saludo matinal martes 13 de agosto 2013 (analizando el dolor)
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SALUDO MATINAL ANALIZANDO EL DOLOR MARTES 13 DE AGOSTO DEL 2013TRANSCRIPT
(Analizando el dolor)
Saludo matinal
Martes 13 de agosto del 2013
Queridos amigos, hola buenos días, la vida continua y nosotros seguimos
con nuestra lucha, por eso encomendándonos al Todopoderoso, iniciemos el
día con optimismo y decisión, el dolor no es eterno y los guerreros valientes,
se enfrentan a él, con la fe y l esperanza , fe en que todo pueden superarlo
con la ayuda de Dios, y la esperanza de que un día desaparecerá, para
siempre, porque una vez que el hombre consiga ser un hombre de bien, y no
cometa más errores, no tendrá ninguna razón de ser en su vida.
Son muchos los hermanos que acuden al suicidio para liberarse del dolor, y
lejos de conseguirlo, se encierran en él, con dificultades para salir, son
muchos los espíritus suicidas que se han manifestado en las sesiones
mediumnica y así lo han manifestado, por eso todo el que se decide por la
acción de hacerle frente y seguir adelante, un día consiguen liberarse.
El dolor imperturbable, continua siendo el servidor del alma, sacudiendo y
despertando las mentes, en el afán de realizar aquello que es divino – la
manutención del equilibrio de la ley.
El emerge aquí allí, con mil apariencias, más siempre mostrado en una
apariencia que muy pocos osan escucharlo y procuran entenderlo.
Para encararlo surgió en épocas remotas el estoicismo, teniendo como
punto básico de apoyo el desprecio por los bienes terrenos, el cual, aliado al
culto de las virtudes promovería el equilibrio en el hombre, valorizándolo
para vencer el dolor, pues de esta forma, puede enfrentarlo con nobleza y
con fe.
Francisco de Asís, experimento burlas, mil humillaciones, sin embargo
mantuvo la fuerza pulsante del amor en sus actos y palabras ejercitando
las virtudes cristianas, nunca dejó de bendecir el dolor.
Sócrates fue un ejemplo del estoicismo, cuando encarcelado después de vil
juzgamiento, preconizaba,, aun mismo en la prisión, el cultivo de la moral y
de la virtud como únicos medios para superar el aguijón del dolor.
Nuestra querida Juana de Ângelis que el dolor es la moneda de rescate, de
ejercicio para la fijación del bien y una alta concesión divina.
Si desapareciese el dolor el hombre ignoraría la paz, no tomaría en
consideración la necesidad de la alegría y maldeciría la salud, de esta
manera, es inestimable oportunidad de ejercitar lecciones para que el bien
hiciese morada definitiva en su tela mental.
Estemos donde estemos, en sillas de ruedas; en los tormentos morales; en
las limitaciones de los objetivos; en las sombrías convivencias familiares,
sociales y en el trabajo; ante el dolor en el cuerpo, en la mente y en el alma,
donde queme la brasa del dolor, debemos esforzarnos por agradecer a Dios
la oportunidad de reaprender y reparar.
Joanna de Ângelis a través del médium Divaldo Pereria Franco en el libro
“Dimensiones de la Verdad” nos dice que El Amigo incondicional de todas
las horas “Jesús” eligió el dolor como el compañero de sus días terrenales y
aprovecho, a través de él, dejarnos sus hermosas enseñanzas, sin nunca
recurrir al verbalismo ni a la retórica, mostrando que se puede ser feliz en
todos los instantes, sin nunca dejar de exaltar el amor y la bondad como
derrotero de iluminación.
Despreciado, con el cielo particular cargado de sombrías nubes, cargando
preocupaciones, ante angustias y ansiedades levantemos la cabeza y
tornemos nuestras manos en alas de amor y paz y con ellas, a través del
trabajo en el bien alabemos al Señor de la Vida, para que, así, un día
alcemos los vuelos a las regiones de la liberación plena después que
hayamos rescatado nuestras deudas en la contabilidad divina.
Recibamos, pues, al dolor con alegría, con amor y nunca hemos de
desanimarnos ni entrar en desvaríos.
Amigos como todos los días, os deseo, un feliz martes, canalizar el dolor,
con la oración balsámica, que nos equilibra y posibilita para recibir las
influencias benefactoras que nos ayudan a llevar la cruz hasta el fin, sin
desfallecer ni maldecir las horas de rehabilitación espiritual.
Merchita