parrhesia nº 12


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02 PARRHESIA PERIDICO ANARQUISTA BAHIENSE

ANARQUISMODesignacin, sobre el registro cla-

sificatorio e identificatorio de las cate-goras del orden dominante(cristianismo, marxismo, liberalismo,sindicalismo, feminismo, etc.) de lasprcticas, las ideas, los movimientos ylas organizaciones que se reivindicananarquistas. De este modo, el anar-quismo presenta dos caras.

- En tanto autotitulado libre, ade-cuado a lo que procura expresar, seencuentra a disposicin de todos losque lo reconocen como el mejor modode designar lo que sienten, lo queviven y lo que desean. En este sentido,porque pertenece a todos, el anarquis-mo tiene la preciosa posibilidad de serun proyecto comn para una multitudde situaciones, para una infinidad demaneras de sentir, de percibir y deactuar. Es el mejor medio para expre-sar esa extraa unidad de la quehabla Deleuze, que se reclama de lo

mltiple (Mille Plateaux, Les ditionsde Minuit, 1980, pg. 196).- Como categora clasificatoria,

comparable a muchas otras, en com-petencia con ellas, en el registro delorden dominante, el anarquismo cons-tantemente corre el riesgo de negar ala anarqua, la misma de la que pre-tende ser expresin terica y organi-zativa. Al igual que sus rivales religio-sos y polticos, el anarquismo tiendeentonces a dar origen a institucionescerradas sobre su identidad, que dis-ponen de un interior y de un exterior,

con sus rituales de ingreso, sus dog-mas, sus policas y sus curas, sus ex-clusiones, sus cismas, sus anatemas ysus excomuniones. De expresin di-recta einmediatade fuerzas mltiplesy diferentes, el anarquismo se trans-forma en entidad que se desploma, enpoder simblico (Proudhon) anlogo,en su escala, a todas las grandes do-minaciones (Iglesia, Capital, Estado), alas que pretende combatir. Su multi-plicidad originaria tiende entonces atransformarse en una yuxtaposicinde sectas o de individuos en lucha los

unos contra los otros, porque todospretenden disponer de la totalidad deun proyecto de conjunto reducido auna sigla, a una bandera o a un fondode comercio.

Daniel Colson

AMORY GUERRA

No puedo evitar escuchar el himnoanarquista sin que se me caiga unalgrima de emocin, ni hablar de laGuerra Civil Espaola como una gue-

rra comn y corriente, tampoco puedoevitar admirar a Durruti o que se meponga la piel de gallina al ver un graf-fiti anarquista.

Una vez me preguntaron despecti-vamente: para qu serva el idealanarquista si la lgica demuestra quees imposible llevarlo a cabo? Contestque es el sueo lo que mantiene vivoal ideal ms potico y noble que heconocido, ya que si nos conformamosmorimos lentamente, un ideal que porsu extrema bondad e idealismo inspi-ra a guiar al pueblo y a que aprenda aguiarse solo sin dejar de soar con unmundo mejor.

A lo que apunto es que toda ideo-loga que persiga el bien es respeta-ble. Personalmente siento que el hom-bre histricamente ha perdido muchotiempo en discusiones ideolgicas queno llevan a ningn lado. No importa sisos socialista, comunista, budista,pacifista o anarquista, lo que importaes que perseguimos un bien comn.

Yo no se si llamarme anarquista yaque tal vez no cumplo con todos losrequisitos de un anarquista totalmen-te autentico, as que prefiero pensarde una forma que no me invite a lacontradiccin, lo que creo es que todaidea tiene un punto de quiebre y hayque saber negociar tanto en la vidacomo en la poltica. Al anarquismosiempre se lo discrimin, se lo destitu-y, se lo tild de terrorista y eso mo-lesta por que lo confunden con vnda-los por el simple hecho de no enten-dernos o de no compartir ideas, de lamala informacin nos mal cataloga,etc.

No deberamos en vez de perder eltiempo en tirarle piedras a la polica ,o criticar a la iglesia, o afirmar queDios no existe en tratar de imponernuestra ideologa de la misma formaque otros nos quieren convertir a lade ellos en usar ese tiempo en unaforma mas productiva.

En vez de gritarle libertad a unaburguesa que es sorda, Por qu noplantamos rboles en vez de tirar pie-dras? , Por qu no le demostramos almundo lo que somos y lo que quere-mos? , Por qu por ejemplo no salva-mos a los pibes de la droga, de la ca-lle, del hambre ya y ahora!! de la for-ma que sea. En vez de tratar de con-vencer a los polticos de que dejen suscargos porque nosotros sin ellos lopodemos hacer mejor, demostrmosleal mundo que aunque el poder nosquiera aplastar nosotros sin entrar en

ningn congreso ni jurando por lapatria podemos hacer mas que ellos,en vez de explicarles algo que noquieren o no van a entender.

Mucha gente no entiende de polti-ca ni le interesa y cuando escuchan lapalabra anarqua se asustan aun ms.No nos impongamos como libertarios,

contagiemos la libertad, no les hable-mos de anarquismo dejemos que ellosvengan a preguntar. Para que as elda de maana la sociedad diga: losanarquistas, un grupo de locos lindossin dejar de soar, hicieron algo con-creto por la sociedad.

No comparto la violencia por queese es el arma de nuestros enemigos yusarla es ponernos a su altura, si com-parto la violencia como defensa perono como medio.

An sabiendo que todos los esta-dos del mundo en sus altas esferas

son corruptos, fascistas, enfermos delpoder y de la ambicin y que todosresponden a su mxima mas preciada:el capitalismo, podremos luchar, que-

jarnos, y hasta con la mejor de lassuertes podemos triunfar en la revolu-cin social en armas, pero no nos olvi-demos que otros estados estarn dis-puestos a ayudar para que los liberta-rios no triunfen Qu les pas a nues-tros compaeros en la guerra civilespaola? Casi triunfantes los aplasta-ron como moscas, Franco no estabasolo Italia y Alemania corrieron en su

ayuda derramando as la sangre de unpueblo entero que hasta el da de hoypaga las consecuencias, y ac debe-mos de tener algo muy presente: siFranco no estuvo solo, tampoco lo vaa estar el prximo dictador, a esoapunto cuando hablo de violencia, aque llevamos las de perder.

Si queremos un mundo mejor en-trenemos al mundo para que lo sea yeso se hace en el da a da, o pensa-mos que el da de maana expropian-do los fusiles de una comisara vamosa derrotar a un ejercito con tanques,aviones, bombas y asesinos a sueldocon una mente lamentablemente po-drida y lavada por ideales mezquinospreparados para que fracasemos... Nodescarto la posibilidad de una revolu-cin, la cual espero suceda sin sangreaunque lamentablemente eso se tornamuy difcil, pero si ese da llega ten-dremos que ser muchos y, sobretodo,nobles seres humanos.

Alimentmonos de todas las for-mas posibles y guardemos esa energapara el momento que haga falta, no lamalgastemos en esfuerzos intiles.Que las vidas de todos los que lucha-ron por la libertad histricamente nosean en vano, seamos astutos, que nohaya mas celdas empapeladas de pre-sos polticos, y menos de los nues-tros, que los anarquistas no llenencalabozos. Escapemos a las trampas


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del Estado, escapemos a la crcel y ala muerte, no olvidemos que muchagente en nombre de Dios realiza ac-ciones muy nobles, como as tambinpolticos lo hicieron, por citar algnhroe: como olvidarse de Mandela? ledio gloria a un pas como Sudfricadejando una leccin al mundo de que

la discriminacin es un error, comoconsecuencia pas 27 aos preso, yan as al salir de la crcel le enseal pueblo que no deben odiar a susenemigos, que la discriminacin de unblanco a un negro es la misma que lade un negro a un blanco. Fue un hom-bre que lleno los estmagos de unpas que se mora de hambre y revivilos corazones de un pueblo al que elodio le haba hecho olvidar que existael amor. No todos los polticos sonmierda, creo que el poltico honestono puede hacer el bien debido a la

corrupcin que lo rodea. Alguien dijouna vez la poltica es como un violn:se sostiene con la izquierda y se tocacon la derecha, nos debemos sentirorgullosos de no formar parte de eso,como as tambin debemos no sertotalitarios.

Que nuestro ateismo no impidaque los creyentes puedan hacer elbien, respetemos si queremos quenos respeten, y por ultimo nunca peronunca dejemos de soar pero hag-moslo con los pies en la tierra.Pd: escucho ofertas para realizar ac-

ciones a favor de la comunidad, algunproyecto, alguna invitacin para lasolidaridad o lo que sea. Desde ya nopretendo ofender a nadie con estecomentario ni ser ofendido, simple-mente es mi punto de vista.

