palabras para tejernos, resistir y transformar zibechi

Upload: apedevi

Post on 17-Feb-2018

237 views

Category:

Documents


2 download

TRANSCRIPT

  • 7/23/2019 Palabras Para Tejernos, Resistir y Transformar Zibechi

    1/231

  • 7/23/2019 Palabras Para Tejernos, Resistir y Transformar Zibechi

    2/231

    Raquel Gutirrez Oscar Olivera

    Ral Zibechi Hctor Mondragn

    Natalia Sierra Vilma Almendra

    Pablo Dvalos Emmanuel Rozental

    Pablo Mamani

  • 7/23/2019 Palabras Para Tejernos, Resistir y Transformar Zibechi

    3/231

    Esta licencia permite copiar, distribuir, exhibir e interpretar este texto, siempre y

    cuando se cumplan las siguientes condiciones:

    Autora-atribucin: se deber respetar la autora del texto y de su traduccin.

    Siempre habr de constar el nombre del autor/a y del traductor/a.

    No comercial: no se puede utilizar este trabajo con fines comerciales.

    No derivados: no se puede alterar, transformar, modificar o reconstruir este texto.

    Los trminos de esta licencia debern constar de una manera clara para cualquieruso o distribucin del texto. Estas condiciones slo se podrn alterar con el

    permiso expreso del autor/a.

    Este libro tiene una licencia Creative Commons Attribution-NoDerivs-Non-

    Commercial. Para consultar las condiciones de esta licencia se puede visitar:

    http://creative commons.org/licenses/by-nd-nc/1.0/ o enviar una carta a Creative

    Commons, 559 Nathan Abbot Way, Stanford, California 94305, EE. UU.

    Creative CommonsLICENCIA CREATIVE COMMONS

    Autora - no derivados - no comercial 1.0

    2011 de la presente edicin

    [email protected]

    Palabras para tejernos, resistir y transformaren la poca que estamos viviendo

    Raquel Gutierrez, editora.

    Diseo de Portada: Martn Villarroel

    Maquetacin: Pez en el rbol editorial

    textos RebeldesCochabamba diciembre de 2011

  • 7/23/2019 Palabras Para Tejernos, Resistir y Transformar Zibechi

    4/231

    ndice

    Buscando palabras...Presentacin 5

    Sigue andando la palabraPrlogo 9

    Primera parteReflexiones, crtica y perspectivas

    Palabras contra el olvido, el desprecio y la soberbiade los patrones, partidos y caudillos.Oscar Olivera Foronda 13

    Pistas reflexivas para orientarnosen una turbulenta poca de peligro.Raquel Gutirrez Aguilar 31

    Cuando el presente deja de seruna extensin del pasadoRal Zibechi 57

    Mudando hacia lo otro del Mundo.La esperanza hace del fin un finNatalia Sierra 77

    La crisis del afn de lucroHctor Mondragn 97

    Hacia un nuevo modelo de dominacin poltica:violencia y poder en el posneoliberalismoPablo Dvalos 117

  • 7/23/2019 Palabras Para Tejernos, Resistir y Transformar Zibechi

    5/231

    Segunda ParteTrayectorias, dificultades y posibilidades

    La paz de laMama Kiween libertad,de la mujer sin amarras ni silencioVilma Almendra Quiguans 145

    Por qu pensar fuera de los marcos de izquierda y derecha?Reflexin crtica desde Qullasuyu/Bolivia

    Pablo Mamani 171La Crisis de ellos es en sentido inverso a la nuestraEmmanuel Rozental 203

    Sobre los autores 227

  • 7/23/2019 Palabras Para Tejernos, Resistir y Transformar Zibechi

    6/231

    5

    Buscando palabras...

    Habitamos uno de los perodos ms difciles, complejos yoscuros para toda esta parte de la humanidad que vivimosde nuestro trabajo. Hablamos de desigualdad, injusticia

    y violencia; las cuales, por cierto, no son nuevas en nuestromundo, aunque ahora se presenten como desconcertantes porsu magnitud y su crueldad. Hablamos tambin de opacidad,de un mundo donde las relaciones de opresin, dominacin

    y explotacin, por muchos motivos, se han vuelto invisiblesy difusas; entre otros, porque apelan a nuevas y sofisticadastecnologas, tanto materiales como simblicas, sobre las cualeshemos reflexionado y queremos dialogar. Tambin, porque esasnuevas dominaciones, en estos tiempos confusos y turbulentos,son defendidas por aquellos que dicen combatirlas mientraslas apuntalan.

    Por tal razn un grupo de compaeros y compaeras, deherman@s en la lucha y la confianza nos hemos juntadopara conversar. Nos juntamos para eso: para echar luz sobrela oscuridad, para aclararnos de qu se trata este mundoque estamos sufriendo a diario. Creemos que enfocar estosproblemas no es la solucin, pero s constituye un primer pasopara empezar a recorrer un camino. Cuando se habla de Mxico,descubrimos, Colombia, Guatemala, Honduras, HaitCuando decimos Ecuador es Bolivia, Venezuela, Argentina,Brasil, Uruguay No decimos pueblos, sino indignados,

    Tahrir, mujeres, Siria, masacres, marcha, creatividad, migrantesy sed de comprender, de saber para qu y por qu la guerra

    monetaria, el terror, la escasez y los precios inalcanzables debienes sagrados y bienes comunes. Nos convoca una militanciaque rechaza doctrinas y frmulas. Sentimos una repugnanciacompartida hacia autoridades, vengan de donde vengan; yhacia sus frmulas llenas de soberbia y desdn.

  • 7/23/2019 Palabras Para Tejernos, Resistir y Transformar Zibechi

    7/231

    6

    ,

    Creemos que es necesario hacerlo de este modo, en colectivo,por dos razones bsicas. La primera es que la complejidad es

    tanta y el enredo tan enredado, que son necesarias muchasmanos y muchos ojos para desentraar los nudos que nosagobian y agotan. No es tarea para individuos sino paracolectivos que puedan hacerlo en minga: poniendo las ideas

    juntas, sin pretender que suenen como una sinfona, sinocomo un conjunto de voces que poco a poco encuentran unameloda, un ritmo comn.

    Adems, creemos en la tica de lo colectivo. No estamosen esto para ganar debates o colgarnos medallas sino paraesforzarnos por aportar a otros colectivos y, de modo muyparticular, a toda la humanidad sencilla y sensible, humilde yhermana, que siente que las cosas no pueden seguir siendo as.Nos gusta poder decir que no sabemos. Que no entendemos yque no tenemos respuestas completas para los problemas. Esonos tranquiliza. Nos da confianza y nos deja en paz, porqueac nadie viene a competir. Son desahogos para que el tejidode ideas, de ganas y alegras, de dolor y reflexiones, se vayahaciendo entre todas y todos. As, poco a poco, nos vamosdescubriendo en un lugar comn. Del lado de los pueblos, enmedio de esta guerra abierta en su contra desde el poder. Encontra nuestra. Nos asombra lo que cada cual trae y comenta.Nos gusta estar en desacuerdo sabiendo que nos paramosdesde el mismo lugar. Tenemos en comn que nos gusta estaren compaa y que admiramos desde el afecto profundo de laamistad, a cada una y cada uno de las y los dems.

    Importa lo que decimos, pero tambin cmo construimos laspalabras, los caminos que recorremos, los pasos que vamosdando: los textos han sido redactados por personas querecogieron las opiniones de los dems, no en algn coloquioformal sino en un largo proceso de intercambios que han

  • 7/23/2019 Palabras Para Tejernos, Resistir y Transformar Zibechi

    8/231

    7

    hecho que muchas de las ideas que aparecen en estos textosno sean, en rigor, ideas de una u otra persona sino un tejido

    hilvanado a muchas manos.

    Nosotros nos asumimos, tambin, como paridos y tejidos porla Madre Tierra y nos esforzamos por aprender a vivir bajosu mandato. Por eso, sentimos asco del patriarcado machistainseparable de la modernidad agotada y de la codicia del capitalque nos sigue robando procesos, discursos, muertas y muertos,

    aos de lucha, compaeras y compaeros. Creemos en unMundo-Mujer-Pacha, que no ha llegado a develarse todava,pero que existe, nos nutre y nos conforta; que ha perdido ysangrado mucho aunque es imprescindible, y que ahora puedequedar aplastado por mafias autoritarias, fascismos renacidos ymentiras de todos los colores.Estamos luchando y resistiendo. Por tal razn escribimosPalabras para tejernos, resistir, y transformar. Para entender estapoca que nos ha tocado y para compartir un poquito de lo yaconversado, como un aporte desde adentro y desde abajo.

    Amrica Latina, septiembre de 2011

  • 7/23/2019 Palabras Para Tejernos, Resistir y Transformar Zibechi

    9/231

    8

  • 7/23/2019 Palabras Para Tejernos, Resistir y Transformar Zibechi

    10/231

    9

    Sigue andando la palabra

    Sigue andando la palabra y la esperanza. Como en el 2000,como en el 2003, como en diciembre del 2010, ahora en el2011 decidimos, junto a un puado de hermanas y hermanos,incorporarnos en la Marcha en Defensa del TIPNIS y la Vida. Yseguimos marchando, hacia delante. Encontrndonos siemprecon la mentira, la soberbia, la impostura, el autoritarismo y eldiscurso descalificador de los de arriba, estos que gobiernan

    para sus amos: el dinero y el desprecio a nuestros pueblos.

    Y como en esos aos los derrotamos. Derrotamos eso quese les impregna cuando son poder estatal y lo hicimos conlas mismas armas de siempre: nuestra indignacin, nuestroscuerpos, nuestra dignidad, nuestra palabra, nuestras voces,nuestra generosidad, nuestra capacidad de decir BASTA! yAS NO!

    Cuando con Raquel, Ral, Manuel, Hctor y Pablo pensamosen escribir estos textos, no me anim mucho por lo duro que escontar lo que va pasando en estas tierras, en tu vida cotidiana.

    Te indigna, te rabia y tambin te fortalece y nos hace quererser ms coherentes y usar todas las herramientas que tenemospara decir y para caminar juntas y juntos, por lo que queremos

    y creemos.

    Estas palabras escritas no pretenden dar lnea, ni menosgenerar polmica con los de arriba. Lo que queremos es que,en las mismas, la gente se vea aunque sea un tantito reflejada.

    Como en un espejo de agua. Porque como lo dicen los hermanosy hermanas que forman parte de este colectivo escribidor:estas letras son producto de la escucha, con el corazn y losodos. En las calles, los caminos, en las plazas, en los campos,en las comunidades, en los mercados, en las asambleas de los

  • 7/23/2019 Palabras Para Tejernos, Resistir y Transformar Zibechi

    11/231

    10

    ,

    barrios, de los comits de agua y de los regantes. O cuandoescuchamos tambin las quejas de nuestros hermanos ros, las

    hermanas montaas, el viento y ante todo, cuando se enoja yllora nuestra Madre la Tierra.

    Agradecemos a todos y todas ellas. A la gente, que quizs sinsaberlo y de manera recproca, nos informa, nos comunica,nos transmite, nos ensea, en esos mismos escenarios, suspadecimientos, sus angustias, sus dificultades, sus broncas.

