11$
San Luis Potosí 4 3 3 4,300.00$
Tlaxcala 16 118 18 70 19 10 63 40 34,916 1,474 4 745 1,293 2,038 2,891,167.56$
Suma 206 1,459 233 918 252 110 919 454 480,809 17,215 31 1595 62 66 7,859 19,621 1,257 0 28,737 43,781,457.78$
NORTE
Coahuila 13 140 56 96 32 14 93 66 45,466 1,802 2 905 28 315 1,236 2,484 4,579,960.21$
Chihuahua 5 33 5 14 5 4 14 8 7,372 321 70 300 20 390 515,326.77$
Durango 7 39 23 21 9 3 23 16 11,804 380 29 29 120 570 15 705 886,647.46$
Nuevo Leon 7 44 10 34 15 6 35 24 18,780 823 30 445 425 150 1,050 1,679,960.60$
Sonora 3 21 4 11 6 2 12 6 5,592 170 40 75 200 315 789,964.90$
Tamaulipas 96 80 80 127,658.96$
Suma 35 277 98 176 67 29 177 120 89,014 3,592 2 29 29 0 1,165 1423 850 1,586 5,024 8,579,518.90$
GOLFO
Veracruz 48 399 51 278 73 32 277 171 161,216 6,446 13 2,840 6,124 15 8,979 18,314,560.81$
PACIFICO
Colima 4 11 5 6 2 704 4 30 100 130 35,000.00$
Chiapas 2 9 4 6 2 1 6 4 2,788 91 72 72 214,265.89$
Guerrero 3 23 6 15 5 2 15 10 7,658 252 273 273 771,697.18$
Jalisco 14 109 15 73 22 13 83 51 47,966 1,850 5 550 1,316 1,866 2,764,353.04$
Michoacan 14 55 10 36 9 5 35 14 17,940 595 26 4 780 780 1,229,315.59$
Nayarit 10 56 15 31 8 4 27 23 12,304 332 348 60 408 500,000.00$
Oaxaca 4 32 3 12 6 2 21 7 8,644 331 340 340 539,571.93$
Sinaloa 3 16 11 4 1 7 3 3,150 82 200 200 250,000.00$
Suma 54 311 53 189 56 28 200 114 101,154 3,537 5 26 4 0 2,321 1,476 272 0 4,069 6,304,203.63$
Resumen
Centro 206 1,459 233 918 252 110 919 454 480,809 17,215 31 1,595 62 66 7,859 19,621 1,257 0 28,737 43,781,457.78$
Norte 35 277 98 176 67 29 177 120 89,014 3,592 2 29 29 0 1,165 1423 850 1,586 5,024 8,579,518.90$
Golfo 48 399 51 278 73 32 277 171 161,216 6,446 13 2,840 6124 15 8,979 18,314,560.81$
Pacifico 54 311 53 189 56 28 200 114 101,154 3,537 5 26 4 2,321 1476 272 4,069 6,304,203.63$
Suma 343 2,446 435 1,561 448 199 1,573 859 832,193 30,790 51 1,650 95 66 14,185 28,644 2,394 1,586 46,809 76,979,741.12$
Fuente: Elaboración propia con datos de, La Industria, el comercio y el trabajo en México 1925-1927. Tomo I-V de la Secretaria de Industria, comercio y trabajo, pp.60-61. AGEV
MAQUINILLAS PUNTOMAQUINARIA FUERZA MOTRIZ EMPLEADA
Cuadro 2. Maquinaría, fuerza motriz y capital invertido en la Industria textil de algodón en México 1926-1927.
240
De acuerdo a la presente información, Puebla poseía más de 240,000 husos y
9,315 telares, si consideramos que en el Estado existían 51 fábricas, entonces el
promedio de husos y telares por fábrica era de 4,712 y 183 respectivamente. En el
caso del D.F. este tenía 23 fábricas y 119,741 husos y 3,466 telares, en promedio
5,206 husos y 150 telares por manufactura. Por su parte Veracruz con tan solo 11
fábricas poseía 161,216 husos y 6,446 telares. En promedio cada fábrica en
Veracruz poseía 14,656 husos y 586 telares. Con estos datos es posible identificar
que la capacidad instalada de las fábricas en Veracruz, en especial las de
CIDOSA y CIVSA en la región de Orizaba era 30% mayor que la de las fábricas de
Puebla y D.F.
En el caso de Jalisco, este contaba con 47,966 husos y 1,850 telares en 5
fábricas, es decir tuvo un promedio de 9.593 husos y 370 telares. Mientras que
Querétaro tuvo en promedio 8,938 husos y 323 telares en sus dos fábricas activas.
Estos números estaban por arriba del promedio de Puebla y el Distrito Federal,
pero por debajo en un 34% del promedio de Veracruz.
Respecto al capital invertido en maquinaria y equipo en 1926-1927, Puebla
tuvo el 35% del total nacional de capital invertido en la industria textil del algodón
($26, 745, 704.02) en 51 fábricas. El D.F. contaba con el 26% ($9, 639, 421.88) en
23 fábricas. Jalisco el 4% ($2,764,353.04) en 5 fábricas y Querétaro el 1.44%
($1,111,029.11) en dos fábricas. Veracruz, tenía el 24% del capital ($18, 314,
560.81) en 11 manufacturas. Esto porque las fábricas de Veracruz, principalmente:
CIDOSA y CIVSA, eran de grandes dimensiones, utilizaban mayormente la
energía hidroeléctrica y contaban con maquinaria más moderna que las de
Puebla.
Esta maquinaría les permitió las fábricas de CIDOSA y CIVSA elaborar
mayormente telas finas estampadas que iban dirigidas a las clases altas. En el
caso de las fábricas ubicadas en el Estado de Puebla, estas confeccionaban
principalmente mantas para las clases bajas. Los productos elaborados por las
fábricas de hilados y tejidos de algodón en las diferentes regiones del país de
1926 y 1927, se enlistan en el Cuadro 3. En el se señala en kilogramos la
producción de géneros de manta, tejidos con hilo de color, blanqueados,
241
estampados, teñidos, driles, lomas y de otros productos como toallas, bonetería y
cobertores.
En la información contenida en el mismo cuadro, se puede apreciar que los
géneros que más se elaboraron en México de 1926-1927 fueron la manta cruda
para mostrador (39% del total de la producción de géneros), los tejidos con hilo de
color (20%), los estampados (15%), los blanqueados (12%) y los teñidos (7%).
Puebla fue el principal proveedor de mantas crudas. El DF de tejidos de hilo de
color y estampados; y Veracruz de blanqueados y teñidos. Jalisco y Querétaro
produjeron mayormente manta e hilaza. Respecto a los volúmenes de venta,
Puebla tenía el 32%, el Distrito Federal el 22%, Veracruz el 18%, Jalisco el 4% y
Querétaro el 3%, del total nacional.
Para completar la información analizada, se debe considerar el personal
ocupado, el número de fábricas y el total de producción de la industria textil de
algodón en México de 1926 a 1939 expuestos en el Anexo F, y que aquí se
representan en la Gráfica 2. En ella se observa que de 1926 a 1935, Veracruz se
mantuvo por encima del D.F. elaborando más del 20% del total de textiles en el
país, mientras que Puebla casi el 30% y el D.F. el 17%. Sin embargo, a partir de
1937, Veracruz sufrió una caída en su participación -disminuyó al 18%, pero aún
así fue mayor que la del D.F.-, esto porque como se mencionó anteriormente, de
1931 a 1936, los propietarios de la fábricas CIDOSA, así como otras compañías
textiles establecidas en Veracruz, redujeron su volumen de producción y su capital
invertido debido a la caída en ventas por los efectos de la crisis del 29 y por el
cambio del padrón de acumulación que se traslado de los textiles al petróleo.
242
Cuadro 3. Tipos de tejidos de algodón elaborados en México, 1926-1927.
ESTADOS kg. de algodón Hilaza devanada Manta Cruda Tejidos con hiloBlanqueadosEstampados Teñidos Driles Lonas Varios SUBTOTAL Toallas Cobertores Varios Boneteria SUBTOTAL PRODUCCION Ventas realizadas
consumido para la venta para mostrador de color TOTAL pesos corrientes
CENTRO
Distrito Federal 2,832,698 283,881 216,324 782,882 191,578 732,808 66,631 123,700 46,990 5,624 2,166,537 47,599 19,912 21,293 167,104 255,908 2,706,326 7,881,849.92
Guanajuato 356,836 16,384 132,878 11,321 94,268 238,467 1,535 28,068 29,603 284,454 604,557.84
Hidalgo 295,616 43,174 16 28,874 63,038 14,988 68,271 14,370 372 189,929 1,555 19,585 21,140 254,243 646,636.90
Mexico 672,082 27,763 323,927 163,987 487,914 0 515,677 772,571.83
Puebla 6,654,769 897,265 3,121,972 527,417 372,498 609,566 207,792 36,933 4,876,178 3,970 1,581 9,873 72,240 87,664 5,861,107 14,146,709.42
Queretaro 596,504 97,394 432,765 432,765 24,240 24,240 554,399 1,246,075.74
San Luis Potosí 1,610 1,120 266 1,386 0 1,386
Tlaxcala 1,078,055 20,959 572,009 95,571 2,242 189,543 65,355 34,184 2,843 961,747 12,486 12,486 995,192 2,795,042.23
Suma 12,488,170 1,386,820 4,799,891 1,611,172 629,356 1,546,905 408,049 172,254 46,990 140,306 9,354,923 53,124 42,613 71,720 263,584 431,041 11,172,784 28,093,443.88
NORTE
Coahuila 969,657 139,067 465,917 26,559 112,694 79,054 43,275 866,566 982 9,139 10,121 876,687 2,152,918.17
Chihuahua 301,019 55,438 209,677 3,633 268,748 268,748 643,073.02
Durango 115,359 375 52,617 424 53,041 1,691 7,852 18,985 28,528 81,944 107,834.73
Nuevo Leon 405,632 36,739 182,585 8,326 6,781 37,296 36,328 308,055 516 25,815 26,331 334,386 876,136.25
Tamaulipas 25,454 25,454 25,454 25,454 4,732.14
Suma 1,817,121 375 283,861 858,179 34,885 112,694 85,835 106,025 0 40,385 1,521,864 1,498 27,506 16,991 18,985 64,980 1,587,219 3,784,694.31
GOLFO
Veracruz 3,278,046 123,915 173,021 346,882 967,918 543,746 527,105 243,321 7,624 2,809,617 606 36,464 37,070 2,970,602 9,889,189.10
PACIFICO
Chiapas 25,760 20,013 1,270 362 21,645 21,645 42,022.27
Jalisco 805,774 81,902 254,839 24,096 134,427 58,620 60,734 97,700 11,003 14,967 656,386 738,288 1,730,277.84
Michoacan 287,115 26,505 142,782 37,726 419 24,599 205,526 885 308 3,231 4,424 236,455 408,384.82
Nayarit 178,307 140,629 10,432 2,797 153,858 153,858 518,523.92
Oaxaca 95,955 36,485 41,285 1,922 544 80,236 80,236 186,659.75
Sinaloa 126,846 68,116 30,360 101,476 101,476 248,158.09
Suma 1,519,757 108,407 594,748 172,493 145,278 58,620 60,734 124,583 44,704 14,967 1,219,127 885 0 308 3,231 4,424 1,331,958 3,134,026.69
Resumen
Centro 12,488,170 1,386,820 4,852,508 1,611,172 629,356 1,546,905 408,049 172,254 46,990 140,306 9,354,923 53,124 42,613 71,720 263,584 431,041 11,172,784 28,093,443.88
Norte 1,817,121 375 231,244 858,179 34,885 112,694 85,835 106,025 0 40,385 1,521,864 1,498 27,506 16,991 18,985 64,980 1,587,219 3,784,694.31
Golfo 3,278,046 123,915 173,021 346,882 967,918 543,746 527,105 243,321 7,624 2,809,617 606 36,464 37,070 2,970,602 9,889,189.10
Pacifico 1,519,757 108,407 594,748 172,493 145,278 58,620 60,734 124,583 44,704 14,967 1,219,127 885 308 3,231 4,424 1,331,958 3,134,026.69
TOTAL 19,103,094 1,619,517 5,851,521 2,988,726 1,777,437 2,261,965 1,081,723 646,183 91,694 203,282 14,905,531 56,113 106,583 89,019 285,800 537,515 17,062,563 44,901,353.98
% 39% 20% 12% 15% 7% 4% 1% 1% 100% 10% 20% 17% 53% 100%
Fuente: Elaboración propia con datos de, La Industria, el comercio y el trabajo en México 1925-1927. Tomo I-V de la Secretaria de Industria, Comercio y Trabajo, pp.59,64-65. AGEV
KILOGRAMOS DE OTROS PRODUCTOSKILOGRAMOS DE GENEROS
243
Gráfica 2. Participación de los Estados en la producción de textiles de algodón en
México 1926 a 1939.
A pesar de la caída de producción de CIDOSA, la industria textil de algodón
en Veracruz se conservó dentro las cinco principales industrias del Estado. Veracruz
siguió figurando como uno de Estados con mayor producción textil del país, tal como
se señala en los datos del Primer censo industrial en México de 1930 para los
Estados de Veracruz, Puebla, Querétaro, Jalisco, Nuevo León, Estado de México y
el D.F, que se encuentran en el anexo E.
De acuerdo a los datos del Censo de 1930, Veracruz fue el segundo Estado
con mayor producción industrial, sólo por debajo del Distrito Federal, pero por
encima de Nuevo León, Puebla y Jalisco.396 En todos estos Estados, exceptuando
Nuevo León, sus principales industrias fueron la de los alimentos y los textiles de
algodón. Mientras que en Nuevo León, fueron la de los alimentos y la metalurgia.
La región de Orizaba y el Estado de Veracruz en general, después de 1935
no volvieron a figurar dentro de las zonas industriales más importantes del país. Esto
debido a la falta de renovación de inversiones, pero principalmente a que a partir de
1940 “los textiles disminuyeron su producción y otras actividades económicas
desplegaron su espacialidad en el territorio veracruzano. Entre ellas se destacaron,
396
Biblioteca Lerdo de Tejada, SHCP. Archivos económicos, Industrias textiles en México, El Nacional,
23/4/1933.
0%
5%
10%
15%
20%
25%
30%
35%
1926 1930 1935 1937 1939
Distrito Federal
Jalisco
México
Nuevo León
Puebla
Querétaro
Veracruz
244
la construcción ferroviaria, la extracción de petróleo, el azúcar, cerveza, café, tabaco,
siderúrgica, cemento, electricidad y papel”.397
De hecho aunque los socios de CIDOSA invirtieron grandes capitales
($2,550,000 en 1889, $26,574,175.08 en 1911 y $25,138,803.32 en 1920) en la
región, no convirtieron a Orizaba en un polo de desarrollo398 para el Estado de
Veracruz, como lo fue Monterrey para Nuevo León. Esto fue debido a la que
después de 1930 no renovaron su maquinaría y trasladaron sus capitales a otros
rubros más redituables como el petróleo y los bienes raíces.399
CIDOSA en el Valle de Orizaba
Orizaba fue una ciudad manufacturera con discreto crecimiento durante las
primeras dos décadas del siglo XIX. En este tiempo tenía solo ingenios de azúcar y
aguardiente, una fábrica de puros y cigarros que funcionaba con el estanco de
tabaco, 3 molinos de harina de trigo, 4 tocinerías, 8 tenerías que curtían pieles,
herrerías, imprentas y varias hilanderías artesanales.400. Muchas de esas actividades
se vieron potenciadas por todas las actividades de carácter industrial mecánico
como fueron las empresas textiles.
En este punto parece importante resaltar la ubicación geográfica del conjunto
de empresas que formaban CIDOSA con la intención de apreciar el patrón de su
localización, si es que lo hubo. La primera manufactura textil situada en la región fue
Cocolapan. Esta fue fundada en 1836 por Lucas Alamán y los hermanos Legrand. 397
García Aguirre, Feliciano. Op.cit., 1998, pp.101. 398
Respecto a los polos de desarrollo consultar las obras de Francoise Perroux: La economía del Siglo XX y
Técnicas cuantitativas de planificación. 399
En este punto las polémicas abren un espacio de discusión todavía fértil entre los historiadores. Por ejemplo
Cerutti, afirma que el Estado de Veracruz y en particular Orizaba fue un proyecto de ciudad industrial mal
lograda, porque: 1) no pudo convertirse en un centro manufacturero como Monterrey debido a que no desarrolló
una industria metal-mecánica que fue el siguiente paso del desarrollo capitalista, 2) no estaba cerca del mercado
de Estado Unidos, 3) no utilizó las nuevas fuentes de energía como el gas y el petróleo, pero sobre todo porque
no incluyó a nuevos miembros en sus redes y porque no se anticipó a los efectos de las leyes que surgieron
después de la revolución como lo hizo Monterrey con sus sindicatos blancos y asociaciones empresariales.
Cerutti, Mario. Op.cit., 2000, pp.124. En este sentido nosotros hemos podido apreciar a lo largo de nuestra
investigación que la red de inversionistas y propietarios de CIDOSA también poseían intereses en la industria
metal mecánica de Monterrey por lo menos hasta el Porfiriato. La apreciación de Cerrutti es importante porque
al comparar la región de Orizaba con la de Monterrey pone el acento en la importancia de la industria metal.-
mecánica y la cercanía un mercado mayor como el de EU, para afirmar que Orizaba fue una región mal lograda. 400
Rivera Carbó, Eulalia. Op.cit, 2002.
245
Se ubicó en una antigua fábrica de papel localizada en los suburbios de Orizaba, en
la ribera izquierda del río Blanco y contigua a la estación del ferrocarril. Desde su
inauguración contó con maquinaría y procesos de trabajo similares a los de las
fábricas inglesas de textiles de algodón. En la década de 1840, fue la hilandería más
grande del país, con 600 empleados que trabajaban en tres turnos, y operaban
11,784 husos y 446 telares. En ese mismo año las demás fábricas tenían en
promedio 8,000 husos, 100 telares y 400 empleados.
En 1882 se instaló la segunda fábrica textil, Cerritos, propiedad de Enrique L.
Wiechers de ascendencia alemana. Cerritos se ubicó en el barrio de San Juan de
Cerritos, en un solar que había sido estanco de tabaco. Sus terrenos estuvieron
formados por los antiguos ranchos de Cerritos y El Cristo. Contaba con 400
trabajadores, 5000 husos y 181 telares. Además tenía turbinas que eran movidas
por las aguas del río Orizaba, canalizada a través de un acueducto.401
La tercera fábrica de la región fue San Lorenzo. Esta fue propiedad del
empresario norteamericano Tomás Braniff y fue inaugurada en 1883; se ubicó en los
predios conocidos como “El ingenio”, en la villa de Nogales, a 30 Kilómetros al
poniente de Orizaba. Estaba situada al lado de la vía férrea y muy cerca del río
Blanco. Su edificio constaba de un departamento de hilatura en la planta baja y uno
de tejido en la plata alta. También contaba con un departamento de acabado en un
local aparte.402 En 1887 fue la más grande del Estado, operando con 11,088 husos y
300 telares.
Las siguientes fábricas de la región, fueron Río Blanco propiedad de CIDOSA
y Santa Rosa propiedad de CIVSA. La fábrica de Río Blanco se estableció en el
municipio de Tenango en 1892 y la fábrica de Santa Rosa en Necoxtla en 1898.
Ambas fueron las fábricas textiles más grandes de México de 1900- 1930 con una
capacidad de producción comparable a las manufactureras europeas de principios
del siglo XIX.403 En 1912 contaban, cada una, con más de 40,000 husos y más de
1,000 telares. Sus inversiones superaban el monto de $1,000,000 de pesos.
401
Everaer, Luis. Río Blanco. Compañía Industrial de Orizaba S. A. Centenario, 1899.-1989. Salvat México. El
marqués, Querétaro, 1990, pp. 59. 402
Ídem. 403
García, Bernardo, Op.cit. 1980.
246
Habiendo hecho la comparación con otras compañías textiles del país, tal vez
convenga para tener presente aún más la importancia de CIDOSA, compararla con
su entorno más inmediato. Si analizamos los datos de volumen de producción,
materia prima, maquinaria, número de obreros, ubicación y propietarios de las
principales fábricas textiles del Estado de Veracruz entre los años de 1850 a 1912,
las principales fábricas textiles de algodón se ubicaron en las regiones de Jalapa y
Orizaba, de ellas, destacaron Cocolapan, San Lorenzo y Cerritos.
Estas manufactureras aún antes de ser propiedad CIDOSA fueron las de
mayor número de obreros, maquinaría, volumen de producción e inversión. Una vez
fundadas las fábricas de Río Blanco (1892) y Santa Rosa (1896), fueron las de
mayor capacidad productiva. Como se puede apreciar en el cuadro siguiente, por el
número de husos, salarios, inversión y número de obreros las fábricas de CIDOSA
en conjunto fueron las más importantes en el conjunto estatal.
247
Fábrica Ubicación Dueño Algodón No. de Raya o Valor de Husos Telares Potencia
Municipio (quintales) manta hilaza obreros Jornal Inversión
1850
Cocolapan Orizaba Manuel Escandón 7,625 52,017 699,828 600 285,400$ 890,000$ 11,784 446 Agua
Bella Unión Viudad de Elías 1,508 135,200 18,200$ 7,500 20 Agua
Libertad Bernando Sayago 1,444 104,000 8,320$ 1,800 25 Agua
Prosperidad Tuxteca Jalapa 832 64,880 51 212,480$ 1,800 20 Agua
Victoria Francisco Fernandez 312 28,800 3,120$ 600 22 Agua
Industrial Jalapa José Welsh 3,120 286,000 33,920$ 3,000 Agua
Lucas Martín Jalapa Luis García 1,612 147,420 7,800$ 3,064 Agua
Nuestra señora del
Rosario
728 68,640 $ 4,680 1,584 Vapor
1887
Cocolapan Orizaba Escandon hmos. 6,000 60,000 200,000 400 44 a 50 ctvos $ 178,200.00 9,840 200 Agua
San Lorenzo Nogales Tomas Braniff 4,500 100,320 698 5.46 ctvos $ 240,527.37 11,088 300 vapor
Cerritos de San Juan Orizaba Cia. Manufacturera Cerritos 6,000- 8,000 nd nd 400 4 a 3 reales $ 400,000.00 5,000 181 Agua
Industrial jalapeña Jalapa Agustín Cerdán 2,000 35,000 12,000 130 3 reales $ 100,000.00 3,500 Vapor y agua
La probidad Jalapa E. Manuel y f. Forfilio 1,200 20,000 40 4 reales a 12 $ 25,000.00 2,045 Agua
Molino de
Pedreguera
Jalapa A. Sayago 800 a 900 13,000 1,375 154 3 reales a 12 $ 70,000.00 1,000 Agua
Lucas Martin Banderilla Carlos G. Femel Rafael G.
Femel
30,000 12,000 52 37 ctvos $ 120,000.00 1,400 Agua
La Purisima en las
Puentes
Coatepec Gas Castillo y G. 3,000 46 a 50,000 120/130 18.75 ctvos a
5 pesos
$ 200,000.00 4,176 Agua
1912
Cocolapan Orizaba CIDOSA 5,565 188,080 602 20,048 872 Hidroeléctrica
San Lorenzo Nogales CIDOSA 8,276 269,400 642 $ 0.56 a 2.5 $ 832,000 19,048 1,036 Hidroeléctrica
Cerritos de San Juan Orizaba CIDOSA 6,534 170,981 465 $0.56 a 2 $ 600,000 7,576 125 Hidroeléctrica
Río Blanco Tenango CIDOSA 18,614 289,793 2,575 $ 0.56 a 2.5 $ 2,000,000 42,568 1,685 Hidroeléctrica
Santa Gertrudis Orizaba Cía. Manufacturera de Yute657
$ 0.65 $ 615,000 Eléctrica
Santa Rosa Necoxtla CIVSA 14,701 281,685 1,560 $ 1.00 $ 1,300,000 40,184 1,410 Hidroeléctrica
La Claudina Perote Cándido Pérez y cía 110 $2.5 a 3 $ 110,000 Vapor
Industrial jalapeña Jalapa Pantaleon Cerdan 90 $ 0.75 $ 48,600 Hidráulica
La probidad Jalapa E. Manuel Sucs 60 $ 45,000 Hidráulica
San bruno Jalapa Zaldo hmnos y cía. 84 $ 0.60 $ 35,000 Hidráulica
La Purisima Coatepec Zaldo hmnos y cía. 94 $ 1.00 $ 180,000 Hidroeléctrica
Lucas Martin Banderilla Guillermo Pasquel 75 $ 0.62 $ 58,788 Hidráulica y vapor
Fuente: AGN, Cuadro 1. Estado que manifiesta las fabricas de hilados y tejidos de algodon de la República Mexicana , 1850 en Soberanis (1988), p. 44 y Depto. Del trabajo Caja 49
Biblioteca Lerdo de Tejada, SHCP. Archivos económicos, Industrias textiles en Mexico 08/Caja7 /FOLL24 Veracruz reseña geográfica y estadistica. De Ch.Bouret, México,1912. Lámina 4, p.4
Productos
Cuadro 4. Principales fábricas textiles en el Estado de Veracruz 1850-1912.