Juan Pabl [email protected]

LIBERTARIOSPorque libertarixs? Libertarixs

porque confiamos en el ser humano,en el se encuentran todas las posibili-dades, incluso la de pensar por simismx. Porque el camino del autogo-bierno aunque mas largo o difcil, esmas respetuoso para todxs. La criticay la revuelta pueden darse por aadi-dura, son solo consecuencias posi-bles. La intelectualidad, o condicinobrera u okupa son solo circunstan-cias. Se es libertarix por buscar pensarlibremente y actuar autogestivamente(en concordancia). Libres del condicio-namiento del pre-juicio de lxs dems,del afecto o del miedo a perderlo, li-bres de la fuerza coactiva de quienesdetentan el poder y de ms miseriassupersticiosas, pobres argucias desometimiento por el temor. La amena-za de exclusin social por pensar o

ser diferentes, es, en el inconscientecolectivo, una amenaza a la supervi-vencia. Contra ella nos revelamos.

La amenaza permanente de caren-cia afectiva (chantaje) y/o material porpensar distinto o vivir distinto a lxsdems, las consideramos de un sadis-mo impropio de la humanidad. Y sin

embargo sobre ella cimientan desdelos primeros vnculos filiales, hasta lams cruel dominacin poltico religio-sa, aquella extraeza que llaman leal-tad.

Sepan, contra eso nos revelamos.No lo queremos ni para nosotrxs nipara nadie que desee la libertad, encualquier rincn del mundo.

Lucrecia

LOS VICIOSY EL ESTADO

a cambio de

mis sueos,me han dejado

un sitio para el vicioy el pecado.

(Roque Narvaja,Yo quera ser mayor)

No solo la educacin es un aparatoideolgico del Estado (segn Althus-ser), sino que tiene otras formas dedominacin.

En el presente, la bebida y ciertasdrogas (el porro sin ir ms lejos), hansido rodeadas de una aureola de falsa

radicalidad, de productos transgre-sores y anti-sistema, de sustanciasque facilitan la relacin entre las per-sonas, que tienen que perder, paraaparecer como lo que son, armas delpoder constituido para degradar, em-

brutecer, desorganizar e incluso ma-tar. Al mismo tiempo, alcohol y tabacoson una saneada fuente de ingresosfiscales para el Estado, adems deunas ramas de la produccin capitalis-ta que dejan enormes beneficios yacumulan capital.

Compaeros nos encontramos en

este momento ante la incuestionablenecesidad de abrir los ojos ante unade las ms grandes armas que tiene elsistema para hacernos consumir ydormirnos en batalla: y me refieropuntualmente el consumo de drogas yde alcohol.

Hoy es inaceptable la pretensin deconsiderar como inconformista yrebelde el beber o consumir drogas,majadera urdida por la contraculturade los aos 60 y 70 del siglo pasado,que se pone en evidencia al mostrarque han sido los aparatos de domina-

cin, desde la CIA a las diversas poli-cas de todos los pases, quienes mshan hecho y hacen por popularizar losestupefacientes, de las cuales la con-tracultura fue una agencia de propa-ganda, al menos en esto. Entro enpolmica con el anticlericalismo bur-gus, que pretende tildar demoralismo, e incluso de clericales-mo, la temperancia y sobriedad, mos-trando que en el pasado las y los me-

jores militantes del movimiento obre-ro, por lo general irreligiosos y ateos,se opusieron bravamente al alcohol,

as como al tabaquismo. En el presen-te, es evocado el lema, Droga y poli-ca, la misma porquera. Debemosluchar con mpetu por romper las ca-denas con las que nos ata la depen-dencia al alcohol y las drogas que nosdominan tanto fsica como mental-mente, su consumo duerme la con-ciencia y evita posibles acciones quese podran tomar en contra del siste-ma, y renunciando a tratar de un mo-do fcil, superficial y reduccionista elproblema del alcoholismo y la droga-diccin. La conclusin es que ante unproblema tan grave, y que lo va a sercada vez ms, pues el Estado y el capi-tal no van a renunciar a ese arma, latransformacin integral del orden pol-tico-jurdico y social (revolucin) escondicin inexcusable, pero no sufi-ciente, de manera que se demandantareas complementarias, como ir ela-borando un sistema de ideas para laedificacin libre y autnoma del hom-bre, y una reflexin sobre los proble-mas existenciales de la condicin hu-mana, hasta el momento olvidados.Hoy en da resulta ms cmodo y fcilexigir la legalizacin sin debatir real-mente los problemas sociales que cau-san las drogas y el alcohol como lamarginacin social, el maltrato, in-consciencia de actuacin o irresponsa-bilidad. Al Estado no le interesa la sa-lud pblica, solo cobrar impuestos,

PERIDICO ANARQUISTA BAHIENSE PARRHESIA 03


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por un lado subvenciona a los produc-tores tabacaleros en 3000 millones deU$S, para mantener su trabajo, des-pus le cobra un gran impuesto a lasempresas de cigarrillos, luego gastadinero en campaas y tratamientoscontra el tabaquismo, lo que se llamacontradicciones del sistema, el da que

sepan como cobrar el impuesto a lacocana, seguramente se vender enun sobrecito que tendr impreso:aspirar este producto es nocivo parala salud, ley n.

Venimos a sustituir nuestra liber-tad de accin por la de un fantasmade dominacin, no es posible que pen-semos que por que soy libre yo consu-mo lo que quiero por que terminamosde la misma manera como comenza-mos oprimidos, sojuzgados, sin ac-cin, se nos esta olvidando algo tanimportante como es el hecho de que

la revolucin es cambiar la realidadsocial negativa y no de adaptarnos aella. Tenemos que generar concienciade que el alcohol es la droga que masmata y enriquece al estado, al perma-necer legal es la mas consumida, es lamas depresora y por ello la mas ajus-tada al capitalismo, no da lucidez perosi mata neuronas. Nos toca compren-der y actuar contra este medio deopresin, ir generando conciencia encada uno de nuestros allegados y con-gneres, luchar por liberar ms men-tes de la opresin del sistema y de sus

bajos medios de dominacin. La drogaes la mercanca definitiva del sistema.No hace falta hablar para vender. Elcliente se arrastrara por una alcantari-lla para que le vendan. El comercianteno vende su producto al consumidor,vende el consumidor al producto. Nomejora ni simplifica su mercanca.Degrada y simplifica al cliente. El sis-tema crea adictos- dependientes y losmantiene cautivos a travs de su adic-cin. Los alcohlicos creen que consu-men alcohol, cuando es el alcohol elque los consume a ellos, lo mismopasa con los drogadictos. Amboscreen estar en contra del sistema yson aliados ignorantes de el. Que que-de claro, no estoy en contra del vasode vino en las comidas, ni del porropor placer de vez en cuando, estoy encontra cuando el alcohol se convierteen el valor de los cobardes y el porroen el suicidio de los idiotas.

Compaeros, de la conciencia delpueblo nacer su liberacin, ayude-mos a crear conciencia,

jams mi precaria cienciaquiera imponer tirana,la luz que regala el da,

nace en su propia conciencia.(Jos Sarralde)

Alberto

LLORASTEO NO?

(Kirchner obit)

Cientos de personas haciendo unafila por el morbo de ver a la viuda(Cristina Kirchner) vestida de luto consu squito de ministros, intocables amedio metro de la valla, 'vulnerables'a un cascotazo, un zapatazo (comoaquel clebre zapato volador del pe-riodista Iran? que roz los pelitos dela cabeza de Bush) como nunca po-dras verlos en ese estado de indefen-sin.

Si... cientos, miles de personas ha-

ciendo fila, desafiando la noche, orde-nadamente esperando Que cosa? Laresurreccin en el tercer da? Queabran el cajn as se puede ver el res-to ptrido del ex presidente? Algnloco cantando pera, guitarreando ollorando como marrano porque 'kirnerfue lo' mas grande que hay'?

La gente no quiere pasar desaperci-bida, Quin no quiere formar partede la historia?, ir a ver el atad de unfamoso es como ir a ver el conciertosupuestamente 'histrico' del rejuntede 'Soda Stereo' en el estadio. Usted

puede no estar de acuerdo, porquepiensa que 'Soda Streo' tiene masonda que ir a ver a un saco de bur-cratas, bien, pero ese saco de piojosen la casa rosada es el saco de"protagonistas" del 'nuevo pas'?.Usted y sus hijos quieren verlosllorar como los humanos que muchasveces se dud que eran (lea entre l-neas mil notas en 20 diarios distintossobre la falta de humanidad o sensibi-lidad de la seora presidenta y susallegados que son pintados constante-mente de cnicos calculadores e insen-

sibles trepadores).El olor a podrido que emanara de

las entraas hinchadas de Kirchner yque se filtraban como el olor a salchi-cha de la olla tapada (alusin al cajn)no se advirti por la cantidad de olo-

res de las miles de personas que pasa-ron casi como en una maratn, con lacabeza inclinada hacia su derecha yyndose con un dejo de decepcin.Muchos se persignaron para ocultaresa risita irnica de 'Viste que la pla-ta, el poder, la fama, el carisma, no tesalvaron la vida? Gil!'.

