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Discursos de Paco Moncayo Gallegos Alcalde Metropolitano de Quito 2000-2008

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Quito, 8 de octubre de 1940). Hijo del abogado y congresista dr. Paco Moncayo altamirano y la profesora Aída Gallegos García, es un militar y político Ecuatoriano, que en 1995 alcanzó notoriedad pública en su país luego de que comandara al Ejército Ecuatoriano en el con�icto en la que enfrentó al Perú, siendo el Perú derrotado. Durante los acontecimiento bélicos de 1981 con ese mismo país estuvo bajo las órdenes del general Richelieu Levoyer.A la par con su formación militar, Moncayo no descuidó su formación académica, obteniendo el título de Doctor en Ciencias internacionales, con especialidad en economía e integración. Es uno de los precursores de lo que posteriormente se denominó “El militarismo ilustrado del Ecuador”.Hay que destacar que es el único militar en la historia del Ecuador en lograr completar 40 años de vida militar, 5 como cadete y 35 como o�cial. Llegando al �n de su carrera militar luego del con�icto del Cenepa en donde derrota al ejercito Peruano superior en numero y en armamento.En 1998 se retira del ejército al cumplir el máximo de tiempo que manda la ley y fue electo diputado nacional por el partido izquierda democrática (id), siendo el líder del bloque socialdemócrata en el parlamento.Paco moncayo además de los importantes reconocimientos y cargos que ha desempeñado en el país también es co-presidente de la unión mundial de gobiernos locales y municipalidades (UCGL), que es un organismo equivalente a la ONU en la que sus miembros no son naciones sino ciudades.

La Ciudad de la Palabra

El 2 de diciembre de 2001Día de la resistencia indígena.

6 de Diciembre del 2001

6 de Diciembre del 2002Instalación del ConcejoMetropolitano 2003

6 de Diciembre del 2003

6 de Diciembre del 2004 Toma de Posesion del nuevo periodoEnero 2005

6 de Diciembre del 2005

6 de Diciembre del 2006

6 de Diciembre del 2007

6 de Diciembre del 2008

Dia de la Mujer (8 de marzo del 2007)

Día de la Mujer (8 de marzo del 2003)Día de la Mujer (8 de marzo del 2005)

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CONTENIDO

La Ciudad de la Palabra

Día del Patrimonio (8 de septiembre del 2006)

Congreso de Ciudades Americanas Patrimonio de la humanidad (septiembre 2003)

Declaración de Huésped Ilustres (Feria Internacinal de la Cultura y el Libro 2008)

Día del Patrimonio (2003)

Día del Patrimonio (2008)

Inaguración de la Capilla Del Hombre (2002)

Inaguración de la XIX Reunión del Comite Sectorial de Cultura (2008)

Develizamiento de la estatua de César Vallejo(año)

Discursos Históricos La Revolución de Quito(2007)

El Epistolario de Sucre (año)

Inaguración de la estatua de Eugenio de Santa Cruzy Espejo en Madrid (año)

1. El Bicentenario 2.El Siglo de la Ilustración 3. El Derecho a la Educación4. El Combate a la dediocridad5.La Siembra del Espiritu de la Libertad 6. La Judicializacion de la Politica7. Las Enseñanzas de Espejo.

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La Ciudad de la Palabra

Manuela Cañizares.(año)

Inaguración de monumentoJosé Mejía Lequerica (2007)

Antonio José de Sucre (año)

En la ceremonia por el Natalicio de Simón Bolívar. (2006)

Discurso en la Semana Bolivariana(2007)

Eloy Alfaro(año)

Exposicion “El Regreso De Humbolt” (2001)

50 Años de La EEQ.SA.

En el lanzamiento del libro “Palabras De Paz”

Declaratoria de huésped ílustre en Honor de los Presidentes de las Republicas de Cuba y Venezuela. (2002)

Mijail Gorbachev (2003)

Koffi Annan (2003)

Cristina Fernadéz de Kirchner (2008)

Fernando Enrique Cardoso (2008)

Michelle Bachelet (2008)

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La Ciudad de la Palabra

Tabaré Vasquez (2007)

José Saramago (2004)

Presidente Lazlo Solyom. (año)

Mario Vargas Llosa (2007)

Vicente Fox

CondecoracionesCondecoracion del Gobierno de Italia (año)

Inauguración de la Feria Mundial de Agriflor

Condecoración de la Cámara de la Pequeña Industria (2008)

Condecoración de la Unesco

Doctorado Honoris Causa de La Universidad de Pacifico

Travel Mart 2008

Día de la Niñez (2008)

15º Aniversario de Esquel.

Primer Foro social de las Americas (2008)

Democracia Y Equidad.Desafíos Para Un Ecuador Solidario

Firma del decreto que cede a la municipalidad de Quito laCompetencia para construir y operar el nuevo aeropuerto(Octubre 2000)

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La Puntualidad

Inauguración de la XV Bienal Quito (2006)

Discurso de despedida renuncia al Concejo

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EL 2 DE DICIEMBRE DEL 2001DÍA DE LA RESISTENCIA INDIGENA.

Con singular acierto el Cabildo metropolitano acordó celebrar cada año, con ocasión de las fiestas aniversarias de la ciudad, una sesión solemne para

rendir homenaje a nuestro pasado indígena y a la heroica resistencia de los pueblos aborígenes quiteños, en su frustrado y valeroso afán por preservar su independencia y libertad, frente al incontenible avance del osado conquistador español.

Un acierto porque los pueblos necesitan reconocerse en sus más hondas raíces, para encontrar en ellas la razón de su identidad, elemento esencial que permite aglutinar las voluntades particulares en un propósito común, sustentador del desarrollo de sus potencialidades y les permite enfrentar los retos de su proceso histórico, con opciones de alcanzar los objetivos universales de bienestar, seguridad y libertad.

Somos el resultado de un choque de civilizaciones que conformó nuestro especial carácter y personalidad; somos síntesis de aportes de antiguas culturas que en los escenarios geográficos europeos y andino equinoccial se enlazaron con vínculos de eternidad para aportar con lo mejor de sus rasgos biológicos y espirituales para constituir este pueblo vigoroso, portador de valores y principios que modelan una conducta singular, que ha sido capaz de preservar, a pesar de adversas circunstancias, una convivencia de paz.

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Somos un pueblo diverso. Negros, indios y mestizos avanzamos, aunque posiblemente de manera lenta, en el logro de una convivencia tolerante y respetuosa que nos asegure un futuro de paz, justicia y solidaridad. Veo con simpatía como los pueblos indígenas, mediante una acción política sistemática e inteligente ocupan sus justos espacios de participación democrática. Estoy seguro que esta auspiciosa realidad nos permitirá construir una cultura de solidaridad y un futuro sin exclusión, elementos sin los cuales se frustraría cualquier posibilidad de desarrollar un proyecto viable de ciudad y país.

Por eso es importante que nos encontremos reunidos en esta sesión solemne para recordar el valor heroico de nuestros antepasados indios, cuya sangre rebelde, mezclada con la sangre ibérica, y cuya cultura milenaria integrada con la europea constituyen la sabia vital que alimenta los procesos largos, dolorosos pero irreversibles de nuestra integración nacional.

No nos ha de admirar, por todo lo anterior, que al reunirnos cada año para reconocer los méritos de quienes han servido con excelencia a nuestra ciudad, acudamos a la memoria de extraordinarias personalidades indígenas o relacionadas con las causas de los pueblos aborígenes de América y el Ecuador: La Condecoración Rumiñahui que trae a nuestra memoria la figura del indómito general de Atahualpa, curaca de Píllaro, rebelde hasta el sacrificio, que nos enseñó que la dignidad no tiene precio y que es preferible la muerte a la pérdida del don precioso de la libertad.

Sesión Solemne por el Día de la Resistencia Indígena(2 de Diciembre 2001)

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La condecoración Eugenio Espejo, que exalta la personalidad del quiteño más ilustre de la historia milenaria de nuestra ciudad, indio él de rebeldías y libertades, precursor del grito de Agosto, padre de nuestra independencia, ejemplo de honestidad y fidelidad a sus valores y principios, figura egregia que sostiene como pilar fundamental la estructura básica de conformación de nuestro ser nacional.

Las condecoraciones recordatorias de Bartolomé de las Casas, influyente luchador en contra de la explotación de los pueblos indígenas y ardiente defensor de sus derechos, inspirador de las “Nuevas Leyes de Indias” y de Monseñor Leonidas Proaño, el obispo de los indios, de los pobres y de los excluidos.

Estas condecoraciones han sido conferidas a personalidades que reúnen similares atributos en el ejercicio de sus actividades en servicio de las más nobles causas de la vida en sociedad. A Elsa de Mena, por su ejemplar servicio a la Ciudad desde importantes cargos municipales y al país en su insobornable y recta administración del Servicio de Rentas Internas. A José Rumazo Gonzáles por su esmerada investigación y fecunda obra literaria e histórica; a su hermano Alfonso, novelista, poeta, autor de magnas biografías de los héroes de nuestra independencia; al doctor Armando Bermeo Castillo, jurista de altos valores y atributos personales, juez de probada rectitud, magistrado ejemplar, quien ha contribuido y contribuye con su esforzada labor a prestigiar a uno de los pilares básicos del Estado de Derecho, la Función Judicial; y, al doctor Ramiro Borja y Borja, maestro universitario, investigador, tratadista y jurisconsulto que ha dedicado su vida a la labor docente y a la difusión de la ciencia del derecho.

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Una de las preocupaciones mayores de la humanidad, en el presente, constituye la defensa del medio ambiente. Estamos poniendo en riesgo la supervivencia de nuestra especie y consumiendo vertiginosamente los recursos naturales del planeta. En nuestro propio país la deforestación es tan acelerada que, de no tomarse inmediatas y drásticas acciones, la riqueza de nuestros bosques y la extraordinaria diversidad biológica, a ellos vinculada podría ser completamente devastada.

En nuestra ciudad vivimos una situación similar: el aire y las cuencas hidrográficas gravemente contaminados, los bosques destrozados por urbanizaciones precarias, faltos de un sistema moderno de gestión de los desechos sólidos y líquidos; sin formas adecuadas de manejo de la basura tóxica y peligrosa, la ciudad ha vivido a espaldas del cuidado que merece el medio ambiente, especialmente urbano.

Para combatir estos graves males hemos creado las corporaciones Vida para Quito y de Revisión Vehicular, hemos luchado en contra de todas las trampas politiqueras para dotarle a la ciudad de un moderno relleno sanitario; hemos iniciado el cierre técnico de Zámbiza y un proceso de remediación de los daños ocasionados en veinte y cinco años de haberla mantenido como un basurero. En todos estos esfuerzos hemos contado con la participación y apoyo de la Fundación Natura, que hoy hemos galardonado con la condecoración de la ilustre municipalidad y a la cual solicitamos un continuo soporte en beneficio de la comunidad.

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Una ciudad como Quito necesita desarrollar su economía de modo de generar empleos para una población joven que incrementa la oferta de trabajo y que necesita ganar el sustento y sentirse incorporada a la sociedad; para esto necesitamos un crecimiento sostenido de nuestro sector empresarial, especialmente en aquellas áreas que generan alto valor agregado, utilizan gran cantidad de mano de obra directa e indirecta y, permiten una amplia distribución de la riqueza. Requerimos consolidar una tendencia felizmente ya visible de depender cada vez menos del sector público y llenarnos de grandes, medianas, pequeñas y micro empresas de calidad como ALAMBREC y BIOS y trabajadores de calidad como el señor Nicolás Pichucho.

La ciudad necesita una municipalidad eficiente, organizada modernamente, generadora de bienes y servicios de calidad a precios justos, que respete y dé un trato digno a la población. Debemos desterrar el burocratismo sinónimo de indolencia e irresponsabilidad. Doña Yolanda Carrera Cruz ha sido reconocida con la alta condecoración que lleva el nombre del doctor Carlos Andrade Marín, porque representa esos valores de abnegación, puntualidad, honestidad, superación intelectual y lealtad a los fines institucionales y por ser ejemplo de vocación y voluntad de servicio.

Quito es una ciudad de cultura, una sociedad que lee y en la que muchas personas investigan, sueñan, crean, escriben y que publican libros, producen cine, pintan o realizan trabajos de arte para la televisión. Que grato haber conocido la intensa actividad que el año que culmina realizaron los intelectuales quiteños y que reconfortante que la ciudad haya podido premiarles, con las altas condecoraciones discernidas en esta

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ceremonia. Debo destacar, especialmente, el reconocimiento a estos jóvenes colegiales, presente y futuro de la literatura ecuatoriana, que incursionan con iniciales éxitos en la exigente y sacrificada tarea de la producción literaria. Para ellos nuestros mejores parabienes y augurios de éxitos continuos y cada vez mayores.

Una ciudad saludable es aquella que dedica sistemáticamente parte de su tiempo a la actividad física y cultiva los deportes individuales y colectivos. Estas prácticas, indispensables para el equilibrio físico, psicológico e intelectual deben ser y son apoyadas por la Municipalidad. Quito tiene una amplia infraestructura deportiva que hemos mejorado y ampliado sostenidamente y dispone de la mayor organización de voluntariado, en sus ligas barriales; de ahí que no haya descuidado el Concejo capitalino el reconocimiento a los deportistas quiteños en las personas de Diana Margraff, joven campeona panamericana de Bicicross y de Hernán Trujillo Duque, un atleta de la tercera edad que ha competido en las calles y pistas de América llevando en alto el nombre de nuestra ciudad.

Finalmente deseo reiterar nuestro reconocimiento a personas e instituciones que han aportado en el presente año para el buen éxito de las labores de nuestra institución: El doctor José Ramón Jiménez, Procurador General del Estado han atendido de manera solicita y oportuna los trámites del Cabildo, especialmente en un proyecto tan complejo, como fue la transferencia del aeropuerto Mariscal Sucre a propiedad de la ciudad; la Cámara de la Construcción, que cumplió sus cuarenta años de aportar al desarrollo de Quito; el Swiss Hotel, el Diario “Ultimas Noticias”, el Coronel Arturo

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Venegas, primer comandante de la Policía del Distrito, que facilitó una difícil transición hacia conceptos modernos de vinculación de la Policía Nacional a los gobiernos locales; dos colegios que han sido pioneros en los programas de protección del medio ambiente y la cooperativa Solidaridad, por su aporte a la calidad de vida de sus socios y de nuestra ciudad.

Para terminar, deseo agradecer a todos ustedes por asistir a esta solemne sesión que nos ha permitido rendir homenaje a nuestras comunidades indígenas, a su pasado heroico, a su futuro de superación y progreso y a su constante proceso de integración a un país que busca en la solidaridad, inclusión y respeto a las diferencias sustentar la base de un desarrollo en paz; a la vez que reconocer a quienes con su trabajo diario, constante y abnegado más que cosechar lauros, los ofrecen a Quito, enriqueciendo su patrimonio humano, espiritual, cultural y material.

Mesa directiva de la Sesión Solemne 6 de Diciembre de 2001

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6 DE DICIEMBRE DEL 2001

El aniversario de la fundación de una ciudad y, especialmente de nuestra Quito milenaria debe constituirse en oportunidad para reflexionar sobre su

situación, sus potencialidades y problemas, sus oportunidades y desafíos, la realidad de su presente y las proyecciones de su destino, pero especialmente, para afirmar la voluntad inclaudicable de fortalecer nuestra identidad, establecer un propósito común de grandeza y concitar una firme voluntad colectiva para realizar los esfuerzos que sean necesarios, enfrentar sin vacilación los sacrificios, brindar generosamente las contribuciones para que sigamos caminando con pie firme por las amplias avenidas de dignidad y libertad que han sido consigna permanente en su heroica existencia.

Dirigir los destinos de esta ciudad desde las funciones de gobierno o edilicias; encontrarse al frente de las diversas instituciones locales, regionales o nacionales que en ella desarrollan sus actividades, ser líderes de los distintos grupos sociales que conforman la población quiteña o simplemente ser parte de ella constituye a la vez privilegio y grandes desafíos.

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Es, en efecto un privilegio el rico acerbo material y espiritual recibido de nuestros ancestros, por lo magnífico de la arquitectura monumental, por lo multifacético de su antigua y excepcional cultura, por lo trascendente de su larga historia; y, un desafío porque no solamente que debemos cuidar con celo y preservar lo recibido, sino que, es nuestro deber dejar para las generaciones del futuro aportes tan importantes y, de ser posible, de tanta trascendencia los que hemos recibido.

Las festividades aniversarias deben ser también ocasión para que las autoridades rindamos cuentas a los ciudadanos del cumplimiento de los deberes constitucionales y legales que asumimos gracias a la confianza democrática expresada por el pueblo en las urnas; para que les informemos de nuestras acciones y preocupaciones, de nuestro esfuerzo y de nuestras frustraciones, del compromiso irrevocable de dar lo mejor de nosotros mismos para ser dignos de tan altas dignidades, con la certeza de que un mandatario no puede rendir mejor tributo a su pueblo que el del deber dedicada y honestamente cumplido.

El año que estamos por terminar ha sido especialmente complejo para la comunidad internacional y nacional. El sorpresivo y brutal atentado terrorista del 11 de septiembre, la reacción global frente a la irracional violencia que irrespeta los más elementales principios de la convivencia humana, la desaceleración de la economía mundial y sus siempre crueles repercusiones para los países más débiles, son elementos a tomar en cuenta en el ejercicio de la gestión local.

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Del mismo modo, el complejo conflicto colombiano por cuya solución pacífica hemos hecho repetidos votos, la crisis dramática de algunas economías latinoamericanas con capacidad de irradiar sus efectos negativos al conjunto del continente, la imposibilidad de descifrar el laberinto de nuestro subdesarrollo y vislumbrar un camino seguro que nos permita alcanzar la siempre anhelada prosperidad, son elementos gravitantes en la vida de las ciudades que soportan las consecuencias de estos fenómenos sin capacidad real de enfrentarlos desde la dimensión municipal.

Las crisis recurrentes, políticas y económicas de nuestro país con sus graves derivaciones en lo social se sienten con especial fuerza en Quito, por su condición de principal centro político y financiero y por haber sido históricamente el asiento de un sistema de gestión centralizado de administración del Estado, que ha colapsado. Por otra parte, procesos modernizadores indispensables se han descalificado ante la opinión pública generando desconfianza y fortaleciendo tesis inmovilistas de sectores que privilegian sus intereses sobre los de la ciudad, dando como resultado la desatención de problemas acuciantes, la detención de procesos vitales y a la acumulación de problemas que hoy debemos enfrentar con decisión si hemos de avanzar en el objetivo de edificar la ciudad próspera y equitativa a que todos aspiramos.

En el Plan Quito Siglo XXI que propusimos a la ciudadanía planteamos modernizar la gestión del gobierno de la ciudad y mejorar la gobernabilidad democrática institucionalizando la participación ciudadana en la toma de decisiones, asignación de recursos, contraloría social y rendición de cuentas. En esto hemos avanzado significativamente institucionalizando los cabildos territoriales, sociales y temáticos, con resultados esperanzadores.

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La Municipalidad quiteña ha apoyado con entusiasmo la modernización de la gestión gubernamental y la descentralización, por esa razón se ha constituido en un verdadero gobierno local asumiendo competencias que antes correspondían a instituciones nacionales, a la vez que ha realizado una enérgica descentralización y desconcentración hacia las Administraciones Zonales, en proceso de convertirse en verdaderas alcaldías menores, de modo que los ciudadanos puedan ser atendidos de manera ágil, lo más cerca de sus sitios de residencia. Al interior de la institución se ha efectuado una completa transformación del aparato administrativo, se están rediseñando los más importantes procesos para brindar servicios de calidad a los usuarios.

Ningún espacio como el urbano para necesitar de un crecimiento planificado y nunca mejor que en períodos de crisis y en condiciones de escasez de recursos para acudir a la planificación como un instrumento esencial de buen gobierno. Con ese convencimiento la administración presentó a debate democrático de la población y sus instituciones el Plan de Desarrollo Territorial, que posteriormente fue aprobado por el Concejo Metropolitano. Este plan propone una visión de la ciudad que queremos ser, tiene un enfoque sistémico, una proyección estratégica y un horizonte de veinte años. El Plan es normativo y proactivo e incluye la actualización de las normas de Uso del Suelo, del Código de Arquitectura y Urbanismo y del Reglamento Metropolitano para aplicación de dichas normas; incluye también los Planes Maestros para cada una de las áreas funcionales que definen proyectos concretos, algunos en proceso de ejecución y otros que deberán iniciarse en plazos determinados.

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Una de las preocupaciones mayores del pueblo quiteño es la defensa del medio ambiente. Enfrentamos graves problemas de contaminación en el aire, los ríos y en la gestión de los desechos sólidos. Por esta razón, la Función legislativa expidió la reforma legal que permite a los contribuyentes asignar hasta el veinte y cinco por ciento de su impuesto a la renta para financiar proyectos en esta área, los mismos que serán gestionados por la Corporación “Vida para Quito” que hemos creado. Las más urgentes acciones deberán orientarse a la regeneración de los ríos Machángara, Monjas y San Pedro; al Parque Metropolitano y al control de las emisiones contaminantes.

Paralelamente se han contratado los estudios para el cierre técnico del botadero de basura de Zámbiza, para el nuevo relleno sanitario y para la industrialización de la basura. Está en proceso de concesión la recolección de la basura en el centro y sur de la ciudad, se ha emprendido en un programa intensivo de forestación, se ha instalado la Red de Monitoreo del Aire y se ha creado la Corporación para la Revisión Vehicular que concesionará estos servicios a empresas especializadas.

La municipalidad presta muchos de sus servicios a través de empresas especializadas, las mismas que enfrentan situaciones distintas derivadas de su propia naturaleza. Problemas comunes como aparatos administrativos complejos, relaciones laborales difíciles, equipamiento insuficiente y, en algunos casos, obsoleto. Y realidades diferentes: La EMAAP y la del Centro Histórico, han realizado un trabajo sobresaliente; EMASEO, ha incrementado diez vehículos a la flota de recolectores, los primeros en diez años, y está

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empeñada, como informé antes en implantar una moderna gestión de los desechos sólidos. La EMT, está en proceso de total reestructuración, La EMOP ha sido saneada y luego de tropiezos iniciales se encuentra realizando un trabajo satisfactorio. La Empresa de Rastro está en proceso de reorganización y hemos creado la Empresa de Gestión del Transporte, con la misión de reorganizar el sistema, adecuándolo a los requerimientos de una ciudad moderna para que brinde el servicio de calidad y no contaminante que la población reclama.

El gobierno local moderno ha dejado de ser en antiguo proveedor de servicios para convertirse en un verdadero gestor del desarrollo de la comunidad, es por eso que, a partir del 11 de agosto del año 2000, iniciamos gestiones para poner en marcha un proceso de competitividad y la organización, de la Comisión Cívica EQUINOCCIO XXI que, convertida posteriormente en Corporación, tiene como finalidad promover, dirigir, coordinar y ejecutar planes, programas y proyectos que impulsen el desarrollo de los factores claves de la competitividad a la vez que proponer una visión optimista de la ciudad y generar una actitud responsable y comprometida de la población.

El turismo es una de las actividades en las cuales Quito tiene que fundamentar su desarrollo y para este fin se ha creado el Consejo Metropolitano de Turismo y se encuentra en proceso de expedición el Acuerdo Ministerial que da vida a la Corporación Metropolitana que se encargará como un esfuerzo coordinado de los sectores público y privado de adelantar acciones tendientes a un rápido crecimiento de este sector.

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En el tema de la educación el Distrito ha dado pasos trascendentales. Es sabido que esta es la única municipalidad que administra un Subsistema de Educación que está convirtiéndose en un modelo para el país. En la actualidad se ha logrado la transferencia, con Acuerdo Ministerial firmado el primero de noviembre, de competencias en asuntos de Escalafón y Registro Profesional, Régimen Escolar, Refrendación de Títulos, Currículo, creación de establecimientos y supervisión educativa.

Es política de la actual administración dar atención preferencial a la educación inicial, la más importante porque esos años tempranos son decisivos par el desarrollo de la inteligencia y de las capacidades del ser humano. La Municipalidad ha declarado a la educación inicial proyecto prioritario a la vez que aspira a transformarse en generador de experiencias que puedan ser transferidas al sistema nacional.

En el área cultural la municipalidad ha realizado significativos esfuerzos. Agosto Arte y Cultura fue un evento de gran trascendencia, la Exposición por los 200 años de la presencia de Humboldt en territorios del actual Ecuador fue el acontecimiento mayor en el país, el Museo de la Ciudad, el Centro Cultural Metropolitano y el Centro Cultural Benjamín Carrión han desarrollado una programación rica, variada y de alta calidad. El apoyo que se ha podido brindarles abarca asignaciones presupuestarias, construcción de obras como el parqueadero del Museo, se ha rescatado el museo de sitio de Cotocollao y se firmó el Convenio con el Banco Central para convertir el actual edificio en un gran centro cultural con 20.000 metros de áreas para exposiciones, bibliotecas, hemerotecas, museos, auditorios y otros servicios.

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Uno de los temas más complejos que ha enfrentado la ciudad en el presente año ha sido el de la inseguridad y, a no dudarlo el que mayor preocupación y esfuerzo ha merecido por parte de la alcaldía, sin que los resultados sean suficientemente alentadores. No hay duda que la violencia delincuencial es un fenómeno complejo, con hondas raíces sociológicas, fruto del desempleo, la pobreza, la indigencia, los movimientos migratorios, la descomposición de las familias entre otros factores.

No he descuidado mis deberes constitucionales y legales ni mis ofrecimientos de campaña en el tema de la seguridad. Convoqué a las Instituciones especializadas y a la sociedad civil para trabajar coordinadamente; creamos un Consejo Metropolitano de Seguridad en el que participan el Concejo Metropolitano, la Policía Nacional, la Función Judicial, el Ministerio Público y los medios de comunicación. Realizamos campañas en contra de los comercios de cosas robadas que por décadas funcionaban impunemente en la Av. 24 de Mayo y en La Marín, en contra de los locales de diversión ilegales o que permitían el acceso a menores de edad, de los cuales clausuramos 320, profesionalizamos y reforzamos con doscientos hombres a la Policía Metropolitana, Graduamos la primera promoción profesional del Cuerpo de Bomberos, al que dotamos de vehículos y medios de comunicaciones, construimos y reconstruimos cuarteles y retenes para la Policía Nacional a la que entregamos motos, radios y camionetas, logramos la participación del Ejército para el control de armas, capacitamos a la ciudadanía y apoyamos programas como el de las Brigadas Barriales. Esperamos que los resultados comiencen a observarse y esperamos también que las medidas de apoyo al desarrollo económico y social, actuando sobre las causas sean más efectivas que la represión que actúa sobre los efectos.

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Quito ha reclamado del gobierno nacional los recursos necesarios para poder enfrentar sus graves problemas y, en términos generales, ha obtenido una respuesta positiva del señor presidente de la República, el doctor Gustavo Noboa; necesitamos, sin embargo, que las autoridades centrales comprendan la condición especial de Quito, tanto como Capital de la República y sede del gobierno, cuanto en su condición de Ciudad Patrimonio Cultural de la Humanidad. Las dos condiciones implican una serie de responsabilidades que no pueden ser enfrentadas únicamente desde los esfuerzos locales. La Capitalidad impone soportar todo el aparato estatal y entregarle los servicios para que funcionen sin la contraparte de los aportes que se cobran en otros casos, impone también especiales erogaciones para cumplir las funciones de representación en relación con la Comunidad Internacional. Por su parte, la condición de ciudad patrimonial significa fuertes erogaciones para preservar las riquezas arquitectónicas y culturales que son acerbo del pueblo ecuatoriano en su conjunto. El gobierno no puede dejar de considerar estas realidades al momento de asignar los recursos, sin privilegios para Quito, pero igualmente sin ninguna forma de discrimen.

A la Función legislativa le debemos reconocimiento por la expedición de la reforma legal que permite a los quiteños y ecuatorianos que quieran aportar al mejoramiento del medio ambiente de la ciudad con hasta el 25% de su impuesto a la renta a la vez que debemos insistir en solicitarle la expedición urgente de una nueva Ley de Régimen Municipal que armonice con las normas constitucionales y la ley de régimen tributario municipal que permita a los gobiernos locales la aplicación de políticas tributarias acordes con las necesidades

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específicas de cada una de las urbes ecuatorianas, a la vez que transparente el cobro de los impuestos que, en niveles tan elevados como los actuales, solamente estimula la evasión e impide un manejo moderno de un tema vital para el financiamiento de la obra municipal. Del mismo modo es necesaria una ley que distribuya mejor los ingresos corrientes del presupuesto nacional de modo que las competencias asumidas sean parte de los criterios para el reparto. Quito ha asumido la educación, la salud, el transporte, el turismo, los bomberos, y otras funciones cuyo costo debe afrontarse con los escasos recursos del presupuesto local.

Los mandatarios se justifican por resultados y no por intenciones. Las obras están a la vista: Cuatrocientos treinta kilómetros de redes de alcantarillado y de agua potable, la represa Salve Faccha con un 70% de avance, la terminación del proyecto Laderas del Pichincha que en mi administración culminó con el 40%de las obras, el abastecimiento de agua para Puembo, Pifo, Alangasí y Yaruquí, así como trabajos de alcantarillado en las 33 parroquias rurales.

Estamos en proceso de rehabilitación de la vía interoceánica cuyos estudios terminarán la primera quincena de Enero y disponemos del financiamiento para iniciar la construcción del túnel. Hemos iniciado la ampliación del segmento Tumbaco - Pifo, el distribuidor de tránsito de la Villa Flora, la repavimentación de 220 kilómetros de vías, el mantenimiento de 1.500 kilómetros, la pavimentación y recapeo de 90 kilómetros, 80 contratos de adoquinado de barrios, la hermosa tribuna para los barrios del sur, las terminales de la ECOVIA, tanto de la Av. RIO COCA, como de LA MARIN, el complejo deportivo de Solanda, el Parque de los Adolescentes, 72

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muros de contención, en distintos niveles de ejecución, para protección de los barrios en áreas de deslaves y, alrededor de 1000 obras de desarrollo comunitario, realizadas a través de las Administraciones Zonales.

En esta mañana hemos firmado varios acuerdos con el gobierno del doctor Gustavo Noboa, cuya ausencia personalmente lamento. Esto nos permitirá poner en marcha importantes proyectos viales...

Deseo terminar mi intervención convocando al gobierno nacional a continuar apoyando a la Capital, a las instituciones públicas y privadas, pero especialmente a todos los habitantes de Quito a unir sus voluntades en un solo esfuerzo para juntos enfrentar los problemas que nos aquejan y continuar construyendo la ciudad próspera, productiva, competitiva, solidaria y optimista que todos deseamos. De mi parte me comprometo solemnemente, a continuar sin descanso en el cumplimiento de las misiones que la Constitución y las leyes imponen al gobierno local.

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6 DE DICIEMBRE DEL 2002

Quito celebra hoy 468 años de su fundación española y lo hace en franca recuperación de los graves problemas sufridos, particularmente en la última década. Nuestra

capital recibió con mayor dureza que ninguna los impactos del cambio del modelo económico y de la nueva forma de gestión del Estado. Escenario principal de la crisis política ha sido también la primera víctima del colapso financiero, el feriado bancario, la hiperdevaluación, la apertura económica y la adopción del dólar como moneda nacional.

La reducción y debilitamiento del aparato estatal así como la desaparición de numerosas empresas, ha significado para Quito la pérdida de alrededor de 170 000 empleos. El feriado bancario implicó que los dineros de las indemnizaciones por compra de renuncias, fondos recibidos por jubilación y otros ahorros de los quiteños se pierdan parcialmente. El cambio en el régimen monetario redujo a quinta parte el presupuesto municipal y su capacidad de inversión, así como los sueldos y salarios de sus servidores.

La crisis generalizada del país provocó movimientos migratorios que han afectado doblemente a nuestra ciudad; por una parte, grandes sectores poblacionales han ido en busca de mejores días a países de Europa y América del

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Norte, mientras que desde las ciudades pequeñas y el área rural millares de personas han venido a la Capital de la República en procura de mejores oportunidades que las pocas disponibles en sus lugares de origen. Esta situación ha permitido, sin embargo, que las remesas de divisas llegadas del exterior sostengan de alguna manera la economía de la ciudad y el sistema monetario de la dolarización.

El crecimiento acelerado y desordenado de la ciudad, en las últimas décadas, el asentamiento poblacional en áreas de protección ecológica, muchas de ellas muy peligrosas en laderas y bordes de quebradas, el deterioro del patrimonio arquitectónico, el incremento desmedido del parque automotor y la obsolescencia de una parte importante del mismo, el abandono proyectos de alcance estratégico, la indolencia frente a los estragos causados por deslaves e inundaciones han generado graves problemas ambientales, caos en el tránsito, auge de la delincuencia, pérdida de competitividad, deterioro del aparato productivo y un estado de desaliento en la mayoría de los ciudadanos.

Pero, la ciudad de Quito, patrimonio cultural de la humanidad, una de las más bellas urbes del planeta, poseedora de tesoros artísticos invalorables, poblada por personas que mantienen principios y valores de solidaridad, tolerancia y paz, a la vez que inflexible ante la opresión e injusticia; Quito adelantada de la libertad, luz de América, la ciudad de Atahualpa y Rumiñahui, de Espejo y Mejía Lequerica, de las Manuelas Saenz, Cañizares y Espejo, no se arredra ante las dificultades, se levanta airosa frente a las adversidades. Estoy convencido de que con su propio esfuerzo el pueblo quiteño, sabio y milenario se encuentra en proceso de superar sus problemas y se encamina ya al futuro de prosperidad que le corresponde.

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Porque conozco el carácter del pueblo quiteño, su vitalidad y temperamento, que le hacen capaz de grandes realizaciones, le propuse, en el Plan “Quito Siglo XXI”, una Visión de Futuro como ideal compartido de la ciudad que queremos ser y construir: “ Quito eje de la nacionalidad, espacio ordenado con bienestar y solidaridad para todos y todas; con óptima calidad ambiental y estética, con sus áreas históricas y patrimoniales protegidas, segura frente a riesgos de origen natural y humano; con capacidad de gestión autónoma; competitiva y eficiente; democrática, solidaria con fuerte identidad y autoestima.”

El plan, que tiene un enfoque de desarrollo humano sustentable, desarrolla cuatro ejes estratégicos que orientan la acción municipal: Etica política porque es indispensable combatir sin tregua toda forma de corrupción; un paso importante en este sentido fue la creación de una Comisión Metropolitana de Lucha contra la Corrupción, guardián cívico de la ciudadanía para la edificación de un nuevo código de comportamiento social. Solidaridad para atender con prioridad a los sectores vulnerables y desprotegidos. Participación para movilizar la capacidad colectiva, evitando el asistencialismo y paternalismo, convirtiendo al pueblo en gestor de su propio desarrollo; y, descentralización para hacer realidad el equilibrio territorial y social del desarrollo en el país, la provincia y el Distrito.

Si bien nuestra municipalidad abarca un sinnúmero de competencias y funciones, hemos priorizado importantes programas orientados a resolver los principales problemas que hoy nos afectan: la inseguridad, el deterioro ambiental, el desorden del tráfico, la insalubirdad y la falta de empleo.

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Para que el desarrollo de Quito y el país sea posible es indispensable crear un entorno de seguridad y confianza. La violencia, de cualquier naturaleza o forma, atenta contra las libertades básicas del ser humano y de la sociedad. Las personas sometidas al miedo pierden el don precioso de su libertad; las comunidades víctimas del terror se paralizan; combatir la inseguridad es tarea vital de toda democracia.

Desde una óptica tradicional, en otros lugares superada, hemos elevado a norma constitucional la competencia privativa del gobierno central en el tema de la seguridad. Las autoridades locales carecemos de toda capacidad para encarar un problema que los ciudadanos con justicia reclaman a sus alcaldes. Por otra parte, el sistema centralizado y centralista de seguridad se muestra incompetente para prevenir y enfrentar las amenazas, a que está sometida la población. El pueblo quiteño enfrenta múltiples amenazas para las que debe estar siempre preparado. Los volcanes, los sismos, los deslaves e inundaciones, los incendios requieren de planes, entrenamiento y equipamiento específicos que es deber de todas las instancias de gobierno disponer.

Una referencia especial merece el tema de la delincuencia, una amenaza actual, perversa y soterrada que nos corresponde enfrentar como país, con la participación de todas las funciones del Estado. Hemos preparado un proyecto de reformas al Código de Procedimiento Penal al que solicitamos se dé pronto trámite en la legislatura, a fin de que no sea requisito previo y obligatorio la denuncia del ofendido para que se prosiga la acción penal en los casos de violación de domicilios, hurtos, estafas y, en general, delitos contra las personas. Es absurdo que la ley exija la denuncia

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previa del ofendido, cuando es obvio el temor a la represalia o las condiciones de las víctimas, que quedan inhabilitadas para realizar la denuncia. Proponemos, además, una reforma que prohiba a los jueces conferir fianza de libertad a aquellos sindicados que tienen antecedentes policiales de reincidencia en los delitos por los cuales están detenidos con orden de juez competente. También es indispensable que la Cancillería exija por lo menos el récord policial a los extranjeros que ingresan al país y que la policía realice permanentes batidas para capturar y deportar a los extranjeros indocumentados.

El Alcalde, tiene el deber moral de defender a la ciudad de la delincuencia, pero solamente puede hacerlo por vías indirectas, básicamente de apoyo a la Policía Nacional. En nuestro caso hemos realizado todo lo que ha estado a nuestro alcance bien con recursos propios o con dineros obtenidos del gobierno. Creamos la Corporación Metropolitana de Seguridad, que está implementando el sistema “Ojos de Aguila” cuyos resultados son visibles ya en el aeropuerto, donde se ha bajado de 5 a 1 las denuncias de actos ilícitos y, de la misma manera, de 3 a1 en el Centro Histórico. El eje de este programa radica en el uso intensivo de tecnologías modernas de vigilancia y en la participación ciudadana. En los 800 barrios que se han incorporado al sistema, las condiciones de inseguridad han disminuido sustancialmente.

En este momento se instalan 120 cámaras en áreas de interés turístico y otras especialmente conflictivas y se construye un sofisticado Centro de Comando y Control en el cuartel del Regimiento Quito. Conscientes de las limitaciones de la Policía le hemos entregando motocicletas, camionetas,

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cuarteles y equipos de comunicaciones para facilitar el cumplimiento de sus misiones.

Como consecuencia de la situación de inseguridad que enfrentamos, el pueblo quiteño, que no se amilana ante los peligros y es rebelde frente a los atropellos, ha decidido organizarse para su seguridad. No esta dispuesto a soportar más el abuso y la opresión de bandas y mafias que viven al margen de Dios y de la ley. Ha creado para ese fin la Corporación de Acción Ciudadana por la Vida y la Seguridad, iniciativa que aplaudo, felicito y que respaldo con entusiasmo, porque estoy consciente de que la seguridad es un problema de todos y que todos debemos participar en el logro de la paz y tranquilidad que reclamamos. Como Alcalde de Quito solicito a los miembros de la corporación que se constituyan en una veeduría ciudadana permanente en el tema de la seguridad, para que vigilen, propongan, denuncien y exijan que todas las instancias involucradas en la defensa de la seguridad ciudadana, trabajen en conjunto y eficientemente en el cumplimiento de su responsabilidad.

El desarrollo de la ciudad requiere, además de la seguridad, contar con un medio ambiente sano. Hoy Quito cuenta con recursos provenientes de hasta el 25% del impuesto a la renta para financiar los proyectos de mejoramiento ambiental. En la actualidad se está trabajando en la recuperación del río Machángara y de los principales parques metropolitanos. Para mejorar la calidad del aire, la Corporación de Revisión y Control Vehicular se encuentra construyendo por concesión un moderno y sofisticado sistema de estaciones de revisión que iniciarán sus operaciones en marzo del 2003.

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Para solucionar otro grave problema de la ciudad hemos iniciado el cierre técnico del basurero ubicado cerca de Zámbiza. El proyecto cuenta para su terminación con los fondos asignados por el Municipio y los ministerios de Salud, Vivienda y Medio Ambiente. El nuevo relleno sanitario está adjudicado, se está implementando un sistema moderno de disposición final de los desechos peligrosos; contratamos a QUITO LIMPIO, para la limpieza del centro y sur de la ciudad y hemos adquirido 20 nuevos recolectores para EMASEO.

Una ciudad desarrollada es siempre una ciudad saludable. Para lograrlo se han construido aproximadamente seiscientos kilómetros de redes de agua potable y alcantarillado, además de una represa para 11.5 millones de metros cúbicos de agua, implementamos el proyecto de escuelas saludables con 1026 establecimientos escolares y una red de boticas para atender con medicamentos genéricos a los sectores más pobres de la población. En este mismo mes iniciarán su operación las unidades móviles de salud que tendrán una cobertura para 390 mil personas de las áreas suburbanas y urbano marginales del Distrito.

Con el aval concedido por el gobierno nacional para el préstamo del Banco Interamericano de Desarrollo, nos aprestamos a realizar en los dos próximos años la renovación del sistema de alcantarillado del centro histórico, ampliar el servicio de agua potable, realizar la recuperación de quebradas y laderas del centro y sur de Quito y continuar, con el aporte de los barrios, en el programa de desarrollo solidario.

Para que Quito se desarrolle necesitamos que sea competitiva que tenga un aeropuerto moderno, una zona franca y un

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Parque Tecnológico, lo cual está en camino de hacerse realidad gracias al traspaso de los respectivos proyectos a las municipalidades de Quito y Guayaquil y a la concesión realizada al consorcio canadiense. Este paso histórico fue posible por la voluntad política descentralizadora firme del Presidente Gustavo Noboa, que debemos reconocer y agradecer. Estos proyectos se materializarán pese a cualquier intención mezquina en contrario, porque estamos decididos a lograr que Quito entre con pie derecho en el siglo XXI. Merecen resaltarse que gracias a una inteligente negociación de la municipalidad, las ciento cuarenta Ha. del actual aeropuerto, constituirán una amplia zona de protección ecológica y de esparcimiento masivo de la población.

Para el desarrollo de Quito es indispensable contar con un adecuado sistema de transporte y una red vial acorde con las demandas de una ciudad en rápido crecimiento y de un parque automotor que se incrementa exponencialmente. Por eso hemos repavimentado 85 de Km de avenidas, hemos realizado trabajos de adoquinado de calles en barrios, se está ampliando la vía Tumbaco Pifo, se construye el Intercambiador de tránsito de la Villa Flora y se contrató un túnel para rehabilitar la vía interoceánica, que hoy lleva el nombre del insigne artista quiteño Oswaldo Guayasamín. Los recursos para estos proyectos provinieron principalmente de asignaciones del gobierno y una parte de fondos propios.

Para mejorar el tránsito y el medio ambiente hemos puesto a funcionar la ECOVIA. Pagamos los 8 millones de dólares adeudados a los constructores, construimos la terminal de la avenida Río Coca y compramos 42 buses articulados. En los próximos días se realizará el traspaso de la operación a TRANASOC.

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Para financiar los proyectos del Plan Maestro de Transporte y Vialidad obtuvimos un préstamo de la CAF por 50 millones de dólares con el aval y contraparte de 21 millones del gobierno. Nuevas vías, terminales terrestres, facilidades de tránsito están licitándose con estos recursos. Otro crédito, concedido por el Banco del Estado por 15 millones de dólares se dedicará a construir los corredores Miraflores-Carcelén y La Marín- El Recreo.La solución para el tránsito pasa por la construcción multiplicada de corredores metropolitanos de transportación masiva, que es a lo que hemos concedido prioridad

El año 2003 será el del ordenamiento del tránsito de Quito. Ya se ha creado una Policía Metropolitana de Tránsito, que hará cumplir las leyes y ordenanzas municipales: Parqueamientos tarifados, restricciones de circulación, control estricto de las zonas de prohibido estacionamiento, severo control de los vehículos ilegales son tareas policiales que se deben aplicar sin contemplaciones.

Para generar empleos es indispensable que la economía local se reactive, explotar nuestras ventajas comparativas, convertirlas en competitivas y pasar a ser una ciudad de emprendedores. El sector turístico debe convertirse en un pilar estratégico de nuestro desarrollo, porque genera y distribuye ampliamente la riqueza. Por eso hemos aceptado la transferencia de responsabilidades del Ministerio del ramo, creamos la Corporación de Turismo y se contrató a una de las mejores consultoras internacionales para la elaboración del Plan Estratégico que será presentado el día 10 de este mes a la comunidad quiteña.

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Para defender los empleos de los comerciantes minoristas y preservar el Centro Histórico reubicaremos en el primer trimestre del próximo año a quienes hoy ocupan calles, aceras y plazas, en los nuevos centros comerciales populares. Para recuperar el carácter residencial del Centro Histórico nuevos proyectos de vivienda se incorporarán a los que ya se están ejecutando. Por esta razón invito nuevamente a las empresas privadas para que se sumen activamente en este esfuerzo. Con satisfacción propios y extraños son testigos de cómo las principales plazas, paseos e hitos de este legado arquitectónico se hallan recuperados y bellamente iluminados albergan nuevas actividades y servicios.

Para que Quito sea una ciudad solidaria, inclusiva y participativa continuaremos con nuestros proyectos en beneficio de los sectores desprotegidos: niños trabajadores, ancianos indigentes, personas con discapacidades, jóvenes y adolescentes, hacia quienes no solamente se orientara la acción diligente y abnegada del Patronato San José sino de todo el aparato municipal. Es nuestra intención y voluntad política alentar más aún la participación ciudadana y la descentralización, de modo que en las políticas del gobierno local se sienta representada la diversidad de la población quiteña y que todos seamos parte de este gran esfuerzo de progreso y bienestar.

El próximo año, la ciudad celebrará los veinticinco años de su denominación como patrimonio cultural de la humanidad y queremos celebrar este acontecimiento de la manera más adecuada, con grandes eventos culturales. Para este fin, hemos invitado a los ex alcaldes y otras personalidades de la ciudad a conformar un Comité, que será el encargado de planificar,

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dirigir y supervisar los programas que ya se hemos esbozado en una primera reunión. Debo felicitar y agradecer a todos los ciudadanos que, sin excepción, aceptaron este honroso encargo. Ellos, con su experiencia y amor a Quito, aseguran el éxito de la conmemoración.

El año 2004 Quito será la Capital Iberoamericana de la Cultura en virtud de la designación realizada por la Unión de Ciudades Capitales Es otra circunstancia que ofrecerá excelentes oportunidades para reafirmar a la cultura como el eje central histórico de la identidad quiteña, mientras que el año 2009, celebraremos el bicentenario de la fecha más trascendente de nuestra historia. En esa ocasión habremos de renovar, quiteños y ecuatorianos, con la solemnidad debida, nuestro compromiso de mantener siempre viva la luz de la libertad que recibimos como legado de manos de nuestros libertadores.

Para muchos de los proyectos realizados o iniciados en los dos años de mi administración hemos reconocido el apoyo del gobierno del doctor Gustavo Noboa y se lo agradecemos, pero hemos debido también luchar y vencer serias e injustificadas resistencias de funcionarios, algunos de ellos subalternos, quienes bien por que obedecieron consignas de quienes anteponen sus odios y frustraciones a los intereses de Quito, o bien porque sus actitudes riñen con nuestro afán de transparencia, o también por enfermizo regionalismo han intentado incumplir con la entrega de los recursos que nos corresponden por ley o hacerse de oídos sordos frente a las disposiciones del Primer Mandatario.

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En esta ceremonia el Concejo Metropolitano ha realizado un acto de justicia al entregar una condecoración al pueblo de Quito por su excepcional comportamiento al enfrentar con valor decisión, orden y solidaridad los efectos de la erupción del volcán Reventador. Sin una respuesta como ésta, cívica, entusiasta y amorosa a su ciudad, difícilmente habría podido el aparato municipal dar solución tan pronta y eficiente a la recolección y disposición de un millón de toneladas de ceniza volcánica. Esta experiencia nos permite ver que mientras nos mantengamos fraternalmente unidos, podremos solucionar con éxito los problemas actuales o que puedan presentarse en el futuro.

Deseo, al terminar esta intervención, dirigirme al señor coronel Lucio Gutiérrez, Presidente constitucional electo, quien regirá los destinos del país a partir del próximo año para felicitarle por su triunfo electoral, desearle éxito en la difícil tarea que el pueblo le encomendó en las urnas y decirle que los problemas de las ciudades, difíciles por su complejidad y magnitud, no pueden ser resueltos solamente por los municipios. Es indispensable que unamos fuerzas el gobierno nacional, los provinciales y locales para orientar los recursos con un profundo sentido de justicia y equidad. Desde ya deseo expresarle nuestra voluntad de trabajar con su gobierno, como lo hemos hecho con el del doctor Gustavo Noboa, para hacer realidad las aspiraciones de la población capitalina, que es originaria de todo el territorio nacional.

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Finalmente, quiero invocar a los valores y principios más recia y firmemente presentes en el espíritu del pueblo quiteño para que veamos el futuro con optimismo y esperanza; para que seamos capaces de fortalecer y privilegiar todos los factores de unidad y solidaridad, frente a las sinrazones de la confrontación y antagonismos; para que volvamos a estar juntos como en los días grandes de Quito. Solamente así, lucharemos con seguridad de éxito para resolver los problemas y anular las amenazas que enfrentamos. De mi parte el compromiso sigue en pie: trabajo incansable, honestidad a toda prueba y fidelidad a los principios de justicia social y solidaridad que fueron base de mi oferta al noble pueblo de Quito.

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INSTALACIÓN DEL CONCEJO METROPOLITANO

(2003)

Iniciamos en este día un nuevo período de trabajo de una de las instituciones de mayor influencia en la vida de las personas, de mayor raigambre en la historia nacional y

de la cual todos esperamos una labor fecunda y transparente para encausar a la comunidad quiteña por los senderos de prosperidad. Iniciamos las labores de este renovado cuerpo edilicio en una época preñada de incertidumbres, en una etapa de cambios dramáticos y continuos en la cual es más que nunca indispensable la actitud serena, firme y visionaria de los líderes para poder orientar las labores comunitarias en un entorno cada vez más complejo y competitivo.

A inicios del siglo, las viejas concepciones geopolíticas cambian rápidamente. Los Estados Nacionales se muestran cada vez menos competentes para dar cabida a las inquietudes y ansias de desarrollo de grandes masas de población que se asienta con una tendencia creciente en las ciudades, espacios privilegiados para la relación social y política y para permitir la realización de las mejores potencialidades de la especie humana.

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Los especialistas coinciden en que éste será el siglo de las ciudades y que los gobiernos locales cobrarán cada vez más importancia en el escenario mundial. Para asumir estas nuevas responsabilidades que se trasladarán desde las disminuidas instituciones nacionales, deben estar preparadas las municipalidades a fin de que los cambios sean para mejorar la calidad de vida de las respectivas poblaciones.

Esta visión y estas convicciones fueron las que orientaron la propuesta social demócrata de ciudad contenida en el Plan “Quito Siglo XXI” que recibió un amplio apoyo de la población en las urnas en el año 2000, respaldo que ha sido ratificada en el 2002. El pueblo ha votado por un cambio radical en el propio concepto de la ciudad y de la manera de administrarla, ese cambio es el que con gran esfuerzo y superando resistencias obvias de los sectores rentistas del viejo sistema, estamos implementando.

El Plan Quito Siglo XXI establece varios objetivos estratégicos en cuyo logro la Alcaldía ha trabajado sin concesiones ni descanso. Estos son:

Integración para enfrentar los problemas de autoestima y falta de identidad que generan la marginación, la exclusión y las grandes diferencias sociales y económicas entre personas, familias, barrios y sectores de la urbe. Una ciudad escindida, en la cual grandes sectores de la población no se sienten incluidos, con movimientos migratorios fuertes hacia el exterior y desde el área rural, difícilmente puede progresar. El cumplimiento de parámetros mínimos de calidad de vida para todos y todas es factor fundamental de desarrollo y de paz social. La integración implica que podamos concebirnos

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como una sola ciudad, rescatar la esencia del ser quiteño en el reconocimiento y respeto a nuestra diversidad, formando parte de un proyecto común con los necesarios acuerdos y consensos, factores indispensables para una convivencia de paz y una gobernabilidad auténticamente democrática.

Desarrollo humano sustentable que implica alcanzar como ciudad un crecimiento económico relativamente autónomo, fundamentado en la realización plena de las potencialidades en el campo material y espiritual de la mayor parte de la población, en sana relación con el medio ambiente. Un desarrollo orientado al ser humano concebido como un ente social, que fortalezca la unidad familiar, la buena vecindad, la presencia activa de organizaciones sociales de base, que permita el acceso a un trabajo adecuadamente remunerado, a la vivienda digna y que proteja el medio ambiente, que lo recupere y preserve para las generaciones del futuro.

Gobernabilidad democrática. Nosotros creemos que la democracia debe ser fortalecida creando condiciones institucionales para que los ciudadanos sean actores directos en la toma de decisiones en los temas de su interés, estableciendo proyectos prioritarios, asignando recursos, ejerciendo la contraloría social y exigiendo la indispensable rendición de cuentas. Y por supuesto, también asumiendo las responsabilidades y deberes que implica el ejercicio pleno de la condición de ciudadanos. Para mejorar la gobernabilidad democrática, es imperativo terminar con la estadolatría, el clientelismo y el paternalismo que anulan las fuerzas políticas de la sociedad. En Quito, que ha sido pionera en el avance político a lo largo de la vida del país, debemos construir una nueva forma de hacer la política y volver a interesar al pueblo, especialmente a los jóvenes, en la cosa pública.

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Calidad de vida, que se ha de entender como la posibilidad de que la mayor parte de la población, idealmente toda, tenga acceso a los servicios básicos. Una ciudad no es tal si no es capaz de proveer de agua potable, alcantarillado, energía eléctrica, transportación pública y vialidad a los pobladores; si éstos no tienen acceso a los bienes de la cultura, a la recreación y al deporte; si no existe una educación de calidad al alcance de todos; si la inseguridad campea y las condiciones del medio ambiente son insalubres.

Para el logro de esos objetivos cuyo logro modificará sustancialmente la vida de Quito, las relaciones entre sus habitantes, la naturaleza de las actitudes ciudadanas, el Plan establece varias políticas, que han constituido las guías fundamentales para nuestro trabajo.

Ética Política, porque uno de los graves problemas del país y de la ciudad, se repite hasta el cansancio y muchas veces lo repiten los menos calificados, desvalorizando el mensaje, es la corrupción, lo cual nos llevó a plantear el ejercicio ético del poder para inculcar principios, valores y actitudes positivas en la comunidad, perseguir la corrupción, impedir los contratos que enriquecen a las autoridades, a sus familiares y a sus grupos sociales, combatir el cobro de un sueldo no respaldado por el trabajo eficiente y esforzado, evitar toda forma de abuso de la autoridad y concesión de privilegios, entre otras acciones. Para este fin hemos dado transparencia a los contratos de obras, hemos colocado toda la información en la red, estamos realizando el rediseño de procesos susceptibles a actos ilícitos y hemos creado una comisión de lucha en contra de la corrupción, compuesta por ciudadanos de conducta pública y privada intachable.

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Solidaridad. Esta política ha sido aplicada mediante la ampliación de los servicios básicos a los barrios pobres y dando atención preferente a los sectores vulnerables de la sociedad. 600 km. de redes de agua potable y alcantarillado, una represa de agua, ochocientos barrios con adoquinado, incremento de la cobertura de salud, pavimentación de los accesos a barrios marginales, son expresiones concretas de la construcción de una ciudad solidaria. Para darle continuidad a nuestro afán de llegar a todos los sectores con los servicios básicos hemos obtenido recursos de financiamiento del BID y del Banco del Estado por alrededor de 50 millones de dólares que serán aplicados en los dos próximos años.

Participación ciudadana. Con la organización de cabildos sociales, temáticos y territoriales que han permitido un mejoramiento de la gobernabilidad a través de sistemas de programación, presupuestación y ejecución de proyectos con participación de las comunidades, a la vez que sistemas de contraloría social y de rendición de cuentas que debemos todavía perfeccionar.

Economía compartida, para vencer la vieja e inútil dicotomía entre el Estado y el mercado; entre el sector público y el privado, a fin de lograr esfuerzos sinérgicos que nos permitan usar mejor los recursos siempre escasos, desde actitudes abiertas al consenso y al diálogo. Uno de los mecanismos más eficientes en este campo ha sido el de las Corporaciones con las cuales hemos logrado avanzar con mucha agilidad en el desarrollo de proyectos vitales para la ciudad. Además, hemos trabajado en proyectos de microempresas, de agricultura urbana, de crédito y de capacitación, para pequeños emprendedores, especialmente mujeres jefas de familia y jóvenes.

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La descentralización, nos ha permitido asumir responsabilidades en áreas que el gobierno local puede realizar con mayor eficacia que el central y delegar funciones a las ocho administraciones zonales, hoy verdaderas alcaldías menores, con capacidad creciente de prestar los servicios que requiere la población en el sitio más cercano posible a sus lugares de residencia. De la misma manera hemos trabajado conjuntamente con las treinta y tres Juntas parroquiales a través de las cuales hemos dado atención a viejas y postergadas aspiraciones de importantes comunidades, especialmente rurales. Las Juntas han sido, sin distingos, fuertes aliados estratégicos de nuestra gestión.

La política de competitividad busca que Quito sea una ciudad productiva, que no necesite basar su desarrollo en los empleos públicos sino en la capacidad empresarial de su población, permitiéndole competir con otras ciudades del Ecuador y del exterior a fin de atraer inversiones, generar empleos y ofrecer productos de calidad susceptibles de ser exportados y de generar las divisas que la ciudad y el país requieren. Los proyectos de Quito digital, del aeropuerto, de la seguridad, de rescate del medio ambiente y de infraestructura productiva están orientados por esta política.

Los objetivos y políticas estratégicos, establecidos en el plan “Quito Siglo XXI”, que he resumido, han constituido el hilo conductor de los dos años de nuestra administración y han orientado la definición de planes, programas y proyectos. De igual modo han sido esas orientaciones el sustento doctrinario de todas las propuestas presentadas al Ilustre Concejo, del cual he recibido el apoyo unánime en la generalidad de los casos. De ninguna manera la composición política del cuerpo edilicio afectó a esta visión de la ciudad, en la cual generalmente hemos coincidido y por la cual hemos trabajado armónicamente.

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Para dar solución a los problemas presentes y a los proyectos de futuro se requiere de recursos tanto propios como de los que debe entregar o asumir el gobierno. Esto lo planteamos al presidente Lucio Gutiérrez en la Sesión Solemne del 6 de Diciembre último. Se debe reconocer, desde el poder central, que es imposible que cada municipio pueda por si solo dar atención a todas las necesidades de la población y menos aún en el caso de Quito que ha asumido una gran cantidad de competencias y que como Capital atiende especiales compromisos.

Por otra parte, para el desarrollo de Quito es necesario realizar un trabajo coordinado, especialmente con el gobierno de la Provincia y con los de los demás cantones que son parte de la mancomunidad. Deseo, por esta razón, en esta solemne ceremonia, asegurarles a mis amigos, el Prefecto provincial y los colegas Alcaldes que estamos dispuestos a continuar trabajando juntos por el progreso de nuestra provincia, a fin de sumar esfuerzos, evitar interferencias y obtener los mejores resultados para alcanzar los objetivos comunes de bienestar y calidad de vida que queremos para la gente de Pichincha.

Deseo referirme en este momento a algunos de los principales problemas de Quito para informar al Concejo de lo que hemos logrado realizar y de lo que nos hemos propuesto para la segunda parte de nuestro mandato. En el tema de la inseguridad hemos trabajado para preparar a la ciudad frente a las múltiples amenazas que enfrenta, pero como entre estas la que abruma a los quiteños es la delincuencia, hemos tomado medidas prácticas para apoyarle a la Policía, responsable principal en esta lucha. El Plan “Ojos de Águila”, que consiste en un sofisticado y completo sistema de respuesta inmediata

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para diversas amenazas a la seguridad de las personas, se está implementando y ya da resultados. Quito cuenta, además con una unidad de policía especializada con mandos y personal debidamente seleccionados; El Concejo ha creado una Comisión permanente de seguridad y creó una tasa para contar con los recursos logísticos indispensables; y, lo más estimulante es que la ciudadanía ha dicho basta a la violencia y se ha organizado para junto con las autoridades, derrotar a la delincuencia.

Debemos, sin embargo, insistir en que el tema de la inseguridad es responsabilidad del gobierno nacional, a través del Ministerio respectivo y otras instituciones, no es nuestro deber ni intención reemplazarles en el cumplimiento de sus misiones básicas, sino el de exigirle que éstas sean cumplidas. Debemos sí ejercer un claro liderazgo en esta materia, porque es al Alcalde y al Concejo a quienes la comunidad clama por vivir en paz y protegida de tantas amenazas.

En el tema medioambiental hemos creado dos Corporaciones que se encuentran en pleno funcionamiento para preservar nuestros parques y bosques, recuperar las cuencas hidrográficas y proteger la calidad del aire; hemos puesto a funcionar una red de monitoreo del aire, recogemos los aceites quemados que antes se evacuaban por las alcantarillas y hemos iniciado el proyecto Machángara que modificará sustancialmente la situación de dos terceras partes de la ciudad. Los recursos para financiar los proyectos del medio ambiente provienen de la aportación de hasta el 25% del impuesto a la renta por parte de los contribuyentes quiteños.

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La gestión de los desechos sólidos ha sido el tema más conflictivo de los dos años de esta administración. La ciudad ha mantenido un botadero de basura altamente contaminante en el centro urbano durante 25 años y ha prestado el servicio de recolección y limpieza a través de un sistema ineficiente y pésimamente organizado. Hace más de una década el alcalde Rodrigo Paz inició el proyecto de relleno en el Cabuyal que infelizmente fue abandonado. Después no se hizo nada. Para dar seguimiento a este tema vital contratamos estudios que nos permitan abrir un relleno sanitario no contaminante y cerrar el botadero de Zámbiza. Infelizmente algunas personas en defensa de sus intereses particulares han presentado una oposición ciega e a estos proyectos indispensables para que la propia supervivencia de la ciudad. Durante más de un año hemos agotado todas las instancias de diálogo, sin obtener resultados. Hemos llevado el proyecto a un lugar en el cual no se afecta a nadie y, sin embargo, hemos asegurado a las comunidades obras de compensación que conviertan al relleno en una oportunidad para su desarrollo. Hoy se ha producido la muerte lamentable de un ciudadano en un enfrentamiento con miembros del Ejército encargados de dar protección al personal técnico que realiza los trabajos. Inmediatamente he solicitado a las autoridades competentes una prolija investigación para establecer quiénes son los instigadores y responsables, para que no quede impune un hecho trágico que nos afecta profundamente.

Un área en la que hay mucho por hacer es la del tránsito y transporte. Hemos avanzado en la planificación, pues disponemos de un Plan Maestro debidamente estructurado; hemos desarrollado los proyectos para dos corredores metropolitanos, varios intercambiadores, vías de desfogue

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del tráfico y terminales terrestres, para cuya construcción hemos obtenido el financiamiento de 50 millones de dólares de la CAF y 21 del gobierno; Para poner orden en el tránsito y cumplir las misiones que la ley atribuye a la Municipalidad, creamos la EMSAT, que ha venido trabajando intensamente y con buenos resultados; sin embargo, el año 2003 tiene que ser de cambio y de aplicación de todo lo estudiado para disponer de un sistema moderno, ordenado y eficiente de tránsito y transporte en nuestra ciudad.

Otro proyecto de trascendencia que nos corresponde culminar en el primer trimestre del presente año es la reubicación del comercio minorista en los modernos centros comerciales populares construidos por la municipalidad para este efecto. La recuperación del Centro Histórico, el mayor patrimonio cultural del país, el desarrollo del turismo y el progreso de toda la urbe dependen de que seamos capaces de ejecutar juntos un proceso transparente de adjudicación de puestos que ha venido desarrollándose durante un largo período de complejas negociaciones.

Como es de conocimiento de todos los habitantes de esta ciudad y por supuesto de los ilustres ediles, tenemos una enorme tarea por delante que estoy seguro la sabremos enfrentar como de una manera solidaria, colocados todos la camiseta azul y grana de la milenaria capital de los Shiris y cobijados por nuestro sagrado tricolor nacional.

Un Concejo remozado, con una importante participación de mujeres y de jóvenes, inicia sus labores; cada Concejal o Concejala presidirá una Comisión y será parte de por lo menos cuatro de ellas; además, los miembros del Concejo participarán en uno o más de los directorios de las quince

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corporaciones y empresas, así como de otros altos órganos de administración interna, lo cual obedece al espíritu de las normas constitucionales y legales que dan a los ediles no solamente funciones legislativas y de control, sino también administrativas. La dedicación y esfuerzo de cada uno de ustedes, en cada posición, harán posible el éxito de una gestión de la que todos somos responsables.

Al Concejo Metropolitano le corresponden, además, importantes tareas de control político y administrativo sobre la administración. En este campo debo decirles que las puertas de la Alcaldía están abiertas completamente para que cada concejal o concejala tenga acceso a toda la información disponible, sabiendo que aún más esa información está a libre disposición de cualquier ciudadano, a través de las redes informáticas existentes. Estoy, del mismo modo, abierto a toda crítica constructiva que siempre servirá de aporte para hacer las cosas bien y honestamente, que no es otro nuestro cometido.

Deseo al término de mi intervención agradecer a los miembros del Concejo que cesaron en sus funciones por el apoyo prestado a nuestros programas y por la amistad que nos brindaron, la ciudad debe a sus servicios la gratitud que merecen mujeres y hombres de bien, apasionados por las grandes causas de nuestra ciudad. Y, finalmente, debo decir a los miembros del nuevo Concejo que nos espera una ardua tarea que cumplir en los dos próximos años, finales de mi mandato, que esa tarea debemos hacerla en un ambiente de cordialidad, acuerdos y cooperación para que pongamos bases firmes para la grandeza y prosperidad de nuestra ciudad. Mantengamos, junto al pueblos capitalino, Alcalde y Concejo siempre viva la luz de Quito.

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6 DE DICIEMBRE DEL 2003

El aniversario de la fundación española de nuestra Quito milenaria constituye la ocasión oportuna para que revisemos juntos los aspectos más destacados de

la situación de la ciudad, para que las autoridades municipales rindamos cuentas de la manera como hemos ejercido el mandato entregado por el pueblo en las urnas, y para que expresemos nuestros compromisos de trabajo en el año por venir, en el proceso siempre difícil pero irrenunciable de construir el destino de prosperidad y grandeza que los quiteños nos merecemos.

Nuestra ciudad se encuentra experimentando una etapa de recuperación, esperanzadora en su proceso de desarrollo; un difícil despegue que sigue a las experiencias traumáticas de la última década, en un entorno internacional y nacional complejo que nos presenta amenazas de las que debemos protegernos y oportunidades que vamos a aprovechar.

La sociedad internacional experimenta cambios continuos y profundos. El desarrollo vertiginoso de las comunicaciones, la informática y la biotecnología han puesto a prueba a las estructuras económicas, sociales y políticas que tuvieron vigencia en el siglo anterior.

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El poder y la riqueza se concentran en los países y grupos económicos que tienen capacidad para generar, obtener y administrar estratégicamente el conocimiento. Vivimos una obsesión colectiva por producir, competir e innovar. Superados los momentos que los esposos Toffler calificaron de “éxtasis colectivo y júbilo insensato”, provocados por la caída del muro de Berlín y el colapso de la Unión Soviética, el sistema internacional nacido en la pos guerra fría se muestra más bien desalentador.

La llamada globalización, en el modelo neoliberal, que se orienta por la competencia y el mercado, configura la paradoja de un mundo cada vez más integrado por las redes de comunicación, a la vez que fraccionado, como nunca antes, por un sistema de relaciones políticas y económicas que agranda la brecha entre ricos y pobres, entre países y al interior de los mismos.

La esencia y el concepto del estado nacional han ingresado en un período de seria revisión. Los paradigmas de la política tradicional se demuestran insuficientes e inadecuados para orientar las relaciones económicas, sociales y políticas, tanto internacionales como internas, en la sociedad del conocimiento.

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Intervención del Alcalde de Quito Paco Moncayoen la Sesión Solemne por el aniversario de la Fundación de Quito

(6 de Diciembre del 2003)

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Las formas de gestión vertical, centralizada y centralista de los Estados se encuentran en franca decadencia y la democracia de representación, se muestra insuficiente frente a una población cada vez más y mejor informada que quiere recuperar el protagonismo en la toma de las decisiones que competen a su destino.

Los pueblos reclaman por el reconocimiento de sus particularidades y desean solucionar sus problemas desde la óptica cercana de los gobiernos locales, de cara a sus autoridades, ejerciendo la auditoría social que les devuelva la soberanía secuestrada por las pesadas estructuras burocráticas y exigiendo la rendición de cuentas a sus mandatarios.

Si la situación internacional se caracteriza por la incertidumbre, la del país es también confusa y sombría. Acosados por los males del desempleo y la pobreza, los ecuatorianos no vislumbramos un futuro esperanzador. La sociedad desconfía del poder público, las instituciones básicas de la democracia se desprestigian. Hemos generado una cultura que privilegia los antagonismos y el escándalo. La corrupción ha debilitado las reservas morales de la Nación.

El extenuante servicio de la deuda externa, imposibilita atender urgentes demandas sociales; con contadas excepciones, el sistema productivo nacional no logra niveles adecuados de competitividad; las exportaciones nacionales, excepto el petróleo, disminuyen sistemáticamente; sin las remesas enviadas por el pueblo pobre que emigró del país, difícilmente se podría sostener la dolarización.

