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4.1. DIFERENCIAS DE ESTILO Página 1 de 30 4.1. DIFERENCIAS DE ESTILO (a). J. D. Salinger, (The Catcher in the Rye, 1945): El guardián entre el centeno. Traducción de Carmen Criado. El Libro de Bolsillo, Alianza Editorial, Madrid. Primera edición, 1978. Decimoctava reimpresión, 1993. (b). J. D. Salinger, (The Catcher in the Rye, 1945): El guardián entre el centeno. Traducción de Carmen Criado. El Libro de Bolsillo, Alianza Editorial, Madrid, Segunda edición revisada, 2007. Segunda reimpresión, 2012. 4.1. Diferencias de Expresión entre (a) y (b) § 1. La apelación al lector § 2. Uso de los tiempos § 3. Concordancia Con esta lección comenzamos el estudio de diferentes asuntos suscitados en las distintas versiones de la obra de J. D. Salinger, The Catcher in the Rye, (1945), publicada en español con el título de El guardián entre el centeno, traducida por Carmen Criado en una primera versión de 1978 y en una segunda versión en 2007. Los ejemplos y datos de estudio tomados de ambas versiones se citan, respectivamente, como (a) y como (b), para simplificar las referencias. Y, por lo mismo, no se apuntan las páginas de cada ejemplo, salvo en algún caso muy justificado de contraste, porque, si se quiere o se necesita alguna ampliación o detalle, son muy fáciles las búsquedas en las ediciones digitales respectivas, cuando se desea corroborar un ejemplo o situarlo en un contexto más amplio.

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Material complementario coursera- Universidad Autónoma de Barcelona

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  • 4.1. DIFERENCIAS DE ESTILO Pgina 1 de 30

    4.1. DIFERENCIAS DE ESTILO

    (a). J. D. Salinger, (The Catcher in the Rye, 1945): El guardin entre el centeno. Traduccin

    de Carmen Criado. El Libro de Bolsillo, Alianza Editorial, Madrid. Primera edicin, 1978.

    Decimoctava reimpresin, 1993.

    (b). J. D. Salinger, (The Catcher in the Rye, 1945): El guardin entre el centeno. Traduccin

    de Carmen Criado. El Libro de Bolsillo, Alianza Editorial, Madrid, Segunda edicin revisada,

    2007. Segunda reimpresin, 2012.

    4.1. Diferencias de Expresin entre (a) y (b)

    1. La apelacin al lector

    2. Uso de los tiempos

    3. Concordancia

    Con esta leccin comenzamos el estudio de diferentes asuntos suscitados en las

    distintas versiones de la obra de J. D. Salinger, The Catcher in the Rye, (1945), publicada en

    espaol con el ttulo de El guardin entre el centeno, traducida por Carmen Criado en una

    primera versin de 1978 y en una segunda versin en 2007. Los ejemplos y datos de estudio

    tomados de ambas versiones se citan, respectivamente, como (a) y como (b), para simplificar

    las referencias. Y, por lo mismo, no se apuntan las pginas de cada ejemplo, salvo en algn

    caso muy justificado de contraste, porque, si se quiere o se necesita alguna ampliacin o

    detalle, son muy fciles las bsquedas en las ediciones digitales respectivas, cuando se desea

    corroborar un ejemplo o situarlo en un contexto ms amplio.

  • 4.1. DIFERENCIAS DE ESTILO Pgina 2 de 30

    Aunque en la lista de ejemplos de las diferentes fuentes estudiadas se recogen en

    paralelo cada versin de (a) y (b), la propuesta solo pretende ser til para corroborar alguna

    observacin sobre las diferencias de expresin, o de estilo, objeto de comentario.

    En ningn caso se ha tenido en cuenta el original ingls, que se considera

    fundamento de la relacin de parfrasis entre ambas versiones, porque los datos objeto de

    comentario, de (a) y de (b), lo son, no por su relacin (ms o menos estrecha y acertada) con

    el original ingls, sino por su relacin con las condiciones del espaol, tal como advertimos

    cuando nos referamos a los materiales de las versiones espaolas de Los amigos de Eddie

    Coyle, estudiados en la segunda parte del curso, las semanas anteriores.

    Tampoco se han tenido en cuenta, en este curso, las dos versiones argentinas de la

    obra publicadas con el ttulo de El cazador oculto:

    (c). J. D. Salinger, (The Catcher in the Rye, 1945): El cazador oculto. Traduccin de

    Manuel Mndez Andes. Compaa Fabril, Buenos Aires. Primera edicin, 1961.

    (d). J. D. Salinger, (The Catcher in the Rye, 1945): El cazador oculto. Traduccin de

    Pedro Rey. Sudamericana, Buenos Aires, 1999.

  • 4.1. DIFERENCIAS DE ESTILO Pgina 3 de 30

    El estudio de las variantes (a/b) de un mismo traductor y de las variantes (c/d) de

    traductores diferentes, adems de las variantes territoriales, americanas y espaolas (c/d y

    a/b), hubiera sido fantstico. Es un mbito de estudio muy sugestivo, por las observaciones

    que puede suscitar, y porque esas observaciones tendrn una fundamentacin emprica de

    parfrasis incuestionable. Pero, evidentemente, queda fuera de las medidas y condiciones

    de un curso como el programado en esta ocasin. De todos modos, abrigamos la esperanza

    de satisfacer esta posibilidad en otra ocasin, ms adelante.

    Precisamente, como prueba de la necesidad de atencin en la lectura del texto espaol y

    del inters que se puede suscitar desde la lectura atenta del mismo texto, en dos versiones

    diferentes, alternativas, me voy a referir a un caso interesante, que se resuelve con el

    original ingls. Pero, insistimos, lo que aqu nos interesa es el problema suscitado por el

    contraste entre las dos versiones espaolas, con la nica consideracin de los mismos

    textos, en una lectura atenta.

  • 4.1. DIFERENCIAS DE ESTILO Pgina 4 de 30

    Veamos los ejemplos de (1-4):

    (1)a. Empez a mover la cabeza como tena por costumbre. Nunca he visto a nadie mover tanto la cabeza como a Spencer. Y nunca llegu a saber si lo haca porque estaba pensando mucho, o porque no era ms que un vejete que ya no distingua el culo de las tmporas. (p. 15)

    (1)b. Empez a asentir con la cabeza como haca siempre. Nunca en su vida han visto a nadie asentir tanto con la cabeza. Y nunca sabas si lo haca porque estaba pensando y todo eso, o slo porque no era ms que un vejete que ya no distingua el culo de las tmporas. (p. 20)

    (2)a. Y, cmo crees que tomarn la noticia? [de que te han expulsado del colegio]

    Pues... se enfadarn bastante le dije. Se enfadarn. He ido ya como a cuatro colegios.

    Mene la cabeza. Meneo mucho la cabeza.

    Jo! dije luego. Tambin digo jo! muchas veces. (p. 16)

    (2)b. Y cmo crees que se tomarn la noticia?

    Pues... se enfadarn bastante dije. Se enfadarn seguro. He ido ya como a cuatro colegios.

    Mene la cabeza. Meneo mucho la cabeza.

    Jo! dije. Tambin digo jo muchas veces. (p. 21)

    (3)a. Spencer empez a mover otra vez la cabeza. Empez tambin a meterse el dedo en la nariz.

