participación de la mujer salasaca en el ámbito comunal...
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UNIVERSIDAD MAYOR DE SAN SIMÓN FACULTAD DE HUMANIDADES Y CIENCIAS DE LA EDUCACIÓN
DEPARTAMENTO DE POST GRADO
PROGRAMA DE FORMACIÓN EN EDUCACIÓN INTERCULTURAL BILINGÜE PARA LOS PAÍSES ANDINOS
PROEIB Andes
“No sé, las mujeres salasacas tenemos miedo a participar” Participación de la mujer salasaca en el ámbito comunal, organización y la educación intercultural bilingüe de Tungurahua.
Carmen Jerez Caisabanda
Tesis presentada a la Universidad Mayor de San Simón, en cumplimiento parcial de los requisitos para la obtención del título de Magíster en Educación Intercultural Bilingüe, con mención en Planificación y Gestión
Asesora: Dra. Inge Sichra
Cochabamba, Bolivia
2001
La presente tesis “No sé, las mujeres salasacas tenemos miedo de
participar”. PARTICIPACIÓN DE LA MUJER SALASACA EN EL ÁMBITO
COMUNAL, ORGANIZACIÓN Y LA EDUCACIÓN INTERCULTURAL BILINGÜE
DE TUNGURAHUA fue aprobada el.........................................................................
Asesor Tribunal
Tribunal Tribunal
Jefe del Departamento del Post Grado Decano
Dedicatoria
A Christian, mi hijo, que con su corta edad se desprendió de sus
seres queridos y su comunidad para acompañarme en esta etapa
de mi vida. A Manuel, mi esposo amado, por sus largos meses
de espera y confianza. A mi madre, la que me trajo al mundo y
me enseñó a luchar. A mi padre y mi hermano ausentes, por sus
sanos consejos sabios. A mis hermanas, hermanos y sobrinos,
tesoros de mi vida.
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Agradecimiento
Un agradecimiento muy especial al Pueblo Salasaca y a la colaboración de muchas
personas (mujeres y hombres), quienes de una manera u otra, hicieron posible para
culminar este trabajo de investigación.
Pero debo mencionar a quienes más directamente me ayudaron en este estudio.
Gracias a la colaboración de las docentes Inés Jerez, Rosario Jerez y Martha
Masaquiza. Así también a los docentes y directores de los centros educativos Inti Ñan,
Manzana Pamba, Ambayata y Casahuala.
Gracias a las personas: Lic. Mirian Masaquiza (FENOCIN), Lic. Alberto Guapisaca
(Director Provincial), Carlos Paucar, Anita Llanga, Zoila Caizabanda y Bernardo
Chango (funcionarios de la DIPEIB-T), Manuel Masaquiza Ch., Salomón Masaquiza y
Francisca Jerez. por su apoyo desinteresado.
Un especial agradecimiento a la Dra. Paloma Bonfil por sus valiosas sugerencias
desde la distancia (México). A David Montoute por su amistad y apoyo.
A mis profesores, los cuales me apoyaron y guiaron dándome luces con sus
conocimientos durante el desarrollo de la maestría. Debo manifestar que el presente
trabajo de investigación es el resumen del interés que despertaron en mí, los
conocimientos adquiridos durante el espacio del importante Programa de Formación
en Educación Intercultural Bilingüe para los Países Andinos (PROEIB Andes) dirigido
por el Dr. Luis Enrique López.
Mi agradecimiento profundo a la señora Asesora asignada para la orientación de este
trabajo, Dra. Inge Sichra, ya que sin su valiosa ayuda, no hubiera podido culminarlo.
Mi reconocimiento especial al Proyecto EBI-GTZ a la persona de la Dra. Annelies
Merkx, que apoyó la estadía en Cochabamba-Bolivia. Al Ministerio de Educación y
Cultura del Ecuador, a la Dirección Nacional de Educación Intercultural Bilingüe (a los
señores Alberto Anrango y el Dr. Luis Montaluisa). Reiteramos nuestro sincero
agradecimiento con la esperanza de que este trabajo contribuya en un futuro cercano
a la unidad de nuestras organizaciones como también la educación en la lucha de
igualdad de género. A todos muchas gracias.
5
Resumen
El presente estudio tiene como objetivo explorar la participación de la mujer indígena
en los contextos, comunidad, organización zonal y provincial, como también su
participación en la Educación Intercultural Bilingüe. Para la investigación sobre la
participación de la mujer salasaca en los diferentes espacios, hemos tomado como
punto de partida el hogar, donde se manifiestan todas aquellas relaciones de poder e
igualdad entre el hombre y la mujer. Para luego ver cómo aquellas relaciones son
insertadas en los espacios públicos como el cabildo, la organización y el campo
educativo.
En el hogar, su rol de participación ha sido pleno en los diferentes aspectos
presentados dentro de la unidad doméstica. En la comunidad, al igual que en el hogar,
la participación de la mujer es bastante notoria como en el espacio de las mingas y
reuniones comunitarias. En la organización, en las asambleas convocadas por la
organización Unión de Indígenas Salasacas (UNIS), la presencia de la mujer es casi
igual que el hombre, pero ellas no toman decisiones, no aportan porque tienen miedo
de no ser tomadas en cuenta o a los qué dirán y otros. Por un lado, podemos decir que
las mismas mujeres no hacen nada por superar todas aquellas limitantes que las
tienen excluidas del ámbito público. Por otro lado, las mujeres están insertas en
diferentes actividades domésticas, recayendo sobre ellas la sobre carga de trabajo
debido a la ausencia del hombre. En las estructuras de la (UNIS) y el Movimiento
Indígena de Tungurahua (MIT) la presencia de la mujer es escasa.
Hemos encontrado algunas razones que nos permiten explicar sobre el por qué de la
ausencia de la mujer en estos ámbitos. Podemos decir que la misma socialización
primaria dentro del hogar ha sido unos de los factores que ha influido de una manera
negativa en algunas mujeres salasacas, ya que las niñas desde que nacen han sido
consideradas “warmipallas” (sólo eres mujer). Estas manifestaciones poco a poco han
ido invadiendo la participación democrática de la mujer. En lo educativo, la mujer
salasaca está relegada a la docencia y a niveles inferiores como el primero y segundo
grado. Las autoridades educativas y directores de los centros educativos consideran
que la mujer, por ser mujer y madre tiene más cuidado y paciencia en la enseñanza de
los niños pequeños.
Palabras claves: Participación, género, mujer indígena, salasaca, hogar, comunidad,
organizaciones indígenas y educación intercultural bilingüe.
6
Índice
Agradecimiento .............................................................................................................................4
Resumen........................................................................................................................................5
Índice.............................................................................................................................................6
Abreviaturas..................................................................................................................................9
CAPÍTULO I. INTRODUCCIÓN..............................................................................................12
CAPÍTULO II. ASPECTOS METODOLÓGICOS ...................................................................15
1.Planteamiento del problema....................................................................................................15
2. Objetivos..................................................................................................................................18
2.1 Objetivos generales..........................................................................................................18
2.2 Objetivos específicos........................................................................................................18
2.3 Preguntas de investigación..............................................................................................18
3. Justificación............................................................................................................................18
4. Metodología.............................................................................................................................20
4.1 Tipo de investigación .......................................................................................................20
4.2 Descripción de la muestra ...............................................................................................22
4.3 Procedimiento ..................................................................................................................23
4.4 Instrumentos ....................................................................................................................25
5. Consideraciones éticas............................................................................................................26
6. Análisis y resultados esperados ..............................................................................................26
CAPÍTULO III. FUNDAMENTACIÓN TEÓRICA .................................................................28
1. La participación social............................................................................................................28
1.1 Concepción sobre la participación .................................................................................28
1.2 La mujer indígena y participación en el contexto social ..............................................30
1.3 Participación de la mujer indígena en el contexto comunal ........................................33
2. La complementariedad y la subordinación............................................................................34
2.1 Toma de decisiones en el hogar ......................................................................................36
2.2 Toma de decisiones en la comunidad .............................................................................37
7
2.3 Actividades y trabajos comunales ..................................................................................37
2.4 Participación de la mujer en ámbito educativo.............................................................38
3. Enfoque y perspectiva de género............................................................................................40
3.1 Concepción sobre el género.............................................................................................41
4. Elementos que obstaculizan la participación de la mujer .....................................................43
CAPÍTULO IV. PRESENTACIÓN DE RESULTADOS ..........................................................49
1. Una visión del pueblo Salasaca..............................................................................................49
1.1 Caracterización geográfica .............................................................................................49
1.2 El espacio parroquial.......................................................................................................51
1.3 Artesanía y vestimenta ....................................................................................................53
1.4 Historia del pueblo Salasaca desde los diferentes autores ...........................................53
1.5 La cultura salasaca ..........................................................................................................54
2. El ciclo de vida salasaca .........................................................................................................58
2.1 El periodo de gestación....................................................................................................58
2.2 El periodo del parto .........................................................................................................59
2.3 Costumbres después del parto........................................................................................60
2.4 Preferencia de niños de varones .....................................................................................61
2.5 Socialización primaria.....................................................................................................62
2.6 Los “quehaceres” de la mujer salasaca en la unidad doméstica .................................63
3. Espacios de participación de la mujer salasaca.....................................................................66
3.1 En el hogar........................................................................................................................67
3.2 En la comunidad ..............................................................................................................72
3.2.1 Reuniones comunales .................................................................................................74
3.2.2 Mingas comunales ......................................................................................................76
3.4 En la Organización Parroquial Unión de Indígenas Salasacas (UNIS) ......................79
3.4.1 Reunión convocada por la Organización (UNIS) .......................................................81
3.5 En la Organización Provincial Movimiento Indígena de Tungurahua (MIT) ...........86
3.5.1 Estructura del Movimiento Indígena de Tungurahua (MIT) ......................................86
3.6 En la Educación Intercultural Bilingüe de Tungurahua..............................................89
8
3.6.1 En los centros educativos............................................................................................91
3.6.1.1 Las madres de familia en los centros educativos .................................................97
4. Roles y funciones de la mujer salasaca en diferentes espacios.............................................98
4.1 La doble tarea de la mujer: compartir la minga...........................................................98
4.2 Las mujeres nos han defendido. .....................................................................................99
4.3 Roles y funciones de la mujer salasaca en los centros educativos .............................101
4.3.1 Nosotras somos madres y sabemos cómo tratar a los hijos y por eso ya sabemos cómo
tratar a los niños de la escuela ...........................................................................................101
4.3.2 Cuando los muchachos se sienten bien, yo también estoy bien................................103
4.3.3 Somos secretarias por el hecho de ser madres y mujeres .........................................104
4.3.4 Yo me siento bien cuando puedo apoyar en algo al director ....................................105
5. Razones que dificultan la participación de la mujer ...........................................................106
5.1 No nos toman en serio; ellos hacen a manera de burla. .............................................106
5.2 Tenemos ideas pero realmente tenemos miedo de hablar ..........................................107
5.3 A pesar de tener buenos aportes. Prefiero quedar callada por la vergüenza...........108
5.4 Por el miedo de no ser escuchada por los demás no participo...................................110
5.5 Saber hablar la lengua castellano.................................................................................112
5.6 Warmipanaga shuyichilla, kariguna mikushtuchingama. .........................................114
5.7 Aquí sólo los hombres tenemos que dominar..............................................................116
CAPÍTULO V. CONCLUSIONES...........................................................................................122
CAPÍTULO VI. RECOMENDACIONES Y PROPUESTAS..................................................128
CONCLUSIÓN PERSONAL ...................................................................................................131
RESUMEN EN KICHWA........................................................................................................133
BIBLIOGRAFÍA ......................................................................................................................135
ANEXOS ...................................................................................................................................143
9
Abreviaturas
AIET Asociación de Indígenas Evangélicos de Tungurahua
CCP Confederación Campesina del Perú
CECs Centros Educativos Comunitarios
CODENPE Consejo Nacional de Desarrollo de Pueblos Indígenas del
Ecuador
CONAIE Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador
CONFENIAE Confederación de Nacionalidades Indígenas Amazónicos del Ecuador
DIPEIB-T Dirección Provincial de Educación Intercultural Bilingüe de Tungurahua
ECUARUNARI Ecuador Runapac Riccharimui
EIB Educación Intercultural Bilingüe
GTZ Deutsche Gessellschaft für Technische Zusammenarbeit (Cooperación Técnica
Alemana)
MIT Movimiento Indígena de Tungurahua
MIT-A Movimiento Indígena de Tungurahua Sede Atocha
OBCs Organizaciones de base de cuarto grado
ONGs Organizaciones no gubernamentales
ONU Organización de Naciones Unidas
OTGs Organizaciones de tercer grado
PEIB Proyecto de Educación Intercultural Bilingüe
UNICEF United Nations International Children Emergency Fund (Fondo de las
Naciones Unidas para la Infancia).
UNIS Unión de Indígenas Salasacas
Códigos de los entrevistados
Los códigos presentados en este grupo es: el número de orden de categorías, nombre,
apellido, función y la página del libro de entrevista.
24(LML:24) Luis Miniguano Líder
20(ID1:4) Inés Jerez Docente uno
61(ADD1:22) Anónimo Docente-Directora
10
99(MmL1:34) Miriam Masaquiza Líder uno
138(FMC1:46) Flor M. Masaquiza Comunera uno
37(MD2:9) Martha Masaquiza Docente dos
112(MML2:40) Manuel Masaquiza Líder dos
149(EMC2:50) Elmer Masaquiza Comunero dos
Los códigos presentados quieren decir: El número de pregunta, nombre, apellido,
función y la página del libro de entrevistas.
P1(AADIÑ) Antonio Aldás Director Inti Ñan
P1(FCL8:61) Feliciano Caiza Líder ocho
P4(JLlL.50) José Lligalo Líder
P3(MJDD:6) Margarita Jerez Docente-Directora
P2(MMD:115) Margot Mejía Docente
P4(AGAE:41) Alberto Guapisaca Autoridad Educativa
P9(AECP:38) Autoridad Educativa Carlos Paucar
P12(MPDINEIB:110) María Paca DINEIB
P13(SMC:74) Samuel Masaquiza Comunero
P12(AJC3:80) Aida Jerez Comunero tres
P3(RJV+D:48) Rosario Jerez Varayuk+Docente
P3(AOVJAM:46) Autoridad o Varayuk José A. Masaquiza
P9(BCHL3:45) Baltazar Chiliquinga Líder tres
P3(VLlL5:55) Verónica Lligalo Líder cinco
Este grupo de códigos quiere decir: nombre, apellido, función y la página del libro de
entrevistas.
(CTECUARUNARI:8) Carmen Tene ECUARUNARI
(DGT:122) Gilberto Talahua Diputado
(MMCHD:9) Maria M. Chadán Docente
Blanca Chancoso CONAIE
PL(MPD4:113) Manuel Pagalo Docente cuatro
Notas de campo
11
(RsM-24-05-00) María Rosa Masaquiza
(RM-26-06-00) Rosa Masaquiza
(PJ-01-07-00) Petrona Jerez
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CAPÍTULO I. INTRODUCCIÓN
El presente estudio de investigación se realizó en el pueblo Salasaca, comunidad
Centro Salasaca, ubicada en el cantón Pelileo, provincia de Tungurahua. La
comunidad se caracteriza por la existencia del minifundio. Esta situación obliga a los
hombres a la migración temporal en busca de fuentes de trabajo. Por un lado, algunos
se dedican a la artesanía del tejido de tapices, los que son ofrecidos por las mujeres
en las ferias de los días domingos. Por otro lado, los salasacas se dedican al cultivo
sólo para el autoconsumo, ya que la constitución del suelo, en su mayor parte, es
arenosa. Sin embargo, en estos últimos años la gente ha empezado a trabajar en la
tierra a través de los invernaderos, porque hay un servicio del canal de riego Huachi-
Pelileo, el mismo que abastece sus aguas a toda la población.
En el aspecto histórico, Salasaca es uno de los pueblos indígenas “más tradicionales
del Ecuador, cuyos orígenes se remontan a la época prehispánica, al igual que las
demás comunidades de los Andes conservan una estructura muy similar. Siendo parte
de una matriz común (prehispánica y colonial), pese a un proceso diferente que le tocó
vivir durante la época republicana, guarda muchas semejanzas como son el poder
basado en el prestigio y el cual obtiene mediante el estricto cumplimiento del sistema
de cargos” (Choque 1992:124).
En cuanto se refiere a la cultura salasaca, la lengua que predomina es el kichwa. La
vestimenta salasaca “constituye uno de los rasgos propios de su autoctonía. Por él,
precisamente, se diferencia de los demás grupos aborígenes” (Barriga 1988:73).
Salasaca tiene sus propios saberes sobre la medicina, la siembra, el cultivo y otros.
El estudio realizado sobre la participación de la mujer salasaca en los diferentes
contextos, presenta testimonios de mujeres y hombres mediante entrevistas,
observaciones de la cotidianidad en las personas seleccionadas y parte de mi
experiencia. Esto nos permite entender algunas razones de la falta de participación de
la mujer indígena en el ámbito de la comunidad, organización y educación.
La presente investigación es de tipo exploratorio, descriptivo y explicativo. El tema es
poco conocido, si bien es cierto que hay estudios de algunos autores que tratan sobre
la temática de salasaca. Los estudios realizados están enfocados a la cultura y a la
historia de los salasaca. Por ejemplo, la obra de Barriga (1988) enfoca todo lo
referente al aspecto histórico y cultural de los salasacas, apoyándose en diferentes
estudiosos de esta etnia. El único estudio que trata sobre la mujer salasaca es el texto
de Ursula Poeschel (1985), donde recalca la importancia de la mujer, a nivel
económico y socio-cultural, dentro de la familia y dentro de las estructuras de
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parentesco. A diferencia de los estudios históricos y culturales, vale la pena mencionar
“dos trabajos preliminares (manuscritos), por el rigor académico que imprimen sus
autores: uno referido a la fonología del Quichua hablado por los salasacas, de Sheldon
Peter Waskosky (1990); y otro de Jeanette Erazo Heufelder (1991), que trata sobre el
bilingüismo y etnicidad en el movimiento migratorio de los salasacas a las islas
Galápagos” (Choque 1992:2-3).
En el segundo capítulo, la presente tesis, da a conocer los aspectos metodológicos de
la investigación, compuestos por el planteamiento del problema, los objetivos y las
preguntas de investigación. La justificación del problema formula algunas
consideraciones necesarias como aporte al tema de la participación de la mujer
indígena en el aspecto comunal, organizaciones zonales y provinciales, como también
la educación intercultural bilingüe. La última parte del capítulo se refiere a la
metodología del estudio que indica el tipo de investigación, la muestra, procedimiento,
instrumentos, consideraciones éticas y análisis de resultados esperados.
En el tercer capítulo se presenta la fundamentación teórica. A partir de una revisión
bibliográfica de algunos autores que han realizados estudios sobre este tema,
presentamos argumentos teóricos apropiados a los propósitos de la presente
investigación.
El cuarto capítulo corresponde a los resultados de la investigación, el mismo que
contiene cinco partes principales. La primera parte contiene una visión general del
pueblo Salasaca donde se hizo la investigación. En este punto, también se hace
referencia a algunos aspectos socioculturales que distinguen la trayectoria histórica,
vivencias y rasgos culturales de Salasaca.
En el segunda parte se resalta el ciclo vida salasaca, donde se enfoca desde el
nacimiento de la niña o niño, hasta cuando se convierte en mujer adulta y se inserta en
las diferentes actividades de la unidad doméstica.
La tercera parte se refiere a la participación de la mujer salasaca en los diferentes
espacios como: el hogar, la comunidad, reuniones comunales y mingas comunitarias.
Además, se han observado otros niveles de participación como en la Organización
Parroquial Unión de Indígenas Salasacas (UNIS) y en la Organización Provincial del
Movimiento Indígena de Tungurahua (MIT). En el ámbito educativo, participación en la
dirección de la jurisdicción de la educación bilingüe de Tungurahua y en dos centros
educativos de Salasaca.
En la cuarta parte se consideran los roles y las funciones de las mujeres salasacas
como: madres, docentes, dirigentes, profesionales, en este caso, dentro del campo
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educativo bilingüe donde tienen sus funciones de docentes y directoras de los centros
educativos. Por último, se hace referencia sobre algunas razones que dificultan la
participación de la mujer salasaca en los diferentes espacios, especialmente a nivel de
la comunidad, organización y educación.
En el quinto capítulo se extraen las conclusiones, los puntos más sobresalientes de los
resultados de la investigación. En el sexto capítulo se mencionan algunas
recomendaciones para las futuras actividades sobre este tema de estudio,
especialmente en reivindicación del poder de participación de la mujer salasaca en los
diferentes roles y espacios. La tesis termina con la presentación de un resumen global
de la tesis en lengua kichwa, con el objetivo de valorar y desarrollar la existencia del
kichwa al nivel escrito, la bibliografía citada y consultada y los anexos que contienen
los instrumentos de investigación utilizados en el trabajo.
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CAPÍTULO II. ASPECTOS METODOLÓGICOS
1.Planteamiento del problema
La nacionalidad kichwa es uno de los grupos étnicos más numerosos del Ecuador que
ha venido manteniendo su lengua y cultura. Según Chiodi (1990:387) la nacionalidad
kichwa esta asentado en la sierra andina del Ecuador. Así tenemos en la provincia de
Imbabura a los otavalos, natabuelas, caranquis. En Pichincha, cayambes y otras
comunidades. En Cotopaxi, varios grupos sin denominación específica. En
Tungurahua, salasacas, chibuleos, quisapinchas, pilahuínes, píllaros y pasas. En
Chimborazo cachas, lictos, coltas, calpis, pulucates y otros. En Bolívar, los que toman
el nombre del lugar que ocupan: guarandas simiatug, guanujos, casaichis,
cachisaguas, pircapampas, venchoas, casipampas, facundos, gradas, rayos y otros.
En Cañar y Azuay, los cañaris y en Loja, los saraguros.
A partir de los años ochenta, surgen una serie de organizaciones y movimientos
indígenas a nivel nacional. Así, en 1985 nace el Tungurahua Runapac Riccharimui
Movimiento Indígena de Tungurahua (MIT) con la participación de 24 comunidades
indígenas de la provincia de Tungurahua, algunas agrupadas en organizaciones de
segundo grado1. Una de ellas es la Unión de Indígenas Salasacas (UNIS), creada con
la finalidad de mantener la unidad de los comuneros para el desarrollo local y
“fomentar la gestión de la educación bilingüe” (CONAIE 1989:170). La UNIS
representa a mujeres, hombres, niñas, niños y ancianos del pueblo Salasaca. Por
tanto, es filial a la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (CONAIE).
Una vez creadas las organizaciones, los pueblos indígenas, a mediados de los ’80,
comenzaron a levantar su voz de protesta en la búsqueda de hallar un nuevo camino
educativo, derecho a la tierra, el respeto a la interculturalidad y reivindicar los derechos
de cada uno de los pueblos.
En el año de 1988 se “gestan los cambios más significativos en relación con el rol de
las organizaciones indígenas en educación” (Chiodi 1990:374). El hecho histórico, en
este ámbito “es la firma de un convenio entre el Ministerio de Educación y la
Confederación de las Nacionalidades Indígenas del Ecuador, mediante el cual
movimiento indígena asume formalmente el control de la educación” (Ibid).
1 Las organizaciones de segundo grado son las organizaciones regionales. Por ejemplo, Ecuador Runapac Riccharimui (ECUARUNARI) pertenece a esta categoría, es la organización de base más numerosa de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (CONAIE) y una de las más importantes del movimiento indígena nacional.
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Así, se crea la Dirección Nacional de Educación Intercultural Bilingüe (DINEIB)2, sobre
las bases de las distintas experiencias desarrolladas en el país, que han mantenido
una orientación propia en recuperar, fortalecer y mantener la lengua y cultura. El
desafío de las organizaciones y pueblos indígenas fue el de construir una realidad
educativa más satisfactoria y participativa de los pueblos indígenas del Ecuador en el
nuevo milenio.
Se observa en las estructuras de los niveles decisorios de la dirección nacional,
provincial y centros educativos mayor participación y presencia de hombres en los
procesos de la educación indígena. Generalmente, son los hombres los que ocupan
cargos, participan en las reuniones y toman decisiones a nivel de la gestión, mientras
que las mujeres no tienen el mismo nivel de decisión en estas instancias.
En el ámbito organizativo en las comunidades, por ejemplo, en las reuniones de
elecciones de los dirigentes de la UNIS y en la elección de los dirigentes de los
Centros Educativos, la mayoría de las mujeres asisten de oyentes y de observadoras.
Asisten sólo por cumplir con las normas de la organización, no pagar multas o por la
ausencia de los esposos.
La Educación Intercultural Bilingüe en la provincia de Tungurahua está a cargo de los
docentes y funcionarios indígenas. Sin embargo, en las instituciones indígenas como
las organizaciones locales, provinciales, nacionales como también las instituciones de
la EIB, la participación de la mujer es limitada en cuanto a la toma de decisiones, la
expresión verbal frente al público y el manejo de la gestión educativa en los centros
educativos. Asimismo, hay un discurso de parte de los hombres quienes legitimizan la
desigualdad con la falta de preparación y escolarización de las mujeres. Por un lado,
esta desvalorización se manifiesta cuando no se dan las mismas oportunidades de
participación a las mujeres indígenas en los niveles o instancias mencionados, lo cual
perjudica a la mujer en el desarrollo de sus potencialidades, de su autoestima y
seguridad en la capacidad de colaborar con su experiencia acumulada e
históricamente constituida, con la cual ella podría aportar eficientemente a la
planificación, gestión, organización y al desarrollo de la EIB.
Por otro lado, la organización se masculiniza cuando no toma en cuenta las cuestiones
de género tales como la situación concreta de las relaciones entre hombres y mujeres,
niñas, niños y ancianos. En este sentido, las mujeres no tienen oportunidad de
2 Mediante Ley Nº. 150 del 15 de abril de 1992, publicada en el Registro Oficial Nº. 918 del 20 del mismo mes y año, eleva a la Dirección de Educación Intercultural Bilingüe a la categoría de Organismo Técnico Administrativo y Financiero descentralizado (Yánez S/a:180).
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establecer sus canales de intervención, especificar demandas, afirmar sus derechos y
necesidades, introducir sus puntos de vista diferentes. Esta situación no permite hablar
de una participación equitativa si están excluidas las mujeres del ámbito comunal,
organización y la EIB
Sin embargo, hoy en día, las organizaciones indígenas del Ecuador, junto a otras
organizaciones internacionales y nacionales, han realizado debates, conferencias,
seminarios, foros, encuentros, espacios para discutir sobre los Derechos de los
Pueblos Indígenas y la Mujer. Por ejemplo, en el ámbito internacional se realizó en
Panamá el III Encuentro Continental de Mujeres Indígenas, en el que participaron
delegadas de los 19 países de la región “con el objetivo de evaluar los avances y
obstáculos relativos a la situación de las mujeres indígenas, cinco años después de la
IV Conferencia Mundial de la Mujer (ONU/ Beijing 95)” (Tauli-Corpuz 2000:22). En el
plano nacional se ha realizado la Primera Asamblea Nacional de Mujeres Indígenas
del Ecuador en la ciudad de Pujilí, Encuentro de Mujeres Indígenas de la Sierra Sur,
Segunda Asamblea Nacional de Mujeres Indígenas del Ecuador La Merced y otras,
espacios donde se ha analizado la situación de la mujer indígena, el papel de mujer en
la familia, en la comunidad y en las organizaciones.
A pesar de estos encuentros, la participación de la mujer indígena como de la mujer
salasaca sigue siendo un problema por su escasa presencia en los espacios de toma
de decisión y en los cargos de poder en las diferentes estructuras de la organización
Unión de Indígenas Salasacas (UNIS), Movimiento Indígenas de Tungurahua (MIT) y
la Dirección de Educación Intercultural Bilingüe de Tungurahua (DIPEIB-T). ¿Qué pasa
con estas mujeres?
En las comunidades, la mayoría de las niñas indígenas ingresan al primer año de la
escuela. Sin embargo, al culminar el sexto grado, la mayoría de los alumnos son
hombres. Por otro lado, hay mujeres indígenas profesionales y estudiantes, pero en la
acción de participar en la toma de decisiones en las organizaciones locales,
provinciales y nacionales, como también en la gestión de la EIB, la mayoría de las
mujeres no está presente.
Por las situaciones expuestas, el tema propuesto para esta investigación es el estudio
de “La participación de la mujer salasaca en los espacios de organización y educación
intercultural bilingüe”. Esta investigación nos dará indicios sobre el por qué de la
limitada participación de las mujeres salasacas en el ámbito de las organizaciones
comunal y provincial y como también en el ámbito educativo de los centros educativos.
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2. Objetivos
2.1 Objetivos generales
Describir los niveles de participación de la mujer salasaca en los ámbitos comunal,
organizativo y educativo en el pueblo Salasaca.
Entender las razones de la participación limitada de las mujeres indígenas en las
organizaciones UNIS y MIT y los centros educativos en la comunidad Salasaca.
2.2 Objetivos específicos
Describir los roles de las mujeres salasacas en los espacios: organizacional UNIS y
MIT y centros educativos bilingües, Inti Ñan y Manzana Pamba (Salasaca).
Conocer qué piensan los hombres y mujeres con respecto a la participación de las
mujeres en las organizaciones y en la gestión de la EIB en Salasaca.
Explicar las causas de la participación limitada de las mujeres salasacas en las
organizaciones UNIS, MIT y en las unidades educativas.
2.3 Preguntas de investigación
De los objetivos se desprenden las siguientes preguntas:
¿En qué niveles se encuentran las mujeres salasacas participando en los ámbitos:
organización y centros educativos bilingües Inti Ñan y Manzana Pamba?
¿Cuáles son los roles que asumen las mujeres salasacas en los espacios: comunal,
organizacional y centros educativas bilingües Inti Ñan y Manzana Pamba (Salasaca)?
¿Qué piensan los hombres y las mujeres salasacas con respecto a la participación de
las mujeres en las organizaciones y en la gestión de la EIB de Tungurahua?
¿Cuáles son las razones de la limitada participación de las mujeres indígenas en las
organizaciones y los centros educativos bilingües en la comunidad Salasaca?
3. Justificación
Actualmente, la problemática de la mujer indígena es muy discutida a nivel mundial y
dentro de cada país, al abordar temas como el problema de la tierra, la discriminación,
el racismo, la pobreza, la violencia contra las mujeres, la desigualdad de género y
otros que afectan a los pueblos indígenas y, en especial, a las mujeres. Considero que
es necesario llevar a cabo esta investigación para explorar y describir el estado actual
de esta problemática en el Ecuador, especialmente, la falta de participación de la
mujer en los ámbitos públicos.
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Cobra importancia esta investigación, porque nos dará indicios para entender las
razones de la limitada participación de las mujeres salasacas en la toma de
decisiones, cargos de poder3 en la organización y la expresión verbal frente al público,
tanto al interior de las reuniones como también en la gestión educativa. Además,
considero que las mujeres podrían aportar conocimientos integrales y acumulados que
ligan lo supuestamente privado del hogar con lo público organizacional y viceversa,
para el desarrollo de la gestión en la organización UNIS, instancia que lleva adelante
el proceso de la EIB.
El presente estudio ayudará a reflexionar sobre la actuación de las mujeres indígenas
dentro de las estructuras comunitarias y al interior de las organizaciones indígenas,
como también la participación en la gestión de la EIB. Contribuirá, sin duda, a la
percepción de las mujeres indígenas sobre lo que obstruye su real participación en los
procesos de gestión al interior de las organizaciones UNIS, MIT y la EIB. Por otro lado,
la investigación fomentará el respeto a los derechos de las mujeres en los espacios de
poder público y organizacional y la toma de decisiones.
Los hallazgos de la presente investigación orientarán las nuevas concepciones de
participación de la mujer dentro del mundo indígena y construirán nuevas propuestas
de participación en el ámbito educativo, cultural, político y económico de la sociedad
indígena ecuatoriana. También ayudarán a profundizar a que la sociedad indígena
siga fundamentándose en el respeto mutuo que precariamente se reconstruye dentro
de la sociedad nacional envolvente jerárquica y hegemonizadora (Cf. Rivera 1996).
La relevancia social del problema radica en que este trabajo llevaría a entender el
problema de la participación desde el ámbito familiar, comunal y societal, y ver cómo y
por qué se dan aquellas relaciones de desigualdad, inequidad, poder en la
participación de las mujeres indígenas en los ámbitos de la administración y gestión
organizativa y educativa.
Mi experiencia personal en la participación como mujer indígena salasaca en la
organización comunal, provincial y gestión de la EIB me ayuda a tener una información
de primera mano acerca del tema a investigar, así como también el contacto diario con
las mujeres que tienen experiencias de participación en las organizaciones,
movimientos indígenas y la participación en la gestión de los centros educativos de la
educación bilingüe de Tungurahua.
3 Presidenta, vicepresidenta y otros cargos en las instancias de los cabildos, organización y educación bilingüe.
20
Por otro lado, si bien hay materiales escritos sobre género en general, para el caso
específico de la participación de la mujer indígena y, sobre todo, de la mujer salasaca,
la información escrita es escasa en el Ecuador, ya que las comunidades originarias
reducidas “casi a nivel de la inexistencia han sido muy descuidadas por las ciencias
sociales ecuatorianas, que desde siempre centró su atención en las comunidades
resultantes de la modernización de las haciendas” (Choque 1992:1).
El estudio ha sido realizado en el pueblo Salasaca con la participación de autoridades
educativas, líderes, docentes y comuneros, quienes han facilitado los datos para
abordar el tema de estudio, a la vez, la observación directa, la vivencia con las
mujeres salasacas en las reuniones y mingas comunales convocadas por los cabildos.
La misma organización ha permitido recoger la información necesaria para armar el
texto. Las visitas a los dos centros educativos bilingües han dado a conocer qué roles
de participación tienen las docentes salasacas en el proceso de la gestión educativa.
4. Metodología
4.1 Tipo de investigación
El tipo de investigación en el presente estudio es inicialmente de carácter exploratorio
y descriptivo, dado que se trató de recoger información variada y profunda sobre la
participación de la mujer salasaca. El segundo objetivo de la tesis es entender las
razones de participación limitada en la organización y la EIB, de ahí que la
investigación pretende llegar a una explicación más allá de la mera descripción. De
esta forma, intentamos descubrir el por qué de la participación limitada en los
espacios: Cabildo (comunidad), organización UNIS, MIT y la educación bilingüe de
Tungurahua.
La investigación exploratoria según Dankhe (1986)4 plantea que “Sirve para
familiarizarnos con fenómenos relativamente desconocidos, obtener información sobre
la posibilidad de llevar a cabo una investigación más completa sobre un contexto
particular de la vida real...”.
Hernández et.al (1998:58) afirman que: “Los estudios exploratorios se efectúan
normalmente cuando el objeto es examinar un tema o problema de investigación poco
estudiado o que no ha sido abordado antes”. En este caso, algunas cosas me eran
familiares por ser del lugar. Por ejemplo, las personas, los centros educativos en
4 Dankhe G. L.1986. Investigación y comunicación. En (Fernández-Collado y G.L. Danhke comps) La comunicación humana: Ciencia social. México: McGraw-Hill, 385-454. Citado en Hernández et.al. (1998: 58)
21
estudio, las organizaciones indígenas. Lo que sí debo considerar es que el tema a
investigar es una temática poco conocida.
El carácter descriptivo me permite abordar la cotidianidad de las mujeres salasacas,
desde el espacio privado hasta llegar al espacio público. También la investigación
descriptiva trata de responder al análisis de los datos recogidos como también abordar
las preguntas y las interrogantes en función de dar mayor credibilidad al tema. Como
lo señala Hernández et.al (1998:60) que: “Los estudios descriptivos buscan especificar
las propiedades importantes de personas, grupos, comunidades o cualquier fenómeno
que sea sometido a análisis”. De la misma manera, la investigación descriptiva
consiste en describir situaciones, eventos, es decir, en la búsqueda específica de las
propiedades importantes de las personas particulares de grupos y comunidades (Cf.
Ibid). Este intento descriptivo permite también reconstruir de manera sistemática y lo
más detalladamente posible las:
Características de las variables y fenómenos, con el fin de generar y perfeccionar categorías conceptuales, descubrir y validar asociaciones entre fenómenos o comparar los constructos y postulados generados a partir de los fenómenos observados (Goetz y LeCompte 1988:13-14).
Una de las características más importantes de esta investigación descriptiva, es el
procedimiento mediante el cual se interpretan los datos observados. Es decir, es
posible identificar las especificidades de la relación de las personas (hombres y
mujeres), comunidad, cabildo y organizaciones indígenas en su propio contexto. De tal
manera, que nos permita “medir, evaluar los diversos aspectos, dimensiones o
componentes del fenómeno o fenómenos a investigar” (Hernández et.al 1998:60). Por
lo tanto, la observación ha facilitado mirar de cerca todos aquellos procesos y los
hechos, cómo se presentan, cómo accede la mujer al espacio de la toma de
decisiones, cómo participa, cómo aporta la mujer indígena en la gestión de los
cabildos, la organización y el campo educativo, de qué manera y en qué niveles
participa y cuáles son las razones de la escasa participación en los espacios públicos.
Los estudios explicativos, por su parte, “van más allá de la descripción de conceptos o
fenómenos o del establecimiento de relaciones entre conceptos; están dirigidos a
responder a las causas de los eventos físicos o sociales” (op.cit:66). Por su parte,
Hempel sostiene con claridad que explicar un fenómeno es “dar las causas de él, ya
se trate de hechos, tendencias o regularidades” (Hempel 1979)5.
5 Hempel, C. G. 1979. Filosofía de la ciencia natural. Madrid: Alianza. Citado en Velasco y Díaz de Rada (1997:56).
22
Sin duda, los tres enfoques de investigación tanto el exploratorio, el descriptivo como
el explicativo, permiten mostrar de manera específica los detalles de la situación de la
mujer salasaca en cuanto a la participación en los procesos de los ámbitos ya
mencionados. De esta manera, los datos reflejan la cotidianidad de las relaciones y
muestran los espacios de interacción social entre hombres y mujeres.
4.2 Descripción de la muestra
El área de estudio comprende el Pueblo Salasaca del Cantón Pelileo en la Provincia
de Tungurahua. La selección de este lugar se debe a que es un pueblo que presenta
en estos últimos años, los procesos de cambios y la implicancia de la participación de
la mujer indígena en contextos como la comunidad, organización y la educación
intercultural bilingüe. También es importante recalcar que no se hizo el estudio de la
situación de todo el pueblo, sino se enfocó solamente la participación de la mujer
salasaca.
La selección de la muestra responde a los criterios de accesibilidad tanto al espacio
objeto de nuestra investigación, como a los actores sociales involucrados en los
procesos de la organización y la educación. En este sentido, los criterios tomados en
cuenta fueron los siguientes:
Primero, consideré al pueblo Salasaca por ser del lugar y, porque se vive y se
observa la escasa participación de las mujeres en los espacios de la comunidad,
organización y la educación intercultural bilingüe.
Segundo, poseo un conocimiento de la realidad sociocultural del pueblo Salasaca y
un contacto directo con las organizaciones a nivel zonal y provincial.
Tercero, la accesibilidad a los centros educativos Inti Ñan y Manzana Pamba Grande,
considerando que cuentan con un camino carrozable que conectan al pueblo
Salasaca.
Cuarto, los actores sociales como los comuneros, líderes, docentes y autoridades
educativas están prestos a colaborar en el desarrollo de la presente investigación.
En cuanto a la determinación de la muestra, para los propósitos de la investigación se
consideraron dos tipos de población: la población meta o universo y la población
accesible (Cf. Hernández et.al 1996).
23
En cuanto a la población meta6, se trabajó con el director provincial de educación
intercultural bilingüe de Tungurahua y los 2 directores de los centros educativos Inti
Ñan y Manzana Pamba, 3 líderes de la organización UNIS (ex –presidente y teniente
político) y los 2 líderes del MIT (ex –presidente y presidente actual), los mismos que
facilitaron la obtención de resultados significativos. La población accesible7 se
compone de 5 de las 17 mujeres docentes salasacas, 20 comuneros de la población
total (hombres y mujeres) y la entrevista a profundidad con 2 mujeres que tienen
amplia trayectoria educativa y organizacional en el ámbito provincial y nacional.
Como parte del proceso de la investigación, se han identificado las siguientes
unidades de análisis:
Comuneros
Líderes de la comunidad y organizaciones
Reuniones y mingas de la organización y cabildos, espacios donde participan los
pobladores (hombres y mujeres)
Autoridades educativas y docentes
Centros educativos donde participan las mujeres salasacas
Estas unidades de análisis se han constituido en una fuente importante de
información, ya que se ha trabajado con cada una de ellas y se ha participado de una
manera directa, por ser una salasaca más en las reuniones y mingas comunitarias
realizadas por el cabildo y la organización.
4.3 Procedimiento
La estrategia metodológica respondió a un procedimiento, a partir de un cronograma
dividido en dos fechas (tiempos), espacios (lugares) y actividades en terreno, de tal
manera que el proceso de investigación respondió de una manera eficaz a los
objetivos y preguntas de la investigación.
La investigación se realizó en dos fases de trabajo. La primera salida al campo fueron
los meses de enero y febrero de 2000 (8 semanas), tiempo en el cual pude explorar y
conocer a nivel general sobre el tema a investigar y, a la vez, familiarizarme con los
actores que participaron en el estudio. La segunda fase fue la definitiva, la misma que
se realizó en los meses de mayo y junio del 2000 (8 semanas).
6 La población meta está constituida por todos los elementos que forman o hacen a la población y comparten las mismas características. 7 La población accesible está conformada por aquellas personas que encuentran disponibles en el momento del estudio.
24
La recolección de datos empíricos fue realizada a través de las observaciones,
conversaciones y/o entrevistas personales formales e informales en kichwa y
castellano, las que fueron registradas en la grabadora como en el cuaderno de campo.
Realicé visitas a los centros educativos, hogares de los dirigentes del pueblo, docentes
y comuneros. A partir del primer contacto en terreno con los actores, se ha podido
entablar la comunicación y consulta sobre el tema de la investigación.
El trabajo en el terreno se constituyó en un elemento metodológico práctico, ya que
permitió desarrollar la observación participante al llegar a la situación descrita por
Castro y Rivalora (1998:27), quienes manifiestan que “el observador tiene acceso a
una amplia variedad de datos”. Formé parte de la vida comunitaria, organizacional y
educativa donde compartí y observé con una mayor objetividad, para luego describir la
realidad del medio, la cotidianidad y la participación de las mujeres en los diferentes
espacios durante el tiempo de la investigación. Las observaciones fueron registradas
en el cuaderno de campo para luego ser vaciadas como datos.
La observación estaba enfocada específicamente a las mujeres, mientras tanto, las
entrevistas fueron para todos, aún para las observadas, con la finalidad de conocer
qué criterios tienen sobre la participación de las mujeres salasacas en la comunidad,
organizaciones y unidades educativas de la Provincia de Tungurahua. Se recurrió a las
entrevistas semiestructuradas con preguntas abiertas y flexibles sobre la
problemática de las mujeres indígenas. Para recoger la información de los diferentes
actores, se diseñaron guías de entrevista para mantener la orientación del problema a
investigar. Las entrevistas fueron realizadas en el hogar, en las reuniones y mingas
comunales o en las actividades educativas, no hubo espacios privados para las
entrevistas para no causar tensiones al entrevistado. A pesar de ello, por lo general,
en las mujeres se notó miedo frente a la grabadora, por lo cual tuve que tener mucho
cuidado con el uso de este instrumento. Para superar esta situación, antes consultaba
al entrevistado/a si la conversación podía ser grabada.
