evaluación del grado de afectación por entorchamiento y

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Evaluación del grado de afectación por entorchamiento y herbivoría en una población de Espeletia grandiflora Humb. & Bonpl. de la cuenca alta de la Quebrada Calostros del Parque Nacional Natural Chingaza. Juan Mario Torres Quimbaya TRABAJO DE GRADO Presentado como requisito parcial para optar al título de BIOLOGO PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA FACULTAD DE CIENCIAS CARERRA DE BIOLOGÍA BOGOTÁ D.C. 2013 [Escr

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Evaluación del grado de afectación por entorchamiento y herbivoría en una población

de Espeletia grandiflora Humb. & Bonpl. de la cuenca alta de la Quebrada Calostros del

Parque Nacional Natural Chingaza.

Juan Mario Torres Quimbaya

TRABAJO DE GRADO

Presentado como requisito parcial para optar al título de

BIOLOGO

PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA

FACULTAD DE CIENCIAS

CARERRA DE BIOLOGÍA

BOGOTÁ D.C.

2013

[Escr

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Evaluación del grado de afectación por entorchamiento y herbivoría en una población

de Espeletia grandiflora Humb. & Bonpl. de la cuenca alta de la Quebrada Calostros del

Parque Nacional Natural Chingaza.

Juan Mario Torres Quimbaya

Ingrid Schuler, Ph.D. Andrea Forero

Decano Académico Director Carrera de Biología

Facultad de Ciencias Pontificia Universidad javeriana

[Escriba it d l

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4

NOTA DE ADVERTENCIA

Artículo 23 de la Resolución No. 13 de Julio de 1946.

“La Universidad no se hace responsable por los conceptos emitidos por sus alumnos en sus

trabajos de tesis. Solo velará porque no se publique nada contrario al dogma y a la moral

católica y porque las tesis no contengan ataques personales contra persona alguna, antes bien

se vea en ella el anhelo de buscar la verdad y la justicia”.

[Escriba una

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TABLA DE CONTENIDO

Página

RESUMEN 6

1. INTRODUCCION 7

2. PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA 7

3. MARCO TEORICO 9

3.1. Patología Vegetal 9

3.1.1. Agentes causales o determinantes de patologías en plantas 9

3.1.2. Efectos de las patologías en los individuos de plantas 10

3.1.3. Efectos del desarrollo de patologías en poblaciones de plantas. 11

3.1.4. Manifestaciones o síntomas de patologías en plantas 12

3.1.4.1. Entorchamiento, Encrespamiento o enrollamiento 12

3.1.4.2. Herbivoría 13

3.1.4.2.1. Efectos de la herbivoría en las plantas y su relación con patógenos 13

3.2. Epidemiología Vegetal o Epifitia 14

3.2.1 Incidencia. Severidad y Prevalencia 15

3.3 Páramo 16

3.3.1 Servicios ecosistémicos 17

3.3.2 Espeletia grandiflora Humb. & Bonpl 17

4. OBJETIVOS

4.1 General 19

4.2 Específicos 19

5. METODOLOGIA

5.1 Área de estudio 19

5.2. Caracterizar la estructura de la población de E. grandiflora de la cuenca de la quebrada

Calostros afectada por entorchamiento y herbivoría. 20

5.3 Caracterizar el o los grado(s) de afectación por entorchamiento y herbivoría de la

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población afectada de E. grandiflora de la cuenca de la quebrada Calostros. 20

5.4 Evaluar el nivel de asociación entre grado(s) de afectación y clases de tamaño de la

población de E. grandiflora de la cuenca de la quebrada Calostros. 21

6. RESULTADOS.

6.1 Caracterización de la estructura de la población afectada. 22

6.2 Caracterización de los grados de afectación. 24

6.3 Evaluar el nivel de asociación entre clases de tamaño y grados de afectación de la

población afectada. 28

7. DISCUSIÓN 31

7.1 Recomendaciones 34

8. BIBLIOGRAFÍA 34

9. ANEXOS 38

RESUMEN

En el Parque Nacional Natural Chingaza (PNNC), en la cuenca de la quebrada Calostros se

evaluó el grado de afectación en una población de E. grandiflora, con signos de

entorchamiento y herbivoría, en la roseta y en el meristemo, en la que se ha reportado

deterioro severo desde el año 2009. Se encontró que la población de E. grandiflora presentó

una incidencia del 32±8% por herbivoría y del 35±8% por entorchamiento y que la

proporción de individuos afectados fue mayor en las clases intermedias. La severidad por

entorchamiento fue mayor a la de herbivoría. En cuanto a las clases de tamaño no todas se

encontraron igualmente afectadas y la severidad aumentó a medida que incrementó la altura

de la planta. Se encontró que la biomasa, la abundancia y la vistosidad de la planta no parecen

explicar la variación existente en las proporciones de individuos afectados. Dada la baja

severidad en la mayoría de los individuos afectados, se sugirió que el daño causado en la

población no tendría consecuencias graves para la supervivencia de los individuos. No

obstante, la clase Juvenil presentó poca cantidad de hojas del meristemo y 100% de afectación

en ellas, sugiriendo que a futuro la población estaría gravemente amenazada en cuanto a su

capacidad de reclutamiento y su probabilidad de aumentar las tasa de crecimiento.

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1. INTRODUCCIÓN

El desarrollo de patologías en plantas conlleva al deterioro de estructuras que afectan sus

funciones vitales (Agrios et al, 2005). Gran cantidad de evidencia indica que las fitopatologías

influencian la densidad de la población, su estructura genética, su estructura espacial y la

estructura y dinámica de las poblaciones, lo que puede a la vez condicionar su supervivencia y

generar procesos de extinción local (Gilbert 2002).

En la cuenca de la quebrada Calostros del PNNC se encuentra ampliamente distribuida y en

alto grado de conservación la especie E. grandiflora, aun así se ha estado reportando desde el

año 2009 individuos con grado de deterioro severo por herbivoría y entorchamiento. Desde el

año 2012 se ha empezado a adelantar un trabajo sobre monitoreo de poblaciones de frailejón

dentro del marco del programa INAP, en parcelas permanentes previamente establecidas por

Beltrán y colaboradores en el 2011. Varela y colaboradores (2013) analizan la microbiota

asociados a la roseta y aunque ha sido de sus interés mirar el grado de severidad por

herbivoría y entorchamiento, solo se han obtenido datos por individuo, pero aún se desconoce

el estado actual de afectación en el que se encuentra la población afectada de E. grandiflora

de la cuenca de la quebrada Calostros.

El presente trabajo tiene como objetivo principal evaluar el nivel de daño o grado de

afectación en el que se encuentra esta especie y el efecto que tienen los aspectos relacionados

a la altura de cada una de las clases de tamaño sobre el grado de afectación en el que se

encuentra esta población.

2. PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA

El páramo es un ecosistema en donde los elementos de la vegetación y del suelo que

conforman la matriz del paisaje, han desarrollado gran potencialidad para interceptar y

almacenar agua, determinando su valor estratégico (Guhl 1982).

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Las entradas de agua al ecosistema pueden ser expresadas a partir de la precipitación directa y

de la precipitación horizontal o neblina típica de los sistemas de alta montaña tropical. El agua

que entra, se distribuye por el ecosistema a partir de rutas y compartimientos diferentes, antes

de su disposición final en los ríos y depósitos subterráneos. Una de las rutas incluye la

intercepción, que es el proceso de retención parcial de agua, por parte de la vegetación, antes

de ser evapotranspirada (León y Castillo 1998). Entonces, es de inferir que, cualquier

disturbio que ocurra en la vegetación tendrá repercusiones en la dinámica hidrológica del

ecosistema.

Espeletia grandiflora es una especie de frailejón endémica de la cordillera Oriental de

Colombia y es considerada la especie dominante en el estrato arbustivo con Calamagrostis

effusa en el estrato herbáceo, definiendo así la comunidad predominante de los páramos de

esta cordillera (Lozano & Schnetter 1976, Vargas, 1991, Rangel-Ch & Ariza-N 2000). Esta

especie presenta hojas dispuestas en forma de roseta que le permite redirigir el agua

proveniente de la precipitación hacia la base de la médula que es reservorio de agua, y está

presente en el tronco de la planta (Goldstein, 1989; Monasterio & Sarmiento, 1991). Además

observaciones directas indican que las hojas altamente pubescentes de la Espeletia son

eficientes en capturar el agua de la niebla (Tobón & Gil, 2007).