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A inicios del presente siglo es de urgencia vital que los ecuatorianos seamos capaces de definir un proyecto de país, fruto de amplios consensos ciudadanos; requerimos acuerdos básicos que nos permitan pensar el mediano y largo plazos; no debemos continuar siendo esclavos de la coyuntura ni administradores reactivos de lo inmediato. Un mínimo de sentido de responsabilidad debería conducirnos a trazar, por amplio acuerdo la ruta, y establecer el norte de la reconstrucción nacional.

Frente a esta incierta y compleja situación el pueblo quiteño ha decidido orientar estratégicamente su futuro. El Plan “Quito Siglo XXI”, socialmente concertado y asumido, constituye la carta de navegación para la Capital de los ecuatorianos. Gracias a él no hemos abandonado la ruta ni aflojado el timón, aún en los momentos que las presiones de los rentistas del pasado parecían irresistibles.

Este Plan nos presenta una Visión de ciudad, una utopía compartida, un propósito común motivador, capaz de galvanizar nuestra voluntad y movilizar nuestras mejores capacidades y energías para, considerando los legítimos intereses particulares y articulándolos, avanzar en una sola dirección, aunando esfuerzos, construyendo juntos, solidariamente, el futuro de grandeza y prosperidad a que tenemos derecho.

la visión nos dice de una ciudad:“PRODUCTIVA Y COMPETITIVA, DESTINO TURISTICO DE PRIMERO ORDEN,

CON EXCELENTE INFRAESTRUCTURA Y MAGNIFICOS SERVICIOS BASICOS,

CON SU MEDIO AMBIENTE SANO, SU PATRIMONIO ENRIQUECIDO, SEGURA,

DEMOCRATICA Y SOLIDARIA, CON IDENTIDAD y AUTOESTIMA, CENTRO DE

GESTION ESTRATEGICA EN LA ECONOMIA NACIONAL Y GLOBAL.”

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Para que Quito sea competitiva, su Municipalidad es responsable, junto con otros niveles de gobierno y de la sociedad, de crear un entorno favorable, con un correcto ordenamiento territorial, mejorando la infraestructura, la movilidad, el equipamiento de servicios y el capital social; dinamizando y articulando los mercados financieros y laborales, y apoyando el desarrollo científico y tecnológico, de modo de constituirse en una ciudad región atractiva para las personas y para la inversión.

Nuestra ciudad está trabajando para ofrecer un alto nivel educativo y una superior infraestructura académica, cultural, deportiva y recreativa, porque es sabido que las ciudades del mundo no compiten tanto en función de su nivel de ingresos - que es importante- como por su capacidad para ofrecer una mejor calidad de vida: bibliotecas, museos, parques, distritos comerciales, zonas culturales y buen funcionamiento de los servicios básicos.

Para avanzar en la construcción de una Quito competitiva hemos actuado mancomunadamente, asociados estratégicamente el sector público, los gremios empresariales, las universidades y escuelas politécnicas y la sociedad civil organizada, acordando y compartiendo responsabilidades, en permanente diálogo fluido y enriquecedor. Las Corporaciones Vida para Quito, Aeropuerto de Quito, de Turismo, Teleféricos de Pichincha, la agencia de promoción de desarrollo CONQUITO, la Corporación de Calidad del Aire, el FONSAL, la Empresa del Centro Histórico y otras son un ejemplo de funcionamiento eficiente de esta forma de enfrentar el reto del desarrollo.

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Los quiteños hemos decidido apostarle estratégicamente al turismo. Creamos una corporación específica para ese fin. Pusimos en marcha el Plan “Q”, formulado con la participación de expertos españoles de prestigio mundial; modernizamos el Aeropuerto Mariscal Sucre, que hoy luce elegante y renovado; continuamos, pese a las dificultades innecesariamente creadas, con el Plan del nuevo aeropuerto, zona franca y parque tecnológico y recuperamos, para las presentes y futuras generaciones, nuestro Centro Histórico, el legado cultural excepcional que nos convirtió en la primera ciudad del mundo nominada Patrimonio Cultural.

Para incrementar la oferta cultural, reconstruimos el Teatro Sucre, entregamos a la ciudad el Museo de Cera, se construye un espectacular centro cultural en el parque del Itchimbía, avanzamos en el proyecto del Museo Nacional con el Banco Central, dotamos de infraestructura y nuevas salas al Museo de la Ciudad, desarrollamos proyectos arqueológicos importantes como Rumipamba y Tulipe. Esperamos que el gobierno nos entregue el edificio del viejo Hospital Militar para regenerarlo e instalar en él otros proyectos culturales.

Hemos realizado importantes actividades culturales: festivales internacionales de música sacra, teatro, cine y danza, exposiciones de obras de Picasso, Soto, Araceli Gilbert y Muñoz Mariño; la magna exposición de Humboldt y la Opera Rigoletto. Por esas actividades y por lo que Quito es, la UCCI nos concedió el honroso título de Capital Iberoamericana de la Cultura 2004

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Para ser competitivos requerimos de un medio ambiente sano: Por eso cerramos el botadero de basura y construimos el mejor relleno sanitario del país, contratamos los servicios especializados de Quito Limpio, establecimos un sistema diferenciado de recolección de residuos hospitalarios, estamos recuperando las cuencas de los ríos Machángara y Monjas, trabajamos en las cuencas de los ríos San Pedro y Pita, recuperamos el parque Itchimbía, somos dueños ya del 70% del parque Metropolitano, sembramos dos millones cuatrocientos mil árboles, instalamos una moderna red de revisión vehicular, una red de monitoreo del aire y un sistema de recolección de aceites quemados, entre los principales proyectos ambientales.

Para ser competitivos desarrollamos el Plan Quito Digital que nos preparará para enfrentar los retos de la sociedad de la información y el conocimiento. Especial importancia le concedemos al proyecto Quito, educa. net. Cuyo objetivo es integrar a la informática, los idiomas extranjeros y a las redes de información a todos los niños quiteños que no disponen de estas herramientas indispensables para su formación.

Otros proyectos importantes de este plan: Gobierno Digital mejora los servicios de la Municipalidad y transparenta la acción del gobierno local; Acceso universal a la red, pone al servicio de los barrios los 127 centros de informática ya creados, esperamos llegar a los 600 hasta fines del 2004 y, finalmente, con el apoyo de la UNESCO, el proyecto Patrimonio Digital.

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Para que la ciudad sea competitiva, tiene que ser eficiente, tienen que disminuir los tiempos de los viajes y mejorar la conectividad. Quito tiene un grave problema de tránsito que estamos solucionando con el Plan Estratégico de Movilidad que incluye la construcción de dos nuevos corredores metropolitanos, un corredor periférico, la ampliación de la vía interoceánica y la construcción de un túnel, cuatro terminales terrestres, repavimentación de las arterias principales, construcción de arqueamientos, semaforización, señalización vertical y horizontal, campañas de educación vial, entre otras acciones.

En su visión de futuro, Quito quiere ser gobernable y democrática, respetuosa de la dignidad humana, emplear la razón como medio para dirimir los conflictos y la veracidad como antídoto contra el actual escepticismo. Quito, ciudad de libertades defiende el valor inalienable de la persona humana, del hombre y la mujer de carne y hueso, que sienten, quieren, viven y conviven y que buscan darle un significado y dirección a su existencia.

Con esa línea de pensamiento colectivamente definida, hemos gobernado para que la ciudad sea el espacio de la palabra; del diálogo constructor y fructífero, del respeto a las diferencias, de la tolerancia, a fin de construir solidariamente comunidad y encontrar soluciones negociadas a los conflictos.

Hemos acudido a todos los foros para explicar nuestros puntos de vista y defender los proyectos municipales, sin temerle al debate, al argumento y a la crítica constructiva, porque estamos seguros que una ciudad que discute, argumenta, debate y saca conclusiones, progresa en paz.

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Alentamos una intensa participación ciudadana en la definición e implementación de políticas. Los consejos metropolitanos temáticos, los cabildos sociales y territoriales, las corporaciones y fundaciones, las redes de atención a sectores desprotegidos y los comités de gestión, son elementos que se han institucionalizado en la gestión pública en el Distrito.

Deseo en este punto reconocer y felicitar la participación de los jóvenes en las campañas de la puntualidad, los ciclopaseos, contra los excesos en el consumo de alcohol, en apoyo a la seguridad y en la lucha contra toda forma de violencia.

Una forma de participación ciudadana destacable en la política de ejercicio ético del poder que ha dado excelentes resultados es la Comisión metropolitana de lucha en contra de la corrupción que ha trabajado con dedicación, rigor y eficiencia.

Gobernabilidad democrática implica desarrollar órganos de gobierno confiables, creíbles, eficientes y no burocráticos. Una Municipalidad al servicio de los ciudadanos, trabajando con ellos y para ellos; respetándoles y siéndoles útiles. Hemos avanzado en ese sentido al aplicar modernos sistemas financieros, escalafones técnicos de personal, calificar algunas áreas con las normas ISSO, etc. Sin embargo, nos falta mucho por hacer. Tenemos áreas municipales con excesivos gastos administrativos y requerimos importantes sumas de dinero para modernizar los aparatos administrativos y disminuir el gasto corriente, especialmente en las empresas municipales. Continuaremos trabajando el año 2004 para mejorar sustancialmente en este campo.

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Gobernabilidad democrática implica seguridad y convivencia pacífica. Ciudadanía activa y militante, libertad frente al miedo; ausencia de violencia, respeto a la ley, reconocimiento y cumplimiento de reglas, capacidad de saber y poder negociar.

Comunidad y Municipalidad hemos trabajado juntos por la seguridad, para enfrentar las amenazas volcánicas, sísmicas, de deslaves, inundaciones e incendios. Frente a la amenaza creciente de la delincuencia, la Policía Nacional creó una unidad del Distrito Metropolitano y el sistema de Policía Comunitaria; Dotamos a los organismos de seguridad con una Central de Emergencias, equipada con los más modernos medios tecnológicos. Gracias a esta medida, hemos logrado tiempo de respuesta de dos segundos y de reacción de alrededor de cuatro minutos, a la altura de los mejores estándares internacionales.

El pueblo de Quito ha entregado importantes recursos logísticos a la Policía y ha puesto a funcionar el Observatorio de la delincuencia y convivencia ciudadana. Hemos hecho a conciencia todo lo que ha estado a nuestro alcance para apoyar a los responsables de la lucha contra el delito, porque estamos convencidos de que autoridades, policía y comunidad organizada son la trilogía inseparable para el éxito de los programas de seguridad.

Por supuesto, para que Quito sea segura debemos además combatir la pobreza y el desempleo; parar la fuga de ecuatorianos al exterior; fortalecer, con el ejemplo de las clases dirigentes, los valores morales, mejorar permanentemente los organismos de seguridad, controlar la migración de elementos

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indeseables de los países vecinos. Requerimos especialmente una clara política nacional de seguridad interna en defensa de la vida, las propiedades y la tranquilidad de los ecuatorianos.

La Visión de Quito nos dice de una ciudad equitativa y solidaria; un espacio humano donde sea posible una convivencia de paz, una ciudad entendida como una familia ampliada, un pueblo que camina en la historia y que busca en comunidad el sentido de su existencia y el horizonte de su destino.

Una ciudad solidaria asegura calidad de vida a todos y todas: educación de calidad, atención adecuada de salud, vivienda digna, acceso a la cultura deportes y recreación, suficientes espacios públicos y acceso a buenos servicios básicos.

Porque Quito es solidaria con los barrios marginales se ha realizado una obra trascendental la represa Salve Faccha con capacidad de 12 millones de metros cúbicos de agua, la construcción de mil kilómetros de redes de agua potable y alcantarillado. Trescientas cincuenta mil nuevas personas con estos servicios.

Preocupados por el problema de la vivienda de los sectores populares la Municipalidad ha regularizado la situación de 23 000 familias en 95 barrios ordenados como urbanizaciones de interés social; en el Plan Quitumbe se han construido 310 viviendas y se transfirieron a constructores privados terrenos para mil nuevas unidades, mientras que con varios gestores urbanos se ha provisto de soluciones habitacionales a 10.700 familias de recursos limitados. En el Centro Histórico se ha rehabilitado 450 unidades de vivienda.

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Solidarios con los niños y jóvenes hemos fortalecido el excelente sistema metropolitano de educación, que es autónomo. Hemos privilegiados la educación inicial, calificamos con la norma ISSO 9002 a nuestros colegios; el Colegio Benalcázar imparte el bachillerato internacional, mantenemos y mejoramos la infraestructura educativa e incrementamos las partidas presupuestarias para los maestros municipales.

Solidariamente hemos acudido en apoyo de la educación fiscal con los proyectos de Escuelas Saludables, mediante el cual hemos atendido a 348 instituciones y el ya mencionado Quito, educa net. Que nos ha permitido incorporar a la informática y la red a 127 escuelas y colegios.

En el importantísimo sector de la salud, se ha equipado y fortalecido los tres Centros Hospitalarios municipales, se compraron 7 centros de salud móviles y 10 nuevas ambulancias. Y continuamos trabajando para crear el Seguro Metropolitano de Salud.

El Patronato San José, además, inauguró y mantiene el Hogar de Vida para atender a los ancianos indigentes, la Casa de la Niñez para los niños trabajadores de la calle, y en coordinación con la dirección de seguridad unidades de protección a la niñez y a la familia, en las Casas de la Equidad y la Justicia, que multiplican la excelente labor del centro Tres Manuelas.

Una ciudad solidaria privilegia la infraestructura para la recreación y los deportes; en los tres años de mi administración se han entregado 367 obras para el deporte

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en las ligas barriales. Se ha construido o están en construcción las ciclorutas Jefferson Pérez, Itchimbía, Solidaridad, Simón Bolívar y el Chaquiñán con un total de 60 kilómetros.

Para ocupar el sitial que nos merecemos en el concierto de ciudades del mundo, hemos consolidado la imagen internacional de Quito gracias al empeño de todos los estamentos municipales, con la eficiente y entusiasta coordinación de la oficina de Relaciones Internacionales. Las celebraciones de los 25 años de la nominación de Patrimonio de la Humanidad atrajeron la atención de ciudades de América y el mundo.

En la actualidad somos parte de las principales redes de ciudades. Ejercemos la presidencia del Centro Iberoamericano de Desarrollo Estratégico Urbano, y somos sede y titulares de las secretarías de la Red de Ciudades Patrimonio de América Latina y el Caribe y de la Red de Ciudades Andinas.

¿Cómo hemos financiado la acción municipal en el año 2003? La ejecución de los Planes Básicos, Programas y Proyectos de la Municipalidad se financiaron en el presente año con ingresos propios que incluyen impuestos, tasas, tarifas, asignaciones establecidas en la ley, aportaciones voluntarias, préstamos internos e internacionales por 360 millones de dólares y aportes directos del gobierno por 26 millones; esto es una relación de 85% de ingresos propios frente a 15% de aportes directos del gobierno central.

Quito, en su condición de Capital del Ecuador es anfitriona del gobierno nacional y de los Cuerpos Diplomático y Consular, lo cual implica que tiene que cumplir una serie

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de compromisos y prestar servicios no remunerados. Como ciudad patrimonial debe mantener el área histórica más grande de América. Los costos corren a cargo del presupuesto municipal a través del FONSAL y la Empresa del Centro Histórico.

Quito en el 2004 será la Capital Iberoamericana de la Cultura y sede principal del concurso Miss Universo. Nuestra Municipalidad tiene competencias a las que dedica gran parte de su presupuesto en educación, salud, seguridad, tránsito y transporte, saneamiento ambiental y otros egresos que no son asumidos por otras municipalidades y Quito recibe diariamente a miles de emigrantes del resto del país.

Finalmente, Pichincha aporta al presupuesto del Estado con el 52% de los ingresos tributarios, mientras que sus municipios reciben en total apenas el 18.7% de lo que entrega la Provincia.

En defensa del derecho que tenemos los quiteños a un tratamiento de justicia hemos planteado con energía a los gobiernos de turno nuestras legítimas aspiraciones y la exigencia de un tratamiento equitativo con el que reciben otras ciudades.

No queremos privilegios. Somos solidarios con el resto del país, conocemos de la situación de las finanzas nacionales, pero resiente al pueblo de Quito el sentirse postergado de la atención de sus mandatarios. Está en sus manos, señor Presidente, disponer que se atiendan con la urgencia y prioridad que merecen los proyectos de Quito.

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Me refiero ahora, con gran satisfacción, a las condecoraciones con las que el Consejo Metropolitano ha reconocido los méritos de hombres y mujeres de la ciudad y el país que por su trascendente aporte a la cultura, a la ciencia, al desarrollo jurídico, a la seguridad y a la protección de los derechos humanos. Son personalidades que han marcado una huella trascendente e imborrable en el alma nacional y en el desarrollo presente y futuro del Ecuador.

A Carlos Pérez Perasso, periodista, crítico y editorialista, quien a través de la prensa escrita y como Director del Diario “El Universo” ejerció sus actividades con ejemplar dedicación, al servicio de los más altos principios y valores e intereses de la sociedad. Ser humano de excepcionales méritos, luchó sin claudicaciones por el ejercicio libre del periodismo y se constituyó en un referente cívico para la Nación.

A José María Borja, quien como jurista, catedrático y actualmente Procurador General del Estado, se ha destacado por la defensa del Estado de Derecho y ha apoyado decididamente los proyectos vitales de Quito, presentando siempre informes legalmente impecables, imparciales y oportunos.

A Fausto Cordorez, un gran ecuatoriano, que ha prestado servicios fundamentales al país en su larga y fructífera existencia; una personalidad ejemplar, luchador incansable y tesonero por las causas de la Nación ecuatoriana y especialmente por la seguridad interna y externa del Estado.

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A Francisco Salgado Salgado, destacado investigador, catedrático, jurista y autor de numerosas obras en las ciencias jurídicas, aporte fundamental para el progreso del derecho y la justicia del país.

A mi querido maestro, Agustín Moreno, catedrático, historiador insigne, amante de Quito, profesor de universitario, escritor de magnas obras de historia y cultura ecuatoriana.

A Hernán Rodríguez Castelo, ensayista, lingüista, crítico literario y de arte, que ha escrito, ademas, liteartura infantil y juvenil, capacidades que le hicieron merecedor en 1964 al Premio Internacional de Literatura Infantil “Doncel”.

A la hermana Elsie Monge, investigadora social y activista en la defensa de los derechos humanos; una persona que ha dedicado su vida y sus esfuerzos a la protección de los Derechos Humanos de los sectores sociales más débiles.

A Leonardo Tejada, notable pintor de Quito, artista de excepcionales dotes en el tratamiento de la madera, quien se ha destacado de manera sobresaliente en las más variadas técnicas pictóricas.

Y a Nina Pacari, una mujer que ha luchado incansablemente en defensa de los derechos del pueblo indio y que, rompiendo viejos y odiosos paradigmas en contra de su condición de mujer e indígena, ha servido a la Nación desde altas funciones en la legislatura y en la Cancillería, siempre de una manera honesta, dedicada y competente.

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A todos y todas les expreso a nombre de la ciudad el más profundo reconocimiento por su vida de dedicación al servicio de nuestras grandes causas, nuestra admiración por la obra que han realizado en cada uno de los campos de su noble y cívico accionar

Termino mi intervención agradeciendo al Concejo Metropolitano por la forma cívica y responsable con que ha cumplido sus elevadas funciones. Sus miembros han demostrado que las causas de Quito están por encima de banderías políticas o intereses de grupos, han constituido un sólido sostén y apoyo al complejo trabajo de la Alcaldía; Igual reconocimiento a los funcionarios, empleados y trabajadores municipales que, de una manera honesta y abnegada, han aportado para el avance de los proyectos de la ciudad y, con sincera admiración, respeto y gratitud al pueblo quiteño, el mejor recurso para asegurar la construcción solidaria de un presente y futuro mejores para nosotros y nuestros hijos.

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6 DE DICIEMBRE DEL 2004

La ciudad de Quito celebra alborozada un aniversario más de su fundación española. Oportunidad propicia para exaltar la belleza de su verde geografía, la riqueza

de su patrimonio arquitectónico, sus extraordinarios bienes culturales, la naturaleza gentil, franca, pujante de su pueblo; su historia rica en páginas de sacrificio heroico en defensa de sus libertades; en fin, ocasión oportuna para resaltar sin recurrir a frases hechas ni desbordes emotivos, sino más bien sobre la base de realidades evidentes, las grandes virtudes que adornan a la capital de los ecuatorianos.

No resulta difícil imaginarnos, miles de años atrás, la situación de los pueblos primitivos asentados en este escenario pródigo, con un clima saludable y diverso, con una gran riqueza agropecuaria, con un entorno generalmente apacible, rindiendo culto a sus dioses e implorándoles aplaquen la ira de los volcanes.

Mucho tiempo después, en busca de la tierra del sol recto, arribaron los incas desde sus punas y desiertos, atraídos por la riqueza y fertilidad de estos prodigiosos suelos y los incorporaron a su poderoso Tahuantinsuyo. Quito se transformó entonces en el más importante centro administrativo y político del norte del imperio.

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A muy poco tiempo, el incario se estremecía por la llegada de los españoles. El advenimiento de los conquistadores europeos significó la interrupción violenta de ese proceso de integración que había apenas iniciado. El encuentro dramático y complejo de dos civilizaciones en estadios tan diferentes de desarrollo originó el proceso de transculturización, matriz de la identidad mestiza de nuestra cultura quiteña.

El proceso colonizador, cuestionable en sus fines y repudiable en sus métodos, permitió, sin embargo, en nuestra ciudad, el nacimiento de nuevas y ricas expresiones culturales, síntesis magnifica de los aportes europeos, árabes y americanos que encontraron su expresión cumbre en la afamada Escuela Quiteña de Arte.

Casi tres siglos vivió Quito sometida a España. En ese largo período se formaron y consolidaron los atributos de su temperamento espiritual y rebelde, laborioso e inconforme, recoleto y audaz, que le condujeron a convertirse en la primera ciudad en proclamar sus ansias de libertad e independencia en América.

A lo largo de su noble existencia Quito ha ido atesorando títulos y reconocimientos como pocas ciudades en el mundo: Fue la descubridora del río mar al que se conoció como río de Quito, Los patriotas chilenos le bautizaron como Luz de América; se la ha llamado la Florencia de América, Relicario de Arte en América y hace 26 años, la UNESCO, la nominó, como la primera ciudad en el mundo Patrimonio cultural de la humanidad.

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Como se puede observar, son hondas y fecundas las raíces de la quiteñidad; grande el patrimonio de su cultura; abundantes las páginas de honor y dignidad escritas por sus hijos; múltiples las de rebeldía y libertad: Esa es la ciudad a la que tenemos el privilegio de pertenecer, con la que estamos unidos por lazos de amor y vínculos de responsabilidad. Esa es la ciudad de pasado heroico, presente esforzado y futuro prometedor, que hoy celebra los 270 años de fructífera existencia.

Con el aval de tan rico pasado Quito enfrenta con hidalguía las dificultades del presente y construye un futuro de prosperidad y grandeza. Ha sido capaz de entender los cambios dramáticos que ha experimentado la humanidad a inicios del presente siglo y no quiere quedarse rezagada en la marcha de la historia en esta nueva y apasionante etapa civilizatoria de la raza humana.

El pueblo de Quito marcha con paso firme y seguro en el camino de la realización de sus sueños y utopías. Está consciente de que todo proyecto de vida en común se construye sobre la base de una firme identidad y de un fuerte sentido de pertenencia. Que para avanzar en el proceso histórico son indispensables acuerdos fundamentales de la comunidad, una carta de navegación socialmente acordada constituida en un pacto motivador de la acción y el optimismo.

Quito ha tomado conciencia del papel que juegan las ciudades exitosas en el nuevo mundo que se está estructurando; observa que la economía global se caracteriza por una compleja red multidimensional de flujos de información, capitales, mercancías y personas, que integran todo el planeta y de la que las ciudades y sus regiones constituyen

Intervención de Gral. Paco Moncayo Gallegos, Alcalde de Quito, el 6 de diciembre del 2004

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los nodos fundamentales. Sabe que las ciudades que no logren articularse en este sistema de flujos globales quedarán marginadas de los procesos de desarrollo.

Quito está consciente de que para insertarse en la sociedad del conocimiento debe trabajar arduamente para calificar sus recursos humanos, infraestructurales y de servicios a fin de atraer inversiones, generar empleos, incrementar las exportaciones regionales y asegurar niveles adecuados de calidad de vida para el conjunto de la comunidad; La municipalidad debe trascender el tradicional papel de prestadora de bienes y servicios, para convertirse en verdadero gobierno local, principal protagonistas de su propio desarrollo.

Para que esto sea posible, es indispensable una profunda revisión de la manera como se gestionan los asuntos del Estado. La descentralización no puede seguir siendo letra muerta. La mayoría del pueblo quiteño carece de adecuada educación, de buenos sistemas de salud, de solidarios sistemas de asistencia social. El capital humano, fundamento de todo desarrollo, está lamentablemente abandonado. Estamos, así hipotecando nuestro futuro, mientras el debate político – al margen de lo que el país espera - se pierde en la coyuntura y en los viejos juegos del poder.

Quito, como otras ciudades del país, ha demostrado que los acuerdos son posibles cuando se pone por delante un hondo amor la patria y el interés general sobre los egoísmos particulares. Con la masiva participación del pueblo y sus instituciones acordó El Plan Equinoccio 21, nuestra carta de navegación para los próximos 20 años.

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En este Plan los quiteños y quiteñas hemos definido nuestra visión de futuro, como una ciudad productiva, competitiva, incluyente y solidaria; un centro cultural de primer orden en América, uno de los más atractivos destinos turísticos en el mundo, principal centro de gestión estratégica nacional y continental en la economía global, con un pueblo alegre, optimista, innovador, que disfruta de adecuada calidad de vida y que vive a plenitud el espíritu de la democracia.

De acuerdo con la visión mencionada, los objetivos del plan nos hablan de construir: una sociedad equitativa e incluyente, que respete la diversidad cultural, se comunique y aprenda; un territorio eficazmente ocupado en términos de equidad y sostenibilidad ambiental; una economía productiva, competitiva y diversificada, que proporcione bienestar a la población en su conjunto; y, una cultura política ciudadana, fruto de la interacción Estado-Sociedad que, a través de un proyecto político y cultural de ciudad, haga posible la construcción democrática de lo público.

Para que nuestra ciudad pueda cumplir sus sueños y aproximarse a sus utopías es indispensable que seamos capaces de superar los esterilizantes paradigmas de la política tradicional; que no desgastemos nuestras mejores energías en confrontaciones inútiles y paralizantes; que seamos más capaces de la generosidad que del egoísmo; que aprendamos a defender nuestros justos y respetables intereses particulares sin atropellar el interés común y las normas de una sana convivencia; que no permitamos que lo superfluo se imponga sobre lo principal, lo urgente sobre lo importante, el apetito sobre el servicio; la ambición desmedida sobre la generosa defensa del bien común. Siglos de hacer la misma clase de

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política han frustrado las enormes potencialidades de nuestro país. No sigamos cometiendo los graves errores de la trágica política ecuatoriana.

He dicho que Quito enfrenta con decisión un complejo presente y construye un futuro promisorio. Esto es posible gracias al trabajo tesonero y abnegado de la comunidad en su conjunto; sin embargo, en efemérides como la que celebramos es importante destacar los nombres de quienes han brindado un aporte sobresaliente para el mejoramiento material y espiritual de la ciudad: A Gisela Tolziner de Neustatter, amante de Quito, preocupada por su progreso y por el de su gente; alma generosa que ya no está con nosotros pero que vivirá en el espíritu agradecido de su pueblo.

Al Padre José Carollo, Vicario Pastoral del Sur de Quito, la persona que más ha hecho por el mejoramiento de la situación del enorme Sur quiteño, especialmente en los campos de la educación y salud, con una preocupación amorosa por los jóvenes y con un empeño ejemplar para elevar la autoestima y sentido de pertenencia de su comunidad

A la Policía Nacional, por la forma de integrarse al trabajo del gobierno local; por su exitoso proyecto de policía comunitaria y por la valiente exposición al escrutinio público que ha significado el debate y puesta en marcha de su Plan Estratégico Institucional.

Al sobresaliente deportista y extraordinario ser humano, Iván Vallejo, que ha puesto el nombre de nuestro país

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en lo alto no solamente en términos literales al plantar la bandera tricolor en elevaciones mayores a 8.000 metros, sino en términos de una conducta ejemplar y en una actitud de grandeza y humildad que sirven como ejemplo especialmente a las nuevas generaciones.

A Laura Romo de Crespo por su incansable trabajo durante 60 años ininterrumpidos, en beneficio de miles de estudiantes que día a día acuden a la Biblioteca de Casa de la Cultura Ecuatoriana; una mujer que reúne en sí todas las virtudes deseables por su cultura y por el enorme amor a los jóvenes quiteños y ecuatorianos.

Al Dr. Mauricio Gándara Gallegos, por su permanente defensa de los mejores intereses nacionales en la determinación de las políticas internacionales del Ecuador, dando luces para el análisis serio y objetivo de los principales temas relacionados con la soberanía nacional y la dignidad internacional de nuestro país.

A Carlos Joaquín Córdova, por su trabajo lexicográfico. Es autor de más de 10 libros, el principal de los cuales es “El Habla del Ecuador” en el que se registran, a manera de diccionario 8.600 ecuatorianismos. Su minucioso trabajo logró que se incorporaran en el Diccionario de la Real Academia Española, 471 nuevos términos ecuatorianos.

A la hermana Laura Glynn, lamentablemente fallecida, quien dedicó casi 5 lustros de su vida, a impulsar la causa de los derechos del pueblo ecuatoriano desde la Comisión Ecuménica de Derechos Humanos de Ecuador.

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A Oswaldo Moreno, pintor, escultor, grabador, diseñador, artesano, fotógrafo, gestor cultural, y, además, un dedicado maestro de juventudes, tanto en el Colegio Nacional Mejía como en las facultades de Artes y Arquitectura de la Universidad Central, instituciones en las que ha trabajado por más de 30 años

Y a Edgar Palacios. Investigador y promotor musical quien entre 1980 y 1990 creó 12 bandas, 3 orquestas y un coro; en 1991 la Fundación que lleva su nombre; y en 1993 el Sistema Nacional de Música para Niños Especiales, con quienes ha desarrollado un trabajo que ha merecido grandes reconocimientos y elogios nacionales e internacionales.

Deseo finalmente agradecer a la Cámara de Comercio de Pichincha, por la presea que me ha sido concedida, distinción que me honra sobremanera y que me compromete a entregar lo único que realmente poseo, un amor sin límites por mi país, una fe inquebrantable por mi pueblo y una voluntad sin claudicaciones por servir hasta el límite de mis capacidades para que mi ciudad pueda vivir en un ambiente de paz, solidaridad justifica social y libertad

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TOMA DE POSESIÓN DEL NUEVO PERÍODO

(Enero 2005)

La voluntad del pueblo expresada en las urnas nos coloca frente a un nuevo desafío, para el que estamos espiritual, mental, física y moralmente preparados.

Estamos conscientes de la enorme responsabilidad que hemos asumido y entendemos con absoluta claridad que el respaldo mayoritario de la sociedad quiteña es una expresión de confianza y esperanza que no puede ser defraudada.

Por esas razones, al iniciar este segundo período, comprometemos nuestros mejores esfuerzos, nuestra dedicación sin límites, nuestra tenaz voluntad de trabajo, para hacer posible el logro de los objetivos de grandeza y prosperidad, del pueblo capitalino.

Estamos dispuestos, con el espíritu de siempre, a velar porque las justas aspiraciones de la comunidad sean atendidas con el más humano sentido de la equidad, con celo y con honesta preocupación por las personas, por las familias, por los barrios, que son la razón fundamental del ejercicio del poder público local.

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Hemos recibido el abrumador apoyo de nuestros vecinos con humildad y con sincera preocupación. Entendemos que el mensaje entregado en las urnas era el de dar continuidad a un proceso estratégicamente concebido que tiene el aval de una participación ciudadana sin precedentes en el país.

Pero la continuidad tiene que ser entendida con espíritu dialéctico provocador de cambios, con una honesta capacidad de autocrítica y de asimilación de la crítica expresada por quienes apoyaron otros proyectos o candidatos en la reciente campaña electoral.

Por esa razón, hemos tomado medidas para reforzar nuestro equipo de trabajo, especialmente en la alta conducción del gobierno local, a fin de que nuevas ideas, otras inquietudes, renovados bríos, vengan a enriquecer el trabajo de un equipo que durante más de cuatro años ha dado lo mejor de sí para que la ciudad mejore cualitativa y cuantitativamente.

La compleja ecuación de continuidad y cambio tiene que ser claramente entendida y aplicada. Los fundamentos de nuestra propuesta de trabajo, que han dado excelentes resultados, van a continuar siendo aplicados. Creemos firmemente, sobre la base de propuestas elaboradas con el fundamento de resultados obtenidos en gobiernos locales exitosos, que la trilogía que sustenta nuestro planeamiento debe mantenerse. Planificación estratégica, cooperación público privada y gobierno local.

Vamos, por lo mismo, a fortalecer la cultura de planificación estratégica indispensable para darle sentido histórico y dirección sostenida al proceso de desarrollo de Quito.

Discurso de Toma de Posesión del Alcalde y Concejales Enero 2005

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Creemos firmemente que solamente con una visión de largo plazo, con un proyecto colectivo de ciudad, con una capacidad de perseverar en la construcción de nuestras utopías, podremos colocarnos entre las primeras ciudades del mundo.

Vamos a continuar nuestro trabajo con una serena comprensión de los retos y oportunidades que nos presenta el siglo XXI que hemos iniciado; de los grandes y dramáticos cambios experimentados en una geopolítica renovada, en la que insurgen las ciudades y sus regiones como actores principales de las nuevas relaciones políticas, económicas y sociales.

Vivimos una realidad diferente que requiere de enfoques diferentes; que nos obliga a la superación de las viejas dicotomías y paradigmas del pasado; juntando positivamente lo público y lo privado, utilizando la dinámica de las fuerzas del mercado desde un nuevo pacto de convivencia social concertada, y generando una sólida cooperación entre lo local, lo regional y nacional, para racionalizar el uso de recursos que siempre serán escasos.

Los resultados del primer período están a la vista. Hemos demostrado que juntos somos más, podemos lograr más, podemos llegar más lejos. Insistiremos, por lo mismo, en el deber de las autoridades del gobierno central, provincial y local de trabajar juntos, sin absurdas competiciones, sin importar partidos o afiliaciones políticas que solamente se han convertido en razón de discrímenes o privilegios inaceptables.

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Nuestro Plan de Gobierno, que recoge los sentimientos, las aspiraciones, los sueños, de todos los sectores de la ciudadanía, expresados en largas y fructíferas reuniones de trabajo, pretende convertir a la tradicional municipalidad en un verdadero gobierno local y, por lo tanto, plantea temas que han sido sustraídos por el sistema centralista de la tradicional preocupación de las ciudades.

Para Quito, como Capital de todos los ecuatorianos constituye un deber cívico impulsar la descentralización, la cooperación y la complementaridad, de todas las regiones y ciudades del país para que éste asegure un desarrollo sostenido y un futuro mejor para todos los ecuatorianos.

En el tema económico, conscientes de los males que ocasiona a la convivencia social la falta de empleos, creemos que los gobiernos locales podemos apoyar positiva y efectivamente para resolver este grave problema. Es importante lograr construir una comunidad dignificada por el trabajo; no una que viva de la caridad pública o privada; queremos una sociedad integrada por personas capaces de llevar un pan digno a sus casas, alimentar adecuadamente a su familia, educar bien a sus hijos.

Por eso hemos trabajado y continuaremos haciéndolo con el sector productivo de nuestra ciudad y región para apoyar desde la municipalidad el fortalecimiento del sector empresarial. Necesitamos una empresa competitiva, boyante, generando empleos, creando y distribuyendo la riqueza; una clase emprendedora comprometida con el desarrollo social y con los altos fines que la comunidad plantea.

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Creemos que podemos convertirnos en una comunidad de emprendedores, con un sistema de micro, pequeñas, medianas y grandes empresas que compitan y se complementen en un entorno de valores cívicos y sociales aportado por la comunidad local que nos permitan convertirnos en una zona dinámica de la economía nacional y global.

Un ejemplo alentador de lo alcanzado en este campo, es el turismo. Desde que acertadamente asumimos las competencias que hoy ejercemos, hemos mejorado sustancialmente la situación y enfrentamos proyecciones que nos colocan frente a nuevos desafíos y oportunidades que debidamente enfrentados nos asegurarán atender una demanda que crece aceleradamente.

La obra pública municipal fue también, en los últimos años, el principal generador de empleos, para cientos de empresas y decenas de miles de ciudadanos. Por esa razón, es importante mantener y, de ser posible, superar en los años por venir, la intensidad en la dotación de servicios básicos que, además de mejorar la calidad de vida, aportan a brindar oportunidades a trabajo a profesionales de todos los niveles y aún a mano de obra de baja calificación.

Los planes que el pueblo quiteño diseñó y posteriormente apoyó en las urnas, ponen especial énfasis en el territorio, como un elemento fundamental para posibilitar el desarrollo equitativo de la ciudad. Un territorio ordenadamente ocupado, distribuido con equidad para la vida y disfrute de las personas; escenario de una convivencia segura y pacífica, es fundamental para el desarrollo humano sustentable.

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Por esa razón vamos a seguir defendiendo el desarrollo ordenado de la ciudad combatiendo sin descanso a los traficantes y especuladores y asegurando oportunidades de vivienda dignas para las clases medias y bajas de la sociedad. Y vamos también a continuar mejorando las condiciones de nuestro medio ambiente, defendiendo el aire de Quito, forestando y reforestando el Distrito, recuperando las cuencas hidrográficas y entregando a los ciudadanos espacios públicos dignos para su disfrute y recreación.

Vamos a luchar sin desmayo y, estoy seguro, con el apoyo de los empresarios y trabajadores de la transportación pública, para ordenar y dignificar el transporte colectivo que sirve al 80% de los ciudadanos. Ese es el fin del proyecto Metrobús que estamos implementando. Y esperamos también el apoyo de los dueños de vehículos particulares que deberán sumarse a los esfuerzos de ordenamiento que son fundamentales para que la ciudad avance.

Exigiremos a la Policía Nacional, encargada del control del tránsito, que cumpla sus misiones legales de la manera eficaz para la que está profesionalmente capacitada. Seremos severos en esa exigencia que implica la viabilidad y sostenibilidad del desarrollo quiteño.

Seguiremos luchando con toda nuestra fortaleza en contra de la delincuencia e inseguridad. Apoyaremos a la Policía Nacional para que cumpla sus misiones vitales para la comunidad; continuaremos fortaleciendo la organización comunitaria porque la experiencia nos confirma que la solidaridad y organización social son las mejores formas de edificar una convivencia ciudadana pacífica.

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En lo social nuestra preocupación y compromiso con la calidad de los servicios de salud y con la educación que recibe la niñez y juventud son indeclinables. La educación pública y parte de la educación privada, convertida en simple negocio, ponen en riesgo nuestros planes de futuro y el futuro mismo de la sociedad.

Vamos a exigir y apoyar para que ningún niño quiteño quede al margen de la educación básica y para que todos dispongan de las herramientas modernas para una futura exitosa incorporación como fuerza laboral, me refiero a la computación, a la internet y al idioma inglés.

Después de cuatro años, en agosto del 2009, se cumplirán doscientos años de la revolución quiteña que le valió a nuestra ciudad el honroso título de Luz de América. Hace cien años el presidente General Eloy Alfaro planificó y condujo especiales celebraciones para que Quito y el país lleguen con la mayor dignidad a esa fecha trascendente. Tenemos el deber de arribar al bicentenario con una ciudad dinámica, optimista y en franco proceso de desarrollo.

Disponemos de cuatro años para prepararnos para tan importante acontecimiento, que queremos celebrarlo con una programación digna de Quito y el país, con eventos de primero orden de nivel continental y mundial. Debemos hacer del bicentenario una oportunidad para mejorar sustancialmente en todos los aspectos importantes del desarrollo de nuestra ciudad.

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Hemos realizado gestiones con el gobierno central, organismos nacionales e internacionales para con los esfuerzos mancomunados de todos los sectores, hacer del año 2009 un hito en la historia de Quito y del país y un punto de llegada con una ciudad plenamente recuperada, así como un punto de partida para continuar haciendo realidad nuestros sueños, utopías y esperanzas.

Quito es una ciudad fundamentalmente mestiza y diversa, conformada con el aporte de ecuatorianos de todas las latitudes de la geografía nacional y con personas de los más diversos países del mundo. En ella conviven diversas culturas étnicas y es, por lo mismo, una especie de resumen del alma nacional, a la vez que una ciudad cosmopolita y universal abierta a todas las corrientes de expresión y pensamiento del mundo.

Esta ciudad que no acepta formas de liderazgo vertical y autoritario; la sociedad quiteña ha planteado su voluntad de vivir una gobernabilidad democrática con intensa participación ciudadana, con un liderazgo moderno y asertivo capaz de lograr aproximaciones y consensos.

La actitud de la municipalidad, de la población y de las políticas públicas locales, contrasta así con el gran desorden nacional. Desde la impunidad del poder los responsables del atraso y pobreza, personas desaprensivas, ambiciosas e irresponsables, continúan indolentes forjando más atraso y más miseria.

Nuestra ciudad no puede resignarse a ver pisoteada la institucionalidad por quienes tienen el deber de defenderla;

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no puede vivir sin indignación el abuso de poder que conduce a la ruptura de las normas mas elementales de la convivencia democrática; no puede soportar más la mentira, el escándalo y la corrupción convertidos en práctica corriente de la acción pública.

Quito, como otras ciudades del país, tiene el derecho a su progreso que se ve amenazado por la inseguridad jurídica y el caos político que ahuyentan a la indispensable inversión nacional e internacional, desprestigian el nombre del Ecuador y colocan a la dirigencia política a la cabeza en la nefasta lista de las más corruptas del mundo.

Nuestra ciudad seguirá en firme en su cultura de convivencia ciudadana pacífica, en la restitución del valor de la palabra, en el sometimiento a las reglas de la razón como fundamento de la relación cívica y política. Seremos ejemplares en el respeto a las normas constitucionales y legales como corresponde a toda sociedad que quiere un futuro de prosperidad y progreso.

Continuaremos por eso indeclinables en nuestra lucha en contra de todas las formas de corrupción; las que se derivan del ejercicio de la función pública, tanto al interior de la municipalidad como en las relaciones con contratistas y proveedores. Estamos cansados de escuchar a los grandes atracadores e inmorales sus discursos de honestidad y austeridad. De estas virtudes no se habla; se las vive y se las practica a la vez que se controla y exige su cumplimiento.

Los atributos de un servicio pulcro a la sociedad quiteña los han ejercitado los miembros del Concejo Metropolitano que hoy terminan el período para el cual el pueblo les eligió hace

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ya más de cuatro años; creo que constituye un acto de justicia el reconocimiento que la municipalidad les ha brindado al poner en sus pechos las respectivas condecoraciones. Su paso por la función pública en el gobierno local ha sido fructífero, digno, esforzado y decente. Eso es lo que se necesita de los servidores que el pueblo elige para confiarles tan importantes funciones.

El Concejo se ha fortalecido también con la presencia de nuevos ediles que han logrado el apoyo de la comunidad quiteña y se aprestan a servirla en los próximos cuatro años. A ellos quiero expresarles como Alcalde de la ciudad, mis votos sinceros por el mayor éxito en el cumplimiento de sus funciones, así como mi permanente voluntad de cooperación para hacer juntos realidad todas las mejores intenciones que animan a nuestros espíritus.

Con la ayuda de Dios, con el trabajo decidido y honesto del Concejo, con el dedicado esfuerzo de los funcionarios, empleados y trabajadores municipales, con la participación intensa del pueblo y sus instituciones, pongámonos manos a la obra a seguir con más entusiasmo construyendo una Quito productiva y competitiva, solidaria y equitativa, gobernable en democracia. Ciudad solar, principal destino turístico en el mundo, eje cultural de América, una ciudad orgullosa de sí misma para vivir con optimismo y alegría una cultura de paz.

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6 DE DICIEMBRE DEL 2005

Las celebraciones aniversarias de la fundación de nuestra próspera y hermosa ciudad son el marco adecuado para que las autoridades de gobierno del Distrito

Metropolitano de Quito analicemos el estado de situación de la Capital de los ecuatorianos y presentemos el informe de las principales gestiones de gobierno, cumpliendo con el deber constitucional de rendir cuentas al pueblo que nos honró con el encargo de administrar sus asuntos y defender sus intereses.

El año 2005, ha sido dramático para Quito que, como Capital de la República y sede de las funciones del Estado, se ha constituido, a lo largo de su historia, en el escenario principal de la dirimencia de los conflictos políticos de la nación ecuatoriana.

Nuevamente, los acontecimientos provocados por la irresponsable conducción política, por la improvisación, incapacidad y corrupción en el manejo de los asuntos del Estado, pusieron a prueba la vocación democrática del pueblo quiteño.

Una vez más, la rebeldía y dignidad salieron a las calles para defender los principios básicos de la cohesión social ofendida,

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del mismo modo que en la Revolución de las Alcabalas; en la revolución del 10 de agosto de 1809 —que le ganó el honroso título de Luz de América— o en la sublevación del 2 de agosto de 1810, cuya sangrienta represión la convirtió en la Mártir de la Libertad.

En este año, como en cada ocasión que la dictadura, la corrupción el abuso de autoridad, han ofendido la dignidad del pueblo ecuatoriano, familias enteras salieron a las calles quiteñas, marcharon a reclamar contra las arbitrariedades, el deshonor, la concupiscencia en el ejercicio del poder, sin desmayar ante la grosera represión, al grito de “¡Democracia sí! ¡Dictadura No!”.

Pero, lo que ha sucedido en Quito, debe ser entendido en el contexto de una amplia reacción nacional que exige, a inicios de siglo, los cambios indispensables para corregir las fragilidades institucionales de una democracia que tiene que reforzarse y legitimarse por eficiencia en el combate a la pobreza, al desempleo, a la falta de educación y de salud de calidad; a la pérdida del sentido del interés nacional, a la vertiginosa danza de intereses mezquinos que terminan por frustrar las justas aspiraciones de desarrollo social y económico de la comunidad ecuatoriana.

Y todo esto mientras la humanidad avanza en un proceso de cambios acelerados gracias a la revolución de las tecnologías; mientras las sociedades modernas han ingresado con fuerza en la era del conocimiento, dando lugar a nuevas formas de organización económica y social en las cuales debemos insertarnos, a riesgo de quedarnos aislados.

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Sin embargo cabe advertir sobre los peligros de una inserción irreflexiva o impuesta desde la óptica de intereses foráneos. Cualquier decisión que se tome en esta materia deberá defender vigorosa e inteligentemente los intereses del conjunto de la nación, y precautelar al pueblo de cualquier efecto nocivo para sus aspiraciones de desarrollo.

Debemos observar también con atención los cambios que está experimentando el Estado Nacional, en este inicio de siglo, para reforzar nuestros planteamientos sobre la necesidad de un nuevo pacto territorial en el Ecuador, que permita alcanzar los indispensables equilibrios regionales y preservar solidariamente la unidad nacional.

Es evidente, más allá de los esfuerzos de los gobiernos de turno, que el sistema de gestión centralizado de los asuntos públicos ha fracasado. Es incapaz e insuficiente para dar solución a los problemas que le importan a la gente y se ha convertido en el principal generador de los males del regionalismo y la indisciplina política. Por estas razones, las ciudades y provincias reclamamos una gestión autónoma que racionalice el desarrollo del espacio nacional, distribuya adecuadamente las competencias y, concomitantemente, asigne equitativamente los recursos.

Con estos antecedentes y con una clara comprensión de los desafíos de los nuevos tiempos, Quito, con la participación de una mayoría abrumadora de sus instituciones, aprobó el Plan Equinoccio 21 ––su carta de navegación, su hoja de ruta, que contiene la visión de la ciudad que queremos ser y las guías estratégicas para su desarrollo.

(Pag. anterior)Sesión Solemne (6 de Diciembre del 2005)

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Como era de esperarse, una administración planificada, seria y honesta ha dado resultados: La debacle económica de fines de siglo, dejó 1’320.000 habitantes del Distrito superviviendo con menos de tres dólares diarios. En el 2005 esta cifra ha bajado a 600 mil habitantes, menos de la mitad. Es deber de los distintos niveles de gobierno trabajar para que se mantenga esta tendencia; de ese modo podremos llegar al 10% el número de personas viviendo en estas condiciones en los próximos 3 años.

La información disponible nos muestra signos alentadores: Las inversiones en Quito crecieron de 418 millones de dólares en el 2001 a 900 millones en el 2005. El crédito pasó de 1142 millones a 1896 millones. Quito captó el 55% de las inversiones privadas nacionales en el 2005 y el 40% del crédito nacional, mientras que sus depósitos monetarios significan el 50% de los depósitos nacionales. Los depósitos monetarios crecieron de 1660 millones a 3250 millones. El desempleo ha disminuido del 13.3% en el año 2000 a 10.5% en el año 2005. El subempleo bajó del 41% en el 2000 al 33.5% en el 2005, cifra que está por debajo del promedio nacional que es del 45%. La región Quito-Pichincha contribuye al erario nacional con el 47%, mientras que las transferencias del Ministerio de Economía y Finanzas sólo representan el 7% del total nacional.

Las principales razones para este mejoramiento radican en el desarrollo del área turística, en los empleos generados por la obra pública municipal y por el envío sostenido de las remesas de las familias emigrantes. Dotar de agua, alcantarillado, construir la vialidad, realizar la regeneración urbana, construir vivienda y formalizar el comercio es crear empleos, el primer reto para cualquier nivel de gobierno.

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En el área del turismo hemos pasado de 306 mil visitas del 2004 a 400 mil en el presente año. Nuestra Corporación de Turismo hizo promoción en Argentina, Chile, México y participó en 9 ferias nacionales e internacionales. Ha organizado 23 Congresos Internacionales con la asistencia de 18.300 personas. En el presente año se han creado 150 nuevas empresas de servicios turísticos.

En este mismo campo constituyó un hito de este año la apertura del Parque Recreacional Teleférico de Quito, mientras que se encuentra en proceso de adjudicación un sistema de teleférico o funicular de acceso a nuestro colina tutelar, El Panecillo.

Pretender hacer desarrollo económico con energía eléctrica insegura y cara y sin contar con telecomunicaciones eficientes y accesibles, es ilusorio.

Quito quiere hacer lo que el gobierno descuidó en los últimos 20 años. Generar energía hidroeléctrica. Para eso es indispensable que el Estado pague los 230 millones que debe a la Empresa quiteña, a fin de desarrollar nuevos proyectos como el del Reventador para cuya construcción hemos firmado ya una carta de intención con el gobierno de la República Popular China. Está en manos del Congreso Nacional expedir las reformas legales indispensables para que el país no se quede sin estos abastecimientos estratégicos

Hemos pedido también participar en el directorio de ANDINATEL, porque es indispensable defender a esa empresa fundamental para nuestra competitividad, cuya

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administración eficiente permitirá bajar los costos de la conectividad y que todos los niños y jóvenes tengan acceso a la tecnología moderna.

Hemos reforzado nuestra relación con el sector productivo. Creamos la Corporación Quito-Pichincha con la Prefectura Provincial y 15 Cámaras y Asociaciones de la Producción para emprender en la gestión conjunta de proyectos que mejoren la competitividad interna y externa de las unidades productivas de Quito.

Con la joven y dinámica dirigencia de la Cámara de Comercio llevamos adelante ambiciosos proyectos de salud, vivienda y equipamiento urbano.

Trabajamos con la Cámara de la Pequeña Industria en áreas de capacitación y equipamiento. Con ella y con la Asociación de Industriales Textiles, financiados por el BID y apoyados por INSOTEC, cooperamos activamente, a través de CORCONFECCIÓN, en capacitación y asesoría para lograr una industria de la confección competitiva.

En el área social, hemos trabajado con la certeza de que la riqueza de las naciones radica en el desarrollo de su capital humano, para hacer realidad nuestra decisión de contar con un pueblo mejor educado, sano, bien alimentado y alojado, con calidad de vida.

En el campo educativo, mantenemos el objetivo de que ningún niño o niña quede al margen del uso de la computadora y del

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ingreso a la Internet. Hasta el momento, hemos montado aulas de informática en 300 instituciones educativas fiscales y capacitado a centenares maestros en el uso de las tecnologías de información. Estos centros benefician a 90.000 estudiantes y 250.000 miembros de la comunidad.

Suscribimos con la Embajada del Japón, luego de ganar sendos concursos, convenios por un monto de 1’530.000 dólares para construir 17 edificios para centros artesanales y unidades educativas. Además hemos entregado obras de infraestructura a 113 escuelas y colegios fiscales como parte del programa Escuelas Saludables. En los cinco años llegamos ya a 450 centros educativos fiscales que han recibido obras municipales.En el área de la Cultura, la Municipalidad ha impulsado de una manera vigorosa una agenda intensa y de calidad. Este año hemos organizado 15 eventos internacionales de teatro, danza, música sacra, cine y artes plásticas, auspiciados por la municipalidad; 6 macroeventos en encuentros estudiantiles; 4 macroeventos en encuentros con la música popular ecuatoriana; 12 macroeventos en el Encuentro Interparroquial de cultura, 250 eventos en Agosto Arte y Cultura y 145 eventos en el Teatro Sucre.

El equipamiento para la cultura se enriquece con el Museo del Agua que hoy inauguraremos; con la entrega, la semana pasada, de la antigua casona totalmente restaurada del Conservatorio Nacional de Música; con el Teatro Variedades, cuyas obras están por terminarse; con el avance de las obras en el museo de la Ciencia y Tecnología y con la recuperación de la joya mayor del barroco americano, la Iglesia de la Compañía que está totalmente restaurada.

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En el área deportiva hemos construido 29 obras de infraestructura en beneficio de las ligas barriales; con esto llegamos ya a 215 ligas atendidas en los cinco años; auspiciamos la olimpiada sub-12 en la que participaron 204 equipos y 5.000 niños, realizamos 46 campamentos vacacionales para 9.600 estudiantes y el campeonato Quito Juega por la Carolina en que participaron 385 equipos con 5.500 deportistas.

El Patronato Municipal San José mantiene tres centros de atención al adulto mayor, una casa de niños trabajadores, una casa de la juventud y el centro de prevención y atención de la violencia familiar Tres Manuelas. En el año se han atendido 17000 personas de los grupos vulnerables con alimentación, recreación, reforzamiento educativo atención médica y apoyo sicológico.

En el área de la salud, se lanzó el Seguro Metropolitano en el mes de abril. En la actualidad cuenta con 10.000 afiliados y 38 prestadores de servicios. Con la firma del convenio con el gobierno se espera incrementar en 60.000 los afiliados pertenecientes a los quintiles 1 y 2, los sectores más pobres de la sociedad. En este año remodelamos la Unidad de Salud Norte, creamos un Centro de Atención Móvil de Salud y hemos alcanzado a dar atención sanitaria a 380.000 personas.

En Seguridad y Convivencia ciudadanas se ha continuado con el equipamiento de la Policía Nacional, el 911, los bomberos y la Policía Metropolitana. En el presente año hemos entregado 18 nuevos cuarteles, 31 camionetas, 15 motos, y 200.000 galones de combustibles. Está contratándose

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la adquisición de 20 autobombas para el Cuerpo de Bomberos. Hemos capacitado a 25. 000 moradores e instalado alarmas comunitarias en 25.000 hogares.

En el campo de los servicios básicos hemos construido 230 Km. de redes de agua potable, con lo que acumulamos 1.774 Km. en estos cinco años y 20.000 acometidas domiciliarias, de las 75.000 realizadas en el quinquenio. Del 72 % de cobertura, al inicio de nuestra gestión, alcanzamos ya el 95%.

Hemos construido paralelamente 200 Km de redes de alcantarillado, alcanzando los 1.700 Km y 6.000 acometidas domiciliarias de las 48.000 del quinquenio. Y no nos detenemos: desde el domingo se han publicado en la prensa nuevas licitaciones de la EMAAP por un valor superior a 22 millones de dólares.

Debo poner especial énfasis en el proyecto de Ríos Orientales, que permitirá solventar la provisión de agua a la ciudad, por fases, la segunda mitad de este siglo. Dicho proyecto permitirá captar 17 metros cúbicos por segundo, una ínfima proporción del total de 1.500 metros cúbicos por segundo que conducen los ríos de la vertiente oriental de la cordillera. Por lo tanto no causará perjuicio alguno a las poblaciones y a la ecología de la Amazonia. Hemos terminado este año los estudios de prefactibilidad de este proyecto y ahora es necesario iniciar los definitivos, para lo que requerimos del apoyo de los organismos responsables del manejo del recurso hídrico y de la solidaridad y comprensión de las provincias y cantones vecinos.

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En el campo de la vialidad, pusimos en servicio este año el Túnel Oswaldo Guayasamín, de 1.300 m., el túnel vial más largo del país. Hemos avanzado en un 80% en la prolongación norte y sur de la Av. Simón Bolívar para aliviar el pesado tránsito interprovincial. Se han construido aproximadamente 70 Km de vías en barrios populares. Construimos 500 m de nuevos puentes, entre ellos el de la Lauro Guerrero, tan útil para el sur de la ciudad Se repavimentaron 30 Km. Pusimos en servicio las Av. Quitumbe Ñan y Condor Ñan. Construimos el corredor Sur Oriental y el intercambiador Plaza Cumaná, en Chillogallo.

Con crédito concedido por la CAF, se ha iniciado la licitación para construir 253 proyectos viales para los barrios populares. En estos días, en honor de las fiestas quiteñas se ha convocado ya a la licitación de 56 vías de acceso.

En el tema del transporte se entregaron los Terminales de Integración e Inter-parroquial en La Marín para servir a los pobladores del valle de Los Chillos, y se puso en servicio el Corredor Central-Norte. Y, nuevamente con la mirada en el futuro, realizamos la convocatoria internacional para dotación de un sistema de Tren Urbano: 63 firmas han retirado las bases lo que demuestra el interés de las empresas nacionales e internacionales por llevar adelante el proyecto.

Por la especial conformación orográfica y ubicación geográfica, Quito debe ser muy cuidadosa con su medio ambiente. En este año hemos continuado con la implementación de la gestión integral de la disposición de los desechos sólidos; nos encontramos construyendo la moderna Estación de Transferencia de Porotohuayco,

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mediante contrato con Fundación Natura y se encuentra en marcha un concurso internacional para la disposición e industrialización de la basura.

En el delicado tema del manejo del aire de Quito, nuestra ciudad cuenta con una Corporación dedicada con exclusividad a su protección –CORPAIRE– que ejecuta su Plan Maestro de Mejoramiento del Aire de Quito, que incluye la revisión vehicular, la red de monitoreo del aire, la cual detectó a lo largo del año solamente 13 días fuera de norma y ninguno en riesgo para la comunidad. En la página Web de esta entidad, la población puede saber diariamente la situación del aire en todo el Distrito.

Por su parte Vida para Quito, con los fondos del 25% del Impuesto a la Renta ha sembrado un millón quinientos mil árboles más, continúa el programa de construcción de colectores e interceptores y varios tramos del parque lineal, como parte del proyecto de recuperación del río Machángara. El próximo año comenzará la recuperación integral del río Monjas.

En la regeneración del espacio público, se han rehabilitado importantes áreas históricas: la Plaza de San Blas, la Plaza Benalcázar, la regeneración urbana de La Mariscal, San Diego, El Panecillo, La Tola, La Victoria, San Marcos, La Loma; Se rehabilitó el antiguo Conservatorio Nacional de Música; la Villa Amarilla de la Procuraduría General del Estado y el edificio de la antigua Dirección de Higiene, en La Alameda.

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Deseo informarles que hemos iniciado el proceso de recuperación integral del barrio de La Ronda, tan emblemático de la ciudad. Y llevamos adelante la restauración de varios parques y edificaciones patrimoniales en parroquias, o de conjuntos urbanos, como los de Carcelén y Pomasqui, que inauguramos el viernes pasado.

En el área de la vivienda se promocionaron 1.250 viviendas nuevas, con participación del sector privado; se rehabilitaron 115 viviendas con el programa Pon a Punto tu Casa; se promocionó y se construyó 350 viviendas nuevas en el Centro Histórico.

De conformidad con la Ley Orgánica de Régimen Municipal, reformada en septiembre de 2004, se estableció el nuevo sistema de valoración de los predios de la ciudad, expresado en zonas valorativas, que permite definir un valor justo y real de los bienes inmuebles, solucionar la especulación del mercado inmobiliario del Distrito y establecer la base de cálculo de los impuestos prediales que regirán en el próximo bienio 2006 – 2007. Hemos sido cuidadosos para no afectar la economía de las familias quiteñas.

Un paso interesante que daremos en este ámbito para garantizar el respeto a los derechos de los administrados, es la creación de la Defensoría del Contribuyente, como una instancia que al interior del Municipio proveerá asistencia legal, permanente y gratuita, a los ciudadanos que se sientan afectados por determinadas acciones de la Administración Tributaria seccional.

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Dentro de la política de estímulos en la administración de personal de la Municipalidad, se aplicó el “Plan de Medicina Preventiva”, el “Plan de Seguridad y Riesgos Ocupacionales” y se impulsó la participación directa del servidor en mesas de diálogo, para lograr un modelo consensuado de gestión.

El Presupuesto del Municipio del Distrito para el año 2005 fue de 500 millones de dólares; de estos, 374 millones, esto es el 73% fueron recursos propios, 80 millones (el 15%) correspondieron a transferencias de ley, y 55 millones (el 11%) fueron fruto de convenios con distintas instituciones. Respecto del financiamiento, los niveles de endeudamiento se sitúan muy por debajo de lo permitido. La relación de los pasivos totales frente a los ingresos totales es de 55 % y el servicio anual de la deuda es del 15,77%.

Los recursos presupuestarios se han invertido del siguiente modo: Educación Cultura y Deportes 13,5 millones; Salud y Bienestar social 12 millones; Seguridad 21 millones; Medio Ambiente 74 millones; Transporte 40 millones; agua potable y alcantarillado 150 millones, Vialidad 86 millones; Obras de menor cuantía en las 8 administraciones zonales 22,5 millones; y Patrimonio cultural 59 millones. Este es, señoras y señores, un breve resumen de la obra realizada este año.

He dicho que Quito enfrenta con decisión un complejo presente y construye un futuro promisorio. Esto es posible gracias al trabajo tesonero y abnegado de la comunidad, por lo que, en efemérides como la que celebramos, es importante destacar los nombres de quienes han brindado un aporte

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sobresaliente para el mejoramiento material y espiritual de la ciudad, como lo hemos hecho con el Concejo Metropolitano de Quito al entregar esta tarde importantes condecoraciones:

Al doctor Rodrigo Borja Cevallos, la condecoración Gran Collar Rumiñahui, por su decidida contribución al progreso de Quito, desde sus distintas dignidades como Legislador por Pichincha, intelectual, político, enciclopedista, y especialmente durante su ejercicio en la Presidencia de la República.

Al señor Héctor Cueva, la condecoración Gran Collar San Francisco de Quito, por su excepcional labor desde hace 24 años como cofundador, colaborador y ahora Presidente de la Organización Olimpiadas Especiales en el Ecuador, logrando integrar a la sociedad, a través del deporte, a miles de niños y jóvenes con algún tipo de discapacidad.

Al Embajador del Japón Hiroyuki Hiramatsu, la condecoración Gran Collar Sebastián de Benalcázar, por su valiosa contribución a la educación mediante el financiamiento de la infraestructura de planteles municipales.

A la señora Constanza Di Capua, la condecoración Gran Collar Luis Héctor, Barón de Carondelet, por haberse destacado —desde que llegó al país hace más de 60 años, huyendo de la barbarie nazi-fascista— por ser una notable investigadora de la historia y del arte de Quito, una de las primeras arqueólogas del Ecuador y una gran animadora cultural.

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A la Red de Consejos Estudiantiles de Quito, la condecoración María Verónica Cordovez, por su labor preponderante en el campo de la seguridad, sobre todo con la campaña “Vivamos la fiesta en Paz”.

Al señor José Benjamín Cando, la condecoración al Mérito Deportivo “Ciudad de Quito”, por ser un atleta y ser humano de excelente calidad, pues a pesar de su discapacidad ha conseguido medallas de oro, plata y bronce en Olimpiadas Especiales regionales y mundiales, así como este año en la carrera Últimas Noticias.

Al doctor Plutarco Naranjo, la condecoración Federico González Suárez, por ser un desatacado médico e historiador y uno de los mayores conocedores y difusores de las figuras de Espejo, Bolívar, Montalvo y Alfaro.

A la doctora Eugenia del Pino, la condecoración Eugenio Espejo, pues se ha consagrado como una autoridad mundial en biología del desarrollo y biología molecular, además de su trabajo en la docencia y en la conservación de las especies nativas de las Islas Galápagos.

Al licenciado Francisco Granizo, la condecoración Aurelio Espinosa Pólit, por toda su vida de consagración a la literatura, en la que ha alcanzado niveles de excelencia, al ser considerado por la crítica uno de los 10 poetas más grandes del Ecuador.

A la doctora Irma Bautista, la condecoración Manuela Cañizares, por su destacada defensa en pro de los derechos de los pueblos afroecuatorianos e indígenas.

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La condecoración Oswaldo Guayasamín a Nelson Román, notable pintor quiteño, innovador y experimentador, de gran consistencia y autenticidad, que desde los años 70 se ha mantenido en la vanguardia de la creación artística.

Al maestro Gerardo Guevara, destacado director de orquesta, compositor y musicólogo, la condecoración Pedro Pablo Traversari, por sus méritos al frente de diversos conjuntos, coros e instituciones, por su labor como promotor musical y por ser el nexo entre los creadores de la música nacionalista de generaciones anteriores y los compositores contemporáneos

A la doctora Isabel Robalino, la condecoración Jonatás Sáenz, por su relevante trayectoria en defensa de los derechos humanos, especialmente de los sectores más vulnerables de la sociedad.

A todos y todas les expreso a nombre de la ciudad el más profundo reconocimiento por su vida de dedicación al servicio de nuestras grandes causas y nuestra admiración por la obra que han realizado en cada uno de los campos de su noble y cívico accionar.

Quiero expresar mi más profunda gratitud a mis colegas Alcaldes, provenientes de Costa, Sierra y Oriente, que están presentes en esta sesión en homenaje a Quito; agradecer al abogado Jaime Nebot y al Concejo porteño por la condecoración conferida; estas acciones demuestran la vocación solidaria de los gobiernos seccionales y la voluntad común de construir un mejor Ecuador.

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Termino mi intervención agradeciendo al Concejo Metropolitano por la forma cívica y responsable con que ha cumplido sus elevadas funciones. Sus miembros han demostrado que las causas de Quito están por encima de banderías políticas o intereses de grupos. Ellos y ellas han constituido un sólido sostén y apoyo al complejo trabajo de la Alcaldía.

Igual reconocimiento quiero expresar a los funcionarios, empleados y trabajadores municipales que, de una manera honesta y abnegada, han aportado para el avance de los proyectos de la ciudad.

Y, finalmente, con sincera admiración y respeto, mi gratitud al pueblo quiteño, el mejor recurso para asegurar la construcción solidaria de un presente y futuro mejores para nosotros y nuestros hijos.

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6 DE DICIEMBRE DEL 2006

El aniversario de la fundación española de Quito merece una celebración alegre y entusiasta, pero también una reflexión seria, objetiva y serena sobre

nuestro presente y especialmente sobre el futuro que estamos construyendo. Sin omitir los logros alcanzado, a la vez que sin ocultar los problemas que aun enfrentamos; sin reclamar méritos personales, pero sí reconociendo los del equipo del gobierno de la ciudad y los de una comunidad firmemente comprometida con la realización de sus sueños.

Debe ser ocasión también para ratificar ante la ciudad y el país, los compromisos asumidos y para tomar fuerzas, a fin de continuar llevando adelante la difícil tarea de dirigir los esfuerzos comunitarios hacia el logro de los objetivos de productividad y competitividad, de justicia social, inclusión, solidaridad, y de gobernabilidad democrática, establecidos en la planificación de nuestro desarrollo.

Este es un aniversario muy especial porque coincide con la elección de un nuevo presidente y con él la esperanza de los cambios indispensables para superar una situación de progresivo deterioro de nuestra gobernabilidad, de grave crisis política y moral, de incrementada desconfianza en las instituciones y autoridades, de agravamiento de la pobreza y de carencia de condiciones de vida dignas para la mayoría de la población ecuatoriana.

Sesión Solemne 6 de Diciembre del 2006.

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En estas circunstancias, la Nación ha expresado con insistencia su aspiración de urgentes y profundas rectificaciones, que nos permitan rescatar la honestidad en la acción pública y privada, para hacer posible un ambiente de transparencia y confianza, requisitos indispensables para la estabilidad política y crecimiento económico necesarios para la creación de riqueza y empleo, requisitos indispensables para que el pueblo pueda ganar su pan con dignidad y atender con suficiencia las necesidades de sus familias.

Las grandes soluciones a nuestros viejos problemas deben ser concebidas con una comprensión pragmática y realista de las situación de la humanidad a inicios del nuevo siglo como resultado del fin de la guerra fría, de la implosión de la Unión Soviética, de la caída del muro de Berlín, de la apertura de la China a una economía de mercado, de la revolución experimentada en los campos de la ciencia y la tecnología y de la globalización de la economía mundial.

Una de las transformaciones más importantes que experimenta la humanidad a inicios de siglo se produce en la forma de gestión de los asuntos públicos, que supera los límites del tradicional Estado Nacional, tanto con el surgimiento de grandes organizaciones supra nacionales, como por la emergencia de fenómenos subnacionales fundamentados en el reconocimiento de las particularidades geográficas, históricas y culturales de ciudades y regiones que se transforman en protagonistas fundamentales del desarrollo de sus comunidades.

