cirrosis y complicaciones capitulo libro acmi

Upload: lmos1220

Post on 12-Feb-2018

235 views

Category:

Documents


1 download

TRANSCRIPT

  • 7/23/2019 Cirrosis y Complicaciones Capitulo Libro ACMI

    1/27

    CIRROSIS HEPATICA Y SUS COMPLICACIONES

    Juan Carlos Restrepo G1, Oscar M. Santos 2.

    1. MD. Especialista en Medicina Interna. Especialista en Hepatologa. Ph.Den Ciencias Clnicas. MSc. Trasplante de rganos y tejidos. ProfesorTitular Departamento de Medicina Interna y miembro del Grupo de

    Gastrohapatologa. Facultad de Medicina, Universidad de Antioquia.Miembro Unidad de hepatologa Hospital Pablo Tobn Uribe y programa

    de trasplante de hgado HPTU-UdeA. Correo electrnico:[email protected];[email protected]

    2. MD. Especialista en Medicina Interna. Fellow en Hepatologa Clnica.Departamento de Medicina Interna y miembro del Grupo de Gastrohepatologa.

    Facultad de Medicina, Universidad de Antioquia.Correo electrnico: [email protected]

    Caso clnico.

    Paciente de sexo masculino de 48 aos, natural y residente en Medelln,

    casado, tiene dos hijos y es comerciante. Es trado por su esposa porque se

    puso amarillo. Refiere su acudiente que desde hace 3 das lo observa ictrico,

    con astenia marcada, con fiebre no cuantificada, y aumento del permetro

    abdominal. Refiere dos episodios de melenas hace 48 horas y niega

    hematemesis o rectorragias. Lleva dos semanas consumiendo 1 botella de

    aguardiente diaria, adems no se ha alimentado de manera adecuada. Como

    antecedentes personales de importancia tiene que es fumador ocasional y que

    consume desde los 16 aos, a 1 botella de aguardiente por da. No consume

    otros txicos. A la revisin por sistemas refiere temblor fino e inversin del

    patrn del ritmo del sueo. Al examen fsico se encuentra un paciente en

    regulares condiciones generales, PA: 90/60 mmHg, FC: 100 pulsaciones/min,

    FR: 18/min. Temperatura axilar: 38C, con ictericia en escleras, fetor heptico,

    mucosas ictricas, queilitis angular, lengua lisa, mltiples nevus en araa,

    hipertrofia de partidas, ginecomastia, taquicrdico con ruidos cardacos

    rtmicos, sin soplos, con disminucin del murmullo vesicular, con crpitos finos

    en ambas bases, no hay roncus ni sibilancias, ascitis I/III, se insina

    circulacin colateral con Hgado de 16 cms de bordes romos, levemente

    doloroso. Sin reflujo hepatoyugular, testculos disminuidos de tamao. Vello

    mailto:[email protected]:[email protected]:[email protected]:[email protected]
  • 7/23/2019 Cirrosis y Complicaciones Capitulo Libro ACMI

    2/27

    pbico en poca cantidad y con distribucin ginecoide, edema Grado I de

    miembros inferiores y disminucin de la masa muscular, adems asterixis. En

    las pruebas de laboratorio se destacan creatinina de 1.8 mg/dL, bilirrubina total

    de 6.0 mg/dL, albumina srica de 2.7 mg/dl, excrecin urinaria de sodio en

    muestra ocasional de 15 meq/L, en la paracentesis diagnstica el recuento

    absoluto de neutrfilos de 268/ml, en la ecografa se reportan un ndulo

    sospechoso de carcinoma hepatocelular de 4.0 cm con niveles sricos de alfa

    fetoprotena de 400 ng/ml. La endoscopia digestiva superior informa de varices

    esofgicas grado III con estigmas de sangrado reciente.

    CIRROSIS HEPATICA

    El trmino cirrosis se deriva del griego "Kippos" y su descripcin anatmica se

    debe a Laennec, aunque desde la segunda centuria despus de Cristo,

    Arateo observ que la inflamacin heptica preceda a su endurecimiento

    (Skirros). En 1543 Vesalio sugiri la relacin de enfermedad heptica con el

    alcohol, y en 1941 la progresin de una hepatitis a cirrosis se demostr por

    primera vez en estudios seriados de biopsia heptica. En 1838 Carswell

    describi por primera vez los detalles histolgicos del hgado cirrtico y fueRokitansky en 1843 quien sugiri que la cirrosis era consecuencia de una

    anomala circulatoria o de un proceso inflamatorio crnico (1-7). Aunque no

    contamos con estadsticas que reflejen con exactitud la importancia del

    problema en Colombia, es una causa bien reconocida de incapacidad laboral y

    muerte en ambos sexos entre los 30 y los 50 aos. En los Estados Unidos la

    cirrosis ha reemplazado a la diabetes como la quinta causa de mortalidad, y en

    las reas urbanas es considerada la tercera causa de todas las muertes en elgrupo activo de edad ente los 25 y los 65 aos (1-7). Recientemente viene

    reconocindose que un porcentaje importante de las cirrosis que hasta hace

    pocos aos se consideraban criptognicas, son en realidad consecuencia de

    infeccin crnica oculta por el virus de la hepatitis C o asociadas a

    esteatohepatitis. La definicin ms aceptada de cirrosis heptica es la

    adoptada por la OMS "Es un proceso difuso caracterizado por fibrosis y la

    conversin de la arquitectura heptica normal, en ndulos estructuralmente

    anormales". Es bueno resaltar que deben coexistir los ndulos y la fibrosis en

  • 7/23/2019 Cirrosis y Complicaciones Capitulo Libro ACMI

    3/27

    forma difusa, ya que no debemos llamar cirrosis a los procesos focales de

    fibrosis como la hiperplasia nodular focal, y a los procesos nodulares focales

    sin fibrosis, como la hiperplasia nodular regenerativa (1-7). En sntesis los tres

    elementos fundamentales de la definicin son: Proceso parenquimatoso difuso,

    fibrosis difusa y ndulos estructuralmente anormales. Desde el punto de vista

    de la fisiopatologa el proceso cirrtico es similar si el dao ha sido ocasionado

    por el alcohol, un virus, o un proceso autoinmune. El reconocimiento de la

    unidad microcirculatoria en los acinos hepticos es la base para comprender la

    distribucin del dao heptico y la patognesis de la cirrosis. Inicialmente

    aparecen zonas confluentes de necrosis en la hepatitis viral aguda, hepatitis

    por drogas, hepatitis crnicas y hepatitis alcohlica. Si la necrosis compromete

    todo el acino y se activan los mecanismos de la fibrognesis, se puede llegar a

    la formacin de tabiques fibrosos. La fibrosis heptica resulta del depsito en el

    tejido heptico de proteoglicanos, glicoprotenas, y especialmente colgeno,

    con alteracin de su estructura tridimensional (1-7).El desarrollo del proceso

    depende de la actividad de los fibroblastos, de la extensin de la necrosis y de

    la suplencia vascular. Su actividad puede perdurar debido a la persistencia de

    procesos parenquimatosos especficos, de los cuales en los estados

    tempranos depende el tamao de los ndulos. Se acepta en general, que la

    causa determinante del proceso cirrtico, debe persistir por meses o aos, ya

    que las agresiones hepticas agudas y autolimitadas, raramente causan

    cirrosis (1-7). Cualquier clasificacin moderna de la cirrosis debe basarse en la

    etiologa de la enfermedad y es su actividad la que determina las implicaciones

    de tipo pronstico y teraputico. Por lo tanto el clnico moderno y actualizado,

    no debe quedarse solamente con el diagnstico general de cirrosis, sino que

    utilizando en forma adecuada la historia clnica, el examen fsico, el laboratorio,la imgenes diagnsticas y finalmente si procede la realizacin de biopsia

    heptica, debe en lo posible establecer un claro diagnstico etiolgico en la

    mayora de los pacientes. Infortunadamente, cuando la enfermedad se

    encuentra en etapas muy avanzada, las manifestaciones ms sobresalientes

    sin importar la causa, son la insuficiencia heptica crnica y la hipertensin

    portal con todas sus consecuencias. Su curso y pronstico dependen en forma

    directa de la severidad de las complicaciones mencionadas. Desde el punto devista clnico es de utilidad usar los trminos de cirrosis compensada, o de