En marzo del año 2009, en el marco del desarrollo del proyecto INAP, del ministerio de

ambiente, luego de una visita a la cuenca alta de la Quebrada Calostros del PNNC que está

ubicado en la cordillera Oriental de los Andes colombianos y hace parte del complejo de

páramos de Chingaza, se reportó deterioro severo por herbivoría con destrucción de las hojas,

pérdida del meristemo y entorchamiento en frailejones E. grandiflora y Espeletia Uribei,

estableciéndose un área afectada de 376.600 m2. Para junio del mismo año algunos de los

frailejones registrados como afectados se encontraron muertos y, en noviembre del mismo

año, el área afectada se extendió cuenca abajo y en aproximadamente 2.247.600 m2 (Medina y

Varela, 2009). Aunque en la actualidad se destacan los alcances que puedan tener estos daños,

hasta la fecha existen pocos seguimientos a las afectaciones reportadas, por lo que se

desconoce el estado actual o nivel de afectación en el que se encuentra la población de E.

grandiflora, de la cuenca de la quebrada Calostros, y como el grado de afectación podría

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9

poner en peligro la viabilidad de la especie. Además se desconoce como el grado de

afectación influye en la supervivencia de los individuos de cada una de las clases de tamaño.

El propósito de la presente investigación es evaluar el grado o nivel de daño que han causado

las afectaciones por entorchamiento y herbivoría sobre la población de E. grandiflora y como

esto puede estar relacionado con las características de desarrollo de los individuos. Por lo

tanto, el análisis de la interacción entre el grado de afectación y la población afectada tiene

como fin conocer el nivel de asociación existente entre las afectaciones y su relación con las

clases de tamaño presentes en la población de E. grandiflora de la cuenca de la quebrada

Calostros.

3. MARCO TEORICO

3.1 Patología vegetal

Las enfermedades en las plantas son atribuidas a cambios anormales en los procesos

fisiológicos de suficiente duración capaces de causar disminución o cesación de las

actividades vitales que puede ser causada por agentes bióticos o abióticos (American

Phytopatological Society, 1973). Una planta se enferma, en la mayoría de los casos, cuando es

atacada por un patógeno o cuando es afectada por un agente abiótico. Entonces para que una

enfermedad ocurra, es necesario que las condiciones proporcionadas por el hospedante, las

condiciones ambientales y las características del patógeno coincidan tanto en el tiempo como

en el espacio (Agrios et al, 2005). Así se tendrían tres componentes principales que

interactúan para el desarrollo de la fitopatología.

3.1.1 Agentes causales o determinantes de patologías en plantas

Un criterio usado para la agrupación de las enfermedades es el tipo de agente causal de la

enfermedad. Es así que existen las enfermedades infecciosas o de tipo biótico como las

causadas por hongos, procariotas, plantas parasíticas, algas verdes, virus, viroides, nemátodos

y protozoos. Por otro lado, están las no infecciosas o abióticas causadas por bajas o altas

temperaturas, carencia o exceso de humedad en el suelo, carencia o exceso de luz, carencia de

oxígeno, polución del aire, deficiencia de nutrientes, toxicidad mineral y acidez o alcalinidad

del suelo (Agrios et al, 2005).

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Existen factores bióticos y abióticos que se consideran causales por que facilitan y

contribuyen al establecimiento del patógeno o al desarrollo de una patología, dentro de los

bióticos encontramos la susceptibilidad del hospedero, el grado de uniformidad genética en

una población de plantas y el estado de desarrollo (Agrios et al, 2005). Respecto a las

características propias de los agentes determinantes del desarrollo de las patologías

encontramos los niveles de virulencia, la cantidad de inóculo cerca al hospedero, el tipo de

reproducción del patógeno, la ecología del patógeno y el modo de dispersión del patógeno

(Arauz et al, 1991). Dentro de los factores abióticos están los ambientales como la humedad,

temperatura, aire, luz, pH del suelo, estructura del suelo y desbalances nutricionales (Agrios et

al, 2005). Baker (1988) destacó que la temperatura era uno de los factores ambientales que

mayor influencia tenía en el desarrollo de las enfermedades y en la expresión de los síntomas

como se ve claramente en las deficiencias nutricionales de la planta. Además se ha

considerado que los diferentes tipos de estrés en plantas tales como la salinidad, patógenos,

polución del aire favorecen el desarrollo de las patologías (Taiz & Zeiger 2010). Por ejemplo,

se ha podido observar que plantas bajo estrés nutricional, de un mismo tipo y edad en el

mismo ambiente tienden a desarrollar síntomas similares en un mismo tiempo de diferentes

patologías. Sin embargo, si el estrés es el resultado de la patología, el desarrollo de síntomas

tendrá una tendencia a variar entre plantas hasta un estado relativamente avanzado que pueda

alcanzar la patología (Taiz & Zeiger 2010).

3.1.2. Efectos de las patologías en los individuos de plantas

Una especie solo puede establecerse como patógeno si la planta cumple con requisitos como

el proporcionar un nicho ecológico adecuado, lo que la convierte en un hospedero potencial.

Además el patógeno debe presentar mecanismos que le permitan acceder a los nutrientes que

se encuentran dentro de la planta y que las reacciones defensivas de la planta no sean capaces

de detectar al patógeno o que no sean lo suficientemente eficientes como para repeler su

ataque (Arauz et al, 1998).

Los efectos a nivel individual pueden ser muy diversos, por ejemplo, la producción de

enzimas por parte de los patógenos produce la destrucción de los tejidos del hospedante, la

producción de toxinas por parte del patógeno produce clorosis o necrosis, ciertos

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11

polisacáridos que son producidos por patógenos son capaces de bloquear los espacios

intercelulares impidiendo el paso de moléculas inductoras de la defensa y bloquean el xilema

produciendo síntomas de marchitez. Muchos patógenos alteran el crecimiento de la planta al

modificar la producción de los reguladores de crecimiento. Por otro lado, los efectos a nivel

fisiológico que producen las patologías llevan a una disminución en la producción por unidad

de área (Arauz et al, 1998).

Las plantas pueden ser afectadas en cualquier estructura de su morfología llevando consigo

daños fisiológicos, por ejemplo los patógenos son capaces de causar la pudrición en la base

del tallo, destrucción o mal funcionamiento de las raíces, llevándola a la marchitez y hasta a la

muerte o provocando deficiencias o desbalances nutricionales. El daño foliar conlleva a la

disminución de la fotosíntesis a medida que incrementa la intensidad de la enfermedad y al

aumento en la tasa de respiración. También se alteran las relaciones fuente sumidero de

carbono, ya que los tejidos enfermos actúan como sumideros de energía reduciendo la

exportación de fotoasimilados hacia otros tejidos, por lo que disminuye el presupuesto de

carbono para el crecimiento de la planta (Arauz et al, 1998).

3.1.3. Efectos del desarrollo de patologías en poblaciones de plantas

Sí coinciden en el espacio y en el tiempo un hospedero susceptible, un patógeno y un

ambiente adecuado, no solo determinarán la presencia de la enfermedad en las poblaciones de

plantas sino también su magnitud (Arauz et al, 1998). Sin embargo, la frecuencia y la

probabilidad de éxito de las invasiones depende de la uniformidad genética, número de

individuos de la población y de la distribución espacial de los individuos hospederos, cada

uno de estos aspectos pueden ser influenciados por los patógenos con el fin de prosperar en el

establecimiento y desarrollo de la enfermedad (Gilbert 2002). Algunos estudios enfocados a

analizar el efecto de la cantidad de enfermedad sobre la densidad de los individuos del

hospedero han demostrado que la densidad se correlaciona positivamente con la severidad de

la enfermedad, mostrando que los individuos aislados espacialmente tienen una probabilidad

mayor de ser fuertemente afectados (Burdon & Chilvers, 1982). Al contrario, otros estudios

enfatizan el hecho de existir una mayor probabilidad en el incremento de enfermedad

conforme aumenta la densidad de la población, debido a la disponibilidad del tejido para

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12

infectar por parte del patógeno, claro está que en este caso el éxito del desarrollo de la

enfermedad depende más de la capacidad de dispersión del patógeno y de las condiciones

ambientales que favorecen los eventos reproductivos de este (Burdon & Chilvers, 1982).

3.1.4. Manifestaciones o síntomas de patologías en plantas

Independientemente del origen de la patología, está siempre presenta una expresión o

manifestación externa que es denominada síntoma, la cual puede manifestarse morfológica,

histológica o fisiológicamente en la planta enferma (Agrios, 2005). Gran parte de estos

síntomas pueden observarse fácilmente y se consideran una excelente guía para reconocer las

enfermedades, aunque en algunos casos se pueden presentar inconvenientes debido a que un

mismo síntoma puede ser originado por diferentes grupos de patógenos, por condiciones

ambientales diferentes o por características genéticas diferentes (Agrios, 2005). Para

reconocer cuales son los síntomas expresados por las enfermedades en plantas se han

clasificado como: síntomas morfológicos o externos que se derivan en necróticos, (ej:

secamiento, halos amarillos, halos verdes, marchitez, muerte descendente, manchas

necróticas, pudriciones, cancros, mal del talluelo y gomosis), hipoplásticos, (ej: enanismo,

crecimiento en roseta, clorosis, mosaico, moteado), y hiperplásticos (ej: tumores, callos,

enrollamiento, sarna). También están los síntomas histológicos o internos y los síntomas

fisiológicos (Rivera, 2007).

