para paciente intoxicado

276
Cuarta edición G U Í A P A R A E L M A N E J O D E L P A C I E N T E I N T O X I C A D O Escrito por docentes, egresados y residentes del Departamento de Farmacología y Toxicología de la Facultad de Medicina, Universidad de Antioquia. Editores Lina M. Peña, MD Sergio Parra, MD, MSc Carlos A. Rodríguez, MD, MSc Andrés F. Zuluaga, MD, MSc Profesores de Medicina Departamento de Farmacología y Toxicología Clínica El presente trabajo fue desarrollado bajo el convenio 2008-SS-16-2831 entre el Departamento de Antioquia - Dirección Seccional de Salud y la Facultad de Medicina de la Universidad de Antioquia.

Upload: abrenim-diaz

Post on 07-Jul-2015

3.748 views

Category:

Documents


1 download

TRANSCRIPT

Page 1: Para paciente intoxicado

Cuarta edición

GUÍA PARA EL MANEJO DEL

PACIENTE INTOXICADO

Escrito por docentes, egresados y residentes del Departamento de

Farmacología y Toxicología de la Facultad de Medicina, Universidad de

Antioquia.

Editores

Lina M. Peña, MD

Sergio Parra, MD, MSc

Carlos A. Rodríguez, MD, MSc

Andrés F. Zuluaga, MD, MSc

Profesores de Medicina

Departamento de Farmacología y Toxicología Clínica

El presente trabajo fue desarrollado bajo el convenio 2008-SS-16-2831 entre el

Departamento de Antioquia - Dirección Seccional de Salud y la Facultad de

Medicina de la Universidad de Antioquia.

Page 2: Para paciente intoxicado

Guía para el manejo del paciente intoxicado, Cuarta edición

Derechos reservados, 2009. Ninguna parte de esta publicación puede ser

reproducida o transmitida por medios electrónicos o mecánicos, incluyendo

fotocopiado, grabación o por cualquier otro sistema de almacenamiento de

información, sin el permiso por escrito de la Universidad de Antioquia.

Los permisos pueden solicitarse directamente al Departamento de Farmacología y

Toxicología, Facultad de Medicina, Universidad de Antioquia, Carrera 51D #62-29,

oficina 365, Medellín, Colombia, Suramérica. Correo electrónico:

[email protected]

Ediciones previas: 2000, 2003 y 2005.

ISBN-13: 978-958-44-4481-3

Impreso en Medellín, Colombia

ADVERTENCIA

La medicina es una ciencia en continuo cambio. Como cada nueva investigación y

experiencia clínica amplía nuestro conocimiento, permanentes cambios en la práctica,

tratamiento y terapia farmacológica se hacen necesarios o apropiados. Aunque los

autores y editores hemos revisado la información de diversas fuentes que consideramos

confiables con el fin de proveer información completa y acorde con los estándares

aceptados al momento de la publicación, en vista de la posibilidad de errores humanos

o cambios en la ciencia médica, ni los autores, ni los editores, ni los financiadores

garantizan que la información contenida en este texto es absolutamente completa y

acertada, y ninguno de ellos asume responsabilidad por cualquier error u omisión, o por

el resultado obtenido por el uso de la información entregada en este trabajo. Se le

recomienda a los lectores confirmar la información entregada con otras fuentes,

incluyendo la información entregada por cada fabricante en el inserto que acompaña la

mayoría de medicamentos, con el fin de verificar la dosis recomendada, el método,

duración del tratamiento y contraindicaciones.

Page 3: Para paciente intoxicado

Los autores deseamos agradecer a la Gobernación de Antioquia y a la Seccional de Salud de

Antioquia, en especial al doctor Rosendo E. Orozco, por el respaldo otorgado para el desarrollo

de este material.

LUIS ALFREDO RAMOS BOTERO

Gobernador de Antioquia

CARLOS MARIO RIVERA ESCOBAR

Secretario Seccional de Salud de Antioquia y Protección Social

ALBEIRO VALENCIA CARDONA

Subsecretario de Protección Social

ALONSO RENDÓN CASTRILLON

Director administrativo de factores de riesgo

OLGA CECILIA MORALES RENDON

Directora administrativa de gestión integral de recursos

JUAN HUMBERTO PARRA ZULETA

Director administrativo de atención a las personas

PAOLA SALAZAR GALLEGO

Directora administrativa de calidad y red de servicios

MARTHA ELSY ISAZA ESCOBAR

Directora administrativa de asuntos legales

ROSENDO ELIECER OROZCO CARDONA

Referente del proyecto de vigilancia epidemiológica, prevención y control de las

intoxicaciones por sustancias químicas – plaguicidas - mercurio y agresiones por

animales. Correo electrónico: [email protected]

DIRECCION SECCIONAL DE SALUD DE ANTIOQUIA Y PROTECCIÓN SOCIAL

Calle 42 # 52-186 Piso 8 Conmutador 383 80 00 Fax 383 94 35/36 A.A. 50946 web: www.dssa.gov.co

Centro Administrativo Departamental José María Córdova (La Alpujarra) Medellín - Colombia –

Sudamérica

Cuarta edición, 2009.

Page 4: Para paciente intoxicado

PRESENTACIÓN

La Dirección Seccional de Salud de Antioquia y Protección Social entrega las

“Guías para el manejo del paciente intoxicado”, como material de consulta

permanente para el personal médico y asistencial de las ESE hospitales y con

el fin de brindar la atención oportuna, tratamiento y recuperación del paciente

intoxicado y garantizar la vigilancia epidemiológica de estos eventos que son

causa frecuente de morbilidad y mortalidad en cada región del Departamento.

La primera sección describe las “generalidades de manejo” en las que se

detallan el manejo general del paciente intoxicado, los grandes síndromes

toxicológicos, los recursos (personal, equipos y reactivos) necesarios para el

manejo de estos pacientes, los antídotos necesarios para cada nivel de

atención, las pruebas rápidas en toxicología, la guía de manejo del paciente

pediátrico y de la gestante intoxicados, y los cambios electrocardiográficos más

comunes. Posteriormente se registran los agentes agrupados en Pesticidas;

Estimulantes y Depresores del Sistema Nervioso Central; Medicamentos,

Envenenamiento por Animales; Intoxicaciones Ocupacionales, Ambientales y

en el Hogar. Además se incluyen las fichas para ingresar y notificar estos

eventos de notificación obligatoria en el Sivigila.

Son guías elaboradas por docentes, egresados y estudiantes de posgrado

adscritos al Departamento de Farmacología y Toxicología de la Facultad de

Medicina, Universidad de Antioquia, en donde, por cada tema se presenta una

descripción general, farmacocinética, mecanismos de toxicidad,

manifestaciones clínicas, diagnóstico o pruebas de laboratorio de utilidad, dosis

tóxica y tratamiento. No obstante, se advierte a los lectores que requieran

profundizar más sobre estos temas, realizar una consulta mas detallada en

cualquiera de las referencias registradas.

El libro con las 60 guías debe estar disponible en los servicios de urgencias

como material de consulta permanente y administrar el tratamiento correcto a

los intoxicados o a víctimas de accidentes o desastres, durante su traslado y/o

en espera de ingresar a este servicio.

Page 5: Para paciente intoxicado

El presente material es un aporte del Departamento de Antioquia frente al

principio de concurrencia que la Dirección Seccional de Salud de Antioquia y

Protección Social brinda a los Municipios y sus respectivos Hospitales según el

“Proyecto Vigilancia epidemiológica, prevención y control de las intoxicaciones

por sustancias químicas – plaguicidas - mercurio y agresiones por animales,

2008 – 2010”, registrado con el código Nro. 2008-05000-0470, en el banco

programas y proyectos del Departamento Administrativo de Planeación y

liderado por la Dirección de Riesgos del Consumo de la Dirección Seccional de

Salud de Antioquia y Protección Social –Gobernación de Antioquia, “Antioquia

para todos, manos a la obra”.

CARLOS MARIO RIVERA ESCOBAR

Secretario Seccional de Salud de Antioquia.

Page 6: Para paciente intoxicado

Autores (en orden alfabético)

Docentes adscritos al Departamento de Farmacología y Toxicología

Claudia Arroyave, MD

Hugo Gallego, MD

Ubier Gómez, MD

Carlos F. Molina, MD

Sergio Parra, MD (autor y editor)

Lina Peña, MD (autora y editora)

Carlos Andrés Rodríguez, MD (autor y editor)

Andrés Velasco, MD

Andrés Felipe Zuluaga, MD (autor y editor)

Egresados del programa

José Julián Aristizabal, MD

Marie Claire Berrouet, MD

Ximena Trillos, MD

Médicos, estudiantes de la especialización en Toxicología Clínica

Juan F. Cárdenas

Jenny Cuesta

Isabel E. Escobar

Joaquín López

Alejandra Restrepo

Alexis Santamaria

Por la Dirección Seccional de Salud de Antioquia

Rosendo E. Orozco Cardona

Page 7: Para paciente intoxicado

PRÓLOGO

La “Guía para el Manejo del Paciente Intoxicado” ofrece una revisión concisa y

práctica para el diagnóstico y tratamiento de las principales intoxicaciones y

sobredosis por medicamentos observadas en el Departamento de Antioquia.

Esta cuarta edición ofrece 15 capítulos adicionales a los entregados en la

tercera edición, además se han revisado los tratamientos para mantenerlos

actualizados y corregidos, entre otros. Además, fue construida con el esfuerzo

de residentes, egresados y docentes del Departamento de Farmacología y

Toxicología, quienes desarrollan o participan en el programa de especialización

médica en Toxicología Clínica. Durante 2008, este programa fue evaluado por

pares nacionales quienes lo calificaron como de Alta Calidad.

Este trabajo, desarrollado en convenio con la Gobernación de Antioquia y la

Dirección Seccional de Salud, se enmarca dentro de la política de extensión del

plan de acción institucional 2006-2009, fomentando el intercambio y la

transferencia de los resultados de la innovación e investigación a la sociedad,

así como favoreciendo la unión Universidad – Empresa – Estado.

Esperamos sea de utilidad para todos.

ELMER GAVIRIA

Decano. Facultad de Medicina, Universidad de Antioquia

Page 8: Para paciente intoxicado

CONTENIDO

PRESENTACIÓN ............................................................................................... 4

PRÓLOGO ......................................................................................................... 7

1. MANEJO GENERAL DEL PACIENTE INTOXICADO .............................. 11

2. GRANDES SÍNDROMES TOXICOLÓGICOS.......................................... 17

3. RECURSOS NECESARIOS PARA EL MANEJO DEL PACIENTE

INTOXICADO ........................................................................................... 19

4. ANTIDOTOS NECESARIOS PARA CADA NIVEL DE ATENCIÓN ......... 22

5. PRUEBAS RÁPIDAS EN TOXICOLOGÍA ............................................... 32

6. ATENCIÓN Y MANEJO DEL NIÑO INTOXICADO .................................. 36

7. INTOXICACIONES EN MUJERES EMBARAZADAS .............................. 41

8. CAMBIOS ELECTROCARDIOGRAFICOS EN EL PACIENTE

INTOXICADO. .......................................................................................... 46

9. INTOXICACIÓN CON AMITRAZ ............................................................. 53

10. RATICIDAS ANTICOAGULANTES (SUPERWARFARINAS) .................. 56

11. FLUORACETATO DE SODIO ................................................................. 59

12. INTOXICACIÓN POR GLIFOSATO ......................................................... 61

13. INTOXICACIÓN POR INHIBIDORES DE COLINESTERASAS

(ORGANOFOSFORADOS Y CARBAMATOS) ........................................ 65

14. INTOXICACIONES ORGANOCLORADOS ............................................. 72

15. INTOXICACIÓN POR PARAQUAT .......................................................... 76

16. INTOXICACIÓN POR PIRETRINAS Y PIRETROIDES ........................... 81

17. INTOXICACIÓN POR ALCOHOL ETÍLICO ............................................. 84

18. INTOXICACIÓN POR METANOL ............................................................ 90

19. INTOXICACIÓN POR ANTIDEPRESIVOS TRICÍCLICOS ...................... 95

20. INTOXICACION POR BENZODIACEPINAS ........................................... 99

Page 9: Para paciente intoxicado

21. INTOXICACIÓN POR CARBAMAZEPINA ............................................. 103

22. INTOXICACIÓN POR COCAÍNA ........................................................... 106

23. ENFOQUE MEDICO-LEGAL DEL PACIENTE EMBRIAGADO. ............ 110

DRES. JOAQUÍN LÓPEZ Y ANDRÉS F. VELASCO ..................................... 110

24. INTOXICACIÓN POR ESCOPOLAMINA ............................................... 115

25. INTOXICACIÓN POR ÉXTASIS ............................................................ 118

26. INTOXICACIÓN POR FENOTIAZINAS ................................................. 120

27. TRATAMIENTO DEL SÍNDROME DE ABSTINENCIA A OPIOIDES ..... 123

28. SÍNDROME SEROTONINÉRGICO ....................................................... 127

29. INTOXICACIÓN POR MARIHUANA ...................................................... 131

30. INTOXICACIÓN POR OPIOIDES .......................................................... 134

31. INTOXICACIÓN POR ACETAMINOFÉN ............................................... 138

32. INTOXICACIÓN POR ÁCIDO BÓRICO ................................................. 142

33. INTOXICACIÓN POR AMIODARONA .................................................. 144

DRA. JENNY CUESTA .................................................................................. 144

34. INTOXICACIÓN POR ANESTÉSICOS LOCALES ................................ 147

DRES. JENNY CUESTA Y CARLOS A. RODRÍGUEZ .................................. 147

35. INTOXICACIÓN POR BLOQUEADORES DE LOS CANALES DEL

CALCIO ................................................................................................. 150

36. INTOXICACIÓN POR ANTIMÁLARICOS .............................................. 153

37. INTOXICACIÓN POR BARBITÚRICOS ................................................ 157

38. INTOXICACIÓN POR BETABLOQUEADORES .................................... 159

39. INTOXICACIÓN POR CLONIDINA Y SIMILARES (-METILDOPA,

OXIMETAZOLINA, TETRAHIDROZOLINA, TIZANIDINA) ..................... 165

40. INTOXICACION POR INHIBIDORES DE LA ENZIMA CONVERTIDORA

DE ANGIOTENSINA (IECA) .................................................................. 168

Page 10: Para paciente intoxicado

41. INTOXICACIÓN POR GLUCÓSIDOS CARDIACOS (DIGOXINA,

DEDALERA, CATAPIS) ......................................................................... 171

42. INTOXICACIÓN POR HIERRO ............................................................. 175

43. INTOXICACIÓN POR METILXANTINAS (CAFEÍNA, TEOFILINA,

GUARANÁ) ............................................................................................ 178

44. INTOXICACIÓN POR QUIMIOTERAPÉUTICOS .................................. 181

45. INTOXICACIÓN POR LITIO .................................................................. 186

46. INTOXICACIÓN POR SALICILATOS .................................................... 190

47. ACCIDENTE OFIDICO BOTHROPICO Y LACHESICO ........................ 198

48. ACCIDENTE OFIDICO ELAPIDICO ...................................................... 206

49. ACCIDENTE CROTÁLICO .................................................................... 209

50. ACCIDENTE POR ABEJAS ................................................................... 211

51. ENVENENAMIENTO POR ESCORPIONES ......................................... 216

52. INTOXICACIÓN POR CÁUSTICOS ...................................................... 220

53. INTOXICACIÓN POR CIANURO ........................................................... 223

54. INTOXICACIÓN POR VOLATILES INHALABLES ................................. 227

55. INTOXICACIÓN POR HIDROCARBUROS ........................................... 231

56. ARSÉNICO ............................................................................................ 235

57. INTOXICACION POR MONOXIDO DE CARBONO (CO) ...................... 239

58. INTOXICACIONES POR MERCURIO ................................................... 244

59. INTOXICACION POR PLOMO .............................................................. 249

60. INTOXICACIÓN POR TALIO ................................................................. 254

61. ACTIVIDADES DE EDUCACIÓN EN SALUD: INTOXICACIONES POR

SUSTANCIAS QUÍMICAS-PLAGUICIDAS Y ACCIDENTES POR

ANIMALES VENENOSOS. .................................................................... 254

BIBLIOGRAFÍA .............................................................................................. 267

ANEXOS ........................................................................................................ 276

Page 11: Para paciente intoxicado

1. MANEJO GENERAL DEL PACIENTE INTOXICADO

Dres. Alexis Santamaría y Lina Peña

Las intoxicaciones representan cuadros clínicos que muchas veces se

convierten según las circunstancias, en situaciones difíciles de manejar. A su

vez los signos y síntomas, además de ser variados, pueden carecer de

especificidad. Por todo lo anterior la evaluación de este tipo de pacientes

requiere tanto un examen físico exhaustivo, como una historia clínica a partir de

una buena fuente, con el mayor numero de detalles posible.

Dado que los tóxicos pueden producir casi cualquier signo o síntoma, se debe

sospechar intoxicación en un paciente con:

a. Cuadro clínico de inicio súbito (diarrea, náuseas y vómito, falla

ventilatoria, convulsiones, alteración del estado de conciencia,

alucinaciones, cambios de comportamiento, arritmias, distonías, falla

orgánica multisistémica), sin causa clara, en paciente previamente

sano.

b. Antecedentes de: polifarmacia, intento de suicidio previo, labor

relacionada o contacto previo con tóxicos, trastorno psiquiátrico

(adicciones, trastorno depresivo, duelos no resueltos).

c. Aliento o sudor con olor extraño.

d. Quemaduras en boca, piel y/o mucosas.

e. Miosis puntiforme o cambios en la visión.

f. Historia clínica no concordante con examen físico.

Con el fin de estabilizar al paciente, se deben seguir las medidas referidas bajo

la nemotecnia ABCD (Air way - vía aérea, Breathe - ventilación, Circulation –

control circulatorio, Déficit neurológico). Posteriormente se deben realizar

medidas que sean específicas según el caso, como prevenir la absorción o

favorecer la eliminación del tóxico, vigilar la evolución clínica y tener en

cuenta otro tipo de intoxicación en caso de no responder a antídotos o medidas

utilizadas.

Page 12: Para paciente intoxicado

Tanto en la historia clínica como en la ficha de notificación a la Seccional de

Salud de Antioquia, debe quedar registrada la sustancia involucrada, su

presentación, la cantidad aproximada ingerida, el tiempo transcurrido desde el

momento de la exposición y la consulta, la vía de intoxicación (oral, dérmica,

inhalatoria, parenteral, mucosas, ocular, desconocida), los tratamientos previos

a la consulta hospitalaria (sean adecuados o no como inducción de vómito,

administración de aceite o leche, etc.).

A. Medidas específicas en el paciente intoxicado

Inducción del vómito: esta medida no tiene hoy ningún papel en la

descontaminación gastrointestinal del paciente intoxicado. Adicionalmente

puede ser riesgosa en pacientes intoxicados con sustancias que alteren el nivel

del estado de conciencia y que tengan la vía aérea desprotegida. El

medicamento que tradicionalmente se ha recomendado en la literatura para tal

efecto es el jarabe de ipeca, cuyo uso está prohibido en Colombia por las

autoridades sanitarias.

Lavado gástrico: requiere el paso de una sonda orogástrica y la secuencial

administración y aspiracion de pequeños volúmenes de líquido, en un intento

por remover las sustancias tóxicas ingeridas que aún puedan encontrarse en

el estómago. Actualmente, debido a su reducido beneficio, no se recomienda

su realización de manera rutinaria y ha dado paso cuando está indicado al uso

de dosis únicas de carbón activado.

Indicaciones: ingestión de una sustancia a dosis tóxicas, que no tenga

capacidad de fijarse al carbón, no tenga antídoto o sea dializable, que

no sea corrosiva, que no deprima el nivel de conciencia y que no haya

pasado más de una hora de su ingestión.

Complicaciones: estimulación vagal y arritmias, intubación de la vía

aérea con la sonda, con el consecuente paso a los pulmones del líquido

del lavado, broncoaspiración, traumas en la nariz y el tracto digestivo

superior.

Contraindicaciones: pacientes con cualquier grado de depresión del

estado de conciencia, que hayan convulsionado o ingerido sustancias

Page 13: Para paciente intoxicado

con potencial depresor del sistema nervioso central y mientras no tengan

protegida la vía aérea.

Procedimiento: el paciente debe estar en posición de Trendelenburg,

con inclinación de 15 grados y en decúbito lateral izquierdo. En adultos

se debe usar sonda 36 – 40 Fr (diámetro del mismo tamaño de dedo

menique), en niños se utiliza sonda 24 – 28 Fr, la cual debe ser fijada y

confirmar posición gástrica. Se pasan volúmenes de agua de

aproximadamente 200 – 300 mL (en lo posible tibia). En niños se debe

usar solución salina 0.9 % a dosis 10 mL/kg de peso. El volumen de

retorno, debe ser proporcional a la cantidad administrada. No se debe

usar agua en los niños por el riesgo de inducir hiponatremia e

intoxicación hídrica. Se debe continuar con el lavado hasta que el

líquido de retorno sea claro, o hasta que se haya usado un volumen de 3

a 5 litros.

Carbón activado: es la estrategia de descontaminación más recomendada,

desplazando el uso y las indicaciones del lavado gástrico. Funciona como un

efectivo adsorbente, sin embargo su utilidad es fundamentalmente si se usa

antes de que pase una hora de haber sido ingerida la sustancia tóxica.

Indicaciones: exposición por vía oral a sustancias tóxicas, en cantidades,

tóxicas, con menos de una hora de la ingestión, sin deterioro del estado

de conciencia. Ante cualquier evidencia de deterioro neurológico o la

aparición de convulsiones, la administración de carbón activado debe

hacerse previa intubación orotraqueal.

Complicaciones: broncoaspiración de carbón activado, íleo, obstrucción

intestinal.

Contraindicaciones: carece de utilidad o está contraindicado en la

exposición a las siguientes sustancias: alcoholes, hidrocarburos, ácidos

y álcalis, hierro, litio y otros metales.. No se debe emplear en presencia

de deterioro del estado de conciencia o convulsiones, ni en paciente no

intubado.

Procedimiento: cuando está indicado, se diluye 1 gramo por kilo de peso

al 25% en agua corriente y se le da a tomar al paciente o se pasa por la

Page 14: Para paciente intoxicado

sonda orogástrica, en dosis única. En las intoxicaciones por

carbamazepina, dapsona, fenobarbital, quinina, teofilina; que tengan

riesgo de comprometer la vida, se administra en la dosis mencionada

cada 4 a 6 horas, durante 24 horas (esto se conoce como dosis

repetidas de carbón activado).

Catarsis: los catárticos aceleran la expulsión del complejo carbón activado -

tóxico del tracto gastrointestinal, ya que tradicionalmente se ha dicho que el

carbón activado produce íleo u obstrucción intestinal. También se sabe que

acelerar el tránsito intestinal, y por ende la expulsión del tóxico, no tiene

ninguna utilidad como medida de descontaminación. Hoy su uso rutinario está

cuestionado, dado que se considera que dosis únicas de carbón activado no

implican riesgo de producir íleo u obstrucción intestinal.

Indicaciones: paciente con dosis repetidas de carbón activado (ver

apartado anterior).

Complicaciones: nausea, dolor abdominal, vómito, hipotensión

transitoria, deshidratación, hipernatremia, hipermagnesemia.

Contraindicaciones: íleo paralítico, trauma abdominal reciente, cirugía de

intestino reciente, obstrucción intestinal, perforación intestinal, ingestión

de sustancia corrosiva, depleción de volumen, disbalance electrolítico,

falla renal, bloqueo auriculoventricular.

Procedimiento: en caso de ser necesario se debe usar una sola dosis.

En nuestro medio se utiliza Sulfato de magnesio (Sal de Epsom): 30

gramos (en niños: 250 mg por kilo de peso), en solución al 25 % en agua

o idealmente Manitol al 20 %, en dosis de 1 g/kg de peso (5 mL/kg) por

sonda orogástrica.

Irrigación intestinal: la irrigación intestinal limpia el intestino por la

administración enteral de grandes cantidades de una solución osmóticamente

balanceada de electrolitos, lo cual induce deposiciones líquidas, sin causar

cambios significativos en el equilibrio hidroelectrolítico.

Indicaciones: consumo de sustancias tóxicas de liberación sostenida,

ingestión de tóxicos que no se fijen al carbón como metales pesados,

Page 15: Para paciente intoxicado

litio y hierro y los que transportan paquetes de sustancias ilícitas en el

tracto gastrointestinal (tradicionalmente llamados mulas).

Complicaciones: náusea, vómito, dolor tipo cólico, enrojecimiento facial.

Contraindicaciones: obstrucción intestinal, perforación, íleo paralítico y

pacientes con inestabilidad hemodinámica o compromiso de vías

aéreas.

Procedimiento: cada sobre de polietilenglicol se disuelve en un litro de

agua, a través de una sonda orogástrica o con la toma voluntaria del

paciente, se pasa la dosis según la edad así: 9 meses a 6 años: 500

mL/hora, 6 a 12 años: 1 L/h y en adolescentes y adultos 1 a 2 L/h. Se

continúa su administración hasta que el efluente rectal sea claro o

mientras haya evidencia de que aún persiste el tóxico en el tracto

gastrointestinal. El efecto catártico inicia en una hora.

B. Manipulación del pH urinario

Alcalinización urinaria: la alcalinización urinaria es una técnica utilizada para

incrementar la excreción de una sustancia por vía renal mediante la

administración de bicarbonato de sodio, para producir una orina con pH

alcalino. El fundamento de este método es que sustancias tóxicas, que se

comporten como ácidos débiles, incrementen su disociación, en un pH alcalino,

con el fin de favorecer su excreción (“trampa iónica”). Como el principal objetivo

es la manipulación del pH urinario, deben evitarse términos como diuresis

alcalina o diuresis forzada. Cuando está indicado su uso, debe hacerse

adicionalmente medición de creatinina, glicemia y estado ácido base.

Indicaciones: intoxicación de moderada a grave por salicilatos y que no

cumple criterios para hemodiálisis, intoxicación por 2,4

diclorofenoxiacético.

Complicaciones: alkalemia, hipokalemia, tetania alcalótica e

hipocalcemia.

Contraindicaciones: falla renal, isquemia cardíaca de base con edema

pulmonar no cardiogénico, edema cerebral, síndrome de secreción

Page 16: Para paciente intoxicado

excesiva de hormona antidiurética. En estos casos se debe considerar

hemodiálisis o hemoperfusión.

Procedimiento: 2 mEq/kg de bicarbonato de sodio (ampollas de 10 mL, 1

mL = 1 mEq), en 1 litro de agua destilada, se pasa 250 mL en una hora

y el resto 75 mL/hora. A cada litro de la mezcla se le adicionan 10 a 20

mEq de cloruro de potasio. La velocidad de infusión se ajusta para

mantener un pH urinario en 7.5, el cual debe controlarse cada hora. En

la intoxicación por 2,4 diclorofenoxiacético se debe mantener un gasto

urinario de 600 mL/h y suspender cuando haya mejoría del paciente y en

salicilatos se suspende cuando las concentraciones sanguíneas estén

por debajo de 250 mg/L.

La acidificación urinaria incrementa la posibilidad de empeorar el daño renal

cuando hay mioglobinuria, motivo por el cual nunca se recomienda.

C. Criterios de admisión del paciente intoxicado a UCI

Convulsiones, intubación de emergencia, depresión respiratoria, bloqueo

auriculoventricular de segundo y tercer grado, presión sistólica <80 mm Hg,

escala de coma Glasgow <12, necesidad de diálisis de emergencia, acidosis

metabólica de difícil manejo, edema pulmonar inducido por drogas o toxinas,

hipokalemia secundaria a intoxicación por digital.

Page 17: Para paciente intoxicado

2. GRANDES SÍNDROMES TOXICOLÓGICOS

Dra. Lina Peña

Son de gran ayuda, porque permiten asociar los signos y síntomas

presentados por el paciente con un grupo de agentes tóxicos de mecanismos

de toxicidad similar, con el objetivo de orientar el diagnóstico, y el tratamiento

antidotal y de soporte. Se utiliza para ello los signos vitales y otros como:

tamaño pupilar, características de la piel (temperatura y sequedad),

peristaltismo, nivel del estado de conciencia. Los toxidromes más importantes

son:

TOXIDROME MANIFESTACIONES AGENTES RELACIONADOS

Anticolinérgico Taquicardia, hipertensión,

midriasis, visión borrosa,

peristaltismo disminuido,

retención urinaria, psicosis,

convulsiones.

Antihistaminicos y Fenotiazinas

Antidepresivos tricíclicos

Atropina

Baclofén

Escopolamina

Colinérgico Bradicardia, broncorrea,

sibilancias, miosis, lagrimeo,

diaforesis, sialorrea, diarrea,

dolor tipo cólico, vómito,

depresión del estado de

conciencia o convulsiones

Carbamatos

Organofosforados

Fisostigmina

Pilocarpina

Adrenérgico Taquicardia, hipertensión,

midriasis, diaforesis, agitación,

psicosis, convulsiones

Anfetaminas, cafeína y efedrina

Cocaína

Fenciclidina

Terbutalina

Sedante – hipnótico Hipotensión, apnea,

hipotermia, piel fría, confusión,

estupor, coma.

Anticonvulsivantes y etanol

Antipsicóticos

Barbitúricos

Benzodiazepinas

Alucinógeno Taquicardia, hipertermia,

midriasis, agitación,

hiperactividad muscular,

alucinaciones, psicosis,

Anfetaminas

Marihuana

LSD

Fenciclidina

Page 18: Para paciente intoxicado

pánico, sinestesias,

convulsiones.

Cocaína.

Narcótico – Opioide Bradicardia, hipotensión,

depresión respiratoria, miosis,

hipotermia, peristaltismo

disminuido, reducción del nivel

de conciencia

Opioides

Serotoninérgico Taquicardia, midriasis, piel

caliente y sudorosa, vómito,

diarrea, irritabilidad,

hiperreflexia, trismos, temblor,

mioclonias.

Yagé

Clomipramina.

Meperidina

Trazodone,

Fluoxetina, Paroxetina y

Sertralina

Solvente Taquicardia, alucinaciones,

letargia, confusión, cefalea,

inquietud, incoordinación,

ideas de desrealización,

despersonalización,

convulsiones.

Acetona

Tolueno

Naftaleno

Tricloroetano

Hidrocarburos clorados.

Desacople de

fosforilacion

oxidativa

Hipertermia, taquicardia,

acidosis metabólica

Salicilato

2,4 diclorofenoxiacético

Dinitrofenol

Glifosato, fósforo y zinc.

RESUMEN DE ALGUNAS MANIFESTACIONES CLÍNICAS

DE LOS PRINCIPALES TOXIDROMES.

SÍNDROME FC PA FR T PIEL PUPILAS PERIST. SUDOR EST.MENTAL

Adrenérgico A A A A Pálida Midriasis A A Agitado

Serotoninérgico A A A A Rubor Estable A A Agitado

Colinérgico D D A D Pálida Miosis A A Deprimido

Anticolinérgico A A A A Rubor Midriasis D D Agitado

Opioide D D D D Pálida Miosis D A Deprimido

Sedantes D D D D Pálida Estable D D Deprimido

Abreviaciones: FC: frecuencia cardíaca; PA: presión arterial; FR: frecuencia respiratoria; T:

temperatura; Perist.: peristaltismo; A: aumenta; D: disminuye

Page 19: Para paciente intoxicado

3. RECURSOS NECESARIOS PARA EL MANEJO DEL PACIENTE

INTOXICADO

Dra. Lina Peña

Para una adecuada atención del paciente intoxicado en un servicio de

urgencias, es necesario que las instituciones cuenten con una infraestructura

ajustada a los requerimientos de la población usuaria de su servicio.

Es necesario conocer el perfil epidemiológico que permita optimizar los

recursos hospitalarios, por lo tanto el médico debe conocer la población y los

factores de riesgo toxicológicos a los que está expuesta, previendo las posibles

necesidades de insumos y medicamentos, que le permitan atender

adecuadamente los casos de intoxicaciones agudas.

El principal recurso que un servicio de urgencia debe tener es el personal

entrenado y capacitado para atender las diferentes urgencias toxicológicas.

También es importante conocer el grado de complejidad (1º, 2º, 3º ó 4º nivel de

atención) de la entidad hospitalaria dado que de esto dependerá la capacidad

logística de atender de manera adecuada las intoxicaciones.

Insumos básicos para la atención de urgencias toxicológicas en un

primer nivel.

1. Carro de reanimación.

2. Desfibrilador.

3. Oxímetro de pulso.

4. Aspirador de secreciones.

5. Laringoscopio y valvas de diferentes tamaños.

6. Material de soporte ventilatorio y circulatorio: tubo endotraqueal de

varios calibres, balón para presión positiva, con su respectiva válvula

y máscara (ambú), equipos de venoclisis, catéteres de varias

referencias).

7. Oxígeno y equipos para su suministro.

Page 20: Para paciente intoxicado

8. Fonendoscopio (de adultos y pediátrico)

9. Tensiómetro.

10. Negatoscopio.

11. Electrocardiógrafo, monitor de signos vitales.

12. Linterna.

13. Martillo de reflejos.

14. Termómetro.

15. Camilla para lavado gástrico con 15 grados de inclinación cefálica.

16. Sonda orogástrica de varios calibres

17. Sustancias adsorbentes: carbón activado en polvo (bolsas de 60 gr),

tierra de Fuller para el Paraquat (tarro por 60 g), colestiramina para

Organoclorados (sobres de 9 g con 4 g de principio activo).

18. Catárticos: bolsas de manitol al 20%

19. Ducha para baño del paciente.

20. Dextrometer (glicemia capilar) y sus tirillas correspondientes.

21. Cintillas para citoquímico de orina

22. Kits de pruebas rápidas de toxicología.

23. Kits de antídotos (ver capítulo 3 para lista según nivel).

Insumos necesarios para la atención de urgencias toxicológicas en un

segundo nivel. Además de los requerimientos descritos para el primer

nivel, un hospital de segundo nivel idealmente deberá contar con:

1. Anestesiólogo y ventilador.

2. Polietilenglicol (Nulytely ®) para irrigación intestinal total.

Insumos necesarios para la atención de urgencias toxicológicas en un

tercer y cuarto nivel. Además de los requerimientos descritos para los

niveles anteriores, un hospital de tercer y cuarto nivel deberá contar con:

1. Toxicólogo clínico.

2. Unidad de cuidados intensivos.

3. Unidad de hemodiálisis.

4. Laboratorio especializado

5. Banco de antídotos.

Page 21: Para paciente intoxicado

6. Centro de información toxicológica, con biblioteca y bases de datos

especializadas.

7. Especialidades médicas y quirúrgicas para manejo interdisciplinario

del paciente intoxicado.

Page 22: Para paciente intoxicado

4. ANTIDOTOS NECESARIOS PARA CADA NIVEL DE ATENCIÓN

Dra. Lina Peña

Para realizar el manejo del paciente intoxicado debemos hacer un

acercamiento diagnóstico que nos permita encaminarnos hacia las medidas

que impidan la absorción del tóxico, favorezcan la eliminación y la utilización

del tratamiento específico (antídoto).

La mayoría de las intoxicaciones requerirán un manejo sintomático, pero en

algunas de no ser utilizado el antídoto el pronóstico será sombrío.

Cada nivel de atención debe disponer de antídotos según el grado de

complejidad y la capacidad operativa de cada institución.

Por estas razones los antídotos para cada nivel de atención serían:

Primer nivel de atención Nombre N - acetil - cisteína (NAC)

Presentación Sobres granulados de 600, 300 y 100 mg. Ampollas de

300 mg (3mL)

Indicaciones aprobadas Intoxicación aguda y crónica por acetaminofen

Indicaciones en investigación o

por reporte de caso

Tetracloruro de carbono, cloroformo, paraquat, poleo

Dosificación oral 140 mg/kg, diluidos al 5% VO, continuar 70 mg/kg cada 4

horas, diluidos al 5% por 17 dosis

Dosificación intravenosa Dosis inicial: 150 mg/kg, diluida en 200 mL DAD5%, para

pasar en 15 minutos, continuar con 50 mg/kg diluidos en

500 mL DAD5% para pasar en 4 horas y 100 mg/kg

diluidos en 1000 mL DAD5%, para pasar en 16 horas.

Dosificación en niños Debe ajustarse el volumen de diluyente según el peso

corporal del niño así:

≤20 kg

150 mg/kg de NAC en 3 mL/kg de DAD5%, para 15

minutos, seguido 50 mg/kg de NAC en 7mL/kg de

DAD5%, para 4 horas, seguido de 100 mg/kg de NAC

en 14mL/kg de DAD5%, para 16 horas

>20 kg

150 mg/kg de NAC en 100 mL de DAD5%, para 15

minutos, seguido 50 mg/kg de NAC en 250 mL de

DAD5%, para 4 horas, seguido de 100 mg/kg de NAC

en 500 mL de DAD5%, para 16 horas.

Duración de la terapia Esquema oral: 72 horas

Page 23: Para paciente intoxicado

Esquema intravenoso: 21 horas.

Se deben vigilar transaminasas y si están elevadas al

finalizar el tratamiento, éste debe continuar con la última

dosis recibida, hasta que las transaminasas estén

normales.

Observaciones Puede producir vómito, rash, broncoespasmo y

enfermedad del suero.

La presentación oral NUNCA debe darse por la ruta

parenteral.

Nombre Atropina sulfato

Presentación Ampollas de 1 mg (1 mL)

Indicaciones aprobadas Tratamiento de la bradicardia y la broncorrea en las

intoxicaciones por inhibidores de colinesterasas.

Tratamiento de bradicardia sintomática en las

intoxicaciones por betabloqueadores, calcioantagonistas

y digitálicos.

Dosificación en inhibidores de

colinesterasa

Iniciar con bolo intravenoso directo, rápido y sin diluir de

1 – 3 mg, repetir a los 5 minutos en caso de necesidad,

el doble de la dosis previa, hasta lograr los objetivos

terapéuticos (FC ≥ 80x´, PAS≥ 80mmHg, sin broncorrea,

hidratación de la mucosa oral normal, la midriasis y la

boca seca no es un objetivo terapéutico).

Dependiendo de la gravedad de la intoxicación puede

requerirse una infusión intravenosa de 1 – 4 mg / hora, la

velocidad del goteo se ajusta para mantener los objetivos

terapéuticos.

Dosificación en

calcioantagonistas,

betabloqueadores y digitálicos

Bolos de 1 mg IV directo, rápido y sin diluir, cada 5

minutos, hasta un máximo de 3 mg dosis total. Si con

esta dosis no hay respuesta, considerar otras alternativas

terapéuticas (ver capítulo respectivo)

Dosificación en niños Inhibidores de colinesterasas: bolo intravenoso de 0.02

mg/kg, repetir a los 5 minutos el doble de la dosis previa

administrada, hasta lograr los objetivos terapéuticos

mencionados arriba.

Duración de la terapia En las bradicardias por medicamentos el tope son 3 mg

en 15 minutos.

En las intoxicaciones por organofosforados el tiempo lo

define cada paciente en la medida que logre y mantenga

los objetivos terapéuticos.

Observaciones Nunca administrar intravenosa lenta y diluida, (siempre

debe ser rápida y sin diluir) o menos de 0.5 mg en

adultos y 0.02 mg/ kg en niños

Nombre Ácido fólico

Presentación Tabletas de 1 y 5 mg

Ampollas de 1mg (1mL)

Indicaciones aprobadas Tratamiento de la intoxicación por metanol yetilenglicol

Dosificación 1 mg/kg por vía oral o intravenosa cada 4 horas por 24

horas (6 dosis). Máximo 50 mg por dosis

Dosificación en niños 1 mg/kg por vía oral o intravenosa cada 4 horas por 24

Page 24: Para paciente intoxicado

horas (6 dosis). Máximo 50 mg por dosis

Duración de la terapia 24 horas

Observaciones No sirve en toxicidad por inhibidores de la dihidrofolato

reductasa como trimetoprim o metotrexate.

Nombre Etanol

Presentación Ampollas de alcohol absoluto (al 96%) con 50 g en 50 mL

para uso intravenoso

Frascos de aguardiente al 29%, para uso vía oral

Indicaciones aprobadas Tratamiento de la intoxicación por metanol yetilenglicol

Indicaciones en investigación o

por reporte de caso

Intoxicación por fluoracetato de sodio

Dosificación Vía IV: disolver una ampolla de alcohol absoluto en

450cc de DAD al 10%. Pasar un bolo de 8 cc/kg en

1 hora y luego un sostenimiento de 1 - 2 cc /kg / h

Vía oral: disolver en jugo o gaseosa 3 mL/kg de etanol al

29% (aguardiente) para tomar en 1 hora, y luego un

sostenimiento de 0.3 mL /kg / h.

Independiente de la ruta de administración, durante la

hemodiálisis debe aumentarse la dosis de sostenimiento

un 30 %

Dosificación en niños Igual que en los adultos

Duración de la terapia Se puede suspender el antídoto cuando el metanol está

negativo y la acidosis metabólica corregida.

Sin hemodiálisis ni posibilidad de controlar gases

arteriales y niveles de metanol: 5 días.

En fluoracetato la duración del tratamiento es de 24 horas

Observaciones Se debe vigilar la glicemia (con dextrometer cada 3

horas), mientras se esté recibiendo el alcohol, por el

riesgo de hipoglicemia, especialmente si el paciente no

tiene vía oral.

Nombre Naloxona

Presentación Ampollas de 0.4 mg

Indicaciones aprobadas Tratamiento de la depresión respiratoria por opioides

Indicaciones en investigación o

por reporte de caso

En pacientes con hipotensión refractaria y deterioro de

conciencia en intoxicación por inhibidores de la ECA.

Dosificación Dosis Inicial: administrar un bolo de 0.05 a 0.1 mg IV si

el paciente es dependiente a los opioides y de 0.4 a 2

mg en pacientes no dependientes.

La dosis inicial se repite a necesidad cada 3 minutos

hasta lograr revertir la depresión respiratoria, si al llegar a

una dosis de 10 mg, no respira espontáneamente, se

debe considerar otra causa que explique el cuadro.

Dosificación en niños E n menores de 20 kg iniciar con 0.1mg /kg en bolo, y

repetir cada 3 minutos, hasta revertir la depresión

respiratoria. En mayores de 20 kilos igual dosificación

que en los adultos.

Page 25: Para paciente intoxicado

Duración de la terapia Si una vez se ha logrado revertir la depresión respiratoria,

esta reaparece entre 20 y 60 minutos después, se debe

iniciar un goteo a: 0.4 - 0.8 mg/ hora y se titula a

necesidad. En los niños la dosis de la infusión es de 0.04

– 0.16mg/kg/h

Observaciones Algunos consideran que puede producir edema pulmonar

Nombre Tiamina

Presentación Ampollas de 10 mL con 100 mg/ mL

Tabletas de 300 mg

Indicaciones aprobadas Prevención o tratamiento de la encefalopatía de

Wernicke – Korsakoff en alcohólicos o

desnutridos.

Intoxicación con etilenglicol

Dosificación 100 mg IM cada 6 – 8 horas o 300 mg VO día

Dosificación en niños 50 mg IM cada 6 – 8 horas

Duración de la terapia Se puede suspender la administración cuando el paciente

inicie la vía oral

Observaciones Las presentaciones comerciales disponibles en Colombia

NO son para uso IV

Nombre Vitamina K1

Presentación Ampollas de 2 y 10 mg

Indicaciones aprobadas Anticoagulación excesiva causada por warfarina o

superwarfarinas, cuando el INR es mayor de 4.

No está indicado su uso empírico en la ingestión de

anticoagulantes, ya que la mayoría de los casos no

requiere tratamiento.

Dosificación Vía Oral: 10 a 50 mg cada 6 a 12 horas.

Vía venosa: 10 a 25 mg en adultos y 5 – 10 mg en niños,

diluidos en solución salina 0.9% o dextrosa al 5%, a una

velocidad máxima de 1mg/ min.

Dosificación en niños Vía oral: 0.4 mg/ kg/ dosis, cada 6 a 12 horas

5 – 10 mg, diluidos en solución salina 0.9% o dextrosa al

5%, a una velocidad máxima de 1mg/ min

Duración de la terapia El uso de vitamina K1 puede ser necesario por varios días

o incluso meses.

Observaciones No debe usarse como medida profiláctica sólo por la

historia de ingesta de anticoagulantes orales

No debe usarse vitamina K3

Nombre Nitrito de amilo

Nitrito de sodio

Presentación Nitrito de amilo : cápsulas o perlas rompibles de 0.3 mL

Nitrito de sodio: ampollas de 300 mg en 10 mL (30

mg/mL)

Indicaciones aprobadas Intoxicación por cianuro

Dosificación Nitrito de amilo: 2 perlas

Nitrito de sodio: 1 ampolla intravenosa en 3 minutos

Page 26: Para paciente intoxicado

Dosificación en niños Nitrito de amilo: 1 perla

Nitrito de sodio: 0.15 a 0.33 mL/kg diluidos en 50 mL de

SSN, para pasar en 3 minutos

Duración de la terapia Nitrito de amilo: se suspende la inhalación cuando se

inicia la administración de nitrito de sodio

Nitrito de sodio: se puede repetir la mitad de la dosis

inicial, si en 20 minutos no hay recuperación del estado

del paciente.

Observaciones Las ampollas de nitrito de amilo son muy difíciles de

conseguir. Tienen una vida media de 1 año a partir de su

fabricación.

. Nombre Tiosulfato de sodio

Presentación Ampollas de 12.5 g (50 mL al 25%)

Indicaciones aprobadas Intoxicación por cianuro

Dosificación 12.5 g IV a una velocidad de 2 mL/min

Dosificación en niños 1.65 mL/kg (400 mg/kg) a una velocidad de 2 mL /min

Duración de la terapia Se puede repetir la mitad de la dosis inicial, si en 20

minutos no hay recuperación del estado del paciente (y

luego de haber repetido la dosis de nitrito de sodio).

Observaciones El uso de tiosulfato puede producir una falsa disminución

de los niveles de cianuro en las muestras biológicas.

Nombre Piridoxina

Presentación Cápsulas blandas de 50 mg.

Tabletas de complejo B con 20 mg de piridoxina por

tableta.

Ampollas de complejo B de 10 mL, con 50 mg/mL de

piridoxina para uso intramuscular.

Indicaciones aprobadas Intoxicación por etilenglicol y tratamiento de las

convulsiones de la intoxicación con isoniazida.

Dosificación Intoxicación por etilenglicol: 50 mg VO o IV cada 6 horas

hasta que mejore el cuadro clínico

Convulsiones por isoniazida: 1g VO o IV por cada gramo

de isoniazida tomado, si no se conoce la dosis de

isoniazida dar 4-5 g por VO o IV

Segundo nivel de atención Los mismos del primer nivel de atención más: Nombre Protamina

Presentación Ampollas de 5000 UI en 5 mL (5000 UI = 50 mg). 1000 UI

de protamina (10 mg – 1mL) neutralizan 1000UI de

heparina

Indicaciones aprobadas Revertir el efecto anticoagulante de la heparina no

fraccionada y las heparinas de bajo peso molecular, si

existe sangrado o si se aplicó una sobredosis

Dosificación Heparina no fraccionada: Se debe suspender la

administración de la heparina, cuando esta se recibe en

infusión continua.

Page 27: Para paciente intoxicado

Aplicar inmediatamente 1000 UI de protamina por cada

1000 unidades de heparina, administradas en goteo para

10 minutos y en una dosis máxima de 50 mg.

Si han transcurrido 30 a 60 minutos minutos administrar

500 a 750 UI por cada 100 unidades de heparina.

Si han trascurrido 60 a 180 minutos, administrar 375 a

250 UI por cada 100 unidades de heparina.

Después de 4 horas no administrar, pues la heparina se

ha metabolizado y no se obtiene beneficio.

Si el paciente venía recibiendo una infusión continua,

debe neutralizarse la dosis recibida en las 2 últimas horas

(por ejemplo, para un goteo de 1000 unidades hora, se

aplican 20 mg IV).

Si se desconoce la dosis aplicar de 25 a 50 mg IV en 10

minutos.

Heparinas de bajo peso molecular: el efecto es parcial.

1 mg de protamina por cada mg de enoxaparina y

por cada 100U antifactor Xa de dalteparina/

tinzaparina administradas en las últimas 8 horas.

0.5 mg de protamina por cada mg de

enoxaparina y por cada100U antifactor Xa de

dalteparina/ tinzaparina administradas si han

pasado entre 8 y 12 horas.

No administrar si han pasado más de 12 horas.

Dosificación en niños Igual que para los adultos

Observaciones Los efectos inician a los 5 minutos y duran 2 horas.

Se debe monitorizar el estado de la coagulación del

paciente (TPT) para evitar sobreanticoagulación por la

protamina.

La infusión intravenosa rápida puede producir hipotensión

y reacciones anafilactoides.

Nombre Hidroxicobalamina

Presentación Ampollas de 5 mg (en 5 mL), para uso IM. Ampollas de

2.5 g (no disponibles actualmente en Colombia).

Indicaciones aprobadas Tratamiento de la intoxicación por cianuro y prevención

de la toxicidad por tiocianatos durante la infusión de

nitroprusiato de sodio

Dosificación Intoxicación por cianuro: 5 – 15 g IV disueltos en 100 mL

de SSN para pasar en 30 minutos

Prevención de toxicidad por tiocianato: infusión de 25

mg/hora

Dosificación en niños Intoxicación por cianuro: 70 mg/kg

Duración de la terapia Intoxicación por cianuro: dosis única

Toxicidad por tiocianatos: hasta que el riesgo persista

Observaciones Las ampollas de 5 g actualmente no se encuentran

disponibles en Colombia. Para administrar la dosis

requerida que sirve como antídoto en la intoxicación por

cianuro, con las presentaciones disponibles en Colombia

se requieren 1000 ampollas y la presentación es para uso

Page 28: Para paciente intoxicado

IM. Tampoco debe aplicarse cianocobalamina.

Produce coloración roja de las secreciones por 3 a 7 días

(lágrimas, saliva, orina)

Tercer nivel de atención Todos los anteriores y además: Nombre BAL (british anti – lewisite, dimercaprol)

Presentación Ampollas de 300mg (3 ml)

Indicaciones aprobadas Intoxicación aguda por arsénico (menos de 24

horas)

Intoxicación aguda por sales inorgánicas de

mercurio (menos de 4 horas). NO en mercurio

elemental

Encefalopatía por plomo (junto a EDTA), excepto

exposición a plomo alkyl

Intoxicación por oro

Dosificación Intoxicación por oro, mercurio y arsénico: 3 - 5

mg/kg intramuscular profundo, C/4h por 2 días,

luego c/12h por 7-10 días si el paciente

permanece sintomático o con los niveles de los

metales elevados.

Para la encefalopatía por plomo en los niños : 3–

4 mg/kg IM (75 mg/m2), y a las 4 horas EDTA (ver

guía de EDTA mas adelante para dosificación).

Observaciones Viene con aceite de maní como preservante, evitar en

alérgicos al maní. La aplicación local es muy dolorosa y

puede generar abscesos estériles o piógenos.

No debe usarse por la ruta intravenosa.

Nombre Deferoxamina

Presentación Ampollas de 500 mg (liofilizado)

Indicaciones aprobadas Intoxicación por hierro (ver sección para indicaciones de

uso)

Dosificación Infusión de 15 mg/kg/hora

Dosificación en niños Igual

Duración de la terapia Máximo 24 horas

Observaciones No deben darse más de 6 g en 24 horas.

Nombre DSMA (succimer)

Presentación Cápsulas de 100 mg

Indicaciones aprobadas Intoxicación por plomo, arsénico y sales de mercurio

Dosificación 10 mg/kg VO c/8h por 5 días, luego c/12h por 2 semanas

Dosificación en niños 350 mg/m2 VO c/8h por 5 días, luego c/12h por 2

semanas

Observaciones Tener presente que la intoxicación aguda por arsénico y

sales de mercurio puede cursar con gastroenteritis, lo que

Page 29: Para paciente intoxicado

afecta la biodisponibilidad del antídoto. En tales casos

debe considerarse alternativamente EDTA

Nombre Flumazenil

Presentación Ampollas de 0.5mg/5mL y 1mg/10mL (ampollas de 0.1

mg/mL)

Indicaciones aprobadas Depresión respiratoria por benzodiazepinas, como

alternativa a la intubación endotraqueal

Dosificación 0.2 mg IV en 30 segundos, si no hay respuesta, poner 0.3

mg IV en 30 segundos, si no hay respuesta, poner 0.5 mg

IV en 30 segundos, y continuar con esta dosis cada 30

segundos a necesidad hasta un máximo de 3 mg.

Dosificación en niños 0.01 mg/kg, repetir si no hay respuesta cada 30 segundos

hasta un máximo de 1 mg.

Observaciones Su uso está contraindicado si el paciente tiene una

coingestión de antidepresivos triciclicos, si tiene historia

de convulsiones o incremento de la presión

endocraneana o consumo crónico de benzodiazepinas,

por el riesgo de desencadenar arritmias, convulsiones,

aumento de presión endocraneana o un síndrome de

abstinencia respectivamente.

Nombre Glucagón

Presentación Ampollas de 1mg /1mL

Indicaciones aprobadas Hipotensión, bradicardia o trastornos de la

conducción secundarios a la intoxicación por

betabloqueadores

Hipotensión asociada a reacciones anafilácticas

en pacientes que se encuentren

concomitantemente bajo los efectos de los

betabloqueadores.

Depresión miocárdica grave en intoxicación por

calcioantagonistas, antidepresivos tricíclicos, que

no han respondido a otras medidas.

Hipoglicemia de origen no alcohólico

Dosificación Bolo intravenoso de 3 a 5 mg en 2 minutos, repetir cada 3

minutos hasta obtener respuesta o una dosis de 10 mg,

se puede continuar una infusión de 1 - 5 mg / hora

Dosificación en niños Bolo intravenoso de 0.15 mg/kg en 2 minutos, se puede

continuar una infusión de 0.05-0.1 mg/kg/h

Duración de la terapia No está establecida, pero se ha reportado el desarrollo

de taquifilaxia en infusiones por más de 24 horas.

Observaciones Para la administración de infusiones debe reconstituirse

la ampolla con agua destilada o DAD 5%, y no con la

glicerina que trae el producto.

Nombre Azul de metileno

Presentación Ampollas de 10 mg por mL (al 10%)

Indicaciones Tratamiento de la metahemoglobinemia sintomática

(signos o síntomas de hipoxemia: disnea, confusión o

dolor torácico)

Page 30: Para paciente intoxicado

Niveles de metahemoglobina ≥30%

Dosificación 1-2 mg/kg IV lento en 5 minutos. Puede repetirse la dosis

en 30 a 60 minutos. Si no hay respuesta después de 2

dosis, sospechar deficiencia de G6FD.

Duración de la terapia Usualmente sólo deben usarse un máximo de dos dosis.

Cuando hay una producción continua de

metahemoglobinemia por un estrés oxidativo prolongado

(dapsona) se puede requerir dosificar cada 6 – 8 horas

por 2 – 3 días.

Observaciones No es efectivo para reversar la sulfohemoglobinemia.

La dosificación excesiva puede producir

metahemoglobinemia (7 mg/kg en dosis única), por lo que

la recomiendan como antídoto de la intoxicación por

cianuro, ante la falta de nitritos y NUNCA debe usarse si

ya se han aplicado los nitritos.

Nombre Penicilamina

Presentación Tabletas de 250 mg

Indicaciones Es una alternativa en la intoxicación por plomo

en los pacientes intolerantes al BAL o como

terapia conjunta luego de la administración del

EDTA o BAL en intoxicaciones moderadas o

graves.

En intoxicación por mercurio luego del BAL o si

el paciente es intolerante al BAL

Intoxicaciones leves a moderadas por cobre

Dosificación 20 a 30 mg/kg/día, dividido en 3 – 4 dosis.

Dosificación en niños 15 mg/kg/día, dividido en 3 – 4 dosis

Duración de la terapia Se debe iniciar con el 25% de la dosis y aumentar

gradualmente hasta alcanzar la dosis total en 2 ó 3

semanas, para minimizar los efectos secundarios. Hay

que controlar el valor urinario o sanguíneo del metal en

tratamiento, para guiar la duración de la terapia

Observaciones Debe tomarse con el estomago vacío (1 hora antes o

2 horas después de las comidas). Está contraindicado

su uso en los pacientes alérgicos a la penicilina.

Nombre Fisostigmina

Presentación Ampollas de 1 mg /mL

Indicaciones Síndrome anticolinérgico grave (delirio agitado,

retención urinaria, taquicardia sinusal grave,

hipertermia sin sudoración), secundario a agentes

antimuscarínicos.

Dosificación 0.5-2 mg IV a una velocidad de infusión menor a 0.5

mg/min. Se puede repetir a necesidad cada 10 – 30

minutos hasta un máximo de 4 mg

Dosificación en niños 0.02 mg/kg a una velocidad de infusión menor a 0.5

mg/min

Observaciones Se debe tener un monitor cardiaco conectado al

paciente durante su administración y se debe

administrar atropina si aparece un exceso de síntomas

muscarínicos. No administrar por la ruta muscular o en

Page 31: Para paciente intoxicado

infusión continua.

Nombre Pralidoxima

Presentación Ampollas de 500 mg y 1 g, preparar al 1% para su

administración IV tanto en bolo como en infusión (ver

observaciones al final de la tabla)

Indicaciones Síndrome nicotínico y muscarínico secundario a

intoxicación por inhibidor de colinesterasas.

Dosificación Bolo inicial de 1 – 2 g, para pasar en 15 – 30 minutos.

Continuar una infusión entre 200 a 500 mg/h, por 24

horas (ajustar según respuesta)

Dosificación en niños Bolo inicial de 25 – 50 mg/kg, para pasar en 15 – 30

minutos. Continuar una infusión a 5- 10 mg/kg/hora,

por 24 horas (ajustar según respuesta).

Observaciones Tradicionalmente se ha recomendado la

administración del tratamiento por 24 horas,

aunque en las intoxicaciones por agentes muy

liposolubles y de larga acción la duración del

tratamiento puede ser mayor y depende de la

evolución del paciente.

Cada gramo de pralidoxima que vaya a

administrarse debe estar preparado al 1% (1

gramo en 100 mL de SSN).

Page 32: Para paciente intoxicado

5. PRUEBAS RÁPIDAS EN TOXICOLOGÍA

Dras. Alejandra Restrepo y Lina Peña

Las pruebas rápidas tienen un valor importante porque contribuyen junto con la

historia clínica y el examen físico al enfoque diagnóstico de un paciente

intoxicado y por consiguiente a decidir un tratamiento específico. Estas pruebas

deben ser sensibles y rápidas, sin embargo pueden dar falsos positivos y falsos

negativos, por lo que se deben confirmar los hallazgos con pruebas más

específicas. Por eso las pruebas rápidas por sí solas no tienen valor si no se

involucran dentro de un contexto clínico. A continuación se presenta una

revisión de los principales análisis de pruebas rápidas útiles en el servicio de

urgencias.

Fosforados orgánicos:

Muestra: jugo gástrico.

Técnica: en un tubo de ensayo, mezcle 1 cc de jugo gástrico con una

perla de NaOH, la aparición de un color amarillo, indica la presencia de

órgano fosforado (sirve para paratión, metilparatión, que tienen el radical

p – nitrofenol). La reacción puede acelerarse calentando el tubo de

ensayo al baño Maria). También se puede realizar mezclando el jugo

gástrico con agua, cuando la reacción se pone de color blanco, s

considera positiva para la presencia de órganofosforados

Antidepresivos tricíclicos:

Muestra: orina

Técnica: solo sirve para determinar la presencia de imipramina y su

metabolito desipramina.

En un tubo de ensayo se pone 1 ml del reactivo de imipramina, y de

forma muy lenta por las paredes del tubo de ensayo, se adiciona 1 ml

de orina. La prueba se considera positiva cuando aparece un anillo

verde (presencia de imipramina) o azul (presencia de desipramina)

Page 33: Para paciente intoxicado

Salicilatos:

Muestra: orina

Técnica: detecta la presencia de ácido salicílico (metabolito de los

salicilatos). En un tubo de ensayo se pone 1 ml de orina y se le adiciona

1 ml del reactivo de Trinder (FeCl3) al 10%, la aparición de un color

violeta, indica que hubo exposición a un salicilato) no necesariamente

intoxicación). Puede ser positiva la prueba en casos de exposición a

fenotiazinas. Para diferenciar se agregan 2 gotas de acido sulfúrico al

50%, que en caso de ser salicilatos produce la desaparición del color

violeta.

Fenotiazinas:

Muestra: orina

Técnica: a 1 ml de orina se le adiciona 1 ml del reactivo FPN (Cloruro

Férrico al 5%, Ácido Perclórico al 20%, y ácido nítrico al 50%). La

aparición inmediata de color rosado indica fenotiazinas cloradas y la

aparición del color morado indica la presencia de fenotiazinas fluoradas.

Recordar que puede dar falsos positivos con los salicilatos y por tanto se

puede aplicar ácido sulfúrico donde se apreciará que el color violeta no

desaparece. La aparición de colores tardíos se debe más bien a

componentes de la orina, que a la presencia de fenotiazinas.

Cianuro:

Muestras:

a) Contenido gástrico si la administración fue oral.

b) La piel de donde se aplicó el cianuro si fuese parenteral (en el caso de

un occiso).

c) La sangre en todos los casos.

