seminario menor de la asunción

76

Upload: comunicacion-santiago

Post on 23-Mar-2016

251 views

Category:

Documents


0 download

DESCRIPTION

Suplemento Nº 3 de la Revista diocesana 'Barca de Santiago' de la Archidiócesis de Santiago de Compostela dedicado al Seminario Menor de la Asunción en la celebración del 60 aniversario de la colocación de la primera piedra.

TRANSCRIPT

Page 1: Seminario Menor de La Asunción
Page 2: Seminario Menor de La Asunción

EditaArzobispado de Santiagode CompostelaSeminario Menor de La Asunción

DirectorManuel Blanco

Redacción y Coordinación

Inma Tamayo

Colaboran en este número

Julián Barrio Barrio,Manuel Ferreiro Méndez, José Daniel Pérez Espasandín,Alberto Fraile Cancela, Adrián Barreiro Cerqueiro, Santiago Romero Trabazo, Yolanda Mª Gómez, Iván Senín Pereira

Fotografía

Miguel Castaño

Distribución

Secretaría de Mediosde Comunicación delArzobispado de Santiagode Compostela

[email protected]

Diseño y maquetación

Inma TamayoMiguel Castaño

Barca de Santiago

Suplemento 3 - abril 2013Santiago de Compostela

Editorial: La llamada del Señorpor D. Julián Barrio Barrio 2

La historia del Seminariopor Manuel Ferreiro Méndez 3-6

“Ser y dar Luz”por Daniel Pérez - Director espiritual 7-14

Reportaje fotográfico 17-22

Ser profesor en el Seminariopor Alberto Fraile Cancela 23-24

Reportaje fotográfico 25-28

TestimonioAdrián Barreiro Cerqueiras 29

Señor, ¿qué quieres de mí?por Santiago Romero - Formador 33-36

Educar comprometepor Yolanda Mª Gómez - Pedagoga 39-40

El profesorado del Seminario 41-44

Testimoniopor Iván Senín Pereira 45

Reportaje Fotográfico 46-50

Semana Cultural “San Rosendo” 51-72

Artículos

Page 3: Seminario Menor de La Asunción

abla, Señor, que tu siervo escucha” (1 S 3, 3b-10.19). Estas palabras de

Samuel, en respuesta a la llamada de Dios -en el “santuario del Señor, donde estaba el Arca de Dios”- nos ponen en la pista de una importante dimensión del ser humano en su relación con el Altísimo: su capacidad de silencio y de plena acogida y disponi-bilidad a la voluntad del Padre.

No es fácil en estos tiempos de ruido externo y de distracciones que los jóvenes “oigan” la voz del Señor. Si no hay actitud de escucha tampoco habrá voluntad de seguimiento. Por eso es tan importante que nuestros niños y jóvenes dispongan de espacio y tiempo para que alguien les hable de Dios y, como Elí, les señale que ese Dios es un Dios cercano e íntimo que habla en lo profundo del corazón.

Nuestro Seminario Menor es un lugar privi-legiado para ejercer esta mediación que ofrezca a niños y jóvenes la posibilidad de estar atentos a la llamada de Señor. Sin olvidar que es en la familia donde los pequeños deben escuchar por primera vez la deliciosa voz del Padre y empezar a degustar el misterio de la fe.

Ofrecer esta mediación para favorecer el diálo-go de la gracia de la oferta de Dios y la gracia de una respuesta libre, exige un absoluto respeto al tesoro que significa cada uno de los alumnos. Formamos personas para que sepan vivir con responsabilidad y libertad su opción cristiana y ayudamos a discernir si a algunas de ellas el Señor les llama al servicio y al ministerio sacerdotal.

Como pastor de esta Diócesis no puedo por menos que agradecer el esfuerzo y la dedicación constante que realiza desde hace sesenta años el Se-minario Menor para formar a estos jóvenes y plan-tearles que, acaso, Cristo el Señor les convoque a una misión específica como sacerdotes. Puede pare-cer poco, pero es mucho.

Page 4: Seminario Menor de La Asunción

l Seminario de Santiago fue fundado por el Arzobispo Fray

Rafael de Vélez en el año 1829 en el edificio de San Clemente, actualmen-te IES Rosalía de Castro. En el año 1868 el Cardenal García Cuesta, ante la necesidad de espacio que requería el Seminario, que había crecido en nú-mero de seminaristas, consigue que el gobierno de entonces permute el Se-minario de San Clemente, un edificio en perfecto estado de conservación, por el destartalado monasterio de San Martín Pinario. Desde 1869 hasta la actualidad el Seminario de Santiago desarrolla sus actividades en dicho edificio.

