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César Montesano Vazquez
La pareja es lo parejo.Marcela Bracho FuentesPsiciterapeuta. Revista Figura Fondo del IHPGUn articulo enfocado en el analisis de la creación de la intimidad en la relación de pareja. Aborda la importancia de entender nuestros mitos en cuanto a la pareja así como la manera de crear una relación de dialogo basada en el Encuentro YO-TÚ.

REFERENCIAS

1.- PERLS ES., HEFFERLINE R. E, GOODMAN P.: Terapia Gestalt: Excitacion y crecimiento de la personalidad humana, (PHG).Ferrol-Madrid 2002, Colección Los Libros del CTP,. 2.- PHG 11, 1, 4 3.- PHG II, 3, 13 4.- PHG 11, 5, 13 5.- PHG 11, 5,12 6.- PHG 11, 5, 12 7 Y 8.- PHG 11, 8, 6 9 .- PHG 11, 1, 7 10.- PHG 11, 1, 6 11.- PHG 11, 5, 12 12.- GOODMAN, Paul: Los niños y la Psicología, Documentos del CTP, Madrid, 2002 13.- PHG 11, 1, 8 14.- PERLS, Laura: Viviendo en los límites, Ed. Promolibro, PÁG. 53 15.- PHG 11, 8, 5 16.- PHG 11, 1, 2 17.- HODGES, Carl: <<Teoría del Campo», Documentos del CTP, Madrid, 18.- PHG 11, 9, 2 19.- VAZQUEZ, Carmen:»Un homenaje a Laura Perls>>, Pág. 6 20 .- PERLS, Laura: Ibíd., Pág. 85 21 .- PERLS, Laura: Ibíd., Pág. 86 22 .- VAZQUEZ, Carmen, Ibíd., Pág. 6 23 .- PERLS, Laura: Viviendo en los límites, Ed. Promolibro, Valencia.

BIBLIOGRAFÍA GOODMAN, Paul: "Los niños y la Psicología", Documentos del Centro de Terapia y Psicología, HODGES, Carl: "Teoría del Campo", Documentos del Centro de Terapia y Psicología

PERLS, ES., HEFFERLINE, R.E, GOODMAN,P.,: Terapia Gestalt: Excitacion y crecimiento de la personalidad humana, Ferrol-Madrid, Los Libros del CTP, 2002 PERLS, Laura: Viviendo en los limites, Ed. Promolibro, Valencia 1994 VAZQUEZ, Carmen: "Un homenaje a Laura Perls", Documentos del Centro de

Terapia y Psicología

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LA PAREJA ES LO PAREJO: UN ENCUENTRO Yo-Tú

Me quité el alma para ser Tú. J.Sabines

l presente artículo trata sobre la importancia que juegan las

Maree/a Bracho Fuentes.(*) 1 f actitudes humanistas basadas en Carl Rogers y la actitud dialogal basada en la intimidad, presencia y reciprocidad en el

Encuentro Yo-Tú fundamentadas por Martín Buber, llevadas a una relación de pareja en donde el amor habita en ella. Además se exponen algunas posibles consideraciones de cómo el Encuentro provoca una transformación y crecimiento gracias al descubrimiento del Yo en el Tú. En donde el sentido de cualquier relación, ya sea terapéutica o personal, es el encuentro con el otro.

INTRODUCCIÓN

Este artículo nace a propósito de mis roles actuales de vida, la de terapeuta Gestalt, por un lado y la de compañera de vida en una relación de pareja, por el otro. A raíz de una separación con mi esposo hace más de cuatro años, fui en busca de terapia para encontrar respuestas y profundizar sobre mi relación en ese entonces. Finalmente, después de "destapar la cañería'' y tomar conciencia de lo que verdaderamente queríamos como pareja, decidimos volver a intentar, reordenar nuestra relación a través del diálogo profundo, como única condición. A partir de ahí, pude constatar lo potente de la terapia, y decidí especializarme en Psicoterapia Gestalt, habiendo atravesado por el largo camino del desarrollo humano que ayudó, paradójicamente, a que yo me separara de mi pareja después de 12 años. Durante ese lapso de tiempo de aprendizaje humanista, en donde yo sentía que me expandía cual mariposa, empecé por ensayar otras formas de ser, a explorar otras partes de mi, a ampliar la visión de mi existencia. Bastó todo aquello para que mis

(*)Maree/a Bracho Fuentes. Psicoterapeuta Gestalt. Especialidad en Sensibilización en IHPG. Diplomados en Desarrollo Humano y Psicología Transpersonal. Actualmente dedicada a la docencia y a la psicoterapia individual y de grupos.

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relaciones interpersonales fueran transformándose. Me daba cuenta que tanto con mi terapeuta corno con mi "cliente", lo

que realmente importaba era la relación, que las actitudes humanistas ayudaban a lograr el encuentro entre ambos, así que me propuse hacer "eso mismo" en mi relación de pareja.

Las preguntas que me propongo contestar en este trabajo son éstas: ¿Podré crear una relación de crecimiento, de encuentro profundo, de intimidad, de mutualidad con mi pareja como lo he logrado en mis relaciones terapéuticas? ¿Cómo es que teniendo las actitudes humanistas y funcionando óptimamente en mis otras relaciones interpersonales no las aplicaba con la persona que vivía conmigo? ¿Qué me pasaba que teniendo todos los recursos para hacer que mi relación de pareja fuera la mejor, resultaba la más conflictiva? ¿Cómo era posible que con ella no pudiera crecer y me sintiera estancada, sin avanzar, sin salir de las mismas situaciones repetitivas y caóticas?