Técnica: el cianuro puede ser detectado por la transformación de Cobre

(+2) a Cobre (+1) en presencia de la resina de guayaco. La prueba

consiste en humedecer una tirilla de papel de filtro en una solución de

sulfato de cobre (CuS04). Luego se impregna esta tirilla en una solución

Page 34: Para paciente intoxicado

de resina de guayaco. Posteriormente se introduce la tirilla en el frasco

que contiene la muestra biológica sin tener contacto con las paredes del

frasco ni con el contenido de la muestra. Debe aparecer un color azul

inmediatamente en caso de que sea positivo para cianuro. El reactivo de

Guayaco debe guardarse en la nevera pues pierde actividad con el

tiempo dando falsos negativos. En caso de no tener el reactivo hay una

prueba que aunque no es específica puede ser sensible a la intoxicación

por cianuro y consiste en tomarle el pH al jugo gástrico. En términos

generales, el pH gástrico será básico en caso de haber consumido

cianuro debido a la siguiente reacción.

El cianuro en presencia de un medio ácido y agua se convierte en ácido

cianhídrico y en hidróxido de potasio. El ácido cianhídrico es volátil y el

hidróxido de potasio no, por lo que su presencia allí alcaliniza el jugo

gástrico, cuyo pH puede medirse con una cintilla de pH (las usadas para

la orina)

Alcoholes y aldehídos:

Muestra: orina.

Técnica: A un mililitro de orina se le adiciona 1ml de dicromato de

potasio (al 10% en ácido sulfúrico al 50%). La reacción genera la

aparición de un color azul verdoso de intensidad variable según la

concentración y confirma la presencia de sustancias volátiles reductoras

(alcoholes). Se deben usar técnicas confirmatorias para concentración y

tipo de alcohol.

Monóxido de carbono:

Muestra: sangre. Se debe conseguir otra muestra control de una

persona no fumadora.

Se toman unas gotas de la sangre del paciente y del control en dos

tubos de ensayo, se le agrega a cada uno 10 ml de agua destilada y se

Page 35: Para paciente intoxicado

agita. Luego se adiciona 1 ml de NaOH al 10%. La muestra control dará

un color amarilloso- café, mientras que la muestra que contiene CO

mantendrá un color rojo cereza característico.

Paraquat:

Muestra: orina o jugo gástrico.

Técnica: disolver 10mg de ditionito de sodio en 10 ml de Na0H 1N (o

bicarbonato de sodio). En un tubo de ensayo se pone 1 ml de orina y se

le adicionan 2 ml de la mezcla de la solución anterior. La reacción toma

un color azul violáceo, de intensidad variable, según las concentraciones

de paraquat presentes. El ditionito de sodio se degrada con la luz, por lo

tanto debe permanecer guardado en un frasco oscuro y envuelto en

papel de aluminio y almacenado en una caja o cajón a resguardo de la

luz.

Cocaína:

Muestras no biológicas (polvo blanco en la nariz o en decomisos)

Técnica: sobre una placa de plástico o vidrio, se pone la muestra

problema y se le adicionan 2 gotas de tiocianato de cobalto, la reacción

en presencia de cocaína, dará un color azul, posteriormente se le

adicionan 3 gotas de ácido clorhídrico 6N, con lo cual parece un color

rosado, luego se adiciona 1 ml de cloroformo y en caso de ser cocaína

la reacción nuevamente se tornará de azul.

Heroína:

Muestras: no biológicas

Técnica: a la muestra problema se le adicionan unas gotas de cloruro

férrico, en presencia de heroína aparecerá un color amarillo - marrón.

Sin embargo existen falsos positivos, en caso de morfina da un color

verde y en caso de cocaína un color morado.

Page 36: Para paciente intoxicado

6. ATENCIÓN Y MANEJO DEL NIÑO INTOXICADO

Dres. Marie C. Berrouet, Lina Peña, Sergio Parra

Cuando estamos ante un niño intoxicado se deben evaluar y consignar en la

historia clínica todos los signos y síntomas, la sustancia involucrada, su

presentación, la cantidad ingerida, el tiempo transcurrido entre el momento de

la exposición y la consulta, la vía de intoxicación y las medidas de primeros

auxilios practicadas para realizar un enfoque y tratamiento adecuados. Es

importante aclarar las circunstancias en que sucedió la intoxicación para

descartar la presencia de enfermedades psiquiátricas y de maltrato.

Siempre se debe sospechar intoxicación cuando se tenga un niño con:

antecedentes de contacto con un tóxico, un cuadro clínico de aparición súbita,

compromiso neurológico, cardiovascular o falla orgánica multisistémica de

causa desconocida, alteraciones pupilares extremas o cambios en la visión y

quemaduras en boca o en piel, entre otros. La siguiente es una lista de

sustancias comunes en nuestro medio que aun a bajas dosis son

potencialmente letales en niños.

MEDICAMENTO DOSIS POTENCIALMENTE LETAL (mg/kg)

Alcanfor 100

Clonidina 0.01

Cloroquina 20

Clorpromazina 25

Codeína 15

Difenoxilato 1.2

Desipramina 15

Difenhidramina 25

Page 37: Para paciente intoxicado

Dimenhidrinato 25

Hierro 20

Imipramina 15

Teofilina 8.4

Según la edad, las intoxicaciones pediátricas se dividen en dos grupos. El

primer grupo (menores de 6 años), generalmente se expone a un solo tóxico

en poca cantidad, de manera no intencional y si los responsables se enteran,

consultan en forma relativamente oportuna. Hay casos en donde se exponen a

2 ó más tóxicos, y esto puede constituir un indicio de maltrato.

En el segundo grupo están los mayores de seis años y adolescentes. En este

caso es importante considerar que es más frecuente la exposición a múltiples

agentes, las sobredosis de drogas de abuso, alcohol, el gesto suicida y la

demora en la atención.

De igual manera que con los adultos se debe tener precaución con algunas

sustancias, pues en la fase inicial de la intoxicación el paciente se presenta

asintomático. Algunas de esas sustancias son: acetaminofén, hierro, paraquat,

y anticoagulantes.

En el examen físico del niño intoxicado es importante evaluar si se encuentra

apático, si responde o no a los estímulos y se debe incluir también el examen

de los genitales para descartar abuso sexual. En niños existe la posibilidad de

que se presenten cuadros clínicos atípicos; por ejemplo, con los

órganofosforados puede ser más frecuente el toxidrome nicotínico y las

manifestaciones del sistema nervioso central que el cuadro muscarínico clásico,

por lo menos durante las primeras fases de la intoxicación.

Tratamiento: en cuanto al manejo general del niño intoxicado este no difiere

mucho del adulto. Las medidas generales de descontaminación buscan

disminuir la absorción del tóxico y son las siguientes:

Page 38: Para paciente intoxicado

BAÑO: debe ser con agua tibia y jabón, teniendo precaución con la

presentación de hipotermia y sólo en aquellos casos donde se presenta

exposición cutánea.

CARBÓN ACTIVADO: se utiliza en dosis de 1g/kg en solución al 25% en

dosis única por vía oral, no es útil en intoxicaciones por hierro, litio, metales

pesados, cáusticos, hidrocarburos, alcohol, etilenglicol o cianuro. Sólo se

recomienda hasta dos horas después de la ingesta, pero si se trata de

formas farmacéuticas de liberación prolongada pudiera administrarse más

tardíamente. Es importante resaltar que ante la presencia de alteraciones

del estado de conciencia se debe intubar previamente, por riesgo de

broncoaspiración, en dichos casos si la intubación no es posible la

administración de carbón no se debe realizar.

LAVADO GÁSTRICO: hasta una hora después de la ingesta. La sonda

utilizada es orogástrica y se puede pasar un volumen de 10 - 15 mL/kg de

solución salina al 0.9% en cada recambio, hasta obtener un líquido

transparente igual al que se está ingresando; sin embargo, no se

recomienda superar un volumen total de 3000 mL. Es una medida cada vez

menos utilizada y ha sido desplazada por la administración de carbón

activado. Es importante resaltar que ante la presencia de alteraciones del

estado de conciencia se debe intubar previamente, por riesgo de

broncoaspiración, en dichos casos si la intubación no es posible el lavado

gástrico estaría contraindicado.

CATÁRTICOS: su utilidad es mínima, pero es necesario para evitar la

obstrucción intestinal que puede producirse con dosis repetidas de carbón

activado. Si no se ha presentado deposición en 6 horas, se debe dar una

nueva dosis de catártico. Se utilizan las siguientes sustancias: manitol

20%: dosis 1g/kg (5 mL/kg) o hidróxido de magnesio (leche de magnesia) 3

mL/kg por SNG o por VO. Se utiliza sólo en caso de administración de

dosis repetidas de carbón activado y no es necesario con dosis únicas de

ésta sustancia.

Page 39: Para paciente intoxicado

IRRIGACIÓN INTESTINAL: está indicada en intoxicación aguda por litio,

hierro, ingesta de dosis tóxicas de medicamentos de liberación prolongada:

diltiazem, verapamilo, teofilina, nifedipina, metoprolol, entre otros. Se

realiza con polietilenglicol que produce diarrea con efecto osmótico, pero

sin riesgo de deshidratación o pérdidas electrolíticas. Usualmente se utiliza

Nulytely®, el cual se diluye 1 sobre en 1 litro de agua y se administra por

sonda nasogástrica. Dosis: 15 – 25 mL/kg/hora hasta que las heces sean

completamente claras o hasta que no haya evidencia radiológica del tóxico

en el intestino.

Secuelas: pueden ser de diverso tipo y dependerán del tipo de intoxicación,

esta son algunas de ellas: encefalopatía hipóxico – isquémica, trastornos del

aprendizaje, infecciones, fibrosis pulmonar, anemia, neuro- y nefropatías,

estenosis esofágica, flebitis, necrosis y amputaciones.

Prevención: se debe hacer el mayor énfasis posible porque puede evitar la

muerte, las lesiones y sus secuelas y además es económicamente menos

costosa.

Debe desarrollarse en los distintos ambientes sociales la cultura de la

prevención.

Mantener las sustancias peligrosas "fuera del alcance de los

menores" y bajo llave.

Desechar en su totalidad los sobrantes de sustancias peligrosas y de

medicamentos.

No se deben almacenar conjuntamente venenos, cáusticos,

elementos de aseo, juguetes, alimentos y drogas.

No se deben retirar las etiquetas ni las tapas de seguridad de ningún

producto.

No se deben re-envasar sustancias peligrosas en recipientes de

elementos no dañinos y menos de alimentos o medicamentos, o si se

va a hacer, se debe rotular claramente el envase.

Page 40: Para paciente intoxicado

No se deben suministrar drogas en la oscuridad, ni usar solventes en

lugares cerrados.

Los médicos deben dar una adecuada educación en salud, no sólo

acerca de la enfermedad, y en caso de que ésta se presente, utilizar

el tiempo adecuado para explicar la formulación, incluso por escrito,

con letra clara e idealmente incluyendo los posibles efectos

secundarios.

Page 41: Para paciente intoxicado

7. INTOXICACIONES EN MUJERES EMBARAZADAS

Dres. Juan F. Cárdenas, Lina Peña, Sergio Parra

Se calcula que aproximadamente 0.6 a 1% de todas las intoxicaciones suceden

en mujeres embarazadas y lo que es peor aún, 6.3% de ellas desconocen su

estado; por lo tanto es indispensable que el médico tenga conocimiento de las

diferencias fisiológicas y riesgos inherentes a este tipo de pacientes, pues se

involucra a dos seres humanos: la madre y el feto.

Los medicamentos prescritos o automedicados, el alcohol, la cafeína, las

drogas de abuso y los químicos en el sitio de vivienda o de trabajo son fuente

importante de contacto con xenobióticos en la mujer gestante.

Cambios fisiológicos y sus implicaciones:

En la mujer embarazada, desde el punto de vista farmacocinético hay

diferencias en la absorción, distribución y metabolismo de tóxicos y fármacos.

Absorción: retardo del vaciamiento gástrico en un 30 a 50%; disminución

de la motilidad intestinal, del tono del esfínter esofágico inferior y

aumento del pH gástrico en un 30 a 40 %. Esto produce un mayor

tiempo de exposición a las diferentes sustancias, retardo en la absorción

e inicio de acción. La disolución de sustancias hidrosolubles aumenta y

por lo tanto su absorción. Estos cambios también aumentan el riesgo de

broncoaspiración.

Distribución: hay un aumento de la fracción libre de sustancias con alta

unión a proteínas como el fenobarbital, la fenitoína y el diazepam.

También se aumentan los depósitos de sustancias lipofílicas como el

fentanil o la marihuana, prolongando su vida media. La mayoría de

xenobióticos pasan a la circulación fetal por difusión simple. La

circulación fetal es acidótica, convirtiendose en una “trampa iónica” y

favoreciendo la concentración de sustancias básicas como meperidina,

propranolol y amitriptilina, lo que en sobredosis pone en mayor riesgo al

feto. También los organofosforados tienden a concentrarse allí.

Page 42: Para paciente intoxicado

Metabolismo: hay una reducción de la velocidad de eliminación de

sustancias como cafeína, teofilina y amitriptilina.

Excreción: hay un aumento de la tasa de filtración glomerular, asociado

a un incremento de la reabsorción tubular, lo que aumenta la

probabilidad de nefrotoxicidad.

Teratogenicidad: según la Organización Mundial de la Salud son los efectos

adversos morfológicos, bioquímicos o de conducta inducidos durante la vida

fetal y detectados en el momento del parto o más tardíamente.

Es de importancia mencionar que el potencial teratógeno depende de la dosis,

el momento y el tiempo de exposición al xenobiótico. En el grupo de los

medicamentos y tóxicos hay muchos reconocidos como teratogénicos:

antagonistas del ácido fólico, hormonas sexuales, talidomida, retinoides,

warfarina, alcohol, litio, cocaína, metilmercurio y plomo.

Estudios controlados en animales y observaciones en humanos expuestos

también muestran a diferentes plaguicidas como potenciales genotóxicos y

teratógenos, como es el caso de los organoclorados (DDT, aldrín, endosulfán,

lindano) y los organofosforados (parathión, metilparathión y malathión).

Consideraciones especiales en Intoxicaciones agudas de mujeres

embarazadas:

Acetaminofén: en el primer trimestre se aumenta el riesgo de aborto, al

parecer por toxicidad directa sobre el embrión, aunque aún no es claro el

mecanismo. En el tercer trimestre del embarazo, algunos autores

consideran que si hay niveles tóxicos en la madre y el bebé está a

término, es una indicación de finalizar de inmediato el embarazo, exista

o no hepatotoxicidad en la madre. El tratamiento con N-acetil-cisteína

no parece evitar la hepatotoxicidad en el feto, pues no atraviesa la

placenta. Los neonatos pueden requerir exsanguinotrasfusión para

evitar el desarrollo de hepatotoxicidad, pues el tratamiento con N-acetil-

Page 43: Para paciente intoxicado

cisteina en estos neonatos no ha demostrado ser de mayor utilidad y los

reportes de su uso son anecdóticos.

Algunas maternas también pueden iniciar trabajo de parto prematuro

espontáneo después de la sobredosis de acetaminofen.

Hierro: la gravedad de esta intoxicación es mayor en la madre que en el

feto pues, a pesar de que la placenta es permeable al hierro, evita que

éste pase en cantidad excesiva, sin embargo la deferoxamina (su

antídoto) tiene un potencial riesgo de teratogenicidad (se han reportado

malformaciones esqueléticas y defectos de osificación en animales).

Dada la letalidad de esta intoxicación para la madre, si hay indicaciones

claras, la deferoxamina puede ser suministrada, independiente de la

edad gestacional.

Monóxido de Carbono: En esta intoxicación es el feto quien corre

mayores riesgos que la madre por la hipoxia prolongada que produce,

llevando a graves secuelas neurológicas y en muchos casos a la muerte

fetal. El feto tiene niveles 58% más altos de carboxihemoglobina que la

madre durante la intoxicación y elimina mucho más lentamente el

monóxido de carbono.

El tratamiento de elección en esta intoxicación es el oxígeno hiperbárico

y la madre debe ser informada de los altos riesgos para feto por la

intoxicación misma.

Organofosforados: dado que en un pH acidótico se favorece la

fosforilación de la colinesterasa por los organofosforados, es

recomendable un estricto seguimiento al feto. No obstante el tratamiento

es igual al de mujeres no embarazadas.

Intoxicaciones crónicas de consideración especial en mujeres embarazadas:

Alcohol: sus efectos terminan en retardo mental asociado a

malformaciones fetales, denominado “Síndrome alcohólico fetal” que

puede tener diferentes grados y está más relacionado con grandes

Page 44: Para paciente intoxicado

consumos puntuales a repetición durante la gestación (especialmente si

son entre las semanas 15 y 20 y después de la semana 25 de gestación,

etapas en las que el sistema nervioso central es más susceptible).

Cocaína: no produce un síndrome definido como en el caso del alcohol.

La constricción en los vasos placentarios lleva a disminución del flujo

sanguíneo que, dependiendo de la edad gestacional y del patrón de

consumo, puede producir abruptio de placenta, parto prematuro, retardo

de crecimiento intrauterino y malformaciones cardiovasculares y

neurológicas. No hay reportes de síndrome de abstinencia neonatal a

cocaína hasta el momento.

Opioides: en las mujeres adictas a opioides es recomendable el uso de

una terapia de sustitución (metadona o buprenorfina), reduciendo así la

morbilidad asociada. El síndrome de abstinencia durante el embarazo

puede desencadenar aborto o parto prematuro, por lo tanto, el momento

para la detoxificación completa debe ser posterior al parto. El síndrome

de abstinencia neonatal se puede presentar entre las 12 y 72 horas post-

parto. Los niños pueden presentar deshidratación, irritabilidad, insomnio,

pobre succión, temblores, diarrea, piloerección, hipertonía, trastornos

respiratorios y disautonomía, que finalmente puede llevar a la muerte y

debe tratarse en una unidad de cuidado intensivo neonatal.

Mercurio: la exposición a mercurio se ha asociado a aborto espontáneo,

embriotoxicidad, fetotoxicidad y teratogenicidad. La decisión de tratar a

una paciente embarazada con toxicidad por mercurio debe sopesarse

según riesgo-beneficio. No existe una alternativa farmacológica segura

durante el embarazo y aunque la penicilamina puede causar defectos

cutáneos y articulares en el feto, puede ser necesario su empleo. La

dosis usual es de 15 a 40 mg/kg/día dividida en tres dosis cada 8 horas

(lejos de las comidas) hasta un máximo de 2 g/día. La dosis pediátrica

es de 20 a 30 mg/kg/día, por vía oral, una o dos veces al día, lejos de las

comidas. En éstos casos la penicilamina puede suministrarse entre 3 y

10 días, con monitoreo de la excreción urinaria de mercurio. Si la cifra

Page 45: Para paciente intoxicado

disminuye rápidamente, la carga corporal del metal probablemente es

baja. Se debe esperar un mínimo de 10 días post-tratamiento para

repetir la medición de mercurio en orina de 24 horas y determinar así la

necesidad o no de un nuevo tratamiento; pueden llegar a necesitarse

ciclos repetidos de penicilamina.

Plomo: el plomo cruza la placenta y la exposición in útero se asocia a

alteraciones cognitivas y anomalías congénitas menores, tipo

linfangioma e hidrocele. Algunos estudios han mostrado una mayor

incidencia de aborto espontáneo. Al igual que con el mercurio no existe

una alternativa farmacológica segura para ser empleada durante el

embarazo y la decisión de administrar el tratamiento con penicilamina

debe basarse en el riesgo-beneficio, empleando el mismo esquema

sugerido en el manejo de la intoxicación por mercurio.

Page 46: Para paciente intoxicado

8. CAMBIOS ELECTROCARDIOGRAFICOS EN EL PACIENTE

INTOXICADO.

Dras. Alejandra Restrepo, Marie C. Berrouet y Lina Peña

Las alteraciones en el electrocardiograma son comunes en el paciente

intoxicado, por lo que siempre se debe realizar uno de doce derivaciones al

ingreso.

El ECG es una herramienta sencilla, objetiva y rápida, que permite obtener

información acerca del diagnóstico, tóxico o fármaco responsable, gravedad de

la intoxicación y manejo a seguir.

La toma del ECG no debe reemplazar el monitoreo cardiaco, pues este no

permite visualizar la totalidad de las derivaciones y la determinación del ritmo,

los intervalos y segmentos (PR, QRS, QTc, ST), importantes para el

diagnóstico.

Para mencionar las principales alteraciones electrocardiográficas es importante

comprender cuáles son los mecanismos de producción de las arritmias y los

diferentes sitios donde un tóxico puede actuar para producir un efecto deletéreo

en el ritmo y automatismo cardiacos.

Los mecanismos fisiopatológicos de la arritmogénesis son:

1. Anormalidades en la iniciación del impulso (aumento del automatismo).

2. Anormalidades en la conducción del impulso (los bloqueos, reentradas).

3. Anormalidades simultaneas en la generación y la conducción.

Existen diferentes mecanismos por los cuales las sustancias tóxicas pueden

producir alteraciones electrocardiográficas y manifestaciones cardiovasculares,

los cuales se explicarán a continuación:

Alteraciones cardiacas:

Page 47: Para paciente intoxicado

1. Alteración del potencial de acción, el cual está constituido por cinco

fases, cada una con un evento iónico predominante:

- Fase 0. Despolarización debida a la activación de los canales rápidos

de sodio.

- Fase 1. Cierre de los canales de sodio y apertura de los canales de

calcio.

- Fase 2. Ingreso de calcio.

- Fase 3. Salida de potasio.

- Fase 4. Restablecimiento del potencial de membrana en reposo.

2. Iniciación anormal del impulso:

El aumento de la automaticidad se relaciona con la pendiente de la fase

4 de la despolarización. En esta fase hay salida del sodio y calcio y

entrada de potasio al interior de la célula, alcanzando el potencial de

membrana en reposo, logrando una nueva despolarización y potencial

de acción. Por lo tanto, las sustancias que aumentan la pendiente de la

fase 4, disminuyen el umbral de despolarización o aumentan el potencial

de membrana en reposo, producen aumento en la frecuencia de disparo.

3. Conducción anormal del impulso (reentrada):

Cuando la trasmisión de un impulso, durante la fase 1 y 2 del potencial

de acción, es obstaculizado por un tejido refractario, este se propaga por

una vía alterna más lenta que el tejido de conducción normal,

posibilitando que el impulso retrasado entre en contacto con tejidos

adyacentes que ya están nuevamente repolarizados y desencadene un

circuito de reentrada, facilitando la aparición de arritmias por conducción

aberrante.

4. Aumento del automatismo:

En condiciones normales, el tejido cardiaco no presenta

despolarizaciones espontáneas durante la fase 4, excepto en presencia

de algunos tóxicos o sobredosis farmacológicas, los cuales producen

despolarizaciones y contracciones por cortos períodos de tiempo aun sin

alcanzar el umbral de disparo.

Page 48: Para paciente intoxicado

Alteraciones en órganos o sistemas diferentes al corazón

1. Efecto central: los opioides deprimen el centro respiratorio y

cardioacelerador, llevando a hipoxemia y secundariamente a bradicardia.

2. Efecto periférico: los bloqueadores 1, los calcioantagonistas que

pertenecen a la familia dihidropiridina (nifedipina o amlodipina), disminuyen

la resistencia periférica y producen taquicardia refleja.

3. Efecto mixto: drogas de abuso como la cocaína y anfetaminas inhiben la

receptación de catecolaminas a nivel presináptico, las cuales actúan en

receptores adrenérgicos y favoreciendo la presencia de taquicardia,

hipertensión o vasoconstricción.

A continuación se describen algunas de las arritmias más comunes en los

pacientes intoxicados y las posibles causas:

1. Taquicadia sinusal: es la alteración del ritmo más frecuente en el

contexto de las intoxicaciones.

Siempre que se presente se deben descartar sustancias que produzcan:

1.1. Aumento de la disponibilidad de catecolaminas (noradrenalina,

adrenalina) e indoles (serotonina) en la hendidura sináptica, por

aumento de la liberación, inhibición de la recaptación o inhibición

del metabolismo, en este grupo se encuentran anfetaminas y

derivados, cocaína, ADT e inhibidores de la MAO.

1.2. Efecto anticolinérgico y vagolítico como atropina y escopolamina.

1.3. Disminución de la resistencia vascular periférica, con taquicardia

compensatoria, como agonistas 2 presinápticos (clonidina),

bloqueadores 1 (prazosina) y calcioantagonistas del tipo

dihidropiridinas (nifedipina).

1.4. Disminución del gasto cardiaco secundario al uso de nitratos y

dilatadores arteriales y venosos como nitratos (nitroglicerina,

nitroprusiato, poppers) los cuales inducen disminución de la

Page 49: Para paciente intoxicado

precarga y poscarga, causando aumento de la frecuencia

cardiaca como mecanismo compensador.

1.5. Otros mecanismos, como la disminución de la oxigenación tisular

(hipoxemia) inducida por cianuro y monóxido de carbono,

conllevan a un incremento de la frecuencia cardiaca tratando de

aumentar la entrega de oxígeno a los tejidos; de igual forma

alteraciones metabólicas o hidroelectrolíticas como la acidosis

(metanol, etanol, salicilatos, hierro, etc.), hipoglicemia

(sulfonilúreas) e hiperkalemia (espironolactona).

2. Bradicardia sinusal. Al igual que la taquicardia sinusal es una de las más

frecuentes y puede deberse a un efecto tóxico directo o indirecto.

Descartar sustancias que produzcan:

2.1. Disminución de las catecolaminas circulantes producida por

sustancias como agonistas 2 presinápticos (clonidina, amitraz) y

barbitúricos.

2.2. Aumento de la resistencia vascular periférica, lo cual se debe a un

agonismo selectivo (etilefrina) de los receptores 1, ya que el

vasoespasmo selectivo y aumento de la poscarga origina

bradicardia como respuesta compensadora.

2.3. Bloqueo de receptores beta cardiacos por betabloqueadores.

2.4. Bloqueo de los canales de calcio tipo L por calcioantagonistas.

2.5. Disminución del automatismo y efecto cronotrópico negativo,

como los glucósidos cardiacos (digoxina).

Teniendo en cuenta las alteraciones antes mencionadas, la historia clínica,

antecedentes epidemiológicos y socioculturales y el conjunto de signos y

síntomas (toxidrome), se podrá establecer una aproximación diagnóstica y

orientar por lo tanto el tratamiento.

A continuación se mencionan las principales alteraciones electrocardiográficas

de algunas de las intoxicaciones más prevalentes en nuestro medio:

Page 50: Para paciente intoxicado

1. Antidepresivos: las alteraciones cardiovasculares dentro de las

primeras seis horas luego de la intoxicación constituyen la principal

causa de muerte. La taquicardia sinusal se debe al efecto anticolinérgico,

es más común en las fases iniciales de la intoxicación pues predomina la

hipotensión secundaria al bloqueo 1.

En las intoxicaciones graves se encuentran alteraciones tales como:

- Prolongación del intervalo PR

- Ensanchamiento del QRS

Mayor de 100 milisegundos se asocia con convulsiones en el

50% de los casos

Mayor de 160 milisegundos se asocia con arritmias

ventriculares tales como taquicardia, fibrilación y torsades de

pointes.

- Desviación a la derecha del eje (S > R en la derivación DI y R en

AVR > 3mv)

2. Antipsicóticos: las alteraciones cardiovasculares son más frecuentes

luego de 10 a 15 horas post-intoxicación. Se puede presentar

taquicardia sinusal, bradicardia, arritmias ventriculares (taquicardia y

fibrilación), prolongación del intervalo QTc y ensanchamiento del QRS.

3. Organofosforados: dependiendo de los síntomas predominantes habrá

taquicardia sinusal e hipertensión (efecto nicotínico) o bradicardia

sinusal, bloqueo auriculoventrilar, retraso de la conducción

interventricular, ritmos idioventriculares, latidos ventriculares prematuros

y arritmias ventriculares mono o polimorfas, prolongación de los

intervalos PR, QRS, QTc y alteración del segmento ST (efecto

muscarínico). Los pacientes con prolongación del QTc o extrasístoles

ventriculares tienen mayor mortalidad y son más propensos a desarrollar

falla respiratoria que los que tienen QTc normal.

Page 51: Para paciente intoxicado

4. Litio: la alteración electrocardiográfica más común es el aplanamiento o

inversión de la onda T. Puede encontrarse además la aparición de

ondas U y prolongación del intervalo QTc.

5. Cocaína: la principal manifestación es la taquicardia sinusal. Del 3 al

15% de los pacientes presentan un síndrome coronario agudo con o sin

elevación del segmento ST (SCA) secundario a la sobredosis. Puede

presentarse además ensanchamiento del QRS por el bloqueo en los

canales de sodio dependientes de voltaje, taquicardia supraventricular,

latidos ventriculares prematuros, taquicardia o fibrilación ventricular.

6. Fluoracetato de sodio: el hallazgo más común lo constituyen los

cambios en el segmento ST, anormalidades en la onda T y la

prolongación del intervalo QTc con arritmias ventriculares.

7. Acetaminofén: alteraciones en el segmento ST y aplanamiento o

inversión de la onda T.

8. Salicilatos: taquicardia sinusal, prolongación del intervalo QTc,

aparición de ondas U y aplanamiento de la onda T secundarios a

hipokalemia.

9. Paraquat: en pacientes con grandes ingestiones se puede presentar

taquicardia y arritmias ventriculares.

10. Glifosato: taquicardia o bradicardia y arritmias ventriculares.

11. Anticolinérgicos: taquiarritmias supreventriculares.

12. Amitraz: bradicardia sinusal.

13. Etanol: la arritmia más frecuente en la intoxicación aguda y síndrome de

abstinencia es la taquicardia sinusal. Las anormalidades

electrocardiográficas se asocian a la presencia de hipokalemia que

Page 52: Para paciente intoxicado

conlleva a una repolarización prolongada y predispone a la aparición de

alteraciones tales como: aplanamiento de la onda T, ondas U

prominentes, bloqueo de rama derecha, depresión del segmento ST,

extrasístoles, fibrilación auricular, taquicardia auricular paroxística,

marcapasos auricular migratorio, taquicardia ventricular e incluso

fibrilación ventricular. Estas arritmias mejoran con el reemplazo

adecuado de potasio y magnesio.

Page 53: Para paciente intoxicado

9. INTOXICACIÓN CON AMITRAZ

Dres. Isabel E. Escobar, Carlos F. Molina, Sergio Parra

Descripción: el amitraz es un insecticida y acaricida del grupo de las

formamidinas, frecuentemente utilizado en medicina veterinaria para el control

de los ectoparásitos en el ganado. Los productos comerciales (Triatox,

Bañol, Ectodex, Mitac y Singap) contienen entre 12.5 a 20% del principio

activo diluido en solventes orgánicos, entre los cuales el más utilizado es el

xileno. Por lo tanto, la exposición a estos productos puede generar toxicidad

tanto por el amitraz como por el solvente.

Farmacocinética: tiene una absorción rápida e importante desde el tracto

gastrointestinal, los niveles pico se alcanzan a las dos horas. Sufre

metabolismo hepático y excreción renal (se calcula que en 24 horas se excreta

alrededor del 60% del amitraz). El tiempo de vida media es aproximadamente 4

horas. Se han reportado casos de intoxicación por amitraz por exposición

cutánea, pero se desconoce la proporción absorbida.

Mecanismos de toxicidad: amitraz es un agonista adrenérgico, que

estimula principalmente los receptores 2 centrales. Desde este punto de vista,

la toxicidad por este agente es similar a la producida por otros agonistas 2

adrenérgicos como la clonidina.

Por su parte, el xileno actúa como un depresor del sistema nervioso central,

incluso después de un período transitorio de recuperación. Además puede

inducir la aparición de arritmias y edema agudo de pulmón.

Manifestaciones clínicas: la intoxicación con amitraz puede generar grados

variables de depresión del SNC presentándose somnolencia, desorientación,

ataxia, estupor, depresión respiratoria (que puede progresar hasta el paro

respiratorio), hiporreflexia o arreflexia y coma (puede ser tan grave como para

comprometer los reflejos de tallo, sin que se pueda hacer con certeza el

Page 54: Para paciente intoxicado

diagnóstico de muerte cerebral). Estas alteraciones se acompañan de miosis

(ocasionalmente midriasis), bradicardia, hipotensión, hipotermia, vómito,

disminución del peristaltismo, dolor y distensión abdominal, aumento leve de

las transaminasas, hiperglicemia y poliuria. También se han reportado algunos

casos con presentación de convulsiones. Los síntomas generalmente se inician

entre 30 y 90 minutos. Eventualmente en la fase inicial de la intoxicación puede

presentarse taquicardia, hipertensión e hipertermia. El xileno puede producir

efectos tóxicos como depresión del SNC, ataxia, nistagmus, episodios de

neuroirritabilidad y neumonitis química.

Diagnóstico: no existe prueba específica de laboratorio, así que el diagnostico

debe basarse en la historia y sospecha clínica. Debido a su semejanza se

deben descartar otras intoxicaciones como: clonidina, opioides, barbitúricos,

bezodiazepinas, etanol, IECAS e insecticidas organofosforados. Se

recomiendan como pruebas complementarias las siguientes: hemoleucograma,

glicemia, pH y gases arteriales, ionograma, transaminasas, electrocardiograma,

rayos X de tórax.

Dosis tóxica: la dosis tóxica mínima en humanos se ha estimado en 0.25

mg/kg, con 2.5 mg/kg se pueden presentar alteraciones de la conciencia y se

ha reportado muerte con una dosis de 6 g.

Tratamiento:

1. ABCD inicial.

2. Adecuada oxigenación.

3. Lavado gástrico y carbón activado (según recomendaciones del capítulo 1).

4. Recordar el catártico (manitol) siempre que se use más de una dosis de

carbón activado.

5. Monitoreo respiratorio con control de oximetría de pulso cada 4 horas. Si

ésta es menor del 90% el paciente posiblemente progresará a paro

respiratorio requiriendo intubación orotraqueal y soporte ventilatorio.

6. No es necesario tratar la hiperglicemia, pero si es mandatorio corregir la

hipoglicemia cuando se presente.

7. Control de la hipotermia o hipertermia por medios físicos.

Page 55: Para paciente intoxicado

8. En caso de bradicardia usar bolos de atropina: en adultos de 0.5 mg/dosis

como mínimo (hasta un máximo de 3 mg) y en niños 0.02 mg/kg/dosis.

9. Deben suministrarse líquidos endovenosos en caso de hipotensión (30

mL/kg en bolo IV) y puede llegar a requerirse soporte inotrópico con

dopamina 5-20 g/kg/min.

10. Manejo de convulsiones con diazepam 5 a 10 mg intravenosos cada 10 a

15 minutos hasta un máximo de 30 mg.

11. Los pacientes intoxicados con este producto pueden progresar hasta el

paro respiratorio que requiere soporte ventilatorio y manejo en unidad de

cuidados intensivos.

12. La corrección de la acidosis metabólica con bicarbonato de sodio

intravenoso debe reservarse para aquellos pacientes en los que las

medidas de tratamiento para convulsiones, hipotensión, falla respiratoria e

hipoxia no hayan mejorado significativamente la situación del paciente.

13. Valoración por psiquiatría en caso de intento suicida.

Page 56: Para paciente intoxicado

10. RATICIDAS ANTICOAGULANTES (SUPERWARFARINAS)

Dras. Jenny Cuesta y Lina Peña

Descripción: los derivados de la cumarina (presentes en el trébol dulce) han

sido ampliamente usados como anticoagulantes y como pesticidas, sin

embargo, ante la aparición de roedores resistentes a sus efectos, se introdujo

un nuevo grupo al que se llamó superwarfarinas (hidroxicumarinas e

indandionas), y que actualmente no tienen papel terapéutico en la

anticoagulación humana. En el grupo de las hidroxicumarinas se encuentran:

difenacoum (Ratak), bradifacoum (Klerat), bromadiolona (Contrac, Lanirat,

Ratex) y cumatetralil (Racumin); en el grupo de las indandionas están:

difacinona (Matex), clorofacinona (Ramucide) y pindona. Las presentaciones

comerciales suelen ser gránulos y pellets. La presente guía se enfocará en los

aspectos tóxicos, clínicos y terapéuticos de la intoxicación por los

anticoagulantes del grupo superwarfarina.

Farmacocinética: las superwarfarinas son altamente liposolubles y se

concentran en el hígado, son 100 veces más potentes que la warfarina; en

sobredosis tienen una vida media de eliminación de semanas a meses (una

rata que muera por los efectos de una superwarfarina, necesitaría 21 días

recibiendo warfarina, para tener el mismo efecto). Se absorben bien por vía

oral y se metabolizan en el hígado.

Mecanismo de toxicidad: inhiben las enzimas llamadas epóxido reductasas,

cuyo papel es mantener la vitamina K en estado reducido (activa), que sirve

como intermediaria para que durante la síntesis hepática de los factores de la

coagulación (dependientes de vitamina K: II, VII, IX y X), éstos sean

carboxilados, proceso necesario para fijar el calcio y que les permite ser

funcionales y activarse en la circulación. De modo tal que en presencia de

estos tóxicos se acumulan grandes cantidades de vitamina K en estado

oxidado (inactiva) y los factores de la coagulación formados tienen inhibida su

capacidad coagulante.

Page 57: Para paciente intoxicado

Manifestaciones clínicas: la mayoría de los pacientes no presentan

alteraciones clínicas. El efecto anticoagulante (prolongación del TP) aparece

dentro de las primeras 48. Los cuadros de sangrado pueden ser de leves

(hematomas, sangrado al cepillarse los dientes) a graves (sangrado masivo de

tracto gastrointestinal o hemorragia del SNC) y comprometer cualquier órgano

o sistema. La coagulopatía puede persistir por semanas a meses (8 – 12

meses), lo cual suele suceder cuando la ingesta de la superwarfarina es

crónica.

Diagnóstico: hemoglobina, hematocrito, plaquetas, grupo sanguíneo, TP, INR,

TPT al ingreso, con TP e INR a las 24 y 48 horas posterior a la intoxicación. Un

INR normal a las 48 horas significa en la mayoría de los casos una exposición

no significativa. En pacientes sintomáticos se realizan los controles de TP e

INR cada 12 horas hasta la normalización.

Otros estudios de laboratorio que pueden realizarse, con fines diagnósticos y

con base en las manifestaciones clínicas son: uroanálisis, sangre oculta en

heces, función hepática, TAC simple de cráneo, endoscopia digestiva,

radiografía de tórax.

Dosis tóxica: hay cambios en TP desde dosis de 0.1 mg/kg de bradifacuoma.

Tratamiento: nunca se aplica vitamina K profilácticamente o empíricamente

por la historia de ingesta de un anticoagulante, porque da la falsa seguridad de

que al realizarse el tratamiento, no aparecerán alteraciones y los valores de

TP/INR no servirán como parámetros para evaluar la gravedad de la

intoxicación durante las siguientes 48 horas.

Paciente asintomático sin prolongación de TP.

1. Realizar ABCD.

2. Para las medidas de descontaminación ver el capítulo 1.

Paciente asintomático con INR prolongado

Page 58: Para paciente intoxicado

1. Si el INR es menor de 3.9, sólo debe realizarse control de laboratorio

hasta que el INR se normalice, no se aplica vitamina K.

2. Si el INR es ≥ a 4 se debe administrar vitamina K1 10 a 50 mg vía oral en

adultos y 0.4 mg/ kg/ dosis vía oral en niños, cada 6 a 12 horas. No

sirve la vitamina K3. El uso de vitamina K1 puede ser necesario por

varios días o incluso meses.

Paciente con sangrado activo:

1. Plasma fresco congelado: 15 mL/ kg, o concentrado de factores 50

unidades / kg o factor VII recombinante 1.2 a 4.8 mg.

2. La vitamina K1 por la ruta intravenosa se ha asociado a reacciones

adversas peligrosas (anafilaxia) y algunos consideran que sus efectos

no son mejores o más rápidos por esta ruta. Otros la recomiendan sólo

cuando el paciente tiene un sangrado grave. La dosis es de 10 a 25 mg

en adultos y 5 – 10 mg en niños, diluidos en solución salina 0.9% o

dextrosa al 5%, a una velocidad máxima de 1mg/ min. Se controla el INR

cada 12 horas y se continúa el esquema de dosificación como se explicó

en el apartado anterior (paciente asintomático con INR prolongado).

Page 59: Para paciente intoxicado

11. FLUORACETATO DE SODIO

Dres. Jenny Cuesta y Sergio Parra

Descripción: es un polvo de aspecto cristalino blanco, altamente soluble en

agua, carente de olor y sabor. Se comercializa de manera ilegal en Colombia

con la finalidad de eliminar ratas y ratones. Su presentación clásica es en forma

de solución contenida en un frasco de vidrio con tapa de corcho; sin embargo,

en la actualidad el recipiente que lo contiene es un frasco plástico con tapa

rosca. La concentración de dichos preparados comerciales es desconocida.

Farmacocinética: se absorbe bien por vía oral, mientras que su absorción por

vía dérmica se da sólo en piel lesionada. También se ha reportado buena

absorción por vía inhalatoria. Sufre metabolismo hepático.

Mecanismo de toxicidad: el fluoracetato es convertido en fluorocitrato a través

del ciclo de los ácidos tricarboxílicos y este último al inhibir la enzima aconitasa

interfiere la progresión del ciclo. Como efectos bioquímicos derivados de dicho

bloqueo se aumentan los niveles sanguíneos de citrato, lactato, glucosa y

cuerpos cetónicos, y se reducen los niveles sanguíneos de calcio y potasio.

Manifestaciones clínicas: sus efectos pueden presentarse varias horas luego

de la ingestión (entre 0.5 a 6 horas más frecuentemente, pero hay reportes de

retraso para el comienzo de las manifestaciones de hasta 36 horas). El cuadro

inicial se caracteriza por compromiso del sistema nervioso central

presentándose convulsiones tonicoclónicas generalizadas recurrentes y que

alternan con estados de profunda depresión del estado de conciencia. Puede

ocurrir agitación psicomotora o pérdida súbita de conciencia seguida de coma.

Hipotensión y alteraciones del ritmo cardiaco como taquicardia, extrasístoles,

bloqueos, bradicardia, prolongación del intervalo QTc, fibrilación auricular y

ventricular, cambios inespecíficos del segmento ST, cambios pronunciados en

la forma de la onda T y asistolia. Los trastornos gastrointestinales inespecíficos

también son frecuentes al inicio e incluyen: náuseas, vómito y diarrea.

Page 60: Para paciente intoxicado

Puede presentarse falla renal aguda oligúrica o acidosis tubular renal,

hiperglicemia, hipokalemia e hipocalcemia. Ésta última puede llegar a producir

“tétanos hipocalcémico” acompañado de convulsiones, hipotensión y colapso

cardiovascular.

Dosis tóxicas: se han reportado síntomas reversibles de intoxicación con

dosis de 0.1 mg/kg. Las dosis superiores a 2 mg/kg son potencialmente letales.

Diagnóstico: No existe prueba específica de laboratorio, así que el diagnóstico

debe basarse en la historia y sospecha clínica. Se recomiendan como pruebas

complementarias: hemoleucograma completo, ionograma con Ca y Mg,

glicemia, gases arteriales, enzimas hepáticas, bilirrubinas, BUN, creatinina y

monitoreo electrocardiogáfico continuo.

Tratamiento:

1. ABCD inicial.

2. Vía dermatológica: retirar vestiduras y lavar con agua y jabón.

3. Monitoreo cardiaco continuo.

4. Lavado gástrico y carbón activado (según recomendaciones del capítulo

1). Recordar el catártico (manitol) siempre que se use más de una dosis

de carbón activado.

5. Etanol mínimo por 24 horas, por ruta oral o venosa, así:

Intravenoso:disolver 50 mL de etanol al 96% en 450 mL de DAD 5%

(concentración al 9.6%), pasar un bolo de 8 mL/kg para 30 minutos y

luego administrar un goteo de 0.8 mL/kg/h durante 24 horas.

Oral: administrar por sonda nasogástrica (SNG) etanol al 29%

(aguardiente) a 3 mL/kg/h en bolo y continuar a 0.3 mL/kg/hora durante

24 horas.

6. En caso de hipocalcemia hacer manejo de ésta con gluconato de calcio

0.5 a 2 g (5 a 20 mL de una solución al 10%) IV a una velocidad que no

supere los 200 mg/min. Evaluar si hay persistencia de la hipocalcemia a

la hora.

7. Manejo de convulsiones con diazepam 5 a 10 mg intravenosos cada 10

a 15 minutos hasta un máximo de 30 mg.

Page 61: Para paciente intoxicado

12. INTOXICACIÓN POR GLIFOSATO

Dres. Isabel C. Escobar, José J. Aristizábal, Sergio Parra

Descripción: el glifosato es un compuesto herbicida de amplio espectro;

carece de actividad residual, de volatilidad y de arrastre a regiones no blanco;

no sufre bioacumulación en la cadena alimenticia y sufre degradación biológica

a productos naturales. Se utiliza en el control de malezas. Los nombres

comerciales en Colombia son: Roundup®, Panzer® y Rodeo® entre otros. La

presentación de Roundup concentrado contiene la sal isopropilamínica de

glifosato al 41% y un surfactante (polioxietanolamina POEA) al 15%. En

nuestro medio se adiciona Cosmo Flux 411F® (una mezcla de surfactantes no

identificados y aceite mineral parafínico) para la fumigación de cultivos ilícitos.

Los surfactantes se adicionan con el fin de aumentar la penetración del

herbicida a las plantas y así incrementar su poder tóxico.

Farmacocinética: con relación a la toxicidad sistémica, la vía oral es la ruta

más importante, se absorbe entre el 20 al 30% y puede incrementar con dosis

altas. También se puede presentar una baja absorción por vía inhalatoria,

dérmica y conjuntival. El glifosato no sufre metabolismo hepático, pero se

sugiere que las bacterias del colon pueden ser las responsables de un

metabolito que se puede detectar en bajas concentraciones. La excreción renal

es la principal forma de eliminación de la sustancia y la vida media se ha

calculado en 2 a 3 horas en pacientes intoxicados con una aparente función

renal normal. La vida media se prolonga con las alteraciones de la función renal.

Se desconocen las características cinéticas de los compuestos que acompañan

al glifosato en los preparados comerciales.

Mecanismo de toxicidad: se ha propuesto que la toxicidad depende de los

surfactantes acompañantes más que del glifosato en sí mismo (debido a la

menor dosis letal 50). Los surfactantes alteran la integridad de la pared

mitocondrial y el gradiente de protones requerido para la producción de energía,

lo cual se manifiesta en la disminución del ATP celular generando alteraciones

de la contractilidad miocárdica, incremento de la resistencia vascular pulmonar

Page 62: Para paciente intoxicado

y finalmente falla multiorgánica. El glifosato en altas concentraciones desacopla

la fosforilación oxidativa mitocondrial, lo cual puede contribuir a la toxicidad.

Manifestaciones clínicas: e espectro de manifestaciones es muy amplio,

desde el paciente asintomático, hasta el paciente con un cuadro clínico grave.

La ingestión de glifosato con el correspondiente surfactante produce toxicidad

gastrointestinal y cardiopulmonar principalmente, pero otros órganos y sistemas

pueden resultar comprometidos. El cuadro incluye: náuseas, vómito, diarrea,

dolor epigástrico, ardor en boca y garganta (se pueden evidenciar quemaduras

en la mucosa oral), hipotensión (debida a choque cardiogénico), insuficiencia

ventilatoria (por broncoaspiración del compuesto), alteraciones del nivel de

consciencia (confusión y convulsiones), dilatación pupilar, leucocitosis a

expensas de los neutrófilos, fiebre, pancreatitis, alteraciones del equilibrio ácido

base, falla renal aguda y elevación transitoria de enzimas hepáticas. También

se han reportado cambios electrocardiográficos hasta en el 20% de los casos

(consistentes en taquicardia o bradicardia sinusal, bloqueos AV, cambios

inespecíficos de segmento ST y onda T).

Por otro lado, en un caso de inyección intramuscular de glifosato se reportó un

rápido desarrollo de rabdomiolisis y síndrome compartimental.

A este herbicida se le reconoce su potencial efecto como irritante local:

irritación dérmica (usualmente debida a exposición prolongada), lesiones de la

cornea y conjuntivitis leve. El 3% de los pacientes expuestos por vía dérmica

pueden desarrollar toxicidad sistémica. Los aerosoles pueden ocasionar

irritación nasal, oral y en la garganta. También se han descrito casos de

reacciones alérgicas, manifestadas principalmente por broncoespasmo. Es

importante considerar el posible desarrollo de lesiones corrosivas del tracto

gastrointestinal en intoxicaciones moderadas a graves.

Diagnóstico: el diagnóstico se basa en la historia clínica y el antecedente de

contacto con productos que contengan glifosato. Es posible medir los niveles

de glifosato en suero u orina, pero no existen laboratorios que realicen dicha

prueba en nuestro medio. Además, los resultados de concentraciones no son

Page 63: Para paciente intoxicado

una guía útil para el manejo de los pacientes. Otras pruebas de laboratorio

incluyen: glicemia o glucometría, citoquímico de orina, BUN, creatinina,

ionograma, pH y gases arteriales, oximetría de pulso, enzimas hepáticas,

amilasas y electrocardiograma. La acidosis metabólica, los rayos X de tórax

anormales, la taquicardia y la elevación de la creatinina sérica son indicadores

de mal pronóstico.

Una endoscopia digestiva puede ser necesaria si hay sospecha de importantes

efectos corrosivos en la mucosa del tracto gastrointestinal. Los rayos X de tórax

están indicados en caso de intoxicaciones moderadas a graves o si persisten

los síntomas.

Dosis tóxicas: es probable encontrar toxicidad con el consumo oral de más de

85 mL de la solución concentrada. La dosis letal obtenida a partir de estudios

animales refleja la mayor toxicidad del surfactante POEA (1200 mg/kg)

comparada con la del glifosato (>5000 mg/kg).

Tratamiento:

1. Realizar ABCD.

2. Para disminuir la absorción por vía dérmica, retirar ropas

contaminadas y bañar exhaustivamente con agua y jabón.

3. En caso de contacto ocular, hacer un lavado profuso por 5 minutos

con solución salina 0.9% y luego dejar goteo continuo durante 1 hora;

finalmente ocluir el ojo afectado y solicitar valoración por oftalmología.

4. En caso de hipotensión, iniciar soporte hemodinámico inicialmente

con cristaloides 30 mL/kg en bolo IV. Si persiste la hipotensión,

iniciar vasopresores tipo dopamina.

5. Mantener diuresis 1-2 mL/kg/hora. Realizar estricto control de

ingresos y egresos urinarios.

6. El lavado gástrico está indicado si la ingestión lleva menos de 1 hora,

y se realizará con solución salina. Considerar antes de pasar sonda

nasogástrica la posible presencia de quemaduras del tracto

gastrointestinal (ver capítulo 1).

Page 64: Para paciente intoxicado

7. Carbón activado (según recomendaciones del capítulo 1). Recordar el

catártico (manitol, sulfato de magnesio o leche de magnesia) siempre

que se use más de una dosis de carbón activado.

8. En caso de broncoespasmo sin presencia de edema pulmonar se

debe hacer manejo con agonistas beta 2 inhalados (salbutamol,

terbutalina).

9. No existe antídoto específico.

10. Valoración por psiquiatría en caso de intento suicida.

11. Si los síntomas persisten o empeoran, el paciente debe ser remitido a

un centro de mayor complejidad para ser evaluado por Toxicología

Clínica.

Page 65: Para paciente intoxicado

13. INTOXICACIÓN POR INHIBIDORES DE COLINESTERASAS

(ORGANOFOSFORADOS Y CARBAMATOS)

Dres. Isabel C. Escobar y Sergio Parra

Descripción: los organofosforados y carbamatos pertenecen al grupo de los

pesticidas, son sustancias de amplia utilización en la agricultura y la ganadería,

producen el 80% de las intoxicaciones por pesticidas en el mundo y son las

sustancias que más frecuentemente causan intoxicaciones en humanos. Su

toxicidad es alta y las exposiciones en humanos se deben a: intentos suicidas,

accidentes de trabajo durante las actividades agrícolas, ingreso a lugares

recién fumigados, por el consumo de alimentos contaminados y también han

sido utilizados como armas químicas.

Existe una gran variedad de sustancias de este tipo en nuestro medio, aquí

mencionamos algunos ejemplos y sus respectivos nombres comerciales:

Organofosforados: acefato (Acephate, Orthene 3%, Orthene 75%,

Orthene 97%), azametiphos (Alfacron, Alfabron 50 WP), clorfenvinfos

(Birlane 24%), clorotión, clorpirifos (Attamix SB, Dursban, Lepecef,

Lepecid, Lorsban 2.5% DP, Lorsban 240 E, Pirifos 48 EC, Pirycron,

Pirycron EC, Pyrimex EC, Polyethylene, Reldan 48 CE, Saluthion),

Clorvenvifos (Supona), coumafos (Asutol), diclorvos (Dedevap, Mafu,

Nogos 50 EC, Nuvan), diazinón (Basudin 5G, Basudin 600 EW, Basudin

600 EC, Diazol, Neocidol 40 WP, Vetxan, Xanivet), diclorvos (Bibesol,

Vapona), dicrotofos (Bidrin, Carbicron 100 SL), dimetoato (Agrixon SL,

Cristoato 400, Dermatox, Dimetox 40, Dimetox 40 EC, Diostop CE,

Folimat, Roxion, Sistemin 40 EC, Sistoato 40 EC, Trifosix 40 EC),

disulfotron (Dysystron GR 5), edifenfos (Hinosan), endotión, etilparation

(Folidol), etión (Rhodiacina), etoprop (Mocap 5 GR, Mocap 10, Mocap 15

GR), fenamifos (Nemacur GR 10), fenitrotion (Folithion, Sumibas,

Sumithion 2.5% PE, Sumithion 50 EC), fentión (Baytex, Pulfen), fentoato

(Elsan CE), fosfamidon (Dimecron 100 SL, Dimecron 100 SCW),

fosforotioato (Insecticida LF), fosmet (Baño insecticida), Isazofos (Miral

10, Miral 500 EC), malatión (Fyfanon 57 CE, Malathion, Malathion UL,

Page 66: Para paciente intoxicado

Malathion 57% EC), merfos (Folex), metacrifos (Damfin 500 EC),

metamidofos (Amidor 60 SL, Monitor, Supercron, Tamaron SL 40,

Tamaron SL 600, Tamaron), metilparatión (Agrometil, Algodonero 630,

Metacide 480, RP Metril 48, Sinafid), metilpirimifos (Actellic 50 E, Actellic

50 EC, Actellic 2%, Actepac 2% PE, Arrierafin, Matahormigas),

metrifonato (Negasunt, Neguvon), monocrotofos (Acrotofos 600, Azodrin

600, Cristofos 600, Elancron 60 SL, Honecron 600 SL, Monocron SL,

Nuvacron 40 SL, Nuvacron 60 SL, Ronecron 600), paratión (Parathion,

Penncap, Penncap M), Phosalone (Zolone), phoxin (Baythion, Volaton),

profenofos (Curacron 500 EC, Curacron UV 250), propetamifos (Blotic),

pyrazofos (Afugan 30 CE), sumitión, temefos (Abate), terbufos (Counter

15 GR, Counter 10 G, Counter 5 G), tetraetilpirofosfato, tiometon (Ekatin),

triazofos (Hostathion, Hostathion 40 EC), tribufos (DEF 720 EC),

triclorfon (Loción Antisárnica, Champy-B-6, Closamin, Derma Vet,

Dipterex 500 SL, Dipterex SP 80, Rofitox 3%, Rofitox 80%, Rhodilene,

Sarpil).

Carbamatos: aldicarb (Temik, Temik 15), carbaril (Agrovin 80, Dimefos),

carbaril (Carbaryl, Cebitox, Sevibano, Sevin 5 GR, sevin 80, Sevin XLR),

carbofurán (Carbofuran 330, Carbofuran 33 GR, Carbofuran 5 G,

Carbofuran 33 OSC, Carboter 10 GR, Carboter 330 SC, Carboter 5 GR,

Carbotox 330, Curater 3 G, Curater GR-5, Curater GR-10, Curater SC

330, Furadan 3 GR, Furadan 3 SC, Furadan 4 SC, Furadan 5 GR,

Furadan 10 GR, Furalimor 3 GR, Furalimor 5 GR, Furalimor SC,

Insecarbol, Marshal), metomil (Lannate S, Lannate 40 PS),

metilcarbamato (Piorel), metiocarb (Mesurol, Mesurol WP 50), oxamilo

(Vydate SL), pirimicarb (Pirimor), promecarb (Carbamult), propoxur

(Baygon, Bolfo), ropoxur (Unden), thiodicarb (Semevin 350 SC).

Farmacocinética: los organofosforados son sustancias muy liposolubles y se

absorben muy bien desde el tracto gastrointestinal, pulmones, piel y diferentes

mucosas. La presencia de ulceraciones en la piel, la alta temperatura y la alta

humedad ambiental favorecen la absorción dérmica. La mayoría alcanzan

concentraciones pico antes de las 6 horas. Tienen una alta distribución,

alcanzan el sistema nervioso central y algunos se pueden acumular en el tejido

Page 67: Para paciente intoxicado

adiposo (desde donde su redistribución súbita puede desencadenar crisis

colinérgicas). Son metabolizados en el hígado y el intestino, sufren reacciones

de oxidación, hidrólisis y conjugación, los metabolitos inactivos son excretados

en la orina. Varios organofosforados (entre ellos paratión y malatión) deben

sufrir metabolismo por oxidación para convertirse en la sustancia tóxica

(derivado oxón). La vida media es muy variable (minutos a horas), no obstante

los fenómenos de redistribución pueden mantener concentraciones de algunos

compuestos por más de 1 mes.

Los carbamatos también se absorben bien a través de pulmones, piel, mucosas

y tracto gastrointestinal. Los niveles pueden medirse 30 minutos después de la

ingestión. A diferencia de los organofosforados, los carbamatos no llegan

fácilmente al sistema nervioso central. La mayoría de dichos compuestos

sufren metabolismo en el intestino e hígado, los metabolitos son excretados en

orina, con más del 90% de éstos compuestos eliminados en 3 días.

Dosis tóxica: es muy variable y depende de la sustancia, algunos de ellos se

clasifican dentro de las sustancias de ligeramente tóxicos (dosis letal 50 mayor

a 1 g/kg: malatión, temefos, carbaril), moderadamente tóxicos (dosis letal 50

entre 50 a 1000 mg /kg: clorpirifos, diazinon, fenitrotion, fosmet, diclorvos,

dimetoato, profenofos, propoxur, pirimicarb, promecarb, thiodicarb), altamente

tóxicos (dosis letal 50 menor a 50 mg/kg: coumafos, metamidofos,

monocrotofos, paratión, fosfamidon, terbufos, tetraetilpirofosfato, aldicarb,

carbofurán, metiocarb, oxamilo).

Mecanismos de toxicidad: los organofosforados y carbamatos comparten

como mecanismo de acción la inhibición de la enzima acetilcolinesterasa, que

se encarga de la degradación de la acetilcolina. No obstante, la diferencia

radica en que los órganofosforados inhiben la enzima de manera irreversible al

fosforilarla (usualmente en el transcurso de 24 a 72 horas, fenómeno

denominado como envejecimiento), mientras que los carbamatos lo hacen de

manera reversible. Esto significa que en presencia de inhibición por

organofosforados la única manera que el organismo tiene de recuperar la

degradación del neurotransmisor es por la síntesis de nuevas enzimas. En el

caso de los carbamatos, luego de un tiempo la enzima reanuda su actividad.

Page 68: Para paciente intoxicado

La inhibición de la acetilcolinesterasa aumenta la disponibilidad de acetilcolina

en todas aquellas sinapsis donde se libera dicho neurotransmisor y se produce

una estimulación excesiva de sus respectivos receptores (nicotínicos y

muscarínicos), se produce así un toxidrome colinérgico.

Adicionalmente, los organofosforados y carbamatos pueden inhibir otras

esterasas en el organismo; por ejemplo: tripsina, pseudocolinesterasas,

carboxilesterasas, paraoxonasas, esterasa neurotóxica (aparentemente

relacionada con la neuropatía periférica) y otras proteasas. Por otro lado, los

productos comerciales contienen solventes del grupo de los hidrocarburos, lo

que puede explicar la irritación de las partes que entraron en contacto directo

con el compuesto.

Manifestaciones clínicas: a pesar de que algunos compuestos se clasifican

como de baja toxicidad, todo paciente con historia de contacto con

organofosforados o carbamatos necesita una apropiada evaluación médica.

Las manifestaciones tóxicas pueden aparecer tan rápidamente como a los 5

minutos o pueden tardarse más de 24 horas. Los signos y síntomas de la

intoxicación se clasifican de la siguiente manera:

Originados en el sistema nervioso central: ansiedad, inquietud motora,

insomnio, cefalea, mareo, temblores, rigidez, coreoatetosis, alteraciones del

comportamiento, depresión respiratoria, hipoxemia, confusión, convulsiones,

coma y paro respiratorio. Las manifestaciones del sistema nervioso central

usualmente están ausentes en intoxicaciones debidas a carbamatos. Sin

embargo, cuando se presentan se deben más a la hipoxemia que a la

estimulación de receptores colinérgicos.

Nicotínicos: fasciculaciones, taquicardia, hipertensión, midriasis, hipotonía,

mialgias, retención urinaria, hiperglicemia, cetosis, leucocitosis, calambres

musculares y el clásico síndrome intermedio (aunque algunos lo atribuyen a un

daño muscular ocurrido en la fase aguda de la intoxicación).