Page 5: Seminario Menor de La Asunción

La idea de construir un Semi-nario Menor nace de la situación de los alumnos en el Seminario de San Martín, pues era una situación insos-tenible debida, sobre todo, al núme-ro elevado de ingresos y a la falta de adecuación de las instalaciones. Ya en 1928 el arzobispo Fray Zacarías Mar-tínez, al tomar posesión de la dióce-sis se da cuenta del serio problema en que se encuentran los seminaristas mayores y menores del Seminario de San Martín e intenta solucionar aque-lla situación.

Se piensa en construir un nue-vo pabellón en la huerta del Semina-rio. Pero hay serios problemas econó-micos. Intenta recaudar fondos en la diócesis; y lo consigue. Pero en 1933 se muere el arzobispo y los fondos conseguidos se emplean en realizar aquellos trabajos más urgentes que afectan a la infraestructura del Semi-nario Mayor.

La Guerra civil supone un grave quebranto en todos los planes. Ter-minada ésta se produce un fuerte au-mento en el alumnado y San Martín resulta insuficiente. Se piensa, enton-ces en buscar otro edificio para acoger a los seminaristas menores. En 1947, siendo Arzobispo Monseñor Muñiz de Pablos, se traslada parte del Semina-rio al Hospital de san Roque aunque el edificio no reunía las condiciones necesarias para este cometido.

Al ser nombrado Arzobispo de Santiago, D. Fernando Quiroga Pala-cios, se propone la restauración de San Martín y construir un Seminario Menor de nueva planta. En 1953, D. Fernando es promovido al cardenalato y, en ese mismo año, se inicia la anda-dura del Seminario Menor de la Asun-ción de Santiago de Compostela.

- El primero de marzo, fiesta de San Rosendo, glorioso prelado composte-

Proyecto elegido para la construcción del nuevo Seminario, antes de añadir la torre principal

Page 6: Seminario Menor de La Asunción

lano, se coloca la primera piedra del edificio.

- El 30 de septiembre de 1955 termina la primera fase de las obras e ingresa la primera promoción de alumnos en número de 224, con el correspondien-te equipo de formadores. Monseñor José Cerviño fue nombrado primer rector del Seminario

- En el curso 1956-57 son 1124 los alumnos matriculados

- El 2 de octubre de 1957 bendijo el conjunto el Nuncio de Su Santidad, Monseñor Antoniutti, acompañado del Sr. Cardenal, de Monseñor Nóvoa Fuente, Obispo Auxiliar y de las auto-ridades locales y provinciales.

- El 10 de septiembre de 1958, día de san Pedro de Mezonzo, el Jefe del Es-tado, Francisco Franco Bahamonde,

inaugura solemnemente el Seminario.

- Desde 1968 los estudios realizados en el Seminario Menor tienen la misma va-lidez que aquellos que se imparten en los Institutos de Enseñanza Secundaria y Ba-chillerato existentes en el Es-tado Español.

El Seminario se dedicó a Nuestra Señora de la Asun-ción porque, mientras se construía, tuvo lugar la defi-

nición dogmática.

El Rector en el Seminario El Seminario Menor es una co-munidad educativa diocesana erigida por el Obispo según las normas de la santa Sede para cultivar los gérmenes de vocación sacerdotal de quienes, en edad temprana, presentan indicios de esa vocación y se inclinan por el sa-cerdocio diocesano secular ( P.F.6)

La tarea educativa en el Semi-nario Menor la lleva a cabo el Equipo Educativo del seminario que está inte-grado por:- El equipo de formadores, cuya fun-ción es atender la marcha general del Seminario según las tareas encomen-dadas a cada uno.- El grupo de profesores, cuya función más directa es atender a la formación intelectual.

Page 7: Seminario Menor de La Asunción

Para atender al funcionamiento del Seminario Menor hay que atender a estas funciones: Rector, Formadores y Tutores, Director o Directores espi-rituales, Director técnico, Profesores y tutores académicos, Psicopedagogo, Secretario, Administrador, Bibliote-cario, Personal de cocina, limpieza, portería, mantenimiento. Por supues-to que no es necesario que cada cargo esté desempeñado por personas dis-tintas.