3.1.4.1 Entorchamiento, encrespamiento o enrollamiento

Es un síntoma morfológico que sucede por el crecimiento desigual de la lámina foliar lo que

causa que la hoja se encorve hacia arriba, enrollándose o encrespándose, al desarrollarse más

rápidamente en ciertas partes de la hoja. Este síntoma sucede con mucha frecuencia en plantas

infectadas por virus. Existen ejemplos de este tipo de síntoma como los descritos en el

enrollamiento amarillo del tomate y el virus del enrollamiento de la papá (Torres, 2002). Otro

ejemplo es el entorchamiento del arroz, enfermedad que afecta a todas las variedades de arroz

y es transmitida por un hongo del suelo llamado Polymyxa graminis que se encuentra en los

diez primeros cms del suelo, cerca de las raíces sirviéndole de vector al virus (Aristizabal,

1999).

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13

3.1.4.2. Herbivoría

La herbivoría es la interacción planta-animal más frecuente en la naturaleza (Weis et al,

1989). A tal punto que se han documentado los fuertes efectos de la herbivoría de insectos en

el crecimiento, reproducción y supervivencia de las plantas (Huntly 1991). Coley & Barone

(1996) argumentan que la herbivoría por insectos en una fuerza selectiva mucho más potente

en los trópicos que en las zonas templadas, por la diversidad existente de herbívoros en los

trópicos.

3.1.4.2.1 Efectos de la herbivoría en las plantas y su relación con patógenos

La herbivoría afecta de diferente manera a las plantas, dependiendo de los factores bióticos y

abióticos involucrados (Coley & Barone, 1996, Medinaceli et al, 2004). El impacto que la

herbivoría tiene en la eficacia biológica de la planta es el resultado de las interacciones entre

las plantas, sus consumidores y sus enemigos naturales. Por ejemplo, sucede frecuentemente

que los patógenos de plantas coocurren con los herbívoros en la misma planta hospedera. Está

interacción entre patógenos y herbívoros puede ser directa y positiva sí los herbívoros

consumen las toxinas, esporas y micelio con las que ataca el patógeno a la planta, además

puede ser negativa cuando el insecto es quién transporta el patógeno, le sirve de vector o el

daño que este le ocasiona por herbivoría a la planta ayuda a romper las barreras físicas de

defensa contra los patógenos (Tack y Dicke, 2013). Otro de los impactos negativos de la

herbivoría es la disminución de la tasa fotosintética que puede conllevar a la pérdida de

nutrientes, según la edad y los tejidos que hayan sido extraídos. Las plantas reaccionan a la

pérdida de hojas con una explosión de nuevo crecimiento, con un consumo de nutrientes que

de otra forma hubieran ido a parar al crecimiento y la reproducción. La defoliación también

hace que la planta recurra a defensas químicas, con un costo considerable. Con frecuencia, la

extracción de nutrientes y fenoles de las raíces las expone al ataque por parte de hongos,

mientras la planta concentra sus defensas en las partes aéreas. La defoliación severa, y el

posterior crecimiento foliar, alteran fisiológicamente a la planta (Granados et al, 2008).

Las plantas pueden ser expuestas a diferentes niveles de herbivoría a través de su ontogenia

variando tanto el impacto como los tipos de resistencia (Boege & Marquis, 2005). Janzen

(1976) reportó un declive significativo en la viabilidad de semillas y plántulas en relación con

Page 13: Evaluación del grado de afectación por entorchamiento y

14

el incremento en el grado de herbivoría y en un estudio de Medinaceli et al (2004) se encontró

que los individuos de mayor tamaño presentaron un mayor índice de herbivoría con respecto a

los más pequeños debido a que estos individuos son el foco de atracción para los herbívoros.

3.2. Epidemiología vegetal o epifitia

Epifitia significa enfermedad que afecta a una gran cantidad de plantas de una especie

determinada y es como se denomina técnicamente la epidemia en plantas. Existe o se presenta

una epidemia cuando se da un desarrollo de enfermedad súbito y rápido o extendido. Además

se debe tener en cuenta la dinámica de la enfermedad, es decir, el cambio en la cantidad de

enfermedad con el tiempo. Por "cantidad" de enfermedad se quiere decir incidencia (el

número de plantas afectadas respecto a la población total), severidad (la cantidad de hojas

afectadas sobre el número total de hojas), o una combinación de ambos (Cooke et al, 2006).

Según esta definición, podemos ver epidemias rápidas o lentas y aún epidemias "negativas",

en que hay una disminución de la cantidad de enfermedad con el tiempo. Otra forma de ver

una epidemia “negativa” es por ejemplo, si usamos la proporción de individuos infectados

como una medida de incidencia de enfermedad y durante la temporada seca se forman hojas

nuevas y sanas mientras que las hojas infectadas se caen, vamos a ver un cambio negativo en

la cantidad de enfermedad (Cooke et al, 2006). Las enfermedades en las plantas comúnmente

comienzan a un nivel bajo (un número pequeño de plantas afectadas y una cantidad pequeña

del tejido vegetal afectado) y llegan a ser de interés para nosotros solamente cuando su

incidencia y severidad aumenta con el tiempo (Cooke et al, 2006). Para entender la

epidemiología de las enfermedades en las plantas se deben tener en cuenta el estudio de los

factores ambientales que interactúan con la planta enferma. Con respecto al hospedero se debe

conocer la naturaleza de su resistencia ya que sí está disminuida parcial o totalmente afectará

aumentado la velocidad de desarrollo de la enfermedad (Cooke et al, 2006). Otro aspecto a

considerar es el hábito del hospedero, por ejemplo la estructura de la planta puede influenciar

la forma en la que se disemina la enfermedad y de esta forma la arquitectura de la planta

puede influenciar el microclima para el patógeno y también la cantidad de daño causado por

los efectos del viento, lo que facilitaría la entrada de patógenos (Xu and Madden, 2002).

Page 14: Evaluación del grado de afectación por entorchamiento y

15

3.2.1. Incidencia y Severidad

Incidencia es el número de veces que la(s) enfermedad(es) se puede registrar en una población

en un tiempo determinado. Es decir que la incidencia es la proporción (o el porcentaje) de

individuos de una población que manifiestan la enfermedad dentro del total de una población

en un tiempo definido (Nutter, 2001). La incidencia medida como proporción también indica

la probabilidad de que un individuo de la población resulte afectado por la enfermedad (Ruiz

et al. 2001). La ecuación planteada para incidencia es:

I= (número de individuos afectados / número de individuos de totales)×100

Dónde: I = porcentaje de incidencia en la población

La incidencia de la enfermedad es una variable binaria, que describe el estado de salud o

enfermedad de una planta (Madden and Hughes, 1999). Puede ser adecuada para llevar a cabo

la evaluación de las infecciones sistémicas, las cuales pueden llevar a la pérdida total de la

planta, a infectar las raíces o causar una lesión que lleve a la muerte de la hoja, pero también

esta variable puede usarse en los estadios tempranos de una epidemia causada, por ejemplo,

por un patógeno foliar cuando tanto la incidencia y la severidad están relacionadas y se

incrementan simultáneamente (James, 1983).

La severidad es la variable que indica que tan grave es la enfermedad en un individuo (Gauhl,

1989). Puede ser definida como el área foliar afectada (James, 1983) y a nivel de individuos

como el número de hojas afectadas respecto al total de hojas (Arauz et al, 1998; Nutter, 2001).

Para la evaluación de la severidad de la enfermedad se pueden usar los métodos cuantitativos

directos que utilizan mediciones que han sido definidas de la siguiente manera (Cooke et al,

2006):

Severidad de la enfermedad (S)= (área de tejido infectado / área de tejido total) * 100 o

(hojas afectadas /total de hojas) * 100

En general la incidencia es más fácil y más rápida de evaluar que la severidad y es por lo tanto

más conveniente usarla en la evaluación de las enfermedades donde son necesarias muchas

Page 15: Evaluación del grado de afectación por entorchamiento y

16

observaciones o donde hay alguien no experto en la recolección de los datos (Madden and

Hughes, 1995); sin embargo, la severidad puede ser más importante ya que se puede usar en

la medición de varias enfermedades y da a conocer el estado actual de daño que hay en cada

individuo afectado, permitiendo saber si con el tiempo, realmente ha habido o no un progreso

de la enfermedad presente en cada individuo (Xu and Madden, 2002).

