periferias. diseños imperiales

Upload: camilo-bermudez

Post on 09-Jan-2016

214 views

Category:

Documents


0 download

DESCRIPTION

Daños imperiales sobre México, de Jhon Saxe Fernandez

TRANSCRIPT

  • DISEOS IMPERIALES SOBRE MXICO Y AMRICA LATINA*

    John Saxe-Fernndez**

    1. Preliminares

    0p[LFRYLYHPRPHQWRVGHDOWRULHVJRSDUDVXLQFLSLHQWHGHPRFUDFLDy su existencia como Estado-nacin. Cuando arrecian recesin, desem-SOHR\DTXHDQORVDOOHUHVTXHVRVWLHQHQODHFRQRPtDSRUODFDtGDGHORVprecios del petrleo, de las remesas, el turismo y las exportaciones, junto con altos ndices de desempleo, fugas de capitales y especulacin con la DEUXSWDGHYDOXDFLyQGHOSHVRODVLPSUXGHQWHV\GHVDWLQDGDVSROtWLFDVHFR-nmicas neoliberales y de seguridad del calderonismo colocan al pas en VHULRSUHGLFDPHQWR6HSULYDWL]D\H[WUDQMHUL]DODUHQWDSHWUROHUDSRUPHGLRde una reforma energtica inspirada en sus ejes centrales por el mismo recetario del Banco Mundial aplicado en Brasil, extraamente aplaudido

    * Trabajo presentado a las Jornadas Bolivarianas, Instituto de Estudios Latino-Americanos8QLYHUVLGDGGH6WD&DWDULQD)ORULDQySROLV%UDVLO$EULO

    &DWHGUiWLFRGHOD81$03ULPHU3UHPLR1DFLRQDOGH3HULRGLVPRHQDQiOLVLVLQWHU-nacional otorgado por el Club de Periodistas de Mxico (2008); en 2004 testigo en el juicio del BRussels Tribunal por los crmenes de guerra del gobierno Bush/Cheney contra la poblacin de Irak.

    Perif 17pimprenta.indd 64-65 18/07/2009 22:00:02

  • 66 PERIFERIAS N 17 JUNIO 2009 67

    por sectores progresistas: endosan una legalidad indefendible que, con gimnasia lingstica, rompe con la norma constitucional y abre de par en par las puertas al contratismo desenfrenado y al sometimiento GHYLUWXDOPHQWHWRGDODDFWLYLGDGVXVWDQWLYDGH3(0(;DHPSUHVDVWLSRHalliburton y Schlumberger. Ello mientras se aplican medidas proccli-cas, incrementando precios de combustibles esenciales como el diesel e impuestos que afectan a pequeas y medianas empresas, mientras se DUUHPHWHFRQWUDHOVDODULRFRQXQDLQXVLWDGDH[LELOL]DFLyQODERUDOTXHHOLPLQDGHUHFKRVIXQGDPHQWDOHVHQORVFRQWUDWRVFROHFWLYRV/DDJULFXOWXUDpermanece plagada de programas asistencialistas y electoreros dominados SRUFOLHQWHODVSDQLVWDV&RQORVGHUHFKRV ODERUDOHVPiVHOHPHQWDOHVHQULHVJR\XQSHUVLVWHQWHDWDTXHDODSDUDWRSURGXFWLYRQDFLRQDOHQXQHVTXH-ma que, gracias al Tratado de Libre Comercio de la Amrica del Norte, QRVOOHYDDLPSRUWDUELHQHVHVHQFLDOHVDODFDQDVWDEiVLFDIULMROHVPDt]FDUQHOiFWHRV0p[LFRDQXDOPHQWHH[SXOVDDPLOPH[LFDQRVGHVXHVSDFLRQDFLRQDO&RQODYiOYXODFHUUiQGRVHSRUHOFRODSVRGHOHPSOHRHQ((88DUDt]GHODPHJDFULVLVDGLDULRDXPHQWDODYLROHQFLD\HOULHVJRde explosin social, en especial en la frontera norte.

    2. Diseos Imperiales

    Mientras los diseos castrenses y de seguridad estadounidense sobre Mxico, centrados como en el caso de Irak y Venezuela en un ambicioso SURJUDPDGHHVWDELOL]DFLyQ\UHFRQVWUXFFLyQYHUDGHODQWHDYDQ]DQSRUPHGLRGHODPLOLWDUL]DFLyQGHODFDPSDxDFRQWUDQDUFRWUiFR\FUL-men organizado: un esquema ya aplicado por Washington a Colombia y adoptado por Caldern que, como esperaban sus gestores, se hunde en un bao de sangre, debilita la funcin de defensa nacional y gesta una debacle de derechos humanos. Sacar al Ejrcito Mexicano de los cuarteles \HQYLDUORDODVFLXGDGHVGHWRGDODUHS~EOLFDXQDPHGLGDSODQWHDGDDOinicio mismo de la gestin de Caldern por sugerencias de consejeros de seguridad estadounidenses, lejos de solucionar los problemas planteados SRUHOQDUFRWUiFRORVFRPSOLFD\FRORFDDOSDtVEDMRFUHFLHQWHYXOQHUD-

    bilidad ante las ambiciones geoestratgicas de EEUU. Estas son tareas TXHSRUPDQGDWRH[SUHVRFRQVWLWXFLRQDOVRQH[FOXVLYDVGHHQWHVFLYLOHVSe trata de medidas alentadas por la Casa Blanca de Bush y continuadas SRUHOJRELHUQRGH2EDPD\HO(MHFXWLYRPH[LFDQR