Al frente de todo este organi-grama está el Rector del Seminario, que es nombrado por el Obispo. Al Rector le corresponde el encargo de la Dirección del Seminario. Es el re-presentante del Obispo en el Equipo Educativo y el representante del Cen-

tro en todos sus asuntos. Ha de cui-dar y velar por la buena relación entre todos los miembros de la Comunidad Educativa así como del buen desarro-llo de la tarea formativa y educativa. Es el responsable de todas las áreas educativas del Seminario: Formación, celebración, estudios, deportes,…y es el coordinador de todos los miembros del equipo educativo. (P.F.90).

Para esto necesita contar con un equipo de formadores bien cohe-sionado, ilusionados por su sacerdo-cio, en el que reine la caridad fraterna y el espíritu de servicio a su Obispo y a la Iglesia diocesana.

Manuel Ferreiro MéndezRector del Seminario Menor

El Seminario en construcción, todavía sin la escalinata Colocación y bendición de la primera piedra

Page 8: Seminario Menor de La Asunción
Page 9: Seminario Menor de La Asunción
Page 10: Seminario Menor de La Asunción

irigirse espiritualmen-te” no consiste sólo en

desahogarse psicológicamente, ni simplemente buscar consejo como se hace en el marco de la amistad. No tratamos de ser amigos de los semi-naristas sino sus formadores, su re-ferente. Les damos confianza, cariño, comprensión, pero cada uno en su si-tio, sabiendo poner distancias y corri-giendo lo que hay que corregir.

Hay que tener siempre presente -y los santos nos lo recuerdan eficaz-mente con su ejemplo- que el verda-dero y único modelo de la santidad cristiana es Jesucristo, y que toda

Page 11: Seminario Menor de La Asunción
Page 12: Seminario Menor de La Asunción

labor de acompañamiento espiritual consiste en procurar que cada cris-tiano tenga una amistad personal e íntima, de verdadero amor, a su ma-nera, con Cristo, hasta querer iden-tificarse con Él.

Las conversaciones de la di-rección espiritual pretenden dar luz a cada uno para que en su libertad, con su inteligencia, sepa discernir el camino que Dios tiene preparado para él de forma que pueda corresponder libre, personal, responsable y gene-rosamente.

¿Cómo es un día en el seminario a nivel espiritual?

Tengo que decir que es muy exigente.

Desarrollé mi ministerio como diácono y sacerdote en la parroquia de San Juan Bautista de Carballo y cuan-do hace cinco meses aterricé aquí me parecía increíble que jóvenes de entre trece y dieciocho años pudiesen al-canzar ese nivel de exigencia.

Aunque es un pecado por mi parte, he de decir que los primeros días tuve que acostumbrarme al es-tricto horario: oración a la mañana, laudes, ofrecimiento de obras, lue-go las clases, con su recreo a media mañana para continuar con más cla-ses. Comida, deporte, clases, estudio, Misa, cena, tiempo libre, oración de la noche (completas) y por fin, el mere-cido descanso.

Page 13: Seminario Menor de La Asunción

Habrán notado los lectores que he dicho “pecado” y digo bien, por-que cuando estuve en la parroquia si no rezaba laudes a las 8:00 h lo ha-cía después y no pasaba nada. Aquí ni formadores ni seminaristas nos da-mos ese lujo. Cada cosa a su tiempo. Aprendemos a guardar el orden para que el orden nos guarde a nosotros, que decían los clásicos y nuestros an-tiguos formadores de seminario nos recordaban casi a diario.

Si la hora de levantarse es a las 7:30h, no cabe posibilidad de otro momento, ni el minuto siguiente ni el anterior. Un timbre muy estriden-te, que tengo el gusto de hacer sonar todos los días, nos llama a una ducha de agua caliente.

Cuando suena el tercer timbre son las 8:10 h, es decir la hora de ir

hacia la capilla para la primera ora-ción de la mañana en comunidad. A las 8:15h los seminaristas menores (de 1º a 3º de E.S.O.) ya en su capilla hacen el ofrecimiento de obras y escu-chan la Palabra de Dios, acompañados por uno de los directores espirituales, mientras que los seminaristas mayo-res (de 4º de E.S.O. a 2º de BAC.) en la capilla de San José hacen el rezo de laudes, en gallego, con otro director espiritual.