  • 7/23/2019 Cirrosis y Complicaciones Capitulo Libro ACMI

    4/27

    cirrosis descompensada. La cirrosis compensada se descubre generalmente en

    forma incidental, cuando se examina al paciente por otra razn o cuando se

    lleva a una ciruga abdominal. Puede sospecharse en el paciente asintomtico

    que presenta nevus en araa, eritema palmar, edema de miembros inferiores,

    circulacin colateral abdominal, hepatomegalia dura, lbulo heptico izquierdo

    aumentado de tamao o esplenomegalia. Usualmente el perfil bioqumico

    heptico es normal o casi normal, y el diagnstico solo puede establecerse con

    la biopsia heptica de manera definitiva aunque las pruebas de imagen y los

    hallazgos bioqumicos y endoscpicos permiten hacer la aproximacin

    diagnstica (1-7). Estos pacientes tienen una excelente sobrevida y muchas

    veces no es la cirrosis la causa de muerte. Los pacientes con cirrosis

    descompensada son pacientes desnutridos, con severa atrofia muscular, con

    ictericia, que cuando se presenta el pronstico es usualmente pobre, ya que

    esto implica que el proceso de necrosis celular avanza a un ritmo ms rpido

    que el de regeneracin. Otros hallazgos son el fetor heptico, la piel

    bronceada, la uas blancas, lesiones purpricas en la piel de los antebrazos y

    regiones pretibiales, presin arterial baja, escaso vello pbico y axilar,

    ginecomastia y atrofia testicular. El perfil bioqumico heptico es anormal y

    solamente el trasplante heptico, en quienes est indicado mejora la sobrevida

    de estos pacientes. En los exmenes de laboratorio se observa anemia

    moderada que puede ser normoctica normocrmica por enfermedad crnica;

    microctica hipocrmica por sangrado digestivo, o macroctica por deficiencia

    de folatos, sobre todo en los casos de alcoholismo. Si el paciente no presenta

    ningn grado de anemia debe pensarse en una cirrosis compensada o en una

    hemocromatosis. El hiperesplenismo que frecuentemente se manifiesta por

    trombocitopenia y/o leucopenia, puede contribuir tambin al desarrollo de laanemia. Como todos los factores de coagulacin, con excepcin de uno de los

    componentes del factor VIII, se producen en el hgado, en presencia de cirrosis

    se observan importantes trastornos en las pruebas de coagulacin (1-7). La

    que correlaciona mejor con el pronstico y severidad de la enfermedad es el

    tiempo de protrombina, especialmente cuando no corrige despus de la

    administracin de la vitamina K. Los niveles de fibringeno son tardamente

    bajos, reflejando la disminucin de su sntesis. Usualmente hay elevacinmoderada de la bilirrubina directa, las aminotransferasas pueden estar

  • 7/23/2019 Cirrosis y Complicaciones Capitulo Libro ACMI

    5/27

    aumentadas de acuerdo con el grado de actividad necroinflamatoria y el tipo

    especfico de cirrosis. La fosfatasa alcalina se encuentra moderadamente

    elevada en algunos de los casos y en forma considerable en las cirrosis biliares

    y en los casos complicados con un carcinoma hepatocelaular (1-7). Las

    pruebas que reflejan funcin sinttica como la albumina y la protrombina se

    encuentran por lo general alteradas. Existen otro tipo de pruebas que no se

    utilizan rutinariamente en la prctica clnica, pero que son de mucha utilidad en

    estos casos y que miden de cierta forma la reserva funcional heptica, o el

    porcentaje de la masas celular heptica preservada, estas pruebas son: El

    Verde de Indocianina (ICG), La Bromosulftalena (BSP), La Aminopirina

    marcada, El Monoetil-glicil-exilidide (Megx) y la Coliglicina (CG) (1-7). En

    presencia de ictericia se encuentra bilirrubina y urobilingeno en la orina. El

    sodio urinario puede estar muy bajo en los casos avanzados, especialmente

    cuando hay ascitis refractaria o sndrome hepatorenal, recordando que la

    cirrosis es una de las causas ms frecuentes de hiponatremia dilucional. En los

    casos relacionados con alcohol, es frecuente observar hipocalcemia,

    hipofosfatemia e hipomagnesemia. El uso inadecuado de los diurticos puede

    ocasionar hipocalemia o hipercalemia. Es caracterstico encontrar una alcalosis

    respiratoria por hiperventilacin central, combinada con una alcalosis

    metablica por el uso de diurticos. En los casos muy avanzados hay acidosis

    metablica por exceso de cido lctico. Las comunicaciones arteriovenosas a

    nivel heptico y pulmonar explican la hipoxemia frecuentemente observada. El

    hgado cirrtico presenta limitaciones importantes en la sntesis de albmina,

    rea y factores de coagulacin. El ciclo de la rea se lleva a cabo en el hgado,

    y su papel fundamental es convertir el amoniaco derivado del catabolismo

    protico en rea la cual es eliminada por el rin (1-7). Es por sta razn que elpaciente cirrtico presenta niveles bajos de rea y elevados de amonio con las

    consecuencias adversas para el sistema nervioso. Es por esto tambin que el

    cirrtico no utiliza bien el nitrgeno de la dieta, con acumulacin de sus

    productos y encefalopata secundaria. Debe aclararse que slo aquellos

    pacientes en estado avanzado de su enfermedad (Child B o C), presentan

    intolerancia a las protenas. Existe un patrn srico de aminocidos que refleja

    alteraciones fundamentales en el metabolismo protico. Hay elevacin de losaminocidos aromticos (tirosina, fenilalanina y metionina) por falta de

  • 7/23/2019 Cirrosis y Complicaciones Capitulo Libro ACMI

    6/27

    captacin heptica, y disminucin de los de cadena ramificada por exceso de

    utilizacin por el msculo (1-7). Aunque se pens que sta alteracin era

    importante en la patognesis de la encefalopata, actualmente se acepta que

    puede contribuir de manera indirecta y poco importante. Es caracterstico

    encontrar hiperinsulinemia e hiperglucagonemia por resistencia perifrica a la

    insulina (1-7)Esto explica la presencia de intolerancia a los carbohidratos con

    hiperglicemia que es frecuente observar en los cirrticos. La hipoglicemia slo

    se observa en casos de insuficiencia heptica crnica y avanzada exceso de

    alcohol o glucogenosis hereditaria. En ocasiones el carcinoma hepatocelular

    produce sustancias con accin hipoglucemiante como manifestacin

    paraneoplsica. El hgado es el centro del metabolismo lipdico, pues es el sitio

    donde se sintetiza el colesterol, que puede excretarse en la bilis como

    colesterol o como cidos biliares (1-7). En las cirrosis biliares hay

    hiperlipidemias severas por regurgitacin hacia el plasma. En estos casos

    pueden observarse niveles muy elevados de colesterol. En los casos de cirrosis

    no biliares el colesterol por lo general se encuentra bajo, y sus steres no

    pueden sintetizarse porque la enzima Lecitin-colesterol-acetiltransferasa

    (LCAT) se encuentra muy deprimida. Los triglicridos se sintetizan tambin en

    el hgado en un porcentaje significativo. Por sta razn se encuentran elevados

    en la cirrosis alcohlica temprana, y deprimidos en general, en la cirrosis en

    estadios avanzados. Es frecuente observar que los hombres cirrticos

    muestren cambios feminoides y las mujeres cambios androides. Parece ser

    que no es la enfermedad heptica en s misma la que ocasiona estos

    problemas, sino el efecto txico directo del alcohol y el hierro sobre las

    gnadas y la hipfisis (1-7). Adicionalmente, el alcohol induce la secrecin de la

    androstenediona, la cual es convertida por una aromatasa en estrgenos. Lafuncin cardiovascular en el cirrtico se caracteriza por un aumento en el gasto

    cardaco con disminucin de la resistencia perifrica. Una de las bases para

    que ocurran estos cambios, es el desarrollo de numerosas comunicaciones

    arteriovenosas en la piel, msculos y vsceras. Tambin existe y

    aparentemente como efecto primario, una gran vasodilatacin, mediada por

    vasodilatadores no bien identificados, entre los cuales el Oxido Ntrico parece

    jugar un papel importante (1-7). Cuando se presenta la ascitis y sta esabundante, hay aumento de la presin intraabdominal y disminucin del gasto