    En medio del torbellino y apremio gestados al calor de esquemas im-pulsados por el mismo Departamento de Defensa de EEUU (DdD) en lo militar, y el Banco Mundial (BM) y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) en lo econmico, el almirante Michael Mullen, Jefe del Estado Mayor &RQMXQWRGH((88HQODSULPHUDYLVLWDRFLDOGHXQ-HIHGH(VWDGR0D\RUregistrada en la historia bilateral, realizada a principios de Marzo 2009, ex-pres tener conciencia del xito del plan de juego para poner de rodillas al pas: tienen una necesidad urgente. Todos tenemos una sensacin de XUJHQFLDVREUHHVWR$VtTXHWRGRVYDPRVDHPSXMDUGXURSDUDHQWUHJDUHVDFDSDFLGDGWDQUiSLGDPHQWHFRPRVHDSRVLEOH1. Las capacidades a las que VHUHHUH0XOOHQVRQODVGHFRQWUDLQVXUJHQFLDGHXWLOLGDGDODROLJDUTXtDmexicana ante las reacciones sociales por el acelerado deterioro econmico, pero tambin de gran inters para la geopoltica estadounidense en Amrica /DWLQD\HO&DULEH0XOOHQGLRDYLVRDODRSLQLyQS~EOLFDPH[LFDQDGHTXHODVIXHU]DVDUPDGDVDVXFDUJRHVWiQOLVWDVSDUDD\XGDUD0p[LFRHQVXguerra contra el narco con tcticas de contrainsurgencia como las emplea-das contra los rebeldes de Irak y Afganistn.2 La declaracin es ominosa. Anuncia la ocupacin militar, con operaciones de inteligencia y patrullajes WHUUHVWUHVDpUHRV\QDYDOHVFRQMXQWRVEDMRHVTXHPDVGHHVWDELOL]DFLyQ\UHFRQVWUXFFLyQXWLOL]DGRVSRUHO3HQWiJRQRHQ,UDN\$IJDQLVWiQFRPRORDQWLFLSyODRFLQDHQFDUJDGDGHODFRRUGLQDFLyQLQWHUGHSDUWDPHQWDO\GHlas agencias de inteligencia en 2004, entonces a cargo de Carlos Pascual. Cabe mencionar que en esas naciones EEUU no enfrenta a rebeldes sino a los pueblos organizados como resistencia armada ante una atroz petro-guerra y ocupacin militar en la que se emplean todos los instrumentos de DOWDWHFQRORJtDGLVSRQLEOHVH[WHQGLpQGRVHD3DTXLVWiQGRQGHHQODVSULPHUDV

    1 6WDII5HIRUPD2IUHFH((88WiFWLFDVGHFRQWUDLQVXUJHQFLDReforma, 7 de Marzo, 2009, p 7.

    2 Ibdem.

    Perif 17pimprenta.indd 66-67 18/07/2009 22:00:02

  • 68 PERIFERIAS N 17 JUNIO 2009 69

    VHPDQDVGH\DFRQ2EDPDHQOD2FLQD2YDOFRQWLQ~DQSHUSHWUiQ-GRVHDWDTXHVDODSREODFLyQFLYLOGHVGHDYLRQHVQRWULSXODGRV(Q0p[LFRnacin como Irak, Venezuela y Brasil con petrleo y gas, la planeacin del 3HQWiJRQRLQFOX\HLJXDOTXHHQ&RORPELDXQDSROtWLFDTXHQRDWDFDODVUDtFHVQLORVSLODUHVGHODFULPLQDOLGDG\HOQDUFRWUiFRRORVGHMDLQWDFWRVRORVDFLFDWHD(VRVtORVXWLOL]DFRPRH[FXVDSDUDLQWHUYHQLUHQWLHUUDDLUHy mar, junto al despliegue de bases, esquemas portuarios y empresariales de dominio econmico/territorial sobre recursos humanos y naturales. En 0p[LFRWDPELpQHO3HQWiJRQRVHFRPSURPHWLyFRQVXVFRQWUDSDUWHVa combatir al crimen organizado mediante el impulso de tecnologas como VLVWHPDVGHGHWHFFLyQ\DOHUWDWHPSUDQDHQYXHORVHPEDUFDFLRQHV\UXWDVWHUUHVWUHVSURYHQLHQWHVGH&HQWUR\6XGDPpULFDHQIDWL]iQGRVHODGHFLVLyQGHO'G'SDUDSURYHHUPiVD\XGDHQLQWHOLJHQFLDYLJLODQFLD\UHFRQRFLPLHQWRHQODIRUPDGHDYLRQHVHVStDVQRWULSXODGRV3

    &RQVHMRVQRHVFXFKDGRV

    Ante los riesgos de usar al Ejrcito Mexicano como eje de la lucha FRQWUDFULPHQRUJDQL]DGRWHUURULVPR\QDUFRWUiFR'RPLQLTXHGH9L-OOHSLQH[SULPHUPLQLVWURGH)UDQFLDFRQVLGHUyQHFHVDULRDGYHUWLUD/RVPinos en 2008, en una conferencia magistral en la sede del PAN, que en esa campaa la militarizacin no tiene que ser el elemento central () ya que tiene consecuencias e insisti en la importancia de poner adelante ORVHOHPHQWRVGHLQWHOLJHQFLD\QDQFLHURVHFRQyPLFRV\WRGRORTXHHVestrategia de seguridad y militar que tiene que acompaar. Para Edgardo Buscaglia, del ITAM4, asesor de la ONU y especialista en estos temas, ODYLROHQFLDGHVDWDGD5UHYHODTXHODSROtWLFDGHHQIUHQWDUODGHOLQFXHQFLD