    Pero tambin nos transmiten sus sueos, sus esperanzas, susatrevimientos, su irrespetuosidad al Poder. Y ante todo susganas y decisin de no claudicar jams, de seguir batallandopor algo distinto, que est ah, en el imaginario de todos ytodas.

    Que siga andando la palabra, que siga andando la indignacin,que siga andando la esperanza, la alegra, la lucha. Desde Tahirhasta el TIPNIS, desde Wall Street hasta Cajamarca, desde laPatagonia hasta Tesalnica, desde Medelln hasta Damasco,desde Barcelona hasta Ciudad Jurez. Es decir: hasta siempre.

    Oscar Olivera, diciembre de 2011

  • 7/23/2019 Palabras Para Tejernos, Resistir y Transformar Zibechi

    12/231

    11

    Primera parteReflexiones, crtica y

    perspectivas

  • 7/23/2019 Palabras Para Tejernos, Resistir y Transformar Zibechi

    13/231

    12

  • 7/23/2019 Palabras Para Tejernos, Resistir y Transformar Zibechi

    14/231

    13

    Palabras contra el olvido, el desprecio y la soberbiade los patrones, partidos y caudillos

    Oscar Olivera Foronda

    Recuerdo que en 1964, a fines de octubre, me invadi la tris-teza, el miedo, la impotencia y la bronca. Una bala perdida enun golpe militar disparada por un soldado haba matado ami mejor amigo de infancia, a mi hermano, a mi compaero,

    a Carlos; l estaba entrando a su casa, pisaba la grada de lapuerta de calle y cay muerto, tena 9 aos.No poda entender por qu tuvo que morir siendo tan nio.El ao 2000, en abril, en esa misma calle, casi en la mismapuerta, luego de ms de 25 aos, mora otro joven, en la deno-minada Guerra del Agua, los mismos sentimientos, las mis-mas preguntas me invadieron.En abril del 2001, en la marcha a La Paz, fuimos interveni-dos por tanques y helicpteros del ejrcito; ms de dos milcompaeros y compaeras dispersados en las montaas del al-tiplano aymara, perdidos, hambrientos, sedientos y cansados,nos echamos en la noche y vimos el cielo estrellado. En el picode un cerro dijimos entre varios: Por qu estamos aqu? Qu

    hemos hecho para estar as, perseguidos, condenados, busca-dos? y lloramosEn octubre del 2003 lloramos de alegra cuando vimos partir,en veloz, precipitada y cobarde fuga, el avin en el que se en-contraba Gonzalo Snchez de Lozada, el cnico vende-Patria.En junio-julio del 2005 veamos desmoronarse el poder popu-lar, construido con mucha laboriosidad a partir de las jornadas

    del 2000, cuando el Congreso dispuso adelantar las eleccionesgenerales para ese fin de ao, ante la desaparicin de los par-tidos polticos para llevarnos al juego de la democracia repre-sentativa, privilegiada, demaggica, luego de haber disfrutado

    y ejercitado una democracia participativa, asamblestica, en las

  • 7/23/2019 Palabras Para Tejernos, Resistir y Transformar Zibechi

    15/231

    14

    ,

    calles, los caminos, las comunidades y las Plazas, durante va-rios aos, en nuestro querido territorio, el kollasuyu, hoy lla-

    mado Bolivia.En enero del 2006, me volvieron estos y muchos otros recuer-dos, de temores, tristezas, frustraciones y enojos. Es que se me

    vino el temor de que los compaeros que habamos empujadoa que transformen nuestras vidas desde esa estructura estatalheredada, para desmontarla y transferir, a travs del fortaleci-miento organizacional e ideolgico, entre las comunidades de

    la ciudad y el campo el PODER no iba a ser tal, y dije p-blicamente en aquel entonces no estoy alegre porque hayaganado las elecciones Evo Morales, estoy preocupado porquelos defectos de las personas que han asumido la responsabili-dad de empujar desde arriba un real proceso de cambio, no seconviertan ms bien en polticas de Estado y ms bien estasdebilidades se conviertan en un catalizador para que ellos setransformen y se adecuen a las estructuras estatales racistas,coloniales, corruptas, sordas, ciegas y de absoluta subordi-nacin a los intereses de los nuevos amos del mundo, de losnuevos reyes y reinas, los grandes consorcios de transnaciona-les, que desde los 70s, han establecido polticas de saqueo, dedespojo, de genocidio, de etnocidio y etnicidio, en contra de

    nuestros pueblos y nuestra Madre: la PachaMama.I. Lo que la gente haba demandado desde las jornadas del 2000

    La Guerra del Agua, la Guerra del Gas. La gente del campoy la ciudad, que de manera colectiva va construyendo laborio-samente desde abajo, eso que llamamos tejido social, que se va

    reconfigurando como cuando uno arroja una pequea piedraa la superficie de un espejo de agua --las ondas que este en-cuentro entre la piedrita y el agua producen, no es vertical, noes catico, no es conflictivo, es ms bien horizontal, tranquilo,

  • 7/23/2019 Palabras Para Tejernos, Resistir y Transformar Zibechi

    16/231

    15

    armonioso y en ONDAS, que cada vez son ms grandes yvigorosas, as v yo estos procesos de resistencia, deliberacin,

    decisin y lucha de nuestros pueblos, de la gente sencilla y tra-bajadora del campo y la ciudad, de los ancianos y ancianas, delos hombres y mujeres, de los jvenes y jvenes (como dice elSup), de los nios y nias de nuestras tierras, donde lo que unees la indignacin, el sentirse ninguneado, ignorado, desprecia-do, es decir inexistentes para las lites econmicas y polticas,en todas partes del mundo.

    Por eso la gente empez a hacer andar la palabra, como dicenlos hermanos y hermanas zapatistas del EZLN, para que stasolo se detenga para escuchar a la tierra, a las piedras, a los ros

    y mares, a los rboles, a la selva, a las montaas, a las nubes ylos pjaros, a la gente y siga caminando, porque lo que mstemen los poderosos y poderosas son las palabras, que vienende la multitud, de la tierra, del infierno en que se han conver-tido sus vidas.Demandbamos una nueva vida, sin poltica partidaria de ol-

    vido y de desprecio y sin esa economa de muerte, de despojo,de saqueo, de exterminio y de corrupcin. Por eso expulsamosa la transnacional estadounidense Bechtel, por eso expulsa-mos a Gonzalo Snchez de Lozada, por eso pusimos en la

    estructura estatal a Morales y Garca Linera, para cambiar,para transformar nuestras vidas y vivir en armona con la na-turaleza, con nuestra madre la tierra, porque somos hijos ehijas de ella. Por eso pusimos nuestros cuerpos a las balas, alos gases, en las barricadas, por eso pusimos nuestras broncas

    y nuestros gritos al viento, para decir que existimos y que nobamos a permitir que el olvido se imponga a nuestra memoria

    histrica, a la dignidad.Haba, pese a esos temores y preocupaciones, esperanza, ale-gra, entusiasmo, energa lo haba, los haba, las haba.

  • 7/23/2019 Palabras Para Tejernos, Resistir y Transformar Zibechi

    17/231

    16

    ,

    II. La re-partidizacin de la Poltica y el temor de los gobernantesal Poder Popular

    Esta demanda se hizo ms fuere en las luchas por la AsambleaConstituyente, proclamadas por los y las indgenas de las tie-rras bajas, quienes protagonizaron la VIII Marcha en defensa

    y preservacin del TIPNIS (Territorio Indgena del ParqueNacional Isiboro Scure) en agosto-octubre de este ao 2011

    y amplificadas como un eco poderoso luego de las jornadasvictoriosas de abril, en septiembre del 2000 durante los levan-tamientos indgenas de quechuas y aymaras.En trminos bien simples era, no ms partidos, horizontaliza-cin del poder, democracia comunitaria y participativa, deci-sin de las organizaciones sociales en una nueva estructura so-cial y econmica, es decir era construir, entre todos y todas unanueva forma de convivencia social, basada en los principiosancestrales de nuestros padres y abuelos, de nuestras madres

    y abuelas: la reciprocidad, la complementariedad, el respeto,la solidaridad, la generosidad y por supuesto como parte de lanaturaleza, la convivencia armnica con la que nos dio, nos da

    y nos dar la vida, la PachaMama.Recuerdo que a fines de mayo del 2005, las organizaciones

    sociales, todava vigorosas, autnomas, solidarias y horizon-tales --porque nos veamos como iguales--elaboramos unapropuesta de ley para que sea sancionada y promulgada porel gobierno derechista de entonces. Estbamos con fuerzapero Morales y los Masistas nos dijeron: hermanos, vamos aelaborar, aprobar y promulgar una mejor ley, porque vamos atener una mayora parlamentaria, y les cremos.

    Pero luego de ser gobierno el MAS y Morales, la cosa no fueas.. la derecha se envalenton, Garca Linera, el llulla (men-tiroso en quechua), empez a sacar las uas y la lengua paradestruir todo aquello que nosotros, sin l, habamos construi-

  • 7/23/2019 Palabras Para Tejernos, Resistir y Transformar Zibechi

    18/231

    17

    do: un tejido social vigoroso, fuerte, unido, digno, autnomo,anti-partido. Fue l quien una vez nos ayud a formular estas

    ideas en la Tesis Fabril del Congreso de obreros y obreras enOruro el ao 2000. Ah planteamos con las siguientes palabraslo que hoy va dando vueltas al mundo: Ni nacionalizacin, NiEstatizacin, Ni Privatizacin. AutogestinLa famosa Ley de Convocatoria a la Asamblea Constituyentefue acordada entre cuatro paredes, entre cuatro individuos(los

    jefes de los partidos polticos de ese entonces), a espaldas de lagente y fue un desastre. En ella se devolva la representacinciudadana, la intermediacin poltica a los partidos y la posi-bilidad de constituir las denominadas agrupaciones ciudada-nas, sustitutas a los partidos, tena mucho ms requisitos quepara constituir una tradicional organizacin partidaria.Entonces, result que la eleccin de los Asamblestas fue adedo, determinado por los jefes de los Partidos, se infiltraronmuchos derechistas en las listas del oficialismo, varios temasimportantes como p.e., el tema laboral fueron ignorados y alfinal, quines decidieron el contenido de la nueva Constitucinfueron los mismos actores que aprobaron la ley de convocatoria.Lo extrao, ilegtimo e ilegal (desde la perspectiva de las leyesneoliberales), es que NO ES la Asamblea Constituyente elegi-

    da para este fin la que aprueba el texto final, si bien se apruebaun texto, ste es cambiado por los jefes y es promulgada porel Congreso Nacional, constituyndose en un CONGRESOCONSTITUYENTE, que certifica y legaliza, lo que los

    jefes y Garca Linera ya haban decidido. A pesar de ello, alre-dedor de esta Asamblea se estableci un gran entusiasmo en

    varios sectores sociales para aportar de manera participativa,

    en la elaboracin de la CPE.Desde mi perspectiva, si bien la Nueva Constitucin Polti-ca del Estado, tiene un sin fin de limitaciones y contradic-ciones, que se estn haciendo visibles recin ahora durante