Los datos colectados para la evaluación de la enfermedad deben haber sido caracterizados por

estado de desarrollo de la planta en el tiempo en que se haga la evaluación porque los efectos

de un nivel dado de enfermedad en el crecimiento de la planta y la importancia del nivel de la

enfermedad en relación al progreso de una epidemia variará en los diferentes estadios de

tamaño de la planta (Cooke et al; 2006).

3.3. Páramo

El páramo es un ecosistema tropical húmedo que está sobre el límite del bosque, es un bioma

de alta montaña ubicado entre los 2800 y los 4200 msnm, hace parte de las montañas

tropicales de América y se encuentra distribuido de manera discontinua entre las latitudes de

11°N y 8°S (Luteyn, 1999). Geológicamente es reciente, 2–4 millones de años, por ende se

considera como uno de los ecosistemas de montaña que muestran mayor diversidad y

endemismo en el mundo (Luteyn, 1999). El páramo presenta baja variación en la temperatura

media entre estaciones, fuertes variaciones térmicas diarias, altos niveles de radiación UV,

fuertes vientos, baja presión atmosférica, bajos niveles en la presión parcial de oxígeno y la

presencia de fuertes heladas (Troll 1960; Vargas, 2002; Luteyn, 1999). Los suelos son jóvenes

y poco desarrollados, almacenan grandes cantidades de agua, son pobres en nutrientes y de

pH ácido (Baruch, 1979: Vargas, 2002). Todas estas condiciones representan un conjunto de

factores climáticos, edafológicos y geomorfológicos que condicionan la presencia de los

organismos que han logrado adaptarse a estos ambientes extremos (Vargas, 2002). Colombia

posee el 49% de los páramos del mundo es decir de los 36.000 km2 de páramo, la mayor

extensión la tiene Colombia, con 14.400 km2. Los páramos colombianos son

atmosféricamente húmedos con precipitaciones por encima de los 1500 - 2000mm anuales,

según la clasificación de (Cleef 1981; Rangel 2000).

Page 16: Evaluación del grado de afectación por entorchamiento y

17

3.3.1 Servicios ecosistémicos de los páramos

Los servicios ecosistémicos se definen como “las condiciones y procesos a través de los

cuales los ecosistemas naturales y las especies que los conforman, ayudan a mantener y

satisfacer la vida humana”. Además se ha tenido en cuenta que los ecosistemas desarrollan

servicios fundamentales que mantienen la vida y que son de gran relevancia para el avance de

las civilizaciones (Daily et al, 1997).

Los páramos de la región andina son reconocidos por su alta presencia de endemismos porque

sus ecosistemas son los mayores retenedores y reguladores del ciclo hidrológico, y porque

ante el efecto del cambio climático estos ecosistemas son altamente vulnerables. Además son

hábitat y sustento de poblaciones indígenas y locales con valiosos conocimientos tradicionales

vinculados al ecosistema, entre otros valores y servicios, por lo que requieren especial

atención de la comunidad local e internacional (Daily et al, 1997)

Así pues, el servicio del páramo con mayor reconocimiento es la regulación hídrica, puesto

que es uno de los factores que determina la calidad y cantidad de agua disponible para la vida

y el bienestar humano (Van der Hammen et al, 1986). Para Hofstede (1995), el ecosistema

páramo, provee fundamentalmente dos servicios ambientales: Provisión de agua y

almacenamiento del carbono. De la misma manera, considera un servicio la diversidad de

especies y de paisajes, la diversidad de cultivos, el turismo y los suelos.

3.3.2. Espeletia grandiflora

Es una especie endémica de la cordillera Oriental de Colombia que domina con

Calamagrostis effusa la comunidad predominante de los paramos de esta cordillera y se

encuentra en un rango altitudinal que oscila entre 2900 - 4100 m (Fagua, 2007). La especie

presenta una alta tasa de crecimiento que es muy importante para las plantas más pequeñas

porque los individuos que crecen rápidamente y/o retienen hojas viejas en sus tallos

(necromasa) tienen mayor probabilidad de sobrevivir al frio y a la sequía, como se ha

observado en otras espeletias (Smith, 1981; Goldstein et al, 1989; Monasterio, 1986; Mora-

Osejo & Sturm, 1994). Además se ha observado que en condiciones sin disturbio antrópico, la

Page 17: Evaluación del grado de afectación por entorchamiento y

18

mayor mortalidad de individuos ocurre a nivel de juveniles y plántulas (Estrada y Monasterio,

1988; Hofstede, 1995; Premauer, 1999). Estas rosetas gigantes presentan una médula central

voluminosa que les permite el almacenamiento de agua durante la noche para sobrellevar las

altas tasas de transpiración que se dan durante la mañana (Goldstein et al, 1985). El

almacenamiento de agua es la forma como estas plantas regulan el ciclo hídrico, dado que la

mayor cantidad de agua se pierde por evapotranspiración y otra gran parte termina en los

acuíferos subterráneos (Goldstein et al, 1985; Monasterio y Sarmiento, 1991). Otra estrategia

adaptativa de esta especie es que las hojas se repliegan durante la noche, confiriendo

protección a heladas tanto a hojas jóvenes como a animales que habitan la roseta, como

insectos y arañas (Hedberg y Hedberg, 1979).

Espeletia grandiflora se caracteriza por su forma de roseta caulescente y leñosa que puede

llegar a alcanzar los 2 metros de altura, de grandes hojas altamente pubescentes, soportada

sobre un tallo no ramificado, las hojas inmaduras forman un denso brote alrededor del

meristemo apical. Las hojas muertas o necromasa persisten en la planta formando un grueso

cilindro alrededor del tallo. Las flores se disponen en un arreglo en forma de capítulo

disciforme o cabezuela que cuelga de un largo tallo (inflorescencias axilares) en antesis. Cada

capítulo tiene dos tipos de flores, la mayoría de ellos son discos de flores, las cuales son

tubulares, actinomorfas, tienen un gineceo estéril que forma la parte masculina del capítulo y

está localizado hacia el centro del capítulo. Los capítulos están rodeados por flores liguladas o

flores femeninas, las cuales son zigomórficas con una raya larga amarilla. Solo las flores

macho tienen nectarios, las cuales son localizadas en la base de la corola, alrededor del estilo;

los cinco estambres tienen filamentos libres y las anteras están fusionadas, formando un tubo

alrededor del estilo (Fagua & Gonzales, 2007). Esta forma de crecimiento ha evolucionado

independientemente en las regiones alpinas del mundo y está ausente en las regiones alpinas

extra-tropicales. Por lo tanto se asume que esta forma de roseta es una respuesta adaptativa al

ambiente alpino tropical (Hedberg, 1979).

Page 18: Evaluación del grado de afectación por entorchamiento y

19

4. OBJETIVOS

4.1 GENERAL

Evaluar el grado de afectación por entorchamiento y herbivoría en una población de Espeletia

grandiflora de la cuenca de la quebrada Calostros en el Parque Nacional Natural Chingaza,

Cundinamarca, Colombia.

4.2 ESPECIFICOS Caracterizar la estructura de la población de Espeletia grandiflora de la cuenca de la quebrada

Calostros afectada por entorchamiento o por herbivoría.

Caracterizar el grado de afectación producido por entorchamiento y herbivoría de la población

de Espeletia grandiflora de la cuenca de la quebrada Calostros.

Evaluar el nivel de asociación entre clases de tamaño y grados de afectación de la población

de Espeletia grandiflora de la cuenca de la quebrada Calostros.

5. METODOLOGÍA

5.1 Área de estudio

Esta investigación se realizó en las parcelas previamente establecidas por Beltrán y

colaboradores (2011) ubicadas en la parte alta de la cuenca de la quebrada Calostros entre los

3500 y 3700 msnm, dentro del Parque Nacional Natural Chingaza que está ubicado en la

Cordillera Oriental de Colombia entre los 4° 51’ – 4° 20’ de latitud Norte y los 73° 30’ – 73°

55’ de longitud Occidente entre los departamento de Cundinamarca y Meta. En el parque se

han registrado precipitaciones medias anuales que muestran un solo pico de lluvias intensas

hacia los meses de Mayo y Agosto y una época seca presente entre los meses de Diciembre a

Febrero. La temperatura media oscila entre 6 y 7 °C (UASESPNN, 2005).