Reconociendo esta realidad y luego de largos y democráticos debates, las autoridades seccionales presentamos a las

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funciones ejecutiva y legislativa un proyecto de ley de autonomías que, recogiendo una sentida y generalizada aspiración de los ecuatorianos, propone un sistema de gestión en el cual los gobiernos locales e intermedios tienen, dentro del ámbito de la ley, libertad plena para ejercer su iniciativa en todas las materias de su competencia. Estas, se acepta universalmente, deben, de modo general, incumbir preferentemente a las autoridades más cercanas a los ciudadanos e ir acompañadas de los recursos que por asumirlas les corresponden.

Este proyecto de ley pone especial énfasis en la corrección de las disparidades e inequidades históricas que han impedido el desarrollo homogéneo del territorio y del pueblo ecuatoriano, mediante mecanismos destinados a la protección de las entidades seccionales y sectores sociales más débiles. Reconoce, además, el derecho de asociación para el ejercicio de competencias relativas a objetivos comunes.

Hablemos ahora de nuestra ciudad. Quito festeja del nuevo aniversario con la satisfacción de haber alcanzado los objetivos trazados y con la certeza de que se encuentra en un proceso irreversible de superación y progreso.

Es una metrópoli reconocida nacional e internacionalmente, cuenta con un sistema de gestión eficiente y con sistemas modernos de planificación estratégica; ha mejorado sustancialmente sus sistemas administrativos y aplica con rigor las normas básicas del buen gobierno. En su planificación, el pueblo de Quito se planteó llegar al bicentenario del Primer Grito de la Independencia con una población con servicios básicos universales. En la actualidad la

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cobertura de electricidad es del 100%, de agua potable el 96% y el de Alcantarillado 95%. En seis años hemos construido redes de agua potable y alcantarillado de 2000 Km. casi la misma extensión que lo que se hizo en todo el siglo anterior.

Planteamos llegar al año 2010 y que no haya niño, niña o adolescente que no tenga acceso a las herramientas del siglo XXI, esto es la computadora e internet. Hemos instalado 500 aulas de cómputo en escuelas y colegios fiscales y hemos firmado la carta de intención con el Banco Mundial para disponer de los recursos que nos permitan alcanzar la meta propuesta.

Decidimos que nuestro subsistema de educación sería autónomo y se convertiría en un referente para la educación del Distrito y del país. Lo hemos logrado calificando nuestros institutos con normas ISSO, impartiendo el bachillerato internacional e implementando un sistema que cubre la educación desde los 0 a 5 años hasta el bachillerato, especialmente en especialidades orientadas a la productividad y competitividad.

En el presente año, con el apoyo del pueblo y el gobierno del Japón hemos construido 21 instalaciones educativas municipales, pusimos a funcionar la primera etapa de la nueva Unidad Educativa Eugenio Espejo y apoyamos a la educación fiscal con recursos de la ciudad con trabajos de mantenimiento y equipamiento de instalaciones. 250 Escuelas y Colegios del Ministerio de Educación han recibido obras municipales.

Planteamos mejorar la movilidad y modernizar el transporte. Hemos integrado dos corredores metropolitanos con 26

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Km. de extensión y 150 vehículos articulados ecológicos que sustituyen a 500 buses convencionales; se han construido tres terminales terrestres y continúa la construcción de la terminal interprovincial en Quitumbe que inauguraremos el próximo año.

Del mismo modo, en tres meses entregaremos dos extensiones de la Av. Simón Bolívar con una inversión de 70 millones de dólares, con lo cual mejorará el tránsito de las Av. Maldonado, Granados, Eloy Alfaro, Mariscal Sucre y Panamericana Norte. Y lo más importante hemos construido este año 210 Km de vías, barriales, en la mayor parte de los casos con participación directa de las comunidades. En los seis años la cifra alcanza los 786 Km.

Quito ha sido y deberá seguir siendo un centro cultural de primer orden. En el presente año hemos entregado el edificio del ex Círculo Militar, el Teatro Variedades, el Teatro México, el edificio de los Correos, los museos de Sitio de La Florida y Tulipe, mientras que continuamos construyendo el Centro de Convenciones Médicas en el antiguo Hospital Eugenio Espejo, el museo de Ciencia y Tecnología en Chimbacalle, El Museo temático del Ferrocarril y el Museo de Arte Moderno en el viejo Hospital Militar.

Decidimos trabajar por un ambiente sano, con espacios públicos dignos que sirvan a comunidades integradas y con autoestima. Para cumplir con ese objetivo incorporamos un parque metropolitano de 640 Ha en el Sur, el parque lineal en el río Machángara con 70Ha de extensión, 42 Km de ciclo rutas, 226 parques zonales y barriales y hemos sembrado 4.6 millones de árboles.

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Para mejorar la gestión de los desechos sólidos, hemos concesionado por 15 años el manejo del relleno Sanitario, de una Estación de Transferencia y de una Planta de tratamiento de desechos hospitalarios a una institución de gran experiencia y prestigio como es la Fundación Natura.

Nos planteamos convertir a Quito en una ciudad asegurada en salud. Creamos el Seguro Metropolitano y hemos incorporado al mismo 66.000 personas, mientras que participamos con el gobierno nacional en el Seguro Universal que dará cobertura a una población potencial de 300 000 personas de los sectores más pobres.

Para ser una ciudad competitiva y productiva, como establece nuestro Plan, continúa la construcción del nuevo aeropuerto, los estudios de la zona franca, del parque tecnológico y del polígono logístico. La Corporación de Turismo ha realizado un excelente trabajo de promoción de nuestra ciudad y país; La Agencia de Desarrollo local CONQUITO opera la Bolsa de Empleo, apoya en la creación de microempresas, mantiene el programa de agricultura urbana participativa, entrega microcréditos y apoya emprendimientos productivos en cooperación con las Cámaras de la Pequeña y Mediana Industria y de Comercio.

Enfrentamos sin embargo como ciudad, problemas de difícil solución como son el del tránsito y transporte. Como es conocido, han ingresado al parque automotor desde el año 2000 cerca de 180 000 coches particulares, lo cual sumado a nuestra compleja topografía, a la insuficiente labor policial, al atrasado sistema semafórico afecta a nuestra movilidad y por ende a la eficiencia de la ciudad.

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Para mejorar esta situación es indispensable unificar los trabajos de la EMSAT y de la Policía Nacional con la creación de una Policía de Distrito que se reporte directamente al Alcalde, que los recursos de la matrícula de los vehículos ingrese a las arcas municipales para el mantenimiento vial la señalización y la semaforización; debemos continuar con el proyecto del Metro ligero, con la ampliación de la vía panamericana, de la vía interoceánica, la construcción de un tercer túnel en San Juan y la culminación del anillo perimetral. Estos proyectos no se podrán realizar sin una participación directa del gobierno nacional.

Del mismo modo, es indispensable que el gobierno reasuma sus obligaciones constitucionales en el tema de la seguridad y que las funciones legislativa y judicial colaboren en el esfuerzo para tener un país y una ciudad seguros.

La Policía Nacional carece de recursos, el sistema carcelario está colapsado, prácticamente no existe un sistema de gestión de riesgos y defensa civil, no se ha tramitado las reformas al Código de Procedimiento Penal, el Ministerio Público carece del personal suficiente y los escándalos de corrupción incrementan la desconfianza y alientan la impunidad.

La Municipalidad y el pueblo de Quito hemos debido enfrentar esta emergencia con nuestros propios recursos y estamos dispuestos a continuar con la gestión del sistema integral que hemos organizado, pero esperamos del gobierno central que reasuma sus responsabilidades y que sea capaz de establecer políticas de estado y planes efectivos en esta materia con cobertura para todo el territorio nacional.

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Quito ha trabajado arduamente para mejorar la calidad del aire y mantenemos los índices de contaminación bajo control, pero atenta contra estos esfuerzos la mala calidad de los combustibles que provee petroecuador, hemos planteado, por lo mismo, la necesidad de construir una refinería regional que corrija la actual situación. Esperamos que con el nuevo gobierno podremos adelantar este vital proyecto,

El país enfrenta una deficiencia de generación eléctrica que atenta en contra de su economía y bienestar. Es imperativo que nos empeñemos en construir nuevas plantas hidroeléctricas para disponer de energía abundante y barata. La Empresa Eléctrica Quito tiene cuatro proyectos listos para su ejecución. Requerimos, sin embargo, para garantizar las inversiones que se necesitan que el gobierno pague a la Empresa la enorme deuda que mantiene con ésta por concepto del diferencial tarifario, esperamos que las autoridades dejen de dilatar la solución de este grave problema que pone en riesgo la existencia misma de una de las pocas empresas eficientes que tiene el país.

En fin estos y otros problemas requerirán de un esfuerzo sostenido y coordinado del Presidente que asumirá a inicios del próximo año, de los prefectos y alcaldes de todo el Ecuador que podemos, si queremos hacerlo, conformar un formidable equipo para trabajar por el mejoramiento de las condiciones de vida de nuestro pueblo.

En esta tarde, la comunidad quiteña, ha reconocido a las personalidades de la ciudad y del país que han destacado en el servicio a los intereses y al progreso de nuestra Nación.

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Merece especial mención el ex presidente Rodrigo Borja a quien se le reconoce no solamente los servicios que prestó a Quito desde la primera magistratura sino lo que él como Quiteño ha representado nacional e internacionalmente en los campos de la política, las ciencias sociales y la cultura.

Del mismo modo, Quito reconoce al doctor Gustavo Noboa Bejarano su actitud abierta a la municipalismo nacional, su apertura a una descentralización, su decisión histórica de transferir la administración aeroportuaria a las alcaldías y porque, al margen de bajos intereses regionalistas, supo trabajar con todas las provincias y cantones del país.

Con sobra de merecimientos han sido condecorados también el Canciller Francisco Carrión y el Embajador Horacio Sevilla, quienes, desde sus funciones en el servicio exterior, han trabajado con excelencia ed defensa de los intereses nacionales.

No podía ser más justa la condecoración a los creadores de la Bienal de Arquitectura Rolando Moya y Evelia Peralta, así como al Colegio de Arquitectos, por haberla mantenido durante 28 años, convirtiéndola en el evento de mayor importancia académica de la ciudad.

Felicito con igual entusiasmo al doctor Miguel Espinoza, al Dr. Jorge Salvador Lara, al Dr. Julio Paz, el padre Juan Halligan, al Dr. Julio Pazos, al Dr. César Paz y Miño, a la señora Sonia Andrade, al Arq. Milton Barragán, al maestro Carlos Bonilla, al deportista Hugo Chilla, por ser todos en sus respectivas áreas ejemplos de constancia, esfuerzo y amor a la Patria ecuatoriana.

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Quiero hacer especial mención a Teresa Simbaña, una mujer indígena, lidereza de virtudes excepcionales, quien colaboró con nuestra administración dirigiendo la oficina de asuntos indígenas, quien ya no está con nosotros pero cuya siembra seguirá germinando en el alma de los que creemos en una ciudad incluyente y solidaria.

Deseo también expresar, finalmente, mi gratitud al Concejo Metropolitano por su patriótica y cívica actitud, a los funcionarios, empleados y trabajadores de la municipalidad que cumplen con devoción las tareas encomendadas, a las Juntas Parroquiales a los dirigentes gremiales, de Cámaras y Colegios profesionales, a las organizaciones no gubernamentales, los presidentes de los barrios y de las ligas deportivas barriales y en especial a todos y cada uno de los vecinos que participan en el mejoramiento de las condiciones de vida de la comunidad quiteña.

Una especial mención les debo a los organismos internacionales de crédito, en especial al BID y a la CAF que se han convertido en los principales socios estratégicos del desarrollo no solamente de Quito sino de muchas ciudades del país, del mismo modo al sistema de Naciones Unidas, a las Embajadas y Consulados por su solidaridad y apoyo al trabajo de la municipalidad.

Termino mi intervención deseándole al Presidente electo éxito en las delicadas funciones que asumirá en pocos días. Estamos convencidos que sabrá enrumbar al país por senderos de trabajo, eficiencia y honestidad. Le aseguramos, además, el apoyo de nuestra municipalidad y de nuestro pueblo a todas las iniciativas de su gobierno que aporten a la construcción de una patria más justa, equitativa, incluyente, digna y soberana.

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6 DE DICIEMBRE DEL 2007

Hoy como hace cien años en la revolución liberal y hace doscientos en la de la independencia, el pueblo ecuatoriano ha emprendido transformaciones

radicales impostergables con la esperanza de poder construir la patria justa, incluyente, equitativa y solidaria, que permita a todos y todas una convivencia solidaria y de paz.

En estos mismos días, en Montecristi, la ciudad natal del Alfaro, ante la mirada expectante de América y el mundo, hemos iniciado los ecuatorianos un proceso de construcción de un nuevo pacto social, para crear una diferente y mas justa organización económica, política, social y territorial que permita concretar la aspiración irrenunciable a un desarrollo integral de la nación ecuatoriana.

La Asamblea Constituyente, abocada a la patriótica tarea de enrumbar a la sociedad ecuatoriana por nuevos caminos de mayor libertad, razón y dignidad, sabe que deberá actuar sobre una realidad concreta que es el resultado de una construcción colectiva milenaria que, sumando avances y retrocesos, configura la situación que se quiere y se debe transformar.

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Es importante, por lo mismo, que se reconozcan y fortalezcan los logros alcanzados gracias a esfuerzos continuos y muchas veces heroicos de la sociedad ecuatoriana, que nos han permitido avanzar en la historia, mucho más rápido que otros países, en aspectos sustanciales como la equidad de género, la protección de los derechos de niños, niñas y adolescentes, la inclusión de personas con discapacidades, el reconocimiento de nuestra diversidad étnico - cultural y los procesos de descentralización territorial. En todos estos campos Quito ha sido pionera. Por lo tanto, las reformas que se aprueben deberán valorar el papel que les corresponde a los gobiernos seccionales que en una gran mayoría han servido eficiente y honestamente a sus comunidades, recibiendo por ello su respaldo y reconocimiento. Es evidente, por lo demás, que sin la distribución espacial del poder la justicia social se dificulta y la democracia de participación ciudadana se imposibilita.

Quito, en estos procesos, ha sido la primera en asumir las competencias que le corresponden a un verdadero gobierno local. Y lo ha hecho con responsabilidad y eficiencia como paso a informar:

Asumimos la Alcaldía de Quito el año 2000, cuando la patria sufría la más amarga crisis de su historia reciente, que por razones de su capitalidad Quito soportó de manera aún más aguda.

La ciudad y su municipalidad se debatían en grave situación económica, institucional, social y moral. El pueblo quiteño soportaba las más altas tasas de pobreza e indigencia. Decenas

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de miles de sus pobladores huían a buscar en tierras lejanas las oportunidades que aquí no podían encontrar. Se vivía un ambiente de desconfianza y frustración que oprimía especialmente a los sectores sociales más pobres.

En esas circunstancias, enfrentando resistencias iniciales impensables, comenzamos un proceso de transformaciones orientadas a construir una ciudad menos vulnerable, económicamente productiva y competitiva; socialmente incluyente, justa y equitativa; territorialmente ordenada, ambientalmente sana, con su patrimonio recuperado y protegido; administrada con eficiencia y honestidad.

Hoy, siete años después, podemos destacar con sano orgullo que Quito se encuentra a la cabeza, entre las mejores ciudades de Latinoamérica en calidad de vida y provisión de los servicios básicos. En efecto, la energía eléctrica cubre al 99%, de la población y el agua potable y alcantarillado al 97%. Del mismo modo, hemos construido 1143 Km. de vías urbanas, que equivalen al 40% de lo realizado en toda la historia de la ciudad. Con el proyecto “Mi Barrio Lindo” estamos trabajando en 70 barrios periféricos dotándoles de parques y espacios comunitarios, guarderías, casas comunales, unidades de policía comunitaria, entre otros servicios.

Estos logros de Quito no han perjudicado a nadie; lo hemos hecho con nuestros propios esfuerzos, contrayendo créditos con organismos como el BID y la CAF, que deberemos pagar. Lo paradójico es que, por haber solucionado la prestación de los servicios básicos, recibiremos cada vez menores recursos del presupuesto general.

Intervención del Alcalde de Quito en la Sesión Solemne (6 de Diciembre 2007)

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Pero la ciudad tiene aún problemas por resolver. Uno de ellos es la inseguridad. Por mandato constitucional la seguridad es competencia del gobierno central; sin embargo, por el descuido de los sucesivos gobiernos, el pueblo de Quito, en marcha memorable exigió que la Alcaldía tome el control de este problema que aún hoy nos aqueja.

Debemos advertir que el tema de la seguridad por su complejidad involucra a la Función Legislativa, la Función Judicial, al Ministerio Público, la Policía Nacional y otras instituciones, razón por la cual Quito fue la primera ciudad en organizar un Consejo metropolitano de seguridad en que participan todas estas instancias para coordinar acciones en el Distrito.

El pueblo de Quito, frente a la gravedad del problema, decidió contribuir pagando una tasa anual que nos ha permitido construir 5 cuarteles para la Policía Nacional, 65 unidades de Policía Comunitaria, ocho sistemas integrado de seguridad para bomberos, 911 y Policía Metropolitana. Hemos dotado a la institución policial con 160 patrulleros, 360 motos y aportamos para su logística con monto anual de 1.500.000 dólares. Es por lo mismo indispensable que el gobierno central defina una política nacional de seguridad y que asuma las responsabilidades por tanto tiempo abandonadas.

En materia de salud, en cooperación con el gobierno nacional, hemos alcanzado el aseguramiento de 186 mil afiliados de los grupos sociales que reciben el bono solidario, mientras que en el subsistema metropolitano hemos prestado alrededor de 500 mil atenciones en el año.

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Como parte de la política cultural continuamos con el desarrollo de infraestructura. En el presente año hemos entregado el edificio Alambra para la Academia Nacional de Historia, el Centro Cultural Benalcázar y dos salas del Museo de Ciencia y Tecnología.

Hemos recuperado para la ciudad en estos siete años tres teatros, tres museos, cinco centros culturales y un centro de convenciones. Como en las más importantes ciudades del mundo en la actualidad se realizan en Quito alrededor de 700 eventos culturales cada año.

El Fondo de Salvamento ha continuado también con su extraordinaria labor de rescate del patrimonio cultural: Recuperó diez centralidades urbanas, el histórico puente del Río Machángara, varias calles y escalinatas patrimoniales, el Camino de El Inca, el parque de La Alameda y su Observatorio Astronómico, el Mercado San Francisco, el Colegio San Fernando, la Casa Alambra, la Ex Casa de los Correos, la Casa de la Estampería Quiteña, la Casa de la Acuarela, el Hospital Gonzalo González, y la “Factoría del Conocimiento” en Chimbacalle.

Una mención especial merece la recuperación integral de la tradicional calle de La Ronda.

Concluyó trabajos en cinco iglesias y avanza en la restauración de San Francisco y se encuentra en proceso de construcción el Centro de Convenciones “Eugenio Espejo” y el Centro de Cultura Contemporánea en el antiguo Hospital Militar y el Cine México

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Porque la ciudad debe conocer sus raíces, su pasado indígena milenario para crecer mirando orgullosamente hacia un futuro de dignidad y progreso, al asumir la Alcaldía dispuse la creación de la división de arqueología en el FONSAL. Hoy podemos mostrar con orgullo y con evidencias históricas irrebatibles la grandeza de nuestro pasado quitu – cara en los museos de sitio de tulipe, de La Florida, de Rumipamba y en el Pucará de Guayllabamba.

De esta manera hemos estado a la altura del reconocimiento mundial como primera ciudad patrimonio de la humanidad.

A la Municipalidad le corresponde apoyar al deporte barrial y alienta el voluntariado que tiene en Quito una enorme fuerza en las Ligas barriales. Hemos intervenido en la infraestructura de 153 ligas en los siete años y hemos apoyado el desarrollo de un promedio de 20 campeonatos cada año.

Cooperamos con la infraestructura para la educación pública con el proyecto Escuelas Saludables. 292 instituciones han recibido el apoyo municipal en los siete años.

Pero el más importante apoyo brindado al sector educativo del Estado es el proyecto Quito Educa - Net. Lo concebimos con el objetivo de llegar al Bicentenario y que no haya niño, niña ni adolescente que no tenga acceso a la computación y a Internet. Para esto hemos instalado 500 telecentros y está en proceso la adquisición de los equipos para 600 más con lo cual habremos cumplido la meta trazada.

Creamos este año el Instituto del Emprendimiento y el Empleo, conformado por 17 centros de capacitación. Su

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objetivo es que los estudiantes salgan con capacidad de autogestión y generación de empleo productivo, en áreas relacionadas con la pequeña y mediana empresa, en campos como las artes gráficas, industria de la construcción, metal mecánica, mecatrónica, textil y otras. Para este fin, con recursos de asistencia del pueblo del Japón, hemos construido 21 instalaciones educativas.

El Patronato San José, ha puesto en servicio de los sectores más vulnerables ocho centros para atender niños en situación de calle, jóvenes y adultos mayores en situación de riesgo. Anualmente se atienden con calidad y calidez alrededor de 50.000 personas.

El problema más agudo que soporta Quito en la actualidad es el de la congestión vehicular producida por el ingreso de alrededor de 200.000 automotores nuevos en los últimos siete años, a una ciudad de difícil topografía, con deficientes sistemas de gestión del tránsito y con limitados recursos municipales.

Hace más de un año el Congreso Nacional aprobó una ley para que una parte pequeña de los recursos que pagamos los quiteños en las matrículas de los vehículos pasen a la municipalidad que tiene asumidas las competencias del tránsito desde 1993. El señor Presidente vetó totalmente esa ley y ofreció compensar a Quito con las asignaciones necesarias. Esperamos tener una respuesta positiva del Ministerio de Economía y finanzas para continuar adelante con proyectos vitales como los de semaforización y gestión digital del transporte.

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En el campo de la infraestructura vial, conforme al Plan Estratégico de Movilidad, hemos construido tres terminales de transporte público; estamos concluyendo en Quitumbe la nueva terminal interprovincial y el próximo año construiremos una quinta Terminal en Carcelén.

El plan de la referencia establece como solución al problema del tránsito dar prioridad al transporte público masivo, a los peatones y ciclistas, pro esa razón seguimos construyendo el sistema METROBUS que en esta etapa, incluye nuevos corredores exclusivos para el Sur de Quito, proyecto que cuenta con el apoyo del gobierno nacional.

Ayer inauguramos el proyecto vial más importante de los últimos años: la ampliación la avenida Simón Bolívar, que permite una conexión directa desde Santa Rosa en el sur, hasta Carapungo en el Norte, con una inversión de 74 millones con préstamo de la CAF. Esta vía permite cruzar la ciudad en menos de media hora, descongestiona el tránsito y lo mejora en las principales arterias longitudinales de la ciudad

En el próximo año deberemos iniciar la construcción de la vía al Nuevo Aeropuerto, para financiar la cual hemos iniciado el trámite para obtener un crédito por 110 millones de dólares ante la CAF, con el aval ofrecido por el Gobierno Nacional. La vía tendrá una longitud de 13.5 Km. En las próximas semanas se procederá a la convocatoria a la licitación correspondiente, de modo de asegurar que para 2010 se cuente con una vía eficiente de acceso al nuevo aeropuerto y al valle de Tumbaco.

Al inicio de nuestra gestión creamos la unidad de suelo y vivienda y la empresa municipal Quito Vivienda con el fin

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de ordenar el crecimiento de la ciudad y poner al alcance de los grupos de menores ingresos opciones de vivienda, liberándoles de la explotación de los traficantes de tierras y evitando las costosas invasiones.

Para solucionar este antiguo problema heredado hemos legalizado a la fecha 192 barrios con 41.101 lotes, beneficiando a cerca de 180.000 personas. Están en proceso de legalización 100 barrios más.

En el campo de la vivienda, en el Centro Histórico se han construido 327 viviendas nuevas; con el programa “Pon a punto tu casa” se han recuperado 300. En la ciudad Quitumbe, se han construido 4.100 de una meta de 11.000 viviendas. Hemos iniciado el proyecto “Ciudad Bicentenario”, con una cabida de 3.000 soluciones habitacionales. Del mismo modo el proyecto de El Garrochal que tendrá una cabida de 13.500 viviendas.

Para mejorar la calidad de vida y crear oportunidades de recreación para las familias quiteñas hemos incorporado el Parque Metropolitano del Sur, con una superficie de 720 hectáreas; el próximo año incorporaremos el Parque Chilibulo, con una extensión de 300 hectáreas, ambos en el Sur de Quito.

Se ha consolidado además el Parque Metropolitano Guanguiltagua, continuamos los trabajos del “Parque Largo Machángara” y hemos iniciado obras en el parque lineal del Río Monjas.

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El programa de forestación continúa. En este año sembramos 900.000 árboles, alcanzando ya 4.5 millones. Para dar continuidad a este esfuerzo se inauguró los viveros de Caupicho y Las Cuadras con lo que el municipio tiene una capacidad de producción de un millón de plantas anuales.

Para continuar en el mejoramiento del sistema de gestión de los desechos sólidos concesionamos a Fundación Natura el manejo del Relleno Sanitario y de la Terminal de transferencia de Porotohuayco la misma fundación maneja la planta de tratamiento de los desechos hospitalarios y hemos iniciado la construcción de una nueva Estación de Transferencia.

El cierre técnico del viejo botadero de basura continúa y tratamos el gas metano con la empresa Eteco-Alquimiatec con bonos de carbono.

En cumplimiento del Plan Ambiental corpaire ha mantenido los indicadores bajo los exigentes índices europeos y no hemos tenido un solo día de riesgo por el aire de Quito.

Se recogen y procesan 92.00 galones de aceites usados con la empresa Biofactor. Estos, antes se desalojaban por las alcantarillas con grave daño ambiental. Con la empresa Fabribat se reciclan las baterías de autos y el próximo año iniciaremos con el manejo de las pilas, incluidas las de los celulares. Es importante destacar también que actualmente con la participación de 30 colegios se realiza la recolección selectiva de plásticos con un total de 25 toneladas mensuales; en el 2008 se trabajará con 300 colegios y se aspira recolectar unas 150 toneladas mensuales.

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En el campo económico el proyecto más importante de Quito es el nuevo aeropuerto que de tantos comentarios ha sido objeto. En esta ocasión no voy a profundizar sobre este tema pero si voy a reiterar que he iniciado acciones legales en la Fiscalía de Pichincha para que se establezca si hay o no irregularidades; he solicitado a la Contraloría un examen completo de todos los procesos y he pedido a la Corpaq que contrate una auditoría independiente para analizar, una vez más, las condiciones económicas y financieras del contrato. Si es que existieren irregularidades, exigiré que éstas sean severamente sancionadas, pero lo que no se puede hacer es detener este proyecto vital para el Ecuador y para Quito.

Junto al aeropuerto se están desarrollando proyectos para que funciones una Zona Franca, un parque tecnológico y un polígono logístico. Así Quito tendrá el puerto seco que requiere vitalmente para su desarrollo.

A más de construir infraestructura vial, turística y prestar servicios básicos, estamos promoviendo la producción de bienes y servicios mediante la atracción de inversiones y la capacitación para la modernidad, como una herramienta básica para resolver los problemas de inequidad social.Con el ánimo de modernizar el enfoque productivo de la Región Quito-Pichincha, el Municipio Metropolitano ha entregado a la comunidad empresarial sendos estudios sobre las nuevas oportunidades para exportar servicios, acerca de lo que deben hacer los empresarios locales, para mejorar el uso de las tecnologías de información y comunicación.

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Para promover el empleo y el emprendimiento por parte de los habitantes de Quito, el Municipio creó la Agencia de Desarrollo Local llamada CONQUITO que en tres años de trabajo se ha conectado con 17.320 desempleados y 593 empresas, logrado la colocación de 7.745 personas.

CONQUITO también ha capacitado a 27.509 personas en fundamentos empresariales, ha otorgado 1.053 microcréditos, ha incubado y fortalecido a 110 pequeñas empresas, otorgado asistencia técnica a 9.516 personas y ha prestado 2.660 asesoramientos empresariales.

También ha capacitado a 265 empresarios en exportación de bienes y servicios, mercadeo electrónico, digitalización de empresas y mejor uso de las tecnologías de la información y las comunicaciones.

En materia turística la Corporación Metropolitana efectúa un trabajo muy eficiente por lo cual el ingreso de turistas extranjeros que en el año 2000 era de 283.000 visitantes en el año 2007 ha llegado a 430.000. Con esto se han creado fuentes de ocupación directa e indirecta, como forma práctica de redistribución inmediata de los frutos del progreso turístico.

El empleo generado por los proyectos municipales ha colaborado con la disminución de los pobres del 50.6% a 19% entre el 2000 y el 2007. La pobreza extrema bajó en el mismo lapso del 10.1% al 5.1%. Y el índice de desocupación en la ciudad de Quito disminuyó de 13.3% a 9.97%.

Finalmente, todo el proceso financiero se encuentra controlado, además de la auditoría interna y la Contraloría del Estado, por Quito Honesto, la comisión distrital para combatir a la corrupción.

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Deseo referirme de manera particular a las Parroquias rurales que han recibido una especial atención en nuestra administración. Hemos trabajado armónicamente con las parroquias en proyectos de agua potable, alcantarillado, y adoquinados. Se han realizado importantes trabajos de rehabilitación y puesta en valor de plazas, iglesias y edificios patrimoniales en 31 de las 33 cabeceras parroquiales. El próximo año se trabajará en las dos restantes.

Me referiré ya para terminar a la presencia quiteña en el mundo. En el presente año el Alcalde de Quito fue reelegido como copresidente de Ciudades y Gobiernos Locales Unidos y como presidente del Agencia de las Naciones Unidas para los Gobiernos Locales (UNACLA). Hace pocos días recibió el premio a la Excelencia en el Servicio Público junto con otros seis funcionarios de América, conferido por la OEA, UNITAR, CIFAL Y CAF, luego de analizar más de 200 candidaturas del continente.

El parque museo del agua Yaku recibió el premio latinoamericano “Placa Empresarial 2007” por su aporte a una nueva cultura de preservación y manejo responsable del agua; la EMOP y la EMAAP recibieron en Madrid el Trofeo Internacional de la Construcción. La EMAAP recibió adicionalmente la medalla de oro a la excelencia otorgado por la Corporación Ecuatoriana de Calidad Total y el Colegio Sebastián de Benalcázar el Premio Iberoamericano por la Excelencia Educativa 2007.

Mi administración, como obra de humanos, podrá adolecer de errores, pero nunca de indolencia, desidia, descuido o despreocupación. Nos hemos dado enteros a

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la causa del rescate de Quito y en el próximo año, último de este período debemos apretar aún más el acelerador, ser más dedicados, más eficientes, más comprometidos para alcanzar las metas que nos hemos propuesto y que el pueblo espera ver realizadas.

Pero Quito no son su Alcalde y su Municipalidad; son especialmente los hombres y mujeres que desde diversas actividades forjan su grandeza.

El día 1º de Diciembre que rememoramos la resistencia indígena entregamos el premio Rumiñahui de Oro a empresas y personas de las artes, las ciencias, el mundo empresarial y a servidores públicos, muchos de ellos niños, niñas y adolescentes.

En esta sesión hemos conferido condecoraciones a personalidades que se han destacado por una vida de servicio a la patria y a la ciudad. A todos felicito. Todos ustedes son un ejemplo de vida digno de emular. Deseo con el permiso de todos los condecorados, permitirme destacar la condecoración a Alejandra Cantos, perseguida y expatriada por el crimen imperdonable de su pureza, su vocación de servicio y su honestidad.

Agradezco al Concejo Metropolitano que casi sin excepción ha conformado un poderoso equipo de trabajo, aportando con el marco legislativo y la fiscalización así como coadministrando áreas específicas de la acción municipal; a los funcionarios, empleados y trabajadores municipales por su cada vez mayor comprometimiento y profesionalismo y una mención muy especial al Banco Interamericano de

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Desarrollo y a la Corporación Andina de Fomento principales socios estratégicos de nuestro desarrollo.

Agradezco especialmente al pueblo de Quito, que es el principal actor de su propio desarrollo pues nuestra gestión ha privilegiado la participación ciudadana, como una forma democrática de gobernar, compartiendo las decisiones con los ciudadanos para que sea sostenido y durable su desarrollo.

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6 DE DICIEMBRE DEL 2008

Cuando en el año 2000 asumí la Alcaldía de Quito, presenté algunas reflexiones sobre el significado de iniciar una gestión con el cambio de siglo y sobre las

nuevas circunstancias que vivía la humanidad: la revolución técnico científica, la globalización económica, el colapso del llamado socialismo real y los efectos de la aplicación de las tesis neoliberales.

Del mismo modo hice referencia a las circunstancias que vivían el país y la ciudad, a la grave crisis moral, económica, política e institucional, a lo positivo de la firma de la paz con el Perú - al margen de cualquier consideración sobre el acierto de las negociaciones- y a la necesidad de enfrentar los retos del nuevo siglo con cambios radicales, porque “no era posible seguir haciendo más de lo mismo con los mismos personajes y los mismos resultados.”

Conforme a los cambios de inicios del siglo y el milenio, defendí la necesidad de un nuevo enfoque geopolítico a la gobernabilidad democrática del Ecuador, que reconozca las limitaciones del modelo centralista y la importancia de los gobiernos locales, reforzando los procesos de descentralización que, con relativo éxito se venían ejecutando.

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Al término del segundo período de la administración que he presidido, la ciudad y el país han experimentado un proceso de transformaciones que era previsible y deseable, toda vez que respondía a un mayoritario clamor popular y porque objetivamente obedece al agotamiento de instituciones y sistemas de gobernabilidad que fueron diseñados a la luz de los que los esposos Toffler calificaron como un éxtasis colectivo y un júbilo insensato, de quienes proclamaban el fin de la historia.

Lo lamentable es que en dos décadas de una geopolítica unilateral, inspirada en visiones unidimensionales de la historia, la sociedad y la economía, la situación de la humanidad en su conjunto no ha mejorado, la pobreza y la enfermedad amenazan la supervivencia de pueblos enteros, la brecha entre ricos y pobres se ha agrandado, el deterioro ambiental es alarmante y la economía ha sufrido un espectacular descalabro, forzando a los líderes del mundo a volver a la realidad y, esperamos que a la cordura, para reconocer el papel importante del Estado para hacer posible el desarrollo, la justicia social, la inclusión y la convivencia en paz.

En sentido contrario, es importante reconocer de manera objetiva que nuestra ciudad ha mejorado. Todos los índices sociales y económicos así lo demuestran y por eso, Quito se ha convertido en un referente a nivel nacional e internacional, comprobando así la validez de la propuesta de construir una ciudad productiva y competitiva, incluyente, equitativa y democrática, sobre la base de una gestión fundamentada en la planificación estratégica, el manejo honesto de los recursos, la selección de los mejores hombres y mujeres en el equipo de

(Pag. Siguiente)Sesión Solemne por la Fundación de Quito6 de Diciembre del 2008

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gobierno y el estímulo a la participación público privada en los temas del desarrollo.

En los dos períodos de mi gobierno hemos sido fieles a la planificación socialmente acordados por la comunidad quiteña, que plantea la promoción de una economía productiva, competitiva y diversificada, que proporcione bienestar a la población en su conjunto; de una sociedad equitativa e incluyente, que respete la diversidad cultural, se comunique y aprenda; de un territorio eficazmente ocupado en términos de equidad social y sostenibilidad ambiental; y, de una cultura política ciudadana, que haga posible la construcción democrática de lo público.

Hemos sido fieles también a la visión de un gobierno local cuyo deber fundamental es defender el valor inalienable de la persona humana, de cada persona y de todas las personas. De hombres y mujeres concretos que piensan, sienten, quieren, temen, se organizan, participan y buscan darle un significado y dirección a su existencia.

A la construcción colectiva de una ciudad que se reconoce diversa, cuyo pueblo de mestizos, indios, negros y blancos ha logrado una convivencia en paz; una ciudad plural y tolerante, abierta a todas las corrientes de pensamiento: filosóficas, políticas y religiosas; la ciudad de la palabra; del diálogo constructor y fructífero, que debate, disiente y argumenta para encontrar soluciones negociadas a sus contradicciones y conflictos. La ciudad de los acuerdos y consensos que construye su progreso en paz.

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Además del reto de ser la primera alcaldía del milenio, nos correspondió, también, ser la administración que conduciría a la ciudad a las celebraciones del bicentenario de la revolución quiteña de 1809. Y nos planteamos, inspirados en el pensamiento de Espejo y en la heroica lucha de los héroes de nuestra independencia, llegar al bicentenario con un pueblo liberado, en lo que estuviese a nuestro alcance de la oprobiosa marginalidad, de la exclusión y la injusticia.

En cumplimiento de la obligación democrática de rendir cuentas ante la comunidad el día 21 de noviembre detallé los programas y proyectos, así como su nivel de cumplimiento. Además hemos publicado un libro con el informe a la ciudad sobre el trabajo realizado. Por esta razón solamente diré que hemos llegado a todos los barrios y parroquias con los servicios básicos. La casi totalidad disponen de electricidad, agua potable, alcantarillado, vías pavimentadas de acceso, parques e instalaciones comunitarias.

El patrimonio cultural de Quito está recuperado y despierta el interés y admiración de ecuatorianos y extranjeros, luce mejor que nunca, del mismo modo que los centros urbanos de las 33 parroquias.

Decidimos poner a Quito en el mapa del turismo mundial y lo hemos logrado. El negocio turístico es trascendental para nuestra ciudad y para el país. Hoy Quito es un importante centro mundial de convenciones, y se beneficia de más de 600 millones de dólares anuales que benefician a amplios sectores económicos y sociales vinculados a esta importante actividad.

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Planteamos convertir a Quito en una ciudad digital, con los pies firmes en la sociedad del conocimiento. Combatir la exclusión digital, hemos trabajado para que no haya niño, niña ni adolescente que no tenga acceso a la computación y a Internet.

Para apoyar a la productividad y competitividad creamos una agencia de desarrollo local denominada CONQUITO, que cuenta con la factoría del conocimiento, bolsa de empleo, incubadora de empresas de base tecnológica, promoción de micro empresas y microcréditos, agricultura urbana, comercio electrónico, entre otros.

El aeropuerto de Quito avanza, a pesar de la campaña en contra que ha soportado este proyecto. La alcaldía publicó un libro explicando su desarrollo y con todos los documentos relacionados en un disco anexo. Quiero ser muy claro. Soy una persona que toma decisiones, por supuesto a la luz de análisis objetivos, aceptando riesgos y calculando relaciones de costo y beneficio. Decisiones mías, en momentos cruciales de la historia del Ecuador evitaron grandes daños a nuestro país.

La decisión tomada el año 2002, en el marco de una grave crisis interna, cuando el terrorismo internacional había destruido las Torres Gemelas, con precios del petróleo fluctuando en los 14 dólares por barril, frente a una propuesta del gobierno del Canadá y con financiamiento directo de los gobiernos de ese país, de los Estados Unidos de América y de instituciones como el Banco Interamericano de Desarrollo y el Banco de Exportaciones e Importaciones de Washington, fueron las correctas. Las volvería a tomar. ¿Cuánto le habría costado

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a Quito si por pusilanimidad o cobardía no hubiésemos realizado la tan criticada concesión? ¿Cuánto le costaría algún intento irresponsable de detener el proyecto?

En el área social hemos realizado avances significativos Triplicamos el número de alumnos del subsistema y duplicamos el de maestros, dotamos de modernas infraestructuras a la educación municipal y a las actividades deportivas y recreacionales.

En el campo de la cultura hemos multiplicado museos, cines, salas de concierto, centros de convenciones y centros culturales, a la vez que hemos enriquecido la agenda cultural de nuestra ciudad poniéndola a la altura de cualquier capital de América.

Hemos defendido el ambiente, protegiendo el suelo, el agua, el aire, modernizando la gestión de los desechos sólidos, produciendo y sembrando millones de árboles y manejando los desechos peligrosos.

Hemos creado la Dirección de Inclusión Social, el Consejo y las Juntas de Protección de niños, niñas y adolescentes, el Consejo de discapacidades, las casas de justicia, el centro de solución pacífica de conflictos, las oficinas para asuntos indígenas y de afroecuatorianos, casa para niños trabajadores y personas de la tercera edad, la casa de las juventudes, entre otros proyectos...

El tema que nos ha causado mayor preocupación ha sido el de la movilidad. Estamos aplicando el plan estratégico que ha sido actualizado y debatido por todos los sectores de la sociedad

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quiteña; aplicamos consistentemente las recomendaciones de los mejores expertos del mundo, conscientes de que no existen soluciones fáciles y de corto plazo para este problema.Sin ser competencia directa del gobierno local hemos trabajado mucho en el tema de la seguridad y creo que hemos cumplido satisfactoriamente la parte que asumimos.

Creamos el consejo Metropolitano y los consejos zonales de Seguridad, la Corporación de Seguridad, el Centro de Atención de emergencias, el observatorio de la convivencia y seguridad, la tasa de seguridad, con esos recursos apoyamos a la Policía Nacional y a la Fiscalía, fortalecimos al Cuerpo de Bomberos y a la Policía Metropolitana. Sin embargo los resultados son magros y serán necesarios esfuerzos combinados de la legislatura, la función judicial, el ministerio público, la rehabilitación social, los medios de comunicación, los gremios y la sociedad para detener la ola de violencia que nos amenaza.

Algo hemos hecho, queda mucho por hacer, las ciudades son siempre proyectos inacabados, son tarea de muchas las generaciones; lo que no pueden hacer las ciudades es detener el ritmo de su desarrollo, muchas veces en pocos años se ha destruido el trabajo acumulado de décadas. Esto en Quito, estoy seguro, no pasará. Me referiré ahora a la posición de Quito y sus autoridades frente a los acontecimientos trascendentes que ha experimentado el país en el último año. De las calles de Quito y de la enérgica actuación de su pueblo se originó el proceso de cambios que enfrentamos. Hemos apoyado la mayoría de quiteños y quiteñas el proceso constitucional aún

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reconociendo las falencias detectadas. Creemos con todos los errores que seres humanos puedan haber cometido, todo es mejor que volver al pasado de oprobio, a la inestabilidad política y al caos institucional en que hemos vivido.

Aportamos con los trabajos de la Asamblea Constituyente, con propuestas que fueron debatidas con la comunidad, especialmente en los temas de desarrollo territorial, descentralización y autonomías. La nueva Carta Constitucional recoge muchas de nuestras sugerencias.

Una vez que la nueva Constitución entró en vigencia, el Concejo Metropolitano inició un serio esfuerzo legislativo para adecuar la estructura institucional al nuevo ordenamiento, a la vez que el Instituto de la Ciudad, nuestro Centro de análisis e investigación, preparó un proyecto de Estatuto Autonómico que esta siendo debatido con todos los sectores de la población quiteña.

Es importante destacar que el Distrito Metropolitano de Quito existe, tiene su ley orgánica constitutiva; no se requiere crearlo siguiendo los trámites que la nueva Constitución establece para nuevos Distritos que a futuro se puedan crear; por esta razón, presentaremos a la Comisión de Legislación y Fiscalización nuestro proyecto a fin de que se reforme la ley de creación adecuándola al nuevo marco constitucional.

La economía mundial sufre una grave recesión que afectará sin duda a nuestro país y a nuestra ciudad. La historia nos muestra como siempre los efectos de las crisis los sufren especialmente los más débiles. Esto es lo que hay que evitar.

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Los bajos precios del petróleo, la disminución de las remesas, la apreciación del dólar, al aumento del costo del financiamiento externo, la reducción de flujos de dinero a la economía, la caída del valor de nuestras exportaciones, la menor inversión privada y pública son elementos que debemos tomar en cuenta para diseñar estrategias anti crisis que atenúen sus efectos y conviertan la crisis en oportunidades.

Creo que es muy importante que defendamos, por sobre todas las cosas el empleo; para esto la inversión en obra pública nacional y local debe mantenerse por lo menos en los niveles actuales; como debe, también estimularse la inversión privada nacional y extranjera.

La población debe fortalecer las respuestas solidarias para que los pobres no paguen los costos de los malos manejos de la economía mundial. La canasta solidaria, el fondo solidario para el seguro de salud, el sistema de becas, los proyectos de protección social, la promoción de micro empresas y los micro créditos y todo lo que seamos capaces de imaginar y diseñar con ese fin debe ser preocupación prioritaria de la Alcaldía, como sin duda lo será del gobierno central.

Con seguridad, éste será mi último mensaje como alcalde de Quito, Creo que hemos cumplido un ciclo de servicio leal, honesto y esforzado a la comunidad. La historia sabrá juzgarlo. Nos encontramos en pleno proceso electoral que espero sea un especio de reflexión, debate de repropuestas e ideas y no de vanas confrontaciones que degradan la actividad política y dejan saldos de resentimientos muchas veces irreparables.

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Convoco a los mejores quiteños y quiteñas a que se comprometan con la ciudad, con su presente y futuro, presentándose como candidatos y candidatas a la alcaldía y a las concejalías. Estoy seguro que nuestro pueblo tendrá excelentes opciones para escogen a sus mandatarios. No habrá mejor premio para mi esfuerzo y dedicación que entregar la Alcaldía a personas que superen nuestros modestos logros, corrijan nuestros errores y conduzcan a Quito con certezas al logro de sus metas de desarrollo.

Al término de mi intervención, expreso mi felicitación a la Junta de Andalucía, a nuestro sistema de equidad y justicia “Tres Manuelas”, al Ballet Ecuatoriano de Cámara y a las destacadas personalidades quienes, como un justo reconocimiento de sus virtudes personales, cívicas, políticas y profesionales han recibido las preseas con las que el pueblo de Quito, representado por su Consejo, y previa la observación de severas reglas, ha discernido en su favor. Que su ejemplo estimule a las generaciones actuales y a las futuras a un serio comprometimiento con el desarrollo personal, familiar y comunitario que permita la construcción colectiva de la ciudad que amamos y nos merecemos.

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DÍA DE LA MUJER(8 de marzo 2007)

El análisis objetivo del proceso de desarrollo histórico de la humanidad nos permite observar un progresivo avance hacia metas cada vez más altas de

conocimiento, respeto a los derechos humanos políticos y sociales, ampliación de la libertad y valoración de la paz.

La democracia, sistema político que reconoce como origen y titular del poder político al pueblo y concibe al gobierno como una organización que se justifica en la búsqueda del bien común, aun reconociendo que se encuentra profundamente condicionada por las relaciones reales de poder, ha sido y es sin duda el mejor escenario para que la búsqueda incesante de la especie humana de formas mejores y mas justas en las múltiples y diversas relaciones indispensables para la supervivencia de seres que sólo son concebibles viviendo en comunidad.

Sin embargo, es indispensable entender que los desarrollos en el campo del conocimiento; en la conquista aunque relativa de la libertad; en la valoración de la paz como un bien supremo y en la administración de los conflictos mediante el empleo de instrumentos políticos, se ha alcanzado, paradójicamente, gracias a la lucha heroica e incesante de hombres y mujeres extraordinarios que sacrificando lo más valioso, sus propias

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vidas, fueron y son grandes impulsores del desarrollo espiritual y material de los pueblos.

Ese es el caso de las mujeres trabajadoras que un día como hoy, en la ciudad de Nueva York rindieron el tributo de sus vidas luchando por condiciones dignas y humanas para su trabajo y por un salario justo; ese es también el caso de tantas ecuatorianas que a lo largo de los siglos han sido referentes y paradigmas de la lucha por alcanzar una relación equitativa y no discriminatoria en las relaciones familiares, sociales y políticas: Manuela Saénz, Manuela Cañizares, Dolores Cacuango, Marietta Veintimilla y tantas otras figuras que enaltecen las páginas de nuestra historia nacional.

Entre esas personas excepcionales tenemos hoy con nosotros a una luchadora incansable por las mejores causas de la justicia y la libertad: Nela Martínez. Mujer firme en sus principios, leal a sus ideales, empecinada en sus utopías, ejemplo de convicciones hondas y sensibilidades tiernas frente al dolor de los pobres, a la postergación de las mujeres, a la marginación de los indios, al dolor de todos los que sufren.

Mujer, así mismo, insobornable en la defensa de sus principios, inclaudicable en la lucha en contra del fascismo opresor, violento, infamante y cobarde; contra el poder que humilla, denigra y si no somete asesina; contra los que sacrificaron todo, aún los sagrados intereses territoriales de la Patria, a sus mezquindades y apetitos; contra los que usaron la palabra para llegar al corazón sencillo de los pueblos ofreciéndoles soluciones mágicas para sus vidas atribuladas, a cambio de un poder que después usaron para hacer más duras aún esas tribulaciones.

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Ese es el caso, también de la hermana María Filomena Saveria Petilli, misionera italiana de la congregación Sagrado Costado, mujer que dedica cada minuto de su día y cada día de su vida a atenuar el dolor de los habitantes humildes de barrios tan populosos como Roldós y Pisulí en los que familias pobres de todos los rincones de nuestra patria han encontrado un pedazo de suelo en que edificar sus esperanzas.

Ella dirige un centro de salud que es ejemplo de eficiencia y de trato amable a los dolientes; atiende solidariamente a más de 150 ancianos que acuden por una comida entregada con amor y recibida con dignidad en el comedor San Judas Tadeo; cuida de los alcoholicos anónimos que luchan por su propia redención, mantiene los talleres artesanales para mujeres de escasos recursos, apoya a un magnífico centro educativo que regenta su comunidad; en fin, es ejemplo de ternura, amor y dedicación abnegada a la causa de la solidaridad con los quiteños y quiteñas de menores recursos.

Cuánto acierto el de la Comisión de la Mujer, el Niño y la Familia al haber elegido a estas dos mujeres ejemplares para recibir el homenaje de reconocimiento por su lucha y por su entrega. En ellas, el gobierno municipal y la ciudad entera rinden su tributo de admiración a todas la quiteñas que cada día en las más diversas actividades, enfrentando obstáculos que aún no han sido removidos, entregan generosas las especiales virtudes con ola que Dios privilegió a su género para salir adelante con sus familias y contribuyen con su trabajo al engrandecimiento de la comunidad.

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Pero el camino por recorrer en el logro de la conformación de una sociedad incluyente es todavía largo. En momentos difíciles como los que soporta la sociedad ecuatoriana, cuando la corrupción y politiquería han postrado en la pobreza y en la indigencia a las mayorías; cuando las familias se descomponen porque los progenitores deben buscar en sitios lejanos el pan digno que en el país no encuentran, las principales víctimas de esta situación son precisamente las mujeres, los ancianos, los niños, los indios y los negros, sectores vulnerables que soportan con mayor crueldad los efectos perniciosos de la irresponsable administración de los negocios públicos y privados.

El camino por recorrer es largo porque todavía las mujeres son víctimas de violencia en el seno de sus propios hogares, porque su trabajo no es remunerado con justicia, porque debe trabajar, a veces, de sol a sol, en detrimento de su salud; porque la mayoría de ellas no ha alcanzado la verdadera libertad para decidir sobre su vida, su tiempo ni su cuerpo; porque todavía en el mundo millones de niñas son mutiladas en sus órganos íntimos como consecuencia de costumbres ancestrales, o son transformadas en mercancía por mafias de prostitución y pornografía, o trabajan en fabricas del mundo dependiente, en condiciones tan precarias como las de la Inglaterra de la revolución industrial, para hacer posible la competitividad de empresas transnacionales que buscan reducir sus costos de producción por la cómoda vía de reducir salarios.

Intervención Alcalde de Quito Inauguración Conferencia Regional de La Mujer en América 6 de Agosto 2007

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Por estas razones es necesario reiterar en una ocasión como esta nuestro compromiso con la construcción de un proyecto de ciudad solidario, equitativo y que se fundamente en la justicia social, el mismo que debe hacer suyas las justas reivindicaciones de las mujeres ecuatorianas que proponen una nueva conceptualización de la ciudadanía, que les permita afirmar mecanismos para una mayor y mejor participación ciudadana, la vigencia plena de su derecho a vivir sin ser víctimas de violencia, la igualdad de oportunidades, el respeto a la autonomía y autodeterminación sobre aspectos vitales de su existencia como los sexuales y reproductivos, la representación política en todos los ámbitos de decisión, la incorporación del enfoque de género en la planificación del desarrollo y la institucionalización de políticas públicas para superar las desigualdades y el reconocimiento y respeto de las distintas estructuras familiares existentes, para alcanzar la meta de una ciudad en la cual las mujeres y los hombres se reconozcan como compañeros de lucha en la construcción de una sociedad incluyente, justa, equitativa y solidaria

Deseo terminar mi intervención expresando mi reconocimiento a la mujer quiteña, a su esforzada lucha por vivir con dignidad y llevar un pan humilde pero honesto a sus hogares; a nuestras compañeras municipales funcionarias, empleadas y trabajadoras que sirven a la ciudad con abnegación y aportan al constante mejoramiento material y espiritual del Distrito; a las dignas, inteligentes y activas concejalas que son ejemplo de trabajo y de voluntad puesta al servicio de las causas de Quito y, finalmente, a mi madre, a mi esposa, a mi hija y, en ellas, a todas las mujeres de una familia que tanto apoyo siempre me ha entregado.

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DÍA DE LA MUJER8 de Marzo del 2003

En este año, Quito cumple los 25 años de su declaratoria por parte de la UNESCO, como Patrimonio Cultural de la Humanidad. La primera ciudad, junto con Cracovia

en merecer esta nominación como justo reconocimiento a su extraordinario entorno geográfico, a su excepcional legado cultural y a los aportes singulares entregados por sus artistas al arte americano y universal.

Para celebrar este aniversario el pueblo quiteño y sus instituciones, con el liderazgo de la Ilustre Municipalidad, han preparado un amplio programa que busca hacer de esta celebración la ocasión oportuna para reforzar nuestra autoestima, nuestra identidad forjada en miles de años y nuestro sentido de pertenencia a una colectividad reconocida mundialmente por sus valores y virtudes especiales.

En el marco de estas celebraciones, como uno de los eventos sobresalientes, el Distrito Metropolitano de Quito presenta Mujeres en la Danza, el Primer Festival Nacional y encuentro de mujeres hacedoras de la danza, organizado por la Fundación Casa de la Danza, dirigida por Susana Reyes y Moti Deren, institución que ha trabajado con gran dedicación y esmero en la última década para enriquecer y fortalecer la danza en el conjunto de las demás expresiones

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artísticas, así como para el desarrollo de la comunidad desde el arte; razones fundamentales para que la Municipalidad haya acogido y patrocinado esta estimulante iniciativa con la que abrimos la rica programación preparada para todo el presente año.

Por otra parte, el inicio de este festival nacional, se realiza en el día que la humanidad dedica a enaltecer la memoria de las heroicas mujeres que rindieron el tributo de sus vidas luchando por un salario justo y condiciones dignas y humanas en su trabajo, en la ciudad de New York; y para destacar los aportes que en cada país, en cada ciudad, en cada comunidad han brindado las mujeres para la construcción de sociedades más justas, solidarias e inclusivas.

Ese es, en nuestro caso el aporte de ecuatorianas que han sido paradigmas a lo largo de los siglos en la lucha persistente por lograr una relación equitativa y no discriminatoria en las relaciones familiares, sociales y políticas: Manuela Saénz, Manuela Cañizares, Manuela Espejo, Dolores Cacuango, Marietta Veintimilla, para citar apenas a unas pocas mujeres de perfiles extraordinarios en las que quiero representar y rendir mi homenaje a los cientos de miles de luchadoras incógnitas que han hecho el reconocimiento de los derechos de las mujeres en el Ecuador.

Ese es también el caso del aporte brindado por las pioneras y maestras de la danza ecuatoriana a las que se rendirá especial y merecido homenaje en esta noche, por su aporte al desarrollo de las expresiones artísticas en general y porque orientaron su intensa actividad a poner al alcance de todos y todas la participación en actividades culturales, superando

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las usuales limitaciones y prejuicios sobre la participación de la población femenina en estas actividades.

Damos pues inicio a esta intensa semana de actividades dedicadas al arte de la danza en la cual podremos disfrutar de un festival coreográfico destinado a resaltar el potencial creativo de la mujer ecuatoriana, un evento que ha logrado reunir a maestras nacionales, críticos nacionales e internacionales y personalidades de la cultura que participarán en talleres, foros y mesas redondas dedicadas a fortalecer las expresiones culturales de nuestra ciudad y país.

Agradezco a todos y todas por su entusiasta y decidida participación, auguro los mejores resultados para la programación y declaro inaugurado el aprimer Festival Mujeres en la Danza con este verso: “Alza tu canto Jacinta, y que llegue a los cielos, al monte, al río y al mar, este canto del alma, plegaria del corazón”

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DIA DE LA MUJER(8 de marzo de 2005)

El 8 de marzo, la humanidad conmemora el día universal de la mujer en memoria de las trabajadoras que en la ciudad de Nuerva York rindieron el tributo

de sus vidas luchando por condiciones dignas y humanas para su trabajo y por un salario justo.

También es la fecha en la que los ecuatorianos recordamos a tantas mujeres que a lo largo de los siglos han sido referentes y paradigmas de la lucha por alcanzar una relación equitativa y no discriminatoria en las relaciones familiares, sociales y políticas: Manuela Saénz, Manuela Cañizares, Manuela Espejo, Dolores Cacuango, Marietta Veintimilla y tantas otras figuras que enaltecen las páginas de nuestra historia nacional.

El pueblo de Quito, en su Plan, socialmente concertado, Equinoccio 21 ha planteado la necesidad de construir una ciudad incluyente, justa y solidaria y específicamente hacer viable el logro de los derechos de las mujeres que viven en nuestra bella y querida ciudad, así como asegurar su importante y enriquecedora a participación democrática.

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La dedicada y entusiasta actividad que desarrolla la Asociación de Damas de la Cámara de la Pequeña Industria de Pichincha en beneficio de Quito y, especialmente de los sectores más necesitados de su población, demuestra de manera clara la importancia de la participación de las mujeres en los aspectos más importantes de la vida social, política y económica de este Distrito.

La participación de mujeres patriotas y dignas en la marcha de Quito, es otra demostración de la importancia creciente de nuestro género en la búsqueda de soluciones democráticas para enfrentar los retos de una convivencia solidaria y de paz.

Felicito a la dinámica presidenta del la Asociación, señora Clemencia Cueva de Egüez, por esta gran iniciativa que permite rendir homenaje a las mujeres de la ciudad, provincia y país, mediante la organización de este mega evento en que se exhiben productos y servicios dedicados a lo que más nosotras apreciamos, esto es nuestro hogar.

Pero deseo felicitar de manera muy especial la decisión de acompañar esta importante Mega Feria con eventos de corte académico que se realizarán paralelamente para discutir temas vinculados a estas trascendentales conmemoraciones.

Deseo el mejor de los éxitos a esta Feria que tiene el noble fin de recaudar fondos para la construcción, adecuación y mantenimiento del hogar de niñas del Divino Niño Jesús. Dios sabrá recompensar estas muestras de amor y solidaridad con los sectores más vulnerables y que requieren de nuestra mayor preocupación.

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Al declarar inaugurada esta Mega Feria, expreso mi afectuosa felicitación a las organizadoras, les deseo que alcancen los objetivos que se han trazado; saludo y me congratulo con los expositores para quienes auguro, así mismo, la realización de excelentes negocios y hago votos porque la Cámara de la Pequeña Industria siga desempeñando en Quito el importante papel de dinamizadora de su economía, así com que continúen aportando al mejor desarrollo de nuestra bella ciudad, patrimonio cultural de la humanidad.

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DÏA DEL PATRIMONIO(8 de septiembre del 2006)

Retomamos mi intervención inaugural. Habíamos reflexionado sobre los cambios dramáticos que enfrenta la humanidad a inicios del presente siglo.

De las amenazas que afectan a la propia supervivencia de la civilización humana.

De los cambios geopolíticos que está experimentando el mundo. De la estrecha vinculación entre la democracia y los gobiernos locales y del siglo de las mujeres y las ciudades.

Reconocimos que el subdesarrollo, la dependencia y la sociedad patriarcal son caras distintas de una misma moneda. La lucha por salir del subdesarrollo y dependencia implica superar los límites de la sociedad patriarcal.

La sociedad patriarcal fundamenta en valores sociales que imposibilitan un desarrollo humano auténtico al impedir o dificultar la realización plena de las mujeres como personas, lo cual implica una limitación para la mitad del capital humano, el más importante para lograr el desarrollo de los pueblos.

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La situación es doblemente discriminatoria cuando las mujeres pertenecen a las clases sociales postergadas o suman a la exclusión por género otras por razones raciales, religiosas o de cualquier naturaleza.

Los valores, conductas, actitudes y comportamientos de la sociedad machista deben ser drásticamente modificados para construir una sociedad basada en la igualdad, la libertad, la paz y la inclusión.

En la actualidad, los roles aceptados como buenos en la sociedad patriarcal conceden al hombre el manejo del poder y la capacidad casi exclusiva de decidir en los temas fundamentales; la mujer tiene verdadera libertad para decidir sobre su vida, su tiempo, su religión y su cuerpo.

Se ha ganado la igualdad frente a la ley, pero la herencia patriarcal le sigue asignando a la mujer roles inferiores; Las decisiones de la mujer siempre van matizadas por una relación de dependencia, no de autonomía.

La cultura paternalista y machista margina a la mujer de funciones y decisiones fundamentales.

El ambiente cultural hace de la mujer un ser poco solidario con otra mujer. Se convierte en competidora y adversaria. Existe poca solidaridad entre mujeres. Una mujer es casi sinónimo de peligro para otra mujer.

El trabajo de la mujer es considerado como complementario y sigue siendo subvalorado, subestimado, mal pagado y en su mayor parte invisible, y aunque son las mujeres las que hacen

(Pág. Siguiente)28º Aniversario de la declaración de Quito Patrimonio de La Humanidad (8 de Septiembre del 2006)

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entre el 60 y 75 % del trabajo del mundo, éstas ganan solo el 10% del total de salarios y son dueñas de menos del 1% de toda la propiedad privada mundial.

La mujer trabaja en ocasiones con doble jornada y hasta triple jornada, en detrimento de su descanso o recreación.En temas como el de la seguridad, son las mujeres las principales víctimas de violencia y abuso sexual en el seno mismo de las familias.

En la política los partidos políticos tradicionales generalmente omiten temas como el de la liberación femenina y de la participación de las mujeres en la toma de las decisiones más importantes de las cúpulas partidarias.

En el campo de la educación es en el que mayores adelantos pueden observarse: El porcentaje de mujeres en las universidades creció drásticamente en los años 60 y 70 y casi igualó al de los varones. Muchas de estas mujeres trabajaban en la burocracia pública y privada.

Es, por lo mismo, muy importante que el gobierno metropolitano aproveche de esta nueva celebración para reafirmarse en sus principios de la no discriminación y que todos los seres humanos nacemos libres e iguales, en nuestra voluntad de garantizar en el ámbito de nuestras responsabilidades, la igualdad en el goce de los derechos económicos, sociales, culturales, civiles y políticos, para hombres y mujeres, nuestra convicción de que el desarrollo sostenible exige la participación de la mujer, que como en otras materias la democracia en el hogar es fundamento esencial para una verdadera democracia en la ciudad y el país.

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CONGRESO DE CIUDADES AMERICANAS PATRIMONIO DE LA HUMANIDAD

(Septiembre 2003)

Quito, sus autoridades y habitantes dan la bienvenida afectuosa a los Representantes de las Ciudades Americanas que ostentan el reconocimiento

de Patrimonio Cultural de la Humanidad y les agradece por haber aceptado la invitación para participar en las celebraciones programadas con ocasión de celebrarse los 25 años de su nominación por la UNESCO.

Debo, penosamente, iniciar mi intervención, informándoles, con sincero pesar, del fallecimiento del Alcalde de Trinidad, Cuba, Arquitecto Roberto Lopez Bastidas, quien había comprometido su participación en ésta reunión.

El arquitecto López se distinguió como uno de los más dinámicos Alcaldes de esa bella y singular ciudad y fue el gran impulsor de su desarrollo. Su muerte acongoja a su familia, amigos y a su país. Como postrer homenaje a su memoria les invito a guardar un minuto de silencio.

Al retomar esta exposición, quiero exteriorizar al señor Alcalde de la ciudad de Puebla, México, don Luis Eduardo Paredes Monteczuma y al ex Alcalde don Jesús Cantú, el alto aprecio y reconocimiento por haber cedido a Quito, con gran sensibilidad, la sede de esta importante reunión.

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Cumplo con el grato deber de expresar el reconocimiento del Municipio Metropolitano a la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, por el apoyo eficiente y oportuno en los preparativos de la Segunda Reunión de Ciudades Americanas Patrimonio de la Humanidad.

Esta segunda reunión se desarrolla en circunstancias muy especiales para muestra ciudad, cuando se cumplen los 25 años de la nominación como Patrimonio Cultural y constituye uno de los eventos centrales de tan importante celebración.

Quito ha logrado llegar a estas fechas memorables con un trabajo bien hecho en el tema de la conservación de su patrimonio. Nos sentimos contentos al poder presentarles a nuestra ciudad en un momento decisivo de la historia, cuando en forma pacífica, sin conflictos ni violencia alrededor de 7 mil vendedores que ocupaban calles, aceras y plazas se encuentran realizando sus labores diarias en cómodos centros comerciales. Esperamos poder compartir las enseñanzas obtenidas en este proceso.

Como sabemos que la consolidación y sustentabilidad del proyecto son extremadamente importantes, esperamos también poder compartir con nuestros colegas las experiencias de otras hermanas ciudades patrimoniales en tan importante asunto. Estamos seguros que la participación de los dignos delegados a esta reunión será de mucha utilidad para nuestra ciudad.

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Es importante que en esta ocasión se pueda pasar revista de las decisiones y acuerdos adoptados en la primera, celebrada en la hermosa Cartagena de Indias, Colombia, en julio del 2002.

Es particularmente importante el tema relativo a la creación de la Red de Ciudades Americanas Patrimonio de la Humanidad; el establecimiento de subredes temáticas; la apertura de la página Web; las gestiones para la inclusión del proyecto de Red en el presupuesto, a mediano plazo, de la UNESCO; y, la utilización de la red regional de gobernabilidad del PNUD.

No menos importantes son los asuntos relacionados con la vinculación del Convenio Andrés Bello en los temas de economía y cultura; la continuación del trabajo iniciado por ICOMOS para establecer indicadores de conservación de ciudades históricas; la utilización de la metodología de la UNESCO para poner en marcha un sistema de información que permita recopilarla, procesarla y reproducirla; y, finalmente, la recepción y puesta en práctica de los 25 módulos ofrecidos por la UNESCO para la formación de líderes.

Esta Segunda Reunión nos permitirá, además, analizar el proyecto titulado “Impacto Económico del Patrimonio Histórico a cargo del Convenio Andrés Bello”; los Alcaldes y representantes tendrán la oportunidad de presentar los Proyectos de “Experiencias Innovadoras”; y, finalmente, analizaremos el proyecto denominado “Ciudades Digitales”.

Dada la dinámica y entusiasmo reinante, podemos anticipar que la agenda será enriquecida con otras importantes y

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valiosas iniciativas, que redunden en beneficio no solo de los afortunados habitantes de las ciudades patrimonio, sino también de todas aquellas ciudades que se empeñan por alcanzar tal distinción, en noble emulación.

Finalmente, les expreso la gratitud del Alcalde y del pueblo de Quito por su presencia en nuestra ciudad en ocasión tan importante, espero que su permanencia en Quito les sea grata y que las experiencias compartidas, en esta importante oportunidad sirvan para que todas nuestras ciudades continúen realizando con éxito las arduas tareas de preservación y enriquecimiento de los respectivos patrimonios.

La creación del Fondo de Salvamento del Patrimonio Cultural, ha sido uno de los aportes más importantes para el desarrollo de la cultura en esta milenaria y sin par ciudad, llamada por tradición y vocación a ocupar un primerísimo lugar entre las ciudades del mundo por la cultura de su pueblo y por la calidad y cantidad de sus artistas, en las diversas expresiones de esta fundamental actividad.

El FONSAL, ha sido un elemento fundamental para hacer posible la ejecución de las políticas que en los campos de recuperación del Centro Histórico, preservación y enriquecimiento del patrimonio y en el desarrollo de la cultura, han planteado las sucesivas administraciones.

En la actualidad, luego de un largo proceso de consultas, en el marco de la necesidad de contar con la población para el diseño y definición de los planes, programas y proyectos de desarrollo social, económico y territorial, la ciudad ha

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definido su visión de sí misma y ha planteado políticas de largo, mediano y corto plazo para construir la comunidad, productiva, equitativa, incluyente, solidaria, así como el gran destino turístico y eje cultural de América que nos hemos propuesto ser.

Pero un proyecto ambicioso de ciudad requiere ciertos fundamentos, sin los cuales, se desmoronaría el resultado de cualquier esfuerzo, por intenso que este sea. La observación de países, regiones o ciudades que han alcanzado éxito, nos muestra una población con fuerte identidad, elevada autoestima y sentido de pertenencia. La cultura es, sin duda, un elemento básico para que estas condiciones se alcancen.

Un proyecto exitoso de ciudad, requiere un comprometimiento general con los objetivos y metas que se hayan trazado y que se expresan en un propósito estratégico impulsor de una voluntad colectiva que sin dudas asegura la superación de todos los obstáculos y la remediación de las usuales debilidades. Nada de esto es posible si no nos conocemos a nosotros mismos, si no sabemos de donde venimos, cuales son nuestras raíces, cuáles las razones comunes de nuestra identidad.