  • 7/23/2019 Cirrosis y Complicaciones Capitulo Libro ACMI

    7/27

    cardaco. A medida que la enfermedad progresa se observa una cada de la

    presin arterial media que se asocia con mal pronstico. En general el paciente

    cirrtico sin ascitis tiene una hemodinamia renal normal, cuando sta aparece,

    se observa una disminucin del flujo cortical renal, de la filtracin glomerular y

    problemas tubulares asociados con los mecanismos de concentracin de la

    orina. En las pruebas de imagen del hgado, la ecografa generalmente muestra

    patrones anormales de ecogenicidad y atenuacin, aumento de tamao de los

    vasos del sistema portal, hipertrofia del lbulo caudado, esplenomegalia y

    ascitis. El advenimiento de la ecografa con doppler ha permitido medir el flujo

    portal y arterial heptico, su direccin y la presencia de trombosis asociada. La

    tomografa axial computarizada muestra por lo general un hgado de bordes

    irregulares, con coeficiente de atenuacin anormal, hipertrofia del lbulo

    caudado y signos indirectos de hipertensin portal como ascitis, colaterales

    venosas y esplenomegalia (1-10). No es raro observar estudios "normales a

    pesar de existir cirrosis. La resonancia magntica nuclear es til el diagnstico

    de cirrosis por depsito de hierro o cobre, el estudio de la circulacin portal sin

    inyectar medio de contraste, y en la deteccin y caracterizacin de los tumores

    hepticos. Indudablemente el mtodo de mayor exactitud para diagnosticar la

    cirrosis es la laparoscopia, la visualizacin directa del hgado, no solo permite

    confirmar el diagnstico an antes de la biopsia, sino que permite realizar sta

    en forma dirigida, controlar el sangrado si ocurre y evaluar el tipo especfico de

    cirrosis y sus complicaciones no obstante con las pruebas de imagen de alta

    tecnologa la laparoscopia ha dejado de ser un mtodo costo efectivo y solo se

    reserva para situaciones de duda o cuando exista ascitis o coogulopata y se

    quiera hacer un diagnstico diferencial de la ascitis o la realizacin de una

    biopsia. Desde el punto de vista morfolgico, la subdivisin de la cirrosis enmacro y micronodular ha reemplazado la antigua clasificacin de postnecrtica

    y portal. Se acepta como micronodular la cirrosis cuyos ndulos miden en

    promedio menos de 3mm de dimetro, y como macronodular si los ndulos

    miden ms de 3mm. Esta clasificacin no tiene implicaciones etiolgicas. Los

    hgados cirrticos pueden ser grandes o pequeos, dependiendo del proceso

    regenerativo concomitante y de la infiltracin secundaria como en el caso del

    cambio graso. Histolgicamente el diagnstico patolgico se establecedemostrando ndulos de tamao variable rodeados por tabiques fibrosos en

  • 7/23/2019 Cirrosis y Complicaciones Capitulo Libro ACMI

    8/27

    donde se observan ductos biliares neoformados e infiltrado inflamatorio de

    intensidad variable segn la etiologa y severidad de la enfermedad. En general

    un patlogo experto es capaz de establecer la etiologa de la enfermedad en

    ms del 80 % de los casos, sobretodo si la biopsia es interpretada en asocio

    con el clnico y a la luz de la informacin clnica disponible (1-10). Desde el

    punto de vista clnico y bioqumico existe la clasificacin de Child-Turcotte-

    Pugh Tabla 1, relacionndose un mayor puntaje con mayor insuficiencia

    hepatocelular y peor pronstico. Una de las causas ms importantes de cirrosis

    en el mundo es la Hepat i tis crnica por virus C; cerca de 200 millones de

    personas en el mundo estn infectadas por el virus C, en Colombia se calcula

    que el 1.2 % de los donantes altruistas de los bancos de sangre tienen

    serologas positivas para virus C, estas son pruebas de diagnstico que

    detectan anticuerpos a la hepatitis C pero para profundizar en el diagnostico

    sera necesario hacer ensayos moleculares para detectar o cuantificar el ARN

    del VHC. De los pacientes con infeccin por virus C solo el 20% despus de

    10-20 aos desarrollaran cirrosis heptica. La biopsia de hgado puede ser til

    para establecer la gravedad de la enfermedad y la evaluacin para descartar

    causas como el alcohol. Por otra parte la Hepat it is crnica por viru s B, es

    una causa menos frecuente de cirrosis que la hepatitis C. El diagnstico de la

    infeccin crnica por Virus B se basa en la deteccin del antgeno de superficie

    (HBsAg) seis meses despus de la infeccin inicial, y las pruebas adicionales

    para la replicacin del virus B, como son el antgeno e del virus B (HBeAg), los

    anticuerpos totales contra el antgeno e (anti-HBeAg) y la carga viral, que se

    deben realizar para determinar si el paciente debe ser considerado para la

    Parmetro1 2 3

    Ascitis No Grado III Grado III

    Bilirrubina < 2 mg/dL 2 a 3 mg/dL > 3 mg/dL

    Albumina > 3.5 gr/dL 2.8 a 3.5 gr/dL < 2.7 gr/dL

    Tiempo de

    protrombina (INR)

    < 1.7 1.7 a 2.3 > 2.3

    Encefalopata no Grado III Grado III - IV

    Tabla 1. Clasificacin de Child-Turcotte-Pugh. A: 5 a 6 puntos. B: 7 a 9

    puntos. C: 10 a 15 puntos

  • 7/23/2019 Cirrosis y Complicaciones Capitulo Libro ACMI

    9/27

    terapia antiviral o no. Por su parte el abuso crnico de alcohol es el aspecto

    ms importante del diagnstico de la enfermedad heptica alco hlic a,

    aunque a menudo es rechazada por el paciente, los pacientes pueden

    presentar aparte de los signos caractersticos de la cirrosis heptica, hepatitis

    alcohlica concurrente caracterizada por fiebre, hepatomegalia, ictericia y

    anorexia. En la hepatitis alcohlica se observa en los resultados del laboratorio

    una elevacin desproporcionada de AST en comparacin con ALT y ambos

    valores estn por lo general menos de 300 IU/ mL. Esta relacin es en general

    superior a 2,0, un valor que se ve raramente en otras formas de enfermedad

    heptica. La biopsia de hgado, si se realiza, puede revelar los hallazgos tpicos

    de la hepatitis alcohlica, como la necrosis de clulas hepticas, cuerpos de

    Mallory, la infiltracin de neutrfilos, y una distribucin perivenular de la

    inflamacin, donde la lesin aparece por primera vez en las zonas pericentrales

    y luego progresa a fibrosis panlobulillar en aquellos que siguen consumiendo

    licor. La Esteatohepat i t is no alcohl ica es una enfermedad diagnosticada por

    biopsia heptica (11). Los resultados de la biopsia son indistinguibles de los de

    la hepatitis alcohlica que se ha descrito anteriormente, pero el paciente no

    tiene antecedentes de consumo de alcohol importante. La enfermedad heptica

    es estable en la mayora de los pacientes, pero una minora progresa a cirrosis

    (11). Dentro de las causas autoinmunes, la Hepat i t is autoinmune es

    particularmente importante porque con el diagnstico oportuno, el tratamiento

    con prednisona con o sin azatioprina tiene beneficio incluso en aquellos con

    cirrosis establecida pero con indicios de actividad inflamatoria ya sea por

    bioqumica o por histologa. Una de las caractersticas de laboratorio de la

    hepatitis autoinmune, aunque no siempre est presente, es una elevacin de

    las globulinas sricas, particularmente gammaglobulinas (12). Estahipergamaglobulinemia generalmente se asocia con autoanticuerpos

    circulantes, que son particularmente tiles en la identificacin de la hepatitis

    autoinmune. Hay dos tipos principales de hepatitis autoinmune que llevan a

    cirrosis heptica y que se caracterizan por autoanticuerpos especficos como

    los anticuerpos antinucleares, los anticuerpos anti-msculo liso, y los anti-

    LKM1, con manifestaciones clnicas y caractersticas epidemiolgicas

    diferentes. En ocasiones los anticuerpos antimitocondriales aparecen enasociacin con antinucleares y otros autoanticuerpos. El diagnstico de

