traducción texto oceanía

28
“On the road of winds”, Patrick V. Kirch, 2000. Cáp.1 Discovering the oceanic past ; pp. 12-41 D. ILLANES 12 Y 13/ Descubriendo el pasado oceánico. Mientras esta excavación estaba en proceso, en mayo de 1950, llegó a nuestros oídos el descubrimiento del momento de W.F Libby, de un nuevo método de datación del carbón (imagino que se refiere al carbono, pero dice carbón y no me consta que se use para designar el carbono.) mediante la medida de la radioactividad. Una muestra de carbón de un fogón (del alero (refugio o lo q sea) de Kuli’ou’ou) …fue ingresada… revelando que el alero había sido ocupado alrededor del 1004 D.C. Esta fue la primera datación de radiocarbono proveniente de cualquier isla en el pacífico y abrió posibilidades inimaginables para reconstruir la prehistoria del área. Los isleños del pacífico siempre han promulgado su propia e indígena visión de la historia, codificada en la tradición oral que pasó de generación en generación. En el caso de occidente, las especulaciones acerca de los orígenes de estos isleños comenzaron con los grandes viajes de exploración en tiempos de la ilustración Europea, y continuaron cuando los misioneros y otros europeos empezaron a arraigarse en las islas del pacífico. A fines del siglo XIX , el desarrollo académico de la etnología y la arqueología tenía su equivalente local en la fundación de instituciones académicas en el pacífico. El tipo de evidencia buscado por los académicos que debaten acerca de la prehistoria oceánica han cambiado radicalmente a través de los años, la arqueología en este campo ha tomado peso únicamente desde la segunda guerra mundial, antes de el pionero trabajo de E.W. Gifford en Fiji en 1947, la mayoría de los antropólogos estaban convencidos de que las islas del pacífico carecían de un registro estratificado de los cambios culturales. La perspectiva histórica se hace indispensable para poder apreciar por completo nuestro entendimiento actual de la prehistoria oceánica y su arqueología. Este capítulo bosqueja los antecedentes intelectuales del estudia de la prehistoria del pacífico y la arqueología a lo largo de dos siglos, proporcionando así una suerte de espejo en el que se reflejan nuestros enfoques y perspectivas contemporáneos. Los viajes de la ilustración: Durante décadas, después de que Magallanes cruzara el pacífico en

Upload: nina

Post on 29-Sep-2015

233 views

Category:

Documents


2 download

DESCRIPTION

super aburrido

TRANSCRIPT

On the road of winds, Patrick V. Kirch, 2000. Cp.1 Discovering the oceanic past; pp. 12-41

D. ILLANES 12 Y 13/

Descubriendo el pasado ocenico.

Mientras esta excavacin estaba en proceso, en mayo de 1950, lleg a nuestros odos el descubrimiento del momento de W.F Libby, de un nuevo mtodo de datacin del carbn (imagino que se refiere al carbono, pero dice carbn y no me consta que se use para designar el carbono.) mediante la medida de la radioactividad. Una muestra de carbn de un fogn (del alero (refugio o lo q sea) de Kuliouou) fue ingresada revelando que el alero haba sido ocupado alrededor del 1004 D.C. Esta fue la primera datacin de radiocarbono proveniente de cualquier isla en el pacfico y abri posibilidades inimaginables para reconstruir la prehistoria del rea.

Los isleos del pacfico siempre han promulgado su propia e indgena visin de la historia, codificada en la tradicin oral que pas de generacin en generacin. En el caso de occidente, las especulaciones acerca de los orgenes de estos isleos comenzaron con los grandes viajes de exploracin en tiempos de la ilustracin Europea, y continuaron cuando los misioneros y otros europeos empezaron a arraigarse en las islas del pacfico. A fines del siglo XIX , el desarrollo acadmico de la etnologa y la arqueologa tena su equivalente local en la fundacin de instituciones acadmicas en el pacfico.

El tipo de evidencia buscado por los acadmicos que debaten acerca de la prehistoria ocenica han cambiado radicalmente a travs de los aos, la arqueologa en este campo ha tomado peso nicamente desde la segunda guerra mundial, antes de el pionero trabajo de E.W. Gifford en Fiji en 1947, la mayora de los antroplogos estaban convencidos de que las islas del pacfico carecan de un registro estratificado de los cambios culturales. La perspectiva histrica se hace indispensable para poder apreciar por completo nuestro entendimiento actual de la prehistoria ocenica y su arqueologa. Este captulo bosqueja los antecedentes intelectuales del estudia de la prehistoria del pacfico y la arqueologa a lo largo de dos siglos, proporcionando as una suerte de espejo en el que se reflejan nuestros enfoques y perspectivas contemporneos.

Los viajes de la ilustracin:

Durante dcadas, despus de que Magallanes cruzara el pacfico en 1520-1521, los galeones espaoles recorran anualmente las rutas martimas entre Amrica y Guam (donde los espaoles establecieron un pequeo asentamiento repleto de fuertes de piedra.) y de ah hasta Manila, regresando a Acapulco a travs de un tedioso y a menudo mortal paso por el pacfico norte. Buscando expandir la influencia del imperio, Mendaa lider su funesta expedicin para colonizar las islas Salomn en 1595. Las expediciones alemanas bajo el mando de Schouten y Le Maire (en 1615-17), Tasman (1642), y Rogeveen (1721) aumentaron el conocimiento geogrfico y cartogrfico que en europa se tena del ocano Pacfico. Los motivos de todos estos viajes eran meramente comerciales, y las bitcoras de los exploradores dan a conocer muy poco atisbo de curiosidad con respecto al otro.

Then, as the intellectual movement known as the Enlightenment gathered steam in the latter parts of the eighteenth century, interest in the peoples of the Pacific exploded.

As, mientras el movimiento intellectual de la ilustracin tomaba impulso a fines del siglo XVIII, el inters por las gentes del pacfico tuvo un aumento explosivo. Louis de Bougainville regres de Tahit en 1769 con reportes que causaron revuelo en los grandes salones parisinos, lo que ms tarde inspir a Denis Diderot (Autor de la famosa Encyclopdie) para escribir el Supplment au Voyage de Bouganville, con reflexiones acerca de la tolerancia social y la libertad sexual. Jean-Jacques Russeau bas su concepto para Lhomme naturel en el modelo tahitiano. Las gentes de los mares del sur fueron, de improvise incorporadas en el proyecto de la ilustracin.

Las tres expediciones del capitn James Cook, bajo el patrocinio conjunto del almirantazgo britnico y la Royal Society de Londres, ejemplifican el viaje de descubrimientos de la ilustracin, cuyas metas eran tanto el avance de las ciencias naturales como la expansin del imperio britnico.

Para su trgico tercer viaje (1776-1780) Cook haba visto e interactuado extensamente con las gentes del pacifico ms que cualquier explorador europeo antes que l. Cook qued realmente impactado ante las similitudes que percibi entre las gentes que hoy conocemos como polinsicos, quienes se encontraban en islas tan distantes entre s como Nueva zelanda, Isla de pascua, Tahit, Tonga, y el recientemente

Figura 1.1: El capitn James Cook fue uno de los primeros exploradores europeos que le prestaron atencin a la cultura polinsica, y desarroll una teora acerca de sus orgenes. (detalle de Un sacrificio humano en una Morai en Otaheite, dibujado por John Webber para el atlas de la tercera expedicin de Cook; coleccin del autor.

MARTIN RIOS: 14 Y 16 /

Despidindose de la Isla de Pascua en 1774, mientras en su segundo viaje, Cook reflexion que: es extraordinario que una misma nacin se haya propagado sobre todas las islas que constituyen casi una cuarta parte del globo (Beaglehole, ed, 1969:354). Los altos grados de relacin en el lenguaje fue una lnea de evidencia que Cook y sus compaeros notaron particularmente. En el tercer viaje, Cook haba esbozado una teora de origen:Desde la tierra que ellos originalmente emigraron, y por las huellas que ellos han propagado a travs de un vasto territorio, aquellos quienes son curiosos en sus razonamientos de esta naturaleza, pueden quizs no encontrar mucha dificultad para elaborar conjeturas. Esto ha sido ya observado, ellos soportaron fuertes marcas de afinidad en algunas tribus indias, que habita las Ladrones (Marianas) y las Islas Carolinas, y la misma afinidad puede ser trazada nuevamente entre los Battas y los Malays. Cuando estos eventos ocurrieron, no es fcil comprobar, probablemente esto no fue hace poco, como ellos tiene una alta poblacin, y no tienen tradicin de su propio origen pero son perfectamente fabulosos; mientras que por el contrario, el estado inalterado de su lengua general, y la simplicidad que aun prevalece en sus costumbres y maneras, parece indicar que no podra haber mucha distancia en tiempoLa tradicin iluminista de grandes expediciones exploradoras persisti despus de Cook bien entrado el siglo XIX, bajo el liderazgo de notables como La Prouse, Vancouverm DEntrecasteaux, Labillardiere, Krusenstern, Kotzebue, Freycinet, and Dumont d Urville (Fig. 1.2). Fue Domont Durville quien nos agobi* con la clasificacin tripartita de la gente del ocano pacfico: Polinesios, Melanesios y Micronesios. El gran periodo expedicionario culmin en 1838-42 con la Expedicin de Exploracin de los Estados Unidos bajo el liderazgo de Charles Wilkes cuyos resultados cientficos fueron publicados en un conjunto limitado de grandes volmenes. Volumen 6, Etnografa y filologa de Horacio Hale (1846) merece una mencin especial. Como Cook, Hale fue impresionado por las conexiones lingsticas entre las poblaciones del pacfico, y desarroll una teora del origen Polinsico basado en una rigorosa comparacin filolgica. Como Howard (1967:50) comenta: en las bases de su investigacin [Hale] concluy que el proceso* de emigracin fue de oeste a este, y que los polinesios pertenecen a la misma raza que las personas de las Islas Indias Orientales. Hale elabor una reconocida secuencia de migraciones dentro de Polinesia, con el grupo Fiji como escenario primario:La escena original es probablemente en el Grupo Fiji. Un grupo de Melanesios, o Papuano, lleg primero, y coloniz principalmente en las planicies aluviales que se extiende a lo largo de la costa oriental de Viti-levu. Despus una segunda compaa de emigrantes, de la raza polinsica, quizs desde algunas islas del Este Indio, llamado Bulotu, hacen su aparicin, y encuentran las costas occidentales no ocupadas, establecindose ellos mismo all*. Los dos, por ende, dividieron la tierra entre ellos, y se conocan unos a otros como las personas de oriente y las de occidente, o Viti y Tonga. (1846:178)En su dependencia de las comparaciones lingsticas, as como su vinculacin de los orgenes polinesios de la isla regin del sudeste asitico, Hale prefigura debates acadmicos contemporneos con respecto a la prehistoria del Pacfico.