248
Volvamos un poco la mirada al patrón de localización de las fábricas
pertenecientes al objeto de estudio. Con la finalidad de hacernos de una mirada
esquemática más clara de este importante fenómeno económico, se empleara el
mapa construido por Bernardo García Díaz (2007: pp 56). Las fábricas no
siguieron un patrón preconcebido ni muchos menos planificado, más bien se
ubicaron a los lados de la vía de transporte más eficiente disponible en ese
momento, como el ferrocarril. Las decisiones que condujeron a la ubicación de las
fábricas fueron construyendo un corredor industrial sin proponérselo. Corredor que
fue gestando una trama urbana que no seguía los patrones típicos de las ciudades
coloniales, no obstante sigue siendo materia de estudio e interés. Gracias a ello es
posible apreciar en la actualidad las dificultades que debieron sortear la
construcción de una importante región en el Estado de Veracruz.
249
Mapa 2. Localización de las fábricas textiles en la región del Valle de Orizaba
Fuente: Bernardo García Díaz (2007: pp 56)
2
A México
A México
'' Las Fábricas TextilesDel Valle De Orizaba ''
Fábrica: Ubicación:
1. Santa Gertrudis2. Cerritos3. Cocolapan4. Río Blanco
5. Mirafuentes6. San Lorenzo7. Santa Rosa
OrizabaOrizabaOrizabaRío BlancoNogalesNogalesSanta Rosa Necoxtla
Ferrocarril
Carretera
Población
A Veracruz1
3
4
6
7
5
El R
ío B
lanco
A Veracruz
250
Derrama económica
De acuerdo a Rivera Carbó, los grandes capitales detrás de la industria
textil de la primera mitad del siglo XIX no tenían interés en la región de Orizaba,
más que en lo que podía afectar directamente al desempeño de su empresa.404 Lo
mismo sucedió con los empresarios textiles que fundaron CIDOSA y CIVSA. Estos
vivieron e invirtieron sus capitales en negocios en la Ciudad de México o en
Francia, y sólo fundaron en Orizaba las fábricas textiles, para aprovechar las
concesiones del gobierno y los recursos hidráulicos de la región. Como se ha
destacado antes, estos empresarios poco visitaban las fábricas, solo acudían a los
Consejos de Administración en la Ciudad de México y dejaban su operación en
manos de los directores y gerentes, algunos de ellos socios minoritarios o
parientes como fue el caso de Casimiró André, Víctor Léautaud, Víctor y Eduardo
Garcín.
Víctor Garcín hermano de Eduardo Garcín fue tal vez el que más sobresalió
porque era el que más negocios poseía y por los incidentes de protestas obreras
conocidos como la Huelga de Río Blanco, donde varios obreros incendiaron las
tiendas de este empresario en enero de 1907. Él mismo tenía la concesión de la
tienda de raya de Río Blanco, una panadería, un molino de maíz, tres pulquerías
(“Río Blanco”, “El Toreo”, “La Competencia”), una cantina (“La Vanguardia”) y un
Billar (“Los pasos de Tenango”).405 La ubicación, el capital y los impuestos que
pagaba por estos negocios se pueden apreciar en el Cuadro 5.
404
Rivera Carbó, Eulalia. Op.cit, 2002, p.301. 405
Archivo del Municipio de Río Blanco, Pagos por Derechos de patentes. Ramo Legumbres y carbón y ramo
de pulque, 17/12/1886.
251
Cuadro 5. Negocios que poseía Víctor Garcín en Tenango, Veracruz, 1901.
Otros negocios donde participó fue la sociedad en comandita simple Manuel
Diez y cía. Ésta fue fundada en 1907 y tuvo un capital de $100,000 y se
encargaba de administrar la tienda de abarrotes y ropa, “Casa Diez”. El capital que
fue aportado por Manuel Diez ($30,000), Víctor Garcín ($65,000) y José Garcín
($5,000). Víctor Garcín contribuyó con mayor monto dado que era el socio
comanditario y los demás los comanditados.406 Los datos de socios, capital
aportado y tipos de sociedades en que se organizó Manuel Diez y cía., del periodo
de 1907 a 1929 se enlistan en el Cuadro 6. En él se observa que dicho empresario
abandonó esta sociedad como resultado de los incidentes de 1907.
406
Registro Público de la Propiedad de Orizaba (RPPO), Libro de comercio, febrero de 1907, Escritura 309.
Fecha Negocio Capital Dirección Municipio Pago por derecho de
patente
01/11/1901 Tienda Río Blanco 24,000.00$ Frente a la fábrica Tenango 15.00$
12/11/1901 El Toreo 300.00$ Calle real Tenango 15.00$
12/11/1901 La competencia 190.00$ Calle principal Tenango 15.00$
12/11/1901 Los paseos de Tenango 150.00$ Calle real Tenango 15.00$
12/11/1901 La Vanguardia 150.00$ Calle principal Tenango 15.00$
12/11/1901 Panadería 1,000.00$ 3.00$
15/11/1901 Molino de maíz 1.50$
Fuente: Archivo municipal de Río Blanco, Pagos por derecho de patente, Ramo Legumbres y carbon y ramo pulque
252
Cuadro 6. Evolución organizativa de Manuel Diez y cía. 1907-1933.
Lugar de
Origen
Domicilio Capital
aportado
Porcentaje
de utilidad
Sueldo
Anual
Puesto
Nombre Manuel Díez y cía. Víctor Garcín Francia Orizaba 65,000$ Director
Tienda Casa Diez Manuel Diez España Orizaba 30,000$ Gte.-Admor
Fundación feb-07 José Garcín Francia D.F. 5,000$ Gte.-Admor
Sociedad Comandita Casimiro André Francia D.F. -$ Gte.-Admor
Duración TOTAL 100,000$
Nombre Manuel Díez y cía.
Tienda Casa Diez Manuel Diez España Orizaba 110,000$ 15% 700$ Director
Prórroga 12/05/1924 José Garcín Francia D.F. 120,000$ 15% 700$ Gte.-Admor
Sociedad Mercantil-colectiva Casimiro André Francia D.F. 130,000$ 18% 700$ Gte.-Admor
Duración 2 años Manuel Morante Diez España Orizaba 20,000$ 20% 700$ Gte.-Admor
Sebastian Gutierrez Diez España Orizaba 30,000$ 12% 700$ Gte.-Admor
Víctor Leautaud Francia Orizaba 10,000$ 11% 400$ Gte.-Admor
Grimaldo Morante España Orizaba -$ 9% Empelado
TOTAL 420,000$ 100%
Nombre Manuel Díez y cía.
Tienda Casa Diez Manuel Diez España Orizaba 90,000$ 15% Director
Reconstitución 31/12/1929 José Garcín Francia D.F. 90,000$ 15% Gte.-Admor
Sociedad Mercantil-colectiva Casimiro André Francia D.F. 90,000$ 10% Gte.-Admor
Duración Manuel Morante Diez España Orizaba 50,000$ 20% Gte.-Admor
Víctor Leautaud España Orizaba 25,000$ 14% Gte.-Admor
Grimaldo Morante Francia Orizaba 25,000$ 19% Gte.-Admor
Baltazar Mroante Diez España Orizaba 10,000$ 7% Gte.-Admor
TOTAL 380,000$ 100%
Nombre Manuel Díez y cía.
Tienda Casa Diez Manuel Diez España Orizaba 65,000$ 12% Director
Reconstitución 10/03/1931 José Garcín Francia D.F. 78,000$ 12% Gte.-Admor
Sociedad Mercantil-colectiva Casimiro André Francia D.F. 78,000$ 12% Gte.-Admor
Duración Manuel Morante Diez España Orizaba 50,000$ 25% Gte.-Admor
Víctor Leautaud España Orizaba 25,000$ 15% Gte.-Admor
Grimaldo Morante Francia Orizaba 25,000$ 8% Gte.-Admor
Baltazar Mroante Diez España Orizaba 10,000$ 16% Gte.-Admor
TOTAL 331,000$ 100%
Nombre Manuel Díez y cía. sociedad en comandita
Tienda Casa Diez José Garcín Francia D.F. 100,000$ 12%
Reconstitución 10/03/1933 Casimiro André Francia D.F. 100,000$ 12%
Sociedad comandita simple Manuel Morante Diez España Orizaba 107,000$ 25%
Duración 4 años Grimaldo Morante España Orizaba 58,000$ 22.5%
Baltazar Mroante Diez España Orizaba 35,000$ 22.5%
Roberto Escamilla Orizaba 4% Empleado
Juan Armada Orizaba 2% Empleado
TOTAL 400,000$ 100%
Fuente: Archivo del Registro Público de la propiedad y de inspección y Archivo General de Notarías del Estado de Veracruz (ANEV) y
Registro Público de la Propeidad de Orizaba (RPPO)
Escritura Notario Fecha
309 RPPO feb-07
786 y 787 José Camacho 06/03/1927
796 José Camacho 31/12/1927
858 y 904 RPPO dic-29
403 José Camacho 13/01/1930
950 José Camacho 19/07/1935
Datos de los socios
Datos de la sociedad Nombre
253
Otra empresa que constituyeron algunos socios de CIDOSA fueron la
sociedad colectiva Segura, Braniff y cía. para administrar Luz y Fuerza Motriz de
Orizaba S.A. Sus socios eran Ricardo Segura, Tomás Braniff y Juan B. Eduardo
Garcín.
Las empresas de socios barcelonnettes enlistadas anteriormente pagaban
derecho de patente al Gobierno del Estado de Veracruz. Este fue el impuesto
aplicado a los giros mercantiles, establecimientos industriales y talleres de artes y
oficios, así como a los juegos permitidos por la ley. Formaba parte de las
Contribuciones o impuestos directos que también incluían el cobro por fincas
urbanas o rústicas, la contribución sobre plantíos de caña de azúcar, de café y de
tabaco; los productos de las notarías propiedad del Estado y de oficios públicos
vendibles y renunciables de propiedad particular.407
Del total de la recaudación del Estado, los impuestos directos fueron los
que mayor monto alcanzaron (más del 70%) del total de los cobros de 1888 a
1908. De hecho, los ingresos provenientes de los derechos de patentes,
representaron casi el 30% del total de los impuestos recaudados de 1888 a 1910
como se describe en el Cuadro 7.
407
También existieron las contribuciones o impuestos indirectos, que incluían la traslación de dominio, la
patente de fierro para ganado y madera, el consumo de ganado, el impuesto a herencias y legados y las
mandas forzosas para bibliotecas públicas de Veracruz. Archivo General del Estado de Veracruz (AGEV),
Memoria de la Tesorería General del Estado Libre y Soberano de Veracruz-Llave presentada a la H.
Legislatura, el 17 de Septiembre de 1910. Oficina Tipográfica del Gobierno del Estado Xalapa, Ver. 1911,
pp.60.
254
Cuadro 7. Impuestos recaudados en los principales municipios del Edo. De
Veracruz, 1888-1910.
De acuerdo a los datos de este cuadro, de los impuestos por derechos de
patentes, Orizaba generó el 26% del total recaudado en el Estado de 1888 a 1890.
Sus montos superaron a los de Xalapa y Córdoba, y sólo estuvieron por debajo de
los del Puerto de Veracruz. Situación que cambió durante la primera década del
siglo XX, cuando los impuestos cobrados fueron muy similares e inclusive fueron
mayores a los del Puerto, gracias a los aportes de la industria textil y en especial a
los realizados por las fábricas propiedad de CIDOSA que obtuvieron su mayores
ganancias durante esos años. Solo por citar un ejemplo, de acuerdo a los datos
del Cuadro 8 las fábricas de Cocolapan y San Lorenzo pagaron por concepto de
impuestos estatales $7,549 pesos, casi el 21% del total de lo recaudado por
derechos de patente de Orizaba en 1888, que fue de$36, 185.28.
Municipio Contribuciones Indirectas
Monto % Monto % Monto % Monto %
1888
Total del Estado 230,976.26$ 100% 503,859.96$ 79% 135,996.39$ 21% 639,856.35$ 100%
Veracruz Pto. 72,990.72$ 32%
Orizaba 36,185.28$ 16%
1889
Total del Estado 223,752.42$ 100% 527,463.75$ 75% 173,553.85$ 25% 701,017.60$ 100%
Veracruz Pto. 71,216.04$ 32%
Orizaba 35,826.36$ 16%
Jalapa 22,876.00$ 10%
Córdoba 17,834.00$ 8%
1890
Total del Estado 238,409.84$ 100% 570,171.40$ 77% 174,274.94$ 23% 744,446.34$ 100%
Veracruz Pto. 69,074.16$ 29%
Orizaba 37,978.80$ 16%
Jalapa 23,253.78$ 10%
Córdoba 19,697.22$ 8%
1908
Total del Estado 397,720.51$ 100% 995,774.99$ 71% 405,209.16$ 29% 1,400,984.15$ 100%
Veracruz Pto. 116,845.88$ 29% 277,166.38$ 75% 94,272.49$ 25% 371,438.87$ 100%
Orizaba 115,624.28$ 29% 184,833.21$ 78% 51,400.46 22% 236,233.67$ 100%
1909 -$
Total del Estado 402,807.94$ 100% 586,155.56$ 41% 859,064.51$ 59% 1,445,220.07$ 100%
Veracruz Pto. 115,693.00$ 29% 162,024.52$ 44% 206,517.67$ 56% 368,542.19$ 100%
Orizaba 121,064.29$ 30% 140,747.50$ 59% 99,837.97 41% 240,585.47$ 100%
1910 -$
Total del Estado 216,394.82$ 100% 308,451.36$ 40% 470,882.85$ 60% 779,334.21$ 100%
Veracruz Pto. 59,774.33$ 28% 85,184.46$ 43% 112,059.39$ 57% 197,243.85$ 100%
Orizaba 63,482.53$ 29% 75,003.74$ 60% 49,236.87 40% 124,240.61$ 100%
Fuente: AGEV, Memoria presentada a la H. Legislatura del Estado Libre y Soberano de Veracruz Llave
1 de enero 1890 al 30 de junio de 1890. Jalapa, Imprenta del Gobierno del Estado, 1891.
Cuadro No. 14 Comerciantes y contribución anual de 1890 en Levi, Manuel.
Cuadro No. 25 Valor de las contribuciones directas al Estado según padrones año 1889, 1890 en Levi, Manuel.
Memoria de la Teoseria General del Estado Libre y Soberano de Veracruz-Llave presentada a la H. Legislatura
el 17 de Septiembre de 1910. Oficina Tipográfica del Gobierno del Estado Xalapa, Ver. 1911, pp.45- 46 y 60
Memoria de la Secretaria de Economía Nacional, 1934
Derecho de patente Contribuciones Directas TOTAL
I M P U E S T O S
255
En la misma información también se observa que los impuestos a los
directos del municipio de Orizaba, fueron los de mayor recaudación de 1908 a
1910. Sus montos se mantuvieron en un porcentaje de 78% en 1908, y 60% de
1909-1910 con respecto a las contribuciones totales, mientras que el municipio
Veracruz y el total del Estado su participación paso del un 70% en promedio en
1908, a un 40% en 1909-1910.
Cuadro 8. Impuestos pagados por las fábricas de San Lorenzo, Cerritos y Cocolapan, 1887.
En este momento vale la pena contemplar la derrama económica generada por
salarios. Estos fueron analizados con más detalle en el apartado de estrategias
laborales, donde se noto que sus montos eran similares al promedio de la industria
textil de la región408, solo que estos se pagaban a mayor número de obreros.
CIDOSA contó durante todo el periodo de estudio con más de 4,000 empleados en
todas sus fábricas, mientras que CIVSA solo tuvo entre 1500 y 1700 empleados.
Después de este breve recorrido, es posible apreciar que las derramas
económicas ocasionadas por las fábricas de CIDOSA se unieron
preponderantemente al resto de las actividades empresariales que tuvieron lugar
en el Valle de Orizaba. Los efectos más visibles se pueden apreciar a lo largo de
estos años en la trama urbana.
408
En 1920, CIDOSA pagaba 5 pesos a sus empleados administrativos y 2.91 a sus obreros. CIVSA pagaba
5.05 y 2.15.
Fábrica Ubicación Dueño Administrador Municipio Municipal Estatal Federal Total
Cocolapan Orizaba Escandon hmos. Alberto G.
Hurphy
$ 1,411.00 $ 3,483.00 $ 1,223.00 $ 6,117.00
San Lorenzo Nogales Tomas Braniff Leniun 1,228.00 $ 4,066.00 $ 1,323.00 $ 6,618.00 $ Cerritos de San Juan
Orizaba Cia. Manufacturera de los Cerritos 3,540.00 $
Fuente : AGN, Departamento del trabajo, Caja 49.
Impuesto
256
Un acercamiento a la urbanización de Orizaba
Los cambios encabezados por la fundación de la primera fábrica textil en
Orizaba, no fueron lo suficientemente exitosos como para lograr que el gobierno
rompiera la unidad orgánica típicamente preindustrial de la ciudad. De hecho, la
traza y la imagen urbana permanecieron con pocas alteraciones, sin
modificaciones radicales.409 Solo la población cambio en tamaño y composición
por la migración de trabajadores nacionales y extranjeros, calificados y no
calificados atraídos por las fábricas textiles instaladas en el Valle.
Si comparamos la población de Orizaba antes de que operaran las fábricas
textiles de Cerritos, San Lorenzo, Río Blanco y Santa Rosa, observamos que 1877
tenía 12,696 habitantes. Mientras que para 1900 ya con la instalación de las
fábricas mencionadas la población aumentó a 32, 894 habitantes. Esto fue un
crecimiento de un 159%, mientras que en las demás ciudades del Estado la tasa
del crecimiento fue alrededor del 90% para el periodo.
El crecimiento de la población de los principales municipios del Estado de
1877 a 1930 se observa en el Cuadro 9. De acuerdo a sus datos, la población de
Orizaba en el siglo XIX fue similar a la de las principales ciudades del Estado:
Xalapa, Veracruz Puerto y Córdoba. De hecho el municipio de Veracruz Puerto
siempre registró una mayor población que cualquier otro municipio excepto en
1900 donde fue superado por Orizaba en casi 500 habitantes, esto por el inicio de
operaciones de las fábricas de Río Blanco y de Santa Rosa. Después, de 1910 a
1930, el crecimiento de la población de Orizaba disminuyó a un promedio del
9.3%, pero aún así continuó siendo el segundo más poblado del Estado debido a
la fuerte atracción de población ejercida por las fábricas textiles.
409
Rivera Carbó, Eulalia. Op.cit, 2002, pp.64, 66.
257
Cuadro 9. Población de algunos municipios del Estado de Veracruz, 1877-1930.
Los primeros obreros que llegaron a trabajar a las fábricas textiles del Valle
de Orizaba fueron en su mayoría, hombres indígenas, campesinos, obreros,
tejedores de otras zonas, artesanos, etc.410 En cuanto a los supervisores y
empleados administrativos, primeramente se contrataron extranjeros, pero
después se delegaron funciones y se capacitaron a los trabajadores mexicanos
para ocupar los puestos de confianza.
En la imagen 1 se muestra una fotografía de los directores, jefes de
departamentos, correiteros, ayudantes y cabos del departamento de tejidos de la
fábrica de Río Blanco en 1920. En ese mismo año solo 82 de los 4320
trabajadores de las fábricas propiedad de CIDOSA eran mujeres, casi el 2%. Esto
contrastaba con el total de población femenina de 1921 en las localidades del
Valle de Orizaba, que representaba casi el 50% o más de la población total, tal
como se muestran en los datos del Cuadro 10. Esto se explica porque “los
trabajadores que emigraron a la región fueron acompañados de sus familias,
cuyos miembros a veces también fueron ocupados en las fábricas, las mujeres
como costureras y los niños como obreros de medio tiempo”.411
410
Para un análisis más detallado de los trabajadores que arribaron a la región, ver García Díaz, Bernardo.
Textiles del Valle de Orizaba, 1880-1925: cinco ensayos de historia sindical y social. Universidad
Veracruzana, Colección Historias Veracruzanas No. 7. Xalapa, Ver, 1990. 411
Gómez Galvarriato, Aurora. “La transformación de los pueblos fabriles del Valle de Orizaba” en 20/10
Memoria de las Revoluciones en México. Primavera, 2009. México, pp.95.
Municipio 1877 1900a 1910 1921 1930 1900 1910 1921 1930
Total del estado 504,905 981,030 1,132,859 1,159,935 1,377,293 94% 15% 2% 19%
Veracurz pto. 16,720 32,263 53,115 58,225 55,295 93% 65% 10% -5%
Orizaba 12,696 32,894 37,679 39,563 42,904 159% 15% 5% 8%
Papantla 18,439 23,967 31,316 34,870 39,768 30% 31% 11% 14%
Xalapa 10,000 20,388 28,640 29,933 31,370 104% 40% 5% 5%
Córdoba 11,600 20,612 23,302 26,892 30,390 78% 13% 15% 13%
Santa Rosa 1,402 6,688 10,707 377% 60%
Nogales 4,096 7,072 9,527 73% 35%
Tenango del Río 3,329 7,357 9,656 121% 31%
a. Datos de 1895 para la población de Santa Rosa, Nogales y Tenengo del Río Blanco
Fuente: Estadísticas Sociales del porfiriato 1887-1910, Sría. de Economía, México 1956.
Cuadro 1. Población por entidades (p.8), (p.9)
Cuadro 2. Población existente en las capitales de las entidades federativas
Cuadro 4. Habitantes existentes en diversas poblaciones del país (p.11),
AGEV, Sothworth (2005), Población en el Canton de Orizaba, p. 159.
Censo general de habitantes 1921. Veracruz, Depto. De estadística Nacional, México 1928, pp. 120-242.
Censo del Estado de Veracruz Llave, 1930. Secretaría de la economía Nacional. Cuadro II. Población de los municipios, pp.11-13.
Población total Tasa de crecimiento
258
Imagen 1. Trabajadores de la fábrica de “Río Blanco”
Fuente: AGEV, Río Blanco, No. 398 Cuadro10. Población por sexo de las localidades que conforman la región del valle de Orizaba, 1921 y 1930.
El crecimiento de la población en la región, también incrementó los servicios
públicos de educación, vivienda, agua, luz, pavimentación, etc. Algunos de estos
servicios fueron proporcionados por el gobierno municipal de 1800-1870, por las
compañías textiles durante el Porfiriato y por los sindicatos durante y después de
la Revolución.412 Sin embargo, en ese ambiente de gran efervescencia, el uso del
suelo debió adquirir gran importancia. Aspecto que no estamos en condiciones de
412
Goméz Galvarriato, Aurora. Op.cit, 2009, pp. 93.
Municipio Localidades total Hombres Mujeres total Hombres Mujeres
TOTAL DEL EDO. 1,159,935 1,377,293
Orizaba Orizaba 39,563 17,837 21,726 42,904 19,578 23,326
Río Blanco El Carrizal 490 247 243 945 470 475
Río Blanco Rancho Nuevo 41 21 20 153 79 74
Río Blanco San Buenaaventura - - - 124 76 48
Río Blanco San Joaquín 25 13 12 122 68 54
Río Blanco Tenango 6,169 3,137 3,032 7,289 3,595 3,694
Río Blanco Xicotepec 141 70 71 250 130 120
Nogales Nogales 6,407 3,193 3,214 9,020 4,414 4,606
Nogales Encinal 354 179 175 124 67 57
Nogales Muyuapan 110 53 57 - - -
Nogales Ojo Zarco 44 85 41- 99 54 45
Nogales Palo Verde - - - 214 109 105
Nogales La Carbonera - - - 70 36 34
Nogales Chicahuaxtla 115 55 60 4 2 2
Santa Rosa Camerino Z. Mendoza 5,153 2,596 2,557 9,032 4,454 4,578
Santa Rosa La Cuesta 436 215 221 412 191 221
Santa Rosa Necoxtla 1,099 530 569 1,263 610 653
Fuente: AGEV, Censo del Estado de Veracruz Llave, 1930. Secretaría de la economía Nacional. México, 1933.
