laorganizacióninstitucional delacomunidadjudía · cierto desahogo económico comenzó a notarse...

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333 M O D U L O 49 La organización institucional de la comunidad judía DESARROLLO DE LA VIDA COMUNITARIA Instituciones de carácter filantrópico La comunidad judía quedó arraigada al país definitivamente en vísperas de la guerra de 1914 y posteriormente a la misma. Los judíos argentinos se entre- garon con dedicación al afianzamiento de sus instituciones colectivas, fundan- do todas aquellas que le hacían falta dotando de mayor solidez a aquellas que ya existían. La sociedad Ezrah (Asociación Israelita de Beneficencia y Socorros Mutuos) se había visto inundada antes de la guerra con innumerables pedidos de ayuda y el estallido de esta provocó el aumento de necesitados. El apoyo con algunos pesos no alcanzaba a resolverles el problema. Así fue como algunos de ellos op- taron por retornar a Europa a buscar nuevos rumbos. La desocupación en el campo y en la ciudad tuvo grandes efectos sobre los obreros judíos. Algunos comenzaron a dispersarse por las localidades del inte- rior del país en búsqueda de sustento y otros recurrieron a instituciones de be- neficencia judías –la Jevrá Kedushá y la Congregación 1 - para que les brin- dara ayuda. Cierto desahogo económico comenzó a notarse en un sector determinado de la comunidad judía – comerciantes, artesanos e industriales- quienes se habían establecido sólidamente antes de la guerra y que durante ella pudieron progre- sar. Estos comenzaron a participar en actividades y eventos de carácter filan- trópico, Así pudo la Ezrah celebrar el 29 de octubre de 1916 la colocación de la piedra fundamental para el edificio del Hospital. Poco tiempo después comenzó la construcción del mismo. Este se inauguró el 25 de mayo de 1921. Otra institución fue fundada en 1916 El Hogar Israelita Argentino pa- ra Ancianos y Huérfanos, incluía dos asilos separados para niños y adultos donde se albergaron centenares de personas. Los primeros habitantes del lugar fueron niños judíos huérfanos que estaban internados en los asilos porteños di- rigidos por religiosos católicos. El primer anciano también fue retirado de un re- fugio católico y el segundo fue uno de los propios fundadores, Abraham Vermont (veterano del periodismo judío en la Argentina).

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Page 1: Laorganizacióninstitucional delacomunidadjudía · Cierto desahogo económico comenzó a notarse en un sector determinado de la comunidad judía – comerciantes, artesanos e industriales-

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M O D U L O 49La organización institucionalde la comunidad judía

DESARROLLO DE LA VIDA COMUNITARIA

Instituciones de carácter filantrópico

La comunidad judía quedó arraigada al país definitivamente en vísperas dela guerra de 1914 y posteriormente a la misma. Los judíos argentinos se entre-garon con dedicación al afianzamiento de sus instituciones colectivas, fundan-do todas aquellas que le hacían falta dotando de mayor solidez a aquellas queya existían.

La sociedad Ezrah (Asociación Israelita de Beneficencia y Socorros Mutuos)se había visto inundada antes de la guerra con innumerables pedidos de ayuday el estallido de esta provocó el aumento de necesitados. El apoyo con algunospesos no alcanzaba a resolverles el problema. Así fue como algunos de ellos op-taron por retornar a Europa a buscar nuevos rumbos.

La desocupación en el campo y en la ciudad tuvo grandes efectos sobre losobreros judíos. Algunos comenzaron a dispersarse por las localidades del inte-rior del país en búsqueda de sustento y otros recurrieron a instituciones de be-neficencia judías –la Jevrá Kedushá y la Congregación1- para que les brin-dara ayuda.

Cierto desahogo económico comenzó a notarse en un sector determinado dela comunidad judía – comerciantes, artesanos e industriales- quienes se habíanestablecido sólidamente antes de la guerra y que durante ella pudieron progre-sar. Estos comenzaron a participar en actividades y eventos de carácter filan-trópico, Así pudo la Ezrah celebrar el 29 de octubre de 1916 la colocación de lapiedra fundamental para el edificio del Hospital.

Poco tiempo después comenzó la construcción del mismo. Este se inauguróel 25 de mayo de 1921.

Otra institución fue fundada en 1916 El Hogar Israelita Argentino pa-ra Ancianos y Huérfanos, incluía dos asilos separados para niños y adultosdonde se albergaron centenares de personas. Los primeros habitantes del lugarfueron niños judíos huérfanos que estaban internados en los asilos porteños di-rigidos por religiosos católicos. El primer anciano también fue retirado de un re-fugio católico y el segundo fue uno de los propios fundadores, Abraham Vermont(veterano del periodismo judío en la Argentina).

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El Asilo de Ancianos reci-bió a los inválidos de la coloni-zación y a artesanos de muchaedad, además de padres y ma-dres que ya no podían convivircon sus hijos. Debemos desta-car que en 1942 el filántropoJosé Iturrat, como expresión desolidaridad con el pueblo judíovíctima del nazismo, donó a laInstitución un vasto terreno enBurzaco (Provincia de BuenosAires), donde se construyeronlos pabellones que son usadoshasta el día de hoy por los an-cianos.

El Asilo de Niños recibió a un centenar de huérfanos de los pogroms deUcrania que fueron traídos al país en 1921.

Por su parte la Sociedad de Socorro de Damas Israelitas fundó en1919 un Asilo para Niñas, cuyo edificio propio estaba ubicado en el barrio dePalermo y El Hogar Infantil Israelita nació en 1928 gracias a la generosidadde un grupo de señoras judías para albergar a los niños menores cuyas madrestrabajaban todo el día.

La Sociedad de Protección a la Mujer- Ezras Noschim ha pasado pordiversas etapas cuidando siempre de dar amparo a las mujeres abandonadas.

La Liga Israelita contra la Tuberculosis nació en 1916 y aún hoy atiende amiles de pacientes en sus consultorios. En 1937 abrió en las Sierras de Córdo-ba (en Unquillo) un hospital y casa de convalecientes. La Cocina Popular hoyconocida como Comedores Populares fue creada en 1922, después de la Pri-mera Guerra Mundial, cuando numerosos inmigrantes judíos llegaban en situa-ción afligente a la Argentina. Esta muestra de solidaridad concreta y anónima(cualquiera podía sentarse a comer en los salones de la entidad sin ser interro-gado por nadie) ha continuado aún después del cese de la inmigración. Su pri-mer sede estuvo ubicada en la calle Riobamba 388 (Capital Federal).

Otras instituciones se fueron constituyendo con carácter filantrópico comola Bené-Brith Argentina en 1930, la primera filial en Sudamérica con sede enTucumán 744; la Asociación Filantrópica Israelita (HilfsvereinDeutschsprechender Juden) en 1933; la Unión de Mujeres Judías de laArgentina que luego pasará a denominarse Consejo Argentino de MujeresIsraelitas (CAMI).

También se formaron las sociedades regionales o las sociedades de residen-tes conocidas como Landsfahrein que desempeñaron desde las primeras déca-das del siglo una importante actividad de ayuda y aclimatación para los nuevosinmigrantes. Existieron desde la Primera Guerra Mundial- la Federación dejudíos polacos

En 1915 un grupo de animosas personasresolvió crear el Hogar Israelita Argentino

para Ancianos y Huérfanos.

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la Sociedad Regional de Galitziala Sociedad de oriundos de Besarabiala Sociedad judíos rumanosla Sociedad de judíos lituanosla Sociedad de judíos de Bialystockla Sociedad de judíos de habla alemana

Llevaron a cabo una labor útil para sus asociados estableciendo entre ellosun contacto social y para los residentes en Europa a quienes vincularon al país.

ESTATUTO APROBADO EL 18 DE ABRIL DE 1941

Capítulo 1Generalidades

Art. 1 - Denominación:La Asociación Mutual Israelita Ar -gentina de Buenos Aires (ex-Jevra Ke -dusha Ashkenazi), constituida el 26de abril de 1900, se denominará en losucesivo Asociación Mutual IsraelitaArgentina - Comunidad de Buenos Ai -res.

Art. 2 - Fines:La Asociación tiene por objeto servirde vínculo entre los judíos de la Capi -tal Federal y el Gran Buenos Aires de -sarrollando las actividades señala -das por los arts. 3 al 6, de acuerdocon la reglamentación que apruebe laAsamblea.

Art. 3 - Obra Social:a) En beneficio de los asociados y sus

familiares mediante la prestaciónde ayuda constructiva y subsidiosen caso de fallecimiento.

b) Subvención a entidades de benefi -cencia, culturales, educacionales, religiosas, y obras que persiganaltos fines.

c) Apoyo a toda acción constructiva en bien de Israel.d) Toda obra de bien común que no fuere contraria al espíritu de los

presentes Estatutos.

Art. 4 - Obra cultural y educacional:a) Promoverá la difusión de la cultura judía y general organizando

conferencias, cursos, audiciones etc.b) Editará y/o auspiciará publicaciones de toda índole.c) Abogará por un creciente intercambio espiritual y cultural entrela República Argentina e Israel.d) Propenderá a la educación judaica entre los asociados y la colec -

Libro de Actas de la AsociaciónMutual Israelita Argentina de

Buenos Aires, 1941.