Hay un morbo ah. Muchos viejosfueron a seducir a esa mujer, a tirarleojitos, y mostrarle la espalda al toroherido de muerte pero an batallantePodr matarme a mi, se atrever?, laseduccin de la 'femme fatal' (mujerfatal), pero sus lentes oscuros no deja-ban ver siquiera las bolsas de la vejez,y su cara plida y corroda estaba pu-ramente maquillada para maquinar alpervertido 'entereza, fuerza, sexuali-dad'. Otros llevaron a sus hijos de for-ma educativa: 'ese tipo de mujer es elque te puede llegar a matar', la viuda

como un objeto alcanzable y ertico ypara el padre o madre es un indicadorde que hay cierto tipo de gente que tetermina matando tarde o temprano,alejarse de ellas.

Un paro cardaco: 'ella no le prote-gi', por otro lado otros la re victimi-zaban haciendo un llamado a la demo-cracia y temiendo a la dictadura queIsabel Pern padeci. 'La mujer dbil,frente a un gobierno en crisis'. Mu-chos machistas estaban perfilando ahacer la cola con morbosidad, pero lamayora se qued en casa (obvia-

mente temiendo que 'sus' mujeres nolos cuerneen) , en todas las emisorasque pusieron la banda negra de luto.

Todas las cmaras buscando lalgrima facilonga, la gente se apelma-zaba para llorar frente al lente; el pe-riodista solo tiene que acercar el mi-crfono para que la gente solloce,como si le hicieran 'el anal' por prime-ra vez. Y no fue poca la mierda, no fuepoca.

El cierre de algo viejo y el comien-zo de algo nuevo? Muchos lagrimabanPor qu?, quizs la exposicin medi-tica hizo de la gente un despojo desentimientos desatados, las personasdesmaraadas de alegra, gozo, detristeza o de silencio, muchos estabaninmiscuidos con sus adentros en unacomunin ms profunda que cualquierotro da en que estaban mirandoshowmacht. Son los que lloraron cuan-do Ricardo Fort se fue 'del bailando'.Si, la mayora no llor, ni goz, ni na-da, solamente 'acompa' a la minoramorbosa que estaba imaginando unamuerte dolorosa, que tard en llegar yque todos estn de acuerdo: da mu-cho que pensar. Ser muerto en anoni-mato como la inmenssima mayora oser exhibido como un -trofeo- del go-bierno? (reemplcese 'gobierno' porcualquier otra entidad). Al fin tienen aun muerto, el muerto garantiza'calidad', el muerto siempre va a ser


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muerto, no va a revivir y se va a equi-vocar, el muerto si la hizo bien dejabien parada a toda la familia: 'fulanitoera tan bueno... como toda su familiade trabajador', o lo contrario 'menga-nito era un re-ladrn, bien muertoest, me cago en su familia, sus ami-gos deben ser igual de chorros'.

Faltaba que lo embalsamen, (Nodes ideas Facu!) y lo paseen por lacalle como en un circo (Que sociedadno lo es a baja escala?), si, eso a lagente le hubiese encantado, tocar supiel acetonada, una onda Stalin embal-samando a Lenin, Kirchner no estuvolejos de la reclusin durante sus lti-mos das, aislado de su poder de in-fluencia, rodeado del hermetismo deun paraje solitario, sedado...

Muchos se llenaron la boca con lapalabra 'respeto', que sintetiza'miedo', miedo a quedar para el culo

burlndose, criticando o simplementehacerse el desapercibido de esta noti-cia. A muchos nos encantan estas no-ticias por los macabros detalles. Losperiodistas en los medios estabandebatiendo sobre que era un paro car-diaco, si el censo nacional se suspen-dera, si lo velaran a cajn abierto, sila gente podra ir a verle (al cajn)(mirarlo y pensar: ah dentro hay uncadver descomponindose, vestidocomo cualquiera de nosotros que es-tamos vivos), y dems cuestiones su-perficiales. Todos tenan miedo, todos

recordaron el ataque de 'la muerte',siniestra y sorpresiva, muchos fuerona curiosear, as ven el 'toque' mortalde la muerte, el golpe irreversible.

Las Madres de Plaza de Mayo dije-ron que era como perder un hijo. Ns-tor era un hijo. De alguien ?.

Los zurdos mostraron condolen-cias, los diestros se mostraron huma-namente acongojados, los 'tarados'tocaron bocina en la calle, los giles nose dieron por enterados. Los insensi-bles fueron felices, porque nada tienesentido.

La gente que los puteaba y cagabasangre, supuestamente, por su culpahoy est silenciosa, dicen: 'ahora mis-mo no me importa lo que hizo, seaenriquecimiento ilcito (por la sospe-chosa suma de 155% en su patrimoniode un ao a otro, dicho sea de pasomotivo para que en 6,7,8 en el canal7, se corte el programa justo cuandose iba a hablar de 'eso'), sean polticasincorrectas (represiones a las marchasde los trabajadores, intentar aplicarlas 'retenciones', un discurso cido yagresivo contra los medios masivos,etc), hoy mis condolencias con ese serhumano muerto'. Es muy gracioso quecuando Fuentealba muri (fue asesina-do a sangre fra y tena toda una vidapor delante de luchador social y do-cente) nadie llor as, cuando LucianoArruga (un joven de menos de 18

aos y diramos 'toda una vida pordelante') no fue encontrado por sersecuestrado por la polica y desapare-cido nadie llor as, nadie vino con ellente de la cmara para que la gentellore como estpida por el desconoci-do moribundo de Kirchner Alguno deustedes tom un mate con l? Ni un

solo matienzo?, y todos lloraron y vi-vieron hipcritas para siempre.Ahora los dos Kirchner gozan de

una supervaluacin, el trofeo de Kirch-ner muerto garantiza 'posteridad' (almenos si no le sacan los trapitos su-cios al sol), y la viuda garantiza'espectculo'. Todos curioseaban so-bre como seria una presidenta, ahoraComo gobernar la viuda? Se encon-trar un chongo? Se volver a casar?Vivir el resto de su vida como la se-ora Mirta Legrand?.

Abran las apuestas!

Solo escrib lo que la gente piensapero no se atreve a documentar. Yosoy feliz (por esto).

Nih i l- i sta [email protected]

Fuente: www.deconstruido.blogspot.com

EL VIEJOCUENTO DE LAIMPUTABILIDADY LOS MENORES

Acostumbrado, s, pero sobre todoharto estoy de ver como las cosas serepiten cclicamente para favorecer alos intereses de determinados secto-res.

Trasel caso de unjoven de 15 aosque asesino a un comerciante para ro-barle, asistimos una vez ms al tpicoy detestable show de la carroa me-ditica y poltica. El hecho alque hago

mencin desencadeno falsos debates,odio y resentimiento en la opininpblica. Instalado, como siempre, porlos medios de (des) informacin. Dan-do pie a los oportunistas de turno,como la derecha, que sali a reclamara viva voz bajar la imputabilidad delos menores a 14 aos! para frenar

as la ola delictiva. Como si no supi-ramos que lo hacen por su condicinde burgueses y defensores acrrimosde su bendita propiedad privada! Lamisma que genera la tan mentada in-seguridad de la cual se viven quejan-do. Por otro lado el gobierno sali acontestar que esas discusiones des-van el verdadero origen del tema.Mostrando as una imagen mssensata, y de paso eximindose deculpa y cargo para salir airoso de lasituacin.

En mi opinin lo que realmente

desva el tema de discusin es esteabsurdo circo meditico-poltico y nohay que ser anarquista para darsecuenta. Espordicamente se recurre aestos temas para distraer a la gente deotras cosas, igual o ms importantes,y de paso llevar agua para su molino.No olvidemos que este es un aoelectoral!

Mientras tanto los pibes sin futurosiguen suicidndose por sobreviviry en ocasiones hasta arruinndoles lavida a otros, y a esto no hay optimis-mo oficial que lo pueda desmentir.

Estoy convencido que estos pibesson vctimas (de polticos en campaa,de ongs, de spots publicitarios, delsistema, etc.) y que al final de cuentasson siempre los mismos los que salenperdiendo. Tienen su destino marcadodesde que nacen hasta que mueren.Solo algunos pocos, muy pocos logranencontrar una alternativa y para elresto, como deca un viejo militante dela CNT, les espera las mazmorras.

Cristian



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EL MIEDOAL DEBATE

Siguiendo la inquietud manifestadapor un compaero en otra publica-cin, donde plantea la falta de espa-cios de intercambio y discusin dentrodel movimiento, me parece una buenaocasin para comenzar a tratar estetema con cierta asiduidad, y al menosdejar alguna opinin al respecto paraque, en alguna medida y con algo desuerte, resulte un disparador y otros,si lo desean,vayan haciendosu aporte.

