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Los orígenes del maoísmo en Colombia:
La Recepción de la Revolución de Nueva
Democracia 1949-1963
Rodolfo Antonio Hernández Ortiz
Universidad Nacional de Colombia
Facultad de Ciencias Humanas, Departamento de Historia
Bogotá, Colombia
2016
Los orígenes del maoísmo en Colombia:
La Recepción de la Revolución de Nueva
Democracia, 1949-1963
Rodolfo Antonio Hernández Ortiz
Tesis o trabajo de investigación presentada como requisito parcial para optar al título de:
Historiador
Director (a):
Ph.D., Mauricio Archila Neira
Línea de Investigación:
Historia política y social
Universidad Nacional de Colombia
Facultad de Ciencias Humanas, Departamentos de Historia
Bogotá, Colombia
2016
(Dedicatoria o lema)
A la militancia del Partido Comunista de Colombia: mujeres y hombres que protagonizaron esta
historia.
Al pueblo que lucha y en medio de la lucha construye nuevos discursos.
A las mujeres que hicieron posible esta Historia.
Agradecimientos
Como todo conocimiento, esta investigación es una construcción colectiva. De allí que los agradecimientos van dirigidos a todas las personas que contribuyeron de forma directa e indirecta a mi formación como historiador y al cumplimiento de los objetivos propuestos. A la militancia maoísta con quien pude discutir esta investigación y a los compañeros y compañeras de la red académica tejida alrededor de ella.
Aunque es una verdad de perogrullo decir que el pregrado me permitió hacer esta investigación, el haber definido el tema de investigación en el segundo semestre, y aprovechar, en la medida de lo posible, cada reseña, ensayo de curso, ponencia a eventos y artículos, me dio la posibilidad de recibir aportes de cada docente y revisores que conocieron los avances.
Agradecer al profesor Eder Maylor Caicedo en cuyo curso teórico “Perspectivas históricas del conflicto armado en Colombia” concebí la idea inicial; al profesor Sergio Ospina Romero quien en su curso de Antropología Histórica orientó la construcción del balance historiográfico; a los profesores Reinaldo Barbosa, Luis Daniel Santana y Fabio Zambrano en cuyos cursos pude trabajar los sucesos de El Davis desde la óptica de la antropología histórica, geografía de la población e historia urbana respectivamente; a la profesora Gisela Cramer quien me aportó una perspectiva latinoamericana en su curso de América IV y a la profesora Diana Andrea Gómez quien me aportó una perceptiva relacional entre China y América latina; al profesor Cesar Ayala quien además de brindarme parte de sus archivos, en su curso me permitió trabajar el planteamiento del problema; al profesor Ricardo Sánchez quien me llamo la atención sobre lo importante que fue para la militancia de los años 60 la teoría de la Revolución de Nueva Democracia; al profesor Antonio Amaya quien también me aportó con su archivo, pero sobre todo, porque me indujo al exhaustivo trabajo heurístico; al profesor Medofilo Medina por sus sugestivas pistas sobre la corriente pro-china en el seno del Partido Comunista de Colombia; a la profesora Ana Clarisa Agüero y los profesores Diego García y Adrián Celentano de la Universidad Nacional de Córdoba, Argentina por la lectura y comentarios al trabajo base del segundo capítulo. Y claro está, agradecerle al profesor Mauricio Archila por su paciente acompañamiento y orientación por más de cuatro años.
Resumen y Abstract IX
Resumen
Esta investigación analizó la “Recepción” del modelo de revolución de nueva democracia china hecha por el Partido Comunista de Colombia durante 1949-1963. Se buscó comprender cómo la “Recepción” de dicho modelo aportó a la diferenciación de la izquierda comunista y al surgimiento del nuevo discurso en donde todos los grupos maoísta ubican su génesis. Para su realización se asumió el concepto de “Recepción” propuesto por Horacio Tarcus, entendida como el proceso global de producción y circulación, interpretación, apropiación o rechazo de las ideas. La investigación se organizó en cuatro capítulos en consonancia con la propuesta metodológica para estudiar la “Recepción”: Producción, difusión, recepción y apropiación. El trabajo heurístico permitió recuperar los archivos internos del Partido en versión digital y toda la producción editorial en relación con la revolución china. Esos materiales se constituyeron en fuentes para la investigación, a las cuales se le sumaron la prensa del Partido, las entrevistas a militantes del periodo histórico, los diarios de viajeros y las crónicas de la violencia. Dentro de los principales hallazgos se pueden enumerar: 1) La “Recepción” permitió en el seno del Partido Comunista fortalecer las posiciones marxistas leninistas que tenían a Mao Tse-tung como referente internacional; 2) El fortalecimiento de esas posiciones determino el proceso de formación del discurso maoísta en el seno de Partido Comunista de Colombia; 3) La “Recepción” se estableció como el instrumento a través del cual la condición externa, la experiencia china de una revolución triunfante y la misma ruptura chino-soviética, se constituyó en una condición interna, haciendo más compleja la dinámica partidaria; 4) La posición asumida por el Partido en medio del cisma comunista significó la expulsión de las “tesis maoístas”; y 5) El concepto “maoísmo” fue convertido en sinónimo de antimarxismo, mucho antes de que un partido que se reivindicara como maoísta. Es decir, antes que el maoísmo, surgió primero el anti-maoísmo en Colombia.
Palabras clave:
Recepción, Maoísmo, Nuevo discurso, Modelo revolucionario chino
Resumen y Abstract XI
Abstract
This research examined the "Reception" model of revolution of new Chinese democracy made by the Communist Party of Colombia during 1949-1963. He sought to establish how the "reception" of the model contributed to the differentiation of the communist left and the emergence of new discourse where all the Maoist groups, the ML field, locate their genesis. For its realization the concept of " Reception" proposed by Horacio Tarcus, understood as the overall process of production and circulation, interpretation, appropriation or rejection of ideas was assumed. The research was organized in four chapters in line with the proposed methodology to study the "Welcome": Production, distribution, reception and appropriation. Heuristic work allowed to recover the internal files of the Party in digital version and all publishing in relation to the Chinese revolution. These materials were formed in sources for research, which was joined by the Party press, interviews with members of the historical period, the daily traveler and chronic violence. Among the main findings can be listed: 1) The "Welcome" allowed within the Communist Party Marxist Leninist strengthen positions that had to Mao Tse-Tueng as an international benchmark;2) The strengthening of these positions determine the formation of the Maoist discourse within the Communist Party of Colombia; 3) The "Welcome" was established as the instrument through which the external condition, the Chinese experience of a successful revolution and the same Sino-Soviet split, was established in an internal condition, making the party more complex dynamic; 4) The position taken by the Communist Party amidst the schism meant the expulsion of the "Maoist thesis"; And 5) The "Maoism" concept was become synonymous with anti-Marxism, long before a match that was vindicate as Maoist. Before Maoism, first came the anti-Maoism in Colombia.
Keywords:
Reception, Maoism, New speech, Chinese revolutionary model
Contenido
(Dedicatoria o lema) V
Agradecimientos VII
Resumen IX
Palabras clave: IX
Abstract XI
Keywords: XI
Contenido XIII
Abreviaturas XV
Introducción 17
1. El momento de la producción. Revolución de Nueva Democracia: Modelo revolucionario chino para América Latina 37
Introducción 37 1.1 Modelo Chino para el Tercer Mundo y los propósitos de difundirlo 40 1.2 Diplomacia Popular: La estrategia china para difundir la Revolución de Nueva Democracia en América Latina 48 1.3 La tendencia pro-china en América Latina 55 Conclusiones 60
2. El momento de la difusión Estudiando las lecciones del Partido Comunista Chino 65 Introducción 65 2.1 La revolución china y la prensa del Partido Comunista de Colombia 67 2.2 El inicio de la labor editorial: más allá de un debate historiográfico 73 2.3 El interés por el carácter de la revolución 76 2.4 La china representada en los diarios de viajeros 77 2.5 La Nueva Democracia China: El primer libro de Mao Tse-tung editado en Colombia 81 Conclusiones 86
3. El momento de la recepción El Davis: La zona liberada 89 Introducción 90
XIV Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
3.1 Inicio de la lucha ideológica y política en el seno del PCC, 1940-1956 91 3.2 Respuesta comunista a la Violencia en el Sur del Tolima 95 3.3 La zona liberada de El Davis, 1951-1953 101 Conclusiones 111
4. El momento de la apropiación Depositarios del pensamiento del camarada Mao Tse-tung 113
Introducción 113 4.1 Distanciamiento del PCC y el PCCh 117 4.2 Continuidad de la lucha ideológica y política en el seno del PCC 126 4.3 La tendencia pro-china y la división en el seno del PCC 134 4.4 Discurso maoísta y el devenir de la tendencia pro-china 149 Conclusiones 164
5. Conclusión final Maoísmo y anti maoísmo dos aportes del PCC 167
6. Anexo 1 (La biblioteca ideal) 175
7. Bibliografía 181 Archivo Prensa del Partido Comunista de Colombia 181 Archivo del Partido Comunista de Colombia 184 Archivo Partido Comunista de Colombia - marxista leninista 187 Crónica sobre El Davis 187 Entrevistas 188 Historia de maoísmo en Colombia 188 Tesis de investigación. 189 Prensa del Partido Comunista de China 190 Historia de la revolución china 192 Relaciones entre China y América Latina 193 Referencia General 194
Abreviaturas
ARCO Acción Revolucionaria de Colombia
CIMREC Comité de Integración de los Movimientos Revolucionarios Colombianos
ELN Ejército de Liberación Nacional
EPL Ejército Popular de Liberación
FARC Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia
FPL Frente Patriótico de Liberación
FUAR Frente Unido de Acción Revolucionaria GCR Grupo Comunista Revolucionario
JUCO Juventud Comunista
ML Marxista leninista MOEC Movimiento Obrero Estudiantil Campesino
MOIR Movimiento Obrero Independiente Revolucionario
ONU Organización de las Naciones Unidas
PC ML Partido Comunista de Colombia - marxista leninista
PCC Partido Comunista de Colombia
PCCh Partido Comunista de China
PCC-M Partido Comunista de Colombia - Maoísta
PCUS Partido Comunista de la Unión Soviética
PRS Partido Revolucionario Socialista
RND Revolución de Nueva Democracia
SIC Servicio de Inteligencia Colombiano
UOC Unión Obrera Comunista
USIA Agencia de Información de los Estados Unidos
Introducción
El interés del Partido Comunista de Colombia-PCC por la revolución china se ha logrado
datar desde de 1938 en el periódico Tierra, con el artículo titulado “El imperialismo
Japonés y la Revolución China”1. Entre 1938 y 1949 el PCC hizo un seguimiento
sincrónico a los sucesos de la Revolución de Nueva Democracia-RDN china en sus diarios
de circulación nacional: Tierra, Diario Popular y Vanguardia del Pueblo. En ese mismo
periodo aparecían artículos de Mao en semanarios como Sábado2 y se editó y distribuyó
entre la militancia colombiana el que sería el primer texto de Mao Tse-tung, cuya fecha se
registra en 19483. Se trata de Fundamentos de la Revolución China4.
Mientras esto pasaba en Colombia, los sucesos de la revolución en China (1921-1949)
fueron forjando la dirección de Mao Tse-tung que se concretó el 6 de enero de 1935,
cuando el Buró Político ampliado, reunido en Tsunyi, cambió la composición del
organismo dirigente central, estableciendo una dirección encabezada por Mao Tse-tung.
La antesala inmediata había sido el periodo de 1927 a 1935 donde el Partido vivió la fase
campesina, en este tiempo se forjó “el pensamiento Mao Tse-tung” y la experiencia allí
desarrollada se constituyó en pieza clave y fundante para el desarrollo de la RND en
China. Pero antes el Partido Comunista de China-PCCh ya había transitado en sus
1 Sin nombre. “El imperialismo Japonés y la Revolución China”. Tierra, Bogotá: marzo, 1938, 23. 2 Ana Strong Lousie, “El Pensamiento vivo de Mao Tse-tung”. Sábado, Bogotá, 11 de junio, 1949.6. y Israel Espstein, “Los jefes de la China Roja”. Sábado, Bogotá, 12 de febrero, 1949.13. 3 Se calcula la fecha de 1948 dado que el texto que se reproduce es un escrito de Mao conocido entre sus obras escogidas como La situación actual y nuestras tareas, escrito el 25 de diciembre de 1947 y en la nota editorial se dice « (...) todas las prevenciones contempladas en este material escrito en diciembre del año pasado». 4 Mao Tse-tung, Fundamentos de la Revolución China (Bogotá: Ediciones Vanguardia, s.f.).
18 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
primeros 6 años por una etapa ortodoxa donde intentó hacer la revolución emulando la vía
soviética.
De 1935 a 1949 la tarea de Mao fue desarrollar en la práctica los planteamientos de la
Revolución de Nueva Democracia consistentes en crear bases de apoyo en las zonas
rurales, utilizar el campo para rodear las ciudades y finalmente tomarlas por la vía armada;
a la par del desarrollo práctico de la revolución Mao Tse-tung fue sintetizando su
experiencia en obras que concentraba el modelo revolucionario chino: Análisis de las
clases de la sociedad china (1926), Informe sobre una investigación del movimiento
campesino en Junan (1927), ¿Por qué puede existir el poder rojo en china? (1928), La
lucha en las montañas Chingkang (1928), La Revolución China y el Partido Comunista de
China (1939), Sobre la Nueva Democracia (1940), Sobre el gobierno de coalición (1945)
y Sobre la dictadura democrática popular (1949). Durante dicho periodo también se
consolidó la clara intención política de los comunistas chinos por hacer de su experiencia
un modelo revolucionario para el Tercer Mundo.
El triunfo de la revolución china bajo la dirección de Mao Tse-tung en Octubre de 1949,
tuvo un eco relevante en la izquierda colombiana, debido a la difusión que hiciera el PCC.
Enterados, el pleno del Comité Central saludaba «calurosamente las grandes victorias, de
alcance histórico universal, del ejército popular de China, que ha hecho morder el polvo a
los sirvientes del imperialismo»5, así mismo llamaba la atención a todos los comunistas
para que «estudien y asimilen las formidables lecciones del Partido Comunista Chino,
artífice de la victoria»6. Y no era para menos, en plena Guerra Fría el triunfo de la
revolución china era un avance del marxismo leninismo.
Entre 1949 y 1963 el PCC fue responsable de la difusión de 36 artículos de libros
relacionados con la experiencia del comunismo chino y, particularmente, con la de su
máximo líder Mao Tse-tung. De estos, 35 son responsabilidad directa del Partido
Comunista de Colombia a través de sus empresas editoriales: Ediciones Centauro,
Ediciones Paz y Socialismo y Ediciones Suramérica. Solo en el año 1960 se registró el 42
5 Comité Central del Partido Comunista de Colombia, 87. 6 Comité Central del Partido Comunista de Colombia, 87.
Introducción 19
% de la producción. A estas cifras se le pueden sumar los 10 artículos y 4 reseñas que
aparecen en la revista del Partido Documentos Políticos, desde 1957 a 1960, y los 21
artículos en el periódico Voz de la Democracia desde 1957 a 1963, todo ello proclive a la
experiencia del comunismo chino. Así lo expresa Fred Kaim, quien fuera militante del
PCC en esa época: «Puesto que el principal enemigo de los EEUU era la República
Popular China, defender a China, difundir a Mao, era una de las más importantes armas
anti-imperialistas»7.
Esa ingente tarea de dar a conocer la experiencia de una revolución triunfante la realizaba
el PCC en medio de un periodo histórico de múltiples retos para los comunistas
colombianos. El Partido se encontraba en el periodo de la Reconstrucción leninista
intentando superar lo que ellos denominaron “el revisionismo Duranista” y todavía no se
habían recuperado de la profunda división que lo había debilitado notoriamente en el V
Congreso de 1947, conocido también como Congreso de Bucaramanga.
Los desafíos de la revolución en Colombia eran inmensos en medio de la agitada
condición política nacional: La violencia desatada contra las bases campesinas de
comunistas y liberales, el gobierno militar de Rojas Pinilla y el inicio de Frente Nacional.
Era un panorama complejo, violencia generalizada, sociedad dividida, derrumbe parcial
del Estado, y paradójicamente, crecimiento económico. La época de la Violencia, o mejor
dicho, la primera y la segunda guerra8, de 1949 a 1953 y de 1954 a 1956, había sido la
antesala del desarrollismo en Colombia.
En el contexto internacional y ante el triunfo de la revolución china, la administración del
presidente Truman de los Estados Unidos orientaba generalizar la teoría de la contención y
proponía reforzar los sistemas de alianzas pro-occidentales y cuadruplicar los gastos en
defensa. « Estados Unidos crea la SEATO, la Organización del Tratado del Sudeste de
Asia, para contener a los chinos; crea una alianza con Australia y Nueva Zelanda que se
llamó el ANSUS; desarrolla la séptima flota y, sobre todo, desarrolla lo que en su
7 Entrevista a Kaim, Fred, Bogotá, 17 de mayo 2016. 8 Guzmán Campos, Germán, Orlando Fals, Borda y Eduardo Umaña Luna, La violencia en Colombia. Estudio de un proceso social (Bogotá: Universidad Nacional, coedición con Ediciones Tercer Mundo, 1962).
20 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
momento se llamaron "los portaviones que no se podían hundir", que eran Taiwan y Japón
como puntos locales de contención de China»9.
Esta vez la Guerra Fría tenía asidero en las elites colombianas. En Colombia no solo se
envió tropas para combatir a los comunistas en la Guerra de Corea, sino que con el acto
legislativo 06 del 7 de septiembre de 1954 se ilegalizaba el Partido Comunista. Así
conservadores, liberales y militares habían decretado que «El comunismo y demás partidos
internacionales no podrán actuar en Colombia como organizaciones políticas» 10 .
En un ambiente de guerra generalizada contra los comunistas, de completa clandestinidad
en las ciudades, y de resistencia armada en el campo, surgió en el seno del PCC debates
sobre la vía de la revolución en Colombia. Esto determinó que un grupo de militantes se
inclinará por el desarrollo de la guerra en las zonas campesinas, superando la orientación
de “Autodefensa” dada por el Partido a sus bases. Esta posición que fue denominada como
“extremo izquierdista”, ya tenía sus gérmenes en la propia dinámica del Partido años atrás,
hasta el punto de que el Sexto Congreso se pronunció contra ellas y analizaron que tenían
diverso origen, sin embargo plantearon que «la causa principal radicaba en una apreciación
equivocada del levantamiento popular del 9 de abril de 1948»11.
Durante el mismo periodo de 1949 a 1963 se había hecho más intensa la lucha de líneas al
interior del PCC. El proceso de “Recepción” del modelo revolucionario chino era
prácticamente la continuidad de la reconstrucción leninista emprendida por el Partido
desde 1945. Pero con el devenir del debate interno, la álgida situación política nacional y
la agudización del debate internacional en el seno del comunismo, sobre todo a partir de
1960, la militancia del PCC se alineó grosso modo en dos grupos con dos maneras
diferentes de pensar la solución de los problemas nacionales, pero que por la cultura
política de sectarismo y dogmatismo terminaron en dos posiciones antagónicas con mutuas
descalificaciones por reivindicar cual era la más revolucionaria.
9 Eugenio Anguiano Roch, “La República Popular China y su incidencia en el mundo”, Estudios de Asia y África Vol. 20, No. 1 (63) (1985):110. 10 Pizarro, Eduardo, “Las FARC de la autodefensa a la combinación de todas las formas de lucha” (Bogotá: Tercer Mundo Editores, IEPRI, 1991), 104. 11 Resolución del VI Congreso del Partido Comunista de Colombia. Agosto de 1949.
Introducción 21
En el contexto internacional el debate no era menos intenso en el seno del comunismo.
Desde 1956 las diferencias que ya existían entre el PCCh y el PCUS se acentúan; a la
fecha los comunistas chinos se han sentido progresivamente desilusionados por la
dirección de Kruschev al frente del comunismo internacional. Después de 1960 las
relaciones entre el PCCh y el PCUS pasan a la ruptura, lo que estaba en debate era la
diferencia sobre estrategia global, sobre relaciones dentro del Bloque Comunista, sobre la
paz y el alcance de la des-estalización, sobre la permisible diversidad de métodos a
emplear para la construcción del socialismo y el comunismo, y sobre la cuestión
fundamental de la jefatura del campo socialista.
En ese contexto los líderes chinos recalcaron que su experiencia de la revolución china,
que era entendida como una aplicación creadora del marxismo leninismo a las condiciones
concretas en China, se podía constituir en un modelo para el Tercer Mundo y ser
alternativa al llamado “revisionismo”. Así, América Latina y por ende Colombia, se
convirtió en un nuevo campo de batalla entre China y la Unión Soviética en su lucha por
utilizar las redes del movimiento comunista internacional para ganar adherentes. Esta
situación fue para los chinos más intensa después del rompimiento de relaciones
diplomáticas con Cuba, pues no solo su modelo era alternativa al “revisionismo soviético”,
sino también al “foquismo castrista” que brillaba con luz propia desde 1959.
Necesariamente el debate internacional del comunismo iba a tener repercusiones en el seno
del Partido Comunista. Comenta Fred Kaim: «Cuando el PC colombiano fue regañado por
los soviéticos por inclinarse hacia los chinos, entonces revirtieron el proceso y comenzaron
-solapadamente- a hacer anti-chinismo»12. El PCC termina alineado con las tesis del
PCUS, y la política de publicaciones y la simpatía hacia el pensamiento de Mao Tse-tung
se cierra con el 29 pleno del Comité Central, en octubre de 1963, cuando el Partido
Comunista de Colombia se apartó completamente de los comunistas chinos y plantearon
12 Entrevista a Kaim, Fred, Bogotá, 17 de mayo 2016.
22 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
que no volverían a publicar sus ideas por ser contrarias a su línea política13. A la par de
esto, la lucha de líneas en el seno del PCC se intensifica hasta provocar la división del
Partido. Desde el lado oficial del PCC se emprendió una campaña de aislamiento y
expulsiones a la militancia que defendía más firmemente los principios marxistas
leninistas apoyados a nivel internacional en las ideas y la figura de Mao Tse-tung; el PCC
optó por resolver la lucha interna con medidas administrativas de expulsiones masivas,
haciéndolas pasar por problemas disciplinarios y no debates ideológicos y políticos. Por el
otro lado, las posiciones marxistas leninistas que empezaban a diferenciarse con la
posición oficial del Partido, la «facción maoísta» que se dio en el seno del PCC14, se dejó
cautivar por la política china que «alentaba a los miembros pro-chinos a que abandonaran
los Partidos Comunistas que querían seguir una línea pro soviética»15. El resultado final: la
división de la izquierda comunista en Colombia y el surgimiento de un nuevo discurso.
