autorretratos de 1º eso b
TRANSCRIPT
Yo he nacido en Cantabria, así que mi lengua materna es el
castellano, ya que aquí solo tenemos una lengua. Aprendí a hablar
castellano cuando era muy pequeña en el colegio. Pero también
me acostumbré muy pronto a la forma de hablar de otras gentes,
ya que solemos viajar mucho. En Cataluña conocí el catalán,
porque tengo amigos con los que hablo cada año que voy en
vacaciones. En Londres también entré en contacto con el
inglés. Ahora, también "hablo" euskera, por mi amiga Olaia, y
hasta francés, porque vamos a competir en verano a Hossegord.
Es importante conocer otras lenguas y dialectos, ya que nos
enriquecen nuestra cultura. A pesar de ello, yo me quedo con los
dichos y la forma de hablar de mi "tierruca".
He crecido en un entorno bilingüe, ya que mi madre es francesa y mi padre es
español. Desde el día que nací, mi madre no para de hablarme en francés. Siempre
nos ha hablado a mi hermano y a mí en francés, pero mi padre nos hablaba en
español. Entonces yo, en mi pequeña cabecita, tenía un lío entre el francés y el
español, aunque con los años me fui acostumbrando. Recuerdo que todas las
noches, cuando todos estaban en la cama, decíamos en alto “bonne nuit” (buenas
noches) y nos dormíamos.
Como dije antes, mi madre siempre nos hablaba en francés, aunque mi hermano y
yo nunca le hemos respondido en francés. Ella hablaba en francés pero nosotros le
respondíamos en español.
Una de las muchas cosas buenas que tenía tener una madre que hablase en francés
era que, cuando estabas con amigos y tu madre te reñía (en francés), tus amigos no
entendían lo que tu madre decía.
Todos mis amigos del cole sabían que mi madre era francesa y que yo sabía hablar
francés. En los recreos me atosigaban a preguntas como: ¿Cómo se dice manzana
en francés? ¿Cómo se dice mesa? ¿Sabes decir “supercalifragilisticoespidalidoso” en
francés? Y otras muchas preguntas…
Cuando iba de viaje a Nantes (Francia) hablaba todo el tiempo en esta lengua, ya
que mi abuela, mi tío, mis primos y toda mi familia hablaban en francés. Recuerdo
que mi familia me decía que tenía una muy buena pronunciación y eso me
motivaba a hablarlo más aún.
Ahora más que nunca, me doy cuenta de que ser bilingüe me va a abrir muchas
puertas en un futuro y que me va a ser de gran ayuda para mi porvenir.
Yo nací en Cantabria y desde siempre he hablado castellano,
pero uso un dialecto del propio idioma en el que se dice por
ejemplo “a ella la gusta”. Esa es la única diferencia que
conozco del dialecto cántabro.
En cuanto a mi segunda lengua, esta siempre ha sido el
inglés, ya que lo estudio desde los tres años y siempre me
ha gustado hablarlo y aprenderlo. Tengo el nivel A1 y el
titulo del Trinity de segundo de la E.S.O. que saqué en sexto
de primaria en las clases extraescolares del colegio al que
iba. En cuanto al francés no tengo mucho que decir, puesto
que solo llevo tres semanas cursándolo, pero ya me podría
defender ante una situación sencilla.
Me llamo Javier y nací en Santander. Soy monolingüe, mi única lengua
oral y escrita es el castellano, porque vivo en una comunidad en la que
solo se habla esa lengua. Sin embargo, en España hay algunas
comunidades en las que se hablan otras, el catalán , el gallego, el
euskera, etc.
En 2008 empecé a estudiar en un colegio con programa bilingüe.
Estudiaba inglés, science y art. Esto me ha ayudado a tener un inglés
bastante aceptable. Además cada año venía una persona extranjera y
con ella practicábamos la expresión oral. También nos mandábamos
cartas con niños ingleses.