Es cierto que al no tener ningunaorganizacin, ms bien ser los anar-quistas un poco refractarios a la orga-nizacin y el compromiso instituciona-lizado, y ser tambin pocos y disgre-gados en una extensa geografa, ter-mina siendo difcil y poco frecuente elintercambio nter subjetivo de opinio-nes y pareceres. La ausencia de orga-nizacin formal hace que no exista laobligacin de reunirse peridicamentepara debatir diversas cuestiones ati-nentes al desarrollo y enriquecimientode una ideologa determinada. Por unlado me parece bien, en el sentido deque el dilogo enriquecedor no puedeser impuesto por reglamentos. Porotro lado, esta falta de compromisoformal, sumado a la escasa cantidadde compaeros y, tal vez, falta de cos-tumbre tambin, genera una notablefalta de dilogo y debate, lo que pro-voca indudablemente pereza y pobre-za terica y mental. Todo movimientosin discusin interna, se dogmatiza yempobrece, y termina quedando muyaislada de la sociedad, ya que la pro-blemtica de la realidad contempor-nea, siempre frtil y cambiante, noingresa al interior del movimiento pa-ra ser sometida a debate.

Se que algunos tienen, aunque nolo admitan, una cierta reticencia aldebate y habra que analizar dnde seorigina esta reticencia y reconstruir eldiscurso para ver que hay detrs delas palabras, cuales son las intencio-nes, y saber por qu, el discurso queexpresa y describe una determinadaideologa, se atesora y guarda comoquien deposita dinero en un banco, enlugar de someterlo a las reglas del

proceso dialctico.Tal vez el hombre, la mujer, todos

somos lo que es nuestra historia,cuando tenemos que dar una defini-cin de nosotros, tenemos que mirarhacia el pasado, desde el nombre,fulano de tal, alguien nos puso unnombre en el pasado, nos impuso un

idioma, una sociedad, una religin, unethos y una cosmovisin determinada,y en algn momento tambin noso-tros en el pasado, aportamos algopara definir nuestra subjetividad, engran parte opuesta al ethos familiar,ya que la individualidad es un recortede la realidad, una separacin del ori-gen, se fortalece la individualidad aldiferenciarse de los orgenes.

Sea como fuere, solemos estar c-modos con el pensamiento poltico social que forma parte de nuestrasubjetividad y nuestras expectativas

sobre cmo ser una sociedad ideal,las ideologas expresan una determi-nada posicin con respecto a la reali-dad, una posicin frente al mundo ytambin un deseo que se proyectahacia el futuro, algo que guarda ciertasimilitud con las religiones. Poner enla criba de la dialctica todas las certi-dumbres que nos determinan y nosdan un lugar en el mundo y un senti-do a nuestra vida, siempre es una in-cmoda tarea, seguramente permane-cer y vegetar en nuestro pequeocrculo de verdades conocidas, es

ms cmodo que poner en suspensotodo ese entramado de prejuicios quenos determinan. Siempre lo nuevo, lodesconocido, genera incertidumbre,nos hace sentir inseguros y desprote-gidos, tendemos a preferir la comodi-dad de lo conocido.

El problema es tambin, y llegandoahora al ncleo de la cuestin, es queen el discurso poltico actual el debatese ha convertido en una forma decompetencia donde uno gana y otropierde. Ya se abandonaron las formasdialcticas pensadas en la gracia clsi-ca como camino conducente a la ver-dad, (para Platn dialctica y cienciason lo mismo), se abandon el buenuso de la lgica, del entimema,(silogismo de retrica) y del argumen-to slido y bien fundamentado.

Actualmente la verdad y el enrique-cimiento de las ideas a travs del di-logo se abandonaron, y en toda discu-sin, prevalece la necesidad de la vic-toria, sin importar la solidez y la mo-ralidad de los argumentos empleados,esto, adems de ser algo de muy cor-to alcance y de gente con estaturamoral mas bien baja, se debe a unacuestin de Poder, (un tema centralpara el anarquismo).

En realidad cuando se busca la vic-toria en un debate con el uso de cual-quier artilugio retrico, se esta bus-cando Poder, se busca que el oponen-

te reconozca explcita o implcitamen-te la autoridad del vencedor, autori-dad intelectual en un plano tericopero autoridad al fin. Eso le da al ven-cedor un Poder Simblico, posee, almenos en apariencia, una inteligenciasuperior, argumentos ms convincen-tes, etc.

Este Poder es reconocido en cual-quier cultura, hasta las ms primiti-vas culturas reconocan esto y otorga-ban una cierta autoridad que devieneluego en un Poder Simblico y quemuchos investigadores lo consideranel origen del Poder de Factum actual.

En lo referente al movimiento anar-quista o libertario, personalmente noprefiero enrolarme ni etiquetarme enninguna de sus infinitas variantes,aunque respeto a aquellos que prefie-ren identificarse invariablemente conuna corriente determinada, me parece

que toda definicin, todo ismo oista restringe la libertad de pensa-miento, tambin cristaliza e institucio-naliza el libre discurrir de la razn,donde existe un ismo pronto apare-cen los dogmas y las doctrinas, y tam-bin donde hay doctrinas pronto apa-recern los exegetas de la ciencia re-volucionaria y los nuevos dirigentes.Es por eso que muchos compaerosque actualmente se encuentran desa-rrollando trabajos tendientes a unmayor agiornamiento libertario, sue-len sealar al anarquismo negador de

la anarqua. He aqu el anarquista,no se nomina ni embandera, deja esasminucias para los que buscan seguri-dad(Lucrecia).

Me parece que si observamos lasdiferencias existentes entre las diver-sas corrientes con cierta atencin,podremos ver que dichas diferencias,dira que no superan el plano del con-cepto, el uso, significado y alcance deunos pocos conceptos abstractos, osea un conflicto meramente semnti-co, diferencias que con un buen ejerci-cio dialctico interpersonal deberan,al menos, poder procesarse sin mayo-res inconvenientes, a menos que hu-biesen tambin, como me parece, di-ferencias originadas en cuestiones dePoder Simblico y egosmo, explicadoms arriba, una competencia por de-



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demostrar quien es el dueo de laverdad en materia crata.

Pero no quiero dejar en estas l-neas una impresin equivocada, notengo mayor inters en la unidad, laconcordia, el pensamiento nico, codi-ficado y sacralizado, me parece msenriquecedor el conflicto, la variedad

en el pensamiento, pienso que a ma-yor variedad, mayores perspectivas enlas miradas, nos ensean ms y crece-mos ms, todo objeto tiene mltiplescaras (objeto en sentido metafsico),tiene el objeto tantas caras como suje-tos lo miran, si vemos las cosas desdeun solo ngulo o desde una sola per-sona o perspectiva obtenemos una vi-sin muy parcial y muy restringida dela realidad, valorizar y estimar despre-

juiciadamente otras opiniones sirvenpara enriquecer la propia, y tener unavisin ms amplia y de mayor alcance:

Si el movimiento ha de crecer en vezde encogerse, habr que tirar un mon-tn de madera muerta y abrazar unascuantas ideas arriesgadas(Bey).

Es momento de incorporar agencia-mientos hasta hoy despreciados por elanarquismo clsico, como los colecti-vosdegnero olos antiespecistas,mo-vimientos artsticos, filosficos o seu-dofilosficos, etc. Abandonar el cen-tralismo conceptual eurocentrista, lamoral judeo cristiana occidental, in-corporar visiones de culturas negras,amarillas, de pueblos originarios, cul-

turas orientales, tribales, etc. Y tam-bin, Por qu no? Cierto espiritualis-mo o misticismo, aunque ms no seaen un sentido ldico, y desempolvar lamente del materialismo cientificista,verdadera religin de la modernidad.

Lejos de constituir una amenaza ala pureza ideolgica, el aporte de dife-rentes culturas o agenciamientos quehasta el momento se canalizan en for-ma precaria, nos enriquecera, nosaportara mayor tolerancia y facilitarael dialogo. Creo que el anarquismosiempre tuvo una antropologa mscompleja queel marxismo,que es msreduccionista exaltando exagerada-mente las condiciones materiales de lavida como determinante de la concien-cia,por eso pienso que deberamos te-ner mayor predisposicin a incorporarnuevas fuentes de voluntad y deseo.

Me parece que sera interesantelograr espacios de encuentro dondedebatir personalmente con cierta pe-riodicidad. La costumbre actual deldebate a travs de Internet y de losperidicos (este ltimo caso muy tra-dicional) me parece algo pueril si seda entre gente que vive a pocos me-tros de distancia entre s, salvo que seevite la discusin personal por unacuestin de inseguridad, como formade resguardar un pequeo trozo deverdad, un pequeo Poder Simblico,descrito ms arriba.