Las guías de entrevistas fueron aplicadas a un total de 35 personas (hombres y
mujeres), comuneros, líderes, docentes y autoridades educativas, quienes colaboraron
de manera desinteresada en darme información para esta investigación.
La entrevista a profundidad “contiene una descripción de los acontecimientos y
experiencias importantes de la vida de una persona o alguna parte principal de ella, en
las propias palabras del protagonista” (Taylor y Bogdan 1996:174). Por otro lado,
representan la forma más pura de los estudios descriptivos. En ellas, el investigado
narra su trayectoria personal, organizacional y educativo (Ibid). Las entrevistas a
25
profundidad fueron aplicadas sólo a 2 mujeres de trayectoria organizacional y
educativa a nivel provincial y nacional.
Las observaciones, consultas y entrevistas a los actores sociales logré con algunas de
las indicaciones de Castro y Rivalora (1998:20-21):
Ganar la confianza de los informantes.
Dar a conocer a los informantes el objetivo del estudio a realizar.
Familiarizarme con las mujeres, líderes o con las personas que fueron luego
observadas y entrevistadas.
Obtener la autorización del presidente de la comunidad Centro Salasaca y Dirección
Provincial de Tungurahua para entrar a la organización y las unidades educativas.
Acceder a la grabación de la entrevista.
Observar a las mujeres docentes salasacas el trabajo en el aula.
No causar alarma a las personas observadas por ser del lugar.
Llevar el diario de campo para anotar toda la información y la observación.
Finalmente, la revisión bibliográfica se ha constituido en un elemento vital e
importante para obtener datos acerca de la caracterización del entorno sociocultural
del Pueblo Salasaca, como también al tema en estudio.
4.4 Instrumentos
Para la recolección de datos se ha utilizado los siguientes instrumentos:
Guía de entrevistas a docentes (mujer-hombre)
Guía de entrevista a las autoridades educativas: Director provincial, directores de
unidades educativas.
Guía de entrevista a líderes de la comunidad y organizaciones (mujeres-hombres)
Guía de entrevista a los comuneros (mujeres y hombres)
Guía de entrevista a profundidad. (2 mujeres)
Ficha de observación (mujeres y hombres)
Las guías de entrevistas fueron elaboradas antes de salir al segundo trabajo de
campo, las mismas que fueron muy útiles, porque estaban ya construidas sobre la
base de las primeras observaciones realizadas en el primer trabajo, aunque ya
llegando al lugar mismo de los hechos había que aumentar o quitar algunas cosas.
26
5. Consideraciones éticas
En la realización del estudio investigativo, consideré el aspecto cultural para
incorporarme en la vida de la comunidad, organización y centros educativos, evitando,
en lo posible, alterar el quehacer cotidiano de los actores a investigar. Por otro lado,
utilicé estrategias de inclusión que generan un ambiente de confianza y colaboración
de líderes y mujeres involucrados o no en el desarrollo de la EIB, para lo cual aprendí
a escuchar, respetar el tiempo de los actores investigados, a tener discreción y
cuidado en lo que se dice y se hace, a motivar la conversación con quienes
manifiestan inquietud de hacerlo. Hice uso de los procedimientos mencionados en las
líneas anteriores para conseguir estar dentro de la comunidad y observar lo que pasa
al interior de ella, sin condicionar demasiado las actitudes, reacciones y actuaciones
de los colaboradores en la investigación (Cf. Castro y Rivalora 1998).
La historia de vida la obtuve mediante la entrevista a profundidad, lo cual ha
contribuido a profundizar el análisis del problema planteado. Por razones de respeto a
la confianza que demostraron las protagonistas de las historias de vida y demás
mujeres entrevistadas, utilicé sólo los testimonios que se refieren a la participación
comunal, organizacional y educativa.
6. Análisis y resultados esperados
En el estudio de investigación se siguieron procedimientos concernientes al análisis de
los resultados con el método cualitativo. Las grabaciones de las entrevistas han sido
transcritas detalladamente, sin alterar las opiniones vertidas por los participantes en el
cuaderno de campo. Algunas entrevistas fueron transcritas en Salasaca aprovechando
los momentos libres y la mayor parte en Cochabamba.
Para el análisis de los datos se siguieron los siguientes pasos:
Transcripciones
1. Identificación de categorías
2. Subrayado de categorías en la interpretación
3. Listado de categorías
4. Recorte de patrones
5. Jerarquización y agrupación categorías
6. Verificación de las categorías
7. Descripción y explicación de las categorías encontradas
27
8. Análisis e interpretación de los datos.
Los primeros tres primeros pasos para el análisis de los datos corresponden a la
autora María Bertely Butquets (2000:66), quien explica de esta manera, se “incorpora
algunos criterios de forma y contenidos de [las entrevistas], además de mostrar en la
columna de inscripción. El segundo se desprende del anterior, pero articula las tareas
que realicé para interpretar mis datos: subrayar fragmentos de inscripción que desde
mi perspectiva resultaban llamativos; preguntar, inferir, conjeturar y subrayar los
patrones emergentes en la columna de interpretación; y ubicar y definir –de modo
tentativo- las categorías de análisis que estaban en permanente construcción”.
Para los pasos seis hasta ocho, utilicé la enseñanza recibida en el taller de
elaboración de proyectos educativos dictado por el Dr. Diego Martínez. Ya teniendo el
listado de categorías, recorté cada categoría, después fui jerarquizando y buscando un
patrón que abarque a las categorías, así se agruparon y verificaron las categorías
volviendo a revisar el listado de las mismas.
Los resultados están en función a los objetivos planteados en el proyecto. Se trata de
presentar la información sobre las razones que impide la real participación las mujeres
en los procesos de gestión organizacional y educativa. Por otra parte, descubrir cómo
asumen las mujeres involucradas las diferencias de participación encontradas. De esta
manera, se buscó generar la reflexión y discusión sobre la participación equitativa de
las mujeres en los niveles de gestión y planificación en la organización y el ámbito
educativo (durante el trabajo de campo). Posteriormente, el documento será
socializado a nivel de las organizaciones indígenas y centros educativos de la
provincia.
Finalmente, esperamos que mediante este trabajo de investigación podamos contribuir
en parte a que la sociedad salasaca sea equitativa, democrática, que los hombres y
mujeres participen juntos en la construcción de una gestión pertinente en los ámbitos
comunal, organizacional y educacional.
28
CAPÍTULO III. FUNDAMENTACIÓN TEÓRICA
1. La participación social
1.1 Concepción sobre la participación
La participación de la mujer en el ámbito indígena se constituye en una estrategia muy
importante para lograr el desarrollo de sus demandas en la comunidad, la eficiencia y
la eficacia que contemple a las necesidades básicas de las mujeres en las
comunidades, organizaciones y en el plano educativo. En este sentido, iniciaremos la
reflexión sobre la importancia de este concepto, entendiéndolo como un espacio de
interacción social, de intervención directa entre hombres y mujeres en la toma de las
decisiones como parte de la democracia participativa. Apoyamos nuestra reflexión con
la siguiente cita:
El concepto de participación como la intervención en la toma de decisiones y no sólo como el establecimiento de canales multidireccionales de comunicación y consulta (...), la participación completa sólo se da cuando las decisiones se toman por las propias personas que han de poner en acción (...), es la intervención de los individuos o grupos de personas en la discusión y toma de decisiones que les afectan para la consecución de objetivos comunes, compartiendo para ello métodos de trabajo específicos. (Gento 1991:11)
Es decir, la participación tanto del hombre como de la mujer no sólo se refiere a
hablar, tener fuerza de voluntad para opinar sobre los temas relacionados con las
necesidades de la comunidad en general, si no más bien, significa una participación
activa de ambos, que tome en cuenta las formas de relaciones de unos con otros
dentro de las comunidades y que la mujer pueda tener la misma oportunidad de
participación en la toma de decisiones en situaciones específicas, ya sean
organizativas, educativas u otras.
Con respecto a la participación como intervención en la toma de decisiones, Gento en
la cita mencionada arriba, plantea que ésta se realiza con métodos de trabajos
específicos. Frente a esta posición debemos tener en cuenta en la vida de las
comunidades indígenas la participación no se rige a estos métodos. Es decir, hay una
brecha grande entre la teoría y la práctica. Sin embargo, lo teórico está muy bien
señalado en los textos, por ejemplo, en Bolivia hay una Ley de Participación Popular
donde el marco legislativo y jurídico apoya y posibilita la participación popular. De la
misma manera, la Constitución Política del Ecuador (1998:33) señala un punto muy
importante en el artículo 102 que dice: “El Estado garantiza la participación equitativa
de hombres y mujeres..., en las instancias de dirección y decisión en el ámbito público,
en la administración de justicia, en los organismos de control y en los partidos
políticos”.
29
¿Qué pasa en la práctica en el ámbito indígena? La participación de hombres y
mujeres en los diferentes ámbitos tanto comunal, organizacional, político,
administrativo y educativo tiene una concepción distinta de lo teorizado, ya que la
participación, al menos en las comunidades indígenas del Ecuador, es entendida
desde una perspectiva de colaboración o contar con la presencia, por ejemplo, ir a las
mingas comunales, ayudar a construir una infraestructura comunal, escolar o
eclesiástica, realizar gestiones para el beneficio de la comunidad o escuela, etc. Esto
implica comprender que las diferentes comunidades tienen sus propias organizaciones
y su propia visión de participación, para lograr algunos objetivos específicos.
El proceso de la participación social no sólo implica la presencia de los hombres,
también la presencia de la mujer es importante, porque en los distintos niveles o
formas de participación en la gestión de los cabildos, organizaciones y la gestión
educativa, se trata de que ella forme parte de la discusión y del diálogo a partir de una
práctica tolerante y respetuosa con el ejercicio del poder de manera equilibrada. Al
respecto Gento (1991:11) manifiesta:
Participar es tomar parte activa en cada una de las distintas fases que afectan al funcionamiento de grupos (desde su constitución inicial, pasando por su estructuración, la toma de decisiones, la puesta en práctica de las mismas y la valoración de resultados), asumiendo parte del poder o del ejercicio del mismo.
Sin duda, el diálogo y la toma de las decisiones compartidas se constituyen en el pilar
del ejercicio de la democracia participativa. No habría una verdadera participación, si
se restringiese la participación de las mujeres en los ámbitos públicos (cabildos,
organización y educación). La participación será eficiente en tanto todos (hombres y
mujeres) formen parte de la negociación, planificación, administración y evaluación de
procesos de la participación social.
En cambio para otros “... la participación tiende a percibirse como una acción libre.
Dicha percepción no concuerda con el significado de la palabra, ni con la forma en que
se da en la práctica. Ya que, muy a menudo, se obliga o arrastra a la gente para que
participe en operaciones en las que no tiene interés” (Rahnema 1997:194). Por eso, en
muchas comunidades andinas y no andinas existe la experiencia de haber abierto
espacios de participación, haber convocado a distintas agrupaciones de la zona y no
haber obtenido la respuesta esperada. Por tal razón, Sirvent (1994)8 manifiesta: “La
participación real depende por un lado de la existencia de espacios institucionales y,
8 Sirvent, María Teresa. 1994. Educación de adultos: Investigación y participación. Buenos Aires: Libros del Quirquincho. Citado en Alfiz (1997:102).
30
por otro lado, de la capacidad de la población para organizarse y usar dichos espacios
o para crear o recrear nuevas instancias participativas”.
De lo expuesto, podemos manifestar que la participación es un proceso donde se debe
tener la facultad de empoderamiento para usar los diferentes espacios, como las
organizaciones indígenas y la EIB, en beneficio de los intereses de los actores
involucrados, para alcanzar una participación libre y democrática. De la misma
manera, los pueblos indígenas han tenido la capacidad de organizarse a través de la
participación, la misma que sido usada para reivindicar los derechos sobre la tierra, la
educación y el campo político. Las mujeres, aunque en un menor grado, también han
hecho uso de la participación para organizarse y manifestar las desigualdades de
género, la marginación, la violencia física, la pobreza y otros problemas.
Finalmente, Alfiz (1997:102) dice que hay un cierto interés en considerar a la
participación como “el intercambio como “dados”, como un resorte que se activa en
cuanto se convoca a la gente. Sin embargo, se puede comprobar que en ocasiones se
hace difícil que la población citada concurra y en otras se hace difícil que opine, que
decida realmente”.
Estos casos se ven plasmados en la realidad, porque cada persona tiene un cierto
interés de participación. Para participar con más fuerza depende del conocimiento que
tenga la persona, por ejemplo, en el manejo de las leyes, proyectos, gestión y otros,
para lo cual es importante la capacitación, porque de lo contrario aunque tenga
espacios de participación sino tiene elementos suficientes para usar un determinado
espacio será lo mismo que nada.
1.2 La mujer indígena y participación en el contexto social
Las comunidades indígenas y, en especial, las mujeres de la mayoría de los países
latinoamericanos siguen enfrentando los problemas de tenencia de tierra, pobreza,
analfabetismo y otros. Estos problemas han obligado a las mujeres a buscar nuevos
espacios de participación organizativos “y nuevos canales de ejercicio del poder no
sólo informal, como lo demuestran varios ejemplos: el Comité de mujeres de los
trabajadores mineros de Bolivia, la constitución de comisiones femeninas en las
organizaciones indígenas del Ecuador (por ejemplo la CONFENIAE y la CONAIE); la
Primera Asamblea Nacional de la Mujer Campesina del Perú, organizado por la
Confederación Campesina del Perú –CCP” (D’Emilio 1987:118).
En cuanto a la participación de las mujeres y la toma de decisiones en los ámbitos
públicos (político, educativos, organizaciones, social, religioso, etc.), “no siempre ella
puede seguir ejerciendo su influencia a través de los canales no formales de ejercicio
31
del poder, pues en algunos casos, éstos han desaparecido a raíz del mismo proceso
de cambio. Se busca nuevas formas de participación y espacios organizativos, sobre
todo, por lo que concierne a la solución de problemas inmediatos de la unidad
doméstica” (op.cit: 123).
Sin embargo, cabe señalar que hay casos donde las mujeres indígenas han buscado
espacios de participación en las organizaciones, no sólo para solucionar carencias
puntuales, “sino que han llegado a la participación plena (o por lo menos a la
reivindicación de la participación plena) en las instancias del ejercicio del poder” (Ibid).
De ese modo, numerosas organizaciones indígenas han tenido que aceptar la
presencia de la mujer, “por presión femenina, la constitución de comisiones de mujeres
es un ejemplo de las nuevas dinámicas que se están generando en las sociedades
indígenas y particularmente en lo que concierne a la diferenciación del trabajo y
esferas de influencias por sexos” (Ibid).
La escasa participación de las mujeres en los cargos administrativos y “la toma de
decisiones de su comunidad, [en las organizaciones provinciales y zonales] es mínima
o ninguna, o está fuertemente mediatizada por las tradiciones culturales de sus
comunidades” (Llanos 1997:195). Es decir, esta situación marginal se expresa “a
través de detalles que son significativos, como la ausencia de cargos administrativos y
políticos y otras posiciones de responsabilidad en manos de mujeres, la falta de
relación con las autoridades y con la administración pública” (Poeschel 1985:121).
La misma autora indica que la ausencia de la mujer salasaca en los espacios
administrativos, toma de decisiones y responsabilidades por “la limitación que sufren
las mujeres a través de la educación (analfabetismo y monolingüismo), que motiva, en
buena parte, su baja auto-estimación y que determina indudablemente su disminuida
participación en decisiones comunales, a más de que su participación no es propiciada
ni por la comunidad, ni por los miembros de la administración pública, quienes en
términos generales son representantes exclusivos de la cultura y la sociedad nacional-
urbana” (op.cit:122).
Las limitaciones que sufren las mujeres indígenas permiten entender la situación de la
mujer indígena en el Ecuador. Al respecto Llanos (1997:196-197) manifiesta que: “La
identificación de problemas claves de clase, género y etnia, que afectan a la mujer
campesina, el análisis de los mismos y el planteamiento de alternativas de solución,
por cierto no es tarea fácil, menos aún para la mujer campesina”.
Sin embargo, las demandas de las mujeres indígenas apuntan a superar las limitantes
que históricamente se han establecido para la reproducción económica, social y
32
cultural de la familia y la comunidad. En el caso de las comunarias de base, tomando
en cuenta los cambios que van abriendo en la sociedad kichwa, puede señalarse que
sus demandas, especialmente de “talleres de capacitación”, están enfocadas a
“superar limitaciones que, a través del predominio de nuevos valores como “el saber
hablar” o “saber leer y escribir”, se imponen a su participación en la toma de
decisiones tanto al interior de sus familias como del movimiento indígena en general”
(Lehm 1996:430).
Sin duda, “el saber hablar” es un elemento muy importante, ya que algunas mujeres
por no saber expresar sus opiniones frente al público, dejan que sólo los hombres
debatan en las asambleas comunales. Al respecto, D’Emilio (1987:127) señala:
A propósito de los quechuas, las mujeres asisten en silencio mientras que los hombres opinan y debaten. Sin embargo, al volver al hogar tratan nuevamente el asunto y a veces es la opinión de la mujer la que prevalece. En este caso, en las reuniones siguientes el marido presentará una nueva posición justificando el cambio por “haberlo pensado mejor”.
Asimismo, podemos decir que en las asambleas de las comunidades, los aportes de
las comunarias o comunarios son inmediatos. Esto perjudica la realización de planes
de desarrollo y otros, puesto que las opiniones que surgen en ese instante no llevan a
consolidar de una mejor manera un proyecto de desarrollo. Por tal razón, los dirigentes
de las organizaciones tienen que darse un tiempo necesario, para que los comuneros
piensen y discutan y vuelvan a retomar el mismo tema en las próximas asambleas.
Desgraciadamente, este hecho no se ha tomado en cuenta por los que dirigen han
”exigido un pronunciamiento inmediato de la comunidad y en base a lo obtenido en
una sola asamblea, se han elaborado planes de desarrollo destinados de antemano al
fracaso. La decisión diferida sería en estos casos algo muy útil, ya que sería la forma
de captar realmente el sentir de la comunidad” (Ibid).
Por lo expuesto podemos decir que, para nuestros fines, en estos últimos años, las
mujeres indígenas están participando en los diferentes espacios. Pese a la dificultad
que tienen, ellas han formado grupos, organizaciones y movimientos de mujeres. En el
Ecuador, la participación de la mujer indígena ha ocupado espacios importantes tanto
a nivel, organizativo, educativo como político. Así en el siglo XX, Dolores Cacuango y
Tránsito Amaguaña, fueron las primeras promotoras y dirigentes del Ecuador que hoy
se plasman como el ejemplo para seguir participando. En la actualidad, la participación
de la mujer indígena ha sido notoria en el campo político organizativo del país, así
tenemos algunas mujeres dirigentes entre las cuales podemos destacar a la Dra. Nina
Pacari.
33
1.3 Participación de la mujer indígena en el contexto comunal
En las comunidades indígenas, la grave crisis económica ha generado la migración
masculina. Poeschel (1985:131) en su reflexión final de la ”Mujer Salasaca” manifiesta
a la migración como un elemento que ha conducido al “aumento de la participación
femenina en la producción y reproducción, su toma de responsabilidad y la sobrecarga
de trabajos que asume”. Por otra parte, la misma autora en su análisis sobre la
participación de la mujer a nivel comunal señala: “La comunidad reconoce el valor
económico y social de la mujer, [pero] no reconoce su posición política dentro del
sistema de poder, y en las actividades comunales, en la práctica, las coloca en una
situación de poca importancia” (op.cit:121). De este modo, la mujer no ha sido digna
de ser valorada al mismo nivel que el hombre, a pesar de estar integrada en la
producción, reproducción, responsabilidad y la sobrecarga de trabajos. Es decir, el
trabajo arduo de la mujer no es reconocido en las mismas condiciones que el trabajo
del hombre a nivel comunal.
Albó (1984:410) en sus estudios sobre el contexto aymara de Bolivia, sostiene que, si
bien el dominio público está “culturalmente en las manos de los hombres”, existe una
participación femenina efectiva, debido básicamente a los siguientes factores:
los cargos públicos recaen sobre la unidad familiar y, en la ausencia del varón,
cualquier persona de la familia puede representarla;
en los actos comunitarios participan juntamente hombres y mujeres, cada uno con un
papel específico;
la mujer participa también en los procesos de toma de decisión de las asambleas
comunitarias, pues las familias siempre se consultan antes de llegar a cualquier
acuerdo.
En el Ecuador, especialmente en las comunidades indígenas de la sierra andina, se
evidencia la figura de participación de cualquier manera, así como señaló Albó, sobre
algunos aspectos que son similares en las sociedades andinas del Ecuador así como
sucede en la sociedad aymara boliviana, ya que el hombre y la mujer se
complementan unos a otros. Por ejemplo, la decisión de las asambleas es consultada
entre las parejas.
En cambio, Harris (1985:32) cuestiona la efectividad de que la pareja funcione como
una unidad en las actividades comunitarias, y observa que:
Las mujeres son notables por su ausencia, sólo los hombres asisten a las asambleas comunales y minkas laborales en cada localidad. Sólo los hombres asumen cargos de autoridades sea a nivel local o a nivel de Laymis en su
34
totalidad. La mayoría de asambleas o actividades políticas tienen lugar temprano en las mañanas o en las tardes: a esas horas las mujeres están sentadas junto al fogón preparando alimentos... Es así que la misma actividad que, en la esfera doméstica, da a la mujer el control de la economía del hogar, es causa de su exclusión de la mayor parte de las otras actividades colectivas. La principal forma en que las mujeres participen en la actividad colectiva es cocinando y acarreando agua.
Las posiciones de ambos autores se refieren a cuestiones relativas de participación.
“Los dos planteamientos denotan evidentemente un juego de fuerzas permanente,
donde el poder masculino ocupa espacios claramente visibles, mientras el femenino
permanece relegado por los propios mecanismos culturales, que alejan a la mujer de
las instancias participativas y decisiones a nivel comunitario” (Carafa 1993:150).
De la misma manera, Poeschel (1985:121) sostiene que la “división de trabajo relega a
la mujer a las labores en la parcela, en la casa y dentro del espacio tradicional,
mientras que reserva al hombre la actividad pública”. En concreto, la posición social de
la mujer se caracteriza, en gran parte, por las tareas asumidas en la reproducción,
limitando de este modo la participación a nivel comunal y organizaciones por las
actividades domésticas y agrícolas que determinan a la unida familiar.
2. La complementariedad y la subordinación
La noción de la complementariedad ha sido un tema abordado en los estudios sobre
la naturaleza de las relaciones de género en la cultura andina. Hamilton (1995)9
sostiene que: “Las relaciones de género en las sociedades andinas están basadas en
principios de complementariedad entre lo masculino y femenino y principios de
igualdad, no jerárquica, entre los sexos-géneros”. También Carafa (1993:150) en sus
estudios sobre las comunidades bolivianas manifiesta que: “En el ámbito doméstico
existe prácticamente un equilibrio entre los distintos dominios de la pareja”.
Hemos visto en el estudio realizado por D’Emilio (1987:120) en las comunidades
amazónicas, que la complementariedad de los roles se observa también en la
“producción de bienes alimenticios, pues el trabajo masculino está orientado a la caza
y pesca (aporte por lo tanto de proteínas a la dieta alimenticia) mientras que la mujer
se dedica a la agricultura y recolección (carbohidratos y proteínas vegetales; el cultivo
del campo (la chacra) pertenece a la mujer, aunque el hombre participa en la limpieza
inicial del bosque”. En este caso, podemos decir, que la pareja (mujer y hombre) se
complementan unos a otros. Es decir, la mujer participa al lado del hombre en el
trabajo, desde la siembra hasta la cosecha y el cuidado de los animales y otros.
9 Hamilton, Sarah. 1995. “The Two-headed Household: Gender and Agricultural. Development in an Andean Setting (Cotopaxi Province, Ecuador)”. Tesis para obtener el grado de Ph.D. Citado en Cervone et.al. (1998:19).
35
De la misma manera, Choque (Cf.1999) también plantea que la concepción
generalizada de la sociedad indígena y la relación hombre - mujer al interior de la
misma, que se tiene hoy en día, es aquella que habla de la complementariedad y la
dualidad entre hombre y muje,r donde los dos son una unidad, resaltando en ella la
reciprocidad y la redistribución. Esta es una concepción donde se da por sentado que
la participación de la mujer en las comunidades es plena, en todos los ámbitos de la
vida dentro de ese contexto. Es decir, la relación hombre y mujer -kari-warmi - no es
excluyente sino que más bien es de mutuo apoyo y complementario.
Últimamente, están surgiendo otras voces que emergen desde dentro y fuera de las
comunidades. Estas voces emergentes se contraponen a esta interpretación,
sosteniendo que todo este constructo de reciprocidad, redistribución y
complementariedad, en el fondo encubre un fenómeno social al interior de las
comunidades indígenas, que se manifiesta en la desigualdad y subordinación de la
mujer frente al hombre. Al respecto, Choque (1999:142) manifiesta que:
La sociedad andina basa las relaciones de desigualdad, mediante una forma muy sutil de encubrir la subordinación. La desigualdad social fundada en relaciones de explotación en una sociedad donde todos son hermanos se encubren mediante relaciones de hermandad sanguíneas o ficticias; no está demás señalar que la sociedad andina basa su estratificación en una difusa diferenciación, que para los ojos foráneos aparenta uniformidad.
Choque también refuerza en la cita, dando una mirada generalizada de que la
complementariedad en las comunidades andinas que, en el fondo nos es como la que
hemos enfocado en nuestras citas, sino que más bien es una manera de encubrir las
relaciones de desigualdad. Por una lado, la diferenciación no está tan marcada por las
relaciones de hermandad, en el fondo estas relaciones ficticias de padrinazgo,
compadrazgo, ayllu, no permiten ver que dentro del sistema familiar hay una
explotación donde no hay complementariedad, sino las relaciones de desigualdad sutil
para encubrir la subordinación.
En cuanto se refiere a la subordinación, Stolen (1987)10 en sus estudios realizado en
las comunidades indígenas del Ecuador dice que “las relaciones entre hombres y
mujeres son jerárquicas y desiguales”. Por un lado, la subordinación de la mujer “se
mantiene no sólo a nivel familiar y local sino por los mismos gobiernos: se perpetúa la
separación del espacio público con el privado, lo productivo y lo reproductivo”
(Vázquez 1997:124). Por otro lado, ambos autores quieren decir que las mujeres son
10 Stolen, Kristi-Anne. 1987. A media voz. Relaciones de género en la sierra ecuatoriana. Quito: CEPLAES. Citado en Cervone et.al. (1998:20).
36
excluidas tanto de los procesos productivos, como la participación del ámbito público y
el acceso a las oportunidades.
Si bien considero que en la sociedad andina hay relaciones de desigualdad social,
éstas están por sobre la filosofía de vida de la cultura andina que cree en la dualidad
de todos los seres de la naturaleza, lo que se entiende como una relación recíproca de
complementariedad, en que ambos son necesarios e importantes.
Podemos manifestar que, en las sociedades andinas, hemos visto que el trabajo
doméstico es complementario, pero ¿qué pasa en el ámbito público, como las
organizaciones y la EIB? Allí desaparece lo recíproco. Es decir, la presencia de la
mujer se subordina frente a los cargos administrativos y toma de decisiones, si bien es
cierto que las comunidades indígenas están siendo cada vez más influidas por la
sociedad occidental, donde se ve una disputa de actividades asumidas del hombre y la
mujer.
2.1 Toma de decisiones en el hogar
En todo caso, lo importante para nuestra discusión es que la autoridad en el hogar, las
responsabilidades de la unidad familiar y “al proceso de toma de decisiones, las
mujeres parecen participar activamente en el proceso a nivel doméstico: cualquier
decisión es tomada conjuntamente por el marido y mujer, es más, no puede ser
tomada sólo por uno sin consultar al hombre” (Cervone et.al 1998:176). Es decir, las
decisiones son compartidas entre la pareja y se tiene que llegar a acuerdos mutuos.
En otros casos como en algunas comunidades de la provincia de Cotopaxi “el peso de
la opinión del hombre al momento de tomar decisiones es mayor que el de la mujer.
Una mujer rara vez decide por sí y ante sí; él en cambio, bien puede llegar a la casa a
comunicar la “buena nueva” de una decisión tomada” (Dueñas et.al 1997:89).
Podemos decir que la toma de decisiones según los distintos enfoques de las autoras
nos da entender que las decisiones de las mujeres tienen el mismo valor, pero en
algunos casos las decisiones del acuerdo mutuo pueden ser más aparentes que
reales.
37
2.2 Toma de decisiones en la comunidad
En el Ecuador, las mujeres indígenas en algunas comunidades tienen sus propias
formas organizativas, participan igualitariamente en las decisiones de las comunidades
(Cf. Hamilton 1995)11. En cambio, Stolen (1987)12 dice que “las mujeres no participan
formalmente en las decisiones comunitarias, sino que su voz se expresa a través de
las consultas que hacen a los varones a nivel del hogar”. Por eso, “la mujer, que está
acostumbrada a consultar a su marido antes de tomar cualquier decisión de interés
común se siente abandonada” (Poeschel 1985:130) cuando su esposo está ausente
del hogar, por situaciones de migración temporal lejos de su comunidad.
En cambio, en un estudio del caso peruano Harvey (Cf.1989:21), observa que las
mujeres de las culturas andinas “sienten que carecen de legitimidad en las asambleas
políticas; no usan el discurso oficial sino un discurso paralelo y, en esta medida, se
excluyen y son excluidas de tener la última palabra; son un grupo de presión”. De la
misma manera, (Harris 1985:32) cuestiona “la eficacia de la participación femenina
como proveedora del poder decisorio, ya que son los varones quienes definen -o por lo
menos son considerados así- los destinos de la comunidad”.
En otros casos, las mujeres no participan en las decisiones de la comunidad por que
“se considera que las mujeres poseen relación diferente con el lenguaje a la de los
hombres; ellas no tienen muy desarrollada la habilidad de hablar en público” (Carafa
1993:151).
Las mujeres en los contextos indígenas no han desarrollado su habilidad de hablar
frente al público, por lo tanto, no se sienten capacitadas para participar en la toma de
decisiones en las actividades político-representativas. Según Carafa, en general la no
participación de las mujeres en la toma de decisiones en los ámbitos públicos se
atribuye a su poco dominio público.
2.3 Actividades y trabajos comunales
En cuanto se refiere a la actividad de las mingas comunales, a pesar de que “éstas
cada vez tienen un mayor rostro femenino por la migración de los hombres, al
momento de pasar la lista, el nombre al que se responde es al del marido. Los pocos
hombres presentes en la actividad dirigen la minga y reparten el trago” (Dueñas et.al.
11 Hamilton, Sarah. 1995. “The Two-headed Household: Gender and Agricultural. Development in an Andean Setting (Cotopaxi Province, Ecuador)”. Tesis para obtener el grado de Ph.D. Citado en Cervone et.al. (1998:23). 12 Stolen, Kristi-Anne. 1987. A media voz. Relaciones de género en la sierra ecuatoriana. Quito: CEPLAES. Citado en Cervone et.al. (1998:23).
38
1997:88). De la misma manera, estos autores mencionan que “las organizaciones
mixtas, así como sus directivas y comisiones, están fundamentalmente integradas por
los hombres”.
Por otro lado manifiestan los mismos autores que “en el campo, aunque existe una
asignación genérica en relación a los espacios público y privado, estos [espacios] no
tienen una connotación antagónica ni excluyente. Así, si bien las mujeres
prioritariamente pertenecen al mundo de lo privado, participan masivamente en las
actividades comunales, como mingas, fiestas y celebraciones, mientras que los
hombres, asignados en lo fundamental a lo público, eventualmente incursionan en lo
privado, realizando tareas domésticas de cocina o cocinado” (op.cit:90-91).
En este caso, podemos dar una mirada que no hay una estricta separación entre lo
público y lo privado, ya que el hombre también en algunos casos puede asumir tareas
exclusivas de la mujer como bien dice la cita. Desde mi conocimiento, eventualmente,
es cuando los hombres logran asumir las responsabilidades cotidianas del quehacer
doméstico. Por ejemplo, el hombre en la comunidad Salasaca asume las tareas
cuando la mujer esta ocupada o esta enferma o, sólo cuando hay hijos y la mamá no
está.
Zúñiga & Gómez (1995)13 define el rol de las mujeres indígenas de Colombia,
señalando cómo las mujeres “participan en la producción de la fuerza de trabajo no
sólo teniendo los hijos y enseñándolos, sino además trabajando por el bienestar de la
fuerza de trabajo al proveer alimentación, hogar, servicios de mantenimiento de la
salud en el hogar, servicios de bienestar en el hábitat familiar, etc.: El rol productivo se
refiere al trabajo remunerado que realizan las mujeres para sostener o contribuir al
sostenimiento de la familia. Es el rol que desempeña paralelamente con el
reproductivo. Rol de gestora comunitaria se refiere a la participación cada vez más
comprometida de las mujeres en actividades comunitarias que muchas veces no son
más que formas de ampliar su papel reproductivo en el ambiente vecinal, configurando
una especie de ‘maternidad social’”.
2.4 Participación de la mujer en ámbito educativo
En los últimos años, la situación educativa de la mujer en el panorama mundial y en el
contexto específico de cada país ha ocupado un lugar bastante interesante. Por esta
razón, su análisis ha ocupado “tribunas internacionales, seminarios y programas de
13 Zúñiga, Miryan, Rocío Gómez. 1995. Sistematización de la experiencia de la Escuela de Madres de El Tambo. Cali: Univalle. Citado en Zúñiga (1997:50).
39
cooperación, reclamando una igualdad de oportunidades y participación que ya
ninguna nación de América Latina desconoce en cuanto a los principios, pero que, sin
embargo, todavía está lejos de lograrse en la realidad” (D’Emilio 1987:95).
En lo que se refiere a los pueblos indígenas de América Latina, desde 1970 han
venido cooperando los mismos indígenas con el apoyo de algunas instituciones
gubernamentales o no gubernamentales (GTZ), a un fortalecimiento de sus
organizaciones, ya sea en el ámbito local de cada pueblo o en ámbito nacional. Estas
organizaciones nacieron “sobre todo como respuesta al problema vital de la defensa
de sus territorios, han ido incorporando en sus reivindicaciones y el derecho a la
participación plena en las políticas socio-económicas y culturales que los atañen y el
derecho a la propia identidad étnica” (op.cit:96).
En cuanto se refiere a la formación docente femenina, en algunos países la tendencia
es hacia una división de las especialidades docentes por género. Cuando García habla
de la situación peruana dice que, quien domina el sector del magisterio, son las
mujeres. Al respecto manifiesta que “mayormente las mujeres son las que se
especializan en la educación inicial, siguiendo la tendencia que se da en la educación
nacional” (García 1998:5).
Por un lado, el problema de la limitada presencia de mujeres en el ámbito educativo,
es por el “escaso número de mujeres que terminan la educación secundaria en
algunos pueblos indígenas, lo que ocasiona que existan pocas mujeres que postulen a
centros de formación” (Ibid). Por otro lado, en el caso de las poblaciones indígenas
con más “tiempo de relación con la sociedad envolvente y en los cuales se ha notado
cada vez mayor número de mujeres que acceden a la formación profesional,
encontramos la misma tendencia mostrada a nivel nacional: que la profesión educativa
está siendo ejercida cada vez más por mujeres” (Ibid). Por su parte, Harvey (1989:28)
también manifiesta que, especialmente en las zonas rurales del contexto peruano los
maestros “son con frecuencia mujeres, pero como en otras áreas de la administración
estatal, las mujeres sólo están representadas en grandes cantidades en los niveles
más bajos, y en las escuelas primarias rurales son con seguridad el nivel más bajo”.
En este caso, podemos ver que el magisterio está siendo feminizado a nivel nacional
del Perú y otros países como Ecuador, porque las mujeres copan los niveles iniciales y
primarios. Frente a este problema, una autoridad educativa manifestó “en el campo
educativo, últimamente en el país se ha dado un vuelco total, porque antes era
solamente para hombres, poco a poco se ha ido perdiendo valor... se ha ido relegando
a una cuestión de mujeres, los hombres hemos dejado a la educación porque hemos
40
considerado como una profesión no apta para hombres, sino que está más dedicada a
las mujeres” (Entrevista CPAE:34).
En el Ecuador, según la estadística del año 2000, en la jurisdicción bilingüe de la
provincia de Tungurahua se verifica que existen más profesionales hombres que las
mujeres dentro del campo educativo. Sin embargo, en los primeros niveles de la
educación es evidente, la presencia mayoritaria de las mujeres. Porque algunos
hombres “se dedican a ser ingenieros, médico, abogados... la educación no debe ser
considerada como una profesión de segunda categoría” (Ibid).
También podemos manifestar, que algunas mujeres no tienen opción a otra carrera
que a la docencia. Ven esta profesión como un camino más rápido de llegar a sus
fines, o a veces la mujer se obstaculiza por el factor económico, quedando sus sueños
truncados sólo en la docencia. Entonces, algunas de las situaciones señaladas nos
permiten entender la feminización en el ámbito educativo en cuanto a la docencia en
niveles primarios.
3. Enfoque y perspectiva de género
En cuanto se refiere al enfoque de género, es una manera de mirar el mundo,
interpretarlo y entenderlo. Por lo que el enfoque de género da la “posibilidad de mirar y
hablar de las mujeres y de los hombres, de la manera cómo la sociedad ha entendido
lo que es ser mujer u hombre, de los impuestos culturales y roles que les han sido
asignados y transmitidos de generación en generación a través de la crianza y la
educación” (Mazo 1997:160). Además, manifiesta que con esta óptica y esta mirada,
“se permite “desnaturalizar” lo que la cultura ha hecho como natural en términos de los
comportamientos y de las formas de relación entre los géneros y de éstos con el
mundo; en términos de los que según la cultura “les compete”, por el hecho de haber
nacido mujeres u hombres en esta sociedad de corte patriarcal” (Ibid).
Los estudios que adoptan “el enfoque de género, ampliamente difundido en los
noventa14. Se habla de un “enfoque” pues a partir de la formulación del concepto o
categoría género se está construyendo toda una línea de pensamiento académico y
político, para interpretar y transformar las desigualdades sociales entre mujeres y
varones” (León 1995:316).
Por tal razón, el enfoque de género, permite expresar, “las relaciones de género
desiguales, las desventajas para las mujeres, la desigualdad de oportunidades, la
14 “En ocasiones llega a tener un uso indiscriminado y poco riguroso, confundiéndose como “sinónimo” de mujeres, y que goza de mayor estatus y legitimidad académica” (León:1995:316)
41
discriminación de las mujeres en todos los campos de la vida” (Mazo 1997:160). Por
una parte, el enfoque de género, “como construcción social y cultural, nos permite
además de develar una problemática histórica y ancestral, construir alternativas de
transformación y modificación de mitos, creencias, valores y relaciones entre personas
y formas de relacionarnos con el mundo, los espacios, los oficios entre otros” (Ibid).
Por otra parte, el enfoque de género ha permitido explicar la acción protagónica de la
mujer, “en los espacios políticos y socio-culturales y en consecuencia descubrir el
ocultamiento del trabajo productivo, pero no valorado socialmente de la mujer en la
casa” (Lagunas 1995:364).
En cambio, la perspectiva de género es la posibilidad que nos da el enfoque del
género, de “mirar con proyección, no quedarnos con lo que aparece con respecto al
deber ser de mujeres y hombres; nos permite atravesar con la línea perspectiva, todas
las situaciones en las que las mujeres y hombres participan o pueden llegar a
participar; con la mirada puesta en las implicancias y los efectos de los que la
sociedad haya naturalizado la discriminación, la subordinación y la desigualdad de
oportunidades para las mujeres” (sic. Mazo 1997:160).
Las diferentes situaciones con las que afrontan las mujeres en general hasta hoy, han
sido mediante habilidades y capacidades que pueden adquirir para modificar su
relación con el mundo privado y lo público, esta serie de situaciones han sido ubicadas
a través del enfoque y la perspectiva de género.
La perspectiva de género se restablece entonces en un método y una herramienta
pedagógica que facilita a la investigación, “la descontrucción y construcción de nuevos
conocimientos, nuevas actitudes y modificar su posición frente al mundo como un
sujeto con conciencia y dignidad de género” (Mazo 1997:160).
3.1 Concepción sobre el género
El componente temático sobre el género generalmente se inicia como un proceso de
“sensibilización de las mujeres sobre su aquí y ahora, en el cual se dan oportunidades
para que ellas reconozcan su condición social y valoren su desempeño social por la
cantidad de tareas que deben realizar, de funciones asignadas a su género, y de
tiempo que invierten, articulados con el bajo aprecio social por su trabajo” (Zúñiga
1997:47).
La concepción de género en el ámbito indígena es la relación entre lo masculino y lo
femenino, hombre y mujer. En este sentido, iniciaremos la reflexión sobre la
importancia de este concepto, entendiéndolo como la relación directa entre hombres y
mujeres en la toma de las decisiones como parte de la democracia participativa.
42
El género es concebido como una categoría relacional que incluye pero no se limita a
mujeres: en contraste se refiere al entendimiento de la construcción histórica de la
organización social de saber sobre la diferencia sexual (Scott, 1988)15. En esta
concepción, “el género no se refiere a las diferencias físicas naturales, sino al saber
social que establece significados (que son variables, contradictorios y debatidos) para
esas diferencias corporales” (Clark 1995:221).
En cambio, en la definición ya clásica de (Joan W. Scott 1990)16, el género es “un
elemento constitutivo de las relaciones sociales basadas en las diferencias que
distinguen los sexos y una forma primaria de relaciones significantes de poder”. De
ese modo, Laguna (1995:360) interpreta la conceptualización de Scott como “una
relación de poder y por lo tanto jerárquica; indica la supremacía del varón y la
subordinación femenina”. El surgimiento de esta categoría dio al debate de las
feministas académicas, matizando la subordinación de la mujer, explicitando el
sistema sexo –género como una forma más clara de explicar la desigualdad entre
hombres y mujeres. Por consiguiente, la definición nace “de un análisis de las distintas
corrientes y vertientes del pensamiento teórico feministas e intenta definir el concepto
de género como una categoría analítica” (Celiberti 1997:68).
El segundo aspecto fundamental en la definición de Scott (1990) sobre el género es el
que se refiere a las relaciones de poder:
El género es el campo primario dentro del cual o por medio del cual se articula el poder. No es el género el único campo, pero parece haber sido una forma persistente y recurrente de facilitar la significación del poder... Establecidos como conjunto objetivo de referencias, los conceptos de género estructuran la percepción y la organización, concreta y simbólica, de toda la vida social. Estas referencias establecen distribuciones de poder (control diferencial sobre los recursos materiales y simbólicos, acceso a los mismos), el género se implica en la concepción y construcción del propio poder (Scott 1990)17.
Celiberti (1997:69) comenta que la definición de Scott y los trabajos teóricos
posteriores han abierto un campo riquísimo a la conceptualización sobre género. La
producción teórica se encuentra en una fase de gran creatividad y diversidad pero
también de divergencia.
Por una parte, Camacho, autora del artículo ”Capacitación de educadoras
comunitarias”, realiza una definición innovadora para la práctica de la pedagogía de
género y mirar al mundo con otros ojos, para construir y sintetizar las ideas
15 Scott, Joan W. 1988. Gender and la politics of History. New York: Columbia University Press. Citado en Moscoso (1995: 221). 16 Scott, Joan W. 1990. El género: categoría útil para el análisis histórico- Historia y género. S/L. S/Ed. Citado en Celiberti (1997:68). 17 Ibid.
