psico voclñabulario 1

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CAPÍTULO I. NECESIDADES, INSTINTOS Y DESEOS 1. ANOREXIA La anorexia nerviosa es un trastorno del comportamiento alimentario que se caracteriza por una pérdida significativa del peso corporal producida normalmente por la decisión voluntaria de adelgazar. Este adelgazamiento se consigue suprimiendo o reduciendo el consumo de alimentos, especialmente "los que engordan" y también con cierta frecuencia mediante vómitos, uso indebido de laxantes, ejercicio físico exagerado y consumo de anorexígenos, diuréticos... El trastorno suele iniciarse entre los 14 y 18 años de edad, pero en los últimos tiempos está descendiendo la edad del inicio. El paciente anoréxico experimenta un intenso miedo al aumento de peso a pesar de que éste disminuye cada vez más y de una manera alarmante. Se produce una distorsión de la imagen corporal, lo que obliga a mantener la dieta. El hecho de la pérdida de peso es negado prácticamente siempre por el enfermo y no suele tener conciencia de la enfermedad. Esta malnutrición produce alteraciones, síntomas y trastornos: hipotensión, alteraciones de la piel, caída de cabello, trastornos gastrointestinales, etc. También se dan síntomas de ansiedad, depresión y obsesivos. Esta malnutrición también provoca tristeza, irritabilidad, aislamiento social e incluso ideas de muerte y suicidio.

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CAPÍTULO I.

NECESIDADES, INSTINTOS Y DESEOS

1. ANOREXIA

La anorexia nerviosa es un trastorno del comportamiento alimentario que se caracteriza

por una pérdida significativa del peso corporal producida normalmente por la decisión

voluntaria de adelgazar. Este adelgazamiento se consigue suprimiendo o reduciendo el

consumo de alimentos, especialmente "los que engordan" y también con cierta

frecuencia mediante vómitos, uso indebido de laxantes, ejercicio físico exagerado y

consumo de anorexígenos, diuréticos...

El trastorno suele iniciarse entre los 14 y 18 años de edad, pero en los últimos tiempos

está descendiendo la edad del inicio.

El paciente anoréxico experimenta un intenso miedo al aumento de peso a pesar de que

éste disminuye cada vez más y de una manera alarmante. Se produce una distorsión de

la imagen corporal, lo que obliga a mantener la dieta.

El hecho de la pérdida de peso es negado prácticamente siempre por el enfermo y no

suele tener conciencia de la enfermedad. Esta malnutrición produce alteraciones,

síntomas y trastornos: hipotensión, alteraciones de la piel, caída de cabello, trastornos

gastrointestinales, etc. También se dan síntomas de ansiedad, depresión y obsesivos.

Esta malnutrición también provoca tristeza, irritabilidad, aislamiento social e incluso

ideas de muerte y suicidio.

SEÑALES DE ALARMA DE LA ANOREXIA NERVIOSA

- Comer como si estuviera a dieta, a pesar de que ya está muy delgada.

- Usar ropas muy holgadas o demasiado grandes.

- Estar preocupadas por el peso, por conseguir dietas y por la figura.

- Experimenta cambios de personalidad.

- Experimenta vértigos, desmayos, pérdida de conocimiento y dificultad para

concentrarse.

- Temor a aumentar de peso o engordar.

- Percepción distorsionada del peso, tamaño o figura de su cuerpo.

- En las mujeres, la ausencia de al menos tres ciclos menstruales consecutivos.

- Ausencia de otro trastorno físico o psiquiátrico que pudiera justificar la pérdida de

peso o la negativa de comer.

- Comienzo del tratamiento antes de los 25 años de edad.

TIPOS DE ANOREXIA NERVIOSA

Existen distintos tipos de anorexia:

De carácter restrictivo: en donde la pérdida de peso se consigue a través de una dieta

y ejercicio intenso, en dónde la los afectados no recurren a los atracones o cualquier

tipo de purga.

De índole compulsiva: estos individuos sí recurren a atracones o purgas incluso

después de ingerir pequeñas cantidades de comida, para así perder peso.

SÍNTOMAS DE LA ANOREXIA

La anorexia se puede diagnosticar no sólo al ver a una persona con un bajo peso

corporal, esta enfermedad presenta ciertas características muy propias de dicho

trastorno:

Rechazo a mantener el peso normal de acuerdo a la edad y a la altura del individuo,

adopción de distintas dietas, tener como objetivo únicamente ladelgadez, carácter

hostil e irritable, la persona tiende a tener actitudes depresivas, actividad física

intensa, miedo intenso a ganar peso, distorsión de la imagen del cuerpo, en las

mujeres existe la ausencia de tres ciclos menstruales consecutivos, preocupación por

las calorías de los alimentos, se presentan dolores abdominales, vómitos,

preocupación por cómo son elaboradas las comidas (con qué ingredientes),

restricción de alimentos, hiperactividad entre otras cosas.

Los médicos asienten que el perfil de una persona que padece anorexia es idéntico al

de aquellas personas que padecen bulimia aunque ambos trastornos sean diferentes.

El comportamiento de un paciente con bulimia o anorexia se basa en ser muy

inmaduro y dependientes del núcleo familiar, con un gran miedo a la maduración

sexual y a asumir responsabilidades.

Existen diversas complicaciones en el caso de la anorexia si ésta no es tratada a

tiempo y de una forma adecuada, aquí las nombramos: los vómitos provocan

engrosamiento glandular, caries, desgaste de la raíz dental, pérdida de piezas

dentales, desgarramiento del esófago, inflamación de la garganta haciendo que se

dificulte cada vez más tragar, espasmos estomacales, problemas digestivos, anemia,

problemas gastroinstestinales, etc.

También están las complicaciones que se manifiestan cuando se produce un abuso

de diuréticos: descenso del nivel de potasio, disminución de los reflejos,

manifestación de sed, daño hepático, y arritmia cardíaca, entre otras afecciones.

Los anoréxicos pueden ser reconocidos fácilmente por distintos síntomas

emocionales: no tener la habilidad para hacer frente a situaciones emocionales o

exoresarse, hay una disminución de las relaciones sociales (se produce un

aislamiento), cambios drásticos de humor, compulsión y vergüenza debido a sus

malos hábitos alimenticios. Esta hipersensibilidad en el área emocional está

acompañada por ese deseo de poder manejar sentimientos y reacciones que son

afectadas por ese condicionamiento social de verse bien, lo que indica para un

anoréxico perder peso.

CARACTERÍSTICAS PSICOLÓGICAS DE LA ANOREXIA NERVIOSA.

- IMAGEN CORPORAL: la mayoría de las anoréxicas perciben una imagen corporal

distorsionada porque se ven demasiado gordas sin hacer caso de lo escuálido que está su

aspecto.

Uno de sus principales temores es llegar a estar gorda y la decisión de mantener un peso

corporal bastante bajo a cualquier precio.

- UN ACONTECIMIENTO CRUCIAL: éste se refiere a la inmediata adultez de la

joven y la independencia que la sociedad espera que ella logre. A medida que se vuelve

más delgada y más débil, la anoréxica requiere más atención de quienes la rodean, y ya

no tiene que preocuparse por salir sola ya que sino, supondría un mayor control sobre su

vida propia.

- SATISFACE VARIAS NECESIDADES CONFLICTIVAS: la libera de parte del

estrés de entrar en la adultez y lograr la independencia, mientras que atrae la atención de

los padres y ofrece una medida de control de su propia existencia.

