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i LA PESQUERÍA DEL CALAMAR GIGANTE (Dosidicus gigas) EN EL GOLFO DE CALIFORNIA. RECOMENDACIONES DE INVESTIGACIÓN Y TÁCTICAS DE REGULACIÓN Autores: Susana Martínez-Aguilar 1 , Enrique Morales-Bojórquez 1 , Juan Gabriel Díaz-Uribe 1 , Ma. Del Carmen Suárez-Higuera 1 , Agustín Hernández-Herrera 2 . ISBN 970-9892-01-0 1 Instituto Nacional de la Pesca. Centro Regional de Investigación Pesquera Unidad La Paz, Carretera a Pichilingue Km.1 s/n. CP 23020. La Paz, Baja California Sur, México. 2 Centro Interdisciplinario de Ciencias Marinas. Instituto Politécnico Nacional, Av. I.P.N. s/n, Colonia Palo de Santa Rita. Apartado Postal 592, CP 23000. La Paz, Baja California Sur, México.

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LA PESQUERÍA DEL CALAMAR GIGANTE (Dosidicus gigas) EN EL GOLFO DE CALIFORNIA. RECOMENDACIONES DE INVESTIGACIÓN Y TÁCTICAS

DE REGULACIÓN

Autores:

Susana Martínez-Aguilar 1, Enrique Morales-Bojórquez1, Juan Gabriel Díaz-Uribe1, Ma. Del Carmen Suárez-Higuera1, Agustín Hernández-Herrera2.

ISBN 970-9892-01-0

1 Instituto Nacional de la Pesca. Centro Regional de Investigación Pesquera Unidad La Paz, Carretera a Pichilingue Km.1 s/n. CP 23020. La Paz, Baja California Sur, México. 2 Centro Interdisciplinario de Ciencias Marinas. Instituto Politécnico Nacional, Av. I.P.N. s/n, Colonia Palo de Santa Rita. Apartado Postal 592, CP 23000. La Paz, Baja California Sur, México.

DIRECTORIO

JAVIER BERNARDO USABIAGA ARROYO Secretario de Agricultura, Ganadería, Desarrollo

Rural, Pesca y Alimentación

COMISION NACIONAL DE ACUACULTURA Y PESCA

Ramón Corral Avila

Comisionado Nacional

Prisciliano Meléndrez Barrios Director General de Ordenamiento

Pesquero y Acuícola

Raúl Villaseñor Talavera Director de Normalización

INSTITUTO NACIONAL DE LA

PESCA

Guillermo Compeán Jiménez Director en Jefe del Instituto Nacional

de la Pesca

Luis Beléndez Moreno Director General de Investigación

Pesquera del Pacífico Norte

Claudia de la Garza Montaño Directora del Centro Regional de

Investigación Pesquera de La Paz, B.C.S.

ii

PREPARACION DE ESTE DOCUMENTO Este documento fue elaborado en el Centro Regional de Investigación Pesquera de La Paz, Baja California Sur y sometido a revisión y edición en las instalaciones de la CONAPESCA en Mazatlán, Sinaloa. La revisión editorial de este documento se efectuó en la Dirección General de Ordenamiento Pesquero y Acuícola de la CONAPESCA, y estuvo a cargo de Raúl Villaseñor y Omar C. Carrillo Sandoval. Las citas bibliográficas, así como la referencia de los autores en la cita de este documento, se presentan tal y como fueron proporcionadas por los autores.

CITA DE ESTE DOCUMENTO

Martínez-Aguilar , S., Morales-Bojórquez, E., Díaz-Uribe, J. G., Suárez-Higuera, M. C. y Hernández-Herrera, A., 2004. La Pesquería del Calamar Gigante (Dosidicus gigas) en el Golfo de California. Recomendaciones de Investigación y Tácticas de Regulación. Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca, Instituto Nacional de la Pesca, Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación. México. 77 p.

ii

Contenido

PRÓLOGO ...........................................................................................................5

RESUMEN............................................................................................................6

INTRODUCCIÓN..................................................................................................7

ANTECEDENTES.................................................................................................9

La pesquería .................................................................................................................... 9

Evaluación de stock .................................................................................................... 12

Biología reproductiva ................................................................................................. 13

ÁREA DE ESTUDIO...........................................................................................14

MATERIAL Y MÉTODOS...................................................................................15

Fuente de datos............................................................................................................ 15

Modelos .......................................................................................................................... 16 Reclutamiento y escape proporcional..................................................................... 16 Cambios del coeficiente de capturabilidad ( ), en función de la longitud........ 17 qCambios relativos de con el tiempo ..................................................................... 18 qAbundancia de la población ..................................................................................... 19

Ciclo de reproducción ................................................................................................ 19

Definición de grupos de longitud de manto ......................................................... 21

RESULTADOS ...................................................................................................21

Reclutamiento y escape proporcional ................................................................... 22

Coeficiente de capturabilidad ( )............................................................................ 22 q

Ciclo de reproducción ................................................................................................ 23

DISCUSIÓN Y CONCLUSIONES.......................................................................26

iii

RECOMENDACIONES DE MANEJO ................................................................32

RECOMENDACIONES DE INVESTIGACIÓN....................................................33

AGRADECIMIENTOS ........................................................................................33

LITERATURA CITADA ......................................................................................35

LISTA DE FIGURAS. .........................................................................................39

FIGURAS............................................................................................................41

TABLAS .............................................................................................................62

iv

PRÓLOGO La pesquería de calamar gigante (Dosidicus gigas) en el Golfo de California inicia en

1974 y actualmente es capturado en las zonas de Santa Rosalía, B.C.S., Guaymas,

Son. y Mazatlán, Sin.. El área de pesca de Santa Rosalía, B.C.S., constituye el 70% del

volumen nacional de captura de esta especie en peso fresco. Por esta razón, también

tiene la flota ribereña más importante en cuanto al número de licencias que participan

de la pesca, con casi 1200 embarcaciones menores distribuidas desde Loreto hasta

Santa Rosalía, B.C.S.. Desde el punto de vista económico, el recurso ha representado

una importante entrada de divisas a la pesca artesanal; la población de Santa Rosalía,

B.C.S. ha reiniciado una recuperación económica por la oferta de empleos directos e

indirectos, debido a las altas abundancias del recurso, ya que el principal mercado es

de exportación, principalmente hacia Oriente, donde Corea es el consumidor más

importante. En cuanto al manejo, la principal dificultad para regular la pesquería radica

en los cambios anuales que presenta en abundancia y composición de tallas. La

abundancia de estos organismos es variable, pero su distribución cercana a la costa de

la península, hace al recurso disponible durante casi todo el año. En esta zona se

observan continuamente organismos tanto de tallas (longitud de manto) pequeñas como

grandes, debido a la entrada y salida a la zona de pesca de calamares provenientes de

diferentes épocas de reproducción. La composición de la estructura de tallas observada

en esta zona no ha sido reportada para Guaymas, Son.. Existen indicios de que la zona

de pesca de Santa Rosalía es un importante núcleo de reproducción para la especie,

diversos cruceros de investigación han colectado información sobre individuos de D.

gigas con tallas pequeñas. La producción de calamares de la zona de Santa Rosalía,

mantiene la pesquería en el área de Guaymas, Son. durante toda la temporada. Cuando

la captura en Guaymas se agota, los barcos camaroneros adaptados a la pesca del

calamar gigante viajan a los caladeros de Santa Rosalía, ocasionando algunos

conflictos con la flota ribereña de la región. De esta manera, la importancia del recurso

calamar gigante (D. gigas) en la zona de Santa Rosalía, B.C.S., es debido a que

existen las condiciones que favorecen su ciclo de vida y a que funciona como centro de

dispersión hacia otras zonas del Golfo de California, razón por la cual podría constituir

una unidad de manejo independiente de Guaymas, Son.

RESUMEN Para el análisis de la pesquería de calamar gigante (Dosidicus gigas) del Golfo de California se

realizaron muestreos quincenales en la zona de Santa Rosalía, B.C.S., durante el periodo

comprendido entre Mayo y Octubre del 2002. Se observó la tendencia de la distribución de tallas

y la relación peso longitud encontrada en las capturas comerciales fue , con un

factor de correlación de 0.94. El intervalo de longitud de manto (LM) de la captura comercial

estuvo entre los 30 y 90 cm. Del total de organismos obtenidos de las capturas comerciales el

44% eran machos y el 56% hembras, con una proporción de sexos variable durante el periodo

de muestreo. Los resultados de la estimación del reclutamiento mostraron una subestimación,

debido a que la captura por unidad de esfuerzo ( ) exhibió dos picos a lo largo de la

temporada. Este comportamiento no se había observado antes y todo indica que la pesquería

está sustentada por dos cohortes, por lo que la estimación del reclutamiento requiere de

consideraciones para poblaciones con cohortes múltiples. El rendimiento también fue analizado a

través de estimaciones quincenales del coeficiente de capturabilidad ( q ) en función de la LM,

con el método de proyección de matrices. El patrón promedio de q no muestra una tendencia

definida, pero el comportamiento sugiere que la captura en la primera mitad de la temporada de

pesca estuvo sustentada por una cohorte. La variación de en función de LM con el tiempo, fue

determinada con la tasa de cambio de la quincenal respecto al promedio del tiempo total

analizado. La tendencia fue muy variable en el periodo de estudio observándose a los calamares

de LM más pequeña en el mes de julio. El proceso de maduración sexual de las hembras de

calamar gigante, se examinó por métodos histológicos, para validar las fases de madurez

gonadal morfocromática. Las muestras fueron obtenidas quincenalmente en el área de Santa

Rosalía, B.C.S., durante el periodo comprendido entre Junio del 2001 a Noviembre del 2002. Los

distintos tipos de ovocitos observados en el tejido, fueron cuantificados, encontrándose una

composición diferente para cada una de las fases morfocromáticas. La proporción ovocitos, se

utilizó para determinar estadísticamente las fases de madurez gonadal aplicando un estimador

denominado índice de madurez (IM). El IM permitió diferenciar claramente las gónadas

reproductivamente inactivas (fases I, II y III.) de las activas (fases IV, V y VI). De acuerdo a los

resultados del IM, la mayoría de hembras de Dosidicus gigas son maduras entre los 70 y 75 cm

de LM, con dos probables picos de actividad reproductiva durante verano y otoño.