5.2 Caracterizar la estructura de la población afectada

Se realizó el muestreo para cada una de las 9 parcelas permanentes previamente establecidas

por Beltrán y colaboradores (2011) que se encuentran entre los 3500 y 3700 msnm de la

cuenca de la quebrada Calostros del PNNC. Cada parcela tuvo un área de 100 m2, con

Page 19: Evaluación del grado de afectación por entorchamiento y

20

dimensiones de 10m de largo por 10m de ancho, con individuos de E. grandiflora y como

mínimo 50m de separación entre ellas para evitar las pseudorreplicas (Matteuci & Colma

1982). Durante el muestreo se tomaron datos de la altura de cada uno de los individuos

utilizando cinta métrica, con el fin de caracterizarlos a posteriori en las diferentes clases de

tamaño respecto a la altura, usando los rangos de agrupación por intervalos de Sturges (1926)

que serán determinados con la siguiente ecuación:

C = (Xmax–Xmin)/M; donde M = 1 + (3.3 × log N), N será el número total de individuos, M

el número de clases a definir, X= el valor máximo y mínimo de la longitud del tallo y C =

rango o intervalo de cada clase de tamaño.

Como resultado del análisis de los datos de las alturas de la planta, que ha sido la variable más

recomendada para la construcción de la estructura poblacional de la especie (Bonilla et al,

2005), se logró establecer las clases de tamaño como las propuestas por Fagua (2007) quién

uso el mismo método para su estudio.

Posteriormente, se identificó tanto la proporción de individuos total afectados por

entorchamiento o por herbivoría como el total de afectados por clases de tamaño. Estos datos

fueron analizados estadísticamente por el software Statistica 5.1.

5.3 Caracterizar el grado de afectación producido por entorchamiento y herbivoría,

para ello se calcularan los siguientes indicadores:

1. Incidencia de la afectación por entorchamiento y herbivoría en E. grandiflora para

toda la población afectada y por clase de tamaño: la incidencia se calculó a partir del

número de individuos que presentaron la(s) afectación(es) sobre el total de individuos

muestreados. Para ello, se realizó el conteo de individuos que presentaron hojas

afectadas por herbivoría o por entorchamiento. Una vez estuvieron las frecuencias de

individuos afectados por parcela se procedió a utilizar el paquete estadístico Statistica

5.1 para graficar el promedio y error estándar de las proporciones con el fin de mostrar

la variación existente en los datos. El mismo procedimiento se realizó para estimar la

incidencia por clase de tamaño.

Page 20: Evaluación del grado de afectación por entorchamiento y

21

2. Severidad de la afectación por entorchamiento o por herbivoría en E. grandiflora para

cada clase de tamaño caracterizada: La severidad se calculó para cada individuo

afectado como el número de hojas afectadas tanto de la roseta como del meristemo

sobre el número de hojas totales multiplicado por cien (Dávila, 2011), obteniendo así

el porcentaje de severidad del daño causado, ya sea por entorchamiento o por

herbivoría, en el individuo de E. grandiflora. Luego este porcentaje fue categorizado

en seis rangos o grados de herbivoría y de entorchamiento (1=1 – 5%; 2=6–12%; 3=

13–25%; 4=26–50%; 5=51–100%), grados que fueron propuestos con el fin de

reconocer la intensidad de defoliación o pérdida de área foliar por herbivoría o por

entorchamiento (Domínguez & Dirzo, 1995). Luego estos grados de herbivoría y

entorchamiento fueron analizados en el paquete estadístico Statistica 5.1 con el fin de

conocer en que grado(s) de afectación se encontró la mayoría de la población y que

grado(s) de afectación fueron los más representativos en cada una de las clases de

tamaño existentes en la población muestreada. Este análisis también se hizo con el

ánimo de poder buscar asociaciones con aspectos relacionados a la altura de las clases

de tamaño establecidas. Además se realizaron pruebas post-hoc como el test de

Duncan para comparar entre grupos con el fin de buscar diferencias significativas

entre las proporciones de los individuos afectados.

5.4. Evaluar el nivel de asociación entre las clases de tamaño y grados de afectación de la

población afectada

Se plantearon 4 hipótesis de acuerdo al conocimiento respectivo y se utilizaron los datos de la

altura de la planta para corroborar estas hipótesis, usando la prueba de chi cuadrado del

paquete estadístico Statistica 5.1. Respecto a las 4 hipótesis se evaluó la probabilidad de que

se ajustaran las proporciones de individuos afectados a la proporción de individuos por clase

de tamaño, o que se ajustarán en proporción a la biomasa, abundancia y vistosidad medida

como la altura de los individuos por el número de individuos presentes en cada clase.

Page 21: Evaluación del grado de afectación por entorchamiento y

22

6. Resultados

6.1 Caracterización de la estructura de la población afectada

Se obtuvo el registro de 1393 individuos de E. grandiflora ubicados en 9 parcelas de 155

individuos en promedio.

La proporción de individuos sanos fue del 51% de la población registrada. Se encontró una

incidencia o un promedio de la proporción de individuos afectados por herbivoría y

entorchamiento menor que la de individuos sanos (F (1, 16)=40.522, p=0.00001 y F (1,

16)=32.797, p=0.00003 respectivamente). En lo que corresponde a la herbivoría, la población

afectada fue del 32±8% del total de individuos muestreados (ver figura 1), siendo muy

similar, a la proporción de individuos con entorchamiento (35±8%), (ver figura 2).

Fig. 1: Promedio y error estándar de la proporción Fig. 2: Promedio y error estándar de la proporción de

de Individuos con y sin herbivoría. Individuos con y sin entorchamiento.

Page 22: Evaluación del grado de afectación por entorchamiento y

23

La caracterización de la población en clases de tamaño respecto a la altura dio como resultado

un total de 7 clases que se definieron de la siguiente manera: Juvenil (10-22cms), Adulto 1

(23-36cms), Adulto 2 (37-51 cms), Adulto 3 (52-66 cms), Adulto 4 (67-81 cms), Adulto 5

(82-96 cms), Adulto 6 (mayores o iguales a 97 cms).

La población de individuos no afectados como la de afectados, tanto para herbivoría como

para entorchamiento, presentaron un patrón similar que se evidenció por el aumento de la

media de las proporciones de individuos desde la clase Juvenil hasta el adulto 3 y por el

descenso de las medias de las proporciones de individuos desde el adulto 3 hasta el adulto 6

(ver anexo 1 y Figura 3ª y 3b). De tal manera se pudo observar que por clase de tamaño la

proporción de individuos sanos fue siempre mayor a la de individuos afectados por

entorchamiento o por herbivoría donde a excepción del rango de individuos con alturas

mayores o iguales a 97 cms, todos presentaron diferencias entre sus proporciones (ver anexo 1

y Figura 3a y 3b).

Respecto a la incidencia por entorchamiento o por herbivoría, se observó que las clases de

tamaño que presentaron una mayor proporción de individuos afectados fueron adulto 1 y

adulto 2 con 6±3% de la totalidad de individuos afectados para ambas clases, mientras que

las clases con menor proporción de individuos afectados correspondió a Juveniles con una

proporción de 3±3% de individuos afectados (Ver Fig. 3a y 3b). Sin embargo las clases con

mayor proporción de individuos afectados respecto al total de individuos por clase de tamaño

indica que las clases más afectadas fueron Adulto 5 y Adulto 6 que presentaron proporciones

3±3%, tanto para entorchamiento como para herbivoría, muy similares a la de individuos no

afectados, es decir el 50% de la población de la clases Adulto 5 y 6 se encontró afectada (Ver

Fig. 3a y 3b).

Page 23: Evaluación del grado de afectación por entorchamiento y

24

Fig. 3a: Promedio y error estándar de la proporción de Fig. 3b: Promedio y error estándar de la proporción de

individuos con y sin entorchamiento en cada clase de tamaño Individuos de cada clase de tamaño con y sin herbivoría.

en relación con el total de la población. en relación con el total de la población.

6.2 Caracterización de los grados de afectación

La afectación por entorchamiento y herbivoría fue clasificada en 5 grados de afectación como

se expuso previamente en la metodología. La población afectada muestra que no todos los

individuos se encontraron igualmente afectados, encontrándose diferencias notorias entre las

proporciones de individuos afectados por clase de tamaño tanto para herbivoría como para

entorchamiento (Ver tabla 1), es decir que hay grados de afectación más recurrentes que otros

en la población de afectados y diferentes proporciones de individuos por grado de afectación

(Ver figura 4). En general cada grado de afectación de herbivoría mostro porcentajes que se

encontraron entre 3 - 11% y entre el 2 - 11% para entorchamiento (Ver tabla 1).

Respecto a la herbivoría la mayor proporción de individuos presentó grado 2 de afectación

(37±5% del total de afectados), que representa a los individuos con un 6-12% de hojas

afectadas (ver figura 4). Es de destacar que la proporción de individuos del grado 2 presentó

Page 24: Evaluación del grado de afectación por entorchamiento y

25

diferencias significativas con todos las proporciones de individuos afectados de los demás

grados y que las proporciones de los individuos afectados con Grado 1, 4 y 5 no presentan

diferencias significativas entre estas (Ver anexo 1).