43
reconociendo las diferencias, la valoración de lo subjetivo, lo local, lo cotidiano. Al
respecto señala:
El género es algo que se construye. Lo construyen hombres y mujeres con una intencionalidad común que es buscar el empoderamiento de la mujer respecto a ella misma, en la toma de decisiones en su grupo, en la comunidad local y en la política, en el sentido más amplio (Camacho 1997:143).
Otra autora en la misma línea sostiene que: “El género se construye a través de las
relaciones de parentesco pero no exclusivamente; la economía, el mercado de trabajo
segregado por sexos, la educación y la política tiene un papel fundamental en esta
construcción” (Celiberti 1997:69).
En cambio, hemos visto que (Moser 1991)18 menciona que la definición de género no
se refiere a los hombres y a las mujeres, “sino a la relación entre ambos y, en
consecuencia al modo como estas relaciones se construyen socialmente. Lo más
importante es tener en cuenta que, en nuestros días, se puede, a priori, identificar el
sexo de la gente, pero no el género de las personas, puesto que, como es una
categoría social, su constitución varía de una sociedad a otra, de una clase a otra”. La
importancia de este concepto de género señala al mismo tiempo, las diferencias de
sexos, enfatizando la idea de género como una categoría social.
Por otro lado, es necesario también mencionar las dificultades de uso del término
género, es una dimensión compleja. Es decir, “la masificación del término “género”,
está contribuyendo a su vulgarización y simplificación. Muchas veces, al hablar de
género, se piensa en las mujeres y no en las relaciones sociales de género” (Celiberti
1997:69) También Beatriz (1992:53) sostiene que “género, por lo tanto, no es sinónimo
de mujer.
4. Elementos que obstaculizan la participación de la mujer
La situación de las mujeres en Latinoamérica está caracterizada por la pobreza, la
violencia dentro y fuera de la familia que en muchísimos casos “ejerce sobre su vida
cotidiana una presión y un miedo constantes, y finalmente, por la escasa participación
que tienen en procesos de decisión política en todos los niveles, lo que dificulta que
sus voces sean escuchadas y sus determinaciones sean tomados en cuenta” (Jung et
al. 1996:2).
Por otro lado, la debilidad de las mujeres frente a la pobreza “se ve agravada además
por la excesiva carga de trabajo como consecuencia de la doble jornada, que las deja
18 Moser, Carolina. 1991. “La planificación de género en el tercer mundo: enfrentando las necesidades prácticas y estratégicas de género”. En: Guzmán, Portocarrero, Vargas (compiladoras). Género en el desarrollo Perú: Entre mujeres. Citado en Beatriz (1992:52).
44
sin ningún espacio para el desarrollo personal. Los menores niveles de educación,
salud y tiempo libre repercuten en su limitada participación en los procesos de toma de
decisiones a nivel familiar, local y nacional” (Vázquez 1997:120).
La limitada participación y toma de decisiones de las mujeres de sectores indígenas y
populares ha sido explicada desde varios ángulos por diferentes autores.
En cuanto a la que se refiere a imagen y modelo de mujer, “[se la] subordina a un
espacio: el hogar y el fuego, a la privacidad, a la constitución de lo interno y de lo
externo. La apropiación espacial femenina aparece con la madre y que luego la hija
suplanta tempranamente para merecer su constitución como sujeto de sentido social
(Montecino S/a:42).
Mazo (1997:162) también reconoce que la imagen y el modelo de mujer impuestos por
la cultura, se reproduce a través de la socialización, la educación tanto formal como
informal. Estas atribuciones que impone la cultura invisibilizadora, inequitativa,
subvalorada, borradora de la diferencia y de la especificidad de ser mujer, relegan a
las mujeres a enfrentar solamente la vida doméstica.
Con respecto a lo doméstico, habría dos elementos importantes que impiden la
participación de la mujer, la sobrecarga de trabajo es el fenómeno que se desarrolla
a través de la migración masculina, sobre todo en los sectores rurales (indígenas y
campesinos), donde la mujer “asume el papel de jefa de hogar y la responsabilidad de
la producción agropecuaria en la parcela familiar, sustituyendo al varón que migra, ya
en forma temporal o definitiva. Para las mujeres que permanecen en el área rural, la
migración significa soledad y sobrecarga de trabajo” (Llanos 1997:195).
Por otro lado, “la oposición e inclusive hostilidad de sus esposos cuando empiezan
a participar en reuniones de mujeres (clubes de madres, comités, etc.) y en
organizaciones políticas. Las razones son múltiples, desde el miedo al descuido del
trabajo doméstico hasta el temor de relaciones extramatrimoniales” (D’Emilio
1987:130). Asimismo, Ramírez (1997:197) reconoce como perjudicial el trato
autoritario de dirigentes, esposos y padres frenan, en gran parte, las decisiones dentro
del hogar o en las mismas organizaciones de mujeres.
Otra elemento identificado por varios autores como decisivo se refiere a la
expresividad de las mujeres indígenas en el ámbito público, por la falta de
competencia bilingüe, la cual se manifiesta en “sentimientos de vergüenza y timidez”
(Harvey 1989:22). Además, la misma autora señala que las mujeres que representan
en los cargos de poder permanecen, en el mejor de los casos, silenciosas, en el peor
de los casos son objeto de burla por parte de los varones; con frecuencia, son
45
representadas sólo a través de las figuras burlescas de hombres disfrazados. Del
mismo modo, Ramírez (1997:197) señala que las “condiciones características de
atraso, discriminación, subordinación, autosubvaloración y otros condicionamientos, le
impiden ejercitar su capacidad expresiva”.
Finalmente, se ha identificado a la educación como es un factor decisivo para explicar
la desigualdad de oportunidades de participación de mujeres indígenas y de sectores
populares. El alto porcentaje de analfabetismo en las mujeres indígenas, dificulta la
participación y la toma de decisiones en el plano de la administración pública, así
como el “menor nivel educativo por parte de las mujeres, mayor desinformación y por
lo tanto menos capacidad de negociar y ganar reconocimiento” (Ramírez 1997:177).
“Los efectos de una educación sexista que habilita a las mujeres en asuntos
exclusivos al rol socialmente y tradicionalmente asignado a las mujeres y que gira
alrededor de su papel materno” (Mazo 1997:162). Hay pocas mujeres indígenas y de
sectores populares que acceden a los niveles de educación primaria, secundaria y la
universidad, “lo cual niega cualquier libre opción de desarrollo humano que se salga
del impuesto” (Ibid). Como no llegan muchas mujeres indígenas y campesinas a los
niveles indicados, no les queda otra opción que las restringen a desempeñar el rol de
madres y el hogar.
Con estás referencias teóricas, son evidentes las dificultades que la mujer indígena y
campesina enfrenta en el mundo, como las situaciones culturales, la desigualdad de
oportunidades, la desvaloración, el analfabetismo, el monolingüismo entre otros, que
obstaculizan la participación democrática.
Para entender las razones profundas donde se originan las desigualdades de género o
cómo se perpetúan en las mujeres, es menester detenernos en el complejo proceso de
la socialización.
Es preciso considerar el papel que las mujeres desempeñan en la etapa de
“socialización primaria de las nuevas generaciones, es decir en el proceso de
interiorización de la realidad social por parte de los niños” (D’Emilio 1987:131).
Como observan Berger y Luckmann (1969:201)19 “el niño no interioriza el mundo de las
personas para él importantes como uno de los muchos mundos posibles; lo interioriza
como el mundo, el único mundo existente, el mundo tout court (“a secas”, t.d.a); por
eso el mundo interiorizado en la socialización primaria es tanto más radicado en la
19 Berger, Peter y Luckmann. 1969. La realta come costruzione sociale, el Mulino, Torino; Tit. Orig: The Social Constructin of Reality, Garden City; Double day and Co., New York, 1966. Citado en D’Emilio (1987:132).
46
conciencia de cuanto lo sean aquellos interiorizados en las socializaciones
secundarias”. Es decir, la escuela aliena culturalmente al niño, pero gracias al
cercanía y la interiorización de la mujer como madre detiene el proceso de
aculturación. Por un lado, muchos estudiosos sobre este caso, han constatado a la
mujer como la que cuida ese proceso de la socialización y que atribuye un rol
importante a la cultura, ya que la mujer transmite sus valores culturales de generación
en generación. A pesar, de mantener normas y valores que enriquecen a la etnia, en
algunos casos, esto también es visto como un aspecto negativo, porque creemos que
es difícil salir o cambiar estos modelos que se dan en cada sociedad. Así como
D’Emilio (1987:132) dice: “La personalidad modelada desde la más temprana edad
según normas y valores de la propia etnia, se siente amenazada en su identidad y en
su unidad por otras normas y valores impuestos y por lo tanto pueden frenar el
proceso aculturativo”.
En el texto “Modernidad, pluralismo y crisis de sentido” estos autores indican que en el
proceso de socialización “existen, si no grietas reales, al menos pequeñas fisuras”
(Berger & Luckmann 1997:82). Al respecto, podemos manifestar que cualquier
socialización no alcanza a un cien por cien, porque los seres humanos desde que
nacen tienen diferentes actitudes, por eso el niño no es un recipiente vacio. Por
ejemplo, la niña o el niño tienen diferentes maneras de concebir al mundo, a veces la
sociedad impone para modelarlos desde el inicio. Es decir, la niña como mujer y el
niño como hombre, aceptar que el niño reciba el mundo como viene, es ahí donde la
madre juega un rol fundamental de proteger, como el caso de una educación y una
cultura alienante “y es en este sentido que se señalaba la probabilidad que gracias a
las mujeres se hayan reducido los efectos negativos de una educación formal
culturalmente alienante” (D’Emilio 1987:132). Por otro lado, el niño que no logra
concebir la socialización de la madre y el padre, el niño crea su identidad o su propio
mundo con la que la madre y la sociedad le da, en esa socialización hay fisuras, por
eso encontramos con niñas y niños rebeldes, reacios, serios, tristes, etc., este hecho
humano permite entender por qué las culturas son diferentes, aun reconociendo esas
diferencias totalmente homogéneas, la sociedad ha implantado los bloques de mujeres
y hombres reduciendo a los seres humanos a dos únicos modelos.
A pesar de que el proceso de socialización “fomenta o reprime en uno y otra
determinados comportamientos, los resultados no siempre son tan uniformes como se
quisiera y esperar; de allí que ni hombres ni mujeres son totalmente homogéneos
entre sus respectivos pares ni tan diametralmente diferentes a sus contrarios; y
aunque la sociedad logra reducir a las personas a dos únicos modelos (mujer y varón)
47
las trata como si lo hubiese conseguido evitando que unos y otras sean conscientes de
sus similitudes” (Marques 1997)20
En estudios realizados por Mansilla (1993:164) en la situación peruana dice:
Por el hecho de nacer mujer, la niña tiene ante sí dos posibilidades: o acepta los estereotipos sexuales y asume limitaciones que conllevan o los rechaza enfrentando las críticas y la presión social. Si por un lado se carece de canales de formación de la identidad femenina, por otro lado se socializa a las niñas bajo un modelo que separa su ser individual y social, obligándolas a visualizar sólo partes de sí que se diluyen y desintegran. Esta socialización las reafirma en una baja autoestima.
Si damos una mirada a la cita, podemos afirmar que la socialización del hogar hacia
las niñas indígenas y campesinas, es un factor fundamental para que éstas desarrollen
las capacidades de autoestima, autovaloración de sí mismas y así en la vida futura
puedan involucrarse en cualquier espacio que se les presente.
De la misma manera, “los hijos varones son los depositarios de los diferentes saberes
y destreza trasmitidos de padre a hijos, para pasados los años argumentar la
superioridad masculina frente a las mujeres, a quienes desde pequeñas se les privó
del acceso a esas habilidades y conocimientos” (Dueñas et.al. 1997:59-60).
El niño sólo por haber nacido varón, se siente con más poder y oportunidades, antes
de asumir roles o aprender sus atributos. En cambio, la mujer se interioriza un
sentimiento de baja autoestima por hecho de haber nacido mujer. Estas diferencias,
más tarde, crean una complejidad en la niña configurándose como un ser inferior al
hombre.
De lo expuesto podemos decir que la identidad femenina es, entonces la constitución
colectiva de una subjetividad construida en la socialización dentro del hogar, donde la
mujer se construye la idea de que vale menos que el hombre, por tal razón, en algunos
casos la mujer ha negado su participación en las organizaciones y en la EIB, espacios,
atributos y actividades vinculados al poder y la administración pública.
En cuanto se refiere a la valoración de la niña en algunos hogares, desde el primer
momento de su nacimiento reciben la subvaloración o valoración de sus padres o los
familiares. Por ejemplo, en el caso de El Salvador “el nacimiento de un niño es
celebrado matando una gallina, las mujeres que paren niñas “no se ganan la gallina”.
Las parteras tienen tarifas diferenciadas y cobran más caro sus servicios cuando el
recién nacido es niño” (Vázquez 1997:121). En el caso de los quechuas, “además se
20 Marques, Joseph-Vicent. 1997. “Varón y patriarcado”. En: (ed. Teresa Valdés y José Olavaria) Masculinidad/es, poder y crisis. Santiago: ISIS Internacional, FLACSO. Citado en Dueñas et.al. (1997:61).
48
considera que si el primer nacido en un matrimonio es una mujer, ella traerá suerte,
pues asegurará prosperidad, seguridad de provisiones y estabilidad” (D’Emilio
1987:127).
Ante este panorama de visiones y posiciones de los autores, veremos en nuestros
resultados qué pasa o cuál de las posiciones apuntan a un acercamiento más real a la
participación de la mujer indígena, en especial de mujer salasaca
49
CAPÍTULO IV. PRESENTACIÓN DE RESULTADOS
1. Una visión del pueblo Salasaca
Las partes que corresponden a la visión del pueblo Salasaca y el ciclo de vida
salasaca, están basadas en la experiencia y observaciones de la investigadora,
apoyada con estudios de autores de esta etnia en los puntos necesarios. Por tal razón,
he considerado que no hace falta que tenga una información de los actores, ya que
soy parte de la vivencia del pueblo Salasaca.
1.1 Caracterización geográfica
El pueblo Salasaca, ubicada en el cantón Pelileo de la Provincia de Tungurahua,
ocupa una extensión aproximada de 14 Km². Está situada a trece kilómetros de la
ciudad de Ambato y a cinco de Pelileo, capital del cantón del mismo nombre. Está
atravesada por la carretera asfaltada, Ambato-Pelileo-Baños-Puyo. La jurisdicción
parroquial limita al norte con el río Pachanlica; al este con el caserío Chiquicha; al sur
con las parroquias García Moreno, Tambo, Guantugsumo, Teligote, Benítez y la
Quebrada de Mazabacho; al oeste con la hacienda Albornoz y el Río Pachanlica
(Choque 1992:7). La población, calculada por los dirigentes de la comunidad, es de
10.000 habitantes21.
El pueblo Salasaca está dentro de la Organización Zonal de la Provincia de
Tungurahua llamada “Unión de Indígenas Salasacas” reconocida con las siglas de
“UNIS”, que abarca a los salasacas que habitan en las parroquias El Rosario, Benítez
y la Matriz Pelileo. La parroquia Salasaca actualmente está conformada por 18
comunidades: Huasalata, Chilcapamba, Patuloma, Manguihua Cochapamba,
Manzanapamba Grande, Manzanapamba Chico, Sanjaloma Alto, Sanjaloma Bajo,
Centro Salasaca, Jatún Rumiñahui, Rumiñahui Chiquito, Rumiñahui Alto ó Pintag,
Capillapamba, Llicacama, Ramosloma, Vargaspamba, Huamanloma, y Curi Ñan. Cada
una de estas comunidades está representada por los Cabildos22 y los cabecillas23.
Salasaca jurídicamente fue reconocida como Comuna según el Acuerdo No. 4044 con
fecha 22 de junio de 1962. Diez años después, la comunidad se constituye como la
21 Cifras de la población según los dirigentes de los cabildos de cada comunidad. 22 El Cabildo es el representante máximo de la comunidad. Son nombrados cada año mediante voto de la asamblea comunal. El cabildo está conformado por el presidente, vicepresidente, secretario, tesorero, síndico y vocales. Cada uno de ellos tiene diferentes funciones. Sin embargo, todos se coordinan y se dedican a las actividades en beneficio comunal; por ejemplo, mantener el orden de la comunidad, realización de obras, mingas y velar por el bienestar y desarrollo de la misma. 23 El cabecilla es un representante nominado por cada comunidad; es decir, este es el encargado de coordinar con los dirigentes de las comunidades y de la Organización UNIS. Sus funciones principales son: llevar mensajes, convocar a las mingas, a las reuniones de la comunidad y la organización, apoyar al presidente del cabildo en la gestión dentro y fuera de las comunidades.
50
Parroquia Rural Salasaca, según consta en el Acuerdo No. 112 con fecha 10 de julio
de 1972. Desde ese momento, los salasacas eligieron por primera vez al Teniente
Político24 indígena. A pesar de ser reconocida como parroquia, los pobladores
prefieren llamarla “la comunidad Salasaca” hasta el momento.
Al crearse Salasaca como parroquia se fundaron las quince comunidades.
Posteriormente, con el crecimiento demográfico, se ha conformado Salasaca de
dieciocho comunidades o caseríos ya indicadas en la página anterior. Cabe señalar
que la comunidad en estudio es el centro de la parroquia, por tal razón, lleva el nombre
de la comunidad Centro Salasaca. Por los años 80, la mitad de la comunidad era
conocida comunidad Manzana Pamba Grande y la otra mitad comunidad Rumiñahui
Grande. Un grupo de comuneros vio la necesidad de independizarse para lograr
mayor desarrollo porque este centro de la parroquia es considerado como un sitio
turístico debido a las ferias que se realizan los días domingos y las fiestas
tradicionales. Don Carlos Jerez fue el primer cabildo de esta comunidad, quien con su
empeño elaboró el estatuto junto con otros compañeros para adquirir el alcantarillado y
otras obras. La comunidad Centro Salasaca, en la actualidad, cuenta 102 familias
aproximadamente, según las listas de los dirigentes. Es la primera comunidad entre
las dieciocho que cuenta con servicios básicos necesarios. Hoy por hoy, la comunidad
cuenta con la presencia de profesionales indígenas salasacas como profesores,
licenciados en diferentes ramas, un sacerdote, abogados y dos médicos.
Los servicios básicos y las instituciones públicas que funcionan en la parroquia
Salasaca son: luz eléctrica, teléfono, agua entubada, alcantarillado, tenencia política25,
sub-centro de salud, el mini hospital Jambirina Huasi,26 registro civil, iglesias: católica y
evangélica, convento de monjas, correo, oficina de la organización y algunas casas
comunales. Esta parroquia en la actualidad cuenta con siete centros educativos de los
cuales tres son centros bilingües, jardines de infantes, guarderías y un colegio
bilingüe. Las escuelas se hallan repartidas en las diferentes comunidades de la
parroquia.
Salasaca es un centro turístico muy importante de la provincia de Tungurahua. Es
visitada en los días de feria y festivos por turistas nacionales y extranjeros inclinados a
observar las peculiaridades culturales de este singular grupo étnico dedicado a la
artesanía del tejidos y agricultura.
24 Es el encargado de intermediar en las diferencias que se suscitan entre los moradores y caen bajo el Derecho Personal (Poeschel 1985:32) 25 Es el centro donde acuden los comunarios para resolver sus problemas personales y comunitarios. 26 Casa de Salud.
51
1.2 El espacio parroquial
Salasaca se encuentra ubicada entre los 2.500 y 3.000 metros sobre el nivel del mar.
Según Maggio (1970:207)27 está en la clasificación ecológica de “bs-MB”, bosque seco
montaño bajo. Las características climáticas de esta formación son: temperaturas
medias entre 12º y 18ºC con precipitaciones pluviales entre los 500 y 1.000 mm, su
formación topográfica es plana y ondulada. El clima de esta zona sufre alteraciones
debido al desplazamiento de masas de aire que son arrastrados por corrientes de
vientos procedentes del Oriente que moderan el clima. En otras ocasiones es muy
benigno.
En lo que se refiere al relieve salasaca, éste se encuentra dentro del sistema
montañoso de la Cordillera de los Andes, en la región interandina o sierra, ya que a
pesar de encontrarse en el valle, su territorio constituye una planicie de suelo arenoso
rodeado de grandes montañas, nevados y volcanes. De acuerdo a este relieve,
Salasaca se divide en tres zonas: alta, media y baja. La zona alta corresponde a la
comunidad Pintag o Rumiñahui Alto o Teligote. En la zona media están las
comunidades Patuloma, Manguihua Cochapamba, Manzanapamba Grande,
Manzanapamba Chico, Ramosloma, Capillapamba, Llicacama, Sanjaloma Alto,
Sanjaloma Bajo, Centro Salasaca, Curi Ñan, Rumiñahui Grande, Rumiñahua Chiquito,
Huaman Loma y Vargas Pamba. La zona baja corresponde a las comunidades
Huasalata y Chilcapamba, con un clima cálido y terrenos óptimos para la producción.
El sistema hidrográfico de la parroquia se reduce al río Pachanlica, a partir del cual
nacen las acequias Mondongo, Canal Pachanlica o Sevilla, Albornoz Naranjo y el
Canal Huachi-Pelileo capta las aguas del río Ambato, lo que hace que este nuevo
canal riegue a los suelos de todo el pueblo.
En la agricultura, el tipo de suelo arenoso diferencia a Salasaca de otras comunidades
de los valles de la región (Pelileo, Patate, Píllaro, Quero y otros) que son
caracterizados por su buena producción de exportación tanto nacional como
internacional. En cambio, en Salasaca es escasa la producción de papas, legumbres,
gramíneas, frutas y otros alcanzan para su autoconsumo, sólo en la época de capulíes
(enero- abril) aportan las mujeres este producto a las ferias de Pelileo y Otavalo
(sábados), Quero (domingos), Ambato (lunes y viernes) y Cevallos (jueves). Cabe
indicar que estas tierras producen pencos y cabuyas, cuyas fibras son utilizadas para
confeccionar el tejido de sogas, shigras y costales. A esta actividad generalmente se
27 Maggio, P. 1970. Aplicación Agrometereológica en el Ecuador, Instituto Ecuatoriano de Recursos Hidráulicos, INERHI. Quito. Citado en Poeschel (1985:24)
52
dedican ancianos y mujeres. Las shigras, costales y sogas de cabuya son ofrecidos en
las ferias ya descritas anteriormente. Para los pobladores, las raíces del penco y las
hojas de la cabuya sirven para el lavado de su pelo. El zumo del penco o tzawar
mishki28 es usado para la bebida o para la preparación de coladas (arroz de cebada,
api). También sirve de alimento para el ganado vacuno. En la actualidad, se realiza el
encuentro de música, danza y pintura denominado “Tzawar Mishki”29 con la finalidad
de ofrecer este producto y otros a quienes la visitan.
En Salasaca, las tierras pertenecen a cada familia. Estas propiedades son divididas
por los herederos al momento de fallecer el padre y no así de la madre. Por un lado, la
parroquia “tiene derecho al usufructo de tierra comunal en el cerro de Teligote donde
recogen plantas medicinales y hierbas para tinturar sus propios vestidos” (Poeschel
1985:39). La recolección de plantas medicinales y tinturación son realizados una vez al
año (septiembre y octubre) por los comuneros, especialmente jóvenes (hombres y
mujeres). Esta zona es el único espacio comunal, actualmente bastante reducido,
porque cada vez esta siendo expropiado por los mestizos o blancos. Por otro lado, las
tierras en las zonas de límites con otras parroquias y dentro de la misma comunidad
están siendo vendidas a personas de otros lugares como: Nitón, Riobamba (indígenas)
y mestizos que están cerca de la población. Esta situación preocupa a algunos
pobladores y especialmente a la organización. Por esta razón, la Unión de Indígenas
Salasacas (UNIS), últimamente ha prohibido rotundamente la venta de tierras a
personas no originarias del pueblo Salasaca con fines de preservar su territorio, su
lengua y su cultura.
Actualmente, en el pueblo Salasaca existe una variedad de viviendas, desde las
chozas tradicionales hasta casas de construcción moderna de dos a tres pisos. Cabe
señalar que las mejores casas están ubicadas en la comunidad Centro Salasaca, las
mismas que disponen de los servicios básicos necesarios. A lo largo de Salasaca se
puede observar casas de bloques30 con techo de tejas, zinc, cubiertas de cemento
armado que han sido construidas en estos últimos veinte años y, en mínima cantidad,
28 Esta bebida extraída del penco de la cabuya en su último ciclo de la vida se utiliza como dulce, uso medicinal puede ser fermentado para convertirse en licor. De cada planta salen alrededor de cuatro litros cada día. Luego de seis meses se secará y morirá la planta y en su reemplazo se sembrará una nueva, que luego de 15 años alcanzará la dimensión y seguirá brindando este jugo medicinal a las futuras generaciones. (Diario Hoy 31-10-2000) 29 En el “Encuentro Cultural Tzawar Mishki”, se reúnen pueblos y nacionalidades indígenas afroecuatorianas y no indígenas para presentar lo mejor de la danza, música, pintura y artesanía (Ibid). 30 Son hechas con la mezcla de cemento, cascajo y arena. Luego la mezcla de los componentes señalados es puesta en un molde rectangular de hierro. Los moldes tienen una medida de 10X25 y 14X25 centímetros.
53
se observa la existencia de chozas, estas últimas son consideradas por los comuneros
reliquias del pueblo.
1.3 Artesanía y vestimenta
En lo que se refiere a la artesanía, los salasacas a lo largo de la historia han sido
conocidos por su habilidad y ávidos a los tejidos de los chumbis (fajas), ponchos,
bayetas, rebozos y hoy a la manufactura de los tejidos de tapices que constituye el
principal rubro económico. Este tipo de artesanía permite establecer contactos con las
provincias de Imbabura, Pichincha, Azuay, Chimborazo y Tungurahua. También han
sido comercializados con otros países como Alemania, Estados Unidos, Francia,
Inglaterra, España y otros.
En cuanto a la vestimenta, “constituye uno de los rasgos propios de su autoctonía. Por
él precisamente, se diferencia de los demás grupos aborígenes” (Barriga 1988:73). El
hombre usa calzón y camisa blanca de lienzo, dos ponchos largos negro y blanco, en
su hombro y cuello lleva un rebozo o varimidia de color morado o rojo de lana,
sombrero de lana blanca, redondo y con falda ancha adornado con hilos de lana como
rojo, morado, verde y blanco, y en su cintura utiliza chumbi o faja de lana. En cambio,
la mujer salasaca usa anaco negro, rebozo, varimidias sostenida a la altura del pecho
con un tupo, aretes largos y collares de coralina o coral, camisa con bordados, chumbi
que sirve para sostener el anaco, sombrero al igual que el hombre y alpargatas de
fajas. Sin embargo, actualmente, el uso de la vestimenta salasaca está en decadencia,
especialmente en los jóvenes hombres que migran a las ciudades y no así en las
mujeres que todavía conservan su ropa tradicional. Pese a esta decadencia, el pueblo
Salasaca mantiene un apego fuerte a las tradiciones culturales.
1.4 Historia del pueblo Salasaca desde los diferentes autores
La versión sobre el origen de los Salasacas según Alfredo Costales (1954:63-64)31 es
que: “el Salasaca es un grupo ‘Mitimacuna’ que podríamos clasificarlo en una de las
categorías señaladas por Cieza de León; según el cual eran hombres ‘que servían
para realizar una especie de colonización interior con el objeto de poblar tierras sin
hombres’. Así pues es el Salasaca un Tiawanaco trasplantado a las sombras del
Tungurahua y el Teligote con todas las virtualidades del inmortal imperio, cuyas raíces
de cofias líticas viven metidas en el corazón de nuestros Andes”. Nicola (1960:83)32 en
31 Costales; Alfredo y Piedad de Costales 1954. “Los Salasacas”. En: Boletín de Informaciones Científicas Nacionales. Vol. 7 No. 62. Quito: Casa de la Cultura Ecuatoriana. Citado en Poeschel (1985:25) 32 Nicola, Gerardo 1960. Tierra de Tungurahua. Ambato: Atenas. Citado en Poeschel (1985:25)
54
cambio manifiesta que: “algunos han creído que son bolivianos deportados durante el
período incásico, debido a su insubordinación, pero estudios realizados sobre su
idioma, sobre su toponimia, dan como resultado que esta tribu debe haber tenido
emparentamiento con los Puruhaés quienes ya estuvieron asentados en esta región
desde antes de la estabilización del Imperio de los Incas”. Debenais (1950:101)33
manifiesta al respecto: “Este grupo ha permanecido como étnica puramente
consanguínea, manteniendo la pureza de sangre. Este grupo homogéneo, desde el
punto de vista de la consanguinidad, ha sido desplazado por los Incas y entonces
tomó el nombre de la localidad donde se ubicó, como ha ocurrido en todos estos
casos, habiéndose connaturalizado con la tierra a la cual ama por sobre todas las
cosas” (sic). Rubio Orbe (1965:153)34 indica que: “Los Salasacas constituyen restos de
grupos mitimaes del Incario. Sus vestidos, el aislamiento en que han vivido, la
ubicación geográfica, sus costumbres, tradiciones y leyendas que conservan, pueden
ser pruebas para afirmar que se trata de gente que fue obligada a dejar sus lugares de
origen”. Según la experiencia vivida en la parroquia Salasaca, se escucha de algunos
comuneros adultos y hoy de los jóvenes manifestar que son originarios de Bolivia.
Para decir con certeza, la identidad de los Salasacas es bastante polémica. Dando
una mirada a las citas anteriores, los estudiosos de esta etnia coinciden “por su
estructura orgánica, sus costumbres, su conformación fisiológica y sus tradiciones
proceden de los Mitimaes Bolivianos” (Poeschel 1985:26).
1.5 La cultura salasaca
Durante largo tiempo, este grupo indígena se ha mantenido perfectamente alejado de
los blancos o mestizos y demás razas indígenas del país, conservando severamente
sus costumbres y tradiciones. “Salasaca es la única comunidad en la provincia que
mantiene hasta el presente un sistema tradicional de autoridad representado por sus
alcaldes. Esta situación hacia fuera de la sociedad salasaca ha sido percibida como un
mero pasante de fiestas” Carrasco (1982:70). A pesar de ser dependientes de la
iglesia católica, los alcaldes o varayuk ganan poder, prestigio y respeto dentro de la
parroquia. En la comunidad éstos son llamados “taitas”, que pueden ejercer cualquier
cargo como cabecilla, cabildo, teniente político y presidente de la organización.
En cuanto se refiere a la lengua, la comunicación entre los salasacas es de
preferencia el kichwa, su lengua materna. El castellano es hablado mayormente por
33 Debenais, Ginette 1950. “Monografía de la parcialidad Salasaca”. En: Revista de la Casa de la Cultura Ecuatoriana. Tomo III, No. 10, enero-diciembre 1950. Quito. Citado en Poeschel (1985:26) 34 Rubio, Orbe Gonzalo 1965. Aspectos Indígenas. Quito: Casa de la Cultura Ecuatoriana. Citado en Poeschel (1985:26)
55
jóvenes fuera de Salasaca para comunicarse con personas de habla hispana. Barriga
(1988:160) manifiesta al respecto: “El quichua es la lengua que prevalece. La
comunicación entre ellos necesariamente se hace en este idioma. Constituye el último
reducto que ventajosamente se le está manteniendo y cultivando, por intermedio de la
educación bilingüe”.
En los hogares salasacas la lengua que predomina es el kichwa. El padre, la madre y
los hijos se comunican en la lengua materna a pesar de los cambios tecnológicos que
han ingresado al pueblo como la radio y la televisión. Actualmente, en algunos niños
salasacas es común escuchar el castellano en sus hogares a través de los medios
señalados. Cuando ingresan a la escuela y al colegio tienen contacto con la segunda,
por medio de los profesores mestizos y su aprendizaje es en castellano. Sin embargo,
la mayoría de los niños y jóvenes mantienen el kichwa como lengua materna y el
castellano como segunda lengua; es decir, el castellano utilizan para comunicarse con
personas de habla hispana u otros que desconocen el kichwa. Es muy importante
recalcar que la mayoría de los pobladores conservan su lengua originaria y utilizan en
todo momento como en las mingas, las reuniones comunales, organizacionales y
educativas.
Entre las costumbres referentes al ciclo vital del recién nacido siguen una serie de ritos
por ejemplo, el ombligo es cortado con una hoja de zigzi (planta nativa del lugar) por el
suegro o por un anciano a la medida de 1\4 y dos dedos35 en los varones y de 1\4 en
las mujeres. Después de haber bañado a la criatura36, sobre la boca del recién nacido
pasan una aguja con hilo rojo como señal que se la cosen para que el niño/a no sea
mentiroso y que su boca no sea muy grande. De la misma manera, las uñas son
cortadas al mes de su nacimiento por una persona muy trabajadora y el pelo en los
Domingos de Ramos por una persona de carácter fuerte. Durante los primeros días de
nacido, los familiares de la casa toman muy en cuenta a la persona que visita. Si hay
un visitante en la casa, la awila (abuela) del niño/a, en un plato de barro obsequia
mote de maíz cocido y lleva consigo al bebe y entrega en brazos del visitante, quien
será señalado como saruk taita o saruk mama37 (persona que apoyará durante su
vida). Posteriormente, los padres escogen al markuk taita (padrino de bautizo) y a la
aparik mama (mujer encargada de bañar, vestir y llevar a la iglesia para su bautizo). El
bautizo de su hijo se realiza específicamente los días sábados por la tarde en la iglesia
35 Medida en base a la distancia del dedo índice extendido del pulgar (Choque 1992:13). 36 El niño o niña por primera vez es bañado con agua de ñyachik sisa (flor amarilla), luego esa misma agua es hecha beber con la finalidad de sea fuerte y no tenga miedo al agua. 37 Para los niños debe ser mujer la que visita y para una niña un hombre para que tengan equilibrio de carácter en la vida.
56
de la parroquia, pero antes el nombre del niño/a es inscrito en la Jefatura de Registro
Civil. El niño o la niña es presentado a la sociedad mediante una fiesta preparada por
sus padres.
La niñez y juventud del/la salasaca están dedicadas a la vida del campo y algunos a la
escuela. En la etapa de la adolescencia, la madre se ocupa de la preparación de las
niñas para su rol de mujer adulta, para luego dar paso al matrimonio. De igual manera,
el joven es guiado por su padre y recibe consejos sobre las responsabilidades de su
vida futura. “Desde este momento se los consideraba aptos para la vida en pareja. El
rapto de la novia y la aceptación del hecho por los padres son los siguientes pasos
para el matrimonio, que es solemnizado mediante una fiesta que dura generalmente
cuatro días38. En su totalidad, los matrimonios salasacas son realizados de acuerdo a
su propia tradición ritual y, excepcionalmente, algunos lo realizan al estilo mestizo. Las
fechas consideradas como la más propicias para esta celebración son durante las
fiestas de Ramos y de Difuntos. En su vida adulta, la pareja realiza una serie de
actividades ritual-festivas y sociales en la comunidad” (Choque 1992:14).
En la parroquia Salasaca, cuando un indígena muere, lo toman sin mucho dramatismo.
Los parientes y amigos que asisten al funeral tratan de que la familia doliente no se
sienta triste, por lo que son ellos los encargados de realizar diferentes juegos durante
la noche del velorio (Cf. Ibid). Por ejemplo, los acompañantes juegan a la llama,
cebolla, gallo, rey, huayro tullu39 y otros con el fin de alegrar la noche del velorio, y son
recompensados con bebida y comida por parte de los familiares dolientes. Desde la
media noche empieza la repartición del jachun api (colada morada) por las nueras
hasta la salida del funeral, además las jachun (nueras) tienen la obligación de dar los
chumbis (fajas) a los aparik o los llamados caballos, quienes se encargan de
colocarlos haciendo una envoltura sobre el ataúd. Luego el difunto es llevado a la
iglesia por cuatro o seis caballos (personas que cargan al muerto). En el camino hacia
al cementerio hay tres lugares de descanso para el funeral, ahí los familiares brindan
trago a los caballos y acompañantes, así llegan al cementerio. Antes de la sepultura, el
38 “A los dos días del rapto, los padres del novio visitan a los padres de la novia, en compañía de algunos familiares llevando chicha, pan, plátanos y maíz cocido (muti), para hacer la petición de mano; son pocos los casos en que los padres niegan la realización del matrimonio, ya que de lo contrario tendrían que enfrentar el peligro del embarazo y de desprecio de su hija como de su familia. El tiempo que permanece la muchacha en casa de los padres del novio es considerado como tiempo de prueba, durante el cual los futuros suegros (illa suegro, illa suegra mama) vigilan su desempeño en las actividades domésticas y agrícolas. Hasta hace poco tiempo, las monjas Lauritas aprovechaban esta ocasión para acceder al servicio doméstico gratuito, a cambio de catequesis y enseñanza de labores domésticas” (Choque 1992:14). 39 El hayru tullu es un hueso seco de las patas del ganado. Además en los juegos sólo participan los de sexo masculino. Es decir, niños, jóvenes, adultos y ancianos. Los juegos generalmente empiezan a la media noche.
57
ataúd del fallecido es abierto con la finalidad de que el muerto observe el mundo por
última vez, así también aprovechan los familiares y acompañantes para mirar el rostro
del difunto también por última vez. La esposa o esposo y familiares depositan en el
interior del ataúd el kukawi (una shigra con comida), de la misma manera colocan
velas, fósforos, romero y otros instrumentos de trabajo. Los mismos que son
considerados de gran utilidad para el difunto en su largo caminar. De esta manera, es
enterrado. Luego de sepultarlo los parientes, amigos y acompañantes dan la vuelta por
el nicho diciendo “shuk punllakama, shuk punllakama”40.
La ceremonia ritual fúnebre dura por seis días, empieza con la comunicación del
fallecido a los familiares, velorio, entierro, mundungu mitza (envío del difunto por los
familiares y acompañantes), kunlli o tumina (colaboración de comida o dinero entre los
asistentes) y uku pichay (limpieza de la casa y despedida a la familia doliente).
En la comunidad Salasaca cuando muere un joven soltero/a, la preocupación de los
padres es hacer casar antes del entierro, para lo cual hacen los siguientes ritos: Los
varones o mujeres fallecidos son casados mediante una ceremonia ritual. Para esta
ceremonia los padres y los familiares utilizan a un/a palomo/a, gallo o gallina blanco/a
como señal de pureza y libertad.41 Esta ceremonia ritual generalmente se inicia a partir
de la media noche donde participan todos los acompañantes del funeral. Para esta
ceremonia, un salasaca anciano es escogido por los padres del facellido/a para que
represente al sacerdote y también escogen una pareja de casados para que
representen a los padrinos. La ceremonia es casi similar a los matrimonios
verdaderos. Una vez celebrados el casamiento entre el fallecido/a y el/la ave arriba
mencionada, éstas(os) van encima del ataúd, no es necesario amarrarlos y se nota
mucha tristeza en ellos. Este rito es bastante serio, o a veces una joven o un joven
soltero/a42 asume y acepta casarse con el fallecido/a, (sobre todo si fue su novio o
novia), al aceptar renuncia su libertad de soltería, pasan a pertenecer a la vida de los
serios (viudos o viudas) los que serán respetados por los comuneros salasacas
ancianos. Estos casos son muy especiales.
40 Hasta otro día, hasta otro día. 41 Según la cosmovisión salasaca, cuando un joven muere y no es casado con las aves que significa pureza y libertad, es que el fallecido en el más allá nunca descansará en paz y siempre será prisionero de los llamados ayas, espíritus que no dejan tranquilo su alma. 42 Serán recompensados por los padres del fallecido o fallecida con algunos bienes. El pago más significativo para los que asumen este rito es un retazo del mejor terreno. Por otro lado, a pesar de recibir este beneficio, la mujer o el hombre joven que aceptó casarse con el fallecido/a, son considerados viudas o viudos hasta su muerte, lo cual no es aceptado por los jóvenes salasacas, por lo que ellos llaman comúnmente a los que aceptaron casarse ayatabla (calavera) como sinónimo de desprecio.
58
El dos de noviembre es un día muy especial para todos los pobladores, asisten al
cementerio niñas/os, jóvenes, adultos y ancianos para reunirse con el difunto, llevan
consigo ofrendas florales, comidas (cuye, conejo, gallinas, pan, colada morada, chicha
frutas etc.) para realizar el intercambio entre los parientes y con la supuesta compañía
del muerto. La creencia de los salasacas es que el difunto se encuentra en ese lugar
para recibir todo lo llevado, o de lo contrario se sienten tristes y hacen soñar durante
todo el año con mucha hambre. Por eso, este día es muy importante para todos los
pobladores salasacas.
El ciclo festivo del pueblo Salasaca se inicia en enero con los varayuk o alcaldes43, los
que hacen la fiesta todo el año calendario. En cambio, los caporales realizan la fiesta
en el mes de febrero por cinco días en honor a las flores del maíz. Los pendoneros en
el mes de agosto y noviembre, los capitanes en octubre y diciembre en honor a los
santos San Antonio y San Buenaventura. Con estas dos últimas fiestas empieza el
sembrío en las partes altas y bajas. Estas fiestas duran al igual que la anterior. Pero
antes, hay una preparación de dos meses para escoger y asegurar de quienes van a
participar bailando en la fiesta. Los costos pasan de dos a tres mil dólares
aproximadamente.
2. El ciclo de vida salasaca
Creemos conveniente empezar desde cuando la mujer concibe al niño en el vientre
materno. A partir del nacimiento, dar una mirada como la niña salasaca es recibida y
socializada dentro del hogar por la madre, para desde allí mirar cómo todas aquellas
relaciones de igualdad y relaciones de género se dan en el hogar y la sociedad
salasaca.
2.1 El periodo de gestación
Como síntoma del embarazo, la mujer salasaca se orienta a través de la pérdida del
periodo menstrual. Después de un tiempo comunica su embarazo a su esposo y
amistades más cercanas (mujeres) quienes aconsejan dando ánimos, sobre todo, si es
madre primeriza. Para la mujer salasaca embarazada, es normal continuar con las
actividades cotidianas, como cargar la carga de alfalfa, la caminata de todos los días y
otros, lo cual ayudará a tener un parto sin complicación.
43 “Personaje central en el ciclo religioso-festivo salasaca, es el Alcalde, hombre adulto, casado, que al “hacerse anotar” y “coger la vara” se responsabiliza para efectuar las fiestas, ritos ceremonias y funciones establecidas, que la dignidad impone y al mismo tiempo, accede al grupo de “Salasacas reconocidos con status”, que le da acceso a desempeñar cargos (cabecilla) en la comunidad, integrándose al grupo de ‘respeto’” (Carrasco 1982:70).
59
Cabe señalar que algunas mujeres sufren malestares como el dolor de la cintura y el
vientre. Si persisten estos dolores, acuddonde una “jakuk mama” (aquellas llamadas
”parteras empíricas” en la literatura médica), quien conoce la ubicación del niño en el
vientre. La misma que realiza “masajes, correcciones de la posición de la wawa y
acompañamiento en el primer parto” (Arnold y Yapita 1996: 333). Por ejemplo,
Margarita, una de las comuneras, sentía molestias de dolores de cintura. Unos pocos
días antes del nacimiento del niño. Ella me pidió que yo le acompañe donde la señora
Manuela, conocida como “mama Manuca Inga”, la que ayuda a resolver los dolores
causados por el embarazo a través de masajes y quien asegura detectar la mala
ubicación del niño. Recuerdo que decía la “jakuk mama” a Margarita: “ay diu shay,
maraga ladumumi rishca, imata aparirkanki, kunun rikushun, jakukpika alli
tukunkallami, pero kunanka ama jichi ruranata rurankichu”44. Entonces, la “jakuk
mama” a Margarita hizo unos masajes en su vientre y aconsejó que descanse unos
días45. Esto era unos días antes de su parto. Me sorprendió cómo la mujer predecía lo
que iba a suceder con el parto de Margarita y lo dicho se cumplió aproximadamente tal
como ella dijo.