Cuando llegué a quinto de primaria, empecé a estudiar otra lengua
extranjera, el francés. Tanto el francés como el inglés me gustan y los
suelo practicar en verano, ya que voy a un campus bilingüe en el que
he escuchado diferentes dialectos, debido a que los monitores eran de
diferentes países [Inglaterra, Irlanda y Escocia].
La excursión de fin de curso que realizamos en sexto la hicimos a
Dublín , donde prácticamente todo el día nos comunicamos con los
habitantes de allí en su propio idioma. Cuando íbamos a comer o a
cenar teníamos que pedir la comida, bebida…, en inglés.
Me considero una persona casi bilingüe ya que desde la cuna toda mi familia a
excepción de mi tía María me ha hablado en castellano: mi tía María, que cursó
sus estudios y trabaja en Londres, me ha hablado desde pequeña en inglés.
Por otra parte mis primas segundas viven en Sydney y cada año, en verano,
vienen a España. Me veo obligada a hablar con ellas en inglés ya que ellas no
saben hablar en castellano.
También me gusta mucho esta lengua, por lo que desde pequeña he insistido
en hacer los exámenes de Cambrigde e ir siempre avanzada: ya tengo el B1.
En lo que se refiere al castellano, considero que tengo un castellano normal,
sin dialectos.
Mi iniciación al francés empezó en 5º de primaria. Teniendo una hora a la
semana. En el instituto la he escogido como materia optativa.
También el novio de mi tía es italiano por lo que siempre he querido
aprenderlo pero no he tenido ocasión de empezar.
Me considero una trotamundos y he puesto en práctica mis conocimientos
lingüísticos en el extranjero. He podido observar la diferencia que hay entre en
inglés americano y el inglés de Inglaterra, y entre el francés suizo y el francés
de Francia.
Me llamo Hugo Cifrián y nací en Santander, una ciudad
monolingüística. Yo hablo el idioma español que aprendí gracias a
la gente que me rodeaba: mis padres, mis familiares, las personas
de la guardería... Después, más adelante perfeccioné mi idioma
gracias al colegio.
Mientras estaba en primaria también aprendí otro idioma: el
inglés. Este idioma lo llevo practicando desde la guardería y
todavía sigo practicándolo. Este año, como he empezado el
instituto, iba a estudiar, aparte del inglés, el francés, pero al final
no lo voy a estudiar. Por ahora solo estudiaré el inglés.
Yo nací en Santander, con lo cual mi lengua materna es el español,
hablado con dialecto normal. Cuando ya casi tenía aprendido el
castellano (a los 3 o 4 años) empecé con el inglés. Al principio era
una extraescolar en mi guardería (el Niño Jesús) y estuve tres años
estudiándolo así. A los 6 años empecé en un nuevo cole. Era uno
de los bilingües de Cantabria: El Jardín De África (JDA). Allí se
enseñaban otras asignaturas en inglés, como ciencias, plástica y
educación física. En aquel colegio aprendí mucho de esta lengua;
además, en 4º, 5º y 6º hice los exámenes de Cambridge (exámenes
oficiales de inglés.) Con 8 años fui a Nueva York y este verano, con
11 años, he ido a Londres de vacaciones.
Con 10 años empecé a estudiar francés como segunda lengua en
el colegio. Aún no sé mucho, pero continuaré con estas clases.
Con 10 también empecé con alemán, aunque lo he dejado este
año. De los tres idiomas es el que más me ha costado, aunque he
aprendido muy poco.
Yo nací en una tierra monolingüe, donde, como en todos los sitios,
hay unas palabras y expresiones distintas. A mí me parecen
normales pero a gente que no es de aquí le parecen extrañas. En
mi tierra monolingüe se habla castellano, solo castellano, por lo
tanto, es la lengua que llevo aprendiendo desde que nací y todavía
sigo aprendiendo. Conozco varios dialectos, pero el que más
escucho es el de Extremadura porque unos primos míos viven allí y
suelo ir a visitarlos. El único idioma que controlo perfectamente es
el castellano, pero también sé algo de inglés, que llevo
aprendiendo desde los tres años en el colegio y seguiré
aprendiendo en el instituto. También este año empiezo a dar
francés.