A través de estas características psicológicas se puede observar dos tipos de anorexia:

- Anoréxicas austeras: comienzan perdiendo peso a través de dietas y ejercicio, por lo

general ayudadas con laxantes, píldoras de dieta y/o diuréticos.

- Anoréxicas voraces: muestran características de la bulimia nerviosa, es decir, que

pasan por atracones y vómitos.

TRATAMIENTO DE LA ANOREXIA NERVIOSA

Hay diversos tratamientos para la cura de la anorexia, las alternativas son: psicoterapia,

terapia comportamental, terapia medicamentosa, familiar, etc.

Los objetivos de estos tratamientos es regularizar la alimentación en el individuo y

tratar que el entorno familiar solucione sus disfunciones ya que el papel de la familia es

fundamental para la recuperación. Se recomienda en el caso de los padres del afectado

que traten de hacer encontrar a su hijo los valores perdidos, fomentar su iniciativa,

independencia y autoestima. Ayudarlo a manejar su ansiedad, si se manifiestan actitudes

sospechosas no hay que encubrirlas sino pedir ayuda profesional rápidamente, no

imponer comida: que el tema de la alimentación no se convierta en una discusión.

2. BULIMIA.

Las personas que padecen bulimia son incapaces de dominar los impulsos que les llevan

a comer, pero el sentimiento de culpa y vergüenza tras ingerir muchos alimentos les

lleva a una purga (vómitos autoinducidos o empleo de laxantes o diuréticos o ambos),

regímenes rigurosos o ejercicio excesivo para contrarrestar los efectos de las abundantes

comidas.

Los bulímicos tienen cerca de 15 episodios de atracones y vómitos por semana y, en

general, su peso es normal, por lo que resulta difícil detectar la enfermedad. En un solo

atracón pueden llegar a consumir de 10.000 a 40.000 calorías.

La bulimia nerviosa, también llamada simplemente bulimia, es un desorden de comer

que se caracteriza por episodios de comer excesivamente y después intentar compensar

por métodos inapropiados para controlar el peso (ej. con vómitos). Los métodos

inapropiados incluyen vómitos, estar en ayunas, los enemas, el uso excesivo de laxantes

y diuréticos, o hacer ejercicio compulsivamente. Atiborrarse es cuando un individuo

come una cantidad de comida mucho mayor de lo que comería la mayoría de la gente en

una situación parecida.

La bulimia tiende a desarrollarse durante la niñez o la adolescencia. Afecta a las

mujeres más que a los hombres. Las personas con bulimia muchas veces mantienen

estos comportamientos en secreto, sintiéndose asqueados y avergonzados cuando se

atiborran, pero luego aliviados cuando se purgan. Las personas con bulimia

normalmente pesan dentro del rango normal para su edad y su altura. Sin embargo, a

veces tienen miedo a aumentar de peso, tienen ganas de perderlo, o pueden sentirse

totalmente insatisfechos con sus cuerpos.

CAUSAS DE LA BULIMIA

En el origen de esta enfermedad intervienen factores biológicos, psicológicos y sociales

que desvirtúan la visión que el enfermo tiene de sí mismo y responden a un gran temor a

engordar. El enfermo de bulimia siempre se ve gordo, aun cuando su peso es normal,

pero no puede reprimir sus ansias de comer. Generalmente la bulimia se manifiesta tras

haber realizado numerosas dietas dañinas sin control médico. La limitación de los

alimentos impuesta por el propio enfermo le lleva a un fuerte estado de ansiedad y a la

necesidad patológica de ingerir grandes cantidades de alimentos.

Hasta el momento se desconoce la vulnerabilidad biológica implicada en el desarrollo

de la enfermedad y son más conocidos algunos factores desencadenantes relacionados

con el entorno social, las dietas y el temor a las burlas sobre el físico. Muchos de los

factores coinciden con los de la anorexia, como los trastornos afectivos surgidos en el

seno familiar, el abuso de drogas, la obesidad, la diabetes mellitus, determinados rasgos

de la personalidad y las ideas distorsionadas del propio cuerpo.

¿CUÁLES SON LOS SÍNTOMAS DE LA BULIMIA NERVIOSA?

Los síntomas de la bulimia nerviosa incluyen:

Comer descontroladamente y atiborrarse, para luego prugarse

Vomitar o abusar de los laxantes para perder peso

Usar el baño frecuentemente después de las comidas

Hacer ejercicio excesivamente

Preocupación por el propio peso

Problemas con la dentadura

Dolores de garganta

Depresiones o cambios de humor

Sentirse fuera de control

Ganglios hinchados en el cuello y en la cara

Reflujo, indigestión, hinchamiento

Menstruaciones irregulares

Debilidad, fatiga, y ojos rojos e inflamados

¿CÓMO SE TRATA LA BULIMIA?

Para tratar la bulimia, hay que considerar las necesidades físicas y psicológicas de la

persona. El tratamiento puede incluir terapia psicológica y medicamentos como los

antidepresivos. En muchos casos, el tratamiento será administrado por un equipo de

profesionales de medicina interna, la nutrición, y la salud mental para evaluar la

severidad de los síntomas y para recetar y cuidar al paciente. El resultado ideal del

tratamiento es restablecer la salud física y la manera normal de comer.

DIAGNÓSTICO.

El médico sospecha bulimia nerviosa si una persona está demasiado

preocupada por el aumento de su peso, que presenta grandes fluctuaciones,

en especial si existen signos evidentes de una utilización excesiva de laxantes.

Otras pistas incluyen tumefacción de las glándulas salivales de las mejillas,

cicatrices en los nudillos por haber usado los dedos para inducir el vómito,

erosión del esmalte dental debido al ácido del estómago y un valor bajo de

potasio sanguíneo. Sin embargo, el diagnóstico dependerá de la descripción

del paciente de una conducta comida excesiva-purga.

El diagnóstico resulta complicado ya que los episodios de voracidad y vómitos

se ocultan con facilidad. Además, algunos síntomas pueden ser confundidos

con los de otras patologías. Para un diagnóstico adecuado es necesaria una

entrevista psiquiátrica que desvele la percepción que el enfermo tiene del

propio cuerpo y la relación que mantiene con la comida. Asimismo, es

necesaria una exploración física completa para detectar los trastornos fruto de

su comportamiento alimenticio. Los objetivos del tratamiento son corregir los

trastornos alimenticios y psicológicos de la enfermedad.

¿SE PUEDE PREVENIR LA BULIMIA?

Como no se conoce la verdadera razón para el desarrollo de la bulimia, es difícil

decir cómo se puede prevenir. Sin embargo, vivimos en una sociedad donde la

imagen de la mujer “ideal” que se ve a través de los medios de comunicación no es

muy realista. Los educadores y los padres de la gente joven les pueden ayudar a

poner esta idea de “ideal” en perspectiva. Se debe enseñar a los adolescentes para

que entiendan que el peso apropiado no es igual a la delgadez extrema.

http://www.dmedicina.com/enfermedades/psiquiatricas/bulimia

3. ALGOFILIA.

Perversión instintiva que consiste en una apetencia por el dolor físico. Se distingue

del masoquismo, con el que a veces se le asocia, por la ausencia de componentes

eróticos. Se encuentra, sobre todo, en ciertos delirios místicos y en la melancolía.