2.2 El periodo del parto
Cuando llega el día del alumbramiento, el esposo, la mamá y sus hermanas están
presentes para cualquier emergencia durante el parto. La mayoría de las mujeres
salasacas prefieren que su parto sea en la casa, porque tienen más confianza en su
gente. Cuando detectan los dolores, su mamá prepara una cama junto al fogón con
paja seca de zigzi o cebada y encima de éstas, coloca una estera. Durante el parto, en
algunas ocasiones, acompaña la “jakuk mama”. Junto a ella están sus familiares
quienes animan con palabras dulces. Cuando “jakuk mama” se da cuenta que el parto
va a ser difícil, ordena al esposo de la paciente que busque el nido del pájaro, marco
(planta medicinal), flores de capulí, tronco de calabaza y flores de alfalfa. Las plantas
medicinales y el nido del pájaro son considerados los remedios efectivos para que
apure el parto. Los tres últimos son preparados en fusión del agua hervida por las
mismas mujeres, todas saben prepararlo.
Esta bebida es dada a tomar a la mujer con dolores, muy caliente, con la finalidad de
que su vientre se caliente, ensuavece y así pueda dar a luz más rápido. Por otro lado,
44 Traducción: Ay Dios mío, el niño se ha cambiado de posición. ¿Qué has cargado? Ahora vamos a ver. Con el masaje que te haga, va a quedar bien. 45 Para la mujer salasaca, el descanso no consiste en ir a estar acostada en la cama, continua con trabajos leves hasta el día del alumbramiento.
60
el marco46 es bastante efectivo. Lo preparan calentando en el fuego para frotarlo en la
cintura y en barriga de la mujer adolorida. En cambio, el nido del pájaro es utilizado
para que los músculos se suavicen con el humo, por eso al nido de pájaro la
encienden con fuego hasta que de este salga bastante humo, cuando está a punto de
terminar quemando lo apagan el fuego, para luego hacer cruzar varias veces sobre el
humo a la mujer con dolores de parto.
En esos momentos, la mujer está tapada con un rebozo. Según las awilas (abuelas) es
para que no tenga frío. Mientras más calor tenga la mujer adolorida de parto, más
constante vienen los dolores, así el parto es también más rápido.
Cuando ya nace la niña o el niño, la preocupación de los familiares es el periodo de la
salida de la placenta, porque esta etapa es considerada como la más peligrosa. ”Así,
culturalmente, todo el periodo de la espera de la placenta es como un velorio” (Arnold
y Yapita 1996:342). Para apurar la salida de la placenta, la “jakuk mama” o el padre le
coloca una cebolla blanca gruesa en la boca para que tenga fuerza, esto ayuda la
salida de la placenta. La placenta es enterrada al momento detrás de la casa o debajo
de un árbol sin ningún rito.
Actualmente, hay pocas mujeres que acuden a los hospitales de Ambato o Pelileo,
especialmente cuando el parto es cesarea. En cambio, la mayoría de las diecisiete
docentes dan a luz en el hospital del Seguro de Ambato, ya que éste acredita un
certificado del parto, documento que sirve para justificar y enviar un profesor
reemplazante durante los tres meses de licencia considerados por ley de carrera
docente y escalafón.
2.3 Costumbres después del parto
Una vez nacido el niño, bañan con el agua preparada con flores de ñyachik47. Luego la
niña o el niño es entregado a su madre, envuelto con una bayeta y faja más o menos
nueva. Una vez terminado el parto, la “jakuk mama” es reconocida por los padres con
la “jucha” que consiste en pago en dinero o una canasta de papas o maíz. Sobre todo,
si el niño fue Kari (varón) será retribuida la “jakuk mama” con dinero y si es warmi
(mujer) le ofrecerán un canasto de papas o maíz.
46 El marco es una planta medicinal que pertenece al grupo de las denominadas “plantas calientes” que sirve para el parto, para colocar en la nalga del niño con diarrea, torceduras, resfrio y otros como la limpieza de la casa para que vaya la mala suerte, la limpieza del niño cuando esta asustado, etc. Esta planta sirve para diversas utilidades porque tiene un poder curativo. Además de tener poder curativo, sirve también como alimento para los cuyes y conejos. Esta planta se puede encontrar específicamente en la parte andina de la sierra ecuatoriana y otros países andinos como Bolivia y Perú. 47 Planta medicinal utilizada para el baño de los niños. También sirve para teñir las fachalinas de las mujeres, dando un color amarillento.
61
La madre, luego de su parto, generalmente descansa en la casa con dieta por un mes,
si hay alguien que la pueda cuidar y apoyar con las labores de la casa. De lo contrario,
sólo está dos semanas. En esta época, la mujer descansa junto a su recién nacido,
también recibe visitas de sus familiares, especialmente de su madre y sus hermanas.
En este periodo, en algunos casos el hombre asume la responsabilidad de las tareas
de la mujer como el cuidado de sus hijos, de los animales, la limpieza de casa y otros.
Para que el cuerpo de la mujer después del parto se ponga resistente, la mamá o
cualquier mujer de la familia en unos días prepara un baño. El baño es preparado
hirviendo las hierbas y plantas medicinales como culquis, llullu zig zig, matico,
eucalipto y otros. Una vez bañada con estas plantas medicinales, la mujer salasaca
está lista para volver a sus labores cotidianas.
Cabe indicar, que el recién nacido es envuelto con una bayeta y faja desde los
hombros hasta los tobillos, hasta un año o más (antes). Actualmente, la envuelven
hasta por lo menos cinco meses con la finalidad de que el niño crezca recto y no tenga
piernas torcidas. La mamá presta mucha atención al niño desde el primer día de su
vida hasta que el niño entre en una etapa de independencia. Es decir, hasta que el
niño pueda realizar sólo algunas cosas como comer, jugar y asearse. La madre
salasaca lacta al niño hasta aproximadamente tres años y si es varón pasa de la edad
señalada.
2.4 Preferencia de niños de varones
Es frecuente ver en algunos hogares salasacas que los padres prefieren que su primer
hijo sea varón. Al parecer las mujeres, en algunas sociedades andinas y no andinas
son discriminadas desde que nacen. Por ejemplo, un informante dice al respecto:
Bueno, en primer lugar las mujeres son discriminadas desde que nacen, las personas pregunta cuando una mujer da a luz, ¿qué trajo al mundo? Entonces, desde ahí viene la discriminación, si dicen que nació un hombre que bueno ha sido hombre, y cuando dice que nació una niña, ah mujer nomás es, que pena48.
Un ex dirigente también menciona que en las comunidades “la mujer es desvalorada
desde que nace. Desde niñas, nosotros pensamos que la mujer es menos que el
hombre. Desde ahí hay desigualdad de oportunidades, porque los mismos padres
dicen tú eres sólo mujer”49. Estos casos, en algunos hogares es muy marcado, sobre
todo si es primer hijo de la familia. En el pueblo Salasaca, la ilusión o el orgullo de
algunos padres es que su primer hijo sea varón. En algunos casos, el taita cuando
nace una niña ni siquiera la mira demostrando un gesto de no estar contento con el
48 Entrevista: P8 (MML2:67) 49 Conversación: (RM) 29-06-00
62
nacimiento de la warmi mara (niña mujer). Esto ocurre sólo con el primer hijo, después
las niñas mujeres son aceptadas sin problemas, pero en el transcurso de su vida la
mujer se dedica a una serie de actividades domésticas, por tal razón, sólo algunas
mujeres ingresan a los niveles escolares.
En cambio, actualmente se observó un número más o menos considerable de jóvenes
(mujeres y hombres) que realizan estudios en diferentes colegios de Ambato, Pelileo y
Salasaca. De éstos, sólo algunas mujeres llegan a culminar hasta alcanzar la
universidad. Según lo observado, habían alrededor de 10 mujeres salasacas que
continuaban estudios superiores en las diferentes universidades de la provincia. Las
demás jóvenes laboran en diferentes actividades dentro y fuera del hogar y la
comunidad. En la cultura andina, especialmente en Salasaca, la mayoría de las
jóvenes salasacas contraen matrimonio tempranamente.
2.5 Socialización primaria
En esta etapa, la madre brinda todo el amor a sus hijas e hijos. A pesar de haber el
cariño igualitario a sus hijos, en algunos hogares visitados se nota la diferencia de los
sexos. La niña mujer es cuestionada desde su nacimiento, porque está considerada
“warmipalla” (sólo es mujer). Por esta situación, la mujer salasaca desde muy pequeña
se muestra sumisa con sus padres, con sus hermanos y más tarde con su marido. A
temprana edad realiza labores junto a su madre. Por lo tanto, conoce los deberes y
derechos que más tarde enseñará a sus hijos, a asumir responsabilidades específicas
como el cuidado de sus hermanos menores, cuidado de animales pequeños (cuyes,
conejos y gallinas), acarreado de agua, leña y una serie de mandados de acuerdo a su
edad.
Las mujeres salasacas reciben una educación donde no tienen la oportunidad de
participar verbalmente con sus padres en el hogar. Esto hace difícil que las mujeres
puedan opinar frente a las asambleas comunales y las de organizaciones, donde
prefieren sólo escuchar, no porque no saben, si no porque ellas fueron educadas a
obedecer y escuchar las órdenes de los padres, hermanos y tíos. Por otro lado, la
influencia de la educación recibida en los planteles educativos con actitudes
dominantes ha causado temor y miedo en la expresión verbal frente al público.
En algunos casos, al parecer, las mismas madres salasacas generan la desigualdad
de oportunidades de participación de las niñas, porque al niño varón permiten al juego
y la salida de la casa. Mientras que la hija mujer, por ser mujer, debe estar dentro de la
casa, apoyando a la mamá en algunas tareas domésticas, es decir la niña desde muy
pequeña asume responsabilidades domésticas. Así mismo, en la actualidad se
63
observó que la joven salasaca en el hogar no tiene permiso de salida para participar
en las actividades de la reunión, más que todo cuando se realiza en las noches. En
cambio, cuando tiene que asistir a una minga de limpieza de acequia, las hijas mujeres
son casi obligadas a participar, es decir, en el trabajo físico. Por tal razón, una joven
comunera dijo no estar de acuerdo con sus padres por estas desigualdades de
oportunidades para con la mujer. Así, manifiesta al respecto:
Sí, por el hecho de ser mujer, mi padre me ha tenido limitada a diferentes cosas, por ejemplo, mi mamá me dice por ser mujer tengo que ser calladita y obedienta. El hogar influye a que nosotras las mujeres sintamos relegadas, atemorizadas y a veces nuestras propias madres generan el machismo, porque a mi hermanito le permite todo y mientras que a mí ni siquiera me dan permiso a una reunión, sólo porque vivo cerca, veo y escucho las reuniones desde mi ventana. Por eso me da rabia y a veces reclamo a mis padres pero no me escuchan, por eso espero cumplir mis 18 años para salir y, por lo menos tratar de involucrar con la vida comunal y así aprender de los grandes líderes la gestión. Y por otro, lado tienen que dar oportunidad a esta nueva generación50.
Casos como los señalados han influido psicológicamente en la mujer salasaca para
que ellas no quieran participar. Como ya lo dije anteriormente, no es que las mujeres
no entiendan o no sepan de lo que se trata en las reuniones. Ellas están atentas
escuchando. Por eso se ve comentarios entre ellas cuando los hombres hablan.
2.6 Los “quehaceres” de la mujer salasaca en la unidad doméstica
La mujer salasaca al unirse con el hombre, se dedica a las diversas actividades desde
cuando los pájaros empiezan con sus silbidos hasta que el sol esconde su rostro en el
horizonte. Muchas veces, la mujer se queda realizando tareas en las noches como
desgranar maíz, cocinar el mote y otros. Cuando su hijo está enfermo, la madre se
desvela junto a la niña o al niño toda la noche. Descansa pocas horas para continuar
con las labores del día siguiente.
Así, en su trabajo de todos los días, prepara la comida en las horas de la madrugada
mientras sus hijos duermen. Cuando está lista su comida, los despierta, llamándole de
está manera, “ña utkichi, jatarichi, ña punllayanmi maraguna”51. Estas palabras se
escuchan en la mayoría de los hogares salasacas. Después de haberles brindado el
desayuno a los niños de la edad escolar, ordena diciendo: “Ña richi mayllaringuichi,
escuelamu ringuichi”52. Los niños de esta edad casi ya no necesitan el apoyo de su
mamá, a excepto de bañarse y peinarse. Mientras que los niños se preparan para irse
a la escuela, ella se encarga de alimentar a sus hijos menores.
50 Entrevista: 138 (FMC1:46) 51 Traducción: Niños levanten, ya es día. 52 Traducción: Ya váyanse a asearse para que vayan a la escuela.
64
El esposo de igual forma se levanta a la misma hora que su esposa, ellos son los
encargados de ir a muyuy (rodeo) a los animales para luego ir a continuar su trabajo
en el telar. Después que sus hijos van a la escuela, la mujer pone al hombro a su hijo
tierno, agarra las wascas (sogas) lleva al hijo menor con ella para que ayude a cuidar
a su hijo tierno, mientras ella corta el pasto. Va con el asno al wayku (lugar donde hay
pasto verde) y mientras camina, hila. Una vez llegada a lugar, amarra al asno, baja
hasta casi cerca del río para cortar muya (pasto), corta la mula de pasto53, sube las
cargas en su hombro una por una hasta llegar arriba. Le coloca al asno las cargas con
la ayuda de alguna persona que se encuentre realizando la misma actividad. Para
pedir apoyo dice así: “Ñukamu apachisha favur rurabay”, es frecuente escuchar a las
personas solicitadas de su colaboración “mana pudishaga” (si no puedo). Así, la
mayoría de las mujeres salasacas cumplen estas actividades hasta la actualidad, a
excepción de algunas mujeres que trabajan en la docencia u otra institución54 . En
horas más llega a wakra kuchu (lugar donde están los animales), donde reparte el
pasto a los animales55, pone el penco, muchas veces corta el zigzig (paja que sirve
para cubrir el techado de los hogares salasacas), los deja bien comidos a los
animales, para luego regresar a su casa. A su regreso, también lleva el pasto o alfalfa
para los animales pequeños (cuyes, conejos, y chancho) que generalmente están
cerca de su casa. En el hogar, continúa con las labores de la cocina, hace el almuerzo
para su esposo, hijos y muchas veces a sus obreros que están contratados para tejer
los tapices. Después del almuerzo, como a manera de descanso realiza actividades
como: hilar junto al telar donde está tejiendo su esposo, escoger la semilla, coser la
ropa, ayuda a su esposo a escoger los espinos de los hilos de tejer. La rutina diaria de
la mujer salasaca es cumplir con estas actividades descritas, a más de tener que
cumplir trabajos comunitarios, sobre todo las mingas y las reuniones, especialmente
cuando su esposo no se encuentra en la comunidad o porque están haciendo
actividades en el campo o en su hogar.
Sin embargo, cuando le toca las labores comunitarias, la mujer en la tarde anterior
realiza actividades como irse a cortar alfalfa o pasto. Así su esposo al día siguiente se
encarga del cuidado de los animales, o muchas veces, ella ya lo deja haciendo en
horas de la madrugada. En los hogares salasacas, se nota la complementariedad y la
reciprocidad, porque el esposo colabora o a veces los hombres asisten a las mingas.
Pero no todos los hogares tienen la misma suerte por situaciones como la migración o
53 Equivale a dos cargas de pasto, alfalfa etc. 54 Sólo algunas mujeres no realizan estas actividades, según lo observado la mayoría de estas mujeres cumplen estas actividades por la tarde. 55 Ganado vacuno.
65
trabajos que realizan los hombres fuera del hogar. Es ahí donde la mujer se convierte
en padre y madre para cumplir dobles funciones, como las comunales y las de la
unidad doméstica. Un dirigente de MIT manifiesta al respecto:
Normalmente, por la pobreza que hay, los hombres salen del campo hacia la ciudad para buscar recursos económicos. Entonces, ellas son las que asumen esa responsabilidad de ser padre y madre a la vez y también cumplen con las actividades que se desarrollan dentro de la comunidad, estar presentes en las reuniones de las escuelas, de la comunidad, las mingas. Entonces se ve un grado de participación y responsabilidad en desarrollo comunitario56
Mediante este testimonio podemos ver que la migración masculina refuerza al punto
de la participación de la mujer en el espacio público comunal donde se desarrollan
actividades como las reuniones y mingas, ámbitos donde la mujer participa
activamente. También vemos que el fenómeno de la migración da lugar a que la mujer
se responsabilice en la toma de decisiones dentro del hogar asumiendo el papel de
padre y madre.
Por otro lado, hemos visto que no es responsabilidad de la mujer salasaca, el arado
con la yunta. Las esposas de los emigrantes reciben apoyo de los familiares,
especialmente de su papá, quien colabora en realizar esta actividad, o a veces
contratan a los mismos salasacas para que cumplan esta labor. Por ejemplo, mamá
Rosa, mayor, viuda, siempre alquila la yunta arado57 de su primo, quien cobra una
cantidad de 30.000 sucres, más el almuerzo. Muchas de las mujeres cumplen con esta
labor basándose en el apoyo familiar o contratan a quienes realizan estas labores.
Generalmente, las mujeres que no cuentan con los esposos en sus hogares por
situaciones de migración no esperan hasta que regrese su marido. La mujer ya tiene
trabajados sus terrenos. Lo hace por cuenta propia cuando ya llega el mes de los
sembríos. Por situaciones como las ya señaladas, en algunos hogares se ve la
ausencia del jefe de la familia porque está trabajando en otros lugares de la provincia
como jornalero, albañil o se ha migrado hacia Galápagos, a la Costa y Oriente.
Algunos salasaca permanecen un año, o más. En cambio, algunos se trasladan por un
cierto tiempo (4, 6, 8 meses).
De la misma manera, la mujer participa en las fiestas rituales junto al esposo. Por
ejemplo, Rosario, docente cuyo esposo es varayuk, tenía que cumplir con todas las
obligaciones de esta fiesta ritual, a más de cumplir con las labores educativas. Una de
las cosas que le favorecieron para dedicarse a la casa, en especial, a la fiesta fue el
paro de la Unión Nacional de Educadores, que había empezado el 15 de mayo que
56 Entrevista: P7(LML:25) 57 Yunta de arado es la pareja del ganado vacuno, que se utiliza en el pueblo Salasaca y la parte andina de la sierra ecuatoriana para el arado y el sembrío de la parcela.
66
duro hasta casi a mediados de julio. En ese lapso de tiempo se realizaron las fiestas
del “Ensayo”, “Churana Apay”, “Curpus Christi”, “Jatun Octava” y “Chishi Octava”, la
fiesta final de los varayuk o alcaldes. De esta manera, se pudo observar que la mujer
salasaca, a pesar de ser mujer profesional, cumple como esposa cuando su marido
decide hacer las fiestas rituales de la comunidad. Aunque ella supo manifestar que no
estaba de acuerdo en realizar la fiesta “pero como soy su esposa, tengo que la cumplir
para que la comunidad no me hable”58. Muchas veces, se ve que la mujer no está de
acuerdo en realizar estas fiestas, porque realmente significa un fuerte gasto
económico. En algunos casos, para pagar las deudas de las fiestas, los comuneros
migran hacia los lugares ya mencionados por un tiempo señalado.
Todas las actividades son asumidas con mucha responsabilidad por parte de la mujer,
para que especialmente la comunidad le respete. Así, en la vida adulta, la pareja de
casados cumple con una serie de actividades rituales- festivas y sociales de la
comunidad desde los apadrinamientos de matrimonios y bautizos, hasta los cargos de
cabecilla, varayuk o alcalde.
3. Espacios de participación de la mujer salasaca
En este capítulo presentaremos los espacios de participación de la mujer salasaca en
la siguiente orden como hogar, comunidad, organizaciones Unión de Indígenas
Salasacas (UNIS) y Movimiento Indígena de Tungurahua (MIT) como también en el
aspecto educativo.
Este ordenamiento quiere reflejar cómo la mujer participa activamente en la toma
decisiones dentro del hogar, entre la pareja hombre y mujer y cómo estas relaciones
de igualdad, toma de decisiones van desapareciendo poco a poco en los ámbitos
públicos especialmente en las organizaciones y la educación intercultural bilingüe. En
el hogar veremos que la mujer salasaca participa de una manera activa, así como
también en la comunidad a través de las reuniones y mingas desarrolladas al interior
de la comunidad. En la organización UNIS la participación de la mujer salasaca es
activa pero sin hablar en las reuniones. No son tomadas en cuenta para los cargos
administrativos o a veces ellas mismas no quieren representar en estos espacios por
algunos factores que dificultan su participación democrática. En cambio, en la
organización provincial MIT, es muy escasa la presencia de la mujer, sólo
encontramos a las mujeres no salasacas en la Secretaría de la Mujer y secretaria en
58 Observación de campo. “No me hable” quiere decir: la gente en la comunidad cuando la mujer no cumple con las labores, en este caso la fiesta ritual, será criticada por todos los salasacas. Para evitar ciertos cuestionamientos acepta como esposa a realizar esta actividad sin ninguna resistencia.
67
general. En el ámbito educativo, la participación de la mujer se reduce a la docencia,
hay poca participación en el aspecto administrativo y toma de decisiones. Es decir, en
la dirección provincial y centros educativos, la presencia de la mujer salasaca es
escasa por situaciones como las que veremos más adelante.
3.1 En el hogar
El hogar de la familia salasaca está conformado por una pareja casada más sus hijos
biológicos y adoptivos o “wiñachishcas”59 que comparten la vida familiar y su vivienda
junto a sus padres hasta que los hijos o hijas decidan casarse o salir de la casa. En
Salasaca, el matrimonio es “monógamo y legítimo” (Poeschel 1985:59). Los padres de
los novios presentan a la sociedad, a la nueva familia mediante tres días de fiestas
rituales.
Sin embargo, la vivienda de la familia puede ser independiente o dependiente. La
primera es un hogar simple donde la pareja vive sola con sus hijos lejos de sus
padres. La segunda se refiere al espacio donde la familia comparte el mismo techo
con los padres de la esposa o su marido. Esto se suele ver con frecuencia en las
parejas recién casadas o cuando son hijos únicos.
Después de un tiempo, los padres de la nueva familia proporcionan un lote de terreno
para que ellos puedan construir un hogar independiente, para lo cual también algunas
parejas reciben el apoyo por parte de sus padres. En el nuevo hogar, la mujer viene a
constituirse “eje de la familia” junto a su esposo y más tarde sus hijos, donde los dos
empiezan una vida con responsabilidades sobre las diferentes actividades cotidianas
del hogar. Una de las entrevistadas manifiesta al respecto “nosotras las mujeres
dentro del hogar somos las ejes de la familia, claro sin desvalorar al hombre”60.
Cuando entrevisté a un comunero joven casado, supo valorar a la mujer por ese don
que la misma naturaleza le ha dado, el de traer nuevas vidas a la sociedad y
administrar las diferentes actividades; “las mujeres también valen y más todavía
porque son las ejes de la administración del hogar y lo más importante es que ellas
reproducen seres humanos”61. Mientras conversábamos sobre el tema, él supo
reflexionar, diciendo “estas cosas no entendemos los hombres indígenas, por eso
pensamos que nuestras mujeres no sirven, por eso ellas deben tener su sitio y ser
respetadas a todo nivel”62. Para finalizar, el comunero dio un llamado de atención a los
59 Wiñachishcas son los hijos adoptivos con todos los derechos y obligaciones culturales. 60 Entrevista: 20(ID1:4) 61 Entrevista: 149(EMC2:50) 62 Ibid.
68
dirigentes de las comunidades: así como administran el hogar las mujeres, también
puedan representar espacios de poder como es la organización. Al respecto manifestó
“[...] los dirigentes hombres deben dar paso a que nuestras mujeres representen en
los espacios de poder, porque tal vez aportarían de una manera óptima al desarrollo
local”63.
Una vez conformado el hogar, la mujer salasaca desempeña un papel muy
fundamental ya que está inserta en las múltiples funciones. Es decir, es la compañera
inseparable del hombre en las fiestas, faenas agrícolas, como el arado, la siembra, el
deshierbe, en el regadío de agua en los sembrados, en las cosechas, en cuidado del
ganado, de los animales pequeños y otros. Su trabajo es igual que aquel del hombre y
aún más, porque ella exclusivamente se dedica al cuidado de sus hijos y de los
quehaceres de la casa. Una entrevistada nos hablaba así al respecto: “la mujer
siempre está pendiente de las cosas que pasan en la casa, [...] la mujer indígena que
tiene un hijo siempre ella está con el hijo al trabajo, con el hijo a la escuela, con el hijo
al cerro, con los animales, en la fiesta, en los trabajos agrícolas. Las mujeres están
pegadas a sus hijos, son las que siempre saben de los problemas y saben cómo
resolver”64. Como señala esta cita, otra de las labores elementales de la mujer
salasaca es cuando llega a ser “madre”. Para proteger a sus hijos, siempre los lleva
consigo en el hombro a todas las actividades que realiza fuera de su hogar, como el
campo y la comunidad, hasta por lo menos cuando sus hijos tengan dos años o hasta
que el hermano mayor pueda cuidar.
La mujer, así como participa en diferentes actividades del hogar, también participa en
la toma de decisión junto a su esposo, ambos se consultan, conversan para la compra
o la adquisición de algún mueble o inmueble. Así me contó una mujer que trabaja en la
docencia, casada con dos hijos “[...] en la casa las que decidimos, creo que somos las
mujeres, las que tomamos más decisión y para algunas cosas tenemos que discutir un
poco para ponernos de acuerdo en algunas cuestiones, por ejemplo, digamos en la
compra de un terreno, sería una compra de algún artefacto, entonces tomamos
decisión, así en el hogar mismo somos las mujeres que tomamos más decisión”65.
Sobre el mismo tema, un ex -presidente de la organización Unión de Indígenas
Salasacas (UNIS) manifestó “en la casa es una vida privada, donde el marido y la
63 Ibid. 64 Entrevista: P3(VLlL5:55) 65 Entrevista: 37(MD2:9)
69
mujer pueden decidir, en muchas cosas, ahí si tiene la misma capacidad para hablar,
ya que en la vida privada es menos vista por otras personas”66.
Para darnos cuenta, sólo hablemos de un espacio del hogar que es la cocina. La mujer
casi el cien por cien es la que decide qué va a hacer de comida para el almuerzo, ella
realiza sola esta tarea, en algunos casos, el esposo coopera pero no decide. Así dijo la
entrevistada al respecto: “en la cocina, por ejemplo, somos las que decidimos que
cocinamos, el esposo solo será el que sirve”67. Según mi experiencia, retomando el
mismo ejemplo de la cocina, el hombre salasaca en la mayoría de las familias está
ocupado; en mi caso, mi esposo siempre teje en el telar sus tapices, él no cocina,
aunque tenga hambre. Espera hasta que yo regrese de mi trabajo, como que yo fuera
llevando las cosas de la cocina. A veces me molesto, pero qué puedo hacer, aunque
llegue cansada de mi trabajo, tengo que cocinar porque es mi deber de esposa y
madre. Muchas veces lo hago sola y decido qué cocino. Es verdad, como dice la cita
señalada arriba, que “el esposo sólo será el que sirve”. Ante esta situación, un líder de
mucha experiencia dijo:
Por ejemplo, a mí me gustaría que los hombres también veamos las responsabilidades del hogar como cocinar. Por eso digo que la mujer es la que más trabaja, por lo menos el 80%, ya que los hombres piensan que sólo ellas tienen que realizar las tareas del hogar. En esas cosas ya se nota la desigualdad68.
Esta posición en este testimonio, corresponde a una persona que tiene amplia
trayectoria de liderazgo dentro la comunidad y ha sido nombrado por el pueblo
Salasaca dos veces teniente político. También ha tenido la oportunidad de viajar con la
música y artesanías por algunos países de Europa donde ha radicado por algunos
años. Por tal razón, podemos notar claramente que su discurso está influenciado por
la sociedad occidental donde él manifiesta que el espacio de la cocina también sea
ejercida por el hombre. Entonces, tal vez el único espacio donde la mujer tiene poder
de hacer y deshacer las cosas también quiere que sea un espacio más del hombre.
¿Si el hombre asume el papel de la cocina, qué espacio ocupamos las mujeres? Por
un lado, sería una gran ventaja para que la mujer y el hombre podamos compartir y
apoyarnos mutuamente, pero desde mí punto de vista puede ser sólo un discurso, ya
que la mayoría de los hombres salasacas se dedican a la artesanía, agricultura y otros
migran.
66 Entrevista: 112(MML2:40) 67 Entrevista: 37(MD2:9) 68 Entrevista: 123(MML2:42)
70
La mujer salasaca ha sido firme en la toma de decisiones dentro del núcleo familiar,
pero su reconocimiento como mujer y persona no ha alcanzado a mayores grados de
desenvolvimiento, por situaciones y condiciones como las que señala una ex-dirigente
de ECUARUNARI en una de sus conferencias:
No nos toman en cuenta la carga de trabajo que tenemos las mujeres, ni nuestras disponibilidades. Es frecuente encontrar a mujeres embarazadas o recientemente dadas a luz realizando tareas que implica fuerza física, cosa que es vista con absoluta naturaleza por la comunidad y las mismas mujeres69.
Por otro lado, la falta de valoración a la mujer salasaca se manifiesta cuando son
sometidas a la violencia física por parte de algunos esposos. La mujer, a pesar de ser
firme en la toma de decisiones, no se puede medir contra la fuerza física del hombre.
Un comunero manifiesta al respecto. “Aquí, yo veo desprecio y desvalorización a la
mujer, porque hay mucha violencia física por parte de los esposos ya veces ni las
suegras no la valoran”70. Asimismo, en algunos casos, psicológicamente son
minimizadas. Por lo tanto, crean sentimientos de inferioridad cuando no es estimada y
estimulada por su esposo.
El testimonio arriba indicado señala que muchas de las mujeres salasacas no
alcanzan a ser valoradass por sus esposos y, muchas veces tampoco por las suegras
que consideran de flojas, vagas, inútiles perezosas y otros términos que han causado
malestar en las mujeres. A veces, utilizan estos términos sólo para subestimar la
capacidad de la mujer. En algunos casos, evidentemente es un celo maternal de parte
de las suegras. Estas cosas influyen en la parte psicológica de la mujer. Por lo mismo,
se observa a algunas mujeres una falta de autoestima. Estos casos son muy
especiales, por lo que considero que el tema puede ser objeto de estudio y análisis
posteriores de quienes se interesen profundizar sobre las mujeres salasacas.
En cambio, en otros hogares, pasa todo lo contrario de lo señalado, porque la mujer
alcanza a ser valorada por la pareja y muchas veces de la familia, porque ella es la
que crea un ambiente alegre y demuestra su amor a través de múltiples actividades
destinadas para su hogar. En este sentido, afirma un comunero casado: “Una mujer
indígena se levanta a las cuatro de la mañana para dejar haciendo café a su esposo y,
a las seis sale a su trabajo. Regresa y otra vez empieza la tarea. Por eso es
valorativa...”71.
Al mismo punto, el actual teniente político de la parroquia señaló lo siguiente:
69 Conferencia: (CTDECUARUNARI:8) 70 Entrevista: P9(BCHL3:45) 71 Entrevista: P9 (BCHL3:44)
71
Entendemos los hombres porque algunas mujeres son trabajadoras igual que los hombres. Por ejemplo, en la casa la mujer está hilando, cocinando, cuidando a los animales, lavando la ropa, los hilos para tejer [...]. Hay otras mujeres que trabajan más que el hombre. [...] Por eso, las mujeres tienen mucho valor. Por eso yo respeto como líder, como humano. Ya que en esta vida la mujer tiene un rol importante, ya que en la casa cuidan, son guardias que tienen en orden. Por eso valoro a la mujer indígena y por qué no decir a la mujer en general. [...]. Ellas a veces son más inteligentes que los hombres y con mucha responsabilidad72.
Este testimonio pertenece al mismo líder de amplia trayectoria citado anteriormente,
quien elogia a la mujer poniendo en un sitio muy arriba. Estoy consciente de que este
testimonio puede ser un discurso, aunque este importante personaje ha demostrado el
ejemplo de respeto a la mujer en la comunidad. Este líder con quien pude hablar sobre
el tema, manifiesta que son las mujeres las que más trabajan dentro de la unidad
doméstica y la comunidad. Por tal razón, es valorable el trabajo arduo de la mujer
salasaca.
Las dos posiciones anteriores sobre la valoración de la mujer casi tienen similitud,
porque los dos son líderes de la comunidad. Los dos testimonios ponen a la mujer en
una categoría muy elevada. Es decir, en algunos hogares se observa que las mujeres
son muy cotizadas dentro de la unidad doméstica, porque tienen igual derecho a tomar
decisiones. Son consideradas como las mejores administradoras del hogar por los
esposos. El estímulo de los que la rodean, ayuda a la mujer salasaca sentirse segura
de sí misma. Si tiene seguridad, estímulo, la mujer puede estar al mismo nivel del
hombre para participar de manera activa en las actividades de la comunidad y, por qué
no decir, en las organizaciones. Cabe indicar que son muy pocas las mujeres que
participan fuera del hogar, por situaciones que presentaremos más adelante. Por otro
lado, en algunos casos para alcanzar a ser valorada depende a qué familia pertenece.
Es decir, aquí juega mucho el número de bienes (terrenos). Las fiestas que ha
realizado el padre de la mujer tienen mucho valor, porque la hija de éste es preferida
por los comuneros. A veces también logran el valor las mujeres salasacas mediante
los cargos públicos de sus padres así como: presidente del cabildo, dirigentes de la
UNIS, teniente político o profesionales. En otro ámbito, las mujeres alcanzan a ser
valoradas por ser hijas únicas. Muchas veces, las mujeres que no corresponden a este
grupo, logran su valor por los propios méritos como esposa y madre ejemplar. Los
factores señalados juegan un papel muy importante en la sociedad salasaca, por lo
cual la comunidad observa un mínimo detalle para que la mujer o hija alcance su valor.
72 Entrevista: 109(MML2:38
72
3.2 En la comunidad
Cada una de las comunidades del pueblo Salasaca tienen la estructura de cabildos
que se constituye de presidente, vicepresidente, secretario, tesorero, sindico y
vocales, personas elegidas democráticamente cada dos años por la asamblea y tienen
la responsabilidad de velar por el bienestar, el orden y el desarrollo de la comunidad.
En la misma reunión se nombra a los cuatro cabecillas que trabajarán juntamente con
los cabildos, éstos son específicamente interlocutores de la organización UNIS y de
las rondas nocturnas. Los cabecillas son autoridades tradicionales que tienen la misma
capacidad y poder de mandato que los primeros. Los cabildos y los cabecillas realizan
gestiones dentro y fuera de las comunidades. Muchas veces ayudan en las gestiones
realizadas por la organización.
En estos últimos años en algunas comunidades de esta parroquia, varias mujeres han
sido parte integrante del cabildo. Por ejemplo, Inés, docente, casada y madre de un
hijo, fue la primera mujer nominada como vicepresidenta de la Junta Pro-Mejoras del
Centro Salasaca, la misma que después de un tiempo fue reemplazada por su esposo.
Al respecto dijo: “cuando estaba vicepresidenta de la Junta Pro-Mejoras, pero estuve
poco tiempo participando, de ahí mi esposo tomó las riendas del caso y entonces él
participó”73. Al parecer, Inés no había tenido oportunidad de participar a nivel del
cabildo. Fue su primera ocasión, pero tampoco pudo cumplir por razones muy
personales, como el descuido. Esa fue la única explicación por parte de ella por
haberse alejado del cabildo. Así manifiesta al respecto: “Me descuidé y... no sé qué
pasó, pero total es que terminó mi esposo”74. Aún recuerdo con claridad cuando Inés
estaba de candidata para presidenta. Algunas mujeres estábamos muy optimistas en
tener una mujer en el poder. Otras mujeres preferían no dar el voto a su compañera
sino al varón. Al respecto, menciona el líder de la comunidad Pintag, que fue
presidente de la UNIS y el Movimiento Indígena de Tungurahua (MIT): “Las mismas
mujeres desvaloran. Por ejemplo, en una comunidad te candidatizan y a tí, por ser
mujer, no te darán votos. Por eso, la participación no es igual como del hombre”75. En
este caso, las mismas mujeres no dan importancia a su género. Por lo tanto, no
apoyan cuando la mujer es candidata para un determinado puesto en el cabildo.
Desde que Inés participó en la elección del cabildo y fue electa vicepresidenta, aunque
no cumplió con ese rol, las esperanzas de algunas mujeres no se habían quedado
atrás. Así, al año siguiente también eligieron a otra mujer como vicepresidenta de la
73 Entrevista: 6(ID1:2) 74 Ibid. 75 Nota de campo: (RM: 26-06-00)
73
comunidad Centro Salasaca. Al igual que Inés, era docente, casada y madre, estos
roles no la habían dificultado. Más bien, ella supo decirme que, junto al presidente y
otros dirigentes, había aprendido a perder el miedo de hablar frente al público y
realizar gestión para la comunidad. Así dijo la ex -dirigente al respecto:
Como yo fui elegida a la vicepresidencia del Centro, tuve que cumplir, porque muchas compañeras habían puesto confianza en mí. Entonces, no quise defraudar, sino más bien, dar ánimo a otras compañeras para que puedan seguir participando, y así aprender a estar y hablar frente al público también las mujeres. Ha sido una experiencia bonita porque mi esposo también me apoyó. Nunca él se enojó cuando yo estaba ahí, además, cuando nos reuníamos para planificar algunas gestiones, lo hacíamos en mi casa y mi esposo también nos apoyaba con sus opiniones76.
Los dos casos muestran la participación de la mujer a nivel del cabildo y por ende de
la comunidad. Si hablamos de la participación de las mujeres en las dieciocho
comunidades de la parroquia, son pocos los cabildos donde se ve a la mujer en los
cargos de poder, en su mayoría son hombres los que asumen los cargos de poder. En
cambio, un poco ya saliendo del nivel de cabildo, hemos observado que las mujeres
en la mayoría de los módulos de agua del canal Huachi- Pelileo ocupan cargos de
poder. Por ejemplo, en diferentes módulos encontramos a mujeres en cargos de
vicepresidentas, secretarias, tesoreras y vocales. Las mujeres son consideradas por
los dirigentes como “las mejores tesoreras. En este sentido, no tenemos por qué
negarlo. Más bien hay que facilitarlo su participación”77. De este modo, vemos que la
participación de la mujer es activa en los niveles de la comunidad porque una instancia
como del agua de regadío también pertenece a la parroquia. En el mes de junio una
mujer salasaca viajó hacia República Dominicana con el fin de capacitarse y conocer
las experiencias en el manejo y mejor uso en el regadío. El canal Huachi- Pelileo ha
dado oportunidades de participación a las mujeres salasacas para que puedan
experimentar y conocer la administración y gestión. Por consiguiente, la participación
de la mujer salasaca sí aparece aunque no en mayores escalas. Por otro lado,
podemos decir que en algunos casos la participación de la mujer salasaca es activa
pero sin hablar, porque hemos observado que las mujeres que asumen los roles como
vicepresidentas, secretarias y tesoreras no participan con la expresión verbal, no
toman decisiones y, en el mejor de los casos, ni siquiera se atreven a sentarse
adelante en la mesa junto a los otros dirigentes.
Algunos salasacas consideran que es necesaria la presencia de las mujeres en los
cargos de poder, pero lastimosamente, las mujeres aún no han logrado alcanzar estos
76 Nota de campo: (PJ: 01-07-00) 77 Entrevista: P6 (LML:24)
74
espacios de participación dentro de las comunidades. Los pobladores prefieren que los
hombres administren los cabildos y no las mujeres, porque piensan que ellos tienen
mayor capacidad y responsabilidad para la gestión. También las mujeres podrían
administrar y gestionar de una manera eficiente, como ya lo demostró una de las
dirigentes cuando fue vicepresidenta. Una autoridad educativa señala al respecto:
De tal manera que, para nosotros, sería ideal que haya más mujeres en cargo directrices, pero, debido al pensamiento de las comunidades, ellos eligen mas hombres que mujeres. Piensan que los hombres somos más ejecutivos, somos más eficientes en las actividades, más responsables, que tenemos mayor capacidad de gestión, que tenemos mejor capacidad de negociación. Entonces, por ese criterio de las comunidades, no eligen a las mujeres, por lo tanto, los cargos directrices en las comunidades por parte de las mujeres es muy reducida [...] la participación igual no se da, no se da. [...] entonces es muy limitado la participación de ellas en las instancias directivas tanto de comunidades y organizaciones zonales y las instituciones educativas78.
De lo dicho podemos deducir, la participación de la mujer salasaca en los niveles de la
comunidad como en la instancia del cabildo, es decir en los cargos de poder, toma de
decisiones y la expresión verbal frente al público se reduce al silencio y la poca
presencia de ellas en los ámbitos de poder, como veremos más adelante.
3.2.1 Reuniones comunales
La mujer salasaca demuestra activamente su participación en las reuniones y mingas
comunales.
Las reuniones son realizadas en la casa comunal del Centro Salasaca cada trimestre.
A veces se presentan reuniones extraordinarias. Las reuniones extraordinarias pueden
ser llamadas a cualquier hora del día o la noche cuando los casos son urgentes. La
gente es llamada por los altos parlantes de la comunidad para que asistan a la
asamblea y se reúnan a una hora señalada. Las asambleas generalmente son
convocadas por el presidente del cabildo los días viernes, sábados o domingos por la
noche con la finalidad de lograr mayor asistencia de comuneros, en especial hombres.
A la hora señalada, van llegando uno por uno y suelen iniciar una hora después.
Mientras se reúnen, los comuneros (hombres) conversan sobre temas de la realidad
nacional. Por ejemplo, en ese tiempo (cuando hacía la investigación para esta tesis)
era frecuente escuchar sobre la dolarización y el cambio de gobierno y algunos hacen
bromas entre ellos (fuera de la casa comunal). Cuando el número de asistentes es
mayoritario, el presidente del cabildo abre la puerta y pasan todos al salón de
reuniones, donde se ve en la parte superior una mesa y cinco sillas, ahí sólo se
sientan los dirigentes. Hay otras sillas alrededor del salón, generalmente, los hombres
78 Entrevista: P9 (AECP3:38)
75
se sientan. Mientras que las mujeres prefieren sentarse en el piso cruzadas de piernas
en una forma circular entre ellas. Una que otra mujer se sienta adelante, sobre todo,
jóvenes que están estudiando y algunas profesionales, también se observan mujeres
con sus pequeños hijos.
En la reunión, el secretario o la secretaria cumple un papel muy fundamental. Los que
asumen el cargo de secretario o secretaria casi siempre son hombres y mujeres que
han pasado por lo menos la primaria o que saben escribir y hablar en voz alta. La
sesión inicia con una pequeña introducción de parte del secretario o secretaria, luego
lee los temas que serán tratados a lo largo de la sesión. Uno de los primeros puntos es
la asistencia y la fijación de multa por el incumplimiento “en las reuniones las multas
son absoluta responsabilidad de ellos, en fijar las diferentes multas según el caso que
sea”79. Una vez leídos los puntos de orden, intervienen el cabildo para dar la
bienvenida y el agradecimiento a los asistentes y para ver si están de acuerdo con los
puntos a tratar. Es frecuente ver en las reuniones uno que otro hombre que participa
diciendo “está bien o mal” o que aumente otro punto, los demás están callados.