Entonces, la presente investigación, con el título “Los orígenes del maoísmo en Colombia”
y subtitulo “la recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963” se está
planteando un problema histórico: ¿cuándo, en qué condiciones y sobre todo, cómo, se
conformó el discurso político donde los grupos maoístas del “campo ML” 16 ubican su
génesis?; esto en esencia es un problema del conocimiento: ¿cómo se interpela un
conocimiento producido en otro contexto?, es decir, ¿cómo difundir y apropiar una
experiencia indirecta?. La investigación nos remite a un problema historiográfico. ¿Con
qué herramientas analíticas se ha examinado dicho proceso?
13 Partido Comunista de Colombia, “Resolución sobre las divergencias en el movimiento comunista y obrero mundial”, La situación política nacional y la táctica del Partido Comunista. (Bogotá: Ediciones Colombia Nueva, 1963). 71-72. 14 La expresión es de un dirigente del PCC quien reconoce la configuración de una corriente política maoísta en el seno del Partido. Ver Álvaro Oviedo, “maoísmo y Trotskismo en Colombia”, Estudios marxistas Nº 13 (1977): 72. 15 Marisela Connelly, “La influencia del pensamiento de Mao en América Latina”, Estudios de Asia y África Vol. 18, Nº 2 (1983): 215. 16 El término hace referencia a todas las organizaciones que tuvieron que ver directa o indirectamente con el Partido Comunista de Colombia marxista leninista (PC de C-ML), y se caracterizan, al menos hasta los años ochenta, por una rígida ortodoxia maoísta. Ver Mauricio Archila, “El maoísmo en Colombia: la enfermedad juvenil del marxismo-leninismo”, Controversia No 190 (2008):148. Esto deja por fuera al Moir y las diferentes tendencias que de él se han desprendido.
Introducción 23
En relación con la historiografía no son muchos los trabajos que aborden como objeto de
estudio al maoísmo en Colombia, aunque en los años que transcurren de este siglo, el
interés por este campo de estudio ha aumentado. En su orden de aparición está el trabajo
de Frank Molano en el 2004, “El imaginario maoísta (1965-1982). Como mentalidad
revolucionaria en la izquierda Colombiana”; Mauricio Neira Archila en el 2008, “El
maoísmo en Colombia: la enfermedad juvenil del marxismo-leninismo”, José Abelardo
Díaz Jaramillo en el 2010, “El movimiento obrero estudiantil campesino 7 de enero y los
orígenes de la nueva izquierda en Colombia 1959 – 1969”, repite Frank Molano en el
2011, “La izquierda maoísta colombiana: organizaciones y mentalidades en la década de
1970”; Miguel Ángel Urrego Ardila en el 2012, “Partido del Trabajo de Colombia (PTC)
Un capítulo de la historia del maoísmo, 1970-1982”; Esteban Morales Estrada en el 2014,
“El MOIR y su política de “Los Pies Descalzos” como materialización de la ideología
maoísta en Colombia, 1969-1990”; el recién publicado de Miguel Ángel Urrego en el
2016, “Historia del maoísmo en Colombia. Del MOEC al MOIR/PTC (M), 1959-2015”;
por último el trabajo en construcción de Aldo García, “Historia de las ideas y experiencias
maoístas en Colombia 1960 - 2000”. Importante recordar tres significativos trabajos del
siglo XX, el de Fabio López De La Roche que publicó en 1994 “Izquierda Y Cultura
Política: ¿Oposición Alternativa?”, Álvaro Villarraga y Nelson Plazas, “Para reconstruir
los sueños: una historia del EPL” en 1994, y el ya clásico primer intento por sistematizar
la trayectoria de la izquierda colombiana, “¿De dónde venimos, hacia donde vamos, hacia
dónde debemos ir?” del grupo maoísta Proletarización escrito en 1975, que por su
abundante material documental se constituye, también, en una fuente primaria.
La mayoría de los trabajos relacionan los orígenes del maoísmo con la ruptura chino-
soviética, la división del PCC y la “reconstitución” del Partido Comunista de Colombia
marxista leninista, PC de C-ML, en su X congreso de 1965. Quien se ocupa de dar una
explicación a la configuración de esta nueva corriente política de la Nueva Izquierda
Colombiana es Frank Molano.
Plantea Molano que el maoísmo como imaginario revolucionario fue el resultado de una
fusión entre las tradiciones y mentalidades políticas colombianas y la asimilación de las
ideas del líder comunista chino Mao Tse-tung y las tesis políticas e ideológicas del Partido
24 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
Comunista de China, particularmente las de la Revolución Cultural. Esto protagonizado
por núcleos de jóvenes intelectuales y dirigentes sociales de la década del 1960 y 197017.
Dicha fusión dice Molano, trajo implícito que en Colombia el maoísmo tuvo elementos
contradictorios: «significó ruptura con el pensamiento político de la izquierda,
promoviendo una nueva sensibilidad social entre núcleos revolucionarios llevándolos al
compromiso con la realidad de los sectores populares (...) [y] también significó una
continuidad de las mentalidades heredadas del pasado colonial: el sectarismo, los “odios
heredados”, el dogmatismo y la “mentalidad del colonizado”»18; completa su explicación
diciendo que «el conflicto chino-soviético, no fue solo un reflejo mecanicista de lo externo en
lo interno, sino una manera en que se enfrentaron de forma dramática, dos maneras de pensar la
solución de los problemas nacionales, en el seno del Partido Comunista desde fines de los años
50 y que culminaría con una gran ruptura a mediados de los años 60»19. El cuestionamiento a
dicha explicación es que no explica cómo se dio esa “fusión” y esa “asimilación”.
En relación con la “recepción” del maoísmo, el único trabajo que la aborda, en un solo
capitulo, es el de Frank Molano cuando subtitula la primera parte como: “La recepción
inicial de las ideas de Mao Tse-tung 1930-1963”. Por su brevedad y falta de unidad
temática, realmente no hace una historia de la recepción. En el trabajo solo se menciona la
traducción y la edición de dos textos de Mao como reflejo de «el entusiasmo que produjo entre
sectores del partido sus ideas y la experiencia china»20. El primero es Sobre la Nueva
Democracia traducido por Gilberto Vieira y el segundo es la Dictadura Democrática Popular
traducido por Anteo Quimbaya. Frente a este último la fuente citada no respalda la afirmación
de que el texto haya ingresado por el puerto de Buenaventura, en una remesa clandestina.
Siendo el análisis de la lucha interna en el PCC el verdadero centro de ese capítulo de Molano,
es interesante el planteamiento dejado por él, a manera de hipótesis: «Es posible que el triunfo
de la revolución china influyera en varios sectores del PCC, que empiezan a exigir de la
17 Frank Molano Camargo, El imaginario maoísta (1965-1982). Como mentalidad revolucionaria en la izquierda Colombiana (Tesis de Maestría de Historia, Universidad Nacional de Colombia, 2004) 1. 18 Molano, 1. 19 Molano, 26. 20 Molano, 7.
Introducción 25
dirección una posición más clara frente a la lucha armada, pasar a la clandestinidad y preparar
el Partido para un largo período de guerra prolongada»21. La presente investigación asumió
dicha hipótesis, como también asumió el reto de dotar de base empírica la afirmación sobre
la “recepción” del Comunismo chino, hecha por Molano en el sentido de que: «Al hacer
una revisión del tipo de literatura y opiniones expresadas en la Prensa del Partido se encuentra
que a partir de 1963, dejan de publicarse artículos del PCCh y su espacio es ocupado por la
literatura soviética»22.
Desde el punto de vista empírico no es mucho lo que las fuentes puedan decir de como las
organizaciones maoístas entienden el proceso de “Recepción”. En una cartilla de
formación de militancia maoísta se leen afirmaciones, varias sin sustento y con claras
imprecisiones históricas. Allí se dice:
«Existe varias versiones de cómo llegó el maoísmo a Colombia, una de ellas afirma que
llegó en los años 30 a través de un buque por Buenaventura en donde llegaron muchos
libros de Mao y fue así como comenzó a conocerse el maoísmo. Otros afirman que sólo fue
hacia los años 40 cuando se conoció el maoísmo con los guerrilleros del llano, se dice que
a través de José Alvear Restrepo cuando se fue al Llano. Por otro lado el PCC hacia los
años 50s, después del triunfo de la revolución de Nueva Democracia en China, difundió el
maoísmo, por medio de sus cuadernos políticos en donde introducían algún texto de Mao
en cada edición. En 1955 apareció un libro sobre la Nueva Democracia adiado por el PCC,
era traducciones de los textos de Mao Tse-tung, que venían vía Vietnam y Francia,
posteriormente está el texto de Gilberto Viera sobre la Nueva Democracia, también la
contradicción y sobre la Práctica. Posteriormente también se difundió el maoísmo a través
de Pedro Vásquez Rendón, fundador del PCC-ML»23.
De todo lo dicho hasta aquí se concluye la pregunta que guía esta investigación: ¿Cómo la
“Recepción” del modelo revolucionario chino hecha por el Partido Comunista de
Colombia durante 1949-1963 aportó a la diferenciación de la izquierda comunista y al
surgimiento de un nuevo discurso?
21 Molano, 8. 22 Molano, 16. 23 PCC-M. “Cartilla de instrucción política”. Historia del maoísmo en Colombia, 2010.
26 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
Pensarse esa pregunta en el marco de la historia del maoísmo en Colombia, trae a colación
los planteamientos del profesor Medófilo Medina en su trabajo sobre La historiografía
política del siglo XX en Colombia, cuando decía: «Aunque no resulta desdeñable lo hasta
ahora logrado por la disciplina histórica en la comprensión de las terceras fuerzas, no
resulta menos cierto la existencia de objetos de estudio aún no explorados. Entre estos
últimos están las organizaciones y partidos de orientación trotskista, o maoísta. Su
debilidad numérica y su fragmentación organizativa no deberían hacer perder de vista que
representaron el canal de expresión política de estudiantes ávidos de participación, o de
franjas radicalizadas del movimiento sindical y de sectores informales»24. Veinte y dos
años después de este balance, la situación de los estudios sobre maoísmo en Colombia no
ha cambiado significativamente, aunque como ya se dijo, en el presente siglo hay un
interés creciente por este objeto de investigación.
Es así que la importancia de este trabajo radica en que al estudiar la “Recepción” hecha
por el PCC, se estaría aportando no solo al estudio de los terceros partidos, sino a llenar el
vacío histórico y discutir los acuerdos historiográficos en torno a los orígenes del maoísmo
en Colombia.
Con esa expectativa, y por esa apuesta, la investigación se realiza a partir del concepto de
“Recepción” planteado por Horacio Tarcus25 el cual se «remite a un proceso mayor de
producción/difusión intelectual donde es necesario discriminar (analíticamente) a
productores, difusores, receptores y consumidores de las ideas»26. Dicho concepto aporta
una visión teórica y metodológica para el desarrollo de esta investigación.
Desde el punto de vista teórico la “Recepción” es entendida como el proceso global de
producción y circulación, interpretación, apropiación o rechazo de las ideas. Los
planteamientos de Tarcus dan claridad a la hora de asumir la “Recepción”. Lo primero en
24 Medófilo Medina, “La historiografía política del siglo XX en Colombia”, La historia al final del milenio: ensayos de historiografía colombiana y latinoamericana, Vol. 1, ed. Universidad Nacional de Colombia (Bogotá: Universidad Nacional de Colombia, 1994) 457. 25 Horacio Tarcus, La historia intelectual y la problemática de la recepción. Introducción del libro Marx en la Argentina. Sus primeros lectores obreros, intelectuales y científicos (1871-1910) (Buenos Aires: Siglo XXI, 2007). 26 Tarcus, 14.
Introducción 27
que hace énfasis es que esta investigación no se propone valorar si la militancia del PCC
leyó “correcta” o “incorrectamente” a Mao y la revolución china, «sino establecer cómo lo
leyeron y por qué lo leyeron »27y sobre todo que interpretación hicieron de esas lecturas.
En ese sentido tampoco es el propósito del investigador considerarse el poseedor de la
interpretación más ajustada a los textos de Mao, máximo cuando se debe reconocer que se
cuenta con la ventaja de la perspectiva histórica. Al respecto dice Tarcus: «conocemos
“efectos” histórico-políticos de la obra de Marx que ellos necesariamente
desconocieron»28. Aunque tampoco podemos leerlo por fuera de la historia de sus
“efectos” histórico- políticos. Tenemos a nuestro favor más de medio siglo de lecturas de
Mao y la experiencia del comunismo chino que pueden inspirar la aquí realizada, y además
está el “corpus interpretativo rico y complejo” al que no tuvo acceso la militancia de los
años 50 y 60.
Otra idea a la que Tarcus presta atención es a la labor interpretativa que todo lector hace:
«Todos, inevitablemente, interpretamos cuando leemos: la lectura es en sí misma un acto
de interpretación»29. Esto implica que el texto no existe por fuera de la historia de sus
interpretaciones, y en ese sentido lo que aborda esta investigación es una de varias
interpretaciones que se han hecho o que se deben hacer del modelo revolucionario chino.
La obra culmen de Mao, la Nueva Democracia, fue realizada, actualizada, y recreada con
cada lectura que de ella hiciera la militancia marxista leninista en el seno del Partido
Comunista de Colombia. De dichas lecturas e interpretaciones surgió el nuevo discurso en
el seno de la izquierda comunista, pero no fue el único, ni lo será, por lo que la
investigación está abierta. Afortunadamente para la labor del historiador, los militantes
marxista leninista no solo leyeron e interpretaron los textos, sino que también
sistematizaron sus interpretaciones volcándolas en la escritura.
En relación a lo metodológico, Horacio Tarcus propone que dentro del proceso global de
producción y circulación de las ideas, se pueden distinguir distintos momentos: 1) la
27 Tarcus, 19. 28 Tarcus, 20. 29 Tarcus, 20.
28 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
producción; 2) la difusión; 3) la recepción; 4) la apropiación. Esta tipología permitió
ordenar la investigación y el documento final. En ese sentido el primer capítulo se ocupó
del momento de la producción. Aquí se indaga, a partir de una profunda revisión
historiográfica de la revolución china, la clara intención política del Partido Comunista de
China por hacer de su experiencia revolucionaria un modelo para el Tercer Mundo. Se
considera que así se inicia el largo proceso de la “recepción” del modelo revolucionario
chino asumido por el Partido Comunista de Colombia, por lo que el capítulo está dedicado
al proceso de producción del modelo de la Revolución de Nueva Democracia. Lo que se
desarrolla en el capítulo es «El momento de la producción de una teoría, llevado a cabo
por intelectuales conceptivos»30. Una primera versión de lo expuesto en este capítulo está
en prensa, próximo a ser publicado con el título: “Revolución de Nueva Democracia:
Modelo revolucionario chino para América Latina”31.
En el capítulo se hace un primer acercamiento al propósito chino de difundir su modelo
revolucionario, dejando entrever aquellos aspectos que ellos han identificado como parte
del modelo. En segunda instancia se analiza la diplomacia popular como estrategia para
difundir dicho modelo, y en la última parte se estudia uno de los logros de dicha estrategia:
El surgimiento de una tendencia pro-china en América Latina.
El segundo capítulo se ocupa del momento de la difusión. Esta parte está dedicada al
proceso de difusión del modelo de la Revolución de Nueva Democracia, a través de su
edición en libros, folletos, periódicos, revistas, y reseñas; también en cursos, conferencias,
traducciones y diarios de viajeros. Lo que aborda el capítulo es «la difusión de un cuerpo
de ideas a un campo de producción diverso del original»32. El capítulo se construyó a
partir de una indagación más amplia de la difusión del comunismo chino realizada como
antesala a esta investigación y presentada en “Las VIII Jornadas de Historia de las
30Tarcus, 15. 31 El artículo hace parte del número XX de la revista Goliardos. 32 Tarcus, 16.
Introducción 29
Izquierdas”33, bajo el título: “La difusión del comunismo chino en Colombia 1949-1963:
El aporte editorial del Partido Comunista de Colombia-PCC” 34.
El capítulo aborda en un primer ítem la historia sincrónica y diacrónica de la revolución
china que es registrada en la prensa del Partido Comunista de Colombia, más
concretamente el diario Tierra. El segundo ítem corresponde al inicio de la labor editorial,
donde se aborda el debate historiográfico sobre el primer texto de Mao editado en
Colombia, haciendo énfasis en como la revolución china suscitó un conflicto con el
paradigma de la vía al poder en la militancia del PCC. La tercera parte aborda el interés
por el carácter de la revolución que el Partido expresa a la hora de publicar las obras de
Mao, la escogencia de los temas, los énfasis y hasta los títulos. En el ítem cuatro se
muestran los frutos de la diplomacia popular china tras la visita de intelectuales, algunos
de ellos comunistas, que después de conocer de primera mano lo que estaba sucediendo en
China publicaron diarios de viajeros los cuales se convirtieron en herramientas para la
difusión del proceso revolucionario chino. Cierra este capítulo el primer libro de Mao Tse-
tung editado en Colombia: La Nueva Democracia China. Allí la exposición se centra en
identificar el significado que para los militantes del Partido Comunista de Colombia tenía
la obra publicada.
El trabajo de archivo fue determinante para la realización del capítulo. A partir de la
investigación se logró reconstruir la labor editorial y de prensa del PCC, recopilando casi
todos los libros publicados sobre la revolución china, para lo cual se acudió a bibliotecas
públicas, bibliotecas de sindicatos, bibliotecas personales, librerías del libro usado y las
33 Evento organizado por el Centro de Documentación e Investigación de la Cultura de Izquierda en la Argentina (CeDInCI), en noviembre 2015, bajo el título: “marxismos Latinoamericanos. Tradiciones, debates y nuevas perspectivas de la historia cultural e intelectual”. 34 Rodolfo Hernández, "La difusión del comunismo chino en Colombia 1949-1963: El aporte editorial del Partido Comunista de Colombia-PCC." Goliardos, Revista estudiantil de Investigaciones Históricas N° 18 (2014): 70-91.
30 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
redes académicas que se fueron tejiendo en el desarrollo de la investigación35. En el Anexo
Uno se presenta la reconstrucción de esta “biblioteca ideal”36.
El tercer capítulo se ocupa del momento de la recepción. Se analiza “la resistencia
Campesina en el Sur del Tolima” centrado en los sucesos de El Davis entre los años 1949-
1953, entendiendo que esa experiencia expresaba un claro ejemplo de los receptores en el
marco del largo proceso de la “recepción” del modelo revolucionario chino que asumió el
PCC, y más concretamente, la militancia que protagonizó una experiencia de zona liberada
y construcción de poder popular en El Davis. Lo que el capítulo aborda es «el proceso
activo por el cual determinados grupos sociales se sienten interpelados por una teoría
producida en otro campo de producción, intentando adaptarla a su propio campo»37. Este
capítulo se elabora a partir del trabajo “La ciudadela de El Davis: La construcción social
del poder popular”, presentado en el VIII Encuentro Latinoamericano de Estudiantes de
Historia- ELEH38.
Para poner en contexto la experiencia de El Davis, el capítulo hace un primer acercamiento
a la lucha de líneas en el seno del Partido Comunista, centrada en la vía de la revolución,
por ser un aspecto determinante dentro del modelo de Revolución de Nueva Democracia.
Continuando con el contexto se aborda en la segunda parte la respuesta comunista en el
Sur del Tolima ante la violencia desatada por el Estado en 1949. La tercera parte de este
capítulo analiza el proceso que empezó como la defensa del territorio y la vida, terminó
con desplazamientos forzados y migraciones internas, entre ellas la épica “Columna de
Marcha”, para buscar en las alturas de las montañas tolimenses un lugar seguro donde
vivir: El Davis.
35 Como lo plantea Tarcus, 19. “El libre acceso de los investigadores a estos textos es una de las condiciones básicas para el establecimiento de un campo profesional de estudios sobre la izquierda”. 36 La noción de “biblioteca ideal” es tomada de trabajos de Roger Chartier sobre las bibliotecas. Con ella queremos denotar las distintitas obras de Mao y la revolución china que circularon en Colombia en el periodo estudiado. 37 Tarcus, 16. 38 Evento organizado estudiantes del Departamento de Historia de la Universidad Nacional en octubre de 2015, bajo el lema “Memoria y conflicto para pensar y repensar la Historia desde América Latina”.
Introducción 31
En la construcción de este capítulo fue determinante asumir la crónica como fuente oral y
estudiarla a partir del análisis crítico permitiendo darles voz a los protagonistas de la
resistencia campesina en El Davis. En ese sentido se trabajó crónicas de Jorge Hernández
Barrio o Comandante Olimpo39, Ciro Trujillo40, Isauro Yosa41, y Pedro Antonio Marín o
Manuel Marulanda42.
El último capítulo está dedicado al momento de la apropiación. El largo proceso de la
“Recepción” del modelo revolucionario chino culmina con una nueva interpretación del
carácter de la sociedad colombiana y el carácter de la revolución por aquellos militantes
que defendían más firmemente los principios marxistas leninistas apoyados a nivel
internacional en las ideas y figura de Mao Tse-tung. Lo que emprende el capítulo es «el
“consumo” de un cuerpo de ideas por parte de un supuesto lector “final” al término de la
cadena de la circulación»43. La base para construir este capítulo fue el trabajo preparado
para el II Congreso Internacional Izquierdas, Movimientos Sociales y Cultura Política44,
con el título de “La vía de la revolución en la guerrilla comunista de los años 50”.
El capítulo aborda en una primera parte el proceso de distanciamiento del PCC y el PCCh,
y en la segunda parte continúa con el desarrollo de la lucha ideológica y política en el seno
del PCC, que en el capítulo anterior había quedado en 1956. Con esos dos apartados como
contexto, en el ítem tres se analiza el proceso de apropiación o “consumo” de las ideas
fruto de la “Recepción”, pero también el rechazo de esas ideas: dos escenarios de un futuro
posible. El último apartado de este capítulo centra su atención en los elementos emergente
de la “Recepción” del modelo revolucionario chino: La diferenciación de la izquierda
comunista y por ende el surgimiento de un nuevo discurso: el discurso maoísta. Como
colofón se explora sucintamente el devenir de la tendencia pro-china.
39 Carlos Arango. “El Ex Comandante Olimpo y el Chaparral de los grandes”. En. FARC. Veinte años. De Marquetalia a la Uribe. (Ediciones Aurora. Bogotá. 1985). 40 Ciro Trujillo, Páginas de su vida. (Bogotá, Editorial Abejón Mono, 1974). 41 Molano, Alfredo. “Isauro Yosa, el Mayor Lister”. En: Trochas y fusiles. (El Ancora Editores. Bogotá.1999). 42 Manuel Marulanda Vélez, Cuadernos de campaña (Bogotá: Editorial Abejón Mono, 1973) 43 Tarcus, 18. 44 El evento fue realizado por la “Red para el estudio de las izquierdas en América Latina (REIAL)”, capítulo Colombia en noviembre de 2013.
32 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
El capítulo se trabaja a partir del archivo del Partido Comunista de Colombia recuperado
en versión digital, gracias a las redes académicas tejidas alrededor de la investigación.