Puestos de avanzada del imperio: Misioneros, Colonialistas, y Comienzos Acadmicos:

Antes que Estados Unidos organizara su propia expedicin en 1938, las islas del pacfico estuvieron bajo la influencia de la expansin proselitista, comercial e imperial. La Socit de Maire (Francia), London Missionary Society, y American Board of Commissioners for Foreign Missions (Boston) cada uno haba enviado grupos de misioneros a varios (principalmente Polinesia) destinos de Oceana. Estos proveedores de fe tomaron un gran inters en las lenguas, culturas, y tradiciones de las personas que ellos se esforzaron en convertir. Algunos, como William Ellis (1830) escribi etnografas fundamentales. Los orgenes de la teora de Ellis tuvo las ancestral migracin de Polinesia desde Asia va el estrecho de Bering y por la costa oriental de Norteamrica, de este modo evitando los problemas de cmo estas poblaciones podran hacer sus caminos contra constantes vientos alisos imperantes dentro del trpico (Ellis 1830, II:48)Los misioneros establecieron reglas ortografa para las lenguas indgenas, alentando a un gran nmero de indgenas a alfabetizarse. Algunos Polinesios tales como David Malo y Samuel Kamakau en Hawaii, Te Ariki Taraare en Rarotonga y Mamae in Mangaia comenzaron a escribir bajo su propia tradicin oral indgena. Kamakaus Ruling Chief of Hawaii (1961) sigue siendo un notable rcord dentro de la historia poltica indgenas y es regularmente consultado por arquelogos (e.g, Cordy 1996) y etngrafos historiadores (e.g., Kirch and Sahlins 1992).Los misioneros fueron los nicos blancos que arribaron a las islas, algunos puestos coloniales fueron establecidos en Nueva Zelanda, Tahiti, Fiji y en otros lugares. Entre los oficiales coloniales estaban Sir George Grey (que recogi una rica tradicin oral Maor), Basil Thompson (quien escribi en Fiji y Tonga), Abraham Fornander (un ministro del gobierno Hawaiano) y S. Percy Smith (quien registr la tradicin Rarotongan). Fornander compil una monumental coleccin de la tradicin oral Hawaiana (Fornanders Collection of Hawaiian Antiquities and Folk-lore, Thrum, ed. [1916-20]) y fue creador de un trabajo sinttico: An Account of the Polynesian Race (1878). Basado en su propia lectura de las tradiciones orales Polinsicas, Fornander propuso una elaborada teora de los orgenes Polinsicos:Yo creo que los datos recogidos nos lleva a la conclusin de que varias ramas de la familia son descendientes de personas consanguneas, pero mucho ms antiguas que la familia Vedic de raza aria; entr a la India antes de los Vedic*, que all sometieron a una mezcla con la raza Dravidian que ha influido constantemente en tu tez; que tambin ... se convirti en molde para la civilizacin Cushute-Arabian* de esta poca; que, fueron expulsados de la India por la fuerza o voluntariamente, para salir a colonizar, se establecieron en el archipilago indio en un perodo temprano, y se extendi desde Sumatra hasta Timor y Luzn. (1878:159) este prrafo no supe como traducirlo y fue una mezcla entre mi ingls penca y el traductor de google en realidad casi todo el texto lo hice as, pero en este caso fue fatal.Desde las islas del sureste de Asia, Fornander rastre los antepasados de los pobladores de Fiji, luego de Samoa y Tonga, y finalmente de una gran cantidad de islas del pacfico oriental. Las ideas Fornander llevaron gran fuerza en los estudios de Polinesia entrada la primera mitad del siglo XX.Como Fornander, S. Percy Smith (1921) confi en la poderosa tradicin oral de Polinesia, principalmente de los pobladores de Rarotonga (Islas Cook) y Taranaki (Nueva Zelanda). Smith postul una tierra natal india de los Polinesios, y usando estudios genealgicos, puso excesiva precisin calendrica a las fechas de los sucesos, tales como la migracin desde Java a Fiji y luego de las islas Lau entre el ao 0 y el 450 dc. (1921:158-59), asociado con los nombres de los antiguos jefes como Vai-takere y Tu-tarangi.En el fin del siglo, los campos de la etnologa y la antropologa fueron formalmente definidos en las universidades Europeas y Americanas, las instituciones acadmicas tambin surgi colgado en los principales centros del Pacfico (Rose 1980) DANI RIVERA: 17 Y 18/ En nueva Zelanda, La Sociedad Polinesia fue establecida en 1892 para promover el estudio de la Antropologa, Etnologa, Filologa, HIstoria y antigedades de la raza Polinesia, principalmente a travs de la publicacin de un Diario que lleva su nombre (el cual ha sido continuamente publicado desde esa poca). Igualmente significativo fue la fundacin, en 1889 en Honolulu, del Museo de Etnologa e Historia Natural de Polinesia Bernice Pauahi Bishop, un memorial a los ltimos jefes gobernantes de la dinasta Kamehameha que incorporaron sus colecciones de material etnogrfico hawaiiano (Fig. 1.3). El Primer director del Museo Bishop, William T. Brigham (Fig. 1.4), sostuvo el puesto hasta 1919, escribiendo innovadoras monografas sobre la etnologa Polinesia, incluyendo Implementos de piedra y trabajo en piedra de los antiguos Hawaianos (1902). En Nueva Zelanda, el museo Dominion en Wellington y el museo Otago en Dunedin proporcion similares bases institucionales para escolares tal como Elsdon Best, quien llev a cabo importantes investigaciones sobre fortificaciones Maori pa (best 1927).En este periodo premoderno de la Antropologa acadmica, la Arqueologa (o el estudio de antigedades) no era an distinguida de la etnologa, y los mismos que profesionales comenzaron a realizar ambos, trabajo etnogrfico y estudio de artefactos en museo. Ellos (stressed= Resaltaron)? la descripcin sistemtica y la clasificacin de material cultural, como fue publicado en el Museo Bishop y en las monografas del Museo Dominion. De todas maneras algunas excavaciones reales fueron llevadas a cabo. Ya en 1872 Julius Von Haast en Nueva Zelanda excav sitios en South Island donde artefactos prehistricos fueron mezclados con los huesos de aves moa extintos. Esto nos induce a considerar excavar sitios en South Island y la reunin de colecciones de artefactos desenterrados pertenecientes al museo (que generalmente carecen de procedencia estratigrfica). En 1913, John F. G. Stokes del Museo Bishop excav un refugio rocoso estratificado en Kaho'olawe en islas hawaianas, recuperando anzuelos de hueso y otros objetos. A diferencia de sus contemporneos en Nueva Zelanda, Stokes reconoci y sigui la estratigrafa presente en el refugio rocoso de Kamohio, pero sus cuidadosas anotaciones de estas asociaciones fueron ignoradas cuando J. G McAllister (1933b) puso por escrito el sitio dos dcadas despus. Stokes (1991) ademas midi los templos de los sitios en Molokai y Hawaii, en un esfuerzo de poner a prueba la teora del director del museo Brigham de los dos estados de desarrollos de la religin Hawaiina (Dye 1989).Otro pionero arqueolgico del periodo premoderno, Katherine Scoresby Routledge, llevo a cabo una notable expedicin a Rapa Nui (Easter Island) entre 1913 y 1916 (ver Fischer 1997:125-39). La descripcin de Routledge acerca de su diseo de investigacin contrasta maravillosamente con la jerga acadmica contempornea: Cuando decidimos conocer el Pacifico antes de morir, y preguntarle a las autoridades antropolgicas del Museo Britanico que trabajo quedaba por hacer, la respuesta fue Easter Island. Fue un proyecto mucho ms grande de lo que estaba contemplado, tenamos dudas de nuestra capacidad para tan importante aventura. (1919:3-4)Ni la menor de sus dudas trataba de la extrema dificultad de llegar a la remota Isla de Pascua (Easter Island), rica en rutas de steamship (estos barcos de vapor) comerciales. Fue as por lo tanto decidido, como Scoresby es un navegante aficionado, que vala la pena conseguirse en Inglaterra un pequeo barco de nuestra propiedad, adaptado para el propsito, y zarpar en ella.El Mana de 90-pies le proporcion a Routledge operaciones de base como las que ella realiz en la primera minuciosa exploracin del singular complejo estatuario de Easter Island. Basada en sus estudios de terreno, Routledge concluy correctamente que varios vnculos conectan a la gente que vive ahora en Easter Island con las grandes imagenes y que esas fueron el trabajo de los ancestros de la gente habla-polinesia Rapa Nui (1919:291) Routledge public slo una popular, pero no obstante muy valiosa, cuenta de su trabajo de campo (1919), y por muchos aos sus notas originales se temieron prdidas. (Routledge misma fue trgicamente internada en una institucin mental durante sus ltimos aos). Sus Notas han sido localizadas y constituyen una mina etnogrfica as como datos arqueolgicos. El inters Antropolgico en Oceana fue intensa en el fin de sicle, marcada por lo que Welsch (ed., 1998:-565) llama el periodo de expedicin de la investigacin etnolgica. Entre las mejores investigaciones de estos aos estuvieron la debidamente famosa expedicin de Cambridge al Estrecho de Torres dirigida por A. C. Haddon (Herle & Rouse 1998), el Estudio etnogrfico de Papa, por C. G. Seligman (1910), la expedicin Percy Sladen Trust bajo W. H. Rivers (1914) y la Expedicin Joseph N. Field del Pacfico Sur dirigida por A. B. Lewis (1998). Todas estas expediciones se enfocaron en Melanesia, mientras que la Expedicin German Hamburgo abarc Melanesia y Micronesia (Thilenius 1902). Pese al temprano nfasis en Melanesia, el foco de muchos trabajos etnogrficos y arqueolgicos fue desplazado prontamente por Polinesia, habiendo permanecido por mucho como la gran preocupacin de la arqueologa, hasta hace poco.Las primeras dos dcadas del siglo XX, la antropologa del pacfico gradualmente toma lugar en la academia, incremento dominado por investigadores jvenes, con ttulos doctorales (el primero es el 1894, en Harvard). La antropologa en esta poca temprana tiene una fuerte orientacin histrica, promulgada por lderes como F. Boaz (U de Columbia), Rolan Dixon (Harvard) y Alfred Kroeber (Berkeley). Otra figura importante, Edward Sapir, traza las bases metodolgicas para la antropologa histrica en su clsico trabajo: Perspectiva temporal en la cultura de aborgenes americanos (1916). La evidencia arqueolgica juega un rol en el esquema de Sapir, sin embargo sta es subordinada a la etnografa comparativa tanto como lingustica. Un sesgo que influenci la reconstruccin histrica del Pacfico hasta despus de la segunda guerra mundial. Esta relegacin de la arqueologa a un rol menor, refleja la ausencia de un mtodo independiente para fechar, o para establecer una temporalidad (las dataciones radiocarbnicas no se inventaron hasta fines de 1940s). Como Bruce Trigger (1989) observa, la arqueologa americanista durante la primera mitad del siglo XX estuvo absorta en desarrollar mtodos cientficos para poder establecer cronologas, para reconstruir las secuencias culturales, en ausencia de textos histricos que pudiesen corroborarlo. Estas islas del pacfico no carecan solamente de textos escritos, sino que tambin de cermica. Dejando slo la arquitectura monumental y las herramientas de piedra como los principales objetos de estudio arqueolgico.