    Y no es que me molestara mucho, pero tienen que reconocer que da bastante asco ver a un to hurgndose las napias. (p. 16)

    (3)b. Spencer empez a asentir otra vez con la cabeza. Empez tambin a meterse el dedo en la nariz. A m no me importaba, slo que da bastante asco ver a alguien hurgndose la nariz. (p. 22)

    (4)a. Lo malo es que tengo que irme. He de ir al gimnasio a recoger mis cosas. De verdad.

    Me mir y empez a mover de nuevo la cabeza con una expresin muy seria.

    Ver, seor, no se preocupe por m le dije. De verdad. Ya ver como todo se me arregla. Estoy pasando una mala racha. Todos tenemos nuestras malas rachas, no? (p. 21)

    (4)b. Lo malo es que ahora tengo que irme. Tengo mi equipo en el gimnasio y tengo que ir a recogerlo para llevrmelo a casa. De verdad.

    Me mir y empez a asentir otra vez con la cabeza con una cara muy seria.

    Ver, seor, no se preocupe por m dije. De verdad. Me ir bien. Es slo que estoy pasando una mala racha. Todos tenemos nuestras malas rachas y eso, no? (p. 28)

    Dnde est el problema?

    (1)a. Empez a mover la cabeza como tena por

    costumbre. Nunca he visto a nadie mover tanto la

    cabeza como a Spencer. Y nunca llegu a saber si

    lo haca porque estaba pensando mucho, o

    porque no era ms que un vejete que ya no

    distingua el culo de las tmporas. (p. 15)

    (1)b. Empez a asentir con la cabeza como haca

    siempre. Nunca en su vida han visto a nadie

    asentir tanto con la cabeza. Y nunca sabas si lo

    haca porque estaba pensando y todo eso, o slo

    porque no era ms que un vejete que ya no

    distingua el culo de las tmporas. (p. 20)

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    (2)a. Y, cmo crees que tomarn la noticia?

    [de que te han expulsado del colegio]

    Pues... se enfadarn bastante le dije. Se

    enfadarn. He ido ya como a cuatro colegios.

    Mene la cabeza. Meneo mucho la cabeza.

    Jo! dije luego. Tambin digo jo! muchas

    veces. (p. 16)

    (2)b. Y cmo crees que se tomarn la noticia?

    Pues... se enfadarn bastante dije. Se

    enfadarn seguro. He ido ya como a cuatro

    colegios.

    Mene la cabeza. Meneo mucho la cabeza.

    Jo! dije. Tambin digo jo muchas veces.

    (p. 21)

    (3)a. Spencer empez a mover otra vez la cabeza.

    (p. 16)

    (3)b. Spencer empez a asentir otra vez con la

    cabeza. (p. 22)

    (4)a. Me mir y empez a mover de nuevo la

    cabeza con una expresin muy seria. (p. 21)

    (4)b. Me mir y empez a asentir otra vez con la

    cabeza con una cara muy seria. (p. 28)

    1. El problema est en la versin de (a) porque en todos los casos (1-4) se alude a un

    gesto determinado con la misma expresin mover la cabeza. Por qu es un problema esta

    solucin? Porque puede dar pie a suponer que como es Spencer el personaje que, segn (1)

    y (3-4), reitera el gesto de mover la cabeza se ha de entender que (2a) se est refiriendo

    tambin a l.

    Pero (2a) se refiere a una accin, que se menciona por primera vez en el texto y que

    no se vuelve a mencionar, referida al protagonista, distinto de Spencer. Porque la lectura de

    (2a) est condicionada por la que se acaba de hacer en (1a) de la pgina anterior, referida a

    un gesto atribuido a Spencer, un personaje distinto; gesto que se confirma en (3a) y en (4a).

    (1)a. Empez a mover la cabeza como tena por costumbre. Nunca he visto a nadie mover tanto la

    cabeza como a Spencer. (p. 15)

    (3)a. Spencer empez a mover otra vez la cabeza. (p. 16)

    (4)a. Me mir y empez a mover de nuevo la cabeza con una expresin muy seria. (p. 21)

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    Podra entenderse en (2a) que ms bien se quiso decir (2aa), por la comparacin

    entre el gesto de Spencer de mover la cabeza y la reiteracin del protagonista: Tambin yo

    digo jo muchas veces.

    (2)a. Mene la cabeza. Meneo mucho la cabeza.

    Jo! dije luego. Tambin digo jo! muchas

    veces. (p. 16)

    (2)aa. Mene la cabeza. Menea mucho la

    cabeza.

    Jo! dije. Tambin yo digo jo muchas

    veces.

    2. No hay problema en la versin (b) porque se distingue entre el mover la cabeza

    de (2b), referido al protagonista, y el gesto de asentir con la cabeza de (1b) y de (3-4b),

    referido al personaje Spencer. Por tanto, est muy bien la solucin y la distincin de (b), que

    diferencia los dos gestos sin posible confusin o el malentendido hipottico de (a).

    3. La solucin anterior de (b) parece perfectamente suficiente pero poda haberse

    destacado ms con una versin distinta de (2c):

    (b) Original ingls Alternativa

    (1)b. Empez a asentir con la cabeza como haca siempre. Nunca en su vida han visto a nadie asentir tanto con la cabeza. Y nunca sabas si lo haca porque estaba pensando y todo eso, o slo porque no era ms que un vejete que ya no distingua el culo de las tmporas. (p. 20)

    He started going into this nodding routine. You never saw anybody nod as much in your life as old Spencer did. You never knew if he was nodding a lot because he was thinking and all, or just because he was a nice old guy that didn't know his ass from his elbow.

    (2)b. Y cmo crees que se tomarn la noticia?

    Pues... se enfadarn bastante dije. Se enfadarn seguro. He ido ya como a cuatro colegios.

    Mene la cabeza. Meneo mucho la cabeza.

    Jo! dije. Tambin digo jo muchas veces. (p. 21)

    I shook my head. I shake my head quite a lot. "Boy!" I said. I also say "Boy!" quite a lot.

    (2)c. Negu con la cabeza. Suelo negar con la cabeza.

    Jo! dije. Tambin digo jo muchas veces.

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    (3)b. Spencer empez a asentir otra vez con la cabeza. (p. 22)

    Old Spencer started nodding again.

    (4)b. Me mir y empez a asentir otra vez con la cabeza con una cara muy seria. (p. 28)

    He looked up at me and started nodding again, with this very serious look on his

    face.

    Con este ejemplo solo queremos destacar que:

    1. Independientemente de la versin original y de algn posible caso como este, nos

    centraremos exclusivamente en las diferencias de expresin en espaol de las

    versiones (a) y (b).

    2. Las diferencias entre (a) y (b) pueden ser perfectamente significativas.

    3. En caso de duda, si las diferencias entre (a) y (b) se pueden considerar como ms all

    de puras variaciones de estilo, la solucin de la versin (b) ha de considerarse como

    preferible.

    Es evidente que puede tener mucho inters el estudio de la relacin entre el texto de

    la versin en espaol y el correspondiente texto original en ingls, as como el estudio de

    hasta qu punto la versin espaola traduce con fidelidad el sentido del original ingls.