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tividad judía en general mediante la subvención de escuelas israe -litas y el mantenimiento y apoyo de institutos y seminarios.

e) Fundará organismos educacionales con la colaboración de las es -cuelas subvencionadas.

Art. 5 - Asistencia arbitral:Prestar a los asociados asistencia arbitral para solucionar conflic -tos entre ellos y siempre que ambas partes estén de acuerdo en some -ter sus diferencias a la C.D. con excepción de las improcedencias queseñala el art. 768 del Código de Procedimientos en lo Civil y Comer -cial, y de acuerdo a las prescripciones a los títulos XXXII y XXXIIIdel mismo.

Art. 6 - Asistencia ritual:Proporcionará a los asociados y miembros de sus familias la asisten -cia ritual que se establezca y en caso de fallecimientos, el lugar parasu sepultura en los Cementerios de la Asociación, de acuerdo con lasprescripciones tradicionales del rito israelita.

Art. 7 - Carácter:La Asociación se constituye como una institución absolutamenteapolítica. No participará en actividad alguna que tenga un carácterajeno a sus fines, pero queda facultada a participar, por medio delas acciones pertinentes, en todos aquellos casos en que se trate de ladefensa de sus asociados y del buen nombre de la colectividad judía.

Art. 8 - Domicilio:El domicilio legal de la Asociación queda constituido en la CapitalFederal.

Art. 9 - Término:La Asociación se constituye por tiempo indeterminado y subsistirámientras haya diez socios dispuestos a sostenerla y que se comprome -tan a perseverar en el cumplimiento de sus fines sociales y no sobre -venga alguno de los casos previstos en el Art. 48 del Código Civil. LaAsociación esta capacitada para adquirir bienes muebles o inmue -bles y contraer obligaciones, así como para realizar cualquier opera -ción con los Bancos de la Nación Argentina, Hipotecario Nacional yProvincia de Buenos Aires.

Art. 10 - Idioma:La Asociación empleará en sus libros, actos y escritos, el idioma cas -tellano.

Instituciones de carácter socio- cultural

Nuevas entidades se fueron fundando tanto en el interior del país como enla Capital a partir de 1914. La vida comunitaria fue tomando fuerza y se fuepaulatinamente ramificando hacia las provincias donde se encontraba pobla-ción judía.

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• Se crearon en Corrientes en 1914 la Asociación Israelita Latina y en1917 la Sociedad Cultural Israelita “Scholem Aleijem” ;

• En Concordia (Entre Ríos) se fundó en 1915 la Asociación Unión Israeli-ta y en 1920 el Centro Cultural Israelita “Bialik”

• En 1925 se estableció el Centro Social Israelita Argentino de Concep-ción del Uruguay (Entre Ríos)

• El Centro Unión Israelita de Córdoba, por fusión de dos instituciones“Unión Israelita” y el “Centro Israelita”, se fundó en 1915 y en 1925 la Jev-rá Kedusha de Villa María

• En Rosario (Santa Fe) se fundó en 1926 la W.I.Z.O (Organización Sionis-ta Femenina Mundial), la Sociedad Israelita y la escuela “BarónHirsch”

• En 1929 se creó la Asociación Israelita de Beneficencia• En Campana (Buenos Aires) se creó “Bnei Israel” más tarde se denomina-

rá Sociedad Cultural Israelita• La Asociación Cultural Israelita de Beneficencia del Chaco se fundó

en 1929• Se creó en 1939 la Sociedad Israelita Marplatense• En la Capital Federal surgieron en 1937 la Júdische Kultur Gemeinds-

chaft-J.K.L y la Asociación Cultural Israelita de Buenos Aires(A.C.I.B.A.); y en 1939 la Nueva Comunidad Israelita (NCI) y la enti-dad Culto Israelita de Belgrano

Instituciones de carácter socio- cultural y deportivo

El 26 de abril de 1926 se constituyó la Sociedad Hebraica Argentina porla integración del “Centro Juventud Israelita” (nacido el 6/1/1909) con la “Aso-ciación Hebraica” (fundada el 5/2/1923).

El escritor Alberto Guerchunoff fue designado como árbitro para fijar elnombre de la corporación surgida de la fusión de las dos entidades y consideróque para calificar al nuevo centro, su acción dentro del país , la amplitud quedebía inspirar sus propósitos en el orden de las vinculaciones sociales como enel desarrollo de su fin cultural, convenía adoptar un rótulo con prescindencia detoda razón sentimental de cada uno de los elementos originarios que lo compo-nían y a su juicio debía denominarse “Sociedad Hebraica Argentina”.

Las primeras casas de Hebraica estuvieron ubicadas en Corrientes 2697 yen Callao 384. El 12/10/1941 se colocó la piedra fundamental de la actual sedede la calle Sarmiento.

Hebraica nació para satisfacer las necesidades culturales, sociales, parapromover una vinculación creadora con el ambiente intelectual y artístico ar-gentino, propulsando las múltiples expresiones espirituales humanas en susformas judaica, nacional y universal.

Entre sus logros podemos citar en 1926 la iniciación de una acción de estí-mulo por la lectura inaugurándose la Biblioteca en la calle Callao 348. Hacia1931 esta se transformó en un importante factor de atracción ya que en ella un

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escritor judío o no, en castellano o en idish pronunciaba una charla o una con-ferencia y luego un intérprete recitaba o leía trabajos ilustrativos, aquellos mo-mentos fueron llamados “Tardes de Biblioteca”.

Entre los visitantes destacados que Hebraica recibió en esos tiempos se en-contraban: Maurice Shwarz, actor de teatro idish en 1930; en 1931 Cesar Tiem-po, escritor; Samuel Eichelbaum, autor de la obra “Un guapo del 900”; el actorjudío norteamericano Jacob Ben Ami; en 1938 la escritora y poetisa GabrielaMistral y en 1936 los escritores Alberto Guerchunoff y Saúl Chernijovsky.

El premio Nobel Albert Einstein,científico, visitó la institución en 1925 yfue distinguido como “Socio Honorario”.En el artículo 24 de los Estatutos de laSociedad Hebraica Argentina se estable-cía que “serán elegidos socios honorariosaquellas personas que por su trascenden-te actuación pública, notoriedad intelec-tual o científica, merezcan tal distinción”

En 1932 esta institución promovióuna reunión de delegados de institucio-nes de la cual surgió el “Comité IsraelitaArgentino contra el Antisemitismo” queen 1934 recibió el nombre de D.A.I.A.

La idea de fundar la OrganizaciónHebrea Argentina Macabi surgió en1927 de un grupo de inmigrantes de origenpolaco y lituano, de los cuales algunos ha-bían pertenecido a la institución madre“Unión Mundial Macabi”.

No se sabe con certeza cual fue el lugarinicial de Macabi, si en la calle Córdoba oen la calle Corrientes. En un principio sealquilaron las instalaciones del gimnasiode un colegio en la calle Ecuador 1160 y secontrató un profesor de gimnasia. Se pro-dujeron desavenencias y algunos integran-tes se retiraron y el 30 de diciembre de1930 fundaron la Asociación Israelitade Gimnasia, dictando su constitución como organización judía, libre, sionistay apartidaria.

Alquilaron el gimnasio del Cangallo Schule, Pte. Perón 2169, donde sepracticaba gimnasia calistenia1, lucha greco- romana y grandes aparatos; la se-cretaría estaba ubicada en Pasteur 470.

Macabi comenzó a consolidarse y a participar en campeonatos nacionales.En 1933 apareció el primer número de la revista de Macabi.

La Comisión Directiva solicitó a la Embajada Británica que no restringierala entrada de los judíos que eran evacuados de Alemania por las persecuciones

Conferencia de Albert Einstein en la Socie -dad Hebraica Argentina, año 1925.

Colocación de la piedra fundamental dela Organización Hebrea Macabi,

fundada en 1928.

1. Gimnasia cuyo objetivo es el desarrollo de las fuerzas musculares y de la belleza de los movimientos.

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nazis. En 1934 participó del acto público realizado en el Luna Park en protestapor la barbarie nazi.

El 24 de diciembre de 1935 se reu-nieron en un local del centro de BuenosAires y pusieron por escrito sus intencio-nes: “Dicha necesidad la justificamos an -te los inconvenientes que ponen algunosClubes similares en la admisión de “nue -vos socios” y para disponer de un lugarapropiado de descanso donde sus asocia -dos puedan pasar algunos días al aire li -bre en compañía de sus familiares, e in -culcar en los hijos la conveniencia de de -dicarse al ejercicio sano del deporte...”

Se adoptó para la institución el nom-bre de “Club Náutico Israelita” tras

largo debate dejando a una Asamblea de Socios la decisión de cuál sería el nom-bre definitivo. El 28 de mayo de 1936 se tomó el de “Club Náutico Hacoaj” enhonor a un club de remo de Viena, Austria, que por aquellos días había sido des-truido por el nazismo.

En 1936 se inauguró oficialmente el Campo de Deportes en el Partido de Ti-gre. En 1937 obtuvo la Personería jurídica

Instituciones educativas

En la capital y en algunas ciudades del interior se inició la actividad edu-cacional hacia fines del siglo XIX y comienzos del XX, la mayoría eran “tradi-cionales”, mantenidas por una sinagoga, cuyo objetivo principal era enseñar alos niños a rezar.y a leer la Torá. Esta enseñanza fue impartida generalmentepor personas que tenían cierta instrucción, algunas habían cursado estudios decapacitación pedagógica o tenían experiencia en la enseñanza.