Aun con todos las distancias delcaso, el intercambio de opiniones ayu-da a entender y comprender al otro,aunque suene meloso creo que la ni-ca forma de construir algo es a travsdel afecto y la comprensin, puedollamar a alguien Compaero peroeso concepto aplicado a personas que

no conozco es un concepto vaco delcontenido que debera tener, para queadquiera contenido y no sea un simpleformalismo necesito conocer a la per-sona, saber cuales son sus virtudes ydefectos, conocer sus deseos y expec-tativas, saber que le agrada y que co-sas le molestan, entonces el conceptoCompaero adquiere su real signifi-cado, y eso se logra con una relacinde persona a persona.

Tambin sera bueno romper elpropio cerco, y lograr un intercambiode pareceres con el resto de la socie-

dad, que si vamos a construir un mun-do distinto deber ser con todos, conorganizaciones sociales, partidos, co-lectivos varios, etc, y tambin, simplesviadores individuales.

Como ocurra en nuestro pas, afines del siglo XIX, se hacan diversosencuentros entre anarquistas y socia-listas donde se debatan todas las pro-blemticas del incipiente movimientoobrero argentino, y se discutan lasdiversas ideas de construccin de unfuturo para toda la humanidad, estosencuentros, bastante olvidados por la

historiografa oficial, sentaron las ba-ses para la fundacin de la primerafederacin obrera en Argentina.

Me parece interesante la posibili-dad de recrear, (con las diferencias delcaso, ya que han pasado ms de 100aos de aquellos hechos) esta prcti-ca. En realidad, como descalificacinsolemosusar para los partidos marxis-tas la definicin Socialismo autorita-rio en contraposicin al Socialismolibertario democrtico, horizontal ylibre de autoridades, pero si esto nose sustenta con hechos concretos re-sulta una descalificacin facilista, yaque al menos peridicamente los par-tidos realizan encuentros para debatirsu problemtica, incluso los que po-seen un esquema organizativo leninis-ta, que poseen un mbito de debatemuy restringido, pero al menos lo tie-nen, nosotros, libertarios de nombre,deberamos superar holgadamenteese marco de discusin.

Si, como creemos, nuestros idealesson los ms adecuados para crear unmundo mejor, deberan ser evidentesy sobresalir en corto o largo plazo encualquier debate en torno a la proble-mtica social, si tenemos temor a ha-cerlo, es que no estamos demasiadoseguros de nuestras ideas.

[email protected]

SOBRANPOLTICOS

Muri el Tirano. As de clara fuela expresin popular cuando dej deexistir la persona con que se explica-

ban no slo cuatro dcadas de dicta-dura militar, sino principalmente elsufrimiento y la vida de millones deespaoles repartidos en distintos con-tinentes. Cambiando fechas y tecnolo-gas, la opresin econmica no esmuy distinta en cualquier lugar dondela sociedad capitalista obliga a milesde millones a sacrificarse diariamentepor sobrevivir, a mendigar, robar oagachar la cabeza para conservar untrabajo. Sin embargo, en estos das,la muerte de quien representa en ladimensin poltica los ltimos aos dela sociedad argentina la era K - , ge-nera un extrao sentimiento muy dis-tinto a aquel alivio profundo que ex-perimentaran pobres, trabajadores yluchadores con la expiracin del gene-ralsimo Francisco Franco.

A esta altura de la costumbre, yaes un chusmeri viejo comentar queen los primeros 7 aos de presidencialos Kirchner multiplicaron en un 700 %su patrimonio declarado, que sus ri-quezas reconocidas son de 55,5 millo-nes de pesos, y como la corrupcinresulta una obviedad tolerada, sermejor recordar otras cuestiones queno tengan que ver con nmeros.

Cmo llegaron los Kirchner a lacima del Poder? Escalando no creo,pisando cabezas seguro, heredandoalgo, multiplicando riquezas en pero-dos dictatoriales y en los que siguie-ron, hacindose de cmplices sociosextranjeros y compatriotas, pero merefiero a cmo llegaron al GobiernoNacional. Menem, Duhalde, con ellosno slo comparti altos cargos en el ElPartido, negocios y brindis, sino quefueron compaeros de ruta, jugaronen el mismo equipo y por eso uno lepasa el trono a otro de su confianza.

2001. 2002. Esa poca fue creati-va. La U.C.R. huyendo de la historia enhelicptero, las figuritas se sucedanrepetidas, la gente seguamos en lacalle y el Poder recurri un poco pordesesperacin, otro por oportunismomafioso a su rostro ms horrible,Duhalde y su fascismo declarado ex-plicando y demostrando que de unlado estaba el Estado, y del otro susenemigos. El civismo veraniego habapasado y lxs luchadores crecamos enasambleas multicolores. El F.M.I. pedabalas para despejar la calle y Duhaldese las di, costndole caro el teatroantidisturbio de querer hacer pasardos fusilamientos como enfrentamien-to entre piqueteros tuvo que adelantarlas elecciones y candidate a su suce-



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sor, un desconocido sureo con pocasapariciones televisivas.[1] Frente a ElFantasma de los 90 gan el Frentepara la Victoria por abandono, y conun simple gesto para quienes quierenconformarse con poco, descolgando elretrato de Videla orden la casa.

En lo material, todo sigui su ten-

dencia, la brecha entre ricos y pobresse agrand, la calidad de vida se pare-ce a la de siempre y unas cuantas em-presas amigas del Gobierno lograronhacer crecer exponencialmente susganancias ( Telefnica, Repsol, BarrickGold, Unilevel, Grupo Plaza, Groboco-patel y algunas ms). En lo simblico,hizo muchas cosas recurriendo a lomejor de la tradicin peronista: divi-di a la sociedad en dos, los gorilas ylas ovejas, reflot el sentimiento pa-tritico, se proclam antimperialista yderechohumanista; compr a lxs que

se vendieron ponindoles el mooideolgico que cada quin eligi yahorr la ilusa redistribucin de lariqueza inviertiendo en asistencialis-mo barato para nixs pobres y vieji-txs olvidadxs

La relacin con el capital mundialfue la misma de siempre y cumpli alpie de la letra el rol de economa ex-portadora de materias primas, garanti-z por la fuerza la industria mineraque envenena el agua, la petroleraque contamina el aire, la pesqueraque depreda los mares y consolid el

modelo sojero llevando al extremo elcinismo opresivo de una sociedaddonde conviven hambrientos y alimen-tos que se usan para combustible. AlF.M.I. se la pag toda junta y tuvo ellujo de poder abrazar en persona aldiablico Bush a la vez que organiza-ba de la mano de Maradona unaContra Cumbre para que Chavezacuse de imperialista a su socio petro-lero, en una cancha de futbol repletade utpicos bien contenidos. En lacalle, lxs desconocidxs de siemprerompan la paz social, sus vidrieras ypateaban las rejas del castillo, cientosde detenidxs y unxs cuantxs heridxdemostraban que la libertad de ex-presin es slo para los que coinci-den con los poderosos.

El 24 de marzo de 2006 al cumplir-se Treinta aos de l ltimo GolpeMilitar, mientras en Buenos Aires elgobierno celebraba de la mano detraidoras madres de desaparecidos elDa de la Memoria, un pueblo del nor-te de Santa Cruz, la provincia-feudode los Kirchner, estaba militarizadocon las vas de comunicacin interve-nidas. En Las Heras, la Gendarmeraentr casa por casa y tortur delantede su familia a los varones mayoresinventando culpables individuales deuna revuelta popular contra las petro-leras en la que result muerto un poli-ca, y el frente de la comisara recibi

ciento veinte balazos.Con los impactos de la crisis

bancaria mundial, y reservandoel supervit fiscal para pagarleal Club de Pars y a otros accio-nistas financieros, la constanteinflacin aumentaba un des-contento social que se man-

tena al margen del conflic-to del Gobierno con em-presarios rurales que nodudaban en amenazar condesabastecer dealimentos a la

poblacin con tal de sacar una tajadams grande.

Desgastada su imagen y ayudadopor el calendario, el Gobierno suporecomponerse apostando fuerte alrecurso ms bsico al que recurren losEstados para ganar la simpata de sussbditos: la colaboracin de reconoci-dos artistas y la coincidencia con el

espectculo futbolero ms hipnotizan-te de la televisin facilitaron que elsentimiento patritico del bicentena-rio genere simpata hacia una Admi-nistracin que aprovechaba un senti-miento nacional a-politico.