En lo que concierne al entorchamiento la mayor proporción de individuos presentó grado 3 de

afectación (32±7% del total de afectados), que representa a los individuos con un 13-25% de

hojas afectadas (ver figura 5). Es de destacar que la proporción de individuos afectados con

grado 3 no presentó diferencias significativas respecto a la proporción de individuos del grado

2 (p= 0,781599). (Ver anexo 2). Por el contrario solo el 12±4% de la población afectada se

observó altamente afectada por herbivoría o por entorchamiento (ver figura 4 y 5).

Fig. 4: Promedio y error estándar de la proporción de individuos afectados por grado de afectación por herbivoría

Page 25: Evaluación del grado de afectación por entorchamiento y

26

Tabla1: Número de individuos y proporción de individuos de cada una de las clases de tamaño por grado de afectación por herbivoría.

Fig 5: Promedio y error estándar de la proporción de individuos afectados por grado de afectación por entorchamiento.

G1 G2 G3 G4 G5 Sin herbivoría Total general# Individuos 0 7 8 7 2 78 102

Proporción(%) 0 6,86 7,84 6,86 1,96 76,47 100# Individuos 5 37 26 16 6 220 310

Proporción(%) 1,61 11,94 8,39 5,16 1,94 70,97 100# Individuos 14 41 25 10 5 244 339

Proporción(%) 4,13 12,09 7,37 2,95 1,47 71,98 100# Individuos 15 23 19 11 10 181 259

Proporción(%) 5,79 8,88 7,34 4,25 3,86 69,88 100# Individuos 8 21 25 11 12 129 206

Proporción(%) 3,88 10,19 12,14 5,34 5,83 62,62 100# Individuos 8 17 11 6 11 57 110

Proporción(%) 7,27 15,45 10 5,45 10 51,82 100# Individuos 4 7 10 10 6 30 67

Proporción(%) 5,97 10,45 14,93 14,93 8,96 44,78 100Total general # Individuos 54 153 124 71 52 939 1393

3,88 10,98 8,90 5,10 3,73 67,41 100

Grados de afectación Herbivoría

Proporción total de individuos

Juvenil

Adulto 1

Adulto 2

Adulto 3

Adulto 4

Adulto 5

Adulto 6

Page 26: Evaluación del grado de afectación por entorchamiento y

27

Tabla 2: Número de individuos y proporción de individuos de cada una de las clases de tamaño por grado de afectación por entorchamiento.

Para el análisis del daño en las hojas del meristemo con herbivoría o con entorchamiento, se

observó como el porcentaje de hojas afectadas disminuye a medida que aumenta el número de

hojas del meristemo, con excepción de la clase de tamaño adulto 4. Las clases más afectadas

fueron la clase 4, quién presentó 55±10% de sus hojas afectadas con herbivoría y el 75±25%

con entorchamiento, y la clase Juvenil que presentó el 100±20% de afectación en las hojas del

meristemo, para ambos casos. Mientras que las clases menos afectadas en el caso de

herbivoría fueron adulto 5 (21±19%) y 6 (20±20%) y en el caso de entorchamiento fueron

adulto 3 (40±20%) y adulto 6 (55±40%).

G 1 G 2 G 3 G 4 G 5 Sin Entorchamiento Total generalJuvenil # Individuos 0 1 8 11 4 78 102

Proporción(%) 0 0,98 7,84 10,78 3,92 76,47 100Adulto 1 # Individuos 4 27 39 27 5 208 310

Proporción(%) 1,29 8,71 12,58 8,71 1,61 67,10 100Adulto 2 # Individuos 13 44 33 12 6 231 339

Proporción(%) 3,83 12,98 9,73 3,54 1,77 68,14 100Adulto 3 # Individuos 15 23 19 11 10 181 259

Proporción(%) 5,79 8,88 7,34 4,25 3,86 69,88 100Adulto 4 # Individuos 12 23 20 7 8 136 206

Proporción(%) 5,83 11,17 9,71 3,40 3,88 66,02 100Adulto 5 # Individuos 9 12 15 5 3 66 110

Proporción(%) 8,18 10,91 13,64 4,55 2,73 60 100Adulto 6 # Individuos 5 10 8 5 1 38 67

Proporción(%) 7,46 14,93 11,94 7,46 1,49 56,72 100Total general # Individuos 59 148 147 73 31 935 1393

4,24 10,62 10,55 5,24 2,23 67,12 100

Grados de afectación Entorchamiento

Proporción total de individuos

Page 27: Evaluación del grado de afectación por entorchamiento y

28

Distribución lambda de Wilks = 0.33843, F(12, 70)=4.1939, p= 0.00006Intervalo de confianza del 0.95

% herbivoría# hojas meristemoJuvenil Adulto 3Adulto 1 Adulto 2 Adulto 4 Adulto 6

Clase de tamaño

-20

0

20

40

60

80

100

120

140

Adulto 5

Distribución lambda de wilks=0.38584, F(12, 58)=2.9478, p=0.00293Intervalo de confianza del 95 %

# hojas meristemo% entorchamiento

Adulto 5Adulto 6

Adulto 1Adulto 4

Adulto 3Adulto 2

clases de tamaño

-40

-20

0

20

40

60

80

100

120

Juvenil

Fig. 5a: Promedio y error estándar del # de hojas totales del meris- Fig. 5 b. Promedio y error estándar del # de hojas totales del meris-

temo y del % de herbivoría en el meristemo por clase de tamaño temo y del % de entorchamiento en el meristemo por clase de tamaño

6.3 Evaluar el nivel de asociación entre clases de tamaño y grados de afectación de la

población afectada.

Para evaluar el grado de asociación entre las clases de tamaño y grados de afectación se

plantearon 4 hipótesis que podrían explicar la variación de las proporciones de individuos

afectados. Las hipótesis planteadas fueron las siguientes:

1. Hipótesis Nula: La proporción de individuos afectados es igual para todas las clases

de tamaño.

Hipótesis Alterna: La proporción de individuos afectados es diferente para todas las

clases de tamaño.

Respuesta encontrada: Se rechazó la hipótesis nula tanto para entorchamiento como para

herbivoría (Valor chi cuadrado= 106.4154 GL = 6 p < 0.000000 y Valor Chi-Cuadrado =

68.41538 FG = 6 p < .000000, respectivamente) Ver anexo 3. Es decir que las clases de

Page 28: Evaluación del grado de afectación por entorchamiento y

29

tamaño presentaron proporciones de individuos afectados diferentes a lo esperado, lo que

hubiese sido que todas las clases de tamaño presentaran igual proporción de individuos

afectados.

2. Hipótesis Nula: La proporción de individuos afectados es proporcional a su

abundancia

Hipótesis Alterna: La proporción de individuos afectados no es proporcional a su

abundancia.

Respuesta encontrada: Se rechazó la hipótesis nula para herbivoría (Valor Chi-Cuadrado =

25.87418; GL = 6 p < 0.000235) y se aceptó la hipótesis alterna para entorchamiento (Valor

Chi-Cuadrado = 6.787736; GL = 6 p <0 .340927) Ver anexo 4. Es decir que, en el caso de la

herbivoría, la probabilidad de que las proporciones de individuos afectados se ajustarán en

proporción a la abundancia o al número de individuos totales es probable en menos del 5% de

los casos. A diferencia del entorchamiento donde la probabilidad de que las proporciones de

individuos afectados se ajustarán a la abundancia fue mayor al 30% de los casos.

3. Hipótesis Nula: La proporción de individuos afectados es proporcional a la biomasa

(altura * # de individuos afectados) de las clases de tamaño.

Hipótesis Alterna: La proporción de individuos afectados no es proporcional a la

biomasa (altura * # de individuos afectados) de las clases de tamaño.

Respuesta encontrada: Se rechazó la hipótesis nula tanto para entorchamiento como para

herbivoría (Valor Chi-Cuadrado = 88.19707 FG = 6 p < .000000 y Valor Chi-Cuadrado =

56.08158 FG = 6 p < .000000, respectivamente) Ver anexo 5. Es decir que la probabilidad de

que las proporciones de individuos afectados se ajustarán en proporción a la cantidad en

biomasa de los individuos afectados es probable en el 0% de los casos.

Page 29: Evaluación del grado de afectación por entorchamiento y

30

4. Hipótesis Nula: La proporción de individuos afectados es proporcional a la vistosidad

(altura de los individuos afectados).

Hipótesis Alterna: La proporción de individuos afectados no es proporcional a la

vistosidad (altura de los individuos afectados).

