apoyo a los productores-custodios de maÍces nativos … para una politica... · apoyo a los...
TRANSCRIPT
APOYO A LOS PRODUCTORES-CUSTODIOS DE MAÍCES NATIVOS DE MÉXICO
ELEMENTOS PARA EL DISEÑO DE UNA POLÍTICA PÚBLICA
José Luis Herrera Ayala Samuel Peña Garza
1
Introducción
La importancia de la conservación de los maíces nativos, está relacionada a la premisa de producir
cosechas más abundantes y de mejor calidad al disponer de riqueza genética para generar mejores
semillas y, con ello, aportar a la seguridad alimentaria de la población mexicana.
Los pueblos indígenas y las comunidades campesinas en sus agro-sistemas tradicionales tienen reservorios
de germoplasma nativo que es importante para el país y el mundo. Esta riqueza genética es un tesoro
nacional con vastas posibilidades de uso para enfrentar el desafío de generar más alimentos ante el
incremento de la población, diseñar nuevos productos, enfrentar los riesgos del cambio climático,
atemperar el fenómeno de la emigración rural y desde luego, revertir la tendencia del incremento en las
importaciones de maíz, aspecto que tiende a agudizarse.
La aportación al diseño de una política pública para el Desarrollo Sustentable de los maíces Mexicanos
que enseguida se expone, tiene el propósito de minimizar el riesgo de mezclas no deseadas de
germoplasma presente en razas y criollos de maíces regionales importantes por sus características
genotípicas y de valor de cambio o de uso, con germoplasma de variedades mejoradas y por tanto, la
posibilidad de degradación genética de las razas y criollos nativos.
La racionalidad de esta aportación también tiene muy presente las condiciones de pobreza de los
productores de razas y criollos maíz. Por esta razón además se tiene como propósito contribuir a la
corrección de los factores económicos y sociales que dan lugar a la inaceptable realidad señalada que
provoca la emigración campesina y que deja solos a los adultos mayores y mujeres con la
responsabilidad de la custodias de tierras de labor y del cultivo de los maíces nativos.
El Desarrollo Sustentable de los maíces Mexicanos es materia de una política de Estado: atender
apropiadamente este tema es también atender el problema de la pobreza en grandes territorios de
nuestro país. En el contexto de la argumentación apuntada, es preciso determinar los criterios para el
establecimiento, caso por caso, de áreas geográficas donde se conserven y custodien los maíces nativos
como lo establece la Ley de Bioseguridad de Organismos Geneáticamente Modificados. Fundando así,
las bases para un régimen de protección especial para el maíz, pero sobre todo para el desarrollo
sostenible de la agricultura de los productores y sus familias que conservan el maíz nativo de México.
2
Considerandos para una política pública que atienda al desarrollo sustentable de los maíces mexicanos
Visión Integral.-
El hecho de que los apoyos destinados por el gobierno federal para el tema en comento estén
fragmentados entre varias instituciones y que falta coordinación entre las mismas, aunado a que
frecuentemente la conceptualización del sector rural en general y la actividad agrícola en particular no
responde a una visión holística, es una problemática que debe ser superada.
Hoy tenemos la oportunidad; primero de generar un marco para las políticas públicas que generen los
cambios sistémicos necesarios para revertir la tendencia a la baja que presenta el inventario de recursos
naturales, particularmente el de maíz nativo, y el deterioro del desarrollo de los pequeños agricultores,
atender el tema con medidas que orienten los recursos fiscales y segundo, generando la base para que
los productores custodios, sus organizaciones y comunidades obtengan beneficios por la conservación,
uso y desarrollo del recurso fitogenético del maíz nativo.
Una apropiada combinación de acciones y lineamientos agro-ambientales y de desarrollo rural, y bajo la
premisa de que el “contaminante, paga”, de la eco-condicionalidad y de contratos entre la agricultura y
los que utilicen el germoplasma con fines de investigación, generación de nuevos productos y
manipulación genética, puede contribuir firmemente para una verdadera política en favor de la
conservación y desarrollo sustentable de los maíces mexicanos.
Esto obliga al establecimiento de normas, metodologías y protocolos que los agricultores que cultiven
maíces nativos deben respetar para conservar las ayudas que reciban, pero que el suministro
suplementario de bienes y servicios sociales y ambientales sea pagado por la sociedad. Una legalización
de las ayudas internas (subsidios) y alternativas de pagos ambientales para los agricultores custodios,
puede detener el productivismo y permitir que se reconozcan formas de agricultura sostenible o
agroecológica, que son también alternativas comerciales para nichos de mercado específicos.
