sistematización de archivos eclesiásticos

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S S ISTEMATIZACIÓN ISTEMATIZACIÓN DE DE A A RCHIVOS RCHIVOS E E CLESIÁSTICOS CLESIÁSTICOS UNA NECESIDAD DE LA PROVINCIA MERCEDARIA ARGENTINA Universidad Nacional de Córdoba Facultad: Filosofía y Humanidades Escuela: Archivología Cátedra: Metodología y Práctica Archivística Alumno: Alfredo Rubén Mariano Furlani Córdoba, diciembre del 2000

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SSISTEMATIZACIÓNISTEMATIZACIÓN DEDE A ARCHIVOSRCHIVOS

EECLESIÁSTICOSCLESIÁSTICOS

UNA NECESIDAD DE LA PROVINCIA MERCEDARIA

ARGENTINA

Universidad Nacional de Córdoba

Facultad: Filosofía y Humanidades

Escuela: Archivología

Cátedra: Metodología y PrácticaArchivística

Alumno: Alfredo Rubén MarianoFurlani

Córdoba, diciembre del 2000

A Silvia

Agradezco sinceramente a mis compañeros de estudio todo su apoyo, sinel cual hubiera sido imposible la conclusión de esta carrera. Un recuerdoespecial a quienes compartieron generosamente su material de estudiosconmigo: Carlos, Claudia, Eduardo, Ivana, Julieta, Marcia, Nelly, y todoslos demás que así lo hicieron y de cuyos nombres no me acuerdo por laemoción que me embarga.

También al claustro docente deseo expresar mi agradecimiento porhaberme animado en circunstancias personales desfavorables.

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A A MODOMODO DEDE I INTRODUCCIÓNNTRODUCCIÓN

El objetivo de este trabajo es despertar en el ámbito de la ProvinciaMercedaria Argentina la conciencia sobre la necesidad de sistematizar losarchivos de su jurisdicción.

Como su presentación se realiza en un ámbito universitario, esconveniente aclarar, además de los antecedentes institucionales de laentidad en estudio, algunos rudimentos de archivología eclesiástica.

El Sistema de Archivos Eclesiásticos que se propone necesita de laparticipación de numerosos sectores encargados de la administración de laantedicha Provincia1 religiosa. Por ello, en lo referido a sistematización,puede considerarse un mero borrador de trabajo, ya que como se planteamás adelante, el anteproyecto deberá surgir de una Comisión formada alefecto.

1 En adelante, cuando se use el término Provincia, se entenderá como la jurisdicción religiosadenominada Provincia Mercedaria Argentina, a menos que se indique lo contrario.

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1. O1. ORÍGENESRÍGENES YY EVOLUCIÓNEVOLUCIÓN DEDE LALA

IINSTITUCIÓNNSTITUCIÓN..

1.1. LA NECESIDAD.

Gibraltar. Los remos se hunden rápidamente en las aguas que fluyentorrentosas entre las columnas de Hércules. Los hombres están seguros.Esta vez no tendrán que derribar la puerta para tratar de entrar en tierrasespañolas; alguien los espera para abrirla.

Primavera mediterránea del 711. Atrás quedaban los intentos de invasióndel 674 en Algeciras, la derrota de la escuadra ante los barcos deTeodomiro en el 701, las escaramuzas del 709.

La traición del conde don Julián (Olbán) deja libres las playas de GebelTarik a las tropas enviadas por Muza. Y una epopeya de ocho siglos estápor comenzar.

Las cadenas empiezan a cubrir a los habitantes de la península, y muchosde ellos contemplan el mismo mar desde otras playas.

Argel, ¡qué lejos está el hogar, qué distante la patria! Los deportadosesperaban en el destierro un milagro que los devolviera a la vida. La vidaera su más grande necesidad, ¿quién podría satisfacerla?

Cautivos les llamaban. ¿Qué eran, que son? En palabras de uncontemporáneo:

Mas captiuos son llamados, por derecho, aquellos que caen en prisión deomes de otra creencia. Ca éstos los matan después que los tienen presos,por desprecio que no han la su ley, o los tormentan de crueles penas, o sesiruen dellos como de sieruos, metiéndolos a tales seruicios que querríanante la muerte que la vida.2

Había un sustento religioso para esa su nueva condición. Venía de loprofundo de otra península, de Arabia.

4. Y cuando os enfrentéis con los incrédulos, decapitadles hasta que leshayáis desbaratado; y encadenad a los supervivientes. Ya sea que lesperdonéis luego, por generosidad o mediante rescate, aguardad a que la

2 Las siete partidas del Rey D. Alfonso El Sabio, Partida Segunda, Título XXIX, Ley I. Citado por:GAZULLA, Fray Policarpo. La Orden de Nuestra Señora de la Merced, Valencia, 1985, pág. 7.

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guerra haya terminado. Tal es la orden. Y si Dios hubiera querido, Elmismo se habría vengado de ellos; pero, os ordenó la guerra paraprobaros mutuamente. En cuanto a quienes hayan sido muertos por lacausa de Dios, El jamás desmerecerá sus obras. …31. Ciertamente que,os probaremos para cerciorarnos quienes son los combatientes yperseverantes, de entre vosotros, y justificar vuestra conducta. …35. Noflaqueéis, pues, ante el adversario invitándole a la paz; porque seréis losvencedores, pues, Dios está con vosotros y jamás defraudará vuestrasacciones. 3

A los invasores no sólo los movía el ansia de conquista; había unapromesa.

157. Mas, si murierais o fueseis muertos por la causa de Dios, sabed quela indulgencia y la clemencia de Dios es preferible a cuanto atesoran.158. Y sabed que, tanto si morís como si sois muertos, a Dios seréisretornados. … 198. En cambio, quienes teman a su Señor tendránjardines, bajo los cuales corren los ríos, donde morarán eternamente,como albergue de Dios. Porque, lo que está a la vera de Dios, es lo mejorpara los piadosos.4

Dura fue la vida para los cristianos bajo la dominación árabe en España.En otras palabras, sucedió en España lo que en todos los paísesconquistados por los árabes; su dominación dulce y humana al principio,degeneró en un despotismo intolerable. Desde el siglo IX, losconquistadores de la Península seguían a la letra el consejo del califaOmar, que había dicho secamente: «Debemos comernos a los cristianos,y nuestros descendientes deben comerse a los suyos mientras dure elIslam».5

En muchas oportunidades, el cautiverio fue sinónimo de muerte.Todos los cristianos que allí había, fueron decapitados, y asolando laciudad, unos pocos que habían escapado de la muerte fueron llevados aCórdoba, donde metidos en mazmorras y puestos en cadenas estuvierondos años y medio alabando y bendiciendo a Dios trino y uno, vivo yverdadero. Y aunque Dios tiene cuidado de todos, y principalmente delos que puestos en tribulación encomiendan a Dios sus cuerpos y susalmas con esperanza y sirviéndole en buenas obras: quiso la piedaddivina (como lo tenía ordenado en su predestinación) poner fin a lasfatigas y trabajos de aquellos cautivos y sus miserias que en los cuerpospadecían. Y porque llegasen con mucho gozo y con la palma del martiriodelante de su presencia habiéndole servido, permitió que el tirano que los

3 El Sagrado Corán, sura XLVII (sura del Apóstol Muhammad o de Mahoma), aleya 4. Versioncastellana directamente del original arabigo por CASTELLANOS, Rafael y ABBOUD, Ahmed.Editorial Arabigo Argentina "El Nilo". Buenos Aires, 1953

4 El Sagrado Corán, sura III (La familia de Imran), aleya 157 y ss.5 DOZY, Historia de los Musulmanes españoles, traducción de Colección Universal, tomo II, pág.

49.Citado por: GAZULLA, Fray Policarpo. La Orden de Nuestra Señora de la Merced, Valencia,1985, pág. 13.

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había traído cautivos, los sacase de la cárcel, y que pasándolos a cuchillocoronados de la laurea de su propia sangre, los enderezase al reino de loscielos… (Carta del Rey Bermudo II, sobre los cautivos de la fortaleza deSimancas, año 984)6

La España medioeval se pareció un tanto a la actualidad de la TierraSanta. Convivieron allí, como lo hacen hoy, cristianos, musulmanes yjudíos. Estos últimos tan mal no la pasaron, porque a pesar de los mandatoscondenatorios del profeta hacia ellos, su colaboración y buenas relacionescon los berberiscos les otorgaron una independencia notable. Esto favorecióel trabajo de intermediación (para nada mediación) de los judíos entremoros y cristianos.

¿Qué hacían tantos judíos a tanta distancia de su tierra? Dominada lainsurrección del año 132 en Jerusalén, el emperador Adriano –hijo deromanos oriundos de Hispania– hizo transportar a España 50.000 familiasjudías, llegando a ser varios centenares de miles en tiempos de los godos.

Luego de la cristianización del Imperio Romano y de la catolización delreino visigodo, el rey Sisebuto (612/620) persiguió severamente a losjudíos que no se "convirtieran". El obispo Isidoro de Sevilla y el IVConcilio Toledano reprobaron la actitud real.

Perseguidos, las comunicaciones con las comunidades hebreas en elnorte de África entraron en aumento, y no precisamente para pedir elsostenimiento del reino visigodo. El rey Egica (687/701), al enterarse de lasconspiraciones en el 694, cambió su actitud tolerante. La severidad fue enaumento, hasta que el rey Witiza (701/709) levantó las sanciones. Muertoéste, empezó una guerra civil que concluyó con la derrota de los partidariosdel rey difunto, y la asunción del rey Rodrigo. En la cuarta y definitivainvasión mora de la primavera del 711, los judíos, quizá previendo unanueva persecución, apoyaron decididamente los intereses moros. Seiniciaba así una cohabitación entre las tres religiones monoteístas quereconocían por padre de los creyentes a Abraham. Un largo condominioque terminó luego de ocho siglos con la toma de Granada, y con losganadores expulsando a buena parte de los otros contendientes: moros yjudíos. Un punto interesante para los investigadores de la historiamercedaria, dadas las actividades de rescate de prisioneros que ejercíanambos, sería el de las relaciones que pudieran haber existido entre judíos ymercedarios.

6 MORALES, Crónica general de España, libro XVIIl, cap. II. Citado por Gazulla, ibíd, pág. 17.

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1.2. SATISFACIENDO LAS NECESIDADES DE LOS MÁS

NECESITADOS

La función (o la satisfacción de una necesidad).

Con seguridad que el rescate (redención) de cautivos es cosa casi tanantigua como el cautiverio mismo…

Sacar a los omes de captiuo, es cosa que plaze mucho a Dios, porque esobra de piedad, e de merced.7

Hacer las redenciones pagando en el acto el valor de los cautivos, fue lomás común y corriente desde los primeros tiempos.

Algunos siglos antes, san Ambrosio, obispo de Milán, recordaba a losfieles que el oro de la Iglesia estaba para los pobres, sobre todo para losmás necesitados, los cautivos:

Quien envió sin oro a los apóstoles (Mt. 10,9), fundó a la Iglesia sin oro.La Iglesia no posee oro para tenerlo ni guardado, sino para distribuirlo ysocorrer a los necesitados. ¿Acaso se nos ha olvidado ya cuánto oro yplata se llevaron los asirios del templo de Jerusalén (2Re 24,13)? ¿Nosería mejor que los sacerdotes fundieran el oro para el sustento de lospobres, si no hay otros recursos, que exponernos a que se apoderen de élsacrílegamente los enemigos? ¿Temes, acaso, que falte el ornato deltemplo de Dios? El Señor te respondería: Los sacramentos no requierenoro; el verdadero ornato de los sacramentos es la redención de loscautivos. 8

El Cuarto Concilio de Constantinopla9,en el canon 15, admitía comoúnico motivo para vender los bienes sagrados de la iglesia el rescate decautivos:

Apostolicos et paternos canones renovans sancta hæc universalissynodus definivit neminem prorsus episcopum vendere vel utcumquealienare cimelia et vasa sacrata, excepta causa olim ab antiquis canonibusordinata, videlicet quae accipiuntur in redemptionem captivorum

7 Las siete partidas del Rey D. Alfonso El Sabio. Partida Segunda, Título XXIX, Ley I. Citado por:ROMERO TALLAFIGO, Manuel. «Los soportes de la escritura y la información desde la edad delos sumerios hasta la alta edad media». En: El papel y las tintas en la transmisión de la información,Diputación Provincial de Huelva. Huelva (España), 1992, pág. 17 [17-38].

8 AMBROSIO DE MILAN. Sobre los deberes de los ministros, libro II, c. 28, 137-138. En:Patrología Latina, Editorial J.P. Migne, París, 1844-1855, volumen 16, pág. 148. Citado por:GONZALEZ CARVAJAL, Luis. Con los pobres contra la pobreza. Paulinas, Madrid, 1992, pág. 50.

9 ALBERIGO, G. Conciliorum æcumenicorum decreta. Bolonia, 1973, pág. 177. Citado por:Comisión Pontificia para los Bienes Culturales de la Iglesia. «Necesidad y urgencia del inventario ycatalogación de los bienes culturales de la Iglesia». En: L'Osservatore Romano, edición española, 21de abril del 2000, pág. 14 [7-14], nota 9.

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A veces se entregaban cierto número de prisioneros árabes por el rescate.Y casos había que los nobles pagaban su libertad, dando a los sarracenos

siervos cristianos propios, siendo éste uno de los tantos abusos a que sevieron sometidos los siervos.

Redimirse poniendo rehenes en fianza, era una práctica no muyfrecuente.

Con las cofradías o hermandades, establecidas para prestarse mutuoapoyo en los casos de cautiverio, y la fundación de los primeros institutosredentores en el siglo XII, la obra de redimir cautivos se socializó.

Era costumbre dejar en los testamentos legados destinados a la redenciónde cautivos y a la construcción de puentes: per captivos et per pontes.

Aparecieron los intermediarios. Solían ser mercaderes, a los que se lesencargaba agenciar los rescates y redimir los cautivos. Se los llamabaexeas. Posteriormente, el oficio se organizó de la mano de Alfonso elSabio.

Alfaqueques, tanto quiere decir en arauigo, como omes de buena verdadque son puestos para sacar los catiuos. …E sin todo esto, se deuenguardar, de no lleuar ningunas cosas la vna parte a la otra como manerade mercaderia, si no tan solamente aquellas que fueren para sacar loscatiuos. … Onde bien assi como los Alfaqueques, que estas cosasguardassen asi como sobredicho es, deuen ahuer buan gualardon por ello;otrosi los que assi no lo fiziessen, deuen auer pena, segun que el fechofuesse…»10

La institucionalización de la función: las OrdenesRedentoras.

La Orden de Santiago, fundada en 1175, fue la primera en poner vidas ybienes al servicio de los cautivos.

En 1180 se fundó la Orden de Montegaudio, conocida también como delSanto Redentor, incorporada posteriormente a la Orden de los Templarios.

En 1198, San Juan de Mata y San Félix de Valois instituyeron en Franciala Orden Redentora de la Santísima Trinidad.

Y a principios del siglo XIII, comienzan Pedro Nolasco y suscompañeros esta historia redentora que llega hasta nuestros días.

10 Las siete partidas del Rey D. Alfonso El Sabio., Parte segunda, título XXX, Ley I. Citado por:GAZULLA, Fray Policarpo. La Orden de Nuestra Señora de la Merced, Valencia, 1985, pág. 30.

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1.3. COORDINANDO ESFUERZOS, O EL CAMINO DE

NOLASCO.

Pedro Nolasco habría nacido alrededor del 1180 en Mas Saintes Puelles,al sur de Francia. De joven se trasladó a Barcelona, continuando losnegocios de su padre (comerciante). En uno de sus viajes comerciales, pagael rescate de un cautivo encontrado en su camino, en 1202. En 1205, juntoa un grupo de comerciantes, funda una cofradía dedicada exclusivamente alrescate de cautivos.

El 10 de agosto de 1218, san Pedro Nolasco fundó en Barcelona laOrden de la Virgen María de la Merced de la redención de los cautivos11,con la participación del rey Jaime de Aragón y ante el obispo de la ciudad,Berenguer de Palou.

El 17 de enero de 1235, el Papa Gregorio IX concede la aprobaciónpontificia a la Orden. ¿Qué diferenciaba esta Orden Redentora con lasdemás?

Características propias de La Merced

a. Limosnas de redenciónEn primer lugar, no se redimía tan sólo con los bienes propios. Se pedía

limosna, y se organizaba la recolección. Se administraba el esfuerzopopular. Tenía características de Orden Mendicante. La limosna deredención tenía una administración paralela e independiente. Las PrimitivasConstituciones, en el año 1272, legislaban muy claramente sobre el cuidadoque había de brindar a la rendición de cuentas:

El primer día del Capítulo, todos los Comendadores y Oficiales acudan ala reunión y entreguen al Maestre las bolsas y las llaves, y la cuenta delas limosnas que han recibido, y dé cada uno una dobla para costear losgastos del Capítulo. Y hagan entrega también por escrito al dichoMaestre de cualquier cosa o suma de dinero que hayan prestado o pedidoprestada, o de legado que hubieren recibido por razón de algún cautivo, a

11 A lo largo de su existencia la Orden de la Merced ha recibido distintas denominaciones, algunasoficiales (Orden de la Virgen María de la Merced de la redención de los cautivos, Orden de laMerced de Padres Mercedarios), y otras oficiosas (Orden de la limosna de los cautivos, Orden deSanta Eulalia, Orden de la Merced, Orden de Santa María de la Merced bajo la regla de SanAgustín, Orden de San Agustín) [Cfr. GAZULLA, fray Policarpo. La Orden de Nuestra Señora dela Merced - Estudios histórico críticos …, pág. 107 y ss.]. Su nombre oficial actual es: Orden de laBienaventurada Virgen María de la Merced, y su forma abreviada: Orden de la Merced [Cfr.Estatutos de la Provincia Mercedaria Argentina, números 3 y 5]. Todas designan a la mismainstitución.

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fin de que esto sea entregado al fraile que, de Consejo del Capítulo, seráenviado a la tierra en la que estas cosas se deberán entregar12.

La palabra "limosna" ha quedado muy desacreditada en la actualidad.Resulta muy difícil hoy comprender por qué la limosna recibe elogios tanextraordinarios en la Biblia y en la tradición de la Iglesia. Es que fuevaciada de su sentido original por los ricos y poderosos.

La palabra griega elemosyné (limosna), en los libros del AntiguoTestamento que usaban los judíos de la diáspora, suele traducir el hebreosedaqah (justicia), y con ese sentido se utiliza en el Nuevo Testamento. Asípues, para la Biblia "dar limosna" equivale a "hacer justicia ".

Es que, desde este punto de vista, la limosna suple de momento la faltade justicia, pero sin renunciar a ella. Es hacer justicia en nombre de Dios aquienes no se la hacen los hombres. Si no se entiende así la limosna, dejapaso al otro significado, diametralmente opuesto; el que anatemizan Marx yEngels:

"...De esta suerte, la beneficencia está organizada desde hace tiempocomo diversión".13

Si desde la justicia de los hombres la limosna es un acto absolutamentevoluntario, desde la justicia de Dios se torna obligatoria. A la tradicióncristiana le ha gustado referirse a la limosna en términos de un impuesto.San Agustín, al referirse a la limosna, dirigiéndose a los cristianos, losexhorta:

"...vosotros sois cobradores de vosotros mismos".14

Por eso, los recolectores de limosnas para la redención, eran vistos comoverdaderos cobradores de un impuesto, tan sólo ordenado por la sangre delos paisanos que estaban en mazmorras, más allá del mar.

El Sagrado Corán también da cabida a las limosnas, y entre sus fines seencuentra la redención de esclavos.

Las limosnas son tan sólo para los pobres, los menesterosos, losrecaudadores, los pusilánimes; para la redención de esclavos, losinsolventes; para la causa de Dios y para el viandante; ello es un preceptodimanado de Dios; porque, Dios es sapientísimo, prudente.15

12 DEVESA BLANCO, fray Juan. «Las Primitivas Constituciones de la Orden de la Merced oConstituciones Amerianas». En Analecta Mercedaria. Roma, año II, 1983, págs. 62/63 y 84/85 [5-119]. Lo de «Amerianas» viene por el maestre general bajo cuyo mandato fueron promulgadas, frayPedro de Amer.

13 MARX, Carlos y ENGELS, Federico. La Sagrada Familia. En: Obras de Marx y Engels, tomo 6,Crítica, Barcelona 1978, pág. 228. Citado por: GONZALEZ CARVAJAL, Luis. Con los pobrescontra la pobreza. Paulinas, Madrid, 1992, pág. 128

14 AGUSTIN DE HIPONA. Obras Completas de San Agustín, tomo 22, BAC, Madrid, 1967, pp.822/23. Citado por: GONZALEZ CARVAJAL, Luis. Con los pobres contra la pobreza. Paulinas,Madrid, 1992, pág. 127.

15 El Sagrado Corán, sura XLVII (sura del Apóstol Muhammad o de Mahoma), aleya 4.

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Visto el dinero más allá de los intereses particulares, convengamos quese trata de un auténtico medio de comunicación y comunión.

Para los mercedarios de los primeros tiempos, el dinero teníacaracterísticas casi sacramentales. Cada moneda, por más pequeña quefuera, representaba la diferencia entre la vida y la muerte de un cristiano.Así, las monedas de la redención podían convertirse en las monedas deJudas, si eran mal administradas.

Los mercedarios históricamente necesitaron y movilizaron ingentescantidades de dinero. Por eso, al decir de Zumel, eran comerciantes y de losbuenos; las ganancias no equivalían en este caso a la sed de lucro (que en elfondo es instinto de muerte) sino al ansia de vida de los demás.

Los fondos recaudados no constituían un recurso; pasaban ya a lacategoría de medio de rescate. El control y vigilancia de esos fondos teníancaracterísticas –perdóneseme la torpeza– "sacramentales". Y toda esainformación se reflejaba en diversos libros y registros.

La fe, objeto de los trabajos y sufrimientos de tantos mercedarios,implica necesariamente confianza en Dios y confianza en los hombres. Poreso, de toda acción emprendida en favor de los cautivos se debía y se deberendir cuentas con rapidez y exactitud. Es mucho más dañino para él queestar entre cadenas, la pérdida de confianza en la posibilidad de liberarlo.Una colecta mal llevada (ya sea porque se equivocó en el encuadre delsujeto o porque se llevó adelante negligentemente) y mal rendida atentadirectamente contra el espíritu mercedario.

b. Movimiento religiosoEn segundo lugar, obligó a movilizar esfuerzos de muchos hombres y

mujeres que no pertenecían a ella directamente: cofrades, síndicos,cuestores. Más que de una orden religiosa puede hablarse de unmovimiento religioso. Se trata de un conjunto de Institutos religiosos yasociaciones de laicos que han ido surgiendo a través de los tiempos. Todosellos apelan al mismo fundador originario, San Pedro Nolasco, a quien aveces se encuentran asociados otros fundadores particulares; secomprometen a realizar, de formas diversas, una misma misión liberadora yse sienten unidos por un mismo amor a la Virgen María bajo la advocaciónde la Merced. Estos Institutos y asociaciones cultivan un mismo espíritu,promueven lazos de fraternidad y forman la Familia Mercedaria. Estotambién tiene profunda significación archivística para los conventos de laOrden, porque varias de esas asociaciones depositan sus fondosdocumentales en los archivos conventuales.

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c. Tomar el lugar del cautivoEn tercer lugar, no sólo se pagaba el rescate en dinero. Si faltaba el

dinero, había que quedarse como garantía de pago del rescate adeudadopor la libertad de algún cristiano que estaba al borde de la desesperanza.Para el mercedario que quedaba en cadenas, de ahí a perder la vida nohabía mucho trecho.

El primero que pagó con su vida la libertad de los más débiles fue elmismo Cristo. Por eso, para los primeros cristianos el perder la libertad porlos más necesitados era considerado como signo de coherencia con lasenseñanzas del Maestro. San Clemente lo recuerda en estos términos:

"Sabemos que entre nosotros muchos se han entregado a las cadenas,para rescatar a otros; muchos se han vendido por esclavos y con el preciode su libertad han alimentado a otros".16

1.4. SÍNTESIS HISTÓRICA DE LA MERCED

Un movimiento religioso necesariamente debió sufrir vicisitudes de todotipo a lo largo de casi ocho siglos de existencia. Más todavía si susactividades estaban en un área tan compleja como la de redención decautivos. Veamos, en una apretada síntesis elaborada teniendo muy a lavista la elaborada por fray Saúl Peredo Meza, mercedario peruano, lasprincipales etapas de este ciclo vital inacabado.

Un cambio radical y doloroso

Casi un siglo después de la fundación, en 1317, se produce un doloroso(por lo innecesariamente acelerado) cambio: de Orden Redentora pasa aOrden Clerical. Es decir, se le agregan funciones propias de los clérigos,que antes le eran accesorias. Y así, el gobierno pasa de los caballeros a lossacerdotes. Este cambio, que permitió la supervivencia de la Orden hasta laactualidad, produjo una fuerte crisis de identidad en el siglo XIV. Y estatransformación se refleja en la organización archivística de la Orden, yaque buena parte de su producción documental brota de la actividadparroquial.

La Orden se expande a otras naciones, se incrementa fuertemente elaspecto cultural y aparecen los primeros tratados históricos de la Orden.

Como orden redentora poseyó castillos y fortalezas, y sostuvo hospitales.

16 Constituciones Apostólicas IV, 9. Citado por: MONTOYA MELESIO, fray Samuel La esclavitud yla Orden de la Merced México, 1984, pág. 46.

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Como orden clerical, al par que redentores, fueron también misioneros,predicadores y educadores.

Un nuevo horizonte

Con el descubrimiento de América, la Merced encontró un nuevohorizonte para sus actividades, más allá de los mares. Los PP. Juan deInfante y Juan de Solórzano llegaron con Colón al menos en su segundoviaje. Surgen nuevos horizontes de apostolado ni siquiera sospechadosanteriormente. Es un período breve, pero pleno de actividad: a partir deSanto Domingo, la Orden se expande en América, desde México a laArgentina; el trabajo misionero es intenso; por voluntad de los propiosfrailes que aquí trabajan surgen las provincias americanas, se crean centrosde formación para los religiosos.

En Europa, si por un lado se incrementa la Orden con nuevasfundaciones y se establece un procurador en Roma, en Francia losmercedarios atraviesan una difícil situación a causa de los protestantes, enque pierde muchos religiosos y conventos; se fortalecen la Orden Tercera ylas Cofradías y nacen los primeros monasterios de monjas mercedarias declausura; y se intentan los primeros pasos de una reforma de la Orden.

La Orden después del Concilio de Trento

El Capítulo general de 1574 es el punto de partida de un largo períodoque dura casi doscientos años: la Orden asume los decretos del Concilio deTrento sobre el estado religioso; los Maestros Generales que hasta entonceseran vitalicios gobernarán por seis años; se desarrolla una destacada laborcultural y universitaria donde brillan tantos ilustres religiosos en diversoscampos del saber; se hace más decidida la preocupación por la formación ycomo consecuencia crece el personal , aumentan los conventos yprovincias; la Orden se da unas Constituciones nuevas y más actualizadas;en esta época (1603), como fruto de la reforma de la Orden se fundan losmercedarios descalzos y junto a ellos las monjas mercedarias descalzas declausura, ambas ramas se multiplicarán rápidamente; la redención decautivos, ministerio primordial de la Orden, alcanza gran desarrollo debidotambién a la poderosa contribución económica de las provincias deAmérica; es la época de mayor florecimiento mercedario.

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Un siglo de persecución

Durante un siglo, desde 1770, la Merced debe sufrir una grave crisis.Como consecuencia de la revolución, en Francia desaparecen losmercedarios y por las guerras napoleónicas y la influencia liberal en Españae Italia, de manera que quedan reducidos a veintiséis todos los frailes y asólo dos conventos mercedarios en Europa.

Las provincias en América se ven afectadas por las consecuencias de lasguerras por la independencia en cuyo movimiento participan destacadosreligiosos.

La legislación de las nuevas repúblicas latinoamericanas es totalmenteadversa para la vida religiosa. Prácticamente se obliga la secularización delos frailes. Son suprimidos los conventos y los noviciados, quedandoveintiséis conventos con trescientos religiosos. Si esta situación en Américahubiera durado algunos años más, la Orden hubiera muerto de vejez.

En la Argentina, cuyos religiosos en Buenos Aires habían apoyadofervientemente la revolución de Mayo17, y la Independencia en 181618,alrededor de 1857 sólo quedaba en el Convento de Córdoba un sacerdoteconventual y algunos en el Convento de Mendoza.

Durante cuarenta años la Orden había sido gobernada por VicariosApostólicos, designados directamente por la Santa Sede, dada laimposibilidad de reunir capítulo general. Pero la raíz del viejo olivomercedario estaba fuerte. Desde tierras australes, religiosos de la ilustreprovincia chilena inician un proceso de restauración.

Como suele ocurrir en tiempos de crisis, la renovación en la Iglesia partefrecuentemente de las mujeres. Las necesidades en el área de promociónhumana fomentan el surgimiento de nuevas congregaciones mercedariasfemeninas que entraron a aumentar los miembros de la Familia Mercedaria.

17 Actas del Cabildo de Buenos Ayres. Año 1810, 22 de mayo, fs. 105: "Por el reverendo PadreProvincial dela Merced Doctor Fray Manuel Torres se dixo que se conformava en todo con lavotacion del Señor Comandante Don Cornelio Saavedra … Por el Reverendo Padre Comendador dela Merced Fray Juan Manuel Aparicio se dixo: que se conformaba en todo con el voto del SeñorDon Cornelio Saavedra, reduplicandolo en todas sus partes…". De nada sirvió que el virreyCisneros, en su circular del 18 de mayo a "los leales y generosos pueblos de su virreynato"recordara "aquel valor heroico (de España), que quebrantando las cadenas de setecientos años deesclavitud, la sacó con mayor esplendor a ser envidia de las Naciones…". Los mercedarios, porcarisma, no podían identificarse con los esclavizadores, por más que durante 360 años hubierancolaborado "con valor heroico" para quebrar esas cadenas a que hacía referencia el virrey.

18 Archivo Histórico del Convento de la Merced de Córdoba (en adelante AHCMC). Libro 18, fs 190.Libro de Patentes

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La restauración de la Orden

La Orden debe ser restaurada en Europa y vigorizada en América.Después de casi medio siglo, se retorna a elegir Maestro General. Hacia elviejo mundo parten religiosos de las provincias de América a dar elimpulso restaurador. Los noviciados abren sus puertas y se establecennuevas casas. Las nuevas Constituciones se adaptan a la nueva realidadeclesial del último tercio del siglo XIX. Crecen las actividades apostólicasy se vigoriza el desarrollo cultural. Con motivo del VII centenario de laOrden, en todas las provincias surgen religiosos investigadores que sededican con empeño al estudio de la Historia de la Orden.

En la primera mitad del siglo que concluye, los mercedarios debenpadecer nuevas pruebas, en México y sobre todo en España muchosreligiosos son asesinados y se suprimen sus conventos.

Sin embargo, la familia mercedaria crece en forma halagadora, pues sefundan siete Congregaciones mercedarias femeninas que inspiradas en elcarisma mercedario se consagran a diversos apostolados.

La Orden después del Concilio Vaticano II

El Concilio Vaticano II impulsa con determinación la reforma de la vidareligiosa en toda la Iglesia y a partir de 1966 comienzan a soplar airesnuevos en la Orden: se inicia el período de su renovación, se celebra elcapítulo general especial que emprende la total reformulación de lasConstituciones que serán promulgadas en 1986.

Desde el punto de vista administrativo, el gobierno de la Orden adquierenuevas modalidades: se crea el Consejo de Provinciales y las Reuniones deProvinciales. Van apareciendo distintas formas de administración del tipostaff: equipos de reflexión, de asesoramiento.

En pro de una mayor eficiencia en el manejo de los fondos, se vancentralizando la administración económica bajo el control de comisioneseconómicas.

Es un aggiornamento que no puede ser dejado de lado sin correr peligrode sucumbir. Es un aggiornamento que tiene profundas implicancias en elmodo de administrar los archivos.

La liturgia propia de la Orden es renovada completamente y se preparannuevos libros litúrgicos: misal, breviarios, ritual.

El carisma y espiritualidad mercedarios son objeto de frecuentes estudiosy profundización: para ello se funda el Instituto Histórico de la Orden. Setiende a crear equipos de preservación del patrimonio cultural.

En el área formativa, se elabora un Plan general de vocaciones,formación y estudios, y se organizan diversas reuniones de religiosos.

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Cautividades actuales

Concebir la Orden de la Merced sin España es imposible. Y tampococomprender plenamente la cautividad de los españoles sin el esfuerzoesclarecedor realizado por los mercedarios. Pero los cautivos no son cosasdel pasado.

En la actualidad, la figura del cautivo cristiano no puede encuadrarsedentro de un concepto varias veces centenario. Surgen hoy en lassociedades humanas nuevas formas de esclavitud social, política ysicológica, que resultan para la fe de los cristianos tan perniciosas como laesclavitud y cautividad de otros tiempos. Fue necesario actualizar el objetode sus trabajos. Así, para la Orden de la Merced,

Las nuevas formas de cautividad, constituyen el campo propio de lamisión y cuarto votos mercedarios, se dan allí donde hay una situaciónsocial en la que concurren las siguientes condiciones: 1) es opresora ydegradante de la persona humana; 2) nace de principios y sistemasopuestos al Evangelio; 3) pone en peligro la fe de los cristianos; 4) ofrecela posibilidad de ayudar, visitar y redimir a las personas que seencuentran dentro de ella.19

Por eso, a la luz de esta definición, la necesidad de los más necesitadoshoy continúa.

Una de las misiones que llevaron los mercedarios desde sus albores, fuela de dar asilo a los cautivos rescatados. Constituyó, en ese sentido, unaorden hospitalaria. En este siglo, cautivo y refugiado son términos casisinónimos, sobre todo a partir de la segunda guerra mundial.

Cupo a los mercedarios argentinos, que tenían a su cargo la IglesiaNacional Argentina en Roma, la tarea de refugiar a diversos contingentesjudíos durante la persecución nazifacista. Como era una iglesia que contabacon inmunidad diplomática, las pesquisas no podían pasar más allá deldespacho. Según palabras del padre Brunet,

"…Concluida la guerra, se dejó constancia de esta ayuda prestada por laIglesia Argentina, en una nota oficial dirigida al P. Garrido el 25 de juniode 1946 por el comandante del Frente de Resistencia de la RegiónAeronáutica de la ciudad de Roma, al General D. A. Umberto Cappa, enla que hace mención del P. Zamora, «il quale affrontando i nostri stessirischi, con iguale decisa volontá di collaborare alla redenzione e allavittoria ci ha dato valido e prezioso aiuto». …."20

Esa misma iglesia fue centro de refugiados para polacos y etíopes apartir de los años 80.

19 Regla y Constituciones de la Orde de la Bienaenturada Virgen María de la Merced (en adelanteConstituciones). Roma, 1986 número 16

20 BRUNET, Fr. José. Iglesia Nacional Argentina (Roma) - Aclaraciones a una despedida y algo más.Edición de la Curia Provincial Mercedaria Argentina, Córdoba, 1990.

16

También hubo refugio para los islámicos en la Casa del Refugiado deMadrid, a partir de 1988. Se trata de una versión actual –exclusiva parahumanos– del arca de Noé: multiracial, multilungüistica y ecuménica.Conviven allí iraníes, angoleños, somalíes, liberianos, senegaleses,sierraleoneses; de lengua árabe, francesa, portuguesa, inglesa o española;islámicos chiitas, islámicos sunnitas, baptistas o católicos.

En el África estas tareas para con los refugiados se cumplen en medio deguerras fraticidas promovidas por las empresas multinacionales.

El refugiado no sólo es cautivo en tierras extrañas. Muy triste es serlo enla propia. Así es que hay refugios para los "meninos de rua en el Brasil", uhogares de día para niños y jóvenes en riesgo en la Argentina.

Ciñéndonos a nuestro país, dentro del sector marginado, hay iniciativasde promoción humana de diverso tipo. Desde apoyo para la causa aborigen,hasta colaboración con emprendimientos productivos y culturales.

Desde su fundación, los mercedarios sabían que la peor de las opresionesera la cultural, y de allí las obligaciones constitucionales de cultivarse ycultivar a los demás.

No es casual que de sus colegios hayan surgido hombres empapados enideales libertarios. En el Perú, buena parte de los que impulsaron laindependencia fueron egresados del colegio mercedario de Lima. EnCórdoba, el redactor del manifiesto de la reforma universitaria de 1918,Deodoro Roca, fue exalumno brillante del Colegio San Pedro Nolasco.21

Tampoco el patronazgo de la Virgen de la Merced sobre la mayoría delos ejércitos latinoamericanos se dio porque sí. Es que eran ejércitosrevolucionarios en busca de una independencia que tristemente se convirtiótan sólo en un cambio de dueños, y no nos trajo la libertad.

La Orden va tomando conciencia de la situación de los oprimidos enLatinoamérica. Así, en la reunión de Superiores Provinciales de Lima(Perú) y Córdoba (Argentina), en 1977 y 1978 –pleno proceso militar–, seconsideraba que en esa

«…coyuntura histórica que viven los pueblos del continente, seconfigura una clara situación de cautividad, dentro de la cual la Ordendebe hacerse presente mediante el ejercicio de su apostolado redentor. Setrata, en efecto, de una situación social opresiva y degradante para lapersona humana, dimanante de principios opuestos al Evangelio,gravemente peligrosa para la fe»22.

Por ello, la Orden resolvió ejercer su apostolado redentor en formaespecífica en América Latina

«a) Evitando todo tipo de relación, a nivel individual o colectivo, quehaga aparecer a la Orden o a sus miembros en connivente complicidad,con un orden social injusto y opresor; b) asumiendo una actitud de

21 AHCMC. Colegio San Pedro Nolasco, registros de asistencia.22 Boletín General de la Orden de la Merced. Enero/julio 1977.

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profetismo pastoral…; c) orientando toda su labor pastoral…al serviciode liberación integral del hombre»23.

Además de sus actividades permanentes de evangelización, promoción yasistencia, la Orden de la Merced organiza campañas anuales en pro de loscristianos perseguidos. Algunas con mayor fruto que otras.

Tanto en Sudán como en Mauritania, los milicianos emprenden en el surcacerías de esclavos (cristianos o animistas) para venderlos a las familiasislámicas adineradas del norte del país. Las condiciones de vida de estoscautivos son inhumanas.

Se llama Akuac y cuesta cien dólares. Como un perro de medio pelo, ocinco compacts, o un botón en la mesa de saldos de Armani. Se llamaAkuac y es sudanesa, y acaba de ser liberada de siete años de esclavitud.… Para los tasadores, ellos son muebles. … Su cuerpo no les pertenece:son usados para el trabajo, el sexo, y la procreación de la raza esclava.Las faltas más livianas y rutinarias son castigadas con golpes, negaciónde comida y prolongadas exposiciones al sol, con las manos y los piesatados entre sí. Un intento de fuga puede significar tortura con hierrocandente, el corte de los tendones de Aquiles o la castración.24

El rescate por parte de sus familiares, imposible.«Vi cómo ataban a los tres más pequeños a un caballo y se los llevaban.A los otros dos les ataron las manos a la espalda y los agruparon con unacuerda junto a otros niños… No sé cómo voy a conseguir recuperar a mishijos, porque no me quedan vacas ni dinero para comprarlos».25

Por ello, la campaña correspondiente al año 1999 estuvo destinada arescatar niños esclavos en el norte del Sudán. A la tarea también estánavocados Anti Slavery International (ONG suiza) y SolidaridadInternacional Trinitaria (de la Orden Trinitaria).

23 Ibíd.24 Revista Noticias. Buenos Aires, 7 de marzo de 1998, pág. 122.25 Revista Caminos de Liberación. Madrid, número 85, año 1998

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2. E2. EVOLUCIÓNVOLUCIÓN ESTRUCTURALESTRUCTURAL DEDE LALA

IINSTITUCIÓNNSTITUCIÓN..

La Orden de Santa María de la Merced era una Orden laical de vidaactiva en común, cuya finalidad era la defensa de la fe, mediante el rescatede los cristianos en situación de cautiverio.

Podemos dividir la evolución estructural en cinco etapas.

2.1. ETAPA FUNDACIONAL.

La Orden de la Merced nació como Orden Religiosa Redentora concarácter militar. La similitud con las Ordenes Militares propiamente dichases muy notoria:

- Frailes laicos. - El hábito era el escudo formado heráldicamente por la Cruz de la

catedral de Barcelona y las armas reales del rey Jaime I, quienparticipó en su fundación.

- Un caballo por cada fraile, y zapatos como los templarios.- Títulos exclusivos de las órdenes militares:

o Maestre para la máxima autoridad de la Orden;o Lugarteniente del Maestre, para sus representantes;o Prior, para el superior de la casa matriz (Barcelona);o Comendador, para el encargado de la encomienda o casa.

Las Constituciones Mercedarias de 1272 se redactaron muy similares alas de la Orden Militar de Santiago. Las armas que usaban los frailesconstituían otra profunda similitud. Sin embargo, había una diferenciafundamental. Las órdenes militares estaban inmersas activamente en elfenómeno de las cruzadas y usaban sus armas a la ofensiva para guerrearcontra los ejércitos islámicos; la Orden de la Merced usaba sus armas a ladefensiva, para garantizar el tránsito de las limosnas de redención y elretorno de los rescatados a su tierra. Si alguna vez hubo que usarlas enforma activa, fue tan sólo debido a expreso pedido de los monarcas.

Ya desde el principio se vislumbra el espíritu práctico y decidido de sufundador, que en pos de garantizar el cumplimiento de su objetivo va

19

adaptando las estructuras existentes a las necesidades insatisfechas delobjeto de sus desvelos.

Durante este primer siglo, la Orden no tenía subdivisiones territoriales, ypor especial concesión del Papa Inocencio IV, en 1245, todos los frailesparticipaban de los capítulos.

Desde este momento nos encontramos con dos tipos de autoridadesmáximas: el capítulo y el maestre.

- El capítulo, máxima autoridad gubernativa, tiene carácter deasamblea con potestades legislativas y resolutivas.

- El maestre, máxima autoridad administrativa, tiene carácterpersonal. Dependen del maestre los definidores, que es una figuraequivalente al de los ministros.

2.2. PRIMERA REFORMA ESTRUCTURAL

En el Capítulo General de Cuenca de 1319 se produce cambio radical: sepasa de orden laical a orden clerical, el voto es indirecto, y se divide laOrden en dos provincias.

- Cataluña- Castilla.

Son vocales capitulares, los cuatro definidores de la provincia en quetiene lugar y los dos definidores generales de la otra provincia.

2.3. SEGUNDA REFORMA ESTRUCTURAL

Para mediados del siglo XV, la Orden está dividida en cuatro provincias,con un total aproximado de 650 frailes:

- Aragón, que cuenta con 50 casas- Castilla, 22- Francia, 14- Italia, 3.

La provincia mercedaria de Castilla goza de una autonomía absolutadurante un siglo. En 1447, el papa Nicolás V confirmó esta divisiónautonómica. Y es en ese marco en que se produce el arribo de losmercedarios al nuevo mundo: todos ellos dependen de Castilla. Es que laprovincia castellana era la única que estaba en condiciones jurídicas deestablecerse en aquellas tierras, sujetas al reino de Castilla. Por ello los

20

religiosos mercedarios que de España fueron a América, pertenecían adicha provincia.

2.4. TERCERA REFORMA ESTRUCTURAL

En el siglo XVI, la Orden no era un instituto oficialmente reformado deacuerdo a las disposiciones del Concilio de Trento. El 8 de noviembre de1574 dio comienzo en Guadalajara el Capítulo General, conocidointernamente como Capítulo de la Reforma. Sus puntos principales son:

Nivel general

- Alternancia en la celebración de capítulos entre Aragón y Castilla.- Cada provincia participa con 3 votos: el Provincial y dos electores

generales elegidos por el capítulo provincial respectivo. - Alternancia de origen del Maestro General:

- provincias de Castilla o Indias,- provincias de Aragón, Italia y Francia.

- Procurador de la Orden en Roma, pata tratar asuntos ante la SantaSede, elegido por el Maestro y el Capítulo

- Maestro General con potestad universal sobre todos los religiososde la Orden.

- Maestros Generales con 6 años de mandato, dejando de servitalicios.

- Aparece la figura del secretario.

Nivel provincial

Los Provinciales serán elegidos por los respectivos capítulosprovinciales y durarán sólo tres años en el cargo.

No podrán ser reelegidos hasta haber pasado seis años.

Nivel local o conventual

Los comendadores serán nombrados por el Provincial y sus Definidoresen el mismo capítulo.

Comenzarán y acabarán sus oficios junto con el Provincial. Podrán repetir el trienio en la misma casa, pero sólo por una vez. Con la expansión de la Orden en lugares separados por enormes

distancias, donde se fundaron muchos conventos, los religiosos residentesen América del Sur muy pronto comenzaron a sentir la necesidad de teneruna cierta autonomía de la provincia de Castilla, de la cual procedían lamayor parte de los frailes españoles.

21

Una década antes del capítulo general de Guadalajara, el padre Gasparde Torres, Provincial de Castilla, por documento del 13 de enero de 1563,había dividido la Orden de Nuestra Señora de la Merced de América encuatro provincias:

- la de Guatemala, con los conventos de Guatemala, Chiapas,Honduras, El Salvador, Nicaragua y por algún tiempo los deMéxico;

- la del Cuzco, con los conventos existentes en la región cuzqueña,Charcas y los que se fundaren hacia el Río de la Plata;

- la de Lima con las casas de los territorios de Lima, Quito,Popayán, Nuevo Reino de Granada y Panamá;

- la de Chile con las casas ya existentes y las que se fundasen haciael Estrecho de Magallanes.

A raíz de esta división previa, y como los Maestros Generales no iban aAmérica para hacer la visita canónica, fue necesaria la creación de la figuradel Vicario General. Eran los responsables de la observancia regular y lacorrección fraterna. Tenían la potestad de convocar y presidir los capítulosprovinciales, confirmar o anular las elecciones de Provinciales, mediar encaso de conflictos, etc. En la práctica, constituyeron una fuente deconflictos. Muy subordinados a la autoridad de ambas sedes virreynales,abusaron frecuentemente de su autoridad tanto para complacer loslineamientos políticos de la sociedad civil como para remitir a Españasignificativas cantidades de dinero. Actuaron a veces más comofuncionarios reales ad hoc que como prelados religiosos. Desaparecieron enel período hispánico tardío, en tiempos de la reforma de Carlos III. Habíados Vicarios Generales:

- uno con asiento en Lima. Tenía jurisdicción sobre las Provinciasde Lima, Cuzco, Chile, Quito, Tucumán, más los conventos deCartagena de Indias, Panamá y Portobelo.

- y otro con residencia en México. Le correspondían Nueva España,Guatemala y Santo Domingo.

Vendrían luego algunos desmembramientos de las provinciasamericanas:

La provincia de Tucumán, desmembrada de la del Cuzco, se fundó el 6de enero de 1593. Su primer Provincial fue el padre Pedro Guerra.

En 1607 se erigió la provincia de Santo Domingo. Su primer Provincialfue el padre Pedro de Torres.

La provincia de México quedó constituida en 1616, al confirmarla comotal el papa Paulo V. Su primer Provincial fue el p. Baltasar Camacho (1574-1622).

La provincia de Quito, segregada de la de Lima, nació el año 1616. Suprimer Provincial fue el padre Antonio de Pesquera.

22

La viceprovincia del Maranhao se formó con religiosos que fueron desdeQuito, en 1635.

Hacia fines del siglo XVII, se reforman las constituciones de la Orden,vigentes desde 1317, las que estaban actualizadas por las reformas delcapítulo de Guadalajara de 1574. Corre el año 1691, y nos encontramos enel período de mayor esplendor de la Orden. Sin embargo, en lo esencial, lasinstituciones son las mismas. Y luego de la restauración de la Orden nohubo demasiados cambios

2.5. CUARTA REFORMA ESTRUCTURAL

La cuarta gran reforma estructural tuvo lugar luego del ConcilioVaticano II. La Iglesia modifica su código de derecho canónico, y lasconstituciones de los institutos religiosos deben adaptarse a estasmodificaciones.

La vida religiosa está definida en el primer parágrafo del canon 57326.§1. La vida consagrada por la profesión de los consejos evangélicos esuna forma estable de vivir en la cual los fieles, siguiendo más de cerca aCristo bajo la acción del Espíritu Santo, se dedican totalmente a Dioscomo a su amor supremo, para que, entregados por un nuevo y peculiartítulo a su gloria, a la edificación de la Iglesia y a la salvación del mundo,consigan la perfección de la caridad en el servicio del Reino de Dios y,convertidos en signo preclaro en la Iglesia, preanuncien la gloriacelestial.

Y el segundo párrafo establece quiénes son los consagrados:§2. Adoptan con libertad esta forma de vida en institutos de vidaconsagrada canónicamente erigidos por la autoridad competente de laIglesia aquellos fieles que, mediante votos u otros vínculos sagrados,según las leyes propias de los institutos, profesan los consejosevangélicos de castidad, pobreza y obediencia, y por la caridad a la queéstos conducen, se unen de modo especial a la Iglesia y a su misterio.

A través de su existencia bimilenaria, la Iglesia vio surgir diversosmodos de consagración religiosa; y dentro de esos modos, diversas tareas alas que avocarse. El surgimiento de esos modos y esas tareas tuvo origen ennecesidades concretas dentro de la Iglesia. A los primeros ermitaños que seretiraban al desierto para orar individualmente, siguieron los cenobios (p.e.cenobitas), luego las órdenes monásticas (p.e. benedictinos). En medio dela crisis espiritual del siglo XI surgen las órdenes religiosas (p.e.

26 CODIGO DE DERECHO CANÓNICO. (En adelante CIC). Libro II. Del pueblo de Dios. Parte III.De los institutos de vida consagrada y de las sociedades de vida apostólica. Sección I. De losinstitutos de vida consagrada. Título I. Normas comunes a todos los institutos de vida consagrada.

23

mercedarios). Luego vendrían los institutos surgidos durante el Concilio deTrento (jesuitas). Posteriormente, las congregaciones religiosas (p.e.lasallanos), y ya en el siglo XX los institutos seculares (p.e. servidoras). Atodos ellos se los reconoce como institutos de vida consagrada.

Canon 577. En la iglesia hay muchos institutos de vida consagrada, quehan recibido dones diversos, según la gracia propia de cada uno: puessiguen más de cerca a Cristo ya cuando ora, ya cuando anuncia el Reinode Dios, ya cuando hace el bien a los hombres, ya cuando convive conellos en el mundo, aunque cumpliendo siempre la voluntad del Padre.

Algunos institutos de vida consagrada, como es el caso particular de laOrden de la Merced, tienen una dependencia directa de la supremaautoridad de la Iglesia

Canon 591. Para proveer mejor al bien del instituto y a las necesidadesdel apostolado, el Sumo Pontífice, en virtud de su primado sobre toda laIglesia y en atención a la utilidad común, puede eximir a los institutos devida consagrada del régimen de los Ordinarios del lugar, haciendo queestén sometidos exclusivamente a sí mismo o a otra autoridadeclesiástica.

Dentro de los distintos tipos de institutos de vida consagrada, el CICreconoce a los institutos religiosos, que define así27:

Canon 607. §2. Un instituto religioso es una sociedad en la que losmiembros, según el derecho propio, emiten votos públicos perpetuos otemporales que han de renovarse, sin embargo, al vencer el plazo, yviven en vida fraterna en común.

De acuerdo con todo esto, la Orden de la Merced es un instituto religiosode derecho pontificio que goza del derecho de exención.

Luego de una serie de reformas, estas quedaron plasmadas en lasConstituciones de 1986. Como hemos visto, en ellas aparecen nuevasfiguras colegiadas a nivel general y provincial.

En 1988, las tres provincias europeas (Aragón, Castilla y Roma) sedesgajan, dando lugar cada una a una viceprovincia americana: Venezuelala primera, Brasil la segunda y Estados Unidos la tercera. En 1992, Aragónvuelve a desgajarse, haciendo surgir la viceprovincia de Guatemala.

Desde el punto de vista administrativo, el gobierno de la Orden adquierenuevas modalidades: se crea el Consejo de Provinciales y las Reuniones deProvinciales.

Van apareciendo distintas formas de administración del tipo staff:equipos de reflexión, de asesoramiento.

En pro de una mayor eficiencia en el manejo de los fondos, se vancentralizando la administración económica bajo el control de comisioneseconómicas.

27 Ibíd. Título II. De los institutos religiosos

24

Estructuras actuales de gobierno y administración en la Orden de laMercedNivel General

Capítulo General

Maestro GeneralConsejo General Secretario General

Secretariado de Vida ReligiosaSecretariado Vocaciones, Formación y EstudioSecretariado de Pastoral MercedariaSecretariado de Régimen y Gobierno

Procurador GeneralPostulador GeneralEcónomo GeneralInstituto Histórico de la Orden Cronista General

Cronistas ProvincialesComisión Económica GeneralObra Redentora Delegado

Fondo General de RedenciónConsejo de ProvincialesEquipo de Reflexión

NivelProvincial

Capítulo Provincial

Superior ProvincialConsejo Provincial Secretario Provincial

Secretariado de Vida ReligiosaSecretariado Vocaciones, Formación y EstudioSecretariado de Pastoral MercedariaSecretariado de Régimen y Gobierno

Obra Redentora Delegado ProvincialFondo Provincial

Consejo Provincial de Pastoral Educativa

Secretaria

Consejo Provincial de Pastoral Parroquial

Secretaria

Instituto Histórico de la Provincia CronistaSistema de Bienes Culturales

Comisión Económica Provincial Ecónomo ProvincialDelegado ProvincialDelegado por las Bases

NivelLocal

Capítulo Local

Superior LocalConsejo Doméstico Vicario Local

Secretario LocalCronista localResto de la Comunidad

Consejo Local de Pastoral Delegado conventualDelegados de las distintas instituciones

Ecónomo Local

25

2.6. ESQUEMA DE CREACIÓN Y SUPERSIÓN DE

PROVINCIAS MERCEDARIAS

Primera Fase: Fundación y Expansión1218 La Orden, provincia única1319 Aragón Castilla1440 Aragón Ita

liaFrancia Castilla {autónoma del resto de la orden)

1563 Castilla Guatemala Cuzco Lima Chile

1587 Castilla

An-dalu-cía

1593 Cuzco

Tucu-mán

1603 Aragón Va-len-cia

1607 Guatemala S. Do-mingo

1616 Gua-temala

México

Li-ma

Quito

1635 Qui-to

Mara-ñón(vp)

1672 Francia

París(vp)

1750 Aragón Cerdeña(vp)

1764a1792

Segunda Fase: Extinción y Restauración1823a1877

Persecusión en Europa: sólo quedan al final del períodotres conventos (Roma, Cerdeña y en Aragón) y 22religiosos ancianos.

En Américase extinguenMéxico,Cuzco, SantoDomingo yGuatemala

Quedan algunosconventos en las delTucumán, Lima yQuito

Chile

1878 Aragón Tucumán Li-ma

Quito

1887 Castilla1893 Bolivia

(vp)1907 Roma1911 Chil

eCon-cep-ción(vp)

1912 Chile1920 Chil

eCon-cep-ción(vp)

19301931 Méxi-

coTu-cu-mán

Bue-nosAires(vp)

1954 Argentina Chile

26

1988 Aragón Vene-zuela(vp)

Roma

USA(vp)

Castilla Brasil(vp)

PuertoRico(vp)

1992 Ara-gón

Guate-mala(vp)

27

3. E3. ELL DESTINATARIODESTINATARIO DEDE ESTEESTE TRABAJOTRABAJO: : LALA

PPROVINCIAROVINCIA M MERCEDARIAERCEDARIA A ARGENTINARGENTINA..

Hemos visto ya la necesidad insatisfecha que dio lugar a la institución.Hemos recorrido su evolución histórica durante ocho siglos. Correspondeahora detenernos en el estudio del destinatario de este trabajo: la ProvinciaMercedaria Argentina.

3.1 CONCEPTO DE PROVINCIA.

Etimológicamente deriva del latin, provincia.En su primer significado podemos definirla como «una de las grandes

divisiones de un territorio o Estado sujeta por lo común a una autoridadadministrativa.» .28

Encontramos tres elementos significativos en el concepto:- Resultado de la primera división territorial- Unidad de gobierno o administración sometida a la jurisdicción

territorial de alguna autoridad.O dicho en otras palabras, «es cada una de las partes en que se divide

territorialmente una persona de derecho público para el mejorfuncionamiento de su administración».29

Dentro de la mentalidad del imperio romano, las provincias eran losterritorios conquistados fuera de la península y sometidos directamente a sudominio. Según Festo30:

Provinciæ appelabantur quod populus romanus eas provicii est ante vicit.Para los españoles el concepto de provincia no les era para nada

desconocido. Sometidos a los romanos a partir de la segunda guerra púnica,su territorio fue dividido desde un principio en España Ulterior y EspañaCiterior.

28 ESPASA CALPE. Enciclopedia Universal Ilustrada Europeo Americana. Editorial Espasa CalpeS:A: Madrid, 1930. (En adelante Espasa Calpe). Artículo sobre Provincia.

29 Ibíd.30 Ibíd.

28

Inmersa dentro del mundo romano, la Iglesia primitiva adoptó laadministración propia del imperio que la rodeaba. Allí tuvieron origen lasprovincias eclesiásticas, como se desprende de los Hechos de losApóstoles, cuando aluden a esta división territorial. Para el derechocanónico actual31.

Canon 431. §1. Para promover una acción pastoral común en variasdiócesis vecinas, según las circunstancias de las personas y de loslugares, y para que se fomenten de manera más adecuada lasrecíprocasrelaciones entre los Obispos diocesanos, las Iglesiasparticulares se agruparán en provincias eclesiásticas delimitadasterritorialmente.

§2. Como norma general, no habrá en adelante diócesis exentas; portanto, todas las diócesis y demás iglesias particulares que se encuentrandentro del territorio de una provincia eclesiástica, deben adscribirse a esaprovincia

§3. Corresponde exclusivamente a la autoridad suprema de la Iglesia,oídos los obispos interesados, constituir, suprimir o cambiar lasprovincias.Canon 432. §1. En la provincia eclesiástica tienen autoridad, conforme ala norma del derecho, el Concilio provincial y el metropolitano.§2. La provincia tiene, de propio derecho, personalidad jurídica.

Dada su extensión, las órdenes religiosas adoptaron también esa divisiónpara un mejor gobierno de la institución. Según el CIC32:

Canon 621. Se llama provincia al conjunto de varias casas erigidocanonicamente por la autoridad legítima que forma parte inmediata de uninstituto, bajo un mismo superior.