Cuando empecé el colegio me adentré por fin en un mundo lingüístico, con ganas de aprender
otros idiomas como el inglés, el francés y el italiano. Mi madre es de Bilbao, así que conoce el
euskera, pero yo no sé hablar esa lengua.
En primero de primaria empezamos con el inglés. Me enseñaron vocabulario como “red, blue,
hello”… Era como si me prepararan para ir a Inglaterra. El inglés al cabo de unos años se me iba
dando mejor, y pasamos de lo fácil a lo normal. En este caso aprendía mucho más pero que
más vocabulario, como “I´m, You´re”… Era tanto lo que aprendía que me daban ganas de ir a
Inglaterra y quedarme allí, como si fuera otro inglés. Al final alcancé un nivel considerable (sabía
bastante) y me creía que con mi forma de hablar inglés me podría ir por todo el mundo,
expresando mis conocimientos sobre el inglés.
En quinto de primaria empecé el francés, aprendimos vocabulario como “français, chien,
hamster”… También daba francés fuera del colegio, así que aprendí tanto, que no me esperaba
saber todo eso. Fue una ilusión enorme para mí.
También he conocido el mundo italiano. Lástima que no sé casi nada. Aunque no sepa casi
nada me ha gustado el italiano. Lo conocí a los siete años cuando fuimos a Cerdeña de
vacaciones. Este año también he ido a Cerdeña.
¡Ah! casi se me olvida hablar de mi lengua de origen: es el castellano. Es la que se me da mejor
(obviamente, ya que es mi lengua de origen).
Otra de las lenguas con las que me he topado este verano es el gallego. La mujer de mi tío es
gallega, y trajo a sus padres a pasar un fin de semana a casa de mis abuelos, por lo que les
oímos durante varios días “arrecarallo, trapalleiro”…
Sr. Jerónimo
Nací en Santander en 2002. Mis padres son españoles, con lo cual mi
idioma materno es el español.
Desde muy pequeño he tenido contacto con el inglés a través de mi tío y
mis primas, que son irlandeses, tanto por sus visitas a España, como por
las nuestras a su país. A los tres años comencé en un colegio bilingüe, el
Jardín de África, donde recibía la mitad de las clases en inglés. También
tuve ocasión de poner en práctica mi inglés en varios viajes a Londres y
Dublín. En el colegio tuve contacto con diferentes acentos en inglés: el
profesor de educación física era neozelandés y varios de mis profesores
eran ingleses, irlandeses o estadounidenses. En el colegio nos ofrecían la
posibilidad de realizar los exámenes de la Universidad de Cambridge y
yo hice los exámenes de Flyers, Starters y Movers con buena nota. A
menudo veo con mi padre series de televisión en versión original en
inglés.
En cuarto de primaria me apunté a unos cursos de chino en el colegio, que
realicé durante dos años. También en quinto de primaria tuve que dar la
asignatura de francés durante los cursos de 5º y 6º. Asimismo he tenido
contacto con el italiano, a través de viajes a Italia. Hasta hoy he seguido
estudiando varios de estos idiomas, con los que sigo en contacto en el día
a día.
Cuando era pequeño sabía chino porque había nacido en
China. Luego vine a España y aprendí castellano. Mis padres me lo
enseñaron. También aprendí en el colegio, viendo la televisión y
oyendo la radio. Mis primeras palabras fueron “hola”, “papá” y
“mamá”.
Aprendí inglés también en el cole y ahora sigo
estudiándolo en el instituto y en la academia. Mis primeras
palabras fueron “hello”, “goodbye”, “one”, “two”…
Por último estoy estudiando francés, mis primeras palabras
fueron “bonjour”, “un”, “deux”, “trois”…
Soy monolingüe.