En ese sentido el FONSAL, ha trabajado muy eficientemente para preservar el patrimonio cultural intangible. Ha organizado una división arqueológica que se encuentra empeñada en descubrir y descifrar nuestro pasado más lejano; ha rescatado del olvido a nuestros grandes artistas populares y ha publicado varios tomos de la Biblioteca Básica de Quito. Este nuevo y apasionante trabajo viene a enriquecer el acervo literario y plástico de nuestra ciudad y de ahí deriva su gran importancia.

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Debemos expresar nuestra gratitud a Alfonso Ortiz Crespo, que ha propuesto y llevado adelante esta magnífica iniciativa, que solamente pudo ser posible por su acuciocidad investigativa que le llevó a encontrar este verdadero tesoro cultural ecuatoriano en la Biblioteca Nacional de España, según el mismo nos cuenta por oportuno aviso de Nancy Morán Proaño y dedicación meticulosa y profesional de Elena de Santiago Páez, hallazgo que hoy se pone al alcance del público ecuatoriano e internacional.

Esperamos que ésta y todas las tareas que realiza la Municipalidad de Quito, a través de sus diferentes órganos culturales contribuyan al logro del fortalecimiento de nuestra identidad y autoestima, que serán las bases, como se ha dicho antes, para que construyamos juntos y solidarios el futuro de grandeza y prosperidad que nos merecemos.

En las sesión solemne de esta mañana destaqué la enorme importancia de la creación del Fondo de Salvamente para la magnifica recuperación, reconocida y aplaudida en el mundo, del patrimonio cultural de la ciudad de Quito.

Difícilmente, sin el visionario proyecto de ley presentado al Congreso Nacional por el entonces diputado, lamentablemente fallecido, Patricio Romero Barberis, para la creación del FONSAL, difícilmente podríamos presentar los bienes patrimoniales de nuestra querida ciudad y de sus treinta y tres parroquias en la excelente condición que apreciamos propios y extraños.

El trabajo realizado desde la propia creación del fondo por hombres y mujeres de alta calificación técnica, pero,

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especialmente amorosos de Quito y su cultura, ha sido ya reconocido y destacado por las principales autoridades de América y el mundo.

Recientemente la señora Marielle Richon, alta funcionaria del Centro del Patrimonio Mundial de la UNESCO, en carta al Arquitecto Carlos Pallares señala: “Con los representantes de la OCPM así como de la Universidad Laval de Quebec, estuvimos muy impresionados por los trabajos de restauración y de valoración realizados o realizándose en la Ciudad entera con el apoyo del FONSAL.

A su vez, la autoridad máxima de dicho Centro, Francesco Bandarin, dice en una carta enviada días después:“También estoy convencido de que la ciudad de Quito no puede ser mejor lugar para este evento que reunirá a 50 periodistas del mundo entero en tres idiomas, castellano, francés e inglés. Será una ocasión única para guiarles en la Ciudad y mostrarles concretamente cómo se implementa la Convención de 1972”

En los ocho años de mi administración hemos sido tenaces en los esfuerzos por colocarle a Quito en un lugar de privilegio entre las ciudades del mundo. Y lo hemos hecho. Quito se ha convertido en un referente en muchos de los asuntos del gobierno local. Frecuentemente, invitados por organismos internacionales, llegan a nuestra ciudad autoridades y personal técnico de varias partes del mundo para observar lo que estamos haciendo.

Sin embargo, más allá de todos los grandes proyectos, por delante del nuevo aeropuerto, de la dotación general de servicios básicos, de los grandes proyectos educativos,

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productivos, medioambientales o de salud, estos años estarán marcados por las realizaciones en el tema de preservación del patrimonio cultural.

En estos esfuerzos han trabajado todas las instancias municipales. Ha sido una gran minga de miles hombres y mujeres comprometidos con este ambicioso empeño. Como ejemplos, la Empresa del Centro Histórico, que jugó un papel preponderante en la reorganización del comercio informal y en la recuperación de algunos edificios para la cultura y la vivienda; o, la Empresa Municipal de Alcantarillado y Agua Potable que ha realizado enormes inversiones subterráneas para evitar un colapso de nuestro Centro Histórico. A todos ellos les debemos gratitud.

Pero, sin duda, la institución que ha llevado el centro de gravedad del esfuerzo y ha constituido la vanguardia de todas las instituciones ha sido el FONSAL. Ha recuperado la arquitectura monumental religiosa, que guarda celosa parte importante de nuestra historia y de nuestra a famada cultura: Se restauró La Compañía, en un proceso que duró 10 años, del mismo modo las iglesias de Santo Domingo, Santa Catalina, La Merced, La Capilla del Robo, San Agustín, San Blas, Santa Clara, La Concepción, Santa Bárbara, El Carmen Alto, El Santuario de Guápulo, Carmen Bajo, San Francisco, El Monasterio de la Concepción y la recoleta El Buen Pastor.

Los núcleos centrales de las 33 parroquias rurales presentan una imagen renovada. La población se siente orgullosa de sus plazas, iglesias y casas coloniales, que

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han sido intervenidas recuperando su antiguo esplendor.Construcciones patrimoniales que permanecieron abandonadas por muchos años hoy lucen maravillosamente restauradas y prestan servicios invalorables a la cultura.

Es el caso del antiguo hospital Eugenio Espejo, donde funciona un moderno Centro de Convenciones, del antiguo hospital Militar, transformado en el Centro Nacional de Arte Contemporáneo; los Teatros Sucre, México y Variedades, el antiguo Círculo Militar y el Centro Cultural Itchimbía, además de la participación en los museos del Agua y del Interactivo de Ciencias. Se ha trabajado en las casas inventariadas de valor histórico y cultural que posee la ciudad. Se recuperaron integralmente la Casa de la Acuarela, la Fundación Caspicara, el edificio archivo del FONSAL, la Casa del Conservatorio de Música, la Casa de la Academia de Historia y el Museo de Sucre, entre otras. Barrios y plazas recuperaron su imagen y el auto estima de su gente. Es el caso de las Plazas Foch y de los presidentes, la Avenida Amazonas, la 24 de Mayo en el Centro Histórico, el tradicional barrio La Ronda, el Panecillo, El Tejar, San Diego, Chimbacalle, entre otros lugares. El parque de La Alameda luce renovado y llama la atención de los visitantes su magnífico espectáculo de luces y sonidos.

También fueron iluminadas las plazas de la Independencia, San Francisco, Santo Domingo, del Teatro, La Merced y San Blas.

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La investigación arqueológica ha dado importantes resultados. La cultura quiteña tiene antecedentes de más de 13 000 años como se puede comprobar de los vestigios arquitectónicos y de los objetos de obsidiana y cerámica. Entre los proyectos desarrollados cabe destacar: Rumipamba y La Florida que contienen una riqueza arquitectónica invaluable; Rumicucho y Guayllabamba; el Centro Ceremonial de Tulipe, capital de la cultura yumbo, el mapa arqueológico del Distrito Metropolitano de Quito. El FONSAL también trabaja en el rescate y conservación del patrimonio intangible constituido por manifestaciones artísticas y tradiciones; la música, la danza, la gastronomía y las costumbres, que viven en la memoria colectiva de la población.

Es también digno de destacarse el esfuerzo editorial realizado en estos ocho años que ha permitido que la Biblioteca Básica de Quito cuente con más de 40 libros referidos a nuestra historia, tradición y cultura, con aportes de historiadores, antropólogos, y arqueólogos. Entre estos corresponde citar ‘La Lagartija que abrió la calle Mejía’, ‘Púlpitos Quiteños’, ‘Calles, casas y gente del Centro Histórico’, ‘Años Viejos’, ‘Sabor de la memoria’, ‘Guía Arquitectónica de Quito’. De igual forma, se efectuó la recuperación de libros antiguos.

Todos estos logros de esta querida institución podrán ser apreciados en esta exposición que pretende poner a consideración del pueblo de Quito, como una forma práctica de rendición de cuentas a la comunidad, a quienes se deben todos los esfuerzos de la Municipalidad y sus empresas e instituciones.

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Conviene señalar también que las inversiones realizadas para recuperar el patrimonio aportan significativamente al progreso económico de Quito y el país; por el empleo que generan estas obras y especialmente por las derivaciones hacia el mejoramiento de la industria turística. El turismo inyectó sobre los $600 millones de dólares en la economía quiteña en el año 2007, generando empleos para miles de personas y constituyéndose en una de las principales actividades económicas de la ciudad.

El año anterior, dimos la bienvenida a 461.000 viajeros internacionales. En los seis puntos de información de la Corporación Metropolitana de Turismo de Quito, atendimos a 53.000 turistas. La página web turística de Quito recibe cerca de 1.000 visitantes cada día. Y a fines del 2007, Quito fue listada entre los principales lugares para visitar en 2008 por el prestigioso periódico The New York Times.

Para terminar, espero que la visita a esta muestra sirva para que los quiteños y las quiteñas; los ecuatorianos y las ecuatorianas, sigamos haciendo conciencia del valor enorme de nuestra cultura y nos comprometamos en ser parte del cuidado y protección de este patrimonio que nos pertenece como un legado de nuestros antepasados y que debemos preservar y entregar, siempre en mejores condiciones, a las nuevas generaciones.

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DECLARACIÓN DE HUÉSPED ILUSTRES (FIESTAS INTERNACIONAL DE LA

CULTURA Y EL LIBRO 2008)

Inicio mi intervención saludando el desarrollo de la Fiesta Internacional de la Cultura. Iniciativa importante del ministro Galo Mora Witt, quien ha decidido desarrollar

este evento rindiendo culto al libro y a la literatura como la expresión artística central, en el presente año.

Felicito también a la Cámara Ecuatoriana del Libro, Núcleo de Pichincha, por sus importantes aportes para presentar una muestra de los principales sellos editoriales de nuestro país e Ibero américa y por su justo afán de situar en el mapa del mundo del libro al Ecuador y a su importante riqueza editorial.

Considero que ha sido un acto de justicia y un acierto de los organizadores de esta Fiesta Internacional de la Cultura, dedicar este gran evento a la memoria de Alfredo Pareja Diezcanseco, uno de los más connotados historiadores y novelistas de nuestro país, reconocido como uno de los mejores y más emblemáticos renovadores de la novela ecuatoriana del siglo XX, al cumplirse el centenario de la fecha de su nacimiento

Intervención del Alcalde de Quito en la inauguraciónExposición de la obra del FONSAL

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Al saludar esta iniciativa del gobierno nacional, debo coincidir con el Ministro Mora en la necesidad de que el Estado coloque a la política cultural en el centro de las políticas públicas, creando estímulos que alienten esta noble actividad a la vez que evitando celosamente cualquier injerencia que desde el poder desnaturalizaría la razón de ser de las distintas expresiones artísticas.

Para Quito es de especial importancia la realización de eventos de esta naturaleza. La historia de nuestra ciudad está profundamente marcada por las expresiones de su creación artística, como se observa en su excepcional patrimonio que integra las refinadas expresiones del arte indígenas de las épocas Quitu – Cara, e Inca, con las extraordinarias realizaciones de la afamada Escuela Quiteña de Arte y con la rica producción artística de las actuales generaciones.

Como un reconocimiento a esa excepcional herencia que, generación tras generación ha ido atesorando el pueblo de Quito, la UNESCO la nominó, hace ya treinta años, junto con Cracovia, la bella ciudad polaca, como las primeras ciudades de la lista del Patrimonio de la Humanidad.

Consecuente con la tradición de su pueblo, las administraciones edilicias han trabajado a lo largo de la historia, con diferentes enfoques y énfasis, en apoyo a las actividades culturales. Los ocho años de nuestra administración no han sido la excepción; antes, por el contrario, hemos sido entusiastas en el apoyo a los planes y programas culturales y hemos alcanzado logros importantes.

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En los dos períodos de mi gobierno hemos multiplicado teatros, cines, librerías, galerías, bibliotecas, museos, centros culturales, salas de conciertos y otras instituciones e instalaciones culturales. Además, hemos auspiciado la realización de una rica agenda cultural, como en las más cultas ciudades de América, realidad que fue reconocida por la Unión de Capitales Iberoamericanas cuando designó a Quito como Capital Iberoamericana de la Cultura.

Conforme a nuestra visión de ciudad que nos habla de una comunidad solidaria, incluyente, equitativa y gobernable en democracia, asumimos que la cultura debía ser para todos y las políticas culturales nacer de la propia sociedad, desde los ojos de viejos, adultos, jóvenes, adolescentes y niños, hombres y mujeres, negros, indios y mestizos, ricos y pobres. Una política cultural nacida del seno de la sociedad desde todas y todos, para todas y todos.

Una actividad cultural en la que, como plantea José Ron: “el pueblo participando conscientemente en su elaboración, sea sujeto y objeto de su propia actividad, productor de su propia cultura, para transformarse a sí mismo y transformar con él al mundo.”

Cuando en esta misma sala recibimos a Mario Vargas Llosa, destacamos su opinión de que: “La literatura es una actividad fundamental” … que “debe ocupar un lugar importante en las vidas de todas las personas, porque es una fuente de conocimientos y una fuente extraordinaria de placer… que los libros son importantes porque no hay una diversión que sea más sana, exultante y estimulante; un buen libro realmente creativo, agudiza nuestra sensibilidad, desarrolla en nosotros un gran sentido crítico y transforma nuestra existencia.”

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En coincidencia con el pensamiento del ilustre peruano, en Quito hemos apoyado importantes iniciativas para que todas las familias quiteñas tengan la posibilidad de disponer de sus bibliotecas familiares e incentivar la lectura entre sus miembros. Una de ellas, en apoyo a la Campaña Nacional de Fomento de la Lectura, fue la distribución con las planillas de nuestra empresa eléctrica de las más famosas obras de la literatura nacional e internacional con el costo de un dólar; otra iniciativa nuestra que cabe destacar fue la creación de la “Biblioteca Básica de Quito, que ha permitido publicar en los últimos ocho años, cerca del medio centenar de títulos sobre temas relacionados con la ciudad, su gente y su historia.

Es por todo lo anterior que como Alcalde de Quito, a nombre del pueblo de la capital de los ecuatorianos y por decisión unánime del Concejo Metropolitano, cumplo con el grato y honroso encargo de declarar a tan destacadas personalidades de la literatura como huéspedes ilustres de nuestra ciudad expresándoles nuestros mejores deseos porque su estadía en nuestro país les sea personal y profesionalmente grata.

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DIA DEL PATRIMONIO(2003)

En este día de singular significación para la ciudad de Quito, se ha reunido en sesión solemne el Consejo Metropolitano para honrar a los distinguidos

huéspedes invitados a participar en los diversos e importantes eventos que se llevan a cabo con ocasión de las celebraciones de los 25 años de ésta ciudad como Patrimonio Cultural de la Humanidad.

Las reuniones programadas, en las que se tratan temas de gran importancia para nuestra región y para las redes de ciudades de que somos parte, nos permitirán compartir experiencias en el ejercicio de las funciones propias de los gobiernos locales a la vez que fortalecen las relaciones personales y directas de los Alcaldes, a fin de encarar de mejor manera los nuevos retos que asumen las ciudades en una visión renovada de las relaciones internacionales, hasta hace poco, reservadas con exclusividad a los Estados.

La presencia de los ilustres alcaldes, en el marco de las celebraciones aniversarias, nos permite desarrollar una apretada y muy importante agenda que incluye reuniones de Alcaldes Andinos, de Ciudades Patrimoniales del Continente americano, de ciudades con las que mantenemos convenios de hermandad y de importantes autoridades de las respectivas redes de ciudades.

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Por la especial relación que nos une con Cracovia, deseo destacar de manera particular la presencia del distinguido y querido amigo Jacek Majchrowsky, Presidente de esa bella ciudad, que con Quito fue la primera ciudad en el mundo en recibir de la UNESCO la declaratoria que las identifica, las honra y las compromete como Patrimonio de la Humanidad.

Con gran satisfacción, Quito ha declarado Visitantes Ilustres a las autoridades de países, regiones y ciudades amigas y hermanas y les expresa su gratitud por haber logrado arreglar sus complejas agendas para solemnizar con su presencia nuestras celebraciones, a la vez que les manifiesta, sus deseos de una feliz y fructífera permanencia en esta ciudad que les ha acogido con gran simpatía y afecto.

De igual manera y con justicia, el Concejo del Distrito Metropolitano ha acordado rendir homenaje de reconocimiento y gratitud a los distinguidos compatriotas que tomaron la iniciativa de presentar a la UNESCO la candidatura de Quito para ser considerada como Patrimonio; a las autoridades que prepararon y expusieron los elementos justificativos de esa solicitud; y a los personeros que desplegaron sus mejores esfuerzos por alcanzar la honrosa nominación

De manera muy especial, el Concejo Municipal del Distrito Metropolitano quiere agradecer y destacar el aporte del arquitecto Rodrigo Pallares Zaldumbide, mentalizador e impulsor de la iniciativa, en su calidad de Director del Instituto Nacional de Patrimonio y Miembro del Comité Intergubernamental del Patrimonio Mundial; al general Fernando Dobronsky, en ese entonces Ministro de

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Educación; al licenciado Alvaro Pérez, Alcalde de Quito de la época; y al doctor Gonzalo Abad Grijalva, Miembro del Consejo Ejecutivo de la UNESCO.

Destaco también el reconocimiento de la municipalidad quiteña al doctor Patricio Romero Barberis, quien, en su condición de legislador propuso y logró la expedición, por parte del Congreso Nacional, de la ley de creación del FONSAL, institución que ha sido un pilar en la recuperación del Patrimonio.

Al cumplir los 25 años de la honrosa nominación, la ciudad de Quito observa con satisfacción y orgullo la recuperación que se ha logrado de su Centro Histórico. Ha sido un paso muy importante, que se debe a muchos actores, en particular a los propios comerciantes informales que merecen nuestro especial reconocimiento.

En las tareas que quedan por hacer le corresponderá al sector privado nacional e internacional utilizar las oportunidades creadas. Ya observamos con satisfacción y optimismo un gran interés por invertir en nuevos proyectos. Esperamos que el impulso se intensifique y mantenga.

El Plan Estratégico de Desarrollo del Centro Histórico establece como prioridad a los proyectos que permitan que la ciudad histórica vuelva a ser residencial. La gran demanda de soluciones habitacionales por parte de personas que desean vivir en ella es un buen síntoma de que este objetivo se va a lograr en corto plazo. El éxito de los proyectos de vivienda ejecutados por la Empresa del Centro Histórico, constituye, un estímulo para la participación de otros gestores urbanos.

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Solamente cuando se vuelva a crear una vigorosa vecindad, los habitantes defenderán y valorizarán sus espacios y lucharán para que nunca más se repitan los graves errores del pasado.

El proceso de recuperación del Centro Histórico se debe al apoyo de algunos países, de muchas instituciones nacionales y extranjeras, al esfuerzo de varias administraciones municipales; al trabajo esforzado de innumerables funcionarios, empleados y trabajadores y a la voluntad del pueblo quiteño de recuperar y enriquecer su legado cultural.

El compromiso de la Alcaldía y el Consejo Metropolitano es el de luchar por dar sostenibilidad a este proceso, de erradicar toda forma de politiquería o clientelismo, que son dos factores que causaron la pérdida de control y la degradación del patrimonio, de insistir en una visión global y por lo mismo estratégica de la ciudad en su conjunto y del papel del Centro Histórico en los planes de futuro, especialmente en el tema del desarrollo del sector turístico.

También en esta solemne ocasión la UCCI, nos ha entregado la honrosa nominación como Capital Iberoamericana de la Cultura, que constituye una oportunidad especial para que Quito, una ciudad con tan rica y variada tradición en este campo, pueda organizar un programa especial a lo largo del año 2004. Las hermanas ciudades capitales de Iberoamérica pueden estar seguras de que estaremos a la altura de este compromiso.

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Termino mi intervención invitando a mis conciudadanos para que hagamos de este aniversario la ocasión propicia no solamente para congratularnos por los avances logrados, sino, también para pasar revista a lo que está en marcha y proyectar nuestra acción al futuro, con una firme voluntad colectiva de superar lo hasta hoy logrado. De ese modo podremos con satisfacción y orgullo seguir ostentando, por siempre, el honroso título de Patrimonio cultural de la Humanidad.

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DIA DEL PATRIMONIO (2008)

Cuando en 1534, Sebastián de Benalcázar fundó Quito, mal podría haber imaginado el singular destino que le esperaba a nuestra hermosa ciudad.

No había forma de que previera que la modesta Villa, daría lugar a una urbe tan importante y singular. Que con el pasar de los siglos, lo que entonces era un puñado de casitas, junto a una rústica iglesia se haría merecedora de títulos tan honrosos como Luz de América, Relicario de Arte, Capital Iberoamericana de la Cultura, Primer Patrimonio Cultural de la Humanidad, entre tantos otros. Y es que la historia de nuestra ciudad, su gente, y su cultura son especiales y dignas de admiración. El 10 de agosto hemos iniciado las celebraciones bicentenarias de la revolución quiteña que motivó la honrosa calificación de Luz de América, atribuida por el hermano pueblo chileno por iniciativa del padre Camilo Enríquez, testigo de las jornadas libertarias de inicios del siglo XIX. A pocos días nos hemos reunido para celebrar otra fecha de especial importancia, el trigésimo aniversario de la designación de Quito como primera ciudad patrimonio de la humanidad.

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Como parte de las celebraciones bicentenarias, el próximo año, en esta misma fecha, se reunirá en Quito el Décimo Congreso Mundial de las ciudades Patrimonio de la Humanidad. Juntaremos así dos celebraciones importantes del calendario cívico de la Capital ecuatoriana.

Ahora nos hemos convocado en esta magnífica iglesia para rememorar la fecha en que la UNESCO hizo constar a Quito en la privilegiada lista de ciudades patrimonio de la humanidad, en un acto de justicia y reconocimiento al extraordinario esfuerzo realizado durante siglos por hombres y mujeres nacidos o no en esta ciudad que fueron capaces de perpetuar en la arquitectura, las artes el genio de nuestra raza mestiza.

Pero nos hemos reunido también para reconocer la inteligencia y patriotismo de los ecuatorianos y ecuatorianas que trabajaron arduamente para presentar de manera documentada y contundente las candidaturas de Quito y las islas Galápagos y las razones para su nominación como patrimonios cultural y natural de la humanidad.

Y, por supuesto esta convocatoria se realiza también para felicitar y estimular el trabajo de todos quienes desde distintas funciones y responsabilidades han logrado mantener y enriquecer la heredad patrimonial, poniendo a Quito en primerísimo sitial entre las ciudades del mundo.

Y es que en verdad los ecuatorianos tomamos conciencia oportunamente, del valor extraordinario de su patrimonio cultural. En efecto, ya en 1967 se habían dictado las Normas de Quito Para la Conservación de los Centros Históricos,

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se contaba con el Plan de Preservación del Patrimonio Monumental y con Ordenanzas Municipales que aseguraban su aplicación.

De modo que Quito se había preparado con alguna anticipación, para cuando en 1972, la UNESCO aprobó la Convención sobre la protección del Patrimonio Cultural y Natural que constituye el inicio del proceso de creación del Listado de Patrimonio Mundial.

Así, en 1976, en la décimo novena Conferencia Mundial de la UNESCO en Nairobi, Kenya, cuando se conformó el Comité de Patrimonio Mundial, la delegación ecuatoriana presentó formalmente la propuesta inicial para que se declare a Quito Patrimonio Cultural y a Galápagos Patrimonio Natural de la Humanidad.

Rodrigo Pallares, uno de los principales protagonistas de la histórica nominación, señala la trascendencia de lo alcanzado con estas frases: “...las dos candidaturas ecuatorianas fueron aceptadas en su primera presentación, cosa que como veremos mas adelante, no lograron lo italianos con la legendaria Roma, sin duda alguna el bien cultural más importante del mundo”

En 1978 se presentaron al Comité del Patrimonio Mundial de la UNESCO, en Washington, 69 solicitudes de muchísimos países para inscribir bienes patrimoniales. Solamente fueron admitidas 6 como Patrimonio Natural, 4 como Monumentos y 2 como Ciudades Patrimoniales del Mundo: Quito y Cracovia

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El texto de la inscripción de nuestra ciudad en la privilegiada lista señala: “Quito forma un ensamble sui generis armónico donde las acciones del hombre y la naturaleza se han juntado para crear una obra única y trascendental en su categoría’.Y en la Guía del Patrimonio Mundial, la UNESCO al referirse a Quito dice:

“En esta ciudad andina, el hombre no ha buscado imponerse a la naturaleza, sino que la ha utilizado para realizar una obra única en su género, en la que las construcciones religiosas, los edificios civiles y las artes plásticas forman un todo armonioso e indisoluble que testimonia una concepción unificada de las fuerzas humanas y naturales”

Estos son los hechos. Refirámonos ahora a los protagonistas, a quienes el Concejo Metropolitano de Quito ha decidido rendir un merecido homenaje.

El General de División, Fernando Dobronsky, ministro de Educación en el período de 1976 a 1979, quien realizó un trabajo activo para lograr este objetivo desde del inicio de su gestión.

El Gral. Dobronsky presidió la delegación ecuatoriana a la 19ª Conferencia Mundial de la UNESCO y presentó la propuesta de que se declare a Quito Patrimonio Cultural de la Humanidad y a Galápagos Patrimonio Natural de la Humanidad.

Gonzalo Abad quien está presente, pese su avanzada edad de 98 años, ha sido, una de las figuras más importantes de la historia de la educación en el Ecuador, y era miembro del Consejo Ejecutivo de la UNESCO en 1978, El fue clave en

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la idea inicial, compartida con Hernán Crespo Toral y otras personalidades, de la declaración de Quito como Patrimonio de la Humanidad.

Gonzalo Abad hizo una larga carrera en la UNESCO e influyó con su inteligente y experimentada aporte en las políticas educativas a nivel mundial.

El Embajador Antonio José Lucio Paredes, quien se desempeñaba como Embajador en Francia y ante la UNESCO, en 1978. Diplomático de carrera, embajador en varios países, ministro de RR EE de 1972 a 1974, cuya carrera está jalonada de logros como la apertura de las relaciones comerciales con China y Corea del Sur y el restablecimiento de la Academia Diplomática del Ecuador.

El doctor Fernando Chamorro, entonces Secretario permanente de la Comisión Ecuatoriana de la UNESCO, y director de Asuntos Internacionales del Ministerio de Educación, quien coordinaba todas las relaciones de los organismos e instituciones ecuatorianos relacionadas con la educación, la ciencia y la cultura.

Y la historiadora del arte doctora Ximena Escudero, Directora Nacional de catalogación del Instituto Nacional de Patrimonio Artístico, a quien Rodrigo Pallares encargó la preparación de los documentos que permitieran señalar las razones que asistían a Quito para ser declarada Patrimonio de la Humanidad.

A todos ellos, junto a quienes reconocimos hace cinco años en las celebraciones del vigésimo quinto aniversario,

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el pueblo ecuatoriano les guarda sentimientos de gratitud y admiración por su visionaria gestión que abrió las puertas para que Quito sea hoy el referente mundial en la preservación patrimonial.

Sin embargo, la nominación no habría significado mucho de no existir instituciones, autoridades y otras personas que con pasión se dedicasen al cuidado, la preservación y enriquecimiento de nuestro patrimonio.

De todos ellos merece una singular referencia el FONSAL. Cuando en el año 1987, el país sufrió los estragos de un devastador terremoto, el entonces diputado Patricio Romero Barberis, ya fallecido, y a quien reconocimos también hace cinco años, presentó un proyecto de ley al congreso nacional para la creación de esta institución cuyo nombre hace honor a su titánica tarea.

El FONSAL ha sido muy eficiente en el cumplimiento de su misión de preservar el patrimonio arquitectónico, artístico, intangible y arqueológico. A quienes han laborado en él y particularmente a personas como el arquitecto Carlos Pallares y su extraordinario equipo les debe la ciudad el poder disfrutar de un patrimonio recuperado que es orgullo del país y referente mundial en el campo de la conservación.

El rescate de nuestros bienes patrimoniales ha producido distintos efectos positivos en nuestro país y ciudad. El fortalecimiento de nuestra autoestima y el reforzamiento de nuestra identidad, nos permiten construir con optimismo el proyecto de desarrollo en que nos encontramos empeñados.

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En materia de Protección del Patrimonio es necesario mencionar también el admirable trabajo realizado por todas las dependencias y empresas municipales, empeñadas en histórica minga para la enorme tarea realizada. Destacan entre ellas la Empresa de Desarrollo Urbano y la EMAAP, esta última por la construcción de túneles, colectores, alcantarillas y el mejoramiento de espacios públicos. Esta obra sin precedentes en el Centro Histórico, disipa la amenaza de desastres que podrían haber comprometido seriamente nuestro Patrimonio.

Con todas esas contribuciones Quito se ha convertido ya en un referente en América Latina y en el mundo. Pero, eso no significa que vayamos a dormirnos en los laureles. Continuamos, hoy, trabajando en la consolidación y sostenimiento de este monumental proyecto de recuperación patrimonial.

Regentamos y alentamos el éxito de los centros comerciales populares en los que siguen desarrollando sus actividades los miles de comerciantes minoristas que salieron de las calles, aceras, plazas, atrios y otros espacios públicos.

Ejecutamos, con el apoyo de la Junta de Andalucía, el programa “Pon a punto tu casa”, que financia adecuaciones de viviendas a fin de recuperar la condición residencial del Centro Histórico.

Con el apoyo financiero del Banco Interamericano de Desarrollo estamos ejecutando varios programas para promover y consolidar la apropiación del Centro Histórico por parte de los quiteños y de los ecuatorianos.

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Para ese fin hemos puesto en marcha un fondo de co -inversión, que busca generar nuevas inversiones de operadores privados que tengan proyectos sustentables y rentables; un fondo de asistencia técnica dirigido a mejorar la calidad de la oferta de servicios turísticos y culturales , y un fondo social concursable que tiene como objetivo fomentar la participación de la sociedad civil organizada en la resolución de los problemas sociales del Centro Histórico.

En materia de infraestructura estamos construyendo dos terminales terrestres para convertir al del Cumandá en un edificio de parqueos. Paralelamente construimos otro edificio con el mismo fin en el sector de la Ronda.

La recuperación de nuestro patrimonio tiene además importantes efectos en la economía quiteña, tanto por la gran inversión en obra pública como por el mejoramiento de la industria del turismo. Hoy Quito se ha ganado un puesto entre los principales destinos turísticos del mundo y se ha convertido en un importante destino de ferias y convenciones. Esta actividad inyectó sobre los $600 millones de dólares en la economía quiteña en el año 2007, generó empleos para miles de personas y se constituyó en una de las principales actividades económicas de la ciudad.

Voy a cerrar mi intervención refiriéndome a dos asuntos de la mayor importancia que sé les serán gratos. La Unión Latina, que representa el doctor Chamorro, se encuentra catalogando los libros anteriores al año 1800 que se encuentran en las bibliotecas de Quito. El trabajo desarrollado por una misión presidida por el Profesor Gastohe Brescia, ha dado como resultado la comprobación de que Quito es la ciudad de

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América del Sur que más libros antiguos anteriores a la Independencia posee. Ya están catalogadas más de 25.000 obras, alguno de los cuales tiene la firma nada menos que de Fray Jodoco Ricke, es decir, son libros de mediados del siglo XVI que utilizaba aquel fraile que tanto contribuyó desde el año siguiente de la fundación de Quito, al desarrollo primigenio de la ciudad.

Y, algo que puede sorprenderles, pero que creo es importante que pueda informarles en esta ocasión: la Municipalidad va a impulsar, con la invalorable ayuda del Gobierno Nacional, la declaratoria del Distrito Metropolitano de Quito como Patrimonio Natural de la Humanidad.

Las razones son suficientes: nuestro Distrito esta ubicado en un escenario natural excepcional, con una biodiversidad extraordinaria y multitud de especies endémicas, únicas en el mundo. Con una variedad muy grande de pisos ecológicos, que no tienen ni siquiera los parques nacionales del Ecuador ni los sistemas de áreas protegidas.

Los argumentos para esta iniciativa se deben al proyecto, “Monitoreo Biológico: una herramienta para el manejo adaptativo de las áreas naturales protegidas y bosques protectores del Distrito Metropolitano de Quito” realizado por el Museo Ecuatoriano de Ciencias Naturales y financiado por el Fondo Ambiental, que creamos el año 2005, precisamente para poder realizar estudios y acciones de conservación a cargo de la Dirección Metropolitana Ambiental.

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Los resultados de dicho estudio son sorprendentes y nos permiten sustentar características únicas y singulares de nuestro Distrito, que ameritan que su reconocimiento también como Patrimonio Natural de la Humanidad.

Termino mi intervención convocando al pueblo quiteño a sentirse orgulloso de su extraordinario pasado, de su dinámico presente y del gran futuro que juntos todos estamos construyendo. Sigamos siendo conscientes de nuestra grandeza, forjada en siglos por tantas generaciones, de nuestra responsabilidad como guardianes y protectores del patrimonio, del que nos beneficiamos y que tenemos que preservar para entregar enriquecido para las futuras generaciones.

Que estas celebraciones y las del bicentenario nos encuentren unidos y solidarios con nuestra patria querida a la que tanto debemos y a cuya grandeza aportamos con el esfuerzo cotidiano.

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INAUGURACIÓN DE LA CAPILLA DEL HOMBRE.

(2002)

“Vengo pintando desde hace tres o cinco mil años, más o menos.” “ Soy consciente de que venimos de una cultura milenaria, alrededor de la cual

se formó una civilización que alcanzó momentos de gran esplendor.” Guayasamín.

El pintor conoce que es un hito en la historia del arte ecuatoriano y latinoamericano; una de sus cumbres señeras. Entiende que su exquisita sensibilidad tiene antecedentes en una memoria colectiva formada con las esperanzas, ilusiones, angustias y padecimientos de muchas generaciones; que su extraordinaria producción artística expresa mucho más que una experiencia personal, por lo mismo efímera; que manos como las suyas de indios y mestizos, desarrollaron con excelencia uno de los legados culturales más valiosos de nuestro continente americano.

Arte trascendental el suyo, ecuatoriano, americano y universal, con raíces profundas en la cerámica, tejidos y ornamentos de pueblos que desde hace diez mil años se ubicaron en el escenario geográfico admirable en que se asienta nuestra ciudad; arte heredero de la connotada Escuela Quiteña, nacida

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de un dilatado y doloroso proceso de transculturización, portadora de un profundo mensaje histórico, artístico y espiritual, síntesis magnífica de elementos mozárabes, mudéjares, platerescos, manieristas y barrocos, con un aporte aborigen que le gana espacio sutil pero sostenidamente a los lineamientos de la cultura oficial. Por eso es hito, por eso es cumbre, porque es parte de una pléyade admirable de artistas como Caspicara, Pampite, Goríbar, Legarda, Miguel de Santiago, Samaniego y mil más.

“ Mi pintura es para herir, para arañar y golpear en el corazón de la gente. Para mostrar lo que el hombre hace en contra del hombre.” Guayasamín.

Nacido en 1919, el pintor da testimonio de un siglo terrible. En su obra se recoge con crudeza las tragedias sufridas por el ser humano, ocasionadas, infelizmente por otros seres de la misma especie, y por eso golpea, en efecto, el corazón de la gente. Sensible, como fue, a toda forma de opresión e injusticia, Guayasamín no podía menos que transformarse en denuncia viva de los dolores, angustias y desesperanzas de la gente y, especialmente, de su propia gente.

De los indios ecuatorianos y americanos, víctimas de la explotación, el abuso, el oprobio, la exclusión y el discrimen; de esos héroes ignotos de una resistencia centenaria, aferrados a una precaria supervivencia; de esos seres humanos, capaces de toda generosidad, abiertos a toda forma de perdón, pero conscientes de la urgencia de su reivindicación.

Pintor de proyección universal, plasmó también las desgarradoras imágenes de los hombres y mujeres que

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sufrieron los horrores de las guerras a las que se arrastró a los pueblos para defender privilegios egoístas disfrazados con tesis oscuras de geopolíticos que pregonaban los equilibrios de poder, las hegemonías mundiales, la urgencia vital de la expansión territorial, presuntas superioridades raciales o sueños de destinos manifiestos.

De los seres humanos recluidos en campos de concentración y de exterminio por defender sus valores, principios e ideales; de los pueblos víctimas de la brutalidad del colonialismo o de la menos frontal dependencia; de las repúblicas sojuzgadas por las armas en Europa o de las democracias tomadas por asalto por grupos de interés apoyados en la oprobiosa acción de fuerzas militares presuntamente nacionales.

“ ... Yo no sé nada más que pintar. Creo que no hubiera podido ser nada más que pintor.” Guayasamín.

Porque solamente sabía pintar, hizo de su arte una arma poderosa e imbatible para denunciar y luchar en contra de toda forma de opresión y exclusión en el mundo, y porque sentía como propio el dolor de nuestros pueblos indios, negros y mestizos se convirtió en uno de los mejores exponentes del expresionismo indigenista y del realismo social de la pintura ecuatoriana y por su compromiso con la defensa de las causas universales, llegó a constituirse en uno de los más grandes representantes de la plástica a nivel mundial. Con sus obras cumbres Huacayñan, camino del llanto, la Edad de la Ira y la Edad de la Ternura, Guayasamín ejerció y ejerce una singular pedagogía de amor, cultura de paz, democracia, derechos humanos y solidaridad.

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“La Capilla del Hombre es un llamado a la unidad de América Latina: de Méjico a la Patagonia, un solo país.” Guayasamín.

El pintor vivió convencido que la obra cultural constituía patrimonio de los pueblos y, coherente con esta convicción decidió entregarle a Quito y al Ecuador el fruto de su genio y esfuerzo; en 1977, con el generoso acuerdo de sus hijos, creó la Fundación Guayasamín, y le entregó su invalorable patrimonio, constituido en tres museos: arqueológico, con más de 3500 piezas; colonial con más de 800 piezas y contemporáneo con 250 obras; y, paralelamente, concibió la construcción de la Capilla del Hombre, un monumento al hombre latinoamericano.

La Capilla del Hombre, cuya primera etapa regocijados inauguramos, es un testimonio de su compromiso con América, símbolo de la defensa de los derechos humanos, de la lucha contra el racismo y toda forma de discriminación. Testimonio de las páginas de una historia de dolor que no puede repetirse. Invocación a la construcción de sociedades más justas, solidarias e incluyentes, donde mujeres, niños, personas con discapacidades, razas y culturas se sientan partícipes.

Quito cumplirá el próximo año, 25 años de su nominación como patrimonio cultural de la humanidad. Cuando, hace ya un cuarto de siglo, la UNESCO reconoció el enorme legado de historia y cultura de nuestra ciudad, lo hizo especialmente por el maravilloso escenario de su asentamiento y por haber sabido mantener los tesoros de su cultura, preservándoles de las naturales tendencias modernizadoras que depredaron la riqueza patrimonial de tantas ciudades de nuestro

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continente. Pero los quiteños debemos tener conciencia de que una ciudad patrimonial no justifica tal designación por el solo privilegio de su herencia conservada, sino que debe incrementarla para beneficio de las futuras generaciones. La Capilla del Hombre será, en los tiempos que habrán de venir, un testimonio de la creatividad y sensibilidad artística de los ecuatorianos del siglo XX.

Deseo, como alcalde de la Capital de los ecuatorianos, en el nombre del pueblo quiteño, expresar un saludo de bienvenida y un reconocimiento por su presencia a nuestros ilustres visitantes, que acogieron la invitación del gobierno nacional, de la municipalidad de Quito, del Gobierno de la Provincia y de la Fundación Guayasamín y que nos acompañan en esta especial celebración. Su presencia afirma la trascendencia de esta solemne inauguración y para fortalece los estrechos lazos de amistad entre nuestros pueblos, que la Capilla del Hombre perenniza.

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INAUGURACIÓN DE LA XIX REUNÓN SECTORIAL DEL COMITE DE CULTURA

(2008)

Quito, ciudad equinoccial en los Andes septentrionales, sede del legendario reino de los Shiris, Centro Imperial del norte del incario,

Capital de la Real Audiencia de Quito, del Distrito del Sur de la Gran Colombia y del Estado ecuatoriano, recibe con afecto a los representantes de las hermanas ciudades capitales iberoamericanas asistentes a la XIX Reunión del Comité Sectorial de Cultura de la UCCI y les desea una grata estadía y fructíferas resultados para sus trabajos y deliberaciones.

Cuando la UNESCO, nominó a Quito como la primera ciudad, en el mundo, junto con Cracovia, Patrimonio Cultural de la Humanidad, no hizo otra cosa que reconocer su rica y milenaria historia; el espectacular entorno geográfico en que se encuentra asentada, su cultura diversa y milenaria; su arquitectura colonial cuidadosamente preservada, las maravillas de su arte religioso, de sus artesanías artísticas y la excelencia de la producción artística de su pueblo.

Quito es una ciudad de rica historia. Durante siglos, con el trabajo material e intelectual de sus moradores, ha logrado conformar una sólida identidad cultural. Somos herederos

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de la antigua tradición artística y artesanal de los pueblos aborígenes, de la famosa Escuela Quiteña de Arte en la Colonia y, como Capital ecuatoriana, aquí han nacido, vivido y trabajado renombrados artistas de trascendencia internacional. En la actualidad, la vida cultural de la ciudad es intensa y variada, tanto por la producción de sus ciudadanos de todas las edades, cuanto por la presencia regular de grandes espectáculos artísticos. El reconocimiento de esta realidad fue que motivó que la UCCI, para nominarla Capital Iberoamericana de la Cultura 2004. Quito, es además una ciudad que ha mantenido, a lo largo de su historia una presencia cultural importante especialmente en América y Europa a la vez que aspira integrarse en la sociedad del conocimiento y la denominada aldea global, sin complejos, reconociendo que las tendencias históricas conducen a la humanidad a una cada vez más estrecha integración. Un mundo conectado en tiempo real, gracias a los maravillosos avances de la ciencia y de la tecnologías, tiene que constituirse en una oportunidad para el mejoramiento material y espiritual de los pueblos, a la vez que nos impondrá las necesarias medidas de prevención que eviten que el encuentro inevitable con otras culturas afecten a nuestra personalidad e identidad.

Muchas personas se preguntan en la actualidad, con justificada preocupación, si la globalización nos va a afectar especialmente a las sociedades y países de menor desarrollo, toda vez que es evidente que no se trata solamente de un fenómeno económico y político sino que su alcance llega a todos los campos de la vida de la sociedad y se siente cada vez con mayor intensidad, en el de la cultura. A mi juicio, creo

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que los procesos de intensa relación y contacto entre variadas culturas locales, generarán una cultura mestiza mundial enriquecida por los aportes de todos los pueblos, mientras que las individualidades se mantendrán y fortalecerán, en la medida que su conocimiento será demandado por una población mundial integrada por las redes de comunicación disponibles. La diversidad que ya se defiende y considera como un elemento positivo al interior de las naciones, no tiene porque ser agredida por los contactos enriquecedores entre todos los pueblos del mundo. Se habla en la actualidad de pensar globalmente y actuar localmente. Esto porque las ciudades y sus regiones de influencia se encuentran integradas a una compleja red multidimensional de flujos de información, capitales, mercancías y personas, que integran todo el planeta. Las ciudades–región constituyen los nodos de infraestructuras y servicios avanzados de esta red de flujos y se constituyen en los elementos organizadores y de soporte de la economía mundial. Las ciudades que no logran articularse en este sistema de flujos globales quedan marginadas de los procesos de desarrollo.

La sociedad del conocimiento tiene en las ciudades su punta de lanza. Es su punto de referencia y polo de atracción, el escenario donde se estimula el libre juego de las ideas para conseguir la innovación y creatividad, fomentar la generación, aplicación y difusión de los saberes y conocimientos, crear condiciones para la productividad y para el consumo y disponer de formas de comunicación y acceso a otros centros internacionales dinámicos, para asegurar relaciones de mutua conveniencia con el resto del mundo.

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Para lograr el desarrollo de sus comunidades, los gobiernos locales deben superar su papel de simples prestadores de bienes y servicios, para convertirse en verdaderos gobiernos locales, capaces de definir planes estratégicos, con la participación de los ciudadanos, como un pacto socialmente acordado para enfrentar las incertidumbres que nos presenta un mundo de cambios dramáticos e imprescindibles. En esos planes, la política cultural es de trascendente importancia, porque ella se refiere al fortalecimiento de la identidad, del sentido de pertenencia y del auto estima, indispensables para acordar un propósito común y activar las potencialidades de la comunidad hacia el logro de los fines que se ha trazado.

La política cultural, debe orientarse a construir la ciudad solidaria, incluyente, democrática y participativa, respetuosa de la diversidad, en la que todos y todas nos sintamos indispensables, en la que la dignidad del ser humano, la confianza en las personas e instituciones, la justicia social, la igualdad de oportunidades, permitan armonizar los comprensibles intereses particulares, evitando o superando negociadamente los conflictos.

El Plan Quito Siglo XXI, que hemos aplicado los quiteños y quiteñas en la actual administración proclama nuestra vocación de Paz, como el mayor valor de la civilización, como el presupuesto de toda necesaria convivencia, como representativa de la dignidad humana, como ejercicio de solidaridad, como espacio de todas las libertades, como razón de todos los derechos, como sustento de todas las alegrías, como aliento de la felicidad posible y deseada.

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La aplicación de estas políticas han orientado la actividad cultural de los últimos cuatro años, período en el que Quito se ha abierto al mundo. Hemos trabajado responsablemente para restaurar aquella admirada y admirable imagen cultural de nuestros templos, de nuestros teatros , de nuestras callejuelas coloniales y de nuestras casas solariegas, cuajadas de esa historia milenaria que ahora exhibimos con orgullo, para que sean disfrutadas con equidad por todos y todas y para que sean una carta de presentación para los hermanos de otros lugares que nos visitan.

Como se ha podido apreciar en las presentaciones anteriores nuestra ciudad se preparó y cumplió con gran alegría y dedicación los compromisos derivados de su nominación como Capital Iberoameridana de la Cultura 2004. Hemos enriquecido nuestra infraestructura, construimos el Centro Cultural Itchimbia como icono cultural rememorativo de esta nominación y hemos desarrollado un programa de alta calidad para disfrute de la población quiteña. Espero que la presencia de los dignos delegados de las ciudades hermanas en Quito les permitirá visitar y observar los logros de Quito en este año especial de su historia.

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DEVELIZAMIENTO DE LA ESTATUACÉSAR VALLEJO

Es este un día muy especial para la ciudad de Quito. Recibimos con especial afecto al Alcalde de San Isidro de Lima, nuestro apreciado amigo, el ingeniero Gastón

Barúa, al alcalde de la ciudad natal del poeta César Vallejo, Abner Avalos, al querido embajador Jaime Cacho Souza, a sus respetadas esposas, a un grupo de connotados poetas y al sobresaliente escultor peruano Miguel Baca Rossi autor de la soberbia estatua que nos entrega como símbolo de amistad, de integración y hermandad, el noble pueblo del Perú.

No hay duda que los Alcalde de San Isidro y de Santiago del Chuco han deseado honrar de manera sobresaliente a la ciudad de Quito, al haber elegido a César Vallejo para que, desde la perpetuidad del bronce, sea un embajador permanente de la cultura peruana en este sitio especial en el cual con César Dávila Andrade serán los primeros en poblar este parque destinado a la memoria de los más excelsos representantes de la literatura latinoamericana.

Constituye en verdad un honor y una distinción especial, la presencia de Vallejo para que reciba el reconocimiento y la admiración de los habitantes de Quito y del Ecuador entero. El ha sido y es sin duda el poeta peruano más grande de todos los tiempos y una figura señera de la literatura hispanoamericana

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del siglo pasado. Su voz ha sido calificada como una de las más originales de la lengua española y su mensaje de amor y solidaridad con los pobres y desamparados, es admonición permanente para que seamos capaces de construir en cada ciudad, en cada país, en el mundo entero condiciones que permitan la realización espiritual y material plena de hombres y mujeres, niños, jóvenes y viejos, indios, negros y mestizos, en fin de un ser humano diferente, capaz de vivir en paz, solidariamente, respetando los derechos ajenos, con la certeza de que se respetarán los propios en un ambiente de libertad y justicia.

En Vallejo, en su obra, se pueden observar, sin esforzarse las enormes similitudes de nuestros pueblos, naciones mestizas, renuentes a quererse ver y reconocer en el espejo de sus realidades, viviendo de nostalgias de experiencias ajenas, identificados desde una identidad propia inaceptada; dolidos y como avergonzados de las miserias cotidianas e irredentas, en busca permanente de modelos para vivir, para gobernar, para dirimir los conflictos, o para escribir con el molde de cualquier arquetipo extraño.

Pero, en Vallejo, en sus orígenes, en su atormentada vida, en su creatividad maravillosa, debemos también reconocer con orgullo las virtualidades especiales de la calificada por Vasconcelos como raza cósmica; de ese fruto de aportaciones milenarias y de potencialidades integradas, que suma la esforzada laboriosidad y suprema constancia de los pueblos indios; el temperamento audaz, la imaginación fecunda, la exaltación espiritual del aporte hispano, mestizo a la vez de tantos mestizajes. La raza de Vallejo, la raza americana, la estirpe de los ecuatorianos y peruanos.

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En Vallejo, en su poesía, nos descubrimos Ecuatorianos y Peruanos como pueblos tan cercanos; sometidos a las mismas tribulaciones, experimentando las mismas vicisitudes, angustiados por las mismas carencias, anhelando cambios que se postergan, valorando muchas veces, lo propio en la negación de lo que nos es más cercano y por eso, en los días que hemos sido capaces de forjar, que queremos que sean de caminos desandados y rencores vencidos, debemos también ser capaces de entender que debemos estar juntos en la definición de nuestros destinos, en la forja de nuestros futuros; en el esfuerzo mancomunado e irremediable de las rectificaciones.

Deseo saludar con alegría este nuevo acto de amistad de los Alcaldes de San Isidro y Santiago del Chuco; decirles que del mismo modo que nuestro Rumiñahui, el símbolo de todas las rebeldías y de todas las dignidades, es apreciado y custodiado en tierras limeñas, así estará Vallejo en esta ciudad hermosa y hospitalaria; ratificarles la actitud y predisposición de Quito para la cooperación en las tareas que son comunes a quienes tenemos el honor, pero también la tarea enorme de administrar ciudades que desean tener certezas de mejores días; insistir en que todos los actos de acercamiento entre nuestras ciudades son deseados y bienvenidos porque aportan a la más fácil realización de las políticas que diseñan y aplican los gobiernos nacionales, en el común afán de hacer de nuestra América Latina un espacio de unión y de esfuerzos concertados y solidarios y expresar, en sus personas, tan distinguidas y apreciadas, nuestro afecto y estimación a nuestros hermanos de San Isidro, de Santiago del Chuco y a todo el pueblo peruano.

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DISCURSOS HISTÓRICOS

LA REVOLUCIÓN DE QUITO.(2007)

Quito, ciudad milenaria, enclavada en los Andes equinocciales, en un entorno geográfico majestuoso y espléndido, rodeada por volcanes de nieves

perpetuas y valles amplios de tierras fértiles y generosas, escribió con la sangre de sus mejores hijos, hace ya casi dos siglos, páginas de honor y dignidad de las más hermosas y significativas de la historia del pueblo americano.

Quito, de tradición heroica y rebelde, ha resistido con vocación libertaria toda forma de opresión, exceso y abuso del poder. Tan temprano como en 1544, a pocos años de su fundación española, intentó, en la llamada Rebelión de los Encomenderos, romper los vínculos de sumisión que la ataban a España; posteriormente escenificó, en los años 1592 y 1593, la llamada Rebelión de las Alcabalas, en 1765 se levantó en armas en contra de la ley de los Estancos y los Alcoholes, y el 10 de agosto de 1809, se convirtió en la procera de la libertad al iniciar el proceso revolucionario que culminaría con la independencia de las colonias hispano americanas.

El Presidente José Molina, que reemplazó al fallecido Ruiz de Castilla, el mandatario depuesto por la Junta Soberana de

(Pág. siguiente)Intervención del Alcalde de Quito en el lanzamiento libro Quito (25 de julio 2007)

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1809 expresa con lucida interpretación del espíritu quiteño, en informe al gobierno español: “La experiencia tiene acreditada que las ideas características de la Provincia de Quito son, desde su cuna, propensas a la revolución e independencia. Este es el espíritu que ha animado a los padres, esta la leche que ha alimentado a sus hijos…”

Tradición libertaria centenaria, recogida y reforzada a fines del siglo XIX por el genio y la pluma de Eugenio de Santa Cruz y Espejo, sin duda la más destacada figura de la Colonia ecuatoriana. Este polifacético mestizo quiteño fue médico e investigador afamado, hombre de leyes y de letras, fundó el primer periódico de la Audiencia y la primera biblioteca pública, se desempeñó como maestro universitario y fue un sobresaliente escritor. Como político, contribuyó decisivamente a la creación de la sociedad patriótica “Amigos de País”, de la cual fue su secretario, y en la que sembró su avanzado pensamiento.

Espejo se reconocía: “Fundador y devoto activo de la orden de los predicadores en el desierto”, pero, en contra de los dictados de su propio pesimismo, sembró en terreno fértil, en los indómitos espíritus de los quiteños, la semilla que iba a fecundar el 10 de Agosto de 1809, para concedernos el título glorioso de “Luz de América.”

La revolución de Quito tuvo amplia resonancia en toda la América hispana y en la propia España: el Dr. Jorge Salvador Lara nos cuenta que Emparam, Capitán General de Venezuela, prohibió con pena de muerte la circulación de impresos provenientes de Quito; el Santo Oficio de la Inquisición de Santa Fe de Bogotá, promulgó un edicto, el 24 de diciembre de

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1809, excomulgando a quienes tuviesen o leyesen proclamas cartas o papeles provenientes de Quito; La Junta de Santiago de Chile, organizada el 18 de septiembre de 1810, invocó en el momento de su constitución el ejemplo de la revolución quiteña; los patriotas de Michoacán, México, se reunían para platicar y conocer las cosas de Quito; y la publicación de los sucesos de agosto, en El Espectador Sevillano, de España, contribuyó a la Declaración de la Igualdad entre los Españoles y Americanos. Inclusive a fines del siglo XIX, Martí, el héroe de la revolución cubana, se refirió, en más de una ocasión al ejemplo revolucionario de Quito.

Sabemos bien que la Junta de Gobierno quiteña tuvo corta vida. Las tropas virreinales la sofocaron; sin embargo, la brutalidad de la represión ejercida por las autoridades españolas explica los alcances de la Revolución; la horrible matanza de los próceres, que alcanzó al pueblo y especialmente a la juventud universitaria quiteña, el 2 de agosto de 1810, encendió la llama de indignación y rebeldía que inflamó los corazones de los patriotas americanos y convirtió en irremediable la conquista de nuestra independencia.

Carlos Montúfar, enviado por el gobierno español para lograr la pacificación del pueblo quiteño, indignado al conocer de la crueldad de los acontecimientos del 2 de Agosto, inició una segunda lucha revolucionaria, que colmina con una nueva derrota y el fusilamiento del patriota quiteño fusilado en Buga. Destaquemos que en 1812, se expidió la primera Constitución quiteña, en la que consta que la soberanía proviene del Pueblo.

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La represión sufrida por el pueblo quiteño produjo la reacción indignada del resto de América. El 22 de octubre, en Caracas el pueblo, al mando de José Felix Ribas, se amotinó en contra de las autoridades españolas; En Bogotá el sabio Caldas protesto por los crímenes de Arredondo en su periódico: Diario Político; mientras que la Suprema Junta Gubernativa de Bogotá, expresó su solidaridad con el pueblo de Quito y amenazó con represalias al conde Ruiz de Castilla.

En Chile, el Padre Camilo Henríquez, escribió y puso en escena un drama bajo el título Camila, la Patriota de Quito, que también fue presentado en Buenos Aires; y las autoridades de Valparaíso ordenaron que en el faro del puerto se colocase una lápida en homenaje a los mártires quiteños con el título: “Quito Luz de América”, que honra a nuestra ciudad desde entonces y para siempre.

Bolívar fundamentó en la matanza del pueblo de Quito su famosa declaración de Guerra a Muerte: “No hablemos de los tres siglos de ilegítima usurpación en que el gobierno español derramó el oprobio y la calamidad sobre los numerosos pueblos de la pacífica América. En los muros sangrientos de Quito fue donde España, la primera, despedazó los derechos de la naturaleza y de las naciones. Desde aquel momento de 1810 las muertes de Quiroga, Salinas y tantos otros, nos armaron con la espada de las represalias para vengar aquellas sobre todos los españoles. El lazo de las gentes estaba cortado por ellos; y por ese sólo primer atentado, la culpa de los crímenes y las desgracias deben recaer sobre los primeros infractores.”

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La herencia de Agosto es una consigna permanente de dignidad y libertad para el pueblo ecuatoriano; que por esos valores ha combatido y combatirá toda forma de injusticia, explotación, exclusión, aun a costa de los mayores sacrificios.

Orgullosos de nuestra heroica historia, celebraremos en agosto del año 2009 el bicentenario del Primer Grito de la Independencia o de la Gesta Revolucionaria de 1809. Para la recordación de los primeros cien años, el Presidente General Eloy Alfaro convocó a una Feria Internacional, construyó el Palacio de la Exposición, actual edificio del Ministerio de Defensa, y en él estuvieron presentes países de Europa, Norteamérica y de los hermanos países latinoamericanos.

Unámonos todos los ecuatorianos para llegar a las celebraciones del Bicentenario, con el país recuperado, con las instituciones republicanas renovadas y fortalecidas, con un gobierno serio y responsable, con una planificación seria para caminar en la historia sin sobresaltos. Con un pueblo sano, mejor educado y atendido en sus necesidades básicas. Esa será la mejor manera de celebrar este aniversario especial de la gesta quiteña y rendir homenaje a quienes entregaron su tranquilidad, bienestar y aún sus propias vidas para legarnos un futuro de libertad y dignidad.

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EL EPISTOLARIO DE SUCRE(año)

Agradezco al Cronista de la ciudad, Dr. Jorge Salvador Lara, por haberme encargado esta grata tarea: Leer las cartas de Sucre, correspondientes a los últimos cinco

años de su vida y escribir un prólogo para el tercer tomo del epistolario de quien ha sido y es mi personaje histórico preferido. La figura de Sucre no es para controversias. A diferencia de lo que sucede con nuestros personajes históricos principales: Bolívar, Rocafuerte, García Moreno, Alfaro, Velasco Ibarra, para citar a algunos. De Sucre se ha escrito mucho. Hay tantas referencias sobre su personalidad, todas coincidentes en señalarle como un ejemplo de virtudes personales, cívicas y patrióticas.

Su vida ejemplar ha sido ampliamente reconocida. Ningún otro general, al menos que yo lo sepa, tuvo la suerte y el privilegio de ser biografiado por el propio Libertador y posiblemente ninguno como él estuvo expuesto durante tanto tiempo a la observación y juzgamiento de sus contemporáneos. Por esas razones, el epistolario del Gran Mariscal de Ayacucho es tan importante. Nos permite penetrar- desde testimonios escritos de su propia mano- en los espacios más íntimos de su generoso corazón. Gracias a estas cartas podemos conocerlo mejor, valorar las distintas facetas de su carácter y conducta para extraer

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del ejemplo de su rica vida las enseñanzas que sirvan como guíaz de conducta, especialmente para quienes se ven enfrentados a la dura y tantas veces ingrata tarea del servicio público.

En el prólogo del segundo tomo del Epistolario Quitense del Gran Mariscal Antonio José de Sucre, destaqué las singulares virtudes de estadista que adornaban al héroe de Pichincha y que las demostró en la administración del Distrito del Sur de Colombia. De igual modo corresponde hacerlo ahora sobre el ejercicio de sus tareas públicas, especialmente en el corto desempeño de la Presidencia de Bolivia, en su victoriosa participación en defensa de la integridad territorial colombiana, a la Presidencia del Congreso Admirable y de la frustrada embajada ante Páez para evitar la separación de Venezuela de la Patria Grande.

Del periodo boliviano, como del quiteño, cabe destacar sus expresiones continuas de repugnancia al ejercicio de las tareas de gobierno. Refiriéndose a la disposición de Bolívar de quedarse a dirigir el nuevo Estado, le escribe a Santander: El Libertador quiere que me quede en el Alto Perú por mucho tiempo. Para complacer al general Bolívar me he quedado en silencio… de un lado temo que se me dé el mando en estos departamentos y yo aborrezco el mando de pueblos, hasta desesperarme la idea de que se me ocupe con él”

Y en carta a su amigo Aguirre, desde Cochabamba, en julio de 1825: “Por unos impresos que acompaño a Vd. verá que fui elegido presidente constitucional de Bolivia. Tuve la satisfacción de que de 114 votos de los colegios electorales, me dieron 111, lo cual justifica suficientemente mi

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administración. Sin embargo yo no he aceptado la presidencia y sólo he ofrecido desempeñarla hasta la reunión del primer congreso constituyente, el 8 de agosto de 1828. He tenido en mi negativa varias razones, entre otras, mi anhelo de irme a vivir a Quito como unos ciudadanos privados y muy privados en su casa: y la casa de Chillo o en Chisinche”.

Sin embargo, llamado al cumplimiento del deber lo hace de manera extraordinaria, de modo que mientras todo es alboroto en Colombia y en el Perú, en Argentina y Brasil, Bolivia se mantiene en calma. Sabe que está bien gobernada. Sucre escribe al respecto de su gestión: “He dado también una porción de decretos, y que por cierto son bastante benéficos para el país. Uno arregla un colegio de ciencias y artes… otro un colegio para huérfanos, otro arregla un hospicio para mendigos… un decreto mejora los hospitales, el sexto facilita el establecimiento de escuelas de primeras letras en todos los pueblos de este Departamento… con otro se crea una escuela de mineralogía… Todos estos mismos establecimientos benéficos están planificándose en Cochabamba, y ahora voy a organizarlos en Chuquisaca… Los establecimientos de educación de La Paz serán superiores porque el país es muy rico”.

Bolivia nace protegida por los Batallones colombianos, pero Sucre entiende que la soberanía de un país exige la organización de unas fuerzas armadas propias. Se dedica a ello mientras estimula el pronto retiro de los militares colombianos. El 4 de junio de 1827 escribe a Bolívar: “ Yo no sé porque el Gobierno no quiere aprender en la experiencia, es el más grande absurdo querer que unos cuerpos a 1.500 leguas tengan la misma dependencia del Gobierno que los

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de Bogotá. Ni el Gobierno español haría tales desatinos…Yo voy levantando los cuerpos de Bolivia. Ya hay siete escuadrones buenos con 900 hombres muy a caballo; y están organizándose tres batallones que están regulares. La Brigada de Artillería está completa y he conseguido un oficial científico para dirigirla. Tenemos pólvora, plomo, cañones, etc., etc., todo pronto y no faltan dentro del país cinco mil fusiles buenos; espero en dos meses dos mil y dentro de ocho seis mil”.

Posteriormente, en agosto, informa al Libertador: “Bolivia tiene ya tres batallones regulares con 1.500 hombres y siete escuadrones con unos 900 soldados, hay además la brigada de artillería en Oruro con 200 y la compañía de Santa Cruz con 300 hombres. Luego que se vaya Voltígeros subirán los tres batallones a 2.000 plazas y cuando se haya ido Pichincha se organizarán los cinco batallones decretados por el Congreso”.

Desde la distancia, sigue con preocupación los acontecimientos de Colombia que se desgarra e luchas fratricidas. Los amigos y los enemigos del libertador; los militares, los religiosos y los políticos. Sucre desea como nadie el fin de las revueltas, se declara ferviente defensor de la estabilidad y la paz. Advierte las susceptibilidades de los héroes legendarios de la independencia y escribe: “Algunos doctores pretenden tirar demasiado la cuerda… y una cuerda demasiado tirada suele reventar. Muy bueno que sometan las acciones de todos a las leyes, pero que sea de todos y no de una clase que después de ser la que tiene todos los títulos al reconocimiento público, porque es la única y exclusiva a la que se debe la existencia del Estado, tiene también en sus manos las escopetas y puede molestarse de observar esta

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especie de persecución. A lo que entiendo parece que no hay ni bastante prudencia ni bastante imparcialidad”.

Cuando se entera de la revuelta de los artilleros volantes de Quito, escribe: “En las conspiraciones militares es menester ejercer un rigor inexorable, si no todo se pierde”. Y en otra carta insiste sobre su indeclinable posición al afirmar: “Vd. sabe que yo soy de los jefes que tienen más serenidad con los militares para sujetar su conducta con los ciudadanos, al deber más estricto y que por tanto puedo decir que tengo voto en este negocio, aunque sea también militar. Deseo pues acierto y prudencia.

Cuando conoce por cartas de Aguirre de las ideas separatistas que con el ejemplo de Venezuela comienzan a circular en el Distrito del Sur, le contesta: “Por nada debe hacerse una fracción de la república… Además que Vds. dicen que Quito quiere ser gobernado por el Libertador o por mi, y esto es un despropósito, porque Vds. No deben ligarse a las personas, sino a los buenos principios”. Los buenos principio, los de la democracia, los de la unidad, los de la justicia, que él proclama y defiende.

Los problemas de Colombia la tienen a punto de los enfrentamientos internos. Angustiado porque los soldados de la libertad puedan derramar la sangre preciosa de sus hermanos, exige la sujeción a las leyes. Escribe: “Siempre he sido amigo de que cualquier alteración tenga lugar por los trámites mismos de las leyes; más si Vd. han creído que de cualquier manera es preciso alterar la constitución, opinaré que lo que quiera que se haga , sea sin alborotos… los pueblos tienen sus representantes en el cuerpo legislativo y por su

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medio todo puede hacerse legalmente. Nada más contagioso que la anarquía. Pobres pueblos”… “Siento que el Sur se alborote. Cada día veo más y más cuanto erró el gobierno aprobando la insurrección de Bustamante. Lágrimas y sangre constará a Colombia un paso tan falso… me limito por tanto a recomendar el orden, la obediencia a las leyes. Reclamen cuanto fuere menester, pero por los órganos legales”.

Pero también la paz de Bolivia se verá alterada, no por la situación interna, porque los bolivianos aman a Sucre y quisieran poder mantenerlo en el poder, sino por las intrigas de los caudillos peruanos, sus antiguos compañeros de armas en la guerra contra España. A Bolívar le escribe: “No puede Vd. pensar la caterva de papeles que vienen del Perú para trastornar a Bolivia. Hasta hoy nada han influido, pero quizás a la larga harán algo”.

La conspiración da resultados. Se produce el atentado de Chuquisaca. Gamarra., con el pretexto de protegerlo lleva tropas peruanas a Bolivia. A él le escribe en mayo del año 28: “… la mayor de las calamidades públicas, es que tropas extranjeras se mezclen en disensiones de una nación, me guardé bien de dar aquel paso,( se refiere a pedir el apoyo de fuerzas de Colombia) y con él un ejemplo fatal… Sin pedir auxilios a nadie, he sido sacado de las manos de los asesinos por las tropas y los pueblos bolivianos”. Herido en un brazo, entrega el poder y deja una lección que no supieron aprender los pueblos de América cuando sentenció: “En las guerras internas no cabe otra gloria que terminarlas”. Comprende, desilusionado, los males que aquejan a los nuevos pueblos, ocasionados por sus clases dirigentes - ayer como ahora- y los retrata de manera magistral con fina ironía:

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“Esta Colombia está condenada a ser un caos y un barullo. Cae uno del porrazo de un militar y si tiene fuerzas para levantarse, lo espera un fraile con su excomunión; y si por casualidad guarda uno alguna bendición apostólica de reserva para escaparse, lo espera un demagogo con su cuchilla popular; y si es tan afortunado que evade todos los peligros, lo aguarda en el término un rentista que lo lleva a vender en un estanco. Entre tanto se hace todo en nombre de la libertad y las leyes”.

Sucre es un gran guerrero, y por eso mismo, porque conoce de los horrores de la guerra ama la paz y procura evitar los enfrentamientos. Especialmente aquellos entre americanos. Por eso, cuando se entera de los problemas ocasionados por varias razones, entre ellas la indefinición de los límites entre los dos nuevos Estados, se toma la licencia de intervenir ante el Perú para evitar el agravamiento del conflicto: Le informa a Bolívar del siguiente modo: “Se me habló de una proclama de Vd. de 3 de julio, que equivalía a una declaración de guerra y de la contestación de Lamar el 30 de agosto… si la marina peruana es más fuerte y bloquea el lado productivo. Entonces se unirán a los ultrajes recibidos la manifestación tácita de incapacidad para vengarlos. En esta duda es que yo resolví tocar en el Callao, exponiéndome mucho, para ofrecer trabajar a una reconciliación… que las diferencias existentes se sometan a la Asamblea Americana”.

¿Qué había pasado? Bolívar, cansado de reclamar la devolución de Jaén y Mainas, así como el cumplimiento de obligaciones contraídas en la guerra de la independencia del Perú, había lanzado un ultimatum: “Si dentro de seis meses contados desde la fecha, no hubiere puesto el Perú a las órdenes de la Intendencia del Azuay a las provincias de Jaén y

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parte de Mainas que retiene, el Gobierno de Colombia creerá no sólo que el Perú lo hostiliza con ánimo irrevocable, sino que ha dejado la decisión a la suerte de las armas”. En respuesta, el Congreso del Perú decretó que el Ejército y la Armada sean puestos en pie de guerra, autorizó al presidente Lamar mandar personalmente las operaciones y dispuso, el 9 de septiembre de 1828, el bloqueo de los puertos colombianos “desde Tumbes inclusive, hasta Panamá”.