Cuándo pregunta el presidente “¿aprobamos?” Todos dicen “sí, sí, sí”.
La participación de la mujer salasaca en la unidad doméstica es equitativa, es decir,
tiene la misma oportunidad del hombre para tomar decisiones. Pero ya yéndonos a las
asambleas comunitarias o espacios públicos, donde se discuten y se toman decisiones
a cerca de los problemas administrativos, gestiones y otros, la intervención de las
mujeres frente a la asamblea es escasa. Al respecto, una comunera casada, madre de
tres hijos me indicó que “en las reuniones comunales, la participación es de los
hombres; pero más acudimos las mujeres a las reuniones, sólo estamos calladas, los
que participan son sólo hombres”80. Son muy escasas las mujeres que intervienen para
dar su opinión sobre los problemas planteados, ellas prefieren no hablar, aunque
tengan ideas que puedan aportar para fortificar la asamblea. Por lo observado, me
atreví a preguntar: ¿Por qué no toman parte activa de la reunión? Su explicación fue
casi similar a la de todas las mujeres con las que pude hablar: “miedo de equivocar”,
“temor al que dirán”, ”inseguridad”, “vergüenza” y otros factores que limitan su habla
frente al público. Una entrevistada dijo al respecto “no participo por el miedo de hablar
y por el miedo de no ser escuchada por los demás”81. Por otro lado, las mujeres hacen
comentarios entre ellas cuando los hombres hablan. En una asamblea comunal, pocas
mujeres (sólo las profesionales) piden la palabra para dar su opinión o sugerencia.
79 Entrevista: P3(MJDD:6) 80 Entrevista: 19(ID1:4) 81 Entrevista: 19(ID1:4)
76
En las reuniones, las mujeres salasacas se dan espacios de participación mínimos,
como habíamos señalado anteriormente de dos mujeres que fueron elegidas
vicepresidentas en representación de la mujer. Hasta el momento “... en las
comunidades, [...] es rarísimo que una compañera sea presidente o vicepresidenta de
cabildo de una comunidad. Es muy raro pero sí ha habido”82. Sin embargo, en las
elecciones de los cabildos hemos podido constatar que muchas mujeres salasacas no
llegan a tener un voto decidido para elegir un candidato, sino un voto orientado por las
otros salasacas. En otras ocasiones, las decisiones son simbólicas a través de los
aplausos o cuando alzan las manos. Así comentó el actual presidente del Movimiento
Indígena de Tungurahua, un dirigente con 25 años de experiencia:
Las compañeras mujeres al llegar a las reuniones deben tomar decisiones, tener voz y voto, porque muchas de las veces sólo llegan a tener voto porque, guiado por los demás, tanto hombres y mujeres no tienen un voto decisivo, analizado no? Entonces, porque alguien lo dice, si hay que tomar una decisión, todos alzan la mano, porque el otro u otra compañera dice sin analizar, entonces, ese punto nos falta, la participación sí lo hay83.
Por otro lado, los dirigentes no toman las decisiones solos en las reuniones. Siempre
expresan a la asamblea los propósitos que ellos tienen. Discuten y preguntan en
especial a las mujeres de esta manera “ima ninkichi warmikuna, allichumatikun, ima
ninkichi rimarichi” (¿qué dicen las mujeres? Está bien. ¿Qué dicen? Pero hablen). Al
ver que ninguna mujer contesta, el presidente del cabildo expresa así “mana
ñukuchika upalla ruranchikchu, kankunata tapushkanimi, pero imatash mana
ninkiquichik, pakta ñukata jipa puncha rimankichimu mana alli rurashka nisha”
(Nosotros los de la directiva no estamos haciendo solos, estamos preguntando a
ustedes, pero como no dicen nada, cuidado con reclamar después). La
responsabilidad del dirigente o el presidente del cabildo, es dar a conocer a la
asamblea las actividades que serán realizadas durante su gestión y preguntar si están
de acuerdo o no con las actividades a realizarse. Para entender la escasa
participación de la mujer salasaca, más adelante, en el parte cinco se presentará con
mayores detalles. A continuación veremos el grado de participación de las mujeres
salasacas en las mingas comunales.
3.2.2 Mingas comunales
Anteriormente habíamos visto sobre la participación de las mujeres salasacas en las
reuniones de la comunidad. De esta forma, en la cultura andina las actividades
comunitarias más comunes son las mingas y reuniones donde participan niños,
82 Entrevista: P6(AECP3:36) 83 Entrevista: P2 (LML:23)
77
jóvenes, adultos y ancianos (hombres y mujeres). En las actividades de las mingas
comunitarias se puede apreciar la presencia mayoritaria de las mujeres salasacas
(solteras y casadas), por algunos factores sociales que se manifiestan en los hogares
observados. Uno de los factores que provoca la ausencia del hombre es la migración
temporal a “Quevedo, Santo Domingo, Quito, Lago Agrio o Galápagos”. El esposo se
ausenta por algunos meses o años, es ahí donde recae sobre la mujer la asistencia a
mingas y reuniones comunales a más de otros trabajos de la unidad doméstica. En el
caso de Rosa, mujer casada, pasa la mayor parte de su vida sola con su hija (estudia),
porque su esposo trabaja fuera de su hogar (Provincia El Oro). Ella, además de
cumplir con los trabajos acostumbrados en su casa, también está obligada a realizar
las mingas de la comunidad para no recibir sanción del cabildo o pagar multas. Al
respecto, dijo: “cuando mi esposo va a Quivido o Galápagos, yo tengo que trabajar
todo, en casa con wawas, con terrinito, con mingas de aquí, si no voy, mi vienen a
cubrar”84.
Según lo observado, otros factores que limitan la presencia de los hombres en las
mingas comunitarias son los trabajos agrícolas y las artesanías del tejido. En algunos
hogares, el hombre trabaja todo el día de lunes a sábado desde las horas de la
madrugada hasta altas horas de la noche en el tejido junto a sus obreros, situación
que no permite involucrarse en las mingas ni en las reuniones comunitarias. Muchas
veces dice el esposo a su esposa “anda tú, yo gano más tejiendo”85. El trabajo frente a
la difícil situación que presenta actualmente la sociedad ecuatoriana, permite a la
mujer indígena tener mayor oportunidad de participación en los ámbitos de la
comunidad.
Para realizar las mingas comunales, en la segunda reunión presentan propuestas, los
dirigentes elegidos en la primera sesión. Estas actividades son discutidas y luego
planificadas. Ahí también, entre todos fijan la cantidad económica de las multas de
acuerdo a los estatutos elaborados. En cambio, algunas mingas están fuera de lo
planificado, las mismas que son comunicadas por los altoparlantes de la comunidad a
altas horas de mañana. Muchos dirigentes, cuando pasan el comunicado suelen decir
“Karicunalla, mana warmikunaga, ni marakunapash” (Sólo hombres, no mujeres ni
niños)86. Aunque los dirigentes limitan la presencia de las mujeres y niños, en estas
actividades se ve poca asistencia de hombres, por las diferentes situaciones que se
presentan al interior de cada uno de los hogares salasacas. Al respecto, dijo una
84 Nota de campo: (RsM:24-05-00) 85 Experiencia propia 86 Notas de campo.
78
informante “a las reuniones y las mingas vamos más las mujeres, porque aquí es la
costumbre de ir más las mujeres, no los hombres. Ya que ellos trabajan fuera de la
comunidad. Entonces nosotras somos responsables de ir a estas cosas”87.
Para las mujeres, cumplir actividades de la comunidad es una costumbre. Ya que la
minga es considerada como una tarea más de ellas, no se hacen problema. Asisten
sin ninguna resistencia para trabajar y cumplir con los mandatos del cabildo, situación
que no sucede con algunos hombres, debido a que tienen que realizar otras tareas
exclusivamente de hombres (como el arado) en beneficio de su familia. Ante la poca
presencia de los hombres, mi curiosidad era saber por qué el hombre no participa con
mayor frecuencia en las labores comunitarias. Uno de los comuneros supo contestar
de la siguiente manera “para mí que los hombres somos más ocupados, por eso ellas
son las encargadas de hacer todas las cosas que manda la comunidad y mandamos a
las mujeres a las mingas porque nosotros tenemos que trabajar fuera o en el campo”88.
En cambio, algunos manifiestan que ir a las mingas “es una pérdida de tiempo”89. Por
eso prefieren que vayan sus esposas ya que ellas no van solas sino siempre
acompañadas de un “puchskana huango”90 para hilar mientras descansan o
almuerzan. Las mingas, por lo general, se realizan los días martes desde las siete de
la mañana hasta las seis de la tarde. Otras dependen del tipo de minga, como
derrumbes de las acequias, limpieza de acequias, rondas nocturnas de vigilancia y
otras. Estas actividades son desarrolladas en forma competente y cumplida. Así, la
mujer salasaca ha demostrado una vez más su participación en representación de su
unidad doméstica.
En la sociedad andina, hay distintas maneras de participar, puesto que la mujer se
halla inmersa en diferentes funciones sociales que abarca espacios desde los
preparativos de las fiestas rituales, cuidado de los enfermos hasta la selección de
semillas dentro de la estructura familiar. Al respecto, el presidente actual del MIT
manifiesta “además, las mujeres participan de diferentes niveles. Ellas participan a
través de mingas, reuniones, fiestas rituales, curaciones, cosecha y otros...”91. Las
situaciones señaladas dan a conocer que las mujeres salasacas desempeñan más
funciones y cumplen más trabajos, sin ser ellas reconocidas por la sociedad actual.
87 Entrevista: P3(RJV+D:48) 88 Entrevista: P3(AOVJAM1:46) 89 Nota de campo 90 El “huango” es un bulto de lana amarrada en un extremo de un palo que sirve para hilar. 91 Entrevista: P9(LML6:25)
79
En síntesis, podemos decir que la mujer salasaca cumple múltiples funciones, como
en la unidad doméstica y la comunidad. En el ámbito de la comunidad, la mujer
participa en las actividades como las reuniones y las mingas solicitadas por los
presidentes de cabildo, de aguas, etc. En esta parte, hemos enfocado en las reuniones
y las mingas comunitarias porque son espacios donde se ve la presencia mayoritaria
de las mujeres salasacas. En la categoría reunión se observa la asistencia amplia de
las mujeres, debido a que sus esposos se encuentran trabajando fuera de la
comunidad, o a veces los hombres prefieren quedarse trabajando en los telares hasta
las altas horas de noche. Por estas situaciones, la mujer es obligada asumir esta
responsabilidad con la finalidad de no recibir sanción mediante una multa económica.
Cabe indicar que las reuniones generalmente se realizan por la noche, con el
propósito de reunir a los jefes del hogar. Lo mismo sucede con las mingas
comunitarias, espacios donde la mujer demuestra su fuerza física de acuerdo a los
trabajos presentados. A veces los trabajos de mingas son bastante difíciles y requieren
la fuerza del hombre. En estos casos, los hombres se responsabilizan, pero siempre
las mujeres apoyan en otras tareas que igual resultan ser igualmente cansadoras.
Muchas veces, en las mingas se observan mujeres con sus pequeños hijos, que
también realizan trabajos igual que los demás. Para evitar mirar todas aquellas
escenas que pasan las mujeres en los trabajos comunales, los dirigentes prefieren que
el hombre esté presente en estos tipos de actividades.
Para la mujer salasaca, la carga ocupacional es bastante agitada, porque no basta con
las actividades de la unidad doméstica sino también tienen que participar en los
trabajos comunitarios. Por otro lado, estas labores ejecutadas diariamente en las
comunidades son una forma de involucrarse en los espacios públicos comunales.
En el espacio comunal vemos la participación activa de la mujer salasaca a través de
la minga y la reunión, pero este espacio comunal como que no trasciende al espacio
institucional, donde la presencia de la mujer es escasa en la toma de decisiones y
asumir cargos administrativos públicos.
3.4 En la Organización Parroquial Unión de Indígenas Salasacas (UNIS)
En este espacio, veremos cuánto poder tienen las mujeres en la toma de decisiones
en las asambleas realizadas por la UNIS y su grado de participación frente al público.
Antes que surgiera la organización Unión de Indígenas Salasacas, la parroquia
contaba con la Junta del Campesinado. Por los años ‘80, Salasaca se encontraba en
conflictos con la vecina Parroquia Benítez (mestiza), por los límites geográficos. Para
asegurar los límites y bienes de la comunidad, en el año de 1985 se reúnen los líderes
80
de las 18 comunidades de la parroquia Salasaca, con el fin de elaborar el estatuto
general con la participación de hombres y mujeres. Una vez elaborado el estatuto, éste
fue enviado al Ministerio de Agricultura y Bienestar Social, siendo aprobado
jurídicamente con fecha 22 de julio de 1985, Acuerdo Ministerial No. 71792. La Unión
de Indígenas Salasacas es la organización de base de cuarto grado93 (OBCs). Por
circunstancias de proyectos existentes y demandas por parte de las autoridades de la
provincia, se afilió al Tungurahua Runacunapac Jatun Tantanacui, Movimiento
Indígena de Tungurahua organización de tercer grado94 (OTG). Por medio de este se
integra a la organización regional Ecuador Runapac Riccharimui (ECURUNARI),
formando parte de la organización nacional Confederación de las Nacionalidades
Indígenas del Ecuador (CONAIE).
La actual directiva de la UNIS se identifica con los sectores menos favorecidos de la
parroquia y ha realizado gestiones fundamentales, con el apoyo de las comunidades y
las organizaciones vinculadas al desarrollo. En estos momentos, la UNIS recibe
proyectos bajo la administración de la Consejo Nacional de Desarrollo de Pueblos
Indígenas del Ecuador CODENPE. Razón por la cual, en las comunidades de la
parroquia se estaba realizando talleres de capacitación para la elaboración de los
planes estratégicos. Aquí se podía observar la mayor concurrencia de mujeres a estas
reuniones con el fin de aportar con opiniones sobre las necesidades, para que los
dirigentes en base a esas necesidades realicen propuestas urgentes de las
comunidades.
La participación de la mujer salasaca en los espacios de poder de la organización
UNIS es escasa, aunque en el año de 1997, candidatizaron a una mujer para
presidenta. Mediante voto popular, ocupó el segundo lugar asumiendo inmediatamente
el cargo de vicepresidenta. Luego de unos días, fue reemplazada por un hombre. Las
razones de su destitución del poder no las conocemos, pero sí podemos considerar
que el actual presidente no estuvo de acuerdo, porque ella pertenecía a un grupo
opositor, debido a que esos momentos la comunidad se hallaba dividida por
cuestiones de límites comunales. Así cuenta al respecto una líder joven de la
92 Esta información fue obtenida en una entrevista con Manuel Masaquiza Jiménez, actual Teniente Político de la Parroquia Salasaca. 93 Las organizaciones de cuarto grado son las organizaciones de base o zonales que están dentro de las comunidades por ejemplo, la Unión de Indígenas Salasacas (UNIS). 94 Las organizaciones de tercer grado son aquellas que abarcan a varias organizaciones zonales. El Movimiento Indígena de Tungurahua pertenece a esta categoría, la misma que comprende a las siguientes organizaciones de base: Unión de 7 Comunidades (UNOCANI), Unión de Comunidades Cristóbal Pajuna (UCCP), Unión de Indígenas Salasacas (UNIS) y otros como las Zonas de Santa Rosa, Chibuleo, Quisapincha, San Fernando, Píllaro, Tisaleo y Cunuk Yaku. (Luis Miniguano, presidente encargado del MIT 02-06-00)
81
comunidad que actualmente trabaja en una organización nacional con proyectos eco
turístico “[...] hace tres años tuvimos una dirigenta, vicepresidenta mujer, pero no la
quisieron reconocer. Las causas no las sé. No creo que fuera por ser mujer, sino
porque era del otro bando, como quien dice, opositor al presidente actual, no a la
organización...”95. A partir de este testimonio podemos ver ya un intento de explicación,
del por qué de la falta de la mujer en las estructuras del poder de la UNIS, no es un
problema de género, es determinante a qué grupo de líderes pertenece, a qué partido
político o el tipo de dirigente. Situaciones como éstas no parecen ser justificadas por
las actuaciones de quienes están en el poder de la UNIS. Esto ha perjudicado
actualmente la participación, no sólo de mujeres sino también de hombres salasacas.
Razón por la cual, algunos comuneros aún recuerdan los años pasados de la
organización, porque los dirigentes tenían propuestas de participación comunal. Hoy,
aquellas propuestas sólo han quedado marcadas en los libros de la UNIS. Un
comunero joven casado menciona “estuve de acuerdo con la organización por sus
nuevas propuestas de participación, hace como 2 o 3 años ya no está marchando bien
la organización, porque muchos dan diferentes opiniones y el presidente no está de
acuerdo”96. Estas realidades presentadas al interior de la UNIS han provocado la
escasa participación, en el sentido de dar uso a la palabra frente al público por parte
de los comuneras/os de la parroquia, porque las opiniones de algunos participantes no
son tomadas en cuenta por ciertos dirigentes.
3.4.1 Reunión convocada por la Organización (UNIS)
La oficina de la organización está ubicada en el Centro de la parroquia. Cuando hay
reuniones todos los moradores de las 18 comunidades concurren hacia allí. Las
asambleas, por lo general, se realizan los días sábados por la tarde y duran hasta la
noche. En una pequeña plaza de tierra junto a la oficina de la UNIS se reúnen los
pobladores. Comúnmente las mujeres se sientan en el suelo. Sólo se observa a
hombres mayores sentados junto a las mujeres y los demás prefieren escuchar la
reunión parados. Los dirigentes se sientan cerca de la puerta de la oficina en unas
sillas, está la mesa donde anota el secretario y un pequeño equipo de amplificación.
La reunión se inicia con el control de asistencia a los cabildos y cabecillas de las 18
comunidades. La verificación de la asistencia a los cabecillas dura aproximadamente
media hora y la gente se distrae en las conversaciones. Mientras pasan la asistencia
algunas mujeres realizan el hilado.
95 Entrevista: 99(MmL1:34) 96 Entrevista: 148(EMC2:48)
82
Una vez comprobada la asistencia mayoritaria de las comunidades, se inicia la sesión.
El secretario presenta los puntos a tratar para que la asamblea ponga su visto bueno.
El presidente pregunta sobre los temas que serán discutidos en la reunión, uno que
otro salasaca contesta. Al ver que la mayoría no manifiesta nada, el presidente
muchas veces toma las decisiones sólo con las personas que opinaron (hombres).
Generalmente, las mujeres no opinan, sólo escuchan calladas esperando que los
hombres tomen las decisiones. Un comunero dijo al respecto “los que tomamos las
decisiones somos los hombres, en su mayoría, porque las mujeres siempre están
calladitas o a veces algunas también toman decisiones como siguiendo a los hombres,
pero nunca toman decisión por sí solas, según mi experiencia”97. Por otro lado, la
decisión también se convierte en simbólica, porque reiteradas veces se escucha a los
dirigentes diciendo “alcen las manos los que están de acuerdo o aplaudan”98. Sobre
todo las mujeres aceptan las decisiones de los dirigentes sin analizarlas, o muchas
mujeres, aún teniendo buenos aportes, no quieren hablar por vergüenza o miedo. Por
esta razón, un dirigente de la comunidad y actual Teniente Político manifestó sobre la
situación:
Aquí en Salasaca se ve que la mujer es sumisa, cuando va a las reuniones escucha callada la reunión. Si todos dicen esta bien, ellas aceptan sin analizar, no quieren participar por vergüenza, a veces piensan que si digo mal se van reír. Han crecido encerradas dentro de la comunidad, pero responsables, son muy responsables, sino sólo hablando de la participación en las reuniones no hablan porque tienen miedo, por eso ellas no quieren hablar. Las mujeres en la UNIS no participan99.
En las entrevistas, en cambio, respecto de este particular, algunas mujeres afirmaron
que sí hablan en las reuniones de la organización, aunque no expresan al público.
Esto nos quedó claro con lo observado, mientras que los hombres dirigentes y algunos
comuneros participan hablando en la asamblea, las mujeres hacen comentarios de los
aportes de los dirigentes y comuneros entre ellas. Una de las entrevistadas señaló “en
la vida de la organización ahí sí ya toman decisiones los hombres, pero así también
las mujeres, aunque no estamos en los micrófonos, atrás, atrás ya estamos opinando
que esto no está bien o esto esta bien así”100.
Según mi experiencia, en el año 92, las mujeres participaban con opiniones. Muchas
veces yo también hablé frente al público. La gente respetaba los criterios que las
mujeres teníamos. Aunque no fuimos partícipes en el poder, las mujeres también
tomábamos decisiones, es por eso que las mujeres salasacas participamos
97 Entrevista: 148(EMC2:48) 98 Experiencia propia 99 Entrevista: 111(MML2:39) 100Entrevista: (MD2: )
83
decididamente en el Levantamiento Indígena del 92. Poco a poco en los últimos años,
se ha ido mermando la participación de las mujeres. En la actualidad sólo se ve una o
dos mujeres que opinan frente al público. Hoy mi gran pregunta es ¿por qué las
mujeres ya no participan en las asambleas de la UNIS?
Algunos salasacas reclaman la ausencia de las mujeres preparadas en las reuniones
de la organización, donde ellas bien podrían aportar y tomar decisiones sobre algunos
asuntos presentados por los dirigentes. Un comunero joven menciona al respecto:
En cuanto a la participación de las mujeres salasacas, no he visto más de una o dos mujeres que más o menos son preparadas. No sé que pasará con otras mujeres, porque sí hay pues profesoras, estudiantes y otras. A la hora de aportar o tomar decisiones, ellas brillan con su ausencia, no sé que pasará. Eso sí se necesita verdaderamente un estudio”101.
Esta ausencia tiene explicación. Muchas veces, los jóvenes profesionales (mujeres y
hombres) dicen haber sido partícipes en las reuniones y eventos realizados por la
organización. Por situaciones de problemas personales u otros con el dirigente se han
alejado algunos profesionales, líderes y comuneros, quienes se encuentran
descontentos por las actitudes impositivas del actual presidente. Esto ha perjudicado
la participación en la toma decisiones para una buena gestión y administración de la
UNIS.
Por otro lado, los comuneros tampoco quieren escuchar las opiniones de los
profesionales. Por esta razón, cuando asisten a las reuniones, éstos sólo escuchan.
No opinan, aunque varias veces hacen comentarios entre ellos. Al punto, una joven
profesional manifestaba “yo para qué voy a opinar algo en la reunión de la UNIS,
cuando no escuchan. Mejor prefiero quedar callada, o hacer comentarios entre
nosotros, así nadie me rechaza”102. Verdaderamente, en las reuniones observadas no
vi a ninguna mujer que pase adelante donde están los micrófonos para opinar y decir
si está de acuerdo o no, ni siquiera yo me atreví a pasar adelante y hablar frente al
público, porque realmente creo que sentía miedo. Por eso comparto las opiniones de
algunas mujeres salasacas cuando manifiestan que tienen “miedo”, “vergüenza”,
“temor al que mi dirán”.
Pienso que nosotras las mujeres indígenas y en especial las salasacas, estamos en un
proceso de recuperación. Porque la educación recibida en la niñez dentro del hogar ha
sido bastante marcada en cuanto a la diferencia de sexos. Las hijas mujeres siempre
éramos después del hijo varón. Estas aseveraciones por parte de nuestros padres, o
101 Entrevista: 146(EMC2:49) 102 Nota de campo
84
el tipo del sistema educativo en el que nos hallábamos sujetas y la misma sociedad,
ha marcado en nosotras diferencias. Hoy, estas diferencias son manifestadas por
nosotras a través de los temores que dificultan la participación, la representación de
las mujeres salasacas en lo público. Por lo señalado, las madres salasacas creo que
estamos a tiempo de socializar a nuestros hijos sin diferencias de sexos porque, de lo
contrario nuestras hijas mujeres sufrirán las mismas limitaciones que nosotras.
Sin embargo, hay muchas esperanzas en algunos líderes sobre la participación de las
mujeres, ya que tuvieron una vicepresidenta aunque fue destituida por los dirigentes
de ese entonces, a pesar de eso dice que:
Llegarán si llegará, porque ellas también tienen derechos y están preparándose. Ya tuvimos una vicepresidenta en la UNIS, por eso pienso que sí llegará, pero ellas tienen que ser abiertas, tener un conocimiento amplio, y acoger a todos sea enemigo, amigos todos, para llegar a ocupar esos espacios de poder103.
Por otro lado, hay discursos de participación de los dirigentes donde muestran todo lo
contrario, de cómo hemos visto la participación en las líneas anteriores. También
vemos que un dirigente muestra todo un panorama de participación igualitaria y amplia
de mujeres y hombres. Un ex dirigente de la UNIS al respecto indica:
Bueno la UNIS desde la creación ha sido abierto tanto para los varones como para las mujeres y por ende también yo pienso que falta solamente la participación de la mujer, porque la UNIS es siempre abierta y está con brazos abiertos y por ende no hay el egoísmo de parte de la dirigencia104.
En cuanto a la gestión y planificación de la organización, la participación en general es
reducida, ya que la planificación generalmente es realizada entre los cabecillas de las
18 comunidades. Las mujeres que asisten a las reuniones de la UNIS donde se
planifica sobre las actividades que se realizará durante el periodo de gestión no dan
sus opiniones por temor o agotamiento físico, dejando que el hombre participe y que
ellos tomen decisiones. Ellas aprueban lo que dicen los dirigentes, “son contaditas,
sino que aquí solamente participan más los hombres”105. Las mujeres que asisten a las
reuniones en su mayoría son adultas, que muchas veces se quedan dormidas en las
asambleas por el cansancio del trabajo constante que realizan en la unidad doméstica,
porque en la mayoría de los casos, las asambleas son realizadas por las noches, ya
que ahí disponen de tiempo los hombres. Por estas situaciones, muchas veces se
escucha decir de algunos dirigentes y comuneros “las mujeres sólo vienen a dormir”.
Es evidente que algunas mujeres se queden dormidas en las reuniones por la fatiga
que llevan, porque ellas son las primeras en levantarse en la madrugada y las últimas
103 Entrevista: 119(MML2:41) 104 Entrevista: P1(FCL8:61) 105 Entrevista: 61(ADD1:22)
85
en recogerse, estas cosas algunos hombres no toman en cuenta. Piensan que la
mujer duerme por que no quiere participar en la reunión, al contrario, he visto que las
mujeres hacen mucho esfuerzo para no quedarse dormidas con el propósito de
escuchar la asamblea. Al respecto pienso que los dirigentes, si de verdad quieren que
la mujer participe, por qué ellos no hacen un esfuerzo para realizar las reuniones un
poco más temprano, por qué sólo ellos tienen que disponer del tiempo. ¿Acaso las
mujeres son robots? La mujer también es una persona que necesita descansar para
continuar con sus trabajos dentro y fuera de la unidad doméstica.
En síntesis, podemos decir que la organización UNIS es una instancia que tiene poder
sobre las 18 comunidades, por poseer un estatuto jurídico que ha sido realizado por
los mismos comuneros con la finalidad de ser respetados por las parroquias vecinas
(mestizas) y de respetarse mutuamente entre los salasacas. Por disponer del poder,
tiene la potestad de hacer participar por igual a mujeres, hombres, niñas, niños,
ancianas y ancianos. Si miramos desde este ángulo, la UNIS no cumple con las
normas fijadas en el estatuto, porque se ve una institución masculinizada y a la vez
cerrada, puesto que sólo hay un grupo que siempre quiere manejar del poder, no
dando oportunidad a los demás y mucho menos a las mujeres. Por lo mismo, algunos
salasacas no están de acuerdo con la gestión del actual presidente de la UNIS. Por lo
tanto, rechazan a la organización.
Si retrocedemos sólo dos décadas atrás para darnos cuenta, la participación era muy
diferente. No es por desacreditar a los dirigentes actuales, pero recuerdo que los
dirigentes mayores de ese tiempo fueron personas que poseían mucha sabiduría. Por
no contar en esos tiempos con amplificadores, altoparlantes para reunir a la gente,
ellos tenían sus propias estrategias, como por ejemplo, las reuniones eran de temas
puntuales, convocaban a la gente a las reuniones por medio de los síndicos, quienes
se encargaban de gritar desde las lomas más altas, las reuniones no duraban más de
tres horas. Además, las reuniones se realizaban temprano, donde todos sentados en
la plaza escuchaban y compartían las opiniones con mucho respeto a los aportes de
los viejos líderes, la reunión duraba, a más tardar, hasta las seis de la tarde. No han
pasado más de dos décadas para que sea todo diferente. Hoy muchos líderes
disputan el poder, por eso se observa la división de comunidades, casi nada ha
quedado de aquellos tiempos atrás ni las enseñanzas de nuestros mayores.
86
3.5 En la Organización Provincial Movimiento Indígena de Tungurahua (MIT)
El Movimiento Indígena de Tungurahua (MIT) es una fracción del Movimiento Indígena
de Tungurahua Sede Atocha (MIT-A), que estuvo liderado por la iglesia bajo la
responsabilidad del cura Jesús Tamayo, quién inició apoyando a los indígenas de la
provincia. Luego de un tiempo, trató de imponer en la toma de decisiones, por lo cual
no estuvieron de acuerdo los dirigentes indígenas y, por ende las comunidades. Así,
convocaron los dirigentes al Primer Congreso en el año de 1984 donde participaron 24
comunidades indígenas de la provincia. Es así como nace el nuevo movimiento, como
una organización jurídica e independiente de la iglesia con fecha 14 de febrero de
1985, Acuerdo Ministerial No 0048. Actualmente el MIT, siendo la organización más
representativa de la provincia de Tungurahua, es filial a la organización regional
ECUARUNARI. Por medio de ésta se integra a la Confederación de Nacionalidades
Indígenas del Ecuador (CONAIE).
El Movimiento Indígena de Tungurahua es la instancia que apoya decididamente la
Educación Intercultural Bilingüe de Tungurahua106 a través de proyectos y avales para
los nuevos aspirantes en EIB.
3.5.1 Estructura del Movimiento Indígena de Tungurahua (MIT)
Actualmente, el Consejo de Gobierno del MIT está conformado por el Presidente,
Vicepresidente, secretario y tesorero, más las Secretarías de: Organización y Pueblos,
Agrario y Medio Ambiente, Educación y Cultura, la Mujer y Familia, Salud,
Comunicación y Relaciones Interinstitucionales de Proyectos107.
Dentro de las instancias señaladas, la presencia de la mujer indígena es limitada, por
el momento, el MIT apenas contaba con dos mujeres de la Comunidad Chibuleo de la
Parroquia Juan Benigno Vela del Cantón Ambato, en calidad de secretarias. La
presencia de la mujer salasaca es completamente nula en los niveles indicados, por
cuestiones como las que ellas manifiestan “tiempo”, “no conozco”, “no tengo la
oportunidad de salir”, “me da miedo”, situaciones que hasta el momento no han sido
superadas en algunas de las entrevistadas. Frente a esta realidad, el dirigente actual
del MIT afirma que: “hay cierta resistencia que la mujer tenga toda la libertad de
participar, mucho más si ya tienen hogar, cuando ya son casadas”108. Las situaciones
106 Información obtenida mediante una entrevista al dirigente Luis Miniguano, presidente encargado del Movimiento Indígena de Tungurahua. 107 Ibid. 108 Entrevista: PA1(LML:20-21)
87
señaladas, hacen que la participación de la mujer indígena sea limitada en los
mencionados espacios.
En los años pasados, la dirigencia del MIT estuvo en manos de los indígenas
salasacas por dos periodos. En la gestión actual de la organización provincial,
Salasaca cuenta con un vicepresidente en el MIT (actual presidente de la UNIS). De
esta manera, se observa la participación de los hombres y no así de la mujer. Sin
embargo, la mayoría de los/as salasacas son afiliados al Movimiento, instancia que
respalda con su aval a la participación activa de mujeres y hombres profesionales
indígenas en la educación intercultural bilingüe de Tungurahua. Así narró un viejo
dirigente del MIT:
Sí, damos el aval para que ellos puedan participar en la EIB y tengan respaldo de la organización provincial. Además, el aval damos por igual. No hay preferencias de sólo hombres ni mujeres. Nosotros como miembros de la organización tenemos la obligación de dar por igual la oportunidad de participar sin discriminar a ninguno de los sexos109.
La organización provincial, en este sentido, ha sido muy eficaz, no tiene preferencias
de sexo ni sentimientos de rencor con ninguno de los que solicitan su aval para
participar en diferentes espacios, ya sea como la educación, trabajo en las
instituciones indígenas, becas para estudiantes y otros de mayor importancia.
A pesar del compromiso con el MIT, según mi experiencia hasta el año que estuve
trabajando en la EIB, nunca tuve un contacto directo con los dirigentes. Yo no sabía ni
quiénes eran y sólo conocía a tres dirigentes quienes firmaban al pie del aval. Por lo
observado al MIT, llegan docentes de los Centros Educativos con la finalidad de pedir
apoyo para sus centros. Justo al momento que yo estuve hablando con el presidente,
llegó un docente salasaca a preguntar sobre algunos diplomas que había solicitado.
Estas cuestiones me hicieron pensar que, al momento, el MIT tiene contacto con sus
afiliados y responde a las necesidades de las escuelas. Ya no dan sólo un respaldo
como es el aval sino también ofrece apoyo en algunas gestiones.
En cuanto se refiere a la participación de las mujeres en el directorio de la
organización provincial, dicen haber contado con la presencia de una mujer indígena
(no salasaca). Esta mujer no pudo seguir adelante, argumentando que ella no estaba
en capacidad de seguir en ese puesto porque era analfabeta y no porque los
dirigentes de MIT la excluyeron, sino por posiciones de ella, que se sentía limitada o
menos que el hombre. Al respecto, un viejo dirigente y uno de los iniciadores de este
109 Entrevista: P4(JLlL:50)
88
Movimiento expresa110 “una mujer ocupó el año pasado la vicepresidencia del MIT,
pero no actuó, ella dijo que era analfabeta y si hizo a un lado. No siguió en el poder.
Entran como secretarias, sólo así entran todavía”. Hasta el momento, hemos visto que
las mujeres han tenido representación, aunque sea en un mínimo grado en el poder en
los tres espacios revisados (comunal, zonal y provincial), lo cual da una imagen de
que, en los años siguientes, las mujeres habrán logrado ocupar cargos de poder en las
organizaciones locales y provinciales de Tungurahua.
Algunos líderes que desean la superación de las mujeres salasacas, no dudan de la
capacidad que puedan tener para administrar y gestionar un cabildo, una organización
o la educación bilingüe. Por tal razón, el Movimiento Indígena Pachakutik y otros
partidos políticos, en estas últimas elecciones, dieron espacio para que la mujer
salasaca represente en la candidatura a las Juntas Parroquiales. Por eso, casi la
mayoría de las mujeres y hombres entrevistados dicen estar conscientes que las
mujeres deben tener la oportunidad de participar y vivir la experiencia en los cargos de
poder. Uno de los entrevistados sobre el tema dice que:
Si nosotros apoyásemos a nuestras mujeres, estoy seguro que para el año 2003 tendríamos una mujer alcalde indígena y salasaca en nuestro cantón o una directora de la EIB de Tungurahua, si no alcanzamos estos espacios, por lo menos presidenta de la UNIS o MIT111.
Por otro lado, algunas mujeres han retomado conciencia de que deben participar en
las organizaciones y han reconocido su debilidad, como es la “vergüenza” y el “miedo
a lo que dirán”. Frente a estos factores que limitan la participación, hoy quieren darse
la oportunidad de demostrar su capacidad de gestión y administración en el ámbito de
la organización provincial. Mediante las conversaciones con algunas mujeres,
demostraron estar convencidas de que tienen que participar en MIT, pero ¿cuándo?
Esta es la gran duda, porque a nivel de la provincia de Tungurahua las mujeres
indígenas que tienen oportunidades son pocas. Con esto no quiero decir que la mujer
nunca estará en el MIT. Debo indicar que, para este proceso, pasarán algunos años
hasta que las mujeres tomen conciencia de valor, autoestima y seguridad en sí
mismas. Por otro lado, los hombres tendrían que dejar las actitudes autoritarias sobre
la mujer.
110 Entrevista: P7(JLIL:50) 111 Entrevista: P9 (BCHL3:44)
89
3.6 En la Educación Intercultural Bilingüe de Tungurahua
La Dirección Provincial de Educación Intercultural de Tungurahua (DIPEIB-T) está
ubicada en Ambato, la capital de la provincia. Actualmente, la jurisdicción bilingüe se
halla repartida en las zonas de mayor población indígena de la provincia con 59
Centros Educativos, con un total de 307 docentes y 3.732 estudiantes
aproximadamente112. Según los datos encontrados, 16 (8 mujeres y 8 hombres)
personas trabajan en la parte administrativa de la dirección provincial o subsistema de
nacionalidades o pueblos, integrado por los siguientes componentes: Director de
Educación de Nacionalidad o Pueblos; Área Administrativo- Financiero; Área Técnica y
Unidades Educativas Descentralizadas.
Dentro de las instancias del Subsistema de Nacionalidades o Pueblos,
generalmente, las mujeres se hallan realizando sus actividades en la parte del área
administrativa financiera. Mientras que en otras instancias, la presencia de la mujer es
restringida. Una autoridad educativa manifiesta al respecto:
Aquí, en la dirección provincial de educación, no están desempeñando cargos directivos las mujeres. Están al mando de los departamentos de la dirección. No están mujeres, están sólo hombres. Bueno, ahí se puede decir que se ha relegado un poco la participación de las mujeres dentro de la gestión administrativa y la gestión educativa aquí en la planta provincial. En cuestión de dirección institucional tampoco tenemos presencia de mujeres113.
Por lo dicho, desde su inicio, la planta provincial hasta la actualidad ha estado en
manos de los hombres. Siendo que las mujeres profesionales (Docentes) no han
tenido la oportunidad de ser candidatizadas en las comunidades y en las escuelas
para ser partícipes en la elección de director provincial. Es decir, los participantes para
este cargo son elegidos en las comunidades o en las escuelas, para luego ser
elegidos en una asamblea provincial convocada por las tres organizaciones
provinciales como son: Movimiento Indígena de Tungurahua (MIT), Movimiento
indígena de Tungurahua sede en Atocha (MIT-A) y la Asociación de Indígenas
Evangélicos de Tungurahua (AIET). Estos candidatos presentan propuestas de trabajo
para un determinado tiempo ante la asamblea general de las organizaciones,
autoridades educativas y comunidades mediante un debate entre los candidatos. Son
elegidos en la asamblea general por voto popular de las comunidades representadas.
Una autoridad educativa menciona al respecto:
Dentro de la dirección de la educación bilingüe, quien determina a las autoridades no es precisamente el director provincial o la dirección provincial, si no, se elige a
112 Datos proporcionados por la Lic. Zoila Caizabanda del Departamento de estadística de la Dirección Provincial de Educación Intercultural Bilingüe de Tungurahua. 113 Entrevista: P5 (AECP:36)
90
través de una elección popular en las comunidades, en las escuelas con la participación de todos los actores educativos. Luego son convocados a una reunión provincial, donde son elegidos para directores114.
La EIB en Tungurahua se inició hace 11 años. Desde ese entonces, las mujeres no
han logrado alcanzar el poder, ni siquiera ser encargadas de la dirección. Sin
embargo, una autoridad educativa afirma que estaría gustoso de encargar la dirección
a una mujer, puesto que esto sólo parece ser un discurso. Algunas mujeres que
trabajan en la planta provincial manifestaron: “Nunca nos han solicitado para encargar
la dirección. Nosotras ya trabajamos aquí desde que inició”115. Esta es la realidad
donde el ser hombre (indígena) también se halla influenciado por el machismo, en no
querer reconocer que la mujer puede estar al frente del Subsistema de Nacionalidades
o Pueblos, por lo menos, cuando el director titular se ausenta. Una autoridad educativa
señala al respecto:
Como es el caso de la dirección de la educación, ahora creo han pasado unos 6 a 7 directores provinciales y no ha habido, nunca ha habido ni siquiera encargado, una mujer que esté de directora. Entonces, yo creo que eso es uno de los puntos que incluso para mí ha sido fundamental y que yo estaba pensando en eso, de que si tuviera que encargar la dirección, a mí me gustaría encargar a una mujer116
Sin embargo, el mismo entrevistado afirma que, para asumir un cargo de la dirección,
la mujer debe estar suministrada de conocimiento y poder de decisión para dirigir la
gestión y administración de la EIB. Así manifiesta a lo indicado:
Una mujer también debe estar preparada de alto nivel, que tenga conocimiento, que vale la pena, entonces no, no hay ningún problema, más que todo, una mujer que tenga decisión, buena voluntad, que tenga fuerzas para hacer, que no tenga ninguna dificultad. Más bien estamos tratando de que, algún momento haya una mujer o que sea directora provincial117.
Según lo manifestado, el discurso de algunas autoridades educativas exige a la mujer
alcanzar un alto nivel de estudio para asumir el espacio de poder en la dirección
provincial. Frente a esta realidad, una docente casada dice: ”Yo creo que actualmente,
[...] ni los hombres están tan preparados para asumir cargos de director, porque nos
falta mucha decisión y preparación” 118.
En estos testimonios vemos que tanto los hombres como las mujeres ven la falta de
preparación académica para tomar poder de una eficacia administrativa institucional
en las diferentes instancias, tanto al nivel local, provincial y nacional. Hasta el
momento, los hombres se ocupan de las funciones administrativas y a pesar de sus
114 Entrevista: P9 (CAEP:36) 115 Nota de Campo: 25-06-00 116 Entrevista: P4 (AGAE:41) 117 Entrevista: P4 (AGAE:41) 118 Entrevista: P9 (MMD2:7)
91
falencias, no reconocen sus debilidades y aluden sólo a la mujer que carecen de un
alto nivel de preparación intelectual.
3.6.1 En los centros educativos
Según los datos encontrados, el número total de docentes es de 307, de los cuales 97
son mujeres, quienes trabajan de docentes en las distintas escuelas de la jurisdicción
bilingüe de la provincia de Tungurahua. De este total, sólo 8 mujeres son directoras
profesoras, quienes planifican, gestionan y administran los centros educativos.
La falta de mujeres en los cargos directrices de los centros educativos nos permite
entender algunas de las razones por las que no participan en la planificación, gestión y
administración de la EIB. A esto, algunas de las docentes entrevistadas mencionan
palabras como éstas: “es de mucha responsabilidad”, “hay que tomar decisiones
fuertes”, “para no quedar mal decimos no” y “no la podemos hacer por miedo”.
Según mi experiencia, cuando fui elegida para asumir el cargo de directora, tenía
mucho miedo frente a la responsabilidad de una institución educativa donde tenía que
dedicarme tiempo completo. Muchas veces, mi hogar quedaba en un segundo plano.
Era bastante difícil para mí tener que administrar las dos cosas, hogar y centro
educativo. Al inicio de la gestión, tuve mucho temor, me sentía incapaz de hacer algo,
pero el cariño de la gente de la comunidad, la escuela y el mismo hogar hace que una
se sienta segura frente a la responsabilidad que la comunidad encomienda. Ahora que
he pasado por esa experiencia, entiendo cuando algunas mujeres indígenas no
quieren asumir los cargos de directora. Al escuchar las opiniones de las mujeres
docentes entrevistadas, me he dado cuenta que a las mujeres, sobre todo a las
indígenas, como que nos domina el temor y el miedo, mas no lo que podemos hacer,
porque algunas mujeres sí estamos en capacidad de realizar gestión y administración.
Lo que sí nos falta es superar el miedo y otros factores que limitan la participación.