  • 7/23/2019 Palabras Para Tejernos, Resistir y Transformar Zibechi

    19/231

    18

    ,

    su aplicacin, constitucionaliza muchos convenios y acuerdosinternacionales --en el papel-- que hoy son desconocidos y pi-

    soteados por el gobierno, como el Convenio 169 de la OIT, re-ferente a la consulta previa a los pueblos indgenas. Convenioscomo ste abren, a travs de algunos artculos, la posibilidadde construir espacios institucionales nuevos, como el controlsocial o los emprendimientos autogestionarios o a travs deestos derechos a los pueblos indgenas, se puede recuperarla autonoma y el auto gobierno como en el caso de los y lasindgenas del TIPNIS.La ideologas y prcticas neo liberales han hecho carne en al-gunas comunidades y barrios populares, donde trminos comousufructo, prioridad o aprovechamiento de los recursos natu-rales han establecido duras y peligrosas confrontaciones entrecomunidades-ciudad, comunidades-comunidades por el dis-frute y explotacin de los recursos o bienes comunes como elagua, los minerales, los hidrocarburos y la bio diversidad entreotros, mercantilizando las relaciones entre las comunidades yla Madre Tierra..Esto ltimo tiene que ver con la grave contradiccin entre eldiscurso y la accin del gobierno y en particular de Morales;de defensores de los derechos de la madre tierra en todo el

    mundo, por un lado y por el otro, la entrega y mercantilizacinde la PachaMama a las transnacionales o correligionarios.En sntesis, la Nueva Constitucin no tuvo una efectiva par-ticipacin de la gente, no se tom en cuenta lo que pudo ha-ber colocado como contenido; no aprobaron el texto final losAsamblestas, sino que la definieron los jefes de los Partidos ypor esa especie de collage que hicieron para contentar a to-

    dos los sectores sociales y partidarios, la misma es una bombade tiempo, debajo de la silla de Morales, como ya se est vien-do en los conflictos que tienen que ver con la construccin demega-proyectos, de energa, camineros, mineros o petroleros

  • 7/23/2019 Palabras Para Tejernos, Resistir y Transformar Zibechi

    20/231

    19

    y las comunidades y poblaciones en las regiones.Como deca un poblador de la zona Sud de Cochabamba, que

    ya vivi 40 aos como inquilino, que no tiene casa, agua ni unaposta sanitaria: la Constitucin es un librito chiquito, muybonito que nos han entregado, pero creo que no sirve paranada, porque nada se cumple.

    III.- La Economa como la continuacin de las formas de domi-nacin del capital extranjero y la subordinacin de nuestro desa-rrollo a los intereses de las transnacionales y el gobierno del Brasil

    Otra vez tenemos que referirnos a la Guerra del Agua, la Gue-rra del Gas, cuando la gente demandaba una economa de ar-mona con la naturaleza, no de mercantilizacin, de saqueo,de despojo, de expulsin de las comunidades y el deterioro desus territorios, una economa que asegure la alimentacin desus animales y / para la gente, donde la produccin comunita-ria, los emprendimientos urbanos basados en la autonoma degestin fuera de la normatividad mercantilista y sancionadoraa los pequeos productores o servidores pblicos, los conde-nan a la sobrevivencia.Una economa basada en el respeto a las leyes laborales a los

    trabajadores y trabajadores de la produccin industrial en ge-neral y de los funcionarios pblicos, donde se eliminen lascondiciones de FRAUDE LABORAL, impuestas durante elneo-liberalismo desde 1985, eso queramos, eso demandamos,eso les dijimos y.no lo hicieron, no les dio la gana ni tuvie-ron voluntad.La primera muestra del rumbo que iba a tomar la economa o

    del rumbo de continuar con el mismo viejo proyecto por partede este gobierno se vio con la actitud que en particular tomel do Garca Linera-Arce Catacora (ministro de Finanzasde Morales, muy ligado a altos cargos en los gobiernos de la

  • 7/23/2019 Palabras Para Tejernos, Resistir y Transformar Zibechi

    21/231

    20

    ,

    derecha boliviana). Ms de 2.500 trabajadores y trabajadorasde la Lnea area nacional LAB, tomaron los aeropuertos, re-

    clamando un apoyo estatal para el manejo, por parte de ellosmismos, de esta empresa que fue saqueada por la VASP bra-silera y posteriormente por un empresario boliviano que posi-blemente apoy la campaa electoral de algunos.. y logr fugardel pas, luego de llevarse millonarias sumas de dinero al igualque los Canhedo de las VASP, todos impunes hasta hoy (poralgo ser).En aquel entonces a solo semanas de haberse instalado comogobierno, sacaron a la polica y al ejrcito, para reprimirnos alos trabajadores del LAB, los obreros fabriles y los guerrerosdel agua que habamos decidido apoyar esa palabra clave paracambiar la sociedad: AUTOGESTION!!El gobierno dijo que no poda hacerse cargo de impulsar unproyecto para gestionar la corrupcin, que iban a involucrarsedonde haba dinero, inversin, utilidad, ganancia.Los trabajadores y trabajadoras solo reclambamos JUSTI-CIA SOCIAL, la crisis de las empresas manejadas corrupta-mente por los ricos ya no deba descargarse sobre las espaldasde los trabajadores y trabajadoras.El nuevo gobierno, no tuvo la voluntad para generar un nuevo

    tipo de economa social, cre ms bien una lnea area para-lela, fortaleci las existentes privadas con contratos de uso deservicios. La mayora de las 2.500 familias de los trabajado-res y trabajadoras de la aerolnea, hoy estn precarizadas, hanperdido casi todas sus pertenencias para sobrevivir, jams lesfueron pagaron sus beneficios sociales porque los empresarios

    jams aportaron a los Fondos de la Seguridad Social, varios se

    suicidaron, los hijos quedaron traumados por las condicionesde precarizacin de sus vidas y hoy son un grueso sector socialdesalentado por las promesas de la campaa masista el 2005,de salvar la empresa, que no se cumplieron, y hoy viven sin

  • 7/23/2019 Palabras Para Tejernos, Resistir y Transformar Zibechi

    22/231

    21

    esperanzas de tener una vida digna.Esa fue la muestra de lo que iba a significar luego la poltica

    econmica del gobierno con la continuidad de la presenciade las empresas transnacionales de petrleo y minera, jugosasindemnizaciones a la transnacional Suez que fue echada porel pueblo de El Alto el 2005 (ms de 20 millones de dlares)El 2006, con la denominada Nacionalizacin de los Hidro-carburos --que no fue tal y ms bien una propaganda que unhecho real-- si bien se establece una relacin ms justa con elcapital transnacional en cuanto a la renta petrolera, jams senacionaliz nada; la empresa estatal es solo un logotipo: laspetroleras siguen definiendo las polticas hidrocarburferas sinindustrializacin, contraviniendo la agenda de octubre fijadapor el pueblo boliviano en general y alteo en particular.La gran minera como la establecida en la mina San Cristbal,de propiedad y operada por la japonesa Sumitomo, consumediariamente el equivalente al agua que consumen todos loshabitantes de Cochabamba en un da. Esto ha ocasionado eldesplazamiento de comunidades indgenas y campesinas, des-aparicin de plantas y bofedales y fuentes de agua; los anima-les se han ido o han muerto por la contaminacin y el ruidoproducido por las dinamitas. Esta mina es la ms grande a

    cielo abierto del mundo y su materia prima se agotar en po-cos aos ms; esta planta es impenetrable para los defensoresde los derechos laborales y medioambientales. Morales visitla mina, felicit a los inversionistas por su tecnologa y por suinversin de alrededor 1.000 millones de dlares que generala produccin al ao y que apenas deja 60 millones en im-puestos. El gobierno jams escuch las demandas de los cam-

    pesinos, les dijo que eran malos hermanos porque se oponanal desarrollo.Ms ejemplos podemos dar de numerosos pueblos que hoysufren las consecuencias de la contaminacin de la actividad

  • 7/23/2019 Palabras Para Tejernos, Resistir y Transformar Zibechi

    23/231

    22

    ,

    minera, pueblos y comunidades pequeas y cuyas sus voceshan sido acalladas y sus reclamos se han entrepapelado en la

    burocracia estatal, muchas veces comprometida con estos in-tereses. Vitichi en Potos, las comunidades de los ros Pilco-mayo en Chuquisaca, Tarija y Potos y Desaguadero en Oruro,el lago Titicaca en La Paz, son ejemplos de los estragos de lacontinuidad del modelo extractivista neoliberal y depredador.Sobre el tema de la seguridad alimentaria del que tanto hablamorales en su Ley de Revolucin Productiva solo podemosdecir que de acuerdo a varios documentos publicados por or-ganizaciones que trabajan estos temas, hoy se importa un 60%ms en alimentos que hace 5 aos.Sumado a esto el negocio del cambio en el uso del suelo, desdelas esferas institucionales de los municipios, las gobernaciones,las direcciones campesinas ligadas al gobierno, para urbanizartierras agrcolas, de pastoreo, comunitarias de recarga hdrica,para urbanizarlas, estn poniendo en serio riesgo la seguridadalimentaria en Bolivia y en particular en Cochabamba.No entrar al tema de lo que pasa con las reservas fiscales yde oro. Todos saben y en su momento lo denunciamos, quefueron comprados bonos con nuestras divisas en el exterioren transacciones con bancos y pases en bancarrota, como el

    Tesoro de los Estados Unidos de Norte Amrica, Portugal,Italia, el Banco Bilbao Vizcaya entre otros, o se han utilizadolas mismas para la importacin de productos (ms de 5.000millones de dlares). Los volmenes de la deuda interna y ex-terna han crecido enormemente y la corrupcin en el apara-to estatal que coloca a Bolivia entre los pases ms corruptosde Amrica latina de acuerdo al informe de la ONU, son la

    muestra clara de lo que ocurre con el denominado procesode cambio, impulsado por el pueblo boliviano y confiscado ydesvirtuado por el gobierno de Morales y Garca Linera.

  • 7/23/2019 Palabras Para Tejernos, Resistir y Transformar Zibechi

    24/231

    23

    IV. El agua y su Guerra librada, fue quien pari a este gobierno

    Si la Guerra del Agua, habra tenido otro desenlace, creo queno habra habido gobierno de Morales-Garca Linera. Si bienla participacin de estos personajes en esa lucha fue perifri-ca, uno gozando de su inmunidad como parlamentario y elotro como investigador que quera saber lo que pasaba luegode salir de la crcel, esta rebelin popular les sirvi a ambospara ampliar su discurso y accin a las ciudades a travs de laCoordinadora del Agua y de la Vida, instancia autoorganizada

    y autnoma de la gente del campo y la ciudad que resisti yreverti la privatizacin del agua en Cochabamba.Hoy el Agua no se encuentra en la Agenda estatal, en eldiscurso si, en la prctica no existe. El Ministerio del Aguacreado en enero del 2006 por la presin de las organizacionessociales, es hoy en da propiedad de un minsculo grupo degente absolutamente inoperante e incapaz.Las empresas pblicas han sido abandonadas a su suerte y lagestin ineficiente, corrupta. Han sido copadas por los mili-tantes del proceso de cambio, que ayer estuvieron en contrade la lucha por el Agua y hoy dirigen estas empresas hundin-dolas aun ms que antes de la Guerra del Agua del 2000.