  • 7/23/2019 Cirrosis y Complicaciones Capitulo Libro ACMI

    10/27

    hepatitis autoinmune puede ser difcil de establecer ya que los autoanticuerpos

    pueden no estar presentes, pero la biopsia heptica revela cambios

    caractersticos, aunque no especficos, tales como un infiltrado portal de clulas

    mononucleares y de plasmocitos con compromiso de la placa limitante que

    rodean la trada portal, y a menudo este infiltrado inflamatorio afecta tambin el

    lobulillo. Teniendo en cuenta las posibles dificultades en el diagnstico, algunas

    ocasiones es necesario iniciar un tratamiento de prueba con esteroides en

    pacientes con un cuadro compatible y sin otra causa aparente de la cirrosis,

    especialmente si hay actividad inflamatoria (12). Otra causa de cirrosis es la

    Cirrosis bi l iar primaria, estaes una enfermedadque puede ser asintomtica o

    presentarse con una historia de hiperpigmentacin cutnea, fatiga, prurito no

    necesariamente asociada a ictericia en fases iniciales (13). El examen fsico

    suele revelar hepatomegalia y esplenomegalia con menos frecuencia. En las

    pruebas de laboratorio los anticuerpos antimitocondriales son el sello distintivo

    serolgico de cirrosis biliar primaria, con las pruebas ELISA estos

    autoanticuerpos son sensibles en un 95% y en un 98% especficos. Se

    observa adems elevaciones pronunciadas en la concentracin de fosfatasa

    alcalina srica de origen heptico, con elevaciones notables en la

    concentracin de colesterol srico, mientras que la hiperbilirrubinemia no se ve

    sino en fases avanzadas del curso de la enfermedad (13). Elevaciones

    modestas de la bilirrubina srica, que persisten durante ms de tres a seis

    meses supone un mal pronstico, estos pacientes deben ser referidos de

    manera oportuna para trasplante heptico, incluso en ausencia complicaciones

    que comprometan la vida. La biopsia heptica generalmente confirma el

    diagnstico con una destruccin gradual del conducto y su eventual

    desaparicin. Las pruebas de imagen o la colangiografa no son necesarios enla mayora de los pacientes. La colangiografa retrgrada endoscpica es

    tpicamente normal y solo es til en el paciente en el que la prueba de

    anticuerpos antimitocondriales es negativa y existe la posibilidad de colangitis

    esclerosante primaria o un carcinoma del conducto biliar o del pncreas (13).

    Otra de la autoinmunes que con frecuencia se observa asociada a la cirrosis

    heptica es la Colangit is esclerosante primaria, esta es una enfermedad

    colestsica crnica de los conductos biliares del hgado y que esfrecuentemente progresiva (13,14). La presentacin clnica es la de una

  • 7/23/2019 Cirrosis y Complicaciones Capitulo Libro ACMI

    11/27

    enfermedad heptica colestsica aguda en ocasiones pero generalmente

    crnica, caracterizada por esteatorrea, prurito, deficiencias de vitaminas

    solubles y enfermedades metablicas seas. Las complicaciones son

    comunes, especialmente las estenosis dominantes biliares, colangitis,

    colelitiasis, colangiocarcinoma y el cncer de colon. Existe una fuerte

    asociacin entre la colangitis esclerosante primaria y la enfermedad

    inflamatoria intestinal, especialmente colitis ulcerativa y menos frecuente con la

    enfermedad de Crohn. El diagnstico se establece mejor por colangiografa o

    colangioresonancia que muestra una imagen caracterstica de estenosis

    difusas y dilatacin focal de los conductos biliares, lo que lleva a un aspecto de

    rbol de invierno. El trmino primaria se utiliza para distinguirla de otras

    condiciones que pueden conducir a un sndrome clnico y colangiogrfico

    similar. Estos incluyen la coledocolitiasis, el colangiocarcinoma, la colangitis

    bacteriana, el antecedente de la ciruga biliar y otras colangiopatas adquiridas.

    La colangitis esclerosante primaria tambin se asocia con una serie de

    alteraciones inmunolgicas, ninguna de los cuales es diagnstica. Estas

    incluyen una elevada concentracin de IgM en el 50%, y varios

    autoanticuerpos. Los ms comunes son anti-msculo liso y los anticuerpos

    antinucleares y los anticuerpos dirigidos contra antgenos citoplasmticos y

    nucleares de los neutrfilos (p-ANCAS) (13,14). Dentro de las enfermedades

    metablicas se encuentra la Hemocromatosis hereditar ia que se puede

    sospechar si hay antecedentes familiares de cirrosis, o si el paciente tambin

    presenta hiperpigmentacin de la piel, diabetes mellitus, la seudogota, y / o

    miocardiopata (15). Un porcentaje de saturacin de transferrina 60 % en

    hombres y 50% en las mujeres se detectan el 90 % de los pacientes

    homocigotos con Hemocromatosis hereditaria. Sin embargo, muchosinvestigadores han propuesto el uso de valor de corte de 45% para los

    hombres y mujeres, lo que puede conducir a la identificacin de ms falsos

    positivos (15). La concentracin plasmtica de ferritina por encima de 300 ng /

    mL en hombres y 200 ng / ml en las mujeres proporciona un mayor apoyo para

    el diagnstico de sobrecarga de hierro, sin embargo la hiperferretinemia se

    presenta en otras alteraciones hepticas y sistmicas. Por lo tanto, se

    requieren otras pruebas para confirmar el diagnstico en pacientes quepresentan cirrosis (15). Esto se puede lograr en una de tres maneras: la prueba

  • 7/23/2019 Cirrosis y Complicaciones Capitulo Libro ACMI

    12/27

    gentica, que ya est disponible, la biopsia de hgado, y la respuesta a la

    flebotoma. En ausencia de pruebas genticas, una biopsia heptica suele ser

    necesaria para confirmar el diagnstico, la sobrecarga del parnquima de

    hierro puede ser demostrada por tincin de azul de prusia y la fibrosis se puede

    detectar si existe. En el tejido heptico tambin puede ser analizado

    directamente el contenido de hierro que es preferiblemente reportado como

    micromoles de hierro por gramo de peso seco de hgado. Los valores normales

    son de menos de 36 mmol / gr, mientras que los valores por encima de 71

    mmol / g son muy sugestivos de pacientes homocigotos para hemocromatosis

    hereditaria. Este valor puede ser dividido por la edad del sujeto en el ao para

    dar el ndice de hierro heptico (HII), un valor 1,9 es altamente sugestivo de

    esta patologa, cualquiera de estos resultados puede servir, aun si la prueba

    gentica para este trastorno no est garantizada (15). Otras causas decirrosis

    son mucho menos comunes, pero deben ser considerados en el contexto

    clnico apropiado. A modo de ejemplo, la enfermedad de Wilson es un

    trastorno autosmico recesivo que se debe sospechar en cualquier paciente

    que tiene una historia personal o familiar de la cirrosis en una edad joven o que

    se presenta con una insuficiencia heptica fulminante en la edad de 45 aos. El

    diagnstico suele establecerse por los hallazgos de una concentracin de

    ceruloplasmina srica baja (en el 95% de los pacientes) y el aumento del

    contenido heptico de cobre en la biopsia heptica, un hallazgo que tambin se

    puede ver en las enfermedades hepticas colestsicas como la cirrosis biliar

    primaria y esclerosante primaria colangitis. La def ic inecia de Alfa-1

    ant i t r ipsinaes un trastorno autosmico recesivo que puede causar cirrosis en

    nios y en 10 a 15% de los adultos que tambin pueden tener enfermedad

    pulmonar obstructiva crnica. El primer paso para estudiar una personasospechosa es la medicin de las concentraciones de Alfa-1 antitripsina en

    suero. El fenotipo se debe guardar para las personas que tienen una

    concentracin de Alfa-1 antitripsina bajos o dudosos, esta prueba requiere

    habilidad y experiencia, por lo que se debe tener cuidado para seleccionar un

    laboratorio que puede proporcionar estas caractersticas.

  • 7/23/2019 Cirrosis y Complicaciones Capitulo Libro ACMI

    13/27

    Complicaciones de la cirrosis

    Ascitis. La ascitis es la acumulacin anormal de lquido en la cavidad

    peritoneal. Es la complicacin ms comn de los pacientes cirrticos,

    presentndose en el 60% en seguimientos a largo plazo y con otrascomplicaciones de la cirrosis como el sangrado variceal y la encefalopata

    heptica marcan la aparicin de la cirrosis descompensada. Es la principal

    indicacin de hospitalizacin en el paciente cirrtico y est entre las principales

    causas de remisin a un programa de trasplante heptico ya que su aparicin

    tiene implicaciones pronsticas, en donde el 15 a 30% de los pacientes morirn

    en el siguiente ao y el 50% a 2 aos (16, 17). La fisiopatologa de la entidad

    depende de la hipertensin portal inicialmente como consecuencia de ladistorsin de la arquitectura heptica por la fibrosis y la produccin de

