aproximación a la noción del "do no harm". cómo evitar los efectos negativos en una...
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Este documento se realizó como parte práctica del Máster en Estudios Internacionales de la Universidad de Barcleona, durante el curso 2008-2009. Puede contener errores de contenido así como tipográficos. La intención es dar a conocer el concepto del "do no harm" o "acción sin daño" en el ámbito de la cooperación al desarrollo y a todas esas personas u organziaciones interesadas en proyectos de cooperación. Dada la sucesión de actuaciones e información existente, pueden existir ejemplos más actuales y pertinentes que se esperan poder introducir en una versión más actualizada.TRANSCRIPT
UNIVERSITAT DE BARCELONA
Departamento de Derecho y Economía Internacionales
MÁSTER EN ESTUDIOS INTERNACIONALES
Aproximación a la noción del “do no harm”
Cómo evitar los efectos negativos en una actuación de cooperación al desarrollo
MEMORIA DE MÁSTER
Autora:
Anna Renau Granados
Barcelona, Diciembre de 2009
Dirección y asesoramiento:
Inma Bayarri Gómez,
Especialista en Cooperación Internacional para el Desarrollo
Xavier Férnandez Pons,
Profesor Titular de Derecho Internacional Público en la Universitat de Barcelona
"Una persona inteligente resuelve los problemas, una sabia los evita."
Albert Einstein
Contenido
Agradecimientos ........................................................................................................................... 1
1. Introducción .......................................................................................................................... 2
I. Sobre la Ayuda a la Cooperación al Desarrollo ................................................................. 7
II. Sobre el “Do No Harm” ................................................................................................... 13
2. Definición del concepto “do no harm” ............................................................................... 16
I. Concepto ......................................................................................................................... 16
II. El “do no harm” aplicado a la Cooperación al Desarrollo ............................................... 23
3. Marco de trabajo del “do no harm” aplicado a la Cooperación al Desarrollo: elementos de
análisis ......................................................................................................................................... 30
I. Contexto ...................................................................................................................... 31
i. Dónde .............................................................................................................. 32
ii. Por qué ............................................................................................................ 49
iii. Cuándo ............................................................................................................ 55
II. Actuación y Actores..................................................................................................... 65
i. Qué .................................................................................................................. 65
ii. Cómo ............................................................................................................... 72
iii. Actores ............................................................................................................ 79
III. Evaluación ..................................................................................................... 116
4. Conclusiones ..................................................................................................................... 128
5. Bibliografía ........................................................................................................................ 134
6. Anexos ............................................................................................................................... 145
I. Abreviaturas y Siglas ................................................................................................. 145
II. Glosario de palabras clave español-inglés ................................................................ 146
III. Esquema ampliado del “Do No Harm” aplicado a la Cooperación al Desarrollo ...... 150
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1
Agradecimientos
Gracias a Inma y a Xavier, por su ayuda.
Gracias a los niños de los orfanatos de Guabuliga y Wulugu (Ghana), por hacerme ver la
realidad con otros ojos.
2
1. Introducción
New York, 9 May 2006 – UN Secretary-General's discourse to the 159th Annual Stated Meeting of the Fellow of
the New York Academy of Medicine
In my business, preventive measures are what we apply to try to avert an armed conflict, and operations have
more to do with peacekeeping troops and blue helmets than with scalpels and anaesthetic. If Hippocrates were
mentioned in the UN General Assembly, many of the ambassadors would probably assume that they were being
accused, once again, of hypocrisy. Indeed, some might say that we could do much more to comply with the first
principle of Hippocrates: “first, do no harm”.
La Cooperación al Desarrollo forma parte de las políticas de ayuda de los Estados y
constituye una actividad creciente de organizaciones públicas y privadas.1 El objetivo se
ha mantenido en la línea de tratar reducir o mitigar las desigualdades que persisten
entre los países del Norte y del Sur, países “ricos” o “pobres”, o del “centro” o
“periferia”.2 Conceptos que, como la misma ayuda, van variando a lo largo del tiempo y
se adaptan a las circunstancias y necesidades de cada época.
Así pues, no son pocas las veces que los mismos protagonistas de la ayuda se han
replanteado su papel y el de su trabajo, reflexionando y analizando sobre el porqué de
la continuidad persistente de tantas desigualdades. Pese a los esfuerzos y los recursos
dedicados parece que a veces los problemas no hayan mejorado ni un ápice. Estados,
organizaciones internacionales, organizaciones no-gubernamentales y centros de
investigación, reflexionan sobre los resultados obtenidos y analizan sus actuaciones.
Por otro lado, esta autorreflexión que experimenta el mismo sector de la cooperación
al desarrollo permite su propia evolución y adaptación a los nuevos tiempos.
1 En la década de los 60 ya aparece como uno de los temas principales de la agenda de la ONU. Véase en
el Primer Decenio de las Naciones Unidas para el Desarrollo, resolución 1710 (XVI) y 1715 (XVI) de 19 de diciembre de 1961.
2 Distintas denominaciones según autor y época. La distinción entre países del “centro” y “periferia” es
utilizada en el marco de un sistema económico capitalista y que fue empleada sobre todo por autores como Raúl Prebisch, Samir Amín o Immanuel Wallerstein. Véase por ejemplo: PREBISCH, Raúl. Capitalismo periférico: crisis y transformación. México DF: Fondo de Cultura Económica, 1981; AMIN, Samir. El desarrollo desigual. Ensayo sobre las formaciones sociales del capitalismo periférico. Barcelona: Editorial Fontanella, 1978; WALLERSTEIN, Immanuel. El Capitalismo histórico y movimientos antisistémicos: un análisis de sistemas-mundo. Madrid: Akal, cop. 2004.
3
Primeramente, cabe puntualizar la diferenciación entre cooperación internacional al
desarrollo, construcción de paz y ayuda humanitaria.3 Pese a los matices que hay
entre unos y otros, y la multiplicidad de opiniones y criterios al respecto de cada
concepto, en los tres casos el objetivo final es que se restablezca la paz o el equilibrio
(social, político, económico…) necesario para que la zona o grupo poblacional en
cuestión recupere su autonomía y, en el caso de la cooperación al desarrollo y
construcción de paz, que no dependa de las ayudas externas. Si bien no se entrará en
detalle de estos tres ámbitos, sólo puntualizar que es el motivo de actuación, con
objetivos a largo plazo y preventivos, o según las necesidades del momento,
respectivamente, lo que distingue principalmente una actividad de otra. Por ejemplo,
el envío masivo de alimentos y materiales de construcción para rehabilitar una zona
devastada por fuertes inundaciones sería objeto de una acción de ayuda humanitaria.
En cambio, capacitar la población para aprovechar mejor el cultivo de su tierra y para
utilizar adecuadamente los materiales de que disponen, sería una actuación de
cooperación al desarrollo.
En el presente trabajo, la línea a seguir se centra en la cooperación al desarrollo. A
continuación, se presenta una aproximación al concepto del “do no harm” o “no
dañar”, del que se expondrán sus bases y su aplicación en este ámbito. El interés y la
motivación por el estudio de este concepto surgen ante la perspectiva de un cambio de
conciencia y de actitudes, por parte de las distintas esferas participantes en la
cooperación al desarrollo, como se expone más adelante; además del panorama
mundial que, pese a los esfuerzos, persiste en una dinámica de desigualdades.
Aplicando la noción del “do no harm” a la cooperación al desarrollo se pretende
obtener una perspectiva distinta para la implementación de cualquier intervención de
ayuda. Se trata de alinear todo el plan de trabajo con el objetivo de garantizar el
3 Para una ampliación de los conceptos, véase PÉREZ DE ARMIÑO, Karlos (dir.), ABRISKETA, Joana (et al.).
Diccionario de acción humanitaria y cooperación al desarrollo. Barcelona: Icaria; Bilbao: Hegoa, 2002; GÓMEZ GALÁN, Manuel; SANAHUJA, José Antonio. El sistema internacional de Cooperación al desarrollo. Una aproximación a sus actores e instrumentos. Madrid: CIDEAL, 1999; TORROJA M., Helena. La Asistencia humanitaria en la Organización de las Naciones Unidas: fundamentos y perspectivas actuales. Barcelona: Atelier, 2004.
4
impacto positivo deseado y destinado a una población receptora en concreto,
mediante un proceso que identifique los elementos o actividades nocivas que puedan
perjudicar la actuación, y de este modo poder evitarlos. La finalidad máxima de la
aplicación del “do no harm” es evitar los efectos negativos que puede haber en una
actuación de cooperación al desarrollo, y por tanto “no dañar”. Asimismo, la
implicación de los receptores como actores directos en la actuación pretende
involucrar a la población hasta el punto que, más adelante, sean ellos mismos los
agentes impulsores de futuras actuaciones, promoviendo así un autodesarrollo de su
propio entorno y situación.
Por otro lado, tras las actuaciones realizadas y los logros adquiridos, es posible poco a
poco restablecer o asentar un equilibrio entre los distintos sectores que conforman la
población receptora (economía, política, sociedad, medio ambiente…) y sus relaciones
con otras sociedades o países, lo que implica, si bien no a primera vista, sí una
construcción de paz a largo plazo. Así, las barreras físicas o de carácter cultural,
religioso o político que pudieran existir, podrían desvanecerse mediante la voluntad o
el trabajo conjunto de una población que construye la sostenibilidad de su propio
desarrollo.
Surge aquí, un modelo de cooperación y una metodología propia, el “do no harm”, que
tiene en consideración muchos más factores de los que se suelen plantear hasta el
momento, a la hora de realizar cualquier actuación en el marco de la cooperación al
desarrollo. Se trata de una cooperación que tiene una visión global del problema,
abraza todas las partes implicadas y se preocupa de forma preventiva por las
consecuencias negativas que pueda ocasionar, además de proyectar sus resultados a
largo plazo.
5
Metodología
Para poder contextualizar la noción del “do no harm” en un ámbito de trabajo, se
partirá de la base que los lectores tienen conocimiento de las actividades que se
efectúan en el marco de la cooperación al desarrollo, y por tanto, seguirá una línea de
trabajo parecida a un ciclo de proyecto, que por otro lado, también tiene la intención
de poder aplicarse a un programa, plan o estrategia.4 No se pretende realizar un
trabajo teórico ni especulativo, aunque contenga ciertas referencias teóricas y algunas
hipótesis, sino que trata de ser una aproximación a este concepto relativamente nuevo
y poco desarrollado en la cooperación al desarrollo. Asimismo, se ofrece una
introducción a lo que puede ser una nueva práctica dentro de la cooperación
internacional al desarrollo, dando un enfoque descriptivo pero a la vez crítico, con
referencias jurídicas y académicas.
Se presenta una visión distinta para implementar y diseñar posibles actuaciones de
cooperación al desarrollo, y su finalidad es exponer a modo de guía o manual todos
estos conocimientos, basándose en la experiencia de distintos agentes de la
cooperación al desarrollo. Las ideas que se exponen no son exclusivas ni definitivas,
sino que componen un primer paso introductorio, el cual es perfectamente variable y
está abierto a ampliaciones y mejoras, puesto que la práctica de este mismo sistema
permite su evolución y ofrece otros posibles caminos a seguir.
Dado que se trata de un elemento poco estudiado todavía en el ámbito de la
cooperación al desarrollo, existen pocas fuentes documentales sobre este tema. Las
escasas publicaciones dedicadas en exclusiva a esta materia son principalmente en
inglés, y algunas también en francés. La mayoría de las fuentes provienen de revistas,
boletines y publicaciones electrónicas diversas, por la facilidad y rapidez de
accesibilidad a la documentación. Por otra parte, el contenido de este trabajo se basa
4 Véase UE. Bases metodológicas – objeto de la evaluación (¿qué?). Las evaluaciones de proyecto, de
programa, de estrategia. EuropeAid – Cooperation Office. Disponible en la página oficial de los Programas de Cooperación Exterior de la Comisión Europea, <http://ec.europa.eu/europeaid/index_es.htm>, consultado en octubre 2009.
6
en recursos tan variados como la propia experiencia en el terreno,5 informes de las
Naciones Unidas y otras organizaciones internacionales, documentos de ONGs y
diversas entidades públicas o privadas, así como autores destacados en el tema de
cooperación al desarrollo.
En este apartado 1 introductorio, se contextualiza la noción del “do no harm” en el
marco de la cooperación al desarrollo, tomando como referencia distintas fuentes
relacionadas con la cooperación internacional al desarrollo.
En el apartado 2, se trata de precisar el concepto del “do no harm” con distintas
aplicaciones y se hace una primera aproximación en el ámbito de la cooperación al
desarrollo.
En el apartado 3, se analizarán por separado todos los elementos a tener en cuenta en
el marco de trabajo del “do no harm” aplicado a la cooperación al desarrollo, con
explicaciones y ejemplos basados en actuaciones ya realizadas o en fase de
implementación.
Posteriormente, en el apartado 4, se exponen las conclusiones extraídas tras el análisis
de todos los factores que intervienen en el marco lógico del “do no harm” y del papel
de la cooperación al desarrollo en la actualidad.
En definitiva, se presenta una aproximación a una nueva manera de enfocar la
cooperación al desarrollo, así como una manera distinta de entender las necesidades o
las situaciones conflictivas de ciertas áreas del mundo, a la vez que permite reflexionar
sobre el trabajo que se está haciendo y que se puede hacer en adelante.
5 Como cooperante en el norte de Ghana durante dos meses (julio-agosto 2009), colaborando en dos
orfanatos y en la gestión con la ONG Braveaurora (Austria) (www.braveaurora.com).
7
I. Sobre la Ayuda a la Cooperación al Desarrollo
Es difícil que la ayuda sea eficaz si los donantes no se coordinan, debilitan las instituciones locales con centenares de proyectos aislados, utilizan la ayuda como instrumento de política exterior orientado a
lograr ventajas políticas, estratégicas, comerciales o de otra índole, y en sus políticas no se aplica el principio de coherencia, pues de poco sirve dar ayuda […]
José Antonio Sanahuja, (2008).
Tras la preocupación y el impulso que las Naciones Unidas han dedicado a la
cooperación al desarrollo desde los años 60,6 la “Declaración del Milenio”7 que se
adopta en el año 2000 marca una nueva etapa de conciencia global sobre las
desigualdades mundiales y el desarrollo. Los “Objetivos de Desarrollo del Milenio”
(ODM) para luchar contra la pobreza son los grandes compromisos políticos que se
alcanzan a raíz de una gran movilización y acción política a escala global. En definitiva,
una muestra evidente de la voluntad mundial por actuar: estados, organizaciones
internacionales, ONG y movimientos sociales entre otros, participan abiertamente en
el debate sobre cuestiones de desarrollo social.8
Cabe destacar el 8º Objetivo de Desarrollo del Milenio que toma como principio
“fomentar una alianza mundial para el desarrollo”, en el que se hace un llamamiento a
la coherencia política de todos los estados y a una coordinación de los donantes, lo
cual lleva un mensaje implícito acerca de mejorar la eficacia y la eficiencia de la ayuda.
Dos de los cinco criterios de evaluación que el Comité de Ayuda al Desarrollo (CAD)
tiene en consideración para analizar los programas de cooperación al desarrollo.9
6 Primer Decenio de las Naciones Unidas para el Desarrollo, Resolución 1710 (XVI).
7 Resolución de la Asamblea General de las NNUU A/RES/55/2, adoptada el 8 de septiembre de 2000.
8 SANAHUJA, José Antonio. “¿Más y mejor ayuda?: la Declaración de París y las tendencias en la
cooperación al desarrollo”. En: Paz y conflictos en el siglo XXI: tendencias globales. Anuario 2007-2008. Espanya: Ceipaz, Icaria Editorial, Fundación Cultura de Paz, pp.71-101.
9 OECD - DAC. Evaluating Development Co-operation. Summary of Key Norms and Standards. Paris:
Network on Development Evaluation, 2008.
8
También se debate sobre la calidad y la cantidad de la ayuda, que no siempre son
complementarias pero sí condicionan los resultados. Es a raíz de una mala gestión o
planificación, de actividades o recursos, que las actuaciones pueden no resultar como
se esperaba o las consecuencias pueden ser más bien negativas dado que han causado
algún perjuicio.
Un ejemplo de todo ello sería cuando los países donantes destinan importantes
cantidades de dinero o recursos, pero su gestión o la implementación de la actuación
son inadecuadas. En cambio, también sucede que pequeñas organizaciones de pocos
recursos, y objetivos menos ambiciosos, han logrado resultados destacables, es decir,
unos resultados positivos en cuanto a eficiencia y calidad.
Otro aspecto relevante del impulso del “do no harm” se basa en asegurar la
gobernanza del país receptor. Por ejemplo, la organización Ingeniería Sin Fronteras de
Cataluña10 ha conseguido implementar procesos de desarrollo a largo plazo, con
actuaciones que aseguran la sostenibilidad mediante el fortalecimiento de las
instituciones y la coordinación entre los diferentes actores. Sobre este tema también se
debatió en la Conferencia sobre Financiación al Desarrollo en Monterrey (México) el
2002,11 donde se estableció el objetivo de lograr acuerdos concretos respecto a la
movilización de los recursos necesarios para el cumplimiento de los ODM. Se
establecieron además, compromisos sobre la calidad de la ayuda y la cantidad, pese a
ser viejas promesas como asegurar el 0’7% del Producto Interior Bruto (PIB) de los
10 PULGAR, Marta (coord.). Memòria de l’Associació Catalana d’Eginyeria sense Fronteres 2008.
Barcelona 2009. Los programas de cooperación al desarrollo que diseñan incluyen un análisis y planificación previa que engloba las necesidades de la zona. Se aborda la problemática con todos sus actores: comunidades, administraciones públicas, ONG, universidades, etc., con la intención de integrarlos en una misma dirección. Este programa de planificación es complementario, en este sentido, al de desarrollo de infraestructuras. Disponible en:<http://catalunya.isf.es>, consultado en octubre 2009.
11 Resoluciones de la Asamblea General de las NNUU 56/210 B, de 9 de julio de 2002; 57/250, de 20 de
diciembre de 2002; 57/270 B, de 23 de junio de 2003; 57/272 y 57/273, de 20 de diciembre de 2002; 58/230, de 23 de diciembre de 2003; 59/225, de 22 de diciembre de 2004, y 60/188, de 22 de diciembre de 2005.
9
países donantes,12 para la ayuda al desarrollo. Así pues, los estados se plantean
mejorar la eficacia de la asistencia modificando la distribución y el uso eficaz de los
recursos.
Tales compromisos se reiteraron nuevamente en la Conferencia de Doha de 200813
sobre el seguimiento del Consenso de Monterrey, y que además, siendo conscientes de
las debilidades del sistema internacional actual, agravadas por crisis económicas y
alimentarias principalmente, los países firmantes reiteraron “la importancia de la
libertad, la paz y la seguridad, el respeto de todos los derechos humanos, incluido el
derecho al desarrollo, el estado de derecho, la igualdad entre los géneros y el
compromiso general de lograr sociedades justas y democráticas en pro del desarrollo”,
e insistieron en la responsabilidad de las políticas nacionales, los recursos internos y las
estrategias de desarrollo propias de cada país para alcanzar el equilibrio internacional
deseado.
Sin embargo, es evidente que la meta del 2015 que se propusieron los estados con los
ODM, para lograr sus fines de “erradicar la pobreza mundial” (en porcentajes), se
encuentran lo suficientemente lejos como para afirmar que no se están cumpliendo las
expectativas. El siguiente gráfico muestra la cantidad de ayuda oficial al desarrollo
(AOD) destinada hasta el 2007, experimentando unos leves aumentos en 2005 y 2007.
A pesar de ello, la ayuda destinada todavía no alcanza la meta fijada por las Naciones
Unidas del 0’7%. En el 2008, por ejemplo, los únicos países que llegaron a esta cifra o
incluso la superaron fueron Dinamarca, Luxemburgo, Noruega, los Países Bajos y
Suecia.14
12 Establecido en la Resolución de la Asamblea General 2626(XXV) del 24 de octubre de 1970 que adopta
la “Estrategia Internacional del Desarrollo para el Segundo Decenio de las Naciones Unidas para el Desarrollo”.
13 Resolución de la Asamblea General de las NNUU A/RES/63/239 de 19 de marzo de 2009.
14 Informe sobre los Objetivos de Desarrollo del Milenio 2009, publicado por el Departamento de
Asuntos Económicos y Sociales de las Naciones Unidas (DESA), Julio del 2009.
10
La eficacia de la ayuda se continúa cuestionando y ya en 2005 los estados donantes y
los países socios acuerdan, en la Declaración de París sobre la Eficacia de la Ayuda al
Desarrollo,15 un objetivo común para establecer una colaboración más fuerte y
capacitar a los países receptores para que consigan sus propias metas de desarrollo. Se
acuerda darles más protagonismo y responsabilidad para definir sus necesidades y
prioridades de desarrollo, es decir, fomentar el “autodesarrollo”; proponen que la
ayuda que se destina cumpla con esas necesidades y que se proceda de la manera más
coordinada posible entre los países donantes. Esto implica que todos los estados deben
adoptar nuevos comportamientos y prácticas. Actualmente, las metas que la
Declaración proponía para el 2010 parece que están todavía por alcanzar. Un informe16
sobre el desarrollo elaborado por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo
Económico (OCDE), ilustra como esos objetivos distan aún de su cumplimiento. El
estudio expone que se está progresando, que algunos países o regiones han
experimentado cambios sustanciales, pero ello no es suficiente. Mediante unos
15 Declaración de París sobre la Eficacia de la Ayuda al Desarrollo, Foro de Alto Nivel, París 28 de Febrero-
2 de Marzo, disponible en <http://www.oecd.org/dataoecd/53/56/34580968.pdf>, consultado en septiembre 2009.
16 MIZRAHI, Simon (dir.). Survey on Monitoring the Paris Declaration: Making Aid more effective by 2010.
OCDE, 2008. Y, OCDE. Development Cooperation Report. 2009.
Figura 1: Asistencia oficial para el desarrollo (AOD) proporcionada por países desarrollados, 2000-2007 (en miles de millones de dólares estadounidenses constantes del 2006). Fuente: Development Cooperation Report OCDE-DAC, disponible en <www.sourceoecd.org/developmentreport>, consultado en septiembre 2009.
11
indicadores (columna de la izquierda) se evalúa el nivel de alcance de las metas
previstas en la Declaración. Estos progresos demuestran que el compromiso de todas
las partes involucradas y el esfuerzo común permiten avanzar; de este modo, tanto los
gobiernos, la sociedad civil, el sector privado y otros colectivos, también son partícipes
en la totalidad del proceso.
Las mismas partes implicadas son conscientes de sus propósitos y limitaciones, y ellas
mismas reconocieron en el 3er Fórum de Alto de Nivel sobre la Eficacia de la Ayuda en
Accra (Ghana, 2-4 septiembre 2008)17 que no habían progresado lo suficiente, y que si
no adoptaban más medidas y actuaban con rapidez, sería imposible alcanzar los
objetivos fijados para el 2010.18 Del Fórum resultó un programa de acción en el que los
estados participantes reflexionan una vez más sobre la relación entre países donantes y
17 Disponible en <http://www.oecd.org/dataoecd/58/16/41202012.pdf>. También en alemán, portugués
y español.
18 Dichos objetivos se basan en los cinco principios marcados en la Declaración de París (2005):
apropiación (ownership), alineamiento (alignement), armonización (harmonization), gestión de resultados (managing of results) y mutua responsabilidad (mutual accountability). Ver SANAHUJA y MIZRAHI, Op.Cit.
Figura 2: How far are we from meeting the targets? (33 countries) Fuente: MIZRAHI, Simon, Op.Cit.
12
receptores, y se aboga por potenciar los recursos y sistemas propios de los países
socios.
En definitiva, es patente la preocupación y el interés por lograr unos objetivos
ambiciosos, así como la autocrítica y los cambios que está experimentando la
cooperación al desarrollo. Aprendiendo de sus errores o debilidades, los agentes
cooperantes siguen probando nuevos caminos y descubren otras vías de actuación que
ofrecen unos resultados más favorables en consonancia con la idea de mejorar sus
resultados y “no causar más daño”.
13
II. Sobre el “Do No Harm”
“Para que la globalización sea positiva, ha de serlo para pobres y ricos por igual. Tiene que aportar el mismo
grado de derechos que de riquezas. Tiene que suministrar el mismo grado de justicia y equidad social que de
prosperidad económica y de buenas comunicaciones.”
Kofi Annan
Tras situar de manera orientativa, y sin entrar en un análisis más profundo, la evolución
y los problemas a los que se enfrenta la cooperación al desarrollo para efectuar su
labor, es visible que tanto las grandes organizaciones internacionales, como las mismas
Naciones Unidas, o las pequeñas ONG de distintos países, se preocupan por los
resultados de su trabajo y hacen pública su inquietud.
Resulta de gran interés y relevancia el dar a conocer la autocrítica y evaluación que se
hace de la cooperación al desarrollo desde distintos ámbitos, aunque los resultados no
siempre derivan únicamente de la labor hecha, sino de muchos otros factores externos
que no dependen de ella. Una fuerte variación en los precios de los alimentos o del
carburante, desastres naturales, conflictos políticos internos, efectos inesperados por
corrupción, etc., serían situaciones imprevisibles que ni los agentes desplazados en el
terreno pueden prever. Por otro lado, tanto técnicos de cooperación como sociedad
civil en general, en ocasiones pueden cuestionarse acerca del destino definitivo de los
recursos o sobre el abandono o descuido de algunos proyectos.
Así pues, tomando como referencia el papel desempeñado por la cooperación al
desarrollo y los resultados obtenidos a lo largo de los años, se introduce aquí una
“En un pueblo rural de Kenia, Sauri, la población disponía de una pequeña clínica. Los
aldeanos no podían pagar al médico ni comprar medicamentos, de modo que esté se fue
del pueblo. En el momento que el doctor se marchó, la clínica permaneció cerrada. A partir
de entonces la gente sigue adelante sin atención sanitaria ni medicinas. Cuando la malaria
se agrava y sus hijos sufren taquicardias producidas por anemia, (…) se apresuran a llevarlos
al hospital del distrito, que se encuentra en la cercana Yala.”
Fuente: SACHS, Jeffrey. El fin de la pobreza: cómo conseguirlo en nuestro tiempo. Barcelona: Debate,
2005, p.327.
14
nueva noción de cooperación. Con la lección aprendida de las buenas y malas prácticas
de experiencias anteriores, está surgiendo una ideología19 y una nueva metodología
basadas en la noción del “do no harm” o “no hacer daño”. El personal de algunas
organizaciones internacionales y locales ven cómo modificando su plan de trabajo y la
estructuración de sus intervenciones, los resultados pueden ser más satisfactorios para
todos los agentes involucrados (donantes y receptores), y lo más destacable es que
ofrece sostenibilidad al proyecto diseñado mediante el protagonismo, como actores
directos de la acción, de los mismos beneficiarios.
La intención de este trabajo es presentar la noción del “do no harm” y su metodología.
Este concepto se basa, como las palabras mismas indican, en el fundamento de “no
dañar”, es decir, actuar sin ocasionar efectos negativos, o contraproducentes, ni
perjudicar. Basándose en la experiencia de profesionales en cooperación al desarrollo,
se tiene una visión más abierta y global del problema o necesidad a tratar, y se
estructura un plan de trabajo que analiza diversas piezas que lo conforman. La idea del
“do no harm” intenta, sobre todo, promover las capacidades locales20 de los
beneficiarios que, a su vez, se convierten en los mismos actores de la actuación. El
objetivo, ayudar a realizar y promover un desarrollo autónomo de los mismos
beneficiarios, mediante la identificación y prevención de posibles efectos negativos de
las actuaciones. Probablemente se trate de una “nueva” cooperación con unos ideales
bastante claros, una “cooperación sostenible” promovida por sus receptores.
19 Ideología en tanto que conjunto de ideas fundamentales de un grupo o colectivo. RAE, Real Academia
Española.
20 En la nueva perspectiva de la ayuda internacional, el desarrollo de las capacidades locales es
fundamental para determinar una política de desarrollo con fecha de caducidad. El propósito es estimular a los países para alcanzar las condiciones necesarias para poner en marcha un proceso de desarrollo humano sostenible que haga innecesaria la ayuda y aumente la autonomía del receptor. ALONSO, J.A. “Componentes de una nueva agenda en la política de cooperación al desarrollo”. En: COSTAS C., A.; CAIRÓ C., G. (coords.). Cooperación y desarrollo. Hacia una agenda comprehensiva para el desarrollo. Madrid: Ediciones Pirámide, 2003, pp.125-162.
15
Por otra parte, esta cooperación también tiene implícitos los conceptos de calidad y
eficiencia. Considerando la evolución de la misma ayuda, si las dificultades
permanecen o los cambios son poco notables, entonces, surge la duda de cómo ha
repercutido la ayuda destinada hasta el momento y cuáles han sido sus efectos.
Asimismo, es cuestionable si realmente se soluciona el problema, si la población
receptora se beneficia por igual, cuáles son los resultados globales y visibles de las
actuaciones, y sobre todo, si se ayuda realmente o se origina alguna consecuencia
negativa o algún daño. A través de estas cuestiones se valorará el impacto de la ayuda,
una ayuda que por ahora se focaliza en el cumplimiento de unos objetivos concretos y
no se detiene lo suficiente a evaluar todos sus efectos.
“El Desarrollo Humano (…) comprende la creación de un entorno en el que las personas
puedan desarrollar su máximo potencial y llevar adelante una vida productiva y creativa de
acuerdo con sus necesidades e intereses. Las personas son la verdadera riqueza de las
naciones. Por lo tanto, el desarrollo implica ampliar las oportunidades para que cada
persona pueda vivir una vida que valore. El desarrollo es entonces mucho más que el
crecimiento económico, que constituye sólo un medio —si bien muy importante— para que
cada persona tenga más oportunidades.”
Fuente: El Concepto de Desarrollo Humano, Informes sobre Desarrollo Humano del Fondo de las
Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
16
2. Definición del concepto “do no harm”
I. Concepto
“Silvia Neyala Zinga of Huambo, is not a fortunate person. Her mother, Deofina Chinima, can no longer walk since a
mortal shell destroyed her left foot during the Angolan civil war. Her father died fighting in late 1992, after Savimvi
again took up arms after losing the election. Her eldest brother, Alberto, has been missing ever since the siege of
Huambo by UNITA rebels beginning on January 8, 1993. The only food the family had for long periods was cornmeal
donated by the Red Cross. Silvia is two years old.
The best rule of all for Western helpers is, first, do no harm.”
William Easterly, The White Man’s Burden
Si bien en los inicios de la noción del “do no harm” o “no dañar”, en la década de los
90, se aplicaba principalmente a situaciones de mantenimiento de paz y a la ayuda
humanitaria, también lo podemos encontrar en otros contextos, como en medicina o
como en este caso en la cooperación al desarrollo.
Un ejemplo de los efectos negativos ocasionados por la asistencia humanitaria a nivel internacional es el caso de los campamentos de refugiados en Zaire tras el genocidio de Ruanda.
Los refugiados eran una mezcla de “auténticos” refugiados, ruandeses que fueron obligados literalmente a huir, y gente que escapaba de venganzas o persecuciones por los crímenes cometidos durante el genocidio. A estos últimos se les tendría que haber excluido del estatus de refugiado siguiendo las convenciones internacionales, lo que no se cumplió y todavía hoy sigue siendo motivo de discusión. Debido a la ausencia de mecanismos (legales) para expulsar a los sospechosos de crímenes de guerra, éstos permanecieron en los campamentos y se beneficiaron de los derechos internacionales otorgados a los refugiados. Así pues, “la logística militar ayudó a establecer un santuario humanitario en el que los criminales de guerra y el ejercito recibieron protección, alimentos, y legitimidad, y continuaron con el control de la población que ellos mismos habían conducido hasta Zaire por este motivo.”
Las fuerzas militares extranjeras que se habían paralizado durante la crisis política, entonces, de repente se movilizaron por el desastre “humanitario”, transformando el genocidio en una “emergencia compleja” en que no había un lado bueno o un lado malo, sino sólo víctimas.
“Para las agencias de cooperación, actuar en los campos de refugiados ruandeses implicaba difíciles compensaciones al enfrentarse a un dilema de principios morales. La mayoría de agencias decidieron permanecer para hacerse cargo de las necesidades inmediatas de la población ante el posible gasto de las futuras escaseces. Otros decidieron que si no podían conseguir lo que era justo, al menos no deberían participar en lo que claramente era injusto. Sopesando los pros y contras de cada posición es un ejercicio complicado, en concreto cuando los acontecimientos futuros no se pueden predecir. (…) La crisis de Ruanda suscita cuestiones sobre respetar el imperativo humanitario ante cualquier otro.”
Fuente: TERRY Fiona. Condemned to Repeat?: the paradox of humanitarian action. Estados Unidos: Cornell University Press, 2002. pp.155-215.
17
Así, encontramos distintos enfoques por parte de diversos agentes, y que de algún
modo se pueden aplicar al contexto que nos concierne.
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) introdujo el enfoque del “do no harm”
en las situaciones de conflictos armados abogando por la prevención de tales
situaciones antes de pasar a una acción armada. En la metodología que emplea, se
empiezan a analizar las causas y los causantes de los conflictos y se reflexiona sobre los
factores de la ayuda que agravan o apaciguan el problema. Asimismo, se intenta crear
una conciencia sobre las actuaciones y esto permite una autorreflexión y
sensibilización del personal, para actuar posteriormente con responsabilidad y reducir
cualquier consecuencia negativa. La experiencia sobre el terreno y los resultados
visibles permiten una gran fuente de conocimiento para configurar la planificación, el
seguimiento y la evaluación de futuras actuaciones. A la hora de diseñar nuevos planes
de actuación, los expertos en prevención de conflictos consideran que el hecho de
fijarse unas expectativas claras y mínimas ayuda a asentar una base segura para la
consolidación y el mantenimiento de la paz.21 Además, en algunos programas como en
los que se elaboran desde el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo
(PNUD), se intenta difundir la idea del “do no harm” a nivel internacional como modelo
a seguir por la comunidad internacional en las situaciones de post-conflicto. Abogan
por promover actividades que reduzcan el riesgo de que resurja el conflicto y estimule
una actividad económica positiva, además de atribuir a los actores locales el
protagonismo del restablecimiento de la situación.22
El Comité de Asistencia para el Desarrollo (CAD) de la OCDE también toma conciencia
de los daños que pueden ocasionar las actuaciones en misiones de prevención de
conflictos o de mantenimiento de la paz. Uno de sus principios de actuación en el
21 Véase por ejemplo: VAN TONGEREN, Paul. The Role of Civil Society in the Prevention of Armed Conflict
- An integrated program of research, discussion and network building. European Center for Conflict Prevention y UNDESA (Departamento de Economía y Asuntos Sociales de las Naciones Unidas), Noviembre 2004.
22 PNUD. Post-Conflict Economic Recovery: Enabling Local Ingenuity. Bureau for Crisis Prevention and
Recovery (BCPR), octubre 2008; PNUD. Peacebuilding in North Kivu, Democratic Republic of the Congo. Bureau for Crisis Crisis Prevention and Recovery (BCPR). [en línea] Disponible en <http://www.undp.org>, consultado en septiembre 2009.
18
marco de situaciones bélicas o post-bélicas es que la ayuda que se proporciona evite
los efectos negativos, y dentro de lo posible, contribuya positivamente a su prevención
y a la consolidación de la paz. Entre sus publicaciones, los manuales para profesionales
y los planes de trabajo ya incluyen alusiones del “do no harm” o efectos negativos de la
asistencia en los conflictos. En este caso se contempla el “do no harm” como una
herramienta que prevé las posibles dificultades y los daños inesperados que pueden
surgir a lo largo de las actuaciones.23
Por otra parte, además, el CAD establece unos criterios de evaluación24 para analizar y
determinar que las actuaciones de cooperación cumplen con unos mínimos de realidad
y coherencia a la hora de su implementación. Toda intervención destinada a la
cooperación al desarrollo debería adquirir esos criterios para ofrecer unos buenos
resultados. Se referirá a dichos criterios a lo largo del trabajo.