Aquí se da prioridad a las resoluciones de los Congresos, las Sesiones Plenarias del
Comité Central y las revistas internas como Tareas, con el ánimo de develar las luchas
internas de la militancia. El uso de las fuentes orales permite un acercamiento a la versión
de los protagonistas, por lo que aquí se recoge las voces de Antonio Pinzón militante del
PCC hasta finales de los años cincuenta y posteriormente impulsor del Movimiento Obrero
Estudiantil Campesino- MOEC, la de Álvaro Villaraga militante Partido Comunista de
Colombia (marxista-leninista), PC de C (m-l), y la de Fred Kaim militante de la Juventud
Comunista a la hora del rompimiento en el V pleno de 1964 y posteriormente miembro del
Comité Central del PC de C (m-l).
Es importante dejar consignado que, si bien en el desarrollo de esta investigación se dieron
avances, el resultado final no es una suma cuantitativa de los artículos y ponencias que
aquí se han citado. Desde el inicio de la investigación en el 2011, los hallazgos empíricos,
las entrevistas a protagonistas de esta historia y a militantes del maoísmo, las reflexiones
propias, el diálogo con profesores y colegas como Andrés Caro quien está trabajando la
“Recepción del marxismo en Colombia”, fueron cambiando el conocimiento del proceso
histórico y la interpretación de él. Lo que empezó como una apuesta con el primer artículo
donde se planteó la “provocativa”45 tesis de que la experiencia de El Davis era el génesis
del maoísmo en Colombia46 ha tenido que cambiar y precisarse por el devenir de la
investigación. Este no es el momento de adelantar las conclusiones, pero es necesario decir
que la experiencia de El Davis si hace parte de la historicidad del maoísmo, un claro
ejemplo de lo que implicó la recepción del modelo revolucionario chino, como se sustenta
en el capítulo tres, pero no es la génesis del maoísmo en Colombia.
Una reflexión final.
45 La expresión es de Alberto Pinzón Sánchez integrante de la Comisión de Notables en los diálogos de paz entre el gobierno del presidente Andrés Pastrana y la FARC. Ver La aldea universal del Davis en el sur del Tolima, En http://www.argenpress.info/2015/01/la-aldea-universal-del-davis-en-el-sur.html 46 Rodolfo Hernández, " El Davis, génesis del maoísmo en Colombia: incidencia del pensamiento Mao Tse-tung en el sur del Tolima." Goliardos, Revista estudiantil de Investigaciones Históricas N° 16 (2012): 77-87
Introducción 33
Cuando se dijo arriba que esta investigación aborda un problema de conocimiento, hace
referencia a una pregunta: ¿cómo se relacionan las experiencias directas e indirectas para
forjar un nuevo discurso? Esta es la inquietud del investigador en el tiempo presente,
máximo cuando los cambios nacionales (Acuerdo en La Habana) y Latinoamericanos
(retroceso de proyectos alternativos) entran a cuestionar las vías de la revolución y exige
hacer un balance para saber ¿de dónde venimos, hacia donde vamos, hacia donde debemos
ir? Es evidente que se vive un momento donde se requiere nuevas preguntas y estas
tendrán que pasar por un balance del conflicto armado que nos acompaña por más de
medio siglo, y que traía implícito en las prácticas de la Fuerzas Armadas Revolucionarias
de Colombia-FARC la tesis maoísta de “rodear la ciudades desde el campo” y la “guerra
popular prolongada”. Así pues, con esta investigación se alberga la esperanza de que las
nuevas formulaciones sobre el carácter de la sociedad y el carácter de la revolución, y en
general sobre los futuros por venir, estén acompañadas de nuevos discursos emergentes
capaces de interpretar las realidades planetarias en su complejidad, y proponer
revoluciones paradigmáticas.
Sobre Mao Tse-tung, maoísmo, y discurso maoísta.
En las fuentes de archivo consultadas para esta investigación se encontraron diferentes
formas de escribir el nombre completo de Mao; Mao Tze Tung en el periódico Tierra de
1938, Mao-Tse Tung en el semanario Sábado de 1949, Mao Tsé Tung en el primer texto
publicado por parte del PCC en 1952, Mao Tse Tung en el libro sobre la Nueva
Democracia editado por el PCC en 1952. Después de 1954 llegaron las obras de Mao
directo desde China donde su nombre completo apareció como Mao Tse-tung y después
de 1966, con la revolución cultural, como Mao Tsetung. Todas estas variantes
corresponden a transcripciones procedentes del mundo anglosajón. En un solo caso de
literatura secundaria se encontró la expresión Mao Zedong correspondiente la
transcripción en pinyin, el sistema de transcripción fonética del chino mandarín reconocido
oficialmente en la República Popular China desde 1958.
Desde posiciones críticas al maoísmo, o más bien, desde el anti-maoísmo se sustenta que
el cambio de Mao Tse-tung a Mao Tsetung tenía el objetivo de aunar en el “Culto a la
34 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
personalidad de Mao”. Esta novedad, dicen escritores soviéticos, «ha sido concebida para
dar al nombre de Mao un valor simbólico: ahora quiere decir “el que alumbra a Oriente”,
mientras que, con la ortografía anterior, los dos últimos jeroglíficos significan, literalmente
traducido, “encenagador del Oriente”, “cieno en Oriente” o “Oriente de cieno”»47.
Independiente del anterior debate, en este trabajo se escribirá el nombre completo de Mao
así: “Mao Tse-tung”. Esta forma corresponde al método Wade-Giles, el sistema más
difundido para la transcripción de los nombres chinos en Occidente durante todo el siglo
XX, hasta cuando se generalizó el uso del sistema pinyin. Por último, es importante tener
presente que en la onomástica china un nombre se escribe con el apellido primero y el
nombre de pila después. En ese sentido Mao era el apellido y el nombre de pila era Tse-
tung.
Frente al concepto de maoísmo, no fue propósito de esta investigación entrar a debatirlo.
El trabajo de Aldo García, arriba señalado, promete un capítulo especial con esta esperada
disertación. Cuando se indaga por el origen del maoísmo en Colombia, se hace referencia a
la génesis política y orgánica de los grupos que hoy día (2016) se autoproclaman no solo
maoístas, sino maoístas del llamado “Campo marxista leninista”. Siendo este un polo del
maoísmo48 deja por fuera el otro polo: el MOIR y todas las agrupaciones que de él se
desprenden. Es decir, esta no es una historia de todos los maoísmos en Colombia.
En este trabajo se es consciente que el concepto maoísmo no era cotidiano en el periodo de
investigación 1949-1963, y que fue justo a inicio de los años 60 cuando el término alcanza
una amplia difusión por dos vías, en medio de la agudización del conflicto Chino-
Soviético. Por un lado están los intelectuales de Occidente, principalmente los de Harvad,
que estaban en «la búsqueda de una estrategia (la maoísta) realizada por Mao»49. Desde
esta acepción maoísmo era sinónimo de “pensamiento de Mao Tse-tung”, como lo
enunciaría el Partido Comunista de China-PCCh, y entendido en términos generales como
47 M Altaiski; V Gueórguiev, Crítica de las concepciones filosóficas de Mao Tse-tung (Moscú́: Progreso, 1976), 28. 48 Ver Mauricio Archila, en la Nota 16 de este trabajo. 49 Jerome Chen, Mao and the Chinese revolution (New York: Oxford University Press, 1965), 19.
Introducción 35
«todo el complejo evolutivo de normas oficiales de pensamiento y comportamiento
desarrolladas por el PCCh mientras [estuvo] bajo la dirección de Mao»50.
En la segunda vertiente el término maoísmo empieza a ser acuñado de forma despectiva
por los comunistas soviéticos, que una vez rota las relaciones con el PCCh, le bautizaron
con esa misma denominación, diferenciándole de la doctrina de Marx y Lenin, hasta el
punto de que «antes de que los maoístas [de China] hubieran creado las condiciones en el
partido y en país para poner en circulación el vocablo maochzhui (maoísmo), los
marxistas-leninistas lo habían desacreditado y se había convertido en un sinónimo de
antimarxismo, antisovietismo, chivinismo y hegemonismo»51.
Ubicándonos en la época, el concepto adecuado es “el pensamiento de Mao Tse-tung”
proclamado en el Séptimo Congreso Nacional del Partido Comunista de China en abril de
1945. Desde un principio los líderes chinos se negaron a calificar las teorías de Mao como
maoísmo, y en su lugar las denominaron Mao Tse-tung szusian (pensamiento de Mao Tse-
tung), donde szusian quiere decir “idea”, “explicación” y también “idea original”. En
cambio, para los chinos, el carácter que se lee chui con el que escribirían maoísmo es
utilizado para traducir los “ismo” extranjeros, o “propias doctrinas” atribuido a sistemas
como el marxismo y el leninismo. En términos concretos, el PCCh nunca difundió el
concepto de “maoísmo”, sino el de “pensamiento de Mao Tse-tung”, razón por lo cual la
militancia de los años sesenta, afines con las tesis de Mao Tse-tung, nunca se definió como
maoísta, sino como marxista-leninista.
En ese sentido la categoría “discurso maoísta” hace referencia a los enunciados y prácticas
sociales de la militancia del Partido Comunista de Colombia que se autodefinía como
marxista leninista y que a nivel internacional, antes y sobre todo después del conflicto
chino-soviético, se apoyaban en las ideas y la figura de Mao Tse-tung. Era la militancia
que reconocían y reivindicaban el “pensamiento de Mao Tse-tung”. Es así que la categoría
se convierte en una bisagra temporal que une dos momentos históricos, el periodo de
50 Harold C. Hinton, La China comunista en la política mundial (México: UTEHA, 1968) 65. 51 M Altaiski; V Gueórguiev, 28.
36 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
estudio de esta investigación 1949-1963, cuando los protagonistas iban haciendo su propia
historia, y el tiempo presente, cuando se hace y se lee esta Historia.
1. El momento de la producción. Revolución de Nueva Democracia: Modelo revolucionario chino para América Latina
El momento de la producción, los productores de las ideas...
«La victoria de la revolución china es un modelo de la realización del paso de la
revolución de nueva democracia a la revolución socialista en un país que era semicolonial
y semifeudal»52. Esta, que fuera una de las opiniones de los dirigentes chinos, expresa a su
vez la clara intención del Partido Comunista de China por hacer de su experiencia
revolucionaria un modelo para el Tercer Mundo. Se inicia de esta forma el largo proceso
de la “Recepción” del modelo revolucionario chino, por parte del Partido Comunista de
Colombia. Es así que el presente capitulo está dedicado al proceso de producción del
modelo de la Revolución de Nueva Democracia. Lo que se desarrolla en el capítulo es «el
momento de la producción de una teoría, llevado a cabo por intelectuales conceptivos»53.
Introducción
Después de la Segunda Guerra Mundial y una vez derrotado Japón, China emergió como
potencia regional con voz, voto y posibilidades de veto en la naciente Organización de las
Naciones Unidas - (ONU). Entre 1945 y 1949 China se debatió entre un gobierno de
coalición, propuesto por los comunistas, o guerra civil, promovida por los nacionalistas.
52 Wang Chia-hsiang, “La significación internacional de la victoria del pueblo chino”, En El gran salto adelante. Diez estudios sobre la República Popular China, eds. Partido Comunista de Colombia. (Bogotá: Paz y Socialismo, 1960), 166. 53 Tarcus, 15.
38 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
En el trabajo de Harrison Forman de 1945, La Otra China54, sustentaba que ninguna
solución estable podría lograrse en Asia, y por lo tanto en el mundo, sin un acuerdo que
tuviera en cuenta la existencia de la gran fuerza humana y política representada por los
comunistas encabezados por Mao Tse-tung.
Pero ante la propuesta del gobierno de coalición, los nacionalistas respondieron con la
guerra civil apoyada por Estados Unidos en el marco de la naciente Guerra Fría, dando
como resultado «el caso histórico de que en un país periférico, en un país subdesarrollado,
en un país cuya sociedad apenas estaba saliendo del feudalismo, se produzca (...) una
revolución marxista.»55. Lo ocurrido en China fue una de las revoluciones sociales más
profundas del siglo XX, dirigida por el Partido Comunista de China, cuyo programa,
táctica y estrategia, sintetizadas por Mao Tse-tung, fue conocida como Revolución de
Nueva Democracia.
El triunfo de la Revolución de Nueva Democracia en China, inspirado en el Pensamiento
Mao Tse-tung, no solo fue una bocanada de aire fresco para el comunismo internacional,
sino una revolución paradigmática que cuestionó la ortodoxia marxista en aspectos
relevantes como lo fueron: el sujeto histórico de la revolución, pues siendo la clase obrera
para el marxismo, en China ese papel lo cumplió el campesinado; las bases
revolucionarias, que eran las ciudades y los centros industriales para el marxismo, y en
China estas se constituyeron en las zonas rurales; y por último, la estrategia revolucionaria,
que siendo la insurrección para el marxismo, tal como se aplicó en la Revolución de
Octubre, en China el papel estratégico le correspondió a la guerra de guerrillas y a la
guerra popular prolongada. Es así que la Revolución de Nueva Democracia se constituyó
en una revolución campesina, dirigida por un Partido Comunista que movilizó a millones
de campesinos por sus reivindicaciones, concretándolas en las zonas rurales donde los
comunistas, respaldados por la guerra de guerrillas, tenían gobierno y poder popular.
Surgía así el modelo revolucionario chino para la toma del poder: la Revolución de Nueva
54 Harrison Forman, La otra china (Buenos Aires: Editorial Abril, 1945). 55 Eugenio Anguiano Roch, 108.
1. El momento de la producción 39
Democracia. En occidente fue leída como la «verdaderamente original fórmula maoísta
para la revolución»56.
Reconociendo que para la política y la ideología comunista es natural que los dirigentes de
una revolución triunfante quieran propagarla y transmitirla a sus pares de otros países, los
líderes chinos no escatimaron esfuerzos por contribuir al estudio de su propia historia y
sobre todo, para aportar a la síntesis de un modelo revolucionario57, que según ellos era
aplicable a los países del Tercer Mundo. En ese sentido el modelo aquí presentado es una
«descripción de la visión del Partido Comunista Chino de su propia experiencia en
términos de aquellos aspectos de la revolución china que ellos sienten como aplicables (...)
para revoluciones del Tercer Mundo»58. Esto trae implícito, por ende, que los elementos
del modelo aquí expuesto no corresponden a lo planteado por los investigadores que han
hecho sus propias interpretaciones del modelo revolucionario chino59.
Pero para los chinos, hasta bien entrada la década de los 50, el Tercer Mundo era solo Asia
y África. Lo cierto es que América Latina no estaba dentro de las prioridades en la política
exterior china, en parte por la distancia geográfica, pero sobre todo porque su prelación era
garantizar los intereses nacionales, y uno de ellos era la seguridad de sus fronteras, para lo
cual Asia y África eran determinantes. Fue solo hasta el triunfo de la revolución cubana,
en 1959, que los chinos se interesaron por esta parte del mundo. «A fin de hacer destacar
las tesis defendías por el Partido Comunista de China (PCCH) en el ámbito de la izquierda
latinoamericana, Pekín se identificó con la Revolución Cubana subrayando los paralelos
56 Arthur A Cohen, El Comunismo de Mao Tse-tung (Medellín: Albon Interprint, 1968) 74. 57 No es el alcance de este trabajo, como lo señala Lev Deliusin, analizar si dicha síntesis y conceptualización teórica de la experiencia china tuvo en cuenta todos los aspectos de la condición histórica concreta, las particularidades de la situación revolucionaria en el país, y la forma y los métodos específicos de la lucha ideológica, política y armada. Un debate al respeto puede verse en: Lev Deliusin, La esencia sociopolítica del maoísmo (Moscú: Editorial Progreso, 1976). 58 Peter Van Ness, Revolución y política exterior China: el apoyo de Pekín a las guerras de liberación nacional (Buenos Aires: Ediciones Líbera, 1970), 83. 59 Entre los trabajos con esos propósitos se destaca Schwartz, Benjamin. Chinese Comunism and the Rise of Mao. Cambridge: Harvard University Press, 1951. Chen, Jerome. Mao and the Chinese revolution. New York: Oxford University Press, 1965. Brandt, Conrad; Fairbank, John K; y Schwartz, Benjamin. A Documentary History of Chinese Communism. London : G. Allen & Unwin, 1952.
40 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
con esta y la experiencia china e insistiendo en la idea de que la lucha armada era el
camino más efectivo para la conquista del poder»60.
Durante la década de los 60 los líderes chinos hicieron énfasis en apoyar a los Partidos
comunistas y no comunistas en América Latina que querían luchar por la liberación
nacional, pero principalmente a aquellos que lo querían hacer siguiendo el camino de Mao
Tse-tung, tanto así que en la práctica descuidaron las luchas libradas por las fuerzas pro
cubanas pese a que tenían más ímpetu que las fuerzas pro chinas. Lo que veremos a
continuación es cómo durante las décadas del cincuenta y sesenta la diplomacia popular
China le permitió materializar la clara y manifiesta intensión del Partido Comunista de
China por presentar su experiencia revolucionaria para la toma del poder, es decir la
Revolución de Nueva Democracia, como modelo triunfante para las naciones del Tercer
Mundo y, por ende, para América Latina. En ese sentido se hará un primer acercamiento al
propósito chino de difundir su modelo revolucionario, dejando entrever aquellos aspectos
que lo configuran. En segunda instancia se analizará la diplomacia popular como estrategia
para difundirlo, y en la última parte se analizará uno de los logros de dicha estrategia: El
surgimiento de una tendencia pro-china en América Latina.
1.1 Modelo Chino para el Tercer Mundo y los propósitos de difundirlo
Pese a que era tema recurrente de los comunistas chinos plantear la necesidad de adaptar el
marxismo-leninismo a la realidad concreta de cada país, no escatimaron esfuerzos para
expresar que su experiencia de toma del poder se podía constituir en un el modelo de
aplicación universal en los países del Tercer Mundo. La construcción de este modelo
siempre estuvo en la mira de los comunistas chinos, incluso antes de la toma del poder.
Con un completo optimismo por el triunfo de la Revolución de Nueva Democracia, y de
que sus implicaciones no solo eran para China, sino para el mundo entero, Mao Tse-tung
realizó declaraciones en diciembre de 1936 y diciembre de 1947, en el sentido de que: «la
60 Humberto Garza Elizondo, “La nueva diplomacia de Pekín en América Latina”, Estudios Orientales, Vol. VIII, n° 1, (1973): 78.
1. El momento de la producción 41
revolución china habría de ejercer una influencia de largo alcance en la revolución del
Oriente, así como en el mundo entero»61. En 1948 los comunistas chinos enviaron un
mensaje a la Conferencia de la Juventud de Asia Sudoriental, reunida en Calcuta, donde
decían, al referirse a la lucha armada, que «a este respecto el pueblo de China ha dejado el
ejemplo de una experiencia extremadamente valiosa para los pueblos de los países
orientales»62.
La definición más temprana del modelo revolucionario chino publicada después del triunfo
en 1949, fue la que adelantó Lui Shao-chi, al dirigirse a la Conferencia Sindical de los
países de Asia y Oceanía en noviembre de 1949. Uno de los apartes de su intervención
decía:
«En una colonia o semicolonia, si las personas no tienen armas para defenderse, no tienen
nada. La existencia y el desarrollo de las organizaciones proletarias y la existencia y el
desarrollo de un frente único nacional están íntimamente ligados a la existencia y el
desarrollo de una lucha armada. Este es el único camino para muchos pueblos coloniales y
semi - coloniales en su lucha por la independencia y la liberación»63.
En esa misma intervención Lui Shao-chi planteó el concepto de camino o senda trazada
por Mao, el cual debería ser recorrido por los países del Tercer Mundo: «El camino
escogido por el pueblo chino para la victoria sobre el imperialismo y sus secuaces y la
creación de la República Popular de China es el camino por el cual deben marchar muchos
países coloniales y semi coloniales en la lucha por conquistar la independencia nacional y
la democracia del pueblo. Ese camino es el camino del camarada Mao Tse-tung»64.
En 1951 se conmemoraron los 30 años del Partido Comunista de China, el cual fue
aprovechado para expandir la propaganda a favor del modelo revolucionario chino. En
61 Harold, 85. 62 Hinton, 85. 63 Original publicado en For a Lasting Peace, for a People's Democracy, Órgano de la Oficina de Información de los Partidos Comunistas en Bucarest. Citado por A. M. Halpern, “The Foreign Policy Uses of the Chinese Revolutionary Model”, The China Quarterly N° 7 (1961): 2. 64 Chen Po-ta. “La Doctrina de Mao Tse-tung sobre la aplicación del marxismo-leninismo a la revolución China”, La Nueva Democracia China (Bogotá: Graficas Centauros, 1952) 58-59.
42 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
discurso del 1 de julio de 1951, Lu Ting-yi, describió la revolución china como «el más
grande acontecimiento en la historia del mundo desde la revolución del Octubre [y como]
el prototipo de las revoluciones en los países coloniales y semicoloniales»65. Para la misma
conmemoración Chen Po-ta sintetizó la experiencia China así: «la necesidad de emprender
en la aldea una larga guerra revolucionaria, de utilizar las aldeas para cercar y después
conquistar las ciudades; las de que era preciso crear y mantener el poder revolucionario en
una serie de pequeños sectores y de irlo desarrollando y ampliando gradualmente en el
proceso de una larga lucha por la conquista del poder en todo el país», y a reglón seguido
generalizó: «En su conjunto constituye una nueva conclusión del marxismo – leninismo
lograda sobre la base de la experiencia revolucionaria en los países coloniales y
semicoloniales»66..
El convencimiento de los comunistas chinos que la contribución de Mao a la estrategia de
la revolución debe aplicarse a otros países atrasados, se vio reflejado en la revisión de
antiguos textos de Mao que serían publicados Obras Selectas en 1951. Arthur A. Cohen
cita un ejemplo de ello. Dado que el escrito de Mao de 1928 “¿por qué puede existir el
poder político rojo en China?” fue elaborado para el ámbito local, cuando se publicó en
1951 se añadió una nota resaltando la aplicabilidad de la experiencia revolucionaria china
a otros países “del Oriente”. El pasaje clave en la nota dice:
«Así, precisamente como lo ha hecho el pueblo chino, todos o por lo menos algunos, de los
pueblos coloniales del oriente pueden sostener zonas de base grandes o pequeñas y
mantener regímenes revolucionarios por un periodo prolongado, llevar a cabo guerra
revolucionaria prolongada para encerrar las ciudades en un círculo desde el campo, y
proceder gradualmente a tomar posesión de las ciudades y obtener la victoria en escala
nacional en sus respectivos países»67.
Pero la intervención de los textos no solo iba encaminada a justificar la aplicabilidad del
modelo chino, también se buscaba ajustarlos a la ortodoxia marxista leninista. Un ejemplo
de ello lo da Wolfgang Franke con la obra clásica de la revolución china escrita por Mao
65 Hinton, 86. 66 Chen Po-ta, 58. 67 Cohen, 74.
1. El momento de la producción 43
en 1927: “Informe sobre la investigación del movimiento campesino en Hunan”. Franke
sustenta que para resaltar el papel de la clase obrera, los líderes chinos omitieron un pasaje
donde Mao daba a entender la importancia central de los campesinos para la revolución en
China. El pasaje suprimido decía: «para la ejecución de la revolución los esfuerzos de los
habitantes de las ciudades y de los militares sólo intervendrán en tres décimas, mientras
que las restantes siete décimas se encargarán los campesinos en la revolución en el
campo»68.