La razón de este trabajo es dar respuesta a estas interrogantes. Encontrar cómo puedo utilizar estas actitudes humanistas y los elementos característicos del encuentro en una relación de terapia y representarlos en la relación diaria con mi pareja. Este artículo plantea algunas de mis reflexiones acerca de cómo lograr una relación dialogal basada en el Encuentro Yo-Tú buberiano para que la pareja sea en sí misma un camino de transformación personal .. Es un antojo ofrecer una ruta de salida a algunos conflictos de pareja actuales proponiendo la existencia de una relación basada en el diálogo profundo y en las actitudes humanistas de Carl Rogers.

LA RELACIÓN DE PAREJA: una perspectiva matrimonial

Aquí me refiero al matrimonio entendiéndolo corno la unión de dos personas -que comparten sus vidas y conviven juntos en un mismo espacio y tiempo. Y corno tal, existe un vínculo amoroso entre ellos en donde lo que realmente palpita es la pareja.

"El matrimonio no sólo es la expresión del amor que existe entre dos personas, sino también la profonda evocación de uno de los grandes misterios de la vida, el entretejimiento de muchas hebras distintas del alma. El matrimonio toca cuestiones cargadas de emoción y relacionadas con el sentido absoluto, está lleno de sentimientos paradójicos, fantasías descabelladas, profunda desesperanza, epifanías de dicha y luchas enconadas." (Moore, pag. 73.)

A lo largo del escrito me referiré a la relación de pareja, y no al matrimonio

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corno lo establece la ley o la iglesia. Sin embargo encuentro que es importante remitirme en este momento al "concepto matrimonio" por lo que me ha significado vivir en pareja: un espacio compartido, novedoso, conflictivo y grandioso a la vez. En donde la pareja es lo parejo. No somos iguales, afortunadamente pero sí marchamos a la par hacia la meta de la individualidad, juntos, lado a lado.

Consideraciones actuales Creo que hoy en día este tipo de relación está en crisis. Las posturas tanto

del hombre corno de la mujer se han modificado y hay gran confusión en cuanto a la función de los papeles de cada uno. Si bien dentro del matrimonio o en cualquier tipo de relación de pareja, hay que ejercer la libertad, el mutuo respeto hacia la individualidad del otro, me parece que hemos dejado atrás la co-responsabilidad que implica vivir en pareja. Y lo que hacernos es andar a la deriva, sin acuerdos, sin pactos mutuos, sin compromiso, guardando resentimientos, rencor e ira y culpando al otro de no ser corno queremos que sea. " .... y una vez que se empieza a exigir lo imposible en la pareja, comienza el resentimiento, el juego de las culpas, las irritaciones y de cuánto hay". (Perls, pág. 131).

Parece ser que la solución al problema de estar insatisfechos en la vida de parejas actuales es la de separarse o divorciarse. Con estas constantes no hay soluciones posibles a estos desencuentros conyugales: el saldo es muy doloroso, desde la repartición de bienes y tiempo para los hijos, si los hay, hasta el abandonar sueños y amigos mutuos . Y corno si fuera poco, el residuo de un temor al acercamiento, a la intimidad con otra persona . Viviendo en la desconfianza de que cualquier relación pueda fallar. Y esto supone que el único modo de evitar estas situaciones es quedarse en esa "cárcel" llamada matrimonio y permanecer prisionero a sabiendas que no sé es feliz y que la vida se ha convertido en una supervivencia llenando esos vacíos existenciales con el trabajo, la comida, el alcohol, los amigos, o con fantasías de infidelidad.

¿Habrá otro camino? ¿Existe otra posibilidad mejor que el de quedarse en ese encierro llamado matrimonio? Considero que el enfoque existencial-humanista podría ser una puerta para la solución de estos conflictos. En donde el ser humano tiende a crecer, a desarrollarse, a encontrarse con su sí mismo a través del otro. La buena noticia es que la pareja está permanentemente cambiando, que no está en un estado inmutable. Este cambio empieza desde el furor del enamoramiento, viaja después por la sinuosidad de trechos para descubrirse y acaba culminando . en una relación creada para unirse íntimamente, y me atrevo a decir, trascendentalmente. Es· quizá cuestión de renovación constante y de una re-eleccion mutua para mantener viva la relación, una y otra vez mientras dure la vida. Es importante deshacer la creencia heredada culturalmente de que el matrimonio es una prisión, un lugar en donde nadie quiere estar y todos llegan por diferentes

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motivos. Un espacio en donde quedamos atrapados, enganchados y en donde parece que no hay posibilidad de encontrar la llave de la puerta para salir huyendo.

El matrimonio no es un camino fácil. Asumir que hiciste una promesa de amor para siempre y que además vas a convivir c-on otro ser distinto a ti, con sentimientos, pensamientos, rituales, actitudes, preferencias totalmente opuestas a las tuyas es un reto y un riesgo. Implica dejar de amar románticamente y entrar a contactar realmente con el genuino interés por el bienestar del otro. Con esto quiero decir, crear una relación con tu pareja es establecer un vínculo amoroso. Aquí no hay técnica sino actitudes humanistas, que más adelante me detendré en comentarlas.