    vasoconstrictores en la microcirculacin sinusoidal heptica, todo esto

    compensado con vasodilatacin esplcnica y aumento del flujo portal. Como

    consecuencia hay la formacin de circulacin venosa colateral y por lo tanto

    shunt portosistmico, finalmente ascitis por aumento de la filtracin plasmtica

    de los sinusoides hacia el espacio de Disses con una reabsorcin por linfticos

    que es sobrepasada, y ms tardamente con disminucin del volumen

    plasmtico efectivo lo que produce una marcada activacin de los sistemas

    reninaangiotensina-aldosterona, nervioso simptico y la liberacin no

    osmtica de arginina vasopresina, que se manifiesta en ascitis refractaria,

    hiponatremia y finalmente sndrome hepatorenal. La prueba diagnstica ms

    til es el gradiente albumina plasma/liquido asctico > 1.1 que tiene un 97% de

    precisin sobre el origen de hipertensin portal (16, 17). El tratamiento de la

    ascitis en el cirrtico incluye unas recomendaciones generales como son la

    restriccin de sodio a 2 gr/da (88 mmol/da), no es necesaria la restriccin de

    agua excepto en hiponatremia severa (Na < 120 meq/L), la abstinencia del

    alcohol en los alcohlicos y evitar el uso de medicamentos como AINES y ARA

    II/ iECA (16, 17). El 90% de los cirrticos necesitara tratamiento con diurticos,

    se inicia habitualmente con espironolactona 100 mg/da o la combinacin con

    furosemida 40 mg/da y se aumenta progresivamente cada 7 das hasta 400

    mg y 160 mg da respectivamente. El objetivo del tratamiento con diurticos

    debe ser la perdida de mximo 0.5 Kg/da de peso en aquellos sin edemas y 1

  • 7/23/2019 Cirrosis y Complicaciones Capitulo Libro ACMI

    14/27

    Kg/da en aquellos con edemas. Al lograrse la movilizacin de la ascitis debe

    buscarse la menor dosis de diurticos con el fin de evitar complicaciones como

    encefalopata, falla renal y alteraciones del sodio o el potasio. En ascitis severa

    el tratamiento de eleccin es la paracentesis de grandes volmenes con el

    remplazo con cristaloides y albumina que tiene como objetivo disminuir la

    probabilidad de disfuncin circulatoria post paracentesis. Habitualmente una

    paracentesis mayor de 5 litros se remplaza con albumina en dosis 6-8gr/L de

    ascitis removida durante 6 horas (16, 17).No se ha probado que otros coloides

    sean tiles y existe controversia sobre el remplazo con paracentesis menores

    de 5 litros. Se define ascitis refractaria de acuerdo a los criterios de la Tabla 2.

    El tratamiento de primera lnea es la paracentesis de grandes volmenes ms

    albumina. La siguiente alternativa es el uso de TIPS (shunt portosistmico

    intraheptico transyugular) con excelente control de la ascitis, mejora de la

    calidad de vida y tendencia a disminuir la mortalidad que no se ha podido

    confirmar en todos los estudios, sin embargo como problema la falta de

    disponibilidad en muchos centros, el alto costo y el hecho que muchos

    pacientes pueden tener contraindicaciones para el procedimiento. El trasplante

    heptico es la siguiente opcin de tratamiento. Los shunt quirrgicos y el shunt

    peritoneo venoso actualmente tienen muy poco uso.

    Ascitis refractaria a

    diurticos

    Ascitis que no puede ser movilizada o recurrencia temprana a pesar

    de adherencia y dosis apropiada de diurticos

    Ascitis intratable por

    diurticos

    Ascitis que no puede ser movilizada o recurrencia temprana que no

    puede ser prevenida por efectos adversos relacionados con

    diurticos

    Requisitos

    Duracin del

    tratamiento

    Terapia intensiva de diurticos por lo menos 7 das y con dieta

    apropiada

    Falta de respuesta Prdida de peso < 0.8 Kg en 4 das

    Recurrencia temprana Reaparicin de ascitis grado II III en los 30 das siguientes a la

    movilizacin inicial

    Complicaciones por

    diurticos

    Encefalopata, falla renal, hipokalemia o hiperkalemia, hiponatremia

    Tabla 2. Definicin de ascitis refractaria

  • 7/23/2019 Cirrosis y Complicaciones Capitulo Libro ACMI

    15/27

    Varices esofgicas y hemorragia variceal. Se considera que el 40 a 50% de

    los cirrticos tendrn varices esofgicas durante su evolucin, siendo ms

    frecuente en aquellos con enfermedad ms avanzada, Child A 40% - Child C

    85% (18-20). El desarrollo y crecimiento de las varices ocurre 7% por ao (18-

    20). La tasa a 1 ao del primer sangrado variceal es del 12%. La tasa de

    recurrencia a 1 ao de sangrado es del 60%. La mortalidad es de 15 a 20% a

    6 semanas, siendo ms baja en los Child A que en los Child C donde alcanza

    el 30%. Solo el 30 a 40% estn vivos a 2 aos, por lo cual es una de las

    indicaciones para ingresar a los programas de trasplante heptico. Los

    principales factores de riesgo para sangrado variceal son el tamao de las

    varices, la presencia de marcas rojas y la enfermedad heptica avanzada (18-

    20).La fisiopatologa de la entidad es explicada por hipertensin portal, con la

    formacin de colaterales cuando el gradiente de presin venosa heptica

    (GPVH) es mayor de 10 mm Hg, que corresponde a la diferencia entre la

    presin en cua heptica y la presin libre en la vena heptica. Las varices

    esofgicas se forman como comunicacin con la vena gstrica izquierda o con

    los vasos gstricos cortos. El diagnostico se realiza por endoscopia digestiva

    superior, que se le debe solicitar a todo paciente cirrtico desde el momento del

    diagnstico. Hasta ahora no existe ningn tratamiento profilctico para evitar la

    aparicin de varices. En cuanto a la profilaxis primaria de varices pequeas,

    solo se recomienda tratar los pacientes con marcas rojas o cirrticos

    avanzados con beta bloqueadores no selectivos-BBNS (propranolol o nadolol)

    (18-20). Con varices medianas o grandes se recomienda el uso de BBNS o la

    ligadura endoscpica con bandas, con similar eficacia y sin ventajas en

    sobrevida de una sobre la otra, dependiendo la eleccin de la disponibilidad

    local, la experiencia, los costos y las caractersticas de los pacientes. Cuandose usan medicamentos el objetivo es reducir el GPVH a menos de 12 mm Hg lo

    cual es difcil de documentar por los pocos estudios de hemodinamia heptica

    que se hacen en la prctica diaria, por lo cual la meta es reducir la frecuencia

    cardiaca a 55 latidos por minuto. Los pacientes cirrticos con hemorragia

    variceal aguda estn crticamente enfermos y deben vigilarse en la UCI/UCE.

    Existe de todas maneras un 50% de chance de que ceda el sangrado

    espontneamente, siendo menor en cirrticos Child C, con varices grandes,con GPVH > 20 mm Hg y consangrado en chorro durante la endoscopia, y es

  • 7/23/2019 Cirrosis y Complicaciones Capitulo Libro ACMI

    16/27

    precisamente en este grupo de pacientes donde se debe ser ms agresivo en

    las intervenciones (18-20). La reanimacin debe hacerse con precaucin para

    evitar sobrecarga de volumen que puede generar aumento en la presin portal

    y resangrado, y se busca como metas una hemoglobina de 8 gr/dL, un

    recuento de plaquetas > 50000 y tiempos de coagulacin normales. El

    tratamiento especfico se basa en la combinacin de vasopresores con la

    ligadura endoscpica con bandas en las primeras 12 horas desde el ingreso,

    pero adems en pacientes de alto riesgo (Child C o pacientes con GPVH > 20

    mm Hg) si hay falla al tratamiento convencional debe considerarse

    tempranamente (primeras 24 horas) el uso de TIPS, en un estudio reciente

    asocindose con disminucin del resangrado, menor nmero de das en UCI,

    en hospitalizacin y disminucin incluso de la mortalidad a 1 ao (17). En

    cuanto a los vasopresores, el que tiene ms evidencia y el nico relacionado

    con disminucin de la mortalidad es la terlipresina en dosis de 1 a 2 mg IV cada

    4 a 6 horas, pero debe usarse con precaucin en individuos con enfermedad

    coronaria o enfermedad arterial oclusiva crnica por sus efectos de

    vasoconstriccin severa (18-20). Tambin con buena evidencia la

    somatostatina y su anlogo el octreotide, en dosis de 250 a 500 mcg/hora o

    100 mcg/hora respectivamente durante 3 a 5 das. Debe usarse siempre

    antibitico profilctico, una quinolona o una cefalosporina de 3 generacin por 7

    das, los cuales se ha comprobado disminuyen las infecciones y disminuyen la

    mortalidad (18-20). Se recomienda el uso precoz de lactulosa para evitar la

    encefalopata heptica. Deben suspenderse los BBNS o diferirse su inicio hasta

    5 a 7 das despus del sangrado. El resangrado se presenta en 10 a 20% de

    los pacientes, la mayora de las veces en las primeras 48 a 72 horas,

    permaneciendo un riesgo alto hasta los 10 das. Si hay resangrado la terapiaendoscpica es la primera lnea de tratamiento, si hay falla debe considerarse

    TIPS, y si hay falla a los anteriores se considera el shunt quirrgico o la

    devascularizacin como medidas extremas. En cuanto a la profilaxis

    secundaria se prefiere la combinacin de BBNS con ligadura endoscpica con

    bandas hasta la erradicacin de las varices, lo cual requiere varias sesiones.