Con la llegada de la nueva inmigración después de 1920 comenzó la era delas escuelas laicas, la primera escuela nació en 1917 en Villa Crespo, por inicia-tiva de un grupo sionista.

En 1919 se produjo la primer huelga de maestros agrupados en una socie-dad profesional llamada Agudat Hamorim (Agrupación de Maestros) que co-menzó un proceso general de organización gremial. Se impusieron como objeti-vo la mejora de las condiciones de trabajo y la modernización de los marcos es-colares.

Si bien el movimiento huelguístico fracasó dio origen a la fundación de es-cuelas modernas que respondieron a dos tendencias políticas: unas respondíanal Sionismo progresista y llevaban el nombre de “Borojov”, eran nacionalistas yreivindicaban en él a las grandes figuras del sionismo, las otras eran de carác-ter cosmopolita adoptaban los nombres de las grandes figuras de la literaturaidish.

El Club Náutico Hacoajfue fundado en 1935.

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En 1927 ya habían cinco escuelas Borojov en distintos barrios y otras cin-co escuelas “obreras” que pertenecían a la otra tendencia.

Hubo aguda competencia entre ambas lo que perjudicó, pues se superpo-nían en barrios cercanos, sin ningún análisis de factibilidad económica.

En1933 fueron todas clausuradas por el régimen nacido del golpe militardel año 30, bajo la común acusación de “comunistas”.

En 1939 se creó el Seminario de Maestros. Desde sus comienzos fuemantenido integralmente por la Comunidad. Los docentes judíos estaban orga-nizados gremialmente como ya hemos mencionado pero esa institución se divi-dió a causa de divergencias ideológicas referidas al idioma de estudio, la meto-dología de su enseñanza y las actitudes de respeto de la tradición, idea nacio-nal y sionismo cuando se incorporaron en 1931 quince jóvenes maestros de Eu-ropa oriental. En octubre de 1931 se formó la Histadrut Hamorim Haivriim(Organización de Maestros Hebreos), cuya ideología se basaba en el sionis-mo y en la enseñanza del hebreo como idioma en sí mismo.

O.R.T ARGENTINA

En 1936 la institución educativa ORT inicia en el país los cursos técnicospara dotar a sus alumnos de profesiones modernas y productivas. ORT Ar -gentina representa los principios e ideas de la Unión Mundial ORT, funda -da en 1880.Los propósitos establecidos fueron los siguientes: - Contribuir al desarrollo de la milenaria cultura judía respetando sus tra -diciones y valores éticos.- Ayudar a mitigar los problemas humanos mediante el progreso técnico yeconómico.- Educar para la responsabilidad social y el involucramiento comunitario.La creación de la Escuela Técnica ORT de Buenos Aires constituyó la cris -talización de un ideal largamente acariciado. Fue fruto de un estudio com -pleto y meditado sobre las condiciones económicas del país y las perspecti -vas que ofrecía el pujante desarrollo de la industria nacional. Sus propul -sores tuvieron claro que la labor era ardua pero que el futuro sería ventu -roso.En 1940 fue designado el director de la escuela por la resolución del Con -sejo Directivo de la Confederación Latinoamericana ORT-OSE. La OSE fuecreada para proteger la salud de las masas, mediante sus consultorios, clí -nicas y maternidades. El 18 de marzo de 1941 abrió sus puertas la escuela en una casa alquila -da en la calle Constitución 4241. En 1948 se comenzó con la construcciónde un edificio propio en el terreno de Yatay 240 y se lo inauguró oficialmen -te el 25 de noviembre de 1951.

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AYUDA POR MEDIO DEL TRABAJO

En 1880 se fundó en Rusia la Sociedad para elEstímulo de la Artesanía, cuya sigla en ruso esORT, que se proponía junto a otras institucionespromover el aprendizaje de oficios y agriculturaentre los judíos.Esta organización funcionó en Europa Orientalhasta la Primera Guerra Mundial, y a partir deentonces se extendieron sus actividades haciaotros países del mundo. Su lema Ayuda por me -dio del trabajo fue la guía que orientó la tarea.Es así que se crearon talleres para dar empleo acientos de desocupados, además la capacitaciónen diversas especialidades.En Argentina, la ORT fue fundada en 1936. En

1963, la escuela técnica fue incorporada a la en -señanza oficial.Actualmente, hay dos escuelas técnicas ORT secundarias y dos tercia -rias, que funcionan en Buenos Aires.«... El Fondo Comunal de Domínguez había adquirido un edificio quepuso a disposición de la escuela ORT, que comenzó a funcionar en 1955.«Fue la escuela quien lo equipó, y el mantenimiento se hizo en formaconjunta entre la ORT y la Jewish.«El programa de la escuela comprendía varias materias: Física, Mate -máticas, Dibujo y Tecnología.También había un taller de reparaciones, en el cual los alumnos reali -zaban las clases prácticas.«Asistían muchos jóvenes, no solamente de Domínguez sino también deotras colonias... »

(Fragmento de la entrevista a León Salzman).

“La escuela ORT del pueblo (Villa Clara) era de costura y máquina.Yo iba dos veces por semana. Allí cortaba y confeccionaba la ropa parami hija y para mí. También aprendíamos a cocinar. Cada una de lasque asistíamos llevaba sus recetas, y luego las preparábamos.

“La escuela está abierta a todas las señoras y jóvenes de la comuni -dad. Por eso concurrían judías y no judías. A mí me gustaba mucho ir:era muy lindo. Fui durante muchos años, y llegué a ser Presidenta de laORT.”

(Fragmento de la entrevista a María Fink de Elstein)Chiaramonte S.; Finvarb E.; Fistein N.; Rotman G.:

“Tierra de promesas” Ediciones Nuestra Memoria - 1995

La prensa judía en la Argentina

Hacia 1939 la prensa judía ya había cumplido cuatro décadas de existenciaen el país. En 1898 nacieron tres periódicos en Buenos Aires en idish: Viderkol(El Eco), Der Idisher Fonograf (El Fonógrafo Judío) y Di Folks Shtime (La

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Voz del Pueblo), los que fueron al mismotiempo los primeros en América del Sur.

Desde sus comienzos la prensa judíase dedicó a reflejar la vida del país , suscaracterísticas , sus necesidades y preo-cupaciones.

El Eco se imprimió en litografía1, porfalta de una imprenta judía en Bs. As.

La Voz del Pueblo abordaba los pro-blemas de la ciudad como los del campo,contribuyó a la fundación de las princi-pales instituciones israelitas de la Capi-

tal y su director, Abraham Vermot, mereció el título de “defensor de los inmi-grantes”.

El Fonógrafo Judío tuvo una vida efímera pues no fue un periódico que re-flejaba los conflictos internos de la comunidad, mantenía una línea apacible.

Los redactores de los diarios israelitas de Buenos Aires se empeñaron enelevar el nivel de sus lectores publicando páginas dedicadas a las letras, al tea-tro, a los niños y a otras cuestiones de índole cultural. Otra de las preocupacio-nes de la prensa judía fue cuidar la pureza del lenguaje.

En 1906 se editó Dos Idische Lebn (La vi-da judía) , órgano de la agrupación sionista - so-cialista y así fueron apareciendo varias publica-ciones mensuales o semanales de variado tinteideológico como ser; Broit un Ehre (Pan y Dig-nidad) en 1909, de ideología poalesionista, DerRoiter Shtern ( La Estrella roja) de ideologíacomunista en 1923.

También en el interior del país se publica-ron periódicos en idish en distintas épocas peroen general tuvieron una corta vida. Ejemplo deellos fueron El Colono, El Colono Israelita ,El Defensor, La Pampa ,Tribuna de MoisésVille, Rosario Leben.

El 1º de enero de 1913 se publicó como pre-cursor de los diarios israelitas Der Tog (ElDía).

Los años de guerra dieron origen a la apari-ción diaria de la prensa judía. La necesidad de es-tar al tanto de los acontecimientos que se estabandando en el “viejo hogar” y la necesidad de publi-cidad de las nuevas instituciones motivaron elsurgimiento de importantes órganos de prensa.

Revista social y humorística en idish quese publicón desde 1923 hasta 1935.

Publicaciones periódicas en idischeditadas en Buenos Aires.

1. Arte de dibujar o grabar en piedra, para multiplicar los ejemplares de un dibujo o escrito.

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El 15/11/1914 se fundó Di Idishe Zaitung (El Diario Israelita) de tenden-cia sionista y pequeña burguesa. La base del diario era de información peroofrecía además escritos de destacados escritores judíos del exterior.

En 1918 hizo su aparición Di Presse (La Prensa), de orientación proleta-ria. En un principio su orientación marcó una neta oposición al sionismo. Mástarde varió su rumbo manteniendo una línea de simpatía hacia este movimien-to. Sus colaboradores habituales fueron autores famosos del exterior. Estos dosdiarios fueron un motor importante en la vida institucional y cultural de la co-munidad judía argentina.