Una docente, casada y madre, afirma al respecto “muchas veces [...] las mujeres
tenemos miedo de participar en un puesto de dirección”119. En cambio, otro grupo de
mujeres considera que está en capacidad de hacer gestión, puesto que ellas son las
que administran el hogar y quienes poseen un conocimiento acumulado de años que
bien les podría ser útil para la administración y gestión educativa. Al respecto una
docente salasaca menciona:
Pienso que sí, porque también las mujeres tenemos la capacidad de administrar y llevar de mejor forma la gestión, porque nosotras, las mujeres, dentro del hogar somos las ejes de la familia, claro sin desvalorar al hombre. Entonces, nosotras
119 Entrevista: 67 (ADD1:24)
92
somos quienes hacemos gestión, administración y por qué no aplicar todo este conocimiento acumulado de años en la gestión de la EIB y, por tanto, a ver si hacemos una administración pertinente120.
En el espacio educativo, la participación de las mujeres en los cargos directrices es
limitada, por situaciones ya indicadas anteriormente. En las redes educativas de la
jurisdicción bilingüe, pude observar sólo a una mujer en el cargo de dirección. Una
autoridad educativa manifiesta, al respecto “yo creo que de las siete redes que tenemos
en la actualidad, una mujer está desempeñando un cargo directivo. De tal manera que
es baja la participación de las mujeres dentro de la planificación educativa”121.
Por otro parte, se pudo ver que algunos de sus compañeros docentes demuestran
“celo de poder” cuando la mujer asume la responsabilidad de una red educativa.
Notándose claramente el descontento de algunos profesores (hombres), porque
consideran que las mujeres son incapaces de llevar adelante un cargo de dirección, o
simplemente, no aceptan estar bajo la coordinación de una mujer. Ante esta situación,
aparece la poca consideración hacia las mujeres por creerlas inferiores a los hombres.
Algunos docentes creen ser superiores por querer ellos administrar la red, puesto que
la capacidad administrativa de la mujer se ve en conflictos. En vez de ser un apoyo
para su gestión, viene a ser un obstáculo en la toma de decisiones y su desarrollo
personal como mujer. Una autoridad educativa manifiesta al respecto:
[...] la presencia de las mujeres en el sector indígena, vemos que hay muy pocas mujeres que asumen cargos directrices en las unidades educativas en las escuelas. Por lo tanto, la participación dentro de la gestión educativa es mínima y está supeditada a la participación de los hombres como máximos exponentes de un liderazgo educativo, pero la poca presencia que ha habido de las compañeras en asumir roles directivos ha sido eficiente no? Ha sido bastante positivo. Tenemos compañeras que están a cargo de instituciones y vemos mayor responsabilidad, mayor dedicación, pero igual vemos también, el celo de los hombres, en querer asumir ellos las funciones, que en lugar de ser un apoyo para emprender acciones en las instituciones vienen a constituirse como un obstáculo. Eso realmente limita la acción de las mujeres y hace parecer que la función de ellas no es efectiva, que requiere cambio mismo de mando a un hombre. Entonces, yo creo que es necesario también un trabajo bastante fuerte con los hombres, con los profesores para que vayan asumiendo ellos también cargos que, sin ser de un nivel inferior, pero ser docente y estar administrado por una mujer. La concepción misma del hombre no le permite, le exige actuar de una manera un poco dura, un poco exigente contra las mujeres, que hacen todos los esfuerzos para poder mejorar su sistema administrativo122.
En el testimonio presentado, el entrevistado parece tener un doble discurso. El primer
discurso se refiere a que algunos hombres tienen son reconocidos visiblemente, por
manejar el liderazgo. Además, él dice reconocer el trabajo arduo de las mujeres
120 Entrevista: 20 (ID1:4) 121 Entrevista: P5 (AECP:36) 122 Entrevista: (AECP):34
93
porque han demostrado eficiencia y responsabilidad en las funciones asumidas. Esta
entrega al trabajo administrativo de la mujer ha provocado conflictos en algunos
docentes hombres, los mismos que obstaculizan la participación activa de la mujer
dentro de los establecimientos educativos. El segundo discurso, manifiesta que para
cambiar las actitudes negativas de los docentes hombres, es necesario trabajar más
con los hombres, mostrándole que las funciones asumidas por las mujeres deber ser
respetadas y aceptadas, sin ningún tipo de celos ni actitudes negativas que atentan
contra la mujer.
Frente a esta realidad, no sólo algunos hombres manifiestan celos, algunas mujeres
docentes también muestran estar celosas cuando una mujer llega a ocupar espacios
de poder. Situaciones como éstas han dificultado la participación activa de la mujer
dentro de los planteles educativos. Una dirigenta joven, casada de la comunidad de
Chibuleo señala que:
Algunas mujeres pensamos que ya va a ganar un sueldo mejor que el nuestro, o es más bonita, más habladora, se ríe, por eso le ponen, por tantas cosas, muchas ideas que vienen a la mente. Entonces, yo creo que es eso porque no queremos que una mujer llegue a ocupar funciones altas. Esas cosas debemos superar, romper los esquemas negativos que tenemos algunas mujeres123.
El celo o la indeferencia de las mujeres hacia las mujeres que llegan a ocupar cargos
en los ámbitos educativos y otros también dificultan la participación, porque siempre
tratan de no estar conformes con los trabajos realizados, con la capacidad que puede
tener la mujer. Es decir, las mismas mujeres no se valoran, porque piensan que el
trabajo del hombre puede ser mucho mejor. O tal vez piensan que, estando en el
poder, llegan a tener más oportunidades de participar en otros ámbitos. Si las mismas
mujeres colocamos barreras a nuestras compañeras, creo que nunca habremos
logrado con lo que algunas mujeres nos proponemos. Si logramos alcanzar un puesto
de poder las mujeres en la Dirección Bilingüe de Tungurahua habremos dado un salto
para que las posteriores mujeres salasacas, chibuleas, quisapinchas también lleguen a
ocupar un puesto jerárquico.
En cuanto se refiere a la participación de las mujeres salasacas en EIB de
Tungurahua, según los hallazgos, hay 17 que participan de docentes en los diferentes
centros educativos de la provincia. Una de ellas, es directora encargada de la escuela
“Caupolican” del cantón Ambato, parroquia Augusto N. Martínez de la comunidad
Calhua Chico. Ella dice que no es directora titular, “sólo estoy encargada desde el año
95”. A pesar de no ser directora titular, ha demostrado su capacidad de poder
123 Entrevista: P4(VLlL5:55)
94
administrar dedicándose tiempo completo sin ser reconocida económicamente. A lo
señalado manifiesta que “las mujeres también tenemos la capacidad para participar en
cualquiera de estas funciones. Podemos desempeñar con mucha más responsabilidad
este cargo o en cualquiera de los cargos”124.
A continuación, presentamos una lista de las mujeres salasacas que participan en la
EIB de Tungurahua con sus respectivas funciones.
Cuadro No 1
Centros educativos y Cantones de la Provincia de Tungurahua donde participan las
docentes salasacas
No Planteles Cantón Nombre de las docentes Cargo
1 Manzana Pamba Pelileo - Salasaca Masaquiza Jenny
Prof. Parvularia
2 Inti Ñan Pelileo - Salasaca Masaquiza Marta
Masaquiza Delfina
Prof. Primaria
Prof. Primaria
3 República del
Ecuador
Pelileo - Salasaca Toainga Martha Prof. Primaria y
secundaria
4 Jaime Róldos
Aguilera
Pelileo -
Condorahua
Chango Fanny Prof. Primaria
5 Tiwinza v Pelileo- Chiquicha
Masaquiza Olga
Masaquiza Fabiola
Masaquiza Margarita
Prof. Primaria
Prof. Primaria
Prof. Primaria
6 Provincia de
Chimborazo
Ambato- Ambato Chango Berta Prof. Primaria
7 Caupolican Ambato- Augusto N.
Martínez
Masaquiza Orfelina Directora- Prof.
Primaria
8 José Felix Ayala Ambato- Pucará
Grande
Chiliquinga Elena Prof. Primaria
124 Entrevista: 16(ID1:3-4)
95
9 U.E. Ambayata Ambato-
Quisapincha
Jerez Inés
Jerez Carmen
Prof.
Secundaria y
primaria
Prof.
Secundaria
10 U.E. Casahuala Ambato-
Quisapincha
Toinga María Prof.
Secundaria
11 U.E. Huayna
Capac
Ambato- Apatug
Cuatro Esquinas
Masaquiza Zoila
Masaquiza Rosa María
Chango Janeth
Prof. Primaria
Prof.
Secundaria
Prof.
Secundaria
Fuente: Elaboración propia con datos proporcionados de la estadística de la DIPEIB-T.
Periodos 1999-2000.
Según los datos señalados, las mujeres docentes salasacas participan en los once
diferentes Centros Educativos de la provincia de Tungurahua. Si revisamos el cuadro,
podemos apreciar que sólo una mujer salasaca ocupa el cargo de dirección, el resto
son docentes.
A pesar de no tener el nombramiento de directoras, algunas docentes se dedican a
colaborar en la parte de la gestión. Muchas veces, cuando los directores son de la
misma comunidad, a veces no tienen tiempo para ir hacia la ciudad donde se
encuentran generalmente, la alcaldía, prefectura, EIB, ONGs y otras instituciones que
apoyan a la educación. Esto ocurre frecuentemente con algunas mujeres que trabajan
en el cantón Ambato. Cuando el director no tiene tiempo, las docentes se encargan de
ir a preguntar en las instituciones señaladas, las solicitudes ya dejadas por parte del
director o por ejemplo, ir a la dirección a comunicar algunos inconvenientes suscitados
dentro del plantel u otros. Por otro lado, las mismas mujeres se ofrecen a apoyar al
director para realizar una gestión conjunta y, algunas veces, la gestión también
requiere de la colaboración de los padres de familia y comuneros para lograr los
objetivos trazados durante el año escolar. Una docente señala al respecto que:
En el CEC Inti Ñan conjuntamente con el director hemos trabajado, casi igual a igual, ya que es una institución experimental que necesita de mucho apoyo, ya sea de las docentes, padres de familia y de la misma comunidad. Por lo tanto, he
96
estado participando activamente para conseguir los modelos propuestos para el centro educativo125.
Por otro lado, la participación de la mujer en la gestión educativa es muy importante,
ya que la mujer, como buena gestionadora del hogar, conoce también las necesidades
más urgentes de los centros educativos. Es imprescindible la participación de las
mujeres al igual que de los hombres, debido a que se pueden complementar con los
aportes que tiene cada uno. Sin embargo, el aporte de la mujer está más enfocado a
conseguir lo que se propone con el apoyo de todos los actores educativos para el
desarrollo de la comunidad, organización o educativo.
Según lo observado y la experiencia personal, algunas mujeres no nos cansamos de
seguir molestando a las instituciones que se ofrecen en apoyar, hasta que cumplan
con lo ofrecido. Algunas veces, de tanto estarnos viendo o molestando, cumplen, pero
muchas veces no logramos conseguir, porque nos ponen muchas barreras para no
cumplir. A pesar de esa situación, no nos rendimos, sí, sobre todo cuando los padres
de familia o la comunidad encomienda para que realice la gestión. Por otro lado, nos
topamos con compañeros/as docentes que no creen en la capacidad de adquirir algo,
por eso muchas veces me han dicho “qué vas poder, si eso es difícil”. Al menos,
cuando se enteraron que yo venía a estudiar maestría, me decía un compañero
profesor “qué vas a dejar la misa lista, para que otros canten”. Entonces, el querer o
poder hacer algo está en cada uno de los actores sea mujer u hombre. Por ejemplo, la
directora del CEC Provincia de Chimborazo realiza las gestiones a costa de todo, los
resultados de su gestión son bastante pertinentes, porque ha conseguido buen
equipamiento del plantel, un terreno donde ya están construyendo la infraestructura
propia. Una de las directoras manifiesta al respecto:
Las mujeres también tenemos capacidad para hacer gestión en las escuelas, somos más responsables en sentido de hacer gestión porque cuando queremos conseguir algo, la conseguimos, ya que hoy en día nos están abriendo las puertas. Entonces, debemos de demostrar que las mujeres indígenas también tenemos ese espíritu para el desarrollo de nuestras unidades educativas y las comunidades donde vivimos.126.
Con lo señalado, en ningún sentido estamos tratando de minimizar al hombre, son
cosas reales que ocurren en la vida de cada profesional, dirigente, líder comunitario,
todo depende de la capacidad y la buena voluntad que tenga la persona para realizar
gestión.
Por otro lado, hemos observado que las pocas mujeres que asumen cargos de
dirección, han demostrado responsabilidad en gestión y administración de los centros
125 Entrevista : P1(MD2:4) 126 Entrevista: P5 (ADD1:11)
97
educativos. Por tal razón, manifiesto que las mujeres somos competentes para
cualquier trabajo que delegue la comunidad o la escuela. A veces, creo que nosotras
también tenemos la culpa en no querer aceptar algún cargo, porque pensamos que no
vamos a poder cumplir. Pienso que las mujeres estamos en hora de que nos
pongamos la mano en el pecho y, decir yo voy a poder y asumir cualquier
responsabilidad con mucho valor.
3.6.1.1 Las madres de familia en los centros educativos
Las reuniones en los centros educativos Manzana Pamba e Inti Ñan de la parroquia
Salasaca, por lo general, se realizan durante los días de la semana por la mañana,
dura hasta el mediodía. Como se señaló anteriormente, en las reuniones comunales y
la UNIS, la ubicación de las mujeres y los hombres son semejantes. A pesar de que
los planteles educativos en su mayoría cuentan con los pupitres de los niños, las
madres prefieren sentarse en el piso. Las reuniones en las escuelas de la comunidad
son colectivas (todos los grados). La mayoría de las veces son convocadas por el
director de la escuela para tratar temas relacionados con la conducta,
aprovechamiento de los niños, problemas de infraestructura, mingas, fiestas, gestiones
y otros.
La participación verbal y personal de las mujeres es escasa. Cuando quieren
manifestar algo, en la mayoría de los casos lo realizan en coro, empieza hablando
una, luego todas hablan en voz alta, a veces casi no se entiende la expresión grupal
de las mujeres. Por lo que el director o presidente de padres de familia le llama la
atención con estas frases “Upallichi” (silencio), “Kunun rimarichi, shuk, shuk” (ahora
hablen uno por uno). Según lo observado, las reuniones en las dos escuelas son
diferentes. El Centro Educativo “Manzana Pamba” se distingue porque no es
obligatoria la presencia del papá y la mamá, puede estar un familiar más cercano que
tenga mayor de edad, muchas veces asisten a las reuniones hijos/as mayores. Un
docente del CEC Manzana Pamba dice:
Bueno, se ve más participación de las mujeres, debido a que los padres de familia van hacia Galápagos y otros a la Costa a trabajar de albañiles. Entonces, como las mamitas son las encargadas de la responsabilidad de los hijos, vienen a las reuniones para no pagar multas o también para saber el rendimiento de sus hijos127.
En cambio, el Centro Educativo Experimental “Inti Ñan” busca la manera de tener
presentes en las reuniones a la pareja, es decir, al papá y la mamá con la finalidad de
conocer cuáles son sus intereses como padres en la educación de sus hijas y hijos.
127 Entrevista: PL (MPD4:113)
98
Una docente del Inti Ñan menciona al respecto que: “Según en mi trabajo asisten más
las mujeres, ya que los hombres van al trabajo, hemos hecho reuniones para tener al
papá y la mamá. Los dos son responsables del hijo. Entonces, ahí sí, acuden la
pareja, bueno ahí toman las decisiones los hombres más”128. En cuanto a la toma de
decisiones, es semejante a las reuniones comunales como también de la organización.
Quienes deciden son los varones. Aunque las madres salasacas dicen no participar
verbalmente, son las que más participan dentro del trabajo comunitario y educativo.
Por lo tanto, la participación de las mujeres salasacas en los distintos ámbitos es
mayoritaria, aunque en la toma de decisiones, su voz no es escuchada al público. Con
su presencia demuestran que ellas son partes activas de la sociedad salasaca.
4. Roles y funciones de la mujer salasaca en diferentes espacios
4.1 La doble tarea de la mujer: compartir la minga
La mujer salasaca asume las labores comunitarias como las mingas, reuniones
comunitarias, actos culturales y educativos, porque los jefes del hogar salen a trabajar
fuera de la comunidad. Por lo tanto, la mujer se encarga de cumplir el rol de la minga
con el fin de no recibir sanción económica. Además, consideran que la minga y las
reuniones son espacios donde ellas puedan dialogar acerca de sus problemas, sus
hijos, sus alegrías, sus fiestas y otros. Un dirigente de la comunidad opina al respecto:
Concurren más las mujeres, porque los hombres salen a trabajar fuera de la comunidad, y al mismo tiempo, aprovechan para conversar con las demás mujeres, aunque las mujeres desempeñan un doble trabajo, porque tienen que ir a las mingas o reuniones y a la vuelta tiene que cumplir con las tareas en el hogar129.
Mediante este testimonio podemos ver que la mujer salasaca cumple diferentes roles
ya sea en la comunidad o dentro de la unidad doméstica. Por consiguiente, las
diferentes actividades presentadas en la comunidad trasladan también a las jóvenes
mujeres a participar en cualquiera de las actividades, ya sea comunitarias o del hogar.
Una joven comunera manifiesta al respecto
Nosotras también podemos participar realizando distintas actividades dentro de la comunidad, ya que en nuestras comunidades hay diferentes maneras de participar, por ejemplo, ir a la minga, seleccionar semillas junto a mi mamá, hilar, tejer, hacer ritos, ir al colegio y otras130.
El testimonio de una joven estudiante, presenta los diferentes roles que ocupan las
mujeres salasacas. Estas sobrecargas de trabajo sobre ellas pueden ser una manera
128 Entrevista: P12 (MD2:7) 129 Entrevista: 114(MML2:40) 130 Entrevista: 137 (FMC1:45-46)
99
de explicar la escasa participación en los espacios públicos como la organización y
otros ámbitos.
De la misma manera se observa, en las comunidades las mingas familiares, donde
se ve también la presencia de la mujer salasaca. Por ejemplo, en la construcción de
una vivienda, el rol de ellas es ayudar en la cocina, repartir la chicha, el mote, mientras
los hombres trabajan. Es frecuente mirar en una minga familiar que las mujeres se
reparten las tareas. Es decir, cuatro personas ayudan dentro de la cocina a preparar
los alimentos, otras pelan papas y algunas colaboran en cuidar a los animales. Por tal
razón, algunos de los entrevistados coinciden cuando dicen que “participar es
compartir, apoyar mutuamente131. Es evidente que en las sociedades andinas, como
salasaca, aún permanece el sentimiento de solidaridad, sobre todo en las mingas
familiares donde se apoyan mutuamente con el trabajo físico y algunas veces con
alimentos como la papa, el maíz.
Por otro lado, los datos muestran que en algunas comunidades de la parroquia, la
mujer desempeña roles como por ejemplo, el papel de vicepresidentas, secretarias,
tesoreras y vocales. Un dirigente del MIT manifiesta que: “Hay ya en varias
comunidades, en este caso mujeres como vicepresidentas, secretarias y algunas
incluso ya hay mujeres presidentas de cabildos”132. Este testimonio pertenece a un
líder de amplia trayectoria y actualmente presidente del MIT. También ha recorrido
varias comunidades de la provincia, por eso, da una mirada más amplia sobre las
funciones que las mujeres indígenas están desempeñando en el ámbito de la
administración pública.
4.2 Las mujeres nos han defendido.
En las asambleas, cuando se trata de los levantamientos indígenas, los hombres son
los que deciden con las palabras. A la hora de estar presente en las manifestaciones,
marchas, muchos de los hombres brillan con su ausencia. Puesto que la mujer debe
asumir ese rol protagónico, sin temor a la fuerza pública, las mujeres son las que están
en las primeras filas con sus banderas en las marchas demostrando su valentía. En
estos casos, la mujer es muy tomada en cuenta por los dirigentes y comuneros. Pero,
al momento de elegir para un presidente de la UNIS, la mujer queda en un segundo
plano. Un dirigente, señala al respecto:
Al menos en las movilizaciones la participación de la mujer ha sido muy notoria, exitosa y fuerte, han sido definitivamente las que se han parado más que los
131 Entrevista : (SMC4:73) 132 Entrevista: P5(LML:24)
100
varones, considerando que el enfrentamiento como decir con la fuerza pública, entonces han sido las que nos han defendido y, en ese sentido, hay la fuerza de participación133.
En los levantamientos, manifestaciones y marchas, es responsabilidad de la mujer
estar presente. Muchas veces, los dirigentes eligen a las mujeres para que participen
en las protestas de los levantamientos. Al parecer, algunos dirigentes y comuneros
tienen miedo de ser apresados por la fuerza pública, razón por la que no quieren
participar, con eso no quiero decir que la participación de los hombres salasacas es
nula. A veces, hay mayor presencia de los hombres. A pesar de eso, las mujeres
tienen mayor potestad y poder de participación en estos hechos. Así como es tomada
en cuenta para los levantamientos, me gustaría que los dirigentes tomen conciencia
que la presencia de ellas en las estructuras de la UNIS es de mucho valor.
Desde la creación de la organización UNIS, según los hallazgos, hay sólo tres mujeres
que han pasado de secretarias y una elegida vicepresidenta, la misma que fue
reemplazada por otro hombre. Casos como estos nos llevan a reflexionar ¿acaso la
UNIS es sólo para los hombres? ¿Por qué esta organización al momento se ve
masculinizada, donde las mujeres no pueden hablar de sus necesidades de mujeres?
¿Por qué no hay una dirigenta mujer, quien pueda escuchar y apoyar a los problemas
de las mujeres salasacas? Los dirigentes han asegurado que no hay diferencias entre
la mujer y el hombre, es verdad, pero si se quiere representar al poder de la UNIS hay
que estar ligado al grupo de los líderes privilegiados. De la misma manera, los
dirigentes no hacen nada por integrar a la mujer en los roles de las estructuras de la
UNIS, que muy bien ellas podrían aportar con conocimientos acumulados debido a
que la mujer es administradora en el aspecto económico. Las mujeres son
organizadoras de la familia, se preocupan de las necesidades del hogar como:
comprar la comida, útiles escolares, ropa para sus hijos, medicamentos y se
preocupan de cuidar a sus esposos y, además, son reproductoras de la vida. Todas
estas experiencias acumuladas de las mujeres no han sido aprovechadas por los
dirigentes.
Algunos dirigentes de la organización UNIS, cuando se les pregunta por qué las
mujeres no asumen roles dentro de las estructuras de la UNIS, suelen decir que no
están preparadas, no tienen liderazgo. Un ex –dirigente manifiesta, al respecto “dentro
de la parroquia las mujeres, no tienen liderazgo, falta preparación”134. Al parecer, el
hombre justifica con estas palabras por no dar espacio a que la mujer represente en la
133 entrevista: P2 (LML:23) 134 Entrevista: P10 (BCHL3:45)
101
administración de la UNIS. Yo pienso que la mujer cuando asuma el rol dentro de las
estructuras de la UNIS, la propia experiencia le enseñará, así habrá proyecciones en
otras mujeres salasacas, a seguir integrándose poco a poco hasta involucrarse en este
espacio.
Sin embargo, se ha observado que en el pueblo Salasaca, hay mujeres que muy bien
aportarían a la organización. Lo que pasa es que las propias mujeres (algunas) no se
interesan en participar en la administración pública. Si las mujeres salasacas no se
lanzan hoy a estos espacios, desafortunadamente, las estructuras de los cabildos, la
UNIS, del MIT estarán en el poder de los hombres. Como uno de los dirigentes
mencionó “si no tenemos una mujer líder, siempre reinará el machismo”135.
4.3 Roles y funciones de la mujer salasaca en los centros educativos
4.3.1 Nosotras somos madres y sabemos cómo tratar a los hijos y por eso ya
sabemos cómo tratar a los niños de la escuela
El Centro Educativo Manzana Pamba está ubicado en la comunidad del mismo
nombre, a pocos kilómetros del Centro de la parroquia Salasaca. Los comuneros se
dedican a la agricultura y artesanía. El CEC Manzana Pamba cuenta con una
infraestructura moderna de 7 aulas, una cocina, una bodega y una sala de dirección.
Junto al CEC hay un patio reducido donde juegan los niños, debido a que alrededor se
encuentran las casas de los comuneros y por el lado izquierdo cruza la carretera vía a
la parroquia El Rosario y sus comunidades136. Actualmente, el CEC Manzana Pamba
cuenta con 7 profesores, de los cuales 2 mujeres, y 95 alumnos.
Según entrevistas realizados a las docentes manifiestan que el rol principal como
profesional, mujer y madre, era apoyar y dar cariño al niño sin diferencias. Al respecto,
manifiesta:
Yo pienso que más, más a los niños que comienzan de así, debe enseñarles una mujer, ¿por qué? Porque las niñas necesitan ese cariño, ese amor para todas las cosas. Una como madre sabe, se aprecia lo que ellos son, lo que ellos sienten muchas de las veces. En cambio, un hombre puede ser que tenga muchos años de experiencia pero, en realidad, no tiene ese amor que tiene una madre. Porque mire, una madre es todo en la casa, madre, es esposa, es profesora, muchas cosas, entonces las mujeres tienen más experiencias que los mismos hombres137.
Un docente al mismo punto manifiesta al respecto:
Dentro del trabajo mismo con los niños, depende de la persona sea hombre o mujer si la persona es dinámica yo creo que va atraer a los niños no? Depende de que también tenga la personalidad, pero hay mujeres que no les gusta mucho a
135 Ibid. 136 Información obtenida en una conversación con el director del CEC Manzana Pamba. 137 Entrevista: P2 (DCMPMM:115)
102
los niños. Entonces, no podemos manifestar que las mujeres tienen más preferencia o son más cariñosas eso depende de la persona138.
En cambio, el discurso de algunos docentes se contrapone al discurso de algunas
docentes.
Si damos una mirada a los dos testimonios, las docentes enfatizan las palabras
“madre cariño, y amor”, es evidente que una mujer como madre tenga estas
características para enseñar a los alumnos. Por esta razón, en los centros educativos
visitados se observó a mujeres ocupar los grados inferiores, como jardín de infantes,
primero y segundo año de básica. Por otro lado, pienso yo como docente y mujer, que
los hombres docentes también podrían tener las mismas características, porque ellos
también son padres y creo que deben poseer el amor paternal. Es decir, en algunos
casos ambos cumplen con las características señaladas.
El discurso de las mujeres es apoyado con las palabras “somos mujeres, madres
esposas”. Yo también estoy muy de acuerdo con las posiciones de algunas mujeres
entrevistadas, porque la mujer cuando llega a ser esposa, avanza un proceso. Luego
llega a ser madre logrando otro proceso. ¿Qué quiero decir con esto? Algunas mujeres
por ser mujeres tienen un comportamiento maternal sin ser esposa o madre, es decir
es algo natural que cada mujer posee en su interior. Pero también se podría decir,
según la experiencia en los centros educativos y el testimonio del director del CEC
Manzana Pamba, que no todas las mujeres ofrecen amor maternal a sus aprendices, a
pesar de ser madres, esposas. ¿Por qué digo esto? Cuando yo tuve que cambiarme
del primer grado a otro nivel reemplacé a una docente, casada y madre, quien nunca
tuvo paciencia para enseñar a los niños pequeños. Se escuchaba los gritos de la
profesora hacia los otros grados, los niños tenían miedo. Entonces con esta
experiencia pienso que no es amor o cariño el que diferencia si es mujer o madre, sino
es la vocación que uno tiene en la profesión. De la misma manera, otro caso similar
pasó en otro centro educativo. Yo estuve a cargo de un segundo grado, me tuve que
cambiar a otra escuela dejando a los niños en manos de una profesora mestiza y
soltera. No pasó mucho tiempo, donde los padres se quejaban de su actitud de
maltrato frente a los niños. Por tal razón, insisto que para ser docente, pesa mucho la
paciencia de enseñar a los niños y, sobre todo la vocación. Para brindar una
educación eficaz a los niños no es necesario ser mujer, madre o esposa.
138 Entrevista: (DCMPMJ:116)
103
4.3.2 Cuando los muchachos se sienten bien, yo también estoy bien
El centro educativo “Inti Ñan” está ubicado en la comunidad Sanjaloma Alto de la
parroquia Salasaca, tiene algunas etapas de desarrollo. Primero, funcionó como Wawa
wasi, luego como jardín de infantes. En el año de 1996, por mérito a la propuesta
educativa presentada por los comuneros, se eleva como Centro Educativo
Experimental, con Acuerdo Ministerial. Este documento ha facultado al centro
educativo para que pueda extenderse los niveles de educación primario y ciclo básico.
Actualmente, cuenta con una infraestructura pequeña con tres aulas sumamente
equipadas con materiales educativos, una sala de dirección, una bodega y una cocina.
Junto al centro educativo está un patio pequeño con algunos juegos infantiles
realizados por los docentes y los padres de familia. El centro educativo “Inti Ñan”
cuenta con 4 docentes de los cuales 3 son mujeres salasacas y 56 alumnos139.
En este centro educativo, las docentes preparan el ambiente escolar, en la tarde, dos
veces por semana, con la finalidad de brindar una enseñanza pertinente, donde los
niños se sienten a gusto, lo que les hace sentir bien, especialmente a Marta, con quien
tuve más oportunidad de hablar sobre el tema. Junto a ella pasé una tarde observando
cómo realiza la actividad. Es sumamente cansador, porque tiene que clasificar los
materiales que va a usar en los dos días. Por ejemplo, para matemática y lengua
indígena, si falta algún material no duda en hacerlo debido a que algunos materiales
son del medio. Lo que hace es salir a buscar en el campo. No cuesta nada, sino un
poco más de tiempo. En cambio, cuando falta, digamos, un material de lectura, ella lo
prepara con dibujos, utilizando acuarelas y marcadores para que al niño le llame la
atención. También recorta tarjetas y dibuja las letras. Todo lo realiza con mucho
cuidado. Así, deja todo preparado en la tarde anterior. Al día siguiente, la clase resulta
amena y motivada con los esfuerzos que las docentes realizan. Marta menciona al
respecto:
Cumpliendo con estos roles me siento bien. Cuando los muchachos se sienten bien, yo también estoy bien, en poder apoyar en la enseñanza a la gente que necesita. Entonces, claro que el trabajo es arduo y fuerte para la preparación del ambiente, pero en el momento del trabajo, es algo formidable que no se siente ningún cansancio, ya que todo el proceso de enseñanza aprendizaje ya esta preparado, entonces, no tengo ningún problema140.
Si revisamos el testimonio, la entrevistada destaca las palabras “formidable y sin
ningún cansancio”. ¿Qué quiere decir con esto? El trabajo dentro del aula con los
niños es satisfactorio, porque el aula ambiente está preparado con anterioridad.
139 Datos proporcionados por el director del CEC Inti Ñan 140 Entrevista: 40 (MD2:10)
104
Además, son los niños los que planifican al inicio de la semana (día lunes) qué quieren
aprender durante los días de la semana. Como señalamos en esta cita, el director del
CEC Inti Ñan “nosotros los días lunes sólo somos secretarios, ellos son los que
realizan el plan semanal, entonces ese día los docentes guiamos, en qué área le falta
dedicarse más“. Por tal razón, los docentes son los que preparan los materiales y el
aula ambiente. La clase es bastante motivada por la profesora y no se nota ningún
cansancio en los niños. Al final de la clase, se observa sonrisas en los aprendices y
son ellos los encargados de cerrar la clase con una adivinanza, canción o cuentos.
Cabe indicar que sólo hay 7 alumnos en esta aula. Por eso todos participan. Por otro
lado, se observa que los niños tienen toda la confianza de preguntar a los docentes
algo que no entienden para luego ser indicados mediante ejemplos u otros.
4.3.3 Somos secretarias por el hecho de ser madres y mujeres
La mujer busca su propio espacio a parte de ser mujer, madre y docente, dentro de
algunos centros educativos han asumido el papel de secretarias. En este caso, Marta
cumplía el rol de secretaria del centro educativo “Inti Ñan”, al nivel de los padres de
familia. Por ser secretaria de la escuela, tenía que cumplir en redactar oficios
encomendados por el director. A veces, las personas de la comunidad solicitaban de
su apoyo. Por ejemplo, en leer documentos de escritura de las tierras, o hacer alguna
solicitud. A más de ser educadora del nivel pre-primario, también se ocupa de otros
niveles. Al respecto, señala:
Bueno, los roles que se desempeñan, por ejemplo, yo, en la escuela cumplo como secretaria de la institución, también trabajo como profesora del nivel pre-primario en todas las aulas, también doy cultura física a los niños de primaria, y a los del nivel básico ciencias sociales y ciencias aplicadas141.
En cambio, una autoridad educativa menciona a los roles de secretaria y la docencia
como una función del nivel más bajo. Al respecto menciona que:
Los roles [que] las mujeres están desempeñando son cargos de un nivel, no de primer nivel, si no su función está en lo que es secretaria, en lo que es profesoras, [...] pero no tenemos presencia de mujeres que cumplan en los cargos directivos [...]. De tal manera, que aquí en Tungurahua, la presencia de la mujer se limita a cumplir funciones de docente y auxiliares de secretaria142
En el primer testimonio podemos ver que la mujer en los centros educativos asume el
rol de secretaria y docente, considerado por ellas como los espacios propicios de
participación. En cambio, el segundo testimonio pertenece a un funcionario de la
DIPEIB-T. Es evidente, que este actor piense como un nivel inferior a los roles
mencionados, porque muchas veces las autoridades con estar en los cargos
141 Entrevista: 39 (MD2:9-10) 142 Entrevista: P7 (AECP:37)
105
jerárquicos no entienden que también el rol de la docencia y la de secretario son
actividades de suma importancia, porque ahí la mujer empieza a participar, por tal
razón, las mujeres consideran este espacio como el suyo. Con esto no queremos decir
que algunas mujeres se conforman con cumplir estos cargos, también aspiran a llegar
a un nivel más alto. Es ahí donde la mujer se trunca porque los llamados funcionarios
(algunos) de la dirección provincial son indiferentes y no quieren que otra persona
ocupe un cargo dentro de esta instancia.
Aprovechando la paralización, algunos centros educativos estaban elaborando el Plan
Estratégico, por lo cual el director solicitaba la presencia de ella para que esté
presente cumpliendo el rol de secretaria, donde ella tenía que recoger todos los datos
para realizar una memoria. Por ello, ella estaba conciente de cumplir con las
actividades de la docencia, ya que eso era lo que a ella le determinaba su
participación. Una docente, de la Unidad Educativa “Ambayata” señala al respecto:
“Los roles que determinan la participación de la mujer indígena es, en especial, de ser
docente, pero [las] mujeres como madres, esposas brindamos una educación más
adecuada a los niños. Tenemos diferentes roles143.
Claramente, podemos ver en este testimonio, la docente afirma tener su propio
espacio dentro del establecimiento educativo como es el rol de secretaria y docente, a
más de ser mujer, madre y esposa. De este lado, al parecer la mujer se identifica
como la “pacha mama” en la cosmovisión indígena, por que evidentemente este
espacio esta relacionado con la naturaleza, porque la mujer tiene la mirada segura de
ser procreadora, cuidadora, defensora, etc., por eso todo lo que se puede mirar (pacha
mama) ha sido entregado a la mujer por el Jatun pachakamak.
4.3.4 Yo me siento bien cuando puedo apoyar en algo al director
A más de cumplir con las labores educativas la docentes, cumple con algunas
gestiones del centro educativo. O Algunas veces, la docente reemplaza al director
asumiendo las funciones, cuando este se ausenta. Al respecto, manifiesta:
Todos los docentes estamos en las mismas capacidades de asumir cualquier responsabilidad cuando el director necesita de nuestra colaboración. Por eso, me siento bien, cumpliendo algunos de los roles que me ayudan a estar cerca de algunas gestiones que realiza el compañero144
Este testimonio presenta que las docentes también tienen la oportunidad de apoyar al
director del centro educativo, ya que éste encarga la dirección a las docentes,
entonces esto hace que las mujeres también se sientan consideradas a su nivel. Acá
143 Entrevista: 63(ADD1:23) 144 Entrevista: (ADD1:10)
106
ellas también están en capacidad de cumplir cualquier cosa que encomienda el
director o la misma comunidad.
Por otro lado, su rol es acompañar al director a realizar algunas gestiones en Ambato
o Pelileo. Por ejemplo, en el tiempo del trabajo de campo, los comuneros y los
profesores estaban en proyecciones de crear un colegio bilingüe en la comunidad de
Manzana Pamba, estaban presentes también los docentes apoyando esta gestión. Por
eso, una docente salasaca manifiesta al respecto: “A mí me gusta acompañar a
algunas gestiones que realiza el compañero Manuel, así voy aprendiendo algo no?”145.
En este caso, los testimonios la mujer salasaca indican que no sólo cumplen con el
papel de docentes en los centros educativos, si no que también cumplen funciones de
gestión.
5. Razones que dificultan la participación de la mujer
Hasta estos momentos, hemos visto en las partes anteriores la presencia mayoritaria
de la mujer salasaca en las reuniones y mingas solicitadas por los cabildos,
organizaciones, aunque muy poca participación en la EIB. En cambio, en esta parte,
presentaremos todo lo referente a las limitaciones de la participación de la mujer
salasaca en los ámbitos de la comunidad, organización y la EIB de Tungurahua.
La información recogida mediante las entrevistas y enriquecida a través de algunas
observaciones directas de la cotidianidad de las mujeres salasacas, nos permite
compartir algunos resultados como son: burla e indiferencia hacia la mujer, falta de
autoestima, temor al que dirán, temor y miedo a la participación pública, vergüenza de
participar por miedo a equivocarse, y otros.
5.1 No nos toman en serio; ellos hacen a manera de burla.
La burla e indiferencia por parte de algunos hombres es una de las razones que
impiden la participación activa de las mujeres en los ámbitos públicos. Según lo
observado, parece que algunos hombres no quieren que la mujer participe dentro de
los cabildos, organizaciones y la EIB ocupando puestos de poder. Sienten temor de
que las mujeres puedan alcanzar mucho más de lo que ellos han logrado alcanzarlo
en estos espacios. Por tal razón, algunos líderes y hombres salasacas optan por no
tomar en cuenta las capacidades y las responsabilidades que tienen las mujeres para
ocupar un cargo en las instancias ya indicadas. Una de las entrevistadas a
profundidad de la DINEIB señala así:
145 Conversación: (25-06-00)
107
La mujer avanza a ver con claridad, gana el espacio, si la mujer ve con claridad, aunque no pueda decir a nivel general todo, pero uno está convencida que sí es, o es así las cosa, entonces teme [...] de que ese espacio sea ganado por las mujeres. Es lo único, que más puede ser la indiferencia, los celos profesionales también como que en las bromas han dicho que los hombres tienen un cerebro más amplio, con más conocimiento, pero el cerebro es igual tanto del hombre como de la mujer146.
De la misma manera, una docente mencionaba “si vamos a las reuniones una mujer o
si queremos participar, únicamente los hombres se ríen, o no nos toman en cuenta”147.
Según lo presenciado en el caso de las reuniones, muy pocas mujeres participan. Por
ejemplo, en aquella reunión que se realizó sobre la elaboración del plan estratégico en
la comunidad Centro Salasaca, apenas tres mujeres alzaron las manos para pedir la
palabra. A pesar de su participación en representación de la mujer, las opiniones de
ellas frente a los aportes de los hombres no eran tomadas en cuenta por algunos
dirigentes. Una docente salasaca, afirma: “Para mí… que la decisión es siempre
tomada por los hombres. No sé por qué, pero los hombres son quienes deciden si se
hace o no se hace, dejando a un lado la opinión de una mujer”148.
En los tiempos de elecciones para un puesto de poder en el cabildo u organización, las
mujeres cuando son candidatizadas no son tomadas en serio. Esto hace que la mujer
se sienta relegada de estos espacios y hasta se siente burlada. Muchas veces, ni el
mismo que eligió a una mujer para candidatizarla en una elección de cabildo, apoya en
el momento de la elección.
Estos detalles de la burla y la indiferencia han ido causando temor y miedo, hasta que
llega al punto en que ellas se dan cuenta que no son tomadas con seriedad para una
elección u otros como hablar frente al público. Las mujeres participantes reaccionan
frente a estas actitudes indiferentes de algunos hombres y mujeres. Una docente
casada manifiesta: “Son dos cosas, la una no queremos participar y la segunda, que
los indígenas salasacas se burlan, si nos ponen como candidatas. Por eso parece que
tenemos ese miedo a la participación”149.
5.2 Tenemos ideas pero realmente tenemos miedo de hablar
Otra razón para la falta de participación de la mujer salasaca es el temor al que dirán,
siendo éste el más general en las mujeres salasacas o que puede tener cualquier
persona o grupo social. Esta es una obsesión, en la cual la mujer salasaca tiene
“temor al qué dirán” porque cree que le critican su forma de opinión, su estilo de
146 Entrevista: P12 (MPDINEIB:110) 147 Entrevista: 4(ID1:2) 148 Entrevista 18 (ID1:4) 149 Ibid.
108
expresión, su construcción de ideas, sus gestos, su forma de comunicación con los
demás individuos y, con mayor razón, cuando está frente al público o un grupo de
personas como son las reuniones. En algunos casos, este prejuicio resulta ser real. Es
decir, las críticas se dirigen a las personas que opinan, esto puede ser con el fin de
desmoralizar, desaprobar las ideas o simplemente son críticas destructivas. Una joven
salasaca manifiesta al respecto:
Creo que siempre es el qué dirán, el temor a equivocarse, tal vez pensando que alguien está ahí, o no te quiere ver o no sé, o no le simpatizas. Tal vez ese temor, pero a medida que va pasando el tiempo y vas hablando, aunque hables mal pero hablas, entonces eso hay que propender a decirles a las mujeres, que sí se puede hablar, sí puede participar, esas serán las causas. ¿Y cómo enfrentar esas causas? Creo que uno teniendo seguridad, autoestima como mujer, una autoestima de que las mujeres si pueden150.
El temor al que dirán ha influido mucho en la participación de las mujeres, porque
frena el poder de tomar decisiones, el asumir roles de poder, realizar gestiones con los
cabildos, organización y la educación. Por esta causa, muchas de las mujeres dicen
“mejor no participamos en nada”. De la misma manera, se ve a las mujeres que han
recibido educación y que hoy laboran de docentes. Ni aquellas expresan lo que
piensan, por este factor que determina la participación discursiva en los diferentes
ámbitos. Una docente salasaca manifiesta al respecto:
Me parece muy bien, pero lastimosamente en esta sociedad salasaca las mujeres no tomamos decisiones, por más preparación que tengamos. Aquí en las reuniones, en las organizaciones y la EIB son los hombres los que toman decisiones y muchas veces no hablamos, no expresamos lo que sentimos. No sé por qué. Tal vez será porque no sabemos hablar bien el castellano, vergüenza, temor a la gente o al que dirán, o frente al publico151.
Si damos una mirada a los testimonios presentados, sobre el miedo al qué dirán
parece ser una imagen construida por la misma mujer, la familia, los vecinos quienes
observan y controlan las actitudes de algunas mujeres salasacas. Para evitar los
comentarios y la burla de los demás, ellas se mantienen alejadas de los ámbitos
públicos. Por lo tanto, no hay quizás mayor temor en las mujeres salasacas, que caer
en la boca de los comuneros y comuneras por su inseguridad.
5.3 A pesar de tener buenos aportes. Prefiero quedar callada por la vergüenza
Otro de los aspectos más fuertes que aparece en las mujeres del sector andino, en
especial en las salasacas es la vergüenza, la misma que va acompañada del miedo.