Cuadro XXXVIII. Población distribuida por localidades (p.254-448)
1921 1930
259
desarrollar porque requiere una investigación distinta, donde la compraventa del
suelo y la renta del mismo fuesen objetivo central.
En 1805 el gobierno municipal de Orizaba instaló agua y cañerías para el
primer cuadro de la ciudad. En 1826, colocó 150 faroles de un sistema de
alumbrado público y en 1846 amplió el servicio de agua para los barrios de
Cocolapan y Angostura, por la instalación de la fábrica de Cocolapan. Fue hasta el
imperio francés (1864-1867) que el gobierno empedró la calle principal y mejoró el
alumbrado público. Colocó un reloj en la torre de la parroquia y reparó el puente
de San Juan, también adelantó la construcción del Teatro Llave. Después de la
República Restaurada, el municipio aumentó las obras. En 1870 construyó un
desagüe nuevo, cajas repartidoras de agua y amplio el sistema de alumbrado
público hacia la fábrica de Cocolapan. En 1874 construyó otro canal para surtir de
agua potable a la población.413
En cuanto a las compañías textiles, CIDOSA en 1891 inauguró el primer
sistema de iluminación eléctrica impulsado por la fábrica Cocolapan contratada por
el Ayuntamiento de Orizaba. Además construyó en Tenango de Río Blanco, la
Iglesia, el mercado, escuelas, parques, el Palacio Municipal y 1,100 casas para
alquilar a sus obreros y empleados. También en 1908 contribuyó con el gobierno
de Orizaba para que se pavimentaran 4210 m2 de calles. 414 En la imagen 2, se
muestran fotografías panorámicas de Orizaba, Rio Blanco y Nogales para el año
de 1908. En estas imágenes se observa que en todos estos municipios, existía un
camino principal (o “camino real”) que los comunicaba y del cual partía la traza de
la ciudad.
413
Rivera Carbó, Eulalia. Op.cit, 2002, pp.64, 66. 414
Ídem.
260
Imagen 2. Panorámica de Orizaba, 1908.
Fuente: AGN, Fototeca, propiedad artística y literaria. Briquet A. No. 1.
Orizaba-Garita de Nogales
Fuente: AGN, Fototeca, Fondo Briquet A. No. 4
261
Tenango de Río Blanco, Veracruz. .
Fuente: Archivo Municipal de Río Blanco (AMRB).
En la fotografía del municipio de Río Blanco también se observa que la
fábrica de Río Blanco estaba instalada a un lado del camino principal, el cual
actualmente es la carretera México-Orizaba.
En el caso de CIVSA, esta empresa construyó en 1897 en Necoxtla 542
casas para rentar a sus empleados, iglesias, el palacio municipal, una vía para el
tranvía local, una parte de la vía ferroviaria Veracruz-México. En 1906, la
iluminación de las calles, un acueducto para dotar de agua a una parte del Pueblo
de Santa Rosa. En 1917, la plaza central y en 1928 donó junto con CIDOSA y la
Cervecería Moctezuma $15,000 para la construcción de la autopista México-
Veracruz.415
Los sindicatos por su parte construyeron en los años veintes el Banco
Obrero,416 tiendas cooperativas de consumo, los Institutos de Educación y las
Academias Técnicas para adultos y niños; la escuela América, el cine y teatro
Juárez. El Banco Obrero y las tiendas cooperativas tuvieron sus antecedentes en
415
Gómez Galvarriato, Aurora. Op,cit, 1999ª, pp. 457-465. 416
Este es un aspecto de la vida y organización sindical que debiera explorarse a profundidad con la intención
de valorar su influencia en el entorno social orizabeño. Aspecto que se señala porque sin duda durante los
años que operó debió tener beneficios en el tejido social, cosa que no estamos en condiciones de desarrollar.
262
las tiendas de raya o tiendas de empresa. Estos negocios les servían a los
empresarios para recuperar parte de los salarios de los obreros, al obligarlos a
comprar en ellos los alimentos, ropa y otros bienes que necesitaban. La tienda de
raya cambiaba los vales que la compañía otorgaba a los obreros, cobrándoles una
comisión por ello. Existían en la Fábrica de San Lorenzo, en Río Blanco y Santa
Rosa, pero solo les permitían comprar a sus respectivos obreros. 417
Las tiendas de raya operaron hasta 1912, cuando las leyes laborales las
prohibieron. Esto dio pie a que surgieran otras negocios comerciales que cobraban
tasas de interés más altas (la tienda de raya de CIVSA cobraba 5% mensual y
otras tiendas 12%.) Para solucionar esto, los obreros decidieron abrir sus propias
tiendas cooperativas y Bancos para comprar barato y obtener créditos con tasa
accesibles. En 1928 fundaron las tiendas cooperativas de las fábricas de Santa
Rosa, Río Blanco, Mirafuentes, San Lorenzo y Santa Gertrudis. En estas tiendas
permitieron a todos los obreros y campesinos comprar en ellas. También crearon
la sociedad mutualista CIDO-mutua que otorgaba vales como ayuda a los
trabajadores, sólo que sin descontarles comisión alguna. Por su parte, el Banco
Obrero en 1928 cobraba el 2% de interés mensual y pagaba el 1% a los
ahorradores. Parte de sus ganancias se utilizaron para construir la escuela
primaria América, el cine y teatro Juárez.418 (Ver imagen 3)
Tanto las compañías textiles, como los sindicatos impulsaron las
actividades de educación y de entretenimiento como el teatro, los clubs, bandas
de música y equipos deportivos como: “los equipos de Beisbol de Río Blanco
(UDRB), de Santa Rosa “Sparta”, “Río Blanco Stars”, “Titan”, “Bacardi”, “Venus”,
“Fabriles XX”, “Reforma”, “Sporting”; y el equipo de futbol “Orizaba A.C.” 419. Estas
actividades fueron posibles gracias a “las leyes que obligaron a las compañías a
mantener jornadas laborales de 8 horas con descansos obligatorios, que
generalmente se daban los sábados por la tarde y los domingos todo el día”.420
417
Ídem, pp. 410-442. 418
Ídem. 419
García Díaz, Bernando. Santa Rosa y Río Blanco. Colección Veracruz imágenes de su historia. Archivo
General del Estado de Veracruz, 2a. edición México, 1991. 420
Gómez Galvarriato, Aurora. Op,cit, 1999ª, pp. 452-457.
263
Imagen 3. Escuela América en Orizaba
Fuente: Archivo Sindicato de Santa rosa publicado en Gómez (2009), pp.109.
En cuanto a educación, tanto CIDOSA como CIVSA, apoyaron a las
escuelas municipales de los pueblos donde se establecieron y posteriormente
apoyaron las iniciativas de los obreros de establecer más escuelas primarias,
kínder y escuelas de oficios. De hecho con el artículo 123 de la Constitución de
1917 y el 85 de la Ley laboral de Cándido Aguilar de 1914, se obligó a las fábricas
de más de 100 trabajadores a establecer escuelas en sus fábricas. Al principio
ambas compañías rechazaron estas disposiciones argumentando que ya
apoyaban a las escuelas públicas, pero con el tiempo y la presión de los
sindicatos, cambiaron su posición aumentando el apoyo sobre todo a escuelas de
oficios”.421
421
Ídem, pp.510.
264
El establecimiento de estas escuelas, benefició a la población de la región.
En el Cuadro 11se identifican los datos de población mayor de 10 años que sabía
leer y escribir por municipio en 1930 .De acuerdo a estos datos, el municipio del
Puerto de Veracruz, fue el de mayor población alfabetizada del Estado con el 73%
de sus habitantes. Orizaba fue el segundo con un 67% y Xalapa, fue el tercero con
un 62%. Por su parte, Río Blanco y Nogales, tenían alrededor del 60% de su
población alfabetizada; mientras que Santa Rosa contaba con un 50%. Todos
estos municipios estaban por encima del promedio del Estado que era del 32% de
los habitantes. Además “el índice de alfabetización de los obreros de las fábricas
de CIDOSA y CIVSA fue el más alto que el resto del país: 50% en Río Blanco,
55% en Nogales y 62% en Santa Rosa”.422
Cuadro 11. Población de 10 años o más que saben leer y escribir en algunos municipios del Estado de Veracruz, 1930.
Los sindicatos apoyados por las compañías textiles y algunos gobiernos
municipales encabezados por ex trabajadores de las fábricas, construyeron a
partir de los años veintes, los Institutos de Educación y las Academias Técnicas
para adultos y niños. Las cuales tenían como fin combatir el analfabetismo y
capacitar a los trabajadores. También iniciaron con escuelas nocturnas para los
obreros. La primera fue la de la fábrica San Lorenzo en 1912, cuyo sueldo del
maestro fue pagado por CIDOSA. En 1916 igualmente instalaron escuelas
422
Gómez Galvarriato, Aurora. “De operarios a Obreros: la organización laboral” en García, Díaz, Bernardo.
La huelga de Río Blanco, 1997-2007. Ed. Secretaria de Educación de Veracruz, Gobierno del Estado,
Veracruz, 2007.
1930
Municipio TOTAL Saben leer y
escribir
Saben leer Ni leer ni
escribir
Saben leer y
escribir (%)
TOTAL DEL ESTADO 957,472 310,988 18,418 628,066 32%
Veracruz 55,295 41,514 1,059 12,722 75%
Orizaba 32,079 21,626 661 9,792 67%
Jalapa 31,370 19,550 459 11,361 62%
Santa Rosa 7,462 3,716 189 3,557 50%
Tenango de Río Blanco 6,805 4,245 177 2,383 62%
Nogales 6,701 4,049 139 2,513 60%
Fuente: AGEV, Censo del Estado de Veracruz Llave, 1930. Secretaría de la economía
Nacional. Dirección general de estadística, México, 1933.
Cuadro XVII. Alfabetismo de la población de diez años o más (p.191-229)
Población de 10 años o más
265
nocturnas en Río Blanco y Santa Rosa. Estas escuelas se enfocaron a la
instrucción básica y técnica para aumentar la productividad de los obreros. 423
Los centros de enseñanza continuamente recibieron ayuda de las empresas
y del gobierno; por ejemplo, en 1926 el sindicato de Río Blanco solicitó a la
dirección de CIDOSA, CIVSA y San Idelfonso, ayuda para establecer una escuela
técnica textil. Las compañías aceptaron ayudar y en 1929, CIDOSA donó $10,000
pesos en efectivo, CIVSA $6,000, San Idelfonso $300 y el Gobierno Federal
$13,650. También aportaron una máquina abridora, una alimentadora, un batiente,
dos cardas, un estirador, un veloz pabilador, un veloz intermedio, un veloz fino, un
troxil de pie, uno de trama, un cañonero, un urdidor, 6 telares y una dobladora.424
A manera de síntesis las actividades industriales tuvieron efectos múltiples
en la vida de la población. Los trabajadores tuvieron acceso a salarios
remunerados durante más de cuatro décadas, lo cual permitió tener acceso a una
forma de vida distinta a la que tenían en sus lugares de origen. Las exigencias del
asentamiento poblacional que crecieron aceleradamente durante todos estos
años, demandaron servicios de vivienda, agua, drenaje, electricidad, salud,
educación y recreación como nunca antes sucedieran en el Valle de Orizaba.
Además de los servicios propios de la organización y administración
municipal, así como las formas de acceder políticamente a ella -relacionarse con
el empresariado, autoridades estatales y federales-, describirían estilos de vida
impensados. La actividad empresarial y fabril sin dudarlo, funcionó como atractor
de una fuerte migración ocasionada por la derrama económica. Sin embargo, el
desarrollo regional no fue el objetivo principal de las empresas, éste estuvo sujeto
a la suerte que tuvieron dichas empresas en el cambiante mundo de negocios que
operaba en ese entorno social.
423
Gómez Galvarriato, Aurora. Op,cit, 1999ª, pp. 510. 424
AGEV, Sección Fomento, serie Industria, Caja 170.
266
Conclusiones
Después de este recorrido y habiendo adelantado a algunas respuestas a las
preguntas planteadas originalmente es importante destacar que la presente
investigación no fue una indagación con clausura. Es decir que la cantidad de
interrogantes generada en su transcurso se abre a otros campos problemáticos
que por ahora no se está en condiciones de desarrollar. Sin embargo, los
resultados obtenidos ofrecen ya sus certidumbres.
Las lecciones historiográficas nos han legado sin duda importantes
conocimientos de la experiencia de la industria textil en México. Estas lecciones
como ya vimos se abren sobre todo a tres campos problemáticos: el propio del
rendimiento industrial y su valoración en conjunto; el de los empresarios y
trabajadores y el de su papel en el desarrollo económico del país. Gracias al
primero de los empeños se posee una mirada de los alcances y límites del
desarrollo textil, sin los que no hubiera sido posible realizar estudios más amplios
como los referidos al desarrollo económico del país o los estudios comparativos.
Sin embargo, y pese a que el estudio del empresariado se ha realizado en algunos
casos a profundidad, así como el de las organizaciones y luchas obreras, el
estudio de las organizaciones empresariales, sus estrategias administrativas se
estudian tímidamente. Es en este aspecto en donde más claramente se ubica el
desarrollo de esta tesis.
Estudiar el mundo empresarial presenta ciertos retos. En primer lugar, las
fuentes de información son dispersas y de difícil acceso. En segundo lugar a pesar
de que existen multitud de explicaciones teóricas, no se dispone de un marco
teórico privilegiado para analizar las estrategias de los empresarios a largo plazo.
Las teorías sin embargo si bien se abren a un espectro en donde las empresas se
encadenan al comportamiento general de la economía. Sobre todo a partir del
surgimiento de las teorías del desarrollo y específicamente del desarrollo regional
que pusieron el acento en los factores de localización, en los lugares centrales y
en la teoría de base de exportación, resultan insuficientes tratándose del mundo
empresarial, pues éste quedo subordinado y con frecuencia borrado por los
267
análisis macro. En este sentido son relevantes las apreciaciones de Douglas North
que enfatiza la importancia del ambiente institucional en el cual operan las
empresas. Aspecto que viene bien en un sentido al estudio del desarrollo
empresarial, porque nos invita a poner atención en el papel e importancia del
contexto institucional y social en el que funcionan las empresas. En tercer lugar las
explicaciones referidas al comportamiento empresarial, sus redes y estrategias,
son tratadas cada una por separado otorgándoles el peso que los teóricos
consideran tienen cada uno. Así algunos enfatizan en las estructuras
organizacionales, en las estrategias que permiten alcanzar ciertos objetivos o en el
tamaño e importancia de la red de intereses. Por ejemplo autores como Alfred
Chandler, Ronald Coase , Olliver Williamson, Alejandro Portes, Casson, Mark
Granovetter, Luc Boltansky y Eve Chiapello, si bien no ofrecen una mirada
abarcadora del mundo empresarial, aportan aspectos y relaciones sugerentes. De
todas ellas nos hemos servido para atisbar el mundo de las estrategias y de las
redes empresariales utilizadas por la Compañía Industrial de Orizaba SA
(CIDOSA) entre los años 1889 a 1930.
Gracias a todos estos aportes -tanto historiográficos como teóricos-, se pudo
indagar con cierta prestancia la importancia de una red construida por los
empresarios de CIDOSA. Una red que se puso a prueba en condiciones sociales
de gran incertidumbre como fueron las luchas revolucionarias de 1910, la Primera
Guerra Mundial y la crisis internacional de 1929. Pero también las estrategias de
los empresarios y el entorno sociohistórico en el cual estos operaron. Pasar revista
a estos fenómenos es importante porque gracias a ello la hipótesis que guio esta
investigación fue probada suficientemente.
Los socios de CIDOSA mantuvieron alianzas basadas en principios de
confianza, solidaridad, esfuerzo, dedicación y lealtad gracias a su origen
barcelonnette, pero también en incentivos económicos. Quienes no cumplían
fielmente los compromisos se hacían acreedores a sanciones y pérdida de
recompensas.
Gracias a sus mecanismos e identidad colectiva, estos inmigrantes tuvieron
acceso a créditos, mercancías, descuentos y otros tipos de financiamientos.
268
Además debido a la solidaridad que mantenían entre compatriotas, aplicaban la
práctica del favor con favor se paga. Brindándose oportunidades de empleo,
recursos financieros, protección, etc. a cambio de lealtad y trabajo constante.
Repitiendo la práctica cada vez que alguno de los migrantes adquiría una posición
privilegiada. Esta estrategia se habría de repetir a lo largo de los cuarenta años
analizados. Si bien es cierto la migración del Valle de Ubaye se transformó debido
a varios acontecimientos históricos -como serían la lucha revolucionaria, la
Primera Guerra Mundial y la Constitución Mexicana de 1917, etc.-, al cambiar los
incentivos institucionales que tuvieron durante el siglo XIX, no impidió que en el
siglo XX continuarán desplegando sus estrategias, fortaleciendo sus vínculos
matrimoniales, relaciones amistosas y económicas.
Estos vínculos les permitieron disminuir los costos de monitoreo en sus
negocios. El acceso al financiamiento francés motivo a los inmigrantes
barcelonnettes, que ya se ubicaban en comercio de textiles, a asociarse para
fundar sus propias fábricas textiles. Además participar como accionistas de los
principales bancos (Banco Nacional de México, Banco de Londres y México,
Sociedades financiera para la Industria en México, etc.) y compañías
manufactureras (Cía. cigarrera el Buen Tono, cía. Fundidora de fierro y Acero de
monterrey, cía. de papel San Rafael, etc.) de México durante el periodo de 1890-
1930. Este proceso que implica la acumulación de capital para avanzar del
comercio a la producción industrial y a las finanzas no siguió necesariamente este
orden. Algunos de ellos pasaron del comercio a las finanzas directamente, otros
más lo hicieron directamente en la fabricación textil para de ahí desplegarse en los
otros dos ámbitos. Los comerciantes barcelonnettes aplicaron estrategias de
diversificación, integración horizontal y vertical. Sin embargo, dichas formas de
integración fueron parciales en sus negocios de consumo, industriales y de
financiamiento, pues no lograron migrar hacia otras ramas productivas promisorias
como el petróleo y gas.
Es importante destacar que estos empresarios se mantuvieron asociados
con otros empresarios poderosos de la época como: José Yves Limantour,
Enrique Creel, Joaquín Casasus, Porfirio Díaz Jr., Agusto Gennin, Hugo Scherer,
269
Vicente Ferrara, Pablo Maceda, Xavier Ycaza, Tomás Braniff, Patricio Milmo y
Fernando Pimentel y Fagoada. Con quienes mantuvieron sus iniciales estrategias
de lazos familiares, de amistad y de negocios. Conservando en todos los casos
estrecha relación con todos los gobernantes de México. Por eso la red de sus
intereses se extendió geográficamente a casi todo el país de oriente a occidente,
del centro al norte, manteniendo siempre sus vínculos internacionales Europeos.
Una extensa red sin precedentes en la historia del México moderno.
Las asociaciones que formaron con coterráneos, gobierno y otros empresarios,
les permitió crear una red de negocios que les proporcionaba información,
recursos productivos -mano de obra, capital-, recursos políticos privilegiados como
concesiones de agua, exención de impuestos, etc. y ventajas monopólicas en sus
empresas, como en CIDOSA, que fue una de las compañías manufactureras más
redituables de México. Destacan como causas de sus éxitos: 1. Su organización
técnica funcional donde se daba mayor énfasis a la fabricación mediante
maquinaria moderna y estandarización de los procesos de trabajo. 2. Al avance
tecnológico en el uso de energía (vapor, electricidad, etc.), 3. El incremento de su
escala de fabricación incorporando mayor número de obreros y máquinas (como
en el caso de Río Blanco). 4. Las concesiones y privilegios del gobierno (en
aguas, impuestos, compras, etc.). 5. El desarrollo de vías de comunicación y
transporte, 6. Pero principalmente por las redes sociales y de negocios a las que
pertenecían sus dueños, las cuales como ya se ha dicho les imponían un sistema
de normas y valores basados en la fe católica que recompensaban su lealtad
(nuevos convenios para otros negocios, financiamiento, concesiones de los
gobiernos, etc.) pero castigaban su desobediencia con expulsión de las empresas.
Por otra parte, cuando los empresarios textiles se vieron afectados por la
Revolución no sufrieron daños directos en sus fábricas pero sí, en las redes de
distribución al afectarse los sistemas de transporte y comunicación. Sin embargo,
las compañías textiles como CIDOSA obtuvieron utilidades a pesar del conflicto,
de los cambios políticos, sociales y económicos, generados la guerra civil;
principalmente porque mantuvieron relaciones cercanas con los diferentes
gobernantes de México. Seguir conservando sus concesiones e intereses fue el
270
objetivo central de su estrategia, por eso tuvieron la habilidad y flexibilidad para
adaptarse a las nuevas leyes y exigencias de los obreros, sin dejar de obtener
ganancias para sus empresas. De hecho la queja de los empresarios por el
aumento de salarios y prestaciones que impusieron las Leyes del trabajo y la
Constitución de 1917 parece estar atenuado por los volúmenes de ganancias que
ellos obtuvieron.
Es destacable el hecho de que los socios CIDOSA lograran obtener las
mayores ganancias del sector textil mexicano, durante las dos primeras décadas
del siglo XX. Una de las razones principales era que vendían telas finas de calidad
con marcas registradas y apetecibles por los consumidores, a través de sus redes
de comercialización que eran más amplias que las de su competencia, ya que
poseía mas tiendas de ropa y agentes de venta en toda la república. Además de
tener acceso privilegiado a fuentes de financiamiento interno como reinversión de
utilidades, participación accionaria en bancos como BANAMEX, Banco de Londres
y México, Banco Central Mexicano, etc., y externo, proveniente de los socios
franceses, que cotizaban acciones en las bolsas de valores de Ginebra y Paris.
Por si fuera poco también tuvieron acceso al financiamiento de organismos como
la Sociedad financiera para la industria en México que tenía su sede en Suiza.
Otra circunstancia que debieron enfrentar las compañías de tejidos de algodón,
y que sí afecto sus ganancias, fue la Crisis mundial de 1929. Está provocó una
caída de sus ventas e inversiones en planta productiva. De 1926 a 1932 las telas y
prendas de vestir en México se acumularon en las tiendas y las fábricas textiles
solicitaron al gobierno disminuir sus días de trabajo e inclusive cerrar por un
tiempo. El gobierno no accedió y los inventarios siguieron acumulándose,
provocando pérdidas a los empresarios textiles.
En el caso de CIDOSA, esta compañía vendía sus productos a las clases altas,
por lo cual sus pérdidas fueron mayores que aquellos que producían
principalmente manta, ya que el mercado que más se contrajo fue el de los
productos de lujo. El impacto de la crisis del 29, fue de tal magnitud que en 1931 la
compañía registró su primera pérdida desde 1889; y su capital disminuyó en 35%.
En 1932 su capital volvió a disminuir en 23% y en 1933 los socios plantearon la
271
posibilidad de disolver la sociedad. Ante este panorama, el gobierno decidió ceder
a las peticiones de los empresarios y les permitió disminuir las jornadas laborales,
trabajando cuatro días a la semana.
La transformación del patrón de acumulación en el mundo y la crisis de
confianza de los empresarios hacia al gobierno por la ley del trabajo que daban
más poder a los obreros, los socios de CIDOSA y de otras empresas textiles
optaron por ya no crear plantas productivas, disminuir sus inversiones en las
fábricas de tela (del 69.32% en 1911 a 43.92% en 1920) y trasladar sus capitales
a bienes raíces. De hecho desde la fundación de la compañía en 1889, los socios
de CIDOSA adquirieron grandes extensiones de terrenos en los municipios de Río
Blanco, Orizaba, Nogales, Veracruz puerto y en la Ciudad de México. Estos
terrenos fueron utilizados para construir casas de alquiler para los obreros,
rentarlos para el gobierno y/o construir oficinas para la empresa.
Los efectos sociales que tendrían sus iniciativas, a lo largo de cuarenta
años, aceleró el crecimiento demográfico en el ámbito territorial concreto de los
municipios del Valle de Orizaba. Además contribuyó a elevar el nivel de ingreso de
los trabajadores quienes adquirían bienes de consumo en tiendas de la empresa,
accedían a viviendas alquiladas o vendidas mediante créditos con bajas tasas de
interés, así como influir en la educación de los habitantes y promover los deportes
y la música. Estos aspectos positivos del establecimiento de las industrias tuvieron
sin duda su contraparte, expresada en la organización de lucha obrera, y en los
niveles de pobreza y hacinamiento de la población que habitaba en los terrenos
de las compañías.