    El 2000 la gente no luch porque el Agua se reconozca comoderecho humano. Esta es una retrica linda en el papel ypara el norte, pero que va en contra de la concepcin de que elagua es la sangre de la Madre Tierra, de que el Agua es un ser

    vivo y es un regalo generoso de la Pachamama para todos losseres vivos, como la propia tierra, las montaas, las plantas, losanimales. Nadie tiene derecho, desde una perspectiva homo-

    centrista, a tener prioridad sobre el agua.Los ros, los lagos como el Titicaca, los pozos de agua en lasciudades, los nevados de nuestras montaas y nuestros hilosde agua se estn contaminando, estn desapareciendo por el

  • 7/23/2019 Palabras Para Tejernos, Resistir y Transformar Zibechi

    25/231

    24

    ,

    denominado cambio climtico, por el modelo de desarrolloextractivista ejecutado por este gobierno y la actividad impune

    y criminal del narcotrfico.Los Derechos de la Madre Tierra funcionan para el discursoa nivel internacional, pero todo queda en la retrica cuandose trata de venderla para embolsillarse mucha plata. El dineroantes que garantizar la reproduccin de la vida, es la polticade funcionarios de gobierno, en el futuro se sabr de los nue-

    vos ricos que se hicieron con la violacin a la PachaMama.El agua se usa como propaganda gubernamental, muchas ve-ces electoral. Se ha creado un programa a nivel nacional lla-mado Mi Agua, donde se entregan 300.000 dlares a cadamunicipio para supuestamente construir sistemas de agua po-table y de riego. No hay fiscalizacin ni participacin social eneste programa.En cuanto al presupuesto estatal, con recursos propios, el es-tado destina a la atencin de las necesidades de agua y sa-neamiento solo un poco ms del 1%, es decir NADA. Msdel 80% del presupuesto en temas de agua viene de la coo-peracin internacional, es decir seguimos siendo una coloniaen este tema, supeditados, subordinados a las polticas de esacooperacin.

    Es la cooperacin quien ha decidido la desaparicin de losComits, asociaciones y cooperativas de agua y riego en elcampo y la ciudad, estn realizando un inventario de todosestos sistemas autnomos, construidos y constituidos por gen-te comn que ha desarrollado y recuperado una gestin comu-nitaria, andina y participativa del agua. Estos sistemas son unpoder popular real, eficiente, solidario, recproco, horizontal,

    organizado, movilizado. Pero no quieren esto los del gobierno;ellos quieren todo el poder y control para ellos y han esta-blecido mecanismos para expropiar las fuentes, las redes y lagestin del agua, como cuando estuvo la Bechtel, so pretexto

  • 7/23/2019 Palabras Para Tejernos, Resistir y Transformar Zibechi

    26/231

    25

    de la creacin de las empresa metropolitanas que no son otracosa que negocio de alcaldes y concejales. Con esto buscan

    expropiar, desmontar no solo la sabidura y gestin popularesy comunitarias, sino ante todo el PODER que esta en los deabajo, al que le temen los caudillos, los partidos y los patrones.

    V. El Mundo del Trabajo, injusto, pisoteado, despreciado, cooptado

    Un Decreto famoso a nivel mundial, aqu en Bolivia, fue el21060 del 29 de agosto de 1985, que estableca la libre contra-tacin y el libre despido a las y los trabajadores por parte de lospatrones, sean estos del estado o privados.A mediados de los 90s, se quiso cambiar la Ley del trabajo, losobreros y obreras de las fbricas resistimos esa pretensin delgobierno de entonces y frenamos esa intencionalidad patronal,si bien la Ley no se cumpla, la tenamos escrita para defen-dernos para luchar por nuestros derechos.Hoy estamos peor que en aquella poca. Este gobierno tuvola osada de querer cambiar la normativa laboral sin consen-so a atravs del llamado Cdigo del trabajo, que estableca ladivisin de los trabajadores del sector pblico y del sectorprivado, a fines del 2009, luego de la aprobacin de la Nueva

    Constitucin que establece la prohibicin de cualquier tipo dediscriminacin.Este proyecto de Cdigo laboral, criminalizaba el derecho ala huelga, estableca en dos tercios el qurum para aprobartemas en las asambleas de los sindicatos, se condenaba a penacorporal a los dirigentes o trabajadores que impidieran rom-per la huelga por parte de otros trabajadores, es decir normas

    fascistas, que logramos parar, hasta hoy.Pero nuevamente se insiste en una nueva ley con ese conte-nido, discriminatorio, criminalizador, autoritario, favorable alcapital. Si bien no pudo todava imponer esta Ley, ha ido to-

  • 7/23/2019 Palabras Para Tejernos, Resistir y Transformar Zibechi

    27/231

    26

    ,

    mando medidas muy sutiles y por otros canales de poner envigencia medidas neoliberales y anti-obreras, como ser:

    Se ha obligado a trabajadores pblicos, a mudar a un r-gimen creado por los gobiernos neo liberales, donde pierdentodos sus derechos laborales, a ttulo de que los funcionariospblicos son soldados y soldadas de la Revolucin. Esto ha signicado que hoy ms del 80% de los funcionariospblicos estn bajo condiciones de Fraude Laboral, es decirtotalmente desprotegidos de sus derechos laborales y socialescomo personas y sus familias. Los trabajadores y trabajadoras contratadas en las empresasproductivas creadas por este gobierno, no estn sujetos a con-tratos laborales, sino a contratos bajo el cdigo de comercio, esdecir la fuerza de trabajo y las necesidades de sus familias sonconsideradas como mercancas, cuanto menos pides , cuantomenos cuestes te contrato, te compro. Se obliga en la nueva ley de pensiones el depsito de un por-centaje del salario de los trabajadores sin contratos laborales(denominados consultores), al denominado fondo solidario,convalidando de esta manera los contratos por servicios pro-hibidos por la ley del trabajo en vigencia. Las empresas de servicios y de produccin han sido obliga-

    dos a travs de la ley financial a tercerizar varias actividades,desde la seguridad fsica hasta la educacin en las universi-dades, contraviniendo flagrantemente la propia Constitucin. El concepto que este gobierno tiene de los Derechos labora-les y sociales es que los mismos son una carga y no una obli-gacin de proteccin y de cuidado del trabajador, trabajadora

    y su familia.

    Los sindicatos tradicionales, han sido cooptados a travs deprebendas que van desde la compra de edificios a la dotacinde movilidades o viajes al exterior de sus dirigentes, salvo hon-rosas excepciones como la de algunos sectores de los maestros.

  • 7/23/2019 Palabras Para Tejernos, Resistir y Transformar Zibechi

    28/231

    27

    Se ha establecido que ms del 75% de la fuerza laboral enBolivia, trabaja en condiciones de Fraude laboral, la mayora

    jvenes y mujeres.

    VI. El denominado gasolinazo de navidad el 2010

    El 26 de diciembre del 2010, el gobierno de Morales-GarcaLinera, a travs de este ultimo, ya que como es costumbre enMorales, cuando las papas queman no est presente, determi-n la subida de los carburantes hasta en un 82%. Esta medidafue resistida por la poblacin, los artculos ms bsicos de lacanasta familiar subieron en ms del 100%, el costo del trans-porte de pasajeros y carga se fueron por las nubes; esto oca-sion una desesperacin en la poblacin ante el ocultamiento

    y acaparamiento de los alimentos por la especulacin y la in-seguridad.El gobierno al igual que los neo liberales justificaba en losmismos trminos y desprecio ante la poblacin: no podemosseguir subvencionando a la poblacin los costos internacio-nales de la gasolina, el diesel y el gas, no podemos seguir des-angrando la economa del pas, debemos vivir la realidad. Larealidad es que ms de dos millones de bolivianos y bolivianas

    viven con apenas un dlar al da y un litro de gasolina se pre-tenda establecer en casi al mismo parmetro, era inconcebiblepara la gente de los sectores populares.La gente sali a las calles, resisti e hizo retroceder al gobier-no, como en la Guerra del Agua el 2000, como en Octubredel 2003. A los gobiernos no les interes la gente, para ellosel pueblo no existe, la economa y la poltica es un tema de

    expertos, no de la chusma, de la multitud, cuando es sta quele dio el mandato, para desmontar la economa capitalista yneo-liberal, que ignora a nuestros pueblos, que las castiga, quelas explota.

  • 7/23/2019 Palabras Para Tejernos, Resistir y Transformar Zibechi

    29/231

    28

    ,

    VII. La Marcha Indgena-Popular en defensa del TIPNIS (Te-rritorio Indgena del Parque Nacional Isiboro Scure)

    Para concluir, de manera muy breve escribir algunas lneascon relacin a la Marcha en Defensa del TIPNIS, no deseosuplantar a mis hermanos y hermanas indgenas de las tierrasbajas, con quienes tuve el privilegio de marchar 200 Km. endos semanas de los 600 Km. y dos meses que dur la marcha.

    Jams en las muchas marchas que particip con obreros, cam-pesinos, indgenas del altiplano y los valles, mujeres y jvenes,se haba colocado tantas trampas, tanta soberbia, tanta desca-lificacin y al final tanta represin como lo que pas en la zonade Yucumo, donde, centenares de hombres, mujeres, ancianos

    y ancianas, nios y nias fueron brutalmente reprimidos. Rei-tero como jams se lo haba hecho antes, ni en los regmenesfascistas militares, todo esto por rdenes de Morales, eso na-die lo puede negar, pero se niegan a asumir su verdadporcobarda.Lo grave de este gobierno de impostura, es que ha venidodestruyendo durante seis aos el tejido social de confianza,reciprocidad y solidaridad que tan laboriosamente habamosconstruido desde el 2000. Sin embargo, su conducta durante

    este conflicto, que tuvo repercusin internacional, ha repuestola re-constitucin de ese tejido social, donde gruesos sectoresde la poblacin, citadina en particular, han tomado como refe-rente al y la indgena noble, generosa, pacfica, clara, perseve-rante y real defensora de la Madre Tierra.Si bien la Marcha se la conoce ms por la oposicin tenaz aque una carretera financiada por el Brasil a travs del BN-

    DES y ejecutada por la constructora brasilea OAS, pase porel territorio Indgena en cuestin, el contrato tambin estcuestionado por la falta de transparencia y de absoluto some-timiento a los intereses del gobierno brasileo, as como el

  • 7/23/2019 Palabras Para Tejernos, Resistir y Transformar Zibechi

    30/231

    29

    pisoteo a la Constitucin del Estado Purinacional Boliviano.En el fondo esta marcha, con todas sus caractersticas, guarda

    estrecha relacin con el pensar, el sentir, el vivir y el actuar dela gente sencilla y trabajadora de nuestro Pueblo, como ocu-rri en la Guerra del Agua el 2000, en la Guerra del Gas el2003 y el Gasolinazo del 2010.Es un BASTA! al avance de las transnacionales para sembrarluto, destruccin, saqueo.Es un BASTA! al modelo de desarrollo impuesto por losmismos intereses de siempre desde hace ms de 500 aos, conlos nuevos colonizadores y colonizados gobiernos.Es un BASTA! A este confuso discurso de progresismo es-tril, con el que nos siguen aturdiendo lleno de cifras fabri-cadas y de mentiras veladasEs un BASTA! a la prepotencia, a la soberbia y el desprecioa la gente humilde e indgena por parte de los gobernantes ycon mayor razn de un gobierno que se dice ser indgena y delos movimientos sociales...nada ms falso.Es un SI PODEMOS! a resistir, a que no estamos dormidos,ni cansados ni vencidos, ni derrotados.Es un SI! a que estamos dispuestos a retomar el rumbo sea-lado colectivamente y desde abajo en el ao 2000, el 2003 y el