Algunos estados también han empezado a aplicar este principio en sus políticas de
cooperación internacional al desarrollo o ayuda humanitaria, como es el caso de
Alemania, Suiza, Suecia o Canadá.25 En el caso de Alemania por ejemplo, ya se
contempla la práctica del “do no harm” como una línea de trabajo a seguir a la hora de
diseñar proyectos o programas que tengan que desarrollarse en situaciones de
beligerancia o en crisis. Esto permitirá que las consecuencias inesperadas en la
cooperación al desarrollo, en especial las que empeoren los conflictos, se puedan
23 OCDE. Guidance on Evaluating conflict prevention and peace building activities. Development
Assistance Committee, 2008.
24 Criterios de evaluación: pertinencia, eficacia, eficiencia, sostenibilidad, impacto, coherencia,
complementariedad, valor añadido o agregado. Véase en: OCDE - DAC. Evaluating Development Co-operation. Summary of Key Norms and Standards. Paris: Network on Development Evaluation, 2008; página web official de la OCDE < http://www.oecd.org>; Bases metodológicas. Proceso de evaluación. EuropeAid Cooperation Office, Comisión Europea. Disponible en <http://ec.europa.eu/europeaid>, consultado en octubre 2009.
25 Véase en las políticas de Cooperación al Desarrollo de cada país: Federal Ministry for Economic and
Development (Alemania), disponible en <http://www.bmz.de/en/index.html>; Swiss Agency for Development and Cooperation SDC y SwissPeace (Suiza), disponible en <http://www.sdc.admin.ch/> y <http://www.swisspeace.ch/>; Swedish International Development Cooperation Agency (SIDA) (Suecia), disponible en http://www.sida.se/English/; Canadian International Development Agency y Canadian Co-operative Association (Canadá), disponible en <http://www.acdi-cida.gc.ca/home> y <http://www.coopscanada.coop/>, consultados en octubre 2009.
19
identificar, evitar o atenuar.26 En definitiva, las políticas de desarrollo que toman el “do
no harm” como herramienta de trabajo se centran en su gran mayoría en las zonas de
conflictos y su principal objetivo, a la par que finalizar o apaciguar el enfrentamiento,
es intentar no aumentar las tensiones entre las partes combatientes o en tensión.27
Otro aspecto a considerar, es la insistencia sobre la calidad de la ayuda que se ofrece.
Autores de referencia como Rafael Grasa28, instan a los estados a seguir una triple
dirección en sus políticas de cooperación al desarrollo:
“Fomentar el desarrollo más que la cooperación por sí misma; preguntarse siempre
para qué, para quién y con qué estándares debe planificarse, decidirse y realizarse
estrategias y políticas de cooperación; y buscar la máxima integración del sistema de
ayuda y cooperación al desarrollo. En suma (…) se podría decir que a la hora de
planificar, decidir y actuar, la política de cooperación al desarrollo debe tener como
guía seis “C” (capacidades, coherencia, coordinación, complementariedad,
condicionalidad, corresponsabilidad).”
Nociones que, como se ha dicho, remiten a algunos de los objetivos presentados en la
Declaración de París y que en determinados casos son fuente de crítica como en el caso
de la condicionalidad ejercida en algunos países.29
26 Federal Ministry for Economic Cooperation and Development of Germany [http://www.bmz.de/en/] y
Canadian International Development Agency [http://www.acdi-cida.gc.ca/index-e.htm].
27 SIDA. Promoting Peace and Security - Through Development Cooperation. Suecia: SIDA (Swedish
International Development Cooperation Agency), Ed. Edita, 2006. Disponible en: <http://www.sida.se/>, consultado en mayo de 2009.
28 GRASA HERNÁNDEZ, Rafael. “Instituciones para una cooperación al desarrollo de calidad: aclaraciones
y propuestas iniciales”. [en línea]. En: Revista CIDOB d’Afers Internacionals. N. 72 (2005), pp.85-95. Disponible en: <http://www.berghof-handbook.net>, consultado en mayo 2009.
29 Algunos artículos críticos de la condicionalidad: MOLINA, Nuria. “Europa cuestiona la condicionalidad de las IFIs: ¿De quién son los resultados?”, y “La alta condicionalidad del FMI baja la eficacia” (noticia). En: Boletín Bretton Woods, N. 60, marzo-abril 2008 y N59, enero-febrero 2008, disponible en <http://www.brettonwoodsproject.org>, consultado en octubre 2009; PRADO, Juan Pablo Lallande. La condicionalidad política de la Cooperación al desarrollo. Sanciones a la ayuda internacional. Tesis Doctoral de la Universidad Complutense de Madrid, mayo 2005. Disponible en <http://eprints.ucm.es/tesis/cps/ucm-t28973.pdf>, consultado en octubre 2009.
20
Por parte de las organizaciones no gubernamentales (ONG) que aplican la visión del
“do no harm” en sus metodologías, de actuaciones en conflictos bélicos o post-bélicos,
intentan alcanzar los objetivos propuestos al mismo tiempo que respetan la coherencia
de sus actuaciones. La Cruz Roja Española, por ejemplo, en consonancia con los
fundamentos del Movimiento Internacional de la Cruz Roja y la Media Luna Roja
“adopta una serie de enfoques de intervención a través de los cuales pretende
garantizar la legitimidad, sostenibilidad y viabilidad de las acciones, obtener mayor
impacto y aumentar la capacidad de transformación de la realidad social.”30
Por otro lado, cabe destacar la organización Collaborative for Development Action -
Collaborative Learning Projects, con sede en Norteamérica, y que ha sido la primera en
difundir estudios y proyectos que explican y ponen en práctica la metodología de no
causar daño en los proyectos de ayuda humanitaria y cooperación al desarrollo. Son los
responsables de difundir el concepto del “do no harm” como instrumento de análisis
del impacto de la paz en el conflicto. Sus orígenes se remiten a los años 90 cuando un
grupo de ONG’s internacionales y locales trabajaron conjuntamente para analizar el
impacto de la ayuda en un escenario de conflicto. Para establecer una actuación tanto
de ayuda humanitaria como de cooperación al desarrollo, hay que tener en cuenta una
serie de elementos que intervienen en el marco del conflicto31, directa o
indirectamente, y que pueden servir como actores o instrumentos a la hora de diseñar
y planificar toda intervención. Son lo que ellos denominaron en su momento las
“capacidades locales para la paz” (Local Capacities for Peace), y entre los que
distinguen los “conectores” y los “divisores”, a los cuales se referirá más adelante.32
Es decir, elementos que conforman el contexto del conflicto los cuales pueden facilitar
o no el desarrollo de la actuación, como podría ser la propia población, la religión o
30 CRUZ ROJA ESPAÑOLA. Plan de Cooperación Internacional de Cruz Roja Española, Madrid, 2008.
31 Entendiendo como conflicto en el contexto de la cooperación al desarrollo a aquellas situaciones de
desigualdad o tensión de cualquier característica que afecta a la población meta, sin que comporte explícitamente una relación bélica.
32 ANDERSON, Mary B (dir.). Do no harm: How aid can support peace – or war. Estados Unidos: Ed. Lynne
Rienner, 1999.
21
cultura, el mercado y la economía, o la actividad social o laboral, por citar algunos
ejemplos. Mediante la colaboración y coordinación de múltiples organismos es posible
detectar muchos de los factores que influyen en el desarrollo final de las actuaciones y
tener así conocimiento de cuáles son los elementos que perjudican o mejoran la
relación entre paz y conflicto. Las experiencias en los distintos países y situaciones son
de gran ayuda y sirven de guía para diseñar y elaborar futuros proyectos, ya que
proporcionan un gran catálogo de buenas y malas prácticas a tener en cuenta.
En el ámbito académico y de investigación o los llamados think tanks,33 la noción del
“do no harm” no aparece generalmente como un área específica de estudio sino que se
encuentra implícita en los distintos sectores donde se trabaja. Surgen nuevos estudios
y prácticas para que, a través de la participación ciudadana, la equidad de género, el
medio ambiente o la gobernanza, se promueva un desarrollo social, económico y
humano, a la vez que se promueve la construcción de paz. Las actividades que se
realizan responden a una doble aspiración: “incrementar las capacidades reales de las
personas en las sociedades y sectores desfavorecidos del Sur, de manera que puedan
alcanzar un desarrollo social, económico y cultural sostenible, y contribuir de este modo
a unas relaciones internacionales más justas, estables, pacíficas, seguras y
equilibradas.”34 Paralelamente, también se estudia la evolución y la especialización de
la cooperación al desarrollo desde la perspectiva de los criterios de evaluación del CAD
como la calidad, la cantidad, la eficacia o la eficiencia de la ayuda, con el fin de mejorar
el impacto de la cooperación ofrecida e “instalar nuevas capacidades, mecanismos e
instrumentos en las diversas arquitecturas de los agentes donantes y receptores.”35
33 Tomando como referencia a Hegoa, Instituto de Estudios sobre Desarrollo y Cooperación Internacional
(España), Escola de Cultura de Pau – UAB (España), Fundación CIDOB (España), CIDEAL, Centro de Investigación y Cooperación para el Desarrollo (España), National Centre of Competence in Research NCCR North-South (Suiza), Overseas Development Institute (Inglaterra), Center for Global Development (Inglaterra), Development Studies Institute DESTIN, (Inglaterra).
34 CIDEAL. Misión, Visión y Valores de CIDEAL. [en línea] Centro de Investigación y Cooperación para el
Desarrollo (España). Disponible en: <http://www.cideal.org/>, consultado en octubre 2009.
35 Una de las líneas de trabajo de la Fundación CIDOB (España).
22
Finalmente cabe puntualizar que, a pesar de que la metodología basada en la noción
del “do no harm” no es una práctica conocida en muchos países, algunas
organizaciones ya han empezando a trabajar con este método, en concreto, para sus
actuaciones de ayuda o cooperación en situaciones de conflicto bélico. Básicamente se
considera como una herramienta que identifica de manera sistemática las vías en que
debe proporcionarse la ayuda humanitaria y la cooperación al desarrollo en las
situaciones de conflicto, de modo que fortalezcan las capacidades locales para
promover la paz en lugar de acentuar las dificultades o las tensiones.36
Si bien el “do no harm” se ha diseñado y se está aplicando sobre todo en situaciones de
conflictos armados, los elementos que se consideran para analizar el contexto y actuar
de la mejor forma posible sin agravar el problema, tendrían que aplicarse también a las
actuaciones centradas en la cooperación al desarrollo. El objetivo de intervenir sin
agravar la situación es el mismo en ambos casos, así como el ideal de detectar aquellos
factores nocivos que afectan al buen desarrollo de la actuación, y poder eludirlos.
En este caso, también se adoptará el “do no harm” como una herramienta y una
“filosofía” de trabajo. No se trata de una fórmula magistral que permita encontrar
todos los elementos necesarios para configurar la solución final a los problemas
específicos de cada caso, ni mucho menos el mejor camino a seguir.
Muchas de las organizaciones o entidades que trabajan en actuaciones de cooperación
al desarrollo siguen una misma dinámica y no introducen cambios en sus sistemas de
trabajo. Pese a todas las reflexiones sobre el papel de la cooperación y la ayuda que
tienen lugar en las altas esferas37 y entre la sociedad civil, el enfoque de no dañar está
poco consensuado, ya sea por su desconocimiento, por la falta de información o
medios, o por la falta de interés.
36 Centro para la promoción para la paz SwissPeace (Suiza)
37 Algunos autores hablan de la “parte superior” y “parte inferior” (top y bottom) de la cadena de la
ayuda, haciendo referencia metafórica de “los que están arriba” y “los que están a bajo”, como William Easterly (2006).
23
II. El “do no harm” aplicado a la Cooperación al Desarrollo
El “do no harm” aplicado a la cooperación al desarrollo se podría entender como el
mecanismo a través del cual se fortalecen las capacidades locales y, al mismo tiempo,
se fomenta la prevención de conflictos y la construcción de paz, con el fin de garantizar
unos resultados positivos respecto a la población receptora de la ayuda, fomentando el
autodesarrollo, y procurando no interferir negativamente en la realidad existente.
Cabe puntualizar aquí, que el concepto de conflicto des de la perspectiva del “do no
harm” se entiende como cualquier situación que presente desigualdades o tensiones
de distinta índole, no sólo bélicas, ya sea por cuestiones de desequilibrios económicos,
políticos, de corrupción, racismo, impunidad, o cual sea el elemento que se utilice
como discriminatorio y origine un contexto de tensión y enfrentamiento en un país o
en el seno de una sociedad.
Por tanto, se trata de una cooperación colectiva en el sentido de que se evalúan las
relaciones entre los diferentes ámbitos, actores y motivaciones, para una misma
actuación. La mayoría de veces, las intervenciones se centran en un área o un sector en
concreto (alimentación, educación, sanidad, etc.), y no se percibe la relación que
pueden tener los distintos ámbitos entre sí. De este modo, cuando se planifica entorno
a una actividad específica, puede que haya algunos elementos que en principio no
tengan correspondencia alguna con la actuación a realizar, pero tras el análisis puede
resultar que sí son relevantes y de gran importancia para desarrollar un plan de
intervención, es decir, se identifican los elementos “conectores” o “divisores”,38
aquellos que nos pueden ayudar o los que preferiblemente tendrían que evitarse.
38 Entendiendo como “conectores” aquellos elementos que tienen un efecto catalizador y beneficiarán la
acción, y los “divisores” tienen más bien un efecto inhibidor, y por tanto pueden impedir el buen desarrollo de la actuación.
24
Es analizando y evaluando todos y cada uno de los componentes, cuando se puede
entender mejor el contexto donde se trabaja y ofrecer una buena colaboración.
Porque, en cada caso, las sociedades tienen su propia historia, cultura, valores y
conflictos propios; comparten una lengua y unas tradiciones, experiencias, así como
instituciones, sistemas políticos y económicos, de modo que cada proyecto será local y
singular.39 Sin embargo, también existen situaciones en que la multiculturalidad,
además de constituir una riqueza cultural y lingüística inequívoca, puede suponer al
mismo tiempo una dificultad añadida antes que un punto de unión entre los
receptores, por lo que es necesario evaluar si por el contrario, lo que puede crear el
conflicto son las distintas lenguas, orígenes, religiones, tradiciones, afiliaciones políticas
o creencias en una misma sociedad.
Para identificar todos estos elementos que estarán en juego dentro del marco de
trabajo y desde la perspectiva del “do no harm”, el centro de investigación del
Collaborative for Development Action (CDA), antes mencionado, propone un sistema
de análisis mediante cuestiones que abordan la información necesaria y permite
39 ANDERSON, Mary B., Op. Cit.
“Los divisores incluyen a todos aquellos actores que intencionadamente utilizan factores y recursos para mantener la polarización existente entre las partes del conflicto. Entre ellos están, por ejemplo, la corrupción, la impunidad del castigo, el acceso desigual a los recursos, a los servicios y al empleo, las barreras lingüísticas, la manipulación de las diferencias étnicas, la militarización de la sociedad, la pérdida de confianza en las instituciones estatales, la autoridad en declive de los mediadores (clero, profesores, mayores) o los grupos de personas que promueven insistentemente la delimitación y la exclusión.
Entre los conectores figuran todos aquellos actores que deliberadamente utilizan factores y recursos para unir a las personas y contribuir a un sentimiento de pertenencia y responsabilidad compartida (inclusividad). En caso de conflictos internos, los conectores pueden ser la lengua común, las infraestructuras compartidas (teléfono, carreteras y transporte público), los recuerdos comunes, los matrimonios exógenos, las fiestas religiosas o nacionales comunes o los grupos de personas particularmente integrativas que tienden puentes sobre las fronteras de los conflictos.”
Fuente: Gestión de Programas sensible al Conflicto (GPSC) – Integración de la sensibilidad a los conflictos y prevención de la violencia en la cooperación internacional, COSUDE – Agencia Suiza para el Desarrollo y la Cooperación.
25
esquematizar las relaciones entre la ayuda y el conflicto; una herramienta que servirá
para identificar aquellos elementos o actividades que pueden repercutir de manera
negativa en la actuación, y así poder planificar, hacer el seguimiento y evaluar, evitando
todos esos factores negativos. Este enfoque de planificación se puede aplicar tanto a
las actuaciones de ayuda humanitaria como de cooperación. Porque a la hora de
diseñar un plan de acción hay que tener en cuenta todos los factores que rodean o
forman parte íntegra del problema o la situación. Todo está interrelacionado y una cosa
depende de otra, y a medida que la actuación avanza, surgen nuevas dificultades y
oportunidades imprevistas que determinarán las posibles vías a seguir.
Como afirman los colaboradores del CDA, los conflictos nunca son simples. Las
situaciones en conflicto son complicadas, polifacéticas y únicas (cada una tiene sus
propias características, personalidades, historias, etc.).40 En definitiva, la visión del “do
no harm” ayuda a entender con claridad la complejidad del contexto, a ver cómo
afectan las decisiones tomadas respecto a los receptores, y permite pensar en distintas
maneras de actuar para aportar un efecto positivo.
El siguiente gráfico ilustra los factores a tener en cuenta en una situación de
prevención de conflicto. Mediante una serie de cuestiones se identifica toda la
información básica, a la vez que permite analizar aquellos elementos que podrán
interactuar positiva o negativamente y, por tanto, que se utilizarán para realizar
cualquier intervención. Tomando como eje del presente estudio la columna central,
todas estas cuestiones nos permitirán descubrir y analizar un contexto, unos actores y
una actuación que podremos moldear y aplicar según cada caso. Las preguntas Por
qué, Dónde, Qué, Cuándo, Con quién, A través de quién y Cómo, servirán como guía a
seguir para delimitar los campos de análisis. En cada uno de ellos se identificarán sus
características y la aplicabilidad de la noción del “do no harm”, es decir, se identificarán
aquellos elementos perjudiciales y aquellos que sean potencialmente beneficiosos en
la toma de decisiones referentes a la actuación.
40 Información disponible en la página web <http://www.cdainc.com>, consultada en octubre 2009.
26
Si bien la cooperación al desarrollo sigue otra dinámica que el estudio de los conflictos
bélicos, esta herramienta también servirá para situar un marco de trabajo y obtener así
la información necesaria para planificar una actuación de cooperación preventiva y que
no cause daños. Es decir, antes de empezar toda implementación es necesario analizar
los problemas y dificultades latentes o existentes en la zona donde se quiere actuar
puesto que son aspectos inherentes del país en desarrollo y requieren un análisis de
conflicto previo.
Aunque la configuración del análisis varíe un poco, se presenta otro esquema
paralelo41 para poder identificar todos los componentes a tomar en consideración. El
orden o la clasificación de los elementos no son en sí lo más destacable, sino la relación
entre todos ellos. Como si de un puzle se tratase, todas las piezas están relacionadas y
para poder completarlo es necesario compaginar y distribuir bien todas las partes.
41 Véase en el punto 3 “Marco de trabajo del “do no harm” aplicado a la Cooperación al Desarrollo” y
esquema completo en los Anexos.
Figura 3: “Do No Harm” Framework for Considering the Impacts of Aid on Conflict.
Fuente: ANDERSON, Mary B., Op. Cit.
27
Las cuestiones Dónde, Por qué y Cuándo delimitarán el contexto, es decir, la situación
geográfica y temporal adecuada a la situación. Al mismo tiempo que se analizan las
características que definen el lugar donde se quiere llevar a cabo la actuación, también
se identifica el Por qué, la motivación que conduce a realizar tal acción o la
problemática que requiere de una intervención. En esta parte, se reflexiona sobre la
viabilidad y la conveniencia de la actuación, asegurando sobre todo si el lugar y el
motivo de la actuación son los adecuados y plenamente justificados por su
intencionalidad y la voluntad de los beneficiarios. El Cuándo delimita el momento en el
que se procede según el tipo de situación y de quiénes tienen que actuar. Además, se
tendrán que considerar los distintos periodos según cada fase de implementación, que
marcan la duración de toda la intervención, y en los que influyen distintos factores a
evaluar, los cuales, externos al conjunto de planificación de una actuación, pueden
modificar los efectos, y por tanto los resultados esperados.
El Qué y el Cómo permitirán enmarcar la actuación. Tanto en la acción planificada,
según el contexto y las necesidades consensuadas anteriormente por los beneficiarios,
y en la metodología acordada, se analizarán aquellas actividades en que toda la
población pueda participar, en concordancia con sus capacidades y limitaciones. La
actuación busca en sí conseguir una repercusión positiva, tanto a nivel colectivo como
individual, armonizando la labor diaria con las nuevas iniciativas. El trabajo que se
planifica gira en torno a unos objetivos a cumplir delimitados ya en el contexto, y estos
mismos objetivos responden a su vez a un problema determinado. La finalidad es que
este “problema” se sustituya por una capacidad adquirida que potencie el
autodesarrollo.
Posteriormente, se identifican los actores42 analizando Con quién y A través de quién se
realizará la intervención. En este caso, se establece la diferencia de los sujetos que
tienen una implicación directa o indirecta con el trabajo que se quiere realizar, con el
42 Definición y referencias en: GÓMEZ GALÁN, Manuel; SAINZ OLLERO, Héctor. El ciclo del proyecto de
cooperación al desarrollo. La aplicación del marco lógico. Madrid: CIDEAL, 1999; GÓMEZ GALÁN, Manuel; SANAHUJA, José Antonio. Op. Cit.; PÉREZ DE ARMIÑO, Karlos (dir.); ABRISKETA, Joana (et alt). Op. Cit.; entre otros.
28
fin de seleccionar aquéllos que tienen potencial para ser actores del proyecto. Es decir,
siguiendo la idea de los “conectores” y los “divisores”, el enfoque del “do no harm”
escoge y clasifica los sujetos que se encuentran en el marco de trabajo, según sus
características o función de la actuación, además de sus potencialidades o limitaciones.
Esta arbitrariedad se basará en fundamentos obtenidos mediante la aportación, el rol o
los condicionantes de cada colectivo de actores con el fin de que sean partícipes en la
actuación y ésta resulte beneficiosa.
Finalmente, también hay que considerar la importancia de la evaluación.43 Aunque no
aparezca en el gráfico anterior, la evaluación tiene un gran protagonismo en el “do no
harm” dado que mediante todos los resultados, de las distintas etapas de
implementación de los proyectos, permite reflexionar sobre los resultados obtenidos o
los efectos que se pueden ocasionar. Se trata de una evaluación constante de todos los
mecanismos utilizados y de las impresiones de los actores, para conseguir el fin
esperado de garantizar una colaboración positiva. Esto ofrece una visión global del
trabajo realizado y permite analizar el impacto real de la actuación, de modo que se
podrá identificar una metodología para cada actividad específica, aplicando la visión
del “do no harm”.
A partir de aquí se puede extraer una buena o mala práctica que condicionará futuros
proyectos y permitirá mejorar la metodología y la calidad de la cooperación que se
ofrece. Cada planificación o intervención servirá como punto de partida para una
ampliación posterior, así como para modificar o excluir algunos de los pasos seguidos,
con el fin de conseguir una cooperación eficiente y de calidad. El método del “do no
harm” requiere que uno mismo y con los demás agentes de cooperación se pregunten
43 Algunas obras de referencia sobre evaluación: GÓMEZ GALÁN, Manuel; SAINZ OLLERO, Héctor. Op.
Cit.; SOGGE, David (ed.) Compasión y cálculo. Un análisis crítico de la cooperación no gubernamental al desarrollo. Barcelona: Ed. Icaria Antrazyt, 1998; OCDE. Glosario de los principales términos sobre evaluación y gestión basada en resultados. Francia: Publicaciones de la OCDE; LENSIK, R., WHITE, H. “Asignación de la ayuda y reducción de la pobreza: el informe <<Evaluación de la ayuda>>. En: ALONSO, J.A., FRERES, Ch. (eds.). Los organismos multilaterales y la ayuda al desarrollo. Madrid: Civitas Ediciones, 2000. pp.217-240.
29
constantemente, “¿ocasionará esto algún daño?”, y requiere la responsabilidad de
buscar la información necesaria y adecuada para responder a esta cuestión.44
A continuación se analizarán cada uno de los elementos citados desde el punto de vista
del “do no harm” aplicado a la cooperación al desarrollo, puntualizando que, aunque
se establezca una clasificación en distintos puntos, debido a la interrelación
mencionada entre todos los elementos que conforman el marco de trabajo, es difícil
fraccionar un solo ámbito o temática, de modo que la información relativa a un factor
determinado irá apareciendo a lo largo del texto.
44 CDA – Collaborative Learning Projects. Thinking and Using Do No Harm, abril 2009. [en línea]
Disponible en: <http://www.cdainc.com>, consultado en septiembre 2009.
30
3. Marco de trabajo del “do no harm” aplicado a la Cooperación al
Desarrollo: elementos de análisis
“Don't take everything that you can get or everything that is given to you. Benefit will only be derived if you use
everything you get honestly. Our country will suffer if we spend easily what is easily got. The giving will not
continue.”
Daw Aung San Suu Kyi (1999)
Para poder elaborar una actuación de cooperación al desarrollo hay que tener en
cuenta las múltiples características que componen el marco de trabajo y las
interrelaciones que se establecen. Esto permite detectar los posibles problemas que se
pueden presentar a la hora de la implementación y, a su vez, evaluar los riesgos de la
misma actuación.
La finalidad de localizar todos estos factores y determinar cómo interactúan entre ellos
es poder identificar los actores que participarán en la actuación y de qué modo se
procederá para no causar daños.
El siguiente esquema muestra, a modo resumido, los elementos principales que a
continuación se analizarán con detalle. Las preguntas que se mencionaban
anteriormente permiten seguir una línea de investigación y así ir acotando factores de
la actuación.
Figura 4: Esquema de aplicación del “do no harm” en la Cooperación al Desarrollo. (Elaboración propia)
31
I. Contexto
El primer paso para empezar a elaborar una actuación de cooperación al desarrollo es
entender el contexto donde tendrá lugar y comprender su idiosincrasia. El análisis de la
situación geográfica, político-social y económica de un área determinada, así como de
la población que la integra, ofrece una información concreta que permite acotar el
ámbito de trabajo y determinar cómo afectará en cada situación la intervención de la
cooperación.
Es importante, sobre todo para los cooperantes en el terreno, conocer el contexto por
donde se mueven, su historia, su cultura, la situación político-económica actual, la
sociedad que lo integra, y entender la multiplicidad de aspectos que conforman el
problema el cual motiva la actuación. En cualquier caso, la toma de decisiones es
constante y por esto es necesaria una evaluación previa de los efectos que puede
ocasionar en cada caso una elección u otra, con el fin de optar por aquella acción que
no cause ningún daño.
Asimismo, todas las características del contexto pueden variar a lo largo de la historia
de un país o por circunstancias inesperadas, lo que implica que sea un elemento
dinámico y requiera la necesidad de los cooperantes de adaptarse a nuevas
situaciones. Es conveniente, por tanto, conocer el “terreno de juego” para definir con
claridad y acotar las prioridades de actuación, diferenciar los beneficiarios del resto de
agentes implicados y focalizar los recursos disponibles en actividades concretas.
32
i. Dónde
Una dimensión del contexto es el dónde, que delimita la localización del destino de la
ayuda: el lugar físico de la actuación que se concentrará en un país o región, y
determinará si se trata de una zona rural, urbana o periurbana, o la combinación de
varias a la vez. Dentro de este marco geográfico, se tendrá en cuenta el grupo
poblacional que lo conforma para identificar los receptores y beneficiarios directos de
la ayuda, con lo que, dadas sus características, se los implicará como actores de la
actuación. Ambos factores delimitan entre sí el espacio de implementación donde se
desarrollará la actuación.
Para situar el área de actuación se tendrán que valorar sus características y
componentes, delimitar en qué punto y con quién se podrá actuar, con el fin de
garantizar los efectos positivos. Existen numerosos informes, estudios y estadísticas
que evalúan los países según índices económicos, sociales, relativos a los servicios
públicos básicos, o según el nivel de pobreza (Ej. ingresos, tasas de analfabetismo o
malnutrición, enfermedades, conflictos bélicos, etc.), como los que elaboran distintas
organizaciones internacionales tales como el Banco Mundial, el Fondo Monetario
internacional (FMI), la OCDE, el PNUD o la Comisión Europea, entre otros. A partir de
ahí se obtiene información necesaria para valorar las características de un país y área
concretos.
Figura 5: Alivio de la Deuda en el marco de la
Iniciativa para los Países Pobres Muy Endeudados
(PPME). Fuente: Fondo Monetario Internacional, marzo 2009.
El siguiente cuadro muestra un listado realizado por el FMI en el que, según distintos indicadores, enumera los Países Pobres Muy Endeudados (PPME), los cuales necesitan especialmente algún tipo de ayuda económica o técnica, ya sea de este organismo o cualquier otra organización internacional.
33
Son destacables y a tener en cuenta los códigos CAD y CRS (Credit Reporting System o
Sistema de Notificación por parte de los Países Acreedores),45 estándares de los países
donantes de la OCDE para clasificar y unificar los ámbitos de actuación, o el Índice de
Desarrollo Humano (IDH) establecido por el PNUD,46 entre otros indicadores de
múltiples organismos. Estos listados ayudan a concretar el tipo de actuación
focalizándola en un ámbito concreto, ya sea de educación, sanidad, gobernabilidad,
comunicaciones, transportes… que en cada país tendrá un estatus o nivel de desarrollo
diferente. El IDH o el PIB per cápita, por ejemplo, muestran las capacidades o
dificultades, en términos económicos o de recursos, que el país en cuestión puede
presentar a la hora de implementar una actuación determinada. Sin embargo, hay que
tener en cuenta que muchas veces estos indicadores no ofrecen una visión local y
consensuada, o más bien real, del país o ámbito, puesto que se basan en datos
oficiales, los cuales en algunos países, no transmiten una información actualizada ni
fidedigna de la situación en que se encuentra el conjunto del país.
45 Los países miembros del CAD han creado una base de datos común, el CRS, donde se clasifican los
sectores y subsectores en que se pueden clasificar las actuaciones de cooperación al desarrollo. Disponibles en la página web oficial de la OCDE, <http://www.oecd.org>, consultado en septiembre 2009.
46 El PNUD elabora anualmente Informes sobre el Desarrollo Humano que se pueden consultar en
internet: <http://hdr.undp.org/es/>, consultado en septiembre 2009.
En muchas ocasiones es palpable que las zonas elegidas como prioritarias no son las que
responden a los indicadores y criterios de vulnerabilidad socioeconómica, malnutrición o
morbilidad, entre otros, sino las que tienen mayor facilidad de acceso, o las que tienen más
peso político para expresar sus necesidades y hacer valer sus derechos. A menudo se trata
de áreas remotas, mal comunicadas y lejanas las cuales son casi inaccesibles para realizar
una buena logística de intervención.
Un ejemplo de ello serían los pastores nómadas que pese su situación de vulnerabilidad,
con frecuencia se les olvida de programas u actuaciones de ayuda porque su movilidad y
permanencia en lugares remotos dificulta la logística y seguimiento de las actividades,
ofrecen condiciones de vida adversas para el personal cooperante y menor visibilidad del
trabajo realizado en el entorno más próximo.
Fuente: Entrada de: Selección de destinatarios. En: PÉREZ DE ARMIÑO, Karlos (dir.); ABRISKETA, Joana
(et alt). Diccionario de acción humanitaria y cooperación al desarrollo. Barcelona: Icaria; Bilbao:
Hegoa, 2002.
34
De este modo, es necesaria la comparación con otros medios informativos con el fin de
poder evaluar el estatus actual y normalizado de cada zona o área. En países donde el
PIB per cápita presenta ciertas mejoras o índices positivos, puede representar tan sólo
la riqueza de una pequeña parte de la población y no de todo el conjunto, que
permanece arraigado en la pobreza o pobreza extrema, ocultando así las desigualdades
económicas o estructurales que sufre el país y prolongando su inestabilidad. Por tanto,
es imprescindible evaluar otras fuentes con el fin de identificar las lagunas que
presenta cada sector o ámbito del país receptor de la ayuda. No obstante, esta tarea
resulta difícil dado que las informaciones disponibles, como las de la OCDE-CAD,
reúnen un gran volumen de datos sobre cómo se invierte la ayuda, pero son difíciles de
interpretar para los que no son especialistas, sumado a la dificultad de encontrar
información accesible y comparable.47
Esas fuentes relevantes y que a menudo no se tienen lo suficientemente en
consideración son las fuentes locales. En ocasiones pueden parecer de menor
envergadura, pero no son menos útiles, dado que el país receptor muestra en primera
persona sus necesidades o escaseces. Así, podemos encontrar estudios o informes
procedentes de ONGs locales, universidades, sindicatos, asociaciones de vecinos,
colectivos de mujeres o jóvenes, escuelas, hospitales, cooperativas de agricultores o
ganaderos, entre otros, los cuales exponen su verdadera necesidad o problemática por
la que ellos mismos piden colaboración.
Desde la perspectiva del “do no harm”, este paso es muy apreciable dado que son los
propios beneficiarios o receptores de la ayuda los que toman la iniciativa de sugerir
cuáles son sus carencias o reivindicaciones. Desde Guatemala, por ejemplo, se publica
una revista electrónica de información y discusión social. Su carácter independiente y
plural permite la difusión de noticias sobre la situación social del país a modo
divulgativo pero también participativo de la sociedad, en el que se puede analizar y
47 Center for Global Development. Quality of Official Development Assistance. Información ampliada
disponible en la página web: <http://www.cgdev.org>, consultado en septiembre 2009.
35
debatir sobre distintos temas que afectan la población en general.48 Datos como el
terreno apto para el cultivo que permanece intacto o sin aprovechar; el encubrimiento
del contrato de trabajo por otros “tipos de contratos” que alejan a los trabajadores de
sus prestaciones; las relaciones de poder entre las diversas fuerzas políticas o grupos
dominantes, además de otros sectores influyentes que inciden diferentemente
(empresas, grupos de indígenas, ONGs,…) y la resistencia social; o la oposición de la
sociedad ante proyectos de carácter capitalista y que anula la capacidad de desarrollo
nacional, éstas son algunas de las “denuncias” que expone el pueblo guatemalteco.49
Gracias a todos estos indicadores, es posible conocer la situación global en distintas
áreas como la económica o financiera, social o de sectores que influyen en la sociedad
(educación, sanidad, medio ambiente…), para analizar en qué ámbito conviene actuar,
o con qué grupo poblacional, al cual se refiere más adelante. Esta selección permitirá
determinar en qué país se podrá actuar y escoger entre un área u otra, un sector o
subsector, en función del que ofrezca más vías de actuación con repercusión positiva.
Indicadores como el PIB (por sectores o áreas poblacionales), el flujo de comercio, la
deuda externa, demografía (tasa de natalidad y mortalidad), concentración poblacional
por zonas, ocupación por sectores, equidad de género en todos los ámbitos, nivel de
educación y sanidad, estado de contaminación, zonas verdes, ubicación de fábricas,
etc., dan pie a cuestionarse a qué sector se destinará la ayuda para que el PIB per
cápita aumente por igual. En términos económicos, es orientativo el Índice Gini,50 el
cual mide la distribución de la renta entre distintas capas de la población y muestra el
grado de desigualdad entre las familias de un mismo país. Sin concretar las áreas más
48 Albedrío.org, revista electrónica de discusión y propuesta social, disponible en
<http://www.albedrio.org>.
49 Boletín 2. En: CONGCOOP (Coordinación de ONG y Cooperativas), Guatemala, abril-junio 2008;
ARGUETA, Alejandro. El disfraz de la relación de trabajo en Guatemala. Unión Guatemalteca de Trabajadores, Guatemala, 2008; SOLIS, F. et altri (ed.). El Observador. Análisis alternativo sobre política y economía, N.14, septiembre 2008; POQOMCHI, Maya. Re-vitalizar la identidad: de la resistencia al poder, En: Albedrio.org, Guatemala, agosto 2008.
50 El Índice Gini es utilizado en algunos organismos internacionales como la CIA en su World Factbook o
el PNUD, disponibles en: <https://www.cia.gov/library/publications/the-world-factbook/index.html> y <http://hdrstats.undp.org/en/indicators/161.html>, consultado en octubre 2009.
36
desfavorecidas, permite identificar el nivel de disparidad de ingresos pese a que el PIB
muestre datos positivos generales de un país.