Yo nací en Moldavia, un país al este de Europa. Al principio mis
padres me hablaban por mi lengua natal, y así fue hasta que a los
tres años me trasladé a España, donde empecé la guardería,
aunque, eso sí, con muchos problemas con la comunicación ya
que no sabía mucho español. Pero fui acostumbrándome. Cuando
llegó primaria ya manejaba bastante bien el idioma. Sin embargo,
la ortografía no se me daba muy bien. Aparte del español también
aprendí el inglés en el colegio. A medida que iban avanzando los
cursos yo iba mejorando mi ortografía. Seguía aprendiendo inglés
y nuevas palabras del español hasta llegar a quinto curso,
momento en que me fui a otro colegio que, además, era bilingüe,
es decir, que aparte de estudiar un poco más de inglés estudiaba
también francés. La verdad es que no era muy difícil. Pasaron los
curos hasta llegar al I.E.S Las Llamas.
Me crié en un entorno monolingüe.
Mi dialecto es el cántabro, y hay expresiones que a las personas de
otras provincias les resultan raras, y yo no lo entiendo, como: 'a
cuchus' (a hombros); 'acaldar' (colocar); 'atropar' (reunir);
'bardal' (desordenado); 'chapapote/pichi' (alquitrán); 'chon'
(cerdo).
Mis padres son cántabros, por eso yo no me sé más lenguas.
Mi primer contacto con unalengua extranjera ocurrió en el colegio,
con tres años, aprendiendo inglés. Mis padres a veces nos ponen
películas en inglés, para que así nos acostumbremos a escucharlo.
Desde hace unos días, estudio francés en el instituto, y me gusta
mucho.
Hola, me llamo Valentina. Todo esto comenzó el 13 de febrero de 2002,
lógicamente es el día en que yo nací.
Desde que llegué al mundo hasta los 6 años aproximadamente, mi madre me
hablaba aparte de en español en italiano, ya que ella estuvo viviendo en Italia
unos años. Luego le dije que no quería más. Ahora me arrepiento de haberlo
dejado, ya que me hubiese gustado seguir hablándolo. Respecto al dialecto,
toda la familia de mi padre, él incluido, son de Extremadura. También van
todos los veranos a Cádiz, Andalucía, y por parte de mi madre tenemos unos
primos segundos en Vitoria, aunque tenemos muy buena relación. Por último
tengo un tío que vive en Mallorca, por tanto he estado en contacto con el
mallorquín también. En primero de primaria comencé con otro idioma, el
inglés, al que he ido a clases particulares desde los seis años. El inglés me
encanta. Bueno, los idiomas en general me gustan, pero el inglés en especial
ya que se me da bastante bien. Lo he puesto en práctica varias veces en
Tailandia, la India… y otros, lo que pasa es que no me acuerdo. También el
francés me gusta, lo llevo estudiando desde quinto de primaria. También lo he
puesto en práctica una vez cuando fui de camping a Francia, para pedir el
desayuno, las baguettes...
Ya no tengo más idiomas de los que hablar.
Yo nací en un entorno monolingüe. Mis padres son españoles y solo hablo
una lengua. Aunque yo también hable inglés, no lo domino del todo. Voy a
una academia que se llama “Yellow submarine”. Allí va mucha gente
conocida y la tengo justo debajo de mi casa. Hay muchas aulas y es muy
divertido. Antes de que me trasladara a vivir aquí venía una chica a mi casa
que se llamaba Sayde. Era inglesa y se quedaba a dormir en casa de unos
amigos. Cuando dábamos clase con ella hacíamos postres como bizcocho
y ella nos iba enseñando las medidas, magdalenas, etc… Otros días
jugábamos a juegos habituales de allí que nos enseñaba ella y otros
hacíamos fichas y dibujos. Nos lo pasábamos bomba.