La Algofilia es la búsqueda mórbida de sensaciones dolorosas sin connotaciones ni

componentes eróticos.

La ausencia de todo carácter erótico, la distingue del masoquismo, que es la

perversión del sentido genital, por el cual, el acto sexual no puede lograrse más que

bajo la acción de insultos, flagelaciones o de cualquier otra sevicia.

4. HIPEREROTISMO.

No tiene, en general, significación diagnóstica. Las variaciones individuales del

erotismo; y, en cada individuo, sus oscilaciones normales, por influencias

ambientales, son tan grandes, que es difícil decir cuándo el aumento es normal y

cuándo deja de serlo. Como he dicho, no siempre se acompaña el aumento de la

capacidad genital. Cuando existe esta falta de paralelismo, tenemos una de las

pruebas más importantes de la anormalidad de un hipererotismo. En la mujer, un

erotismo intenso puede coincidir con frigidez (disociación del erotismo y el orgasmo)

(Þ).

Puede el erotismo exaltado acompañarse de molestias genitales: pesadez y

dolorimiento testicular o cordonal en el hombre; y, en la mujer, dolores cólicos en la

región de las trompas, que pueden confundirse con salpingitis, sobre todo, si, como

no es raro, hay también febrícula. He aquí sus etiologías:

A) Puede depender el hipererotismo de trastornos endocrinos: la acromegalia, en

sus primeras fases, el hipercorticalismo; y, desde luego, el hipergenitalismo.

B) Pero, en la mayoría de los casos, el elemento psíquico es mucho más

importante: tal ocurre en ciertos neuróticos y psicópatas, sobre todo en ciertas formas

de demencia senil. También se observa muchas veces en la tabes dorsal y en la

parálisis general, precediendo a la fase de impotencia, e incluso coincidiendo con

ésta; entonces, el hipererotismo de estos enfermos, con erección anulada, puede

derivar hacia formas diversas de anormalidad sexual.

C) A partir del climaterio, en los dos sexos, puede mostrarse un hipererotismo, de

génesis mixta, endocrina y psíquica. En la mujer es más intenso cuando existe

virilización.

5. HIPOEROTISMO.

Se caracteriza por disminución o pérdida del deseo sexual y se ve en cuadros

depresivos y neurasténicos.

La disminución del erotismo se observará:

a) En casos de insuficiencia genital, incluso leves.

b) Otras veces, el hipoerotismo coincide con estados de hipergenitalismo

anatómico: por ejemplo, con la macrogenitosomía de origen suprarrenal, y sobre

todo central, hipotalámica (Þ).

c) El erotismo en los síndromes hipopituitarios e hipotiroideos puede disminuir

muy precozmente, aun en formas leves de aquellos trastornos endocrinos. No es

raro, en efecto, que la indiferencia sexual sea una de sus primeras

manifestaciones. En el primer caso las gonadotropinas están disminuidas.

d) La diabetes es, entre las endocrinopatías, una de las que más precozmente

determinan hipoerotismo, a veces asociado a dificultad en la erección en el

hombre y frigidez en la mujer. Puede encontrarse incluso en casos de prediabetes:

he aquí el que este trastorno sea frecuente en individuos que pertenecen a

familias diabéticas, aun antes de ser, ellos, diabéticos verdaderos.

e) Otro grupo interesante de hipoerotismo es el de los individuos sin lesiones

endocrinas, pero con hipometabolismo constitucional. El metabolismo basal

debe, pues, ser investigado en todo caso de disminución inexplicada del erotismo.

f) En algunas intoxicaciones, especialmente en la bromurada, en la arsenical, etc.

La mayoría de psicofármacos pueden producir disminución de la libido.

g) El hipoerotismo es un fenómeno normal, aparte de la senilidad, en los estados

de decadencia física por enfermedades depauperantes (anemias, infecciones

crónicas, incluso focales, etcétera); en la alimentación escasa; en las grandes

preocupaciones intelectuales o emocionales, etcétera: así como en diversas

enfermedades mentales y nerviosas. Es frecuente en los adelgazamientos por

desnutrición o por anorexia mental.

http://cienciaexplicada.com/hipererotismo.html

6. HOMOSEXUALIDAD.

Se define a este tipo de orientación sexual como la preferencia erótica (incluyendo

fantasías y experiencias) por personas del mismo sexo, con disminución del interés

erótico hacia las personas del sexo opuesto. Otras definiciones, dentro de la

dificultad de dar una descripción exacta de la homosexualidad, son, por ejemplo, un

patrón persistente de sentimiento homosexual acompañado de un patrón persistente

ausente o débil de sentimiento heterosexual; una atracción erótica persistente, de tipo

adulto, hacia una persona del mismo sexo y que generalmente, aunque no siempre,

desemboca en una relación sexual.

No es nada nuevo decir que la conducta homosexual existe, en mayor o menor grado,

en casi todas las culturas. Se sabe que de los 76 tipos de sociedades que pueblan

nuestro planeta, en 49 -más de la mitad- la homosexualidad es considerada por la

comunidad como una práctica aceptable. Es bien cierto que la manifestación de la

homosexualidad depende de que los factores socioculturales sean permisivos o

represivos. Si repasamos la historia, nos encontraremos con las magnificencias

descritas sobre el amor homosexual de los antiguos griegos y romanos, y referencias

bíblicas a la muy probable homosexualidad del famoso rey David, aunque luego

hallaremos contundentes cartas de san Pablo condenando enérgicamente tales

prácticas. La Iglesia católica tiene una postura bien definida al respecto, habiendo

declarado que la atracción homosexual no es en sí misma éticamente reprobable y

que toda persona tiene su dignidad inviolable con independencia de la orientación e

incluso del comportamiento sexual. Aunque ve la actividad homosexual, que no es lo

mismo que la orientación homosexual, como algo moralmente malo.

¿Qué causa la homosexualidad?

Nadie sabe por qué algunas personas son homosexuales. Algunas personas que

estudian la sexualidad humana creen que la sexualidad es el resultado de los genes,

de factores sociales o individuales aislados o combinados. Una percepción

equivocada muy común es que las relaciones familiares donde ha habido problemas

hacen que la gente se vuelva homosexual; sin embargo, no existe ninguna

investigación científica de peso que apoye este mito.

Los psicólogos, psiquiatras y otros profesionales de la salud mental concuerdan en

que la homosexualidad no es una enfermedad, un trastorno mental ni un problema

emocional. Más de 35 años de investigación científica objetiva y bien diseñada han

demostrado que la homosexualidad, en sí misma, no se asocia con trastornos

.mentales ni problemas emocionales o sociales. Se creía que la homosexualidad era

una enfermedad mental porque los profesionales de la salud mental y la sociedad

tenían información tendenciosa.

http://www.sontushijos.org/consultas/materiales/material53.pdf

7. LESBIANISMO

Consiste en la homosexualidad propia del género femenino. En otras palabras, una

lesbiana es una mujer que se siente atraída romántica, afectiva y/o sexualmente,

hacia personas de su mismo sexo.

Las lesbianas son mujeres que aman a otras mujeres y pueden sentirse vinculadas

más estrechamente a las mujeres emocional y espiritualmente. Es normal y sano ser

uno mismo, sea uno heterosexual u homosexual, lo que realmente importa es que

aprendamos a gustarnos a nosotros mismos.