9.200003.0 LP =

CPUE

q

CPUE

Introducción

as de calamar y camarón, (Morales-

ojórquez et al. 2001d).

nua recuperación de

cuerdo con los patrones de explotación (Rosenberg et al., 1990).

En los últimos años, la abundancia del recurso calamar gigante (Dosidicus gigas) en el

Golfo de California (Figura 1), se ha incrementado. Caddy y Rodhouse (1998),

mencionan que la abundancia de algunos recursos de peces ha sido reducida por

sobrepesca y los calamares que son de vida corta y ecológicamente oportunistas, se

han incrementado debido a la reducción en la presión por depredación y la debilitada

competencia por alimento. La variación en la abundancia de calamares también ha sido

explicada por la variabilidad en los parámetros ambientales (Roberts, 1998; Robin y

Denis, 1999; Waluda et al., 1999, 2001; Agnew et al, 2000; Sakurai et al, 2000). En el

Golfo de California las variaciones interanuales de la captura (Figura 2), han sido

relacionadas con las fluctuaciones ambientales, migraciones extensivas del recurso y

con la interacción existente entre las pesquerí

B

La información biológica y pesquera de Dosidicus gigas en el Golfo de California es

todavía escasa. El problema con mayor atención ha sido la estimación de biomasa del

recurso (Hernández-Herrera et al. 1998, Nevárez-Martínez et al. 2000, Morales-

Bojórquez et al. 2001b). Estas estimaciones se han basado en el modelo de Rosenberg

et al. (1990). El modelo asume que la población explotada está compuesta por una

cohorte que se agota a través del tiempo (Leslie y Davis 1939, De Lury 1947, Ricker

1975), de tal forma, que resulta relativamente simple evaluar la abundancia poblacional

a partir de un estimado del tamaño inicial (reclutamiento). Sin embargo, el valor de la

pendiente asociada a la capturabilidad, no permanece constante (Hilborn y Walters

1992), en algunos casos el modelo lineal se cuelga, mostrando una curvatura en lugar

de describir una línea (Gould y Pollock 1997, Gould et al. 1997, Morales-Bojórquez y

Nevárez-Martínez 2002). En los modelos de extracción sucesiva, las medidas del

esfuerzo pesquero y la captura son fundamentales en la estimación del reclutamiento y

la capturabilidad, ya que con ellos se define la estrategia de explotación del recurso,

calculando el escape proporcional constante, que se asume es necesario para

mantener a la población dentro de límites que permitan su conti

a

7

En recientes análisis, los resultados indican la presencia de más de una cohorte en la

población (Morales-Bojórquez et al. 2001d). Esta situación ha creado dudas sobre la

dinámica del recurso y la forma de evaluarlo, cambiando la perspectiva de

administración del calamar, ya que se debe estimar con precisión la magnitud de cada

horte así como su contribución a la reproducción, lo cual influye sobre la tasa de

s (longitud de manto), lo que supone la

xistencia de distintas cohortes. Esta composición en la estructura de longitud de manto

ra

valuar la abundancia del calamar gigante (Dosidicus gigas) en el Golfo de California,

ciones del coeficiente de capturabilidad y el desarrollo gonádico.

co

reemplazo de la población.

El porcentaje más alto de la captura total en peso fresco obtenida en el Golfo de

California es aportado por la pesca realizada en la zona de Santa Rosalía, B.C.S.,

seguido por Guaymas, Son, y Mazatlán, Sin.. Desde el punto de vista económico, el

recurso ha representado una importante entrada de divisas a la pesca artesanal;

poblaciones como Santa Rosalía, B.C.S. han reiniciado una recuperación económica

por la oferta de empleos directos e indirectos, debido a las altas abundancias del

recurso, ya que el principal mercado es de exportación, principalmente hacia Oriente,

donde Corea es el consumidor más importante. Santa Rosalía concentra la más

importante flota ribereña, con casi las 1,200 embarcaciones menores (pangas) con

motor fuera de borda, distribuidas desde Loreto hasta Santa Rosalía, B.C.S. En cuanto

al manejo, la principal dificultad para regular la pesquería radica en los cambios anuales

que presenta en abundancia y estructura de tallas. En Santa Rosalía se observan

continuamente organismos de diferentes talla

e

no ha sido reportado para Guaymas, Sonora.

Por otro lado, la zona costera de Baja California Sur es considerada como área de

desove, debido a que se han registrado altas tasas de apareamiento, cuantificadas por

la presencia de espermatóforos adheridos a la membrana oral de las hembras (Sato,

1975, 1976; Markaida y Sosa-Nishizaki, 2001; Tafur et al. 2001). La importancia que

tiene la zona de Santa Rosalía, en cuanto a volumen de captura y su probable

contribución al reclutamiento, así como, las fuertes implicaciones de manejo que tiene la

existencia de más de una cohorte en la pesquería de calamar gigante, fue la base pa

e

analizando las varia

8

ANTECEDENTES

La pesquería

En el Golfo de California, los primeros estudios sobre calamar gigante se realizaron al

principio de la década de los 80’s por Ehrhardt et al. (1983) y Klett (1996). Se intentó

explicar la dinámica de la población a partir de datos de captura y esfuerzo, cruceros de

investigación e información biológica básica. Sin embrago, el recurso desapareció

repentinamente y la hipótesis que pareció más razonable es que el calentamiento de la

corriente de California (El Niño) fue la causa (Klett 1996). El recurso no fue estudiado de

nuevo hasta que en 1995 la pesquería resurgió (Morales-Bojórquez et al. 1997, 2001c).

El recurso ha mostrado variaciones importantes en disponibilidad, observando en la

mporada de 1997-1998 una nueva caída que se asoció con la presencia de otro

ticas de manejo del

curso son controlar el esfuerzo de pesca a través de la asignación de licencias o

ones y recomendaciones sobre análisis de datos de captura y esfuerzo, así

omo de la información obtenida por cruceros de investigación (Nevárez-Martínez et al.

el 15 de Marzo del 2004; segunda sección), menciona el uso de talla mínima,

te

evento El Niño (Morales-Bojórquez et al. 2001c).

El esquema de manejo se ha basado en mantener una biomasa del 40% al final de

cada temporada de pesca, la cual es calculada en el momento mismo que el

reclutamiento es observado durante los meses de mayo y junio (Morales-Bojórquez et

al. 1997, 2001b, 2001d; Hernández-Herrera et al. 1998). Así las tác

re

permisos de pesca (Nevárez-Martínez y Morales-Bojórquez 1997).

Adicionalmente, cuando no se obtiene información veraz sobre el tamaño del

reclutamiento a partir de datos de captura y esfuerzo, se utiliza un sistema de cuotas de

captura que permiten simultáneamente obtener información de la pesquería y plantear

recomendaciones de administración. El Instituto Nacional de la Pesca, basa sus

estimaci

c

2000).

Las medidas de regulación establecidas a través del Diario Oficial de la Federación,

publicado

9

que no es útil en esta pesquería. Incluso, el mismo documento no hace referencia a talla

alguna.

A diferencia de Sonora (en donde ha habido un ambiente de cooperación reflejado no

sólo en la aceptación de las propuestas de manejo, sino en el apoyo económico de los

industriales y Gobierno del Estado de Sonora a la investigación pesquera), en la parte

de Santa Rosalía, B.C.S. no existen comités, sectores gubernamentales o grupos de

productores que en colaboración con el Instituto Nacional de la Pesca conformen

rupos de trabajo que permitan analizar, discutir o sugerir las bases de manejo del

s barcos camaroneros se adaptan con sistemas de pesca para calamar

igante, y a su vez, cuando la temporada de camarón del Pacífico Mexicano inicia,

minuye (Morales-Bojórquez et al.

001d).

oras, con rendimientos promedios de 400 o 500 kilos de

anto en los meses de mayor abundancia (primavera). Los sistemas de luz de las

embarcaciones se les acoplan carretes manuales de poteras, o bien, la pesca es

g

recurso. Aunque existe buena disposición hacia compartir sus bases de datos tanto de

captura como sus principales indicadores económicos.

La elevada abundancia del recurso durante 1996 creó expectativas sobre la pesquería

(Hernández-Herrera et al. 1998), ya que representó una alternativa rentable que se

complementó bien con la pesquería del camarón del Pacífico Mexicano, prácticamente

cuando los rendimientos del camarón disminuyen hacia los meses de diciembre y

enero, lo

g

entonces la presión de pesca sobre el calamar dis

2

Las flotas que explotan el recurso son de dos tipos:

La flota de pangas caracterizada por embarcaciones con motor fuera de borda de 40 a

75 caballos de fuerza, y dos pescadores por panga. La actividad de la flota en la zona

de Santa Rosalía. B.C.S. inicia a partir de las 16:00 horas y puede concluir hasta las

2:00 horas del día siguiente, sin embargo el tiempo de pesca efectivo de cada

embarcación varía entre 4 y 5 h

m

pangas son variables, usan desde focos de automóvil o tipo “árbol de Navidad” hasta

focos caseros de pocos watss.

La flota de barcos camaroneros adaptados a la pesca de calamar gigante. A estas

10

manual con solo una línea y su potera correspondiente. También se les adaptan

sistemas de iluminación variables. Pueden ser linternas que tienen cuatro lámparas de

00 wats y 100 volts, con luminosidad de 6,840 lúmenes por linterna, o bien lámparas

centro del Golfo de California hasta Santa Rosalía, B.C.S. lo que

romueve el desplazamiento de los barcos de Sonora hacia las zonas de pesca de

o de mayor captura 160,000 t (1996), lo

ue coincidió con la caída en el precio del recurso en 1999 para Santa Rosalía, B.C.S. y

de captura y esfuerzo, los cuales no son de fácil acceso en la

1

de 2,000 wats y 200 volts, con luminosidad de 30,000 lúmenes.

Morales-Bojórquez et al. 1997, sugieren que las zonas de Santa Rosalía, B.C.S. y

Guaymas, Son., explotan “un stock” localizado en la parte central del Golfo de

California, el cual está conformado por una cohorte o generación dominante. Los

individuos de esa cohorte también han mostrado un movimiento entre ambas costas, lo

cual beneficia la pesca en las dos localidades. También se ha observado que el recurso

se concentra desde el

p

Santa Rosalía, B.C.S.