Respuesta encontrada: Se rechazó la hipótesis nula tanto para entorchamiento como para

herbivoría (Valor Chi-Cuadrado = 398.0342 FG = 6 p < 0.000000 y Valor Chi-Cuadrado =

287.1038 FG = 6 p < 0.000000, respectivamente) Ver anexo 6. Es decir que la probabilidad de

que las proporciones de individuos afectados se ajustarán en proporción a la vistosidad de los

individuos de la población es probable en el 0% de los casos.

7. Discusión de Resultados.

Al evaluar la incidencia por herbivoría o por entorchamiento en la población de E.grandiflora

se encontró una población altamente afectada, planteamiento que surgió de observar que tan

solo el 51% de la población se encontró sin ninguna afectación y que la proporción de

individuos afectados con herbivoría fue del 32±8% y del 35±8% con entorchamiento. Esta

alta incidencia podría sugerir dos razonamientos: 1. el tiempo que lleva el patógeno afectando

la población es alto o 2. la población del patógeno que alguna vez se estableció, fue lo

suficientemente grande como para afectar considerablemente en poco tiempo a la población

de E. grandiflora. Según Cooke et al (2006) las enfermedades comienzan a un nivel bajo, es

decir un número pequeño de plantas afectadas y una cantidad pequeña del tejido vegetal

afectado, y su incidencia y severidad tiende a aumentar con el tiempo y tienden a estabilizarse

cuando se acercan al límite de su progreso exponencial. Este argumento explicaría por qué el

tiempo que lleva el patógeno afectando a las poblaciones es un elemento a considerar.

En contraposición a una población altamente afectada se encuentra el hecho de haber

observado que la mayoría de los individuos de la población presentaron un bajo porcentaje de

hojas afectadas (ver figura 4 y 5 y tabla 1 y 2). Lo que podría sugerir que aunque el patógeno

Page 30: Evaluación del grado de afectación por entorchamiento y

31

logra afectar a muchos, no necesariamente estas afectaciones tendrían consecuencias graves

en términos de supervivencia. Aunque no se podría considerar las incidencias encontradas

como un indicador fiable de una población altamente afectada debido a que la mayoría de

individuos de la población presentaron una baja severidad, sí se podría considerar que a futuro

está población podría estar disminuyendo considerablemente su capacidad de reclutamiento y

su probabilidad de aumentar la tasa de crecimiento. La razón por la que se piensa que estas

afectaciones son una amenaza para el futuro de la población es debido a que la severidad en el

meristemo fue muy alta sobre todo para la clase Juvenil, que presentó el 100% de afectación y

fue la clase con el menor número de hojas en el meristemo. Ballina-Gomez et al (2008)

estudiaron la supervivencia en plántulas y lograron concluir que uno de los estados más

vulnerables a la herbivoría y al ataque de patógenos son las hojas jóvenes durante el ciclo de

vida de una hoja. Otra información que refuerza la idea del alto nivel de amenaza futura en las

poblaciones de E. grandiflora son las investigaciones hechas en varios grupos botánicos en

los cuales se ha observado que bajo condiciones sin disturbio antrópico, la mayor mortalidad

de individuos ocurre a nivel de juveniles y plántulas (Estrada y Monasterio, 1988; Hofstede,

1995; Premauer, 1999). La condición de amenaza podría aumentar si retomamos las

observaciones de Verweij y Kok, (1992) quienes estimaron que la mortalidad en Espeletia

podría aumentar hasta 2 veces más en condiciones de disturbio que en condiciones normales.

Un aspecto que podría ponerse en contra de la posibilidad de tener amenazada en un futuro a

la población de Espeletia grandiflora por el hecho de haber observado 100% de afectación en

el meristemo de la clase Juvenil es que se ha observado que las tasas de crecimiento en

juveniles, y la germinación, se ven estimuladas luego de un disturbio; y este aumento se ha

visto como una respuesta a una mayor tasa de mortalidad en estas clases y en los adultos más

grandes (Smith, 1981; Verweij y Kok, 1992, Kovár, 2001), sin embargo, esto solo podrá ser

establecido con observaciones en un plazo mayor.

Otro aspecto a destacar es que la incidencia es mayor en las clases intermedias, tanto para

entorchamiento como para herbivoría, lo cual podría estar asociado el hecho de ser las clases

con mayor cantidad de individuos en la población (Ver tabla 1 y 2). Se ha observado que está

alta incidencia en las clases de tamaño intermedias va acompañada en su gran mayoría con

una severidad que corresponde a no más del 22% de hojas afectadas, tanto para herbivoría

Page 31: Evaluación del grado de afectación por entorchamiento y

32

como para entorchamiento, lo que podría sugerir que el patógeno tiene cierta predilección a

afectar las clases que tienen mayor número de individuos o que este hecho observable no

indica ninguna preferencia por parte del patógeno y que simplemente el hecho de estar

afectando al grupo más abundante es lo que se podría esperar por simple azar. En

contraposición a la predilección por parte del patógeno a afectar a las clases más abundantes

está el hecho de haber encontrado, tras corroborar con nuestros datos, que las proporciones de

individuos afectados por entorchamiento o por herbivoría de cada clase de tamaño no se

ajustaron en proporción a la abundancia de ninguna de las clases, lo cual no implica que no

haya una preferencia por las plantas más abundantes, sino que sugiere que el proceso de

selección de la planta por parte del patógeno podría estar afectado por otros factores no

estudiados en este trabajo.

Respecto a la severidad por entorchamiento o por herbivoría estuvo el hecho de haber

observado que no todas las clases de tamaño estuvieron igualmente afectadas (ver gráfica 4 y

5) y que la severidad tuvo una proporción de individuos mayor a medida que incrementó la

altura de la planta, (ver tabla 1 y 2). Esto podría sugerir tanto una gran cantidad de patógenos

en el ambiente como también podría sugerir que el aumento en la severidad podría estar

asociado al envejecimiento natural asociado al aumento en altura de la planta, ya que además

se observó que una de las clases más afectadas fue el adulto 6 donde más del 70% de los

individuos presentó grado 3, 4 y 5 de afectación (Ver tabla 1). El hecho de que no todas las

clases de tamaño estuvieran igualmente afectadas llevó a plantear que la biomasa, o la

abundancia o de pronto la vistosidad de la planta podrían haber explicado la variación

existente en la severidad de las afectaciones, pero al probar las hipótesis, se pudo corroborar

que ni la biomasa, ni la vistosidad, ni la abundancia se ajustaban en proporción a la

proporción de individuos afectados, por lo que cada una de estas hipótesis no logro explicar

en sí el porqué de la variación en los grados de afectación, a excepción del entorchamiento

donde la probabilidad de que las proporciones de individuos afectados se ajustarán en

proporción a la abundancia fue mayor al 30% de los casos. Lo que podría sugerir no descartar

una posible acción conjunta de la biomasa, vistosidad y abundancia, lo que probablemente

podría haber influenciado la variación existente de los grados de afectación.

Page 32: Evaluación del grado de afectación por entorchamiento y

33

A evaluar el nivel de asociación entre las clases y grados de afectación una de las primeras

inquietudes que surgieron, partió del hecho de haber observado gran similitud entre las

proporciones de cada una de las afectaciones, un patrón similar para entorchamiento y

herbivoría en cuanto a las proporciones de individuos afectados para cada una de las clases de

tamaño y de las observaciones hechas para determinar el grado de asociación entre las dos

afectaciones como eventos independientes que tienen la misma probabilidad de ocurrir

simultáneamente (ver figura 6). Lo que sugirió que las afectaciones podrían hacer parte de una

misma dinámica de la enfermedad.

Todos los hechos observados y relacionados anteriormente permiten sugerir que el daño

ocasionado aunque no representa una amenaza actual en la supervivencia de los individuos, a

futuro sí podría repercutir en aspectos relacionados a la estructura de la población y a sus

tasas de crecimiento poblacional, especialmente por el daño tan grave observado en los

individuos juveniles y porque gran parte del daño causado está concentrado en las clases

intermedias. Este patrón de la dinámica de las afectaciones en especies de Espeletia

anteriormente descrito aunque no había sido reportado en E. grandiflora, Jiménez (2012) lo

encontró en Espeletia argéntea presente en la parte baja de la cuenca de la quebrada Calostros,

otro evidencia más que sugiere la adaptabilidad del agente causal a las especies de Espeletia.

7.1 Recomendaciones.

• Se recomienda realizar un nuevo monitoreo que permita evaluar el progreso de las

afectaciones en E.grandiflora ubicada en la cuenca de la quebrada Calostros.

• Se podría realizar este monitoreo por individuo para poder observar con el tiempo que

tanto del daño causado podría estar afectando la supervivencia de los individuos de

cada clase de tamaño presentes en la población de E. grandiflora.