El concepto de multifuncionalidad sugiere que las decisiones de política pública sobre el comercio, la
protección del medio ambiente y el desarrollo sostenible, y particularmente la economía rural, se unen en
una lógica positiva de sinergia a favor de los campesinos y las comunidades que conservan la riqueza
contenida en el germoplasma de los maíces nativos.
3
Una mejor articulación y coordinación de las políticas entre sí, también se transforma en una alternativa
contra la visión exclusivista de políticas neoliberales de la agricultura intensiva y productivista, en donde se
subestima la función productiva de las pequeñas explotaciones agrícolas, considerándolas indeseables
para los objetivos de la competitividad, si bien les va se les da la consideración de ser exclusivamente
gestores del medio ambiente, o bien como casos sociales aislados que requieren una red de seguridad
con apoyos dadivosos o filantrópicos, mientras que en los hechos son una base potencial donde se
puede implementar una mejor innovación de la agricultura.
Consideramos que el fortalecimiento social está en organizarla para los fines, siempre legales que sean de
su interés, que el efecto multiplicativo que tiene los apoyos entregados a una organización es lo
deseable, que en el mercado ambiental que se sugiere es más probable la ayuda externa a los
campesinos organizados, es por ello que los apoyos que proponemos deben ser a productores custodios
organizados formalmente y que en los lineamientos de un futuro programa se contemple el concepto de
demanda y que esto exija proyectos integrales que contemplen el enfoque holístico, integral y
multifuncional para un desarrollo sustentable de la organización y la comunidad en la que conviven.
Definir el Protocolo y territorios de la Conservación de los Maíces Mexicanos.-
Implica sistematizar los documentos legales, acuerdos y lineamientos que formalizan todas las acciones
de conservación y la protección de los maíces mexicanos, en concreto un compendio legal que oriente y
fundamente todas las acciones de política pública que se generen.
Debe incluir las condiciones científicas para que los maíces y los productores sean beneficiarios en el
programa, el listado de las razas y sub-razas consideradas y los criollos, en estos últimos el contenido en
porcentaje de mezclas de razas, subrazas y otros genes que se aceptan en el programa, así como otras
características de orden cultural, alimentario, tradicional o características especiales que los defina como
importantes para ser incluidos en el programa. Definir un criterio básico de elegibilidad del espacio en
donde se implementarán las acciones de política pública, que contemple el territorio físico, económico,
ambiental y social.
Redes de Científicos.-
El procedimiento en que los servicios científicos para el rescate, investigación, protección,
caracterización, fomento y desarrollo de los maíces mexicanos deben de darse, el procedimiento y actos
4
que formalicen con los productores custodios y su organizaciones la prestación de sus servicios, los
derechos y obligaciones de los científicos y sus instituciones, y los mecanismos para cumplir con beneficios
y resultados que de su intervención se generen, así como la obligación de integrarse a una red nacional
que fortalezca la investigación, innovación y la generación de nuevos productos en beneficio de las
cadenas productivas que se derivan del Sistema Producto-Maíz Nacional.
Red de Extensionistas para la Protección y Desarrollo Sustentable de los Maíces Mexicanos.-
Este concepto debe contener componentes donde se establezcan: Los criterios para la aprobación
como Extensionista a propuesta de las organizaciones, las categorías de extensionistas, básico
especializado y de coordinación; Módulos de capacitación para cada nivel de extensionista, capacite y
adiestre los cuadros técnico con ingenieros agrónomos, técnicos agropecuarios incluso técnicos
empíricos que surjan de los productores líderes que integraran la red; Módulos de capacitación para los
productores custodios y talleres de planeación participativa de los proyectos de desarrollo rural;
Procedimiento para integrarse y ser pagados sus servicios a través de las organizaciones de productores,
sus obligaciones y derechos ante las organizaciones de productores custodios del maíz mexicano.
Derechos por Servicios Ambientales y por el uso del Recurso Fitogenéticos.-
Los recursos fitogenéticos son la base para la generación reproducción y mejoramiento de la agricultura y
la producción de alimentos, por lo tanto constituyen la base de la seguridad alimentaria mundial, directa
o indirectamente, mantienen los medios de subsistencia de todas las personas del planeta.