Después de un día lleno de cla-ses, risas, riñas, deporte, estudio y un largo etcétera de vivencias, llega la hora más importante: la hora de la Misa, que comienza puntualmente a las 20:15 h todos los días. Cada día preside un formador y el jueves el rec-tor con toda la comunidad de mayores y menores junta. En la Misa cantamos, muchas veces reímos, y aprendemos a

Page 14: Seminario Menor de La Asunción

descubrir el valor de la Palabra, lo que Dios quiere decirnos a cada uno de nosotros.

Teniendo la barriga llena con la magnífica cena que nos preparan, y después de un rato de descanso, nuevamente volvemos a la capilla para terminar el día con la oración de la noche, donde pedimos perdón al Señor por nuestros pecados, a veces grandes a veces pequeños, y también agradecemos a Dios todos los bene-ficios, favores, detalles que ha tenido con nosotros a lo largo del día. Aquí también aprendemos a valorar lo que Dios hace por nosotros cada día.

¿Me entendéis ahora por qué digo exigente? Ojalá que todos los sa-cerdotes llevásemos esta vida tan or-denada.

Todavía nos queda por hablar de la celebración penitencial que tene-mos cada 15 días. Es un momento es-pecial en el que un sacerdote es capaz de ver la obra que Dios hace a través del seminario en cada uno de los jóve-nes que aquí vive. El Señor nos da luz para reconocer nuestros errores, fuer-za para corregirlos, ánimo en nuestras luchas. Salimos muy reconfortados y

Page 15: Seminario Menor de La Asunción

alegres porque dejamos una mochila pesada en ese armario llamado confe-sionario.

Con todo, también los lunes por la tarde, tanto los externos como in-ternos tienen esta posibilidad puesto que hay un sacerdote en la capilla para este fin.

Somos conscientes de que son chicos jóvenes, muy jóvenes, que es-tán absorbiendo todo cuanto les llega a sus mentes y sobre todo a su cora-zón. Por eso además de la Eucaristía, la celebración penitencial y las oracio-nes, hemos creado un pequeño grupo de oración en el que aprendemos a re-zar, a hablar con Dios y sobre todo, a escucharle. Es un grupo voluntario, ni siempre somos muchos, ni siempre vienen los mismos, pero algunos repi-ten y con gusto.

Muchas veces me quedo sor-prendido de cómo preparan la oración. A decir verdad, ni los creía capaces, pero los jóvenes siempre sorpren-den, y cuando escucho las reflexiones que hacen sobre lo que la Palabra de Dios les ha dicho, me quedo atónito. Bueno, atónito y feliz de que se vayan acercando más a Jesús, a María, y nos demos cuenta de lo que Ellos son ca-paces de hacer por nosotros; de cómo nos aman.

Os voy a contar una pequeña anécdota para que veáis un ejemplo de la relación de los seminaristas con Dios.

Un día teníamos la adoración perpetua. Desde la oración de la ma-ñana (8:15h.) hasta la misa de la tarde (20:15h.) el Santísimo está expuesto en la capilla general. Establecemos

Page 16: Seminario Menor de La Asunción

turnos de adoración para alumnos y profesores. Aproximadamente esta-mos 15 minutos delante del Señor en silencio.

Aunque a priori parezca que re-zamos mucho, algunos repitieron tur-no voluntariamente, y a otros se les debió de pasar el tiempo tan rápido que los quince minutos los transfor-maron en treinta.

Es una gozada ver a los jóvenes delante del Señor, en silencio, mirán-dole y Mirándolos. Todo aquello que le intentamos transmitir sólo lo pueden experimentar en ese momento, estan-do a solas con Él. Hay muchos que se sienten nerviosos ante el silencio y la soledad; otros que tienen su mente puesta en el examen o deberes que no hicieron… pero muchos de ellos han manifestado que se han sentido muy a gusto, sin saber explicar por qué. Han sentido paz, se han sentido acompa-ñados, mirados por Él, le han hablado de sus cosas importantes, o dicho de otro modo, han estado con el Amigo.

A mí me resulta increíble y me da mucha alegría poder disfrutar de

estas experiencias que los jóvenes del seminario pueden tener y de hecho tienen, con Dios.