Las mujeres que se consideran ser lesbianas o sentir atracción por personas de su

mismo sexo, aclaman que es algo totalmente natural para ellas, que lo han sentido

desde que están pequeñas, pero el miedo hacia la discriminación de la sociedad les

hace difícil aceptarlo pues creen que están mal, por eso muchas mujeres parecen ser

heterosexuales cuando en realidad son lesbianas de nacimiento. Muchos psicólogos

alrededor del mundo dicen que es algo completamente natural ser homosexual y/o

heterosexual, como ejemplo se cita que hay más de 1500 especies animales en el

mundo en donde existe comportamiento homosexual y dicha actitud animal es obra

de la naturaleza misma.

1 Raquel P.; Cristina F. (2006). Conceptos clave sobre Homosexualidad y

Lesbianismo. Madrid – España.

8. INSOMNIO.1

El insomnio es uno de los trastornos del sueño más comunes.

Aunque el insomnio únicamente suele concebirse como la dificultad para iniciar

el sueño, lo cierto es que la dificultad para dormir puede tomar varias formas:

Dificultad para conciliar el sueño al acostarse (insomnio inicial, el más

común de los tres)

Despertarse frecuente durante la noche (insomnio intermedio)

Despertarse muy temprano por la mañana, antes de lo planeado (insomnio

terminal)

Esto impide la recuperación que el cuerpo necesita durante el descanso nocturno,

pudiendo ocasionar somnolencia diurna, baja concentración e incapacidad para

sentirse activo durante eldía.

Varios son los determinantes de este trastorno de sueño. Factores como el estrés, la

elevada activación del organismo o la depresión son relevantes. En la actualidad, es

frecuente la prescripción de fármacos para el tratamiento a corto plazo del insomnio.

Sin embargo, el tratamiento farmacológico no constituye una solución adecuada a

mediano y largo plazo, y es preferible evaluar en estos casos el uso de otras técnicas,

como la terapia conductual o cognitivo-conductual. Un asunto de primer orden en el

abordaje de este trastorno de sueño (el insomnio es en realidad un síntoma, y no una

enfermedad) consiste en instruir al paciente acerca de los principios de la llamada

profilaxis o higiene del sueño.

Alejandro Jiménez G. (2000) El insomnio en la práctica médica. Instituto

Mexicano de Psiquiatría. México.

Tipos de insomnio.

Existen diversas clasificaciones del insomnio, según la duración del trastorno, según

la gravedad con la que se presente y según el horario en el que se presente:

Según su duración, se puede distinguir entre el insomnio transitorio o agudo

(dura menos de 4 semanas), el insomnio a corto plazo o subagudo (más de 4

semanas, pero menos de 3-6 meses) y el insomnio a largo plazo o crónico (más

de 3-6 meses).

En función de su severidad, se distingue entre el insomnio leve o ligero, con el

que existe un mínimo deterioro de la calidad de vida; el moderado, que se da

cada noche y en el que empiezan a surgir ciertos signos del deterioro de la

calidad de vida con síntomas como irritabilidad, ansiedad, fatiga, y el severo o

grave, en el que los síntomas se sufren con mayor intensidad y por tanto la

calidad de vida se ve algo más afectada.

Por los horarios, se hace distinción entre el insomnio inicial o de conciliación

(dificultades leves o graves para conciliar el sueño al acostarse), el intermedio o

de mantenimiento del sueño (en vez de dormir toda la noche de continuo, la

persona se despierta varias veces durante la noche) y el terminal o de final de

sueño o de despertar precoz, conocido por los expertos como insomnio matinal

(la persona despierta poco o mucho antes de la hora que tenía planeada hacerlo).

Causas del insomnio: El insomnio puede tener orígenes diversos:

Situaciones generadoras de estrés temporal o crónico, debido a problemas o

preocupaciones laborales, familiares, sexuales, económicas, etc.;

Las condiciones físicas del espacio en el que se descansa;

Hábitos irregulares del sueño, así como cambios frecuentes de horarios a la hora

de irse a dormir o de levantarse;

Malos hábitos alimenticios (cenas copiosas, irse a la cama con hambre);

Consumo de sustancias excitantes del sistema nervioso (té, café, alcohol, bebidas

con cola, tabaco y cualquier otra que provoque dependencia física o por lo menos

psicológica);

Tras intervenciones quirúrgicas (las patologías orgánicas que vienen

acompañadas de dolor suelen ser causantes de dificultades para dormir);

Abstinencia del alcohol o de otras sustancias depresoras del sistema nervioso;

Efectos secundarios de los medicamentos;

Trastorno de estrés post-traumático: después de algún accidente, de un golpe, de

un traumatismo o de alguna otra situación estresante (generalmente intensa y

repentina)es posible que el individuo tenga dificultades leves o graves para

descansar;

Congestión nasal;

Necesidad de ir al baño

Estados de ansiedad excesiva (véase crisis de ansiedad y ataque de ansiedad).

Tratamiento:

Técnicas de relajación: Pueden utilizarse diversas técnicas como relajación

progresiva, entrenamiento en imaginación, biofeedback e hipnosis. El objetivo es

reducir la ansiedad y el estrés en el momento de irse a dormir. Para ello se enseña a

la persona insomne unos ejercicios durante las sesiones de terapia, que luego deberá

practicar en casa.

Tiempo de preocupación: En casos en los que una persona no pueda dormir a causa

de pensamientos y preocupaciones que giran en su mente, se le pide que establezca

un tiempo para preocuparse durante la tarde o la mañana. Es un periodo durante el

cual revisas el día, haces planes, buscas soluciones. Fuera de ese periodo, y sobre

todo en la cama, te prohíbes terminantemente preocuparte.

Imaginación guiada: Dejas de pensar que "debes dormirte" para centrarte en una

fantasía agradable que tratas de ver en tu mente con detalle. Esto te ayuda a dejar de

lado las preocupaciones.

9. HIPERSOMNIO

Esta afección se caracteriza por un sueño excesivo nocturno a la vez que se siente

una constante somnolencia durante el día.

Existen cuatro tipos:

Hipersomnio post-traumático: Este tipo de hipersomnio puede surgir a causa de

una lesión del sistema nervioso central. El hipersomnio suele presentarse justo

después del accidente en cuestión, pero en ocasiones puede tardar hasta un

año. Su duración dependerá de la gravedad de la lesión.

Hipersomnio recurrente: Los afectados tienen periodos largos en los que

duermen excesivamente, seguidos de periodos de alerta normal. El tiempo entre

un periodo y otro es indeterminado.

Hipersomnio idiopático: Es muy parecido a la narcolepsia: sueño de más de 10

horas, dormir en momentos inapropiados, somnolencia y siestas frecuentes. A

veces la cataplejia y las alucinaciones hipnagógicas pueden también aparecer sin

que sean síntomas de narcolepsia. Sin embargo, no se confunde con la

narcolepsia porque en el hipersomnio idiopático hay muy poco sueño REM.

Hipersomnio normal: A menudo es genético y el que lo padece sólo necesita

más horas de sueño, unas 10 o más. No resulta un problema a no ser que

interfiera en la vida cotidiana.