    Aquellos pacientes que sangran a pesar de la anterior combinacin de medidas

    deben remitirse para colocacin de TIPS y a un programa de trasplanteheptico (18-20).

  • 7/23/2019 Cirrosis y Complicaciones Capitulo Libro ACMI

    17/27

    Encefalopata heptica (EH). La EH es el conjunto de manifestaciones

    neuropsiquitricas que se desarrollan en pacientes con insuficiencia heptica.

    Se divide en episdica, persistente y mnima. Se espera que el 30 a 40% de los

    pacientes cirrticos presenten EH (21-24).Hay muchos factores implicados en

    la fisiopatologa de la entidad como se aprecia en la Figura 1 (22). El

    diagnstico es bsicamente clnico, y se clasifica con los criterios de West

    Haven Tabla 2. Muchas veces las manifestaciones son muy sutiles, como en la

    EH mnima y de all la utilidad de ciertos instrumentos neuropsicolgicos que

    buscan evaluar la velocidad psicomotora, la percepcin visual y la atencin.

    Los exmenes de radiologa son poco especficos, en algunos casos

    necesarios en el diagnstico diferencial, sin embargo estudios de resonancia

    nuclear magntica han detectado aumento del depsito de manganeso en los

    ganglios basales. En cuanto al tratamiento se debe empezar por descartar un

    evento desencadenante, siendo los ms frecuentes las infecciones, el

    sangrado, la hipovolemia, el desequilibrio hidroelectroltico, la constipacin y el

    consumo de ciertas sustancias. El manejo dirigido a disminuir los niveles de

    amonio se basan en el uso de disacridos como la lactulosa en dosis de 15-30

    gr cada 8 horas inicialmente y que debe titularse para lograr 2 a 3 deposiciones

    blandas al da, siendo claros en que en los estudios no se ha demostrado

    objetivamente su beneficio y sin impacto en la mortalidad (21-24). El problema

    principal con la lactulosa es la tolerancia, con la aparicin de diarrea, distensin

    .

    Figura 1. Fisiopatologa de la encefalopata heptica. Tomada del artculo

    de D. Haussinger, F. Schliess (22)

  • 7/23/2019 Cirrosis y Complicaciones Capitulo Libro ACMI

    18/27

    Grado Conciencia Comportamiento Hallazgos neurolgicos

    0 Normal Normal Alteracin del examen

    neuropsicolgico

    1 Normal Euforia, ansiedad, insomnio Bradipsiquia

    2 Somnolencia Desorientacion,comportamiento inapropiado

    Bradilalia, Asterixis

    3 Confusin,

    estupor

    Gran desorientacin,

    comportamiento bizarro

    Rigidez muscular, hiperreflexia

    4 Coma Coma Rigidez de descerebracin

    Tabla 2. Criterios de West Haven de encefalopata heptica

    y dolor abdominal como sus principales efectos adversos. La rifaximina, unantibitico no absorbible en dosis de 400 mg VO cada 8 horas y 550 mg VO

    cada 12 horas, ha demostrado en los ltimos aos su efectividad y seguridad

    en el tratamiento, inicialmente en el manejo a corto plazo de EH episdica y

    posteriormente en la EH persistente y en tratamientos a largo plazo, teniendo

    como ventaja una mejor tolerancia y por lo tanto mayor adherencia de los

    pacientes, pero con un alto costo del tratamiento que es compensado por

    menores tasas de hospitalizaciones (21-24). Otros medicamentos comobenzoato de sodio, neomicina, metronidazol, L-ornitina L-aspartato y

    aminocidos de cadenas ramificadas no han demostrado un claro beneficio en

    los estudios clnicos. No es necesario restringir las protenas de la dieta. Se ha

    determinado en estudios que la sobrevida a 3 aos de pacientes con EH es

    solo del 25% y por lo tanto estos pacientes deben remitirse tempranamente a

    trasplante heptico (21-24).

    Peritonitis bacteriana espontanea (PBE). La PBE es la infeccin bacteriana

    ms importante y comn en los pacientes con cirrosis. Se presenta en el 7 a

    30% de los cirrticos con ascitis. Inicialmente se relacion a una mortalidad del

    episodio del 90% pero en la actualidad es menor al 20%, sin embargo la

    recurrencia a 1 ao es del 70% y la sobrevida a 1 ao es solo del 30 al 50% por

    lo cual es considerada una de las indicaciones para remitir a trasplante

    heptico (25). La fisiopatologa de la entidad se explica por la disfuncin

    inmune en los cirrticos especialmente en los procesos de fagocitosis, la

  • 7/23/2019 Cirrosis y Complicaciones Capitulo Libro ACMI

    19/27

    alteracin del sistema reticuloendotelial y la translocacin bacteriana favorecida

    por el sobrecrecimiento bacteriano y la constipacin. Los pacientes pueden

    consultar por dolor abdominal, distensin, vomito, escalofros, fiebre o

    hipotermia, encefalopata, falla renal, shock o incluso asintomticos por lo cual

    se recomienda que a todo paciente cirrtico hospitalizado con ascitis se le debe

    realizar una paracentesis diagnostica. El diagnostico se basa en documentar

    ms de 250 polimorfonucleares/mL o un cultivo positivo en el lquido asctico,

    aunque puede encontrase bacteriascitis que corresponde a un germen aislado

    sin reaccin leucocitaria (25). Los cultivos son positivos en 30 a 40% de los

    pacientes y para aumentar el rendimiento de los mismos debe inocularse el

    lquido en frasco de hemocultivo en la cabecera del paciente y deben tomarse

    hemocultivos. Los grmenes ms frecuentes son las enterobacterias

    Escherichia coli y Klebsiella pneumoniae, y en menor proporcin estreptococos

    y enterococos. Siempre hay que descartar peritonitis secundaria que se

    caracteriza por un lquido asctico con un alto contenido de protenas, con LDH

    mayor que la plasmtica, con glucosa menor de 50 mg/dL y con cultivos

    polimicrobianos. El tratamiento se debe instaurar rpidamente despus de

    conocer el recuento de neutrfilos, siendo los medicamentos ms estudiados

    las cefalosporinas de 3 generacin y las quinolonas, con tiempos de

    tratamientos tan cortos como 5 das siendo suficientes (25). Hay estudios con

    otros antibiticos como amoxicilina-clavulanato y piperacilina-tazobactam con

    buenos resultados y generalmente cada centro decide el antibitico de acuerdo

    a la epidemiologia local. Esta infeccin es uno de los principales

    desencadenantes del SHR, documentndose efectos favorables con el uso de

    albumina en dosis de 1.5 gr/kg al momento del diagnstico y 1gr/Kg el da 3,

    confirmndose el beneficio solamente en pacientes con creatinina plasmtica >1 mg/dL, nitrgeno ureico > 30 mg/dL y bilirrubina total > 4 mg/dL. No es

    necesario estudio de control del lquido asctico en forma convencional, solo en

    pacientes con inadecuada evolucin clnica o sospecha de peritonitis

    secundaria. Todo paciente que haya sufrido un episodio de PBE debe recibir

    profilaxis secundaria indefinida o hasta el trasplante con una quinolona o

    trimetoprim sulfametoxazol. La profilaxis primaria est indicada en los casos de

    sangrado gastrointestinal durante 7 das y en pacientes con una concentracin

  • 7/23/2019 Cirrosis y Complicaciones Capitulo Libro ACMI

    20/27

    de protenas en lquido asctico menor de 1.5 gr/dL y que adems estn con

    falla renal, hiponatremia o cirrosis avanzada (25).

    Sndrome hepatorenal (SHR). El SHR se define como la insuficiencia renal

    funcional y reversible que ocurre en un paciente con una hepatopata avanzada

    en la ausencia de una causa identificable de falla renal. La incidencia anual es

    de 8% en cirrticos con ascitis. Es una entidad muy temida por el pronstico al

    que se asocia, en promedio siendo la sobrevida menor de 3 meses y en el tipo I

    menos de un mes. Se divide en tipo I en donde existe un deterioro rpido en la

    funcin renal con aumento de la creatinina > 2.5 mg/dL en menos de 2

    semanas, habitualmente asociado a un factor desencadenante, y el tipo II

    corresponde a un deterioro ms lento, siendo esta entidad la continuidad del

    proceso fisiopatolgico de ascitis refractaria (26-28). En la fisiopatologa del

    SHR predomina la vasoconstriccin arterial renal severa por la liberacin

    inapropiada de vasoconstrictores secundaria a vasodilatacin sistmica y

    disminucin marcada del volumen arterial efectivo, siendo primordial la

    presencia del estado de cardiomiopata cirrtica. Para su diagnstico se debe

    cumplir los criterios que aparecen en la Tabla 3 (26). Debe recordarse que la

    insuficiencia renal aguda (IRA) es una entidad que se presenta en el 20% de

    los cirrticos hospitalizados, siendo la mayora (70%) de origen prerenal, y de

    este origen algo ms del 60% corresponde a hipovolemia y el resto a SHR.