    Pero aqu el inters y el foco se han puesto en el estudio de la relacin entre el texto de la

    versin en espaol y las condiciones de expresin de la lengua del espaol: hasta qu punto

    y en qu sentido la versin espaola de (a) o de (b) constituyen diferencias de estilo de la

    lengua en un determinado aspecto de la expresin: la manifestacin de la apelacin al

    lector, el lxico, la reiteracin, la expresin ponderativa, el orden de palabras, los adverbios,

    el gerundio, la impersonalidad, etc.

    Los puntos objeto de estudio en las lecciones de esta tercera parte del curso sobre

    este texto, original de J. D. Salinger, proceden, sistemticamente, de ambas versiones y los

    presentamos en paralelo porque haremos un estudio comparativo. Es as porque el objeto

    de estudio consiste en presentar, destacar y analizar las diferencias de Estilo entre las

    versiones (a) y (b) de la misma traductora Carmen Criado. Porque, aunque la versin (b) se

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    etiqueta como segunda edicin, los cambios y las reconsideraciones de expresin que la

    misma traductora propone en la versin (b), prrafo por prrafo, desde la primera pgina

    hasta la ltima, son tan profundas que ms que de una segunda edicin habra que hablar

    de una edicin alternativa, distinta. Por eso el inters y el que las diferencias entre (a) y (b)

    sean un magnfico objeto de estudio para la observacin de las alternativas de Estilo, de

    expresin, porque son la manifestacin en relacin de parfrasis, con un sentido idntico, de

    un mismo original: la versin inglesa.

    Facilitamos esa labor del lector de estos apuntes proporcionando ambas versiones

    pero la identificacin, la discusin, el razonamiento y la argumentacin de las alternativas de

    una expresin se van a hacer desde las condiciones de la propia lengua y sus variantes de

    uso, desde la gramtica, desde los diccionarios o desde las sanciones de uso de los datos de

    los corpus.

    Antes de concluir, har tres precisiones previas y una consideracin general:

    1. Trataremos siempre, en general, de diferencias de expresin o de Estilo entre (a)

    y (b); y no entra, en absoluto, en el objeto de este estudio la valoracin de calidad

    literaria, gramatical o expresiva en (a) y (b). Esas valoraciones de calidad

    CORRESPONDERA HACERLAS a la teora literaria, que segn las condiciones propias

    de una disciplina cientfica, podra pronunciarse al respecto.

    2. No nos vamos a referir ni aqu ni ms adelante al autor J. D. Salinger o a la obra, El

    guardin entre el centeno porque los manuales, los tericos de referencia y la red

    permiten leer muy diferentes y abundantes consideraciones con distintos puntos de

    vista.

    3. Tampoco diremos nada sobre la traductora, Carmen Criado, de la cual, tambin

    en la red, se pueden encontrar muy buenas referencias a su extensa obra en muy

    distintos mbitos de la traduccin ingls-espaol.

    Aqu, referido al asunto que nos ocupa, solo queremos destacar que son tantas, tan

    precisas y tan finas, desde el punto de vista de la expresin de la lengua, las

    diferencias entre (a) y (b) que hacen de esas dos versiones un objeto inapreciable

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    (como no hay otro, de una misma mano) para el estudio de las diferencias de

    expresin, de Estilo, en muy diferentes mbitos de la lengua: desde el lxico a la

    sintaxis y la semntica.

    *** *** *** *** *** *** *** ***

    Antes de concluir estas lneas introductorias se han de hacer algunas precisiones

    sobre el formato de los Apuntes de esta tercera parte del curso. A diferencia de los Apuntes

    de lecciones anteriores, donde primero se proporcionaban todos los datos objeto de estudio

    en cada epgrafe y luego se estudiaban uno por uno o en grupos de asunto coincidente,

    segn el caso, aqu se presentarn y comentarn sucesivamente los datos ms destacados y

    relevantes o significativos, por algn motivo, de cada epgrafe. Porque no estudiamos las

    PREFERENCIAS de expresin, sino las DIFERENCIAS, que intentaremos destacar desde la

    primera mencin de los datos objeto de estudio.

    En los diferentes puntos y epgrafes de esta parte del curso se aducen numerosos

    ejemplos, que alguien podra considerar excesivos, pero que creemos que son necesarios

    por distintos motivos, principalmente porque el nmero de ejemplos pone de manifiesto la

    consistencia y el peso especfico del aspecto en cuestin, que no es trivial, ni ocasional y que

    no es una ocurrencia o una rareza.

    Porque cuando una expresin sea rara por algn motivo, se advertir y se sealar

    convenientemente.

    Y porque cuando un ejemplo expresivo es exclusivo de una versin suscita mucho

    inters saber cules son las expresiones alternativas que sustituyen al exponente expresivo

    de que se trate.

    Porque, en definitiva, la seleccin de los datos, la comparacin entre las versiones

    correspondientes de (a) y de (b), en cada caso, y el destacado de los motivos como primera

    presentacin de los contrastes constituyen una primera parte esencial de los apuntes de

    estas lecciones del curso.

  • 4.1. DIFERENCIAS DE ESTILO Pgina 10 de 30

    Hechas las consideraciones anteriores, obligadas al inicio de una segunda parte del

    curso, veamos cul es el objeto concreto de esta leccin, que presentamos y desarrollamos

    con un procedimiento semejante al de las lecciones anteriores.

    En esta leccin, como en las siguientes, trataremos por extenso un asunto que se

    pone de manifiesto en un nmero significativo de ejemplos, as como un par de aspectos no

    menos importantes pero con pocos ejemplos.

    En concreto, el asunto ms relevante de esta leccin es el de las diferencias de

    expresin de la apelacin al lector. Un aspecto destacado en la expresin de El guardin

    entre el centeno es que su protagonista, Holden Caulfield, un joven adolescente de 17 aos,

    relata los hechos, desde su punto de vista, con continuas interpelaciones al lector. Este ser

    el primer punto de las lecciones de esta parte: la variedad de frmulas de expresin elegidas

    para manifestar en (a) y en (b) esa apelacin al lector.

    Tambin se estudiarn algunos ejemplos sobre las diferencias en el uso de los

    tiempos verbales y sobre la concordancia.

    1. La apelacin al lector

    La figura expresiva de la apelacin se usa en El guardin desde las primeras lneas

    del texto. Cuando aqu nos referimos a las diferentes manifestaciones de la Apelacin, nos

    referimos a casos como (1) donde el texto interpela al lector.

    1(a). Si de verdad les interesa lo que voy a contarles, lo primero que querrn saber es dnde nac, cmo fue todo ese rollo de mi infancia, qu hacan mis padres antes de tenerme a m, y dems puetas estilo David Copperfield, pero no tengo ganas de contarles nada de eso.

    (b). Si realmente les interesa lo que voy a contarles, probablemente lo primero que querrn saber es dnde nac, y lo asquerosa que fue mi infancia, y qu hacan mis padres antes de tenerme a m, y todas esas gilipolleces estilo David Copperfield, pero si quieren saber la verdad no tengo ganas de hablar de eso.