El tercer diario importante apareció en 1936 llamado Morguenzaitung(Diario de la mañana) buscó sobre todo al hombre de la calle al que le ofrecióun material de lectura sensacionalista. Fue el primero que introdujo una pági-na en castellano.

Paralelamente habían otros periódicos que sustentaban distintas ideolo-gías por ejemplo: Páginas socialistas, El Sionista, Di Idische Hofenung(La esperanza judía).

Existía otro órgano como el semanario Israel que estaba dirigido a las co-lectividades de origen sefaradí.

Teatro Popular Judío

El fundador del teatro judío fue Bernardo Vaisman, quien se presentó en1901 con una compañía de operetas. Desde entonces desfilaron por los escena-rios judíos de Buenos Aires los más destacados actores.

Los judíos de gusto “fino” llevaban al teatro a sus conocidos no judíos de laintelectualidad y de la prensa con el fin de mostrarles los artistas talentosos dela comunidad local y del extranjero.

El Olimpo se convirtió desde entonces en el templo del arte judío. Allí se in-terpretaron obras como “Los muertos” de Florencio Sanchez, “El hijo de Agar”de González Castillo, “Dios, Hombre y demonio” de Dubrovner.

A esa época corresponde también el descubrimiento de la recitadora BertaSingerman (llegó a la Argentina en 1911 proveniente de Rusia) que en aquellostiempos interpretaba roles infantiles en el teatro judío, su hermana Paulinatambién se destacó. Entre los primeros actores estuvieron Enrique Chaico (lle-gó a la país en 1914) quien actuó en la obra “Dios se lo pague” y Fanny Brenna,quien poseía excepcionales cualidades demostradas en el teatro judío.

Los artistas de la primer troupe actuaron en el teatro Battaglia (Santa Fey Callao) y representaron obras de teatro melodramático europeo, y lograron latemporada más exitosa con aquellas obras.

Las salas Excelsior, Ombú, Soleil, Nuevo y Mitre fueron aquellas que tam-bién albergaron la actividad teatral judía en Buenos Aires. Los elencos alterna-ban entre la capital y las colonias del interior del país.

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Esto pasóUn 9 de setiembre...

... de 1907 nació en Mozir, una pequeña ciudadrusa, la intérprete Berta Singerman, una artistaque recreó con su estilo y su voz la poesía de losmás grandes autores.Llegó a la Argentina cuando tenía cuatro añosjunto con sus padres, que huían de la represiónzarista por haber intervenido en un levanta -miento. A los cinco años asistió por primera veza una representación teatral y desde entonces suvida fue el teatro. Empezó jugando a montarobras con sus hermanos y amigos y más tardeformó parte de una compañía que hacía giraspor las colonias agrícolas judías de Entre Ríos, haciendo casi siem -pre el papel de huerfanita. En Buenos Aires estudió en la Bibliotecadel Consejo Nacional de Mujeres, donde muy pronto se destacó por sufuerte personalidad en la manera de recitar. A los quince años lacontrataban las familias de la sociedad portería como profesora dedeclamación de sus hijas. Con su único tapadito, que le había hechosu madre, Berta llegaba a las elegantes casas de Barrio Norte, inten -tando transmitir una sabiduría que no podía explicar y que era enella un sentimiento natural. Después comenzó a relacionarse con losgrupos intelectuales de escritores y artistas y se impuso recitando los

Anuncios de los espectáculos en los principales teatros judíos de Buenos Aires.

Berta Singerman.

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poemas de Rubén Darío, Juana de Ibarbourou, Pablo Neruda, GarcíaLorca, Juan Ramón Jiménez y otros grandes autores que en muchoscasos fueron sus amigos y admiradores. Se presentó en España, Méxi -co, Portugal, Brasil, Francia, los Estados Unidos e Israel. Los recita -les eran en español, aun en los países de habla no hispana, pero seincluía en el programa la traducción. La máxima atracción era suactuación. El músico Manuel de Falla dijo: "Berta extrae música delas palabras'. La gran dama de la poesía murió en Buenos Aires en1998.

La presencia judía en la vida argentina

La presencia judía también fue posible encontrarla en otros aspectos de lavida argentina. Enrique Dickmann fue el primer diputado de origen judío elec-to en 1914 por el partido Socialista, a medida que avanzó el proceso de integra-ción, la participación judía en el campo político argentino se fue expandiendohacia otros partidos e ideologías, como Moisés Lebensohn (radical).

En el Psicoanálisis y la Psiquiatría son numerosas las personalidadesque han contribuido al desarrollo de estas disciplinas en el país (Arnaldo Ras-covsky, Marie Glas de Langer, Jose Bleger, Mauricio Abadi, Jose Itzigshon, en-tre otros).

La Medicina ha sido una ciencia que siempre han cultivado los judíos, enla Argentina han contribuido al progreso de la misma y la existencia del Hospi-tal Israelita ha permitido el desarrollo de la misma; destacamos algunos espe-cialistas Paulina y Sara Satanovsky (oftalmóloga y traumatóloga respectiva-mente), Moisés Polack (histólogo), Aarón Kaminsky (dermatólogo), AlejandroZabotinsky (odontólogo).

Reconocidas personalidades judías han descollado en las Ciencias Exac-tas, Físicas y Naturales, así también en Agronomía y Veterinaria, comoSalomón Pavé (ciencias veterinarias), Leopoldo Halperín (agrónomo), Delia Ra-binovich (agrónoma).

En el campo del Derecho es interesante señalar que la labor desarrolladapor penalistas y criminólogos judíos como los doctores Bernardo Beiderman yElías Neuman.

Dentro del campo de la Ingeniería y la Arquitectura se destacaron pro-fesionales que tuvieron una vasta actuación en temas de urbanismo y normasedilicias. En las siguientes obras públicas intervinieron algunos de ellos: Pala-cio Central de Correos y Telégrafos de Buenos Aires (1927), Colegio NacionalBuenos Aires (1914).

En el terreno de las Ciencias Sociales y Humanísticas, intelectuales de-dicados a problemas sociales y humanísticos se dedicaron a investigar, escribiry enseñar sobre distintas temáticas. Algunos destacados exponentes son Rodol-fo Mondolfo (miembro de la Academia Nacional de Ciencias de Buenos Aires),León Dujovne (traductor y profesor universitario), Jacobo Kogan (especializadoen estética y filosofía kantiana), Gregorio Klimovsky (epistemólogo, reconocido

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internacionalmente en filosofía de la ciencia), Boleslao Lewin (historiógrafo).Son incontables los periodistas y escritores judíos que se han distinguido en

el ámbito de la Prensa Nacional, he aquí alguno de ellos Simja Sneh, SamuelRollansky, Mark Turkow, Julio Korn, Alberto Guerchunoff, Bernardo Verbitsky.

En la Literatura Judeoargentina se publicó en1919 en idish la primera antología de escritores judeoar-gentinos. El profesor Lázaro Schallman señaló en ese li-bro, para dar fe al proceso de aculturación, la intercala-ción de argentinismos y criollismos. Años después, la si-guiente generación de escritores judeoargentinos escri-bió directamente en español, incorporando multitud deexpresiones que venían del idish escuchado en la casafamiliar o de su infancia. Esto se puede observar en tex-tos de César Tiempo , Samuel Glusberg, Bernardo Ver-bitsky y otros.

En las letras judías de la década del ´20 y del ´30 sedestacaron autores que traían consigo una tradición li-teraria proveniente de Polonia y Rusia. Entre ellos po-demos destacar a Marcos Alperson, conocido por sus memorias sobre la coloni-zación judía en la Argentina; los que han ofrecido la descripción del ambienteurbano cabe destacar entre otros a Helfman (cuentista, periodista, pintó en susrelatos el ambiente inmigrantorio argentino), Brodsky (novelista y dramatur-go), Kliguer (el poeta español en idish, tradujo poemas del castellano al idish),Boleslao Lewin ( destacado en historia americana, investigó sobre el criptoju-daísmo en la época colonial).

En la expresión artística figuran pioneros en el Cine Nacional Argen-tino como Max Glusman quien desde los primeros años del siglo XX impulsó lanaciente actividad cinematográfica. Otros personajes destacados fueron LeónKlimovsky , Luis Saslavsky quienes escribieron guiones cinematográficos y di-rigieron películas en el país.

Actores como Laura Hidalgo, Hedy Crilla, María Duval, Natan Pinzón,Adolfo Stray, Marcos Zucker fueron algunos de los exponentes judíos de la ac-tuación.

En la Radiofonía y Televisión Argentina debemos destacar a JaimeYankelevich quien compró Radio Argentina que en 1938 pasó a llamarse Bel-grano. Descolló por ese entonces una “comunicadora social” llamada PalomaEfron, conocida como Blackie, todo un símbolo de inteligencia frente al micrófo-no.

Autores teatrales como Samuel Eichelbaum (Un guapo del 900) y Ger-mán Rozenmacher (Requiém para un viernes a la noche).

Músicos, intérpretes y directores como el maestro Jacobo Ficher, Kal-man Saslavsky, Eliahu Kantor, Alberto Lisy, Teodoro Fuchs, Max Zalkind hancontribuido a la difusión de las melodías judías.

En el terreno de la llamada “música popular” es notable la cantidad deintérpretes y compositores judeoargentinos ligados al tango en las primeras dé-cadas del siglo XX. Luis Rubinstein, Ben Molar, Santos Lipesker, Julio JorgeNelson entre otros; fueron compositores, comentaristas y críticos de tango.

