1CONCR(S DEL t\'EOLÍTIC A PENÍt\'SUL\ lBLRlCA CAVA-BEI.LATERRA, 1')')')

UNA CABAÑA NEOLITICA EN LOS PICOS DE :EUROPA

DIEL CjLI.,'TlLLO

Becario Postgrado de la Fundacián /vlarcelino Botín. Deparamento de Ciencias Históricas de la Universidad

de Cantabria

Resumen

La comunicación da cuenta de los trabajos realizados en cabaña de la Calvera. Se describen los resul lados de la

excavación de una cabaña neolírica enmarcada las investigaciones del conjunto de la Peña (hiedo

(Camalcño, Cantabria). Se discuten las diferentes estructuras, las indusuias -microlíricas, macrolíticas cerá­

mica-, la función y la relación v de la cabaña de la Calvera con las estructuras de Pciía

Oviedo.

lhe constructions,

lit Peña Oriedo.

Abstract

In Hut issitr carricd out u/ithin the Peña Ouiedo (Cmnalerlo,

1) Írrtruducción.

La presente comunicación trata de ser un avance de los

resultados de las excavaciones que se vienen realizando

en la zona de la campa de La Calvera incluida dentro

del yacimiento de Peña (hiedo (Camalcño, Canrabria).

Estos trabajos en un marco más amplio de

mvesngacion que comenzó desarrollarse en el citado

yacimiento en ] 989, con la excavación de un dolmen

En los dos año» siguientes 1990 1991 se cxca-

vó otra estructura diferente npológicarnente

de la anterior .

La necesidad de una de las pre­

vias de trabajo, segÚn la cual las estructuras mczaííucas

eran cerca de las zonas de hábitat de los

1C:"p,)jI,.dl:'Jc:~ de su construcción, hizo que du-

unte la campaña de 1991 se realizaran varios sondeos

en la campa de La Calvera. El resultado de los sondeos

Iuc todas las expectativas que

en ellos habíamos En el primero de los

sondeos pronto diversos útiles en sílex acle-

de ccr.irnicas decoradas.

Las circunstancias que ha atravesado laAdrni-nisrración de Canrabria una r~llta de

apoyo de la misma a la actividad Desde

1989 sólo ha subvencionado el programa de interven­

CIOIlCS en dos ocasiones, lo que ha impe­

dido una mavor actividad en el conjunto de la PeiLl

Oviedo. No obstante, los resultados de las sucesivas

campañas de hicieron que los

continuaran afio tras año a pesar de carecer de las sub­

venciones oficiales necesarias.

numero 1 Rl:HRIU\TUM V 349

r-~~~~~~~~~~~~~~~~~--- - ~ ---------'-'~

,~UONANSA

,~LACIONES

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Il ) El Conjun to Megalítico(le la Peña Oviedo ,

El aislam iento geográ fico ' ha o riginado que el medio

natural se haya conservado en unas cond icio nes excep·

cionales, de forma qu e un a gran parte de su rerrirorio

esta previsto que se incluya en el fu ru ro Parqu e Nació-

El conjunto megalítico de 1,1 Peña Ov iedo (Camaleño,

Canrabria) se halla ubicado en b comarca de Li ébana, en

la ladcrn meridional del Macizo Orienrai de los Picosde

Europa -figura 1-. l .iébana es una de LLS comarcascantábri­

cas m,ís singulares desde el punto de vista geogd fico. Se

rr.ua de una fosa de carácter tect ónico consrreúida entre

los relieves mon raño sos de Picos de Europa, Peña Sagray

laCordillera Cant ábrica cuyasalrirudes culminaressupe­

ran , en todos los casos, ampliamente los 2000 metros,

frente a los 200 del fondo del Valle.

recient em ent e yacím icn ros semejant es en el cordal de

Sollube (Bcrrnco, Vizcaya) [L ópez Quinta na 1995] y

la localizaci ón de una estación de caract er ísticas simi­

lares en la necrópolis megalítica de Airo e nriezo-Ha­

yas (Arn puero/L icndo, C an rab ria), dentro de los traba­

jos del proyecto de la Prehisroria de la Mar ismas [Serna

J99 J]. En este conrcxro general se inscriben los hallaz­

gos del Conju nto Megalítico de la Peña O vicdo, en elextremo sudoccidc nral de Can rubria.