Los recursos fitogenéticos, son la materia prima que se utiliza para la producción de nuevos cultivos con
mejores características y constituyen una reserva de adaptabilidad genética, que sirve de protección
contra las plagas, enfermedades, cambios ambientales y económicos que pudieran ser nocivos.
La diversidad del maíz en México se mantiene indudable e imprescindiblemente gracias a las
comunidades campesinas locales e indígenas. Sus Agro-sistemas permiten la conservación de los recursos
genéticos del maíz que constituyen la base de la alimentación y de la producción agrícola de México.
La contribución a la conservación, mejoramiento y disponibilidad de del germoplasma de maíz en el
pasado, presente y futuro que han hecho los agricultores de maíz de todas las regiones, en particular los
5
de los centros de origen y diversidad, constituye la base en la que sustentamos sus derechos a recibir
pagos ambientales y apoyos fiscales por Servicios Ambientales y por el uso del Recurso Fitogenéticos,
éstos derechos ya son reconocidos por la FAO por conservar, utilizar, intercambiar y vender semillas y otro
material de propagación conservados por los campesinos, establece que deben traducirse en que ellos
participen en las decisiones y en la distribución justa y equitativa de los beneficios que se deriven de la
utilización del su germoplasma de maíz para la alimentación y la agricultura, por lo que es de particular
importancia la aplicación de los derechos del agricultor; lo que debe traducirse y respaldarse con
políticas pública y acciones del Ejecutivo con la visión de lograra una agricultura y una seguridad
alimentaria sostenibles.
Coordinación Institucional.-
En este sentido consideramos que debe existir una ventanilla única y se dé prioridad a proyectos
integrales.
Caracterización, potenciación y desarrollo comercial de los maíces Mexicanos.-
Las acciones inmediatas requieren de precisión en torno a la conservación de las razas y criollos en
cuanto a lo que debe conservarse, para que debe hacerse e identificar el valor actual y futuro posible,
que se traduzca en una oportunidad de generar dinamismo en las comunidades rurales, partiendo del
principio de que al darles un valor agregado y estar en el circuito de comercialización, estaremos
garantizando su permanencia en la región, fortaleciendo a la vez, la conservación in-situ en beneficio
directo para los custodios de esta riqueza genética.
La Organización de los productores custodios en torno a la conservación de la biodiversidad de maíz,
con una visión integral, sustentable y participativa.
La constitución de organizaciones de productores custodios de los maíces nativos debe tener una visión
mas integral que propicie el desarrollo comunitario, en la cual los productores participen en la
planeación, ejecución y evaluación del trabajo, fortaleciendo la organización de los custodios en busca
de la mejora continua que redunde en calidad de vida, el problema de la pobreza sólo podrá
solucionarse si se involucra en el proceso a los pobres y sus familias. Ello implica, de ahora en adelante
partir de las necesidades y problemas de los ejidos y comunidades. Los ejidos y comunidades no son
6
entidades homogéneas en ningún aspecto y por lo mismo no puede hacerse "tabla rasa" y aplicar un sólo
enfoque o modelo para su desarrollo, y muchos menos a nivel nacional. Por ello, el nuevo desarrollo rural
debe eliminar la programación convencional de "arriba hacia abajo" y realizar planes de trabajo que
resulten de acciones propuestas por los ejidos y comunidades; es decir, adoptar una programación local
o microrregional "de abajo hacia arriba".
Para que los pobres sean los artífices de las políticas que solucionen sus necesidades se debe partir de las
necesidades mismas en el esquema de un desarrollo con las características siguientes:
1. Diversificado. En los ejidos y comunidades rurales normalmente se llevan a cabo diversas
actividades que tienen que ver con la producción agropecuaria, forestal y acuícola. Sin embargo,
tradicionalmente los planes o programas que se ofrecen a dichos ejidos y comunidades ya tienen
objetivos y actividades definidos, lo cual suele frenar las iniciativas comunitarias. En ese sentido, se
recomienda que en el nuevo desarrollo rural se considere poner en práctica diferentes proyectos
productivos y de mejoramiento social que posibiliten la inclusión de la mayor parte de los miembros
del ejido o la comunidad.
2. Planificado. Que los programas de desarrollo rural no se elaboren por compromisos políticos o
situaciones circunstanciales, sino que obedezcan a propósitos y objetivos de corto, mediano y largo
plazo, mismos que serán definidos conjuntamente con la población de los ejidos y de las
comunidades.