Alberto Gerchunoff.

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También hubo una importante presencia judía en la Academia Porteña deLunfardo como León Benaros, César Tiempo, Bernardo Verbistsky, etc.

Es necesario mencionar al “Gardel y Al Jolson” comunitario que fue JevlKatz; su nombre y sus canciones se hicieron tan populares como representati-

vas de los inmigrantes judíos, recreó un idioma mixto,mezcla de idish y castellano.

Artistas plásticos han sobresalido en el desarrollode esa disciplina en la Argentina (Israel Hoffmann, Jac-ques Brodsky y Manuel Eichelbaum).

En el deporte tanto de manera colectiva, a travésde entidades como la Sociedad Hebraica Argentina, laOrganización Hebrea Macabi y Hacoaj, como individual,tuvieron participación los judíos argentinos. Fue en elajedrez donde hubo participación descollante como la deMiguel Najdorf y Julio Bolbochán. Eximios jugadores debillar como Carlos Friederman y Alegre Frekman (cam-peón argentino y subcampeón mundial), en boxeo se re-gistraron los primeros campeones judíos como Mauricio

Corinstein, Moisés Ortemberg. En fútbol una larga lista de deportistas judíosse incorporaron a los clubes del país como Jaime Roitman (Argentinos Juniors,Vélez), Aarón Werfigker (Ríver, Platense), Isaac Scliar (Atlanta, Almagro, N.O-.Boys y otros), Alberto Listerman (Racing, River) entre otros.

Podríamos concluir acerca de la participación judía en las primeras déca-das del siglo XX que dos líneas la marcaron, una la integración a la sociedad ar-gentina y la segunda la continuidad del judaísmo, a través de las cuales la co-munidad se fue desarrollando y afianzando.

Relación de la comunidad judía con el Ishuv en Eretz Israel

Los acontecimientos internacionales como la revolución bolchevique de1917 y el anuncio del compromiso del gobierno de Gran Bretaña a crear un “Ho-gar Nacional” para el pueblo judío en Eretz Israel, llegaron a todo hogar judíoen la Argentina.

Para celebrar este último acontecimiento se celebraron convenciones,asambleas, se intensificó la actividad sionista y el movimiento se consolidó. Unsector del sionismo que se mantenía como fracción opositora dentro del movi-miento fundó en 1918 la agrupación Hitajdut, que en 1932 se unió al partidoPoale- Sión. El poalesionismo floreció hacia 1918 y al año siguiente celebró suprimer congreso regional. Durante ese año algunas personalidades de BuenosAires promovieron una gestión diplomática a favor de los judíos de Eretz Israel.El 4 de junio de 1918 se entrevistó con el presidente Yrigoyen el rabino ShmuelHalfón a fin de solicitar que la Argentina influyera sobre el rey Alfonso XII deEspaña para que este interviniera ante el gobierno turco instándoles a derogarla amenaza de expulsión a Siria de la población judía de Eretz Israel.

Jevl Katz.

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Algunos jóvenes inmigrantes judíos se dirigieron en marzo de 1918 a la em-bajada británica ofreciéndose como voluntarios pues había llegado la noticia so-bre la creación de los batallones de voluntarios judíos en el ejército británico pa-ra luchar contra el Imperio Otomano. La Federación Sionista y la CongregaciónIsraelita de Buenos Aires apoyaron esta iniciativa. La aprobación de las solici-tudes fueron recibidas en el mes de agosto y se autorizó la movilización de cin-cuenta voluntarios quienes partieron desde el puerto de la ciudad de La Plata.La salida de los mismos fue acompañada por una emotiva despedida.

La crisis en el movimiento socialista internacional dio lugar a un cisma enel segundo congreso del poalesionismo en 1921, en 1922 vuelven a unirse lossectores de izquierda y derecha y diez años más tarde se unieron al grupo de losTzeirei Sión y formaron un Partido Socialista Judío Unido Poalei Sión- TzeireiSión.

En el año 1933 se realizó en Buenos Aires el Primer Congreso de la Juven-tud Sionista del país, surgiendo del mismo la “Confederación Juvenil SionistaArgentina”, entidad que tuvo corta vida. Sin embargo en las metas juvenilesquedó la profunda convicción de la necesidad ineludible de crear un organismoque coordine la actividad de los jóvenes sionistas.

En 1937 jóvenes entrerrianos apoyados por instituciones del interior convo-caron en octubre de 1937 en la ciudad de Rosario a una conferencia a la cualconcurrieron centros sionistas de: Entre Ríos, Santa Fe, Capital Federal, Cór-doba, La Plata y Rosario, de la cual surgió la necesidad de crear un organismopara lo cual convocó para el mes de julio de 1938 un Congreso General Extraor-dinario de jóvenes Sionistas. Este Congreso cumplió con su labor.

Instituciones de ayuda a las víctimas de la Primera Guerra Mundial y de los pogroms en Europa

En febrero de 1915 se fundó el Comité Central de Ayuda a las VíctimasIsraelitas de la Guerra, dicho comité funcionaba con filiales en todo el país.

En los meses de marzo y abril de 1921 se creó el Comité de Protecciónde los Inmigrantes Israelitas (dependiente del Comité Central de Ayuda alas Víctimas Israelitas de la Guerra), por el rabino Halfón y representantes deotros organismos. Una de las actividades más importantes en el año 1921 fueel traslado de cien huérfanos judíos de Ucrania a la Argentina.

Pese al éxito obtenido pronto surgieron dificultades. El rabino Halfón se re-tiró del Comité y junto a la J.C.A. crearon la Sociedad de Protección de In-migrantes Israelitas – SOPROTIMIS.

Esta Sociedad operaba en dos terrenos fundamentales: 1) facilitar el viaje y el ingreso de los inmigrantes a la Argentina y,2) suministrarles orientación y ayuda en su absorción.En el primer año de existencia de la sociedad sus logros fueron importan-

tes, se consiguieron permisos de ingreso para cuatro mil seiscientos sesenta ytres personas, esta organización trabajaba con el gobierno. La asociación desig-naba un empleado para subir a cubierta de cualquier nave que llegaba a puer-

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to y aquél se ponía en contacto con los inmigrantes judíos cuyos nombres ha-bían sido recibidos por las compañías navieras. Este empleado con varios miem-bros del ejecutivo mediaban en caso de alguna dificultad que se les presentaraa los inmigrantes ante las autoridades argentinas, también les explicaban suderecho a alojarse en el Hotel de Inmigrantes y a recibir pasajes gratuitos al in-terior del país. Distribuían entre ellos material impreso con el domicilio de So-protimis y la invitación a hacer uso de sus servicios.

Hacia 1923 se le retiró a la Sociedad el permiso de subir a los barcos y sólopudo comenzar a tener contactos con los inmigrantes judíos cuando estos ha-bían bajado al muelle e incluso tras haber dejado atrás los portones del puerto.

Otro terreno en que operaba la Sociedad estaba relacionado con el hecho deasegurar la ocupación de los inmigrantes después de su arribo, lo que implicóel establecimiento de oficinas de trabajo. Como el objetivo fue distribuirlos porel interior del país se estableció una red eficiente de subcomisiones locales quereuniera información sobre las posibilidades de ocupación en su entorno y seocupara después de los inmigrantes que le fueran enviados.

En 1924 las dos instituciones “Soprotimis” y el “Comité Central” se fusio-naron quedando la entidad primera a cargo de la protección a los inmigrantesisraelitas en la República Argentina.

La primera actividad conjunta instituida en Europa fue el registro exactode todos los necesitados de ayuda. Pudieron ayudar a los inmigrantes que lle-gaban por propia iniciativa y por la de sus parientes, no así en lo relativo al es-tímulo de inmigración a la Argentina y la ayuda en su absorción.

Hacia fines de 1926 el campo de acción fue restringiéndose debido a los ín-dices de aparente estabilidad de los judíos de Europa oriental.

Se había tenido esperanzas que se fusionaran las organizaciones mundia-les dedicadas a la ayudas de inmigrantes. Efectivamente en febrero de 1927 sefundó una organización de inmigración conjunta denominada “HICEM” (HIAS,JCA, EMIGDIRECT)1.

Sus objetivos fueron: estudio de nuevos países convenientes para la inmi-gración judía, ayuda a los emigrantes en los países de origen y en tránsito,orientación y asesoramiento en sus primeros pasos en los países de absorción.En su estatuto HICEM debía mantener contacto con los comités y asociacionesrelacionadas con las organizaciones fundadoras y Soprotimis estaba en contac-to con JCA , la cual era una de ellas y claro ejemplo de solidaridad.

En 1927 Soprotimis no manifestó ningún cambio concreto, dado que espe-raba el máximo apoyo desde el exterior. La gran expectativa de una organiza-ción central dio lugar a una pobre realidad. La gran mayoría de los inmigran-tes no recurrieron a la organización central encargada de asuntos de inmigra-ción, algunos porque contaban con la ayuda de parientes, o porque los mediosque tenían a su disposición les bastaban para establecerse, otros evitaban acu-dir a Soprotimis por las noticias que tenían de su escasa eficacia. Otros obte-nían ayuda de otros organismos que completaban o coincidían en sus activida-des con la organización central como el Idisher Arbeiter Comitet (Comité deInmigración de Trabajadores Judíos) o las instituciones regionales “Landsfah-rein”.1- HIAS –Organización de EEUU de ayuda a los refugiados.EMIGDIRECT- Comité unido para la emigración judía-. Vereinigtes Komitee Für Jüdische Auswanderung

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En abril adhiere al Comité de organización del Congreso Judío Mundial1 yparticipa en forma sistemática en el esclarecimiento y la solución de problemasgenerales del judaísmo.