I í ~. I 1 ,1 , ~·.l li/ki ,·,l l ,1<- la " -' " 11.I I. J ,1.: 1¡.:h.l ll .l ~ ,'] t : \ )I1¡ ll l l1 " d.- I'n l.l ( h In .!<,.

Una Cabaña Neolítica en los Pecas de Europa

Amb os yacimientos , O rdu nre e liso Beruvo . podrían

pon er de rn .in ificsto la importancia qu e los f'lcro res de

orden eco nó mico tu viero n en la elección de los lugares

en los que se erigieron los monumentos megalíticos, en­

trando en clara cont radicción con int erpretacio nes que

priman lo simbólico o rimal costv» facrores dererrninan­

tes en laelección de los lugares para la construcción demegaliros. A estas manifestacion es pr óximas al límirc

or ient al de la región de Canrabria se ha n un ido m.is

.'15 0 O RUI:IRICAT U M n úmero I

Los yacimientos de habitaci ón relacion ados co n áreas

megalíticas era n hasta hace poco, una excepción, cuan­

do no u n intento volunrarisra de encontrar alguna expli­

cación para materiales aparec idos en el en to rn o de los

1l10llU Ill CIl tOS megal íticos. Sin embargo, la localización

a medi ado s de la d écad a de los och en ta de una serie de

est ruc tu ras de h ábit a t en riso Ber ayo ( Ka rra n rza , Viz­

cava), por part e de Javier C o rroch are gu i v M " José Ya­rri ru. ab ri ó u na llu eva perspectiva en la invcsrigac. óu

de la Prehistoria Recient e C nnt.ibrica [G orrochareguj;

Yarritu 19i14 j.

En la década de los noventa los mismos invest igadores

encontraron una serie de estru cturas ligadas a mo nu ­

m ento s megalíticos en el p'lf1 tano de Ord unre (Mena ,

Bu rgos), cuyas excepcionales cond icion es de CVlISerlJ(/ ­

riou permit ieron el desar rollo de un co mp letísimo csru­

J io [C o rro cha regu i s.Jl

l_____________¿ ~

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nal de Picos de Europa, incluido el propio yacimiento

de la Peña Oviedo.

Los el de laPeña Ovicdo se inscri­

ben dentro del Proyecto de becado por

la Fundación Borín cuentan con el oportuno permi­

so de esa Consejería de Cultura del Gobierno de Can-

tabria, El conjunto de la I'eria Oviedo esta

compuesro por tres de estructuras mega-

v ;11"11In OS otros monumentos aislados, escalona-

dos lo de una ladera entre los mil quinientos y

los mil metros de altitud [Diez Castillo 1991: 193].

En lazona central del coniunro -] 250 m.s.n.m.' ubi-

ca la La Calvera. grupo, que ocupa

la campa del mismo nombre, compuesto por una

serie de estructuras diversas -rúmulos, dólmenes, círcu­

los, alineamiento....- en un muy reducido espacio [Diez

Castillo 1994:54[.

Una cincuentena de metros al sur la campa deCalvera, en una zona un poco más elevada, se encuentra

un muro aterrando más de cien metros de longi-

tud. compuesto por ortostatos hincados. entre

los que en ocasiones un espacio libre. Esta es-

trucrura lineal cierra el relieve rocoso dominante

nombre al conjunto. Peña Oviedo, en forma semicir­

cular desde la de la peña hasta una zona

acantilada de más de sesenta metros de desnivefEn elinterior de espacio se observan diferentes estructuras

pétreas de difícil valoración. Los sondeos realizados en

el recuperar una escasa serie de mate­

riales líticos que, aun considerando su escaso valor

nóstico, se pueden considerar comemporáneos al resto

de las zonas excavadas en el conjunto.

La asociación entre las estructuras la cam­

pa, el alineamiento. arras lajas aisladas coloca­

das en la misma y este muro parecía da­

das las evidencias de este tipo de estructuras

muradas en la Prehistoria cantábrica. No obstante, es

conocida la existencia de en estructuras neolíticas

semejantes en la fachada atlántica, como los conocidos

causeioayed. La misma del uso

de la zona. debido sus características -pre-

sencia de un manantial, de los vientos. calidad

de los pastos•...- desde el momento de la erección de [os

l1le~gallltCIShasta nuestros días

sis de que trate de una estructura de época posterior.