    3 Ibdem.4 Profesor de Derecho del ITAM: Instituto Tecnolgico Autnomo de Mxico, ente XQLYHUVLWDULRSULYDGR

    5 (QODVPXHUWHVYLROHQWDVYLQFXODGDVDODFDPSDxDDQWLQDUFRSDVDURQGHPiVTXHODVEDMDVUHJLVWUDGDVHVHDxRHQ,UDN

    RUJDQL]DGDQRHVODFRUUHFWD\DTXHSULYLOHJLDODPLOLWDUL]DFLyQ\QRDWLHQGHODVFDXVDVTXHRULJLQDQHOFULPHQ\HOQDUFRWUiFR(OUHVXOWD-GRGLMR%XVFDJOLDKDFHXQDxRHVWiDODYLVWD\SXHGHUHFUXGHFHUVHVLno se replantea el camino, si no se trata de desmantelar la red en que se VRVWLHQHQORVJUXSRVFULPLQDOHVHQYH]GHPLOLWDUL]DUGHDWDFDUORVFRQHIHFWLYRV\EXVFDUVXHQFDUFHODPLHQWRFRPRRFXUULyHQ&RORPELD'LHJRValadz, del IIJ la UNAM6DGYLHUWHGHODLQFRQVWLWXFLRQDOLGDGGHHVWDmilitarizacin, a lo que se agregan los peligros por los desequilibrios FtYLFRPLOLWDUHVLQGXFLGRVHQ0p[LFRFX\RVHIHFWRVSROtWLFRVHQ((88Obama y Clinton deben ponderar.$GYHUWHQFLDVWRGDVGHLQQHJDEOHXUJHQFLDSHURGHVRtGDVSRU&DOGH-

    rn quien, sin nocin de la razn de Estado, coloca al pas en situacin YXOQHUDEOHDQWHXQDHYHQWXDOLQWHUYHQFLyQGHO3HQWiJRQR$GHPiVGHmanera temeraria, en medio de una de las crisis econmicas mundiales PiVVHYHUDVGHODHUDPRGHUQDDSOLFDSROtWLFDVHFRQyPLFDVUHFHVLYDVanti-populares y entreguistas en materia petrolera, alimentando las tensio-QHVGHFODVH\HOFDOGRGHFXOWLYRGHORVPDOHVTXHGLFHFRPEDWLU0LHQWUDV0p[LFRHVWDOOD&DOGHUyQORVLUYHD:DVKLQJWRQHQFKDURODGHSODWD

    3ODQGH-XHJR\2FXSDFLyQ

    Cuatro son los pilares de los juegos geoestratgicos propiciados por el aparato de seguridad de EEUU en Mxico: armas, droga, negocio y caos, operando bajo un esquema de dominio colonial-imperial conocido bajo la rbrica de estabilizacin y reconstruccin. El trmino juegos HVHQJDxRVR1RVRQWUDYHVXUDVHVSRQWiQHDVVLQRVDQJULHQWRVHVTXHPDVHQFDPLQDGRVDHOLPLQDUGHO%UDYRDOD3DWDJRQLDREVWiFXORVMXULVGLF-cionales al dominio hegemnico y empresarial de EEUU sobre naciones con recursos humanos y naturales estratgicos. Mxico y Colombia son los

    6 ,,-,QVWLWXWRGH,QYHVWLJDFLRQHV-XUtGLFDVGHOD8QLYHUVLGDG1DFLRQDO$XWyQRPDGHMxico (UNAM).

    Perif 17pimprenta.indd 68-69 18/07/2009 22:00:02

  • 70 PERIFERIAS N 17 JUNIO 2009 71

    FDPSRVGHSUXHEDSDUDLPSXOVDUODGRFWULQDGHODVIURQWHUDVH[LEOHVcomo ya lo experiment Ecuador en Sucumbios el ao pasado. (OPDQHMRTXHKDFHHODSDUDWRGHVHJXULGDGGH((88GHODGLQiPLFD

    entre armas, negocio y drogas es central en la promocin del caos y la LQHVWDELOLGDGHQGLFKRVSDtVHVORTXHHVEDVH\H[FXVDSDUDODLQWHUYHQFLyQy ocupacin militar. Son realmente espectaculares y muy preocupantes ORVGDWRVRIUHFLGRVSRULQVWDQFLDVRFLDOHVGHOJRELHUQRPH[LFDQRVREUHODFDXGDLQDJRWDEOHGHDUPDPHQWRGHJUDQFDOLEUHYROXPHQ\DOWDWHFQR-ORJtDTXHEDMRODVQDULFHVVLQRHVTXHFRQODYHQLDGHODVDXWRULGDGHVGH((88VHHQYtDD0p[LFRVHKDQDVHJXUDGRPLODUPDVGHQXHYDWHFQRORJtDGHXVRH[FOXVLYRPLOLWDUFRPRODQ]DJUDQDGDV0*/FDOLEUHy 40 mm; fusiles Barret 50; sub ametralladoras y pistolas belgas impor-WDGDVSRU((88\HQYLDGDVGHPDQHUDH[SHGLWDD0p[LFRDUPDPHQWRGLVHxDGRSDUDSHQHWUDUYHKtFXORVEOLQGDGRVFRKHWHVDQWLWDQTXHV0\At4; lanzacohetes; granadas de fragmentacin como las usadas contra la SREODFLyQHQ0RUHOLDHOGH6HSWLHPEUHGHXQRSHUDWLYRXWLOL]DGRSDUDHOODQ]DPLHQWRGHOD,QLFLDWLYD0pULGD(VHDUPDPHQWRDGTXLULGRGHGLVWULEXLGRUHV\HQODVPLVPDVIiEUL-

    FDVSRUORVFiUWHOHVPH[LFDQRVHQ((88SRUVXYROXPHQLPSRVLEOHde escapar deteccin), alto calibre, junto con un probable despliegue de mercenarios7 y/o fuerzas especiales bajo cubierta, seran ingredientes FHQWUDOHVGHORVHVTXHPDVGHDPSOLDFLyQPLOLWDUSRUODYtDGHXQSUR-grama de estabilizacin y reconstruccin del Departamento de Defensa (DdD) en curso en Mxico, montados en el enorme trauma humano que abarrota las morgues del pas, en que se transform la militarizacin de la guerra contra el narco con que dio inicio un sexenio hurfano de le-JLWLPLGDGGHVSXpVGHODFXHVWLRQDGDHOHFFLyQGHWRGDYtDODVFLIUDVcon que sali electo Caldern no cuadran8.