La pesquería tiene una variabilidad en las capturas que hasta el momento no se ha

podido explicar de manera concluyente. Al parecer no hay evidencias de

sobreexplotación y la disminución de 1998-1999 se asoció con la presencia de un

calentamiento de la corriente de California, donde incluso el recurso mostró un patrón

de movimiento que lo llevó de la parte centro norte del Golfo de California hacia el

Pacífico (Bahía Magdalena, BCS). En la temporada 1999-2000 se observaron

problemas de precio en el recurso, ya que se pagaba barato el kilo de calamar, así los

patrones de captura a través del tiempo siguieron las tendencias del mercado

internacional del calamar. En algunos años, aunque la abundancia fue alta, la captura

permaneció baja en comparación con el period

q

de Sonora en el 2000.

Desde el punto de vista de la evaluación del stock explotado, la pesquería cuenta con

modelos explícitos para la estimación de biomasa, los cuales se apoyan en modelos de

extracción sucesiva. Las predicciones de captura pueden hacerse puesto que la escala

de tiempo usada son periodos semanales o quincenales. El recurso capturado a lo largo

de la temporada depende del reclutamiento a la pesquería y de la eficiencia de las flotas

correspondientes (capturabilidad). Así, la evaluación del recurso depende de la

veracidad de los registros

11

zona de Santa Rosalía, B.C.S., debido principalmente a la existencia de varios sitios de

o.

ctores que

ralmente utilizado es el análisis de reducción de stock de Delury (Rosenberg et al.,

1990), , descrito en términos de la captura por unidad de esfuerzo, ,

por:

desembarco del recurs

Evaluación de stock

La mayoría de las especies de calamar tienen un ciclo de vida anual y su abundancia

presenta grandes variaciones de un año al siguiente. Para evaluar la población, se

asume que la pesquería es sostenida por una sola cohorte, proveniente de un pulso

máximo de reclutamiento. El número de animales sobrevivientes al final del año afectan

la pesquería del año siguiente sólo a través de la cantidad de los productos del desove.

La evaluación se orienta a determinar el número de reclutas al inicio de la temporada de

pesca, la tasa de explotación durante la temporada y el número de organismos

reprodu sobreviven hasta el final de la temporada de pesca. El modelo

gene

tt ANoN −= CPUE

totE

t t

en número de individuos, tE es el esfuerzo pesquero, tA es la captura acumulada

desde el inicio de la estación de pesca al tiempo ,t No es la abundancia inicial en

número de individuos (reclutamiento) al inicio de la temporada de pesca y q , es el

coeficiente de capturabilidad. Esta relación supone proporcionalidad entre la captura por

unidad de esfuerzo y la abundancia del recurso y que la capturabilidad es constante a

través del tiempo. Con esta función, Rosenberg et al. (1990), plantearon el escape

proporcional de reproductores como estrategia de manejo del calamar Illex argentinus

en las islas Falkland, con un nivel permisible de K = 40% y desde entonces el escape

proporcional tam ha consid rado en otras pesquerías de calamar en el mundo

(Beddington

t qAqNCCPUE −=

Donde, es la abundancia en número de individuos en el tiempo , es la captura

bién se e

et al., 1990, Hernández-Herrera et al. 1998). El escape proporcional es

efinido como es la tasa instantánea de mort

=

N t C

FeK −= , donde F alidad por pescad

definida por EqF ⋅= .

12

La principal limitación observada para la utilización del método de Delury, es cuando la

CPUE , se incrementa al final de la estación incrementando también la abundancia

estimada del stock, esto descarta, el supuesto de que cada tem de pesca

representa una cohorte separada. Además del incremento de CPUE , se ha observado

disminución de la longitud media de las capturas y picos

porada

durante la

mporada de pesca, que son evidencias del ingreso de más de una cohorte a la

(2001d

e la pesquería de calamar, no obstante, los valores de

anteniendo su consideración de constancia a través del tiempo, dentro de la

debido a las altas tasas de apareamiento que encontró en las hembras de calamar

de la CPUEte

pesquería (Agnew et al. 1998, Hatfield and Des Clers, 1998).

Para probar la existencia de más de una cohorte, Agnew et al. (1998) utilizó los valores

del coeficiente de capturabilidad y señala que grupos de valores de q , evaluados con el

método de Delury, corresponden a cohortes individuales. Para la pesquería de calamar

gigante (Dosidicus gigas) del Golfo de California, Morales-Bojórquez et al. ),

evaluaron el coeficiente de capturabilidad en función de la longitud del manto, para una

temporada de pesca a través del método determinístico de capturabilidad )(MDC ,

(Arreguín-Sánchez, 1996, Martínez-Aguilar, et al. 1997) observando grupos de valores

de q en diferentes intervalos de longitud de manto considerando que dichos grupos

corresponden a distintas cohortes. Los trabajos de Agnew et al. y Morales-Bojórquez et

al. op cit., aportan información muy importante, que tiene implicaciones fuertes en la

evaluación y manejo d q , siguen

m

temporada de pesca.

Biología reproductiva

El proceso de maduración en Dosidicus gigas ha sido estudiado en sus dos áreas

principales de distribución: en el Pacífico Sur (Nesis 1970; Tafur y Rabí 1997; Tafur et

al. 2001) y en el Pacífico Norte incluyendo el Golfo de California (Michel et al. 1986;

Markaida y Sosa-Nishisaki 2000). Nesis (1970), define la primera escala de madurez

específica para Dosidicus gigas y propone la presencia de tres grupos en función de la

distribución de los fotóforos como respuesta al aislamiento geográfico entre el grupo de

Sudamérica y los grupos de Centroamérica y México. Sato (1976) sugiere que las

costas de la península de Baja California pueden funcionar como áreas de desove

13

gigante. Michel et al. (1986) describen por primera vez las fases de desarrollo de los

gametos del calamar gigante, sin embargo no describen los cambios en la composición

e gametos conforme la gónada madura.

s maduras con respecto a los machos

aduros es muy baja a lo largo de todo el año.

o fácil definir los períodos reproductivos del calamar

arkaida y Sosa-Nishisaki 2000).

REA DE ESTUDIO

d

Según Ehrhardt et al. (1983, 1986) en una temporada, el ciclo reproductivo de

Dosidicus gigas, no está fijo, varía con las condiciones oceanográficas. En 1980

encontraron hembras maduras a lo largo de todo el año con tres picos de reproducción,

el más importante en Diciembre/Enero en el Noreste del Golfo de California (cerca de

Guaymas) y el talud continental al Oeste de la península de Baja California. Este pico

genera los individuos que se reclutan a la pesquería en Marzo/Abril y sostienen la

pesquería en Septiembre. Los otros dos picos ocurren en Mayo/Junio y en Septiembre

cerca de Santa Rosalía, observando reclutamientos a la pesquería en Septiembre y

Enero/Febrero respectivamente. En contraste, Markaida y Sosa-Nishisaki (2000) no

encontraron ningún pico reproductivo entre 1995-1997 y argumentan que la época de

reproducción podría extenderse todo el año. Además, plantean que Dosidicus gigas

utiliza la región central del Golfo de California como área de alimentación y no de

reproducción, ya que la proporción de hembra

m

Los análisis de madurez gonadal y ciclo reproductivo en Dosidicus gigas se han basado

primordialmente en las características morfocromáticas de las gónadas y para ello se

utilizan distintas escalas de madurez, sin que estas se hayan contrastado con los

cambios que ocurren a nivel de tejido. La disparidad de escalas es probablemente una

de las razones por las que no ha sid

(M

Á

La localidad de Santa Rosalía, B.C.S. se localiza en los 27o 20’ LN y los 112o 16’ de LO

(Figura 1). Se ubica a 552.5 Km al Norte de La Paz, B.C.S., por la carretera

transpeninsular con una elevación sobre el nivel medio del mar de 40 m, presenta un

14

clima BW(h’) que corresponde al tipo muy seco, muy cálido y cálido con una

mperatura media anual de 22.6o C.

ODOS

tos de

s ovarios para su posterior identificación. El estatolito y los parásitos se sumergieron

La Paz, Baja California Sur. La captura total por clase de LM y el esfuerzo de

esca se usaron para estimar el índice de abundancia relativo de la pesquería, en este

aso la .

te

MATERIAL Y MÉT

Fuente de datos.

Se realizaron diez muestreos en la captura comercial de la flota artesanal ubicada en

Santa Rosalía, B.C.S., con una periodicidad quincenal correspondientes al periodo del 6

de mayo al 22 de octubre del 2002. En cada muestra se procesaron aproximadamente

cien calamares, registrando para cada organismo: peso total del cuerpo, longitud y peso

del manto. De una pequeña fracción de la muestra (∼30%) se determinó el sexo y

estadio de madurez sexual, con base en escala reportada por Lipinski (1995), (Tabla 1).

Las gónadas fueron fijadas en solución de Davidson (Bell y Lighter 1988) para ser

transportadas y almacenadas hasta su procesamiento histológico. Además, se

colectaron estatolitos, para análisis de edad, picos para el estudio de relaciones tróficas

y estómagos para identificar hábitos alimenticios. Así mismo, se extrajeron parási

lo

en alcohol al 70%, y el estómago y pico fueron congelados para su preservación.

La captura total por clase de longitud de manto (LM), en número de calamares por cada

2 cm de clase de LM, fue obtenida de la combinación de las estadísticas diarias de

captura (en kilogramos), agrupada en periodos quincenales y la estructura de LM,

obtenida de los muestreos quincenales de las capturas comerciales. Los registros del

esfuerzo pesquero (noches de pesca), fueron proporcionados por la Subdelegación de

pesca de

p

CPUEc

15

Modelos

Reclutamiento y escape proporcional

Se utilizó el modelo de extracción propuesto por Rosenberg et al. (1990) y aplicado por

Morales-Bojórquez et al. (1997) en la pesquería de calamar gigante. El modelo tiene la

siguiente forma:

( ) ( )∑−

=

1t

i la captura acumulada en número de

dividuos para cada unidad de tiempo t. Para este análisis M = 0.202 por quincena

n lognormal del mismo (Hilborn y Walters, 1992).

on este enfoque, se analizó una hipótesis de error de observación (Hilborn y Walters,

1992; Polacheck et al., 1993). El error de observación fue simulado 2,000 veces de

acuerdo con el siguiente estimador:

−−−− −=0

15.00

i

Mti

Mtt eCqeqNCPUE

donde q representa el coeficiente de capturabilidad, N0 el reclutamiento en número de

individuos, M la mortalidad natural (constante), C

in

(Hernández-Herrera et al.,1998), que fue estimado con el método Silliman descrito por

Ricker (1975) y Morales-Bojórquez et al. (1997).