    2010, por la gente sencilla del campo y a ciudad.Es un SI a que juntos y juntas podemos y construir un mun-do nuevo que soamos con nuestros padres y abuelos y que loqueremos para nuestros hijos e hijas, nietos y nietas.Bolivia ya no es la misma desde las rebeliones de los aos se-alados. Con la marcha indgena del 2011, se ha abierto nue-

    vamente el debate del modelo de desarrollo que queremos y

    la significacin del verdadero vivir bien, pregonado por elgobierno y demandado y luchado por nuestros pueblos de ma-nera laboriosa.Esta marcha, creo yo, ha unido a una mayora de la pobla-

  • 7/23/2019 Palabras Para Tejernos, Resistir y Transformar Zibechi

    31/231

    30

    ,

    cin otra vez, ha reconstituido la capacidad de indignacinde nuestro pueblo, ha devuelto la autonoma a la sociedad en

    movimiento, frente a los movimientos sociales cooptados porlos gobiernos denominados progresistas, ha devuelto la mar-cha, nuestra capacidad de soar juntos, nos ha devuelto la ca-pacidad de ser poder desde abajo, el nico poder que puedetransformar nuestras vidas frente a la muerte del capital.Hoy nos sentimos orgullosos de lo que somos de lo que hace-mos, de lo que decimos, porque somos un pueblo en perma-nente deliberacin, predispuestos siempre para hablar entrenosotros, para re-conocernos una y otra vez, frente al olvido

    y al desprecio, para decir a los poderosos que si existimosporque nos organizamos, nos movilizamos, por un mundo queseguimos soando, el mundo de la alegra, de la justicia social,de la armona y para llegar a ese mundo a esa sociedadde-bemos ser como el Agua: Generosos, Alegres, Transparentes yen Movimiento.Para que no mueran ms Carlos como en el 64, ni Victor Hu-gos como en el 2000, ni Juanes, ni Joss, no mas Marlenes (lania de 8 aos que fue asesinada por los militares en septiem-bre del 2003, en Warisata, como prembulo de la Guerra delGas), para que no haya mas represin ni llanto de madres y

    nios como en Yucumo en la marcha indgena del TIPNISdel 2011, ejecutados por los mismos gobiernos de mierda, ll-mense como se llamen. Para que mis hijos, mis hijas, mis nie-tos y nietas, no sientan la tristeza, los miedos, las impotencias

    y las broncas que yo sent y siento aun en varias jornadas.Desde las secas tierras del hermoso valle de Cochabamba, laLlajta, en Bolivia, diciembre del 2011.

  • 7/23/2019 Palabras Para Tejernos, Resistir y Transformar Zibechi

    32/231

    31

    Pistas reflexivas para orientarnosen una turbulenta poca de peligro

    Raquel Gutirrez Aguilar

    Escudriar las contradicciones que estamos viviendo

    Qu poca estamos atravesando? Qu sentido y contenidotiene -y qu horizontes puede abrir- el conjunto de protestas

    y levantamientos que est sacudiendo muy diversos lugaresdel mapa mundial? Qu puede haber de similar entre loslevantamientos y revueltas de los jvenes, los trabajadores y lasfamilias humildes de los pases rabes con los que amanecieste turbulento 2011, y los sistemticos esfuerzos de los jvenes,las mujeres, los jubilados, los hipotecariamente desalojados,los sin trabajo, los sin papeles, quienes, indignados, se han

    movilizado una y otra vez en Madrid, en Barcelona y en elEstado espaol en su conjunto? Cmo se emparentan esasluchas con las de los trabajadores y las familias griegas quienesestn siendo brutalmente acosados en su posibilidad mismade reproducir la vida cotidiana? Y qu tiene todo esto que vercon los esfuerzos en Mxico -ciertamente ambiguos- por noseguir cayendo en la espiral de violencia, muerte y barbarie queamenaza con convertir nuestro generoso pas en la primeracrcel de 2 millones de kilmetros cuadrados del mundo,incluyendo sus areas de castigo, sus zonas de esparcimiento

    y su centro de observacin y clasificacin? Cmo ligartodo lo anterior, con el conjunto de acciones de resistencia ylucha contra el despojo y la violencia que, de manera menos

    difundida aunque sistemtica, estn desplegando miles y milesde hombres y mujeres indgenas y no indgenas en Guatemala,Mxico, Colombia, Per, Bolivia, Ecuador, Chile, Argentina yBrasil, por citar los ms conocidos?Por qu a pesar de tantos esfuerzos, de tanta indignacin, de

  • 7/23/2019 Palabras Para Tejernos, Resistir y Transformar Zibechi

    33/231

    32

    ,

    tanto sufrimiento como es el que muchos estamos teniendoque padecer, de todas estas distintas, polimorfas y variadas

    acciones de rechazo a lo que se nos impone en todo el planetacomo presente absurdo y como destino obscuro; toda estaenerga desplegada no parece alcanzar para ofrecernos certezasni, aparentemente, generar capacidad fluida de sintonizarnos-enlazarnos entre cada vez ms? Por qu a pesar de tantaenerga vital derrochada para defendernos de las agresiones

    y para abrir otros horizontes de vida comn, no logramos

    todava, gestar y parir una manera de hilar eficazmente nuestracomn capacidad de rechazo y veto a los planes de muerte, ex-plotacin, desprecio y saqueo que ellos lanzan contra nosotros

    y, ms difcil aun, no conseguimos vislumbrar maneras deproyectar-construir materialmente nuestros inciertos aunquepotentes y comunes deseos, contra los fines y medios de ellos?Quines son ellos? De quines estamos hablando cuandodecimos ellos... y, ms aun, quienes somos nosotros, losque trabajamos, padecemos y luchamos, los que acampamosen las plazas y migramos, los que nos movilizamos y nosrebelamos y, de todos modos, sentimos con frecuencia queestamos atrapados en una enorme telaraa normativa-legal

    y econmica que nos dificulta o impide dar curso a nuestrasmltiples iniciativas y propuestas?Necesitamos, para comenzar, establecer un nosotras -comodicen los indignados de Madrid; s, en femenino, abarcativo demujeres y varones en esfuerzo perseverante por ponernos depie- y un ellos... Requerimos una distincin analtica bsicaproducida por nosotras mismas para nombrar el mundo y, apartir de ello, volverlo inteligible y abarcable; una distincin

    inicial que pueda guiarnos en la transformacin civilizatoriaen la que estamos empeados.Tuvimos una vez, hace ms de 150 aos, una distincin binariaque, aunque trgica a la larga, de todos modos result muypotente para orientar los pasos de las luchas de abuelos y

  • 7/23/2019 Palabras Para Tejernos, Resistir y Transformar Zibechi

    34/231

    33

    abuelas de todas nosotras. Reivindicando el lenguaje que hoyrescata y contrasta, tambin, la distincin entre lo masculino

    predominante y dominante y lo femenino en resistenciay lucha, podramos recordar as la mencionada distincin:proletarias y burgueses.

    Tal disyuncin, que orient y habilit durante muchasdcadas innumerables esfuerzos de lucha y construccinprotagonizados por antecesores nuestros ha sido casi siempre,o bien ferozmente criticada y devaluada, o bien simplemente

    mantenida de forma dogmtica, aprisionada en torpes criteriosclasificatorios de la peor tradicin sociolgica.Para comenzar esta reflexin mi intencin es recuperar aspectosfundamentales de tal distincin entre proletarias y burgueses,estableciendo, sin embargo, dos crticas de fondo. La primeraes la crtica al carcter en ltima instancia, singularmenteindividualizador y tendencialmente unviersalizador de taldistincin: los trminos proletario y burgus son, ademsde adjetivos, tambin sustantivos contrapuestos que designan

    y clasifican, en el ms conservador y banal -aunque comn-uso de tales trminos, a individuos -o entidades singulares-que pertenecen a clases. Se reinstala as, un problema formalclsico de la filosofa occidental: la cuestin del elemento y elconjunto, del universal comprendido como clase mediante unconcepto y de los objetos singulares que son abarcados porl. De ah que el contenido de enunciados del estilo X esproletario, Y es burgus, donde X o Y podan ser cualquiercosa, desde individuos hasta formas de lo poltico, pasando poragrupaciones o propuestas resultara, adems de sumamenteconfuso, intil a la hora de comprender el despliegue mismo

    del antagonismo entre tales clases as delimitadas. Elpar proletario/burgus, entendido de la manera descrita,ancla y fija el pensamiento a un modo de razonar esttico ytendencialmente cerrado. De ah el peligro de tales dispositivosde clasificacin que, sin embargo, operan al mismo tiempo

  • 7/23/2019 Palabras Para Tejernos, Resistir y Transformar Zibechi

    35/231

    34

    ,

    como posible fundamento para la produccin de significadospropios, en tanto se proponen mantener a la vista los trminos

    de un antagonismo dinmico radical que ha fracturado la vidasocial de una manera especfica, aunque cambiante, a lo largode esta ya prolongada poca de capitalismo.La segunda crtica a la distincin en cuestin hace notar elrestringido lugar desde el cual tal par analtico se sola establecer.Hasta su casi total abandono en la discusin poltica de las ltimasdcadas, la contraposicin entre proletarias y burgueses se

    fundaba privilegiando el terreno de la produccin y reproduccineconmica del propio capital, es decir, desde lo que se entendacomo el mbito de mayor interioridad de la valorizacin del valor1:la fbrica, la gran industria, etc. Al proceder de tal forma, o bien sedejaban fuera, o se establecan como secundarios, los contenidospotencialmente disruptivos y transformadores de otras diversasluchas y de otras mltiples actividades, en particular las de lasmujeres y las de los pueblos indgenas.Ahora bien, la distincin contrapuesta en cuestinbrindaba de todos modos -insisto- una peculiar potencia alpensamiento crtico: le dotaba de la capacidad de establecerun piso o fundamento bsico, inicial, para la inteleccin delantagonismo que hasta ahora contina atravesando, rasgando

    y recomponiendo intermitente aunque continuamente, elmundo que habitamos. Esa justamente es la potencia queconsidero urgente recuperar, colectiva y tendencialmente;

    y para ello, propongo una distincin que esquive o eluda lascrticas sealadas arriba. El par antagnico que sugiero comodistincin ms general para la comprensin de la poca queestamos viviendo es el siguiente:

    Entramados comunitarios vs.coaliciones de corporaciones transnacionales

    1 Esta cuestin es analizada con gran detalle por John Holloway en su trabajoAgrietar el capitalismo. El hacer contra el trabajo. Sobre todo en los captulos IV,V y VI. (Holloway, 2011)

  • 7/23/2019 Palabras Para Tejernos, Resistir y Transformar Zibechi

    36/231

    35

    Qu quiero designar con el trmino entramado comunitario ypor qu lo propongo?