El problema del origen polinesio.1920 marc un hito en la antropologa del pacfico. Herbert E Gregory, el profesor Silliman de Geologa en la U de Yale y el presidente del comit de investigaciones del pacfico del Consejo Superior de Investigaciones Cientficas, quien acababa de ser nombrado director del Museo Bishop en Honolulu. Gregory trajo a sus nuevas publicaciones una asociacin acadmica con Yale y 40mil dolares (una suma sustancial de dinero para la poca) donado a la universidad por alumnos (corredor de valores), Bayar Dominick y designados por investigadores polinsicos. Gregory convoc la primera conferencia cientfica del Pan-pacfico en Honolulu, la cual elabor un set de Recomendaciones para investigaciones antropolgicas en polinesia, incluida la arqueologa. Desde que la arqueologa polinsica es en muchos aspectos un campo virgen, el primer problema es hacer estudios-encuestas en las islas Tal encuesta no debe revelar el contenido de la arqueologa para las islas estudiadas, sino que debe aconsejar respecto a las relaciones temporales y variaciones locales (Gregory, ed., 1921:117).Con muchos fondos de Yale a disposicin, Gregory implement las expediciones Bayard Dominick siguiendo las recomendaciones de la conferencia cientfica del pan-pacfico y entonces resolver el problema de los orgenes polinesios. Cuatro equipos, compuestos por jvenes y enrgicos estudiantes graduados de las universidades americanas de lite, fueron rpidamente reunidos y enviados a las Marquesas, Tonga, Australes y Hawaii. Cada equipo incluy etnlogos para el estudio de la organizacin social y la religin, y un arquelogo para evaluar las estructuras de piedra y la cultura material, con los asistentes e intrpretes necesarios posicionados en puntos estratgicos para realizar los estudios necesarios con el fin de establecer las normas fsicas desde la cultura material, tradiciones y lenguaje de los polinsicos (Gregory). El grupo de trabajo estaba equipado con calibradores y cartas antropomtricas estandarizadas para registrar las caractersticas fsicas del mayor nmero de habitantes nativos posibles de las islas estudiadas (Hiroa 1945: 45). Estas dataciones somatolgicas seran trabajados por Louis R. Sullivan y, posteriormente, Harry Shapiro del Museo Americano de Historia Natural. En resumen, las expediciones Bayard Dominick, implementaron el primer modelo holstico de estudio antropolgico en Polinesia, siguiendo a Sapir (1916) y su propuesta metodolgica para una reconstruccin histrica.En retrospectiva, la arqueologa juega un rol secundario en las expediciones Bayard Dominick. En las Marquesas, Ralph Linton decidi precipitadamente que las islas presentan pocas oportunidades para las investigaciones arqueolgicas,... faltas de oportunidades otorgadas por la acumulacin gradual de depsitos estratificados, en la medida que no se conocen conchales o restos de estas caractersticas (basurales p.e.) en las islas. Linton hizo esta valoracin negativa sin haber puesto una pala en el suelo, y dcadas ms tarde las Marquesas demostrara tener uno de los registros arqueolgicos ms ricos de cualquier archipilago polinesio (Suggs 1961).John F. C. Stokes, ms en sintona con el potencial de la arqueologa y ya adelantada por el trabajo de campo en Hawai, dirigi el equipo de las islas australes y sitios aldeas fortificadas estudiados en la isla de Rapa (Fig. 1.6). Por desgracia, era lento para producir su monografa, y despus de una pelea con el director Gregory, el manuscrito de Stokes fue dejado de lado en los archivos del museo, donde ha languidecido hasta nuestros das.En Tonga, William C. McKern era slo un poco menos pesimista. "Como primera consideracin, el panorama arqueolgico en Tonga no es prometedor. El estudiante encuentra aqu un campo moteado, pobres en depsitos estratificados atribuibles a fuentes humanas, pero rica en monumentos artificiales de tierra y piedra". Pero McKern, al menos, trat de cavar, y fue recompensado con el descubrimiento de la cermica, hasta ahora desconocido en Tonga. "En varios lugares dispersos se encontr (cermica), en depsitos estratificados, que ocurre con mayor abundancia en los estratos libre de evidencia de contacto europeo". Sin embargo, obstaculizado por la falta de un mtodo para la datacin de cermica, McKern interpretado errneamente sus fragmentos como una variante de la cermica prehistrica tarda de Fiji, sin gran profundidad temporal. McKern habra sido consciente de la cermica casi idntica encontrada por un sacerdote belga (Meyer 1909) en la pequea isla de Watom, 4.500 kilmetros al oeste, podra haberse dado cuenta de que sus tiestos de Tonga en realidad eran de considerable antigedad; la celebracin de pistas para la primera fase de asentamiento humano en la remota Oceana (El complejo cultural Lapita, vase el captulo 4). Sin embargo, se perdi la oportunidad, y la tarea de reconstruir la prehistoria del Pacfico fue entregado a los etnlogos.Edward S. C. Handy, jefe del partido Marquesas de las expediciones Bayard Dominick, subi rpidamente su prestigio en los estudios de la Polinesia. Haciendo caso omiso de la evidencia limitada de la arqueologa (y cuidada metodologa de Sapir), Handy promulg una teora de los orgenes polinesios y las migraciones, mejorando los esfuerzos anteriores de Abraham Fornander y S. Percy Smith. Basndose en estos datos etnogrficos de Tahiti, Handy traz un esquema difusionista complejo, en el que varios "rasgos" de la cultura polinesia se correlacionaron con las culturas "budistas" y "brahmnica" de la India; e Indochina, Malasia, y China (Handy 1930a, ver tambin Linton 1923).Los puntos de vista de Linton y Handy no concordaban con todos los etnlogos, quienes estaban cada vez ms disconformes con el paradigma difusionista promovido por ciertos eruditos Alemanes tales como Fritz Grabner (1905) de la escuela Kulturkreis (ver Harris 1968; 382-92) que estaba en desacuerdo con el cuidadoso particularismo histrico de Franz Boas y Edward Sapir. En un trabajo, cuya sofisticada teora cultural estaba adelantada a su tiempo, Edwin Burrows (1938) argument que las diferencias entre las culturas de la Polinesia Occidental y la Polinesia Oriental haban resultado del proceso cultural in situ, como el desarrollo local y el abandono o el rechazo de las ideas, dcadas ms tarde, la arqueologa apoyara las ideas de Borrows. Ralph Piddington, el editor pstumo de los voluminosos trabajos comparativos de Robert W. Williamson (1924) sobre la organizacin social y la religin de la Polinesia, tambin atac la historia difusionista de Handy. Pero Piddington no se dio cuenta de que la arqueologa puede contribuir ms directamente al conocimiento del pasado. Su opinin era que la arqueologa "no produjo ningn organismo integrado de conclusiones histricas" y que esto era: en parte debido al hecho de que los tipos de cultura revelados por la investigacin arqueolgica en Polinesia no varan mucho de las que prevalecan cuando la isla se descubri por primera vez ... Esto significa, en efecto, que hay lmites definidos a lo que la arqueologa puede aadir a nuestro conocimiento de la cultura material de la Polinesia, y que ello implica para la mayora de los casos nada ms que una duplicacin de la informacin (etnogrfica) que ya est disponible. Por tanto, existe poca esperanza de la aparicin de cualquier serie de tipo cultural, como se ha establecido en otras partes del mundo. (Piddington 1939. 334-35)

Figura. El etnlogo del Museo Bishop, John F.G. Stokes y su esposa, en el muelle de Isla Rapa en 1920, durante la Expedicin Bayard Dominick. Stokes fue un pionero en la arqueologa polinsica en muchos aspectos adelantado a su poca.

Figura. El etnlogo del Museo Bishop Keneth P. Emocy (al centro) miembro del equipo Hawaiano de la Expedicin Bayard Domick durante las excavaciones del grupo de estructuras en el crter Hanakauhi (no segura de esa palabra) en Maui en 1920. Este fue el primer proyecto de campo en Polinesia de Emory.