Los trabajos arqueológicos realizados en laPeña Oviedo

comenzaron con la excavación de dos estructuras mega­

líticas. La primera, situada a menos de cinco metros del

asentamiento, se trata de un dolmen simple con cáma-

ra que considerar prorotípico

de los monumentos de altura tanto en la

Cornisa Cantábrica. como en el Valle del Ebro [Díaz

Casado otros 1991]. Los realizados propor­

cionaron un escaso número de elementos rnobiliares

entre losque destaca la presencia de un hacha pulimen­

tada la ausencia de material cerámico. De la base de

estructura proviene la datación radiocarbónica, so-

bre carbón, GrN-18.782 de 5.195±25 BI~ cuya calibra­

ción la remonta hasta elumbral entre el IV milenios

-cntre el 4042 yel .3971 cal a.C>.

La las estructuras excavadas es sensiblemen-

te diferente -desdeel punto de vista a la nor-

ma de los monumentos conocidos en la

región [Diez Castillo; Ruiz Cobo 1995]. Por

de los estudios llevados a cabo en el vecino País Vasco se

pensar un tipo tardío -los allí denominados

'cromlechs' tienen serie de datacioncs radio­

carbónicas que van desde el afio 920 a.e. al año 190 d.

C. 198(); Blor 1988]-. Sin los halhz­

gOOi materiales y la propia estructura interior de la Peña

Oviedo acercarle, en su función. los dólme­

nes. De la base de esta estructura datación

radiocarbónica, también sobre carbón, -GrN- 19.048 de

4.820±40 BP- , cuya calibración sitúa con un 95,;VVo

de entre elaño 3.704 y el J.50() cal. a.C,

III) La Cabaña de LaCalvera.

Como se ha descrito la cabaña se encuentra en la zona

central de la campa de La Calvera, rodeada de diferen-

tes estructuras la de los traba-

jos en la misma prevé una excavación

que ponga en relación todos esos elemento,

que realizar en el verano de 1995 gracia!,

la subvención concedida a tal efecto por la Funda­

ción Marcclino Botín.

El sondeo realizado en el durante el año 1991 ya

reveló la de estructuras que el

yacimiento. Así junto a una relativamente serie

de materiales mobiliares -143 restos de talla, 5 útiles de

sustrato, 1 ] 3 de láminas con

huellas de uso, 2 de cerámica 3

sin decorar; en una extensión de 12 rntsz- se hallaron

una serie de estructuras de no

número 1 RUBRICATUM O 551

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lel.'larllegOs. Así mismo la anucacron

del C1HiKSCN Tiocianaro

la

meros pastores

",UJUdJJ.r.<tUL.J de la

de Potasio- ha 11,~nnll",1"

de postes

ha la fecha CrN-19.049 de 55') BP so­

bre carbón sin calibrar debajo de nivel de una po-

media de 6 crns, se encuentra el nivel

formado por una matriz ferrosa muy la

potencia de nivel en ocasiones los 20 crns.

la del mismo permite pensar que

sedimentario duración

homogéneas. Bajo el nivel." localiza

disnnzue por presencia de pequeñas

que en raras ocasiones superan los 1()

crns. de lado en el cual empiezan ap~trecer en

ocasiones los materiales del yacimiento,

por contraste con el nivel 3 prácticamente estéril. Fínal­

merite el nivel ') el nivel neolítico el cual S<:'C11-;lcr<:'-

por la presencia de abundante utillaje lítico fru­

secos carbonizados,

1 ,¡S mctodoioara empleada durante las campañas

1993 la recolección de la fracción

¡lna de sedimento para su procesado por flotacióo \·¡"ras

a detectar los en existentes

de ese modo intentar descubrir la

En la zon;1 oriental de la cabaña se desarrolla Ull kcho

de de gr;ln tamaño que t.lpa o que cubre mejor

dicho uno de los extremos de la zanja de cimellt.lciÓn

de lacahat'ia. l.a extensión de este lecho dé

no se ha determinar lo que dificulta en este mo-

memo de la su adecuada interpretación.