Dado que la información de esfuerzo estuvo incompleta se simularon valores de

esfuerzo, asumiendo una distribució

C

⎟⎟⎠

⎞⎜⎜⎝

⎛−

= 2

2δσ

δ

eff isim

Así el valor estimado de CPUE que

se utilizó para fines de parametrizar el modelo fue

l valor promedio de los datos simulados (Hilborn y Walters, 1992). Finalmente la

fue estimada con el d to observado de captura (en número de individuos) y el

esfuerzo simulado, de acuerdo con:

e

CPUE a

16

( ) ( )∑−

−−−−

=⎠⎝

−=1

15.0t

MtMt

i

i eCqeqN

ef

C

se en el análisis de la ca

manto se realizaron estimac

r Arreguín-Sánchez (1

scrita

como NAN ,⋅= donde es el vector del tamaño del stock en número al tiempo

N

tra

⎟⎟⎞

⎜⎜⎛

− 00

2

2i

iδσ

δ

Cambios del coeficiente de capturabilidad ( q ), en función de la longitud

Con ba ptura por unidad de esfuerzo por clase de longitud de

iones de q con el método determinístico de capturabilidad

(MDC), de la forma propuesta po 996). El modelo estima la

capturabilidad por clase de longitud ( ), con base en una matriz de transición de

tl 1, +

(quincenas). tl , y 1,tl son representados por la ( ). es la matriz de

nsición expresada por: SG = A

l

: tl tlN ,

t N + CPUE A

⋅ donde G es la matriz de probabilidad de

crecimiento y S es la matriz de supervivencia. Cada uno de los elementos de S son

obtenidos de )(, expexp , ttl EqMZtiS ⋅+−− == don ti, es la mortalidad total y de Z M es la

mortalidad natural para el i th grupo de longitud al tiempo t . La matriz de crecimiento,

G , es definida suponiendo que los organismos crecen de acuerdo al modelo de von-

Bertalanffy, las probabilidades son calculadas r Shepherd

(1987), (Morales-Bojórq 2001d). 1 se resuelve con el algoritmo de

mínimos cuadrados utilizando dos rutinas de búsqueda directa no lineal. La primera

lcula valores aproximados de

con el método descrito po

uez et al. , +tlN

ca A. Los valores de A son acepta os uan las

diferencias uadrado del valor obs y el calculado 1,

d c

al o de

do

c ervad 1, +tlN ~+tlN alcanzan su

valor mínimo Como G es conocid . a y SGA ⋅= , la segunda rutina calcula valores

s de valores son aceptados cuando las diferencias al e S y sus cuadrado daproximado

A y su nueva estimación A~ , son mínimas. Como los valores de , S M y E son

s tLq , fue despejada de )(, exp tEqMtiS ⋅+−= . Finalmente se estimó un valor

promedio de q por clase de longitud

conocido

tLq , .

17

Los parámetros de crecimiento del modelo de von Bertalanffy ( /quincena

ernández-Herrera (1998). La mortalidad natural

con el método de Silliman (Ricker 1975), fue considerada constante con un

Cambios relativos d

de la capturabilidad en función de la longitud del manto en el

expresados por la relación de la tasa anual de por clase de longitud

de la quincena al tiempo , , respecto al promedio de la temporada analizada

PUE , . De acuerdo con Arreguín-Sánchez (1996), la relación en su forma lineal es

xpresada como:

033.0=k

87=∞L cm) fueron tomados de H

estimada

valor de, 2.0=M por quincena.

e q con el tiempo

Los cambios relativos

tiempo, son CPUE

t tLCPUE ,

yLC

e

L CPUECPU[

y L,

⋅βαLn

Donde: tL,

+ = ]EtL,t L,

t L,

β , representa las diferencias relativas en el patrón de cambio de q con la

itud de la quincena t respecto a yLCPUE , ; tL,long α representa las diferencias relativas

en la abundancia de org presentes en la captura de la cena

. El signo de la pendiente y de la ordenada al origen

los grupos de lon itud que son más abundantes. Entonces si

anismos más pequeños quin

, respecto a yLCPUE , tL,β tL,α t

g tL,βindica es positivo y

tL,α negativo, los organismos grandes son más abundantes que los pequeños y

iceversa.

v

18

Ab

a mortalidad por pesca ( ), fue calculada de la expresión general (Ricker

1975, Gulland 1983). Para las estimaciones de abund ia en número de calamares,

fue determinada con la misma ecuación pero expresada para cada clase de LM y para

a

undancia de la población

F EqF ⋅=L

( tN )anc

Fcad quincena ( t ).

ttLtL EqF ⋅= ,,

a , se obtuvo de la siguiente expresión general: tNL

( )( ) tLMFtL

tLtL F

MFtL ,

,

,, .exp1

⋅⎟⎟⎠

⎞⎜⎜⎝

−⋅

+= +−

CN

onde: representa la captura en número de individuos por clase de LM, para cada

El peso promedio por clase de LM obtenido de la relación peso-

ngitud se utilizó para transformar la abundancia en número de calamares a biomasa en

n las características morfológicas y del

licular que rodea a los ovocitos, se definieron sus fases de desarrollo. Las

diferencias entre los estadios de madurez macroscópica asignados en el campo a partir

tLC ,D

tiempo t correspondiente.

lo

toneladas.

Ciclo de reproducción

En el laboratorio, de cada gónada se extrajo una muestra de tejido de 1 cc

aproximadamente. La muestra se deshidrató en alcohol etílico, se transparentó con

Hemo-De y se incluyó en parafina de punto de fusión alto. Para obtener las laminillas se

hicieron cortes transversales de 7 μm de espesor con un micrótomo de rotación manual

y fueron teñidas con la técnica hematoxilina-eosina (H&E). La lectura de cada laminilla

consistió en seleccionar un campo visual de 0.5 cm2 para contar los ovocitos en cada

una de sus fases de desarrollo. Con base e

epitelio fo

19

de las propiedades morfocromáticas de las gónadas, fueron evaluadas con la ecuación

descrita por Sauer y Lipinski (1990):

∑=

= 5

0ssn

IM ∑

=

×5

0

)(s

s sn

ador del nivel de desarrollo de los ovocitos en

s gónadas, entonces, cada estadio macroscópico tendrá un IM significativamente

el análisis de la proporción de hembras maduras por intervalo de

M. Para ello, se estimó la frecuencia acumulada de hembras maduras en cada

intervalo de talla, y se ajustó por el método de mínimos cuadrados a una curva logística

de la siguiente forma:

donde: IM es el índice de madurez, s es un número discreto entre 0 y 5 asignado a cada

nivel de desarrollo del ovocito y ns es el número de ovocitos contados en el estadio s.

Se aplicó un análisis de varianza de una vía y pruebas de Tukey para comparación

múltiple de factores. La hipótesis planteada para esta prueba fue: si los estadios de

madurez macroscópica son un buen indic

la

distinto al siguiente estadio. Además, el IM se utilizó para evaluar los cambios en el

nivel de maduración a través del tiempo.

La talla de primera madurez (Lm ) en la cual el 50% de las hembras son sexualmente

maduras, se obtuvo d

L

)(11

ibLai eP −+

=

donde: Pi es la frecuencia relativa acumulada de hembras maduras en el intervalo de

ngitud i, Li es la marca de clase del intervalo i en términos de LM, a y b son las

onstantes de regresión y cumplen con la condición a/b = Lm.

lo

c

20

Definición de grupos de longitud de manto

La división de la longitud de los calamares en grupos, fue usada como marco de

referencia, en la descripción de los diferentes procesos que involucra el estudio de este

recurso. Por esta razón, se estableció la división de la estructura de longitud del manto,

para machos y hembras mezclados en tres grupos: pequeños, medianos y grandes,

definiendo los intervalos de talla de13-34cm, 36-60 cm y >62-120 cm de LM, para cada

grupo respectivamente. Nigmatullin et al. (2001) proporcionaron la base para la

definición de los grupos. Los autores dividieron la estructura de longitud de manto por

separado de machos y hembras adultos de esta especie. Los machos pequeños los

definen entre los 13 y 26 cm de LM, los medianos entre los 24 y 42 cm de LM y los

grandes los >40-50 cm de LM. Para hembras pequeñas los organismos de 14-34 cm de

LM, las medianas de 28-60 cm de LM y las grandes entre los 55 y 65 a los 100 y 120

cm de LM. En este estudio la división fue el resultado de la integración de la estructura

e longitud de manto de machos y hembras, con intervalos de longitud del manto de los

lapamiento.

ructura de longit

el periodo en estudio. La

roporción macho:hembra se presenta en la Tabla 2. En el mes de septiembre se

bservó la mayor proporción de hembras por cada macho.

d

grupos sin sobre

RESULTADOS

El intervalo de LM en las muestras de las capturas comerciales estuvo entre los 30 cm y

los 90 cm de LM, (Figura 3). La estructura mostró una gran variabilidad en su

composición, observándose alternadamente presencia de organismos pequeños y

grandes. En el mes de Octubre se registraron los calamares de longitud de manto más

pequeña. Para extrapolar la est ud de las muestras a la captura total

(Figura 4) y obtener la captura por unidad de esfuerzo por clase de LM (CPUE), se

calculó la relación peso longitud: 91.200003.0 LP ⋅= con un factor de correlación de 0.94,

(Figura 5). De las muestras de las capturas comerciales el 44% eran machos y 56%

hembras con una proporción de sexos variable durante

p

o

21

Reclutamiento y escape proporcional

Los resultados mostraron una subestimación del reclutamiento 2,302,284 calamares

con error estándar ( ES ) de 1,118,363 (P< .375). El valor de la capturabilidad fue de

0.00015 con ES = 0.00014 (P< .375) y r2 = 0.21 (Figura 6). La tendencia de la captura

por unidad de esfuerzo a través del tiempo mostró una caída a partir de la quincena 4

(Figura 7), esto implicó que el aparente pico de reclutamiento se observara en Julio, es

decir, dos meses después del tiempo esperado en el cual el reclutamiento sucede.

demás se observó una mezcla de distintas tallas a lo largo de toda la temporada,

ión anual. La subestimación del reclutamiento y la falta

e ajuste del modelo, solo mostraron que la serie de tiempo tiene al menos dos picos de

apturabilidad

uestra el valor más alto a los 72 cm de LM. La desviación estándar es alta debido a

A

indicando el flujo continuo de organismos hacia la estructura de la población (Figura 3).