    Busco referirme a la multiplicidad de mundos de la vidahumana que pueblan y generan el mundo bajo pautas diversasde respeto, colaboracin, dignidad, cario y reciprocidad,no plenamente sujetos a las lgicas de la acumulacin delcapital aunque agredidos y muchas veces agobiados por ellas;pretendo establecer un trmino suficientemente general -que

    no universal- como para abarcar los lazos estables o ms omenos permanentes que se construyen y se reconstruyen a lolargo del curso de cada vida concreta, entre hombres y mujeresespecficos, que no estn plenamente sujetos ni sumergidos enlas lgicas de acumulacin de valor, para encarar la satisfaccinde mltiples y variadas necesidades comunes de muy distintotipo. Intento pensar un nombre, para decirlo de manera

    sinttica, para las infinitas formas colectivas en que se expresay se realiza el trabajo vivo, el trabajo til para la producciny reproduccin de la vida humana; en fin, para designar dealguna manera la compleja trama humana que habitamosmediante la cual se despliega la energa humana creadora nosubsumida realmente o no plenamente ceida a los designios

    y formatos de la valorizacin del valor.

    Tales entramados comunitarios pues, unos ms antiguos,otros con origen temporal ms cercano -contemporneos-, seencuentran en el mundo bajo diversos formatos y diseos: desdecomunidades y pueblos indgenas, hasta familias extendidas

    y redes de vecinos, parientes y migrantes desparramadas enmbitos urbanos o rurales; desde grupos de afinidad y apoyomutuo para fines especficos, hasta redes plurales de mujeres

    para la ayuda recproca en la reproduccin de la vida, por slomencionar algunas variantes de tales entramados.El trmino entramado comunitario, de por s, refiere a sujetoscolectivos, aunque de muy diversos formatos y clases. Adems,

  • 7/23/2019 Palabras Para Tejernos, Resistir y Transformar Zibechi

    37/231

    36

    ,

    tiene la virtud de no establecer su fundamento en el interiormismo de la produccin del capital -ie, en la esfera econmica

    del capital; e intenta poner el acento, ms bien, en la formadel vnculo establecido -comunitario, centrado en lo comn- yen la finalidad concreta que lo anima: la pluriforme, verstil yexigente reproduccin de la vida en cuanto tal. En ese sentido,se asienta en aquello especficamente humano que desbordauna y otra vez al capital, que se expande por diversos terrenosde lo que sola llamarse la esfera de la reproduccin social-

    natural, en contraposicin y contraste a la esfera civil y a laesfera poltica. Hasta cierto punto, entonces, entramadoscomunitarios son las diversas y enormemente variadas confi-guraciones colectivas humanas, unas de larga data, otras ms

    jvenes, que dan sentido y amueblan lo que en la filosofaclsica se ha designado como espacio social-natural, es decir,el espacio de reproduccin de la vida humana no directa niinmediatamente ceido a la valorizacin del capital, noplenamente dominado por sus leyes aunque casi siemprecercado y agredido por ellas.

    Para qu nos sirve, en la tarea de entender la poca que vivimos,la distincin confrontada entre entramados comunitarios ycoaliciones de corporaciones transnacionales?

    Nos sirve, bsicamente, como hilo conductor para lacomprensin general de lo que est ocurriendo.Si tratamos de ordenar y entender los vertiginosos caudalesde sucesos que vemos ocurrir o que contribuimos a producir:por una parte, movilizaciones, tomas de plazas, marchas,acampadas, protestas, asambleas, encuentros, deliberaciones,

    levantamientos; y tambin, por otra, matanzas, represin,acoso, crisis, desalojos, quiebras, paro, desprecio, elecciones,maniobras polticas, discursos gubernamentales a cual mssordos, autistas e insensatos... las cosas se organizan con mayorclaridad si entendemos que esos sucesos son las expresiones ms

  • 7/23/2019 Palabras Para Tejernos, Resistir y Transformar Zibechi

    38/231

    37

    lgidas, extraordinarias, de la gigantesca y global confrontacinentre variados y plurales formatos de mltiples entramados

    comunitarios con mayor o menor grado de cohesin internay enlace; y las ms poderosas corporaciones transnacionalesy coaliciones entre ellas, que saturan el espacio mundial depolicas y bandas armadas, discursos supuestamente expertos,imgenes, reglamentos e instituciones rgidamente jerrquicas.Los momentos cotidianos de la misma confrontacin, queocurren de manera mucho menos aparatosa, ms discreta

    aunque continua y sistemtica, los experimentamos cadaquien en la vida cotidiana: se trata del amplio y heterogneoconjunto de acciones de apoyo mutuo que inventamos da a dapara lograr vivir y, as, encarar la tambin cotidiana cadena deagresiones soportadas a partir de las formas transnacionalizadasde trabajo y vida que se nos han impuesto en las ltimasdcadas, con sus lastres de inseguridad y endeudamiento, consus ritmos de trabajo enloquecidos e interminables, con suabsurda organizacin de los espacios urbanos y rurales dondeestas mismas coaliciones de corporaciones desarrollan sussistemticas y cada vez ms abusivas actividades expansivas.Cabe hacer notar que el par clasificatorio propuesto es, antetodo, un recurso del pensamiento para habilitar la comprensinde lo que ocurre. Insisto en ello en tanto que, como bien me hasealado Manuel Rozental, muchas veces la distincin entrelos entramados comunitarios y las coaliciones de corporacionesno es tan visible ni tan fcil de discernir en la cotidianidad.De all su utilidad analtica, epistmica; no como herramientapara describir lo que hay sino para comprender lo que puedehaber: las coaliciones corporativas, por lo general, a la hora

    de desarrollar sus proyectos, penetran, permean, convencen,arrasan y desnaturalizan los entramados comunitarios.Buscan ser hegemnicas y fabrican hegemona con todos losdispositivos a su disposicin. De ah justamente la pertinenciadel desafo lanzado que consiste en ubicarnos, nosotras, a la

  • 7/23/2019 Palabras Para Tejernos, Resistir y Transformar Zibechi

    39/231

    38

    ,

    hora de pensar los sucesos polticos, asumiendo la existenciaagredida y en peligro de mltiples formatos de entramados

    comunitarios; para, desde all, entender las variadas accionesde las coaliciones transnacionalizadas de corporaciones quepenetran, confunden y niegan tales entramados; que losdesvanecen, los desprecian y los despojan. En gran medida,las luchas contemporneas estn y han estado, tambin, enel reconocimiento y adscripcin de/a tales entramados quedesbordan la valorizacin del valor y el mbito de acumulacin.

    Muchas veces, seala Rozental2, nosotros mismos tenemosdificultades no slo para reconocer tales entramados sinotambin para reconocernos en ellos. En tanto, como parte deellos, eso somos.

    Criterios clasificatorios diferentes: elementos iniciales para ladiscusin

    Estamos pues, atravesando una poca en la cual estocurriendo una profunda transformacin. El conjunto demediaciones para sortear los antagonismos ms profundosque atraviesan la sociedad, los que se construyeron desdemediados del siglo XIX y se consolidaron en el XX, estnen ruinas. La contradiccin antagnica de fondo se presenta

    cada vez ms descarnada y desnuda: tal confrontacin ocurreentre los entramados comunitarios que de mltiples manerasresguardan y reproducen la vida no sujetndose plenamente

    2 Se nos dificulta establecer un nosotras-ellos desde all, desde los entramados,porque lo corporativo entra y funciona y nos incorpora dentro de ellos; ascomo tambin, en contraste, nosotros permeamos los mbitos corporativosms duros cuando recreamos nuevos entramados comunitarios y an siendo

    cajeros bancarios o vendedoras de supermercados con horarios de maquila,all adentro, tejemos esos entramados y nos vamos infiltrando con risas,historias, tiempos, pequeas protestas y rupturas, que son grietas con potencialenorme para burlar el cerco de la acumulacin. Conversaciones epistolares conManuel Rozental para la preparacin de este volumen. Agradezco sus aportesde corazn.

  • 7/23/2019 Palabras Para Tejernos, Resistir y Transformar Zibechi

    40/231

    39

    a la reproduccin del capital y la demencial ambicincorporativa de valorizacin sin lmite de tal capital acumulado.

    As ocurre aun si tales flujos de antagonismo son difusos uopacos; aunque no se nos presenten con la claridad prstinaque pretendan ofrecernos otras distinciones hoy claramenteen vas de caducidad.

    Justamente en este contexto entran en crisis los estados-naciny, en general, casi todos los artefactos nacionales de inclusinsocial as fuera subordinada: los sindicatos y coaliciones de

    trabajadores, los partidos polticos y las reglamentacionesdemocrticas, las instituciones nacionales de redistribucin,salud y educacin... Casi todos ellos se ven tendencialmenteconvertidos en impotentes guetos cercados por la mareacorporativa de la acumulacin desbocada. Los estados-nacinse van convirtiendo, de manera creciente, en paralizadasinstituciones secuestradas bajo el peso de sus deudas hacia lacoalicin corporativa transnacional. Ante la poblacin de suspases pasan a convertirse en cobradores de impuestos y regalaspara las concesiones obtenidas por la coalicin corporativa, agarantizar los contratos que stas han obtenido y a manejaruna parte de las fuerzas armadas y la polica -aunque hacemucho que perdieron el monopolio del uso de la violencia.Lamentablemente, al describir este cuadro no estoyexagerando. La coalicin corporativa transnacional, esamaraa de intereses y ambiciones de ocupacin, explotacin

    y propiedad, que actualmente fundan su actividad en laguerra, el saqueo y la depredacin de todo lo que existe, haarmado una red de instituciones y un conjunto de palabras

    y argumentos para asegurar su permanencia. La red de sus

    instituciones est constituida, en primer lugar, por el bloquede mercados financieros -alrededor del cual tiene su clerobien jerarquizado de accionistas, grandes inversionistas,expertos y consultores-, las bolsas de valores suelen llamara sus sectarias catedrales; y nombran todo esto mediante

  • 7/23/2019 Palabras Para Tejernos, Resistir y Transformar Zibechi

    41/231

    40

    ,

    una engaosa expresin: los mercados, a cuyos intereses ynecesidades el conjunto entero de los procesos de reproduccin

    vital de la especie humana se debe ceir.Sin embargo, qu cosa son esos mercados en cuyos altarestodo tiene que ser sacrificado? Son, bsicamente, corporacionescerradas y privadas de ricos donde se concentra la riquezaen sus mltiples formas: mercado energtico, mercado dematerias primas -donde se concentran los alimentos delmundo y otro conjunto de recursos productivos-, mercados

    financieros -donde se monopoliza el manejo y destino deldinero. Dada la manera en la que actualmente se utiliza eltrmino los mercados en el espacio pblico, es necesariohacer un ejercicio reflexivo sistemtico para entender y asumirque tales mercados no son entidades naturales como porejemplo, las playas o las montaas. Los mercados sonnicamente el nombre de esas corporaciones cerradas de ricosque se enriquecen cada vez ms y que, al hacerlo, nos condenana todos los dems a una vida de carencia constante: sin casa,sin papeles, sin tierra, sin tiempo, sin comida, sin derechos...Una pregunta necesaria a estas alturas de la exposicin, una

    vez que he defendido la pertinencia de volver a contar conuna manera propia, nuestra, para distinguir lo que ocurreen las actuales turbulencias polticas y he sugerido que talcontradiccin principal ocurre entre los mltiples entramadoscomunitarios que habilitan nuestra existencia en el mundo

    y la coalicin de corporaciones transnacionales que buscanapropiarse de absolutamente todo lo que hay; una vez hechoesto, vale la pena preguntarse por el vaciamiento poltico y crisissistemtica de casi todos los estados-nacin contemporneos.