A este superior se lo conoce como provincial, y es uno de sus superioresmayores. Esta condición le da status jurídico de Ordinario, equiparándosesu potestad en muchos aspectos, sobre todo administrativos, a losObispos33. Veamos qué entiende el CIC por ordinario.

Canon 134. §1. Por el nombre de Ordinario se entienden en derecho,además del Romano Pontífice, los obispos diocesanos y todos aquellosque, aun interinamente, han sido nombrados para regir una iglesiaparticular o una comunidad a ella equiparada según el canon 368, ytambién quienes en ellas tienen potestad ejecutiva ordinaria, es decir losvicarios generales y episcopales, así también, respecto a sus miembros,los superiores mayores de institutos religiosos clericales de derechopontificio y de sociedades clericales de vida apostólica de derechopontificio que tienen, al menos, potestad ejecutiva ordinaria.

31 CIC. Libro II Parte. II Sección II, Título II. De la agrupación de iglesias particulares. Capítulo I. Delas provincias eclesiásticas y las regiones eclesiásticas.

32 Ibíd. Parte III, Sección I, Título II. De los institutos religiosos. Capítulo II. Del gobierno de losinstitutos. Art. I. De los superiores y de los consejos.

33 CIC. Libro I. De las normas generales. Título VIII. De la potestad de régimen.

29

§2. Por el nombre de ordinario del lugar se entienden todos los que seenumeran en el §1, excepto los superiores de institutos religiosos y desociedades de vida apostólica.§3. ….

En su aspecto administrativo, esta equiparación potestática tiene hondasignificación archivística. Los archivos de la Curia Provincial tienen unaorganización muy similar a los archivos de la Curia Episcopal.

En el nuevo CIC, la creación y supresión de provincias religiosas estáncontemplados fundamentalmente en los cánones siguientes34.

Canon 581. Corresponde a la autoridad competente de un instituto, atenor de las constituciones, dividirlo en circunscripciones, cualquiera quesea el nombre de éstas, erigir otras nuevas y unir las ya erigidas odelimitarlas de otro modo.

Canon 585. La supresión de circunscripciones de un institutocorresponde a la autoridad competente del mismo.

Las constituciones de la Orden de la Merced se refieren a la provinciacomo a la comunidad provincial35

234. Las comunidades locales, signos diversos de la unión de loshermanos en Cristo, adquieren mayor expresión y plenitud cuando,vinculadas jurídicamente entre sí con la dirección de un superior común,integran la comunidad provincial.

Según las Constituciones, la potestad para erigir una nueva provinciareside en la máxima autoridad de la Orden: el capítulo general.

236. Compete al capítulo general, después de un maduro estudio y de unperíodo oportuno de preparación por las partes interesadas, erigir nuevasprovincias, dividir las erigidas o unirlas a otras, adscribir una casa a otracomunidad provincial.

Los derechos fundamentales de las provincias están contemplados en elartículo siguiente.

237. La provincia tiene por derecho:- religiosos propios adscriptos

- personalidad jurídica- superior mayor propio

- casas de noviciado y de estudios reconocidas- participación en los actos de la Orden y la precedencia según la

antiguedad.En el caso de la Provincia Argentina, su status jurídico dentro del

derecho civil es muy peculiar, ya que es uno de los poquísimos casos de

34 CIC. Libro II. Parte III. De los institutos de vida consagrada y de las sociedades de vida apostólica.Sección I. De los institutos de vida consagrada. Título I. Normas comunes a todos los institutos devida consagrada.

35 Constituciones. Capítulo VI. La comunidad provincial. Sus miembros

30

persona jurídica preconstitucional. En la resolución IGPJ 3592, del 2 deagosto de 1971, la Inspección General de Personas Jurídicas resolvió:

Art. 1. Declarase que la asociación Orden de la Bienaventurada VirgenMaría de la Merced en su forma abreviada Orden de la Merced, se hallainvestida de personería jurídica, en virtud de lo prescrito en el artículosesenta y siete, inciso veinte de la Constitución Nacional, con capacidadsuficiente para ejercer todos los actos de la vida civil, de acuerdo a losartículos cuarenta y uno y cuarenta y siete del Código Civil yconcordantes del mismo.

Nos encontramos, pues, ante una sección de una institución que goza,tanto a nivel civil como eclesial y aún dentro del mismo instituto religioso,de una autonomía notable y plena capacidad jurídica para contratar.

3.2. SÍNTESIS HISTÓRICA DE LA PROVINCIA

MERCEDARIA ARGENTINA

Si bien el descubrimiento y la conquista de América eran resorteexclusivo de los reyes españoles, la actividad misional –impuesta por eltítulo de posesión otorgado por Alejandro VI– exigió una importante acciónde la Iglesia en la organización de la nueva sociedad americana.

En esa actividad, nuestra Iglesia estuvo en inferioridad de condicionescon respecto de la corona. Corrían por esos tiempos en Europa ideas deformar iglesias nacionales, que la monarquía aplicó con fuerza en elejercicio del patronato. Este derecho surgió de la Bula de Inocencio VI, en1486, con ocasión de la campaña contra el reino moro de Granada. Comobien dice Konetzke:

Desde el punto de vista del desarrollo de la organizacionpolitico/eclesiástica en la monarquia española, las guerra de laReconquista y la expansión en ultramar representaron una continuidadinquebrantada.36

Muchas figuras jurídicas e instituciones administrativas de la conquistaamericana provienen de la reconquista española: cabildos37, encomiendas38.

36 KONETZKE, Richard. América Latina. II. La época colonial. Editorial Siglo XXI. Primera ediciónen castellano, 1971. Madrid- México. Colección Historia Universal Siglo XXI, volumen 23.Traducción de Pedro Scaron., pág. 205.

37 Los cabildos eran fruto de la autonomía concedida a los vecinos de las nuevas villas levantadas entierras recién reconquistadas; y los adelantados, aquellos que habían dispuesto de su fortuna parainiciar la reconquista de una comarca

38 Era ésta una institución jurídica medioeval española, mediante la cual se encomendaban a uncaballero, luego de la reconquista de una comarca, los habitantes moros de la zona, para convertirlosal cristianismo e instruirlos en las verdades de la fe. Esto reconocía sus antecedentes entre los

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Para misionar un continente varias veces superior al territorio europeo, lajerarquía eclesial no estaba en condiciones de hacerlo directamente. Porotra parte, los papas de ese período estaban demasiado ocupados en susasuntos temporales y hasta familiares, así que bien venía la ayudaproveniente de los monarcas cristianos. Y a los obispos y clérigos secularesque estuvieran aceptablemente instalados en la península no los atraíamayormente la idea de aventurarse en tierras lejanas y hostiles. Por eso, laprimera evangelización, debió correr por cuenta de hombres que hubieranabrazado radicalmente el evangelio: los religiosos.

Nos encontramos, pues, ante una serie de derivaciones. El papa derivó enlos reyes la evangelización americana. Y los reyes españoles derivaron enlos adelantados y conquistadores la expansión temporal y en los religiososla expansión evangélica.

Según Antonio Ybot León, la primera evangelización de Américareconoció tres etapas:

«Primero bautizaron los capellanes de las expediciones militares otambién, en sus entradas particulares, religiosos o clérigos solitarios …,aún sin conocimiento de las lenguas…Después los misioneros, ya descubiertas y estudiadas las lenguas,deducidas las gramáticas, formados los primeros vocabularios,predicaron a los indios en sus idiomas respectivos ….

… Todavía podría considerarse una tercera etapa, alcanzada cuandofundados ya los pueblos indígenas, erigidas las parroquias y organizadoslos curatos, la cristianidad indígena entró en los cauces normales de lavida espiritual y de la práctica religiosa».39

La expansión de las misiones provocó tensiones entre los religiosos yjerarquía. Esta quería disminuír a su mínima expresión la presencia deaquéllos en los territorios recientemente anexados, y fue motivo para queno se pudieran fundar hospicios mercedarios dedicados a la actividadredentora, como veremos más adelante. En palabras del padre GermánGarcía Suárez:

A partir de mediados del siglo XVI se dio una floración de vocaciones enAmérica tanto de sacerdotes seculares como de religiosos. Estaabundancia de vocaciones causó cierta crisis en las doctrinas de losreligiosos, ya que los obispos querian colocar en prebendas aseguradaspara el sostenimiento a los sacerdotes. Los obispos querrían que los

primeros cristianos, cuando los recién convertidos quedaban bajo la dirección de otros más antiguos,para que los guiaran en el camino emprendido. El encomendero debía sostener a los sacerdotesencargados de esta evangelización. Los encomendados debían pagar de su producción los tributoscorrespondientes al encomendero, que como señor de armas tenía prohibido realizar trabajosserviles.

39 YBOT LEÓN, Antonio. La Iglesia y los eclesiásticos españoles en la empresa de Indias, I, Madrid1954, 430. citado por BRUNET, fray José: "Misioneros, Mártires y Laicos en la ProvinciaMercedaria de Santa Barbara del Tucumán". En: Analecta Mercedaria 10 (1991) pág. 126/127 [125- 213],

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religiosos se redujeran a sus conventos y dejaran todas o casi todas lasdoctrinas a los clérigos. Por lo cual escriben al rey, al consejo de Indias ydemás organismos. Se produjo una segunda crisis en las misiones deAmérica de la que lograron salir también los religiosos airosos hasta dossiglos después.40

La evangelización de nuestro territorio nacional tuvo sus inicios en lazona de Asunción del Paraguay, ya por 1535.

Luego vendría el Tucumán, donde mercedarios, dominicos yfranciscanos desarrollaron una vasta tarea misionera.

Cuyo fue la tercera, recibiendo el mensaje evangélico a través de lacordillera de los Andes. Y también la zona de los lagos neuquinos.

Nuestra Iglesia no tuvo en estas tierras la influencia que ejerció en otraslugares de la colonia hispánica. La pobreza y el aislamiento de la región,atraía a muy pocos clérigos, y hasta el siglo XVII los Obispados podíanpermanecer vacantes durante tiempos respetables. Hasta comienzos delsiglo XVIII, la Iglesia en el Río de la Plata pasó por un «período deorganización confusa y elemental, en el que imperó, como causa generatrizde los sucesos, el regalismo en boga y la caracteística de una colonizaciónllevada a cabo sin obedecimiento a plan premeditado».41 Luego del ascensode los Borbones, «paralelamente al mayor acrecentamiento del regalismo,fue acentuándose, en el trono español, el espíritu de tolerancia religiosa,que no parece advertirse durante el reinado de los Austrias»42.

En cuanto a las diócesis, poco antes de terminar el siglo XVI, el mapaeclesiástico de nuestro territorio estaba bajo la órbita de cuatro sedesepiscopales: Asunción, Buenos Aires, Tucumán, y Santiago de Chile. Estadivisión permaneció hasta bien entrado el siglo XIX.

La Orden de la Merced, que gozaba de las mismas prerrogativas que losórdenes mendicantes, se dedicó de lleno a la evangelización americana. Noestá dentro de la finalidad de este trabajo extenderse en materia abundantey concienzudamente tratada por autores mercedarios de reconocida ydilatada producción historiográfica. No obstante, a los efectos del presente,debo resaltar algunos datos históricos.

En primer lugar, que fueron indiscutiblemente mercedarios quienesprimero se hicieron cargo de la evangelización a través de cada una de lascorrientes colonizadoras, y los primeros en fundar conventos. Para ellocrearon escuelas para los niños aborígenes y formaron catequistas.

Los mercedarios penetraron al actual territorio argentino comocapellanes de los conquistadores y adelantados por el norte, con la

40 GARCIA SUAREZ, fray Germán. «Tarea Evangelizadora de la Merced entre los indígenas deAmérica: motivaciones, métodos, vitalidad (siglo XVI)». En: Presencia de la Merced en América,tomo I. Estudios, Madrid, 1991, pág. 99 [83-118]

41 CARBIA, Rómulo D. Historia Eclesiástica del Río de la Plata, tomo II. Casa Editora Alfa yOmega, Buenos Aires, 1914, pág. 59

42 CARBIA, op. Cit, pág. 233

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expedición de Diego de Almagro en 1535 dirigida a la conquista delreino de Chile, acampando en el norte argentino por noviembre de dichoaño y cruzando la cordillera por abril de 1536. Por el este llegaron con laexpedición de don Pedro de Mendoza en 1536 en lo que hoy es BuenosAires, y al año siguiente remontando el Paraná arriban con Juan deAyolas fundando la ciudad de Asunción del Paraguay el 15 de agosto de1537. Por el oeste llegan en un primer momento en 1551 con laexpedición que Francisco de Villagra baja del Cuzco hacia Chile, comodespués de fundada la ciudad de Mendoza los mercedarios de Chilecruzan la cordillera para auxiliar [espiritualmente] a los españoles deCuyo.43

Esto también se desprende de los conventos fundados hasta principiosdel siglo XVII.

Fundaciones de ciudades y conventos mercedarios en el siglo XVICiudad Fundación ciudad Fundación conventoAsunción 1537 1537Santiago del Estero 1553 1557Mendoza 1561 1594San Juan 1562 1591Tucumán 1565 1565Talavera del Esteco 1567 1568Córdoba 1573 1601Santa Fe 1573 1615Buenos Aires 1580 1601Salta 1582 1582Corrientes 1583 1588La Rioja 1591 1607Jujuy 1593 1601San Luis 1594 1601

En segundo lugar, que aceptaron rápidamente mestizos entre susnovicios, lo que los volvió sospechosos a los ojos de Felipe II. La Mercedrápidamente se encarnó en América44.

En tercer lugar, que los mercedarios no trabajaron jamás sin la ayuda delaicos. La fundación de cofradías era prácticamente coetánea con laerección de conventos. Es decir, que había una profunda inserción laical.

En cuarto lugar, que no descuidaron la recolección de limosnas ni elrescate de cautivos de la tierra, como veremos más adelante.

Corría el año 1561. En Santiago del Estero se funda la primeracomunidad de religiosos en lo que es el actual territorio argentino, ycorrespondió a los mercedarios el haber sido los pioneros.

En la última década del siglo XVI existían 5 conventos estables ennuestro actual territorio (además del de Asunción del Paraguay) en la

43 BRUNET, fray José. "Misioneros, Mártires y Laicos en la Provincia Mercedaria de Santa Barbaradel Tucumán". En: Analecta Mercedaria 10 (1991), pág. 125 [125 - 213]

44 KONETZKE, op. cit, pág. 239.

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jurisdicción del virreynato del Perú: Santiago del Estero, Tucumán,Talavera del Esteco, Corrientes y Salta.

La Orden de la Merced integraba en esos años la antigua ProvinciaMercedaria del Cuzco. Los inconvenientes que planteaban las distanciaseran casi insuperables, así que el 6 de enero de 1593, fue erigidacanónicamente la "Provincia de Santa Bárbara del Tucumán, Río de la Platay Paraguay", que por aquel entonces no cobijaba a las comunidadescuyanas (San Juan, Mendoza y San Luis).

Apenas iniciado el siglo XVII se fundan los conventos de Córdoba,Buenos Aires, Jujuy, La Rioja y Santa Fe. El convento de Córdoba, sefundó definitivamente en 1601, siendo el único convento mercedarioargentino habitado en forma permanente desde la época colonial. Pordiversas razones, que serán recogidas en otro trabajo mayor, en su archivoconventual está depositada buena parte de la historia de la Merced en laArgentina.

En el siglo XVIII, surgen los hospicios –conventos pequeños– deCatamarca y de Las Conchas (en Buenos Aires). Fundamentalmente en esesiglo, los mercedarios se desparraman por las pampas como misioneros, yllegaron a establecerse como capellanes en las islas Malvinas. En reiteradasoportunidades negocian con los aborígenes el rescate de cautivos45,actividades que continuaron hasta bien entrado el siglo XIX. Sostuvieronescuelas, y les tocó hacerse cargo de algunas reducciones jesuíticas dellitoral argentino.

Luego de estar al borde de la extinción, en que pasan a poder de extrañostodos los demás conventos, la vida religiosa mercedaria en la Argentina serestauró en Córdoba allá por 1857 con refuerzos provenientes de Mendoza.Tan sólo los conventos de La Rioja y Santiago del Estero volvieron amanos de sus antiguos dueños.

En el siglo XIX los mercedarios establecen los conventos deMontevideo, Maipú, y el de la actual avenida Gaona, en Buenos Aires.

Y en el siglo que concluyó, se retorna a Tucumán, pero en otra lugar.Hay fundaciones en Concordia (Entre Ríos); Ranelagh y Gerli (BuenosAires); Rivera Indarte, Barrio Yapeyú y San José de la Dormida (Córdoba);y hasta se funda una comunidad en Roma.

En el año 1931, se divide, en razón de su crecimiento, la provinciamercedaria en dos: la provincia del Tucumán y la viceprovincia de BuenosAires.

En 1953, como presagiando la reestructuración eclesiástica quesobrevendría en la Argentina a partir de 1955, ambas provincias sonreunificadas en la actual Provincia Mercedaria Argentina.

45 Para mayor información sobre redenciones, ver apéndice

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Síntesis de fundación o restauración de conventosConvento Anteriores a 1823 Posteriores a 1860

Titular Localidad De Hasta De HastaSan José Asunción del Paraguay 1537 182? --- ---San Pedro Nolasco Santiago del Estero 1557 182? 1879 ActualSanta Catalina San Miguel de Tucumán 1565 182? --- ---Madre de Dios Talavera del Esteco 1568 1692 --- ---San Juan Bautista Salta 1582 182? --- ---San Pedro Pascual Corrientes 1588 182? --- ---S/n conocido San Juan 1591 182? --- ---Santa Catalina Mendoza 1594 --- --- 1992San Lorenzo Córdoba46 1601 --- --- ActualSan Ramón Buenos Aires 1601 1823 1965 ActualS/n conocido San Luis 1601 1613 ---Santa Ana Jujuy 1602 182? ---San Pedro Armengol La Rioja 1607 182? 1860 ActualSan Agustín Santa Fe 1615 1830 --- ---Hospicio de Catamarca Catamarca 1723 182? --- ---Hospicio de San Ramón Merlo (Buenos Aires) 1740 182? --- ---Nuestra Señora de la Merced Maipú --- --- 1861 ActualSan Pedro Nolasco Av. Gaona, Buenos Aires --- --- 1893 ActualSan Pedro Nolasco Montevideo --- --- 1896 1982León XIII Rivera Indarte, Córdoba --- --- 1916 ActualSan Pedro Nolasco in Urbe Roma --- --- 1931 1987San Pedro Nolasco Tucumán (nuevo) --- --- 1933 ActualSan Pedro Pascual Ranelagh, Prov. Buenos

Aires--- --- 1938 Actual

San Pedro Armengol Gerli, Prov. Buenos Aires --- --- 1941 ActualSan Ramón Nonato Barrio Yapeyú, Córdoba --- --- 1945 1999San Serapio Mr. Concordia, Entre Ríos --- --- 1962 1999San Agustín San José de la Dormida --- --- 1986 1994

46 Quizá no sea el primer convento, ya que hay indicios que permiten pensar en la preexistencia enotra ubicación.

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4. C4. CONSIDERACIONESONSIDERACIONES SOBRESOBRE ORGANIZACIÓNORGANIZACIÓN,,ADMINISTRACIÓNADMINISTRACIÓN, , DOCUMENTOSDOCUMENTOS YY

ARCHIVOSARCHIVOS E ECLESIÁSTICOSCLESIÁSTICOS..

4.1. ORGANIZACIÓN Y ADMINISTRACIÓN.

Como vimos, Pedro Nolasco organiza la redención de cautivos. No lohace solo. Una vez gastado todo lo que tenía, decide gastarse a sí mismo. Ytambién a otros, porque fue comerciante y sabe que la verdadera empresaes la que beneficia a todos.

Funda una Orden religiosa, impulsa una vasta organización dedicada aunir esfuerzos para visitar y liberar a los más oprimidos.

Esta institución se dedica a impulsar, coordinar y dirigir los esfuerzosliberadores de los cristianos que ven en los cautivos el rostro de Jesús. Esdecir, una auténtica tarea de administración, en el más alto y profundosentido de la palabra. Como bien advertía el maestro Tanodi, dada laestrecha relación con los archivos, «es necesario contar con conceptosclaros acerca de la administración», ya que su aplicación es vastísima47.Personalmente pienso que no pocos malos entendidos entre sus discípulosparten de no tener en cuenta esta admonición.

Quienquiera que desee rastrear el origen de este término latino, seencontrará ante diversas vertientes.

Algunos lo ven en ad manus traere, es decir, traer en la mano, tareapropia de funcionarios menores. En un diccionario de uso popular encontréad minus traere, es decir, traer lo pequeño, ocuparse de las cosas pequeñas,de los detalles.

47 Cfr. TANODI, Aurelio. Manual de Archivología Hispanoamericana, pág 61. «Debido a la estrechaunión que existe entre los archivos y la administración, en su parte creativa, es necesario contar conconceptos claros acerca de la administración. Etimológicamente, la palabra proviene del latín, delverbo "ministrare", que quiere decir servir, y de la preposición a, ad, que significa "hacia" en sentidode movimiento. Por lo tanto, administración significaría acción y efecto de administrar o servir parael cumplimiento de un fin o para conseguir un fin preordenado, preestablecido hacia el cual se va.En tal sentido, la administración tiene aplicación vastísima, que la acerca mucho al concepto demétodo, que está esencialmente en función de conseguir un fin determinado.

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Otros, en ad ministrare, cumplir con el oficio de ministros. Ministroreconoce como origen la partícula indoeuropea mei (pequeño, inferior), quelos latinos recogieron –entre otras– en minus (pequeño, menos) y tambiénen minister (menester, trabajo de poca importancia, de donde derivómenesteroso).

En cambio, los oficios y cargos altos estaban a cargo de los magistrados.Magistrado era quien ejercía un alto cargo. Provenía de magis (mayor), quedio lugar a magister (cargo de gran importancia, jefe, el que indica oenseña lo que ha de hacerse) y magistratus (gobernante, persona elevada alcargo de magister). Maestro también reconoce esta raíz, pero con elagregado de ludi (juegos, diversiones, burlas, escuela). Maestro de escuela(magister ludi) y burla tienen mucho en común ya desde el tiempo de losromanos: no es casual que estos "jefes" fueran esclavos.

Así, el objeto del gobierno, a cargo del magistrado (magister), serían lasgrandes decisiones o indicaciones o enseñanzas, mientras que las de laadministración las pequeñas. Todas estas decisiones quedaban estampadasen documentos. Como veremos luego, documento proviene del verbo latinodocere (enseñar, manifestar, informar, instruir); y documentum es algo asícomo pequeña instrucción, lección, ejemplo.

Lo fundamental en toda administración, es la tarea de coordinar losesfuerzos de otros para cumplir las indicaciones que llegan desde arriba.

Para Pedro Nolasco y sus compañeros, lo esencial de esta administraciónredentora no debería hacerse hoy desde lo alto de un despacho alfombradosino desde lo más profundo de una cárcel con el piso cubierto deinmundicias o de un campo de refugiados tapizado de cadáveres. Y ser unode ellos, si hace falta.

La administración de estos esfuerzos no muere allí; también implicaapoyar logísticamente otras iniciativas liberadoras. Es difícil que variosemprendimientos fracasen completamente.

Para que el fracaso no suceda fácilmente, las comunicaciones necesitanser fluidas y claras. Y toda decisión debe quedar establecida firmementepara brindar seguridad en los distintos tiempos de un proyecto a largoplazo. Tan largo, que va llegando a los ocho siglos, sin visos de terminar.Porque en términos que no me son gratos, "la demanda es creciente y laoferta es muy poca".

4.2. COMUNICACIÓN, ESCRITURA Y DOCUMENTACIÓN.

En la más pequeña escena de cualquier grupo humano, está presente dealgún modo el fenómeno de la comunicación. Siempre hay alguien que

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tiene que decirle algo a otro, o como se dice actualmente, de transmitirleinformación. Esto no implica que conozca o pueda conocer al otro; tan sólosabe que el otro puede llegar a existir.

Toda información está compuesta de datos (nombres, fechas, valores,etc.) reunidos orgánicamente alrededor de un asunto.

En toda comunicación hay tres elementos.a. Emisor: es quien envía una información, iniciando el ciclo.b. Mensaje: es la información representada por signos más o menos

comprensibles por el receptor, enviada hacia él a través de un medioadecuado.

c. Receptor: el que rescata la información que contiene el mensaje,haciendo exitoso el proceso comunicacional.

Y en una actividad administrativa, la comunicación marca la diferenciaentre el éxito y el fracaso.

La Escritura, regalo de lo alto.

¿Cómo asegurar las palabras para resguardar las acciones pasadas,presentes o futuras?

Según la mitología egipcia, el dios Osiris sacó a los hombres de suignorancia. Les dictó sus leyes y enseñó el arte de representar en formagráfica las palabras.

Sin embargo, los primeros intentos de los hombres primitivos fuerondirigidos en sentido contrario. Sumidos en el miedo a lo desconocido,pintaron en lo más escondido de sus hábitats signos para atraerse labenevolencia de los dioses. Luego comprendieron que esos signospermitían comunicarse con sus semejantes.

No obstante, fueron los sumerios quienes, en un ambiente semidesérticoy gracias a un lenguaje monosilábico, llegaron a disponer de un sistema derepresentación silábica en el cuarto milenio antes de Cristo. Ur de Caldea,hogar de Abrahám. Y fue en tierras de Canán, donde por primera vezapareció un alfabeto para comunicarse en forma escrita, quizá por el 1300AC.

Hermosa imagen: según el relato del Génesis, el hombre fue amasadocon barro; según la información que nos brinda la historia, la primeraescritura fue hecha sobre barro. El hombre hecho de tierra y agua, insufladopor el «pneuma» (aire, espíritu) divino; las tabletas sumerias hechas detierra y agua animadas por el «pneuma» humano sometidas al fuego parasobrevivir a sus autores en los archivos de los templos y palacios reales.

Ya en el sentir profano lo escrito reviste el carácter de cosa solemne,definitiva, irrevocable:

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Pilato contestó: «Lo que he escrito, está escrito»48.La ley escrita se constituye en garantía de cumplimiento. Tan así, que en

las Sagradas Escrituras es el mismo Yavé quien graba las tablas de la ley49.15 Entonces Moisés bajó del monte, trayendo en su mano las dos

tablas de la Ley, escritas por ambas partes, 16 y labradas por Dios; así comoera también de la mano de Dios la letra grabada en ellas.

La Ley bíblica no sólo son mandamientos de Dios; es también un pactoque otorga garantías al pueblo israelita. Y queda plasmado en undocumento con la escritura más firme que se conocía (grabada) sobre elmaterial más inalterable de entonces (la piedra); o como se le designacientíficamente "epigráfica".

Cuando el pueblo judío estuvo próximo a ingresar a la tierra prometida,Moisés les entregó el código deuteronómico.

Ya que vais a pasar el Jordán para ir a tomar posesión de la tierra queYavé vuestro Dios os da, ya que vais a ocuparla y habitar en ella,cuidaréis de poner en práctica todos los preceptos y normas que yo osexpongo hoy50.

Esta Ley no sólo se promulga, no sólo se escribe, también se mandaconservar el documento. Es el testimonio de un pacto, y Moisés "sabía muybien de los bueyes con que araba".

24 Cuando terminó de escribir en un libro las palabras de esta Ley hastael fin, 25 Moisés dio esta orden a los levitas que llevaban el arca de laalianza de Yavé: 26 «Tomad el libro de esta Ley. Ponedlo al lado del arcade la alianza de Yavé vuestro Dios. Allí quedará como testimonio contratí. 27 Porque conozco tu espíritu de rebeldía y tu dura cerviz.…»51

Por seguridad, los reyes de Israel tendrán un duplicado. Refiriéndose alRey, el código deuteronómico establece:

Cuando suba al trono real, deberá escribir esta Ley para su uso,copiándola del libro de los sacerdotes levitas. La llevará consigo; la leerátodos los días de su vida, ….52

Pero no es algo que se escribió solamente para los levitas o el rey y allíquedó. Está destinada al conocimiento del pueblo a través de los tiempos.Según el relato bíblico,

Moisés puso esta Ley por escrito y se la dio a los sacerdotes, hijos deLeví, que llevaban el arca de la alianza de Yavé, así como a todos losancianos de Israel. Y Moisés les dio esta orden: «Cada siete años, …

48 Evangelio de San Juan 19,2249 Exodo, 32,15/16.50 Deuteronomio, 11, 31-3351 Deuteronomio, 31, 24-2752 Deuteronomio, 17,18

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cuando todo Israel acuda, para ver el rostro de Yavé tu Dios, al lugarelegido por él, leerás esta Ley a oídos de todo Israel.»53

Los documentos sirven para comprometerse, personal ycomunitariamente.

De acuerdo con todo esto, tomamos un firme compromiso por escrito. Eldocumento ha sido firmado por nuestros jefes, nuestros levitas y nuestrossacerdotes.54

No es casual que los profetas de Israel tuvieran claro que Dios lesmandaba fijar sus oráculos mediante la escritura.

Díjome más el Señor: Toma un pergamino grande, y escribe en él encaracteres claros e inteligibles:….55

El versículo anterior no sólo establece la obligación de escribir, sinotambién que la grafía sea clara y entendible. Y también el material sobre elque irá montado el mensaje divino.

Pero, para que no sólo fuera entendible sino también creíble, aparecenlos testigos en el siguiente.

Y tomé por testigos fieles de lo que escribía, a Urías sacerdote, y aZacarías, hijo de Baraquías;56

La moral bíblica fue siempre particularmente exigente con la veracidadde los testigos, en especial cuando se trataba de dar testimonio en juicio.

Si nos vamos a las primeras leyes judiciales, recibidas directamente deDios por Moisés, ya se condena el falso testimonio.

No des oídos a calumniadores, ni te prestarás a decir falso testimonio enfavor del impío.57

En el Nuevo Testamento, "testigo" y "testimonio" toman un profundosentido religioso. Jesucristo es el testigo fiel por excelencia.

… Yo para esto nací y para esto vine al mundo, para dar testimonio de laverdad…58

Su testimonio llegó hasta la misma muerte.Tanto en Moisés como a todo lo largo de la Historia del Pueblo de Dios,

el valor del testimonio es central. El pueblo Judío será testimonio ante lospaganos, así como la Iglesia ante todos los hombres.

Por eso, en la Iglesia, los delitos que atenten contra la confiabilidad delos documentos merecen especial condena, como veremos más adelante.

53 Deuteronomio, 31,1154 Nehemías 10,155 Isaías, 8, 1.56 Isaías 8, 2.57 Exodo, 23, 1.58 Evangelio de San Juan, 8, 37

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Tanta importancia reviste la escritura, que los libros que losdescendientes de Abrahán, Isaac y Jacob, reconocen como escritos bajo elimpulso divino, son llamados Sagradas Escrituras.

Por el otro lado, entre los descendientes de Abrahán que sostienen queIsaac bendijo a Ismael y no a Israel, también se encarece la escritura. En elSagrado Corán, el profeta amonesta a los creyentes sobre la obligación dedocumentar sus obligaciones.

¡Oh, creyentes! Cuando contraigáis una deuda, por un tiempodeterminado, documentadla: que un memorialista, en vuestra presencia,lo ponga fielmente por escrito y ningún memorialista se negará a escribircomo Dios le ha enseñado; que escriba, sin omitir nada, lo que el deudorle dicte y que tema a Dios, su Señor. Pero, si el deudor es un pródigo oun insensato o está incapacitado para dictar, que su curador dictefielmente por él. Llamad a dos testigos, de entre vuestros hombres o, ensu defecto, a un hombre y dos mujeres, de las que prefiráis de lostestigos, a fin de que, si una de ellas olvidara, la otra se lo recuerde. Quelos testigos no se nieguen cuando sean requeridos. No desdeñéisdocumentar la deuda sea pequeña o grande hasta su vencimiento. Esteproceder es el más equitativo, a los ojos de Dios, el más válido para eltestimonio y el más adecuado para evitar dudas. Salvo que se trate de unaatijara de contado, que hagáis de mano a mano, no incurriréis en falta sino lo documentais. Apelad a testigos cuando merquéis y que elmemorialista ni el testigo sean coaccionados; pues si lo hiciéraiscometeríais un delito. ¡Temed a Dios; y El os instruirá; porque, Dios esomnisapiente!59

Las enseñanzas del Profeta fueron escritas por sus contemporáneos sobrelos materiales disponibles: hojas de palmera, tablillas, trozos de pergamino,cueros, lajas, omóplatos, etc. La tradición recuerda algunos de estosescribas: Alí bnu Abi Tálib, Abu Bakr, Omar bnu-l-Jattab, Ozmán bnuAffán, Mua'uia bnu Abi Sufián y Zaid bnu Zabit. De sus manos vio la luz elSagrado Corán.

Siglos después, el rey Alfonso X el sabio, al referirse a la necesidad de laescritura, lo hace en términos de fijación del pasado para el conocimientofuturo.

El antigüedad de los tiempos es cosa que faze a los omes olvidar losfechos pasados, e por ende fue menester que fuese fallada escritura,porque lo que antes fuera fecho non se olvidasse, e supiesen los omes porellas las cosas que eran establecidas bien, como si de nuevo fuesenfechas.60

59 El Sagrado Corán, sura II (sura de La Vaca), aleya 282.60 Las siete partidas del Rey D. Alfonso El Sabio Partida III, título XVIII.

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Mensaje y soporte

La palabra siempre tuvo algo de la libertad de los pájaros. Pero decíanlos antiguos romanos que ella deseaba ser sujetada: verba volant scriptamanent.

Para que el mensaje no se pierda, pues, los hombres debieron buscarcómo y dónde atraparlo.

Para el cómo, encontraron y privilegiaron la escritura, y para hacerlarápida encontraron en la pintada ventajas notables sobre la grabada. Conrespecto a las tintas, desde la antigüedad hay dos grandes tendencias: lospigmentos que se adhieren superficialmente, y los que se impregnan en elsoporte. Entre las primeras se encuentra la vieja tinta china al carbón, yentre las últimas las tan conocidas ferrogálicas. Ambas tienen susdesventajas: la primera se borra fácilmente, la otra acidifica y destruye elpapel.

Como anécdota, viene al caso la solución que aportó un mercedario deMallorca en el siglo XVII, fray Miguel Thomás. A la fórmula ferrogálicaañadió "agua de carbón de pino picado"61.

Para el dónde, pasaron por muchos tipos de materiales que soportaran losdistintos pigmentos utilizables, hasta llegar al papiro, el pergamino y porúltimo el papel. Su nombre (paper, papel) parece derivar del papiro. Comocharta papyri (carta de papiro) se le menciona en algunos textos antiguos,como pergamino de parmo (pergamino de trapos), en otros.

Cuenta la leyenda que la persecución del emperador chino Tsin (acomienzos de la era cristiana) a los escritores que lo criticaban, incluyó ladestrucción de las tabletas de madera para escribir en todo su imperio. Laspersecuciones a los ideólogos no son nada nuevo sobre la faz de la tierra.En la búsqueda de reemplazar las tabletas destruidas, descubrirán el papel.

El papel fue inventado por Tsai Lun, funcionario de la dinastía Han delEste (antes del año 100 DC). Este eunuco usó restos de red, trozos de seday cortezas de árboles (morera y bambú); los desmenuzó, disolvió en agua ylos amasó; la pasta la secó en delgadas láminas y el resultado ha permitidocomunicarse a los hombres como nunca antes.

Los árabes lo llevaron consigo a Europa. Por falta de vegetales,utilizaron trapos en desuso de lino, cáñamo y algodón. Cuando los ejércitoschinos invadieron territorios dominados por los árabes a mediados del siglooctavo, los musulmanes rechazaron el intento y obtuvieron el secreto de losprisioneros vencidos. Los documentos más antiguos que conserva la

61 THOMAS, fray Miguel (mercedario). Libre de memories, fol 36. Archivo Real de Mallorca, Clero,2024), citado por MUT CALAFELL, Antonio. «Fórmulas de la tinta caligráfica negra de los siglosXIII a XIX y otras relacionadas con la tinta». En: El papel y las tintas. Huelva, 1992, pág. 132 [103-183]. Otra fórmula propuesta por un mercedario es la ferrogálica de fray Joan Pujetó, que recoge elautor del artículo en la página 128

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humanidad datan de los siglos II y III, y proceden del Tibet y el Turquestán.Marco Polo describe, con profunda admiración, la fabricación y el uso depapel moneda en los dominios de Kublai Kahn, allá en el siglo XIV.

El progreso humano, tal como lo conocemos, no podría haber existidosin un soporte tan abundante, liviano, barato y durable como el papel.Europa no hubiera sido lo que fue sin la posibilidad de la imprenta. Y elconocimiento no se hubiera diseminado tanto en eso que llamamosOccidente sin los libros; y el abuso de los poderosos sin tantas iniquidadesmanchando pliegos y más pliegos de celulosa seca como sus corazones. Sinembargo, no fueron los blancos quienes se preocuparon de inventarlo:fueron los amarillos de China, los amarillos de México. Los blancos sólo lotuvieron en cuenta para llenarlo con poquísimos signos que podíanrepresentar casi todo conocimiento humano.

Pero como el progreso de la raza humana crece actualmente en unaprogresión inmensurable, las necesidades de nuevos medios y soportes degrabación han impulsado la aparición de todo tipo de ellos. Sin embargo,las necesidades básicas son las mismas: confiabilidad, perdurabilidad yaccesibilidad. Que el texto guardado no pueda ser adulterado; que perduremucho más que la vida de sus autores, y la de los sucesores de sus autores,y así durante generaciones; y que pueda ser interpretado con facilidad yseguridad con ninguna o mínima utilización de instrumentos de lectura.

A menudo se plantea la confrontación entre medios modernos y antiguosde escritura. Pienso que es estéril, ya que la aparición de un medio nuevono significa la supresión del anterior. Y las indudables ventajas de lainformación procesada por máquinas –computadoras– muy bien puede servolcada sobre soportes antiguos –papel– para servir de seguro testimonio; yla información contenida en soportes antiguos puede ser retomada pormedios modernos de lectura informatizada –reconocimiento electrónico detextos– para su reprocesamiento. Como ejemplo emblemático, el mensajeenviado en la sonda espacial Voyager a las posibles civilizacionesextraterrestres estaba grabado sobre una plancha de metal; como lo hacíanlos artesanos miles de años antes. Lo importante es saber qué es másconveniente usar, ya sea nuevo o viejo, y –valga la redundancia– ¡usarlo!.

Documento

A modo de apretada síntesis, podremos establecer entonces que un Documento es todo objeto que lleve adherido un mensaje, y que éstaadhesión permanezca luego del momento de su emisión.

En los documentos que son objeto de los estudios archivológicos,encontramos algunos elementos básicos y comunes.

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1. Están originados en una actividad administrativa62.2. Hay un soporte, generalmente papel.3. Hay un mensaje, reflejado mediante signos convencionales.4. Hay medios de fijación de esos signos convencionales,

frecuentemente tinta.Dentro de los archivos encontraremos documentos que, además de su

carácter administrativo, pueden dar lugar a derechos u obligaciones. Sonlos documentos jurídicos, que pueden valer como prueba en juicio, aunqueno fueran pensados originariamente para ello.

Y dentro de estos últimos se destacan aquellos que creados sobresoportes blandos (papiro, pergamino o papel), fueron escritos conformalidades estrictas con el ánimo de dar testimonio de valor jurídico: sonlos documentos diplomáticos, entre los que encontramos en la Orden de laMerced, por ejemplo, las actas de profesión religiosa o los nombramientosde superiores.

Documento y testimonio

Según la definición vigente en la administración pública provincial deCórdoba, un documento «es un escrito que atestigua o informa sobre unasunto».

Es otra de las necesidades que debe cubrir un documento administrativo:otorgar certeza, atestiguar.

A no ser que conste otra cosa por argumentos contrarios y evidentes, losdocumentos públicos hacen fe de todo aquello que directa yprincipalmente se afirma en ellos.63

La necesidad de garantizar la autenticidad del documento, tanto en sucontenido como en su continente, dio origen a una serie de oficios yfunciones.

Los secretarios que anotaban lo que se resolvía otorgaban validez al actoen sí. En la antigua Roma se los conocía como notarius, de donde derivó ennotario o escribano. Ellos daban fe del hecho.

Otros funcionarios tenían en su poder los sellos que guardaban en unacajita, llamada scrina. Por esa razón se los conoció como scrinarius, oficioconocido actualmente como canciller. Ellos hacían guardar lasformalidades necesarias para que un documento no pudiera ser falsificadofácilmente.

Guardado el documento para tiempos futuros, fue necesario que algunosse encargaran de su conservación y de ponerlos a disposición de la consultacuando fuera necesario. Como desde tiempos muy remotos los documentos

62 Tomando administrativa en el sentido que le da Tanodi en su Manual de Archivología, pág. 61 y 62.63 CIC, 1541.

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no podían salir del archivo salvo excepciones, los archiveros tenían entresus funciones entregar una copia debidamente certificada. Ellos daban fe dela validez de la copia, tarea que en algunas oficinas todavía siguenejerciendo.

4.3. LA ARCHIVALÍA.

Como vimos, la administración es el factor creador de documentosadministrativos. Sin embargo, cubierta la finalidad primaria del documento,frecuentemente no se destruye. Los hombres han optado por conservarlosdurante tiempos prolongados.

¿Por qué? Es que la Ciencia necesita la conservación perdurable dedicho material. Como el hombre necesita de la memoria para vivir, lasociedad requiere de la documentación pretérita para progresar.

Fundamentalmente hay dos grandes tipos de documentos de los que laciencia histórica se sirve: los que fueron realizados con intención histórica(p.e. crónicas, memorias y otros relatos), y los que fueron realizados confines prácticos (p.e. administrativos, jurídicos). Y sin embargo, a pesar deno tener un fin histórico, son los más confiables para el historiador.

La administración crea los documentos administrativos y los guardadurante sus primeros tiempos. Los archivos los recogen, y si corresponde,aseguran su conservación. Así como no se confunde biblioteca con lascolecciones que cobija, tampoco es lógico confundir archivo con sucontenido. Por ello, al conjunto del contenido de los archivos muchosdocentes de la Escuela de Archiveros de la UNC lo denominanhabitualmente archivalía.

Archivalía son los conjuntos orgánicos de documentos provenientes dela actividad administrativa de una institución64.

Esto de conjunto orgánico es esencial a la noción de archivalía. Elcontenido de un archivo es algo que fluye naturalmente de la actividad deuna entidad. Si se pierde la unidad entre la documentación que fluye y laactividad que la hace fluir, habremos roto el hilo conductor de lainformación que contienen. Así como un collar es mucho más que lasperlas que lo componen, la archivalía es mucho más que los documentosque la forman. Mucha información se ha perdido –aunque no falte ningunapieza documental– por querer reordenar los resultados de unaadministración desordenada.

64 Cfr. VAZQUEZ, Manuel. Introducción a la Archivología. Guía de Estudios, tercera edición.Córdoba, 1996, pág. 61, quien toma el concepto de TANODI, Aurelio. Manual de ArchivologíaHispanoamericana..

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La palabra archivalía, etimológicamente es un neutro plural latino-archivalia-, probablemente derivado de archivabilia, que significa"archivables" o "cosas de archivo". En alemán existe "archivalien".Schellemberg, autoridad máxima en archivología moderna, lo rescató.De allí llega al manual de Archivología de Tanodi, que lo castellanizacomo "archivalía"65.

La archivalía nace de un trabajo administrativo: capturar, procesar,ordenar y conservar información. Son tareas que se desarrollan desde lasgrandes asociaciones hasta la más pequeña célula social. Todos estamosobligados a guardar cierta documentación, aunque tan sólo se trate deimpuestos pagados y los documentos de identidad.

Los documentos administrativos nacen con vocación de archivalía –enmayor o menor grado–, pero la concreción de esa vocación no depende deellos sino del discernimiento y reconocimiento social.

Dentro del ámbito eclesiástico, no se usa el concepto archivalía sino unosemejante, como es documento de archivo.

Edades de los documentos administrativos

En el destino de los Documentos, podemos reconocer tres etapas básicas,conocidas como edades de los documentos, o ciclo vital de los documentos.Distinguir esto es de suma importancia para las ciencias sociales y para lasde la administración. Pero para la Archivología es una cuestión central.

No es lo mismo un pergamino dirigido por el Rey Jaime I a un príncipeárabe en 1218 que en 1230 o en 1998. En 1218 el pergamino no podíaextraviarse porque implicaba el fracaso de un viaje de rescate de cautivos;tampoco en 1230 por las dudas que alguien reclamara algún derecho; ymucho menos en 1998, porque constituiría un crimen de lesa cultura.

Hay por lo tanto tres grandes etapas o edades dentro de ese Ciclo Vital.Algunos las establecen por el uso: los de la primera edad tienen mucho uso,los de la segunda edad menos, y los de la tercera casi ninguno.

Otros, por su potencialidad administrativa. 1. Fase de formación o corriente, con archivalía en potencia y utilización

administrativa en acto.2. Fase intermedia, con archivalía en proceso de actualización y

utilización administrativa en potencia.3. Fase de conservación permanente, constituido por materiales

resultantes de un previo descarte; con archivalía en acto y utilización socialen acto.

Y otros, como Manuel Vázquez, por su vigencia administrativa.

65 Ibíd, pág. 59.

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Para ellos, la primera edad va desde el momento en que se planifica latransacción (trámite particular) administrativa hasta que se resuelve lafinalización del trámite- (Momento de Planificación/Momento deTramitación).

La segunda edad corre desde que entra en vigencia la resolución hasta laprescripción de los derechos y deberes que pudieran desprenderse de ella.(Momento de vigencia/Momento de Plazo Precaucional). Al finalizar estaetapa, es cuando debe eliminarse la información superflua. Al destruirse lainformación, el documento desaparece. No hace falta la desaparición delsoporte, como se ve en los documentos informáticos. Lo esencial de esteproceso de selección es la destrucción de la información superflua, la quenos hace perder de ver el bosque por contemplar cada árbol. Parte o latotalidad de esa información destruida será reciclada y reelaborada pormedios estadísticos. Los encargados de preseleccionar los documentos devalor permanente son los profesionales archivísticos -lo harán en base anormas preestablecidas-, y los de dar el veredicto final los peritos enhistoria y ciencias afines con la institución a que pertenecen esosdocumentos.

Los documentos que pasen esta selección, que son aquellos que por suvalor cultural tengan validez permanente, serán conservados en losarchivos históricos como patrimonio y como recurso para las generacionesfuturas. Es la tercera edad de los documentos.

4.4. ARCHIVOS

¿Qué es un Archivo?

Es un término equívoco. En el lenguaje usual podemos distinguir por lomenos cuatro significaciones básicas.

a)El edificio.b) Las instalaciones.c) El contenidod) La institución o la sección de una institución.Pero la acepción que verdaderamente nos interesa es la última, la

institucional.El maestro Tanodi definió así al término66.

66 TANODI, Aurelio. Manual de Archivología Hispanoamericana. Teorías y principios. SerieCollectanea Archivistica. Córdoba (Argentina). Universidad Nacional de Córdoba, 1961, 286 pág,pág. 8.

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Entendemos bajo el término archivo las secciones de entidades y lasinstituciones que reúnen, conservan, ordenan, describen, administran yutilizan la archivalía y eventualmente los documentos históricos que noson archivalía.

Atreviéndonos a simplificar su definición, podemos considerar así alconcepto.

Llamamos archivo a la estructura orgánica destinada recibir, conservar yrecuperar documentos de una administración, y/o brindar informaciónsobre ellos.

Desde un punto de vista sistémico,Un archivo es un sistema de relaciones recíprocas entre documentos ygrupos de documentos67

Como curiosidad, inserto la particular concepción de archivo que, enotro contexto, brinda Michael Foucault68.

Es el sistema general de la formación y de la transformación de losenunciados.

Tareas dentro de un archivo

Dentro del archivo, la tarea previa del archivero será conocer lainstitución de donde provienen los fondos documentales. Necesitaráinteriorizarse de:

a) Historia, estructura orgánica y funciones del organismo productor;b) Razón de la existencia de los documentos;c) Legislación que rige la institución.

Ante la multiplicidad de piezas documentales, necesitará:a) Conocer a grandes rasgos la masa documental que ponen en sus

manos. Para ello elaborará un inventario previo. Así estará en condicionestambién de reclamar a las oficinas productoras por los traslados ytransferencias de documentación no realizados en término.

b) Agrupar lógicamente las unidades documentales según suscaracterísticas comunes. Es decir, establecer sus clases, clasificarlas.

c) Individualizarlas, con menor o mayor precisión, de acuerdo a esascaracterísticas comunes, mediante distintas operaciones de descripción.

d) Ordenar las unidades documentales. Para ello pondrá en orden lasunidades de conservación; y luego las instalará en los anaqueles de acuerdocon un plan.

67 Cfr. AMPUDIA MELLO, José Enrique. «Modelo técnico para la organización de archivoshistóricos». En: Boletín del Sistema Nacional de Archivos, México, número 3, 1984, págs. 3 [3-12]

68 FOUCAULT, Michel. La arqueología del saber. Traducción de Aurelio Garzón del Camino. SigloVeintiuno Editores, México, sexta edición, 1979, pág. 221.

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e) Pensando en las necesidades futuras, deberá apartar lo documentaciónnecesaria de la superflua, mediante tareas de selección documental.

f) Brindar las condiciones necesarias para que la documentación seconserve en buenas condiciones por el término necesario establecido, asísea un par de años o para siempre.

g) Todo ello, para recuperar la documentación requerida en el momentooportuno. Que no es sino éste el fin de los archivos.69

Bancos de datos

Milenios pasaron desde la aparición de los primeros archivos. Pero en unsiglo la vida de la humanidad entró en una vorágine tecnológica jamáspensada. De la mano de la electrónica vio la luz el procesamientoelectrónico de la información y la inteligencia artificial. Y llegó lainformática a la administración, procesando datos y guardando el resultadode ese proceso en forma tal que sólo pudiera ser recuperado mediantemáquinas70.

La acumulación de todos esos datos y de documentos informáticosprovenientes de la actividad administrativa constituyen un banco de datos.Constituyen los bancos de datos –a mi modo de ver– fondos documentaleso secciones de ellos, porque guardan información sobre las actividadesadministrativas de una persona o institución. Pero –actualmente y por lasposibilidades ciertas de la adulteración y pérdida de información– su valortestimonial es relativo. Son archivos muy dinámicos y útiles para lainformación interna de la propia institución, mientras no se planteen dudassobre su confiabilidad. Instalada una discrepancia, su valor testimonial escuestionable. Por otra parte, negarles esa condición «archivalística» es ir acontramano de la historia, ya que se trata de una tecnología que puededisponer una oficina cualquiera de una administración cualquiera. Es más,también a ellos se debe aplicar el criterio de ciclo vital.71 Y el organismorector de los archivos estadounidenses, el National Archives and RecordsAdministration dispone de una repartición especializada, el Center forElectronic Records72.

No hay que confundir banco de datos con base de datos.

69 cfr. SZLEJCHER, Ana Leonor. Organización de Archivos Vivos. CIDA, Córdoba, 1981.70 No podemos leer lo que contiene un diskette con nuestros ojos, necesitamos de una máquina para

ello71 Cfr. DURANTI, Luciana. Diplomática. Nuevos usos para una antigua ciencia. S & C Ediciones.

Carmona (Sevilla-España), 1996, pág. 111, citando a: Management of Electronic Records: Issuesand Guidelines (New York: United Nations, 1990), p. 22-23.

72 Cfr. www.nara.gov/nara/electronic

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Esta última es una herramienta de procesamiento de datos, que puedeser consultada y administrada desde distintos niveles y actividades de unainstitución, con distintos tipos de restricciones.

En cambio, en un banco de datos puede haber varias bases de datos,además de documentos provenientes de procesadores de textos, planillas decálculo, imágenes digitalizadas, proyectos asistidos por computadora,grabaciones sonoras digitalizadas, gráficos digitalizados, y todo lo que alhombre se le ocurra informatizar y haya tenido o tenga conexión con laactividad administrativa de una institución.73

Hacia otra visión de los archivos: garantía de vitalidad

Suele haber una visión deformada y un tanto peyorativa de la misión delos archivos. No es raro que cuando se haya de sancionar algún empleado"inútil", se lo "traslade al archivo". Sin embargo, cumplido el "período decastigo", no es infrecuente que el empleado no quiera retornar a su oficinade origen. Encontró un verdadero tesoro.

La ubicación física del archivo también refleja ese modo de pensar.Puede ser un sótano (contrariando muchas veces indicaciones que brinda laciencia archivística), un altillo, una cocina abandonada, un garaje. Es decir,lugares apropiados para guardar cosas inservibles que no merecen que lesdediquemos ni el tiempo que gastamos en acondicionarlas para tirarlas.

Pero un buen archivo es garantía de vitalidad institucional. Cuando senecesita fortalecer la identidad personal, los psicólogos intentan que elpaciente se reencuentre con su historia. Porque sin memoria nadie puedeaprender, nadie puede desarrollar aptitudes de sobrevivencia.

Lo mismo ocurre con las instituciones. Cuando alguna necesitarevitalizarse, sus archivos le dan a conocer las necesidades que le dieronorigen, y las funciones que cumplió y dejó de cumplir.

¡Pobre de la comunidad que olvidó su pasado! ¡Pobre la que descuidósus archivos! Probablemente se corromperá más rápidamente que lospapeles en los anaqueles cubiertos de incuria, y sus despojos los repartiránla mayoría de las veces hombres más corruptos que el montón de celulosadegradada y llena de moho en que vinieron a terminar libros y cartas dequienes la hicieron nacer.

Para los cristianos, los archivos eclesiales son los que, al mirar haciaatrás interpelan, llamando a enderezar los caminos torcidos. Los archivosse convierten en guardianes de la memoria del Pueblo de Dios.

73 Cfr. Dictionary of archival terminology. Dictionaire de terminologie archivistique. Publicación delCIA (Centro Internacional de Archivos), editado en 1988 por Peter Walne.

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Así lo entendió un mártir de nuestro siglo, el inolvidable monseñorEnrique Angelelli, al ordenar la creación de las vicarías parroquiales en elobispado de La Rioja.

… 5) Tendrán sus respectivos Libros Sacramentales de Bautismo,Confirmación y Matrimonio, y sus propios Sello y Archivo,descubriendo en ello el sentido de la "historia propia" de una ComunidadPeregrina. 6) Fijarán y comunicarán a esta Curia Diocesana, previa sucatequesis correspondiente, el día de Toma de Posesión, como asítambién el lugar en donde tendrán el Archivo.… En la Sede Episcopal deLa Rioja, a quince días del mes de agosto, Festividad de la Asunción dela Santísima Virgen, del año del Señor de mil novecientos setenta y dos.Enrique Angelelli, Obispo de La Rioja. Por mandato del Señor Obispo,Pbro. Juan Aurelio Ortiz, Secretario General.

Por ello, para la Iglesia los archivos son, efectivamente, lugares donde seconserva la memoria de las comunidades cristianas y a la vez factores decultura para la nueva evangelización.

4.5. ALGO SOBRE ARCHIVOS ECLESIÁSTICOS.

Los archivos del antiguo pueblo de Dios: Israel

Todo lo referido a la cultura judía toca entrañablemente a los cristianos.Cristo fue judío, pensó como judío, vivió como judío. En un recordadoencuentro –el 13 de abril de 1986 en la sinagoga romana– con el GranRabino de Roma, Elio Toaff, el Papa Juan Pablo II definió a los judíoscomo los hermanos mayores de los cristianos74.

Israel, el antiguo pueblo de Dios, predecesor de la Iglesia, fuemodificando su estilo de vida social a través de más de 4 milenios.

De su vida tribal, pasó al nomadismo en tiempos de Abraham, alsedentarismo ya en tiempos de Moisés y de la conquista del territorio.

La monarquía de David le otorgó su organización administrativa, y ya sehabla entonces del oficio de archivero.

15. David reinaba sobre todo Israel, dictando normas y administrandojusticia a todo el pueblo. 16 Joab, hijo de Sarvia, era jefe de su ejército;Josafat, hijo de Ajilud, era archivero; 17 Sadocl, hijo de Ajitub, yAbiatar, hijo de Ajimelec, eran sacerdotes. Seraya era Secretario. 18

74 Revista Ciudad Nueva, edición argentina, N° 375, enero/febrero 1998.

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Banaías, hijo de Yoyadá, mandaba a los quereteos y peleteos. Los hijosde David eran sacerdotes75.

Esta cita se vuelve a repetir en un capítulo posterior.23 Joab era jefe de todo el ejército de Israel; Banaías, hijo de Yoyadá, erajefe de los kereteos y peleteos; 24 Adoram era inspector de impuestos, yJosafat, hijo de Ajilud, era archivero76.

Salomón, influenciado por los usos egipcios y fenicios, pueblos conbuena tradición administrativa, instaura la burocracia en tiempos desobreabundancia económica. Se da la influencia sobre las instituciones deIsrael, y de allí las nuevas funciones, como la de "familiar del rey" (2Samuel 15,37), probablemente de origen egipcio; la de "mayordomo"(Ajisar), cuyas funciones se asemejan a las del vizir egipcio (cfr. Isaías22,22, Mt. 16,19); las de los «secretarios» y «cronistas», conocidos tambiénen Egipto. Véase la lista de funcionarios que nos proporciona el primerlibro de los Reyes.

Reinó Salomón sobre todo Israel 2 y las personas que desempeñaron losmás altos cargos de su gobierno fueron: Azarías, hijo de Sadoc,sacerdote, 3 Elijoref y Ajías, hijos de Sisa, secretarios; Yosafat, hijo deAjilud, canciller; 4 Banaías, hijo de Joyada, jefe del ejército. Sadoc yAbiatar, sacerdotes. 5 Azarías, hijo de Natán, superintendente, jefe de losgobernadores77.

Como vemos, el archivero que tenía David pasa a desempeñar el cargode canciller en tiempos de Salomón.

Los hebreos tuvieron su archivo en el templo de Jerusalén, que fuedestruido por el incendio cuando la ciudad santa fue tomada por asalto porlos romanos, dirigidos por Vespasiano.

En los textos bíblicos encontramos con frecuencia temas relacionadoscon la documentación. A modo de ejemplo vayan los siguientes. Jeremías(32, 10-15), una escritura de compra de un terreno. Ester (3, 12-15), sobreescribas y decretos. Sobre escribas Esdras (7,11); Ezequiel (9,2), PrimerLibro de Crónicas (24,6).