Muscarínicos: miosis, lagrimeo, sialorrea, broncorrea (algunas veces tan grave

que puede simular un edema pulmonar agudo), diaforesis, aumento del

Page 69: Para paciente intoxicado

peristaltismo, dolor tipo cólico, diarrea, tenesmo, incontinencia urinaria,

bradicardia, prolongación del intervalo PR, bloqueos cardiacos, broncoespasmo,

disnea y sibilancias, hipotensión, dolor abdominal y vómito.

Una de las principales manifestaciones cardiovasculares es la prolongación del

intervalo QTc, que puede llevar a taquicardia ventricular polimorfa (arritmia de

puntas torcidas), aunque también pueden presentarse otro tipo de arritmias.

Además de todos los anteriores, pueden presentarse colitis, pancreatitis y

neumonitis química.

La falla respiratoria aguda causada por los organofosforados, conocida también

como “Síndrome Intermedio”, se presenta entre 24 y 96 horas después de la

intoxicación, se caracteriza por compromiso de cualquier par craneano, paresia

de los músculos del cuello y la cintura escapular, que se manifiesta con

dificultad para levantar la cabeza y el tronco; debilidad de músculos de la

lengua y de la faringe, tos débil y parálisis de músculos respiratorios. Puede

durar entre 2 y 32 días, requiere soporte ventilatorio en unidad de cuidados

intensivos. Los compuestos más implicados en su presentación son: dimetoato,

monocrotofos, metamidofos, fentión, diazinón, clorpirifos, malatión, paratión,

triclorfón, metrifonato, ciclorvos y metilparatión, entre otros.

También se puede presentar una neuropatía retardada principalmente con los

compuestos que contienen flúor, se inicia entre 15-30 días después de la

ingestión del tóxico con debilidad, ataxia, parálisis distal y desmielinización

ascendente, con electromiografía de denervación; la recuperación parcial se

presenta entre 6-12 meses con adecuada rehabilitación.

La exposición crónica a organofosforados también se ha relacionado con una

gran cantidad de manifestaciones colinérgicas y otras alteraciones

inespecíficas del sistema nervioso.

Diagnóstico: La intoxicación por inhibidores de colinesterasas debe ser

distinguida de aquellas producidas por sustancias que estimulen directamente

Page 70: Para paciente intoxicado

los receptores muscarínicos (muscarina, pilocarpina, betanecol, metacolina) o

los receptores nicotínicos (nicotina, lobelina). La discriminación más apropiada

para el diagnóstico de intoxicaciones por inhibidores de colinesterasas es la

medición específica de la sustancia o sus metabolitos. No obstante, dichas

pruebas no se encuentran disponibles en nuestro medio. Se recomiendan los

siguientes exámenes de laboratorio:

Colinesterasas eritrocitarias, que deben tomarse en tubo seco y

heparinizado. Los valores normales oscilan entre un 80%-120% de

actividad de la enzima. Está prueba es de utilidad para corroborar la

exposición a un inhibidor de colinesterasas y es de ayuda para valorar la

gravedad de la intoxicación.

Hemoleucograma completo con sedimentación.

BUN y creatinina.

Aminotransferasas, bilirrubinas y fosfatasa alcalina

Ionograma completo que incluya magnesio, porque se puede presentar

hipomagnesemia e hipocalemia.

pH y gases arteriales: se puede encontrar acidosis metabólica.

Amilasas séricas: puede presentarse pancreatitis.

Rayos X de tórax para descartar la presencia de neumonitis química y/o

broncoaspiración.

Electrocardiograma de 12 derivaciones; medir intervalo QTc.

Tratamiento:

1. ABCD, donde la aspiración de secreciones debe ser esencial.

2. Baño exhaustivo con abundante agua y jabón, si hubo exposición

dérmica (fumigadores).

3. Monitoreo cardíaco continuo y electrocardiograma cada 6 horas, las

primeras 24 horas.

4. Realizar lavado gástrico sólo si la intoxicación es por vía oral y si el

paciente llega en la primera hora de la intoxicación (ver las

recomendaciones del capítulo 1).

5. Si se realizó lavado gástrico, administrar carbón activado siguiendo las

recomendaciones del capítulo 1.

Page 71: Para paciente intoxicado

6. Debido a la diarrea que es inducida por el tóxico, la utilización de

catártico no está indicada en esta intoxicación.

7. Atropina 1 a 3 mg (1 a 3 ampollas) intravenosa, directa y rápida (niños

0.02 mg/kg), evaluando la respuesta cada 5 minutos y repitiendo en este

mismo intervalo de tiempo hasta obtener frecuencia cardíaca mayor a 80

pulsaciones/minuto, presión arterial sistólica mayor a 80 mmHg, sin

broncorrea (auscultación pulmonar sin roncus, pero es necesario tener

presente que la atropina no puede eliminar ruidos anormales de

regiones donde hubo broncoaspiración), aspecto de mucosa oral similar

a una hidratación normal y pupilas que ya no tienen miosis puntiforme.

No es necesario aplicar atropina hasta obtener midriasis.

8. Administrar pralidoxima (únicamente para pacientes intoxicados con

organofosforados), bolo inicial de 1-2 g, diluir cada gramo en 100 mL de

solución salina al 0.9% y administrar por vía intravenosa en 30 minutos.

Continuar la administración con una infusión continua de 200 a 500

mg/hora por 24 horas. En niños, el bolo inicial es de 25-50 mg/kg y se

debe continuar con una infusión continua de 5-10 mg/kg/hora por 24

horas. La reactivación de colinesterasas es dependiente del tiempo en

que tarda cada tóxico en envejercer la acetilcolinesterasa; sustancias

como monocrotofos y profenofos parecen beneficiarse muy poco aun si

la administración de oximas se realiza tempranamente.

9. En caso de agitación o convulsiones se deben controlar con

benzodiazepinas (diazepam 5 a 10 mg intravenosos cada 10 a 15

minutos hasta un máximo de 30 mg).

10. Intubación y ventilación mecánica en caso de síndrome Intermedio.

11. Si se presenta arritmia de puntas torcidas se debe suministrar sulfato de

magnesio 2-4 gramos (1-2 ampollas) intravenoso directo (niños 0.3

mL/kg).

12. No se debe dar alta al paciente hasta que cumpla 48 horas asintomático.

13. Valoración por psiquiatría en caso de intento suicida.

14. El paciente debe ser evaluado al menos 2 semanas después del alta

para descartar la presencia de neuropatía retardada de predominio

motor, que requiere inicio precoz de rehabilitación.

Page 72: Para paciente intoxicado

14. INTOXICACIONES ORGANOCLORADOS

Dr. Sergio Parra

Descripción: son pesticidas derivados del cloroetano, cuyo representante más

conocido es el diclorodifeniltricloroetano (DDT). Muchos de ellos han sido

prohibidos a nivel mundial (por ejemplo DDT y clordano) por su amplia

distribución y persistencia ambiental, capacidad de acumularse en la cadena

alimentaria y por los efectos deletéreos de dicha acumulación. Los compuestos

que pertenecen a este grupo son: hexaclorobenzeno, metoxiclor, clordano,

DDT, heptaclor, clordecón, mirex (Cebo hormiguicida, Mirenex, Mirmex),

lindano (Anuchol, Gorgoricida, Gusanol, Gusantrol, Lexagro, Lindafor,

Lindocan, Nexa, Nexa-Dip, Nuchicida), toxafeno (Clorofen 60), aldrín (Aldrex),

dieldrín (Dieldex), endrín (Endrex), dodecacloro (Isca Mirenex), dicofol

(Kelthane) y endosulfán (Thiodan 15, Thiodan 35, Thionex, Thiomil 35 EC).

Farmacocinética: los organoclorados son sustancias altamente liposolubles y

que presentan excelente absorción desde el tracto gastrointestinal, los

pulmones y la piel (aunque DDT, toxafeno y mirex se absorben pobremente por

la última vía). Se concentran en el sistema nervioso central, ganglios nerviosos,

glándulas suprarrenales y tejido adiposo. Su tendencia natural es a acumularse

en el último tejido (en especial con la exposición repetida) y tienen una

eliminación muy lenta desde allí, de tal manera que pueden persistir en el

organismo por meses o años. Pueden encontrarse en la leche y atraviesan con

facilidad la placenta. La mayoría de los organoclorados son metabolizados por

declorinación, oxidación y posterior conjugación. Los compuestos originales y

sus metabolitos se excretan principalmente por la bilis, pero los primeros sufren

recirculación enterohepática. También se pueden encontrar metabolitos en la

orina.

Dosis tóxica: es muy variable y depende de cada compuesto, se ha calculado

las dosis letales en animales y los organoclorados se clasifican de la siguiente

manera: ligeramente tóxicos (dosis letal 50 superior a 1 g/kg:

hexaclorobenzeno, metoxiclor), moderadamente tóxicos (dosis letal 50 entre 50

Page 73: Para paciente intoxicado

y 1000 mg/kg: clordane, DDT, heptaclor, lindano, mirex, toxafeno) y altamente

tóxicos (dosis letal 50 menor a 50 mg/kg: aldrín, dieldrín, endrín y endosulfán)

Mecanismos de toxicidad: se han reportado varios mecanismos de acción

que explicarían la neurotoxicidad de estos agentes, entre ellos están:

antagonismo de los receptores GABAA (para sustancias como lindano, aldrín,

dieldrín, endrín, endosulfán y heptaclor), interferencia con el flujo normal de

iones a través de la membrana nerviosa al impedir la inactivación de los

canales de sodio y bloqueando los canales de potasio (DDT), bloqueo de las

bombas sodio-potasio ATPasa y la calcio ATPasa (todos los organoclorados).

También se ha reportado inhibición de la actividad de la ATPasa dependiente

de calcio-calmodulina e incremento de la degradación de serotonina y

noradrenalina. Por tales razones, se interfiere con la transmisión de los

impulsos nerviosos (en especial en el sistema nervioso central) y se aumentan

los niveles de neurotransmisores excitadores como glutamato y aspartato. El

resultado final son las descargas nerviosas repetidas y un estado de

hiperexcitabilidad del sistema nervioso.

Por otro lado, los organoclorados sensibilizan el corazón a las catecolaminas y

favorecen sus acciones arritmogénicas.

Manifestaciones clínicas: la mayoría de pacientes expuestos por vía oral a

cantidades importantes de organoclorados desarrollan nauseas, vómito, dolor

abdominal y algunos presentan diarrea. Los síntomas comienzan en la gran

mayoría de los pacientes en las dos primeras horas posteriores a la ingestión,

pero en algunos pacientes pueden demorarse en aparecer hasta 6 horas si

hubo ingesta previa de alimentos. La exposición cutánea puede desencadenar

irritación en los sitios de contacto y el desarrollo de síntomas puede tardar

desde varias horas hasta varios días (en especial cuando la exposición es

repetida). Las manifestaciones de neurotoxicidad son las más importantes y se

caracterizan por un estado de excitación progresivo. Pueden aparecer grados

variables de temblor, hiperreflexia, parestesias en cara, lengua y extremidades,

alteraciones sensoriales, confusión, ataxia, cianosis, hipertermia, contracciones

mioclónicas (que pueden parecer convulsiones) y algunos pacientes pueden

desarrollar convulsiones (usualmente son tónico – clónicas generalizadas, pero

Page 74: Para paciente intoxicado

también se han reportado casos con compromiso focal) con progresión hasta el

coma con compromiso de la función respiratoria. Sin embargo, en algunos

casos los pacientes inician con convulsiones de manera súbita. Es importante

anotar que los niños y ancianos son más susceptibles a los efectos tóxicos de

los organoclorados.

La exposición crónica también ha sido relacionada con toxicidad

(esencialmente con clordecón) y las manifestaciones reportadas son temblor

intencional en las manos (aunque en casos graves el temblor puede llegar a

ser de reposo y también evidenciarse en la cabeza y todo el cuerpo), pérdida

de peso, artralgias, brotes cutáneos, dolor precordial, cambios en la

personalidad, alteraciones en la memoria a corto plazo, depresión, movimientos

oculares rápidos, irregulares e incoordinados, marcha atáxica, debilidad

muscular, incoordinación motora y habla arrastrada. Adicionalmente, la

exposición crónica a organoclorados se ha asociado con varios tipos de cáncer,

pero los estudios en humanos son contradictorios.

Diagnóstico: se debe hacer diagnóstico diferencial con todas aquellas

sustancias o enfermedades que produzcan convulsiones. En nuestro medio no

existen laboratorios que determinen de manera urgente los niveles en sangre

de organoclorados, de tal manera que la historia de exposición es el

antecedente más importante. El olor de algunos organoclorados es

característico (puede detectarse en el aliento del paciente o el vómito); por

ejemplo, el de toxafeno es similar a la trementina y el de endosulfán similar a

huevos podridos. Los rayos X de abdomen pueden revelar una sustancia

radioopaca luego de la ingestión de un organoclorado. Se deben solicitar los

siguientes exámenes de laboratorio para evaluar el estado del paciente y

ayudar en el diagnóstico diferencial: glicemia, hemoleucograma, ionograma, pH

y gases arteriales, BUN, creatinina, creatina fosfoquinasa, amilasas séricas,

aminotransferasas, bilirrubinas, pruebas de coagulación, electrocardiograma y

rayos X de abdomen y tórax.

Se puede encontrar: hiperglicemia, acidosis metabólica, elevación de enzimas

hepáticas, evidencia de rabdomiolisis y rayos X de tórax con infiltrados

compatibles con neumonitis.

Page 75: Para paciente intoxicado

Tratamiento:

1. ABCD.

2. Si hubo inhalación, vigilar signos de compromiso respiratorio y

suministrar oxigeno.

3. Si hubo exposición dérmica, retirar las vestiduras y realizar baño

exhaustivo con abundante agua y jabón.

4. Si hubo contacto ocular realizar lavado con abundante agua tibia por 15

minutos.

5. Si hubo ingestión y el paciente llega antes de 1 hora realizar lavado

gástrico y suministrar carbón activado como se recomienda en el

capítulo 1.

6. No existe antídoto específico.

7. En caso de convulsiones se deben controlar con benzodiazepinas

(diazepam 5 a 10 mg intravenosos cada 10 a 15 minutos hasta un

máximo de 30 mg). Si las convulsiones son incontrolables o recurren

después de 30 mg de diazepam en adultos o 10 mg en niños mayores

de 5 años aplicar fenobarbital intravenoso así: adultos 10 mg/kg en 60

mL de solución salina 0.9% para pasar en 30 minutos, dosis diluidas

adicionales a necesidad de 100 mg cada 20 min; en niños 15 - 20 mg/kg

con dosis adicionales a necesidad de 5 - 10 mg/kg cada 20 minutos.

8. La hipertermia debe manejarse de manera agresiva con medidas de

enfriamiento externo.

9. La colestiramina puede aumentar la excreción de organoclorados al

interrumpir la recirculación enterohepática. Se deben administrar 4g (1

sobre), diluido en 80 mL de un líquido (que no sea una bebida

carbonatada), cada 6 horas.

10. Corregir trastornos hidroelectrolíticos y las alteraciones del estado ácido-

base.

11. Valoración por psiquiatría en caso de intento suicida.

12. Lo pacientes con intoxicaciones crónicas deben evitar al máximo nuevos

contactos con la sustancia, deben recibir colestiramina a las dosis

recomendadas previamente y deben ser evaluados por psiquiatra y

neurólogo.

Page 76: Para paciente intoxicado

15. INTOXICACIÓN POR PARAQUAT

Dres. Joaquín López y Andrés F. Zuluaga

Descripción: paraquat y diquat son herbicidas sólidos, insípidos e inodoros,

muy solubles en agua, pertenecientes al grupo de los bipiridilos. Paraquat es el

más usado, su forma líquida se emplea para el control de malezas y como

regulador del crecimiento vegetal, en tanto, diquat se utiliza como herbicida

acuático, especialmente en la región Caribe. En nuestro medio se consiguen

dibromuro de diaquat (Reglone® SL), dicloruro de paraquat en suspensión al

20% (Gramoxone® SL, Gramafin® SL, entre otros) o una combinación de

diaquat (8%) con paraquat (12%) llamada Gramoxone PLUS®

(http://www.fitosanitarisaro.com/pdfs/gramoxoneplus.pdf) .

Farmacocinética: ambos son rápidamente absorbidos a partir del tracto

gastrointestinal y se alcanzan concentraciones máximas dentro de las 2 horas

post-ingestión. La presencia de alimentos reduce significativamente la

absorción. La absorción por piel es limitada, excepto se exponga a soluciones

altamente concentradas de paraquat (Cerrillo® SL) o existan lesiones que

alteran la integridad de la piel (abrasiones). Paraquat tiene un volumen de

distribución aparente de 1.2 a 1.6 L/kg. Paraquat es captado selectivamente y

concentrado en las células alveolares pulmonares, aunque también alcanza

buenas concentraciones en riñones, hígado y músculos. Tanto el paraquat

como el diquat son poco metabolizados, pero mientras el primero se elimina

por vía renal (fracción excretada sin cambio cercana a 90%) entre 12 y 24

horas, diquat se excreta por riñones y tracto grastrointestinal.

Mecanismo de toxicidad: Estas sustancias generan un efecto corrosivo en los

tejidos con los cuales entran en contacto, la toxicidad celular se da por el

imbalance entre la producción de radicales libres y los sistemas de

detoxificacion. Particularmente, luego de su captación y concentración

pulmonar, se produce una alveolitis secundaria al exceso de radicales libres

intra-alveolares que degenerarán en necrosis, seguida por proliferación de

tejido conectivo y fibrosis pulmonar.

Page 77: Para paciente intoxicado

En condiciones normales, la fosfato de nicotinamida-adenina dinucleótido

(NADP por sus siglas en inglés) actúa como coenzima indispensable en

reacciones de óxido-reducción enzimáticas en la respiración tisular

(específicamente en el transporte de electrones hacia la fosforilación oxidativa),

el metabolismo de los lípidos y la glucogenólisis. Paraquat actúa reduciendo la

NADP, el cual a su vez reduce el oxígeno molecular, formando superóxidos

que son expuestos a procesos de oxidoreducción formando peróxidos, los

cuales al descomponerse pueden oxidar los ácidos grasos de las membranas

lipídicas, con la consiguiente muerte celular, proceso conocido como

peroxidación lipídica. Aunque las células tienen sistemas enzimáticos de

defensa (superóxido dismutasa, catalasa, peroxidasa) contra estos radicales

libres, en las intoxicaciones por bipiridilos, la producción de dichos radicales

excede la capacidad de defensa. La principal consecuencia de este proceso es

la ausencia de síntesis de ATP por parte de las células afectadas.

Manifestaciones clínicas: inicialmente las características del envenenamiento

incluyen náuseas, vómito y dolor abdominal. El espectro adicional de

manifestaciones depende de la dosis ingerida; cuando esta es <20 mg/kg se

pueden observar úlceras en boca, faringe, esófago y estomago, hematemesis,

disfonía y disfagia. Con dosis entre 20 y 40 mg/kg, también se puede producir

mediastinitis, neumonía y fibrosis pulmonar (días a semanas post-exposición),

hepatitis tóxica, falla renal aguda (falla perdedora de potasio secundaria a

necrosis tubular aguda) y muerte. Dosis >40mg/kg (por ejemplo, ≥20 mL de una

solución al 20%) producen en pocas horas la muerte secundaria a falla

orgánica multisistémica (incluyendo coma, necrosis adrenal, acidosis

metabólica, convulsiones, edema y falla pulmonar y arritmias y depresión

miocárdica).

Diquat causa síntomas similares pero no causa fibrosis pulmonar. Con diquat

es más común la neurotoxicidad y una gastroenteritis severa con secuestro de

líquidos con pérdida masiva de líquidos y electrolitos que puede contribuir a

empeorar la falla renal.

Page 78: Para paciente intoxicado

Cuando hay exposición ocular o de mucosas, independiente de la dosis y del

bipiridilo, se pueden observar: edema, eritema, conjuntivitis, queratitis y ulceras,

entre otros.

Dosis tóxica: una cantidad tan pequeña como 10-20 mL de una solución al

20% de paraquat (2 a 4 gramos) en adultos y 4-5 mL en niños, puede producir

la muerte. Para diquat, la dosis letal estimada para adultos es 30 a 60 mL (6 a

12 gramos) de una solución al 20%.

Diagnóstico: Es básicamente clínico, sin embargo, existe una prueba

cualitativa rápida (prueba de la ditionita) que ayuda a confirmar el diagnóstico

de paraquat (existe poca experiencia con diquat) y se realiza adicionando a 5

mL de orina 0.1 g de bicarbonato de sodio (para alcalinizar la orina) y 0.1 g de

ditionita sódica (hidrosulfito sódico). Si la orina cambia a un color azul

(paraquat) o verde (diquat) la prueba es positiva.

La prueba de la ditionita tiene un buen valor pronóstico cuando la orina se

examina en las primeras 24 horas siguientes a la ingestión. Cuando no se

observa cambio de color o se produce un cambio tenue a un azul pálido, se

considera que la concentración de paraquat está cerca o debajo del límite de

detección de la prueba (1 mg/L), y permite predecir supervivencia, en tanto, un

color azul intenso u oscuro generalmente predice un desenlace fatal. En el

caso de diquat, el cambio a verde intenso se asocia probablemente con un mal

pronóstico.

También es posible medir bipiridilos en sangre y orina mediante

espectrofotometría, cromatografía o radio-inmunoensayo, sin embargo, se

requiere de una infraestructura sólo disponible en hospitales o laboratorios de

alta tecnología, como los disponibles en el Laboratorio de Farmacología y

Toxicología de la Facultad de Medicina de la Universidad de Antioquia.

Se considera que niveles de paraquat en sangre mayores de 2, 1 y 0.1 mg/L a

las 4, 6 y 24 horas, respectivamente, se asocian con alta probabilidad de

muerte.

Page 79: Para paciente intoxicado

Las pruebas de función pulmonar son necesarias, debido a que los cambios

pulmonares aparecen tardíamente a los rayos X y éstos reflejan pobremente la

gravedad. Una prueba complementaria en el diagnóstico de la intoxicación es

la determinación de ácido malonildialdehído (MDA, por sus siglas en inglés), un

reflejo de la peroxidación lipídica inducida por los bipiridilos. Esta prueba está

disponible en nuestro Laboratorio en la Universidad de Antioquia.

Entre los estudios de laboratorio que también se deben solicitar se incluye

hemoleucograma, ionograma con calcio y magnesio, BUN y creatinina,

bilirrubina total y directa, transaminasas, fosfatasas alcalinas, pH y gases

arteriales, CPK, y endoscopia digestiva superior (idealmente en las primeras

48 horas post-ingesta). Se debe hacer seguimiento del funcionamiento

pulmonar en los sobrevivientes, mediante espirometría luego de dos a seis

semanas para evidenciar compromiso restrictivo (fibrosis) como secuela.

Tratamiento:

1. Realizar ABCD.

2. Nada vía oral en las primeras 24 horas. No inducir el vómito.

3. Canalizar 2 venas: una para medicación general y otra para líquidos

endovenosos (solución salina al 0.9% o lactato Ringer) a razón de 30

mL/kg/día.

4. Control estricto de líquidos ingeridos y eliminados.

5. En caso de úlceras orales, realizar enjuagues bucales cada 8 horas con

una mezcla de 10 mL de difenhidramina, 10 mL de nistatina y 10 mL de

hidróxido de aluminio.

6. En caso de compromiso ocular, se debe realizar lavado del ojo afectado con

solución salina al 0.9% a goteo continuo durante 1 hora.

7. En caso de contaminación dérmica se debe hacer baño exhaustivo del

paciente.

8. El lavado gástrico sólo está indicado si la sobredosis por vía oral tiene

menos de una hora de evolución (ver capítulo 1). Suministrar

inmediatamente por sonda nasogástrica (o vía oral) adsorbentes como la

tierra de Fuller al 25% (o la bentonita al 7.5%), a dosis de 1.5 g/kg adultos y

Page 80: Para paciente intoxicado

2 g/kg de peso niños (menores de 12 años). Esta administración debe

repetirse cada 4 a 8 horas por 24 horas. En caso de no disponer de tierra

de Fuller se puede emplear carbón activado, como se recomienda en el

capítulo 1.

9. Adicionalmente, prescribir manitol 5 mL/kg por vía oral (o sonda

nasogástrica), en caso de no tenerlo disponible pueden administrarse por la

misma ruta 250 mg/kg de hidróxido de magnesio o sulfato de magnesio.

10. Entre las medidas farmacológicas que se han recomendado, aunque su

eficacia en el envenenamiento no se ha establecido, se incluyen:

Propranolol 80 mg cada 8 horas previa toma de presión arterial,

manteniendo una presión arterial media >70 y una frecuencia

cardiaca ≥60.

N-acetilcisteína 150 mg/kg diluidos en 200 mL de DAD al 5% para

pasar en una hora bolo IV, seguido por 50 mg/kg diluidos en 200

mLde DAD 5% para pasar en 4 horas IV y continuar con una infusión

IV de 100 mg/kg diluida en 200 mL de DAD 5% cada 16 horas hasta

completar 10 días; luego de los cuales se continúa 600 mg VO cada

8 horas por otros 10 días . Se sugiere vigilar sobrecarga hídrica y la

presencia de la enfermedad del suero, la cual se presenta entre 5 y

10 dias luego del uso de este medicamento y se caracteriza por

fiebre, rash y adenopatías.

Vitamina E 400 UI por vía oral cada 12 horas por 20 días.

Page 81: Para paciente intoxicado

16. INTOXICACIÓN POR PIRETRINAS Y PIRETROIDES

Dres. Jenny Cuesta y Andrés F. Zuluaga

Descripción: ampliamente utilizados como insecticidas. Las piretrinas son

productos naturales derivados de las flores de las plantas Chrysanthemum

cinerariaefolium y Tanacetum coccineum. Las piretrinas son venenos de

contacto que rápidamente penetran el sistema nervioso del insecto. Luego de

su aplicación, el insecto no puede moverse o volar, pero una “dosis de noqueo”

no implica su muerte. Las piretrinas son rápidamente detoxificadas por enzimas

en el insecto, entonces algunos de ellos podrán recuperarse totalmente. Para

asegurar una acción letal, y retrasar la acción de dichas enzimas, es común

que se adicionen sustancias sinergistas como los carbamatos (u

organofosforados) en los insecticidas comerciales.

También se han desarrollado derivados semisintéticos más efectivos que las

piretrinas naturales, conocidos como piretroides. Estos productos son, además,

menos tóxicos para los mamíferos por lo cual su uso es más masivo. En la

literatura es común el uso del término “piretro” ("pyrethrum", en inglés) para

referirse de una forma general a piretrinas y piretroides. En el mercado

encontramos los siguientes piretroides (que emplean como solventes

hidrocarburos tales como el xileno) de venta libre: aletrina (Raid®), transflutrina

(Bygon®), bioresmetrina, cialotrina (Karate Zeon 5®), cipermetrina

(antiparasitario), decametrina, deltametrina (“tiza mata cucarachas”), fenotrina,

permetrina, supermetrina, entre otros.

Farmacocinética: los piretroides pueden ingresar al cuerpo por ingestión,

inhalación o absorción dérmica, son rápidamente hidrolizados por esterasas

hepáticas, y eliminados por orina. La dosis a la cual no se observan efectos

adversos (NOAEL, del inglés no observed adverse effect level) en animales

luego de su ingestión es 1 mg/kg/día. La Organización Mundial de la Salud

(OMS) considera 0.05 mg/kg/día como “niveles de ingesta diaria permitida” de

permetrina y cipermetrina. La ruta inhalada es poco común como vía de

intoxicación, debido a la baja volatilidad de estos compuestos, que favorece

Page 82: Para paciente intoxicado

NOEL de 1000 mg/kg/día en animales, por lo cual la relación riesgo:beneficio

es muy favorable para estos insecticidas en spray. De hecho, la OMS

recomienda el uso a gran escala de piretroides para tratar angeos, toldillos y

camas en zonas maláricas.

Mecanismo de toxicidad: los piretros perpetúan la apertura de los canales de

sodio voltaje dependientes induciendo un retraso en la conducción (>10 msec,

al menos de dos veces el tiempo normal).

Manifestaciones clínicas: los piretroides se dividen en dos clases según la

ausencia (tipo I) o presencia (tipo II) de un grupo -ciano. Los tipo I (por

ejemplo, permetrina) pueden inducir un síndrome tembloroso caracterizado por

hiperexcitación, ataxia y convulsiones, seguido de una parálisis flácida; este

síndrome es similar al inducido por DDT. Los tipo II (por ejemplo, ciflutrin)

desarrollan un síndrome de coreoatetosis-salivación (incoordinacióin,

coreoatetosis, parestesias, convulsiones, hipersensibilidad, temblores,

hipersalivación y parálisis).

Los piretros también aumentan la liberación de neurotransmisores y están

ampliamente asociados con fenómenos alérgicos, incluyendo la exacerbación

aguda de neumonitis, asma e incluso reacciones de hipersensibilidad inmediata

fatales. Dermatitis de contacto alérgica o irritativa se ha reportado hasta en el

70% de aquellos individuos que trabajan con pesticidas. A la fecha, no se ha

aceptado la existencia toxicidad crónica por piretroides.

Dosis tóxica: la dosis tóxica por ruta oral en mamíferos es 100 a 1000 mg/kg,

y la dosis letal aguda por esa misma ruta es 10 a 100 g (LD50 ~1 g/kg).

Diagnóstico: el diagnóstico se basa en la historia de exposición. No hay

síntomas clínicos patognomónicos, ni pruebas de laboratorio específicas para

identificar estos compuestos (debido a que son rápidamente metabolizados por

el cuerpo).

Page 83: Para paciente intoxicado

Entre los estudios de laboratorio que se pueden ordenar se incluye glicemia,

electrolitos y gases arteriales.

Tratamiento:

1. Realizar ABC (prestar especial atención a la aparición de

broncoespasmo y anafilaxia, y tratarlos según el caso).

2. Si se ingirió grandes cantidades de piretros (>30 mL), se debe vigilar al

paciente durante al menos 4 a 6 horas debido al riesgo de desarrollar

convulsiones y depresión del SNC. En caso de aparecer convulsiones se

recomienda emplear benzodiazepinas o fenobarbital a dosis usuales.

3. No existen antídotos específicos, ni métodos extracorpóreos de

extracción.

4. Se recomienda descontaminar según la ruta de exposición:

a. Vía dermatológica (piel): remover vestiduras y lavar copiosamente

con agua y jabón. Se puede aplicar vitamina E en aceite vegetal

para reducir las parestesias.

b. Vía oftálmica: lavar copiosamente con solución salina normal y

remitir para evaluación por oftalmólogo para descartar mediante

examen con fluoresceína lesión de la córnea.

c. Vía oral: después de una gran ingestión de “tizas

matacucarachas” (más de dos, debido a que cada tiza tiene 37.6

mg de deltametrina) o de soluciones altamente concentradas, se

puede emplear carbón activado (ver capítulo 1). El lavado gástrico

no es necesario si se administra a tiempo el carbón.

Page 84: Para paciente intoxicado

17. INTOXICACIÓN POR ALCOHOL ETÍLICO

Dres. Juan F. Cárdenas, Andrés Velasco y Andrés F. Zuluaga

Descripción: el etanol, o alcohol etílico, es una de las sustancias de abuso

más comúnmente utilizadas en nuestro medio con fines recreativos. Su

consumo se está altamente difundido en la población al encontrarse como

componente de bebidas como aguardiente, cerveza, ron, vodka, vino, entre

otras, o en productos como colonias, perfumes, cremas de dentales y de afeitar

y elíxires. Igualmente, el etanol puede servir como un sustrato competitivo en el

tratamiento de emergencia de los envenenamientos por etilenglicol y metanol.

Esta amplia variedad de productos y usos, permite que se puedan afectar todas

las clases sociales, ambos sexos y un amplio rango de edades.

De hecho, como es una sustancia legal y socialmente aceptada, los efectos

tóxicos del etanol suelen minimizarse equivocadamente, tanto por el personal

de salud como por los mismos pacientes, desconociendo las consecuencias

deletéreas que el consumo agudo puede presentar sobre el organismo,

especialmente sobre las poblaciones especiales (niños, ancianos y mujeres

embarazadas).

Farmacocinética: tiene una rápida y buena absorción (pico sérico entre 30 y

120 minutos) por todas las vías (gastrointestinal, parenteral, dérmica e

inhalatoria), distribuyéndose ampliamente en el agua corporal (Vd = 0.5 a 0.7

L/kg). La eliminación es principalmente por oxidación hepática, siguiendo una

cinética de orden cero. En promedio, un individuo adulto puede metabolizar

entre 7 y 10 g de alcohol por hora. Sin embargo, esta tasa varía entre

individuos y es influenciada por los polimorfismos de la enzima alcohol

deshidrogenasa y la actividad del sistema microsomal oxidativo (CYP450 2E1).

Por ello, los síntomas son variables entre pacientes dependiendo del sexo,

raza, velocidad de consumo y cronicidad del mismo.

Mecanismo de toxicidad: sus efectos son consecuencia directa de la acción

sobre el receptor GABA facilitando la entrada de cloro a las células,

Page 85: Para paciente intoxicado

disminuyendo así su excitabilidad y actuando como depresor del sistema

nervioso central (SNC). Debe recordarse, entonces, que tiene acción sinérgica

con cualquier otra sustancia que sea depresora del SNC.

Manifestaciones clínicas: varían según la cronicidad del consumo. En

intoxicaciones agudas leves a moderadas, la depresión de las áreas corticales

frontales en sistema nervioso central explica la euforia, incoordinación leve y

alteraciones de funciones como el juicio, el raciocinio y la conducta

(desinhibición), por lo que se afectan la atención, concentración, memoria y

ocasionalmente conductas desinhibidas y antisociales. Si la intoxicación

progresa se presentarán alteraciones visuales y motoras, induciendo depresión

respiratoria y afectando el estado conciencia hasta producir coma (si se

ingieren agudamente grandes cantidades). Se puede encontrar rabdomiolisis

como resultado de una prolongada inmovilidad. Adicionalmente también se

pueden presentar arritmias, arreflexia, vómito, dolor abdominal, sangrado

gastrointestinal y complicaciones pulmonares secundarias a broncoaspiración.

También se presentan signos como enrojecimiento facial, taquicardia,

hipotensión, hipotermia, diaforesis, midriasis, disartria, labilidad emocional,

nistagmus. Se pueden presentar convulsiones, especialmente en niños, por la

hipoglicemia ocasionada por el etanol. Otros trastornos metabólicos

posteriores a la ingesta aguda de etanol incluyen acidosis metabólica,

hipokalemia, hipomagnesemia, hipocalcemia e hiperamilasemia.

La intoxicación crónica está asociada a numerosas complicaciones, incluyendo

toxicidad hepática (infiltración grasa del hígado, hepatitis alcohólica, cirrosis,

acompañadas de hipertensión portal, ascitis y sangrado de várices esofágicas y

hemorroides), neurológica (encefalopatía hepática, atrofia cerebral,

degeneración cerebelar y neuropatía sensorial [entumecimiento “guante-

media”]), cardíaca (fibrilación auricular asociada con la hipokalemia e

hipomagnesemia y la pobre ingesta calórica o síndrome de “corazón del día

festivo”), gastrointestinal (pancreatitis aguda usualmente manifiesta por dolor

abdominal y vómito, sangrados secundarios a gastritis inducida por alcohol,

Page 86: Para paciente intoxicado

esofagitis, fisuras de Mallory-Weiss y duodenitis), entre otras (cetoacidosis

alcohólica caracterizada por una acidosis metabólica con anión gap elevado).

Síndrome de abstinencia: la descontinuación súbita después de consumir

crónicamente altas cantidad de alcohol ocasiona sobre-activación del sistema

nervioso simpático manifiesta por cefalea, nerviosismo, ansiedad,

palpitaciones, insomnio y convulsiones tónico-clónico generalizadas (entre 6 y

12 horas después de suspendido), que puede progresar a delirium tremens

(síndrome caracterizado por taquicardia, diaforesis, hipertermia y delirio, luego

de 48 a 72 horas de suspendido el consumo) que puede terminar en la muerte

del paciente.

Diagnóstico: usualmente simple, se fundamenta en la historia de consumo

asociado al característico aliento a alcohol fresco o al olor fétido del

acetaldehído, en presencia de nistagmus, ataxia y alteraciones del estado

mental. Existe disponibilidad local para la medición cualitativa y cuantitativa de

niveles séricos de etanol. El laboratorio de Farmacología y Toxicología de la

Facultad de Medicina de la Universidad de Antioquia o el laboratorio de

Toxicología de la Secretaria de Tránsito y Transporte de Medellín son dos

centros de referencia en este tema.

La utilización de otras ayudas de laboratorio dependerá del estado clínico del

paciente y la disponibilidad de las mismas. Se sugiere realizar por lo tanto:

glucometría, pH y gases arteriales, ionograma incluyendo magnesio, calcio y

fósforo, BUN, creatinina, amilasas séricas, electrocardiograma, CPK total,

citoquímico de orina, alcoholemia y en casos de dificultad respiratoria o

hallazgos auscultatorios sugestivos de broncoaspiración se debe solicitar

radiografía de tórax.

Dosis tóxica: generalmente 0.3 g/kg de etanol puro (aproximadamente 2

copas de vino o 2 cervezas) pueden producir una concentración sérica de

etanol ≥40 mg/dL. En nuestro país, el límite legal (según el código de tránsito)

para intoxicación es >0.04 g/dL (en Brasil, por ejemplo, es sólo 0.02 g/dL).

Page 87: Para paciente intoxicado

Un valor de 0.1 g/dL (ó 100 mg/dL) reduce la capacidad de reacción y juicio y

es suficiente para inhibir la gluconeogénesis e inducir hipoglicemia, pero no

causa coma.

Se requieren niveles séricos >300 mg/dL para causar coma o depresión

respiratoria en bebedores novatos y >500 mg/dL en consumidores crónicos.

Tratamiento: se deben descartar otras patologías existentes en un paciente

con antecedente de haber ingerido alcohol etílico, como el trauma

craneoencefálico (usualmente asociado) o raquimedular, estados post-ictales,

infecciones, hipoglicemia, encefalopatía hepática, encefaloptatía de Wernicke

(secundaria al déficit de tiamina), trastornos hidroelectrolíticos, síndrome de

abstinencia, o intoxicaciones mixtas con otros alcoholes (metílico y etilen-

glicol).

Al paciente intoxicado por alcohol etílico en el servicio de urgencias se le debe

observar por lo menos 6 horas (en niños hasta que los niveles séricos estén

<50 mg/dL); dependiendo del estado clínico de embriaguez y ante la presencia

de otras complicaciones (respiratorias, metabólicas, gastrointestinales o

traumáticas) se recomienda hospitalizar o remitir a un nivel superior de

atención.

Entre las medidas de soporte y emergencia se incluye:

1. Realizar ABCD. Proteger y garantizar una adecuada permeabilidad de la vía

aérea, asegurando un buen volumen ventilatorio (si es necesario, intubar y

suministrar ventilación asistida). Es importante mantener un adecuado

estado de hidratación e iniciar la vía oral tan pronto se tolere. No se deben

usar soluciones con dextrosa para reanimar, se recomienda el uso de SS

0.9% o Lactato de Ringer.

2. Administrar por ruta intravenosa 100 mg de tiamina, lentamente, a pacientes

con sospecha de alcoholismo crónico o desnutrición, para prevenir la

encefalopatía de Wernicke-Korsakoff.

3. Mantener el calor corporal por medios físicos (especialmente en niños).

Page 88: Para paciente intoxicado

4. No existen antídotos específicos, ni se recomienda la descontaminación

gástrica (debido a que el etanol es rápidamente absorbido). La aspiración

del contenido gástrico por sonda nasogástrica, previa intubación, está

indicada sólo en pacientes extremadamente intoxicados que ingresan en

estado comatoso posterior a la ingesta masiva y aguda (<45 minutos) de

etanol.

5. La hemodiálisis remueve eficientemente el alcohol circulante, pero rara vez

es necesario debido a que la mayoría de pacientes mejoran con las

medidas de soporte.

6. En caso de agitación, emplear haloperidol, en adultos 5 mg por hora hasta

obtener respuesta y en niños 0.01 a 0.1 mg/kg dosis (máximo 0.5 mg dosis

total).

7. En síndrome de abstinencia, emplear benzodiazepinas (diazepam 2 a 10

mg intravenosos, repetir según necesidad).

8. En caso de agitación en intoxicación aguda, igualmente puede emplearse

una benzodiazepina.

9. En pacientes con hipoglicemia, comprobadas por el resultado de una

glucometría se debe garantizar una infusión de 0.5 a 1 g de dextrosa/kg de

peso, para ello se debe aplicar un bolo intravenoso de 250 mL de DAD 10%

y continuar con infusión de 25-50 mL por hora realizando glucometrías

periódicas. En caso de no presentarse hipoglicemias se puede hidratar con

solución salina normal.

10. En caso de vómito persistente (sospechar pancreatitis) utilizar

metoclopramida a las dosis usuales, para evitar la broncoaspiración.

11. A pacientes alcohólicos con hipomagnesemia se les debe aplicar 2 g de

sulfato de magnesio disueltos en los líquidos intravenosos.

12. Se debe corregir la hipokalemia y la hipofosfatemia.

13. En los pacientes adultos con trastornos de la coagulación, administrar una

ampolla de 10 mg (Konakion MM®) por vía oral (romper la ampolla) de

vitamina K1 sintética (fitonadiona). En niños, administrar 0.6 mg/kg por vía

oral (evitar la administración parenteral). Si hay hemorragia administrar

primero plasma fresco antes de suministrar la vitamina K.

Page 89: Para paciente intoxicado

14. En pacientes con alta sospecha clínica y radiológica de neumonía

aspirativa, ojalá con confirmación microbiológica, ordenar antibióticos de

amplio espectro como ampicilina-sulbactam a dosis usuales.

Page 90: Para paciente intoxicado

18. INTOXICACIÓN POR METANOL

Dres. Joaquín López y Andrés F. Zuluaga

Descripción: el metanol, alcohol metílico o “alcohol de madera”, se obtiene

como subproducto de la fabricación industrial de polímeros, formaldehído y

compuestos metilados, como contaminante de la destilación artesanal del licor

y como constituyente de removedores de pintura y varios solventes industriales,

como el “thinner” que puede llegar a contener hasta un 30% de metanol (300

mg/mL).

Farmacocinética: el alcohol metílico es rápidamente absorbido (por ruta

gastrointestinal, respiratoria y cutánea) y distribuido al agua corporal total (Vd

similar al etanol). Este no se une a proteínas y es metabolizado con una

cinética de orden cero por la enzima alcohol deshidrogenasa a formaldehido, a

una velocidad 10 veces menor respecto al etanol. A continuación, este

subproducto es transformado por la enzima aldehído deshidrogenasa a ácido

fórmico (formato). La vida media del metanol oscila entre 1 y 24 horas, mientras

para el formato es 3 a 20 horas. Menos de 5% se excreta sin cambios por orina

y 10 a 20% por vía respiratoria.

Mecanismo de acción: son los productos de degradación del metanol los

responsables de la toxicidad. Esta resulta de una combinación de acidosis

metabólica (por el incremento en la producción de hidrogeniones) secundaria a

la acumulación de formato y lactato, y a la toxicidad intrínseca del formato

(inhibe la respiración mitocondrial) que podría explicar la ceguera asociada, e

incluso algunas de las lesiones de los ganglios basales (o “círculo hipóxico”). El

metabolismo y eliminación de este subproducto tóxico depende de las reservas

hepáticas de folato (ácido fólico y folínico). Los primates tenemos una baja

reserva de folatos y somos las únicas especies que acumulamos formato y

sufrimos de toxicidad por metanol.

Page 91: Para paciente intoxicado

Existe evidencia experimental que sugiere que la acidosis metabólica actúa

como favorecedora de la intoxicación al disparar la producción y acumulación

de formato. Esto refuerza la importancia de corregir la acidosis metabólica.

Manifestaciones clínicas: las manifestaciones se pueden presentar aguda (40

minutos) o tardíamente (luego de 12 a 24 horas) post-ingesta; esto último se

puede observar cuando se consumió el producto concomitante con etanol.

La intoxicación aguda causa confusión, ataxia, cefalea, malestar general,

debilidad, anorexia, náuseas, hiperventilación a medida que progresa la

acidosis metabólica, vómito, dolor abdominal y cambios visuales con fotofobia y

visión nublada progresiva. Usualmente los síntomas oculares preceden signos

objetivos, tales como pupilas dilatadas que son parcialmente reactivas o no

responden a la luz y fondo de ojo que muestra hiperemia del disco óptico con

desvanecimiento de los márgenes (pseudopapilitis). La ausencia de estos

hallazgos en el fondo de ojo no excluye el diagnóstico.

Algunos pacientes describen angina de pecho, por lo que a veces son

admitidos con diagnóstico diferencial de infarto agudo de miocardio.

Los signos de mal pronóstico son: acidemia, convulsiones, bradicardia, falla

respiratoria y coma. El paro respiratorio es una complicación dramática

asociada con una tasa de muerte de 75%.

Las secuelas más comunes son: neuropatía óptica, ceguera, infartos de

ganglios basales, parkinsonismo, encefalopatía tóxica y polineuropatía.

Diagnóstico: en ausencia de una historia de exposición, la intoxicación por

metanol es difícil de diagnosticar, especialmente si se ingirió simultáneamente

etanol prolongando el periodo de latencia. La intoxicación por metanol debe

sospecharse en cualquier paciente que tenga acidosis metabólica de origen

desconocido, con anión gap aumentado. Es posible medir cualitativa o

cuantitativamente niveles séricos de metanol pero no de formato. Cualquier

concentración de metanol >20 mg/dL es tóxica (punto de corte para determinar

Page 92: Para paciente intoxicado

la suspensión del antídoto) y cualquier valor >40 mg/dL debe considerarse muy

peligroso; sin embargo, niveles séricos bajos (<20 mg/dL) no descartan el

diagnóstico, porque después del periodo latente esas concentraciones mínimas

o no detectables pueden explicarse por la conversión total a ácido fórmico.

Adicionalmente se puede solicitar hemoleucograma, pH y gases arteriales,

glicemia, ionograma incluyendo magnesio y fósforo, BUN, creatinina, CPK total,

citoquímico de orina, cuantificación de etanol y metanol en sangre. Como

requisitos para una posible hemodiálisis se requieren Ac Chagas, HIV, VDRL,

AgsHBV y AcHCV.

Dosis tóxica: La dosis tóxica por vía oral es de 100 mg/kg y la letal de 20 a

150 gramos (30-240 mL). La dosis tóxica mínima por vía inhalatoria se estima

en 200 ppm durante aproximadamente 8 horas o de 6000 ppm independiente

del tiempo de exposición.

Tratamiento:

1. Realizar ABCD. Proteger y garantizar una adecuada permeabilidad de la

vía aérea, asegurando un buen volumen ventilatorio (si es necesario,

intubar y suministrar ventilación asistida).

2. Tratar las convulsiones si se presentan con uno de los siguientes

anticonvulsivantes: diazepam (0.1-0.2 mg/kg IV) o midazolam (0.1-0.2

mg/kg IM). Recordar que todos los anticonvulsivantes pueden inducir

hipotensión y paro cardio-respiratorio si se administran rápidamente.

3. No administrar carbón activado ya que no impide de manera significativa

la absorción de metanol, excepto en casos de co-ingestión de “thinner”

(ver capítulo 1).

4. Idealmente los pacientes con intoxicación por metanol deben ser

remitidos a niveles superiores donde pueda determinarse la presencia

de acidosis metabólica y seguimiento durante su corrección.

5. Si hay posibilidad de medir gases arteriales y líquidos y electrolitos, el

esquema de manejo a seguir sería:

Page 93: Para paciente intoxicado

En caso de sospecha de intoxicación, en ausencia de los recursos de

laboratorio comentados, debe iniciarse antídoto específico (etanol) hasta

lograr la remisión del paciente.

6. En caso de acidosis metabólica (o cuando se presenten síntomas

oculares) debe tratarse inmediata y agresivamente con altas dosis de

bicarbonato sódico hasta que el pH sérico sea >7.3. Infundir en 1 ó 2

minutos por ruta intravenosa un bolo inicial de 1 a 2 mEq/kg diluidos en

250 mL de agua destilada; repitiendo a necesidad hasta corregir el pH

sérico y retornar el bicarbonato a un valor normal (>20 mEq/L).

7. El tratamiento específico (antídoto) es la administración de etanol

(fomepizol, otro antídoto específico, no está disponible en Colombia), el

cual está dirigido a inhibir competitivamente la conversión del metanol

en sus metabolitos tóxicos. La administración de antídotos debe

mantenerse hasta que los niveles séricos de metanol sean <20 mg/dL o

hasta que se obtenga una prueba cualitativa negativa.

Intravenosa: Disolver 50 mL de etanol al 96% en 450 mL de DAD 5%,

lo que permite obtener una concentración aproximadamente al 10%

(100 mg/mL) para administrar un bolo inicial de 8 mL/kg de peso y

continuar con un goteo de 0.8 mL/kg/h. La concentración de etanol en

sangre debe mantenerse entre 100 y 120 mg/dL.

Tratamiento

pH sanguíneo

Anión gap

[Na+ + K+] – [Cl- + HCO-3]

Historia de ingesta

<20

>7.3

Observación clínica

Vigilar gases arteriales

≤7.3

Bicarbonato

Antídoto

>20

≤7.3

Bicarbonato

Antídoto

Ácido folínico (o fólico)

Considere hemodiálisis

Page 94: Para paciente intoxicado

Oral: por sonda nasogástrica, iniciar con un bolo de 3 mL/kg de etanol

al 30% (aguardiente), continuando con 0.3 mL/kg por hora.

8. Acido fólico 1 mg/kg, máximo 50 mg VO o IV cada 4 horas por 24 horas.

9. Criterios para hemodiálisis (si el paciente va a ser sometido a diálisis

se debe aumentar 30% el goteo del antídoto)

Síntomas visuales independientemente de la metanolemia.

Metanolemia >50 mg/dl.

Anion gap > 10 mOsm/kg H2O.

Acidosis metabólica (pH <7.3) con anion gap aumentado.

Ingestión de 30 mL en adultos ó 0.5 mLkg en niños, de metanol

absoluto (concentración mayor al 99%).

Page 95: Para paciente intoxicado

19. INTOXICACIÓN POR ANTIDEPRESIVOS TRICÍCLICOS

Dra. Lina Peña

Descripción: los antidepresivos tricíclicos (ADT), son un grupo de

medicamentos farmacológicamente relacionados, usados para el tratamiento

de la depresión, el dolor neuropático, la migraña, la enuresis, el déficit de

atención y los trastornos de pánico y obsesivo compulsivo. Comparten unas

características toxicológicas, farmacocinéticas y terapéuticas únicas. Los más

conocidos son la amitriptilina (Tryptanol®), la butriptilina (Evadyne®) y la

imipramina (Tofranil®).

Farmacocinética: son altamente liposolubles y atraviesan la barrera

hematoencefálica. Se absorben rápida y completamente del tracto

gastrointestinal, los niveles plasmáticos pico se presentan entre 2 y 8 horas

luego de la ingesta de dosis terapéuticas, sin embargo, en sobredosis la

disminución del peristaltismo causada por los efectos anticolinérgicos y el

efecto de la ionización al pH del estómago retardan la absorción. La

biodisponibilidad oscila entre el 30 y el 90% y existe un extenso metabolismo

de primer paso en el hígado, sin embargo en sobredosis este metabolismo se

satura, aumentando la biodisponibilidad. Su volumen de distribución es muy

grande (10 - 60 L/kg). Las concentraciones tisulares de los ADT son 10 – 100

veces mayores que las plasmáticas y sólo el 1 – 2% se encuentra en el plasma.

Estas características explican porque las medidas de detoxificación

extracorpórea (diuresis forzada o hemodiálisis), son inefectivas para el

tratamiento de la intoxicación.

Los antidepresivos se metabolizan casi completamente por el CYP 450, por

oxidación del anillo central o por reacciones de desmetilación de la cadena

alifática lateral; las aminas terciarias como la amitriptilina y la imipramina luego

de la desmetilación forman aminas secundarias, las cuales son metabolitos

farmacológicamente activos como la nortriptilina y la desipramina (lo cual

prolonga el tiempo de toxicidad), que luego se conjugan para formar

glucurónidos inactivos que se excretan por vía renal; algunos antidepresivos

tienen circulación enterohepática pero esto carece de importancia clínica. La

Page 96: Para paciente intoxicado

vida media de eliminación oscila entre 6 – 70 horas en dosis terapéuticas, pero

puede prolongarse hasta tres veces en sobredosis. Los ADT tienen un bajo

margen de seguridad y pequeños cambios en la dosis o el uso concomitante

de inhibidores del CYP, prolongan la vida media y se corre el riesgo de producir

toxicidad aun a dosis terapéuticas.

Mecanismo de toxicidad: los efectos de los ADT se pueden resumir en tres

grupos así: (i) la inhibición de la recaptación de neurotransmisores

(norepinefrina, serotonina y dopamina). (ii) el bloqueo de ciertos tipos de

receptores: adrenérgico (1), dopaminérgico (D2), histaminérgico (H1),

muscarínicos y serotoninérgicos (5-HT2A) y (iii) el bloqueo de los canales

rápidos de sodio y rectificadores tardíos de potasio (Ikr). Estas relaciones

explican muchos de los beneficios terapéuticos de estos medicamentos, pero

también, sus efectos adversos o tóxicos.

Dosis tóxica: niños: 5mg/kg: adultos: 10 mg/kg.

Manifestaciones clínicas: los síntomas usualmente inician 30 a 40 minutos

después de la ingestión pero pueden ser más tardíos debido a que el efecto

anticolinérgico a nivel gastrointestinal retrasa la absorción. Se presenta estado

de conciencia variable: desde agitación y delirio hasta somnolencia, estupor o

coma, inicialmente puede haber hipertensión, pero tambien normo o

hipotensión, que puede evolucionar a choque refractario. Una manifestación

muy característica es la taquicardia sinusal estable, que es la arritmia más

frecuente en esta intoxicación, no suele requerir tratamiento y puede durar

hasta 7 días. Las convulsiones son la alteración neurológica más grave, se

presentan en el 10 % de los casos y en el 13 % de los que fallecen, suelen ser

tónico-clónicas generalizadas y únicas.Otras manifestaciones son: hipertermia,

midriasis, mucosas secas, arritmias cardíacas de predominio ventricular,

disminución del peristaltismo y retención urinaria. Adicionalmente pueden

encontrarse las siguientes alteraciones de laboratorio: acidosis metabólica,

hiperglicemia, leucocitosis con neutrofilia, creatinina y CPK aumentados. El

periodo de observación mínimo debe ser de 12 horas

Page 97: Para paciente intoxicado

Diagnóstico: los niveles de antidepresivos tricíclicos en las muestras

biológicas (sangre), deben solicitarse siempre en los pacientes con sospecha

de intoxicación, sin embargo, no existe un nivel que se correlacione con el

cuadro clínico (valores muy bajos pueden estar presentes en pacientes muy

graves), dependiendo del momento de la toma, la cantidad ingerida, la

realización de las medidas de descontaminación, etc. Sin embargo algunos

consideran que valores en sangre >800 ng/mL, se correlacionan con una

intoxicación muy grave. En un paciente con valores altos y un cuadro clínico

compatible, servirán para confirmar el diagnóstico. Puede haber falsos positivos

cuando el paciente ha tomado: carbamazepina, difenhidramina, fenotiazinas,

fenitoína. Otros exámenes que se pueden solicitar son: ionograma con

magnesio, gases arteriales, glicemia, hemograma, creatinina, citoquímico de

orina, CPK total y rayos X de tórax si se sospecha broncoaspiración.

Todos los pacientes deben tener un electrocardiograma al ingreso, cuando se

sospeche (permite enfocar el diagnóstico y el tratamiento) o se esté seguro de

que un paciente ingirió una sobredosis de ADT, ya que hasta un 85% de los

pacientes presentará cambios en dicho examen. Las alteraciones en el

electrocardiograma son:

QRS mayor de 100 milisegundos.

Relación R/S en aVR > 0.7.

Onda R >3mm en aVR.

Onda S >3mm en la derivación DI (desviando el eje hacia la derecha).

Cuando el paciente tiene estas alteraciones en el electrocardiograma, debe

hacérsele un monitoreo continuo y un electrocardiograma de control cada 4

horas.

Tratamiento:

1. Realizar ABCD.

2. Monitoreo cardiaco continuo si hay cambios electrocardiográficos.

3. ADVERTENCIA: en un paciente con disminución del puntaje de Glasgow

o convulsiones, en el contexto de la intoxicación por ADT, la realización

de las medidas de descontaminación tiene que hacerse previa

intubación orotraqueal. El no seguimiento de esta recomendación

Page 98: Para paciente intoxicado

implica un grave riesgo para la vida del paciente, por lo que se

contraindica cualquier procedimiento de descontaminación.

4. Carbón activado: es la medida más apropiada y según algunos

reemplaza la realización del lavado gástrico, se usa una dosis única, si

el paciente se presenta dentro de la primera hora. Puede administrarse

después, pero su efectividad disminuye rápidamente en el tiempo (para

dosis ver capítulo 1). Hoy la mayoría está de acuerdo en que para una

dosis única de carbón activado, no se requiere la administración de

catártico. En el contexto de esta intoxicación debe individualizarse su

uso, observando detalladamente la presencia de peristaltismo.

5. En virtud de las características farmacocinéticas de los ADT, la

hemodiálisis, la hemoperfusión y las dosis repetidas de carbón activado,

no son actualmente consideradas de utilidad.

6. Convulsiones: diazepam 5 a 10 mg IV (niños dosis 0.2-0.5 mg/kg) y

repetir cada 5 minutos si es necesario. Está CONTRAINDICADO el uso

de fenitoína, como anticonvulsivante en estos casos (mayor efecto

bloqueador de canales de sodio).

7. Sedación: usar benzodiazepinas, está contraindicado el uso de

haloperidol, por favorecer el desarrollo de convulsiones.

8. Bicarbonato de sodio: si el QRS es ≥100 milisegundos, la onda R >3mm

en aVR o se presenta una taquicardia de complejos anchos, se pone 1

mEq/kg de bicarbonato de sodio (en un buretrol) y se pasa IV directo, sin

diluir y se repite si es necesario vigilando que el pH sérico no exceda los

7.5. No está establecida la dosis límite, pero se recomienda no superar

la dosis de 4 mEq/kg. NO está indicado poner infusiones de bicarbonato.

9. No administrar fisostigmina ni flumazenil ya que pueden desencadenar

convulsiones. No utilizar antiarrítmicos del grupo I tales como lidocaína y

fenitoína ya que tienden a agravar la toxicidad. Preferir la amiodarona si

después del bicarbonato IV persisten las arritmias.

Page 99: Para paciente intoxicado

20. INTOXICACION POR BENZODIACEPINAS

Dres. Andrés F. Zuluaga y Marie C. Berrouet

Descripción: las benzodiazepinas son medicamentos seguros, eficaces y de

bajo costo, ampliamente utilizados como sedantes, hipnóticos,

anticonvulsivantes, en síndrome de abstinencia alcohólica e inducción

anestésica. En el mercado encontramos diferentes miembros de la clase

benzodiazepinas que difieren en potencia, vida media y duración del efecto (ver

farmacocinética). Existen medicamentos que a pesar de no ser

benzodiazepinas como eszopiclona (lunast®), zolpidem (stilnox®) y zaleplón

(sonata®), inducen efectos similares.

Farmacocinética: la mayoría tienen alta unión a proteínas (>80%) y se

absorben bien por vía oral y parenteral. Estos agentes tienen metabolismo

hepático y, generalmente, su eliminación es por vía renal. Los pacientes con

insuficiencia hepática y renal pueden acumular los metabolitos activos (o el

producto parental) si no se les ajusta la dosis. A continuación se presentan

algunas características de las benzodiazepinas más comercializadas en

Colombia:

Medicamento Nombre comercial

(año)

Vida media

(horas)

Metabolitos

activos

Dosis

terapéutica

usual (mg)

Alprazolam Xanax® (1981) 6 – 27 No 0.25 – 0.5

Diazepam Valium® (1963) 40 – 120 Sí 5 – 20

Flunitrazepam Rohypnol® 20 No 1 – 2

Lorazepam Ativan® (1977) 10 - 20 No 2 – 4

Midazolam Dormicum® 2 - 7 Sí 1 – 5

Triazolam Somese® (1983) 2 – 6 No 0.125 – 0.5

Mecanismo de toxicidad: se consideran depresores del sistema nervioso

central al actuar en los receptores de ácido gamma-aminobutírico (GABA). Se

han descrito tres tipos de receptor GABA (A, B y C) que son los principales

Page 100: Para paciente intoxicado

responsables de la neurotransmisión inhibitoria. Los receptores GABAA son

canales de cloro hetero-oligoméricos compuestos de cinco subunidades, y son

modulados por químicos como las benzodiazepinas. Estos medicamentos

potencian la acción del GABA (gabaérgicos), y el resultado es depresión de los

reflejos espinales y del sistema reticular activador ascendente, favoreciendo el

desarrollo de coma y paro respiratorio.

Manifestaciones clínicas: el inicio de la sintomatología depende de la

sustancia, de la vía de administración y de la dosis, aunque usualmente se

manifiestan entre 30 y 120 minutos después de ingeridas. Las manifestaciones

agudas se asocian con el efecto depresor del sistema nervioso (sedación,

disartria, ataxia y nistagmus), dependiendo de la sobredosis se puede

evolucionar hasta alteraciones cardiopulmonares, coma (usualmente

acompañada de hiporreflexia y pupilas mióticas) y muerte. En niños y ancianos

pueden presentarse efectos paradójicos como agitación psicomotora y

convulsiones. La aplicación intravenosa rápida de benzodiazepinas

(principalmente midazolam) se ha asociado con paros respiratorios.