• Se podría realizar este monitoreo teniendo en cuenta observaciones sistemáticas en

campo que permitan entender la dinámica de la enfermedad con el fin de ampliar las

evidencias que permitan entender la posible secuencia de las afectaciones en el

desarrollo de la enfermedad.

Page 33: Evaluación del grado de afectación por entorchamiento y

34

8. BIBLIOGRAFÍA

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Page 37: Evaluación del grado de afectación por entorchamiento y

38

Anexos. Anexo 1.

Test Post Hoc de Duncan; Variable dependiente proporción de individuos F = 55.815, GL = 36.000

Grado Herbivoría Grado 1 Grado 2 Grado 3 Grado 4 Grado 5 1 Grado 1 0,000066 0,011706 0,932950 0,521556 2 Grado 2 0,000066 0,006210 0,000055 0,000032 3 Grado 3 0,011706 0,006210 0,012553 0,003327 4 Grado 4 0,932950 0,000055 0,012553 0,549226

5 Grado 5 0,521556 0,000032 0,003327 0,549226

Anexo 2.

Test Post Hoc de Duncan; Variable dependiente proporción de individuos: F= 98.543, GL = 37.000

Grado entorchamiento Grado 1 Grado 2 Grado 3 Grado 4 Grado 5

1 Grado 1 0,033454 0,022723 0,381479 0,014120 2 Grado 2 0,033454 0,781599 0,005149 0,000087 3 Grado 3 0,022723 0,781599 0,003054 0,000049 4 Grado 4 0,381479 0,005149 0,003054 0,079131 5 Grado 5 0,014120 0,000087 0,000049 0,079131

Anexo 3 3.1

3.2

Resultados esperados - observados; Valor Chi-Cuadrado = 68.41538 FG = 6 p < .000000

Observados herbivoría Esperados herbivoría O - E (O-E)**2 - /E

Adulto 1 90,0000 65,0000 25,0000 9,61538 Adulto 2 95,0000 65,0000 30,0000 13,84615

Adulto 3 78,0000 65,0000 13,0000 2,60000 Adulto 4 77,0000 65,0000 12,0000 2,21538 Adulto 5 53,0000 65,0000 -12,0000 2,21538

Adulto 6 37,0000 65,0000 -28,0000 12,06154 Juvenil 24,0000 65,0000 -41,0000 25,86154 Suma 454,0000 455,0000 -1,0000 68,41538

Resultados esperados - observados; Valor Chi-Cuadrado = 106.4154 GL = 6 p < 0.000000

Observados entorchamiento Esperados entorchamiento O - E (O-E)**2 - /E Adulto 1 102,0000 65,0000 37,0000 21,0615

Adulto 2 108,0000 65,0000 43,0000 28,4462 Adulto 3 81,0000 65,0000 16,0000 3,9385

Adulto 4 70,0000 65,0000 5,0000 0,3846

Adulto 5 44,0000 65,0000 -21,0000 6,7846 Adulto 6 29,0000 65,0000 -36,0000 19,9385

Juvenil 24,0000 65,0000 -41,0000 25,8615

Suma 458,0000 455,0000 3,0000 106,4154

Page 38: Evaluación del grado de afectación por entorchamiento y

39

Anexo 4 4.1

4.2

Anexo 5 5.1

Resultados esperados - observados; Valor Chi-Cuadrado = 25.87418 GL = 6 p < 0.000235

Observados herbivoría Esperados herbivoría B - E (B-E)**2 - /E Adulto 1 90,0000 101,0000 -11,0000 1,19802

Adulto 2 95,0000 110,0000 -15,0000 2,04545 Adulto 3 78,0000 84,0000 -6,0000 0,42857 Adulto 4 77,0000 67,0000 10,0000 1,49254

Adulto 5 53,0000 36,0000 17,0000 8,02778 Adulto 6 37,0000 22,0000 15,0000 10,22727 Juvenil 24,0000 33,0000 -9,0000 2,45455

Suma 454,0000 453,0000 1,0000 25,87418

Resultados esperados - observados; Valor Chi-Cuadrado = 6.787736 GL = 6 p <0 .340927

Observados entorchamiento Esperados entorchamiento B - E (B-E)**2 - /E Adulto 1 102,0000 102,0000 0,00000 0,000000 Adulto 2 108,0000 111,0000 -3,00000 0,081081 Adulto 3 81,0000 85,0000 -4,00000 0,188235 Adulto 4 70,0000 68,0000 2,00000 0,058824 Adulto 5 44,0000 36,0000 8,00000 1,777778 Adulto 6 29,0000 22,0000 7,00000 2,227273 Juvenil 24,0000 33,0000 -9,00000 2,454545

Suma 458,0000 457,0000 1,00000 6,787736

Resultados esperados - observados; Valor Chi-Cuadrado = 56.08158 GL = 6 p < 0.000000

Observados herbivoría Esperados herbivoría O - E (O-E)**2 - /E Adulto 1 102,0000 55,0000 47,0000 40,16364

Adulto 2 108,0000 91,0000 17,0000 3,17582 Adulto 3 81,0000 93,0000 -12,0000 1,54839 Adulto 4 70,0000 93,0000 -23,0000 5,68817

Adulto 5 44,0000 60,0000 -16,0000 4,26667 Adulto 6 29,0000 57,0000 -28,0000 13,75439 Juvenil 24,0000 10,0000 14,0000 19,60000

Suma 458,0000 459,0000 -1,0000 88,19707

Page 39: Evaluación del grado de afectación por entorchamiento y

40

5.2

Anexo 6 6.1

Resultados esperados - observados; Valor Chi-Cuadrado = 398.0342 FG = 6 p < 0.000000 Observados entorchamiento Esperados entorchamiento vistosidad B - E (B-E)**2 - /E

Adulto 1 102,0000 29,0000 73,000 183,7586

Adulto 2 108,0000 45,0000 63,000 88,2000

Adulto 3 81,0000 60,0000 21,000 7,3500

Adulto 4 70,0000 75,0000 -5,000 0,3333

Adulto 5 44,0000 90,0000 -46,000 23,5111

Adulto 6 29,0000 143,0000 114,000 90,8811

Juvenil 24,0000 16,0000 8,000 4,0000 Suma 458,0000 458,0000 0,000 398,0342

6.2

Resultados esperados - observados; Valor Chi-Cuadrado = 287.1038 FG = 6 p < 0.000000

Observados herbivoría Esperados herbivoría vistosidad O - E (O-E)**2 - /E Adulto 1 90,0000 29,0000 61,000 128,3103 Adulto 2 95,0000 45,0000 50,000 55,5556

Adulto 3 78,0000 60,0000 18,000 5,4000 Adulto 4 77,0000 75,0000 2,000 0,0533

Adulto 5 53,0000 90,0000 -37,000 15,2111 Adulto 6 37,0000 143,0000 -106,000 78,5734

Juvenil 24,0000 16,0000 8,000 4,0000 Suma 454,0000 458,0000 -4,000 287,1038

Resultados esperados - observados; Valor Chi-Cuadrado = 88.19707 GL = 6 p < 0.000000

Observados entorchamiento Esperados entorchamiento biomasa O - E (O-E)**2 - /E

Adulto 1 90,0000 54,0000 36,0000 24,00000

Adulto 2 95,0000 90,0000 5,0000 0,27778

Adulto 3 78,0000 92,0000 -14,0000 2,13043

Adulto 4 77,0000 92,0000 -15,0000 2,44565

Adulto 5 53,0000 59,0000 -6,0000 0,61017

Adulto 6 37,0000 57,0000 -20,0000 7,01754

Juvenil 24,0000 10,0000 14,0000 19,60000 Suma 454,0000 454,0000 0,0000 56,08158

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Anexo 7. Test Duncan; Diferencias no absolutas de afectados vs diferencias no absolutas del azar F = 606.22, FG = 2778.0 grupos Juvenil Adulto 1 Adulto 2 Adulto 3 Adulto 4 Adulto 5 Adulto 6 Azar 1 Juvenil 0,765588 0,500554 0,131405 0,093950 0,015661 0,000305 0,391647 2 Adulto 1 0,765588 0,671811 0,203669 0,152016 0,030742 0,000861 0,539958 3 Adulto 2 0,500554 0,671811 0,357770 0,280575 0,072787 0,003340 0,815480 4 Adulto 3 0,131405 0,203669 0,357770 0,829339 0,336401 0,040016 0,453405 5 Adulto 4 0,093950 0,152016 0,280575 0,829339 0,417001 0,055995 0,366633 6 Adulto 5 0,015661 0,030742 0,072787 0,336401 0,417001 0,229279 0,105558 7 Adulto 6 0,000305 0,000861 0,003340 0,040016 0,055995 0,229279 0,006093 8 azar 0,391647 0,539958 0,815480 0,453405 0,366633 0,105558 0,006093