10. HIPOSOMNIO.

El hiposomnio se caracteriza principalmente por la poca profundidad del sueño, que

no descansa al enfermo, a pesar de las horas que duerme. Estos sujetos se

despiertan más fatigados que al acostarse y están muy irritables y nerviosos. Se

produce el hiposomnio por la debilidad del sistema nervioso en la neurastenia

constitucional, en la convalescencia de enfermedades debilitantes, gastro-

intestinales (colitis mucomembranosa), en los trastornos circulatorios de las angio y

cardiopatías.

http://www.medicinasaludysociedad.com/site/index.php?option=com_content

&view=article&id=50:trastornos-del-sueno-insomnio-e-hipersomnio-en-

enfermeras

11. DISFUNCIONES SEXUALES.2

Son problemas en la respuesta sexual humana (el deseo, laexcitación y el orgasmo)

que usualmente impiden el desarrollo de una vida íntima plena, afectan la salud

integral y la autoestima del individuo, así como su relación de pareja.

Ezequiel L.(2007) Las disfunciones sexuales. Universidad Nacional de Mar

del Plata. Bogotá Colombia

Padecer de algún tipo de trastorno sexual es algo muy común hoy en día. Lo mejor

que se puede hacer es buscar el tratamiento adecuado lo antes posible, para volver

a disfrutar de la vida sexual plena que tanto la persona afectada como su pareja

merecen.

Clasificación: Las disfunciones sexuales más comunes son:

Anorgasmia: Imposibilidad de conseguir un orgasmo.

Aversión sexual: Rechazo a casi todo tipo de acto sexual, incluye miedo, ataques

de pánico, fobia, asco, entre otros.

Dispareunia: Dolor durante o poco después de una relación sexual.

Dolor sexual no coital: Dolor genital recurrente durante la actividad sexual

provocado por estimulación no coital.

Eyaculación precoz: Respuesta orgásmica o eyaculatoria durante el acto sexual

antes de lo deseado.

Eyaculación retardada: Sucede cuando la erección se mantiene pero la

eyaculación tarda en aparecer.

Falta de deseo sexual o Frigidez: También llamado deseo sexual hipoactivo, se

describe como el bajo nivel de interés sexual.

Impotencia: Caracterizada por la dificultad del hombre en mantener

una erección con la rigidez suficiente para lograr la penetración vaginal. Hoy en día

existen gran cantidad de tratamientos.

Vaginismo: Espasmo muscular involuntario de los músculos vaginales que

provoca gran dolor durante o la imposibilidad de la penetración.

CAUSAS:

Es frecuente en personas que sufren de alguna dependencia, como el alcoholismo o

los psicofármacos. Muchas drogas pueden intervenir en el proceso funcional de la

excitación y el orgasmo.

Otra de las causas frecuentes es un inadecuado perfil hormonal, en especial un bajo

nivel de andrógenos. La testosterona es necesaria para mantener el deseo no sólo en el

hombre, sino también en la mujer, aunque en ella los niveles normales son mucho más

bajos.

Lo más normal es que las disfunciones sexuales obedezcan a causas psicológicas como

un bajo nivel de autoestima, estadosdepresivos, excesivo estrés o ansiedad,

una historia de abusossexuales o mala relación de pareja, etc.

Lo importante es tener conciencia de que cualquiera que sea la

causa, existen tratamientos y terapias, tanto para el individuo en sí, como para la pareja

afectada, para resolver estos problemas. Entre antes se acepte el problema y se tome

acción, mejores posibilidades tendrá la persona de retomar y disfrutar de una vida

sexual normal y plena.

Tratamiento: Acudir al especialista lo antes posible, ya que las disfunciones

sexuales tienen solución cuando se tratan precozmente y se lleva a cabo una terapia

adecuada, casi siempre a nivel de pareja.

Es importante asimismo eliminar ciertos tabúes sociales tales como el tamaño del

miembro, tipo y número de actuacionessexuales, impotencia “como preaviso” del

envejecimiento, mala experiencia como precursora de una actividad sexual angustiante,

etc.Disminuir la ansiedad por mantener relaciones sexualespuede aliviar la tensión que

provoca la necesidad de cumplir. Muchas veces esto por sí mismo puede ocasionar el

trastorno dado.

CAPÍTULO II.

TRASTORNOS DEL LENGUAJE

1. MUTISMO.

El mutismo se define como la incapacidad persistente de hablar en voz baja y hasta

de emitir un sonido laríngeo.

Según Ajuriaguerra, podemos distinguir entre:

Mutismo total o adquirido: producido por la existencia de un importante shock

afectivo, de forma súbita o progresiva. Mutismo selectivo o electivo: incapacidad

persistente de hablar en situaciones sociales específicas (por ejemplo en la escuela

con el profesor y los compañeros), cuando es de esperar que hable porque así lo

hace en otras situaciones. Los niños que presentan mutismo selectivo no tienen

alterada la capacidad para comunicarse, sino que se niegan a utilizar el lenguaje oral

en situaciones específicas a pesar de usarlo en otras. Habitualmente este mutismo se

inicia antes de los cinco años, su alteración puede durar tan solo unos meses, aunque

a veces persiste más tiempo, prolongándose durante años.

Se establecen como síntomas y trastornos asociados los siguientes:

Timidez excesiva. Aislamiento social. Retraimiento social. Rasgos compulsivos.

Comportamientos negativistas.

Empezaremos realizando la valoración de los siguientes aspectos para situarnos ante

la gravedad del caso. Se realizará una valoración del lenguaje con el objetivo de

conocer el nivel linguístico que el alumno posee para compararlo con el

correspondiente a su edad cronológica.

http://www.emagister.com/curso-logopedia/mutismo

Se pretende establecer el perfil psicolinguístico del niño evaluando a nivel de

expresión, comprensión e imitación provocada o repetición.

Se deben controlar los resultados obtenidos en:

Pruebas de vocabulario. Repetición de logotomas, palabras y frases. Riqueza

gramatical. Uso del lenguaje en diferentes situaciones sociales. Nivel de producción

oral observando el lenguaje espontáneo en uso. Nivel de comprensión.

Se observan mediante diversas entrevistas los siguientes aspectos que puedan ser de

interés para posibles modificaciones de conducta del niño:

La actitud de los padres con el niño y respecto al problema. El modo de relación con

el niño (sobreprotección, abandono, rechazo,...) Actitud del sujeto en presencia de

los padres, en su ausencia, ante el juego o ante las tareas que debe realizar. Otras

maneras de comunicarse: gestos, juegos y motivaciones en general.

Las NEE de los alumnos con mutismo se centrarán fundamentalmente, y según

los casos en:

Mejorar y compensar sus dificultades de adaptación social y escolar. Establecer

relaciones con niños de su edad. Normalizar la interacción verbal con los

compañeros. Normalizar, y en muchos casos establecer, paulatinamente la

interacción con maestros y adultos. Ampliar la relación con los miembros

familiares.

Al intervenir es el mutismo es fundamental establecer primero una entrevista con la

familia y la escuela para saber cuándo habla o no habla y qué le gusta. Emplearemos

técnicas de modificación de conducta, y entre otros aspectos trabajaremos:

Desarrollo de la comunicación no verbal Interacción no verbal. Imitación de

sonidos. Interacción rítmica. Extinción de lenguaje no verbal. Moldeamiento del

habla y uso de fichas Generalización

Técnicas Cognitivo-conductuales: Las utilizamos para reducir la tensión muscular y

la ansiedad que le genera al sujeto el tener que hablar con sujetos extraños. Las

clasificamos en:

Técnicas de relajación y respiración: Permiten que el sujeto adquiera las habilidades

necesarias para reducir la ansiedad y enfrentarse a las situaciones de hablar con

extraños de forma correcta.