La variabilidad en tallas observada en el periodo de julio a octubre del 2002 es un

comportamiento muy extraño, al parecer los organismos pequeños (entre 30 y 36 cm de

longitud de manto) aparecen hasta octubre, mientras que en julio su presencia es

escasa, aunque suficiente para tener impacto sobre la CPUE . Sin embargo la

presencia de organismos grandes (mayores a 66 cm de LM ) que aparecieron en

agosto, puede ser que incorporaran una alta biomasa a la población que es difícil de

medir. Los cambios repentinos en la CPUE no son una tendencia común en recursos

con una sola cohorte o generac

d

reclutamiento (Julio y Octubre).

Coeficiente de capturabilidad ( q ).

La variación del valor promedio del coeficiente de capturabilidad por clase de LM se

presenta en la Figura 8. El promedio general fue de 0.0014, (d.s.=0.003) y los valores

mínimo y máximo observados fueron 0.0003 y 0.014 respectivamente. La c

m

las variaciones del coeficiente de capturabilidad con la LM y con el tiempo.

Las tendencias en los cambios relativos quincenales de la tasa de captura en función de

LM, respecto al promedio periodo analizado (6 de Mayo al 26 de Julio), presentaron una

gran variabilidad (Figura 9). En los meses de mayo y julio se capturaron calamares de

intervalos de longitud mediana (36-60 cm de LM), con predominio en la primera

22

quincena del mes de Mayo y la segunda de Julio. Con excepción de las quincenas

antes mencionadas, la presencia de calamares de LM mediana es escasa. En Julio la

abundancia de calamares pequeños y grandes en la captura fue alta, observándose las

longitudes más pequeñas (30-36 cm de LM) en la primera quincena. La Tabla 3

presenta las constante del modelo lineal ajustado a las tendencias de los cambios

relativos observados de la CPUE por clase de LM y el coeficiente de correlación. La

pendiente del modelo

s

β , indica el cambio relativo de capturabilidad en función de la LM

y α , la abundancia de los organismos más pequeños presentes en la captura. Los

alores duplicados de las constantes, con distinto signo, en la misma quincena, indica la v

presencia simultánea de calamares pequeños y grandes en las capturas.

El índice de capturabilidad β , en función de la cantidad de pesca mostró una tendencia

descendente con una disminución aproximada del esfuerzo pesquero del 35% entre el

29 de Mayo y 26 de Ju 10). Los valores negativos de lio (Figura β en la figura indican

ue la captura estuvo sustentada principalmente por calamares de longitudes

n base en las estimaciones de y el esfuerzo pesquero

jercido en cada quincena, el valor total de biomasa para el periodo analizado fue de

a 11).

a actividad ciclónica no permitió que la pesca de calamar se

alizara con regularidad, por lo que no hay registros en la segunda quincena de agosto

q

pequeñas.

La abundancia fue calculada co q

e

31, 244 toneladas (Figur

Ciclo de reproducción

El análisis histológico se hizo con las bases de datos obtenidas de Junio a Noviembre

del 2001 y de Mayo a Octubre del 2002. Durante estos período se colectaron un total de

428 organismos, de los cuales el 71% fueron hembras, el 27% machos y el 2%

indiferenciados (Tabla 4). En 2001 el muestreo se dirigió casi exclusivamente a las

hembras, mientras que en el 2002 se colectaron tanto hembras como machos. A finales

de la temporada 2001, l

re

y el mes de septiembre.

23

Con los cortes histológicos se identificaron cinco tipos de ovocitos en el tejido que

representan diferentes estadios de desarrollo, desde inmaduros hasta ovocitos a punto

de ser expulsados (Tabla 5). Los primeros dos estadios describieron no consecutivas,

en las que el ovocito no está disponible para la actividad reproductiva. Para el cálculo

del IM a estos dos estadios se les asignó S= 1 y 2 respectivamente. Los otros tres

stadios representaron etapas de maduración consecutivas en las que se consideró que

1 disminuyen al 60% y el resto se encuentran madurando,

rincipalmente en estadios 3 y 4. Cuando las gónadas alcanzan la fase IV de madurez,

a los organismos que se encontraron en fase de

producción activa de la inactiva. Por esta razón, el análisis temporal de la maduración

e

el ovocito estaba en preparación o disponible para la actividad reproductiva. A estos

estadios se les asignaron valores de S= 3, 4 y 5 respectivamente.

En términos generales, las categorías de maduración establecidas de acuerdo a las

propiedades morfocromáticas de las gónadas estuvieron correlacionadas con las

características histológicas del propio órgano. Se pudo observar que la composición de

los distintos tipos de ovocitos en la gónada cambia conforme el organismo madura

sexualmente (Tabla 6). En las gónadas de juveniles (Fase I), solamente se observaron

ovocitos 1, sin embargo, un 7% de los organismos clasificados como juveniles fueron

organismos que ya habían desovado o se encontraban en reposo, y por lo tanto no eran

propiamente juveniles. En la fase II, los ovocitos 2 y 3 empiezan a ser más abundantes

(~10% cada uno), sin embargo los ovocitos 1 siguen predominando (~75%). En la fase

III, los ovocitos

p

alrededor del 90% de los ovocitos se han desarrollado hasta los estadios 3 y 4 en una

proporción 0.4:1.

En la fase V, se observó la mayor abundancia de ovocitos 5 con un 18% de las células

contadas. El resto de los ovocitos se distribuyó homogéneamente en comparación con

los otros estadios de madurez. En la fase VI, se observaron dos casos, uno en donde el

tejido presentó restos de ovocitos maduros y tejido conjuntivo en abundancia y el otro

en el que más del 80 % de los ovocitos estuvieron en el estadio 1 ó 3. Aunque estos

cambios también se reflejaron en el IM (Figura 13) y en el análisis de varianza cuyo

valor de F fue significativo, la prueba de comparaciones múltiples de Tukey solo detectó

una diferencia significativa entre las fases III y IV (Tabla 7). Es decir, la composición de

ovocitos en las gónadas fue tan variable que la escala de madurez macroscópica solo

permitió identificar con confianza

re

24

y la determinación de la LM de primera madurez se trabajó con las lecturas histológicas

del tejido de la gónada.

Durante 2001, el promedio más alto del IM de las hembras se presentó en la primera

quincena de octubre, con un valor significativamente >2. En esa quincena más del 90%

de los ovocitos estaban desarrollados entre los tipos 3 y 5 con una predominancia de

los ovocitos 4 (~62%). En la segunda quincena de Junio y primera de Julio el índice

promedio es igual a 2, sin embargo fueron los periodos de mayor dispersión del IM . En

estas quincenas la predominancia de ovocitos 1 (~60-70%) está compensada por la

presencia de ovocitos 4 y 5 (~20-25%). Lo anterior indica una transición un

eriodo reproductivamente activo a uno inactivo. La primera quincena de agosto, el

entre

IM p

es similar al de las dos quincenas anteriores, sin embargo la composición de ovocitos

es diferente, en la que predominan los ovocitos 2.

En 2002, se observaron dos picos en los que el IM fue significativamente >2 (Figura

13). En la segunda quincena de mayo los ovocitos en el tejido fueron del 3 al 5 de

estadio de desarrollo comprendieron el 57% , en la que los de tipo 3 fueron los

predominantes (38%). En la segunda quincena de agosto los ovocitos 3 a 5

omprendieron el 73% de los ovocitos en el tejido, de los cuales, los ovocitos 4 fueron

de LM, principalmente entre 75 y 80 cm de

M. La hembra madura más pequeña que se registro fue de 33 cm de LM. El análisis

e frecuencia acumulada indica que Dosidicus gigas alcanza la talla de primera

adurez a los 72 cm de LM, (Figura 14b).

c

los más abundantes (31%). En los otros meses el IM fue <2 debido a la predominancia

de ovocitos 1 y a la ausencia propiamente de ovocitos 5.

Las tallas de las hembras en los muestreos oscilaron entre 33 y 91 cm de LM,

observándose la mayor frecuencia entre 50 y 80 cm (Figura 14a). Más del 90% de las

hembras adultas fueron mayores de 50 cm

L

d

m

25

DISCUSIÓN Y CONCLUSIONES

La captura comercial de calamar gigante (Dosidicus gigas) en el área de Santa Rosalía,

B.C.S. mostró gran variabilidad, con el pico más alto en el mes de Julio. En estudios

previos (Roberts 1998. Robin y Denis, 1999; Waluda et al., 1999 y 2001; Agnew et al,

2000; Sakurai et al, 2000, Morales-Bojórquez et al. 2001d), se han planteado diferentes

factores que influyen en la variación de la abundancia, sin embargo, en la variación de

la captura comercial en el Golfo de California, influyen también factores tales como los

desacuerdos entre la industria y los pescadores en el precio por kilo y la capacidad de

procesamiento que tienen las plantas, que en ocasiones, cuando el recurso es muy

abundante, limitan la cantidad de captura que reciben, provocando problemas en la

valuación del recurso pues esta depende primordialmente de los datos de captura y

Golfo de California. Sin embargo, este tipo de estudios se hacen

on métodos de marcaje y recaptura, que resultan muy costosos y a la fecha no existen

en la estructura de

eso y longitud de manto, es conveniente hacer el estimado con una periodicidad anual.

e

esfuerzo.

El calamar gigante es una especie migratoria y las variaciones de disponibilidad del

recurso dependen de este comportamiento, por lo que es importante describir el patrón

migratorio dentro del

c

reportes al respecto.

En las muestras obtenidas la proporción de sexos fue variable durante el periodo de

estudio, con una dominancia de hembras de 9:1 en el mes de Septiembre. Markaida y

Sosa-Nishizaki (2001), mencionan que la proporción sexual es casi igual durante la

estación de desove y en el pico de desove, las hembras maduras dominan entre un

70% y 80% del total. En este trabajo la proporción sexual observada fue considerada

como un elemento auxiliar en la determinación del pico de desove. En cuanto a la

relación peso-longitud, debido a las variaciones que se presentan

p

La relación peso-longitud en este estudio es una estimación anual.