Los socios de CIDOSA igualmente contribuyeron al desarrollo urbano de la
región del valle de Orizaba, al permitir que sus fábricas proporcionaran electricidad
a los ayuntamientos, al hacer donaciones para que se construyeran escuelas,
parques, mercados, iglesias, edificios públicos y vías de comunicación como
líneas de telégrafos, carreteras, etc. El establecimiento y operación de las fábricas
de CIDOSA en la región de Orizaba, tuvo efectos mayores. Contribuyo a situar a
Veracruz como uno de los Estados de mayor producción industrial en el país en
las primeras tres décadas del siglo XX. Sin embargo sería hasta 1962 cuando
272
CIDOSA fue vendida a Jerónimo Arango, Carlos Trouyet y Manuel Senderos,
quienes continuaron operando las fábricas hasta 1993, cuando fue declarada en
quiebra. Actualmente se tiene contemplado realizar una central de abastos en el
antiguo edificio de la fábrica de Cerritos y un estadio de futbol en los terrenos de la
fábrica de Cocolapan. Con esto se perderá la oportunidad de resguardar el
patrimonio industrial de esta región y de utilizarlo para realizar estudios que nos
ayuden a comprender ¿Por qué CIDOSA y sus fábricas no generaron un polo de
desarrollo en la región? Y ¿Qué impactos ambientales ocasionaron el
funcionamiento de estas manufacturas al valle de Orizaba? Estas y otras
interrogantes quedaron pendientes por responder en otras investigaciones
¿Cuáles son las lecciones más generales que nos ofrecen este análisis? 1. Que la
estrategia diseñada por los empresarios de CIDOSA y la red construida para
mantener sus negocios florecientes, con asideros nacionales e internacionales
funciono para hacer crecer sus negocios en un medio como ya se ha dicho de
gran incertidumbre afectado por situaciones internas y externas; 2. Sus
estrategias y redes como se pudo apreciar fueron más eficientes para enfrentar las
incertidumbres de la lucha armada de 1910 y la Primera Guerra Mundial, que la
crisis de sobreproducción que difundió sus efectos internacionalmente después de
1929; 3. Que la elección de herramientas teóricas y conceptuales facilitaron el
análisis de la empresa objeto de estudio, no obstante los aspectos relacionados
con el desarrollo regional de un territorio que no parece estar exactamente situado
en los centros de consumo ni en los de producción de materia prima, pero si en las
vías de comunicación y en las de abastecimiento de los recursos hídricos. La
fuerza de trabajo se fue conformando al paso de los años con migrantes de zonas
aledañas; 4. Sin duda en la operación y funcionamiento de esta emblemática
empresa, el entorno institucional fue un importante medio para su desarrollo; 5. En
el proceso de análisis y valoración del desempeño de esta empresa, si bien
destacan sus éxitos, la posibilidad de analizar sus errores y formas de sanción a
algunos de sus socios quedó fuera de esta investigación por falta de fuentes. Sus
fracasos como ya se ha dicho, se hicieron visibles después de la tercera década
del siglo XX, migrar hacia otras fuentes de inversión más seguras fue sin duda
273
parte de sus estrategias. 6. Un aspecto que llama poderosamente la atención es el
papel de las mujeres en la construcción de las redes empresariales, solo en un
caso un empresario cede sus negocios a su viuda, como fue José Ollivier, para el
resto se desconoce el papel de las mujeres en la red de dicho empresarios. Con
frecuencia lo que si se visibiliza es que una forma de ampliar la red era con los
vínculos matrimoniales, al casar a sus hijas con otros empresarios. No obstante el
papel de las mujeres relacionado con el mundo del trabajo es un tema pendiente
por esclarecer.
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284
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Archivo General de la Nación (AGN)
Archivo Histórico de las Notarias de la Ciudad de México (AHNM)
Archivo General del Estado de Veracruz (AGEV)
Archivo del Registro Público de la propiedad y de inspección y Archivo General de
Notarías del Estado de Veracruz (ANEV)
Archivo Municipal de Orizaba
Archivo Municipal de Nogales
Archivo Municipal de Río Blanco
Archivo histórico del agua (AGA)
Archivo Plutarco Elías Calles y Fernando Torreblanca (APC y FT)
Archivos Históricos de BANAMEX (AHBANAMEX)
Archivos Históricos de patentes del Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI)
Registro Público de la Propiedad de Orizaba (RPPO)
285
A N E X O S
286
ANEXO A. Datos sobre la industria textil nacional
Año No. de fábricas No de telares No de Husos No. de obreros Producción en
kilogramos
Valor en ventas
(pesos
corrientes)
Producción /
No. De
obreros
Producción /
No. De
Maquinas
1917 99 20,489 573,072 22,187 16,032,426 64,129,744 722.60 27.01
1918 104 25,017 689,173 27,680 18,300,426 48,566,675 661.14 25.62
1919 114 27,026 749,237 33,185 23,823,818 69,778,410 717.91 30.69
1920 120 27,301 753,837 37,936 28,524,622 120,492,434 751.91 36.52
1921 121 28,409 770,945 38,227 32,331,811 93,941,985 845.78 40.45
1922 120 27,819 758,624 39,677 31,189,011 85,023,398 786.07 39.66
1923 113 27,770 752,255 38,684 27,280,775 92,283,070 705.22 34.97
1924 109 26,536 721,580 37,080 26,369,920 92,872,871 711.16 35.25
1925 124 28,734 780,691 42,359 35,977,418 104,395,152 849.35 44.45
1926 131 29,446 780,144 44,114 36,206,792 93,510,666 820.76 44.72
1927 132 29,290 777,380 41,008 35,808,522 88,746,682 873.21 44.39
1928 132 29,295 791,333 38,889 35,147,733 90,966,026 903.80 42.83
1929 139 28,825 792,336 38,881 34,421,394 93,729,079 885.30 41.92
1930 141 29,229 800,023 38,860 36,781,477 94,602,044 946.51 44.36
1931 142 29,228 799,129 36,883 31,071,002 78,563,663 842.42 37.51
1932 137 27,900 773,579 34,626 32,219,409 84,161,245 930.50 40.20
1933 155 31,438 855,256 35,426 39,886,229 102,073,240 1,125.90 44.98
PROMEDIO 125 27,868 759,917 36,806 30,668,987 88,108,023 828 38.56
Fuente: Pruneda (1942) pp. 4
Grupos No. De fabricas en operación
1935 1936 1937
Hilados de algodón 31 33 36
Hilados y tejidos de algodón 89 91 90
Hialdos y tejidos de algodón y aristisela 17 20 26
Hilos 18 24 25
Tejidos de aldon 21 28 48
Tejidos de algodón, aristesela y seda 36 36 38
toal 212 232 263
Fuente: Pruneda (1942) 68
Lugar 1935 1936 1937
DF 62 59 65
Jalisco 8 13 14
México 9 11 12
Neuvo León 4 4 4
Puebla 77 89 99
Queretaro 4 5 6
Veracruz 10 10 10
No.fabricas Valor I Valor producción
Puebla 39.70% 30.25% 30.10%
df 26.00% 28.29% 17.55%
Veracruz 4.00% 18.50% 21.45%
TOTAL 69.70% 77.04% 69.10% p.69
287
ANEXO B. MAQUINARÍA
CIA INDUSTRIAL MANUFACTURERAS, S.A. "RIO GRANDE" EL SALTO, JALISCO 1926
Nombre de maquina Num. Maquinas Materia Horas Marca Capacidad Rev x minuto
DEPTO. PREPARACION E HILADOS
Abridoras 2 A 15.5 Platt & Bros
Batientes 5 A 15.5 Platt & Bros
Trituradoreas 1 A 15.5 Dobson & Barlow
Cardas Chaponas 3 A 15.5 Platt & Bros
Cardas de cilindro 62 A 15.5 Varias marcas
Manuares 7 A 15.5 Platt & Bros
Mecheras en grueso 7 A 15.5 Platt & Bros
Mecheras intermedias 9 A 15.5 Platt & Bros
Mecheras en fino 24 A 15.5
Mecheras superfino
Cordoneras 1 A 15.5 J.M. Summer
Devanadoras 20 A 15.5 Varias marcas
Torcedoras 1 A 15.5 Dobson & Barlow
Salfatinas de hilar
Tróciles de pie 40 A 15.5 Varias marcas 14,400 7500
Tróciles de trama 20 A 15.5 Varias marcas 9,360 7500
Dobladoras 2 A 15.5 Varias marcas
Trituradoras de desperdicios 1 A 15.5 Dobson & Barlow
Batientes engrasadores
Batanes
Cardas abridoras 5 A 15.5 Platt & Bros
Cardas de enrollar
Cardas de peinado
Continuas de hilar
Descatizadoras en mojado
Descatizadoras a vapor
Desmotadora
Exprimidoras
Lavadoras de lana
Lizosas
Peinadoras rectilineas
Revolvedoras
Secadora de lana
Intercétiles
Peinadoras circulares
Veloces
Reunidoras Napa
Estiradoras Napa
Peinadoras de algodón
DEPTO. TEJIDO Y ACABADO
Canilleras 2 A 15.5 Lesson's
Cañoneras 6 A 15.5 Varias marcas
Maquinas de hacer lisos 1 A 15.5 Moor Mill Ltd
Maquinas de hacer peinados 1 A 15.5 Moor Mill Ltd
Maquinas engomadoras 4 A 15.5 Varias marcas
Maquinas urdidoras 11 A 15.5 Varias marcas
Bastidores de atado 8 A 15.5 Varias marcas
Bastidores de repaso 5 A 15.5 Varias marcas
Tinas pasteras 2 A 15.5 Varias marcas
Telares atriles combinación 122 A 15.5 Varias marcas
288
ANEXO B. MAQUINARÍA
CIA INDUSTRIAL MANUFACTURERAS, S.A. "RIO GRANDE" EL SALTO, JALISCO 1926
Nombre de maquina Num. Maquinas Materia Horas Marca Capacidad Rev x minuto
Telares cajines 97 A 15.5 Varias marcas
Telares cajines chacalos 1 A 15.5 J.M. Summer
Telares circulares 2 A 15.5 Hodgson
Telares circulares chacalos
Telares chacalos 70 A 15.5 Varias marcas
Telares doble ancho 10 A 15.5 Varias marcas
Telares manguera 1 A 15.5 J.M. Summer
Telares planos 664 A 15.5 Varias marcas
Telares pabellon 1 A 15.5 J.M. Summer
Bastidores de revisar 7 A 15.5 Rio Grande
Prensas de empacar 4 A 15.5 Varias marcas
Torculos 5 A 15.5 Varias marcas
Aprestadores 4 A 15.5 Societé Alsacienne
Afelpadores 1 A 15.5 Montfort & Glad
Dobladilladoras
Enanchadoras 2 A 15.5 Varias marcas
Enrolladoras 2 A 15.5 Varias marcas
Estampadoras 3 A 15.5 T. Gladd
Generadoras
Golpeadoras 1 A 15.5 Long Brigde
Jabonadoras 1 A 15.5 Sin marca
Lavadoras 7 A 15.5 Long Brigde
Marcadoras 1 A 15.5 Henry Wallrock
Ramas 2 A 15.5 Mather & Platt
Rasuradoras 1 A 15.5 Mather & Platt
Ramas de teñir
Rociadoras 3 A 15.5 F. Gadd
Oxidadoras 1 A 15.5 Mather & Platt
Aparatos esmeriladores 1 A 15.5 Thomas & Roch
Aparatos filtradores 1 A 15.5 Sin marca
Ollas de blanqueo 1 A 15.5 Mather & Platt
Pasteras 1 A 15.5 Sin marca
Secadoras de añil 6 A 15.5 Varias marcas
Mercerizadoras 1 A 15.5 R.G.
Tanques de tintorería 3 A 15.5 Varias marcas
Bobinuares
Cepillos
Dobladora medidora 6 A 15.5 Varias marcas
Enmotadoras fantasia
Estufa para secar 1 A 15.5
Guils
Lavadora de piezas
Mesas de acabado 11 A 15.5 R.G.
Ramas de secar 2 A 15.5 Mather & Platt
Navajas
Palmers
Planchadoras
Tanques lavadores
Tanques para teñir piezas 3 A 15.5 Varias marcas
Vaporizadoras 2 A 15.5 T.Gladd
Telares franceses
Telares ingleses
289
ANEXO B. MAQUINARÍA
CIA INDUSTRIAL MANUFACTURERAS, S.A. "RIO GRANDE" EL SALTO, JALISCO 1926
Nombre de maquina Num. Maquinas Materia Horas Marca Capacidad Rev x minuto
Telares alemanes
Carreteros de canilla
Carreteros de madeja
Circulares p/camiseta y calzoncillo
Circulares p/ media y calcetin
Circulares para resorte
Circulares p/punta de cubrecorsé
Circulares para afelpado
Circulares para tubos de cubrecorsé
Rectilínea para calcetines, etc
Rectilinea para sweters
Remalladoras
Máquinas de cadeneta
Máquinas para cerrado
Máquinas de sobrecostura
Máquina de costura
Máquina de hacer ojales
Estufas para ahormar
Maquina para quesos 7 A 15.5 Lesson's
Máquina para conos 2 A 15.5 Lesson's
Afirmadoras 2 A 15.5 T. Gladd
DEPTO. PRODUCCION Y FZAS FISICAS
Calderas 3 A 15.5 Galloway
Tanques de Petróleo 6 A 15.5 Sin marca
Motores de gas
Motores de vapor
Motores de aire
Motores de carbon vegetal
Motores de electricidad 21 A 15.5
Turbinas 4 A 15.5 Varias marcas
Dinamos Generadores 7 A 15.5
Hornos fundidores de acero
Hornos fundidores de bronce
Hornos fundidores de fierro 1 A 15.5 Byram & Cía
Cajas de modelar
Cepillos 3 A 15.5 Varias marcas
Tornos 8 A 15.5 Varias marcas
Taladros 3 A 15.5 Pitt's Mach. Co.
Tarrajas 2 A 15.5 Sin marca
Fresadoras 1 A 15.5 Sin marca
Martinetes 1 A 15.5 Sin marca
Bancos mecanicos 2 A 15.5
Bancos modelistas 1 A 15.5
Bancos carpintería 13 A 15.5
Cepilladoras de carpintería 1 A 15.5 The Egaan Co.
Machihembradoras 1 A 15.5 The Egaan Co.
Sierras circulares 1 A 15.5
Tornos de carpintería 2 A 15.5
Traslapadoras de carpintería 1 A 15.5 The Egaan Co.
Sierras vueltas 1 A 15.5
Molino para tierra refracc. 1 A 15.5
Generador autógeno 1 A 15.5
Fuente: AGN, departamento del Trabajo, Caja 1103, Expediente 4.
290
ANEXO B. MAQUINARÍA
FABRICA "LA EXPERICIENCIA" MPIO. ZAPOPAN, JALISCO 1926
Nombre de maquina Num. Maquinas Materia Horas Marca Capacidad Rev x minuto
DEPTO. PREPARACION E HILADOS
Batiente doble 1 A 15.5 Dobson & Barlow 1,200
Batiente repasadores 2 A 8 Howard & Bulloug 1,500
Trituradoreas 1 A 3 William Tathan 1,000
Cardas Chaponas 21 A 22 Hovard & Bulloug 160
Cardas de cilindro
Manuares 3 A 22 Hovard & Bulloug 370
Mecheras en grueso 3 A 22 Hovard & Bulloug 170 650
Mecheras en grueso 1 A 8 Curties Sone 60 400
Mecheras en fino 10 A 22 Howard & Bulloug 1,380 1,000
Mecheras superfino 1 A 8 Curties Sone 130 700
Cordoneras 3 A 8 Sin marca 9 150
Cordoneras 1 A 15.5 Sin marca 24 150
Mecheras intermedias 5 A 22 Hovard & Bulloug 504 700
Salfatinas de hilar
Tróciles de pie 19 A 20 Hovard & Bulloug 5,700 7,000
Tróciles de trama 13 A 20 Hovard & Bulloug 4,180 6,500
Tróciles de trama 4 A 20 Platt Brothers 1,472 6,500
Trituradoras de desperdicios
Batientes engrasadores
Batanes
Cardas pabiladoras
Cardas de enrollar
Cardas de peinado
Continuas de hilar
Descatizadoras en mojado
Descatizadoras a vapor
Desmotadora
Exprimidoras
Lavadoras de lana
Lizosas
Peinadoras rectilineas
Revolvedoras
Secadora de lana
Intercétiles
Peinadoras circulares
Veloces
Reunidoras Napa
Estiradoras Napa
Peinadoras de algodón
DEPTO. TEJIDO Y ACABADO
Canilleras 1 A 8 Sin marca 20
Cañoneras 3 A 15 Sin marca 140
Maquinas de hacer lisos
Maquinas de hacer peinados
Maquinas engomadoras 3 A 8 Hovard & Bulloug
Maquinas urdidoras 4 A 15 Henry Livesey
Bastidores de atado 4 A 8
Bastidores de repaso 1 A 8
Tinas pasteras 2 A 8
Telares atriles
291
ANEXO B. MAQUINARÍA
FABRICA "LA EXPERICIENCIA" MPIO. ZAPOPAN, JALISCO 1926
Nombre de maquina Num. Maquinas Materia Horas Marca Capacidad Rev x minuto
DEPTO. PREPARACION E HILADOS
Telares cajines 68 A 8 Platt Bros 150
Telares cajines chacalos 8 A 8 Gregson & Monk 150
Telares circulares 2 A 8 Hattersley 150
Telares circulares chacalos
Telares chacalos
Telares doble ancho 2 A 8 Henry Livesey 120
Telares doble ancho 2 A 8 Robert Hall & Sons 120
Telares planos 362 A 8 Henry Livesey 190
Telares planos 19 A 8 William Mills 190
Bastidores de revisar 463
Prensas de empacar
Torculos
Aprestadores
Afelpadores
Dobladilladoras
Enanchadoras
Enrolladoras
Estampadoras
Generadoras
Golpeadoras
Jabonadoras
Lavadoras
Marcadoras
Ramas
Rasuradoras
Ramas de teñir
Medidoras 2 A Henry Liversey 34
Tanques de tintorería 1 A Erkens & Brix
Estufas para secar 2 A Erkens & Brix
Rociadoras
Oxidadoras
Aparatos esmeriladores
Aparatos filtradores
Ollas de blanqueo
Pasteras
Secadoras de añil
Mercerizadoras
Tanques de tintorería
Bobinuares
Cepillos
Dobladora medidora
Enmotadoras fantasia
Estufa para secar
Guils
Lavadora de piezas
Mesas de acabado
Ramas de secar
Navajas
Palmers
Planchadoras
292
ANEXO B. MAQUINARÍA
FABRICA "LA EXPERICIENCIA" MPIO. ZAPOPAN, JALISCO 1926
Nombre de maquina Num. Maquinas Materia Horas Marca Capacidad Rev x minuto
DEPTO. PREPARACION E HILADOS
Tanques lavadores
Tanques para teñir piezas
Vaporizadoras
Telares franceses
Telares ingleses
Telares alemanes
Carreteros de canilla
Carreteros de madeja
Circulares p/camiseta y calzoncillo
Circulares p/ media y calcetin
Circulares para resorte
Circulares p/punta de cubrecorsé
Circulares para afelpado
Circulares para tubos de cubrecorsé
Rectilínea para calcetines, etc
Rectilinea para sweters
Remalladoras
Máquinas de cadeneta
Máquinas para cerrado
Máquinas de sobrecostura
Máquina de costura
Máquina de hacer ojales
Estufas para ahormar
DEPTO. PRODUCCION Y FZAS FISICAS
Calderas 1
Tanques de Petróleo 1
Motores de gas
Motores de vapor
Motores de aire
Motores de carbon vegetal
Motores de electricidad 7 General Electric Co.100,125,6.5.3 H/P
Turbinas
Dinamos
Hornos fundidores de acero
Hornos fundidores de bronce
Hornos fundidores de fierro
Cajas de modelar
Cepillos 1
Tornos 3 Seneca Falls 11", 11" & 22"
Taladros 2 Champion Blower1" & 3/4
Tarrajas
Fresadoras 1
Martinetes
Bancos mecanicos 3
Bancos modelistas
Bancos carpintería 4
Cepilladoras de carpintería
Machihembradoras 1
Sierras circulares 1
Tornos de carpintería 2
Traslapadoras de carpintería
Fuente: AGN, departamento del Trabajo, Caja 1103, Expediente 4.
293
ANEXO B. MAQUINARÍA
CIA INDUSTRIAL DE GUAD, S.A., ATEMAJAC EDO DE JALISCO 1926
Nombre de maquina Num. Maquinas Materia Horas Marca Capacidad Rev x minuto
DEPTO. PREPARACION E HILADOS
Abridoras
Batiente 2 A 8 Platt Bros 1,020
Trituradoreas
Cardas Chaponas 15 A 8 Platt Bros 175
Cardas de cilindro
Manuares 2 A 8 Platt Bros 330
Mecheras en grueso 2 A 8 Platt Bros 600
Mecheras intermedias 3 A 8 Platt Bros 744
Mecheras en fino 9 A 8 Platt Bros 1,025
Mecheras superfino
Cordoneras 2 A 8 Jhon M Summer Co. 894
Devanadoras
Torcedoras
Salfatinas de hilar
Tróciles de pie 14 A 8 Platt Bros 9,600
Tróciles de trama 14 A 8 Platt Bros 9,560
Dobladoras 1 A 8 Platt Bros
Trituradoras de desperdicios 1 A 5 Platt Bros 800
Batientes engrasadores
Batanes
Cardas pabiladoras
Cardas de enrollar
Cardas de peinado
Continuas de hilar
Descatizadoras en mojado
Descatizadoras a vapor
Desmotadora
Exprimidoras
Lavadoras de lana
Lizosas
Peinadoras rectilineas
Revolvedoras
Secadora de lana
Intercétiles
Peinadoras circulares
Veloces
Reunidoras Napa
Estiradoras Napa
Peinadoras de algodón
DEPTO. TEJIDO Y ACABADO
Canilleras
Cañoneras
Maquinas de hacer lisos
Maquinas de hacer peinados
Maquinas engomadoras 2 A 8 Gregson & Monk 58
Maquinas urdidoras 4 A 8 Gregson & Monk 36
Bastidores de atado 2 A 8
Bastidores de repaso 1 A 8
Tinas pasteras
Telares atriles
294
ANEXO B. MAQUINARÍA
CIA INDUSTRIAL DE GUAD, S.A., ATEMAJAC EDO DE JALISCO 1926
Nombre de maquina Num. Maquinas Materia Horas Marca Capacidad Rev x minuto
Telares cajines
Telares cajines chacalos
Telares circulares
Telares circulares chacalos
Telares chacalos
Telares doble ancho
Jacquards
Telares planos 280 A 8 Gregson & Monk40" 200
Telares triple anchos
Bastidores de revisar 1 A 8
Prensas de empacar 1 Telas 8 John Shaw & Son
Torculos 2 Telas 8 Mather Platt
Aprestadores 1 Telas 8 Mather Platt
Afelpadores
Dobladilladoras
Enanchadoras 3 Telas 8 Alsacianas
Enrolladoras 1 Telas 8
Estampadoras 2 Telas
Generadoras
Golpeadoras
Jabonadoras 2 Telas 8 Mather Platt
Lavadoras 3 Telas 8 Alsacianas
Marcadoras 1 Telas 8 Mather Platt
Ramas
Rasuradoras
Ramas de teñir
Rociadoras 1 Algodo/Telas 8 Sin marca
Oxidadoras 2 Telas 8 Long Bridge
Aparatos esmeriladores
Aparatos filtradores
Ollas de blanqueo 3 Telas 11.5 Sin marca
Pasteras
Secadoras de añil
Mercerizadoras
Tanques de tintorería 2 Telas 6 Sin marca
Bobinuares
Cepillos
Dobladora medidora 3 Telas 8 Mather Platt
Enmotadoras fantasia
Estufa para secar
Guils
Lavadora de piezas
Mesas de acabado
Ramas de secar
Navajas
Palmers
Planchadoras
Tanques lavadores
Tanques para teñir piezas
Vaporizadoras 1 Telas 8 Long Bridge
Telares franceses
295
ANEXO B. MAQUINARÍA
CIA INDUSTRIAL DE GUAD, S.A., ATEMAJAC EDO DE JALISCO 1926
Nombre de maquina Num. Maquinas Materia Horas Marca Capacidad Rev x minuto
Telares ingleses
Telares alemanes
Carreteros de canilla 2 A 8 Jhon M. Sunmer 00 495
Carreteros de madeja
Circulares p/camiseta y calzoncillo
Circulares p/ media y calcetin
Circulares para resorte
Circulares p/punta de cubrecorsé
Circulares para afelpado
Circulares para tubos de cubrecorsé
Rectilínea para calcetines, etc
Rectilinea para resortes
Rectilinea para sweters
Remalladoras
Máquinas de cadeneta
Máquinas para cerrado
Máquinas de sobrecostura
Máquina de costura
Máquina de hacer ojales
Estufas para ahormar
DEPTO. PRODUCCION Y FZAS FISICAS
Calderas 5 The Bromnell, Atlas, Backak120-80-75 H.P.