    Entendemos por estados-nacin la peculiar forma moderna dearticulacin de intereses pblicos y privados para garantizar lareproduccin del capital incluyendo el capital variable en talconsideracin, por supuesto- dentro de territorios delimitadospor fronteras nacionales. Bosquejando groseramente una

  • 7/23/2019 Palabras Para Tejernos, Resistir y Transformar Zibechi

    42/231

    41

    primera clasificacin que contribuya a orientarnos en losdistintos tipos de estado-nacinactualmente existente; podemos

    distinguir cuatro grandes bloques de pases con sus respectivosestados-nacin y las distintas maneras en que se esfuerzan porcontener a sus poblaciones dentro de tal dimensin, es decir,a los polimorfos entramados comunitarios donde la vida sedesarrolla:

    1. Aquellos estados-nacin que estn endeudados hasta eltope con prstamos de cifras inimaginables facilitados por

    redes de bancos, empresas y a veces, por otros gobiernos;son pases agobiados por los intereses y obligaciones dedichas deudas, gobernados por lites que poco a poco se

    van convirtiendo en meros cobradores de impuestos paragarantizar las rentas y lujos de quienes se esconden detrsdel trmino los mercados. Hasta hace poco tiempo, lamanera de integrar a sus poblaciones estuvo basada en el msamplio soborno colectivo por la va del auspicio a la deudapersonal y a cierta seguridad social (Espaa, Grecia, Italia,Irlanda y, hasta cierto punto, Estados Unidos, hasta ahora).

    Todos estos son estados tendencialmente privatizados y envas de quiebra.2. Los estados-nacin que han logrado un equilibrioproductivo y financiero mnimo -aunque profundamenteinjusto- y juegan un papel de reparto en el escenarioprotagonizado por los acreedores ms fuertes. Talesestados, aprovechando la opacidad que acarrea laturbulencia, pretenden adems colarse a la coalicin decorporaciones transnacionales bajo formatos un pocomodificados: mismas reglas, intereses y procedimientos,

    aunque emprendidas ahora tambin de manera estatal.Ejemplo de esta clase anfibia de estados-corporacinson China en Asia, o Brasil en SudAmrica. La relacinmando-obediencia entre gobernantes y gobernados en talesestados anfibios, erosiona el reconocimiento de derechos

  • 7/23/2019 Palabras Para Tejernos, Resistir y Transformar Zibechi

    43/231

    42

    ,

    sociales colectivos y privilegia las llamadas actividadesde promocin social: planes, subsidios, becas y todo tipo

    de subsidios personalizados, que alteran radicalmente lacondicin ciudadana, sustituyndola por una ms parecidaa la de vasallaje3.3. Estn despus los estados-nacin mucho ms pequeosde Amrica Latina que, en medio de las condicionesgenerales descritas arriba y casi siempre como corolario deun perodo de intensa lucha desplegada desde mltiples y

    heterogneos entramados comunitarios por habilitar otrasformas de relacin poltica y social, estn actualmentepretendiendo jugar el desgastado papel de agentes deuna supuesta modernizacin que no es ms que un nuevoepisodio de re-colonizacin en pocas de predominio yhegemona corporativa transnacional (Bolivia, Ecuador,Argentina, entre los ms destacados). Son los estadoscomparsa de cualquiera de los dos tipos anteriores.4. Finalmente estn los estados-crcel, los lugares donde laconfrontacin principal entre coaliciones de corporacionestransnacionales legales e ilegales ligadas a mafias de litesgobernantes- y los diversos entramados comunitarios estdesplegndose de manera radical, devastadora, desolada; lasms de las veces, adems, incomprensible por su brutalidad

    y confusin. Mxico, Colombia, Guatemala y Honduras,forman parte de este concierto de estados actualmentetrgicos.

    Dado el predominio de la contradiccin entramados comuni-tarios/coaliciones de corporaciones transnacionalizadas quesostenemos, la clasificacin de diversos tipos de estado-nacin -esquemtica, tentativa e inicial- persigue por un lado,colocar como criterio principal, la manera en que se establecela relacin de mando entre gobernantes y gobernados dentrode las fronteras de los pases, antes que otros elementos que

    3 Sobre este tema ver Zibechi, Contrainsurgencia y miseria(Zibechi, 2010)

  • 7/23/2019 Palabras Para Tejernos, Resistir y Transformar Zibechi

    44/231

    43

    han perdido relevancia bajo el predominio de los interesestransnacionales. Por otro, tiene la finalidad de exhibir las

    diferencias para que queden claras las semejanzas; es decir, paramostrar que, pese a los modos distintos en que esto ocurre demanera concreta en cada lugar, la banalizacin y vaciamientode los estados-nacin es un problema general para los diversos

    y variopintos entramados comunitarios de muy diversos pases.

    En medio de lo que hoy ocurre, nos podemos seguir guiando por la

    distincin izquierda-derecha?Si concedemos que, i) la contradiccin fundamental de nuestrotiempo se est presentando entre los distintos tipos, formatos

    y clases de entramados comunitarios a los que hemos aludidoy la coalicin -internamente competitiva- de corporacionestransnacionalizadas para el saqueo, el despojo, la explotacin y

    la guerra; y ii) concedemos que la relevancia de las mediacionesconstruidas durante los siglos XIX y XX para encaminar y darcurso a esta contradiccin est disminuyendo cada vez ms...entonces, es preciso admitir que se ha banalizado la distincinizquierda/derecha originada para contrastar el tipo depoltica desarrollada en y desde el estado, y para distinguir laposicin poltica de segmentos de la clase dominante hacia

    tales mediaciones -de auspicio o de contraposicin. Parecierapues que, actualmente, tal distincin no puede ya funcionar.Sucede, ms bien, como si tal par clasificatorio opacara msque alumbrara los fenmenos sociales, pues centra la atencinen aspectos que no son decisivos a la hora de comprender losasuntos polticos de fondo que se juegan en estos tiempos deturbulencia extrema.

    Y la distincin no est funcionando, en primer lugar, porquealude a asuntos que no son las cuestiones principales en disputa.Las posibilidades de trastocar el orden de cosas inadmisiblee indignante que recurrentemente se nos impone -desde losdesalojos de las viviendas, hasta los saqueos de territorios,

  • 7/23/2019 Palabras Para Tejernos, Resistir y Transformar Zibechi

    45/231

    44

    ,

    pasando por la sobre-explotacin de los trabajadores y lareduccin de enormes grupos de personas a la condicin de

    excluidos, por slo mencionar las ms notables; la posibilidadde trastocar todas estas formas brutales de avasallar eldespliegue de una vida digna, cooperativa y feliz no transita

    ya por los caminos establecidos mediante la distincinizquierda/derecha que alude, bsicamente, al tipo de prcticas

    y posiciones que asumen las mediaciones estatales, sindicales,legales, actualmente en franca descomposicin. La disolucin

    de los significados polticos en competencia que en pocasanteriores eran distinguidos mediante el par izquierda/derecha nos encamina entonces, en primer lugar, a sugerirla distincin adentro/afuera o, menos esquemticamente,entramados comunitarios/coaliciones de corporacionestransnacionales; del mismo modo que nos impulsa a sugerircomo algo conveniente, adems de la consideracin de tiposde estado-nacin ya discutida en pginas anteriores, tambinla discusin sobre las distintas formas de estado y gobierno,entendidas estas como las variantes contemporneas dearticulacin de los intereses de las coaliciones de corporacionestransnacionales con las lites gobernantes en los distintospases. Antes de esto ltimo, hagamos algunas consideracionesen relacin a la distincin adentro/afuera como criterio paradistinguir dos diversas formas de lo poltico4.El par adentro/afuera es relevante, en primer lugar, paradistinguir el lugar lugares- y el tiempo tiempos- dela poltica, de su despliegue y prctica. La poltica desdeadentro del estado se ve obligada a ceirse a los tiempos ymodos de lo instituido; en contraste con ello, la poltica desde

    afuera, desde los entramados comunitarios mismos, tiene laposibilidad de establecer sus modos de asociarse y de hacer, de

    4 Para una discusin un poco ms detallada en relacin a la temtica sobrelas formas de la poltica y la distincin afuera/ adentro, ver Los ritmos delPachakuti (Gutirrez, 2009).

  • 7/23/2019 Palabras Para Tejernos, Resistir y Transformar Zibechi

    46/231

    45

    deliberar sus fines en cada momento y segn los lugares de sudespliegue. Tiene tambin sus propios criterios para establecer

    cundo se acerca a las actividades y prcticas dentro de loinstituido y cundo se aleja de ellas5. La poltica desde losentramados comunitarios, es decir, la poltica desde afuerade lo instituido como legalmente poltico, por lo generaldesborda, impugna y desorganiza los formatos polticosconstruidos para, justamente, inhabilitar sus verstiles ypluriformes posibilidades. Por tal razn, la poltica desde

    afuera no se funda en la universalizacin de propuestas, entanto no busca ocupar el supuesto lugar de enunciacin de louniversal afirmativo que es el sitio del mando poltico estatalpor antonomasia. Ms bien, discute, critica, veta y se esfuerzapor generalizarse, avanzando hacia la fundacin-recuperacinde nuevas fuentes de derecho.

    Ahora bien, en relacin a los otros criterios clasificatorios queconsidero conveniente proponer, distingamos entre tresformasestatales, esto es, tres formas contemporneas de la polticadesde adentro del estado que son, solamente, modalidadesepidrmicamente diferenciables de articulacin de los fines yproyectos de las coaliciones de corporaciones transnacionalescon los poderes instituidos y las lites locales. Estas tresformas de estado se distinguen entre s, nicamente, por elgrado de articulacin con tales intereses y por los formatosprocedimentales que despliegan para asegurar su conservacine intenciones. Son, adems, formas inestables, en permanentecondicin de actualizacin y reconfiguracin.Las tres formas de estado que, sugerimos, pueden ser tiles

    para distinguir aspectos de las polticas implementadas,compartiendo sin embargo, una nica y misma predisposicin

    5 Pablo Mamani ha construido interesantes argumentos para distinguir lo quel llama el afuera-afuera, el afuera-adentro y el adentro-adentro, comocriterios que permiten distinguir variadas formas de la poltica.