Los muestreos quincenales del recurso calamar proporcionan información sobre la

estructura de longitud del manto y su variación en el tiempo y permiten observar el

periodo de reclutamiento y hacer el seguimiento de la cohorte o cohortes presentes en

la población. La estrategia de manejo establecida para esta especie se basa en un

26

modelo que asume la existencia de una sola cohorte anual, lo que hace importante, el

monitoreo de la estructura de longitud del manto en periodos cortos de tiempo y la

determinación del ciclo reproductivo. En este trabajo la estructura de longitud de manto

registrada, presentó una gran variabilidad, observándose en las frecuencias de longitud,

odas alternantes de organismos pequeños y grandes, que no permitieron, por este

parame

entras que en el

eriodo de agosto a octubre dominaron los organismos de talla pequeña, con una

dancia

undan

del

avés de cruceros stigación y otros métodos alternos de análisis de ,

m

medio, identificar la cohorte o cohortes presentes durante el periodo de estudio.

El patrón de cambio observado en los picos de abundancia relativa de la CPUE ,

sugieren la presencia de dos cohortes de calamar en la temporada 2002. La

trización del modelo de extracción sucesiva no fue estadísticamente exitosa, ya

que el valor de N0 estimado en julio fue insuficiente para soportar el incremento en

CPUE debido a la presencia de la cohorte de octubre (Figura 3), además del patrón

irregular observado de los organismos grandes dentro de la zona de estudio. Morales-

Bojórquez et al. (2001b) registraron la presencia de tres cohortes de calamar gigante en

el Golfo de California, sin embargo, para la zona de Guaymas la explotación del recurso

se sustenta en una cohorte principal (Hernández-Herrera et al. 1998). Los datos

mostraron la presencia de organismos medianos de mayo a julio, mi

p

mezcla de baja abun para tallas medianas y grandes (Figura 3).

Los cambios en la CPUE de la pesquería del calamar gigante parecen tener relación

con los cambios en la composición de tallas de la captura, pero no con la ab cia.

La pesquería muestra signos de hiperestabilidad, definida por la concentración de

esfuerzo en zonas donde el calamar es más abundante, de tal forma que la CPUE se

mantiene mientras que la abundancia declina (Hilborn y Walters 1992), sin embargo, los

cambios repentinos de abundancia por la entrada o salida de una nueva cohorte,

pueden provocar hiperdepleción, es decir, que la CPUE decline más rápido que la

abundancia (Hilborn y Walters 1992). La dinámica del recurso no permite por ahora,

conocer con precisión qué fenómeno se está presentando, pero el tama

reclutamiento y el tamaño de la población a diferentes tiempos es posible evaluarlos a

ño

de inve CPUEtr

como el método determinístico de capturabilidad ( MDC ) que se aplicó en este estudio.

27

Los cam epentinos en la estructura de la población puede tener relación con

cambios en las tasa de mortalidad y de la capturabilidad, el comportamiento de la flota

depende de la disponibilidad, de mercado y precio, y esta variación tiene su impacto

sobre la CPUE comercial. Al margen de esta observación, la población de calamar que

se pesca en Santa Rosalía parece tener dos cohortes que son explotadas,

comportamiento que no había sido observado y que dificulta la estimación de los

parámetros del modelo. La posibilidad de tener dos cohortes sugiere éxito

bios r

en la

upervivencia, aunque cabe la posibilidad de que sea el resultado de la mezcla de

de una cohorte principal en la porción de tiempo de la

mporada de pesca analizada con el MDC. Basson et al. 1996 y Agnew et al. (1998)

p

s

stocks diferentes, la cual es una hipótesis a comprobar. En cualquier caso, esto puede

implicar que la población sea más grande de lo que las estimaciones mostraron.

Aunque la estructura de tallas no permitió identificar claramente el número de cohortes

presentes en esta temporada de pesca, la presencia de picos de q indican el ingreso

de más de una cohorte a la pesquería. Sin embargo el grupo más conspicuo de valores

de q estuvo entre los 54 y 82 cm de LM con el valor más alto en los 72 cm de LM, lo

cual indico la presencia

te

señalaron que diferentes grupos del coeficiente de capturabilidad indican dos o más

cohortes en la pesquería.

Con el propósito de comprobar si el comportamiento observado en cuanto a estructura

de LM y coeficiente de capturabilidad en la temporada 2002, era un atrón repetido, se

analizó la temporada 2001 de la misma forma que la del 2002 (Figura 15). Además, se

determinó la estructura de LM total para cada una de las temporadas y se evalúo q por

clase de LM de la temporada 2001 (Figura 16). En ambos casos q mostró una gran

variabilidad respecto a la LM. No obstante, la tendencia general observada para los

organismos pequeños a medianos es que la capturabilidad decrece conforme se

incrementa la LM, y en los calamares medianos a grandes la capturabilidad se

incrementa conforme se incrementa la LM. El cambio en la tendencia está precisamente

en los organismos de LM mediana, los cuales son escasos en la estructura de la

captura comercial y son precisamente las tallas en donde las hembras empiezan a

madurar aunque no se trata propiamente de la talla crítica o talla de primera madurez,

que corresponde al 50% de hembras maduras. En la evaluación de calamares, la

28

suposición general es que la capturabilidad es constante para una estación de pesca

determinada, sin embargo, dado que se pescan durante gran parte de su ciclo de vida y

el comportamiento cambia conforme crece de juvenil a adulto era de esperarse

encontrar cambios en capturabilidad entre organismos de tallas pequeñas y grandes,

pero el flujo de calamares hacia adentro o fuera del área produce una gran variabilidad

en los valores de q . En el área de Santa Rosalía este comportamiento es diferente a lo

ue hasta ahora se conoce, y seguramente está relacionado con la dinámica del

diferencial de

alamares por L por una dominancia en la población de calamares de LM grande.

q

recurso. Esto merece más atención por las fuertes implicaciones que tiene el manejo del

recurso, ya que esta zona es la que mayor volumen aporta a la captura total.

Los cambios relativos de la capturabilidad en función de la LM, con el tiempo

presentaron una gran variabilidad en su tendencia. En los gráficos, los valores negativos

denotan cantidades bajas de calamares en las capturas de la LM correspondiente, y los

positivos cantidades altas. La variación en la tendencia se debe a la presencia

alternada, en la captura, de calamares de tallas pequeñas (13-34 cm de LM) y grandes

(62-120 cm de LM). Con excepción de la primera quincena de Mayo y la segunda de

Julio , es notoria la ausencia o baja presencia de calamares de LM medianas (36-60 cm

de LM). Markaida y Sosa-Nishizaki (2001) en su análisis de distribución por LM, sexo y

estadio de madurez, mencionan que la escasez de calamares de tallas medianas,

puede ser efecto de la selectividad de la potera, de la segregación

c M, o

Nosotros consideramos que son necesarios estudios específicos para determinar la

razón de la ausencia de este grupo de intervalos de LM en las capturas.

En el gráfico de β en función del esfuerzo pesquero (Figura 10), se observó que la

captura, durante el tiempo analizado, está sustentada principalmente de tallas

pequeñas, con una disminución del esfuerzo pesquero conforme se incrementa el

empo. La disminución del esfuerzo puede estar asociado a la presencia de calamares

s de la variación de respecto a la LM,

sí como, el seguimiento de sus cambios relativos en función del tiempo y del esfuerzo

ti

grandes, ya que existe una preferencia por calamares de tallas pequeñas en las plantas

procesadoras.

La escasez de datos de esfuerzo limitó el análisi q

a

29

pesquero. No obstante, los resultados permiten concluir que el coeficiente de

capturabilidad varía con la talla y con el tiempo.

La presencia de más de una cohorte en la pesquería de calamar produce una mezcla

en la estructura de tallas y considerando el tamaño y peso de especie Dosidicus gigas,

sto provocó que la captura en número de calamares no reflejara la captura total en

válida para Dosidicus gigas, ya que de los seis

iveles de madurez sólo se pudieron distinguir dos grupos: reproductivamente activos e

iderar que para

nalizar el ciclo reproductivo, es necesario segregar a los organismos maduros de los

e

peso, aún cuando la transformación se hizo con el peso promedio correspondiente a

cada intervalo de LM. Esto no pasaría de existir sólo una cohorte en la pesquería.

En cuanto a madurez gonádica, de las diversas escalas de madurez descritas para

calamares (Juanicó 1983) varias han sido utilizadas para Dosidicus gigas (Michel et al.

1986; Ehrhardt et al. 1986; Tafur y Rabí 1997). Sin embargo ninguna de ellas ha sido

validada histológicamente. La escala de madurez utilizada en este trabajo fue validada

para Loligo vulgaris (Cephalopoda: Liliginidae) (Sauer y Lipinski 1990) Sin embargo,

esta misma escala solo es parcialmente

n

inactivos. identificaron dos grupos, los cuales fueron separados en dos grupos:

reproductivamente activos e inactivos.

La reproducción es un proceso continuo y bien definido, pero la escala de madurez es

en realidad un punto de referencia arbitrario. Dependiendo de los objetivos del análisis,

se puede elegir una escala de dos niveles (maduros e inmaduros) o una escala de

varios niveles (varias etapas inmaduras, varias etapas maduras) (Jaunicó 1983).

Aunque una escala multinivel proporciona información más fina del proceso

reproductivo, requiere también de propiedades morfocromáticas definidas con más

precisión y fácilmente identificables. De no cumplirse esta condición la probabilidad de

traslapo entre los distintos niveles aumenta considerablemente. Dado que la escala

empleada en este estudio es una de las que tiene más niveles de maduración, es

probable que el uso de una escala con menor número de niveles se correlacione mejor

con los cambios histológicos de la gónada. Este cambio debe cons

a

que ya han desovado, mientras que para el análisis de la talla de maduración es

necesario distinguir a los juveniles de los adultos que están en reposo.

30

Aunque existen huecos de información en la serie de tiempo analizada, los resultados

obtenidos del seguimiento de los estadios de maduración en función del desarrollo los

ovocitos fueron consistentes con los reportes de otros autores. Ehrhardt et al. (1983)

identificaron tres picos reproductivos en 1980: 1) Diciembre-Enero, basado en la

presencia de hembras maduras; 2) Mayo-Junio, basado en la presencia de hembras

desovadas y 3) Septiembre, basado en la presencia de hembras maduras. Ramírez y

lett (1985) definen también un pico en Mayo-Junio durante 1981 y una predominancia

l hueco de

ormación en agosto y septiembre, no es fácil de interpretar. Bien puede representar

La constancia de la talla de primera madurez en

un período de 5 años puede ser reflejo de estabilidad en la población, sin embargo sería

recomendable evaluar de manera más precisa el impacto que la captura de juveniles

puede tener en la dinámica del stock.