Nosotros que tan-tas veces pensamos que está todo perdido, que la juventud ya ni se abre a la trascendencia, que recurrimos al seminario

como último recurso,… Sin embar-go, aquí encontramos un lugar en el que los jóvenes sí aprovechan estos momentos, adquieren experiencia de Dios, lo pueden conocer e incluso enamorarse de Él hasta el punto de entregarle la propia vida.

Esto es lo más importante a ni-vel espiritual. No sólo anunciarles la buena nueva del Evangelio, sino que puedan experimentar el maravilloso regalo que Dios nos da que es la FE. Así se lo pedimos al Señor, y así os pido a cada uno de vosotros que re-céis por el Seminario Mayor y Menor, tanto por los jóvenes como por sus formadores.

Termino con el siguiente texto de San Pablo a los Romanos ¿Cómo, pues, invocarán a aquel en el cual no han creído? ¿Y cómo creerán en aquel de quien no han oído? ¿Y cómo oirán sin haber quien les predique? (…) Como está escrito: ¡Cuán hermosos son los pies de los que anuncian la paz, de los que anuncian buenas nue-vas! (Rom 10, 14-15).

José Daniel Pérez EspasandínDirector espiritual del Seminario Menor

Page 17: Seminario Menor de La Asunción
Page 18: Seminario Menor de La Asunción

Capilla general de la Asunción

Page 19: Seminario Menor de La Asunción

Capilla de San José, utilizada por la comunidad de mayores

Page 20: Seminario Menor de La Asunción

23 - Barca de Santiago Revista diocesana

Page 21: Seminario Menor de La Asunción

Capilla de la Inmaculada, utilizada por las Hijas de la Natividad de María durante casi 50 años

Page 22: Seminario Menor de La Asunción
Page 23: Seminario Menor de La Asunción
Page 24: Seminario Menor de La Asunción

San

tiag

o A

póst

ol t

ien

e u

n l

uga

r de

stac

ado

en n

ues

tra

casa

Santo Tomás de Aquino, el gran teólogo

San Fernando, rey de España, patrón del Cardenal

Page 25: Seminario Menor de La Asunción

San

Jos

é, p

rote

ctor

de

Jes

ús

y de

tod

os l

os s

emin

ario

s

San Pedro de Mezonzo, obispo de Santiago ycompositor de la Salve

San Juan el Apóstol más joven, no dudó en seguir a Cristo

Page 26: Seminario Menor de La Asunción
Page 27: Seminario Menor de La Asunción

os profesores del Seminario Menor somos conscientes de nuestra labor en el centro y de

nuestra responsabilidad con la Archi-diócesis. Sabemos que un sacerdote ha de ser, sobre todo, un buen cris-tiano. También sabemos que un buen cristiano es, antes que nada, una bue-na persona. Y a eso nos dedicamos. Todos nuestros esfuerzos, a través del contacto diario con los seminaristas en las clases, en los pasillos o en los tiempos de recreo, están encaminados a lograr una buena educación para ellos.

Nos ocupamos especialmen-te de la formación académica e inte-lectual de los seminaristas, pero no sólo de eso. También procuramos en

todo momento transmitir unos valo-res acordes con el humanismo cristia-no. Valores que ayudarán a nuestros alumnos a crecer como personas y sa-car todo el potencial que atesoran.

Por eso a nosotros nos impor-tan los resultados que consiguen nuestros alumnos, pero también los procesos para conseguirlos y el es-fuerzo empleado. Por eso damos valor a la participación, al compromiso, al esfuerzo, al respeto, a la sinceridad,… Por eso no nos cansamos de apostar una y otra vez por nuestros alumnos, ya que estamos convencidos de nues-tro trabajo está dando sus frutos.

Alberto Fraile Cancela, Profesor del Seminario Menor

Page 28: Seminario Menor de La Asunción
Page 29: Seminario Menor de La Asunción

22 - Barca de Santiago Revista diocesana

Page 30: Seminario Menor de La Asunción
Page 31: Seminario Menor de La Asunción
Page 32: Seminario Menor de La Asunción

maneira de como cheguei ao Seminario é moi curiosa. A

decisión de vir xurdiu dun día para outro. En principio eu quería facer un ciclo medio, porque me dixeron que non valía para estudar, pero tiña claro que quería facer o Bacharelato. Miran-do colexios descubrimos que o Semi-nario era a mellor opción, pregunteille a un veciño meu que se ordenara facía pouco, e díxome que non había pro-blema por ir e que era unha boa idea.