En Agosto combaten la goleta Guayaquileña con la corbeta peruana Libertad, en Punta Malpelo. El 22 de Noviembre de 1828, la Escuadra peruana, al mando del almirante Guisse, ataca Guayaquil. La heroica resistencia del pueblo huancavilca, que cobró la vida del Comandante peruano, se prolongó hasta el 19 de Enero, cuando Illingworth se vio forzado a capitular. El Intendente de Guayaquil informa así a Bolívar, al reclamar su auxilio: “Nunca se borrarán de nuestra imaginación las calamidades y privaciones de toda especie que hemos sufrido en estos días de desolación, horror y muerte. Nuestros santos templos, nuestros monumentos públicos, nuestras casas, el sexo delicado, nuestras familias desoladas, que hoy vagan despavoridas por los campos han sido el blanco del bárbaro opresor de nuestra ría. Su plomo mortífero no ha perdonado ni la tierna infancia, cuya sangre inocente tiñe las márgenes del Guayas.”

Sucre, como relatamos antes, había intentado en el Callao mediar para evitar la guerra. Cuando llega a Guayaquil, de regreso a su añorada Quito, escribe al Libertador: “Llegado a guayaquil, he encontrado, aquí con una misión de V. E. cerca del gobierno del Perú, para tentar negociaciones pacíficas… Si se observa que por parte de V. E. se solicita la paz, y que por

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parte del gobierno del Perú también se habla de paz, como el bien necesario a los nuevos Estados de nuestro continente, resulta que la falta de explicaciones es la que va a conducirnos a una guerra”.

“¡Bendito sea el día que usted llegó a Guayaquil!”, le escribe el Libertador y le encarga la conducción suprema de la guerra.

El 18 de Diciembre de 1828, El Gran Mariscal envía una carta a Flores, con sus amistosos consejos. Destaca la importancia de Cuenca para la defensa; la necesidad de no ceder en ninguna circunstancia más halla del nudo del Azuay, porque hacerlo abriría para el enemigo una línea de operaciones desde Naranjal. La Base de Operaciones debe ubicarse en Riobamba; se enviará un escudo protector hacia el Norte para enfrentar a Obando que actúa en connivencia con Lamar; Parte de los medios se orientarán Guayaquil y con la masa se conducirá una maniobra defensiva desgastando al adversario en la línea de operaciones Loja - Cuenca. Aconseja: “...opino que usted debe concentrar sus fuerzas abandonando a Guayaquil... la pérdida de Guayaquil me parece insignificante en cambio de destruir los 4000 peruanos que se han presentado en Loja... es difícil que una división peruana penetre desde Guayaquil a Riobamba...Así la espalda del Ejército está segura...No creo que sea bueno abandonar Cuenca: creo que al enemigo debe esperarse a las puertas de esa ciudad...La llanura de Tarqui es buen campo de batalla...El abandono de Cuenca facilitaría al enemigo reponer sus caballos, descansar sus tropas, reunir sus hospitales, y, en fin, reparar sus pérdidas como yo lo hice el 22...La pérdida de Cuenca traería consigo la pérdida de Guayaquil...los enemigos recibirían auxilios por Naranjal...La conservación de Cuenca es mucho más importante que

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la del Departamento de Guayaquil...Creo que es urgente que el Batallón Pichincha y el Escuadrón Húasares guarden el lado Norte, sea en la provincia de los Pastos o en la de Ibarra...Será bien hacer depósitos en Riobamba...el abandono de Guayaquil (se justifica) porque insisto que de ningún modo nos debemos dejar batir en detal. La conservación y el triunfo del Ejército es la base de la existencia de los pueblos.” Este extracto de la carta a Flores nos permite apreciar las altas cualidades de Sucre como estratega, su comprensión cabal de los objetivos político y militar de la confrontación, la aplicación sabia de los principios de la guerra, el empleo óptimo del escenario, su valoración objetiva de las fuerzas, sus previsiones logísticas prudentes.

En esa misma carta le dice a Flores: Estaba de viaje a Mindo, y regresé al instante que tuve una carta del Intendente, avisándome que un cuerpo de cuatro mil peruanos ha penetrado nuestras fronteras…. Seguiría mañana mismo a Cuenca si el conocimiento que tengo de la revolución no me hiciera sospechar, que puedo ser más perjudicial que útil. En nuestra conferencia aquí me dijo Vd. que llenando un deber de amistad me aconsejaba de no tomar el mando del ejército porque muchos de los jefes eran mis personales enemigos. .. No apetecía entonces el mando, ni lo quiero ahora; pero el honor y el patriotismo me inducen a repetir que estaré con las tropas el momento que Vd. me insinúe que puedo ser allí de algún provecho”.

Prima felizmente el sentido común y Flores le invita a tomar el mando de la guerra. ¿Podía haber sido de otro modo? ¿Podía el exacerbado egoísmo y los resentimientos de algunos de sus subalternos impedir contar con él que era una garantía de victoria? Felizmente no. El 23 de

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febrero del año 29, desde Riobamba, escribe a Aguirre: “Esta tarde he recibido contestación del general Flores y me llama para el ejército. Me pondré en marcha al amanecer de mañana, y estaré en Cuenca el martes.

El 27 de enero Sucre llega a Cuenca, como Jefe Superior del Sur y arenga a los Cuerpos del Ejército: “Colombianos: Una paz honrosa o una victoria espléndida son necesarias a la dignidad nacional y al reposo de los pueblos del Sur. La paz la hemos ofrecido al enemigo: la victoria está en vuestras lanzas y bayonetas”.

La inteligente conducción de la maniobra, la correcta selección del terreno en que ha de dar la batalla, el conocimiento de sus adversarios – “para mí son como cartas marcadas”- la motivación de sus soldados, las correctas previsiones logísticas, el hábil manejo de la relación con Lamar, la bravura del buen general Flores, culminarán con una victoria espléndida, obtenida por su magistral conducción y por las lanzas y bayonetas de sus soldados.

El 28 de enero se dirige al General Lamar para evitar la guerra: “siguiendo el primer impulso de mi corazón de ahorrar sangre americana próxima a derramarse en la campaña invierto mis oficios por evitar que los soldados que a mis órdenes pelearon por la Independencia, empleen sus armas para destruirse recíprocamente…. No pretendo sino dejar bien puestos el honor, los intereses y la dignidad de Colombia, sin exigir humillaciones a la República peruana.” La respuesta es soberbia: “El campo de batalla y no las jactancias establecerán de que parte está la superioridad” dice Lamar. No le preocupa de qué parte está la razón.

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Sucre no desmaya en su afán por evitar la guerra, en el documento conocido como: Las Bases de Oña, propone nombrar una comisión para arreglar los límites según la división política y civil vigente el 10 de Agosto de 1809, fecha en que estalló a la revolución quiteña. Lamar rechaza también esta nueva propuesta.

El 8 de Febrero, desde su cuartel de Paquishapa insiste el Mariscal Sucre, con un nuevo mensaje de paz: “ … no aspiramos humillar al Perú, porque es de nuestro honor mismo que ningún pueblo de América se envilezca; queremos todo lo noble y todo lo justo. En medio del disgusto que nos causa esta lucha, nos consuela la idea de que las desgracias que ella arrastra no son buscadas por nosotros. Defendemos nuestros hogares, nuestros derechos, nuestra independencia, contra un enemigo que nos ha invadido”.

El 11 de febrero logra iniciar conversaciones de paz en Saraguro. Lamar las aprovecha para maniobrar con sus fuerzas hacia la retaguardia colombiana. La guerra se hace inevitable. El 12 de Febrero el General Urdaneta derrota en Saraguro a parte de la fuerza peruana, destruye sus instalaciones logísticas y captura pertrechos y banderas de guerra y, finalmente, el 27 de febrero, en apenas dos horas de combate, es derrotada la fuerza invasora que sufre, según los partes de guerra, más de dos mil quinientas bajas entre muertos, heridos y prisioneros.

A la mañana siguiente el mando peruano decide reiniciar las negociaciones, aceptando luego de la derrota las propuestas de Sucre previas a la Batalla.

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Se firma el tratado de Girón en los mismos términos establecidos en las Bases de Oña. Sucre informa al Ministro de Guerra de Colombia sobre dicho tratado: “Hemos podido sacar más ventajosas condiciones y aun imponerlas abusando de la victoria; pero juzgué del honor de la Nación y del gobierno que el Ejército concediera casi lo mismo que habíamos exigido antes de la batalla, y que no humillaremos las armas, ni al pueblo peruano”. Refiriéndose al mismo asunto el General O’Leary escribe el 3 de marzo: “Hemos creído que la generosidad después de la victoria es más noble y más gloriosa; vuelve el Ejército peruano abatido. Cuando pasó al Macará tenía 8.000 hombres y hoy no lo pasan 1.500”Dijimos antes que Bolívar quiso escribir, de su propia mano la biografía de Sucre. Es que la relación entre estos dos grandes libertadores fue entrañable. Sucre vio siempre en el Libertador a su padre espiritual. Es tan grande la confianza que le inspira Bolívar que, cuando decide contraer matrimonio con su adorada Mariana, le consulta sobre su decisión. Le escribe: “He resuelto cumplir de una vez el compromiso a que estoy ligado con la señorita Solanda en Quito… si hay circunstancias que hagan parecer mal este partido, autorizo a Vd. para que escriba a Aguirre que lo suspenda. He dicho a Vd. que confío siempre de sus consejos como los que recibiría de mi padre.

Pero, esa relación que es de absoluto respeto y confianza no le priva a Sucre de ser franco con su amigo, así, frente al ultimátum al Perú le advierte: “Diré también (pidiendo antes la indulgencia de U. por mis opiniones) que yo consideré como prematura y precipitada la declaración de guerra sin dominar el Pacífico.

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Para Sucre era impensable una Colombia en Paz sin la presencia del Libertador. Así lo hizo saber como presidente del Congreso en Bogotá en 1830, cuando en su mensaje dirigido a Bolívar le dijo: “Mientras no se establezcan instituciones libres al mismo tiempo que fuertes, la historia de todos los países enseña que la pública tranquilidad depende necesariamente de las personas. El monstruo de la anarquía se cebaría, señor en Colombia, si vos la abandonaseis en este momento.

Pero, la ingratitud de los dirigentes y su insaciable ambición obran para que Bolívar deje el poder y salga de Colombia. Sucre no alcanza a estar para despedirlo. Por eso le escribe: “Cuando he ido a casa de Vd. para acompañarlo, ya se había marchado. Acaso es esto un bien, pues me ha evitado el dolor de la más penosa despedida. Ahora mismo, comprimido mi corazón, no se que decir a Vd”.

“Más no son palabras las que pueden fácilmente explicar los sentimientos de mi alma respecto de Vd.; Vd. los conoce, pues me conoce mucho tiempo y sabe que no es su poder, sino su amistad la que me ha inspirado el más tierno afacto a su persona. Lo conservaré, cualquiera que sea la suerte que nos quepa, y me lisonjeo que Vd. me conservará siempre el aprecio que me ha dispensado. Sabré en todas circunstancias merecerlo”.

“Adiós, mi General, reciba Vd. por gaje de mi amistadlas lágrimas que en este momento me hace verter la ausencia de Vd. Sea Vd. feliz en todas partes y en todas partes cuente con los servicios y con la gratitud de su más fiel y apasionado amigo”.

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La relación de Sucre con Quito merece un tratamiento particular. Desde el triunfo de Pichincha el general cumanés se enamoró de la ciudad y del país. Son múltiples sus demostraciones de afecto y es reiterada la expresión de su voluntad de venir a vivir en nuestra Capital. Desde Cochabamba, en julio de 1825, le escribe a su amigo el coronel Aguirre: “Todas mis ansias después de acabada la campaña del Perú es ir a Quito, descansar unos días para dar un salto a Cumaná a ver mi familia y arreglar sus intereses y sus asuntos que han sufrido algún trastorno después de la muerte de mi padre y volverme a establecer para siempre en Quito”.

Y son repetidas las ocasiones en que se refiere a su preferencia por Quito. He aquí algunas de ellas, en carta al coronel Aguirre: “Vd. que sabe cuanto amo yo a Quito juzgará mi pesar de saber que en lugar de los adelantos que tanto deseo, sufra atrasos… Vd. me dice que la sal llegó a subir hasta 12 pesos la arroba y no sé porque sea esto, pues en bodegas creo que sólo vale un peso. Si ese estando es para Vds. Tan gravoso, sus diputados debieran representarlo. Si yo estuviera en Quito haría uno, ciento y mil reclamos contra lo que perjudicare al pueblo”.

Y otra: “Acaso me veré en la precisión de quedar en esta república hasta el año 27 pero yo nunca pierdo de vista irme a fijar en Quito, porque pienso que mis huesos se entierren en el Ecuador, o que se tiren en el volcán Pichincha”.

Pero sus declaraciones de amor a Quito se traducen en hechos y preocupaciones concretas. Se encarga de solicitar algunas Vicuñas para enviarlas a su ciudad adoptiva: “Le dije al Libertador que procurase mandar a Vds. Las vicuñas que

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me piden porque será más fácil hacerlo desde Lima que desde aquí”.

Al Coronel Aguirre: “Celebro que Vd. ocupándose siempre del bien de su país haya ido al trabajo del camino a Esmeraldas. Creo que los quiteños deben tomar mucho interés en que ese camino se abra lo más breve y en establecer por ese lado todas sus relaciones de comercio. Si yo estuviera allí, a cargo, ya esto se habría logrado porque siempre lo pensé con interés”.

Justifica las reacciones de los pueblos del Sur frente a los costos de la Guerra. El 6 de diciembre de 1828l le dice a Bolívar: “Para condenar la falta de entusiasmo de esta gente es preciso recordar sus sufrimientos en diez y ocho años de revolución, sus desembolsos por la guerra de Pasto, y las exacciones que fueron urgentes para la del Perú. Cuando esperaban que la paz los convaleciera, tuvieron por recompensa leyes de destrucción y desprecios insoportables… pensar que todos los medios para la empresa podían sacarse sólo del Sur, y fiarla a los descontentos Departamentos de la frontera fue a la vez un cálculo fallido… Si hay motivos o no para el aniquilamiento del entusiasmo, júzguelo U….”

Se preocupa también por la economía quiteña. En carta a : “ Indicaré toda vez, que si nos e prohíbe absolutamente en todo el Sur la introducción de los artículos manufacturados ordinarios de lana y algodón, hasta la harina de trigo, estas provincias se arruinan, y como la propia conservación es el primer deber del hombre, alegarán ellas un derecho indispensable para separarse de un gobierno que las destruye”.

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Refiriéndose a los mismos temas, en carta a : “Muy de paso diré que aunque Mr. Necker asegura que los intereses de Quito se concilian aumentando alcabalas a los géneros que se trabajan aquí, le contestaría que el aumento de derechos es una incitación al contrabando, y una protección a la introducción de las manufacturas extranjeras, más y más perjudicial a los intereses de los fabricantes del país… sin que se arruinen estos pobres manufacturero; con leyes de franquicias escritas muy bonitamente en libros, pero que no repractican ni en Francia ni en Inglaterra donde no se permitiría a un poblé quiteño ni aún comer con un tenedor hecho en su país. Parecería que estas reflexiones son oportunas ahora que se negocia el TLC y los Estados Unidos, fuerza el libre comercio y el fin de los subsidios a los otros países, pero los mantiene en beneficio de sus agricultores. Neo liberales cuando les conviene; estatistas y keynesianos cuando no.

Cuando viaja a Bogotá para participar por Cumaná en el Congreso, comunica a Aguirre en enero de 1830: “Está dictado el decreto sobre la apertura del camino a Esmeraldas. Acabo de ver al Ministro del Interior y me dice que está en la imprenta; pero que nada se ha variado en los términos que yo lo puse. Se señalan doce mil pesos por año, y corre en la empresa una Junta compuesta de Vd., el Marqués de San José, don Guillermo Matheu y el Prefecto que la preside”.

Conocedor de nuestra historia, se refiere a las unidades militares peruanas mandadas por Arredondo, cuando en el parte de la batalla de Tarqui escribe: “El campo de batalla era un espectáculo de horror: mil quinientos cadáveres de soldados peruanos han expiado en Tarqui las ofensas hechas por sus caudillos a Colombia y al LIBERTADOR; y tal vez los crímenes del 10 de agosto de 1810 en Quito.

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A Mariana, le quiere por esposa por lo que ella es y, también por ser quiteña, así lo expresa en carta a su amigo el coronel Aguirre: A decir a Ud. La verdad M… es una mujer que me convendría porque su carácter con el mío se avienen, porque después de dos años y medio de estar ausente, tengo por ella tanto cariño como estándola tratando y porque después de todo es Quiteña y yo quiero una quiteña para compañera de mi vida.

Al coronel Aguirre, el 3 de abril de 1827: “Ya la mía no es desesperación sino ansia de irme a Quito. Dicen las gentes por aquí que soy un loco enamorado de mi novia, y yo les digo que soy casado ya y muy enamorado de mi mujer. ¿Qué dice mi buena M… de todo esto? La quiero más que nunca”“Por fortuna, cada vez estoy más contento de mi elección con M… para mi compañera, y el quererla a los cuatro años de ausencia con más extremo y cariño que el día que dejé de verla, me parece el mejor presagio de una vida tranquila con ella y de que nuestra familia sea el seno del reposo y de la dicha”.

No cabe duda que Sucre fue un excepcional militar, un estadista sobresaliente, un diplomático fino, un esposo y amigo ejemplar; pero todo esto solamente resume sus cualidades como ser humano, preocupado siempre por los más débiles, por los que más necesitan. ¿No son ellos los primeros en ser atendidos en sus actos de gobierno?

Después del triunfo de Ayacucho recibe recompensas económicas que le sirven para ayudar a las familias de sus compañeros caídos en combate. Así lo informa en carta al coronel Aguirre: “Este Alto Perú ha regalado un millón de pesos a nuestro ejército… mi parte del Alto Perú la he cedido

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para las viudas e hijos de los soldados colombianos muertos en Ayacucho, pues en el Bajo Perú me han dado bastante para vivir”.

De su paso por Guayaquil, en el inicio de la campaña libertadora de Quito, concibe una hija. Le escribe a Aguirre: “En Guayaquil tengo una niñita, que sea o no mía, su madre los decía así, y he llegado a creerlo. Su madre, Tomasa Bravo, ha muerto, según me han escrito de Guayaquil y la chiquita (que se llama Simona) no se quien la tenga y es mi deber y deseo recogerla. Abuso de la amistad de Vd. para rogarle que me haga llevar esa niñita a Quito y la ponga en una casa en que la eduquen y la críen con mucha delicadeza y decencia”.Del mismo modo, preocupado por la situación de sus hermanos, les hace llegar todos los auxilios que puede. Al coronel Aguirre le dice: “Sabe Vd. que mi haber nacional de Colombia con todo lo que él ha producido desde el año 23 que está en giro, lo he dado a mi familia”.

Y finalmente, en carta al Libertador: “Mi conducta es clara como la luz, y mi alma está formada por mis principios; y estos por mi educación. No ha sido necesaria la revolución para sacarme del lodo, ni mi carrera está formada por intrigas sino por servicios positivos y por una conducta que con la cabeza erguida, sostengo que es intachable”.

Ese fue Sucre. Y qué bueno que el pueblo quiteño y el ecuatoriano, especialmente los jóvenes estudiantes, puedan disponer de este nuevo tomo en que se publican las cartas de los últimos años de su corta pero fructífera vida. Que esta sea un modelo de virtudes que nos permita cultivar el ejemplo del mejor de los generales de Bolívar y de la libertad.

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INAUGURACIÓN DELA ESTATUA DEEUGENIO DE SANTA CRUZ Y ESPEJOEN

MADRID1. EL BICENTENARIO

El 10 de agosto de 1809, la ciudad de Quito amaneció entre atónita y exaltada con la noticia de que el Conde Ruiz de Castilla, presidente de la Real Audiencia había

sido depuesto y que una Junta de Gobierno había tomado el poder y declarado la independencia.

Los Virreinatos de Lima y Nueva Granada reaccionaron inmediatamente, sofocaron la insurrección y apresaron a los patriotas en los calabozos del Cuartel Real.

Un año después, el 2 de agosto de 1810, jóvenes universitarios, familiares y dirigentes de los barrios de la ciudad intentaron poner en libertad a los presos, fracasaron y las tropas virreinales asesinaron a presos, líderes políticos y estudiantes.

El sacrificio de los mártires quiteños indignó a los americanos. Bolívar fundamentó en este hecho su histórica declaración de guerra y los patriotas chilenos de Valparaíso colocaron una placa en el faro del puerto con la leyenda “Quito Luz de América”, calificativo que honra desde entonces a la capital de los ecuatorianos.

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10 años después, Guayaquil alcanzó su independencia. Desde esta ciudad, convertida en la base de las operaciones del Ejército de la libertad, el General Sucre inició la campaña político militar que culminó en Pichincha el 24 de mayo de 1822, sellando así la independencia del actual Ecuador.

2.EL SIGLO DE LA ILUSTRACION

Pero, ¿Cómo y con quién inició ese singular movimiento revolucionario? ¿Quién inculcó en los quiteños la pasión por la libertad? ¿Quien sembró en sus mentes la semilla independentista?

Fue Eugenio de Santa Cruz y Espejo, cuya estatua entregamos hoy al pueblo de Quito y del Ecuador.

Sin duda el fue la más destacada figura de la Colonia ecuatoriana, pródiga en personalidades como la del sabio Pedro Vicente Maldonado, el historiador Juan de Velasco, la santa Mariana de Jesús, Azucena de Quito, el poeta Juan Agustín Aguirre y centenares de asombrosos escultores y pintores de la talla de Legarda, y Caspicara.

Espejo nació en 1747, hijo de un indígena peruano y una mestiza quiteña. Fue médico e investigador afamado, fundó el primer periódico de la Audiencia y la primera biblioteca pública, se desempeñó como maestro universitario y fue un sobresaliente escritor.

Espejo fue sin duda fruto destacado del siglo de las luces, y uno de los más preclaros exponentes de la ilustración americana. Fruto de las especiales circunstancias de tiempo y espacio en

(Pág. anterior)intervención Alcalde en el monumento a Espejo en Quito

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que transcurrió su ciclo vital. De esa nueva etapa civilizatoria de la humanidad fundamentada en una firme confianza en el poder supremo de la razón humana, sustentada en la teoría de la gravitación universal de Isaac Newton, en la consigna de Inmanuel Kant de atreverse a conocer, en el reto de reexaminar, de cuestionar. En la aceptación de la posibilidad y necesidad del progreso.

3. EL DERECHO A LA EDUCACION

A pesar de los discrímenes de la época y venciendo tenaces resistencias, de los grupos de poder, se graduó en la Universidad San Gregorio de Quito como médico, como doctor en Derecho civil y como doctor en Derecho Canónigo.

Como médico y naturista aportó a los conocimientos de la época con investigaciones importantes. En 1785 publicó “Reflexiones sobre un método seguro para preservar a los pueblos de las viruelas”, Comentarios a los aportes del doctor Francisco Gil, miembro de la real Academia Médica de Madrid, que le permitieron realizar un crudo análisis de la pobres condiciones higiénicas de la América colonial.

4. EL COMBATE A LA DEDIOCRIDAD

Como pedagogo censuró en “Diálogos del Nuevo Luciano”, publicado en 1777, los sistemas educativos de los jesuitas, quienes ejercían una gestión preponderante en la educación quiteña y contribuyó desde la cátedra, a la formación política de los patriotas infelizmente sacrificados en los calabozos del Cuartel Real y de las calles de Quito.

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Iguales críticas se encuentran en su ensayo “La ciencia Blancardina”, en la que ahonda la crítica al sistema de educación y a la falta de atención de los gobernantes a solucionar los graves problemas que afectaban a la vida del pueblo.

5. LA SIEMBRA DEL ESPIRITU DE LA LIBERTAD

Amigo cercano del Marqués de Selva Alegre don Juan Pio Montufar y de las elites criollas quiteñas aportó con los argumentos esenciales para un proyecto autonómico de la Presidencia de Quito.

Contribuyó decisivamente a la creación de la sociedad patriótica “Amigos de País” y “La Escuela de la Concordia”, germen de los movimientos independistas, de la cual fue su secretario, y en la que divulgó su avanzado pensamiento.

Como filósofo dejó plasmada su extraordinaria erudición en innumerables libros: “Marco Poncio Catón”, “Carta al Padre Lagraña sobre Indulgencias”, “El Sermón de San Pedro”, “La Ciencia Blancardina” y fue inculpado de la difusión de “|El Retrato de Golilla”; esta última una sátira contra el rey Carlos III

Posteriormente publicó, también su “Defensa de los Curas de Riobamba” y “Cartas Riobambenses”, “Voto de un ministro Togado de la Audiencia de Quito” y en 1794 una “Segunda Carta Teológica”

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6. LA JUDICIALIZACION DE LA POLITICA

Como una práctica perversa, no entendible siquiera en un sistema monárquico, se ha usado del poder para perseguir judicialmente a las personas honestas que se atreven a pensar con libertad y a combatir la corrupción.Ese fue el caso de los Presidentes de la audiencia, José García Pizarro, Juan José Villalengua quien se expresó de Espejo diciendo que era “propenso a la sátira y de carácter soberbio, impetuoso y osado hasta lo sumo, a quien calificó de delincuente, de genio inquieto y maligno” del mismo modo que Luis Antonio Muñoz de Guzman quien lo encarceló y provocó su temprana muerte. Inculpándole de la aparición de las leyendas aparecidas en quito convocando a los quiteños a ser libres y conseguir la felicidad y a reconocer que la gloria está al amparo de la cruz.

Por sus polémicas ideas políticas fue a prisión y luego desterrado a Bogotá, donde conoció y entabló estrechas relaciones con Nariño y Zea, precursores de la independencia colombiana.

Murió en prisión, pobre en 1795, como los grandes idealistas, dejando sin embargo una invalorable herencia de conocimientos, libertad y dignidad.

7. LAS ENSEÑANZAS DE ESPEJO

Dos cientos años después, la ciudad de Quito, cuna de Espejo, reflexiona también sobre las mejores formas de enfrentar y aprovechar los grandes cambios de fines del siglo XX en esta nueva era civilizatoria marcada hondamente por la revolución

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de las tecnologías que ha incidido de forma dramática en todos los aspectos de la vida de la especie humana y de sus organizaciones sociales y políticas.Una forma de enfrentar las vicisitudes de la nueva era es, sin duda, la de valorar los hechos de nuestro gran pasado, analizar objetivamente la situación presente e interpretar con acierto los escenarios de futuros posibles.

Para hacerlo de manera digna, hemos planificado las celebraciones del bicentenario de la revolución quiteña, con grandes eventos culturales, sociales, políticos y con el desarrollo de grandes proyectos que marquen un importante hito en la vida de la ciudad.

Para el Ecuador no será un simple elemento decorativo urbano, será el recordatorio permanente del compromiso del pueblo quiteño de enfrentar la mediocridad, la corrupción, el mal gobierno, la injusticia y la falta de libertad.

Para terminar, deseo expresar mis sentidas felicitaciones al artista ecuatoriano Eduardo Maldonado y a los talleres de Eduardo Carpa donde se realizó la fundición en bronce de esta hermosa escultura y, por supuesto, nuestro sentimiento de profunda gratitud al apuntamiento de madrid y a su digno Alcalde, Alberto Ruiz Gallardón por haber aportado decididamente la realización de este proyecto.

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MANUELA CAÑIZARES(año)

Es digno de todo aplauso el esfuerzo realizado para destacar la figura de Manuela Cañizares Álvarez, una de las principales protagonistas de la gesta libertaria

del 10 de Agosto; tanto por ser la mujer que desempeñó un papel fundamental en la toma de las decisiones cruciales en los días previos al de la constitución del primer gobierno libre de América Latina, cuanto por la dificultad de descifrar, con tan escasas fuentes históricas la naturaleza de su personalidad y los detalles de su trascendente vida.

Más importante todavía que se haya realizado esta inteligente investigación cuando Quito se prepara para celebrar los doscientos años de los acontecimientos que dispararon el proceso emancipador de América hispana.

Quito, de tradición heroica y rebelde, ha resistido dignamente toda forma de opresión, exceso y abuso del poder. Tan temprano como en 1544, a pocos años de su fundación española, intentó, en la llamada Rebelión de los Encomenderos, romper los vínculos de sumisión que la ataban a España; posteriormente escenificó, en los años 1592 y 1593, la llamada Rebelión de las Alcabalas, en 1765 se levantó en armas en contra de la ley de los Estancos y los Alcoholes y en 1809, fue la adelantada de la libertad en América. Así fue, así ha sido y será, hasta el fin de los tiempos…

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El Presidente José Molina, quien reemplazo del fallecido Ruiz de Castilla y fue a ejercer sus funciones en Cuenca, expresa con inteligente juzgamiento esta realidad, que Manuel De Guzmán, autor de esta investigación transcribe: “La experiencia tiene acreditada que las ideas características de la Provincia de Quito son, desde su cuna, propensas a la revolución e independencia. Este es el espíritu que ha animado a los padres, esta la leche que ha alimentado a sus hijos…”

Tradición libertaria recogida y reforzada por el genio y la pluma de Eugenio de Santa Cruz y Espejo, sin duda la más destacada figura de la Colonia ecuatoriana. Este polifacético mestizo quiteño fue médico e investigador afamado, hombre de leyes y de letras, fundó el primer periódico de la Audiencia y la primera biblioteca pública, se desempeñó como maestro universitario y fue un sobresaliente escritor. Como político, contribuyó decisivamente a la creación de la sociedad patriótica “Amigos de País”, de la cual fue su secretario, y en la que divulgó su avanzado pensamiento. Como filósofo dejó plasmada su extraordinaria erudición en innumerables libros. Alguien que se reconocía: “Fundador y devoto activo de la orden de los predicadores en el desierto”, pero que, en contra de los dictados de su propio pesimismo, sembró en terreno fértil, en los indómitos espíritus de los quiteños, la semilla que iba a fecundar el 10 de Agosto de 1809, para concedernos el título glorioso de “Luz de América.”

Manuela Cañizares se contagió del fervoroso sentimiento de libertad legado por Espejo, eso se descubre en las páginas de este importante trabajo histórico, que nos relata, con el respaldo de un prolijo estudio de varias fuentes, la presencia y acción de Manuela en el movimiento revolucionario del año 1809.

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En efecto, 10 de agosto la ciudad de Quito amaneció exaltada con la noticia de que el Conde Ruiz de Castilla, presidente de la Real Audiencia había sido depuesto y que una Junta de Gobierno había tomado el poder y declarado la independencia. Posiblemente nada de lo que sucedió aquel día trascendental de nuestra historia americana habría sido posible sin la intervención oportuna y desafiante de esa quiteña valiente.

Ella impidió la dilación en la decisión de deponer al Presidente de la Audiencia, inicio de la revolución de Quito, que tuvo amplia resonancia en toda la América hispana y en la propia España. El Dr. Jorge Salvador Lara nos cuenta que, Emparam, Capitán General de Venezuela, prohibió con pena de muerte la circulación de impresos provenientes de Quito; el Santo Oficio de la Inquisición de Santa Fe de Bogotá, promulgó un edicto, el 24 de diciembre de 1809, excomulgando a quienes tuviesen o leyesen proclamas cartas o papeles provenientes de Quito; La Junta de Santiago de Chile organizada el 18 de septiembre de 1810 invocó en el momento de su constitución a la revolución quiteña; los patriotas de Michoacán México, se reunían para platicar y conocer las cosas de Quito; y la publicación de los sucesos de agosto, en El Espectador Sevillano, contribuyó a la Declaración de la Igualdad entre los Españoles y Americanos. Finalmente, ya a fines del siglo XIX, Martí, el héroe de la revolución cubana, se refirió, en más de una ocasión al ejemplo revolucionario de Quito.

La naturaleza de la represión ejercida por las autoridades españoles explica los alcances de la Revolución. La horrible matanza de los próceres, que alcanzó al pueblo y especialmente a la juventud universitaria quiteña, el 2 de agosto de 1810,

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encendió la llama de indignación y rebeldía que inflamó los corazones de los patriotas americanos y convirtió en irremediable la conquista de nuestra independencia.

En Caracas el pueblo, al mando de José Felix Ribas, se amotinó en contra de las autoridades españolas el 22 de octubre de 1810; En Bogotá el sabio Caldas protesto por los crímenes de Arredondo en su periódico, Diario Político; mientras que la Suprema Junta Gubernativa de Bogotá, expresó su solidaridad con el pueblo de Quito y amenazó con represalias al conde Ruiz de Castilla; y las autoridades de Valparaíso ordenaron que en el faro del puerto se colocase una lápida en homenaje a los mártires quiteños con el título: “Quito Luz de América”, que honra a nuestra ciudad desde entonces y para siempre.

En Chile, el Padre Camilo Henríquez escribió y puso en escena un drama bajo el título: “Camila, la Patriota de Quito”. Esta obra fue presentada también, posteriormente, en Buenos Aires. Fue ese el reconocimiento de la participación de la mujer quiteña en la épica gesta libertaria y fue, por consiguiente, un homenaje a Manuela Cañizares, la principal patriota que participó en aquella memorable jornada.

La trascendencia de la revolución de Quito y de su drástica represión fue reconocida también por el Libertador Bolívar, quien fundamentó en la matanza de los mártires quiteños su famosa declaración de Guerra a Muerte: “No hablemos de los tres siglos de ilegítima usurpación en que el gobierno español derramó el oprobio y la calamidad sobre los numerosos pueblos de la pacífica América. En los muros sangrientos de Quito fue donde España, la primera, despedazó los derechos de la naturaleza y de las naciones. Desde aquel momento

Intervención del Alcalde de Quito en la presentación del libro en Homenaje a Manuela Cañizares

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de 1810 las muertes de Quiroga, Salinas y tantos otros, nos armaron con la espada de las represalias para vengar aquellas sobre todos los españoles. El lazo de las gentes estaba cortado por ellos; y por ese sólo primer atentado, la culpa de los crímenes y las desgracias deben recaer sobre los primeros infractores.”

Con estos hechos a la vista, es válido preguntarse: ¿Que habría pasado si Manuela no demostraba, en la noche del 9 de agosto, ser la mujer fuerte y decidida, de ánimo sereno y firme que, con frases inspiradas de amor a la libertad y justicia, logró calmar los temores y levantar los ánimos de los complotados cuando, enfrentados a tan grande decisión, manifestaron temor o desconfianza?

Muy importante, pues, que se publique este estudio histórico, cuando Quito y el Ecuador se preparan para celebrar el año 2009, el bicentenario del Primer Grito de la Independencia o de la Gesta Revolucionaria de 1809. Para la recordación de los primeros cien años, el Presidente General Eloy Alfaro, convocó a una Feria Internacional, construyó el Palacio de la Exposición, actual edificio del Ministerio de Defensa, y en él estuvieron presentes países de Europa, Norteamérica y de los hermanos países latinoamericanos; En esta ocasión no podemos hacer menos que hace un siglo; preparémonos, por lo mismo, todos con gran decisión y entusiasmo, para las grandes celebraciones del 10 de Agosto del 2009.

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INAUGURACIÓN DE MONUMENTO A JOSÉ MEJÍA LEQUERICA

(2007)

Nació en la ciudad de Quito...Vivió treinta y ocho años apenas. Educado entre las zozobras de la falta de hogar, pues que era hijo adulterino de una mujer casada,

no por aquello dejó de obtener varios grados univer sitarios, de empeñarse en investigaciones bo tánicas con notables naturalistas de la época, de ejercer la docencia superior, de adquirir, como uno de los más ejemplares autodidac tos, una abrumadora suma de conocimientos filosóficos, históricos, jurídicos, políticos... Pocas personalidades se yerguen tan alto en Hispanoamérica.  Fue Maestro en Artes, Doctor en Teología y en Derecho Civil. A los veintiún años de edad consiguió por oposición la Cá tedra de Latín. Y a los veintitrés la de Filoso fía, de idéntica manera. La prisa parecía ser su signo. A los veinte años se casó con una mu jer que le doblaba en edad: Manuela Espejo, hermana de Eugenio, el prócer quiteño...

Mejía fue hacia Manuela a tra vés de las tertulias y las lecturas en la casa de Espejo, que quizás fue el alero familiar que echó de menos desde su infancia. El ambiente de Quito no fue propicio a José Mejía, a pesar de sus talentos... Se le pusieron trabas en el otorgamiento de sus títulos universitarios. Se le zahirió de hijo ilegítimo. Se le despojó in justamente de sus cátedras...

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Destituido al fin de sus medios de tra bajo, salió del país... La fatalidad del destierro, impuesto o volunta rio... El viaje de Mejía, en las circunstancias en que se hizo, tuvo el sabor de una amarga aventura. Tomó rumbo a España. Llegó a ésta en una hora difícil... un pueblo menesteroso, no de civismo sino de poder conductor, que se revolvía furiosa mente contra la invasión de Bonaparte.

Corría el año de 1807. El viajero quiteño, hombre de tantas profesiones, consiguió trabajo en el Hospital General de Madrid. Allí se estuvo hasta cuando la ciudad se levantó en armas contra el extranjero que la sojuzgaba (2 de Mayo de 1808).

Se incorporó entonces a esas milicias populares porque odiaba la agresión y |a conquista. A su esposa le dirigió en aque lla ocasión una carta, recogida por Pablo Herrera en su “Antología de Prosistas Ecuatoria nos”, en donde ha quedado constancia de tal hecho: “entonces -dice- empuñé el fusil y fui a ocupar mi puesto en una puerta, la cual no desamparé de día ni de noche hasta que se rindió la villa por capitulación, que fue el 4 de septiembre”. Tras la derrota tuvo que salir de Ma drid. Bajo el disfraz de carbonero. Haciendo largas marchas a pie. Soportando toda suerte de incomodidades y contratiempos. Despertando sospechas entre los unos y los otros, es pañoles y franceses.

Hasta que dio en Sevilla... En la nueva ciudad se alistó otra vez en el ejército popular. Lo hacía voluntariamente, por convencimiento propio. Y nuevamente escribía a su esposa: “... si salgo con vida y honra, como lo espero de Dios, tendrás en tu compañía un hombre que habrá mostrado no estar por demás en el mundo”. Estas experien cias, en que todo lo puso

(Pág. Siguiente)intervención de alcalde en monumento al prócer José Mejia Lequerica (6 de diciembre 2007)

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a riesgo, completa ron su personalidad, enriquecida antes por el laboreo intelectual...

José Mejía se convirtió en repre sentante parlamentario... Depuestos los monarcas españoles, vinieron las cortes o asambleas que la Regen cia...  Hasta que aquellas se instalaron definitiva mente en Cádiz, en 1810. Con 105 diputados... Quito eligió a José Matheu, Conde de Puñoenrostro. El Virreinato de Nueva Grana da nombró diputado suplente a José Mejía.

El principal no asistió. De haberlo hecho, jamás hubiera podido llenar el lugar del orador qui teño. Ningún hispanoamericano alcanzó el nivel de Mejía. Ni seguramente ningún espa ñol. La suya era una de las más brillantes in teligencias de la época. Y su palabra tenía un magnetismo que pocas veces será igualado...

Sirvió Mejía a los intereses de su América con noble obstinación. Frecuente mente estaba ella envuelta en sus alusiones, en sus juicios, en su crítica de las instituciones españolas...

Era Mejía una de aquellas grandes perso nalidades que debieron su formación a las co rrientes del setecientos...  abundan sus discursos... en favor de la libertad de imprenta, de la correcta administración de justicia, de la abo lición de las torturas, de la igualdad ante la ley, etc.

¡Qué hombre excelente, único, hubie ra sido Mejía para la conducción de la na ciente república ecuatoriana si no hubiera caído en Cádiz, a los 38 años de edad apenas, víctima de una violenta enfermedad!

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ANTONIO JOSE DE SUCRE(AÑO)

Multifacética es la personalidad de Sucre, uno de los generales más brillantes en esa matriz fecunda de la historia latinoamericana que dio a luz para

el continente y el mundo a protagonistas excepcionales para representar con excelencia la epopeya de la libertad en el Continente de la Esperanza. En esa pléyade de héroes míticos, que escribieron páginas de indescriptible heroicidad, destaca Sucre, junto a la figura inigualable de Bolívar, su General y amigo entrañable.

Sucre nace en 1795, final de un siglo y en los albores de una nueva era. El mundo entero se encuentra conmocionado por los acontecimientos de Norte América en 1776, y por el desmoronamiento del viejo orden a manos del pueblo de parís en Francia, 1789. A los trece años ingresa a la escuela militar de Caracas, dirigida por el Coronel español Tomás Mires.

En Europa deslumbra el genio de la guerra, Napoleón, cuyos ejércitos, victoriosos ocupan España y coronan rey a José, hermano del Emperador. El pueblo español de estirpe altiva y rebelde reacciona en contra del invasor, constituye Juntas de Gobierno a lo largo y ancho del país y proclama a Fernando su único y legítimo rey. Las colonias americanas ávidas de

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independencia y organizan sus propias Juntas Supremas. En Venezuela Caracas y Cumaná crean las suyas. El 12 de julio de 1810 la Junta Suprema de Cumaná nombra al joven Sucre Oficial de milicias regladas y en octubre Caracas le extiende los despachos de oficial de ingenieros.

El 5 de julio Caracas declara la independencia absoluta de España. Francisco de Miranda llega para dirigir la defensa de la República. La Junta le concede plenos poderes. Sucre es designado para servir como Ayudante del Generalísimo, militar de extraordinaria formación y experiencia como estratega. Una excepcional oportunidad de aprendizaje para el joven soldado.

Participa en 1812 en los combates de La Victoria y Aragua que conduce victorioso Miranda contra las tropas del General realista Domingo Monteverde. Combate luego bajo el mando de Santiago Mariño y como jefe de un batallón de zapadores, participa en las acciones victoriosas de Guiria y Cumaná. En la campaña de Oriente obtiene sus ascensos a los grados de Capitán, Mayor y Teniente Coronel.

En 1814 es designado a servir en el Estado Mayor General del Ejército de Oriente. Ese año terrible de la lucha por la libertad Sucre combate a órdenes de Mariño en las batallas de Boca Chica y La Puerta; en Carabobo y Aragua al mando de Bolívar; y, en Urica y el sitio de Maturín bajo la dirección de Ribas. Excepto Boca Chica y Carabobo, todas son derrotas. Este año es ascendido a Coronel.

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Boves ocupa militarmente Cumaná, la hermana de Sucre se suicida para no caer en manos de los realistas; la madrastra y otras dos hermanas son apresadas. Su hermano Vicente muere acuchillado. Experiencias terribles que marcan, en contra de lo previsible, su comportamiento generoso con los adversarios derrotados y con la población civil.

En 1817 es Jefe de Estado Mayor General del Ejército de Oriente y Comandante General de la Provincia de Cumaná. En 1818, bajo el mando de Bermúdez triunfa en la Guiria y río Caribe.

El 15 de febrero de 1819 se instala el Congreso de Angostura. Bolívar es designado Presidente, Vicepresidente el Dr. Zea. Este ascendió a Sucre a General de Brigada, en reconocimiento a sus méritos. El 12 de junio, el General Mariño, con Sucre como su Jefe de Estado Mayor, triunfa en Cantaura frente a las tropas realistas mandadas por Arana.

El mes de mayo de 1821 llega Sucre a Guayaquil. Es un joven oficial de 26 años, con una madurez como estratega y político ganada en una década de permanente campaña. Es su primera comisión como Comandante de una fuerza. Se muestra previsivo y cauteloso. Desembarca los Batallones Albión, Santander y el Escuadrón Guías en Santa Elena y El Morro y se presenta en el Puerto donde la situación política es incierta. Se desempeña con su característico tacto y habilidad, en beneficio de la causa colombiana.

Aymerich inicia su ofensiva sobre Guayaquil. Sucre derrota a Gonzáles en Yaguachi, captura seiscientos prisioneros,

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setecientos fusiles y otros pertrechos. Quedan doscientos muertos en el campo de batalla. Se mueve entonces con celeridad hacia Babahoyo para enfrentar al propio Aymerich, que se repliega con sus tropas hacia Ambato que ocupa 10 de julio, al día siguiente Sucre acepta la batalla en las afueras de Ambato, en Huachi, donde sufre una derrota completa. Imperturbable organiza nuevas fuerzas. El 9 de febrero ocupa Saraguro, población donde se le une Santa Cruz, enviado por San Martín. El 21 ocupa sin resistencia Cuenca, ciudad en la cual recluta quinientos soldados y recibe el batallón Alto Magdalena. Continúa su marcha a la gloria.

En Riobamba chocan las vanguardias de los ejércitos patriota y realista. La Caballería de Ibarra y Lavalle derrotan en Tapi a la Caballería española, Continúa el repliegue de Aymerich. Se organiza en el Tiopullo. Sucre realiza una maniobra de diversión y lo elude por la ruta del río Pita hacia el valle de Los Chillos, a donde llega el 19 de mayo. Se mueve hacia Chillogallo; reconoce el dispositivo realista; se da cuenta que se encuentra sólidamente apoyado en las elevaciones que cierran, por el sur, el acceso a la capital de los Shiris y decide dar la batalla al norte de la ciudad. Elude las defensas españolas por las laderas del Pichincha. Los realistas se dan cuenta temprano, el 24 de Mayo, de la maniobra patriota y tratan de ubicarse, ya muy tardíamente, en una posición ventajosa. La decisiva Batalla, correctamente conducida, termina con el triunfo completo de los libertadores. Bolívar asciende a Sucre a General de División y le nombra Intendente del Departamento del Sur.

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En el cumplimiento de esas complejas funciones se mostró delicado y afanoso, preocupado y previsivo. La situación de la ciudad era de desastre. En comunicado al doctor José María Castillo, Secretario de Hacienda le informa sobre los edificios públicos: “ ... el hospital militar de esta capital está amenazado de una ruina cierta en el próximo invierno... todos los edificios públicos se hallan aquí en el mismo estado de deterioro...”

Al general Santander, el 17 de septiembre le escribe: “Con sentimiento tengo que decir que Vd. que no sé como arreglarme para los gastos del departamento... sabe que a mi nada me mandaron en dinero para la división del sur, y aseguro a Vd. que sólo la división del Perú gastó en plata 80.000 pesos fuera de raciones, etc., etc., y la de Colombia consumió un caudal. No creo que el gobierno se desentienda de estos gastos que fueron hechos en unas tropas que libertaron al sur...tenemos en Quito más tropas de las necesarias para su conservación interior; y si para guardar las fronteras necesita de ellas o de más, las fronteras es cosa que toca a todos.”

Pero, no solamente la situación de la administración pública es mala, sino que la población sufre de pobreza. Sucre se preocupa por lo que sucede e informa: “El gobierno de Guayaquil (independiente) mandó estancar la sal, y esta medida se vio como un ataque directo a Quito para arruinarlo; todos nos alarmamos con un decreto semejante... A Quito le arrancaron de este solo año 25 a 30.000 pesos... y los vecinos que antes compraban una arroba de sal por seis reales, la compran ahora por cuatro, cinco, y seis pesos... se lo digo para que no se crea que, en caso de venir 16.000 pesos, se hace favor a Quito; pues Quito da todavía a la caja de Guayaquil a lo menos 8 o 10.000 pesos.”

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El 21 de Febrero de 1823 insiste sobre el tema económico: “ La renta del aguardiente producía aquí en otro tiempo de 24 a 30.000 pesos sólo en el Cantón Quito. Ahora con la introducción de aguardientes extranjeros ha bajado de tal modo que hay mes que solo da 600 pesos.”

El sistema de alcabalas afecta drásticamente a los más pobres. Ante esa situación, el 6 de octubre de 1822, escribe al Secretario de Estado y del Despacho del Interior: “Como aquí continuaban pagando alcabala los fondos territoriales por la disposición de que el sistema de hacienda quede en el mismo pie antiguo, he pedido una razón de lo que produce este derecho en aquellos artículos de primera necesidad, y cuyo comercio es el patrimonio de los pobres, para quitar la alcabala de estos renglones.”

Desde su alta función Sucre se preocupó mucho por la educación. El 6 de septiembre le escribe al doctor José María Castilla: “Una vez que el gobierno no ha tenido por conveniente que la renta de la canonjía supresa de este Coro, se aplique a aumentar los escasos fondos de las universidades, sería de desear que el gobierno si lo creyese justo, destinase a este objeto importante las dos partes de los bienes de los religiosos que mueren, y que con el nombre de espolios pertenecían antes a los vicarios generales de la orden residentes en España. En ocasiones anteriores he consultado sobre la aplicación de estos fondos que adjudicados a las universidades podrían ser útiles para mejorar la corta renta de sus cátedras, y promover de ese modo la instrucción pública muy atrasada aquí, o ya para dotar con su producto una o dos becas, según alcance, en las que puedan acomodarse los niños pobres que se dediquen a la carrera de los estudios.”

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El 19 de octubre emite un decreto por el cual: “Considerando que uno de los objetos más importantes en que el gobierno quiere emplear su atención es la educación pública lastimosamente atrasada en el Departamento, crea una Junta esencialmente destinada a entender en todos los objetos que tengan relación con la instrucción pública en la provincia de Quito... La Junta se compondrá del Rector de la Universidad, el gobernador del Obispado, el actual Ministro decano de la Corte de Justicia y de los rectores de los colegios.”

Quito ama a Sucre y se siente satisfecha de su presencia en la Intendencia. El general es recíproco en el aprecio a la ciudad. El 13 de septiembre escribe a don Antonio Ante: “ Los sentimientos de gratitud que Vd. me manifiesta en su apreciable comunicación por los pocos servicios que he podido prestar en la empresa de libertad a los ilustres hijos del Ecuador de los horrores de la opresión en que gemían bajo la arbitrariedad española, me son sumamente satisfactorios y los considero siempre como la más dulce recompensa a mis pequeños trabajos. Por lo mismo, el destino a que el gobierno ha querido elevarme poniéndome a la cabeza de este departamento lo miro sólo como un nuevo título que me empeña a desvelarme incesantemente por la felicidad de sus habitantes”.

Sucre es un republicano convencido. En la convocatoria para designar a los representantes de Quito a la Asamblea Nacional, le dice al Cabildo: “Si la asamblea electoral de Quito, no es la depositaria de los derechos del pueblo quiteño, es a lo menos el órgano por donde los ciudadanos han expresado su voluntad, para delegar parte de la soberanía que corresponde a una sección importante de la república, en la representación

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nacional. La congregación de los electores de Quito es el acto más augusto que ejerce la provincia porque es el que va a constituirla en su bien y en su prosperidad. Cada miembro de esta respetable corporación ha contraído un pacto sagrado con los pueblos que le depositaron su confianza... El acierto en la primera elección de los representantes de Quito, es la que decide los destinos del vasto departamento del Sur, llamado a ocupar un alto rango en Colombia... El primer pueblo que desde el Ecuador dio a los americanos el grito de la libertad, debe ser el primero que enseñe que la misma libertad reclama principios moderados para que jamás la licencia sea su término... La próxima legislatura es la que probablemente va a consolidar el edificio que ha costado a Colombia arroyos de sangre y esfuerzos heroicos; la próxima legislatura va a ser la primera asamblea nacional de la república. Su representación, debe por tanto ser compuesta de ciudadanos ilustres y beneméritos, de hombres honrados y virtuosos, de patriotas fieles y constantes.”

Cuando luego de la campaña de Tulcán conoce de reclamos presentados al Libertador sobre presuntas fallas administrativas en su desempeño en la Intendencia, escribe desde Túquerres, el 3 de diciembre, al Cabildo de Quito: “He sido informado que el cabildo de esa capital o alguno de sus miembros han tratado de dirigir un reclamo al Exmo. Señor Libertador Presidente contra mi administración en la intendencia o contra algunos actos de ella; y que han sido detenidos por miramientos particulares. Como yo sea un ciudadano tan amante de Quito como cualquiera que vieron en él la luz, soy el primero en pedir a la municipalidad, que desechando consideraciones ajenas de su deber y que en nada tienden al bien público manifiesten a S.E. los males causados

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al país por defectos de mi mando... nunca he pensado lisonjearme de que mi administración acreciese de faltas, ni que ha sido la que absolutamente necesitaba el departamento para fijar su dicha; ni el tiempo, ni las circunstancias, ni nuestra situación hubieran quizás dado este orgullo, a ningún magistrado colocado en mi lugar... porque amigo de la patria más que de mí mismo, me será complaciente ser conducido a la vía de la justicia, y observar que hay en el departamento ciudadanos vigilantes que sean el escollo de la arbitrariedad; y que el gobierno contenga a los magistrado que se desvíen de las leyes... Puedo también asegurar a V.S.M., que aun cuando una acusación bien sea del gobierno o de algún ciudadano resulte del todo falsa, antes de excitar ningún resentimiento de mi parte, sólo merecerá mi aplauso en cuanto lo contemple por un celo en bien del país, que es siempre mi primer objeto.”

Luego de la victoria alcanzada contra las fuerzas de Boves, en Pasto, es designado plenipotenciario de Colombia ante el Perú a donde viaja atento a cumplir las disposiciones del libertador, el cual llega posteriormente a Callao, se hace cargo del gobierno, toma el mando de las tropas y vence en Junín.

Llamado a Colombia por problemas internos, Bolívar deja el mando a Sucre. El 22 de octubre el experimentado La Serna abre campaña en contra de las tropas de la libertad; el 9 de diciembre se produce la trascendental batalla en Ayacucho. Sucre triunfa completamente sobre sus temibles adversarios. Bolívar dice: “La batalla de Ayacucho es la cumbre de la gloria americana, y la obra del General Sucre. La disposición de ella ha sido perfecta, y su ejecución divina. Maniobras hábiles y prontas desbarataron en una hora a los vencedores de catorce

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años, y a un enemigo perfectamente constituido y hábilmente mandado… Ayacucho semejante a Waterloo, que decidió los destinos de Europa, ha fijado la suerte de las naciones americanas.”

Con los laureles de la victoria todavía frescos, en contra de sus más íntimos deseos, resulta electo presidente de Bolivia, la nación organizada por el Libertador, bajo una constitución redactada de su propia mano. Desempeña el complejo encargo con acierto, tacto y dedicación. Cuando se produce la conspiración de Chuquisaca, de la que resultó herido y en la que estuvo a punto de perder la vida, con el país invadido por las tropas del Perú, reúne al Congreso y le presenta su renuncia, para evitar un enfrentamiento fratricida.

En su último mensaje a la Nación, pone énfasis en la defensa de uno de los principios básicos del Derecho Internacional cuando afirma: “ Está en los intereses de todos destruir este derecho de intervención que se ha arrogado el Perú y que envolvería nuestro Continente en eternas guerras y calamidades espantosas.”

Y honesto total, como es, pide solamente un premio por sus servicios: “ La Constitución me hace inviolable: ninguna responsabilidad me cabe por los actos de mi gobierno. Ruego, pues, que se me destituya de esta prerrogativa, y que se examine escrupulosamente toda mi conducta”

La creación de los nuevos Estados genera, como era de esperarse, los primeros problemas de fronteras. En mayo Bolívar se ve obligado a presentar un ultimátum al Perú. El

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general Lamar inicia la guerra en contra de Colombia. Sucre arriba a Guayaquil. “¡ Bendito sea el día que usted llegó a Guayaquil!”, le escribe su amigo el Libertador, al designarle conductor supremo de la guerra.

El 27 de enero llega Sucre a Cuenca. Trata de alcanzar un acuerdo, pero la guerra se vuelve inevitable. Triunfa en Oña, Girón y Tarqui. El Convenio de Girón se firma en los términos planteados antes del enfrentamiento, porque Sucre considera que la victoria militar no confiere derechos. Tarqui, como Ayacucho, es la consagración de Sucre como conductor militar.

Sucre fue un soldado profesional. Estudió desde los trece años los rudimentos básicos de la carrera militar, a partir de los quince años, por más de una década guerreó bajo el mando de los más destacados líderes de la independencia de la América española. De sus aciertos y errores obtuvo las enseñanzas que consolidaron sus aproximaciones teóricas iniciales. Solamente después de este largo aprendizaje alcanzó el mando de una fuerza, en la consolidación de la independencia del actual Ecuador. Después de Pichincha, Ayacucho y Tarqui, constituyen la apoteosis de su genio como conductor militar.

Sucre tuvo condiciones excepcionales como negociador. Conocedor de su noble carácter y clara inteligencia fue elegido para tratar con el general Español Pablo Morillo sobre la regulación de la guerra. Lo hizo con tanto tino y prudencia que Bolívar se refirió al tratado logrado como: “... digno del alma del general Sucre: la benignidad, la clemencia,

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el genio de la beneficencia lo dictaron, él será eterno como el más bello monumento de la piedad aplicada a la guerra.” Esa es la razón para que se considere a Sucre como pionero del derecho humanitario. Jamás humilló a sus adversarios derrotados. Luego de la Batalla de Pichincha, informa: “En el mismo campo de batalla ofrecí, por intermedio de O Leary a los vencidos una capitulación digna de su honor y heroísmo.” Del mismo modo, cuando debe enfrentar a sus antiguos compañeros de armas en Tarqui, procura evitar, por todos los medios, la confrontación, presenta bases para lograr acuerdos y, cuando forzado por las circunstancias, combate y vence, no reclama de La Mar, nada que no pidiera antes de la batalla. Así, deja una honda huella en el Derecho Internacional Americano, con la doctrina que lleva su nombre y que se resume en que la victoria militar no concede derechos.

De su personalidad como líder militar y político debe destacarse una inteligencia razonadora, fría y objetiva, especialmente en circunstancias críticas; un espíritu previsivo; su prudencia y meticulosidad en el planeamiento de las campañas; la bondad de su espíritu y el refinamiento de su carácter de militar culto; su lealtad sin límites a la causa de la libertad y a sus superiores, particularmente a Bolívar; la franqueza y valor de sus planteamientos, y la capacidad de armonizar intereses diversos, evitando que éstos dificulten el logro de los objetivos de la causa común; la libertad.

Bolívar que tanto conocía y quería a Sucre decía de él: “Sucre es caballeroso en todo; es la cabeza mejor organizada de Colombia; es metódico y capaz de las más altas concepciones: es el mejor general de la República y su primer hombre de Estado. Sus principios son excelentes y fijos; su moralidad

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es ejemplar y tiene alma grande y fuerte. Sabe persuadir y conducir a los hombres, los sabe juzgar.”

Sucre fue un soldado modelo en su conducta personal y profesional. Desde la perennidad que concede la historia a sus actores excepcionales, su ejemplo es una fuente de la luz que debe orientar a los ciudadanos de uniforme y de paisano en el cumplimiento de sus deberes cívicos, hoy y siempre.

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EN LA CEREMONIA POR EL NATALICIO DE BOLIVAR

(2006)

Vivió 47 años/ luchó en 49 batallas/ escribió 2352 cartas/ emitió 172 proclamas/ recorrió 123.500 kilómetros/ más que Colón y Vasco de Gama juntos.

A caballo anduvo 65000 kilómetros/ vez y media la vuelta de la tierra/ 10 veces más que Aníbal/ 8 veces más que Julio Cesar/ 3 veces más que Alejandro de Macedonia/ el doble que Napoleón de Bonaparte.

Pero murió solo/ sin un centavo/ Simón Bolívar, Libertador de cinco naciones.

Así se refiere el poeta Alfredo Olguín de una manera objetiva, descarnada, conmocionante a este hombre universal, orgullo de la raza humana, cuyo natalicio en esta fecha recordamos.

Juan Montalvo, cumbre de la literatura ecuatoriana dice de Bolívar: “En los hombres extraordinarios, esos que prevalecen sobre cien generaciones y dominan en la tierra altos como una montaña, el genio viene armado de todas las armas... Guerrero, escritor, político, estadista, orador, todo fue Bolívar, y de primera línea... Sin temor de sobrepasarnos en

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el encarecimiento, podemos contar a Don Simón entre los hombres con los cuales la naturaleza demuestra su poder, y Dios el amor con que glorifica al género humano”.

Y es que nuestro Libertador, el padre de nuestra gran nación bolivariana infelizmente fracturada en débiles Estados, fue, que duda cabe, la inteligencia más sobresaliente y la voluntad más firme, de la epopeya libertaria, Supo gracias a la excepcional agudeza de su pensamiento interpretar lúcidamente la situación histórica de su tiempo; interpretó con clarividencia la realidad latinoamericana; analizó correctamente el proceso de la América anglo sajona; penetró en los más hondos significados de la revolución liberal y burguesa de Europa y supo maniobrar con extraordinaria habilidad, sobre la base de una magnífica elaboración estratégica, para llevar adelante la obra magna de la libertad americana.

Bolívar se colocó, como un genio que fue, muy por encima de las circunstancias y de las miserias de sus contemporáneos. Recibió los más grandes honores y halagos, a la vez que las mayores afrentas e ingratitudes. En ambos casos mantuvo una actitud de generosidad y de grandeza, a la vez que nos dejó un legado de realismo y humildad en su magnífico Delirio sobre el Chimborazo, cuando puso en labios del Padre de los siglos sus propias reflexiones: ¿ Porqué te envaneces, niño o viejo, hombre o héroe? ¿ Crees acaso que el universo es algo? ¿ Qué montar sobre la cabeza de un alfiler es subir?”

Bolívar fue el líder en el más amplio y generoso de los sentidos. Un hombre que fundamentó su lucha militar y política en principios universales. Que respetó a las naciones por sus cualidades morales y las destacó, que nos hizo saber

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que sin el firme fundamento de una escala de valores asumida y respetada, ninguna grandeza es posible.

Cuando analiza la realidad continental al referirse a Chile dice: “El reino de Chile está llamado por la naturaleza de su situación, por las costumbres inocentes y virtuosas de sus moradores, a gozar de las bendiciones que derraman las justas y dulces leyes de una república. Chile puede ser libre”.

Y al referirse a la forma de organizar a las nuevas repúblicas sostiene: En tanto que nuestros compatriotas no adquieran los talentos y las virtudes políticas que distinguen a nuestros hermanos del Norte – se refiere a la América anglo sajona -, los sistemas enteramente populares, lejos de sernos favorables, temo mucho que vengan a ser nuestra ruina.

Destaco la actualidad de ese enfoque que pone énfasis a los valores humanos y cívicos y al desarrollo de los talentos del pueblo como sustento fundamental de la democracia.

Con su visión más que profética admonitiva, Bolívar aseguraba: “Si no nos unimos pereceremos”. Unión, unión, unión es la consigna “... los caudillos aprenderán que para conquistar el poder han de emprender una actividad muy otra del forcejeo minúsculo y de la conspiración parroquial. Cuanto hemos debido y tenemos aún que pagar los pueblos latinoamericanos por haber desoído ese mandato.

Parcelamos el territorio de la patria grande en pequeños espacios de poder, privilegiando las glorias provincianas a lo que pudo ser un destino de grandeza continental. Copiamos sistemas y visiones de una Europa desgarrada y ejercitamos

Ceremonia del Natalicio Libertador Simón Bolívar 24 de Julio del 2006

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una geopolítica desintegradora, en la que nos enfrentamos hermanos con hermanos en guerras fratricidas y costosas que generaron sentimientos irreconciliables y heridas insanables.

Un desaforado todos contra todos entre cada parroquia o cantón y entre países también cantonizados, instrumentos apenas, en tantas ocasiones de intereses hegemónicos extra continentales. Hoy como entonces suenan terribles las frases de Bolívar: “Los americanos del sur han pasado por los siglos como los ciegos por entre los colores, se hallaban sobre el teatro de acción pero sus ojos estaban vendados; nada han visto, nada han oído. ¿Por qué? Porque no podían ver la justicia y mucho menos oír la libertad”.

Hoy, cuando iniciamos un siglo y milenio es indispensable volver al mensaje bolivariano. Terminar con las prácticas centenarias de la antropofagia política y unirnos todos con el propósito de salir como países individuales y como latinoamericanos de esta situación que nos empobrece y degrada.

Debemos alimentarnos del mensaje de Bolívar para asumir con valentía la defensa de nuestros derechos, pero también para entregarnos con generosidad al cumplimiento de nuestros deberes. Sin patriotismo, sin respeto a las leyes y a los magistrados, como el exigía seguiremos marchando a contrapelo de la historia.

Debemos nutrirnos espiritualmente de su ejemplo para ser constantes en la búsqueda del destino de progreso y grandeza que nos merecemos. Acordarnos del Bolívar tantas veces vencido pero jamás derrotado, reiniciando porfiadamente

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la lucha, inventando ejércitos, incendiando los corazones americanos con sus proclamas y sin amilanarse ante las más duras adversidades. Del Bolívar de Pativilica, enfermo, casi moribundo, enfrentado a los mejores generales españoles, con tropas bisoñas y diezmadas respondiendo a la pregunta de Mosquera: ¿ Y que piensa usted hacer ahora General? Con la única palabra posible para su grandeza: ¡Triunfar!

Termino mi intervención felicitando a los Parlamentarios Andinos por esta brillante iniciativa de organizar, junto con los alcaldes de Cuenca, Guayaquil y Quito, la Semana de Bolívar. Agradezco a todos quienes con entusiasmo y esfuerzo han sido los ejecutores de la programación; a las instituciones y empresas que nos han apoyado; a las ilustres personalidades del país y de otros países bolivarianos que han participado en ella; a los artistas que nos han deleitado con sus exquisitas interpretaciones y a todos los presentes por su bondadosa presencia en esta sesión solemne.

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DISCURSO EN LA SEMANA BOLIVARIANA

(2007)

“En los hombres extraordinarios, esos que prevalecen sobre cien generaciones y dominan en la tierra altos como una montaña, el genio viene armado de todas

las armas... Guerrero, escritor, político, estadista, orador, todo fue Bolívar, y de primera línea... Sin temor de sobrepasarnos en el encarecimiento, podemos contar a Don Simón entre los hombres con los cuales la naturaleza demuestra su poder, y Dios el amor con que glorifica al género humano”. Juan Montalvo.

Señoras y Señores. Una año más, por iniciativa del Parlamento Andino, el pueblo bolivariano ha sido convocado para rendir homenaje a la memoria del Libertador, al repaso de su pensamiento inspirado, al recuerdo de su lucha heroica y abnegada, a la revisión de su herencia, de libertad y dignidad, tantas veces dilapidada; ala memoria de una vida entregada a las más altas causas del ser humano, a la reflexión y renovación de su consigna de grandeza en la unidad de los pueblos latinoamericanos.

Se ha dicho que la historia es un diálogo permanente entre el pasado y el presente. Que la revisión de los hechos consignados en las páginas de la memoria colectiva sirven para entender mejor la realidad actual y son indispensables

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para definir un proyecto concertado de futuro. Por esa razón, volver al pensamiento de Bolívar, revisar con admiración su excelsa biografía, dos siglos después de su fulgurante y fecunda presencia en el proceso de la aventura humana, serían ejercicios estériles si no provocasen la convicción y compromiso de dar continuidad a su obra de libertad, justicia y redención.

Bolívar, fue, como todos los seres humanos, con el acertado enfoque de Ortega y Gasset, él y su circunstancia. Su obra excepcional, solamente pudo ser fruto de la conjunción de sus virtudes personales; de su atildada formación en la que hay que reconocer la participación amorosa y sabia de Simón Rodríguez y el entorno económico, social y político de fines del siglo XIX, que hizo posible que la matriz fecunda de la raza iberoamericana alumbrase hombres de su talla y proyección.

Bolívar murió dejando una obra inacabada; observando como los apetitos de poder, egoístas, de sus propios compañeros de lucha, se satisfacían, voraces, destruyendo un proyecto político de integración y solidaridad que habría permitido a los pueblos de Latinoamérica, una mejor proyección y presencia en el escenario continental y mundial; Creyó, decepcionado, que había arado en el mar. Pero no fue así: Un siglo después, manos como las de Alfaro, recogieron la posta en la lucha inacabada por la libertad, para derrotar al oscurantismo y a la arbitrariedad.

Hoy, también un siglo después, la humanidad entera ha experimentado cambios dramáticos y cada vez de mayor celeridad. Ha sido superada la sociedad y la economía de la era industrial y el mundo de inicios de siglo se organiza sobre la base de la capacidad de generar, obtener y gestionar

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estratégicamente el conocimiento, que se ha convertido en el elemento central de la riqueza y del poder. El colapso de la Unión Soviética, La unificación de Alemania, la ampliación de Europa, los nuevos paradigmas políticos y sociales vigentes en la China; los problemas generados por la emergencia de un mundo estratégicamente unipolar; las amenazas de la delincuencia, el narcotráfico, el terrorismo, la pobreza, la desintegración social, deben obligar a los pueblos bolivarianos y a cada uno de nuestros países a revisar profundamente estructuras caducas que frustran nuestros afanes de realización material y espiritual.

Cuando Fredy Elhers, un gran bolivariano y hombre de especial sensibilidad, propuso la realización de estas celebraciones, generó una oportunidad para que el pueblo ecuatoriano, adelantado de la libertad, heredero de la epopeya heroica y trágica de Agosto de 1809 y 1810, de las hazañas libertarias de Octubre de 1820 y de tantas páginas de dignidad escritas en cada ciudad y pueblo de la patria, reflexione sobre las circunstancias dramáticas y dolorosas de la presente situación. Reconozca que el sistema centralista y centralizado de la gestión gubernamental ha colapsado, que no tiene sentido seguir haciendo más de lo mismo, porque solamente obtendremos los mismos resultados. Que es indispensable retomar el mensaje de la unidad desde el respeto a las particularidades regionales y el reconocimiento de nuestra rica diversidad. Que la integración y la descentralización son elementos inseparables de una sola ecuación de justicia, solidaridad e inclusión.

“Si no nos unimos pereceremos”. Resuena el mensaje de Bolívar en los pueblos americanos. “Unión, unión, unión es la consigna “... repite a los oídos del Ecuador. “ los caudillos

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Condecoración al Alcalde por la Sociedad Bolivariana 14 de Noviembre del 2007

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aprenderán que para conquistar el poder han de emprender una actividad muy otra del forcejeo minúsculo y de la conspiración parroquial” nos repite. No sigamos desoyendo su mandato.