En estos aos de plena vigencia delos Derechos Humanos, el Estadosigui asesinando personas con susvariadas policas a un promedio de diapor medio [2], la tortura se aplica TO-DOS los das en las distintas crceles ycomisaras de este territorio, lxs lu-chadores sociales hemos recibidosamenazas telefnicas y personales,golpizas, detenciones, extradiciones,balas de goma y de plomo, gases la-crimgenos, criminalizacin judicial, yun estigma creciente que pretendellevarnos de la acusacin de sectariosa la de terroristas.

Por eso cuesta entender cmo esque tantas personas con buenas inten-ciones se coman el verso kirchneristay se sientan afligidos con la muerte detal personaje. Lo que sin duda ayuda ala comprensin es el enorme e inteli-gente aparato ideolgico con quecuentan lxs demcratas, que pas deser 12 pginas oficialistas a tener supropio programa televisivo y un sin finde repetidoras radiales que propaganla voz de Cristina por toda la pobla-cin. Y claro, los defensores de loexistente suelen estar acompaados

por los falsos crticos, que prefieren lapaz social y el respeto a la legalidadpues la estabilidad los hace perduraren su rol de intermediarios; y que me-

jor para expresar su pensamiento quelos lamentos del Frente Popular DaroSantilln, una organizacin como tan-tas piqueteras que creci con lo queelEstado Kirchneristareparti para cal-

mar las aguas y que sintetiza el refor-mismo posmodernamente reciclado:Para bien o para mal, la principal

disyuntiva respecto al bienestar de lasclases populares en esta coyuntura,est en manos de ese proyecto confu-so de beneficios empresariales y ms-tica popular, ideolgicamente ambi-guo [3] Vergenza debera darlesinvocar el nombre de un luchador quearriesg su vida para salvar a un com-paero, y ahora ustedes compartiendoel dolor con Tinelli para despedir auna de las figuras que mejor defendiel inters de la burguesa, y que enci-ma, encubri a los asesinos polticosde Maximiliano y Daro.

Cuando decimos que es lo mismoun gobierno que otro es porque nin-gn gobierno favorece a sus goberna-dos, cuando decimos que todo sigueigual es porque la vida de las perso-nas sigue igual. El millonario siguecontando billetes, el nio de la callesigue pidiendo, el trabajador trabajan-do, el pobre pobre, la prostituta viola-da, el preso encerrado, lxs distintxssufriendo discriminacin, y as todo.Nuestra vida y la de millones no de-penden ni puede depender de unasola persona, es un sistema social.

A quien culpar por las cmarasque nos vigilan todo el tiempo? Acual Gobierno? Al diputado queaprueba la ley? Al electricista que las



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PERIDICO ANARQUISTA BAHIENSE PARRHESIA 09coloc? El uso de cmaras es una delas ltimas innovaciones en materiade tecnologas de control estatal quese generaliza en todas las ciudadesdel mundo. Hay algo grande, muygrande, casi tan grande como la socie-dad, y es el Estado, que incluso pormomentos se mete adentro nuestro,

nos hace obedecer, mandar y reivindi-car las leyes que nos ordenan.Unos das antes que Kirchner, mu-

ri Guillermo Trafianco. Sabas?Porqu te sensibiliza ms la muertede un multimillonario que la de unpibe pobre fusilado por la polica?Porqu? Ah?

Es decepcionante o esperanzadorque para justificar la miseria que nosrodea hayan recurrido a reivindicarvalores opuestos a los principios capi-talistas? Que tengan que hablar deIgualdad y Libertad para conseguir el

apoyo de tanta gente buena, de esaspersonas que si convirtieran esas pa-labras en ideologas de vida, se movi-lizaran para actuar en oposicin a losintereses dominantes.Es este el lti-mo ropaje del Poder, qu queda cuan-do esta careta sea descubierta?

Cada da sale el sol, cada noche seacuesta, y no hay ninguna otra deter-minacin natural que haga que la vidade los humanos sea siempre la mis-ma; si algunos slo conocen la pobre-za tortuosa y otros la aburrida abun-dancia, es porque cada da hay rela-

ciones econmicas que se confirman,la necesidad de unos, la ambicin deotros y algo que definitivamente estplanificado y es concreto como lo ga-rrotes de la polica: la intervencindistintiva del Estado para con cadaser.

Izquierda o Derecha, dos identida-des que hacen referencia a la posicinque ocupaban los polticos en el parla-mento francs. Nosotrxs, sabiendoque los conflictos sociales se resuel-ven en la calle y afuera de los edificiosinstitucionales, que la vida que desea-mos se construye peleando por ellasin depender de nadie, enfrentando ala autoridad, creando relaciones arm-nicas basadas en el respeto, la solida-ridad y el amor, que queremos a lanaturaleza , preferimos reconocernosluchadorxs por la libertad.

Muerte al Estado. Viva la anarqua ytodos los sueos de rebelda.

Coli br de Arr ecif e

REFERENCIAS:[1] Ante el llamado electoral, muchos

de los que coreaban Que SeVayan Todosse fueron corriendo a afichar la cara de susdirigentes colaborando as con unos esca-loncitos a la reconstruccin de la erosiona-da confianza popular en las instituciones.

[2] www.correpi.lahaine.org[3] www.prensadefrente.org

EL ASALTOAL HADES

Vivimos en un estado en el quehemos sido desposedos de muchascosas que nos eran propias para po-dernos socializar e integrar en la so-

ciedad humana; slo que no lo sabe-mos, porque la devastacin se oculta.No nos podemos imaginar, por eso,qu es la vida ni qu es nuestra vida.Quizs podemos imaginarnos lo quesucedera si nos desposeen ahora dealgo que sabemos que es propio denuestra condicin, por ejemplo, elaire. (Ojo, que esto lo 'sabemos' por elpuro y simple vivir, sin ciencias nicientficos que nos lo 'descubran',como antes, nuestros prehistricosantepasados saban muchas ms co-sas de la vida, que ahora, en cambio,

no sabemos). Vamos a imaginarnos,pues, que nos desposeen del aire y loconvierten en una propiedad privadaen manos de unas autoridades que loparcelan, lo envasan y nos lo dan acada cual con una escafandra paraque respiremos.

Estaramos agradecidsimos de quenos diesen lo que necesitamos paravivir, como si fuese un acto de gene-rosidad de la autoridad competente,puesto que nos habran ocultado lades-posesin previa. En principio, laoperacin de desposesin se justifica,

diciendo que es para administrar losrecursos y para distribuir el oxgenoadecuadamente. Al cabo de unas ge-neraciones, nadie se acuerda de quehubo un tiempo en que el aire estabaahyse respiraba sinnecesidadde quenadie lo envasase y lo distribuyese.

El ejemplo no resulta dispara-tado cuando pensamos que latierra, que hoy es toda propie-piedad privada y est parce-lada, hace 500 aos en Am-rica era como el aire, hastaque llegaron los europeos y

desposeyeron a los indios desu entorno y lo convirtieron enpropiedad.

As mismo los padres tenemos in-culcado el que l@s hij@s nos tienenque estar agradecid@s porque les he-mos dado de comer, etc. y se aceptaesta idea porque se oculta la devasta-cin del entorno propio de la criaturahumana. Es como si incendian un bos-que y luego dicen que nunca hubo

otra cosa ms que el desierto, y nosborran de la memoria el bosque y elincendio devastador. Por eso siempreha habido una mitologa de los orge-nes, para ocultar los parasos perdi-dos y establecer la guerra y el fratrici-dio y el Poder como consustanciales ala condicin humana. As construyenla Realidad. No pertenecemos a nues-tros padres; pertenecemos a la espe-cie humana en general y a un grupohumano en particular, y esta segunda'pertenencia' no tiene nada que vercon la propiedad o la apropiacin;

tiene que ver con nuestro origen filo-gentico, con nuestro ser parte de untodo ms amplio,.

Bajo una meticulosa presentacin,a base de proteccin, paternalismo yamor, las autoridades competentesdan a las criaturas humanas las esca-fandras necesarias para sobrevivir. Lacriatura humana, que no sabe quepreviamente ha sido desposeda de loque le perteneca por su propia vitali-dad lo recibe con agradecimiento yreconocimiento a la superioridad porsu accin benefactora: le debe la vida

a la Autoridad. Y para vivir necesito aalguien superior, un Poder que mepermite tener la escafandra para so-brevivir; y de este modo yo me perci-bo y me identifico como inferior a losuperior y sumiso al Poder.

Casild a Rodr igaezTomado de la agenda

Remolino 2011


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TU POLITICA ESMAS ABURRIDAQUE LA MIERDA

Sabes que es verdad. Si no fueraas, Por qu todo el mundo se escon-

de cuando pronuncias sta palabra?Por qu la concurrencia a tus reunio-nes grupales de discusin sobre teoraanarco-comunista ha sufrido una cadapeor que cualquiera experimentadaanteriormente? Por qu el proletaria-do oprimido no ha entrado en razn yse ha unido a vos en tu lucha por laliberacin del mundo?