  • 7/23/2019 Palabras Para Tejernos, Resistir y Transformar Zibechi

    47/231

    46

    ,

    a viabilizar los proyectos depredadores de las coaliciones -encompetencia- de corporaciones transnacionales son:

    Democracia liberal de mercado Regmenes de seguridad democrtica Estados progresistas de retrica social

    En las democracias liberales de mercado ms antiguas yconsolidadas -que existen en Estados Unidos y en Europa-las instituciones de mediacin y los cuerpos legales decontencin de la disolucin de los vnculos sociales que exigela contempornea acumulacin creciente del capital, han sidosistemticamente erosionadas hasta prcticamente vaciarlasde todo contenido poltico efectivo. La crisis hipotecariadel 2008 y la actual crisis generalizada de deudas estnmostrando a cada vez ms numerosos grupos de indignados y

    asombrados europeos de mltiples nacionalidades, la terriblefalacia del mundo de privilegio que crean habitar. En taleslatitudes, lo ms notable es el modo en que ocurre ese sbitodesplome de una de las certezas polticas fundamentales desus regmenes polticos: la creencia en que ellos s habitabanregmenes democrticos en los cuales, los ciudadanos tenanla capacidad de incidir en los asuntos pblicos mediante

    formatos institucionales. Esta certeza est derrumbndose y,para consuelo de los hombres y mujeres de otros muy diversosentramados comunitarios de esta tierra, los y las europeos,

    jvenes y viejos, estn deliberando sobre esto en sus cientosde acampadas, asambleas, festivales y blogs. En los pasesms ricos, de tradicin democrtica-liberal ms larga, losentramados comunitarios variados, mltiples, con formatos

    contemporneos a veces demasiado laxos, pero an asexistentes- fueron tendencialmente arrinconados a territoriossociales aparentemente sin importancia: clubes deportivos,redes de vecinos con actividades estrictamente privadas,asociaciones para fines de lo ms diverso, etc. En la actualidad,

  • 7/23/2019 Palabras Para Tejernos, Resistir y Transformar Zibechi

    48/231

    47

    cuando colapsa la falaz convocatoria individualizada a incidiren la poltica oficial nicamente mediante el voto, estos

    restos de entramados comunitarios fuertemente golpeados einvisibilizados son los que aparecen en las plazas, se aduean delas calles y despiertan nuevas fuerzas construyendo velozmentenuevos lazos. Por eso la actividad poltica que despliegan nocabe en los formatos liberal-democrticos 6.Los llamados regmenes de seguridad democrtica, quetienen a Colombia a la vanguardia y a Mxico y Guatemala

    siguindole los pasos, son las formas estatales en las que losciudadanos, los hombres y mujeres de carne y hueso, los que

    vivimos de nuestro trabajo, la estamos pasando peor. Nosotroshemos ido siendo desposedos de cualquier tipo de derecho

    y posibilidad poltica institucional desde hace varias dcadas,bajo el manto de un sofisticado dispositivo de peridicasimulacin electoral. Sin embargo, esto se ha acelerado en losltimos aos combinndose con variadas modalidades polticasde terrorismo estatal, paramilitar y corporativo-transnacional7.Distintas y confusas recombinaciones de bandas armadasse han ido apropiando de cada vez ms amplios territorios,despojando a los distintos entramados comunitarios que ahhabitamos, primero de los recursos naturales y de nuestrashistricas prerrogativas a producir alimentos; despus de losderechos mnimos a transitar, a asociarnos, a expresarnos y, ensus aristas ms graves, a vivir. Las acciones de estas variopintas

    6 No es aqu donde cabra una discusin ms detallada sobre lo que sucedeactualmente en Europa; cuestin adems, sobre la que carezco de informacinms completa. Sin embargo, me atrevo a sugerir que en diversos pases de Eu-ropa estn resurgiendo vitalmente nuevos y antiguos formatos de asociacin y

    enlace que, con sus muy variadas peculiaridades, podran tambin ser pensadoscomo entramados comunitarios en marcha. En todo caso, sern ellos quienesdecidirn si esta manera de entender las cosas les puede resultar de algunautilidad.

    7 Para una descripcin del modo como ocurre esto en el caso colombiano ver,Vilma Almendra, en este mismo volumen.

  • 7/23/2019 Palabras Para Tejernos, Resistir y Transformar Zibechi

    49/231

    48

    ,

    recombinaciones de bandas armadas, uniformadas y nouniformadas, institucionales o ilegales, estn generalizando no

    slo un sufrimiento gigantesco en todas partes, sino que, antetodo, aseguran el despojo creciente de toda riqueza al tiempoque pretenden clausurar, sin lograrlo del todo, cualquier atisbode esperanza de renacimiento de las posibilidades de vidadigna y de justicia. Estos regmenes belicosos y arbitrarios,en donde florecen formas perversas de masculinidad ycrueldad, se ensaan contra las mujeres y los nios. Lo trgico

    es que quieren ser, desde la perspectiva de los intereses delas coaliciones de corporaciones transnacionales, el espejodeformado del futuro para todos los pueblos.Finalmente, estn los estados progresistas de retrica social.Esta clase de estados se ha erigido en los ltimos aos comola clausura y estabilizacin de los polifnicos esfuerzos portransformar el orden econmico y poltico impuesto por remedosde democracias liberales de mercado que, en Amrica Latina,

    vivimos durante la ltima dcada del siglo XX. Son formasestatales que se han erigido como contencin y encausamientoa lo todava nologrado por los diversos y mltiples entramadoscomunitarios durante sus momentos de mayor esfuerzo portransformar la vida poltica, econmica y social. Esta formaestatal contempornea vuelve a subordinarse a los intereses delas coaliciones de corporaciones transnacionales, negociandomrgenes de cierta y frgil autonoma relativa; se reviste,adems, de retricas ceidas al par izquierda/derecha -enalgunos casos se aaden tintes multi o pluriculturales. Sinembargo, paulatinamente, casi en todos los pases donde existenregmenes de esta clase las lites gobernantes se comportan

    como autnticas correas de contencin al despliegue de lasaspiraciones y proyectos planteados desde la sociedad llana,desde los pueblos indgenas, desde los mltiples entramadoscomunitarios que habitan esas tierras y que confan en dotarsede maneras satisfactorias de reproducir la vida.

  • 7/23/2019 Palabras Para Tejernos, Resistir y Transformar Zibechi

    50/231

    49

    Algunas distinciones que podran ser provisionalmente tiles

    Para finalizar la reflexin acerca de estas breves pistas paraorientarnos en la comprensin de esta poca turbulenta yllena de peligro, cuando el mundo que hemos conocido parececolapsar (Espaa, Grecia, Portugal, etc.) o cuando lo que nospropusimos conseguir a travs de luchas anteriores amenazaconvertirse en su contrario (Bolivia, Ecuador, Argentina, etc.),quiz convenga comenzar con una distincin sobre lasformas

    de la polticaque vale la pena precisar.Volviendo a centrar la atencin en la contradiccin principalque hemos considerado al comienzo: la establecida entre losmultiformes y variopintos tipos de entramados comunitariosque sostienen la reproduccin de la vida ms all de la merareproduccin del capital y los embates de las coalicionesde corporaciones transnacionales asociados a ejrcitos,

    bandas armadas y lites locales gobernantes de todosniveles; constatando, adems, el declive y vaciamiento de lasinstancias mediadoras institucionales y formales -estadoscon sus jerarquas y tecnocracias, cuerpos legales con susprocedimientos y formatos, etc.-, que se construyeron enlos siglos anteriores; tomando en cuenta pues, todo esto,

    vale la pena reflexionar sobre el curso contemporneo de los

    fenmenos polticos desde el punto de vista, una vez ms, dela emancipacin social.De los argumentos ya esgrimidos es posible derivar unaconclusin: los asuntos polticos ms importantes que a todosnos incumben no se centran ni se dirimen ya al interior de losestados-nacin. Por tal razn, la poltica, la actividad polticaen su sentido ms general, como intervencin individual

    y comn en los asuntos generales para la regulacin de laconvivencia, que a todos incumben, en tanto que a todosafectan, no puede continuar centrndose en el estado o enla ocupacin de cargos pblicos o gubernamentales. Pierde

  • 7/23/2019 Palabras Para Tejernos, Resistir y Transformar Zibechi

    51/231

    50

    ,

    pertinencia y relevancia, entonces, nuevamente, la distincinizquierda/derecha entendida como formas distintas y

    contrastantes de administrar y gestionar el poder estatal; comopar para distinguir entre formas de la poltica. La poltica deizquierda termina parecindose a la de la derecha: se vuelvenprcticamente indistinguibles en sus acciones prcticas y ensus formas de ejercer el mando, aunque se separen en algunosaspectos de su retrica8.La distincin pertinente para discriminar entre las variadas

    formas contemporneas de la poltica y lo poltico parece estarentre los rasgos y contenidos estadocntricos de una forma dela poltica y la autonoma poltica no centrada en el estado dela otra.La poltica estado-cntrica entonces es, por una parte, la quesigue orientando sus acciones, objetivos y comportamientoshacia la ocupacin del poder gubernamental, considerandoque desde ah se puede monopolizar el uso de la voz, de lasdecisiones y de los recursos pblicos. Por otra parte, tambinse practica esta forma de la poltica desde la sociedad, a vecesincluso bajo formatos de movilizacin de gran radicalidad,cuando las acciones de la poblacin llana se orientan ademandar concesiones o a exigir reconocimiento. As, lapoltica estado-cntrica se organiza, casi siempre, con base enla dualidad dinmica donador/demandante. Uno, el estado

    y sus funcionarios, el que supuestamente posee, dispone yrepresenta al conjunto, se coloca como concentracin de laspotencias y riquezas pblicas, estableciendo relaciones de donasimtricas y jerarquizadas que casi siempre pervierten la propia

    8 Sobre el caso de Bolivia, vale la pena consultar el libro colectivo Ahora escuando? Bolivia: cambios y contradicciones,que contiene varios ensayos bien do-cumentados sobre diversas cuestiones polticas pendientes en ese pas y, tam-bien, sobre las lamentables similitudes entre las formas polticas de la derecha

    y las del gobierno de Evo Morales, en relacin a los pasos prcticos implemen-tados desde el aparato de gobierno.

  • 7/23/2019 Palabras Para Tejernos, Resistir y Transformar Zibechi

    52/231

    51

    accin de intercambio as establecida. La poltica estado-cntrica en pocas liberales organiza la relacin gobernante-

    gobernado exhibiendo amplias semejanzas con los formatosde mando obediencia del antiguo vasallaje -con sus juegos dereconocimiento-don, lealtad-obediencia-. Bajo estas pautas sepueden desarrollar una variedad casi infinita de acciones dedemanda-movilizacin-negociacin-atencin segmentada yparcial de la demanda o represin y desconocimiento de ella;que a la larga y en su reiteracin, refuerzan y estabilizan el

    orden de cosas existente.En contraste con ella, la poltica de la autonoma no centradaen el estado es una forma de lo poltico que, en primer lugarreinstala la decisin soberana deliberada en comnsobre mbitosespecficos de la vida colectiva, como eje prctico de suaccin. En tal sentido, invierte, de entrada, el orden de mandodominante y desordena los lugares oficiales e instituidos de laenunciacin que asignan prerrogativas especficas a cada quien.La poltica de la autonoma no centrada en el estado, pues,se coloca siempre, as sea tendencialmente, por encima de laley en tanto que se considera legtima fuente de la legalidadque debe organizar la vida comn y conducir el asuntoprctico general. Con frecuencia y por lo mismo, las accionespolticas colectivas desplegadas desde la autonoma antes queestablecer-prescribir modos de hacer las cosas, diagramanguas morales, criterios de distincin muy generales acerca delo que est bien y lo que no est bien. A partir de ah, apelana la auto-organizacin y a la continuacin de la deliberacin yde la produccin de nuevos formatos de relacionamiento entretodos. Por tal razn, estas acciones se comprometen con un tipo

    de poltica abierta y en permanente y perseverante apertura.No se preocupan de planes de gobierno mejores o distintos,o de propuestas alternativas completas y cerradas; sino quese concentran en asegurar que se pueda seguir deliberando, demanera general y expansiva, sobre lo que en comn conviene

  • 7/23/2019 Palabras Para Tejernos, Resistir y Transformar Zibechi

    53/231

    52

    ,

    llevar a cabo. Una poltica desde la autonoma es, en tal sentido,tambin una poltica fluida desde la inestabilidad intermitente,

    comprometida con el auspicio sistemtico del flujo dinmicode la capaci