    El escenario es deplorable: Mexicanos aniquilando mexicanos mientras EEUU, su aparato de seguridad y sistema bancario, sacan jugo

    7 0HUHHURDLQGLYLGXRVRHPSUHVDVGHVHJXULGDGHVWDGRXQLGHQVHVPDQHMDGRVSRUH[RFLDOHVGHOD&,$RHO3HQWiJRQR

    8 Como lo muestra Crespo, Jos Antonio, Las Actas Hablan, Mxico, Debate, 2008.

    FRQODGLQiPLFDHQWUHHOWUiFR\FRQVXPRVLQFRQWUROGHGURJDVDOOi\ODYHQWDGHDUPDVDTXt$OQRUWHORVGyODUHVDOVXUODVEDODV\ODVSLODVGHFDGiYHUHV7RGRFRQJUDYHV ULHVJRVSDUD ODVREHUDQtDH LQWHJULGDGWHUULWRULDOGHOSDtV\VXVYDVWRVUHFXUVRVQDWXUDOHV(VXQDGLQiPLFDHQODque los organismos de espionaje de EEUU y su DdD, ahora bajo Robert Gates, ex director de la CIA, juegan un papel primordial: la interrelacin FRQ\SURWHFFLyQGHORVQHJRFLRVPXQGLDOHVGHOQDUFR\HOWUiFRGHDUPDVTXHGDURQLOXVWUDGRVHQHOHVFiQGDOR,UiQFRQWUDVXQRSHUDWLYRVHFUHWRGHOD&,$SDUDQDQFLDUODJXHUUDGH5HDJDQFRQWUDODUHYROXFLyQVDQGLQLVWDXVDQGRGLQHURGHOWUiFRLOHJDOGHDUPDVD,UiQ6HJ~Q0LFKHO&KRVVXGRYVN\*DWHVHVWiLPSOLFDGRHQHO,UiQFRQWUD9 y hoy las fuerzas GHRFXSDFLyQHQ$IJDQLVWiQDSR\DQHOQDUFRWUiFRTXHSURGXFHFHUFDde 200 mil millones de dlares en ingresos para el crimen organizado, ODVDJHQFLDVGHLQWHOLJHQFLDHLQVWLWXFLRQHVQDQFLHUDVRFFLGHQWDOHV.10 $GHPiV VH KDGRFXPHQWDGRTXH OD&,$ MXJyXQSDSHO FHQWUDO HQ HOGHVDUUROORGH ORV WULiQJXORVGH ODGURJD ODWLQRDPHULFDQRV\DVLiWLFRVEstos fabulosos negocios y arreglos siguen bajo la proteccin de los VHUYLFLRVGHLQWHOLJHQFLDGH((88LQGLFDQGRVXYLJHQFLDEDMRHOQXHYRJRELHUQRGHPyFUDWDORTXHDGHPiVRIUHFHXQDEDVHSDUDODLQWHUSUHWD-cin adecuada de un documento del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas cuyo eje es el caos en Mxico, ante el cual EEUU estara obligado a dar una respuesta dadas las consecuencias para su seguridad interna. Lo que no se menciona es el papel de EEUU en la gnesis del caos inducido por medio del binomio fatal: el Consenso de Washington y el trinomio armas-negocio-drogas.

    9 &KRVVXGRYVN\0LFKHO&RQWLQXLVPR1HRFRQVHUYDGRUHQHO3HQWiJRQRVoces del Periodista, N. 206, 16-31 de Marzo 2009, Mxico D.F., p. 20-21. Trabajos del autor disponibles en www.globalresearch.ca

    10 &KRVVXGRYVN\0LFKHO/DV)XHU]DVGH2FXSDFLyQDSR\DQHOQDUFRWUiFRDIJDQRVoces del Periodista, N. 206, 16-31 de Marzo de 2009, Mxico D.F., p. 12-13.

    Perif 17pimprenta.indd 70-71 18/07/2009 22:00:02

  • 72 PERIFERIAS N 17 JUNIO 2009 73

    ((88\ODJpQHVLVGHOFDRV

    Lo planteado hasta aqu se comprende mejor si se tiene presente que desde hace aos las concepciones del Departamento de Defensa (DdD) de EEUU sobre los problemas primarios de seguridad nacional HQ0p[LFRHO&DULEH\$PpULFD/DWLQDVHFHQWUDQGHPDQHUDH[FOXVLYDe interesada en los efectos y no en las causas de la inestabilidad. No es por miopa conceptual. Tampoco es asunto menor si se recuerda que cuando sus docentes del Colegio de Guerra de esa nacin han sealado que los programas de ajuste estructural del consenso de Washington, (auspiciados por el Comander-in-Chief desde el BM, el BID y el FMI) estn en la raz del problema de seguridad nacional en Mxico, se les margina y hasta se les castiga con el cese fulminante de sus cargos.11