Según Donald S Zagoria los líderes chinos tenían la clara pretensión de recusar la
estrategia soviética en las zonas subdesarrolladas para reemplazar a los rusos en la
dirección del movimiento revolucionario en tales lugares. Fue así que «estas aspiraciones
se pusieron de manifiesto, en 1959 y 1960, con el nuevo y audaz planteamiento de la tesis
china según la cual la teoría maoísta y la experiencia revolucionaria china eran aplicables a
las zonas subdesarrolladas, no siéndolo, en consecuencia, la teoría y la experiencia
revolucionaria soviética»69.
En ese contexto Chou-En-lai en 1959 formula los puntos claves de la política exterior de
China para los países del Tercer Mundo:
«Asia, África y América Latina, que solía ser la parte trasera imperialista, ahora han
llegado a la vanguardia en la lucha contra la agresión y el colonialismo (...) el imperialismo
EE.UU., que es el puntal del colonialismo moderno, que ya se encuentra atrapado en un
"auténtico remolino." (...) Las fuerzas coloniales imperialistas no cesarán en la etapa de la
historia de su propia voluntad, y la lucha por alcanzar y salvaguardar la independencia
nacional no será un camino de rosas (...) Con el fin de obtener la victoria completa de
todos los países que se esfuerzan para ganar y asegurar la independencia nacional no sólo
tienen que derrotar a la intervención armada y la agresión de los imperialistas, sino
también para aplastar a sus diversos planes y maquinaciones turbias (...) Estamos listos
68 Wolfgang Franke, “Doctrina y práctica revolucionaria de Mao Tse-tung”, Eco Revista de la Cultura de Occidente Tomo III, N° 4 (1961): 420. 69 Donald S. Zagoria, El conflicto Chino Soviético 1956-1961 (Barcelona: Ediciones G.P, 1962) 282.
44 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
para dar apoyo y asistencia en toda la extensión de nuestras capacidades a todos los
movimientos de independencia nacional en Asia, África y América Latina»70.
El siguiente gran impulso, en aras de expandir la propaganda a favor del modelo
revolucionario chino, se dio para la conmemoración de los 10 años del triunfo de la
revolución china en 1959. Para esta fecha el énfasis no está solo en el modelo de la
Revolución de Nueva Democracia, sino también de la Revolución Socialista que China
estaba construyendo. Aprovechando los eventos Liu Shao-chi repetiría el mismo ejercicio
de 1949 ante los delegados de los doce Partidos comunistas de América Latina que
visitaron a China, en febrero y marzo, de cuyo resultado el Partido Comunista de
Colombia publicó un resumen bajo el título de “Nuestras experiencias”. Alguno de los
elementos del modelo chino que plantea este articulo son: «Si se quiere alcanzar la victoria
de la revolución tres condiciones son obligatorias: 1) La hegemonía del proletariado; 2) El
apoyo de los campesinos, sobre todo de los campesinos pobres y braceros; 3) El dominio
sobre el ejército revolucionario, porque son muy necesarias las fuerzas armadas
revolucionarias»71.
Para la conmemoración de los 10 años de la República Popular China se publicó Ten
Glorious Years72 donde editaron varios estudios de diferentes líderes chinos con el fin de
proclamar que la conquista del poder hecha por el Partido Comunista de China había de
ser considerada como un “Ejemplo típico” para los países subdesarrollados73.
El Partido Comunista de Colombia tuvo la oportunidad de editar el libro titulado El gran
Salto adelante74 donde se reprodujeron diez estudios de Ten Glorious Years 75. A manera
70 Chou En-lai, "Report on Government Work," First Session of the Second National People's Congress, April 18, 1959, CB No. 559.Citado por Halpern, 9. 71 Liu Shao-chi, “Nuestras experiencias”, Documentos Políticos N° 14 (1959): 63. 72 Varios Autores, Ten Glorious Years (Peking: Foreign Languages Press, 1959). 73 Zagoria, 282. 74 Liu Shao-chi, Chou En Lai et al. El gran salto adelante. Diez estudios sobre la República Popular China (Bogotá: Ediciones Suramérica, 1960). 75 Los siguientes son los textos publicados en esta obra: El triunfo del marxismo leninismo en China de Liu Shao Chi, El gran decenio de Chou En Lai, Mantener en alto la bandera roja de la línea general del Partido y las ideas militares de Mao Tse-tung, Avanzar a pasos agigantados de Lin Piao, La gran unidad del pueblo chino de Ding Siao Ping, Un decenio de lucha por la causa de la paz en el mundo y el progreso de la humanidad de Chen Yi, Sobre el gran salto adelante en la construcción socialista de China de Li Fun Chun,
1. El momento de la producción 45
de ejemplo se lee allí que Liu Shao-chi planteó: «La revolución china ejerce una
formidable fuerza de atracción sobre todos los pueblos de los países atrasados, que han
sufrido o sufren en su propia carne el yugo del imperialismo. Dichos pueblos se han
percatado de que lo que pudieron hacer los chinos, pueden y deben hacerlo también
ellos»76. A su vez Deng Siao-ping fijó:
«Bajo la dirección del proletariado, el pueblo chino ha llevado hasta el final la revolución
democrática antiimperialista y anti feudal y se ésta librando rápidamente, mediante la
revolución y construcción socialista, de la pobreza y el atraso, proporcionando con ello un
ejemplo del paso de la revolución democrática a la revolución socialista en los países
coloniales y semicoloniales y de la transformación de un país agrícola atrasado en un país
industrial avanzado»77.
Finalmente citar a Wang Chia-siang para quien es natural que la victoria del pueblo chino
haya atraído la atención general de los pueblos de Asia, África y América Latina que
luchan contra el imperialismo, y concluye: «la victoria de la revolución china es un
modelo de la realización del paso de la revolución de nueva democracia a la revolución
socialista en un país que era semicolonial y semifeudal»78.
A partir de 1960 el énfasis de los chinos a la difusión de su modelo revolucionario estaba
puesto en la lucha armada, razón por la cual los esfuerzos a la hora de publicar el volumen
IV de las Obras de Mao, la revisión de la historia de las bases revolucionarias rurales, y el
análisis de las tácticas de los movimientos de liberación nacional en los países de reciente
independencia se centraron en «elaborar una oposición entre la eficacia de la lucha armada
Las comunas populares son el resultado inevitable del desarrollo social en China de Li Ching Chuan, Un comunista debe ser un marxista leninista, no un compañero de viaje del Partido de Kang Sheng, La significación internacional de la victoria del pueblo chino de Wang Chia Siang y El Partido Comunista de China, máximo dirigente del pueblo chino en la construcción del socialismo de Liu Tan Tao. 76 Liu Shao-chi, “El triunfo del marxismo leninismo en China”, En El gran salto adelante. Diez estudios sobre la República Popular China, eds. Partido Comunista de Colombia. (Bogotá: Paz y Socialismo, 1960), 5-6. 77 Deng Siao-ping, “La gran unidad del pueblo chino y la gran unidad de los pueblos del mundo”, En El gran salto adelante. Diez estudios sobre la República Popular China, eds. Partido Comunista de Colombia. (Bogotá: Paz y Socialismo, 1960), 97-98. 78 Wang Chia-hsiang, 166.
46 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
y la ineficacia de los métodos revolucionarios legales»79. De igual forma, en medio de las
visitas de delegaciones Latinoamericanas a China, durante los años 1959 y 1969, el mismo
presidente Mao Tse-tung les compartía «las experiencias del pueblo chino en la lucha
revolucionaria y en la construcción socialista»80. Solo en el encuentro del 3 de marzo de
1959 asistieron representantes de Chile, Venezuela, Colombia, Perú, Ecuador, Bolivia,
Argentina, Cuba, Brasil, Paraguay, Costa Rica y Panamá81.
Zagoria comenta cómo el énfasis puesto en el “ejemplo” chino para los países
subdesarrollados fue acentuado aún con mayor audacia en una enumeración que salió
publicada en la prensa llamada Chung-kuo ching-nien82 en 1960. Allí se lee:
«Este artículo proclama que las tesis de Mao sobre la “nueva revolución democrática” eran
“aplicables a otros países coloniales y semi coloniales”, debido a que se fundaban en la
experiencia revolucionaria de un “típico” país colonial, o sea, China. En realidad se
sostuvo una vez más, como en 1949-1951, que las teorías de Mao “representan un nuevo
desarrollo y un redescubrimiento de la teoría marxista leninista de la revolución en los
países coloniales y semi coloniales”»83.
Dieciséis años después de que Lui Shao-chi formuló por primera vez un esquema del
modelo revolucionario chino, en 1965 aparece una definición más cabal y concreta del
modelo en el artículo de Lin Piao, “Long live the victory of the peoples war”, en español
conocido como “¡Viva el triunfo de la guerra popular!” En un contexto muy diferente
tanto en lo nacional como en lo internacional, caracterizado por ser un momento histórico
donde la fracción maoísta está en la ofensiva, el líder chino se refiere a los países del
Tercer Mundo como si fuera el "campo" y a los países desarrollados entre los que incluye
a la Unión Soviética como la “ciudad", por lo tanto la estrategia, emulando la vía de la
revolución china, era rodear las ciudades desde el campo, pues según Lin Piao, «esta teoría
79 Halpern, 10. 80 Mao Tse-tung, Importantes charlas del presidente Mao Tse-tung con personalidades de Asia, África y América Latina (Pekín: Ediciones en lengua extranjera, 1960), 3. 81 Articles, “Chaiman Mao Meets Leaders of fraternal Latin American Parties”, Peking Review N° 10 (1959): 10. 82 Estudiad el diálogo del presidente Mao sobre cuestiones de democracia en países coloniales y semi coloniales. Chung-kuo ch´ing-nien, 9, 1° de mayo 1960. 83 Zagoria, 282.
1. El momento de la producción 47
no sólo es aplicable a China, sino que también constituye una gran contribución a la lucha
revolucionaria de las naciones oprimidas del mundo entero»84.
Sustentando que la contradicción entre los pueblos revolucionarios de Asia, África,
América Latina y el imperialismo encabezado por los EE.UU., es la contradicción
principal del mundo contemporáneo, Lin Piao hace un parangón de la situación del Tercer
Mundo con la China antes del triunfo para así enfatizar en el modelo revolucionario chino:
«Hoy en día, muchos países y pueblos de Asia, África y América Latina, son víctimas de la
intensa agresión y sojuzgamiento del imperialismo acaudillado por los EE.UU. y de sus
lacayos. Las condiciones fundamentales políticas y económicas de un buen número de esos
países tienen mucho en común con las que prevalecían en la vieja China. En ellos al igual
que en la China de entonces, el problema campesino adquiere extrema importancia. Son
los campesinos quienes constituyen la fuerza principal de la revolución nacional-
democrática, dirigida contra el imperialismo y sus lacayos. Al agredir a esos países, los
imperialistas siempre comienzan por ocupar las grandes ciudades y las vías de
comunicación importantes, pero no están en condiciones de establecer su control total
sobre las extensas zonas rurales. El campo, y sólo el campo, es la vasta zona donde los
revolucionarios pueden marchar hacia la victoria final. Es por ello que la teoría del
camarada Mao Tse-tung sobre la creación de bases revolucionarias en las zonas rurales y la
utilización del campo para rodear las ciudades ejerce una fuerza de atracción cada vez
mayor sobre los pueblos de esas zonas»85.
Al referirse a la guerra popular prolongada como estrategia del modelo chino, Lin Piao
plantea los siguientes elementos. «1) Conducción de un Partido comunista revolucionario;
2) Correcta utilización de la política de frente unido; 3) Confianza en el campesinado y
establecimiento de las bases rurales; 4) creación de un ejército de nuevo tipo dirigido por
el Partido comunista; 5) uso de las estrategias y las tácticas de la guerra del pueblo; 6)
Adhesión a una política de confianza en sí mismo»86.
84 Lin Piao, “Long live the victory of the people’s war”, Peking Review N° 36 (1965): 23. 85 Lin Piao, 24. 86 Van Ness, 87-88
48 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
Por ultimo vale la pena traer la voz de Liu Ta-nien quien hace una pretensión bastante
clara:
«La victoria de la revolución democrática china y el advenimiento del socialismo en la
historia de china han sentado un brillante ejemplo para los países coloniales y semi
coloniales del mundo. La victoria del pueblo chino sobre el imperialismo y sus lacayos y la
fundación de la República Popular de China han inspirado grandemente al pueblo de
muchos países coloniales y semi coloniales en su lucha por la independencia nacional y la
victoria completa de su revolución democrática del pueblo. La revolución Socialista Rusa
de Octubre sirvió como ejemplo para la revolución en naciones opresoras, esto es, para la
revolución en países imperialistas, mientras la revolución china sentó un ejemplo para las
revoluciones en las naciones oprimidas, esto es, los países coloniales y semi coloniales.
Estudiando los cambios en la historia asiática desde la Segunda Guerra Mundial
necesitamos hacer una apreciación adecuada tanto de la trayectoria como de la influencia
de la revolución china porque es de significación para el mundo mucho más allá del Este o
de Asia»87.
Una síntesis de todo este proceso la da Peter Van Ness en el marco de la política exterior
China: «Quizás la mejor manera de caracterizar la política exterior de China Comunista
durante los primeros años de la década de 1960 es afirmar que estaba dominada por los
intereses del estado chino, un estado consagrado a mejorar a China como nación y a
propagar el pensamiento de Mao Tse-tung como la interpretación del marxismo-leninismo
que más adapta a las condiciones modernas, especialmente en Asia, África y América
Latina»88.
1.2 Diplomacia Popular: La estrategia china para difundir la Revolución de
Nueva Democracia en América Latina
La política exterior china trazada para América Latina fue determinada por los intereses
nacionales, a la luz de las propias necesidades de la política interna; las relaciones con la
Unión Soviética de amistad-cooperación y posteriormente, a partir de 1960, de lucha-
87 Liu Ta-Nien, “How to appraise the history of Asia”, Pekin Review N° 45 (1965): 26. 88 Peter Van Ness, 220.
1. El momento de la producción 49
confrontación; y las relaciones de China con Estados Unidos en el marco de la Guerra Fría.
Emerge de la relación dinámica de esos tres factores en una constante triangulación, el
interés del Partido Comunista de China por presentar su experiencia revolucionaria y la de
su máximo líder, Mao Tse-tung, como modelo triunfante de toma del poder para las
naciones del Tercer Mundo.
Es necesario entender que dicha política también fue determinada por la fuerte lucha
interna que se libró en el seno del mismo Partido Comunista de China. De allí los
diferentes énfasis y particularidades de esa política durante el periodo 1949-1976. Enrique
Fanjul sostiene que:
«Entre 1957 y 1976, la historia de China estuvo marcada por el enfrentamiento entre las
dos facciones, la maoísta y la pragmática. Entre 1957 y 1960, con el Gran Salto Adelante,
el maoísmo fue la tendencia dominante. Los pragmáticos dominaron entre 1961 y 1965, los
años de la "restauración moderada". El periodo 1966-1969 fue el de la fase más aguda y
violenta de la Revolución Cultural (que no terminaría oficialmente, según las autoridades
chinas, hasta 1976), en la que Mao aplastó a sus rivales. Entre 1970 y 1976, éste siguió
dominando el poder, pero ejerciendo una política más moderada»89.
En ese contexto se puede entender la periodización y caracterización de la política exterior
china para el Tercer Mundo. Entre las diferentes propuestas que han hecho los estudiosos,
compartimos aquí lo planteado por Humberto Garza Elizondo: «1949-1952, afirmación
revolucionaria y alineación con el campo socialista; 1953-1955, coexistencia pacífica;
1956-1966, militancia antimperialista y surgimiento del antirrevisionismo; 1967-1969,
Revolución Cultural»90.
Bajo esa caracterización de la política exterior los comunistas chinos sabían que las
relaciones diplomáticas oficiales, de Estado a Estado, no iban a ser fáciles con Occidente y
menos con América Latina que se movía en la órbita de influencia de los Estados Unidos.
El resultado fue establecer relaciones semioficiales y a nivel de Partido Comunista,
también llamada Diplomacia Popular, a través de la cual los comunistas chinos se
89 Enrique Fanjul, “La herencia de Mao en la China actual”, Política Exterior Vol. 7, No. 36 (1993): 122-135. 90 Humberto Garza Elizondo, China y el Tercer Mundo (México: Colegio de México, 1975) 7.
50 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
propusieron difundir su modelo revolucionario para la toma del poder en América Latina.
La tarea no era de poca monta, el mismo Comité Central del PCCH estableció un Instituto
para Asuntos de América del Sur, dirigido por Chu Tu-nan, y una Asociación de Amistad
entre China y América Latina91.
La diplomacia popular china para América Latina tuvo como objetivo ganar amigos, e
influencia y prestigio, así como neutralizar cualquier sentimiento de animadversión en
contra de China, de allí la importancia de las actividades implícitas de la Diplomacia
Popular, a saber: culturales, propagandísticas y comerciales92. Aquí vamos a mirar en
detalle las actividades culturales y propagandísticas durante los años sesenta.
Relaciones culturales
«Durante la década de 1950, los chinos siguieron una política en América Latina cuyos
puntos principales eran: 1) la guerra de liberación nacional y 2) el Frente Unido interno
para lograr el triunfo y establecer gobiernos nacional- democráticos. En el exterior, el
frente se llevaría a cabo con todas las fuerzas progresistas susceptibles de unir todos los
países, en contra de los Estados Unidos»93. En ese sentido «la República Popular de China
tenía un programa paralelo para cultivar relaciones amistosas con intelectuales
latinoamericanos que no tenían ningún interés en someterse a la disciplina de un Partido
Comunista»94, a partir de lo cual el gobierno de Mao desarrolló relaciones informales con
organizaciones afines y entre Partidos Comunistas a través de las cuales se dieron varias
visitas de intelectuales latinos (periodistas, políticos, catedráticos, estudiantes, etc.) para
conocer la experiencia del comunismo chino.
William Ratliff calcula sobre 1.400 el número de visitantes latinoamericanos en el
91 Victor Alba, “The Chinese in Latin America”, The China Quarterly N° 5 (1961): 53. 92 Leonardo Ruilova China popular en América Latina (Bogotá: Ediciones Internacionales, 1978) 97. 93 Marisela Connelly y Romer Cornejo Bustamante, China-América Latina. Génesis y desarrollo de sus relaciones (México: El Colegio de México, 1992), 59. 94 Matthew Daniel Rothwell, “La revolución china y Latinoamérica: el impacto de redes comunistas globales en movimientos sociales y grupos guerrilleros latinoamericanos”, Resquicios N° 15 (2013): 44.
1. El momento de la producción 51
transcurso de la década de 195095, y entre 900 a 1.000 para los años 1959-196096. Solo
para 1959 con motivo de los 10 años de la conmemoración del triunfo de la revolución
china se invitaron 402 delegados de América Latina97. Uno de los resultados inmediatos de
estos viajes fue la organización de asociaciones culturales o sociedades de amistad entre
China y países latinoamericanos. La primera de estas Asociaciones fue la Chilena, creada
en 1952; luego la Brasileña, en 1954; la Mexicana, en 1957; la Uruguaya, en 1959; la
Colombiana, en 195998; y la Argentina, en 1961.
Para enfrentar el aislamiento diplomático y con miras a darle más peso a las recién
constituidas “sociedades de amistad”, la nueva dirigencia de China optó por fundar una
Organización no gubernamental, el 3 de mayo de 1954, que en principio se llamó
Asociación del Pueblo Chino para las Culturas Extranjeras, nombre que en 1966 cambió
por el de Asociación del Pueblo Chino para la Amistad con las Culturas Extranjeras y en
1969 adoptó la denominación con la cual se la conoce hoy: Asociación de la Amistad del
Pueblo Chino con el Extranjero. Luego de esto las delegaciones culturales chinas
emprendieron visitas a América Latina. En junio de 1954, la Delegación Cultural de China
participó en el I Congreso Iberoamericano de Cultura, celebrado en Santiago de Chile. En
agosto de 1956, la Delegación de Artes Folclóricas de China realizó una gira de
presentaciones en Chile, Uruguay, Argentina y Brasil. En 1959, la Delegación de
Acrobacia de China visitó Brasil, Chile y Uruguay99.
El principal resultado de la estrategia cultural fueron los diarios de viajeros: crónicas de los
intelectuales que viajando a China, a su regreso daban charlas, hacían declaraciones,
escribían artículos e incluso libros en amena prosa, la mayoría de las veces a favor de la
revolución china. Víctor Alba reportaba para 1961 la existencia de por lo menos veinte
libros publicados por los viajeros latinoamericanos en México, Buenos Aires, Montevideo
95 William Ratliff, "China en el futuro de América Latina", China en América Latina: reflexiones sobre las relaciones transpacíficas, (Bogotá: Universidad Externado de Colombia, 2012), 34. 96 William Ratliff, "Communist China and Latín America 1949-1972 ", Asian Survey, 10 (1972): 859. 97 Alba, 55. 98 Partido Comunista de Colombia - PCC, “Constituida Sociedad de Amigos de China”, Voz de la democracia, Bogotá, sábado 5 de septiembre, 1959. 99 http://www.chinatoday.mx/cul/CLACE/content/2013-01/29/content_515215.htm
52 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
y la Habana. Según él: «ninguno de ellos es crítico, ni tampoco desapasionado en sus
relatos»100. Leonardo Ruilova cita que los primeros invitados oficiales latinoamericanos
fueron el mexicano Vicente Lombardo Toledano, Presidente de la Confederación
Latinoamericana de Trabajadores, y Lázaro Peña, Secretario General de la Confederación
Cubana de trabajadores para participar en la Conferencia sindical de Asia y Australia
realizada en Pekín entre noviembre 16 y diciembre 3 de 1949101. Lombardo Toledano se
convierte en el primer difusor sobre China, al publicar el “Diario de un viaje a la China
Nueva”, en México, el 15 de abril de 1950102. Le siguió el historiador Mexicano Fernando
Benítez quien divulgó en 1953 “China a la vuelta”.
En 1954 el escritor comunista argentino Raúl González Tuñón, quien había recorrido la
Unión Soviética y China el año anterior, publica la crónica “Todos los hombres del mundo
son hermanos”, y en 1955 Norberto Frontini y María Rosa Oliver, viajeros y activistas del
“movimiento por la paz” editan “Lo que sabemos hablamos”103. Comenta Adrián
Celentano que el movimiento de viajeros tuvo como su organizador principal al escritor
realista y agitador cultural Bernardo Kordon y que la primera crónica de viaje escrita por
él se tituló 600 millones y uno, editada en 1958 por Siglo Veinte104.