Los efectos a largo plazo de las benzodiazepinas son desconocidos, aunque se

han reportado alteraciones de la función cognitiva y adquisición de la memoria.

En mujeres embarazadas se asocia con efectos teratogénicos, pérdidas fetales

o una embriopatía caracterizada por retardo en el crecimiento intrauterino,

dismorfismos y disfunción cerebral.

Otros efectos adversos reportados con sobredosis incluyen bloqueo

neuromuscular, toxicidad hepática, hematológica y renal, rabdomiolisis,

dermatitis y anafilaxia.

Diagnóstico: usualmente se fundamenta en la historia de ingestión o inyección

reciente. Se debe descartar la intoxicación por otros agentes sedantes-

hipnóticos, antidepresivos, antipsicóticos y narcóticos. Es posible cuantificar los

niveles séricos de benzodiazepinas, sin embargo tienen poco valor en

urgencias toxicológicas. Asimismo, pueden solicitarse pruebas en orina con

fines médico legales, que confirman la intoxicación, pero no son pronósticos ni

Page 101: Para paciente intoxicado

necesarios para el diagnóstico, porque no necesariamente indican que sea la

sustancia responsable de la toxicidad. Los inmunoensayos no detectan varias

benzodiazepinas de amplio uso, como triazolam y alprazolam.

Además se requiere medición de glicemia, gases arteriales y pruebas de

función renal.

Dosis tóxica: en general tienen un rango terapéutico amplio, por lo cual no

existe una dosis tóxica establecida. Se han reportado consumos 10 veces

superiores de diazepam sin observarse signos de depresión respiratoria. Sin

embargo, también se observa paro respiratorio luego de la inyección rápida de

dosis bajas de varias benzodiazepinas. Por lo anterior, cuando aparecen

manifestaciones de toxicidad debe sospecharse siempre la coingesta con otros

depresores del sistema nervioso.

Tratamiento:

1. Estabilizar el paciente. Realizar ABCD.

2. Suspender la vía oral (por la depresión del SNC) e intubar si el Glasgow

≤8.

3. Observar al paciente por un periodo mínimo de 24 horas, y tratar coma,

hipotensión e hipotermia si ocurren.

4. No se recomienda el lavado gástrico por alto riesgo de broncoaspiración

debido a la depresión del sistema nervioso. Ni la diuresis forzada, ni la

diálisis sirven remover las benzodiazepinas.

5. Considere carbón activado (1g/kg en solución al 25% por SNG) si la

ingestión ocurrió 30 minutos antes. No se recomienda su uso si el

paciente tiene deterioro del estado de conciencia.

6. Hoy la mayoría está de acuerdo en que para una dosis única de carbón

activado, no se requiere la administración de catártico. En el contexto de

esta intoxicación debe individualizarse su uso, observando

detalladamente la presencia de peristaltismo.

7. El antídoto específico (antagonista del receptor de las benzodiazepinas)

es flumazenil (lanexat®, ampollas 0.5 mg/5mL). Se recomienda sólo en

aquellos casos selectos en los cuales hay coma y depresión respiratoria,

Page 102: Para paciente intoxicado

esto porque la esta intoxicación es rara vez fatal y el antídoto puede

inducir hipotensión, arritmias o alteraciones hemodinámicas y puede

desencadenar convulsiones en pacientes con historia de epilepsia,

aumento de la presión intracraneana, ingestión concomitante de

antidepresivos tricíclicos, anticonvulsivantes, hidrato de cloral y cocaína,

e incluso puede precipitar un síndrome de abstinencia en pacientes

adictos a las benzodiazepinas.

Si se decide administrar flumazenil, la dosis intravenosa inicial es de 0.2

mg (0.01mg/kg, en niños), y si no se obtiene respuesta se suministran

bolos de 0.3 mg, a necesidad hasta un máximo de 3 mg en adultos (1

mg en niños). Su efecto (reversión de coma) debe iniciar 1 - 2 minutos

luego de administrada y persistir por 1 a 5 horas dependiendo de la

dosis y el tipo de benzodiazepina involucrada (momento en el cual se

debe repetir la dosis del antídoto).

8. Evaluación por psiquiatría en intentos suicidas.

Page 103: Para paciente intoxicado

21. INTOXICACIÓN POR CARBAMAZEPINA

Dres. Jenny Cuesta y Andrés F. Zuluaga

Descripción: analgésico coadyuvante (neuralgia post-herpética, dolor por

miembro fantasma), anticonvulsivante (crisis parciales o tónico-clónicas

generalizadas) y estabilizante del ánimo (trastorno bipolar) de amplio uso,

relacionado estructuralmente con antidepresivos tricíclicos y con fenitoína, por

lo cual comparte similitudes en el cuadro tóxico.

Farmacocinética: Sustancia liposoluble, de lenta e impredecible absorción por

vía gastrointestinal. Excepto en las presentaciones de liberación controlada, el

pico sérico se alcanza entre 6 y 24 horas. En sobredosis su vida media se

prolonga y su eliminación puede retardarse hasta 72 horas. Su rango

terapéutico es estrecho, las concentraciones plasmáticas oscilan entre 4 y 12

mg/L. Tiene una unión a proteínas de ~80% y se metaboliza (oxidación)

ampliamente por la CYP 3A4 produciendo el metabolito activo 10,11-epóxido

carbamazepina. Adicionalmente, puede autoinducir la enzima microsomal

(proceso que toma hasta 4 semanas) permitiendo una amplia variedad de

interacciones medicamentosas. Aproximadamente 2 a 3% se excreta sin

cambio por orina.

Mecanismo de toxicidad: similar a la fenitoína, in vitro carbamazepina limita el

disparo repetido del potencial de acción evocado por una despolarización

sostenida de las neuronas corticales o de médula espinal. Esto parece ser

mediado por un enlentecimiento en la tasa de recuperación de la inactivación

del canal de sodio activado por voltaje. Al parecer el metabolito activo 10,11-

epoxicarbamazepina contribuye a este efecto. También se ha descrito bloqueo

central y periférico de receptores muscarínicos y receptores 1.

Otros mecanismos de acción propuestos, aunque menos probables, son

inhibición de la recaptación presináptica de adenosina e inhibición de la

liberación presináptica de glutamato.

Page 104: Para paciente intoxicado

Manifestaciones clínicas: debido a su lenta absorción, la sintomatología

puede tardar en presentarse. La mayoría de manifestaciones tóxicas parecen

ser relacionadas con sus efectos anticolinérgicos y depresores del sistema

nervioso central. Este medicamento también altera la función cerebelar-

vestibular. Adicionalmente, debido a su parecido estructural con los

antidepresivos tricíclicos como imipramina, la sobredosis aguda con

carbamazepina puede causar convulsiones y alteraciones en la conducción

cardíaca.

Concentraciones plasmáticas ≥40 mg/L se asocian con convulsiones (estatus

epiléptico), mioclonias, hipertermia, fluctuación en el estado de conciencia,

coma, depresión respiratoria y cardiotoxicidad. Los niños pueden convulsionar

con concentraciones séricas menores, pues son más susceptibles al

compromiso neurológico que al cardiotóxico.

Manifestaciones de intoxicación leve a moderada pueden ser somnolencia,

ataxia, nistagmus, oftalmoplejia, desórdenes del movimiento (disquinesias,

distonías), midriasis, hipotensión. Puede haber taquicardia sinusal en el 35%

de los pacientes. La prolongación del complejo QRS se presenta en el 15% de

los intoxicados y la prolongación del intervalo QT en un 50 % de los casos. En

ancianos se ha reportado bloqueo auriculo-ventricular y bradicardia.

Puede haber hiponatremia significativa (más relacionada con altas dosis y en

ancianos). En algunos casos pancreatitis, hepatitis, hiperamonemia, leucopenia,

trombocitopenia y agranulocitosis.

En intoxicación crónica se presenta principalmente muerte súbita en

epilépticos, alteraciones hematológicas, hepáticas y renales entre ellas el

síndrome de secreción inadecuada de hormona antidiurética.

Dosis tóxica: la ingestión aguda de >10 mg/kg se considera tóxica (dosis

máxima recomendada: 35 a 40 mg/kg/día). Se han reportado muertes en

adultos luego de ingerir 3.2 a 60 g.

Page 105: Para paciente intoxicado

Diagnóstico: se fundamenta en la historia de exposición y signos de depresión

neurológica. Se puede corroborar solicitando niveles séricos del medicamento

(disponible en el laboratorio de Farmacología y Toxicología de la Facultad de

Medicina), haciendo un control cada 6 horas (debido a la posibilidad de

intoxicarse con formas farmacéuticas de liberación prolongada). Niveles séricos

>10 mg/L se asocian con ataxia y nistagmus. Intoxicación grave (convulsiones,

depresión respiratoria, coma y muerte) se asocian con niveles mayores a 40

mg/L. Es importante considerar que la presencia de carbamazepina puede dar

una reacción falsa positiva en las pruebas de laboratorio para antidepresivos

tricíclicos.

Tratamiento:

1. Realizar ABCD.

2. Monitoreo cardiaco estricto.

3. Electrocardiograma cada 6 a 8 horas.

4. Lavado gástrico, si el paciente es atendido máximo en la primera hora

luego de la ingesta (ver capítulo 1).

5. Carbón activado, el cual se puede iniciar tan tardíamente como 12

horas post-ingesta. Están indicadas dosis repetidas, siempre y cuando

se vigile aparición de obstrucción intestinal (ver capítulo 1).

6. En caso de convulsiones se hace manejo con benzodiazepinas o

fenobarbital. Evitar el uso de fenitoína o cualquier otro anticonvulsivante

bloqueador de canales de sodio.

7. Si hay prolongación de QRS > 100 mseg se puede administrar

bicarbonato de sodio 1 mEq/kg rápido sin diluir, intravenoso.

8. No es útil la hemodiálisis. La hemoperfusión tiene resultados

comparables a dosis repetidas de carbón activado.

Page 106: Para paciente intoxicado

22. INTOXICACIÓN POR COCAÍNA

Dres. Marie C. Berrouet y Andrés F. Zuluaga

Descripción: es un alcaloide obtenido a partir de las hojas de Erithroxylum,

que luego de diferentes procesos químicos se comercializa ilegalmente como

bazuco (pasta básica de coca, para fumar), perico (clorhidrato de cocaína,

para aspiración nasal –snorted- o inyectar) y crack (cristales de cocaína, para

fumar). Estos productos vienen contaminados con otras sustancias

estimulantes (lidocaína, cafeína, metanfetamina, efedrina y fenciclidina) que

potencian su toxicidad.

Farmacocinética: se absorbe bien por todas las rutas, luego de fumada o

administrada intravenosamente sus efectos aparecen en 2 minutos, con un pico

de acción entre 8 y 12 minutos y duración del efecto hasta 30 minutos. Por

aspiración nasal el efecto eufórico ocurre a los 15 minutos con pico de acción

cardiovascular a los 60 minutos y duración acción de varias horas. Sin embargo,

por mucosa oral se puede demorar hasta 30 minutos para absorberse. La

cocaína es metabolizada por esterasas hepáticas y plasmáticas y por hidrólisis

no enzimática, antes de ser eliminada por vía urinaria (90 a 95%) como

metabolitos inactivos (principalmente benzoilecgonina).

Mecanismo de toxicidad: estimulante del sistema nervioso central, actúa

inhibiendo la recaptación de catecolaminas, favoreciendo la acumulación

sináptica de dopamina y norepinefrina, que explican la exagerada actividad

simpática central y periférica.

También actúa como anestésico local, retrasando la iniciación y conducción del

impulso nervioso al bloquear los canales de sodio, lo que también favorece su

cardiotoxicidad.

Manifestaciones clínicas: intoxicación leve: signos vitales normales o

levemente alterados. Puede ocurrir euforia, ansiedad, agitación (incluso delirio),

cefalea, temblor distal, nauseas, vomito, diaforesis, midriasis.

Page 107: Para paciente intoxicado

Intoxicación moderada: hipertensión, taquicardia, alucinaciones, hiperactividad,

clonus, aumento del tono muscular, convulsiones tónico-clónicas generalizadas

de corta duración, rabdomiolisis.

Intoxicación grave: Marcado incremento de signos vitales que puede causar

disección aórtica o hemorragia cerebral, hipertermia maligna, arritmias

cardiacas, estatus epiléptico, edema agudo de pulmón, hepatitis tóxica,

colapso vascular.

Dentro de la principales complicaciones asociadas al consumo de esta droga

están las cardiacas, principalmente la isquemia miocárdica no sólo por la

hiperactividad simpática y el vasoespasmo coronario sino porque estos

pacientes tienen procesos de ateroesclerosis acelerada. Además se ha

observado depresión de la conducción (prolongación del complejo QRS) y la

contractilidad, que se puede manifestar como taquicardia ventricular o

fibrilación. En un paciente consumidor con dolor precordial típico o atípico, se

debe descartar estas complicaciones y seguir los manejos de acuerdo a los

consensos establecidos, teniendo en cuenta que en la fase aguda están

contraindicados los beta-bloqueadores.

Los consumidores crónicos pueden presentar episodios de epistaxis, rinitis y

perforación del septo nasal. También manifestaciones sistémicas como

anorexia, pérdida de peso, insomnio, psicosis, paranoia. Inyecciones

subcutáneas accidentales pueden causar úlceras necróticas localizadas.

Diagnóstico: en pacientes con historia de consumo del producto o signos y

síntomas de intoxicación simpaticomiméticas se debe hacer énfasis en la

evaluación del sistema cardiovascular, respiratorio y sistema nervioso central.

La tomografía axial computarizada de cráneo es necesaria en pacientes con

focalización o quienes presenten deterioro neurológico. Se deben solicitar ECG

y troponinas, en caso de no tenerlas CPK total, CPK-MB pH y gases arteriales,

BUN y creatinina, glicemia, ALT y AST, determinación de metabolitos de

Page 108: Para paciente intoxicado

cocaína en orina, estos últimos para confirmar el diagnóstico aunque no

influyen en el manejo ni en el pronóstico.

La radiografía de tórax y/o abdomen es necesaria en “mulas” (“body packers”) y

en aquellos vendedores ambulantes que al ser sorprendidos súbitamente por

una autoridad rápidamente ingieren el material envuelto en condones

(“cocaine-filled condoms”) sin asegurar un buen sellado de estos, por lo cual los

viales pueden fácilmente romperse intoxicando gravemente al delincuente

(“correos humanos” o “body stuffers”).

Se deben solicitar pruebas de laboratorio que descarten infecciones sistémicas

(endocarditis, neumonía, absceso epidural, entre otras), especialmente en

consumidores intravenosos.

Dosis tóxica: es muy variable y depende de la susceptibilidad individual, tipo

de preparado, de la ruta de administración y de la utilización concomitante de

otras sustancias dentro de las cuales merece especial atención el alcohol,

puesto que en su presencia, la cocaína es transesterificada a cocaetileno, un

potente cardiotóxico de mayor vida media que el producto parental.

Usualmente, la ingestión de ≥1 g de cocaína es fatal.

Tratamiento:

1. Realizar ABCD.

2. Monitoreo cardíaco continuo.

3. Medios físicos para bajar la temperatura en caso de hipertermia (mantas

humedas, bolsas de hielo en axilas y región inguinal).

4. Si hubo ingestión de bolsas de cocaína y no hay evidencia clínica de

intoxicación (“correos humanos”) administrar polietilenglicol (Nulytely®) por

sonda naso-gástrica a 25 mL/kg/h hasta que las deposiciones sean claras y

no exista evidencia radiológica de bolsas en el tracto gastrointestinal. La

sospecha de ruptura es indicativa de laparotomía exploradora urgente.

5. La base del tratamiento en caso de hipertermia persistente, agitación,

hipertensión, taquicardia o convulsiones o dolor torácico son las

benzodiazepinas. Se puede utilizar diazepam 5-10 mg IV (niños: 0.2 a 0.5

Page 109: Para paciente intoxicado

mg/kg) cada 5-10 minutos hasta lograr la mejoría. La dosis se maneja

dosis/respuesta y pueden requerirse dosis altas. También puede usarse

midazolam (2-5 mg IV cada 5-10 minutos o en infusión continua).

6. Las arritmias ventriculares se tratan idealmente con amiodarona 5 a 10

mg/kg en bolo en un periodo de 15 a 30 minutos, seguido de una infusión IV

de 10 mg/kg/día durante 24 a 72 horas.

7. Los casos de síndrome coronario agudo deben ser manejados según las

guías recomendadas para esta entidad clínica.

8. Evitar el uso de betabloqueadores por el riesgo de hipertensión paradójica,

tener precaución con el uso de antipsicóticos por el riesgo de precipitar

convulsiones, arritmias y reacciones extrapiramidales.

9. En caso de rabdomiolisis con elevación de CPK total ≥3 veces el valor

normal, iniciar manejo con líquidos endovenosos con solución salina normal

para garantizar una diuresis de 3 a 4 mL/kg/hora. Hacer control de CPK

total cada 12 horas las primeras 24 horas, luego cada 24 horas hasta la

normalización. Es necesario vigilar la aparición de falla renal que pueda

perpetuar la intoxicación. Ni la diálisis, ni la hemoperfusión sirven para

aumentar la eliminación.

Page 110: Para paciente intoxicado

23. ENFOQUE MEDICO-LEGAL DEL PACIENTE EMBRIAGADO.

Dres. Joaquín López y Andrés F. Velasco

El consumo del alcohol es un problema de salud pública mundial, su capacidad

de alterar la condición cerebral normal conlleva a que las personas se

expongan y expongan a los demás a circunstancias que conducen a

violaciones de la ley, por lo que determinar el estado de embriaguez es una

obligación en estos casos de las entidades que cumplan funciones de policía

judicial.

En ese punto, cuando la autoridad interviene para procesar judicialmente al

individuo embriagado culpable o realizar la inspección judicial al cadáver, la

solicitud al médico de realizar la evaluación de la embriaguez sólo puede ser

atendida con metodologías científicas que de modo responsable permitan

hacer el diagnóstico correcto, positivo o negativo, de la intoxicación por alcohol,

con las obvias consecuencias que durante el proceso penal ello conllevará.

Es necesario entender que el término “embriaguez” es un elemento conceptual

netamente clínico, que define a un estado patológico producido por la acción

de sustancias que afectan esencialmente el funcionamiento del sistema

nervioso central. Dado lo anterior, los términos de alcohol y embriaguez no son

sinónimos, y en teoría no es suficiente conocer la alcoholemia de un paciente

para establecer su grado de embriaguez sin una evaluación clínica del paciente.

Entre las sustancias embriagantes más comunes tenemos: Alcoholes,

Marihuana, Cocaína, Anfetaminas, Barbitúricos, Antidepresivos, Opiáceos,

Fenotiazinas, LSD y en general cualquier sustancia que afecte la función del

sistema nervioso central.

Desde el punto de vista legal, la justicia colombiana, cuando se trata de

accidentes de tránsito en estado de embriaguez se rige dependiendo de la

gravedad del accidente bajo el código nacional de tránsito o el código penal

colombiano.

Page 111: Para paciente intoxicado

Cuando no hay lesionados o víctimas en el accidente, el código nacional de

tránsito estipula que los implicados deben ser trasladados lo más pronto

posible a un centro oficialmente certificado para la realización de una prueba

científica, para la determinación del estado de embriaguez y poder establecer

la respectiva sanción.

Cuando por culpa del accidente en estado de embriaguez se presentan

lesionados o muertos el código penal colombiano sanciona con prisión, multa y

suspensión del ejercicio profesional, teniendo en cuenta el hecho de estar

embriagado como agravante punitivo, lo que aumenta la pena.

Cabe recordar también que asistir al trabajo bajo los efectos de sustancias

embriagantes puede ser causal de terminación del contrato.

Las leyes Colombianas estipulan que será el Instituto Nacional De Medicina

Legal o en su defecto el médico general en regiones donde no haya médico

legista, quienes realizaran los exámenes pertinentes para diagnosticar el

estado de embriaguez de una persona.

Mediante el “Reglamento Técnico Forense Para La Determinación Clínica Del

Estado De Embriaguez Aguda” del Instituto Nacional de Medicina Legal y

Ciencias Forenses publicado en Diciembre 2005, se establecen los parámetros

para realizar la evaluación clínica o paraclínica de un paciente embriagado.

Se debe obtener por escrito el consentimiento libre e informado para la

realización del examen clínico y de las pruebas paraclínicas complementarias

(incluyendo la toma de muestras biológicas), por parte del examinado (a) o su

representante legal, según el caso. En el evento en que la persona por

examinar, o su representante legal, se rehúse a la práctica del estudio se le

informará de inmediato a la autoridad, pues se requiere una orden emitida por

un Juez de Control de Garantías para su realización.

Page 112: Para paciente intoxicado

Se deben registrar y documentar los hallazgos del examen clínico, teniendo en

cuenta que se deben consignar tanto los positivos, como los negativos, que

permitan fundamentar o descartar un diagnóstico de embriaguez, orientar su

etiología, sustentar la necesidad de tomar muestras cuando sea del caso, y

hacer un diagnóstico diferencial con otras patologías si es pertinente. Como

medida inicial se deben tomar los signos vitales (frecuencia cardiaca,

frecuencia respiratoria, presión arterial, temperatura corporal). Además, cuando

sea posible, es deseable registrar la talla y el peso del examinado, y examinar

los reflejos osteotendinosos (por lo menos el rotuliano).

El diagnóstico de embriaguez alcohólica de primer grado se configura con la

presencia de, por lo menos, nistagmus post-rotacional discreto,

incordinación motora leve y aliento alcohólico, analizados dentro del

contexto de cada caso específico. Estos signos están precedidos por

alteraciones en la esfera mental y neurológica, relacionadas con la atención,

concentración, memoria y juicio, fundamentales para la realización de

actividades de riesgo.

El diagnóstico de embriaguez alcohólica de segundo grado se da cuando se

detecta nistagmus post-rotacional evidente, incoordinación motora

moderada, aliento alcohólico y disartria. Además puede haber alteración en

la convergencia ocular. Estos signos presuponen un mayor compromiso de la

esfera mental y neurológica (en lo relativo a la atención, concentración,

memoria y juicio) y por ende mayor incapacidad para efectuar actividades de

riesgo.

Finalmente por examen físico, se establece el diagnóstico de embriaguez

alcohólica de tercer grado cuando el paciente presenta entre sus signos y

síntomas, desde nistagmus espontáneo o post-rotacional evidente, aliento

alcohólico, disartria, alteración en la convergencia ocular, incoordinación

motora severa y aumento del polígono de sustentación, hasta cualquier

expresión clínica que implique mayor compromiso mental y neurológico con

somnolencia, imposibilidad para articular el lenguaje, amnesia lacunar,

incapacidad para mantener la postura y bipedestación, o alteraciones

Page 113: Para paciente intoxicado

graves de conciencia (estupor o coma). Este estado implica una alteración

completa de la esfera mental y neurológica (en lo relativo a la atención,

concentración, memoria y juicio) y, por ende, de la capacidad de la persona

para efectuar actividades de riesgo.

La pertinencia de las pruebas de laboratorio para determinar alcoholemia u

otras sustancias diferentes al alcohol, está sujeta a la información previa del

caso, a la obtenida en la entrevista y a los hallazgos del examen clínico; por lo

tanto es el médico quien determinará la necesidad de realizar o no tales

pruebas adicionales.

Sólo en aquellos casos en los cuales no se haya efectuado examen clínico, se

deben interpretar los resultados de las pruebas de alcoholemia (ya sea por

métodos directos o indirectos) mediante la correlación entre la escala de

embriaguez etílica y el nivel sérico de alcohol establecida en el artículo

segundo de la Resolución 0414 de 2002 del Instituto Nacional de Medicina

Legal y Ciencias Forenses y aclarada mediante Resolución 0453 de 2002, así:

Escala de embriaguez Nivel sérico de etanol

Negativa (normal) <40

Primer grado 41 a 99

Segundo grado 100 a 149

Tercer grado >150

Dado lo anterior el personal médico debe saber cómo realizar el diagnóstico de

embriaguez aguda, porque es en los servicios de urgencias donde se tiene el

primer contacto con los pacientes embriagados implicados en procesos

penales, civiles o administrativos. En estos servicios se debe realizar la tomas

de muestras y la valoración clínica del estado de embriaguez.

Toma de muestras:

Se debe tomar muestra de sangre 7 mL (2 tubos) en tubo de vidrio tapa

gris (con fluoruro de sodio y oxalato de calcio), realizando la asepsia con

agua destilada y no con alcohol. Esta muestra se debe refrigerar entre

Page 114: Para paciente intoxicado

0ºC y 5ºC, bien tapada. Se debe anotar la hora exacta de la toma y el

sitio de la venopunción. En esta muestra se realizará la alcoholemia y la

búsqueda de otros embriagantes en el laboratorio especializado.

Tomar muestra de orina de mínimo 40 mL. Esta muestra se debe rotular

y tapar adecuadamente y en ella se realizará la búsqueda de sustancias

embriagantes si la autoridad competente lo considera necesario en el

transcurso de la investigación.

Se debe asegurar la cadena de custodia para que las muestras tengan

carácter probatorio.

Con la anterior revisión se pretende que el lector comprenda que el diagnóstico

de embriaguez aguda es el resultado del análisis y la consideración de muchas

variables, que sobrepasan en conjunto la importancia de un valor simple de

etanol en sangre, más cuando de esto depende la vida o la libertad de muchos.

Page 115: Para paciente intoxicado

24. INTOXICACIÓN POR ESCOPOLAMINA

Dres. Joaquín López y Andrés F. Velasco

Descripción: la escopolamina o burundanga es un alcaloide natural que se

obtiene de las semillas de las plantas del género Datura y Brugmansia de la

familia de las solanáceas; popularmente la planta se conoce como “borrachero”

y su fruto como “cacao sabanero”, el cual está compuesto por unas 30 semillas.

Cada semilla contiene suficiente escopolamina para intoxicar a un adulto. La

escopolamina procesada es un polvo fino, cristalino, de color blanco y de sabor

amargo, aunque también la suministran sin cristalizar. La escopolamina

empleada con fines delincuenciales puede estar mezclada con

benzodiazepinas, alcohol etílico o fenotiazinas.

Farmacocinética: se absorbe por el tracto gastrointestinal, por inhalación y a

través de la piel; se puede suministrar por lo tanto en bebidas, alimentos,

cigarrillos en contacto con los labios, linimentos, aerosoles e inyecciones. Su

acción comienza a los 30 minutos y la vida media es de 3 horas.

Mecanismo de toxicidad: antagonismo competitivo de los receptores

muscarínicos periféricos y centrales.

Dosis tóxica aguda: la dosis tóxica mínima de sustancia pura se estima en

10 mg en el niño y 100 mg en el adulto.

Manifestaciones clínicas: se caracteriza por causar un síndrome

anticolinérgico, con mucosas y piel seca, midriasis, visión borrosa, fotofobia,

piel eritematosa, hipertermia, hipertensión, taquicardia, disminución del

peristaltismo, retención urinaria, alucinaciones, pasividad, sugestionabilidad,

amnesia anterógrada, somnolencia, coma y convulsiones. En algunos

pacientes se puede presentar una etapa inicial de agitación y agresividad. Las

complicaciones, aunque poco frecuentes son: arritmias, inestabilidad

hemodinámica, rabdomiolisis y falla renal.

Page 116: Para paciente intoxicado

Los pacientes pueden presentar secuelas neuropsicológicas como: síndrome

de demencia escopolamínica, síndrome de estrés post-traumático y

alteraciones cognitivas.

Diagnóstico: el diagnóstico se basa en la historia de exposición y en la

presencia de signos típicos como dilatación pupilar y enrojecimiento cutáneo.

Los paraclínicos se deben realizar según el estado clínico del paciente y

disponibilidad las siguientes pruebas: hemograma, pH y gases arteriales,

ionograma incluyendo magnesio, BUN, creatinina, citoquímico de orina, CPK

total y escopolamina en orina.

Tratamiento: la mayoría de los pacientes con intoxicación por escopolamina

pueden ser manejados sintomáticamente.

1. Realizar el ABCD.

2. En caso de ingestas recientes (1 hora) de semillas de cacao sabanero,

está indicado el lavado gástrico exhaustivo con agua o solución salina

(200 mL ó 10 mL/kg en niños) hasta que el contenido gástrico salga

claro.

3. Suministrar una dosis de carbón activado de 1 g/kg de peso corporal en

solución al 20-25% por sonda nasogástrica.

4. Medios físicos para bajar la temperatura.

5. En caso de agitación sedar con benzodiazepinas, no aplicar

antipsicóticos como el haloperidol por el riesgo de aumentar la toxicidad

cardiaca y disminuir el umbral convulsivo.

6. Monitoreo electrocardiográfico continuo.

7. Manejo de convulsiones con diazepam 5-10 mg (niños: 0.2-0.5 mg/Kg)

IV y repetir cada 5 minutos si es necesario.

8. Es importante garantizar una buena diuresis (>2 mL/kg/hora), dado el

riesgo de falla renal por mioglobinuria con líquidos previo paso de sonda

vesical.

9. Administrar fisostigmina (ampollas de mg/mL) únicamente a los

pacientes con: convulsiones, coma, agitación grave que no cede a

benzodiazepinas o taquicardia supraventricular de complejos estrechos.

Page 117: Para paciente intoxicado

La dosis a suministrar es de 1 a 2 mg en el adulto y de 0.02 mg/kg en el

niño en infusión IV durante 5 minutos, con monitoreo electrocardiográfico.

El efecto dura aproximadamente una hora. Excepcionalmente se

requiere repetir la dosis. Se debe tener a mano atropina por si hay

necesidad de revertir los síntomas de la excesiva estimulación

colinérgica tales como convulsiones, bradicardia y asistolia.

10. Las arritmias ventriculares pueden tratarse con lidocaína 1.5 mg/kg IV en

bolo, seguido de infusión de 2 mg/min.

11. Considerar TAC de cráneo en pacientes con signos de focalización o

deterioro neurológico a pesar de tratamiento.

Page 118: Para paciente intoxicado

25. INTOXICACIÓN POR ÉXTASIS

Dra. Marie C. Berrouet

Descripción: las sustancias químicas sintetizadas en laboratorios clandestinos

se conocen como drogas de diseño, el éxtasis o metilendioximetanfetamina

(MDMA) es un buen ejemplo. Esta droga está siendo consumida cada vez con

mayor frecuencia dentro de los grupos de jóvenes y además es común que se

consuma combinándola con otras sustancias de abuso dentro de las que se

destacan cocaína y alcohol, aumentando el riesgo de toxicidad. En las calles

se conoce con diferentes nombres según el diseño que tenga la tableta (por

ejemplo: adan, love, paz, amor, eva). Es importante destacar que una gran

parte de las presentaciones se encuentran adulteradas con sustancias como

parametoxiamfetamina, (MDA, conocido como Eva), o ketamina, entre otras.

La dosis aproximada que contiene cada tableta oscila entre 50 y 150 mg,

aunque también se encuentra como polvo o cápsulas.

Farmacocinética: buena absorción por todas las vías (inhalatoria, intravenosa,

mucosas).pero la principal ruta de ingestión es la vía oral.

Mecanismo de toxicidad: el éxtasis produce una estimulación de las vías

adrenérgicas, dopaminérgicas y serotoninérgicas en el sistema Nervioso

Central y Periférico al inhibir la recaptación de aminas biógenas y al facilitar su

liberación al espacio sináptico lo cual produce un toxidrome simpaticomimético.

Manifestaciones clínicas: los signos y síntomas encontrados son producto de

una hiperactividad simpática, dentro de los principales están: taquicardia,

hipertensión, hipertermia palpitaciones, temblor, diaforesis, sequedad de la

boca, parestesias, trismos, bruxismo, espasmos musculares involuntarios y

movimientos estereotipados y repetitivos.

Se han descrito complicaciones como: arritmias cardiacas, isquemia

miocárdica y enfermedades cerebrovasculares hemorrágicas (más comunes) e

isquémicas, rabdomiolisis con falla renal aguda asociada y convulsiones,

Page 119: Para paciente intoxicado

también coagulopatía por consumo y edema agudo de pulmón no cardiogénico.

Por actividad dopaminérgica se han reportado reacciones extrapiramidales

como (distonía aguda, parkinsonismo y acatisia).

El espectro de trastornos psiquiátricos es muy amplio y frecuente desde

cuadros confusionales y episodios de despersonalización hasta psicosis

paranoide.

Diagnóstico: la necesidad de exámenes de laboratorio estará determinada por

el cuadro clínico del paciente y la disponibilidad de los mismos. Dentro de los

principales están: glicemia, función renal, hemograma, ionograma, pH y gases,

CPK, ECG y TAC cerebral en caso de compromiso neurológico.

Tratamiento: el enfoque terapéutico del paciente que consume éxtasis

depende de los síntomas que presenta, es decir, puede ir desde una simple

observación hasta manejo en la Unidad de Cuidados Intensivos.

1. Estabilización inicial, asegurar una adecuada vía aérea y una buena

administración de líquidos. ABCD.

2. En caso de agitación y/o convulsiones iniciar diazepam 10 mg IV y

repetir cada 10 minutos si no responde. La dosis de los niños de 0.1

mg/kg a 0.3 mg/kg IV. También se puede usar midazolam 3-5 mg en

adultos y 0.1 mg/kg a 0.2 mg/kg en niños. Se pueden llegar a

necesitar dosis altas de benzodiazepinas.

3. Una vez estabilizado el paciente se pueden utilizar benzodiazepinas

como el lorazepam o el clonazepam.

4. Para el manejo de la hipertermia, se deben utilizar medios físicos.

5. En caso de crisis hipertensiva el medicamento de elección es el

nitropusiato de sodio a dosis de 10 g/kg/min IV.

6. En caso de arritmias ventriculares administrar amiodarona (5 a 10

mg/kg en 20 minutos y luego 1 g para 24 horas), si hay inestabilidad

hemodinámica se debe realizar cardioversión eléctrica.

7. En caso de rabdomiolisis se debe administrar solución salina normal

para mantener el gasto urinario mayor de 2 mL/kg/h.

Page 120: Para paciente intoxicado

26. INTOXICACIÓN POR FENOTIAZINAS

Dres. Isabel C. Escobar y Andrés F. Zuluaga

Descripción: a este grupo de medicamentos pertenecen algunos

antihistamínicos como la prometazina (Fenergan, retirado del mercado local),

los antipsicóticos (o neurolépticos) y antieméticos como la metoclopramida

(Plasil, Pramotil, Primperan), la cual es una de las principales causas de

intoxicación en niños.

Farmacocinética: las rutas de intoxicación son la oral y la parenteral. Estos

medicamentos tienen grandes volúmenes de distribución (Vd = 10 a 30 L/kg), y

la mayoría tienen prolongadas vidas medias de eliminación y metabolismo

hepático.

Mecanismo de toxicidad: los signos y síntomas encontrados en los pacientes

se explican por la acción de estos fármacos en diferentes receptores: depresión

del sistema nervioso central por bloqueo de receptores de histamina;

hipotensión ortostática por bloqueo de receptores alfa1-adrenérgicos y

taquicardia por bloqueo de receptores colinérgicos. Con grandes sobredosis se

han descrito efectos depresores cardíacos similares a quinidina. La distonía

aguda y el extrapiramidalismo son comunes incluso a dosis terapéuticas y

ocurren por bloqueo central dopaminérgico. Aunque pueden disminuir el umbral

convulsivo por mecanismos desconocidos, es más común que causen

sedación y alteren la regulación de la temperatura (poiquilotermia), todo esto

mediado por los efectos anticolinérgicos.

Manifestaciones clínicas: alteración del estado de conciencia, aunque el

bloqueo alfa-adrenérgico causa pupilas mióticas, es posible a dosis tóxicas

encontrar midriasis secundaria a los efectos anticolinérgicos, piel seca,

hipotensión, prolongación del QTc, arritmias, alteraciones en la temperatura

(hipotermia o hipertermia), retención urinaria, convulsiones, síntomas

extrapiramidales (opistótonos, rigidez muscular, trismus, crisis oculógira e

incluso distonías agudas, parkinsonismo, acatisia), síndrome neuroléptico

Page 121: Para paciente intoxicado

maligno (hipertermia, rigidez, sudoración, acidosis láctica y rabdiomiolisis). En

los niños se puede presentar como efecto paradójico agitación psicomotora.

Dosis tóxica: este grupo de medicamentos no tiene una dosis tóxica

establecida, pues según la susceptibilidad individual, pueden aparecer

reacciones adversas aun con dosis terapéuticas, que requieren tratamiento.

Diagnóstico: se fundamenta en la historia de ingestión (usualmente suicida) y

la presencia de las manifestaciones clínicas. No se dispone de métodos

cuantitativos de los niveles séricos de fenotiazinas que permitan ayudar en el

diagnóstico o tratamiento. Si existen métodos de tamizaje cualitativos (pruebas

rápidas) para detectar su presencia en orina o jugo gástrico. Entre los estudios

de laboratorio que se deben solicitar se incluye gases arteriales, electrolitos,

glucosa sérica, BUN, creatinina, CPK, ECG e incluso rayos X de abdomen

(para visualizar pastillas radioopacas). En el ECG puede observarse:

taquicardia sinusal, prolongación del intervalo QT, aumento del complejo QRS,

Torsades de pointes, taquicardia o fibrilación ventricular, bloqueo A-V.

Tratamiento:

1. Realizar ABCD (ver capítulo 1).

2. El lavado gástrico sólo está indicado si la sobredosis por vía oral tiene

menos de una hora de evolución (ver capítulo 1).

3. Carbón activado si no han transcurrido más de 2 horas postingesta (ver

capítulo 1).

4. En caso de extrapiramidalismo emplear biperideno (Akineton®) 2 mg

intramuscular (IM) o intravenoso (IV) cada 30 minutos en adultos ó 0.04

mg/kg/dosis IV o IM hasta obtener respuesta en niños (máximo 4 dosis).

Otra alternativa es el empleo de difenhidramina (Benadryl®) 1 mg/kg IM o IV

sin exceder de una ampolla (50 mg) por dosis. Esta última puede repetirse a

necesidad y debe administrarse sólo en casos en los que el QTc no esté

prolongado.

5. Si el QTc es >500 mseg, administrar sulfato de magnesio 4 g (20 mL de

solución al 20%) diluidos en 100 mL de dextrosa en agua destilada por vía

intravenosa para pasar en 30 minutos.

Page 122: Para paciente intoxicado

6. Si se evidencia taquicardia ventricular polimorfa (Torsades de pointes)

iniciar sulfato de magnesio IV directo (sin diluir) en dosis de 4 g en adultos

(20 mL de solución al 20%) ó 0.3 mL/kg en niños ó isoproterenol 1-10

g/kg/min.

7. En caso de convulsiones utilizar diazepam (Valium®) 5-10 mg IV (niños:

0.2-0.5 mg/kg) inicialmente, repetido cada 5 minutos si es necesario.

Page 123: Para paciente intoxicado

27. TRATAMIENTO DEL SÍNDROME DE ABSTINENCIA A OPIOIDES

Dr. Andrés Felipe Velasco Bedoya

El síndrome de abstinencia a opioides es un estado agudo ocasionado por la

interrupción o reducción del consumo de estos narcóticos cuando han

generado dependencia física.

Los opioides más frecuentemente implicados en el síndrome de abstinencia

son morfina, meperidina, codeína, oxicodona, tramadol, hidromorfona y

heroína, tanto cuando se emplean terapéuticamente (por ejemplo, en el

tratamiento del dolor crónico) o usados como sustancias de abuso (heroína).

El tiempo que toma llegar a ser físicamente dependiente a un opioide varía de

acuerdo con la sustancia y las características personales del consumidor. De

manera similar, el tiempo que demoran los síntomas de abstinencia en hacer

aparición, una vez se ha generado la dependencia física y se disminuye de

manera importante o se suspende el opioide, dependerá también del tipo de

sustancia y de la intensidad de la dependencia, iniciándose tan rápidamente

como 6 horas luego de suspendida la heroína o 24 horas luego de la

suspensión de la metadona. Los síntomas de abstinencia se pueden presentar

incluso con la reducción abrupta de una dosis establecida crónicamente.

Debe recordarse que la dependencia física no se considera una adicción, esta

última definida como el uso compulsivo de sustancias a pesar de sus

consecuencias negativas dado el deseo vehemente por consumirlas.

Mecanismo de la abstinencia a los opioides: estos medicamentos ejercen su

efecto inhibitorio en las vías neuronales a través de la interacción con

receptores acoplados a proteínas Gi, estimulando la salida de potasio y

disminuyendo la entrada de calcio, favoreciendo la hiperpolarización neuronal y

alterando la neurotransmisión.

Page 124: Para paciente intoxicado

Con el uso crónico se generan cambios de regulación en baja, que hacen que

cada vez se requiera de más dosis para obtener el mismo efecto (tolerancia).

En el paciente con dependencia física, la ausencia o disminución aguda de la

dosis, hace que el calcio ingrese sin control a la célula, especialmente en

aquellos centros neurológicos accionados por opioides endógenos, como el

locus ceruleus y el núcleo accumbens, lo que se traduce en la presencia de los

síntomas de abstinencia.

Es necesario también recordar que se puede desencadenar un síndrome de

abstinencia a opioides cuando a un paciente con dependencia física se le

suministra naloxona o naltrexona.

Características clínicas: hay alteraciones en los signos vitales, hipertensión o

hipotensión, esta última cuando el volumen sanguíneo ha disminuido, hay

además taquicardia y taquipnea sin alteraciones en la temperatura.

El paciente puede cursar sin alteraciones mentales, pero es frecuente la

presencia de ansiedad e irritabilidad.

Hay signos físicos sutiles como el bostezo, la epifora, la rinorrea que se

presentan al inicio del cuadro clínico, posteriormente pueden aparecer la

midriasis, el tremor, la piloerección, inquietud, náuseas y vómito, diarrea,

artralgias, mialgias y espasmos musculares. Las convulsiones se presentan

muy especialmente en neonatos hijos de madres adictas, en quienes reviste

mayor gravedad.

Diagnóstico: Se recomienda solicitar los siguientes estudios de laboratorio:

ECG para descartar prolongación del intervalo QTc por alteraciones

hidroelectrolíticas y taquiarritmias.

Hemograma

Ionograma completo.

Gases arteriales (descartar alteraciones ácido-básicas).

CPK totales (pueden encontrarse elevadas).

Page 125: Para paciente intoxicado

Panel de tóxicos en orina. Útil para descartar el consumo de otras

sustancias de abuso que agreguen comorbilidad.

Tratamiento: La piedra angular del tratamiento del síndrome de abstinencia a

opioides es la utilización de metadona en dosis que van desde 40 mg a 120

mg/día según la severidad del consumo y la respuesta clínica del paciente. La

metadona debe administrarse como dosis única, idealmente en la mañana.

En caso de no disponer de metadona, se puede emplear un coctel no

específico de medicamentos, que incluye:

Benzodiazepinas, útiles para el control de la ansiedad propia del

síndrome de abstinencia a opioides y controlan el insomnio. Puede

utilizarse diazepam en dosis de 5-10 mg IV inicial y continuar esta

misma dosis por vía oral cada 8 horas según la respuesta del paciente;

también se puede emplear Lorazepam a dosis de 2 mg VO cada 8

horas. No se recomiendan para periodos superiores a 7 días.

Clonidina, eficaz para tratar los signos y síntomas de abstinencia a

opiáceos, sin embargo, no es útil en el manejo del “deseo de consumo”

o “craving” por opiáceos y tampoco reduce la duración del síndrome de

abstinencia. Se administra una dosis inicial de prueba por vía oral de

0.15 mg en adultos y 1 g/kg en niños, evaluando permanentemente la

presión arterial durante 2 horas. Si es bien tolerado y aún persisten los

síntomas, se continúa con 0.15 mg cada 4 ó 6 horas en adultos y 1 g

/kg en niños. Se puede continuar el tratamiento por 7 días, para luego

hacer una reducción del 25% de la dosis diaria cada día por 3 días, para

luego suspender completamente. En caso de hipotensión o presión

arterial media <70 mm de Hg, no se debe suministrar la clonidina.

Se pueden utilizar AINES (diclofenaco sódico, voltaren®) para el manejo

de las mialgias.

Antieméticos (metoclopramida, plasil®) y antiespasmódicos (hioscina

n-butilbromuro, buscapina simple®) para el control de la sintomatología

gastrointestinal.

Page 126: Para paciente intoxicado

La duración del tratamiento del síndrome de abstinencia, con metadona,

generalmente es de dos semanas, aunque puede variar según la respuesta

individual. Finalmente, debe resaltarse la importancia de conectar al paciente

con un grupo terapéutico para el manejo crónico de su adicción.

Page 127: Para paciente intoxicado

28. SÍNDROME SEROTONINÉRGICO

Dr. Sergio Parra

Descripción: La toxicidad por serotonina es una reacción adversa de

severidad variable y que se ha convertido en un problema frecuente e

importante en las últimas décadas. La reacción de toxicidad grave y

potencialmente fatal, debida al exceso de serotonina en el sistema nervioso

central y que es generada por los efectos de varios medicamentos (en especial

antidepresivos) ha sido denominada tradicionalmente como síndrome

serotoninérgico, pero en la actualidad se prefiere la utilización de la

denominación toxicidad por serotonina y se considera un tipo de intoxicación y

no una reacción idiosincrática. Usualmente se presenta luego de:

La sobredosis aguda de venlafaxina (con una frecuencia aproximada del

30%)

La sobredosis aguda de inhibidores selectivos de la recaptación de

serotonina (con una frecuencia aproximada del 15%).

El aumento de la dosis del fármaco antidepresivo (en especial inhibidores

de la monoamino oxidasa y los inhibidores selectivos de la recaptación de

serotonina).

La coadministración de antidepresivos y otras sustancias con las que se

pueden presentar interacciones medicamentosas que favorecen la

presentación del síndrome (otros antidepresivos, anfetaminas, éxtasis,

cocaína, sumatriptan, buspirona, litio, dihidroergotamina, meperidina,

sibutramina, ritonavir, tramadol, dextrometorfano, linezolid, entre otros).

Mecanismos fisiopatológicos: La gravedad clínica refleja el grado de

potenciación de la transmisión serotoninérgica, dicho síndrome parece

desarrollarse por la estimulación excesiva de los receptores de serotonina, en

especial los 5-HT2A y 5-HT1A. Teóricamente cualquier fármaco que incremente

la serotonina en el sistema nervioso central tiene el potencial de desencadenar

el síndrome de manera dosis dependiente; no obstante, éste ha sido más

frecuentemente observado por la coadministración de medicamentos con

diferentes mecanismos de acción. Los casos más severos usualmente se han

Page 128: Para paciente intoxicado

reportado con fármacos del grupo de los inhibidores de la monoamino oxidasa

(iMAO) combinados con otras sustancias que incrementan la transmisión

serotoninérgica. Aunque también ha sido asociado al coadministrar fármacos

con actividad serotoninérgica y sustancias inhibidoras del metabolismo

hepático (fluconazol, ritonavir).

Manifestaciones clínicas: Se dividen en tres grandes grupos:

Alteraciones mentales: agitación, excitación, hipomanía, intranquilidad,

confusión.

Hiperactividad neuromuscular: hiperreflexia, clonus, miclonus, temblor,

escalofrío, fasciculaciones, incoordinación motora, rigidez e hipertonía.

Hiperactividad autonómica: hipertermia, sudoración, enrojecimiento facial,

hipertensión, taquicardia, taquipnea, midriasis.

Las manifestaciones aparecen rápidamente, usualmente en las 6 horas

posteriores al aumento de la dosis, la coadministración de otro medicamento o

la sobredosis. Algunos de los signos neurológicos son muy sugestivos y

pueden orientar al clínico en el diagnóstico; por ejemplo, la hiperreflexia y el

clonus (en algunos casos espontáneo) tienden a ser generalizados y con mayor

compromiso de los miembros inferiores; también se puede presentar clonus

ocular o nistagmus.

Existen varias complicaciones serias (consecuencia de la hipertermia no

tratada); por ejemplo, convulsiones generalizadas, rabdomiolisis, mioglobinuria,

insuficiencia renal, acidosis metabólica, coagulación intravascular diseminada y

falla orgánica multisistémica.

La mayoría de los casos leves a moderados se resuelven completamente entre

24 a 72 horas luego de suspender las sustancias causantes; no obstante, los

casos severos con complicaciones requerirán manejo en unidad de cuidado

intensivo.

Diagnóstico: La toxicidad serotoninérgica debe ser diferenciada del síndrome

neuroléptico maligno, la hipertermia maligna, las infecciones del sistema

nervioso central, el delirio debido a anticolinérgicos, síndromes de abstinencia,

las sobredosis de agentes simpaticomiméticos y la intoxicación con estricnina,

Page 129: Para paciente intoxicado

entre otros. Los niveles en sangre de los antidepresivos pueden ser útiles para

corroborar el diagnóstico. No obstante, debido a la gran variedad de sustancias

que pueden producirlo, no existen pruebas de laboratorio que cuantifiquen

todos estos agentes y por ende un resultado negativo no descarta el problema.

Según los criterios de toxicidad serotoninérgica de Hunter, son muy sugestivos

de síndrome serotoninérgico la historia previa de consumo de un agente

serotoninérgico sumado a cualquiera de las siguientes situaciones:

1. Clonus espontáneo.

2. Clonus inducido o clonus ocular con presencia concomitante de agitación

o diaforesis o hipertonía mas temperatura mayor a 38ºC.

3. Temblor e hiperreflexia.

Se recomienda realizar las siguientes pruebas (dependiendo de la gravedad del

proceso): glicemia, pH y gases arteriales (o en su defecto oximetría de pulso),

ionograma, pruebas de función renal, pruebas de coagulación y evaluación

electrocardiográfica continua.

Tratamiento:

1. Medidas ABCD.

2. Administrar oxígeno suplementario.

3. Si hubo ingestión y el paciente llega antes de 1 hora realizar lavado gástrico

y suministrar carbón activado como se recomienda en el capítulo 1.

4. Suspender todas las sustancias con actividad serotoninérgica.

5. La agitación, la actividad muscular excesiva o las convulsiones se deben

controlar con benzodiazepinas (diazepam 5 a 10 mg intravenosos cada 10 a

15 minutos hasta un máximo de 30 mg).

6. La hipertermia debe manejarse de manera agresiva con medidas de

enfriamiento externo y si la temperatura es superior a 41.1ºC se debe

recurrir a la parálisis con bloqueadores neuromusculares no despolarizantes

(seguidos de intubación orotraqueal y ventilación asistida en unidad de

cuidados intensivos).

7. En caso de hipotensión deben suministrarse líquidos endovenosos (30

mL/kg en bolo intravenoso) y puede llegar a requerirse soporte con infusión

intravenosa de dopamina 5-15 g/kg/min (la dopamina no debe utilizarse si

el paciente utilizó inhibidores de la monoamino oxidasa), si el paciente no

Page 130: Para paciente intoxicado

responde puede ser necesaria la infusión intravenosa de noradrenalina, 0.1

g /kg/min.

8. La ciproheptadina puede ser útil como antídoto (sólo si el paciente no ha

recibido carbón activado) y se recomienda suministrar 12 mg divididos en

tres dosis por vía oral, suministrando cada dosis con un intervalo de una

hora. Si hay buena respuesta y es necesario se puede continuar

administrando cada 6 horas hasta completar 32 mg.

9. Los pacientes con toxicidad leve a moderada deben valorarse por un

periodo de 6 horas, pero si han consumido formas farmacéuticas de

liberación controlada el periodo de evaluación se debe extender hasta las

12 horas.

10. Valoración por psiquiatría en caso de intento suicida.

Page 131: Para paciente intoxicado

29. INTOXICACIÓN POR MARIHUANA

Dr. Carlos A. Rodríguez

Descripción: la marihuana (Cannabis sativa) es una planta ampliamente

utilizada con fines recreativos y su principal compuesto farmacológicamente

activo es el -9 Tetrahidrocanabinol (THC).

Se encuentra en diferentes presentaciones:

Hierba, usada para la fabricación de cigarrillos o adicionada a los

alimentos, con 1-8% de THC.

Resinas (Hachis “pipas”), con 5-10% de THC.

Extractos oleosos (aceite de Hachis), con la mayor concentración de THC

(hasta 50%).

Farmacocinética: por vía inhalada se absorbe entre un 20-50% del TCH, el

inicio de acción es 6-12 minutos y los síntomas pueden durar hasta 3 horas.

Por vía oral sólo alcanza la circulación sistémica entre un 5-20% del TCH

debido al metabolismo hepático de primer paso, empieza a actuar en 30-60

minutos y persiste 4-6 horas.

Mecanismo de toxicidad: el THC y otras sustancias presentes en Cannabis

sativa activan los receptores canabinoides endógenos (CB). El receptor CB1

está ubicado principalmente en el sistema nervioso (corteza cerebral,

hipocampo, cuerpo estriado, cerebelo y terminales nerviosas centrales y

periféricas) y el receptor CB2 en las células del sistema inmune; y ambos están

implicados en la regulación de la liberación de neurotransmisores y citoquinas.

La activación del receptor CB1 produce disminución de la respuesta motora,

analgesia y estimula la ingesta de alimentos.

Page 132: Para paciente intoxicado

Manifestaciones clínicas: dependen de la vía de administración, experiencia

del consumidor, dosis y concentración del principio activo. El uso inhalado u

oral causa principalmente efectos sobre el sistema nervioso central (“high”), la

infusión intravenosa puede producir toxicidad multiorgánica, incluyendo falla

renal aguda, gastroenteritis, anemia, trombocitopenia y leucocitosis.

Las manifestaciones neurológicas son variadas. La intoxicación leve incluye

euforia, somnolencia, alteración en la percepción del tiempo y aumento del

apetito. La intoxicación moderada se manifiesta con amnesia, déficit de

atención, dificultad para concentrarse, incapacidad para realizar actividades

complejas, alteraciones del ánimo como episodios de risa y depresión, y

desorientación. La intoxicación extrema presenta debilidad, incoordinación,

letargia, ataxia, disartria, ansiedad, espasmos musculares, depresión

respiratoria, coma, y en pacientes susceptibles, convulsiones.

Otras manifestaciones incluyen hipo- o hipertermia, bradi- o taquicardia, hiper-

o hipotensión, inyección conjuntival, midriasis, nistagmus, fotofobia,

xerostomía, bradipnea, tos, constipación y retención urinaria.

Es importante determinar el consumo concomitante de otras drogas de abuso,

ya que la marihuana puede potenciar los efectos de otros depresores del

sistema nervioso central y la taquicardia inducida por la cocaína.

El consumo crónico puede llevar a síndrome amotivacional, ginecomastia,

alteraciones espermáticas y en la ovulación, y mayor riesgo de cáncer de

cabeza, cuello y pulmón.

La presencia de un síndrome de abstinencia clásico no ha sido descrita para la

marihuana. Sin embargo en pacientes habituados a esta sustancia, la

disminución o supresión del consumo puede acompañarse de síntomas

inespecíficos como agitación, irritabilidad, alteraciones del sueño y apetito,

nauseas, vómito o escalofrío. La duración de los síntomas, momento del inicio

y tratamiento no están claramente definidos.

Page 133: Para paciente intoxicado

Diagnóstico: electrolitos, creatinina, BUN y glicemia pueden requerirse para

descartar otras causas de alteración del estado mental o convulsiones. La

prueba de canabinoides en orina por inmunoensayo, disponible en el

laboratorio del Departamento de Farmacología y Toxicología de la Facultad de

Medicina de la Universidad de Antioquia, puede ser positiva por varias

semanas después de la resolución clínica. El Electrocardiograma muestra

cambios en la repolarización inespecíficos.

Dosis tóxica:

Oral: 30 mg/kg

Tratamiento:

1. ABCD inicial, con especial atención a la vía aérea.

En caso de consumo por vía oral, si la ingestión fue reciente (hasta 1 hora)

realizar las medidas de descontaminación del tracto gastrointestinal según

indicaciones del capítulo 1: manejo general del paciente intoxicado.

2. En caso de hipotensión, líquidos endovenosos isotónicos.

3. En caso de agitación utilizar diazepam intravenoso, 5 a 10 mg en adultos y

0.2 a 0.5 mg/kg en niños, repitiendo la dosis cada 10 minutos según

respuesta.

4. Evaluación por toxicología clínica y farmacodependencia.

Page 134: Para paciente intoxicado

30. INTOXICACIÓN POR OPIOIDES

Dres. Alexis Santamaría, Carlos F. Molina, Carlos A. Rodríguez

Descripción: los opioides son el grupo de sustancias con acción similar a la

morfina, que es un alcaloide derivado de la planta Papaver somniferum, y se

dividen en naturales (morfina, heroína, codeína, hidrocodona) y sintéticos

(fentanilo, butorfanol, meperidina, hidromorfona, nalbufina y metadona).

Farmacocinética: los opioides pueden administrarse por vía oral,

intramuscular, intravenosa, transdérmica, intranasal e inhalada. La dosis y vía

de administración influyen en los síntomas y su duración. La biodisponibilidad

oral es variable por diferencias en el metabolismo hepático de primer paso

(morfina 25%, codeína 60%). El paso de la barrera hematoencefálica depende

de la liposolubilidad, siendo mayor con la heroína y la morfina, lo que explica su

mayor potencial adictivo. Los opioides tienen metabolismo fase I y II y algunos

generan metabolitos tóxicos como la normeperidina. La excreción es

principalmente renal, por lo cual el diagnóstico puede establecerse midiendo

los opioides o sus metabolitos en orina.

Mecanismo de toxicidad: los efectos de estas sustancias se deben a la

interacción con los receptores opiodes (MOP), (KOP) y (DOP). La

activación del receptor produce analgesia, depresión respiratoria, disminución

de la motilidad intestinal, retención urinaria, bradicardia, miosis y euforia. El

receptor media la disforia y los efectos psicotomiméticos y el receptor

produce analgesia y depresión respiratoria.

Manifestaciones clínicas: el toxidrome opioide clásico consiste en alteración

del estado de conciencia, depresión respiratoria, mioisis y disminución del

peristaltismo.

Sistema nervioso central: según la dosis se puede observarse euforia o

disforia, letargia, somnolencia progresiva y coma. La meperidina,

Page 135: Para paciente intoxicado

dextrometorfano y codeína pueden causar hiperirritabilidad y un

síndrome mixto de estupor y delirium. La morfina y sus congéneres

causan constricción pupilar, sin embargo el propoxifeno, la meperidina y

la pentazocina no afectan el tamaño pupilar, y puede encontrarse

midriasis en pacientes con hipoxia o anoxia cerebral. El diámetro pupilar

puede variar en caso de combinación con estimulantes (cocaína) y

anticolinérgicos (escopolamina). Las convulsiones ocurren

principalmente por hipoxia, aunque la meperidina, el propoxifeno y el

tramadol pueden producirlas de manera directa.

Efectos respiratorios: la falla respiratoria es la consecuencia más seria

de la sobredosis de opioides y se debe a la disminución en la

sensibilidad al dióxido de carbono y de la respuesta ventilatoria a la

hipoxia.

Efectos gastrointestinales: se presentan náuseas y vómito por

estimulación de la zona quimiorreceptora, y retraso del vaciamiento

gástrico y disminución del peristaltismo por la activación de los

receptores intestinales.

Efectos cardiovasculares: hipotensión mediada principalmente por

liberación de histamina, bradicardia por disminución de la estimulación

del SNC y daño miocárdico en caso de hipoxia prolongada.

Otros: la intoxicación aguda puede complicarse con rabdomiolisis,

hiperkalemia, mioglobinuria y falla renal.

Diagnóstico: dado que estas sustancias pueden contener una amplia variedad

de ingredientes activos, adulterantes y contaminantes el síndrome clínico

puede estar sólo parcialmente relacionado con el componente opioide.

Según las manifestaciones clínicas debe realizarse hemograma, electrolitos,

BUN, creatinina, CPK, citoquímico de orina, gases arteriales,

Page 136: Para paciente intoxicado

electrocardiograma (especialmente en intoxicación por propoxifeno), radiografía

de tórax (en caso de hipoxia persistente), tomografía de cráneo y estudio de

líquido cefalorraquídeo para descartar otras causas de coma o convulsiones.

En pacientes que usan drogas intravenosas deben descartarse complicaciones

infecciosas asociadas (endocarditis, meningitis bacteriana, hepatitis viral y VIH

principalmente).

Dosis tóxica:

Dosis letal de codeína: 7-14 mg/kg.

Dosis letal de hidrocodona para adultos: 100 mg.

Dosis letal de heroína pura: ≥350 mg en no adictos, ≥1800 mg en adictos

Dosis letal de morfina: ≥120 mg en individuos que nunca han recibido el

fármaco.

Un individuo tolerante a los opioides puede requerir dosis mayores y los niños

suelen tener mayor sensibilidad y desarrollar toxicidad con dosis cercanas a la

terapéutica.

Tratamiento: Debe enfocarse en el manejo de la vía aérea, administración de

naloxona y soporte hemodinámico.

1. Practicar el ABCD.

2. En caso de depresión respiratoria administrar naloxona intravenosa

(Narcan®), disponible en ampollas de 0.4 mg/mL (de 1 y 10 mL) o ampollas

de 1 mg/mL (de 2 mL). También puede administrarse por vía intratraqueal,

intramuscular, intraósea o subcutánea.

a. En pacientes no dependientes a opioides: bolos directos (30

segundos) crecientes de 0.4 a 2 mg cada 2 ó 3 minutos a

necesidad (hasta lograr respiración espontánea), si no hay

respuesta después de 10 mg, revaluar el diagnóstico. En niños la

dosis por bolo es de 0.1 mg/kg (máximo 2 mg).

b. En pacientes dependientes a opioides: bolos directos crecientes

de 0.1 a 0.2 mg cada 2 ó 3 minutos hasta lograr respiración

Page 137: Para paciente intoxicado

espontánea (si no hay respuesta después de 10 mg, revaluar el

diagnóstico).

c. En ambos casos se debe continuar con una infusión continua de

0.25 a 6.25 mg/hora (0.04 a 0.16 mg/kg/hora en niños.)