L<I dureza del material del sustrato ClCilitÓ <in

duda su excav<lciÓn a los neolíticos de laPU1a (h icdo. La lorma en que 11naliza el único excre-

mo de la zanja hasta el momento indica que

la excavación de 1.1 se produjo con material pro-

bnhlcrnemc no La J¡JcalizaciÓn de la

campa en una llana a 1 de altitud sobre

él nivel del mar, pero en la que los Ulll'U:" ti"erosivos de dos vertientes contrapUéS¡;¡S,

la continuada de los sedimentos provenien-

tes de erosión de dos laderas.

esta caracrcnstica del

asienta la campa dé I.a Calvera la que ha f'~' ..... ,'"

conservación t.mro del silo, como de la

en momento. Entre ellas destacaban la localiza-

ción de un "silo" por primera vez la prehistoria

tábrica 2-. El comen ido del silo no permitió diluci-

dar su car.icrer funcional. Un de lámina con

huellas de uso su interior avalar

su iut crprctacion como contenedor de elemento

con una hoz. En posrcriorc» campañas

ricrr., de inrcrior f)ara someterla al

de Horacióu con objeto de los restos sellll-

ti;ls que l'l mismo pudiera contener.

el ¡¡ÚO de ¡ ')9 1 apareciÓ una zanja excavada

en Ll roca del sustrato que además tenía una inflexión

en el fue localiLHLL UI1 solo metro cuadrado.

z;1I1ia la que el desarrollo de las intervenciones

.trqueotozrcas posteriores han interpretar co-

mo la cimeruación de una L.lbaria de subcua-

"U ,'u,,",")'" con una apcrtur<l hacia el sureste,

obscrv a en la :\.

Entre la ccr;imica, además de varios tragn1ellt(lS

común muv mal conservados. han ll.'.lIf.!I.''''''''

tragn1éllt(lS pcrtenecrcntcs a la 111isrna vasi ja, lapasta

docu-

ITI.!) Los elementos rnobiliares.

El sondeo cíectuado la Calvera ha

mentar gran cantidad de piezas líticas, además de

tragnlet1[(IS de cerámica dl' al menos cuatro vaxi­

líticas abundan las lascas los pro­

ductos secundarios de talla, estando presentes los titi-

les de sustrato, los de lámina -todos ellos en

sílex- los una muela ele molino,

un alisador de arenisca LIdensidad de muv superior la

observada durante la cxcav.u ión. tanto en los monu­

mentos del mismo co nju nto. C01110 en la

zona exterior la cahuria.

Sin la actividad desarrollada en la carnpa por

los pastores durante los 6.000 arios calendáricos 'IUCvan

la Fecha más que poseemos para elmiento hasta nuestros días haber producido

"lY""""'" intrusivos.

En la zona de la campa de La Cah'cra han Ur\lIIIl",U¡-

do cinco d o nivel 1 que

en ocasiones proporciona piCZ;lS líticas que se

interpretar como provcnicurc- de la remoción que las

diferentes estructuras de la campa han sufrido de lamano ele los lu rt ivos, el nivel caracterizado por la pre-

sencia de carbones provenientes quizás de un

incendio de la campa puesto que en-

cuenrran en la roralid.id de los cuadros abiertos hasta

el momento. ladatación radiocarbónica de nivel 2

ruuncro J Rl'I)RICAtl l \ l V .15."

es negra al interi or y rojiza al exterio r co n de sgrasanre

grueso en el que pred o min a el Óxido férrico, ambos

frag me n tos p rese nt an resto s d e un a deco raci ón pl ásri­

ca: y ocho fragm enr os de un vaso de rond o pla no y per ­

fil ligcranlcntc curvo, la superficie exte rior, negru zca,

es t á alisad a -fig. 4-. La tracru ra :ln tigua d e los fr:lgm en ­

ros y la proxi m idad enr re ellos ap u nta h acia u na de pos i­

ción primaria en un In edia sedi rne nro l ógico con escasa

cncrgí:l. IJ escaso co nocimi ento del Neolírico de la C or­

ni sa C antáb rica impide estab lec er paralelos par a estas

piezas cerám icas. sin em ba rgo nin g-una de las piezas

p rocedente s de cu evas es similar 1RUI! CO HO 1992].