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    Desde el primer enunciado del texto ya se observan diferencias entre (a) y (b), en este

    asunto, como en otros que veremos a continuacin. Se coincide en el tratamiento de usted,

    fijado en estas lneas para todo el texto; y (b) introduce una frmula de interrogacin

    indirecta retrica: pero si quieren saber la verdad no tengo ganas de, alternativo a la

    interpelacin ms directa del pronombre destacado en la versin de (a): pero no tengo

    ganas de contarles nada de eso

    NO nos referimos a casos como los de (2-3), donde un personaje interpela a otro con una

    pregunta eco, en (2a), o con la interrogacin indirecta retrica de (1b) si quieres saber la

    verdad, referida a Stradlater en (3a).

    2(a) Te importara cortarte las uas encima de la mesa, oye? Te lo he dicho ya como cincuenta...

    (b) Te importara cortarte las uas encima de la mesa? dije. Te lo he dicho como cincuenta...

    3(a) Ests furioso con Stradlater porque te dijo que deberas lavarte los dientes de vez en cuando. Pero si quieres saber la verdad, no lo hizo por afn de molestarte.

    (b) Ests enfadado con Stradlater porque te dijo que deberas lavarte los dientes de vez en cuando. No lo dijo para ofenderte, maldita sea.

    Las manifestaciones de la apelacin al lector, segn (1), al ser un recurso tan genuino

    en El Guardin tienen una grandsima variedad expresiva, por motivos obvios de variacin

    en (a) y en (b): se manifieste o no, adopta distintas formas alternativas en cada versin o

    presenta algunos modelos recurrentes de alternancia en casi todas las formas de la retrica:

    interrogacin retrica, exclamacin, apstrofe o invocacin, comunicacin, etc.

    1.1. Manifestacin o no de la apelacin en (a) y (b).

    Respecto a la manifestacin de la apelacin, nos encontramos casos como los de (4-

    6), en que la versin (a) expresa esa interpelacin al lector mientras que la correspondiente

    versin (b) de cada ejemplo no la manifiesta, o lo hace, indirectamente, de forma impersonal

    como ocurre en (6b): Si lo piensas bien.

    (4)a. Pero les juro que estoy completamente loco. (4)b. Pero estoy loco. Lo juro por Dios.

  • 4.1. DIFERENCIAS DE ESTILO Pgina 12 de 30

    (5)a. A pesar de todo, soy un to bastante sano, no crean.

    (5)b. Aunque estoy bastante sano.

    (6)a. S que es un tipo de cobarda bastante raro, la verdad, pero aun as es cobarda. No crean que me engao.

    (6)b. Si lo piensas bien, es un tipo de cobarda bastante raro, pero aun as es cobarda. No me engao.

    En otros casos como los de (7-9), por el contrario, nos encontramos con que la

    versin (b) expresa esa interpelacin al lector mientras que la correspondiente versin (a) de

    cada ejemplo no la manifiesta; o la manifiesta, indirectamente, de forma narrativa como

    ocurre en (9a): Me lata el corazn como si fuera a escaprseme del pecho.

    (7)a. Bueno es el tal Ossenburger! (7)b. Deberan ver al tal Ossenburger.

    (8)a. Estaba hecho un Cristo. Tena sangre por toda la boca.

    (8)b. En su vida han visto una carnicera igual. Tena sangre por toda la boca.

    (9)a. Dios mo! Me lata el corazn como si fuera a escaprseme del pecho.

    (9)b. Dios mo, cmo me lata el corazn.

    De todos modos, como es lgico, en general, cuando en un caso de una de las dos

    versiones (a) o (b) hay una manifestacin de algn tipo de apelacin, suele haberla, con igual

    o distinta forma, en el ejemplo correspondiente de la otra versin. Porque se ha de suponer

    que la presencia de esta figura expresiva en las versiones espaolas est determinada por el

    original.

    1.2. Modelos recurrentes de alternancia de la apelacin en (a) y (b).

    Antes de continuar quizs convenga precisar que, aunque presentamos ejemplos

    reunidos con igual o parecida solucin expresiva, se ha de entender que ello se debe a una

    ordenacin y estructuracin de los materiales objeto de comentario. Porque,

    1, no suele haber mucha coincidencia entre las manifestaciones de cada versin (a)

    o (b);

  • 4.1. DIFERENCIAS DE ESTILO Pgina 13 de 30

    2, no suele haber coincidencia entre las soluciones de dos manifestaciones sucesivas

    o prximas en la misma versin (a) o (b), por motivos obvios elementales de calidad

    literaria de la versin espaola, y, por supuesto, del original;

    y 3, cuando se observa algn tipo de reiteracin sucesiva o prxima en (a) o (b), se

    puede entender como manifestacin de un tipo de nfasis evidente.

    Con estas precisiones, veamos ahora algunos modelos de correspondencia o

    alternancia entre las soluciones en la manifestacin de la apelacin en las versiones (a) y

    (b).

    1.2.1. Apelacin en forma de Negacin en (a) y de Exclamacin indirecta en (b).

    En los ejemplos de (10), de distintas pginas de cada una de las dos versiones, se

    observa la correspondencia entre la solucin en forma negativa de (a) y su correspondiente

    en forma exclamativa de (b).

    (10)a. (10)b.

    Jo! No se puso furioso ni nada! Jo, cmo se enfad.

    Jo! No haca pocas cosas raras! Jo, cmo le gustaban esas porqueras.

    Jo! No me senta poco raro! Jo, qu raro me senta.

    Jo! No me estaba poniendo poco nervioso! Jo, qu nervioso me estaba poniendo.

    Jo! No estaba poco preocupado el to! Jo, qu preocupado se le vea.

    Jo! No era poco nerviosa la ta! Jo, qu nervioso era.

    Jo! No me llegaba la camisa al cuerpo! Dios, qu miedo pas.

    Dios mo! Me lata el corazn como si fuera a escaprseme del pecho.

    Dios mo, cmo me lata el corazn.

  • 4.1. DIFERENCIAS DE ESTILO Pgina 14 de 30

    En los casos de la versin (a) el sentido apelativo de las manifestaciones negativas se

    funda con el adverbio de refuerzo ni nada o con la dislocacin de poco, tambin de

    refuerzo.

    Vase el contraste:

    No se puso furioso ni nada! [+Aseveracin, +Apelacin]

    No se puso furioso! [+Negacin]

    se puso furioso! [+Aseveracin, -Apelacin]

    No me senta poco raro! [+Aseveracin, +Apelacin]

    No me senta raro! [+Negacin]

    me senta raro! [+Aseveracin, -Apelacin]

    En los ejemplos correspondientes de (b) ese mismo sentido se propone en forma de

    exclamacin, con la dislocacin del verbo al final de los enunciados de esta modalidad.

    El penltimo ejemplo de (10a) es significativo: Jo! No me llegaba la camisa al cuerpo!

    En este caso el sentido apelativo de la expresin se funda en el nfasis que se manifiesta por

    el uso de una frase hecha o modismo: No me llegaba la camisa al cuerpo!

    Segn Mara Moliner: no llegarle a alguien la camisa al cuerpo: Estar con mucho

    miedo por algo que puede ocurrir. As es evidente, por tanto, la correspondencia

    entre esta versin de (a) y su correspondiente de (b): Dios, qu miedo pas. La

    frase hecha de (a) en este caso no requiere otro refuerzo como en los casos

    anteriores.