3. Colectivo. Mucho se ha dicho del individualismo, el egoísmo y la falta de cooperación de los
mexicanos; sin embargo, también es cierto que en el medio rural existen tradiciones históricas en
cuanto a las formas y mecanismos de trabajo comunitario, por ejemplo: la faena, el tequio, la
ayuda mutua, la prestafuerza, la mano-vuelta, las mayordomías, etc. Por lo tanto, el nuevo
desarrollo rural deberá promover y fomentar la organización de la población de ejidos y
comunidades en grupos o sectores, para realizar actividades o acciones colectivas que
contribuyan al progreso y bienestar comunitario.
4. Sostenible. Se parte de reconocer el mal uso, el abuso y la sobreexplotación de los recursos
naturales para la producción agropecuaria y forestal, lo cual se ha visto agravado con el uso de los
productos agroquímicos para incrementar la productividad de dichos recursos. Ante esta situación,
se considera que ya no es conveniente que se continúe deteriorando e! suelo, el agua, el aire, la
7
vegetación natural y la fauna silvestre sino que, por el contrario, será necesario implementar
mecanismos y procedimientos que nos permitan "utilizar los recursos naturales para producir
conservando y, si es posible, acrecentándolos". Es decir, se propone aprovechar los recursos
naturales para producir alimentos con tecnologías menos destructivas del ambiente, durante cierto
tiempo, y cambiar de sistema de producción cuando se encuentren nuevas tecnologías que
superen a las anteriores, pero que posibiliten mayores producciones sin deteriorar el ambiente. A
esto se aspira llegar con el desarrollo rural sostenible.
5. Equitativo. Equidad, igualdad, corresponsabilidad, son conceptos y atributos para un nuevo
desarrollo rural que ya no fomentará la exclusión, la marginación, la componenda, la corrupción
sino que, por el contrario, propiciará la gestación y ejecución de proyectos de trabajo comunitarios
que se llevarán a cabo conforme a lineamientos claramente definidos, en los que podrán participar
todos los interesados y cuyos beneficios deberán compartirse y distribuirse según el cumplimiento y
respeto de las normas establecidas y aceptadas en reuniones de grupos o sectores de la
comunidad
6. Integral. En el medio rural se presentan problemas técnicos y económicos relacionados con las
actividades productivas de las áreas agrícolas, pecuaria, forestal y acuícola; además, los custodios
de maíces criollos al igual que el resto de los habitantes del ejido o la comunidad tienen problemas
y necesidades comunes en cuanto a los servicios públicos: salud, educación, recreación, deportes,
transporte, etc.; además, de acuerdo con la edad y grupos de referencia se generan ciertas
demandas de instrucción y capacitación que pueden atenderse mediante cursos, talleres,
conferencias, etc. Toda esta situación nos indica que el nuevo desarrollo rural debe asumir la
característica de integralidad; es decir, atender todos los asuntos, problemas y necesidades que
demanden solución no tan solo de un sector de la población sino de la comunidad en general,
para garantizar la generación de alto impacto en los objetivos que se planteen al inicio. En este
aspecto, la educación y capacitación campesina constituyen una acción prioritaria.
7. Participativo. El desarrollo rural convencional propició y favoreció el paternalismo. Se acostumbró a
los habitantes de los ejidos y comunidades a esperar los planes y programas del gobierno, que
siempre llevaban y regalaban "algo". Hoy que el gobierno ha retirado la mayor parte de los apoyos
y servicios "gratuitos" para fomentar el desarrollo rural, y que se ha reformado el Artículo 27
constitucional para dar mayor libertad al ejidatario y comunero para que tome decisiones sobre sus
8
recursos productivos y sobre el desarrollo comunitario, se hace necesario resaltar la importancia de
la participación campesina en un nuevo modelo de desarrollo rural. En este contexto, la
participación campesina se caracteriza como la acción consciente, directa y comprometida para
contribuir a resolver los problemas de su organización, de su ejido o de su comunidad.