Habilidades sociales: Permiten al sujeto aprender una serie de habilidades que no

poseen, para interactuar con otras personas.

Modelado: El sujeto ve a otras personas hablando con otras personas extrañas y así

aprende que no hay que anticipar consecuencias aversivas, reduciendo así su

ansiedad. Sin embargo, por sí solo su eficacia es muy escasa.

· Automodelado: El sujeto se ve así mismo, mediante un montaje, hablando con

personas extrañas.

En la intervención con la familia intentaremos crear dos conductas:

No crear demandas de hablar en presencia de extraños. No servir de intérprete suyo,

que él sienta la necesidad de comunicarse.

En la intervención con la escuela se darán las siguientes orientaciones:

No referirse en principio a la condición del habla del alumno. Evitar que los

compañeros le den importancia al hecho del habla del alumno. Tratar en principio de

fortalecer toda comunicación no verbal.

El último punto a señalar son las ACIs. Un ACI es una estrategia de planificación y

actuación docente que incorpora las modificaciones requeridas por un ACNEE y

que le permiten acercarse a los objetivos establecidos en el currículo ordinario que

le corresponde por su edad. Es elaborada por el profesor tutor, los profesores

especialistas y el profesorado de apoyo y cuentan con la colaboración del orientador.

En todas estas alteraciones en general, no se suele necesitar ACI propiamente

dichas, es decir significativas, salvo en algunos casos más graves como son el

mutismo, la disfasia y la afasia.

A la hora de realizar una ACI se debe saber que ha de ser una estrategia global, muy

flexible y dinámica, que tenga en cuenta unos criterios generales:

Partir de una amplia y rigurosa evaluación del alumno/a y su contexto. Partir

siempre del currículo ordinario. Tender a que las adaptaciones aparten al alumno/a

lo menos posible de los planteamientos comunes. Combinar los criterios de realidad

y éxito.

2. VERBORREA.

La verborrea define una actitud en la que se tiende a hablar de modo permanente sin

controlar lo que se dice impidiendo la interacción con los demás. En los estados de

nerviosismo o ansiedad se utiliza esta forma de hablar para mitigar dicho

nerviosismo, como un mecanismo de defensa a situaciones estresantes que

desaparecen a muy corto plazo. En ocasiones puede resultar un problema para

establecer relaciones sociales duraderas ya que puede limitar la comunicación. A

veces para salir de una situación que puede crear un apuro se utiliza el exceso de

palabra y es cuando se dicen cosas sin pensar pudiendo ofender al oyente o crear

situaciones incómodas. Podemos aprender si prestamos atención en qué momentos

usamos hablar el exceso y qué estamos intentando evitar con esta conducta.

http://www.fundacionpunset.org/apol/20910/verborrea-nerviosa/

3. DISNOMIA

La anomia o disnomia es la dificultad que tienen las personas con algún tipo de

daño cerebral, deterioro o disfunción (v.g. afasia o demencias) para recuperar las

palabras o para producir los sonidos que las componen. El conocido fenómeno de

la “punta de la lengua” sería una forma muy común, pero no patológica, de este

problema.

Los actuales modelos psicolingüísticos, consideran la existencia de tres tipos de

anomia o déficit de denominación fundamentales (8,16-18).

Anomia semántica: Consiste en la aparición de problemas conceptuales como

consecuencia de daño en el sistema semántico. Este tipo de pacientes suelen tener

no sólo dificultades de denominación sino también problemas de acceso al

significado desde cualquier modalidad lingüística. Los pacientes con anomia

semántica suelen cometer errores semánticos, incluyendo fallos en la compresión

oral, lectura y denominación de dibujos. Con frecuencia no son conscientes de sus

propios fallos. Además, este tipo de pacientes anómicos puede tener dificultades o

cometer fallos en la denominación de ciertas categorías semánticas muy concretas

(v.g. animales o frutas).

Anomia fonológica de recuperación (Phonologicalretrieval anomia o

PRA): Cuando el sistema fonológico está dañado, los pacientes que padecen este

tipo de problema pueden generalmente reconocer el significado de un objeto, pero

se muestran incapaces de acceder a la fonología precisa de salida, a pesar de

conservar intacto el conocimiento semántico. Esto es, que el paciente tiene

dificultad para decir en su forma completa la palabra en sí misma; muy parecido a

lo que ocurre en el fenómeno de la “punta de la lengua”. Así pues, estas personas

con anomia tipo PRA pueden frecuentemente recuperar una parte de la palabra que

quieren nombrar, o incluso decir el número de sílabas que ésta contiene, pero no

pueden acceder a la forma completa de dicha palabra. En los pacientes con PRA, la

frecuencia figura como el factor más importante en la recuperación de una palabra

desde el lexicón. Los déficit más habituales aparecen en la producción de errores

de tipo semántico, morfológico o en la emisión de respuestas nulas (no válidas). Sin

embargo, los pacientes con PRA suelen tener una buena comprensión y son capaces

de transmitir el significado de una palabra a través de gestos o mímica. Además,

pueden frecuentemente leer en voz alta y repetir palabras que, por otra parte, son

incapaces de nombrar en exposición.

Anomia fonológica de codificación (Phonologicalencoding anomia o PEA): Este

tipo de anomia se produce cuando la conexión entre el sistema semántico y el

sistema léxico-fonológico se encuentra dañado. En ese caso, las representaciones

de las palabras permanecen intactas pero el paciente no puede acceder

correctamente a ellas. Estos pacientes a menudo comenten errores de tipo

fonológico en la denominación, así como fallos en la lectura y en las tareas de

repetición de palabras.

Se han utilizado hasta ahora tres técnicas de tratamiento y rehabilitación de la

anomia:

Repetición. El logopeda dice en voz alta el nombre del objeto y el paciente ha de

repetirlo hasta que es capaz de decirlo sin ayuda. El inconveniente de este sistema

es que los efectos del tratamiento duran poco tiempo y pasados unos minutos el

paciente ya no recuerda la palabra (19).

Ayudas o pistas lexicales (fonológicas, silábicas, etc.). El logopeda ayuda al

paciente anómico diciéndole los primeros sonidos de una palabra (fonemas o

sílabas) y el paciente tiene que terminar o “cerrar” la palabra propuesta. Este

procedimiento resulta más efectivo, aunque de la misma manera que el anterior, no

suele ser muy duradero y pasados alrededor de 30 minutos el paciente vuelve a

tener problemas en la evocación del vocablo (20).

Ayudas o pistas semánticas. El logopeda poco a poco proporciona al paciente

distintas características sobre el significado de la palabra que se quiere evocar, a

través de un dibujo o una fotografía. El problema es que el paciente frecuentemente

conoce tales características del significado de la palabra pero no puede evocarla y

decirla.

Otros autores creen que este tipo de estrategias de rehabilitación fracasan en gran

medida, porque sólo se fija en un único aspecto del procesamiento del acceso al

léxico. Según ellos, las pistas fonológicas y silábicas son útiles para activar ciertos

nodos referidos a la articulación y forma de la palabra pero no sirven para

consolidar y fijar su aprendizaje. Por otro lado, las pistas semánticas no son

especialmente apropiadas para ayudar a recuperar una palabra pero ayudan a fijar

mejor los enlaces entre los distintos almacenes de acceso y evocación.