Una forma práctica de calcular la infusión continua es multiplicando los mg

del bolo efectivo por 6.6, agregar esta dosis a 1 litro de solución salina

normal o dextrosa al 5% e infundir a 100 mL/hora.

La infusión se titula para mantener una adecuada ventilación espontánea

sin precipitar abstinencia opioide aguda y se mantiene por 12-24 horas.

3. No inducir vómito.

4. Lavado gástrico y carbón activado, si cumple criterios (ver capítulo 1)

5. Indicaciones para unidad de cuidados intensivos: lesión pulmonar aguda,

edema pulmonar, hipotensión o bradicardia, requerimiento de ventilación

mecánica.

6. En caso de presentar síndrome de abstinencia, remitirse a la guía para su

respectivo manejo.

7. Una vez el paciente esté estable, evaluar su motivación y posibilidades de

ingresar a un programa de rehabilitación.

Page 138: Para paciente intoxicado

31. INTOXICACIÓN POR ACETAMINOFÉN

Dres. Alejandra Restrepo, Elizabeth Vanegas, Andrés F. Zuluaga

Descripción: el acetaminofén (paracetamol o N-acetil-p-amino-fenol) es

ampliamente utilizado como analgésico y antipirético, y como ingrediente de

antigripales que se venden sin fórmula médica (Adorem, Descongel, Dolex,

Doloptal, Dolofen, Dristan, Noxpirin, Sinalgen, Tempra, Tylenol, Winadeine,

Winadol).

Farmacocinética: rápida absorción gastrointestinal, alcanza niveles máximos

dentro de 0.5 a 2 horas. La absorción de preparaciones líquidas es más rápida

y puede retrasarse en productos de liberación prologada o por la ingesta

simultánea de alimentos u otros fármacos como opiáceos y anticolinérgicos. El

volumen de distribución es 0.8 a 1 L/kg. Extensamente metabolizado por

conjugación hepática (90%) a metabolitos inactivos (glucorónidos, sulforónidos

y cisteína) y, en menor proporción (8%), por el sistema de oxidasa mixta

citocromo P450 (1A2 y 2E1) a un producto intermedio hepatotóxico (N-acetil-p-

benzo-quinona imina, NAPQI). La conjugación hepática es un proceso

saturable que favorece a dosis terapéutica la eliminación del medicamento

entre 1 a 3 horas, pero en sobredosis la vida media se prolonga hasta 12 horas

porque la capacidad de eliminación del sistema de oxidación es limitada (primer

orden), facilitando la acumulación del metabolito tóxico. La depuración es de

0.3±0.08 L/kg/h y disminuye en hepatitis, hipertiroidismo, embarazo y

obesidad.

Mecanismo de toxicidad: en condiciones normales, NAPQI es detoxificado

por glutatión, sin embargo, en sobredosis excede la capacidad del sistema y el

metabolito reacciona directamente con las macromoléculas hepáticas y a nivel

de los túbulos renales, generando necrosis centrolubulillar hepática y tubular

renal. La sobredosis en embarazo ha sido asociada con muerte fetal y aborto

espontáneo.

Page 139: Para paciente intoxicado

Dosis tóxica aguda: tienen mayor riesgo de sufrir intoxicación aguda aquellos

pacientes con alcoholismo crónico, administración simultánea de fenobarbital,

fenitoína, carbamazepina, rifampicina e isoniazida, y aquellos con daño

hepático previo, malnutridos o con anorexia. La toxicidad se ha asociado en

menores de 6 años de edad a dosis ≥200 mg/kg/día y en personas mayores a

esta edad a dosis ≥150 mg/kg/día. Una dosis única de 7.5 gramos puede

causar toxicidad aguda.

Dosis tóxica crónica: se puede presentar a dosis terapéuticas (adultos: hasta

4 g/día; menores de 6 años: 10 a 15 mg/kg cada 4 a 8 horas) luego de 2 a 8

días de consumo. En general, no se recomienda en ninguna edad

prescripciones superiores a 5 días del producto.

Manifestaciones clínicas: en las primeras 12 a 24 horas el paciente puede

estar asintomático o presentar síntomas gastrointestinales caracterizados por

náuseas, vómito y epigastralgia con la posterior desaparición de dichos

síntomas. Después de 24 a 36 horas las pruebas de función hepática empiezan

a alterarse, acompañadas de dolor en hipocondrio derecho, astenia y adinamia.

Luego de 3 a 5 días, el daño hepático está establecido y se manifiesta con

ictericia, coagulopatía, alteraciones ácido-básicas y encefalopatía. A nivel

bioquímico se encuentran transaminasas elevadas, elevación de bilirrubina,

prolongación del tiempo de protrombina (TP), acidosis metabólica e

hipoglicemia. En este período puede presentarse también falla renal anúrica u

oligúrica. La mayoría de los pacientes recuperan completamente la función

hepática sin secuelas y superan la falla orgánica múltiple con la instauración de

un adecuado tratamiento y manejo de soporte durante 1 a 2 semanas.

Diagnóstico: es importante establecer un diagnóstico oportuno por medio de

una adecuada sospecha e historia clínica. Sin embargo, algunos pacientes no

pueden proveer la información necesaria, no están dispuestos a colaborar con

el interrogatorio o desconocen la importancia de la intoxicación, por lo que a

pesar de no usarse rutinariamente en nuestro medio, la determinación de los

niveles de acetaminofén es una herramienta útil para determinar la exposición

a este medicamento y predecir la probabilidad de hepatotoxicidad y

nefrotoxicidad. Para una adecuada interpretación (Nomograma de Rumack-

Page 140: Para paciente intoxicado

Matthew), los niveles deben obtenerse luego de 4 horas de la ingesta o máximo

en las primeras 15 a 24 horas de la misma. Antes de 4 horas de la intoxicación

los niveles son indetectables.

Se deben solicitar los siguientes paraclínicos al ingreso del paciente y cada 24

horas hasta que la toxicidad se resuelva o se descarte: hemograma completo,

AST, ALT, bilirrubinas (total y directa), fosfatasa alcalina, albúmina, TP-INR,

TPT, BUN, creatinina, ionograma, glicemia y pH y gases arteriales.

Tratamiento:

1. Realizar el ABCD (ver capítulo 1).

2. No inducir el vómito.

3. Lavado gástrico y carbón activado (según recomendaciones del capítulo

1).

4. Recordar el catártico (manitol) siempre que se use más de una dosis de

carbón activado.

5. El antídoto N-acetilcisteína (NAC) debe iniciarse luego de la ingesta de

dosis tóxicas con o sin síntomas. Existen dos esquemas (oral y venoso)

igualmente efectivos: (1) Esquema oral: dosis inicial 140 mg/kg vía oral,

disuelto en agua, continuar 70 mg/kg cada 4 horas por 17 dosis. La NAC

tiene mal sabor y olor, adicionalmente puede producir náuseas y vómito,

por lo que se sugiere administrar antiemético venoso (metoclopramida

10 mg IV cada 8 horas en adultos y 0.15 mg/kg/dosis en niños;

opcionalmente ondansetrón 8 mg cada 8 horas en adultos y 4 mg cada 8

horas en niños). Si el paciente vomita en la primera hora de la

administración se debe repetir la última dosis. Si persiste la intolerancia

se debe iniciar la vía intravenosa. (2) Esquema venoso: dosis inicial de

150 mg/kg diluidos en 200 mL de dextrosa en agua destilada al 5%

(DAD 5%) para pasar en 15 -30 minutos; seguida por 50 mg/kg diluidos

en 500 mL de DAD 5% para 4 horas y luego 100 mg/kg diluidos en 1000

mL de DAD 5% para las siguientes 16 horas. En caso de pacientes

diabéticos se puede diluir en solución salina normal. Tener en cuenta

además que los líquidos en los que se diluye el antídoto deben

contabilizarse dentro de los requerimientos diarios del paciente en 24

Page 141: Para paciente intoxicado

horas. La dosis inicial no debe pasarse en bolo ya que puede producir

hipotensión o reacciones anafilactoides (principalmente en pacientes

asmáticos y con bajos niveles de acetaminofen en sangre). Para

manejar estas reacciones se detiene o disminuye la velocidad de

infusión. Si las pruebas de función hepática continúan alteradas a pesar

del manejo anterior se debe continuar la última dosis de NAC hasta que

las transaminasas estén máximo tres veces sobre el valor normal. En

mujeres embarazadas se sigue el mismo esquema de manejo.

6. Vigilar el desarrollo de falla hepática fulminante o falla renal. La

encefalopatía, prolongación persistente y progresiva del TP, acidemia

metabólica e hipoglicemia son indicadores de falla hepática severa, en

estos pacientes está indicado el inicio de NAC incluso luego de 24 horas

de la ingesta.

7. Criterios de trasplante hepático: pH arterial <7.3 (independiente del

grado de encefalopatía), o encefalopatía grado III-IV, TP >100 segundos

(INR >6.5) y creatinina >3.4 mg/dL. El trasplante hepático es una medida

salvadora en pacientes con falla hepática severa; sin embargo, NAC

debe continuarse hasta obtener mejoría del TP con INR < 2.

Page 142: Para paciente intoxicado

32. INTOXICACIÓN POR ÁCIDO BÓRICO

Dr. Andrés Felipe Velasco Bedoya

Descripción: el ácido bórico se consigue en nuestro medio en forma sólida,

cristales blancos transparentes, inodoros y en solución acuosa al 2.5 y 5%,

también se encuentra como borato sódico (Bórax) empleado para eliminar

plagas rastreras (cucarachas y hormigas). Tiene propiedades antisépticas, es

débil bacteriostático y fungistático. Popularmente se suministra a las vacas

(Tinka®) por su capacidad irritativa de la uretra para favorecer la monta del

toro.

Farmacocinética: se absorbe muy bien por el tracto gastrointestinal y la piel

lesionada. La eliminación del ácido bórico es predominantemente renal y sin

cambios. Pequeñas cantidades se eliminan por el sudor, la saliva y las heces.

La inhalación de ácido bórico puede producir síntomas irritativos en el tracto

respiratorio.

Mecanismo de toxicidad: Desconocido. Aunque es un ácido inorgánico, no es

cáustico.

Manifestaciones clínicas: cuando hay síntomas, estos aparecen 4 a 6 horas

después de la ingestión.

Sistema digestivo: vómito azul-verdoso, diarrea sanguinolenta y dolor

abdominal tipo cólico.

Sistema Nervioso Central: cefalea, agitación, delirium, hipertonía,

hiperreflexia, irritación meníngea, incremento de la presión intracraneana

y en casos graves convulsiones y coma.

Cardiovascular y renal: hipotensión, oliguria, anuria

Piel: desde las 6 horas post-ingesta puede presentarse un brote

eritematoso que comienza en el rostro, pliegues inguinales y axilares

con posterior generalización, incluyendo palmas, plantas y mucosas.

Page 143: Para paciente intoxicado

Dos a cinco días después se presenta descamación y exfoliación

(síndrome de la langosta).

Otros: anemia, alteración de las pruebas hepáticas y alopecia.

Diagnóstico: pH y gases arteriales, citoquímico de orina, ionograma, glicemia,

BUN y creatinina, pruebas hepáticas.

Dosis tóxica: la dosis letal es de 2 a 3 g en neonatos y lactantes y 5 g en

niños. Una cucharadita de ácido bórico puro en gránulos puede ser fatal. En

adultos se estima entre 15-20 g.

Tratamiento: No existe un antídoto específico para este tipo de intoxicación,

por lo tanto su manejo es sintomático.

1. ABCD inicial.

2. No utilizar carbón activado en esta intoxicación.

3. Monitorización cardiaca y vigilancia neurológica.

4. Control de hipotensión con líquidos endovenosos, en caso de no mejorar

administrar dopamina o norepinefrina.

5. Si se presentan convulsiones administrar diazepam intravenoso (adultos: 5

a 10 mg, repetir cada 10 a 15 minutos a necesidad. Niños: 0.2 a 0.5 mg/kg,

repetir cada 5 minutos a necesidad). Considerar barbitúricos o fenitoína si

las convulsiones son incontrolables o recurrentes pese a las

benzodiazepinas.

6. Son fundamentales en caso del “síndrome de la langosta” los cuidados de la

piel y estar atentos al desarrollo de infecciones.

7. La hemodiálisis y la diálisis peritoneal permiten eliminar el borato en caso

de falla renal por intoxicaciones severas.

Page 144: Para paciente intoxicado

33. INTOXICACIÓN POR AMIODARONA

Dra. Jenny Cuesta

Descripción: amiodarona (Cordarone) es un antiarrítmico clase III, se

encuentra en tabletas de 200 mg o ampollas de 150 mg. Debido a sus acciones

sobre el corazón, los medicamentos antiarrímticos son extremadamente

tóxicos, por lo cual las sobredosis a menudo comprometen la vida.

Farmacocinética: su absorción es variable, con una biodisponibilidad oral de

65%, alta distribución a tejidos y acumulación en tejido adiposo, pulmón e

hígado. Su eliminación se da principalmente por metabolismo hepático y

excreción biliar, pero también sufre biotransformación en el intestino. La des-

etil-amiodarona, su principal metabolito activo, tiene recirculación entero-

hepática con una vida media tan prolongada como el compuesto parental (entre

26 y 107 días). Ni la amiodarona, ni su metabolito son dializables.

Mecanismo de toxicidad: esta sustancia bloquea preferencialmente canales

rectificadores de potasio, también inhibe débilmente los canales de sodio y de

calcio activados por voltaje. Adicionalmente, es un antagonista no competitivo

de los receptores adrenérgicos. Estos mecanismos llevan a una reducción de la

automaticidad, prolongación del potencial de acción y del periodo refractario, y

vasodilatación periférica.

Manifestaciones clínicas: los síntomas son la extensión de los efectos

farmacológicos.

Sistema cardiovascular: bradicardia sinusal, bloqueo auriculo-ventricular,

taquicardia ventricular polimorfa, fibrilación ventricular, hipotensión,

síncope.

Sistema nervioso central: letargia, vértigo, parestesias.

Sistema digestivo: náuseas, vómito, constipación, anorexia, ascitis, dolor

abdominal, hepatitis tóxica y hepatomegalia (asociada con dosis de

carga por ruta intravenosa).

Page 145: Para paciente intoxicado

Sistema respiratorio: tos, fiebre, disnea y dolor precordial son síntomas

sugestivos de neumonitis intersticial y fibrosis pulmonar.

Sistema endocrino: amiodarona puede inducir liberación de yodo y el

uso crónico resulta en función tiroidea alterada (hiper e hipotiroidismo).

Diagnóstico: usualmente basado en la historia de consumo del antiarrítmico,

asociado a los típicos hallazgos electrocardiográficos y cardíaco. Debido a la

prolongada vida media del producto, se puede solicitar la medición de niveles

séricos de medicamentos (los niveles terapéuticos oscilan entre 1 y 2.5 mg/L)

incluso varios días después de ingerido. Entre las pruebas de laboratorio que

son de utilidad en estos casos se incluye ECG, pruebas de función hepática,

renal y tiroidea, ionograma, gases arteriales, rayos X de tórax y glicemia.

Dosis tóxica: En humanos se han reportado casos de intoxicación con niveles

superiores al rango terapéutico (200 a 2000 mg/día en adultos y 2.5 a 34

mg/kg/día en niños), especialmente con ingestas superiores a 8 g.

Tratamiento:

1. Realizar ABCD

2. No hay antídoto específico. Se realiza manejo sintomático.

3. Monitorización cardiaca permanente.

4. Medidas de descontaminación general (sólo si la intoxicación es por vía

oral, según recomendaciones del capítulo 1).

5. En hipotensión: administrar cristaloides 10 a 20 mL/kg. Si no hay adecuada

respuesta utilizar dopamina 5 a 20 g/kg/min (titulando a necesidad). En

caso de no alcanzar una apropiada respuesta cambiar a norepinefrina 0.5 a

1 g /min.

6. En bradicardia sinusal administrar atropina en dosis de 1 mg intravenoso

cada 3 minutos hasta una dosis total de 3 mg en adultos. Para niños 0.02

mg/kg/dosis hasta 1 mg. En caso de no obtener respuesta, administrar

infusión de isoproterenol de 2 a 10 g/min en adultos. En niños de 0.1 a 1.5

g /kg/min.

Page 146: Para paciente intoxicado

7. En taquicardia ventricular polimorfa administrar sulfato de magnesio 2 g en

bolo inicial para pasar en 30 minutos y luego seguir con 0.5 a 1 g/hora. Si

no hay respuesta, administrar isoproterenol 2 a 10 g/min (niños: 0.1 a 1.5

g/kg/min).

8. Puede ser necesaria la utilización de marcapasos transitorio.

9. La colestiramina (dosis máxima de 10 g cada 8 horas en adultos y en niños

80 mg/kg cada 8 horas) disminuye la vida media de la amiodarona.

Page 147: Para paciente intoxicado

34. INTOXICACIÓN POR ANESTÉSICOS LOCALES

Dres. Jenny Cuesta y Carlos A. Rodríguez

Descripción: medicamentos como lidocaína, bupivacaína, ropivacaína y

prilocaína, son ampliamente utilizados en la práctica médica por sus

propiedades anestésicas locales mediante aplicación tópica, inyección en las

proximidades de las terminaciones nerviosas y de los troncos nerviosos

principales, así como en los espacios epidural y subaracnoideo. Cuando se

administran de forma sistémica pueden alterarse las funciones del músculo

cardíaco, esquelético y liso, así como la transmisión de impulsos en los

sistemas nerviosos central y periférico y en el sistema de conducción del

corazón. Son medicamentos usualmente seguros y la toxicidad ocurre

generalmente con la inyección intravascular inadvertida o la aplicación repetida

de dosis terapéuticas.

Farmacocinética: además de las formas inyectables, los anestésicos locales

están disponibles en gel, crema y parches transdérmicos. Se absorben

rápidamente después de la administración parenteral, oral y respiratoria.

Aunque son efectivos por sí solos, la combinación con un vasoconstrictor

(usualmente epinefrina a 5 g/mL) disminuye la tasa de absorción, reduce la

toxicidad sistémica y prolonga la duración del efecto.

Mecanismo de toxicidad: bloquean la conducción de impulsos uniéndose

reversiblemente a los canales de Na+ voltaje-dependientes. La benzocaína, la

prilocaína y ocasionalmente la lidocaína, pueden producir

metahemoglobinemia, sobre todo en neonatos.

Manifestaciones clínicas: los efectos sobre sistema nervioso central

usualmente preceden a los efectos cardiovasculares (excepto en el caso de la

bupivacaína), e incluyen mareo, somnolencia, tinnitus, disgeusia, temblor y

parestesias. A dosis mayores se presenta agitación, ansiedad, convulsiones,

coma, depresión y paro respiratorios. Como efectos cardiovasculares se

presentan hipotensión por bloqueo simpático, bradiarritmias, fibrilación

Page 148: Para paciente intoxicado

ventricular y asistolia por bloqueo en la conducción cardiaca. En el ECG se

observa prolongación del intervalo PR y del QRS. La bupivacaína es el

anestésico local más cardiotóxico.

Otras manifestaciones menos comunes: reacciones alérgicas y anafilaxia.

Hipoxia tisular por metahemoglobinemia.

Diagnóstico: monitoreo electrocardiográfico, electrolitos, BUN y creatinina para

descartar otras causas de arritmias, oximetría de pulso.

Dosis tóxica: depende de la ruta y velocidad de administración, la condición

del paciente y de la asociación con vasoconstrictor. En general, la dosis tóxica

de lidocaína oscila entre 4 mg/kg (sin epinefrina) y >7 mg/kg (con epinefrina),

para bupivacaína es 3 mg/kg, procaína 14 mg/kg y ropivacaína 3 mg/kg.

Tratamiento:

1. Descontinuar la administración del anestésico.

2. ABCD.

3. Observación estrecha ya que la manifestaciones pueden aparecer hasta

2 horas después para la lidocaína y 4 horas para la bupivacaína.

4. Oxígeno suplementario e intubación electiva según condición del

paciente.

5. Monitoreo electrocardiográfico continuo.

6. Lavado de la mucosa en caso de contacto masivo con ellas

7. En caso de convulsiones puede administrarse diazepam 0.1-0.3 mg/kg

IV o fenobarbital (20-30 mg/kg en 30 minutos IV ó IM); evitar el uso de

fenitoína por a su acción sobre los canales de sodio similar a la

lidocaína.

8. En caso de bradicardia utilizar atropina 0.01 mg/kg (no menos de 0.5

mg) en dosis repetidas, puede requerir marcapasos (puede ser útil el

marcapasos externo de algunos desfibriladores). La adrenalina (0.01

mg/kg cada 5 minutos) es una alternativa en caso de hipotensión o paro

pero puede predisponer a otras arritmias.

9. La hipotensión se controla con líquidos, si no mejora se puede utilizar

Page 149: Para paciente intoxicado

dopamina (2-20 g/kg/minuto), noradrenalina (0.05-0.1 g/kg/minuto).

10. Si hay fibrilación ventricular desfibrilar, la reanimación puede ser difícil y

prolongada y llegar a necesitar circulación extracorpórea.

11. En caso de metahemoglobinemia administrar oxigeno suplementario y

azul de metileno 1-2 mg/kg IV lento de la solución al 1% (1 mL contiene

10 mg) y puede repetirse 1 hora después.

Page 150: Para paciente intoxicado

35. INTOXICACIÓN POR BLOQUEADORES DE LOS CANALES DEL

CALCIO

Dres. Jenny Cuesta, José J. Aristizábal y Carlos A. Rodríguez

Descripción: es un grupo de fármacos ampliamente utilizado en diferentes

tipos de enfermedades cardiovasculares como angina, hipertensión arterial y

arritmias supraventriculares, y en otros trastornos como la migraña. Se

clasifican químicamente en dos grupos, los dihidropiridínicos (como nifedipina,

nicardipina, amlodipina y nimodipina) y los no dihidropiridínicos (como

verapamilo y diltiazem). Los primeros son más selectivos por los vasos

sanguíneos, mientras los segundos actúan sobre vasos y también sobre el

miocardio.

Farmacocinética: están disponibles en forma oral y parenteral. Hay

presentaciones en ampollas, tabletas, cápsulas y formas de liberación

prolongada (verapamilo, diltiazem y nifedipina). Se absorben ~90% por vía oral

con un significativo metabolismo de primer paso, la vida media varía de 3 a 7

horas, pero puede prolongarse en caso de sobredosis. Es importante tener en

cuenta que los efectos tóxicos de las presentaciones de liberación prolongada

pueden retrasarse.

Mecanismo de toxicidad: estos medicamentos bloquean los canales de calcio

(Ca2+) tipo L voltaje dependientes y disminuyen la entrada de este catión en el

músculo liso y cardiaco, causando vasodilatación, disminución de la resistencia

vascular periférica (RVP) y de la contractilidad miocárdica, lo cual lleva a una

caída significativa del gasto cardíaco (GC). Además se retarda la conducción

en los nodos sinusal y AV predisponiendo a bradiarritmias que pueden

progresar hasta bloqueos. Los efectos varían según el tipo de medicamento

ingerido (dihidropiridínico vs. No dihidropiridínico), el verapamilo es el más

potente depresor de la FC, PA y del GC mientras que la nifedipina es el que

más disminuye la RVP, conservándose una respuesta compensadora

(taquicardia), pero a dosis tóxicas se pierde la selectividad sobre los tejidos.

Page 151: Para paciente intoxicado

La toxicidad puede presentarse tanto por sobredosis como por interacciones

con fármacos del mismo grupo y otros como betabloqueadores, nitratos y

diuréticos. Además, pueden aumentar la toxicidad de fármacos como la

carbamazepina, quinidina, estatinas, ciclosporina, inhibidores de proteasa del

VIH y teofilina (por inhibición del citocromo P450 y la glicoproteína P).

Manifestaciones clínicas: se encontrará en primera instancia hipotensión y

bradicardia (puede presentarse taquicardia refleja con los dihidropiridínicos) por

depresión del nodo sinusal, bloqueo AV, o efecto inotrópico negativo. El QT

puede estar prolongado. Los hallazgos neurológicos (alteración de conciencia,

infarto cerebral, convulsiones) y respiratorios (edema pulmonar, síndrome de

dificultad respiratoria aguda) son usualmente secundarios a la toxicidad

cardiovascular.

Los principales efectos gastrointestinales son náuseas, vómito y constipación.

Las formas de liberación sostenida pueden quedar retenidas en el intestino,

causar obstrucción intestinal y prolongar la toxicidad. La evacuación de estas

presentaciones reduce la morbimortalidad.

Pruebas de laboratorio: monitoreo cardíaco continuo durante las primeras 6

horas (o según la evolución clínica del paciente). En su defecto, ECG cada

hora por las primeras 6 horas. Electrolitos, glucosa, BUN y creatinina para

detectar otras causas de arritmias. Radiografía de tórax en pacientes con

síntomas respiratorios y radiografía de abdomen cuando hay signos de

obstrucción intestinal o historia de ingesta de formas de liberación prolongada.

Dosis tóxica: la ingestión de 1 gramo o más de verapamilo, nifedipina o

diltiazem puede producir toxicidad seria y posiblemente la muerte en un adulto.

Los demás fármacos de esta familia parecen ser menos tóxicos pero hay pocos

datos disponibles.

Las dosis terapéuticas pueden llegar a ser tóxicas, dependiendo de las

comorbilidades presentes o la ingesta de otros medicamentos.

Tratamiento:

1. ABCD inicial

Page 152: Para paciente intoxicado

2. Oxigenación adecuada.

3. Monitoreo cardiaco (indicado previamente) y vigilancia estricta de pacientes

sintomáticos por lo menos por 24 horas idealmente en unidad de cuidados

intermedios o intensivos.

4. Control de la hipotensión con bolos de solución salina al 0.9% ó Hartmann,

de 30 mL/kg considerando la posiblidad de recurrir al soporte inotrópico con

dopamina o dobutamina/noradrenalina.

5. Lavado gástrico (ver capítulo 1)

6. Carbón activado (ver capítulo 1)

7. Irrigación intestinal total en pacientes con sobredosis por formas de

liberación prolongada (ver capítulo 1).

8. Atropina: indicada si el paciente tiene bradicardia sintomática. En adultos

0.5 – 1 mg (hasta 3 mg), niños 0.02 mg/kg (hasta 3 dosis) IV cada 5

minutos.

9. Gluconato de calcio al 10%: 0.6 mL/kg IV. Repetir cada 10-20 minutos si es

necesario hasta 3-4 dosis, o administrar infusión continua de 1.2 mL/kg/h.

10. Otras opciones son:

o Glucagón a dosis de 2 – 10 mg IV (50-150 g/kg) que puede repetirse

cada 10 minutos, y según la respuesta, considerar infusión continua de

2–10 mg/hora (50–100 g/kg/hora)

o Insulina/dextrosa (hiperinsulinemia euglucémica): bolo de insulina de 1

U/kg acompañado de 0.5 a 1 g/kg de dextrosa IV seguido de una infusión

de 0.5 U/kg/h de insulina y de 0.5 a 1 g/kg/h de dextrosa, ajustando

según la glicemia y monitorizando el potasio.

11. Inhibidores de la fosfodiesterasa: inamrinona 0.75 mg/kg IV seguido de una

infusión de 5 - 10 g/kg/min.

12. Si no hay respuesta con las anteriores medidas farmacológicas, el paciente

debe ser trasladado a una unidad cardiovascular para la realización de

procedimientos como la implantación de marcapasos transitorios, de balón

de contrapulsación aórtica, oxigenación por membrana extracorpórea

(Extracorporeal membrane oxygenation ECMO) o bypass cardiopulmonar.

Page 153: Para paciente intoxicado

36. INTOXICACIÓN POR ANTIMÁLARICOS

Dr. Carlos A. Rodríguez

Descripción: los antimaláricos del grupo de las quinolinas y sus derivados

incluyen quinina, quinidina, cloroquina, hidroxicloroquina, mefloquina,

primaquina y amodiaquina. Estos fármacos se utilizan en las zonas endémicas

de malaria y en el tratamiento de enfermedades reumatológicas (cloroquina e

hidroxicloroquina en artritis reumatoide, lupus eritematoso, escleroderma,

pénfigo, polimiositis y sarcoidosis).

Por su uso más frecuente y potencial toxicidad, la guía se limita a la

intoxicación por quinina (oral, parenteral), cloroquina (oral, parenteral) y

mefloquina (oral).

Farmacocinética: quinina: la biodisponibilidad oral es del 76%, alcanza

concentraciones pico 1-3 horas después de la ingesta, la vida media es de 9-15

horas, es metabolizado en un 80% y el 20% restante se elimina por el riñón sin

cambios. Cloroquina: la biodisponibilidad oral es del 80%, el pico sérico se

observa 2-5 horas después de ingerida, se distribuye ampliamente (volumen

de distribución >100 L/kg), su vida media oscila entre 40 y 55 días, y su

eliminación es principalmente renal. Mefloquina: su absorción es lenta pero casi

completa (>85%), tiene alto volumen de distribución, vida media de 15 a 27

días, y eliminación hepática.

Mecanismo de toxicidad:

Quinina: en el corazón bloquea canales de sodio y potasio. El bloqueo de los

canales de Na+ disminuye el inotropismo, enlentece la conducción y ensancha

el QRS; el bloqueo de los canales de K+ retrasa la repolarización y puede

desencadenar taquicardia ventricular polimórfica (de puntas torcidas o torsades

de pointes). Puede causar alteraciones auditivas por efectos sobre el oído

interno (vasoconstricción del órgano de Corti, bloqueo de canales de K+) y

alteraciones visuales por toxicidad retinal directa. En el páncreas tiene un

Page 154: Para paciente intoxicado

efecto similar a las sulfonilúreas por bloqueo de los canales de K+, causando

liberación de insulina e hipoglicemia.

Cloroquina: los efectos cardiacos son similares a los de la quinina. Puede

causar bloqueo AV, prolongación del QRS y el QT y depresión del segmento

ST. Las alteraciones oculares son raras en esquemas cortos de tratamiento y

profilaxis, pero más frecuentes en tratamientos crónicos de enfermedades

reumatológicas.

Mefloquina: sus efectos cardiodepresores son menores con respecto a la

quinina, pero puede prolongar el QT a dosis profilácticas y terapéuticas. El

efecto sobre los canales de potasio pancreáticos es mínimo. La neurotoxicidad

no tiene un mecanismo claro, pero hay evidencia de acción anticolinérgica

central.

Manifestaciones Clínicas:

Quinina: los pacientes tratados a dosis terapéuticas presentan con frecuencia

un cuadro denominado cinconismo, caracterizado por náuseas, vómito, dolor

abdominal, diarrea, hipoacusia, tinnitus, cefalea, vértigo y taquicardia. En

sobredosis puede presentarse bloqueo cardiaco y arritmias (taquicardia y

fibrilación ventriculares) así como hipotensión. Las alteraciones visuales,

generalmente reversibles, incluyen visión borrosa, fotofobia, escotomas y hasta

ceguera completa. Pueden presentarse hipoglicemia y reacciones de

hipersensibilidad cutáneas y hematológicas.

Cloroquina: el espectro de manifestaciones es similar al de la quinina y

comienzan 1-3 horas post-ingestión. Las alteraciones gastrointestinales son

menos frecuentes, la hipotensión es más marcada e invariablemente se

encuentra hipokalemia asociada a los trastornos cardiacos. Puede haber

también depresión respiratoria. Se describe depresión del sistema nervioso

central, mareo, cefalea y convulsiones. En toxicidad crónica se presentan

daños auditivos y visuales potencialmente irreversibles, neuropatía y miopatía.

Page 155: Para paciente intoxicado

Mefloquina: a dosis tóxicas se presentan náuseas, vómito y diarrea. Las

alteraciones cardiacas son menos severas que con la quinina, pero en caso de

combinación con halofantrina, quinina o cloroquina puede presentarse

prolongación del QT y torsades de pointes. Las manifestaciones del sistema

nervioso central son las más significativas e incluyen disforia, alteraciones del

estado de conciencia, ansiedad, delirio, alucinaciones, psicosis y convulsiones.

Los casos reportados de sobredosis con mefloquina presentan trastornos

neurológicos prolongados y potencialmente irreversibles (debilidad,

parestesias, alteraciones visuales y auditivas

Laboratorio: Electrocardiograma (QRS mayor de 0.14 segundos es indicativo

de toxicidad severa), ionograma con énfasis en potasio, glicemia.

Dosis Tóxica:

Quinina: 2-8 g son potencialmente fatales en adultos.

Cloroquina: dosis superiores a 5 g en adultos son usualmente fatales, en

niños ha habido muertes con dosis desde 750 mg.

Mefloquina: no se ha establecido la dosis tóxica en humanos, se ha

reportado toxicidad grave en pacientes que ingirieron hasta 5000 mg en

5 días.

Tratamiento: para los tres medicamentos se recomienda:

1. Realizar ABCD.

2. Monitoreo cardiaco continuo.

3. No inducir el vómito.

4. Si el paciente se presenta tempranamente y no ha vomitado, realizar

lavado gástrico exhaustivo con solución salina 0.9% 10 mL/kg cada vez,

hasta que el contenido gástrico salga claro, previa intubación si hay

compromiso de conciencia. Ver capítulo 1.

5. Suministrar carbón activado, a una dosis de 1 g/kg de peso en solución

al 25% por sonda nasogástrica (se han recomendado dosis repetidas

para la intoxicación por quinina y mefloquina). Ver capítulo 1.

Page 156: Para paciente intoxicado

6. Administrar catártico: sulfato de magnesio (sal de Epsom) 30 g en

adultos ó 250 mg/kg en niños en solución al 25%, ó manitol al 20% por

vía oral 5 mL/kg. Si en las siguientes 4 horas el paciente no ha

exonerado se debe repetir la dosis. Ver capítulo 1.

7. Si el QTc está prolongado por encima de 500 milisegundos administrar

sulfato de magnesio 4 g (20 mL de solución al 20%) diluidos en 100 mL

de Solución salina al 0.9% para pasar en 30 minutos. Repetir cada 6

horas hasta que el QTc esté normal (<430 ms en hombres, <450 ms en

mujeres, <440 ms en niños).

8. Para los casos individuales de intoxicación se presentan las siguientes

opciones terapéuticas:

Tratamiento específico para intoxicación por quinina:

Si hay hipotensión administrar líquidos endovenosos y adrenalina 0.25

g/kg/min si no hay respuesta.

Mantener la glicemia con una infusión de dextrosa al 5 ó 10%.

Si el QRS está ensanchado por encima de 140 milisegundos administrar

bicarbonato de sodio a dosis de 1 mEq/kg, para lograr un pH sérico de

7.45 – 7.50.

En caso de taquicardia de puntas torcidas “torsades de pointes” aplicar

sulfato de magnesio intravenoso, dosis de 1 a 2 g diluidos en 100 mL de

dextrosa al 5% para pasar en 1 a 2 minutos, y repetir si no hay

respuesta. Si no se controla con magnesio, puede emplearse

isoproterenol IV.

Tratamiento específico para intoxicación por cloroquina:

El tratamiento de la depresión cardiaca y vasodilatación debe incluir

simultáneamente:

Adrenalina, agente inotrópico, cronotrópico y vasoconstrictor de

elección, 0.25 g/kg/min disuelta en solución salina 0.9%.

Diazepam, dosis inicial de 2 mg/kg IV en 30 minutos, seguido por una

infusión continua de 1 a 2 mg/kg/día por 2 a 4 días.

Page 157: Para paciente intoxicado

37. INTOXICACIÓN POR BARBITÚRICOS

Dres. Carlos A. Rodríguez, Jenny Cuesta

Descripción: son derivados del ácido barbitúrico, fueron muy utilizados en el

pasado como sedantes e hipnóticos, pero su potencial de abuso, rango

terapéutico estrecho y el desarrollo de fármacos más seguros ha restringido

marcadamente su comercialización. En la actualidad se usan en anestesia

(tiopental) y en el manejo de síndromes convulsivos (fenobarbital y primidona).

Farmacocinética: el tiopental es de administración intravenosa, altamente

liposoluble, de acción ultracorta (15-20 minutos) y excreción hepática. El

fenobarbital se administra por vía oral e intravenosa, es de acción larga (6-12

horas) y se elimina por vía hepática y renal. La primidona es metabolizada a

fenobarbital y feniletilmalonamida (PEMA).

Mecanismo de toxicidad: los barbitúricos potencian la acción del GABA en el

receptor GABAA aumentando la entrada de cloro a las neuronas y causando

hiperpolarización. También reducen la estimulación inducida por glutamato,

deprimen el centro respiratorio, e inhiben la contractilidad y conducción

cardiaca por su acción estabilizante de membrana. El uso a largo plazo

produce tolerancia por desensibilización de los receptores e inducción del

metabolismo hepático.

Manifestaciones clínicas: la toxicidad puede dividirse en leve (somnolencia,

disartria, marcha inestable y nistagmus), moderada (depresión del estado de

conciencia, hiporreflexia y disminución de la frecuencia respiratoria) y severa

(coma, hipotermia y colapso cardiorrespiratorio). Las manifestaciones

neurológicas pueden incluir pérdida de reflejos de tallo y presencia de reflejos

patológicos (Babinski), simulando muerte cerebral. También se ha descrito

necrosis tubular aguda y rabdomiolisis. En las primeras 24 horas del coma

pueden aparecer bulas o ampollas en los sitios de presión, las cuales se

resuelven espontáneamente 1-2 semanas después.

Page 158: Para paciente intoxicado

La suspensión abrupta de barbitúricos tras el uso crónico desencadena un

síndrome de abstinencia similar al de las benzodiazepinas, en el caso del

fenobarbital 1 semana después y se prolonga hasta 14 días.

En pacientes previamente sensibilizados, el fenobarbital puede causar el

síndrome de hipersensibilidad a anticonvulsivantes 1 a varias semanas

después del inicio del tratamiento, caracterizado por malestar, faringitis,

adenopatías cervicales, eosinofilia, brote (hasta síndrome de Stevens-Johnson

y necrolisis epidérmica tóxica) y manifestaciones sistémicas.

Laboratorio: electrolitos, glicemia, CPK, BUN, creatinina y ECG. Medición de

barbitúricos en sangre.

Dosis tóxica: el fenobarbital es tóxico a concentraciones plasmáticas >50

g/mL.

Tratamiento:

1. ABCD (énfasis en atención de la vía aérea y prevención de la hipoxia).

2. Descartar hipoglicemia.

3. Carbón activado en múltiples dosis (ver capítulo 1)

4. No se recomienda alcalinizar la orina por el mínimo efecto sobre la

excreción del fenobarbital y el alto riesgo de alcalosis metabólica e

hipernatremia.

5. En los casos más graves, que no responden a las medidas anteriores o

tienen falla renal, se recurre a la hemodiálisis o hemoperfusión.

Page 159: Para paciente intoxicado

38. INTOXICACIÓN POR BETABLOQUEADORES

Dres. Alexis Santamaria y Sergio Parra

Descripción: los betabloqueadores son un numeroso grupo de medicamentos,

ampliamente utilizados para el tratamiento de entidades como la hipertensión

arterial crónica, taquiarritmias, enfermedad coronaria, falla cardiaca crónica,

profilaxis de la migraña y glaucoma, entre otros. La gravedad de las

intoxicaciones varía de un cbetabloqueador a otro. Los compuestos de dicho

grupo que se encuentran en nuestro medio son: propranolol (artensol, inderal),

metoprolol (betaloc, beloc, betoprolol, lopresor, roximet), atenolol (diluxen,

blockium, tenormin, plenacor), carvedilol (vasodyl, dilatrend, coryol, carvedil),

nadolol (corgard), sotalol (sotacor, darob), timolol (blocadren, timopres, oftabet,

timoptic), bisoprolol (concor) y betaxolol (optipress, betoptic). El propranolol es

el beta bloqueador prototipo, ha sido el más frecuentemente involucrado en

sobredosis y parece ser más letal que otras sustancias del mismo grupo. Las

intoxicaciones graves suelen ser refractarias a varias de las medidas de

tratamiento, requiriendo monitoreo estricto en unidad de cuidados intensivos.

Farmacocinética: los betabloqueadores vienen en presentaciones para

administración por múltiples vías, siendo la oral la más frecuentemente

empleada. La biodisponibilidad oral fluctúa desde un 25% para el propranolol

hasta casi un 100% para el sotalol. Luego de su ingestión se absorben

rápidamente, presentando concentraciones máximas entre 1 a 4 horas para las

formas farmacéuticas de liberación inmediata, de tal manera que los signos de

toxicidad aparecen a los 30 minutos y alcanzan un máximo a las 2 horas. No

obstante, las preparaciones de liberación prolongada pueden tener periodos de

absorción prolongados y los signos de toxicidad pueden aparecer tan

tardíamente como a las 24 horas. La liposolubilidad puede afectar la

distribución de las diferentes sustancias y por ende influenciar el grado y

características de la toxicidad (propranolol, metoprolol y carvedilol son

altamente liposolubles). La vida media de los betabloqueadores es

ampliamente variable siendo tan corta como 8 minutos para el esmolol y tan

prolongada como 32 horas para el nebivolol; no obstante, las alteraciones

Page 160: Para paciente intoxicado

farmacocinéticas atribuibles a los efectos cardiovasculares pueden explicar la

persistencia de la toxicidad por varios días.

Mecanismos de toxicidad: Aunque todos los fármacos pertenecientes a dicho

grupo comparten algunas características, como el antagonismo sobre los

receptores beta 1, existen diferencias en cuanto a la capacidad de bloquear

receptores beta 2, los receptores alfa adrenérgicos y canales iónicos. De esta

manera los betabloqueadores se clasifican de la siguiente manera:

Beta bloqueadores beta 1 selectivos (también denominados como

cardioselectivos): metoprolol, atenolol, esmolol, bisoprolol, nebivolol.

Betabloqueadores no selectivos: propranolol, nadolol, timolol.

Betabloqueadores con actividad simpaticomimética intrínseca: pindolol,

oxprenolol, penbutolol, bucindolol.

Betabloqueadores con actividad sobre los receptores alfa adrenérgicos:

labetalol, carvedilol, celiprolol

Este grupo de medicamentos reduce la frecuencia cardiaca, la velocidad de

conducción, la contractilidad miocárdica y la secreción de renina al bloquear los

receptores beta 1; su efecto estabilizador de membrana (reduciendo el influjo

iónico de sodio y calcio durante la fase 0 del potencial de acción cardiaco) lleva

a prolongación de la despolarización y ensanchamiento del QRS (dichas

acciones sólo han sido atribuidos a: acebutolol, betaxolol, pindolol y

propranolol; el bloqueo beta 2 favorece la constricción del músculo liso

bronquial (pacientes predispuestos) y la reducción de la glucogenólisis. Es

importante considerar que, en caso de sobredosis, aquellos considerados

selectivos pierden dicha propiedad.

Manifestaciones clínicas: En sobredosis se presentan efectos

cardiovasculares, neurológicos, respiratorios, gastrointestinales, metabólicos

entre otros.

Las manifestaciones cardiovasculares son las más frecuentes y pueden

aparecer de manera súbita, incluyen las siguientes: hipotensión, bradicardia,

alteraciones en la conducción cardiaca (bloqueo AV de primer grado,

Page 161: Para paciente intoxicado

conducción idioventricular anormal, bloqueo AV de alto grado, cambios del

segmento ST y de la onda T), anormalidades de la despolarización y la

repolarización ventricular (en especial con agentes con actividad estabilizante

de membranas y con el sotalol). El electrocardiograma suele presentar PR y

QRS prolongados. Se puede presentar choque cardiogénico y asistolia. Los

betabloqueadores con actividad simpaticomimética intrínseca pueden, por el

contrario, caracterizarse por taquicardia e hipertensión. Es importante tener en

cuenta que el sotalol se asocia frecuentemente con taquicardia ventricular,

torsades de pointes (taquicardia ventricular polimorfa) y fibrilación ventricular.

Las alteraciones del sistema nervioso central, que pueden presentarse en

ausencia de signos cardiovasculares importantes, son: convulsiones, insomnio,

grados variables de depresión (desde somnolencia hasta coma, con frecuente

compromiso de la función respiratoria) y que son agravados por la

hipoperfusión, la acidosis y la hipoxemia.

El broncoespasmo es raro en personas sin predisposición, pero es probable

que se presente en pacientes con asma o enfermedad pulmonar obstructiva

crónica. También se puede encontrar cianosis central y periférica, hipoglicemia

(más frecuente en pacientes diabéticos recibiendo hipoglicemiantes, en niños y

pacientes con uremia) e hiperkalemia (de ayuda en el diagnóstico diferencial),

Las alteraciones gastrointestinales reportadas incluyen el espasmo esofágico y

la isquemia mesentérica.

Diagnóstico: Es necesario diferenciar la intoxicación por betabloqueadores del

choque anafiláctico, cardiogénico, séptico o hipovolémico, o de intoxicaciones

por calcioantagonistas, organofosforados, carbamatos, antiarritmicos, agonistas

alfa 2 adrenérgicos, digitálicos, cianuro, opioides, cloroquina, hipnóticos y

antidepresivos tricíclicos. La determinación de concentraciones elevadas de

betabloqueadores en sangre es sólo útil para confirmar el diagnóstico, pero en

nuestro medio no hay disponibilidad de dicha prueba de laboratorio. Se debe

solicitar BUN, creatinina, glucometría seriada y electrolitos (en especial el

potasio y magnesio). La radiografía de tórax y los gases arteriales sólo debe

realizarse a los pacientes sintomáticos.

Page 162: Para paciente intoxicado

Dosis tóxicas: La respuesta a una sobredosis de beta bloqueador es

altamente variable dependiendo de la condición médica asociada, el uso de

otros medicamentos y las características farmacológicas propias de cada uno

de los constituyentes del grupo. Pacientes susceptibles pueden tener severas y

aun fatales reacciones a dosis terapéuticas. No existen datos precisos pero la

ingestión de dos a tres veces la dosis terapéutica debe considerarse

potencialmente mortal en todos los pacientes.

Tratamiento:

1. Hospitalizar, la aparición de signos de la intoxicación puede ser demorada y

una vez instaurados pueden persistir varios días.

2. Realizar ABCD.

3. Adecuada oxigenación.

4. Suspender la vía oral.

5. Antes de iniciar la descontaminación del tracto gastrointestinal se debe

hacer la intubación orotraqueal (si el estado neurológico del paciente lo

amerita). Se puede aplicar de atropina previa intubación, por el estímulo

vagal que esta implica.

6. La inducción del vómito, además de aumentar el estímulo vagal, no ha

demostrado utilidad y está absolutamente contraindicada en los pacientes

con algún grado de deterioro neurológico.

7. Lavado gástrico y carbón activado (según recomendaciones del capítulo 1).

8. Recordar el catártico siempre que se use más de una dosis de carbón

activado y considere la utilización del lavado intestinal total cuando se haya

presentado ingestión de medicamentos de liberación prolongada (según

recomendaciones del capítulo 1).

9. Monitoreo electrocardiográfico, hemodinámico y de oximetría de pulso

continuos hasta al menos 6 horas después de la ingestión. Si no es posible,

obtener electrocardiograma cada 4 – 6 horas.

10. Manejo de convulsiones con diazepam 5 a 10 mg intravenosos cada 10 a

15 minutos hasta un máximo de 30 mg. El Fenobarbital o los relajantes

musculares son alternativas en caso de convulsiones refractarias.

11. En caso de bradicardia usar bolos de atropina: en adultos de 0.5 mg/dosis

como mínimo (hasta un máximo de 3 mg) y en niños 0.02 mg/kg/dosis.

Page 163: Para paciente intoxicado

Además, iniciar isoproterenol (4 g/min) e incrementar la infusión de

acuerdo a la respuesta clínica.

12. Deben suministrarse líquidos endovenosos en caso de hipotensión (30

mL/kg en bolo IV), pero se debe vigilar estrechamente para evitar la

aparición de edema pulmonar.

13. En caso de bradicardia e hipotensión refractarias a las medicas previas y

con evidencia de falla cardiaca iniciar:

a. Glucagón 5 – 10 mg en bolo intravenoso administrado durante 2 minutos

(en niños 50 - 150 g/kg), dichos bolos deben ser repetidos hasta que se

observe respuesta (que aparece en 1-3 minutos y es máxima a los 7

minutos) y luego continuar con una infusión a la dosis de respuesta en

mg/hora.

b. 30 a 60 ml de gluconato de calcio al 10% (60 mg/kg en niños hasta un

máximo de 3 gramos) en bolo intravenoso administrado durante 5

minutos. Los bolos de gluconato de calcio pueden ser repetidos cada 15

minutos, hasta cuatro dosis, o suministrar una infusión de 0.6 – 1.2

ml/kg/hora, pero debe empezar a valorarse la calcemia a partir de dicho

momento.

c. Insulina, bolo de 1U/kg/h, seguido de 0.5 U/kg/h en infusión continua y

dextrosa al 10% 1 g/kg/h. Se debe evaluar la glicemia cada 30 minutos y

ajustar la infusión de glucosa para mantener al paciente euglicémico.

Usar hasta que el paciente se encuentre estable y sin inotrópicos.

14. En caso de falla de las anteriores medidas pueden utilizarse otros

inotrópicos como epinefrina, dobutamina, norepinefrina (en dosis muy altas)

o milrinona aunque la experiencia con estos es más limitada y debe hacerse

en unidad de cuidados intensivos con valoración de la actividad cardiaca a

través de técnicas invasivas o no invasivas. Aquellas intoxicaciones debidas

a betabloqueadores con efectos vasodilatadores (labetalol, carvedilol,

bucindolol, celiprolol, nebivolol y betaxolol) pueden beneficiarse de la

administración de epinefrina o norepinefrina.

15. Se recomienda la utilización de bicarbonato de sodio 1 – 2 mEq/kg en bolo

intravenoso en caso de ensanchamiento del QRS, arritmias ventriculares e

hipotensión severa. El bicarbonato puede agravar las arritmias ocasionadas

Page 164: Para paciente intoxicado

por intoxicación con sotalol y éstas pueden responder a la administración de

magnesio.

16. Si la respuesta a todas las medidas anteriores no es adecuada puede ser

necesaria la utilización de marcapaso y/o balón de contrapulsación aórtico.

Page 165: Para paciente intoxicado

39. INTOXICACIÓN POR CLONIDINA Y SIMILARES (-METILDOPA,

OXIMETAZOLINA, TETRAHIDROZOLINA, TIZANIDINA)

Dres. Jenny Cuesta y Carlos A. Rodríguez

Descripción: los fármacos agonistas 2 adrenérgicos se utilizan en

hipertensión arterial (clonidina y -metildopa); desorden de déficit de atención

e hiperactividad, profilaxis de migraña y síndromes de abstinencia (clonidina); y

como descongestionantes tópicos (oximetazolina y tetrahidrozolina).

Farmacocinética: tanto las tabletas de clonidina y -metildopa como las gotas

de descongestionantes tópicos tienen muy buena absorción por vía oral, por

ende pueden generar toxicidad sistémica con facilidad. Para la clonidina el

inicio de acción es 30 a 60 minutos, mientras que para la -metildopa es 3 a 4

horas (por ser un profármaco). La eliminación es por riñón y la vida media se

prolonga en pacientes con falla renal.

Mecanismo de toxicidad: la toxicidad se debe a la estimulación de receptores

2 centrales y periféricos.

La acción 2 en el sistema nervioso central disminuye la liberación de

norepinefrina causando letargia, coma, miosis, hipotononía, depresión

respiratoria, apnea e hipotermia. Las consecuencias cardiovasculares incluyen

bradicardia e hipotensión. La acción 2 periférica causa vasoconstricción con

hipertensión, pero priman los efectos simpaticolíticos centrales. La -metildopa

requiere activación metabólica previa a -metilnorepinefrina para poder actuar,

de ahí su lento inicio de acción. Por sus efectos sobre el SNC, la intoxicación

por agonistas 2 puede asemejarse a la toxicidad por opioides.

Manifestaciones clínicas: inicialmente se presentan los cambios del sistema

nervioso central, luego puede observarse un periodo transitorio de hipertensión

que dura 2 a 4 horas (especialmente en ingestas masivas o administración

intravenosa) y posteriormente se activan los efectos simpaticolíticos

Page 166: Para paciente intoxicado

(bradicardia sinusal e hipotensión). En ocasiones puede encontrarse hipotermia

y miosis puntiforme.

Con -metildopa se han reportado algunos casos de anemia hemolítica, leuco y

trombocitopenia, miocarditis, pancreatitis, parkinsonismo, parálisis de Bell y

psicosis incluso a dosis terapéuticas.

La suspensión abrupta de tratamientos con clonidina y -metildopa puede

generar un síndrome de abstinencia por hiperactividad simpática 16 – 48 horas

después de cesar la terapia, manifestándose con agitación, insomnio, temblor,

hipertensión y palpitaciones.

Diagnóstico diferencial: la intoxicación por 2 agonistas genera mayor

depresión cardiovascular que los opioides. El compromiso de conciencia la

diferenciará de las bradicardias con hipotensión causadas por los antagonistas

betaadrenérgicos y los bloqueadores de canales de calcio.

Los organofosforados aumentan el peristaltismo y las secreciones, lo que

permite diferenciar esta intoxicación de la causada por 2 agonistas. El amitraz,

por ser un 2 agonista, tiene un cuadro muy similar al causado por estos

medicamentos.

Diagnóstico: por el potencial de bradiarritmias e hipoventilación el paciente

debe tener monitoreo electrocardiográfico y de oximetría de pulso continuos

hasta la mejoría.

Dosis tóxica: en niños se ha reportado toxicidad con dosis tan bajas como 0.1

mg de clonidina.

Tratamiento:

1. Realizar ABCD.

2. Monitoreo cardiovascular, neurológico y respiratorio como mínimo por 8

horas desde el ingreso. Estimular al paciente constantemente para evitar la

depresión respiratoria, sin embargo puede llegar a requerir soporte

ventilatorio.

Page 167: Para paciente intoxicado

3. Medidas de descontaminación generales (ver capítulo 1).

4. Las bradicardias que generen compromiso hemodinámico requieren

tratamiento con atropina a dosis de 0.02 mg/kg en niños y en adultos de 0.5

a 1 mg, según respuesta.

5. La hipotensión se maneja con cristaloides endovenosos y si no hay

respuesta se debe iniciar una infusión de dopamina de 5 a 20 g/kg/min.

Considerar los otros vasopresores en casos refractarios.

6. Las hipertensiones iniciales graves se deben manejar con nitroprusiato de

sodio, ya que su efecto es muy corto y revierte fácilmente si se presenta

hipotensión.

7. Si se presentan convulsiones aplicar diazepam IV (adultos: 5 a 10 mg,

repetir cada 10 a 15 minutos a necesidad. Niños: 0.2 a 0.5 mg/kg, repetir

cada 10-15 minutos a necesidad).

8. La hipotermia se maneja con medidas físicas de calor externo.

9. Aunque es discutido, se ha sugerido aplicar naloxona a dosis de 0.1

mg/kg a dosis repetidas (hasta 10 mg en total).

Page 168: Para paciente intoxicado

40. INTOXICACION POR INHIBIDORES DE LA ENZIMA CONVERTIDORA

DE ANGIOTENSINA (IECA)

Dres. Marie C Berrouet, Sergio Parra

Descripción: son medicamentos de amplio uso, especialmente como

antihipertensivos, difieren dentro del grupo en cuanto a potencia y

características farmacocinéticas. Los medicamentos clásicos son: captopril

(capoten, altran), cilazapril, (inhibace), lisinopril (tensiopril), quinapril

(acupril), enalapril (renitec), ramipril (tritace), trandolapril y fosinopril.

Farmacocinética: se absorben rápidamente desde el tracto gastrointestinal,

usualmente dentro de las cuatro primeras horas. La mayoría son profármacos

(excepto captopril y lisinopril) que sufren metabolismo al compuesto activo y se

excretan por vía renal de manera inalterada. No obstante, el fosinopril y

trandolapril también se excretan por vía biliar.

Mecanismos de toxicidad: los inhibidores de la ECA se unen al sitio activo de

la enzima convertidora de angotensina, impidiendo la conversión de

angiotensina I en angiotensina II. Ésta última produce vasoconstricción e

induce la secreción de aldosterona. Por lo tanto, la reducción de las

concentraciones de angiotensina II explica la hipotensión y la reducción de las

concentraciones de aldosterona la reducción en la retención hidrosalina y la

hiperkalemia.

Manifestaciones clínicas: se presentan generalmente luego de 6 horas post-

ingestión, sin embargo existen casos de manifestaciones en menor tiempo.

Agudas: hipotensión acompañada de pulso normal o bradicardia. Se

pueden presentar náuseas, diaforesis y/o depresión del estado de

conciencia. También se han reportado casos de falla renal aguda y

fenómenos de angiodema. La hipotensión, que es la manifestación más

común, puede ser de difícil manejo.

Page 169: Para paciente intoxicado

Crónicas: broncoespasmo, tos, hiperkalemia, neutropenia, hipernatremia

y angioedema.

Diagnóstico: El antecedente o sospecha de ingesta sumado a los hallazgos

clínicos y paraclínicos. Se recomienda evaluar: electrolitos, función renal,

electrocardiograma, gases arteriales, hemoleucograma. En el diagnóstico

diferencial es importante considerar a los betabloqueadores y antagonistas de

canales de calcio, en este sentido la evaluación de la glicemia puede ser útil.

Dosis tóxicas: se resumen en la siguiente tabla.

IECA Rango

terapéutico

Dosis tóxica

(niños)

Dosis tóxica

(adultos)

Captopril 50 – 150 mg/dia > 8 mg/kg > 7.5 g

Enalapril 10 – 40 mg/dia > 2 mg/kg > 300 mg

Quinapril 20 – 80 mg/dia No se conoce No se conoce

Perindopril 4 – 16 mg/dia No se conoce >180 mg

Fosinopril 20 – 80 mg/dia No se conoce No se conoce

Lisinopril 20 – 40 mg/dia No se conoce > 320 mg

Tratamiento:

1. Realizar ABCD.

2. Vigilancia del estado cardiovascular.

3. Lavado gástrico y carbón activado (según recomendaciones del capítulo

1).

4. Recordar el catártico (manitol) siempre que se use más de una dosis de

carbón activado.

5. Control de hipotensión inicialmente con líquidos endovenosos 1500 mL

en adultos, 20 mL/kg en niños y evaluar. Si persiste administrar

dopamina (10 – 20 g/kg/min o norepinefrina (bolo inicial de 8 a 12 g

/min en adultos y 2 g/m2/min en niños). Luego mantenimiento con 2 a 4

g/min o ajustando la dosis de acuerdo al nivel de presión arterial

deseado.

Page 170: Para paciente intoxicado

6. En caso de hipotensión refractaria al manejo inicial, compromiso

ventilatorio y del sistema nervioso central administrar naloxona (adultos

0.4 mg intravenosa directa, niños 0.01 mg/kg).

7. El paciente asintomático se debe observar por un periodo mínimo de 24

horas.

Page 171: Para paciente intoxicado

41. INTOXICACIÓN POR GLUCÓSIDOS CARDIACOS (DIGOXINA,

DEDALERA, CATAPIS)

Descripción: son extraídos de diversas plantas como Digitalis purpurea y

Digitalis lanata (dedalera), Thevetia peruviana (catapis, cobalonga o castañeto)

y Nerium oleander (adelfa o azuceno). Éstas contienen diversos glucósidos

cardiacos en todas sus partes, principalmente en las semillas. Son utilizados

para el tratamiento de la insuficiencia cardiaca (digital, digoxina, Lanitop) y en

infusiones como “purgante natural” o “semillas para adelgazar”, conocidas

comúnmente como avellanas (Thevetia y Nerium). Las formas naturales de los

glucósidos cardiacos son cáusticas cuando se ingieren por vía oral y el látex de

las semillas es irritante al contacto con los ojos.

Farmacocinética: la biodisponibilidad de la digoxina por vía oral es en

promedio del 75%, su efecto comienza entre 1.5 y 6 horas post-ingestión, la

vida media es 36 a 48 horas y su eliminación principalmente renal. El rango

terapéutico va de 0.5 a 2.0 ng/mL.

Mecanismo de toxicidad: los glucósidos cardiacos inhiben la bomba Na+ K+

ATPasa, lo que incrementa las concentraciones de sodio intracelular, lleva a

acumulación de calcio en las células miocárdicas y aumento de la contractilidad.

A dosis terapéuticas aumentan el tono vagal, disminuyen la velocidad de

conducción del nodo sinusal y AV (cronotrópicos negativos) y reducen el tono

simpático. La acumulación excesiva de calcio intracelular produce alteraciones

en la repolarización ventricular llevando a acortamiento del QT, depresión del

segmento ST (cubeta digitálica) y eventualmente a contracciones ventriculares

prematuras y taquiarritmias. La inhibición de la Na+/K+ ATPasa del músculo

esquelético puede producir hiperkalemia.

Manifestaciones clínicas:

Manifestaciones no cardiacas: los primeros síntomas son usualmente

náuseas, vómito o dolor abdominal, acompañados de letargia, confusión

y debilidad. La hiperkalemia sugiere intoxicación aguda y niveles de

potasio superiores a 5.5 mEq/L indican mal pronóstico.