Las piezas m encionadas provienen tanto de la zo na in­

te rio r de la caballa, co mo de las zo nas '1Ied:l1l as; si b ien

1J de ns ida d d e ha llazgos es sup erior en los cuadros in -

ter iores, q ue en los cuad ros circu nda nre s. E n ellos han

aparec ido concrcram cn tc todos los fl 'agme nr os del vaso

ce rámico, el segme nr o del círcu lo , el pu lime nto y varias

lascas d e cua rcita y crista l de roc a, así com o algunas

lasqui ras de reto qu e de este mi smo materi al y de sílex.

III .2) ¿Que tipo d e actividad se desarrolló en lacaba­ña d e La Calvera?

Es te es , q uizás, el ma vor interrogan te q ue abre lo caba­

ña localizada en elco n junto m egalít ico de la1'61a Ovie­

do . La escasa rcp rcscn ta rividad fun cion al de los ru areria­

les a rq ueológicos d ificult a la in terpre taci ón d e las act i­

vidades allí desa rro lladas. No obsta nte . parece claro que

se pu ed e excl uir la de un uso ritual d el esp acio debido

al co ntraste , tanto cua n t ira rivo co mo cua li tativo , con

los ha llazgo s p roveni entes de los do s mo num entos me-

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354 O RU Il R]C AT UM mi m e-ro I

las estructuras

se continua-<I'Ocl1l',,1'.1,d en

cabañas. cuando las inclernen­

""'h'''I,,,I,,O'l,'''' causaban la ruina de las cxisrcnres.

Aun con los resultados las daracioncs racliocar-

bónicas, difícil si laconstucción de la caba-

ña I de la Calvera fue anterior o no la del dolmen de

Peña Oviedo 1, va que estamos en lo cierro elde tiempo transcurrido fue inferior al margen de error

las daraciones radiocarbónicas.

A pesar de la construcción sucesivainmediatos. escasas de "valor"

pertenecen bien al dolmen -hacha nlll",,,,·tH"_

bien al círculo -geomérricos de buena f:!ccur;¡ ce­

r.imica por contra, en la zona de la e JJ1­

c1uso en silo se han varias piezas con lus­

tre y marcas de uso.

ricas. también. han aparecido

los monumentos megalíticos.

permitan identificar b misma como una edificación

vinculada a la infraestructura necesaria para la cons-

trucción de de los inmediatos.

Notas

,.-OI)'LlfL\b el'..' 1_¡t~lufn v PoLtLilllL'"

I'r,tbalho\ ti, \ntnlpíl-

BiJ lliografía

DIFI. (\SIIIH).\,; CO'J/AI.IJ

.'IIIR t.. 101'11 (21-1" Ie\:"\

lZ1\I.I"" )jI( l. 1.I.cROI\I l.s

111. 3) Correlación cronológica con las estructuras me­

galíticas.

En el estado actual de la de las clara-

cienes radiocarbónicas proceso. la traba-

jo que defendemos la siguiente: la campa de La

fue hacia la mitad del VI milenio

del presente radiocarbónicos- por un grupo

humano actividad fundamental era la ''''I",iler;:>

aunque la la recolección hubieron

gran en la actividades del grupo. Esta primera

ocupaciou tuvo, como las sucesivas. un ,",r-,,.,,,>,,· "'Cl1ni'._

na] estuvo motivada por la de pastos de al­

tura. Ese carácter hizo que las viviendas levantadas por

ese grupo fueran realizadas con materiales no duraderos.

En un momento a la construcción

del de los monumentos [unerarios. quizás el

dolmen de Peña Ovicdo 1. Esta interpretación ven­

dría avalada por la de materiales arqucolózr­

cos lámina, un percutor, etc.- en la masa

rumular del dolmen. Como observa el

en el que está la calibración de las

dos fechas estructuras megalíticas

del conjunto de la Peña Oviedo estas bailan

por un margen de más de 200 años, lo que

una secuenciación en la construcción de las estructuras.

Por OHa parte. la presencia de semillas carbon izadas,

de cerámica común, molederas,

yunques. de de lámina invitan a pensar en

el desarrollo de actividades diversas dentro de la caba-

fia, rodas en relaciÓn con lasubsisrencia sus mo-

radores. podría pensar que estamos

ame un de pastores similar a los que aún

en día encuentran las proxurudades.

de sílex que sirven de soporte las

rec'] W>lTlI 1:1' y la escasez primarios

de rallas podrían un buen para

que se tratara de un de talla.

número 1 RUFIRICATU!vl V)',)

GrN18782

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