Yo nunca he dado francés pues en mi cole no se daba hasta la ESO y ahora
en el instituto he entrado en el “Proyecto Espade” y convalido educación
física y francés.
Este es mi autorretrato lingüístico. Como habéis podido ver soy
monolingüe, con lo cual yo solo hablo una lengua perfectamente: el
español.
Me llamo Manuel Francés, tengo 11 años y vivo en
Santander. Mi idioma es el castellano. En el colegio del que
vengo estaba estudiando el inglés y el francés. La primera
vez que escuché el inglés fue con tres años y desde entonces
estudio el inglés y también estudio el francés, lo estudio
desde quinto curso.
En mi casa se habla solo el castellano, porque mi padre y mi
madre son españoles.
La lengua que me gustaría estudiar es el italiano, porque me
parece una lengua muy fácil y a si podría ir a Italia, que es el
lugar donde me gustaría vivir.
Desde pequeña me enseñaron las palabras básicas de inglés: hello, yes, los
números, colores…, y también palabras en español porque, como cualquier
niño pequeño, empecé el colegio sin saber hablarlo muy bien.
Me enseñaron también a escribir palabras en español como mi nombre.
Después a decirlas y luego a leerlas. Lo mismo pasó con el inglés. Cuando
estaba ya en primaria me enseñaron a escribirlo y después a leerlo.
Estando ya en tercero de primaria, me enseñaron también un poco de
francés. Empezamos con el vocabulario y un poco de pronunciación. En
cuarto, quinto y sexto empezamos a practicar la pronunciación y nos
empezaron a enseñar cómo mantener una conversación en inglés, como
por ejemplo: hello, how old are you? What is your name?... Igual que en
francés: salut, quel âge tu as? También aprendí algunas palabras como:
merci; bonjour, oui, non…
Pero yo no soy bilingüe. Solo sé hablar perfectamente en español y me
puedo defender en francés e inglés, pero todavía me queda mucho que
aprender.
Yo nací en Bezana el 13 de enero del 2001. Cuando era pequeña, me
cuidaban mis abuelos y mis padres. Todos los sábados íbamos con los
primos y los tíos a la piscina y jugábamos en el agua. Un día fuimos a la
playa , también íbamos de vacaciones. Algunas veces mi madre, y otras
veces mi abuela cuando era pequeña, me leía cuentos antes de irme a la
cama. Mi abuelo es el que me enseñó un poco de inglés y mi abuela le
ayudaba un poco. Mi madre también me enseñó muchas cosas sobre el
inglés. Cuando empecé al colegio, me enseñaron más cosas sobre el
castellano, ya que ya sabía algunas cosas. El inglés que me empezaron a
enseñar cuando empecé con tres años en el colegio era muy interesante.
Después pasé a primaria, momento en que me enseñaron más cosas sobre
el inglés: todavía no sabía mucho pero me enseñaron a escribir, a hablar, el
abecedario y muchas otras cosas. Mis padres me enseñaron muchísimas
cosas también. Lo mejor del colegio fueron mis amigos y los profesores,
que, cómo no, me enseñaron un montón de cosas. Ahora estoy en el
instituto y tengo muchos amigos que me ayudan y nos lo pasamos genial
en el recreo jugando a la pelota, hablando sobre las clases que nos tocan
después, de los deberes y de muchísimas cosas más.
Mis dos padres son españoles, por lo que mi lengua materna es el español.
Tardé unos tres años en conseguir hablar esta lengua bien.
Cuando empecé primaria estudié inglés en el colegio, aunque algunos
años iba a academias. Al final de primaria ya sabía decir cosas como: “I am
Sergio” y “I am from Spain”.
Yo tengo dos primos de Bélgica. Algunos veranos voy a visitarlos y
aprendo un poco del idioma holandés. Ya sé algunas cosas como “dank u”
(gracias) y “tot ziens” (hasta luego).