Una buena estrategia en la rehabilitación de la anomia puede ser aquella que logre

una correcta activación de los nodos lexicales correspondientes a los fonemas, a las

sílabas, a los morfemas, etc. y, al mismo tiempo, logre vincularlos al significado

para prolongar la huella lexical y permitir su más fácil recuperación.

4. OLIGOFASIA.

Consiste en la pobreza de la cantidad de palabras y formas gramaticales utilizadas;

muy característico de los deficientes mentales y dementes, especialmente en aquellos

casos incipientes. Debe distinguirse de la que depende del grado de desarrollo

cultural adquirido.

http://sisbib.unmsm.edu.pe/bibvirtual/libros/psicologia/manual_psiquiatr%C3

%ADa/cap-5.htm

5. VERBILOCUENCIA.

Es el uso innecesario de rebuscadas palabras y formas gramaticales que tornan el

discurso artificioso, formalista y hasta grotesco. Se presenta en pacientes con ideas

de grandeza, en hipomaníacos, en dementes incipientes y en personalidades

histriónicas.

http://sisbib.unmsm.edu.pe/bibvirtual/libros/psicologia/manual_psiquiatr%C3

%ADa/cap-5.htm

6. AFASIA.

La característica fundamental de este cuadro es la alteración de la comprensión del

lenguaje. Otra característica es la elocución que puede ser abundante pero carente de

sentido o con escaso valor comunicativo.

Si existe algún lenguaje espontáneo presenta alteraciones propias: ecolalias y

perseveraciones silábicas y verbales (perseveraciones de palabras), que pueden ser

tan intensas que pueden volver al lenguaje ininteligible, (idioglosia).

Otro rasgo es la fatigibilidad y la labilidad de la atención, esta se prueba al hacer

trabajar a un niño afásico, veremos que se van incrementando los errores y los lapsos

de concentración son cada vez más breves, como consecuencia se ve también

perturbada la memoria.

El aprendizaje escolar de los niños con afasia de escasa gravedad es posible siempre

y cuando se cumplan algunas condiciones, la primera es acompañar este proceso con

una reeducación adecuada del lenguaje, la segunda es tener en cuenta que en este

síndrome es necesario realizar adecuados estudios fisio-patológicos para basar en

ellos tanto la reeducación como el trabajo escolar.

7. AFASIA EXPRESIVA.

La afasia expresiva es un tipo de afasia en la que la persona pierde la capacidad de

comunicarse con los demás. Esto es en realidad un trastorno del cerebro y ocurre

cuando la porción anterior del mismo está dañado o no se desarrolla completamente.

Este tipo de afasia se conoce en términos de neuropsicología clínica como afasia de

Broca, mientras que en la neuropsicología cognitiva, se denomina como

afasia agramatismo.

Este trastorno se asocia con la falta de desarrollo del área de Broca del cerebro, que

se refiere a la posterior izquierda frontal inferior. Al mismo tiempo, la región anterior

del cerebro podría estar dañada o poco desarrollada. Una persona que sufre de afasia

expresiva es incapaz de hablar y escribir, a pesar de que es capaz de comprender y

percibir todo lo que sucede alrededor de su entorno.

En tales condiciones, la persona va a tener dificultades para iniciar el habla. Su

discurso será con fluidez detenida, diferentes dificultades, etc. La persona se enfrenta

a esos mismos problemas a la hora de escribir. Su lenguaje se reduce a

la distorsión de frases inadecuadamente construidas. En resumen, ellos saben lo que

quieren decir, pero no se puede comunicar.

La afasia expresiva es un efecto secundario de un derrame cerebral. La terminología

médica para este tipo de accidente cerebrovascular es la embolia o trombosis. Un

estudio ha demostrado que el 35% de las personas que han desarrollado la afasia, se

debe como resultado de un accidente cerebrovascular. Esta afasia también es causada

por muchos otros trastornos, como tumores cerebrales, hematoma extradural, trauma

cerebral, ataque cerebral y hemorragia cerebral.

8. AFASIA MOTORA O DE BROCA.3

Este término designa un síndrome complejo, en el cual predomina la insuficiencia de

los aspectos motores del lenguaje y de la escritura, acompañado de agramatismo y en

algunos casos trastornos de comprensión del lenguaje. Además suele existir

hemiparesia y problemas sensoriales en el lado derecho. Inicialmente y de forma

transitoria puede haber hemianopsia derecha y desviación ocular ipsolateral.

Aunque está implicada la circunvolución frontal inferior (área de Broca), esta afasia

es el resultado de una gran lesión que abarca los elementos cortical y subcortical a lo

largo de la porción frontal y superior de la cisura de Silvio, incluida la ínsula. Las

causas comunes de la afasia de Broca pueden ser varias, como oclusión embolica de

la división superior de la arteria cerebral media izquierda, o hemorragia hipertensiva

del putamen, o un tumor o absceso del lóbulo frontal, o lesiones metastásicas, o un

hematoma subdural.

En la fase aguda, el paciente está prácticamente mudo, no comprende, no es capaz de

comunicarse, sufriendo además un fuerte impacto emocional.

Con el tiempo la comprensión mejora, mientras que las dificultades de lenguaje y

escritura persisten, debido a una apraxia del aparato linguobucofaríngeo.

A medida que mejora el paciente es capaz de hablar en voz alta, aunque las palabras

son anunciadas con lentitud y con mucho trabajo. La articulación y entonación

(prosodia) están alteradas. Debido a estos aspectos existe poca fluidez, la acentuación

de las palabras y frases es inadecuada, a veces hay tartamudeo. El lenguaje consiste

principalmente en nombres y adjetivos y se omiten las palabras funcionales como

artículos, preposiciones y conjunciones, lo que da al lenguaje un estilo agramatical y

telegráfico.

Una vez pasadas las fases aguda y subaguda, estas dificultades del habla pueden

persistir, aunque con frecuencia una adecuada terapéutica del lenguaje hace mejorar

a los pacientes.

En la afasia de Broca, además del lenguaje hablado está afectada la comunicación

escrita. Debido a la parálisis de la mano derecha estos pacientes no pueden seguir

escribiendo con la misma. La alternativa es enseñarles a escribir con la mano

izquierda o también aprovechar las nuevas tecnologías para posibilitar la

comunicación.

http://www.slideshare.net/aleja.tg/afasia-de-broca

9. AFASIA TÓNICA.

La persona necesita tiempo adicional para entender mensajes orales (por ej., os

trastornos del habla son severos, existen problemas de fluidez y de comprensión. La

comunicación suele estar afectada de manera severa. En la mayoría de los casos los

pacientes logran decir únicamente unas pocas palabras y su comprensión del lenguaje

es igualmente muy limitada, no pueden leer ni escribir. Una causa frecuente de la

afasia global suele ser una lesión que destruye gran parte de las áreas del habla del

hemisferio dominante y que se origina por oclusión de la arteria carótida interna

izquierda o de la arteria cerebral media en su origen. Cuando la causa principal es una

de las siguientes: edema, parálisis postconvulsiva, una alteración metabólica o

hipertermia transitoria, la recuperación suele ser posible y relativamente rápida.