Dúo trágico: Retrato de una relación disfuncional Una de las causas de la disfuncionalidad en la pareja es dada por la falta de

comunicación, es decir, no hay una actitud dialogal en la relación. Y esto se debe a que existen respuestas verbales y no verbales que obstaculizan la escucha y la comprensión, esto es, cuando el otro te quiere comunicar su experiencia o algún sentimiento o alguna idea y tú o el otro, ordena, dirige, manda, advierte, amenaza, sermonea, alecciona, aconseja, sugiere, juzga, critica, desvaloriza, culpa, ridiculiza, interpreta, etc.

Estos patrones de respuesta son dañinos en la medida en que se convierten en nuestra forma habitual de responder, no quiere decir que no podamos bromear, o interrogar o simpatizar con el otro, sino que cuando estoy con mi pareja en un diálogo profundo, de centro a centro, utilice estas herramientas sucias para entorpecer y cerrar la comunicación.

Otra de las barreras que obstaculizan la comunicación es entrar en un diálogo interno con nosotros mismos a un volumen tan alto que no escuchamos al otro. Generalmente procede de asuntos no resueltos que se apoderan de nuestro campo de conciencia.

Además de esta ausencia de diálogo, es que las expectativas que ponemos en el otro son tan altas, que creemos que nuestra pareja nos va a resolver la vida, nos va a curar de nuestras angustias, nos va a llenar los huecos existenciales, y nos va a satisfacer todas nuestras necesidades.

La pareja habita en el amor En este inciso quisiera hablar del vínculo emocional llamado amor. La

diferencia entre otros tipos de relación es que en ésta, el amor es el factor predominante. Y a partir de este sentimiento todo cambia. En una relación terapéutica hay empatía, interés genuino por el otro, aceptación, comprensión, cariño incondicional pero amor como se da en la pareja conyugal no existe. Y he

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ahí que habitar en el amor lo complica todo. "A los sentimientos se los "tiene"; el amor es un hecho que "se produce". Los

sentimientos habitan al hombre, pero el hombre habita en su amor. Esto no es ninguna metáfora: :es la realidad. El amor no es un sentimiento que se adhiere al Yo de manera que el Tú sea su "contenido" o objeto; el amor está entre el Yo y el Tú.". (Buber, pág. 16).) .

Aquí hay dos conceptos que me gustaría definir: La pareja y el amor. A partir de esta unión se da el encuentro de un Yo con un Tú en este tipo de relación.

¿Que es una pareja? Según el diccionario Larousse, pareja es "El conjunto de dos personas o

cosas semejantes. En particular, dos guardias, dos animales, macho y hembra. Dos cosas que siempre van juntas: este guante hace pareja con el otro. Compañero o compañera de baile. Matrimonio o novios. Compañero el juego." (Dice. Larouse.Pag.222)

Yo añadiría que una pareja son dos personas que van juntas pero no pegadas, caminando por el mismo camino. Es aquella que tiene el poder de despertarme en aquellas zonas en las que me encuentro dormida. La que tiene la virtud de ponerme en movimiento hacia delante, mostrándome en que aspectos debo crecer. Es aquella que me da la oportunidad para ampliar mi conciencia y descubrir una verdad más profunda en mi. Es la que me permite hacer de mi vida un proyecto juntos.

Una manera de habitar el amor es al aceptarnos recíprocamente en vez de toleramos. Uno de los aprendizajes en el camino del encuentro con mi pareja es la aceptación del otro tal como es, y eso es posible si antes aprendí a aceptarme a mi

mismo.

Y el amor ¿qué es? Si queremos definir a la pareja en matrimonio necesitamos hablar del amor

y de su significado en el vínculo que se crea cuando dos personas planean seguir juntas en el mismo camino. Sin embargo, me siento incapaz de definir al amor per se, cada quien tiene su propio sentir, su propia experiencia del amor. Lo que sí puedo constatar es que amar es algo maravilloso, no tiene la intensidad de las pasiones, ni el embrujo ni la fascinación de estar enamorado, por supuesto que no, el amor tiene una esencia divina, una profundidad tal que es capaz de conceder al que se ama el regocijo, la alegría plena por su sola existencia en la tierra. Hay una definición que encontré que me resultó la mas bella de todas: El verdadero amor es el deseo inevitable de ayudar a otro para que sea quien es en verdad. Y la de Buber "El amor es la responsabilidad de un Yo por un Tú. En estó reside la igualdad entre aquellos que se aman, igualdad que no podría residir en un sentimiento .... " (Buber, pág. 16)

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PRINCIPIOS HUMANISTAS PARA LA CREACION DE LA RELACION

Crear una relación terapéutica es establecer un vínculo emocional.. El terapeuta acoge cálidamente al diente dentro de una atmósfera de confianza, aquí no hay técnica sino actitudes como el interés genuino al atender sentimientos de las expresiones del cliente. Ofrecer una comprensión y aceptación profundas de las actitudes conscientes en el momento que explora paso a paso las áreas peligrosas de su vivir.

Una atmósfera cálida y permisiva es aquella donde el cliente se siente libre, en donde puede atreverse a ser lo que es, sin miedo a ser rechazado, ni juzgado, ni invalidado. Ahí en donde puede sentirse comprendido y aceptado.