K

de hembras maduras en Agosto-Septiembre. Estos picos mantienen cierta

correspondencia con los valores altos del IM encontrados en mayo y agosto del 2002.

Con respecto a 2001, el período de transición descrito para junio y julio hacen suponer

que debió haber un pico reproductivo en mayo, lo cual coincide con los estudios previos

y el 2002. Sin embargo, el pico observado en octubre de 2001, dado e

inf

un período reproductivo prolongado, si el calamar empezó su temporada en agosto-

septiembre, o bien puede representar un retraso en el período reproductivo.

Considerando que hasta antes de la década de los 80s, los calamares mayores de 40

cm LM no habían sido reconocidos en el hemisferio norte (Markaida 2001), la frecuencia

de tallas registrada en este estudio demuestra que la pesquería de calamar en el Golfo

de California se sostiene por un intervalo amplio de tallas. Sin embargo, la talla de

primera madurez estimada en 72 cm de LM, implica que el 60% de las hembras

capturadas son juveniles. Durante 1996, Markaida y Sosa-Nishisaki, encontraron que la

mayor parte de las hembras capturadas en Santa. Rosalía maduraban en los 74 cm de

LM (Markaida y Sosa-Nishisaki 2001).

31

RECOMENDACIONES DE MANEJO

1.-Sería favorable para el manejo del recurso, que el permiso de pesca se autorice por

panga o embarcación, esto permitiría tener un mejor control del esfuerzo pesquero y la

vigilancia seria mas eficiente, pues cada panga traería su documentación.

2.-Realizar un sistema de libretas de campo en los sitios pesqueros. Esta libreta puede

ser solicitada a los permisionarios o pescadores cada vez que entreguen los avisos de

arribo y mientras se procesa la información darles otra y así irlas rotando con una

periodicidad preferentemente semanal o quincenal. Generalmente, en cada sitio los

permisionarios anotan en un cuaderno la captura en peso que descarga cada pescador

por día de pesca para después pagarles. Los registros en el cuaderno, hechos por el

encargado del sitio pesquero, proporcionan información de captura y de esfuerzo que

son esenciales para la evaluación de la población de calamar y en consecuencia para el

manejo.

3.-Mantener la dimensión actual del esfuerzo pesquero, es decir, no incrementar el

número de permisos de pesca hasta que se tengan resultados del sistema de libretas

de campo. Con esta medida, la variabilidad en la dimensión del esfuerzo se mantendría

dentro de un intervalo que sería más fácil de medir. Sostener el esfuerzo pesquero no

afectaría social y económicamente la región, pues cuando la abundancia del recurso ha

sido alta, la captura se ve limitada por la capacidad de las plantas procesadoras de

calamar.

El sistema de libretas de campo aplicado al calamar gigante (Dosidicus gigas) en el

área de Santa Rosalía, B.C.S. sería una prueba para medir la captura y el esfuerzo

pesquero y de funcionar podría aplicarse a otras pesquerías artesanales en las que este

tipo de información es difícil de obtener.

3.-El proyecto del sistema de libretas de campo podría iniciarse en el área de Santa

Rosalía, B.C.S. por el personal del proyecto calamar del Centro Regional de

Investigación Pesquera, La Paz, B.C.S., quienes proporcionarían la información

obtenida a la oficina de Administración de pesquerías de la subdelegación estatal de la

SAGARPA. Para hacer esto posible, la solicitud de la libreta a los permisionarios,

tendría que ser un requisito oficial para renovar los permisos de pesca y hacerse a

través de la autoridad correspondiente con el apoyo de la oficina de pesca, donde se

reciben los avisos de arribo.

RECOMENDACIONES DE INVESTIGACIÓN

Realizar estudios bio-económicos, puesto que, en la variación de la captura influyen

factores tales como, el precio del producto y la capacidad de procesamiento del recurso

en las plantas procesadoras. Esto produce problemas en la evaluación de la pesquería

y en consecuencia en el manejo.

Ejecutar estudios para describir los movimientos migratorios de la especie, dentro del

Golfo de California, pues de esto depende la disponibilidad del recurso a la pesquería.

Efectuar por lo menos, otro ciclo de análisis histológico, que incluya la época de

invierno, para completar o corroborar las fases de madurez identificadas, y establecer

una escala de madurez gonádica particular para el calamar gigante.

Continuar con el monitoreo de la pesquería de calamar gigante (Dosidicus gigas), en la

zona de Santa Rosalía, B.C.S., pues los cambios repentinos en la CPUE no son una

tendencia común en recursos de una sola cohorte o generación anual y la alta variación

observada en la zona de Santa Rosalía, B.C.S., no había sido reportada. Esto tiene

impacto en las medidas de administración del recurso y es probable que se necesite

implementar medidas de manejo propias para esta zona.

AGRADECIMIENTOS Los autores agradecen a la Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca (CONAPESCA),

Dirección General de Ordenamiento Pesquero y Acuícola, por el financiamiento para

llevar a cabo este estudio. A las Plantas procesadoras de calamar, por la información y

el apoyo brindado durante los muestreos, especialmente a sus gerentes: Ing. Regulo

33

López, C.P. Miguel Tito Cota y C.P. Etelvina Carvajal. A la Subdelegación de Pesca de

la SAGARPA por la información brindada, especialmente al Biól. José Hernández

Lizardi, Jjefe del Departamento de Administración de Pesquerías. Al personal de

campo: Raúl Zamarrón Daniels, Leonardo Méndez López, Luis Arturo Robles Vázquez y

Armando Hernández López.

34

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38

LISTA DE FIGURAS.

Figura.1. Tendencia anual de las capturas de calamar gigante Dosidicus gigas. Modificado de Morales-Bojórquez et al. 2001. Figura 2. Área de estudio en Santa Rosalía, B.C.S. Figura 3.- Distribución de longitudes de manto de Dosidicus gigas durante la temporada 2002. Figura. 4. Captura comercial de calamar gigante (Dosidicus gigas), descargada en las plantas procesadoras de la zona de Santa Rosalía, B.C.S. Temporada de pesca 2002. Figura 5. Relación peso-longitud del calamar gigante (Dosidicus gigas) de la zona de Santa Rosalía, B.C.S. Temporada 2002. Figura 6.- Ajuste del modelo lineal de extracción sucesiva. Figura 7.- Tendencia de la CPUE de calamar gigante Dosidicus gigas. Figura 8. Estimaciones quincenales promedio del coeficiente de capturabilidad en función de la longitud de manto para el periodo comprendido entre el 6 de Mayo al 26 Julio del 2002. Figura 9. Cambios relativos quincenales de la tasa de captura en función de la longitud de manto, respecto al promedio del periodo analizado (6 de mayo al 26 de Julio). Figura 10. Diferencias relativas quincenales de capturabilidad ( tβ ) en función del esfuerzo pesquero (número de viajes). Figura 11. Estimaciones de abundancia en número de calamares y abundancia en toneladas. Figura 12. Índice de madurez estimado en cada fase de madurez gonádica. Cada barra representa el valor promedio y su intervalo al 95% de confianza. La línea horizontal representa el valor promedio estimado para el total de los calamares analizados. Figura 13. Composición de ovocitos (izquierda) e Índice de Madurez quincenal (derecha). Ovocitos 1; Ovocitos 2; Ovocitos 3; Ovocitos 4; Ovocitos 5. Las barras representan el promedio, el intervalo de confianza y el intervalo máximo y mínimo de los índices de madurez estimados en cada quincena. Figura 14. (a) Proporción de organismos maduros por clase longitud de manto. Las barras negras representan el total de organismos y las grises el número de organismos maduros.(b) Frecuencia acumulada de organismos maduros. Se muestra la longitud de manto de primera madurez.

Figura 15. Estimaciones quincenales promedio del coeficiente de capturabilidad en función de la longitud de manto para el periodo comprendido entre el 9 de Mayo a 19 de Julio del 2001. Figura 16. Estimaciones anuales promedio del coeficiente de capturabilidad en función de la longitud de manto para la temporada 2001. : 9 de Mayo a 19 de Julio del 2001 y : 6 de Mayo al 26 Julio del 2002.

tN

1+tN Figura 17. Estadio microscópico del desarrollo de los ovocitos. Primer estadio: ovocito inmaduro o primario. Figura 18. Estadio microscópico del desarrollo de los ovocitos. Segundo estadio: reposo o postdesove, ovocito primario cuboidal. Figura 19. Estadio microscópico del desarrollo de los ovocitos. Tercer estadio: madurando, epitelio invadiendo el ovocito. Figura 20. Estadio microscópico del desarrollo de los ovocitos. Cuarto estadio: maduro, desplazamiento del epitelio folicular. Figura 21. Estadio microscópico del desarrollo de los ovocitos. Quinto estadio: ovocito listo para ser liberado.

40

FIGURAS

116o 115o 114o 113o 112o 111o 110o 109o 108o 107o 106o

23o

24o

25o

26o

27o

28o

29o

30o

31o

32o

Océano Pacífico Golfo de California

MÉXICO

Guaymas

SantaRosalía

Figura 1.

41

0

20

40

60

80

100

120

140

160

Cap

tura

(mile

s de

tone

lada

s)

Tiem po (años)

TotalBaja Cal. Sur.

Figura 2.

42

Julio-2

05

10152025

30 36 42 48 54 60 66 72 78 84 90

Frec

uenc

ia (%

)

Julio-26

0

5

10

15

20

25

30 36 42 48 54 60 66 72 78 84 90

Longitud de manto (cm)

Frec

uenc

ia (%

)

Agosto-30

05

10152025

30 36 42 48 54 60 66 72 78 84 90

Agosto-7

05

10152025

30 36 42 48 54 60 66 72 78 84 90

Mayo-6

05

10152025

30 36 42 48 54 60 66 72 78 84 90

Frec

uenc

ia (%

)

Mayo-29

05

10152025

30 36 42 48 54 60 66 72 78 84 90

Frec

uenc

ia (%

)

Junio-12

05

10152025

30 36 42 48 54 60 66 72 78 84 90

Frec

uenc

ia (%

)

`

Octubre-8

0

5

10

15

20

30 36 42 48 54 60 66 72 78 84 90

Septiembre-12

0

5

10

15

20

30 36 42 48 54 60 66 72 78 84 90

Octubre-22

05

101520

30 36 42 48 54 60 66 72 78 84 90

Longitud de manto (cm)

Figura 3.