Sustentando esta declaracin audaz pero errnea, est el rechazo incuestionable de cualquier cambio cultural o desarrollo en la cultura de las Islas del Pacfico. La arqueologa, en la visin estrecha de Piddington, revel vestigios materiales que simplemente duplic lo que ya estaba documentado etnogrficamente. Ningn registro estratificado de que existi un cambio cultural. Todo era esttico y atemporal en Oceana, en verdad, se trataba de "pueblos sin historia".Sorprendentemente, dada esta perspectiva sofocante, una cierta cantidad de arqueologa de campo bsica se logr en el Pacfico antes de la Segunda Guerra Mundial, la mayora en la Polinesia. Keneth P. Emory (Fig 1.7), Wendell C. Bennet, J.G McAllister, y otros, mapearon y registraron estructuras de piedra en Hawai, Las Islas de la Sociedad, los atolones ecuatoriales, y en otros lugares, y utilizaron estos datos para plantear hiptesis histricas relativas a las migraciones polinesias (Bennett 1931, Emory 1921, 1924, 1928, 1933, 1934a, 1934b, McAllister, 1933 a, 1933b). En Micronesia, Laura Thomson (1932) sintetiz colecciones excavadas por dos aficionados en Guam y otras islas Marianas. Sin embargo, a pesar de las continuas excavaciones en Nueva Zelanda (por ejemplo Duff 1942, Lockerbie de 1940, Skinner 1923-1924) prcticamente toda la arqueologa del Pacfico antes de la Segunda Guerra Mundial se restringi al reconocimiento de la superficie y a la descripcin y clasificacin de la cultura material.Antroplogos Fsicos de los aos 1920 y 1930 tambin intervinieron en los debates en torno a los orgenes de la Polinesia. Roland Dixon, de Harvard, (1929) consider a los polinesios como una mezcla de varias oleadas migratorias (incluyendo australoides, negroides ocenicos, caucsicos y mongoloides), cada uno con sus propias caractersticas somticas distintivas. De manera similar, Louis Sullivan (1924), quien tabul y analiz las observaciones antropomtricas obtenidas por la expedicin Bayard Dominick, escribi que los antroplogos han estado en desacuerdo en las afinidades raciales de los polinsicos. Algunos los han clasificados como mongoles, otros como caucsicos, mientras que otros aun los mantienen como razas separadas. Esto es una fuerte evidencia de que los polinsicos son una raza muy mixta. Por cada vez que ha habido un desacuerdo general a las afinidades raciales de un grupo se ha encontrado casi invariablemente que este grupo no es uno homogneo. (1924, 22, nfasis aadido.)

Desde la perspectiva de la biologa de la poblacin moderna, tales declaraciones anticuadas como menos, perniciosamente racistas a lo msson representativas del pensamiento tipolgico (encasillamiento) de este periodo. En las dcadas que llevaron a la Segunda Guerra Mundial, sirvieron de combustible a la visin Blanca de pureza racial y el deseo de restringir la inmigracin extranjera, especialmente la de las razas asiticas. Un resultado de esta actitud fue la particular conformacin de las teoras histricas dl prominente erudito polinesio Te Rangi Hiroa. Te Rangi Hiroa y la Ruta Micronesia a Polinesia. Te Rangi Hiroa (Sir Peter Buck) Uno de los ms prominentes eruditos polinsicos de mediados del siglo veintecreci en un mundo bicultural, aprendiendo el lenguaje y las costumbres de su madre Maor mientras aspiraba a las instituciones culturales de su padre Irlands. Nacido en 1977, Hiroa fue al colegio de Te Aute, un internado anglicano para los nios Maori, ganando su ttulo medico en la universidad mdica de Otago en 1910.

Su servicio al gobierno como oficial mdico de los Maons y su puesto en el parlamento de Nueva Zelanda fueron interrumpidos por su alistamiento en el tan festejado regimiento Maon que apenas sobrevivo al debacle como Gallipoli. Incluso antes de la Gran Guerra, Hiroa se estaba en trance con la investigacin etnolgica, y public su primer paper en La Revista de la Sociedad Polinesia en 1910. Despus de haber hecho un nombre en la etnografa de Nueva Zelanda, Hiroa acept una cita con el personal del Museo del Obispo en 1927 y comenz a llevar a cabo estudios de campo en polinesia tropical. Despus de haber servido un periodo como profesor visitante en la Universidad de Yale en 19932-34, el fideicomisados del museo invit Hiroa para ocupar el cargo de director luego de la jubilacin de Herbert Gregory en 1936.

Para finales del 1930 Hiroa era respetado internacionalmente como una autoridad en la cultura polinesia y como el director del Museo del Obispo, tena una prominente posicin acadmica. (Adems tena el ttulo de profesor de la universidad de ale) Aun as Hiroa se encontr a si mismo como parte de una sociedad polinsica removida por las ideas de las diferencias innatas entre las razas humanas. Estaba orgulloso de sus ancestros Maori, y a la vez dolorosamente consciente de como muchos Blancos vean a los Polinsicos como inferiores, clasificados por algunos antroplogos (Como Sullivan y Dixon) como una raza mal mezclada incorporando tanto los elementos negroides como mongoloides. A pesar de su fama acadmica (como tambin su servicio poltico y en guerra) Hiroa haba fallado en recoger para s la ltima forma de reconocimiento del pueblo de su madre con el ttulo de caballero. Esto lo llev a buscar ciudadana americana, pero ah se tuvo que enfrentar al prejuicio racista, para muchos americanos los polinsicos eran la parte mongoloide de la temida peste amarilla.

En este contexto poltico y racial, Hiroa estaba desarrollando cautelosamente una nueva teora de los orgenes polinsicos, una que sorpresivamente evitaba cualquier asociacin entre la gente polinsica y los habitantes de piel oscura de Melanesia (clasificados como negroides ocenicos). La mayora de las teoras de esos tiempos trazaban las migraciones polinsicas a travs de la melanesia, implicando que los polinsicos tenan componentes raciales melanesios. A principios del 1930, mientras revisaba Rivers Historiy of Melanesian society, Hiroa le escribi a su amigo Sir Apirana Nagata que Si t puedes borrar cualquier rastro de sobrevivencia de la influencia melanesia en las organizaciones sociales melanesias, mucho mejor. En 1938 Hiroa public su teora en un libro hecho para una extensa audiencia. Las paginas finales del libro contenan un mapa del pacifico con flechas que llevaba la frase El tringulo polinsico con la ruta Micronesia del norte y la ruta del ser de la rechazada teora Melanesia. Para evitar cualquier contaminacin con la Melanesia, Hiroa hizo los ancestrales polinesios migrar desde la isla del sudeste de Asia por medio de los atolones de Caroline y el archipilago de Kirbats. Invoc los estudios antropomtricos hechos por el Museo del Obispo, clamando que Los maestros marinos del Pacific deben ser Europeos ya que no son caracterizados por el cabello frondoso, la piel negra y las piernas delgadas de los negroides, tampoco tienen la cara plata ni los rasgos de ojos cados de los mongoloides.

Hiroia explic su caso as:

A la luz de los recientes estudios comparativos de la cultura material y organizaciones sociales de Melanesia y Polinesia, es improbable que las grandes migraciones al pacfico hayan pasado a travs de la melanesia. En general los polinsicos son fsicamente muy diferentes a los melanesios. Si se hubiesen detenido en las islas melanesias para reparar sus naves y recolectar vveres, es probable que hubiese tenido lugar el mestizaje racial y las caractersticas negroides aparecieran de forma consistente entre los polinsicos

La fuerte evidencia a favor de la ruta micronesia recae en la evidencia en contra de la ruta melanesia. Es desafortunado que la poblacin original de micronesia haya sido sobre yacidas con elementos mongoloides que aparecieron en los ancestros luego de que los polinesios pasaran por ah. Aun as, a pesar de la imposicin de un nuevo lenguaje en el rea, numerosas palabras polinesias marcan el rastro ancestral.

A pesar de que Hiroa hizo parecer que el peso de la evidencia apoyaba su teora de la ruta micronesia, de hecho existan problemas. Uno de los ms serios, el cual Hiroa mismo reconoci, fue el origen de la compleja actividad horticultora polinsica que existe en melanesia y como esta no pude derivar de los atolones de micronesia. Por otra parte, la sofisticada industria de herramientas de piedra de polinesia tendra que haber sido reinventada luego de un periodo de adaptaciones para bombardear la tecnologa en micronesia.

Para resolver esos problemas, Hiroa tuvo la readquisicin de plantas alimenticias y animales domsticos de los Polinesios desde los Melanesios en Fiji, a travs de Samoa y Tonga: "No soy un etnobotnico, pero siento que, aunque los Polinesios viajaron hacia el interior de Polinesia central por la ruta Micronesia, aquellas plantas de alimentos tan importantes como la del rbol del pan, pltano, ame y malanga ms fina, se realizaron desde Indonesia a Nueva Guinea y pasadas por melanesios a su puesto de avanzada en el este, en Fiji. . . . Las plantas alimenticias ms ricas que alcanzaron Fiji tuvieron que ser pasadas a la Polinesia central a travs de islas volcnicas. La primera estacin de traspaso en la Polinesia occidental fue proporcionada por Samoa o Tonga" (1938a:307-8). Esta no fue una explicacin parsimoniosa, pero para Hiroa era esencial si es que su ruta micronesia deba ser comprobada.

"Vikingos de la salida del sol" fue pensado para una audiencia pblica amplia, a quienes Hiroa (publicando bajo su nombre Ingls Peter H. Buck) deseaba ganar sobre la idea de que los polinesios eran "Europoides". Pero tambin expuso su teora en una monografa acadmica densa dentro de la cultura material de las Islas Cook (1944 ; vase tambin Hiroa 1945:12-13). All, en una larga discusin , rechaz la teora de "dos estratos" de Handy, y avanz su propia proposicin de que la diversidad de culturas polinesias se haba originado a partir de una sola poblacin "Polinesia Temprana", que haba entrado en el Pacfico desde Indonesia a travs de Micronesia (Fig. 1.9). Como Burrows (1938), Hiroa dio cuenta de que la posterior diferenciacin de las culturas de la Polinesia fue resultado de una variedad de procesos culturales internos.