También se considerará si hay un mercado interno o de exportaciones, y se
determinará en qué área comercial se puede dar apoyo para que aumenten los
beneficios; dependiendo del nivel de deuda, se valorará si es aconsejable actuar o no, o
si influirá la actuación en las relaciones bilaterales o internacionales del país receptor, y
cómo. En una sociedad con muchos niños o muchos adultos se podrá incidir en la
educación y en la sanidad, para educar las madres sobre maternidad, prevención de
enfermedades tanto de pequeños como adultos, sobre nutrición, divulgación de
prácticas de higiene, incidir en los causantes de la elevada mortalidad, aportar nueva
formación y materiales a los médicos locales. Se tendrá en cuenta si la población se
concentra en un área rural o más industrializada, qué tipo de educación, trabajo, nivel
de salud, etc. tendrán; por qué hay más o menos ocupación en unos sectores que en
otros, qué afecta a esta disparidad, si hay diferencia entre hombres y mujeres, o si
existe mano de obra infantil. Además de cuestionarse si la mujer tiene distintos roles o
actividades asignadas en el conjunto de la sociedad, qué género predomina en los
cargos de gobernabilidad y responsabilidad; si llega por igual a todos los ciudadanos la
educación y los servicios sanitarios; dónde es posible incidir para reducir los índices de
contaminación; existen suficientes áreas verdes; la concentración de fábricas incide en
la salud de los ciudadanos; qué tipo de infraestructuras hay; toda la población tiene
acceso al transporte público…
Por otro lado, también hay que considerar el análisis cultural y social. Una visión
antropológica51 del contexto permitirá conocer mejor la población y relacionarla con la
problemática del desarrollo o identificar aquellos aspectos que favorecerán o
perjudicarán la implementación de cualquier actividad. “No se trata de acumular datos
ni de convertirse en historiador, sino de ser capaz de analizar la estrategia de
51 Un análisis antropológico de la situación en conflicto o problemática permitiría obtener información
relevante sobre los orígenes que pueden causar dichos problemas o los agravantes de la situación actual. Pero esto podría ser objeto de otro estudio de investigación.
37
cooperación y desarrollo desde una perspectiva diacrónica significativa.”52 Aspectos
como la situación política, económica, social, así como la cultura y la religión, como
hitos principales de las sociedades, permitirán conocer mejor los grupos poblacionales
y determinar cuál es la población meta, quiénes serán los beneficiarios directos, a
quién se podrá capacitar como actor, y quiénes quedarán apartados de la actuación.
Sin olvidar, empero, el conocimiento de este grupo meta de toda la información y su
acuerdo con la planificación y, sobre todo, con la actuación, hecho que se equipare al
cumplimiento del llamado “consentimiento previo, informado y libre”53 relacionado
con los pueblos indígenas, y que valora la importancia de los conocimientos
tradicionales en la ejecución de la cooperación.54
52 UE. Análisis social y antropológico. EuropeAid Cooperation Office, Comisión Europea. [en línea]
Disponible en <http://ec.europa.eu/europeaid>, consultado en octubre 2009.
53 Declaración de las Naciones Unidas sobre los derechos de los pueblos indígenas, recogida en la
Resolución A/RES/61/295, del 13 de septiembre de 2007.
54 CABRERO, Ferran. El Tercer Món no existeix. Diversitat cultural i desenvolupament. Intermón Oxfam,
Barcelona, 2006. pp.81-95.
38
Además, también se tendrán en cuenta los fondos recibidos por parte de los países
ricos que destinan ayuda y cómo se gestionan. Hay países en que, dadas sus
características de extrema pobreza o la situación insostenible de su economía, de sus
estructuras políticas o la debilitación de las capacidades de autogestión democrática,
reciben múltiples fondos de ayuda pero el problema persiste tras años de trabajo. Por
ejemplo, el caso de Nicaragua, donde representantes del estado y de la sociedad civil
pedían una mayor aportación de la comunidad internacional, y por otra parte los
Un mecanismo para identificar las características sociales y culturales de la sociedad puede ser analizando las herencias, transformaciones y apropiaciones en la historia y cultura de la sociedad, para identificar aquellos elementos que podrán servir como conectores en una actuación de cooperación al desarrollo:
En lo que se refiere a la herencia, las creencias y las costumbres (ancestrales, religiosas, culturales, etc.), el patrimonio heredado o la historia del país (colonización, guerras civiles o internacionales, etc.) pueden determinar el carácter y posicionamiento de la sociedad en distintos bandos y que esto sea motivo de divergencia entre una misma población. En tal caso, se tendrán que considerar y actuar en consonancia a tales creencias y tradiciones, respetando los elementos que conforman su identidad. Es importante identificar si la población meta comparte los mismos valores o por si el contrario es un punto de división. En este punto, el ideal sería encontrar el elemento común en la historia o cultura que los engloba: qué tradiciones persisten entre la población, qué grupos las conocen y las practican, se transmiten de generación en generación o cambian los valores de padres a hijos, qué momento histórico es el que ha marcado más, etc.
Las transformaciones que hayan experimentado el país o la población también pueden ser fuente de discordia. Habrá que considerar qué organizaciones sociales, jurídicas y políticas se han sucedido, el legado que ha dejado y ver cuáles persisten y si la población tiene preferencia por alguna en concreto o hay disparidad. Asimismo, ver en qué estos cambios han influenciado en la sociedad y si esto podrá afectar o no a la implementación de la actuación, por oposición o negación de ciertas ideologías o comportamientos.
La herencia cultural también es muy importante para determinar si las actitudes de los beneficiarios están sujetas a unos valores muy arraigados o por el contrario están dispuestos a aceptar nuevos puntos de vista a la hora de planificar o actuar. Del mismo modo que el mestizaje, que puede significar fuente de conflicto o favorecer la mezcla de grupos en la realización de actividades conjuntas, o por otro lado puede significar un estigma heredado y comportar el rechazo por parte de un sector de la sociedad. Dentro también del aspecto cultural, cabe analizar la capacidad y voluntad de adaptación a los nuevos tiempos y la modernización de los valores y costumbres culturales, lo que puede ofrecer numerosas ventajas a la hora de introducir nuevos hábitos o para la creación de nuevas estructuras organizativas o de trabajo, con los valores sociales (que en la actualidad han cobrado más relevancia) de equidad de género, sostenibilidad y derechos humanos implícitos.
Fuente: UE. Análisis social y antropológico, EuropeAid Cooperation Office, Comisión Europea. [en línea] Disponible en <http://ec.europa.eu/europeaid>, consultado en octubre 2009.
39
países donantes eran cautos y meticulosos a la hora de destinar más fondos, debido a
la divergencia de intereses o la falta de transparencia en sus intenciones, lo que rompe
con el acuerdo de la Conferencia de Monterrey (2002) sobre la movilización de
recursos y su proporcionalidad respecto las necesidades.55 “Un entorno nacional
propicio es fundamental para movilizar los recursos internos, aumentar la
productividad, reducir la fuga de capitales, estimular al sector privado y atraer y utilizar
productivamente las inversiones y la asistencia internacional”,56 aún así, la tensión
aumenta y hay un cambio de intereses cuando el estado en cuestión no cumple con la
condicionalidad, transparencia y colaboración con los países donantes de la ayuda.
Cabe puntualizar aquí la distinción entre los países involucrados en la acción. Por una
parte tenemos el país receptor57 de la ayuda, que como ya se ha dicho, se evalúan
previamente sus necesidades y las circunstancias en qué se encuentra para una
posterior intervención. Es necesario escuchar sus demandas, contrastar las
informaciones y, si no se dispone de personal desplazado, visitar el terreno para
verificar todas las informaciones y asegurarse en qué espacio se debe actuar. De aquí
también puede surgir la petición de ayuda directamente a los posibles colaboradores.
Los gobiernos centrales o comunitarios de estos estados pueden, directamente o
mediante agencias de cooperación, solicitar un tipo de asistencia determinada. Otros
agentes como actores de cooperación de agencias privadas, locales o incluso
55 Surge aquí otro debate sobre la gestión de los recursos por parte de países donantes y receptores,
pero que no corresponde aquí entrar en profundidad. Algunos artículos que ofrecen distintas perspectivas: CÁCERES, Sinforiano. “Ante la crisis alimentaria: <<Necesitamos más acciones y menos discursos>>” [en línea] En: Revista Digital Envío, N. 315, junio 2008, Universidad Centroamericana, Nicaragua. Disponible en: <http://www.envio.org.ni/articulo/3789>, consultado en octubre 2009; FLORES, Miguel. “Nicaragua solicita apoyo”, mayo 2008. [en línea] En: El pueblo Presidente, Portal informativo del poder ciudadano. Nicaragua libre. Disponible en <http://www.elpueblopresidente.com>, consultado en octubre 2009; MELÉNDEZ, Mayda I. “Disminuye ayuda externa para Nicaragua”. [en línea] En: El Observador Económico. Disponible en: <http://www.elobservadoreconomico.com>, consultado en octubre 2009; PNUD en Nicaragua, disponible en: < http://www.undp.org.ni>.
56 En Principales Medidas de la Conferencia Internacional sobre Financiación para el Desarrollo de
Monterey (México), de 2002. Disponible en el documento d Aprobación del consenso de Monterrey A/CONF.198/3.
57 Entendiéndose como país receptor el estado que recibe ayudas para el desarrollo procedente de otros
estados, y que un sector de su población cumple unos criterios de vulnerabilidad y necesidades que urgen una intervención. Véase en: PÉREZ DE ARMIÑO, Karlos (dir.); ABRISKETA, Joana (et alt.). Op.Cit.
40
internacionales, entre otros, también pueden personificar esta demanda. Mediante
esta información, es posible valorar qué lugar se escoge y por qué, cuáles son los
determinantes que decantan la decisión por este sitio y no otro. Ideas como la
proximidad de infraestructuras, accesibilidad, recursos propios, la condición física del
terreno (espacio montañoso, marítimo, altitud…), si existe alguna rivalidad entre la
población o con zonas o países cercanos, la aceptación por parte de los beneficiarios,
etc., son determinantes para concretar el área o región de actuación. La interacción
entre todos estos elementos determinará el lugar de la actuación y un primer enfoque
de la metodología a seguir.
Por otro lado, están los países donantes58 que remiten la ayuda mediante
organizaciones propias, del país receptor, a través de organismos internacionales o
incluso directamente. Aunque el “do no harm” concede mayor importancia al país
receptor, no deja sin analizar y comprender las características del donante. El contexto
mundial en el que interactúan todos los estados, el papel que ejerce cada uno y las
circunstancias que los afectan, también condicionan su actitud a la hora de ejercer de
donante. Así pues, aspectos como una crisis económica mundial, relaciones bilaterales
entre estados, terrorismo mundial, precio de los alimentos o del carburante, relaciones
comerciales, consecuencias medioambientales, o migraciones de población, pueden
58 Estado u organización que destina recursos (materiales, monetarios o humanos) a otro país o
población, normalmente de modo desinteresado, pudiendo establecer una condicionalidad a la ayuda ofrecida. Véase más en: GÓMEZ GALÁN, Manuel; SAINZ OLLERO, Héctor. Op. Cit.; PÉREZ DE ARMIÑO, Karlos (dir.); ABRISKETA, Joana (et alt.). Op.Cit., entre otros.
Figura 6: Pobreza absoluta (hasta 2$ al día). Fuente: Worldmapper
El tamaño del territorio muestra
la proporción de personas que
viven con menos de 2$ al día,
según el índice de paridad de
poder adquisitivo. Asimismo, un
ejemplo de la proporción de
países con unas necesidades
básicas.
41
condicionar de un modo u otro las capacidades de los estados que ofrecen la ayuda,
dado que variarán sus recursos o su disponibilidad. Por otro lado, además, el interés o
motivación en destinar algún tipo de asistencia también se verá alterado puesto que el
donante priorizará sus necesidades y bienestar, pese a los compromisos que haya
adquirido con la comunidad internacional, los socios bilaterales o la propia sociedad.
Al mismo tiempo, deberán seguir unas pautas de coordinación y colaboración entre
distintos agentes donantes e implementadores59 que estén trabajando en la misma
zona, tanto si son agentes de cooperación local o internacional, como representantes
de estados u organizaciones donantes, o también los mismos beneficiarios. Además,
tendrán que detectar qué actividad está realizando cada uno, de modo que las
intervenciones no se sobrepongan, no se obstaculicen mutuamente, resultando así en
una actividad innecesaria, y por el contrario puedan colaborar entre ellas, de modo
que el trabajo a realizar se complemente. Con la detección de otros agentes y uniendo
esfuerzos y recursos se puede llegar a una complementariedad en la actuación, sin
olvidar la condicionalidad y aceptación del país receptor. Es decir, tal y como se acordó
en la citada Declaración de París, que haya coherencia y colaboración a la par que se
otorguen más responsabilidades a los beneficiarios, sin olvidar una reciprocidad en las
relaciones, derechos y obligaciones: “Eliminar la duplicación de esfuerzos y racionalizar
las actividades de donantes, para alcanzar el máximo rendimiento posible” y “definir
medidas y estándares de desempeño y responsabilidad para los sistemas de los países
socios en gestión de finanzas públicas, aprovisionamiento, salvaguardias fiduciarias y
evaluación medioambiental, aplicándolos de manera rápida y extensa, de acuerdo con
las buenas prácticas ampliamente aceptadas”.60
Sin embargo, con esta correspondencia mutua, también se espera del país receptor
que adquiera el compromiso del autodesarrollo sin la dependencia económica o
técnica con los países donantes, puesto que no es raro ver en ocasiones una cierta
59 Entendiendo como agente donante aquel que destina ayuda económica o técnica a los países en
desarrollo, y el agente implementador, o cooperante, aquel que implementa una actuación de cooperación junto a los receptores.
60 OCDE. Declaración de París sobre la eficacia de la ayuda al desarrollo (2005).
42
conveniencia en las ayudas externas. El vínculo que se establezca ha de ser de equidad
en cuanto a relaciones, derechos y obligaciones entre todos los países.
El espacio de implementación61 de la actuación es importante porque implica distintos
factores a la vez: situación geográfica, es decir los límites físicos en el terreno de uno o
múltiples estados, así como las características y necesidades que lo conforman, para
adecuar las actividades y los recursos previstos en una localización geográfica;
juntamente con la localización de otros agentes en la zona, como se ya ha dicho.
Por otro lado, desde el enfoque del “do no harm” se valora la identificación de
actuaciones previas en la misma zona, y en el sector y subsector en qué se quiere
intervenir, por las informaciones relevantes que servirán posteriormente para enfocar
la metodología a seguir y justamente identificar esos elementos de los que se podrá
prescindir. A través de las experiencias previas en el mismo lugar, se pueden conocer
las buenas y malas prácticas ejercidas y por tanto, identificar los mecanismos y
recursos que causaron algún daño para modificarlos y mejorarlos. De esta manera, las
actividades se configurarán de un modo distinto, irán destinadas a otros socios o
grupos poblacionales diferentes y podrán ofrecer un efecto positivo.
En un caso hipotético (sin determinar las características de la zona) en el que se quiere
incidir en la nutrición de los niños, podrían surgir diversas dificultades: si se ofrece
educación directa a los padres mediante reuniones, coloquios, o sesiones informativas
61 GÓMEZ GALÁN, Manuel; SAINZ OLLERO, Héctor. Op. Cit.
A pesar de los recursos o medios de que dispongan los donantes, la visión del “do no harm”
propone que éstos también hagan una autorreflexión sobre sus capacidades i limitaciones a
la hora de actuar. Tendrán que evaluar si los recursos de que disponen son adecuados a la
situación (material, personal o financiero); si corresponde a la demanda por parte del
receptor; qué medios emplearán para desplazarse en el lugar de la actuación; que
diferencias se establecerán entre el personal cooperante, tanto internacional como local, y
los beneficiarios (alojamiento, transporte, alimentación, seguridad, remuneración, etc.),
este aspecto hay que determinarlo con precisión dado que si existen grandes diferencias
entre los actores, podría originarse algún tipo de tensión o conflicto.
Fuente: ANDERSON, Mary. Op.Cit.
43
en asociaciones o centros comunitarios, pero ésta tiene poca incidencia porque los
adultos no pueden desplazarse, o no tienen disponibilidad, o no les llega la
convocatoria, entonces se podría optar por incidir directamente a los niños,
juntamente con los padres, mediante charlas educativas itinerantes, o facilitar visitas
regulares al médico (si éste existe en las cercanías). Además, conocer los sectores
donde se trabajó previamente permite evaluar si es necesario continuar actuando
desde el mismo ámbito, incrementando o reduciendo la actividad, o pasar a un sector
distinto, siempre dependiendo de los resultados obtenidos, y las evaluaciones y
consideraciones pertinentes. Siguiendo el ejemplo supuesto, si la información que se
desea transmitir (la importancia de una buena nutrición) no llega mediante la
educación a través del sector social o la sanidad, se puede incidir en educar, directa o
indirectamente, por otros sectores. Cooperantes expertos en el terreno junto a
médicos o personal local, podrían realizar charlas y exposiciones en los colegios o
introducir los conceptos relevantes en las materias escolares. Es importante, en
cualquier caso, difundir y hacer públicas las actividades que se suceden mediante actos
o talleres paralelos y así poder informar sobre la actuación y su finalidad al conjunto de
la población.
Sin embargo, también es factible y deseable, desde la perspectiva del “do no harm”
actuar tomando en consideración el mayor número de sectores, siempre que sea
posible, dependiendo del análisis de la situación, además de la viabilidad y adaptación
de cada uno con la actuación. Así, las escuelas podrían ofrecer fruta o cereales
procedentes de los agricultores locales y al mismo tiempo promover la actividad
económica interna del país; introducir las mujeres en el trabajo de producción agrícola,
de modo que se promueve su inserción en el mercado laboral y su independencia
económica de los maridos o figuras paternas, tal y como fomentan los programas del
Fondo de Desarrollo de las Naciones Unidas para la Mujer (UNIFEM);62 los médicos
podrían educar en ciertos aspectos a los profesores (al mismo tiempo que unos y otros
aprenden sobre el contexto cultural dónde trabajan) y ambos difundir aspectos de
62 Véase información relacionada sobre estrategias para el empoderamiento de la mujer y la equidad de
género en la página web de UNIFEM, disponible en: < http://unifem.org>, consultado en octubre 2009.
44
higiene y nutrición tanto a hombres como a mujeres; mediante algún medio de
comunicación (radio o televisión locales, revista o folletos de entidades) se podría
divulgar información concerniente en forma de recetario, participación popular,
promoción de ferias de alimentos o semillas nativas, recuperación de platos típicos,
entre otros, y promover o recuperar a su vez las tradiciones culturales; o crear huertos
en los centros escolares para asegurar unos alimentos básicos y promover entre los
jóvenes la actividad agrícola.63 Este último ejemplo correspondería a una de las vías de
actuación de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la
Alimentación (FAO) a través de sus Programas de Seguridad Alimentaria64 en África y
Asia meridional. Actividades e intenciones diversas que dependerán de cada situación
y en las que son de gran importancia la participación de los beneficiarios.
Con todo, se pueden detectar aptitudes instaladas en el terreno de actuación, es decir,
material de trabajo o capacidades y limitaciones de la población local que, como fruto
o resultado de las intervenciones previas, podrán servir para la nueva actuación o por
el contrario, se tendrán que evitar. De este modo, se puede prevenir cometer los
mismos efectos negativos e invertir el tiempo en la realización de otras actividades.
63 La participación de los jóvenes en la agricultura a través de proyectos de huertos escolares forma
parte de las actividades incluidas en un programa nacional de seguridad alimentaria (PNSA) promovido por la FAO. Un ejemplo real se puede encontrar en Kenia, el cual tiene como objetivo incrementar el acceso de los kenianos a los alimentos. Disponible en <http://www.fao.org/spfs/national-programmes-spfs/success-npfs/kenya-es/es/>, consultado en octubre 2009.
64 La Seguridad Alimentaria se ha convertido en uno de los principales focos de actuación de las NNUU a
través de la FAO y otros organismos para asegurar el derecho a los alimentos, así como una de las vías para erradicar la pobreza. Véase también la página web de la FAO, disponible en: <http://www.fao.org/index_es.htm>, consultado en octubre 2009.
“En Bosnia-Herzegovina, uno de los primeros métodos que surgieron efecto por parte de las
agencias de cooperación fue incentivar las relaciones entre gente de distintas etnias y de
diferentes pueblos y ciudades, mediante pequeñas orquestas, coros, revistas académicas y
asociaciones juveniles. Músicos, académicos y jóvenes mostraron su entusiasmo por
reanudar sus actividades cotidianas e introducirse de nuevo en aquellas áreas en que tenían
especial interés y talento. Estaban preparados para reinstaurar estas asociaciones con el
esfuerzo común de gente que apenas hacía poco tiempo había sido el enemigo.”
Fuente: ANDERSON, Mary B., Op.Cit.
45
En el contexto también es importante identificar los diferentes grupos poblacionales65
que integran el espacio de implementación. Se identifican y se analizan los distintos
grupos que conforman la sociedad receptora, y posteriormente se determina quiénes
serán los receptores directos y por tanto, los beneficiarios, y los receptores indirectos
para concretar el tipo de actuación y la metodología a emplear. Una característica
propia de la noción del “do no harm” es que estos beneficiarios también se convierten
en actores activos de la misma intervención para fomentar su propia autonomía y
desarrollo.
Se diferenciará la población, por tanto, entre los grupos más vulnerables, con
características propias y por su relación en el conjunto de la sociedad, para determinar
cómo adaptar la actuación a las aportaciones participativas de cada uno. Entre esos
colectivos se encuentran jóvenes, niños, mujeres, minorías o grupos discriminados,
como pueden ser homosexuales, personas con discapacidades, trabajadoras de sexo
comercial, etc. De cada colectivo se desglosará toda la información pertinente a tener
en cuenta como son la edad, sexo, posición socio-económica (a destacar si se trata de
sectores distintos puesto que variará su estatus, por ejemplo sin son de ámbito rural o
urbano), nivel de educación, etc., y la relación que se establece ente ellos; otros
aspectos que condicionan el comportamiento de la población como su lengua, cultura,
etnia, religión o corriente política; o también el rol que desempeñan en la comunidad y
en qué ubicación geográfica se encuentran.
Cabe insistir en los criterios de selección de los grupos destinatarios o beneficiarios,
teniendo en cuenta la multiplicidad de aspectos que conforma cada persona, ya que en
ocasiones, a “las agencias pueden parecerles criterios objetivos y racionales, y a los
propios elegidos pueden parecerles absurdos, pues esa característica por la que se les
65 Entendiendo como grupo poblacional a la población meta o receptora de la ayuda. Véanse ejemplos
en: PNUD – México. Vinculación del trabajo del PNUD en México con los Objetivos de Desarrollo del Milenio. Disponible en <http://www.undp.org.mx/spip.php?page=article_noticias&id_article=78>; Observatorio de la Cooperación al Desarrollo en el Ecuador, disponible en <http://www.cooperacion.org.ec/>; PÉREZ DE ARMIÑO, Karlos (dir.); ABRISKETA, Joana (et alt.). Op.Cit., entre otros.
46
elige tal vez no da lugar a que se identifiquen entre sí o quieran trabajar juntos.”66 Hay
que tener en cuenta las rivalidades y competencias que pueden existir en un mismo
grupo meta, y como establece el criterio del “do no harm”, considerar todos los
aspectos de las identidades de las personas en conjunto dentro de su contexto social.
Aspectos generales y específicos a la vez, que perfilan la naturaleza de los beneficiarios
y ayudarán a determinar cuáles de ellos serán los receptores directos de la ayuda y si
podrán formar parte activa de la actuación e involucrarlos como actores, o si por el
contrario pueden afectar o interferir negativamente en el transcurso y resultado final
de la intervención, y por lo tanto, no tendrían que considerarse como actores
partícipes. Todas estas especificidades ayudan en cada momento a planificar una
actividad en concreto para que cada uno de los actores contribuya en la actuación,
aprenda conjuntamente con los demás y ayude a promover la cooperación desde el
seno de la misma población.
Conviene apuntar aquí que la participación67 de la población en todo el proceso de la
actuación de cooperación, desde la planificación a la evaluación pasando por la
implementación, es relevante para que los beneficiarios se sientan protagonistas y
adapten como suya la actividad, de modo que la motivación puede derivar a resultados
positivos y eficientes. Además, mediante “la participación ciudadana, conocer a través
de la misma cuál es el sentir de la población, incrementará esa eficiencia, ese
rendimiento,”68 deseado para la actuación.
66 PÉREZ DE ARMIÑO, Karlos (dir.); ABRISKETA, Joana (et alt.). Op. Cit.
67 Un tema interesante a desarrollar sería analizar como la motivación y la implicación de la población
receptora pude incidir, positiva o negativamente, en la implementación de una actuación de cooperación.
68 BLAS, Asier; IBARRA, Pedro. “La participación: estado de la cuestión”. [en línea]. En: Cuaderno de
Trabajo de Hegoa (Universidad del País Vasco), N. 39, enero 2006. Disponible en: <http://pdf2.biblioteca.hegoa.efaber.net/ebook/15289/Cuaderno_de_trabajo_39.pdf>, consultado en septiembre 2009.
47
Además, también hay que considerar la repercusión que puede tener la intervención a
terceros, es decir, población que no se implica dentro de la acción pero que de algún
modo se ve afectada, directa o indirectamente, por el trabajo de los cooperantes. En
este caso, se les tendrá en cuenta por si es posible involucrarlos en el proyecto, o por el
contrario es preferible mantenerlos al margen de la acción. Esto se evaluará con más
detenimiento cuando se hable de los actores.
Toda la información recopilada en el contexto delimita en cierto modo el motivo de la
actuación, el por qué, dado que expone unas circunstancias concretas que requieren
una solución o intervención determinada.
Es importante que después de analizar cada apartado se vuelva a revisar tantas veces
como sea necesario para poder evaluar en todo momento qué mecanismos se están
empleando y los efectos que pueden ocasionar, con la finalidad de que no sean
negativos para los beneficiarios. Cada vez surgirán nuevos elementos y nuevas
cuestiones que permitirán extraer más información y mecanismos para que la
actuación resulte beneficiosa. A modo de recopilatorio, se pueden realizar una serie de
preguntas que permiten resumir el proceso de toma de decisiones en cada etapa y, a
su vez, ofrece la oportunidad de reflexionar sobre nuevos dilemas o informaciones que
En un proyecto de participación local y voluntariado en la recogida de residuos, promovido
por el PNUD, entre otros organismos, el equipo experto en el « Do No Harm » contribuyó a
la elección y la gestión del material del proyecto, la elección de los colaboradores directos,
el posicionamiento ante el « poder moderno » y el « poder tradicional », el nuevo mercado
y la cooperación con el FNUDC (Fondo de las Naciones Unidas para el Desarrollo de la
Capitalización), la concepción del proyecto y su presupuesto. Todos estos elementos se
tuvieron en cuenta durante la formulación del proyecto en la que participaron tanto la
sociedad civil, como el gobierno regional y las organizaciones internacionales.
Fuente: Projet « promotion de la participation locale et du volontariat dans la gestion des déchets de
la ville de Gabú » (Guinée – Bissau). Programa de las Naciones Unidas para el Voluntariado,
diciembre 2005.
48
ampliarán o concretarán el marco de actuación desde la perspectiva de no hacer
daño.69
69 Adaptación propia del marco de trabajo del The Do No Harm Framework for Analyzing the Impact of
Assistance on Conflict, elaborado por el CDA, Op.Cit.
¿Dónde?
- ¿Por qué escoger este lugar?
- ¿Por qué este país y no otro?
- ¿Por qué esta región y no otra?
- ¿Por qué en este poblado y no el otro, o ambos?
- ¿Cuál es la necesidad a cubrir?
- ¿Qué indicadores se han utilizado?
- ¿Cuál es el grupo meta o población más vulnerable?
- ¿Dónde se encuentra?
- ¿A quién dejamos fuera y por qué?
- ¿En qué ámbito/sector se quiere incidir principalmente?
- ¿Cuáles son las capacidades y limitaciones del país receptor?
- ¿Cuál es el legado histórico y cultural del país receptor? ¿Influirá en la
actuación?
- ¿Cuál es la situación del país receptor en el contexto mundial (relaciones
políticas, económicas, sociales)?
- ¿Cuáles son las capacidades y limitaciones del país donante? ¿Qué situación
tiene en el contexto mundial?
- ¿Hay otras actuaciones en la misma área escogida?
- ¿Hay colaboración?
- ¿Hay experiencia previa o capacidades adquiridas?
49
ii. Por qué
Una vez delimitada la primera parte del contexto en torno a la cuestión dónde, se
detecta el motivo de la actuación, es decir, el por qué. Con el análisis de características
y necesidades de la ubicación se desprende la causa que motivará al donante a actuar
para reducir, mitigar o superar las problemáticas que impiden el desarrollo sostenible
de la población, con la intención a la vez de arraigar unas prácticas y actitudes en pro
del autodesarrollo mediante una intervención que no genere efectos negativos.
Siempre y cuando la motivación del donante y el tipo de actuación sean coherentes y
pertinentes70 en cada situación, se podrá proseguir con el diseño y planificación de un
proyecto o un programa de intervención.
Por otra parte, la motivación del donante sirve para identificar también quiénes son los
que ofrecen la ayuda, cómo procederán y qué intereses particulares tienen (políticos o
económicos, por ejemplo, en el caso de los estados). Ampliando la información sobre
los países donantes, también cabe destacar algunos apuntes más. Desde la visión del
“do no harm”, antes de empezar a actuar, el agente cooperante, responsable de la
implementación, debe hacer una autorreflexión sobre sus propias características y así
conocer las fortalezas y debilidades de que dispone, así como los riesgos que puede
comportar su actividad. Habrá que diferenciar por tanto, entre el agente donante, que
puede ser un país o una organización (que no dependa de ningún estado), o el agente
implementador, el personal que desarrolle el trabajo de cooperación. Esto permitirá
saber qué tipo de actuación se puede alcanzar, en proporción o concordancia con los
recursos propios disponibles. Se trata en definitiva de una autocrítica para identificar la
naturaleza del donante o su propia identidad.
Para identificar sus capacidades y limitaciones, el donante debe cuestionarse sobre si
tiene experiencia o no en el terreno y sector donde quiere actuar, puede haber tenido
años de experiencia en un ámbito y país, y continuar ampliando actuaciones, o por el
contrario cambiar completamente la ubicación, lo que puede repercutir
70 Criterios de actuación y evaluación que propone el CAD y la OCDE.
50
negativamente, dado que empezaría casi desde cero; si quiere continuar o cambiar el
tipo de actividad o área de actuación, lo que también implicaría la adquisición de
nuevos conocimientos y prácticas; si dispone de suficientes recursos económicos y
materiales, de cuáles se servirá, de dónde provienen y en qué los invertirá
exactamente; si buscará nuevos recursos en el país receptor o los recaudará
previamente, lo que puede perjudicar el impacto de la acción puesto que puede
afectar indirectamente en algunos sectores; tendrá que evaluar el personal de que
dispone y si se contempla la posibilidad de contratar a más, en este caso si será del país
donante o del receptor (hecho que fortalecería las capacidades locales y un mejor
conocimiento de la realidad local), y si es necesaria una formación específica, además
de velar por los derechos laborales de cada uno. Se evaluará la disponibilidad material
y temporal; los principios o ideales en que se basa pueden condicionar el realizar un
tipo de actuación determinada, ya sea por valores éticos, religiosos o políticos que se
contrapongan con el carácter de la actividad en sí o del receptor, etc.
Igualmente es relevante en este punto, la naturaleza de los socios que tiene el agente
como entidad, aquéllos que de un modo u otro colaboran a la realización de sus
proyectos o actividades en general. En vista a garantizar unos buenos resultados para la
actuación, se evaluará qué tipo de relación se establece y qué beneficios o perjuicios
pueden conllevar esos colaboradores. Dependiendo de si son instituciones, gobiernos,
ONGs, asociaciones, fundaciones, sindicatos, una organización del país receptor que
actúe como implementador local, etc., pueden proporcionar recursos financieros para
cubrir gastos o para ampliar el número de actividades; pueden dar publicidad entre
otros países del norte o del sur, de modo que se da a conocer el donante como agente
de cooperación y sus actividades, al mismo tiempo que educa y sensibiliza la población.
Además, el apoyo organizativo proporciona material o personal para ampliar o mejorar
el trabajo; y al establecerse vínculos de colaboración con otras entidades u organismos,
es posible realizar actuaciones en el terreno o apoyar tareas de organización. En el caso
de los gobiernos, la aportación de más subvenciones o apoyo en la realización de sus
actividades beneficiaría al cooperante del país donante o del norte (pero a tener en
cuenta, como se verá más adelante, la dependencia que pueda surgir entre estado y
agente cooperante). Asimismo, puede haber un apoyo en cuestiones no evidentes en
51
el trabajo cotidiano pero sí imprescindibles como temas fiscales, jurídicos o
administrativos; y las donaciones privadas o a título personal también supondrán una
ampliación de los recursos económicos o materiales. Si se trata de un agente local o
internacional, con sedes en distintos países, la incidencia de la actuación puede ser
mayor; y por otro lado, una gran participación del implementador local, repercutirá en
el buen desarrollo de sus actividades con los beneficiarios.
En contra, también se considerará estos socios desde otra perspectiva, como se decía,
en consonancia a los perjuicios que puedan afectar o interferir en el trabajo del
donante. Las malas relaciones con otros agentes pueden perjudicar la divulgación de
las actividades o la reputación del cooperante entre la sociedad civil, o afectar al flujo
de recursos o conocimientos entre entidades del mismo sector. Como se decía
anteriormente, una oposición o divergencia en el ámbito político supondría, en algunos
casos, un recorte de la financiación por parte de la administración pública, y esto
implicaría no disponer de suficientes recursos para mantener el personal y unos
materiales mínimos. Se trata de una dependencia, a veces inevitable, entre las
organizaciones y las instituciones públicas, en que sin las subvenciones que se otorgan,
muchas de las pequeñas entidades no podrían sostener el mantenimiento de sus
actividades y, por tanto, la realización de cualquier actuación de cooperación.
Siguiendo los criterios del “do no harm”, sería ideal que los agentes cooperantes no
dependieran de otros organismos (fondos públicos o entidades privadas, por ejemplo)
para la realización de sus actuaciones puesto que condiciona el carácter, la motivación
y la afluencia de sus actividades. Se trata a la vez, de que el donante reafirme su
identidad ante cualquier otro agente y sea coherente y fiel a sus principios, sabiendo
en cada momento, cuáles son sus prioridades de actuación y los socios que respetan su
identidad.71
Otros posibles problemas surgen cuando alguna asociación se opone al carácter del
donante, ya sea por motivos religiosos, políticos, culturales, etc., y esto repercuta en su
publicidad; así como su ausencia en los medios de comunicación y comporte el
71 SOGGE, David. Op. Cit., pp.21-48.
52
desconocimiento del agente cooperante y sus actividades, a la vez que no se educa ni
sensibiliza a la población. O puede que la contraparte no cumpla con su compromiso
de colaboración y dificulte la comunicación con los beneficiarios y el desarrollo de
cualquier implementación…
Con todo, la experiencia previa en otras intervenciones también perfila el carácter de la
actuación, ya que las buenas y malas prácticas aportan nuevos conocimientos, y esto
permite valorar el potencial propio de reacción o creatividad ante situaciones nuevas.
Se trata del valor añadido72 que el agente donante podrá adaptar en las intervenciones
para mejorar los resultados y no volver a hacer daño, si este fue el caso. Las buenas
prácticas permiten continuar trabajando con un grupo de población determinado e
intentar ampliar la actividad o el número de participantes, si hay una buena
participación. Si los objetivos se han cumplido adecuadamente, permitirá seguir con un
método de trabajo determinado y aplicarlo a otros ámbitos; involucrar otro sector
poblacional e intercambiar experiencias entre personas distintas, promoviendo la
divulgación de las actividades.
Al comprobar la viabilidad de la actuación en el contexto que se aplica, es posible
ampliar la actividad a comunidades, pueblos o áreas cercanas; aprovechando, a la par,
72 Entendido como las capacidades y conocimientos adquiridos a través de la experiencia y que facilitará
el posterior trabajo a realizar, además de la distinción con otros agentes que no hayan ejercido las mismas actividades.
Muchas organizaciones establecen unos principios con los que se identifican y caracterizan
sus actuaciones. Cruz Roja Española, de acuerdo con lo establecido en el Comité
Internacional de la Cruz Roja, tiene como principios fundamentales: humanidad,
imparcialidad, neutralidad, independencia, carácter voluntario, unidad y universalidad.