En el Perú los primeros diarios de viajeros fueron escritos por periodistas y militantes que
viajaron a la aún joven República Popular China. El escritor y periodista Jorge Falcón
Gárfias publicó en octubre de 1959 “China: la revolución del arroz y de la rosa.
Comparaciones con India, América, Europa”; César Guardia Mayorga hizo lo mismo con
“De Confucio a Mao Tse-tung: Del feudo a la comuna popular” en octubre de 1960; el
pintor Carlos De la Riva procedió de igual manera en 1961 “Donde nace la aurora:
Estampas de la nueva China”; en 1959 el periodista Miró Quesada publicó los libros La
Otra Mitad del Mundo. Tomo 1: la Unión Soviética y La Otra Mitad del Mundo. Tomo 2:
la China comunista; el también periodista Ernesto More publicó en 1960 “Las comunas
100 Alba, 55. 101 Ruilova, 98. 102 Vicente Lombardo Toledano, Diario de un viaje a la China nueva (México: Ediciones Futuro, 1950 ) 103 Adrián Celentano, “Las ediciones del maoísmo argentino”. I Coloquio Argentino de Estudios sobre el Libro y la Edición (La Plata, 2012), 64. 104 Celentano, 65.
1. El momento de la producción 53
populares en China”; y por ultimo está el trabajo de Jorge Del Prado de 1960 titulado “Las
grandes experiencias de la revolución china. Entrevista con Mao Tse-tung”105.
Entre los viajeros Colombianos a la China de Mao se destacan Jorge Zalamea, Diego
Montaña Cuéllar, Jorge Gaitán Vieira y Manuel Zapata Olivella. Los cuatro dejaron
consignadas sus memorias y recuerdos en diarios de viajeros que se constituyeron en los
primeros insumos de la intelectualidad y de líderes de izquierda para acercarse a la
realidad China. Jorge Zalamea escribió “Reunión en Pekín” (1952); Diego Montaña
Cuéllar escribió “Por los caminos de la paz. De Pekín a Viena” (1953); Jorge Gaitán
Vieira publicó el breviario de poemas titulado “China (1952-1955)” y Manuel Zapata
Olivella aportó con su ameno estilo de cronista en un libro titulado “China 6 a.m.” (1954).
Estos escritos se dieron en el marco de la visita de los colombianos a la Conferencia de
Paz celebrada en Pekín en el año 1952.
El papel de la propaganda
Pensando en el objetivo de difundir su modelo revolucionario para la toma del poder en el
Tercer Mundo, China empezó a publicar, a partir de 1951, las ediciones de las obras
escogidas de Mao Tse-tung. Esta vez los textos escogidos fueron revisados por el autor,
pues como comentaban en la nota de la primera edición, en anteriores compilaciones, los
escritos ni estaban ordenados, tenían errores de transcripción, no incluían obras
importantes y sobre todo, no estaban revisados por Mao Tse-tung106.
Despuntando la primera década de la República Popular de China se iniciaron las
publicaciones oficiales en español. La primera de estas fue la Constitución de la República
Popular de 1954107, en enero de 1959 se publica en español la revista China Reconstruye
y, para 1960, circulaban en nuestro continente las siguientes revistas: Ciencia China,
Mujer China y China Revista Ilustrada; las Obras Selectas de Mao en español aparecieron
105 Ernesto Toledo Bruckmann, el Pensamiento Mao Tse-tung en el Perú. orígenes y división en la izquierda peruana en 1964. http://www.pcdelp.patriaroja.org.pe/el-pensamiento-mao-tse-tung-en-el-peru-origenes-y-division-en-la-izquierda-peruana-en-1964-parte-1/ 106 Mao Tse-tung, Obras escogidas Tomo 1(Pekín: Ediciones en Lenguas Extranjeras, 1968) 5. 107 Connelly y Cornejo, 65.
54 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
en 1960108y la revista Pekín Informa en español el 6 de marzo de 1963, en cuyo número
inaugurar incluyeron «cuatro artículos trascendentales que tratan de problemas vitales
relacionados al movimiento comunista internacional»109, uno de ellos fue “La segunda
declaración de La Habana: un estímulo para la lucha de los pueblos latinoamericanos”,
escrito por Yao Chun-tao, por permitirles con ello impulsar el debate de la lucha armada.
Para 1956 le encargaron a Wang Huaizu ser el traductor al español de Mao. Ese mismo
año fue traductor «del discurso inaugural del VIII Congreso del Partido Comunista»110. A
la cita habían acudido numerosos revolucionarios de América, quienes pudieron seguir el
discurso de Mao gracias a la interpretación de Wang.
En el mes de septiembre de 1956 se emite el primer programa de Radio Pekín en español,
en la voz de Jacinto Barrios, de nacionalidad española, como parte de los acuerdos
logrados entre el Partido Comunista de China y el Partido Comunista de España. “¡Aquí
Pekín, habla Pekín! Esas fueron las primeras palabras pronunciadas (...) de la que hoy es
Radio Internacional de China.”111 La radio se convertía en el mecanismo esencial para
hacer llegar al mundo la identidad de la Nueva China. Radio Pekín fue concebida como la
voz divulgadora de la revolución china desde su fundación, el día 3 de diciembre de 1941,
cuando emitió su primer programa en japonés, con la identificación de Radio Xinhua de
Yan'an, dirigido a las fuerzas invasoras niponas112.
En julio de 1960, los Gobiernos de China y Cuba suscribieron su primer acuerdo de
cooperación cultural antes del establecimiento de relaciones diplomáticas. Para el mismo
año la política exterior China había logrado el establecimiento de “Asociaciones de
Amistad con China” con diferentes países de América Latina, y, un año antes, en abril de
1959, la apertura de oficinas de la agencia de prensa Nueva China (Xinhua). En Colombia
108 Ruilova, 106. 109 Editorial, “A nuestros lectores”, Pekín Informa, N° 1 (1963): 3. 110 Wang Huaizu, el traductor al español de Mao. http://www.zaichina.net/2013/09/25/wang-huaizu-el-traductor-al-espanol-de-mao/ 111 http://www.igadi.org/china/2006/xr_aqui_pekin_habla_pekin.htm 112 http://espanol.cri.cn/161/2006/06/05/[email protected]
1. El momento de la producción 55
el encargado fue Romero Buj, desde esta agencia los chinos difundieron folletos y las
revistas China Reconstruye y Pekín Informa.
En 1965 ingresa el colombiano Enrique Posada Cano113 como Consejero del Buró de
Traducciones y Publicaciones dependiente del Consejo de Estado de China, para hacer
parte del equipo de traductores de las Obras Escogidas, obra poética y Escritos Filosóficos
y Militares de Mao Tse-tung, así como de los Textos Selectos de Deng Xiao-ping.
1.3 La tendencia pro-china en América Latina
La diplomacia popular China fue acompañada de un trabajo político e ideológico para ir
alineando fuerzas contra la vertiente soviética del comunismo considerada por los chinos
como revisionista. El documento llamado Proposición acerca de la línea general del
movimiento comunista internacional114 se fue constituyendo en la base de unidad de los
grupos pro-chinos.
Las sesiones de debate y estudio con comunistas latinoamericanos hicieron parte de ese
trabajo político e ideológico. Un militante del Partido Comunista del Perú, José Sotomayor
Pérez, recuerda los hechos así: «aprovechando la presencia en Pekín de delegaciones de
varios Partidos Comunistas latinoamericanos el año de 1959, el PCCh consiguió que buen
número de ellos enviaran a China grupos de dirigentes con fines de estudio. No fue casual
que los líderes chinos se lanzaran a esta empresa inmediatamente después del triunfo de la
revolución cubana»115.
Los cursos dictados en Pekín, tenían la finalidad de formar cuadros dirigentes
profundamente imbuidos de las ideas del líder chino, absolutamente seguros que en las
semi colonias latinoamericanas debía tenerse en cuenta en primer lugar la experiencia de la
revolución china. Recordaba Sotomayor:
113 http://www.chinatoday.mx/eco/analys/content/2013-01/29/content_515233.htm 114 También conocida como Carta de los 25 puntos, es la respuesta que el Partido Comunista de China da, el 14 de junio de 1963, a la carta del Partido Comunista de la Unión Soviética del 30 de marzo de 1963. Ver Polémica acerca de la línea General del Movimiento Comunista Internacional (Pekín: Ediciones en lenguas extranjeras, 1965): 3-57. 115 José Sotomayor, ¿leninismo o maoísmo?, (Perú: Koldo Pérez de San Román, 2009), 135.
56 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
«El profesor de cada materia insistía, de palabra, en que se tuviera en cuenta que su
exposición se refería a las enseñanzas que el PCCh había extraído de la revolución china;
pero que no debían aplicarse mecánicamente a otras realidades, no debían copiarse. Sin
embargo, la verdad es que después de 5 meses de estudios en Pekín, todos volvieron con la
seguridad de que, en lo fundamental, el camino recorrido por la revolución china tendría
que repetirse en los países de la América Latina»116.
Álvaro Delgado, militante de ese entonces del Partido Comunista de Colombia, también
recuerda las conferencias sobre el pensamiento de Mao Tse-tung recibidas en 1960, lo que
consideró como un curso de maoísmo informal, con conferencistas de lujo como Chu En-
lai y Deng Xiao-ping: «Recibimos varias conferencias (sobre la lucha clandestina) con
historiadores y conocedores del tema, y de estas charlas tomé apuntes a mano y al regreso
a Colombia redacté un texto para uso interno del Partido que se llamó “Prepararse para
tiempos difíciles”, del cual desgraciadamente perdí la única copia que guardaba bien
escondida»117. Joaquín Moreno, militante del PCC, también viajó a China y junto con
Arnaldo Domínguez y Gilberto Vieira asistieron a «una entrevista donde participaron
dirigentes comunistas latinoamericanos como Luis Carvalan y Jorge del Prado»118.
Al Partido Comunista Revolucionario de Chile (PCR) lo antecedió un grupo político
marxista-leninista llamado «Espartaco». Haciendo alusión a su constitución recordaban:
«El primer encuentro entre dicho grupo político y el PCCH efectuado en 1964, fue
realizado por los dirigentes de «Espartaco» con el propio camarada Mao Tse-tung, quién
alentó y respaldó sus propósitos de construir un auténtico Partido Comunista y dio para
ello valiosos consejos. Entre ellos: “no copiar mecánicamente las experiencias de China o
de otro país: luchar contra toda tendencia seguidista y pensar con nuestra propia cabeza,
aplicando el marxismo-leninismo a la realidad concreta de nuestro país”»119.
116 José Sotomayor, 41. 117 Álvaro Delgado, Todo tiempo pasado fue peor. Memorias del autor basadas en entrevistas hechas por Juan Carlos Celis, (Bogotá: La carreta social, 2007), 170. 118 Gilberto Vieira, Las libertades y la unidad popular (Bogotá: Ediciones Suramérica, 1977) 127. 119 http://www.archivochile.com/pp/pcr/pcr00017.pdf El Pueblo [Órgano Oficial del CC del PCR de Chile] N° 93, Diciembre 1977.
1. El momento de la producción 57
Gilberto Vieira, del Partido Comunista de Colombia, recibió consejos parecidos en
1956120. Cuando murió Mao recordaba:
« [En 1956] Integré una delegación de Partidos Comunistas latinoamericanos que asistió al
histórico Vigésimo Congreso del PCUS y allí mismo fue invitada por el legendario
Mariscal Chu Teh para estudiar las experiencias de la revolución china. (…) Nos sintetizó
con claridad una serie de experiencias de la lucha revolucionaria del Partido chino y nos
pareció admirable su advertencia, según la cual “si se toma las experiencias chinas para
consultarlas, está muy bien. Si se copian, está muy mal…Siempre se pierde si se copian las
experiencias. La copia siempre causa perjuicio”»121.
En esa visita los dirigentes chinos le programaron a los delegados latinoamericanos una
gira a todas las regiones importantes de China, lo que curiosamente suscitó un reclamo de
Vieira: «Mire,- le dijo a los chinos- nosotros no somos turistas, sino queremos estudiar la
experiencia de la revolución china»122. Entonces ellos respondieron: «Pero para eso
necesitan conocer a China»123, así fue que la gira se prolongó por tres meses.
Las claras intenciones de los líderes chinos de promover y difundir su modelo
revolucionario para América Latina, y los álgidos debates alrededor del conflicto chino
soviético, que incluían discusiones de estrategias y tácticas para la toma del poder,
sirvieron de contexto externo para complejizar las diferencias internas que ya existían en la
mayoría de los Partidos Comunistas latinoamericanos, desembocando en la escisión de
varios de estos y en la formación de grupos o Partidos Comunistas marxistas leninistas
alineados con las tesis de Mao.
Para 1968 existían 10 Partidos en América Latina que se autodenominaba pro-chinos:
Argentina, Bolivia, Brasil, Colombia, Chile, Ecuador, México, Perú y Paraguay. En la
revista Pekín Informa se daba espacio para las declaraciones de adhesión a las tesis del
comunismo chino por parte de los líderes latinoamericanos: La condena al revisionismo en
120 José Luis Díaz-Granados, Gilberto Vieira y su época (Manizales: Secretaria de cultura, gobernación del caldas, 2011). 121 Gilberto Vieira, 126. 122 Díaz-Granados, 59. 123 Díaz-Granados, 59.
58 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
Chile124, la fundación del Partido Comunista Revolucionario de Chile125 y su resolución
política126; llamamiento de los comunistas pro-chinos de Bolivia exhortando al pueblo a
levantarse en armas127; las expulsiones128 y conferencias del Partido Comunista del Perú
donde se repudiaba el revisionismo129 y ratificaban la construcción de la fuerza armada130;
las condenas a Jruschov131, el llamamiento al pueblo brasileño a prepararse para la guerra
popular132, la síntesis del golpe de Estado133 y los análisis de la situación nacional e
internacional134 hechos por el Partido Comunista del Brasil; y de Colombia, las
discusiones ideológicas en el seno del Partido Comunista135, las expulsiones y
conformación del Partido Comunista pro-chino136, el llamamiento a aplicar el pensamiento
de Mao Tse-tung 137 y la publicación de las obras del Presidente Mao138.
De igual forma este diario permitió en páginas que la militancia pro-china en América
Latina debatiera las tesis del libro de Regis Debaray Revolución en la revolución, el cual
suscitó un debate con los cubanos sobre la estrategia revolucionaria a seguir en América
124 Artículos y documentos, “Reunión de militantes marxista-leninistas del PC de Chile condena el revisionismo de la dirección del Partido”, Pekín Informa N° 15 (1964): 13-15. 125 Artículos y documentos, “Se funda el Partido Comunista Revolucionario de Chile”, Pekín Informa N° 31 (1966): 38. 126 Artículos y documentos, “Resoluciones políticas del Primer Congreso del Partido Comunista Revolucionario de Chile”, Pekín Informa, N° 35 (1966): 23-23-26. 127 Artículos y documentos, “Bolivia: la lucha armada es la única vía”, Pekín Informa N° 18 (1967): 29. 128 Artículos y documentos, “Ha sido expulsado el Grupo Revisionista del Partido Comunista Peruano”, Pekín Informa, N° 6 (1964): 33. 129 Artículos y documentos, “IV Conferencia Nacional del PC del Perú Condena el Revisionismo”, Pekín Informa N° 21 (1964): 19-22. 130 Artículos y documentos, “V Conferencia Nacional del Partido Comunista Peruano”, Pekín Informa N° 12 (1966): 13-22. 131 Artículos y documentos, “Resolución del Comité Central del Partido Comunista del Brasil: respuesta a Jruschov”, Pekín Informa N° 15 (1963): 44-45. 132 Artículos y documentos, “Resolución política aprobada en la VI Conferencia Nacional del Partido Comunista del Brasil”, Pekín Informa N° 51 (1966): 21-26. 133 Artículos y documentos, “Lecciones del golpe militar del Brasil”, Pekín Informa N° 19 (1964): 31-35. 134 Artículos y documentos, “La situación interna brasileña y las tareas del Partido Comunista del Brasil”, Pekín Informa N° 23 (1965): 16-18. 135 Artículos y documentos, “Condena a la línea revisionista del Partido Comunista de Colombia”, Pekín Informa N° 18 (1964): 21. 136 Artículos y documentos, “Lucha armada para la liberación; condena a la traición del revisionismo contemporáneo”, Pekín Informa N° 33 (1965): 17, 18, 19,26. 137 Artículos y documentos, “El órgano del PC de Colombia (M-L) llama a todo el Partido a aplicar creadoramente el pensamiento de Mao Tse-tung a la práctica revolucionaria colombiana”, Pekín Informa N° 19 (1968): 25-27. 138 Artículos y documentos “Publicación de las obras del Presidente Mao en el extranjero”, Pekín Informa N° 20 (1968): 19-20.
1. El momento de la producción 59
Latina. Rotas las relaciones entre China y Cuba, y dado el interés de estos últimos por
presentar su propia experiencia revolucionaria como tercería entre los chinos y los rusos,
mas aplicable a América Latina, las críticas a Debaray tuvieron el objetivo de desplegar
«una campaña para presentar las enseñanzas de la experiencia china, en lugar de la
derivadas del caso cubano, como la más apropiada para los pueblos de Latinoamérica»139.
Fue así que se publicaron textos de Partidos y movimientos comunista pro-chinos de
Bolivia140, Colombia141 y Uruguay142.
El 1963 el PCCh expresó más nítidamente su interés por conformar un movimiento
maoísta paralelo al Movimiento Comunista Internacional. Se lanzó al encuentro de
dirigentes de izquierda y llamó a los egresados de sus escuelas de cuadros para darles
directivas, al mismo tiempo que divulgaba intensamente sus artículos de polémica con el
PCUS143. La “orientación” incluía: «alentar a los miembros pro chinos a que abandonaran
a los Partidos Comunistas que querían seguir una línea pro soviética. [Y] (…) estimular la
guerra revolucionaria como recurso para lograr el poder político» 144.
Para 1965 en la prensa china aparecían los programas políticos de los Partidos comunistas
pro-chinos145, en donde «se exhortaba a la unificación de los diversos movimientos
nacionales revolucionarios en el marco de un frente patriótico de liberación y proclamaba
sin vacilaciones una estrategia de lucha armada»146. Pero también la prensa registraba
apoyo a las luchas de liberación nacional realizadas por fuerzas diferentes a los Partidos
139 Garza, 173. 140 Liberación, Órgano del Comité Central del Partido Comunista de Bolivia, “Hay que tomar el camino de la lucha armada señalado por el presidente Mao”, Pekín Informa N° 3 (1968): 18. 141 Artículos y documentos, “El órgano del PC de Colombia (M-L) llama a todo el Partido a aplicar creadoramente el pensamiento de Mao Tse-tung a la práctica revolucionaria colombiana”, Pekín Informa N° 19 (1968): 25-27. 142 Artículos y documentos, “Decidido a hacer del pensamiento de Mao Tse-tung la guía para la acción: declaración emitida por el Movimiento de Izquierda Revolucionario de Uruguay”, Pekín Informa N° 31 (1968): 19.21. 143 Sotomayor, 136. 144 Marisela Connelly, “la Influencia del pensamiento de Mao en América Latina”, Estudios de Asia y África Vol. 18, No. 2 (56) (1983): 215-231. 145 En Jen-min jih-pao, 23 de mayo de 1965, pág. 5, publican el programa político Partido Comunista del Brasil; en Jen-min jih-pao, 13 de agosto de 1965, pág. 3, publican el programa político del Partido Comunista de Colombia (ML); en Jen-min jih-pao, 16 de diciembre de 1965, pág. 4, publican el programa político del Partido Comunista Peruano. Citado por Peter Van Ness, 172-173. 146 Peter Van Ness, 172-173.
60 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
comunistas en Brasil, Colombia, Guatemala, Honduras, Nicaragua, Paraguay, Perú,
República Dominicana y Venezuela. Lo anterior se puede ejemplificar con el caso
colombiano en donde los chinos también expresaban apoyo al Ejército de Liberación
Nacional147 y al Frente Unido del Pueblo148 dirigido por el cura Camilo Torres.
Tal como lo demuestra Peter Van Ness, para este año, 12 países latinoamericanos recibían
respaldo implícito en la prensa china a sus procesos revolucionarios. En el caso de Bolivia,
República Dominicana y Venezuela se adicionaba un respaldo explícito, y solo República
Dominicana ameritó una declaración de Mao Tse-tung condenando la agresión armada de
los Estados Unidos en abril de 1965149. En esta ocasión la intervención de Mao es
aprovechada para señalar aspectos del modelo revolucionario chino. Dijo Mao:
«Estoy convencido de que, con el respaldo de todos los pueblos del mundo, la República
Dominicana logrará la victoria final en su patriótica lucha antiyanqui, siempre que se
apoye en las amplias masas populares, una a todas las fuerzas patrióticas y sostenga una
lucha prolongada»150.
Conclusiones
Pese a que América Latina siempre estuvo en un tercer orden de prioridades, después de
Asia y África, para la política exterior china, los esfuerzos de los comunistas chinos para
sintetizar y difundir la Revolución de Nueva Democracia como modelo para el Tercer
Mundo impactó fuertemente a un vasto sector de la militancia comunista en esta parte del
mundo. Jóvenes, intelectuales, estudiantes y sectores de la pequeña burguesía que venían
discutiendo con sus partidos comunistas la política moderada, electoral, es decir, la política
de coexistencia pacífica con los Estados Unidos, rápidamente se vieron identificados con
las lecciones de una revolución triunfante. Se puede decir que la producción de la
Revolución de Nueva Democracia China aportó a la militancia de América Latina una
147 En Jen-min jih-pao, 23 de marzo de 1965, pág. 5. Citado por Peter Van Ness, 106. 148 Round the world, “One Falls, Thousands More Arise” Peking Review N° 11 (1966): 28. 149 Peter Van Ness, 106. 150 Mao Tse-tung, “Declaración en apoyo de la resistencia del pueblo dominicano contra la agresión armada de los EE.UU”, Pueblos de todos los países, unidos para derrotar a los agresores norteamericanos y a todos sus lacayos (Pekín: Ediciones en lenguas extranjeras, 1966), 17.
1. El momento de la producción 61
«ideología práctica»151, es decir un plan teórico para llevar a cabo una revolución; aunque
de manera indirecta, también incidió en la escisión de los Partidos Comunistas en América
Latina.
Efectivamente, la diplomacia popular china para América Latina le permitió al gobierno de
Pekín romper con el aislamiento impuesto por Estados Unidos en su “patio trasero”. No
solo a China la visitaron las personalidades más sobresalientes de la vida política en
nuestro continente, que después fueran presidentes (Salvador Allende, Alfonso López
Michensen) y con el tiempo propiciaran las relaciones diplomáticas en los años 80, sino
también acudieron intelectuales destacados que dejaron sus impresiones en ensayos, libros
y expresiones artísticas que el permitió a los pueblos latinoamericanos conocer al gigante
asiático.