Aceptación Es la disposición y capacidad sensible de comprender los pensamientos,

sentimientos y luchas del cliente desde su propio punto de vista. Es reconciliarse el Tú que Tú eres, con tus cualidades y defectos, con tu

grandeza y pequeñez, con tus dones y carencias, con lo bueno que tienes y con tus limitaciones. Aceptar es abrir de nuevo las puertas del Yo al Tú, derribando las defensas que mi egoísmo ha levantado y buscar las puertas de entrada al otro, superando los miedos y la desconfianza. Aceptar es no reclamarte por tus errores y esperar que tu tampoco me reclames los míos.

¿Cómo puedo aceptar las diferencias entre el Yo y el Tú? Creo que la respuesta es cuando abandono la idea de que hay un único

punto de vista. "Es imprescindible incorporar las dos maneras de estar en el mundo para integrarse como personas y con el otro." (Bucay,pág.202)

El desafío es abrirse a una forma diferente de estar en el mundo e integrarla a uno mismo, abrirse a un pensamiento nuevo, a una manera distinta de encarar la vida. El amor empieza cuando descubro quien es el otro, cuando abandono la idea de lo que "debería de ser" y en donde surge de pronto alguien nuevo que me sorprende con su originalidad. Bucay dice que ahí es donde comienza el amor, con la sorpresa, con el descubrimiento, mientras que si trato de encajar al otro en mis viejas ideas no pasa nada, es decir, más de lo mismo no sirve. Amar es abrirse a lo nuevo, a lo real.

Aprecio incondicional y positivo Significa que no existen condiciones de aceptación, ningún sentimiento de

"te quiero solamente, si eres esto y esto otro". Significa una apreciación de la persona tal cual es. Es decir, es una actitud no evaluativa. Implica también una

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aceptación a expresiones del cliente de sentimientos negativos, dolorosos, de temor, defensivos y "anormales", así como por la aceptación de sentimientos positivos o "buenos" , maduros, de confianza, sociales, etc. Con la misma aceptación de las formas en que es congruente tanto incongruente. "Significa un interés por el cliente como persona "aparte" con permiso de tener sus propios sentimientos, sus propias experiencias." (Rogers 1962, pág. 83)

Comprensión Empática Percibir el mundo tal como éste lo percibe. Percibir al diente tal como se vé

a si mismo y al hacer esto dejar de lado todas las percepciones según un marco de referencia externo. Es ver a través de los ojos del otro. "Sentir el mundo privado del paciente como si fuera el propio, sentir el coraje, el miedo o la confusión del paciente como si fueran propios, pero sin que se mezclen con el propio coraje, miedo y confusión".(Rogers, La relación interpersonal, pág. 84). Esta actitud es la que a mi modo de ver, es la que más favorece el crecimiento.

Autenticidad Quiere decir congruencia, genuina e integrada. Dentro de la relación, el

terapeuta es libre y profundamente él mismo, con su experiencia real, exactamente representada por su conciencia de sí mismo.

"He descubierto que cuanto más auténtico puedo ser en la relación, tanto más útil resultará esta última. Esto significa que debo tener presentes mis propios sentimientos, y no ofrecer una fachada externa, adoptando una actitud distinta de la que surge de un nivel más profundo o inconsciente. Ser auténtico implica también la voluntad de ser y expresar, a través de mis palabras y mi conducta, los diversos sentimientos y actitudes que existen en mí.. Sólo mostrándome tal cual soy, puedo lograr que la otra persona busque exitosamente su propia autenticidad." (Rogers, pdg.41).

Respeto, atención y escucha En cuanto mayor sea mi respeto, mi atención y mi escucha con mi cliente,

más armoniosa resulta la relación que estoy creando. Respetar al otro distinto a mí, con mérito propio e incondicional. Respetarlo como un ser valioso, independientemente de su condición, conductas o sentimientos. El respeto brinda calidez y seguridad a la relación terapéutica . El silencio es una forma maravillosa de escuchar, es pasiva, es potente. "Sólo quiero que me escuches, no me digas nada, sólo quiero ser atendida por ti".

Siendo estas actitudes humanistas las claves para el proceso terapéutico, lo que propongo, es que lo sean también para una relación de pareja en donde se dé

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el diálogo profundo y el "encuentro Yo-Tú".

LA RELACION DIALOGAL: Un encuentro Yo-Tú

Diálogo. Encuentro. Yo-Tú. Estas palabras denotan una posición. especial de dos individuos en presencia uno del otro. Una forma concreta de contacto. Conceptos heredados de Martín Buber (1878-1965). Filósofo, teólogo, militante. Siempre a la búsqueda de una mayor humanidad. Ideas tales como la del "hombre-en-relación" corno única posibilidad de crecimiento humano.

Pondré el acento en la dimensión del encuentro Yo-Tú buberiano y la actitud dialogal que en términos gestálticos el primero corresponde al momento del contacto final; la otra está presente durante todo el proceso contacto-retirada, que es la que representa en el terapeuta el fondo del que va a emerger la figura del Yo-Tú.

¿Qué es un Encuentro? Encuentro es aquel en donde dos personas centradas en ellas mismas

comparten su camino sin renunciar a su centramiento, a su individualidad. Si no estoy centrada en mí es corno si no existiera y si no existo ¿cómo podría encontrarme en el camino con el otro?

Toda vida verdadera es un encuentro según Buber. "La relación con el Tú es directa. entre el Yo y el Tú no se interpone

ningún sistema de ideas, ningún esquema y ninguna imagen previa. La palabra primordial Yo-Tú sólo puede ser dicha con la totalidad del ser. Entre ese encuentro Yo-Tú no se interponen ni fines, ni placer, ni anticipación. El deseo mismo cambia cuando pasa de la imagen soñada a la imagen aparecida. Todo medio es un obstáculo. Sólo cuando todos los medios están abolidos, se produce el encuentro" (Buber, Yo-Tú, pag. 14).