El Segundo Libro de Crónicas (26,11) nos habla de censo, escriba ynotario

"Conforme al número de su censo hecho bajo la vigilancia de Jejiel, elescriba, y Maseías, el notario, a las órdenes de Janaías, uno de los jefesdel Rey…"

Sobre registro, Nehemías (7,6). "Hallé el registro del censo de los que habían regresado del destierro alprincipio…"

Y también sobre documento, Nehemías (10,1)

75 Segundo Libro de Samuel, capítulo 876 Segundo Libro de Samuel, 2077 Primer Libro de los Reyes, 4

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De acuerdo con todo esto, tomamos un firme compromiso por escrito. Eldocumento ha sido firmado por nuestros jefes, nuestros levitas y nuestrossacerdotes.

Inscripto aparece en el primer libro de Crónicas 5,1."Con todo, José no fue inscripto en las genealogías como el primero…"

Y el sello, aparece en el primer libro de los Reyes (21, 9)Jezabel escribió cartas en nombre de Ajab y les puso el sello de éste.

Los archivos eclesiásticos hasta la caída del imperioromano de occidente.

Apenas establecida, la Iglesia cuidó de depositar en la casa de algúncristiano respetable los sagrados vasos y las Santas Escrituras, y muypronto las actas de los mártires, que en tiempo de persecución eranescondidas en alguna cámara de las catacumbas78. El Papa Clemente (93)creó en Roma siete notarías para registrar los martirios; el Papa Antero(235/36) desplegó gran celo en la recolección de testimonios de martirios.Mártir, en griego, equivale a testigo.

Los primeros archivos cristianos fueron para testimoniar los martirios.Este eje archivos/testimonio/martirio, tiene estrecha relación con el carismamercedario. El cautivo es siempre un mártir en potencia.

El Concilio de Nicea (325) habla en el canon XVI de un oficial quecuide los archivos en que se deben guardar el registro de las ordenanzas, laexpedición de letras dimisorias, los decretos sinodales y conciliares y eltestimonio de la administración y temporalidades de la Iglesia.

El Concilio de Mileto (402), en Africa, prescribió una matrícula oarchivos que guardaran los registros de ordenación para evitar disputasacerca de la antigüedad en los obispos.

En tiempos del emperador Constantino, mediante leyes publicadas en losaños 318 y 333, a los obispos les fueron conferidas facultadesjurisdiccionales en asuntos civiles. Esto obligó a incorporar notarii ydefensores79.

Las propiedades de la Iglesia aumentaron considerablemente. ElConcilio de Calcedonia (451), en su canon 26, ordena a los obisposdesignar un ecónomo. Una cuarta parte del patrimonio eclesial era conocidocomo quarta pauperum; según el decreto del Papa Simplicio en el año 475.Era común en esta época levantar al lado de las iglesias casas destinadas alos pobres, enfermos y huérfanos. Para atender hospitales y cementarios, secrean los oficios de parabolani y fossores.

78 Cfr. ESPASA CALPE, artículo sobre archivos, §archivos eclesiásticos.79 KNÖPFLER, Luis. Manual de Historia Eclesiástica. B. Herder, Friburgo de Brisgovia (Alemania),

1908, pág. 126 in fine y 181.

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Comienza así a surgir una verdadera necesidad administrativa en laIglesia. A la sombra de las grandes iglesias aparecen bibliotecas, archivos ytesorerías, a cargo de bibliothecarii, archivarii, thesaurarii y secretarii80.

Noticias del tiempo de san Dámaso (366/384) se refieren a unaorganización de archivos conforme con el modelo de los del Estadoromano81.

Ya desde la antigüedad, pues, se perfila una doble administracióneclesiástica: una referida a su misión (mártires y sucesión episcopal), y otraa su patrimonio material y cultural.

Los archivos eclesiásticos durante el medioevo

Desde el principio de la Edad Media había gran número de ArchivosEclesiásticos, en los que se guardaban con frecuencia, fuera de su destinodirecto, manuscritos profanos; en ellos, por orden de Justiniano, figuraba elCódigo de este nombre. Todos estaban bien organizados y conservados.

El encargado de los archivos de las catedrales de la Edad Media, erallamado tabularius en Roma y jartophylax en Constantinopla. Más tardefueron creados los municipales, asimismo bien ordenados. Aparece unaexpecialización, que es la del archivista, el encargado de las partituras demúsica sacra82.

Los primeros archivos eclesiásticos de los religiososYa desde los primeros siglos del cristianismo, mujeres y hombres

radicalizaban su opción evangélica, entregándose por completo al serviciode Dios y de sus prójimos. Surgió así la vida religiosa, donde en busca demayor libertad se renunciaba a cosas totalmente legítimas, como la deformar una familia, poseer bienes y disponer de su tiempo y de su persona.Esta radicalización estaba contenida en los votos de pobreza, obediencia ycastidad. Quizá sea superfluo, pero a mi modo de ver es imprescindibleremarcar que sacerdote no es igual a religioso, porque es tan religioso unlego como un sacerdote regular o una hermana; y un sacerdote no tiene porqué ser religioso.

La primera orden religiosa existente en occidente, y que supervive hastanuestros días, es la de San Benito. De su Regla veamos cómo eran losreligiosos de su tiempo.

Capítulo I. Los géneros de monjes. …El primero de ellos es el de loscenobitas, o sea, monasterial, que militan bajo una regla y un abad. …

80 Ibíd.81 Cfr. ESPASA CALPE, artículo sobre archivos.82 Cfr. ESPASA CALPE, artículo sobre archivero.

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Luego, el segundo género es el de los anacoretas o ermitaños, quienes,no por un fervor novicio de la vida religiosa, sino después de largaprobación en el monasterio, aprendieron a luchar contra el diablo,amaestrados ya con el socorro de muchos; y bien aguerridos en las filasde sus hermanos para la lucha solitaria del desierto, seguros ya y sin elconsuelo de otro, con sólo su mano y brazo, tienen valor suficiente paraluchar, con el auxilio de Dios, contra los vicios de la carne y de lospensamientos…

En esa primitiva regla se habla de inventarios y de registros personales, yde su correspondiente archivo.

Capítulo XXXII. Las herramientas y bienes del monasterio. … Tenga elabad un inventario de ellas, para que cuando los hermanos se suceden enlos cargos que les son asignados, sepa lo que da y lo que recibe. …Capítulo LVIII. La recepción de los hermanos. …Haga de esta promesasuya una petición a nombre de los Santos, cuyas reliquias allí están y delabad presente. Escriba de su mano esta petición; o bien, si no sabehacerlo, ruegue a otro que la escriba y el novicio haga en ella una cruz, ypóngala por su mano sobre el altar.…Pero…si alguna vez, …consintiereen irse del monasterio…aquella petición suya, que el abad tomó de sobreel altar, no se le devuelva, mas resérvese en el monasterio83.

Todo esto se da en un marco de pobreza. La pobreza de que habla laregla no es la carencia absoluta de elementos de subsistencia y de trabajo,sino de la imposibilidad absoluta de disponer de ellos. Y en ellos seincluyen los instrumentos de escritura y de lectura. La propiedad sedescribe como un vicio.

Capítulo XXXIII. Si los monjes deben tener algo propio. Ante todo se hade cortar de raíz en el monasterio este vicio, para que nadie se atreva adar o recibir cosa alguna sin mandato del abad, ni tener nada propio,absolutamente nada, ni libro, ni tablillas, ni pluma, nada en absoluto,como a quienes no les es lícito tener a su propio albedrío ni sus cuerposni sus voluntades: pero todas las cosas necesarias deben esperarlas delpadre del monasterio … Y, como está escrito, todas las cosas seancomunes a todos (Hechos de los Apóstoles, 4,32), y nadie diga o pienseque algo es suyo.…Capítulo XLVIII. El trabajo manual de cada día. … En estos días deCuaresma reciban todos un libro de la biblioteca, que leerán por orden eintegramente; estos libros se han de dar al principio de Cuaresma…

Capítulo LV. El vestuario y el calzado de los hermanos. …Y para queeste vicio de la propiedad se corte de raíz, dé el abad todas las cosasnecesarias, esto es, cogulla, túnica, escarpines, zapatos, ceñidor, cuchillo,pluma, aguja, pañuelo y tablillas para escribir, para que se quite todo

83 Regla de San Benito. Versión castellana por Bruno Avila, osb. Tercera edición enteramente revisadapor los monjes de la abadía de San Benito de Luján. Abadía de San Benito, Buenos Aires, 1978. SanBenito nació en 480 y murió en 547. En España los archiveros celebran su día en la fiesta de SanBenito, el 11 de julio

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pretexto de necesidad. Mas considere siempre el abad aquella sentenciade los Hechos de los Apóstoles, que "se daba a cada uno según habíamenester" (Hch. 4,35)84.

Se designaba bibliótafo a los religiosos encargados de la custodia de lasactas de los concilios, extender diplomas y administrar los bienes de unmonasterio85.

A los archivos monacales debe la humanidad la posesión de los escritosde los filósofos griegos y retóricos latinos. El innecesario bombardeoestadounidense del monasterio de Montecasino, en la segunda guerramundial, tuvo para la cultura consecuencias similares a las de la quema dela biblioteca de Alejandría.

Los archivos eclesiásticos después del Concilio deTrento

A raíz fundamentalmente del tema de las indulgencias, Lutero provocauna dolorosa división dentro de la Iglesia. Repárese en que se trata de unacuestión que atañe a los bienes materiales, al patrimonio económico: a laslimosnas e indulgencias.

De esta dolorosa experiencia surgió la necesidad de corregir lasnumerosas deficiencias que existían en su seno. Luego de muchasdificultades, Paulo III convocó al Concilio General de Trento, inauguradoel 13 de diciembre de 1545. En su sesión del 17 de junio de 1546, seprohibió la actividad de los limoneros o demandadores. Por razoneslógicas, quedaron fuera de esta disposición la actividad de los Mercedariosy de las órdenes mendicantes.

En la sesión del 3 de junio de 1547, se explicitaron normas sobre elbautismo. Rejerarquizando las ceremonias bautismales, se establecieron loscorrespondientes registros. Así, desde la Iglesia, se da origen a los actualesregistros civiles. Desde el bautismo, todos pueden conocer sus antepasados,todos quedan igualados. Este tema, que veremos en el apéndice sobregenealogía, es de capital importancia. Como complemento registral deaquél, el Decretum de reformatione matrimonii, del 11 de noviembre de1563, establece en su capítulo primero que el matrimonio debe inscribirseen un registro86.

84 Regla de San Benito.85 BUONOCORE, Domingo. Diccionario de Bibliotecología. 2° edición aumentada, Buenos Aires,

Marymar, 1976.86 CONCILIO DE TRENTO. Canones et decreta sacrosancti oecumenici Concilii Tridentini. Romae.

Ex Typographia Poliglotta. S.C. de Propaganda Fide. MDCCCLXXXII. Sessio XXIV. Dereformatione Matrimonii. Caput II. Inter quos cognatio spiritualis contrahatur. Cfr. KNÖPFLER,Luis. Manual de Historia Eclesiástica. B. Herder, Friburgo de Brisgovia (Alemania), 1908, pp.523/528.

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…Parochus, autequam ad baptismum conferendum accedat, diligenter abeis, ad quos spectabit, sciscitetur, quem, vel quos elegerint, ut baptizatumde sacipiendum admittat; et in libro eorum nomina describat; docea queeos quam cognationem contraxerint ne ignorantia nulla excusarivaleant…

Posteriormente, en 1580, la legislación sobre archivos se recoge en elCorpus Iuris Canonici.87 En 1614, el papa Pablo V (1605/21) amplió elnúmero de libros parroquiales a cinco: de bautismos, de matrimonios, deconfirmados, de difuntos, y de "statu animarum" [censo de familiascatólicas]88. A este papa se debe el actual Archivo Vaticano, al que setrasladó al final del siglo XVIII todo lo que contenía el del castillo de SantAngelo.

En la época postridentina se reguló constantemente en cuestionesarchivísticas. Breve Inter omnes, Bula Cum in litteris y ConstituciónMuneris nostri, de Pío V; Breve Regularium personarum, ConstituciónSollicitudo pastoralis y Motu Proprio Provida Romani, de Sixto V;Constitución Maxima vigilantia y su Istruzione anexa, de Benedicto XIII;el Bannimentum generale de BenedictoXIV.

No hay que olvidar el destacado oficio de San Carlos Borromeo en laorganización archivística de la iglesia.

Desde el punto del testimonio personal de vida, el Concilio dispusoestrictas normas para reconocer la santidad de un difunto. Sixto V,mediante la constitución apostólica Inmensa Æterni Dei, del 28 de enero de1588, fundó la Congregación de los Sagrados Ritos89.

Benedicto XIV, mediante las normas contenidas en su De Servorum Deibeatificatione et de Beatorum canonizatione, dio normas precisas querigieron las beatificaciones y canonizaciones hasta bien entrado el presentesiglo. En ellas, se extiende sobre las funciones de los archivos y losarchiveros de la Sagrada Congregación de Ritos.

6. Notarius est etiam Inspector archivi sacræ Congregationis, vulgoArchivista, ita ut, statim ac quis destinatur in Notarium, designetur simulet semel in archivi Inspectorem. Operæ itaque pretium est, nonnulla hicrecensere de dicto Congregationis archivo.90

87 Cfr. GARIBAY ALVAREZ, Jorge. «Los archivos eclesiásticos y el sistema nacional de archivos».En: Boletín del Sistema Nacional de Archivos, número 3. México, 1984, pág. 30 [30-31].

88 Cfr. TANODI, Aurelio. Manual de archivología hispanoamericana, página 185.89 Const. apost. Inmensa Æterni Dei, 28 de enero 1588. Cfr. Bullarium Romanum, Ed. Taurinensis, t.

VIII, 985/999.90 BENEDICTI XIV. Opera Omnia. Tomo I. De servorum dei beatificatione, et beatorum

canonizatione. Alber Ghettus et soc. Prati in Typografhia Aldina. Roma, MDCCCXXXIX., pág.120.

«Caput Decimumnonum: De notario, et Archivi Inspectore, Interpretibus Processuum,Procuratoribus, Advocatis, et Medicis, aliisque Ministris Congregationis Sacrorum Rituum. §6.Notarius est etiam Inspector archivi sacræ Congregationis, vulgo Archivista, ita ut, statim ac quisdestinatur in Notarium, designetur simul et semel in archivi Inspectorem. Operæ itaque pretium est,

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Los archivos eclesiales luego del Concilio VaticanoPrimero

Si bien el Concilio Vaticano Primero fue un concilio eminentementedogmático en defensa de la autoridad papal, hubo de fortalecernecesariamente la organización eclesial. La Iglesia se reorganizaba luegode las persecusiones de la primera mitad del siglo XIX.

El Papa León XIII, el Papa de la cuestión social y la Rerum Novarum,también se ocupó de los archivos. En 1881 ordenó la apertura parcial de losArchivos Vaticanos. A partir de esa fecha, numerosos países fundaron einstalaron institutos históricos en Roma para utilizar esa valiosadocumentación.

Y, como veremos más adelante, los archivos también fueron tratados conpreocupación por la reorganización eclesial en Latinoamérica y enCórdoba.

Las normas sobre su cuidado no cesaron. El 30 de agosto de 1898, lacircular de la Sagrada Congregación del Concilio. El 30 de septiembre de1902, la circular de la Secretaria de Estado. El cardenal Merry del Val, endiciembre de 1907, ordena constituir en cada diócesis un Commissariatopara documentos y monumentos.

nonnulla hic recensere de dicto Congregationis archivo. § 7. Summus Pontifex Urbanus VIII,archivo sacræ Congregationis locum assignavit in palatio Vaticano, uti legitur in regestis SecretariiCaroli Paulutti pag. 413. In hoc archivo custodiuntur authentici processus causarum Beatificationis,et Canonizationis, et interpretationes autographæ illorum, qui sun extero idiomate confecti; cumquein sacrorum rituum Congregatione alia pertractentur negotia, puta præcedentiarum, et similia,processus Beatificationum, et Canonizationum retinentur in loco separato ab aliis scripturis, necamoveri possunt, nisi de mandato vel Cardinalis causæ Relatoris, vel fidei Promotoris, causa illosvidendi, quatenus opus sit, et cum onere deinde restituendi. Claves autem loci, in quo asservanturscripturæ, retinentur a Protonotario, qui ulterius tenetur conficere inventarium dictorum processum,et quatuor illius exemplaria, quorum unum esse debet penes ipsum, alterum penes Secretarium,tertium apud Promotorem, quartum vero remanet in archivo; et in fine cujuslibet anni fit aProtonotario, Secretario, et Promotore coram archivi Inspectore collatio inventarii cum processibus,ut videatur, an aliqui desint, et an illi, qui fuerunt crediti vel Cardinali Relatori, vel fidei Promotori,uti supra dictum est, fuerin redditi. §8. Desumuntur hæc omnia ex decretis Innocentii XI. §5 et 6.Advertens etiam (sacra Congregatio) quam necessaria sit diligens custodia processuum originalium,decrevit, quod ii, sicuti etiam interpretationes originales illorum, qui sunt extero idiomate confecti,retineri debeant in archivo sacræ Congregationis in Vaticano in loco clauso et separato ab aliisscripturis, nec possint amoveri, nisi de ordine Eminentissimi Cardinalis Ponentis, vel ad instantiamR.P. Promotoris, ad effectum videndi, quatenus opus sit, et deinde reportandi; cujus archivi duæ sinclaves, una penes Protonotarium Apostolicum, qui pro tempore intervenerit sacræ Congregationi, etaltera penes Secretarium: et clavis loci, in quo custodiuntur dicti processus, siet lpenes eumdemProtonotarium, alterius vero, in quo retinentur aliæ scripturæ sacræ Congregationis, penesSecretarium. Idemque Protonotarius curam habeat revidendi inventarium dictorum processum, etquatenus non adesset, illud diligenter fieri mandet cum quatuor copiis, quarum una stet penescumdem Protonotarium, altera penes Promotorem, altera penes Secretarium, et quarta in eodemarchivo; et in fine anni idem Protonotarius, Promotor, et Secretarius revidere debeant dictuminventarium, et conferre cum processibus, ad effectum recognoscendi, an aliquid deficiat, et curandi,ut reportentur; et Secretarius referat in prima sequenti Congregatione».

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El Papa Benedicto XV promulga el Código de Derecho Canónico de1917. Allí, en una ubicación netamente notarial, entre los oficios delCanciller y del Notario, aparecen una serie de normas archivísticas91.

Can. 375: § 1 creación de los archivos diocesanos§ 2 inventario de documentos

Can. 376: § 1 actualización anual del inventario de documentos§ 2 reintegro de los documentos extraviados al archivo.

Can. 377: § 1 cerradura del archivo§ 2 poseedor de la llave del archivo

Can. 378: § 1 prohibición de sacar documentos sin permiso§ 2 recibo de préstamo de documentos

Can. 383: Inventarios por duplicado de los archivos parroquiales.Can. 384: Accesibilidad de los investigadores a los documentos nosecretosCan. 470: § 4 archivos parroquiales

Roma está en Italia, y en ella viven italianos. Esta perogrullada nosiempre es tenida en cuenta al hablar de la Iglesia, pero algunas normas einquietudes mueren a la vera del mar Tirreno o del Adriático. En plenasegunda guerra mundial, en 1942, el cardenal Mercati ordenó un censoitaliano del patrimonio archivístico y bibliográfico. En 1955 apareció laConstitución para la Pontificia Comisión Permanente para los ArchivosEclesiásticos de Italia.

Los archivos eclesiásticos a fin del segundo milenio

Mil novecientos cincuenta y ocho. Una multitud oraba bajo la lluvia enla Plaza de San Pedro. De pronto, desde la chimenea de la Capilla Sixtina,blanco como la nieve el humo rompía la tensa espera y subía hacia el cielo.Un hombre bajo y relleno se asoma al balcón. Hijo de campesinos, sabíadel trabajo duro y de la simplicidad del aire rural. "¡Habemus Papa!",exclamaron todos a una. Preguntado sobre su nuevo nombre, respondió:"Juan". "Mal nombre para un pontífice", pensaron algunos memoriosos dela historia. Y fue consagrado como Juan XXIII, y conocido como el PapaBueno.

Asfixiado, como tantos otros, por el encierro donde se hallaba la Iglesiaen la última mitad del último siglo del milenio, decidió abrir sus ventanas.

91 Codex Iuris Canonici. Typis Polyglottis Vaticanis. Roma, 1929, cánones 372 a 384. ART. II. Decancellario aliisque notariis et archivo episcopali. Can. 372. - §I. In qualibet Curia constituatur abEpiscopo cancellarius qui sit sacerdos, cuius præcipuum munus sit acta Curiæ in archivo custodire,ordine chronologico disponere et de eisdem indicis tabulam conficere. §2. Poscente necessitate,adiutor ei dari potest, cui nomen sit vice-cancellarii sed vice-tabularii. §3. Cancellarius est eo ipsonotarius

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Y por ellas entró de todo y salió de todo. Entre lo que se perdió estuvo unaparte del patrimonio cultural. A la profunda reforma del Concilio VaticanoII, alegre y esperanzada, sucedió una tempestad estremecedora.

Calmada un tanto la tormenta, que costó la vida a dos sucesores de SanPedro, apareció en 1983 el Nuevo Código de Derecho Canónico, bajo elactual pontificado de Juan Pablo II. Grande es el impulso que reciben losarchivos durante su pontificado. La constitución Pastor Bonus dio renovadomarco al Archivo Vaticano e impartió normas aplicables a los demásarchivos eclesiásticos.

La llegada del tercer milenio de la evangelización del mundo, no podíadejar de lado un profundo retorno a las raíces. Los archivos eclesialesdeben brindar, como en su primeros tiempos, testimonio de los mártires. Enpalabras de Juan Pablo II.

La Iglesia del primer milenio nació de la sangre de los mártires:«Sanguis martyrum, semen christianorum ». … Al término del segundomilenio, la Iglesia ha vuelto de nuevo a ser Iglesia de mártires. Laspersecuciones de creyentes –sacerdotes, religiosos y laicos– han supuestouna gran siembra de mártires en varias partes del mundo. E1 testimonioofrecido a Cristo hasta el derramamiento de la sangre se ha hechopatrimonio común de católicos, ortodoxos, anglicanos y protestantes,como revelaba ya Pablo VI en la homilía de la canonización de losmártires ugandeses. … En la medida de lo posible no deben perderse enla Iglesia sus testimonios. Como se ha sugerido en el Consistorio, espreciso que las Igleslas locales hagan todo lo posible por no perder elrecuerdo de quienes han sufrido el martirio, recogiendo para ello ladocumentación necesaria. Esto ha de tener un sentido y una elocuenciaecuménica. El ecumenismo de los santos, de los mártires, es tal vez elmás convincente. La communio sanctorum habla con una voz más fuerteque los elementos de división. … Será tarea de la Sede Apostólica, convista al Año 2000, actualizar los martirologios de la Iglesia universal,prestando gran atención a la santidad de quienes también en nuestrotiempo han vivido plenamente en la verdad de Cristo….92

En la actualidad, de los registros pontificios, el núcleo de los archivosvaticanos, sobrevivieron hasta nuestros tiempos unos 6.000 volúmenes delos siglos XIII al XV, con unos 3.000.000 de documentos de esa época. Esquizá una de las fuentes más importantes sobre los últimos siglos de la edadmedia y del renacimiento. Desde el punto de vista de la historia de lasuniversidades, los estudiosos pueden encontrar informaciones valiosísimassobre las más antiguas. La importancia de estos registros papales ha dadolugar al surgimiento de una disciplina científica de la cual son objeto deestudio exclusivo. Funciona en el Vaticano una Escuela de Archivística,ampliada con la creación de secciones especiales de paleografía,

92 Cfr. JUAN PABLO II. Tertio Millenio Adveniente, carta apostólica de Juan Pablo II del 10 denoviembre de 1994, N° 37. Editorial San Pablo, Buenos Aires (Argentina), marzo de 1995.

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diplomática y restauración. Cuenta también con el apoyo de la "BibliotecaLeonina" (una de las dos secciones de la Biblioteca Vaticana), especializadaen el estudio de los manuscritos. Con la llegada de la era informática, se hainiciado la tarea de digitalizar documentos y obras de arte, transcribirtextos, y volcar todo el resultado tanto en la Red Informática de la Iglesiacomo en las otras redes, presentes o futuras.

Recientemente, la Pontificia Comisión para los Bienes Culturales de laIglesia, dirigió en febrero de 1997 una carta circular bajo el título "Lafunción pastoral de los Archivos Eclesiásticos". Es casi todo un proyecto desistema eclesial de archivos.

Luego de analizar la importancia que tiene para la Iglesia la transmisióndel patrimonio documental, bajo traza las líneas esenciales que debecontemplar un proyecto orgánico: a) potenciación o institución del archivohistórico diocesano; b) organización del archivo corriente; c) colaboraciónentre entidades civiles y eclesiales; d) orientaciones comunes a las Iglesiasparticulares, para coordinar las intervenciones en favor de los bieneshistórico-culturales y en particular de los archivos; e) profesionalizacióndel personal que trabaja en esos repositorios –en este punto se incluye unapartado sobre selección documental–.

Dedica un capítulo a la conservación del patrimonio documental,destacando la irrepetibilidad del material documental. Para ello habrá decontarse con espacios adecuados, y un adecuado sistema descriptivo,resaltando al inventario como la herramienta fundamental. No se queda enlos procesos tradicionales, sino que insta a la informatización

En el último capítulo, marca pautas para valorizar el patrimoniodocumental, destinado tanto a la historia como a la misión de la Iglesia.Recuerda a los obispos el destino universal del patrimonio archivístico.Pide una adecuada reglamentación del uso de los archivos. Recomienda laubicación en los archivos de material bibliográfico que de un marco dereferencia a los investigadores (biblioteca y centros de documentación einformación). Insta al uso del depósito documental con fines de formacióncultural, y a la promoción de la investigación histórica.

Lo que plantea la Santa Sede es quizá el sistema de archivos más grandedel planeta, interrelacionado con la red informática de la Iglesia, y puestoen común con la humanidad a través de Internet –o las redes de comunióninformativa que se encaren en el futuro como InterPlaNet–.

Apertura de los Archivos Eclesiales

Fue el Papa León XIII, quien ordenó la apertura de los archivosvaticanos a los investigadores. Esta profética apertura fue provechosa parala Iglesia. No hay muchas cosas peores que saber o presumir que se nos

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oculta una verdad. Y un archivo cerrado sin necesidad "huele muy mal", yhace casi tanto daño como un archivo abierto con falta de prudencia.Además, buena parte de los documentos de un archivo suelen estarrelacionados con los existentes en otros; y frecuentemente es difícil ocultardel todo la realidad.

Pío XII se expresaba así sobre el tema:El Vaticano no quiere ser, sin embargo, una empresa científica, auncuando la apertura de los Archivos Vaticanos por León XIII tuvo comoconsecuencia inevitable un desarrollo notabilísimo de la institución.Aquella apertura fue un acto de valor. El Papa dió con ello curso libre ala investigación cientifica a base de los documentos históricosacumulados por los Sumos Pontifices desde los tiempos de Inocencio III.Por lo general prevalece la opinión de que esa investigación ha resultadoy ello en forma sorprendente, una justificación y un honor para laIglesia93.

En este último siglo ha quedado a disposición de las ciencias buenaporción de la archivalía vaticana. Estas liberaciones a la consulta hanocurrido en varias ocasiones, sobre todo durante el pontificado actual deJuan Pablo II. En la última, se ordenó la apertura de los archivos secretosde la Inquisición, en el ámbito de la revisión histórica propuesta en laencíclica "Tertio Millenio Adveniente" ante la celebración del Gran Jubileodel Año 200094. Esta revisión se transforma en un mandato en el documento«La Iglesia y las Culpas del pasado».95

La recomendación de abrir los archivos de la Iglesia se reitera en la cartacircular de la Comisión para los Bienes Culturales de la Iglesia de febrerode 1997.

Los responsables deben procurar que el uso de los archivos eclesiásticospueda facilitarse no sólo a los interesados que tienen derecho a usarlos,sino también a círculos más amplios de estudiosos, sin prejuiciosideológicos y religiosos, quedando a salvo las oportunas normas deseguridad, dadas por el derecho universal y por las normas del Obispodiocesano. La apertura desinteresada, la acogida benévola y el serviciocompetente deben ser objetos de atenta consideración para que lamemoria histórica de la Iglesia se ofrezca a toda la colectividad96.

Y la Iglesia no sólo deberá abrir sus archivos. También deberá ser

93 PIO XII. Discurso a una delegación de la escuela de bibliotecarios de Baviera. En: L'OsservatoreRomano. Buenos Aires, jueves 6 de junio de 1957.

94 Cfr JUAN PABLO II. Tertio Millenio Adveniente, N° 33. 95 Comisión Teológica Internacional Memoria y reconciliación: La Iglesia y las Culpas del Pasado.96 Comisión Pontificia para los Bienes Culturales de la Iglesia. (En adelante CPBCI). Carta circular

La función pastoral de los archivos eclesiásticos. Febrero de 1997. N° 4 §1.

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…promotora de la organización archivística, motivando su importanciacultural, especialmente si no existe todavía una apta sensibilización entrelas instituciones civiles97.

En la actualidad, ante la pretensión hegemónica de obligar a todos apensar de un mismo modo, los archivos eclesiásticos, como testimonios deotro estilo de vida, se constituyen en un fuerte escollo para las historiassintéticas. Si consideramos que estos archivos eclesiásticos tienen todos unpatrón organizativo semejante, podremos inducir que sus contenidostambién son semejantes. Y que, por lo tanto, los escollos serán muchos.

Grandes etapas históricas de los archivos eclesiásticos

A modo de síntesis, podemos intentar establecer cinco grandes etapashistóricas para los archivos eclesiásticos.

1. De la Iglesia primitiva o proscripta: en donde se puso el acentoen registrar los martirios y la sucesión jerárquica de la Iglesia (sobretodo de los Papas). Está a cargo de notarios.

2. De la Iglesia post Constantiniana: en donde se organiza laadministración de las obras asistenciales y bienes de la Iglesia, y laregistración de sucesión episcopal, ordenaciones sacerdotales yconsagración religiosa (monjes y monjas). Aparecen los primerosarchiveros eclesiásticos.

3. De la Iglesia post Tridentina, en donde se inicia el registro deidentidad de cada uno de los católicos: bautismo, confirmación,matrimonio, ordenación sacerdotal, defunción. En estos años seorganizan los archivos vaticanos. Se habla en alguna oportunidad deInspector de Archivos.

4. De la Iglesia post Vaticano Primero, donde se empieza con laapertura parcial hacia los investigadores. Se establecen normasprecisas para los archivos diocesanos y parroquiales, que quedan acargo del canciller y del obispo. Empiezan a reiterarse a principios desiglo las inquietudes preservacionistas del patrimonio documental.

5. De la Iglesia de fin del segundo milenio. Los archivoseclesiásticos adquieren una misión pastoral. En el marco de unllamado a la conversión se abren progresivamente los archivos, hastallegar a los de la Inquisición. Se recomienda recoger testimonios demartirios y conservar esa documentación98. Aparecen con toda

97 Ibíd. N° 4 §5. 98 Cfr. Juan Pablo II. Constitución apostólica Divinus perfectionis Magister sobre las Causas de los

Santos. AAS 75 (1983), 349/355. No hay disposiciones sobre archivos, pero se sobreentienden enuna adecuada organización al hablar, entre otros, de las funciones del secretario (art. 5) y del envíode duplicado de todas las actas a la Sagrada Congregación de Ritos (art. 2 inc. 6).

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intensidad las inquietudes preservacionistas e irrumpe con fuerzaincontenible la informatización.

4.6. ARCHIVOS ECLESIÁSTICOS LATINOAMERICANOS

Llegado Colón de las Indias a España, empezaron los preparativos parala evangelización americana. No es el momento ni el lugar de juzgarla, nisiquiera prejuzgarla.

Durante unas cuantas décadas arribaron clérigos y regulares en tareaseminentemente misioneras.

Eran tiempos del Concilio de Trento. Mientras que a las iglesiaseuropeas era imperioso el reformarlas, las americanas nacían prácticamentereformadas. Todo hubiera sido muy distinto para ellas sin la presenciaaplastante del poder real.

"Las relaciones, pues, entre la Corona y los obispos eran relaciones dedependencia…Es sintomático que un prelado celoso por aplicar lasdecisiones tridentinas, como Toribio de Mogrovejo, entrase en conflictocon el derecho de patronato"99.

La Iglesia presente en América tuvo una característica singular: nació demanos de frailes procedentes de las pocas Ordenes que pudieron llegar aestas tierras. El rey llegó a proyectar, sin ser llevada a la práctica, laorganización de las Iglesias de Indias como iglesias regulares, es decir,administrada por religiosos de la Orden que predominase en el lugar. (Cartaal embajador español ante la Santa Sede, 9/9/1572)100

Y los frailes, en general, vivían su pobreza a conciencia. Ya porvocación, ya por la pobreza del lugar de misión, ya por las contribucionesforzadas impuestas por los funcionarios reales.

Hubo otra característica que los acercó más al pueblo. Generalmente sermestizo llevaba otra condición: la de hijo extramatrimonial. Y si uno ve condetenimiento las actas capitulares americanas de algunas Ordenesreligiosas, los mestizos abundan. Y los pedidos de indulto para acceder alpresbiterado también. Esto implica que era más fácil ingresar a la vidasacerdotal como regular que como secular. Este dato es importante a la horade ver la adhesión de los religiosos a la causa emancipadora americana.

Solía decir un virrey español que había tres clases de clérigos enAmérica: los clérigos españoles, que en general venían para conseguir uncargo; los soldados y aventureros que accedían al sacerdocio arrepentidos

99 VILLEGAS, Juan sj. Aplicación del Concilio de Trento en hispanoamérica (1564-1600). Cuadernosdel ITU. Instituto Teológico del Uruguay. Montevideo, 1975, pág. 70.

100 VILLEGAS, Juan sj. Ibíd, pág. 68.

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de sus acciones pasadas (sería el caso del primer poeta argentino, fray Luisde Tejeda); y los nativos, que eran quienes más se preocupaban por laevangelización.

El adoctrinamiento, pues, corrió en general por cuenta de los frailes, enlengua aborígen. Pero cuando la mayor parte de la labor estaba hecha, laspresiones de algunos obispos ante el rey fueron grandes. Tan grandes, queterminaron, en épocas borbónicas, por encerrar a los frailes dentro de susconventos, y prohibir las lenguas indianas. Y el mejor ensayo de realizar lautopía en esta tierra, las misiones jesuíticas, fue descabezado.

Desde fines del siglo XVI hasta comienzos del siguiente, y de acuerdocon los decretos del Concilio de Trento, hubo en la ciudad de Lima tresconcilios seguidos. Allí, entre otras cosas, se estructuró el gobierno y laadministración eclesiástica. Así que el tema de los archivos no podía faltar.En la Instrucción para Visitadores, salida del Concilio de Lima en 1583, en8 de sus 29 capítulos se habla de libros, inventarios, registros101.

Con respecto de las parroquias, se ordenaba que«tengan un libro donde distintamente asienten los nombres de todos losque se bautizaren, y si sonlegítimos, y de cómo se llamaban primero, yde sus pueblos y caciques, y de qué encomendero son; y así mismo losnombres de sus padres y de dónde son naturales. Y los curas que losbautizaren lo firmen de sus nombres, y el día, mes y año (...) De loscuales libros haya gran recaudo y guarda. Y el cura que acabare su oficioentregue los dichos libros al cura que le sucediere, tomando delconocimiento de cómo los entrega y las hojas escritas que tienen. Y esteconocimiento sea obligado de dar al prelado o vicario en cuyo distritoestuviere.»102

También se ordenaba la confección de padrones de confesantes103, elregistro de rentas, casas y escrituras de cada iglesia diocesana, que debíaguardarse en la Iglesia Catedral104, en el archivo de las escrituras yposesiones de la Iglesia105.

La legislación de Indias, que tanto legisló en materia eclesiástica, noestuvo ausente en cuanto a los archivos se refiere.

Es conveniente para buena cuenta de los tributos de indios, evitar costasy fraudes ... que manden a todos sus clérigos y religiosos ministros dedoctrina tengan un libro en que se matricule a todos los que nacieren yfuesen bautizados y otro libro en que escriban los nombres de losdifuntos; y de lo que constare envíen cada un año a nuestros virreyes,presidentes y gobernadores certificaciones con toda fidelidad, más los

101 Ibíd. 102 Cfr. GOMEZ GANEDO, Lino. «Los Archivos parroquiales como fuentes de conocimiento

histórico». En: Boletín del Sistema Nacional de Archivos, número 3. México, 1984, pág 24 [22-29]103 Ibíd104 Ibíd105 Ibíd

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padrones que hicieren la Semana Santa para las confesiones, ciertos yverdaderos, imponiéndoles pena de excomunión106.

Esta legislación también influyó en los tipos documentales eclesiásticos.Desde el punto de vista diplomático, las formas de algunos documentoseclesiásticos, como las actas capitulares, eran una mezcla de las usadas porla Cancillería Pontificia y la Cancillería Española107.

Como veremos, el primer concilio limense implicó la realización de lossínodos del Tucumán, de donde nace posteriormente la arquidiócesis deCórdoba.

La documentación producida por la Iglesia durante la colonia fue muyabundante. Según el profesor Emiliani, podemos establecer algunosgrandes rubros, que simplificados serían así108:

Documentación relacionada con la fundación de colegios, hospitales,iglesias, capillas, etc.; Testamentos a favor de la Iglesia; Cobro dearanceles eclesiásticos; Expedientes judiciales eclesíasticos; Expedientesde nulidades matrimoniales; Libros de matrículas y padrones;Resoluciones episcopales; Mensajes pastorales; Comunicacionesdiversas; Censos; Obras pías; Escrituras diversas; Correspondencia conla Santa Sede; Registros de Reales Cédulas, Breves, Bulas, etcétera;Cofradías; Inventarios; Informes diversos; Libros de contabilidad.

Pasaron cuatro siglos. Terminadas las persecuciones que sufrió la Iglesiaen la primera mitad del siglo XIX, tiene lugar el Concilio Vaticano Primero.A consecuencias de él, se reúne también en Roma el ConcilioLatinoamericano.

Al hablar de la administración de los bienes eclesiásticos, establecenormas precisas sobre archivos, inventarios y libros 109.

106 Cfr. GOMEZ GANEDO, Lino, artículo citado. Real cédula del 27 de marzo de 1606, a los obisposy superiores religiosos. Cfr. Recopilación de las leyes de Indias, ley 25, título 13, libro primero.

107 MORALES, fray Alfonso (mercedario). Historia General de la Orden de la Merced en Chile.Santiago, 1983, pág. 190.

108 Cfr. EMILIANI, Jorge Roberto. Manual de Administración Indiana. Córdoba, 1994, pág. 306.109 Acta et Decreta Concilii Plenarii Americæ Latinæ in urbe celebrati Anno Domini MDCCCXCIX.

Tomo I. Romæ, Typis Vaticanis, MDCCCC, pág. 375. CAPUT IV. De administratione bonorumecclesiasticorum. «851. Administratio bonorum ecclesiasticorum fiat nomine Ecclesiæ et iuxtanormas iure communi et particulari ecclesiastico, atque in instrumento fundationis præscriptas [Cit.cap. 2. de relig. domib. in Clem.; Conc. Trid. 1. c.]. Quicumque igitur bonorum ecclesiasticorumadministratores deputati sunt, imprimis omnium rerum, redituum, bonorum sive mobilium siveimmobilium suæ curæ commissorum accuratum conficere debent inventarium. Cuius inventariiunum exemplar tradendum est Episcopo, ut in archivio episcopali conservetur, alterum exemplar,propria administratoris manu subscriptum, inter libros ecclesiasticos est retinendum.- 852. Porroboni administratoris est omnia documenta et instrumenta, quibus iura ecclesiastica in bonatemporalia nituntur, caute conservare et rite ordinare et in archivio vel armario convenienti et aptocustodire. Cum nostra ætate, ex tolerantia vel ex benigna concessione Sanctæ Sedis, causæclericorum mere civiles velut contractuum, debitorum, hæreditatum, non raro a iudicibussæcularibus cognoscantur et definiantur, omnia documenta ibidem ad præscripta iuris civilisaccurate sint exacta [Cfr. decr. S. Off. 23 Ianuarii 1886 (Coll. P. F. n. 1011)]. 853. Administratorecclesiasticus etiam libros teneat bene ordinatos accepti et expensi, quot pro maiori minorive ambituadministrationis necessarii sunt; insuper rationem administrationis suæ legitimo tempore et ordine

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Los archivos eclesiásticos de Córdoba110

Corría el año 1578 cuando se erigió la antigua diócesis del Tucumán. Enel decreto correspondiente, ya se establecía el oficio de Canciller y Notarioepiscopal. Entre sus funciones estaba la de custodiar los instrumentoslegales originados en las actividades del obispado.

…15. Officium Cancellarii sive Notarii Ecclesiæ et capituli, quiquoscumque contractus inter Ecclesiam, Episcopum et capitulum, etquoscumque alios in protocolo et notis suis recipere, actus capitularesscribere, donationes, possessiones, census, feuda præcaria per eosdemEpiscopum, capitulum, Ecclesiam vel eisdem factæ, vel in posterumfaciendæ annottet, et scribat et instrumenta custodiat; partes reddituum,beneficiis distribuat, necnon rationes redat et recipiat. (El oficio decanciller o notario de la iglesia y del cabildo, el cual debe recibir todaclase de contratos entre la iglesia, el obispo y el cabildo, y otros decualquier tipo que sean, en el protocolo y por sus anotaciones, y escribirlas actas capitulares; escriba y anote las donaciones, posesiones, censos,feudos precarios, hechos por el mismo obispo, cabildo o iglesia, o hechoa ellos, o que en el futuro se harán, y custodie los instrumentos;distribuya a los beneficios las partes de las rentas; de y reciba lascuentas).111

Ya en los primeros años del siglo XVII hay constancias de la existenciadel archivo eclesiástico en Santiago del Estero.

Yo, Diego de Rojas …en veinte y dos dias del mes de marzo de mil yseiscientos y siete años, sacandole del archivo eclesiástico donde lovolví…(Santiago del Estero)112.

Un lustro despues de la erección del obispado tucumano, ya estaba enfuncionamiento el primer concilio limense. En el primer sínodo delTucumán, originado en las disposiciones limenses, se ordenaba el registro yguarda, lo que es decir archivo, de libros de registro relativos de laidentidad de las personas. En consonancia con todas las iglesiasamericanas, establecen los libros de bautismos, casamientos y entierros,antecesores en siglos de los actuales libros de nacimientos y defuncionesque llevan los registros de las personas. A estas funciones se agreganrudimentos estadísticos, al ordenar la confección de padrones.

servato reddat, neque futurarum expensarum et redituum annuum elenchum præparare omittat110 Dado que la Escuela de Archiveros de la UNC, donde se presenta este trabajo final, tiene su sede en

Córdoba, considero necesario explayarme sobre los archivos eclesiásticos de Córdoba. No estádemás señalar la estrecha relación del maestro Tanodi con las autoridades eclesiales, tanto de Romacomo de Córdoba.

111 ARANCIBIA, José y DELLAFERRERA, Nelson. Los sínodos del antiguo Tucumán. Ediciones dela Facultad de Teología de la UCA. Editora Patria Grande. Buenos Aires, 1979, p. 277.

112 Ibid, p. 195

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Constitución 18. Ordenamos y mandamos que todos los curas de nuestroobispado, así de españoles como de indios, tengan libro o libros de losbautismos, casamientos, entierros y padrón de todos los indios grandes ypequeños; y escriban en un papel, que esté junto al altar de la iglesia, lasfiestas de obligación de los indios, y las de los españoles. Y sepan que detodo lo susodicho tomarán cuenta los visitadores113.

El segundo sínodo del Tucumán estableció normas para el libro de actasdel cabildo eclesiástico.

Capítulo XI. Que el viernes de cada semana se haga cabildo(eclesiástico). …Y se nombre secretario que de fe de las cosas que en eldicho cabildo se traten, y haya libro donde se asiente lo que sedeterminare; y no viniendo el deán se haga sin él el dicho cabildo, por elprebendado que le sucediere en la presidencia de él114.

También establecen penas para el incumplimiento de las tareasregistrales que deben efectuar los clérigos.

Capítulo XIV. Que los curas de este obispado tengan libro donde asientenlas personas que en sus iglesias se entierran. Porque las fábricas de esteobispado son muy pobres, y la limosna que se da por las sepulturas essuya, y es bien que se entienta y sepa quién se muere y se entierra enellas: Se ordena y manda que todos los curas de este obispado tenganlibro donde asienten los que mueren y se entierran en sus iglesias,poniendo con claridad la limosna que dan por las sepulturas y de dóndeson naturales, para que esta limosna se aplique para la fábrica de lasiglesias donde se entierran, y se sepa los que mueren; y al fin de cadames los mayordomos de las iglesias lo firmen de sus nombres con losdichos curas, los que se han muerto y enterrado en cualquier iglesia y lalimosna que han recibido; y los curas de indios también tengan libro enque asienten todos los que mueren en sus doctrinas, así casados comosolteros. Lo cual hagan los dichos curas, pena de excomunión mayor ipsofacto incurrenda, y de ser castigados por el señor obispo.

Capítulo XV. Que se estorbe la mala costumbre que hay, para que a losniños sin grave causa y necesidad, no se les eche agua de bautismo encasa de sus padres, sino que los traigan a la Iglesia.- Para estorbar elabuso grande y poca reverencia que se tiene al sacramento del bautismo,siendo la puerta de nuestra salvación, y que se debe hacer con lasolemnidad que la santa Iglesia católica romana tiene ordenado: Ordenay manda este santo sínodo…Y todos los curas tengan libro de bautismodonde asienten a los que bautizan, poniendo los nombres de losbautizados, padres y padrinos, y de dónde son naturales; con pena deexcomunión mayor ipso facto incurrenda y de cincuenta pesos, al que locontrario hiciere, demás que será castigado por el ordinario115.

113 Ibíd, p. 153. 114 Ibíd, p. 186115 Ibíd, p. 188/89

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Luego del medio siglo de luchas por la emancipación americana, laIglesia cordobesa encaró decididamente su reorganización. Cercana ya lacrucial década de 1880/89, el sínodo cordobés de 1877 estableció normasprecisas sobre documentación y archivos.

Capítulo XV. Disposiciones generales sobre Parroquias. ConstituciónTercera. Siendo el Archivo Parroquial una de las cosas que deben llamarcon preferencia la atención de los Párrocos para conservarlo con elcuidado y esmero que exige su importancia; atentos los descuidos ydefectos que suelen notarse en esto, el Sínodo ordena que el ArchivoParroquial conste de los libros siguientes: -Libro de Bautismos; deMatrimonios; de Defunciones; de Confirmaciones y de Fábrica (NR: ellibro donde constaba los gastos de construcción y reparación del templo).Estos libros deberán estar bien encuadernados y foliados, y ser delformato que tienen el papel de oficio por lo menos, dejando hacia el ladoizquierdo de cada folio un margen suficiente para hacer las anotacionesnecesarias. Debiendo suscribir el Cura todas las partidas de los tresprimeros libros, las de Confirmaciones en la forma que se indica en estecapítulo, y las cuentas de fábrica de cada año. Cuidando de no consignarnada fuera de las rayas que tenga el papel, y de que se archive tododocumento oficial, cualquiera que sea su procedencia. Los libros ydemás papeles que componen el archivo parroquial, se conservarán en unarmario decente, cerrado con llave (que tendrá el Cura), y colocado enlugar seguro; sin permitir que por ningún pretexto se lleven a casaparticular los libros y papeles del archivo.

Constitución Cuarta. Se ordena que se tenga el mayor cuidado y esmeroen la manera de llevar los libros; escribiendo con claridad, limpieza,escrupulosa exactitud, y sin abreviaturas, las partidas de Bautismo,Confirmaciones, Matrimonios y Defunciones; usando letras y noguarismos, para expresar la edad y las fechas; conformándose en todo alos formularios aprobados por este Sínodo, que se ponen acontinuación…116

Pasaron treinta años. La Córdoba de comienzos de siglo había recibidoun aporte inmigratorio impensado en el segundo tercio del siglo anterior.Un poco más apaciguadas estaban las tensiones entre católicos y liberales.Y un nuevo Sínodo Diocesano, el de 1906, retoma el tema dedocumentación y archivos.

Capítulo V. Del visitador de Parroquias. 46. Habrá en la diócesis unempleado de la Curia diocesana, que se titulará Visitador de Parroquias.47. Será de su incumbencia examinar: b. Si tiene los inventariosprescritos, y están completos y debidamente formados; c. Si existen losobjetos anotados en los inventarios, y si se encuentran en el estado quecorresponden; … e) Si los libros, informaciones y demás documentos

116 Sínodo Diocesano celebrado en Córdoba por el Iltmo. y Rmo. Señor Obispo Don Fray ZenónBustos y Ferreira el Año del Señor de MCMVI. Resoluciones y Apéndices, pág. 141 y 142. Córdoba,1907. Tip. La Industrial. E. Molteni, 25 de Mayo 20 y 22.

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relativos al archivo, se conservan en buen estado y en el ordenconveniente; f) Si se llevan en la forma prescrita los libros de que constael registro parroquial…117

Había concluído tres años atrás el Concilio Vaticano II. Y laarquidiócesis de Córdoba se pone a la vanguardia en lo que atañe aorganización de archivos eclesiásticos. Las segundas jornadas deArchiveros de la República Argentina, realizadas en 1969, habíarecomendado la concentración de archivos diocesanos. Con la firma deMonseñor Primatesta, se promulgaba el siguiente decreto:

«RAUL FRANCISCO PRIMATESTA, POR LA GRACIA DE DIOS YDE LA SANTA SEDE APOSTOLICA, ARZOBISPO DE CORDOBAEN LA REPUBLICA ARGENTINA: La próxima celebración del CuartoCentenario de la Creación de la Diócesis de Córdoba del Tucumán, esocasión propicia para recordar su historia y la grande influencia por ellaejercida a través de sus hombres e instituciones, en la evolución religiosadel País, obligando por ello mismo al cuidado y valoración científica delos documentos que la comprueban,cuya conservación esconsiguientemente un servicio que se debe no sólo a la Iglesia, sinotambién a la Ciudad de Córdoba y a la Patria; teniendo en cuenta el valorhistórico del Archivo de la Arquidiócesis, uno de los más antiguos delPaís y con el fin de ponerlo a mejor resguardo, como así también losarchivos de las primeras Parroquias y procediendo, además, de acuerdoal sentir de las prescripciones del Derecho Canónico, POR LASPRESENTES LETRAS DISPONGO: 1) Que por Administración delArzobispado, se provea de local adecuado y seguro para la expresadafinalidad -canon 375-. 2) Que se reúnan en el Archivo Central delArzobispado, todos los Archivos Parroquiales de la Arquidiócesis,anteriores al año mil novecientos, con sus documentos y libros, desde lafecha de creación de cada Parroquia, hasta el treinta y uno de Diciembrede mil ochocientos noventa y nueve. 3) Que por Secretaría delArzobispado se disponga el traslado de la documentación de referencia,su clasificación y ulterior fotocopia de la misma. 4) Tómese razón,notifíquese a quienes corresponda y dése al Registro de Curia. Dadas enla Sede Arzobispal de Córdoba, a diez de Octubre, Fiesta de NuestraSeñora de Loreto, del año mil novecientos sesenta y nueve. RaúlFrancisco Primatesta, arzobispo de Córdoba; Cgo. Mons. Carlos S.Audisio, secretario canciller118.

Cuatro años después, allá por noviembre de 1973, se inauguraba lo quese dió en llamar "centralización, conservación y reordenamiento delArchivo de la Arquidiócesis de Córdoba" (sic). Fue en ocasión de laSemana del Archivero de 1973. Allí, el Profesor Tanodi destacaba las

117 Ibíd, Resoluciones y Apéndices, pág. 15118 Archivo Central del Arzobispado de Córdoba. Protocolos. Prot. 550/69.

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medidas implementadas en cuanto medidas de conservación ypreservación119.

Varias diocesis siguieron su ejemplo, sin amedrentarse mucho ante suprecaria situación económica. Los considerandos de la creación del archivodiocesano de Jujuy son muy expresivos del momento que vivían losarchivos eclesiásticos120.

4.7. DISPOSICIONES SOBRE LOS ARCHIVOS

MERCEDARIOS A TRAVÉS DE LOS TIEMPOS.

Llegados a este punto, estamos en condiciones de ver cómo losmercedarios se ocuparon a través del tiempo de organizar, administrar yconservar sus fondos documentales.

Los archivos de la Orden de la Merced desde lostiempos de San Pedro Nolasco hasta el Concilio deTrento

Ya desde 1226 hay constancias de escrituras donde intevnieron losmercedarios. El archivo de la Corona de Aragón se constituye enprivilegiado testigo de los primeros años de la Orden121.

119 Boletín Oficial del Arzobispado de Córdoba. Octubre/diciembre 1973, p. 156/158.120 Archivo Obispado de Jujuy. Protocolos. Prot. 143/72/D. «.José Miguel Medina, por gracia de Dios

y de la Santa Sede Apostólica obispo de Jujuy: Vistos: que, según frase de Pío XII, los archivos sontesoros inestimables y Pablo VI subraya la dignidad, el valor y la necesidad de los archivoseclesiásticos, estimulando a cada diócesis a darles definitivamente el puesto que le compete y que lacondición de muchos no es todavía satisfactoria; y CONSIDERANDO: que la catedral, lasparroquias, iglesias y cofradías, los lugares piadosos, las personas morales y los administradores debienes eclesiasticos deben enviar a la Curia Episcopal un duplicado de su archivo; Que en la CuriaEpiscopal se han de guardar los documentos y escrituras relativos a los negocios diocesanos; QueSixto V y Clemente VIII idearon un archivo general o central de la santa Sede; idea que llevó a caboPaulo V y León XIII; Que, según Pío XII, los archivos aislados se pueden perder fácilmente; Que, elConsejo Presbiteral, en su reunión del 9/III/ppdo, ha aconsejado que los libros anteriores a 1900 searchiven en la Curia Episcopal; se DISPONE: 1) Que los libros parroquiales anteriore s milnovecienteos (1900) se custodien en el archivo episcopal; 2) Que se entreguen a esta Curia antes delprimero de julio próximo. NOTIFIQUESE a los interesados y archívese. DADO en la SedeEpiscopal de Jujuy a nueve días del mes de abril del año del Señor de mil novecientos setenta y dosdomingo segundo de Pascua. José Miguel Medina. Obispo de Jujuy

121 Archivo de la Corona de Aragón, Monacales, Merced, núm. 35, fol. 56. Escritura de la donaciónque Hugo Conde de Salsis hizo a Fray Pedro Nolasch de un patio que medía cinco canas y trespalmos, en la ciudad de Perpiñan; hecha en Perpiñán, en el mes de enero de 1226.

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Donde hay administración no pueden faltar los archivos. Uno de losprimeros archivos mercedarios del que he podido encontrar rastros es el deJátiva. Como hemos visto, allí funcionaba una importante industriapapelera; quizá eso fuera razón de la disputa que por ella mantenían losmonarcas de Aragón y Castilla122.

Otros archivos mercedarios importantes de la época fueron los deBarcelona y del Puig123.

El material que ha llegado hasta nuestros días consiste en escrituras dedonación, testamentos, contratos, actas capitulares124, actas de tomas dehábito125. Las citas van a modo de ejemplo.

En aquellos años, el verdadero administrador de la Orden era el Maestre,y las normas sobre documentos de las primitivas constituciones se refierena la limosna de redención (constitución tercera) 126 y a la rendición decuentas del maestro general (constitución 45) .127.

122 Archivo de la Merced de Játiva. «Toma de posesión de una casa de campo y varias yugadas detierra testadas por el canónigo Guillermo Bernardo de San Román, con fecha primero de abril de1254». Citado por GAZULLA, Fray Faustino D., La Orden de Nuestra Señora de La Merced –Estudios Histórico Críticos 1218/1237–, Monasterio del Puig, Valencia (España), 1985, pág. 80.

123 cfr. GAZULLA, Fray Faustino D., La Orden de Nuestra Señora de La Merced –Estudios HistóricoCríticos 1218/1237–, Monasterio del Puig, Valencia (España), 1985, pág. 21 y ss.

124 Archivo del Real Patrimonio de Barcelona. Actas del capítulo mercedario de 1317. Pergamino.Citado por GAZULLA, Fray Faustino D., La Orden de Nuestra Señora de La Merced –EstudiosHistórico Críticos 1218/1237–, Monasterio del Puig, Valencia (España), 1985, pág. 38.

125 Archivo Histórico Nacional, Merced, Puig (particulares), pergamino número 11. Citado porGAZULLA, Fray Faustino D., La Orden de Nuestra Señora de La Merced –Estudios HistóricoCríticos 1218/1237–, Monasterio del Puig, Valencia (España), 1985, pág. 38.

126 DEVESA BLANCO, fray Juan. "Las Primitivas Constituciones de la Orden de la Merced oConstituciones Amerianas." En: Analecta Mercedaria, año II. Roma, 1983, págs. 62/63 [5-119].«Ques deu fer lo primer dia del capitol. 3. Lo primer dia del capitol tots los comandos els oficialsvinguen al capitol e retten al maestre les borses e les claus, e compten deles almoynes les quals anreebudes, e do cascu vna dobbla a fer les mesions del capitol. E donen enquara escrit al dauant ditmaestre qualque cosa ho suma de dines que aien prestats o manleuats, Ho lexa que aien rebuda peraho dalgun catiu per tal que aço sia liurat a aquell frare lo qual de consell del capitol sera trames aaquella terra hon aquestes coses se deuen desliurar.…»

127 Ibíd, pág. 84/85. «Del mestre que no pusqua vendre possesio. 45. Lo maestre No pusqua dar nivendre ni cambiar ni alienar les possesions del orde sino per redempcio dels catius e aço ab conselldel prior e dels quatre difinidos del capitol general, qui sien tots auistats en semps. E si tots quatredifinidos no eren presents tres basten a ço ab lo prior que sia present. Perestits lo Maestre no pusquamudar Comandados de sa comandadoria si no era tal cas que ell aqui romanen fos aqui greuescandol. Sia pero tengut lo Maestre retre compte al capitol de tot ço que en aquell an aura rebut deles comandadories.»

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Los archivos de la Orden de la Merced desde elConcilio de Trento hasta la Restauración de laOrden

Las constituciones albertianas, de comienzos del siglo XIV, no ofrecengrandes innovaciones en lo preceptuado sobre documentos y archivos.

En lo que he podido conocer, éstas tuvieron lugar en el capítulo generalde Guadalajara, en 1574, el capítulo de reforma de la Orden. En ellas seordena recoger y recuperar las escrituras y documentos y ponerlas en losrespectivos archivos conventuales.