    Y es que su desacato no fue menor: desarticulan y desautorizan ODV SUHPLVDV GH ODV KLSyWHVLV \ MXVWLFDFLRQHV SDUD ODV RSHUDFLRQHVFODQGHVWLQDV\RGHLQWHUYHQFLyQ\RFXSDFLyQPLOLWDUPLJUDFLyQLOHJDOQDUFRWUiFR\FULPLQDOLGDG(ODVXQWRFREUDWUDVFHQGHQFLDFXDQGRQRVHQWHUDPRVJUDFLDVDGDWRV\DQiOLVLVRIUHFLGRVSRU-RUJH/XtV6LHUUDTXHHQODVKLSyWHVLVGHJXHUUDGHO3HQWiJRQRHQ0p[LFRVHSUHYpQDFFLRQHVmilitares ante la posibilidad de que en los prximos 25 aos el Estado mexicano se derrumbe, como resultado del embate prolongado y cada YH]PiVLQWHQVRGHOQDUFRWUiFR12 Se indica que los escenarios del Co-mando de Fuerzas Conjuntas del Departamento de Defensa (DD) ubican a Mxico en el contexto mundial de los estados dbiles, cuyo fracaso puede presentar desafos muy seriosDORVSODQLFDGRUHVHVWUDWpJLFRV\operacionales de la fuerza militar de EEUU .13 6HSUHVHQWDQDVtDPHQD]DVJUDYHVDODMXULVGLFFLyQHLQWHJULGDGWHUUL-

    WRULDOPH[LFDQD\DTXHHO''XWLOL]DHVWRVDUJXPHQWRVSDUDSODQLFDUHOXVRGHVXIXHU]DHQODVVLJXLHQWHVGpFDGDVORTXHKDUtDHYLGHQWHque

    11 El despido del Dr. Donald Schultz, especialista en asuntos de seguridad nacional en $PpULFD/DWLQDHVXQFDVRSDUDGLJPiWLFR

    12 El Universal, 24-I-09.13 Ibdem.

    la intervencin militar debe estar considerada dentro de los escenarios posibles en la relacin EEUU-Mxico.14(QWRGRHVWRORTXHPiVOODPDODatencin es el silencio del Pentgono sobre el papel tan activo de EEUU en el auspicio de las condiciones bsicas de esos juegos de guerra en los ltimos 26 aos, al impulsar desde el FMI-BM-BID el retiro del Esta-do mexicano de sectores estratgicos, desregulando y desnacionalizando bancos, ferrocarriles, petrleo, electricidad, infraestructura, agricultura, DJXDELRGLYHUVLGDGUHVHUYDPLQHUDOHWF\SURSLFLDQGRHOGHVHTXLOLEULRsocio-poltico por medio de la rigurosa aplicacin (con el concurso de sus empleados en Los Pinos, Hacienda y Economa) de un guin basado en una GUiVWLFDUHGXFFLyQGHOJDVWRS~EOLFRODDQXODFLyQGHVXEVLGLRVDOFDPSRa los alimentos, al transporte para los sectores populares; la promocin de GHVSLGRVPDVLYRVGHEXUyFUDWDVWpFQLFRV\WUDEDMDGRUHVGHODVHPSUHVDVSULYDWL]DGDVODGHVUHJXODFLyQHQEHQHFLRGHEDQTXHURV\FRPHUFLDQWHVODHOLPLQDFLyQGHOtPLWHVDJDQDQFLDV\DOFDSLWDOHVSHFXODWLYRODVXSUHVLyQGHOFRQWUROGHSUHFLRVGHYDVWDQGRPiVHOLQJUHVRIDPLOLDUFRQORVWRSHVVDODULDOHVODSURPRFLyQGHODDSHUWXUDWRWDOHLQGLVFULPLQDGDDODLQYHUVLyQH[WUDQMHUD\DODVPHUFDQFtDV\FDSLWDOHVGHOH[WHULRUVRFDYDQGRHPSOHR\DSDUDWRSURGXFWLYRHODXVSLFLRGHORVLQYHUVLRQLVWDVIRUiQHRVFRPRSLHGUDDQJXODUGHOPRGHORLQVWDXUDQGRXQDSROtWLFDFDPELDULDPX\H[LEOHTXHpermite la entrada y salida irrestricta de capitales nacionales y extranjeros, es decir, con libertad para saquear a un pas si en otro hay mayor segu-ridad o mayores tasas de ganancia.15 Hasta fechas recientes EEUU y sus FRPSDUVDVORFDOHVFRQVLGHUDQEiVLFDODOLEUHRSRUWXQLGDGSDUDHVSHFXODUHQEROVDVGHYDORUHV\SDUDtVRVVFDOHVGRQGHVHEXUVDWLOL]DQ\UHPDWDQQXHVWURVDFWLYRVHVWUDWpJLFRV

    Tal es el recetario (Consenso de Washington) que auspicia la infor-PDOLGDGHFRQyPLFDODFULPLQDOLGDG\HOQDUFRWUiFR(O3HQWiJRQRVDEHTXHHOHVWDOOLGRVRFLDOHVWiHQFXUVR\HVGHODUJRDOFDQFHVLQFDPELRGHrumbo siguen balcanizacin e incautacin del pas.

    14 Ibdem.15 Ortiz Wadgymar, Arturo, Poltica Econmica de Mxico, 1982-1995, Mxico, Nuestro

    Tiempo, 1994.