Hablaré más tarde lo que es el encuentro corno confluencia sana. Hay un instante realmente mágico y pleno en ese fluir sólo si hay presencia e intimidad en la relación.

A propósito de la Relación cito a Buber "Quien está en la relación participa de la realidad, es decir, de un ser que no está en él, ni exlusivarnente fuera de él. Toda realidad es una eficiencia en la que participo sin querérrnela apropiar" (Yo y tú, pag 98} Así la relación supone ser elegido y elegir. Los momentos de intenso compromiso en el que el Self actualiza todas sus potencialidades son raros, así como los encuentros Yo-Tú. Este encuentro fue descrito por Buber no como un proceso· sino corno un acontecimiento, o bien, como posición, forma de estar en relación: Este acontecimiento corno dice Schoch , es el encuentro en sí mismo,

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puede referirse en términos gestálticos al contacto final. Así que el término Yo-Tú en terapia es más un instante o ·momento de encuentro que una relación que remite a una noción de duración. El encuentro Yo-Tú en una pareja amorosa, no es sólo un acontecimiento separado, sino también un proceso, un camino. Implica una relación y una duración.

"El encuentro puede ser fugaz y manifestarse por una mirada, una actitud, o un guiño bajo la forma de una broma o de una sonrisa. Es una percatación global, intuitiva, de dos seres vueltos el uno hacia el otro, de manera accidental o deliberada, es un reconocimiento, una palabra dada y recibida, una actualización de la presencia." (Schoch Pag.98)

Encuentro Ontológico Este momento del Yo-Tú podría ser considerado corno ontológico, se presenta

con un carácter de transcendencia, en donde se rebasa al instante. Es en donde encuentras al otro en su ser estando Tú en el tuyo.

Considero que no hay palabras para describir el momento del encuentro, es para vivirlo exclusivamente. "El a dúo no es un espacio intersideral que existe independientemente de un Yo y un Tú de cada encuentro concreto" (Schoch cita a Levinas. Pag. 73). El hombre no es real más que en una relación con el otro y el "a dúo" se convierte así en una categoría fundamental del ser.

En ese encuentro trascendental, en donde el "a dúo" es lo sustantivo, existen tres elementos primordiales, que para mí, son esenciales en ese proceso mutuo y que participan en la construcción de la realidad específica de ese encuentro:

l. Reciprocidml Al encuentro Yo-tú, Buber le atribuye un carácter de reciprocidad y esto se

refiere al hecho de que "Yo afecto al Tú y Tú afecta al Yo". Se puede ver en esto un carácter de mutualidad y de simultaneidad. Cada uno es movido por el otro, no sale de ello indemne.

Reciprocidad no significa igualdad para un encuentro terapéutico, ya que el terapeuta esta ahí para poner sus competencias al servicio de su paciente y por otro lado no espera que su paciente se interese por él. Está colocado simplemente en un sistema de intercambios. Sin embargo, en la relación de pareja difiero con esta posición. En esta situación la reciprocidad si es de igualdad. La pareja se funde. Dar y recibir es una sola cosa. No existe una sin la otra. Es por ello que considero q.ue la pareja es lo parejo, en este sentido.

"En la psicoterapia dialogal implica que el terapeuta vaya siempre por delante en un camino estrecho. Es decir, que no se apoye en las vastas alturas de un sistema pedregoso, entre los abismos donde no existe certeza alguna, ningún conocimiento enunciable, sino la seguridad de encontrar

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lo desconocido." (Schoch citando a Buber, ,pág.100). En la relación de pareja sucede que los dos llevan la delantera, están

caminando juntos por el mismo sendero desconocido, estrecho y pedregoso para ambos. Y los dos en cualquier momento pueden actuar, prever o comprender las situaciones. Estas acciones en la relación terapéutica sólo conciernen al facilitador.

2. Presencia Aquí se describe la actitud dialogal desde otro ángulo, desde otro camino

para encontrar al otro, distinto del de la comprensión. Y este camino es la presencia. Situándonos en el diálogo, sin buscar poder, sino una relación de intercambio, de co-creación, en donde se accede a otra forma de realidad, que cada ve:z es nueva y que no agota jamás las posibilidades. "Cada encuentro es presencia pura, cada encuentro es un acto creador, se sitúa en otro grado del mundo y también más allá, es ese lugar donde no estábamos antes de habernos reunido" (Schoch. Pag. 105).

La presencia es un estado del darse cuenta, es como mantener una cuerda lo suficientemente tensa como para que el encuentro con el otro haga sonar una nota. La presencia consiste en vivirse plenamente. La presencia ante el otro permite verle en su unicidad, es captarlo en ese instante en todas sus dimensiones de su ser. De ahí, que el encuentro sea ontológico.

Estar presente consiste en abrirse, hacerse disponible a la novedad, a lo desconocido, a lo nunca vivido. Es aceptar recibir en el mismo momento en que se da, es dejarse impactar por el otro. "Estar presente es exponerse, ir por delante de uno mismo, al descubierto y también diluirse para dejar crecer al otro en su Self y confirmarle."(Schoch, pág.l06). La presencia está en una apertura corp9ral y emocional. Es una intensidad dirigida al continuum de la experiencia. Lo que llamaría Buber "Tener un conocimiento íntimo" y que hace posible el diálogo. Desde este lugar la presencia es terapéutica en cualquier relación, ya que el otro le permite en el punto en el que se encuentra. Estar presente es "estar para".