8. Autogestivo. Gestionar algún asunto por uno mismo, o resolver un problema por acciones propias o
decidir nuestro destino de manera consciente y comprometida. En síntesis, se puede definir a la
autogestión como la autonomía en la toma de decisiones, tanto individuales como colectivas. Para
nuestro caso, nos interesa caracterizar a la autogestión de la siguiente manera: proceso que les
permite a los pobladores del medio rural, a través de sus organizaciones, tomar en sus manos y sin
intermediarios o agentes externos a la organización, la problemática de sus respectivas
agrupaciones y gestar, por ellos mismos, las tareas y acciones necesarias para resolver en beneficio
de la organización; esas tareas y acciones implican también la toma de decisiones y del poder en
los asuntos políticos y económicos, locales y regionales, que les posibiliten avanzar en su propio
desarrollo. Si bien pueden necesitar la orientación o acompañamiento de instituciones
especializadas, son ellos los que deben de decidir la forma de conseguirlas como una tarea más de
autogestión, para ello deben de participar en la metodología del autodiagnóstico comunitario, lo
cual les permita que de manera grupal todos participen en la planeación, ejecución y evaluación
del trabajo, en la lógica de la autogestión desde las premisas básicas hasta la puesta en marcha
de las acciones y/o proyectos atendiendo los preceptos subsecuentes:
Identificar los proyectos de mayor importancia para el desarrollo rural propio y de su entorno.
Participar en la toma de decisiones sobre el manejo de recursos gubernamentales.
Vigilar que con los proyectos se logren los resultados en corto plazo, maximizando los recursos.
Identificar los recursos que existen en el territorio así como su aprovechamiento.
Planificar las acciones de más importancia compaginando priorizar necesidades.
Fortalecer la gestión de recursos alternativos.
Realizar la toma de decisiones en función de las necesidades de la población.
De esta manera buscaremos contribuir a que la tecnología de producción, conservación, transformación
y comercialización transferida a través del programa propuesto, se traduzca en una oportunidad de
generar renta a los custodios del germoplasma de los maíces nativos mexicanos. A la vez, incida en la
9
dinámica social comunitaria al impulsar acciones de desarrollo rural autogestivo, endógeno y de alcance
integral, mediante la complementariedad de los subsectores agrícola, pecuario, forestal y agroindustrial,
con efectos de creación de oportunidades de ocupación y superación para todos los miembros de la
familia rural.
En este contexto, si se asume como definición de desarrollo "un proceso de crecimiento económico que
contribuya al autoabastecimiento y que posibilite una distribución equitativa y justa de los bienes
materiales y de los beneficios de ese crecimiento económico, así como el mejoramiento de las relaciones
sociales entre los poseedores de los medios de producción y los trabajadores", entonces se esperaría que
el desarrollo en general y el rural en particular tendrían como propósito fundamental el combate y la
erradicación de la pobreza.
Generar un proceso genuino y verdaderamente participativo, autogestivo y democrático, que parta de
lo local y comunitario hacia lo regional y nacional, visualizando su inserción crítica en un esquema de
desarrollo equitativo y sostenible.
Es de sobra asentir que en nuestro país, el cultivo mas importante por tradición cultura y subsistencia de los
mas pobres es el maíz. Si se lograra el tan pregonado y poco practicado desarrollo sustentable de los que
se dedican al cultivo de maíz criollo en México se estaría dando un paso gigantesco de desarrollo real y
sustentable.
Como una herramienta puede considerarse el siguiente planteamiento que ha madurado a través de la
convivencia directa con los productores rurales que citamos antes, especialmente con verdaderos
custodios de la riqueza genética nacional que representa el maíz.
10
PROGRAMA ESPECIAL PARA PRODUCTORES CUSTODIOS DE MAÍCES NATIVOS DE MÉXICO
Objetivo General.- Recolectar, caracterizar y clasificar, en sus centros de origen, el material genético de
las razas y criollos de los maíces nativos mexicanos, para preservarlos en bancos de germoplasma in situ y
ex situ con procesos de investigación y desarrollo, así como de uso y renovación continua, orientados al
descubrimiento de las potencialidades alimenticias, bioquímicas e industriales de estos maíces,
transformados en productos, empresas y estrategias de comercialización en beneficio directo de los
productores campesinos e indígenas que los han resguardado.
Objetivos Específicos.-
Promover la preservación, manejo y protección de los maíces criollos mediante actividades de
conservación in situ y ex situ.
Fortalecer las Unidades de Producción de los custodios de razas de maíces mexicanos mediante
proyectos de inversión y el desarrollo de capacidades.
Establecer convenios de colaboración entre instituciones de investigación y organizaciones de
productores de maíz
Lineamientos:
Población Objetivo.- Organizaciones de productores constituidos formalmente cuyas actividades
principales sean la producción, comercialización y transformación de maíz.