En relación con la Unión Soviética, y después de hacerse público el conflicto Chino-
Soviético, la diplomacia popular china, con más énfasis, le permitió a Pekín presentar su
experiencia como alternativa al llamado “revisionismo”, en este sentido la región se
convirtió en un campo de batalla más en su lucha por arrebatar el movimiento comunista
internacional del control soviético. Esta situación fue para los chinos más intensa después
del rompimiento de relaciones diplomáticas con Cuba, y el alineamiento de los isleños con
el PCUS, pues ahora no solo su modelo era alternativa al “revisionismo soviético”, sino
también al “foquismo castrista”.
Es evidente que la relación entre China y América Latina tejida a través de la diplomacia
popular no estuvo exenta de contradicciones. Pese al énfasis puesto por los chinos de que
su experiencia y el mismo pensamiento de Mao Tse-tung fue resultado de la “aplicación
creadora del marxismo leninismo” a la realidad concreta de China, el ahínco con que
promovieron su modelo para el Tercer Mundo les impidió ver que no existe un único
Tercer Mundo, sino varios, es decir, que entre Asia, África y América Latina hay
diferencias significativas que no se pueden omitir. De allí que los análisis concretos de las
realidades concretas terminaran siendo remplazados por la analogía entre China antes del
151 El concepto es de Franz Schumann y utilizado por Peter Van Ness en su trabajo aquí citado.
62 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
triunfo y los países de América Latina durante la década del 50 y 60. El balance final es
que los resultados no fueron los deseados y que ningún proceso revolucionario guiado por
el pensamiento de Mao Tse-tung y el modelo de Revolución de Nueva Democracia
triunfará.
Si bien la producción-difusión de la Revolución de Nueva Democracia redundó en que los
miembros pro chinos abandonaran a los Partidos Comunistas que querían seguir una línea
pro soviética, constituir sus propios Partidos Comunistas marxistas leninista y asumir la
guerra revolucionaria como recurso para lograr el poder político, no fueron suficientes los
esfuerzos de los comunistas chinos para dar forma organizativa a esta tendencia, al final de
cuentas los dirigentes comunistas pro-chinos no lograron comprender el proceso
revolucionario en América Latina.
Una de las explicaciones del fracaso de los partidos comunistas pro-chinos la da Marisela
Connelly, ella dice:
«Los dirigentes pro-chinos latinoamericanos no conocían profundamente las ideas de Mao
ni la situación real de sus países. Este hecho les impidió iniciar y dirigir el movimiento
revolucionario. Los dirigentes pro-chinos solo habían leído algunas obras del Mao Zedong
y, basándose en ese conocimiento superficial, trataron de explicar toda la situación política,
social y económica de sus países creyendo que con la mera repetición de las frases podrían
poner en obra la revolución. Sus intentos de crear bases rurales y movilizar a los
campesinos fueron fracasos debidos a la falta de preparación y organización. A pesar de
que analizaron con detenimiento la necesidad de obtener el apoyo de las masas, los
dirigentes comunistas pro chinos hicieron muy poco para lograrlo»152.
En Colombia esa tesis es asumida, autocríticamente, por el propio PC de C-ML, que en su
XI congreso llegó a esta conclusión: «Desde su reestructuración, nuestro Partido se apoyó,
en gran medida, para la formación teórica, en el estudio sin crítica, de las obras de Mao
152 Marisela Connelly, 231.
1. El momento de la producción 63
Tse-tung y del PCCH, y en muchos casos fue la única literatura utilizada. La explicación
de esta situación se halla en la deficiente asimilación de la teoría marxista-leninista»153.
153 Partido Comunista de Colombia PC de C-ML, Conclusiones XI Congreso, (Colombia, 1980), 205.
2. El momento de la difusión Estudiando las lecciones del Partido Comunista Chino
El momento de la difusión, los difusores de las ideas...
«Estudien y asimilen las formidables lecciones del Partido Comunista Chino, artífice de la
victoria»154. Esta, que fuera la orientación del Partido Comunista de Colombia a su
militancia una vez conocido el triunfo de la revolución china dirigida por Mao Tse-tung,
expresa a su vez la clara intención del PCC por asumir la tarea de difusión en el marco de
la “Recepción” del modelo revolucionario chino. Es así que el presente capítulo está
dedicado al proceso de difusión del modelo de la Revolución de Nueva Democracia, a
través de su edición en libros, folletos, periódicos, revistas y reseñas; también en cursos,
conferencias, traducciones y diarios de viajeros. Lo que aborda el capítulo es «la difusión
de un cuerpo de ideas a un campo de producción diverso del original»155.
Introducción
En el capítulo anterior acabamos de analizar como la diplomacia popular se constituyó en
una estrategia para que el Partido Comunista de China pudiera difundir la Revolución de
Nueva Democracia (RND) como modelo revolucionario para la toma del poder en
América Latina, durante la década cincuenta y sesenta. La producción de dicho modelo no
era un producto acabado y estático en el tiempo, por lo contrario, los elementos que
constituyeron a la RND como modelo revolucionario fueron cambiando a merced de la
154 Comité Central del Partido Comunista de Colombia, 87. 155 Tarcus, 16.
66 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
propia dinámica política al interior del Partido Comunista de China, y su relación con la
situación nacional e internacional. Por ejemplo, siendo la lucha armada un elemento
central dentro del modelo chino, es inferior el énfasis puesto a este aspecto por Lui Shao-
chi en 1949, en comparación con lo expuesto por Lin Piao en 1965.
Igualmente, así como entre 1949-1965 los líderes chinos fueron sintetizando la RND como
modelo revolucionario para el Tercer Mundo, el Partido Comunista de Colombia, desde su
posición internacionalista, fue asumiendo dentro de la “Recepción” la difusión de dicha
síntesis. Es así que en el presente capitulo se centrará en la difusión hecha por el Partido
Comunista de Colombia del modelo de la Revolución de Nueva Democracia china. Una
mirada más amplia de la difusión del comunismo chino en Colombia, 1949-1963, se puede
consultar en un trabajo ya publicado, previo y antesala a esta investigación156. Para
cumplir el propósito analizaremos los libros editados y en apoyo haremos referencia al
material en los periódicos y la revista del Partido. Escogemos los libros porque estos
permitieron cumplir cabalmente con los propósitos de la difusión al ser «libros de
izquierda», es decir, libros que «Fueron publicados por una serie de editoriales de
tendencia política de izquierda —de alguna manera identificado con los ideales de una
revolución social de cuño marxista-leninista— y que tuvieron el expreso propósito, por
parte de sus editores, de contribuir a la agitación intelectual, política, académica, entre
diversos círculos de lectores radicalizados»157.
Bajo esa óptica el capítulo abordará en un primer ítem la historia sincrónica y diacrónica
de la revolución china que es registrada en la prensa del Partido Comunista de Colombia,
más concretamente el diario Tierra. La segunda parte corresponde al inicio de la labor
editorial, donde se aborda el debate historiográfico sobre el primer texto de Mao editado
en Colombia, haciendo énfasis en como la revolución china suscitó un conflicto con el
paradigma de la vía al poder entre la militancia del PCC. La tercera parte abordará el
156 En este capítulo nos apoyaremos en el trabajo de mi propia autoría. Rodolfo Hernández, "La difusión del comunismo chino en Colombia 1949-1963: El aporte editorial del Partido Comunista de Colombia-PCC." Goliardos, Revista estudiantil de Investigaciones Históricas N° 18 (2014): 70-91. 157 Juan Guillermo Gómez García, Cultura intelectual de resistencia. Contribución a la historia del “Libro de Izquierda” en Medellín en los años setenta (Bogotá: Ediciones Desde Abajo, 2005), 60.
2. El momento de la difusión 67
interés por el carácter de la revolución que el Partido expresó a la hora de publicar las
obras de Mao, la escogencia de los temas, los énfasis y hasta los títulos. En el ítem cuatro
se muestran los frutos de la diplomacia popular china tras la visita de intelectuales, algunos
de ellos comunistas, que después de conocer de primera mano lo que estaba sucediendo en
China publicaron diarios de viajeros que se convirtieron en herramientas para la difusión
del proceso revolucionario chino. Cierra este capítulo el primer libro de Mao Tse-tung
editado en Colombia: La Nueva Democracia China. Allí la exposición se centrará en
identificar el significado que para los militantes del Partido Comunista de Colombia tenía
la obra publicada.
2.1 La revolución china y la prensa del Partido Comunista de Colombia
Cuando el Partido Comunista de Colombia logra, en un segundo intento, tener periódico a
nivel nacional con Tierra en 1935, la revolución china ya había transitado por el periodo
de la primera guerra civil revolucionaria 1925-1927, la cual significó para los comunistas
su primer fracaso; y se estaba desenvolviendo la primera etapa del periodo de la segunda
guerra civil revolucionaria. Para 1938, fecha en la cual hemos encontrado los primeros
registros en la prensa del PCC sobre la revolución china, la segunda guerra civil
revolucionaria china había quedado relativamente en suspenso y se desenvolvía el periodo
de la guerra de resistencia contra el Japón iniciado en 1937.
En agosto de 1938 el periódico Tierra narra varios sucesos de la “Heroica lucha del pueblo
chino” entre lo que subraya, como lo más extraordinario, el ingreso de los comunistas al
gobierno nacional de China, 7 ministros comunistas de 15 miembros, entre los que se
destaca «el camarada Mao Tze Tung, el “Stalin chino”, y el camarada Van Min, miembro
del Comité Ejecutivo de la Internacional Comunista y una de las más ilustre figuras de la
I.C.»158.
En las mismas páginas se publica una crónica de Edgard Snow titulada “Como lucha el
ejército chino”, en donde se describe, dice el PCC, «las grandiosas luchas del antiguo
158 Sin nombre. “El imperialismo Japonés y la Revolución China”. Tierra, Bogotá: marzo, 1938, 23.
68 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
Ejército Rojo, actualmente, “Octavo ejército de Ruta de la República China”»159. Se
resalta en la descripción la política de «reducción de los impuestos, confiscación de la
propiedad de los traidores (…) [la creación de] vanguardia de la juventud, comités de
movilización, grupos de anti traidores y escuelas de entrenamiento». Se dice en la nota que
con todo ello los comunistas anti-japonizaron todo el campesinado, logrando su
movilización a favor de la liberación y dándole «la verdadera significación de la guerra al
pueblo». Una guerra de las amplias masas campesinas era lo que leía el PCC en esta nota
periodística.
En marzo 13 de 1938, cuya edición especial número 154 del periódico Tierra fue dedicada
a la lucha contra el fascismo, se publicó un extenso reportaje sobre “El imperialismo
Japonés y la Revolución China”. Este es uno de los primeros acercamientos del Partido
Comunista de Colombia a la historia (diacrónica y sincrónica) de la Revolución china;
veamos los aspectos más sobresalientes que el Partido difundió con este trabajo.
La historia inicia con el “Primer Frente Único”, programa de los “Tres principios del
pueblo” de Sun Yat-Sen que eran: democracia, nacionalismo y bienestar económico. Para
1912 relata el cambio de nombre de su Partido revolucionario, la Liga Unitaria, por el de
Kuomintang o Partido Nacional Popular en 1912; y el triunfo de la revolución burguesa
que constituye la República de China al derrocar la dinastía Manchú. La desilusión de esta
revolución es señalada después de que el presidente designado, Yuan Shih- Kai, suprimió
el Kuomintang, disolvió el parlamento en 1913 declarándose dictador, y el intento de
Golpe de mano para instaurar la monarquía en 1916.
Establecido en el sur, con más apoyo popular y trabajando en la clandestinidad, el
Kuomintang se propone el establecimiento de una República independiente burguesa-
democrática. Durante el periodo entre 1920-1923 Sun Yat-Sen se acercó a la Unión
Soviética para recibir su apoyo. Para 1922, señala la nota, se constituye el Partido
Comunista Chino cuyo programa inmediato «era prácticamente idéntico al de Sun Yat-
159 Sin nombre. “El imperialismo Japonés y la Revolución China”. Tierra, Bogotá: marzo, 1938, 23.
2. El momento de la difusión 69
Sen: anti-imperialista, tendiendo a establecer una república democrática y a efectuar una
reforma agraria»160.
Culmina este periodo con la reorganización del Kuomintang de acuerdo con los
lineamientos del Partido Comunista Ruso, pero sin asumir la ideología marxista; se avala
el ingreso individual de los comunistas al Kuomintang (fusión); y el envío de consejeros
político y militares desde Moscú a China, «para ayudar a Sun Yat-Sen a crear las fuerzas
necesarias para la conquista del Norte, la unificación de China y el triunfo de la
revolución»161.
En la segunda parte del relato se habla de la “Gran Revolución”, ella comprende el periodo
de 1924-1927. En esta etapa se señala la muerte de Sun Yat-Sen, su testamento donde
aconseja seguir con los tres principios del pueblo y la amistad con Rusia, y la lucha interna
en el seno del Kuomintang por el control del Partido siendo Chiang Kai-shek el
representante del ala derecha.
Mientras el ejército revolucionario avanzaba hacia el Norte, las fuerzas nacionalistas
capturan a Hankow, la ciudad más importante del centro de China y en Shangai los
comunistas impulsaron la huelga general de tal forma que cuando llego Chiang Kai-shek
no se necesitó una batalla militar. Pero la unidad entre comunistas y nacionalistas se
rompe, Chiang Kai-shek da a conocer sus intereses contrarrevolucionarios e inició “el
terror blanco”, «ya con la mayoría del Kuomintang y del ejército en sus manos, le fue
posible destruir la influencia de los Rusos y de los comunistas nativos. Hankow no tardó
en rendirse. La comuna de Cantor fue ahogada en sangre. La contra-revolución parecía
haber triunfado definitivamente». China fue unificada por Chiang Kai-shek, pero a costa
de la revolución y el casi exterminio de los comunistas.
Es importante reseñar que para este momento el PCCh transitaba sus primeros seis años de
existencia, y este se «presenta y se considera a sí mismo como el Partido de la clase
obrera. Intenta avanzar la revolución apoyándose sobre el proletariado. Sus armas son las
160 Sin nombre. “El imperialismo Japonés y la Revolución China”. Tierra, Bogotá: marzo, 1938, 23. 161 Sin nombre. “El imperialismo Japonés y la Revolución China”. Tierra, Bogotá: marzo, 1938, 23.
70 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
huelgas y las insurrecciones urbanas»162, pero ante los sucesos ya señalados, para 1927 el
«Partido se encuentra diezmado y reducido a la clandestinidad»163. De 1927 a 1935 el
Partido vive la fase campesina, en este periodo se forja el pensamiento Mao Tse-tung y la
experiencia allí desarrollada se constituye en pieza clave y fundante para el desarrollo de la
Revolución de Nueva Democracia en China. El contraste con la fase ortodoxa es evidente:
«He aquí un Partido comunista separado del proletariado y de las ciudades, agazapado como en un
refugio en el corazón de los campos y de las colinas menos accesibles. Un Partido que, para acelerar
el progreso histórico, escoge como terreno de acción una de las regiones más abandonadas (sur de la
provincia del Jiangxi), de un país él mismo ya subdesarrollado. Por lo que se refiere a la
composición social del Partido de la clase obrera, ésta se resume así: campesinos entrenados por
intelectuales y secundados en caso necesario por algunas tropas de bandidos, también salidos del
campesinado. Formas de acción: la huelga ha dejado lugar a la guerrilla. Y la instauración de una
administración rebelde local, que pone la revolución agraria en el centro de su programa, reemplaza
la conquista electoral de las municipalidades o los ediles del Partido que se preocupan por
multiplicar las casa-cuna, los estadios o las clases de nieve»164.
Veamos cómo la prensa comunista continúa registrando esta fase campesina.
En la tercera parte del relato histórico el PCC le presta atención a la conformación de los
Soviets chinos. Los residuos de la “Gran Revolución” continuaron su lucha en las
provincias del sur de China. Refugiados principalmente en Kiangsi, pequeñas bandas de
campesinos, obreros, estudiantes e intelectuales guardaron fidelidad a la revolución. «El
Partido Comunista adoptó entonces un nuevo programa: trabajar por el establecimiento de
un gobierno democrático de obreros y campesinos que pudiera cumplir con el programa
del antiguo Frente Unido»165.
Para 1930 la fuerza del ejército rojo les posibilita a los comunistas chinos establecer un
gobierno soviético en la provincia de Kiangsi y en otros lugares del sur y centro de China.
162 Lucien Bianco, Los orígenes de la revolución China 1915-1949 (Caracas: Editorial Tiempo Nuevo, S.A., 1970), 82. 163 Lucien Bianco, 85. 164 Lucien Bianco, 89. 165 Sin nombre. “El imperialismo Japonés y la Revolución China”. Tierra, Bogotá: marzo, 1938, 23.
2. El momento de la difusión 71
Aclara el PCC que «esto no significa que se hubiera establecido un régimen socialista»166,
lo que reconocen en el ejercicio del gobierno de los soviets chinos son reformas
democráticas como son: «redistribución de la tierra, abolición de los impuestos opresivos,
reducción de la renta de la tierra, y establecer jornadas de 8 horas laborales»167. Esto es, y
lo dice el PCC, « medidas de legislación social comunes a todos los países civilizados, y
convertir, pues, la democracia en un hecho en lugar de una promesa sin contenido»168. Es
así como la militancia del Partido entiende la segunda república comunista de la historia,
la República soviética China169 con Mao Tse-tung como presidente.
Estos soviets en su primera etapa resisten entre 1930 y 1937 cinco ofensivas gigantescas
por parte de Chiang Kai-shek, en la última ofensiva se utilizaron un millón de hombres de
los cuales cuatrocientos mil participaron directamente. Fruto de esta ofensiva reaccionaria,
dice el Partido Comunista de Colombia, es que se da «la hazaña militar más extraordinaria
desde Anabasis, la famosa retirada de los diez mil descripta por Xenofonte»170.
Conozcamos como el PCC registró la hoy conocida “Gran Marcha de Mao”, que 11 años
después de consignarlo en su diario Tierra, iría inspirar a los comunistas de sus bases
campesinas organizadores de la “columna de marcha” en la región del El Davis como
veremos más adelante:
«Poniendo en marcha a todo su ejército, con el equipo, con la maquinaria de sus fábricas y
de sus plantas impresoras y seguidos de millares de familias campesinas, los soviets
principiaron su jornada hacia el Norte, para llegar al fin a la provincia de Shensi, en el
Noreste después de una migración que duro un año y que cubrió una distancia cerca de
nueve mil kilómetros. Al llegar a su destino los Soviets se encontraron con el grueso de sus
166 Sin nombre. “El imperialismo Japonés y la Revolución China”. Tierra, Bogotá: marzo, 1938, 23. 167 Sin nombre. “El imperialismo Japonés y la Revolución China”. Tierra, Bogotá: marzo, 1938, 23. 168 Sin nombre. “El imperialismo Japonés y la Revolución China”. Tierra, Bogotá: marzo, 1938, 23. 169 Kewes S Karol lo plantea como el primer triunfo de los Maoísta ocurrido el 7 de noviembre de 1931, en la provincia de Kiangsi. Ver Kewes S Karol, China: el otro comunismo (México: Editorial Siglo XXI, 1967): 98. 170Sin nombre. “El imperialismo Japonés y la Revolución China”. Tierra, Bogotá: marzo, 1938, 23.
72 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
fuerzas intacto, con su moral inquebrantada y en posición de despertar a toda la nación
para la defensa de China contra la agresión Japonesa»171.
Es importante resaltar que durante la travesía de la fase campesina y más concretamente a
partir del 7 de noviembre de 1931 «Mao Tse-tung ejerció el poder real sobre una sexta
parte del territorio chino, tuvo bajo sus órdenes a un ejército de 145.000 hombres que no
tardaría en duplicar sus efectivos, pero que en el seno de su Partido no era más que el
número 6 o 7»172. Esta experiencia, conocida por algunos investigadores como “la fracción
del poder real”, “herejía en el acto” 173 o simplemente “la grandeza del sentido común”174,
a la cabeza de Mao, pero sin que este estuviera a la cabeza del Partido culminó de una vez
por todas el 6 de enero de 1935, cuando el buró político ampliado, reunido en Tsunyi,
cambió la composición del organismo dirigente central, estableciendo una dirección
encabezada por Mao Tse-tung175.
Basta recordar que al iniciar la década de 1960 el Partido Comunista de Colombia publica
Lecciones de la lucha revolucionaria en China176, una traducción del texto de Mao Tse-
tung conocido como Problemas estratégicos de la guerra revolucionaria de China, en
cuya nota editorial es reconocen la lucha de líneas que se libró en el seno del Partido
Comunista de China y la salida victoriosa del «camarada Mao Tse-tung (...) [y el rechazo
de] los que sostenían una línea errada»177.
171 Sin nombre. “El imperialismo Japonés y la Revolución China”. Tierra, Bogotá: marzo, 1938, 23. 172 Kewes S Karol, 102. 173 Estos dos primeros concepto son paternidad de Benjamin Schwarzt En Chinese Communism and the Rise of Mao (Cambridge: Harvard University Press, 1952). 174 El concepto es paternidad de Lucien Bianco En Los orígenes de la revolución China 1915-1949 (Caracas: Editorial Tiempo Nuevo, S.A., 1970), 175 A partir de 1943 seria llamado Presidente del Buró Político del Comité Central del PCCh, y después de 1945 y hasta su muerte en 1976 Presidente del Comité Central del Partido Comunista de China. 176 Mao Tse-tung, Lecciones de la lucha revolucionaria en China (Bogotá: Ediciones Paz y Socialismo, 1960). 177 Editor. Nota editorial a Lecciones de la lucha revolucionaria en China. Por Mao Tse-tung, (Bogotá: Ediciones Paz y Socialismo, 1960), 4.
2. El momento de la difusión 73
2.2 El inicio de la labor editorial: más allá de un debate historiográfico
El triunfo de la Revolución China bajo la dirección de Mao Tse-tung en octubre de 1949
tuvo un eco relevante en la izquierda colombiana debido a la difusión que hiciera el PCC.
Alcanzada la victoria por parte de los comunistas chinos el pleno del Comité Central del
PCC saludaba «calurosamente las grandes victorias, de alcance histórico universal, del
ejército popular de China, que ha hecho morder el polvo a los sirvientes del
imperialismo»178.
Después de este triunfo el Partido Comunista de Colombia incorpora en el análisis de la
situación internacional una nueva variable en la ecuación de la correlación de fuerzas entre
el campo democrático y el imperialismo. En enero de 1950 el PCC caracterizaba la
situación internacional de crecimiento y consolidación de las fuerzas del campo
democrático antiimperialistas entre otras cosas «por la histórica victoria de la revolución
agraria anti-imperialista de China»179. Para marzo de 1951 el XIV pleno del Comité
Central caracterizaba la situación internacional por la división del mundo en dos campos
antagónicos; el campo democrático anti-imperialista que lucha por la paz mundial y el
imperialista anti–democrático que practica la política de guerra. La fortaleza del campo de
la paz se la atribuyen, además de la orientación del “genio de Stalin”, por factores
históricos entre los cuales están: «El triunfo de la Democracia Popular en China, la gran
nación asiática que aporta a la causa de la paz y del progreso el formidable potencial
humano de sus 475 millones de habitantes, emancipados del yugo imperialista y
feudal»180.