En este año, las celebraciones a Bolívar se centran en el pensamiento y acción de una gran quiteña y latinoamericana Manuela Saénz. Que la invocación a esta luchadora por la libertad, a la compañera de sueños del libertador, a la coronela de las campañas del Perú, nos recuerde que sin equidad de género, sin una participación justa y paritaria en los esquemas de participación política de las mujeres ecuatorianas, la libertad, la justicia y la democracia no serán posibles. Rindamos homenaje a Manuela en cada una de las manuelas que luchan hoy en el Ecuador y América por la solidaridad y la inclusión.

Cierro mi intervención con el fragmento del poema de Alfredo Olguín, con el que abrí la del año pasado: Simón Bolívar.

Vivió 47 años/ luchó en 49 batallas/ escribió 2352 cartas/ emitió 172 proclamas/ recorrió 123.500 kilómetros/ más que Colón y Vasco de Gama juntos.

A caballo anduvo 65000 kilómetros/ vez y media la vuelta de la tierra/ 10 veces más que Aníbal/ 8 veces más que Julio Cesar/ 3 veces más que Alejandro de Macedonia/ el doble que Napoleón de Bonaparte.Pero murió solo/ sin un centavo/ Simón Bolívar, Libertador de cinco naciones.

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ELOY ALFARO(año)

Eloy Alfaro fue un revolucionario. Fue un patriota. Fue un idealista. Fue un valiente. Fue un líder. Reunió en grado superlativo las virtudes deseables para la profesión

de militar.

No fue un militar profesional. No tuvo otra academia que el vivac y el campo de batalla. Se forjó en la lucha esforzada por las libertades y los derechos, especialmente de los pobres y marginados.

Enfrentó a enemigos terriblemente poderosos: tanto al feudalismo fanático y retrogrado de la aristocracia serrana, como al liberalismo gamonal e insaciable de la burguesía costeña. Su martirio mismo no fue mas que otro doloroso capítulo de esa lucha esforzada y sin cuartel, que constituyó su vida ejemplar.

Se le llamó el “General de las derrotas”, porque saboreó sin claudicar sus reveses, con sobrehumana obstinación.

A los veinte y dos años tuvo su primer enfrentamiento con las tropas del gobierno conservador: Una emboscada exitosa al frente de una decena de jóvenes de Montecristi, su ciudad natal, el apresamiento del entonces Coronel Francisco Javier Salazar, gobernador de la Provincia, el acuerdo burlado y el primer exilio a Panamá.

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Dos años después, a órdenes del General Urbina, volvió a Manta para levantar Manabí, en apoyo de la campaña revolucionaria, oportuna y drásticamente sofocada por el mismo Presidente.

Se puso entonces a preparar su propia expedición. Adquirió de su peculio la goleta La Evangelina, armas y municiones; las envió con destino a Manabí, para iniciar la lucha desde su Provincia. Todo cayó en manos del Gobierno.

En l875 muere García Moreno. Le sucede Borrero, gobierna con el mismo círculo conservador y con la misma Constitución: la carta negra. Los liberales se pronuncian por Ignacio de Veintemilla. Vuelve Urbina para ponerse al frente de las tropas y nombra a Alfaro Coronel. Triunfan en Galte. A los treinta y cuatro años Alfaro participa de una acción de armas importante. Aprende de la sabiduría y experiencia del viejo General.

Veintemilla defrauda al país y a los liberales. Alfaro se pone a conspirar, cae prisionero en Guayaquil, sufre las humillaciones y horrores del calabozo, tiene que firmar una acta para recuperar su libertad.

En 1880 está en Tumaco. A bordo de “La Estrella” llega a Esmeraldas. Se toma la Plaza y comienza su expedición hacia el sur. Traicionado por el Coronel Guedes, viaja sin hallar apoyo por toda la costa ecuatoriana y “derrotado sin haber combatido” tiene que regresar a Panamá.

En 1822 Veintemilla se declara dictador. El 5 de Junio Alfaro vuelve a Esmeraldas. Nombra su Jefe de E.M. a Roberto Andrade y exige la rendición de la Plaza. Ataca en la madrugada y es derrotado. Repliega hacia la sierra a unirse con sus camaradas

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quienes también han sido derrotados en Yurac-Cruz. Escapa por colombia hacia Panamá.

Sinembargo el país está en contra de Veintemilla. Sarasti en la Sierra centro y norte, Salazar por el Sur comienzan la Campaña. Es el movimiento restaurador que une a liberales y conservadores en contra del Capitán General. Alfaro se declara Jefe Supremo de Manabí y Esmeraldas e inicia la campaña sobre Guayaquil. Sus tropas le proclaman General. Tras cortos combates alcanza Mapasingue, donde une sus fuerzas a las de los Generales Salazar y Sarasti, sus viejos e irreconciliables rivales. Coopera valerosamente con el triunfo militar, pero sufre una nueva derrota política. Vuelve una vez mas, agobiado de frustraciones a Panamá. El gobierno le ha confirmado su grado de General.

Al año siguiente vuelve a la lucha. Adquiere armas, equipo y una nueva embarcación: el “Alhajuela” que bautiza como “Pichincha”. Es doblemente derrotado: en tierra en Portoviejo y en el mar en Jaramijó.

Fracasa el Progresismo. La inmoralidad y astucia de Caamaño arrastran al gobierno de Cordero al bochornoso escándalo de la venta de la bandera. Nuevamente todo el país se pone en pie. Liberales y Conservadores quieren hacerse del Poder. Los primeros llaman al mas connotado de sus líderes, Eloy Alfaro y le proclaman Jefe Supremo. Organiza inmediatamente el gobierno y su Ejército. Emprende la campaña hacia Quito, centro político del país. Triunfa en Chimbo y Gatazo y entra victorioso a la ciudad Capital. El Consejo de Gobierno le concede el grado de General de División.

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La consolidación del control del poder político es, como en toda revolución, un proceso complejo e incierto. Alfaro gobierna desde el vivac. Lucha en todo el país en contra de las todavía poderosas fuerzas conservadoras a las que derrota en cruentos combates. Destaca el triunfo en Cuenca en Agosto de 1896, con el cual consolida el control del Austro ecuatoriano.

En su mensaje a la Convención reunida en Guayaquil, el 10 de Octubre, retrata al Ejército que acaba de llevarle al Poder: “En el Ejército que tenemos todo es nuevo, improvisado, y si algo se ha veteranizado, ha sido en la campaña misma... Los jefes y oficiales que hoy tenemos, ostentan sus presillas orladas por el fuego de los combates, ellos y nuestros valientes soldados pusieron a prueba su patriotismo. Me enorgullesco con justo motivo de haber sido el jefe de esa legión de valerosos ciudadanos.”

Alfaro conoce la fuerza que comanda, sabe de sus deficiencias, entiende que el nuevo Estado necesita institucionalizarse en base a la creación de una fuerza armada correctamente estructurada. Dedica, por lo mismo su mayor atención a la debida preparación del personal militar y a la formación de los futuros mandos y cuadros del Ejército. En Mayo del 96 crea la Comisión codificadora de leyes militares, dirigida por el General Cornelio Vernaza. En Septiembre pone en vigencia el Código Penal y el de Procedimiento Penal, decreta la organización y competencia de los tribunales militares, aprueba y dispone la difusión del Reglamento de Táctica de Infantería.

En Agosto de 1898 organiza la fuerza permanente de la República, con las Brigadas de Artillería de Campaña Bolívar y Esmeraldas, la Brigada Sucre, los batallones de Infantería Vencedores, Guayas, Pichincha, Quito, Alhajuela, Libertadores, Carchi y Vargas torres y El Grupo de caballería Yaguachi.

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En 1899 Crea el Colegio Militar y la Academia de Guerra; en 1900 crea la Escuela de Clases y los Cursos de perfeccionamiento para oficiales subalternos. Trae además una misión chilena para que coopere en la organización de los Institutos armados.

Cuando el ala conservadora del liberalismo capitaneada por Plaza entrega el poder político a Lizardo García, Gerente del flamante Banco Comercial y Agrícola, vuelve Alfaro a la lucha en defensa de su revolución y en una campaña violenta que culmina en Chasqui pidiendo a sus soldados: “Media hora de valor, buena letra y la victoria es nuestra”, derrota al Ejército gobiernista.

Cuando el Perú amenaza invadir al territorio nacional, encarga la Presidencia de la República, cancela a un Ministro de Estado que se muestra timorato y derrotista, Viaja a Guayaquil, arma y pone en pie de guerra un Ejército de 17000 hombres con los cuales prepara la defensa de las Provincias de El Oro y Loja. Su prestigio, valor y actividad sirven para disuadir al tradicional agresor y la “Patria resulta intacta”.

De este resumen tan apretado de la vida militar del con acierto llamado “Viejo Luchador” podemos concluir en que fue un ejemplo de virtudes militares, que es un patrono dignísimo no solo de la Escuela militar que con justicia lleva orgullosamente su venerado nombre, sino del propio Ejército Nacional que, creado a su imagen y bajo su inspiración sigue siendo el custodio de su heroico legado.

Alfaro fue valeroso hasta el heroísmo; leal sin claudicaciones a sus principios y a la patria, disciplinado en su ámbito personal, familiar y público, abnegado hasta el sacrificio, constante frente a

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toda adversidad, honesto con los bienes públicos y desprendido de los suyos por la causa liberal. Física, intelectual y moralmente superior, fue un estratega lúcido y un valeroso conductor táctico. Fue, en conclusión, a la luz del juicio histórico imparcial, la personalidad militar más sobresaliente del Ecuador.

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INAUGURACIÓN DE LA EXPOSICIÓN “EL REGRESO DE HUMBOLT”

(2001)

Constituye un motivo de especial orgullo, para el Alcalde del Distrito Metropolitano de Quito, para el Concejo y la ciudadanía quiteña constituirnos

en anfitriones de esta magnífica exposición nominada “El Regreso de Humboldt”, con la cual pretendemos conmemorar con la importancia y solemnidad que este acontecimiento amerita, la presencia en los territorios de América y, en particular de lo que hoy es nuestro país, de este extraordinario científico y humanista, figura señera del pueblo alemán y de la humanidad entera.

Esta exposición, seguramente la mayor y más importante que se ha presentado en el Ecuador, en esta materia, ha sido organizada por dos importantes organizaciones de la municipalidad quiteña: la Empresa del Centro Histórico y el Museo de la Ciudad, con el auspicio de la Asociación Humbolt, la embajada de la República Federal Alemana y la Sala de Artes y Exposiciones de Alemania. A todas estas instituciones y a otras que han prestado su invalorable apoyo para la realización de esta extraordinaria empresa cultural, les expresamos nuestra felicitación y reconocimiento.

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Cuando se propuso la participación de la Alcaldía en la organización de este evento, que había tenido feliz cumplimiento en México en 1997, en La Habana entre 1997 y 1998, en Caracas en 1999, en Bonn entre 1999 y el 2000, y en Bogotá hasta hace pocos meses.

Le brindamos nuestro más entusiasta apoyo, tanto porque es deber de la municipalidad la promoción del desarrollo cultural de nuestra población, cuanto porque aportará para que los quiteños, ecuatorianos y ciudadanos de otros países que la visiten puedan conocer algo más de esta ciudad milenaria, poseedora de una historia tan rica en acontecimientos sobresalientes y para que, desde una visión retrospectiva del pasado, podamos llegar a entendernos mejor, reconocernos en nosotros mismos, vernos desde los ojos de este investigador admirable, en los valores de nuestra cultura tan honda para que así, las personas, que hoy en día nos visitan vean en nosotros un pueblo orgulloso de sí mismo y dispuesto a grandes emprendimientos, como aquellos quiteños que le debieron compartir con en 1801 con el ilustre visitante, sus ansias de libertad, de justicia y su voluntad de independencia. Quito en 1801-02

La ciudad que Alejandro de Humboldt encontró al llegar a Quito en enero de 1802 era, en sus propias palabras “simpática pero fría y nublada”, aunque también la describió como “alegre, viva y amable”.

Humboldt, y su compañero de viaje Aimé Bonpland, deben haber llegado en uno de esos días de invierno, cuando Quito

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se envuelve en brumas, y todo se pone gris. Quizás al día siguiente, o cuando más dos días después, habrán visto una de esas mañanas azules maravillosas, y entonces habrán gozado de la alegría de los colores, bajo ese sol equinoccial que hace que todo relumbre y se regocije.

La ciudad que los dos europeos encontraron hace 200 años tenía 30.000 habitantes, y era no solo la sede de la Real Audiencia, sino también la más importante y poblada ciudad del Ecuador, pues tenía unos 5.000 habitantes más que Cuenca, que andaba por los 25.000, y el doble de los habitantes de Guayaquil, que no llegaba a 15.000.1

Encerrada entre el Panecillo y San Juan, ya que no se extendía más allá de lo que hoy llamamos el Centro Histórico, la urbe era especialmente notable por sus iglesias y conventos, que tenían fama mundial. Como dicen los historiadores de la arquitectura, en Quito todo estaba subordinado a las iglesias; las plazas se habían conformado en torno a su presencia. “La ciudad era un inmenso convento en donde emergían los campanarios y las cúpulas, y hasta las mismas viviendas civiles querían parecerse a los conventos, guardando, por cierto, las debidas distancias”.2

1 Nick D. Mills y Gonzalo Ortiz Crespo, “Economía y sociedad en la transición poscolonial, 1759-1859”, Revista Cultura, N° 6, Enero-Abril 1980, p. 762 AlexandraKennedyTroyayAlfonsoOrtizCrespo,“Reflexionessobreelartecolonial quiteño” en Nueva Historia del Ecuador, Vol. 5, p. 185

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En efecto, las casas quiteñas que Humboldt habrá visto en sus caminatas por esas calles y que habrá visitado en las continuas invitaciones que recibía, eran por lo general muy sencillas, “con fuertes influecias andaluzas. De patio central, generalmente de una planta y con las habitaciones dispuestas a su alrededor, con un corredor por delante de ellas y su zaguán que desembocaba normalmente en el centro. Por el exterior era cerrada, con muy pocas aberturas, solamente las necesarias, mientras la actividad se vuelca hacia el interior”.3 Por fuera, muchas casas tenían sus ventanas enrejadas con hierro, pero aún deben haber quedado las que tenían rejas de madera, de la cual también estaban hechas incluso las cerraduras de la puerta principal y sus respectivas llaves. La ciudad generalmente estaba muy limpia, debido a sus aguaceros, pero también a la labor del Cabildo, que desde 1567 ya tenía encargados de cuidar la higiene y la limpieza de la ciudad.

Todas las calles de Quito estaban empedradas. No era mucho tiempo de eso, pues había sido el Presidente Juan José de Villalengua que, a finales del siglo anterior, las había mandado a arreglar.

Mientras tanto, las iglesias lucían su esplendor, tanto en la arquitectura monumental, de la cual la plaza, iglesia y convento de San Francisco eran la mejor muestra, como en su decoración, sus tallas, sus pinturas, el oro y los labrados de sus altares mayores, el recubrimiento y detalles de sus interiores y aún de sus fachadas impresionantes. Para entonces, las principales quebradas que atravesaban la ciudad, ya tenían todas ellas puentes para salvarlas, y no era necesario como hasta un siglo antes bajar hasta el fondo 3 Ibid

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del abismo para subir al otro lado. Más aún, para cuando Humboldt y Bonpland llegan a Quito, ya algunas de esas quebradas estaban rellenadas y aún había construcciones encima de ellas, como el antiguo Colegio de los Jesuitas, hoy sede de nuestro Centro Cultural Metropolitano.

Humboldt debe haber notado la singular división social y económica de los habitantes de Quito, que en esa época era común ver en términos puramente étnicos o de castas. Pocos años después de su visita, otro viajero, William Stevenson, en su crónica del Quito de 1810, aseveró que la población quiteña podía dividirse en tres partes casi iguales: blancos, mestizos e indios” y añadía: “Aquí hay muy pocos negros o descendientes de esa raza”.4 Sin embargo, otros testimonios muestran que el número de indios probablemente era mayor, pues la aristocracia tenía por costumbre traer a una numerosa servidumbre indígena de sus haciendas a sus casas de la ciudad.

No es difícil suponer que los amigos de Humboldt y Bonpland les habrán cedido alguno de los carruajes tirados por caballos y mulas para circular por las calles empedradas, carruajes que existían desde dos siglos antes, cuando el Presidente Morga trajo el primero a inicios del siglo XVII.5 También les dotarían de caballos para sus visitas al valle de los Chillos, su ascención al Antizana, o su recorrido alrededor del Cotopaxi. Pero también compartieron su visita a la ciudad con los indios, a los que trataban con deferencia, negándose a ser cargados por ellos en los viajes, como sucedía con los hacendados, que se transportaban “a lomo de indio”. “Jamás podré cabalgar sobre una persona”, dice precisamente Humboldt en su crónica de viajes. De uno de esos acompañantes tenemos el nombre: 4 Cit por Mills y Ortiz, p. 785 Silvia Benítez y Gaby Costa, “La familia, la ciudad y la vida cotidiana en el período colonial”, Nueva Historia del Ecuador, Vol. 5, p. 216

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Felipe Aldás, un guía indígena con quien ascendió al cráter del Guagua Pichincha, donde por poco ambos pierden la vida, al desprenderse una cornisa de hielo por el que transitaban al filo del abismo. No fueron una sino tres las ascensiones al Guagua, la primera de ellas frustrada y la tercera con fuerte olor a azufre y 18 sismos en 35 minutos, que registró meticulosamente. Ya entonces hizo notar que las erupciones del Pichincha van al Oeste, mientras Quito se encuentra al Este, el lado seguro del volcán.

A pesar de que Quito hace 200 años atravesaba una crisis, producto de la caída de sus exportaciones textiles hacia el Perú, y la falta de otros mercados, crisis que venía siendo el caldo de cultivo para la actividad independentista, Humboldt y Bonpland gozaron de la gran abundancia y variedad de comidas de que gozaba la ciudad, con frutas de todos los tipos traídas de la Costa y el Oriente y los granos, legumbres y carnes de las haciendas cercanas. A lo largo de los siglos de la Colonia, Quito tuvo siempre fama por dos productos: su pan y sus dulces. Justamente 10 años antes de la llegada de los dos científicos europeos, el Obispo de Quito Pérez Calama se había preocupado de que no desapareciera la tradición de la industria panificadora, y había organizado cursos para que todos compartieran los secretos de la calidad de los viejos panaderos.6

Probablemente Humboldt y Bonpland participaron en alguna de las festividades públicas. Las fiestas de Quito eran renombradas ya entonces, y se las hacía por diversos motivos, sobre todo religiosos pero también políticos. El carnaval (con agua ya desde entonces, y ya desde entonces con esfuerzos de

6 Ibid, p. 204

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las autoridades por erradicarlo), la Pascua, Corpus Christi, San Pedro y San Pablo, Finados, todo era ocasión de procesiones, bailes y toros...

Pero en Quito bullía también la conciencia de que esta era una “patria”, como la había llamado por primera vez Eugenio Espejo, muerto seis años antes de la llegada de los dos científicos europeos. En conversaciones secretas, se hablaba de lo que Espejo había dicho, de lo que algunos de los criollos pensaban. Aún no había llegado la hora de intentar un grito de independencia, pero las cosas maduraban, y Humboldt habría de darse cuenta.

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50 AÑOS DE LA EEQ.SA.

La celebración de los cincuenta años de una empresa tan importante para el desarrollo y la calidad de vida de la comunidad quiteña constituye una ocasión apropiada

para reflexionar no solamente sobre los logros y realizaciones de la misma, sino también para realizar las evaluaciones necesarias a fin de tomar las medidas indispensables para que pueda cumplir eficazmente sus misiones y ponerse a la altura de los retos que le depara el nuevo siglo.

En la obra “El Fin de la Historia y el Ultimo Hombre” de Francis Fukuyama se cita la interesante reflexión de Makensie: “La historia de la humanidad es un registro de conocimientos acumulados y sabiduría creciente, de continuo avance de una plataforma inferior a una superior de inteligencia y bienestar.”

Concordando con la anterior aseveración podemos decir que el desarrollo de formas cada vez más avanzadas de generar y distribuir energía han marcado la historia de la humanidad, desde el día en que las cuevas de nuestros más lejanos antepasados se iluminaron y abrigaron con el fuego, hasta las modernas plantas de generación nuclear.

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La energía eléctrica es novísima en la historia de la humanidad. Hasta fines del siglo XIX, los sistemas productivos funcionaban todavía movidos, en gran parte, por la fuerza de los seres humanos y de los animales domésticos. La teoría de los electrones, que forma la base de la teoría eléctrica moderna, fue presentada por el físico holandés Hendrik Antoon Lorentz apenas en 1892 y el uso generalizado de la electricidad ha sido un fenómeno de inicios del siglo XX.

Hoy, un siglo más tarde, la humanidad enfrenta una nueva revolución tecnológica gracias al desarrollo de las comunicaciones, la informática, la optoelectrónica, la microelectrónica y la ingeniería genética. Una revolución que, del mismo modo que la del vapor y la de la electricidad modifica de manera sustancial todos los aspectos de la vida de los seres humanos, pero que se diferencia de las anteriores por lo radical de los cambios, así como por la permanencia de los mismos.

Para Quito, las empresas de servicios públicos constituyen elementos fundamentales para su desarrollo presente y futuro. El pueblo quiteño convocado a través de la casi totalidad de sus instituciones, aprobó el Plan Equinoccio 21, con el cual se planteó una visión de futuro y una hoja de ruta para darle sentido y dirección a su proceso histórico. La visión se sintetiza de la siguiente manera:

QUITO PRODUCTIVA Y COMPETITIVA, JUSTA, INCLUYENTE Y EQUITATIVA; Y GOBERNABLE EN DEMOCRACIA; UN CENTRO DE CULTURA Y TURISMO DE PRIMER ORDEN EN EL MUNDO.

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Para que Quito sea competitiva, se requiere, entre otros elementos, energía eléctrica abundante, sana y barata. La Empresa Eléctrica Quito tiene que dar respuesta a esta necesidad vital para la economía regional.

Para Que quito sea justa, equitativa e incluyente debe llegar con los servicios básicos a todos los sectores de la sociedad a precios aceptables; para eso se necesita una empresa eficiente que no traslade a los consumidores los costos excesivos fruto de una mala organización y administración.

Para que exista una verdadera gobernabilidad democrática, el pueblo quiteño debe participar en la adminisración de lo público y ejercer los derechos contitucionales de la auditoría social y la exigencia de la rendición de cuentas.

Es necesario, por lo mismo, que reformemos nuestro concepto de lo público; en particular de las empresas que son de todos los ecuatorianos y no pueden convertirse en patrimonio del mandatario de turno, o de los directivos y trabajadores; que entendamos que trabajamos para un conglomerado que paga nuestros salarios y que son los pobres de la ciudad y del campo los que más sufren cuando tienen que recoger los centavos para poder pagar una energía cara o simplemente carecen de ella.

Debemos reconocer que la buena situación, en el contexto nacional, de la EEQ, se debe en gran medida a que existe una amplia participación del sector privado en su administración superior. Están presentes los empresarios, a través de la Cámara de Industrias, los trabajadores con una posición en el Directorio y como accionistas en la

(Pág. siguiente)Intervención Alcalde de Quito ceremonia aniversario Empresa Eléctrica Quito 19 de noviembre 2008

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Junta General y, especialmente, centenares de pequeños accionistas privados. Creo que el Congreso Nacional debe promulgar una ley o las reformas legales necesarias para que los abonados puedan participar en los directorios, establecer mecanismos de rendición de cuentas y abrir los paquetes accionarios a la comunidad.

La EEQ, tiene una gran tarea por delante. Debemos hacer realidad los proyectos de generación “Reventador”, “Quijos” y “Victoria” debemos disminuir las pérdidas negras y técnicas; debemos continuar con la reingeniería de procesos, con programas de calidad total; con un mejoramiento de la relación laboral, en fin, tantos y tantos objetivos en cuyo logro estamos ya comprometidos, pero que solamente podrán ser alcanzados en su plenitud si somos capaces de ser generosos con nuestra empresa y con nuestro pueblo y si somos lo suficientemente sensibles para llevar adelante los correctivos que siguen siendo necesarios.

Para terminar, deseo exaltar la memoria de quienes durante medio siglo han trabajado para el engrandecimiento de nuestra empresa. Todos los que hicieron algo para mejorarla deben ser reconocidos; todos los que lucharon para unir los esfuerzos de la municipalidad , la Caja del Seguro y la Caja de Pensiones, para su creación merecen un sitial en nuestra memoria; todos los que con el trabajo esforzado de cada día cooperaron para brindar un servicio de calidad al pueblo quiteño, sin importar cuan humilde haya sido el puesto que les correspondió ocupar en el escalafón, deben permanecer en el recuerdo como ecuatorianos ejemplares; en fin, los directivos, funcionarios, empleados y trabajadores que fueron parte de la historia de estos 50 años merecen mi gratitud y la del pueblo quiteño que represento.

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EN EL LANZAMIENTO DEL LIBRO “PALABRAS DE PAZ”

La ceremonia en que participamos por iniciativa e invitación de don Enrique García, Presidente Ejecutivo de la Corporación Andina de Fomento, me

permite el honor de compartir con este importante auditorio, en este augusto lugar, algunas reflexiones sobre un tema de vital importancia para nuestra ciudad, país, continente y para la humanidad entera.

Por otra parte, la feliz idea de publicar los discursos de las personalidades laureadas con el premio Nobel de la paz, me ha permitido lecturas de hondo significado y trascendente mensaje que hace bien la CAF en ponerlas al alcance de la comunidad para que pueda enriquecerse con reflexiones que hacen referencia a momentos dramáticos de la vida de nuestra especie y a comportamientos heroicos de quienes han dejado una honda huella en la lucha indeclinable, lucha de supervivencia, por lograr una convivencia de paz, solidaridad y compasión entre los pueblos del mundo.

Que una idea tan rica en contenidos surja de una organización que apoya al desarrollo de nuestros países mediante el financiamiento de proyectos que están precisamente vinculados con el mejoramiento de la calidad de vida y con

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ejercicios redistributivos de la riqueza, nos conduce de manera natural a pensar en la vinculación íntima entre el desarrollo y la paz. El desarrollo entendido no como simple - aunque importante - crecimiento económico, sino como un proceso de elevación de los niveles de realización material y espiritual de los seres humanos y de construcción de condiciones de justicia y equidad en las relaciones internas y externas de los Estados. El desarrollo económico y social precisa, sin duda, de una paz interna e internacional firme y duradera.

Es triste reconocer, como nos informa Elena Poniatowska, que a lo largo de tres mil años, sólo ha habido trece días sin guerra en el mundo. El siglo XX que hemos cerrado con saldos tremendos de destrucción, muerte, persecuciones, holocaustos, ha sido uno de los más violentos. Europa, en especial y el mundo se inundaron en sangre y dolor por enfrentamientos que privilegiaron tesis absurdas de una geopolítica criminal que sustentaba afanes de hegemonías, apetitos de poder y soberbia de los poderosos. Guerras para repartirse el mundo dependiente y alimentar los aparatos productivos de las potencias industriales.

La humanidad saludó el fin de la Segunda Guerra Mundial con la esperanza de poder construir un sistema internacional que le permitiría una paz duradera y, sin embargo, casi sin respiro pasó a una nueva forma de confrontación político ideológica y militar de dos sistemas que se declararon antagónicos e incompatibles. La guerra mal llamada fría pudo derivar en el exterminio de toda forma de vida en el planeta. La certeza de la destrucción mutua asegurada, dejó en la obsolescencia a la tesis de Clausewitz sobre la guerra como continuación de la política con la utilización de medios violentos. La imposible

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guerra total derivó en las confrontaciones en niveles de mediana y baja intensidad, auspiciadas por ambas potencias hegemónicas y desarrolladas en los territorios de los países pobres, luchas en las cuales nuestros pueblos solamente ponían el territorio y los muertos.

Eran épocas de guerra fría, cuando se proclamaban en Latinoamérica doctrinas revolucionarias por un lado y anti subversivas y de seguridad nacional, por el otro; cuando se soñaba en un mundo de igualdad y justicia cuya construcción justificaba formas horrendas de violencia o se apelaba a la brutalidad para mantener situaciones intolerables de marginalidad e injusticia.

En las épocas cuando la consigna bajada del imperio, proclamaba que “el mejor guerrillero era el muerto”, algunos sectores, los más lúcidos plantearon que los movimientos revolucionarios se alimentaban en las expectativas crecientes, de pueblos que no querían soportar más un sistema que generaba extremas pobreza y desigualdad.

Se encontró entonces una relación directa entre los índices de frustración percibidos de quienes exigían cambios justos reprimidos para mantener los privilegios de los rentistas del sistema caduco. Ese era el verdadero combustible que mantenía viva la llama de la rebeldía y de la insurrección. Concluyeron que mientras existan situaciones de extrema explotación y marginalidad las posibilidades de reacciones violentas estaban siempre presentes. Que no eran las doctrinas sino el hambre la que levantaba a los pobres de la tierra para buscar con el uso de la fuerza lo que la indolencia, corrupción y extrema avaricia hacían imposible.

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En ese entonces, unos pocos países, el Ecuador entre ellos, fueron suficientemente lúcidos para plantear estrategias que obren sobre las causas de la insatisfacción y no centren en la represión la búsqueda de una paz imposible y, en esas condiciones, indeseable. Con razón nos dice David Trimble en su discurso: “El primer peligro es que podríamos rechazar reclamos legítimos para el cambio debido a la barbarie de grupos terroristas enfocados a la revolución”.

El siglo XX fue también un siglo atroz para nuestra América Latina fragmentada, desde los días de su independencia, por la adopción de superestructuras político jurídicas ajenas a su realidad; dirigida en los más altos niveles por grupos de poder miopes, que también adoptaron sin mayor reflexión la geopolítica guerrerista de los Estados Nacionales europeos y enfrentaron a sus países en guerras fratricidas que solamente reforzaron las relaciones de dependencia, la pobreza y el atraso. Resultaría risible, de no haber sido trágico, el observar a los caudillos nacionales llevando a sus pueblos a guerras de fronteras para justificar ineptitudes internas o para inmortalizar en las páginas parroquiales sus efimeras hazañas.

Felizmente, en fecha reciente, Ecuador y Perú lograron poner fin a una lucha centenaria que tantos males trajo a los dos pueblos: odios irreconciliables, heridas insanables, sobresaltos permanentes. Hemos firmado una paz de hermanos, hemos tenido el valor que impone romper paradigmas y prejuicios. Pero el reto actual es preservar una paz más importante, la paz interna. Bien dice Koffi Annan: “ Hoy las verdaderas fronteras no están entre países sino entre potentes e impotentes, entre libres y encadenados, entre privilegiados y humillados...

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La verdadera agenda es la agenda de la pobreza... La paz, entendida como ausencia de guerra, tiene poco valor para quienes se están muriendo de hambre o de frío”.

Nos encontramos en los umbrales del siglo XXI, al decir del mismo Koffi Annan: “ Hemos entrado al tercer milenio a través de una puerta de fuego”. El extraordinario desarrollo de la ciencia y la técnica, especialmente en la informática, las comunicaciones y la biotecnología, nos ha juntado en una aldea global que mantiene, como las ciudades de los países pobres juntas, más juntas que nunca, a la riqueza más ostentosa y a la pobreza más denigrante.

La economía globalizada en términos de un neoliberalismo salvaje amplía la brecha entre pobres y ricos de manera acelerada, el tantas veces citado, Koffi Annan nos advierte: “Nadie puede decir que ignora el costo que esta brecha impone a los pobres y desposeídos, quienes tienen los mismos derechos a la dignidad humana, las libertades fundamentales, la seguridad, la alimentación y la educación que cualquiera de nosotros”. Hoy más que nunca son entendibles los conceptos de las expectativas crecientes y de las frustraciones resultantes. Si no actuamos sobre las causas de insatisfacción profundas de nuestros pueblos nadie puede asegurarnos un futuro de paz verdadera.

Desearía pensar como el Dalai Lama, no en términos de una aldea global, sino en sus palabras: “Actualmente somos, en verdad, una familia global...Porque si todos perseguimos de un modo egoísta sólo lo que creemos de nuestro interés, sin tener en cuenta las necesidades de los otros, podemos terminar haciéndoles daño a los demás y perjudicándonos a nosotros mismos...El desarrollo material sin evolución espiritual puede causar también serios problemas”.

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Pero, como hemos de ser objetivos, debemos reconocer avances importantes experimentados por gran parte de la humanidad. Hoy cada vez más pueblos viven en regímenes democráticos, muchos de ellos, el nuestro mismo, llenos de imperfecciones, pero democracias que, por su propia naturaleza, son perfectibles. Hemos avanzado significativamente en la construcción de un marco jurídico para la protección de los derechos humanos y la defensa de los sectores vulnerables de la sociedad; se han creado instituciones encargadas de proteger y sustentar esos derechos; se hacen serios esfuerzos para lograr la independencia de la función judicial a fin de combatir la impunidad de los soberbios. Hay mucho todavía por hacer, pero sin duda hemos avanzado.

Permítanme que termine esta intervención con una referencia corta sobre nuestra administración municipal. Quito, como el Ecuador, es una ciudad diversa y es un ámbito geográfico y humano en que se evidencia con crudeza las grandes contradicciones de nuestra realidad nacional. Por esa razón, nos hemos propuesto cultivar una cultura de convivencia de diálogo y paz para alcanzar una auténtica gobernabilidad democrática. Creemos con John Hume que: “ la diferencia no constituye una amenaza, que es natural, es la esencia misma de la humanidad. Que, en consecuencia, no debería ser una fuente de odio o conflicto.” Queremos, como nos recomienda David Trimble ser parte de los Políticos que buscan hacer una paz que funcione, no un mundo perfecto, que nunca ha existido.”

Para lograrlo, hacemos una Alcaldía para todos, pero les ponemos especial atención a los sectores más pobres y desprotegidos; trabajamos para reforzar a la democracia

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con una fuerte participación ciudadana. Los niños, los jóvenes y adolescentes, las mujeres y los ancianos; los indios, negros y mestizos, las personas con discapacidades, todos hacen parte de la definición de las políticas públicas. Hemos conformado un Consejo de Equidad encargado de vigilar que las políticas sociales no se queden en letra muerta o en simples declaraciones. Rendimos cuentas y estimulamos la auditoría social. Privilegiamos la negociación y la búsqueda de consensos para encontrar soluciones a los problemas y los resultados alcanzados nos demuestran que estamos en el camino correcto. Todo esto por convicción, porque estamos seguros de que la paz no tiene otro camino que el de la justicia social, el respeto a los derechos humanos, la igualdad de oportunidades para todos y todas.

Bienvenidos pues a Quito, una ciudad con vocación de paz.

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EN HONOR DE LOS PRESIDENTES DE LAS REPUBLICAS DE

CUBA Y VENEZUELA(2002)

La oportunidad de la solemne Inauguración de la Capilla del Hombre, en la que hoy hemos participado, concede a Quito el privilegio de recibir como huéspedes

ilustres al excelentísimo señor presidente de la República de Cuba, Comandante Fidel Castro Ruz, al excelentísimo señor presidente de la República de Venezuela, Coronel Hugo Chávez Frías; a la primera dama de la República de Guatemala, señora Evelyn Moraya de Portillo, a la ex primera dama de Francia, señora Danielle de Miterrand, a Don Carlos Mario Valencia Miranda, colega alcalde de la hermana ciudad del Cuzco, al señor Per Engebak, Director Regional de UNICEF y al científico Manuel Patarroyo a quienes saludamos con especial afecto y les recibimos con el cariño, consideración y respeto de un pueblo que aprecia su presencia en nuestra ciudad y el gesto noble de haber aceptado la invitación para estar con nosotros en la histórica ocasión de la entrega a Quito de la monumental obra concebida y construida por el gran pintor y ecuatoriano Oswaldo Guayasamín.

Recibimos a nuestros ilustres visitantes en este augusto local, la capilla del Museo de la Ciudad, testigo de una historia de siglos de viscisitudes y avatares, en los que se ha

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ido conformando de forma compleja pero consistente la identidad del pueblo quiteño y ecuatoriano, pueblo mestizo fruto de la fusión de las razas europea e indígena, poseedor de grandes virtudes y ricas potencialidades, capaz de expresiones culturales de altos quilates como las de la Escuela Quiteña de arte, que nos lego en lienzos y esculturas, en templos y retablos, una herencia invalorable, que ha permitido que nuestra ciudad fuera calificada, entre las primeras, como patrimonio cultural de la humanidad.

El pueblo de Quito, ciudad cuna de Guayasamín, ha sido y es un pueblo de libertades y rebeldías. Estas calles y aceras, en el corazón del Centro Histórico, por las que habéis transitado han sido testigos de hechos trascendentales desde los inicios de la vida de la Quito aborigen. Rumiñahui, el gran conductor de la resistencia contra la conquista española, luchó en estos mismos sitios; en 1592, en la conocida Revolución de las Alcabalas, nuestros antepasados reclamaban ya el derecho a la representación popular en el gobierno y justificaban la insurrección nacional en contra de las tiranías; muy cerca de este lugar, en 1809, los padres fundadores declararon nuestra independencia y, en 1812, los Próceres dictaron la primera Constitución quiteña, señalando al pueblo como titular de la soberanía del naciente Estado. Ese pueblo, de tan larga y rica historia, os da en esta noche, regocijado, la más cordial bienvenida.

Quito, esta ciudad que valora su pasado y se demuestra orgullosa de su identidad, recibe, por estas mismas razones con especial afecto a los ilustres representantes de pueblos hermanos de América y el mundo. A la Cuba de Martí, poeta, apóstol y mártir de la independencia; a Venezuela, tierra de

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Bolívar y Sucre, héroes comunes también de ecuatorianos, colombianos, bolivianos y peruanos, padres y libertadores de nuestras naciones; al pueblo francés, cuyo pensamiento fue germinal para los precursores americanos, quienes, como Eugenio de Santa Cruz y Espejo, en, Quito sembraron, a su vez, las inquietudes independentistas en el corazón de los jóvenes patriotas.

Saludamos con especial simpatía a Fidel Castro, cuyas valerosas hazañas revolucionarias como líder del movimiento 26 de Julio, como expedicionario del Granma, como victorioso comandante de los barbudos guerrilleros de la Sierra Maestra y como estadista de tantos años de defensa sin claudicaciones de la revolución cubana han despertado siempre la admiración de los ecuatorianos y le han convertido, en vida, en una de las personalidades míticas de la historia latinoamericana.

Al Coronel Hugo Chávez, cuyos ideales bolivarianos valoramos altamente, para quien solamente podemos desear y augurar que la democracia venezolana se fortalezca y estabilice de modo que en un ambiente de paz y amplia cooperación pueda trabajar con todas las fuerzas y el entusiasmo de que es capaz para que el hermano pueblo venezolano pueda encontrar rumbos de prosperidad, justicia y solidaridad

Al entregarles las llaves de la ciudad, deseo hacer votos porque las relaciones entre Ecuador, Cuba y Venezuela se fortalezcan, que la cooperación a través de todos los procesos integradores latinoamericanos nos permitan alcanzar las soluciones que nuestros compatriotas claman, a los graves problemas que, en una era como la actual, de un revolucionario y continuo proceso técnico y científico, se vuelven sin sentido.

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Me complace de igual manera declarar huéspedes ilustres a mi colega Alcalde del Cuzco, Ing. Carlos Valencia Miranda, a quien le expreso nuestra voluntad y deseo de cooperación para que las dos ciudades que comparten la calificación de Patrimonio Cultural de la Humanidad, avancen en el logro de sus objetivos de bienestar y calidad de vida para todos sus habitantes. Aprovecho, así mismo la ocasión para felicitarle por su reciente reelección que le permitirá continuar ejecutando sus planes y proyectos.

A la Señora Danielle Miterrand, ex primera dama de Francia, presidenta de la fundación France Libertés, comprometida con la defensa y promoción de los derechos humanos, luchadora incansable por la difusión de una cultura de paz, y por la protección de los pueblos desfavorecidos

A la excelentísima señora Evelyn Moraya Portillo de cuyo trabajo en beneficio de los niños y jóvenes de Guatamala conocemos y admiramos.

Al señor Per Engebak, Director regional de UNICEF para América Latina por la extraordinaria labor desempeñada él y por la oficina nacional de ese organismo de las Naciones Unidas, en la defensa de los derechos de los sectores desprotegidos de nuestra sociedad. Esto lo hemos reconocido con múltiples expresiones de admiración de las instituciones y del pueblo quiteño a Yoriko Yasukawa, a quien con pesar estamos despidiendo.

Y al señor Manuel Elkin Patarroyo, premio Príncipe de Asturias de Investigación Científica y Técnica, luchador incansable por defender la salud de los pueblos pobres

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del llamado tercer mundo. Sus estudios de las vacunas, especialmente contra la malaria y su generosidad al donar sus descubrimientos a la O.M.S, le ubican entre los científicos de mayor compromiso y sensibilidad social.

Que grato es, señoras y señores, haber podido destacar, aunque breve e incompletamente las virtudes de los pueblos aquí representados y de las personalidades que nos visitan. También le debemos al maestro Guayasamín la oportunidad de esta inolvidable encuentro.

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MIJAIL GORBACHEV(2003)

La humanidad transita por caminos irreversibles hacia su realización espiritual y material. Una observación objetiva y desapasionada del proceso humano nos

permite coincidir con Kant, cuando asevera que la historia nos conduce hacia etapas cada vez más altas en el ejercicio de la libertad, con Hegel cuando asegura que el hombre organiza la realidad sobre las exigencias de su pensamiento racional y que la historia es una lucha constante por la libertad, con Mckensie que nos habla de un movimiento continuo hacia plataformas cada vez más elevadas de ciencia y tecnología, y, porqué no, con el Premio Nobel de Literatura José Saramago, cuando con fino humor, refiriéndose al eslabón perdido, significó que el hombre a plenitud aún no existe, que llegará como fruto de un proceso de constante perfeccionamiento.

El hombre es él y su circunstancia ha dicho el filósofo español Ortega y Gasset. El relevante protagonismo de Mijail Gorbachov en el desarrollo histórico de nuestro tiempo no puede ser entendido y, peor juzgado al margen de esta realidad. Es a la vez artífice y producto de una época turbulenta que marca el ingreso de la humanidad a la sociedad del conocimiento como fruto de una revolución en las tecnologías de la comunicación, la informática y la biología que ha modificado en cambio continuo y acelerado las

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formas de producir, pensar, organizarse y relacionarse, tanto en los ámbitos internos como en la comunidad internacional.El mundo de Mijail Gorbachov en lo interno lo describe con crudeza en su libro perestroika “Nuevo Pensamiento para mi país y el mundo”, en el cual describe la realidad de la Unión Soviética, “Uno de los mayores poderíos del mundo que se levantó para reemplazar el atraso semicolonial y semifeudal del imperio Ruso.

Nos relata sobre “Una especie de mecanismo de freno afectaba el desarrollo social y económico. Y todo eso sucedía al mismo tiempo que la revolución científica y tecnológica abría nuevas perspectivas para el progreso social y económico.”

De modo muy similar a lo que sucede en nuestro país dice: “La riqueza de nuestro país en términos de recursos naturales y mano de obra nos ha echado a perder; incluso podría decirse que nos ha corrompido.”

Y así, en todas las dimensiones de la crisis: El llamado “principio residual” que pospone los programas sociales y culturales, que reciben lo que resta del presupuesto. En nuestro caso para el pago de la monstruosa deuda externa.

La gradual erosión de los valores ideológicos y morales del pueblo; el dominio de la burocracia y su presencia prepotente en todos los asuntos del Estado; la atmósfera de .“vale todo” con decaimiento de la disciplina y la responsabilidad. La gente deshonesta que siempre reclama sus derechos pero no cumple sus deberes; que aportan con casi nada a la sociedad, pero sacan de ella todo lo posible y aun lo imposible; que en definitiva viven de ingresos que no han ganado.

Distinción huespéd ilustre de Quito alSeñor Mijail Gorbachov

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Frente a esa situación, Mijail Gorbachov tuvo el valor de plantear su Perestroika. Propuesta de una revolución inconclusa que terminó superada por el vértigo de los acontecimientos. Una revolución como: “un salto hacia delante en el desarrollo del socialismo, en la realización de sus características esenciales. Una revolución que habría significado: “iniciativa para las masas, intensificación de la economía, cambio firme hacia la ciencia y tecnología, desarrollo prioritario de la esfera social, eliminar las deformaciones éticas.”

Una revolución que planteaba la democratización como “la piedra angular en el esfuerzo de reestructuración.” Y la relación inseparable entre el cumplimiento de la ley y la democracia. Legalidad destinada a proteger a la sociedad de los abusos del poder y a garantizar los derechos y libertades de la comunidad. Una comunidad en la que los jóvenes liberados de “la tutela y supervisión mezquinas” participen en la renovación y enriquecimiento intelectual de la sociedad y en la que las mujeres participen activamente en el desarrollo de la economía y la cultura y en la vida pública.

Para que la reestructuración fuese posible, Mijail Gorbachov planteaba que debía ir acompañada de la Glasnost, de la transparencia informativa, de la libertad de información sin la cual es imposible la democracia. Son sus palabras: “Quiero remarcar que la prensa deberá unir y movilizar a la gente, antes que desunirla y generar ofensas y falta de confianza.”El hombre, dijimos antes, citando al filósofo Ortega y Gasset, es él y su circunstancia. Al ex presidente Mijail Gorbachov le correspondió dirigir a su país en un momento crucial de la historia. En un punto de inflexión, de cambios desbordantes. La humanidad que había permanecido bajo la amenaza de su

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destrucción por un inestable equilibrio del terror entre los dos sistemas antagónicos; observó en él, en su liderazgo, la sensatez suficiente para terminar con una confrontación que podía terminar en holocausto generalizado.

El presidente de la Unión Soviética definió al mundo de fines de siglo como contradictorio, interconectado e interdependiente en el que todos se vuelven cada vez más necesarios para todos. Las Naciones del mundo – aseguraba - se parecen hoy a un grupo de andinistas sujetos todos por una misma cuerda. Sólo pueden, o bien trepar juntos hasta la cima de la montaña o bien caer juntos al abismo.

Mijail Gorbachov, nuestro ilustre huésped, proclamó un mundo libre de guerras, carreras armamentistas, armas nucleares y violencia. Entendió con lucidez la caducidad del pensamiento de Clausewitz sobre que la guerra sea la continuación de la política por otros medios. Denunció un mundo en el que convivían excepcionales posibilidades de desarrollo y progreso con la más abyecta pobreza, el atraso y el oscurantismo.

Sobre el tercer mundo sus frases son tan válidas entonces como ahora: “El capitalismo ha llevado sus relaciones económicas con Asia, Africa y América Latina a un punto tal que todos los países están condenados al estancamiento económico por no poder satisfacer sus propias necesidades esenciales y estar empantanados en deudas monstruosas.

Está gestándose una explosión social de tremenda fuerza destructiva. La deuda de los países en desarrollo constituye uno de los problemas mundiales más serios.”

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Termino mis referencias al pensamiento de nuestro visitante al citar frases que han causado enorme impacto desde el día que tuve en mis manos su libro: “Lo que actualmente se requiere de los líderes es una correcta valoración de las realidades, una mente lúcida y un creciente sentido de la responsabilidad. Es decir, se requieren políticos serios, en lugar de los que juegan a los políticos o los politiqueros.” Porque: “ Para mejor o para peor, no hay modo subjuntivo en política. La historia se hace sin ensayos. No puede haber repeticiones.

Gracias señor Gorbachov por recordarle al mundo que: “Somos todos pasajeros a bordo de un barco, la Tierra, y no debemos permitir que naufrague. No habrá una segunda arca de Noé.”

Por su pensamiento lúcido, por sus aportes extraordinarios a la paz mundial, por haber estado a la altura de las demandas de su pueblo en la época en que tuvo el poder y porque tenemos la satisfacción de que visite nuestra bella e incomparable ciudad, me honro en declarar a Mijail Gorbachov y a su digna compañera Huéspedes ilustres de Quito, Primer Patrimonio Cultural de la Humanidad, ciudad de libertades, descubridora del río mar y, en el año que decurre, Capital Iberoamericana de la Cultura.

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KOFFI ANNAN(2003)

Quito se honra con la presencia del Secretario General de las Naciones, el ilustre Kofi Annan, Premio Nobel de la Paz, una de las personalidades

más destacadas del mundo actual, un luchador incansable por la materialización de los grandes principios que animan a esta organización creada, en los momentos finales de una de las más crueles confrontaciones mundiales para hacer posible la construcción de un mundo de paz, seguridad y desarrollo. El ha dejado ya una honda huella en la lucha indeclinable, lucha de supervivencia, por lograr una convivencia de paz, solidaridad y compasión entre los pueblos del mundo.

Desde el inicio de sus altas funciones en enero de 1997, luego de un ejemplar desempeño de distintas dignidades en varios organismos de las Naciones Unidas, el señor Annan ha definido las prioridades institucionales en un amplio programa de reformas para la organización, el fortalecimiento de las acciones tendentes al desarrollo de los pueblos, el mantenimiento de la paz y seguridad internacionales, la promoción de los derechos humanos, el imperio del derecho y de los valores universales de igualdad, tolerancia y dignidad humana y la restauración de la confianza de la comunidad internacional en la Organización.

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Es triste reconocer que a lo largo de tres mil años, sólo ha habido en el mundo trece días sin guerra. El siglo XX fue uno de los más violentos de esta trágica historia; terminó con saldos tremendos de destrucción, muerte, persecuciones y holocaustos. Fue precisamente por esta razón, que la humanidad, abrumada por la demencial violencia de las guerras mundiales y la insana brutalidad de los regímenes totalitarios, creó las Naciones Unidas con la esperanza de poder construir un sistema internacional que le permitiría una paz duradera. El prólogo de la Carta de San Francisco expresa, en síntesis magnífica esa utopía de todos los hombres y mujeres del mundo que aspiramos a una existencia social digna, pacífica, tolerante, incluyente y de solidaridad humana:

“Nosotros los pueblos de las Naciones Unidas, resueltos a preservar a las generaciones venideras del flagelo de la guerra que dos veces durante nuestra vida a infringido a la Humanidad sufrimientos indecibles, a reafirmar la fe en los derechos fundamentales de los hombres, en la dignidad y el valor de la persona humana, en la igualdad de derechos de hombres y mujeres y de las naciones grandes y pequeñas, a crear condiciones bajo las cuales puedan mantenerse la justicia y el respeto a las obligaciones emanadas de los tratados y otras fuentes del derecho internacional, a elevar el nivel de vida dentro del concepto más amplio de libertad. Hemos decidido aunar nuestros esfuerzos para realizar estos designios”.

Sin embargo, casi sin darle a la humanidad un respiro, los antiguos aliados en la derrota del nacional socialismo y a los movimientos fascistas europeos y asiáticos iniciaron una confrontación, política, ideológica, cultural y militar

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que, mal llamada guerra fría, pudo derivar en el exterminio de toda forma de vida en el planeta. La certeza de la destrucción mutua asegurada, dejó en la obsolescencia a la tesis de Clausewitz sobre la guerra como continuación de la política con la utilización de medios violentos. La imposible confrontación total derivó en los conflictos de mediana y baja intensidad, auspiciados por ambas potencias hegemónicas y desarrollados en los territorios de los países periféricos, lucha en las cuales nuestros pueblos solamente ponían el territorio y los muertos, en el ajedrez de superiores intereses estratégicos.

En Latinoamérica se enfrentaron doctrinas revolucionarias por un lado y anti subversivas y de seguridad nacional, por el otro; justificando los revolucionarios la construcción de un mundo de igualdad y justicia con el empleo de las formas más crueles de violencia. Mientras que los gobiernos, algunos de ellos corruptos e ineptos, presumían defender una supuesta civilización occidental y cristiana, apelando al empleo de la más brutal represión por parte de los organismos de seguridad del Estado.

Pocos líderes lúcidos pudieron deducir una relación directa entre la frustración de los pueblos, acosados por la pobreza y la injusticia y la violencia y comprendieron que eran esos elementos los que constituían el verdadero combustible que mantenía viva la llama de la rebeldía y de la insurrección. Concluyeron que mientras existan situaciones de extrema explotación y marginalidad las posibilidades de reacciones violentas estaban siempre presentes. Que no eran las doctrinas sino el hambre la que levantaba a los pobres de la tierra para buscar con el uso de la fuerza lo que la indolencia, corrupción y extrema avaricia hacían imposible.

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Por otra parte, la adopción de políticas de Poder en las relaciones entre los Estados Nacionales y las luchas por la expansión territorial y por los beneficios que generan hegemonías regionales o mundiales, han dado a lugar a una geopolítica agresiva y de confrontación que ha provocado grandes gastos en armamentos, incertidumbre, angustia y atraso económico y social.

Ese ha sido el caso de Ecuador y Perú enfrentados en una lucha centenaria que sólo males trajo a los dos pueblos: odios irreconciliables, heridas insanables, sobresaltos permanentes. Los dos países han firmado una paz de hermanos y han tenido el valor que impone romper viejos paradigmas y prejuicios.

Estamos seguros de que esta será una paz duradera preludio de una firme integración económica, cultural y, con el tiempo, política. Ahora el reto es preservar la paz interna. Ya lo ha dicho nuestro ilustre huésped: “ Hoy las verdaderas fronteras no están entre países sino entre potentes e impotentes, entre libres y encadenados, entre privilegiados y humillados... La verdadera agenda es la agenda de la pobreza... La paz, entendida como ausencia de guerra, tiene poco valor para quienes se están muriendo de hambre o de frío”.

Nos encontramos en los umbrales del siglo XXI. Al decir del Secretario General de las Naciones Unidas, que hoy nos visita: “ Hemos entrado al tercer milenio a través de una puerta de fuego”. El extraordinario desarrollo de la ciencia y la técnica, especialmente en la informática, las comunicaciones y la biotecnología, nos ha juntado en una aldea global que mantiene, como las ciudades de los países pobres juntas, más juntas que nunca, a la riqueza más ostentosa y a la pobreza más denigrante.

Visita oficial del Secretario General de las Naciones Unidas, Koffi AnnanNoviembre 2003

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La economía globalizada en términos de un neoliberalismo salvaje amplía la brecha entre pobres y ricos de manera acelerada. El señor Annan nos advierte: “Nadie puede decir que ignora el costo que esta brecha impone a los pobres y desposeídos, quienes tienen los mismos derechos a la dignidad humana, las libertades fundamentales, la seguridad, la alimentación y la educación que cualquiera de nosotros”. Hoy más que nunca, en la sociedad del conocimiento, de la informática y las comunicaciones, son entendibles los conceptos de expectativas crecientes y frustraciones resultantes. Si no actuamos sobre las causas de insatisfacción profundas de nuestros pueblos nadie puede asegurarnos un futuro de paz verdadera.

Como quiteño y ecuatoriano, no puedo dejar de referirme en esta solemne ocasión, frente a la más alta autoridad del organismo internacional creado para defender la paz y seguridad de nuestro planeta, a la situación que enluta a tantos hogares de la hermana nación colombiana. Sentimos como nuestra la tragedia del pueblo fraterno, convocamos a la comunidad internacional a no mirar indolentes tanto dolor y sufrimiento y a obrar para que la paz reine por fin en Colombia.

No creemos en la solución militar, ni en la posibilidad de internacionalizar el conflicto, creemos firmemente que es la hora de internacionalizar los esfuerzos por lograr la paz; El Ecuador, en defensa de sus propios y más caros intereses y solidario con un pueblo al que le unen tantos lazos históricos, raciales, culturales, económicos, debe colocarse entre los primeros países en aportar para que la paz sea posible.

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Este es un reto para la Organización de Estados Americanos y para las Naciones Unidas. Creemos que la personal y abnegada dedicación del Secretario General a la búsqueda de la paz en Colombia, puede cambiar el curso de los acontecimientos y alcanzar una solución negociada al conflicto del país vecino. No se podrá enfrentar con éxito los grandes retos del presente siglo si no somos capaces de aportar para que la razón expresada en la capacidad de negociar y llegar a acuerdos, marque la ruta del destino de Colombia, el área Andina y Latinoamérica.

Terminaré mi intervención resaltando el papel de los gobiernos locales en la construcción de un mundo de paz y progreso y planteando la necesidad de que las Naciones Unidas pongan especial atención en este fenómeno de la geopolítica mundial que pone a las ciudades y sus regiones como protagonistas de primera línea en las relaciones internacionales.

Esa situación se experimenta muy evidentemente en el Ecuador, con una presencia cada vez más activa de los gobiernos municipales. Frente a esta realidad, es muy importante que la Municipalidad quiteña haya hecho suyos los Objetivos de Desarrollo del Milenio.

En el Plan Quito Siglo XXI, que aplicamos con convicción y constancia, se definen planes, programas y proyectos para erradicar la pobreza y el hambre, lograr la educación primaria universal, promover la igualdad de género, reducir la mortalidad infantil y mejorar la salud materna, combatir las enfermedades y defender el medio ambiente; que no son simples enunciados sino prácticas honestas promovidas desde el gobierno local.

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Quito, como el Ecuador, es una ciudad diversa y es un ámbito geográfico y humano en que se evidencia con crudeza las grandes contradicciones de nuestra realidad nacional. Por esa razón, nos hemos propuesto cultivar una cultura de convivencia, de diálogo y paz para alcanzar una auténtica gobernabilidad democrática.

Para lograrlo, hacemos una Alcaldía para todos, pero les ponemos especial atención a los sectores más pobres y desprotegidos; trabajamos para reforzar a la democracia con una fuerte participación ciudadana. Los niños, los jóvenes y adolescentes, las mujeres y los ancianos; los indios, negros y mestizos, las personas con discapacidades, todos hacen parte de la definición de las políticas públicas. Hemos conformado un Consejo de Equidad encargado de vigilar que las políticas sociales no se queden en letra muerta o en simples declaraciones. Rendimos cuentas y estimulamos la auditoría social. . En todos estos esfuerzos hemos encontrado siempre el decidido apoyo de los distinguidos representantes de los distintos organismos y agencias de las Naciones Unidas.

Queremos que Quito sea la ciudad de La Palabra, en la que los problemas derivados de las naturales diferencias de intereses y posiciones se soluciones utilizando ampliamente la negociación y los consensos. Los resultados hasta hoy alcanzados nos demuestran que estamos en el camino correcto. Todo esto porque estamos seguros de que la paz no tiene otro camino que el de la participación, la negociación de los conflictos, la justicia social, el respeto a los derechos humanos y la igualdad de oportunidades para todos y todas.

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La Ciudad de la Palabra

Espero que en las frases expresadas, el ilustrísimo visitante podrá percibir el especial entusiasmo, regocijo y esperanza con que el pueblo de Quito y de nuestra querida patria ecuatoriana le recibe. Creo interpretar con fidelidad los sentimientos de mis conciudadanos al expresarle nuestra fe en el imperio del derecho internacional, frente a las imposiciones del poder y los votos más sinceros por el feliz logro de todos los objetivos que ha trazado para su administración, en la difícil tarea de hacer realidad los altos fines de las Naciones Unidas.

Por estas razones, al entregarle las llaves de nuestra ciudad como símbolo de amistad, admiración y respeto, le expresamos nuestra bienvenida, nuestros deseos porque su estadía en nuestra ciudad y país le sea grata y que le permita alcanzar a plenitud los objetivos de su grata presencia en tierras ecuatorianas.

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CRISTINA FERNÁNDEZ DE KIRCHNER(2008)

El 23 de marzo del año anterior Quito celebró alborozada la presencia de la entonces senadora Cristina Kirchner, en su visita al frente de una Misión Comercial que

llegó para formalizar importantes convenios con el gobierno nacional y con empresarios ecuatorianos.

En esta ocasión recibimos a tan ilustre huésped en momentos de profundo dolor para la familia quiteña, cuando vestimos de luto por la muerte de catorce jóvenes, en infausto incendio sucedido este fin de semana.

Decía en mi discurso de marzo del 2007 que Quito es una comunidad que proclama los valores de inclusión, equidad y justicia social, cuya Municipalidad desarrolla una gestión planificada, integrando en el diseño e implementación de las políticas públicas locales con enfoques de género, étnico y generacional. Y que, por esas mismas razones, recibíamos expectantes la visita de una de las mujeres con mayor liderazgo y presencia política en Latinoamérica.

Le dijimos también a la Senadora de nuestro compromiso con la eliminación de las tradicionales inequidades, a través de la adopción de estrategias que subsanen las desigualdades basadas en la exclusión y discriminación, procurando igual acceso a recursos y oportunidades, igual bienestar material

Declaración de huésped Ilustre a Cristina Fernández de Kirchner2008

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y espiritual, igual participación en la toma de decisiones, sustentados en un sistema de valores basados en el respeto y tolerancia para todas las etnias, los credos, las posiciones políticas, las edades y los géneros.

Y encontramos en usted posiciones coincidentes. En su discurso nos dijo: “…quiero hacerme eco de los conceptos que ha desarrollado el Alcalde de esta ciudad; en cuanto a la necesidad de bregar por una sociedad más justa, más equitativa sin discriminación, ni de género ni de ninguna índole. Bregar fundamentalmente por romper esa brecha de desigualdad que recorre por toda nuestra región que, desgraciadamente, no es la más pobre pero si la mas injusta…”

Por eso, y coherentes con nuestra visión del mundo, de la vida, de la sociedad y de la política, hemos observado con enorme satisfacción como, en los albores del siglo XXI, América comienza a romper los viejos paradigmas paternalistas y elige a mujeres de la talla de la presidenta Michelle Bachelete y Cristina Kirchner para que dirijan los destinos de dos de los más importantes países de la Región.

Su visita anterior a Quito dejó una honda huella y una magnífica impresión en quienes tuvimos la oportunidad de conocerle, tratarle y escucharle. Por esa misma razón, es entendible que hayamos seguido con el mayor interés el proceso político que le llevó a la Presidencia de Argentina. Desde el 19 de julio de 2007 cuando lanzó oficialmente su candidatura presidencial en el Teatro Argentino de la ciudad de La Plata, en las elecciones del 28 de octubre, cuando se consagró ganadora de la presidencia en primera vuelta y el 10 de diciembre, fecha en que asumió la delicada responsabilidad de dirigir los destinos de su pueblo.

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Deseo destacar su invitación a los argentinos para participar en un “Acuerdo Bicentenario” para combatir la desocupación y la pobreza, enfrentando planificadamente los temas de la economía, de la infraestructura, del conocimiento y de la salud y desarrollo social.

Me parece muy oportuno, señora Presidenta, que su iniciativa de un gran acuerdo por el Bicentenario se amplíe a la comunidad latinoamericana para que juntos celebremos los doscientos años de nuestra revolución independista reforzando la integración y buscando juntos y solidarios, objetivos que nos permitan combatir el desempleo, la pobreza y crear oportunidades iguales para todos y todas las personas que compartimos suelo, historia, cultura y esperanzas.

Del mismo debería ser doctrina latinoamericana la expresada por usted sobre la necesidad de ser inflexibles en los desacuerdos cuando hay que combatir la corrupción, la violación de los derechos humanos, la impunidad y la inseguridad; porque en esos casos, como usted lo defiende, no cabe otra cosa que el cumplimiento de la ley y Justicia.

No puedo en esta ocasión, y aun a riesgo de cansar su atención, dejar de referirme a su magnífica participación en la compleja reunión del Grupo de Río, en la cual, cumplió un papel destacado y orientador cuando planteó que: “al terrorismo no se combate con la violación masiva de los derechos humanos, sino con la aplicación de la ley; la ley interna y la internacional que vuelven inadmisible la doctrina de la unilateralidad”.

Los latinoamericanos debemos apoyar su defensa de la multilateralidad, en las relaciones entre Estados, del fortalecimiento de los principios del Derecho Internacional,

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del respeto a instrumentos básicos de la organización internacional: las cartas de las Naciones Unidas y de la Organización de Estados Americanos, que son fundamentales para asegurar relaciones internacionales de paz y cooperación. Como usted con acierto expresó: “Si nosotros perdemos esta convicción y recurrimos a la justicia por la propia mano, estaremos perdiendo uno de los atributos más distintivos de la política latinoamericana.”

Para terminar, deseo recordarle a la ilustre presidenta argentina las frases con las que cerró su discurso del 23 de marzo del año anterior:“Tengan quiteños y ecuatorianos la seguridad de que los lazos de hermandad entre mi República, la República de Argentina y vuestra República del Ecuador, van a ser más fructíferos más profundos. Es el compromiso que hemos asumido…” Con la certeza que desde las altas funciones para las que el pueblo argentino le eligió estos deseos se materializarán en relaciones de mutua conveniencia y de honda amistad, solidaridad y cooperación, me place entregarle las llaves de la ciudad como testimonio de nuestra admiración y aprecio.

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FERNANDO ENRIQUE CARDOSO(2008)

La ciudad de Quito y el pueblo del Ecuador saludan con regocijo la presencia de uno de los más destacados latinoamericanos de nuestra época, el doctor Fernando

Enrique Cardoso, Presidente de la hermana y querida República Federativa del Brasil y le expresan un cálido saludo de bienvenida junto a los deseos más fervientes por una fructífera y placentera estadía en el país.

Esta ciudad, de milenaria historia, de rica y espléndida geografía, de gentes esforzadas y acogedoras; esta, la tierra de los Quitus y los Caras, la cuna de Atahualpa, el último de los Incas y centro político de su imperio; la centenaria presidencia audiencial, descubridora del gran río de las amazonas y precursora de las gestas libertarias americanas; la capital de los ecuatorianos, patrimonio cultural de la humanidad, recibe con entrañable afecto al Presidente del extraordinario pueblo brasileño.

Y lo hace no solamente por la alta representación que ostenta, en virtud de su condición de Jefe de Estado, sino también porque reconoce en él a uno de los más lúcidos estudiosos de la realidad latinoamericana y a uno de los pensadores más influyentes en los complejos mundos de la academia y de la política en el Continente.

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En efecto, valoramos en nuestro ilustre huésped su exigente y atildada formación académica, en prestigiosas universidades de su país y de Europa, su fructífera y brillante carrera docente en prestigiosos centros de estudios superiores de Brasil, Estados Unidos de Norte América, Francia, Inglaterra, Argentina y Chile, así como, especialmente, sus aportes al análisis histórico, sociológico, económico y político de Latinoamérica, así como sus propuestas de sólida sustentación científica, propulsoras de estrategias útiles para el desarrollo de nuestras economías nacionales y regionales.

Si todo lo anterior nos muestra el perfil de un personaje de excepción, cómo no destacar su exitoso paso desde la actividad académica a la política: Uno de los fundadores del Partido del Movimiento Democrático Brasileño, en los días finales de la dictadura militar; senador desde 1983, Jefe del Bloque legislativo de su partido, Senador constituyente, relator del reglamento interno y relator adjunto de la Comisión de Sistematización de la Asamblea Constituyente; miembro fundador del Partido de la Social Democracia Brasileña, Ministro de Relaciones Exteriores y de Finanzas en el gobierno de Itamar Franco y desde 1995, Presidente de la República.

La vida pública del Doctor Fernando Enrique Cardoso, constituye una invitación para que reflexionemos sobre la conveniencia y la necesidad imperiosa de que personas como él, las más capaces, las mejor preparadas, las más honestas, las realmente patriotas, se decidan a participar en el que hacer político de sus pueblos ofreciéndoles un adecuado liderazgo, porque, de otra manera, se ceden estos espacios que pueden convertirse en el monopolio de personas desaprensivas, audaces, incompetentes o, lo que es peor, corruptas.

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Lo dicho en el plano interno tiene especial significado en el internacional, especialmente en el latinoamericano que requiere con urgencia de líderes excepcionales y visionarios, capaces de ofrecerle aliento y orientación en las actuales circunstancias especialmente difíciles y complejas.

En el mundo de nuestros días, empequeñecido por el avance de las comunicaciones y la informática; en momentos en que la economía de mercado y su contraparte política, la democracia liberal se globalizan; en un planeta que enfrenta graves amenazas medioambientales, en una sociedad polarizada en la cual miles de millones de seres humanos, víctimas del atraso y la pobreza, viven en la frustración y el desencanto, necesitamos nuevas voces esclarecidas y propuestas innovadoras.

En los umbrales de un nuevo milenio, cuando apartándose de las optimistas previsiones que planteaban el fin de la historia, nos encontramos envueltos en conflictos de características dantescas; cuando enfrentamos amenazas a la paz y seguridad para las que parecería no tenemos respuestas, es indispensable que las mejores inteligencias de latinoamérica sean capaces nuevamente de replantear los no agotados proyectos integradores.

Excelentísimo señor, nuestro país y el vuestro están unidos por estrechos lazos geográficos e históricos; por proximidades culturales y afectivas; y por la certeza de que solamente desde una óptica de cooperación e integración podemos labrar un mejor futuro para nuestros pueblos. Somos parte de la mayor cuenca hidrográfica del planeta y de la principal fuente de suministro de oxigeno para la tierra,

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compartimos el interés de articular el espacio continental para una fluida comunicación interoceánica, nuestras relaciones comerciales son fluidas, tenemos por delante nuevos desafíos, especialmente en el área social, que podemos enfrentar juntos, para construir naciones más justas, solidarias y auténticamente democráticas.

Al presentar a su excelencia estas frases de salutación y bienvenida, no puedo dejar de referirme al importante papel de su gobierno, en el arreglo definitivo de la vieja controversia ecuatoriano peruana, que tanto daño hacía al desarrollo de los dos pueblos y que constituía una razón de permanente inquietud y sobresalto para la cooperación e integración de nuestro continente.

La participación oportuna, ponderada, fraterna y comprometida de la diplomacia y de las Fuerzas Armadas de su gran país, fue un elemento fundamental para el logro de esta paz por ambos pueblos tan apreciada.