Decidinme eu só a vir, sen que ninguén me dixera nada. A miña in-tención era estudar e ter unha forma-ción, pero có convencemento de que Deus me pode pedir cousas maiores.

Desde moi novo, ofrecinme a ser monaguillo para axudar ao meu párro-co, e teño unha relación especial coa miña parroquia. Gústame moito ser

monaguillo e non me arrepinto de vir estudar para o Menor. O meu párroco está contento de que haxa un fregués no Seminario con vocación.

Aquí no Menor dannos un refor-zo espiritual que nos achega a Deus dunha maneira especial e nos fai sen-tir máis preto da Igrexa. A través da palabra de Deus sentímonos identifi-cados con Xesús. A xente escandalí-zase de que esteamos no Seminario, porque nos ve como “bichos raros”, pero non é así: somos mozos normais que queremos ter a Cristo nas nosas vidas.

No Seminario aprendín a valorar as pequenas cousas da vida e a querer aos que me rodean.

Adrián Barreiro CerqueirasSan Xoan de Laiño – Dodro

1º de Bacharelato

Page 33: Seminario Menor de La Asunción
Page 34: Seminario Menor de La Asunción

San

Ros

endo

, ob

ispo

de

Iria

, en

cu

ya f

iest

a se

col

ocó

la p

rim

era

pied

ra d

e n

ues

tra

casa

Page 35: Seminario Menor de La Asunción

San

Ju

an d

e Á

vila

, pa

trón

del

cle

ro e

spañ

ol,

ha

sido

pro

clam

ado

este

cu

rso

Doc

tor

de l

a Ig

lesi

a

Page 36: Seminario Menor de La Asunción

Y es que el formador de un Se-minario está para acompañar

a aquellos que les han sido encomen-dados a crecer en todos los sentidos. Efectivamente, la formación acadé-mica es uno de los pilares fundamen-tales de nuestra labor junto al resto del profesorado, pero no tiene menos importancia la formación humana, la comunitaria y la espiritual (por la cual velan especialmente los directores espirituales que el Señor Arzobispo nombra).

Para ello, el formador acompa-ña y anima al seminarista en todos es-tos ámbitos desde una preocupación constante, como lo hace un padre con sus hijos. Igual que un padre no po-

Page 37: Seminario Menor de La Asunción

dría enumerar sin más como realiza esta labor, tampoco el formador, pues-to que cada chico es único y tiene sus propias circunstancias. No obstante, sí creo que nos podría ayudar a des-cubrir esta labor formativa el saber en qué consiste el día a día de un semi-narista.

Lo primero que debemos de te-ner en cuenta es que el Seminario es como una gran familia compuesta por los sacerdotes, el profesorado, el per-sonal de la casa y los chicos que, a su vez, pueden ser externos (sólo vie-nen a las clases), mediopensionistas (duermen en sus casas) e internos.

Tras levantarnos, hacer la ora-ción de la mañana y desayunar, la jor-nada viene marcada por el horario de las clases: por las mañanas cinco ho-ras y por las tardes dos (menos los

miércoles). Los alumnos cursan los estudios propios de la ESO y el Ba-chillerato (con tres ramas diferentes), prestando un especial cuidado a los estudios humanísticos. Todos coin-ciden en la preocupación que cada profesor muestra por cada uno y su cercanía, que nunca está reñida con el respeto que se manifiesta en gestos tan sencillos como el hecho de poner-se en pie cuando cualquiera de ellos llega al aula. También en el tiempo de

Page 38: Seminario Menor de La Asunción

dades. Desde las mañanas de retiro, las caminatas, el deporte, las excur-siones, el trabajo de la casa, las pro-yecciones… hasta la oportunidad de conocer otras realidades de nuestra diócesis: parroquias, obras de caridad y apostolado, encuentros y celebracio-nes…

Son muchas también las activi-dades que salpican todo el curso es-colar: los ensayos del grupo de teatro; el festival de Navidad y los concursos que se convocan en estas fechas; el Concurso de Sto. Tomás; las distin-tas Semanas Cultural, Vocacional y de las Letras Gallegas; los encuentros Vocacionales en el Seminario Mayor y el Seminario Menor (con monagui-llos); los Ejercicios espirituales; las Jornadas misioneras y de recogida de alimentos; los encuentros con las fa-milias; las excursiones, visitas cultu-rales y viajes de fin de etapa; los actos de graduación; los campamentos de verano…

Todo ello, unido a ese segui-miento y trato personal con el semi-narista constituyen la labor del forma-dor. Junto a la dimensión por la que vela el director espiritual favorecen esa tierra buena en la que va planteán-dose la vocación, para que, como el joven Samuel, también nosotros po-damos proclamar: “Habla, Señor, que tu siervo escucha”.