    Perif 17pimprenta.indd 72-73 18/07/2009 22:00:02

  • 74 PERIFERIAS N 17 JUNIO 2009 75

    (O3URFRQVXODGR\ODQXHYDHVWUDWHJLDJOREDOGHVHJXULGDG

    /DVVHQDGRUDV

  • 76 PERIFERIAS N 17 JUNIO 2009 77

    (QYDULRVFRPHQWDULVWDVHQWUHHOORV1DRPL.OHLQHQThe Na-tion22\'DYLG,JQDWLXVGHOWashington Post23, alertaron al pblico sobre ODSRFROODPDWLYDRFLQDUHFLpQHVWDEOHFLGDHQHO'HSDUWDPHQWRGH(VWDGRbajo Pascual quien, en una reunin del Centro de Estudios Internacionales y Estratgicos, haba delineado la combinacin de esquemas permanen-tes de estabilizacin y reconstruccin, es decir, de de-construccin SUHYHQWLYDXWLOL]DQGRODSUR\HFFLyQPi[LPDGHSRGHUDpUHR\QDYDOFRQWUDODSREODFLyQHLQIUDHVWUXFWXUD\GHUHFRQVWUXFFLyQSUHYHQWLYDpreparando paquetes econmicos de outsourcing DWRGRQLYHO24DIDYRUGHGHFHQDVGHPLOHVGHUPDVFRQWUDWLVWDVGHVGHODVPiVJUDQGHV%HFKWHO([[RQ0RELO*HQHUDO'\QDPLFV%RHLQJHWFLQFOX\HQGRODVGHVHUYL-cios mltiples tipo Halliburton, hasta las de seguridad, electricidad, agua, etc. Pascual tambin inform que trabajaba en cooperacin estrecha con el Consejo de Inteligencia Nacional para elaborar listas de pases de alto ULHVJRFRQHOQGHHVWDEOHFHUHTXLSRVGHUHVSXHVWDUiSLGDSDUDGDULQLFLRDODSODQHDFLyQSUHEpOLFD\PRELOL]DU\GHVSOHJDUUiSLGDPHQWHXQDYH]LQLFLDGRHOFRQLFWR\SURFHGLGRFRQORVDWDTXHVDODSREODFLyQy la destruccin de la infraestructura rural y urbana. Ya en ese momento estaran los contratos pre-completados para la reconstruccin del pas, que acaba de ser destruido25. Klein indica que Pascual pensaba TXHVXRFLQDWHQtDFRPRPLVLyQQRWDQWRUHFRQVWUXLUFXDOTXLHUHVWDGRYLHMRVLQRFUHDUHOWHMLGRVRFLDOGHHVDVQDFLRQHVLQGXFLpQGRODVKDFLDODGHPRFUDFLD\SROtWLFDVDPLJDEOHVDOPHUFDGR(MHPSOLFDQGRVXVHVTXHPDVGHUHFRQVWUXFFLyQUiSLGD3DVFXDOPHQFLRQyGDULPSXOVRDODYHQWDGHHPSUHVDVHVWDWDOHVTXHFUHDURQXQDHFRQRPtDQRYLDEOH

    22 Klein, Naomi, Disaster Capitalism, 2-V-05. 23 ,JQDWLXV'DYLG$4XLHW7UDQVIRUPDWLRQThe Washington Post, 18-V-05, p. A17.24 6D[H)HUQiQGH]-RKQ,UDNXQG*HZDOWJHVFKlIWHDas Argument, 263, 5-6, December

    2005, pp. 108-116. En Terror e Imperio me he referido extensamente a este proceso que YLQFXODDODVJUDQGHVUPDV\GHFHQDVGHPLOHVGHPHGLDQDV\SHTXHxDVHPSUHVDVFRQODF~SXODJXEHUQDPHQWDO\OHJLVODWLYDSRUPHGLRGHXQYDVWRHMpUFLWRGHFDELOGHURV

    25 Las citas de Pascual son ofrecidas por Klein, op. cit.

    $OJXQDV YHFHV H[SOLFy3DVFXDO OD UHFRQVWUXFFLyQ VLJQLFD KDFHUSHGD]RVORYLHMR264XLHQUHYLVHHOGRFXPHQWRGHO'6%SURQWRSHUFLELUiYHUWLHQWHVXOWUD

    FRQVHUYDGRUDVDUWLFXODGDVSRUDXWRUHV\DQDOLVWDVHQWUHHOORVHOKLVWRULDGRUNiall Ferguson27 y Thomas P.M. Barnett28GHO&ROHJLR1DYDOGH*XHUUDFerguson argumenta que EEUU necesita reconocerse a s mismo como XQJUDQLPSHULRTXHUHTXLHUHDGHPiVGHXQHTXLYDOHQWHPRGHUQRGHODYLHMD2FLQD%ULWiQLFDGH&RORQLDVDQGHJHQHUDUODHVWDELOLGDGSROtWLFDHQXOWUDPDU6HJ~QHODXWRUHODSDUDWRPLOLWDUGH((88HVHFLHQWHHQODrealizacin de operaciones que destruyen a naciones enteras, pero carece GHODKDELOLGDGSDUDDGPLQLVWUDUORTXHVLJXHGHVSXpVGHODGHYDVWDFLyQAl respecto, Ignatius inform desde el Washington Post que aunque nadie en el gobierno de Bush endosaba el lenguaje imperialista de Ferguson, WUDVEDPEDOLQDVHOJRELHUQRHVWiGHEDWLHQGRXQDPSOLRUDQJRGHFDPELRVimportantes en la poltica que se dirigen en tal direccin, transformando a ORVVHUYLFLRVPLOLWDUHVHO'HSDUWDPHQWRGH(VWDGR'(\RWUDVDJHQFLDVen forma tal que ayude a EEUU a mejorar lo que tan torpemente rompi en Irak. No lo llamen RFLQDGHFRORQLDV, pero de muchas maneras se es el modelo para poner en operacin el tipo de fuerza de estabilizacin amplia que los funcionarios estn discutiendo.29 7KRPDV30%DUQHWWSRUVXSDUWHSODQWHDTXHHO3HQWiJRQR'G'

    GHEtD GLYLGLUVH HQ GRV IXHU]DV FRQPLVLRQHV GLIHUHQWHV XQD IXHU]D/HYLDWiQFHQWUDGDHQHOXVRGHSRGHUDpUHR\QDYDOFDSD]GHSXOYHUL-]DUFXDOTXLHURSRVLWRUDORVDSHWLWRV\REMHWLYRVLPSHULDOPRQRSyOLFRV(libre comercio, petrleo, gas, minerales, etc.), y una fuerza de ad-

    26 7H[WXDO7KHRIFHVPDQGDWHLVQRWWRUHEXLOGDQ\ROGVWDWHV\RXVHHEXWWRFUHDWHdemocratic and market-oriented ones. So, for instance his fast acting reconstruc-WRUVPLJKWKHOSVHOORIIVWDWHRZQHGHQWHUSULVHVWKDWFUHDWHGDQRQYLDEOHHFRQRP\Sometimes rebuilding, he explained, means tearing apart the old. Citado en Klein, op. cit.