Otrosi se ordena [y] manda que el general en toda su orden y losprovinciales en sus provincias cada uno recoia y busque las scripturas ypapeles tocantes y pertenecientes a las rentas, hacienda, legitimas,derechos y acciones de los conventos y casas y los pongan en depositocomun de cada convento respectivamente para que los come ndadore s ydepositarios sepan lo que se les deve y an de aver y se cobre por las viasjudiciarias con fidelidad y brevedad, y que el comendador solo ni elprovincial solo ni el general ni capitulo no puedan remitir, perdonar osoltar las legitimas y hazienda perteneciente a los tales conventos sinconsentimiento de la maior parte de /los vocales de la casa a quienpertenesciere, como es de derecho, ni los conventos puedan vender,donar ni enaienar, renunciar ni traspasar hacienda ninguna de las rayces emuebles que aora o en qualquier tiempo tuvieren o poseyeren sin licenciaexpresa del provincial o capitulo provincial o del general o capitulogeneral avida en scrito y ante notario publico128.

También en 1574 se legisla con respecto de los libros de redención ygastos

... para lo qual se ordena y manda que se lleven los libros de laredemption y gastos a los capitulos provinciales y generales adonde sevean y pasen con todo rigor y demonstracion de justicia, y las quentas seayan de dar por los redemptores al primero capitulo general oprovincial129

Llegamos así a las constituciones que rigieron durante el períodocolonial del que más documentos han supervivido hasta nuestros días: lasconstituciones del padre José Linás, de 1691, y su posterior adecuaciónmatritense de 1723.

En ellas están muy bien regulados los aspectos que hacen al quehacerarchivístico, tanto en lo que hace a la redención, como a la vidainstitucional de la orden y a sus bienes temporales.

128 Actas del Capitulo General de la Orden de la Merced celebrado en Guadalajara. 1574, noviembre,14. A.C.A., Reg. 2670. Citado por: GARCIA ORO, José, PORTELA SILVA, María José. «Felipe IIy la Reforma de las Ordenes Redentoras». En Revista Estudios, enero/junio 1998, números 200/201,págs. pág. 108-109. [5/156]

129 Ibíd, pág. 110.

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Redencionales. Las constituciones establecen los libros racionales deredenciones, en la distinción segunda, «De redemptione captivorum». Encada convento debía existir un arca de caudales de redención, aseguradabajo triple cerradura cuyas llaves tenían el Comendador o superior, elprocurador de redención y el depositario130, y tres libros131:

- Patronatos, censos, posesiones y otros derechos- Legados píos, donaciones, cesiones, créditos, limosnas

colectadas132.- Libro mayor de entradas y salidas de redencion.

Además de tales libros, debían existir en el archivo testimonios de lasdisposiciones eclesiales y reales atinentes a la redención de cautivos, paraser exhibidos ante cualquier requerimiento de las autoridades133.

Debía existir un depósito provincial134, donde se concentrara la limosnarecogida por los conventos. Este depósito, también bajo tres llaves, estaba

130 Regula et Constitutiones Sacri, Regalis, ac Militaris Ordinis B. Mariæ de Mercede RedemptionisCaptivorum (Constituciones matritenses). Madrid, 1725. Distinctio secunda, caput III deadministratione, et custodia bonorum redemptionis, §4. Hujusmodi Depositum tribus sit clavibusobseratum, quarum unam habeat Commendator, secundam Procurator Redemptionis, & tertiamdignior Depositarius. Illud utique nullatenus recludatur, claudatur, vel referatum maneat, nisi semperiis tribus clavigeris una concurentibus, & pariter attestantibus quidquid dati, vel accepti præscribitur,reponitur, aut extrahitur. Si quis autem contrarium fecerit, poenam privationis officiorum, &utriusque vocis incurrat.

131 Ibídem. Distinctio secunda, caput III de administratione, et custodia bonorum redemptionis, §2. Setut de cunctis, & singulis discreta ratio habeatur, tres libros omnino diversos a prædictisCommendatoribus confici, & in eadem Arca servari præcipimus. Primus sit ubi expresse annotenturpatronatus, possessiones, census, aliaque jura perpetua ad Redemtionem pertinentia, cum relationeinstrumentorum, & nominibus eorum, a quibus exigenda sunt, & temporis tractu mutantur.Secundus contineat pia legata, donationes, cessiones, credita pecuniarum, proventus fructuum exprocuratione & quæstura procedentium cum elemosynis ubilibet minutatim collectis, & quæ cumquealia bona adventitia. Tertius sit quasi Major, & index universalis aliorum, in quem referenda estomnis quomodolibet ratio dati & accepti: idest omnes pecuniæ quocumque titulo adeptæ, & pariterquomodocumque consumptæ.

132 Cfr. Ibídem. Distintio secunda, caput. 2, §5. …in libro ad hoc destinato memoriæ tradant,congruenti ab ipsis tempore exigenda

133 Ibídem. Distinctio secunda, caput III de administratione, et custodia bonorum redemptionis, §3. Etnon solum in prædicto Deposito hujusmodi libros consignari præcipimus, sed etiam privilegiaomnia Apostolica & Regia, cum universis pariter scripturis & instrumentis ad bona Rdemptionis, &eorum accurant administrationem & collectam pertinentibus: pro quibus, si ad lities aliquasextrahantur, substituatur schedula nomine Procuratoris extrahentis, & loci, vel tribunalis, cuipræsentari contigerit, inscripta.

134 Ibídem. Distinctio secunda, caput III de administratione, et custodia bonorum redemptionis, §5.Similiter constituimus, ut in quolibet Conventu præcipuo, & Capite cujuscumque Provinciæ aliud sitDepositum Generale a Conventuali discretum, cui inferantur omnes pecuniæ Redemptionis totiusProvinciæ, & fideliter custodiantur. In illo pariter contineatur liber, in quo singulæ pecuniarummissiones specialiter & distincte pro singulis conventibus memorentur: ut de eo, quod quisquemiserit, & in Redemptione laboraverit, ratio habeatur in promptu, Circa clausurum vero &referationem ipsius serventur eadem, quæ de reliquis superios ordinavimus, sub eisdem poenisprivationis officiorum, & vocis activæ & pasivæ: ita ut omnia Redemptionis Deposita tribus semperclavibus sint inviolabiter obfirmata.

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ubicado en el convento principal o casa provincial, separado del propiodepósito conventual. Se debía llevar

- un libro donde se anotaran los dineros provenientes de cadaconvento.

Los redentores que marchaban a rescatar los cautivos debían llevar treslibros135, para dar mayor fe y claridad a su accionar136. Para defender la Fede un defendido se hace necesario despertar la fe en el defensor.

- En uno anotaban todo lo recibido de la Orden o de particularespara la redención.

- En el otro se consignaban los datos referentes a cada uno de loscautivos redimidos y el juramento de su fidelidad y obedienciadurante el viaje de retorno, lo mismo que la promesa voluntaria deacompañar por dos meses a los redentores en tierra de fieles.

- El tercero, era una relación de todo los sucesos del viaje, que teníacaracterísticas de instrumento público.

Estos libros eran examinados por los padres capitulares137.También la actividad redentora exigía la publicidad de los hechos. Las

constituciones preveían dos tipos de documentos.- Uno previo al viaje de rescate: el anuncio de la redención. Esta

publicación la debían hacer los procuradores generales, seis mesesantes de la partida de la misión, en todas las ciudades y pueblosque tansitaran los redentores.138.

135 Ibídem. Distinctio secunda, caput V de redemptorivus, et institutione illorum, §9. Insuper inprædictis libris memoratos esse volumus & statuimus omnes Captivos redemptos; relatis propriisnominibus eorum, ætate, patria, tempore servituis, & Redemptionis pretio. Ad finem autemsuperaddi sancimus publicum instrumentum omnium eorum, quæ in tota Redemtione sun gesta, &fuerint notatu digniora. Quibus ita peractis frates remetum instruant, & cum Captivis revertantur adpropria, recepto prius a singulis juramento fidelitatis, quod pacifice sibi eos ducentibus obedient, &quo voluerint sequentur per duos menses, ex quo fidelium oris, ad quas diriguntur, appulerint,Ceterum interea omnia in via necessaria ministrentur eis pia largitione & consilio.

136 Ibídem. distinctio secunda, caput V de redemptoribus, et institutione illorum, §8. Ut redemptoresmajori fide, claritate, 6 commodo omne suæ villicationis munus adimpleant, sub dictis poenis illispræcipimus, ut singuli singulos libros habeant pro sua quisque Provincia, vel Regno: in quibusomnia pro Captivorum Redemtpine, tam ab Ordine, quam aliunde a sæcularibus per modumeleemosynæ, subsidii, & adiutorii suscepta fideliter perscribant, dato prius tradentibus testimonioacceptæ pecuniæ. Quæcumque necessario exprenderit, etiam in eosdem libros referant: utquandocumque opus fuerit, rationem dati & accepti reddere ubique valeant.

137 Ibídem. distinctio secunda, caput V de redemptoribus, et institutione illorum, §13. QuareDefinitoribus utriusque Capituli, & illis omnibus, ad quos hujusmodi judicium attineat, subinterminatione ultionis æternæ præcipimus, ne illus leviter, sed toto æquitatis pondere assumant:libros eorum exactissime evolvant, foliurum notas & quantitatis singulatim relegant, & iterum adsummas novo examine ducant; universam rationem dati & accepti, & qualiter sibi cohæreat,diligentissime discutiant; neque aliquid fine censura prætereant, aut sumptus quoslibet, & impendia,nisi justa, & rationabilia, minime vero superflua admittant. Si autem eos quoad aliquid negligentes,aut noxam contraxisse fortasse reperiant, illos poenis nostræ Constitutiones, & severa ultione, sinemoderamine plectant. Interim tantem donec primam rationen primo Capitulo exhibeant, utprædicitur, ad nullom promoveantur officium.

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- Otro al concluir la misión: el catálogo de los cautivos rescatados,que se fijaba en lugares públicos, describiendo nombres, edad,patria, tiempo de cautividad, precio de su libertad y gastoserogados por ellos139.

Vida institucional. Se prevé la institución de un depósito o archivo ordinario, tanto a nivel

general, como provincial o conventual, donde debían guardarse losdocumentos que testimoniaban derechos y actividades de la Orden140.

Los libros de profesión, donde quedaban testimoniados los cuatro votosque emitían los nuevos religiosos (obediencia, pobreza, castidad y el cuartovoto), debían guardarse diligentísimamente para siempre en el archivoconventual141.

Las actas de los capítulos generales debían transcribirse en el libro de laOrden, que estaba por ese entonces en la Curia General de Madrid142.

Por su parte, las actas de los capítulos provinciales debían hacerse endos originales, uno de los cuales debía ser enviado a la Curia General143.

El responsable último de toda la documentación producida en losdistintos estamentos provinciales era el Secretario Provincial, que además

138 Ibídem. distinctio secunda, caput IV, de modo, opportunitate, et conditionibus, quibus estexequenda Redemtpio, §5. Sex antea mensibus quam proficiscatur Redemptio, fiat ejus primapublicatio per Procuratores Generales, appensis publicis tabellis impresis in omnibus civitatibus &oppidis præcipuis Regnorum, unde eadem sit mitenda Redemptio

139 Ibídem. distinctio secunda, caput VIII de regressu redemptionis, & quemadmodum sit ab Ordinesuscipienda, §7 Post hanc vero solemnitatemin principali Conventu Provinciæ celebratam, statimProcurator Generalis Redemptionis excudi curet Catalogum per totam Provinciam evulgandum,locisque publicis affigendum; in quo sint suo ordine descripta nomina & cognomina eorum omnium,qui a captivitate liberati fuerint, una cum ætate, patria, tempore captivitatis, pretio libertatis, &subsidiis pro illis erogatis.

140 Ibídem. Distinctio 8, caput 9. De possessionibus habendis. §2 Super his ergo bonis, & aliisquibuscumque, statuimus, & ordinamus, tut tam Generalis Magister in Ordine, quam Provinciales,& Commendatores in suis respective conventibus, & Provinciis diligenter requirant, aut requirifaciant scripturas omnes, & publica instrumenta proffessionum, redditum, legitimarum, actionum, &guarumcumque aliorum bonorum ad Ordinem nostrum, Provincias, & domos ejus quomodo libetpertinentium, ut illa in communi deposito ordine debito, & accurate custodiantur: ita fane, ut faciledignoscantur rescripta omnia, & publica instrumenta bonurum omnium prædictorum, & sint inpromptu quoties necesse fuerit.

141 Ibídem. Distinctio 4, caput 7 §4. ... Quea omnia contestari debent Prælatus, & alii duo fratres paritersuscribentes. Liber autem professionum semper in deposito conventus diligentissime custodiatur

142 Ibídem. Distinctio 7. De electionibus ad officia, et potestatibus electorum. Caput 2. De præsidecapituli generalis, et casibus, in quibus ejus celebratio mutatur. §10. ...Cum tamen eligatur, fiatauthentice, ita ut de singulis actis, electionibus, & decretis Diffinitorii, vel Capituli esse rite, &canonice facta, & non tanquam a corpore, aut Diffinitorio acephalo processisse in libro Ordinis, &ubique constare valeat.

143 Ibídem., caput 18, § 5: Præcipimus tandem, ut ubicumque Capitulom Provinciale celebretur, cuiMagister Ordinis non adfuerit, teneatur Præces ilius ab isto, vel Constitutione nostra designatus,omnium ejus actuum, nullo excepto, fidele transumtum de verbo ad berbum authentice conscribifacere, in forman secundi originalis, ab iisdemque, a quibus primum, similiter suscriptum remitteread magistrum, ut de illius valore, ac ritu plenius decernat, & judicet.

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tenía la misión de llevar los llamados libros de provincia y actuar comomediador entre el provincial y los religiosos144.

Bienes temporales.Los encargados de llevar los libros de administración temporal y ejercer

el oficio de archivero eran los depositarios145.Entre estos libros de administración temporal figuran el libro de censos e

hipotecas146 y los libros de entradas y salidas y libro mayor147. Tambiéndebía figurar el inventario148.

144 Ibídem, caput 19, § 14. Secretarii interest librum Provinciæ regere, & in eo Diffinitoria, eorumqueElectiones, & acta notare, visitationes pariter ab ipso Provinciali factas, ab initio usque ad finem inConventuum libros diligenter, authentiticeque referre: alias vero Visitatoribus comissas, curapervigili custodire: querulos interdum de Provinciali fratres debet in tranquilitatem, & bonum de illosensum inducere ita ut inter eorum & Provincialis partes se semper discretum mediatorem exhibeat.Si graduatus non fuerit, infra Procuratores Generales vocem in Capitulo habentes primus ubiquesedeat, dum actu munus obierit; quo item tempore, & intra Provinciam constitutus soliusProvincialis obedientiæ subjaceat, neque in Comendatorem sssumi valeat.

145 Ibídem. Distinctio 8. De statu, et regimine omnium Provinciarum Ordinis, & domorum ejus. CaputX. De depositariis conventus .…§3. Ad eos quidem pertinet regere libros omnes dati & accepti, &omnium rerum, que pertinent ad Conventum, rationem habere, & secundum proprias earum species,& qualitates diversos libros statuere, in quibus omnia cum distinctione scribantur. …§8. Quoniamautem potissime ad Depositarios attinet bonorum Conventus habere expressam notitiam, ac libroseorum dirigere, in illisque scripturas, & novos hypothecarum dominos, censuumque notaredebitores, & de cunctis exactam rationem habere, & reddere valeant una cum Commendatore inCapitulo; idcirco statuimus, ut unus eorum, qui ex judicio Prælati plus sit diligens, & disertus incustodia, & peritia scripturarum, officium Archivarii exerceat, & ita habeat cuncta instrumentadisposita, ordinata, & servata, ut quantum sit possibili, disperdi non valeant. Habeat apud se clavemsemper Archivi; a quo nullum instrumentum extrahi permittat, nisi per breve tempus, relictaquememoria extrahentis, ad quem finem, & quo deferat illud. Curet pariter, ut locus sit aptus, & mundusa pulvere, tineis, vermibus, & muribus, unde scripturas sæpius lacerari contingit: ac nimis antiquas,antequam penitus abeant, denuo a suis originalibus extrahat, vel illud medium adhibeat, quo adfidem publicam maneant semper cum viribus.

146 Ibídem. Distinctio 8, caput 9. De possessionibus habendis. …§3. Commendatoribus autempræcipimus sub pæna privationis officii, quod quoties aliquis census, & Hypoteca cujuscumquepossessionis Conventus in novum possessorem transeat, de hoc semper memoriam faciant in librospeciali, expressis nominibus ementium, atque etiam illorum, qui noviter, & de facto possidentterras, domus, aut hereditates liminares, quibus Hypotheca, hereditas censualis, aut possessioConventus adhæret, ita ut probatio identitatis eorum numquam perire valeat, nec oblivione deleri,sed tractu successivo novorum dominorum semper diligentissime notaro, omni tempore dominioOrdinis pateat. Quod insuper, ut aliunde non pereat, sub præfatis poenis, eisdem Commendatoribusconstituimus, ut omnes dominos prædictorum censuum, hereditatum, aliorumque bonorumConventibus respondentium in t[ilegible] suo triennio, aut etiam in antecedentibus innovatos,obliget, ut novo instrumento juridico feipsos debitores Conventibus fateantur.

147 Ibídem. Distinctio 8, caput 9. De possessionibus habendis. §4. Similiter omnia debita, tam activa,quam passiva debent Commendatores in libro speciali conscribere, en omnium illorum rationesoblivione deleantur. Nomina insuper tam debitorum, quam creditorum in ipso etiam libro memoraripræcipimus, ut quid cuique debeatur, aut debeat, Conventui constare valeat. Si quid autem mutuoCommendatores accipiant, semper id faciant numerata pecunia coram Depositariis, & inter debitaactiva in prædicto libro conscripta, in libisque majoribus Conventus dati & accepti, tam in solutione,quam receptione dictæ mutuatæ pecuniæ. Quod si contrarium faciant, tam ipsi Depositarii, quamCommendator pænam privationis vocis activæ, & passivæ, & officiorum incurrant: & sint obligatidebito, donec illud Conventui solvant.

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La preocupación de la Orden por sus Archivos durante la monarquíaespañola queda demostrada largamente.

Para reafirmar lo dicho, en el capítulo general de Sevilla, en 1788, seinstaba a poner a cargo del archivo de la Orden a sujetos caracterizados,como lo refiere el padre Benjamín Rencoret.

Capítulo general de Sevilla (1788). El 10 de mayo de 1788 en que fueelegido el Rmo. Mora, sabio i buen administrador. Estatutos para laAmérica. Se tenga cuidado grandisimo con el archivo de la Orden,poniendo a su cuidado i para su arreglo sujetos caracterizados, pues deellos depende que nuestros derechos no se oscurezcan. Que la historia dela religión pueda ser conocida en adelante con la faena critica y exactitudnecesaria149.

Esta fue la organización de los archivos mercedarios durante losprimeros seis siglos de existencia de la institución. Esta fue la organizaciónarchivística que arrasaron los vientos revolucionarios del siglo XIX: de lasegunda década en América y de la cuarta década en Europa.

Los archivos de la Orden de la Merced desde laRestauración de la Orden hasta el ConcilioVaticano II

La restauración de una institución acarrea la necesaria reunificación delo que estaba disperso. Y los documentos suelen dispersarse con extremafacilidad. La recuperación de la documentación mencionada anteriormente,tuvo un correlato en la legislación mercedaria del momento. El maestrogeneral Valenzuela dedicó todo un capítulo de las constitucionespromulgadas bajo su mandato, a la organización de los archivos de laOrden, en sus tres niveles: general, provincial y local.150

Para el archivo general establecía dos artículos:928. La guarda y conservación de las escrituras y los prontuarios denoticias contribuyen tanto al gobierno de la Orden como a la

148 Ibídem. Distinctio 8, caput 9. De possessionibus habendis. ...§8Cum autem e vita decefferit,universa bona mobilia, quæ ad usum possidebat, sic dividantur, ut Habitus, & vestes Religiosismagis indigentibus a Commendatore distribuantur: pertinentia vero ad lectulum, & mensam,quæcumque illa sint, ducantur et infirmariam, ejusque Deposito inserantur, in quo hujusmodiutentilia pro infirmes tantum custoditi præcipimus, modo & forma jam suo loco prædictis. Ceterumlibri a Magistro, vel Provinciali Conventibus studiorum (prout mellius expedierit) impertiantur.Sedilia vero, mensæ, & omne genus arcæ, tegumentorum, vestiumque custodiæ, ministeriumscribendi, lucernæ, & candelabra, & id genus utensilia maneant ipsi Conventui, ubi brater decefferit,in communique ejus inventario describantur, tanquam bona ipsius Conventus, ita ut perpetuoconservantur in cellis ejusdem ad usum Religiosorum.

149 AHCMC. RENCORET, fray Benjamín. Borrador de las Crónicas Mercedarias Argentinas, pág. 57.150 Regla y Constituciones de la Real y Militar Orden de los Redentores de la Bienaventurada Virgen

María de la Merced. Santiago de Chile, 1933. .Distinción Novena. Capítulo VII. De los archivosque se han de tener en la Orden.

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administración de los bienes de la misma: de ahí es que ha parecidooportuno determinar en qué cosas deben ordenarse tales archivos y conqué normas deben regirse. Elíjase, pues, en la casa generalicia y en laprincipal de la Provincia, como también en los conventos de algunaimportancia, un lugar seguro, provisto convenientemente de armarios,asientos y demás cosas necesarias para formar el archivo, el que debetener forzosamente dos llaves que deben conservarse siempre una enpoder del Superior y otra en poder del archivero que debe ser nombradopor el Superior y que debe tener el cuidado de guardar todo con taldiligencia que no se destruya cosa alguna, ni aun de mínima importancia,por descuido o negligencia. Para el cargo de Archivero general es precisoque se elija a un religioso verdaderamente docto, gran estudioso de laantigüedad y de la Historia de la Orden, el que debe durar en el oficiotoda su vida.

929. En el archivo general de la Orden deben depositarse y guardarse contodo cuidado, orden y claridad todas las Letras, Constituciones yRescriptos Apostólicos; las facultades, privilegios y concesionespertinentes a la Orden; una copia auténtica de las Constituciones y de losDecretos, tanto del Maestro como del Capítulo General; y todas lasescrituras de cualquier género que tengan relación con la misma Orden;de todo esto conviene hacer un compendio o suma para que puedanhallarse fácilmente. Téngase además un catálogo de las Provincias en elcual, después de anotar la fecha de la erección de la Provincia, indíqueseel número de casas de que consta y los principales ministerios de losreligiosos; también un catálogo de todas las casas de la Orden dispuestopor Provincias con la anotación de las posesiones, rentas y gastos de cadauna; asimismo ténganse catálogos de las personas de toda la Orden,dispuestos unos por Provincias y casas y otros por orden alfabético; enellos se han de dar a conocer la edad, el grado, oficio, cualidades,ingenio, ciencia virtudes y defectos más notables de cada uno; dichoscatálogos deben renovarse cada vez que fuere necesario. Haya tambiénpor lo menos una noticia sumaría de todos los bienes de cada una de lascasas de la Orden; mas, de aquellos que pertenecen al uso y propiedad dela Curia General, deben tenerse documentos y títulos auténticos.Finalmente, téngase una copia de los hechos, ordenanzas y cartas delMaestro General, y un repertorio de las cosas notables de toda la Ordenque pueda consultarse para escribir su historia.

En lo referente al archivo provincial establecía:930. Igualmente en el archivo provincial han de guardarse esos mismosdocumentos pontificios, las Cartas encíclicas y ordenanzas del MaestroGeneral, y los Decretos de los Capítulos Generales, las disposiciones yhechos del Provincial y todas las escrituras que conciernen al bien de laProvincia o de algún convento, los instrumentos de los bienes inmuebles,y los inventarios de los objetos muebles que pertenecen al oficio delProvincial, y de los inmuebles de cada una de las casas ha de tenerse almenos un inventario, y por último un catálogo del personal.

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Los archivos de cada convento estaban contemplados en el artículosiguiente.

931. Finalmente en el archivo conventual, fuera de las ordenanzas ydecretos de los Superiores, han de guardarse con toda diligencia losinstrumentos, los contratos, los privilegios, los títulos de cualquier clasede bienes, las escrituras que de cualquier modo contienen los privilegiosy derechos del convento, los inventarios de los bienes inmuebles, elcatálogo de las personas y las biografías de los muertos, de tal suerte quedichas cosas no sufran el menor detrimento ni se destruyan.

La integridad de los fondos documentales quedaba prevista en el artículosiguiente, donde además se preveía el castigo severo para quienes fueranresponsables de la desaparición de documentos del archivo.

932. No se permita que se saque de dichos archivos escritura alguna sinocon expresa licencia del Superior y con la suficiente garantía para que serestituya a su debido tiempo; ni se entregue a quien no conste que la hade devolver oportunamente. Por lo cual ha de dejarse memoria firmadapor el que ha retirado el escrito y por el archivero, en la que se declarecuándo se ha sacado el documento, cuál ha sido éste y en qué fecha se hade devolver; y si algún religioso obrare de otra manera o fuere causa deque desaparezca algo del archivo, sea castigado severamente, según elgrado de culpabilidad.

Obsérvese que habla de ser castigado severamente, mientras que para elresponsable de la desaparición de libros de la biblioteca se preveía lisa yllanamente la excomunión151.

En cuanto a la producción de documentos, no hubo mayores cambioscon lo preceptuado dos siglos antes por el padre Linás, salvo adecuacionesy simplificaciones, tal como ocurre en el modo de anunciar la próximarealización de una redención, la que debía hacerse

…en los periódicos de mayor circulación o en carteles fijos en lasciudades y lugares principales de donde va a ser enviada152.

Llegamos así a la etapa de renovación de la vida religiosa, iniciado por elConcilio Vaticano II. No viene al caso reseñar las Constituciones que sepromulgaron en el año 1970, por dos razones: una, su breve período de

151 Cfr. Ibídem. Distinción V Del ejercicio y profesión literaria; capitulo 17, de las bibliotecas y losbibliotecarios, número 499. «….mandamos en virtud del Espíritu Santo y de Santa Obediencia, bajopena de incurrir ipso facto en excominión mayor, que ningún religioso de cualquier grado ocondición que sea, se atreva a sacar de la biblioteca por cualquier excogitable pretexto o motivo,uno o varios libros, cualesquiera que sean, y llevarlos a otros conventos, o venderlos o prestarlos alos seglares de afuera, o de cualquier manera dispensarlos…»

152 Ibíd, Distinción Sexta, número 529

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vigencia; la otra, que las disposiciones que atañen a los archivos153 han sidoincluídas prácticamente sin modificaciones en las Constituciones vigentes.

153 Cfr. Constitutiones et normæ Ordinis B.M.V. de Mercede. Roma, 1970. Normas 0137, 0138, 0154,0210, 0226, y 0243. Cabe aclarar que en las constituciones de 1970 estas disposiciones figurancomo normas –similares a «disposiciones reglamentarias»–, es decir, con categoría menor a losnúmeros –artículos– de las constituciones; mientras que en las Constituciones actuales figuran comoparte integrante de su texto.

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5. L5. LOSOS A ARCHIVOSRCHIVOS E ECLESIÁSTICOSCLESIÁSTICOS ENEN ELEL

ORDENAMIENTOORDENAMIENTO JURÍDICOJURÍDICO ACTUALACTUAL DEDE LALA

IIGLESIAGLESIA YY DEDE LALA O ORDENRDEN

5.1. DIVISIÓN DE LOS ARCHIVOS ECLESIÁSTICOS

Los archivos eclesiásticos, de crecidísimo numero, podríamos agruparlosen cuatro grandes divisiones, de acuerdo al tipo de institución a quepertenecen:

- archivos de la Suprema Autoridad de la Iglesia o archivosvaticanos (según Tanodi154 públicos estatales),

- archivos de las iglesias particulares, o archivos episcopales yparroquiales (puestos en la posición de Tanodi podríanconsiderarse semiestatales, ya que están bajo la jurisdicción de unaorganización internacional que goza de un poder preterestatal155);

- archivos de las personas públicas eclesiales, o de los institutosreligiosos y sociedades de vida apostólica (dentro de la visión deTanodi se asimilarían a los privados);

- y archivos de las personas privadas eclesiales, o archivos de lasasociaciones de fieles (para Tanodi también se asimilarían a losprivados).

Al tercer grupo corresponden los archivos mercedarios objeto de esteestudio.

De acuerdo al tipo de función que desempeñan y de la documentaciónque albergan en:

archivos corrientes (según la CPBCI «documentos para la vida ygestión de los diversos entes»);

archivos históricos (íd. «documentos de importancia histórica»);

154 TANODI, Aurelio. Manual de Archivología Hispanoamericana. UNC, Córdoba, 1961, pág. 181155 Ibíd.

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archivos secretos (íd. « documentos sobre causas criminales,atestados de matrimonios de conciencia, dispensas deimpedimentos ocultos, etcétera).

Archivos Vaticanos.

El Código sólo se ocupa tangencialmente de los archivos vaticanos156.360. La Curia romana, mediante la que el Romano Pontífice sueletramitar los asuntos de la Iglesia universal, y que realiza su función ennombre y por autoridad del mismo para el bien y servicio de las Iglesias,consta de la Secretaría de Estado o Papal, del Consejo para los asuntospúblicos de la Iglesia, de las Congregaciones, Tribunales y de otrasInstituciones cuya constitución y competencia se determinan por leyparticular.

Esta ley particular se plasmó en la Constitución apostólica Pastor Bonus,del sumo pontífice Juan Pablo II sobre la reforma de la Curia Romana. Losnúmeros (artículos) de la constitución apostólica relacionados másdirectamente con los archivos son los siguientes.

1. La Curia Romana es el conjunto de Dicasterios y Organismos queayudan al Romano Pontífice en el ejecicio de su suprema misiónpastoral, para el bien y servicio de la Iglesia universal y de las Iglesiasparticulares, con lo que se refuerzan la unidad de la fe y la comunión delPueblo de Dios y se promueve la misión propia de la Iglesia en elmundo.

186. Existen algunas instituciones, tanto de origen antiguo como denueva constitución, que, aunque no forman parte en sentido propio de laCuria Romana, sin embargo prestan servicios necesarios o útiles almismo Sumo Pontífice, a la Curia y a la Iglesia universal, y de algúnmodo están ligadas con la Sede Apostólica.187. Entre estas instituciones se distingue el Archivo Secreto Vaticano,en el cual se conservan los documentos relativos al gobierno de laIglesia, a fin de que estén a disposición en primer lugar de la Santa Sedey de la Curia para realizar su trabajo, y también, por concesión pontificia,puedan ser para todos los historiadores fuente de conocimiento, inclusode la historia profana, de todas las regiones que en los siglos pasadosestuvieron estrechamente ligadas con la vida de la Iglesia.

Archivos Episcopales.

Dado que las curias episcopales y las curias provinciales guardannotables semejanzas en cuanto a lo administrativo, el estudio de esta

156 CIC. Libro II, Parte II, Sección I, Capítulo IV. De la Curia Romana.

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legislación canónica suple las falencias que puedan presentar lasconstituciones y estatutos de las congregaciones religiosas.

El código obliga expresamente a los Ordinarios (obispo, provincialreligioso u otro a él equiparado según el canon 381), que

«las actas y documentos de los archivos … de su territorio [jurisdicción]se conserven diligentemente, y que se compilen los inventarios oíndices…»

Les impone también crear y vigilar el funcionamiento del archivohistórico de su jurisdicción, para

…que los documentos, que tengan un valor histórico, sean guardadosdiligentemente y ordenados sistemáticamente

Y también deberán dotarlo de un reglamento que permita su correctofuncionamiento según su propia finalidad.

Esta es una característica muy destacable de los archivos eclesiásticos:son responsabilidad directa del ordinario.

El legislador, sin embargo, heredero de una larguísima tradiciónarchivística, no se ciñe al concepto historicista del archivo. En el nuevoCIC157, los archivos episcopales están ubicados en una postura francamenteadministrativa (utilidad primaria), dejando lo histórico y cultural para elúltimo canon del tema. Por ello habla de dos grandes grupos de archivoseclesiásticos:

- Archivos curiales, referidos a los episcopales en edadadministrativa (486 a 490)

- Otros archivos eclesiásticos (491), donde se encuentran aquellosno curiales y los históricos.

De acuerdo a su accesibilidad, pueden distinguirse tres tipos de entidadesarchivísticas:

- General (486 a 488)- Secreto (489 y 490)- Histórico (491)

Normas canónicas para el Archivo General de la CuriaEpiscopal.

Comparada con el Código anterior, las normas actuales resultan mássimples y exigentes que las anteriores.

157 CIC. Libro II: Del Pueblo de Dios. Sección II: De las Iglesias particulares y de sus agrupaciones.Título III: De la ordenación interna de las Iglesias particulares. Capítulo II: De la Curia diocesana.Artículo II: Del Canciller y otros notarios y de los archivos. Cánones: 486 a 491.

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ContenidoEn el Archivo General de la Curia deben conservarse los documentos y

escrituras correspondientes a los asuntos diocesanos, sean espirituales otemporales (c. 486 § 2).

Condiciones

- "lugar seguro"(c. 486 § 2);- "orden manifiesto de los documentos"(c. 486 § 2);- "diligentemente guardados"(c. 486 § 2);- "inventario" o "índice" de los documentos (c. 486 § 3) (la

versión latina habla de "catalogus"158;- "resumen del contenido de cada escritura" (c. 486 § 3).

Accesibilidad

El archivo general de la Curia debe permanecer cerrado y sólo el Obispoy el Canciller poseerán la llave. Por regla general, nadie accede al archivo,salvo que cuente con permiso del Obispo o del Moderador de la Curia juntocon el Canciller (c. 487 § 1).

Retiro de documentos

En principio, no se permite sacar nada del archivo. Si se exceptúa lanorma, se exige que sea "por poco tiempo"; y con el consentimiento delObispo o del Moderador de la Curia junto con el Canciller (c. 488).

Copias de documentos

La expedición de copias auténticas (escritas o fotocopiadas) dedocumentos públicos puede ser reclamada por los "interesados" sólo enrazón de su "estado personal" (statum suaepersonae) (c. 487 § 2).

Normas canónicas para el Archivo Secreto de la Curia

Contenido

La Curia cuenta también con un archivo secreto donde guardar losdocumentos que deban custodiarse "bajo secreto" (c. 489 § 1).

Condiciones

Inviolabilidad e inamovibilidad. En caso de necesidad, basta un armarioo caja dentro del archivo general, con tal que esté totalmente cerrado conllave; y esté fijo en su sitio (c. 489 § 1).

158 CIC. Canon 486 §3. Documentorum, quæ in archivo continentur, conficiatur inventarium seucatalogus, cum brevi singularum scripturarum synopsi.

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Acceso

Unicamente el Obispo tiene la llave del archivo seereto (c. 490 § 1), elcual no podrá en principio abrirse mientras esté vacante la sede episcopal,salvo en caso de verdadera necesidad y por el administrador diocesano enpersona (c. 490 § 2).

Retiro de documentos

Los documentos del archivo secreto no pueden ser retirados (c. 490 § 3).

Destrucción de documentos secretos

El archivo secreto debe ser revisado anualmente, con el objeto deproceder a la destrucción de documentos de causas criminales en materiade costumbres cuyos reos hayan fallecido o que hayan tenido sentenciacondenatoria diez años antes. Destruido el documento, se conservará unbreve resumen del hecho junto con el texto de la sentencia definitiva (c.489 § 2) 7.

Normas canónicas para el Archivo Histórico de laCuria

Contenido

El Código encomienda al Obispo la erección de un archivo históricodiocesano integrado por los documentos que «tengan valor histórico" (c.491 § 2).

Condiciones

- Que los documentos se guarden con cuidado

- Que el Obispo dicte normas sobre la organización de losarchivos, la conservación de los documentos y el acceso aellos (c. 491 § 3).

Posteriormente, al reorganizar la Curia Romana, en el caso puntual de laPontificia Comisión para la Conservación del Patrimonio Artístico eHistórico, Juan Pablo II vuelve a legislar sobre los archivos históricos.

101. §1. Entre los bienes históricos, tienen particular importancia todoslos documentos e instrumentos que se refieren y atestiguan la vida y laacción pastoral, así como los derechos y las obligaciones de las diócesis,parroquias, iglesias y demás personas jurídicas instituídas en la Iglesia.§2. Este patrimonio histórico consérvese en los archivos o también en lasbibliotecas, que en todas partes han de encomendarse a personascompetentes, para que dichos testimonios no se pierdan.

En el segundo inciso, se establece pues que todos los archivos históricoseclesiales han de encomendarse a personal especializado en la ciencia

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archivológica y el arte archivístico. Resulta extremadamente importantepara los archiveros conocer y hacer conocer la antedicha norma jurídicaeclesiástica.

Para profundizar este tema véanse los anexos documentales.

Normas canónicas para otros archivos eclesiásticos

Cuáles

El código menciona otros archivos: Iglesias Catedralicias, Colegiatas,Parroquias y otros.

Condiciones.

- Cuidar que los documentos se conserven diligentemente.- Procurar la confección de inventarios o índices en doble

ejemplar (uno para el archivo propio y otro para eldiocesano) (c. 491§ 1).

Accesibilidad.

Para examinar o sacar de su sitio las actas y documentos aludidos en los§§ 1 y 2, deben observarse las normas establecidas por el Obispodiocesano. (c. 491§ 3).

Archivos Parroquiales

Normas canónicas para el Archivo Parroquial

El Código actual insiste sobre los archivos parroquiales.Casi toda las disposiciones canónicas sobre el archivo parroquial están

contenidas en el canon 535159. El parágrafo 4 establece la obligatoriedad de suexistencia.

§ 4. En toda parroquia ha de haber una estantería o archivo…

Contenido

En el Archivo Parroquial han de guardarse tanto las piezas documentalesen edad administrativa como las que están dejando de serlo.

- libros parroquiales (c. 535 §4)

- cartas de los Obispos (c. 535 §4)- otros documentos que deben conservarse por motivos de necesidad o

de utilidad (c. 535 §4)

159 CIC. Libro II: Del Pueblo de Dios. Sección II: De las Iglesias particulares y de sus agrupaciones.Título III: De la ordenación interna de las Iglesias particulares. Capítulo IV: De las parroquias, delos párrocos y de los vicarios parroquiales. Cánon: 535.

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- libros parroquiales más antiguos (c. 535 §5)- libros de administración temporal (c. 532; cfr. c. 1281/1288)

Condiciones

"diligentemente" (c. 535 § 5).Más adelante, en el canon 555, al hablar de los archiprestes –un

archiprestazgo es algo así como la unión de varias parroquias–, previenesobre casos de enfermedad o muerte de algún párroco.

"Cuide el arcipreste que los párrocos de su distrito que sepa que seencuentran gravemente enfermos no carezcan de los auxilios espiritualesy materiales y de que se celebre dignamente el funeral de los quefallezcan; y provea también para que, cuando enfermen o mueran, noperezcan o se quiten de su sitio los libros, documentos, objetos yornamentos sagrados u otras cosas pertenecientes a la iglesia". (c. 555 §3).

No es del todo infrecuente que cuando hay un sacerdote viejo y enfermoempiecen a revolotear algunos anticuarios cerca de la casa parroquial.

Accesibilidad

- "cuide el párroco de que no vaya a parar a manos extrañas" (c. 535§ 4)

- "observar las normas establecidas por el Obispo diocesano". (c.491§ 3)..

Retiro de documentos

Nada dice. Por analogía, ha de aplicarse lo preceptuado para los archivosde las curias episcopales.

Copias de documentos

Cada parroquia ha de tener su propio sello; los certificados que serefieren al estado canónico de los fieles, así como también las demás actasque puedan tener valor jurídico, deben llevar la firma del párroco o de sudelegado, y el sello parroquial. (c. 535 § 3; cfr. c. 487 § 2).

Supervisión

Los archivos parroquiales están sujetos a la supervisión episcopal. …todo ello debe ser revisado por el Obispo diocesano o por su delegadoen tiempo de visita o en otra ocasión oportuna… (c. 535 § 4)..

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5.2. DOCUMENTOS Y ADMINISTRACIÓN EN EL ACTUAL

CÓDIGO DE DERECHO CANÓNICO

Como bien sostiene Tanodi160, la Iglesia lleva adelante dosadministraciones. Una, en el orden espiritual, en todo lo que hace a suministerio salvífico. Otra, en el orden temporal, en todo aquello que hace aluso de los recursos económicos necesarios para la asistencia a los pobres, elsostenimiento del culto y la predicación del evangelio.

Puede uno estar tentado a ubicar a las primeras como actividadessustantivas y a las otras como facilitativas; pero como ambas son tandiscímiles dan origen a dos administraciones totalmente separadas, unidastan sólo en el vértice por la autoridad suprema (papa, obispo, párroco)según el caso. Yendo al fondo de la cuestión sobre quién es la máximaautoridad administrativa en la Iglesia la respuesta es: el Papa. En loeconómico esto se traduce en que todos los bienes eclesiásticos decualquier tipo y de propiedad de cualquier persona jurídica eclesiástica(obispados, parroquias, institutos religiosos, movimientos religiosos quegocen de tal personería) son en última instancia de propiedad de toda laIglesia; y es el Papa quien debe decidir sobre ellos. De allí la importanciadel entorno papal.

Los actos administrativos en el ámbito de la administración de los bienestemporales están dirigidos a la sociedad, tanto civil como eclesiástica, y porlo tanto necesitan documentarse por escrito, por un principio básico delegalidad y equidad. Desde el archivo general de la curia pasarán losdocumentos, previa selección, al archivo histórico.

En la administración «salvífica», en cambio, los actos administrativos sedan dos foros totalmente distintos.

Uno, el interno, reservado tan sólo a Dios y a la conciencia de cadahombre, que en el caso de los miembros de la Iglesia puede ser abordadopor los pastores que tengan la suficiente potestad. En este ámbito, como eslógico, no hay necesidad de pruebas y constataciones. Ni Dios ni el hombreen su fuero personal necesitan documentar las relaciones recíprocas. Enconsecuencia, los actos administrativos eclesiales dados para el forointerno, si bien se otorgan por escrito, se han de conservar en el archivosecreto; en algunos casos, dada la facultad verbotenus, el documentodeberá ser extinguido. Del acto administrativo de foro interno quedará tansólo una reseña, que resguardando los derechos individuales, rescaten elconocimiento del hecho para la comunidad eclesial. Esta reseña es la que

160 TANODI, Aurelio. Manual de Archivología Hispanoamericana. UNC, Córdoba, 1961, página 182.«La jerarquía ejerce la administración en su doble faz: espiritual y temporal; la espiritual se refiere ala administración de sacramentos, enseñanza, predicación, jurisdicción, etc.; la temporal a laadministración de bienes materiales, posesiones, edificios, rentas, sueldos, etc. …»

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deberá pasar, vencidos los plazos que estipulen los ordinarios en lareglamentación archivística de su órbita, al archivo histórico.

Otro, el externo, es el ámbito comunitario de la Iglesia. En él impera elprincipio de legalidad, que exige la documentación del acto administrativo.Por ello deben ser hechos por escrito [salvo casos específicamentecontemplados], y sus sujetos pasivos debidamente notificados. Si es un actoadministrativo para el que se comisiona su ejecución a una autoridaddistinta del otorgante, también debe documentarse las facultades para suejecución. El destino de estos documentos es, en una primera etapa, elarchivo general; y luego el archivo histórico. Así ordena el CIC161 sobre losactos administrativos.

37. El acto administrativo que afecta al fuero externo debe consignarsepor escrito, igualmente su acto de ejecución, si se realiza en formacomisoria.40. El ejecutor de un acto administrativo desempeña inválidamente sufunción si actúa antes de recibir el correspondiente documento y de haberreconocido su autenticidad e integridad, a no ser que hubiera sidoinformado previamente del documento con autoridad del que dio el acto.

Cabe preguntarse qué entiende el CIC por documento eclesiástico. Elcanon 1540 aclara sobre el tema.

1540. §1. Son documentos públicos eclesiásticos aquellos que hansido redactados por una persona pública en el ejercicio de su funciónen la Iglesia y observando las solemnidades prescriptas por elderecho.§2. Son documentos públicos civiles los que, según las leyes de cadalugar, se reconocen como tales.§3. Los demás documentos son privados.

Creo necesario a esta altura mencionar los principales registros quedeben llevar las iglesias particulares.

No es el caso analizarlos. Por ello simplemente transcribo lasdisposiciones pertinentes del CIC, respetando ambos niveles –salvífico ytemporal– de administración.

Principales registros que deben llevarse según el actualCódigo de Derecho Canónico y que hacen a la misiónsalvífica de la Iglesia.

Libros de bautismo y difuntos

535 § 1 En cada parroquia se han de llevar los libros parroquiales, esdecir de bautizados, de matrimonios y de difuntos, y aquellos otros

161 CIC. Libro I. De las normas generales. Título IV. De los actos administrativos singulares.

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prescritos por la Conferencia Episcopal o por el Obispo diocesano; cuideel párroco de que esos libros se anoten con exactitud y se guardendiligentemente. § 2. En el libro de bautizados se anotará también la confirmación, asícomo lo que se refiere al estado canónico de los fieles por razón delmatrimonio, quedando a salvo lo que prescribe el c. 1133, por razón de laadopción, de la recepción del orden sagrado, de la profesión perpetuaemitida en un instituto religioso y del cambio de rit ; y esas anotacioneshan de hacerse constar siempre en la partida del bautismo.877. El párroco del lugar en que se celebra el bautismo debe anotardiligentemente en el libro del bautismo el nombre de los bautizados,haciendo lugar del ministro, los padres, padrinos, testigos, si los hubo, yel lugar y día en que se administró e indicando asimismo el día y lugardel nacimiento …

Libros de confirmación

895. Deben inscribirse los nombres de los confirmados en el libro deconfirmaciones de la Curia diocesana, dejando constancia del ministro,de los padres y padrinos, y del lugar y día de la administración delsacramento, o donde lo mande la conferencia episcopal o el obispodiocesano, en el libro que se guarda en el archivo parroquial; el párrocodebe notificarlo al párroco del lugar del bautismo para que se haga laanotación en el libro de bautismos a tenor del c. 535.2

Libros de matrimonio

1121. §1. Después de celebrarse el matrimonio, el párroco del lugardonde se celebró o quien hace sus veces, …debe anotar cuanto antes enel registro matrimonial los nombres de los cónyuges, del asistente y delos testigos, y el lugar y día de la celebración, según el modo prescritopor la Conferencia Episcopal o el obispo diocesano.

1122. §1. El matrimonio ha de anotarse también en los registros debautismos en los que está inscrito el bautismo de los cónyuges.

1133. El matrimonio celebrado en secreto se anotará sólo en un registroespecial, que se ha de guardar en el archivo secreto de la Curia.

Libros de misa

955. §3. Quienes transmitan a otros Misas que han de ser celebradas,anoten sin demora en un libro tanto las Misas que recibieron como lasque han encargado a otros, anotando también sus estipendios.

958. §1. El párroco y el rector de una iglesia o de otro lugar piadoso,donde suelen recibirse estipendios de Misas, han de tener un libroespecial en el que tomarán diligentemente nota del número de Misas quese han de celebrar, de la intención, del estipendio ofrecido y delcumplimiento del encargo.

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§2. El Ordinario tiene obligación de revisar cada año esos libros,personalmente o por medio de otros.

Los libros de misa están relacionados con la misión salvífica de laIglesia. Sin embargo, los estipendios recibidos deben reflejarse en los librosde entradas y salidas, ubicados dentro del área de administración de losbienes temporales.

Libros de ordenación (diaconal, sacerdotal o episcopal)

1053. §1. Al terminar la ordenación, deben anotarse en un libro especialcuidadosamente custodiado en la curia del lugar donde se haadministrado el sacramento, el nombre de cada ordenado y el ministroque lo ordenó, así como el lugar y el día de la ordenación, y searchivarán también con diligencia todos los documentos referentes acada una de las ordenaciones. §2. El obispo debe dar a cada ordenado un certificado auténtico de laordenación recibida; y si estos fueron ordenados con dimisorias por unObispo ajeno, mostrarán a su vez ese documento a su Ordinario propio,para que se anote la ordenación de un libro especial que se guardará en elarchivo.

1054. El ordinario del lugar, tratándose de seculares o el Superior mayorcompetente si se trata de sus súbditos, debe comunicar la ordenación alpárroco del lugar del bautismo de cada ordenando, para que lo anote enel libro de bautismos, a tenor del c 535§2.

Similares a los libros de ordenación son los libros de profesión religiosa,que llevan los institutos religiosos.

Principales registros que deben llevarse ydocumentación a guardar según el actual Código deDerecho Canónico y que hacen a la administracióntemporal de la Iglesia.

Libros de inventarios

1283. Antes de que los administradores comiencen a ejercer sufunción: 1. Deben prometer solemnemente, mediante juramento ante el ordinarioo su delegado, que administrarán bien y fielmente.2. Hágase inventario exacto y detallado, suscrito por ellos, de los bienesinmuebles, de los bienes muebles, tanto preciosos como pertenecientesde algún modo al patrimonio cultural, y de cualesquiera otros, con ladescripción y tasación de los mismos; y compruébese una vez hecho.

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3. Consérvese un ejemplar de este inventario en el archivo de laadministración, y otro en la curia; antótese en ambos cualquier cambioque experimente el patrimonio.

Obsérvese que en el último punto se habla de ejemplares múltiples, yque su destino serán dos archivos distintos.

Libros de entradas y salidas

1284.…§2. Deben por tanto [los administradores]: …7. Llevar condiligencia los libros de entradas y salidas. …

Escrituras y testimonios

1284. …§2. Deben por tanto [los administradores]: …9. ordenardebidamente y guardar en un archivo conveniente y apto los documentose instrumentos en que se fundan los derechos de la Iglesia o del institutosobre los bienes; y, donde pueda hacerse fácilmente, depositar copiasauténticas de los mismos en el archivo de la Curia.

5.3. SANCIONES DEL DERECHO CANÓNICO

Luego de ver las obligaciones impuestas a los administradores en loreferido a documentación y archivos, uno puede preguntarse sobre laspenas que prevé el CIC para aquellos que transgreden esas normativas.

Si bien toda la actividad de la Iglesia tiene su plena realización más alláde la muerte, en la eternidad, las sanciones que pueden aplicar susautoridades transcurren en el orden temporal. Según la doctrina eclesial, elúnico que puede juzgar en el más allá, y en su caso premiar o castigar, esDios. Y es obvio decir que a El el CIC no lo rige.

1312. Las sanciones penales en la Iglesia son: 1. penas medicinales o censuras, que se indican en los cc 1331-1333;2. penas expiatorias, de las que se trata en el c. 1336.

Las penas medicinales o de censura (excomunión, entredicho ysuspensión), primordialmente tienden a corregir al pecador y moverle alarrepentimiento de sus actos.

Las expiatorias, a reparar el daño causado por el pecado.1336. §1. Además de otras que pudiera establecer la ley, las penasexpiatorias, susceptibles de afectar al delincuente perpetuamente o porun tiempo determinado o indeterminado, son las siguientes:

1. la prohibición o mandato de residir en un determinado lugar oterritorio;

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2. la privación de la potestad, oficio, cargo, derecho, privilegio,facultad, gracia, título o distintivo, aun meramente honorífico;

3. la prohibición de ejercer los actos que se enumeran en el n. 2°,o la prohibición de ejercerlos en un determinado lugar o fuera deun lugar determinado, pero estas prohibiciones nunca son bajopena de nulidad;

4. el traslado penal a otro oficio;5. la expulsión del estado clerical. …

Los cánones mas significativos en cuanto a delitos contra el patrimoniodocumental eclesial son dos.

1377. Quien enajena bienes eclesiástico sin la licencia prescripta, debeser castigado con una pena justa.

1391. Puede ser castigado con una pena justa, según la gravedad deldelito:

1. quien falsifica un documento público eclesiastico, o altera,destruye u oculta uno verdadero, o utiliza uno falso o alterado;

2. quien, en un asunto eclesiástico, utiliza otro documento falso oalterado;

3. quien afirma algo falso en documento público eclesiástico.A este respecto, el CIC anterior era más severo. El canon 2360§1,

ordenaba excomunión reservada de un modo especial a la Santa Sede aquien falsificare documentos de la Sede Apostólica y/o hiciese uso de ellos.Por su parte, el canon 2405 preveía excomunión simplemente reservada ala Santa Sede para quien sustrajere, ocultare, adulterare o destruyeredocumentos de la Curia.

2405. Vicarius Capitularis aliive omnes tam de Capitulo, quam extranei,qui documentum quodlibet ad Curiam episcopalem pertinens sive per sesive per alium subtraxerint vel destruxerint vel celaverint velsubstantialiter immutaverint, incurrunt ipso facto in excommunicationemSedi Apostolicae simpliciter reservatam, et ab ordinario etiam privationeofficii, beneficci, plecti poterunt.

La prescripción del delito no es sólo cosa de la legislación civil. El CICtambién prevé en su ordenamiento esta figura jurídica.

1362. La acción criminal se extingue por prescripción a los tres años;

1363. La acción para ejecutar la pena se extingue por prescripción sidentro de los plazos establecidos en el c. 1362, computados desde el díaen que la sentencia condenatoria pasa a cosa juzgada no se ha notificadoal reo el decreto ejecutorio del juez, de que se trata en el c. 1651.

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5.4. LEGISLACIÓN MERCEDARIA SOBRE CULTURA YARCHIVOS.

La legislación propia de la institución religiosa en estudio está dada endos niveles: general y provincial.

El nivel general, que, sujeto a las disposiciones del derecho canónico,rige en toda la Orden, está regido fundamentalmente por las Constitucionesde la Orden de la Merced. Estas datan del año 1986.

Sobre el cuidado en general que debe dispensarse a los bienes –ya seanéstos espirituales, culturales o económicos–, las constituciones lo incluyenen el mismísimo voto de pobreza. Entre estos bienes se encuentran losarchivos de la Orden.

Número 46. Los religiosos debemos considerar los bienes de la Orden,por razón de la pobreza y del fin a que son destinados, comopertenecientes a los pobres de la Iglesia; usarlos como medios paranuestra misión caritativa y redentora y tratarlos con esmero, comoadministradores fieles que han de rendir cuenta de ellos a Dios y a lacomunidad.

De los documentos que conservan los archivos se nutren la narración dela Historia, cuyo conocimiento es indispensable para el adecuadodiscernimiento vocacional.

153. Iníciese a los novicios en el estudio de la regla, constituciones,ritual, historia y espiritualidad de la Orden y en todo aquello queconstituye su mejor tradición y patrimonio espiritual. Suscite el maestroen los novicios el gozo de sentirse llamados a un instituto que desde hacetantos siglos se entrega a un servicio liberador en la Iglesia,impulsándolos a un gran amor hacia ella y hacia sus sagrados pastores .

Por otra parte, las actividades propias de la institución exigen unacuidadosa preparación cultural, entre las que la ciencia histórica ocupa unlugar de privilegio.

188. El propio ministerio apostólico, integrado en el ambiente culturaldel momento, nos exige a los mercedarios una cuidadosa preparación enlas ciencias y las letras, así como en el uso de los medios decomunicación social y de todo aquello que sirva a la exposición de lasciencias sagradas en la difusión de la doctrina de Cristo, relacíonándolascon su fin, historia y espiritualidad de la Orden.

Para garantizar la promoción de la investigación y fomentar elconocimiento de la Orden se dispuso la creación del Instituto Histórico, queasume, como derivación, la protección del acervo documental.

191. §1. El instituto histórico, dependiente del Maestro General yregulado por sus propios estatutos, promueve la investigación de lahistoria y espiritualidad mercedarias y fomenta el conocimiento de la

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Orden con adecuadas publicaciones. §2. Las provincias ofrezcan sucolaboración diligente para que este servicio sea más eficaz y seincremente cada día en beneficio de la Orden.

Las disposiciones concretas sobre archivos comienzan en la última partedel número 196.

196. … Los manuscritos de un religioso difunto pasan al archivoprovincial.

Las disposiciones constitucionales fundamentales que rigen los archivosde la Orden son los número 197.

197. En las curias y en las casas, haya un archivo con seccionesadministrativa e histórica, cuyas llaves guarden el superior y elarchivero. Quedando siempre a salvo la caridad con las personas, no sesaque ni publique nada sin autorización del superior respectivo, cuidandode que se devuelvan íntegros los documentos y que todo permanezca enbuen estado. §2. Los superiores mayores tengan además un archivoespecial para asuntos reservados, destruyendo periódicamente lo que noofrezca utilidad.344. Cada administración tenga un archivo donde se custodienordenadamente los títulos de propiedad y demás documentosadministrativos.

El esquema archivístico que de él se desprende es:

Tipos de archivo mercedario

1. archivo común, para las curias provinciales y los conventos1.a. sección administrativa –«corriente» o «general» (cfr. CIC 486 a

488)1.b. sección histórica –«historico» (cfr. CIC 489 y 490)

2. archivo secreto, para el caso de las curias provinciales (cfr. CIC491)

3. archivo de las administraciones económicas

Condiciones

Integridad de los documentos.Conservación en buen estado.

Accesibilidad

Llaves a cargo del superior y el archivero.Autorización del superior para la consulta de los documentos (cfr. c. 487

§ 1).

Retiro de documentos y copias

Autorización y control del superior (cfr. c. 488).

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Encargados del archivo

Nivel local. 232. El superior (local) designa secretario a uno de losconsejeros, a quien toca redactar las actas del capítulo y del consejo, delas cuales da fe, y atender el archivo local, si no está encomendado aotro. Nivel provincial. 270. §1. El provincial nombra a uno de los consejerossecretario provincial, cuyo cargo es proporcionalmente semejante al delsecretario general.….

Nivel general. 310. El secretario general, al asumir su cargo, preste eljuramento de ritual ante el Maestro General. En razón de su oficio:… 4.cuida del archivo administrativo.Nivel de administración económica. Quien sea designado para esta tareapor el responsable.

Inspección del archivo

323. La visita, que debe ser anunciada oportunamente a las comunidades,entre otras cosas, comprende:… 8. el archivo y la biblioteca de laprovincia y de las casas.

Libros de administración

215. Las comunidades [locales], según corresponda, lleven los siguienteslibros:

de capítulos y consejos

de admisión al noviciado y de profesiones

de actas de visita

de crónica diaria

de misas constitucionales, de fundación y de las recibidasdiariamente

de religiosos difuntos

de administración económica

Sanciones

En cuanto a las sanciones, las constituciones de la Orden se remitenclaramente al CIC. Obviamente se trata mayormente de penas expiatorias, yaque actualmente las penas medicinales son de rara aplicación dentro de losinstitutos religiosos. El religioso que atentara contra documentos y archivossería candidato para habérselas más con un psicoterapeuta que con un juezeclesiástico.