Además, también se pueden acotar distintos ámbitos de intervención. Intermón Oxfam
trabaja en cuatro áreas: proyectos de desarrollo, acción humanitaria, comercio justo y
campañas de sensibilización. Independientemente de si son estados u organizaciones, el
factor financiero se verá modificado dependiendo de las colaboraciones con otros entes,
públicos o privados, nacionales o internacionales.
Fuente: Web de Cruz Roja Española, disponible en <http://www.cruzroja.es>, y web de Intermón
Oxfam, disponible en <http://www.intermonoxfam.org>. Consultado en octubre 2009.
53
el interés conjunto tanto para la participación como para la divulgación, y así, otras
experiencias adquiridas que pueden repetirse o ampliarse. Prácticas que, dados los
efectos positivos que generan, pueden promoverse e incentivar a los beneficiarios para
que ellos adopten la responsabilidad de su sostenibilidad y así poder garantizar el
“efecto multiplicador” deseado de todas las actuaciones de cooperación: mediante la
práctica continua y el arraigo de unos conocimientos y un interés común, se puede
transmitir el ideal de cooperación entre los mismos actores beneficiaros y que sean
ellos los próximos cooperantes en las zonas circundantes.
En definitiva, el valor añadido supone la especialización del agente cooperante que
ejecuta las actuaciones de modo que amplía el conocimiento sobre una población
determinada y unos sectores, pudiendo así, perfeccionar sus intervenciones y asentar
las bases de la sostenibilidad del proyecto.
Asimismo, el conocimiento y la reflexión sobre posibles malas prácticas también
enriquecen el valor añadido del cooperante puesto que le permite conocer qué
mecanismos perjudicaron las actuaciones pasadas, por su mal desarrollo, la poca
incidencia o aceptación entre los beneficiarios, el perjuicio ocasionado en el medio
Algunos ejemplos de la concienciación de aplicar la cooperación al desarrollo con el objetivo de promover dicho efecto multiplicador:
Desde la Dirección General de Relaciones con África, del Gobierno de Canarias, un proyecto de cooperación con distintos países africanos tiene como finalidad promover el efecto multiplicador mediante la formación portuaria, destinando recursos económicos y dirigido tanto a trabajadores como directivos de los puertos participantes en el proyecto. El objeto del proyecto es iniciar un proceso de formación regular de técnicos y trabajadores portuarios que permita transferir conocimientos y prácticas a disposición de los puertos de África, para que las infraestructuras se vean mejoradas y reduzcan los altos costes que influyen negativamente en la economía de estos países, asegurando así su autodesarrollo. Otro ejemplo lo encontramos en el ámbito académico con la Fundación ETEA para el Desarrollo y la Cooperación, que en su programa de cooperación universitaria cuenta con la participación de distintas universidades latinoamericanas. En ella se establece un modelo de cooperación entre universidades con el objetivo de “aprovechar el efecto multiplicador en la formación de formadores y la mejora de las capacidades y recursos de las universidades contrapartes”.
Fuente: Proyecto “Propiciar el efecto multiplicador en la ayuda canaria al desarrollo. El ejemplo de la formación portuaria.” Cooperación Canaria, Gobierno de Canarias, disponible en <http://www.cooperacioncanaria.com/proyectos.asp>. Y Fundación ETEA – Cooperación Universitaria, disponible en < http://www.fundacionetea.org>, consultados en octubre 2009
54
ambiente, la poca equidad de participación entre hombres y mujeres; qué actores
mostraron más o menos interés o los que incidieron negativamente en el resultado
final, por la poca implicación o disponibilidad; la relación entre los distintos grupos
participantes en una misma actividad… En resumen, malos resultados debido a una
falta de previsión o desconocimiento de unos hábitos, costumbres, tradiciones
culturales o simplemente disponibilidad de los mismos beneficiarios, pero que servirán
para próximas intervenciones a modo de nuevos dilemas o dificultades a considerar.
Así pues, siguiendo un criterio de humildad, se evalúan las capacidades y limitaciones
del propio agente donante, y los riesgos o beneficios que comporta actuar con unos
socios determinados, para determinar qué tipo de actuación se puede abastar, y con el
fin de que la intervención resulte pertinente y coherente con la situación que se
presente.
¿Por qué?
- ¿Qué elementos son los causantes de conflicto o inestabilidad?
- ¿Por qué actúa el país donante?
- ¿Qué motiva a actuar y de qué recursos, socios y experiencia dispone?
- ¿Qué espera detener o modificar con la intervención?
- ¿Por qué éste? ¿Cuál es el valor añadido de la organización para intervenir
en este problema y en este sitio?
- ¿Por qué necesita ayuda el país receptor?
- ¿Por qué este grupo poblacional y no otro?
- ¿Por qué esta actividad y no otra?
- ¿Por qué funciona o no una actividad? ¿Hay efecto multiplicador?
55
iii. Cuándo
Finalmente, dentro de la dimensión del contexto también se incluye el factor tiempo.
Se trata del cuándo se realizará la actuación de cooperación dependiendo, por un lado,
del donante y su predisposición para poner en marcha cualquier proyecto o
intervención, y por otro según la situación o necesidades en que se encuentren los
beneficiarios, y que preste a una actuación en un momento adecuado y propicio.
Es inevitable en ambos casos cuestionarse si “ahora” es el momento de actuar o no,
qué tiene este momento que lo hace favorable o inoportuno para una intervención. En
lo que se refiere al donante, la decisión de actuar antes o después vendrá condicionada
por distintos factores que pueden variar según el tipo de actuación o la situación en
que se encuentre el agente cooperante encargado de realizarla. Hechos como la
estrategia habitual de intervención, según los criterios o principios de la entidad;
coordinación con otras actividades; la disponibilidad real de recursos; captación de
personal con preparación adecuada y estabilidad en el proyecto en cuestión; movilidad
de personas y materiales, etc., son algunos de los factores que ayudan a determinar el
calendario de actuación del donante, para que la actuación sea factible.
Por otra parte, la actuación en sí también requerirá un momento o una época
determinados según sus necesidades o condicionantes en el país receptor, y que se
puede retrasar o avanzar según convenga para que se adapte mejor a las circunstancias
y a los beneficiarios. De manera que dependerá del tipo de actuación y de sector
dónde se quiere intervenir, de la situación del gobierno del país, de factores climáticos,
gestión de servicios públicos para la población, etc., y de la capacidad del donante para
intervenir en un momento específico adecuado.
Algunos ejemplos que pueden condicionar el momento de la actuación por sus
características o la situación del país receptor serían la época de cosecha, que vendrá
determinada básicamente por la climatología regional y esto establecerá una
disposición predeterminada de la población receptora en el caso que el cultivo fuera su
ocupación principal; así como también puede influir la climatología en general con las
temperaturas, lluvias, vientos que pueden ser un impedimento para realizar las
actividades debido a las malas condiciones el terreno y la dificultad de
56
desplazamientos; o las epidemias estacionales que dejarán inactiva a una parte de la
población con la que no se podrá contar para las actividades y los posibles riesgos de
contagio de los cooperantes, lo que supone la decisión de actuar pese a los riesgos o a
esperar por prudencia; además de los inesperados desastres naturales como
inundaciones, sequías, olas de calor, plagas, etc., que ofrecen condiciones extremas
para actuar y, a menudo, ponen al país receptor en estado de alerta.
Los períodos de escolarización también suponen un determinante de la disponibilidad
de los beneficiarios, si se trata de niños o jóvenes, y de sus padres, en cuanto a
organización de tareas o recursos necesarios; manifestaciones de estudiantes o
sindicatos, por ejemplo, pueden predecir una inestabilidad de la política interna del
país, con lo que el agente cooperante tiene que ser prudente para no interferir entre
los distintos bandos y crear involuntariamente a un sector preferente para sus
actuaciones, además de actuar en contra las disposiciones del país.
Una inflación o deflación inesperada en la economía del país receptor perjudicaría, por
ejemplo, los precios de los materiales o los salarios de los trabajadores, impidiéndoles
invertir su tiempo en otras actividades no remuneradas o, por el contrario, se tendrían
que diseñar actividades en las cuales se pudieran beneficiar, económica y socialmente.
Las elecciones y cambios de gobierno, ya sean democráticos o a raíz de alguna
inestabilidad interna, también pueden suponer un problema para la cooperación
puesto que desestructura todas las relaciones establecidas hasta el momento e implica
nuevas negaciones y acuerdos; o por otro lado, las relaciones políticas que el país
receptor establece con la comunidad internacional, también pueden suponer una
inestabilidad de consensos y reorganizar de nuevo las relaciones. Las migraciones de
personas, tanto dentro del país como con personas procedentes de otros estados,
pueden desequilibrar la estructura económica o causar algún conflicto social o étnico,
entre otros, lo que implica el conocimiento por parte del cooperante de los distintos
grupos y relaciones entre ellos. El estado de las infraestructuras (transporte,
comunicación…) o la adquisición de nuevas tecnologías, puede, en determinadas
ocasiones, facilitar el trabajo a realizar o incentivar a la población receptora a mejorar
instalaciones y a participar en actividades con las nuevas adquisiciones.
57
Además, el factor cultural también condicionará las actuaciones, ya sea en la
configuración de calendarios anuales, lo que implica una coordinación de fechas entre
cooperantes y beneficiarios; los períodos de vacaciones, días festivos o incluso las
celebraciones religiosas (Navidad, Ramadán, Dipavali…) son elementos culturales y
religiosos a la vez, de cada región, a tener en cuenta a la hora de planificar las
actividades, puesto que la población invertirá su tiempo en ellas, a no ser que se
compaginen las actividades con estas festividades, o pueden comportar limitaciones
considerables a los beneficiarios.
Otro aspecto temporal a considerar es el tiempo que durará la implementación de la
actuación, y por tanto cada etapa, que variará en función de la disponibilidad y
características de beneficiarios y colaboradores para generar una implementación con
resultados positivos. Desde la noción participativa del “do no harm” se incluye a los
En una provincia rural de la China, el Banco mundial financió un proyecto de reforestación
en zonas rurales, donde la población padecía cada vez más la pobreza. Gracias a la
participación de agricultores locales, pero también a la adopción de nuevos conocimientos
especializados y a la introducción de nuevas técnicas los resultados fueron cambios
radicales en materia medioambiental y social. En seis años (de 1998 a 2004) el ingreso
promedio anual per cápita aumentó un 150% en las zonas del proyecto. Esto coincidió con
la reforma político-económica de la China.
“Les llevó varios años de arduo trabajo -sobre todo por parte de los aldeanos de más edad
que no habían emigrado a las ciudades- convertir la ladera de 68 hectáreas en la huerta
productiva que es hoy en día. Los agricultores obtuvieron pequeños préstamos a través de
un proyecto financiado por el Banco Mundial y plantaron castaños de alto rendimiento,
resistentes a las sequías, bajo la dirección de los asesores forestales del condado. Se
construyeron terrazas escalonadas en la ladera para reducir la erosión y se capacitó a los
agricultores en el uso de fertilizantes y en la lucha contra las plagas a fin de lograr mejores
resultados.
Ahora, las castañas han creado una pequeña economía aparte que, a su vez, ha generado
nuevas fuentes de trabajo, como su transporte y procesamiento en ciudades cercanas.
Hace poco los aldeanos compraron 50 computadoras con conexión de banda ancha para
poder comercializar sus productos con más eficacia por Internet.”
Un caso que ejemplifica como las distintas circunstancias y actividades responden a
necesidades variadas del momento.
Fuente: Proyecto para zonas pobres: ayuda a la reforestación de China. Proyectos del Banco
Mundial. Disponible en: <http://go.worldbank.org/5NOEWBJ980>, consultado en noviembre 2009.
58
beneficiarios de un buen principio en la actuación, ya sea en el diseño o planificación,
hasta que se considera finalizada y en todas las etapas de evaluación (ex - ante,
durante y ex - post).73 En todo este proceso la duración puede variar por distintos
factores referentes a los actores.
En el ciclo de proyecto se ordena cada etapa mediante un cronograma,74 el cual
permite clasificar cada actividad según el periodo de realización. En cambio, el
concepto del “do no harm” contempla el factor tiempo desde el punto de vista de la
adaptación de los actores, y sobre todo de los beneficiarios, en cada momento. Es
decir, frente a la importancia de seguir un cierto orden en la realización de las
actividades también es necesario conocer los factores que determinarán la duración
(características de los beneficiarios) y los elementos a tener en cuenta (aptitudes
culturales o sociales) para analizar los mecanismos de actuación y qué riesgos se
pueden presentar en cada momento.
Así pues, se planearán y utilizarán los mecanismos de intervención en función del
tiempo real disponible de los beneficiarios. Al hacerlos partícipes activos de las
actividades, ellos mismos confirmarán cuántas horas podrán participar, qué días, en
qué momento del día, si vendrán a título personal o en representación de una familia,
73 Debe considerarse la transcendencia de la evaluación en cada etapa de la actuación, puesto que
permite analizar la repercusión de cada decisión tomada. Véase también: GARCIA FORÉS, Estefania. “La evaluación de las ONGD: un reto para mejorar la ayuda al desarrollo. Realidad y perspectivas.” Memoria de Máster de la Universitat de Barcelona, junio de 2005.
74 GÓMEZ GALÁN, Manuel y SAINZ OLLERO, Héctor. Op. Cit.; PÉREZ DE ARMIÑO, Karlos (dir.); ABRISKETA,
Joana (et alt.), Op. Cit.; Comisión Europea.
Figura 7: Ejemplo de esquema de un proyecto de cooperación de la Comisión Europea.
Fuente: <http://ec.europa.eu/index_es.htm>,
consultado en septiembre 2009.
En cada etapa de un proyecto de cooperación se incluirán los beneficiarios para involucrarlos en la toma de decisiones y en la implementación de toda actividad, desde la identificación hasta la evaluación.
59
clan o grupo, si vendrán solos o con cónyuges o hijos, etc. Estos elementos están
sujetos, a la vez, a los rasgos culturales que definen a los beneficiarios como el ritmo de
vida, el rol de cada persona o la prioridad a ciertas actividades.
Antes de empezar con cualquier actuación es importante definir y establecer la línea
base75 que se quiere seguir y especificar su finalidad. Por ello se elabora un
diagnóstico76 que contiene toda la información necesaria con la que posteriormente se
definirá la metodología de trabajo. Este diagnóstico confirma la identificación previa
que se ha hecho sobre la situación de desarrollo del país, y se justifica con fuentes de
verificación, con el fin de asegurar su legitimidad. A partir de ahí, se podrán diseñar los
planes de actuación o los Planes Operativos Anuales (PAO), donde se exponen los
principales componentes de la actuación de cooperación y se identifican los
mecanismos de actuación que sean factibles, como puede ser la situación actual de la
zona, el contexto socio-económico, las potencialidades de la región, las características
de la población, los posibles elementos conectores o divisores que ayudarán o
impedirán la puesta en funcionamiento de la actuación, etc. “Sólo un correcto
diagnóstico de la situación de partida, de las causas que la han determinado y de los
efectos que produce, permitirá poder plantear de manera coherente el escenario al que
se quiere llegar, las posibilidades de alcanzarlo y los medios que habrán de
emplearse.”77
75 Entendiendo el estudio de situación y análisis de indicadores que permitirán identificar el problema
para una posterior planificación de actividades y objetivos a alcanzar.
76 GÓMEZ GALÁN, Manuel y SAINZ OLLERO, Héctor. Op. Cit.; PÉREZ DE ARMIÑO, Karlos (dir.); ABRISKETA,
Joana (et alt.), Op. Cit.
77 GÓMEZ GALÁN, Manuel y SAINZ OLLERO, Héctor. Op. Cit.
60
Esta información permite analizar los posibles riesgos78 que irán surgiendo a lo largo de
la implementación y se pueden plantear los mecanismos de prevención o resolución de
conflictos para que finalmente la repercusión no tenga efectos negativos. Hechos como
la no participación debido a incompatibilidad, conflictos familiares o laborales,
concepción cultural de la actividad, etc., pueden ser perjudiciales para toda la
actuación. Es recomendable revisar tantas veces sea posible este esquema de ideas
previo al proyecto, dado que es muy probable que a medida que se avance, surjan
nuevos dilemas o contratiempos.
Con el fin de no ocasionar efectos negativos, toda intervención tiene que ser factible y
humilde desde el punto de vista de disponibilidad, capacidades y recursos adecuados
de los beneficiarios y las capacidades de los implementadores (locales y extranjeros).
En determinados casos puede que el donante necesite un periodo de detección y
selección del personal adecuado, que tendrá que ejecutar las distintas actividades
programadas. El personal, ya proceda del país donante o del mismo receptor, tendrá
que conocer la situación a la que se enfrenta y la multiplicidad de factores que la
conforman. En ocasiones es necesario un tiempo de formación, en este caso, se podrá
hablar de la oportunidad de generar trabajo local de manera que indirectamente se
78 En el ciclo de proyecto equivaldría a la configuración de un árbol de problemas.
Los buenos resultados derivados de las planificaciones con los PAO certifican una
metodología preventiva que funciona y es recomendable para aplicarlos en distintos
ámbitos y países. Un ejemplo es la agencia norteamericana de cooperación USAid que
introduce estos planes en sus guías de actuación en el marco del medio forestal de América
Latina.
Uno de los objetivos para la implementación de estos planes es que “una buena
planificación del manejo forestal ayuda a seleccionar las actividades que mejor contribuyen
al cumplimiento de los objetivos del manejo, tomando en cuenta aspectos económicos,
sociales y ecológicos. Además permite proyectar el estado al futuro del bosque y su
importancia para las futuras generaciones que dependerán de este bosque para su
supervivencia e ingresos económicos.”
Fuente: USAID. Guías metodológicas para desarrollar planes operativos anuales y generales de
manejo forestal en bosques naturales. [en línea] Estado Unidos: Usaid. Disponible en:
<http://www.usaid.gov/>, consultado en octubre 2009.
61
influirá en el mercado laboral del país, y habrá un empoderamiento de las capacidades
locales por la apropiación de nuevos conocimientos o actividades.
Por otra parte, tanto si se trata de personal cooperante como de los beneficiarios, se
respetarán los derechos y obligaciones de cada persona. Desde el enfoque del “do no
harm”, se conciliará la vida laboral con la familiar, impidiendo por ejemplo, la
sobrecarga de horas a las mujeres que, en la mayoría de sociedades, son las
encargadas del cuidado de los niños; no acumular horas de trabajo y dejar tiempo de
descanso; facilitar áreas de reposo o espacios aptos para que también puedan asistir
los niños; etc. En definitiva, facilidades para que puedan participar en la actuación pero
respetando los derechos laborales recogidos en los convenios sobre derechos del
trabajador que establece la Organización Internacional del Trabajo (OIT)79, respecto a
horarios, sectores o género.
Asimismo, se considerará el rol o la pertenencia de cada actor en un sector
determinado de la sociedad, el cual vendrá determinado por factores tan variados
como el género y la edad, las responsabilidades que tenga en el conjunto de la
comunidad, si tiene asignado un trabajo específico, si culturalmente se acepta que
mujeres y hombres trabajen juntos, etc. En todo caso, se tendrán que respetar los
derechos humanos80 en cuanto a igualdad entre todos los actores, pero con cierta
precaución en su aplicación o introducción en determinadas sociedades, puesto que
elementos esenciales como la equidad de género, pueden ser motivo de conflicto y
perjudicar así la implementación de cualquier actividad. Lo mismo sucede con la
libertad de expresión, la distinción entre culturas o los derechos jurídicos, entre otros.
79 Los convenios referentes a la Normas Internacionales del Trabajo pueden consultarse en la página web
la OIT: <http://www.ilo.org/ilolex/spanish/convdisp1.htm>, consultado en octubre 2009.
80 Declaración Universal de los Derechos Humanos, aprobada por la Naciones Unidas el 10 de diciembre
de 1948. Disponible en <http://www.un.org/es/documents/udhr/>, consultado en octubre 2009.
62
En suma, “la cooperación al desarrollo dirigida a la promoción y garantía de los
derechos humanos no se puede limitar a los derechos civiles y políticos, sino que tiene
que abrazar todos los derechos humanos generalmente reconocidos.”81
81 SAURA I ESTAPÀ, Jaume. Drets Humans i Cooperació al Desenvolupament. [en línea] En: Institut dels
Drets Humans de Catalunya, Barcelona 2006. Disponible en: <http://www.idhc.org/cat/documents/InformeCOOPERACIO.pdf>, consultado en septiembre 2009.
El enfoque del “do no harm” respecto la cuestión de género tiene distintos puntos a contemplar en cuanto a una actuación de cooperación y los posibles efectos:
Aspectos a considerar:
- Preguntar dónde están las mujeres y los hombres en el contexto en general, y entre los conectores y los divisores en concreto. - Preguntar cuáles son las dimensiones relativas al género en las capacidades de resolución de conflictos (sistemas e instituciones; actitudes y actuaciones; valores e intereses comunes; experiencias comunes; símbolos) - Preguntar sobre cómo y por qué la transmisión de recursos y los mensajes éticos afectan diferente a hombres y mujeres. - Identificar y utilizar documentación sobre la no segregación de sexos, y si no es posible, buscar información en forma de experiencias y documentos administrativos. - Pensar en estrategias para involucrar a los hombres y minimizar la resistencia masculina a cuestiones específicas de género. - Evitar los estereotipos de hombres y mujeres. En lugar de ver a las mujeres como víctimas, pensar en medios creativos para fortalecer y aumentar las capacidades de hombres y mujeres. Aspectos a evitar:
- Evitar utilizar un lenguaje clasista o despectivo en ambos sentidos. - Evitar dar por sentado que mujeres y hombres pertenecen a grupos homogéneos y, que por tanto, tengan los mismos intereses y necesidades según su sexo. - Evitar la incertidumbre sobre los propósitos de la actuación respecto a la equidad de género en general, la participación y el empoderamiento en particular de las mujeres, así como la “masculinidad debilitada” (homosexuales, discapacitados físicos o enfermos). Fuente: SwissPeace. Gender&Do No Harm. Suiza.
63
En definitiva, la noción del “do no harm” se centrará en aquellos mecanismos de
implementación que, tras previo análisis de compatibilidad y prevención de riesgos,
resulten los más adecuados al contexto y se adapten a la disponibilidad de los actores.
Siempre y cuando se trate de actividades factibles por los beneficiarios y a la vez
garanticen la sostenibilidad de su desarrollo. En el marco estatal, por ejemplo, el
“garantizar la oportunidad, coherencia, eficacia y eficiencia de la política de
cooperación internacional para el desarrollo, se exige el establecimiento de
mecanismos de planificación, seguimiento y evaluación adecuados. Estos tres
elementos han de ser considerados íntegramente en un mismo ciclo, que se
retroalimenta permanentemente.”82
82 MINISTERIO DE ASUNTOS EXTERIORES DE COOPERACIÓN DE ESPAÑA. El proceso de planificación
estratégica geográfica en el marco del ciclo de la política de cooperación para el desarrollo. España: Ministerio de Asuntos Exteriores de Cooperación de España, 2005.
Una de las organizaciones no gubernamentales más destacada por su labor en el ámbito de los Derechos Humanos es Amnistía Internacional. Sus actuaciones se centran en la defensa todos estos derechos con el fin de que todas las personas pueden disfrutar de ellos.
“Todos los derechos humanos son indivisibles e interdependientes. Las violaciones de los DESC (por ejemplo, no proteger los derechos sobre las tierras de los pueblos indígenas, negar los derechos de educación a las minorías y prestar servicios de atención médica de manera no equitativa) a menudo están relacionadas con violaciones de los derechos civiles y políticos en forma de negaciones reiteradas. Del mismo modo que para el pleno disfrute del derecho a la libertad de expresión es necesario concertar esfuerzos en favor del derecho a la educación, para el disfrute del derecho a la vida es preciso tomar medidas encaminadas a la reducción de la mortalidad infantil, las epidemias y la malnutrición.”
Fuente: Amnistía Internacional, disponible en <http://www.es.amnesty.org>, consultado en octubre 2009.
64
¿Cuándo?
- ¿Por qué este momento para la intervención? ¿Cuál es la situación actual que hace
que ahora sea el momento de intervenir?
- ¿Esta situación es después del problema/conflicto, antes o durante?
-¿Cuándo tiene disponibilidad el país donante? (teniendo en cuenta recursos,
capacidades, elementos externos).
- ¿Cuándo tienen disponibilidad los beneficiarios?
- ¿Cuánto tiempo invertirán en la actuación?
- ¿Es compatible con su cotidianidad?
- ¿Cuándo tiene disponibilidad el país donante?
- ¿Cuánto tiempo durará la intervención?
- ¿Cuál es el plan de trabajo que se establece (línea base)?
- ¿Cómo saber cuándo se ha terminado la intervención? ¿Qué criterios se
utilizarán?
- ¿Qué habrá cambiado y cómo se sabrá?
- ¿Qué problemas podrán surgir a lo largo de la actuación?
- ¿Hay preparada alguna estrategia alternativa al plan inicial?
65
II. Actuación y Actores
i. Qué
Una vez identificados los problemas específicos o la situación que se quiere modificar,
así como los objetivos que se proponen alcanzar, se puede diseñar un plan de acción
en el que se definirán los mecanismos adecuados para la prevención de posibles
efectos negativos. A este periodo también se le denomina fase de formulación.83 En
esta etapa, se tendrán en cuenta todos los análisis y evaluaciones que se han realizado
previamente y se trasladarán a un marco práctico, con un conjunto de actividades
factibles, es decir, que sean realistas con la situación, humildes con los recursos y
capacidades de los actores, y que promuevan el efecto multiplicador ya mencionado.
Según el tipo de actuación que se quiere realizar dependerá también el tipo de ayuda
que se destina, si se trata de una cooperación técnica o financiera,84 lo que puede
condicionar la formulación de cualquier actividad de implementación. En cualquier
caso, tanto si trata de un tipo de cooperación u otro, se tendrá que valorar el efecto
que produce la presencia de los cooperantes así como las repercusiones de sus
actividades en distintos ámbitos de la sociedad beneficiaria.
83 GÓMEZ GALÁN, Manuel y SAINZ OLLERO, Héctor, Op. Cit.
84 Distintos tipos de Cooperación al desarrollo según sus características. Véase en GÓMEZ GALÁN,
Manuel y SANAHUJA, José Antonio. Op. Cit.
“Cuando se trata de cuestiones ambientales importantes de un país, el prestatario elabora
un plan de protección ambiental, donde se describen los problemas, se mencionan las
principales causas y se elaboran políticas y medidas concretas para solucionarlos. En el plano
social, se pueden realizar distintos tipos de estudios para analizar los perjuicios potenciales
para la salud, los recursos productivos, las economías y las culturas de las poblaciones
indígenas. En el plan para los pueblos indígenas se indican las intervenciones que el
prestatario tiene previsto realizar en las regiones indígenas si fuere necesario, con el objeto
de evitar o reducir los perjuicios potenciales para la población. Estos planes forman parte del
diseño del proyecto.”
Fuente: Banco Mundial
66
La cooperación implica de algún modo la transferencia de recursos, ya sean materiales
o no, y esto puede incidir en la economía, en el sistema sanitario o educativo, en la
repercusión social de ciertos grupos o sectores, la colaboración o rivalidad entre los
receptores, etc., por lo que es necesario evaluar qué recursos se proporcionan, cómo
se distribuyen y a quién, y quién decide su movilización o implantación entre los
beneficiarios. Todo esto en definitiva, seguirá una relación de coherencia y realismo en
que deberá basarse toda planificación, en vista a no incentivar ningún tipo de conflicto
o tensión entre los beneficiarios.
Entre las principales consecuencias negativas que pueden surgir de una intervención,
podemos destacar el robo de bienes por parte de la población receptora para una
posterior venta (y conseguir dinero para obtener otros productos) o para uso propio;
ciertas actividades de los cooperantes pueden influenciar el mercado interno creando
nuevas actividades y así promover la economía, o por el contrario, substituir ciertos
oficios y así eliminar una fuente de ingresos. La atribución de un grupo de beneficiarios
y no incluir ciertas personas, puede crear algún conflicto social y esto repercutir en la
colaboración entre la población y la implementación de cualquier actividad. En
ocasiones, los recursos provistos por los donantes pueden substituir a los locales y de
este modo se destinan a otros ámbitos o necesidades; lo mismo que puede ocurrir con
los servicios públicos (si el país dispone de ellos), cuando el Estado o los grupos
gobernantes declinan la responsabilidad de actividades concretas a los cooperantes,
como podría ser el aprovisionamiento de material sanitario y mejorar el servicio
médico, o canalización del agua en un pueblo o ciudad. En situaciones semejantes, el
trabajo que se realiza adoptando la actitud del “do no harm” escoge el
posicionamiento que influye más positivamente en los beneficiarios y su contexto
determinado.
Así pues, para no causar daño en el entorno de la sociedad con la que se colabora, se
diseñarán actuaciones que no interfieran en la economía del país receptor de la ayuda
o que tengan una repercusión positiva, lo que puede reforzar la economía global del
67
país y, como coinciden distintos autores,85 esto favorece el desarrollo y apacigua la
pobreza. Lo que se pretende no es eliminar actividades sino, a ser posible, crear de
nuevas; implementar un mecanismo que favorezca las relaciones interpersonales de los
actores, entre ellos y con el conjunto poblacional; y ante todo no sustituir las
responsabilidades del Estado o agentes competentes en cuanto a prestación de
servicios o derechos de la población, sino que los cooperantes deben incentivar tales
actuaciones y no remplazar el rol de cada agente.
85 Véase por ejemplo en: SACHS, Jeffrey. El fin de la pobreza: cómo conseguirlo en nuestro tiempo.
Barcelona: Debate, 2005; SALA i MARTÍN, Xavier. Economía liberal para no economistas y no liberales. Barcelona: Debolsillo, 2005, entre otros.
Desde una visión periodística, el público en general puede estar al corriente de los daños
que la cooperación internacional puede ocasionar en los países y sociedades en desarrollo
si no planifican o instauran sus actuaciones adecuadamente. A raíz de los estragos
ocasionados por el paso de un huracán en Guatemala que hizo necesaria la ayuda
alimentaria de emergencia, el 2005, el periodista Gustavo Duch escribió a modo de crítica
sobre los perjuicios que puede ocasionar esta actividad:
(…)“La gestión del Programa Mundial de Alimentos de las Naciones Unidas (PMA) debe ser
muy cuidadosa, entregando alimentos propios de los hábitos de consumo de la región. No
debe cronificarse más allá de lo necesario para no desincentivar las iniciativas de
producción de las gentes de la zona compitiendo a un precio muy inferior. Y sobre todo no
ha de ser un mecanismo para subvencionar los excedentes de agriculturas super-intensivas
como las de la Unión Europea y los Estados Unidos. Cuando las mágicas leyes de la oferta y
la demanda del mercado no funcionan, el PMA se convierte en un mecanismo estupendo
para financiar a potentes sectores cerealistas”.
Otro riesgo a tener en cuenta lo encontramos en el caso de abastecimiento de semillas
transgénicas para los agricultores, como el ejemplo de la multinacional Monsanto, en la
India, donde cada vez se imponen las semillas transgénicas, patentadas y propiedad de
multinacionales, que imponen altos precios para los agricultores y dependencia de un
producto para mantener sus cosechas.
Fuente: DUCH, Gustavo. Con los pies en la Tierra, artículo Hay ayudas que no ayudan, en El Periódico
de Catalunya, 14 de noviembre de 2005, p.118, Ed. Icaria, Barcelona, 2007. ROBIN, Marie Monique
(dir.). Le monde selon Monsanto (1 y 2) [documental]. Francia: ARTE France, Image et Compagnie,
Productions Thalie, Office National du film du Canada, WDR. 2007, 1h48min.
68
En el ámbito sanitario encontramos la labor que realiza la organización médico-
humanitaria Médicos Sin Fronteras (MSF) por todo el mundo. Tomando como ejemplo
los proyectos que ejecutan en Indonesia por exclusión a la atención sanitaria de
algunos grupos de la población, esta organización emprendió un programa de atención
primaria en colaboración con el Ministerio de Salud, en Papúa en mayo de 2006.86 Tras
la labor de asistencia que proporcionó acceso a la atención básica y de urgencia,
realizar numerosas consultas y reforzar el sistema médico y de higiene, en un año se
traspasó a las autoridades de salud locales ciertas actividades concretas. Estos
proyectos se centran en el paciente y refuerzan las capacidades y los recursos de los
médicos locales, promoviendo de este modo la mejora de la calidad sanitaria por parte
del personal local a la vez que se produce un empoderamiento de este sector en el
país.
Otro aspecto que abraza la noción del “do no harm” en la realización de cualquier
implementación, es la integración de unos criterios transversales como son la equidad
de género, medio ambiente, derechos humanos y gobernanza, con el resto de
objetivos y metas a alcanzar. Como ya se ha dicho anteriormente, toda actividad
implica unas relaciones implícitas que en ocasiones no se tienen en consideración a la
hora de formular las actividades de cooperación. Para que una actuación no perjudique
el entorno, contaminando con desechos, residuos o incrementando la polución; para
no aumentar la tala de árboles, al utilizar la madera como material de construcción o
combustible, y causar desforestación u otros daños en el terreno; para no enfrentar
familias o sociedades al intentar introducir las mujeres en el ámbito laboral; para no
intensificar tensiones entre clanes, etnias o tribus al promover el uso de una lengua,
unas tradiciones o simplemente difundir una cultura para que no desaparezca; para
evitar el abuso de poder por parte de los representantes escogidos, al fortalecer la
capacidad de organizar y gobernar un área sin la dependencia de agentes externos;
para no infringir ningún derecho humano al involucrar los actores en actividades que
atenten su integridad física, que no respeten su cultura o religión, o les impida realizar
cualquier otra tarea; etc.
86 SANCHO, Javier (coord.). MSF Memoria Internacional 2007. España: Médicos Sin Fronteras, 2008.
69
En definitiva, se trata de encontrar aquellos mecanismos de actuación que se ajusten a
las capacidades y limitaciones de los actores, y del contexto, interrelacionando
cualquier factor que afecte a los beneficiarios y su entorno, ideando así una actuación
que consensue todos estos elementos y prevenga cualquier perjuicio. Como critica
Irene Khan, Secretaria General de Amnistía Internacional:
“La discriminación, la represión estatal, la corrupción, la inseguridad y la violencia son
características tan definitorias de la pobreza como la falta de recursos económicos.
Estos problemas de derechos humanos no pueden resolverse simplemente elevando el
nivel de ingresos”.
Un ejemplo que pone en práctica la participación de todos los actores y la relación que
puede haber entre sectores distintos, puede verse en la metodología de trabajo de la
organización Ayuda en Acción:
“Identificamos un alto índice de analfabetismo en una comunidad pobre, comprobamos la
ausencia de centros escolares, el absentismo de los niños y niñas y decidimos construir un
centro escolar y sensibilizar a los padres sobre la importancia de que sus hijos asistan a la
escuela, liberándoles por unas horas del trabajo que realizan.
Después de un tiempo, construimos una bonita escuela y a ella acuden los niños con
asiduidad. Hemos identificado una carencia, hemos prestado un servicio, hemos cumplido
con lo que se espera de nosotros… pero ¿en qué medida los conocimientos adquiridos por
los niños son adecuados a la realidad de su contexto?, ¿son valorados por sus familiares?,
¿fortalecen sus capacidades para enfrentarse al mundo cuando sean adultos?, ¿generan
valores de respeto a las diferencias culturales y de género?, ¿promueven la convivencia
democrática, la participación, el respeto al medio ambiente y en definitiva, capacidades de
reflexión y transformación?….
En Ayuda en Acción, ampliamos el problema para provocar un cambio estructural y no sólo
cubrir una necesidad. Por eso, en este caso, nos coordinamos con el Ministerio de
Educación en un programa de adecuación de los materiales didácticos y en proyectos de
sensibilización y formación de docentes, también en un proyecto que promueva la
participación de los padres en un sistema educativo de carácter intercultural donde se
comparten y renuevan los conocimientos autóctonos, dándoles un valor de recurso técnico.
Y, además, promovemos un proceso organizativo alrededor de esta problemática para que
los miembros de la comunidad incidan en las políticas públicas. Experiencia General del
Trabajo de Ayuda en Acción.”