Tanques de Petróleo 5 300,000 Lts
Motores de gas
Motores de vapor
Motores de aire
Motores de carbon vegetal
Motores de electricidad 42 ASIA Alemana30-8-30 H.P.
Turbinas
Dinamos
Hornos fundidores de acero
Hornos fundidores de bronce
Hornos fundidores de fierro 1 1 Tonelada
Cajas de modelar
Cepillos 1
Tornos 2 The Rohon Carp. Seneca Falls
Taladros 1
Tarrajas 2
Fresadoras 1
Martinetes
Bancos mecanicos 1
Bancos modelistas
Bancos carpintería 2
Cepilladoras de carpintería
Machihembradoras
Sierras circulares 1
Tornos de carpintería 1
Traslapadoras de carpintería
Fuente: AGN, departamento del Trabajo, Caja 1103, Expediente 4.
296
ANEXO B. MAQUINARÍA
FABRICA DE HILADOS Y TEJIDOS DE ALGODÓN E "EL HERCULES", EDO. QUERETARO. 1926
Nombre de maquina Num. Maquinas Materia Horas Marca
DEPTO. PREPARACION E HILADOS Husos Rev x minuto
Abridoras 2 A 8 Howard y Bullongh
Batiente 4 A 15 Platt y H.B.
Trituradoreas
Cardas Chaponas 45 A 15 Platt Brothers 175
Cardas de cilindro
Manuares 6
Mecheras en grueso 6 A 15 Platt Brothers 70 y 80 650
Mecheras intermedias 7 A 15 Platt y H.B. 124 y 148 720
Mecheras en fino 13 A 15 Platt y H.B. 160 y 200 1,100
Mecheras superfino
Cordoneras 6 A 15 Panumth 16
Devanadoras 12 A 18 Sin autor 80
Torcedoras 1 A 8 Sin autor
Salfatinas de hilar
Tróciles de pie 34 A 15 Howard y Bullongh 300 y 380 7,500
Tróciles de trama 14 A 15 Howard y Bullongh 328 y 352 7,000
Dobladoras
Trituradoras de desperdicios
Batientes engrasadores
Batanes
Cardas pabiladoras
Cardas de enrollar
Cardas de peinado
Continuas de hilar
Descatizadoras en mojado
Descatizadoras a vapor
Desmotadora
Exprimidoras
Lavadoras de lana
Lizosas
Peinadoras rectilineas
Revolvedoras
Secadora de lana
Intercétiles
Peinadoras circulares
Veloces
Reunidoras Napa
Estiradoras Napa
Peinadoras de algodón
DEPTO. TEJIDO Y ACABADO
Canilleras
Cañoneras 5 A 15 Howard y Bullongh 180 550
Maquinas de hacer lisos
Maquinas de hacer peinados
Maquinas engomadoras 3 A 8 Howard y Bullongh
Maquinas urdidoras 8 A 15 Howard y Bullongh
Bastidores de atado 16 A
Bastidores de repaso
Tinas pasteras 3 Almidón Sin Autor
Telares atriles
Capacidad
297
ANEXO B. MAQUINARÍA
FABRICA DE HILADOS Y TEJIDOS DE ALGODÓN E "EL HERCULES", EDO. QUERETARO. 1926
Nombre de maquina Num. Maquinas Materia Horas Marca
Telares cajines
Telares cajines chacalos
Telares circulares
Telares circulares chacalos
Telares chacalos
Telares doble ancho
Jacquards
Telares planos 597 A Pan Curtis y W Smith 200
Telares triple anchos
Bastidores de revisar
Prensas de empacar 2 A Rogers Ketchum
Torculos 1 A Sin Autor
Aprestadores
Afelpadores
Dobladilladoras
Enanchadoras
Enrolladoras
Estampadoras
Generadoras
Golpeadoras
Jabonadoras
Lavadoras
Marcadoras 1 A Sin Autor
Ramas
Rasuradoras
Ramas de teñir
Rociadoras
Oxidadoras
Aparatos esmeriladores
Aparatos filtradores
Ollas de blanqueo
Pasteras
Secadoras de añil
Mercerizadoras
Tanques de tintorería
Bobinuares
Cepillos
Dobladora medidora 3 A Howard y Bullongh
Enmotadoras fantasia
Estufa para secar
Guils
Lavadora de piezas
Mesas de acabado 2 A
Ramas de secar
Navajas
Palmers
Planchadoras
Tanques lavadores
Tanques para teñir piezas
Vaporizadoras
Telares franceses
Capacidad
298
ANEXO B. MAQUINARÍA
FABRICA DE HILADOS Y TEJIDOS DE ALGODÓN E "EL HERCULES", EDO. QUERETARO. 1926
Nombre de maquina Num. Maquinas Materia Horas Marca
Telares ingleses 597 A 15 Parr Curtis y W. Smith
Telares alemanes 5
Carreteros de canilla
Carreteros de madeja
Circulares p/camiseta y calzoncillo
Circulares p/ media y calcetin
Circulares para resorte
Circulares p/punta de cubrecorsé
Circulares para afelpado
Circulares para tubos de cubrecorsé
Rectilínea para calcetines, etc
Rectilinea para resortes
Rectilinea para sweters
Remalladoras
Máquinas de cadeneta
Máquinas para cerrado
Máquinas de sobrecostura
Máquina de costura
Máquina de hacer ojales
Estufas para ahormar
DEPTO. PRODUCCION Y FZAS FISICAS
Calderas 1 Galloway Std 100 H.P.
Tanques de Petróleo 6 600 Mts Cubicos
Motores de gas
Motores de vapor
Motores de aire
Motores de carbon vegetal
Motores de electricidad 9 A.E.G. 608 H.P.
Turbinas 1 Wre y Bennett 80
Dinamos
Hornos fundidores de acero
Hornos fundidores de bronce
Hornos fundidores de fierro
Cajas de modelar
Cepillos 2 Sin Autor
Tornos 4 Sin Autor
Taladros 2 Sin Autor
Tarrajas
Fresadoras
Martinetes
Bancos mecanicos 6
Bancos modelistas
Bancos carpintería 8
Cepilladoras de carpintería 1 The Egan Co.
Machihembradoras
Sierras circulares 2 Sin Autor
Tornos de carpintería 1 Sin Autor
Traslapadoras de carpintería
Fuente: AGN, departamento del Trabajo, Caja 1103, Expediente 4.
Capacidad
299
ANEXO B. MAQUINARÍA
FABRICA DE HILADOS Y TEJIDOS DE ALGODÓN "RIO BLANCO" EN GUADALAJARA, 1926
Depto de preparación e hilados
Maquinaría Capcidad
Número Materia horas Marca Husos Rev. Por min
Abridoras 1 Algodón 8 platt y bros 1000
Batientes 2 Howard 1300
Cardas chaponas 7 Howard 180
Manuares 1 Howard 280
Mecheras en grueso 1 Cortes 600
Mecheras intermedio 2 Howard 800
Mecheras en fino 3 Cortes 334 1000
Tróciles de pie 8 Brooks 1895 5613
Tróciles de trama 5 Howard 1500 5613
Depto. De ejido y acabado
Cañoneras 1 Howard 100 800
Maquina engomadora 1 Howard 40
Maquina urdidora 1 Howard 47
Telares planos 98 Himyhivery 180
Depto de fzas físicas
turbinas 1 Quac
Torno 1
Taladro 1
Banco mecánico 1
Banco carpintería 1
Fuente: AGN, Departamento del trabajo, Caja 275, expediente 1.
300
ANEXO C. SALARIOS
FABRICA DE "RIO BLANCO", GUADALAJARA, JALISCO, 1921.
Puesto Hombre Mujer Hombre Mujer Hombre Mujer
Director técnico 1
Empleados admón 1 20
Cabos preparación 2 22
Cabos de hilados 1 22.5
Barrenderos 2 7.5
Batienteros 2 20
Carderos 1 2.06 cia
Ayudnates de acrderos 1 1.52
Estiradores 2 0.234 hank
Ay. Estiradores 1 0.14 hank
Veloceros 4 0.28 hank
Ay veloceros 4 0.148 100 k
Trocileros de pie 8 3.19
Ay trocileros de pie 7 1.65
Trocileros trama 5 3.19 100 k
ay trocileros tama 5 3
Ay trocaleros 1 1.02
Canilleros 1 1.26
Cañoneros 7 3.19 100 k
Atadores 1 0.48 hilo
ay atadores 1 0.28
Engomadores 1 2.4
Ay engomadores 1
Urdidores 1 1.08 100 k
Dobladores 1 2
Revisadores 1 0.8
Tejedores 26 23 0.6 pza
Corrieteros 1 2
Ay corrietero 1 2
Pesadores 1 1.24
Mozo de patio 0.9
Portero 2 1.24
Comunero 1 1 1.24
Maestro de taller 1 3.72
Mecanicos 1 2.5
Ay mecanico 2 1.2
Herreros 1 1
Ay herrero 1 0.8
Hojalatero 1 1.65
Carpintero 1 3.19
ay carpintero 1 1.39
Aceitadores 1 1.93
Peones 20 0.8
Maestro calderas 1 1.65
Turbineros 1 1.65
TOTAL 127 24 4.64 20.00 1.60 1.41
Fuente: AGN, Departamento del trabajo, Caja 275, expediente 1.
Número de empleados
Salario
Máximo fijo Mínimo Fijo Destajo
301
ANEXO C. SALARIOS
HILADOS Y TEJIDOS "LA MAGDALENA" MPIO SAN ANGEL D.F. JUNIO 1921
Puesto Mexicanos Extranjeros Máximo Mínimo
Ayudantes 32 1.04 1.04
Mudadores 102 1.04 0.76
Engomadores 6 4 2.5
Ayte de engomador 8 2.5 1.3
Fatigueros
Barrenderos 18 1.5 1.38
Pabileros 69 2 1.5
Peones de telas 8 1.71 1.5
Empacadores 6 2.5 1.5
Carreiteros 12 5 4
Batienteros 9 2 1.5
Escarmenadores 6 1.75 1.5
Tintoreros 6 2.5 1.5
Mecanicos 13 5 2
Herreros 3 3.5 2
Hojalateros 3 3 1.5
Carpinteros 12 3.5 2.25
Aceitadores 14 2 1.5
Electricistas 4 5 2.5
Ayudantes 12 2.5 2
Veladores 5 3 2.5
Porteros 2 3 3
Carderos 18 2 1.97
Tejedores 450 4.5 1.75
Canilleras 12 1.5 1.15
Carreteras 70 2 1.15
TOTAL 900 0 2.72 1.81
Fuente: AGN, Departamento del trabajo, Caja 275, expediente 1.
Número de obreros SALARIO
302
ANEXO C. SALARIOS
FABRICA DE SAN "ANTONIO ABAD" 1921 DISTRITO FEDERAL
Puesto Mexicanos Extranjeros Maximo Mínimo
Ayudantes 21 1.4 1.07
Mudadores 16 1.07 1.07
Engomadores 4 1.57 1.57
Barrenderos 7 1.69 1.07
Pabilleros 1 1.79 1.79
Peones de Telas 1 1.51 1.51
Empacadores 5 2.37 1.88
Cabos correiteros 5 5 3.56
Batienteros 5 1.94 1.78
Escarmendadoras 3 1.78 1.78
Tintoreros 2 2.18 1.84
Mecanicos 9 4.16 1.9
Herreros 2 4.75 1.9
Hojalateros 2 4 1.9
Carpinteros 9 5.83 1.07
Aceitadoras 4 1.71 1.4
Elecctricistas 1 2.75 2.75
Ayudantes 1 2.75 2.75
Veladores 4 3.17 2.14
Porteros 3 2.77 2.33
Carderos 5 2.23 2.23
Tejedores 132 5.53 1.4
Canilleras 2 1.19 1.19
Carreteras 16 2.19 1.04
Veloceros 20 2.69 1.3
Trocileros 36 2.82 1.11
Envanadoras 4 2.31 1.5
Torcedoras 3 1.97 1.95
Mozos de despacho 6 1.4 1.4
Atadores 4 3.38 2.45
Pepenadores 5 1.07 1.07
Dobladoras 3 1.99 1.99
didores 4 3.32 2.42
Estiradores 5 1.74 1.3
Cabos cardas 2 6.17 2.78
Cabo de preparacion 1 4.16 4.16
Cabo Hilados 2 4.5 2.97
Cabo Engomadores 1 5.34 5.34
Cadillero 1 5.34 5.34
Queseras 3 1.5 1.5
Bobinoir 2 1.34 1.13
Acarreadores de canilla 2 1.57 1.07
Limpiadores de canilla 1 1.4 1.4
Boteros de cardas 4 1.67 1.67
Paquetero 1 3.3 3.3
Acarreador carretes 1 1.4 1.4
Limpiadores de Borra 3 1.4 1.07
lanqueo 14 1.9 1.07
Aprestos 26 1.9 1.07
Tinte algodón 7 1.6 1.4
SALARIONúmero de obreros
303
ANEXO C. SALARIOS
FABRICA DE SAN "ANTONIO ABAD" 1921 DISTRITO FEDERAL
Puesto Mexicanos Extranjeros Maximo Mínimo
Estampadoras 1 7.5 7.5
Estampadoras ayudantes 13 2.24 1.4
Ayudantes Tintoreros 12 1.84 1.4
Afelpadoras oficial 5 5 5
Afelpadoras ayudantes 20 1.4 1.4
Acabado 11 1.99 1.4
Fogoneros 7 5.83 5.83
Ayudantes 1 2.08 2.08
Carreros 4 5.33 1.71
Albañiles 8 2.97 1.51
Peones de patio 16 1.51 1.51
Sohaufeur 1 4.17 4.17
Jardinero 2 1.67 1.51
TOTAL 522 2.79 2.10
Fuente: AGN, Departamento del trabajo, Caja 275, expediente 1.
SALARIONúmero de obreros
304
ANEXO C. SALARIOS
COCOLAPAM, ORIZABA EDO DE VERACRUZ AGOSTO 1921
Puesto Mexicanos Extranjeros Maximo Mínimo
Ayudantes
Mudadores 55 0.82
Engomadores 7 7.17 2.31
Ayte de engomador 5 2.31
Fatigueros
Barrenderos 7 1.81 1.65
Pabileros 54 5.83 2.66
Peones de telas 6 2.31
Empacadores
Cabos de correiteros 17 7.01 6.18
Batienteros 10 2.06 1.65
Escarmenadores 4 4 1.81
Tintoreros
Mecanicos 21 11 6.18
Herreros 2 6.18 3.3
Hojalateros 2 4.63
Carpinteros 12 4.12 2.06
Aceitadores 9 2.88 2.06
Electricistas 15 7.33 4.12
Ayudantes 10 4.12 2.47
Veladores 8 2.06 1.65
Portadores 9 2.47
Carderos 18 7.5 2.06
Tejedores 330 5.5 3.3
Canilleros 11 2.88 1.65
Carreteros 9 2.47 1.65
Estibadores 10 2.66 1.65
Troxileros 93 4.17
Urdidores 11 4.67
Atadores 9 4.17
Repasadores 12 6.33
Albañiles 9 3.61 1.65
Cañoneros 43 2.17
Peones 39 2.88 1.65
TOTAL 847 4.24 2.59
Fuente: AGN, Departamento del trabajo, Caja 275, expediente 1.
Número de obreros SALARIO
305
ANEXO C. SALARIOS
CERRITOS ORIZABA EDO. DE VERACRUZ AGOSTO 1921
Puesto Mexicanos Extranjeros Maximo Mínimo
Ayudantes varios 99 2.47
Mudadores 27 1.82
Engomadores 2 4.95
Ayte de engomador 2 1.65
Fatigueros 2 1.65
Barrenderos
Pabileros 10 3.5 2.5
Peones de telas 4 2.06
Empacadores
Cabos de correiteros 3 5.36
Batienteros 10 2.06 1.65
Escarmenadores
Tintoreros 9.07
Mecanicos 7 1.23
Herreros
Hojalateros
Carpinteros 4 6.18 3.3
Aceitadores 5 2.06 1.65
Electricistas 1 4.33
Ayudantes
Veladores 4 3.05 1.65
Portadores 2 2.06
Carderos 7 6.5 2.47
Tejedores 79 4.33 2.67
Canilleros 4 2.06 1.65
Carreteros 6 2
Estibadores 4 2.5
Troxileros 51 3 2
Urdidores 6 5 3.32
Atadores 2 2.33 1.65
Repasadores 2 4.33
Albañiles 4 5.16 2.88
Cocheros 1 1.89
Cañoneros 6 2 1.65
Peones 75 2.88 1
TOTAL 429 3.44 2.08
Fuente: AGN, Departamento del trabajo, Caja 275, expediente 1.
SALARIONúmero de obreros
306
ANEXO C.SALARIO
CIA INDUSTRIAL DE ATLIXCO, S.A. "METEPEC" EDO. PUEBLA 1921
Puesto Mexicanos Extranjeros Maximo Mínimo
BATIENTES
Abridor 1 2
Alimentadores 3 1.8
Bacudidor 1 1.65
Despedazadores 2 1.5
Peones 2 1.5
Atienteros 8 1.8
Pepenador arpileras 1 1.25
CARDAS
Carderos 6 2.45 2.25
Porteros 6 1.4 1.28
Moaderos 1 1.5
Afiladores de cardas 2 2.5 1.65
Estiradores 10 2.98 2.78
Veloceros 53 2.34 2.12
Aytes de veloceros 10 1.05
Carretilleros 13 1.05
Barrenderos 2 1.05
Trocileros pie 44 2 1.86
Aytes de trocileros 16 1
Trocileros trama 35 2.5 2.26
Aytes trocileros 23 1
Cabosde Ayudantes 2 1.5
Empaquede canilla 8 0.75
Encuendadores 4 1.05
Arrenderos 2 1.05
Humedecedor 1 1.25
Sacudidores 4 1.05
Pepenadores 5 1.05
Limpiadores 6 1.05
Aceitadores 2 1.28
Comunero 1 1.05
Portero 1 1.5
Cañoneros 22 2.08 1.9
Comuneros 1 1.11
Faciadores de carretes 7 1.11
Carretilleros 2 1.11
Barrenderos 2 1.11
Hurdidores 17 2.55 1.98
Engomador 1 Semanal 18.33
Antepasadores 5 2.13 1.76
Aytes repanadores 5 1
Aratadores 9 3.12 2.88
Pepenadores 4 1
Tejedores 419 3 2.4
Trameros 2 1.75 1.25
Cargadores de telas 4 1.5
Barrenderos 19 1.37
Número de obreros SALARIO
307
ANEXO C.SALARIO
CIA INDUSTRIAL DE ATLIXCO, S.A. "METEPEC" EDO. PUEBLA 1921
Puesto Mexicanos Extranjeros Maximo Mínimo
Comuneros 3 1.11
Humeedecedor 1 1.25
Aviadores 2 2.5 1.5
Refacciones 1 1.25
DESPOSITO DE PLANTAS
Medidores 3 3 2.5
Revisadores 5 2.25
Dobladores 7 1.5
Clasificadroes 1 2
Enterciadores 1 2.37 1.25
Correiteros 16 5 4.7
Ayte Correiteros 8 3.5
Mecanico 1 3
Ayte mecanico 1 1.5
Carpintero 1 2.5
Ayudante Carpintero 1 1.5
Portero 1 3
Tanqueo 42 2.3 1.7
Titoreria de hilaza 3 1.75 1
Tintoreria de generos 40 1.4 1.25
Estampa 36 2 1
Afelpado 10 1.25 0.8
Apresto de blanco 27 2 0.8
Apresto de color 26 1.75 0.8
Emparejadora de constura 14 1.75 1
Empaque 5 1.5 1.12
Muestrarios 3 2.5 0.8
Almacen 1 1.5
Aprobado 4 2.5 1.25
FUERZA HIDRAULICA
Engrasodores 5 1.32
Turbinero 1 2.75
Ayte turbinero 1 1.32
Encargado 1 5
Compuerteros 6 1.25
VAPOR
Fogonero 1 3
Ayudante 1 2.75
FZA ELECTRICA
Encargado 1 3.5
Turbinero 2 2
Transformador 1 1.32
ALUMBRADO
Electricistas 1 3
Ayte Electricista 1 1.25
Presero 1 1.25
TALLER MECANICO
Mecanicos 4 3.5 2.75
Número de obreros SALARIO
308
ANEXO C.SALARIO
CIA INDUSTRIAL DE ATLIXCO, S.A. "METEPEC" EDO. PUEBLA 1921
Puesto Mexicanos Extranjeros Maximo Mínimo
Herreros 2 3
Hojalateros 3 3.5 3
Tornero 1 3.5
Bandero 1 2
Ayudantes 4 2.5 1.5
FUNDICION
Maestro 1 4
Fundidores 2 2.5 2.25
Ayudantes 1 1.08
CARPINTERIA
Maestro 1 6.5
Modelista 1 3.5
Carpinteros 6 2.5
Ayudantes 2 1.5 1
GENERALES
Veladores 5 3 1.75
Mozo de almacen 1 3.5
Mozo de despacho 1 2
Mozo de correo 1 1.75
Hulero 1 1.25 1.5
Cargadores 13 1.75
Peones 9 1.25
CASERIO DE OPERARIOS
Vigilantes 2 1.75
Carreros 3 1.25
Barrenderos 6 1
Limpia petica 2 1
TOTAL 1154 1.99 1.76
Fuente: AGN, Departamento del trabajo, Caja 275, expediente 1.
Número de obreros SALARIO
309
ANEXO C. SALARIOS
FABRICA DE HILADOS Y TEJIDOS "EL HERCULES" ESTADO DE QUERETARO ENERO 1921
Puesto No. Obreros Trabajo Maximo Mínimo
BATIENTES
Cabos 2 Diario 1.90
Batienteros 12 Diario 1.73
Borreros 2 Diario 1.25
Abridores 2 Diario 0.95
Barrenderos 2 Diario 0.95 0.74
CARDAS
Carderos 16 Diario 1.73
Boteros 4 Diario 1.50
Turbineros 2 Diario 1.33
Aceitadores 2 Diario 1.43
Barrenderos 3 Diario 1.14
Comuneros 3 Diario 1.25 1.14
PABILADORES
Estibadores 12 Destajo 1.67 1.10
Veloces Gordos 12 Destajo 1.67 1.10
Intermedios 18 Destajo 1.97 1.10
Finos 27 Destajo 1.45 1.00
Ayudantes 30 Diario 1.25
Carreteros 5 Diario 1.31 1.25
Peones 3 Diario 1.14
HILADOS
Cabos 2 Diario 2.75
Ayudantes 2 Diario 1.93
Camilleros 4 Diario 1.42
Barrenderos 5 Diario 0.95
Trocilleros de Trama 28 Destajo 2.40 1.56
Trocilleros de Pie 71 Destajo 2.06 1.63
Mudadores 72 Diario 0.95
Cordoneros 4 Diario 1.14 1.00
DEVANADO
Cabos 1 Diario 0.60
Devanadores 17 Destajo 3.34 1.22
Paquetero 1 Destajo 4.12 3.00
CARRETEROS
Amarradores 60 Destajo 0.97 0.74
Barrenderos 2 Diario 0.95
URDIDO
Urdidores 11 Destajo 3.62 1.76
ENGOMADO
Ayudantes 3 Destajo 2.60
Peones 6 Destajo 2.40
Fogoneos 2 Diario 2.07
Leñero 1 Diario 1.14
ATADO
Atadores 9 Destajo 3.30 1.36
Peinero 1 Diario 1.52
DOBLADO
Dobladores, emparejadores, marcadores, etc12 Destajo 3.00 1.50
TELARES
Salario
310
ANEXO C. SALARIOS
FABRICA DE HILADOS Y TEJIDOS "EL HERCULES" ESTADO DE QUERETARO ENERO 1921
Puesto No. Obreros Trabajo Maximo Mínimo
Cabos 1 Diario 4.50
Carreteros 13 Destajo 3.21 2.92
Medidores 6 Diario 1.79
Canilleros 2 Diario 1.50
Pesadores 2 Diario 1.25
Trameros 6 Diario 0.95
Barrenderos 6 Diario 1.50
Peones 1 Diario 1.25
Tejedores, según actitud y dedicacion520 Destajo 2.14 1.50
TALLERES
Mecanicos 12 Diario 3.41 1.00
Herreros 3 Diario 3.34 1.25
Carpinteros 11 Diario 2.38 0.95
Hojalateros 2 Diario 2.42 1.52
Talabarteros 2 Diario 2.00 1.49
Electricistas 2 Diario 3.66 2.38
VARIOS
Empleados 7 Diario 4.33 3.66
Porteros 2 Diario 1.90 1.25
Preseros 2 Diario 1.40
Registros 2 Diario 2.21 2.08
Veladores 7 Diario 1.14
Mozo correo 1 Diario 1.14
Cocheros 2 Diario 2.75 1.75
Albañiles 10 Diario 1.50 0.95
Peones 16 Diario 1.25 1.14
Capitan de peones 1 Diario 1.49
Criados 2 Diario 0.75
Esculcadores 3 Diario 2.50 1.75
TOTAL 1115 126.51 46.79
Fuente: AGN, Departamento del trabajo, Caja 275, expediente 1.