Page 172: Para paciente intoxicado

Manifestaciones cardiacas: bradicardia que responde a atropina,

hipotensión, ritmo ventricular ectópico, bloqueo auriculoventricular, QTc

corto y finalmente fibrilación ventricular.

En la toxicidad crónica pueden presentarse bradiarritmias que no respoden a la

administración de atropina, síntomas neuropsiquiátricos y alteraciones visuales.

Pruebas de laboratorio: según la disponibilidad se debe realizar ECG,

hemograma, ionograma con potasio y magnesio, pH y gases arteriales, BUN,

creatinina y niveles séricos de digoxina.

Dosis tóxica: la administración de 1 mg de digital a un niño y 3 mg a un adulto

pueden ser letales; 2 semillas en infusión a un niño y 8 semillas a un adulto

también pueden causar la muerte. Se consideran tóxicos niveles séricos de

digital mayores de 2 ng/mL.

Tratamiento:

1. Realizar ABCD.

2. En caso de ingestión, realizar medidas de descontaminación (ver

capítulo 1).

3. Monitoreo cardiaco continuo.

4. En caso de alteración hemodinámica se deben canalizar 2 venas: una

para la administración de medicamentos y otra para líquidos

endovenosos, ya sea solución salina al 0.9% ó Hartmann, 30 mL/kg IV,

teniendo precaución en pacientes que presenten falla cardiaca de base.

5. Corregir los trastornos hidroelectrolíticos, principalmente la hiper o

hipokalemia.

6. Si se presenta bradicardia con hipotensión o bloqueo AV, aplicar

atropina en bolo IV rápido a dosis de 0.5 mg (0.02 mg/kg en niños),

repetir cada 5 minutos de ser necesario, hasta un máximo de tres dosis.

7. Para tratar las arritmias ventriculares en forma aguda suministrar

lidocaína bolo de 50 a 100 mg a una velocidad de 25-50 mg/min (1

mg/kg en niños), si no se controla la arritmia se puede repetir la dosis sin

exceder 200-300 mg en 1 hora; continuar con fenitoína diluida en

Page 173: Para paciente intoxicado

solución salina a dosis de 15 mg/kg IV lento (en un tiempo superior a

media hora), continuando a razón de 300 a 400 mg/día VO en adultos

(dividido en 2 ó 3 dosis) y 4-8 mg/kg/día VO en niños.

8. Si hay hiperkalemia iniciar tratamiento con 10 unidades de insulina

cristalina en 500 mL de DAD al 10% para pasar IV en 6 horas y

bicarbonato 5 ampollas (50 mEq) en 50 mL de DAD al 5%, (volumen

total de 100 mL) para pasar a 25 mL/hora, repitiendo la mezcla hasta

obtener un pH urinario entre 7 y 8. También son de utilidad las resinas

captadoras de potasio (kayexalate).

9. Si hay hipokalemia reponer potasio según déficit.

10. En caso de hipomagnesemia o hipokalemia refractaria, en adultos dar 2

g IV de sulfato de magnesio y en niños 25 mg/kg diluidos en 100 mL de

DAD 5% para pasar en 30 minutos.

11. Los marcapasos externos tienen utilidad limitada en bradiarritmias

refractarias, los marcapasos transvenosos deben evitarse por el riesgo

de arritmias letales y la cardioversión debe reservarse a los casos más

graves.

12. Evitar medicamentos que pueda agravar la intoxicación, tales como:

diuréticos, betabloqueadores, calcioantagonistas, quinidina, omeprazol,

eritromicina y otros macrólidos y tetraciclinas.

13. Nunca administrar gluconato de calcio.

14. La diálisis no tiene utilidad por el alto volumen de distribución de los

glucósidos cardiacos.

15. Administrar anticuerpos FAB en caso de potasio mayor de 5.0 mEq/L,

síntomas gastrointestinales severos, bloqueo AV severo, arritmias con

inestabilidad hemodinámica, insuficiencia renal aguda, convulsiones y

coma, digoxina mayor de 15 ng/mL en cualquier tiempo ó 10 ng/mL 6

horas postingesta, ingestión de >10 mg en adultos y >4 mg en niños,

intoxicación por digitálicos provenientes de la Thevetia peruviana y

Nerium oleander. La dosis se calcula así:

Ampollas requeridas = digoxina (ng/mL) X peso (kg)/100 ó

Ampollas requeridas = Cantidad ingerida (mg) X 0.8/0.5

Page 174: Para paciente intoxicado

Si no se cuenta con la información necesaria, administrar de 10 a 20

ampollas en intoxicaciones agudas y de 3 a 6 ampollas en

intoxicaciones crónicas.

16. Si hay contacto ocular con el látex de una semilla o planta que contenga

digitálicos, se debe lavar el ojo con solución salina al 0.9% durante 1

hora, con goteo continuo.

Page 175: Para paciente intoxicado

42. INTOXICACIÓN POR HIERRO

Dres. Carlos A. Rodríguez, Jenny Cuesta

Descripción: el consumo frecuente de suplementos de hierro (especialmente

en mujeres embarazadas) y de multivitamínicos con hierro, sumado a las

características de las formas farmacéuticas (tabletas de colores, cubierta

azucarada y apariencia de golosina), facilitan la intoxicación con este metal,

principalmente en niños, los cuales son los más susceptibles. En el mercado

se encuentran diferentes presentaciones de hierro y es necesario determinar la

cantidad de la forma elemental ingerida por el paciente por kg de peso (Tabla

1).

Presentación % Hierro

elemental

Contenido de hierro

elemental/tableta

Sulfato ferroso, tabletas 300 mg 20 60 mg

Gluconato ferroso, tabletas 300 mg 12 36 mg

Fumarato ferroso, tabletas 200 mg 33 65 mg

Multivitamínicos con hierro adultos --- 10-110 mg/tableta

Multivitamínicos con hierro niños --- 10-18 mg/tableta

Farmacocinética: un individuo normal absorbe del 5-10% del hierro de la

dieta, principalmente en duodeno y yeyuno proximal, dependiendo de los

requerimientos y los depósitos en los enterocitos, macrófagos, bazo y huesos

(ferritina). Es transportado en plasma por la transferrina y utilizado en la

eritropoyesis. No existe un mecanismo específico de eliminación de hierro y se

limita a 1 mg/día (por exfoliación del epitelio intestinal y durante el periodo

menstrual).

Mecanismo de toxicidad: el exceso de hierro libre cataliza reacciones de

oxidorreducción, produciendo peroxidación lipídica y radicales libres. Es

directamente corrosivo sobre el tracto gastrointestinal donde puede causar

ulceración, edema, sangrado y perforación; y llevar a grandes pérdidas de

Page 176: Para paciente intoxicado

líquido por hemorragia o formación de un “tercer espacio”. La severidad de

estos efectos depende de la cantidad de hierro elemental ingerido, la duración

del contacto con la mucosa y la presencia de alimentos en el estómago.

El hierro libre tiene un potente efecto vasodilatador y es tóxico directamente

para los vasos y el corazón, lo que exacerba la hipovolemia e hipotensión por

la pérdida de líquidos. El hígado es el órgano más sensible a la toxicidad del

hierro y puede manifestarse por hiperbilirrubinemia, hipoglicemia,

hiperamonemia, alteraciones de la coagulación y encefalopatía. La hipotensión

e hipovolemia, la interferencia con la fosforilación oxidativa y el daño

mitocondrial llevan a acidosis metabólica. Las alteraciones neurológicas se

deben a la toxicidad sistémica y al edema cerebral inducido directamente por el

hierro.

Manifestaciones clínicas: la intoxicación se ha dividido en 5 fases según el

tiempo transcurrido tras la ingestión, aunque no todos los pacientes tienen el

mismo curso temporal. La primera fase (gastrointestinal, hasta 6 horas post-

ingesta) se caracteriza por náuseas, vómito, dolor abdominal y diarrea. El

efecto corrosivo puede llevar a hematemesis, hematoquezia y melenas. Si no

hay vómito en las primeras 6 horas, la toxicidad por hierro es poco probable

(excepto en el caso de las tabletas con cubierta entérica). Durante la segunda

fase (latente, hasta 24 horas) se resuelven los síntomas gastrointestinales pero

puede haber hipoperfusión subclínica y acidosis metabólica. En la tercera fase

(sistémica, hasta 48 horas post-ingesta) hay manifestaciones de shock

hipovolémico y cardiogénico, acidosis metabólica grave, disfunción renal,

coagulopatía, síndrome de dificultad respiratoria aguda, letargia, convulsiones y

coma. La cuarta fase (hepática, 2-3 días después de la ingestión) se

caracteriza por gran elevación de las transaminasas y falla hepática. En los

pacientes que sobreviven a intoxicaciones graves puede presentarse una

quinta fase (tardía, 4-6 semanas después) con estenosis pilórica por

cicatrización.

Pruebas de laboratorio: gases arteriales, ionograma, hemograma completo,

proteína C reactiva, creatinina, BUN, glucosa, pruebas de coagulación,

transaminasas y bilirrubina. Se recomienda tomar una radiografía de abdomen

Page 177: Para paciente intoxicado

en las primeras 2 horas post-ingesta, aunque un resultado negativo no excluye

la sobredosis ya que no todas las formas farmacéuticas son radioopacas. Los

niveles séricos de hierro alcanzan un pico entre las 4-6 horas, entre 300-500

g/dL se asocia a toxicidad gastrointestinal significativa y sistémica leve, entre

500-1000 g/dL a toxicidad sistémica grave y shock, y niveles >1000 g/dL a

alta mortalidad.

Dosis tóxica: dosis <20 mg/kg de hierro elemental tienen bajo riesgo de

toxicidad. Entre 20 y 60 mg/kg pueden o no producir toxicidad seria, y >60

mg/kg tiene alto riesgo de intoxicación grave. La dosis letal reportada va de 60

a 300 mg/kg.

Tratamiento:

1. Realizar ABCD.

2. Determinar la cantidad de hierro elemental ingerida.

3. Si es >20 mg/kg o se desconoce la dosis, realizar lavado gástrico con

solución salina, sin agregar bicarbonato (ver capítulo 1). El carbón

activado no adsorbe el hierro.

4. Irrigación intestinal total con polietilenglicol hasta obtener evacuación

rectal clara (ver capítulo 1).

5. Administrar deferoxamina en infusión intravenosa continua a 15 mg/kg/h

(máximo 30 mg/kg/h) si:

a. Los niveles pico de hierro sérico son >500 g/dL, ó

b. Hay toxicidad significativa: letargia, coma, hipovolemia, acidosis

metabólica, coagulopatía, ó

c. La radiografía abdominal muestra tabletas de hierro a pesar de las

medidas de descontaminación

6. Descontinuar la deferoxamina cuando haya resolución la acidosis

metabólica y la toxicidad sistémica, ausencia de píldoras radioopacas

en la radiografía (si estaban presentes inicialmente) o desaparición del

color rosa de la orina (si se presentó al comienzo). Nota: la

deferoxamina es segura en el embarazo y puede emplearse.

Page 178: Para paciente intoxicado

43. INTOXICACIÓN POR METILXANTINAS (CAFEÍNA, TEOFILINA,

GUARANÁ)

Descripción: las metilxantinas son moléculas provenientes de bebidas como el

chocolate, el té y el café. Otras plantas como guaraná, nuez de cola y hierba

mate también contienen cafeína. Actúan como estimulantes del sistema

nervioso central, sin embargo desde el punto de vista terapéutico, se utilizan

como coadyuvantes en estados obstructivos de la vía aérea, como asma y

EPOC (principalmente la teofilina y su sal más hidrosoluble, aminofilina), o

combinados con analgésicos (cafeína 30-65mg), para acelerar su absorción.

Una taza de café instantáneo tiene aproximadamente 40 mg de cafeína (lo

mismo que una bebida cola). Algunas marcas de bebidas energizantes

contienen 80 mg (lo mismo que una taza de café filtrado), mientras que otras

pueden tener hasta 160 mg ó más. Una taza de té aporta entre 40 y 100 mg de

cafeína.

Farmacocinética: La biodisponibilidad oral de las metilxantinas es cercana al

100% para la cafeína y teofilina y 80% para la teobromina. Se metabolizan

principalmente por el citocromo P450 1A2 y su vida media oscila entre 4 y 6

horas. La teofilina está disponible en formas de liberación prolongada y su

derivado, la aminofilina se utiliza por vía intravenosa.

Mecanismo de toxicidad: las metilxantinas causan liberación endógena de

catecolaminas, produciendo estimulación beta-adrenérgica, bloquean

receptores de adenosina y a dosis supraterapéuticas inhiben las

fosfodiesterasas de manera no selectiva, lo que incrementa la concentración de

cAMP y causa efectos similares a la estimulación adrenérgica.

Manifestaciones clínicas:

Sobredosis aguda de metilxantinas: generalmente secundaria a intento

suicida, ingestión accidental en niños o iatrogenia. Las principales

manifestaciones son náuseas y vómito, taquiarritmias (especialmente

taquicardias supraventriculares), hipokalemia, hiperglicemia y acidosis

Page 179: Para paciente intoxicado

metabólica, taquipnea, temblor, fasciculaciones, ansiedad, cefalea,

agitación, alucinaciones y convulsiones resistentes a los antiepilépticos a

dosis usuales. Se debe tener en cuenta que la toxicidad de las formas

farmacéuticas de liberación prolongada puede manifestarse tardíamente

(12-16 horas después de la ingesta). La administración intravenosa rápida

de dosis terapéuticas de aminofilina y/o la omisión de la oxigenoterapia

durante la infusión se ha asociado con muerte súbita por arritmias.

Intoxicación crónica: aparece con la administración de dosis terapéuticas

altas o cuando hay interacciones medicamentosas que alteren el

metabolismo. Cursa con anorexia, náuseas, palpitaciones y en ocasiones

vómito. También pueden presentarse taquiarritmias y convulsiones.

Intoxicación crónica con cafeína (cafeinismo): producido por la ingesta

crónica de altas dosis de cafeína, manifestada con nerviosismo, cefalea.

irritabilidad, ansiedad, insomnio, temblor constante, contracturas

musculares, palpitaciones, poliuria y diarrea. Los consumidores crónicos de

cafeína pueden presentar síndrome de abstinencia 12-24 horas después de

cesar el consumo caracterizado por cefalea, náuseas, rinorrea, irritabilidad y

adinamia.

Pruebas de laboratorio: monitorización cardiovascular (ECG) hasta que el

paciente esté estable, niveles séricos de teofilina (si hay disponibilidad), potasio

sérico y glicemia.

Niveles séricos y dosis tóxica: el rango terapéutico de la teofilina es 5-15

mg/L. Un nivel mayor de 20 mg/L se considera tóxico. Sin embargo, pueden

encontrarse efectos adversos con niveles menores. Las complicaciones graves

se presentan en los casos agudos a niveles séricos entre 80 y 100 mg/L, y en

los casos crónicos entre 40 y 60 mg/L. La dosis letal de cafeína por vía oral es

de 10 g (150-200 mg/kg). En niños la ingesta de 35 mg/kg de cafeína puede

generar toxicidad moderada.

Page 180: Para paciente intoxicado

Tratamiento:

1. ABCD inicial.

2. Monitoreo electrocardiográfico continuo.

3. La terapia con múltiples dosis de carbón activado es esencial para prevenir

y reversar la toxicidad, se administra 1 g/kg disuelto en agua corriente cada

4 a 6 horas durante 24 horas (ver capítulo 1). Es igualmente importante

controlar el vómito con metoclopramida IM ó IV 10 mg cada 6-8 horas.

4. Taquiarritmias: corrección de la hipokalemia y tratamiento con beta

bloqueadores como metoprolol (5 mg IV a razón de 1-2 mg/min repitiendo

cada 5 min máximo hasta 20 mg) o bloqueadores de canales de calcio

como verapamilo (en pacientes asmáticos) 5-10 mg (0.1-0.15 mg/kg) en 2

minutos y 10 mg media hora después si la respuesta no es adecuada.

5. En caso de convulsiones utilizar benzodiazepinas (diazepam o midazolam)

o barbitúricos (fenobarbital), así:

o Diazepam IV: adultos 5-10 mg cada 10-15 min y niños 0.3 - 0.5 mg/kg

cada 5 min a necesidad.

o Fenobarbital: adultos 10-20 mg/kg en 60 mL de solución salina 0.9% a

25-50 mg/kg/min, dosis adicionales de 120 mg cada 20 min; niños 15-20

mg/kg con dosis adicionales de 5-10 mg/kg.

o Para status epiléptico se emplea fenobarbital a 0.5 - 1 mg/kg/h o

midazolam así: 0.2 mg/kg bolo lento (2 minutos) y luego infusión de 0.75-

10 g/kg/min.

6. Si hay hipotensión:

o Bolos de cristaloides de 10-20 mL/kg o titulados para alcanzar una

presión arterial media (PAM) mayor de 55-60 mm Hg.

o Vasopresores como la dopamina o la norepinefrina ajustados para

alcanzar una PAM mayor de 55-60 mm Hg.

7. Para aumentar la eliminación en intoxicaciones graves (convulsiones,

inestabilidad hemodinámica), está indicada la hemoperfusión (carbón

activado o resina) o la hemodiálisis.

Page 181: Para paciente intoxicado

44. INTOXICACIÓN POR QUIMIOTERAPÉUTICOS

Dr. Andrés F. Zuluaga

Descripción: medicamentos empleados para el tratamiento de diferentes tipos

de cáncer. Estos agentes pueden clasificarse en antimetabolitos (metotrexate,

5-fluorouracilo, capecitabina, pentostatina, fludarabina), agentes alquilantes

(busulfán, carmustina, cisplatino, ciclofosfamida, clorambucilo, mecloretamina,

procarbazina), alcaloides (vinblastina, vincristina, paclitaxel, etopósido,

topotecán), antibióticos antitumorales (actinomicina D, doxorubicina,

mitoxantrona, bleomicina), antihormonales (tamoxifeno, ciproterona, flutamida,

anastrozol) y misceláneos (cetuximab, bevacixumab, tretinoína). Estos

fármacos son más propensos a causar toxicidad en personas expuestas debido

a su mecanismo de acción y estrecho margen terapéutico. De hecho, pacientes

que los reciben tienen 10 veces más riesgo de sufrir efectos adversos (por

ejemplo, neutropenia, trombocitopenia, fiebre, entre otros), respecto a la

población no expuesta.

Farmacocinética: estos agentes pueden administrarse por varias rutas,

incluyendo intravenosa (la más usada), intra-arterial, intravesicular,

intracavidad, intra-lesional, tópica y oral. La ruta intratecal se restringe a

metotrexate y citarabina. Las rutas más asociadas con sobredosis son

precisamente la intravenosa, la oral y la intratecal. Algunas características

cinéticas de estos productos se pueden ver en la siguiente tabla:

Agente Vía Vd (L/kg) UP (%) Metabolismo Eliminación Dializable

Busulfán O, IV 0.6-1 3-32 Hepático Renal Si

Clorambucilo O 0.14-0.29 99 Hepático Renal No

Cisplatino IV 0.17-1.47 90 Hidrólisis (NEnz) Renal ND

Ciclofosfamida O, IV 0.34-1.2 12-14 Hepático Renal Si

Doxorubicina IV 25 70-85 Hepático Biliar HemoP

Mitoxantrona IV ND 80 Hepático Biliar>renal No

Metotrexate O, IV, IT 0.4-0.8 50 Hepático Renal > biliar No

5-Fluorouracilo T, IV 0.25 8-12 Hepático Respiratoria, renal ND

Vinblastina IV 27 50-99 Hepático Biliar>renal ND

Vincristina IV 8.4 44 Hepático Biliar>renal ND

Paclitaxel IV 2 90-98 Hepático Biliar>renal ND

Page 182: Para paciente intoxicado

Abreviaturas de la tabla: Vd= volumen de distribución, UP= unión a proteínas, O= oral, IV=

intravenosa, IT= intratecal, T= tópica, ND= información no disponible, NEnz= no enzimática,

HemoP= hemoperfusión

Mecanismo de toxicidad: causan muerte celular por disrupción de la síntesis

de DNA (antimetabolitos), alteración de la estructura de los ácidos nucléicos

(agentes alquilantes) o inhibición de la separación cromosomal mediante una

variedad de mecanismos (alcaloides).

Manifestaciones clínicas: los sitios de toxicidad más comunes son el sistema

hematopoyético y gastrointestinal. En general, puede encontrarse leucopenia

como la manifestación más común de la depresión de la médula ósea inducida

por quimioterapéuticos, aunque también se puede observar trombocitopenia y

anemia. Esto favorece la aparición de infecciones o diátesis hemorrágica

frecuentemente relacionados con la muerte de los pacientes expuestos. El

nadir del recuento leucocitario se presenta entre la 1 y 4 semana de

administración, siendo más precoz con los antibióticos, antimetabolitos y

antimitóticos.

Igualmente, la toxicidad gastrointestinal es muy común. Es frecuente observar

náuseas, vómito y diarrea asociados con la administración de estos productos.

Otro hallazgo común, pero más dañino, es la aparición de gastroenteritis

ulcerativa.

Como puede apreciarse en la siguiente tabla, dependiendo del medicamento

existen diferencias sutiles en el daño que induce sobre cada órgano.

Agente Descripción de Algunas Manifestaciones Tóxicas Exclusivas

Busulfán Fibrosis pulmonar, insuficiencia adrenal (uso crónico). Altas dosis se

relacionan con convulsiones y coma.

Clorambucilo Afecta sistema nervioso: convulsiones, confusión y coma.

Carmustina Hipotensión, sofoco con vasodilatación y taquicardia (bolos IV)

Ciclofosfamida Cistitis hemorrágica

Doxorubicina Cardiotoxicidad (incluso arrtimias) y cardiomiopatía (se co-administra con

dexrazoxano como cardioprotector)

Page 183: Para paciente intoxicado

Dosis tóxica: debido a la altísima toxicidad de estos agentes, incluso la

exposición a dosis terapéuticas debe considerarse como potencialmente

peligrosa.

Estudios de laboratorio: incluyen hemograma con diferencial, recuento

plaquetario, electrolitos, glucosa, BUN y creatinina, enzimas hepáticas y tiempo

de protrombina. Para agentes cardiotóxicos se recomienda electrocardiograma.

Los niveles séricos no se emplean de rutina, excepto en el caso de

metotrexate. Niveles de este fármaco ≥5 mol/L tras 28 horas de exposición se

relacionan con alto riesgo de toxicidad.

Tratamiento:

1. Realizar ABCD.

2. Tratar coma, convulsiones, hipotensión y arrtimias según sea necesario.

3. Tratar náusea y vómito con metoclopramida

4. Reponga la pérdida de líquidos causada por gastroenteritis con fluidos

cristaloides intravenosos.

5. La depresión de la médula ósea requiere manejo por experto (oncólogo,

o en su defecto hematólogo, farmacólogo o toxicólogo), por lo tanto

considere la remisión a nivele superior de atención.

6. Si se observa extravasación, detenga inmediatamente la infusión y retire

tanto líquido como le sea posible mediante presión negativa usando

jeringa. No se recomienda el uso de esteroides.

Mitoxantrona Leucopenia grave (fatal) y cardiomiopatía (reversible)

Metotrexate Tóxico gastrointestinal, abortifaciente. Ácido folínico (leucovorin) es el

antídoto específico

5-Fluorouracilo Síndrome cereberal agudo, angina vasoespástica

Vinblastina Mielosupresión, íleo paralítico, síndrome de secreción inapropiada de

hormona antidiurética

Vincristina Convulsiones tardías (9 días post-administración), delirio, coma. Fatal por

ruta intratecal. El ácido glutámico (500 mg cada 8 horas VO) parece reducir

la neurotoxicidad

Paclitaxel Reacciones de hipersensibilidad (incluso fatales), hipotensión, bradicardia,

arritmias e infarto de miocardio (fatal)

Page 184: Para paciente intoxicado

Dactinomicina, daunorubicina, doxorubicina, idarubicina,

mitoxantrona: aplicar compresas de hielo en el sitio afectado

durante 15 minutos hasta 4 veces al día durante 3 días.

Mitomicina: aplicar compresas calientes en el sitio afectado

durante 15 minutos hasta 4 veces al día durante 3 días.

Mecloretamina (dacarbazina y cisplatino): infiltre el sitio de

extravasación con 10 mL de 2.5% de tiosulfato sódico (para

preparalo diluya 1 mL de 25% de tiosulfato con agua esteril hasta

completar un volumen final de 10 mL).

Etopósido, paclitaxel, vincristina, vinblastina: aplicar compresas

calientes en el sitio afectado durante 15 minutos hasta 4 veces al

día durante 3 días. La administración local (inyección) de

hialuronidasa (150 a 900 unidades) puede ser de utilidad, en caso

de estar disponible.

7. El carbón activado sólo parece tener utilidad en caso de sobredosis por

metotrexate, busulfán, melfalan y clorambucilo. En cualquier caso,

deben seguirse las mismas indicaciones de uso descritas en el capítulo

de manejo general del paciente intoxicado.

8. Si existe y los tiene disponibles, siempre emplee agentes de rescate (o

quimioprotectores) , como se indica:

Metotrexate: ácido folínico (leucovorin®) 15 a 25 mg vía oral ó

hasta 1000 mg/m2 vía intravenosa, cada 6 a 8 horas. Segunda

opción es carboxipeptidasa (sólo disponible en USA bajo el

protocolo del NIH 92-C-0137).

Cisplatino: amifostina (Ethyol®) que primero se reconstituye con

solución de cloruro de sodio 0,9% antes de la administración

endovenosa, adicionando 9,7 mL al vial de 500 mg. No hay una

dosis exacta, pero se han administrado dosis múltiples (hasta tres

veces la dosis única recomendada de 740-910 mg/m2) de manera

segura en un período de 24 horas bajo condiciones de estudio.

Antraciclina y antibióticos: dexrazoxane (cardioxane®), es

empleado como cardioprotector durante la administración de

Page 185: Para paciente intoxicado

doxorubicina (>300 mg/m2) a mujeres con cáncer de seno. Este

agente es un análogo cíclico del EDTA.

Page 186: Para paciente intoxicado

45. INTOXICACIÓN POR LITIO

Dres. Marie C. Berrouet y Carlos F. Molina

Descripción: el litio es un metal con características similares al sodio y al

potasio, pero con un tamaño más pequeño. El carbonato de litio (theralite®) es

un fármaco utilizado como estabilizador del afecto, eficaz para el tratamiento

de trastorno bipolar entre otros desórdenes psiquiátricos, de bajo costo, pero

cuyo rango terapéutico es muy estrecho (0.8 a 1.2 mEq/L), favoreciendo que se

presente con frecuencia toxicidad aguda y crónica. El riesgo de intoxicación

grave aumenta en pacientes con uso crónico, polimedicados, con enfermedad

renal concomitante y en pacientes hiponatrémicos.

Farmacocinética: el carbonato de litio se administra en tabletas de 300 mg

que contiene 8.12 mEq del ión litio. Su absorción comienza rápidamente y tarda

aproximadamente 8 horas en completarse. Ingresa lentamente a los tejidos

(explica el retraso en la aparición de síntomas neurológicos a pesar de la

sobredosis) y tiene un volumen de distribución entre 0.5 y 1.4 L/kg. Tiene una

vida media de 14 a 30 horas. Al no ser metabolizado y no encontrarse unido a

proteínas, es filtrado libremente por los glomérulos renales.

Mecanismo de toxicidad: actualmente no se conoce bien su mecanismo. Una

hipótesis es que actúa como inhibidor no competitivo de la enzima inositol-

monofosfato, disminuyendo los niveles de inositol y afectando todas las vías

activadas por este mensajero. Esta depleción del inositol libre puede llevar a

afectar el metabolismo de otros neurotransmisores (colinérgicos, adrenérgicos

y dopaminérgicos). Cuando hay niveles excesivos de litio se deprime la

transmisión sináptica. Otros consideran que este catión entra a la célula y

sustituye el sodio o potasio, actuando como estabilizador de membrana celular.

Manifestaciones clínicas: el espectro de manifestaciones es muy amplio

desde la toxicidad leve hasta la severa. En casi todos los pacientes, la

intoxicación se desarrolla de manera gradual con un predominio de los

síntomas mentales y neurológicos.

Page 187: Para paciente intoxicado

Toxicidad leve a moderada: se presenta con síntomas gastrointestinales

(náuseas, vómito, dolor abdominal y diarrea) asociado a confusión,

letargo, estupor, temblor, mioclonous, hiperreflexia, fasciculaciones,

ataxia, espasticidad, disartria.

Toxicidad severa: lo anterior más inestabilidad hemodinámica, falla renal

aguda generalmente secundaria a hipovolemia, arritmias, convulsiones,

choque y muerte.

En intoxicaciones crónicas la sintomatología es predominantemente

neurológica, sin síntomas gastrointestinales. Adicionalmente se puede

encontrar hipotiroidismo (50%), miocarditis, anemia aplásica, Parkinson,

alteraciones cognoscitivas, pseudotumor cerebral, diabetes insípida

nefrogénica (20-70%) secundaria a inhibición de la acción de la hormona

antidiurética sobre las nefronas distales, túbulo contorneado distal y túbulo

colector, además puede inducir falla renal, síndrome nefrótico y nefritis

intersticial.

La secuela más importante de una intoxicación por litio es el Síndrome de

Neurotoxicidad Irreversible inducida por Litio (SIN-L), una alteración que se

puede presentar aun con niveles terapéuticos. Los síntomas predominantes

están dados por disfunción cerebelar, síndrome extrapiramidal, disfunción del

tallo cerebral y demencia.

Diagnóstico: sospecha clínica asociada a historia de consumo, con los niveles

de litio en sangre >1.5 meq/L. La litemia debe tomarse siempre después de

transcurridas 12 horas de la ingesta de la última dosis del medicamento o de la

hemodiálisis, para evitar litemias falsamente elevadas.

Gravedad de la intoxicación Niveles séricos de litio (meq/L)

Leve a moderada 1.5 a 2meq/L

Moderada 2 a 2.5 meq/L

Page 188: Para paciente intoxicado

Grave >2.5 meq/L

Pero no se puede establecer una relación muy clara entre las concentraciones

y la severidad de los síntomas, por lo que la guía del tratamiento son las

manifestaciones clínicas.

Se pueden solicitar los siguientes estudios de laboratorio hemograma,

ionograma con calcio y magnesio, glicemia, BUN y creatinina, citoquímico de

orina, TSH, T4 libre, ECG, pH y gases arteriales.

Dosis tóxica: se puede considerar que 20 a 30 tabletas de carbonato de litio

en un adulto y >40 mg/kg en un niño causan toxicidad aguda. La toxicidad

crónica se presenta aun con dosis terapéuticas (cuando las concentraciones

son >1.5 meq/L), especialmente en ancianos, cuando hay depleción de sodio, o

cuando se usa concomitante AINES (excepto la aspirina), diuréticos (tiazídicos),

IECAS, ciclosporina, tetraciclinas, carbamazepina, verapamilo y

metoclopramida, entre otros.

Tratamiento:

1. Realizar ABCD. Administrar oxígeno suplementario.

2. Si ocurren, tratar coma, convulsiones (benzodiazepinas) e hipertermia.

3. Monitoreo electrocardiográfico continuo.

4. En pacientes deshidratados infundir durante 4 horas por vía intravenosa

20 mL/kg de solución salina normal. Una vez el déficit de líquidos ha

sido resuelto, continuar con soluciones hipotónicas (solución salina

0.45%) para evitar la hipernatremia asociada a altas cargas de sodio

usual en pacientes con diabetes insípida nefrogénica inducida por litio.

En caso de presentarse esta última, puede emplearse amilorida a dosis

usuales, debido a que no causa hipokalemia, tiene bajo riesgo de

depleción de volumen y reduce la captación celular de litio por bloqueo

del transportador conocido como canal de sodio sensible a amilorida.

5. En intoxicación aguda, realizar lavado gástrico (ver capítulo 1). En caso

de observarse tabletas en los rayos de abdomen, o en caso de historia

Page 189: Para paciente intoxicado

de ingesta de formas de liberación prolongada se debe administrar

polietilenglicol (ver capítulo 1).

6. No hay antídotos específicos, ni se administra carbón activado. Se debe

evitar la administración de IECAS, AINES y diuréticos tiazídicos, debido

a que reducen la eliminación renal del litio y empeoran la intoxicación

debido a alteraciones del sodio.

7. Si la función renal está normal, corregir hipokalemia según déficit.

CRITERIOS PARA HEMODÍALISIS EN INTOXICACIÓN POR LITIO

Presencia de manifestaciones cardíacas

Presencia de manifestaciones neurológicas

Deterioro clínico progresivo

Falla renal

Litemia > 2.5 meq/L en intoxicación crónica

Litemia > 4 meq/L en intoxicación aguda

Page 190: Para paciente intoxicado

46. INTOXICACIÓN POR SALICILATOS

Dres. Alejandra Restrepo, Andrés F. Velasco y Andrés F. Zuluaga

Descripción: existen en el mercado una gran cantidad de compuestos que

contienen salicilato como principio activo, como el subsalicilato de bismuto

(antiulceroso, Bisbacter®), salicilato de metilo (rubefaciente de uso externo,

Infrarub sport®), acido salicílico (queratolítico, Duoplant®), ácido acetil salicílico

(analgésico y antiinflamatorio, Aspirina®), salicilato de dietilmaina (Reparil

gel®) y salicilato de sodio (Artrifen®).

El ácido acetilsalicílico continúa siendo el analgésico, antiinflamatorio y

antipirético más usado a pesar de la aparición de nuevos fármacos. En el

mercado y sin formula médica se comercializado como aspirina®, mejoral®,

asawin®, rhonalito®, ASA®, cardioaspirina®, ecotrin®, alka-seltzer®

(combinado con ácido cítrico y bicarbonato), aggrenox® (combinado con

dipiridamol), sevedol® o cafialgimid® (combinado con acetaminofén y cafeína),

cafiaspirina® (combinado con cafeína), dolviran® (combinada con cafeína y

codeína). Por el amplio uso de estos fármacos el personal de salud debe estar

familiarizado con dicha intoxicación, la cual puede ser accidental, con fines

suicidas o por inadecuada dosificación en niños o ancianos.

Farmacocinética: tiene una adecuada absorción por el tracto gastrointestinal y

dérmica. Luego de la ingestión de dosis tóxicas la cinética del medicamento

cambia. La absorción es completa luego de 4 horas de ingesta. Cuando se

administran medicamentos con cubierta entérica o de liberación controlada, la

absorción puede prolongarse días a semanas, retrasando la aparición de los

síntomas. La vida media del producto parental es 0.25 horas, mientras para su

metabolito activo (salicilato) es hasta 30 horas, especialmente en casos de

sobredosis. Tiene baja unión a proteínas (50 a 80%). El volumen de

distribución (Vd) es 0.15 L/kg, pero este puede aumentar hasta 0.3 L/kg por la

acidemia que favorece incremento de la fracción no ionizada y mayor

movimiento del medicamento al interior celular. La eliminación en dosis

terapéuticas es de predominio hepático (depuración 3.9 L/h), pero a dosis

Page 191: Para paciente intoxicado

tóxicas la ruta de eliminación renal adquiere importancia. De hecho, la

eliminación renal es dependiente del pH, por lo anterior, es importante

mantener un pH entre 7 y 8 (alcalinizar la orina) para asegurar una mayor

eliminación del fármaco (“trampa iónica”).

Mecanismo de toxicidad: la intoxicación por salicilatos genera varios daños:

Efectos centrales: estimulación central del centro respiratorio

favoreciendo la hiperventilación, con la consecuente alcalosis

respiratoria (disminución del CO2), deshidratación (por aumento de las

pérdidas insensibles a nivel pulmonar) y acidosis metabólica

compensatoria (disminución del HCO3). En los niños el tiempo de

progresión a acidosis metabólica es más rápida que en los adultos.

Otros efectos tóxicos en sistema nervioso varían desde un estado

confusional agudo hasta el coma y edema cerebral. El mecanismo para

explicar estos efectos no está claro del todo, sin embargo el edema

cerebral se le atribuye a la fragilidad capilar y a la alteración en la

integridad de pequeños vasos.

Efectos celulares: desacople de la fosforilación oxidativa en las

mitocondrias, lo que lleva a disminución de la síntesis de ATP, aumento

de la tasa metabólica (e hipertermia secundaria), incrementando el

consumo de oxígeno y producción de CO2. También se produce

disrupción del metabolismo de la glucosa y ciclo de Krebs (ciclo de los

ácidos tricarboxílicos) lo que conlleva acumulación de ácidos orgánicos

como el piruvato, lactato y acetoacetato que favorecen la aparición de

acidosis metabólica que cursa con anion gap alto >14 mEq/L. En este

punto es importante tener en cuenta los siguientes diagnósticos

diferenciales: cetoacidosis diabética, acidosis láctica, intoxicación por

metanol o alcoholes tóxicos, y falla renal.

Efectos gastrointestinales: la ingestión de salicilatos produce vómito,

náuseas y dolor abdominal. Puede ocurrir además hemorragias del

tracto digestivo superior por úlceras gástricas o duodenales. Los

síntomas gastrointestinales son más llamativos en la intoxicación aguda.

Siempre debe considerarse la presencia de hepatitis tóxica.

Page 192: Para paciente intoxicado

Efectos metabólicos y sobre líquidos y electrolitos: otro factor que

potencia la acidosis es el aumento del catabolismo proteico inducido por

aspirina, con incremento de los aminoácidos sanguíneos por inhibición

de las aminotransferasas, favoreciendo además la aminoaciduria. Por el

incremento en la tasa metabólica, la hiperpirexia, la taquipnea y el

vómito, se favorece la pérdida de líquidos y la deshidratación. Además

para tratar de compensar la alcalosis respiratoria se aumenta la

excreción renal de HCO3 (favorece la acidosis), sodio y potasio. Por lo

que además de la deshidratación y acidosis metabólica compensatoria

es común encontrar hiponatremia e hipokalemia.

Efectos hematológicos: inhibición de los factores de la coagulación

vitamina K dependientes (II, VII, IX y X), adicionalmente inhibe el factor

V, lo que explica la prolongación del tiempo de Protrombina (TP).

Además altera la función plaquetaria, prolongando el tiempo de sangría.

Estas dos condiciones favorecen el sangrado local o sistémico.

Efectos pulmonares: edema pulmonar no cardiogénico, relacionado con

el aumento en la permeabilidad capilar de la vasculatura pulmonar. La

aparición de síndrome de dificultad respiratoria del adulto está más

asociado con intoxicación crónica y secreción inadecuada de ADH.

Otros: los salicilatos pueden producir ototoxicidad, la cual según el

tiempo de evolución de la intoxicación podría ser reversible. Se

caracteriza por tinnitus, hipoacusia y vértigo. El desarrollo de falla renal

aguda no es frecuente, la mayoría de las veces es por compromiso

prerrenal secundario a la pérdida de líquidos y suele mejorar con una

adecuada reanimación.

Manifestaciones clínicas: los pacientes pueden intoxicarse luego de una

ingesta aguda accidental o suicida o como resultado de dosis repetidas durante

varios días.

Ingestión aguda: el paciente puede llegar asintomático o presentar

náuseas, vómito, epigastralgia, hematemesis, deshidratación, diaforesis,

tinnitus, hipertermia, taquicardia, taquipnea, disminución del volumen

urinario, letargia, convulsiones o coma. En la medida en que la toxicidad

Page 193: Para paciente intoxicado

se agrave aparecerán hipotensión, arritmias como fibrilación ventricular

o taquicardia ventricular, edema pulmonar, falla ventilatoria,

convulsiones, coma, hipoglicemia e hipertermia. La muerte tras la

intoxicación se debe principalmente a complicaciones neurológicas,

pulmonares y cardiovasculares.

Para fines prácticos las fases de la intoxicación no influyen en el manejo,

de hecho es recomendable un periodo de observación mínimo de 24

horas incluso en pacientes que consultan asintomáticos.

Ingestión crónica: la presentación e instauración del cuadro clínico es

inespecífica y larvada, por lo que el diagnóstico suele ser pasado por

alto o atribuirse a otras causas como sepsis, neumonía o alteraciones

gastrointestinales. Los pacientes se presentan con deshidratación,

acidosis metabólica y algo que es característicos son las alteraciones en

la esfera mental (confusión, desorientación, alucinaciones, letargo,

convulsiones o coma). En esta toxicidad es más frecuente la aparición

de edema pulmonar y edema cerebral.

Diagnóstico: En la mayoría de los casos la información se obtiene del

paciente, quien informa la cantidad de tabletas ingeridas. En caso de

inconsciencia, se debe solicitar a familiares o acudientes información sobre

antecedentes personales y familiares, médicos y farmacológicos, para

determinar los medicamentos a los cuales está expuesto y si es necesario traer

al servicio de urgencias tabletas, blister o empaques de medicamentos que

hayan encontrado cerca del paciente. Se cuenta además con parámetros en el

examen clínico del paciente como el aumento en la frecuencia respiratoria,

hipertermia, diaforesis, vómito, epigastralgia, hiperventilación, acidemia

metabólica con o sin alcalosis respiratoria (si se cuenta con pH y gases

arteriales). Es importante considerar la coingesta de más de una sustancia que

puede enmascarar el cuadro clínico (por ejemplo, medicamentos que también

contienen opiáceos).

Page 194: Para paciente intoxicado

Se recomienda la medición de niveles de salicilato en plasma. Estos pueden

determinarse de forma cualitativa (métodos colorimétricos, ver capítulo de

pruebas rápidas) o cuantitativa (Cromatrografía Líquida de Alta Precisión). En

el Laboratorio de Farmacología y Toxicología de la Facultad de Medicina,

Universidad de Antioquia, se dispone de estos métodos, sin embargo no se

debe esperar a obtener los resultados para instaurar el tratamiento inicial.

Igualmente, se recomienda tomar mediciones seriadas de niveles séricos por la

posibilidad de ingesta de formulaciones de liberación controlada que

expresarán elevaciones tardías.

Los niveles terapéuticos de salicilato oscilan entre 15 – 30 mg/dL. Niveles >60

mg/dL se acompañan de alteraciones ácido-base y compromiso de la esfera

mental. Salicilemia >90 mg/dL se asocia con toxicidad grave.

Se ha utilizado el nomograma de Done para definir la severidad de la

intoxicación según la salicilemia, sin embargo este nomograma tiene sus

limitaciones, no aplica en toxicidad crónica y además, en nuestro medio,

preferimos iniciar el manejo ante la sospecha clínica.

Es conveniente solicitar al ingreso hemograma, plaquetas, ionograma con

calcio y magnesio, CK total (rabdomiólisis por la hipertermia), pH y gases

arteriales, medir anión-gap, TP, TPT, BUN, creatinina, glicemia, AST, ALT,

citoquimico de orina para evaluar sedimento urinario, ECG 12 derivaciones,

radiografía de tórax.

Se debe considerar realizar endoscopia digestiva superior o colonoscopia

según otras co-morbilidades del paciente, en presencia de sangrado digestivo.

Estudio de LCR si es necesario descartar otra causa como responsable de las

alteraciones neurológicas.

Dosis tóxica: Debe hospitalizarse todo paciente que ingiera una cantidad

mayor o igual a 150 mg/kg.

Page 195: Para paciente intoxicado

Dosis ingerida (mg/kg) Clasificación de la intoxicación

aguda

150 a 200 Leve

200 a 300 Moderada

300 a 500 Grave

>500 Potencialmente letal

Es importante conocer la presentación comercial que ingirió el paciente para

determinar de una manera exacta o aproximada la dosis (en mg/kg). La tasa de

mortalidad luego de una sobredosis aguda es inferior al 2 %.

La toxicidad crónica ocurre luego de la ingestión de >100 mg/kg/día, por más

de dos días. La tasa de mortalidad en intoxicaciones crónicas asciende hasta el

25%.

Tratamiento:

1. Realizar ABCD.

2. Lavado gástrico (ver recomendaciones del capítulo 1)

3. Administrar carbón activado (ver recomendaciones del capítulo 1).

4. El uso concomitante de soluciones de irrigación gastrointestinal

(polietilenglicol) favorece la eliminación en los casos de bezoar y

tabletas con cubierta entérica.

5. Administra catártico siempre que se use carbón activado en dosis

repetidas, ver recomendaciones capitulo Manejo general del paciente

intoxicado.

6. Tratar la deshidratación. Realizar adecuada reanimación con líquidos

endovenosos (cristaloides) al mismo tiempo que se vigila estrictamente

la diuresis del paciente para evitar la sobrecarga hídrica. Durante las

primeras 2 horas se recomienda iniciar con 10 a 15 mL/kg/hora y

continuar con 2000 a 6000 mL por m2 de superficie corporal (SC =

[(peso x 4) + 7] / (peso + 90)) hasta completar 24 horas, de tal manera

que se mantenga un gasto urinario de 3 a 6 mL/kg/hora.

Page 196: Para paciente intoxicado

7. No existe un antídoto específico para esta intoxicación. Sin embargo, el

bicarbonato de sodio IV se usa para corregir la acidosis metabólica

(mantener pH plasmático alrededor de 7.4) y para potenciar la

eliminación del fármaco por orina.

8. Manejar de la hipertermia con medidas locales como compresas de

agua fría, ventiladores, etc.

9. Según la severidad de la prolongación del TP y manifestaciones

hemorrágicas asociadas, se indica el uso de vitamina K o plasma fresco

congelado en caso de sangrado que amenace la vida.

10. Manejar convulsiones con diazepam 5 a 10 mg IV (niños: 0.2-0.5 mg/kg)

y repetir cada 5 minutos si es necesario.

11. Si hay hipocalcemia, gluconato de calcio al 10%, 0.1-0.2 mL/kg.

12. Si hay coma o convulsiones con insuficiencia respiratoria se debe iniciar

respiración asistida.

13. En caso de hipoglicemia administrar DAD 5 ó 10 % según la cantidad de

volumen requerido.

Alcalinización urinaria: permite disminuir la reabsorción tubular del salicilato y

aumenta la secreción de salicilato libre en el túbulo proximal, sin forzar la

diuresis.

La alcalinización puede realizarse de dos formas:

1.1. Se administra Bicarbonato de Sodio de 1 a 2 mEq/kg diluido en 125 mL de

Solución salina al 0.9% y completar hasta 500 mL con DAD 5%, la mitad de

este volumen (250 mL) se pasan en 1 hora y la otra mitad a goteo para 3 horas.

Monitorizando el pH urinario con el fin de mantenerlo entre 7 -8.

1.2. Luego de un bolo de 1 – 2 mEq/Kg, adicionar 10 ampollas de Bicarbonato

de Sodio (100 mEq en 100 mL ) a 1 Litro de DAD 5%, quedando 10 mEq por

Litro de solución. Se inicia la infusión IV a 200 mL/hora ( 20 mEq/ hora),

mientras se monitoriza el pH urinario. Es importante tener en cuenta que antes

de administrar bicarbonato se debe obtener un adecuado nivel de hidratación,

puesto que la administración de altos volúmenes de líquidos y de bicarbonato

puede precipitar un edema pulmonar especialmente en pacientes con toxicidad

Page 197: Para paciente intoxicado

crónica. En pacientes deshidratados pasar cristaloides de 10 a 15 mL/kg por

hora durante dos horas, antes de administrar el bicarbonato de sodio.

1.3. Recordar que la acidemia metabólica induce una falsa hiperkalemia por la

salida de K+ desde el interior de la célula. Cuando el gasto urinario está en el

rango normal (0.5 a 2 mL/Kg/hora) se debe suministrar 20 a 40 mEq de potasio

por litro de la solución (1 a 2 ampollas por Litro), realizando control de

ionograma. La hipokalemia evita que se logre la alcalinización urinaria, puesto

que en este caso se reabsorbe a nivel renal K+ con Na+, dejando los

hidrogeniones en los túbulos renales.

2. Hemodiálisis

Efectiva para una rápida eliminación del salicilato y para la corrección de

trastornos ácido-base y sobrecarga hídrica.

Las indicaciones para hemodiálisis son:

ingestión aguda con niveles plasmáticos > 100 mg/dL con acidemia

metabólica acompañada o no de otras manifestaciones clínicas.

Ingestión crónica con niveles plasmáticos > 60 mg/dL, acompañado de

acidemia, confusión o letargia, especialmente si se trata de paciente

anciano.

Cualquier paciente con manifestaciones clínicas severas que no

responden al manejo convencional.

Insuficiencia renal que no responde a la reanimación con líquidos.

3. Hemoperfusión

Es efectiva en aumentar la eliminación del salicilato pero no corrige los

trastornos ácido-base ni hidroelectrolíticos.

Page 198: Para paciente intoxicado

47. ACCIDENTE OFIDICO BOTHROPICO Y LACHESICO

Dras. Alejandra Restrepo y Lina Peña

Descripción: 90 a 95% de los accidentes ofídicos en Colombia son producidos

por la Familia Viperidae, subfamilia Crotalinae y los géneros Bothrops atrox y

Bothrops asper (mapaná, mapaná X, "X", Talla X, cuatronarices), Bothrops

punctatus (rabo de chucha, mapaná rabiseca), Porthidium nasutum (patoco,

patoquilla, veinticuatro, sapa), Porthidium lansbergii, Bothriechis schlegelii

(víbora de tierra fría, cabeza de candado, víbora de pestaña, granadilla) y

Lachesis muta (verrugoso, rieca), serpientes que habitan en el bosque húmedo

tropical y subtropical.

La mayoría de los accidentes se producen en personas entre los 15 y 44 años,

afectando principalmente las extremidades inferiores.

Mecanismo de toxicidad: el veneno es una mezcla de más de 50 sustancias

entre las que se destacan las hemorraginas, miotoxinas, fosfolipasa A2,

proteasas, inhibidores de la enzima convertidora de angiotensina, entre otras,

las cuales tienen efectos miotóxico, hemorrágico, procoagulante,

desfibrinizante, nefrotóxico y necrotizante, generando diferentes grados de

toxicidad local o sistémica.

Manifestaciones clínicas: los accidentes se pueden clasificar según sus

manifestaciones clínicas en leve, moderados y graves y a su vez pueden ser

locales o sistémicos. Siempre se clasificará y tratará según el mayor grado de

gravedad local o sistémica.

Page 199: Para paciente intoxicado

CLASIFICACION LOCAL- SISTÉMICO

CLASIFICACIÓN LOCAL SISTÉMICO

LEVE

Edema: máximo dos segmentos de

la extremidad. No compromiso del

tronco

Diferencia de diámetro comparativo:

Menor o igual a 4 cm

No necrosis

Flictenas escasas o ausentes

Sangrado local escaso o ausente

No sangrado

No compromiso hemodinámico

No complicaciones

Valor de TP, TPT normal

MODERADO

Edema: 3 o más segmentos sin

compromiso del tronco

Diferencia de diámetro comparativo:

mayor de 4 cm

Hemorragia local activa

Flictenas hemorrágicas

No necrosis

Gingivorragia, hematuria o

sangrado por heridas recientes

No sangrado en SNC

No compromiso hemodinámico

TP, TPT prolongados

GRAVE

Edema: 3 o más segmentos con

compromiso de tronco, cara o

cuello

Necrosis

Ofidio mayor de 1m

Todos los accidentes por Lachesis

muta

Compromiso hemodinámico

Complicaciones como CID, falla

renal aguda, sangrado del SNC

Tiempos de coagulación

infinitos

El accidente lachésico es similar en la fisiopatología al bothrópico, estas

serpientes pueden alcanzar pueden alcanzar hasta 2.5 metros de longitud con

mayor capacidad de inoculación y adicionalmente se han descrito

manifestaciones neurotóxicas de excitación vagal como bradicardia, diarrea y

dolor tipo cólico. Todo accidente lachésico debe ser manejado igual al

bothrópico grave.

Page 200: Para paciente intoxicado

Diagnóstico y pruebas de laboratorio:

Prueba del todo o nada: En un tubo seco, tapa roja se introducen 5 mL de

sangre del paciente, se deja durante 20 minutos en reposo en posición vertical,

luego de este tiempo se verifica si hay o no formación de coagulo mediante

movimientos oscilantes hacia la posición horizontal. La formación de un

coágulo firme, se interpreta como COAGULABLE, en caso que no se forme

coágulo o este sea friable se interpreta como NO COAGULABLE.

Una prueba del todo o nada, interpretada como NO COAGULABLE, permite

apoyar el diagnóstico de mordedura por serpiente de la familia Viperidae, que

debe complementarse con los demás signos y síntomas.

ADVERTENCIA: se puede tener una prueba del todo o nada no coagulable,

con TP y TPT normales, dado el carácter inespecífico y general al evaluar la

coagulación que tiene esta técnica.

Adicionalmente se debe pedir en accidente ofídico TP, INR, TPT, hemograma,

recuento de plaquetas, fibrinógeno, dímero D, VSG, ionograma, BUN,

creatinina, CK total, citoquímico de orina, PCR, pH y gases arteriales. Rayos x

de tórax en caso de dificultad respiratoria para descartar SDRA. Tomografía

Computarizada de Cráneo Simple en caso de convulsiones para descartar

sangrado en SNC

Tratamiento: la medida salvadora en pacientes con ofidiotoxicosis es la

aplicación del suero antiofídico, es por esto que la atención médica es

prioritaria con el fin de no retrasar su aplicación.

A. Medidas prehospitalarias

1. Inmovilizar la extremidad en posición neutral.

2. Consultar rápidamente al hospital o centro de salud más cercano para iniciar

manejo antidotal.

3. No realizar incisiones en el sitio de la mordedura.

3. No utilizar torniquete.

4. No succionar la herida.

5. No administrar bebidas que contengan etanol o hidrocarburos como petróleo.

6. No poner emplastos en el sitio de la mordedura.

Page 201: Para paciente intoxicado

7. No aplicar hielo local.

8. No inyectar nada en el sitio vecino a la mordedura (petróleo).

9. No consultar curanderos ni empíricos.

A. Medidas hospitalarias

Tratamiento específico:

1. Se deben canalizar dos venas, una para el suministro de líquidos y la

otra para el antiveneno.

2. Iniciar la infusión del antiveneno (monovalente o polivalente) sin previa

prueba de sensibilidad, todo paciente se considera reactor potencial. Se

diluye cada ampolla del antiveneno liofilizado en los 10 mL de agua

destilada que provee el fabricante, y se agregan las ampollas requeridas

a una bolsa de solución salina isotónica (250 mL para adultos y 100 mL

para niños) y se inicia el goteo a una velocidad de 10 - 15 gotas por

minuto, si en 10 minutos no hay reacciones, se calcula para finalizar la

infusión en 30 - 60 minutos. La dosis varía según la clasificación del

envenenamiento así: LEVE: 3 ampollas, MODERADO: 6 ampollas,

GRAVE: 9 ampollas (en caso de mordedura por Bothrops > 1m o

verrugoso, aplicar 9 ampollas).

3. Si ocurre una reacción, durante la infusión del antiveneno se cierra el

goteo y se administra adrenalina 1:1000 (ampolla 1 mg/mL) por vía

subcutánea (0.01 mg/kg en niños y 0.2 - 0.5mg en adultos) o por vía

intravenosa diluido 1:10000 (0.1 mg/mL) a igual dosis, si la reacción es

grave. Adicionalmente debe administrar un esteroide por la ruta IV,

equivalente a 100 - 200 mg de hidrocortisona cada 6 horas, por 24 horas

y un antihistamínico por la ruta IV. Si la reacción persiste se instala una

infusión de adrenalina (1 mg diluido en 250 de solución salina fisiológica:

4 g/ ml) para pasar un mL/min, cuando mejore o desaparezca la

reacción, se reinicia el goteo de antiveneno para terminar de pasarlo en

1 - 2 horas, por una línea venosa diferente a la de los líquidos y de la

adrenalina.

Medidas de soporte:

Page 202: Para paciente intoxicado

1. Corregir la hipovolemia: si existe hipotensión o choque, administrar

oxígeno (si saturación <92%) y cristaloides (solución salina o lactato

de Ringer) a 10 - 30 mL/kg a chorro. Repetir si es necesario, si no

hay mejoría se administran coloides y si no responde se deben

administrar inotrópicos. Corregida la hipovolemia se dejan líquidos de

reposición. Si hay rabdomiolisis, se debe mantener una diuresis de 3

mL/kg/h.

2. Analgesia: deben evitarse AINES, ASA (por sus efectos sobre las

plaquetas), u otros analgésicos por vía intramuscular, se recomienda

el uso de acetaminofén vía oral o tramadol IV.

3. Aplicar el toxoide tetánico con o sin antitoxina de acuerdo al estado

de inmunización del paciente y cuando las pruebas de coagulación

se hayan normalizado.

4. Inmovilizar a la víctima en una posición cómoda con la extremidad al

nivel de la cama.

5. Remoción de joyas, ropa, y todo tipo de elementos que puedan

actuar como torniquete.

6. Lavado del sitio de la mordedura con agua o solución salina y jabón

antiséptico, y cubrir sin compresión con gasas limpias humedecidas

con solución salina.

7. Drenaje diario de las flictenas con jeringa estéril, previa asepsia y

cultivo del líquido drenado.

8. Evitar inyecciones intramusculares en las primeras 24 a 48 horas,

para no producir hematomas.

9. Evitar el consumo de estimulantes o depresores como etanol.

Evolución y seguimiento del paciente:

1. Control de signos vitales: evaluación de pulsos periféricos, diuresis,

progresión del edema, sangrado local y sistémico cada hora durante

las primeras seis horas, y luego cada 6 horas al menos por 48 horas.

2. Controles de coagulación, plaquetas y función renal a las 12, 24, 48 y

72 horas de iniciado el tratamiento.

Page 203: Para paciente intoxicado

3. Una adecuada respuesta terapéutica debe reflejarse en la cesación

del sangrado local y sistémico en las primeras 12 horas. Los

parámetros de la coagulación deben normalizarse en más del 50 %

de los pacientes en 12 horas y en el 95 % - 100 % de los casos en 24

horas. Se recomienda una dosis adicional de antiveneno (2 - 3

ampollas), si en 12 horas no ha cesado el sangrado (excepto la

hematuria), o si en 24 horas no se han normalizado las pruebas de

coagulación.

4. El edema cesa en las primeras 24 horas en el 80% de los casos y en

48 horas en el 100% de los casos. La progresión del edema en las

primeras 24 horas, no es criterio para recomendar dosis adicionales

de antiveneno.

5. Las plaquetas y los niveles de CK deben normalizarse en 3 - 5 días.

6. El deterioro neurológico (focalización, convulsiones, deterioro del

estado de conciencia), puede significar una hemorragia en el sistema

nervioso central, esta puede necesitar drenaje, previa certeza de la

normalización de las pruebas de coagulación o la aplicación de

plaquetas, crioprecipitado y plasma fresco congelado.

7. Los pacientes anémicos (hemoglobina < de 7g/dL) o con choque

hipovolémico, pueden requerir transfusión. Los hemoderivados

siempre que se requieran deben administrarse solo después de

haber aplicado el antiveneno.

8. Síndrome compartimental. En caso de sospecha administrar manitol

al 20%, 5 mL/kg IV en una hora, si no hay mejoría de las

manifestaciones o si hay empeoramiento, debe considerarse la

realización de las fasciotomía.

9. El debridamiento de áreas de necrosis se debe realizar después del

quinto día del envenenamiento

10. Antimicrobianos. No se recomienda el uso de antibióticos

profilácticos de rutina independiente de la gravedad del accidente,

puesto que la incidencia global de infecciones asociadas al accidente

ofídico se encuentra entre el 5 y 18 %. Cuando éstas se presentan

suelen aparecer después del tercer o cuarto día del accidente, y ante

la sospecha clínica o paraclínica de infección, se recomienda tomar

Page 204: Para paciente intoxicado

una muestra del contenido de las flictenas obtenido por aspiración

con aguja estéril previa asepsia local y enviar la muestra para

coloración de Gram y cultivo. Idealmente en este caso se debe

remitir el paciente a un nivel de atención de mayor complejidad.

11. En caso de no ser posible la remisión y ante la evidencia de

infección inicie antibioticoterapia en dosis terapéuticas y no con fines

profilácticos, con cubrimiento para bacilos Gram negativos,

anaerobios y cocos gram positivos. Se debe evitar agentes

nefrotóxicos como aminoglicósidos.

Las alternativas en su orden son:

- Ciprofloxacina + Clindamicina

- Ciprofloxacina + Cefalosporina de 3a generación

- Clindamicina + Cefalosporina 3a generación

- Ampicilina/sulbactam, no debe usarse como monoterapia por la

resistencia intrínseca de Morganela morganii (AmpC+),

enterobacteriacea prevalente en este tipo de infecciones.

12. Nuevas dosis de antiveneno: se aplican 3 ampollas diluidas como se

explicó anteriormente cuando:

a. Hay sangrado local o sistémico (excepto hematuria, la cual puede

durar hasta 1 semana), luego de 12 horas de la última aplicación

del antiveneno.

b. Tiempos de coagulación (TP, TPT) prolongados luego de 24

horas de la aplicación de la última dosis de antiveneno.

c. ADVERTENCIA: no utilizar otros criterios (edema que no mejora,

prueba del todo o nada persiste no coagulable antes de 24 horas

de aplicado el antiveneno) para aplicar dosis adicionales de

antiveneno, diferentes al esquema explicado previamente, con el

objetivo de minimizar el uso excesivo o irracional del antiveneno

y el riesgo de reacciones adversas.