    Con un efecto parecido al de este ejemplo, en Dios mo! Me lata el corazn como si

    fuera a escaprseme del pecho, es la proposicin comparativa como si fuera a

    escaprseme del pecho la que confiere el sentido apelativo, evidente en la forma

    correspondiente de la versin (b): Dios mo, cmo me lata el corazn.

  • 4.1. DIFERENCIAS DE ESTILO Pgina 15 de 30

    1.2.2. Apelacin en forma de Si quieren que les diga en (a) y de Si quieren saber la

    verdad, en (b).

    En la versin (b) se introduce la solucin Si quieren saber la verdad, en muchos casos

    que presentaban muy diferentes formas de expresin en los correspondientes ejemplos de

    (a): Si he de serles sincero les dir que soy virgen. De verdad. Si quieren que les diga la

    verdad, el to que me cae mejor La verdad es que en cuanto corro un poco se me corta la

    respiracin. Tena una barba muy cerrada, de verdad.

    (11)a (11)b

    Si he de serles sincero les dir que soy virgen. De verdad.

    Si quieren saber la verdad, soy virgen. De verdad.

    Si quieren que les diga la verdad, el to que me cae mejor

    Si quieren saber la verdad, el to que ms me gusta de

    Si quieren que les diga la verdad no les tengo ninguna simpata.

    Si quieren saber la verdad, me fastidian muchsimo.

    La verdad es que en cuanto corro un poco se me corta la respiracin.

    No tengo nada de fuelle, si quieren saber la verdad.

    Pero no tengo ganas de contarles nada de eso. Si quieren saber la verdad no tengo ganas de hablar de eso.

    Tena una barba muy cerrada, de verdad. Tena una barba muy cerrada. De verdad.

    S que es un tipo de cobarda bastante raro, la verdad, pero aun as es cobarda. No crean que me engao.

    Si lo piensas bien, es un tipo de cobarda bastante raro, pero aun as es cobarda. No me engao.

    En ambas versiones se ve cmo toma sentido apelativo la expresin de verdad desde su

    uso como refuerzo intensificador en Si he de serles sincero les dir que soy virgen. De

    verdad. Tena una barba muy cerrada, de verdad; hasta un uso autnomo de la expresin

    de verdad, con este sentido: Tena una barba muy cerrada, de verdad. Tena una barba

    muy cerrada. De verdad.

    O su variante en serio de ambas versiones: Estaba rodeado de imbciles. En serio. Y

    de ejemplos como los de (12):

  • 4.1. DIFERENCIAS DE ESTILO Pgina 16 de 30

    (12)a (12)b

    El vestbulo estaba completamente vaco y ola como a cincuenta millones de colillas. En serio.

    El vestbulo estaba vaco. Ola como a cincuenta millones de puros apagados. De verdad.

    Cuanto ms caro el colegio ms te roban, palabra. Cuanto ms caro el colegio, ms ladrones, en serio.

    En (12) se destacan los elementos apelativos: de verdad, en serio, palabra.

    1.2.3. Apelacin en forma de Como iba diciendo en (a) y de Bueno, pues en (b).

    Para terminar, comentaremos el caso de los ejemplos de (13) que adoptan una

    solucin uniforme en las versiones de (b), escuetas, tajantes; frente a las soluciones de (a),

    ms narrativas y perifrsticas: Pero, como les iba diciendo, cuando me met en la cama

    Pero, como iba diciendo, antes de volver al hotel pens entrar en un bar Pero, volviendo a

    lo que les iba diciendo, me puse mi gorra nueva y Pero, como deca, en cuanto recobr el

    aliento cruc Como deca, es una de esas personas con las que da gusto hablar.

    (13)a (13)b

    Pero, como les iba diciendo, cuando me met en la cama

    Bueno, pues cuando estaba en la cama

    Pero como les iba diciendo, era el sbado del partido de ftbol

    Bueno, pues era el sbado del partido de ftbol

    Pero, como les iba diciendo, mientras me abrochaba la camisa

    Bueno, pues mientras me estaba poniendo otra camisa

    Pero, como les iba diciendo, me puse a pasear por

    Bueno, pues estuve dando vueltas por la habitacin

    Pero, como iba diciendo, antes de volver al hotel pens entrar en un bar

    Bueno, pues antes de llegar al hotel iba a entrar en un bar

    Pues, como iba diciendo, era diciembre y haca un fro que pelaba

    Bueno, pues era diciembre y todo eso y haca un fro que pelaba,

  • 4.1. DIFERENCIAS DE ESTILO Pgina 17 de 30

    Pero, volviendo a lo que les iba diciendo, me puse mi gorra nueva y

    Bueno, pues me puse mi gorra nueva y

    Como deca, es una de esas personas con las que da gusto hablar

    Bueno, pues ella era una de esas personas con las que siempre te apetece hablar

    Pero, como deca, en cuanto recobr el aliento cruc

    Bueno, pues en cuanto recuper el aliento cruc

    Estas variaciones de sentido idntico son una magnfica prueba del sentido progresivo

    del imperfecto espaol: como les iba diciendo, como iba diciendo, volviendo a lo que

    les iba diciendo, como deca. El imperfecto deca significa una accin en desarrollo iba

    diciendo y en un momento imperfecto al que se puede volver, volviendo a.

    Las diferencias entre las versiones (a) y (b) de (13) son evidentes. El objeto y el motivo es

    manifestar el registro de la lengua del personaje segn su edad, su condicin social y el

    carcter del hablante.

    1.3. Formas predominantes alternativas de la apelacin en (a) y (b).

    En los apartados anteriores de este epgrafe hemos podido ver el contraste entre unas

    formas y otras de manifestacin de los distintos procedimientos, ms relevantes, de

    apelacin en la versin (a) y en la versin (b).

    A continuacin se ofrece la lista de variantes de cada versin (a) o (b) para que se pueda

    apreciar mejor la riqueza de alternativas expresivas en cada versin.

    En concreto, en la versin (a) se observan variantes como las siguientes, desde la

    expresin aseverativa, con apelacin elptica, hasta las exclamaciones e interrogaciones

    directas o indirectas.

    Variantes de manifestacin de la apelacin en (a)

    Jo! A veces le pona a uno nervioso.

    Jo, yo estaba con los nervios desatados!

    Jo! No me llegaba la camisa al cuerpo!

  • 4.1. DIFERENCIAS DE ESTILO Pgina 18 de 30

    Jo! Cmo me fastidian esas cosas!

    Jo! Cmo me temblaba la voz!

    Jo! No era poco nerviosa la ta!

    Jo! No estaba poco preocupado el to!

    Jo! No haca pocas cosas raras!

    Jo! No me estaba poniendo poco nervioso!

    Jo! No me senta poco raro!

    Jo! No se puso furioso ni nada!

    Menudo timo! Haba que ver el tal filete.

    Se imaginan a alguien metiendo mano a una chica y contndole un suicidio al mismo tiempo?

    A pesar de todo, soy un to bastante sano, no crean.

    Como deca, es una de esas personas con las que da gusto hablar

    Es que no les he dicho que me haban echado.

    La verdad es que en cuanto corro un poco se me corta la respiracin.

    No crean que me engao.

    Pensarn que tengo mala idea, pero de verdad no lo digo con esa intencin.