En 5º de primaria empecé a estudiar el francés. Ya sé algunas cosas como
“bonjour” o “comment tu t’apelle?”.
También he entrado en contacto con el alemán porque una vez fui a
Alemania y aprendí cosas como “hallo” (hola) o “guten morgen” (buenos
días).
El único idioma de los que nombrado solo domino uno: el español, pero
hay otros en los que me puedo defender aunque no sepa toda esa lengua,
como el inglés.
Hola, soy Pablo Salceda del Cueto y tengo 12 años. Soy de 1ºB.
Mi lengua materna es el castellano.
Cuando tenía tres años mis padres me inscribieron en el colegio Eloy
Villanueva García. Es un colegio bilingüe. En la asignatura de inglés
siempre he tenido profesoras nativas. En infantil la profesora se llamaba
Patricia y en primaria Madi.
El curso pasado como viaje de fin de curso fuimos a Liverpool una semana,
que es el viaje que se suele hacer en este colegio cuando acabas primaria.
Me gustó mucho la experiencia porque pude practicar el inglés. Además
ha sido la primera vez que he ido a otro país.
El año pasado fui a una academia para reforzar el inglés. Me gustó porque
aprendíamos a base de juegos.
Este curso por primera vez estoy aprendiendo francés. De momento me
parece más fácil que el inglés.
A mí me parece importante poder aprender otras lenguas, para poder
relacionarme y conocer otras culturas.
Hola, soy Lucía. Mi lengua materna es el castellano. Mis primeras palabras fueron “mamá”,
“papá”, “Wawa” (mi hermana Laura) y “Manini”, que era como llamaba a Nemo, nadie sabe por
qué. Creo que no tengo ningún acento, pero utilizo palabras que solo se usan aquí como
“cachaba” o “pindio”. A medida que me he ido haciendo mayor he obtenido más vocabulario,
he ido aprendiendo más cosas sobre esta lengua a lo largo de primaria.
Desde los tres años, en infantil, nos iban enseñando palabras en inglés, pero muy básicas,
“HELLO, BY, BLUE, PINK”... A lo largo de primaria nos iban enseñando cosas más difíciles y
gramática más compleja, como por ejemplo los verbos irregulares. En general mis profesores
han sido bastante buenos, en primaria sobre todo. En sexto de primaria, el profesor era
bastante bueno en inglés, y lo entendía bien. Mi padre me ponía series de televisión en inglés y
así me iba acostumbrando a escuchar este idioma.
Últimamente sé más inglés debido a que escucho muchas canciones en esta lengua y acabo
aprendiéndome la letra. Creo que ahora pronuncio mejor y ha aumentado mi vocabulario.
Ahora en secundaria doy francés. Estamos empezando por lo básico: los meses, números, el
abecedario, también nos han enseñado:
COMMENT TU T´APPELLES?
QUEL ÂGE TU AS?
OÛ TU HABITES?
Así que ahora estoy practicando tres leguas.
Me crié en un entorno monolingüe. Mi lengua materna es el castellano,
por lo que la usaba tanto en mi casa como en el colegio.
La segunda lengua que empecé a aprender fue el inglés con tres años
recién cumplidos. Mi profesor siempre fue el mismo. Se llama Álex y es de
nacionalidad australiana. Este idioma siempre lo he usado en todos mis
viajes fuera de España, como a Italia, Francia, Bélgica y Portugal. También
lo usaba en el colegio desde educación infantil.
Mi tercera lengua fue el francés. Este idioma lo empecé a estudiar con
once años. Mi profesora se llama Alessandra y es de nacionalidad belga.
El francés lo usaba en viajes fuera de España como a Bélgica, Francia y un
año en el colegio Sardinero.
Por último, todos los años viajo a Bélgica para visitar a mis primos que son
bilingües de español y holandés y por eso conozco algunas palabras en
holandés.