Salario
311
ANEXO C. SALARIOS
FABRICA DE SANTA ROSA, MAYO 1921
Puesto Mexicanos Extranjeros Maximo Mínimo
Batienteros 23 2.35 1.65
Carderos 19 4.6 2.14
Pabileros 31 2.51 1.65
Veloceros 43 5.64 2.75
Trocileros de piey trama 152 4.85 2.42
Tejedores 437 4.85 2.2
Canoneros 60 1.99 1.75
Urdidores 13 4.48 3.16
Repasadores 19 2.82 2.2
Cabos correiteros 15 8.89 7.66
Aytes de Correiteros 4 5.77 5.77
Engomadores 9 5.5 2.8
Aytes de engomador 7 1.97 1.97
Carreteros 5 1.81 1.73
Aceiteros 11 2.23 1.81
Tintoreros 23 2.23 1.65
Mecanicos y aytes 27 8.9 1.98
Herreros y aytes 8 5.2 2.97
Carpinteros y aytes 20 4.16 2.31
Hojalateros y aytes 7 4.27 1.78
Electricistas 9 9.33 4.12
Aytes de electricista 9 5.56 3.93
Albañiles 17 5.56 2.6
Peon de albañil 18 1.78 1.65
Calderas 6 3.25 1.65
Barrenderos 19 1.65 1.65
Peones de telas 3 1.73 1.73
Empacadores 4 5.83 3.5
Veladores 11 5 2.5
Porteros 11 6.66 2.5
Cargadores 16 2.82 1.65
Aytes diversos 65 2.97 1.65
Aytes menores de edad 139 1.43 0.83
Operarios diversos de estamp. 236 3.3 1.65
Caballerangos y mozos 8 2.64 1.65
Peones diversos 50 1.65 1.65
TOTAL 1554 4.06 2.42
Fuente: AGN, Departamento del trabajo, Caja 275, expediente 1.
Número de obreros SALARIO
312
ANEXO C. SALARIOS
CIA. INDUSTRIAL VERACRUZANA, S.A. MPIO DE ATLIXCO, EDO DE PUEBLA 1921
Puesto Mexicanos Extranjeros Maximo Mínimo
Ayudantes 60 1.11 1
Mudadores 32 0.9 0.9
Engomadores 1 0.02
Aytede Engomador 3 2 1.25
Barrenderos 10 1.5 1.11
Papileros 30 2 1.5
Peones de telas 2 1.5 1.5
Empacadores 1 0.2 0.15
Correiteros 8 4 4
Batienteros 10 2.5 1.8
Tintoreros 12 2.75 1.4
Mecanicos 11 7 1
Herreros 2 2.75 1
Hojalateros 2 3 0.75
Carpinteros 9 3 2.25
Aceitadores 6 3 1.25
Electricistas 1 7 2
Ayudantes 3 3 2
Veladores 2 3 2
Porteros 8 2.5 2
Carderos 8 1.89 1.23
Tejedoras 200 5 1.5
Canilleras 4 1 1
Carreteras 4 1 1
Trosileros 38 2.5 2
Cañoneros 15 1.5 1
Urdidores 6 4 2
Retadores y Repasadores 5 6 3
Aprestos 12 1.5 1.3
Almacen 10 5 1
Patios y varios servicios 50 3 1
TOTAL 565 2.75 1.50
Fuente: AGN, Departamento del trabajo, Caja 275, expediente 1.
Número de obreros SALARIO
313
Anexo C. Salarios Rio Blanco 1922
Obreros Mexicano Extranjero Máximo Mínimo Promedio
1 Abridores 16 1.82 1.65 1.735
2 Aceitadores 33 4.13 1.25 2.690
3 Amarradores -
4 Acabadores -
5 Afelpadores 17 2.15 1.65 1.900
6 Aayudante engomado 15 2.06 1.65 1.856
7 Albañiles 24 3.13 1.65 2.390
8 Atadores 12 3.66 1.80 2.730
9 Batienteros 18 5.28 2.06 3.670
10 Banderos 6 2.39 1.65 2.020
11 Barrenderos 15 1.65 1.65 1.650
12 Boneteros (costureras) 30 1.75 1.75 1.750
13 Bodegueros 6 7.00 1.90 4.450
14 Carderos 35 5.94 1.65 3.795
15 Carreteros 1 4.75 4.75 4.750
16 Canilleros 12 1.65 1.65 1.650
17 Correiteros 25 7.00 5.77 6.385
18 Carpinteros 28 5.70 2.06 3.880
19 Cañoneros 44 2.00 1.25 1.625
20 Cocheros 3 2.64 1.65 2.145
21 Debanadoes 19 1.00 1.00 1.000
22 Dobladores 5 2.50 1.50 2.000
23 Diversos 590 3.13 1.65 2.390
24 Estiradores 29 2.00 2.00 2.000
25 Electricistas 27 9.35 2.06 5.705
26 Engomadores 14 3.63 1.82 2.725
27 Empacadores 10 2.00 1.50 1.750
28 Estampadores 7 3 8.25 5.05 6.650
29 Encargados -
30 Fatigueros -
31 Fogoneros 10 4.75 1.82 3.285
32 Fundidores 29 6.18 2.06 4.120
33 Grabadores 6 7.20 3.30 5.250
34 Herreros 10 9.80 3.15 6.475
35 Hojalateros 14 7.26 2.06 4.660
36 Maestros tintoreros 1 2 10.00 10.00 10.000
37 Maestros hilados 1 8.33 8.33 8.330
38 Maestros Cardas 1 7.43 7.43 7.430
39 Mudadores 70 1.10 0.83 0.965
40 Mecánicos 75 9.90 2.06 5.980
41 Peones 455 3.13 1.65 2.390
42 Pesadores 4 4.50 4.50 4.500
43 Pegadores 12 1.10 0.83 0.965
44 Pintores 4 5.20 2.06 3.630
45 Revisadores 4 1.40 1.30 1.350
46 Repasadores 10 4.00 3.00 3.500
47 Trameros 1 5.50 5.50 5.500
48 Talabarteros -
49 Trosileros 156 2.50 1.65 2.075
50 Torcedores -
51 Tintoreros 90 3.13 1.65 2.390
52 Tejedores en general 545 4.00 2.00 3.000
53 Urdidores 26 3.00 2.50 2.750
54 Veladores 14 2.88 2.06 2.470
55 Veloceros 66 3.75 1.48 2.615
Sumas 2645 5 4.34 2.56 3.45
SalarioNúmero de empleados
314
Empleados Mexicano Extranjero Máximo Mínimo Promedio
Gerente 1
superintendente
Cajero 1
Contador
Oficinistas 87 7 10 3
Sumas 88 8
Promedio
Hombre Mujer Hombre Mujer
12.60 3.00 4.50 1.25 3.51
Promedio
Hombre Mujer Menor Hombre Mujer Menor
9.90 2.06 1.50 1.65 1.65 0.82 2.70
Fuente Exp. 5 Caja 426 Depto del Trabajo AGN
Número de empleados Salario
Salarios individuales cuota diaria
Fijo
Maximo Mínimo
Destajo
Maximo Mínimo
315
Anexo C. Salario San Lorenzo 1922
Obreros Mexicano Extranjero Máximo Mínimo Promedio
1 Abridores 4 2.06 1.65 1.855
2 Aceitadores 4 2.06 1.65 1.855
3 Amarradores -
4 Acabadores -
5 Afelpadores -
6 Ayudante engomado 5 2.06 1.65 1.855
7 Albañiles 4 2.48 1.65 2.065
8 Atadores 11 3.66 1.80 2.730
9 Batienteros 4 2.96 1.65 2.305
10 Banderos 3 1.82 1.65 1.735
11 Barrenderos 5 1.65 1.65 1.650
12 Boneteros -
13 Bodegueros 2 5.33 1.75 3.540
14 Carderos 15 4.12 2.06 3.090
15 Cajoneros 7 1.65 1.65 1.650
16 Canilleros 6 1.65 1.65 1.650
17 Correiteros 10 6.74 4.95 5.845
18 Carpinteros 6 4.70 2.48 3.590
19 Cañoneros 41 3.00 1.65 2.325
20 Cuenderos 2 2.06 1.65 1.855
21 Debanadoes -
22 Dobladores 3 4.50 2.25 3.375
23 Diversos 28 3.13 1.65 2.390
24 Estiradores 8 4.02 1.65 2.835
25 Electricistas 3 5.66 1.65 3.655
26 Engomadores 6 3.25 1.65 2.450
27 Empacadores -
28 Estampadores -
29 Encargados -
30 Fatigueros -
31 Fogoneros 2 2.88 2.06 2.470
32 Fundidores -
33 Grabadores -
34 Herreros -
35 Hojalateros 1 5.44 5.44 5.440
36 Maestros tintoreros -
37 Maestros hilados 1 1 6.50 6.50 6.500
38 Maestros Cardas 1 1 5.80 5.80 5.800
39 Mudadores 37 0.99 0.83 0.910
40 Mecánicos 12 8.50 2.06 5.280
41 Peones 99 1.65 1.65 1.650
42 Pesadores 6 3.33 2.25 2.790
43 Pegadores 10 1.10 0.83 0.965
44 Pintores 2 3.30 1.65 2.475
45 Revisadores 2 -
46 Repasadores 3 3.50 1.07 2.285
47 Trameros 1 4.25 4.25 4.250
48 Talabarteros -
49 Trosileros 85 2.50 1.65 2.075
50 Torcedores -
SalarioNúmero de empleados
316
Obreros Mexicano Extranjero Máximo Mínimo Promedio
51 Tintoreros -
52 Tejedores en general 278 4.00 2.00 3.000
53 Urdidores 10 2.50 1.25 1.875
54 Veladores 3 2.20 1.65 1.925
55 Veloceros 44 3.75 1.48 2.615
Sumas 439 2 3.03 1.95 2.49
EmpleadosGerente
superintendente
Cajero 1 10
Contador
Oficinistas 6 7 2
Administrador 1
Sumas 7 1 17 2
Salarios individuales de cuota diaria
Promedio
Hombre Mujer Hombre Mujer
5.66 2.66 3.00 1.25 4.77
Promedio
Hombre Mujer Menor Hombre Mujer Menor
8.50 2.06 1.50 1.65 1.65 0.83 2.65
Fuente Exp. 5 Caja 426 Depto del Trabajo AGN
Número de empleados Salario
Maximo Mínimo
Destajo
Maximo Mínimo
Fijo
317
Anexo c. Salarios Cerritos 1922
Obreros Mexicano Extranjero Máximo Mínimo Promedio
1 Abridores -
2 Aceitadores 5 2.06 1.65 1.855
3 Amarradores -
4 Acabadores -
5 Afelpadores -
6 Ayudante engomado 2 1.82 1.82 1.820
7 Albañiles 4 5.16 2.88 4.020
8 Atadores 2 2.50 2.50 2.500
9 Batienteros 10 2.06 1.65 1.855
10 Banderos -
11 Barrenderos 2 1.65 1.65 1.650
12 Boneteros -
13 Bodegueros -
14 Carderos 7 6.50 2.47 4.485
15 Carreteros 6 2.00 1.65 1.825
16 Canilleros 4 2.06 1.65 1.855
17 Correiteros 3 5.36 5.36 5.360
18 Carpinteros 4 6.18 1.65 3.915
19 Cañoneros 6 2.00 1.25 1.625
20 Cocheros 1 1.90 1.90 1.900
21 Debanadoes -
22 Dobladores -
23 Diversos 75 2.06 1.65 1.855
24 Estiradores 4 4.02 1.65 2.835
25 Electricistas 1 4.50 4.50 4.500
26 Engomadores 2 4.95 4.95 4.950
27 Empacadores -
28 Estampadores -
29 Encargados -
30 Fatigueros -
31 Fogoneros -
32 Fundidores -
33 Grabadores -
34 Herreros -
35 Hojalateros -
36 Maestros tintoreros -
37 Maestros hilados -
38 Maestros Cardas -
39 Mudadores 27 0.99 0.83 0.910
40 Mecánicos 7 9.07 1.65 5.360
41 Peones 99 1.88 1.65 1.765
42 Pesadores -
43 Pegadores -
44 Pintores -
45 Revisadores -
46 Repasadores 2 3.00 2.50 2.750
47 Trameros -
48 Talabarteros -
49 Trosileros 51 2.50 1.65 2.075
SalarioNúmero de empleados
318
Obreros Mexicano Extranjero Máximo Mínimo Promedio
50 Torcedores -
51 Tintoreros -
52 Tejedores en general 93 4.00 2.00 3.000
53 Urdidores 6 -
54 Veladores 4 3.05 2.06 2.555
55 Veloceros 10 3.75 1.48 2.615
Sumas 324 0 2.97 1.96 2.47
EmpleadosGerente
superintendente
Cajero 1 10
Contador
Oficinistas 3 7
Administrador 1
Salarios individuales de cuota diaria
Promedio
Hombre Mujer Hombre Mujer
6.50 3.96 5.44
Promedio
Hombre Mujer Menor Hombre Mujer Menor
9.07 1.50 1.65 0.83 2.68
Fuente Exp. 5 Caja 426 Depto del Trabajo AGN
Número de empleados Salario
Fijo
Maximo Mínimo
Destajo
Maximo Mínimo
319
Anexo C. Salarios Cocolapan 1922
Obreros Mexicano Extranjero Máximo Mínimo Promedio
1 Abridores 10 2.06 1.65 1.855
2 Aceitadores 9 2.88 2.06 2.470
3 Amarradores -
4 Acabadores -
5 Afelpadores -
6 Ayudante engomado 5 2.06 1.65 1.855
7 Albañiles 9 3.61 1.65 2.630
8 Atadores 9 4.17 1.80 2.985
9 Batienteros -
10 Banderos -
11 Barrenderos 7 1.82 1.65 1.735
12 Boneteros -
13 Bodegueros -
14 Carderos 18 4.12 2.06 3.090
15 Carreteros 9 2.48 1.65 2.065
16 Canilleros 11 2.68 1.65 2.165
17 Correiteros 17 7.00 5.77 6.385
18 Carpinteros 12 4.12 2.06 3.090
19 Cañoneros 43 2.00 1.75 1.875
20 Cocheros -
21 Debanadoes -
22 Dobladores -
23 Diversos 20 4.12 1.65 2.885
24 Estiradores 9 2.00 2.00 2.000
25 Electricistas 15 7.33 4.12 5.725
26 Engomadores 7 3.25 1.65 2.450
27 Peinadrs 4 2.00 1.75 1.875
28 Estampadores -
29 Encargados -
30 Fatigueros -
31 Fogoneros -
32 Fundidores -
33 Grabadores -
34 Herreros 2 6.18 3.30 4.740
35 Hojalateros 2 4.65 4.65 4.650
36 Maestros tintoreros -
37 Maestros hilados 1 9.00 9.00 9.000
38 Maestros Cardas 1 9.00 9.00 9.000
39 Mudadores 55 0.99 0.83 0.910
40 Mecánicos 21 11.00 3.75 7.375
41 Peones 37 2.88 1.65 2.265
42 Pesadores -
43 Pegadores -
44 Pintores -
45 Revisadores -
46 Repasadores 12 2.50 2.50 2.500
47 Trameros -
48 Talabarteros -
49 Trosileros 93 2.00 1.65 1.825
50 Torcedores -
SalarioNúmero de empleados
320
Obreros Mexicano Extranjero Máximo Mínimo Promedio
51 Tintoreros -
52 Tejedores en general 330 4.00 2.00 3.000
53 Urdidores 11 -
54 Veladores 8 2.06 1.65 1.855
55 Veloceros 54 3.75 1.48 2.615
Sumas 436 2 3.53 2.43 2.98
EmpleadosGerente
superintendente
Cajero 1 10
Contador
Oficinistas 4 7
Administrador 1
Sumas 5 1
Salarios individuales de cuota diaria
Promedio
Hombre Mujer Hombre Mujer
5.83 2.17 2.00 1.25 5.52
Promedio
Hombre Mujer Menor Hombre Mujer Menor
11.00 1.82 1.50 1.65 1.65 0.83 2.60
Fuente Exp. 5 Caja 426 Depto del Trabajo AGN
Número de empleados Salario
Maximo Mínimo
Destajo
Maximo Mínimo
Fijo
321
Anexo C. Salarios Hercules 1922
Obreros Mexicano Extranjero Máximo Mínimo Promedio
1 Abridores 2 0.95 0.95 0.950
2 Aceitadores 2 1.49 1.49 1.490
3 Ayudantes 9 2.75 1.83 2.290
4 Acarreador pabilo 4 1.42 1.42 1.420
5 Paqueteros 3 1.50 1.00 1.250
6 aguadores 2 1.40 1.40 1.400
7 Albañiles 7 1.50 0.95 1.225
8 Atadores 12 3.00 1.33 2.165
9 Batienteros 17 2.14 1.14 1.640
10 Banderos 4 1.14 1.14 1.140
11 Barrenderos 24 1.50 0.95 1.225
12 Cordoneros 2 1.05 1.05 1.050
13 Bodegueros 1 3.66 3.66 3.660
14 Carderos 16 2.14 2.14 2.140
15 Carreteros 60 1.50 0.62 1.060
16 Canilleros 4 1.31 1.31 1.310
17 Correiteros 14 3.66 2.75 3.205
18 Carpinteros 10 2.38 1.25 1.815
19 Cabos 2 2.21 2.08 2.145
20 Cocheros 1 2.00 2.00 2.000
21 Debanadoes 17 2.25 1.50 1.875
22 Dobladores 9 3.33 2.00 2.665
23 Diversos 4 1.90 1.14 1.520
24 Estiradores 24 2.00 1.25 1.625
25 Electricistas 2 3.66 3.66 3.660
26 Engomadores 2 5.83 3.66 4.745
27 Empacadores -
28 Estampadores -
29 Encargados -
30 Comuneros 3 1.25 1.25 1.250
31 Fogoneros 2 2.07 2.07 2.070
32 Porteros 3 1.90 1.25 1.575
33 Grabadores -
34 Herreros 4 3.34 1.25 1.200
35 Hojalateros 2 2.42 1.52 1.970
36 tintoreros -
37 Maestros hilados 1 10.85 10.85 10.850
38 Maestros Cardas 1 11.66 11.66 11.660
39 Maquinistas 15 3.41 0.60 2.005
40 Medidores 6 1.79 1.79 1.790
41 Peones 11 1.25 1.14 1.195
42 Pesadores 2 1.25 1.25 1.250
43 Pegadores 52 1.14 1.14 1.140
44 turbineros 2 1.40 1.33 1.365
45 Revisadores 3 2.50 2.12 2.310
46 Rodillero -
47 Trameros 6 0.95 0.95 0.950
48 Talabarteros -
49 Trosileros 95 2.25 1.25 1.750
50 Trosileros ayudantes 24 1.52 1.52 1.520
51 Tintoreros -
52 Tejedores en general 503 1.75 0.66 1.205
53 Urdidores 14 3.00 1.50 2.250
54 Veladores 6 1.14 1.40 1.270
55 Veloceros 62 1.75 0.60 1.175
Sumas 1069 2 2.47 1.93 2.18
SalarioNúmero de empleados
322
Empleados Mexicano Extranjero Máximo Mínimo Promedio
56 Gerente 1 18.66 16.5 17.58
57 superintendente 1 8.33 8.33 8.33
58 Cajero 0
59 Contador 0
60 Oficinistas 8 5 3.66 4.33
Salarios individuales de cuota diaria
Promedio
Hombre Mujer Menores Hombre Mujer Menores
5.00 2.50 1.00 0.75 0.75 0.75
Promedio
Hombre Mujer Menor Hombre Mujer Menor
4.00 1.14 1.52 0.95 0.80 0.75
Fuente Exp. 5 Caja 426 Depto del Trabajo AGN
Número de empleados Salario
Maximo Mínimo
MínimoMaximo
Destajo
Fijo
323
Anexo C. salarios Metepec 1922
Obreros Mexicano Extranjero Máximo Mínimo Promedio
1 Abridores 1 2.00 2.00 2.000
2 Aceitadores 2 1.28 1.28 1.280
3 Amarradores -
4 Acabadores -
5 Afelpadores 10 1.25 1.00 1.125
6 aguadores -
7 Albañiles -
8 Atadores 9 3.12 2.50 2.810
9 Batienteros 8 1.80 1.80 1.800
10 Banderos 2 2.05 1.80 1.925
11 Barrenderos 31 1.05 0.80 0.925
12 Boneteros -
13 Bodegueros -
14 Carderos 6 2.45 2.25 2.350
15 Carreteros 22 2.08 1.90 1.990
16 Canilleros -
17 Correiteros 16 5.00 4.25 4.625
18 Carpinteros 12 2.50 2.50 2.500
19 Cabos 2 1.50 1.50 1.500
20 Cocheros -
21 Debanadores -
22 Dobladores 7 1.50 1.50 1.500
23 Diversos 626 1.55 1.55 1.550
24 Estiradores 10 2.98 2.78 2.880
25 Electricistas 7 3.00 3.00 3.000
26 Engomadores 1 3.00 3.00 3.000
27 Empacadores 5 1.50 1.25 1.375
28 Estampadores 36 2.00 1.50 1.750
29 Encargados -
30 Fatigueros -
31 Fogoneros 2 3.00 3.00 3.000
32 Fundidores 4 2.50 2.25 2.375
33 Grabadores 4 2.50 2.25 2.375
34 Herreros 2 3.00 3.00 3.000
35 Hojalateros 3 3.50 3.00 3.250
36 tintoreros -
37 Maestros hilados -
38 Maestros Cardas -
39 Maquinistas -
40 Molineros -
41 Peones 11 1.25 1.25 1.250
42 Pesadores 1 1.50 1.25 1.375
43 Pegadores de hilo -
44 Pintores -
45 Revisadores 18 2.09 2.09 2.090
46 Rodillero -
47 Trameros 2 1.75 1.25 1.500
48 Talabarteros -
49 Trosileros 118 1.62 1.30 1.460
50 Torcedores -
51 Tintoreros 43 1.40 1.25 1.325
52 Tejedores en general 419 3.00 2.50 2.750
53 Urdidores 17 2.55 1.98 2.265
54 Veladores 5 3.00 3.00 3.000
55 Veloceros 63 2.34 2.12 2.230
Sumas 1525 0 2.25 2.05 2.15
Fuente Exp. 1 Caja 430 Depto del Trabajo AGN
SalarioNúmero de empleados
324
Empleados Mexicano Extranjero Máximo Mínimo Promedio
56 Gerente
57 superintendente
58 Cajero
59 Contador
60 Oficinistas
61 administrador
Fuente Exp. 1 Caja 430 Depto del Trabajo AGN
Número de empleados Salario
325
Anexo C. Salarios Rio grande 1922
Obreros Mexicano Extranjero Máximo Mínimo Promedio
1 Abridores -
2 Aceitadores 6 2.00 1.24 1.620
3 Amarradores 2 0.80 0.8 0.800
4 Acabadores 22 2.03 0.69 1.360
5 Afelpadores 2 1.06 1.00 1.030
6 aguadores 1 1.24 1.24 1.240
7 Albañiles 21 2.66 1.49 2.075
8 Atadores 15 2.80 0.96 1.880
9 Batienteros 15 2.12 1.65 1.885
10 Banderos 2 1.65 1.65 1.650
11 Barrenderos 10 1.24 0.83 1.035
12 Boneteros -
13 Bodegueros 3 1.65 1.06 1.355
14 Carderos 22 2.32 2.06 2.190
15 Carreteros 63 1.86 0.69 1.275
16 Canilleros 1 1.02 1.02 1.020
17 Correiteros 9 6.00 3.50 4.750
18 Carpinteros 18 4.00 0.54 2.270
19 Cabos en v/s dep 15 5.31 1.35 3.330
20 Cocheros 2 1.65 1.00 1.325
21 Debanadoes -
22 Dobladores 5 2.50 1.21 1.855
23 Diversos 4 3.35 0.50 1.925
24 Estiradores 27 1.91 0.83 1.370
25 Electricistas 4 1.48 1.00 1.240
26 Engomadores 9 6.14 1.24 3.690
27 Empacadores 2 5.00 2.45 3.725
28 Estampadores 14 4.00 1.06 2.530
29 Encargados -
30 Fatigueros -
31 Fogoneros 4 3.62 1.24 2.430
32 Fundidoresx kilo 0.10 0.10 0.100
33 Grabadores 6 6.00 0.89 3.445
34 Herreros 4 2.87 1.20 2.035
35 Hojalateros 2 2.44 0.71 1.575
36 tintoreros 1 3.50 3.50 3.500