Fuente: Página web de la entidad, disponible en <http://www.ayudaenaccion.org/>, consultado en octubre 2009.
70
Otro elemento a tener en consideración a la hora de planificar cualquier actuación, es
la relevancia que adquiere en el “do no harm” la relación establecida entre
“planificadores” y “gestores”.87 En un extremo, los planificadores se sitúan entre la
esfera de los donantes donde planifican e idean actuaciones según la evolución de la
economía de cada país, el mercado internacional o las relaciones de política
internacional, y en general contemplan la cooperación al desarrollo desde una
perspectiva tradicionalista y poco efectiva en determinadas ocasiones. En el otro
extremo, los gestores están en contacto más directo con los receptores de la ayuda,
por lo que obtienen de primera mano la reacción que haya causado una acción en
concreto, y de este modo pueden evaluar objetivamente los resultados de su
intervención, lo que en el apartado de evaluación se verá como “la rendición de
cuentas” o feedback de los beneficiarios.
En todo caso, las reflexiones de ambos serán válidas, y lo que tendrá valor será su
coordinación y armonización para diseñar unas actividades adaptadas a la realidad
donde se quieran aplicar. En este caso, los gestores serían los que más cumplen con la
noción del “do no harm” puesto que se acercan a los receptores y esperan de ellos su
opinión o evaluación al respecto. Sin embargo, como ya se ha dicho, el papel del
donante influye en cualquier actuación, y los planificadores pueden prever cuáles
serán los intereses y los recursos disponibles en cada momento, por lo que la
87 EASTERLY, William. The White man's burden: why the West's efforts to aid the rest have done so much
ill and so little good. New York: Penguin Books, 2006.
“In foreign aid, Planners announce good intentions but don’t motivate anyone to carry them
out; Searchers fins things that work and get some reward. Planners raise expectations but
take no responsibility for meeting them; Searchers find accept responsibility for their
actions. Planners determine what to supply; Searchers find out what is in demand. Planners
apply global blueprints; Searchers adapt to local conditions. Planners at the top lack
knowledge of the bottom; Searchers find out what the reality is at the bottom. Planners
never hear whether the planned got what it needed; Searchers find out if the customer is
satisfied. (…)”
Fuente: EASTERLY, William. The White man's burden: why the West's efforts to aid the rest have done
so much ill and so little good. New York: Penguin Books, 2006. pp.3-29.
71
colaboración de unos y otros sería el ideal de consenso necesario para planificar una
actividad adecuada.
¿Qué?
- ¿Qué actividades se realizarán? y ¿Qué recursos se emplearán?
- ¿Qué metodología se empleará? ¿Es realista y factible?
- ¿Se está proveyendo de material, alimentos, personal, vehículos,
herramientas, dinero, etc.?
- ¿Qué tipo de material, alimentos, personal, etc.?
- ¿Qué tipo de actividades/recursos son apropiados a estas circunstancias?
- ¿Afecta la actuación al desarrollo del país receptor/beneficiarios?
- ¿Cómo incide la actuación en los aspectos transversales?
- ¿Se adapta la actuación a las capacidades y limitaciones de los actores?
- ¿Responden estas actividades/recursos a los objetivos fijados?
- Qué repercusiones (positivas y negativas) tendrá la actuación en:
- país receptor
- los beneficiarios
- el propio donante
- ¿Qué actores involucra/implica la actuación?
- ¿Quiénes diseñan las actuaciones?
- ¿Qué relación hay entre donantes, receptores y beneficiarios?
- ¿Se coordinan todas las actividades entre donante y beneficiario?
72
ii. Cómo
“La estructura organizativa y el sistema de gestión que se ponen en marcha para la
ejecución del proyecto tienen una vinculación directa con el objetivo específico que
constituye el punto de referencia permanente para el establecimiento de los distintos
criterios de actuación. Estos criterios deben estar concebidos de acuerdo con el
elemento principal que define la fase de ejecución y constituye su motor, es decir, el
“cómo” de cada decisión y acción. Este “cómo”, que contiene el grado de coherencia del
método empleado, condicionará el éxito del proceso y su contribución al objetivo del
proyecto.”88
Así pues, siguiendo la perspectiva del “do no harm”, se valorará con detenimiento la
metodología empleada en la resolución y prevención de conflictos, es decir, la
respuesta a las situaciones inesperadas en todo momento; en la implementación de
cada una de las actividades, así como en su divulgación y continua evaluación; y
finalmente en los mecanismos de implicación de los beneficiarios y otros agentes
relacionados con la actuación.
Con todo, en este punto adquieren gran importancia los elementos transversales que
se comentaban anteriormente, puesto que, mediante tales consideraciones, será
posible introducir las mujeres en el terreno laboral y fomentar la equidad de género,
mejorar el aprovechamiento de los cultivos sin dañar el medioambiente, o crear
nuevas infraestructuras con la participación ciudadana, entre otros muchos ejemplos.
Las características de cada actividad propondrán los mecanismos concretos y las
fórmulas de actuación más precisas y adaptadas en su realidad para poder actuar.
Sin olvidar que un país o área, y cada uno de sus ciudadanos, serán distintos unos de
otros, la metodología empleada procurará relacionar cada uno de los elementos
distintivos o propios a modo de encajarlos y coordinarlos idóneamente. De esta
manera, la aplicación del “do no harm” valorará la cultura, así como la religión entre
88 GÓMEZ GALÁN, SAINZ OLLERO, 1999. Op. Cit.
73
otros, como factores determinantes para identificar si se podrán realizar según qué
actividades y de qué modo, y quiénes podrán desarrollarlas. Sin olvidar que cualquier
actividad que se implemente pasa a formar parte de la vida cotidiana de los
beneficiarios, todo girará en torno a sus características.
La organización y distribución de actividades entre los beneficiarios se adaptará según
el sector, la población o grupo en concreto con el que se quiere trabajar. Teniendo en
cuenta las cualidades oportunas (edad, sexo…) se coordinan las actividades en las que
participan y se adaptan al tiempo real disponible de cada beneficiario, compaginando
su ocupación con la vida familiar. A su vez, esta distribución horaria y de tareas, puede
servir como paso introductorio a hombres y mujeres en determinados sectores donde
antes no tenían acceso, mezclando costumbres con una nueva actividad, o atribuir
nuevas responsabilidades o compartirlas, así como adquisición de nuevos
conocimientos por parte de un grupo o la difusión de unos a otros. Asimismo, según el
tipo de implementación se tendrá en cuenta si se trata de una colaboración voluntaria
o remunerada por parte de los beneficiarios, por lo que especificará si invierten su
tiempo para aprender a la vez que realizan un trabajo remunerado.
Adquiere aquí también importancia el origen de la financiación, ya que si una actividad
está total o parcialmente financiada por el donante, puede que a largo plazo los
receptores pierdan interés o motivación, y no inviertan tiempo ni trabajo en ella,
sintiendo que no tienen ninguna responsabilidad u obligación ante la continuidad o
sostenibilidad por el proyecto en cuestión; o puede suceder al contrario, que sean los
mismos beneficiarios los que, una vez establecida una actividad, sean los únicos, o una
gran parte, que invierten sus ganancias o fondos, lo cual supondría su implicación
directa con el proyecto y determinaría en cada momento las dificultades, las escaseces
o las mejoras pertinentes, adaptando así la implementación a sus necesidades.
Un elemento influyente en el contexto mundial actual es el uso de las tecnologías en
todos los ámbitos de desarrollo social y económico de los estados. Aunque sigue en el
aire el debate sobre la concesión de nuevas tecnologías o simplemente material
tecnológico, hacia los países que no disponen de recursos, ni para adquirirlos ni para
elaborarlos, determinados proyectos de autodesarrollo se originan con la aportación,
74
por parte de países ricos, de elementos o tecnologías novedosos que permiten dar un
primer paso a nuevas técnicas de cultivo, aprovechamiento del suelo o de semillas, o
prácticas médicas que reducen los índices de enfermedades, entre otros. Se trata de
una cooperación científica que pese los buenos resultados que está experimentando,
necesita mejorar la coordinación entre las políticas de cooperación científica, las
políticas internacionales y los programas de ayuda al desarrollo.89 Como bien resume
Jean-François Girard, Presidente del Institut de Recherche pour le Développement
(IRD)(FR):
“Previously, development was seen as simply building roads, hospitals and schools. But
it is clearly more complicated than that. The transfer of technology cannot be achieved
at a stroke. It is first necessary to create a different relationship between research and
development, placing science in the service of populations”.
89 VAN ROSSOM, Julie. “A developing cooperation”. En: Research EU, The magazine of the European
research area. N.61, July 2009. European Commission.
75
Sin embargo, la controversia se amplía en el momento en que estas colaboraciones
parecen tener más afán de lucro por parte del país emisor que por su ánimo de ayudar.
Este sería el caso por ejemplo, de la sustitución de semillas autóctonas por semillas
En un mismo contexto, podemos encontrar ejemplos de actuaciones que según cómo se
realizan y dependiendo de su motivación, pueden generar un efecto u otro.
Do Harm…
En el contexto de Sudáfrica, donde cada año mueren 300.000 personas por el sida, miles
más permanecen infectadas, no hay acceso a los medicamentos de prevención ni
tratamiento, el mismo gobierno niega que el virus del VIH sea el causante de la enfermedad
y se opone a científicos y expertos de todo el mundo, cuestionando la eficacia de los
antirretrovirales y defendiendo los productos de la tierra, plantas o tubérculos, como
prevención suficiente ante tal afección, Matthias Rath, vendedor de vitaminas, aprovecha la
coyuntura para incidir en el mercado con un producto que, asegura, acabará con la
enfermedad.
A pesar de tener científicos y parte de la comunidad internacional en contra, acusado de
difundir información “falsa y engañosa”, este empresario consigue imponer sus vitaminas
gracias al apoyo de un gobierno que antepone tradiciones ancestrales ante la medicina,
gracias al desconocimiento de una población y sus tradiciones culturales, y su imposibilidad
por acceder a otros productos, y gracias a declaraciones contra métodos anticonceptivos,
antirretrovirales y demás, este vendedor consigue beneficios mientras que las cifras de
afectados por el VIH y las personas muertas por el SIDA, siguen siendo las mismas o incluso
más elevadas.
… or Do No Harm
Uno de los principales causantes de enfermedades y muertes en África y Asia, y no tan
reconocido como la malaria o el sida, es la diarrea. Debido a esta afección mueren más de
1’6 millones de niños menores de 5 años según la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Recientemente, se están implementando unos programas de poca repercusión pero con
resultados impresionantes. Organizaciones y gobiernos estadounidenses distribuyen, en
distintos países africanos y asiáticos, comprimidos a base de zinc que detienen la
enfermedad cuando aparecen los primeros síntomas. Aunque el mejor método preventivo
es una buena hidratación, con minerales y nutrientes necesarios, y la utilización de agua
potable o limpia (sobre todo tras los periodos de lluvias), este nuevo complemento
evidencia su eficacia con buenos resultados.
Sin embargo, la diarrea continúa siendo uno de los grandes desconocidos en la ciencia o
medicina, y no se destinan los recursos suficientes para la investigación, lo que permitiría
analizar con profundidad los causantes y otros métodos de prevención y tratamiento
adecuados.
Fuente: GOLDACRE, Ben. “The man who sold out medicine.” En: WIRED. Reino Unido: Condé Nast
Publications. July 2009, pp.43-46.; WALT, Viviene; SOGOLA. “The Great Zinc Breakthrough.” En: Time,
Vol. 174, N.6 (August, 2009), pp.14-17.
76
transgénicas, como en el caso Monsanto;90 el envío de medicamentos para la
prevención o tratamiento del SIDA con altos costes, que beneficia a empresas
farmacéuticas y distribuidores, pero crea una deuda externa en el país receptor; o el
envío masivo de ordenadores de segunda mano, que en ocasiones son inutilizables y
quedan arrinconados, sin poder aprovecharse las piezas y contaminando el
medioambiente.
En todo momento la comunicación entre cooperantes y beneficiarios es
imprescindible, por lo que la lengua de trabajo debe ser común desde el principio. En
cualquier caso, se evaluará la necesidad de traductores e incluso mediadores, ya sean
culturales o políticos, para evitar malentendidos de cualquier tipo y establecer el
consenso ante todo. En este aspecto cobran importancia nuevamente los rasgos
culturales, religiosos, étnicos o cualesquiera que sean en las relaciones interpersonales
y por defecto en las actividades a realizar. Al mismo tiempo, tanto el lenguaje como la
actitud que se emplee serán equitativos entre cooperantes y beneficiarios, con respeto
mutuo y sin ánimo, sobre todo, de imponer u obligar a actuar de una manera
determinada, ni infravalorar aspectos propios de cada persona. La forma de expresarse
de los cooperantes, en este caso, será respetuosa y mediante ello será posible
promover la equidad de género, si se dirige de igual modo tanto a hombres como a
mujeres; la diversidad cultural, si muestra interés en aprender la lengua o dialecto del
beneficiario y hace el esfuerzo de comunicarse en su lengua; así como la utilización e
interpretación de los gestos o expresión cultural, que en determinadas ocasiones
pueden expresar un significado u otro. En definitiva, hay que dirigirse a los receptores
de un modo respectivo y equitativo, mostrando una actitud colaborativa y no
supeditada.
90 ROBIN, Marie Monique (dir.). Le monde selon Monsanto (1 y 2) [documental]. Francia: ARTE France,
Image et Compagnie, Productions Thalie, Office National du film du Canada, WDR. 2007, 1h48min.
77
Por otro lado, el “do no harm” también considera la actuación como un elemento
práctico que servirá para educar, capacitar o introducir nuevas prácticas entre los
beneficiarios, y que al mismo tiempo, será un aprendizaje recíproco hacia los
cooperantes, que aparte de relaciones interpersonales también pueden adquirir
conocimientos sobre una cultura o unas tradiciones distintas a las propias. Se
establecerá una educación sobre las actividades y los elementos relacionados que
facilitará la formación de los beneficiarios y establecerá la capacitación continua de
aprendizaje. Con estos conocimientos adquiridos es posible a la par, difundir la
actuación tanto en el ámbito del país donante como del receptor, por un lado
sensibilizando una parte de la población para que conozca el contexto de otros países y
adquiera conciencia; y por el otro, para dar a conocer una actividad o una metodología
que de algún modo mejora la calidad de vida e influye en un colectivo, sociedad o país,
pudiendo mostrar los buenos resultados y pudiendo crear el efecto multiplicador.
Un gesto o un medio de comunicación que precisamente resulta unánime por todo el
mundo es la sonrisa. Y este es especialmente el objetivo principal que busca, y consigue en
su gran mayoría de proyectos, la organización Payasos Sin Fronteras.
Mediante la risa buscan el reequilibrio de sociedades que han sufrido o sufren un conflicto
(bélico y no bélico) y que altera el estatus emocional de las personas. También la utilizan
como “mecanismo de recuperación de valores constructivos y creativos como la tolerancia,
la diversidad, la participación comunitaria, desde una perspectiva de género, y la paz.”
Con esta comunicación no verbal no sólo influyen el aspecto psicológico y emocional de los
beneficiarios, sino que también impulsan un movimiento sociocultural para potenciar el
desarrollo cultural de la comunidad, y promover a su vez valores sociales como la paz, la
tolerancia, la diversidad o la igualdad. Además, intentan influenciar en otros ámbitos como
la salud, protección de la infancia, promoción de los derechos humanos o la educación de la
paz como medio de resolución o prevención de conflictos.
Sus espectáculos se adaptan al contexto específico en el que viven los beneficiarios, al
mismo tiempo que localizan recursos humanos locales que puedan asumir una tarea de
multiplicación de la dinámica propuesta.
Finalmente, la población meta no es exclusivamente un único colectivo como podrían ser
los niños, sino que todas las intervenciones se dirigen también a las familias y las
comunidades, y se valora la integración entre los distintos grupos en las actividades y
proyectos.
Fuente: Payasos Sin Fronteras. Disponible en: <http://www.clowns.org/>, consultado en octubre
2009.
78
¿Cómo?
- ¿Qué metodología se emplea?
- ¿Se utilizan las capacidades locales o se instauran las estrategias de los
donantes?
- ¿Cómo se realiza el trabajo exactamente?
- ¿Cómo se actúa en realidad sobre el terreno y desde el país donante?
- ¿Cómo interactúan donantes y beneficiarios?
- ¿Hay diferencias entre ellos?
- ¿Cómo actúan los beneficiarios?
- ¿Las actividades se adaptan a la realidad del contexto?
79
iii. Actores
Los actores, o participantes en todo el proceso de la actuación de cooperación,
representarán a individuos o colectivos distintos según el proyecto que se realice.
Dependiendo de la tipología de la actuación, los objetivos y el sector o ámbito donde
se quiera realizar, el perfil de los actores variará, por lo que no se puede establecer un
perfil exacto, sino unas características genéricas de aquellos grupos más destacables y
que, normalmente, aparecerán en cualquier actuación.
La estrategia de selección de los actores consiste en identificar las potencialidades de
cada uno y la complementariedad que podrá establecerse entre todos ellos. Al aplicar
la metodología del “do no harm”, la actuación de cooperación aboga por el trabajo
conjunto de todos los actores, creando una red colaborativa y participativa, a la vez
que se refuerzan y amplían las capacidades de todos ellos, arraigando así unos
conocimientos para el futuro autodesarrollo de los beneficiarios.
Entre los actores, se podrá diferenciar entre aquellos que tienen una implicación
directa o indirecta en la actuación. Es decir, por un lado, las personas que actúan
conscientemente y se implican en la labor a realizar y trabajan conjuntamente con los
demás actores con implicación directa; y por otro lado, en la implicación indirecta, se
encuentran los actores que de manera involuntaria o por algún tipo de relación
implícita, o esporádica, se involucran también en la actuación, y se ven afectados por la
actuación de cooperación.
Una adecuada selección de los actores permitirá mejorar la eficacia de la ayuda para
satisfacer los objetivos previstos; concentrar recursos en los grupos más vulnerables y
necesitados; y minimizar los perjuicios que pueda causar una intervención
indiscriminada, excesiva o que llegue a receptores que realmente no lo necesiten. Esto
por ejemplo, podría generar una mentalidad de dependencia de la ayuda; el
desincentivo a la realización de actividades productivas (por recibir donaciones sin
contraprestación, o por el tiempo que absorbe la participación en los proyectos); las
80
alteraciones en el mercado laboral o en los precios debido a los proyectos de empleo o
distribución de alimentos u otros bienes.91
Ante todo, “los protagonistas, tanto en los medios como en los fines, son aquellos que
padecen las situaciones de injusticia. Por ello, las personas y sus capacidades son la
razón de ser (...) del desarrollo.”92 Del mismo modo defiende el Movimiento
Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja afirmando que “debe seguir, en
todo caso, centrando sus esfuerzos en «minimizar los daños», es decir, en la formación
de mujeres y de hombres en materia de prevención y gestión de los desastres, sean
éstos naturales (cometido de la Federación) o estén relacionados con un conflicto
(ámbito de intervención del CICR).”93
91 PÉREZ DE ARMIÑO, Karlos (dir.); ABRISKETA, Joana (et alt.). Op. Cit.
92 En la metodología empleada por la organización Ayuda en Acción, uno de los puntos clave de sus
proyectos de desarrollo son los actores. Disponible en < http://www.ayudaenaccion.org/>, consultado en octubre 2009.
93 GRUNEWALD, François. “De la prevención a la rehabilitación. Antes, durante y después de la urgencia:
la experiencia del CICR en perspectiva”. [en línea]. En: Revista Internacional de la Cruz Roja, N.129, mayo-junio 1995, pp288-308. Disponible en <http://www.icrc.org/Web/Spa/sitespa0.nsf/html/5TDLQB>, consultado en septiembre 2009.
81
Actores con Implicación Directa
Desde la perspectiva del “do no harm”, una vez se han identificado los causantes que
provocan el conflicto entre la población meta, es decir, los motivos que dividen a la
sociedad o las tensiones que provocan la escisión,94 y una vez se determinan las
posibles vías para intervenir y resolver la problemática; entonces se especifica cuáles
son los actores directos de la implementación. Es importante determinar cuáles son los
elementos en común que favorecen un punto de unión y permite la reconstrucción de
las relaciones. Con el fin de asegurar los buenos resultados y el buen impacto de la
intervención, en la implicación directa, se establecerán los actores que sí participarán,
los que no y los que preferiblemente no intervendrán95, a pesar de que, en ciertas
circunstancias inesperadas, puede que se incluya a estos últimos en el proyecto.
A continuación se presenta a los actores más destacables y los elementos positivos por
los cuales se determina su participación directa en la actuación, teniendo en cuenta a
demás, que toda motivación y capacidad presenta a su vez unas limitaciones y unos
posibles riesgos los cuales hay que afrontar y considerar en la selección de actores.
Cabe puntualizar, que estos grupos no son únicos ni exclusivos en todas las
actuaciones, sino que como ya se ha dicho, variarán en función del ámbito de trabajo y
pueden, además, incluirse otros colectivos según las actividades que quieran realizar.
⋅ Beneficiarios: de entre la población meta, escogida por unos criterios de
vulnerabilidad y por ser sujetos activos en un entorno de desigualdad frente a otro
colectivo más aventajado, y que puede transformarse en conflicto, se escogen aquellas
personas cuyas capacidades y potencialidades son adecuadas y pertinentes para
implicarlas en el todo el proceso de la actuación y hacerles partícipes como actores, no
simplemente como receptores, promoviendo así una apropiación del proyecto.
94 Entendiéndose que como tensiones o enfrentamientos no sólo se aplica a los conflictos bélicos, sino a
todas las desigualdades, de índole diversa, que afectan a una sociedad creando un entorno propicio al conflicto interno.
95 VVAA. The Do No Harm Handbook (The Framework for Analyzing the Impact of Assistance on Conflict)
[en línea]. Cambridge, Estados Unidos: Collaborative Learning Projects, Noviembre 2004. Disponible en <http://www.cdainc.com>, consultado en mayo de 2009.
82
De esta manera, toda actividad y metodología se diseñará e implementará según el
perfil de cada tipo de beneficiario. Dependiendo del sector en qué se trabaje, los
conocimientos, las habilidades o las experiencias serán determinantes en cuanto a las
capacidades de adaptación y ejecución de las actividades y permitirá valorar si es
necesaria una formación previa de los beneficiarios, o la contratación o participación
de formadores de un área determinada. Esto puede variar la formulación de la
actuación puesto que implica más actividades complementarias y más tiempo. Sin
embargo, este valor añadido de los beneficiarios potencia su participación en todo el
proceso de diseño e implementación de un proyecto, ya que posiblemente su
conocimiento del contexto de la actuación sea mayor que el de los agentes
cooperantes externos.
La edad permite determinar qué tipo de actividades podrá desarrollar el beneficiario
en función de sus capacidades físicas y cognitivas, sin olvidar de establecer unos
parámetros en función del tipo de sociedad y cultura con el que se trabaja, puesto que
no son los mismos en todos los países. Además, también puede ofrecer información
sobre la actividad o trabajo que tiene en el conjunto de la población, es decir, si es
estudiante, trabajador activo o sin ocupación, y permitirá establecer una clasificación
de actividades adaptadas a cada colectivo.
El sexo de los beneficiarios es importante para poder establecer una correcta equidad
de género, pero que en ocasiones puede resultar una fuente potencial de conflicto, ya
que numerosas sociedades se basan en el patrón del hombre y dificulta la participación
de mujeres en ciertas actividades. La intención, desde un enfoque que no perjudique
las relaciones sociales, es que hombres y mujeres participen como iguales, sin rechazos
ni reticencias. En ello se pretende defender los derechos de la mujer e impulsar su
participación en todas las tomas de decisiones a nivel nacional, regional, local e
internacional, y su representación en los mecanismos de prevención, organización y
83
resolución de conflictos, tal y como se recoge en la Resolución 1325 de las Naciones
Unidas del año 2000,96 en relación a la mujer y la construcción de paz.
Por este motivo, se diseñarán actividades en las que puedan participar ambos sexos,
para fortalecer las capacidades de ambos, para integrar a la mujer en el contexto del
trabajo y fomentar su independencia respecto al marido o al padre, pero sin dañar la
estructura social o el rol que cada uno tiene en su sociedad. Con el fin de respetar la
equidad de género y la cultura, se decidirá la pertinencia de participación de unos u
otros en cada actividad evitando los posibles enfrentamientos entre ellos y con los
cooperantes.
El estatus social, o más bien el rol comunitario, también influencian la participación en
ciertas actividades. La posición de cada persona en el sí de su sociedad permitirá
valorar factores como la disponibilidad temporal o incluso incompatibilidades para
poder participar en el proyecto. Dependiendo del sector al cual pertenezca, cada
beneficiario podrá aportar unos conocimientos concretos; y por otro lado, la influencia
que tenga en su comunidad le atribuirá la toma de decisiones y responsabilidades, en
el caso de ser líder, como por ejemplo un consejo de ancianos, líder espiritual,
comadronas o un alcalde. El hecho de que estos beneficiarios participen en el proyecto,
le atribuye cierto prestigio con el que implicar al resto de la población meta. No
obstante, bajo las premisas de no dañar las estructuras y las relaciones intercomunales
de una sociedad, la integración de cualquier actividad deberá respetar los roles
arraigados en la sociedad beneficiaria. Es decir, establecer un equilibrio y respeto entre
las costumbres y las nuevas prácticas que pretenden, de modo indirecto, solucionar las
desigualdades estructurales que presente el grupo meta.
96 Resolución S/RES/1325 (2000) sobre la mujer, y la paz y la seguridad, del Consejo de Seguridad de las
NNUU, del 31 de octubre de 2000.
84
Otro aspecto complementario al rol comunitario es la ocupación u oficio que permite a
los beneficiarios tener unos ingresos. Dependiendo de las tareas, los beneficiarios
tendrán mayor o menor disponibilidad para participar en el proyecto, además de
aportar conocimientos determinados y recursos según el tipo de actividad que
realicen, y los cuales se aprovecharán al máximo en todo el proceso de la actuación.
Esto puede determinar si se trabaja con un colectivo preferiblemente que con otro, o
designar la distribución de tareas correspondientes, con el fin que el beneficiario
pueda apropiarse de la actuación. El respeto o importancia que cada actividad tenga
dentro de la comunidad podrá incentivar la implicación en el proyecto del resto de
beneficiarios con actividades complementarias.
Al mismo tiempo, el intercambio de experiencias y conocimientos entre los distintos
beneficiarios puede fomentar la motivación y el interés mutuo por adquirir nuevas
vivencias y descubrir otros ámbitos de su entorno. De este modo, mediante las
capacidades técnicas que puedan ofrecer algunos de ellos, es posible promover la
La asociación no lucrativa Architecture for Humanity realiza proyectos de diseño
arquitectónico de modo voluntario en que diseñadores de todo el mundo ofrecen sus
diseños y se adaptan a las características de distintos países y sociedades. Su objetivo
principal es ofrecer un servicio a la vez que inciden en la estructura social y económica del
país receptor, puesto que en todos sus proyectos utilizan materiales y técnicas locales,
además de la participación de los beneficiarios directos en la construcción.
Un ejemplo de ello es la construcción de un centro social para mujeres y niños en la India,
en el que además de ser un centro de día para niños, también se impartirán talleres,
reuniones y todo tipo de clases.
En el proceso de diseño y en toda la implementación participaron activa y conjuntamente
las mujeres de la localidad, los representantes y otros miembros de la comunidad. A pesar
de algunos problemas como las inclemencias meteorológicas y la escasez de recursos
(materiales y humanos) debida a otros proyectos en la misma zona, el edificio pudo
completarse. Por otro lado, en este caso puede observarse la falta de previsión en cuanto a
temporalidad y disposición que se comentaba anteriormente.
A parte de las facilidades que proporciona el centro, el trabajo realizado genera otros
puestos de trabajo, fuentes de ingresos, y una nueva consciencia sobre el medio ambiente.
Fuente: Proyecto Nadukuppam Colony Community Center, India, en el marco de proyectos
impulsados por la asociación Arquitecture for Humanity. Disponible en:
<http://www.architectureforhumanity.org>, consultado en octubre 2009.
85
formación de formadores, en que los mismos beneficiarios reciben la formación
adecuada por parte de los cooperantes, para poder transmitir con la metodología
adecuada sus disciplinas a otras personas, y promover así el conocimiento dentro de
sus comunidades. Más adelante, podrán actuar sin necesidad de la intervención de los
cooperantes, de modo que potencializan sus capacidades de autodesarrollo.
Es importante destacar la disponibilidad que ofrecen los beneficiarios para poder
organizar las actividades y no alterar sus responsabilidades en el sí de la sociedad.
Como se ha ido comentado a lo largo del texto, el tiempo de que disponen los
beneficiarios para compaginar sus tareas habituales y las nuevas actividades, debe ser
coherente y respetuoso con el fin de no sobrecargarlos y para no ocasionar algún tipo
de conflicto personal de cada beneficiario con sus relativos.
Otra característica a considerar, es la implicación de los beneficiarios en todos los
ámbitos con el fin de que se apropien del proyecto, lo que permitirá en adelante la
sostenibilidad del mismo. Los diversos métodos para implicarlos son la participación
directa como personal de la actuación, mediante la aportación de recursos propios
Un proyecto promovido por la asociación Local Capacities for Peace Project (LCCP),
juntamente con otros organismos, decidieron introducir un nuevo enfoque, a raíz de sus
experiencias en el terreno como cooperantes, a sus contrapartes en el Cuerno de África. El
objetivo no fue tan sólo promover una herramienta útil para el diseño e implementación de
proyectos, el “Do No Harm”, sino que pretendía obtener experiencia mediante los aspectos
prácticos de esta aplicación con los diferentes tipos de organizaciones participantes y
distintos entornos culturales y políticos.
De este modo, el proyecto estaba configurado a formar cooperantes locales para que estos
pudieran, más adelante, aplicar esta herramienta al mismo tiempo que difundían los
conocimientos adquiridos.
“The training strategy was supposed to promote local ownership of the “Do No Harm”
concept by creating an appropriate number of multiplicators both within partner
organisations and on the consultancy market. The availability of local trainers was also seen
as necessary for adaptations of the approach in terms of languages, cultural and political
environments”.
Fuente: GRAFE, Rolf. Local Capacities for Peace in the Horn of Africa. Final Project Report. Informe
conjutno entre: Church Development Service (EED), Alemania; Interchurch Organization for
Development Co-operation (ICCO), Holanda; Collaborative for Development Action (CDA), Estado
Unidos. 2006.
86
como espacios físicos, comunales o individuales, para actividades, reuniones o
almacén, o la contribución con materiales. Además, por lo general las aportaciones de
fondos, dentro de sus posibilidades, ayudan a lograr la sostenibilidad deseada de
algunos proyectos, como por ejemplo, crear un fondo común para poder mantener el
trabajo de un médico en la comunidad, o para el mantenimiento de la canalización y
distribución de agua potable.
Asimismo, es notable destacar la presencia de grupos que por sus características,
pueden ser más vulnerables y requerirán una integración más específica y cuidadosa
en el proyecto. Se trata de colectivos con alguna discapacidad física o psíquica,
marginados sociales, refugiados, niños huérfanos, adolescentes conflictivos o mujeres
maltratadas, entre otros, que a menudo sufren el rechazo social que dificulta su
inserción o participación en la comunidad, y no se tienen en cuenta sus necesidades.
Dentro de los objetivos del “do no harm” habrá dos posibles vías de actuación: en
primer lugar, mediante las actividades establecidas, se promoverá la inserción de estos
colectivos socialmente marginados entre los agentes cooperantes; o en segundo lugar,
se les podrá incluir en las actividades del proyecto activamente, promoviendo
mecanismos de trabajo colectivo y su aceptación, en la medida de lo posible, entre el
La muerte de mujeres durante el parto es un hecho común en muchos países que no
disponen de recursos ni de un servicio médico mínimo. La mayoría de casos podrían
prevenirse si hubiera una asistencia previa durante el embarazo y se reconociese cualquier
síntoma de complicación o enfermedad.
En un programa promovido por USAID y el Banco Mundial en Bangladesh, se otorgan becas
a jóvenes adolescentes para que puedan estudiar y al mismo tiempo trabajan realizando un
servicio médico a centenares de familias, las cuales participan con pequeñas aportaciones
al servicio que se les ofrece.
“Feroza Yasmin Shadia is a nineteen-year-old Bangladeshi girl from a poor peasant family.
(…) Now she is a bicycle paramedic responsible for 515 families in the countryside around
Savar, Bangladesh. (…) Dr. Zaf trained teenage girls to treat common ailments, deliver
prenatal and postnatal care to pregnant women, and refer any emergencies to the hospital
that he built. Foreign donors and the Bangladesh government gave Dr. Zaf money, but he
also charged his poor patients modest fees to expand services further. He founded that
even the poor were willing to pay for good service. Charging the poor modest fees for
health care is way to increase accountability for delivering health services.”
Fuente: EASTERLY, Op. Cit. pp. 50-51.
87
resto de la población (siempre procurando no incentivar o provocar mayor conflicto, ni
crear imposición alguna).
La cultura, y en ella se incluye la religión o espiritualidad, también define a los
beneficiarios y estipula una serie de consideraciones a tener en cuenta por parte de los
cooperantes en cuanto a la relación y comunicación que se establece y el tipo de
actividades a realizar. Ante todo, respeto y aceptación de todas las culturas
coexistentes en un mismo contexto para defender y potencializar el intercambio. Como
bien ejemplifica Alemania en sus políticas internacionales de cooperación, con las que
intentan establecer un equilibrio en todos los ámbitos: “Cultural freedom is a
fundamental human right. When cultural freedom does not exist, and when minorities
and their cultures are oppressed, conflicts can easily arise.”97
Por un lado, como ya se comentó anteriormente, la lengua de comunicación es
imprescindible para un buen entendimiento, lo que puede requerir la intervención de
traductores o incluso mediadores culturales. Sin embargo, puede servir como vínculo
para configurar actividades y promover a la par el intercambio de costumbres y
tradiciones culturales de distintas comunidades. Por otro lado, la religión o
espiritualidad puede servir como un nexo de unión que congregue a los beneficiarios y
los motive a participar en algún proyecto en concreto, mediante el cual vean unos
beneficios reales para su comunidad.
Contrariamente a los aspectos positivos que determinan la elección de beneficiarios
como actores directos, también hay que asumir ciertos riesgos o retos que en
ocasiones pueden perjudicar la actuación.
Las mismas características de edad, género o rol comunitario, en ocasiones pueden ser
motivo de tensiones o diferencias agraviantes entre los mismos participantes, y
dificultar la comprensión y convivencia mutuas, impidiendo realizar las actividades
conjuntamente o creando rechazo hacia un colectivo determinado. La equidad de
97 WETTIG, Hannah; KLÖVER, Silke; HENKE, Kerstin. Towards One World. Development Policy White
Paper.[en línea] Federal Ministry for Economic Cooperation and Development, June 2009. Disponible en: <http://www.bmz.de/en/index.html>, consultado en mayo 2009.
88
género, por ejemplo, en la toma de decisiones o las responsabilidades, puede ofender
a los hombres de ciertas sociedades; o la concepción de autoridad y conocimiento
vinculada a la edad, puede representar un impedimento para que los jóvenes no
puedan participar en algunas actividades o no se les conceda el derecho a voto. Es
necesario, en todos estos casos, integrar adecuadamente a cada colectivo sin alterar
las costumbres tradicionales ni los roles predeterminados, pero sí intentar introducir
nuevas prácticas y otros conocimientos, de modo equitativo y con el fin de que los
beneficiarios conozcan y acepten una visión distinta de la sociedad y el papel de cada
persona.
La cultura y la pertenencia a una religión, así como una ideología política, pueden
determinar un carácter que influya negativamente a la relación con los agentes
cooperantes y afecte su predisposición a participar. Determinadas actividades pueden
ser entendidas, desde la perspectiva de los beneficiarios, como un acto que altere la
armonía de sus creencias religiosas o ideológicas, limitando así sus posibilidades de
actuar, de modo que será necesaria una elaboración más esmerada de las actividades.