    Pero les juro que estoy completamente loco.

    Pero no tengo ganas de contarles nada de eso.

    Pero, a lo que iba, si consigo recordar una cosa de ese estilo, enseguida me entra la sensacin de despedida.

    Pero como les iba diciendo, era el sbado del partido de ftbol

    Pero, como deca, en cuanto recobr el aliento cruc

    Pero, como iba diciendo, antes de volver al hotel pens entrar en un bar

    Pero, en fin, como les iba diciendo, al poco de subir al taxi,

    En fin, como les iba diciendo, al poco de subir al taxi, el taxista empez a darme un poco de conversacin.

  • 4.1. DIFERENCIAS DE ESTILO Pgina 19 de 30

    Pero, volviendo a lo que les iba diciendo, me puse mi gorra nueva y

    Si he de serles sincero les dir que soy virgen. De verdad.

    Si quieren que les diga la verdad no les tengo ninguna simpata.

    Si quieres saber la verdad, no lo hizo por afn de molestarte.

    En la versin (b) se observan variantes nuevas, que se reiteran ms, con

    imprecaciones y un tono ms narrativo e intimista.

    Variantes de manifestacin de la apelacin en (b)

    Bueno, pues [55 ocurrencias en (b), 0 en (a)] antes de llegar al hotel iba a entrar en un bar

    Deberan haber visto los filetes.

    Deberan ver al tal Ossenburger.

    Dios mo, cmo me lata el corazn.

    Dios, cmo me revientan esas cosas.

    Dios, qu miedo pas.

    El to, a su modo asqueroso, era bastante listo. De verdad.

    En su vida han visto una carnicera igual. Tena sangre por toda la boca,

    Estaba rodeado de imbciles. En serio.

    Imagnense meter mano a alguien mientras le cuentas que un to se ha suicidado.

    Jo, cmo le gustaban esas porqueras.

    Jo, cmo me temblaba la voz.

    Jo, cmo se enfad.

    Jo, no aguanto a ese hijo de puta. De verdad.

    Jo, qu nervioso era.

    Jo, qu nervioso estaba.

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    Jo, qu nervioso me estaba poniendo.

    Jo, qu nervioso te pona a veces.

    Jo, qu preocupado se le vea.

    Jo, qu raro me senta.

    Me he olvidado de decrselo. Me haban expulsado.

    Pensarn que lo digo con mala idea, pero no lo digo con mala idea.

    Pero estoy loco. Lo juro por Dios.

    Tena una barba muy cerrada. De verdad.

    Si lo piensas bien, es un tipo de cobarda bastante raro, pero aun as es cobarda. No me engao.

    [] si quieren saber la verdad no tengo ganas de hablar de eso.

    Si quieren saber la verdad, soy virgen. De verdad.

    [] si quieren saber la verdad.

    Sin entrar en el anlisis de los procedimientos expresivos apelativos de cada versin,

    que no caben en los lmites de estas presentaciones, son evidentes las diferencias

    apreciables en los destacados de cada lista.

  • 4.1. DIFERENCIAS DE ESTILO Pgina 21 de 30

    2. Uso de los tiempos

    Sobre el uso de los tiempos solo hay unos pocos casos que pueden merecer un

    comentario por algn motivo. En (1) se observa el contraste entre el imperfecto destacado

    en la versin (a) y el conocido como pretrito perfecto simple, que se prefiere en la versin

    (b).

    (1)a. Hace un par de aos conoc a una chica que era an peor que yo. Jo! No haca pocas cosas raras! Pero durante una temporada nos divertamos muchsimo. (p. 72)

    b. Hace un par de aos conoc a una chica que era an peor que yo. Jo, cmo le gustaban esas porqueras. Pero durante una temporada nos divertimos mucho, de un modo un poco asqueroso. (p. 91)

    El imperfecto de (a), como tal, expresa un evento en desarrollo en el pasado. Aqu sera

    perfectamente coherente con el marcador temporal de su enunciado durante una

    temporada que expresa un sentido durativo significado por la preposicin durante.

    Aqu, quizs convenga recordar el sentido de los diferentes tiempos en un sitio tan

    accesible para cualquiera como el diccionario de Mara Moliner con definiciones sencillas,

    claras y precisas:

    6.1.2. Pretrito imperfecto. a) Expresa fundamentalmente, en forma asertiva, una accin durativa,

    o bien, reiterada o habitual, simultnea en todo o en parte con otra tambin pretrita, durativa o

    instantnea, o con un tiempo expresado con un adverbio o expresin adverbial, tal como antes,

    entonces o en aquel tiempo. Es decir: su significado es fundamentalmente pretrito, asertivo,

    imperfectivo y relativo, o sea, considerado en relacin con el de otra accin: Yo sala [estaba saliendo]

    cuando t entrabas. Me invitaba muchas veces a caf. En aquel tiempo no haba automviles. All no

    pasbamos fro. Cuando era estudiante, me levantaba todos los das a las siete. Cuando acababa la

    costura, cortaba el hilo.

  • 4.1. DIFERENCIAS DE ESTILO Pgina 22 de 30

    6.1.3. Pretrito indefinido. El nombre de este tiempo (llamado en otras lenguas, por ejemplo en

    francs, definido) obedece a la intencin de contraponerlo al perfecto, el cual recibe del participio con

    que se forma un sentido de completo acabamiento.

    a) Sin embargo, contra lo que su nombre podra hacer creer, la accin expresada por el indefinido no

    slo est completamente terminada en el momento de enunciarla, sino que su tiempo se fija

    generalmente con toda precisin: Lleg el jueves a las diez. La primera semana vivi en un hotel.

    Es, pues, en oposicin al imperfecto (de accin durativa), un tiempo perfectivo, o sea, de accin

    terminada; y, as como se dice del imperfecto que es el tiempo imperfectivo del entonces y del

    all, puede decirse del indefinido que es el tiempo perfectivo de esas mismas relaciones.

    h) En algunas regiones, especialmente en Galicia, Asturias, Len y Castilla la Vieja, y en gran parte de

    Hispanoamrica, se emplea en lugar del pretrito perfecto: Hoy me levant (en vez de he levantado)

    tarde. Por qu no viniste (en vez de has venido) esta maana?.

    6.1.4. Pretrito perfecto. a) Se emplea para expresar una accin ocurrida en la misma unidad de

    tiempo que se menciona como transcurriendo en el momento en que se habla, o se considera como

    produciendo consecuencias todava: He llegado hace un momento. He decidido marcharme cuanto

    antes. Hemos tenido muchas enfermedades este invierno. La guerra ha dejado sin hogar a muchas

    familias. Antes de rectificarla, han ocurrido muchas desgracias en esta carretera.

    Con estas definiciones de 6.1.2. y de 6.1.3. se explican las diferencias entre las dos

    versiones de los ejemplos de (1). Lo cual no quiere decir que no sean ambas posibles en sus

    contextos pero con sentido algo diferente.

    En los ejemplos de (2) se observa una alternancia sistemtica entre el uso del pretrito

    simple en la versin (a) y el uso de perfecto compuesto destacado en la versin (b)

    correspondiente. Ahora se han de tener en cuenta las definiciones anteriores de 6.1.3. y de

    6.1.4. de Mara Moliner, que recordbamos en el cuadro anterior.