Santiago Romero TrabazoFormador de la Comunidad de Menores

clases queremos reconocer esa cerca-nía de Dios ofreciéndole el trabajo del día y pidiendo su ayuda para llevarlo a cabo.

Tras reponer fuerzas con la co-mida, hay tiempo suficiente para el descanso y el deporte, mediante el desarrollo de distintas ligas internas. Otros prefieren practicar con algún instrumento musical o simplemente disfrutar de sus compañeros en los jardines e instalaciones del centro.

Lo que se explica a lo largo de la mañana y a primera hora de la tar-de, es necesario asimilarlo y trabajar-lo de manera individual, por lo que tras la merienda y algo de descanso, comienza el tiempo de estudio: hora y media por la tarde y otra hora antes de dormir. Obviamente, hay días en los que hay más trabajo que otros, pero el tiempo de estudio siempre es necesa-rio.

Antes de cenar y tener otro poco de tiempo libre, la celebración de la Eucaristía alimenta e ilumina ese de-seo de crecer en amistad con Aquel que da verdadero sentido a nuestra existencia. Para revisar cómo vamos en este sentido y dar gracias por lo re-cibido, la oración de Completas marca el último acto comunitario de la jorna-da.

El fin de semana (puesto que van a casa cada quince días), ofrece más tiempo para otro tipo de activi-

Page 39: Seminario Menor de La Asunción
Page 40: Seminario Menor de La Asunción
Page 41: Seminario Menor de La Asunción
Page 42: Seminario Menor de La Asunción

l Departamento de Orienta-ción quiere estar al servicio

de la comunidad educativa del colegio para ello intentamos detectar, preve-nir, atender, solucionar posibles pro-blemas que se manifiesten en nuestros alumnos y atenderlos individualmente.

“Nuestro objetivo es despertar personas, hacer que los alumnos que pasan por el centro protagonicen su vida. Para ello la estrategia orienta-dora se construye sobre el convenci-miento de que la educación tiene que ser personalizada y, además, abordar-se desde todas las instancias posibles: familia, profesores y educadores, por que educar compromete siempre y nos compromete íntegramente a todos”.

En el alumno este compromiso pasa por poner orden, constancia, vo-luntad, motivación y la alegría de ver que uno es capaz de vencerse y poner-

Page 43: Seminario Menor de La Asunción

se metas y cumplirlas. De potenciar el esfuerzo.

En el profesor, estando al ser-vicio del alumno para que este crezca como persona en comunidad, propo-niendo, posibilitando, educando en la responsabilidad.

Nuestro centro es una gran fami-lia de educadores y como comunidad educativa, ofrece todos los medios pe-dagógicos de formación humana, inte-lectual y espiritual, que toda auténti-ca formación educativa está llamada a desarrollar. El estilo de vida ordena-da ayuda al adolescente a estructurar-se mediante la adquisición de hábitos de estudio, oración y convivencia, que garantizan la adquisición de seguri-dad en uno mismo y el desarrollo de la responsabilidad.

Los valores propios del Semi-nario ayudan no solo a descubrir el cristianismo como un hecho de vida profundo y enriquecedor si no que también preparan a la persona hacia una vida social, profesional y familiar íntegra.

Por eso la espiritualidad no es un capítulo aislado en la vida de nues-tros alumnos. Por el contrario, se rea-liza cuidando todas las dimensiones del crecimiento personal: una afectivi-dad sana en la relación con la familia y la convivencia con los compañeros, el esfuerzo intelectual en el estudio y el amor a la Iglesia.

La formación espiritual armo-niza todo estas facetas y les ayuda a realizar un buen discernimiento voca-cional. En este camino la celebración de la Eucaristía, la oración, el acom-pañamiento de un padre espiritual y la presencia de los sacerdotes forma-dores son ayudas en este crecimiento personal cristiano.