"No es a partir del ser en general como él viene a mi encuentro. Todo lo que de él me llega del ser en general sin duda se ofrece a mi comprensión y a mi posesión. Le comprendo a partir de su historia, de su medio, de sus costumbres. Lo que escapa en él a mi comprensión es él, el que es': (Schoch, cita a E. Levinas. Pag 104).

3. Intimidad Otro modelo de encuentro es la Intimidad. Cuando el encuentro es profundo

y trascendente estoy hablando de un vínculo íntimo, y esto es no quedarse en la

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superficialidad. Es un encuentro en una búsqueda a la profundidad de la relación, para que ésta pueda permanecer y trascender en el tiempo. Una relación íntima es aquella que empie:za por cancelar el miedo a exponernos y está en el compromiso de ser quienes somos.

Cuando yo entro en intimidad con mi pareja, en ese momento honro su existencia, las cosas que me dice son una posibilidad de que yo sepa, antes que nada, que puede contar conmigo. Dice Rogers, que cuando percibo la aceptación total del otro, entonces y sólo entonces puedo mostrarte mi yo más amoroso, mi yo más creativo, mi yo más vulnerable, y agregaría- mi yo más íntimo-.

Intimidad, entonces, implica entrega y supone una atmósfera o entorno lo suficientemente como para abrirse al otro. "Sólo en la intimidad puedo darte todo aquello que tengo para darte. Si yo me abro quedo muy vulnerable, entonces la intimidad es inevitablemente riesgosa" dice Bucay.

"En las relaciones íntimas están involucradas las dimensiones "más interiores" de uno mismo y de la otra persona''. (Moore, pag.47).

La intimidad se va construyendo poco a poco en un permanente proceso de desarrollo y transformación. Despacio se encuentra el deseo de abrir la interioridad. Es recorrer uno a uno cada riesgo en la entrega, empe:zar a devdar los secretos, los misterios y conquistar cada ve:z más espacios de aceptación y apertura. Creo que sólo se es capaz de intimar cuando te das cuenta que tu pareja es diferente a "ti", y que además haces todo lo posible para que el otro pueda permanecer siendo así. Distinto, tal como es.

Sin intimidad no hay encuentro. La intimidad es una actitud dialogal que es a mi parecer muy diferente del diálogo. Y para que exista intimidad es

que se tenga un vínculo afectivo con la pareja (cariño, amor) , que exista confianza y que además sienta una atracción por el otro .

Habiendo explorado estos tres elementos fundamentales en el encuentro, el dúo, está, en sus funciones para entrar en una danza, en una entrega, en interacción. En la confluencia llamada sana.

Confluencia Sana La confluencia sana se da sólo cuando las semejanzas y las diferencias sirven

para estar juntos. En la individualidad, en el "Yo soy yo y tú eres tú, y juntos hacemos un nosotros". Cuando hay contacto real con la pareja para nutrirte del otro, para alimentarte, para fundirte y recrearte en ese espacio inventado por los dos. Cuando se entra en ese encuentro para después salir. Y cuando se sale, entonces se puede asimilar e integrar lo nuevo en uno. Lo que es digerido se queda como parte integrante de la personalidad. De ahí la importancia de que cada encuentro debe ser novedoso, auténtico, y satisfactorio . De lo contrario habría aburrimiento,

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dependencia, regresión y la relación se aferraría a una situación antigua y caduca impidiendo así el crecimiento. En esa confluencia sana está el encuentro, el en unidad, no hay elección de fronteras, ni alienación.

"En ese momento yo "soy mi pena, Yo soy mi placer, Yo soy ante ti-Tú.. No hay distanciamiento entre el que vive La pena, el placer, el encuentro y esa pena, ese placer, ese encuentro. Ese Yo- Tú no estdn destinados a producir efecto alguno para mí o para el otro; son, eso es todo. En esta fase se realiza la integración de todas las fonciones perceptivas, motoras y aftctivas. "(Schoch, pag. 80).

En este contacto final todo es vivido por el ser entero, quien se decide a ello no puede preservar nada de sí mismo. En ese momento Yo me reconozco Tú, y Tú te reconoces Yo. Ese encuentro, insisto, está lleno de excitación, aunque parezca efímero, transitorio, deja huellas ya que la novedad contactada es asimilada y ahora forma parte de nuestro organismo. ''Así la confluencia ha llegado a designar el enredo, considerado como más o menos sano, entre un "Yo" y un "Tú" en un "Nosotros" indiferenciado, temporal como el orgasmo o en el encuentro amoroso, cronificado en un "como si" de contacto en formas disfuncionales" (Robine, pag. 101).

Fromm decía que ese deseo de fusión interpersonal es el impulso más poderoso que existe en el hombre. Constituye su pasión más fundamental, la fuerza que sostiene a la raza humana. Cuando esta cita no puedo más que pensar en el encuentro entre dos personas que confluyen, que participan juntos para guardar la semilla que otorga esperanza al mundo.