Me he detenido largamente sobre Te Rangi Hiroa, tanto porque l era la autoridad prominente en Polinesia a mediados del siglo XX, y porque su trabajo demuestra cmo el contexto socio-poltico de cualquier estudioso puede influir en el desarrollo de sus ideas. La teora de la "ruta de Micronesia" -nunca bien respaldada por evidencia emprica- caera por completo una vez que la arqueologa estratigrfica y la lingstica comparada modernas fueron llevados a lidiar con el problema despus de la Segunda Guerra Mundial. Basndose casi exclusivamente en datos etnogrficos comparativos -especialmente la cultura material- Hiroa fue, sin embargo, capaz de montar un argumento convincente. Su trabajo marca la culminacin del perodo de dominacin de la etnografa en la prehistoria del Pacfico, con la arqueologa como un simple espectador. El descubrimiento de la profundidad temporal y el cambio en la cultura

La Segunda Guerra Mundial centr una atencin sin precedentes en el Pacfico, ya que miles de soldados norteamericanos se abrieron paso a travs de las selvas de Guadalcanal y otros lugares exticos. En parte como resultado de este elevado inters en el Pacfico, al finalizar la guerra se lanzaron varios programas antropolgicos regionales. Mientras que la antropologa del Pacfico en la primera mitad del siglo XX haba sido dominada por la etnografa, la arqueologa entr rpidamente en si misma poco despus de mediados de siglo. El profesor Edward W. Gifford de la Universidad de California, Berkeley, quien como joven etnlogo haba dirigido en 1920 la Expedicin del Bayard Dominick a Tonga, decidi en 1947 convertir su mano a la arqueologa. Convencido por las opiniones prevalecientes de Hiroa y otros de que no haba estratificacin cultural en la Polinesia, Gifford eligi enfrentarse a Fiji:

Como Polinesia tropical haba cedido arqueolgicamente slo la fase temprana de las culturas locales que se estaban desarrollando en el momento del descubrimiento, me decid a buscar ms al oeste por una sucesin de culturas. Fiji pareca un lugar probable, y, por otra parte, razon que podra mostrar rastros de antiguos polinesios, si es que ellos haban llegado a travs de Fiji. Tambin, razon que las grandes islas, en lugar de las ms pequeos, seran susceptibles de producir una sucesin de horizontes culturales, los colonizadores temprano presumiblemente seran atrados por las grandes masas de tierra ms que por las pequeas. De ah que Viti Levu, de superficie de ms de 4.000 kilmetros cuadrados, fue seleccionada. (1951: 189)

Gifford explor Viti Levu durante seis meses, descubriendo 38 sitios y excavando dos, Navatu y Vunda (vase el captulo 5), ambos bien estratificados y conteniendo una secuencia de cambios en los estilos cermicos. Gifford no estaba seguro de las edades de estos sitios, pero en base a comparaciones estilsticas externas, pensaba que los materiales estratigrficamente ms tempranos podran correlacionarse con "la Edad de Bronce del sudeste de Asia a travs de Borneo y las islas Salomn" (1951: 237). Se lanz la poca moderna de la arqueologa del Pacfico.

Animado por sus resultados de Fiji, Gifford organiz una segunda expedicin arqueolgica del Pacfico en 1952, esta vez a la gran isla de Nueva Caledonia (Gifford y Shutler 1956). El mtodo pionero de datacin radiocarbnica de Willard Libby acababa de ser desarrollado, y Gifford aprovech la oportunidad para datar muestras de carbn de su costa oeste de Nueva Caledonia, Gifford y su alumno Richard Shutler, Jr. (Fig. 1.10) encontraron un tipo caracterstico de estampado cermico, que Gifford reconoci como casi idnticos a los tiestos que su compaero de trabajo de la expedicin Bayard Dominick, McKern, haba encontrado en Tonga en 1920. Lo que verdaderamente asombr a Gifford, sin embargo, fue la edad de las muestras de carbn asociadas a estos, fechado por C14: 2800 + -350 A.P.

Figura 1.10 Profesor Edward W. Gifford (centro izquierda) de la Universidad de California y su asistente estudiante graduado Richard Shutler, Junior (centro derecha), asistido por trabajadores locales, durante su expedicin en 1952 a Nueva Caledonia. Fue durante esta expedicin en que el sitio de Lapita fue descubierto. (Foto cortesa P. A. Hearst Museo de Antropologa).Texto:Inesperadamente todos los previos supuestos acerca de la profundidad temporal superficial de las culturas de las islas del pacfico parecan derrumbarse; las excavaciones de Gifford revelaron justo el tipo de estratificacin cultural que Piddington y otros haban reclamado que no exista. Aqu haba un tipo de cermica finamente decorada, mostrando una temprana conexin entre Melanesia y Polinesia, bastante contrario a la teora de la ruta de Micronesia de Hiroa. Ciertamente, que tempranamente llego a ser llamada el estilo de la cermica de Lapita que cruz el lmite de separacin entre Polinesia y Melanesia, y esto podra con el paso del tiempo incluso hacer a los etnlogos repensar las categoras fundamentales que ellos haban heredado del tiempo de Dumont dUrville (e.g., Thomas 1989).Alrededor de la misma poca (1949-50), Alexander Spoehr del Museo de Campo de Historia natural en Chicago, explor la arqueloga en las Islas Marinas de la franja occidental de Micronesia (Spoehr 1957). El tambin encontr sitios bien estratificados mezclados en una secuencia de cermica, as como arquitectura en piedra que podra ser colocada en la parte posterior de la secuencia cultural (ver captulo 6). Spoehr tom ventaja de las nuevas dataciones del mtodo de radiocarbono para obtener una fecha base de 1527 +- 200 Antes de Cristo del sitio de Chalan Piao en Saipan. l audazmente argument que mientras la reconstruccin prehistrica de Oceana haba previamente dibujado en otras ramas de la antropologa, es en gran medida de los datos de arqueologa que debe construirse el conocimiento futuro de la historia la cultura ocenica (1957:17). Designado para suceder a Hiroa como el director del Museo de Bishop despus de la muerte de este ltimo en 1951, Spoehr estuvo pronto en una posicin influyente para avanzar en esa agenda de investigacin.Ciertamente, menos de un ao antes Te Rangi Hiroa falleci de Cancer, el Bishop Museo de Kenneth P. Emory (en ese entonces un experto veterano de la antropologa del Pacfico), haba sido el primero en atender la llamada de Willard Libby para muestras de radiocarbono de los sitios de las islas del Pacfico. Emory, ocupado en excavar el Kuliouou Rockchelter en la isla de Oahu envi a Libby una muestra de un hogar en la base del depsito cultural de la vivienda: El 19 de Febrero de 1951, Buck (Hiroa) llam a Kenneth a su oficina y ley en voz alta una carta recin recibida de Chicago. Libby haba fechado la muestra en radiocarbono de Kenneth de la cueva en Kuliouou en 1004 A.D, ms o menos 180 aos. Esta fue la primera datacin de radiocarbono para la Polinesia. Chico, estaba yo emocionado, dijo Kenneth ms tarde. Inmediatamente esto abri toda una nueva vista de posibilidades (Krauss 1988:338).Respaldado por la llegada de Spoehr en el Museo de Bishop en 1953, Emory lanz un gran programa de arqueologa Hawaiana, excavando sitios a lo largo de todas las principales islas, dirigiendo la definicin de una secuencia basada no en cermica-que estaba ausente en la Polinesia Oriental-pero si en modificaciones de estilos de anzuelos en concha y en hueso (Emory et al. 1959).Sin embargo, Emory en Hawaii no era el nico etnlogo vuelto hacia la arqueologa ahora buscando por nueva evidencia con la cual reconstruir el pasado polinsico. Una dcada antes, Roger Duff haba comenzado excavaciones en Wairau Bar en Nueva Zelanda, las cuales contenan ambas habitaciones depsitos y entierros. Duff abri su clsica monografa en el sitio de Wairau Bar con su notable declaracin: los estudiantes de etnografa de la Polinesia tienen en sus manos una notable laboratorio humano en el que estudiar cualquiera de las leyes que determinan la evolucin cultural humana en el tiempo y en espacio. l observ que si una cultura humana se haba mantenido esttica uno podra tener la expectativa de que alguna cultura de alguna isla se mantuviera exactamente como la otra (1950:1). Obviamente este no haba sido el caso del Pacfico, incluso aunque los etnlogos hubieran atentado a explicar las diferencias culturales como resultado de sucesivas migraciones, o oleadas de personas. Pero en Nueva Zelandia, Duff y sus colegas, tal como E. D. Skinner and L. Lockerbie, descubrieron evidencia arqueolgica directa de cambios culturales locales, en parte a causa de la adaptacin a las temperadas condiciones de estas islas. Duff concluy que la mayor contribucin de estos estudios a la teora de los cambios culturales en la Polinesia es la demostracin de que la cultura podr alterar por unos continuos y principalmente auto motivados procesos de cambio. Finalmente, cambios y procesos culturales estn siendo integrados en la arqueologa del Pacfico y en investigaciones antropolgicas.Al considerar este rejuvenecimiento de la arqueologa del pacfico inmediatamente seguida de la Segunda Guerra Mundial, uno no puede exagerar la significancia de la datacin por radiocarbono. En una organizacin independiente, cientficos haba desarrollado medios por los cuales las culturas materiales pudieron ser directamente datadas, liberando a arquelogos de confusas conjeturas basadas en presuntas correlaciones estilsticas, a menudo sobre vastas distancias geogrficas. Por otra parte, las edades producidas por las primeras muestras datadas de Nueva Caledonia, Saipan, and Oahu fueron en exceso con respecto a lo que las teoras etnogrficas ortodoxas haban predicho. De aqu en adelante, la prehistoria del Pacfico perteneci a la arqueologa, aumentado por la lingstica histrica, otro campo de desarrollo en la era Post Segunda Guerra Mundial. La dominancia de la etnologa comparativa y los difusionistas eran cosa del pasado.La Bsqueda de la Secuencia PolinsicaInspirada por los xitos de Gifford, Spoehr, Emory, and Duff, y otras investigaciones unidas al panorama de la arqueologa del Pacfico durante los aos 1950.A pesar de los emocionantes descubrimientos de Fiji, Nueva Caledonia, y las Marianas, el ms grande foco se mantuvo en Polinesia. Emory, luego unido por Yosihiko Sinoto (Fig.1.11) and William J. Bonk, se concentraron en la excavacin de refugios estratificados y dunas de arena a lo largo de las islas Hawaianas. Despus de 1960, Emory y Sinoto (1965) extendieron sus investigaciones a las Islas Sociedad y Las Marquesas. En Nueva Zelanda, los esfuerzos pioneros de Duff fueron pronto incrementados como el departamento de (continuacin pg.30) antropologa en la Universidad de Auckland cuando nombr su primer arquelogo acadmico.DAVID CARVALLO: 30 y 31/