    (2)a (2)b

    Cmo es que vuelves a esta hora si ella slo haba pedido permiso hasta las nueve y media? La hiciste llegar tarde?

    Vaya horas de volver si ella haba firmado slo hasta las nueve y media. La has hecho llegar tarde?

  • 4.1. DIFERENCIAS DE ESTILO Pgina 23 de 30

    Le diste recuerdos mos? S.

    Qu dijo? Sigue dejando todas las damas en la fila de atrs?

    Le has dado recuerdos mos? le pregunt. S.

    Qu ha dicho? dije. Le has preguntado si sigue dejando todas las damas en la fila de atrs?

    Qu barbaridad! dijo. Qu te ha pasado?

    Se refera a la sangre.

    Me pele con Stradlater le dije.

    Dios mo! dijo. Qu demonios te ha pasado?

    Se refera a la sangre y todo eso.

    Me he peleado un poco con Stradlater dije.

    Probablemente le hice dao, pero no tanto como quera. Podra haberle hecho mucho ms, pero le pegu con la derecha y con esa mano no puedo cerrar muy bien el puo por lo de aquella fractura de que les habl.

    Probablemente le hice un poco de dao, pero no tanto como quera. Podra haberle dolido mucho, pero le pegu con la derecha y no puedo cerrar bien el puo con esa mano. Por los cortes aquellos de los que les he hablado.

    En espaol, como se sabe, se mantiene en casi todas las variantes de lengua la distincin

    de uso y de significado entre estas dos formas del pasado: las del pretrito simple (cant) y

    las del pretrito compuesto (he cantado) aunque en algunas variantes de lengua se prefiere

    una de las dos alternativas, que se usa con los sentidos de ambas. Pero la distincin es

    significativa y conviene mantenerla.

    En general, en pretrito simple (cant) se expresa un evento completado o terminado,

    situado en un momento ms o menos alejado del presente, del ahora enunciativo, y bien

    delimitado: llovi el lunes (pasado); dio un paseo por la tarde (de ayer), etc.

    En cambio, el pretrito compuesto (he cantado) expresa un evento, tambin completado

    o terminado pero situado en un momento ms o menos reciente, o prximo, o que incluye

    el ahora enunciativo: ha llovido el lunes (de esta semana); ha dado un paseo por la tarde

    (de hoy), etc. Los distintos tiempos expresan, como se ve, diferencias de situacin y de

    perspectiva.

    Segn esto, en los distintos ejemplos de (2) se han adoptado dos soluciones distintas (no

    interesan aqu los posibles motivos y causas del original ingls que las facilitan):

  • 4.1. DIFERENCIAS DE ESTILO Pgina 24 de 30

    En (a) los eventos en pretrito simple se sitan en un momento del pasado ms o

    menos ajeno al ahora del entorno: La hiciste llegar tarde?; Le diste recuerdos?;

    Qu dijo?; Me pele; Por los cortes aquellos de los que les habl.

    En cambio, en (b) los eventos en pretrito compuesto manifiestan una cierta

    proximidad o relacin con el ahora de los acontecimientos de situacin: Le has

    hecho llegar tarde?; Le has dado?; Qu ha dicho?; Me he peleado; Por los cortes

    aquellos de los que les he hablado.

    El caso de (3) es diferente.

    (3)a. Vamos, la invito. No quiere? le dije. La verdad es que me habra gustado mucho que aceptara.

    b. Vamos, venga conmigo. Por qu no? dije. Me habra gustado que hubiera aceptado.

    La identidad de sentido de aceptara en (a) y de hubiera aceptado en (b) se funda en la

    polisemia de aceptara, que puede usarse y documentarse con diferentes sentidos, segn se

    caracteriza en cualquier manual sobre el asunto. Resumiendo, en este caso, en (a), me

    habra gustado mucho que aceptara, el momento de aceptara puede entenderse como

    posterior o bien como anterior al momento de me habra gustado.

    Quizs por eso sea preferible la solucin de (b) donde el momento de hubiera aceptado

    solo se entiende en un nico sentido de un momento anterior al de me habra gustado.

    Decimos que es preferible (b) precisamente porque es unvoca la solucin hubiera

    aceptado frente al sentido equvoco y ambiguo de aceptara en (a), sin que esa

    ambigedad parezca relevante.

    Se puede recordar la definicin y distincin de estos dos tiempos en Mara Moliner

    El pretrito imperfecto y el pluscuamperfecto de subjuntivo, el primero referido al

    presente o al futuro y el segundo al pasado, se emplean para expresar un deseo en

    que se envuelve contradiccin de lo que otro dice o cree o un reproche porque,

  • 4.1. DIFERENCIAS DE ESTILO Pgina 25 de 30

    pudiendo, no haya realizado o realice la cosa a que el deseo se refiere: Todo fuera[-

    se] tan fcil [o tan difcil] como eso! (que no es nada difcil, a pesar de lo que t

    dices). Yo que tuviera [hubiera[-se] tenido] dinero como lo tiene [tena] l, para

    comprarlo! Yo que llegara a tiempo para conseguirlo!.

    En (4) tenemos dos ejemplos de nfasis del evento por dislocacin y anteposicin: lo que

    me hubiera gustado habra sido ir a, en (a); y Lo que podra hacer es decir en la versin

    (b) del segundo ejemplo de (4).

    (4)a (4)b

    En el fondo, lo que me hubiera gustado habra sido ir a casa un rato y charlar con Phoebe. Pero, en fin, como les iba diciendo, al poco de subir al taxi, el taxista empez a darme un poco de conversacin.

    Me habra gustado poder ir a casa y pegar la hebra un rato con Phoebe. Pero al final, al rato de ir en el taxi, el taxista y yo empezamos a hablar.

    Probablemente me habra quedado all como cinco minutos con los guantes en la mano sabiendo que lo que tena que hacer era romperle al to la cara. Hasta el ltimo hueso, vamos. Slo que no habra tenido agallas para hacerlo. Me habra quedado de pie, mirndole con cara de duro de pelcula y luego le habra dicho algo muy ingenioso, muy agudo.

    Habra tenido los guantes en la mano y todo eso, sabiendo que lo que tena que hacer era atizarle al to un puetazo en la mandbula o algo as, romperle la mandbula. Slo que no habra tenido agallas para hacerlo. Slo me habra quedado all de pie tratando de parecer un to duro. Lo que podra hacer es decir algo muy cortante y muy impertinente para que se enfadara en lugar de pegarle un puetazo en la mandbula.

    Estas dos soluciones permiten apuntar un par de observaciones:

    1, esta manifestacin del nfasis no es propia de una versin (a) o (b) sino que

    aparece por la conveniencia del texto, segn su autor;

    y 2, la versin alternativa puede incluir el mismo sentido enftico con la rotundidad

    del punto y seguido y del orden lineal: Me habra gustado poder ir a, en (a); y Le

    habra dicho algo muy en la versin (b).

  • 4.1. DIFERENCIAS DE ESTILO Pgina 26 de 30

    Las versiones (a) y (b) de (5) ponen de manifiesto el contraste entre el uso de los tiempos

    del comentario del presente en (a) y los tiempos de la narracin, del relato, en (b), con

    el mismo sentido.