Por un lado, puede que existan desavenencias frente la actuación entre beneficiarios
de un mismo colectivo, entre los cuales haya opiniones opuestas sobre los posibles
cambios sociales que implique la intervención. Por otro lado, además, puede ser
motivo de conflicto si entre la población meta existen varios colectivos originarios de
etnias, religiones o grupos políticos distintos, lo que dificulta la participación colectiva e
incluso el diseño de las actividades. Sin embargo, esta diferencia puede ser un buen
motivo de intercambio cultural y dar pie a un aprendizaje recíproco de tradiciones y
costumbres propias.
Finalmente, otro riesgo con el que se pueden encontrar los cooperantes es la
dependencia de los beneficiarios a las ayudas externas. En ocasiones, ante la
intervención y el arraigo de unas actividades determinadas, a menudo de países ricos,
se establece la concepción y comodidad de que una responsabilidad en concreto
depende de los cooperantes. Como consecuencia, los beneficiarios pueden adoptar
una posición pasiva a la espera de la nueva llegada de cooperantes y recursos, de modo
89
que su inactividad confía en la intervención asistencialista de los cooperantes.98 Por
este motivo, desde la perspectiva del “do no harm”, los cooperantes intentarán
reactivar la motivación y participación de los beneficiarios en las actuaciones evitando
cualquier forma de asistencialismo.
⋅ Agente implementador local: entre la misma sociedad receptora se encuentran
los agentes locales que se encargan, junto a los beneficiarios, de implementar las
actuaciones. Estos actores, normalmente, realizan las actividades conjuntamente con
los cooperantes del país donante, los cuales actúan como la contraparte del proyecto
que se realiza.
El hecho de tener la contraparte en el norte, o en el país donante, puede facilitar la
comunicación entre el norte y el sur y establecer un intercambio directo. La presencia
en el terreno permite una visión más próxima de la evolución de las actividades y
ofrecer unas primeras impresiones para proceder a evaluar el día a día de las
actividades o, al menos, con cierta proximidad temporal.
El agente local puede aportar un conocimiento más amplio del contexto geográfico y
de la población receptora, que complemente los conocimientos adquiridos por parte
de los cooperantes donantes, ya que pueden ver y analizar la realidad desde un punto
de vista más cercano y con fuentes propias del país o región. Esto permitirá configurar
las actividades del modo más idóneo posible a las necesidades del contexto y poder
asegurar un buen impacto que se ajuste a la realidad.
Al mismo tiempo, la relación directa con los beneficiarios o incluso con las autoridades
locales, debería facilitar la comunicación y las relaciones posteriores con ellos, con el
fin de establecer acuerdos y llegar a un consenso para determinar el objeto de
actuación y la metodología a seguir en cada situación. Mantener una buena
comunicación, durante todo el proceso de implementación y en el transcurso de
cualquier actividad, es determinante para conocer la opinión y el grado de
98 Experiencia propia durante la estancia como cooperante en Ghana, en la participación en un proyecto
de gestión y organización de un orfanato.
90
participación de los beneficiarios en las actividades, lo que permitirá averiguar el valor
que le conceden los beneficiarios al trabajo realizado, y si realmente se ajusta a las
necesidades y cumple con los objetivos previstos. Además de la relación directa que
establezcan con los beneficiarios, también cabe destacar la experiencia conjunta en
actuaciones anteriores, o la procedencia de estos agentes de comunidades cercanas,
por lo que tendrán alguna relación cultural o simplemente lingüística. Todo esto ofrece
un grado de confianza con la que los beneficiarios pueden expresar sus dudas, quejas o
comentarios respecto a la implementación o el resto de actores involucrados en el
proyecto.
Esta misma conexión puede extenderse a las comunidades o áreas cercanas al lugar de
implementación, dado que se trata de agentes locales que conocen el terreno o
posiblemente tienen más facilidades para conocerlo. De esta manera, en caso de poder
ampliar el proyecto, dispondrán de más recursos para establecer la metodología y
localizar a los beneficiarios.
Por otro lado, el valor añadido de los agentes implementadores locales puede ser la
experiencia que han adquirido en el entorno y con la población receptora, pudiendo
determinar con más facilidad los posibles riesgos que presente cada grupo de
beneficiarios, las relaciones entre ellos, y las circunstancias, positivas y negativas, que
afecten a cada colectivo. De este modo, podrán surgir más alternativas para elaborar o
modificar, en caso necesario, las actividades previstas, y adaptarse mejor a la realidad
del marco social y sus estructuras internas. Por todo esto, la capacidad de reacción del
agente local será mayor que la reacción del agente cooperante del norte.
Contrariamente, el hecho de pertenecer a la misma sociedad receptora puede
ocasionar, en ciertas ocasiones, que la opinión de los agentes no sea del todo objetiva
con la realidad de la situación y pueden dejarse influenciar por opiniones e intereses
diversos. Un posible reto será ampliar la capacidad de vehicular correctamente las
demandas de los beneficiarios hacia los agentes donantes, pudiendo discernir entre lo
que son las necesidades temporales y las permanentes. No son raras las veces en que
las peticiones de más ayuda, ya sea económica o técnica, no concuerden con la
evolución de las actuaciones o con la situación real del contexto, así como la petición
91
de recursos inapropiados o completamente fuera de lugar en relación a los objetivos
de la actuación de cooperación, como por ejemplo, la petición de electrodomésticos o
aparatos electrónicos cuando la red eléctrica es insuficiente.
Otro aspecto que puede influenciar negativamente en la implementación es que los
agentes locales no adquieran la capacidad de adaptación a nuevos valores y técnicas.
Los propios valores arraigados de una sociedad y cultura, pueden actuar a favor de
determinados grupos y excluir a otros, las concepciones o juicio de valores pueden
impedir la correcta implementación de una actividad por no ser equitativa y
respetuosa con toda la población. Todo esto puede ocasionar que no se moldeen las
capacidades propias a las necesidades del momento ni se busquen alternativas. Por
otro lado, el mismo desconocimiento de nuevas técnicas o actividades, puede dificultar
también, en ciertas ocasiones, la modernización de las metodologías con las que
implementar las actividades, o la posibilidad de adaptar o recuperar las costumbres
culturales o técnicas tradicionales a la nueva realidad y necesidades del momento.
En todo caso, desde las premisas del “do no harm”, el recurso adecuado para una
correcta implementación en la sociedad receptora, sería la capacitación y formación de
agentes locales para gestionar todo el proyecto, de modo que se promueve el
fortalecimiento de las capacidades de los agentes del sur y la relación directa con los
agentes donantes. El trabajo de los agentes cooperantes del norte se traspasaría a los
beneficiarios o en tal caso, a los agentes implementadores locales, de modo que se
promovería sin duda el posterior autodesarrollo. Sin embargo, permanece la reticencia
de los agentes donantes hacia la capacidad de gestión de fondos por parte de los
estados receptores y los agentes locales y, paralelamente, la reticencia de los agentes
cooperantes del norte al perder capacidad de actuación e influencia, lo que repercute
conjuntamente en limitar el empoderamiento de la sociedad receptora.
92
⋅ Autoridades nacionales, locales y comunales: puesto que la metodología del
“do no harm” concede más protagonismo y participación a los beneficiarios de la
ayuda, deberían de tenerse más en cuenta a las instituciones públicas del país receptor
(o según el caso, organizaciones estables y respetadas colectivamente) y valorar el
trabajo que desempeñan en el seno de su sociedad y, por tanto, su implicación en la
actuación.
En el marco de trabajo, se considerarán las políticas y planes de desarrollo que
establecen tanto las autoridades estatales como las comunales. Éstas tendrán que
responder a estrategias viables y positivas para la sociedad en conjunto y ser
pertinentes con las necesidades reales. Paralelamente a estos planes, se tendrá que
velar para que la actuación de cooperación se complemente, en la medida de lo
posible, con el trabajo que ya se esté realizando y no quede aislada en un marco de
trabajo determinado del contexto donde se ejecuta. De este modo, permite asegurar
que todas las actividades sean coherentes con la realidad a la que se exponen.
“For donors, finding new local partners is always more strenuous than continuing to work
with the ones they already know. Hence, relatively little effort is put into finding an
interlocutor appropriate with regard to what is trying to be achieved. Existing mass-based
organizations and trade unions consequently tend to be neglected as potential partners for
civil society support—in contrast, many of these new, national, urban NGOs that donors do
engage have a weak membership base, a lack of country-wide and balanced political or
ethnic representation, and are often linked to the political establishment through kin
relationships. The potential detrimental effects of such pernicious donor preferences are
clear: donor-driven civil society initiatives focusing on NGOs limit the capacity to create
domestic social capital and ownership for the peace process, thereby undermining
empowerment and leaving domestic groups in a weak and subordinate position”.
Fuente: PAFFENHOLZ, Thania; JÜTERSONKE, Olivier. Context-Sensitive engagement: Lessons learned
from Swiss experiences in South Asia for Aid effectiveness in fragile scenarios. Conflict Prevention and
Transformation Division (COPRET) and the South Asia Division of the Swiss Agency for Development
and Cooperation (SDC), Switzerland, 2008.
93
Es importante determinar cuáles son las responsabilidades y ámbitos de actuación de
cada administración, para saber con cuáles de ellos será necesario colaborar en cada
etapa del proyecto y en qué momento del proceso actuará cada uno. Dependiendo de
las funciones asignadas podrán desarrollar su papel en consonancia a los objetivos del
proyecto y se podrá incidir, mediante la actuación, en distintos sectores de la sociedad
receptora. Por tanto, cada institución ejercerá su rol dentro del contexto y se procurará
el respeto y colaboración mutuos.
Por una parte, las autoridades nacionales implementan sus propias políticas de
desarrollo, por lo que es necesario coordinarse con los agentes cooperantes locales y
extranjeros. El respeto y coordinación con las actuaciones en curso promoverá la
implicación de todos los agentes y, a su vez, supondrá un fortalecimiento de las
responsabilidades y capacidad de gestión de las administraciones estatales. Por tanto,
se refuerza la gobernanza mediante la cual se pretende dotar al país receptor para que
no dependa de las ayudas externas y aumente las capacidades locales de autogestión,
en todos los estratos sociales.
Estas autoridades, además, dispondrán de información pertinente según sectores o
ámbitos del país, lo que podrá determinar los indicadores nacionales y facilitar los
datos a otros agentes. Sin embargo, cabe tener en cuenta que por lo general estos
indicadores no recogen la realidad del país, por intereses de clases sociales o políticos
por ejemplo, y los cuales no muestran datos de pobreza real u otros tipos de
desigualdades. Estos indicadores son los que a menudo son utilizados por organismos
En referencia a la influencia que ejercen las autoridades en determinadas situaciones, David
Sogge, colaborador del Transnational Institute de Amsterdam (Holanda) escribe:
“Es fundamental la forma en que las autoridades locales (ya sean oficiales o rebeldes) y las
poblaciones afectadas se relacionan entre sí. Cuando existe reciprocidad, y unas normas
aplicables que regulan la voz de los ciudadanos, y la rendición de cuentas de las autoridades,
habrá más probabilidades de que haya un sistema público de ayuda receptivo.
Paradójicamente, cuando existen esas normas de reciprocidad en el gobierno, muchas veces
la ayuda exterior se hace innecesaria. (…)”
Fuente: SOGGE, David. “Los subalternos de la ayuda. La superación de los problemas de aprendizaje
en los organismos de ayuda.” En: ROBERTS, Adam; ABRISKETA, Joana (et alt.). Los desafíos de la
acción humanitaria. Barcelona: Icaria Antrazyt, 1999.
94
internacionales o los mismos estados donantes para configurar otros indicadores
comparativos con otros países, y determinar así índices de desarrollo o desequilibrio a
nivel mundial. Por este motivo, la perspectiva del “do no harm” adoptará con
prudencia estas informaciones con el fin de adaptarse lo más fiel posible a la realidad
de la situación.
La posición de estas instituciones permitirá además la coordinación con los distintos
agentes implementadores y cooperantes por todo el país, pudiendo así facilitar
trámites burocráticos o de documentación, que en determinados casos pueden
entorpecer, o incluso impedir, el desarrollo de la actuación. Por tanto, es importante
reconocer la autoridad que establecen estos actores sobre el terreno y respetarla con
el fin de asegurar una buena relación y que esto repercuta positivamente en la
actuación.
No obstante, puede que en ocasiones las autoridades públicas presenten un marco
totalmente distinto con el que los agentes cooperantes tengan que lidiar y adaptar a las
circunstancias de la actuación. En determinados países, la falta de responsabilidad por
parte de las autoridades se refleja en la mala gestión y funcionamiento, o en ocasiones
inexistencia, de prestaciones o servicios públicos para la sociedad, complicándose en
algunos casos hacia la corrupción, tráfico de influencias o malversación de fondos.
Además, si debido a periodos de elecciones, o cambios forzosos de gobierno, el
personal de dichas autoridades se renueva, será necesario restablecer otra vez las
relaciones con el fin de preservar las actuaciones de cooperación y adaptarlas, si es
necesario, a las nuevas políticas de desarrollo. El descuido de las responsabilidades,
puede traducirse en un agravio de problemas que inciden directamente a ciertos
grupos de la población perjudicando su bienestar o intereses. La falta de recursos
mínimos, infraestructuras o incluso derechos, perjudica de pleno a la población y es
una responsabilidad de los estados velar por sus ciudadanos.
Como consecuencia, el desinterés y la creciente falta de recursos para afrontar las
escaseces, puede desembocar a la delegación de responsabilidades a los agentes
cooperantes o donantes. De esta manera, se les traspasarían las responsabilidades de
la gestión e implementación de los servicios públicos o de aquellos sectores que no
95
pueden ofrecer unos mínimos de calidad, sustituyendo así a las autoridades como
agentes directos de la actuación. En todo caso, no hay que olvidar que son las
instituciones quienes tienen que apropiarse y desarrollar las políticas de cooperación y
esto supondrá un reto por parte de los cooperantes para respetar y mantener el rol de
cada uno.
Por otra parte, las autoridades comunales serán las que establezcan una relación más
directa con los beneficiarios y los agentes cooperantes, de manera que esta proximidad
permitirá conocer más de cerca las necesidades y las desigualdades reales de una zona
en concreto. De la implementación conjunta se podrá extraer una información más
cercana y concreta de la realidad, que configurará unos indicadores distintos de los que
pueden ofrecer las autoridades nacionales. Éstos permiten acotar el margen de
actuación y normalmente no se tienen lo suficientemente en cuenta para establecer el
contexto de implementación de una actuación.
Por este motivo, también hay que respetar y valorar las autoridades comunales para
incentivar, implícitamente en las actuaciones, el fortalecimiento de su gobernanza y
promover la participación de todos los beneficiarios.
En un plano secundario, podría darse el caso de que la ideología política principal en el
estado receptor o la influencia de un partido político en la sociedad, conduzca a la
opinión pública hacia la aceptación o rechazo de ciertas ayudas o agentes cooperantes
procedentes de estados que se contraponen o no son afines a sus ideas. Esto
perjudicaría el desarrollo de actuaciones de cooperación, la intervención extranjera o
incluso incentivar corrupción respecto la ayuda recibida, tanto por parte de las
autoridades como por parte de la población. Pero estos casos serían aislados y
particulares de situaciones concretas.
96
⋅ Agente cooperante del norte: dentro del colectivo de los agentes donantes, se
diferenciarán los que intervienen directamente en el terreno y los cuales participan, en
mayor o menor medida, en la implementación de un proyecto junto con los
beneficiarios. Estos cooperantes pueden proceder del sector público o privado
internacionales. A parte del análisis de capacidades y autorreflexión sobre los recursos
y limitaciones para intervenir en cada situación, como ya se ha visto en el apartado del
contexto, se considerarán otros aspectos relevantes.
Una cualidad, o elemento conector, de los agentes cooperantes es la previa experiencia
que hayan adquirido en actuaciones anteriores. Reiterando lo dicho, los conocimientos
que aportan las prácticas pasadas, tanto los aspectos positivos como los negativos,
En Nicaragua, la anulación del aborto terapéutico como figura legal y la consecuente penalización con la cárcel para quienes incurran esta práctica, ha desatado fuertes protestas desde múltiples sectores de la sociedad civil nacional e internacional.
“La interrupción voluntaria del embarazo es ilegal en América Latina, con excepción de Cuba. Sin embargo, las legislaciones de varios países contemplan excepciones en casos de peligro de muerte para la madre, inviabilidad del feto por fallas genéticas graves o cuando el embarazo es producto de violación o incesto.” Sin embargo, los diputados de la Asamblea, mayoritariamente de derechas, aprobaron la ley bajo la presión y exigencias de la Iglesia Católica.
Mujeres, médicos, asociaciones civiles de mujeres, sindicatos y la comunidad internacional están de acuerdo en que “la ley traerá como consecuencia un aumento de la mortalidad materna e infantil y una posible fuga de médicos especialistas a países donde puedan ejercer la medicina con libertad.”
“Cada año mueren en Nicaragua alrededor de 144 mujeres en edad reproductiva, sin incluir el alto subregistro, que se calcula hasta en 50 por ciento.” Por este motivo, y por la férrea defensa de la vigencia de la legalidad del aborto preventivo, organizaciones internacionales que participaban en actividades en este país como cooperantes, han decido mostrar su rechazo ante la nueva ley retirándose de terreno.
“A las 25 declaraciones de organizaciones nacionales e internacionales que reclamaban mantener la despenalización del aborto terapéutico, se sumaron miembros del cuerpo diplomático destacado en Nicaragua, las sociedades médicas de América Latina, representantes de agencias de la ONU, la Unión Europea, la Organización Mundial de la Salud y la OPS y las no gubernamentales Save The Children, International Women’s Health Coalition y Human Rights Watch, entre otras.”
Fuente: ADÁN SILVA, J. “Nicaragua: Aborto terapéutico ilegalizado en carnaval electoral.” [en línea] En: Mujeres en Red. El Periódico feminista. Disponible en: <http://www.nodo50.org/mujeresred/>, consultado en noviembre 2009. JAIME, F. “Nicaragua: Fuerte presión contra el aborto terapéutico.” [en línea]. En: IPS (Inter Press Service). Disponible en: <http://ipsnoticias.net>, consultado en noviembre 2009.
97
suponen un valor añadido de los actores que influenciará en los planteamientos y
actuaciones futuras. Dado que tendrán más información del contexto y de la población,
les podrá ayudar a predecir posibles riesgos e incrementa su capacidad de reacción
ante situaciones adversas inesperadas.
Al mismo tiempo, la relación con los beneficiarios así como con los agentes
implementadores locales es fundamental para establecer los vínculos adecuados de
colaboración, coherencia entre las actividades y las iniciativas, y humildad en el diseño
de la actuación. En este caso, la procedencia de los cooperantes de países del norte,
puede aportar al proyecto el conocimiento y el acceso a nuevas tecnologías, de manera
que es posible la implementación de prácticas distintas, con metodologías novedosas y
resultados destacables, pero siempre y cuando se respeten y promuevan a la vez las
tradiciones culturales.
Además, su posición y relación directa con instituciones públicas o privadas de otros
estados, pueden facilitar la obtención de fondos económicos para invertirlos en
mejoras o ampliaciones de los proyectos, favoreciendo la gestión por parte de los
agentes locales. Del mismo modo, pueden tener conocimiento de otros agentes
cooperantes en la misma zona y establecer contacto para poder trabajar
coordinadamente e intercambiar recursos, conocimientos y experiencias, intentando
que todo ello repercuta de la mejor manera en la actuación.
Los socios que colaboren con estos mismos cooperantes también pueden ser
determinantes para la realización de actividades tanto en el terreno como en el país
donante. El apoyo que éstos puedan ofrecerle podrá incrementar las capacidades de
actuación y permitirán más accesibilidad a recursos o información. Precisamente,
información que los cooperantes podrán aportar al proyecto y de la cual no disponen o
no tienen acceso los agentes locales, como las convocatorias de subvenciones de los
donantes públicos o las modificaciones de las políticas de desarrollo, entre otros.
Igualmente importantes serán los medios de comunicación, que se contemplan en el
proyecto, para la difusión del proyecto en el terreno y así informar e incentivar a la
población, y por otro lado, la difusión de los resultados al finalizar la actuación, en las
sociedades de los países donantes.
98
Sin embargo, también hay que considerar algunos aspectos negativos que pueden
alterar la conducta o participación de los cooperantes. En cuanto a la naturaleza de
este agente, cabe destacar que si se trata de una organización que recibe fondos de
administraciones públicas para el financiamiento de sus actividades, esto puede crear
un cierto arraigo dependiente. En consecuencia, cabe la posibilidad que no pueda
actuar con completa libertad, ya que su margen de actuación estará limitado por los
recursos de que dispone, se verá limitada su capacidad de neutralidad o incluso su
carácter crítico hacia el mismo estado que le subvenciona. En tal caso, podría decirse
que la entidad en cuestión ha sufrido una politización, conscientemente o no, y se sitúa
en un entramado “de relaciones de poder y privilegios, de negociación, de alianzas y
disputas con el estado, con la estructura paraestatal y con otros sectores no
gubernamentales.”99 Este carácter dependiente de los estados u otros financiadores,
rompe con la idea del “do no harm” ya que, en ocasiones, la actuación puede no ser
objetiva con sus fines o no alcance la realización de todo el proyecto diseñado.
Al mismo tiempo, puede que en ocasiones estas organizaciones se conviertan en
simples canales de distribución de fondos, ejerciendo el papel de intermediario entre
el país donante de recursos (económicos o técnicos) y el país o agente receptor, sin
aportar ningún beneficio o complementar la actuación. De esta manera, si tales
organizaciones no intervienen como cooperantes, es decir, participando en el diseño,
implementación y evaluación de las actividades, podría interpretarse como un mero
paso de conexión que posiblemente podría sustituirse por el agente local receptor. En
resumen, “las organizaciones que carezcan de una buena base de miembros o una
fuente independiente de ingresos, y que se limiten a realizar transferencias de recursos
tangibles, estarán en una situación difícil. Deberán entrar en la lucha por los contratos
o perecer”.100
99 SAXBY, John. “¿A quién pertenecen las organizaciones de cooperación no gubernamentales?”. En:
SOGGE, David (ed.). Op. Cit. Pp.65-102.
100 SOGGE, David. “Escenarios y elecciones”. En: Compasión y cálculo. Un análisis crítico de la
cooperación no gubernamental al desarrollo. Barcelona: Ed. Icaria Antrazyt, 1998, pp. 21-48.
99
Por otro lado, también es destacable la presencia de otros agentes en el terreno que
efectúen actividades distintas o con objetivos aparentemente dispares. Por este
motivo, pueden originarse solapamientos de actuaciones, y alterar el buen desarrollo
de todas las actividades, por lo que es conveniente determinar si en la misma área de
implementación existen posibles socios u otros agentes con los que pueden cooperar
conjuntamente.
⋅ Agente donante: el agente donante, normalmente un país del Norte101 (aunque
actualmente surgen actuaciones interesantes en el marco de cooperación sur-sur),
dispone de aquellos recursos necesarios o suficientes para poder colaborar y destinar
ayuda a aquellos países más vulnerables o que solicitan algún tipo de asistencia
determinada. Dependerá, en todo caso, de la motivación, voluntad e intereses del
estado para emprender el proceso.
Dependiendo de las políticas de cooperación que rijan en la administración de cada
estado, se establecerán unas preferencias de intervención en cuanto a áreas
geográficas y sector, que vendrán determinadas en cada caso por factores variados
como puede ser el legado histórico, las relaciones económicas o un interés institucional
entre los estados. En cualquier caso, no todas las colaboraciones serán de ámbito
bilateral, sino que también hay que tener en cuenta las actuaciones multilaterales.
Considerando este aspecto desde la perspectiva de no causar efectos negativos, estas
colaboraciones deberían asegurarse bajo los pilares de un consenso colectivo entre
todos los estados o naciones participantes, tanto donantes como receptores. Esta
participación multitudinaria puede representar una actuación de gran envergadura,
pero asegurando en todo caso la complementariedad y coherencia del trabajo
colectivo para que resulte en una actuación adecuada según la realidad que presente
el receptor.
Precisamente por su posición y carácter institucional, un estado puede influir
positivamente a otros estados u organizaciones internacionales para movilizar recursos
101 Cabe puntualizar que los agentes donantes también pueden ser agentes privados, pero por las
características y su predominancia en este ámbito, aquí se habla principalmente de los estados.
100
o participar en determinadas actuaciones. Podrá disponer con facilidad de ciertos
indicadores para obtener información pertinente sobre la situación o conflicto a tratar,
así como la obtención de los recursos necesarios complementarios de los que ya
dispone.
Asimismo, se considerará la relación institucional entre el estado receptor y el donante,
además de las relaciones con la comunidad internacional. A parte de las políticas de
cooperación internacional que se establezcan entre los distintos países, es importante
destacar que en ocasiones, vínculos históricos, políticos o económicos, son plenamente
influyentes, y en determinados casos exclusivos, en las relaciones internacionales. Por
este motivo, puede no haber entendimiento de objetivos o iniciativas, respecto a las
políticas de cooperación, y que el país receptor no acepte la ayuda de un determinado
estado, o por el contrario reciba únicamente aportaciones por parte de un solo
donante, o incluso que las desavenencias políticas interfieran en la intervención de
agentes independientes a las autoridades donantes.
Empero, como se puede comprobar con la realidad de la historia, el altruismo de los
estados no es, en muchas ocasiones, tan transparente. Ante todo, cada estado preciará
sus intereses nacionales ante cualquier situación y esto, en ocasiones, puede frenar la
colaboración o incluso perjudicarla. Dichos intereses articularán unas relaciones
internacionales concretas en cada caso, y se determinará en gran medida la voluntad
de cooperar o no y con qué países, lo que puede condicionar la actuación y que ésta no
cumpla con las pautas mínimas de calidad y coherencia. Por otra parte, los socios que
pueda establecer un estado donante también podrán repercutir negativamente en las
actuaciones de cooperación si no coinciden en cuanto a la metodología a seguir y
objetivos a cumplir, lo que interfiere plenamente con los criterios de coordinación y
reciprocidad ya mencionados.
En el ámbito económico, cabe destacar la influencia en el mercado que las instituciones
públicas pueden desarrollar, ya que a menudo, los mercados locales pueden
representar la supervivencia de la economía local o la recuperación del equilibrio
económico del país, por lo que es necesario un control de posibles irregularidades, por
parte de la administración, partido de gobierno y empresas privadas locales o
101
extranjeras, que puede desembocar en comercio ilegal, corrupción o contrabando.
Aspectos todos ellos que rompen con las normas de seguridad, certidumbre y
fiabilidad del comercio por las cuales las Organización Mundial del Comercio (OMC)
intenta establecer un orden equitativo del mercado mundial.102 De ahí surge la
necesidad de diseñar meticulosamente la intervención de los cooperantes, puesto que
cualquier actuación afecta de un modo u otro a la economía del país receptor y es
probable que los beneficios no sean equitativos, a la vez que la ayuda puede ser
decisiva para algunos sectores, e incluso crear una dependencia. Por este motivo, el
agente donante tendrá que evaluar y determinar a quién concede las ayudas y quién se
encargará de la gestión.
Con todo, el hecho de ceder responsabilidades al país receptor parece que todavía es
una cuestión ante la cual gran parte de los países donantes muestran reticencia o, al
menos, parece que les cuesta asumir y aceptar el nuevo rol que pueden adoptar y
desarrollar los países receptores. Es palpable que en ocasiones estas posturas se
fundamentan en prácticas reales de mala gestión por parte de los estados receptores,
viendo como la inversión de la ayuda no corresponde precisamente a actuaciones de
desarrollo, sino que se destinan a otros servicios de dudosa utilidad, o simplemente
desaparecen. En este caso, surge la reflexión sobre a quién se dan los fondos y, por
otro lado, qué prioriza la política pública de cooperación al desarrollo del donante para
conceder esos fondos.
Tras haber analizado los principales actores de implicación directa, cabe añadir, que
paralelamente, otros actores secundarios que pueden influir en el desarrollo de la
actuación de cooperación y que, según su pertinencia, participarán o no como actores,
pueden ser otras organizaciones civiles tanto locales como del país donante. El mundo
académico, religioso, cultural, movimientos sindicales o incluso partidos políticos no
gobernantes, pueden ejercer un rol participativo entre la población beneficiaria. Según
102 Acerca de la OMC y sus tratados, véase más en su página web disponible en <http://www.wto.org>.
102
la perspectiva del “do no harm”, mediante este impulso se pueden potenciar las
capacidades de los beneficiarios en determinados ámbitos, y servir al mismo tiempo de
conexión entre individuos o colectivos distintos dentro de una misma sociedad.
En definitiva, se escogerán a los actores por esas cualidades y aportaciones positivas al
proyecto a desarrollar, asumiendo los posibles retos que puedan surgir a lo largo del
proceso de implementación. Sin embargo, dependiendo del proyecto que se quiera
realizar y las circunstancias del contexto, habrá algunos actores que serán excluidos del
marco de trabajo, ya que su acción o presencia puede alterar el buen desarrollo de las
actividades o perjudicar las relaciones del conjunto de beneficiarios y actores
cooperantes.
Un ejemplo de ello podría ser, en ocasiones, la misma administración pública del país
de implementación, la cual puede anteponer intereses propios ante cualquier
actuación que pueda beneficiar a sus conciudadanos. La autoridad que puede ejercer
en el contexto de su territorio podría impedir o dificultar la implementación de las
actividades diseñadas o presentar obstáculos a los cooperantes. La exclusión directa de
las instituciones como actores responderá a circunstancias específicas y altamente
contraproducentes para el buen desarrollo de las actuaciones, como por ejemplo una
clara oposición o aberración del estado a ciertos derechos humanos de un colectivos
de la población, o la concesión de licencias de explotación a empresas que se
contradicen claramente con la defensa medio ambiental del entorno.
Otro actor a evitar en la mayoría de casos son las empresas privadas, nacionales o
internacionales, que actúan en la misma área que los cooperantes. La interposición de
intereses podría repercutir en la selección de personal, la adquisición de recursos o
materiales locales, o incluso la utilización de terreno o áreas de trabajo. Asimismo,
podrían alterar factores como la economía o un sector económico del país; perjudicar
el medio ambiente con la explotación masiva de recursos naturales o contaminaciones
contraproducentes; alterar las relaciones sociales de la población receptora, o violar los
derechos humanos a manos de empresas de seguridad privada o mediante la
explotación laboral.
103
En este caso, se pueden antever ciertos intentos de la comunidad internacional y más
concretamente del sector empresarial por establecer unos parámetros mínimos de
actuación y respeto hacia los países receptores de ayudas. Se trata del llamado Pacto
Mundial de las Naciones Unidas mediante el cual las empresas que se adhieren se
comprometen a respetar unos principios basados en los derechos humanos,
estándares laborales, el medio ambiente y la anti-corrupción. En esta unión, bajo el
nombre de Global Compact, las empresas “comparten la convicción de que las
prácticas empresariales basadas en principios universales contribuyen a la construcción
de un mercado global más estable, equitativo e incluyente que fomentan las sociedades
más prósperas.”103 Si bien este es otro intento de la comunidad internacional para
contribuir al desarrollo y fomentar los mercados sostenibles, en ocasiones hay dudas
sobre los intereses y las actuaciones reales de esas empresas. En la actualidad, se
cuestiona el papel que ejerce el Global Compact y su funcionalidad, además de no
ganarse la confianza de la opinión pública por falta de credibilidad ya que no es
vinculante, ni dispone de mecanismos de control efectivos, entre otros.
103 Definición del Pacto Mundial y sus principios, véase en la página web oficial del organismo The Global
Compact. Disponible en <http://www.unglobalcompact.org>, consultado en noviembre 2009.
104
En la actualidad, China está desarrollando un gran plan de inversión en África el cual está
suscitando distintas opiniones y valoraciones al respeto. Por un lado, parece que no todos
sus intereses son el petróleo o los minerales, sino que se adentra en la economía de los
países y fomenta el mercado interno. Sin embargo, pese al auge económico que esto pueda
suponer, el impacto a largo plazo y las consecuencias en el medio ambiente, la sociedad y la
política de los países africanos, es todavía incierta.
“China has big economic plans and ambitions in Africa that go beyond oil and minerals.
While much of the world still views Africa as a basket-case continent, Beijing is thinking
ahead and busy establishing a foothold in Africa's potentially large consumer markets.”
“(…) China has caught on to something that eludes most governments and companies in the
West. Chinese state-owned and private enterprises believe African consumers could be the
great untapped gold mine. Beijing's engagement with African leaders and governments is
increasingly about ensuring that Chinese firms are best placed to sell their products when
Africans start buying.”
“Andrew Rugasira, 40, runs Good African Coffee, a Ugandan company he set up in 2004 to
supply British supermarkets under the motto "Trade, not aid." He is emblematic of a new
generation of African antiaid, antistate entrepreneurs.”
“Los ingresos procedentes del oro negro (…) hoy rozan los 5.000. Pero la realidad no es tan
halagüeña como los números. Un religioso guineano (…) apunta los problemas endémicos al
describir el día a día:"Se ha notado mucho el crecimiento económico en la construcción de
carreteras y hoteles, pero aunque no hay hambruna sí hay pobreza y muchos hospitales no
tienen las condiciones mínimas". En realidad, cerca del 77% de la población vive por debajo
del umbral de la pobreza.”
Fuente: LEE, Jon. “China’s Africa Gambit.” En: Time. Noviembre 2009; PERRY, Alex. “Africa, Business
Destination”. [en línea] En: Time. Disponible en: <http://www.time.com>, consultado en octubre
2009. ALDEKOA, Xavier. “Nueva farsa del dictador.” En: La Vanguardia, Barcelona, 29 noviembre
2009.
105
Beneficiarios
Elementos conectores Elementos divisores
- conocimientos, habilidades, experiencias -> valor añadido - conocimiento territorio y población - edad, sexo -> equidad -> no conflicto - rol comunitario -> prestigio del proyecto - ocupación, oficio -> conocimientos múltiples - pertinencia cultural, religiosa, política… - disponibilidad -> participación - intercambio experiencias -> formación - implicación, participación -> sostenibilidad - cultura, religión… -> conexión y aceptación cooperación
- desconocimiento actividades - edad, sexo, rol -> diferencias -> conflicto - pertinencia cultural, religiosa, política… -> no conexión y rechazo ayuda o cooperantes - diferencias de responsabilidades - no disponibilidad para trabajar - conflictos sociales o territoriales - dependencia de ayudas extranjeras
Agente implementador local
Elementos conectores Elementos divisores
- conocimiento terreno y población -> idoneidad, impacto, realidad proyecto - relación directa beneficiarios/autoridades locales -> comunicación y confianza - contraparte del Norte (donante)-> intercambio directo - relación comunidades cercanas - experiencia con beneficiarios -> valor añadido - mayor capacidad de reacción en contexto conocido
- influencia de opiniones e intereses -> capacidad de vehicular correctamente peticiones - valores arraigados -> posibles desigualdades - desconocimiento de nuevas prácticas o técnicas -> capacidad de adaptación
Autoridades nacionales, locales y comunales
Elementos conectores Elementos divisores
- políticas y planes de desarrollo propios -> coordinación distintos agentes - responsabilidad -> gobernanza - información pertinente-> indicadores nacionales (¿?) - facilidad información - >burocracia - relación directa beneficiarios y cooperantes -> indicadores locales - fortalecimiento gobernanza -> participación - intermediario entre agente donante y agentes locales
- falta de responsabilidad -> mala gestión ayuda - conflicto con agentes donante por intereses - delegación de responsabilidades a los agentes donantes - influencia ideología política o partido político mayoritario
106
Agente implementador o cooperante
Elementos conectores Elementos divisores
- motivación para cooperar - experiencia en el terreno (buenas y malas prácticas) -> conocimiento terreno y población, etc. - relación contraparte-receptora - relación beneficiarios -> colaboración en todo el proceso de implementación - socios - recursos disponibles - capacidades y técnicas distintas - medios de comunicación -> difusión, sensibilización
- colaboración con otros agentes en el terreno -> posible descoordinación - dependencia fondos públicos -> dependencia estados - desavenencia con los socios - naturaleza propia: simple intermediario entre donante y receptor
Agente donante
Elementos conectores Elementos divisores
- motivación para cooperar - disposición de recursos y socios - cooperación con otros agentes -> más ayudas, más actuaciones… - información -> indicadores internacionales - relaciones internacionales
- intereses nacionales propios -> influencia políticas de desarrollo - recursos limitados o dependencia de factores externos - cooperación con otros agentes -> discordias entre socios -> descoordinación - reticencia en ceder responsabilidad al agente receptor - intervención en mercado local
107
Actores con Implicación Indirecta
Como la aplicación del “do no harm” engloba tantos sectores y actores como sea
posible, en el caso de los actores también se considerará aquellos individuos o
colectivos que de algún modo reciben, indirectamente, los efectos de la actuación. Se
adoptará por tanto la precaución necesaria para saber el grado de afectación del
proyecto o actividades a ciertos actores para determinar si, dependiendo de su
naturaleza, es favorable o no que les incidan los efectos del proyecto para conocer su
reacción o en casos determinados, posiblemente involucrarlos directamente en la
actuación.