13. Otros.

- Protección gástrica con omeprazol oral o ranitidina oral o venosa

- Vía oral según la condición del paciente

Consideraciones para la remisión de los pacientes:

Page 205: Para paciente intoxicado

Por favor especificar en la remisión:

1. Hora y fecha del accidente.

2. Realización de medidas prehospitalarias, especificando cuáles.

3. Hora y fecha de ingreso al primer sitio de atención.

4. Hora y fecha de aplicación del antiveneno

5. Número de ampollas aplicadas y marca ( INS, Probiol o Bioclon).

6. Medicamentos administrados (antibióticos, analgésicos, manitol,

líquidos IV) con sus respectivas rutas y dosis.

Page 206: Para paciente intoxicado

48. ACCIDENTE OFIDICO ELAPIDICO

Dras. Alejandra Restrepo y Lina Peña

Descripción: 0.8% de los accidentes ofídicos en Colombia son producidos por

la Familia Elapidae, subfamilia Elapinae y los géneros Micrurus mipartitus (coral

rabo de ají, cabeza de chocho, rabo de candela) y Micrurus dumerilii. Habitan

en todos los climas especialmente en zonas caficultoras. Las mordeduras

ocurren con más frecuencia en manos o pies y la serpiente suele quedarse

adherida al sitio de la mordedura, debido a su limitada apertura oral.

Mecanismo de toxicidad: el veneno de esta familia es principalmente

neurotóxico tanto pre- como post-sináptico

CLASIFICACION DEL

ENVENENAMIENTO

MANIFESTACIONES CLÍNICAS

LEVE

Dolor local, parestesias y mínimo edema en el sitio

de mordedura.

No hay signos de sangrado, equimosis, ni flictenas

MODERADO

Luego de 2 horas aparece las manifestaciones

paralíticas con compromiso progresivo y

descendente de pares craneanos:

Visión borrosa, diplopía, ptosis palpebral,

oftalmoplejia, sialorrea, disfagia, voz débil.

Puede haber dificultad para caminar

GRAVE

Todo lo anterior más pérdida del equilibrio, dificultad

para la marcha, debilidad de músculos respiratorios,

que puede evolucionar a parálisis del diafragma y

paro respiratorio

Page 207: Para paciente intoxicado

Por la gravedad de este envenenamiento el cual es potencialmente mortal,

todos los pacientes deben ser remitidos al hospital o centro de salud más

cercano.

Diagnóstico y pruebas de laboratorio: el diagnóstico es netamente clínico, la

historia del paciente (identificación de la serpiente) y manifestaciones clínicas

(ver tabla) nos hacen sospechar el envenenamiento por serpientes del grupo

coral.

Se deben solicitar hemograma, recuento de plaquetas, VSG, ionograma, BUN,

creatinina, CK total, citoquímico de orina, pH y gases arteriales.

Rayos X de tórax para descartar SDRA asociado.

Tratamiento:

A. Medidas prehospitalarias

1. Inmovilizar la extremidad en posición neutral.

2. Consultar rápidamente al hospital o centro de salud más cercano para

iniciar manejo antidotal.

3. No realizar incisiones en el sitio de la mordedura.

4. No utilizar torniquete.

5. No succionar la herida.

6. No administrar bebidas que contengan etanol o hidrocarburos como

petróleo.

7. No poner emplastos en el sitio de la mordedura.

8. No aplicar hielo local.

9. No inyectar nada en el sitio vecino a la mordedura (petróleo).

10. No consultar curanderos ni empíricos.

B. Medidas hospitalarias

1. Realizar ABCD.

1. Manejo en Unidad de Cuidados Intensivos por el riesgo de parálisis

respiratoria y necesidad de ventilación mecánica.

2. Canalizar 2 venas: una para los LEV y otra para el antiveneno

Page 208: Para paciente intoxicado

3. Corregir la hipovolemia: si existe hipotensión o choque, administrar

oxígeno (si saturación <92%) y cristaloides (solución salina o lactato de

Ringer) a 10 - 30 mL/kg a chorro. Repetir si es necesario, si no hay

mejoría se administran coloides y si no responde se deben administrar

inotrópicos. Corregida la hipovolemia se dejan líquidos de reposición.

4. Terapia Antidotal.

Todos los accidentes por corales se tratarán como graves, por lo que se

administran 5 a 10 ampollas de antiveneno monovalente anticoral, del

instituto Clodomiro Picado de Costa Rica o del instituto Butantan de

Brasil. Idealmente se debe utilizar en las primeras 4 horas posteriores al

accidente, pero se ha demostrado eficacia hasta 24 horas después.

Se diluyen en 250 mL de Solución salina normal 0.9% en adultos y en

100 mL de la misma solución en niños. Se inicia goteo 10 gotas por

minuto; si en 15 minutos no se presenta reacción terminar de administrar

en 30 – 60 minutos. En caso de Reacciones Adversas Tempranas,

suspender infusión y seguir el mismo esquema explicado en accidente

ofídico bothrópico y Lachésico.

5. Administrar toxoide tetánico IM teniendo las misma consideraciones que

en el accidente ofídico bothrópico y Lachésico.

6. No requieren tratamiento antibiótico pues la inoculación bacteriana por

estas serpientes es escasa y la incidencia de complicaciones infecciosas

asociadas es sólo del 3 %.

Consideraciones para la remision de los pacientes:

Las mismas que en el accidente ofídico Bothrópico y Lachésico

Page 209: Para paciente intoxicado

49. ACCIDENTE CROTÁLICO

Dras. Alejandra Restrepo y Lina Peña

Descripción: los accidentes crotálicos en nuestro medio son raros y son

producidos por la Crotalus durissus terrificus (cascabel colombiana), serpiente

que habita zonas de bosque seco o semiseco tropical, particularmente en el

litoral Caribe, los valles de bajo y alto Magdalena y los Llanos Orientales. Los

accidentes en Antioquia se producen principalmente en los “culebreros”.

Mecanismo de toxicidad: en los accidentes por este género se presentan

pocos efectos locales, pero potentes sistémicos ocasionando miotoxicidad,

alteraciones hemostáticas, nefrotoxicidad y neurotoxicidad. Esta serpiente

posee el veneno más letal de todos los venenos de serpientes terrestres

colombianas.

Manifestaciones clínicas: localmente se produce dolor, edema moderado,

hemorragia local sin flictenas ni necrosis.

Se presentan mialgias, mioglobinuria, anuria, alteraciones de los tiempos de

coagulación, ptosis palpebral, visión borrosa, diplopía, oftalmoplejía, disartria y

rápidamente evoluciona a parálisis con paro respiratorio.

El envenenamiento es leve cuando sólo hay manifestaciones locales, sin

compromiso renal, hematológico o neurológico. Es moderado cuando hay

manifestaciones locales, hematológicas con o sin ptosis palpebral y es grave

cuando además de todo lo anterior hay falla renal, mioglobinuria o falla

ventilatoria.

Para fines prácticos todos los accidentes crotalicos serán tratados como

moderados o graves

Diagnóstico y pruebas de laboratorio: la historia clínica del paciente (la

identificación de la serpiente, sonido del cascabel) y las manifestaciones

clínicas nos permiten orientar el diagnóstico.

Page 210: Para paciente intoxicado

Se deben solicitar TP, INR, TPT, hemograma, recuento de plaquetas,

fibrinógeno, dímero D, VSG, ionograma, BUN, creatinina, CK total, citoquímico

de orina, PCR, pH y gases arteriales. Rayos X de tórax en caso de dificultad

respiratoria para descartar SDRA. Tomografía Computarizada de Cráneo

Simple en caso de convulsiones para descartar sangrado en SNC.

Tratamiento:

A. Medidas prehospitalarias

Las mismas que para el accidente Bothrópico y Lachésico

B. Medidas hospitalarias

Son las mismas que en el accidente ofídico Bothrópico y Lachésico, con

algunas consideraciones especialmente en la dosis del antiveneno:

1. Hospitalizar en Unidad de Cuidados Intensivos por el riesgo de falla

ventilatoria.

2. Antídoto: administrar antiveneno polivalente (INS o Bioclon) o el

anticrotalico del instituto Butantán de Brasil, los que neutralizan entre 10

– 15 mg de veneno de C durissus por cada 10 mL. El polivalente de

Probiol neutraliza menos de 10 mg de veneno.

Los accidentes moderados se tratarán con 10 ampollas y los graves con

20 ampollas. La dilución y la infusión es la misma que en el accidente

ofidico Bothrópico y Lachésico. Tampoco se requiere prueba de

sensibilidad. En caso de Reacciones Adversas Tempranas seguir las

indicaciones descritas en el accidente ofidico Bothrópico y Lachésico.

Seguimiento y consideraciones:

Los mismos que en el accidente ofídico Bothrópico y Lachésico.

Page 211: Para paciente intoxicado

50. ACCIDENTE POR ABEJAS

Dres. Alexis Santamaría y Lina Peña

En Colombia, la población apícola actual está constituida por híbridos entre las

abejas alemanas (Apis mellifera mellifera), italianas (Apis mellifera ligustica) y

africanas (Apis mellifera adansonii o scutellata). La abeja africanizada, es un

híbrido obtenido del cruce de las abejas europeas y las africanas, que

actualmente se encuentra en toda América.

Dosis tóxica: la respuesta tóxica es muy variable según la susceptibilidad

individual, pero 50 picaduras se consideran tóxicas y 500 letales.

Mecanismo de toxicidad: las abejas hembras adultas (obreras) poseen un

aguijón venenoso al final del abdomen capaz de perforar la piel de animales

superiores. Es un órgano netamente defensivo que se encuentra unido al

abdomen, conformado por un aparato perforador consistente en dos dardos

que poseen unas pequeñas barbas que impiden que salga el aguijón una vez

introducido en la piel, desprendiéndose del cuerpo del insecto y ocasionando la

muerte del mismo en pocos segundos. Anexos al aguijón se encuentran los

sacos de veneno, conformados por un músculo que una vez estimulado o

comprimido continúa contrayéndose por sí solo facilitando así la inoculación del

veneno.

El veneno de las abejas es una mezcla de sustancias como fosfolipasa A,

hialuronidasa, fosfatasa ácida, histidina, histamina, melitina, apamina, péptido

degranulador de mastocitos, adolapsina, etc., capaces de producir lesiones

tanto locales como sistémicas.

La hialuronidasa tiene efectos alergénicos, líticos y aumenta la

permeabilidad vascular.

Las fosfolipasas presentes en el veneno, son alergénicas y trabajan

colaborativamente con las fosfolipasas para producir la lisis celular.

La histamina tiene propiedades vasoactivas, produce dolor y edema.

La melitina es uno de los principales alergénicos del veneno.

Page 212: Para paciente intoxicado

La apamina se comporta como neurotoxina de acción motora

produciendo excitabilidad y un efecto cardioestimulante parecido al de

los medicamentos agonistas adrenérgicos y tiene propiedades

hemolíticas.

El péptido degranulador de mastocitos es uno de los responsables de la

liberación de histamina y serotonina en las personas picadas.

Manifestaciones clínicas: las reacciones desencadenadas por picaduras de

abejas son variables, de acuerdo con el sitio, el número de picaduras, las

características y la susceptibilidad del paciente.

Dichas reacciones se pueden ser:

- Manifestaciones locales: son reacciones no alérgicas que ocurren por los

efectos inflamatorios locales de los componentes del veneno de la abeja en

el tejido celular subcutáneo y la piel. Generalmente se observa un habón

eritematoso acompañado de dolor, irritación y prurito en el sitio de la

picadura. Estos síntomas se resuelven en 12 – 24 horas. Esta reacción local

puede ser peligrosa por sí sola, cuando está localizada alrededor de los

ojos, la nariz, la boca y la garganta ya que el edema local puede provocar

obstrucción de la vía respiratoria.

- Manifestaciones sistémicas: un adulto requiere por lo menos 50 a 100

picaduras en un tiempo corto para desarrollar un envenenamiento

sistémico. Las manifestaciones clínicas incluyen: cefalea, vómito, diarrea,

hipotensión, hemoglobinuria, rabdomiolisis, falla renal, miocarditis, arritmias,

infarto del miocardio, convulsiones y coma. Ocasionalmente produce edema

cerebral, desmielinización periférica y neuropatía posterior.

- Reacciones por hipersensibilidad: ~1% de la población es hipersensible al

veneno de las abejas y para estas personas, una sola picadura puede ser

mortal; la susceptibilidad es mayor en niños. La incidencia de reacciones

sistémicas alérgicas después de picaduras por himenópteros, varía en la

población general entre 0.1 y 3%. Los individuos que han presentado una

reacción anafiláctica a las picaduras de himenópteros, tienen un riesgo del

35-60% de presentar anafilaxis ante picaduras futuras. En estas, la reacción

a las proteínas del veneno no depende de la dosis, es mediada por IgE y

Page 213: Para paciente intoxicado

una sola picadura puede ocasionar una grave reacción en el sujeto

sensibilizado. Esta reacción de hipersensibilidad puede ser local o sistémica

y es importante aclarar que las grandes reacciones locales no son

predictivas de progresión a reacción sistémica. Las picaduras en cabeza y

cuello son más propensas a generar reacciones sistémicas que las de las

extremidades. La reacción sistémica de hipersensibilidad ocurre

aproximadamente a los 30 minutos de la picadura e incluye respuestas

cutáneas, respiratorias y cardiovasculares. En estos casos se describe

angioedema e incluso urticaria generalizada. La causa de muerte

usualmente es la obstrucción respiratoria, el colapso cardiovascular o

ambos. Los componentes necesarios de la respuesta anafiláctica son:

Un antígeno sensibilizante introducido previamente: la incidencia de

sensibilización alérgica ocurre en más del 30% de los individuos que son

picados y desaparecen 2-3 años después de la picadura en el 40% de

los casos.

Una respuesta por anticuerpos IgG que sensibilizan los mastocitos y los

basófilos.

Reexposición al antígeno mediante picaduras.

Degranulación de mastocitos y liberación de mediadores como

histamina.

- Enfermedad del suero: puede aparecer una o dos semanas después de un

ataque y se manifiesta por fiebre, artralgias, urticaria, astenia, adinamia,

adenopatías, malestar general, prurito, lesiones vasculíticas, daño renal.

Estudios de laboratorio: hemograma completo con plaquetas, creatinina,

BUN, CPK total, electrocardiograma, citoquímico de orina.

Tratamiento:

1. Hospitalizar.

2. Realizar ABCD.

3. Retirar aguijón lo antes posible y revisar el conducto auditivo externo, la

córnea y las fosas nasales en busca de aguijones.

4. El manejo de la toxicidad sistémica es específico según la manifestación.

Page 214: Para paciente intoxicado

5. En caso de reacción anafiláctica seguir el siguiente algoritmo y realizar

tratamiento según la tabla contigua.

Medicamentos usado para tratar la

reacción anafiláctica Dosis y ruta

Epinefrina

1:1000 (uno en mil, 1 mg/mL) 0.1 mg/kg IM

(máx. 0.5 mL en niños y 0.3 a 0.5 mL en

adultos)

1:10000 (uno en diez mil, 0.1 mg/mL) 0.01

mg/kg IV en 1 minuto ( 0.5 mL en niños y 0.3 a

0.5 mL en adultos).

Infusión: 0.1 g/kg/min

Difenhidramina 1 mg/kg en niños y 50 mg/kg en adultos VO,

IM ó IV

Ranitidina 1 mg/kg IV en niños ó 50 mg IV en adultos

Page 215: Para paciente intoxicado

Hidrocortisona 1 a 2 mg/kg IV

Cristaloides (SSN o Lactato Ringer) 20 a 30 mL/kg en bolo IV rápido

Dopamina Infusión de 5 a 20 g/kg/min

Glucagón 1 a 5 mg IV

Page 216: Para paciente intoxicado

51. ENVENENAMIENTO POR ESCORPIONES

Dras. Jenny Cuesta y Lina Peña

Los escorpiones son animales pertenecientes a la clase arácnida, orden

escorpiones. Son caníbales, solitarios, de hábitos nocturnos, pueden vivir hasta

5 años, y permanecer sin agua y alimento por varios meses. Habitan sitios

oscuros, rincones, debajo de troncos viejos, raíces o piedras, y también en los

domicilios humanos, en los sótanos, techos y en los guardarropas, allí se

acomodan dentro de la ropa o en el interior de los zapatos. En el mundo hay

cerca de 1500 especies, distribuidas en alrededor de 20 familias, siendo la

familia Buthidae, a la que pertenecen los géneros de importancia médica en

Colombia (Tityus y Centruroides).

Tityus: pertenecen: T. pachyurus, T asthenes y T.fuhrmanni

o T. pachyurus: mide 60 – 120 mm longitud, de color amarillento a

negro, con pedipalpos rojizos, los segmentos 4 y 5 de la cola son

oscuros y gruesos. Habita entre 100 – 1300 msnm, en los

departamentos de Boyacá, Caldas, Huila, Tolima, Cundinamarca,

Antioquia (riberas del Magdalena)

o T. asthenes: mide 60 – 80 mm longitud, es de color café oscuro a

negro uniforme, los pedipalpos son rojizos y el cuerpo delgado.

Habita entre 100 – 1100 msnm, en los departamentos de Nariño,

Cauca, Valle, Chocó, Antioquia (riberas del Cauca), el Urabá

antioqueño y en la isla de Gorgona.

o T. fuhrmanni: mide 50 – 60 mm longitud, es de color café oscuro a

negro uniforme, habita entre 1700 – 2500 msnm, en la Cordillera

central, bosques densos y lluviosos y en la zona urbana del valle de

Aburrá.

Centruroides: pertenece C. gracilis, mide entre 60 – 120 mm, habita entre

1 – 1800 msnm, tiene patas y cola amarilla, los segmentos 4 y 5 de la cola

son más oscuros y está distribuido en todo el país. Es el escorpión de

mayor importancia médica en México.

Page 217: Para paciente intoxicado

En Colombia se desconoce la magnitud del problema pero se estima que

puede haber entre 2 y 12 casos por 100 mil habitantes/ año, con un subregistro

del 90%. La creencia de que entre los alacranes y los escorpiones existen

diferencias de tamaño y peligrosidad está muy difundida pero la realidad es que

dichas diferencias no existen y ambos términos son sinónimos.

Mecanismo de toxicidad: es una mezcla de lípidos, enzimas, péptidos y

proteínas de bajo peso molecular, dentro de las que se destacan los péptidos

de cadena corta y de cadena larga, por sus acciones sobre los canales de

sodio voltaje dependientes, los canales de potasio calcio dependientes y los

canales de calcio sensibles a rianodina. Las interacciones de las toxinas con

estos canales producen diversos efectos. Algunos péptidos producen un

bloqueo incompleto de los canales de sodio, enlenteciendo y prolongando la

duración del potencial de acción. Otros producen apertura espontánea de los

canales de sodio, lo que lleva a despolarizaciones espontáneas, aumento de la

excitabilidad y disparo neuronal repetido. La estimulación de los canales de

calcio presinápticos, incrementa la liberación de neurotransmisores y la

actividad neuronal. Existe acción sobre las neuronas del sistema nervioso

autónomo (nicotínicas, muscarínicas y adrenérgicas), lo que lleva a un

incremento en la actividad simpática y parasimpática.

Otras toxinas interaccionan con los nervios motores y sensitivos periféricos,

generando dolor e hiperactividad motora.

Dosis tóxica: oscila entre 100 y 600 g, que es la cantidad máxima que puede

encontrarse presente en la glándula venenosa.

Manifestaciones clínicas:

- Envenenamiento leve: sólo efectos locales (ver algoritmo) que ceden en pocas

horas. Son la mayoría de los accidentes (70%) y no amerita uso de antiveneno,

únicamente medidas generales.

- Envenenamiento moderado: además de las manifestaciones locales del

envenenamiento leve, se presentan manifestaciones sistémicas. Son alrededor de

Page 218: Para paciente intoxicado

15% de los accidentes y requieren el antiveneno, medidas de soporte en algunos

casos, por lo que se recomienda que todos se manejen en III nivel de atención.

- Envenenamiento grave: moderado, presenta complicaciones que pueden llevar a

la muerte, como edema pulmonar y falla respiratoria, arritmias, miocardiopatía,

pancreatitis, entre otras. Son aproximadamente un 5% de los casos y requieren

unidad de cuidado intensivo para el manejo de las complicaciones. Los afectados

más vulnerables son los menores de 15 años y los ancianos.

Estudios de laboratorio: dependen del grado de envenenamiento, en los

casos moderados y graves se deben solicitar: función renal y hepática,

amilasas, electrolitos con calcio y magnesio, troponinas, electrocardiograma y

Rayos X de tórax, en algunos pacientes podría requerirse TAC de abdomen o

cráneo. Hasta el 7% de los casos tienen tiempos de coagulación alterados.

Tratamiento: ver algoritmo.

Page 219: Para paciente intoxicado

1. Realizar ABCD.

2. Lavar con agua y jabón el sitio de la mordedura.

3. Compresas frías en sitio de mordedura. No sumergir en hielo ni hacer

incisiones.

4. Analgésicos: opioides o AINES.

5. Antiveneno: no se realizan pruebas de sensibilidad previas. en casos

moderados (2 ampollas) y graves (4 ampollas): disolver las ampollas de

Alacramyn® en 25 mL en niños y 50 mL de SSN y pasar en 30 minutos.

Si a los 60 minutos no hay mejoría, se repite igual dosis.

6. Toxoide tetánico.

7. Manejo específico de complicaciones.

Page 220: Para paciente intoxicado

52. INTOXICACIÓN POR CÁUSTICOS

Dr. Carlos A. Rodríguez

Los cáusticos son sustancias capaces de producir daño al contacto con un

tejido y se dividen en ácidos (donadores de protones, causan lesión a pH <3) y

álcalis (aceptores de protones, causan daño a pH >11). La severidad la lesión

depende del volumen, pH y concentración de sustancia; y de la duración del

contacto y la capacidad de penetrar en los tejidos.

Ácidos

Descripción

Lo más frecuente es la ingestión de ácido clorhídrico (muriático),

sulfúrico, nítrico y acético concentrados. También se incluyen los ácidos

fosfórico, oxálico y fórmico.

Mecanismo de toxicidad

Producen edema, eritema y úlceras por necrosis de coagulación, la cual

previene la penetración profunda del tóxico. En la mayoría de los casos

el esófago y el estómago se afectan por igual.

Manifestaciones clínicas:

Quemadura de mucosas, piel y cualquier tejido en contacto con el ácido.

La ingestión produce sialorrea, sed, odinofagia, disfagia, hematemesis y

dolor abdominal. La muerte puede sobrevenir por shock,

broncoaspiración o infecciones.

La mezcla de ácido muriático (clorhídrico) con blanqueador (hipoclorito)

con fines de limpieza, produce una reacción exotérmica con generación

de vapores y toxicidad inhalatoria que se manifiesta por tos, disnea,

dolor pleurítico, edema pulmonar, hipoxemia, broncoespasmo,

neumonitis o traqueobronquitis.

Álcalis

Page 221: Para paciente intoxicado

Descripción

Los más frecuentes son el hipoclorito de sodio (blanqueadores de ropa),

el hidróxido de sodio (soda cáustica) y el hidróxido de potasio (limpia

hornos). Actualmente existen en el mercado productos que contienen

amoníaco y soda cáustica para limpieza de hornos, parrillas y pisos.

Mecanismo de toxicidad

Los iones OH- disociados penetran en el tejido y causan necrosis de

licuefacción. Este proceso incluye destrucción del colágeno,

saponificación de lípidos, trombosis transmural y muerte celular. En

segundos se presenta eritema y edema de la mucosas, seguido por

extensión de la reacción inflamatoria hasta las capas submucosa y

muscular. El álcali sigue penetrando hasta que la concentración de OH-

sea suficientemente neutralizada por los tejidos.

Manifestaciones clínicas

Los corrosivos alcalinos pueden producir quemaduras de la orofaringe,

vía aérea superior, esófago y estómago (la ausencia de quemaduras

visibles orales no excluye la presencia de lesiones internas).

Usualmente los pacientes presentan sialorrea, odinofagia, disfagia,

estridor laríngeo, vómito y hematemesis. El aspecto de la mucosa oral es

inicialmente blanquecino, luego oscuro, edematoso y ulcerado. La

muerte puede sobrevenir por shock o broncoaspiración.

Toda quemadura por álcalis se considera grave y produce más secuelas

que la producida por ácidos, como estenosis esofágicas, fístulas

traqueoesofágicas, aortoesofágicas y mayor riesgo de carcinoma de

esófago.

Exámenes de laboratorio: A todos los pacientes expuestos a cáusticos debe

ordenarse pH y gases arteriales, hemograma completo, ionograma y pruebas

de coagulación. La radiografía de tórax y abdomen (de pie) es útil para detectar

signos de perforación esofágica o gástrica (neumomediastino,

Page 222: Para paciente intoxicado

neumoperitoneo). La endoscopia debe realizarse en las primeras 12 horas

post-ingesta (máximo 24 horas después) y está contraindicada desde el

segundo día hasta 2 semanas después.

Tratamiento:

1. ABCD con énfasis en la vía aérea (vigilar todo el tiempo signos de edema y

obstrucción)

2. Lavar las superficies comprometidas con abundante agua (piel, mucosas).

En caso de quemadura ocular mínimo durante 2 horas previa aplicación de

anestesia local.

3. No inducir vómito.

4. No realizar lavado gástrico, excepto en el caso de ingestas masivas de

ácido cuando el paciente se presenta en los primeros 30 minutos (pasando

la sonda con extremo cuidado).

5. El carbón activado no tiene utilidad y puede dificultar la endoscopia.

6. La neutralización con ácidos o bases está contraindicada.

7. La dilución con leche (120-240 mL) sólo debe hacerse en los primeros

segundos a minutos después de la ingesta en pacientes que no tienen dolor

faríngeo, torácico ni abdominal significativo, no han vomitado y están alerta.

8. En caso de edema de la vía aérea puede emplearse dexametasona 10 mg

IV en adultos (0.6 mg/kg en niños).

9. Una vez asegurada la vía aérea iniciar hidratación parenteral con

cristaloides (el tercer espacio generado por la quemadura por cáusticos

puede causar hipotensión).

10. Evaluación por cirugía si hay signos clínicos o radiológicos de perforación.

11. Ni los esteroides ni los antibióticos han demostrado utilidad para prevenir la

estenosis esofágica. En pacientes con lesiones endoscópicas severas

puede considerarse el uso de stents.

En caso de intoxicación por inhalación

1. Suministrar oxígeno humidificado hasta que mejore la sintomatología.

2. Si hay broncoespasmo se puede realizar nebulización con agonistas Beta-2

(salbutamol, 2.5 mg por dosis).

Page 223: Para paciente intoxicado

53. INTOXICACIÓN POR CIANURO

Dres. Isabel C. Escobar y Andrés F. Zuluaga

Descripción: cianuro es un término general que describe un grupo de químicos

donde el carbono y el nitrógeno se combinan para formar compuestos (CN−),

disponibles en forma gaseosa, líquida (cianuro de hidrógeno) o sólida, y puede

combinarse con sales (sodio, calcio o potasio), metales (cobalto, zinc, oro y

mercurio), hálidos (cloruro, fluoruro yoduro y bromuro) y ácidos orgánicos

(forma nitrilescomo). Son sustancias altamente reactivas y tóxicas, con

múltiples usos, incluyendo el procesamiento industrial del oro, laboratorios

químicos, manufactura de plásticos (acrilonitrilo y propionitrilo), pinturas,

pegamentos, solventes, esmaltes y removedores de uñas, papel de alta

resistencia, herbicidas, plaguicidas y fertilizantes (cianamida de hidrógeno).

También se usa como arma química o como sustancia homicida (sales de

cianuro), por su rápida acción letal. El medicamento vasodilatador nitropusiato

libera cianuro cuando se expone a la luz o a través del metabolismo. Además,

existen más de 2500 plantas que pueden contener cianuro (amigdalina y

algunos otros glicósidos cianogénigos), incluyendo las almendras, duraznos,

cerezas, castaña de las indias, yuca y casave. Otra fuente importante son los

incendios, debido a que la combustión de lana, seda, poliuretano o vinilo puede

liberar cianuro e inducir toxicidad fatal por vía inhalatoria.

Farmacocinética: la información de las propiedades cinéticas es escasa, y la

mayoría de la información proviene de modelos animales y algunos casos de

intoxicación humana. El cianuro presenta un olor característico descrito como

“almendras amargas” pero, por predisposición genética, 40% de la población

no puede sentir dicho olor. Presenta rápida absorción por cualquier vía, se

concentra en los glóbulos rojos, tiene una unión a proteínas de 60% y un

volumen de distribución de 0.5 L/kg, y es metabolizado en el hígado por la

enzima rodanasa (sulfurtransferasa) a un metabolito inactivo conocido como

tiocianato que presenta excreción renal. El tiempo de vida media para la

conversión de cianuro a tiocianato de una dosis no letal en humanos es de 20 a

60 minutos. El cianuro de hidrógeno también puede convertirse en un

Page 224: Para paciente intoxicado

compuesto no tóxico mediante su combinación con hidroxicobalamina (vitamina

B12a), produciendo cianocobalamina (vitamina B12).

Mecanismo de toxicidad: el cianuro es un químico asfixiante; inhibidor

enzimático no específico (ácido succínico deshidrogenasa, superóxido

dismutasa, anhidrasa carbónica, citocromo oxidasa, entre otras). La interacción

con la citocromo oxidasa es la más estudiada y de mayor importancia

toxicológica, ya que es esencial para la fosforilación oxidativa y la producción

de energía por la vía aerobia. La inhibición de esta enzima produce disfunción

mitocondrial, alterando la cadena de transporte de electrones y la producción

de energía (ATP), aumentando la producción de acido láctico por la activación

secundaria de la vía anaeróbica.

Dosis letal: la ingestión de 200 mg de cianuro de sodio o potasio o la

exposición al cianuro de hidrógeno gaseoso (HCN) aun a bajas

concentraciones (150-200 ppm) pueden ser fatales.

Manifestaciones clínicas: cuando es inhalado, el cianuro gaseoso produce

síntomas en segundos y la muerte en minutos; cuando es ingerido, los

síntomas aparecen en minutos y la muerte en horas. Algunos frutos, que

contienen amigdalina, también contienen emulsina, una enzima capaz de

hidrolizar la amigdalina para liberar cianuro de hidrógeno, asociándose con

inicio tardío de los síntomas de intoxicación. Inicialmente la intoxicación se

manifiesta por síntomas que reflejan hipoxia tisular, incluyendo náuseas, vómito,

cefalea, taquipnea, ansiedad, agitación, confusión, letargo, convulsiones,

coloración rojo cereza de la piel y del fondo de ojo (por aumento de la

saturación de hemoglobina en sangre venosa), y coma con midriasis hasta

llegar a paro cardio-respiratorio. En el sistema cardiovascular puede haber

inicialmente hipertensión y taquicardia que posteriormente evolucionan a

bradicardia e hipotensión, edema pulmonar cardiogénico y arritmias. En el

sistema respiratorio inicialmente hay presencia de disnea, taquipnea que

posteriormente evoluciona a depresión respiratoria. En caso de sobrevida el

paciente puede presentar secuelas neurológicas manifestadas por

bradiquinesia, parkinsonismo, disartria y compromiso neurocomportamental.

Page 225: Para paciente intoxicado

Diagnóstico: la sospecha clínica de la intoxicación se da en el contexto de un

paciente quien, sin antecedentes previos, presenta pérdida súbita de la

conciencia y colapso cardiovascular asociado a un aumento importante del

acido láctico, en presencia del olor característico. Los niveles de cianuro o

tiocianato no se miden en los laboratorios del país. Es útil la prueba rápida para

cianuro (ver capítulo de pruebas rápidas).

Se recomienda solicitar electrocardiograma, ionograma completo, creatinina,

BUN, AST, ALT, BT, BD, glicemia, gases arteriales y acido láctico.

Tratamiento:

1. Realizar el ABCD, con administración de oxígeno al 100%.

2. Colocar una perla de nitrito de amilo (ampollas de 1 mL) dentro del

dedo de un guante de látex, cubrir la nariz y boca con el orificio del

guante a manera de mascarilla, romper la perla sin soltarla (para evitar

la aspiración de la perla), y permitir que el paciente inhale el contenido

del guante durante aproximadamente 30 segundos. Este medicamento

produce una metahemoglobinemia del 5%, mientras que el nitrito de

sodio al 3% produce un 20 a 30%. La dosis de nitrito de sodio (frasco

de 50 mL) es de 300 mg por vía intravenosa (10 mL) infundido en 5

minutos (en niños: 0.15 a 0.33 mL/kg). Si el paciente está en paro

respiratorio, intubarlo, y preparar un guante como puente entre el ambú

y el tubo, así: colocar una perla en el dedo medio del guante, anudar el

orificio de éste, cortar los extremos distales de los dedos 1 (se conecta

al ambú) y 5 del guante (se conecta al tubo orotraqueal) y se insufla

durante treinta segundos con el ambú a fin de que el contenido gaseoso

de la perla sea inhalado. Todas estas medidas buscan producir

metahemoglobina para desplazar al cianuro de la citocromo oxidasa,

pero pueden estar asociadas con cefalea, empeoramiento de la

hipotensión y disminución de la capacidad de transporte de oxígeno.

Estas complicaciones pueden agravar el cuadro en pacientes

intoxicados simultáneamente con monóxido de carbono, por lo cual no

se recomiendan en pacientes provenientes de incendios.

Page 226: Para paciente intoxicado

3. Iniciar tiosulfato de sodio (hiposulfito de sodio) al 25% (frasco por 50

mL): administrar 12.5 g intravenosos a razón de 5 mL/min (en niños la

dosis es 400 mg/kg, es decir 1.6 mL/kg).

4. Si el paciente llega en la primera hora de la intoxicación por vía oral,

realizar lavado gástrico exhaustivo con solución salina (ver capítulo 1) y

descartar el contenido rápidamente por el riesgo de intoxicación

inhalatoria del personal de salud. Si se realizó lavado gástrico,

suministrar carbón activado y, consecuentemente, catártico (ver capítulo

1)

5. Si hay inestabilidad hemodinámica, iniciar soporte inotrópico con

dopamina o norepinefrina.

6. En caso de acidosis metabólica grave se debe iniciar infusión con

bicarbonato de sodio.

7. El antídoto más prometedor es la hidroxicobalamina (5 g para adultos y

70 mg/kg en niños), pero su uso sigue siendo experimental.

Page 227: Para paciente intoxicado

54. INTOXICACIÓN POR VOLATILES INHALABLES

Dres. José J. Aristizábal y Andrés F. Zuluaga

Descripción: son hidrocarburos halogenados (entre ellos el tricloroetano y el

tricloroetileno) que se comportan como sustancias volátiles de alta

liposolubilidad utilizados como diluyentes en pegantes (conocido

comercialmente como Sacol, Boxer, Cola, etc) y correctores (Liquid

Paper y otros), también en insecticidas, removedores y desengrasantes.

Estos productos pueden tener una composición y concentraciones variables,

son de bajo costo, amplia disponibilidad y altamente adictivos, por lo tanto

pueden ser usados fácilmente como drogas de abuso por la población en

general. Una de las forma de consumo consiste en introducir el producto en

una bolsa ajustando su orificio a la boca y la nariz del consumidor para aspirar

los vapores. También se inhala directamente del envase.

Vías de absorción: inhalatoria (la forma más común), oral, dérmica,

conjuntival.

Mecanismo de toxicidad: la alta liposolubilidad les permite alcanzar niveles

altos en SNC, teniendo una acción similar a los agentes anestésicos y por su

rápida absorción en pulmón, alcanzan niveles plasmáticos significativos

inmediatamente, además de que no sufren metabolismo de primer paso

hepático. El mecanismo de acción se desconoce, sin embargo se ha propuesto

que la narcosis de algunos hidrocarburos volátiles se explica por el aumento de

la transmisión GABA y alteración de los receptores NMDA, lo que genera una

permeabilidad aumentada al cloro y una hiperpolarización neuronal de manera

muy similar al etanol. Por la exposición crónica, produce degeneración

mielínica neuronal que puede llevar a bradipsiquia y alteraciones cognitivas.

Dosis letal: por vía oral es de 0.5 a 5 mL/kg para el tricloroetano y de 3 a 5

mL/kg para el tricloroetileno. Los niveles en aire considerados peligrosos son

de 700 ppm para el tricloroetano y de 1000 ppm para el tricloroetileno.

Page 228: Para paciente intoxicado

Manifestaciones clínicas: en una intoxicación aguda, los primeros síntomas

son los buscados por el consumidor, tales como excitación y euforia que

pueden acompañarse de alucinaciones auditivas y visuales, alteraciones de la

conducta e hiperactividad motora. Además hay cuadros de irritación conjuntival

y de vías respiratorias altas, náuseas, epífora y tos.

En dosis altas, el efecto más notorio es la depresión del sistema nervioso

central, asociado a confusión, visión borrosa, diplopía, cefalea, ataxia y

disartria. Si prosigue la exposición puede haber convulsiones, paro respiratorio

y muerte. Los daños renales y hepáticos se pueden ver entre 24 y 48 horas

después de la exposición. Pueden presentarse también arritmias por

irritabilidad miocárdica. De hecho, el tricloroetileno dejó de emplearse como

anestésico inhalado debido a sus efectos depresores cardíacos, caracterizados

por bradicardia excesiva e hipotensión.

Se debe recordar que por tratarse de un hidrocarburo, se pueden producir

fenómenos de neumonitis química (ver capítulo 55).

También se puede presentar intensa diarrea secundaria a la intoxicación con

hidrocarburos clorinados.

Las alteraciones por exposición crónica comprenden las lesiones

dermatológicas (eritema y erosiones periorales), neurológicas (disfunción

multifocal y progresiva del SNC principalmente cerebelosa, prefrontal, motora y

sensorial), digestivas (irritación gástrica, alteraciones de la función hepática),

además miopatías, acidosis metabólica y depresión de la médula ósea.

Existen numerosos reportes de muerte súbita asociada a la exposición

prolongada a hidrocarburos halogenados, secundaria a un fenómeno de

“sensibilización”. La fuerte asociación entre los abusadores de solventes y la

muerte súbita fue la génesis del término muerte súbita del inhalador (sudden

sniffing death). La fisiopatología de esta sensibilización miocárdica es

pobremente entendida. La hipótesis es que el miocardio responde más

fácilmente a los efectos sistémicos de las catecolaminas, por lo que un exceso

Page 229: Para paciente intoxicado

de estas causa irritabilidad del miocardio, con la consecuente disritmia. Una

hipótesis alternativa es que estos compuestos, especialmente en ambientes

cerrados, desplazan el oxígeno y favorecen la aparición de profundas hipoxias.

Diagnóstico y laboratorio: el diagnóstico se basa principalmente en la clínica

y en el olor característico del aliento del paciente. En nuestro medio no hay

disponibilidad de medición de los niveles séricos de estos compuestos. Son de

utilidad: ionograma, hemograma, función renal, transaminasas hepáticas y

electrocardiograma.

Tratamiento: es básicamente sintomático. No hay un antídoto específico para

tratar la intoxicación por estos agentes. Se debe tener en cuenta que estos

pacientes pueden tener co-ingestión de otras sustancias.

1. El rápido y agresivo manejo de la vía aérea es primordial. En casos de

ingestión de grandes cantidades, es necesaria la protección de la vía aérea

con intubación endotraqueal (ABCD).

2. Administrar oxígeno suplementario a necesidad. No inducir vómito.

3. Según la vía de contaminación, se debe retirar a la víctima de la fuente de

exposición.

4. Retirar las posibles fuentes inhalatorias que estén cerca del paciente

(frasco, ropas o piel impregnadas, etc).

5. Baño general o lavado ocular, si los sitios de contaminación fueron la piel o

los ojos respectivamente.

6. Corregir el disbalance hidroelectrolítico, potenciado por la diarrea intensa

que es usual en este tipo de intoxicaciones.

7. Manejo de convulsiones y sedación con benzodiazepinas o fenobarbital.

8. Para el manejo de las taquiarritmias ventriculares causadas por sensibilidad

miocárdica, puede seguirse el siguiente esquema de manejo:

Page 230: Para paciente intoxicado

9. Evitar el uso epinefrina y dopamina porque pueden llevar a arritmias

ventriculares refractarias o si se requieren, usar epinefrina a dosis bajas.

Observar al paciente como mínimo por 4 a 6 horas.

Taquicardia ventricular o fibrilación ventricular, en paciente con sospecha de intoxicación por hidrocarburos

Fibrilación ventricular

aplicar descargas eléctrica directa a 3 ó 5 J/kg.

Repetir 2 veces si no responde

Taquicardia ventricular

en pacientes sin pulso

De un golpe precordial inmediato o aplicar descarga electrica a 1-3 J/kg.

Si no responde, repetir a 3 ó 5 J/kg

Ver las guías ACLS (advanced cardiac life support)

Taquicardia ventricular

en pacientes con pulso

Esmolol 0.025 a 0.1 mg/kg/min IV o propranolol 0.5 a 3 mg IV

Descarte como etiología:

Hipoxemia

Hipokalemia, Hipocalcemia, Hipomagnesemia

Acidosis metabólica

Isquemia miocárdica

Realizar reanimación cardiopulmonar (si es necesario)

Corregir alteraciones hidroelectrolíticas

No usar procainamida ni bretilio

Page 231: Para paciente intoxicado

55. INTOXICACIÓN POR HIDROCARBUROS

Dres. Isabel C. Escobar, Ximena Trillos

Descripción: son productos ampliamente empleados como combustibles,

pinturas, removedores, líquido para encendedor, solventes, lubricantes,

pesticidas y pegamentos. Los hidrocarburos incluyen compuestos orgánicos

producidos por destilación del petróleo, así como también aquellos derivados

de otras fuentes como aceites vegetales, grasas animales, entre otros.

Usualmente se clasifican en alifáticos (estructura de carbono saturada, por

ejemplo, keroseno, gasolina y aceite diesel), aromáticos (contienen al menos

un anillo benceno, por ejemplo, benceno, tolueno y xileno), halogenados

(contienen átomos de cloro, bromo o fluor, por ejemplo, tetracloruro de carbono,

cloroformo y tricloroetano, ver capítulo 54), alcoholes y glicoles, cetonas y

éteres.

Vías de intoxicación: inhalatoria, oral, dérmica.

Mecanismo de toxicidad: generan alteración en la permeabilidad de las

membranas.

La aspiración de estos compuestos causa daño directo del pulmón,

favoreciendo el desarrollo de neumonitis química y disminución de la

producción del surfactante, lo que a su vez lleva a colapso alveolar con el

consecuente deterioro en la ventilación; esto ocurre con hidrocarburos de baja

viscosidad y mínima tensión superficial como kerosene y gasolina.

Los hidrocarburos alifáticos y los destilados simples del petróleo (por ejemplo,

kerosene), prácticamente no se absorben a través del tracto gastrointestinal, lo

cual reduce el riesgo de toxicidad sistémica después de la ingestión (a

diferencia de la ruta inhalada). Por el contrario, algunos aromáticos y los

halogenados causan toxicidad sistémica (convulsiones, arritmias cardíacas,

coma y muerte).

Page 232: Para paciente intoxicado

La inyección o el contacto con piel y mucosas, puede causar reacciones

irritativas e inflamatorias locales, o incluso necrosis de licuefacción.

La toxicidad sistémica de algunos de estos compuestos se explica también por:

sensibilización cardiaca a las catecolaminas, liberación de radicales libres

llevando a peroxidación lipídica (hidrocarburos halogenados y aromáticos)

El metabolismo a través del CYP450 genera radicales libres que explican la

necrosis hepática.

Dosis tóxica: variable, depende del agente y de la ruta implicada. Por ejemplo,

la aspiración pulmonar de unos cuantos mililitros puede producir neumonitis

químicas. La ingestión de 10 a 20 mL de compuestos como alcanfor o

tetracloruro de carbono puede causar toxicidad sistémica.

Manifestaciones clínicas:

SNC: letargo, obnubilación, ataxia, vértigo, cefalea, disartria, alucinaciones,

labilidad emocional, psicosis, convulsiones y coma (se presentan con algunos

inhalantes como sacol).

Respiratorias: las manifestaciones se pueden presentar desde los primeros 30

minutos del contacto con pico a las 48 horas y pueden durar hasta 7 días. Las

manifestaciones incluyen tos, cianosis, taquipnea, disnea, roncus y crépitos y

disminución del murmullo vesicular, se presenta neumonitis química, edema

pulmonar y neumotórax en casos graves.

Tracto Gastrointestinal: actúan como irritantes de mucosas por lo cual tras su

ingestión se presentan náuseas, vomito, odinofagia y epigastralgia. Algunos

compuestos como el tetracloruro de carbono son hepatotóxicos

manifestándose desde ictericia asociada a una elevación de transaminasas

hasta una falla hepática aguda.

Tras la inyección de estos compuestos se puede observar desde irritación local

con dolor local hasta celulitis, abscesos y necrosis. Se pueden observar

Page 233: Para paciente intoxicado

además arritmias cardiacas, parestesias, fiebre, insuficiencia renal aguda,

trastornos hidroelectrolíticos, rabdomiolisis, eritema, prurito, dermatitis, anemia

aplásica y leucemia mieloide aguda o mieloma múltiple (complicación con el

uso crónico).

Pruebas de laboratorio: hemograma y sedimentación, pH y gases,

ionograma, glicemia, rayos X de tórax, función hepática, función renal, CPK,

citoquímico de orina, electrocardiograma.

Tratamiento:

1. Estabilización de la vía aérea y el estado hemodinámico del paciente,

con líquidos endovenosos y si es necesario, intubación si presenta

alteración del estado de conciencia. En caso de manifestaciones

pulmonares se recomienda un periodo de observación mínimo de 24

horas.

2. Monitoreo de signos vitales.

3. Realizar lavado gástrico sólo en caso de intoxicación por alcanfor y

Tetracloruro de Carbono siempre y cuando el tiempo post-ingesta sea

menor a dos horas. No se debe realizar lavado gástrico en intoxicación

por los otros hidrocarburos, pues hay alto riesgo de broncoaspiración y

neumonitis química secundaria.

4. Administrar carbón activado 1 g /kg diluido al 25% sólo para alcanfor,

tetracloruro de carbono y trementina.

5. Evitar en lo posible el empleo de adrenalina y atropina y en caso de ser

indispensable su uso, iniciar con la dosis terapéutica más baja.

6. En las intoxicaciones por vía dérmica debe realizarse baño exhaustivo

con agua y jabón, enfatizando el aseo de los pliegues, pabellón auricular,

cuero cabelludo y región periumbilical.

7. Si se presenta edema agudo de pulmón se requiere presión positiva al

final de la espiración (PEEP).

8. Antibióticos sólo cuando se presente neumonía secundaria a

broncoaspiración.

9. En caso de convulsiones administrar Benzodiazepinas.

Page 234: Para paciente intoxicado

10. En la intoxicación por thinner se debe descartar intoxicación por alcohol

metílico concomitante, debido a que este último está presente en

concentraciones variables.

Page 235: Para paciente intoxicado

56. ARSÉNICO

Dres. Alexis Santamaría, Andrés F. Zuluaga

Descripción: Dadas sus características (inoloro, insaboro, incoloro,

hidrosoluble y letal) este compuesto ha tenido su papel protagónico a través de

la historia de la toxicología. No obstante su uso en productos del hogar se

encuentra descontinuado, aún es usado como herbicida, preservante de

madera (arseniato de cobre y cromo) y en la fabricación de semiconductores.

Adicionalmente, se emplea como medicamento para el tratamiento del cáncer

(trióxido de arsénico) y también se encuentra en tónicos y remedios populares

(sales inorgánicas), particularmente de origen asiático.

El arsénico es un metaloide, puede estar en compuestos orgánicos

(arsenobetaina y arsenoazúcares, que se encuentran en algunos animales

marinos) e inorgánicos en forma trivalente (arsenito) o pentavalente (arsenato).

La presentación metálica (inusual) tiene valencia 0. Existen formas gaseosas

como arsina (AsH3) y lewisite (agente de guerra biológico, dicloro-2-clorovinil-

arseina), las cuales se caracterizan por producir hemólisis intravascular y

necrosis de ojos, piel y vía aérea, respectivamente.

Farmacocinética: el arsénico sigue modelo cinético tricompartimental, con alta

capacidad de concentración en hígado, riñón, bazo, pulmones y tracto

gastrointestinal. Por lo anterior, su vida media varía en promedio así: 60% del

compuesto administrado es eliminado con una vida media de 2.1 días, 30%

sigue una vida media de 9.5 días y 4% tiene una vida media de 38.4 días. El

5% del compuesto se encuentra unido a proteínas, sobre todo a transferrina.

La forma trivalente muy lipofílica, asociándose con mayor toxicidad, sin

embargo presenta poca absorción desde tracto gastrointestinal. Por el

contrario, las formas metálica y pentavalente presentan una alta absorción por

esa vía, son sometidas a procesos de biometilacion en los tejidos produciendo

formas monometil y dimetil que aparte de ser menos tóxicas, son excretables

por orina; sin embargo, siempre existe la posibilidad de que puedan ser

metabolizadas in vivo a compuestos metilados trivalentes más tóxicos. Este

Page 236: Para paciente intoxicado

metal también se excreta, aunque en menor proporción, por bilis, heces, pelo,

piel, pulmones y sudor. En pelo y unas puede ser detectable hasta 4 semanas

post-administración.

Mecanismo de toxicidad: varía según la valencia, estado y solubilidad. En

general, las formas pentavalentes (As5+) son 2 a 10 veces menos tóxicas que

las formas trivalentes (As3+). En cualquier caso, la toxicidad parece

relacionarse con su capacidad para formar enlaces estables con los grupos

sulfihidrilos y su potencial de reemplazo del fósforo que induce inhibición de

diversos sistemas enzimáticos, incluyendo obviamente la fosforilación

oxidativa, redundando en severa toxicidad celular por agotamiento del recurso

energético. Otros mecanismos de toxicidad propuestos son alteración en la

expresión de genes, alteraciones en el ciclo celular y en la traducción de

señales y apoptosis.

Manifestaciones clínicas: La sintomatología se divide en fases de la siguiente

manera:

Fase 1. Minutos a horas.

Gastrointestinal: dolor abdominal súbito, náuseas, vómito, diarrea

acuosa (en “agua de arroz”).

Cardiovascular: hipotensión, taquicardia.

Aparece también acidosis metabólica y rabdomiólisis.

Fase 2. Primer día a 1 semana post-ingesta.

Cardiovascular: intervalo QTc prolongado, arritmias cardiacas,

cardiopatía congestiva, edema pulmonar no cardiogénico.

Neurológico: encefalopatía.

Renal: proteinuria en bajo grado.

Hepático: elevación de transaminasas.

Dermatológico: descamación máculo-papular, edema periorbitario.

Fase 3. Primera semana a 4 semanas post-ingesta.

Page 237: Para paciente intoxicado

Hematológico: anemia, leucopenia, trombocitopenia, eosinofilia,

punteado basófilo en eritrocitos, coagulación intravascular diseminada.

Neurológico: neuropatía periférica sensoriomotora (puede ser

confundido con síndrome de Guillain-Barré, pero la neuropatía producida

por arsénico no hace compromiso de pares craneales, ni músculos

respiratorios).

Dermatológico: líneas de Mees, lesiones herpéticas.

Diagnóstico: se requiere alto nivel de sospecha para el diagnóstico de este

tipo de intoxicación, y siempre se deben correlacionar los hallazgos al examen

físico con pruebas de laboratorio. El nivel normal de arsénico en orina de 24

horas es ≤50 g/L, o en muestra espontánea de orina ≤30 g/L. Las muestras

espontáneas usualmente son suficientes para el diagnóstico debido a que los

pacientes intoxicados tienen niveles que exceden cientos de veces esos

valores normales. Debe recordarse que la comida de mar puede elevar

levemente (y falsamente) esos niveles. No se recomienda medición de niveles

séricos por su alta variabilidad, aunque en todo caso deben ser normalmente

≤5 g/L.

Otros estudios de laboratorio de utilidad incluyen hemograma, electrolitos,

glucometría, BUN y creatinina, enzimas hepáticas, electrocardiograma (con

especial atención al intervalo QT) y rayos X abdominales y de tórax.

Tratamiento:

1. Realizar ABCD.

2. Emplee medidas generales de descontaminación para evitar la

absorción de este tóxico.

3. La quelación permite que el metal sea incluido en un anillo heterocíclico,

que es a su vez hidrosoluble, estable y excretable por via renal.

DMPS. Se da en dosis de 3 a 5 mg/kg cada 4 horas intramuscular.

BAL (Dimercaprol). Se administra en dosis de 3 a 5 mg/kg cada 4 a 6

horas intramuscular, es la segunda opción.

Page 238: Para paciente intoxicado

Se recomienda la administración de quelantes intramusculares hasta

que el paciente se encuentre estable y los síntomas gastrointestinales

hayan remitido. Una vez haya sucedido esto se debe cambiar a

quelantes de uso oral con DMSA (succimer) 7.5 mg/kg cada 6 horas o

10 mg cada 8 horas. Se debe administrar este esquema hasta que los

niveles de arsénico en orina de 24 horas sean significativamente

menores que la concentración con la cual aparecieron los síntomas.

4. Se debe ser cauteloso en la corrección del disbalance hidroelectrolítico

para evitar empeoramiento del cuadro clínico y siempre optimizar el

gasto urinario (>1 mL/kg/hora).

5. No está indicado el carbón activado y la diálisis no está recomendada a

no ser que el paciente ya estuviera previamente en dicho tratamiento.

6. El uso de antipsicóticos, fenotiazinas y anti arrítmicos del grupo IA, está

contraindicado dada su capacidad para prolongar el intervalo QTc.

Page 239: Para paciente intoxicado

57. INTOXICACION POR MONOXIDO DE CARBONO (CO)

Dres. Alejandra Restrepo y Sergio Parra

Descripción: es un gas que se produce principalmente como resultado del

proceso de combustión incompleta de compuestos como gasolina, carbón,

butano, propano o petróleo. Carece de propiedades irritantes; además, es

incoloro, insaboro e inodoro, lo que facilita la exposición inadvertida, de tal

manera que las intoxicaciones pueden ser accidentales o deliberadas. Los

principales generadores de dicho gas son: vehículos motorizados, incendios,

quema de madera, incineradores de basura, las plantas eléctricas a base de

combustibles y el tabaquismo (2 paquetes de cigarrillo/día, producen en

promedio 5.9% de carboxihemoglobina). Los espacios cerrados favorecen la

acumulación del monóxido de carbono y las altas concentraciones pueden ser

letales para el ser humano. Por otro lado, la absorción de cloruro de metileno

desde la piel, el tracto gastrointestinal o los pulmones genera CO luego del

metabolismo hepático y puede desencadenar toxicidad. Luego de las

intoxicaciones sintomáticas agudas pueden presentarse secuelas neurológicas

hasta en el 50% de los pacientes.

Farmacocinética: el CO se absorbe excelentemente luego de la inhalación y

se transporta por la sangre unido a la hemoglobina, formando un compuesto

denominado carboxihemoglobina. Usualmente se encuentra confinado al

espacio intravascular, pero también puede distribuirse y depositarse en el tejido

muscular (representando hasta un 15% de la cantidad total presente en el

organismo). Por otro lado, el CO disuelto puede distribuirse hacia cualquier

tejido y llegar al sistema nervioso central. No se metaboliza y la principal ruta

de eliminación es a través del aire expirado, pero la velocidad depende de la

concentración de oxígeno a la que esté expuesto el paciente. Se ha calculado,

cuando se respiran concentraciones ambientales de oxigeno, que la vida media

de eliminación del CO está entre 250 a 320 minutos. Dicha vida media se

puede reducir, cuando se respira oxígeno al 100%, a valores entre 70 a 130

minutos en condiciones normobáricas o a 22 minutos en condiciones

hiperbáricas (2.4 atmósferas). Para aquellos pacientes intoxicados, debido a la

Page 240: Para paciente intoxicado

exposición a cloruro de metileno, la vida media aparente del CO puede ser

hasta de 13 horas. Esto se debe a la producción persistente del CO por el

metabolismo del cloruro de metileno.

Dosis tóxicas: el riesgo depende tanto el nivel como la duración de la

exposición. El nivel considerado como peligroso para la salud o para la vida es

de 1200 ppm (0.12%) en el aire inspirado. Se ha calculado, cuando la

concentración ambiental del CO es 0.1%, que se requieren varias horas para

lograr una saturación de la hemoglobina del 50%. Sin embargo, se puede

producir una formación rápida de carboxihemoglobina cuando una persona se

expone a altos niveles de CO por un periodo corto.

No hay una correlación directa entre los niveles de carboxihemoglobina con la

severidad de los síntomas, pero se considera que niveles superiores a 25% son

suficientes para producir síntomas y todos aquellos superiores a 40 % son

generalmente correspondientes a una intoxicación.

Mecanismos de toxicidad: el CO se une a: la hemoglobina (con una afinidad

200 a 250 veces mayor que la del oxígeno), las citocromo oxidasas de la

cadena transportadora de electrones (citocromo a y citocromo a3) y la

mioglobina. Como consecuencia de la interacción con dichos blancos

moleculares se presenta disminución de: la concentración de oxihemoglobina,

la capacidad de transportar oxígeno en la sangre, la capacidad de entrega de

oxígeno a los tejidos y la capacidad de los tejidos de utilizar el oxigeno. Se

produce hipoxia e isquemia tisular, se altera el funcionamiento celular (en

especial la contractilidad miocárdica y el tono vascular) y puede aparecer un

daño irreversible en ciertas áreas del sistema nervioso central.

Adicionalmente, se considera que la peroxidación de lípidos, los procesos

inflamatorios, la liberación excesiva de neurotransmisores excitatorios y los

fenómenos de apoptosis posterior a la anoxia tisular pueden contribuir al daño

en el sistema nervioso.

Manifestaciones clínicas: la intoxicación por CO afecta principalmente a

órganos como el encéfalo y el corazón y puede ser clasificada como leve,

moderada o grave (ver tabla). La mayoría de los pacientes manifiestan

Page 241: Para paciente intoxicado

tempranamente cefalea (de tipo continuo y localizada en la región frontal),

mareo, nauseas y vómito, seguidos de una alteración progresiva en el estado

de conciencia. Existe una mayor susceptibilidad entre neonatos, personas con

enfermedad cardiaca crónica, anemia o problemas respiratorios. En los niños

las manifestaciones pueden ser atípicas con presentación de una convulsión

aislada o un episodio de vómito. La exposición a CO durante el embarazo

puede producir malformaciones congénitas, alteraciones del desarrollo

neurológico y muerte fetal.

Tabla. Clasificación de la gravedad de exposición al CO según las

manifestaciones clínicas

GRAVEDAD SINTOMAS SIGNOS

LEVE Cefalea

Mareo

Náuseas

Vómito

Alcalosis respiratoria

MODERADO Dificultad para concentrarse

Visión borrosa

Disnea

Dolor torácico

Debilidad

Déficit cognitivo

Taquicardia

Taquipnea

Mionecrosis

Ataxia

GRAVE Desorientación

Dolor torácico

Palpitaciones

Síncope

Convulsiones

Coma

Arritmias ventriculares

Hipotensión

Isquemia miocárdica

Infarto agudo del miocardio

Coloración rojo-ceraza de la piel

Flictenas

La acidosis metabólica es un indicador de intoxicación grave y las altas

concentraciones de hidrogeniones son sugestivas de una mala recuperación. El

edema agudo de pulmón de tipo cardiogénico puede aparecer como una

complicación. La mortalidad, luego de un incidente agudo, se relaciona en

muchos casos con la aparición de arritmias ventriculares.

Page 242: Para paciente intoxicado

Luego de la recuperación de una intoxicación grave, pueden quedar (o incluso

aparecer días a semanas más tarde) secuelas neuropsicológicas debidas a las

lesiones hipóxico-isquémicas como: estado neurovegetativo, hemiplejía,

neuropatía periférica, apraxia, agnosia, parkinsonismo, corea, coreo-atetosis,

ceguera cortical, mutismo, demencia, amnesia, pérdida del control de

esfínteres, psicosis, trastornos de la personalidad y del estado de ánimo.

Dichas secuelas son más frecuentes en pacientes mayores a 30 años y que

tuvieron perdida de la conciencia durante la fase aguda.

Diagnóstico: el paciente puede consultar al servicio de urgencias con historia

clara de exposición, en caso contrario, se requiere un alto grado de sospecha

clínica y debe hacerse diagnóstico diferencial con síndromes virales,

intoxicación alimentaria, gastroenteritis y accidente cerebrovascular, entre

otros. Existen unos signos que son altamente sugestivos de la intoxicación por

CO, pero sólo aparecen en algunos casos de exposición grave: la coloración

rojo-cereza de la piel, la coloración rojo brillante de la sangre venosa y la

formación de flictenas. La prueba diagnóstica más útil es la medición de los

niveles de carboxihemoglobina (puede ser en sangre arterial o venosa), pero se

debe tener en cuenta que los valores pueden aparecer normales en pacientes

que han recibido oxigeno previo a la toma de muestra. También se

recomiendan otros exámenes como: ionograma, glicemia, BUN, creatinina,

prueba de embarazo, electrocardiograma de 12 derivaciones, lactato en

sangre, pH y gases arteriales. Es importante tener en cuenta que la saturación

arterial de oxígeno (medida a través de la presión parcial de dicho gas) y la

oximetría de pulso carecen de la capacidad para discriminar las alteraciones

propias de esta intoxicación y no dan cuenta del estado real del paciente. Es

muy frecuente la intoxicación simultánea por cianuro en pacientes expuestos a

gases producidos durante un incendio, por lo tanto también se debe solicitar

cianuro y metahemoglobina. En caso de complicaciones o dificultades en el

diagnóstico puede ser necesario evaluar: concentraciones de creatina

fosfoquinasa y troponinas o realizar tomografía axial computarizada o

resonancia magnética.