    Cirrosis con ascitis

    Creatinina srica > 1.5 mg/dL

    Ausencia de shock

    Ausencia de hipovolemia: no mejora de funcin renal al suspender diurticos y

    usar albumina 1gr/Kg da por 2 das

    No uso actual ni previo con medicamentos nefrotxicos

    Ausencia de enfermedad renal intrnseca: proteinuria > 500 mg/da, sin

    hematuria y ecografa renal normal

    Tabla 3. Criterios diagnsticos actuales del sndrome hepatorenal (26)

    Teniendo esto en cuenta, cuando exista sospecha de SHR se deben retirar los

    diurticos y los nefrotxicos, posteriormente realizar un reto con albumina en

  • 7/23/2019 Cirrosis y Complicaciones Capitulo Libro ACMI

    21/27

    dosis de 1gr/Kg da por 2 das. Hay que realizar una bsqueda activa de

    infecciones particularmente PBE y tambin de hipovolemia por cualquier causa,

    especialmente sangrado digestivo. Para el diagnstico no es necesario realizar

    depuracin de creatinina, y es til la medicin del sodio urinario menor de 20

    meq/L en muestra aislada para diferenciarla de la necrosis tubular aguda donde

    el sodio es mayor de 40 meq/L. El diagnstico es improbable en individuos sin

    ascitis, sin hiponatremia y sin hepatopata avanzada. En cuanto al tratamiento,

    es muy importante una adecuada monitorizacin de la presin arterial, signos

    vitales, gasto urinario y balance de lquidos por lo cual la mayora de veces

    requiere traslado a una unidad de cuidado especial. Se debe continuar con la

    albumina en dosis de 40 gr/da y hay que tener precaucin con el uso de

    cristaloides para evitar hiponatremia dilucional y sobrecarga de volumen. El

    tratamiento especfico se realiza con vasocontrictores que tienen como objetivo

    contrarrestar la vasodilatacin esplcnica severa y aumentar la presin arterial.

    La terlipresina en dosis de 1 a 2 mg IV cada 4 a 6 horas es efectiva en 40 a

    50% de los pacientes, la cual se continua hasta la disminucin de la creatinina

    a < 1.5 mg/dL, en promedio el tratamiento es por 14 das (26-28). Durante el

    tratamiento se observa un aumento de la presin arterial, del gasto urinario y

    del sodio plasmtico. Son predictores de buena respuesta al tratamiento una

    bilirrubina total < 10 mg/dL y un aumento de la presion arterial media > 5 mm

    Hg, verificndose que al 3 da de tratamiento exista una reduccin del 25% de

    la creatinina plasmtica, si no es as se debe aumentar la dosis siempre y

    cuando no existan efectos adversos (26-28). La isquemia miocrdica,

    gastrointestinal y vascular perifrica son los principales efectos adversos de la

    terlipresina. Puede presentarse recada al suspender el tratamiento pero la

    mayora de las veces el retratamiento es efectivo. Una reciente revisinsistemtica demostr que la terlipresina se asocia con disminucin de la

    mortalidad a corto plazo. Otros tratamientos son la norepinefrina y el midodrine

    con octreotide con el objetivo de aumentar la presin arterial media > 10 mm

    Hg, demostrndose en un estudio la no inferioridad de norepinefrina con

    respecto a terlipresina (26-28). Hay que resaltar que los estudios se han

    realizado en SHR tipo I y no en SHR tipo II. En muchos casos es necesario la

    terapia de remplazo renal como terapia puente al trasplante heptico, y otrasmedidas como los sistemas de soporte heptico artificial (MARS o Prometheus)

  • 7/23/2019 Cirrosis y Complicaciones Capitulo Libro ACMI

    22/27

    no han demostrado sustancialmente mejores resultados por lo cual no se

    recomiendan. A pesar de las opciones medicas de tratamiento el nico

    tratamiento definitivo del SHR es el trasplante heptico por lo cual estos

    pacientes tienen que remitirse oportunamente, conociendo de antemano que

    los resultados a largo plazo post trasplante no son tan buenos por la falla renal.

    Carcinoma hepatocelular (CHC). El CHC es la quinta neoplasia ms comn

    en el mundo y corresponde a la tercera causa ms frecuente de muerte por

    cncer (29-31). Es mucho ms frecuente en Asia y en frica que en el mundo

    occidental. Se presenta ms en hombres y especialmente despus de la sexta

    dcada de la vida, pero en las reas endmicas de virus B se presenta en

    edades ms tempranas. Los principales factores de riesgo son cirrosis por

    cualquier causa (90% de los CHC ocurren en hgados cirrticos), infeccin

    crnica por hepatitis B y hepatitis C, especialmente si hay coinfeccin con VIH

    y hepatitis delta, y la exposicin a aflatoxinas (29-31). Es de anotar que en el

    caso de infectados por hepatitis B no es necesario la presencia de cirrosis y los

    pacientes pueden desarrollar CHC incluso siendo portadores, esto relacionado

    con la integracin al DNA del hepatocito que realiza el virus y la represin de

    genes supresores de tumores o la activacin de genes pro oncognicos (29-

    31). En cuanto a la hepatitis C ocurre casi siempre en el contexto de cirrosis y

    los mecanismos implicados son el alto recambio celular relacionado con el

    estado inflamatorio crnico. Adicionalmente, algunas otras causas de cirrosis

    tienen mayor relacin con CHC como son la hemocromatosis, la exposicin a

    alcohol y NASH. Para su diagnstico es til la medicin de la alfa fetoprotena >

    20 ng/mL, siendo un nivel > 200 mg/mL altamente sugestivo, y los estudios

    dinmicos de radiologa como la Tomografa computarizada trifsica de hgadoy la Resonancia nuclear magntica contrastada, en donde una lesin > 2 cms

    con el patrn de realce arterial temprano y lavado en las fases tardas que se

    consideran tpicas de CHC (29-31). Lesiones entre 1 a 2 cms requieren otro

    estudio dinmico, y si la lesin es atpica por radiologa o quedan dudas sobre

    el diagnstico debe realizarse biopsia heptica. Las lesiones menores de 1 cm

    requieren seguimiento por imgenes. Si se hace biopsia esta debe ser

    interpretada por patlogos expertos ya que es difcil diferenciar entre un ndulodisplsico y un CHC. La biopsia se ha restringido por el temor de siembra

  • 7/23/2019 Cirrosis y Complicaciones Capitulo Libro ACMI

    23/27

    durante el procedimiento lo cual puede terminar contraindicando trasplante

    heptico en los casos en que es susceptible de este tratamiento, sin embargo

    el riesgo es del 2.7% (29-31)y en el futuro se cree que el estudio histolgico

    sea fundamental para confirmar el diagnstico. Para la estadificacin y

    tratamiento se han planteado diferentes estrategias, sin embargo la ms

    aceptada en el mundo y la preferida por integrar la carga tumoral, la funcin

    heptica y los sntomas relacionados con cncer es el BCLC del hospital Clinic

    de Barcelona Figura 2, que lo divide en 5 estadios, teniendo la ventaja de

    relacionar el estadio con el tratamiento correspondiente, ofreciendo el mejor

    poder pronostico comparado con otros esquemas (29-31).