⋅ Población comunitaria: entre las personas a quienes les afecta la actuación de
modo indirecto está el resto de población receptora que no se incluye entre los
beneficiarios, pero que por motivos de proximidad reciben de un modo u otro los
efectos que genera la actuación. En el momento en que se estima el radio de incidencia
de una actividad o un conjunto de acciones, es deseable hacer una aproximación
basada en datos reales sobre los objetivos a cumplir y respecto al número de personas
que podrán beneficiarse de dichas actividades. Dependiendo de si se trata de una
actuación a nivel local o comunitaria, o únicamente centrada en un colectivo
específico, será preventivo desde el punto de vista del “do o harm” no especular sobre
los resultados de largo alcance que puedan tener las intervenciones.
En el contexto de implementación, cualquier actividad podrá incidir, en menor o mayor
grado, en distintos elementos del entorno de los beneficiarios, como en los sectores
político-económicos, las vías de comunicación, e incluso en las relaciones con
comunidades cercanas. Si la gestión y la implementación de una actuación son
adecuadas, y la correspondencia de todos los actores es eficiente, los resultados
repercutirán en unas buenas relaciones sociales, en el fomento de intercambios de
tradiciones o costumbres culturales, de vínculos económicos o políticos dentro de la
propia sociedad y con los pueblos, comunidades, regiones o hasta países vecinos.
108
Al mismo tiempo, la intervención de cooperantes extranjeros y las actividades que
desarrollan, junto con los demás cooperantes y beneficiarios, pueden aportar valores,
opiniones o puntos de vista distintos a su realidad y ofrecer una visión alternativa de su
entorno y otras realidades. Esto puede afectar no sólo a los beneficiaros, sino también
a esas personas que les rodean en su día a día, adoptando sin ser conscientes, estos
nuevos conocimientos que pueden repercutir en su modo de pensar y actuar. Es decir,
se adoptarán unos conocimientos que más adelante pueden influir positivamente a
otras actuaciones o toma de decisiones por parte de la población receptora.
⋅ Organizaciones civiles, políticas, académicas o religiosas: de un modo
genérico, las organizaciones a las cuales los beneficiarios se adhieren o son
colaboradores, según sus aficiones o ideologías (pero que no participan activamente en
la implementación del proyecto), pueden relacionarse recíprocamente respecto la
actuación. De modo directo estas instituciones pueden influenciar a los beneficiarios
en cuanto al modo de participación en las actividades, las propuestas y las decisiones,
puesto que cada una tiene una gran incidencia en el carácter de las personas.
Por otra parte, pueden oponerse o apoyar el trabajo de los cooperantes. Dependerá en
gran medida de la relación que se establezca, desde un buen principio, de respeto
mutuo y trasparencia por parte de los cooperantes y beneficiarios sobre el trabajo que
realizan. Sin embargo, a pesar de las buenas intenciones, puede que ni los objetivos ni
A finales de 2009, las relaciones entre Venezuela y Colombia parece que se agravan y no
muestran demasiados indicios de reconciliación a corto plazo. Los enfrentamientos políticos
entre ambos estados empiezan a afectar directamente a la población civil y ello puede
comportar hostilidades entre comunidades vecinas. Un claro ejemplo de ello fue la
destrucción de dos puentes peatonales en la frontera entre ambos países. La destrucción
este vínculo simbólico, pero a la vez funcional, entre los dos estados puede repercutir
seriamente en las relaciones estructurales de sus poblaciones.
“Gobierno de Colombia: Este hecho constituye un acto unilateral y agresivo contra la
población civil y las comunidades de frontera. Eusebio Agüero, general venezolano: Es una
decisión soberana del Estado venezolano destruir los pasos ilegales."
Fuente: SALAZAR, Hernando; VALERY, Yolanda. “Venezuela destruye puentes con Colombia”. [en
línea]. En: BBC Mundo. Disponible en < http://www.bbc.co.uk/mundo/america_latina/ >, consultado
en noviembre 2009.
109
la metodología correspondan a sus valores y esto cree un cierto enfrentamiento o
incluso oposición. En tal caso, desde la perspectiva del “do no harm” se optará por
mantenerse apartados de tales organizaciones y evitar, dentro de lo posible, cualquier
actividad que preste a su intervención, siempre y cuando se analicen los efectos que
pueden tener dichos agentes en los beneficiarios y se tendrán en cuenta.
La influencia de un partido político o representante del gobierno, por ejemplo, puede
inculcar a la población ideas hostiles o discriminatorias hacia determinados grupos
poblacionales, actuaciones de los cooperantes o comunidades cercanas. A nivel estatal,
puede darse el caso de que debido a la pertenencia ideológica o las relaciones de
políticas internacionales, comerciales o de defensa, se cree una opinión pública
contraria a las ayudas externas. En ambos casos, a través de la publicidad mediática o
campañas de movilización popular, es posible manipular la opinión de la sociedad y
originar un rechazo común a cualquier tipo de asistencia procedente de determinados
países, como ocurrió con Cuba y la ayuda de los Estados Unidos, en que había implícito
un enfrentamiento de intereses políticos.
La pertenencia a determinados grupos religiosos o étnicos también podrá influir en la
ideología y creencias de la población, condicionando sus capacidades para actuar.
Asimismo, agrupaciones o líderes religiosos pueden incidir en el rechazo hacia la
actuación, la participación de los beneficiarios y la presencia de agentes cooperantes
externos, además de considerarlo como una pérdida de control o liderazgo sobre la
población. Todas las características relacionadas con la cultura de los actores son un
punto crucial en el desarrollo de las actuaciones ya que, en ocasiones, puede ser el
foco de cualquier enfrentamiento.104
104 Como se comentaba sobre la herencia cultural en una sociedad para determinar los orígenes de un
enfrentamiento, la religión es igualmente determinante en estos casos puesto que forma parte de ella y la propia historia del país o comunidad. Este podría ser otro tema de investigación en relación al origen de los conflictos pasados y actuales.
110
⋅ Medios de comunicación: agentes no tan evidentes pero que participan
indirectamente en algunos aspectos de la actuación son los medios de comunicación.
Éstos pueden intervenir inconscientemente en la actuación y generar algún efecto en
las sociedades receptoras y en las de los países donantes. Se refiere a esos agentes que
no participan en ningún proyecto de cooperación de los propios agentes cooperantes,
los cuales ya disponen de unos medios con una función determinada y unos objetivos
específicos de divulgación y sensibilización.
En este caso, los media de los países donantes y de los receptores pueden difundir
informaciones referentes a actuaciones que tienen lugar en determinados sitios y son
relevantes por algún motivo. De esta manera, en los países donantes, los medios
pueden ser en ocasiones los encargados de difundir y explicar las situaciones que se
viven por todo el mundo, y se dan a conocer unas actividades que reflejan la realidad
que tiene lugar más allá de sus fronteras. Un modo sencillo de informar, normalmente
de fácil acceso, que al mismo tiempo puede ejercer de agente sensibilizador imprevisto
y promover la conciencia social respecto a dichas actuaciones.
En el caso de los conflictos bélicos que han tenido lugar repetidas ocasiones en Georgia, los
orígenes se sitúan, principalmente, entre la desavenencia de las diversas etnias que
convivían en un mismo territorio.
“The widespread abuses and terror were consciously targeted against members of the
“enemy” ethnic groups setting off a cycle of retribution and vengeance. The combination of
indiscriminate attacks and targeted terrorizing of the civilian population was a feature of
both sides’ deliberate efforts to force the population of the other party’s ethnic group out
of areas of strategic importance. The practice was adopted first by the Georgian side, in the
second half of 1992, and later, more effectively by the Abkhaz side. The parties terrorized
and forced the enemy ethnic population to flee ... and in some cases entire villages were
held hostage on the basis of ethnicity.”
El resultado de todo ello es la incomunicación y la imposibilidad de volver a escucharse y
renegociar. Pese a tener unos mismos objetivos para resolver el conflicto, las distintas
perspectivas, dificultan el diálogo y los intentos de cooperación. Además, la injerencia de la
comunidad internacional que se posiciona en uno u otro bando dificulta las relaciones y
capacidad de llegar al consenso.
Fuente: GLUCK, Kenny. International Assistance to civilians: the Abkhaz-Georgian Civil War. Reino
Unido: Local Capacities for Peace Project (Do No Harm), 1995.
111
En el otro extremo, las sociedades de los países receptores, que mediante sus canales
informativos reciben esas noticias, también pueden conocer la realidad de sus vecinos
no tan lejanos y descubrir, a través de su propia gente, los avances o cambios que
deberían, como criterio principal del “do no harm”, ayudar a mejorar las condiciones y
las capacidades de la sociedad. Esta repercusión puede beneficiar en el sentido de
educar a la población de distintos sectores y ofrecer una visión más amplia de su
entorno.
No obstante, el aspecto mediático tiene que observarse, siguiendo la práctica de no
dañar, desde múltiples perspectivas, ya que los medios de comunicación (pese a la
libertad de expresión como un derecho universal)105 en ocasiones no ofrecen una
visión objetiva de la situación real, ya sea por no tener acceso a todas las fuentes, por
no poder difundir la información o por ser demasiado subjetivos. En el caso de los
medios de los países donantes, a menudo las fuentes de información que se utilizan
corresponden en su gran mayoría a agencias internacionales o recursos propios,
olvidando a veces, o sin tener suficientemente en cuenta, las fuentes propias del país
receptor y las más locales, que son las que se acercan más a la realidad.
⋅ Terceros actores: en ocasiones, puede que la actuación de cooperación afecte
involuntariamente a terceras personas, las cuales no se contemplaban inicialmente en
el plan de trabajo, pero que sería conveniente tener en cuenta en el contexto por si
existe la posibilidad de incluirlos como actores activos o no, en caso necesario. Estos
terceros actores, también reciben el impacto de la ayuda de modo indirecto.
En tal caso, se encuentran por ejemplo los emigrantes que dejan sus países de origen
para asentarse en otros donde puedan alcanzar un nivel de vida mejor. De este modo,
se establece una relación de intercambio recíproco, económico y cultural a la vez,
puesto que los flujos de bienes o informaciones son constantes y esto favorece el
desarrollo de los dos ejes de conexión, el emigrante y su sociedad originaria. Un
aspecto positivo a destacar desde la perspectiva del “do no harm”, sería que esos
105 “Todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión”. Artículo 19 de la Declaración
Universal de los Derechos Humanos.
112
emigrantes podrían ejercer o no de cooperante o contraparte desde los países
donantes e implicándolos en los proyectos. Como el contacto con los beneficiarios o el
contexto serían directos, podrían ofrecer un nivel de información y conocimiento del
área local fiable y en consonancia a la realidad del momento, siempre evitando
promover la migración en lugar del fortalecimiento local.
Este tipo de desarrollo se ha empezado a definir como “codesarrollo” del cual el Centro
de Investigación y Cooperación para el Desarrollo (CIDEAL)106 es uno de sus principales
investigadores:
“El codesarrollo se basa en la idea central de que las personas que emigran desde los
países menos adelantados hasta los más prósperos pueden contribuir de forma activa
tanto al desarrollo de sus comunidades de origen como al de las sociedades en las que
son acogidas, en materia económica, social y cultural. El codesarrollo sostiene, por
tanto, que las migraciones pueden constituir una oportunidad para el desarrollo, y en
concreto para un desarrollo compartido, como sugiere el término.”107
106 Véase más información sobre sus proyectos en <http://www.cideal.org/>.
107 Definición de codesarrollo e información sobre sus orígenes y proyectos en
<http://www.codesarrollo-cideal.org/>, consultado en noviembre 2009.
Una colaboración entre la Fundación CEAR-Comisión de Ayuda a los Refugiados y Comisión
Española de Ayuda al Refugiado, Sababia y FONDEP y el asesoramiento de la UAM
(Programa de Migración y Multiculturalismo) realizó un proyecto entre Marruecos y España
para la “Creación de Bases Asociativas para la Realización de Acciones de Codesarrollo con
Marruecos”.
“El proyecto trata de fomentar el asociacionismo productivo entre el norte de Marruecos y
la ciudad de Madrid, mediante la creación y fortalecimiento de redes de asociaciones que
se han puesto en contacto, de intercambios mixtos y de asociaciones creadas. Se realizarán
jornadas y encuentros entre asociaciones de ambas localidades, acciones formativas, una
campaña de promoción de microcréditos en ambas localidades, y se constituirá un grupo de
emprendedores de apoyo.”
Fuente: Ejemplos de Codesarrollo. Marruecos se desarrolla. CIDEAL – Codesarrollo. Disponible en:
<http://www.codesarrollo-cideal.org/ejemplos_marruecos_01.php>, consultado en noviembre 2009.
113
Igualmente, hay que considerar el papel que pueden desempeñar emigrantes de países
en desarrollo que se desplazan a otros países en desarrollo, o la denominada
cooperación “sur-sur”. Este desplazamiento también supondrá una transferencia de
conocimientos y capacidades, posiblemente distintas, con lo que se tendrá que evaluar
si, en determinados casos, se podrán implicar directamente estos emigrantes en el
proyecto o no.
Otro caso serían las personas desplazas de países donantes o ricos por cuestiones
diplomáticas o laborales, y otros muy distintos los refugiados o desplazados internos.
Personas con realidades distintas pero que por motivos diversos conviven en un mismo
contexto cuyos cambios o evoluciones repercutirán de un modo u otro en su alrededor.
Finalmente, en la implicación indirecta hay que considerar un elemento que, si bien no
se refiere a un colectivo propiamente dicho, sí a su repercusión en la actuación.
⋅ Actuaciones previas: se tendrán en cuenta a los agentes que han actuado o las
actividades que han tenido lugar en la misma situación o marco de trabajo con
anterioridad. Como se decía en el apartado del contexto, las buenas y malas prácticas
de las experiencias previas pueden dejar un legado entre las capacidades y las prácticas
de los actores implicados en el proyecto, que inherentemente influenciarán en las
consecuentes implementaciones. Con este valor añadido, se podrán adaptar
conocimientos y aptitudes ya adquiridos, sobre todo de los beneficiarios, en las nuevas
actividades para incentivar la participación. Además, puede facilitar, dependiendo de la
situación, la aceptación y entendimiento entre los distintos actores, puesto que si se
trata de colectivos variados, ya habrán experimentado un intercambio cultural. Es decir,
aspectos culturales o hábitos que influyen tanto en la mentalidad como en la actitud
participativa, así como símbolos, gestos o comportamientos que pueden ser
contradictorios e incluso fuente de enfrentamiento.
Además, como ya se ha comentado, estas prácticas pueden dejar un legado de
satisfacción que, en determinados momentos, altere o en cierto modo perjudique la
concepción de los cooperantes y que la población receptora se acostumbre a los
beneficios en los que se traduce su presencia. Esto puede perjudicar el trabajo de los
cooperantes y la intención de arraigar unos hábitos propios para el autodesarrollo.
114
Población comunitaria
Elementos conectores Elementos divisores
- participación indirecta en la actuación (ej. aprovisionamiento material) - aceptación cooperantes en el terreno -> nueva visión de la realidad - afectación en sectores políticos, económicos, comunicación - relaciones sociales, intercambio tradiciones y costumbres culturales
- oposición con la actuación -> intereses propios, políticos, culturales, religiosos… -> impedimento de la realización del proyecto - mala difusión de la actuación - origen de un conflicto social al no ser beneficiarios -> rivalidad, delitos, corrupción…
Organizaciones civiles, políticas, académicas o religiosas
Elementos conectores Elementos divisores
- participación ciudadana de distintos colectivos - fortalecimiento de capacidades locales - divulgación dentro y fuera de la comunidad receptora - adquisición de nuevas competencias
- posible rivalidad entre población o con los cooperantes - diferencia de intereses - > no colaboración - no participación -> no información, no recursos,…
Medios de comunicación
Elementos conectores Elementos divisores
- difusión y educación a la población de los países donantes -> sensibilización - difusión en país receptor y otros -> educación - rendición de cuentas y valoración de la actuación
- no difusión -> invisibilidad de la actuación - no utilización de todas las fuentes e indicadores-> visión única, no realidad del contexto y situación
115
Terceros actores
Elementos conectores Elementos divisores
- intercambio cultural, económico… - flujos de información -> adquisición conocimiento - participación emigrantes en la actuación -> recurso directo y conocimiento realidad actual - relación directa población meta
- posible aumento de más migraciones de los países receptores a los países donantes - dependencia de los donantes
Actuaciones previas
Elementos conectores Elementos divisores
- conocimientos adquiridos de la población meta y los cooperantes -> buenas prácticas
- dependencia de los cooperantes y donantes -> malas prácticas
116
III. Evaluación
“(…) En cualquier caso, hay indicios de que los proveedores de ayuda no han tenido seriamente en cuenta la
complejidad de las dinámicas sociales que recorren en toda su longitud la cadena de la ayuda y han subestimado los peligros de los resultados perversos.”
David Sogge
Finalmente, cabe destacar la importancia de la evaluación en cada una de las etapas de
planificación e implementación de cada una de las actividades que configuran el
proyecto. En la actualidad, los agentes cooperantes son conscientes de que no sólo los
resultados finales son los que permiten extraer las conclusiones definitivas de una
actuación, sino que es necesaria una evaluación permanente de actores y
metodologías. Algunos ya contemplan el análisis de los resultados desde el principio de
una actuación, de manera que se pueden prever las dificultades, problemas y, en la
medida de los posible, imprevistos, que surgirán a lo largo del trabajo de, modo que es
posible determinar las medidas y precauciones que se adoptarán en cada momento.
En cuanto a la tipología de la evaluación, cabe puntualizar que pueden realizarse una
variedad de evaluaciones según su temporalidad, autoría u objeto de estudio, y que
sería necesario que se estableciera una cotidianidad y conciencia respecto a la
realización de cuantas más evaluaciones sea posible, lo que desde el punto de vista del
“do no harm” supondría un mayor conocimiento de la actuación y así poder asegurar la
calidad deseada.
En cualquier caso, toda evaluación deberá regirse por unos criterios de evaluación y
unos factores de desarrollo que permitirán orientar el análisis y estipular unos
componentes básicos a tener en consideración. Los criterios de evaluación, los cuales
ya han ido apareciendo a lo largo del texto, en principio son los que propone el CAD y
son reconocidos internacionalmente y consensuados por organizaciones de todo tipo.
Estos son, una vez más, los criterios de eficacia, eficiencia, pertinencia, impacto y
sostenibilidad. Por otro lado, entre los factores de desarrollo se encuentran las políticas
de apoyo, aspectos institucionales, factores financieros y económicos, factores
117
tecnológicos, socioculturales, género y desarrollo, y factores ambientales y
ecológicos.108 Cada factor tendrá mayor o menor incidencia en cada actuación, y pese a
ser conocidos entre la comunidad cooperante, es recomendable recordarlos e intentar
aplicarlos, en la medida de lo posible, en cada situación.
Un aspecto a considerar será si se trata de una evaluación interna o externa109 en
función de quién la realice. En cada caso, los recursos, los indicadores, el objeto de
estudio y el análisis de resultados podrán variar y ofrecer distintos puntos de vista y
reflexión. Se tendrá en especial consideración en las evaluaciones internas y externas:
⋅ Evaluación interna: la realizan los actores que participan en el proyecto. Se
evalúa la actuación, la metodología empleada, el impacto de la actuación y la
incidencia que ha causado la propia actuación en los actores. Esto permite al actor
determinar cuáles han sido sus conocimientos adquiridos en cada fase y actividad del
proyecto; una autocrítica sobre las aportaciones a la actuación que le permitirán
mejorar o modificar sus capacidades ante futuras actuaciones. Se trata de un
aprendizaje constante que tiene como finalidad máxima asegurar la calidad de las
intervenciones y la coherencia interna.
Sin embargo, este tipo de evaluación estará sujeta a la predisposición de los actores
para realizarla, la capacidad y recursos adecuados y necesarios, y la posterior difusión
entre el resto de actores. Además, puede que en ocasiones las evaluaciones internas
no sean del todo objetivas y que por temor a las consecuencias o críticas no se
muestren los resultados negativos, presentando de este modo únicamente las buenas
prácticas ejercidas, y ofreciendo una buena imagen ante el público pero la cual no
permite reconocer, y reparar, los propios errores.
108 PÉREZ DE ARMIÑO, Karlos (dir.); ABRISKETA, Joana (et alt.). Op. Cit.; MOSANGINI, Giorgio. “Breve
introducción a la evaluación en la cooperación al desarrollo”. [en línea]. En: El Col·lectiu. Debates sobre desarrollo. Col·lectiu d’Estudis sobre Cooperació i Desenvolupament, noviembre 2006. Disponible en <http://www.portal-dbts.org/>, consultado en noviembre 2009.
109 OCDE. Glosario de los principales términos sobre evaluación y gestión basada en resultados. Francia:
Publicaciones de la OCDE.
118
⋅ Evaluación externa: la realizan aquellos agentes ajenos a la actuación y que no
tienen relación directa con los actores. Al no formar parte integrante del proyecto, sus
autores pueden reflejar los resultados sin reticencias y abiertamente, mostrando una
visión objetiva y desde otra perspectiva, hecho que permite analizar tanto los aspectos
positivos como negativos, especialmente de los cooperantes y beneficiarios, y de las
metodologías utilizadas. Estos agentes, por la profesionalización, experiencia en el
ámbito, y dedicación posiblemente exclusiva a esta labor, pueden ofrecer evaluaciones
exhaustivas y rigurosas. La disponibilidad de los medios necesarios y recursos
suficientes puede ser un factor determinante para poder realizar una evaluación de
calidad, utilizando todos los indicadores y fuentes posibles.
No obstante, estas evaluaciones se tendrán que prever en el presupuesto del proyecto,
ya que en ocasiones suponen una inversión mayor que las internas, lo que puede ser
un factor condicionante en el momento de su realización. Si no se disponen de los
fondos necesarios o éstos no se contemplaban a la hora del diseño del proyecto, puede
que no sea posible realizar las evaluaciones o que se realicen de un modo poco
riguroso y efectivo. Además, el coste, la escasez de subvenciones por parte de los
estados donantes y el hecho de no considerar las evaluaciones como parte integrante
dentro del proyecto, agudizan la falta de tiempo y medios para extraer unos resultados
coherentes y ajustados a la realidad.
Respecto al carácter temporal, se puede establecer una periodicidad de la
evaluación110 en la que se diferencian distintas etapas y en que se tendrán en cuenta,
en cada momento, los actores, las metodologías y los resultados conjuntamente:
⋅ Evaluación ex - ante: permite diseñar mejor la intervención para asegurar la
calidad de la actuación durante los momentos previos a la puesta en marcha, además
de la identificación de los actores que se podrán implicar en la actuación o no, a parte
110 UE. “Los momentos de la evaluación”. En: Bases metodológicas. [en línea] EuropeAid - Cooperation
Office. Disponible en la página web oficial de la Comisión Europea: <http://ec.europa.eu/europeaid/index_en.htm>, consultado en octubre 2009.
119
de los beneficiarios y los cooperantes. Se identifican posibles riesgos que afectan al
proyecto y así se corrigen las propuestas planificadas. En este caso, se plantean
opciones alternativas abiertas a modificaciones. También es el momento adecuado
para tener más en cuenta las lecciones extraídas de las experiencias anteriores (buenas
y malas prácticas), así como los indicadores de valor actual, los cuales permiten tener
una referencia sobre la situación del momento y proponer unos indicadores esperados,
racionales con los objetivos que se quieren alcanzar. De esta manera, será posible más
adelante medir el grado de adecuación y cumplimiento de la actuación.
⋅ Evaluación de proceso: se obtienen los resultados casi simultáneamente al
transcurso de la implementación de manera que se pueden hacer ajustes o cambios,
según las realidades del terreno y la evolución del contexto. Aquí intervendrá la
capacidad de los agentes para improvisar, en caso de que los planes aplicados no
resulten adecuados o surjan dificultades inesperadas. Esta evaluación puede ser de
gran importancia ya que, dependiendo de los resultados, se podrá modificar o
interferir en el curso del proyecto a tiempo para que los resultados finales sean los
realmente esperados. También se podrán constatar las capacidades o limitaciones de
los agentes cooperantes o del resto de agentes implicados en el proyecto, incluidos los
beneficiarios.
⋅ Evaluación ex - post: una vez finalizada la acción, justo después o tras un
periodo de tiempo determinado, se verifican los impactos obtenidos, y se identifican y
juzgan los impactos inesperados, así como la situación real del contexto tras la salida
de los agentes cooperantes de la zona de trabajo. Esto permite identificar los cambios
reales efectuados y determinar cuáles se atribuyen a la intervención. En este punto, se
podrán juzgar si los indicadores esperados, que se definían al principio de la actuación,
coinciden con los resultados obtenidos y los indicadores de valor real al finalizar la
actuación. De esta manera, se podrá evaluar el nivel de cumplimiento de la actuación y
valorar hasta qué punto se han cumplido los objetivos; según los resultados se podrá
determinar si las actividades han tenido un impacto o no y en qué medida.
⋅ Evaluación de impacto a largo plazo: aunque a veces parece que una vez
finalizada la actuación y su correspondiente análisis de resultados, la intervención
queda finalizada, la noción del “do no harm” tiene una perspectiva de futuro para
identificar cuáles son los efectos a largo plazo, y cerciorarse de si los resultados
120
conseguidos permanecen interiorizados entre los beneficiarios. Es decir, si tras un
tiempo de haberse finalizado la actuación se ha logrado arraigar las capacidades
adquiridas durante la actuación y se puede observar una mejora de la calidad de su
entorno, ofreciendo los resultados del buen impacto que tuvo. Además, en ocasiones
puede observarse la extensión de la incidencia producida y comprobar que se ha
generado el efecto multiplicador hacia otras comunidades o zonas cercanas al lugar de
implementación anterior.
Todos los resultados obtenidos en cada etapa permitirán conocer y comprender el
contexto o el “terreno de juego” y las relaciones de sus actores, lo que favorece la
toma de decisiones y juicio de valores ante cualquier situación, sobre todo en las
inesperadas. Es, además, una adquisición de conocimientos en el transcurso de la
implementación, sobre la aplicabilidad o no de las actuaciones y la obtención de
nuevas experiencias, que indirectamente se transferirán tanto a los beneficiarios como
a los agentes cooperantes.
El marco metodológico del “do no harm”, además, contempla la evaluación desde
distintas perspectivas, por lo que cabe puntualizar aquí que existen otras evaluaciones
más específicas y metodologías diferentes que no siempre se llevan a cabo,
dependiendo de la envergadura de la actuación, de sus fines, del presupuesto del cual
se disponga para realizarlas y de otros factores. Éstas pueden ser, entre otras, la
autoevaluación del agente cooperante, tanto del donante como del receptor;
evaluación conjunta entre agentes donantes y receptores; la meta-evaluación, para
analizar la calidad de la evaluación hecha con anterioridad; evaluación participativa en
la que trabajan conjuntamente cooperantes y beneficiarios para el diseño,
implementación e interpretación de una evaluación; además de las evaluaciones de las
metodologías empleadas.111 Esta multiplicidad de evaluaciones servirá para acotar los
elementos de análisis y así poder extraer información más detallada y ajustada a la
realidad. Al mismo tiempo, pueden identificarse los errores cometidos que implican
111 OCDE. Glosario de los principales términos sobre evaluación y gestión basada en resultados. Francia:
Publicaciones de la OCDE.
121
algún efecto en la actuación y las limitaciones que hayan surgido tanto en el desarrollo
de las actividades como en la participación de los actores. Si se tienen en cuenta estos
resultados, seguramente se podrán valorar mejor los cambios a efectuar y reflexionar
sobre las enseñanzas adquiridas.
Aunque sea un elemento destacable para el desarrollo de las actuaciones, todavía
actualmente los agentes no son suficientemente conscientes de su importancia y no
existe una “cultura de la evaluación” en la que se establezcan unos parámetros
obligatorios y se facilite su realización y cumplimiento. Parece que la falta de consenso
y coordinación para establecer una política de evaluaciones deja a menudo un vacío en
este ámbito.112
Para asegurar la calidad de las actuaciones, es necesario que paralelamente a las
evaluaciones, se cumplan unos criterios de coordinación113 entre todos los agentes que
intervienen en la actuación de cooperación, cumpliendo con uno de los objetivos de la
ya comentada Declaración de París. Es manifiesta la necesidad y el compromiso de
cooperación entre los diversos actores con el fin de actuar por unos objetivos comunes
y evitar la competencia innecesaria, buscando un sistema de coordinación en todos los
niveles.
También tienen un rol destacable la rendición de cuentas (accountability)114 y la
reacción y valoración por parte de los beneficiarios (feedback). En ambas
circunstancias existe un intercambio de información y se evalúan todos los aspectos
que intervienen en una actuación, desde el número de actores a aspectos económicos
112 GARCIA FORÉS, Estefania. “La evaluación de las ONGD: un reto para mejorar la ayuda al desarrollo.
Realidad y perspectivas.” Memoria de Máster de la Universitat de Barcelona, junio de 2005.
113 REY, Francisco. “La complejidad de actores en la acción humanitaria y el reto de la coordinación.” En:
ROBERTS, Adam; ABRISKETA, Joana (et alt.). Los desafíos de la acción humanitaria. Barcelona: Icaria Antrazyt, 1999. p.147.
114 ANDERSON, Mary B. “Experience with Impact Assessment: Can we know what Good we do?”. [en
línea]. En: Berghof Handbook Dialogue Series. Alemania: Berghof Research Center for Constructive Conflict Management, Agosto 2004, 13 pp. Disponible en: <http://www.berghof-handbook.net>, consultado en mayo 2009. DELPH, Elisabeth. “Global Vertical Programmes: The future of Aid or a Quick Fix?”. [en línea]. En: The Reality of Aid. Reality Check. Filipinas: EURODAD, pp. 3-10, Julio 2008.
122
o peticiones por parte de los cooperantes hacia los países donantes o los beneficiarios
hacia los cooperantes.
En concreto, la rendición de cuentas permite un cierto control de los agentes
cooperantes mediante el cual deberían presentar todos los resultados y explicaciones
pertinentes sobre la actuación a los donantes, los receptores y la sociedad civil en
general. Mediante este proceso se pretende obtener la transparencia necesaria y
deseable para poder garantizar la calidad y eficiencia de la actuación de cooperación.
Por un lado, se evaluará al agente cooperante procedente del país donante, respecto a
los resultados conseguidos y los objetivos alcanzados. A parte del análisis propio de la
actuación, es una buena oportunidad para el cooperante de reflexionar nuevamente
sobre sus acciones, e identificar cuáles han sido en todo momento sus flaquezas o sus
puntos fuertes, así pues, se valorará el profesionalismo, la renovación y la formación
continua de su personal. Asimismo, se podrá valorar el nivel de incidencia en el
proyecto o en la situación de desequilibrio social y económico donde han intervenido y
la relación con los beneficiarios, para tener conocimiento de sus buenas y malas
La comunicación directa entre actores resulta imprescindible puesto que la perspectiva de
unos y otros varía dependiendo de su posición y situación. Los beneficiarios podrán evaluar
en primera persona la buena o mala implementación de un proyecto o requerirán de una
intervención concreta. Por otro lado, los donantes, no pueden actuar y ofrecer recursos sin
conocer cuáles son las peticiones o necesidades que llegan de los países receptores.
“Lack of feedback is one of the most critical flaws in existing aid. It comes about because of
the near-invisibility of efforts and results by aid agencies in distant parts of the world.”
“At a higher level, accountability is necessary to motivate a whole organization or
government to use Searchers. In contrast, Planners flourish where there is little
accountability. Again, outsiders don’t have much accountability and are more likely to be
Searchers.”
“To simplify by a couple of gigawatts, the needs of the rich get met because the rich give
feedback to political and economic Searchers, and they can hold the Searchers accountable
for following through with specific actions. The needs of the poor don’t get met because
the poor have little money on political power with which to make their needs know ad they
cannot hold anyone accountable to met those needs. They are stuck with Planners. The
second tragedy continues.”
Fuente: EASTERLY, William. Op. Cit., pp.13-15.
123
prácticas acometidas en tal situación, lo que permitirá reflexionar nuevamente sobre
su identidad, sus principios, propiedad y dirección.
Por otro lado, la opinión y reacción que extraen los beneficiarios de la actuación es
tanto o más importante que los análisis de resultados, y permite valorar y evaluar el
grado de satisfacción, del cumplimiento de los objetivos y de la adecuación de las
actividades a la realidad del contexto, así como el nivel de apropiación por parte de los
beneficiarios. Dentro de la línea de trabajo del “do no harm” es idóneo la consideración
de sus reacciones, puesto que es una manera directa de conocer las necesidades
reales, dentro de unos parámetros humildes como ya se ha visto, y se les permite
apropiarse del proyecto con la idea de garantizar un impacto positivo y sostenible.
Sin olvidar el realismo e idoneidad de las prácticas que se quieran realizar, los
resultados extraídos de estas evaluaciones también pueden mostrar los límites y el
alcance que la actuación de cooperación presenta ante el contexto al cual se expone, y
se podrán establecer las responsabilidades adecuadas a cada actor. Siempre y cuando
se realicen dichas evaluaciones y se valoren adecuadamente los resultados, se podrá
adoptar la postura de prevención y mitigación de conflictos que incumbe, en mayor
grado de responsabilidad, a la esfera política o de poder del país receptor y los agentes
donantes.
124
Otro elemento que se evalúa es la metodología empleada en la implementación de
cada actividad y por cada actor. Mediante los resultados obtenidos y estableciendo
mecanismos de consulta entre los actores es posible determinar si los sistemas de
trabajo aplicados han sido pertinentes y adecuados a la situación, y al contexto cultural
y poblacional. La resolución de enfrentamientos inesperados o situaciones sensibles,
también permite identificar si se ha actuado con acierto, de modo que la actitud
adoptada podrá aplicarse a otras situaciones convenientemente. Del mismo modo,
también se realiza un control de calidad a los mecanismos empleados en las
actividades y a los métodos de intervención de beneficiarios, donantes y cooperantes,
reconociendo el rol que ha desempeñado cada método y sus consecuencias.
Por lo tanto, es necesario realizar una evaluación de todos los métodos de
participación, de utilización de recursos locales apropiados para la difusión y
apropiación del proyecto por parte de la población. Comprobar si han sido respetuosos
y promocionan a la vez los derechos humanos, así como si han sido respetuosos con el
Un proyecto de una asociación canadiense en apoyo a las cooperativas agrícolas promueve
el liderazgo y la gobernabilidad a través de los mismos agricultores. El programa pretende
formar a sus miembros con los conocimientos y aptitudes suficientes para que puedan
desarrollar y expandir sus negocios autónomamente.
“Based on this feedback and extensive consultation between Gay Lea Foods Co-operative
and the Canadian Co-operative Association, a comprehensive training and development
program has been developed which meets the needs of current and future farmer-directors
and delegates well as providing opportunities for developing leadership in rural
communities across Canada.
The key aim of the Leadership in Governance Program is to ensure that dairy co-operatives,
other farmer-controlled agricultural businesses within the dairy sector and the wider
agricultural co-operative sector have the skills, knowledge, attitude and capabilities
amongst current and aspiring delegate representatives and farmer-directors as well as
aspiring delegates and directors to fully contribute to the delivery of business plans and
strategies through excellence in corporate governance and member communications.”
Uno de los beneficios de este programa es la adquisición de la competencia adecuada por
parte de los mismos trabajadores del sector, para desarrollar, mantener y ampliar su propio
negocio.
Fuente: Leadership in Governance: by Farmers for Farmers. Canadian Co-operative Association.
Disponible en <http://www.coopscanada.coop/>, consultado en noviembre 2009.