    (5)a. En Ernie est siempre tan oscuro que seran capaces de servir un whisky a un nio de seis aos. Adems, all a nadie le importa un comino la edad que tengas. Puedes inyectarte herona si te da la gana sin que nadie te diga una palabra.

    b. En Ernies te serviran alcohol aunque tuvieras como seis aos porque estaba siempre muy oscuro y, adems, all a nadie le importaba la edad que tuvieras. Hasta podras ser un drogadicto y a nadie le importara nada.

    En (a), con las formas del presente: Est oscuro, y a nadie le importa que tengas;

    Puedes inyectarte sin que nadie te diga una palabra; se manifiesta el sentido de algo real, de

    algo vivido y experimentado, de certeza en lo dicho, de algo que se afirma con la seguridad

    de la experiencia.

    En cambio, en la correspondiente versin (b) los tiempos dominantes en imperfecto:

    Estaba siempre tan oscuro; A nadie le importaba; manifiestan un sentido narrativo de

    evento o estado, de forma de ser o de situacin, en el pasado narrado.

    As, entre las versiones (a) y (b) de (5) nos encontramos ante evidentes diferencias de

    Estilo, de apreciacin, de relevancia y coherencia expresiva con el entorno, y de

    consideraciones de cmo expresar mejor el sentido original (de la versin inglesa), cosa que

    queda fuera del mbito que nos ocupa.

  • 4.1. DIFERENCIAS DE ESTILO Pgina 27 de 30

    3. La Concordancia

    En las versiones de El Guardinque estamos estudiando no hay casos relevantes de

    concordancia que requieran ser mencionados por algn motivo.

    En el caso de (1) nos encontramos ante los famosos plurales con el sentido de parejas o

    de varios singulares: Los padres (padre y madre) de Juan; Los padres (un padre y otro padre)

    de Juan y de Mara (que NO son hermanos) Es el mismo caso de Los hermanos de Juan

    (hermano y hermana, o bien un hermano y otro hermano); como ocurre con los prncipes, los

    seores, etc.

    (1)a. Primero porque es una lata, y, segundo, porque a mis padres les dara un ataque si yo me pusiera aqu a hablarles de su vida privada.

    b. Primero porque me aburre y, segundo, porque a mis padres les daran dos ataques por cabeza si les dijera algo personal acerca de ellos.

    Segn esto, en la versin (a) de (1) ya se entiende muy bien el sentido distributivo de les

    dara un ataque, referido a cada uno de los dos miembros de la pareja de padres (padre y

    madre) del protagonista. Por eso parece ms sorprendente la versin (b), cuyo motivo o

    fundamento se nos escapa y no parece justificado como alternativa al sentido de (a).

    En el caso de (2) estamos ante un brillante y raro hallazgo literario de concordancia de

    sentido en la versin (a).

    (2)a. Faltaban pocos minutos para la cena y haba anochecido bastante, pero nosotros seguamos dale que te pego metindole puntapis a la pelota. Estaba ya tan oscuro que casi no se vea ni el baln, pero ninguno queramos dejar de hacer lo que estbamos haciendo.

    b. Faltaba muy poco para la cena y ya era bastante de noche, pero nosotros seguamos dndole al baln. Cada vez estaba ms oscuro y ya casi ni podamos verlo, pero no queramos dejar de hacer lo que estbamos haciendo.

    En efecto, la versin (a) de (2), de concordancia de sentido, parece ms literaria y

    creativa que cualquiera de sus alternativas con sentido pretendidamente igual:

    (2)a. Pero ninguno queramos dejar de hacer lo que estbamos haciendo.

    b. Pero no queramos dejar de hacer lo que estbamos haciendo.

  • 4.1. DIFERENCIAS DE ESTILO Pgina 28 de 30

    c. Pero ninguno de nosotros queramos dejar de hacer lo que estbamos haciendo.

    d. Pero ninguno de nosotros quera dejar de hacer lo que estbamos haciendo.

    e. ??Pero ninguno quera dejar de hacer lo que estbamos haciendo.

    f. Pero nadie quera dejar de hacer lo que estbamos haciendo.

    g. ??Pero nadie de nosotros queramos dejar de hacer lo que estbamos haciendo.

    Frente al tono tajante y escueto de (2b), en la versin (a) se recoge con nfasis el sentido

    de nosotros mencionado en el enunciado anterior (Nosotros seguamos dale que te pego)

    de manera implcita, sin la reiteracin que se observa en una posible versin como (2c). Ese

    sentido implcito de nosotros en (2a) se sublima en la versin (b), donde solo se conserva

    explcita la negacin (no queramos) y se elude la reiteracin de la negacin de persona

    (ninguno) y de las personas referidas (nosotros).

    Por eso parece ms literaria y explcita la versin (a) y ms escueta y elptica la versin

    (b).

    En este mismo mbito de la concordancia en expresiones como las de (3) y (4) tiene

    inters advertir las distintas soluciones adoptadas en cada caso.

    (3)a No haba conocido a Allie porque era el primer verano que pasaban en Maine antes haban ido a Cape Cod, pero yo le habl mucho de l. Le encantaban ese tipo de cosas.

    (3)b Ella no haba conocido a Allie ni nada, porque se era el primer verano que pasaba en Maine antes haba ido a Cape Cod, pero yo le habl mucho de l. Le interesaban ese tipo de cosas.

    (4)a Ese era exactamente el tipo de cosas sobre el que nunca coincida con l. Le dije que apostara mil dlares a que Cristo no haba mandado a Judas al infierno, y hoy los seguira apostando si los tuviera.

    (4)b En eso exactamente era en lo que no estaba de acuerdo con l. Le dije que apostara mil dlares a que Jess no haba mandado a Judas al infierno. An los seguira apostando, si los tuviera.

    En las dos versiones de (3) se adopta la misma solucin de concordancia de sentido.

    (3)a. Le encantaban ese tipo de cosas.

    b. Le interesaban ese tipo de cosas.

  • 4.1. DIFERENCIAS DE ESTILO Pgina 29 de 30

    c. Le encantaba ese tipo de cosas.

    d. Ese tipo de cosas le encantaba.

    e. Ese tipo de cosas le encantaban.

    En ambas versiones de (3) se ha preferido la solucin (a-b) de verbo en plural

    (encantaban, interesaban), aunque est antepuesto y, segn los manuales, sera preferible la

    forma singular de (3c). Tambin los manuales recomiendan la versin (3d), en singular,

    aunque explican y justifican la versin (3e), en plural, con el verbo en su sitio, pospuesto al

    tema.

    Pero las versiones (a-b) de (3) son ms literarias por dislocacin del verbo a la izquierda y

    por la concordancia de sentido en plural: le encantaban esas cosas.

    En (4a) se adopta la solucin contraria a las de (3). Se prefiere la concordancia en

    singular: ese era el tipo de cosas sobre el que nunca; y no la solucin en plural: ese era el

    tipo de cosas sobre las que nunca, que se podra adoptar, por anteposicin del tema y

    concordancia de sentido.

    En (4a), el tipo de cosas se interpreta como un eso y se prefiere la solucin singular:

    Sobre el que nunca coincida

    En lo que no estaba de acuerdo

  • 4.1. DIFERENCIAS DE ESTILO Pgina 30 de 30

    REFERENCIAS

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