361. El poder judicial en nuestra Orden se ejercerá, cuando a él se acuda,según derecho.

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Patrimonio cultural

El nivel provincial, que complementa lo dispuesto a nivel eclesial ygeneral, surge de los Estatutos Provinciales de la Provincia MercedariaArgentina, cuyo nuevo texto corre desde 1991.

Los estatutos argentinos, por su parte, hablan expresamente depreservación del patrimonio cultural.

23. La preservación del patrimonio cultural de la Provincia constituyeuna preocupación constante del Gobierno y de todos los miembros de laComunidad Provincial. Integran el Patrimonio Cultural de la Provincia,todo convenientemente inventariado:

a. Archivosb. Bibliotecas

c. Monumentos históricosd. Museos

e. Imágenes y reliquiasf. Objetos sagrados de valor

g. Obras de arte

¿Administración o cultura?

Una última observación. En el Código de Derecho Canónico, losarchivos están fundamentalmente contemplados dentro de las funcionesadministrativas del canciller y del notario. En las Constituciones yEstatutos Provinciales de la Orden de la Merced, dentro del patrimoniocultural –a excepción de los archivos de administración económicaincluídos dentro de bienes temporales. Algo a tener muy en cuenta.

Dentro de una visión mercedaria de la Historia, puede considerárselacomo un camino de liberación162. Toda visión filosófica que preconice el finde la historia constituye para el mercedario una situación opresiva de loshombres y de la humanidad. La Historia es, pues, el camino que recorrenlos hombres y la humanidad en pos de su liberación. Y la Cultura estáconstituída por todas las creaciones de los hombres y de la humanidadlevantadas en su caminar liberador.

Por ello, como bien dice una circular de la Comisión Pontificia para losBienes Culturales de la Iglesia163,

162 PIKAZA, fray Javier. Anunciar la libertad a los cautivos. Palabra de Dios y catequesis. EdicionesSígueme. Salamanca (España), 1985, pág. 15 a 19. Cfr. PIKAZA, fray Javier. Camino deLiberación. Editorial Verbo Divino. Navarra (España), 1987, págs. 21 y 22

163 CPBCI. Circular sobre bienes culturales y familias religiosas. Roma, 10 de abril de 1994. Protocolo275/92/12 N.

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…en la escuela de la historia es donde el religioso descubre lasinspiraciones del Espíritu, que siempre llama al apostolado de laevangelización y de la adoración silenciosa. A parte de lo que pueda seruna cierta idea que se ha propagado sobre la realidad de los archivos, hayque decir que el archivo de la Comunidad Religiosa no es un lugar pararefugiarse en el pasado sino el espacio para abrirse al futuro.

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6. R6. REFERENCIAEFERENCIA SOBRESOBRE LOSLOS ARCHIVOSARCHIVOS

COLONIALESCOLONIALES DEDE LALA P PROVINCIAROVINCIA

AARGENTINARGENTINA..

Las primeras noticias que encontramos en la Argentina sobre laexistencia de archivos mercedarios datan del siglo diecisiete.

"...formando el reverendo padre maestro fray Juan de Puga, Provincialque había sido de esta provincia y visitador de ella, una relación muycumplida que concluyó a primero de Octubre de 1692 (después de haberen ocho años registrado todos los archivos de su provincia einformándose de las personas más ancianas religiosas y seglares) paradespachar al cronista general de su Orden, por orden del reverendísimopadre maestro general..."164

En un fragmento del inventario de los papeles del archivo conventual deCórdoba, que data del año 1710, se hace mención a ellas.

…Ytt. Noticias dela Provincia escritas por el Maestro Puga….165

Esta referencia no aparece en el inventario siguiente, de 1774. Como elpadre Lozano publicó su obra en 1720, existe, entre muchas otras, laposibilidad que algún comendador facilitara el manuscrito, y por algunarazón no le haya sido devuelto.

Veamos a continuación el relato que nos brindan los propios documentossobre el lugar donde estuvieron depositados en el pasado.

Archivo del Convento de Santiago del Estero.

Ya en 1722 encontramos una referencia clara al archivo conventual deSantiago del Estero, en que libros y escrituras se describen conjuntamente.Se mencionan bulas y privilegios166.

Sensos y Libros. Libros. Primeramente, Dos thomos de la Suma deSiluestro= Mas una Suma de Ledesma= mas un thomo de SeptimioFlo…, mas otro thomo sobre las ferias de quaresma sin principio nifin=…mas otro thomo sin principio, ni fin de la Vida de Xesuristo, suauthor Fonseca= Mas otro de Alberto Magno= mas otro quaresmal,

164 LOZANO, P. Conquista del Paraguay, tomo 4, pág. 102. Citado por FERREYRA ALVAREZ, frayAvelino. Los Comendadores de Córdoba, siglo XVII. Córdoba, 1997, página 119

165 AHCMC. Libro 19. Inventarios. Memoria adjunta al final del tomo. 166 AHCMC, Tomo 11, pág. 15.

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deshecho= mas otro moralista de Busembau= mas el Parangón= mas lasConstituciones= mas una bulla de Alexandro quarto= Ytten otra de Leóndécimo= mas otra del mesmo= mas un breve de Paulo quarto= mas otrabulla de Sixto quinto= mas otra de Clemente octabo= mas otra delmesmo Pontifice= mas otra del mismo Pontifice= mas otra del mesmoPontifice= mas otra de Paulo quinto= mas otra del mesmo= mas otra dePio quinto en testamento= mas otra de Gregorio decimo quinto= mas unaProvisión Real sovre los yanaconas = mas tres legajos de variosinstrumentos de lo que hacen a favor de este Convento en que se[ilegible] sedulas, Provisiones, y otros instrumentos, que se sacaron delarchivo y se devolvieron a el. / Papeles y Instrumentos del Archivo. sehallan siento y veinte y quatro entre Bullas, sédulas, testamentos, y demas condusentes al Combento.

Diez años después, en 1732, aparecen noticias sobre libros deredenciones, misas, entradas y salidas, de visitas, de cofrades, y registros debautismos, casamientos y difuntos167.

Estado del Combento de San Pedro Nolasco de Santiago del Esterorecibido por el Padre Predicador Fray Lorenzo Lopez de Osornio, comoComendador de dho Combento en primero del mes de febrero de 1732.…Libros de Combento. Primeramente Unas Constituciones Usadas, másel Patronato Real mas Parangon, Yttn. Uno Moral, su Autor Ledesma…Yttn Un libro de mano escrito enque se apuntan los Religiosos difuntos,Yttn otro donde se asientan los esclavos que se Bautisan, Ytt. donde seassientan los esclavos que toman estado de matrimonio, Yttn Otro deRedempsion, Yttn otro de Missas, Yttn otro de Resibo, Yttn otro degasto, Yttn otro de Visitas, y otro de los Cofrades del Escapulario.

En el inventario conventual de 1775168, encontramos ya un auxiliar dearchivo.

Indice de las escrituras, y papeles que se hallan en el Archivo, de las quese recibe el Padre Comendador actual Predicador Jubilado fray YsidroCaseres.

Archivo del Convento de Santa Fe.

Noticias del archivo del antiguo Convento de Santa Fe hay en Córdobadesde 1757. En el Libro de Visitas, en 1757, aparece un listado deescrituras. Y en la visita de 1769169, con fecha 11 de junio, se dice:

Archivo. Visto este, se hallaron en el todas las escrituras a favor delConvento menos las siguientes: …Ytt. otros varios papeles y cedulas deprivilegios.

167 AHCMC, Tomo 11, pág. 38/41. 168 AHCMC, Tomo 11, fs. 324 y 325. 169 AHCMC. Libro 32. Libro de visitas del Convento de Santa Fe, fs. 176.

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Del lugar en que se depositaban los libros de la biblioteca y los papelesdel archivo se habla en el inventario de 1776170.

En la octava vive el Reverendo Padre Maestro Fr. Andres Arias tiene dosmesas La una de ellas con un estante de libros del Convento y la otra decomer, tiene una tinaja y cuatro sillas su corral con su naranjo chino, unogrande y otro chico y su granado. // En la nona vive el PadreComendador Presentado fray Francisco Xacinto Frias tiene dos mesas unescaparatillo quatro sillas los dos depócitos de Redempción y Papeles,una cajuela pequeña, una frasquera con sus frascos, una tinaja, y sucorral con tres naranjos, y tres duraznos.

Antiguo Archivo Conventual de Buenos Aires.

Durante la reforma eclesiástica de Rivadavia, los documentos existentesen el archivo conventual pasaron a poder del estado nacional. Algunos yahan sido hallados en el Archivo Nacional, sobre otros pesa la duda si sequemaron en el año 1955, en el incendio de la Curia Episcopal de BuenosAires, como es el caso del siguiente documento:

Indice de los papeles y libros correspondientes al extinto Convento deRegulares Mercedarios de esta Ciudad, que por Superior disposicion de12 de Mayo ultimo se recibieron en el Archivo General para pasarlos alSeñor Proviçor Gobernador del Obispado. … Buenos Aires 31 de mayode 1823. Por disposición del Señor Colector. (Firmado) AntonioMartínez Jontes. Tengo el honor de pasar a Vuestra Señoría con elcorrespondiente Indice, los papeles y libros correspondientes alextinguido Convento de Mercedarios, con sequente a Superior Orden queseme comunicó en 16 de Abril ultimo cuio cumplimiento se ha diferidohasta el dia, por no haverseme remitido aquellos del Archivo Generaldonde existían. Dios Guarde a Vuestra Señoría. muchos años. BuenosAyres 26 de Junio de 1823 (firmado) Manuel José de la Valle . SeñorProviçor Gobernador del Obispado Dr. Don. Mariano Zavaleta. (Archivode la Curia metropolitana, Secretaría, Legajo 16, N 15, 1/2)171

La documentación estaba agrupada en un legajo de 8 escrituras, unsegundo legajo de 21 escrituras, un grupo de 6 expedientes, y un grupo de49 libros (redención, gastos, etc.) y las constituciones.

170 AHCMC, Tomo 8, ab initio. 171 TOLEDO, fray Bernardino. Estudios Históricos. Provincia Mercedaria de Santa Bárbara del

Tucumán. Tomo I. Córdoba, 1919, pág. 279/283.

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El Archivo del Convento Máximo de Córdoba.

La primera mención de la existencia del archivo del convento deCórdoba data de 1700172.

Nomina delas Escrituras y demas Papeles que están en el Archivo de esteconvento de San Lorenzo de Cordoba fecha por el Padre Maestro FrayFrancisco Sarza en el Año de 1700.

El segundo inventario encontrado sobre el contenido del archivo es de1710/12.173

Por esta memoria empezo el Padre Presentado fray Agustín Alvarez lasescripturas, y papeles segun ella se contienen en presencia de los PadresDepositarios y lo firme con dhos. Padres en quinze del mes de Diciembrede setecientos, y diez. Fr. [ininteligible] Aredes, Comendador; Fr PedroRoman, Depositario, y Presentado; Fray Pedro Robles de Puebla,Depositario.

Junto a las escrituras y papeles, figuran algunas obras literarias,mezclando material bibliográfico con archivístico.

La tercera mención que se encuentra entre los documentos del ArchivoConventual de Córdoba sobre su existencia, llega de 1777.

En el Libro de Inventarios, se lee: "Indice Gral. de todos losinstrumentos y escripturas que se hallan en nuestro Archivo"174.

Contenía en ese entonces de 16 legajos.Primer legajo, «enque se contienen todos los papeles pertenecientes a lastierras de Citon que oy son de Juan Blanco».Segundo legajo, conteniendo papeles pertenecientes a Juan Lopez Fiusa,varias escrituras referidas a Yucat, y otros documentos sobre la familia deSuárez de Figueroa.

Legajos 3 al 6, se encontraban capellanías y censos.Legajo 7, "todos los papeles pertenecientes a Manuel Alvares.

Legajo 8, contiene papeles pertenecientes al Convento de la Rioja y otrasescrituras.

Legajo 9, "todos los papeles pertencientes a Francisco Oyola"Legajo 10, "todos los papeles de Don Andres Ximenes de Lorca"

Legajo 11, "en forma de Libro se hallan las siguientes escripturas".

172 AHCMC, tomo 9. Papeles de Córdoba. En este libro las piezas no han sido numeradas, y figurabajo la página 102 y siguientes. En este tomo se recogieron las piezas dispersas y se encuadernarontodavía peor que las piezas de los tomos anteriores. Encontré en una de sus páginas esta nota escritapresumiblemente por el encuadernador improvisado, allá por los años 1880: "Habiendo encontradoeste libro con unas tapas extremadamente viejas nos ha parecido bien sacarselas e incertarlo en elcuerpo de este que componemos con el fabor de Nuestro Señor y suplicamos á los que esto leyerenque no se olvinden de rogar á Dios por el mas miserables de los hombres i que es el que eso escribei que Dios sabe sin necesidad que lo sepa otro".

173 AHCMC. Libro 19. Inventarios. Memoria adjunta al final del tomo. 174 AHCMC. Libro 19. Inventarios. Año 1777, pág. 49 a 57.

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Legajo 12, "de varios papeles del Orden".Legajo 13, "de varios papeles". Allí se encontraban, entre otros, papelespertenecientes a los síndicos de la redención.Legajo 14, "de Bulas Pontificias"

Legajo 15, "de varias Cedulas reales".Legajo 16, "en que se contienen las escrituras de la nueva y viejaranchería con resolución última del Cabildo; y la de las tierras del ornode ladrillo, con los recivos".

También habían documentos sueltos, entre los que se destacan "…unatado de informaciones de varios religiosos, y un libro de lo mismo… otrolibro de profesiones…" y algunos expedientes judiciales.

No puede dejar de destacarse que en la primera mitad del siglo XIX,debido a las prácticas "regalistas" que adoptaron buena parte de losgobiernos americanos y a su correlato "liberal" de los europeos, la Ordende la Merced prácticamente se extingue en todo el mundo. Debido a ello,sus fondos documentales quedaron a la buena de Dios.

En el inventario de 1846 se reflejan las consecuencias de lasTemporalidades en el patrimonio cultural eclesial175

… Yt. Siete Libros viegísimos sin brevete / Yt. Diez, y nueve librosmanuscriptos del convento / Yt. Un libro idem que trata de las cuentasdel Padre Finado Tizera / Yt. Dos quadernos de las cuentas de laadministración del Señor Otero, reparadas por dho finado porChanselaric / Yt. Un libro delas cuentas del referido Padre Tizera / Yt.Tres libros blancos, sin uso / Yt. La obra de Recopilación de Yndias, queexiste en poder del Doctor Villegas176 / Yt. La caja del Archivo, cuyaoperación no se ha hecho por estar todos los papeles, [ilegible] legajos,etcétera en tal desorden, que es imposible lo puedan arreglar treshombres en un mes.

A fs. 23 aparece una carta que transcribo a modo de ilustrar lasituación que se vivía por esos años.

Viva la Confederación Argentina!/Mueran los Salbajes Unitarios! //Cordoba, Diciembre 8 de 1846 / Año 37 de la Livertad, 31 de laYndependencia / y 17 dela Confedederación Argentina // Al ReverendoPadre Presentado Fr. Alejos Ruiz // Notificado del Supremo auto de 5 delcorriente consiguiente de el acta de fecha del día anterior, y obediente almandamiento del Supremo Gobierno en la parte que me corresponde,elevo al conocimiento de Vuestra Paternidad como encargado en él parael efecto, la relación fiel que a este adjunto de las Temporalidades delConvento de la Merced que actualmente se hayan en la Chacra delreferido Convento, advirtiendo Vuestra Paternidad para que asi se digneprevenirla si lo estiman justo y necesario a quienes corresponda que una

175 AHCMC. Legajo 191. Inventario practicado por el R.P.Fr. Alexo Ruiz de las temporalidades delConvento de la Merced el 14 de Diziembre de 1846, fs. 18.

176 ¡Ojalá algún investigador la pudiera hallar, para poder gestionar su devolución al Convento!

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parte media de los trabajos que alli existen [ininteligible] de algunosutiles, y del número de erramientas de mi propiedad, mediante elcontrato que tengo celebrado con la Venerable Comunidad de ese orden,como tambien por haber abonado la parte que a mi correspondióme porellos segun la liquidación practicada y que se haya al fin de la cuentageneral del año que administré los intereses de ese Convento, cuyasTemporalidades se han encontrado aun en mi poder en razon de que ni lacomunidad ni yo hemos resindido el referido contrato de modo algunolegal ni oficial. // También juzgo conveniente prevenir a VuestraPaternidad que cuando el Padre Fierro dise en el acta de cuatro del que(ininteligible) que en mi poder pasan documentos de la propiedad delConvento ha sufrido una crasa equivocasion pues no me han sidoentregados ningunos documentos por que no llego el caso de entregarmevajo de formal Ynventario todas las temporalidades ni aun algunas, ysolo sí tengo noticia privada que en la Caja del Erario del Convento sinllaves correspondientes desde veinte y tres de Enero de 840, hasta docede Noviembre de 845 en que yo se las hise poner pasaban algunoslegajos de Escrituras archivados por los Ynventariadores de lasTemporalidades del Convento en aquella primera epoca Dr. Dn. MiguelC. del Corro, D. Eduardo P. (inteligible) y D. Manuel SanchezMoscoso. // Dios guarde a Vuestra Paternidad Muchos más años. //Benito de Otero.

En esos años y en Córdoba, al decir de un visitador provincial, se habíaperdido la mayor parte del archivo.

Visita provincial del Padre Ruiz Vicario Provincial en 1862. Junio 17pasó a la biblioteca que tiene muy arreglada el P.Com. Villalón. Todas lasobras truncas y faltando muchas que empezaron a desaparecer en 1840…. Entonces se perdió también la mayor parte del archivo del conventoque tenía documentos importantísimos, –y por falta de ellos se metieronvarios pleitos al convento por los mismos ladrones–, y ha habido quehacer gastos enormes para sacudirse de esos malvados…177

Pero si comparamos el catálogo de 1881 con lo que existe actualmente,notaremos que las perdidas han terminado en forma casi definitiva. De1881 data una especie de catálogo, donde se anotan unos 355 documentos ylibros. Se intitula Archivo de este Convento Grande de San Lorenzo delReal y Militar Orden de Nuestra Señora de la Merced Redención deCautivos; practicado este catálogo el año 1881. En base a este catálogo de1881, que cita Tanodi en su Guía de los Archivos de Córdoba178, se elaboróun índice (totalmente desactualizado a la fecha) en 1936.

Cuando en 1886 el mercedario chileno Fray Benjamín Rencoret,visitador general, llegó a Córdoba, se metió de lleno en los documentos del

177 TOLEDO, fray Bernardino. Estudios Históricos, tomo III. Córdoba, 1921, pág. 103.178 TANODI, Aurelio. Guia de los Archivos de Córdoba. UNC, 1968, págs. 121 a 124. Vale la pena

recordar que en esa ocasión, los archivos eclesiásticos de Córdoba fueron relevados por el docente yex director de esta casa de estudios, profesor Alejandro Moyano Aliaga.

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pasado. Eran tiempos de reorganización religiosa, y había que buscarfuerzas y luces en las raíces.

Al fin llegué al término de mi jornada, Córdova, ciudad rica para lahistoria. Me sepulté en la biblioteca, i en el pequeño archivo delConvento he registrado papeles antiguos i nuevos, formando un indicepara mi uso, que ya cuenta más de 100 páginas. …Hai en nuestro archivoalgunos libros de provincia que arrojan bastante luz a la historia de losdocumentos inéditos sueltos. Hemos empastado siete [en lápiz: doce] consus indices, ayudado por dos hermanos coristas muy curiosos, González iAsíz.179

En el inventario conventual de 1897180 figuran 51 libros del archivo, queno deben confundirse con los de la biblioteca ya que éstos últimos semencionan aparte.

Libros del archivo…51. Estamos conformes con el presente inventariolevantado por el Reverendo Padre Comendador Fr. Vicente B. Osan, alterminar su gobierno. Convento máximo de Sn. Lorenzo Mártir.Noviembre 1° de 1897. Fr. José L. Torres, provincial.

En lo que respecta a la ubicación física del archivo, en el inventario de1777 encontramos un ítem que permite inferirlo.

Ytt. A la entrada de dha. porteria esta situado el Claustro regular que secompone de dies y seis seldas, la primera que suele servir a los PadresComendadores se compone de… otra mas… assi mesmo tiene otraselda…En otra celda se halla una mesa grande, una dosena de taburetes,una caxa del deposito de la Santa Redempción con sus tres serraduras,otra del Deposito comun del Convento con su cerradura, y llave y dosarmellas con sus candados; assi mesmo otra dha. antigua que solia servirdel deposito dela Santa redempción con sus tres cerraduras y llaves…"181

Digo que podemos inferir que allí estaba, primeramente porque habla detres arcas y los archivos mercedarios de ese siglo se depositaban en ellas;en segundo lugar, porque como veremos en el caso del archivo general dela provincia de Santa Bárbara del Tucumán, había sido destinada a él unaantigua caja de caudales de redención; y porque en ningún momento sedice que los papeles y escrituras estuvieran en la Biblioteca.

En este siglo, en el inventario de 1924 ya tiene un recinto propio182.Sala del Teléfono y del Archivo del Convento. …Un armario con varioslibros encuadernados de documentos pertenecientes al Convento: 1.

El índice que dispone el archivo data del 9 de julio de 1936. En élfiguran 170 libros encuadernados. Sin embargo, el número de ellosasciende a más del doble en la actualidad.

179 AHCMC. RENCORET, Benjamín. Crónicas Mercedaria Argentina (Borrador), pág. 56/57. 180 AHCMC, Libro 55, fs. 34181 AHCMC. Libro 19. Inventario 1777, pág. 36/37. 182 AHCMC. Inventarios. Año 1924, s/n.

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El Archivo General de la Provincia Mercedaria delTucumán

Hasta mediados del siglo XVIII, los superiores provinciales llevabanconsigo el arcón que contenía los documentos propios del gobiernoprovincial. Uno de los más ilustres escritores mercedarios, que fueratambién maestro general de la Orden en el siglo XV, refiriéndose alsuperior provincial establecía:

Pertenece al provincial …llevar consigo la Regla, los privilegios, lasactas de los capitulos, las actas del Maestro general bien corregidas.Copiarlas en todas partes, donde no las hay, siguiendo ese ejemplar.Donde existan leerlas y corregirlas diligentemente y hacerlas leer dondeparezca conveniente. ….183

La primera noticia que recogen los libros de actas capitulares sobre laentrega de libros de provincia por parte del provincial saliente [absuelto] alentrante [electo] data de 1728. Obsérvese que la entrega incluye el libro deprovincia del momento más otros tres «desde el primer provincial de estadicha Provincia».

En este convento de San Ramón de Buenos Ayres en veinte y nueve díasdel mes de octubre de mil setecientos y veinte y ocho años, el ReverendoPadre Presentado Fray Juan de Escobar ex Provincial entregó alReverendo Padre maestro Fray Joseph Valerio Valdivia VicarioProvincial de esta Provincia de Santa Barbara del Tucumán, Paraguay yRio de Plata del Ral y Militar Orden de Ntra Señora de MercedesRedención de Cautivos este libro de Provincia con otros tres mas desdeel primer provincial de esta dicha Provincia con los dos sellospertenecientes al oficio el maior de plata y el menor de bronse. Losmesmos que le entregaron a dho. Reverendo Padre Provincial Fray Juande Escobar, quando fue electo Provincial; todo lo qual resivio nuestroReverendo Padre Vicario Provincial, y mas una Bulla de nuestro muySanto Padre Benedicto dezimo tercio Aeternus aeterni Patris, unamemoria de los cauvitos que se redimieron el año de mil setecientos yveinte y seis, y la carta en que vino inclusa dicha memoria, su fechaveinte y siete de septiembre de 1726 por nuestro Reverendísimo PadreMaestro General Fray Gabriel Barbastro, los quales dos instrumentosestán rotos. Resivio también su PadreReverendo una carta circular queescribió Su Reverendísima a todos los prelados de estas Provincias delPerú su fecha catorce de diciembre de 1[ilegible]25 a.s la qual se leentrego manchada, mas un legaxo de papel manuscrito de catorse foxassin principio dificultoso de leer, que roto y mal escrito sellado con unsello, que no se puede conoser, y a mi el infrascripto secretario me

183 ZUMEL, Francisco. «De Initio ac Fundatione Ordinis», Salmanticæ, 1588, página 15. Citado porGARCIA SUÁREZ, Germán. «Teología de la vida religiosa en el maestro Francisco Zumel». En:Estudios. Madrid, julio setiembre 1989, núm. 166, pág. 45 (5 a 60).

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mando poner por diligencia, y para que conste lo puse assí, en dho. Diames y año, de que doy fee. = Y lo firmo su Paternidad con migo. Fr.Joseph Valerio de Valdivia y Alderete [rubricado] Vicario Provincial -Fray Pedro de Gamiz [rubrica] Secretario de Provincial184.

Siete años después encontramos otra entrega, pero esta vez en Jujuy. Esdecir, que los libros habían sido trasladados hacia esta ciudad norteña. Serepite el mismo asiento con respecto de los libros de provincia desde elprimer provincial.

En este Convento de Santa Anna de Jujui en quatro dias del Mes deHenero del año mil settecientos, y treinta, y sinco, Yo El Padre Lector dePrima, y Procurador General Fray Antonio Fernando Fereyra Abad, pordisposición del Reverendo Padre Presidente de Capítulo y Provincialabsuelto Fray Bernardino de Godoy, entregué al Nuestro ReverendoPadre Provincial Electo Maestro Fray Pedro Suárez de Torres este librode Provincia con otros tres mas desde el primer Provincial, y otro viejode varias cosas, que trata, donde ay sermones varios, y normas dePatentes, y otras curiosidades con los dos sellos pertenecientes al oficio,el mayor de plata, y el menor de bronze, una acta General, de NuestroReverendísimo Padre Gilaberte, y una Bulla de Benedicto 13, queempiesa Eternus Eterni Patris, y una casulla vieja de lana morada conestola, y manipulo, y ocho causas contra varios sujetos, que en ellass banexpresados, y para que conste mando su Paternidad Reverendísima alPadre Secretario de Probincia, lo pusiese por diligencia en dicho día, mesy año. Fray Pedro Suarez [rúbrica] Provincial Electo. Por mandato de suPaternidad Reverendísima Fray Juan de Leguizamo [rúbrica] PredicadorJubiliado y Secretario de Provincia185.

En 1743, el definitorio provincial decidió constituir en el Convento deBuenos Aires el archivo provincial.

En este Convento Grande de San Lorenzo de Córdova, en Veinte y seisdías del mes de octubre de mil setecientos y quarenta y tres años junto elDiffinitorio su Paternidad Reverenda de Nuestro Reverendo PadreProvincial electo fray Juan Miguel de Baldivia y Alderete, para conferiry determinar algunas materias que le parecieron precissas para el buenregimen y adelantamiento de la Provincia, y juntos y congregados con laasisstencia del Secretario de Provincia y se determinaron los puntossiguientes= // Primeramente. Determinó su Paternidad Reverenda ySanto Diffinitorio que se hiciesse y se pusiesse en el Convento Grande deBuenos Ayres Archivo de Provincia donde se guardassen vaxo de buenacustodia los libros antiguos de Provincia llevando solo con sigo losReverendos Padres Provinciales el que va corriendo de su tiempo, ydonde tambien se depositassen las causas, que se huviessen hecho, o sehiciessen judicialmente a los religiosos, libros y los de mas papeles, que

184 AHCMC. Actas Capitulares. 1728185 AHCMC. Actas Capitulares. Libro de capítulos, pág. 66

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se hallassen pertenecer no a los Conventos en particular sino a laProvincia en común186.

Por último, el definitorio provincial de 1754 ordenó que un arcónutilizado previamente para erario provincial fuera destinado para el archivoprovincial de Buenos Aires, para los libros antiguos de ella desde sufundación.

Actas del Sto. Dyffinitorio mandadas hazer por Nuestro ReverendísimoPadre Maestro General de todo Nuestro Sagrado Orden Fr. JuanCavallero, y establesimiento de sinco puntos que manda suReverendísima se establescan para el buen regimen dela Provincia yregular observancia. En este nuestro Convento grande de San Ramon deBuenos Ayres en dos dias del mes de octubre de mil setesientos sinquentay cuatro años su Paternidad Reverendísima de Nuestro Reverendo PadreProvincial Maestro Fr. Francisco Rodríguez de la Torre, en cumplimientodel Orden de Nuestro Reverendísimo Padre General hizo tocarsolemnemente a Difinitorio a efecto de establecer, y formar actas, para lamayor observancia y uniformidad en el govierno de nuestra Provincia yConbentos, y Juntamente imponer, y estableser los sinco puntos, que suReverendísima expidio para dha. regular observancia y es como se sigue:… Ytt. Ordena y manda Su Paternidad Reverendísima y SantoDefinitorio que respecto estar existente en este nuestro Convento Grandede Buenos Ayres un arca con tres llaves, que sirvio de erario de Provinciaquando le tubo, esta se aplique y dedique para Archivo general deProvincia en que se guarden los libros antiguos de ella desde sufundacion, y barias sumarias que ay en los archivos particulares denuestros Conventos como consta del libro de Provincia del tiempo delgovierno del Reverendo Padre en La Rioxa, y en el del tucuman, yasimesmo los demas papeles de Provincia que en ellos se hallaren, y quelas tres llaves de dho. Archivo general las tengan, la una el ReverendoPadre Provincial que es o en adelane fuere, la otra el Reverendo PadreComendador o Precidente de este Convento y la otra uno de losConventuales dando parte de ello al Reverendo Padre Provinciall187

186 AHCMC. Actas Capitulares de 1743. Libro 21, capítulo provincial.Disposiciones del definitorio de1743.pág. 111

187 AHCMC. Tomo 11, pág. 161y 164.

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7. B7. BOSQUEJOOSQUEJO DELDEL SISTEMASISTEMA PROVINCIALPROVINCIAL DEDE

ARCHIVOSARCHIVOS MERCEDARIOSMERCEDARIOS..

La utopía, punto de partida de este trabajo.

Llegados a esta altura de la exposición, alejamos nuestra mirada delpasado y del presente. Lo que nos ha movido es el empuje de los datosrecopilados, buena o malamente procesados. Nos encontramos ante unarealidad histórica, institucional y jurídica.

Para poder seguir avanzando es necesario cambiar de mecanismo. Elmotor no deberá empujarnos desde atrás sino atraernos desde adelante.Poniendo nuestros ojos en un futuro arduo pero posible, será la esperanza,la utopía, quien permita esbozar las bases para este sistema provincial dearchivos.

La esperanza, la utopía, es un preciado don que surge en ambientes deuna gran necesidad insatisfecha. La satisfacción de esa necesidad legitimael surgimiento de una institución específica. Pero, convengamos, laesperanza, la utopía, sólo pueden experimentarla quienes están inmersos enesa necesidad, ya sea padeciéndola o compadeciéndola. Por eso, el puntode vista con que se plantearán estas bases es el que se presume existe desdeadentro de la institución de referencia. No estarán en discusión,consecuentemente, los aspectos éticos, morales y religiosos, a menos queexpresamente se indique lo contrario.

Hagámonos primero una pregunta casi obvia. ¿Cuál es la necesidad quesatisfacen los archivos de la Orden de la Merced?

Respondida aquella, planteémonos otra que no lo es tanto. ¿Cuál es lanecesidad que satisfaría un sistema provincial de archivos para la ProvinciaMercedaria Argentina?

La razón de ser de los archivos mercedarios

En los archivos mercedarios descansan documentos que sonconsecuencia directa de su vida administrativa. Una buena administraciónrequiere tenerlos a resguardo para poder tomar decisiones oportunas o parabrindar certeza a los requerimientos de las autoridades eclesiásticas o

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civiles. Es decir, la existencia de los archivos mercedarios está fundada ennecesidades administrativas y jurídicas.

Pero para la Iglesia, sus archivos satisfacen una necesidad todavíamayor.

En una primera instancia permiten recordar cómo se expandió la fecristiana (nivel histórico).

... Las informaciones recogidas en los archivos, permiten lareconstrucción de las vicisitudes de la evangelización y de la educaciónen la vida cristiana188.

En una instancia más profunda, permiten al creyente reflexionar sobre laacción de Dios en la Historia (nivel espiritual).

Las motivaciones teológicas despiertan el interés y atención de lascomunidades cristianas en el cuidado de sus archivos. ... En los archivoseclesiásticos, como decía Pablo VI, se conservan las huellas del transitusDomini [paso del Señor] en la historia de los hombres189

La fe lleva a la acción. Los dos niveles anteriores se dan en un niveleminentemente reflexivo. El tercero, en cambio, tiene consecuenciasprácticas (nivel pastoral).

... Por tanto los archivos, con su patrimonio documental conocido ycomunicado, pueden llegar a ser instrumentos útiles para una inteligenteacción pastoral, puesto que a través de la memoria de los hechos se dauna mayor concreción a la Tradición. Además los archivos puedenofrecer a los pastores y a los laicos, mutuamente comprometidos en laacción evangelizadora, informaciones sobre diversas experiencias lejanasy recientes190.

Por último, para la Iglesia, los archivos son garantía de supervivenciainstitucional y agradecimiento de los fieles del presente hacia quienes losprecedieron.

... Una institución que olvida el propio pasado, difícilmente llegará aconformar su función entre los hombres que pertenecen a undeterminado contexto social, cultural y religioso. ...191.La conservación es una exigencia de justicia que nosotros hoy debemos aaquellos de quienes somos herederos. El desinterés por los bienesculturales es una ofensa a nuestros antepasados y a su memoria. Por tantoes justo que los …[Ordinarios] observen las disposiciones canónicas aeste respecto192.

188 CPBCI. Función pastoral de los archivos eclesiásticos. 1.1. Transmisión como momento de laTradición

189 Id., 1.2. Transmisión como memoria de la evangelización190 Id., 1.3. Transmisión como instrumento pastoral191 Id.192 Id., 3. Conservación de los Documentos de la Memoria

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Pero el patrimonio archivístico eclesial no es un bien que debapermanecer oculto celosamente en los anaqueles: es necerio transmitirlo atodos y utilizarlo193. Pasados los plazos de reserva, se convierte enpatrimonio archivístico universal.

«Los archivos, en cuanto bienes culturales, … con el paso del tiempoadquieren una dimensión universal, transformándose en patrimonio detoda la humanidad»194.

Por ello, los archivos eclesiásticos son instituciones informativas yformativas, factibles de transformarse en importantes centros culturales,contribuyendo eficazmente al desarrollo cultural de la sociedad y a laconstrucción de la paz universal195. Es más, en el pensamiento de lajerarquía, los archivos,

están llamados a desarrollar un papel de agencia cultural no sólo para losespecialistas del sector, sino también para estudiantes y jóvenesoportunamente preparados196.

Para el caso particular de la Orden de la Merced, los aspectos estudiadosanteriormente tienen significados particulares.

Desde el punto de vista administrativo y jurídico, los bienes deben seradministrados con una corrección especial y con un resguardo jurídicocuidadoso, ya que pertenecen por definición a los cautivos. Por ejemplo,una factura de servicio público que se pagara dos veces podría equivaler ala diferencia entre rescatar o no a un cristiano sudanés. Un pleito perdidopor el extravío de un contrato, implicaría un daño mayor todavía.

Los archivos mercedarios están llamados a ser lugar de reflexión parafrailes y laicos. Allí se resguarda la identidad mercedaria y subyacenmétodos aplicados en el pasado que bien pueden ser remozados en unasituación concreta.

Por último, son un acervo a ser usado decididamente contra una culturaalienante. Es una batalla cultural, ya que no sólo se trata de rescataroprimidos sino sobre todo que no surjan opresores ni oprimidos.

La necesidad de un sistema de archivos

Como se ha constatado, tanto históricamente como jurídicamente, laprovincia mercedaria dispone de numerosos archivos. Los hay a nivel decuria provincial como de conventos. Los colegios tienen sus archivos ytambién las parroquias y centros sociales. Pero todos ellos pertenecen a la

193 Id., 4. La valorización del Patrimonio Documental para la Cultura Histórica y para la Misión de laIglesia

194 Id., 4.1. Destino universal del patrimonio archivístico195 Id., 4.4. Formación cultural por medio del depósito documental196 Id., 4.5. Promoción de la investigación histórica

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misma persona jurídica, y de todos ellos se sustenta en su buenaadministración, seguridad jurídica y reflexión histórica. Es decir, queconstituye un conjunto.

Pero para que este conjunto pueda prestar un adecuado servicio a lainstitución que le dio surgimiento y de cuyo cuerpo institucional es parte,es necesario sistematizarlo, es decir, convertirlo en un

Conjunto organizado de cosas, ideas, medios, etcétera, que contribuyen aun mismo objetivo197.

Visto desde un enfoque sistémico, se trata de…un cierto número de elementos en interacción198

El término grecolatino systema (conjunto) deriva del verbo griegosynistemi, que significa reunir199.

Profundizando un ejemplo de las epístolas paulinas200, dentro delconjunto de órganos avocados a la digestión el esófago no puededesentenderse del estómago ni éste del hígado. Hay una serie deinterrelaciones, regidas por criterios funcionales, y adaptables a lascircunstancias externas e internas del conjunto. Estas interrelaciones, estoscriterios funcionales, esta adaptabilidad colectiva, es la que lo constituye ensistema.

Así ocurre también con los archivos eclesiásticos. Para que en conjuntopuedan cumplir con sus funciones, es necesario interrelacionarlos, dotarlosde criterios funcionales y criterios de adaptabilidad a las nuevascircunstancias. Es decir, sistematizarlos.

La UNESCO, a través de su Programa de Gestión de Documentos yArchivos (RAMP), refiriéndose a los archivos estatales, recomienda que

…En cualesquiera circunstancias será necesario crear una organizacióncentral, con funciones ejecutiva y de asesoramiento, que debe respondera un ministro encargado de la ejecución de una política nacionalacordada en materia de archivos …. En algunos países sería convenienteque el Archivo Nacional o al menos un Directorio individual incorporadoa él desempeñara estas funciones de coordinación, en algunos casos seríamás adecuado crear una autoridad ejecutiva aparte mientras que, enotros, donde sea constitucionalmente imposible contar con una direccióncentral, sería factible lograr cierta coordinación a través de un ConsejoAsesor debidamente constituido pero carente de poderes ejecutivos…201.

197 Diccionario del español actual. Grijalbo, Madrid, 1988198 cfr. BENABNFFY, Ludwig von. La Teoría General de Sistemas. FCE, México, 1982.199 ROMERO TALLAFIGO, Manuel. Archivística y archivos, pág. 296200 Cfr. Primera Epístola a los Corintios, capítulo 12, versículos 19 y ss.201 KETELAAR, Eric. Legislación y reglamentos en materia de archivos y gestión de documentos : un

estudio RAMP con principios rectores. Programa General de Información y UNISIST. París:Unesco, 1985, número 197(PGI-85/WS/) En adelante RAMP (PGI-85/WS/).

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También las autoridades civiles de la provincia de Córdoba reconocieronla necesidad de

instrumentar un sistema que coordine y unifique criterios para la reunión,procesamiento y conservación de los documentos e información obranteen los archivos públicos provinciales202.

Avanzando todavía más en la conceptualización, los legisladoresmunicipales de la ciudad de Córdoba establecieron la razón de ser delsistema correspondiente:

El Sistema Municipal de Archivos y Administración de Documentos(SIMARAD), que se instituye por la presente ordenanza tiene porfinalidad la sistematización y racionalización de la producción, elprocesamiento y la conservación de la documentación municipal paraobtener la máxima eficacia de los recursos documentales, promoviendola utilización óptima de la información203.

En el artículo siguiente especificaban la integración del mismo:Integran el SIMARAD todos los archivos pertenecientes a los distintosórganos del gobierno municipal, incluyendo los de institucionesdescentralizadas o autárquicas, cuando las hubiere204.

Es necesario reconocer que a nivel eclesial el panorama archivístico esmás complejo que a nivel estatal. Dentro del estado, la archivalíapermanecerá en su poder. En cambio, dentro de una provincia religiosa,parte de su archivalía pasará a otros ámbitos. La producida por los colegiosy centros sociales, en su mayor parte, irá finalmente a manos de lasautoridades civiles. La que tuvo origen en las parroquias, a manos de lasautoridades episcopales. Por eso todavía no se habla explícitamente desistemas de archivos eclesiásticos.

Pero sí se habla de concentrar archivos menores, lo que plantearelaciones y normas.

Respetando las competencias canónicas y civiles, habrá que pensartambién en la posibilidad de concentrar algunos archivos menores, si noestán suficientemente protegidos jurídicamente, en lugares centralessirviéndose incluso de diversos títulos o formas jurídicas…. La finalidadfundamental de esta concentración es la de salvaguardar la conservacióny uso del material archivístico para poder consultarlo y defenderlo205.

Por otra parte, al recomendar la CPBCI abrirse a una mentalidadmoderna en la gestión de los archivos, implícitamente está respaldando la

202 Ley 7687. Sistema Provincial de Archivo. Veto parcial mediante decreto 349/d/1988.203 Ordenanza 8344/87, vetada por decreto 2115-a-87, de creación del Sistema Municipal de Archivos

y Administración de Documentos (SIMARAD), artículo 2.204 Ibíd, art. 3.205 CPBCI. Función pastoral de los archivos eclesiásticos 2.1. Potenciación o institución del archivo

histórico diocesano

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adopción de medidas reconocidas como apropiadas por los organismosprofesionales.

A este propósito tal vez se tendría que adquirir una oportuna mentalidadde gestión de los archivos eclesiásticos conforme a las modernastecnologías206.

Esta moderna mentalidad de gestión implica reconocer que los archivosmercedarios, y su superestructuración sistémica, no están aislados. Losarchivos, como las personas, no son islas. En la Argentina bien sabemos lasconsecuencias de considerarnos como pertenecientes a una de ellas.Reconocer la realidad archivística circundante obliga a sentirse parteintegrante del maremagnum archivístico eclesial207. De ese reconocimientosurge con mucha naturalidad una red208 de cooperación con los otrosarchivos, sobre todo teniendo en cuenta el espíritu inquieto que animaactualmente a los archiveros. También, la necesidad de «organizar losarchivos de modo que existan unas líneas operativas comunes»209.

Dado que los archivos mercedarios son archivos eclesiásticos, adoptaresas líneas operativas comunes exige adaptar tanto la terminología comolos criterios organizativos a lo usual en el ámbito de la Iglesia.

Por ejemplo, cuando se habla de la edad de los documentos, a niveleclesial se consideran dos tipos de archivos: corriente210 e histórico211. Delarchivo intermedio no he encontrado referencias.

También el término archivalía es desconocido, usándose en cambiodocumento de archivo.212

Llegados a este punto, es necesario preguntarse sobre los archivos de laOrden de la Merced en la Argentina: ¿están adecuadamenteinterrelacionados?, ¿han sido reglamentados sus criterios funcionales?Como la respuesta es negativa, debemos concluir que la necesidad desistematizar el conjunto todavía no ha sido satisfecha.

Tres aspectos fundamentales para la construcción de este Sistema deArchivos es necesario analizar.

1. Los elementos del sistema: la red de archivos.2. El funcionamiento del sistema: las funciones del sistema.3. La programación del sistema, es decir, los pasos a dar paulatinamente

para llegar a su correcto funcionamiento.Pasemos, pues, al desarrollo de estos tres tópicos.

206 Id.207 cfr. CPBCI. Función pastoral de los archivos eclesiásticos. Número 2.4..208 ROMERO TALLAFIGO, Manuel. Archivística y archivos, pág. 297 y ss.209 Ibíd.210 Cfr. CPBCI. Función pastoral …2.2. Organización del archivo corriente211 Ibíd., 2.1. Potenciación o institución del archivo histórico diocesano212 CPBCI. Bienes culturales y familias religiosas. Roma, 1994. Introducción. La necesidad de

inventario catalogación. Roma, 1999, 2.2. El objeto.

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7.1. RED DE ARCHIVOS DE LA PROVINCIA MERCEDARIA

ARGENTINA

Conócese como red al conjunto organizado de elementos que se destinana un fin común. Se diferencia del sistema en que no se tienen en cuenta lasfunciones de esos elementos, sino tan sólo su ubicación estructural dentrodel conjunto.

Como una primera aproximación conceptual, puede decirse queRed de Archivos es un conjunto estructurado de archivos organizado parafuncionar en común213.

Cada archivo del conjunto constituye un nudo de la red. Lo primero queha de verse, pues, para construir esa red, es conocer los nudos o elementosque la compondrán.

Elementos actuales del conjunto de archivosprovinciales mercedarios

El Archivo Histórico de la Provincia MercedariaArgentina

La creación o la potenciación del archivo histórico –tal es el nombre conel que se lo designa en el código de derecho canónico– de una jurisdiccióneclesiástica es el pilar fundamental para la organización archivística de estaúltima.

En el caso de la Provincia Mercedaria Argentina no existe como tal. Haytres acervos documentales, uno en Buenos Aires, otro en Córdoba y otro enMaipú (Mendoza).

El primero de ellos, el de Buenos Aires, está depositado dentro de laBiblioteca Central Mercedaria, bajo el cuidado directo del cronista de laprovincia y del bibliotecario.

El segundo, el de Córdoba, tiene un ámbito propio, y en él «estádepositada la historia de la provincia», al decir del padre Brunet, quienademás de cronista desempeñó tareas de archivero y en ese carácter fueelegido como vicepresidente primero de la Asociación ArchivísticaArgentina en el período 1970/1972. Está a cargo de un archivero, quedepende jerárquicamente del secretario de provincia.

213 Cfr. Diccionario del español actual. Grijalbo, Barcelona, 1988, tomo 3, pág. 820.

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El tercero, el de Maipú, está bajo la responsabilidad del superiorconventual.

La centralización de los acervos culturales es conveniente, tal como lodejan ver las directivas eclesiales del último siglo. Para las constitucionesde la Orden también214.

El archivo histórico de la provincia es el corazón del sistema. Es él quienimpulsará a la acción a todos los demás integrantes del sistema y quienatraerá hacia su lugar definitivo los documentos de archivo, previa unaadecuada depuración.

Los organismos internacionales que rigen la actividad archivística comolos autores insisten en que la dependencia jerárquica de este órgano debeestar inserta lo más cerca posible de la máxima autoridad jurisdiccional.También sostienen la necesidad de una estabilidad en la conducción en lamateria. Por ello, la dependencia debe ser de un oficio –así se denominanen la vida religiosa los cargos para remarcar que no es un título honorífico–que no esté sujeto a las contingencias del momento y que tenga íntimarelación con la actividad propia de los archivos. La figura ideal es la delcronista de provincia. Necesariamente, el archivo histórico debe estar acargo de un profesional en la materia.

En cuanto al lugar de emplazamiento, sostengo que el más indicado esCórdoba, por las razones que paso a enumerar.

Históricamente es el único convento que durante los cuatro siglos deexistencia de la provincia argentina contó con presencia permanente de losfrailes.

Geográficamente es el convento importante más equidistante de losextremos de la provincia, con buenas vías de comunicación y alejado de lasfronteras.

Ambientalmente, posee características relativas superiores a las queofrecen la zona litoraleña y la zona precordillerana. Su humedad relativa noes tan elevada como la de la primera ni tan escasa como la de la segunda.La amplitud térmica es inferior a la de la segunda. Y la contaminaciónambiental es inferior a la de la primera, y en ocasiones a la de la segunda.

Si se me permite una digresión, una inquietud similar, basada enfundamentos geográficos y climáticos, ya fue planteada en diciembre de1812 por el diputado don José Manuel Vélez, en ocasión de elaborarse lasinstrucciones para los representantes cordobeses en la Asamblea GeneralConstituyente215.:

1o. Primero: que siendo máxima aberiguada por la política de todas lasnaciones cultas y puesta en práctica inconcusa para seguridad yconveniencia de todos los Estados, que ni la Armería Nacional, ni los

214 Cfr. Constituciones, número 194215 Actas Capitulares. Libros cuadragésimo quinto y cuadragésimo sexto. Archivo Municipal de

Córdoba, 1960, pág. 548 y 549

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Archivos Generales, ni tampoco los estudios y Universidades seestablezcan al peligro y visisitudes del labio o rivera del continente,donde se halla situada la Capital de las Provincias Unidas del Río de laPlata; que nada debe promoverse por infinitos motibos de congruenciapolítica con mas esfuerzo y ante todas cosas que estos tresprincipalisimos y dilicados establecimientos con la mas puntualformalidad en esta Ciudad de Cordova por ser la mas inmediata a ladicha Capital y la mas adecuada por muchas razones a fin de que pordisposicion y ordenes urgentes del Supremo Gobierno se pongan en estadistancia interior tan a proposito y sin riesgo los dichos establecimientoscuya elección debe apurarse con preferencia. ... 3o. Tercero: que por lasmismas consideraciones políticas y por las ventajas de un clima seco queno causa las ruinas irreparables de la humedad, se pretenda también laresolución, pronta del magnifico edificio de un Archivo Nacional conempleados, dotaciones, y Reglamentos pues estos y otros igualesestablecimientos deben anticiparse aun a la Constitución.

Culturalmente es una comunidad urbana que continuadamente prestóatención a sus archivos, y cuya universidad fue la primera en crear unaunidad académica para la investigación y enseñanza de la disciplinacorrespondiente.

Jurídicamente ofrece la ventaja de contar con títulos perfectos depropiedad, no sujetos a controversia como es el caso del convento deBuenos Aires.

Técnicamente se cuenta en la zona con la presencia de personas einstituciones dedicadas a la preservación y restauración de documentossobre soporte de papel, algunas de ellas vinculadas al Convento.

Tecnológicamente, se dispone de un dominio en Internet,www.merced.org.ar, diseñado y administrado desde el convento, quepermite, entre otros rubros, brindar y recibir información sobre el contenidode los archivos mercedarios.

El Archivo Corriente de la Provincia MercedariaArgentina

El buen funcionamiento del archivo corriente –tal como lo denomina elCIC–es esencial tanto para la vida institucional de la Provincia MercedariaArgentina como para preservar desde su nacimiento los documentos quetestimoniarán a las generaciones futuras las actividades de esta ordenreligiosa.

El archivo corriente de la Provincia funciona en la sede de la curiaprovincial, en Buenos Aires, a unas tres cuadras de la Plaza de Mayo. Estáen un segundo piso, bien protegido, bajo el cuidado directo de la SecretaríaProvincial.

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Ha sido trasladada a él la documentación existente en el Convento deCórdoba que pertenecía directamente al superior provincial y a su consejo.Se trata en general de la documentación producida algunos años después dela restauración de la Orden, es decir, posterior a 1870.

Los archivos económicos de la Provincia MercedariaArgentina

La administración de los bienes temporales de la Iglesia, tienden a estarbajo la jurisdicción directa de órganos colegiados. Las diócesis tienen suConsejo Económico Diocesano, las parroquias su consejo económicoparroquial, y las provincias religiosas sus comisiones económicasprovinciales. La Provincia Mercedaria Argentina no es una excepción, ypor ello toda la administración económica está centralizada en la ComisiónEconómica Provincial, más conocida como CEP.

Tanodi, en su Manual de Archivología Hispanoamericana, ubica a lasatisfacción de «las necesidades indispensables de alimenación, vestido yvivienda»216 dentro del ámbito económico, y los archivos de estasadministraciones los denomina Archivos Económicos. Por ello usaremos ladenominación de archivos económicos para los archivos dependientes de laCEP.

La CEP dispone de un archivo central en Buenos Aires, en la sede de laCuria Provincial, y dos archivos auxiliares. Uno en Córdoba, en una oficinaexterna al convento. Otro en Maipú, Mendoza, también en una oficinaexterna al convento.

Su funcionamiento es similar al de cualquier organismo deadministración económica.

Los archivos conventuales de la Provincia MercedariaArgentina

Cada convento dispone de un archivo conventual, donde se encuentranfundamentalmente documentos que revelan o hacen a su vida comunitaria.

Los archivos conventuales existentes en la actualidad son los deTucumán, Santiago del Estero, La Rioja, Maipú (Mendoza), Córdoba, LeónXIII (Córdoba), Buenos Aires, Gaona (Buenos Aires), Ranelagh (Provinciade Buenos Aires) y Gerli (Provincia de Buenos Aires).

En los archivos conventuales también se encuentran documentosprovenientes de asociaciones piadosas con espiritualidad mercedaria, talescomo movimientos juveniles y otras fraternidades mercedarias.

216 TANODI, Aurelio. Manual de Archivología Hispanoamericana . UNC, Córdoba, 1961, pág. 190

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Los archivos parroquiales de la Provincia MercedariaArgentina

Las parroquias a cargo de la Provincia Argentina son las de Tucumán,Santiago del Estero, La Rioja, Gaona, Gerli, Ranelagh, y la cuasi parroquiade León XIII.

La documentación que en ellas se produce está referidafundamentalmente a la identidad y estado religioso de los bautizados. Ytambién a la celebración de los sacramentos. Sus archivos revelan la vidade la comunidad parroquial.

A los fines de la sistematización de los archivos, es necesario destacar eneste punto que normalmente el superior del convento por lo generaltambién cumple el oficio de párroco217, con responsabilidad directa enambos archivos.

En los archivos parroquiales también se alojan, o deberían alojarse,documentos pertenecientes a asociaciones piadosas dependientesdirectamente de la jerarquía, tales como acción católica, movimiento descouts católicos, y otros similares.

El destino final de sus fondos es el archivo histórico de la jurisdiccióndiocesana correspondiente.

Los archivos escolares de la Provincia MercedariaArgentina

Las instituciones escolares, dependientes de la Provincia MercedariaArgentina, son quienes producen la mayor cantidad de documentación. Estaproducción y su conservación y utilización de la información estáclaramente reglamentada tanto por las autoridades educativas oficialescomo por las autoridades impositivas y previsionales.

Los institutos educativos dependientes de la Provincia Argentina estánubicados en Santiago del Estero, Maipú, León XIII, Gaona y Ranelagh.

El destino final de sus fondos es el que establecen las reglamentacionesoficiales en materia educativa y previsional.

Los archivos asistenciales de la Provincia MercedariaArgentina

Por último, hay un grupo de archivos que revelan la actividad asistencialde los mercedarios en la Argentina.

217 Cfr. Constituciones, número 227.

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Ubicados en zonas donde las condiciones mínimas para desarrollarse conla dignidad correspondiente a los seres humanos están lejos de satisfacerse,producen documentación referidas tanto al área de salud y de educaciónsanitaria, como a pequeños emprendimientos comunitarios.

Es un área especialmente sensible, y su documentación requierecuidados especiales. Por un lado muestra la lucha de los más oprimidos ensu búsqueda de condiciones adecuadas para vivir. Pero por otro lado, cadauna de estas vidas se desarrolla prácticamente fuera de las normas oficialessobre identidad de las personas: indocumentación, trabajo en negro,etcétera. Si se permite el ejemplo de un hielo flotante, estos centrosasistenciales constituyen a veces el único punto de contacto entre la partevisible de la sociedad y la sumergida.

Basados en lo dicho anteriormente, vaya a continuación una tabla deelementos actuales del conjunto de archivos provinciales mercedarios.

Elementos actuales del conjunto de archivos provinciales mercedariosCOMUNIDAD ARCHIVO DESTINO FINALCuria Provincial Corriente Provincia Argentina

Secreto Provincia ArgentinaHistórico Provincia Argentina

Comisión Económica Provincial Administración Central Buenos Aires Provincia ArgentinaAdministración Córdoba Provincia ArgentinaAdministración Mendoza Provincia Argentina

Córdoba Convento Provincia ArgentinaHistórico Provincia Argentina

La Rioja Convento Provincia ArgentinaParroquia Obispado de La Rioja

Santiago del Estero Convento Provincia ArgentinaParroquia Obispado de Santiago del EsteroColegio Ministerio de Educación Provincial

Maipú (Mendoza) Convento Provincia ArgentinaHistórico Provincia ArgentinaColegio Ministerio de Educación Provincial

Gaona (Capital Federal) Convento Provincia ArgentinaParroquia Arzobispado de Buenos AiresColegio Ministerio de Educación Provincial

León XIII (Córdoba) Convento Provincia ArgentinaColegio Ministerio de Educación ProvincialCuasi parroquia Arzobispado de CórdobaCentro Social Provincia Argentina

Tucumán Convento Provincia ArgentinaCentro Social Provincia ArgentinaParroquia Arzobispado de Tucumán

Ranelagh (Buenos Aires) Convento Provincia ArgentinaParroquia Obispado de Lomas de ZamoraCentro Social Provincia ArgentinaColegio Ministerio de Educación Provincial

Gerli (Buenos Aires) Convento Provincia ArgentinaParroquia Obispado de ...

Convento Grande de San Ramón(Capital Federal)

Convento Provincia Argentina

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Red de archivos

Conocidos los elementos existentes, puede establecerse un proyecto dered de Archivos.

Podemos distinguir, pues, cinco cuerdas donde se establecerán estosnudos. Estas cuerdas, al establecerse sus funciones, constituiránsubsistemas.

Cada una de ellas a su vez estará anudada a la cuerda matriz de la red: elarchivo histórico.

Las cuerdas o subsistemas son las siguientes:- Central- Local- Escolar- Parroquial- Asistencial

En el gráfico siguiente podrá observarse la red, figurando al lado de cadaarchivo un código tentativo del mismo, y el tipo de archivo a quecorresponde.

Red de Archivos de la Provincia Mercedaria ArgentinaArchivo Histórico de la Provincia Mercedaria Argentina 001 HistóricoCentrales Conventuales Escolares Parroquiales AsistencialesCuria Pro-vincial

101 Corriente Curial

Buenos Aires

201 Conventual

102 Secreto Curial

Córdoba 202 Conventual

CEPBuenos Aires

103 Económico La Rioja 203 Conventual

La Rioja 401 Parroquial

CEPCórdoba

104 Económico Santiago 204 Conventual

SanPedroNolasco

301

Colegial

Santiago 402 Parroquial

CEPMaipú

105 Económico

Maipú 205 Conventual

P. Váz-quez

302

Colegial

Gaona 206 Conventual

Gaona 303

Colegial

Gaona 403 Parroquial

León XIII

207 Conventual

LeónXIII

304

Colegial

Cuasi Parro-quia León 13

404 Parroquial

CentroSocial

501

Asisten-cial

Tucumán 108 Conventual

Tucumán 405 Parroquial

CentroSocial

502

Ranelagh 109 Conventual

Rane-lagh

205

Colegial

Ranelagh 406 Parroquial

CentroSocial

503

Gerli 110 Conventual

Gerli 407 Parroquial

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7.2. ORGANIZACIÓN DEL SISTEMA.

Enumeración de tópicos a tratar.

Puestos en marcha para la elaboración de este sistema, en una primerainstancia, «estática», enumeraremos los aspectos básicos que deberían sercontemplados.