43

0

100

200

300

400

500

1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

Tiempo (quincenas)

Cap

tura

(num

ero

de c

alam

ares

) x

10 3

Figura 4.

44

Figura 5.

050

100150200250300350400

0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11

Tiempo (quincenas)

CP

UE

0

5

10

15

20

25

22 26 30 34 38 42 46 50 54 58 62 66 70 74 78 82 86 90

Longitud de manto (cm).

Pes

o de

man

to (K

g)

45

y = -0.0001x + 343.36R2 = 0.2155

0

50

100

150

200

250

300

600,000 800,000 1,000,000 1,200,000 1,400,000

Captura acumulada

CP

UE

Figura 6.

46

0

100

200

300

400

0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11

Tiempo (quincenas)

CP

UE

Figura 7.

47

Figura 8.

0

0.0005

0.001

0.0015

0.002

0.0025

0.003

28 32 36 40 44 48 52 56 60 64 68 72 76 80 84 88

Longitud de manto (cm)

Cap

tura

bilid

ad

48

-5

-4-3

-2-1

01

23

4

30 36 42 48 54 60 66 72 78 84 90 96

Ln(U

/Upr

om)

6_May

-5

-4

-3

-2

-1

0

1

2

30 36 42 48 54 60 66 72 78 84 90 96

Ln(U

/Upr

om)

20_May

-1

0

1

2

3

30 36 42 48 54 60 66 72 78 84 90 96

Longitud de manto (cm)

Ln(U

/Upr

om)

12_Jun

-2.5

-2-1.5

-1-0.5

00.5

11.5

2

30 36 42 48 54 60 66 72 78 84 90 96

Ln(U

/Upr

om)

2_Jul

-4

-3

-2

-1

0

1

2

3

30 36 42 48 54 60 66 72 78 84 90 96

Longitud de manto (cm)

Ln(U

/Upr

om)

26_Jul

Figura 9.

49

6_May

26_Jul

12_Jun2_Jul

29_May

26_Jul

2_Jul

-0.15

-0.1

-0.05

0

0.05

0.1

0 500 1000 1500 2000 2500

Esfuerzo pesquero

βt

Figura 10.

50

0

500,000

1,000,000

1,500,000

2,000,000

2,500,000

1 2 3 4

Tiempo (quincenas)

Nt (

num

ero

de c

alm

ares

)

-3,000

2,000

7,000

12,000

17,000

22,000

Bt (

tone

lada

s)

Nt

Bt

Figura 11.

51

0

1

2

3

4

5

I II III IV V VI

Madurez Macroscópica

Indi

ce d

e M

adur

ez (I

M)

Figura 12

52

0

1

2

3

4

5

MAY JUN JUL AGO SEP OCT NOVÍn

dice

de

Mad

urez

2001

0.0

0.2

0.4

0.6

0.8

1.0

MAY JUN JUL AGO SEP OCT NOV

Frec

uenc

ia R

elat

iva

0

1

2

3

4

5

MAY JUN JUL AGO SEP OCT NOV

Índi

ce d

e M

adur

ez

2002

0.0

0.2

0.4

0.6

0.8

1.0

MAY JUN JUL AGO SEP OCT NOV

Frec

uenc

ia R

elat

iva

Figura 13

53

Figura 14

0

4

8

12

16

20

33 43 53 63 73 83 93

Longitud del Manto (cm)

Frec

uenc

ia (%

)

0.0

0.2

0.4

0.6

0.8

1.0

0 10 20 30 40 50 60 70 80 90 100

Longitud del Manto (cm)

Hem

bras

Mad

uras

(%A

cum

)

72

54

0

0.0005

0.001

0.0015

0.002

0.0025

28 32 36 40 44 48 52 56 60 64 68 72 76 80 84 88

Longitud de manto (cm)

Cap

tura

bilid

ad

Figura 15

55

00.000020.000040.000060.000080.0001

0.000120.000140.00016

30 36 42 48 54 60 66 72 78 84 90

Longitud de manto (cm)

Cap

tura

bilid

ad

Figura 16

56

Figura 17

57

Figura 18

58

Figura 19

59

Figura 20

60

Figura 21

61

TABLAS Tabla 1. Descripción morfológica de las fases de maduración gonádica usada en calamares (Sauer y Lipinski 1990). Fase de Maduración Características morfológicas I Juvenil Glándulas nidamentales como bandas transparentes. El resto de las

estructuras no son visibles a simple vista II Reposo Conducto ovárico visible. El ovario es homogéneo III Preparatorio Conducto ovárico extendido. Huevos inmaduros visibles IV Madurando Glándulas nidamentales grandes. Se observan algunos huevos

maduros (amarillos) en el ovario. No existen huevos maduros en el oviducto

V Maduro Huevos maduros en el oviducto. Hay secreción en las glándulas nidamentales

VI Desovado Indefinido

62

Tabla 2. Proporción macho:hembra, registrado en los muestreos masivos de la capturas comerciales de calamar gigante (Dosidicus gigas) en la zona de Santa Rosalía, B.C.S., durante el periodo comprendido entre Mayo y Octubre del 2002.

Quincena Macho-Hembra Mayo-6 1:1.2 Mayo-29 1:3.5 Junio-12 1:1 Julio-2 1:1 Julio-26 3:1 Agosto-7 1:1.2 Agosto-30 1:1.2 Septiembre-26 1:9 Octubre-8 1:1 Octubre-22 1:3.5

Tabla 3. Índice de los cambios relativos de capturabilidad en función de la longitud de manto ( β ) y el índice de la abundancia de los calamares más pequeños presentes en lcaptura (

a α ) para el periodo de tiempo analizado. R (factor de correlación). ,

Quincena � � R Mayo-6 -0.1267 6.7285 0.7 Mayo-29 0.0715 -6.197 0.6 Junio-12 -0.0533 3.7225 0.8 Julio-2 -0.0515 2.6294 0.9 0.0407 -2.0446 0.9 Julio-26 -0.0923 4.7932 0.9 -0.0371 -2.0548 0.6

63

Tabla 4. Número de machos y hembras registrados en lo muestreos biológicos de la capturas comerciales de calamar gigante (Dosidicus gigas) en la zona de Santa Rosalía, B.C.S., durante el periodo comprendido entre junio y noviembre del 2001 y de mayo a noviembre del 2002. QNA (quincena).

Número de calamares Mes Quincena Indiferenciados Hembras Machos JUN/2001 1 0 11 0 2 2 10 7 JUL 1 0 16 1 2 0 16 0 AGO 1 0 6 0 2 SEP 1 2 OCT 1 0 18 0 2 NOV 1 0 20 0 2 0 20 0 MAY/2002 1 0 17 9 2 0 36 10 JUN 1 0 21 25 2 JUL 1 0 11 16 2 0 9 20 AGO 1 3 16 6 2 0 22 7 SEP 1 0 21 9 2 2 17 0 OCT 1 1 3 2 2 2 14 2 TOTAL 19 10 304 114

64

Tabla 5. Descripción de las etapas de desarrollo de los ovocitos de Dosidicus gigas. Estadio del Ovocito

Nivel de Desarrollo (S) Características celulares

Inmaduro 1

Ovocito con núcleo esférico con uno o varios nucleolos, rodeados por un citoplasma eosinófilo. Se observa una capa delgada de células germinales alrededor del ovocito. (Figura 17)

Reposo o Postdesove 2

Solo se observan restos de ovocitos maduros. Tejido conjuntivo abundante y desorganizado, lo cual dificulta el conteo de ovocitos (Figura 18).

Madurando 3

Ovocitos de mayor tamaño con nucleolos menos aparentes. Proliferan las células germinales que se adhieren al ovocito y junto con el epitelio folicular, comienzan a invadir el ovocito formando interdigitaciones. Su morfología cambia de cuadrada a cúbica (Figura 19).

Maduro 4

El núcleo migra hacia uno de los polos del ovocito. Las interdigitaciones se retiran hacia la periferia y su morfología cambia de cúbica a columnar (Figura 20).

A punto de expulsión 5

El núcleo y los nucleolos disminuyen de talla hasta desaparecer. Las células foliculares se retraen y forman una estructura laminar alrededor del óvulo. Hay formación de vitelo y se incrementa el citoplasma eosinófilo (Figura 21).

65

Tabla 6. Composición de ovocitos y promedio del índice de madures (IM) en cada fase de madurez gonádica. Tamaño de la muestra (N).

Madurez Nivel de desarrollo de los ovocitos

Gonadal 1 2 3 4 5 IM N

I 93.0 7.0 - - - 1.070 43

II 74.3 12.1 8.8 4.6 0.2 1.443 91

III 61.8 - 28.6 9.5 0.2 1.863 35

IV 1.9 5.9 25.3 62.3 4.6 3.618 17

V 17.7 - 30.9 33.0 18.4 3.345 39

33.3 - 48.0 12.5 6.1 2.581 3 VI

- 100.0 - - - 2.000 3

66

Tabla 7. Resultados del análisis de varianza del promedio del índice de madurez (IM), y de la prueba de Tukey para comparación múltiple de factores que se aplicó después de que el análisis de varianza resultó significativo. El nivel de confianza (1-α) de referencia es del 95%. Pruebas altamente significativas con P ≤ 0.01 (***) y no significativas (NS), (P > 0.05).

Suma de Cuadrado Fuente Cuadrados g.l. Medio F Prob.

IM 180.777 5 36.155 49.783 6.99x10-30 ***

Error 163.408 225 0.726

Total 344.185 230

Prueba de Tukey para diferentes tamaños de muestra

Etapas

comparadas P

I-II 0.3232 NS

II-III 0.3103 NS

III-IV 2.03x10-5 ***

IV-V 0.9370 NS

V-VI 0.2653 NS

67

“La pesquería del calamar gigante (Dosidicus gigas) en el Golfo de California. Recomendaciones de Investigación y Tácticas de Regulación “ se terminó de imprimir en Diciembre del 2004 en Talleres Gráficos de México. Se tiraron 500 ejemplares.

68