Page 243: Para paciente intoxicado

Tratamiento:

1. Realizar ABCD.

2. Retirar a la víctima rápidamente del sitio de exposición.

3. Mantener la vía aérea permeable y dar ventilación asistida si es necesario.

En caso de inhalación de humo, considerar la necesidad de intubación

orotraqueal.

4. Administrar oxígeno a la mayor concentración posible (100%), utilizando

máscara de no reinhalación o intubación orotraqueal. Este manejo se debe

instaurar hasta obtener la resolución de las manifestaciones y niveles de

caboxihemoglobina menores del 5%.

5. Manejo de convulsiones con benzodiazepinas (diazepam 5 a 10 mg

intravenosos cada 10 a 15 minutos hasta un máximo de 30 mg).

6. En caso de hipotensión deben suministrarse líquidos endovenosos (30

mL/kg en bolo intravenoso) y puede llegar a requerirse soporte con infusión

intravenosa de dopamina 5-15 g/kg/min.

7. Evaluación electrocardiográfica continua para vigilar la presencia o

aparición de isquemia o arritmias.

8. Considerar la administración de oxígeno hiperbárico en casos severos

cuando se presenta síncope, convulsiones, isquemia miocárdica, arritmias

ventriculares, o en los que se cumpla alguno de los siguientes criterios:

pérdida de conciencia, carboxihemoglobina superior al 25%, edad mayor a

50 años, acidosis metabólica (con un exceso de base mayor a 2 mEq/L),

disfunción cerebelar, si luego de 4 horas de la administración de oxigeno

monobásico persisten síntomas como cefalea, ataxia o confusión.

9. Valoración por psiquiatría en caso de intento suicida.

10. El paciente debe ser evaluado al menos 2 semanas después del alta para

descartar la presencia de secuelas neurológicas.

Page 244: Para paciente intoxicado

58. INTOXICACIONES POR MERCURIO

Dres. Joaquín E. López, Carlos F. Molina, Sergio Parra

Descripción: es el único metal líquido a temperatura ambiente, en la

naturaleza se encuentra en estado de sulfuro mercúrico (cinabrio). Hay tres

estados de oxidación del mercurio: elemental o metálico (Hg°), mercúrico

(Hg22+) y mercurioso (Hg2+). Los dos últimos estados pueden generar

compuestos inorgánicos y orgánicos. El mercurio es un compuesto

primariamente neurotóxico, pero en el individuo expuesto las manifestaciones

clínicas de la intoxicación dependen de: la forma química, la cantidad y el

tiempo y la vía de ingreso al organismo.

La forma metálica es utilizada en la fabricación de termómetros, amalgamas

dentales, calibración de instrumentos, cerámica, aparatos eléctricos, luces

fluorescentes, extracción de oro y plata, entre otros.

Las formas mercúricas y mercuriosas son sales compuestas, típicamente

sólidos usados en procesos industriales; entre ellos se encuentran:

Compuestos mercúricos: cloruro, acetato, arsenato, bromato, yoduro, nitrato,

óxido y sulfuro, entre otros.

Compuestos mercuriosos: acetato, cloruro (calomel), yoduro, nitrato, óxido y

sulfato.

Las formas orgánicas incluyen compuestos alquiles de cadena corta (metil, etil,

dimetil, etc.) y de cadena larga, ariles (fenil) y compuestos alcoxialquil

mercuriales. Dichas formas se utilizan como antisépticos (Mertiolate® y

Mercuriocromo ®), fungicidas, herbicidas, germicidas, etc.

El metil mercurio es susceptible a ser captado por los peces y de esta manera

ingresar a la cadena alimenticia y ser fuente de intoxicación para el hombre.

Farmacocinética: el mercurio metálico líquido es pobremente absorbido del

tracto gastrointestinal y por consiguiente poco tóxico cuando es ingerido. Sin

embargo, debido a su capacidad de emitir vapores a cualquier temperatura y su

alta volatilidad favorece su inhalación, absorbiéndose rápidamente hasta el

80% de la cantidad que llega a la vía aérea.

Page 245: Para paciente intoxicado

Las formas inorgánicas tienen se absorben aproximadamente en un 10%

desde el tracto gastrointestinal y posiblemente pueden absorberse desde la vía

aérea.

El mercurio, en cualquiera de sus formas tiene buena distribución tisular y es

capaz de llegar al sistema nervioso central, pero la forma metálica y las

orgánicas tienen una capacidad excepcionalmente rápida de llegar al último

tejido por su alta liposolubilidad.

La forma elemental y las inorgánicas se excretan a través de la materia fecal y

la orina. La vida media calculada desde la eliminación urinaria es

aproximadamente 40 días.

Las formas orgánicas tienen buena absorción a través del tracto

gastrointestinal (90% para el metilmercurio y más del 50% para compuestos aril

y alquiles de cadena larga), la piel y la vía aérea. Los derivados alquil

mercuricos se acumulan en el sistema nervioso central (hipocampo, cisura

calcarina y sustancia gris del cerebelo), riñón e hígado; también es capaz de

cruzar la placenta y se puede excretarse en la leche materna. El metil mercurio

sufre excreción biliar con recirculación enterohepática, el 90% de la excreción

se da a través de la materia fecal. La vida media calculada es de

aproximadamente 50 días.

Dosis tóxicas: Se ha reportado neumonitis química posterior a exposiciones

mayores a 1 mg/m3 de mercurio metálico, mientras que las concentraciones de

10 mg/m3 o superiores son peligrosas de manera inmediata para la salud o la

vida.

La dosis potencialmente letal de cloruro de mercurio por vía oral está entre 1 a

4 g; las sales mercúricas son más tóxicas que las sales mercuriosas.

La ingestión aguda de 10 a 60 mg/kg de metil mercurio puede ser letal.

Mientras que la ingestión crónica de 10 g/kg/día pueden producir alteraciones

neurológicas y reproductivas.

Mecanismos de toxicidad: El mercurio se une principalmente de manera

covalentemente a los grupos sulfidrilo, pero también reacciona ávidamente con

grupos fosforil, caboxilo y amida. De esta manera produce inhibición enzimática,

alteración del funcionamiento de transportadores, bombas, canales iónicos,

Page 246: Para paciente intoxicado

proteínas estructurales, generación de radicales libres y daño de membranas

celulares. A través de tales mecanismos produce compromiso de múltiples

órganos y sistemas con características e intensidad variables. El mercurio

metálico se comporta como un irritante pulmonar, mientras que las sales

inorgánicas tienen el mismo efecto sobre la piel, ojos y el tracto gastrointestinal;

además, son nefrotóxicas. Todo ello se ha atribuido a una acción oxidativa

directa.

Manifestaciones clínicas: La inhalación de altas concentraciones de mercurio

metálico puede causar neumonitis química severa y edema pulmonar no

cardiogénico. Crónicamente produce gingivo-estomatitis, acrodinia, fatiga,

insomnio, anorexia, depresión, pérdida de la memoria y temblor progresivo que

inicia con movimientos coreiformes de los labios. Aunque el mercurio metálico

tiene pobre absorción gastrointestinal puede ser causa de enfermedad

inflamatoria intestinal u obstrucción intestinal.

La inhalación de sales inorgánicas produce dificultad respiratoria aguda,

mientras que la ingestión causa gastroenteritis hemorrágica, dolor abdominal,

necrosis intestinal, colapso cardiovascular y muerte. Aquellos que sobreviven la

fase aguda usualmente desarrollan daño renal tubular con falla renal oligúrica

aguda. La exposición crónica puede producir temblor y cambios

neuropsicológicos.

El mercurio orgánico puede producir parestesias, ataxia, disartria, alteraciones

visuales (reducción progresiva del campo visual), disminución de la agudeza

auditiva, náusea, vómito, diarrea, dolor abdominal, falla hepática y renal. Tales

manifestaciones usualmente tardan semanas a meses en aparecer. El metil

mercurio es un potente teratógeno y la exposición perinatal causa retardo

mental y parálisis cerebral.

Diagnóstico: Las manifestaciones clínicas en conjunto con la historia de

exposición y los niveles elevados de mercurio en orina o sangre son de crucial

importancia. Las mediciones de concentraciones de mercurio en orina de 24

horas son apropiadas cuando la exposición ha sido de mediano o largo plazo,

mientras que la valoración en sangre es útil cuando se presenta una exposición

aguda. Otros exámenes recomendados son: monograma, BUN, creatinina,

Page 247: Para paciente intoxicado

citoquímico de orina y transaminasas hepáticas. En caso de neumonitis

también solicitar pH y gases arteriales y rayos X de tórax. En caso de ingestión

de mercurio metálico, rayos X de abdomen. En algunos casos la tomografía

axial computarizada de cráneo y la punción lumbar pueden ser necesarias para

diferenciar de otros problemas médicos.

Adicionalmente, es recomendable que si se inicia quelación con penicilamina

se haga evaluación de parámetros hematológicos, renales y hepáticos al inicio

y final del tratamiento.

TRATAMIENTO:

1. Retirar de la fuente de exposición.

2. Realizar el ABCD.

3. Luego de la ingestión de mercurio metálico no se necesitan medidas de

descontaminación del tracto gastrointestinal si la cantidad ingerida fue baja,

en caso de ingestión de grandes dosis, con evidencia radiológica de

retención o elevación de los niveles sanguíneos o urinarios de mercurio,

puede ser necesaria la administración de cartártico o irrigación intestinal

total (ver recomendaciones en el capítulo 1).

4. La ingestión aguda de formas orgánicas, mercúricas o mercuriosas amerita

el lavado gástrico y la administración de carbón activado (según

recomendaciones del capítulo 1), pero sólo si no han transcurrido más de

dos horas post-ingestión.

5. En caso de ingestión de sales inorgánicas deben suministrarse líquidos

endovenosos (30 mL/kg en bolo intravenoso).

6. En caso de ingestión de compuestos orgánicos en mujeres que están

amamantando se debe suspender la lactancia, aunque se recomienda

continuar extrayendo la leche para descartarla (puede favorecer la

excreción).

7. El antídoto que se acepta mundialmente para el tratamiento de las

intoxicaciones por mercurio es el unitiol (2,3-dimercapto-1-propanosulfonato

o DMPS; dosis 30 mg/kg/día); no obstante, dicha sustancia no se encuentra

disponible en Colombia. Por lo tanto, la penicilamina ha sido el antídoto

tradicionalmente utilizado en nuestro medio. Se debe administrar lejos de

Page 248: Para paciente intoxicado

las comidas (1 hora antes o 2 horas después) 250 mg cada 8 horas (niños:

25 mg/kg/día, dividido en 3 dosis) por 10 días y realizar nueva medición de

mercurio para establecer si requiere otro ciclo de quelación.

8. Valoración por psiquiatría en caso de intento suicida.

Page 249: Para paciente intoxicado

59. INTOXICACION POR PLOMO

Dres. Alejandra Restrepo y Andrés F. Zuluaga

Descripción: el plomo (Pb) es un metal pesado que funde con facilidad a

temperatura elevada. Se estima que 40% del Pb disponible se utiliza en forma

metálica, 25 % en aleaciones y 35 % en compuestos químicos. Dentro de las

principales fuentes se encuentran: balas, soldaduras y pinturas plomadas, para

la decoración de vitrales y baterías.

Farmacocinética: las principales rutas para el ingreso de plomo al organismo

son la respiratoria y la digestiva. En aquellas personas que han sido víctimas

de heridas por proyectil de arma de fuego, las balas alojadas cerca de los

espacios articulares y las serosas son una fuente constante de plomo. El

volumen de distribución (Vd) inicial a la sangre es de 0.1 a 0.2 L/kg (99% del

Pb se une a los eritrocitos), con la posterior redistribución a otros

compartimientos como el SNC, la placenta y el hueso, alcanzando un Vd final

de 7 L/kg. Los compuestos inorgánicos no se metabolizan, mientras que los

orgánicos sufren reacciones de desalquilación a nivel hepático, sin tener

metabolitos activos. El Pb en el organismo se acumula en tres compartimentos:

sangre (2% del contenido total en el organismo, con una vida media de 5-8

semanas), tejidos blandos (8% del contenido total, vida media de 6-8 semanas)

y hueso (representa el 90% del contenido total con una vida media de años a

décadas). El 70 % se excreta por orina y el restante por heces, cabello, uñas y

sudor. La terapia quelante aumenta hasta 50 veces la excreción de Pb.

Mecanismo de toxicidad: el Pb altera diferentes enzimas (delta-

aminolevulínico deshidratasa, ferroquelatasa y coproporfilinógeno

descarboxilasa) y macromoléculas uniéndose a grupos sulfhidrilo, fosfatos,

carboxilos y también a través de su interacción con cationes como calcio,

hierro y zinc. Todo esto produce alteraciones en la membrana celular y

mitocondrial, el metabolismo de nucleótidos, la síntesis y función del grupo

heme y de diversos neurotransmisores. Los principales sistemas afectados son

el SNC, renal, hematopoyético, reproductivo, gastrointestinal y cardiovascular.

Page 250: Para paciente intoxicado

Manifestaciones clínicas: las manifestaciones clínicas dependen de la

plumbemia (g/dL) y del tipo de exposición, aguda o crónica. Los niños son

más susceptibles, con concentraciones menores presentan sintomatología,

siendo el SNC el principal órgano blanco.

Intoxicación aguda: epigastralgia, dolor abdominal tipo cólico, vómito, diarrea,

hematemesis y hepatitis tóxica aguda, anemia hemolítica, insuficiencia renal

aguda, encefalopatía, convulsiones, coma que pueden conllevar a la muerte

luego de 2 a 3 días de la intoxicación.

Intoxicación crónica: dolor abdominal intenso (cólico saturnino), nausea y

constipación, fatiga, artralgias, mialgias, irritabilidad, insomnio, anorexia,

pérdida de peso, disminución de la libido e hipertensión, anemia normocítica o

microcítica y punteado basófilo, lesión tubular reversible, fibrosis intersticial

crónica, disminución y alteración de los espermatozoides, disfunción eréctil,

partos pretérmino, bajo peso al nacer o alteración del desarrollo neurológico del

feto alteración de la atención y memoria, agudeza visual, coordinación, estado

de ánimo, cefalea, temblor y encefalopatía (considerada como urgencia vital y

caracterizada por la presencia de delirium agitado o letargia, ataxia,

convulsiones y coma), debilidad muscular, polineuropatía ( mano caída).

Diagnóstico: se debe sospechar intoxicación por Pb, en el paciente que tenga

antecedente ocupacional y que presente síntomas (cólico saturnino, anemia,

cambios neuropsiquiátricos y polineuropatía).

La plumbemia es el indicador más confiable de exposición reciente en la

práctica clínica se toma una muestra de sangre venosa en recipientes libres de

plomo, utilizando heparina o EDTA como anticoagulante, la muestra debe

mantenerse entre 2 ºC y 8 ºC.

En personas no expuestas ocupacionalmente los niveles de plomo en sangre

no exceden los 5 g/dL,

Page 251: Para paciente intoxicado

PLUMBEMIA (g/dL) MANIFESTACIONES CLÍNICAS

<15 HTA. Alteraciones en la reproducción y en el feto.

Mialgias y artralgias.

16 a 30 Alteraciones renales y en la síntesis de GR

31 a 40 Anemia. Daño neurológico. Dolor abdominal.

Constipación. Irritabilidad y fatiga. Alteraciones de

memoria, sueño y concentración.

41 a 60 Coloración azul en las encías (ribete de Burton).

Mano caída.

>80 Alucinaciones, encefalopatía, coma y muerte

Zinc Protoporfirina (ZPP) sólo se eleva luego de seis semanas del inicio de la

exposición, por lo que se considera como un marcador de intoxicación crónica

(en presencia de plumbemias >30 g/dL). En el departamento de Antioquia aún

no contamos con un laboratorio que realice la determinación de los niveles de

ZPP, las muestras son enviadas a Bogotá.

Plumburia en la población general debe ser menor de 10 g / día.

Excreción de plomo en uñas y cabello: útil en intoxicaciones crónicas.

Dosis tóxica: Inhalación: el límite de exposición permitido para Pb inorgánico

es de 50 g/ m3 en un período de 8 horas laborales. El nivel considerado

peligroso para la salud o la vida es de 100 mg/m3. El riesgo de intoxicación

crónica se considera a partir de 0.5 mg/día.

Ingestión: factores como la deficiencia de hierro y una dieta baja en calcio

aumentan la absorción, mientras que la coingesta con alimentos la disminuye.

La intoxicación aguda, puede presentarse luego de la ingestión de grandes

cantidades de compuestos solubles o de la retención gastrointestinal de objetos

a base de Pb.

Tratamiento:

Page 252: Para paciente intoxicado

1. Retirar al paciente de la exposición es la medida más importante para evitar

el deterioro clínico.

2. Realizar ABCD.

3. Manejar convulsiones e hidratar cuando sea necesario.

4. La encefalopatía es una urgencia vital, se debe iniciar BAL (British anti-

Lewisite, dimercaprol) 50 a 75 mg/m2 intramuscular (I.M) cada 4 horas por

3 días. A las cuatro horas se inicia etilendiaminotetracetato (EDTA) disódico

cálcico 1000- 1500 mg/m2/día en adultos (30 mg/kg, en niños) cada 8 horas,

por vía intravenosa (ó I.M.), durante 5 días. La repetición del tratamiento

puede considerarse dependiendo de los síntomas y los niveles sanguíneos.

5. En ausencia de encefalopatía se puede seguir el siguiente esquema de

manejo:

6. Como alternativa en nuestro medio en ausencia de EDTA, puede usarse

ácido dimercaptosuccínico (DMSA) y en ausencia de ambos puede

suministrarse penicilamina 20 a 30 mg/kg/día cada 8 horas, por vía oral.

Para minimizar los efectos secundarios se inicia con el 25 % de la dosis,

incrementando gradualmente hasta obtener la dosis plena en tres semanas,

la duración del tratamiento depende de los niveles sanguíneos de plomo y

la sintomatología.

Sospecha clínica y antecedente de exposición a Pb

Adulto

Asintómatico

Plumbemia >80 µg/dL

DMSA (succimer) 10 mg/kg cada 8h VO por

5 días. Luego 2 semanas más con la misma dosis, pero

cada 12 h

Sintomático sin encefalopatía

EDTA calcico disódico 1000

mg/m2/día cada 8 h, I.M., durante 5 días

Niño

Asintomático

Plumbemia >45 µg/dL

DMSA 10 mg/kg cada 8h VO por 5 días. Luego 2 semanas más con la misma

dosis, pero cada 12 h

Sintomático

EDTA 20 mg/kg cada 8 h, I.M. durante

5 días

Page 253: Para paciente intoxicado

7. Se deben obtener niveles de plomo (plumbemia) durante el tratamiento.

Tomar una primera muestra de sangre previo al inicio de la terapia y repetir

el procedimiento el día 2, 7 y 21 luego de iniciada la terapia quelante con el

fin de confirmar si los niveles de plomo están disminuyendo.

8. Medidas de descontaminación: si en la radiografía de abdomen se

visualizan fragmentos de plomo está indicada la irrigación del tracto

gastrointestinal con polietilenglicol (ver capítulo 1). En el caso de

compuestos a base de plomo que puedan ser retenidos en el tracto

gastrointestinal, debe hacerse remoción endoscópica o quirúrgica.

9. Las balas o balines presentes en las serosas, el espacio sinovial,

pseudoquistes paravertebrales o espacio subcapsular, deben ser removidos

quirúrgicamente por el riesgo de producir toxicidad sistémica.

Page 254: Para paciente intoxicado

60. INTOXICACIÓN POR TALIO

Dres. Joaquín López, Carlos F. Molina y Andrés F. Zuluaga

Descripción: el sulfato de talio es un polvo incoloro, insaboro e inoloro, usado

en procesos industriales, juegos pirotécnicos, radiología y medicina

homeopática. Aunque actualmente su uso está prohibido debido a su elevada

toxicidad, todavía se consigue ilegalmente como “matasiete” o “exterminio”.

Farmacocinética: fácilmente absorbible por inhalación, tracto gastrointestinal y

piel intacta. Tiene amplia distribución por el organismo (Vd= 3.6 L/kg), no se

metaboliza y es excretado por vía fecal, con significativa circulación

enterohepática que explica su prolongado tiempo de vida media (2 a 4 días).

Mecanismo de toxicidad: es citotóxico directo, debido a que las membranas

celulares no diferencian entre talio y potasio por la extrema similitud entre sus

radios iónicos (1:47 vs 1.33 Angstroms, respectivamente). Por lo anterior, el

talio se acumula en tejidos con alta concentración de potasio, como el sistema

nervioso, músculo e hígado. Entre la constelación de efectos nocivos

atribuibles al talio se puede describir:

Desacopla la fosforilación oxidativa e inhibe el ciclo de Krebs

Se une a la riboflavina y sus cofactores, inhibe el FAD (altera el

metabolismo del piruvato).

Altera la síntesis proteica y aumenta el calcio intracelular.

Fases clínicas de la intoxicación por talio: en las primeras 24 horas

postexposición, los pacientes presentan síntomas gastrointestinales como

náuseas, vómito, diarrea, constipación, deposiciones de color negro y dolor

abdominal. Entre las 24 y 48 horas siguientes, aparecen debilidad muscular y

parestesias exquisitamente dolorosas en manos y pies, que posteriormente se

van acompañando de taquicardia, hipertensión, depresión miocárdica y

arritmias cardíacas, íleo paralítico y duodenitis. Después de 10 días y hasta 1

mes después de la exposición, se observa alopecia (“signo popular”

diagnóstico), dermatitis perioral, estomatitis periplantar hiperqueratósica y

Page 255: Para paciente intoxicado

xerosis difusa, trastornos de personalidad y alteraciones endocrinas. La neuritis

óptica y las líneas blancas en las uñas secundario a distrofia (líneas de Mees)

pueden observarse tardíamente en la evolución del paciente. Las secuelas

neurológicas (por ejemplo, pérdida de memoria, neuropatía sensitivo-motora

dolorosa, psicosis y demencia) son secuelas comunes.

Diagnóstico: se realiza con la historia de exposición y la presencia de signos y

síntomas sugestivos, y se corrobora mediante medición en orina de 24 horas

de niveles de talio (deben ser >10 g/L) o mediante una prueba cualitativa en

orina que resulte positiva.

Además de los niveles cuantitativos en orina (disponible en el Laboratorio de

Farmacología y Toxicología, Facultad de Medicina, Universidad de Antioquia),

también se recomienda solicitar electrolitos, transaminasas, bilirrubinas y

lipasa. El talio es radioopaco y, en ingestiones agudas, se puede visualizar en

las radiografías simples de abdomen.

Dosis tóxica: La dosis letal (DL50) en humanos es 8 a 12 mg/kg.

Tratamiento:

1. ABCD inicial.

2. Trate convulsiones y coma, si ocurren.

3. Si hay hipokalemia iniciar reposición según déficit.

4. El antídoto específico es el Azul de Prussia (o ferrocianuro férrico,

medicamento vital no disponible), piedra angular del tratamiento en

Europa y Estados Unidos. La dosis oral recomendada para adultos es 3

g cada 8 horas, durante 6 semanas. En niños se sugiere 1 g cada 8

horas.

5. En ausencia del antídoto anterior, se puede administrar carbón activado

al 25% diluyendo 1 g/kg de peso en agua corriente y se le da a tomar al

paciente o se pasa por la sonda orogástrica, repitiendo esta misma dosis

cada 6 horas (ver capítulo 1) hasta que los niveles urinarios de talio sean

<0.5 g/L.

Page 256: Para paciente intoxicado

6. Sulfato de magnesio (Sal de Epsom) 250 mg/kg en solución al 25 % en

agua vía oral dosis única, treinta minutos luego de la administración del

carbón, repetir si no se presenta catarsis en las siguientes 4 horas.

Page 257: Para paciente intoxicado

61. ACTIVIDADES DE EDUCACIÓN EN SALUD: RECOMENDACIONES

PARA LA COMUNIDAD.

Dr. Rosendo E. Orozco Cardona

Acciones preventivas y correctivas: Generalidades.

Al decidir sobre la importancia de cualquier deficiencia en las condiciones

ambientales descubierta que amenace la salud pública, es preciso tener un

buen juicio. Si se descubren deficiencias serias, la aplicación de la medida

correctiva tiene una inmensa importancia, ella debe ser el resultado de un juicio

muy meditado y cuidadoso, teniendo en cuenta que en muchos casos puede

sobrevenir un brote por intoxicación masiva, si las medidas correctivas no se

aplican inmediatamente:

- Cuando se presente una intoxicación, un accidente o emergencia se debe

tomar acciones intra e interinstitucionales, alertar a los actores del SGSS de

la localidad, analizar en el Comité de Vigilancia Epidemiológica las medidas

pertinentes a tomar de acuerdo a la gravedad del evento y circunstancias

relacionados con la intoxicación, accidente o emergencia por sustancias

químicas-plaguicidas y que, según criterios epidemiológicos, demandan una

acción de intervención en forma inmediata.

- Preferencialmente desplazarse al sitio donde ocurrió o esta registrándose el

evento aislar la población en riesgo, así como los animales domésticos, etc.,

de inmediato informar y educar la comunidad sobre los factores de riesgo

que causaron la intoxicación y el manejo adecuado que se le debe dar a

estas sustancias tóxicas: uso mesurado y manipulación correcta.

- Recordar que la comunidad acostumbra re-envasar plaguicidas, reutilizar

envases y empaques y que no utilizan medidas de protección personal

cuando esta manipulando estas sustancias tóxicas, sobre lo anterior hay

que hacer mayor énfasis cuando estemos realizando la infamación,

educación y comunicación.

Page 258: Para paciente intoxicado

- El mayor numero de accidentes, emergencias y eventos de intoxicación por

sustancias químicas plaguicidas ocurren por inadecuado almacenamiento y

transporte lo que ocasiona fugas, derrames, causando desastres

ambientales, desastres tecnológicos entre otros.

- Se debe analizar y hacer seguimiento al estado final del(os) paciente(s), de

las secuelas y la incapacidad permanente cuando así suceda. Evaluar estos

pacientes por salud ocupacional (ARP) o por quien este en capacidad y

autorizado para hacerlo, conforme a lo establecido en la normatividad

vigente.

- Cuando el análisis de la información exprese incrementos en la letalidad

derivados de fallas en la atención, es preciso impulsar acciones de

vigilancia y control para el mejoramiento de la calidad y oportunidad en

coordinación con las EPS, ARS, ARP y las IPS, así como tener la dotación

suficiente de antivenenos, medicamentos complementarios, la red de IPS

operando y brindar información actualizada a la comunidad sobre las

novedades de la prestación oportuna de los servicios de salud, de acuerdo

con su estado de afiliación y su lugar de residencia. Esta información es útil

para diseñar estrategias de mejoramiento de los servicios y del acceso de la

población.

Intoxicaciones por sustancias químicas-plaguicidas:

Acciones de información, educación y comunicación.

Permanentemente mantener informada y educada a la comunidad por todos los

medios posibles (radio, televisión, cartillas, boletines, volantes, charlas en

escuelas, colegios, reuniones de juntas de acción comunal, etc.) y durante las

investigaciones de campo, sobre el manejo mesurado de las sustancias

químicas plaguicidas. Debe hacerse el mayor énfasis posible porque se puede

evitar la muerte, las lesiones y sus secuelas y además es económicamente

menos costosa. En los distintos ambientes sociales debe desarrollarse la

cultura de la prevención. Siempre tener presente, entre otras, las siguientes

recomendaciones y medidas de precaución, con relación a:

Page 259: Para paciente intoxicado

El producto:

- Recuerde que todo plaguicida es veneno.

- No compre productos sin etiqueta, todos los plaguicidas deben estar en el

envase original, en buen estado y perfectamente sellado. Si no sabe leer

hacerse leer la etiqueta.

- Compre el plaguicida en un almacén agropecuario reconocido y autorizado

para funcionar.

- Revise la fecha de vencimiento o de caducidad.

- En lo posible y en caso de extrema necesidad, utilice plaguicidas de

categorías III y IV, es decir, los de la banda azul y verde que son los

mediana y ligeramente tóxicos.

- Utilice la dosis recomendada por el asistente técnico (Agrónomo,

Veterinario), por ninguna razón aumente o disminuya la dosis recomendada.

- Mida muy bien las cantidades, para esto usar elementos de medida como:

jeringas, tarros dosificadores y pesas grameras, instrumentos muy útiles

para preparar los venenos en las cantidades exactas.

- Cuando realice las mezclas y preparaciones del veneno, hágalas al aire

libre ya que en lugares cerrados se concentran vapores tóxicos que pueden

hacerle daño.

- Utilice una vara o un palo para mezclar bien la solución. Nunca utilice las

manos o pies en esta operación, así estén cubiertos con guantes o botas de

caucho.

El transporte:

- Cualquiera que sea el medio de transporte que utilice para llevar los

químicos-plaguicidas hasta el sitio donde se aplican, estos productos

deberán ser trasladados solos, sin la compañía de alimentos, ropa o

utensilios para la casa: jabón, drogas, etc. y dispuestos dentro del vehículo

de transporte en compartimentos aislados, cerrados y seguros.

Almacenamiento y re-uso:

Page 260: Para paciente intoxicado

- No deben guardarse juntos venenos, cáusticos (ácidos, álcalis), elementos

de aseo, juguetes, alimentos y drogas.

- No se deben retirar las etiquetas, ni las tapas de seguridad de ningún

producto.

- En el hogar almacenar las sustancias químicas plaguicidas correctamente,

junto con el(los) aspersor(es) o bombas de espalda y los elementos de

protección personal: fuera del alcance de los niños, animales domésticos;

aislados de sala, habitaciones, cocina, comedores, unidades sanitarias etc.;

en sitios seguros (alacenas, cuartos, bodegas) con llave y solamente

destinados para este fin, bien ventilados y secos para evitar la acumulación

de vapores tóxicos que se originan en los derrames accidentales o por

envases rotos.

- No reemvasar, ni reempacar plaguicidas en recipientes diferentes al

original.

- No reutilizar envases y empaques ni usarlos con otros fines.

Seguridad personal (salud ocupacional):

- Siempre usar la protección personal cuando se manipulan sustancias

químicas plaguicidas: guantes de caucho, botas altas de caucho, delantal

impermeable, overoles, protección para los ojos y para la cara, careta con

respirador, las fumigadoras o “bombas” de espalda en buen estado de

funcionamiento y calibración.

- No destape los envases de veneno, ni las boquillas con la boca.

- Si se siente indispuesto al aplicar el veneno suspenda esta actividad y visite

al médico.

- Siempre lavarse y bañarse completamente después de terminar las

actividades de aspersión y/o aplicación, así como lavar la ropa usada. DE

NINGUNA MANERA EL TÓXICO DEBE HACER CONTACTO CON LA PIEL

U OTRA PARTE DEL CUERPO.

- Recuerde que los venenos entran al organismo por la boca, por la nariz, por

la piel y mucosas.

- Cuando manipule los plaguicidas NO fume, NO coma y NO beba porque

ingiere el veneno y se intoxica, es preferible suspender la labor, asearse las

Page 261: Para paciente intoxicado

manos y luego alimentarse. El tiempo de aplicación del veneno no debe ser

mayor a cuatro horas continuas.

- No le dé a un paciente envenenado con grasas, leche, bebidas alcohólicas,

etc. No le sirven para contrarrestar o neutralizar el veneno, por el contrario

aumentan su difusión en el organismo. Es mejor no demorarse y llevarlo al

médico inmediatamente.

- Cuando vaya asperjar “fumigar” no deje que niños, menores de edad o

animales lo acompañen porque se pueden intoxicar. Informe a las personas

de su casa que va a asperjar y el nombre del veneno-plaguicida.

- Cuando un VENENO se derrame, debe rodearse y taparse con tierra, arena

seca, aserrín u otro material absorbente y luego recogerlo y darle la

disposición correcta. NO DEBE utilizar AGUA u otro líquido porque se

puede aumentar el riesgo de contaminación.

- No aplique el veneno con vientos fuertes porque pueden causar intoxicación

al aplicador o contaminar otros cultivos, el agua, animales, etc. Solo aplique

los venenos en las primeras horas de la mañana entre las 6 a.m. y 10 a.m. y

en las tardes frescas entre las 4 p.m. y 6:30 p.m.

- Aplicar venenos en la cabeza para combatir piojos y liendres, causa la

muerte de niños y adultos.

- No aplique venenos en las camas de dormir. Puede causar la muerte de

niños y adultos.

- No se deben suministrar drogas en la oscuridad, ni usar solventes en

lugares cerrados.

- Evitar la reentrada inmediata a los cultivos después de ser asperjados:

Respetar el tiempo de carencia para cada producto indicado en la etiqueta,

así como para la cosecha luego de la última aplicación.

- Los envases vacíos deben ser totalmente escurridos en el momento de

agotar su contenido (no después), para ello deberán mantenerse en

posición de descarga no menos de 30 segundos. Hasta que se agote su

contenido. Esto se evidencia por un goteo espaciado. Los envases vacíos

pueden contener todavía entre 0.5 y 1% del volumen del producto original.

El agua del triple lavado y limpieza de estos envases se agregara a las

bombas aspersoras (bomba de espalda) para ser utilizada en la aplicación.

Page 262: Para paciente intoxicado

- Los médicos deben dar una adecuada educación en salud, no solo acerca

de la enfermedad, y en caso de que ésta se presente, utilizar el tiempo

adecuado para explicar la formulación, incluso por escrito, con letra clara e

idealmente incluyendo los posibles efectos secundarios y así evitar la

intoxicación por fármacos.

Manejo y control ambiental:

- Mantener las fuentes de agua limpias y libres de contaminantes químicos

plaguicidas, envases, empaques y residuos o remanentes de estos.

- Tener presente la franja de seguridad mayor a 10 metros de la fuente de

agua, cuando se aplican los pesticidas.

- No lave ni enjuague la(s) aspersoras o bombas de espalda(s) en las fuentes

de agua.

- Realizar el tratamiento y disposición correcto de desechos, empaque y

envases: Recordar que el decreto 1443 de 2004, Resolución 693 del 19 de

abril de 2007de los ministerios de Protección Social y Ambiente, Vivienda y

Desarrollo Territorial, Articulo 6, prohíbe la quema y enterramiento de estos

y se establecen los criterios y requisitos que deben ser considerados para

los Planes de Gestión de Devolución de Productos Posconsumo de

Plaguicidas. Los envases con el triple lavado vacíos, deben enviarse a

lugares específicos para su destrucción (Centros de acopio). En estos

lugares tienen diferentes alternativas de eliminación como: reciclado de

materiales, reutilización energética, reutilización de los envases e

incineración en hornos especiales. POR ESTO NUNCA QUEME O

ENTIERRE LOS ENVASES PORQUE AFECTA LA SALUD PUBLICA Y

CONTAMINA EL MEDIO AMBIENTE.

Consumo de alimentos tratados con agroquímicos:

- No cosechar ni consumir productos agrícolas y pecuarios recién tratados

con agroquímicos, como frutas y verduras, etc., es necesario respetar el

tiempo recomendado en la etiqueta del producto. Es decir (y se insiste)

“Respetar el periodo de carencia para cada producto indicado en la

etiqueta”. No programe aplicación de tóxicos o venenos cuando esté

Page 263: Para paciente intoxicado

próximo a la cosecha. Si lo hace llevará productos más contaminados al

mercado, con mayor contenido de trazas de tóxicos que serán acumulados

por los organismos de los consumidores y, por otra parte, sus productos

pueden ser rechazados, perder valor económico y comercial ó tener

problemas graves ya que se pueden intoxicar las personas que los

consuman.

Alternativas para el control de plagas:

- Es de vital importancia aprender a conocer y manejar el agroecosistema y

todas las interactuaciones que en él se dan.

- No sembrar monocultivos sino agroecosistemas, donde la Alelopatía, exista.

- Aprender a leer la naturaleza, una plaga y una maleza, solo nos están

diciendo las deficiencias o excesos que el suelo tiene. La clave es la vida

del suelo, como se dice: “SUELO SANO ES PLANTA SANA, PLANTA

SANA ES HOMBRE SANO”

- Programar la rotación de cultivos, la cual consiste en ocupar la tierra con

cultivos diferentes, alternando cada vez que se termine la cosecha, con el

fin de interrumpir los ciclos de vida de las plagas manteniendo su población

bajo control, además conserva la fertilidad y la salud del suelo; también

implementar la asociación de cultivos, incorporando dos o más cultivos en

un mismo terreno.

- Utilizar el CONTROL BIOLÓGICO o manejo de plagas, dejando actuar a los

enemigos naturales, impidiendo así la instalación de estas y su

reproducción, manteniéndolas en un nivel mínimo donde no provoquen

daño económico en el cultivo.

- El control de plagas con los enemigos naturales, no trae problemas que

atenten contra la integridad del hombre y el medio ambiente. Por lo anterior

se deben favorecer, las condiciones de vida de los enemigos naturales

(parásitos naturales, depredadores y entomopatógenos) dentro del cultivo

con cultivos huéspedes y protegerlos de la aplicación de plaguicidas.

- Usar la Alelopatía y los biopreparados para el control de plagas (teniendo

las mismas precauciones y recomendaciones de manejo mesurado de

sustancias químicas plaguicidas), los cuales son productos extraídos de las

Page 264: Para paciente intoxicado

plantas con propiedades insecticidas, fungicidas, nematicidas y repelentes.

Para utilizarlos adecuadamente es muy importante que sean bien conocidos

y saberlos preparar o adquirirlos de laboratorios reconocidos y autorizados,

y no eliminar los insectos benéficos o aumentar el riesgo de intoxicación y

de contaminación ambiental.

- Propiciar la AGROECOLOGÍA, la cual no utiliza plaguicidas, ni fertilizantes

químicos, ni venenos, ni cultivos manipulados genéticamente

(transgénicos).

Las recomendaciones y medidas dirigidas a informar y educar a la

comunidad, deben hacer parte de la campaña del uso mesurado de

plaguicidas durante los meses de noviembre y diciembre de cada año,

que apoyan la Celebración del día de NO USO DE PLAGUICIDAS, el cual

se celebra internacionalmente el 3 de diciembre.

Accidentes por animales venenosos

Acciones de informacion, educacion y comunicacion.

Para los eventos de accidentes por animales venenosos no existe una forma

de prevención eficaz. Sin embargo para el control de los accidentes en un área

específica, es preciso Informar, Educar y Comunicar las siguientes acciones

comunitarias (y las demás que sean validas y se conozcan en la localidad o

comunidad especifica o que estén establecidas por salud ocupacional - ARP)

para minimizar la gravedad y el número de casos:

- Usar guantes de caucho o de cuero para manejo de leña almacenada,

escombros, rastrojo y otros similares.

- Nunca introducir la(s) mano(s) en huecos, orificios, telarañas, nido de

abejas, etc.

- Tener cuidado en la limpieza de potreros, rastrojos, telarañas, nidos de

abejas, etc.

Page 265: Para paciente intoxicado

- Tener cuidado al revisar en lugares cálidos, oscuros y húmedos, como

“pilas” de madera, hojarasca, cañas, ranuras, fisuras u otros similares, a

estos animales les gusta esconderse en estos sitios, para atrapar sus

presas.

- Mantener limpia la casa y sus alrededores. Evitar acumulación de residuos,

basuras y sobras de alimentos, piedras, tejas o madera y rastrojo alto

cerca de las casas, que atraen y abrigan animales pequeños que sirven de

alimento a las serpientes como ratones, entre otros.

- El uso de botas de caña alta, evitan cerca del 80% de los accidentes.

- Usar toldillos en los dormitorios (algunos animales entran a la habitación

por el techo o caen de él).

- Siempre revisar la ropa para vestir, las toallas y zapatos.

- Podar los árboles o jardín que estén en contacto con techos y ventanas de

las casas o apartamentos.

- Cerrar todas las posibles entradas a las habitaciones: resanar fisuras en

techos, paredes y pisos.

En caso de presentarse una agresión o accidente por animal venenoso, tener

en cuenta:

- Se debe tranquilizar al paciente y asi mismo.

- Evitar el uso de torniquetes.

- No colocar hielo en el sitio del accidente, emplastos, etc., esto puede

favorecer daño de los tejidos, agravando el cuadro clínico.

- No dar alcohol o bebidas que lo contengan, porque produce disminución de

la presión arterial.

- No realizar incisiones en el sitio de la picadura o mordedura, ni succionar el

veneno.

- Colocar al paciente en reposo absoluto, aflojar o quitar la ropa, lavar la

parte del cuerpo afectada con abundante agua y jabón.

- No tomar o comer alimentos o bebidas (nada vía oral) durante las primeras

8 horas.

- No administrar medicamentos por vía intramuscular o intravenosa

(inyectados), el accidente en el paciente altera la coagulación sanguínea y

puede desencadenar hemorragias.

Page 266: Para paciente intoxicado

- Abrigar al paciente, inmovilizar la extremidad si es el caso, trasladar

(transportar) en posición neutral, lo mas pronto posible, al centro

hospitalario más cercano.

- Es de vital importancia tratar de identificar lo mejor posible el animal que

causó el accidente (familia, genero y especie).

En accidente o agresión por alacaranes tener en cuenta:

Se recomienda a los habitantes una serie de acciones para lograr su

prevención: evitar la posibilidad de contacto; procurar la limpieza

domiciliaria (almacenamiento de escombros, ladrillos, tejas, leña,

maderas) y de sus alrededores, (baldíos), también evitar que los niños

jueguen en esos lugares; tapar las grietas de los revoques de las

paredes sobre todo si estas son de ladrillo hueco.

Los alacranes suelen llegar por los desagües, por lo tanto se

recomienda sellar las cámaras de las cloacas; colocar malla metálica

tanto en las rejillas de las casas (cocina, baños), como en los pluviales;

utilizar insecticidas que sean inocuos para los humanos, animales y

plantas, como por ejemplo piretroides eliminan a estas especies que son

muy sensibles.

Si ha encontrado uno de ellos, no olvide revisar la cama antes de

acostarse; no dejar ropa en el suelo y si ello sucede sacudirla antes de

utilizarla; revisar los zapatos sobre todo los de los niños antes de

colocárselos.

Ante la picadura de alacranes, se recomienda a la población que de

inmediato dirigirse a los hospitales para que se tomen en cuenta las

medidas de cuidado, ya que el veneno segregado puede ser fatal para

las personas.

Page 267: Para paciente intoxicado

BIBLIOGRAFÍA

Artículos recomendados:

Capítulo 1:

1. Mokhlesi B, Corbridge T. Toxicology in the critically ill patient. Clin Chest Med

2003; 24(4):689-711.

2. Barceloux D, Mc Guigan M, Hartigan-Go K. Position paper: cathartics. J Toxicol

Clin Toxicol 2004; 42(3):243-253.

3. Vale JA, Kulig K. Position paper: gastric lavage. J Toxicol Clin Toxicol 2004;

42(7):933-943.

4. Tenenbein M. Position paper: whole bowel irrigation. J Toxicol Clin Toxicol 2004;

42(6):843-854.

5. Proudfoot AT, Krenzelok EP, Vale JA. Position Paper on urine alkalinization. J

Toxicol Clin Toxicol 2004; 42(1):1-26.

6. Chyka PA, Seger D, Krenzelok EP, Vale JA. Position paper: Single-dose

activated charcoal. Clin Toxicol (Phila) 2005; 43(2):61-87.

7. Heard K. The changing indications of gastrointestinal decontamination in

poisonings. Clin Lab Med 2006; 26(1):1-12.

8. Erickson TB, Thompson TM, Lu JJ. The approach to the patient with an unknown

overdose. Emerg Med Clin North Am 2007; 25(2):249-281.

Capítulo 7:

1. Vidaeff AC, Mastrobattista JM. In utero cocaine exposure: a thorny mix of science

and mythology. Am J Perinatol 2003; 20(4):165-172.

2. Ciliberto CF, Marx GF. Physiological changes associated with pregnancy.

Physiology Update in Anaesthesia 1998; 9(2):1–3.

3. O'Leary CM. Fetal alcohol syndrome: diagnosis, epidemiology, and

developmental outcomes. J Paediatr Child Health 2004; 40(1-2):2-7.

Capítulo 8:

1. Haro LH, Hess EP, Decker WW. Arrhythmias in the office. Med Clin North Am

2006; 90(3):417-38.

Capítulo 9:

Page 268: Para paciente intoxicado

1. Yilmaz HL, Yildizdas DR. Amitraz poisoning, an emerging problem: epidemiology,

clinical features, management, and preventive strategies. Arch Dis Child 2003;

88(2):130-134.

2. Proudfoot AT. Poisoning with amitraz. Toxicol Rev 2003; 22(2):71-74.

3. Doganay Z, Aygun D, Altintop L, Guven H, Bildik F. Basic toxicological approach

has been effective in two poisoned patients with amitraz ingestion: case reports.

Hum Exp Toxicol 2002; 21(1):55-57.

4. Leung VK, Chan TY, Yeung VT. Amitraz poisoning in humans. J Toxicol Clin

Toxicol 1999; 37(4):513-514.

5. Avsarogullari L, Ikizceli I, Sungur M, Sozuer E, Akdur O, Yucei M. Acute amitraz

poisoning in adults: clinical features, laboratory findings, and management. Clin

Toxicol (Phila) 2006; 44(1):19-23.

6. Ulukaya S, Demirag K, Moral AR. Acute amitraz intoxication in human. Intensive

Care Med 2001; 27(5):930-933.

Capítulo 10:

1. Vale A. Bradberry S. Warfarin and long-acting anticoagulants. Medicine 2007;

35:12:664.

2. Watt BE, Proudfoot AT, Bradberry SM, Vale JA. Anticoagulant rodenticides.

Toxicol Rev. 2005;24(4):259-69.

Capítulo 11:

1. Goncharov NV, Jenkins RO, Radilov AS. Toxicology of fluoroacetate: a review,

with possible directions for therapy research. J Appl Toxicol. 2006;26(2):148-61.

Capítulo 12:

1. Bradberry SR, Proudfoot AT, Vale JA. Glyphosate poisoning. Toxicol Rev 2004;

23(3): 159-67.

2. Weng SF, Hung DZ, Hu SY, Tsan YT, Wang LM. Rhabdomyolysis from an

intramuscular injection of glyphosate-surfactant herbicide. Clin Toxicol (Phila)

2008;46(9):890-1

3. Hsiao CT, Lin LJ, Hsiao KY, Chou MH, Hsiao SH. Acute pancreatitis caused by

severe glyphosate-surfactant oral intoxication. Am J Emerg Med

2008;26(3):384.e3-5

4. Lee CH, Shih CP, Hsu KH, Hung DZ, Lin CC. The early prognostic factors of

glyphosate-surfactant intoxication. Am J Emerg Med 2008;26(3):275-81.

Page 269: Para paciente intoxicado

Capítulo 13:

1. Eddleston M, Buckley NA, Eyer P, Dawson AH. Management of acute

organophosphorus pesticide poisoning. Lancet 2008:16;371(9612):597-607.

2. Li Y, et al. Gastric lavage in acute organophosphorus pesticide poisoning

(GLAOP)--a randomised controlled trial of multiple vs. single gastric lavage in

unselected acute organophosphorus pesticide poisoning. BMC Emerg Med

2006:6:10.

3. Eddleston M. The pathophysiology of organophosphorus pesticide self-poisoning

is not so simple. Neth J Med 2008:66(4):146-8.

4. Aardema H, Meertens JH, Ligtenberg JJ, Peters-Polman OM, Tulleken JE,

Zijlstra JG. Organophosphorus pesticide poisoning: cases and developments.

Neth J Med 2008:66(4):149-53.

Capítulo 14:

1. Karatas AD, Aygun D, Baydin A. Characteristics of endosulfan poisoning: a study

of 23 cases. Singapore Med J 2006;47(12):1030-2.

Capítulo 23:

1. Reglamento Técnico Forense Para La Determinación Clínica Del Estado De

Embriaguez Aguda. Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses.

Diciembre 2005. Disponible en la siguiente dirección:

http://www.dmsjuridica.com/Docs/MEDICINA%20LEGAL/guia-embraguiez.pdf

2. Artículo 250 de la Ley 906 de 2004 (C.P.P.); Sentencia C-822/05 de la Corte

Constitucional, Agosto 10 de 2005.

Capítulo 24:

1. Peterson RG & Peterson LN: Cleansing the blood: hemodialysis, peritoneal

dialysis, exchange transfusion, charcoal hemoperfusion, forced diuresis. Pediatr

Clin N Am 1986; 33.

Capítulo 28:

1. Isbister GK, Buckley NA, Whyte IM. Serotonin toxicity: a practical approach to

diagnosis and treatment. Med J Aust 2007;187(6):361-5.

2. Haddad PM, Dursun SM. Neurological complications of psychiatric drugs: clinical

features and management. Hum Psychopharmacol 2008;23:15-26.

3. Boyer EW, Shannon M. The serotonin syndrome. N Engl J Med

2005;352(11):1112-20.

Page 270: Para paciente intoxicado

4. Gillman PK. A review of serotonin toxicity data: implications for the mechanisms

of antidepressant drug action. Biol Psychiatry 2006;59(11):1046-51.

5. Christensen RC. Identifying serotonin syndrome in the emergency department.

Am J Emerg Med 2005;23(3):406-8.

6. Bijl D. The serotonin syndrome. Neth J Med 2004 Oct;62(9):309-13.

Capítulo 29:

1. Bryson PD. Marijuana. In: Comprehensive review in toxicology for emergency

clinicians. Washington DC: Taylor & Francis, 1996:531-534.

2. Selden BS, Clark RF, Curry SC. Marijuana. Emerg Med Clin North Am 1990;

8(3):527-39.

Capítulo 30:

1. Sporer K. Acute Heroin Overdose. Ann Intern Med 1999; 130:584-590.

2. Waldhoer M, Bartlett S, Whistler J. Ann. Rev Biochem 2004. 73: 953-90.

3. American Heart Association. Guidelines for Cardiopulmonary Resuscitation and

Emergency Cardiovascular Care. Circulation 2005; 112: IV-126-IV-132.

4. Kosten T. O’Connor P. Management of drug and alcohol Withdrawal. N Engl J

Med 2003; 348: 1786-95.

Capítulo 31:

1. Lynch RM, Robertson R. Anaphylactoid reactions to intravenous N-

acetylcysteine: a prospective case controlled study. Accid Emerg Nurs.

2004;12(1):10-5.

2. Vale JA, Proudfoot AT. Paracetamol (acetaminophen) poisoning. Lancet.

1995;346(8974):547-52.

Capítulo 32:

1. Beasley V. Nephrotoxic Metals and Inorganics. Veterinary toxicology.

International Veterinary Information Service. Disponible en: www.ivis.org.

2. Mokhlesi B.Leiken J. Murray P. Corbridge T. General Approach to the Intoxicated

Patient. Adult Toxicology in Critical Care: Part I. Chest 2003;123;577-92.

Capítulo 34:

1. Boulinguez S, Sparsa A, Bouyssou-Gauthier ML. et al. Serious toxicity in a

Young child due to ibuprofen Associated whit EMLA cream used as topical

Page 271: Para paciente intoxicado

anesthetic for the mechanical debridement of leg ulcer .J Am Acad Dermato

2000;42(1):146-48.

Capítulo 35:

1. DeWitt CR, Waksman J. Pharmacology, Pathophysiology and Management of

Calcium Channel Blocker and β-Blocker Toxicity. Toxicol Rev 2004; 23(4): 223-

38

Capítulo 37:

1. Erickson TB et al. Pediatric Toxicology. Capítulo 39, pg. 273

Capítulo 38:

1. Kerns W. Management of beta-adrenergic blocker and calcium channel

antagonist toxicity. Emerg Med Clin North Am 2007;25(2):309-31.

Capítulo 45:

1. Boton R, Gaviria M, Badle DC: Prevalence, pathogenesis and treatment of renal

dysfunction associated with chronic lithium therapy. Am J Kidney Dis 10: 329-

345, 1987.

2. Domínguez L, Medina O, García S. Intoxicación con Litio. Anales de.Med. Interna

2006; 23(9):441-45.

3. Albert Jaeger. Lithium. Medicine 2007;35(12):629-630.

4. Adityanjee, Kaizad R. Munshi and Anita Thampy. The Syndrome of Irreversible

Lithium-Effectuated Neurotoxicity. Clin Neuropharmacol 2005;28:38–49.

Capítulo 47-49:

1. García ME. Aspectos Clínicos y epidemiológicos del accidente ofídico en

Antioquia y Chocó. En: Primer Simposio Colombiano de Toxinología. Editorial

Universidad de Antioquia. Medellín. 1999: 109-119.

2. Gold B, Dart R, Barish R. Bites of Venomous Snakes. N Engl J Med

2002;347:347-56.

3. Gold B, Dart R, Barish R. North American Snake envenomation: diagnosis,

treatment and management. Emerg Med Clin N Am 2004;22:423-43.

4. Nuñez V. Patogénesis de los efectos sistémicos de los venenos de serpientes.

En: Primer Simposio Colombiano de Toxinología. Editorial Universidad de

Antioquia. Medellín. 1999: 61-69.

Page 272: Para paciente intoxicado

5. Otero R, Núñez V, Barona J, Díaz B, Saldarriaga M. Características bioquímicas

y capacidad neutralizante de cuatro antivenenos polivalentes frente a los efectos

farmacológicos y enzimáticos del veneno de Bothrops Asper y Porthidium

nasutum de Antioquia y Chocó. Iatreia 2002;15(1):5-15.

6. Otero R., Osorio R., Valderrama R., Giraldo CA. Efectos farmacológicos y

enzimáticos de los venenos de serpientes de Antioquia y Chocó (Colombia).

Toxicon 1992;30:611-20.

7. Otero R, Gutierrez JM, Nuñez V, Robles A, Estrada R, Segura E et al. A

randomized double-blind clinical trial of two antivenoms in patients bitten by

Bothrops atrox in Colombia. Trans R Soc Trop Med Hyg 1996;90:696-700.

8. Otero R., Mesa MB. Mordeduras graves por serpientes. En: Fundamentos de

Pediatría. El niño en estado crítico. Corporación para Investigaciones biológicas.

Medellín; 2001: 571-578.

Capítulo 51:

1. Otero, R et al. Scorpion envenoming in two regions of Colombia:clinical,

epidemiological and therapeutic aspects. Trans R Soc Trop Med Hyg

2004;98:742-50.

2. Rodríguez de la Vega R. Current views on scorpion toxins specific for K-

channels. Toxicon 2004;43:865–75.

Capítulo 53:

1. Schnepp R. Cyanide: sources, perceptions, and risks. J Emerg Nurs. 2006;32(4

Suppl):S3-7.

3. Baud FJ. Cyanide: critical issues in diagnosis and Treatment. Hum Exp Toxicol.

2007;26(3):191-201.

4. Borron SW. Recognition and treatment of acute cyanide poisoning. J Emerg

Nurs. 2006;32(4 Suppl):S12-8.

5. Allister Vale. Cyanide. Medicine 35:11 612 -13.

Capítulo 56:

1. Cullen NM, Wolf LR, St Clair D. Pediatric arsenic ingestion. Am J Emerg Med.

1995;13(4):432-5.

Capítulo 57:

1. Bateman DN. Carbon monoxide. Medicine 2007;35(11):604-5.

Page 273: Para paciente intoxicado

Capítulo 58:

1. Bradberry S. Mercury. Medicine. 2007;35(12):632.

Capítulo 59:

1. Ramsay RE. Advances in the pharmacotherapy of epilepsy. Epilepsia

1993;34(Suppl 5):S9-16.

2. Royse, SE. Case studies in environmental medicine. Lead Toxicity. Atlanta.

Agency for toxic substances and disease registry. 1992.

Textos de referencia recomendados:

1. Goldfrank LR, Flomenbaum NE, Lewin NA, Howland MA, Hoffman RS, Nelson

LS [eds]. Goldfrank's Toxicologic Emergencies. 8th ed. New York: The

McGraw-Hill Companies, Inc., 2006.

a. De esta referencia recomendamos los siguientes capítulos:

Clancy C. Electrocardiographic principles. p. 119 – 30.

Fine JS. Pediatric principles. p. 487 – 500.

De Roos F. Miscellaneous Antihypertensives. p. 775-86.

Brubacher J. Beta-adrenergic antagonists. p. 924-41.

DeRoss F. Other antihypertensives. p. 946-58.

McGuigan M. Cannabinoids. p. 1212-1220.

Sue Y-J. Mercury. 1334-44.

Su M. Hydrofluoric acid and fluorides. p. 1417–23.

Clark RF. Insecticides: organic phosphorus compounds and carbamates. p.

1497-512.

Holland MG. Insecticides: Organic chlorines, pyrethrins/pyrethroids and

DEET. p. 1523-35.

Tominac R. Herbicides. p. 1536-55.

Tomaszewski C. Carbon monoxide. p. 1689-704.

2. Olson KR [ed]. Poisoning and Drug Overdose. 5th ed. New York: The McGraw-

Hill Companies Inc., 2007.

a. De esta referencia recomendamos los siguientes capítulos:

Olson KR. Emergency evaluation and treatment. p. 1-67.

Hayashi S. Angiotensin blockers and ACE inhibitors. p. 78-9.

Kosnett M. Arsenic. p. 115-19.

Benowitz NL. Beta-adrenergic blockers. p. 131-3.

Lew DH. Chlorinated hydrocarbon pesticides. p. 160-62.

Offerman S. Fluoroacetate. p. 200-01.

Page 274: Para paciente intoxicado

Smollin C. Glyphosate. p. 214-15.

Kosnett MJ. Mercury. 253-58.

Tane DA. Organophosphorus and carbamate insecticides. p. 292-5.

Ferguson TJ. Thallium. p. 354-55.

Olson KR. Theophylline. p. 355-57.

3. Shannon MW, Borron SW, Burns MJ. Haddad and Winchester’s Clinical

management of poisoning and drug overdose. 4th ed. Philapdelphia: Saunders-

Elseviere, 2007.

a. De esta referencia recomendamos los siguientes capítulos:

Erickson TB, Cumpston K, Dobiesz VA. Management principles of overdose

in pregnancy. p. 347-62.

Smolinske SC, Daubert GP, Spoerke DG. Poisonous plant. p. 473-506.

Yip L, Mégabarne B, Borron SW. Opioids. p. 635-658.

Lynton R. Barbiturates. p. 687-94.

Wang RY. Chemotherapeutic agents. p. 927-937.

Bird SB. Beta-adrenergic antagonists.p. 975-82.

Richardson WH, Betten DP, Williams SR, Clark R. Nitroprusside, ACE

inhibitors, and others cardiovascular agents. p. 983-1000.

Liebelt EL. Iron. 1119-28.

Ree JW, Aks SE. Organochlorine insecticides. p. 1231-1236.

Sue YJ, Pinkert H. Baby powder; borates and camphor. p. 1415-1422.

Aaron CK. Organophosphates and carbamates.p.1171-84.

4. Ellenhorn MJ, Schonwald S, Ordog G, Wasserberger J. Ellenhorn’s Medical

Toxicology: Diagnosis and Treatment of Human Poisoning. 2nd ed. Baltimore:

Williams & Wilkins, 1997.

a. De esta referencia recomendamos los siguientes capítulos:

Ellenhorn MJ, Wasserberger J Alcohols and glycols. p. 1149-1151.

Ellenhorn MJ. Lithium. p. 1579-85.

5. Brent J, Wallace KL, Burkhart KK, et al [eds]. Critical care toxicology: diagnosis

and management of the critically poisoned patient. 1st ed. Philadelphia:

Elsevier Mosby, 2005.

6. Klaassen CD. Casarett & Doull's Toxicology: The Basic Science of Poisons.

7th ed. New York: The McGraw-Hill Companies Inc., 2006.

7. Katzung B. Basic & Clinical Pharmacology. 10th ed. New York: The McGraw-

Hill Companies Inc.,2007

8. Erickson, TB. Pediatric Toxicology. Diagnosis and Manegement of the

Poisoned Child. 1st edition. Chicago: The McGraw-Hill Companies Inc., 2005.

Page 275: Para paciente intoxicado

9. Hoyos LS. Genotoxicidad de los plaguicidas. En: Córdoba D [ed]. Toxicología.

4ª ed, Medellín: Manual Moderno, 2000.

10. Carr SR, Coustan DR. Drugs, alcohol abuse, and effects in pregnancy. In:

Reece EA, Hobbins JC, Gant NF, eds. Clinical Obstetrics. The Fetus & Mother.

3rd ed., Malden: Blackwell Publishing Ltd., 2007: 236–247.

11. Ford MD, Delaney KA, Ling LJ, Erickson T. Ford: Clinical Toxicology. 1st ed.,

Philadelphia: WB Saunders Company, 2001.

a. De esta referencia recomendamos los siguientes capítulos:

Henretig F. Clonidine and Central Acting Antihypertensives. p. 391-396.

12. Gómez U, Manrique C. Intoxicación por salicilatos y acetaminofén.

Fundamentos de Pediatría: el niño en estado crítico. Medellín: CIB, 2001.

13. Brunton LL. Local Anesthetics. In: Goodman & Gilman’s Manual of

Pharmacology and Therapeutics. 10th ed., New York: The McGraw-Hill

Companies Inc., 2002: 241-53

Bases de datos recomendadas:

1. Micromedex® Healthcare Series, 2008. Thomson Micromedex, Greenwood

Village, Colorado, USA. Available at: http://www.thomsonhc.com

2. Emedicine® from WebMD, 2008. Omaha, Nebraska, USA. Available at:

http://www.emedicine.com

3. American Society of Health System Pharmacists. AHFS Drug Information. 2008.

Available at: http://www.ashp.org/

Page 276: Para paciente intoxicado

ANEXOS