Población Objetivo en Proyectos de Prioridad Nacional o de impacto Estatal y Regional.- La población
objetivo de este tipo de proyectos se clasificará considerando la importancia y riqueza genética de los
materiales criollos que ostentan los grupos de productores solicitantes así como el grado de impacto de
las actividades a desarrollar en pro de la conservación y aprovechamiento de estos materiales.
11
Beneficiarios;
Requisitos.
Estar formalmente constituidos como figuras asociativas legales y tener o proponer la asesoría profesional
de alguna institución de educación superior u organismo de investigación científica.
Procedimiento: Los interesados en estos apoyos deberán presentar solicitud en las ventanillas
correspondientes en los formatos establecidos para tal efecto (formatos 3 y 4) de los programas y
componentes en concurrencia de recursos acompañados de la siguiente documentación:
Proyecto en formato libre
Acta constitutiva del grupo u organización
Identificación oficial de los representantes del grupo u organización solicitante
CURP de cada uno de los representantes del grupo u organización solicitante.
Convenio de colaboración entre el grupo u organización y una institución de enseñanza superior o de
investigación científica.
Cotización de lo solicitado
Carta compromiso en la que se establezca la responsabilidad de cumplir y dar seguimiento a los
planteamientos del proyecto.
Constancia de productor emitida por un representante de la autoridad ejidal en que manifieste que su
actividad principal es el cultivo de maíz criollo
Padrón de beneficiarios
12
Montos y Conceptos de Apoyo:
Apoyos físicos e infraestructura:
Los montos establecidos para este programa serán hasta de $ 750,000.00 (setecientos cincuenta mil pesos
00/100 M.N.) por beneficiario para los siguientes conceptos:
Bancos de germoplasma comunitarios
Bancos de germoplasma en convenio con instituciones de investigación
Aplicación de los paquetes tecnológicos en cultivos de maíces criollos
Colectas básicas y sus caracterizaciones
Apoyos en Capacitación y Transferencia de Tecnología
Se otorgarán apoyos en los conceptos de Capacitación, Asistencia Técnica, Consultoría Especializada y
Transferencia de Tecnología y Estudios Técnicos Especializados.
CONCEPTO
Cursos de capacitación $ 25,000.00 por grupo de trabajo
Asistencia Técnica para la Conservación y
Extensionismo Tecnológico de impacto local o
regional a grupos productores de maíz criollo
$ 250,000 (Doscientos cincuenta mil pesos 00/100
M.N.)por Organización o grupo de trabajo, sin
rebasar $550.00 (Quinientos cincuenta pesos
00/100 M.N.) por productor individual atendido
durante un ciclo productivo
Asesoría Profesional para la elaboración de planes de
conservación, proyectos y estudios de
$150,000.00 (ciento cincuenta mil pesos 00/100
M.N.) ó $7,500.00 por beneficiario individual
13
aprovechamiento de razas de maíz criollo
Proyectos de impacto local o regional que impulsen el
aprovechamiento sustentable y conservación de
razas criollas
Hasta $1’000,000.00 (Un millón de pesos 00/100
M.N.)
Proyectos Especiales de Capacitación y Asistencia
Técnica de impacto regional y estatal para la
Conservación y Caracterización de Razas de maíz
criollo presentados por Sistemas Producto,
Organizaciones de Productores de Segundo Nivel e
Instituciones de Nivel Superior.
Hasta $10’000,000.00 (Diez millones de pesos
00/100 M.N.)
Organización o asistencia a eventos de intercambio
de conocimientos, tecnologías, experiencias y
proyectos relevantes.
Para organizar hasta $20,000 (Veinte mil pesos)
por evento comunitario, municipal o distrital;
$120,000 (Ciento veinte mil pesos) por evento
estatal; $300,000 (Trescientos mil pesos) por
evento regional o nacional; y $15,000 (Quince mil
pesos) por asistente a cursos y giras de
intercambio.
Estudios y proyectos orientados al desarrollo de
infraestructura que identifiquen y detonen inversión o
que promuevan el aprovechamiento sustentable de
los recursos.
Hasta $2,000,000 (Dos millones de pesos) por
estudio y $2´500,000 (Dos millones quinientos mil
pesos) por proyecto.
Sistemas de información de Mercados Hasta $2´500,000.00 (Dos millones quinientos mil
pesos).