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EDITORIAL

Al servicio de la Medicina Interna

Melchor Álvarez de Mon Soto

Rev Clin Esp. 2008;208(11):537 537

En sus seis décadas de existencia, Revista Clínica Es-pañola (RCE) ha consolidado una posición de prestigioen la comunicación profesional médica en nuestro paísy en el entorno internacional, superando avatares des-favorables para su desarrollo. La relevancia alcanzadapor RCE está avalada por su inclusión en los restrictivossistemas de reconocimiento editorial mundiales y por suimportante impacto de acuerdo con los criterios biblio-métricos, que se ha cuadruplicado en los últimos ochoaños. Se ha superado la limitación que para su difusiónsupone que sea una publicación escrita en una lenguadistinta al idioma predominante empleado en la comu-nicación biomédica. Por el factor de impacto alcanza-do, RCE se ha situado en la cabecera de las revistas médi-cas de nuestro país (por encima del 97,5% de las revistasmédicas españolas) y entre las más altas de la MedicinaInterna de Europa a cuya cabecera se encuentran las bri-tánicas. Esta relevante significación editorial de RCE seha fundamentado en la calidad de los artículos publica-dos y en el interés generado en los lectores a lo largo desus dilatados años de servicio. Quiero expresar mi agra-decimiento a todos los autores que han enviado sus tra-bajos a RCE durante estos años y en especial a los que,por motivos de disponibilidad y prioridad editorial, noha sido posible publicarles sus aportaciones científicas ala comunidad de lectores y que suponen alrededor deltriple de los que han sido incluidos en la revista.Desde su fundación por el profesor Jiménez Díaz, RCEse ha orientado a la difusión de avances en MedicinaInterna. Este compromiso editorial con las bases cien-tíficas de la enfermedad y su aplicación a la prácticaasistencial en el ámbito profesional del internista se havisto potenciado y realzado por ser en los últimos añosen órgano de expresión de la Sociedad Española deMedicina Interna (SEMI). Así, RCE constituye una refe-rencia de la actividad de la especialidad en el entornopúblico contribuyendo a la presencia, proyección socialy difusión de la Medicina Interna en la sociedad médi-ca. Este estrecho y fructífero vínculo entre RCE y laSEMI se ha concretado en que los objetivos estratégi-cos editoriales de la revista se hayan aunado con losde la sociedad de la que es su órgano de expresión.RCE ha comunicado contenidos estratégicos de la

SEMI, de las sociedades autonómicas que la confor-man y de sus grupos de trabajo. RCE ha mantenido ypotenciado la contribución a la difusión de avances enconocimiento de la etiopatogenia, diagnóstico y trata-miento de patologías del ámbito de la medicina inter-na publicando trabajos originales de investigación decalidad. Asimismo, RCE ha hecho suyos los objetivosde actualizar los conocimientos y facilitar la adquisi-ción de los avances claves de la medicina interna apli-cados a la práctica asistencial y analizar los sistemasde gestión profesional propios de la especialidad. La gestión y realización de RCE ha sido posible en estadécada gracias al trabajo de muchas personas. Agradez-co el intenso y la calidad de la labor profesional realiza-da por el redactor jefe y por el secretario de redacción,profesores Manuel Rodríguez Zapata y Luis Manzano.Este sentimiento lo extiendo a los directores asocia-dos, y al Consejo Editorial y Comité Científuico deRCE. Los profesionales de DOYMA al inicio de la déca-da y posteriormente de Elsevier han contribuido de for-ma esencial al desarrollo y viabilidad del proyecto yexpreso mi reconocimiento a todos ellos y a su direc-tora editorial doña Mª Eugenia Eisman.Quiero expresar la ilusión profesional que supuso parami recibir de la SEMI el encargo de dirigir RCE en el2000 y cuya confianza he mantenido durante estosaños. En colaboración con el equipo de dirección edi-torial hemos pretendido responder a la misión enco-mendada con nuestra mejor dedicación e interés. Loserrores que haya cometido en la dirección de RCEdurante estos años son fruto de mis limitaciones y medisculpo por ello.Deseo lo mejor a RCE como revista científica centra-da en la Medicina Interna y órgano portavoz de la SEMIen los próximos años. La calidad del nuevo director ydel equipo de redacción avala el éxito del proyecto. Me despido de los lectores con el mismo espíritu deservicio y colaboración que a mi incorporación a RCEy con la ilusión de haberles podido ofrecer un pro-ducto editorial útil para sus objetivos formativos. Hasido un honor para nuestro equipo de redacción haberparticipado en el apasionante objetivo del desarrollode la Medicina Interna.

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