El optimismo de los comunistas colombianos por lo que acaecía en China, expresado en
las líneas anteriores, no era para menos, 32 años después del triunfo de la Revolución Rusa
el comunismo internacional recibía la victoria del comunismo chino como una bocanada
de aire fresco. No solo era una nueva victoria en plena confrontación capitalismo-
socialismo, sino que era un caso histórico del triunfo de una revolución marxista en un país
178 Comité Central, 30 años de lucha, 87. 179 Conclusiones políticas del XIII pleno del Comité Central del Partido Comunista. Enero de 1950. 180 Resolución política del XIV pleno del Comité Central del Partido Comunista. Marzo de 1951.
74 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
periférico, en un país subdesarrollado, en un país cuya sociedad apenas estaba saliendo del
feudalismo. Y por el hecho de que dicha revolución no era socialista, sino de nueva
democracia, el tipo de revolución aplicable a países no capitalistas, llamó la atención a los
comunistas del Tercer Mundo, y la dirigencia del PCC no fue la excepción.
La actitud del Comité Central del PCC no pudo ser otra, sino la de orientar a su militancia
el estudio de la experiencia de la revolución china. Para facilitar lo anterior, enmarcado en
los principios del internacionalismo proletario, los intelectuales al interior del Partido se
encargaron de hacer traducciones de los textos de los líderes chinos para dar a conocer la
experiencia del comunismo chino y de Mao Tse-tung en sus órganos de prensa: libros,
periódicos y revistas.
Rastreando el hito fundacional de la primera publicación de una obra de Mao Tse-tung en
Colombia se puso en debate181 la versión del «puerto de Buenaventura», que señalaba a
Sobre la dictadura democrática popular como el primer texto de Mao publicado en
Colombia, y que supuestamente había sido introducido por un comunista norteamericano
por el puerto de Buenaventura182. El trabajo en archivo reportó que el primer texto de Mao
Tse-tung editado y distribuido entre la militancia en Colombia, cuya fecha se registra en
1948183 fue Fundamentos de la Revolución China184, donde se reproduce parte del texto de
Mao conocido entre sus obras escogidas como La situación actual y nuestras tareas,
escrito el 25 de diciembre de 1947. Sin constatar plenamente que esta edición sea hecha
por el Partido Comunista, el trabajo de publicación evidencia el interés de la militancia
comunista por la revolución china, inclusive antes de su triunfo, y sobre todo las
enseñanzas que se pueda extraer de dicha experiencia para orientar el proceso
revolucionario en Colombia. Los editores son Ediciones Vanguardia y se definen como
181 Rodolfo Hernández, "La difusión del comunismo chino en Colombia 1949-1963: El aporte editorial del Partido Comunista de Colombia-PCC." Goliardos, Revista estudiantil de Investigaciones Históricas N° 18 (2014): 70-91. 182 Ver, Proletarización, ¿De dónde venimos, hacía donde vamos, hacía donde debemos ir? (Medellín: Editorial 8 de Junio, 1975), 71; Frank Molano Camargo, El imaginario maoísta (1965-1982). Como mentalidad revolucionaria en la izquierda colombiana (Tesis de Maestría de Historia, Universidad Nacional de Colombia, 2004), 6. 183 Ver pie de página 3 184 Mao Tse-tung, Fundamentos de la Revolución China (Bogotá: Ediciones Vanguardia, s.f.).
2. El momento de la difusión 75
una empresa al servicio de la difusión de la literatura proletaria. En la nota del editor de
Fundamentos se identifica la comparación que hacen de la realidad colombiana con la
China, allí se dice:
«Ediciones Vanguardia presenta este importantísimo documento porque considera que sus
bases fundamentales, tiene gran similitud con los problemas de la lucha de nuestro pueblo
por la liberación del yugo imperialista. Las grandes victorias del pueblo chino vienen
confirmando en forma plena, todas las prevenciones contempladas en este material escrito en
diciembre del año pasado»185.
En otro texto de esta editorial sin fecha186 se informa que dentro de las ediciones
publicadas hay una «agotada»: La Revolución China, por Mao Tse-tung187, la cual apunta
a ser parte de la obra de Mao conocida como La revolución china y el Partido Comunista
de China, escrita en diciembre de 1939.
Pero más allá de que el primer texto haya sido Sobre la dictadura democrática popular, La
Revolución China o Fundamentos de la Revolución China; del año en que haya sido
editado; e incluso, sin prestarle atención a que este ingresara por el puerto de
Buenaventura desde Norte América o por la vía latinoamericana188, lo cierto es que el
acercamiento a la revolución china suscitó de inmediato un conflicto con el paradigma de
la vía al poder, pues como recordaba Nicolás Buenaventura, los comunistas en Colombia
tenían un culto, casi religioso, por la «vía pacífica» al poder, por las elecciones; en cambio,
lo expuesto en ese primer texto era completamente diferente, allí leían «por primera vez
con fruición aquello de que el “poder está en la boca del fusil”»189.
185 Editor. Nota editorial a Fundamentos de la Revolución China. Por Mao Tse-tung, (Bogotá: Ediciones Vanguardia, s.f.). 186 Jorge Eliecer Gaitán, Rusia y la democracia (Bogotá: Ediciones Vanguardia, s.f.). 187 Mao Tse-tung, La Revolución China (Bogotá: Ediciones Vanguardia, s.f.). 188Pues se sabe que en países como Chile se encuentra traducciones y circulación de textos de Mao desde finales de los años treinta. Ver Mao Tse-tung, Una sola chispa puede incendiar una pradera (Chile: Lautaro, 1938). 189 Nicolás Buenaventura, ¿Qué pasó camarada? (Bogotá: Ediciones Apertura, 1992), 64.
76 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
2.3 El interés por el carácter de la revolución
El rastro del primer texto de Mao Tse-tung publicado por el Partido Comunista lo
encontramos en los recuerdos de Álvaro Vásquez cuando en 1959 discutía con Antonio
Pinzón, un militante expulsado del Partido; él primero decía: «el Partido publicó en 1952,
por primera vez en Colombia, el trabajo de Mao Tse-tung titulado La naturaleza de la
Revolución China»190. La obra de la que habla Álvaro Vásquez es editada por Gráficas
Centauro. El trabajo es traducido del inglés por Gilberto Vieira en marzo de 1952. El
título, La naturaleza de la Revolución China191, no es original del trabajo de Mao. De
igual forma, el texto solo es la parte quinta —«El carácter de la Revolución China»— del
capítulo dos del trabajo completo de Mao, titulado La Revolución China y el Partido
Comunista de China, escrito en diciembre de 1939.
Escoger solo esta parte y adaptar el título refleja el particular interés del PCC por el debate
del carácter de la revolución en Colombia: o socialista o democrático-burguesa de nuevo
tipo, es decir, una Revolución de Nueva Democracia. La «notable obra», como la llaman,
es ubicada por los editores como una introducción a la Nueva Democracia, escrita por
Mao Tse-tung en 1940. La edición colombiana es acompañada por una nota del traductor
donde le ofrece al lector un breve contexto político de China durante la guerra chino-
japonesa. Cierra la nota anunciando que se traducirán más obras para ser publicadas en un
libro titulado La Nueva Democracia China y que con ese trabajo se inicia la publicación
de las obras de Mao Tse-tung, «en la medida de nuestras posibilidades, traduciendo al
español de las versiones francesas e inglesas, las que a su turno son hechas directamente
del chino por especialistas chinos»192. Ese trabajo anunciado se constituyó en el primer
libro de Mao Tse-tung editado en Colombia. Su historicidad se analizará a continuación.
Pero antes de esto, hay que mencionar que Gráficas Centauro ya había publicado otro
título del comunismo chino un año atrás. Se trata de El Partido de la Revolución China193
190 Álvaro Vásquez, “Contra el dogmatismo y el revisionismo”, Documentos Políticos N° 15 (1959): 53. 191 Mao Tse-tung, Naturaleza de la Revolución China (Bogotá: Gráficas Centauros, 1952). 192 Mao, Naturaleza de la Revolución, 5. 193 Liu Shao Shi, El Partido de la Revolución China (Bogotá: Gráficas Centauros, 1951).
2. El momento de la difusión 77
de Liu Shao Chi. El ejemplar que se analizó para esta investigación tiene un sello del
Partido Comunista de Colombia donde se lee: «Curso nacional de educación»194. Este
hecho ratifica, junto con los Manuales de educación del Partido comunista, la clara
intención del Partido Comunista de Colombia por hacer de la experiencia del comunismo
chino un material para la educación de su militancia.
2.4 La china representada en los diarios de viajeros
En el marco de las relaciones informales promovidas por el gobierno de Mao con
organizaciones afines y entre Partidos Comunistas, el 2 de octubre de 1952 una delegación
colombiana de 11 personas fue invitada a las sesiones preparatoria y general de la
Conferencia de paz de las regiones de Asia y del pacifico.
Manuel Zapata Olivella fue uno de esos colombianos que asistió a la cita y dejó
consignada sus memorias en una crónica de viaje. Su comentarista bibliográfico cuenta esa
historia:
«En 1952, junto con Jorge Zalamea, Diego Montaña Cuéllar, Jorge Gaitán Durán y otros
eminentes intelectuales colombianos, Manuel Zapata viajó a la República Popular China
para participar en el I Congreso de la Paz de los Pueblos del Asia y del Pacífico, el cual se
celebró en Pekín. En su amplio recorrido por varias ciudades y sitios históricos del gigante
asiático, en cuyo marco conoció al poeta chileno Pablo Neruda, al poeta turco Nazim
Hikmet y al novelista brasileño Jorge Amado, el deslumbramiento ante la llegada de una
sociedad nueva lo dejó consignado en su ameno estilo de cronista en un libro titulado
China 6 a.m., el cual publicó en la misteriosa editorial S.L.B. (de un judío aventurero
llamado Samuel Lisman Baum, de quien luego se perdió el rastro para siempre), la misma
que editó La hojarasca, la primera novela de García Márquez»195.
194 Ver este aspecto con más detalle en Rodolfo Hernández, "La difusión del comunismo chino en Colombia 1949-1963: El aporte editorial del Partido Comunista de Colombia-PCC." Goliardos, Revista estudiantil de Investigaciones Históricas N° 18 (2014): 70-91. 195 José Luis Díaz-Granados. Manuel Zapata Olivella, su vida y su obra http://www.humanas.unal.edu.co/colantropos/documentos/manuel_zapata.pdf
78 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
Ni la visita, ni la obra de Zapata, China 6 a.m196, pasarían desapercibidas para la
dictadura en pleno contexto de lucha anticomunista. La participación de este intelectual
de izquierda, en 1952, a la Conferencia de Paz de los Pueblos de Asia y África, «le
produjo un carcelazo en los calabozos del SIC (Servicio de Inteligencia Colombiano), al
considerar el gobierno de turno (Laureano Gómez) que declaraciones de Zapata Olivella
eran contrarias a la política internacional del régimen»197. Nicolás Buenaventura
recordaría que la obra de Zapata, escrita «cuando Jorge Zalamea concluía que [China] era
mucho más revolucionaria que Octubre»198, le permitió ver a China en los primeros años,
«en ese período inaugural, cuando la revolución era verdad o sea cuando aún esta
desordenada o en montonera»199.
Manuel Zapata reconoció que ese viaje le permitió «tener una visión más amplia, de
problemas sociales, económicos y políticos, que no hubiera tenido nunca en la
circunstancias locales»200. Pero esa experiencia tuvo costos; la firma del manifiesto en
contra de la guerra contra Corea por parte de los Estados Unidos le significó ser declarado
traidor de la patria y el gobierno colombiano no le dejó volver al país, terminada la
conferencia. En 1956 Manuel Zapata vuelve a China en una gira de dos años por Europa
con grupos folclóricos de danzas, baile y cuento colombiano. Esa gira le permitió una
dimensión de los grandes problemas políticos de su momento. La situación interna de la
Unión Soviética, dice Zapata, y «la problemática de la China con relación a la Unión
Soviética y con respecto al gran compromiso que tenían los pueblos de mil millones de
habitantes, saliendo del feudalismo y metiéndose al socialismo»201.
La Conferencia de Paz de los Pueblos de Asia y África fue convocada en Pekín, y tenía
como fin apoyar el Congreso de los Pueblos por la Paz que se realizaría en Viena el 5 de
diciembre de 1952. De Colombia, uno de los más activos en este movimiento fue Diego
196 Manuel Zapata Olivella. China, 6 a.m. (Bogotá: , Ediciones S.L.B, 1954). 197 José Luis Garcés, Manuel Zapata Olivella, caminante de la literatura y de la historia (Bogotá: Ministerio de Cultura, 1998). 198 Nicolás Buenaventura, ¿Qué pasó camarada? (Bogotá: Ediciones Apertura, 1992) 141. 199 Nicolás Buenaventura 141. 200 Lucía Ortiz, “Conversación con Manuel Zapata Olivella”, Revistas de Estudios Colombianos 21 (1997): 62. 201 Conversación. 62.
2. El momento de la difusión 79
Montaña Cuellar202. «En su militancia internacional tiene preponderancia su participación
en el Movimiento Mundial por la Paz, su asistencia a diversas conferencias
internacionales. De esta actuación queda su libro de 1953 Por los caminos de la paz. De
Pekín a Viena»203.
En el caso de Jorge Gaitán Durán, quien fuera fundador de la revista Mito (1955-1962),
aprovechó la Conferencia de Paz para recorrer China y Rusia, de cuyo conocimiento
«criticó duramente las inhumanidades del régimen soviético y en cambio encontró un
modelo cuasi-ideal de revolución popular en China»204. De su viaje por China Jorge
Gaitán Durán publicó el breviario de poemas titulado “China (1952-1955)”.
En cuanto a Jorge Zalamea «A partir de 1952 emprenderá una serie de viajes por China,
la Unión Soviética y Europa Central, en calidad de Secretario del Consejo Mundial de la
Paz. En su viaje a la China Popular en 1952, participa en la Conferencia de Paz de los
pueblos de Asia y del Pacífico, desde donde escribe su libro sobre política internacional,
titulado Reunión en Pekín»205.
En los libros de Manuel Zapata, Jorge Zalamea y Diego Montaña Cuellar se aprecia un
orientalismo en positivo. Es decir, un orientalismo que no permite ver a oriente, en este
caso a China desde su propia realidad, desde su propia cosmovisión o visión del mundo,
sino desde la aspiración por encontrar un mundo idealizado donde los males de occidente
hayan sido superados por la humanidad.
Pese a que los revolucionarios que lograron el triunfo en 1949 tenían sus raíces en la
China tradicional contra la cual reaccionaron, pero de la cual también tuvieron
influencias, la China en los diarios de viajeros de los colombianos es de total ruptura, sin
continuidades. En los diarios se lee la ruptura de las viejas ideas, la destrucción del
feudalismo, de igual forma se lee sobre la Nueva China, la Nueva Cultura, y la Nueva
202 Cuellar, Diego Montaña. "La Humanidad perdida en el socialismo militar." Revista de la Universidad Nacional (1944-1992) 21 (2009): 18-19. 203 Ricardo Sánchez, “De la Memoria a la Acción”, Crítica Histórica (Cali: Editorial U. del Valle, 2003) 170 204 http://www.banrepcultural.org/blaavirtual/biografias/gaitrica.htm 205 Patricia Zalamea Fajardo, “Entre arte, literatura y política: indicios en el archivo de Jorge Zalamea Borda”, Aleph 171 (2014): 12.
80 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
Economía.
Lo que se muestra es una China revolucionaria que construye una sociedad nueva con
valores diferentes, una sociedad donde se niegan valores y virtudes milenarias. Una China
fruto de la lucha de clases, y que no da cuenta de la concepción de armonía y conciliación
que caracterizó la milenaria filosofía china.
En la obra de Manuel Zapata Olivella donde relata testimonios y perfiles de la gente
común, se muestra una China encaminada a la destrucción sistemática de los valores
“feudales” y de los usos y costumbres de una sociedad confuciana que se oponía al
cambio, al progreso y al desarrollo. Manuel Zapata siempre muestra un pueblo chino que
se quiere liberar de las cadenas de la tradición.
Por su parte Diego Montaña Cuellar no deja de maravillarse por todo lo que ve. Lo
sorprende la ópera “El Cuarto del Oeste” que la considera la liberación del amor respecto
del concepto feudal. Para él la cultura en la Nueva China es la “liberación de las fuerzas
creadoras hasta antes encadenadas por la ignorancia”. Al final dice:
«Después de esta maravillosa experiencia, hoy podemos decir con toda certidumbre que
nosotros, hombres occidentales, salidos de un mundo erizado de odios, de recelos
dominado por el miedo y la desconfianza, hemos vivido un maravilloso paréntesis de luz
en un mundo donde se respira: bienestar alegría, ternura, fraternidad humana, felicidad, fe
en los destinos del hombre; en una palabra, hemos vivido en el mundo de la paz»206.
Como era de esperarse, estos tres diarios de viajeros se constituyeron en herramientas
para la difusión del proceso revolucionario chino. La representación de la Revolución de
Nueva Democracia China por parte de intelectuales, algunos de ellos comunistas como
Montaña Cuellar y Zapata Olivella, le permitió a la militancia del Partido Comunista
contrastar con fuentes de segunda mano, pero de confianza, lo leído en la síntesis que de
su experiencia hiciera el PCCh.
El PCC, en medio de la política de promover el Movimiento de partidarios de la Paz,
206Diego Montaña Cuellar, Por los caminos de la paz. De Pekín a Viena(Bogotá: Los Ángeles, 1953), 82.
2. El momento de la difusión 81
aprovechó las reuniones informativas de los delegados a la Conferencia de Pekín y al
Congreso de Viena, con sectores populares y de izquierda para que los «representantes de
la intelectualidad [que] pueden ser ganados para la lucha activa por la causa de la paz»207,
ofrecieran al público sus «impresiones de la República Popular China»208.
2.5 La Nueva Democracia China: El primer libro de Mao Tse-tung editado en
Colombia
El interés del PCC por difundir el modelo revolucionario chino para la revolución en el
Tercer Mundo, se vio claramente reflejado con la publicación del primer libro de Mao en
Colombia: La Nueva Democracia China. Después de imprimir el folleto La naturaleza de
la Revolución China, los esfuerzos de los militantes del Partido por difundir los
planteamientos de Mao continuaron y se dieron más traducciones. Anteo Quimbaya
tradujo del ruso, en agosto de 1952, el texto de Chen Bo Da La doctrina de Mao Tsé Tung
sobre la aplicación del marxismo leninismo a la Revolución China, escrito en ocasión del
XXX aniversario del Partido Comunista de China, en 1951; Gilberto Vieira, en septiembre
de 1952, se encargó de traducir del francés La Nueva Democracia China, escrita el 15 de
enero de 1940; y Juan Francisco Mujica tradujo del francés A propósito de la
contradicción, en 1952, tomado del órgano central del Comité Central del Partido
Comunista de Francia. El texto es conocido como Sobre la contradicción y fue escrito en
agosto de 1937.
El resultado de este trabajo de traducción, edición e impresión, salió publicado en 256
páginas bajo el título La Nueva Democracia China209. El libro contiene, además de los
textos ya citados, La Constitución Provisional de la República Popular de China y los
trabajos de Mao Tse-tung La dictadura de la democracia popular, también conocido como
Sobre la dictadura democrática popular, escrito con ocasión del XXVIII Aniversario del
207 La situación actual y nuestras tareas. Informe del Secretario General al XVI Pleno del Comité Central. Agosto 1953. P 9. 208 La situación actual y nuestras tareas. Informe del Secretario General al XVI Pleno del Comité Central. Agosto 1953. P 9. 209 Mao Tse-tung, La Nueva Democracia China (Bogotá: Gráficas Centauros, 1952).
82 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
Partido Comunista Chino, el 1 de julio de 1949; A propósito de la práctica, también
conocido como Sobre la práctica, escrito en julio de 1937; y La situación presente y
nuestras tareas, el informe presentado al comité central del Partido Comunista Chino, el
25 de diciembre de 1947, es decir, el mismo texto publicado por Ediciones Vanguardia
bajo el título Fundamentos de la Revolución China; de estos tres últimos textos y de la
constitución no se tiene información de sus traductores.
Acompañaba los textos ya mencionados una fotografía de Mao relativamente joven, pues
para la fecha él debería tener 59 años. Junto a esa foto hay otras seis y un esquema de la
estructura de gobierno de la República Popular de China. En las seis fotografías se resaltan
dos grandes ideas que al comunismo chino le interesaba difundir: el estudio del pueblo y el
trabajo por la construcción del socialismo. En la primera, donde aparecen tres
generaciones de mujeres (niña, joven y anciana), se lee: «Una joven campesina enseña a
leer a su suegra analfabeta»; en otra fotografía se lee: «En una escuela de invierno, los
viejos se reúnen para la lectura de los periódicos». Hay una más donde se muestra un taller
de hilados en la fábrica textil de Heng Yuan Cotton, que dice: «Un gran esfuerzo viene
realizándose en la China Popular a fin de aumentar la producción e industrializar el país».
Esas dos ideas, que para el comunismo chino expresaban su concepción frente a la
importancia del trabajo de masas para educar y movilizar al pueblo, eran reconocidas pero
no bien vistas desde la otra orilla, o más bien, desde el anticomunismo de Enrique Santos
Montejo, Calibán, quien se expresaba de China en los años 50 así:
«Un viejo pueblo bondadoso, apegado a las tradiciones, prácticamente de filosofía en poco
escéptica, convertido de pronto en colmena o en hormiguero, en donde abejas y hormigas se
entregan por completo al estudio y al trabajo, bajo el impulso de una dictadura feroz y
cruel»210.
Con la publicación de La Nueva Democracia China el Partido Comunista consideraba que
le estaba aportando a su militancia una «parte esencial del pensamiento de Mao Tse-
210 Citado en Agustín Nieto Caballero, El secreto de Rusia (Bogotá: Antares Ltda., 1960) 96.
2. El momento de la difusión 83
tung»211. Para la fecha, Mao Tse-tung era para el PCC el gran dirigente de la nueva China,
un comunista con importantes trabajos teóricos y filosóficos. En la nota de los editores se
reconoce la profunda influencia de Mao Tse-tung en el desenvolvimiento y en la victoria
final de la Revolución China, y no solo se valora esta revolución como el acontecimiento
más importante después de la revolución proletaria de 1917, sino a su principal líder como
«el genial conductor del pueblo chino en su gran revolución agraria antiimperialista»212.
Ese libro marcó todo un momento histórico en las filas del Partido Comunista. Nicolás
Buenaventura recordaba en su nota necrológica que, fruto de su estudio, Anteo Quimbaya
asume la tesis expuesta por Mao Tse-tung sobre la «contradicción principal» para entender
el neocolonialismo:
«En 1953 Anteo Quimbaya con ocasión del cincuentenario de la separación de Panamá,
tomó la tesis sobre la “contradicción principal” con el imperialismo norteamericano, y la
sacó antes que nadie del puro enunciado general, programático y político del Partido,
elevándola al plano del análisis científico histórico»213.