10. DISLALIA.

Se entiende por dislalias el defecto de pronunciación que no obedece a patología

central; las dislalias son normales en periodos de organización del lenguaje, a los 2

o 3 años y más pero su persistencia se debe a:

a) Dislalias orgánicas o anatómicas:

Causadas por una anomalía del aparato fonador, por ejemplo:

fisura palatina.

labio leporino.

frenillo lingual.

defectos de la estructura ósea de los maxilares, etc.

b) Dislalias funcionales:

Generadas por una dificultad del tipo respiratorio, es el sujeto respirador bucal, que

posterior a la intervención quirúrgica de sus adenoides mantiene el hábito

pernicioso.

El niño en estas condiciones para poder realizar el proceso de respiración rompe el

equilibrio bucal compuesto por las presiones que desarrollan la lengua y los labios

sobre las piezas dentarias, desplazándose estas en forma descontroladas,

desvirtuandose la articulación correcta de cada fonema.

c) Dislalias audiógenas:

Motivadas por un déficit auditivo leve, por esto el niño no oye determinados

sonidos o los oye distorsionados, por lo tanto los reproducirá tal cual los percibe.

d) Dislalias por alteración en el proceso de aprendizaje:

Determinadas por:

causas ambientales: es la imitación consciente o inconsciente de personas

que lo rodean o frecuentan. Es el caso de los niños que por su criterio mal

entendido de trato cariñoso, se les habla imitando su propia pronunciación,

por lo tanto hay una modificación del proceso de aprendizaje, porque hay un

reforzamiento de los fonemas incorrectos.

causas psicológicas: traumas emocionales...

causas intelectuales: es el caso del oligofrénico leve, cuyas dislalias son por

fallas profundas en la capacidad de trabajo cerebral que compromete toda la

actividad del niño.

e) Dislalias simples o de evolución:

Estaríamos ante ello cuando no encontramos ningún antecedente patológico, el

estudio neurológico no arroja signo de inmadurez y los estudios complementarios

dan un cociente intelectual normal, la percepción, el esquema corporal, la

orientación espacial y el nivel de lenguaje son de acuerdo a la edad del niño. Puede

suceder que un retardo leve en la maduración del habla haya ocasionado patrones

articulatorios incorrectos, que el niño le resulta difícil superarlos sin una

reeducación.

11. DISARTRIA.

A diferencia de las dislalias, las disartrías no están condicionadas por dificultades

articulatorias de los órganos fonadores, sino por anomalías de coordinación

nerviosa sobre los órganos.

Las disartrías son propias de los niños que padecen algún trastorno neurológico de

orden más generalizado (son frecuentes en las parálisis cerebrales). En una persona

con disartria, un trastorno nervioso, cerebral o muscular dificulta el uso o control de

los músculos de la boca, la lengua, la laringe o las cuerdas vocales, los cuales

producen el habla.

Los músculos pueden estar débiles o completamente paralizados o puede ser difícil

que trabajen juntos.

Dependiendo de su causa, la disartria se puede desarrollar de manera lenta u ocurrir

repentinamente.

Las personas con disartria tienen problemas para producir ciertos sonidos o

palabras.

QUIÉNES SON LOS NIÑOS Y NIÑAS CON DISARTRIAS?

Suelen ser niños y niñas de aspecto distraído, desinteresados, tímidos, agresivos y

con escaso rendimiento escolar que, en muchas ocasiones, creen hablar bien, sin

darse cuenta de sus errores, y en otras, aunque sean conscientes de ellos, son

incapaces por sí solos de superarlos. Los síntomas específicos son la sustitución,

omisión, inserción y distorsión de los fonemas.

o Sustitución: es el error de articulación por el cual un sonido es reemplazado por

otro. El niño no puede realizar una articulación y la suple por otra más fácil o, de

entrada, percibe mal el sonido y lo reproduce tal como el lo discrimina (como lo

emite). Es el error más frecuente dentro de las disartrias funcionales y el que

presenta más dificultades para su corrección. Las formas más frecuentes son la

sustitución de r por d o por g, de s por z y del sonido k por t.

o Omisión: se omite el fonema (p. ej. "iño" por niño) o toda la sílaba en que se

encuentra dicho fonema (p. ej. "loj" por reloj).

o Inserción: se intercala un sonido que no corresponde a esa palabra para apoyar y

resolver la articulación del dificultoso (por ej. "Enerique" por Enrique).

o Distorsión: Se articula el sonido de forma incorrecta pero aproximada a la

adecuada y sin llegar a ser una sustitución.

CLASIFICACIÓN DE LAS DISARTRIAS.

Las lesiones producidas en el SNC pueden localizarse en distintos puntos, en función de

los cuales estableceremos diferentes tipos de disartrias. Así, podemos diferenciar:

Su lenguaje es mal pronunciado (como enredado) y el ritmo o velocidad de su habla

cambia. Otros síntomas abarcan:

Sonar como si estuviera murmurando

Hablar suavemente o en un susurro

Hablar con voz nasal o congestionada, ronca, forzada o velada

Una persona con disartria también puede babear y tener problemas para masticar o

deglutir y le puede costar trabajo mover los labios, la lengua o la mandíbula.

El tratamiento de la disartria se dirige a la causa subyacente siempre que sea

posible, lo que puede mejorar el habla. La terapia del habla a menudo ayuda a las

personas con disartria mejorar el habla. Si disartria es causada por los

medicamentos recetados, cambiar o suspender los medicamentos pueden ayudar.

http://www.apepalen.cyl.com/diversidad/diver/logope/habla/disartria.htm

12. ECOLALIA.

La ecolalia tiene lugar cuando la emisión de otra persona o del propio sujeto es

repetida parcial o totalmente, inmediatamente o después de pasado un tiempo de la

emisión original. En todo caso, hay una imitación selectiva, ya que el niño sólo

repite lo que aún no entiende "pero está a punto de comprender". Asimismo, se

observan repeticiones de frases, estructuras de un nivel de complejidad muy

superior a la competencia lingüística del sujeto.

Los autistas son capaces de producir emisiones ecolálicas con una longitud

significativamente mayor que sus propias emisiones espontáneas e incluso en

algunos casos con mayor precisión articulatoria.

Tipos de ecolalia

A continuación presentamos una clasificación de los ecos en base a cuatro criterios.

Criterio temporal: Tiempo transcurrido entre la emisión original y el eco. Basándonos en

este criterio podemos distinguir:

Ecolalia inmediata: Repetición de emisiones que acaban de ser producidas.

Ecolalia demorada: Repetición de emisiones después de pasado un tiempo

(minutos, horas, semanas).

Criterio estructural: Resulta de la comparación de la forma del eco con la

forma de la emisión original.

Eco exacto: El modelo original y el eco son completamente iguales.

Eco reducido: Repite parte de la emisión original (generalmente la última parte)

de forma exacta.

Eco ampliado: El niño introduce alguna modificación pero no cambia la

estructura de la emisión. Por ejemplo emisión original: "¿Quieres un donuts?".

Eco: "¿Quieres el donuts?".

Eco mitigado o expandido: Tiene lugar cuando se introducen modificaciones

en la frase modelo que indican la existencia de cierta competencia, ciertas

estrategias creativas de modificación y reordenación de estructuras,

El tratamiento se dirige a que el sujeto aprenda a discriminar en qué situaciones

debe emplearla, esto es, poner la ecolalia inmediata bajo control de estímulos

discriminativos específicos.

Es necesario enseñar al paciente para que diferencie qué segmentos del discurso del

interlocutor no debe repetir (por ejemplo, consignas, preguntas) y segmentos que sí

debe repetir (modelos).