La Relación es la que cura: El encuentro como ajuste creativo. El encuentro Yo-tú toca zonas más recónditas del ser, al mismo tiempo que

atañe a la persona entera, es su totalidad, premisa básica en la filosofía de Buber. El Ajuste en Gestalt es el principio de realidad, de adaptación. Creativo

surge de la novedad, nuevas soluciones, nueva configuración, nueva integración. Dimensión de fantasías y ampliación de posibilidades. El encuentro entre la parejas puede crearse para provocar su crecimiento. Esta novedad encontrada es un ajuste creativo. "Después de cada contacto llevado a cabo , estamos transformados porque se ha·realizado una asimilación" (Robine,pag. 91) .

Crecimiento Mutuo: descubrimiento del Yo en el Tú. ¿Cómo puedo descubrirme si no es a través del otro? Sólo en la medida que

me relaciono con el Tú sé quien soy Yo. Es una oportunidad de que en cada encuentro crezca y me transforme, me ajuste creativamente. ¿Cómo? Abriéndome a una actitud dialogal, de centro a centro.

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Cuando veo que hay un "Tú" que también vive, sueña, sufre, necesita, se enoja, llora, ríe igual que Yo. Desde ahí "nos" sanamos, desde nuestra humanidad.

Paradógicamente, cada "desencuentro" da la oportunidad de producir un desarrollo en la persona, es como si creando conflictos se produjera la transformación .Las dificultades, las confrontaciones, los puntos de vista distintos son un camino para superar los propios obstáculos y así poder acercarse al otro. Es una ruta para producir el transformador encuentro consigo mismo. Goodman cuando habla del conflicto, lo presenta " ... como el elemento insoslayable por medio del cual evoluciona el organismo sano hacia una solución creadora ... " (Goodman citado por Schoch, pág. 94). Reconociendo que nosotros no somos más que co-autores de esta creación.

Ahí, creo, comienza la sorpresa, con el descubrimiento del otro. En otras palabras, es llevar a la pareja a no perderse cuando se abre a la alteridad. " ... Sólo cuando el ser, Yo, viene al encuentro de la novedad en el otro, que es alteridad, es cuando se puede constituir el a dúo. El hombre no es real más que con una relación con el otro" (schoch, pág. 73).

Aprender a reconocer y a reconciliar las dualidades, desde las más pequeñas a las que son esenciales como son la polaridad vida-muerte, o autonomía-pertenencia. Tener conciencia de estas diferencias es vivir una experiencia nueva.

El encuentro Yo-Tú es un proceso reparador, desconocido y excitante. Estamos en crecimiento cuando dejamos cada vez más sitio a lo que no es "nosotros", es decir, a un funcionamiento sano en relación con lo que no somos, ya sea conocido o desconocido.

Puedo observar que desde este contexto tanto la relación terapéutica como la relación de pareja nos muestran con claridad en que aspecto debemos crecer. La relación es una oportunidad para ampliar nuestra conciencia, descubrir una verdad más profunda y desnuda de nosotros mismos.

El encuentro tiene una doble funcionalidad: La preservación y el crecimiento. Hay una necesidad de desequilibrio para entrar en intercambio con lo que no es el Yo y llegar a la transformación mutua (la creación}. Ir hacia una mayor complejidad.

"Solamente quien se preserva puede crecer por asimilación y solamente quien asimila la novedad puede preservarse, no degenerar" (Schoch citando a Goodman, pag. 55) .

Goodman nos invita ir hacia esa naturaleza, al libre funcionamiento organísmico, hacia esa unidad, a una intimidad y a una simbiosis en donde hay interdependencia entre dos organismos, participando uno a uno en un crecimiento mutuo.

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LA RELACION SUMA: yo contigo + tú conmigo + yo conmigo + tú contigo a nosotros en el mundo.

He revisado a lo largo de este trabajo los principios humanistas y las características del encuentro Yo-Tú. Ahora en este punto los sumo para que la relación de la pareja sume todos estos aspectos. Esos dos mundos individuales, únicos e irrepetibles se encuentran y se convierten en uno solo. Finalmente lo que realmente transforma y cura es la creación de esa relación, ese encuentro. Nos encontramos con nosotros mismos (yo contigo, yo conmigo) como "Tú" (tú contigo, tú conmigo) y así estamos completamente llenos de la presencia de ese Yo y de ese Tú (nosotros en el mundo).

El sentido de la relación es el encuentro. No sólo aquel del momento fugaz, sino aquel que puede permanecer y alimentarse con nuestra presencia.

Con referencia a este encuentro Perls nos offece la llamada "oración gestáltica'':

"Yo hago lo mío y tú haces lo tuyo. No estoy en este mundo para llenar tus expectativas. Y tú no estás en este mundo para llenar las mías. Tú eres tú y yo soy yo. Si por casualidad nos encontramos es hermoso Si no, no puede remediarse':

(Perls, 136)

Esta oración parece ser que sólo se refiere a una parte del camino en la vida de una persona, sin embargo creo que ésta sería una forma de separarnos del otro, de vivir en un aislamiento genuino. Si queremos romper con la confluencia neuróti<:a la oración resulta de gran utilidad, sobre todo en cuanto a no estar supeditados a funcionar en el mundo con las expectativas que mi pareja pone en mí y yo en ella.

En este trabajo en donde se ha favorecido al encuentro Yo-Tú buberiano , entonces, es necesario que miremos al otro, y hacia lo que la existencia de éste provoca en la nuestra y viceversa.

"Si yo sólo hago lo mío y tú sólo haces lo tuyo, Estamos en peligro de perdernos el uno al otro Y a nosotros mismos. Yo no estoy en este mundo para llenar tus expectativas; Pero estoy en este mundo para confirmarte Como un ser humano único, Y para ser confirmado por ti.