Una de las mujeres con la que pude hablar dijo “por vergüenza y miedo yo no hablo en
las reuniones”. Este complejo ha afectado la participación, sobre todo en la forma de
150 Entrevista: 104(MmL1:35) 151 Entrevista: 67 (ADD1:24)
109
expresarse en público. Por una parte, cuando se conversa con ellas en la casa, se ve
que se expresan con toda confianza, comentan de sus vidas, de sus hijos, de las
reuniones. En el caso de Rosario, me habló mucho de su fiesta, cuando yo también
como mujer salasaca me involucré a participar en su casa compartiendo la cocina
donde preparamos la comida en unas ollas grandes, para brindar a la gente que
asistió a la fiesta. Mirando cómo Rosario conversaba de su fiesta, decidí interrogar
sobre su participación fuera del hogar. Ella me contestó de la siguiente manera
“ñukaga wasillabimi sakirini, mana tandanakuykunamunga rinichu, rishabish mana
rimarinichu, alli yuyayta charishash, pinganaimanta upalla saquirinillami (yo casi
siempre me quedo en la casa. Casi no participo en las reuniones. Si de repente voy,
no hablo, a pesar de tener buenos aportes. Prefiero quedar callada por la
vergüenza)152.
De la misma manera, uno de líderes de la comunidad aseguró que las mujeres no
participan porque domina la vergüenza. Así señala al respecto:
Aquí yo he visto, tanto en las reuniones de la escuela como de la organización y otros, no sé por qué será que las mujeres son tímidas, no participan. No sé si es por miedo o por vergüenza, creo que no tienen miedo. Lo que pasa es que tienen vergüenza o sea por no haber crecido en un medio abierto, teniendo contactos con otra sociedad o cultura. Eso es lo que he visto153.
En cambio, algunos hombres también consideran como un elemento limitador a la
vergüenza, en cuanto a la participación de las mujeres en los espacios de la toma de
decisiones en lo público. Por otro lado, relacionan con la participación de las mujeres
mestizas con las mujeres salasacas, que prefieren guardar sus aportes con su silencio
para evitar ciertos comentarios de otras personas. Mientras que las mestizas se
desenvuelven de alguna manera. Pero al mismo momento, justifican la falta de
participación de la mujer salasaca. Así manifiesta un líder de la comunidad Manzana
Pamba, casado, al respecto:
En la sociedad mestiza, en cambio, he visto que las mujeres sí participan dando opiniones. En Salasaca, las mujeres cuando van a las reuniones sólo escucha no quieren participar por vergüenza, entiendo. Pero ellas deben dejar a un lado la vergüenza, el miedo, además ellas nunca salen, han crecido encerradas dentro de la comunidad154.
El factor vergüenza ha dificultado a la mujer salasaca la expresión verbal en la
asamblea y la representación de ellas en los ámbitos de la administración pública. Es
decir, obstaculiza la intervención pública, no aportando las mujeres salasacas con las
152 Nota de campo. Conversación con Rosario esposa del varayuk del año 2000. 153 Entrevista: 111 (MML2:39) 154 Entrevista: 111 (MML2:39)
110
opiniones en una reunión y su presencia en los espacios del cabildo, la organización
UNIS o la escuela.
5.4 Por el miedo de no ser escuchada por los demás no participo.
Según los hallazgos, por el miedo a la participación pública, las mujeres salasacas no
participan en la toma de decisiones en el ámbito de las asambleas comunales,
organizativas y educativas. En las reuniones, cuando se trata asuntos de
administración, la gestión de la UNIS y otros, la participación de ellas es en forma
pasiva. Muchas veces, prefieren quedar calladas debido al temor, al miedo de
expresarse frente al público. Al ver ausencia en la toma de decisiones, en la
participación verbal, me atreví a interrogar sobre el punto. La mayoría de las mujeres
manifiestan tener “temor a la participación pública”, especialmente en las reuniones y
asambleas comunitarias del cabildo y las organizaciones. A continuación, presentamos
algunas opiniones de las mujeres salasacas al respecto:
“No hablo en las reuniones porque me da miedo de participar, tengo miedo, no puedo
hablar en la gente”155
“[...] el miedo y por ser mujer a veces no queremos hablar, por más que tengamos
buenas ideas, es eso”156
“No sé, las mujeres tenemos miedo a participar, no es porque no permiten nuestros
esposos, pero no sé qué pasa con nosotras, las salasacas”157.
Estos son algunos de los testimonios de las mujeres frente a la pregunta: ¿por qué no
hablas en las reuniones? Mientras realizaba las entrevistas, las mujeres preferían no
ser grabadas, porque decían tener “miedo” y se notaba mucho nerviosismo en ellas.
Muchas se quedaron calladas, optaron no hablar del tema. Otras contestaban no sé y
algunas se alejaron de mí para no ser interrogadas.
Por otro lado, también pregunté a los hombres salasacas con respecto al mismo tema.
Así contestó el Jefe de Área del Registro Civil Salasaca158.
Sinceramente, las mujercitas tienen miedo. Son nerviosas, tímidas. Será por diversos factores como: culturales, preparación, seguridad, analfabetismo, liderazgo, machismo y además les relegamos de los espacios de la comunidad, organización y la educación. Es decir, ellas se sienten marginadas. Por eso la mujer salasaca no tiene oportunidad para participar en los ámbitos mencionados159.
155 Entrevista: P2 (ID1:1) 156 Entrevista: 139 (FMC1:46) 157 Ibid. 158 Instancia que pertenece a la Dirección General del Registro Civil de Identificación y Cedulación. 159 Entrevista: P4 (BCHL3:44)
111
De la misma manera un docente sobre el tema manifestó que:
Las mujercitas en el sector Salasaca, sinceramente he visto en las asambleas que se han realizado, siempre tienen miedo, hablemos así, no quieren hablar, están muy calladas, uno no se sabe de qué mismo ellas piensan. Por esta situación como docentes, pienso que debemos dar confianza y espacios de participación160
La palabra “mujercitas”, al parecer, tiene muchos significados. A mi entender, según la
expresión y el contenido de la cita y los gestos observados durante la entrevista, me
lleva a analizar como una ofensa a la mujer por parte de algunos hombres. Por otro
lado, se podría entender la palabra “mujercitas” como una referencia cariñosa. Por
ejemplo, del varón se escucha en los espacios públicos (organizaciones y
instituciones) conocer a la mujer utilizando la palabra “reinita” “doñita” “madrecita” y
otros. En algunos ámbitos, como en el caso del Ecuador, se escuchan las palabras
señaladas de la boca de las mismas mujeres, en especial de las mestizas, para
desprestigiar al ser indígena como sucede en los mercados, hospitales oficinas,
autobuses y las calles de las ciudades (Pelileo, Ambato, Quito, Guayaquil, etc.).
Por tal razón, algunas mujeres indígenas cuestionamos está partícula “ita” porque da
una visión de carencia de nuestras capacidades, de nuestros conocimientos, de
nuestras habilidades como mujeres indígenas, para actuar de manera activa en los
procesos toma de decisiones en los cabildos, organizaciones y la educación
intercultural bilingüe.
De la misma manera, un comunero opina frente al temor y miedo que poseen las
mujeres salasacas así:
Las mujeres, a pesar de que tienen buenas ideas, no sé por qué siempre quieren depender del otro. Porque ellas no han tenido la oportunidad de hablar frente al público, simplemente son vergonzosas, tienen miedo y son recelosas. Por eso, no participan. A pesar de que tienen buenas ideas, dicen, dile esto tú. Entonces, pienso que la causa es el miedo y el recelo, porque ellas sí tienen buenas ideas161.
Estas debilidades de participación verbal en las asambleas y reuniones, al parecer,
vienen desde sus hogares, debido a que la mujer desde el primer momento que llega
al mundo es considerada como “warmipalla” (sólo es mujer) en la mayoría de los
hogares salasacas. Por tal razón, las mujeres con las que pude hablar, mencionan que
“no hemos salido de la comunidad”. Estas palabras son escuchadas a menudo sobre
todo en las mujeres adultas. En cambio, algunas mujeres jóvenes dicen que “las
nuevas generaciones ya estamos teniendo más contacto con las organizaciones”162.
Según lo observado, parece que en estos últimos años, la mujer indígena y en
160 Entrevista: P10 (MPD4:113) 161 Entrevista: P13 (SMC:74) 162 Entrevista: 97(MmL1:33)
112
especial la mujer salasaca esta tratando de participar, a pesar de las limitaciones, ya
se ve la presencia de ellas en las organizaciones nacionales y provinciales. Estoy
consciente de que es escasa la participación de la mujer salasaca, pero hay una que
otra ya en estos niveles. En las décadas pasadas, la participación de la mujer indígena
fue casi nula. Actualmente, la mujer indígena está ocupando espacios políticos, un
claro ejemplo, tenemos la representación de la Dra. Nina Pacari. A nivel de los
Movimientos Indígenas del Ecuador, tenemos la presencia de Blanca Chancoso,
Carmen Yamberla, Carmen Tene, Lourdes Tiban, Mirian Masaquiza y otras con amplia
trayectoria organizacional. De la misma manera, en el campo de la EIB, tenemos a
María Paca, Luz María de la Torre, Tránsito Chela mujeres que han luchado por una
educación propia. También, sabemos que las mujeres indígenas, en algunas
comunidades, están participando en la EIB en calidad de educadoras. Así la EIB ha
dado oportunidades a las mujeres de las comunidades para que puedan participar
como auxiliares de manualidades, arte indígena, la trasmisión de valores tradicionales,
etc. en los diferentes centros educativos de la provincia, con un pequeño incentivo
económico, porque el principio de la EIB es precisamente el respeto a los saberes
ancestrales y culturales, por lo mismo, tiene un enfoque de educación liberadora en la
búsqueda de una vida mejor a partir de las potencialidades y conocimientos propios
que existen dentro de las comunidades.
5.5 Saber hablar la lengua castellano
Otro de los datos encontrados, vemos que es muy necesario el saber hablar el
castellano. La mujer salasaca, por falta de hábito de expresar sus ideas en castellano
o por miedo a equivocar, no manifiesta sus opiniones en las asambleas. Por esta
razón, ellas permanecen calladas en las reuniones. Esto no ocurre sólo con aquellas
mujeres que no han tenido la oportunidad de prepararse, sino también con aquellas
mujeres profesionales. Por otra parte, podríamos asegurar que desde su niñez no han
tenido oportunidades de participación verbal en el hogar, en la escuela. Por tal razón,
no han desarrollado sus habilidades lingüísticas, tanto en su lengua materna como en
castellano, puesto que esto resulta difícil expresarse en un grupo de personas. Por
consiguiente, algunas mujeres tienen miedo a equivocarse en la formulación y la
estructuración de ideas y pensamientos, los mismos que sirven para construir una
frase, un discurso, etc. En este sentido, el miedo a equivocarse en dirigirse a un
público, en pronunciar correctamente las palabras, oraciones y frases en castellano,
que no es su lengua, ha provocado nerviosismo y temor en las mujeres. Así me
comentó una docente casada de la comunidad Centro Salasaca.
113
Por otro lado, influye también saber hablar el castellano, por ese miedo mismo, al menos hablar el castellano en las mujeres. Ese es el miedo que tenemos las mujeres, el miedo a equivocarnos, confundir las vocales y todo el mundo se ría y comente sobre el mal que hable a pesar de las buenas ideas que había propuesto163.
También una autoridad educativa manifestó al punto:
Las mujeres teniendo excelentes ideas no pueden expresar sus ideas. Tiene limitaciones en exponer sus ideas. Es mucho más difícil cuando las mujeres de los sectores indígenas cuya lengua materna es el kichwa y tienen que desenvolverse en ambientes que no son adecuados, no apropiados donde el idioma oficial es el español les dificulta mucho más la participación de las mujeres en las asambleas, en las reuniones, eso limita que las mujeres no puedan participar164
Cabe indicar que las reuniones efectuadas en el ámbito de la comunidad Salasaca
todas son en kichwa. A pesar de ser así, no opinan, no hablan las mujeres salasacas.
No porque no entienden de qué se trata la asamblea, sino más bien deciden comentar
de una forma más privada en la casa con la familia o en la mayoría de los casos se
observa en las reuniones haciendo comentarios entre ellas, mientras participan
algunos hombres como los líderes, presidentes de los cabildos, comuneros y otros.
Una de las entrevistadas afirmó así: “Todas las reuniones son en kichwa, pero no sé,
por qué no participaremos, por más buenas ideas que tengamos, tampoco no nos
atrevemos a participar”165.
La palabra “no sé” aparece a menudo en casi todas las entrevistas. Por eso me lleva a
pensar que las propias mujeres salasacas no entienden por qué no participan en el
ámbito del cabildo, organización y la EIB. Cuando en el hogar ellas son “ejes
articuladoras” de la administración y de la gestión. A partir de mi reflexión, testimonios,
gestos de mujeres y hombres y algunos factores que hemos venido construyendo, a lo
largo de este punto, sobre la falta de participación de la mujer salasaca en los ámbitos
públicos, me permite intentar llegar a una conclusión de que todas aquellas relaciones
sociales, negativas, positivas construidas en el hogar, en la sociedad salasaca, las
diferencias de sexos socialmente determinados conducen a una aparente
inferiorización de la mujer. Por un lado, pienso que no podemos aceptar a estos
puntos como única explicación, ya que puede haber otros factores más profundos que
limitan la participación. Por otro lado, entre éstos podemos manifestar como los
factores más importantes como la autoridad de los padres, el poder tradicional que
está exclusivamente en las manos de los hombres. Durante el desarrollo de la tesis no
hemos tocado el punto del analfabetismo y monolingüismo, pero yo considero que son
factores que llevan a la mujer a tener una baja autoestima, evidentemente, no dando
163 Entrevista: 24 (ID1:5) 164 Entrevista: P9 (AECP:379). 165 Entrevista: 24 (ID1:5)
114
paso a tomar decisiones en las asambleas comunales y de la organización. Otro de los
factores puede ser la socialización primaria que reciben las mujeres salasacas, la
misma que crea un ambiente de baja autoestima como veremos a continuación.
5.6 Warmipanaga shuyichilla, kariguna mikushtuchingama166.
Finalmente, retomado la parte dos cinco de este capítulo, donde se trata la
socialización primaria de las niñas salasacas, podríamos dar una pista para darnos
cuenta de la ausencia de mujeres en los cargos directivos de los cabildos,
organización y la misma EIB donde se toman decisiones. Por ejemplo, en los hogares
salasacas hasta los años, 70-80 era marcada la diferencia de sexos, porque, cuando
nosotras éramos niñas, nuestros padres nos diferenciaban entre hombres y mujeres,
digamos, en la hora del almuerzo, por A o B circunstancias no alcanzó una cuchara
para el hermano varón. Me acuerdo perfectamente cuando nuestra mamá nos decía:
“Kucharada kuichi kari turigunamu, kangunaga warmiwanaga makiwan mikuychilla”.
(Den la cuchara al hermano varón. Ustedes coman con las manitos porque son
mujercitas). O igual pasaba cuando faltaba un banco. Teníamos que ceder nuestros
asientos al hermano varón y sentarnos en el piso. En el mismo ámbito del desayuno,
almuerzo o cena, de igual manera. Cabe indicar que nada era primero para nosotras
las mujeres. Siempre el hermano varón era primero al servir la comida, al bañarse, al
arreglarse. Creo que desde ese momento, nosotras las mujeres hemos sufrido la
desigualdad de oportunidades. Es evidente que por situaciones como las señaladas,
las mujeres salasacas tuvieron menos oportunidades de educarse, “la familia prefiere
que sea los hombres quienes estudien, puesto que ellos serán los que salen a trabajar
a las ciudades y por eso necesitan aprender a escribir y hacer cuentas”167. Otro de los
ejemplos, que hasta hace poco tiempo atrás existía, es que la mujer ni siquiera podía
elegir a su futuro esposo, puesto que esto era negociado entre los padres.
Actualmente también ocurre, pero son casos muy especiales.
Sin embargo, estos cuestionamientos al parecer hacen que la mujer salasaca venga
arrastrando este problema desde su niñez, quedándose algunas mujeres conformes
en no querer superarse. Por un lado, la concepción patriarcal en términos generales,
como el hogar, la familia está en torno a la autoridad del padre. Es decir, las mujeres
dentro de la unidad doméstica estamos sujetas bajo el dominio masculino, ya sea por
el padre, los hermanos, el esposo, los tíos y los abuelos, quienes como hombres de la
familia tienen control sobre nuestras acciones. Antes habíamos citado un testimonio
166 Traducción: Esperen nomás las mujeres, hasta que los hombres acaben de comer. 167 Entrevista: (CTECUARUNARI:7)
115
donde la mujer hace una década atrás ni siquiera podía elegir a su pareja con quien
compartiría su vida cotidiana. Creemos que desde esa perspectiva, la mujer salasaca
está sometida sin ningún poder de decisión en los espacios comunales, organizativas
y educativas, lo cual, consecuentemente, imposibilita la expresión verbal hacia lo
público, de sentir la emoción de tomar decisiones. Por otro lado, vemos que la
sociedad vigila y asegura que la mujer no rompa esta estructura patriarcal del poder.
Ante esta reflexión, quiero citar algunos de los ejemplos que pasan dentro de la
comunidad. El hombre no es permitido construir la casa sobre el terreno de su esposa,
porque la sociedad señalará “mandarina”168. De la misma manera, “la mujer casada
nunca hablará con un hombre. Si lo hace, será considerada como infiel a su marido,
pero al hombre no se le cuestiona”169. El hombre puede hablar o caminar con cualquier
mujer. Entonces, todo este constructo de la idiosincrasia de algunos pueblos andinos
basado en la diferencia de sexos (mujeres y hombres), ha hecho que la mujer
salasaca se aparte de los ámbitos públicos, aceptando su incapacidad de estar
presente en la toma de decisiones, cuando muchas de las mujeres podrían aportar de
manera eficaz a los ámbitos señalados. Es evidente, que la misma socialización, la
misma sociedad, no ha actuado para que la mujer se libere y tenga la capacidad de
poder participar sin temor al que dirán, sin miedo y sin sentirse discriminada por su
sexo ante los demás, como dijo una autoridad educativa de la DINEIB en la entrevista
a profundidad: “Entonces, creo que no veo la diferencia de que uno es más y otro es
menos. Diferencia sexual es otra cosa, pero no diferencial mental, ni sentimental, ni
emocional”170
Como mujer salasaca, considero que debemos seguir luchando en la recuperación del
autoestima. Por tal razón, no debemos dejar que la oscuridad de la baja autoestima
nos limite nuestra participación, porque las mujeres debemos tener las mismas
oportunidades para decidir y demostrar que también la mujer indígena está en derecho
de tener las mismas circunstancias que los varones. No porque somos mujeres
indígenas vamos a dejar que pisoteen nuestros derechos. Estamos en la libertad de
participar porque somos seres humanos que pensamos en el futuro de nuestras
comunidades, de nuestras organizaciones y de nuestra educación. Las mujeres
estamos en condiciones de participar sin olvidar lo que somos, sin olvidar nuestros
valores culturales. Como señalaba una dirigente de la CONAIE: “Las mujeres somos
personas [...] tenemos que buscar el espacio para poder desarrollar como humanos,
168 El término “mandarina” significa mandado por la mujer. Es decir el hombre no tiene autoridad sobre la mujer. 169 Conferencia: (CTECUARUNARI:125) 170 Entrevista: P6 (MPDINEIB:107)
116
como técnicos, como profesionales, como mujeres, eso sí, sin dejar de ser mamá, sin
dejar de ser esposa”171.
5.7 Aquí sólo los hombres tenemos que dominar
Hasta este momento, hemos visto sobre los problemas que dificultan la participación
de las mujeres salasacas. A continuación, veremos el problema del machismo. Para
nuestros fines, está entendido, de una manera más general, como el dominio del
hombre hacia la mujer, pero a lo largo de este punto, con los elementos encontrados
intentaremos dar el significado de la palabra “machismo” en el pueblo Salasaca.
En el ámbito de la comunidad, según algunos de los entrevistados hombres y mujeres,
el machismo llegó a partir de la invasión española. Pero una de las comuneras
mencionó: “creo que debe haber habido antes con los indígenas también, pero más se
dice que vino con la invasión española”172. Por lo mismo, ella asegura que “no se
puede decir que no hay machismo, aunque digan los hombres que no, pero siempre
nos quieren poner a las mujeres de menos, aunque el hombre sea pequeño”173. Como
habíamos señalado en la reflexión, vemos claramente que aparece el machismo en las
comunidades indígenas, aunque algunos consideran rotundamente que no puede
haber machismo en el sector andino. Un parlamentario indígena manifestó al respecto:
De ninguna manera puede haber el machismo en las comunidades [...] si no es la influencia del mundo occidental, también [...] la iglesia siempre ha dicho que alguien vale más, en este sentido, ha dicho que el hombre vale más, la mujer menos... En ciertos sectores puede haber el machismo pero, al menos ya yendo a una profundidad ya analizando la vida misma, [...] al menos no podría existir el machismo en nuestras comunidades y en nuestras organizaciones174.
De la misma manera, en una de las conversaciones que tuvimos con el gerente de la
Cooperativa Mushuk Runa (Hombre Nuevo) de la comunidad de Pilahuin, él aseguró
que en las comunidades indígenas del Ecuador no existe el machismo. Mencionó que
las mismas mujeres tienen la culpa por no aceptar su participación en los diferentes
espacios presentados. Así manifestó al respecto que:
Las mujeres tienen la culpa porque no han ido ganando el espacio al nivel participativo por su inseguridad, porque dicen, “yo no sirvo para presidenta, secretarias y otros”. Eso para los hombres ¿qué implica? Eso es inseguridad o a veces las mujeres dicen “no, no ese puesto es para hombres”, o cuando eligen algo “voy a preguntar a mi esposo” 175.
171 Entrevista: (Blanca Ch. Dirigenta de la CONAIE:121) 172 Entrevista: 47(MD2:12) 173 Ibid. 174 Entrevista: (DGT:122) 175 Conversación con Luis Alfonso Chango.
117
Este testimonio pertenece a una persona, que durante varios ha venido trabajando con
el Estado en calidad del secretario de la tenencia política de la parroquia Santa Rosa,
quien asegura que las mismas mujeres no han ganado espacios debido a la
inseguridad y falta de autoestima. Evidentemente, no pueden aceptar o tomar
decisiones sin consultar al hombre.
Valga la oportunidad para contar una pequeña experiencia. Durante el trabajo de
campo, se realizó el “Primer Encuentro de Profesionales Indígenas de Tungurahua” en
la ciudad de Baños los primeros días de junio, donde participamos diferentes
parcialidades indígenas de Tungurahua como: Chibuleo, Pilahuin, Quisapincha, Santa
Rosa y Salasaca. En la mesa de adelante no había ni una sola mujer. El coordinador
era el mismo gerente de la cooperativa y otros estudiantes becarios de la Fundación
Hans Seidel. A pesar, de manifestar que no hay machismo en el testimonio de la
página anterior, observé que sólo ellos querían ser las máximas figuras del evento, a
pesar de haber coordinado para realizar este evento con tres mujeres salasacas y una
mujer chibulea. Para ellas, no había espacio. Las dos salasacas recogían datos en
calidad de secretarias para elaborar la memoria. Al nivel de los profesionales aparece
esta desigualdad de oportunidad de participación. Con mayor razón aparece este
fenómeno al interior de las comunidades, organización y la EIB.
En cambio, algunos pobladores no quieren tocar el punto porque consideran que no
hay machismo en las comunidades, como ya apreciamos en las citas anteriores. Pero
es claro notar que aunque ellos manifiesten que no hay machismo, sí lo hay. ¿Por qué
digo esto? Muchos de ellos entienden al machismo como el maltrato físico a las
mujeres, pero no consideran que es machismo cuando los hombres dominan los
espacios físicos, o cuando no dan oportunidad a que las mujeres representen en el
ámbito de la administración pública. Por esta razón, más bien suelen culpar a las
mismas mujeres por la escasa participación. Creemos conveniente rescatar las
palabras de una autoridad educativa quien afirma: “Las mujeres saben que están
dominadas. Saben que no tienen posibilidades de éxito, o sea, ellas sienten, viven y
saborean a diario los problemas de machismo y la sumisión a los hombres”176. ¿Qué
significa este testimonio? En algunos hogares, sin duda, la mujer no tiene poder de
decisión. En algunos casos, el hombre se esquematiza como un ser grandioso y cree
que la mujer debe obedecer al marido sin ninguna rebeldía. ¿Por qué digo esto? Yo
conocí un caso muy doloroso, donde la mujer no tenía derecho a dirigir su voz de
mando o responder en contra de su esposo, sino ella estaba destinada a cuidar al
176 Entrevista: P4 (AECP:35)
118
esposo, a los hijos y dedicarse a los quehaceres de hogar, así como también tejer en
el telar para ganar dinero. Esta mujer nunca apareció en ningún espacio y sólo estaba
sujeta a la unidad doméstica. Esta es una de las razones por la que no pude
entrevistar a esta madre de familia, porque siempre estaba ocupada en sus
quehaceres. Tampoco tenía tiempo para charlar con ninguna de las mujeres. En ella
se notó miedo y temor al hombre.
Asimismo, al momento de realizar las entrevistas, muchos de los informantes
(hombres) reflexionaron, sintiéndose como culpables de la escasa participación de las
mujeres salasacas dentro de los cabildos, la organización UNIS, como en la educación
intercultural bilingüe. A continuación presento algunas entrevistas al respecto:
“Nosotros los hombres creo que somos culpables, porque somos un poco machistas,
que preferimos que la mujer se dedique al hogar, que planche, que cuide los wawas,
que vayan a cosechar, que atiendan y basta”177
“Algunos hombres no dejamos que participen en las reuniones. Por ejemplo, en las
noches, los hombres no le permitimos que nuestras esposas vayan a estar en la
noche. Somos celosos, maltratamos a nuestras mujeres. Por eso las mujeres tienen
miedo, entonces no pueden participan”178.
“Siempre queremos [...] que caiga una mujer y decimos algunos: aquí sólo los
hombres tenemos que dominar. Por eso no vemos igualdad aquí, y por eso no hay
presidenta de la organización”179.
Durante las entrevistas, algunos de los informantes abrieron un pequeño espacio de
discusión mientras conversábamos sobre el tema. Se llegó a analizar la escasa
participación de las mujeres en los diferentes ámbitos. Cuando mencionaban que
“somos un poco machistas”, “somos celosos, maltratamos a nuestras mujeres“ y “sólo
los hombres tenemos que dominar”, ante estas respuestas dadas, manifestaron que
están concientes de las actitudes demostradas frente a la participación de las mujeres,
justificaron su opinión diciendo que no se habían dado cuenta, habían dejado pasar
por alto algunas opiniones, aportes de aquellas mujeres que se esforzaron en dar uso
a la palabra frente al público. Los mismos informantes plantearon que las mujeres
también en parte tienen la culpa por no participar. Cuando son elegidas a ocupar
espacios de poder, ellas no quieren asumir esa responsabilidad. Un líder con muchos
años de experiencia manifestó al respecto “las mujeres también son culpables por no
177 Entrevista: P3 (AECP:29) 178 Entrevista: 150 (EMC2:50) 179 Entrevista: P4 (BCHL3:44)
119
querer ocupar cargos y por creer que son menos que los hombres180. Frente al
cuestionamiento de los hombres, una de las mujeres salasacas afirmó:
Porque, como ya te dije, siempre tenemos ese recelo, o llegando a la casa va decir el marido ¿cómo vas a decir eso? No estaba bien o tal vez tendrán esos problemas no? Por eso, ellas prefieren no participar, ni decir nada, me parece que con el matrimonio pone limite en la participación de las mujeres181.
Por un lado, algunas mujeres también reflexionaron admitiendo que la escasa
presencia en los espacios de poder y la toma de decisiones es culpa de ellas por no
querer participar. Por ejemplo, una mujer decía “no es que nuestros maridos no nos
permiten”. Según la experiencia vivida, en estos casos, al menos en la comunidad
Salasaca, creo que el matrimonio no nos limita, sino más bien creo que cada una de
nosotras, las mujeres tenemos el problema en no superar el miedo, el temor a los
demás, la inseguridad y otros factores que no nos permite actuar de una manera
espontánea y libre. Estos factores tienen su explicación. Anteriormente habíamos visto
sobre la socialización de los padres hacia las niñas frente a los niños salasacas. La
educación recibida en el hogar desde su niñez, más tarde se ha manifestado en
miedo, temor e inseguridad, causando el aislamiento de las mujeres salasacas de los
ámbitos de la comunidad, organización y la educación intercultural bilingüe.
Por otro lado, el actual Teniente Político demostró estar preocupado por la ausencia
de las mujeres salasacas en los diferentes ámbitos. Al mismo tiempo, se da cuenta
que falta la autoestima porque “siempre una mujer es tímida, dice que sólo es mujer,
no se auto valora su persona. Todos tenemos derecho, sea hombre o mujer para
realizar gestión”182. O también algunos esposos impiden la participación de ellas. Éstos
ayudan a que la mujer no tenga ninguna confianza o autoestima en sí mismas para
asumir algún cargo de gestión. Quien manifiesta al respecto:
Pero aquí yo veo que las mujeres siempre se sienten inferiores. Los maridos a veces impiden diciendo ¿a dónde estás yendo? Tu deber es estar en la casa con tu familia. Entonces, ahí viene el problema, las mujeres se sienten débiles porque saben que sus maridos le maltratan. Por estos casos, las mujeres no pueden asumir cargos de gestión porque los mismos hombres impiden su capacidad. Viéndolo bien, las mujeres y los hombres tienen que ser libres para administrar cualquier poder183.
Más adelante, habíamos dicho que el matrimonio no limita la participación de las
mujeres. Quiero recalcar que en algunos casos sí, el hombre, por no entender el valor
que tiene la mujer, no permite participar, o a veces su participación sin el permiso del
esposo resulta ser conflictiva, pero esto no sucede a menudo, sólo en algunos
180 Entrevista: 121(MML2:42) 181 Entrevista: 50(MD2:13) 182 Entrevista: 121 (MML2:42) 183 Entrevista: 116 (MML2:40)
120
hogares. En el mayor de los casos, cuando la mujer llega a alcanzar un grado superior
que el esposo, es ahí donde el hombre quiere sentirse macho a base del maltrato
físico y verbal, haciéndola sentir a la mujer como un ser inservible, incapaz de asumir
algo sin el consentimiento de ellos. El teniente político del pueblo Salasaca manifiesta
al respecto:
Aquí siempre ponemos de menos a la mujer los hombres y las mujeres, como no se paran duras, los hombres tienen facilidad de subordinar. Siempre las mujeres a veces se sienten inferiores pensando que los hombres tienen mayor capacidad que ellas, o a veces las costumbres mismas las tienen subordinadas184.
Si damos una mirada a este testimonio, también algunas mujeres salasacas aportan
para que la desigualdad de oportunidades siga con más fuerza. Siendo que la misma
mujer no valora a otra mujer. En vez de apoyar, la subestima.
Por otro lado, habíamos hablado anteriormente de cómo la sociedad quiere mantener
la autoridad patriarcal, donde los espacios de participación son casi masculinizados. A
veces, la mujer salasaca tiene la oportunidad de participar dentro los espacios ya
señalados, pero en la sociedad salasaca ellas son consideradas “carishinas”185, en
kichwa y en castellano “machonas”, que sólo los hombres pueden asumir roles y salir
fuera del hogar y no así las mujeres, ya que ellas deben dedicarse a un sin números
de labores dentro de la unidad doméstica. Creo conveniente contar una de mis
experiencias, donde reflejo la palabra “carishina”. Cuando yo salí de mi comunidad, la
gente no dudó en utilizar esta palabra con la que tratan de herir primero al hombre y
luego a la mujer. Piensan que las mujeres no tenemos derecho a salir. Quien sale de
su hogar por circunstancias de la vida como estudios, trabajo, es reprimida y señalada
como la mujer que no respeta al marido. Entonces yo me pregunto: ¿cómo vamos a
superar las mujeres si la sociedad nos señala de esta manera? No sólo pasa conmigo,
sino también con aquellas mujeres que asumimos la docencia. Una joven salasaca
estudiante en Ingeniería de Alimentos manifestó al respecto:
He visto a algunas compañeras salasacas participando ya en la EIB, pero lo que dicen los de la comunidad es “carishinas”. Salen porque no respetan al hombre y el hombre debe ser un tonto para que su esposa vaya a trabajar lejos de su pueblo. Entonces, todo ese constructo de opiniones hace que mejor la mujer, para no escuchar críticas, prefiere no participar186.
De la misma manera, cuando la mujer sale del hogar a cumplir con el trabajo de la
docencia u otros, se observa en algunos hogares de éstas el apoyo del esposo en
colaborar en el cuidado de la casa con los niños.
184 Entrevista: 116 (MML2:40) 185 “Carishina” es una palabra compuesta que significa “cari” (hombre), “shina” (así, como, semejante a). Entonces, “carishina” en kichwa quiere decir “como hombre, así como hombre) 186 Entrevista: P12 (AJC3:80)
121
Entonces, ahí el hombre es considerado por algunos comuneros como “warmi
mandashka” o “mandarina” (palabra utilizada para subestimar al hombre). Sin
embargo, esa idiosincrasia del sector andino, de las comunidades indígenas no aporta
para que la mujer pueda participar de una manera democrática. Esto afecta mucho en
la parte psicológica tanto de la mujer como del hombre, porque es lógico que el
hombre reaccione ante los malos comentarios de la gente y no quiera aceptar que su
esposa participe. Si damos una mirada a lo cuestionado, vemos que “el temor al que
dirán” al igual que el “machismo” afecta en la participación de la mujer, porque muchas
de las mujeres como dijimos anteriormente, por evitar al que dirán, prefieren no
participar.
Dentro de la sociedad ecuatoriana, como en el pueblo Salasaca, la mujer sigue siendo
para muchos hogares como un objeto, o muchas veces como un robot, quien tiene que
cumplir con los roles de la unidad doméstica y no así la participación en el espacio
público. Además, no piensan algunos hombres que “enérgicamente, psicológicamente,
emocionalmente puede acabarse la mujer”187. Por tal razón, la mujer está en derecho
de asumir cualquier cargo fuera del hogar.
Finalmente, para nuestros fines vamos a tratar de definir el machismo salasaca con los
elementos encontrados a lo largo de este punto. El machismo salasaca se define bajo
estos términos como la desigualdad de oportunidades, la dominación del hombre hacia
la mujer, el hombre como un ser grandioso, espacios públicos sólo para hombres, los
celos, el maltrato físico y verbal. Estamos conscientes de que no sólo con estos
factores podemos explicar el concepto del machismo. También pueden haber otros
elementos que determinan este factor como puede ser la influencia de la sociedad
occidental a través de la migración, el sistema educativo y otros.
187 Entrevista: P8 (MPDINEIB: 108)
122
CAPÍTULO V. CONCLUSIONES
Para concluir este trabajo de investigación recordemos los dos objetivos que nos
planteamos al iniciar en trabajo. El primer objetivo fue describir los niveles de
participación de la mujer salasaca en los ámbitos comunal, organizativo y educativo en
el pueblo Salasaca. Al respecto podemos concluir que:
En el hogar, las mujeres se consideran “ejes articuladoras de la familia”, porque se
hallan insertas en múltiples funciones, como la producción y la reproducción. La mujer
asume la responsabilidad del cuidado del terreno y de la crianza de los animales para
responder las necesidades reproductivas parciales de la unidad familiar, sumándose a
estas labores cotidianas expresadas en largas horas de trabajo y el cuidado de los
hijos. Esta realidad es evidente, porque la dura situación económica presentada en los
hogares salasacas se manifiesta en la “ausencia del cónyuge [que] incrementa
considerablemente el volumen del trabajo agrícola de la mujer” (Poeshel 1985:129),
La migración masculina, en algunos casos, de alguna manera ha contribuido a la
participación femenina en el ámbito comunal. A pesar, de las limitaciones que pueden
tener las mujeres, se ha ido fortaleciendo la participación en el ámbito público, por
ejemplo, en las reuniones y mingas comunales y educativas se ve mayor presencia de
la mujer. Porque las mujeres consideran que son culturales, estas actividades en el
pueblo Salasaca, o por que los hombres prefieren quedarse trabajando en los telares o
se encuentran fuera de la comunidad por falta de fuentes de trabajo y la dura situación
económica que azota a los hogares salasacas. A pesar de la mayoría de las mujeres
presentes, sin embargo, los hombres toman decisiones y dirigen las actividades de las
mingas y las reuniones. Las mujeres sólo se limitan a realizar trabajos. En algunos
casos asisten por no recibir sanción económica.
La organización UNIS planifica con los cabecillas y presidentes de cabildos de las 18
comunidades. Las reuniones de planificación de la gestión de la UNIS, generalmente,
se realizan por la noche con la finalidad de contar con la mayor presencia de hombres.
En este tipo de reuniones también la mujer está presente. En algunas de las mujeres
se nota el agotamiento por el cansancio físico, porque ellas son las últimas en
recogerse y las primeras en levantarse para cumplir con los diferentes roles
domésticos. Por esta razón, algunas mujeres se quedan dormidas, por lo que los
dirigentes dicen “las mujeres sólo vienen a dormir”. Es evidente, que la mujer esté
cansada, pero los dirigentes no se dan cuenta que la mujer se esfuerza en estar
presente y escuchar las reuniones.
123
En el Movimiento Indígena de Tungurahua (MIT) es escasa la participación de la
mujer salasaca, a pesar de que este movimiento provincial fue administrado por dos
periodos de gestión por los salasacas. Sólo una mujer (no salasaca) llegó a ocupar un
cargo administrativo, pero no concluyó su periodo de gestión, justificando que no
estaba en capacidad de seguir adelante por su analfabetismo.
El candidato para la Dirección Provincial de Educación Bilingüe de Tungurahua es
elegido por las comunidades. El representante es convocado a la gran asamblea
organizado por las tres organizaciones provinciales MIT, MIT-A y AIET, para ser
elegidos mediante voto popular. A este nivel de participación, no han accedido las
mujeres indígenas de Tungurahua, porque las comunidades y los centros educativos
donde se selecciona al representante hasta la actualidad, no han tomado en cuenta a
la mujer para que los represente en este espacio. Algunos docentes de las
comunidades indígenas no aceptan estar bajo la administración de la mujer.
Finalmente, concluimos que las pocas mujeres que asumen cargos de dirección en los
centros educativos, enfrentan dificultades como el “celo de poder” por parte de
algunos docentes hombres que no aceptan ser dirigidos por las mujeres, quienes
desafían el trabajo, no valorando la competitividad que puede tener ella para llevar
adelante un centro educativo. De la misma manera, nos topamos con mujeres que no
están de acuerdo con que una mujer dirija los destinos de la unidad educativa, porque
consideran que el trabajo del hombre es mejor para estos ámbitos. La capacidad
participativa de la mujer indígena en los espacios públicos se obstruye por la falta de
valoración.
El segundo objetivo fue entender las razones de la participación limitada de las
mujeres salasacas en las organizaciones UNIS y MIT y los centros educativos en la
comunidad Salasaca. En este sentido, voy a considerar algunos de los puntos que me
parecen ser los que más se aproximan a explicar las razones de falta de participación
de la mujer salasaca en los ámbitos públicos (comunidad, organización y educación).
La socialización primaria dentro del hogar, es uno de los elementos fundamentales,
porque el hogar le entrega al niño y a la niña sus primeras manifestaciones de amor,
cariño, ternura, atención o aspectos negativos como el rechazo, subvaloración,
aislamiento y otros. Estas expresiones le hacen sentirse seguros a la niña o al niño,
protegidos, con autoestima o lo contrario a estas afirmaciones. En esta situación, la
familia, en especial, la madre juega un papel muy importante porque ella es la
encargada de transmitir, de generación en generación, los valores culturales y
sociales. Entonces, ahí donde la madre diferencia en bloques de hombres y mujeres
124
para socializar de acuerdo a su sexo. Así, por ejemplo, un tratamiento para ellos y otra
para ellas, una determinada actividad sólo para niñas y otra para niños. Así los niños
(mujer y hombre) van interiorizando su “yo” como seres diferentes. La niña por ser
mujer tendrá una baja autoestima o viceversa, el niño por ser varón se figurará como
un ser superior a la mujer.
La teoría de Marqués (1997) muy bien cabe para este punto, donde él hace una crítica
sobre cómo la sociedad impone desde el inicio a las personas dos únicos modelos. Él
considera que ni el hombre ni la mujer son totalmente homogéneos. De tal manera,
que la sociedad a través del hogar no consigue moldear la personalidad del niño o la
niña totalmente. El niño al nacer no es un ser vacío, sino viene con sus
potencialidades; por eso, en algunos casos diríamos que, el sujeto no responde
únicamente a la socialización de la madre o del padre, creando su propia identidad.
Para entender la identidad creada por el niño, acudimos a la teoría de Berger &
Luckmann (1997), ellos dicen que dentro del desarrollo de la socialización escapan
aperturas o “al menos pequeñas fisuras” (Ibid:82). Por tal razón, podemos sostener
que estos escapes durante la etapa de la socialización, como las llamadas grietas y
fisuras, han sido ventajosas en parte. Esto también explica comportamientos
individuales distintos a la mayoría, que se salen del esquema, como por ejemplo, la
participación de algunas jóvenes salasacas (5) en los ámbitos públicos en nuestro
estudio.
Por otro lado, hay que recordar que la socialización es vista en gran medida como
tarea de la mujer. La mujer es quien transmite la cultura, los valores morales, ella
protege los procesos de la aculturación o los efectos negativos de una educación
alienante (Cf. D’Emilio 1987:132). Por tal razón, se hace difícil cambiar estos
esquemas del valor cultural por el cual los seres humanos interiorizan desde la
temprana edad dos únicos modelos (mujer y hombre). Choque (1999:143) sostiene
que mientras la “cultura y la educación se encargan de formar a la mujer a aceptar y
defender su condición sullka, en la familia el varón tiene más valor que la mujer, el
hermano prima sobre la hermana”. Por esta razón, las mujeres están resignadas a
estar dentro de ese mundo sin poder superar las barreras de la distinción de género.
Como indica la autora Mansilla (1993:164) en su artículo “El trabajo y la socialización
de la niña”, la aceptación “de los estereotipos sexuales aumenta con los años,
comprendiendo tanto su rol de mujeres, como la situación que viven”. Por lo que las
niñas son socializadas bajo un modelo que separa de su ser individual y social.
En cuanto se refiere a las funciones de la docencia, concluimos que las mujeres
docentes salasacas en este estudio no dudaron en calificarse o justificarse como
125
“madres y docentes”, porque con estas frases intentan una autodefinición, expresando
la imposibilidad de definirse como mujeres que, pueden servir a la sociedad y la
docencia con el mismo derecho que cualquier otro ser humano (hombre), sin aludir la
condición de esposas y madres. Por un lado, los roles tradicionales de mujer salasaca,
el de servir y reproducir la cultura, son perspectivas que utiliza la mujer hacia los
centros educativos de la EIB, para situarse en un ámbito más visible. Dueñas et.al
(1997:69) plantea que esta “identidad construida socialmente e históricamente,
susceptible de amoldarse –en respuesta a cambios externos- o de transformarse –a
consecuencia de vivencias de las propias mujeres- recurre a control social como
eficiente regulador de su permanencia y reproducción”. Es decir, el control social sobre
la vida de la mujer adquiere valor significativo, pues lo que hagan o dejen de hacer
repercutirá en su valoración social.