    27 Ferguson, Niall, Colosus: the price of Americas empire, London, Penguin, 2005.28 Barnett, Thomas P.M., The Pentagons New Map:War and Peace in the Twentieth-

    First Century1HZ

  • 78 PERIFERIAS N 17 JUNIO 2009 79

    ministracin del sistema basada en el Ejrcito y los Marines, encargada GHJDQDU ODEDWDOODGHFLVLYDSDUDestabilizar y reconstruir naciones despus del desate de las hostilidades (shock and awe) y la ocupacin30, que las dejaran aterrorizadas y destrozadas.'RVVRQODVFRQVHFXHQFLDVGHODFFLRQDUGHOD2FLQDGH3DVFXDOa) una ampliacin sin precedentes de las funciones y operaciones

    FDVWUHQVHVKDFLDYLUWXDOPHQWHWRGDODDGPLQLVWUDFLyQGHOJRELHUQRIHGHUDOde EEUU; y b) el establecimiento de un programa de nation building en HOSDtVREMHWLYRque captara dentro de la estructura y presupuesto del gobierno de EEUU las funciones propias a un Estado soberano como Irak o cualquier otro.31 0HUHHURD WDUHDVGHdefensa, relaciones exteriores y economa.

    Irak muestra que la meta no fue la democracia, la reconstruc-cin o la estabilizacin, sino el saqueo de la economa y el control GHVXUHVHUYDSHWUROHUD(O'U/LHYHQGH&DXWHUGHO7ULEXQDO%UXVHODV(BRussels Tribunal)32, ofreci hace poco una sntesis de los resultados del programa de Estabilizacin y Reconstruccin a seis aos de la guerra, ocupacin y contratismo desenfrenado y corrupto en Irak: 1,2 millones ciudadanos muertos; 2.000 doctores muertos; 5.500 acadmicos e intelectuales asesinados o en prisin. Hay 4,7 millones refugiados: 2,7 PLOORQHVGHQWURGH,UDN\GRVPLOORQHVKDQKXLGRDSDtVHVYHFLQRVHQWUH

    30 Washington implanta, con sus tteres locales, el terror de Estado y la tortura genera-OL]DGD*XDQWiQDPRHWF$OUHVSHFWR6D[H)HUQiQGH]-RKQ*XDQWiQDPRXQGLHimperiale Autokratie, Prokla 143 (Zeitschrift fr kritische Sozialwissenschaft), 36, 20 June, 2006, pp. 223-232.

    31 3RUHMHPSORHQPDU]RGHHO3HQWiJRQRDQXQFLyTXHGHVWLQDUtDXQDSDUWLGDFHU-cana a los diez millones de dlares para apoyar al Ejrcito Mexicano a mantener una SUHVHQFLDHQiUHDVGHOWHUULWRULRPH[LFDQRHQTXHHO(VWDGRQRHMHUFHMXULVGLFFLyQ1RHVDOJRQXHYRFRPRORFRPSUREDUiTXLHQUHYLVHODLQWHUYHQFLyQGH:DVKLQJWRQDORODUJRGHOVLJOR;;HQODIRUPDFLyQPDQHMRDGPLQLVWUDWLYR\SUHVXSXHVWDOGHejrcitos y guardias nacionales en la historia latinoamericana. De ah han salido algunos de los grandes carniceros como Somoza y Pinochet.

    32 El BRussels Tribunal se denomina as tanto en homenaje a Bertrand Russell, quien encabez un Tribunal con su nombre para hacer juicio a los crmenes de guerra de EEUU en Vietnam, como por la localizacin del Tribunal en la ciudad de Bruselas. De ah las dos maysculas: BRussells.