En junio de ese mismo año, el Comité proclamó una colecta a favor de losjudíos de Alemania apoyando su emigración a Eretz Israel y a otros países.

Discusiones internas en el Comité sobre la decisión de restringir el núme-ro de entidades afiliadas a las más importantes motivaron el retiro de los dele-gados de Poale Sión-Tzeirei Sión, que convocaron a una nueva reunión y funda-ron un Comité Colectivo contra el Antisemitismo en la Argentina.

En octubre de 1935 se logra la fusión de las dos comités en una sola enti-dad denominada D.A.I.A.- Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas queinicia su actividad en todo el país y crea filiales en el interior a lo largo de lostres años siguientes.

Desde marzo de 1936 la DAIA desenvuelve una labor sistemática contra elantisemitismo y se preocupa por los problemas generales de la colectividad.

La labor de la DAIA, el ente político de la comunidad, representa a la mis-ma ante el gobierno argentino, compuesto por delegados de las institucionesexistentes y por eso mismo con gran poder de convocatoria, se volvió particular-mente intensa durante la década del ´40.

Nueva ley de inmigración

En julio de 1923 el gobierno presentó a la cámara de Diputados un proyec-to de ley de inmigración nueva y cuyos aspectos más destacados eran la res-tricción de los alcances de esta última, reforzamiento de los criteriosde selección y la ampliación de las atribuciones del Departamento per-tinente. Según ellos la ley de 1876 que todavía estaba vigente dejaba vacíosconsiderables.

El 31 de diciembre de1923 se promulgó un nuevo reglamento por decretocuya condición principal para inmigrar a la Argentina era la “utilidad” que elextranjero podía traer al país.

Todos los casos de enfermedad crónica o infecciosa, enfermos mentales, in-válidos de todo tipo cuyo defecto físico o mental los dificultaba para ganarse elsustento fueron revisados y descalificados para la inmigración, junto con los cri-minales, los elementos marginales y subversivos, etc. Se prohibió la entrada demujeres solas o acompañadas de hijos menores, así como de menores de quinceaños o ancianos mayores de sesenta que viajaran solos. El resto debía tener supasaporte en regla y un certificado policial certificando su buena conducta.

Esta ley puso mayor rigor en el tratamiento de pedidos de residentes en laArgentina de traer a sus parientes del extranjero. Esos pedidos estaban condi-cionados al compromiso irrevocable de hacerse cargo de ellos económicamentey de garantizar su absorción al país. Esto implicaba una investigación minucio-sa del solicitante.

1- Este organismo permaneció como coordinador de realizaciones de actos de propaganda para difundirel verdadero carácter del régimen nazi y como el organizador de las operaciones de defensa y ayuda quese manifestasen necesarias.

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Entre los años 1924 y 1925 se produjo una reducción drástica de la inmi-gración general a la Argentina. Los cónsules argentinos en los países de saliday los funcionarios del Departamento de Buenos Aires, aplicaban con absoluta ri-gidez la ley vigente. Surgieron opositores a esa política señalando que la acti-tud adoptada ante el inmigrante era la que se adoptaba ante un criminal en po-tencia. El cúmulo de trámites y procedimientos que exigía la inmigración legalno tardó en engendrar intentos de infiltración clandestina.

Pese a la severidad de los procedimientos de inmigración adoptados porJuana Ramos, el director del Departamento de Inmigración, y sus subordina-dos, su propósito no fue la paralización completa del movimiento inmigratorio.

La exigencia de presentar pasaportes válidos y especialmente certificadospoliciales extendidos por las autoridades del país de origen fue para muchos in-migrantes judíos imposible de obtener pues habían huido con lo puesto. LaJ.C.A intervino pero sus pedidos fueron denegados. En 1921 se autorizó al GranRabino de la Congregación Israelita de Buenos Aires a actuar en su propio nom-bre y a otorgar certificados de recomendación. En 1922 obtuvo de la DirecciónGeneral de Inmigración todas las facilidades sin restricciones para la inmigra-ción a la Argentina de refugiados de Rusia con parientes en el país y la de aque-llos que no contaban con nadie en la Argentina. Pero en 1923 el Departamentode Inmigración puso fin a estas facilidades otorgadas.

En 1924 la J.C.A. le solicitó a J.Ramos la restauración de los arreglos espe-ciales abolidos por él (influyó la evidente desocupación de judíos que se encon-traban en Bs. As.), comprometiéndose a una estricta selección, promover la dis-persión de la población hacia el interior del país.

La J.C.A. fue autorizada para traer a la Argentina inmigrantes artesanos,familias aptas para la colonización de agricultores. El Departamento de Inmi-gración dio a los cónsules la orden de visar solamente para el interior del país.

En 1926 Ramos fue reemplazado por Amadeo Grandi, la aplicación de lasreglas fue aligerada y se pudieron notar cambios en la inmigración judía puesse detectaron menos quejas sobre demoras en el desembarco de los nuevos in-migrantes como así también la buena voluntad del Departamento de Inmigra-ción.

A fines de marzo de 1928 el jefe del Departamento de Inmigración había de-clarado que “la Argentina recibía con brazos abiertos a todo aquel que llegara aella “.

Hacia 1929 se comenzaron a notar medidas restrictivas con respecto a la in-migración a causa de la situación económica que se daba en la Argentina comoconsecuencia del desmoronamiento de la bolsa de E.E.U.U.. Se produjo una cri-sis repentina que afectó tanto a la población urbana como al sector agrícola;produciéndose la quiebra de empresas y por lo tanto desocupación.

En 1930 el gobierno argentino decretó el aumento de la tasa de ingreso alpaís en un 1.110% (de $3 a $33) para restringir el número de inmigrantes, co-menzó así la etapa de “Inmigración limitada”.

Pese a la crisis llegaron al país más inmigrantes judíos que en el año de pros-peridad que le precedió. El presidente de Soprotimis señaló las grandes dificulta-des que debieron salvar para ayudar a los inmigrantes después de su llegada.

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El presidente de los EEUU llamó a treinta países a una conferencia enEvián (Francia) para resolver la situación de refugiados de Alemania y A u s t r i a1.

La prensa judía de Argentina se hace eco de este acontecimiento y clamópara que la Argentina abriera sus puertas a los refugiados.

La conferencia se inauguró el 6/7/38, el Dr. Tomás Le Bretón, ex Ministrode Agricultura del gobierno de Alvear, y en ese momento embajador en París di-jo “La actitud de la Argentina en materia de inmigración en el pasado, es sufi-ciente para probar la generosidad desde el punto de vista que adoptaremos enel futuro”

El 12 de julio de 1938 una delegación argentina informó en la Conferenciasobre las reformas a la inmigración. Esa reglamentación tenía el propósito ex-preso de impedir la llegada de refugiados obligados a emigrar para salvarse.

La comunidad judía que se disponía a traer a sus parientes temblaba. Sesuspendieron los permisos de entradas. El 25 de agosto de 1938 cerró sus puer-tas a la inmigración.

Por la intervención del gobierno británico se anunció la vigencia en sep-tiembre de 1938 de los permisos acordados a seiscientos judíos de Berlín y a se-senta de Viena. El periódico clerical “Criterio” hablaba de la buena política deinmigración , pero otros sectores criticaban el decreto limitando la inmigracióncomo el “Comité contra el Racismo y el antisemitismo en la Argentina”en el que se encontraban el Dr. Emilio Troise y Américo Ghioldi (dirigentes So-cialistas), Arturo Frondizi, Ricardo Balbín y Arturo V. Illia ( personalidades per-tenecientes al Partido Radical), Jorge Luis Borges (escritor). Todos ellos se opo-nían al fascismo italiano y al nazismo.

El diario “La Prensa” también se pronunció en contra de la política inmi-gratoria.

En noviembre de 1938 diputados socialistas solicitaron que se abra la en-trada aunque sea a niños judíos de Alemania, no fue tratada la petición por te-mor a la reacción de la embajada alemana.

El diario nacionalista “La Fronda” titulaba uno de sus artículos “Es nece-sario oponerse a la invasión semita”, en la práctica el gobierno fue ejecutor deese lema.

Recién el 21 de noviembre de 1938 cuando se publicó lo sucedido en “La No-che de Cristal”2 la D.A.I.A proclamó una semana de duelo de todo el judaísmoargentino y paro total del comercio. La solidaridad del pueblo argentino tuvoimpacto en el gobierno. La prensa se hizo eco de este trágico suceso.

A comienzos de 1939 no se les permitía desembarcar a los barcos que llega-ban a Bs.As, ni siquiera se les permitía permanecer unos días hasta que hicie-ran los trámites para ir a Chile, Bolivia o Paraguay.