Quiz, luego aos de lucha paraeducarlos acerca de su papel de vcti-mas, has llegado a culparlos por sucondicin. Les debe gustar ser piso-teados por los agudos tacones delcapitalismo; y si no fuera as, Por quno se han unido a vos: encadenndosea lugares, coreando consignas en pro-testas cuidadosamente planeadas yorganizadas, y frecuentando centrosanarquistas? Por qu todava no sehan sentado a aprender toda la termi-nologa necesaria para una autnticacomprensin de las complejidades dela teora econmica marxista?

Lo cierto es que, para ellos, tu pol-tica es aburrida porque les resultarealmente irrelevante. Ellos saben quetus anticuados estilos de protesta -tusmarchas, pancartas y reuniones- sonactualmente incapaces de efectuar uncambio real, ya que se han convertidoen algo demasiado predecible dentrodel status quo. Ellos saben que tu jer-ga post-marxista es repulsiva, ya quees realmente un lenguaje de mera dis-cusin acadmica, y no un arma capazde debilitar a los sistemas de control.Ellos saben que tus disputas internas,tus grupos disidentes y tus peleasinterminables acerca de teoras efme-ras, no pueden producir ningn cam-bio real en el mundo en el que vivenda a da. Ellos saben que no importaquin mande, qu leyes haya en loslibros, o bajo qu "ismos" los intelec-tuales se alineen; el contenido de susvidas seguir siendo el mismo. Ellossaben tanto como nosotros, que nues-tro aburrimiento es la prueba de queesta "poltica" no es el camino a nin-gn cambio real. Nuestras vidas yason lo suficientemente aburridas!

Y t tambin lo sabes. Para cun-tos de ustedes la poltica es una res-ponsabilidad? Algo a lo que se com-prometen, porque sienten que debe-ran hacerlo, cuando en lo ms pro-fundo de sus corazones hay millonesde cosas que preferiran estar hacien-do. Tu trabajo como voluntario, es elfavorito de tus pasatiempos, o lo ha-ces sin ningn sentido de obligacin?Por qu piensas que es tan difcil mo-

tivar a los dems a realizar tareas vo-luntarias como las que realizas?Podra ser que fuese simplemente elfruto de tu cargo de conciencia, lo quete lleva a cumplir con tus "deberes"para ser polticamente activo? Tal vez,le agregas emocin a tu "trabajo" in-tentando (conscientemente o no) te-

ner problemas con las autoridades,intentando ser arrestado: no porquevaya a servir de algo a tu causa, sinopara hacer las cosas ms excitantes,para reconquistar un poco el romancede las pocas de revueltas pasadas.Has sentido alguna vez que estabasparticipando en un ritual, en una largay establecida tradicin de protestasque realmente slo sirven para fortale-cer la posicin establecida? Has anhe-lado alguna vez, en secreto, escapardel estancamiento y aburrimiento detus "responsabilidades" polticas?

No es de extraar que nadie sehaya unido a tus esfuerzos polticos.Quiz te digas a ti mismo que es du-ro, que no es reconocido, pero quealguien debe hacerlo. Entonces, larespuesta es NO.

Vos, en realidad, nos perjudicasgravemente a todos con tu pesada ytediosa poltica. Aunque, de hecho, nohay nada ms importante que la polti-ca. NO hablo de la poltica de la ley yla democracia representativa, en laque es elegido un legislador para fir-mar los mismos decretos y perpetuarel mismo sistema. Ni la poltica del"Comenc a militar en la izquierdaradical porque me encanta discutiracerca de detalles triviales y escribirretricamente acerca de una inalcan-zable utopa" anarquista. Ni tampocola poltica de cualquier lder o ideolo-ga que exige que te sacrifiques por"la causa". Sino la poltica de nuestravida cotidiana.

Cuando separas la poltica de lasexperiencias inmediatas y cotidianasde hombres y mujeres, sta pasa a ser

completamente irrelevante. Se con-vierte en el dominio privado de ricos ycmodos intelectuales, que puedendarse el lujo de complicarse sus vidascon tan montonas y tericas cuestio-nes. Cuando te involucras en polticapor un sentimiento de obligacin yhaces de la accin poltica una pesada

responsabilidad, en lugar de un exci-tante juego, que valga la pena por smismo, ahuyentas a gente cuyas vidasya son lo suficientemente pesadascomo para aadir ms tedio. Cuandoconviertes a la poltica en una cosa sinvida, triste, una responsabilidad es-pantosa, se convierte simplemente enotra carga para la gente y no un me-dio para quitarles un peso de encima.Por consiguiente, le arruinas la ideade poltica a la gente para la cual de-bera ser lo ms importante; puestoque todo el mundo tiene inters en

tomar el control de sus vidas, en pre-guntarse a s mismos qu es lo que nodesean para ellas y cmo conseguirlo.Muestras la poltica como algo patti-co, un juego de clase media/bohemiosin sentido, que se refiere solo a smismo; un juego sin relevancia paralas vidas reales que viven da tras da.

Qu debera ser lo poltico? Quedisfrutemos lo que hagamos para con-seguir techo y comida, si sentimosque nuestras interacciones cotidianascon nuestros amigos, vecinos y com-paeros son gratificantes; que tenga-

mos la oportunidad de vivir cada dacomo deseamos hacerlo. Y la "poltica"no debera consistir meramente endiscutir estas cuestiones, sino en ac-tuar directamente para mejorar nues-tras vidas en el presente inmediato.Actuar de un modo que es de por sentretenido, excitante, placentero: espoltico; ya que cuando la accin pol-tica es tediosa, agotadora y opresiva,slo puede perpetuar tedio, fatiga yopresin en nuestras vidas. No debe-ra desperdiciarse ms tiempo deba-tiendo sobre cuestiones irrelevantescuando debemos ir otra vez a trabajaral da siguiente. No ms protestas-rituales predecibles que las autorida-des saben demasiado bien como ma-nejar; ni tampoco ms protestas-rituales aburridas que no le parecerna posibles voluntarios como la manerams emocionante de pasar un sbadopor la tarde; claramente, stas no nosllevarn a ninguna parte. Basta de"sacrificios por la causa". Porque paranosotros, la felicidad -en nuestras pro-pias vidas y las de nuestros compae-ros- debe ser nuestra verdadera causa!

Despus que hagamos de la polti-ca algo relevante y excitante, el restole seguir slo. Pero de una monto-na, meramente terica y/o ritualizadapoltica, nada valioso puede surgir.Esto no quiere decir que no debamosmostrar inters por el bienestar de los



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seres humanos, de los animales, o delos ecosistemas que no estn directa-mente en contacto con nosotros ennuestra existencia diaria. Pero la basede nuestra poltica debe ser concreta:sta debe ser inmediata, debe ser ob-via para todo el mundo -para que seamerecedora de esfuerzo-, debe ser

divertida por s misma. Cmo vamosa poder hacer cosas positivas porotros, si nosotros mismos no disfruta-mos nuestras propias vidas?Para ser ms claros: si te pasas unatarde recogiendo comida de tiendasque de lo contrario hubiese ido a pa-rar a un basural y la sirves a gente conhambre y a gente que est cansada detener que pagar por comida: sa esuna buena accin poltica, pero slo sila disfrutas. Mientras lo haces con tusamigos, si conoces a nuevos amigos,si te enamoras o intercambias histo-

rias divertidas; o simplemente si tesientes orgulloso de haber ayudado auna mujer a aliviar sus necesidadeseconmicas: sa es una buena accinpoltica. Pero si te pasas la tarde re-dactando una furiosa carta a un oscu-ro peridico izquierdista, objetando eluso que un columnista le dio al tr-mino "anarco-sindicalista", eso no va alograr un carajo -y lo sabes-.

Tal vez sea hora de una nueva pa-labra para "poltica", ya que ustedeshan convertido la antigua en una malapalabra. Por lo que cuando hablamos

de actuar juntos para mejorar nues-tras vidas, nadie debera posponerlo.Y es entonces que les presentamosnuestras exigencias, las cuales no sonnegociables y deben ser cumplidascuanto antes; porque no vamos a vivirpara siempre, O s?

1. Hagamos de la poltica algo nue-vamente relevante en la experienciade nuestra vida diaria. Mientras mslejos se encuentre el fin de nuestrapreocupacin poltica, menos signifi-car para nosotros, menos real y apre-miante nos parecer, y ms aburridaser.

2. Toda actividad poltica debe serplacentera y excitante de por s.

3. Para lograr cumplir estos dosprimeros pasos, deben ser creadosmtodos y procedimientos completa-mente nuevos. Los viejos son anticua-dos, estn pasados de moda. Tal vezNUNCA fueron buenos del todo, y espor eso que el mundo est como est.