    ellos 20.000 doctores en medicina. Segn la Cruz Roja, Irak es un pas GHYLXGDV\KXpUIDQRVGRVPLOORQHVGHYLXGDVFRPRFRQVHFXHQFLDGHODJXHUUDHOHPEDUJR\GHQXHYRODJXHUUD\RFXSDFLyQ\PLOORQHVGHhurfanos, muchos de ellos sin techo (cerca de 500 mil). Casi una tercera parte de los nios iraques sufre de malnutricin. 70 % de las nias ira-TXtHV\DQRDWLHQGHQODHVFXHOD/RVVHUYLFLRVPpGLFRVQRKDFHPXFKRORVmejores de la regin, han colapsado totalmente: 75% del cuerpo mdico ha renunciado, y la mitad de ellos huy del pas, y despus de seis aos GHUHFRQVWUXFFLyQORVVHUYLFLRVVDQLWDULRVGH,UDNFDUHFHQGHOPtQLPRQLYHO$FDXVDGHOXVRGHOXUDQLRGHJUDGDGRXVDGRHQODVPXQLFLRQHVSRUORVRFXSDQWHVHOQ~PHURGHFDVRVGHFiQFHU\DERUWRVVHLQFUHPHQWDGUDPiWLFDPHQWH'HDFXHUGRFRQRWURVLQIRUPHVODVLWXDFLyQGHODPXMHUHVVXPDPHQWHJUDYH1RH[LVWHQORVVXPLQLVWURVPiVHOHPHQWDOHV/Dmayor parte de la poblacin carece de acceso al agua potable y el fun-cionamiento de la electricidad se reduce a tres o seis horas diarias. Todo HVWRHQPHGLRGHJUDQSREUH]DGHVHPSOHR\WHUURUGH(VWDGR$GHPiVGHSULVLRQHVRFLDOHVH[LVWHQSULVLRQHVVHFUHWDV'HDFXHUGRFRQOD2UJDQL]DFLyQGH3ULVLRQHURV3ROtWLFRVGH,UDNPiVGHPLOFLXGD-danos han sufrido detencin desde 2003, entre ellos 6.500 menores y 10.000 mujeres. La tortura se practica a gran escala, mientras cerca del 87% de los detenidos no ha sido acusados. La Corrupcin es inmensa33. Mientras la estabilizacin en Irak se traduce en una tragedia humana de enormes dimensiones, el programa de reconstruccin, monopolizado por +DOOLEXUWRQ%HFKWHO\XQLQPHQVRURVDULRGHUPDVSHTXHxDVPHGLDQDV\JUDQGHVQRKDKHFKRRWUDFRVDTXHRIUHFHUPDJQtFDVRSRUWXQLGDGHVDGHFHQDVGHFRQWUDWLVWDVSDUDUHDOL]DUMXJRVRVQHJRFLRVVLQTXHHOVHUYLFLRde agua, la electricidad, los hospitales o escuelas o la infraestructura de salubridad de Irak hayan mejorado.34

    33 Fuente: [email protected] 3DUDXQDDFODUDFLyQVREUHFyPRVHYLQFXODQODYLROHQFLDHVWDWDOHOWHUURUGH(VWDGRODGLQiPLFDGHOFDSLWDOPRQRSROLVWDHQ((88\ODVJDQDQFLDVYHU6D[H)HUQiQGH]-RKQ0p[LFRXQGLH LPSHULDOH3UlVLGHWVFKDIWGHU86$RSFLW WDPELpQ6D[H)HUQiQGH]-RKQ3UHVLGHQFLD,PSHULDO\&DSLWDO0RQRSROLVWDMundo Siglo XXI, 1R3ULPDYHUD,QVWLWXWR3ROLWpFQLFR1DFLRQDO0p[LFRS

    Perif 17pimprenta.indd 78-79 18/07/2009 22:00:03

  • 80 PERIFERIAS N 17

    7. Coda

    En 2005 Bill Van Auken35 constat que, segn documentos del DdD y del Consejo de Inteligencia Nacional, hoy bajo Dennys Blair, exista XQDOLVWDGHXQRVSDtVHVPDGXURVHLPSRUWDQWHV\TXHOD2FLQDGHPascual tena la responsabilidad de disear los planes detallados para VXLQYDVLyQ\RFXSDFLyQDJUHJDQGRTXHVHPDQWHQtDQHQVHFUHWRODVidentidades de los pases en la lista, pero se supo que se concentra en UHJLRQHVFODYHSURGXFWRUDVGHSHWUyOHRHQ2ULHQWH0HGLROD&XHQFDGHO&iXFDVR\IULFD2FFLGHQWDO(QWRQFHVQRVHVDEtDVLSDtVHVODWLQRDPH-ricanos productores como Mxico o Venezuela estaban incluidos.

    El nombramiento de Pascual como embajador de Obama en Mxico GHVSHMDHVDLQFHUWLGXPEUHHLOXVWUDODFRQWLQXLGDGHQHVWHYLWDODVSHFWRHQWUH%XVK\ HO QXHYRJRELHUQRGHPyFUDWD 3DVFXDO HV HOPHQVDMH DMxico, el Caribe y Amrica Latina.

    35 ZZZDUFKLYXPLQIR

    RENTA AGRARIA, GANANCIA DEL CAPITAL Y RETENCIONES

    Rolando Astarita*

    ,QWURGXFFLyQ

    (OREMHWLYRGHHVWHWUDEDMRHVDQDOL]DUODGLQiPLFDGHODUHQWDDJUD-ria en la zona pampeana, su relacin con la ganancia empresaria, y la incidencia de las retenciones a las exportaciones en la distribucin de la SOXVYDOtDHQWUHODVGLVWLQWDVIUDFFLRQHVGHODFODVHGRPLQDQWH3DUDHVRen primer lugar, se trata la rentabilidad en la zona pampeana, uno de los SXQWRVPiVGHEDWLGRVGXUDQWHHOFRQLFWRHQWUHHO*RELHUQR\HOFDPSR\H[SOLFDPRVODGLQiPLFDGHODUHQWD(QVHJXQGRWpUPLQRVHH[SOLFDODGLQiPLFDGHFUHFLPLHQWRGHODUHQWDDJUDULDHQORV~OWLPRVDxRV(Qtercer lugar, se analizan algunos de los efectos de la suba de las reten-ciones a las exportaciones sobre la renta, las ganancias y los salarios, con un pequeo modelo de pas atrasado tecnolgicamente. En cuarto OXJDUVHSURIXQGL]DHQODGLVFXVLyQVREUHODSROtWLFDGHVXEYHQFLRQHVLQWHUYHQFLyQGHO(VWDGRHQORVPHUFDGRV\ODOH\GHOYDORUWUDEDMR3RUltimo, se presentan algunas conclusiones.

    (FRQRPLVWDDUJHQWLQR'RFHQWHHQOD8QLYHUVLGDG1DFLRQDOGH4XLOPDV\GHOD)DFXOWDGde Ciencias Sociales de la UBA. Autor de numerosos libros.

    Perif 17pimprenta.indd 80-81 18/07/2009 22:00:03