Jack Golson, un graduado de la Universidad de Cambridge, llev a Nueva Zelanda la tradicin de la Arqueologa Materialista heredada de sus mentores Gordon Childe y Graham Clarke. Golson rpidamente comenz a profesionalizar y mejorar los estndares de las excavaciones en Nueva Zelanda, organiz la New Zealand Archeological Association, y public varios papers claves definiendo la secuencia cultural prehistrica en el estas vastas islas (Golson 1959, vase tambin Groube 1993b)El continuo foco en Polinesia (ms que en Melanesia, hacia el oeste) fue reforzado por la atencin mundial hacia la travesa, en 1945, de la balsa Kon-Tiki de Thor Heyerdahl, un joven zologo noruego quien promocion sin descanso su teora de que los polinsicos no provenan del oeste, sino de las Amricas (Heyerdahl, 1952). El exitoso viaje desde Per hasta Raroia en el Toamutus caus sensacin a nivel internacional, y en 1955-1956 Heyerdahl lider una segunda expedicin en el sudeste de Polinesia, esta vez en un trawler [barco de pesca por arrastre] Greenland convertido, equipado para la investigacin arqueolgica y con 4 arquelogos profesional a bordo (E.Ferdon, W Mulloy, A. Skjolsvold, y C. Smith). El objetivo principal de la Expedicin Noruega a Isla de Pascua y el Pacfico Este fue Rapa Nui, pero el trabajo tambin fue llevado hasta Rapa Iti y Raivavae en las Australes, y a Hiva Oa en las Marquesas. En la Isla de Pascua, el equipo se concentr en los vestigios del culto estatuario, con reconocimientos y excavacines en la cantera de estatuas de Rano Raraku, y en varios sitios de templos (incluyendo el complejo Ahu Vinapu), en gran parte debido a que Heyerdahl haba propuesto ciertas similitudes entre la arquitectura de Isla de Pascua y sus estatuas y aquellas encontradas en partes de Sudamrica, apoyando su teora migratoria. Menos atencin fue dada a los sitios de habitacin u otras caractersticas arqueolgicas ms mundanas. Los resultados de la expedicin noruega fueron esplndidamente publicados en 2 geniales y bien ilustrados volmenes, que an son puntos de referencia en la arqueologa polinsicaLo que la expedicin noruega fall en realizar, fue convencer a alguien de la veracidad del origen sudamericano propuesto por Heyerdahl. EL arquelogo estadounidense Robert C. Suggs no perdi tiempo en levantar un agudo ataque a Heyerdahl en su ampliamente leda sntesis The Island Civilizations of Polynesia (1960). Despus de revisar numerosas inconsistencias en la informacin y la teora, Suggs parodi las afirmaciones de Heyerdahl de haber probado su hiptesis: Los peruanos de Heyerdahl deben haber hecho uso ellos mismo del aparato clsico de la ciencia ficcin, la mquina del tiempo, para ellos aparecer fuera de Isla de Pascua en el 380 AD, dirigidos por un dios incaico posterior al 750 AD, con una cultura material tiwanakota del 750 AD presentando murallas incas del 1500 AD, y ninguna cosa caracterstica del perodo Tiahuanaco en Per o Bolivia. Esto es equivalente a decir que America fue descubierta en los ltimos das del Imperio Romano por el Rey Enrique el Octavo, quien llev el Ford Falcon a los ignorantes aborgenes (1960:224)A Heyerdahl no le fue mucho mejor en la prensa. Golson, revisando el primer volumen de los resultados cientficos de la Expedicin Noruega, demostr convincentemente que los cambios en la arquitectura y funcin ahu que provee un til, mientras sea limitado, marco para la periodificacin prehistoria de la Isla de Pascua no necesita ser adscrita al arribo de poblaciones a la isla (1965:78). An ms, toda la evidencia arqueolgica descubierta por la expedicin noruega puede ser interpretada como apoyando una visin ms convencional de que la isla habra sido colonizada por ancestros polinsicos desde el oeste, con desarrollos culturales internos, subsecuentes en la misma Isla de Pascua.Mientras la expedicin noruega estaba trabajando en Isla de Pascua, Robert Suggs estaba llevando a cabo la primera excavacin estratigrfica en Polinesia del este, recuperando una larga secuencia cultural revelada en un nmero de sitios bien estratificados. Mientras Emory, Golson y la Expedicin Noruega se centraron profusamente en las secuencias de artefactos (las que usualmente son denominadas el paradigma de historia de las culturas, vase Trigger 1989), la investigacin que marc tendencia de Suggs reflejaba agendas cambiantes en la antropologa estadounidense. En la era post-Segunda Guerra Mundial, una perspectiva evolucionaria se haba levantado bajo la influencia de academicos tales como Julian Steward y Leslie White, interesndose en la Ecologa Humana (vase Harris, 1968:643-87)

NATI ABIGAIl: 32 y 33/

Figura 1.13 - Robert C. limpiando el frente de una excavacin de prueba conocido como el sitio de duna Ha'atuatua en las Islas Marquesas, en el da Suggs descubri el sitio en 1956. El sitio Ha'tuatua revel el primer perodo de la ocupacin de la Polinesia oriental. (Foto cortesa de R. C. Suggs)

Figura 1.14 - Secuencia cultural de Robert Suggs para las Islas Marquesas, resumida grficamente por artista del Museo Americano Nicholas Amorosi. Suggs define sus perodos culturales tanto en terminos de patrones de asentamiento y dinmicas poblacionales como en terminos de tipos de artefactos. (Cortesa de R. C Suggs)

Aunque Suggs no abandon la seriacin y la clasificacin, l estaba ms intrigado por cuestiones antropolgicas ms amplias acerca del cambio cultural: "Quera recopilar informacin comparativa sobre los temas ms generales. Cmo los diversos tipos de la antigua arquitectura del templo en Polinesia encajan con las filosofas religiosas de los nativos? Hubo evidencia de la guerra en otras islas? Si es as, se asemejan las situaciones a las que haban surgido evidentemente en Nuku Hiva durante el perodo en que gran parte de la poblacin haba buscado refugio en cuevas en las partes remotas de la isla? Cmo los planes de aldea en varias sociedades polinesias encajan con la organizacin social de estos grupos? (1962:222).La secuencia de las Marquesas de Suggs (1961) no consiste slo en la lista de tipos de artefactos, pero constituy un modelo para la evolucin de la cultura de las Marquesas en el tiempo, en relacin a la ecologa de la Isla, y la demografa humana (Fig. 1.14). Su investigacin ha encajado bien con el cambio de perspectivas en la antropologa cultural Ocenica, que tena por ahora abandonado el viejo enfoque etnogrfico comparativo de Handy y Hiroa a favor de las comparaciones controladas y el estudio de los procesos culturales. Esta perspectiva evolutiva se ejemplifica en la obra de estos antroplogos influyentes como Ward Goodenough (1957), Marshall Sahlins (1958), e Irving Goldman (1970). Ampliando los horizontes de la investigacinPor la dcada de 1960, los planes de investigacin de los arquelogos y antroplogos del Pacfico se haban ampliado ms all de cuestiones de orgenes culturales y la definicin de secuencias basadas en artefactos. La mayor innovacin fue el desarrollo en arqueologa del "patrn de asentamiento", aplicado por primera vez en la Polinesia por Roger C. Green (Fig. 1.15), que haba sido entrenado en este enfoque por Gordon Willey en Harvard (Golson 1996).El primero en su estudio, fue el 'Opunohu Valley en Mo'orea (Society Islands; Green 1961; Green et.al 1967), y luego en un proyecto multianual importante centrado en Samoa Occidental (Green y Davidson 1969, 1974), Green demostr el poder de la perspectiva de patrn de asentamiento. Ms bien, en lugar de concentrarse exclusivamente en los sitios ricos en artefactos, Green intent incorporar todos los aspectos de un paisaje arqueolgico (Fig. 1.16). Sostuvo que "con el desarrollo de estudios de patrones de asentamiento en arqueologa y la creciente preocupacin de ir delineando el aspecto social de los datos recuperados enlos sitios, ha pasado el da en que tales monumentos o sus caractersticas estructurales pueden darse el lujo de ser tratado slo como contextos para artefactos porttiles y no como objetos en s mismos " (1967b: 102). Los estudios de patrones de asentamiento se convirtieron en la norma en la polinesia, as los arquelogos reconocen su potencial para aportar datos sobre la sociedad prehistrica y su organizacin poltica (Cordy 1985b).A finales de los 60s y principios de los 70s se estaban llevando a cabo estudios de este tipo en Hawai (e.g., Kirch and Kelly 1975; Tuggle and Griffin 1973), Nueva Zelanda (Groube 1964, 1965), Isla de Pascua (McCoy 1976), y las Marquesas (Bellwood 1972; Kellum-Ottino 1971).Inicialmente la intencin de iluminar cuestiones acerca de las relaciones sociales prehistricas y estructura de la comunidad, en