37 Maestros hilados 3 3.20 1.50 2.350
38 Maestros Cardas 1 2.40 2.40 2.400
39 Maquinistas 3 4.00 2.00 3.000
40 Molineros -
41 Peones 72 1.78 1.00 1.390
42 Pesadores 3 1.33 1.33 1.330
43 Pegadores de hilo 60 0.83 0.83 0.830
44 Pintores 2 1.81 0.89 1.350
45 Revisadores 15 1.33 0.83 1.080
46 Rodillero -
47 Trameros 30 2.01 1.53 1.770
48 Talabarteros 3 2.45 0.83 1.640
49 Trosileros de pie 59 1.55 0.66 1.105
50 Torcedores de cordón 5 0.89 0.83 0.860
51 Tintoreros 14 1.75 1.00 1.375
52 Tejedores en general 550 2.80 1.70 2.250
53 Urdidores 17 2.86 1.05 1.955
54 Veladores 14 2.12 1.65 1.885
55 Veloceros 62 2.38 1.00 1.690
Sumas 1224 0 2.50 1.24 1.87
SalarioNúmero de empleados
326
Empleados Mexicano Extranjero Máximo Mínimo Promedio
56 Gerente 1 25 20 22.5
57 superintendente 1 18.66 16.6 17.63
58 Cajero 0
59 Contador 0
60 Oficinistas 13 7.5 4 5.75
61
62 Pabilero 4 1.24 1.24 1.24
63 Comuneros 4 1.24 1.02 1.13
64 Lpmdores 5 1.24 1.02 1.13
65 Acrrdrs 4 1.32 1.24 1.28
66 Peinero 1 1.24 1.24 1.24
67 Cargadores 2 1.24 1.24 1.24
68 Medidores 2 1.65 1.65 1.65
69 D. Trama 4 1.24 1.04 1.14
70 Armadores 2 2.66 2.23 2.445
71 desperdc 8 1.11 0.75 0.93
72 Turbinas 7 1.78 1.12 1.45
73 Mecánicos 33 9.17 0.53 4.85
74 Cobreros 2 5.32 0.53 2.925
75 Lavaderos 11 3.25 0.69 1.97
76 Apretros 9 1.55 1.06 1.305
77 Secadores 13 1.21 0.69 0.95
78 Chamucdrs 2 1.21 1.06 1.135
79 Restidres 13 1.77 0.69 1.23
80 Tórculos 10 2.22 1.21 1.715
81 Jabondres 4 1.32 0.69 1.005
82 Maestro preparación 1 9.59 9.59 9.59
83 Maestro hilados 1 15.71 15.71 15.71
84 Maestro telares 2 14.28 10.5 12.39
85 Maestro borras 1 6.66 6.66 6.66
86 Maestro blanqueo 1 15.76 15.76 15.76
87 Maestro estampado 1 14.28 14.28 14.28
88 Maestro grabado 2 10 10 10
89 Maestro acabado 1 8.33 8.33 8.33
Sumas 153 12
Fuente Exp. 4 Caja 426 Depto del Trabajo AGN
Número de empleados Salario
327
Anexo C. Salarios Santa Rosa 1922
Obreros Mexicano Extranjero Máximo Mínimo Promedio
1 Abridores -
2 Aceitadores -
3 Amarradores -
4 Acabadores -
5 Afelpadores -
6 aguadores -
7 Albañiles 17 5.50 2.60 2.820
Aytes. Albañiles 18 1.65 1.78 2.820
8 Atadores -
9 Batienteros 23 2.35 1.65 2.250
10 Banderos -
11 Barrenderos 22 1.65 1.65 1.650
12 Boneteros -
13 Bodegueros -
14 Carderos y cepilladores 17 2.31 2.06 2.185
15 Carreteros -
16 Canilleros -
Cañoneros 60
17 Correiteros y ayudantes 19 8.50 5.77 7.830
18 Carpinteros 20 6.00 1.65 3.825
19 Cabos 7 6.25 4.17 5.208
20 Cocheros -
Costureras 30 1.65 2.00 1.825
21 Debanadores -
22 Dobladores -
23 Diversos -
24 Pabiladores 31 2.50 1.75 2.125
25 Electricistas 18 7.74 1.65 4.695
26 Engomadores 15 2.80 1.98 2.390
27 Empacadores 4 3.50 2.25 2.875
28 Estampadores 207 5.18 1.65 3.415
29 Encargados -
30 Fatigueros -
31 Fogoneros 6 3.25 2.75 3.000
32 Fundidores 7 7.25 4.00 5.625
33 Grabadores 6 6.75 3.50 5.125
34 Herreros 8 7.42 1.65 4.535
35 Hojalateros 4 5.00 3.75 4.375
36 tintoreros -
37 Maestros hilados -
38 Maestros Cardas -
39 Maquinistas 1 8.33 8.33 8.330
40 Molineros -
Muestrarios 2 1.25 0.625
41 Peones 263 1.65 1.65 1.650
42 Pesadores -
43 Pegadores de hilo -
44 Pintores -
Repasadores 19 -
Aytes. Repasadores 12 -
45 Revisadores -
46 Rodillero -
47 Trameros -
48 Talabarteros -
49 Trosileros pie, trama 108 4.30 2.90 3.600
50 Torcedores -
Aytes. Trocileros 56 3.00 5.00 4.000
51 Tintoreros 23 2.01 1.65 1.830
52 Tejedores en general 437 5.00 1.75 3.375
53 Urdidores 13 4.50 3.25 3.875
54 Veladores y porteros 22 6.50 2.50 4.500
Veloceros 43 2.95 2.10 2.525
55 Aytes. Veloces 25 0.83 0.825
Sumas 1563 0 5.10 3.10 4.15
SalarioNúmero de empleados
328
Empleados Mexicano Extranjero Máximo Mínimo Promedio
56 Gerente 0
57 superintendente 0
58 Cajero 0
59 Contador 0
60 Oficinistas 0
61 administrador 0
62 Cañoneros 60 2.2 1.65 2.000
63 Cargadores 16 2.82 1.65 2.235
64 Mecánicos y ayudantes 27 8.17 1.85 3.500
65 Repasadores 19 4.2 2.5 3.000
66 ayudnates menores 95 0.83 0.83 0.83
67 Suma 217 0 18.22
Salarios individuales de cuota diaria
Hombre Mujer Menores Hombre Mujer Menores
5.50 3.00 1.75 1.65
Promedio
Hombre Mujer Menor Hombre Mujer Menor
8.33 0.83 1.65 0.83
Fuente: AGN, Departamento del trabajo, Caja 275, expediente 1 y Caja 435 Exp. 2.
Número de empleados Salario
Maximo Mínimo
MínimoMaximo
Destajo
Fijo
329
Anexo C. Salarios La magdalena 1923
Obreros Mexicano Extranjero Máximo Mínimo Promedio
1 Abridores 10 1.60 1.38 1.490
2 Aceitadores 6 1.71 1.38 1.545
3 Amarradores 2 2.25 2 2.125
4 Acabadores 90 3.00 1.04 2.020
5 Afelpadores 10 1.70 1.28 1.490
6 Ayudante engomado 2 2.00 2.00 2.000
7 Albañiles 10 2.50 1.78 2.140
8 Atadores 12 3.00 1.60 2.300
9 Batienteros 6 1.97 1.60 1.785
10 Banderos 2 2.36 2.36 2.360
11 Barrenderos 4 1.71 1.38 1.545
12 Boneteros -
13 Bodegueros 2 3.00 2.12 2.560
14 Carderos 12 1.97 1.97 1.970
15 Carreteros 60 2.00 1.04 1.520
16 Canilleros 10 2.00 1.04 1.520
17 Correiteros 8 6.00 4.00 5.000
18 Carpinteros 6 3.44 1.50 2.470
19 Cañoneros 6 3.00 2.36 2.680
20 Cocheros -
21 Debanadoes -
22 Dobladores 4 1.78 1.60 1.690
23 Diversos 31 2.00 1.50 1.750
24 Estiradores 2 2.00 1.75 1.875
25 Electricistas 3 6.00 3.00 4.500
26 Engomadores 8 4.50 1.71 3.105
27 Peinadrs 4 2.25 1.48 1.865
28 Estampadores 4 6.00 4.00 5.000
29 Encargados 3 6.00 4.00 5.000
30 Fatigueros -
31 Fogoneros 2 1.97 1.97 1.970
32 Fundidores 1 3.00 2.00 2.500
33 Grabadores 1 7.00 7.00 7.000
34 Herreros 1 4.00 4.00 4.000
35 Hojalateros 1 2.50 2.00 2.250
36 Maestros tintoreros 1 6.00 4.00 5.000
37 Maestros hilados 1 5.00 5.00 5.000
38 Maestros Cardas 1 5.00 5.00 5.000
39 Mudadores 2 4.00 3.00 3.500
40 Mecánicos -
41 Peones 10 1.38 1.38 1.380
42 Pesadores 3 4.00 3.00 3.500
43 Pegadores 6 2.50 1.50 2.000
44 Pintores 1 4.00 4.00 4.000
45 Revisadores 3 2.41 1.38 1.895
46 Repasadores -
47 Trameros 1 1.71 1.71 1.710
48 Talabarteros 1 3.00 3.00 3.000
49 Trosileros 80 2.50 1.70 2.100
50 Torcedores -
51 Tintoreros 6 1.38 1.04 1.210
52 Tejedores en general 596 4.00 1.60 2.800
53 Urdidores 10 4.00 2.50 3.250
54 Veladores 4 3.00 2.00 2.500
55 Veloceros 6 2.50 1.50 2.000
Sumas 1055 0 3.14 2.32 2.726
SalarioNúmero de empleados
330
Empleados Mexicano Extranjero Máximo Mínimo Promedio
56 Gerente 1
57 superintendente
58 Cajero 1
59 Contador 1
60 Oficinistas 4 4 200 100
61 Administrador
suma 4 7
Salarios individuales de cuota diaria
Promedio
Hombre Mujer Menores Hombre Mujer Menores
3.00 2.50 2.00 1.60 1.50 1.04
Promedio
Hombre Mujer Menor Hombre Mujer Menor
3.00 2.50 2.00 1.50 1.50 1.04
Fuente Exp. 1 Caja 405 Depto del Trabajo AGN
Número de empleados Salario
Fijo
Maximo Mínimo
MínimoMaximo
Destajo
331
Anexo C. Salarios Miraflores 1923
Obreros Mexicano Extranjero Máximo Mínimo Promedio
1 Abridores 2 1.21 1.21 1.210
2 Acarreador 1 1.09 1.09 1.090
3 Amolador 1 1.70 1.7 1.700
4 Acabadores -
5 Afelpadores -
6 Ayudante engomado -
7 Albañiles 2 2.00 1.00 1.500
8 Atadores 2 3.08 2.51 2.795
9 Batienteros 3 1.70 1.36 1.530
10 Banderos 1 1.50 1.50 1.500
11 Barrenderos 4 1.22 1.21 1.215
12 Boteros 2 1.36 1.22 1.290
13 Bodegueros -
14 Carderos 3 1.70 1.70 1.700
15 Carreteros 11 1.37 1.06 1.215
16 Carretillero 1 0.88 0.88 0.880
17 Correiteros 4 3.75 2.50 3.125
18 Carpinteros 3 4.50 2.00 3.250
19 Cañoneros 4 4.16 2.50 3.330
20 Cocheros 1 1.80 1.80 1.800
21 Debanadoes 1 0.88 0.88 0.880
22 Dobladores 1 1.00 1.00 1.000
23 Diversos 18 2.00 0.75 1.375
24 Estiradores 3 1.01 0.77 0.890
25 Electricistas 2 2.50 2.42 2.460
26 Engomadores 3 2.82 1.36 2.090
27 Cuendero 1 0.88 0.88 0.880
28 Canillero 1 0.88 0.88 0.880
29 Encargados 2 3.00 2.00 2.500
30 Mozos 1 0.66 0.66 0.660
31 Fogoneros 1 2.50 2.50 2.500
32 Fundidores -
33 Grabadores -
34 Herreros 2 4.00 1.25 2.625
35 Hojalateros 1 2.00 2.00 2.000
36 Mudadores 13 0.80 0.80 0.800
37 Maestros hilados 1 9.30 9.30 9.300
38 Pepenador 1 0.72 0.72 0.720
39 Mecanicos 2 5.83 4.00 4.915
40 Portero 1 1.71 1.71 1.710
41 Peones 5 1.00 1.00 1.000
42 Pesadores 1 2.00 2.00 2.000
43 Rodillro 1 4.00 4.00 4.000
44 Turbineros 2 2.00 2.00 2.000
45 Revisadores 1 1.75 1.75 1.750
46 Repasadores -
47 Trameros 3 2.00 0.66 1.330
48 Talabarteros -
49 Trosileros 29 1.35 0.63 0.990
50 Torcedores -
51 Tintoreros -
52 Tejedores en general 80 4.07 0.63 2.350
53 Urdidores 2 4.23 2.50 3.365
54 Veladores 3 2.00 1.50 1.750
55 Veloceros 16 2.28 0.78 1.530
56 Pabilero 1 1.21 1.21 1.210
Sumas 243 1 2.25 1.69 1.969
SalarioNúmero de empleados
332
Empleados Mexicano Extranjero Máximo Mínimo Promedio
57 Gerente
58 superintendente
59 Cajero
60 Contador
61 Oficinistas 1 3.33
62 Administrador 1 10
Salarios Individuales de cuota diaria
Promedio
Hombre Mujer Menores Hombre Mujer Menores
4.23 2.18 1.19 0.63 0.70 0.55
Promedio
Hombre Mujer Menor Hombre Mujer Menor
8.33 0.75 0.66 0.66
Fuente Exp. 1 Caja 405 Depto del Trabajo AGN
Número de empleados Salario
Maximo Mínimo
MínimoMaximo
Destajo
Fijo
333
Anexo C. Salarios San antonio 1923
Obreros Mexicano Extranjero Máximo Mínimo Promedio
1 Abridores 1 2.25 2.25 2.250
2 Acarreador 3 1.71 1.40 1.555
3 Amolador -
4 Acabadores 15 4.61 1.55 3.080
5 Afelpadores 20 5.00 1.55 3.275
6 Ayudante engomado -
7 Albañiles 3 2.97 2.08 2.525
8 Atadores 10 2.29 1.07 1.680
9 Batienteros 6 1.94 1.78 1.860
10 Banderos 2 2.08 1.40 1.740
11 Barrenderos 6 1.90 1.51 1.705
12 Boteros -
13 Bodegueros -
14 Carderos 9 2.23 1.67 1.950
15 Carreteros 12 1.51 0.55 1.030
16 Carretillero -
17 Correiteros 5 5.00 3.56 4.280
18 Carpinteros 7 5.83 1.50 3.665
19 Cabos 4 6.17 2.75 4.460
20 Chaufer 2 5.33 4.16 4.745
21 Debanadoes 10 2.51 1.25 1.880
22 Dobladores 1 1.62 1.62 1.620
23 Diversos 60 2.25 1.07 1.660
24 Estiradores 10 1.78 1.40 1.590
25 Electricistas 2 2.75 2.75 2.750
26 Engomadores 5 5.34 1.57 3.455
27 Empacadores 8 1.88 1.88 1.880
28 Estampadores 10 6.66 1.52 4.090
29 Encargados -
30 Fatigueros 21 1.79 1.07 1.430
31 Fogoneros -
32 Fundidores -
33 Grabadores 6 4.16 1.40 2.780
34 Herreros 2 4.75 2.20 3.475
35 Hojalateros 2 4.00 1.90 2.950
36 Maestros tintoreros -
37 Maestros hilados -
38 Maestros Cardas -
39 Mecanicos 8 4.16 1.50 2.830
40 Molineros -
41 Peones 17 1.75 1.51 1.630
42 Costureras 22 4.89 1.00 2.945
43 Blanqueo 24 2.00 1.03 1.515
44 Pintores -
45 Revisadores 1 1.57 1.57 1.570
46 Rodillero 1 5.34 5.34 5.340
47 Trameros -
48 Talabarteros -
49 Trosileros 60 1.39 1.07 1.230
50 Torcedores -
51 Tintoreros 8 1.84 1.55 1.695
52 Tejedores en general 132 2.15 2.15 2.150
53 Urdidores 5 4.64 1.50 3.070
54 Veladores 3 3.88 2.14 3.010
55 Veloceros 29 1.78 1.40 1.590
Sumas 552 0 3.14 1.75 2.448
SalarioNúmero de empleados
334
Empleados Mexicano Extranjero Máximo Mínimo Promedio
56 Gerente
57 superintendente
58 Cajero
59 Contador
60 Oficinistas
61 Administrador
Salarios individuales de cuota diaria
Promedio
Hombre Mujer Menores Hombre Mujer Menores
6.17 1.07 1.79
Promedio
Hombre Mujer Menor Hombre Mujer Menor
Fuente Exp. 1 Caja 405 Depto del Trabajo AGN
Número de empleados Salario
Fijo
Maximo Mínimo
MínimoMaximo
Destajo
335
Anexo C. La comena 1923
Obreros Mexicano Extranjero Máximo Mínimo Promedio
1 Abridores 1 1.71 1.71 1.710
2 Aceitadores 5 1.71 1.71 1.710
3 Amarradores 3 1.71 1.71 1.710
4 Acabadores 2 1.64 1.64 1.640
5 Afelpadores -
6 aguadores -
7 Albañiles 18 2.00 1.12 1.390
8 Atadores 5 3.50 2.00 2.910
9 Batienteros 6 2.57 1.71 1.970
10 Banderos -
11 Barrenderos 6 1.39 1.39 1.390
12 Boneteros -
13 Bodegueros -
14 Carderos 28 1.97 1.71 1.840
15 Carreteros 31 1.74 1.00 1.370
16 Canilleros 4 1.39 1.39 1.390
17 Correiteros 10 3.06 3.06 3.060
18 Carpinteros 4 3.25 2.00 2.500
19 Cabos 4 3.00 3.00 3.000
20 Cocheros -
21 Debanadores 4 1.39 1.39 1.390
22 Dobladores 2 1.64 1.64 1.640
23 Diversos -
24 Estiradores 20 1.39 1.39 1.390
25 Electricistas -
26 Engomadores 3 3.00 1.90 2.450
27 Empacadores 3 2.31 1.64 1.920
28 Estampadores -
29 Encargados -
30 Fatigueros 10 1.45 1.45 1.450
31 Fogoneros 1 1.92 1.92 1.920
32 Fundidores 2 3.50 1.50 2.500
33 Grabadores -
34 Herreros 11 3.25 2.75 3.000
35 Hojalateros 1 1.85 1.85 1.850
36 tintoreros -
37 Maestros hilados 1 8.50 8.50 8.500
38 Maestros Cardas -
39 Maquinistas -
40 Molineros -
41 Peones 5 1.39 1.00 1.120
42 Pesadores 3 2.50 2.50 2.500
43 Pegadores de hilo -
44 Pintores -
45 Revisadores 3 2.31 2.31 2.310
46 Rodillero -
47 Trameros 9 1.39 0.69 1.040
48 Talabarteros -
49 Trosileros 56 2.00 1.00 1.500
50 Torcedores 1 2.00 1.00 1.500
51 Tintoreros -
52 Tejedores en general 214 3.25 0.70 1.920
53 Urdidores 8 3.00 2.00 2.500
54 Veladores 7 2.00 1.50 1.680
55 Veloceros 54 2.00 1.39 1.440
Sumas 544 1 1.72 1.36 1.52
SalarioNúmero de empleados
336
Empleados Mexicano Extranjero Máximo Mínimo Promedio
56 Gerente 0
57 superintendente 0
58 Cajero 0
59 Contador 0
60 Oficinistas 2 5 2.86 3.93
61 administrador 1 13.33 13.33 13.33
Sumas 2 1
Salarios individuales de cuota diaria
Promedio
Hombre Mujer Menores Hombre Mujer Menores
2.55 2.40 1.42 1.38
Promedio
Hombre Mujer Menor Hombre Mujer Menor
3.00 1.64 1.39 1.00
Fuente Exp. 4 Caja 426 Depto del Trabajo AGN
Número de empleados Salario
Maximo Mínimo
MínimoMaximo
Destajo
Fijo
337
Anexo C. Salarios Atemajac 1923
Obreros Mexicano Extranjero Máximo Mínimo Promedio
1 Abridores -
2 Aceitadores 2 1.24 1.24 1.240
3 Amolador 2 1.24 1.24 1.240
4 Acabadores -
5 Afelpadores -
6 Ayudante engomado -
7 Albañiles -
8 Atadores 3 3.18 0.60 1.780
9 Batienteros 3 1.99 1.65 1.760
10 Banderos 5 1.24 1.24 1.240
11 Barrenderos -
12 Boteros -
13 Bodegueros -
14 Carderos 4 1.99 1.49 1.740
15 Carreteros 14 1.53 0.53 1.100
16 Camilleros -
17 Correiteros 3 5.23 4.09 4.840
18 Carpinteros -
19 Cabos -
20 Chaufer -
21 Debanadoes -
22 Dobladores -
23 Diversos -
24 Estiradores 4 1.24 1.15 1.195
25 Electricistas 1 2.59 2.59 2.590
26 Engomadores 2 4.07 1.49 2.750
27 Empacadores -
28 Estampadores -
29 Encargados -
30 Fatigueros -
31 Fogoneros -
32 Fundidores -
33 Grabadores -
34 Herreros -
35 Hojalateros -
36 Maestros tintoreros -
37 Maestros hilados 1 2.66 2.66 2.660
38 Maestros Cardas 1 1.93 1.93 1.930
39 Mecanicos -
40 Molineros -
41 Peones -
42 Pesadores -
43 Pegadores 2 2.38 2.38 2.380
44 Pintores -
45 Revisadores 4 3.19 1.49 1.920
46 Rodillero -
47 Trameros 2 1.24 1.24 1.240
48 Talabarteros -
49 Trosileros 36 2.22 0.83 1.690
50 Torcedores -
51 Tintoreros -
52 Tejedores en general 130 3.33 0.44 1.550
53 Urdidores 4 2.62 1.95 2.550
54 Veladores -
55 Veloceros 18 2.13 0.84 1.420
Sumas 241 0 2.66 1.89 2.270
SalarioNúmero de empleados
338
Empleados Mexicano Extranjero Máximo Mínimo Promedio
56 Gerente
57 superintendente
58 Cajero
59 Contador
60 Oficinistas
61 Administrador
62 Canilleros 2 1.24 1.24 1.24
63 Rodillero 1 2.18 2.18 2.18
64 Comunero 2 1.24 1.24 1.24
65 Portero 1 1.24 1.24 1.24
66 Cordoneras 1 0.83 0.83 0.83
Suma 7 0
Salarios individuales de cuota diaria
Promedio
Hombre Mujer Menores Hombre Mujer Menores
5.23 2.71 2.27 1.57 0.53 0.44
Promedio
Hombre Mujer Menor Hombre Mujer Menor
10.00 1.24 1.24 1.24 0.83 0.60
Fuente Exp. 4 Caja 426 Depto del Trabajo AGN
Número de empleados Salario
Fijo
Maximo Mínimo
MínimoMaximo
Destajo
339
Anexo C. Salarios La experiencia 1923
Obreros Mexicano Extranjero Máximo Mínimo Promedio
1 Abridores -
2 Aceitadores 4 1.78 1.24 1.510
3 Amolador -
4 Acabadores -
5 Afelpadores -
6 Ayudante engomado -
7 Albañiles 4 2.46 1.65 2.055
8 Atadores 4 3.25 1.86 2.555
9 Batienteros 4 2.05 2.05 2.050
10 Banderos 1 1.24 1.24 1.240
11 Barrenderos 6 1.35 1.24 1.295
12 Boneteros 2 1.38 1.25 1.315
13 Bodegueros 8 2.40 2.12 2.260
14 Carderos -
15 Carreteros 30 1.24 1.00 1.120
16 Camilleros -
17 Correiteros 6 6.00 3.33 4.665
18 Carpinteros 6 4.40 2.48 3.440
19 Cabos 6 2.53 2.00 2.265
20 Cocheros -
21 Debanadoes -
22 Dobladores 2 1.60 1.60 1.600
23 Diversos -
24 Estiradores 6 2.00 1.50 1.750
25 Electricistas 12 8.30 1.65 4.975
26 Engomadores 4 5.50 1.30 3.400
27 Empacadores -
28 Estampadores -
29 Encargados -
30 Fatigueros -