Un educador decía que el cole-gio debe servir para aprender a leer, a escribir, a hablar, a pensar, a rezar, a amar, a contemplar y a actuar. Eso queremos.

Yolanda Mª Gómez,Pedagoga y terapeuta de familia

Page 44: Seminario Menor de La Asunción
Page 45: Seminario Menor de La Asunción
Page 46: Seminario Menor de La Asunción
Page 47: Seminario Menor de La Asunción

El Cardenal Quiroga, promotor del Seminario, en el claustro a él dedicado

Page 48: Seminario Menor de La Asunción

ntrar en el Seminario Menor supuso un cambio profundo en mi vida. Me ha conectado con

Dios de una manera que antes nun-ca había imaginado, sintiendo en mi interior una gran paz y tranquilidad. He aprendido a valorar las pequeños ratos con Dios del día a día: las ora-ciones por la mañana, las completas, el rezo del Rosario, la celebración de la Eucaristía...

En lo referente a lo académico he mejorado mucho en mis estudios ya que tenemos un tiempo de estudio donde recibimos ayuda y refuerzo, y contamos con una gran biblioteca dis-ponible todos los días.

No hay que olvidar las activida-des de ocio que ofrece el Seminario: frontón, fútbol, baloncesto, bádminton, futbolín, tenis de mesa,...

También otras actividades ex-traescolares como son las clases de gui-tarra y piano que se ofrecen.

Yo he llegado al Seminario con una conexión con mi parroquia ya que ayudaba a los distintos párrocos en el mantenimiento de la iglesia. En mi caso, al llegar, tenía miedo (por no conocer a gente, lo grande que era el Seminario…), y llegué al punto de no querer estar. Pero llegó un momento en que descubrí que esto era una gran familia y yo era parte de ella, se nota con el cariño que te tratan los formadores y el personal de la casa, y después se crea un vínculo entre tú y el Seminario que tendrás por siempre.

Si tienes una vocación, el Semi-nario es el mejor lugar para que florezca y siga creciendo, porque recibirás ayuda para descubrirla y ser feliz.

Iván Senín PereiraSan Fiz de Estacas – Cuntis

4º de E.S.O.

Page 49: Seminario Menor de La Asunción
Page 50: Seminario Menor de La Asunción
Page 51: Seminario Menor de La Asunción
Page 52: Seminario Menor de La Asunción
Page 53: Seminario Menor de La Asunción
Page 54: Seminario Menor de La Asunción
Page 55: Seminario Menor de La Asunción
Page 56: Seminario Menor de La Asunción

El 1 de marzo, fiesta de san Rosendo, se ce-lebró el 60 aniversa-rio de la colocación de la primera piedra del Seminario Menor de la Asunción, el gran proyecto del Cardenal Quiroga Palacios.

Con este motivo, el Se-minario Menor sacó adelante la I Semana Cultural de San Ro-sendo donde se desa-rrollaron todo tipo de actividades culturales y deportivas, concur-sos, exposiciones, in-auguraciones, confe-rencias y el nacimiento de la “Asociación de ex-alumnos y amigos del Seminario”.

Page 57: Seminario Menor de La Asunción
Page 58: Seminario Menor de La Asunción
Page 59: Seminario Menor de La Asunción
Page 60: Seminario Menor de La Asunción
Page 61: Seminario Menor de La Asunción
Page 62: Seminario Menor de La Asunción
Page 63: Seminario Menor de La Asunción
Page 64: Seminario Menor de La Asunción
Page 65: Seminario Menor de La Asunción
Page 66: Seminario Menor de La Asunción
Page 67: Seminario Menor de La Asunción
Page 68: Seminario Menor de La Asunción

Alumnas y profesoras del Conservatorio de Santiago

Page 69: Seminario Menor de La Asunción
Page 70: Seminario Menor de La Asunción
Page 71: Seminario Menor de La Asunción
Page 72: Seminario Menor de La Asunción
Page 73: Seminario Menor de La Asunción
Page 74: Seminario Menor de La Asunción
Page 75: Seminario Menor de La Asunción
Page 76: Seminario Menor de La Asunción

Seminario Menor de La Asunción - Santiago de Compostelawww.smasuncion.es