Es en virtud de todas las razones que he enunciado que, con enorme complacencia, el pueblo quiteño, su Concejo y el Alcalde Metropolitano, nos sentimos complacidos en declarar a su excelencia nuestro Huésped Ilustre y entregarle la llaves de esta ciudad, que le abre su corazón lleno de afecto, como testimonio de nuestra especial admiración, consideración y respeto.

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MICHILLE BACHELET(2008)

Nos hemos reunido, en esta mañana, para declarar huésped de honor a la presidenta de un país hermano, querido y respetado, a una personalidad

política excepcional y, especialmente, a una mujer de grandes virtudes cívicas y humanas.

Lo hacemos en esta la capilla del Museo de la Ciudad, en el corazón de Quito, primer patrimonio cultural de la humanidad, espacio fundamental de nuestra identidad de ciudad y país, en el cual podemos apreciar el rico legado de la afamada escuela quiteña de arte que nos dejaran grandes arquitectos, pintores y escultores, europeos, indios y mestizos, en lienzos y esculturas, en templos y conventos, de extraordinario valor histórico y cultural.

Qué mejor escenario para honrar a nuestra ilustre visitante que este espacio testigo de los grandes acontecimientos que forjaron, con el sacrificado aporte de muchas generaciones, la trama fundamental de la nacionalidad ecuatoriana.

Quito, enclavada en los Andes equinocciales, en un entorno geográfico majestuoso y espléndido, rodeada por volcanes de nieves perpetuas y valles amplios de tierras fértiles y generosas, sede de antiguas civilizaciones capaces de

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descifrar con exactitud admirable los complejos misterios de la astronomía, de trazar con exactitud asombrosa la línea ecuatorial, la segunda capital del incario, la tierra de Atahualpa el último Inca y del heroico Rumiñahui líder de la resistencia en contra de la conquista española.

Quito la rebelde y libertaria, que ya en 1592, en la Revolución de las Alcabalas, reclamaba el derecho del pueblo a la representación política; la adelantada de la independencia que un memorable 10 agosto, en el año de 1809, alcanzó el honroso título concedido por el pueblo chileno, cuando Las autoridades de Valparaíso ordenaron que en el faro del puerto se colocase una lápida en homenaje a los mártires quiteños con el título: “Quito Luz de América”, que honra a nuestra ciudad desde entonces y para siempre.

Quito, Mártir de la libertad. Fecundó con la sangre de un décimo de su población, sacrificada el 2 de agosto de 1810, por las tropas virreinales venidas de Lima. El Libertador en su declaración de Guerra a Muerte, aseguró: “En los muros sangrientos de Quito fue donde España, la primera, despedazó los derechos de la naturaleza y de las naciones. Desde aquel momento de 1810 las muertes de Quiroga, Salinas y tantos otros, nos armaron con la espada de las represalias para vengar aquellas sobre todos los españoles”.

El Presidente José Molina, quien reemplazó a Ruiz de Castilla, informaba al Consejo de Estado en los siguientes términos: “La experiencia tiene acreditada que las ideas características de la Provincia de Quito son, desde su cuna, propensas a la revolución e independencia. Este es el espíritu que ha animado a los padres, esta la leche que ha alimentado a sus hijos…”

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Este es el pueblo que saluda, en la persona de su presidenta, a la esforzada nación chilena, heredera de la rebeldía araucana, de la intrepidez del capitán Pedro de Valdivia, fundador de Santiago, de los patriotas del 18 de septiembre de 1810, Agustín Eyzaguirre, Mateo, Toro Zambrano, Miguel de la Carrera, Bernardo de O Higguins y los defensores de Rancagua; de los soldados que en Chachabuco y Maipú artífices con su sacrificio y valor de la independencia chilena.

Saludamos al pueblo esforzado y laborioso que desde el inicio mismo de su vida independiente, conducido por una clase dirigente visionaria, sobria y de gran espíritu cívico, con estadistas de la talla de Diego Portales, ministro del presidente Prieto, lograron encarnar en la conciencia nacional, el respeto a la autoridad, el civismo, un sano orgullo nacional, el respeto a la ley y el amor a la patria, que les ha permitido ubicarse entre los más prósperos países del continente americano.

Saludamos al pueblo de Salvador Allende, Pablo Neruda, Gabriela Mistral y Andrés Bello.

No se equivocó Bolívar cuando al referirse a Chile dijo: “El reino de Chile está llamado por la naturaleza de su situación, por las costumbres inocentes y virtuosas de sus moradores, a gozar de las bendiciones que derraman las justas y dulces leyes de una república. Chile puede ser libre”.

Por esa historia común, cuando nuestros países se aproximan al bicentenario de las luchas libertarias, debemos, distinguida Presidenta, prepararnos a juntar las celebraciones y rescatar el espíritu unitario que hizo posible la independencia iberoamericana.

Declaración de huésped Ilustre a la Presidenta de Chile 8 de Agosto 2006

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Pero, al declarar huésped ilustre a la distinguida presidenta de Chile, lo hacemos no solamente en función de su alta magistratura, sino por lo que ella representa para su país y América Latina, como persona.

Su rica biografía ha estado marcada por los acontecimientos dramáticos y trágicos de la guerra fría que tuvo en nuestro continente tan tremendas repercusiones. Hija de un general demócrata acusado de traición a la patria por haber aceptado colaborar con el gobierno del Presidente Salvador Allende, en servicio del pueblo chileno, y que murió en prisión como consecuencia de la represión sufrida, fue detenida junto a su madre en Villa Grimaldi, principal centro de tortura de la tristemente célebre DINA; exilada en Australia y posteriormente en la República Democrática Alemana, dedicó las amrgas horas del destierro a capacitarse para volver y servir a su país.

Pudo hacerlo en 1979, retomó sus estudios y se recibió de médica cirujana y se dedicó a velar por la salud de la comunidad, a la vez que, entendiendo que la única manera de incidir estratégicamente en los temas públicos es aceptando responsabilidades políticas, se integró a diversas actividades en defensa del retorno a la democracia.

Con la restauración de la democracia, en 1990, Michelle Bachelet, se incorporó al Servicio de Salud Metropolitano Occidente como epidemióloga, realizó un curso sobre Estrategia Militar en la Academia Nacional de Estudios Políticos y Estratégicos, logró el primer lugar en su promoción, por lo cual se le otorgó la Beca de Honor “Presidente de la República”, para realizar el curso de Defensa Continental en el Colegio Interamericano de Defensa de Washington DC.

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Posteriormente, en el Congreso del Partido Socialista de 1995, fue elegida para su Comité Central y reelegida en 1998, cuando integró la comisión Política que le permitió dirigir la campaña del candidato Ricardo Lagos en la Región Metropolitana.

En 2000, al asumir el Presidente Lagos fue designada Ministra de Salud, con el encargo de mejorar la atención primaria y preparar una gran Reforma de la Salud, tareas que cumplió con excelencia.

El 7 de enero de 2002 asumió como Ministra de Defensa Nacional. La primera mujer que ocupó este cargo en la historia de Chile y América Latina.. En el ejercicio de esa cartera de Estado, se alcanzaron importantes objetivos: Se modificó el Servicio Militar Obligatorio, se fortaleció del rol del Ministerio y del Estado Mayor; se lograron importantes avances en la igualdad de oportunidades para las mujeres de las Fuerzas Armadas, Carabineros y Policía de Investigaciones. Chile desplegó, además, un importante contingente de fuerzas de paz en varios lugares del mundo, a la vez que se fortalecieron relaciones de confianza mutua entre los Ministerios de Defensa de la Región.

En esta época electoral del Ecuador cabe destacar la forma de hacer política de la Presidenta Bachelet, acercándose a la gente, a escuchar sus puntos de vista, a recoger opiniones, a lograr la participación ciudadana en la propuesta de políticas públicas, para estructurar un Plan de Gobierno, socialmente discutido y acordado que le aseguró el apoyo de los electores asegurando a Chile seguir por la senda de progreso y justicia social en que se encuentra firmemente comprometido..

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Y, es que en esta nueva era del proceso histórico de la humanidad, Chile ha contado con un liderazgo lúcido, capaz de entender y actuar conforme a las nuevas circunstancias del entorno mundial y regional, en defensa de sus intereses.

Los acuerdos políticos alcanzados en este país hermano son un ejemplo de gobernabilidad democrática, de madurez en la dirección de los asuntos del Estado, de la capacidad de definir un proyecto concertado de país para el siglo XXI.

La presencia en las altas funciones de gobierno de personas calificadas por una larga vida de servicio a la nación, como son los casos del Presidente Lagos y la presidenta Bachelet, entre otros, han permitido que Chile se ubique en sitiales de privilegio por su desarrollo económico, el combate a la corrupción y la lucha en contra del desempleo y pobreza.

Recuerdo ahora mis palabras de bienvenida al Presidente lagos cuando recordaba sus planteamientos de que: “se requiere más y mejor globalización, no más autarquismo; más y mejor democracia, no más autoritarismo”. Que la democracia se fortalece… al introducir mayores niveles de justicia e igualdad social”. Que es necesario devolver a la gente su confianza en la democracia”. Que no queremos ir a la modernidad por la injusticia”.

En armonía y coincidencia con estas ideas, Quito, fundamenta la convivencia en principios fundamentales como la cultura de paz, la inclusión, la pluralidad y la tolerancia hacia las diversas formas de pensar, querer y sentir. Una convivencia basada en el respeto a la dignidad humana, el empleo de la razón como medio para dirimir los conflictos y de la honestidad como antídoto contra la desconfianza.

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A constituirse en el espacio de la ciudadanía activa, con personas, que hagan valer sus derechos y cumplan sus obligaciones; con organizaciones cívicas que participen intensamente en la vida pública, exigiendo la rendición de cuentas de sus autoridades y ejerciendo la auditoría social para corregir los males de la irresponsabilidad, la indiferencia y la corrupción.

Esta es la ciudad, realidad y proyecto, que recibe con regocijo a la dignísima Presidenta de la hermana república chilena y al entregarle la llaves de la ciudad, le ratifica su admiración, respeto y los mejores votos porque la cooperación entre Ecuador y Chile se fortalezca en el período de su mandato para bien de los dos pueblos y en particular de los sectores sociales vulnerables.

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TABARÉ VASQUEZ(2007)

Con enorme complacencia saludo al ilustre presidente del hermano pueblo del Uruguay y le expreso la calida bienvenida a nuestra ciudad, la capital de los

ecuatorianos a nombre del pueblo quiteño que celebra su presencia en nuestro país.

Su visita cobra especial significado en estos momentos, cuando a inicios de un nuevo siglo los pueblos latinoamericanos y del Caribe buscan con afán nuevos rumbos que les permitan recuperar los tiempos perdidos para su desarrollo y cuando nos aprestamos a celebrar el bicentenario de la revolución independista hispano americana.

Hace un siglo en el Ecuador se produjo un cambio revolucionario que marcó una nueva etapa en la historia de nuestro país conducido por la inteligencia y el corazón de uno de los ecuatorianos más importantes: El general Eloy Alfaro.

También hace 100 años, el Ecuador tuvo la suerte de estar gobernado por el Viejo Luchador, quien se puso al frente de las conmemoraciones centenarias de la revolución de Quito, y a pesar de las condiciones políticas internas e internacionales adversas, supo dar a aquellas celebraciones la importancia y trascendencia que la situación ameritaba.

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El Ecuador de inicios de siglo enfrenta retos similares en el sentido de las transformaciones que necesita para corregir el rumbo y salir de la triste situación de atraso, corrupción e inequidad a la que, con rarísimas excepciones le han conducido sus gobernantes. Este día ha iniciado la campaña electoral que permitirá la conformación de una Asamblea Constitucional que nos dé una nueva Carta Política, un nuevo pacto nacional que nos permita avanzar con certezas enfrentando los retos y aprovechando las oportunidades que nos presenta el nuevo siglo.

Si el proceso es conducido con patriotismo y poniendo el interés del pueblo por encima de los mezquinos intereses que han frustrado su desarrollo, podremos explotar las inmensas potencialidades que tiene el país en virtud de su rica geografía, su posición geográfica y especialmente por la calidad espiritual de la comunidad ecuatoriana.

Esperemos también que los dignatarios de España y de las naciones americanas nos integremos en una gran celebración que marque el inicio de una nueva relación entre las naciones ibéricas y Latinoamérica y a fin de reconociéndonos en la historia y la cultura común podamos reforzar los procesos de cooperación indispensables para el logro de las metas de progreso, justicia y solidaridad que demanda el nuevo siglo.

El presidente Tabaré Vásquez logró en 1989 por primera vez para la izquierda uruguaya la alcaldía de Montevideo, que desempeñó con acierto entre 1990 y 1995. Por esa razón, el podrá entender mejor los importantes cambios y progreso que ha experimentado Quito a inicios del presente siglos.

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Quito, “Luz de América”, rebelde y heroica, cuna de la libertad, mártir de la independencia, cuyo pueblo ha resistido a lo largo de su historia milenaria, con vocación de dignidad a toda forma de opresión, exceso y abuso de poder, se ha mantenido incólume en la defensa de la libertad, la dignidad y democracia.

Quito, primer Patrimonio Cultural de la Humanidad, nominada así por la UNESCO hace ya 27 años, en reconocimiento de los excepcionales aportes entregados, con el esfuerzo de generaciones, al acerbo cultural de la especie humana, ha recuperado con gran esfuerzo ese patrimonio y lo enriquece con el trabajo de cada día.

Quito avanza con el espíritu de los tiempos. Es una urbe cosmopolita, abierta, diversa que ha sabido interpretar oportuna y adecuadamente las asombrosas transformaciones experimentadas por la humanidad en el cambio de siglo, para orientar sus planes de desarrollo.

Quito, productiva y competitiva trabaja con decisión para generar riqueza y distribuirla con equidad, para integrar a toda su población a la era digital, para convertirse en un destino turístico de primer orden y en un importante centro de gestión estratégica.

Quito incluyente y solidaria lucha contra la marginalidad y tugurización, ha llegado con los servicios básicos a casi la totalidad de su población, trabaja en la universalización de los servicios de salud, dota de espacios públicos dignos a la mayoría de sus habitantes, tiene un subsistema de educación de calidad y trabaja con especial dedicación para y con los grupos vulnerables

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Quito gobernable en democracia ha creado organismos para combatir la corrupción, alienta la participación ciudadana, la toma de decisiones por consensos, la auditoría social y la rendición de cuentas de las autoridades.

Este pueblo saluda con especial afecto y admiración, en la presencia de su presidente a la noble nación uruguaya. A la patria heredera del indómito espíritu de las tribus charruas, de los valerosos fundadores en 1726 de la culta Montevideo, del legendario general José Gervasio Artigas, de los insurgentes dirigidos por Juan Antonio Lavalleja —los célebres Treinta y Tres Orientales— que restablecieron la independencia del país en 1825, del presidente José Batlle y Ordóñez que a inicios del siglo XX patrocinó un amplio cuerpo de leyes sociales que convirtieron a Uruguay en el país más progresista de nuestro continente.

Saludamos a la nación culta de Francisco Acuña de Figueroa, Juan Zorrilla San Martín, Bartolomé Hidalgo, Felisberto Hernández, Horacio Quiroga, Armonía Somers, Juan Carlos Onetti y Mario Benedetti para citar a algunos de sus muchos destacados escritores.

A la patria también de grandes artistas plásticos como Joaquín Torres-García, Juan Manuel Blanes, José Cúneo Perinetti, Joaquín Torres García, José Gurvich, Rafael Barradas.

Saludamos también el acierto de los electores uruguayos que en las elecciones presidenciales y legislativas del 31 de octubre del año 2004 expresaron su voluntad de buscar cambios profundos, eligiendo a los candidatos de Encuentro Progresista Frente Amplio, y llevando al doctor Tabaré Vázquez a la Jefatura del Estado.

(Pág. siguiente )Presidente de Uruguay Tabaré Vásquez (16 de agosto de 2007)

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Desde el mismo día de su investidura, el 1 de marzo de 2005, anunció que su política interior tendría como principales objetivos la lucha contra la corrupción y la pobreza, una política internacional de dignidad e independencia, la aplicación del denominado Plan de Emergencia Social “Mano con Mano” que tiene como objetivo generar las condiciones de carácter estructural imprescindibles para emprender en el camino hacia la igualdad, la equidad y la justicia social.

Es importante señalar la preocupación del presidente Vásquez, que coincide con la nuestra de poner al alcance de todos y todas las herramientas de la computación e INTERNET, que se concreta en la aplicación del Plan Ceibal.

Hechos concretos que se orientan a su decisión de “construir un Uruguay donde nacer no sea un problema, donde ser joven no sea sospechoso y donde envejecer no sea una condena”

Es por todas estas razones que el pueblo de Quito recibe complacido al ilustre mandatario uruguayo y le entrega las llaves de la ciudad, que no son las de la puerta mayor de una urbe amurallada sino la de los corazones siempre abiertos de los quiteños ára quenes como él contribuyen desde el gobierno de su país para construir la América justa y solidaria, progresista e integrada que construya el espacio adecuado para el desarrollo espiritual y material de todos los americanos.

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JOSÉ SARAMAGO(2004)

La presencia de José Saramago, representa uno de los eventos centrales de la programación preparada en este año que Quito es, por voluntad unánime de sus

ciudades hermanas, Capital Iberoamericana de la Cultura. Constituye, además, un hito en la historia cultural de nuestra ciudad y del país.

La UNESCO, la Municipalidad y la fundación Guayasamín, han hecho realidad el sueño de muchos quiteños de lograr la presencia en el país de uno de los más extraordinarios representantes de la literatura universal, uno de los novelistas más apreciados y leídos en el mundo, cuya presencia que nos regocija y que nos honra.

Quito tiene una larga historia como ciudad de cultura, que se comprueba objetivamente en las refinadas expresiones del arte indígenas de las épocas Quitu – Cara, e Inca, así como en las extraordinarias realizaciones de la afamada Escuela Quiteña de Arte, cuyas obras, especialmente en arquitectura, escultura y pintura, demuestran las dimensiones espirituales y altas capacidades artística de nuestra raza mestiza, en íntima relación con el escenario de esta sin par geografía equinoccial, enclavada en los Andes septentrionales.

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Como un reconocimiento a esa rica herencia social que generación tras generación ha ido atesorando Quito, la UNESCO la nominó, primera entre las ciudades del continente y del mundo, junto con Cracovia, la bella ciudad polaca, como Patrimonio de la Humanidad. Esta es la ciudad que recibe con especial admiración a José Saramago.

Concuerdo con Erich From, cuando aseveraba que: “La naturaleza del hombre, sus pasiones y angustias son un producto cultural; en realidad, el hombre mismo es la creación más importante y la mayor hazaña de ese incesante esfuerzo humano cuyo registro llamamos historia... Pero no solamente el hombre es producto de la historia, sino que también la historia es producto del hombre.”

En efecto, la historia de nuestra ciudad, ha sido escrita por hombres y mujeres nacidos en ella, o venidos de diversas latitudes del país y el mundo, quienes, muchas veces con su ingenio y creatividad, pero muchas también con grandes sacrificios, nos legaron una historia de trascendentes realizaciones culturales, en todos los ámbitos de la actividad humana. El pueblo de Quito ha sido y es un pueblo de rebeldías y libertades, el primero en decidirse por la independencia de España; un pueblo incapaz de tolerar la corrupción y tiranía.

He leído una larga entrevista a José Saramago, que me permite establecer importantes coincidencias. El nos dice que no cree en utopías y esperanzas huecas, como: “ algo que está en un lugar que no se sabe dónde... algo que siempre se está posponiendo, como: llegará el día en que uno será feliz, no habrá hambre y la justicia respetará la dignidad humana...” Y nos dice en palabras que deberían ser una consigna para

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gobernantes: “Dime mejor qué estas haciendo hoy y ahora, y si lo que estás haciendo hoy y ahora está en esa dirección. Si es así estupendo. Vamos a trabajar, sabiendo que hay árboles que plántamos y que tal vez su sombra no nos proteja porque su crecimiento es muy lento, y que tal vez tampoco comeremos de su fruto, pero, no obstante, lo plantamos porque será utilizado algún día por otros”.

En esos términos, de lo que hay que hacer ahora, de forma inaplazable, nos esforzamos por hacer de Quito un espacio de convivencia, que respeta a la dignidad humana, emplea la razón e imaginación como medios para dirimir los conflictos y busca en la honestidad el antídoto para la desconfianza.

Creemos que es deber fundamental del gobierno de la ciudad defender el valor inalienable de la persona humana, de cada persona y de todas las personas. De hombres y mujeres de carne y hueso que sienten, quieren, viven y conviven y que buscan darle un significado y dirección a su existencia. Por esa razón, nos identificamos, con José Saramago cuando dice: “La prioridad absoluta tiene que ser el ser humano. Por encima de esa, no reconozco ninguna otra prioridad idealista, pero sin eso ¿Qué puede importarme el Universo?”

Creemos en la democracia como la mejor forma de vida en, pero creemos en ella porque sabemos que es perfectible Y sabemos que la democracia mejor, la de participación ciudadana nació y puede florecer en las ciudades; pero sabemos también que la división formal del poder no es suficiente para construir un sistema de justicia y libertad.

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Hay que democratizar el poder como plantea nuestro visitante: “Con la justicia pasa lo que con la democracia. Soy radical en ese sentido: no existe eso que llamamos democracia. ¿Se puede hablar de democracia si el poder real no es democrático?... Lo más trágico es que, aun sabiéndolo – en el fondo todo el mundo lo sabe -, de un lado y del otro todo el mundo se porta como si efectivamente la democracia existiera. Hay formas rituales democráticas, pero en la sustancia eso no es democracia... Pero el día en que los ciudadanos digan: Basta, queremos algo más, y su voluntad popular se note, ya veremos que pasa.” En efecto, solamente una democracia con participación ciudadana, auditoría social y rendición de cuentas, puede combatir la injusticia, la irresponsabilidad, la indiferencia, la corrupción y la falta de solidaridad.

En Quito, defendemos que la dignidad de las personas se ejerce, expresa y defiende en comunidad, en el hogar, la escuela, el lugar de trabajo, la iglesia, el barrio, por eso pensamos la ciudad como un espacio humano, un escenario de solidaridad para un pueblo que, como todos los de la tierra, transita por la historia buscando el sentido de su existencia, el horizonte de su destino, el camino de su felicidad. Una ciudad al servicio de todas las personas, con especial atención y amor para los más desprotegidos y desamparados.

Somos una ciudad marcada por la diversidad, un pueblo básicamente mestizo que convive con indios, negros y blancos; una ciudad cosmopolita, abierta a todas las corrientes políticas y culturales; por lo tanto, proclamamos como bases de nuestra convivencia la cultura de paz, la inclusión, la pluralidad y la tolerancia hacia las diversas formas de pensar, querer y sentir.

(Pág. anterior)Entrega de diploma, huésped ilustre premio Nobel José Saramago (18 de noviembre 2004)

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Nos definimos como la ciudad de la palabra; del diálogo constructor y fructífero, que nos permite encontrar soluciones negociadas a nuestras contradicciones y conflictos. Una ciudad que es espacio de la discusión, el debate, el argumento y la crítica constructiva es una ciudad de paz.

Por esas razones y por el extraordinario aporte dado desde la literatura a la comprensión del fenómeno humano, Quito recibe con regocijo a José Saramago, cuya vida es testimonio de compromiso con la causa humana. Nacido en una aldea, de una familia de labradores y artesanos, ricas experiencias laborales: cerrajero, mecánico, traductor, asesor editorial, empleado de hospital, periodista, y activista político

Miembro del Partido Comunista Portugués, sufrió persecución y censura durante el período de la Dictadura de Antonio Oliveira Salazar. Participó en la llamada “Revolución de los Claveles”, que puso término a cincuenta años de régimen totalitario y represivo, y devolvió la democracia para Portugal, en el año de 1974.

Precisamente su obra Alzado del Suelo, denuncia la represión Salazarista en contra de los campesinos y los sindicatos agrarios y le caracteriza como un escritor comprometido con las clases oprimidas.

Nuestro ilustre visitante es una de las principales figuras de la literatura mundial. Su obra goza de una admiración sin límites y se ha convertido en uno de los novelistas más apreciados del mundo. Su obra en prosa y verso se ha traducido a más de 20 idiomas. Ha recibido entre las más importantes distinciones: el Premio Camoes, equivalente al Premio Cervantes de la

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lengua española y el Gran Premio de Teatro de la Asociación Portuguesa de Escritores. Es Miembro del Parlamento Internacional de Escritores, de la Academia Universal de las Culturas Y en el año 1998 fue reconocido con el Premio Nobel de Literatura.

Debo confesar haber vivido y vivir una vida de lecturas. De José Saramago he leído parte de su obra y espero seguir leyéndola. Al hacerlo he podido dar la razón a Marcuse, cuando escribía: “Ritualizado o no, el arte contiene la racionalidad de la negación. En sus posiciones más avanzadas es el gran rechazo; la protesta contra aquello que es... El intento de rescatar la racionalidad a partir de lo negativo...” Esa es la sensación que queda en el Ensayo sobre la ceguera, cuando todos, menos una mujer, se quedan ciegos y cuando esa heroína – tenía que ser mujer- nos entrega en cada acto o frase un mensaje de solidaridad; o, cuando en una de las largas y atormentadas noches de Don José, conversa con el techo, en Todos los Nombres; o, en el No insertado, por el corrector, en La Historia del Cerco de Lisboa; o en el descubrimiento, en una película alquilada, de que existe un ser idéntico, en El Hombre Duplicado; o en fin, en las tribulaciones del artesano, en un capitalismo signado por el mercadeo, en La Caverna.

Para terminar, como lector, como parte del gran público que admira a José Saramago, quiero recordar unas pocas frases de “Ensayo Sobre la Ceguera”:

“ Los usurpadores expulsaron de la sala a los ciegos honrados, para quedarse dueños y señores de todo el espacio...”

“Creo que no nos quedamos ciegos, creo que estamos ciegos. Ciegos que ven, Ciegos que viendo no ven.”

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Esto para insistir que toda liberación depende de la toma de conciencia de la servidumbre y que el único camino para evitar la soledad y la angustia radica en el amor y en una de sus formas de expresión el servicio. A los demás

A nombre de Quito, Capital Iberoamericana de la Cultura, declaro a José Saramago Huésped Ilustre de esta ciudad que lo admira y respeta.

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PRESIDENTE LAZLO SOLYOM(año)

El Consejo Metropolitano de Quito y su Alcalde nos sentimos muy honrados y complacidos de recibir y expresar en el nombre del pueblo de Quito un saludo

afectuoso al presidente del Estado de Hungría en su visita a nuestro país, que deseamos le sea fructífera y grata.

Quito, esta bella ciudad enclavada en los andes y sita en la mitad del mundo reúne características geográficas, históricas y culturales que han despertado desde siempre la admiración de las personas que la han visitado.

De esta ciudad partió la expedición que descubrió el gran río de las amazonas que fue entonces conocido como el río de Quito; Fue, además, el escenario de la revolución que dio inicio a la gran epopeya independista latinoamericana; y, hace ya 30 años, en reconocimiento de los excepcionales aportes entregados al acerbo cultural mundial, fue la primera ciudad, junto a Cracovia, nominada como Patrimonio Cultural de la Humanidad.

El rico legado recibido de nuestros antepasados, está presente en la Capilla del Museo de la Ciudad, ubicado en las centenarias edificaciones del Hospital de la Misericordia, que hospeda esta significativa ceremonia y da testimonio de las elevadas dimensiones espirituales y extraordinarias capacidades artísticas de nuestras razas india y mestiza.

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Quito, es una ciudad progresista, una urbe cosmopolita, abierta, diversa que ha sabido interpretar con lucidez las asombrosas transformaciones experimentadas por la humanidad en el cambio de siglo, para emprender con sus esfuerzos de desarrollo.

Quito trabaja con decisión para generar riqueza y distribuirla con equidad, para integrar a toda su población a la era digital, para convertirse en un destino turístico de primer orden y ser un importante centro de servicios y de gestión estratégica.

En su lucha contra la marginalidad, la municipalidad ha llegado con los servicios básicos a casi todos sus barrios, trabaja en la universalización de los servicios de salud, dota de espacios públicos dignos a la mayoría de sus habitantes, tiene un subsistema de educación de calidad y trabaja con especial dedicación con los grupos vulnerables

Quito una ciudad fervientemente democrática, combate la corrupción, alienta la participación ciudadana, la toma de decisiones por consensos, la auditoría social y la rendición de cuentas de las autoridades.

Esta es la ciudad que recibe con beneplácito a tan ilustre huésped.

Más allá del acto protocolario, la entrega de las llaves de la ciudad, constituye la oportunidad de reconocer en el ilustre presidente Lazlo Solyom, las extraordinarias cualidades de un gran intelectual, un excelente maestro universitario, un luchador por los derechos humanos, un defensor de la naturaleza y un eximio estadista.

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Nuestro ilustre visitante culminó sus estudios en la rama del derecho en 1965 y un año después fue autorizado a impartir docencia en la República Democrática Alemana, en la Universidad Friedrich Schiller de Jena.

En 1969, de vuelta en Hungría, realizó labores de investigación en el Instituto de Ciencias Políticas y Legales de la Academia Húngara de Ciencias, y trabajó como bibliotecario en la Asamblea Nacional.

En 1977 publicó el primero de una docena de ensayos sobre distintos aspectos del Derecho, especialmente en los ámbitos de la protección de las personas y el medio ambiente.

En 1978 se unió al equipo docente del Departamento de Derecho Civil de la Universidad de Budapest y un lustro más tarde se convirtió en profesor titular del claustro.

En 1981 alcanzó un doctorado en Ciencias Políticas y Legales por la Academia de Ciencias.

En 1984 retornó a Alemania Occidental para realizar otra práctica académica de Derecho Privado Extranjero e Internacional Privado, en el instituto Max Planck de Hamburgo.

Su compromiso político arrancó en 1987 al figurar entre los impulsores del Foro Democrático Húngaro que se constituyó en partido político en septiembre de 1988.

Desde entonces fue un miembro muy activo de su partido que celebró en 1989 su primer congreso nacional. Fue parte del Comité Ejecutivo y fue delegado en las reuniones de la

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llamada Mesa Redonda de la Oposición, foro que consensuó la transición pacífica al Estado de derecho.

El ilustre Presidente Solyom se mostró especialmente preocupado porque el futuro marco legal del Estado salvaguardara escrupulosamente los derechos humanos. A la par de su militancia partidaria, se adhirió a la Organización no gubernamental “Club por la Libertad de Prensa” y al “Foro de Abogados Independientes”.

El 24 de noviembre, el Parlamento le eligió magistrado del nuevo Tribunal Constitucional encargado de velar por las revisiones democráticas de la Carta Magna

En julio de 1990 se convirtió en presidente del Tribunal Constitucional. Desempeñó esta alta magistratura del Estado ocho años merced a dos reelecciones consecutivas.

El presidente Lazlo Solyom, ha recibido muchos galardones, condecoraciones y doctorados honoríficos, entre ellos, el afamado Premio Alexander von Humboldt.

En 2001 nuestro ilustre visitante ingresó en la Academia Húngara de Ciencias. Sus contactos internacionales incluyeron sendas membresías en la Comisión Internacional de Juristas, con sede en Ginebra, el Instituto para el Estudio Avanzado de Berlín y la Comisión Europea para la Democracia a través del Derecho, más conocida como Comisión Venecia, adscrita al Consejo de Europa.

En añadidura, en marzo de 2000 fue coartífice de la fundación de la sociedad conservacionista Védegylet y en 2004 fue admitido en el Colegio de Ciencias Sociales de Fondo Húngaro de Investigación Científica.

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Finalmente, el 7 de junio del año 2005, el Parlamento le designó para desempeñar la Presidencia de su país.

Esta breve reseña confirma mi acerto inicial de que se trata de una de las más sobresalientes personalidades de la vida política de Hungría y Europa. Finalmente, a nombre del pueblo quiteño reitero a nuestro ilustre visitante y a su comitiva los votos sinceros por una feliz permanencia en el país y nuestra esperanza de que este encuentro en la mitad del mundo, servirá para reforzar la amistad húngaro ecuatoriana, así como para el logro de los objetivos universales de paz, desarrollo, equidad y justicia en las relaciones entre todos los pueblos del mundo.

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MARIO VARGAS LLOSA(2007)

La ciudad de Quito se siente especialmente complacida por la presencia del escritor Mario Vargas Llosa, una de las cumbres de la literatura peruana, americana y

mundial.

Nuestra ciudad, la primera en ser reconocida por la UNESCO como patrimonio cultural de la humanidad, en virtud del extraordinario legado que conserva, fruto de la creatividad e ingenio de nuestros ancestros, recibe con especiales sentimientos de admiración a las personas que han destacado en los campos del arte y la cultura.

Y es que el pueblo de Quito, no solamente que cuida con especial dedicación el patrimonio heredado de sus antepasados, sino que lo enriquece con los aportes de miles de personas que desde la cultura aportan al desarrollo de la ciudad democrática, solidaria y equitativa que día a día construimos.

Ciudad andina y equinoccial, la tierra del sol recto, es también una comunidad abierta a los aportes del pensamiento universal. Posiblemente ha sido su mismo enclaustramiento entre las congeladas cumbres andinas, que ha provocado sus señalados esfuerzos para conectarse con los pueblos y

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culturas del mundo y de estar siempre abierta al debate de las más novedosas tesis de la política y la cultura.

Cómo de otra manera imaginar a la pequeña capital andina convertida en el centro del los debates políticos de fines del siglo XIX, con el liderazgo del genial Eugenio Espejo; cómo entender la presencia de mujeres tan ilustradas como Manuela Cañizares, Manuela Espejo y Manuela Saénz.

¿Quién leyendo las cartas de esta coronela de las campañas libertarias del Perú, la libertadora del libertador, no queda perplejo ante la exquisitez de su pluma y la soberbia capacidad de su inteligencia?

A lo largo de nuestra historia y en contra de cualquier forma de determinismo que habría hecho de Quito una ciudad pacata, hipócrita y cerrada, el pueblo quiteño se ha caracterizado por su irreverencia ante el poder y por su amor a la libertad; por no aceptar verdades hechas, por disponer de un espíritu crítico, de un talante insatisfecho y de un humor fino, arma invencible frente a la estulticia, la soberbia y la corrupción.

Porque Quito es así, se pone de fiesta cada vez que nos visita una personalidad como el escritor Mario Vargas Llosa a quien ha leído, sin duda, un alto porcentaje de Quiteños.

Para las personas de mi edad, que hemos vivido tan intensamente la historia de la segunda mitad del siglo pasado, años de guerras mundiales, ideologías audaces, revoluciones triunfantes, guerras frías y calientes, amenazas de destrucción planetaria causada por el siempre amenazante enfrentamiento nuclear; para quienes hemos vivido los

(Pág. siguiente )Declaración de huésped ilustre a Vargas Llosa (19 de junio del 2007)

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encantos y desencantos de nuestra politiquería criolla; para quienes a pesar de habernos digitalizado conforme a las exigencias del momento, seguimos siendo una generación del libro, la presencia de de Mario Vargas Llosa tiene especial importancia.

Leyendo su Pez en el Agua, nos dimos cuenta que como él, en nuestros primeros años, aprendimos a leer en los Penecas y Billíquenes, y en los afamados leoplanes; que como él adquirimos el hábito deleitoso de la lectura; que por nuestras manos pasaron abierta o subrepticiamente los libros de Emilio Salgari, Julio Verne, Víctor Hugo, Paúl Feval, Alejandro Dumas, Miguel Sabatini, Miguel de Cervantes, León Tolstoi, Fedor Dostoyeski, Vargas Vila, para citar solamente a algunos de los cientos de autores y títulos que tan honda huella grabaron en nuestra vida.

Muchos de nosotros, deslumbrados por la literatura europea, leímos poco de los autores ecuatorianos y latinoamericanos. Se salvan las lecturas obligadas de los clásicos nacionales y regionales y otras hechas con gusto y a voluntad de Pablo Neruda, Gabriela Mistral, José de la Cuadra, enrique Gil Gilbert, o Jorge Icaza.

Todo esto hasta que el deslumbramiento geográfica y culturalmente europeos sufrió un giro dramático y aparecieron en las librerías, lo títulos de libros fantásticos escritos por los García Márquez, Cortazar, Onneti, Sábato, Jorge Amado y por supuesto Mario Vargas Llosa, nuestro ilustre huésped.

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Quiero destacar estas frases suyas, porque las encuentro clarificadoras y estimulantes: “La literatura es una actividad fundamental y de ninguna manera una especialidad. Debe ocupar un lugar importante en las vidas de todas las personas, porque es una fuente de conocimientos y una fuente extraordinaria de placer. Ese es el mensaje que yo traigo a los jóvenes: convencernos de que los libros son importantes porque no hay una diversión que sea más sana, exaltante y estimulante; un buen libro realmente creativo, agudiza nuestra sensibilidad, desarrolla en nosotros un gran sentido crítico y transforma nuestra existencia.

¿De dónde que no sea de nuestras amplias lecturas, obtuvimos esa pasión por la verdad, esa adhesión a las virtudes familiares, ciudadanas y patrióticas? ¿De dónde si nos llegó esa capacidad de indignación ante la injusticia, la exclusión o el discrimen?

Posiblemente, esta disertación debía hacerla un crítico literario, un experto en los temas de la literatura mundial y americana, pero no, aún tomándome el riesgo del error, de la impertinencia y de la expresión inapropiada, la he presentado como un lector, como uno de los miles de lectores quiteños que han tenido el privilegio de recrearse, instruirse y disfrutar algo de la prolífera producción de Mario Vargas Llosa, quien, a través de sus libros ha sido ya un vecino de muchos años de nuestra ciudad y a quien saludamos con la misma confianza y efusión que a un viejo conocido y un cercano amigo. Bienvenido Dr. Mario Vargas Llosa

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VICENTE FOX.

La ciudad de Quito y el pueblo del Ecuador saludan con regocijo la visita del presidente del admirado pueblo mejicano y le expresan un cálido saludo de bienvenida,

junto a los deseos más fervientes porque le sea fructífera y placentera su grata estadía en el país.

Quito, como bien es conocido por su excelencia es una ciudad, de milenaria historia, de rica y espléndida geografía, de gentes esforzadas y acogedoras. Es la tierra de los legendarios pueblos Quitu y Caras que la fundaron miles de años atrás; Posteriormente fue el más importante centro político y administrativo del norte del imperio Inca. En ella nació Atahualpa, el último de los Incas que la convirtió en la capital imperial y, posteriormente, en el período colonial, fue designada capital de la Centenaria Presidencia audiencial.

Desde esta ciudad partieron Pizarro y Orellana para realizar la epopeya del descubrimiento del Río de las Amazonas, al que desde entonces se conoció como el río de Quito. Las calles y plazas del extraordinario Centro Histórico, en que con enorme satisfacción desarrollamos esta ceremonia en honor de nuestro ilustre huésped, fueron escenario de la afamada revolución libertaria, que le valió el título de Luz de América.Por el valor de su rica y antigua cultura, la UNESCO, nominó

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a Quito, hace ya un cuarto de siglo, como la primera ciudad del mundo, Patrimonio de la Humanidad. Esa herencia cultural que usted, señor presidente habrá podido apreciar y que la sentirá, seguramente, tan próxima a la mejicana, es el resultado de ese proceso común a nuestras historias de transculturización entre los pueblos aborígenes y europeos que resultó en un vigoroso mestizaje.

Esta ciudad, orgullosa de su pasado, luchadora incansable por edificar un presente digno de sus antecedentes históricos y comprometida con la construcción de un futuro de prosperidad y grandeza, saluda con afecto al señor Vicente Fox, digno presidente de un país que nos es tan cercano y querido a los ecuatorianos.

México ha sido siempre un referente importante para América Latina. Sus luchas heroicas y más de una vez trágicas en defensa de su integridad, libertad e independencia han inspirado a los grandes líderes progresistas de nuestro continente. Sus conquistas sociales, difícilmente alcanzadas y no siempre sostenidas, fueron incorporadas a las legislaciones de otros países para configurar, por lo menos en la letra de la ley, los derechos conocidos como de segunda generación en beneficio de los pueblos.

Sus gobiernos ofrecieron con singular solidaridad asilo y protección a los perseguidos por intentar romper los viejos esquemas de dominación que afectaron y afectan a nuestros pueblos; y legiones de jóvenes latinoamericanos se han beneficiado de estudios realizados en sus magníficas universidades.

Distinción Huésped Ilustre al Presidente MexicanoVicente Fox

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Sus artistas, sobresalientes en todas las expresiones culturales, fueron y son referentes en el desarrollo de otras culturas nacionales; en fin, este admirable pueblo ha marchado a la vanguardia de los esfuerzos latinoamericanos por salir del estancamiento y buscar construir mejores sociedades, más productivas, competitivas, solidarias y democráticas.

Al saludar la presencia del presidente Fox en nuestra ciudad, debemos reconocer y valorar su excepcional dedicación al servicio del pueblo mejicano, especialmente de los grupos más vulnerables y destacar su generosa y eficiente labor como presidente del Patronato Casa Cuna Amigo Daniel, donde niños huérfanos reciben esmerada y cálida atención; como presidente del Patronato Educativo Loyola, como promotor de la Universidad Iberoamericana y del instituto Lux, para brindar educación de calidad al pueblo de Guanajuato. El ilustre presidente mejicano es un mandatario convencido de que la clave del progreso está en el desarrollo humano. Como gobernador dedicó la mayoría de los recursos de su estado a la educación pública. Logró que el 99% de niños asistan a la escuela, para lo cual su gobierno otorgó más de 55 000 becas a estudiantes de menores recursos.

Del mismo modo debemos destacar el esforzado y exitoso paso del presidente Fox por la actividad empresarial. Nuestro respetado visitante ha sido consejero de la Cámara México Americana de Comercio, vicepresidente de la Asociación de Industriales de Guanajuato, presidente de Coca Cola para México y América Central y el gerente más joven de esa compañía y presidente del grupo Fox, cuyas empresas se dedican a la producción agrícola, ganadera y agroindustrial.

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El presidente Fox ha destacado también en el difícil quehacer de la política: Afiliado al Partido Acción Nacional en la década de los ochenta; en 1988 fue elegido diputado federal por el Tercer Distrito Electoral de León y en 1995 alcanzó la Gobernación del estado de Guanajuato. En el desempeño de esas funciones puso énfasis en la administración honesta, rindiendo cuentas tanto de su patrimonio personal como de las finanzas públicas; mejoró y amplió la infraestructura económica de su estado para atraer la inversión mexicana y foránea, creó un sistema de microcréditos, apoyó la instalación de pequeñas empresas, se preocupó de la educación y logró que Guanajuato llegue a ser la quinta economía más importante de México

Los éxitos alcanzados en sus funciones tanto parlamentarias como ejecutivas le permitieron la candidatura a la Presidencia de la República, representando a la alianza del Partido Acción Nacional y Partido Verde Ecologista de México. El 2 de julio del 2000, ganó las elecciones con la voluntad de liderar un gobierno plural, honesto y capaz abierto a la participación de los mejores ciudadanos.

En diciembre de ese año asumió la presidencia e inmediatamente ordenó el inicio de la retirada del Ejército de Chiapas, anunció el envío de un proyecto de ley sobre cultura y derechos de los pueblos indígenas y firmó con la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, un acuerdo comprometiendo al Estado mexicano al respeto de los derechos y libertades fundamentales .

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Es por las razones antes citadas y para destacar las altas virtudes de americano y mejicano que, con enorme complacencia, el pueblo quiteño, su Concejo y el Alcalde Metropolitano, declaramos a su excelencia, el presidente Vicente Fox, Huésped Ilustre de Quito y al entregarle la Llave de la Ciudad como símbolo de la tradicional hospitalidad quiteña, hacemos votos por que el éxito acompañe su gestión al frente de los destinos de México y porque con su liderazgo se fortalezcan los vínculos de amistad, cooperación e integración entre nuestros países y con el resto de los pueblos hermanos de América Latina. Así será posible hacer realidad la común aspiración de liberar a nuestros pueblos del desempleo y la pobreza, construyendo sociedades prósperas, solidarias y justas.

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CONDECORACIONES

CONDECORACIÓN DEL GOBIERNO DE ITALIA

(AÑO)

Inicio esta intervención expresando mi profunda gratitud al señor embajador de la República de Italia, a su gobierno y noble pueblo por esta condecoración que honra a la

ciudad de Quito a cuyo nombre la recibo, porque ningún mérito puedo atribuirme que no deba ser compartido con los hombres y mujeres de esta hermosa y gran urbe, verdaderos artífices de su desarrollo y protagonistas singulares del constante mejoramiento experimentado en estos años que he tenido el honor y satisfacción de ser su Alcalde.

Durante ocho años, pueblo y Alcalde nos hemos empeñado en construir un nuevo concepto de gestión de lo público y hemos demostrado la factibilidad y conveniencia de un liderazgo democrático, asertivo, fundamentado en la palabra como instrumento de la razón, en la solución negociada de los conflictos, en la planificación, programación y presupuestación acordada; en la aceptación de que la autoridad proviene del mandato popular; que las autoridades no tienen otra razón de ser que la de servir y defender el bien común, entendido como el punto de encuentro de los legítimos intereses particulares para definir visiones y proyectos de vida en común en los que todos y todas nos sintamos incorporados.

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Convencidos de los valores de la gobernabilidad democrática propusimos, hace ocho años, el Plan Quito Siglo XXI que buscaba, en el ámbito de la ciudad, rescatar los valores de la solidaridad, de la honestidad, de la fidelidad a lo planificado, de la eficiencia y justicia en el uso de los recursos y logro de los objetivos, todo esto al servicio de la calidad de vida de la mayoría de los habitantes de Quito.

Hemos trabajado estos dos períodos con tenacidad en la construcción de una ciudad productiva, competitiva, solidaria, equitativa y gobernable en democracia; Una ciudad con fuerte identidad, instituciones sólidas, con liderazgo social de calidad y una gestión pública basada en la comunicación, con la participación, soporte e involucramiento ciudadano.

Hemos gobernado la ciudad procurando elevar la calidad de su capital humano y social, facilitando consensos, orientando visiones claras y positivas de futuro, buscando la integración de lo público y privado para impulsar un proyecto consistente de desarrollo, apostando a una Quito prominente a escala global, forjando cambios que permitan que nuestros hijos y nietos se sientan orgullosos de ser quiteños y ecuatorianos.

Uno de los objetivos importantes de nuestra planificación fue la de proteger y preservar el patrimonio cultural para el uso equitativo e incluyente de las presentes y futuras generaciones; concebimos la recuperación del patrimonio cultural como uno de los ejes estratégicos para el desarrollo sostenible de la población y como elemento fundamental de nuestra identidad, autoestima y sentido de pertenencia. El resultado de un trabajo planificado, técnico y entusiasta ha cambiado positivamente a nuestra ciudad.

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Quito es patrimonio cultural de la humanidad, de modo que los trabajos que realizamos preservan todos los aportes culturales que desde distintas fuentes contribuyeron a crear las maravillosas expresiones quiteñas del arte y la arquitectura. Los aportes brindados a la conformación de la personalidad quiteña de hoy y de mañana por las culturas indígenas y por los legados de la participación europea, de la cual junto a la española, mozárabe, y mudejar, destaca la italiana, de la tierra de Virgilio, Horacio, Ovidio, Cicerón, Lucrecio, Séneca y Tácito. La cuna del Derecho, cuya influencia es notable en los sistemas legales de casi todos los Estados del mundo occidental. El pueblo del renacimiento, de Dante y Giotto, de Petrarca y Boccaccio, de Leonardo y Miguel Angel, de Rafael y Modigliani, de Maquiavelo y Bruno, para citar solamente a algunos de los más destacados.

El aporte de Italia a la Escuela Quiteña de Arte es digno de destacarse. El epicentro de la revolución artística que significó el renacimiento estuvo en ese país del que España recibió fuertes impulsos e influencias desde las primeras décadas del siglo XVI.

Al Nuevo Continente estas influencias llegaron a través de la cultura ibérica y, directamente de Italia, a través de proyectos arquitectónicos, de tratados de arquitectura, como los de Sebastián Serlio y de Vignola y con la presencia de artistas religiosos originarios de ese país.

En el caso de Quito, las primeras manifestaciones se aplicaron en la iglesia de San Francisco, en cuya monumental fachada, construida en el tercer cuarto del siglo XVI se pueden observar diversas influencias manieristas.

(Pág. anterior)Condecoración a Alcalde de Quito Gobierno de Italia (01 de julio 2008)

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Con el barroco sucedió lo propio. Se utilizaron grabados provenientes de Italia y se conoce que hasta la planta de la iglesia de la Compañía de Jesús llegó de Roma en el año 1605, traída por el padre Nicolás Durán Mastrilli.

La influencia italiana en los edificios de la Compañía de Jesús continuó en el año 1754 con el arribo del Mantuano, P. Venancio Gandolfi, de quien se sabe construyó también al menos dos magníficas mansiones para particulares en la ciudad de Quito.

El dibujo del retablo diseñado por el P. Andrea Pozzo para el altar de San Luis Gonzaga en el templo de S. Ignacio de Roma, que llegó a Quito en los grabados de la famosa obra “Prospettiva de Pittori e Architetti” editada en Roma en el año 1700, sirvió como inspiración para retablos como los de las capillas de San Ignacio de Loyola y San Francisco Javier.

Una portada diseñada por Miguel Ángel para la Viña Grimani, en las afueras de Roma, que llegó a Quito en la traducción castellana del tratado de Vignola: “Regla de los cinco órdenes de Arquitectura”, sirvió como modelo para la portada pétrea de acceso al Colegio Máximo, obra del H. Marcos Guerra.

Las influencias italianas continuaron luego de la época colonial. El primer Presidente de la nueva república del Ecuador, Juan José Flores encargó a un arquitecto italiano de apellido Lavezzari los arreglos del palacio nacional en Quito, a quien se atribuye la gran galería exterior neoclásica, terminada en 1847.

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García Moreno envió a talentosos artistas ecuatorianos a estudiar en Italia Es el caso de Rafael Salas Estrada, retratista de los héroes de la independencia; José Salas Salguero, Luis Cadena que estudió con Alejandro Marini. A su retorno debían integrar la planta de profesores de la primera Escuela de Bellas Artes.

En el campo de la música fueron contratados para profesores del Conservatorio de Música Francisco Rossa del conservatorio de Milán, Pedro Pablo Traversari, Antonio Casarotto y Vicente Antorini

A finales del siglo XIX llegaron los arquitectos Lorenzo Durini Vasalli y su hijo, Francesco Durini Cáceres. A este último, le correspondió construir el actual edificio de la Cancillería, el edificio del Banco Central, el Círculo Militar, la Caja de Pensiones, el Banco del Pichincha y el Pasaje Royal

En la Escuela de Bellas Artes, refundada por el Presidente Eloy Alfaro a inicios del siglo XX, enseñaron profesores italianos entre los que destacan, Giacomo Radiconcini, autor de la casa Rotonda en San Blas, del teatro Capitol en la Alameda y el conocido Pasaje Baca, en la calle Espejo.

El monumento a la Independencia construido para celebrar el primer centenario de nuestra independencia, por disposición del general Eloy Alfaro, en la Plaza Grande, fue construido por el arquitecto Francesco Durini, diseñado por el escultor italiano Juan Bautista Minghetti y la hermosa mujer que lo adorna esculpida por el escultor genovés Adriático Foli. Se inauguró el 10 de agosto de 1809.

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Más adelante llegaron los arquitectos Paolo y Antonino Russo, este último que había realizado estudios en la universidad de Palermo y de Milán, se desempeñó como profesor de la Escuela de Arquitectura de la Universidad Central y construyó un sinnúmero de edificaciones como el edificio de la Nunciatura Apostólica y el Teatro Capitol en colaboración con el arquitecto Giacomo Radiconcini, a quien se atribuye también el edificio del antiguo Hotel Magestic, hoy Plaza Grande.

Para mediados del siglo XX el arquitecto Giovanni Rota aportó con la Escuela de Arquitectura de la Universidad Central. A el se deben el edificio de la Caja de Pensiones y el Pasaje Amador que sustituyó al Pasaje Royal que había sido derrocado.

Largo sería continuar describiendo los aportes de arquitectos y artistas italianos al patrimonio cultural de Quito y el Ecuador. Creo que lo señalado es suficiente para que en este día en que el gobierno de Italia ha considerado conferir al Alcalde de Quito esta alta presea, podamos significar como ese hermano país y su pueblo valoran a nuestra ciudad y los esfuerzos realizados por centenares de personas para que los aportes de su cultura que se evidencian en los monumentos y obras de arte de nuestra Escuela Quiteña, se preserven como lo que son un patrimonio de todos los seres humanos.

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INAUGURACIÓN DE LA FERIA MUNDIAL AGRIFLOR

A inicios del presente siglo, nuestras generaciones han podido experimentar una situación de cambios acelerados y continuos provocados por la revolución

de la ciencia y las tecnologías que han penetrado en todos los aspectos de nuestras vidas obligándonos, especialmente a quienes desempeñamos cargos de responsabilidad política, a comprender y utilizar las nuevas herramientas disponibles en beneficio de nuestros pueblos. Quienes no lo entiendan así, estarán condenados a inscribir una vez más el nombre de sus países y ciudades en la lista de los perdedores de la nueva circunstancia histórica.

Vivimos una nueva etapa en el proceso civilizatorio de la humanidad. Una humanidad cada día más urbana. En América Latina, tres de cada cuatro personas vivimos en ciudades las mismas que se han convertido en puntas de lanza de la denominada sociedad de la información y del conocimiento. En estas circunstancias, el proceso de juntar en un determinado territorio actividades de alta tecnología, centros de investigación, empresas, universidades e instituciones financieras, produce un efecto sinérgico del cual pueden emerger nuevas ideas, infraestructuras e instituciones generadoras de riqueza y empleo.

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Para que las actividades económicas, los procesos de innovación tecnológica y las empresas que los generan, quieran concentrarse en ciertos territorios de carácter urbano metropolitano, es indispensable que en éstos califiquen sus recursos humanos, desarrollen sus infraestructuras logísticas, eleven la calidad de vida de sus ciudadanos, acojan universidades y centros de investigación, estimulen actividades innovadoras, atraigan inversiones, conjuguen acciones de agentes públicos, privados y académicos, entre otros aspectos.

Es por estas razones que los gobiernos locales, se han convertido en importantes gestores del desarrollo integral de las ciudades y sus regiones de influencia; hoy, más que nunca, las autoridades locales interactúan con los líderes de los distintos sectores de la sociedad para acordar acciones que aseguren la buena marcha de los asuntos de interés común y enfrentar los retos de un mundo distinto generador de incertidumbres, pero también de oportunidades y esperanzas.

El papel de las empresas en el marco de esta alianza es vital; sin ellas se imposibilita el desarrollo; es, por lo mismo, indispensable estimular el fortalecimiento del tejido productivo local apoyando a micro, pequeñas, medias y grandes empresas capaces de surtir productos de calidad para el mercado interno y para la exportación, que generen empleos y riqueza. No existe otra forma de mejorar la calidad de vida de los ciudadanos.

Con estas convicciones como fundamento la municipalidad quiteña ha trabajado en los últimos ocho años procurando edificar, con la participación de todos y todas una ciudad

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productiva, competitiva, incluyente, solidaria y gobernable en democracia.

Permítanme referirme a algunos ejemplos:

Creamos la Corporación de Turismo que aplicando fielmente el Plan Q, ha logrado colocar a Quito entre los principales destinos turísticos del mundo. Ya en el año 2007, el turismo inyectó sobre los $600 millones de dólares en la economía quiteña, generó empleos para miles de personas, y se constituyó en una de las principales actividades económicas de la ciudad.

Para que una ciudad sea competitiva debe tener un ambiente sano. Creamos CORPAIRE para proteger el aire de Quito con resultados sorprendentes y Vida para Quito que ha recuperado ríos, cuencas hidrográficas, ha reforestado el territorio del Distrito con un millón de árboles y ha incrementado los espacios públicos colocando a nuestra ciudad a la cabeza en el número de metros cuadrados por habitante.

Para apoyar a nuestros empresarios creamos CONQUITO, una agencia de desarrollo local que ha emprendido en proyectos como la factoría del conocimiento, incubadora de empresas de base tecnológica, bolsa de empleo, capacitación para el empleo, agricultura urbana, parques tecnológicos, entre otros.

Para apoyan a las actividades productivas, logramos atraer inversiones de más de quinientos millones de dólares para construir un nuevo aeropuerto, acorde con las demandas del turismo nacional e internacional y de las exportaciones

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e importaciones ecuatorianas. El proyecto se complementa con zona franca, parque tecnológico y polígono logístico.

Uno de los mayores beneficiarios de las nuevas infraestructuras será precisamente el sector florícola digno de todo apoyo y estímulo por parte de nuestra Alcaldía por su impacto positivo en la economía nacional y local. En apenas dos décadas nuestros empresarios florícolas han podido posicionar a la flor ecuatoriana como la mejor del mundo.

Apreciamos en alto grado la generación de empleo por parte de la actividad florícola, 80.000 trabajadores directos y otros 100.000 de negocios afines tienen empleos que les permiten ingresos adecuados para el sostenimiento de sus familias.

Las flores constituyen el primer producto de exportación no tradicional del país y el más importante de la Sierra; el cuarto producto de exportación general del Ecuador, en 2007, luego del petróleo, banano y camarón, con exportaciones que llegaron a los 503 millones de dólares.

El sector floricultor es el mayor difusor de tecnología en el sector agrícola y comercial de exportación del país; El gasto en capacitación de empleados y trabajadores, y en innovación y desarrollo se estima en el 8 % de los gastos anuales totales. Pero, es especialmente destacable la responsabilidad social y ambiental de las empresas asociadas en Expoflores; no solamente que éstas cumplen sus obligaciones fiscales y laborales, sino que apoyan a las comunidades donde se encuentran sus plantaciones, sino que lidera un programa de producción limpia orientado al tratamiento y destrucción biosostenible de los desechos plásticos de los invernaderos y de envases plásticos.

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Las razones expuestas son argumentos suficientes para saludar con entusiasmo esta feria que pone a Quito en el escenario mundial como capital de las flores, como una ciudad abierta, progresista y hospitalaria, empeñada en inscribir su nombre entre los ganadores de la nueva realidad económica, social y política que vive el mundo.

Deseo expresar nuestra cálida bienvenida a todos los participantes que nos visitan de otros países del mundo y a nuestros hermanos llegados de distintos sitios del Ecuador. Les deseamos junto a una feliz estadía, éxitos en sus negocios y que sus objetivos sean alcanzados a plenitud.

Quiero también y muy especialmente felicitar a Expoflores y HPP Ecuador Cía. Ltda., por este magnífico evento. Desde 1992 Flor Ecuador Agriflor, a través de sus 11 ediciones ha demostrado ser la más importante de América y la segunda a nivel mundial, después de la feria anual de Holanda. La dedicación, entusiasmo y competencia de los organizadores son garantía del éxito que estamos seguros coronará sus esfuerzos.

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CONDECORACIÓN DE LA CÁMARA DE LA PEQUEÑA INDUSTRIA

(2008)

Inicio mi intervención felicitando a la Cámara de la Pequeña Industria de pichincha y al Centro de Exposiciones Quito en esta magna ceremonia en la cual

se celebran veinte y cinco años de su fructífero aporte al desarrollo social y económico de Quito y su región.

Celebro también poder participar una vez más en un evento del Centro, esta vez en el “Encuentro Expo Productivo CAPEIPI 2007” que permitirá a la pequeña industria presentar al país una muestra de sus capacidades, de sus progresos en innovación, de su potencial productivo y de su alto nivel de competitividad.

En el momento que vive el país y ante las expectativas de cambio generadas por la instalación de la nueva Asamblea Constituyente, me parece importante que utilice de esta tribuna para realizar algunas puntualizaciones que pueden ser orientadoras.

Es conocido y aceptado universalmente que la humanidad, enfrenta, al inicio de siglo, una situación de cambio acelerado como resultado de la revolución técnica y científica que ha sacudido las viejas estructuras económicas, sociales, políticas y geopolíticas.

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Como consecuencia han cambiado también en los sistemas de gestión pública, modificando las viejas estructuras centralistas y concentradoras, por otras horizontales, flexibles y descentralizadas.

La globalización económica, caracterizada por una compleja red multidimensional de flujos de información, capitales, mercancías y personas, que integran todo el planeta, encuentra en las ciudades a los nodos de infraestructuras y servicios avanzados y a los elementos organizadores y de soporte de la economía mundial.

La acción de juntar en una ciudad actividades de alta tecnología, centros de investigación, empresas y universidades, además de instituciones financieras, para promover sus contactos, produce un efecto sinérgico del cual pueden emerger nuevas ideas e innovaciones tecnológicas que mejoran la producción competitiva de los países.

Lo característico de las ciudades competitivas es la compenetración e interacción entre la esfera social, política y económica, donde el funcionamiento de una de ellas está condicionado por la organización y funcionamiento de las demás.

Por lo tanto, un sistema innovador se crea por la conjunción de acciones de agentes públicos, privados y académicos que interactúan en un territorio específico, aprovechando una infraestructura particular, para adaptar, generar y difundir innovaciones tecnológicas.Las ciudades y regiones exitosas buscan funcionar en sinergia con los Estados a los cuales pertenecen. Es universalmente reconocido el importante

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principio de la subsidiaridad, dejando que se haga en cada nivel de gobierno lo que mejor puede realizar, esto es, con más eficiencia, eficacia y economía.

Esta es en resumen la nueva visión del desarrollo de Quito y su región recogida en el Plan Equinoccio 21, en el cual se asigna un papel vital a las empresas. Sin estas no existe la posibilidad del desarrollo.

Se requiere de micro, pequeñas, medias y grandes empresas, funcionado organizadamente para producir riqueza, distribuirla con equidad y generar empleos. Sin empleos no se puede hablar de calidad de vida para los ciudadanos, ni tampoco de equidad.

En las ciudades y regiones exitosas, las empresas privadas están comprometidas con un cambio profundo que permita corregir las deficiencias públicas y privadas del pasado, compiten sin la protección del estado, sin ejercer influencias políticas, son socios del desarrollo integral de la sociedad, y se integran a ella como el motor de su progreso.Con este marco conceptual como telón de fondo Quito ha emprendido, por sus propios esfuerzos con un proceso de cambios acelerados y positivos cuyos resultados pueden ya observarse.

Algunos proyectos en marcha han sido reconocidos nacional e internacionalmente: La Corporación de Turismo y su plan “Q” que ha logrado colocar ya a Quito entre los destinos turísticos más importantes de América Latina; la Agencia de Desarrollo Local CONQUITO, y sus proyectos de microempresas, micro créditos, instituto para capacitación

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para el empleo, bolsa de empleo, incubadora de empresas de base tecnológica, factoría del conocimiento, etc, nos ha dado plausibles resultados. Uno de ellos es precisamente la “Guía Básica de la Micro, Pequeña y mediana Empresa” que hemos entregado como un aporte para el mejor desarrollo de este sector vital de nuestra economía.Para ponerle a Quito en la sociedad del conocimiento llevamos adelante el programa “Quito Digital” con sus proyectos Quito educa net, gobierno digital, democracia digital, Internet para todos, etc.

Para dar el salto histórico en nuestro desarrollo, planificamos el programa AEROTROPOLIS, con el nuevo aeropuerto, convirtiendo el actual en un gran centro de convenciones y exposiciones; el polígono de servicios logísticos, el parque tecnológico y la zona franca.

Estos proyectos quiteños son irrenunciables y ni la malicia, ni la mala fe, ni los intereses creados de unos pocos malos quiteños y malos ecuatorianos podrán privarle a nuestra ciudad de su legítimo derecho a continuar realizándolos y a asegurar así el desarrollo actual y futuro de todos los ecuatorianos que vivimos en Quito.

Termino esta intervención agradeciendo las palabras generosas y la condecoración con la cual la CAPEIPI honra al gobierno local, a ese equipo de ciudadanos que han trabajado en mi administración y antes de ella por el bien de la ciudad que es en definitiva el bien del país y de todos los ecuatorianos.

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CONDECORACIÓN DE LA UNESCO(2004)

Inicio esta intervención con mi espíritu hondamente estremecido por este acto de reconocimiento de la UNESCO, a la labor desempeñada, por el pueblo de

Quito, junto a su Alcalde, para defender y recuperar la rica raigambre de nuestra cultura; y con mi corazón desbordante de gratitud porque se haya seleccionado para escenario de esta solemne ceremonia La Capilla del Hombre, obra del genio de la plástica ecuatoriana y americana, el gran maestro Oswaldo Guayasamín.

Esta herencia monumental que nos dejó, este pintor universal, a los ecuatorianos y latinoamericanos, nos recuerda el compromiso con el respeto y defensa de los derechos humanos, el deber de trabajar y luchar en contra de toda forma de discrimen y exclusión, la permanente dedicación que le debemos a la construcción de una cultura de paz, fundamentada en la tolerancia, la justicia, la solidaridad y la inclusión. Y constituye, a la vez, un testimonio conturbador de la indefensión del ser humano, tantas veces sometido, a lo largo de la trágica epopeya humana a los caprichos y concupiscencia del poder.

El mensaje que nos quiso dejar Guayasamín, en la Capilla del hombre; en cada detalle arquitectónico, en cada mural, en cada cuadro, en cada imagen, es profundamente político. Nos

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convoca a pensar en la grandeza del ejercicio de la política, en la dignidad del accionar político, en la naturaleza ética del poder, cuando están al servicio de las causas más nobles del ser humano. Ese es el mensaje que debemos rescatar, acoger y aplicar quienes, por la voluntad del pueblo nos encontramos ejerciendo funciones de gobierno en las ciudades, las provincias y el país.

La política así entendida confiere nobleza al servicio público y da significado al liderazgo democrático; nos recuerda que la autoridad proviene del mandato popular; que las autoridades no tienen otra razón de ser que la de gestionar los asuntos públicos procurando el bien común, entendido como el punto de equilibrio en el que se encuentran los legítimos intereses particulares para definir visiones y proyectos de vida en común en los que todos y todas nos sintamos incorporados.

La grave situación del pueblo ecuatoriano, empobrecido y sin esperanzas, se debe precisamente a un ejercicio del poder político servil de los intereses y caprichos particulares de poderosos e irresponsables grupos económicos que no vacilaron en anteponer sus apetitos a la propia supervivencia de la nación. El Poder político secuestrado por la corrupción, de espaldas a los intereses de la comunidad, traiciona los más elementales supuestos de la democracia.

Conscientes de esta realidad propusimos, hace ya cuatro años, un plan de gobierno local que buscaba, en el ámbito de la ciudad, rescatar los valores de la democracia, de la solidaridad, de la honestidad, de la eficiencia al servicio de la calidad de vida de la mayoría de los habitantes de Quito.

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Hemos trabajado estos cuatro años tenazmente en la construcción de una ciudad productiva, competitiva, solidaria, equitativa y gobernable en democracia; Una ciudad con fuerte identidad, instituciones sólidas, con liderazgo social de calidad y una gestión pública basada en la comunicación, con la participación, soporte e involucramiento ciudadano.

Hemos gobernado la ciudad procurando elevar la calidad de su capital humano y social, facilitando consensos, orientando visiones claras y positivas de futuro, buscando la integración de lo público y privado para impulsar un proyecto consistente de desarrollo, apostando a una Quito prominente a escala global, forjando cambios que permitan que nuestros hijos y nietos se sientan orgullosos de ser quiteños y ecuatorianos.

En la Visión del Plan Quito Siglo XXI nuestra propuesta de gobierno para el período que concluye, planteamos un patrimonio protegido y preservado para el uso equitativo de todos y todas; concebimos la recuperación del patrimonio cultural como un elemento fundamental para el fortalecimiento de nuestra identidad, la elevación de nuestra autoestima y el reforzamiento de nuestro sentido de pertenencia. El resultado de un trabajo planificado, técnico y entusiasta ha cambiado positivamente a nuestra ciudad.

Hemos restaurado el centro histórico de la ciudad porque en la magnificencia de sus iglesias y conventos, en la calidez de sus plazas y en cada recodo de sus calles coloniales, palpita intensamente un pedazo de nuestra historia patria, aquella de nuestros antepasados remotos que adoraron al sol en su cuna, la tierra del sol recto, que eso significa Quito y o de los primeros españoles que enarbolando la bandera del evangelio germinaron la raza mestiza y rebelde del grito

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libertario de Agosto que aún retumba en la Plaza Grande, en la Plaza del Teatro, en la brisa fría de cada amanecer o en la memoria dulce y heroica de Manuela Saénz, la Caballereza del Sol.

Hemos recuperado el Patrimonio cultural e histórico para refrescar la memoria de las generaciones actuales y futuras sobre nuestro pasado milenario. Sobre los aportes brindados a la conformación de la personalidad quiteña de hoy y de mañana; por las ricas culturas indígenas y por los aportes llegados de España; para que tengamos presentes que tenemos raíces fuertes que penetran en la inmensidad de los tiempos y sustentan nuestras opciones de un mejor mañana; para que reforcemos nuestra identidad mestiza, nuestro sentido de pertenencia y auto estima, fundamentos esenciales para continuar construyendo el futuro de prosperidad que nos merecemos.

Iniciamos nuestra intervención, expresando la profunda emoción por recibir este reconocimiento de la UNESCO y por haberlo hecho en la Capilla del Hombre. Asegurando que es una presea para el pueblo de Quito, de los cientos de funcionarios, funcionarias y personal técnico de los sectores público y privado de la ciudad que participaron en este proceso de reahabilitación y reordenamiento; de los miles de humildes hombres y mujeres, del comercio informal que tuvieron la decisión y el valor cívico, la fe en sus autoridades y que pacíficamente y sobre la base de acuerdos largamente negociados, ingresaron a los nuevos centros comerciales.