Los judíos de la Argentina estaban en contradicción por un lado preocupa-dos por lo que les acontecía a los judíos de Europa y por otro lado resignadospor la impotencia al cierre de las puertas de la Argentina.

Argentina estaba clausurada para los judíos.

1-Ver módulo 40.2- Ver módulo 40.

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El conflicto de la Zwi Migdal

El 30 de septiembre de 1930 apareció en el diario “Crítica” grandes titula-res acerca de una vasta organización de tratantes de blancas que operaban engran escala. Las mujeres obligadas a ejercer la prostitución eran traídas de Eu-ropa (en su mayoría de Polonia) engañadas bajo promesas de matrimonio, em-pleo y aquí la organización contaba con la colaboración de algunos funcionarios,obteniendo de esta manera los documentos especiales para facilitar el desem-barco de las víctimas.

También tenían un servicio de falsificación de documentos para certificar lamayoría de edad, ya que era un requisito indispensable de esa época para quelas mujeres pudieran ejercer la prostitución legal.

En 1926 comenzó a traslucir las verdaderas actividades de esta asociaciónque ya estaba en manos de rufianes. No se puede determinar cuando comenzóa funcionar así, si desde su fundación o posteriormente.

La sociedad tenía en ese entonces sede en Avellaneda (Gran Buenos Aires)y en la Capital la sucursal estaba ubicada en la calle Córdoba 3000. En su in-terior funcionaba una sinagoga, una sala de velatorios, un cómodo salón de fies-tas y hasta habitaciones para alojamiento. También poseían “su propio cemen-terio” que estaba ubicado en Avellaneda donde eran inhumados exclusivamen-te los restos de sus asociados.

Hubo otra sociedad israelita que se dedicaba también a las actividades de-lictivas llamada “Aschkenasum”.

Esto llegó a oídos de la Comisión Directiva de la sociedad y resolvió el cam-bio de nombre, adoptando la denominación Sociedad de Socorros Mutuos yCementerio “Zwi Migdal”. La explicación de su nombre puede ser atribuidoa un personaje ligado a la sociedad en sus comienzos.

El 19 de mayo de 1930 se produjo el allanamiento a la verdadera sede de laZwi Migdal, la de la calle Córdoba, ya que la de Avellaneda se limitaba a repre-sentar tan sólo las actividades formales de la institución.

Este procedimiento se concretó a partir de la denuncia de una de las tantasvíctimas de los explotadores, que permitió terminar con esta organización. Eljuez Rodríguez Ocampo llevó adelante el proceso judicial y contó con la colabo-ración del comisario Julio Alsogaray. La comisión policial incautó libros de re-gistros de asociados, de tesorería y otros elementos probatorios. Se concretó ladetención de varios integrantes de la sociedad pero muchos otros consiguieronescapar aparentemente en lancha rumbo a Uruguay.

Desde la cárcel misma se movían muchas influencias haciendo que variosabogados excelentemente remunerados apelaran ante el tribunal superior. Elfallo de segunda instancia confirmó la prisión de solamente tres inculpados y larevocó con relación al resto.

El comisario Alsogaray tuvo muy duras palabras para esa decisión judicial.

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JULIO L. ALSOGARAY

La causa del relajamiento moral de algunos grupos de emigrantes ju -díos debe buscarse entre los factores históricos capaces de poner rumbosa una masa, destruir o crear sistemas y convicciones, volver en un sen -tido o en otro la marcha de los acontecimientos de un pueblo, modificarsu estructura y su mentalidad. Precisamente es la tenacidad una carac -terística esencial del pueblo judío. Su moral aferrada siempre a severospreceptos religiosos ha tratado de mantener inmaculada su pureza ra -cial, prohibiendo el cruzamiento en sus matrimonios. En épocas som -brías de su historia, el espíritu de conservación y de austeridad llegó alsacrificio heroico.El hecho de la prostitución y el proxenetismo entre judíos tiene ubicaciónen la Europa Oriental, en los grandes centros de población industrial,como Polonia, o portuarios como Odesa, donde luchan por la vida, conresignada perseverancia y en situación de miseria. Si a esto se agregalos padecimientos físicos y sufrimientos de orden afectivo que sobrevivie -ron con el despojo, quedan bosquejados los factores contribuyentes a laaparición de núcleos, motivos del presente estudio, y repugnancia parasus connacionales.Aquellos que en condición de inferioridad orgánica son incapaces de so -brellevar el embate de su destino al iniciar en condiciones miserables laemigración hacia países nuevos, fueron perdiendo el resto de pudor y dehonestidad para entregarse al ejercicio de menesteres que la sociedadcalifica con desprecio y repulsión.

Trilogía de la trata de blancas. Rufianes. Policía. Municipalidad. Buenos Aires, 1933.

El escándalo de la Zwi Migdal alertó a la opinión pública sobre los proble-mas que creaba la prostitución reglamentada o legal. Fue un detonante que hi-zo posible un movimiento que culminó con la sanción de la llamada “ley de pro-filaxis” que abolió el ejercicio legal de la prostitución en todo el país.

Es importante destacar que los integrantes de esa organización fueron se-veramente sancionados y excluidos de la comunidad. El objetivo central fue elde evitar que se confunda a toda la comunidad con el accionar de estos delin-cuentes.

Los “tmeim”, impuros, así denominados por el resto de la comunidad fue-ron considerados elementos inmorales. Tanto los ashkenazim como los sefara-dim rehusaban tener algo común con ellos. Hasta en el cementerio mismo se ne-gaba la comunidad sepultar a sus muertos en el mismo lugar que lo hacíanellos. Ellos adquirieron un cementerio en Avellaneda, conocido como el “Cemen-terio de los Disidentes”, doce años antes que lo lograran los ashkenazim ya queposeían suficiente dinero.

Cuando los judíos de Buenos Aires se organizaron como grupo comunitario,aquellos elementos de mala fama fueron eliminados de la vida societaria.

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El desarrollo del antisemitismo en la década del ´30

La composición de la sociedad argentina se vio transformada por la inmi-gración masiva que se hizo cada vez más intensiva desde comienzos del sigloXX. Las reacciones suscitadas llevaron a amplios debates.

Los recién llegados se fueron integrando pero sin abandonar su cultura deorigen. Mientras tanto la otra cara del proceso estaba representada por diver-sos sectores de la sociedad tradicional, entre ellos la Iglesia católica que comen-zó a alertar sobre la influencia negativa de la incipiente presencia “foránea”. Dela mano de los recién llegados no sólo venían las ideas anarquistas y socialistassino también proliferaron numerosas logias de tendencia anticlerical que se ge-neralizaron entre los sectores populares y urbanos.

La Iglesia descalificó estas conductas anticlericales y comenzó a estrecharlazos con las elites oligárquicas. La Iglesia afrontó a fines del siglo XIX la olasecularizadora, la ola de prosperidad económica y la nueva mentalidad de laclase media. Comenzó a perder influencia y predicamento en este nuevo tipo desociedad.

La Iglesia vivía esta realidad como una contaminación de la sociedad y co-mo el derrumbe de las creencias tradicionales, que causó preocupación tambiénen la elite dirigente argentina. Por lo tanto la Iglesia como el Estado comenza-ron a enfrentar la “cuestión nacional”. El “ser nacional” comenzó a ser vincula-do al pasado colonial hispánico y católico como oposición al proyecto de una mo-dernidad “extranjerizante” y liberal.

Las aspiraciones más claras de la jerarquía eclesiástica eran: “recristiani-zar a la sociedad y el Estado”.

La “cuestión nacional” en una sociedad desbordante de extranjeros e hijosde extranjeros terminó por constituirse en una “cuestión democrática”.

Una solución política sólo parcial se logró con el ascenso del Partido Radi-cal al poder en 1916. La Iglesia mantuvo buenas relaciones con el primer go-bierno de Hipólito Yrigoyen, pero durante la administración de su sucesor Al-vear, se presentaron conflictos.

Al morir el obispo del Arzobispado de Buenos Aires en 1923, el cargo quedóvacante y el Senado nombró a Monseñor Andrea para ocupar el cargo en la se-de episcopal. Fue considerado como una figura liberal y pro-radical por lo cualfinalmente no fue nombrado para ocupar la arquidiócesis.

Dos hechos marcaron profundamente el fortalecimiento del catolicismo ar-gentino: la creación de los “Cursos de Cultura Católica” en 1922 y la aparicióndela revista “Criterio”.

Los Cursos de Cultura Católica tuvieron el apoyo del Episcopado, equiva-lente a una elitista Universidad católica. En principio estaban destinados a cu-brir las insuficiencias formativas que estos estudiantes encontraban en la Uni-versidad liberal, pero hacia 1932 el presbítero Julio Meinvielle presentó su ci-clo sobre “Concepción Católica de la Política”, donde predicaba una especie de“fascismo” como alternativa a la decadente democracia liberal y su discurso con-tenía una fuerte dosis de antisemitismo.

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Algunos jóvenes atraídos por estas ideas fundaron “Baluarte”. Propiciabanla abolición del orden vigente, todos sus miembros participaron en el golpe mi-litar que derrocó al gobierno radical de 1930. El 6 de septiembre de 1930 al serderrocado el presidente Yrigoyen por el Ejército, la Iglesia argentina manifestópúblicamente su entusiasmo. El periódico oficial del Arzobispado de Buenos Ai-res “El Pueblo” presentó al golpe militar como una obra del “pueblo argentinoapoyado por el ejército”.