31 Fogoneros 1 2.00 2.00 2.000
32 Fundidores -
33 Grabadores -
34 Herreros 1 3.84 3.84 3.840
35 Hojalateros 1 2.24 2.24 2.240
36 Maestros tintoreros -
37 Maestros hilados 1 6.50 6.50 6.500
38 Maestros Cardas -
39 Mecanicos -
40 Molineros -
41 Peones 17 1.55 0.88 1.215
42 Pesadores 4 2.00 1.83 1.915
43 Pegadores -
44 Pintores -
45 Revisadores 2 1.61 1.61 1.610
46 Rodillero -
47 Trameros -
48 Talabarteros 1 1.50 1.50 1.500
49 Trosileros 54 2.00 1.24 1.620
50 Torcedores -
51 Tintoreros 2 2.83 2.05 2.440
52 Tejedores en general 228 3.50 1.00 2.250
53 Urdidores 6 5.00 2.00 3.500
54 Veladores 9 1.49 1.20 1.345
55 Veloceros 38 2.00 1.42 1.710
Sumas 470 0 2.47 1.80 2.130
SalarioNúmero de empleados
340
Empleados Mexicano Extranjero Máximo Mínimo Promedio
56 Gerente
57 superintendente
58 Cajero
59 Contador
60 Oficinistas
61 Administrador
62 Canilleros 13 1.4 1.24 1.32
63 Algodoneros 3 1.24 1.24 1.24
64 Alfareros 2 1 1 1
65 Ay. Estiradores 18 1.24 1.24 1.24
66 V.Veloceros 22 1.24 1.24 1.24
67 Hilonero 38 0.84 0.84 0.84
68 Cañonero 1 1.24 1.24 1.24
69 Caballerangos 3 1.5 1.24 1.37
70 Cañeros 4 1.3 0.96 1.13
71 Cordoneros 6 1.24 1.24 1.24
72 comuneros 2 1.24 1.24 1.24
73 Fontaneros 2 0.96 0.96 0.96
74 Hortelanos 4 1.4 0.95 1.175
75 Jardineros 1 1.3 1.3 1.3
76 Mayordomo 1 3.35 3.35 3.35
77 m. De prep. 1 6.5 6.5 6.5
78 m. Mecánico 1 5 5 5
79 Mecanicos 7 2.8 0.76 1.78
80 Profesores 4 2.9 2 2.45
81 Preseros 4 2.5 0.96 1.73
82 Porteros 5 2.21 1.2 1.705
83 Reolero 1 1.84 1.84 1.84
84 Rieleros 2 1.44 1.44 1.44
Suma 145 0
Salarios indiviudales de cuota diaria
Promedio
Hombre Mujer Menores Hombre Mujer Menores
6.75 5.50 1.50 1.35 1.30 0.90
Promedio
Hombre Mujer Menor Hombre Mujer Menor
8.30 1.28 0.84 1.24 1.24 0.84
Fuente Exp. 4 Caja 426 Depto del Trabajo AGN
Número de empleados Salario
Fijo
Maximo Mínimo
MínimoMaximo
Destajo
341
Anexo C. Salarios Rio Blanco Guad. 1923
Obreros Mexicano Extranjero Máximo Mínimo Promedio
1 Abridores 1 1.65 1.65 1.650
2 Aceitadores 2 1.24 1.24 1.240
3 Amolador -
4 Acabadores -
5 Afelpadores -
6 Ayudante engomado -
7 Albañiles 2 1.65 1.39 1.520
8 Atadores 1 2.50 2.00 2.250
9 Batienteros 1 2.06 2.06 2.060
10 Banderos -
11 Barrenderos 1 1.24 1.24 1.240
12 Boneteros -
13 Bodegueros -
14 Carderos 2 2.06 1.52 1.790
15 Carreteros 6 2.00 1.00 1.500
16 Camilleros -
17 Correiteros 2 4.20 1.72 2.960
18 Carpinteros 2 3.19 1.29 2.240
19 Cabos -
20 Cocheros -
21 Debanadoes -
22 Dobladores -
23 Diversos -
24 Estiradores 3 2.00 1.00 1.500
25 Electricistas -
26 Engomadores 2 2.40 0.82 1.610
27 Empacadores -
28 Estampadores -
29 Encargados -
30 Fatigueros -
31 Fogoneros 1 1.65 1.65 1.650
32 Fundidores -
33 Grabadores -
34 Herreros 2 1.86 0.82 1.340
35 Hojalateros 1 1.65 1.65 1.650
36 Maestros tintoreros -
37 Maestros hilados 1 3.72 3.72 3.720
38 Maestros Cardas 2 3.72 1.93 2.825
39 Mecanicos -
40 Molineros -
41 Peones 2 0.82 0.80 0.810
42 Pesadores 1 1.24 1.24 1.240
43 Pegadores -
44 Pintores -
45 Revisadores 2 1.24 1.24 1.240
46 Rodillero -
47 Trameros 7 1.24 1.24 1.240
48 Talabarteros -
49 Trosileros 19 2.00 0.82 1.410
50 Torcedores -
51 Tintoreros -
52 Tejedores en general 48 2.50 0.50 1.500
53 Urdidores 1 2.50 1.50 2.000
54 Veladores 4 0.90 0.90 0.900
55 Veloceros 8 2.00 1.00 1.500
Sumas 124 0 2.04730769 1.38230769 1.71480769
Número de empleados Salario
342
Empleados Mexicano Extranjero Máximo Mínimo Promedio
56 Gerente
57 superintendente
58 Cajero
59 Contador
60 Oficinistas
61 Administrador
62 luminero 1 1.65 1.65 1.65
63 Preseros 1 0.82 0.82 0.82
64 Caballerango 2 1.04 1.04 1.04
65 Hueteros 2 0.93 0.75 0.84
66 Mecanicos 2 3.72 0.5 2.11
67 Cordonero 1 1.02 1.02 1.02
68 Manteros 3 2.72 0.82 1.59
69 Porteros 2 0.9 0.9 0.9
Sumas 14
Maximo Mínimo
Hombre Mujer Menores Hombre Mujer Menores
2.50 2.50 2.50 0.50 0.50 0.50
Promedio
Hombre Mujer Menor Hombre Mujer Menor
4.20 1.24 0.82 0.82 0.82 0.50
Fuente Exp. 4 Caja 426 Depto del Trabajo AGN
Número de empleados Salario
Destajo
Maximo Mínimo
Salarios Individuales de cuota diaria
Fijo
343
ANEXO D. BALANCES
Activo Valor Pasivo Valor
Fábrica de Río Blanco 10,951,872.38$ Capital social 15,000,000.00$
Fábrica de San lorenzo 2,630,697.39$ Fondo reserva 2,721,591.54$
Fábrica Cocolapam 2,410,354.21$ Fondo previsión 1,558,097.35$
Fábrica Cerritos 798,723.31$ Fondo amortización 3,960,683.04$
Instalación Rincón Grande 973,902.60$ Fondo seguro 490,613.36$
Instalación Cocolapam 497,086.81$ Cuentas acreedoras 1,081,620.34$
Instlación Boquerón 158,620.62$ Ganancia 1,761,569.45$
Muebles y enseres 8,809.53$ TOTAL 26,574,175.08$
Efectivo en cajas México y
fábricas 58,194.55$
Existencias generales 3,667,120.24$
Dividendos anticipados (cupón
29) 483,948.50$
Cuentas deudoras 3,934,844.94$
TOTAL 26,574,175.08$
Archivo Histórico del Agua (AHA) Fondo Aprovechamientos Superficiales Caja 4528 Expedietne 600052
ACTIVO PASIVO
Frabrica de Río Blanco 6,182,617.11$ Capital social 15,000,000.00$
Fábrica de San Lorenzo 1,220,817.38$ Fondo de reserva 2,628,582.13$
Fábrica de Cocolapam 1,671,717.79$ Fondo de previsión 634,608.50$
Fábrica de Cerritos 415,675.29$ Fondo de seguro 474,029.70$
Hidroeléctrica Rincon Grande 825,579.50$ Cuentas de garantía 2,304,714.37$
Hidroelectrica Cocolapam 401,791.24$ Cuentas Acreedoras 1,083,040.14$
Hidroeléctrica Boqueron 321,710.34$ Dividendos 119,127.14$
Alumbrado de nogales 19,521.56$ Saldo de Ganancias y pérdidas 2,894,701.26$
Inmuebles en México 177,000.00$ TOTAL 25,138,803.24$
Oficinas en México 13,497.41$
Terrenos en Veracruz 13,523.00$
Líneas de transmisión eléctrica 43,281.02$
Construcción en Veracurz 9,270.00$
Efectivo 168,342.70$
Existencias generales 6,695,107.39$
Cuentas deudora 6,959,351.59$ TOTAL 25,138,803.32$
Fuente: Archivo Histórico de Notarías de la Ciudad de México
Notario Notaría Volumen Escritura Fecha
Bernando Cornejo 5 113 9378 11/09/1920
Fuente:
Balance al 31/12/1911
Balance al 31/12/1919
344
Valores en pesos corrientes
Industria Número de
establecimientos
Inversión al
31/12/1929
Personal
ocupado
Producción Número de
establecimientos
Inversión Personal
ocupado
Producción
TOTAL NACIONAL 979,529,483 318,763 900,332,923 100% 100% 100%
I. Textiles 194,543,983 76,840 193,711,189 20% 24% 22%
Hilado y tejido de algodón 171 133,500,000 38,500 101,500,000 14% 12% 11%
Hilado y tejido de lana 31 21,000,000 5,300 16,000,000 2% 2% 2%
IV.Productos alimenticios 239,175,808 103,200 313,961,622 24% 32% 35%
V. Luz 670 295,800,000 8,700 67,800,000 30% 3% 8%
VI. Química 60,090,111 12,284 31,321,796 6% 4% 3%
Veracruz
Total del estado 3,806 122,251,715 35,317 101,306,364 100.00% 100.00% 100.00% 100.00%
I. Textiles 64 44,101,795 7,550 25,838,660 1.68% 36.07% 21.38% 25.51%
Hilado y tejido de algodón 11 40,542,146 6,851 24,228,121 0.29% 33.16% 19.40% 23.92%
Hilado y tejido de lana 34 4,230 36 7,780 0.89% 0.00% 0.10% 0.01%
hilado y tejido de yute 15 3,531,778 648 1,582,242 0.39% 2.89% 1.83% 1.56%
Escobas, cepillos y plumeros 4 23,641 15 20,517
II. Metalurgía 229 691,970 873 1,525,352 6.02% 0.57% 2.47% 1.51%
III. Indumentaria y tocador 402 786,479 1,132 1,736,855 10.56% 0.64% 3.21% 1.71%
IV.Productos alimenticios 2,105 43,954,585 17,812 40,100,163 55.31% 35.95% 50.43% 39.58%
V. Luz 80 14,703,839 1,064 3,594,649 2.10% 12.03% 3.01% 3.55%
VI. Química 37 820,541 124 1,033,791 0.97% 0.67% 0.35% 1.02%
Distrito Federal
Total del estado 3,476 182,323,452 61,001 245,859,932 100.00% 100.00% 100.00% 100.00%
I. Textiles 192 32,549,943 12,397 32,085,606 5.52% 17.85% 20.32% 13.05%
Hilado y tejido de algodón 65 18,326,257 6,536 17,057,213 1.87% 10.05% 10.71% 6.94%
Hilado y tejido de lana 5 6,088,388 1,619 5,423,799 0.14% 3.34% 2.65% 2.21%
Calcetería y bonetería 54 6,332,184 3,098 7,058,048 1.55% 3.47% 5.08% 2.87%
Fibras duras (escobas, etc) 16 61,128 99 103,326 0.46% 0.03% 0.16% 0.04%
II. Metalurgía 535 12,942,923 8,414 22,232,100 15.39% 7.10% 13.79% 9.04%
III. Indumentaria y tocador 747 12,324,983 8,736 25,211,604 21.49% 6.76% 14.32% 10.25%
IV. Productos alimenticios 742 24,944,766 8,901 53,390,775 21.35% 13.68% 14.59% 21.72%
V. Luz 15 26,411,095 1,585 21,753,936 0.43% 14.49% 2.60% 8.85%
VI. Química 146 16,133,993 3,957 21,976,882 4.20% 8.85% 6.49% 8.94%
Valores en %
Anexo E. Primer censo industrial en México, 1930.
345
Valores en pesos corrientes
Industria Número de
establecimientos
Inversión al
31/12/1929
Personal
ocupado
Producción Número de
establecimientos
Inversión Personal
ocupado
Producción
Jalisco
Total del estado 4,200 30,510,333 21,248 33,216,310 100.00% 100.00% 100.00% 100.00%
I. Textiles 258 5,952,657 3,592 6,196,757 6.14% 19.51% 16.91% 18.66%
Hilado y tejido de algodón 79 59,612 120 53,312 1.88% 0.20% 0.56% 0.16%
Hilado y tejido de lana 25 22,104 109 78,008 0.60% 0.07% 0.51% 0.23%
Rebozos 22 711,269 827 1,114,282 0.52% 2.33% 3.89% 3.35%
Jarciería 26 885 14 5,216 0.62% 0.00% 0.07% 0.02%
II. Metalurgía 493 976,734 1,641 1,286,623 11.74% 3.20% 7.72% 3.87%
III. Indumentaria y tocador 727 945,885 2,054 3,036,452 17.31% 3.10% 9.67% 9.14%
IV. Productos alimenticios 917 15,305,739 8,864 13,877,326 21.83% 50.17% 41.72% 41.78%
V. Luz 72 2,623,144 830 2,520,846 1.71% 8.60% 3.91% 7.59%
VI. Química 90 2,171,442 461 2,522,529 2.14% 7.12% 2.17% 7.59%
Edo. de México
Total del estado 3,392 43,038,550 11,475 31,067,665 100.00% 100.00% 100.00% 100.00%
I. Textiles 822 3,673,266 2,795 4,876,072 24.23% 8.53% 24.36% 15.70%
Hilado y tejido de algodón 105 1,404,546 1,127 2,036,143 3.10% 3.26% 9.82% 6.55%
Hilado y tejido de lana 345 2,196,649 1,123 2,679,050 10.17% 5.10% 9.79% 8.62%
Rebozos 117 37,227 255 96,244 3.45% 0.09% 2.22% 0.31%
II. Metalurgía 268 169,210 624 258,908 7.90% 0.39% 5.44% 0.83%
III. Indumentaria y tocador 256 207,755 559 538,440 7.55% 0.48% 4.87% 1.73%
IV. Productos alimenticios 661 4,216,110 2,774 10,124,143 19.49% 9.80% 24.17% 32.59%
V. Luz 41 21,409,438 541 2,317,927 1.21% 49.74% 4.71% 7.46%
VI. Química 73 407,381 177 437,957 2.15% 0.95% 1.54% 1.41%
VII. Papel 3 12,070,393 1,829 10,472,960 0.09% 28.05% 15.94% 33.71%
Querétaro
Total del estado 619 6,580,302 3,344 7,122,193 100.00% 100.00% 100.00% 100.00%
I. Textiles 199 3,517,624 2,035 3,142,761 32.15% 53.46% 60.86% 44.13%
Hilado y tejido de algodón 47 2,964,047 1,615 2,713,144 7.59% 45.04% 48.30% 38.09%
Hilado y tejido de lana 60 7,759 70 15,039 9.69% 0.12% 2.09% 0.21%
Bonetería y Rebozos 4 537,619 156 371,077 0.65% 8.17% 4.67% 5.21%
Jarciería 88 8,199 194 43,501 14.22% 0.12% 5.80% 0.61%
II. Metalurgía 51 18,893 132 99,698 8.24% 0.29% 3.95% 1.40%
III. Indumentaria y tocador 70 240,036 233 384,087 11.31% 3.65% 6.97% 5.39%
IV. Productos alimenticios 100 731,356 405 59,254 16.16% 11.11% 12.11% 0.83%
V. Luz 7 1,774,993 180 471,617 1.13% 26.97% 5.38% 6.62%
VI. Química 18 124,089 58 317,167 2.91% 1.89% 1.73% 4.45%
Valores en %
346
Valores en pesos corrientes
Industria Número de
establecimientos
Inversión al
31/12/1929
Personal
ocupado
Producción Número de
establecimientos
Inversión Personal
ocupado
Producción
Nuevo León
Total del estado 1,201 53,733,578 16,159 68,744,280 100.00% 100.00% 100.00% 100.00%
I. Textiles 36 3,502,776 1,612 2,283,710 3.00% 6.52% 9.98% 3.32%
Despepite Ixtle 7 23,806 89 22,202 0.58% 0.04% 0.55% 0.03%
Despepite algódon 3 98,134 47 269,977 0.25% 0.18% 0.29% 0.39%
Hilado y tejido de algodón 4 2,999,388 1,292 1,630,410 0.33% 5.58% 8.00% 2.37%
Pasamerías 9 262,781 88 208,283 0.75% 0.49% 0.54% 0.30%
Broches, escoabas 9 118,406 78 147,919 0.75% 0.22% 0.48% 0.22%
Jarcierías 4 261 18 4,919 0.33% 0.00% 0.11% 0.01%
II. Metalurgía 148 19,332,004 4,402 20,470,091 12.32% 35.98% 27.24% 29.78%
III. Indumentaria y tocador 133 1,578,359 1,052 2,839,101 11.07% 2.94% 6.51% 4.13%
IV.Productos alimenticios 534 10,292,970 3,939 25,269,015 44.46% 19.16% 24.38% 36.76%
V. Luz 25 5,479,197 419 2,596,014 2.08% 10.20% 2.59% 3.78%
VI. Química 22 1,623,032 338 2,960,617 1.83% 3.02% 2.09% 4.31%
Puebla
Total del estado 3,636 156,444,982 25,925 61,641,948 100.00% 100.00% 100.00% 100.00%
I. Textiles 947 37,901,740 13,258 31,412,317 26.05% 24.23% 51.14% 50.96%
Hilado y tejido de algodón (fábricas) 56 35,413,180 11,069 29,157,224 1.54% 22.64% 42.70% 47.30%
Hilado y tejido de algodón (talleres) 24 55,299 77 37,715 0.66% 0.04% 0.30% 0.06%
Hilado y tejido de lana 69 484,411 256 242,277 1.90% 0.31% 0.99% 0.39%
Bonetería y Rebozos 12 4,520 20 10,089 0.33% 0.00% 0.08% 0.02%
Calcetería 14 1,889,587 742 1,743,273 0.39% 1.21% 2.86% 2.83%
Palma 518 - 802 53,802 14.25% 0.00% 3.09% 0.09%
Jarciería 22 19,839 40 30,391 0.61% 0.01% 0.15% 0.05%
Escobas 232 34,904 252 137,582 6.38% 0.02% 0.97% 0.22%
II. Metalurgía 246 205,786 986 1,074,403 6.77% 0.13% 3.80% 1.74%
III. Indumentaria y tocador 217 271,834 956 696,025 5.97% 0.17% 3.69% 1.13%
IV. Productos alimenticios 1,071 19,807,990 5,906 20,268,989 29.46% 12.66% 22.78% 32.88%
Cuero 133 227,368 356 519,247 3.66% 0.15% 1.37% 0.84%
V. Luz 48 94,444,752 1,172 350,414 1.32% 60.37% 4.52% 0.57%
VI. Química 122 311,719 445 839,797 3.36% 0.20% 1.72% 1.36%
Fuente: Primer Censo Industrial de 1930 . Secretaria de economía Nacional. México 1933. Cuadros II, III y IV de los Tomos IX. Distrito Federal, XVI.Jalisco,
XV. Edo. De México, XIX: Nuevo Leon, XXI. Puebla, XXII. Querétaro y XXX. Veracruz pp. 252-257. 449-453, 491-494, 621-625, 702-705 y 990-998.
Valores en %
347
Anexo F. Datos de la industria textil de algodón en los Estados en México, 1926-1939.
Estado Número de
fábricas
Personal
ocupado
Producción % No.
Fábricas
%
Personal
%
Producción
1926Total nacional 95,437,874$
Distrito Federal 16,451,107$ 17.24%
Jalisco 3,879,187$ 4.06%
México 1,518,591$ 1.59%
Nuevo León 2,191,026$ 2.30%
Puebla 29,768,197$ 31.19%
Querétaro
Veracruz 19,733,640$ 20.68%
1930Total nacional 171 38,500 $ 101,500,000
Distrito Federal 23 6,536 17,057,213$ 13% 17% 16.81%
Jalisco 5 120 53,312$ 3% 0% 0.06%
México 7 1,127 2,036,143$ 4% 3% 2.13%
Nuevo León 4 1,292 1,630,410$ 2% 3% 1.71%
Puebla 51 11,069 29,157,224$ 30% 29% 30.55%
Querétaro 2 1,615 2,713,144$ 1% 4% 2.84%
Veracruz 11 6,851 24,228,121$ 6% 18% 25.39%
1935Total del país 205 42,975 165,341,073$
Distrito Federal 58 6,353 29,023,344$ 28% 15% 17.55%
Jalisco 10 2,546 8,590,019$ 5% 6% 5.20%
México 11 2,248 6,887,224$ 5% 5% 4.17%
Nuevo León 4 1,394 2,333,111$ 2% 3% 1.41%
Puebla 62 12,567 49,835,617$ 30% 29% 30.14%
Querétaro 8 1,672 3,780,770$ 4% 4% 2.29%
Veracruz 10 6,829 35,394,556$ 5% 16% 21.41%
1937Total del país 184 43,300 167,858,757$
Distrito Federal 47 6,129 29,934,188$ 26% 14% 17.83%
Jalisco 9 2,896 10,521,540$ 5% 7% 6.27%
México 11 2,704 8,665,659$ 6% 6% 5.16%
Nuevo León 3 1,252 2,880,382$ 2% 3% 1.72%
Puebla 63 12,725 54,013,958$ 34% 29% 32.18%
Querétaro 5 1,275 3,674,200$ 3% 3% 2.19%
Veracruz 10 7,041 30,059,900$ 5% 16% 17.91%
1939Total del país 175 42,603 194,972,746.00$
Distrito Federal 34 5,484 31,402,879.00$ 19% 13% 16.11%
Jalisco 7 3,252 10,899,374.00$ 4% 8% 5.59%
México 10 2,673 11,650,266.00$ 6% 6% 5.98%
Nuevo León 3 1,100 3,111,446.00$ 2% 3% 1.60%
Puebla 66 12,727 61,178,963.00$ 38% 30% 31.38%
Querétaro 6 1,493 4,999,295.00$ 3% 4% 2.56%
Veracruz 10 6,894 35,781,380.00$ 6% 16% 18.35%
Fuente: Elaboración propia con datos de :
Biblioteca Lerdo de Tejada, SHCP. Archivos económicos, Industrias textiles en Mexico
Revista de Estadística, Dir. general de estadística, Secretaria de Economía Nacional Enero 1943. Méx.
Biblioteca del INEGI, Primer Censo Industrial de 1930 . Secretaria de economía Nacional. México 1933.
Cuadros II, III, y IV de los Tomos IX. Distrito Federal; XIV. Jalisco; XV. Edo. De México; XIX. Nuevo León;
XXI. Puebla; XXII. Quéretaro y XXX. Veracruz, pp. 252-257, 449-453, 491-494, 621-625, 702-705 y 990-998.
Cuadro 1, 5 y 9 del 2o. Censo Industrial de 1935 Rama hilados y tejidos de Algodón, pp. 24, 32, 38-39