Inicialmente con el objetivo de cubrirse de la luz en sociedades prehistricas y comunidades, en Polinesia los patrones de asentamiento adquirieron rpidamente una orientacin ecolgica adicional. Combinado con la recuperacin y anlisis de materiales de flora y fauna, los patrones de asentamiento empezaron a incluir sistemas agrarios y otras evidencias de produccin econmica. El etnobotatico Douglas E. Yen sostuvo un importante rol en dicho trabajo, colaborando con arquelogos y siendo pioneros en el estudio del riego prehistrico en el Valle de Makaha, Oahu, evidencia del primer cambio agrario en Polinesia. Restos arqueolgicos de sistemas agrarios y la identificacin de restos de plantas preservados, fueron integrndose a la investigacin en el pacifico.Instituciones gubernamentales comenzaron a ejercer una influencia importante en USA durante la guerra fra. Con el trmino de la 2da guerra mundial, centros de investigacin y universidades estadounidenses (incluyendo la mayora de museos de historia natural), comenzaron a recibir fondos federales sin precedentes, debido en parte al plan de Vannevar Bush, patrocinador de la Fundacin Nacional de la Ciencia (National Science Foundation, NFS). En 1951, la comisin de arqueologa del pacifico del Consejo Nacional de Investigaciones recomend un programa de arqueologa para Micronesia, y un programa similar para arqueologa Polinsica fue llevado a cabo en 1953. A lo largo de los 50 los campos de investigacin eran financiados a travs de privados y donaciones, pero esto cambi radicalmente en 1962, cuando el Bishop Museum recibi su primera donacin del NSF para arqueologa en el pacifico. Con USD77,220 por un periodo de 3 aos, el museo envi expediciones a Rarotonga, Pitcairn, Samoa, incluyendo representantes de la Universidad de Auckland, el Museo de Canterbury, y el museo de Otago. Alex Spoehr, quien entregar prontamente el mando del Bishop Museum a su protegido Roland Force, destaca el rol de la NSF y otras organizaciones federales en el desarrollo de investigaciones en el Pacifico: Los recursos financieros necesarios para llevar a cabo una investigacin a gran escala estn fuera de alcance de instituciones individuales. En Estados Unidos, el soporte federal en la investigacin se est volviendo alga cada vez ms necesario.El Museo Bishop implement su segundo programa de tres aos de historia cultural polinsica en 1965, con el incremento de los fondos de NSF de USD 274,554, nuevamente financiado un grupo internacional de investigadores, ahora incorporando lingistas y etnobotaticos adems de arquelogos. Los impactos de estos fondos no pueden ser subestimados, siendo que muchos de los avances en la arqueologa en Polinesia en los 60 son frutos directos de estos. Adems, le NSF ha continuado financiando arqueologa en el pacifico, como el multi-institucional South-east Solomon Islands Culture History Program y muchos otros proyectos desde Papua Nueva Guinea a Hawaii.Otro campo de innovacin con importante influencia en la arqueologa ha sido la lingstica. En los 30, el lingista alemn Otto Demp-wolff propuso las bases para el anlisis formal de lenguas Austronesias en el pacifico, y despus de la 2da guerra mundial un nmero importante de lingistas jvenes (como Bruce Biggs, Isidore Dyen, Sam Elbert y George Grace) entraron en el campo.

Otro campo de innovacin con influencia importante en la arqueologa ha sido la lingstica histrica. En la dcada de 1930, el lingista alemn Otto Dempwolff (1934-1938) sent las bases para el anlisis comparativo formal de lenguas austronesias en el Pacfico, y despus de la Segunda Guerra Mundial, un nmero de jvenes lingistas (como Bruce Biggs, Isidoro Dye, Sam Elbert, y George Grace) tomaron este campo. A principios de la dcada de 1960, ellos haban demostrado que los Idiomas polinesios formaban un subgrupo discreto dentro de la familia austronesia, y que stos estaban ms estrechamente relacionados con otras lenguas de las islas de Melanesia y Micronesia, formando unas "austronesias del este" o subgrupo "Ocenico. Al mismo tiempo, Emory (1946, 1963) y Pawley (1966) elaboraron el subgrupo interno o la clasificacin de los Idiomas de la Polinesia, que Green (1966) correlaciona explcitamente con las secuencias arqueolgicas recin dilucidadas. La participacin productiva de la arqueologa con la lingstica histrica en el Pacfico ha continuado hasta el presente.

Ms all de la Polinesia: Arqueologa en Melanesia y Nueva Guinea.

Aunque Gifford y Spoehr se dirigan especficamente a los archipilagos del Pacfico Occidental (Fiji, Nueva Caledonia, Las Marianas) en sus esfuerzos post - Segunda Guerra Mundial por revitalizar la Arqueologa del Pacfico, la mayora de las investigaciones en los aos 1950 y 1960 continu centrndose en la Polinesia. Tal vez esto era una consecuencia inevitable de la necesidad de lograr un consenso sobre el viejo "problema de los orgenes de la Polinesia", con base en los nuevos mtodos de excavacin estratigrfica y la datacin por radiocarbono. Pero Jack Golson vio la necesidad de renovar los trabajos en Melanesia y aprovech la oportunidad que presentaba una oferta de empleo en la facultad de la Universidad Nacional de Australia (ANU) en Canberra en 1961.

Desde su nueva base en la ANU, Golson traz una serie de proyectos a largo plazo que agregaran una enorme cantidad de conocimiento a la prehistoria de Melanesia. A finales de 1950, Ralph y Susan Bulmer haban excavado dos abrigos rocosos en las tierras altas (montaas, altiplano) de Nueva Guinea, esbozando una secuencia prehistrica especulativa. Siguiendo esta misma lnea, Golson envi a su estudiante J. Peter White a tierras altas, donde adicionalmente se localizaron y excavaron abrigos rocosos. Otros estudiantes fueron enviados a lugares que Golson juzg seran claves para ampliar nuestro conocimiento de la prehistoria Melanesia: Peter Lauer a las islas DEntrecasteaux, Brian Egloff a Collingwood Bayo en la costa noreste de Nueva Guinea, y Ron Vanderwal y Geoff Irwin a la costa de Papa. La creciente importancia del complejo cultural Lapita donde el propio Golson es autor de varios documentos claves - no fue descuidada u olvidada. Jim Specht re-excav el sitio Watom Lapita, Jens Poulsen cav varios basurales Lapita en Tongatapu, y Colin Smart investig sitios en Nueva Caledonia.

Jim Allen, que haba estudiado la arqueologa histrica de Australia bajo la supervisin de Golson, fue el primer profesor (nombrado) de la facultad de arqueologa en la nueva Universidad de Papua Nueva Guinea en 1969. Sobre dicha base, Allen llev a cabo una importante labor en Nebira y Motupore cerca de Port Moresby, y continu desempeando un papel importante en Melanesia despus de regresar a ANU como miembro del departamento de Golson. Independientemente, el arquelogo francs Jos Garanger explor la arqueologa del centro de Vanuatu, descubriendo un horizonte de cermica (el cual llam Mangaasi por su sitio tipo) y que pareca seguir o reemplazar el horizonte de cermica Lapita en algunas partes de la isla de Melanesia. Garanger abri un nuevo campo interpretativo en la interfaz (sistemas o modos de comunicacin) de la arqueologa y la tradicin oral por el descubrimiento de material veraz en ciertas historias narrativas de los indgenas Vanuatu, como las que pertenecen al famoso jefe Roi Mata. Correlaciones similares entre las tradiciones orales y el registro arqueolgico se demostraron pronto gracias a Kirch y Yen (1982) en su trabajo sobre la atpica Polinesia de Tikopia.

A finales de la dcada de 1960, esta avalancha de nuevos trabajos de campo en Nueva Guinea y las islas de Melanesia desvi finalmente la atencin de la Polinesia (fuera de esta), hacia los archipilagos occidentales del Pacfico. Roger Green, quin haba sido el autor de varias sntesis del origen polinesio (basadas arqueolgicamente), estaba cada vez ms convencido de que el complejo cermico Lapita retena o contena las pistas esenciales de los orgenes ms profundos de los pre-polinesios, as como de los pueblos de la isla de Melanesia. En 1970, Green y Douglas Yen obtuvieron el apoyo de la NSF para "una investigacin interdisciplinar de la prehistoria del sudeste de Salomn y las Islas de Santa Cruz". Su diseo de la investigacin combina esencialmente el trabajo histrico cultural con perspectivas tericas actuales de la arqueologa "procesual", incluyendo un nfasis en la diversidad ecolgica, los sistemas econmicos, y las redes de intercambio interinsulares. En 1971-1972, este proyecto pone los equipos de campo en Kolombangara, Ulawa, Uki, San Cristbal, Santa Ana, Santa Cruz (Nendo), las Islas de Coral, y Anuta, precipitando un verdadero torrente de resultados de investigacin. El SSICHP tuvo tanto xito que la NSF financi una segunda fase de 2 aos en 1977-1978, que extendi el trabajo de campo a Vanikoro tikopia (fig 1.17), y Taumako, el trabajo luego continu en Nendo y las Islas de Coral. Entre los trabajos de Golson y sus estudiantes (de la ANU), y el proyecto del Sudeste de Solomons, la prehistoria de Nueva Guinea y las islas de Melanesia fue finalmente tomando forma.

El Proyecto Southeast Solomons de Green y Yen demostr la efectividad de la coordinacin de programas de investigacin multi institucionales. Este fue el modelo que Jim Allen (1984a) adopt conscientemente cuando organiz el Lapita Homeland Proyect (LPH), enfocado en el archipilago Bismarck. Las Bismarck fueron conocidas por poseer sitios Lapita (tales como Watom y Ambittle), pero, por el contrario, su prehistoria era un gran vaco, a pesar de que haba una sugerencia a partir del refugio de piedra Misisil en Nueva Bretaa, de que poda tener una mayor profundidad histrica Pleistocnica (Specht et al. 1981). En 1985, los miembros del LHP (incluyendo al autor) llevaron a cano encuestas y excavaciones en Nueva Bretaa, Nueva Irlanda, Watom, Nissan, Manus y Mussau (Fig. 1.18), no slo expandiendo nuestro conocimiento sobre los sitios Lapita (Gosden et al. 1989) sino tambin situando la prehistoria del Archipilago Bismarck hacia los 33,000 aos antes del presente (Allen et al. 1989; Allen y Gosden, eds., 1991). Esas fechas han sido conocidas para Australia y Nueva Guinea, pero esta fue la primera demostracin de que los humanos tempranos se expandieron hacia las islas de Oceana Cercana durante el Pleistoceno.Melanesia ha continuado como la escena de mucho trabajo de campo entuasiasta en los 1990s, como construyeron los miembros del LHP en resultados iniciales de entender su investigacin a Nueva Bretaa, Mussau, Manus y en otros lugares. En Nueva Caledonia, antroplogos franceses incluyendo Daniel Frimigacci, Jean-Christophe Galipaud y Christophe Sand expandieron el trabajo pionero de Glifford y Golson para clarificar nuestro conocimiento sobre la prehistoria del sur de Melanesia (ver captulo 5). Una importante nueva investigacin est desarrollndose actualmente en las Solomon occidentales (P. Sheppard, comentario personal?, 1998) y por diversos equipos en Vanuatu. Melanesia, largamente descuidada, por fin tiene un registro arqueolgico propio, en muchos aspectos ms profundo y ms rico que el de Polinesia.