La Iglesia argentina legitimó la intervención militar en la vida política. El grupo Baluarte sostenía que el poder legítimo recae en hombres elegidos

por Dios y no por el sufragio, alentando así discursos antiliberales y antidemo-cráticos.

En 1928 un grupo de intelectuales provenientes de los cursos fundaron larevista “Criterio”. Desde sus comienzos se convirtió en la publicación más influ-yente del catolicismo argentino. Comenzó siendo un medio católico de culturaseria y elaborada, mayormente destinada a un público educado y elitista. En losaños ´30 enfrentó los temas más candentes de la hora política nacional e inter-nacional, por ejemplo: los peligros del comunismo, el nacionalismo, el rol del Es-tado, la situación económica –política europea, la guerra civil española y la“cuestión judía”.

Esta revista cumplió un rol decisivo en la formación de las nuevas camadasde intelectuales católicos, oficiales del Ejército, profesionales y sectores de laclase media alta.

Desde sus páginas se elogió a Mussolini, se aplaudió a Franco en la guerracivil española y se fustigó a los socialistas, a los comunistas y a los judíos.

La mayor parte de las publicaciones de las décadas del ´20 y del ´30, cató-licas y nacionalistas dieron muestras de un antisemitismo más suavizado comoen la revista “Criterio”, a veces latente pero siempre presente.

Las publicaciones “Crisol” o “La Nueva República” expresaron por momen-tos un antisemitismo virulento. En todas ellas encontramos artículos que hacenreferencia a la amenaza que constituye la inmigración judía, el comercio judío,la prensa judía y fundamentalmente la relación entre la comunidad judía y elavance del comunismo.

El periódico “Crisol” fue uno de los más difundidos en la década del´30.Fundado por el padre A. Molas Teran el 1º de febrero de 1932 se definía co-mo “católico y nacionalista”. Crisol se expresaba denunciando “la riqueza y elavance de los judíos” para sensibilizar a los sectores sociales empobrecidos porla crisis de 1930. En el momento en que se intentaba buscar un nuevo orden po-lítico, una nueva identidad nacional, el antisemitismo fue utilizado para conso-lidar, integrar y movilizar a las clases medias y trabajadoras.

La denuncia del capitalismo liberal, del comunismo y del judaísmo eran co-munes a todas las publicaciones, sólo se diferenciaban en el grado de virulencia.

“Crisol” manifestaba una admiración particular por el Duce, por Hitler, ad-miración por regímenes totalitarios europeos que presentaban como una claraalternativa política.

“ El judaísmo toma posesión de centros vitales de la vida económica,social, política y espiritual de Alemania...ayudado por sus acólitos

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liberales...El hitlerismo es Alemania, la representación de la Patria.Como el fascismo en Italia. Y como el nacionalismo lo será en Argen -tina... No es un partido, sino una masa sólida de la inmensa mayo -ría del pueblo... Para juzgar a Hitler es necesario abandonar los cli -chés de la democracia política.”

Oses Enrique, 30-1-1934. Crisol

Este tipo de discurso exaltado encontró eco en algunos sectores juvenilesprovenientes de colegios católicos o de la rama juvenil de “Acción Católica Ar-gentina” generalmente pertenecientes a los sectores medios y medios altos dela sociedad. Uno de los grupos principales surgidos en este proceso fue la“Alianza de Juventud Nacionalista” cuyo lema fue “Viva Cristo Rey” y “Muertea los judíos” en la década del ´40.

En el número de febrero de 1934, segundo aniversario de Crisol se encuen-tran artículos de Lugones, Alberto Uriburu , Gálvez y también del escritor Mar-tínez Zuviría (Hugo Wast) cuyos libros poseían un fuerte contenido antisemita.

La publicación del libro “El Kahal y el Oro” de Hugo Wast, de corte neta-mente antisemita, provocó la reacción del escritor judío Lázaro Schallmanquien publicó un artículo titulado “Hugo Wast anticristiano”.

En un artículo titulado “¿Los argentinos pueden hablar en la Argentina delos judíos?” Sostenía Wast:

“En nuestro país existe una organización secreta, extraña a la tradi -ción argentina, verdadero club de magnates dueños de las finanzas,con el poder de orientar la opinión pública por el control que ejer -cen sobre los periódicos, los cines y, también, las agencias de infor -mación”

Hugo Wast, Crisol, 5-9-1935

Crisol proponía diversas soluciones para “cuestión judía” que fueron desdela creación de ghettos en la Argentina hasta la expulsión. Entre otras cosas sesugería la implantación de una ley que permitiera

“privar a los judíos de los siguientes derechos: ciudadanía, el ejerci -cio de algún empleo dentro del Estado o en un organismo privadoque dependiese del Estado...

Crisol, 24-11-1937

A medida que el nazismo progresaba en Alemania, la publicación radicali-zaba su posición antisemita:

“Ya hemos dicho que con la inflación de 1929, los judíos han acapa -rado toda la riqueza de Alemania. ¿Qué es lo que podemos reprocharal gobierno de Hitler, el cual ha emprendido la restitución a los ale -manes de aquello que les pertenecía y de confiscar a los judíos explo -tadores todos los bienes que ellos han despojado a un pueblo honestoy trabajador”

Crisol 31-1-1937

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Crisol abordaba el tema judío como la imposibilidad de convivencia con elpueblo judío y defendía esta imposibilidad en el extremo de un racismo justifi-cado por la fe:

“....la raza judía es más nefasta que los piojos y otras plagas... Es poresta razón que nosotros justificamos de una cierta manera su perse -cución y su exterminación”

Crisol 1-9-1934

A medida que los argumentos antisemitas de Crisol comenzaron a extre-marse otros grupos católicos, así como también distintos sectores de la sociedadpolítica y la prensa, comenzaron a criticar duramente a este medio.

La empresa de divulgación del antisemitismo no fue sólo tarea de Crisol, tam-bién lo hará “El Pampero” y a comienzo de los años ´40 se agregará “Cabildo”.

MANUEL GALVEZ

Creo, sí, que debiera reformarse la ley de Inmigración, para evitar queeste país se llene de gentes que pertenecen a razas extrañas a la nues -tra.No veo inconveniente que en la Argentina vivan cien mil -el Jewish

Year Book de 1919 daba cuarenta y tres mil para 1911- y sin embargono se les distingue de los demás italianos. Y otro tanto sucede en Ingla -terra.En nuestro país el problema puede ser distinto. Tenemos apenas docemillones de habitantes y es indudable que un millón de judíos -y no ha -blemos de dos o tres millones- perjudicaría a nuestra nacionalidad y anuestro espíritu latino,Desde el punto de vista católico, el problema es por cierto más grave.Los judíos debieran abstenerse de actuar como argentinos contra laIglesia católica. Es una cuestión de delicadeza que no todos la com -prenden. Si yo me fuese a vivir a Rumania, nunca, presentándome co -mo ciudadano rumano, actuaría contra la religión ortodoxa. Los judíosque pasan por liberales solamente lo son frente al catolicismo, no conrespecto a la sinagoga.En Francia, las leyes anticatólicas han sido obra de judíos, comenzan -do por el divorcio. Para los católicos, pues, la existencia de una enormecolectividad israelita constituye un permanente motivo de temor. El ju -dío es por naturaleza intelectual, y, como puede comprobarlo quien ha -ya tratado con judíos, no olvida nunca su condición de tal. Los judíoslucharán, no tengamos la menor duda, en favor del divorcio, de la se -paración entre la Iglesia y el Estado y de la supresión de las congrega -ciones religiosas. Es natural que lo hagan, es perfectamente humano;pero a nosotros los católicos, esto no nos conviene.Pero el reconocer estas verdades no constituye tampoco el antisemitis -

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mo. Combatir contra los judíos que tienen tales o cuales ideas -no porser judíos, sino por causa de esas ideas- no es ser antisemita. Es, senci -llamente, defendernos, defender nuestra causa.La mejor prueba de que aquí no existe el antisemitismo es esta: si losjudíos comunistas dejasen de serlo y se convirtieran en católicos o con -servadores, ¿pensaría alguien atacarlos? Absolutamente. Los recibiría -mos con los brazos abiertos, como hemos recibido a los numerosos ju -díos que se han bautizado o que han entrado en la familia cristiana.La sociedad porteña desciende, en gran parte, de sefardíes. En tiemposde la colonia vinieron al país numerosos judíos, cuyos apellidos son hoyilustres en la aristocracia porteña. Nadie se avergüenza de esta descen -dencia. Y es lógico, ya que el pueblo judío es el más inteligente que exis -te en el mundo. Los judíos constituyen, hoy por hoy en Europa una aris -tocracia intelectual.Repito y repetiré mil veces que nadie odia a los israelitas como tales.Odiamos a los comunistas, a los judíos comunistas como a los comu -nistas de otras nacionalidades. Si los judíos permanecen en nuestropaís dedicados al trabajo, sin conspirar contra nuestra nacionalidad nicontra nuestra religión, pueden estar seguros de que nadie les haráningún mal, aunque no tengan nuestras mismas opiniones religiosas.

Antisemitismo. En Criterio, Nº 239, 29 de septiembre de 1932.

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