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Somos completamente nosotros mismos sólo en la relación con el otro; El Yo alejado del Tú se desintegra. Yo no te encuentro por casualidad; Te encuentro por una vida activa De desarrollo y extensión. En lugar de que pasivamente deje que las cosas ocurran, Yo puedo intencionalmente hacer que ocurran. Yo debo empezar conmigo mismo, en verdad; Pero no debo terminar conmigo mismo: La verdad comienza con dos. "

(Martlnez citando a Tubbs, pag.93)

CONCLUSIONES

Al terminar este trabajo me doy cuenta que todo lo que he escrito me deja con un sentimiento de alegría al saber que he podido experimentar en carne propia este encuentro Yo-Tú con mi pareja, después de tantos años de convivencia, de lucha, de separación, de lágrimas. Me doy cuenta que en este momento de mi vida he creado una relación auténtica y transparente, en donde ahora vivo mis verdaderos sentimientos; que hoy es una relación cálida y permisiva, que puedo aceptar y valorar a mi esposo como un ser distinto a mí. Y creo que él también experimenta lo mismo hacia mí. En donde hemos creado ambos una integración como personas pareciéndonos cada vez más a las personas que queremos ser. Y todo esto que me pasa ahora , ha sido principalmente desde que "apliqué" en mi relación de pareja estos principios humanistas que me fueron enseñados para ser una "buena'' psicoterapeuta . Cuando los estudié me parecían un tanto utópicos e imposibles, sin embargo puedo testimoniar que ahora mi forma de relacionarme con los otros ha cambiado, se ha transformado gracias a estas actitudes. El camino para llegar donde estoy no ha sido fácil. Darme cuenta de quién era yo y qué es lo que realmente quería del otro fue desgarrador. Solté lastres, culpas, soberbia, posturas falsas y al final esa basura también la integré a mí.

Una auténtica relación personal implica que "estoy'' al menos durante unos instantes, completamente presente, que estoy de lleno con ella. En esa actitud dialogal dejo mis preocupaciones, mis ideas, mis sentimientos y ahí atiendo el llamado del otro y el otro, el mío. Estamos en un "a dúo".

Creo firmemente que una relación es significativa no solamente desde que acepto al otro tal cual, sino en la medida que lo comprendo. Cuando me pongo en su lugar, cuando empatizo con sus sentimientos y sus diferentes expresiones. Sólo de esa manera, el otro se desenmascara, se descubre y así es como se

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explorar rincones ocultos, recovecos secretos y vulnerables y descubrir una vivencia más íntima. Con esta libertad recuperada se puede navegar por búsquedas peligrosas, sanando así situaciones del pasado, remordimientos, rencores. Pienso que en presencia sólo de estas actitudes se dan cambios maravillosos. "La relación es lo que cura."

Con todo esto quiero decir, que sin estas actitudes difícilmente habrá un "Encuentro Yo-Tú", que sólo con una actitud dialogal, con la presencia, con la intimidad y reciprocidad se puede lograr. Aunque ese encuentro, como se da en la relación terapéutica , sea un instante. Ese momento habrá valido por el sólo hecho de haber experimentado las dulzuras de esa conexión profunda con el otro.

Sé que esto que propuse en este artículo es demasiado bueno para ser verdad. Una relación en terapia dura sólo una hora a la semana, mientras que en la relación amorosa, sobre todo en el matrimonio se convive de tiempo completo, todos los días, muchas horas. Todo esto podría parecer un sueño o una mentira.

La intención del trabajo ha sido precisamente mostrar que siendo psicoterapeuta gestalt y habiendo desarrollado todos estos principios humanistas con mis clientes, pueda llevarlos a cualquier tipo de relación, y que mejor que con mi. pareja, a la cual elegí y a la cual amo.

Quizá las relaciones no sean perdurables para toda la vida. Quizá creamos que hay mas "desencuentros" que "encuentros". Que como dijo Perls, si por casualidad nos encontramos es hermoso, si no, no puede remediarse. Sin embargo, yo por mi parte creo que una vez que eres tocado por otro, mirado por otro, ya no eres el mismo. Te has transformado.

Más que concluir, dejo abierta esta invitación para quienes quieran atreverse a ensayar nuevas posibilidades de encuentro, de intimidad, de presencia pura, de mutualidad, de danza perenne.

Y me gustaría finalizar con este fragmento de Gibrán Jalil Gibrán:

" ... Pero dejen que haya espacios en su cercanía. Llénense mutuamente las copas Pero no beban de una sola copa. Compartan su-pan Pero no coman del mismo trozo. Canten, bailen y alégrense, Pero que cada uno sea independiente; Las cuerdas del laúd estdn solas · Aunque vibren con la misma música .... "

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BIBLIOGRAFÍA

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BUCAY, Jorge. (2002). EL CAMINO DEL ENCUENTRO. Colección Hojass de Ruta. Editorial Oceáno de México, S.A. de C.V México, D.F.

BUCAY, Jorge, SALINAS, Silvia. (2002). AMARSE CON LOS OJOS ABIERTOS. Editorial Oceáno de México, S.A. de C.V México, D.F.

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SCHOCH DE NEUFORN, Silvie.(2000). LA RELACIÓN DIALOGAL EN TERAPIA GESTALT. Editorial Sociedad de Cultura Valle-lnclán. España.

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