Cómo si todo lo anterior no fuese ya profundamente gratificante, la medalla que la UNESCO ha decidido conceder al pueblo de Quito en mi persona, perenniza la memoria

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de Bolívar, de quien el gran Juan Montalvo dijera: “En los hombres extraordinarios, esos que prevalecen sobre cien generaciones y dominan en la tierra altos como una montaña, el genio viene armado de todas las armas... Guerrero, escritor, político, estadista, orador, todo fue Bolívar, y de primera línea”.Simón Bolívar, libertador de cinco naciones, el estadista pulcro que entendió la política y el servicio público como la posibilidad de materializar los más altos sueños de la especie humana; el general que enarboló las banderas de la libertad en 49 campos de batalla, que recorrió, con el decir del poeta, “123.500 kilómetros, más que Colón y Vasco de Gama juntos. Anduvo a caballo 65000 kilómetros, vez y media la vuelta de la tierra: 10 veces más que Aníbal, 8 veces más que Julio Cesar, 3 veces más que Alejandro de Macedonia, el doble que Napoleón de Bonaparte. El Americano que sacrificó todo, su familia, sus grandes bienes materiales y hasta su misma vida, para dejarnos la herencia de dignidad e independencia que tantas veces hemos malgastado.

Deseo expresar nuestra imperecedera gratitud a la UNESCO, por este reconocimiento, que nos compromete a no desmayar en el servicio de los grandes propósitos de este organismo que sobresale entre los de las Naciones Unidas por su dedicación a las nobles causas de la educación, la ciencia y la cultura. Mucho apoyo ha brindado la UNESCO, a la propia edificación de la Capilla del Hombre, a la nominación de Quito como Patrimonio Cultural y a los esfuerzos realizados por varias administraciones edilicias para proteger y valorar el patrimonio.

Deseo también agradecer las expresiones generosas de las personas que han participado en esta ceremonia a las cuales guardo el mayor respeto y por lo mismo valoro con la dimensión que tienen sus conceptos.

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DOCTORADO HONORIS CAUSA DE LA UNIVERSIDAD DEL PACIFICO

(AÑO)

Cuando se escriba la historia del siglo que inicia, no dudo que será considerado como el siglo de las ciudades. La revolución ocasionada por las nuevas tecnologías de la

comunicación y la informática, que ha trasladado a la humanidad a una nueva forma de organización y funcionamiento fundamentados en la capacidad de generar y administrar estratégicamente el conocimiento; la globalización derivada de la ampliación de las relaciones económicas a escala planetaria; el debilitamiento del estado nacional funcional para la era industrial, son, entre otros, los factores que han fortalecido paralelamente los procesos de integración supranacional y las autonomías regionales y locales.

Se habla en la actualidad de pensar globalmente y actuar localmente. Esto porque las ciudades y sus regiones se encuentran integradas a una compleja red multidimensional de flujos de información, capitales, mercancías y personas, que integran todo el planeta. Las ciudades–región son los nódulos de infraestructuras y servicios avanzados de esta red y se constituyen en los elementos organizadores y de soporte de la economía mundial. Las ciudades que no logran articularse en este sistema de flujos globales quedan marginadas de los procesos de desarrollo.

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Para lograr el desarrollo de sus comunidades, los gobiernos locales deben enfrentan el reto de calificar sus recursos humanos, su infraestructura y los servicios, a fin de crear condiciones favorables para atraer inversiones, generar empleos, incrementar las exportaciones y asegurar niveles adecuados de calidad de vida para el conjunto de la comunidad. Las municipalidades deben trascender de su actual papel de prestadores de bienes y servicios, para convertirse en verdaderos gobiernos locales, protagonistas en el desarrollo de sus áreas de jurisdicción.

La sociedad del conocimiento tiene en las ciudades su punta de lanza. Son su punto de referencia y polo de atracción, el escenario donde se estimula el libre juego de las ideas para conseguir la innovación y creatividad, fomentar la generación, aplicación y difusión de los saberes y conocimientos, crear condiciones para la productividad y para el consumo y disponer de formas de comunicación y acceso a otros centros internacionales dinámicos, para asegurar relaciones de mutua conveniencia con el resto del mundo.

La ciudad es sobre todo un espacio regulado para el contacto, el intercambio y la comunicación. Lo esencial de la ciudad es la interacción entre las personas e instituciones, que son los portadores principales de la información. Es, además, un complejo sistema cuyos componentes interactúan y se influyen mutuamente; de modo que, cualquier variación significativa en el comportamiento de uno de ellos, genera consecuencias de distinta intensidad en los otros. Por otra parte, las ciudades son sistemas abiertos que dependen de una alimentación material y de información externa para mantener

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su estructura interna y asegurar su supervivencia. Como todo sistema abierto tiene la capacidad de seleccionar, procesar y aprovechar la información del medio evolucionando hacia sistemas más complejos.

Las ciudades exitosas son aquellas que planifican estratégicamente, son capaces de alcanzar una seria integración de los sectores público y privado y, finalmente asumir las competencias que les corresponde como gobierno local. La capacidad de lograr una acción concertada de todos los sectores de la ciudad es una de las tareas fundamentales del liderazgo local. Primero, para que el sector público nacional, provincial y local, sobre la base del principio de la subsidiaridad, trabajen juntos, cada cual en lo que mejor sabe y puede hacer en beneficio de la comunidad; Segundo para que el sector privado, especialmente empresarial, académico y social se sumen a los esfuerzos de desarrollo.

En el desarrollo local tienen un especial papel que jugar los institutos de educación superior. Debemos reconocer que la aparición de la universidad está estrechamente vinculada a la emergencia de las ciudades como centros del comercio, la industria y las finanzas; que universidad y ciudad son un binomio, que se complementa y relaciona estrechamente; que la universidad incide en la vida de las ciudades y, a su vez, éstas determinan el carácter de las instituciones educativas de nivel superior.

En la actualidad son importantes para el desarrollo de las ciudades y sus regiones de influencia los flujos de conocimientos que se vinculan al capital humano y social; la investigación básica y aplicada, la difusión de las

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modernas tecnologías de la informática, la comunicación, la biotecnología, entre otras; y, la circulación de información y el amplio intercambio de ideas; por estas razones es evidente que el desarrollo de la educación superior y, especialmente de la investigación vinculada a ésta, tienen un impacto determinante sobre el desarrollo local al incrementar el nivel de clasificación de la población, facilitar la relación con las empresas aportando con el conocimiento que necesitan y la creación de nuevas oportunidades empresariales que sustituyan a aquellas que se han vuelto obsoletas.

Son varios los campos en que la educación superior apoya al desarrollo local. Entre estos: La formación en los recursos humanos en los niveles de grado y postgrado; la inserción laboral de las personas capacitadas; la formación continua, indispensable en un mundo de cambios acelerados y profundos; la difusión de los resultados de la investigación que realizan; la transferencia de la tecnología y el apoyo a los parques científicos y tecnológicos.

Las universidades contribuyen al desarrollo local en diversas formas: Apoyando la capacidad emprendedora no solamente por sus competencias formativas sino por la creación de empresas de base tecnológica; por la contribución a la participación ciudadana, al debate de los grandes temas de interés de la comunidad y por el empleo que generan y gasto que efectúan.

Por todas estas razones es indispensable que los gobiernos locales y las universidades trabajen íntimamente vinculados en bien de la comunidad local; que las municipalidades utilicen las capacidades universitarias en el planeamiento

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estratégico y apoyen financieramente proyectos que se realizan con la cooperación de las universidades.

Las universidades por su parte deberán vincularse más estrechamente a los gobiernos locales; profundizar en el conocimiento de los temas regionales y locales que afecten a la universidad; evaluarse para establecer la capacidad institucional de responder a las demandas locales; establecer mecanismos internos que orienten a las universidades hacia el desarrollo regional y local, a la vez que crear condiciones para un diálogo con las autoridades de esos niveles para establecer condiciones de mutua colaboración que beneficien a los planes estratégicos definidos por la comunidad local.

Termino mi intervención agradeciendo a la Universidad del Pacífico por el alto honor que me han conferido al concederme el doctorado honoris causa de tan alto centro de estudios superiores, decisión que me compromete, más todavía, a continuar trabajando con fe, honestidad y sin descanso para intentar estar a la altura de la confianza del pueblo quiteño y para que la universidad y el gobierno local se integren en la realización de esfuerzos concertados para lograr alcanzar las ambiciosas metas que la comunidad se ha trazado en su planificación estratégica.

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TRAVEL MART 2008

Esta es una noche muy especial para la ciudad de Quito. Es una noche muy especial porque de muchas formas es un hito, una meta alcanzada con gran esfuerzo en

un proceso de muchos años de trabajo duro realizado por instituciones públicas y privadas que han entregado todo su amor y dedicación en beneficio de nuestra hermosa ciudad.

Es una noche muy especial también porque me es posible darles la bienvenida, como alcalde metropolitano de Quito, en este templo que constituye una joya del barroco americano, su más brillante expresión.

Este templo apenas hace diez años estuvo gravemente afectado en sus estructuras y sufrió los efectos de un devastador incendio y hoy les recibe magníficamente recuperado.

Es una noche muy especial porque su presencia constituye un respaldo y reconocimiento del enorme trabajo que el pueblo de Quito y sus autoridades hemos venido realizando para el desarrollo de la industria del turismo en la capital de los ecuatorianos.

Estamos conscientes de que el turismo es una industria clave para el futuro de Quito. Nuestra principal preocupación es la de ser una ciudad competitiva capaz de generar empleos de calidad para combatir la pobreza y el atraso.

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El turismo tiene la virtud de generar muchos empleos y de dinamizar la economía. Beneficia a los hoteles y a los bares, a los transportistas y a los artistas, a los artesanos y a los restaurantes, a los guías turísticos y a los empresarios. Todos ellos y sus familias reciben el beneficio de la riqueza que crea esta industria.

El turismo inyectó sobre los $600 millones de dólares en la economía quiteña en el año 2007, generó empleos para miles de personas, constituyéndose en una de las principales actividades económicas de la ciudad.

Vale la pena recordar esta noche por unos minutos el pasado reciente, para valorar los logros alcanzados.

Cuando asumí la Alcaldía en el Año 2000, los turistas que nos visitaban permanecían una noche en Quito para luego embarcarse hacia las islas galápagos u otro destino. Quizás una breve visita a la Mitad del Mundo. ¡Eso era todo! Nuestro hermoso centro histórico, patrimonio de la humanidad estaba tomado por ventas permanentes que ocupaban sus plazas, aceras, calles, atrios y otros espacios públicos poniendo en riesgo la fantástica arquitectura colonial y republicana. Era un lugar inseguro, con problemas de salubridad, no existían mapas turísticos ni centros de información para los visitantes, tampoco promoción internacional.

¡Cómo han cambiado las cosas! ¡Qué camino fructífero hemos recorrido!

Iniciamos con la rehabilitación del Centro Histórico. Sin uso de la fuerza, con largas negociaciones, como se hacen

(Pág. Siguiente)Inauguración Travel Mart LatinoAmericana (10 de Septiembre 2008)

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las cosas en democracia, logramos que alrededor de 10 mil vendedores se reubiquen en once centros comerciales populares que construimos para el efecto. Recuperamos el patrimonio arquitectónico, mejoramos los edificios de vivienda, construimos nuevos y convertimos el caos en un espacio urbano maravilloso del que hoy pueden disfrutar los propios quiteños y nuestros visitantes,

Nuestra inversión en la preservación del patrimonio cultural debe ser comprendida con un enfoque holístico.

Quito ha sido reconocida desde inicios del siglo XIX como Ciudad Luz en América Latina. Ha sido el hogar cálido de poetas, escritores, soñadores y revolucionarios.

Quito fue hace ya 30 años la primera ciudad en el mundo nominada por la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad.

Esta historia alimenta nuestro compromiso con la cultura y las artes. Hoy su patrimonio intangible, compuesto por tradiciones, vivencias de los barrios, fe religiosa, poesía, música, arte, teatro, danza, también ha sido recuperado.

Todo esto ha sido parte de una visión integral de nuestro desarrollo. Por esa razón hemos trabajado con tanto empeño en dotar a todos los ciudadanos con agua potable, alcantarillado, generosos espacios públicos, de vías urbanas dignas y de un mejor transporte, porque solamente si tenemos una ciudad justa, equitativa y solidaria, podremos presentarnos al mundo como un destino turístico importante.

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La ciudad ha invertido alrededor de 220 millones de dólares en la preservación del patrimonio en lo que va del siglo, y muchos millones más en proyectos de infraestructura.

Así, por ejemplo, a fines del año 2010, la capital podrá ofrecer un aeropuerto totalmente nuevo de clase mundial, capaz de recibir aviones de mayor tamaño y más capacidad de carga. El aeropuerto sin duda fortalecerá todos los sectores de la economía de Quito, pero particularmente beneficiará al turismo. Mientras que, los terrenos del actual aeropuerto se convertirán en otro gran parque y centro de convenciones para Quito

Muchos de estos proyectos han sido exitosos porque fueron administrados por corporaciones público – privadas. Como es la Corporación de Turismo.

Nuestra Corporación desarrolló el primer plan estratégico de turismo, el Plan Q, en el año 2002. Los resultados del plan han sido sorprendentes. Hoy tenemos mapas turísticos de la ciudad, hemos asistido con gran éxito a ferias turísticas internacionales, colaboramos con periodistas de todo el mundo, enviamos boletines turísticos mensuales, hemos desarrollado productos nuevos para el turismo siempre trabajando de la mano con el sector privado.

A los cinco años de aplicación del plan, dimos la bienvenida en el año 2007 en nuestro remodelado aeropuerto a 461.000 viajeros internacionales. En los seis puntos de información de la Corporación Metropolitana de Turismo de Quito, atendimos a 53.000 turistas. La página web turística de Quito recibe cerca de 1.000 visitantes cada día. Y a fines del 2007, Quito fue listada entre los ‘53 lugares para visitar en 2008’ por el prestigioso periódico The New York Times.

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El Buró de Convenciones e Incentivos de Quito también ha dado saltos cualitativos. Quito se ha ubicado como uno de los lugares preferidos como ciudad sede para congresos y convenciones. En el 2006, fuimos anfitriones de 15 eventos y recibimos a 7.000 personas. Al final de 2008, habremos sido la sede de ¡73 encuentros con 34.000 asistentes!

Hemos escalado en la categoría de la Asociación Internacional de Congresos y Convenciones para América Latina del 18vo lugar en 2002 al 12do lugar; y este año, completamos la rehabilitación del bello y antiguo hospital quiteño Eugenio Espejo, equipado con la última tecnología para funcionar como el Centro de Convenciones de Quito. El mensaje es clarísimo: ¡reúnase en la Mitad del Mundo!

Hoy, no solamente estamos enfocados en el Centro Histórico, sino en toda la ciudad y más allá de su núcleo urbano, pues el nuevo Plan Q 2012 incorpora a otros fascinantes lugares quiteños al mapa turístico.

El barrio de La Mariscal, por años el centro de operaciones de los viajeros que llegaban a la capital, ha experimentado un florecimiento en su oferta de entretenimiento. Continuaremos enfocando nuestras energías en incrementar el número de atractivos que la ciudad tiene, además de mejorar la calidad de nuestros servicios.

Empezaremos a promover los “miradores de la ciudad”, sacando el mayor provecho a la ubicación privilegiada de Quito en el corazón de la Avenida de los Volcanes. Estamos desarrollando y comenzamos la promoción de las treinta y tres parroquias en torno a la capital, cuya oferta está caracterizada por festividades e idiosincrasias propias.

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Y también están los bosques nublados y las ruinas arqueológicas en la zona de Mindo-Nambillo; las plantaciones florícolas y los textiles en la ruta hacia Otavalo, las nieves y haciendas campestres de Cotopaxi; las aguas termales y los osos de anteojos de Antisana… El nuevo Plan Q proyecta a Quito con 1.8 millones de visitantes al año hasta 2012 e ingresos de alrededor de mil millones de dólares para el Distrito Metropolitano. Para alcanzar estas ambiciosas metas futuras, trabajamos con socios de la ciudad.

En Quito, colaboramos muy de cerca con la Cámara de Turismo de Pichincha, el Ministerio de Turismo, el Fondo de Salvamento del Patrimonio Cultural, FONSAL. También incluimos como actor fundamental al sector privado: los hoteles, restaurantes y operadores de turismo que hacen que la experiencia del día a día de los visitantes que llegan a Quito sea tan especial. Ellos han asumido el reto de mejorar y expandir el turismo con un entusiasmo y profesionalismo que nos enorgullece.

Travel Mart Latin America en Quito es un ejemplo inmejorable de cómo los actores en la industria del turismo pueden trabajar en conjunto hacia una meta común.

También tenemos socios en el extranjero: En el Reino Unido, Helen y David Hamlet de Passion for Travel han llevado el mensaje de Quito con energía y compromiso. Y, por supuesto, en Estados Unidos, tenemos a William H. Coleman Incorporated, cuyo dedicado y eficiente personal es responsable no solamente de este evento, sino también de

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los exitosos “roadshows” denominados “Meet Ecuador” que hemos desarrollado en Norteamérica en los últimos dos años. Y ustedes, estimados participantes en Travel Mart Latin America 2008, y particularmente los operadores turísticos internacionales presentes. Sin ustedes, sin el interés de sus compañías en nuestro destino, no estaríamos en la posición que hemos alcanzado. Ustedes han concretado el potencial de Quito, han invertido su dinero y su tiempo en nosotros y por ello les estaremos siempre agradecidos.

Así como cualquier encuentro entre distintas culturas empieza con un apretón de manos, extendemos nuestra mano en saludo y en agradecimiento a todos los participantes de este evento tan especial en el calendario turístico de América Latina.

Me resta agradecer a todas las autoridades que han participado este año en Travel Mart Latin America, tanto en el evento de esta noche como durante todo el encuentro. Particularmente, me gustaría agradecer a los miembros y al presidente del Comité Organizador por su estupenda labor. Finalmente, me queda felicitar a todo el personal de la Corporación de Turismo de Quito, sin quienes no sería posible este fructífero encuentro esta noche.

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DÍA DE LA NIÑEZ(2008)

Nos hemos reunido una vez más para celebrar el Día de la Ñiñez y de la Adolescencia. Es ocasión propicia no ya para reiterar nuestro compromiso

y nuestros buenos propósitos, sino para evaluar de que modo el gobierno local ha logrado alcanzar los fines que se auto impuso sobre la base de los claros mandatos de la Convención de los Derechos del Niño, en el sistema de las Naciones Unidas, de la doctrina de Protección Integral a la Niñez y del mandato de la Constitución de la República, que establece que los niños son ciudadanos con derechos y deberes progresivos cuyo cumplimiento depende de un amplio pacto social de responsabilidad de las autoridades, los padres y la sociedad en su conjunto.

Sin embargo, de estos mandatos y declaraciones, la crisis económica, social y moral que vive nuestro país, fruto de la acción concertada de sectores de poder a los que todos identificamos, entre el 40 y el 50% de los niños y niñas sufre desnutrición global; el 70% de los menores de los 18 años son pobres; el 22% de niños y niñas y adolescentes trabaja, 6 de cada 10 niños y niñas del campo vive en la pobreza ; y el 18% está fuera de la escuela.

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Frente a esta lamentable situación, la Municipalidad, en la presente administración ha trabajado de una manera sostenida para mejorar en lo posible y a su alcance la situación de la niñez del Distrito Metropolitano. El Concejo, con su Comisión de la Familia, Niñez y Adolescencia ha creado un marco institucional adecuado, con el fin de que se ponga en vigencia el sistema de protección integral a la vigencia de los derechos y a la observancia del principio del servicio al interés superior de los niños niñas y adolescentes, constituyéndose en el gobierno local pionero en la formulación de políticas distritales y en destinar recursos al financiamiento de proyectos orientados específicamente a este fin.

Las ordenanzas expedidas para “Erradicar la violencia intrafamiliar y de género”, para las discapacidades, para la constitución del Sistema Metropolitano de Protección Integral a la Niñez y Adolescencia, junto con los actos administrativos para la creación del Consejo Metropolitano de Protección Integral y el Comité de Desarrollo Social, son pasos significativos en este afán de pasar de las declaraciones a la realización de hechos concretos en beneficio de este importante y vulnerable sector de nuestra sociedad.

Sistema Metropolitano de protección integral de niñas, niños y adolescentes que se define como el conjunto autorregulado de organizaciones públicas, municipales y privadas que interactúan entre sí y con la sociedad civil para garantizar la aplicación, la vigencia y el cumplimiento de los derechos de la niñez y adolescencia.

El Consejo de Protección Integral a la Niñez y Adolescencia. Permite la integración del sector público por una parte, y de la

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sociedad civil por otra y es el encargado de elaborar, proponer, controlar y evaluar las políticas de protección integral de la niñez y adolescencia en el ámbito del Distrito.

El Comité Social, coordina a todas las instancias municipales que tienen a su cargo funciones orientadas a combatir y erradicar paulatinamente la miseria, la pobreza, el paternalismo y el asistencialismo, haciendo del desarrollo metropolitano el medio para proporcionar a los ciudadanos y ciudadanas quiteñas oportunidades de educación, salud, trabajo, seguridad e igualdad ante la ley, con especial énfasis en la protección integral a la familia y de manera preferente a la niñez y adolescencia del Distrito.

El Patronato San José, con su nueva estructura jurídica y administrativa trabaja para apoyar las políticas sociales y orienta también su accionar a la protección integral de la familia, niños, niñas y adolescentes jóvenes, mujeres, personas con discapacidad y de la tercera edad, con especial prioridad en aquellos grupos de situación de vulnerabilidad, riesgo y exclusión social.

El Patronato lleva adelante proyectos importantes como los centros TERNURA de Prevención y Atención de casos de maltrato infantil, que complementan los servicios del Centro de Apoyo Integral “ Las Tres Manuelas” y la Casa de la Niñez, orientada a dar atención a niños y niñas, callejizados o en proceso de callejización.

Si bien los esfuerzos realizados son insuficientes para enfrentar con fuerza los problemas sociales que afectan a las familias quiteñas, podemos asegurar, que en la actualidad

(Pág. siguiente)Intervención del Alcalde Día de la niñez (18 de septiembre 2008)

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muchos más niños y niñas reciben en sus hogares agua de calidad, que sus domicilios están integrados a la red de alcantarillado, que la política municipal de declara prioritaria la educación inicial ha convertido a Quito en pionera en este campo, que el programa de escuelas saludables que venimos desarrollando con las instituciones fiscales ha mejorado la calidad de la educación de los sectores más pobres, que las boticas populares ponen al alcance de las familias medicinas de calidad y a precio aceptable; que cada vez menos ni{os duermen en las calles y se drogan, que los niños y niñas están participando activamente a través de los Cabildos en la definición de las políticas que les afectan y que estamos trabajando fieles a nuestra propuesta del Plan Quito Siglo XXI, en que propusimos un Distrito Metropolitano convertido en un espacio de generación de ciudadanía, equilibrio social y justicia.

En esta Sesión Solemne hemos firmado un compromiso de trabajo conjunto con importantes instituciones del sector público y privado: con el Ministerio de Bienestar Social, cuya función principal es planificar, dirigir y supervisar la ejecución de programas y proyectos orientados a las condiciones de marginalidad social, moral y económica de niñas, niñas y adolescentes; con la Policía Nacional que tiene entre otras de sus tareas la de garantizar los derechos de las personas y la protección de sus bienes en especial las del menor, la mujer y la familia; y con la Fundación PAN que viene realizando una importante labor para mejorar la calidad de vida de los niños, niñas y adolescentes que trabajan en las calles, desde un compromiso con los principios de solidaridad, justicia, paz y equidad; deseo expresar mi confianza de que con esta

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forma de trabajo conjunto sin la búsqueda de protagonismo o lucimientos personales o institucionales, el próximo año podremos evaluarnos con la satisfacción de que nuestra ciudad habrá ganado en inclusión social, en solidaridad y en la siembra de un futuro de paz y armonía entre todos los habitantes del Distrito Metropolitano.

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15º ANIVERSARIO DE ESQUEL

La ciudad de Quito se une al regocijo de ESQUEL, con ocasión del cumplimiento de su décimo quinto aniversario.

ESQUEL, se ha convertido en estos últimos años en un elemento fundamental en la lucha, siempre difícil, muchas veces infructuosa, por alcanzar el anhelado desarrollo económico y social del pueblo ecuatoriano.

ESQUEL nació en una época de cambios dramáticos: La revolución técnico científica, el fin de la bipolaridad geoestratégica y de la guerra fría, con la caída de uno de sus símbolos, el muro de Berlín y la implosión de uno de los competidores La Unión Soviética.

Epoca calificada como de éxtasis colectivo y de júbilo insensato por los esposos Toffler, frente al espectáculo de un triunfalismo delirante y poco reflexivo que aclamaba el fin de las utopías, la muerte de las ideologías; la aceptación universal de los valores y estilo de vida de los triunfadores, el inicio de un mundo unipolar sin contradicciones.

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ESQUEL, nació, por lo mismo, como uno de los esfuerzos de adaptación a los cambios, de una sociedad que no puede renunciar a sus propios valores, a la posibilidad de construir, en las nuevas circunstancias históricas los valores permanentes de la solidaridad, el compromiso social, la creación de oportunidades que hagan de la competencia un elemento de progreso y no de opresión.

ESQUEL nació para ser útil en una época en que su presencia se hacía necesaria y se hace indispensable. Nació para acompañar los denodados esfuerzos de los sectores más vulnerables de la sociedad, enfrentados a una revolución que desde la convergencia de las tecnologías de la microelectrónica, informática, telecomunicaciones, optoelectrónica y la ingeniería genética, provoca cambios en todas las expresiones de la vida y de la sociedad. Presenta graves amenazas, a la vez que abre un sin fin de oportunidades que hay que saber y poder aprovechar.

En la corta y fructífera vida de ESQUEL, se han producido también grandes cambios en la forma de pensar y gestionar la política. El poder efectivo del Estado – nación sufre una creciente erosión debido a un doble movimiento: la supranacionalización para proveer marcos regulatorios para la globalización y la descentralización para responder las demandas de autonomía de las ciudades y regiones.

Otros actores reclaman el papel de protagonismo positivo que les corresponde en la nueva realidad. Destacan entre estos, los gobiernos locales y la sociedad civil, que representan una nueva actitud de la sociedad, una toma de conciencia de sus capacidades.

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Los pueblos han entendido, por fin, que soluciones a sus problemas no llegaron y no llegarán exclusivamente desde la sabia e iluminada inspiración de los presidentes, congresistas, prefectos y alcaldes, y exigen, por lo mismo, participar, ser consultados, que sus autoridades les rindan cuentas y poder ejercer la auditoría de quienes han recibido en las urnas o por designación sus posiciones de servicio.

Es desde la comprensión de esta realidad que la administración municipal y ESQUEL, han aprendido a caminar juntos; no podrían hacerlo sin compartir valores, principios y actitudes frente a la política y a la sociedad.

Compartimos con Ortega y Gasset que el Hombre es él y su circunstancia. Lo mismo sucede con las instituciones. Eso pasa con ESQUEL. Ha nacido en una etapa de la vida del mundo y de nuestro país que exige respuestas urgentes frente a fenómenos como el de la globalización que configura una realidad en la cual crecen las distancias entre los que todo tienen y los que no tienen nada. Paradójicamente , la revolución tecnológica que disminuye las distancias físicas y psicológicas, entre los pueblos y las culturas, ha permitido la creación de un sistema de relaciones económicas que agrandan la brecha social.

El capital y al mercado, convertidos en los “totems” de los nuevos tiempos, generan incertidumbre, temor, desesperanza. El miedo al futuro, al compromiso, a construir; una dificultad de adaptación, una sensación de inseguridad. La pérdida de los valores del amor a la patria y el civismo, el respeto a las instituciones; todo lo que ha dado sentido a nuestras vidas parecería perder significado.

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Para enfrentar estos desafíos, con el apoyo de ESQUEL, Quito ha planteado constituirse en un espacio de convivencia fundamentada en valores, como el respeto a la dignidad humana, el empleo de la razón como medio para dirimir los conflictos y de la honestidad como antídoto contra la desconfianza.

Nuestra ciudad reconoce que la dignidad de las personas se expresa comunitariamente, en la familia, el barrio, la escuela y el trabajo. Defiende por lo mismo el valor inalienable de la persona humana, el de cada persona y de todas las personas. De hombres y mujeres que sienten, quieren, viven y conviven y que buscan darle un significado y dirección a su existencia.

Una ciudad que entiende que, como comunidad solidaria, debe estar al servicio de todas las personas, en especial de los más desprotegidos y desamparados. que se reconoce diversa y que fundamenta su convivencia en principios básicos como la cultura de paz, la inclusión, la pluralidad y la tolerancia hacia las diversas formas de pensar, querer y sentir.

Una ciudad que cree que es posible una auténtica gobernabilidad democrática, fundamentada en el respeto a la palabra; al diálogo constructor y fructífero, al respeto de las diferencias y capaz de encontrar soluciones negociadas a todas las contradicciones y conflictos.

Una ciudad que quiere ser el espacio de la ciudadanía activa, con personas, que hacen valer sus derechos y cumplen sus obligaciones, organizaciones cívicas que participan intensamente en la vida pública e instituciones estables, respetables y confiables.

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Ahora es fácil de observar porque trabajamos juntos con ESQUEL en la planificación estratégica, en la modernización de la ciudad y su región, en la puesta al día de las estructuras administrativas, en la lucha contra la corrupción. Y porque a nombre de esta ciudad y este país que le agradecen por su sin par labor, el concejo Municipal, en acto de estricta justicia ha decidido entregarle la presente condecoración.

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PRIMER FORO SOCIAL DE LAS AMERICAS

(2008)

Para la ciudad de Quito constituye un privilegio el haber sido seleccionada como sede para el desarrollo de las deliberaciones del Primer Foro Social de las Américas

y del Primer Foro de Autoridades Locales de las Américas por la Inclusión Local.

Esperamos ser dignos anfitriones de todos los importantes eventos programados y estamos seguros que el pueblo quiteño recibirá con su cariño y tradicional cortesía a los hermanos de América y el mundo que nos visitan.

Nos parece especialmente importante, en el marco de esta agenda trascendente, la posibilidad que se nos concede a las autoridades locales de las Américas para compartir nuestras experiencias, inquietudes y logros, en el afán común de construir ciudades y áreas rurales solidarias, equitativas e incluyentes.

Al término del siglo XX e inicios del XXI, la humanidad enfrenta oportunidades y desafíos que involucran a su propia supervivencia. Esto coloca a todos los pueblos del mundo en la disyuntiva de llegar a definiciones, alcanzar acuerdos y buscar caminos seguros para superar las causas que provocan

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la situación de alto riesgo, creada por los cambios dramáticos experimentados en las últimas décadas.

Estos cambios vertiginosos, fruto de una revolución sostenida de la ciencia y tecnología, producen una sensación de vértigo, una dificultad de adaptación, una sensación de angustia e inseguridad.

Las nuevas tecnologías de la informática y las comunicaciones han disminuido drásticamente las distancias físicas y psicológicas, entre los pueblos y culturas del mundo; sin embargo, paradógicamente, lejos de significar un avance de la humanidad hacia metas de equidad e inclusión, configuran una cultura en la que crecen las distancias entre los que todo tienen y los que no tienen nada o casi nada.

En la sociedad mundial globalizada, en el modelo neoliberal, que todo lo orienta por la competencia y por el mercado; se reedita, con mayor crudeza, la lucha por la supervivencia en la que compiten con insuperables ventajas los ya fuertes y poderosos.

El culto al capital y al mercado genera incertidumbre, temor, desesperanza, miedo al futuro, al compromiso y a construir. Mercado y poder vienen a ser los signos del éxito, afectando especialmente a los jóvenes, para quienes parecería quedar dos alternativas: el sometimiento al mercado y al poder, o la fuga y evasión mediante el uso de las drogas.

Es en estas circunstancias, que Quito, una ciudad marcada por la diversidad, y enfrentada a graves problemas de pobreza, procura fundamentar la convivencia de sus ciudadanos en principios fundamentales como la cultura de paz, la inclusión,

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la pluralidad y la tolerancia hacia las diversas formas de pensar, querer y sentir.

En el Plan Equinoccio 21, que constituye nuestra carta de navegación, se plantea la construcción de un espacio de convivencia, fundamentado en valores compartidos como el respeto a la dignidad humana, el empleo de la razón como medio para dirimir los conflictos y de la honestidad como antídoto contra la desconfianza.

Construir una ciudad en la cual las políticas publicas se definan y promulguen con la participación consciente y crítica de todos y todas. una comunidad solidaria, al servicio de todas las personas, en especial de los más desprotegidos y desamparados.

El pueblo de Quito y su gobierno, hemos trabajado para revalorizar y darle sentido a la democracia, buscando seria y persistentemente convertirnos en una ciudad de la palabra, de la credibilidad y de la confianza. Un espacio humano abierto al diálogo constructor y fructífero, respetuoso de las diferencias y tolerante que nos permita encontrar soluciones negociadas a nuestras naturales contradicciones y conflictos.

Si la autoridad y la comunidad privilegiamos la discusión, el debate, el argumento, la crítica constructiva, podremos construir una cultura de paz.

Queremos, y lo estamos logrando, convertir a nuestra ciudad en el espacio de la ciudadanía activa, con personas, que hagan valer sus derechos y cumplan sus obligaciones; con organizaciones cívicas que participen intensamente en la vida pública, exigiendo la rendición de cuentas de sus autoridades

Intervención del Alcalde en el Primer Foro Social de las Americas(23 de junio 2008)

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y ejerciendo la auditoría social para corregir los males del quemeimportismo, la irresponsabilidad, la indiferencia y la corrupción.

Trabajamos estimulados por la convicción de que podremos construir una ciudad equitativa y solidaria, en la que los ciudadanos tengan educación de calidad, atención adecuada de salud, vivienda digna, acceso a la cultura, deportes y recreación, suficientes espacios públicos y acceso a los servicios básicos, con preferencia a los sectores vulnerables, mediante acciones que tengan enfoque de género y aseguren participación y protagonismo a las mujeres.

Esta es la ciudad, realidad y proyecto, que recibe con regocijo al Foro Social de las Américas y que se honra en ser la anfitriona del Primer Foro de Autoridades Locales de las Américas por la Inclusión Social, extraordinarios eventos para cuyo completo éxito hacemos nuestros mejores votos y comprometemos nuestro decidido apoyo.

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DEMOCRACIA Y EQUIDAD.Desafíos para un Ecuador solidario.

Inicio mi intervención felicitando a la Fundación Frederich Erbert y al ILDIS por esta iniciativa que constituye la forma más adecuada para celebrar

sus ochenta años de vida institucional, dedicados con tanta honestidad y tenacidad a fortalecer la democracia, promover acuerdos políticos y fomentar un entendimiento multilateral sobre los problemas globales del desarrollo.

Saludo también la idea de crear un espacio de reflexión sobre dos temas tan íntimamente vinculados como son la democracia y la equidad, para tratarlos en las actuales circunstancias de un país que sufre de una grave crisis institucional que deforma la convivencia democrática a la vez que en una nación agobiada por la pobreza y que distribuye, de una manera injusta e inequitativa la riqueza.

En el marco de este importante evento político académico deseo que se me permita presentar unas pocas reflexiones, que no dudo serán parte de los análisis que ocuparan la atención de los participantes.

La especie humana experimenta, a inicios de siglo, el nacimiento de una nueva sociedad, marcada por una revolución tecnológica continua. Theilard de Chardin

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nos decía que : “Todo nacimiento corresponde a una discontinuidad o salto de naturaleza y amplitud variable... En historia humana- anotaba- vemos que nuevos Estados o nuevas culturas suceden a una revolución social, a una invasión o a una invención...”

Esta reflexión es aplicable a la realidad actual. La revolución tecnológica penetra todos los procesos de nuestra existencia individual y colectiva. Nos encontramos insertos en tal dinámica de cambios que nada de lo conocido con anterioridad parece servirnos. Estos cambios vertiginosos, producen una sensación de vértigo, una dificultad de adaptación, una sensación de angustia e inseguridad.

Los cambios generan a la vez resistencia equivalentes a su profundidad, que es necesario afrontar, aceptando la advertencia de Paúl Kennedy cuando nos dice que: “Un fracaso a la hora de repensar, formarse y equiparse para el futuro, producirá otra cosecha de perdedores económicos de la historia” …“Una vez más la historia está conformando sus listas de ganadores y perdedores.”

En el escenario mundial, la revolución de las tecnologías ha provocado una nueva configuración objetiva del espacio mundial suplantando la parcelación de los tres mundos anteriores por otro unificado en torno al mercado mundial capitalista en que conviven sociedades del conocimiento, industriales y preindustriales.

En el ámbito del Estado – nación se observa una creciente erosión provocada por movimientos de supranacionalización para proveer nuevos marcos para la

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globalización, paralelamente con la emergencia del espacio subnacional que conduce a una transición del Estado nación al Estado de regiones. Las economías regionales dinámicas resultan más funcionales a los nuevos circuitos de la economía mundial. La emergencia de ciudades y regiones de preeminencia global exige la urgente re - territorialización del desarrollo.

Paradójicamente, cuando la humanidad cuenta con todos los medios técnicos para vencer la pobreza, la ignorancia y la enfermedad, el modelo neoliberal aplicado en beneficio de los sectores poderosos, ha producido un agravamiento de la situación de los pobres del mundo.

Hemos de compartir las preocupaciones del premio Nóbel de la Economía Joseph Stiglitz cuando nos alerta sobre los resultados de la aplicación de ese modelo: “…en el Banco Mundial -escribe- comprobé de primera mano el efecto devastador que la globalización puede tener sobre los países en desarrollo y especialmente sobre los pobres de esos países.”

Stiglitz pone énfasis en los resultados negativos para los países pobres cuando son obligados a eliminar barreras comerciales, mientras los países centrales las mantienen, privándose de ingresos vitales que los obtenían vía exportaciones agrícolas.

Del mismo modo nos alerta sobre quienes conducen estos procesos : “Tenemos un sistema que cabría denominar

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gobierno global sin Estado global, en el cual un puñado de instituciones – el Banco Mundial, el FMI, la OMC y unos pocos participantes – los ministros de Finanzas, Economía y Comercio - , estrechamente vinculados a algunos intereses financieros y comerciales. Controlan el escenario…”

En un modelo que todo lo orienta por la competencia y por el mercado; se reedita, con mayor crudeza, la lucha por la supervivencia en la que compiten con insuperables ventajas los ya fuertes y poderosos. Mercado y poder vienen a ser los signos del éxito, afectando especialmente a los jóvenes, para quienes parecería quedar dos alternativas: el sometimiento al mercado y al poder, o la fuga y evasión mediante el uso de las drogas.

Para enfrentar esta situación es indispensable insistir en la búsqueda de un desarrollo sustentable para la humanidad. Debemos insistir en la defensa de un proyecto histórico para nuestra especie. Kant aseguraba que el punto final de la historia será la realización de la libertad humana; Hegel, que la historia universal constituye un proceso de elevación gradual del hombre a la plena racionalidad; Makensie que la historia de la humanidad es un continuo avance de una plataforma inferior a una superior de inteligencia y bienestar y el Papa Juan Pablo, defendía la existencia de un orden moral del universo que conduce a la plenitud de la dignidad humana.

Libertad, racionalidad, conocimiento y dignidad son los pilares sobre los que se debe edificar un nuevo proyecto para la especie humana y deben constituir las guías fundamentales

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para el desarrollo de los pueblos. El desarrollo debe ser entendido como un proceso de crecimiento y cambio estructural en la economía, la sociedad y la política

Tenemos pues que enfrentar los nuevos tiempos con decisión, entender al mundo globalizado para insertarnos conscientemente en él. Coincido con Oskar Lafontaine en que: “La globalización no es ninguna desgracia. La globalización ofrece a todos los países más oportunidades que riesgos. Y convoco con él a no tenerle: “ningún miedo a la globalización”… La globalización puede ser rediseñada, y cuando lo sea, cuando sea manejada adecuadamente, equitativamente, cuando todos los países tengan voz en las políticas que los afectan, es posible que ello contribuya a crear una nueva economía global en la cual el crecimiento resulte no sólo más sostenible sino que sus frutos se compartan de una manera más justa… Necesitamos buena educación, buenas escuelas, buenas universidades, buenas instituciones de investigación y una buena infraestructura en carreteras, ferrocarriles y autopistas de la información; mejorar la productividad energética, una buena tecnología medioambiental…”

Stiglitz, coincide con estas ideas cuando afirma: “Creo que la globalización- la supresión de barreras al comercio y la mayor integración de las economías nacionales- puede ser una fuerza benéfica y su potencial es el enriquecimiento de todos, particularmente los pobres; pero también creo que para que esto suceda es necesario replantearse profundamente el modo en que la globalización ha sido gestionada.”

Con la guía de estas ideas, Quito, una ciudad marcada por la diversidad, y enfrentada a graves problemas de pobreza,

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procura fundamentar la convivencia de sus ciudadanos en principios fundamentales como la cultura de paz, la inclusión, la pluralidad y la tolerancia.

En el Plan Equinoccio 21, que constituye nuestra carta de navegación, se plantea la construcción de la ciudad como un espacio de convivencia, fundamentado en valores como el respeto a la dignidad humana, el empleo de la razón como medio para dirimir los conflictos y de la honestidad como antídoto contra la desconfianza.

Trabajamos, enfrentando grandes limitaciones, en la construcción de una ciudad equitativa y solidaria, en la que los ciudadanos tengan educación de calidad, atención adecuada de salud, vivienda digna, acceso a la cultura, deportes y recreación, suficientes espacios públicos y excelentes servicios básicos, asegurando un trato preferente a los sectores vulnerables y garantizando la participación de las mujeres en todos los programas. Creemos estar contribuyendo así a la construcción de un Ecuador solidario.

Con estas ideas, que no tienen otra originalidad que la de su aplicación leal y consistente en el gobierno local, declaro inaugurado este Foro Internacional y hago votos porque la fundación Friedrich Ebert, continúe en su esfuerzo denodado de apoyo a la lucha de los hombres y mujeres del mundo por construir relaciones de justicia social, libertad y dignidad entre todos los seres humanos.

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FIRMA DEL DECRETO QUE CEDE A LA MUNICIPALIDAD DE QUITO LA

COMPETENCIA PARA CONSTRUIR Y OPERAR EL NUEVO AEROPUERTO

(OCTUBRE 2000)

Hace dos meses trece dias, el diez de agosto, asumi las funciones de alcalde con las que me honro el pueblo en las urnas. El discurso que entonces pronuncié

contuvo una breve exposición sobre la situación del Distrito Metropolitano de Quito y su municipalidad, a lo que me referí, en los términos mesurados y prudentes con que suelo tratar temas de esta índole.

Recordé que los problemas de la ciudad se habían acumulado especialmente en virtud especialmente de un crecimiento desmesurado y desordenado de la población, provocado por una migración acelerada desde el campo y otras ciudades; que la presencia de desastres naturales fruto de la actividad volcánica y de inclementes estaciones invernales que afectaron gravemente a la infraestructura urbana; la crisis economica del país había disminuido de manera dramática los ingresos de los quiteños; el desempleo y subempleo alcanzaban cifras alarmantes; que los pobres no tenian acceso a servicios fundamentales como el de salud; la educación, especialmente fiscal, no lograba niveles de calidad que pudiesen considerarse aceptables; la delincuencia tenía sitiada a la ciudad; la contaminación del aire y las aguas

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alcanzaba niveles insoportables, situaciones todas estas que debian obligar a un trabajo intenso y mancomundado de las distintas instituciones y de los diversos órganos del sector público.

La municipalidad, por su parte, enfrentaba graves problemas. Se encontraba sobre endeudada, con sus empresas en crisis, sin los recursos indispensables para enfrentar proyectos urgentes, y peor para atender los requerimientos siempre crecientes de una población que, cansada de esperar la atención del gobierno nacional, exige hoy del alcalde la atencion de servicios como los de educación, salud, bienestar, seguridad, además de aquellos que fueron prestados con anterioridad.

Enfrentados a esta realidad, y luego de anunciados los resultados de las elecciones, nos hemos reunido en más de una ocasión con el señor Presidente Constitucional de la República para informarle larga y minuciosamente sobre los principales problemas del distrito. Por disposición suya se desarrollaron, además, múltiples sesiones de trabajo con diversos Ministros de Estado en el afán de encontrar soluciones a los problemas señalados y para realizar las coordinaciones necesarias a fin de hacer viable la aplicación del plan “Quito Siglo XXI”, presentado en la campaña electoral y notarizado como propuesta de gobierno local, por el partido Izquierda Democratica.

Debo reconocer, aquí, hoy, públicamente la actitud abierta y comprensiva del Presidente de la Republica, sus ministros y principales colaboradores, frente a nuestros planteamientos. Gracias a ella fue posible que se arreglen de una manera

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rápida y mutuamente satisfactoria los problemas con el banco del estado; que el Ministerio de Finanzas entregue recursos que adeudaba a la municipalidad y al Fondo de Salvamento; que se haga constar en el Presupuesto General del Estado la asignacion para la reconstruccion de la Via Interoceanica, la repavimentación de la red vial y la estabilización de los taludes que tantas veces han puesto en riesgo a las personas, enlutado hogares y obstruido la red vial; también se lograron acuerdos con los ministerios de Bienestar Social, de Salud, de Educacion, de Vivienda y de Medio Ambiente para la realización de proyectos conjuntos y acciones coordinadas en beneficio especialmente de los sectores más pobres de la ciudad; de la misma forma, el instituto Nacional del Niño y la Familia y el Patronato San José trabajan juntos y en armónica relacion en el logro de sus objetivos comunes.

Es muy importante para el país y para la capital de los ecuatorianos que el gobierno central trabaje de manera coordinada con los gobiernos de las provincias y de las ciudades. Es indispensable que los ecuatorianos seamos capaces de un esfuerzo de sensatez para entender con claridad que una cultura de confrontación y prácticas beligerantes entre los diversos sectores sociales y políticos solo han conducido al estancamiento del desarrollo nacional y a que nos ubiquemos en posiciones de desaliento en las escalas comparativas internacionales de logros y fracasos; es de urgencia vital para nuestros mejores intereses que podamos definir el modelo de estado que ha de reemplazar al actual. Centralista, ineficiente, burocratizado y corrupto; pero es también de supervivencia que podamos discutir estos temas sin el apasionamiento al que conduce la política contingente,

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los afanes de lucimiento personal o la irresponsabilidad histórica de colocar los intereses particulares de personas, grupos o instituciones por encima del interes nacional.

En el nuevo modelo de estado que los ecuatorianos debemos diseñar, con prudencia e inteligencia, se deben establecer con claridad las competencias de los distintos sectores: que haga el sector público lo que debe hacer, lo que le corresponde en la rectoria de las relaciones sociales y económicas; que la empresa mixta o la privada realicen lo que mejor saben y pueden hacer en el marco de las responsabilidades sociales de las que no pueden ser exoneradas; que haga el gobierno nacional lo que le es intrínseco en el marco de las políticas generales y de la conducción de sistemas que tienen alcance en la totalidad del país; que sea capaz de reconocer sus limitaciones y la incapacidad de satisfacer desde la óptica central los requerimientos vitales de poblaciones diversas y con problemas específicos; que una reordenada institución provincial, realice individualmente o en amplias alianzas sus propias tareas con los recursos y competencias que constitucional y legalmente les corresponde y que nos dejen hacer a los gobiernos locales aquello que los ciudadanos demandan de sus municipalidades por ser los organismos públicos más cercanos, los inmediatos con referencia a la constatación de sus necesidades; por ser los alcaldes las autoridades que enfrentan diariamente el escrutinio de la sociedad y que no pueden más seguir siendo inculpados por ineficiencias e incapacidades que usualmente se generan desde las decisiones o indecisiones de las autoridades del gobierno central.

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Con la comprension objetiva de estas realidades es que diversos sectores de la sociedad quiteña se reunieron con las autoridades provincial y local para decidir la creación del Comité Civico, llamado a establecer un espacio de interacción entre el sector público y las instituciones ciudadanas para enfrentar, desde una óptica de cooperación y participación, los grandes retos que implica el desarrollo de pichincha y su capital, con la voluntad ferrea de proyectarles en terminos de un progreso compartido con el resto del país, hacia nuevas etapas de superación y mejoramiento.

El Comite Civico, luego de un análisis pormenorizado de la situacion, consideró de prioridad y urgencia enfrentar de manera inmediata y con el carácter de emergente la construccion del Nuevo Aeropuerto para Quito, la creación de la zona franca, el parque tecnológico y otros proyectos a ella vinculados. De esa manera, con la presencia de los sectores de la producción y de los prefectos y alcaldes de las capitales de las provincias de la región, hicimos pública la decisión de, conforme a las regulaciones de la ley, solicitar al Presidente de la Republica se delegue en la Municipaldad de Quito la responsabilidad y los recursos para llevar adelante este proyecto que, siendo una antigua y vital aspiración de los quiteños, había demorado mas de veinte años en un proceso tortuoso y desesperante que creó una sensación de frustración e incapacidad, no solamente en la ciudad sino en el país entero. Posteriormente, presentó igual solicitud la municipalidad guayaquileña y en la celebración de las fiestas octubrinas obtuvo la expedicion de un decreto similar al que se firmara en pocos instantes para la creación del Aeropuerto Internacional para la region del Quito Metropolitano.

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La responsabilidad que asumimos los quiteños y pichinchanos en esta solemne ocasión constituye un enorme reto y un desafio que tenemos que enfrentar sin otra alternativa que la del éxito; el aeropuerto y la zona franca constituyen herramientas estratégicas indispensables para el desarrollo sustentable de la capital y la region. Para Quito significa superar un gran obstaculo para su desarrollo urbano y librarse de una amenaza permanente para su seguridad; le permitirá, ademas, una adecuada comunicación entre los sectores occidental y oriental del norte de la ciudad, mejorar la fluidez del transito y las condiciones medioambientales, la posibilidad de construir áreas verdes y un gran centro de convenciones, una oferta de espacio urbanizable en un sector con infraestructura suficiente, la creación de decenas de miles de empleos, el mejoramiento de las exportaciones, la dinamización del turismo, el crecimiento de sus actividades comerciales y el logro en fin de una mejor calidad de vida para los ecuatorianos de todos los rincones patrios que han hecho de esta, su ciudad.

Quito tiene en este proyecto una oportunidad inigualable para salir de la crisis económica grave que la afecta, desea que este proyecto sea además de beneficio para el país, saluda el proyecto que llevara adelante la municipalidad de Guayaquil y espera poder coordinar fluidamente con ella para que el país gane con la construcción de estas importantes infraestructuras aeroportuarias; no queremos constituir a Quito en una isla de prosperidad en el mar de miseria de un país empobrecido y atrasado; creemos en la necesidad de lograr formas que permitan el desarrollo armónico y equilibrado de todas las regiones, provincias y ciudades; estamos abiertos a una cooperacion sin condiciones para que esta aspiración pueda hacerse realidad.

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Lo dije en mi discurso de posesión y ahora lo repito: Quito no pide privilegios, nunca lo ha hecho, pide un trato justo y que se le permita la posibilidad de un desarrollo autogestionado, por cierto con la colaboración de los gobiernos central y provincial y en fecunda coordinación con las demás municipalidades del país. Creemos firmemente que el Ecuador en su conjunto y nuestra provinicia y ciudad deben apostarle en serio al reto de la competitividad, de la productividad y de la calidad y esto no lo vamos a lograr con estériles enfrentamientos y rivalidades internas; por el contrario, es importante que demos al mundo una imagen de madurez, que seamos capaces de definir por fin un proyecto de país, que se exprese en un plan nacional en el que los intereses de conjunto constituyan una síntesis de los intereses parciales, que siendo como son muy importantes, no podrán ser satisfechos adecuadamente si no es desde el esfuerzo de la nación en su conjunto.

Señor Presidente: en esta que es la casa del pueblo y en la plaza mayor de nuestra ciudad, espectantes, esperanzados, se han dado cita los vecinos de Quito para reclamar a sus líderes politicos, a sus mandatarios y a sus servidores, un trabajo mancomunado, un ánimo de cooperación y un espíritu solidario. Ese pueblo, esos hombres y mujeres, esos jóvenes que quieren tener futuro, nos piden con sus voces y silencios, que comencemos por fin a escribir con páginas de trabajo honesto y transparente, un aporte a la reconstrucción de nuestra patria. Señor presidente, está solamente en nuestras voluntades no defraudar una vez más estas ultimas señales de confianza.

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LA PUNTUALIDAD

La búsqueda del tiempo perdido es una búsqueda inútil, pensar que es posible puede considerarse un espacio para la nostalgia o para el arrepentimiento. El tiempo

vital- tan corto como impredecible- es el recurso más valioso por escaso, incierto e irrecuperable. Cuando nace un ser humano inicia un proyecto de vida marcado por múltiples factores, algunos de ellos determinantes, entre los cuales el tiempo influye como ninguno en la naturaleza dramática y muchas veces trágica de la vida.

Con el tiempo no hay reposición posible. El tiempo perdido está perdido, es irrecuperable. La vida nos enseña que hay tiempo para cada cosa: para estudiar, para trabajar, para recrearse, para descansar, para reflexionar, para la actividad física, para el cuidado espiritual, para relacionarse; en fin, para cada una de las actividades importantes del quehacer humano. Saber distribuir con inteligencia el tiempo que disponemos con los énfasis necesarios, las prioridades indispensables, de acuerdo a las circunstancias, conforme a la naturaleza de cada profesión y otros criterios, es un deber que tenemos frente a nosotros mismos, nuestra familia y la sociedad. De ahí se deriva el concepto y la importancia de la puntualidad.

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Generalmente somos muy cuidadosos en la administración de otros recursos, especialmente los financieros. Anotamos con detalle los ingresos y egresos, estamos pendientes de nuestras tarjetas de crédito, nos angustiamos cuando estos recursos escasean, pero nos olvidamos que el dinero puede recuperarse, que una relación humana pueda rehacerse, que los bienes materiales perdidos pueden reconstruirse; mientras que para lo irrecuperable, nuestro tiempo, no hay registro. Debemos cambiar nuestra forma de pensar y manejar con igual cuidado que la chequera nuestra agenda. No deberíamos poder vivir sin ella como no es justo que ésta se encuentre sometida a voluntades ajenas, excepto, por supuesto, en lo que se refiere a las obligaciones laborales o de otra índole que hayamos contraído.

En la relación social, la puntualidad es una demostración de respeto y honestidad. Respeto al tiempo de los demás, honestidad en no tomarse el tiempo ajeno que, como dijimos, es un recurso más valioso que el dinero u otro bien material. Hay que destacar, que la falta de puntualidad como infracción a las reglas de la convivencia social es más grave conforme a la posición de la persona que la comete o a la importancia de la tarea que se retrasa. Cuando un presidente, ministro o autoridad es impuntual no solamente que irrespeta a los demás, generalmente a sus electores, al pueblo que en uso de su soberanía le concedió el mandato, sino que constituye un mal ejemplo que debilita un valor fundamental para la buena marcha de las instituciones, como es la puntualidad. En los regímenes monárquicos constituía privilegio de los reyes y, casi una obligación hacerse esperar; en la democracia es grosero y de mal gusto que los mandatarios adopten actitudes similares.

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Dos puntos finales: El tema de la puntualidad es un asunto relativo a nuestra libertad. Nosotros deberíamos poder escoger, excepto casos de obligación, a qué sí y a qué no asistir; y por otra parte, sobre la importancia de los factores mensurables se deberían situar los de calidad. Fuimos puntuales a clases a las que fue pérdida de tiempo ir. Llegamos apurados a simposios, debates, mesas redondas o conferencias que defraudaron nuestra expectativa. Lo ideal: ser puntuales en eventos a los que haya valido la pena asistir.

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INAUGURACIÓN DE LA XV BIENAL DE ARQUITECTURA DE QUITO

(2006)

Es grato para el Alcalde de Quito, ciudad anfitriona de este sobresaliente evento, expresar un saludo de afectuosa bienvenida a todos los hermanos del país y

del mundo que se han dado cita para participar en la XV Bienal de Arquitectura organizada por el Colegio de Arquitectos del Ecuador, núcleo de Pichincha.

Estamos seguros que los objetivos que han convocado a tan distinguidos participantes se lograrán a plenitud, gracias a su capacidad y profesionalismo así como por la dedicación de los organizadores que no han escatimado esfuerzos para que esta edición sea tan o más brillante que aquellas que desde hace 28 años, con afán sostenido y voluntad irrevocable se vienen realizando.

La Bienal de Arquitectura constituye un evento sustantivo de la agenda cultural y académica de Quito, por esta razón la ciudad entera apoya, agradece y estimula esta iniciativa que tiene tantos matices positivos para la vida de la ciudad, del país y de nuestra Región.

Este evento cobra especial importancia a inicios de este siglo, cuando enfrentamos cambios dramáticos fruto de una revolución científica, que nos coloca en un mundo interconectado, funcionando en redes, en tiempo real y nos presenta desafíos y oportunidades nunca antes experimentados, especialmente en el ámbito local.

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El nuevo orden económico, basa do en políticas de liberalización y desregulación ha implicado necesariamente una revisión de los conceptos clásicos del Estado nacional, con la emergencia de lo local en relación con lo regional y global, así como la exigencia de una nueva relación de las ciudades con el gobierno central.

Paradójicamente, a pesar de las enormes potencialidades creadas por la ciencia para satisfacer las carencias que afectan a las grandes mayorías de la población mundial, la humanidad experimenta un irracional aumen to de la pobreza, y el incremento peligroso de las disparidades sociales, que enfrentan al campo con la ciudad y a los sectores marginales urbanos con los de mayores ingresos, poniendo en riesgo la paz y la seguridad.

En estas complejas circunstancias, propias de la actual etapa civilizatoria de la humanidad, adaptarse con éxito al nuevo modelo o incidir con decisión para modificarlo, constituye el reto principal que enfrentamos las ciudades y los gobiernos locales.

Todos estos conceptos cobran especial importancia en América Latina y el Caribe que es la región en desarrollo más urbanizada del mundo. A inicios del presente siglo, tres de cada cuatro habitantes de la región viven en centros urbanos y más de la mitad de la población lo hace en grandes ciudades cuya población supera un millón de habitan tes.

En contraste, el 90% de los municipios tienen menos de 50.000 habitantes, un tamaño que no les asegura una base fiscal sólida ni el desarrollo de una capacidad institucional adecuada para hacerse cargo de responsabilidades muy complejas.

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Adicionalmente, y pese a las nuevas competencias asumidas por los gobiernos subnacionales solamente el 15% de los gastos del gobierno están en manos de autoridades locales, en contrate con el 35% que administran en los países industrializados.

Es por lo mismo importante que podamos visibilizar nuestras ciudades, destacar sus problemas, difundir las propuestas de soluciónes y destacar los esfuerzos locales y regionales para responder de una manera apropiada a los problemas del desempleo y subempleo, de la degradación ambiental, del transporte caótico, de la inseguridad y otros aspectos relacionados con la calidad de vida de las personas.

Es importante también que enfrentemos con voluntad de entregar respuestas satisfactorias los cuestionamientos a que los organizadores nos enfrentan: “¿Estamos preparados para enfrentar el futuro? ¿Serán nuestras ciudades megalotugurios o las megalópolis de las profecías urbanas? Seremos capaces de competir con otras ciudades del mundo y garantizar la supervivencia de las nuestras en el nuevo orden global?”

Muchas de las respuestas a estas interrogantes están ahora en el ámbito de los gobiernos municipales, en virtud de generalizados procesos descentralizadores que traspasan competencias a los niveles subnacionales, las autoridades más cercanas a la comunidad y que mejor pueden responder a sus requerimientos.

Eventos como la XV Bienal organizada por el Colegio de Arquitectos de Quito, ayudarán a nuestra ciudad en la reflexión sobre su presente y futuro.

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Quito ha asumido con decisión competencias que le permiten ser rectora de su propio destino. Dispone de una Ley Constitutiva que le asegura una adecuada organización territorial y administrativa, una relativa autonomía financiera y la institucionalidad necesaria para constituir un verdadero gobierno local.

El Distrito cuenta con una planificación estratégica que tiene como horizonte el año 2025. El plan constituye la carta de navegación socialmente acordada por el pueblo quiteño para asegurarse un tránsito positivo en los complejos y turbulentos caminos de la historia.

La visión adoptada por los quiteños nos habla de una ciudad de emprendedores, competitiva, equitativa y democrática; de ser un principal centro de gestión estratégica y de servicios, un gran polo de cultura y un destino turístico principal en el mundo.

El Plan Equinoccio 21, concibe el progreso de Quito como un esfuerzo compartido del sector público con el privado, con una acción coordinada entre los gobiernos nacional, intermedio y local, según el principio de la subsidiaridad y con una ciudadanía activa y participativa que asuma la corresponsabilidad de su desarrollo.

La ciudad de Quito es ya una comunidad con amplia cobertura de servicios básicos de calidad que está empeñada en acabar con la marginalidad y con la tugurización. La cobertura de servicios de agua potable, alcantarillado, electricidad y telefonía la colocan entre las más progresistas ciudades latinoamericanas.

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Para desarrollar su economía la Municipalidad ha asumido la rectoría de los asuntos aeroportuarios, la promoción de parques tecnológicos y polígonos logísticos, la incubación de empresas y capacitación para el empleo, la construcción de centrales hidroeléctricas y refinerías, la promoción de las actividades turísticas, asuntos indispensables para superar las actuales deficiencias derivadas del sistema nacional.

Termino mi intervención destacando una vez más la importancia de la realización de la edición XV de la Bienal quiteña, a la vez que considero un deber de justicia y gratitud, felicitar la dedicación, esfuerzo y esmero de sus organizadores, agradecer la presencia de tan importantes personalidades que nos honran con su participación y asegurar que las conclusiones y recomendaciones que se deriven de los sugestivos eventos académicos planificados, nos serán útiles para atender las complejas tareas del gobierno de los gobiernos de las ciudades de América y el mundo.

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DISCURSO DE DESPEDIDA RENUNCIA ANTE EL CONCEJO

(29 de enero 2009)

Ante el Concejo, el más alto organismo de gobierno del Distrito Metropolitano de Quito, después de ocho años y medio de desempeñar el muy honroso

cargo de Alcalde de nuestra hermosa, próspera y vibrante ciudad, con hondo pesar, a la vez que guiado por mi profunda convicción cargo que, por voluntad mayoritaria del pueblo quiteño, tuve el privilegio de desempeñar durante dos períodos consecutivos de gobierno.

Mi renuncia se produce por dos motivos: hacer posible la alternabilidad democrática y ofrecer mis servicios al país desde la tribuna legislativa y fiscalizadora. Las autoridades elegidas por el pueblo no deben perpetuarse sino dar paso a nuevas generaciones, que con ímpetu renovado y modernas visiones consoliden el progreso de la ciudad y continúen mejorando la calidad de vida de su gente, que siempre es una tarea inacabada.

En ésta, como en cada ocasión que he dejado un cargo o función, tengo una sola certeza: la de haber realizado mis mejores esfuerzos, con la mayor dedicación y honestidad, procurando servir con excelencia a los intereses de mi país, inspirado en el ejemplo de los grandes de la Patria, para cumplir los sagrados deberes asumidos frente al pueblo.

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Fiel a mis convicciones, resultantes de una vida de estudio, de análisis serio de la, historia, de reflexiones largas y tranquilas sobre la naturaleza humana, la sociedad, la economía, el poder político y las relaciones internacionales, he orientado cambios en la acción del gobierno local para superar las lacras de la marginalidad, la injusticia social, la discriminación y la exclusión.

A tales fines he aportado con la creación de una cultura de paz, convencido de que es la injusticia la que abre los cauces a las reacciones violentas; por eso, he sido un Alcalde de todos y para todos, integrando tanto geográfica como socialmente a la mayoría de ciudadanos, en un esfuerzo concertado de desarrollo y he sido especialmente un servidor dedicado a las causas de los sectores populares, tradicionalmente los menos atendidos por las instituciones públicas, logrando así que la familia quiteña no se desgaste en confrontaciones estériles que solamente habrían significado su ruina y la hipoteca de su futuro.

He tomado decisiones que implicaron riesgos; siempre he actuado así, porque los cobardes o pusilánimes nunca fueron actores determinantes en el desarrollo de los pueblos. Hay ocasiones en las que el daño mayor consiste en no decidir; pero, por supuesto, a los indecisos no los juzgan ni persiguen manipulados contralores, pues aquellos jamás emprenden proyectos importantes.

Por eso el Ecuador ha dejado de hacer aeropuertos, refinerías, centrales hidroeléctricas y grandes autopistas que habrían asegurado su progreso.

Discurso de Despedida Renuncia ante el Concejo (29 de Enero 2009)

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En el caso del nuevo aeropuerto, los grandes beneficios para el desarrollo de Quito, al haber atraído .una gran inversión extranjera en las más adversas circunstancias sociales, económicas y políticas del país, generadas por la grave crisis financiera, justificarán ante la historia mi perseverancia y tenaz insistencia.

Alerto al pueblo quiteño a no dejarse derrotar por la conspiración que durante varios años ha buscado con furor detener el avance de este vital proyecto. Por mi parte seguiré luchando por su culminación, porque de ella depende en gran medida el logro de los objetivos de prosperidad y grandeza que nos hemos trazado quiteñas y quiteños, pensando especialmente en las futuras generaciones.

El desempeño de las funciones públicas es muy complejo, requiere que se pongan en juego todos los esfuerzos y las mejores capacidades, además de las más sanas intenciones y por eso es imposible lograr y fatuo atribuirse la infalibilidad, jamás al alcance de los seres humanos; por lo que acepto con humildad que habré cometido equivocaciones; sin embargo, es justo decir en mi descargo, que jamás tomé una decisión pensando en obtener algún beneficio en mi favor o de alguien cercano a mi persona; que siempre decidí sobre la base del mejor saber y entender, respetando los derechos de mis conciudadanos.

He representado internacionalmente con la mayor dignidad al país y a nuestra maravillosa ciudad. El liderazgo nacional e internacional de Quito ha sido evidente. Me ha correspondido, gracias al apoyo de los gobiernos de la región y del mundo desempeñar las presidencias del Centro Iberoamericano

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de Planificación Estratégica Urbana, de la Oficina de las Naciones Unidas para Apoyo a los Gobiernos Locales (UNACLA) “ y de la Organización Mundial de Ciudades (CGLU) para la que fui reelegido por voluntad unánime de los miembros de la Asamblea General, en Jejú, Corea del Sur. Todas estas funciones las he desempeñado con el aprecio y reconocimiento de mis colegas de todos los continentes.

Haría falta muchísimo tiempo para expresar mi gratitud a todos quienes hicieron posible que la gestión de la Alcaldía haya tenido el mérito que los quiteños quieran atribuirle; por esa razón, deseo dirigirme de manera general al principal actor de este proceso de cambio que ha sido el pueblo organizado, los miles de dirigentes comunitarios, los trabajadores, empleados y funcionarios municipales, las instituciones sociales, culturales, empresariales y religiosas, los gobiernos parroquiales, la prefectura de Pichincha, la Asociación de Municipalidades, el gobierno nacional, los medios de comunicación social y a ustedes, el Concejo Metropolitano, de cuyo trabajo honesto y esforzado como legisladores y fiscalizadores, doy fe y felicito.

Quiero expresar mis votos más sentidos por el éxito en el desempeño de la Alcaldía al señor concejal Andrés Vallejo, digno Vicepresidente de este Organismo. En los meses que faltan para que termine nuestra gestión, la Alcaldía estará en buenas manos. Deseo, así mismo, que el voto ciudadano entregue el mandato a una persona honesta y trabajadora que continúe la tarea, cambie lo que sea necesario, pero mantenga el ímpetu de desarrollo que Quito ha alcanzado.

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Convoco al pueblo quiteño a respaldar al nuevo Alcalde, a no dejarle solo en su trabajo, a estar junto a él en sus luchas, exigiéndole el cumplimiento de sus deberes, pero también reconociendo sus desvelos; que pasadas las naturales confrontaciones de la contienda política, el elegido pueda trabajar con todos y todas, para todos y todas, mejorando todavía más, mucho más 1o que en mi administración hemos alcanzado. Quito se merece una respuesta de alto civismo de los nuevos administradores quienes, estoy seguro, estarán a la altura del reto que esperan asumir.

Quito, 8 de octubre de 1940). Hijo del abogado y congresista dr. Paco Moncayo altamirano y la profesora Aída Gallegos García, es un militar y político Ecuatoriano, que en 1995 alcanzó notoriedad pública en su país luego de que comandara al Ejército Ecuatoriano en el con�icto en la que enfrentó al Perú, siendo el Perú derrotado. Durante los acontecimiento bélicos de 1981 con ese mismo país estuvo bajo las órdenes del general Richelieu Levoyer.A la par con su formación militar, Moncayo no descuidó su formación académica, obteniendo el título de Doctor en Ciencias internacionales, con especialidad en economía e integración. Es uno de los precursores de lo que posteriormente se denominó “El militarismo ilustrado del Ecuador”.Hay que destacar que es el único militar en la historia del Ecuador en lograr completar 40 años de vida militar, 5 como cadete y 35 como o�cial. Llegando al �n de su carrera militar luego del con�icto del Cenepa en donde derrota al ejercito Peruano superior en numero y en armamento.En 1998 se retira del ejército al cumplir el máximo de tiempo que manda la ley y fue electo diputado nacional por el partido izquierda democrática (id), siendo el líder del bloque socialdemócrata en el parlamento.Paco moncayo además de los importantes reconocimientos y cargos que ha desempeñado en el país también es co-presidente de la unión mundial de gobiernos locales y municipalidades (UCGL), que es un organismo equivalente a la ONU en la que sus miembros no son naciones sino ciudades.