Reiteremos el objeto material de la archivología: el Documento dearchivo.

El objeto formal de la misma disciplina es el Archivo, considerado comosistema de relaciones entre documentos y grupos de documentos.

Visto ya desde la teoría general de sistemas, el objeto formal es elSistema de archivos, considerado como un grupo de archivosinterrelacionados.

Tenido en cuenta esto, todo lo que se haga deberá ser realizado paragarantizar la supervivencia del mismo y del testimonio e información quepueda brindar.

Para lograr lo dicho anteriormente se han de contemplar tres instanciasbásicas.

La primera es un marco conceptual y normativo.La segunda estriba en la puesta en marcha de un grupo de órganos para

la conducción del sistema.La tercera consiste en las funciones que cubrirá el sistema. Este tópico se

subdivide en cuatro áreas de servicio: servicio del documento, servicio dela información, servicio de evaluación documental y servicio de extensióncultural.

El esquema de los tópicos a tratar es el siguiente:1. Marco conceptual y normativo del sistema

- Definiciones conceptuales.- Definiciones normativas sobre documentos y archivos:

inalienabilidad, imprescriptibilidad- Protección jurídica y sanciones. Necesidad de un reglamento

tipo.2. Órganos del sistema

- Conducción del sistema- Responsable jerárquico, directo y técnico del sistema.- Subsistemas que lo integran.- Personal del sistema

3. Servicios del sistema- 3.1. Servicio del documento

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o Diseño y tratamiento administrativo de documentos.o Conservacióno Clasificación y ordenación

- 3.2. Servicio de la informacióno Procesamiento de la informacióno Accesoo Reprografía

- 3.3. Servicio de evaluación documentalo Evaluacióno Eliminacióno Transferencia

- 3.4. Servicio de la comunicacióno Extensión culturalo Formacióno Inspección

Entremos, pues, a desarrollar estos tópicos, vistos desde la instituciónobjeto de este trabajo.

7.3. DEFINICIONES CONCEPTUALES Y NORMATIVAS

Definiciones conceptuales.

El primer tópico a tratar es el relacionado con las definicionesconceptuales. Dada la complejidad y variedad del objeto de la disciplinaarchivística, es preciso acotarlo, para poder construir sólidamente lasestructuras mayores.

Documento mercedario. Todo elemento que constituya un soporteinformativo con capacidad de testimoniar un hecho, producido, recibidoo relacionado con las funciones y actividades de la Orden de la Merced.Documentación mercedaria: conjunto de documentos mercedarios

Documentación de archivo (archivalía) mercedaria: documentaciónmercedaria capaz de ser conservada con fines culturales o científicos másallá del cumplimiento de la función inmediata que originó su creación.Archivo mercedario: estructura orgánica destinada a recibir, conservar yrecuperar documentos mercedarios, y/o brindar información sobre ellos.

Archivo corriente mercedario: estructura orgánica destinada arecibir, conservar y recuperar documentos mercedarios en edadadministrativa, y/o brindar información sobre ellos.

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Archivo histórico mercedario: estructura orgánica destinada arecibir, conservar y recuperar documentos de archivo mercedarios,y/o brindar información sobre ellos. Archivo secreto mercedario: estructura orgánica destinada arecibir, conservar y recuperar documentos mercedarios que por sucarácter reservado están bajo la tutela directa del ordinario.

Sistema de archivos mercedarios: conjunto interactivo de archivosmercedarios, cuya finalidad es racionalizar tanto la producción,procesamiento, conservación y recuperación de la documentaciónmercedaria, como el suministro de la información contenida en ella.

Definiciones normativas sobre documentos yarchivos.218

El reglamento que se dicte oportunamente debe reconocer en primerlugar

«el carácter fundamental de la relación de los documentosgubernamentales como instrumentos de rendición de cuentas a lacomunidad provincial, prueba de los derechos y obligaciones, fuente deinformación sobre asuntos que entrañen la administración y gobierno;conserva el patrimonio de la comunidad provincial según se evidencia enlos documentos; y proporciona la autoridad exclusiva para desempeñarlas funciones y responsabilidades relacionadas con la gestión de archivosy documentos sobre una amplia base gubernamental.219»

También debe reconocer el carácter institucional del sistema, como concentradora de los documentos provinciales cuyo valor espermanente para conceder autonomía suficiente para su proteccióncontra la injerencia política, incluida la inamovilidad del responsable delorganismo, la protección a sus empleados y el control de lasinstalaciones, equipos y recursos del organismo220.

La normativa recogerá la inserción jerárquica del sistema en la estructuraprovincial, otorgando la suficiente autoridad y autonomía a sus órganos deconducción en las áreas de su competencia, y estableciendo mecanismosmínimos de presupuesto propio.

Los órganos de conducción del sistema deberán ser facultados paraprescribir y hacer cumplir las reglas; reglamentos y normas relacionadascon la gestión de los documentos gubernamentales221

218 RAMP (PGI-85/WS/), 196.219 Cfr. Ibíd, párrafo I220 Cfr. Ibíd, párrafo 2221 Cfr. Ibíd, párrafo 8

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Las normativas que emitan deberían contemplar mínimamente lossiguientes tópicos222.

- responsabilidad de los registros- calificación profesional y capacitación- creación de documentos, incluidos la gestión de formularios,

normas en lo tocante a los medios de información, equipos ysuministros, gestión burocrática

- clasificación; los planes para el trabajo de clasificación pueden seraprobados por el Archivo Nacional

- clasificación de seguridad- ordenación y descripción de los documentos- consultas y préstamos (comunicación de documentos y archivos)- reprografía- gestión de documentos vitales- conservación

Esta reglamentación es conveniente hacerla pública, tal como lorecomienda la Comisión Pontificia para los Bienes Culturales de la Iglesia.

Dado el interés universal que deben suscitar los archivos, es oportunoque cada reglamento se haga público y que las normas, en cuanto seaposible, se armonicen con las del Estado, subrayando así el comúnservicio que los archivos pretenden dar. / Además de la reglamentacióndel archivo diocesano es oportuno que se establezcan también directivascomunes para el uso de los archivos parroquiales, cumpliendo las normascanónicas. Análogamente pueden otros archivos determinar sus propiasnormas para evitar incumplimientos en el registro de datos o en laentrega de documentos. Esta coordinación puede favorecer una posibleinformatización de los datos a nivel diocesano, lo cual permitirá unavisión global y estadística de toda la acción pastoral de una determinadaIglesia particular. / Puede ser oportuno concertar dicha reglamentacióncon archivos de otras instituciones eclesiásticas, especialmente con lospertenecientes a institutos de vida consagrada y con los de las sociedadesde vida apostólica, respetando las propias autonomías223.

Las normativas también deben recoger aspectos técnicos. Pero estosaspectos técnicos es conveniente que no sean recogidos por la normativageneral, sino que se incluyan en las normas particulares dictadas por losórganos de conducción del sistema, a fines de brindar mayor agilidad a latarea. Los aspectos particulares los iremos brindando a medida quedesarrollemos los servicios del sistema.

222 RAMP (PGI-85/WS/), número 201.223 CPBCI. Función pastoral de los archivos eclesiásticos, número 4.2.

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7.3. ÓRGANOS DEL SISTEMA

Como presupuesto fundamental del sistema se ha de tener la menorasignación de recursos económicos y humanos. Esto no sólo por razones depobreza propios de la vida religiosa, sino también por una más que sólidacondición de supervivencia del proyecto.

Conducción del sistema

Órgano Atribuciones Oficio Tareas propiasArchiverode Provincia

Dirección del Sistema Encargado del Archivo Histórico Tareas propias de la dirección delsistemaTareas propias de laadministración del sistema

ComisiónAsesora delSistema

Órgano consultivo y deaprobación de todas las normas deprocedimiento que se emitansobre documentación einformaciónSe reúne periódicamente paradeliberarEleva propuestas sobrenecesidades

Secretario de Provincia responsable directo de la gestiónadministrativa de los documentosde los subsistemas provincial,conventual y asistencial

Delegado Provincial de PastoralParroquial

responsable directo de la gestiónadministrativa de los documentosdel subsistema parroquial

Delegado Provincial de PastoralEducativa

responsable directo de la gestiónadministrativa de los documentosdel susbsistema escolar

Responsable institucional, jerárquico, y directo delsistema.

Superior Provincial: responsable institucional. Como ya se ha visto,tanto el derecho canónico como las constituciones de la Orden de laMerced hacen responsable al superior mayor de los archivos de sujurisdicción.

Cronista de la Provincia: responsable jerárquico. Dentro de uninstitución, el destino de los archivos no puede estar sujeto a los avatares dedecisiones del momento. Por ello, la dependencia del sistema convieneconstituirla a través de una función que por un lado sea respetada y por otrolado esté más al margen de las contingencias que el resto de la institución.La función y la figura más adecuada parece ser la del Cronista de laProvincia, delegado a su vez del Instituto Histórico de la Orden de laMerced, responsable ad hoc del patrimonio cultural de la Merced. ElSistema de Archivos estará ubicado dentro de un Sistema de BienesCulturales de la Provincia, junto con las Bibliotecas y Museos.

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El Archivero de la Provincia será el responsable directo del sistema.Tendrá bajo su inmediato cuidado el archivo histórico de la Provincia, yadministrará el Sistema en común acuerdo con la Comisión Asesora delSistema. Conviene que el oficio tenga carácter de vitalicio, tal como loreconocían las constituciones del padre Valenzuela en el siglo XIX, alreferirse al archivero general224.

… Para el cargo de Archivero general es preciso que se elija a unreligioso verdaderamente docto, gran estudioso de la antigüedad y de laHistoria de la Orden, el que debe durar en el oficio toda su vida.

El Secretario de Provincia, por su parte, será el responsable directo dehacer cumplir las normas sobre gestión administrativa de los documentos.

Subsistemas que lo integran

El sistema está integrado por cinco grandes subsistemas, ya vistos alestructurar la red de archivos.

1. Subsistema central. El subsistema central está compuesto por losarchivos que dependen directamente del gobierno provincial mercedario.Sus documentos necesitan permanecer a disposición inmediata delordinario provincial y de su consejo, reteniéndolos durante un período muygrande.

2. Subsistema conventual. El subsistema conventual está compuesto porlos archivos de cada convento. Sus documentos no es necesario que seanretenidos por períodos grandes, siendo conveniente su transferenciatemprana al Archivo Histórico, por razones de conservación

3. Subsistema educacional. Este subsistema comprende a todos losarchivos escolares dependientes de la institución. Buena parte de estosdocumentos pertenecen en última instancia a las autoridades educativas. Esdecir, provienen de la Orden de la Merced y pertenecen en última instanciaa las autoridades educativas.

4. Subsistema parroquial. Este subsistema comprende a todos losarchivos de las parroquias atendidas por la Orden de la Merced. Como en elcaso anterior, buena parte de estos documentos pertenecen de última a otrasautoridades; en este caso, al ordinario del lugar (obispo). La transferencia alArchivo Histórico Diocesano debe ser acordada con las respectivasautoridades.

5. Subsistema asistencial. Este subsistema comprende todos los archivosde las obras asistenciales encaradas por la Provincia Mercedaria Argentina.

224 Cfr. Regla y Constituciones de la Celestial, Real y Militar Orden Redentora de la BienaventuradaVirgen María de la Merced. Roma, 1895. (Constituciones de Valenzuela) Edición en castellano de laProvincia Mercedaria de Chile, en 1933 Distinción Novena. Capítulo VII. De los archivos que sehan de tener en la Orden. Número 928 in fine..

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Por su naturaleza accidental, pueden constituir fondos cerrados en períodosno muy largos.

Personal del sistema

No habrá mayores erogaciones en cuanto al personal del sistema, ya quelos documentos en etapa administrativa estarán al cuidado del personaladministrativo existente en cada subsistema.

- Administrativos de la curia provincial- Secretario conventual- Secretarios de los colegios- Secretario parroquial- Administrativos de los centros asistenciales.

Es conveniente, de acuerdo a las últimas orientaciones de la ComisiónPontificia para los Bienes Culturales de la Iglesia, delegar en elvoluntariado convenientemente especializado la realización de tareas degran volumen.

Y para otras tareas suplementarias que requieran de profesionalesarchiveros se podrá recurrir a la tercerización de algunos servicios.

Todo lo atinente al personal del sistema deberá ser contemplado por lanormativa que se dicte225

7.5. SERVICIOS DEL SISTEMA

Servicio de diseño y tratamiento administrativo dedocumentos.

El primer servicio que brindará el sistema será coordinar con todos losestamentos administrativos –entiéndase administrativo en el sentido que sele viene dando en este trabajo– la elaboración racional de documentos, y eltratamiento que han de recibir a lo largo de su vida.

La elaboración de documentos necesariamente precisa de un acuerdoentre los órganos de administración y el sistema de archivos; en periódicasreuniones entre la dirección y la comisión asesora del sistema. Son losórganos administrativos quienes experimentan la necesidad de documentar

225 Cfr. RAMP (PGI-85/WS/). 212. Es de suma importancia que la legislación siente las bases para laexistencia de reglamentos detallados para la contratación, nombramiento, promoción, calificaciónprofesional y capacitación del personal de archivos.

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alguna información, y desde el sistema de archivos no se puede ordenarcuáles son los documentos que han de crearse. La jurisdicción para crearloso no pertenece a la administración, y los profesionales más idóneo paradictaminarlo son los del área de las ciencias administrativas y jurídicas(vgr. Administradores y abogados). Pero como se trata precisamente dedocumentos, y el archivero es un profesional de las ciencias de ladocumentación, tiene incumbencia precisa para señalar la conveniencia oinconveniencia de crear tal o cual documento, sobre tal o cual soporte, contal o cual medio de escritura. Por eso se plantea como un servicio. Y si pesea todas las advertencias profesionales la administración decide la creaciónde un documento, el archivero a cargo del sistema deberá implementartodas las medidas que le incumban para servir a ese documento hasta elfinal de sus días.

Los criterios orientadores básicos en cuanto a la creación de documentosque se proponen son los siguientes:

- Documentar sólo lo necesario. Es decir, sólo aquello que necesiteguardarse como testimonio administrativo.

- Documentar con sentido institucional. Es decir, pensando en labuena marcha de la institución, y no en intereses ajenos a ella. Porejemplo, no pueden aceptar las autoridades de la institución laelaboración indiscriminada de informes destinados al merolucimiento personal. Y en sentido contrario, tampoco sería lógicolevantar actas de sesiones de consejo en hojas sueltas, o cuando elsecretario tuviera ganas de hacerlo. Al documentar con sentidoinstitucional se lo hará consiguientemente pensando también enlos archivos.

- Documentar en relación al tiempo de validez del testimonio. Esdecir, previendo el lapso durante el cual un documento prestarátestimonio de una actividad. Por ejemplo, un parte de sancionesescolares debe ocupar el menor espacio posible y no necesita unsoporte de tanta calidad ni un medio de escritura tan perenne comoel registro donde se vuelque la información de este parte.

- Documentar pensando en las generaciones futuras. Es decir,tratando por todos los medios que la información esencial de lainstitución llegue testimoniada lo más lejos posible en el tiempo,cuidando esos documentos con las mayores precauciones desde elmomento mismo de la elección del soporte y los elementos deescritura previos a su confección. Ello sin descuidar la elecciónadecuada tanto de la persona encargada de su redacción como lade aquella encargada de su escritura. Luego de la confección deldocumento, es conveniente que quienes accedan a él y quienesestén encargados de su guarda lo hagan pensando en lasgeneraciones futuras, evitándole riesgos innecesarios. También

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este tópico exige documentar bajo distintos tipos de soportes. Porejemplo, del acto de inauguración de un establecimiento escolarno pueden quedar solamente los testimonios escritos, sino que seránecesario documentos fotográficos y videográficos. Para elprimero de los casos, será oportuno contratar a un buenprofesional de la fotografía, pidiéndole además de las fotografíasen color, algunas copias en blanco y negro [tomadas de negativosblanco y negro o incluso de negativos color] procesadas conrigurosa responsabilidad sobre excelentes papeles sensibles ydonde la eliminación de tiosulfatos y otros compuestos activos seaprácticamente total. Para el segundo de los casos, el documentovideográfico deberá ser posteriormente volcado sobre soportes delectura óptica como el actual dvd.

Terminado el tópico de la elaboración del documento, se le plantea alautor la necesidad de buscar términos adecuados, que no son precisamentesinónimos, para referirse a lo que hace una institución con sus documentosantes de ponerlos a disposición de la sociedad.

El primero es gerenciamiento de documentos. En inglés se usafrecuentemente el término management. El verbo originario, to manage,significa controlar, gerenciar. Gerente, gerenciar, tienen por raíz alparticipio presente gerens, gerentis, que significa el que dirige. Provienedel verbo latino gero, geris, que significa dirigir. También tiene significadosemejante a conducción, que proviene del latín con-ducere, que significallevar con uno de un lugar a otro.

El segundo es gestión de documentos. Gestión proviene del participiolatino gesta, que significa hechos, sucesos señalados. Este participiotambién proviene del verbo gero, pero tiene connotaciones más amplias yprofundas que gerenciamiento, ya que se dirige a la existencia misma(hechos, sucesos) del documento. Gestio, gestionis equivale a laprocuración del documento.

El tercero es administración de documentos. Creo que éste es el másadecuado en un sistema como el propuesto. Administración y servicio soncasi similares; como ya se ha visto el administrador es en el fondo unservidor, un sirviente del documento.

Pero en este servicio del documento, el archivero tiene el derecho y eldeber de procurar que se brinde a su servido el tratamiento que lecorresponde. Por eso, la dirección del sistema estará dotadaestatutariamente de las facultades necesarias para establecer normas deprocedimiento y principios rectores para el tratamiento administrativo deldocumento y para capacitar técnicamente al personal administrativo de lainstitución.226

226 RAMP (PGI-85/WS/), número 200

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Las normas que se dicten nacerán del consenso, a fin de garantizar laeficacia en la administración de documentos. Por ello las normas deberánresponder a necesidades concretas, ser fáciles de aplicar, precisas en suredacción, fáciles de aceptar por los encargados de cumplirlas, y fácil deaplicarse en distintas circunstancias227.

La instauración de esas normas reconoce algunas etapas: reconocimientode la necesidad a cubrir, preparación de un anteproyecto y su estudio portodos los estamentos del sistema, redacción de un proyecto,experimentación del proyecto y homologación del texto de la norma228.

El estatuto del sistema deberá prever también el derecho de inspección, yla facultad de solicitar sanciones para quienes transgredan las normasemanadas del sistema229. El momento más adecuado para la inspecciónordinaria es en ocasión de las visitas canónicas que hacen el superiorprovincial o el maestro general230.

Servicio de Salud de Documentos y Archivos

Una de los servicios que debe garantizar el sistema es «la custodiasegura en edificaciones y condiciones ambientales adecuadas» de todos losfondos que lo integran, más allá del tipo de documentos que contengan. 231

La dirección del sistema es quien actualizará permanentemente lasnormas destinadas a conservar232 en buen estado de salud a los documentosy a los archivos que lo integran; y a recuperarla233 cuando haya sidoafectada.

La buena salud de los documentos eclesiásticos:algunas consideraciones sobre su conservación.

En el caso de la Iglesia, el cumplimiento de su labor pastoral ha llevadoa la búsqueda de medios para transmitir el mensaje evangélico.

Desde el punto de vista formal, los medios más comunes han sido lossignos usados por las comunidades a evangelizar, los que adquieren unanueva significación. Es lo conocido como "resignificación"234, en que a un

227 Cfr. ROMERO TALLAFIGO, Manuel. Archivos y ...., pág. 315 y 316.228 ROMERO TALLAFIGO, Manuel. Archivos..., pág. 316.229 RAMP (PGI-85/WS/), número 202.230 Constitucione, número 323, § 5 al 8.231 Cfr. RAMP (PGI-85/WS/), 194, §i..232 En términos archivológicos, son tareas de conservación y preservación.233 En términos archivológicos, se habla de restauración.234 Algunos detractores de la labor eclesial denominan a esta tarea como "piratería semántica".

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hecho cultural se le asignan nuevos contenidos. Esto ya era usado por elpueblo judío, cuyo caso más patente es el de la Pascua. Una fiesta pastoril,que coincide con una celebración agrícola, es revestida de un significadoliberador. Ejemplos eclesiales sobran, y entre ellos uno de los más notorioes el de la Navidad, que en su etapa pagana era la celebración del solsticiode invierno por parte de los romanos; y el del pino usado en la misma fechapor san Patricio para la evangelización de Irlanda.

Esa búsqueda de medios también incluyó la invención de sistemas deescritura, como es el caso del alfabeto diseñado por un obispo paraevangelizar a un pueblo bárbaro al norte del Rhin235.

Desde el punto de vista del soporte, la variedad de ellos usados en esteproceso es enorme. Se adaptan a cada cultura y a cada tiempo, por lo queesta circunstancia exige a los archiveros eclesiásticos una amplitud decriterios que pone a prueba, a veces en forma drástica, los conocimientosacadémicos adquiridos.

Dada la variedad de soportes y sistemas de escritura, la conservación deestos documentos que testimonian la tarea de la Iglesia requiere de criteriosespecíficos para cada uno de ellos.

A partir de la Guía de Normas, Prácticas Recomendadas y Literaturade Referencia Relativa a la Preservación de toda clase de Documentos236,preparada por la Unesco, puede elaborarse la siguiente división de lossoportes documentales.

- Soportes de escritura y lectura directa: papel, pergamino, papiro yotros

- Soportes de escritura indirecta y lectura directa: fotográficos ymicrofotográficos

- Soportes de lectura indirecta mecánica: discos fonográficos ytarjetas de verificación

- Soportes de lectura indirecta magnética: diskettes, cintas de audio,películas de video,

- Soportes de lectura indirecta óptica: cdrom, dvdrom, cd- Soportes virtuales: correos electrónico, páginas web,

publicaciones electronicas.No está dentro del alcance de este trabajo hacer un pormenorizado

detalle de las conductas ambientales a seguir. Tan sólo puntualizar que ladiversidad de documentos implica una diversidad de precaucionesambientales, de acuerdo al soporte de que se trate.

235 El dato fue proporcionado en clase de Paleografía, y hasta el momento no he podido lograr mayoresdetalles.

236 UNESCO Memory of the World Programme. A guide to Standards, Recommended Practices andReference Literature Related to the Preservation of Documents of All Kinds. Traducido por elalumno desde www.unesco.org/webworld/mdm/administ/en/guide/guidetoc.htm

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Para graficar esta diversidad incorporo a continuación una lista denormas estandarizadas y requerimientos mínimos para las primeras cincoclases.

Requerimientos ambientales mínimos que debenobservarse para las distintas clases dedocumentos

Soportes de escritura y lectura directa: papel,pergamino, papiro y otros

Estándares a observar en soporte papelISO NP 11799 Requerimientos de almacenamiento para materiales de archivo y biblioteca ISO WD 11108 Papel de archivo. Requerimientos de permanencia y durabilidad ISO/TC46 SC10 Requerimientos de almacenamiento para materiales de archivo y biblioteca ISO/TC46 SC10 Requerimientos para encuadernaciónde libros, periódicos, series y otros documentos de papel

para archivos y bibliotecas. Métodos y materialesISO DIS 11800 Información y documentación- Requerimientos para materiales de encuadernación y métodos

usados en la manufactura de librosISO CD 14416 Requerimientos para encuadernaciónde libros, periódicos, series y otros documentos de papel

para archivos y bibliotecas. Métodos y materiales

Soportes de escritura indirecta y lectura directa:fotográficos y microfotográficos

Condiciones climáticasTipo de soporte Temperatura Amplitud

térmicadiaria

Amplitudtérmicaanual

Humedadrelativa

Amplituddiaria de lahumedadrelativa

Amplitudanual de lahumedadrelativa

FOTOGRAFIA Negativos <18 ±1 ±2 30%-40% ±5% ±10%Copias blanco y negro <18 ±1 ±2 30%40% ±5% ±10%Película nitrocelulósica <11 ±1 ±2 30%40% ±5% ±10%Negativos color <2 ±1 ±2 30%40% ±5% ±10%Diapositivas color <2 ±1 ±2 30%40% ±5% ±10%Copias color <2 ±1 ±2 30%40% ±5% ±10%CINE Pelicula color -5 ±1 ±2 30% ±2% ±5%Película blanco y negro deseguridad

<16 ±1 ±2 35% ±2% ±5%

Película blanco y negro al nitrato 4 ±1 ±2 50% ±2% ±5%MICROFILM Plata gelatina blanco y negro <18 ±1 ±2 30%40% ±5% ±10%

135

Calidad del aireGas Archivo activo Archivo pasivoAnhidrido sulfúrico 1 g/m3 1 g/m3Anhidrido nitrico 5 g/m3 1 g/m3Ozono 25 g/m3 2 g/m3Anhidrido carbónico 4 5 g/m3 4 5 g/m3Polvo 75 g/m3 75 g/m3

Estandares de preservación a observar en soporte fotográficoISO 417 Fotografía. Determinación de fijador residual y otros materiales químicos en el procesamiento de

materiales fotográficos ISO 543 Cine - Película de seguridad. Definición, testeado y señalizaciónISO 3897 Fotografía Plateas fotográficas procesadas. Prácticas de almacenamiento ISO 4331 Fotografía. Película fotográfica blanco y negro procesada para archivos. Especificaciones para

película plata gelatina sobre base celulósica estérica. ISO 4332 Fotografía. Película fotográfica blanco y negro procesada para archivos. Especificaciones para

película plata gelatina sobre base polietilénica tereftálica ISO 5466 Fotografía. Películas de seguridad procesadas- Prácticas de almacenamiento ISO 6051 Fotografía. Películas procesadas por contacto. Prácticas de almacenamiento ISO 6200 Microfotografía. Primera generación de microformas plata gelatina - Especificaciones de densidadISO 8126 Microfotografía- Filmes vesiculares y diazo - Densidad visual. Especificaciones ISO 9718 Fotografía. Filmes vesiculares procesados. Especificaciones de densidad ISO 10214 Fotografía. Materiales fotográficos procesados - Filing enclosure for storage. ISO 10602 Fotografía- Película plata gelatina blanco y negro. Especificaciones de estabilidad.

Soportes de lectura indirecta mecánica: discosfonográficos y tarjetas de verificación

Condiciones climáticasFrecuencia de uso Temperatura Amplitud

térmicadiaria

Amplitudtérmicaanual

Humedadrelativa

Amplituddiaria de lahumedadrelativa

Amplitudanual de lahumedadrelativa

Archivo pasivo de 5 a 10 ±1 ±3 30% ±5% ±5%Archivo activo Alrededor de

20±1 ±3 40% ±5% ±5%

Estándares a observar en soportes mecánicos.IASA TC03 InternationalAssociation of Sound andAudiovisual Archives

Salvaguardia del patrimonio en audio.Etica, principios y estrategias de preservación.

Soportes de lectura indirecta magnética: diskettes,cintas de audio, películas de video

Campos magnéticos máximos tolerablesTipo de corriente Campo magnético en Oersted Campo magnético en ampere por metroCorriente alterna 5 Oe 400 A/m Corriente continua 25 Oe 2000 A/m.

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Condiciones climáticas Frecuencia de consulta Temperatura Amplitud

térmicadiaria

Amplitudtérmicaanual

Humedadrelativa

Amplituddiaria de lahumedadrelativa

Amplitudanual de lahumedadrelativa

Archivo pasivo De 5 a 10 ±1?C ±2?C 30% ±5% ±5%Archivo pasivo Alredodor de

20±1?C ±2?C 40% ±5% ±5%

Estándares a observar en soporte magnéticoIASA TC03 InternationalAssociation of Sound andAudiovisual Archives

Salvaguardia del patrimonio en audio.Etica, principios y estrategias depreservación.

SMPTE RP 1901996SMPTE Society of Motion Pictureand Television Engineers

Practicas recomendadas para el cuidado y preservación de registrosaudiomagnéticos

Soportes de lectura indirecta óptica: cdrom,dvdrom, cd

Condiciones climáticasTemperatura Amplitud

térmicadiaria

Amplitudtérmicaanual

Humedadrelativa

Amplituddiaria de lahumedadrelativa

Amplitudanual de lahumedadrelativa

Medios ópticos alrededor 20 ±1 ±3 40% ±5% ±5%

Estándares a observar en soportes ópticosISO/DIS 91711.2. ISO/IEC91711:1989

Procesamiento de la información. Disco optico no regrabable. Conceptos técnicos,condiciones de manipulación y almacenamiento, medidas, propiedades mecánicas yfísicas, propiedades opticas e informáticas, intercambiabilidad física entre systemas.

IASA TC03 InternationalAssociation of Sound andAudiovisual Archives

Salvaguardia del patrimonio en audio.Etica, principios y estrategias de preservación.

Soportes virtuales: correos electrónico, páginas web,publicaciones electronicas.Con la aparición de las nuevas tecnologías propias de la sociedad de la

información, la Iglesia se lanzó de lleno a la Internet, dando lugar a uncrecidísimo núero de sitios y paginas web.

La ciencia y la práctica archivística se encontraron con un desafíomayúsculo: hacer que esa información, que de por sí es muy volátil,conserve su valor testimonial. Y además, el volumen de esa información,exige precisión para la recuperación de esa información en tiempo y forma.

Podemos dejar reducida la problemática en dos tipos documentalesvirtuales:

1. correo electrónico2. publicaciones electrónicas

137

Es necesario estar atento a las normativas que sobre documentosvirtuales provengan del Consejo Internacional de Archivos para poderplanificar en esta materia.

Las condiciones ambientales en el Sistema de Archivospropuesto

De lo anteriormente visto se desprende que las exigencias ambientalesvarían de un soporte a otro.

Cumplir aceptablemente con esas condiciones variará de un subsistema aotro.

En aquellos subsistemas en que la documentación sea retenida porperíodos más largos (provincial, educacional y parroquial), que poseenmayor infraestructura, será su personal administrativo quien desarrollará lastareas preventivas. Dada la presencia masiva de elementos de computaciónen los tres subsistemas, será conveniente que ese personal se avoqueorganizadamente a la transferencia de documentos informáticos desdesoporte magnético hacia soporte óptico, y el copiado programado sobresoporte papel permanente de aquella información que amerite suconservación como legado para las generaciones futuras. Soporte yelementos de escritura se complementan: por ello, se usará en estas copiaspermanentes elementos de impresión que les otorguen perdurabilidad,como sería el uso de impresoras de punto con cintas originales en buenestado.

En aquellos otros subsistemas en que la documentación sea transferidarápidamente (conventual y asistencial), estas tareas, realizadas en suslugares de procedencia por la buena voluntad de religiosos y personalasistenciario, serán abordadas decididamente por el Archivo Histórico.

Los documentos sobre soportes no tan frecuentes como lo son negativosfotográficos, mecánicos y cintas magnéticas –procedentes de todos lossubsistemas–, o copias de ellos, serán enviados al Archivo Histórico a labrevedad posible. Allí se encarará su preservación especializada,recurriéndose cuando fuere necesario a la contratación de terceros paraservicios de almacenamiento.

Aquellos documentos que por su importancia merezcan una longevidadque roce la inmortalidad recibirán cuidados más intensivos. Estaráninstalados en ubicaciones individuales (por ejemplo cajas especialesfabricadas a medida) y estarán disponibles a la consulta en condiciones demáxima seguridad.

En cuanto a los locales e instalaciones de los subsistemas, se aplicaráncriterios de eficiencia y funcionalidad, con el mínimo gasto posible.

138

Recordemos nuevamente que esto del mínimo gasto posible es unacondición esencial para el progreso y supervivencia del sistema propuesto.

Recuperando la buena salud de los documentos: larestauración

Otro de los servicios que debe contemplar el sistema es «la creación deinstalaciones para la restauración y conservación de los materiales dearchivo de todo tipo por métodos adecuados»237

Cuando uno revisa la documentación existente en la mayoría de losarchivos existentes en el país, se encuentra con documentos que no gozanprecisamente de una buena salud.

Los criterios básicos a seguir para preservar la salud de la –permítasemela analogía– «población documental» estarán en concordancia con losrecursos asignados en la comunidad a la salud de la «población humana».No es lícito en un ámbito eclesial brindar mayor atención a las cosas que alos hombres.

Por ello, los conjuntos de documentos que sufran ataques biológicosserán apartados de los que no lo estén, y se les brindará un alojamientopreferencial en lugares donde el aire sea más puro y la humedad no dañesus fibras más íntimas y donde con los elementos disponibles se puedacombatir a sus agresores.

En cuanto a las intervenciones «quirúrgicas» de restauración, sólo seaplicará en aquellos documentos llamados a una longevidad extrema.Dentro de las tendencias actuales en restauración documental, se optará poraquellas orientadas a brindar supervivencia al documento –escuelaestadounidense– y no por aquellas orientadas al rejuvenecimiento delmismo –escuela europea–. Demás está decir que los recursos para estasintervenciones restauradoras provendrán en su inmensa mayoría dedonaciones externas. Así también la prestación del servicio de restauraciónserá contratada con especialistas locales.

Por último, quisiera hacer en este punto una reflexión sobre la vida delos documentos tomada de su comparación con la vida de los hombres.

¿Por qué un documento no puede morir? Lo que las generaciones futurasnecesitan de nosotros es un testimonio fiel de una información segura. Perosi una información de extrema trascendencia fue puesta sobre un soporteque naturalmente ha de morir, o escrito con un medio que el tiempo ha delavar en su decurso, tarde o temprano ese documento dejará de existir. Antela inevitable muerte de un documento, la actitud del archivero deberá ser la

237 RAMP (PGI-85/WS/), 194, §vi.

139

de hacer supervivir el mensaje que transmitía ese documento, plasmándolaen un testimonio de ese documento que reúna las condiciones para seraceptado en reemplazo del que feneció. Dentro de lo que mandaban lasconstituciones mercedarias de 1691 con respecto a las condicionesambientales para la adecuada conservación de las escrituras, se ordenaba laconfección de testimonios para suplir la ilegibilidad de las más antiguas.

…Curet pariter, ut locus sit aptus, & mundus a pulvere, tineis, vermibus,& muribus, unde scripturas sæpius lacerari contingit: ac nimis antiquas,antequam penitus abeant, denuo a suis originalibus extrahat, vel illudmedium adhibeat, quo ad fidem publicam maneant semper cumviribus.238

Este mismo párrafo recogen las constituciones del padre Valenzuela, afines del siglo XIX.

…Cuide igualmente de que el lugar sea apropiado y esté limpio de polvo,de polillas, gusanos y ratas, que con frecuencia suelen destruir lasescrituras, y de reproducir de nuevo de sus originales las demasiadoantiguas antes que desaparezcan completamente, o busque otro mediocomo se mantengan siempre con el vigor necesario para hacer fepública239

Aceptar la muerte de los documentos, es quizá otra enseñanza quepueden brindarnos los archivos.

Conservando la buena salud de los archivos: laseguridad

Hemos visto ya algunos lineamientos sobre las condiciones deconservacion y sobre las acciones de restauración de los documentosdentro del sistema.

Puestos ya en un nivel estructural, corresponden acciones similares paracon las relaciones de los documentos entre sí. Es decir, la conservación dela buena salud de los archivos que integran el sistema y las medidasnecesarias para recuperarla.

238 Constituciones Matritenses, Distinción séptima. Capítulo X. . §8.…239 Constituciones de Valenzuela, número 832 in fine.

140

Entendamos aquí como buena salud de los archivos el buenmantenimiento de las interrelaciones de los documentos que cobijan, vistodesde la integridad del número de documentos interrelacionados.

Por ello, los reglamentos que dicte la dirección del sistema «deben fijarlas medidas de seguridad»240. La integridad de los archivos es un mandatode las constituciones de la Orden de la Merced241:

…Quedando siempre a salvo la caridad con las personas, no se saque[del archivo] ni publique nada sin autorización del superior respectivo,cuidando de que se devuelvan íntegros los documentos y que todopermanezca en buen estado.

Lograr esta integridad es uno de los motivos por los cuales losdocumentos provenientes de los subsistemas conventual y asistencial debentransferirse tempranamente al archivo histórico.

Recuperando la buena salud de los archivos: lareintegración de los acervos documentales

Pero siempre es posible que esa salud de los archivos se deteriore, y dehecho es muy infrecuente que así no sucesa. La dispersión del legadocultural de la Iglesia es una constante a través de su historia, y las causasmuchas veces son extrínsecas. Por ello, el sistema debe plantearse como unservicio más el

- estudiar la posibilidad y el modo de recuperar los archivos confiscadosen el pasado, que pueden encontrarse tal vez dispersos en diversoslugares a causa de complejas vicisitudes históricas, o quizás han sidorestituidos parcialmente o reproducidos informáticamente (por medio demicrofilms discos ópticos, etcétera.);242

Y en conjunto con los abogados de la Provincia Mercedaria Argentina,iniciar las tratativas para la reintegración del patrimonio documental,teniendo en cuenta que esa acción, al decir del Martín Fierro243, «no es paramal de ninguno / sino para bien de todos».

Del principio fundamental de la archivología, el de procedencia, derivael de pertenencia. Establecida la supervivencia de la entidad de

240 RAMP (PGI-85/WS/), número 207241 Cfr. Constituciones, número 197242 Cfr. CPBCI. La función pastoral de los archivos eclesiásticos. Punto 2.4. Orientaciones comunes de

las Conferencias episcopales243 HERNANDEZ, José. Martín Fierro. Ediciones Centurión. Buenos Aires, 1948, versos 7209 y

7210.

141

procedencia, se desprende que sus fondos documentales dispersos contra suvoluntad le pertenecen.

Este argumento ya ha sido esgrimido por el rectorado de nuestraUniversidad en ocasión del reintegro desde la Biblioteca Nacional de laconocida como Biblioteca Jesuítica.

En el caso de la Provincia Mercedaria Argentina, el reconocimiento esoficial, tal como lo establece la Inspección General de Personas Jurídicas,según resolución IGPJ 3592, del 2 de agosto de 1971, al reconocer su«investidura de persona jurídica, en virtud de lo prescripto en el articulosetenta y siete, inciso veinte, de la Constitución Nacional». Es decir, supreexistencia al estado nacional.

De este reconocimiento oficial deviene el derecho de la ProvinciaArgentina a la reintegración de sus fondos documentales. Queda pordelante una larga actividad en este campo para quienes dirigan el sistema.

Servicio de Clasificación y Ordenación

Otro de los servicios que debe prestar el Sistema propuesto es el de … garantizar que se mantenga a todos los documentos … bajo un controladministrativo e intelectual adecuado…244.

Para lograr esto, es necesario desempeñar con la mayor eficacia lasfunciones de

…clasificación y ordenación de los archivos de acuerdo con losprincipios y métodos de archivo aceptados245

Las tareas de organización de los documentos de un archivo consisten enagruparlos y separarlos jerárquicamente según su identidad246, yposteriormente ubicarlos metódicamente dentro del depósito.

Como se ha dicho anteriormente, un documento de archivo pierdeidentidad si se lo aísla de la institución que le da razón de ser. Sólo en esemar de documentos [fondo documental] hermanados por la satisfacción deuna necesidad, esa gota cobra su pleno significado.

Por ello, el principio metodológico básico de la archivología, el principiode procedencia, exige la unidad orgánica de los documentos creados yacumulados por una persona [física o jurídica] en el desempeño de susfunciones y actividades247. Es decir, un fondo documental se organizateniendo en cuenta la persona de donde procede.

De allí deviene el segundo principio, propugnado por los holandesesMüller, Feith y Fruin, por el cual todo documento o grupo de documentos

244 RAMP (PGI-85/WS/), 208.245 RAMP (PGI-85/WS/), 194, §iii.246 Cfr. ROMERO TALLAFIGO, Manuel. Archivos...., pág. 352247 Cfr. Ibíd, pág. 352

142

debe conservarse en la ubicación lógica que le fue asignado naturalmenteen sus orígenes como instrumento de acción. Es el principio de ordennatural.

Clasificación

Por ello, cada documento de archivo necesitamos establecer lainstitución de donde procede [fondo]. Luego la división administrativa quecubre la función específica que dio razón de ser al documento [sección ogrupo]. En un tercer momento la actividad o procedimiento administrativoespecífico [serie] usado por la división administrativa tanto en elcumplimiento directo de su función específica como en las acciones quefaciliten esa función. Todas estas operaciones intelectuales sucesivas sonconocidas como Clasificación, cuyo resultado es el conocimiento de laestructura orgánica y funcional de un fondo documental.

Esta estructura orgánica y funcional se grafica en un Cuadro deClasificación. En un Sistema como el propuesto, la clasificación es previa ala elaboración de un documento. Todo documento nace ya clasificado. Peroen una institución que ha sufrido la desorganización y destrucción de susfondos en diversos períodos de la historia, es un imperativo condicionanteel reconstruir esa clasificación.

De acuerdo a las características de los fondos, suele hacerse Cuadros deClasificación de Unidades Mayores (fondos, grupos y subgrupos) yCuadros de Clasificación de Unidades Menores (series y subseries). Comoel Sistema de Archivos de la Provincia Argentina consta de variossubsistemas, también habrá que hacer constar este hecho.

Cuadro de Clasificación de Unidades Mayores delSistema

Subsistema Fondo Grupo Subgrupo

Cuadro de Clasificación de Unidades Menores delSistema

Serie Subserie Información248

248 Esta última subdivisión se usa en subseries que por su extensión necesiten precisar el asunto quetratan determinados tipos documentales: es el caso por ejemplo de los expedientes que no puedenser tomados genéricamente a los efectos de su evaluación, eliminación o transferencia.

143

Esta clasificación se refleja en un código clasificatorio, que para elsistema propuesto consta de tres sectores de tres dígitos cada uno.

Código de Fondo Código de Grupo Código de Serie1 0 1 3 0 1 0 1 1

Subsistema

Fondo o Archivo Grupo Subgrupo Serie Sub serie

El código correspondiente a cada subsistema es el siguiente: 1 para el central, 2 para el conventual, 3 para el educacional, 4 para el parroquial y 5 para el asistencial.

0. Archivo HistóricoEl Cuadro de Clasificación del Archivo Histórico es de una mayor

complejidad en lo referente a las unidades mayores, ya que refleja cambiosa través de más de cuatro siglos de historia, y en algunos casos bruscoscortes. Pero también simplifica notablemente las unidades menores.

La aparición de una serie miscelánea está motivada en la pérdida defondos documentales. Está destinada a la recuperación de esos fondos o decopias de sus documentos. En su codificación, en lo que hace a la serie,está marcada con un doble cero inicial.

1. Subsistema centralEl Subsistema Central presenta varias particularidades. En primer lugar,

es una necesidad el dejar bien separadas las administraciones económicasdel gobierno central. Esto permite guardar la privacidad de los archivos queno hacen a cuestiones netamente económicas.

También es conveniente que se separen los libros de actas del Consejo,asignando uno para aquellos temas que hagan a las decisiones económicasy otro para las decisiones pastorales. Esto hasta se puede reflejar en lasreuniones, levantándose actas distintas en días diferentes.

En lo que respecta al gobierno provincial, hay actos que no tienen unorganismo determinado encargado de su ejecución, sino que en realidadcorresponde a un área administrativa cubierta por todo el gobiernoprovincial. Es el caso de las relaciones externas: con la iglesia, losmercedarios, el gobierno civil y los particulares.

144

Subsistema Central. Archivo Curia Provincial

Subsistema Central. Archivos económicos.249

2. Subsistema conventual. El subsistema conventual refleja la vida interna de cada comunidad

religiosa. Sus principales divisiones documentales se refieren al gobiernoconventual, a la vida de la comunidad, y a la administración económica.Como en el caso del gobierno provincial, también « hay tipos específicosde administración que no tienen un organismo determinado que lo realice,sino que en realidad corresponde a un área administrativa cubierta por todoel gobierno local. Es el caso particular de las relaciones externas: con laiglesia, los mercedarios, el gobierno civil y los particulares».

Subsistema Conventual.250

3. Subsistema educacional.Es el subsistema más complejo, donde en sus actividades influyen

distintos tipos de motivaciones humanas. Entre ellas se pueden reseñar: eldeseo de predicar el evangelio, el deseo de enseñar, la necesidad del estadode satisfacer los reclamos educativos de la sociedad, la necesidad de losalumnos de aprender, la necesidad de la institución de percibir unacontribución económica de parte de los padres de los alumnos, la necesidadde una remuneración salarial justa por parte de los docentes, la necesidaddel estado de percibir en tiempo y forma las cargas y aportes de lossistemas de previsión y asistencia social. Cada institución educativa es unsistema donde interactúan todos estos factores, originando derechos yobligaciones en forma permanente. Todo ello se refleja en una variadísimadocumentación, proveniente de tres grandes divisiones: el sector que rige lainstitución, el sector que se ocupa de la educación infantil y el sector que sededica a la educación juvenil.

Subsistema educacional.251

249 Ejemplo: CEP Buenos Aires.250 Ejemplo: Convento San Lorenzo Mártir de Córdoba.251 Ejemplo: Instituto Pádre Vásquez, de Maipú.

145

4. Subsistema parroquial.Este subsistema está muy ligado al conventual, ya que el superior local

debe desempeñarse dentro de lo posible como párroco. Sus grandesdivisiones hacen al gobierno de la parroquia, las actividades pastorales, y laadministración económica.

Subsistema Parroquial.252

5. Subsistema asistencial.Este subsistema es quizá el más sencillo. Sus grandes divisiones son tres:

dirección del centro, administración de salud y administración económica.

Subsistema Asistencial.253

Ordenación

Conociendo ya el agrupamiento lógico correspondiente, es necesarioestablecer el orden que individualizará a cada unidad documental delsistema.

- Orden proviene del término latino ordo, ordinis, que consiste en la«colocación de las cosas en el lugar que les corresponde»254. Esteorden implica una «sucesión de las cosas», es decir, que haya uncriterio para colocar una cosa antes de otra y después de otra.

- Ordenar, cuya etimología latina es ordinare, significa colocar lascosas de acuerdo a esos criterios de sucesión de las cosas.

- Ordenación255 documental, será pues la acción de colocar losdocumentos y grupos de documentos de acuerdo a los criterios desucesión adoptados.

Este ordenamiento brinda seguridad a la custodia de los documentos yfacilita su recuperación. Sin embargo, los criterios de ordenación debennecesariamente adaptarse a cada unidad documental en particular. Por eso,primero se hablará de los criterios para las unidades menores y luego de loscriterios para las unidades mayores.

252 Ejemplo: Parroquia Nuestra Señora de la Merced, La Rioja.253 Ejemplo: Centro Social León XIII.254 Cfr. Espasa Calpe. Artículos sobre Orden, Ordenación, y Ordenar.255 Del latin ordinatio, ordinationis

146

Ordenación para Unidades Documentales MenoresExisten varios criterios de ordenación, que se aplican según las

características de cada unidad menor de clasificación.- Orden numérico. Individualiza a los documentos con un número

correlativo. Es un método seguro, porque no admiteinterpolaciones. En algunos casos se combina con el métodocronológico, como es el caso de los Protocolos de la CuriaProvincial.

- Orden cronológico. Individualiza a los documentos por fecha.Permite interpolaciones, usado en series caracterizadas por laconsulta reiterada. Por ejemplo, libros de actas.

- Orden alfabético. Individualiza a los documentos mediante unencabezamiento nominal. Permite más interpolaciones que losmétodos anteriores, pero es el que facilita más la recuperación. Seusa sobre todo en legajos personales.

- Orden natural. Es el que se asigna a los documentos en razón denecesidades específicas de la administración, por ejemplo: ordende llegada o de salida, lo que no siempre coincide con el ordencronológico.

Ordenación para Unidades Documentales MayoresLa ordenación de las unidades mayores exige un gran pragmatismo, ya

que un criterio erróneo podrá incrementará notablemente los metros deestantería necesarios, como también hará más dificultosa las tareas deselección y transferencia de documentos.

Se adoptarán criterios distintos si se tratare de "archivos administrativos"o "archivos históricos".

En un archivo administrativo se dividirá la documentación según losgrupos mayores. Luego se procederá a separar las series según su plazo deretención: la documentación que deba guardarse en forma permanente, deaquella que deberá hacerse por plazos menores, por ejemplo de 20, 10 y 5años. Por último, se ordenarán las unidades de conservación por ordencronológico de ingreso al archivo, sin importar a qué serie o subseriepertenezcan.

En un archivo «histórico», en cambio, se dividirá previamente ladocumentación por fondo. Luego se ubicarán las unidades de conservaciónpor orden cronológico de ingreso al archivo, como en el caso de losarchivos administrativos.

147

Instalación

Los documentos clasificados y ordenados son colocados en el depósitodel archivo de manera tal que su conservación y su recuperación sea lo mássegura posible.

Para ello se los instala en unidades de conservación apropiadas, talescomo cajas de archivo, paquetes o legajos, planeros, compacteras,portadisketes, etcétera.

Las unidades de conservación se instalan en el mobiliario pertinente(estanterías abiertas o cerradas o armarios o cajas de seguridad). Estemobiliario se agrupa y distribuye en uno o más locales de depósito, lo quegenera niveles de jerarquía.

Sala Estantería Cuerpo Anaquel Unidad deconservación

- Unidad de instalación: a los fines de hacer más comprensible estetrabajo para las autoridades de la institución, denominaré así a launidad mínima de instalación, ya descripta en un párrafo anteriorcomo unidad de conservación.

- Anaquel: consiste en un plano individual, sostenido generalmentepor cuatro parantes verticales.

- Cuerpo: es el conjunto de anaqueles sostenido por el mismo grupode parantes.

- Estantería: es el conjunto lineal de cuerpos adosados por sucostado (en el caso de estar adosadas estas estanterías dorso condorso se habla de Hileras).

- Sala: es cada uno de los locales del depósito de documentos delarchivo.

Los distintos niveles jerárquicos del mobiliario se traducen en lasignatura topográfica. La signatura topográfica se asigna normalmente delsiguiente modo.

o La estantería más cercana a la puerta de la Sala recibe elnúmero más bajo y así subsiguientemente.

o El cuerpo más cercano a la puerta recibe también el númeromás bajo, que se aplica secuencialmente hasta el final de laestantería; en caso de tratarse de una hilera el cuerpo queestá adosado dorsalmente al último del final de la estanteríanúmero 1, recibirá el número siguiente (por ejemplo, si elúltimo tenía el número 3, el que tiene a sus espaldas será elnúmero 4).

148

o Los anaqueles se numeran de abajo hacia arriba. Lasunidades de conservación se van instalando en losanaqueles comenzando por el anaquel superior del primercuerpo y cuando este se ha llenado se sigue con el inferiordel segundo cuerpo hasta llegar al superior del mismo.

La identificación de las unidades de conservación se hace mediante lasignatura archivística, dada por los cuadros de clasificación, y la signaturatopográfica, dada por la ubicación dentro del depósito. La primera espermanente, y si hacemos un parangón con las personas, se trataría delnombre y apellido. La segunda es transitoria, y haciendo el mismoparangón, del domicilio. Ambas signaturas quedan estampadas en etiquetasadosadas a cada unidad de conservación.

Signatura archivística Código de fondo o grupo - Código de serieCódigo de unidad de conservación

Signatura topográfica SalaHilera - Cuerpo - Anaquel

Unidad de instalación

En el caso del Archivo Histórico, además de todo lo anterior, deberácolocarse, si se considera oportuno, un pequeño sello que asegure lapertenencia del documento. También dentro de este Archivo, en cadaunidad de conservación será conveniente que figure una carátula decontenido, que describa someramente las piezas documentales contenidas.

Servicio de Procesamiento de la InformaciónDocumental.

Uno de los presupuestos básicos del Sistema es que en él se debeconocer la documentación que se posee, ya sea para su control o paraacceder a ella.

Para lograr ambos objetivos, es necesario procesar tanto la informacióncontenida en el mensaje del documento como la que brindan su soporte,medios de escritura, almacenamiento y ubicación.

En base a la clasificación consensuada y elaborada por los distintosestamentos del Sistema, todos en conjunto se avocan a reconocer ladocumentación que aquél alberga, elaborando

medios de referencia por cualquier procedimiento disponible y adecuadopara facilitar el acceso a los archivos y recuperar información de éstos256

256 RAMP (PGI-85/WS/), 194, §iii.

149

Este re-conocimiento no equivale en este caso en particular a unrelevamiento previo. Estamos ante archivos integrantes de un sistema queno están en condiciones deplorables. Por ello, al hablar de reconocimientoestamos indicando un conocer de nuevo, un profundizamiento delconocimiento que tenemos de su documentación.

Para profundizar el conocimiento de la documentación a los fines de sucontrol y del acceso a ella, es necesario encarar un procesamientoprogresivo, conocido comúnmente como programa de descripción.

Programa de descripción

Describir es la acción de definir una cosa, dando una idea general de suspartes o propiedades. En materia archivística, implica un trabajo de síntesisdirectamente proporcional al volumen de información objeto de ladescripción. Es decir, que a mayor volumen corresponde una menordefinición y a menor volumen una mayor definición.

A diferencia de la descripción bibliográfica, que describe los librosindividualmente, la descripción archivística se aplica a los documentos dearchivo como partes de un conjunto.

La estrategia más moderna de descripción archivística consiste en partirde la totalidad de un fondo documental, y según su cuadro de clasificaciónorgánica proceder a su descripción. Se la conoce como descripciónmultinivel. Esto nos da cuatro niveles de descripción.

Nivel 1. Fondo, que es el conjunto orgánico de documentos producidospor una institución en el decurso de sus actividades.

Nivel 2. Sección o grupo, que es el conjunto de documentospertenecientes a un fondo, que reflejan un tipo de administración específicodentro de la institución.

Nivel 3. Serie, que es el conjunto de documentos pertenecientes a ungrupo, que reflejan un tipo de procedimiento o trámite específico. Dentrode la serie pueden existir uno o varios tipos de documentos específicos. Enel último caso puede considerarse la posibilidad de establecer subseries.

Nivel 4. Unidad documental, que es el documento o conjunto dedocumentos que se han usado en un procedimiento o trámite en particular.

La descripción multinivel va de lo general a lo específico, es decir, delfondo a la unidad.

En segundo lugar, la descripción multinivel implica brindar ladescripción adecuada al nivel de descripción, sin entrar en datos superfluos.

En tercer lugar, la descripción multinivel implica relacionar la unidad endescripción con la unidad de la que depende inmediatamente.

Por último, la descripción multinivel exige no repetir la informaciónbrindada en niveles superiores de descripción.

150

La descripción más sintética que se usa a nivel archivístico está recogidapor el Inventario, que describe la totalidad de una masa documental.

De la información volcada en el inventario devendrán, mediantesucesivos procesos, instrumentos descriptivos cada vez más definidos,orientados a la búsqueda más precisa de información.

La compilación del inventario es el elemento fundamental para laconsulta del archivo, como lo indican los cánones 486 §3257 y 491 §1258.El inventario permitirá la producción de otros instrumentos útiles parausar con facilidad los fondos archivísticos (catálogos, repertorios, fichas,índices) y facilitará el uso de los modernos sistemas informáticos paraunirse con las varias sedes de los archivos y lograr una investigación einformación de amplias dimensiones259.

Pero estos instrumentos más definidos se justifican en casos particulares,de acuerdo a las necesidades que se manifiesten en un momento dado.

Grados de definición en un programa de descripciónPrimer grado Segundo grado Tercer Grado Cuarto GradoInventario

GuíasÍndices, catálogos

Listas de materias

Corresponde aquí hacer una aclaración. El uso de modernos sistemasinformáticos es una condición ineludible para el sistema propuesto. Lainformática estará presente desde el momento de la creación de losdocumentos y su uso será aplicado a todos los servicios que preste elsistema, incluidos aquellos de reproducción de documentos y comunicaciónvirtual de su contenido. Por eso no se hablará en el sistema de un serviciode informática: ella subyace en todas las actividades encaradas.

Antes de la explosión informática de mediados de la década de 1980, sehablaba de inventario sumario, esquemático y analítico. Personalmente,dado que la práctica me ha llevado a ello, pienso que actualmente essuperfluo entrar en esas distinciones para su elaboración. Una simpleincorporación de columnas al inventario esquemático lo transformará en

257 CIC 486. §1. Deben custodiarse con la mayor diligencia todos los documentos que se refieran a lasdiócesis o a las parroquias. §2. Se ha de establecer en cada curia, en lugar seguro, un archivo otabulario diocesano, en el que se conserven con orden manifiesto y diligentemente guardados losdocumentos y escrituras correspondientes a los asuntos diocesanos, tanto espirituales comotemporales. §3. Debe hacerse un inventario o índice de los documentos que se guardan en elarchivo, con un breve resumen del contenido de cada escritura.

258 CIC 491. §1. Cuide el Obispo diocesano de que se conserven diligentemente las actas ydocumentos contenidos en los archivos de las iglesias catedralicias, de las colegiatas, de lasparroquias y de las demás iglesias de su territorio, y de que se hagan inventarios o índices en dobleejemplar, uno de los cuales se guardará en el archivo propio, y el otro en el archivo diocesano.

259 CPBCI. La función pastoral de los archivos eclesiásticos. 3.3. Inventario e informatización

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analítico. Sin embargo, las normas archivísticas actuales sugieren no repetirinformación.

Suele hablarse entre los archiveros de instrumentos de control260 y debúsqueda. En pocas palabras, los primeros son los que permitenbásicamente establecer la documentación en su conjunto que se tiene ydónde se tiene, mientras que los segundos facilitan el acceso a losdocumentos o a su contenido en particular.

Visto así, el Inventario es el instrumento de control por excelencia. Nosdescribe un todo estático en un momento dado, y el conocimiento de esetodo otorga a la institución poder y dominio sobre él.

El inventario por excelencia es el conocido como Inventarioesquemático261. Se confecciona serie por serie. Se describe unidad deconservación por unidad de conservación. Consta de dos sectores biendiferenciados: encabezamiento y encolumnado.

- Encabezamiento. A continuación del nombre del archivo y delgrupo correspondiente, dispone de una entrada descriptiva, dondeconsta el nombre de la serie y su signatura archivística. Luegoexiste un párrafo descriptivo, donde se informa sobre laspeculiaridades de la serie que merezcan aclararse.

- Encolumnado. Consta básicamente de la última parte de lasignatura archivística (la referida a la unidad de conservación), lasignatura topográfica, breve descripción de la unidad deconservación, fechas extremas y observaciones.

A los fines prácticos hay que distinguir el inventario informatizado delinventario sobre papel. El primero nos permite estar informados sobre loque tenemos en el archivo y encontrarlo rápidamente. El segundo, encambio, es también un testimonio válido de lo existente dentro del archivoen un momento dado de la historia humana. Los dos se complementan,pero ninguno suple satisfactoriamente la función del otro.