125
medio ambiente y adecuan las actividades a los recursos disponibles. En definitiva,
evaluar qué materiales se han utilizado en cada ocasión y comprobar que son
apropiados, cómo se consiguen y cómo se distribuyen.
Es importante, para asegurar el buen impacto y la calidad de la intervención, conocer la
metodología aplicada en cada situación y el papel que han ejercido los actores, de
modo que es posible determinar los efectos de la actuación desde distintas
perspectivas y determinar qué aspectos concretos han resultado positivamente y
cuáles no. En este caso, sería conveniente realizar evaluaciones específicas sobre la
equidad de género dentro del proyecto y en general, para observar si se han repartido
las responsabilidades equitativamente o se ha reforzado el papel de la mujer en la
sociedad mediante las actividades realizadas. La evaluación sobre el impacto
medioambiental permite conocer si las técnicas utilizadas respetan el entorno natural
y, dependiendo del proyecto, si en mayor o menor medida se han promovido
actividades ecológicas o se ha evitado la contaminación. Y, entre otras, la evaluación de
impacto en la gobernanza de la comunidad o colectivo con el que se haya trabajado
mostrará si mediante las actividades se han distribuido adecuadamente las
responsabilidades, se han desarrollado correctamente y si han incidido realmente en
las relaciones estructurales de la población receptora. En general, comprobar que
todos los actores comparten la misma lengua vehicular y determinar cuáles son los
métodos de comunicación entre ellos y de difusión del proyecto.
Finalmente, dentro de la metodología también cabe destacar la importancia de los
medios y mecanismos utilizados para la divulgación de los resultados de las
evaluaciones así como de la actuación propiamente dicha. El hacer públicos los
resultados de una iniciativa y de todos sus componentes, entre todo el conjunto de los
agentes implicados y al público en general, permite hacer difusión y educar sobre una
actuación y despertar el interés por un proyecto en concreto; se puede conseguir un
mayor impacto, una mayor implicación de los beneficiarios ya que les aporta
beneficios. Al mismo tiempo, la publicación de los resultados entre la sociedad civil,
mayoritariamente de los países donantes, permite la difusión del trabajo realizado, el
conocimiento de otra realidad existente en otros contextos y quizá la concienciación e
interés por unas situaciones hasta el momento desconocidas en el conjunto de la
126
opinión pública. Se trata de sensibilizar tanto a la sociedad de los países donantes
como a la de los receptores, establecer la rendición de cuentas pertinente, y la mayor
socialización de la actuación de cooperación.
La utilización de distintos medios y métodos para difundir todos los resultados,
positivos y negativos, concede transparencia al conjunto de la actuación y los actores, y
ofrece la confianza necesaria para creer en el proyecto. Sin embargo, la publicación y
difusión de los resultados entre la sociedad civil de muchos países no es tan sencilla,
debido a la falta de medios o el interés para mostrar los resultados, si realmente éstos
existen o se han realizado evaluaciones de algún tipo.115 En el caso de los agentes
donantes y cooperantes del norte, “diversos elementos explican esta situación. El coste
elevado que supone la acción evaluativa es un obstáculo evidente que favorece a las
grandes agencias y limita las posibilidades de los actores de la sociedad civil. De hecho,
la realidad del trabajo de las pequeñas y medianas asociaciones, muy dependientes de
la financiación pública, les dificulta incorporar plenamente a la evaluación en el ciclo de
vida del proyecto ya que es impensable actualmente incluir en la financiación de un
proyecto su evaluación dos o tres años después de la ejecución. Otro aspecto
relacionado tiene que ver con la complejidad metodológica, ya que evaluar requiere
conocimientos teóricos y prácticos específicos sobre un gran número de herramientas.
También existen resistencias de las organizaciones a una labor percibida a veces como
un control obligatorio o incluso una amenaza”.116
En todo caso, la evaluación de cualquier actuación de cooperación y de cualquier actor,
debería consolidarse como una responsabilidad para redefinir y defender unos
intereses y principios sometidos a cambios constantes, y no convertirse en una mera
contabilidad y rendición de cuentas sobre los recursos y esfuerzos dedicados a una
actuación en concreto. Para poder alcanzar la calidad deseada y adecuada en cada
115 FOWLER, Alan; BIEKART, Kees. “Sirven realmente de algo las organizaciones de cooperación no
gubernamentales?”. En: SOGGE, David (ed.). Op. Cit., pp.153-189.
116 MOSANGINI, Giorgio. “Breve introducción a la evaluación en la cooperación al desarrollo”. [en línea].
En: Debates sobre desarrollo. El Col·lectiu. Col·lectiu d’Estudis sobre Cooperació i Desenvolupament, noviembre 2006. Disponible en <http://www.portal-dbts.org/>, consultado en noviembre 2009.
127
situación, la noción del “do no harm” implica la necesidad de realizar evaluaciones y
aceptar todos los resultados, convirtiéndose así en una evaluación constructiva de cada
etapa y actor del proyecto.
La llamada “cultura de la evaluación” debería establecerse como un elemento más,
imprescindible de todo el proceso de desarrollo y todos los actores de las actuaciones
de cooperación.
128
4. Conclusiones
"Ninguna nación debería depender de ningún donante" Ellen Jonson -Sirleaf, Presidenta de Liberia
“¿Las buenas acciones de las organizaciones producen algún cambio real? ¿O es el
personal humanitario sólo un puñado de “idiotas inútiles” cuyos proyectos se colapsan
en cuanto vuelven a casa o dejan de enviar dinero? ¿Su efecto sirve más bien para
enmascarar la raíz del problema, ofreciendo consuelo a los más acomodados pero
afligidos occidentales, y desviar la atención de la cruda realidad de la pobreza y
desesperación? ¿Trabajan voluntariamente por grandes propósitos morales o se ha
convertido en un mero negocio, que excluye cualquier ideal? Además, ¿en qué valores
se apoyan? ¿A quién representan? ¿A quién pertenecen y quién controla en realidad las
organizaciones de cooperación (…)?”117
Con cuestiones parecidas empezaba la introducción de esta memoria para abrir las
puertas a una reflexión sobre el trabajo que se realiza en el ámbito de la cooperación al
desarrollo. Como se ha visto, desde la perspectiva del “do no harm” existen diferentes
caminos para abordar una actuación de cooperación, siempre y cuando se tengan en
consideración las consecuencias que cualquier acto puede suponer.
Se trata, en todo caso, de no focalizarse únicamente en cumplir unos objetivos sino de
reflexionar e imaginar el qué pasaría si se actúa de una forma determinada. La
prudencia y la prevención serían probablemente las principales virtudes de la noción
del “do no harm”. Toda la metodología que se emplea para la implementación de
actividades, la actuación y relación de actores, y las pertinentes evaluaciones, tiene en
consideración las características y las conexiones entre todos los elementos que
interactúan en el “terreno de juego”. Porque cada paso que sucede la actuación
afectará al conjunto de elementos implicados y, consecuentemente, a los resultados.
117 SOGGE, David. Op. Cit., pp.22-23.
129
El concepto del “do no harm” significa también un cambio de mentalidad y, como
consecuencia, otra manera de actuar. Con el fin de mejorar los resultados y asegurar un
mínimo de calidad, debe considerarse el entorno desde todas las perspectivas posibles
y cambiar el modo de pensar y entender las cosas. Con esto no se quiere decir que se
debe renunciar a principios o ideales, sino al contrario, estar abiertos y dispuestos a
aceptar distintas maneras de ver la realidad. En ocasiones, esto implicará el actuar de
otra manera en cualquier ámbito o situación, de modo que en términos generales, este
concepto podría tener multiplicidad de aplicaciones. Y es que el “do no harm” potencia
la capacidad de reacción ante imprevistos, la capacidad de prever situaciones y
conflictos antes de que ocurran, lo que garantiza una mayor efectividad de la actuación
que se realice.
En el ámbito que aquí nos concierne, la cooperación al desarrollo, no se trata de
repartir bienes materiales o tangibles, sino de una inversión de ideas y/o
conocimientos para poder incidir en el punto de vista de todos los actores. Uno de los
principales protagonistas, mediante el cual la práctica del “do no harm” pretende
desarrollarse, son los beneficiarios. Atribuyéndoles conocimientos, experiencia y
responsabilidades se pretende que adquieran la capacidad y empeño necesarios para
que ellos mismos sean lo suficientemente autónomos para realizar cualquier actuación
y procurar por su autodesarrollo.
Sin afán de conseguir los mejores resultados ni cambiar la perspectiva mundial
súbitamente, y ciñéndonos precisamente a los criterios de humildad y realismo del “do
no harm”, el objetivo primordial sería conseguir un impacto positivo, de calidad, en
todos los ámbitos y sin causar perjuicio alguno.
Y pese a que las palabras dichas hasta el momento puedan sonar bien y difundir hálitos
de prosperidad, la realidad de los hechos y la historia actual nos muestran que queda
mucho trabajo por hacer, a nivel individual y colectivo a la vez, para poder cruzar la
línea de la teoría a la práctica. A pesar de los buenos ejemplos mencionados que se
aplican en proyectos de cooperación de todo el mundo, es difícil encontrar una
implementación que tenga en cuenta todas y cada una de las premisas expuestas del
130
“do no harm”. Por lo que debería consolidarse esta perspectiva distinta de la realidad y
de la cooperación al desarrollo y actuar en consecuencia.
Cuando se analiza el contexto para desarrollar una actuación de cooperación, a
menudo pasan inadvertidos indicadores, informaciones o elementos que pueden ser
relevantes durante la implementación y decisivos en los resultados finales. Para
conseguir el impacto positivo deseado es necesario utilizar indicadores reales y
establecer unos objetivos también reales en cuanto a la situación que se aborda. Cabe
delimitar y conocer el espacio donde se quiere trabajar, sus características y las
circunstancias del momento, así como sus condicionantes y limitaciones que
supondrán unos riesgos a asumir en el momento del diseño y planificación de una
actuación. Elementos como la situación geográfica, composición estructural de la
sociedad receptora, o problemas endémicos del país permitirán identificar los
problemas y necesidades a atender.
La motivación de los agentes cooperantes, de los países donantes y receptores, y de los
beneficiarios es importante para poder delimitar el objetivo y el tipo de actuación que
podrán alcanzar, puesto que se conocerán las aptitudes, recursos y disposiciones de los
agentes que desarrollarán las actividades, además de sus debilidades. Así pues, dentro
de unos parámetros de pertinencia en el contexto se establecerá el motivo principal de
la actuación.
También cabe destacar que la temporalidad será un factor determinante durante todo
el proceso de implementación, ya que ello marcará el momento adecuado para actuar.
En este caso, para determinar los periodos de intervención se tendrán que considerar
distintos factores y coordinarlos pertinentemente para que el resultado sea eficiente.
Factores como la climatología, periodos de elecciones, de cosechas o festividades
culturales, entre otros, pueden condicionar en gran medida el buen desarrollo de una
implementación.
A menudo, los resultados finales son consecuencia directa de la falta de previsión y
organización inadecuada al principio de la actuación. Al no disponer de toda la
información pertinente, no comparar los indicadores reales de distintas fuentes y al no
participar conjuntamente los agentes donantes, cooperantes y beneficiarios, las
131
actuaciones resultan inadecuadas, sin aprovechar una aplicación eficiente de recursos
y capacidades en el momento adecuado. Así, por ejemplo, un proyecto basado en la
seguridad alimentaria, puede mejorar el problema de la hambruna en la población
meta, pero perjudicar otros sectores como los agricultores locales, el mercado interno
del país, técnicas agrícolas tradicionales o capacidades de gestión de las instituciones
públicas (aspectos que corresponderían a la soberanía alimentaria) si no se tienen en
debida cuenta todos los indicadores y sectores pertinentes.
Por otro lado, la organización de la actuación tiene que ser realista al contexto y
responder a unos objetivos específicos. Para que resulte eficaz y en consonancia a la
situación que se aborda se determinará, considerando todas las posibilidades y riesgos,
qué se quiere hacer y cómo. Siempre en función de lo que puedan aportar todos los
actores y las características de la situación, se valorarán cuantos más elementos
posibles para definir el procedimiento de implantación, sus características y los
posibles problemas que podrán surgir durante la implementación. Es importante
considerar la metodología que se aplicará en cada caso con el fin de asegurar el buen
desarrollo de la actuación y no ocasionar daño alguno, teniendo en cuenta además
aspectos transversales que influyen en el resultado final, como la equidad de género
ejercida durante todo el proceso, la delegación de responsabilidades para fomentar la
gobernanza, respeto de los derecho humanos, o la preservación del medio ambiente.
En ocasiones, para conseguir el objetivo final no hay que seguir una línea recta sino
que se deben hacer todas las vueltas necesarias para asegurarse de que se han
implicado todos los factores. Si no se consideran esos elementos que, aparentemente
no tienen relación alguna con la actuación que se quiere realizar, puede que el
resultado final cumpla con el objetivo primordial pero carezca de cualidades. La
cultura, la ideología, el rol comunitario, las relaciones sociales e institucionales con
otras comunidades o países, son una pequeña muestra de estas características
inherentes al contexto y a los beneficiarios a considerar.
Los principales protagonistas de todo el proyecto serán los actores. De todo el
conjunto de actores relacionados a la actuación se establecerán las responsabilidades
de cada uno en el proyecto y el rol a desempeñar. Dependiendo de cada situación, los
132
agentes podrán variar y sus características determinarán su función en cada actividad.
Para asegurar una correcta adecuación de la actuación se considerará el vínculo de
cada actor con el proyecto y las potencialidades de que dispone. Otorgando especial
interés a los beneficiarios, se les implicará cuanto más sea posible en todo el proceso
del proyecto, de modo que adquieran las capacidades necesarias para
responsabilizarse, paulatinamente, de todo el desarrollo de su entorno. Además de las
cualidades que se aplicarán en la implementación, sobre todo hay que tener en cuenta
las limitaciones y contradicciones de los actores que pueden concurrir durante todo el
proceso, puesto que pueden alterar los resultados finales y no ofrecer la calidad y
eficiencia esperadas.
Parece que en ocasiones sea más sencillo prescindir de unos actores, para asegurar la
finalidad de un proyecto, que invertir más tiempo y esfuerzo en trasmitir conocimiento
y responsabilidades. En este caso, el cambio de mentalidad tendría que implicar una
concesión de responsabilidad, y posiblemente de autoridad, hacia aquellas personas,
los beneficiarios, que idealmente llegarán a prescindir de otras, los donantes y
cooperantes.
Finalmente, cabe destacar la evaluación que de cada elemento se tendrá que realizar.
Los procesos evaluativos, así como sus resultados, son fundamentales para determinar
el resultado real de la actuación. La posterior difusión de los resultados, ya sean
positivos o negativos, garantizan la transparencia de la actuación y de sus actores, al
mismo tiempo que servirán para sensibilizar y educar a la población, de los países
donantes y receptores, para motivar a los agentes cooperantes, para conocer otras
realidades y para aprender de las experiencias, buenas y malas, con el objetivo de
mejorar en adelante.
Sin embargo, la falta de consenso colectivo por parte de todos los actores repercute en
la falta de iniciativa para evaluar. Posiblemente por la falta de recursos, la
desinformación sobre qué evaluar y cómo, el desconocimiento de la utilidad y
aplicación de las evaluaciones, o simplemente el temor a los malos resultados,
ocasiona que no exista una “cultura de la evaluación” para normalizar esta práctica y
permanezca como una tarea pendiente. Precisamente estableciendo los criterios del
133
“do no harm”, será posible perder el miedo a la evaluación y verla como un elemento
positivo dentro del proyecto que ofrece la oportunidad de mejorar.
Para concluir, apuntar que el enfoque del “do no harm” que se ha expuesto, puede a su
vez aplicarse en cualquier nivel institucional, en las políticas de cada país y no tan sólo
en el ámbito de la cooperación. Empezando desde dentro de las políticas estatales
quizá las reformas, y mejoras, implicarían un cambio posterior a escala internacional, y
si, en todo caso, existe el acuerdo y coordinación de todos los participantes.
En definitiva, la voluntad de querer solucionar los problemas tendría que adaptarse a la
voluntad de prevenirlos.
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CIDEAL – Centro de Investigación y cooperación para el Desarrollo (España):
http://www.cideal.org
Col·lectiu d’Estudis sobre Cooperació i Desenvolupament (España): http://www.portal-
dbts.org
Comisión Europea (varios): http://ec.europa.eu/index_es.htm
Deparment for International Development (Inglaterra): http://www.dfid.gov.uk
Development Studies Institute DESTIN (Inglaterra): http://www.lse.ac.uk/collections/DESTIN
Eldis (Suecia, Noruega, Inglaterra, Suiza): http://www.eldis.org
Escola de Cultura de Pau (España): http://escolapau.uab.cat
EuropeAid (Europa): http://ec.europa.eu/europeaid/index_es.htm
Federal Ministry for Economic Cooperation and Development (Alemania):
http://www.bmz.de/en/issues/Peacebuilding/peacebuilding/index.html
Fondo Monetario Internacional (varios): http://www.imf.org
FRIDE – Fundación para las Relaciones Internacionales y el Diálogo Exterior (España):
http://www.fride.org
Fundació CIDOB (España): http://www.cidob.org
Greenpeace (varios): http://www.greenpeace.org
Health Care Without Harm (varios): http://www.noharm.org
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Hegoa - Instituto de Estudios sobre Desarrollo y Cooperación Internacional (España):
http://www.hegoa.ehu.es
Humanitarian Practice Network (Inglaterra): http://www.odihpn.org
Iniciativa social y estado de bienestar (España): http://www.iniciativasocial.net/nodanar.htm
Instituto de Estudios para la Paz y la Cooperación- IEPC (España):
http://www.universidadabierta.org
Intermón Oxfam (varios): http://www.intermonoxfam.org
International Labour Organization (varios): http://www.ilo.org
Médicos Sin Fronteras (varios): http://www.msf.es
Millennium Villages (Estados Unidos): http://www.millenniumvillages.org
National Center of Competence in Research North-South (Suiza): http://www.north-
south.unibe.ch
Norwegian Agency for Development Cooperation (Noruega): http://www.norad.no
Observatori dels Drets Humans (España): http://www.observatoriodelosderechoshumanos.org
Organisation for Economic Co-operation and Development (varios): http://www.oecd.org
Organización de las Naciones Unidas (varios): http://www.un.org/es
Overseas Development Institute (Inglaterra): http://www.odi.org.uk
Swedish International Development Cooperation Agency (Suecia): http://www.sida.se
Swiss Agency for Development and Cooperation SDC (Suiza): www.sdc.org.np
SwissPeace (Suiza): http://www.swisspeace.ch
The Development Gateway (Inglaterra): http://www.developmentgateway.org
The Graduate Institute of Geneva (Suiza): http://graduateinstitute.ch
Transnational Institute (Holanda): http://www.tni.org
Welthungerhilfer (Alemania): http://www.welthungerhilfe.de/conflict-sensitive-approach.html
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6. Anexos
I. Abreviaturas y Siglas
Término en español Término en inglés
ASD Acción Sin Daño DNH Do No Harm
BM Banco Mundial WB World Bank
CAD Comité de Ayuda al Desarrollo DAC Development Assistance Committee
FAO Organización de las Naciones
Unidas para la Agricultura y la
Alimentación
FAO Food and Agriculture Organization of
the United Nations
FMI Fondo Monetario Internacional IMF International Monetary Found
IDH Índice de Desarrollo Humano HDI Human Development Index
OCDE Organización de Cooperación y
Desarrollo Económicos OECD
Organization for Economic
Cooperation and Development
ODA Ayuda Oficial al Desarrollo OAD Oficial Aid for Development
ODM Objetivo de Desarrollo del
Milenio MDG Millennium Development Goal
OMC Organización Mundial del
Comercio
WTO Wordl Trade Organization
ONGD Organización No-
Gubernamental de Desarrollo NGOD
Non-governamental development
organization
ONU Organización de las Naciones
Unidas UNO/UN United Nations Organization
PIB Producto Interior Bruto GDP Gross domestic product
PMA País Menos Adelantado LDC Least Developed Countries
PNUD Programa de las Naciones
Unidas para el Desarrollo UNDP
United Nations Development
Programme
PPME País Pobre Muy Endeudado HIPC Heavily Indebted Poor Country
UNIFEM Fondo de Desarrollo de las
Naciones Unidas para la Mujer
UNIFEM United Nations Development Fund for
Women
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II. Glosario de palabras clave español-inglés
Nota: las definiciones que se presentan no son exclusivas, puesto que algunos conceptos están sujetos a variaciones y ampliaciones
de su significado y varían según el ámbito en que se emplean. En este caso, se adaptan al contexto de la cooperación al desarrollo y
la noción del “do no harm”.
Término español Término equivalente inglés Explicación
actores actors Todas aquellas personas o colectivos que están involucrados en todo el proceso de desarrollo de una actuación de cooperación, desde su diseño hasta su implementación y evaluación. Entre los actores se distinguen los actores directos y los indirectos.
autodesarrollo self development Capacidad y voluntad de un individuo, grupo o estado para desarrollar sus habilidades y mejorar sus competencias a nivel social, político o económico, sin dependencia de otros agentes.
ayuda humanitaria humanitarian aid Conjunto diverso de acciones de ayuda a las víctimas de desastres cuya asistencia es necesaria en el menor tiempo posible para cubrir las necesidades básicas de la población.
beneficiarios/ destinatarios/ grupo meta
beneficiaries/ reach/ target group
Individuos, grupos u organismos que se benefician directamente de una intervención para el desarrollo además de ser partícipes y actores de toda la intervención.
capacidades/ fortalezas
capacities/ strengths
Aptitudes de los actores para realizar acciones o alcanzar estados de existencia con los que conseguir el bienestar o afrontar un conflicto. El desarrollo consiste en un proceso de aumento de las capacidades de las personas y de consiguiente reducción de su vulnerabilidad.
condicionalidad conditionality Conjunto de condiciones que el donante impone al receptor para poder ser destinatario de la ayuda y para que ésta sea eficaz. Constituye un cumplimiento mínimo de unas políticas económicas y sociales adecuadas, instituciones honestas y
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7
responsables, y un entorno democrático y de respeto a los derechos humanos.
conflicto conflict Problema o situación que crea tensión entre las distintas partes involucradas por motivos de divergencia, discordia o desigualdades de cualquier índole, en un estado o en el seno de una sociedad.
cooperación al desarrollo development cooperation Conjunto de actuaciones diseñadas a largo plazo con el fin de incrementar el desarrollo económico, tecnológico y humano en los países más desfavorecidos, tratando de alcanzar con éstas un crecimiento sostenible a partir de las propias capacidades de los beneficiarios.
coordinación coordination Concentración y gestión de esfuerzos y recursos de los actores, tanto donantes como receptores, para el buen desarrollo y funcionamiento de una actuación de cooperación al desarrollo.
debilidades/ limitaciones
weakness/ limitations
Aptitudes de los actores que pueden perjudicar la realización de una actuación por no tener los conocimientos o habilidades necesarias en el caso concreto, y que puede resultar un impedimento para resolver un conflicto o la fuente del mismo.
derechos humanos human rights Derechos fundamentales que, recogidos en la Declaración Universal de los DDHH, reafirman y velan por la libertad, la justicia y la paz en el mundo, y tienen por base el reconocimiento de la dignidad intrínseca y de los derechos iguales e inalienables de todos los miembros de la familia humana.
efecto multiplicador/ efecto catalizador
multiplier effect/ catalytic effect
Efecto de los actores beneficiarios de difundir y enseñar las capacidades y experiencias adquiridas a zonas o áreas cercanas, sin la intervención de los agentes cooperantes.
eficacia effectiveness Medida en que se lograron o se espera lograr los objetivos de la intervención para el desarrollo, tomando en cuenta su importancia relativa.
eficiencia efficiency Medida en que los recursos/insumos (fondos, tiempo, etc.) se han convertido en resultados positivos.
empoderamiento empowerment Proceso por el cual las personas fortalecen sus capacidades, confianza, visión y protagonismo como grupo social para impulsar cambios positivos de las situaciones que viven.
enfoque “do no harm”/ acción sin daños
do no harm Marco teórico para analizar el impacto de la ayuda sobre conflictos, al tiempo que ha formulado una serie de pautas para gestionar la ayuda de forma que, en lugar de alentar el conflicto, estimule a la población a encontrar mecanismos alternativos para desvincularse del mismo y abordar sus causas.
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8
equidad de género gender equity Capacidad legal, social y política de mujeres y hombres para movilizar y gestionar todo tipo de recursos en condiciones igualitarias.
evaluación de término medio/ evaluación de proceso/ evaluación formativa
mid-term evaluation/ process evaluation/ formative evaluation
Evaluación cuyo objeto es mejorar el desempeño y que generalmente se realiza durante la fase de implementación de un proyecto o programa.
evaluación ex – ante/ evaluación inicial/ evaluación previa/ pre-evaluación
ex – ante evaluation/ appraisal/ quality at entry
Evaluación que se efectúa antes de poner en práctica una intervención para el desarrollo y permite identificar los posibles riesgos que se encontrará la actuación.
evaluación ex – post/ evaluación de impacto
ex -post evaluation Evaluación de una intervención para el desarrollo que se efectúa una vez que ha concluido. Está abocada principalmente a verificar los impactos obtenidos, identificar y juzgar los impactos inesperados y evaluar la sostenibilidad de los beneficios de la intervención.
fiabilidad reliability Es la coherencia de los datos y los juicios de evaluación, y la medida en que se puede confiar en ellos, con referencia a la calidad de los instrumentos, procedimientos y análisis empleados para recopilar e interpretar datos de evaluación.
gobernabilidad governance Forma en la que interactúan los agentes institucionales (públicos, privados y no gubernamentales) en pro del interés público. Tiene como objetivo el logro de un desarrollo económico, social e institucional duradero, promoviendo un sano equilibrio entre el Estado, la sociedad civil y el mercado de la economía.
humildad humility Virtud que consiste en el conocimiento de las propias limitaciones y debilidades y en obrar de acuerdo con este conocimiento.
impacto impact Efectos positivos y negativos, primarios y secundarios, producidos directa o indirectamente por una intervención para el desarrollo, intencionalmente o no.
medio ambiente environment Conjunto de condiciones naturales (físicas, químicas, biológicas) y culturales (sociológicas) susceptibles de influir sobre los organismos vivos y las actividades humanas.
país donante donor country Estado u organización pública o privada que destina recursos (materiales, monetarios o humanos) a otro país o población, normalmente de modo desinteresado, pudiendo establecer una condicionalidad a la ayuda ofrecida.
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Fuente: EurpeAid, Diccionario Hegoa, IATE, Glosario NNUU, OCDE, FMI, Instituto de estudios para la paz y la cooperación IEPC.
país receptor/ socio
recipient country Estado que recibe ayudas para el desarrollo procedente de otros estados, y que un sector de su población cumple unos criterios de vulnerabilidad y necesidades que urgen una intervención.
parte interesada/ parte implicada
stakeholder Entidades, organizaciones, grupos o particulares que tienen un interés directo o indirecto en la intervención para el desarrollo o en su evaluación.
pertinencia relevance Medida en que los objetivos de una intervención para el desarrollo son congruentes con los requisitos de los beneficiarios, las necesidades del país, las prioridades globales y las políticas de los asociados y donantes. Si los objetivos o el diseño de una intervención siguen siendo adecuados aún cuando hayan cambiado las circunstancias.
realismo realism Forma de presentar y hacer las cosas tal como son, sin suavizarlas ni exagerarlas, teniendo en cuenta las debilidades y fortalezas de cada uno.
rendición de cuentas/ corresponsabilidad
accountability Las obligaciones de las partes de actuar de conformidad con responsabilidades, funciones y expectativas de resultados claramente definidas, a menudo con respecto al uso prudente de los recursos. Para los evaluadores, denota la responsabilidad de proporcionar informes de seguimiento y evaluaciones de resultados precisos, imparciales y creíbles. Los administradores y ejecutivos del sector público, deben rendir cuentas ante los contribuyentes y/o los ciudadanos.
respeto respect Miramiento, consideración, deferencia hacia alguien.
retroalimentación feedback Transmisión de las constataciones (hallazgos) a las que se arribó en el proceso de evaluación a aquellas partes para quienes son pertinentes y útiles con objeto de facilitar el aprendizaje. Puede abarcar la recopilación y divulgación de observaciones, conclusiones, recomendaciones y lecciones de la experiencia.
sostenibilidad sustainability Intervención para el desarrollo después de concluida. Probabilidad de que continúen los beneficios en el largo plazo. Situación en la que las ventajas netas son susceptibles de resistir los riesgos con el correr del tiempo.
valor añadido added value Capacidades y conocimientos adquiridos a través de la experiencia y que facilitará el posterior trabajo a realizar, además de la distinción con otros agentes que no hayan ejercido las mismas actividades
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0
III. Esquema ampliado del “Do No Harm” aplicado a la Cooperación al Desarrollo
Contexto: 1_ámbito específico de implementación geográfica
zona rural/urbana/periurbana 2_detección de otros agentes q trabajan en la zona y actuaciones
DÓNDE -> País - región/área Espacio 3_ Sector y Subsector
(actuación en país grupos poblacionales de implementación
o regional) "Receptoers"
jóvenes
minorías
grupos discriminados
mujeres + Características Generales
niños
repercusón a terceros
1_ Determinar lugar concreto donde se quiere destinar la ayuda (lugar físico)
2_ Implica grupo poblacional, zona geográfica, sector..
-Conocer disponibil idad población beneficiaria: para que haya un buen impacto de actuación
- Evitar solapament amb altres donants para implicar-los como actores (mecanismo de multiplicación =>autodesarrollo!)
3_ Ámbito de actuación (área donde tendrán lugar las actividades relacionadas con la actuación) => códigos CAD y CRS
4_ Actuaciones previas en el mismo lugar -- nos informan de --> - buenas y mala prácticas => metodología
- sectores ya trabajados
- con qué población
(dimensión 1
contexto)
4_detección experiencias previas (actuaciones)
ex: homosexuals, TSC(Treballadores Sexe
Comercial), disminuïts
(tenerlos en cuenta por si se pueden involucrar en el proyecto; valorar
si convienen o no!)
- detección, recuperación de capacidades instaladas (material o
capacidades población) => frutos/resultados de acciones anteriores
que nos puedan servir o evitar
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1
Valorar:
Lista países CAD, IDH, PNUD, Banco Mundial, OCDE
Circunstancias históricas y actuales del país: situación política, económica y social, volumen de fondos recibidos por parte de países ricos
Receptores: Características --> edad, sexo, posición socioeconómica, nivel educación../ lengua, cultura, étnia, religión, política../
rol en la comunidad/ubicación geográfica… => aspectos de los beneficiarios q los convierten en RECEPTORES
Países involucrados: donantes-receptores
contexto internacional : cris is económica, medio ambiente, migraciones …
Solicitudes del país receptor: goviernos centrales, comunitarios, etc…
actores de cooperación privados, locales, internacionales… => quien pide la ayuda
etc..
POR QUÉ -> 1_ Motivación del donante (qué mmueve a hacer esta actuación)
- Cómo nos autodefinimos? - análisis de capacidades y limitaciones
- Cual es nuestro valor añadido? -> buenas/malas experiencias propias
- Con qué socios contamos como entidad (independientemente de la actuación)
instituciones, goviernos, ONGs, asociaciones...
Valorar:
Presentar el problema o motivo de la actuació
Indicadores: organismos ONU, agencias, observatorios.. depende del área temática => Fuentes
identificar las propias características
para saber qué tipo de actuación se
puede abastecer
2_ Una vez delimitada tota la primera dimensión del Contexto (DONDE) ya se encuentra el motivo de actuación siempre y
cuando haya "pertinencia" --CAD
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2
- por nosotros: estrategia de la entidad, más equip preparado y estable, etc.
Por qué ahora?
CUÁNDO -> - por la actuación: situación propicia del gobierno país, por el sector, tipo de actuación.. Ex. períodos de recolección,
escolarización…
Durante cuánto tiempo? - tiempo de la implementación:
tiempo previo a la actuación: l ínea base => diagnóstico (confirmación de la identificación, justificación con fuentes de verificación)
tiempo previo de preparación
tiempo de detección/selección personal adecuado
tiempo de formación del personal (si es necesario)
tiempo de desarrollo/implementación de la actuación
tiempo/período de seguimento y de evaluación ------ ----->
sostenibil idad? (resultados a largo plazo)
-----> Evaluación de Impacto
Actuación:
cooperación financera
QUÉ -> Actuación que se quiere hacer según el contexto y las necesidades confirmadas ---> cantidad/calidad
(En base al diagnóstico/línea base) cooperación técnica
Actividades --> respuesta a unos objectivos <---- problemas específicos
Valorar:
Actividades específicas: que respondan a unos resultados esperados en base a los indicadores => fuentes de verificación!
Palabras clave a tener en cuenta --->
Tiene que ser pertinente, eficaz, eficiente, sostenible, factible (códigos CAD)
C
r
o
n
o
g
r
a
m
a
-amigos y excluidos, situación real de la zona/contexto
socioeconómico/potencialidades zona, población..
resultados / satisfacción beneficiarios/ implicación beneficiarios
como actores/ metodologías: divulgación proyecto, socialitzación,
ejecución, multiplicación
humildad, realismo, efecto multiplicador, fortalecimiento de capacidades locales, transversales
(género, medio ambiente, DDHH, gobernabil idad => actuación ajustada a capacidades
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3
CÓMO -> Metodología -> resolución y prevención de conflictos => espacios/mecanismos de resolución conflictos
-- respuesta a situaciones inesperadas (riesgos -> hipótesis)
-> implementación actividad por actividad
-> divulgación del proyecto/actuación/resultados
-> implicación de beneficiarios y otros agentes
Valorar:
De qué modo se aplicará o se realitzará la actuación - teniendo en cuenta cultura del país/zona y capacidades
Qué elementos/materiales se utilizarán - locales o importados
Organitzación actividades: por sectores, población, edad, sexo… -> coordinación con otras actividades =>
=> Tiempo de trabajo diario (según actividad) -- tema horario de los beneficiarios - disponibilidad real
Lengua -> necesidad de traductores, mediadores culturales, políticos… (a tener en cuenta aspectos étnicos, culturales, religiosos…)
Salarios o actividad voluntaria => aportación de los beneficiarios
Elementos transversales: medio ambiente, DDHH, gobernabilidad, género, sostenibilidad
Educación sobre la actuación y los elementos relacionados => formación, capacitación continua
Publicitar la acción (difusión) => sensibilización en el Nord y Sud
Financiación => tanto del donante como del receptor
Lenguaje y actitud --> utilizar un lenguaje q promueva la equidad de género, la diversidad cultural.. =>llenguaje respetuoso
Actores:
=> conectores/ actores
-- Beneficiarios como ACTORES --> tipo de población beneficiaria --> a quien afecta la ayuda (directa/indirectamente)
-- personal de la ONG, Estados donantes, organizaciones civiles.. --> q participan en la actuación
-- entidades locales, administración pública, gente otras comunidades... --> q colaboran/participan
=> divisores/ 'excluidos' => se excluye voluntáriamente de la actuación a ciertos afectados directamente por la ayuda por motivos "x"
IMPLICACIÓN
DIRECTA ->
características del grupo receptor: potencialidades/capacidades para poderlos implicar y convertirlos en actores
(aspectos positivos y pertinentes), pero a tener también en cuenta las debilidades
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4
Elementos/agentes de actuaciones previas que nos pueden indicar buenas o malas prácticas
Repercusión a terceros: valorar en el contexto por si los podemos incluir en la actuación o no (actores o no?!)
Evaluación:
- de la entidad respecto los resultados conseguidos evaluación durante la actuación
EVALUACIÓN -> - de la implicación de los actores (implicación directa) evaluación "ex post" (justo al finalizar)
- de la metodología pertinente evaluación de Impacto o largo plazo
- de la divulgación de los resultados a los actores directos e indirectos => efecto multiplicador?
CRITERIOS -> Criterios evaluación del CAD y la OCDE: eficiencia
eficacia
pertinencia efectos/resultados de la ayuda
sostenibilidad
impacto
IMPLICACIÓN
INDIRECTA ->
=> divisores/'excluidos' => elementos que se quieren evitar expresament pq afectan negativamente al desarrollo
de la actuación. Ex. sector social, político, religioso..
=> Elementos/agentes q se ven afectados indirectamente por la actuación pero q no se contempla q participen en
el proceso de implementación