No una Torre de Marfil: Arqueologa Pblica en el Pacfico

Desde las primeras dcadas del siglo XX cuando los antroplogos y arquelogos alcanzaron estatus formal como disciplinas acadmicas hasta los 1960s, virtualmente todas las investigaciones arqueolgicas en el Pacfico eran llevadas a cabo por un museo o por acadmicos con formacin universitaria. En los Estados Unidos (incluyendo Hawaii), las cosas empezaron a cambiar en los 1960s y 1970s cuando las nuevas leyes federales y estatales alentaron y ordenaron el descubrimiento y preservacin de los materiales arqueolgicos, en conexin con los trabajos pblicos y, a menudo, para desarrollos financiados por privados (Green y Doershuk 1998). A pesar de que muchos museos y departamentos de universidades hayan comenzado a emprender esa arqueologa contractual (o arqueologa de gestin de recursos culturales [CRM], como ha sido conocida), estos cambios incluso han generado el surgimiento de contratistas arqueolgicos independientes. Inicialmente, la arqueologa CRM en el Pacfico fue confinada a Hawaii y a otros territorios estadounidenses incluyendo Samoa norteamericana y Guam. Sin embargo, el gobierno de Nueva Zelanda pronto adopt leyes similares, y en Micronesia los estatutos federales de Estados Unidos comenzaron a ser aplicados en el territorio de confianza de las islas del Pacfico, y posteriormente por los gobiernos independientes de Palau, las Marianas del norte, los Estados Federados de Micronesia, y las Islas Marshall (ver Cordy 1980, 1982). Ciertamente, la expansin del trabajo arqueolgico a lo largo de Micronesia durante las dos ltimas dcadas ha sido casi completamente resultado del movimiento CRM. El crecimiento de la arqueologa CRM en Hawaii, Nueva Zelanda, Micronesia y hasta cierto grado en otras partes de Pacfico ha tenido varias consecuencias. Una gran infusin de fondos para trabajo arqueolgico (en el caso de Hawaii, en total varios millones de dlares por ao), muy por sobre lo que haba estado disponible para investigacin arqueolgica tanto para fuentes privadas de financiamiento como para agencias federales de investigacin como la NSF, lo que ha producido una gran profusin de encuestas y datos de excavacin. Los resultados son reportados frecuentemente en documentos de limitada distribucin, sin embargo, y son raramente publicados en revistas o monografas tradicionalmente acadmicas, resultando en una literatura gris. Retazos de sntesis detrs del trabajo de campo y la presentacin de datos. El enlace inevitable entre arqueologa y el desarrollo de la tierra ha dado paso incluso a algunos conflictos entre arquelogos y poblaciones indgenas, como en Hawaii (ver Spriggs 1989b, 1991c; Kirsch 1999). A pesar de ello, la arqueologa CRM ha resultado en un gran paso expansivo de la investigacin arqueolgica en algunas regiones (especialmente Hawaii, Samoa norteamericana y partes de Micronesia) y a pesar de sus dificultades de crecimiento ha hecho contribuciones significativas.En el mundo Postcolonial del Pacfico, la misma prctica arqueolgica (as como la antropologa) es constantemente criticada, discutida y renegociada. Algunos activistas indgenas han llamado a detener el trabajo arqueolgico, vindolo como un legado del colonialismo blanco. Haunani-Kay Trask, por ejemplo, ha llamado a parar a todos los antroplogos y arquelogos en Hawaii. Ella escribe: debera haber una suspensin del estudio, surcndonos, rebanndonos, aplastndonos y analizndonos (1993:172). Otros, como Joseph Kabui, ex primer ministro de Bougainville Province (Papua Nueva Guinea), se refiere a la arqueologa positivamente y mira los descubrimientos arqueolgicos en su bsqueda de la identidad nacional (Spriggs 1992b: 269). Ciertamente, como estas revisiones histricas nos revelan, la arqueologa del Pacfico ha sido -con unas pocas notables excepciones como Te Rangi Hiroa -principalmente trabajo de acadmicos no indgenas. Pero las cosas estn cambiando rpidamente mientras entramos en el siglo XXI. Indgenas Maori, Hawaianos, Fijanos, Nueva Guineanos?, Kanak y otros isleos del Pacfico estn estudiando arqueologa y comenzando a involucrarse con su prctica.

La Arqueologa en el pacfico ha sido, con algunas notables excepciones, como Te Rangi Hiroa, hecha principalmente por acadmicos no indgenas. Pero esto ha cambiado rpidamente desde que entramos al siglo XXI , indgenas Maor, hawaianos, de Fiji, Nueva Gunea, Kanaky (Nueva Caledonia), y otros isleos del pacifico han estudiado ellos mismos la arqueologa y se han envuelto en esta prctica. Como escribi Jack Golson, en retrospectiva luego de trabajar durante 35 aos en Nueva Guinea:Hoy la enseanza y el entrenamiento en arqueologa en la Universidad de Port Moresby esta en manos de Papua nueva Guineanos, John Muke y Joe Mangi, quienes fueron estudiantes de Les Groube. En el museo Nacional esta Nick Araho, el compaero de trabajo de Pamela Swadling en su bsqueda en Sepik, y, el nuevo designado para realizar trabajos de salvamento es Herman Mandui. Todos ellos son muy conocidos para los que hemos trabajado en su pas en los ltimos aos, y nosotros para ellos. Es de esperar que estas relaciones sirvan de base para la importante nueva etapa de la bsqueda arqueolgicaJunto con los arquelogos Papua nueva guineanos nombrados por Golson, podramos aadir otros acadmicos indgenas, como Lawrence Foanaota, John Keopo, y Kenneth Roga en las Islas Salomn, Jacques Bol, Andr Outcho, y Francis Wadra en Nueva Caledonia, Ralph Regenvunu en Vanuatu, Sepeti Mataraba y Tarisi Sorovi-Vunidilo en Fiji, Peter Adds, Des Kahotea, Nepia Stewart, Nick Tupara, Dean Whiting, y otros en Nueva Zelanda, Mauricio Rufino en Pohnpei, Erika Radewagen y Epi Suafoa en la Samoa Americana, y Kehau Cachola-Abad, Koa Hodgins, Kathy Kawelu, Hanna Springer, y otros en Hawaii. Con ellos, el futuro de la arqueologa en las islas del pacifico, seguramente tomara nuevas dimensiones y explorara aguas desconocidas.

Acercamientos Contemporneos a la prehistoria del pacifico

En este captulo he rastreado algunos de los principales temas e hilos conductores que arman la historia de la arqueologa y la antropologa histrica en el pacfico. Los caminos en que los acadmicos han mirado la historia del pacfico, sus supuestos acerca de la profundidad del tiempo en los procesos culturales, los tipos de evidencias que buscaban o estaban dispuestos a considerar, todas estas cosas han cambiado dramticamente en dos siglos. Un popular aforismo dice que en retrospectiva esta es una visin 20/20, es fcil mirar atrs a los supuestos errneos que sustentaba el paradigma difusionista a principios del siglo XX y encontrarlos. Poner nuestro presente, nuestros supuestos, mtodos y teoras bajo un escrutinio crtico es ms difcil. Como nuestros contemporneos investigadores y escritores sern juzgados por las generaciones futuras solo el tiempo lo dir.La arqueologa del pacfico no est exenta de debates, sus diferentes campos acadmicos, son disputas sobre datos, mtodos e interpretaciones. Algunos de ellos se centran en datos histricos y reflejan un inadecuado registro emprico, como las actual controversia en cuanto a la cronologa de llegada a la polinesia oriental. Estas cuestiones podran ser resueltas por nuevas excavaciones, datos adicionales de radiocarbono, y una bsqueda ms fina en general. Otros debates reflejan diferencias tericas en el campo de la arqueologa como el contraste en los paradigmas arqueolgicos encapsulados por los trminos procesual y post-procesual. Otros temas se centran en cuestiones de interpretaciones, como si el complejo cultural Lapita en la Oceana cercana, tuviera una mayor inclusin de hablantes de lenguaje austronesio, o alternativamente un desarrollo indgena propio de nueva guinea y el archipilago de Bismarck. Estos a su vez dependen de grandes cuestiones de perspectiva metodolgica y terica: quienes estn a favor de la inclusin en Lapita, suelen ser tpicamente antroplogos holsticos que invocan la historia lingstica, y la evidencia biolgica humana en adicin a los datos arqueolgicos, mientras el campo del desarrollo melanesio, est restringido al campo de la evidencia material.Otra controversia y diferencia de enfoque, derivan de cmo los distintos acadmicos ven a las islas del pacfico como un teatro para la investigacin antropolgica. Hasta 1950, muchos acadmicos han aludido a los aspectos de laboratorio que tienen las islas del pacifico as como sus poblaciones humanas y culturas, sugiriendo que en el pacifico se da una especie de experimento natural de diferenciacin y adaptacin cultural. Aunque ninguno de estos antroplogos estuvo nunca en este laboratorio como para concebir seriamente a las islas como un sistema cerrado, ltimamente se nos ha hecho ver de que el mito del aislamiento primitivo no ha hecho ms que hacer retroceder la prehistoria del pacfico.En realidad, los arquelogos del pacifico llevan largo tiempo estudiando la interaccin entre las sociedades de las islas, y ambas, tanto el aislamiento como la interaccin son conceptos fundamentales para la interpretacin y el entendimiento del cambio cultural en Oceana. Otro debate es el entre el contraste filogentico, versus los modelos reticulares de diferenciacin cultural. Ningn modelo es necesariamente superior, y no son necesariamente opuestos, ambos tienen valor dependiendo de la investigacin y las preguntas que queramos responder.He mencionado estos debates acadmicos, no para relevar algn punto de vista en particular, por una vez hemos revelado que cosas sobreviven y cuales se desechan en la historia intelectual. Para m, sera triste ver el da donde creamos conocer todas las respuestas, porque parte de la diversin es ir generando nuevas preguntas. Mi intencin es simplemente mostrar que el campo de la arqueologa en el pacifico, como siempre, est constantemente cambiando. Esto, despus de todo, hace que la bsqueda sea estimulante y valiosa.