Por otro lado, resulta muy complejo explicar por qué la mujer salasaca se define como
madre y no como una mujer que puede asumir funciones para un determinado fin, sin
justificar su rol del espacio público por la conveniencia del hombre, o sólo por
satisfacer al niño en el aula cuando imparte su conocimiento. Si recordamos a Martha,
quien dice “cuando los muchachos se sienten bien, yo también lo estoy” o “poder
apoyar en la enseñanza a la gente que necesita”, nos preguntamos: ¿qué pasará con
ella si no logra satisfacer estas expectativas hacia los demás? Para este estudio,
también Mazo(1997:162) aporta con su teoría, donde señala que las consecuencias de
una educación sexista han facultado a las mujeres en asuntos exclusivos al rol
tradicionalmente asignado a las mujeres y que gira alrededor de su papel materno, lo
cual niega cualquier libre opción de desarrollo humano que se salga del impuesto.
Esta teoría nos permite entender en parte la realidad de la mujer indígena dentro de
los espacios públicos, por qué se identifican con las categorías señaladas.
La complementariedad sostenida por el pueblo Salasaca, parte del principio de
colaboración mutua entre hombres y mujeres, porque todas las actividades se basan
en las relaciones de acuerdos mutuos y recíprocos. Por lo tanto, esta concepción
faculta a la participación plena de la mujer en los ámbitos de la comunidad y la
organización. Choque (1999) sostiene que todo este constructo de reciprocidad,
redistribución y complementariedad, en el fondo es una manera de encubrir las
relaciones de desigualdad y la subordinación al interior de las comunidades indígenas.
Yo como mujer salasaca no concuerdo con esta teoría, porque en la cultura salasaca
aún se vive la complementariedad, lo recíproco no es un simple desafío sino es una
realidad que existe, se siente y se observa. Por ejemplo, cuando el hombre migra, la
mujer y los familiares asumen la responsabilidad de las labores agrícolas y la unidad
126
doméstica. En lo recíproco, la comunidad aún tiene valor solidario con los suyos en el
momento de la minga familiar, todos acuden a colaborar con la mano de obra o con
algunos productos agrícolas.
En las estructuras del poder de la Unión de Indígenas Salasacas (UNIS), se exige
una afiliación partidaria con los líderes de la comunidad y los comuneros. La persona
candidatizada (mujer y hombre) a participar en las elecciones para los cargos
representativos de la UNIS, supuestamente deberían tener el apoyo moral de los
comuneros, considerado como el papel fundamental para la participación. Sin
embargo, en este trabajo se ve que no basta este apoyo. Hemos visto que en el ayllu
practican lo complementario, lo recíproco. Ya yéndonos a un espacio de la
administración pública, se vienen a contradecir estos principios. En este estudio se
descubrieron sólo líderes hombres, donde no aparece la igualdad de oportunidades de
la mujer en el liderazgo salasaca. A partir de esta mirada, hemos intentado explicar, la
falta de participación de la mujer salasaca en las estructuras del poder de la UNIS,
considerando que no es un problema de género solamente. Aparecen otros
parámetros como el étnico, político, cultural, laboral y personal. Por tal razón, las
mujeres salasacas se ven negado el acceso serie de espacios, atributos y actividades
vinculados al poder de la UNIS y a sus símbolos: mundo público, saber hablar,
prestigio y otros. Frente a estos atributos, la mujer salasaca ha interiozado su
autonegación. Concuerdo con Dueñas (1997:63) cuando dice que no se trata sólo de
negarse a incursionar en aguas consideradas de su propiedad. Se trata, además, de
negarse a sí mismas la capacidad de poder nadar.
En nuestro estudio hay evidencias de desigualdades de género en las comunidades,
organizaciones indígenas y centros educativos manifestados en los “celos de poder”,
“inconveniencia de horarios para mujeres” y la “desvalorización”. Esta forma de
dominación aún no cuestionada por el mundo indígena o del pueblo Salasaca atenta
contra los derechos de la participación democrática, en especial, de las mujeres de las
comunidades indígenas. En el peor de los casos, los mismos comuneros (mujeres y
hombres) aportan a este mal interminable cuando demuestran indiferencia hacia
mujeres y líderes hacedores del cambio; actúan con violencia física y verbal, los celos
de pareja generan desigualdad de oportunidades, etc. Se puede decir que en el pueblo
Salasaca (mujer y hombre) no se dan cuenta que todas estas manifestaciones
negativas en contra de las mujeres o los mismos hombres son expresiones de poder y
desigualdad de oportunidades de participación. Algunas mujeres están conformes con
el poder de los hombres, que solamente ellos ocupen los espacios de poder de la
UNIS, la EIB de Tungurahua y los centros educativos. Si la mujer asume las funciones
127
de administración, las mismas mujeres no dudan en desvalorizar su capacidad de
trabajo, tampoco los hombres acceden fácilmente a trabajar bajo la administración de
la mujer.
Finalmente, concluimos que resulta ser muy complejo abordar el término género en el
contexto indígena. Desde una mirada occidental, hay una posición de relación de
igualdad entre hombre y mujer. En mi opinión, el concepto de género no es suficiente
para la realidad del mundo indígena. Aunque los pueblos indígenas contemos con una
misma historia de invasión y dominación por la cultura occidental, hay diferencias en la
manera de cómo se dio la historia, diferentes formas de responder a ella y nuestra
distinta concepción de mirar al mundo, de la naturaleza y nuestra sociedad como
representantes de nuestros antepasados. Todas estas construcciones del mundo
indígena facultan a las relaciones de parentesco, las relaciones de hombre y mujeres,
la relación con la naturaleza y los animales, en el plano social, económico, educativo,
las normas y los valores. Es necesario afirmar estas diferencias y respetar las culturas
como se presentan con su propia lógica. Por lo tanto, al género debemos entenderlo
con nuestros propios elementos o si no, buscar cómo podemos apropiarnos de esta
noción, para trabajarla en la cultura salasaca, desde nuestras formas de vida, saberes
y valores que deben ser discutidos desde adentro.
128
CAPÍTULO VI. RECOMENDACIONES Y PROPUESTAS
A las mujeres indígenas
Las mujeres en la sociedad salasaca, finalmente tienen poca representatividad en los
espacios del cabildo, organización y EIB por situaciones ya mencionadas. Por
consiguiente, pienso que las mujeres no nos debemos dejar consumir por los factores
señalados. Creo que estamos a tiempo para concientizarnos y partiendo desde hoy
como mujeres, esposas, madres y profesionales, dar una educación diferente a
nuestras hijas, hermanas y compañeras para que no sufran los mismos problemas que
nosotras. Con esto no quiero decir que nos vamos al libertinaje, ¡ojo!, si no, buscar
nuestros propios espacios con la finalidad de manifestar nuestras necesidades de
mujeres, elaborar y desarrollar estrategias que permitan encontrar nuevos caminos de
participación a nivel de las organizaciones, como también los espacios educativos.
Todo esto sobre la base de las experiencias específicas acumuladas de administración
en el hogar, a fin de mejorar la administración en las instancias señaladas, y que los
movimientos indígenas y la EIB no aparezcan como instituciones masculinizadas. Así,
las mujeres indígenas haremos escuchar nuestras voces sin temor, sin miedo al
público, porque las mujeres indígenas estamos en capacidad de estar en las
organizaciones zonales, provinciales, nacionales como también en la EIB y en la
política, sin olvidar nuestros valores culturales, el de ser madres, esposas y las
responsabilidades de nuestros hogares.
A las organizaciones indígenas zonales, provinciales y nacionales
Los movimientos indígenas deben fomentar la participación conjunta de hombre y
mujer a través de talleres y encuentros. En estos espacios, dejar que las mujeres se
desenvuelvan por sí solas, que planifiquen las actividades de los talleres y encuentros
para que la confianza, la seguridad y autoestima vuelvan poco a poco en pos de una
participación más amplia en el ámbito público. Los talleres y encuentros realizados por
las organizaciones indígenas deben servir para que las mujeres reflexionen y discutan
sobre sus propias necesidades, a partir de esas reflexiones elaborar un proyecto de
una propuesta participativa, recuperando las necesidades y conocimientos locales.
Los movimientos indígenas deben ser ejemplos multiplicadores de participación
femenina, priorizando los intereses de las mujeres, cediendo un espacio abierto para
que las mujeres puedan interesarse cada vez más en participar y ejercer sus derechos
en las organizaciones zonales, provinciales y nacionales además de ocupar la
representación comunitaria para de esta manera influir cambios en la sociedad.
129
Las organizaciones que deben a los pueblos indígenas, es menester que los intereses
estén siempre puestas de poder servir a la comunidad sobre la base de hombre y
mujer. No tener intereses que vienen de otro lado, hay que pensar que ustedes han
sido elegidos por la comunidad, por eso, los objetivos deben moverse bajo la
perspectiva de hombres y mujeres instruidas y no instruidas. Los criterios deben ser
manejados a través de la lógica de compromiso, propio y moral.
A las instituciones
Las ONGs que trabajan con proyectos enfocados en género, deben tener una estrecha
relación con la educación, porque el género no debe ser solamente eje trasversal en
los contenidos curriculares, sino más bien atravesar todas las estructuras educativas,
de tal forma que podamos transformar actitudes, valores y comportamientos entre
niñas, niños, mujeres y hombres.
A la Educación Intercultural Bilingüe
La EIB a más del respeto a las culturas, tiene un enfoque de educación liberadora que
ha dado mayores oportunidades de participación a las niñas. Por ejemplo, en las
evaluaciones de Puno sobre la educación bilingüe y realidad escolar, realizados por
Rockwell, Pellicer y Héctor Muñoz (1989) han dado resultados que han favorecido a
las niñas. Así, también el Proyecto EIB, la UNICEF han intentado mostrar que la EIB y
el género van juntos. Por eso, debe seguir incrementando en el currículo el género
desde los propios saberes, conocimientos, valores y actitudes de los diversos pueblos
indígenas (Cf. López 1995:174). El enfoque de género debe ser consolidado, en el
sentido de equidad de oportunidades de niñas, niños y jóvenes para que a través de
este enfoque educativo, las escuelas se conviertan en nidos de prácticas participativas
e interacciones comunicativas.
La DINEIB debe incluir en el currículum de formación docente, el enfoque de género a
fin de mejorar las relaciones de hombre y mujer, para que los docentes se especialicen
y, en particular, las mujeres participantes tomen conciencia de su valor y significado
dentro de la sociedad.
El director provincial, a través del departamento de formación docente, debe solicitar a
las personas especializadas en género para la capacitación de los docentes y
administradores sobre el enfoque y perspectivas de género. Los docentes, una vez
recibido los conocimientos acerca del género deben extender a los estudiantes de las
comunidades, porque este término es un poco conocido en las comunidades
indígenas.
130
Los centros educativos deben ser ambientes donde se practique y fomente la
participación igualitaria de niñas y niños, y de docentes mujeres y hombres, sin
diferenciar el sexo, color, edad, lengua y raza; a través de juegos, intercambios
experiencias, encuentros entre las escuelas de la zona, a fin de mejorar sus relaciones
de participación.
El enfoque de género debe ser más propio, más pensado desde adentro, respetando
la diversidad cultural, no sólo asumir lo que viene de fuera; por eso, debe nacer de la
cultura para que se genere como resolución del problema.
Finalmente, podemos concluir diciendo que todos los seres humanos, las mujeres
adultas, adolescentes y niñas tienen derecho a la participación en los ámbitos privados
como públicos. Por lo tanto, el hogar, las organizaciones comunales, provinciales,
nacionales y otras entidades estatales, ONGs, iglesias, deberían velar para que este
derecho a la participación sea ejercido en condiciones iguales que no atenten contra el
desarrollo físico y psicológico de la mujer indígena.
131
CONCLUSIÓN PERSONAL
Mi afán de realizar el tema de estudio sobre la participación de la mujer salasaca
empezó a partir del Seminario Internacional Género, Etnicidad y Educación en
América Latina, realizado en Cochabamba y algunas dificultades que limitaban aportar
o expresar mis opiniones en los espacios públicos. Por ejemplo, en las reuniones de la
organización, en los centros pedagógicos, en el aula del PROEIBANDES y otros.
Por lo expuesto, tuve la necesidad de conocer testimonios de mujeres y hombres
salasacas para que me ayudaran a esclarecer un tema tan complicado. En el primer
momento, pensé que yo nomás, había tenido este problema, pero ya yendo al campo,
recogí testimonios similares, que no me esperaba. Esta investigación generó en mí,
junto con las opiniones de los actores, una serie de preguntas y ansiedades de saber
cuál es el origen de toda estas dificultades. Para contestarme, tuve que leer
detenidamente los testimonios, regresar al pasado, es decir, recordar la vida de la
niñez, donde nuestros padres nos diferenciaban de los hermanos varones, nos
transmitían sus saberes, conocimientos, reglas morales, valores, sin salir de los
esquemas culturales y el sistema educativo que tenía un enfoque de exclusión en
bloques de mujeres y hombres.
Después de haber realizado esta investigación, he reflexionado que fue importante
realizar este estudio para darme cuenta también por qué en mi comunidad los
pobladores relacionan algunas cosas siempre con el hombre. Por ejemplo, se utiliza
expresiones como kjarilla o kjariyti, ‘limpio’, kjariyashka ‘enfermo que se ha mejorado’,
kjari kjari ‘valiente’ o kjari shina ‘mujer que parece hombre’. Es decir, son expresiones
que parecen ser comparadas con la fuerza del varón. ¿Por qué no utilizan la palabra
warmi para indicar estas categorías? ¿Por qué utilizan la palabra warmi sólo para
desestimar?, por ejemplo, warmilla sin fuerza o hombre como mujer.
Pero lo más importante, ha provocado que nosotras mismas nos demos cuenta donde
está el origen de nuestras debilidades como mujeres salasacas. Ahora, al menos yo,
estoy consciente que la primera formación dentro del hogar es un requisito valioso
para que nuestras hijas no tengan que sufrir estas dificultades. La educación ha sido
un sistema discriminador, pero hoy, que contamos con una educación propia, acorde a
nuestras necesidades, donde todos podemos participar, es menester dar una
educación distinta, en especial, a nuestras niñas, con la finalidad de contar, en un
futuro no muy lejano con mujeres salasacas con autoestima, sin dificultades y positivas
en las decisiones que tengan que tomarse
132
En un segundo momento, fue fundamental las sugerencias de la Sra. Asesora, que
motivó a contar parte de mí experiencia vivida, la que me sirvió a participar y ser parte
de algunos datos para explicar la falta de participación de la mujer salasaca. También
me he dado cuenta que es un tema bastante grande que no tiene fin, porque cada
momento aparecen testimonios y vivencias valiosas que no se pudieron colocar todos
en el texto escrito.
Finalmente, reflexioné que fue valioso salir de la comunidad, donde siempre era mi
mundo, donde nunca conocí este nivel de participación como la maestría. He tenido la
oportunidad de relacionarme con las diferentes culturas de los países andinos y, más
que todo, a interesarme por realizar este tipo de estudio. Hoy, estos conocimientos y
estas respuestas obtenidas aquí y en el trabajo me guían a pensar cómo se puede
introducir el género en las comunidades indígenas, organización y sobre todo en la
EIB a partir de los propios saberes. Por tal razón, observo que es un reto grande pero
no inalcanzable, por eso debemos los indígenas empezar a apropiarnos ya de la
noción de género desde adentro, para el beneficio de las comunidades indígenas.
133
RESUMEN EN KICHWA
Kay llamkayka shuk hatun paktanatami charin, shina:
1. Warmikunapak ruraykunamanta, imapi, maypi kakta riksinata maskan. Shina:
Tungurahua markapi kak Salasaca ayllu llaktapi, llaktakunapak hatun
tantanakuykunapi (UNIS), ishkay shimipi yachana wasikunapi.
2. Imashpatak warmikuna mana karikuna shina ruraykunapi puriyta ushankuna, shina
chay Tungurahua marcapi hatun tantanakuykunapi, ishakay shimipi yachachinapipash.
Uchilla paktachinakuna:
1. Warmikuna, shina: chay paypak ayllu ukupi, ayllu llaktapi, hatun tantanakuypi,
ishkay shimipi yachachinapipash imapi llamkakta riksishpa killkana.
2. Chay warmipak imata, imapi kashpapash ruraykunamanta, shina: warmikupak,
karikunapak ima yuyaykunatak chariykta riksina.
3. Imashpatak (wakin warmikunallakunalla) shina: Hatun tantanakuykunapi UNIS, MIT,
ishkay shimipi yachana wasikunapi, ashallata ruraykunapi llamkankuna.
Kay maskaymanta tariypaykunaka kanmi:
1. Ayllu ukupi. Ayllu ukupika, warkunaka tukuy sami llakikunatami charinkuna, shina:
Kusa-warmi kawsaypika makanakuykuna, piñarikuna, rimaykuna, chikanyariykuna,
shukkunapashmi tiyan. Ashtawanka wakin karikunami, paykunapak warmikunata
makashpa kawsashkakuna, kawsankunapash. Karikunaka, warmikunataka mayman
richunpash mana munankunachu kashka, ashtawankarin wasipilla llamkashpa,
yanushpa, wawakunata wiñachishpa, wiwakunata michishpa, allpakunapi llamkashpa
kawsachunllami munankuna kashka.
Shinapash, minkakunamanka warmikunami ashtawan llamkankapakka llukshinkuna,
kutin karikunaka wakinkunallami llukshinkuna, shukkunaka, wasikunapi llamakashpami
sakirinkuna. Shinapash, wakin karikuna, warmikunapash, kitikunamanmi kullkimanta
llamkankapak rinkuna. Ña sawarishka warmikunaka ashtawanka wasipi
ruraykunapillami kawsankuna, mana maymanpash llukshiyta ushankunachu.
2. Ayllu llaktapi. Ima shina ña nishka kan, ayllu llaktapika, achka warmikunami
minkakunaman, tantanakuykunaman rinkuna. Kutin, shina, paykunapak
yuyaykunawan yanapaytaka mana ushankunachu. Chay ayllu llaktapak
tantanakuykunapika karikunami ashtawanka rimankuna, kutin warmikunaka mana
rimankapak munankunachu, ashtawanka upallami sakirinkuna, wakinkunaka
134
manchaytami charinkuna, pinkaytapashmi charinkuna, wakinkunallami ashakuta
rimankuna, shinapash warmipuraka rimarinkunami.
Kutin, cabildokunataka, shuk hatun tantanakuypimi akllashpa churankuna. Chaypika
ashtawanka karikunatami cabildopak churankuna, kutin warmikunataka mana
churankunachu. Shinapash, wakinpika wakin warmikunallami cabildo ukuman
yaykunkuna, chaypika karikunami ashtawanka yayaykunawan yanaparinkuna.
3. Ayllu llaktakunapak tantanakuy. Chay llaktakunami shuklla yuyaywan shina
llamkankapak tantanakushkakuna kankuna. Chay ukupipash cabildokunatami watan
watan churankuna, chaypipash karikunami ashtawanka yaykunkuna, warmikunaka
illanmi. Wakin watakunapillami warmikunataka yanapachishka, chaykunamantapashmi
shina warmikunataka kusakuna mana kachankuna, piñarinkunami, maymanpash mana
kachankapak munankunachu.
4. Ishkay shimipi yachachiymanta. Chay llamakaypika, ishkay shimipi yachachina
yachanawasikunapika, wakin yachachikkunaka runa warmikuna tiyanmi. Chay
warmikunaka ishkay shimipimi yachachinkuna, wakin warmikunaka apukkunami kan.
Chay shina llamkak warmikunaka mana achka kanchu, wakinkunallami kan.
Shinapash, kay watakunapika, yachana wasikunapi, Colegiokunapi,
Universidadkunapipashmi kari, warmi ashtawan yachakushpa mirarinakunkuna.
Shinapash chay warmikunaka chayrakmi yachakushpa katinakun, shinallatak mana
ayllu llakta tantanakuykunapika paykunapak yuyaykunawanka yanapankunachu.
Kay tariypaykunatami, ñukapak maskaypika tariypashkani. Shina, tariypaykunataka,
mamakunata, wakin taytakunatapashmi tapuykunata rurashpa maskashkani.
Chaymantami rikushkani imamantak warmikunaka mana yanapak kashkata.
¡TUKUY SUNKUWAN KAY LLANKAYTA SALASACA WARMIKUNAMAN KUNI!
Cochabamba, febrero del 2001
135
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143
ANEXOS
ANEXO 1 INSTRUMENTOS DE TRABAJO
Guía de entrevista (docentes hombres y mujeres)
I. Datos informativos:
Provincia: Cantón: Comunidad: Nombre: Lugar de procedencia: Área de especialidad o
formación docente: Unidad Educativa: Años de experiencia: Organización que avaló:
Lenguas que habla: Estado civil
II. Expectativas frente a la participación de la mujer indígena en la gestión organizacional y educativa.
1. ¿Qué entiendes por participación?
2. ¿Qué entiendes por gestión educativa y organizacional?
3. ¿Cree que es importante la participación de la mujer indígena en la gestión educativa y organizacional?............Si.......... No.......Por qué?
4. ¿Usted está de acuerdo que la mujer participe en la gestión de la educativa y organizacional?...........Si..........No.........Por qué?.......................................
5. ¿Participan las mujeres en la gestión y planificación de la organización y la EIB?......Si...........No........Por qué?
6. ¿Cuáles son los niveles de participación de las mujeres en las organizaciones locales y provinciales y la EIB?
7. ¿Cuáles son los roles que determinan la participación de la mujer indígena dentro de las Unidades Educativas de la EIB?
8. ¿Crees que la mujer puede desempeñar un cargo de dirección en las unidades educativa y otras instancias de la EIB?........Si..........No.............Porqué..................
9. ¿La sociedad indígena permite que participe en las elecciones para algún cargo en las organizaciones indígenas como en las instancias de la EIB?....Si........No....Por qué?
10. ¿Qué te parece que la mujer participe en el ámbito de la toma decisiones en la gestión de la organización y la EIB?
Otras preguntas:
1. ¿Ustedes dentro del currículo escolar mencionan temas de género?
2. ¿Quiénes son las/los que participan en las reuniones comunales y centros educativos?
3. ¿Creen que con la administración de una mujer marcharía de mejor manera la gestión en las unidades educativas?
144
Guía de entrevistas a autoridades educativas: director provincial y nacional, directores de las unidades educativas.
I. Datos informativos:
Provincia: Cantón: Comunidad: Nombre: Lugar de procedencia: Área de especialidad o formación docente: Unidad Educativa: Años de experiencia: Cargo actual: Organización que avaló: Lenguas que habla: Estado civil
II. Expectativas frente a la participación de la mujer indígena en la gestión organizacional y educativa.
1. ¿Qué entiende usted por participación?
2. ¿Qué entiende por gestión educativa y organizacional?
3. ¿Qué opina respecto a la participación de las mujeres indígenas en la gestión de la educativa?...... trae ventajas o desventajas.
4. ¿Desde su punto de vista, cómo participa la mujer indígena en la gestión educativa de las unidades educativas, provinciales, como también dentro de las organizaciones indígenas?
5. ¿Usted cree que es importante la participación de la mujer indígena en la gestión educativa y organizacional?............Si.......... No.......Por qué? ................................
6. ¿Usted está de acuerdo que la mujer participe en la gestión de la educativa y organizacional?...........Si..........No.........Por qué?....................................................
7. ¿Participan las mujeres en la gestión y planificación de la organización y la EIB?......Si...........No........Por qué.........................................................................
8. ¿Cuáles son los niveles de participación de las mujeres en las organizaciones locales y provinciales y la EIB?
9. ¿Cuáles son los roles que determinan la participación de la mujer indígena dentro de las Unidades Educativas de la EIB?
10. ¿Usted cree que la mujer puede desempeñar un cargo de dirección en las unidades educativa y otras instancias de la EIB?........Si.......... No.............Porqué..................
11. ¿La sociedad indígena permite que participe en las elecciones para algún cargo en las organizaciones indígenas como en las instancias de la EIB?....Si........No....Por qué?
12. ¿Qué le parece a usted que la mujer participe en el ámbito de la toma decisiones en la gestión de la organización y la EIB?
13. ¿Qué sugerencias daría usted para mejorar la participación de la mujer indígena en la gestión educativa y organizacional?
145
Guía de entrevista a lideres de la comunidad y la organización.
Datos generales.
Lugar..........................................Fecha............................................entrevistador........
Datos del entrevistado
Nombre y Apellidos: Sexo: Edad: Grado de instrucción: Lenguas que habla: En caso de ser líder su cargo. Lugar
En caso de ser de una organización
Nombre de la institución: Sigla: Año de fundación: Responsables: Institucionales:
Nombre......................................................................Cargo.........................................
II. Expectativas frente a la participación de la mujer indígena en la gestión organizacional y educativa.
1. ¿Qué entiendes por participación?
2. ¿La comunidad participa en las actividades de la unidad educativa como ser trabajos, reuniones, asambleas donde se toman decisiones?
3. ¿Quiénes concurren más hombres/mujeres a las reuniones, minkas de las unidades educativas?
4. ¿Usted está de acuerdo que las mujeres indígenas salasacas participen en la gestión de organización y la EIB?
5. ¿Cómo realizan la selección de las mujeres y hombres para ingresar al magisterio Indígena?
6. ¿Les gustaría que una mujer realizara gestión dentro de las organizaciones como también en la EIB?...................Si....... No.....................Por qué............
7. ¿Creen que una Mujer Indígena pueda ocupar espacios de poder en la UNIS, MIT y en la EIB de Tungurahua?
8. ¿Según su criterio, cómo y en qué quisiera que las mujeres participen en la comunidad, organización?
9. ¿Qué niveles de participación tienen las mujeres salasacas a nivel comunal, organizativo y educativo?
10. ¿Creen que participar es sólo hablar?
11. ¿Dentro de la sociedad indígena Salasaca desearían tener mujeres líderes capaces de llevar adelante la organización y la gestión de la EIB de Tungurahua?
12. ¿Qué sugerencias tienen respecto al tema de participación de la mujer salasaca en la gestión organizativa y la EIB de Tungurahua?
146
Guía de entrevista a los comuneros (hombres/mujeres).
I. Datos generales.
Lugar..........................................Fecha............................................entrevistador..................
Datos del entrevistado
Nombre y Apellidos: Sexo: Edad: Grado de instrucción: Lenguas que habla..
II. Expectativas frente a la participación de la mujer indígena en la gestión organizacional y educativa.
(Sólo para mujeres)
1. ¿Para tí, qué es participar?
2. ¿Qué trabajos realizas dentro de la comunidad?
3. ¿Perteneces a una organización social y cuál?
4. ¿Quiénes asisten más a las reuniones comunales y educativas?
5. ¿Alguna vez participaste en la organización? Si....No...Por qué?.....
6. ¿Alguna vez te han candidatizado para que participes en la organización?
7. ¿Las mujeres cuando asisten a las reuniones, toman decisiones, hablan, o sólo hablan los hombres?
(general)
8. ¿Qué piensas sobre las mujeres que participan en la organización y la EIB?
9. ¿Tú estas de acuerdo que las mujeres salasacas participen en la gestión de la organización y la EIB de Tungurahua?
10. ¿Crees que las mujeres puedan ocupar puestos de poder y tomar decisiones en la organización y la EIB de Tungurahua?
11. ¿Está bien que las mujeres salasacas participen en las organizaciones indígenas y la gestión de la EIB?
12. ¿Piensas que sólo hablando se participa?
13. ¿Conoces alguna causa que no permite participar a la mujer salasaca en la gestión de la organización como también en la EIB de Tungurahua?
14. ¿Qué sugerencias tienes respecto al tema de participación de la mujer salasaca en la gestión organizativa y la EIB de Tungurahua?
147
Entrevista a profundidad
Datos generales.
Lugar..........................................Fecha............................................entrevistador.............
Datos del entrevistado
Nombre y Apellidos: Sexo: Edad: Grado de instrucción: Lenguas que habla: Fecha de nacimiento: Lugar: Estado Civil
Número de hijos: Ocupación actual: Organización a la que pertenece:
Historia de vida.
1. ¿Cómo fue su niñez y su juventud?
2. ¿Quiénes fueron sus padres?
3. ¿Dónde estudio?
4. ¿Cuáles fueron las mayores aspiraciones en su vida?
5. ¿Cuáles fueron sus mayores dificultades que ha enfrentado en su vida, en la organización y en la EIB?
6. ¿Qué piensa sobre participación de la mujer indígena en la organización y la EIB?
7. ¿Cómo ingreso a la organización y al EIB?
8. ¿Cuáles fueron los roles principales dentro de la organización y de la EIB?
9. ¿Cómo fue la aceptación por parte de los indígenas hombres dentro de la organización?
10. ¿Cuáles fueron sus razones de participación dentro de la organización y en la EIB?
11. ¿Qué ventajas y desventajas ha experimentado en la gestión de la organización y en la EIB?
12. ¿Qué actitudes demuestran los hombres indígenas frente a su participación en las instituciones mencionadas?
13. ¿Cómo cumple con las labores del hogar y de las instituciones mencionadas?
14. ¿Qué concepciones tiene sobre el tema de género?
15. ¿Qué sugerencias tiene usted respecto al tema de participación de la mujer salasaca en la gestión organizativa y la EIB de Tungurahua?
Nota: Las preguntas irán surgiendo de acuerdo a las respuestas.
148
Ficha de observación
Escuela:............................................
Organización:....................................
Nombre de la observada:.............................................
Observado por:.................................................
Día y fecha
Actividad Participantes o actores
Descripción de la observación
Observaciones:................................................................................................................
...........................................................................................................................................
...........................................................................................................................................
.......................................................................................................................
149
ANEXO 2 MUESTRA DE UNA ENTREVISTA GUÍA DE ENTREVISTA (DOCENTES HOMBRES Y MUJERES)
DATOS INFORMATIVOS:
Provincia: Tungurahua. Cantón: Pelileo. Comunidad: SALASACA. Nombre: Marta
Masaquiza. Lugar de procedencia: Manzana Pamba Grande. Área de especialidad
o formación docente: Profesora Primaria y últimamente termine el diplomado en
actualización de habilidades docentes. Unidad Educativa: INTI Ñan Años de
experiencia: 9 años. Organización que avaló: UNIS. Lenguas que habla: Quechua
y Castellano Estado civil: Casada
II. EXPECTATIVAS FRENTE A LA PARTICIPACIÓN DE LA MUJER INDÍGENA EN LA GESTION ORGANIZACIONAL Y EDUCATIVA.
1. ¿Qué entiendes por participación?
Yo entiendo por participación que es una actividad rutinaria que se lo debe alimentar día a día para conseguir las metas propuestas. Como la persona o el docente tiene que estar bien decidido/a, ya que de cada uno depende de la decisión que tomemos porque si no tenemos una decisión, una planificación o un objetivo a donde vamos, no vamos a poder construir, no vamos a poder llegar a esos ideales que hemos propuesto con una institución educativa o una organización.
¿Has tenido el poder de tomar decisiones en la organización o en CEC Inti Ñan?
En el CEC Inti Ñan conjuntamente con el director hemos trabajado casi a igual, ya que es una institución experimental necesita mucho apoyo ya sea de los docentes, padres de familia y de la misma comunidad, por lo tanto estado participando activamente para conseguir los modelos propuestos para el CEC Inti Ñan.
¿Cómo ha participado la comunidad en la gestión educativa?
Como es un modelo nuevo, para ellos algunos no están muy de acuerdo, ya que están acostumbrados con la educación tradicional, como es un nuevo modelo sólo las personas, los miembros que han entendido muy bien casi el 80% de la comunidad han apoyado en forma decisiva y hemos tenido un apoyo formidable que estamos continuando con los objetivos que esta trazado en el modelo.
2. ¿Qué entiendes por gestión educativa y organizacional?
Bueno, yo entiendo que gestión educativa es participar conjuntamente docentes, padres de familia y la comunidad misma en las gestiones para el desarrollo de la comunidad, en si de la educación. Pedir apoyo a las organizaciones no gubernamentales o gubernamentales o producir.
3. ¿Cree que es importante la participación de la mujer indígena en la gestión educativa y organizacional?............ Si.......... No....... Por qué?
Bueno, yo creo que s muy importante la participación de la mujer, ya que es un ser complementaria en la vida cósmica misma, entonces tiene que participar en igual forma hombres y mujeres, creo que debemos participar ya que en este tercer milenio las puertas están abiertas para los hombres y mujeres que deseamos superar, y creo que esta es la oportunidad, ya que en nuestras manos tenemos el pasaporte del futuro y para la generación que viene atrás, es un pasaporte que nos
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brinda la naturaleza misma, entonces creo que no debemos desaprovechar esta oportunidad de participar y preparar.
Que es ser complementario en la visa cósmica.
Las mujeres son como el día o la noche, ya sólo el día no puede existir por eso hay la noche, entonces somos como el día las mujeres y la noche podríamos decir a los hombres, o también lo diríamos que también en la producción y la reproducción sexual cuando la mujer esta embarazada, si lo nota cuando va ser un niño, o una niña, cuando el vientre esta abultado hacia arriba es prácticamente un hombre, y cuando esta para el lado inferior es la mujer, diríamos que la tierra está representado a la mujer a la fertilidad el cielo estaría representado al hombre, entonces es un complemento.
4. ¿Usted esta de acuerdo que la mujer participe en la gestión de la actividad educativa y organizacional?...........Si..........No.........Por qué?
Si, porque, bueno yo creo que la mujer como ser pensante igual que el hombre tiene que participar en todas las actividades del qué hacer humano, por lo tanto ninguna mujer no tenemos que limitarnos a cualquier actividad.
Últimamente con algunas informaciones y algunos estudios que estado realizando, me he puesto fuera de límites, por lo tanto creo que en uno hay muchos límites que hay.
Pero muchos de los esposos no nos entienden, porque casi yo estoy fuera de la casa, por eso me esposo a veces se siente mal, el me dice que estoy dejando mucho el hogar y que viajo mucho, cree que los hombres piensan que nos hicimos o nacimos para estar sólo responsables e la casa y eso me molesta un poco, pero creo que poco a poco me va entendiendo.
5. ¿Participan las mujeres en la gestión y planificación de la organización y la EIB?...... Si........... No........ Por qué?.............................................................
La participación de las mujeres en las organizaciones, por ejemplo, hablemos en las mingas, yo creo que participan más las mujeres, en una minga participa más la mujer, ahora en la toma de decisiones la mujer se limita un poco y bueno será porque, por el público o por el que dirán, una mujer ahí hablando, se siente limitada, por eso, es que no participa y creo que así mismo es a nivel de la provincia.
¿Cómo mujeres como podemos ayudar o salir de ese miedo o del que dirán?
Creo que tenemos que romper las barreras y seguir adelante. Mientras, no nos decidamos nosotras mismas salir adelante, entonces, nadie va a llevar a una organización o dar un empujón, entonces creo que internamente debemos salir adelante, sólo así podremos romper esos esquemas, límites que nos pone la sociedad y el ambiente.
6. ¿Cuáles son los niveles de participación de las mujeres en las organizaciones locales y provinciales y la EIB?
Bueno, yo creo que las mujeres no participamos porque influye mucho en una elección la mujer tiene que dar su voto también, influye mucho aunque no sea la participación al público, pero con su presencia está demostrando una vez más su participación. Influye bastante la presencia para toma de decisiones en una reunión o en una elección.
¿Quiénes deciden en la vida del hogar y la vida pública?
Bueno, yo personalmente, según mi experiencia en la casa las que decidimos creo que somos las mujeres porque tomamos mas decisión y para algunas cosas
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tenemos que discutir un poco para ponernos de acuerdo en algunas cuestiones, por ejemplo, digamos en la compra de un terreno, sería una compra de algún artefacto, entonces tomamos decisión. Así, en el hogar mismo somos las mujeres que tomas más decisión, si en la cocina, por ejemplo, somos las que decidimos que cocinamos, el esposo sólo será el que sirve, un ejemplo. En la vida de la organización, ahí si ya toman decisiones los hombres, pero así también las mujeres aunque no estamos en los micrófonos atrás, atrás ya estamos opinando que esto no está bien o esto está bien así. Y eso es lo que hemos estado mal, entonces, eso sería lo importante romper los esquemas, romper esos esquemas también depende mucho de la educación que nos recibamos y formemos.
¿Has participado en la vida pública es decir en la organización UNIS?
Bueno, casi yo nunca he asistido a las reuniones será unas 5 reuniones de la UNIS que estado no más, no he tenido participación porque tengo que ir alguna parte, no he tenido esa oportunidad de acercar porque los sábados viajo a Quito.
7. ¿Cuáles son los roles que determinan la participación de la mujer indígena dentro de las Unidades Educativas de la EIB?
Bueno, los roles que se desempeñan, por ejemplo yo en la escuela cumplo como secretaria de la institución, también trabajo como profesora del nivel pre-primario en todas las aulas, también doy cultura física a los niños de primaria y a los del nivel básico, ciencias sociales y ciencias aplicadas.
Cumpliendo con estos roles me siento bien, cuando los muchachos se sienten bien, yo también estoy bien en poder apoyar en la enseñanza a la gente que necesita. Entonces, claro que el trabajo es arduo y fuerte para la preparación del ambiente, pero en el momento del trabajo es algo formidable que no se siente ningún cansancio, ya que todo el proceso de enseñanza aprendizaje ya está preparado, entonces, no tengo ningún problema.
¿Cómo cumples los roles del hogar y la escuela?
Bueno para cumplir los roles tanto el hogar como de la escuela, tengo un horario planificado que me permite cumplir, en el hogar ya saben que no voy a poder estar tal hora, me entienden, o tal hora tengo que estar en el trabajo o en gestiones de la institución, todo eso. Entonces, así estoy llevando mi hogar adelante, como mis hijos están en la misma modalidad de estudio conmigo juntos, entonces no hay problema.
8. ¿Crees que la mujer puede desempeñar un cargo de dirección en las unidades educativa y otras instancias de la EIB?........ Si......... No............. Porqué?.................
Bueno, yo creo que eso no es ningún obstáculo ni el poder o no, si no que esta es el decidirnos y el dedicarnos mas profundamente a estudiar y autoprepararnos más que todo, y así podremos llegar hasta la presidencia de la república.
También creo que debemos formar muchísimo y formar un grupo de mujeres ir preparando mucho en el campo administrativo, educativo, humanístico, preparar en la ética profesional, porque no decir aquí estamos las mujeres, bien podemos ocupar cualquier cargo que cualquier hombre lo pueda ocupar en la dirección provincial o cualquier entidad pública, pero para eso también hay mucho machismo en las oficinas y en las instituciones, pero ese machismo creo que podemos eliminar, organizándonos entre mujeres.
Otra de las debilidades de las mujeres también nos apegamos a un grupo para poder participar.
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¿Tu piensas que se puede aplicar nuestras experiencias administrativas del hogar en la gestión de la EIB?
Yo creo que si, por ejemplo una de las educadoras que impulsó la EIB, fue Dolores Cacuango una mujer indígena hace unos atrás, entonces, porque no poder hablar de los años que vienen que estamos en una época con más cobertura para superar.
9. ¿La sociedad indígena permite que participe en las elecciones para algún cargo en las organizaciones indígenas como en las instancias de la EIB?....Si........No....Por qué?
Bueno en EIB, me parece que hasta hoy no han tomado en cuenta a una mujer, entonces, no sé cuál serían las limitaciones que ponga, porque si hay en la dirección, por ejemplo, en la dirección están mujeres en las escuelas, hay muchas mujeres, estaríamos como el 50% de mujeres de docentes de diferentes partes, no sé porqué, me parece que es un poco de machismo de parte de los hombres, dicen, como vamos estar mandados o dirigidos por una mujer, entonces me parece que es eso, que no toman en cuenta a las mujeres.
¿Hay mujeres preparadas como para asumir ese cargo?
Yo creo que actualmente, no hay, ni los hombres están tan preparados para hacer ese cargo, porque, nos falta mucha decisión y la preparación que hemos tenido en las escuelas, en los colegios deja mucho que decir, yo creo que es eso, pero también creo que poniendo un poquito de decisión y dedicándonos a leer una media hora todos los días, no nos hace mal.
10. ¿Qué te parece que la mujer participe en el ámbito de la toma decisiones en la gestión de la organización y la EIB?
Bueno yo creo que las mujeres como ya te dije es algo, muy interesante y muy necesario en la vida, ya que el ser es complementario, entonces yo no creo que se pueda poner barreras entre eso aunque los hombres si oponen, hemos vivido en una sociedad tan machista, hoy por hoy estamos superando ese machismo. Ellos siempre dicen que nos estamos volviendo feministas.
¿Tú crees que no hay machismo en las comunidades indígenas?
Eso viene a raíz de épocas antañas, creo que habido con la invasión española todo eso, creo que debe haber habido con los indígenas también, pero más se dice que vino con la invasión española, entonces acarrea, y no se puede decir que no hay machismo aunque digan los hombres que no, pero siempre hay, siempre nos quieren poner a las mujeres menos, aunque el hombre sea pequeño.
OTRAS PREGUNTAS:
11. ¿Ustedes dentro del currículo escolar mencionan temas de género?
Bueno tenemos ambientes preparados, esta ahí, los niños se van formándose donde no se ve tanto el machismo ni el racismo donde yo trabajo.
¿Cómo serán sus niños en la vida futura?
Según la experiencia y como veo a mi hija, yo la he visto que se siente como mujer, mujer, no se siente menospreciada, de menos, no tiene esos obstáculos el que dirán por ser mujer. La tuve a mi hija cuando yo era soltera no, pero no tiene perjuicios que ella tal vez podría tener, no tiene problemas. Entonces yo, creo que a futuro que están educando están formando bien, y pienso que no van tener problema para vivir en la vida, participar en la vida, por eso me siento tan segura que mi hija va ser diferente a los niños que se han educado en otras escuelas y eso están demostrando. No estoy diciendo yo, está siguiendo un curso de
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liderazgo en la Fundación Jóvenes para el futuro, entonces me ha dicho un tutor mestizo que las niñas Nina, Magali, Corali, como líderes están excelentes y el resto son niñas que tienen de doce a 14 años, y el resto son entre 15 y otros tienen 18- 20 hasta 21 años. Entonces, dentro de ese grupo tres niñas son excelentes y las que más participan en este curso, nos han confirmado y mediante pruebas psicológicas que ellos ha realizado no, mediante test nos han confirmado así, mientras que los otros muchachos son formados en otras escuelas están así, así nomás.
12. ¿Quiénes son las/los que participan en las reuniones comunales y centros educativos?
Bueno, según en mi trabajo asisten más las mujeres ya que los hombres van al trabajo, hemos hecho reuniones para tener al papá y a la mamá, los dos que son responsables del hijo, entonces ahí se acuden la pareja, bueno ahí toman las decisiones los hombres más.
Porque, como ya te dije, siempre tenemos ese recelo o llegando a la casa va decir el marido como vas a decir eso, no estaba bien o talvez tendrán esos problemas no?, por eso ellas prefieren no decir nada o a veces algunos si responden, en la escuela donde trabajo hay tres madres que son solteras y ahí si están participan casi sólo ellas, si participan bastante, ellas me parece que con el matrimonio se pone límite en la participación de las mujeres.
13. ¿Creen que con la administración de una mujer marcharía de mejor manera la gestión en las unidades educativas?
Bueno, yo creo que depende de la preparación que tenga la mujer y la dedicación que tenga tanto en el hogar como en la administración de cualquier entidad pública, educativa. En administración llevaría muy bien, sólo que depende de la organización y planificación que planee para llevar adelante esos trabajos, dentro de las organizaciones indígenas como la EIB y así demostrará que es muy útil como cualquier otros ser humano, por eso es hora de que demostremos y pongamos cartas en asunto y juguemos para ver quién es el que rinde primero, el hombre o la mujer.