Se usará un inventario analítico sólo para aquella documentación dearchivos que por diversas circunstancias devenga en colección dedocumentos, es decir, que la pérdida de documentos haya hecho perder suintegridad en forma notable. En el inventario analítico se describen laspiezas documentales contenidas en cada unidad de conservación, por lo quees necesario reseñar al menos el número de orden de la pieza dentro de launidad de conservación, el lugar, las fechas extremas, las partesintervinientes, y el asunto.

El inventario sumario, en cambio, nos permite saber las series quedispone un archivo, los años límites de las mismas, y su volumen. Esteinventario sumario se agrega a la guía del archivo.

260 Cfr. TANODI, Aurelio. Temas Archivísticos. Reedición de algunos trabajos. Centro Interamericanode desarrollo de archivos. Córdoba, sin indicación de fecha, páginas 42 y 43.

261 Tanodi los llama sumarios. Cfr. TANODI, Aurelio. Temas Archivísticos…, pág. 55

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Conviene hacer una distinción fundamental: los documentos constituyenpara los archivos administrativos meros instrumentos testimoniales einformativos. Para los archivos históricos, en cambio, se trata de bienespatrimoniales: son su patrimonio más preciado.

De los inventarios262 confeccionados informáticamente, mediantesencillos criterios consensuados en común, por el personal responsable decada archivo del Sistema, surgirá un embrionario Inventario del Sistema.Este Inventario del Sistema será de capital importancia para el control de lamasa documental de la Provincia Mercedaria Argentina, con todas lasconsecuencias favorables para el buen gobierno de la institución.

También de los inventarios de cada archivo del sistema surgirán losinstrumentos de búsqueda indispensables para la etapa administrativa de losdocumentos, como es el caso de los índices.

Como ya se ha dicho, el Inventario nos da razón de la documentación deun modo «estático», ya que la movilidad de su contenido mediante esteinstrumento sólo podemos visualizarla mediante comparación entre dos omás elaborados en fechas distintas.

Para ello hay un tipo de instrumento que nos revela esa movilidad demanera directa, «dinámica», y que además lo hace con un valor testimonialpor demás aceptable. Son los Registros de Ingreso y Salida de documentosde cada uno de los archivos. Puesto en marcha el Sistema de Archivos,estos registros particulares deberán reflejarse dentro del Registro deIngreso y Salida de documentos del Sistema.

Por último, del Inventario de cada archivo se elaborarán oportunamentelas listas que acompañarán a los documentos transferidos al ArchivoHistórico, conocidas como Listas de remisión. Estas listas de remisión,oportuna y convenientemente procesadas, darán lugar al Inventario delArchivo Histórico.

El Archivo Histórico dispondrá también de su Registro de Ingreso deDocumentos, donde constará un número de ingreso correlativo, la fecha, elorganismo remitente, el nombre de la serie y la unidad de conservación.

Con posteriores definiciones descriptivas, el Inventario del ArchivoHistórico se reflejará en guías y listas de materias, y en caso de pedirloexpresamente algún programa de investigación, la catalogaciónespecializada de algunos documentos o grupos de documentos.

No obstante, con respecto a este último instrumento descriptivo, elcatálogo, se prevé en la solicitud de consulta para investigadores elcompromiso no sólo del envío de una copia de su trabajo sino tambiéninformación complementaria sobre el documento consultado (personas

262 El canon 491 §1 establece, como ya se vio, que de todos los archivos sujetos a la jurisdicción de unordinario, « se hagan inventarios o índices en doble ejemplar, uno de los cuales se guardará en elarchivo propio, y el otro en el archivo diocesano»

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intervinientes, lugares, objetos, paleotranscripciones si hubiere lugar,etcétera)

Estandarización descriptiva

La realización de estas labores de manera informatizada permitirá laadaptación a las normas internacionales de descripción archivística,conocidas como International Standard Archivistic Description-General(ISAD-G), elaboradas por el Consejo Internacional de Archivos,dependiente de la UNESCO.

Las normas ISADG, y su reciente actualización presentada en elCongreso Internacional de Sevilla 2000, implican también laracionalización y normalización de términos que se usarán para que lainformación y la documentación pueda ser identificada, buscada yrecuperada. Esta normalización terminológica es una tarea de consenso aencarar con el personal de los subsistemas que compondrán el Sistema deArchivos de la Provincia Argentina.

Servicio de Acceso a la Información y Documentación

El servicio fundamental que prestan los archivos a la ProvinciaArgentina es el uso oportuno y adecuado de su documentación para elcorrecto cumplimiento de sus actividades.

Acceder a esta documentación y a esta información pertenece porderecho propio a la Institución. El acceso de la Institución a sus propiosarchivos, sólo puede estar sujeto a normas del gobierno de la Institución encuanto a quienes podrán hacerlo, y en las circunstancias en que lo harán; ya la legislación civil y canónica en cuanto haga a los derechos de tercerosinvolucrados.

Cumplida la misión administrativa para la que fueron creados losdocumentos, otro de los servicios que debe garantizar el Sistema, es la

…creación de salas de búsqueda o consulta en los cuales existan lasinstalaciones adecuadas …y la creación de otros servicios de consultanecesarios para satisfacer las solicitudes por correo, etcétera263

La apertura en el acceso a los archivos eclesiales está recomendadovivamente por la Santa Sede

Los responsables deben procurar que el uso de los archivos eclesiásticospueda facilitarse no sólo a los interesados que tienen derecho a usarlos,sino también a círculos más amplios de estudiosos, sin prejuiciosideológicos y religiosos, quedando a salvo las oportunas normas deseguridad, dadas por el derecho universal y por las normas del Obispo

263 RAMP (PGI-85/WS/), 194, § iv..

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diocesano. La apertura desinteresada, la acogida benévola y el serviciocompetente deben ser objetos de atenta consideración para que lamemoria histórica de la Iglesia se ofrezca a toda la colectividad264.

El recordado papa Juan XXIII reconocía expresamente el derecho detodo hombre a la información objetiva y a participar de los bienes de lacultura.

Todo ser humano tiene el derecho natural al debido respeto de supersona, a la buena reputación, a la libertad para buscar la verdad y,dentro de los límites del orden moral y del bien común, para manifestar ydefender sus ideas, para cultivar cualquier arte, y finalmente, para teneruna objetiva información de los sucesos públicos. / También nace de lanaturaleza humana el derecho a participar de los bienes de la cultura…265

A continuación destacaba que no sólo era un derecho, sino también undeber

Al derecho de todo hombre…a la libertad en la búsqueda de la verdad,[corresponde] el deber de buscarla cada día más amplia yprofundamente.266

Siempre siguiendo a Juan XXIII, la verdad es el fundamento de la paz.La convivencia entre los hombres será consiguientemente ordenada,fructífera y propia de la dignidad de la persona humana si se fundamentasobre la verdad, según la recomendación del apóstol San Pablo:Deponiendo la mentira, hablad la verdad cada uno con su prójimo,porque somos miembros unos de otros [Epístola a los Efesios, capítulo 4,vers. 25].267

El Concilio Vaticano II, exhortabaEs preciso, además, hacer todo lo posible para que todos adquieren laconciencia de su derecho a la cultura y del deber que tienen de cultivarsea sí mismo y a ayudar a los demás268.

Y también reconocía el derecho humano a la correcta información… Existe, pues, en el seno de la sociedad humana al derecho a lainformación sobre aquellas coasas que convienen a los hombres, segúnlas circunstancias de cada cual, tanto particularmente, como constituidosen sociedad. Sin embargo, el recto uso de este derecho exige que lainformación sea siempre objetivamente verdadera y, salvada la justicia yla caridad, íntegra; en cuanto al modo, ha de ser, además, honesta ycorrecta, es decir, que respete las leyes morales del hombre, sus legítimos

264 CPBCI. La función pastoral de los archivos eclesiásticos. N° 4 §1.265 JUAN XXIII. Encíclica Pacem In Terris. Roma, 11 de abril de 1963. Ediciones Paulinas, Buenos

Aires, 1963, pág. 7.266 Ibíd, pág. 12267 Ibíd, pág. 14268 Constitución Gaudium et Spes, número 60.´En: Documentos completos del Vaticano II. Editorial

Mensajero, Barcelona, 1980, pág. 133

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derechos y dignidad, tanto en la obtención de las noticias, como en sudivulgación…269

Sin embargo, el acceso a la información y a la documentación contenidaen los archivos eclesiales, como en el resto de los archivos, no es irrestricta.

…convendrá poner limites a la consulta de fascículos personales y deotras correspondencias epistolares que por su propia naturaleza son decarácter reservado o que los responsables pueden pensar que es así. Nonos referimos al archivo secreto de la curia diocesana, del cualexpresamente se trata en los cann. 489/490, sino en general a losarchivos eclesiásticos. A este propósito algunas metodologíasarchivísticas sugieren que las cartas reservadas se señalen conindicaciones precisas en los inventarios a los cuales tienen acceso losinvestigadores.270

Este derecho al acceso y sus limitaciones deberán estar plenamentereglamentados

El derecho a tener acceso a los documentos públicos, siempre y cuandose cumplan las condiciones dispuestas para proteger su custodia segura ycondiciones físicas, deben estar claramente fijadas en la legislación dearchivo271.

La autoridad para reglamentar esta disposición reside en el Superior delconvento o de la provincia, como expresamente lo señalan lasConstituciones de la Orden

Quedando siempre a salvo la caridad con las personas, no se saque nipublique nada sin autorización del superior respectivo, cuidando de quese devuelvan íntegros los documentos y que todo permanezca en buenestado272

La constitución de este Sistema de Archivos, propugna concentrar en elArchivo Histórico todos los documentos abiertos a la consulta, por lo que laautoridad para reglamentar este acceso dependerá directamente delSuperior Provincial.

Para permitir el acceso de los investigadores a los documentosdepositados en un archivo existen fundamentalmente tres posibilidades273.

- Desde el momento de su creación- Transcurrido determinado tiempo- Transferidos al archivo histórico

Dentro de los postulados de este Sistema, sólamente estarán accesibleslos documentos transferidos al Archivo Histórico cuya apertura haya sido

269 Decreto Inter Mirífica sobre los medios de comunicación social, número 5. En: Documentoscompletos del Vaticano II. Editorial Mensajero, Barcelona, 1980, pág. 435

270 CPBCI. Función pastoral de los archivos eclesiásticos. Número 4.2.271 RAMP (PGI-85/WS/), número 209.272 Constituciones, número 197273 Cfr. RAMP (PGI-85/WS/), número 151.

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dispuesta por el Archivero de Provincia. No obstante, el SuperiorProvincial podrá por derecho propio autorizar el «acceso a documentos yarchivos que normalmente estarían cerrados»274.

El Archivero de Provincia estará facultado para limitar o impedir elacceso «a documentos y archivos que normalmente podrían consultarse(acceso restringido) debido a:

- las condiciones materiales en que se hallan los documentos yarchivos

- la protección de su carácter privado o de seguridad- las condiciones impuestas por el donante de documentos o grupo

de documentos.275

Las condiciones de accesibilidad de los documentos en etapaadministrativa, será consensuada en cada subsistema por el responsable delárea y sus subordinados, y contará con el asesoramiento tanto del Archiverode Provincia como de la eventual consulta con otros profesionales a pedidode éste último.

El acceso masivo a la documentación de mayor significación, transferidao no al Archivo Histórico, será posible gracias a las tecnologías dedocumentación e información virtual. Los usuarios de las redesinformáticas podrán acceder a la documentación librada a la consultamasiva directamente desde sus computadoras. La apertura de estadocumentación para su consulta virtual será resorte privativo del SuperiorProvincial, o en caso de considerarlo oportuno, del Capítulo Provincial.

Servicio de Reprografía

Otro de los servicios que ha de prestar el sistema, es facilitar los recursospara obtener

… copias de los archivos por medios fotográficos y reprográficos de otrotipo …276

En estas copias se reproduce la imagen que brinda el documento y no esuna mera transcripción textual de su contenido.

El destino que puede darse a estas copias reprográficas de losdocumentos existentes en los archivos del Sistema propuesto, podemosagruparlo a los fines de este trabajo en tres grandes divisiones:

Testimonio de un hecho o un derecho, tanto de la institución como deuna persona en particular. Es el caso de una fotocopia de la foja deservicios de un docente, expedida por el director del colegio a los fines deun concurso.

274 Cfr. ibíd.275 Cfr. Ibíd.276 RAMP (PGI-85/WS/), 194, § v..

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Testimonio de reaseguro documental, de los documentos de archivo delsistema. Por ejemplo, un microfilm de un Libro de Patentes del sigloXVIII.

Instrumento de investigación o difusión. Una reprografía de undocumento que no está en condiciones de conservación adecuadas para suconsulta frecuente puede ser el medio que permita a los investigadoresacceder a su contenido o para que su difusión sea masiva a través deediciones por cualquier medio: imprenta, soportes ópticos o publicacionesvirtuales. Para dar mayor seriedad a la investigación científica, lasreprografías entregadas por el archivo histórico a los estudiosos deberíancontar con una validación del Archivero de Provincia277.

Las reprografías de los documentos del primer grupo, serán entregadaspor la autoridad administrativa de quien dependa directamente cada archivodel sistema. En la mayoría de los casos se tratará de fotocopias certificadas.

Las reprografías de los dos grupos siguientes pertenecen en su mayoría adocumentos del Archivo Histórico.

Según la Comisión Pontificia para los Bienes Culturales de la Iglesia,uno de los fines de la reprografía es hacer accesible el material de archivos,para lo que previamente es necesario concentrar la documentaciónexistente.

Para que este programa pueda realizarse, hay que examinar laoportunidad de concentrar en algunos lugares apropiados el materialexistente y hacer que sea accesible, incluso a distancia, gracias a losprocedimientos de reproducción fotográfica o de métodosinformáticos.278

También para la CPCBI, la utilización de medios reprográficosapropiados es una garantía para la conservación de los archivoseclesiásticos.

Para la conservación de los archivos de las Iglesias particulares es dedesear que se sigan los criterios de la mejor tradición archivística y quese utilicen todos los medios técnicos apropiados (fichero electrónico,conexión en red e Internet, microfilms, reproducción de documentos conscanner, discos ópticos, etcétera.),279.

Como se ve aqui, la reprografía está totalmente imbricada actualmentecon la informática. La reproducción informatizada permite llevar a lo quehoy es una práctica rápido crecimiento: la reproducción virtual.

Con los inventarios ya en orden e informatizados, la tarea dedigitalización y microfilmación se hace mucho más sencilla.

277 Cfr. RAMP (PGI-85/WS/), número 211. «La legislación también debe velar por que el ArchivoNacional u otra autoridad en materia de archivo que legalmente posea dichos documentos puedacertificar cualesquier copia de éstos»

278 CPBCI. Bienes culturales y familias religiosas. Roma, 1994. Material de archivos: en la escuela dela historia.

279 CPBCI. La funcion pastoral de los archivos eclesiásticos. 3.3. Inventario e informatización

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Al respecto, y en forma muy rudimentaria, cabe recordar las funcionesesenciales de ambas técnicas reproductivas:

- Digitalización de documentos: consulta y difusión- Microfilmación de documentos: respaldo testimonial de la

documentación.La digitalización y microfilmación simultáneas tiene ventajas no

desdeñables:- Evita exposiciones innecesarias a la manipulación reprográfica- Permite el control informático del proceso, y su entrecruzamiento

con las bases de datos preexistentesSin embargo, los costos que hacen impracticable para este caso ese

proceso simultáneo, harán aguzar el entendimiento de las autoridades delsistema cuando hayan de encarar un programa sistemático de respaldoreprográfico de documentos de archivos. Como bien lo reconoce la CPCBI,

… habrá que buscar fondos extraordinarios destinados a la fase de laprimera informatización de los materiales, además de otros fondosordinarios para el trabajo normal de introducción de datos, sirviéndosetambién de especiales ayudas de instituciones nacionales einternacionales280.

Con profundas limitaciones económicas, el procedimiento que podríaadoptarse en el Archivo Histórico sería el siguiente.

1. Dado que es un archivo privado, la apertura a la consulta de sumaterial es resorte privativo del Superior Provincial. Una vez presentada lasolicitud por parte del investigador, de tratarse de material que tengaprioridad para su reprografiado de respaldo (copia o microfilm deseguridad), se consensúa un horario de atención personalizada.

2. Mediante una cámara fotográfica digital, de buena calidad, seprocederá al fotografiado de los documentos.

3. El investigador trabajará dentro de lo posible con una impresiónobtenida de la reproducción digital, y paleotranscribirá, de ser necesario, eltexto del documento. Lo hará a título gratuito, como retroalimentacióninformativa del sistema, con el compromiso del Archivo Histórico de hacerconstar el autor de la paleotranscripción en procesos posteriores deinformación.

4. Se realizarán copias sobre soportes de lectura óptica de las fotografíasdigitales obtenidas, y se copiarán también las transcripciones obtenidas.

5. Mediante labores de voluntariado, o de prácticas universitarias, sesometerá a los necesarios controles lo obtenido en el paso anterior, y seprocederá a su edición sobre soportes DVD. Cada unidad de conservacióndel Archivo Histórico será reproducida sobre un DVD, guardando tambiénla signatura archivística correspondiente a ella. Es decir, cada DVDdispondrá de la reproducción gráfica digitalizada y la transcripción textual

280 Ibíd.

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de una unidad de conservación [o de parte de ella en caso de ser ésta másextensa que la capacidad del soporte].

6. Basados en el material obtenido, cuando el Superior Provincial estimeoportuno, se podrán encarar publicaciones faccimilares, ópticas o virtualesde los documentos del Archivo Histórico.

7. También con el material obtenido en el punto 5, podrá solicitarse larealización paulatina de la microfilmación de seguridad.

El procedimiento encarado anteriormente permitirá la consulta masiva delos documentos, la divulgación de la historia de la institución y de lasociedad en la que se halló inmersa, y eventualmente también la realizaciónde trabajos prácticos de las cátedras universitarias que lo considerenpertinente.

La difusión masiva de la reprografía digital de los documentos delArchivo Histórico de la institución objeto de este trabajo será tambiéngarantía de su seguridad frente a las acciones ilícitas.

En efecto, sin un soporte documental, acompañado de la fotografía, esdificil, por no decir imposible, demostrar la procedencia de la obra encuestión, con el fin de restituirla a los legitimos propietarios281.

Servicio de Evaluación de Documentos

Analicemos ahora uno de los puntos más delicados para la prácticaarchivística: establecer el valor de la documentación que albergan losarchivos de una institución.

Esta evaluación tiende a facilitar dos objetivos concretos.El primero de ellos es el resguardo óptimo del legado documental que ha

de llegar a las generaciones futuras. La evaluación indicará quédocumentación ha de concentrarse en el Archivo Histórico de la ProvinciaArgentina.

El segundo, es garantizar tanto que en ese legado no exista informaciónredundante o intrascendente, como que la sobreabundancia de documentosque la contengan no atenten contra el resguardo óptimo de aquél. Tambiénaquí la evaluación establecerá los documentos superfluos, para su oportunadestrucción.

La evaluación que satisface los dos objetivos anteriores se cumple en dosetapas sucesivas.

La primera etapa evaluativa judica sobre la permanencia de la vigenciajurídica y administrativa del documento, es decir, sobre su valor primario.

En la segunda etapa evaluativa un grupo interdisciplinario de expertos, apedido de las autoridades del sistema, deciden:

281 CPBCI. Necesidad y urgencia del inventario y catalogación de los Bienes culturales de la Iglesia .Roma, 1999. § 3.4. El peligro de dispersión

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- sobre la eliminación de los documentos que han perdido su valorprimario y cuyo valor secundario no ha sido preestablecidooportunamente; y

- sobre el posterior reciclado del soporte.Si las tareas de evaluación documental son en sí delicadas, en el marco

eclesial, las instituciones poseen características que obligan a un cuidadomayor.

En primer lugar, las personas jurídicas eclesiales nacen en virtud de unaevaluación de la autoridad competente sobre la utilidad verdadera quepersiguen y sobre las posibilidades concretas de llevarlas a cabo282. No es elcaso de las personas jurídicas en el orden civil o empresas comerciales, quenacen por la mera voluntad de sus impulsores. Esto hace que ladocumentación procedente de cada persona jurídica eclesial revista unvalor especial para los investigadores que estudien un sector de la sociedaden las cuales esa institución desarrolla sus actividades.

En segundo lugar, las personas jurídicas eclesiales tienden por naturalezaa perdurar en el tiempo283, y en ocasiones a resurgir luego de largosperíodos de latencia284. Esto último se refleja en «cortes» en los cuadros declasificación, tal como se ha visto oportunamente.

El servicio de evaluación será prestado bajo la supervisión directa de losorganismos de dirección del sistema, que deben

…estar facultados para garantizar que dichos valores [culturales] sedefinan y que se conserven los documentos que tengan interés a losefectos de la investigación285.

La observancia de los criterios orientadores básicos en cuanto a lacreación de documentos propuestos en el Servicio de Elaboración yTratamiento Administrativo de Documentos facilitará enormemente la depor sí complicada y delicada de evaluación documental. Los dos primeroscriterios (1- documentar sólo lo necesario y 2- documentar con sentidoinstitucional) harán que la masa documental no crezca desmesurada y

282 Cfr. CIC 114. §1. Se constituyenn personas jurídicas, o por la misma prescripción del derecho o porespecial concesión de la autoridad competente dada mediante decreto, los conjuntos de personas(corporaciones) o de cosas (fundaciones) ordenados a un fin congruente con la misión de la iglesiaque trasciende el fin de los individuos. §2. Los fines a que hace referencia el §1 se entiende que sonaquellos que corresponden a obras de piedad, apostolado o caridad, tanto espiritual como temporal.§3, La autoridad competente de la Iglesia no confiera personalidad jurídica sino a aquellascorporaciones o fundaciones que pesigan un fin verdaderamente útil y que ponderadas todas lascircunstancias, dispongan de medios que se prevé que pueden ser suficientes para alcanzar el fin quese proponen.

283 CIC. 120. §1. Toda persona jurídica es, por naturaleza, perpetua; sin embargo, se extingue si eslegítimamente suprimida por la autoridad competente, o si ha cesado su actividad por espacio decien años; la persona jurídica privada se extingue además cuando la propia asociación quedadisuelta conforme a sus estatutos, o si, a juicio de la autoridad competente, la misma fundación hadejado de existir según sus estatutos.

284 Como es el caso de la Compañía de Jesús o de la Orden de la Merced.285 Cfr. RAMP (PGI-85/WS/) 204, in fine.

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desordenadamente. El tercer criterio (documentar en relación al tiempo devalidez del testimonio) habrá preparado el camino para determinar aprimera vista la documentación que está en condiciones de pasar al ArchivoHistórico.

Servicio de Transferencia de Documentos286

La necesidad de concentrar los documentos que constituyen un legadocultural para las generaciones futuras, ya ha sido repetidamente tratada a lolargo del trabajo.

Técnicamente, el traslado de documentos a un archivo que sirvedocumentos de la tercera edad se denomina transferencia documental.Estos documentos, que mayoritariamente han perdido validez jurídica yadministrativa, mediante este traslado salen de la jurisdicción del archivode origen para prestar un servicio a toda la sociedad.

Si bien las constituciones de la Orden de la Merced establecen que encada casa –es decir convento– «haya un archivo con sus seccionesadministrativa e histórica», tanto las indicaciones de las autoridadeseclesiales como las circunstancias vividas a través del tiempo como lasmedidas tomadas por las autoridades de la Provincia Argentina ante lacomisión de hechos vandálicos, apuntan a una concentración de esosfondos en un archivo especializado.

La normativa del sistema debe reconocer comoprincipal requisito estatutario para la transferencia es que los documentos… seleccionados para su conservación permanente, es decir, aquellos quese han conservado más años que los prescriptos, se trasladen al Archivo[Histórico]287.

En base a este tiempo durante el cual los archivos han de conservar en supoder la documentación en edad administrativa, se elaboran las conocidascomo Tablas de Retención. En ellas se establecen los plazos durante loscuales cada tipo de documento –dicho en términos comunes– y en su casocada tipo de asunto será retenido por el archivo de origen; y también ellugar donde ha de ser retenido. Elaborar esas tablas de retención es unatarea que debe ser abordada por todos los estamentos del sistema, por loque se adjunta como anexo una tabla de retención ilustrativa, pergeñada porel autor en base al conocimiento personal que tiene de la institución.

286 La ubicación del servicio de transferencia dentro del esquema del sistema plantea una pregunta:¿debe estar antes o después del servicio de eliminación? Como la documentación que hace a lossubsistemas «propios» de la Orden (conventual y asistencial) primero será transferida al ArchivoHistórico y luego eliminada, considero que su ubicación puede ser ésta, y no la que normalmente seindicaría: primero la eliminación y luego la transferencia.

287 Cfr. RAMP (PGI-85/WS/) 205

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La interacción entre esa Tabla de Retención, consensuada y actualizadapermanentemente, y los Inventarios de cada Archivo del Sistema y delInventario del Sistema, permiten programar la remisión al ArchivoHistórico de los documentos que se han de transferir.

Estos documentos que se han de transferir quedan reflejados en una Listade Remisión. Luego de la verificación de la concordancia entre esa Lista deRemisión y los documentos remitidos, esos documentos se considerantransferidos al Archivo Histórico.

Es necesario hacer constar que cada subsistema posee sus propios plazosde retención, alargándose en los casos de los subsistemas central, escolar yparroquial, y acortándose al máximo en los subsistemas conventual yasistencial.

Servicio de Eliminación de Documentos

La elaboración de la Tabla de Retención permite también, en formasimultánea, la confección de la Tabla de Eliminación, donde sepredeterminan los tipos de documentos que estarán en condiciones deeliminarse en un lapso dado, y las circunstancias en que esta eliminación serealizará. La interacción entre esa Tabla de Eliminación, y los Inventariosde cada Archivo del Sistema y del Inventario del Sistema, permitenprogramar las tareas previas a la Eliminación de documentos.

Una de esas tareas previas es el muestreo, que consiste en obtener de unamasa documental homogénea algunas porciones pequeñas que representenal total de ella. La proporción necesariamente ha de ser más grande enépocas de crisis y de cambios que en épocas de normalidad.

La otra es la elaboración de Listas de Eliminación de documentos, dondeconsta los documentos que son remitidos para su eliminación. Laeliminación también se hace bajo estricta supervisión de las autoridades delSistema, luego de la correspondiente verificación.

En el momento de realizarse la destrucción del documento, debelevantarse un acta de eliminación, donde conste lugar y fecha, forma deeliminación del documento y del reciclado del soporte si lo hubiere, y sehaga referencia a la lista correspondiente. Las Tablas de Eliminacióndeberán contemplar también el modo. Hay documentos en los que senecesita una destrucción absoluta, tales como los documentos de identidad,y en ese caso se prefiere la cremación; hay otros que no necesitan de tantosrecaudos, y bastará para ello el uso de una máquina destructora dedocumentación. En el caso de soportes informáticos magnéticos, lo másconveniente será el formateo total, no rápido, del soporte. Para los soportesópticos no regrabables, la destrucción física por calor, mientras que para losregrabables habrá que consultar a un experto.

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Es muy conveniente que se realice una Lista de Eliminación por cadaserie, ya que al Archivo Histórico se remitirá el Acta de Eliminación, con laLista de Eliminación correspondiente y el muestreo resultante.

El anterior es el procedimiento normal aplicable a los conocidos a niveleclesial como «documentos de archivo».

Pero en numerosas ocasiones no se justifica encarar semejante tarea.Existen numerosos documentos que no reúnen las característicastestimoniales propias de aquellos documentos que son objetos formales dela archivología. Un aviso de llamado telefónico, un triplicado de remitoinnecesario, una pila de fotocopias sobrantes de una circular, por ejemplo,son claros ejemplos de documentos sin valor archivístico. Y necesariamentedeben ser eliminados a la brevedad en pro de una buena administración288.Esta eliminación es más clara con los documentos «no archivísticos»emitidos por la institución y requiere algún cuidado con los recibidos.

Dentro de la Curia provincial existen documentos que por su contenidono tienen consecuencias administrativas ni jurídicas, pero sí hacen a losderechos personalísimos. Por ejemplo, algún proceso canónico por algunafalla humana que no entra dentro de las potestades de las autoridadesciviles o los informes de los profesionales del área de la salud mentalprevios a toda profesión religiosa. Estos documentos han de seroportunamente eliminados, a criterio del Superior Provincial, dejandoconstancia del hecho en un acta, junto a un breve resumen sobre ladocumentación eliminada.

Existe otro caso en que la documentación puede llegar a ser eliminada encaso de urgencia. Supóngase un caso de persecución religiosa, de los que laIglesia no estuvo ni estará exenta a lo largo de los siglos. Si la conservaciónde alguna documentación fuera gravemente perjudicial para la vida de lainstitución o de los miembros de la institución, es conveniente que elsuperior con jurisdicción en el lugar tenga facultades para ordenar sudestrucción289. Posteriormente deberá elevar un informe lo más detalladoposible a sus superiores en la Orden, refiriendo las hechos que aconsejaronesta destrucción, el contenido de los documentos destruidos con la mayorcantidad de circunstancias, y la posible existencia de copias de losdocumentos y testigos de la información que poseían esas piezasdocumentales.

288 Al respecto, algunas empresas tienden a no usar escritorios que posean cajoneras, a fin de que nohaya acumulación innecesaria de papeles ni trabajo atrasado.

289 Cfr. RAMP (PGI-85/WS/), número 113.

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Servicio de Extensión cultural

El Sistema propuesto no es algo que pueda terminar en sí mismo. Lastareas de un sistema de archivos no se reducen a servir a los documentos ybrindar información y documentación a los usuarios internos y externos a lainstitución. La riqueza cultural que custodian necesita derramarse, fluyendolibremente por los cauces que encuentre en busca del resto de la sociedad.

Los archivos, en cuanto bienes culturales, se ofrecen ante todo a lafruición y conocimiento de la comunidad que los ha producido, aunquecon el paso del tiempo adquieren una dimensión universal,transformándose en patrimonio de toda la humanidad290.

De no hacerlo, ese legado quedará sepultado, y se corromperá olvidadopor todos.

Por ello, los estatutos del sistema deberán prever

- El fomento del valor educacional de los archivos por mediosadecuados …. 291

- La publicación de … obras dignas de publicarse preparados por elpersonal de los archivos o encargados por éstos292

- Una promoción orgánica e inteligente del legado documental de laOrden para introducirlo en los circuitos vitales de la accióncultural y pastoral de la Iglesia293

Una de las primeras tareas que deberá encarar el sistema, será avocarsea la promoción de la comunicabilidad del material recogido paraconsultarlo o para estudiarlo…294.

Por ello, el Sistema ha de procurar que el Archivo Histórico puedatransformarse en un importante centro cultural, ya que

…los archivos eclesiásticos forman parte del patrimonio de una cultura ytienen un imprescindible valor informativo y formativo…295.

También está llamado el Archivo Histórico a convertirse en agenciacultural, puesto que

… los archivos pueden ser lugares privilegiados de encuentros deestudio, de convenios sobre tradiciones religiosas y pastorales de lacomunidad cristiana, de exposiciones didácticas y de muestrasdocumentales…296.

290 Cfr. CPCBI. La función pastoral …. 4.1. Destino universal del patrimonio archivístico291 RAMP (PGI-85/WS/), 194, § viii..292 RAMP (PGI-85/WS/), 194, § vii..293 CPCBI. La función pastoral …, introducción.294 Ibíd. § 2. Líneas esenciales de un proyecto orgánico.295 Cfr. Ibíd. § 4.4. Formación cultural por medio del depósito documental296 Cfr. Ibíd. § 4.5. Promoción de la investigación histórica

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Y en centro de información, porque quienes…trabajan en los archivos eclesiásticos contribuyen eficazmente aldesarrollo cultural, ya que ofrecen su competencia científica haciendocomprender la naturaleza y el significado de los documentos que ponen adisposición de los investigadores297.

El Sistema ha de interactuar ante las autoridades eclesiásticas y civiles… para promover una orientación común … a fin de coordinar lasintervenciones en favor de los bienes histórico/culturales y en particularde los archivos298

También deberá colaborar con diversas instituciones culturales ycientíficas, ya que ese patrimonio documental

… puede ser un punto de referencia y un lugar de encuentro entre variasiniciativas culturales e investigaciones históricas, en colaboración con losinstitutos especializados de las universidades eclesiásticas, católicas,libres y estatales. Serán también de gran utilidad las relaciones entrearchivos y centros de documentación299.

En colaboración con estas instituciones culturales y científicas,promoverá

…además ediciones de fondos y colecciones de estudios, …[integrándose] en los procesos creativos de la cultura y en la misiónpastoral de la Iglesia local300.

El Sistema será también un promotor permanente de la organizaciónarchivística, ya que es deseable

… que la Iglesia se haga promotora de la organización archivística,motivando su importancia cultural, especialmente si no existe … unaapta sensibilización entre las instituciones civiles301.

Y encarará en toda ocasión que se le presente la promoción de laAsociación de Archiveros Eclesiásticos de nuestro país, inexistente hasta lafecha.

También las Asociaciones de Archiveros Eclesiásticos han depromoverse en todos los países, porque trabajan activamente en bien delperfeccionamiento de los archiveros y de la conservación delpatrimonio302.

Los servicios de extensión cultural se verán facilitados enormementegracias a las tareas de informatización llevadas a cabo en ocasión de lastareas descriptivas y reprográficas del acervo documental. La presencia que

297 Cfr. Ibíd. § 4.4. Formación cultural por medio del depósito documental298 Cfr. Ibíd. § 2.4. Orientaciones comunes de las Conferencias episcopales299 Cfr. Ibíd. § 4.5. Promoción de la investigación histórica300 Cfr. Ibíd. § 4.5. Promoción de la investigación histórica301 Cfr. Ibíd. § 4.5. Promoción de la investigación histórica302 Cfr. Ibíd. § 2.5. Necesidad de personas especializadas en archivos

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ya tiene la Provincia Argentina en Internet, será el vehículo sobre el que eselegado cultural se desplace con rapidez virtual hacia sus destinatarios.

También, Internet será un vehículo privilegiado para brindar informaciónde la historia propia a las comunidades educativas mercedarias, ya se através del correo electrónico como de videoconferencias.

Servicio de Formación

El Sistema ha de procurar prepararcon seriedad profesional a las personas a quienes se confía el cuidado delos Bienes Culturales del pasado, no simplemente para una conservacióninerte, sino sobre todo para una consciente y obligada valorización delpatrimonio.303.

La formación del personal de archivos del Sistema constituye unainversión segura.

Por tanto es de fundamental importancia la formación de los operadoresque activamente trabajan en el sector de los archivos a diversos niveles.A largo plazo este servicio contribuye al desarrollo de una base culturalque hoy es absolutamente necesaria incluso en el trabajo pastoral304.

Esta preparación profesional requerirá… la comunicación de informaciones entre diversos archivos y laparticipación en Asociaciones archivísticas nacionales einternacionales…305.

Los empleados que se desempeñen en los distintos archivos del Sistemadeberán reunir condiciones técnicas y aptitudes personales

La competencia técnica y el sentido del deber son las condicionesindispensables para el respeto a la integridad de los fondosdocumentales…306.

Por su parte, las autoridades de la Provincia Argentina,… deberán confiar la dirección de los archivos eclesiásticos a personaspreparadas, estables, expertas y capaces.307

También las autoridades de la Provincia Argentina y las del Sistema,procurarán animar a los archiveros en su trabajo,

…promoviendo su especialización, invitándoles a tomar parte enAsociaciones nacionales para reflexionar sobre estos temas, organizando

303 CPBCI. Bienes Culturales y Familas religiosas. Perspectivas operativas.304 Cfr. CPCBI. La función. 2.5. Necesidad de personas especializadas en archivos305 Cfr. Ibíd. § 2. Líneas esenciales de un proyecto orgánico.306 Cfr. Ibíd. § 2.5. Necesidad de personas especializadas en archivos307 Cfr. Ibíd. § 2.5. Necesidad de personas especializadas en archivos

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convenios de estudio para profundizar en los aspectos relativos a lagestión de los archivos eclesiásticos;308

Como un servicio eclesial y cultural, el Sistema ofrecerá, dentro de susposibilidades, charlas y cursos a las instituciones que lo requieran, sobretemas de su especialidad.

Servicio de Inspección

Periódicamente las autoridades del Sistema visitarán los diversosarchivos de los distintos subsistemas.

En el transcurso de esos encuentros con el personal de archivo, seprocurará

… avivar … en todos los responsables … la sensibilidad hacia losarchivos de su competencia, para que se dediquen con renovado empeñoa este trabajo, que en la actualidad ha adquirido una especialimportancia;309

Una de las ocasiones en que se tendrán lugar esas reuniones, serán lasvisitas canónicas que realizan los Superiores de la Orden. Al examinar losarchivos, es conveniente la presencia del archivero de la provincia.

Otros momentos de encuentro, serán los previos a las primerastransferencias de documentación al Archivo Histórico; o cuando seaimperiosa la presencia física de las autoridades del Sistema en algúnarchivo específico.

308 Cfr. Ibíd. § 2.4. Orientaciones comunes de las Conferencias episcopales309 Cfr. Ibíd. § 2.4. Orientaciones comunes de las Conferencias episcopales

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8. P8. PROGRAMACIÓNROGRAMACIÓN DELDEL S SISTEMAISTEMA

Vistos los elementos del conjunto y sus interrelaciones, llega el momentode la programación para su puesta en marcha.

Tres son los grandes aspectos a considerar:1. Presupuesto del Sistema.

Erogaciones- Gastos ordinarios- Inversiones ordinarias- Inversiones extraordinarias

Recursos- Financieros- Humanos- Bienes de uso

2. Elaboración del plan3. Ejecución del plan.

8.1. PRESUPUESTO DEL SISTEMA

Gastos

Dentro del presupuesto que ha de administrar el sistema habrá distintostipos de gastos.

Algunos serán irreductibles, es decir que no variarán gran cosa envalores constantes de un año a otro.

Otros estarán destinados a adquisiciones regulares de equipamiento ypequeñas remodelaciones de locales.

Por último, otras conllevarán grandes desembolsos financieros.Es esencial que los gastos irreductibles sean mínimos.

- Uno de esos gastos es el tópico de las remuneraciones salariales.- Otro es el referido al funcionamiento administrativo del sistema,

es decir, gastos de oficina.- Otro no menos importante, es el de mantenimiento y reparación de

las instalaciones.169

- Otro lo constituyen las unidades de conservación: legajos, cajas,carpetas, sobres especiales, etcétera.

- El transporte de los documentos transferidos.- Adquisición de copias de documentos existentes en archivos que

no son de la Provincia Argentina.- Adquisición de bibliografía complementaria.- Formación del personal- Gastos de salud de documentos y archivos.- Publicaciones y exposiciones

Otras erogaciones están constituídas por inversiones ordinarias anuales,tales como muebles de oficina, estanterías, maquinarias, y pequeñasremodelaciones de locales.

Por último, las inversiones extraordinarias son aquellas que implicansumas considerables, tales como la construcción de un local.

Recursos Financieros.

La Provincia Argentina es quien básicamente deberá proveer los recursosfinancieros para la satisfacción de los gastos derivados del funcionamientodel Sistema. No obstante, como ya se ha señalado, las posibilidades deéxito radican en gran medida en que el aporte de la Provincia Argentina seamínimo. Para ello las autoridades del Sistema han de contar con facultadessuficientes como para solicitar subsidios y otros tipos de colaboraciones,tanto financieras como personales.

La puesta en marcha del sistema permitirá que desde el ArchivoHistórico se generen recursos propios, tales como

- Inscripción de investigadores- Autentificación de documentos del archivo- Venta de publicaciones históricas- Cursos especializados para archiveros e investigadores- Cursos y conferencias en general

Recursos humanos.

Con respecto de los recursos humanos del sistema habrán deconsiderarse varios estamentos.

- Archivero de Provincia.- Personal técnico permanente del Archivo Histórico.- Cronistas conventuales.- Personal administrativo de curia provincial, colegios, parroquias y

centros asistenciales.- Servicios tercerizados.

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- Voluntariado.- Pasantías no rentadas.

Bienes de uso

Los recursos materiales del Sistema pueden dividirse en tres grandesáreas:

- Locales- Instalaciones- Equipos

El plan ha de prever, en cuanto a locales:- Reconvertir locales ya existentes- Organizar locales adecuados en cada archivo- Instalación de talleres técnicos en el Archivo Histórico

En cuanto a las instalaciones, ha de prever- Mobiliario adecuado para las unidades de conservación- Condiciones ambientales aceptables- Condiciones de seguridad aceptables

En lo referido a equipos, la obtención de elementos indispensables de- Informática- Teleinformática- Reprografía- Restauración

8.2. ELABORACIÓN DEL PLAN

La elaboración del Plan de Sistematización de Archivos reconoce dosinstancias fundamentales.

La decisión de hacerlo, que depende de las autoridades de la ProvinciaMercedaria Argentina.

La elaboración técnica del mismo, que estará a cargo de quienes lasautoridades de la Provincia designen.

Por ello, el primer paso para la elaboración del plan es la designación deuna persona que reúna en forma satisfactoria las condiciones personales,profesionales y morales requeridas para la programación y puesta enmarcha del Sistema. Este es un punto de inflexión, y una condiciónexcluyente para que todo lo escrito en el presente trabajo pueda tener unaaplicación práctica.

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El segundo paso consistirá en una primera toma de conciencia por partede los responsables de cada área (curia provincial, consejo educativoprovincial, consejo parroquial provincial y comisión económica provincial)de la realidad de los archivos de la Provincia.

El tercer paso será la confección de un anteproyecto de plan por parte delas personas involucradas en los dos puntos anteriores: el promotor y lacomisión, que posteriormente serán las autoridades del Sistema. Esteanteproyecto será elevado al Consejo Provincial para su revisión yaprobación

Anteproyecto de Plan de Sistematización

Se trata de un plan por objetivos. Está dividido en etapas de duraciónvariable, en la que cada una implica el inicio de actividades, lacontinuación de las actividades iniciadas en etapas anteriores y lapreparación de las actividades que se iniciarán en próximas etapas.

Las primeras etapas del plan estarán dedicadas preferentemente areorganizar u organizar las actividades internas de los archivos del sistema,mientras que las etapas posteriores a reforzar las actividades externas.

Cada etapa tendrá desarrollos a dos niveles- Servicios- Estructuras

No está dentro del alcance de este trabajo la elaboración delanteproyecto, ya que ello corresponde, como se dijo, al futuro Archivero deProvincia y a la Comisión Asesora del Sistema.

8.3. EJECUCIÓN DEL PLAN

Promulgado el Proyecto definitivo, y sancionado el Reglamento delSistema, sus autoridades se avocarán a la realización del mismo.

En contacto permanente con todas las personas relacionadas de uno uotro modo con el acervo documental de la Provincia, recabaráninquietudes, escucharán sugerencias, y emprenderán tareas que estándestinadas, por su naturaleza, a no tener una finalización conocida.

El Sistema de Archivos es un organismo «viviente»: cohesionadointernamente en profundidad, rico en matices informativos, las relacionesentre los archivos fluyen libremente por los cauces de su red; mientras quebrinda a la sociedad que la circunda, y más allá, todo lo que buenamente

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puede dar de sí, y recibe de esa misma sociedad todo lo que ella quieraretribuír.

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9. A 9. A MODOMODO DEDE D DESPEDIDAESPEDIDA

Al finalizar la carrera universitaria en que se inserta el presente trabajo,creo oportuno y necesario reflexionar sobre los cuatro años durante loscuales me cobijó esta querida casa de estudios.

Llamé a la puerta de la Escuela de Archiveros buscando conocimientosque me ayudaran a preservar los documentos coloniales existentes en elArchivo del Convento Mercedario de Córdoba.

No existía un curso de extensión sobre el tema, pero los buenos oficiosde una de las secretarias, la archivera Hilda Romero de Acuña, permitieronla inscripción a último momento para poder rendir en carácter de libre elexamen de ingreso. Con sorpresa de mi parte lo aprobé luego de unapreparación de tres días.

El trabajo y el estudio se imbricaron de tal manera que llegaron a ser lamisma cosa. En los momentos de insomnio pensaba en soluciones para elarchivo donde trabajo basándome en lo que había estudiado; y cuandodormía en ocasiones soñé con archivos.

La red de Internet también brindó respuestas a una serie de dudas sobrearchivología, y obligó a comparar distintas realidades. El cotejo desituaciones diversas me produjo una sensación de soledad, ya queconceptos tan usados en el ámbito de la Escuela, como «archivalía» o«archivo intermedio», prácticamente no existen en la actualidad en laspáginas de la web consultadas310.

Dicen algunos que no corresponde expresar abiertamente sussentimientos en ambientes donde debe primar la razón. Para mí es unanecesidad decir que a la sombra de estos muros fui feliz, «que la pasé muybien».

El grupo de estudiantes en el que tuve la suerte de encontrarme semostró generoso, unido, sin mayores dobleces. Sin estos compañeros, sinsu ayuda, muy diversa hubiera sido mi suerte.

Del claustro docente destaco su disposición para evacuar consultas tantosobre temas específicos de sus cátedras como sobre asuntos que no hacían aellos. En reiteradas ocasiones conté con el asesoramiento o apoyo dedocentes de la casa en trabajos de investigación; vaya mi agradecimientopor tales gestos.

310 En legislaciones muy recientes, como es la Ley General de Archivos de Colombia, promulgada enjulio del presente año, ambos términos no aparecen. (Ver www.banrep.gov.co/blaavirtual/web-agn/homeagn.htm)

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Con respecto de la cátedra de Metodología y Práctica Archivística creosinceramente que un archivero no puede salir por el mundo a ejercer suprofesión aceptablemente si no ha pasado por ella. Durante el último añome sentí como un sofista en manos de Sócrates. Y Sócrates bien podríareconocer su mayéutica en el método usado permanentemente por lacátedra. Tuve que dar razón del uso de términos que me parecíaninsignificantes, y tuve que reconocer que eran por demás significativos.Pero gracias a reparar en todos estos aspectos, un nuevo archivero podrásalir a caminar y trabajar en el mundo de los archivos.

Alfredo R. M. Furlani

Córdoba, diciembre del 2000

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AANEXONEXO D DOCUMENTALOCUMENTAL

LA FUNCIÓN PASTORAL DE LOS ARCHIVOS

ECLESIÁSTICOS311

a Iglesia, en el curso de su historia milenaria, se ha prodigado enmúltiples iniciativas pastorales adaptándose a la índole de las culturas,

bastante diversas entre sí, con la única intención de anunciar el Evangelio.La memoria de las obras producidas confirma el incesante esfuerzo de loscreyentes en la búsqueda de aquellos bienes capaces de crear una cultura deinspiración cristiana, a fin de promover todos los valores de la personahumana como presupuesto indispensable para su evangelización.

L

Además de la producción de estos bienes culturales, la Iglesia se hainteresado también por su valorización pastoral y consiguientemente por laprotección de lo que ha producido para expresar y realizar su propiamisión. Pertenece a este último aspecto el cuidado de conservar el recuerdode la múltiple y diversa acción pastoral llevada a cabo por medio de losarchivos. En la mens de la Iglesia los archivos son, efectivamente, lugaresdonde se conserva la memoria de las comunidades cristianas y a la vezfactores de cultura para la nueva evangelización. Son, pues, un biencultural de especial importancia, cuya peculiaridad consiste en registrar elcamino seguido a lo largo de los siglos por la Iglesia en cada una de lasrealidades que la componen. Ya que los archivos eclesiásticos son loslugares de la memoria de la Iglesia, deben recoger sistemáticamente todoslos datos con los que se ha escrito la historia de la comunidad eclesial, paraque ofrezca la posibilidad de una atenta valoración de lo que se harealizado, de los resultados obtenidos, de las omisiones y de los errores.

El estudio documentado y sin prejuicios del propio pasado hace que laIglesia aparezca como «experta en humanidad», ya que da a conocer suimportancia histórica y al mismo tiempo permite que se le reconozca sunecesaria, plural y continua obra de inculturación y de aculturación. Esta

311 Carta circular de la Pontificia Comisión para los Bienes Culturales de la Iglesia dirigida a losObispos. Roma, 2 de febrero de 1997.

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investigación, que procede de una ponderada selección de todo aquello quees documentable, ayuda a mirar hacia un futuro fundado sobre lasaportaciones de la Tradición donde la memoria es a la vez profecía.Teniendo presente una feliz reflexión de la Escuela de Chartres podemosdecir que, aun siendo enanos, nos sentimos gigantes si tenemos concienciade caminar a hombros de las generaciones que nos han precedido comoseñal de la única fe. Las fuentes históricas unen a la Iglesia enininterrumpida continuidad, comenzando desde el mensaje de Jesús ysiguiendo con los escritos de la primera comunidad apostólica y de todaslas comunidades eclesiales, llegando hasta nuestros días, con unaproliferación de imágenes que documentan el proceso de evangelización decada Iglesia particular y de la Iglesia universal. A la inexorabilidad detantas circunstancias históricas, que providencialmente no han destruido lamemoria de los hechos en sus grandes líneas generales, hay que añadirtambién nuestro esfuerzo para proteger y valorizar el material documental afin de poder aprovecharlo en el "hic et nunc" de la Iglesia.

En cuanto a sus contenidos específicos los archivos conservan lasfuentes del desarrollo histórico dc la comunidad eclesial y las que serefieren a la actividad litúrgica y sacramental, educativa y asistencial, queclérigos, laicos y miembros de los institutos de vida consagrada y de lassociedades de vida apostólica han desarrollado, y todavía siguendesarrollando, en el curso de los siglos. No raramente tales institucionesconservan los documentos sobre las obras patrocinadas por ellas, así comosobre otros asuntos que se refieren a las relaciones jurídicas entre lasdiversas comunidades, institutos y personas.

Acerca de las cuestiones propias de los archivos han sido numerosas lasintervenciones de los Sumos Pontífices, conservadas de modo ejemplar enel antiguo y glorioso «Scrinium Sanstæ Sedis» del Laterano, y en el másreciente Archivo Secreto Vaticano. Han sido frecuentes las normas dadaspor los Concilios generales y por los Sínodos diocesanos, como soninnumerables los ejemplos de nobles tradiciones archivísticas en lasIglesias particulares, en las Ordenes y en las Congregaciones religiosas.Tanto el Código precedente del año 1917, como el actual Código deDerecho Canónico (del 25 de enero de 1983) y el Código de los Cánonesde la Iglesia Oriental (del 18 de octubre de 1990), dan normas oportunaspara la diligente conservación y para la valorización atenta de las fuentesarchivísticas. Desde el año 1923 se ofrece, en la Escuela Pontificia dePaleografía y Diplomática, el curso de Archivística, que ha recibido ladenominación oficial de Escuela Vaticana de Paleografía, Diplomática yArchivística. Además de esta realización hay que recordar también lacreación por parte del Sumo Pontífice Juan Pablo II, el 28 de junio de 1988,de la Pontificia Comisión para la Conservación del Patrimonio Artístico eHistórico dependiente de la Congregación para el Clero y su sucesiva

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reforma, por la cual la mencionada Pontificia Comisión para laConservación del Patrimonio Artístico e Histórico por voluntad delRomano Pontífice, recibe la denominación de Pontificia Comisión para losBienes Culturales de la Iglesia, con autonomía propia. Además el SumoPontífice Juan Pablo II, en la Constitución Apostólica Pastor Bonus (del 28de junio de 1988), declara que «entre los bienes Históricos tienen especialimportancia todos los documentos e instrumentos jurídicos, que se refiereny dan testimonio de la vida y cuidado pastoral, como también tienen encuenta los derechos y obligaciones de las diócesis parroquias, iglesias ydemás personas jurídicas instituidas en la Iglesia». El mismo Pontífice havuelto de nuevo sobre este tema en la alocución programática pronunciadacon motivo de la Primera Asamblea Plenaria de la Pontificia Comisión paralos Bienes Culturales de la Iglesia, indicando una amplia variedad de tiposde bienes culturales «puestos al servicio de la misión de la Iglesia» entrelos que se citan «los documentos históricos conservados en los archivos delas comunidades eclesiales».

Gracias a las intervenciones anteriormente mencionadas y a la abundanteliteratura científica e histórica, nace el interés de la Iglesia por laconservación de su memoria histórica, atrayendo así la atención del Pueblode Dios hacia el conocimiento de su propia historia.

Por su parte la Pontificia Comisión para los Bienes Culturales de laIglesia ha transmitido, en varias ocasiones, a los Eminentísimos yExcelentísimos Arzobispos y Obispos el deseo del Sumo Pontífice, JuanPablo II, de que se dé a los bienes culturales de la Iglesia la atención quemerecen por tratarse de testimonios de las tradiciones cristianas y de unmedio de potenciar la nueva evangelización, exigida por el actual momentohistórico. Después de una primera carta circular enviada a los Presidentesde las Conferencias Episcopales (el 10 de abril de 1989) a fin de recogerdatos informativos sobre el sector de los bienes culturales, y por tantotambién sobre la organización de los archivos, se pensó en una segundadirigida a los Presidentes de las Conferencias Episcopales de Europa (el 15de junio de 1991), ante la próxima apertura de las fronteras europeas,solicitando la realización del inventario y la recogida de documentos,relativos a los bienes histórico/artísticos. Posteriormente esta Comisiónindicó en la carta circular del 15 de octubre de 1992, la oportunidad de unaadecuada formación de los futuros presbíteros, mientras cursan los estudiosfilosófico/teológicos, sobre la importancia y la necesidad de los bienesculturales para una mayor expresión y profundización de la fe.

La carta circular del 19 de marzo de 1994 desarrolló el tema de lapeculiaridad de las bibliotecas eclesiásticas en la misión de la Iglesia. Porúltimo, con la presente, se pretende suscitar el interés sobre los archivos,dada su importancia cultural y pastoral, cumpliendo así el deseo del SumoPontífice manifestado a los Miembros de la Primera Asamblea Plenaria de

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esta Pontificia Comisión, el cual, superando la idea de la pura conservacióndel patrimonio de los bienes culturales, afirma que «es necesario llevar acabo una promoción orgánica e inteligente de tales bienes paraintroducirlos en los circuitos vitales de la acción cultural y pastoral de laIglesia».

1. Importancia eclesial de la transmisión delPatrimonio Documental

La documentación conservada en los archivos de la Iglesia Católica esun patrimonio inmenso y precioso. Baste considerar el gran número dearchivos que se han creado como consecuencia de la presencia y actividadde los Obispos en las ciudades episcopales. Hay que mencionar, entre losmás antiguos, los archivos episcopales y los archivos parroquiales. Estos,no obstante las vicisitudes históricas, en muchos casos se han enriquecidocon nuevos documentos como consecuencia de los cambios que hanafectado a la organización institucional de la Iglesia y también por el mayordesarrollo de la acción pastoral y misionera de la misma Iglesia.

Por razón de su antigüedad y del material recogido, son importantestambién los archivos de los monasterios que cuentan con una larga yvariada tradición. La vida cenobítica, de hecho, ha tenido un influjo muyespecial en la evangelización de la población que vivía en torno a losmonasterios; ha iniciado y encauzado importantes instituciones caritativasy educativas; ha transmitido la cultura antigua y recientemente hapromovido la restauración de los documentos archivísticos creandolaboratorios especializados. A los archivos monásticos hay que añadir losde las congregaciones religiosas, los de otros institutos de vida consagrada,los de las sociedades de vida apostólica, con las típicas organizacioneslocales, provinciales, nacionales e internacionales.

Conviene tener en cuenta los archivos que conservan la documentaciónde los Cabildos, catedrales o colegiales; los de los centros de educación delclero (como seminarios, universidades eclesiásticas e institutos superiores);los de los grupos y asociaciones de fieles, antiguas y contemporáneas, entrelas que se encuentran las cofradías y hermandades reconocidas por suantigüedad y merecimientos; los de las instituciones hospitalarias yescolásticas; los de las obras misionales, a través de las cuales se hacanalizado el apostolado cristiano de la caridad. Resulta imposible ladescripción completa de la geografía de los archivos eclesiásticos, loscuales, aun observando las disposiciones canónicas, son autónomos en sureglamentación, diversos en su organización, según las instituciones que sehan ido formando en la historia dos veces milenaria de la Iglesia.

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1.1. Transmisión como momento de la Tradición

Los archivos eclesiásticos, conservando la genuina y espontáneadocumentación nacida en relación con las personas y con losacontecimientos, cultivan la memoria de la vida de la Iglesia y manifiestanel sentido de Tradición. Las informaciones recogidas en los archivos,permiten la reconstrucción de las vicisitudes de la evangelización y de laeducación en la vida cristiana. Los archivos constituyen la fuente primariapara escribir la historia de las múltiples normas de expresión de la vidareligiosa y de la caridad cristiana.

La voluntad por parte de la comunidad de los creyentes, y en particularde las instituciones eclesiásticas, de conservar desde la edad apostólica lostestimonios de la fe y de cultivar su memoria, expresa la unidad ycontinuidad de la Iglesia que vive los actuales tiempos de la historia. Elrecuerdo, recibido con veneración, de todo lo que dijo e hizo Jesús, de laprimera Comunidad cristiana, de la Iglesia de los Mártires y de los SantosPadres, de la expansión del cristianismo en el mundo, es un motivo eficazpara alabar al Señor y darle gracias por las «cosas grandes» que hainspirado a su pueblo. En la mens de la Iglesia, por tanto, la memoriacronológica lleva a una nueva lectura espiritual de los sucesos en elcontexto del eventum salutis, al mismo tiempo que urge a la conversiónpara poder llegar al ut unum sint.

1.2. Transmisión como memoria de la evangelización

Las motivaciones teológicas despiertan el interés y atención de lascomunidades cristianas en el cuidado de sus archivos. Las fuenteshistóricas, conservadas en antiguas arcas o en modernos estantes, hanpermitido y favorecido la reconstrucción de los acontecimientos y hanhecho posible la transmisión de la historia de la acción pastoral de losobispos en sus diócesis, de los párrocos en sus propias parroquias, de losmisioneros en sus zonas de evangelización, de los religiosos en susinstitutos. Baste pensar en el abundante material recogido en los archivos,como son las actas de las visitas pastorales, las relaciones de las visitas adlimina, los informes de los nuncios y de los delegados apostólicos, losdocumentos de los concilios nacionales y de los sínodos diocesanos, lascartas de los misioneros, las actas de los capítulos de los institutos de vidaconsagrada y de las sociedades de vida apostólica, etcétera.

Los registros parroquiales, que testifican la celebración de lossacramentos y anotan las defunciones, además de los fascículos curialesque recogen las ordenaciones sagradas, dejan entrever la historia de lasantificación del pueblo cristiano en su dinámica institucional y social. La

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correspondencia relativa a las profesiones religiosas permiten conocer eldesarrollo de los movimientos espirituales en las formas históricas en quese expresa la sequela Christi. También la documentación que se refiere a laadministración de los bienes eclesiásticos refleja la dedicación de laspersonas y la actividad económica de las instituciones, constituyendo unaimportante fuente documental.