4. Disfruten de ustedes mismos!No existe excusa alguna para estaraburridos... o aburrir!

nete a nosotros en hacer de la"revolucin" un juego; un juego en elque todos lo arriesguemos todo, perono obstante, un juego deleitante y sinpreocupaciones!

Guerr il l a LatinaCrimethinc

LIGASOBRERAS EINSURRECCIN

ANARQUISTAEN BRASIL(1917- 18)

ORGANIZACIONES DE BASECONTRA LA POBREZA

A principios del siglo XX los anar-quistas llegaron a tener una influencia

relevante en el movimiento obreroBrasileo. En 1905, tenan en circula-cin unos 15 peridicos, editados enSo Paulo, Porto Alegre, Santos y Rode Janeiro ().

Anarquistas sobresalientes, comoFabio Luz, Jos Oiticica (foto) y As-trogildo Pereira no slo contribuyerona la creacin de la ConfederacinObrera Brasilera sino a la generacinde organismos autnomos de base enlas barriadas pobres hoy favelas-, lasLigas Obreras, que expresaron la in-tervencin de las colectividades en los

problemas de vivienda, sanidad, ca-resta, etc. Las Ligas Obreras de Belen-ginho, Moca, Cambuci y Lapa se cons-tituyeron en organismos de accin.(1)

Segn Vania Bambirra y TheotonioDos Santos, los anarquistas fueronimpactados favorablemente por laRevolucin rusa de 1917.

HUELGA DE 191 7

En 1917 tanto el movimiento obre-ro organizado como los anarquistassuman a la sostenida campaa antib-

lica su apoyo a la revolucin rusa.Reivindicaban en relacin a este even-to la accin del pueblo y la aspiracina una sociedad sin clases.

En este ao las huelgas se multipli-caron. Los obreros respondan ante la

desocupacin, los bajos salarios y lagran caresta. En San Pablo hubo unahuelga general, que arroj despidos,encarcelamientos, expulsin de ex-tranjeros y asesinatos.

En varios lugares de San Pablo ydel interior del estado hubo enfrenta-mientos entre las tropas del ejrcito,

tradas para reprimirlos. Los anarquis-tas de la Federacin Obrera de Ro de Janeiro declararon enseguida la huel-ga general solidaria.

Poco despus, la situacin de mise-ria entre los trabajadores habilit unatentativa revolucionaria. Ella surga deRo de Janeiro y tena como firmessostenedores ideolgicos a ManuelCampos y Joao Perdigao que contabancon el apoyo vigoroso de los anarquis-tas de Santos. Se declaran en huelgalos obreros textiles de Ro de Janeiro,Niteroi y Petrpolis, y esta era la seal

para iniciar el movimiento, que debaconsistir en la ocupacin de todas lasfbricas y talleres. Un militar infiltradodenunci el plan y el ejrcito comenzde inmediato la represin. Los localesobreros y anarquistas fueron clausura-dos, centenares de trabajadores dete-nidos. Cayeron varios dirigentes pre-sos. Hubo obreros heridos y muertos.Varios sindicatos fueron puestos fuerade la ley. Se cerraron peridicos anar-quistas. (2)

Teniendo como impulsora a la co-rriente libertaria: idealismo, conviccio-

nes, sacrificios y sangre regaron elBrasil de estas primeras dcadas.

Columna LibertariaJoaqu n Penin a

Primer texto de Luis Vitale,"Contribucin a una historia el

Anarquismo en Amrica Latina"; Ed.Instituto de Investigacin de Movimien-

tos Sociales Pedro Vuskovic,Santiago 1998. El segundo de la

Revista Lucha Libert ariade FAU,Marzo de 1999.

REFERENCIAS:(1) Alfredo Gomez: Anarquismo y anar-

co-sindicalismo en Amrica Latina,Ed.Ruedo Ibrico, Madrid, 1980, p.184.

(2) En el movimiento de 1917 se puso aprueba la concepcin anarquista de que elEstado burgus poda ser derrocado pormedio de una huelga general. La derrotade esta huelga, la ms importante del Bra-sil en las primeras dcadas del siglo XX,signific el comienzo de la crisis del anar-quismo en Brasil. El surgimiento del popu-lismo tenentista y, posteriormente, delvarguismo del Partido Comunista, fundado

en 1922, aceleraron la decadencia anar-quista, uno de cuyos sectores se pas a lasfilas del flamante PC. (Luis Vitale,"Contribucin a una historia del Anarquis-mo en Amrica Latina"; Ed. Instituto deInvestigacin de Movimientos Socia-lesPedro Vuskovic, Santiago 1998.)



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EL IDA YVUELTA DE LASOLIDARIDADQueridsimos compaeros de la

Anticarcelaria:

La Anticarcelaria representa paranosotros, EL NO ESTAR TAN SOLOS,en ver que son muchos ms los quegritan que las crceles argentinas sonverdaderos campos de concentracin,y que en ellas se esta llevando adelan-te un genocidio de personas.

No hay nada mas acertado que unapostura abolicionista, no puede seguirexistiendo una institucin, con ms dedoscientos aos de existencia, que alo largo de toda su historia solo haestado para amedrentar y reprimir alpueblo, y lo peor aun, dentro de ellase esta llevando adelante un extermi-nio masivo y sistemticamente de po-bres y excluidos.

Nosotros sabemos muy bien queno fcil militar desde el lugar que lestoca, desde el ltimo eslabn de unacadena social, donde muchos de esoseslabones que estn a la delanteraclaman por ms crcel, otros se hacenlos distrados y no se enganchan enuna movida piantavotos, otros inten-tan sostener lo insostenible, y porltimo esta los otros, los que sola-mente luchan por los presos polticos,lo que vemos muy bien, pero acaso:Nosotros no somos el resultado delmismos sistema que intentan comba-tir?. O acaso, un, pibe o una piba, queviene de generaciones de desocupa-dos, con cero educaciones, con mlti-ples carencias, y que no consiguilaburo, que se canso de mendigar pa-ra poder llevar alimentos a su taperapara alimentar a su familia y no lologro, y por eso meti la pata, que es?Solo preguntamos, que hara la perso-na mas honesta de toda la sociedad sile pasa esto?

Creemos tambin que si aquellosque solo ven en nosotros a simplesdelincuente comunes dieran una mira-dita al interior del la crceles veran,que hay integrantes del pueblo que nose entregan, pibes y pibas con sangreen la venas que tambin son militan-tes sociales y muchos de ellos handejado sus vidas luchando por su pue-blo, sobran los ejemplos y esto no hayquien lo pueda negar.

Disculpen si por hay nos sacamosalgunas espinitas en este prrafo, pe-ro lo tenamos que decir.

Como empezamos cerramos la no-ta: Gracias compas de la Anticarcela-ria, no solo por luchar con nuestropeor enemigo "EL ESTADO", sino tam-bin por no negarnos, por estar nosolo junto a cuatro locos soadores,sino junto a los setenta mil que pue-

blan las crceles, y seguir desde lasbases poniendo lo mejor de cada uno,para que esta pesadilla algn da setermine, quizs no lleguemos a vernuestros sueos realizados, pero es-tas semillas sin lugar a dudas en al-gn momento florecern.

Un infinito abrazo libertario.

Comp as de Ciud ad Interna

MIENTRASEXISTA MISERIA

HABRAREBELIN

Otra vez el estado; el gobierno y laburguesa, volvieron a asesinar, estavez a dos pobres en villa soldati, enbuenos aires, utilizando a la policafederal de cristina Kirchner y a la me-tropolitana de Mauricio Macri parareprimir y desalojar a quienes ocupa-ron un pedazo de tierra para vivir ydesarrollarse como personas.

Estas matanzas como la de las 83muertos en la crcel de san miguel enchile, la de Formosa hace poco tiempoatrs y la de Bariloche en juniode-

muestran que los intereses econ-micos

muestran que los intereses econmi-cos de los que manejan el poder valenmas que la vida de quienes luchan daa da por sobrevivir en este sistemainjusto, donde unos pocos son dueosde todo.

Los medios de comunicacin ha-blan de enfrentamiento entre pobres,

mientras que vimos a las mas necesi-tadas enfrentar cuerpo a cuerpo a lasfuerzas represivas del estado y a susarmas. Tambin escuchamos en estosmedios a los reaccionarios que salen apegarle a los mas dbiles demostran-do el racismo y el nacionalismo queesta sociedad nos ensea desde pe-queos.

Este ao ya suman 222 las perso-nas muertas en manos de la polica dela democracia. Al terror del estadosolo le podemos hacer frente connuestras propias manos, organizados

con el otro sin dirigentes que se quie-ran investir de autoridad para mante-nernos sumisos y tambin debemoscombatir el negocio de la tierra queprovoca que millones de personasvivan en la calle mientras que algunosdisfrutan de la opulencia y la explota-cin. Sin tierra no hay vida.

Anarquistas

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parrhesia nº 12

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