    Figura 2. Estadificacin del CHC, esquema del BCLC. Tomado del artculo

    Mendizabal (30)

    Los tratamientos que estn relacionados con una buena respuesta e incluso

    curacin son la reseccin quirrgica, el trasplante heptico y la ablacin por

    radiofrecuencia. El tratamiento optimo del CHC es la reseccin total de la

    lesin, sin embargo la reseccin quirrgica se restringe a lesiones de mximo 5

    cms y a pacientes con cirrosis child A, con bilirrubina normal y sin hipertensin

    portal, as que solo puede ser ofrecido a menos del 10% de pacientes

    occidentales, relacionndose con una sobrevida de 70% a 5 aos y con unarecurrencia tumoral de 70% a 5 aos (29-30). En pacientes cirrticos con CHC

  • 7/23/2019 Cirrosis y Complicaciones Capitulo Libro ACMI

    24/27

    el tratamiento de eleccin es el trasplante heptico el cual puede solucionar

    ambos problemas, sin embargo la seleccin que se realiza con los criterios de

    Miln, lesin solitaria < 5 cms o 3 ndulos de < 3 cms, son estrictos para poder

    obtener buenos resultados como son una sobrevida a 5 aos del 75% y una

    recurrencia a 5 aos de menos del 15%. Estos resultados favorables y el hecho

    que se d prioridad a estos pacientes, puntaje MELD de 22, ha llevado a un

    aumento en nmero de trasplantes hepticos por CHC. Existen varios grupos

    cientficos que han optado por ampliar los criterios para trasplante sin que sean

    mundialmente aceptados, y adems otros plantean estrategias de reduccin de

    la carga tumoral por la aplicacin de terapias locales (downstaging) con el fin

    de que los pacientes cumplan los criterios para trasplante o no salgan de la

    lista durante el tiempo de espera (29-30). La ablacin por radiofrecuencia es la

    mejor alternativa a lesiones pequeas en pacientes no susceptibles de ciruga

    o trasplante heptico. Tiene muy buenos resultados en lesiones < 2 cms,

    logrando necrosis del 100% de la lesin, con sobrevida del 98% a 2 aos, pero

    con recurrencia del 70% a 5 aos. Se ha comparado en estudios este

    tratamiento en lesiones < 3 cms con la reseccin quirrgica, obteniendo

    resultados comparables y con menores tasas de hospitalizacin y

    complicaciones. La quimioembolizacin transarterial (TACE) busca la necrosis

    isqumica del tumor con la aplicacin de un agente de quimioterapia,

    habitualmente adriamicina o cisplatino. En los pacientes que se logra una

    respuesta objetiva (16 al 60%) se aumenta la sobrevida 24 meses. No puede

    ser ofrecido a pacientes con enfermedad heptica avanzada ni pacientes con

    trombosis portal. Hasta en el 50% de pacientes despus del procedimiento se

    puede presentar el sndrome post TACE caracterizado por fiebre y dolor

    abdominal que es secundario a la necrosis tumoral, en ocasiones con laaparicin de absceso heptico y sepsis. En estados avanzados se ha

    estudiado el Sorafenib, un inhibidor multikinasa con propiedades

    antiproliferativas y antiangiognicas que en estudios recientes ha demostrado

    un aumento en la sobrevida de 2 a 3 meses en pacientes con CHC avanzado,

    multifocal, incluso con trombosis portal y con diseminacin extraheptica pero

    con buen estado general y cirrosis compensada. A los pacientes con CHC

    avanzado, cirrosis Child B o C y mal estado funcional solo se puede ofrecermanejo sintomtico (29-30).

  • 7/23/2019 Cirrosis y Complicaciones Capitulo Libro ACMI

    25/27

    BIBLIOGRAFIA

    1. Botero RC. Cirrosis heptica. En: Vlez H, Borrero J, Restrepo Molina

    J.Fundamentos de Medicina. CIB, Medelln, 2a. edicin, 428-448, 1982.

    2. Botero RC. Cirrosis heptica. En : Vlez h, Borrero J, Restrepo Molina J.

    Fundamentos de Medicina. CIB, Medelln, 3a. edicin, 480-504, 1990.

    3. Correa G, Restrepo JC. Semiologa del abdomen. En Orrego A, Cuellar F.

    Semiologa Clnica. Editorial Universidad de Antioquia 2002: 229-257

    4. Restrepo JC. Enfermedades metablicas del hgado. En Franco F, Sierra F.

    Gastroenterologa y Hepatologa. Fundamentos de Medicina. Editorial CIB

    2004: 221-225

    5. Restrepo JC. Manejo actual de la Hipertensin portal. En Franco F, Sierra F.

    Gastroenterologa y Hepatologa. Fundamentos de Medicina. Editorial CIB

    2004: 226-227.

    6. Conn HO, Atterbury CE. Cirrhosis. In : Schiff L, Schiff ER (eds).Diseases of theliver, 7th edition, J.B. Lippincott Company, Philadelphia, 875-934, 1993.

    7. Bravo AA, Sheth SG, Chopra S. Liver biopsy. N Engl J Med 2001; 344: 495-500

    8. Di Lelio A, Cestari C, Lomazzi A, Beretta L. Cirrhosis: diagnosis with

    sonographic study of the liver surface. Radiology 1989; 172:389.

    9. Finn JP, Kane RA, Edelman RR, et al. Imaging of the portal venous system inpatients with cirrhosis: MR angiography vs duplex Doppler sonography. AJR

    Am J Roentgenol 1993; 161:989.

    10. Fauerholdt L, Schlichting P, Christensen E, et al. Conversion of micronodular

    cirrhosis into macronodular cirrhosis. Hepatology 1983; 3:928.

    11. Neuschwander-Tetri BA, Caldwell SH. Nonalcoholic Steatohepatitis: Summary

    of an AASLD Single Topic Conference. Hepatology 2003; 37:1202-1219

  • 7/23/2019 Cirrosis y Complicaciones Capitulo Libro ACMI

    26/27

    12. Lohs AW, Mieli-Vergani G. Autoimmune hepatitis. Journal of Hepatology 2011

    vol. 55: 171182.

    13. Tischendorf JJW, Geier A, Trautwein C. Current Diagnosis and Management of

    Primary Sclerosing Cholangitis. Liver transplantation 2008. 14:735-746.

    14. European Association for the Study of the Liver. Clinical Practice Guidelines:

    Management of cholestatic liver diseases. Journal of Hepatology 2009, 51:

    237267

    15. Bacon BR, Adams PC, Kowdley KV et al. Diagnosis and Management of

    Hemochromatosis:2011 Practice Guideline by the American Association for the

    Study of Liver Diseases. Hepatology 2011 (54): 328-343

    16. Runyon B. Management of Adult Patients with Ascites Due to Cirrhosis: An

    Update. AASLD Practice Guidelines. Hepatology 2009

    17. EASL clinical practice guidelines on the management of ascites,spontaneous

    bacterial peritonitis, and hepatorenal syndrome in cirrhosis. Journal of

    Hepatology 2010, 53: 397417

    18. Franchis R. Revising consensus in portal hypertension: Report of the Baveno V

    consensus workshop on methodology of diagnosis and therapy in portal

    hypertension. Journal of Hepatology 2010, 53 : 762768

    19. Garcia-Tsao G. Management of Varices and Variceal Hemorrhage in Cirrhosis.

    N Engl J Med 2010;362:823-32

    20. Early TIPS Cooperative Study Group. Early Use of TIPS in Patients with

    Cirrhosis and Variceal Bleeding. N Engl J Med 2010; 362:2370-2379

    21. Poordad FF. Review article: the burden of hepatic encephalopathy. Aliment

    Pharmacol Ther 2007(suppl 1):39.

    22. D Haussinger, F Schliess. Pathogenetic mechanisms of hepatic

    encephalopathy. Gut 2008;57:11561165

  • 7/23/2019 Cirrosis y Complicaciones Capitulo Libro ACMI

    27/27

    23. Maclayton DO, Eaton-Maxwell A. Rifaximin for treatment of hepatic

    encephalopathy. Ann Pharmacother 2009;43:7784

    24. Neff G, Leevy C, Merchant K, et al. Rifaximin reduces the risk of

    hospitalizations in patients with previous episodes of hepatic encephalopathy.

    Presented at digestive disease week, Chicago, IL, May 31, 2009.

    25. Ghassemi S, Garcia-Tsao G. Prevention and treatment of infections in patients

    with cirrhosis. Best Practice & Research Clinical Gastroenterology 2007: 21

    (1): 77-93

    26. Salerno F, Gerbes A, Gins P, Wong F, Arroyo V. Diagnosis, prevention and

    treatment of hepatorenal syndrome in cirrhosis. Gut 2007;56:13101318

    27. Nazar A, Pereira GH, Guevara M, Martin-Llah M, Pepin MN, et al. Predictors of

    response to therapy to terlipressin and albumin in patients with cirrhosis and

    type 1 hepatorenal syndrome. Hepatology 2010;51: 219226.

    28. Gluud LL, Christensen K, Christensen E, Krag A. Systematic review of

    randomized trials on vasoconstrictor drugs for hepatorenal syndrome.

    Hepatology 2010;51:576584

    29. Jordi Bruix and Morris Sherman. Management of Hepatocellular Carcinoma: An

    Update. Hepatology July 2010

    30. Manuel Mendizabal, K. Rajender Reddy. Current Management of

    Hepatocellular Carcinoma. Med Clin N Am 93 (2009) 885900