El material recogido en los archivos pone de relieve, en su conjunto, laactividad religiosa, cultural y asistencial de las múltiples institucioneseclesiásticas, favoreciendo la comprensión histórica de las diversas formasartísticas que se han originado a lo largo de los siglos para expresar elculto, la religiosidad popular, las obras de misericordia. Los archivoseclesiásticos merecen, por tanto, atención no sólo en el aspecto históricosino también en la dimensión espiritual y permiten comprender la uniónprofunda de estos dos aspectos de la vida eclesial. De hecho a través de lahistoria compleja de las comunidades, atestiguada en sus cartas, aparecenmanifiestamente las huellas de la acción de Cristo, que fecunda a su Iglesia,sacramento universal de salvación, y la estimula en los caminos de loshombres. En los archivos eclesiásticos, como decía Pablo VI, se conservanlas huellas del transitus Domini en la historia de los hombres.

1.3. Transmisión como instrumento pastoral

Las instituciones cristianas han asumido en su actividad lasconnotaciones y las modalidades de las diversas culturas y circunstanciashistóricas Al mismo tiempo se han transformado en una importante agenciacultural. Con la llegada del tercer milenio cristiano, puede ser útil elredescubrir la multiforme inculturación del evangelio, que se ha realizadoen los siglos precedentes y que todavía es actual en la medida en que laPalabra del Señor se anuncia, se cree y se vive en la comunidad de loscreyentes, con innumerables costumbres locales y con diversas prácticaspastorales.

La memoria histórica forma parte integrante de la vida de cadacomunidad y el conocimiento de todo lo que atestiguan las sucesivasgeneraciones, su saber y su obrar, crea una situación de continuidad. Portanto los archivos, con su patrimonio documental conocido y comunicado,pueden llegar a ser instrumentos útiles para una inteligente acción pastoral,puesto que a través de la memoria de los hechos se da una mayorconcreción a la Tradición. Además los archivos pueden ofrecer a lospastores y a los laicos, mutuamente comprometidos en la acciónevangelizadora, informaciones sobre diversas experiencias lejanas yrecientes.

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La perspectiva con la que hay que abordar la acción eclesial recabada delos archivos, ha de ser la de una conveniente adaptación de las institucioneseclesiásticas a las exigencias de los fieles y de los hombres de nuestrotiempo. A través de una investigación histórica, cultural y social, loscentros de documentación son favorables de hecho al desarrollo de lasprecedentes experiencias eclesiales, a la comprobación de lo que no secumple, y a la renovación debida al cambio de las condiciones históricas.Una institución que olvida el propio pasado, difícilmente llegará aconformar su función entre los hombres que pertenecen a un determinadocontexto social, cultural y religioso. En este sentido los archivos,conservando los testimonios de las tradiciones religiosas y de la praxispastoral, tienen una propia e intrínseca vitalidad y validez. Así contribuyeneficazmente a desarrollar el sentido de pertenencia eclesial de cadageneración y manifiestan la presencia operante de la Iglesia en undeterminado territorio. Se comprende, por tanto, el cuidado que muchascomunidades locales tienen actualmente y tuvieron en el pasado, en favorde estos centros de cultura y de acción eclesial.

2. Líneas esenciales de un Proyecto Orgánico

Los archivos son los lugares de la memoria eclesial que hay queconservar, transmitir, reavivar y valorizar ya que representan la unión másdirecta con el patrimonio de la comunidad cristiana. Este deseo encuentrasu respuesta en la sensibilidad que se ha desarrollado en muchas Iglesiasparticulares en favor de los bienes culturales y de modo especial en cuantoa los eventos locales. Las iniciativas en esta materia son múltiples ysignificativas no sólo en el campo eclesiástico, sino también en el civil. Enmuchas Naciones existe una atención viva y creciente para los bienesculturales eclesiásticos al considerar las iniciativas que la Iglesia católicaha desarrollado en su historia. También en los países de recienteevangelización y de profundos cambios sociales el cuidado dc los archivosestá asumiendo un significado social y cultural de gran relieve.

En su conjunto conviene distinguir las diversas situaciones en que seencuentran los archivos eclesiásticos. Por ello esta Pontificia Comisiónpara los Bienes Culturales de la Iglesia cree oportuno indicar a SusEminencias y Excelencias algunas orientaciones generales para formularprogramas especiales operativos que tengan en cuenta la conservación yvalorización del patrimonio archivístico de las Iglesias particulares segúnsus diversas situaciones.

En el ámbito eclesiástico los archivos se dividen en archivos diocesanos,archivos parroquiales, archivos de otros entes no sometidos al obispodiocesano y archivos de personas jurídicas. En orden a la función que

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desempeñan existen los archivos corrientes (documentos para la vida ygestión de los diversos entes), los archivos históricos (documentos deimportancia histórica) y los archivos secretos diocesanos (documentossobre causas criminales, atestados de matrimonios de conciencia, dispensasde impedimentos ocultos, etcétera.).

La responsabilidad del material documental recogido en esos archivos seconfía, en primer lugar, a los diversos entes eclesiásticos, por lo cual hayque determinar en cada caso los criterios oportunos para su cumplimiento,procediendo al potenciamiento o a la institución de los archivos históricos,a la defensa y conservación del archivo secreto, a la debida organización delos archivos corrientes, a su oportuna informatización, a la admisión depersonas preparadas y formadas que trabajen en los archivos, a la ayuda depersonal técnico, a la comunicación de informaciones entre diversosarchivos, a la participación en Asociaciones archivísticas nacionales einternacionales y a la promoción de la comunicabilidad del materialrecogido para consultarlo o para estudiarlo. Además sería de desear, dondefuera posible, la institución de Comisiones formadas por los responsablesde los archivos diocesanos y por expertos en estas materias.

Para la organización y gestión de los archivos se pueden usarmetodología diversas, que adopten determinadas teorías archivísticas, o querespondan a particulares exigencias y a concretas posibilidades operativas.No se puede pensar en un proyecto idéntico para todos los archivoseclesiásticos, aunque al mismo tiempo hay que subrayar la necesidad deelaborar un proyecto coherente, abierto a futuros desarrollos tecnológicos ya posibles intercambios de informaciones. En este sentido se sugieren,como ejemplos, algunas orientaciones operativas a fin de situar el problemade los archivos en su propio contexto

2.1. Potenciación o institución del archivo históricodiocesano

Hay que destacar en primer lugar la responsabilidad de las Iglesiasparticulares en orden a la propia memoria histórica. Por esta razón elCódigo dc Derecho Canónico impone expresamente al Obispo diocesano, ya los que se equiparan a él, según la norma del can. 381 §2, que esté atentopara que «las actas y documentos de los archivos de las iglesiascatedralicias, de las colegiatas, de las parroquias y de las otras iglesias desu territorio se conserven diligentemente, y que se compilen los inventarioso índices en dos ejemplares, de los cuales uno se conservará en el archivode la respectiva iglesia y el otro en el archivo diocesano"; añadiendoademás la obligación de que en la diócesis "haya un archivo histórico y quelos documentos, que tengan un valor histórico, sean guardados

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diligentemente y ordenados sistemáticamente". El mismo Obispodiocesano, conforme al canon 491 §3, debe también dotar a dicho archivode un reglamento que permita su correcto funcionamiento según su propiafinalidad.

La organización del archivo histórico diocesano puede servir de ejemploa los otros entes y asociaciones eclesiásticas de la diócesis. En concretopuede ser también un modelo útil para los institutos de vida consagrada ypara las sociedades de vida apostólica que, en muchos casos, poseen unabundante depósito archivístico, a fin de que puedan proveer a la creación oa la organización de los respectivos archivos históricos según los mismoscriterios.

Cuando un archivo histórico se encuentre en el caso de recibir fondos deotros archivos privados (procedentes de fieles o de personas jurídicaseclesiásticas privadas) habrá que proceder de modo que la propiedad deesos archivos privados siga siendo de la persona o del ente depositario,salvo particulares derechos adquiridos en el acto de la concesión del fondo(por ejemplo el cuidado de su integridad, las normas para su conservaciónen un lugar determinado, las normas para consultar dichos fondos,etcétera.). Al recibir estos documentos procedentes de archivos privados,habrá que redactar, en el acto oficial de su entrega, algunas cláusulas parael exacto cumplimiento de las disposiciones que el archivo depositariohabrá de seguir en el uso de esos fondos. Si luego estos bienes caen bajo lacompetencia civil se seguirán las normas vigentes en la respectiva nación.

Respetando las competencias canónicas y civiles, habrá que pensartambién en la posibilidad de concentrar algunos archivos menores, si noestán suficientemente protegidos jurídicamente, en lugares centralessirviéndose incluso de diversos títulos o formas jurídicas, como pueden ser:depósito, extinción o supresión de la persona jurídica eclesiástica, etcétera.

La finalidad fundamental de esta concentración es la de salvaguardar laconservación y uso del material archivístico para poder consultarlo ydefenderlo. Los obispos diocesanos, u otros legítimos responsables, habránde tomar medidas precaucionales para salvar dichos documentos, cuandoéstos corran el riesgo de ser colocados o en lugares impropios o nosuficientemente defendidos, como por ejemplo, en el caso de parroquias oiglesias que no dispongan de sacerdotes o responsables de su tutela, o demonasterios y conventos donde no habiten comunidades religiosas. Aladoptar la solución de la concentración de archivos, se deben conservaríntegros los fondos, a ser posible respetando su primitiva organización ycolocación, ya que puede ser, a veces, el único modo de salvaguardar launidad del material trasladado a otro lugar.

Cuando la documentación recogida sea de especial importancia ocomplejidad, habrá de confiarse la dirección del archivo histórico a

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personas particularmente competentes, sirviéndose también de lacolaboración de expertos para problemas particulares.

2.2. Organización del archivo corriente

El archivo corriente tiene una gran importancia en la vida ordinaria de lacomunidad eclesial. Expresa el conjunto de la actividad pastoral de unacircunscripción eclesiástica, por lo cual es necesario organizarlo segúncriterios que tengan en cuenta las actuales exigencias y que se abran asucesivos desarrollos.

La conservación de la documentación contemporánea es tan importantecomo el cuidado de recoger los documentos antiguos y la organización delos archivos históricos. De hecho los archivos históricos del mañana seencuentran en los actuales archivos corrientes de las diversas curias,episcopales y provinciales, de los despachos parroquiales y de lassecretarías de las instituciones eclesiásticas. En ellos se conservan losdocumentos que recogen la vida de la comunidad eclesial en su continuodesarrollo, en su organización y en la múltiple actividad desarrollada porsus miembros. Especialmente en el periodo post conciliar se ha llevado acabo un provechoso proceso de renovación; se han realizado cambios,incluso radicales, en la organización de las instituciones eclesiales; se hanregistrado nuevos movimientos en la actividad misionera de la Iglesia; seha impuesto la urgencia de adaptar las instituciones a causa del escasonúmero de vocaciones, de la disminución de las prácticas religiosas y deotras condiciones adversas que han afectado sobre todo a los paísesoccidentales. La documentación que se posee es muy abundante y de granimportancia, por lo que hay que proceder con una atenta reglamentación yorganización de esos materiales.

Del funcionamiento de los archivos corrientes puede depender, en elmomento presente, la información y la coordinación de las múltiplesiniciativas y, en el futuro, la imagen de las diócesis, de las parroquias, delos institutos de vida consagrada, de las sociedades de vida apostólica, delas asociaciones de fieles, del movimiento eclesial. Si no se procede conprudencia y con una cierta urgencia a plantear los archivos corrientes, sepueden causar daños que comprometan la memoria histórica y, porconsiguiente, la actividad pastoral de las Iglesias particulares.

Los archivos, bien organizados, son un instrumento útil para comprobarlas iniciativas tomadas a breve, medio y largo plazo, para lo cual hay quefijar los criterios de adquisición de los documentos, ordenarlosmetódicamente, dividirlos según los diversos asuntos (por ejemplo, losregistros de las actas y de los expedientes de la vida eclesial que seprolongan en el tiempo son distintos de otras prácticas que terminan con la

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tramitación de un asunto). El Código de Derecho Canónico prescribe atodos los administradores de los bienes eclesiásticos "catalogaradecuadamente los documentos e instrumentos en los cuales se fundan losderechos de la Iglesia o del instituto acerca de sus bienes, conservándolosen un archivo conveniente e idóneo".

Hay que prestar una atención especial a la metodología con la que sedebe ordenar el archivo, la cual no puede limitarse a recoger y sistematizarexclusivamente el material recogido y elaborado en el archivo, sino quedebe extenderse también a organizar la documentación ofrecida –a travésde registraciones usando el computer, en sonido y en video– por medio devarios medios técnicos orientados hacia el multimedia (diapositivas,cassette en voz, cassette en video, CD, CD-ROM, etcétera.). A estepropósito tal vez se tendría que adquirir una oportuna mentalidad degestión de los archivos eclesiásticos conforme a las modernas tecnologías.

2.3. Mutua colaboración con las entidades civiles

En muchas naciones existe ya una política para los bienes culturales, quese traduce en leyes especiales, reglamentos, acuerdos con entes privados yproyectos concretos. En sus relaciones con los diversos Estados, la Iglesiainsiste en la finalidad eminentemente pastoral de sus propios bienes y en lagran actualidad que aportan estos bienes tanto en favor de la comunidadeclesial como en favor de la misma comunidad civil.

La atención que la Comunidad política presta a sus bienes culturaleshace que también la Comunidad eclesial se sienta interesada por los suyosy que se establezcan niveles de colaboración entre ambas comunidades.Así, paulatinamente, se ha ido difundiendo la convicción de que losarchivos históricos de la Iglesia forman parte del patrimonio nacional,teniendo en cuenta la propia autonomía que les es debida. En este sentidohabrá que establecer normas que respeten la pertenencia, la naturaleza y eldestino originario y propio de tales bienes. Además habrá que favorecer yestimular iniciativas que muestren la acción desarrollada por la Iglesia enuna determinada Comunidad política, por medio de la documentaciónrecogida en los archivos.

Respecto a la Comunidad Política es justo que los Obispos diocesanos ytodos los responsables de los archivos eclesiásticos tengan una actitudrespetuosa a las leyes vigentes en los diversos países, según lo previsto enel canon 22 del Código de Derecho Canónico. También es de desear que lasIglesias particulares se valgan de la colaboración de la Comunidad Política,por medio de determinados convenios estipulados por la Sede Apostólica opor expreso mandato de ella.

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2.4. Orientaciones comunes de las Conferenciasepiscopales

La interacción entre la competente autoridad eclesiástica y la respectivaautoridad civil servirá de estímulo a las Conferencias Episcopalesnacionales y regionales para promover una orientación común en lasIglesias particulares, a fin de coordinar las intervenciones en favor de losbienes histórico/culturales y en particular de los archivos, salvando lapotestad legislativa de derecho divino propia del Obispo diocesano.

Por tanto es oportuno:- reafirmar el respeto que la Iglesia siempre ha manifestado hacia

las culturas, incluso hacia las culturas clásicas no cristianas, de lasque ha conservado y transmitido muchos testimonios históricos,salvándolos a menudo de un probable olvido;

- suscitar la convicción de que el cuidado y la valorización de losarchivos ayuda a apreciar la importancia de esa realidad culturalque, por su profundo sentido pastoral, puede convertirse en uninstrumento eficaz de diálogo con la sociedad contemporánea;

- conservar en los archivos las actas y documentos previstos y todolo que ayude a dar a conocer la vida concreta de la comunidadeclesial;

- estimular la redacción de crónicas que recojan los hechos de losdistintos entes eclesiásticos, para facilitar referencias ydocumentos que se encuentran en los archivos;

- tener un cuidado especial en la conservación de los documentos(sirviéndose de las nuevas tecnologías) relativos a tradicionesreligiosas y a iniciativas eclesiales, para perpetuar su memoriahistórica, ya que de lo contrario corren el peligro de extinguirse yperderse;

- organizar los archivos de modo que existan unas líneas operativascomunes para recoger los documentos, conservarlos, utilizarlos,etcétera.;

- estudiar la posibilidad y el modo de recuperar los archivosconfiscados en el pasado, que pueden encontrarse tal vez dispersosen diversos lugares a causa de complejas vicisitudes históricas, oquizás han sido restituidos parcialmente o reproducidosinformáticamente (por medio de microfilms discos ópticos,etcétera.);

- insistir, ante cada uno de los administradores de los bieneseclesiásticos, sobre su responsabilidad en orden a la protección dela documentación, según las disposiciones canónicas;

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- animar a los archiveros en su trabajo, promoviendo suespecialización, invitándoles a tomar parte en Asociacionesnacionales para reflexionar sobre estos temas, organizandoconvenios de estudio para profundizar en los aspectos relativos ala gestión de los archivos eclesiásticos;

- avivar en los párrocos y en todos los responsables de las personasjurídicas dependientes del Obispo diocesano la sensibilidad hacialos archivos de su competencia, para que se dediquen conrenovado empeño a este trabajo, que en la actualidad ha adquiridouna especial importancia;

- procurar que el arcipreste vea el modo de que «los librosparroquiales se redacten convenientemente y se guardendiligentemente».

2.5. Necesidad de personas especializadas en archivos

Las autoridades competentes deberán confiar la dirección de los archivoseclesiásticos a personas preparadas, estables, expertas y capaces.

La importancia de este servicio hay que considerarla tanto para elarchivo histórico, como para el archivo corriente, según el can. 491 §1 y§2:

- el responsable del archivo histórico diocesano puede realizar untrabajo de asistencia a los archivos existentes en la diócesis, segúnlas directrices impartidas por el Ordinario y puede coordinar lasactividades culturales promovidas por los distintos archivos;

- el responsable del archivo corriente, además de garantizar laoportuna reserva del material recogido en el archivo, puedeverificar las varias iniciativas emprendidas a través de unorganismo que facilite la consulta y la investigación.

Por tanto es de fundamental importancia la formación de los operadoresque activamente trabajan en el sector de los archivos a diversos niveles. Alargo plazo este servicio contribuye al desarrollo de una base cultural quehoy es absolutamente necesaria incluso en el trabajo pastoral. Con estafinalidad, desde algunos decenios trabaja con gran competencia la EscuelaVaticana de Paleografía, Diplomática y Archívistica, instituida cerca delArchivo Secreto Vaticano. Recientemente esta Pontificia Comisión para losBienes Culturales de la Iglesia ha patrocinado la creación del CursoSuperior para los Bienes Culturales de la Iglesia en la PontificiaUniversidad Gregoriana de Roma. También las Asociaciones de ArchiverosEclesiásticos han de promoverse en todos los países, porque trabajanactivamente en bien del perfeccionamiento de los archiveros y de laconservación del patrimonio.

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El cumplimiento de las muchas exigencias de los archivos depende de laprofesionalidad de los operadores a los cuales los Obispos diocesanosconfían la gestión y la dirección de los archivos, y es consecuencia de susentido de responsabilidad hacia la Iglesia y hacia la cultura.

La competencia técnica y el sentido del deber son las condicionesindispensables para el respeto a la integridad de los fondos documentales, ala adquisición de nuevos materiales provenientes de otros archivos, alcuidado del material depositado, a su estudio y a la posible eliminación dealgunos documentos según una reglamentación que determine el paso delarchivo corriente al archivo histórico.

3. Conservación de los Documentos de la Memoria

La preocupación primaria ante los archivos de las Iglesias particulares esla de conservar con diligencia un patrimonio tan precioso para transmitirlototalmente a nuestros descendientes. En la organización de los archivos hayque seguir el criterio de la unidad en la diversidad. La diversidad delmaterial recogido manifiesta la múltiple actividad de la comunidad eclesial,y al mismo tiempo indica la sustancial unidad de intentos.

La conservación es una exigencia de justicia que nosotros hoy debemosa aquellos de quienes somos herederos. El desinterés por los bienesculturales es una ofensa a nuestros antepasados y a su memoria. Por tantoes justo que los Obispos diocesanos observen las disposiciones canónicas aeste respecto. También las iglesias jóvenes son llamadas a documentarprogresivamente su actividad pastoral según las normas canónicas, a fin detransmitir la memoria de la primera evangelización con el esfuerzo de lainculturación de la fe en una determinada comunidad.

3.1. Irrepetibilidad del material documental

Hay que tener presente que los archivos, a diferencia de las bibliotecas,conservan casi siempre documentos únicos en su género, que constituyenlas fuentes principales de la investigación histórica, porque narrandirectamente los acontecimientos y los actos de las personas. Su pérdida osu destrucción, invalidando la investigación objetiva sobre los hechos eimpidiendo el adquirir las precedentes experiencias, compromete latransmisión de los valores culturales y religiosos.

La conservación de los pergaminos, de los documentos y del materialinformático debe estar garantizada por unas adecuadas normas sobre el usode los archivos, por la existencia de eficientes inventarios, por los posiblestrabajos de restauración y conservación de los documentos existentes y porla idoneidad y seguridad de los ambientes donde se depositan los

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materiales. Además de la conservación hay que promover la recuperaciónde elementos informativos que quizás se encuentran dispersos en lugaresimpropios y colaborar con otros archivos eclesiásticos para estableceracciones mutuas concordadas.

La misma selección del tipo de papel que hay que usar en los archivosdebe ser valorada atentamente para garantizar su duración en determinadascondiciones climáticas y ambientales. Estas advertencias sonindispensables para la correcta gestión de tales medios culturales.

3.2. Espacios adecuados

Los responsables de los archivos han de encontrar espacios aptos paracolocar los materiales. Los locales han de responder a las normasfundamentales de higiene (iluminación, climatización, grado de humedad yde temperatura, etcétera.), de seguridad (con dotación de medios contraincendios y antirrobo, etcétera.), y de vigilancia (servicio eficiente devigilancia durante la consulta de los documentos, control de periódicos yrevistas, etcétera.).

En la estructuración de los archivos hay que disponer de locales para eldepósito de documentos y salas de consulta, sirviéndose de los muchosinstrumentos técnicos e informáticos que existen para la investigación y lalectura. Esta organización, en sus elementos concretos, ha de serproporcionada a las diversas categorías de los archivos eclesiásticos y altipo de consulta que se pretende ofrecer.

3.3. Inventario e informatización

Para la conservación de los archivos de las Iglesias particulares es dedesear que se sigan los criterios de la mejor tradición archivística y que seutilicen todos los medios técnicos apropiados (fichero electrónico,conexión en red e Internet, microfilms, reproducción de documentos conscanner, discos ópticos, etcétera.), para lo cual habrá que buscar fondosextraordinarios destinados a la fase de la primera informatización de losmateriales, además de otros fondos ordinarios para el trabajo normal deintroducción de datos, sirviéndose también de especiales ayudas deinstituciones nacionales e internacionales.

La compilación del inventario es el elemento fundamental para laconsulta del archivo, como lo indican los cánones 486 §3 y 491 §1. Elinventario permitirá la producción de otros instrumentos útiles para usarcon facilidad los fondos archivísticos (catálogos, repertorios, fichas,índices) y facilitará el uso de los modernos sistemas informáticos paraunirse con las varias sedes de los archivos y lograr una investigación e

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información de amplias dimensiones. Sirviéndose de las nuevas tecnologíasconviene también conservar en un lugar más protegido un ejemplar dedocumentos de especial valor, para no perder toda la documentación encaso de siniestro.

4. La valorización del Patrimonio Documental para laCultura Histórica y para la Misión de la Iglesia

La documentación contenida en los archivos es un patrimonio que hayque conservar para transmitirlo y utilizarlo. La consulta de los archivospermite reconstruir la historia de una determinada Iglesia particular y de lasociedad en la que esa Iglesia trabajó. En este sentido los documentos de lamemoria son un bien cultural vivo porque se ofrecen como posibilidad deconocer la vida de la comunidad eclesial y civil en el transcurso de lasgeneraciones.

4.1. Destino universal del patrimonio archivístico

Los archivos, en cuanto bienes culturales, se ofrecen ante todo a lafruición y conocimiento de la comunidad que los ha producido, aunque conel paso del tiempo adquieren una dimensión universal, transformándose enpatrimonio de toda la humanidad. El material depositado no puede quedarcerrado a quienes puedan y deseen conocer la historia del pueblo cristiano,sus vicisitudes religiosas, civiles, culturales y sociales.

Los responsables deben procurar que el uso de los archivos eclesiásticospueda facilitarse no sólo a los interesados que tienen derecho a usarlos, sinotambién a círculos más amplios de estudiosos, sin prejuicios ideológicos yreligiosos, quedando a salvo las oportunas normas de seguridad, dadas porel derecho universal y por las normas del Obispo diocesano. La aperturadesinteresada, la acogida benévola y el servicio competente deben serobjetos de atenta consideración para que la memoria histórica de la Iglesiase ofrezca a toda la colectividad.

4.2. Reglamentación de los archivos

Dado el interés universal que deben suscitar los archivos, es oportunoque cada reglamento se haga público y que las normas, en cuanto seaposible, se armonicen con las del Estado, subrayando así el común servicioque los archivos pretenden dar. Además de la reglamentación del archivodiocesano es oportuno que se establezcan también directivas comunes parael uso de los archivos parroquiales, cumpliendo las normas canónicas.

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Análogamente pueden otros archivos determinar sus propias normas paraevitar incumplimientos en el registro de datos o en la entrega dedocumentos. Esta coordinación puede favorecer una posibleinformatización de los datos a nivel diocesano, lo cual permitirá una visiónglobal y estadística de toda la acción pastoral de una determinada Iglesiaparticular. Puede ser oportuno concertar dicha reglamentación con archivosde otras instituciones eclesiásticas, especialmente con los pertenecientes ainstitutos de vida consagrada y con los de las sociedades de vida apostólica,respetando las propias autonomías.

Pero convendrá poner limites a la consulta de fascículos personales y deotras correspondencias epistolares que por su propia naturaleza son decarácter reservado o que los responsables pueden pensar que es así. No nosreferimos al archivo secreto de la curia diocesana, del cual expresamente setrata en los cánones 489 y 490, sino en general a los archivos eclesiásticos.A este propósito algunas metodologías archivísticas sugieren que las cartasreservadas se señalen con indicaciones precisas en los inventarios a loscuales tienen acceso los investigadores.

4.3. Material documental y su contexto

Para el trabajo de investigación y para una mejor valoración de losdocumentos conservados en los archivos, son muy útiles algunosinstrumentos propiamente archivísticos, de los que ya hemos hablado, ytambién otras ayudas bibliográficas que sirven para el estudio de losdocumentos, sobre todo en su contexto histórico. Por esta razón convieneque en los archivos históricos diocesanos haya algunas obras especializadasen el conocimiento histórico/jurídico de las instituciones eclesiásticas, asícomo otras publicaciones generales que ilustren la historia de la Iglesia. Dehecho cada documento debe situarse en su contexto histórico, colocándolosegún sus propias coordenadas de lugar y tiempo. En este sentido son útilestambién las publicaciones de carácter científico que relacionan los datosprecedentemente adquiridos y conocidos, con otros que van apareciendo enel estudio de los documentos de los archivos.

Estas ayudas, unidas a los instrumentos para la lectura de losdocumentos antiguos y para la posible reproducción de los mismos,contribuirán a un uso más adecuado y ágil del patrimonio archivístico.

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4.4. Formación cultural por medio del depósitodocumental

A través del depósito documental la Iglesia comunica su propia historiaque se desarrolla con el correr de los siglos, se coloca entre las diversasculturas recibiendo de ellas sus condicionamientos y, al mismo tiempo, setransforma. También los archivos eclesiásticos forman parte del patrimoniode una cultura y tienen un imprescindible valor informativo y formativo,por lo cual pueden transformarse en importantes centros culturales.

Quienes trabajan en los archivos eclesiásticos contribuyen eficazmente aldesarrollo cultural, ya que ofrecen su competencia científica haciendocomprender la naturaleza y el significado de los documentos que ponen adisposición de los investigadores. Cuando ofrecen su servicio en bien delos estudiosos de otras naciones, contribuyen a acercar entre sí a losoperadores culturales de diversos países y a hacer captar las diferentesculturas, colocándose «entre los creadores de la paz y de la unidad entre loshombres".

4.5. Promoción de la investigación histórica

Es deseable que la Iglesia se haga promotora de la organizaciónarchivística, motivando su importancia cultural, especialmente si no existetodavía una apta sensibilización entre las instituciones civiles. En estesentido conviene coordinar todos los archivos eclesiásticos presentes enuna Iglesia particular, tanto los sujetos al Obispo, cuanto los que dependende otras competencias. Este patrimonio puede ser un punto de referencia yun lugar de encuentro entre varias iniciativas culturales e investigacioneshistóricas, en colaboración con los institutos especializados de lasuniversidades eclesiásticas, católicas, libres y estatales. Serán también degran utilidad las relaciones entre archivos y centros de documentación.

Puesto que los archivos pueden ser lugares privilegiados de encuentrosde estudio, de convenios sobre tradiciones religiosas y pastorales de lacomunidad cristiana, de exposiciones didácticas y de muestrasdocumentales, están llamados a desarrollar un papel de agencia cultural nosólo para los especialistas del sector, sino también para estudiantes yjóvenes oportunamente preparados. Promoviendo además ediciones defondos y colecciones de estudios, esos austeros tabernáculos de la memoriadarán a conocer su plena vitalidad, se integrarán en los procesos creativosde la cultura y en la misión pastoral de la Iglesia local.

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Conclusión

Tratando en esta carta circular del patrimonio archivístico de lacomunidad eclesial, estamos ciertos de haber suscitado en Su Eminencia(Excelencia) recuerdos y sentimientos profundos sobre algunos momentoshistóricos vividos en esa Iglesia de la que es pastoralmente responsable.

El venerado pontífice Pablo VI tenía la fuerte convicción de que "lacultura histórica es necesaria, nace del ingenio creador del hombre, de suíndole, de la necesidad de conocer la vida católica, la cual posee unatradición, es coherente, y desarrolla a lo largo de los siglos un proyecto quepodríamos calificar más bien como un misterio. Es Cristo que obra en eltiempo y que escribe, ciertamente El, su historia, de manera que los trozossueltos de las cartas que nosotros componemos son ecos y huellas del pasode la Iglesia, mejor dicho, del paso por el mundo del Señor Jesús. Y he aquíque, entonces, el tener admiración por estas cartas, por los documentos, porlos archivos, quiere decir, como consecuencia, participar en el culto deCristo, tener el sentido de la Iglesia, darnos a nosotros mismos y dar aquien vendrá, la historia del paso, es decir, del transitus Domini por elmundo".

Conservar, por tanto, este patrimonio para transmitirlo a las generacionesfuturas es un trabajo importante, como también lo es el valorizarlooportunamente para la cultura histórica y para la misión de la Iglesia. Porello la Pontificia Comisión para los Bienes Culturales de la Iglesia hajuzgado conveniente comunicar estas indicaciones para la formulación deprogramas orgánicos.

Recibiremos con alegría y agradecimiento una respuesta a lasconsideraciones que hemos comunicado y a las propuestas que hemosindicado, para poder desarrollar un fecundo diálogo, que proporcionaráulteriores sugerencias para nuestra acción, orientada a las situaciones de lasIglesias particulares, y nos permitirá exponer iniciativas válidas,comprobadas por la experiencia de cada uno.

El trabajo para la conservación y valoración de los bienes culturalesnecesita personas y tiempo. En cuanto a los archivos es necesario ademásque se logre una actitud pastoral, considerando que la conservación de losbienes prepara futuros desarrollos culturales y que la valorización de losbienes puede constituir un válido encuentro con la actual cultura y puedetambién ofrecer ocasiones para participar en el progreso integral de lahumanidad.

El patrimonio archivístico, como bien eclesiástico, según las finalidadespropias de los bienes de la Iglesia, puede aportar una eficaz ayuda a lanueva evangelización. Usando adecuadamente de todos los bienesculturales producidos por la comunidad eclesial, es posible continuar eincrementar el diálogo de los cristianos con el mundo contemporáneo. El

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Santo Padre Juan Pablo II, hablando a los Miembros de la PrimeraAsamblea Plenaria de la Pontificia Comisión para los Bienes Culturales dela Iglesia ha reafirmado "la importancia de los bienes culturales en laexpresión y en la inculturación de la fe y en el diálogo de la Iglesia con lahumanidad (...). Entre religión y arte, entre religión y cultura hay unarelación muy estrecha (...). Y de todos es conocida la aportación que dan alsentido religioso las realizaciones artísticas y culturales que la fe de lasgeneraciones cristianas ha ido acumulando en el curso de los siglos".

Al deseo fraterno de que su trabajo pastoral sea también fecundo enresultados culturales, añado mi deferente y cordial saludo, mientras meconfirmo de Vuestra Eminencia (Excelencia) Reverendísima devotísimo enJesucristo

Francesco Marchisano, PresidenteCarlo Chenis SDB, SecretarioCiudad del Vaticano, 2 de Febrero de 1997

BIENES CULTURALES Y FAMILIAS RELIGIOSAS312

Reverendísima Madre General, Reverendísimo Padre General:Entre los solícitos cuidados propios de la vida eclesial a los que el Santo

Padre Juan Pablo II dirige su atención y hacia los que va orientando elinterés de los Responsables de las diversas Comunidades de la Iglesia,Vuestra Reverencia habrá podido advertir una insistencia muy particularrespecto a los Bienes Culturales de la Iglesia, para los cuales se pide ungrandísimo empeño y una diligentísima responsabilidad.

A los patrimonios formados por las obras de arte figurativo, dearquitectura y por otros patrimonios de arte, pequeños o grandes; por losdocumentos de archivo, por los volúmenes manuscritos e impresos y –como consecuencia– por los Museos, por los Archivos y por lasBibliotecas, debe ser "prestada la máxima atención" en cuanto sonvehículos de cultura y de evangelización y a la vez testimonios elocuentesde la fe de la Iglesia.

A partir del año 1988, el Papa Juan Pablo II ha querido que entre losOrganismos que le ayudan en el servicio de toda la Iglesia existiese uno -de naturaleza universal y "animadora" - encargado precisamente de losBienes Culturales anteriormente mencionados: era la Pontificia Comisión

312 Carta circular de la Pontificia Comisión para los Bienes Culturales de la Iglesia dirigida a losSuperiores Generales de los Institutos Religiosos. Roma, 10 de abril de 1994

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para la Conservación del Patrimonio Artístico e Histórico de la Iglesia,creada con la Constitución Apostólica "Pastor bonus" (arts. 99/104).

El 25 de marzo de 1993, el Santo Padre ha querido transformar esaprimera Comisión, por medio del Motu Proprio "Inde a Pontificatus Nostriinitio", para demostrar cómo los Bienes Culturales de la Iglesia no son sóloun patrimonio que ha de "conservarse", sino más bien un tesoro para darloa conocer y para utilizarlo en favor de la nueva evangelización. A esta tareatodo el "pueblo de Dios" y no sólo el clero, es llamado a ofrecer su propiaaportación. Por este motivo la nueva Comisión ha sido colocada en elcontexto de la amplia obra que la Iglesia realiza en favor de la "Cultura",dotándola de autonomía jurídica y organizadora, reafirmando suimportancia para que aúne el trabajo de animación y de coordinación en elsector de los patrimonios artísticos e históricos: ésta es la nueva PontificiaComisión para los Bienes Culturales de la Iglesia.

La primera actividad que ha caracterizado a la Comisión ha sido la deiniciar una relación cordial con las Instituciones eclesiales que tienen unaresponsabilidad directa en la salvaguardia, valorización y educaciónrespecto a tales Patrimonios, como son las Diócesis, las ComisionesEpiscopales para los Bienes Culturales, los varios Organismosinternacionales ocupados en este sector.

BBCC (Bienes Culturales) y Familias Religiosas

En este espíritu, de conocimiento y de colaboración, me parece justo yoportuno dirigirme a todas las "Familias Religiosas" de la Iglesia, comograndes promotoras de cultura y de arte al servicio de la fe y comodepositarias de una parte importantísima de patrimonios de la Iglesia, unosrelativos a archivos y bibliotecas, otros de materias litúrgicas y artísticas.

Lo hago por medio de esta carta, a la cual confío, en primer lugar, elencargo de transmitir a toda su Comunidad el sentimiento del más granderespeto y estima por todo lo que ha hecho en el pasado y hace, en elmomento presente, a fin de cuidar y valorizar tales Bienes.

La iniciativa y el texto de esta Carta circular cuentan con la más cordialadhesión y aprobación de la Congregación para los Institutos de vidaconsagrada y las Sociedades de vida apostólica.

Juzgo que es indispensable el dirigirme a cada Familia Religiosa paraconvocar, de alguna manera, a cada una de ellas a corresponderadecuadamente al llamamiento del Santo Padre para ser magis magisqueconscientes de la importancia y de la necesidad del patrimonio artístico ehistórico de la Iglesia que se debe conservar, valorizar y promocionar en eltiempo presente y para el futuro.

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Por tanto deseo recordar de manera explícita la responsabilidad que lasFamilias Religiosas tienen respecto a los Bienes Culturales de la IglesiaGracias a la estructura comunitaria de la vida consagrada, los Religiososdan un testimonio significativo y siempre nuevo de los particularescarismas de los fundadores. La vida de las comunidades, en una sustancialfidelidad al proyecto originario, sabe adaptarse a los signos de las variasépocas y a la índole del pueblo donde se enraíza, tanto en los países deorigen como en tierras lejanas. De donde se sigue que muchas FamiliasReligiosas gozan de un patrimonio espiritual que poco a poco se ha idoenriqueciendo y organizando en una integración armónica entre nova etvetera.

En las comunidades se puede observar, de hecho, con interés siemprerenovado cómo el momento presente logra amalgamar las instancias másdiversas: del pasado y de la actualidad, de la vida local y de los modelos deotras culturas y sensibilidades, que son acogidos en un recíproco donestrechamente unido a la misión evangelizadora, a la cual siempre losreligiosos se han dedicado fuertemente y con dinamicidad. Es cierto quealgunas realidades han sido asimiladas solamente de manera superficial,pero es indudable la sensibilidad con que se ha propagado en ambientesreligiosos la adaptación a los demás y la acogida de otros valores con lasoportunas adaptaciones.

De toda esta actividad católica y espiritual son testimonios privilegiadoslos Bienes Culturales. Por tanto hay que considerarlos no sólo comoelementos de interés antropológico y social, sino ante todo comomanifestaciones significativas de una fe que crece en la Iglesia y queencuentra expresiones cada vez más capaces de manifestar su vitalidadinterior. Desde esta perspectiva hay que "releer" los Bienes Culturales de laIglesia: desde las majestuosas catedrales a los pequeños objetos, desde lasmaravillosas obras de arte de los grandes maestros a las minúsculasexpresiones de las artes pobres, desde las obras literarias más inspiradas alos registros contables aparentemente áridos que siguen, paso a paso, lavida del pueblo de Dios.

La Comunidad cristiana sabe que, gracias a las fundaciones de nuevasFamilias Religiosas, han surgido en la Iglesia no sólo nuevas experienciasde espiritualidad o de evangelización, sino también nuevas aportaciones dehumanismo que han tenido espléndidas repercusiones en el campo cultural,artístico, urbanístico, pedagógico. Baste pensar en las centrales deespiritualidad, de cultura y de arte que fueron y son las Abadías y losMonasterios.

Prueba de ello son también los conventos, más modestos en las formas,pero profundamente presentes, de modo silencioso y sin excesivapublicidad, en los barrios de las ciudades o en los suburbios periféricos, loscuales han sido, frecuentemente, además de escuelas de vida espiritual,

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puntos de referencia por su cultura, arte, urbanística, socialidad ycivilización.

La Iglesia todavía hoy interpela a las Familias Religiosas y les pide queno olviden este aspecto de su dedicación y de su testimonio. Quizás podráparecer secundario respecto a la función absoluta de la vida evangélica y dela obra evangelizadora. En cambio creemos que se trata de unaconsecuencia intrínseca a esa función: cuando una comunidad religiosavive intensamente el propio carisma, éste se irradia también a través de lasformas visibles de la cultura y del arte, las cuales se sienten comoinfluenciadas por la intensidad espiritual de tales testimonios.

La difusión en el mundo, hecha en modo silencioso e íntimo, de lasFamilias Religiosas y de su propia vida, que abraza también a muchasgeneraciones de fieles testimonios de la vida evangélica, pone a los mismosreligiosos frente a algunas cuestiones y exige el asumirse explícitamentealgunas responsabilidades.

Iglesias y Edificios

Hoy se pide una intervención atenta en el complejo sector de losedificios de culto y de los destinados a la vida comunitaria. Hay muchospaíses en los cuales la disminución de vocaciones exige un nuevoreagrupamiento de los Religiosos y una diversa distribución de ellos quelleva, como resultado, al cierre y abandono de centros que en otro tiempofueron particularmente importan es para la Familia Religiosa y para la vidaeclesial. En otros países, por el contrario, el repentino y hasta hace pocosaños imprevisto propagarse de la vida consagrada, sorprende a losReligiosos que han de afrontar situaciones diversas. Se pueden recordar,por ejemplo, la necesidad de construir, desde los cimientos, nuevas iglesiasy edificios para la vida comunitaria en las regiones donde la Iglesia se hafundado recientemente, o bien la urgencia de reconvertir los lugares deculto y de restaurar las casas religiosas, en los países donde durante largosdecenios tales espacios habían sido sustraídos a sus legítimos propietarios,como ha sucedido en las naciones del Cuarto Mundo.

Las situaciones, muy diversas entre sí, piden intervenciones apropiadas.En cuanto a los espacios, que se están abandonando a causa de la crisis

vocacional, será conveniente que se proyecte un programa de utilizaciónque tenga en cuenta no sólo el factor económico (venta al mejor precioposible), sino que ante todo tome en consideración el significado históricoy espiritual de cada construcción. Parece por tanto urgente que no se tomenprecipitadamente algunas decisiones acerca de la enajenación delpatrimonio inmueble, sino que se tenga en cuenta la finalidad propia decada edificio en el esfuerzo por mantener íntegra la finalidad originaria,

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sobre todo en lo que se refiere a los centros litúrgicos. Las ampliasconstrucciones que se encuentran ante todo en los países de antiguatradición cristiana no sean objeto de discutibles especulaciones, sino que sedejen disponibles, si es posible, para acciones sociales y culturales en favorde la población que, con su ayuda, colaboró en la edificación de tales obras.

Cuando se trata de recuperar edificios que no se usan desde hace algúntiempo, es conveniente valorar el sentido real de tal operación que habríaque guiar con gran atención, según una clara jerarquía de valores que ayudea establecer la prioridad de las intervenciones y la entidad del esfuerzonecesario. No se trata de restaurar a toda costa lo que ha quedado reducidoa ruinas, para reafirmar un cierto prestigio en el ámbito de poderes ajenos ala Iglesia, es necesario, por el contrario, saber afirmar el primado de laalabanza a Dios sin olvidar los sufrimientos de su pueblo que lleva visibleslas cicatrices de las violencias padecidas también en las iglesias y en lascasas que han sufrido desperfectos y daños. Sabios administradores de losbienes del Espíritu, los Religiosos sabrán encontrar múltiples vías para lasintervenciones de restauración y construcción que no provoquen ulterioressufrimientos en el pueblo cristiano. Cuanto más conveniente será larestauración de los edificios de culto, tanto más austera será la recuperaciónde las habitaciones.

Al construir nuevos edificios religiosos sepan aprovechar toda laexperiencia espiritual, la sensibilidad social y el gusto estético que se handesarrollado en la historia de la propia comunidad. Las edificaciones sedistingan por su atención a lo esencial que sabe unir, a la vez, simplicidad ydecoro, funcionalidad y belleza. No ofusquen las estructuras el mensajeevangélico que las mismas construcciones pueden transmitir cuando seedifican como testimonio del espíritu de las bienaventuranzas.

A veces las difíciles condiciones económicas pueden obligar a renunciara cualquier tipo de intervención en los inmuebles de su propiedad. Sepanlos Religiosos que se encuentran en esta condición de pobreza, confiar en laProvidencia que velará para que nada falte de lo que es necesario para lavida de cada día. Siendo pobres, sepan ayudar a quien se encuentra encondiciones de mayor y más extremada pobreza, dando así también untestimonio creíble de la primacía de Dios y de los valores espirituales en unmundo que fácilmente se deja arrastrar por principios muy distintos.

Material de Museos: provocación para encontrar laspropias raíces

Los edificios de culto y las mismas casas religiosas, con el paso deltiempo, se han convertido en espacios donde se han recogido innumerablestestimonios de la fe vivida por las diversas comunidades: objetos e

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instrumentos musicales para el culto, lienzos y esculturas, pequeños ygrandes objetos de la cultura de cada día han pasado por vicisitudes varias.En muchas comunidades, desde hace algún tiempo, se ha procedido a unaadecuada organización del material en lugares aptos. Muy positivo es clesfuerzo de inserir tales realidades en un contexto didáctico que ayude a losmismos Religiosos y a los visitantes de estas muestras a recorrer la historiade una Familia Religiosa en los sucesos de la vida ordinaria, en la vida dela comunidad y en el trabajo apostólico. Particular atención se dispensará alos objetos litúrgicos: según las posibilidades y oportunidades, úsenseperiódicamente en las celebraciones y, en cualquier caso, se tenga ungrandísimo cuidado de ellos para protegerlos, como se ha tenido atenciónpara salvarlos.

Todo el material que pertenece a la categoría propia de los museos serecoja y se conserve con cuidado. Después de un primer examen se procedaa hacer un inventario general y particularizado según los criteriosmetodológicos de las actuales disciplinas sobre los museos, sin omitirningún aspecto importante como, por ejemplo, una exhaustivadocumentación fotográfica.

Según las situaciones concretas, con el fin sobre todo de prevenirdeterioros irreversibles y el peligro de manumisiones y/o de robos, a veceses prudente recoger todo el material, esparcido en varias casas periféricas,en un único o en varios centros a nivel provincial o nacional. En estadelicada operación hay que evitar sin embargo el causar algún perjuicio alas casas periféricas, sustrayendo objetos preciosos que tengan un particularsignificado para la historia local.

La conservación del material propio de los museos no persigue niúnicamente ni preferentemente un interés arqueológico, más bien expresael deseo de conocer mejor las raíces de la propia historia humana yreligiosa. Desde este punto de vista, el cuidado y conocimiento de todos losobjetos artísticos, pertenezcan al arte propio de la artesanía o al arte culto,puede contribuir a sensibilizar las conciencias de quienes, hoy, deseencomprender tanto las complejas condiciones sociales como lasprovocadoras exigencias evangélicas de cada momento: sólo en la fidelidada las propias características culturales y espirituales, de las que son reflejotodas las obras conservadas en los museos, es posible la apertura a nuevasexperiencias de humanidad y de fe que siempre necesitan la accióncreadora del corazón y de la mente.

Material de Archivos: en la Escuela de la Historia

Gran parte del material, disperso en muchas casas religiosas de todo elmundo, pertenece a la categoría propia del patrimonio de los archivos. La

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protección, casi siempre de papel, de tales documentos los haceparticularmente vulnerables y sujetos a posibles deterioros. Por eso tantomayor ha de ser la atención que se preste a este "mundo", que documenta lahistoria vital y la expansión de la Iglesia, madre de innumerables hijos quereúne en la unidad de la fe.

Según la fisonomía propia de cada comunidad –inserida en los centrossociales y con particulares funciones pastorales, o bien situada en unambiente claustral de soledad– es diferente, de un lugar a otro, la naturalezadel material, que en cualquier caso se ha de inventariar, recoger, ordenar,estudiar y poner a disposición de cuantos investigan en los archivos. De losdocumentos personales a los libros de matrículas, de las actas capitulares alas crónicas de cada casa, de los registros contables a los inventariospatrimoniales, de los registros de población a las meticulosas y puntualesindicaciones sobre la praxis sacramental: el material de archivo es como unhilo conductor que permite seguir en modo concreto las vicisitudes de cadacasa y de toda una Familia Religiosa, a través de su progreso y de suscrisis, de sus expansiones geográficas y de sus reducciones debidas a variosfactores.

El material de archivo se presta, por consiguiente, a toda una serie deanálisis interdisciplinares (de la paleografía a la estadística, de la sociologíaa las ciencias de la comunicación, de la demografía a la economía) queconstituyen el horizonte histórico en el que se coloca la vida religiosa. Y enla escuela de la historia es donde el Religioso descubre las inspiraciones delEspíritu, que siempre llama al apostolado de la evangelización y de laadoración silenciosa. A parte de lo que pueda ser una cierta idea que se hapropagado sobre la realidad de los archivos, hay que decir que el archivo dela Comunidad Religiosa no es un lugar para refugiarse en el pasado, sino elespacio para abrirse al futuro.

Para que este programa pueda realizarse, hay que examinar laoportunidad de concentrar en algunos lugares apropiados el materialexistente y hacer que sea accesible, incluso a distancia, gracias a losprocedimientos de reproducción fotográfica o de métodos informáticos.Muy provechosa es la colaboración entre diversas instituciones interesadas,que permite un amplio abanico de posibilidades: desde un intercambio deinformaciones a la realización de una banca común de datos.

Material de Bibliotecas: savia de Vida Nueva

Otro sector de vivo interés son las colecciones de libros de las FamiliasReligiosas. Este material es como un espejo que refleja las profundaspreocupaciones religiosas y culturales de la Iglesia. Este sector comprendeuna vasta gama "de testimonios": desde los códices medievales en

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pergamino a las más recientes publicaciones impresas, desde los antiguosapuntes escolásticos a colecciones epistolares, desde los volúmenesmanuscritos que contienen reflexiones profundas en los variados campos dela investigación teológica y científica a las colecciones eruditas decompilación, desde dibujos y proyectos arquitectónicos a partituras demúsica compuesta para grandes capillas y para lugares más sencillos ypopulares.

El material de la biblioteca, aun en sus diversas modalidades, representael esfuerzo de hacer fructificar los talentos que Dios ha concedido a sushijos en el camino de búsqueda de su rostro. Es todo un trabajo paciente yde siglos que filtra la ciencia humana hasta transformarla en sabiduría delas cosas de Dios, en una profesión de fe ilustrada por las especulacionesintelectuales y cantada por la música sagrada. Las bibliotecas no contienensólo material cubierto de polvo y destinado al olvido; ocultan tesoros deexperiencia vivida cristianamente y comunicada por medio de la palabraescrita. No se trata sólo de llenar estantes, sino de llenar el corazónllegando hasta la sabiduría de los padres y madres en la fe, savia de vidanueva, en un itinerario de profundización cultural que es parte integrantedel camino de puesta al día de individuos y comunidades para elcrecimiento de cada persona y de toda la familia.

Por tanto el patrimonio de la biblioteca, después de identificarlo, tambiénha de incluirse en el inventario, en caso de necesidad ha de ser restaurado ypuesto siempre, de modo accesible, al servicio de los demás. Lascolecciones bibliográficas de las Ordenes religiosas más antiguas hay queponerlas al día e integrarlas con obras análogas más recientes que permitanel estudio del pensamiento actual. Hay que favorecer la existencia decolecciones centrales, en el caso de los archivos como en el patrimonio delas bibliotecas. En el uso de los libros hay que pensar también en formas decolaboración entre las casas de la misma Familia Religiosa y entre lasdiversas instituciones eclesiales.

Perspectivas operativas

En el plano inmediatamente operativo se abren, como se ha indicado,varias perspectivas que se tendrían que concretar, en parte por cada una delas Familias Religiosas, en parte por entes interreligiosos:

1) Parece importante y justo que las "Mutuæ relationes" entre Obispos yReligiosos, y por tanto entre Diócesis y Familias Religiosas, se lleven aefecto con eficacia en este terreno de los Bienes Culturales. Esto podráefectuarse:

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- buscando la mayor convergencia y sintonía posibles con lasnormas y orientaciones de las Conferencias EpiscopalesNacionales y Regionales, como también de cada Diócesis;

- ofreciendo cordialmente los patrimonios de arte, de historia y decultura, que poseen las Instituciones dirigidas por los Religiosos, atoda la Comunidad Cristiana, de modo que tales Bienes puedanrociar todavía la fe y la cultura del Pueblo de Dios, llenando uncierto distanciamiento que parece interponerse entre el hombre dehoy y la gran tradición de pensamiento y de arte que había unido,en siglos pasados, la fe cristiana y la cultura de los Pueblos;

- insertando, en los círculos de los que cultivan el pensamiento y lasartes, también a aquellos Religiosos que tuvieran particularesaptitudes en esos sectores, de manera que se creen puentes deunión entre los que desarrollan su saber en unión con la fe, comolos Religiosos, y los que buscan la verdad en el estudio y en supropia experiencia artística; de hecho, a ninguno nos estápermitido el cerrarse en la propia visión particular, sin abrirse a lavida total de la Iglesia y de la humanidad.

2) Por eso nos parece importante resolver la situación de las personasdirectamente interesadas en los Bienes Culturales. En este sentido habríaque favorecer, sobre todo, aquellas vocaciones artísticas y culturales queDios suscita para bien de cada Instituto y de toda la Iglesia. E1 verdaderointerés por los Bienes Culturales se testimonia por el cuidado con el cualhoy, en la Iglesia, se promueve una tradición cultural renovada que abraza atodos los ámbitos de los Bienes Culturales históricos. Hay que hacer todolo posible para que la fe y la cultura de los cristianos y de los religiosos dehoy puedan traducirse en expresiones actuales de arte cristiano y enadecuados testimonios históricos.

3) Además hay que preparar con seriedad profesional a las personas aquienes se confía el cuidado de los Bienes Culturales del pasado, nosimplemente para una conservación inerte, sino sobre todo para unaconsciente y obligada valorización del patrimonio. Estos expertos en losvarios sectores de los Bienes Culturales podrán ulteriormente intervenirpositivamente en la formación y en la instrucción de los jóvenes Religiosospara que madure en ellos una viva responsabilidad en favor de todas lasexpresiones culturales de la fe cristiana.

4) Como tuvimos modo de escribir, hace dos años, a las Superioras y a losSuperiores que tienen la Curia General en Roma, se ha creado, en laUniversidad Gregoriana de Roma, una Escuela Superior para Operadoresde los Bienes Culturales de la Iglesia, con la intención de poner adisposición de Sacerdotes, Religiosos y Laicos interesados, un organismo

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que pudiera prepararlos para el sector, delicado y concreto, de laconservación y animación de los Bienes Culturales. Esta Escuela seencuentra ya en el tercer año; y parece que no está lejos el momento de sutransformación en una verdadera y propia Facultad o Departamento paralos Bienes Culturales. Y se puede pensar que, a continuación y gracias a laexperiencia de esta primera Escuela, se puedan abrir otras semejantes enotras partes de la Iglesia. También quisiéramos pedir a los Religiosos queno dejen pasar esta ocasión que se les ofrece de enviar a Roma a aquellosmiembros de su Comunidad en los que se piense para encargarlos o delsector de Arte Sagrado, o del de Archivos y Bibliotecas, o de la enseñanzarelativa a esas disciplinas, o de la animación del patrimonio cultural de lapropia Orden o Congregación.

5) En las programaciones económicas de los Institutos Religiosos no sepuede ignorar el problema de los Bienes Culturales: su valorización sea enorden a su conservación como en cuanto a su uso constituye, entre otrascosas, una inversión financiera segura. Pero el cuidado del patrimonio vamás allá de los confines de la economía y se convierte en participación enlas vicisitudes de las obras y de sus artistas en una común y renovadaexperiencia de fe.

6) En esta misma línea se proponen todas las intervenciones necesarias paradar un espacio a los Bienes Culturales: la coordinación y el mutuoentendimiento dentro de la Iglesia con las otras Instituciones diocesanas ode zona, así como los posibles acuerdos con las competentesadministraciones civiles; la programación común entre Religiosos eIglesias locales, a nivel de investigación, protección, conservación y usodel patrimonio del pasado y de producción para las obras actuales. En todocaso, la colaboración ha de entenderse como empeño activo y no comopuro reglamento de delimitación de competencias, por así decir, celosas decada una de las "partes interesadas".

7) En particular:- recordamos la urgencia de un inventario puesto al día, incluso

fotográfico, de cuanto posee cada una de las casas religiosas;

- se redacte la documentación necesaria para la comprensión delmaterial (origen, proveniencia, uso, contexto socioeclesial);

- cada Instituto Religioso profundice y certifique, medianteapropiados instrumentos de estudio, el propio camino histórico en elcontexto más general de la historia de la Iglesia y de la sociedad,con particular atención a la obra evangelizadora y a la presenciaorante como señales de la primacía de Dios en la vida de la Iglesia;

- cada Familia Religiosa tenga uno o más centros de documentacióndel propio patrimonio artístico e histórico, para poder usar de él conmás facilidad y para efectuar una constante promoción.

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Conclusión

Como conclusión de esta carta fraternal, nos atrevemos a rogarles,Reverendísimas Madres y Reverendísimos Padres Generales –comotambién lo hemos rogado y obtenido de los Eminentísimos(Excelentísimos) Presidentes de las Conferencias Episcopales– que tengana bien respondernos, ayudando a esta Pontificia Comisión, de la que elSanto Padre tanto espera, a conocer lo que se hace, las dificultades que seexperimentan y los deseos de cada Familia Religiosa, sobre los temas quehemos ido exponiendo; y, sobre todo, que tengan a bien el darnos a conocersus consejos, deseos, observaciones, para poder ser siempre más y siempremejor, eficaces y concretos en nuestro trabajo.

Como hemos hecho con las respuestas de los Presidentes anteriormenteindicados, podremos redactar –en recensión única– todas las respuestas quenos llegarán, para comunicarles, enviándoselo a Uds., todo lo que aparezcacomo más significativo.

Esperamos que esta recíproca comunicación, entre la PontificiaComisión y las Familias Religiosas, sea la ocasión para profundizar orestablecer un constante y confiado diálogo, el cual ciertamente influirá enfavor de una vuelta a la cultura y al arte cristianamente inspirados, para loscuales parece que todos desean un renovado empeño.

En la esperanza de que estas consideraciones nuestras y esta "llamada"puedan ser objeto de reflexión en todas sus Comunidades, con las quenuestro pensamiento se une en espíritu de comunión, nos parece útil elhacer resonar de nuevo las palabras del Santo Padre contenidas en el "MotuProprio" con el que ha instituido esta Pontificia Comisión para los BienesCulturales: "La fe tiende por su propia naturaleza a expresarse en formasartísticas y en testimonios históricos que tienen una intrínseca fuerzaevangelizadora y un valor cultural, ante los cuales la Iglesia es llamada aprestar la máxima atención".

Con los sentimientos deferentes de mi respeto cordial, le presento mivivo saludo y agradecimiento, mientras me profeso devotísimo en J.C.

Mons. Francesco MARCHISANO

Presidente

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