El trabajo de Anteo Quimbaya se llamó Problemas históricos de actualidad214.
Por su parte, recuerda Antonio Pinzón, militante del PCC hasta 1959: «me sentí
maravillado por el libro que el Partido edita de Mao, dadas las condiciones técnicas y
financieras de la organización»215, esto se daba «en medio de un ambiente de sensibilidad
a la Revolución China y de álgido debate en torno a la vía de la revolución: lucha armada,
o lucha de masas»216. El libro, según comenta Álvaro Delgado, «fue editado
clandestinamente, y bien editado; era una maravilla»217. A él también le sorprendió su
211 Editor. Introducción a La Nueva Democracia China. Por Mao Tse-tung. (Bogotá: Gráficas Centauros, 1952), 5. 212 Editor. Introducción a La Nueva, 5. 213 Nicolás Buenaventura, “Testimonio sobre Anteo Quimbaya”, Documentos Políticos N° 86 (1970): 94. 214 Anteo Quimbaya, Problemas históricos de la actualidad (Bogotá: Ediciones Sociales, 1953). 215 Entrevista a Pinzón, Antonio, Bogotá, 2 de noviembre de 2012. 216 Entrevista a Pinzón, Antonio, Bogotá, 2 de noviembre de 2012. 217 Delgado, 167.
84 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
publicación, evocando ese momento dice: «me pareció milagroso que en esas condiciones
de pobreza y represión saliera ese libro»218.
Esta obra no pasó desapercibida para el Estado colombiano e incluso para los órganos de
inteligencia de los Estados Unidos. El PCC denunció en su órgano quincenal La Verdad,
en enero de 1953, que la Editorial Centauro había sido allanada y su administrador,
Filiberto Barrero, encarcelado; la causa, denuncia el periódico, fue «la fobia producida por
la publicación del libro del C. Mao Tse-tung, La nueva democracia china»219. En pleno
contexto cuando se estaba debatiendo la ilegalización del PCC por ser «ideología
extranjera» y en medio de la orientación de boicotear las elecciones de marzo de 1953, el
Partido denunciaba que el cierre de la empresa editorial era «una nueva demostración de la
forma como la dictadura pretende impedir que al pueblo colombiano llegue el pensamiento
de los grandes dirigentes del proletariado mundial»220. El pretexto esbozado por los
funcionarios del orden público fue investigar la publicación del libro, pues consideraban
que «contenía instrucciones para las guerrillas»221.
Además de lo anterior, la edición del libro de Mao Tse-tung tuvo persecuciones a nivel
internacional. En plena alianza de Colombia y los Estados Unidos en torno a los inicios de
la Guerra Fría, La Voz de América, emisora administrada por la Agencia de Información
de los Estados Unidos (USIA, por sus siglas en inglés) durante este periodo, trasmite un
programa radial en voz de Carlos Videla donde denuncia que la edición del libro «había
sido financiada en Praga a base de $5,00 el ejemplar; que los dineros los había recibido
Regueros Peralta»222.
Esta denuncia, que involucra a quien fuera uno de los fundadores del PCC y director de
periódicos de divulgación marxista como Verdad Obrera, El Bolchevique, Vanguardia del
Pueblo, Tierra y Diario Popular, fue retransmitida en Colombia por la Radio Nacional y
218 Delgado, 167. 219 Partido Comunista de Colombia - PCC, “Allanada la Editorial ‘Centauro’ Detenido el c. Filiberto Barrero”, La Verdad, Bogotá, 31 de enero, 1953: 1-4. 220 PCC, “Allanada la Editorial”, 4. 221 Gilberto Vieira, Informe al XVI pleno del Comité Central, (Bogotá, agosto 1953), 27. 222 Partido Comunista de Colombia - PCC, “La Radio Nacional sirve de antena a la agencia de calumnias ‘La Voz de América’”, La Verdad, Bogotá, 14 de febrero, 1953: 1- 3.
2. El momento de la difusión 85
la recogió en su prensa el Diario Colombiano. Nuevamente, el PCC denunció lo sucedido
y dejó ver el significado que para ellos tenía la obra publicada: «enseña las grandes
experiencias de la Revolución China y presenta dos maravillosos trabajos filosóficos del
dirigente que hizo morder el polvo a las hordas reaccionarias del Chain Kai-shek y a los
intervencionistas yankis»223.
En comunicado emitido por el Partido se relacionaba directamente a los Estados Unidos
como los gestores de las ordenes a las autoridades colombianas, en la hoja volante se dice:
«Como por la boca muere el pez, el tal Videla en su burdo comentario revela ampliamente
que las medidas tomadas por el detectivismo contra una editorial administrada por
Filiberto Barrero, por el “delito” de haber editado el libro La nueva democracia China de
Mao Tse-tung, fueron ordenadas desde los Estados Unidos por intermedio de la embajada
yanqui y de sus tenebrosos servicios de inteligencia»224. En ese sentido acusaban a los
Estados Unidos de estar «dirigiendo la campaña obscurantista contra los libros que dicen
la verdad sobre el comunismo, la Unión Soviética, y las democracias populares de Europa
y Asia no permitiendo su entrada al país, confiscándolos rabiosamente y cerrando una
imprenta que ha editado una obra sobre la nueva China»225.
Pero el Partido no se dejó intimidar, su respuesta fue, ratificando la importancia que para
el PCC tenía la Nueva democracia, su reedición en la publicación de la Colección
Fundamentos, en 1958. El nuevo libro también se tituló La Nueva Democracia226, e
incluyó dos estudios clásicos de Mao Tse-tung: La Revolución China y el Partido
comunista de China, y Sobre la nueva democracia. En la contraportada hacen referencia a
que el texto sobre La Nueva democracia es la obra teórica más importante de Mao y que
en ella desarrolla la teoría sobre el carácter de la revolución democrática nueva, y que sus
principios fundamentales son valederos para los países dependientes y coloniales.
223 PCC, “La Radio Nacional sirve”, 1. 224 Hoja volante, Las mentiras de la “Voz de los EE. UU. de América” y los caudillos de “Diario de Colombia”. Partido Comunista de Colombia.1953. 225 Hoja volante, Las mentiras. 226 Mao Tse-tung, La nueva democracia (Bogotá: Ediciones Suramérica, 1958).
86 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
Mención especial merece la reseña a este libro publicada en Documentos Políticos número
11 de 1958 por Carlos Correa; allí el autor, que acompaña el escrito con una
representación gráfica de Mao, decía: «El estudio de las tesis de Mao ayudará muchísimo a
los sectores progresistas y democráticos en Colombia a comprender la significación de la
Revolución China y a profundizar en la perspectiva de nuestra propia revolución
colombiana»227.
Conclusiones
En 1975 el grupo maoísta Proletarización analizó, despectivamente, que la aparición en
Colombia de la Nueva democracia de Mao Tse-tung hacía parte de un plan de
publicaciones del PCC para «salir del atraso teórico»228. Lo cierto es que para el PCC de
los años 50 la Nueva democracia no solo significaba una parte esencial del pensamiento de
Mao Tse-tung, sino «la obra teórica más importante de Mao»229, una teoría, que según
ellos «ilumina el camino de la liberación de los países dependientes, de todos los pueblos
coloniales y semicoloniales»230. Efectivamente, el Partido Comunista de Colombia
consideraba que la Nueva democracia desarrollaba la teoría sobre la naturaleza de la
revolución china y explicaba el carácter del régimen popular democrático en el periodo de
transición hacia el socialismo. La veían como una teoría basada en los principios de Lenin
y Stalin aplicados a la realidad China. Al estudiarlo, lo que allí encontraron los militantes
colombianos era sumamente novedoso, propio del comunismo chino que no habían leído
en la literatura soviética: al ser el campesinado el ejército fundamental de la revolución,
infería que el baluarte de esta estaba en el campo, que debería triunfar primero en las zonas
rurales y, luego, en las ciudades, que la revolución en los países como Colombia era, en el
fondo, una revolución campesina. Álvaro Delgado lo evoca claramente:
227 Carlos Correa, “La Nueva Democracia”, Documentos Políticos N° 11 (1958): 67. 228 Proletarización, ¿De dónde venimos, hacía donde vamos, hacía donde debemos ir? (Medellín: Editorial 8 de Junio, 1975), 71. 229 Editor. Introducción a La Nueva, 5. 230 Editor. Introducción a La Nueva, 5.
2. El momento de la difusión 87
«China era un país de campesinos, con solamente veinte millones de obreros industriales, y
lo demás eran mayoritariamente campesinos. Es una revolución agraria, una revolución
democrática, no hay bolcheviques, no hay clase obrera al mando, nada de eso. Eso les
gustaba mucho a los dirigentes comunistas colombianos»231.
En el trabajo Un aspecto de la violencia de 1963232 se muestra con sumo detalle las redes
de distribución que el Partido tenía, evidenciando una cobertura total en los principales
centros poblacionales de Colombia (Antioquia, Tolima, Costa Atlántica, Cali,
Barrancabermeja, Cúcuta y Bogotá), adonde llegaba la experiencia de la Revolución
China233. Todo esto tenía una explicación, agrega Álvaro Delgado: «Como todavía había
relaciones con los chinos, la política del Partido colombiano, y la propaganda y los libros
del Partido, expresaban una simpatía grandísima por China, porque China era una
referencia más cercana a la problemática colombiana que Rusia»234.
Entonces, se puede concluir diciendo que la difusión en el marco de la “Recepción” del
modelo revolucionario chino le permitió a la militancia del Partido y los sectores sociales
de su influencia conocer el contexto, la historia y las experiencias de una revolución
triunfante. A su vez, el modelo chino, y más concretamente, su obra cúspide: “La Nueva
Democracia” fue un texto clave para la formación de la militancia comunista desde un
punto de vista tanto teórico, como de socialización de las experiencias. “La Nueva
Democracia”, como ya se dijo, se constituyó en una “ideología practica”, tanto así que la
obra, como varios de los textos de la experiencia del comunismo chino hicieron parte de
los manuales de educación del Partido que se utilizaban en la Escuela Nacional de Cuadros
bajo la responsabilidad de Arnaldo Domínguez, militante del Tolima que viajó a China
para recibir «conferencias del pensamiento de Mao Tse-tung»235. Toda la militancia y más
231 Delgado, 167. 232 Alfonso Moncada Abello, Un aspecto de la violencia (Bogotá: Promotora Colombiana de Ediciones y Revistas Ltda., 1963), 171-178. 233 En el trabajo de Moncada hace alusión a la distribución del texto Guerra de Guerrillas del Che, que para el autor era “un compendio del manual guerrillero de Mao Tse-tung, adaptado a las peculiaridades sudamericanas”. Moncada, 171. 234 Delgado, 167. 235 Delgado, 167.
88 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
concretamente «los guerrilleros de las "zonas de autodefensa" se alfabetizaban con los
cuadernillos chinos y Mao»236.
236 Entrevista a Kaim, Fred, Cali, 17 de mayo de 2016
3. El momento de la recepción El Davis: La zona liberada
El momento de la recepción, los receptores de las ideas…
«En la práctica, la concepción predominante entre los guerrilleros comunistas del sur del
Tolima fue la de la lucha armada en la perspectiva de guerra popular prolongada. En esa
concepción el enclave de El Davis y la zona sobre la cual está influida, tendía a
considerarse con desproporcionado optimismo como zona liberada. La influencia de la
revolución China era, a este respecto, muy evidente»237. Esta, que fuera la conclusión a la
que llegó el historiador Medófilo Medina cuando analizó “la resistencia Campesina en el
Sur del Tolima”, expresa a su vez un claro ejemplo de los receptores en el marco del largo
proceso de la “Recepción” del modelo revolucionario chino que asumió el PCC. Es así que
el presente capítulo está dedicado al proceso de recepción del modelo de la Revolución de
Nueva Democracia, por parte de los militantes del Partido Comunista de Colombia que
protagonizaron los sucesos de El Davis, entre los años 1949-1953, dándose allí una
experiencia de zona liberada y construcción de poder popular. Lo que el capítulo aborda es
«el proceso activo por el cual determinados grupos sociales se sienten interpelados por una
teoría producida en otro campo de producción, intentando adaptarla en su propio
campo»238.
237 Medófilo Medina, “La resistencia Campesina en el sur del Tolima”, en Pasado y presente de la violencia en Colombia. Gonzalo Sánchez (Comp) (Bogotá: CRRC, 1986), 258. 238 Tarcus, 16.
90 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
Introducción
Se acaba de analizar la difusión que hizo el Partido Comunista de Colombia del modelo de
la Revolución de Nueva Democracia China. Esa ingente tarea como parte de la
“Recepción” del modelo revolucionario chino le permitió a la militancia del Partido en el
campo y ciudad conocer la práctica de una revolución triunfante. Se ha visto que en el año
1952 el Partido publicó la obra culmen de Mao Tse-tung: La Revolución de Nueva
Democracia. Para el año 1953 no solo se había realizado el 28 % de las publicaciones
concernientes a la experiencia de la revolución china, del total que haría el PCC entre
1949-1963, sino que estaba el antecedente de la difusión del proceso revolucionario chino
desde 1938 hasta 1949 en periódicos como Tierra, Diario Popular y Vanguardia del
Pueblo, y a partir de 1952 la socialización de los Diarios de Viajeros. Todos estos
discursos alimentaron las prácticas cotidianas de la militancia comunista.
Mientras esto trascurría, al interior de las filas del Partido, la situación política nacional
estaba caracterizada bajo el llamado periodo de la Violencia, y el PCC tenía que dar
respuesta a la guerra desatada contra ellos en sus zonas campesinas: Sur del Tolima, Viotá,
Sumapaz. Era la llamada Primera Guerra de 1949 a 1953, también conocida como el
periodo de autodefensa y lucha guerrillera239. Fue sin duda una lucha por la defensa de la
vida campesina de cara a la represión oficial.
Fue así que en el Sur del Tolima se ubicaron, en lo fundamental, los núcleos guerrilleros
comunistas en el periodo de 1949-1953 donde se dio un desarrollo de zona liberada y de
poder popular240, orientadas por el PCC; Pizarro Leongómez plantea que allí tuvieron
debut militar «Los futuros comandantes de las guerrillas comunistas (…) Incluso el futuro
fundador del maoísta Ejército Popular de Liberación, Pedro Vásquez, [quien] estuvo en la
zona como comisario político a nombre de la dirección del Partido Comunista»241.
239 La periodización es ofrecida por Eduardo Pizarro Leongómez, “Los orígenes del movimiento armado comunista en Colombia (1949- 1966)”, Análisis Político N° 7(1989). 240 Se entiende por poder popular la creación de poderes políticos alternativos o de formas de organización popular en medio de la guerra. 241 Pizarro Leongómez, los orígenes, 12.
3. El momento de la recepción 91
En ese sentido se presenta en el presente capítulo uno de los casos más significativo de los
receptores del modelo revolucionario chino: los sucesos protagonizados por la militancia
campesina del PCC, que entre 1949-1953 construyeron y dirigieron la ciudadela de El
Davis, una experiencia de zona liberada y de poder popular. Para poner en contexto dicha
experiencia se hará un primer acercamiento a la lucha de líneas en el seno del Partido
Comunista. De todos los debates que implica una lucha de líneas, se centrará en la vía de
la revolución, por ser un aspecto central dentro del modelo de Revolución de Nueva
Democracia. Continuando con el contexto se abordará en la segunda parte la respuesta
comunista en el Sur del Tolima ante la violencia desatada por el Estado en 1949. La
tercera parte de este capítulo analizará el proceso que empezó como la defensa del
territorio y la vida, terminó con desplazamientos forzados, y migraciones internas, entre
ellas la épica “Columna de Marcha”, para buscar en las alturas de las montañas tolimenses
un lugar seguro donde vivir: El Davis.
3.1 Inicio de la lucha ideológica y política en el seno del PCC, 1940-1956
La historia sobre el Partido Comunista de Colombia consigna que durante los años 40 y
más concretamente durante el periodo de la guerra mundial antifascista y de la crisis del
liberalismo en el poder (1940-1945) el Partido libró un intenso debate en torno a lo que
ellos llamaron el “oportunismo de derecha”. Esa lucha se remonta como mínimo al quinto
pleno de la Dirección Nacional, mayo de 1940242, donde se «hizo un severo balance
autocritico del oportunismo de derecha, pero infortunadamente sin la necesaria atención
del peligro contrario, el del oportunismo de izquierda, que a veces se refleja en algunas de
sus formulaciones»243.
La siempre existente tensión entre “oportunismo de derecha”, “oportunismo de izquierda”
y “la posición central” se hizo más intensa cuando el Partido Comunista tuvo que afrontar
242 En el trabajo de 30 años de lucha se habla del Sexto pleno en mayo de 1940. En las fuentes consultadas se hace referencia al quinto pleno con fecha del 17 de mayo de 1940. El documento titulado “materiales para el quinto pleno del Partido comunista” es firmado por Rafael Baquero H. las citas utilizadas en 30 años de lucha corresponde con el documento aquí consultado. 243 Comité Central del Partido Comunista de Colombia, 49
92 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
la gran coalición mundial contra el fascismo que situó a Estados Unidos e Inglaterra al
lado de la Unión Soviética. Reconoció el mismo Partido en “30 años de lucha...” que
«perdió la brújula de los principios de Marx y de Lenin y, a partir de 1942, se lanzó por el
camino extraviado y funesto del revisionismo browderiano»244.
El mismo Partido hizo un balance de este periodo:
«Nuestro partido difundió intensamente primero los artículos y luego los libros del
entonces secretario General del Partido Comunista de los Estados Unidos, Browder, quien
utilizó la gloriosa bandera antifascista para encubrir el contrabando de un revisionismo
hábilmente disfrazado de consideraciones tácticas. Browder sostenía que se había abierto
una nueva perspectiva histórica, de estrecha colaboración en la guerra y después de ella,
entre los Estados Unidos y la Unión Soviética, que aseguraría un mundo sin crisis
económicas ni conflictos armados; el paso gradual del capitalismo al socialismo; el
desarrollo pacífico de los pueblos atrasados con el apoyo financiero Norteamericano»245
Asumida esta autocrítica, las ideas Browderistas se marginan y son expulsadas en el V
Congreso del Partido en la discusión con quienes están a favor de restituir el nombre de
Partido Comunista y reivindicar los planteamientos marxistas-leninistas. De allí que el
Congreso, celebrado en 1947, se le denominó Congreso de la Reconstrucción leninista.
En el VI Congreso reunido entre el 20 y el 28 de Agosto de 1949 se reincorporaba
nuevamente al Partido el grupo de comunistas expulsados «arbitrariamente»246 antes del V
congreso. Este grupo que se había llamado “movimiento reorgánico del Partido
Comunista” era identificado como extremo izquierdista por defender sus tesis contra la
dirección que había sentado como dogma indiscutible «el camino pacífico de la revolución
colombiana»247. Pero era más tozuda la realidad al punto que el mismo Partido tuvo que
generalizar “la consigna de autodefensa de masas”, esto sucedió el 22 de octubre de 1949
en reunión extraordinaria del Comité Central.
244 Comité Central del Partido Comunista de Colombia, 52. 245 Comité Central del Partido Comunista de Colombia, 58. 246 Comité Central del Partido Comunista de Colombia, 87. 247 Comité Central del Partido Comunista de Colombia. 78.
3. El momento de la recepción 93
Ya para esta altura era evidente que la característica de Guerra Popular Prolongada del
proceso revolucionario en China tenia eco en la desbordante violencia que Colombia vivía
con posterioridad al Bogotazo, estos debates se vieron reflejados en el seno del PCC.
Pedro León Arboleda comenta como fue el desarrollo de la lucha de líneas en la
Conferencia Nacional de Organización del Partido en 1949:
«Allí se planeó el problema de las guerrillas. Pedro Abella, Álvaro Vásquez y yo,
apoyábamos la línea guerrillera. Filiberto Barrero se oponía a esta línea. Ahí apenas se
vieron posiciones. Luego, en 1950, se funda la Juventud Comunista en Viotá, zona
guerrillera. Allí estuvieron Eligio, Prospero, Pedro Vázquez, yo, etc. Hubo mucho
entusiasmo. La reunión fue un impacto político. José Gutiérrez, elegido secretario de la
juventud, planteó apoyo a la guerrilla. La gente de Barrero se opuso»248.
En 1951 se vuelve a librar una lucha ideológica en el 14 pleno del Comité Central del PCC
donde aparecieron dos tendencias: la que consideraba necesario y fundamental la acción
guerrillera, y la que sostenía como principal y fundamental el incremento de la lucha de
masas. A la primera se le llamó «extremo izquierdista e idealista… además aventurera,
porque se proponía lanzar, y en algunos lugares lo había logrado, a sectores de la
autodefensa campesina a la ofensiva, cuando la correlación de fuerzas favorecía al
enemigo»249. El Partido dice que tuvo que combatir con posiciones que solicitaban pedir
armamento para los guerrilleros en la Unión Soviética, trasladar miembros del Comité
Central a las guerrillas, y que a su vez reivindicaban la existencia de una “Republica
Popular”, al estilo chino, surgida en los llanos250.
El VII Congreso del PCC en 1952 orientó nuevamente la Autodefensa Campesina
aclarando que «las guerrillas no serán un factor decisivo en la lucha por la liberación del
pueblo colombiana (sic) mientras no pueda fundirse con un movimiento popular que se
exprese en la lucha de MASAS»251; y aunque plantearan que estaban ante una perspectiva
de ampliación del movimiento guerrillero, la orientación fue que «el Partido debe insistir
248 León, Arboleda Pedro. “Ultimo Reportaje a Pedro León Arboleda”, Revista Alternativa N° 47 (1975): 4. 249 Comité Central del Partido Comunista de Colombia, 96. 250 Comité Central del Partido Comunista de Colombia, 95. 251 Comité Central del Partido Comunista de Colombia, 101.
94 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
en su política de autodefensa, lo cual significa organizar a las masas para que estén en
capacidad de responder a las agresiones de sus mortales enemigos, y no para que tomen,
en este periodo, la iniciativa del ataque»252. Para combatir el “aventurerismo” y el
“bandolerismo” en la guerrilla agregaron: «A los guerrilleros debemos hablarles con toda
franqueza y lealtad, esforzándonos por educarlos políticamente, mostrándoles que están
librando una lucha prolongada de grandes proyecciones para el futuro, cuando se convine
con un movimiento de masas revolucionario»253. Ante esto los militantes comprometidos
con el desarrollo de la lucha guerrillera manifestaron sus objeciones; de hecho, las
orientaciones en agosto de 1952 de la "Primera Conferencia Nacional del Movimiento
Popular de Liberación Nacional" donde estos militantes tenían gran influencia iban mucho
más allá de la orientación de las autodefensas:
«1. Buscar la unificación del conjunto del movimiento guerrillero; 2. Iniciar de inmediato y
por iniciativa de la resistencia armada, una reforma agraria democrática; 3. Impulsar una
alianza obrero-campesina guerrillera como medio para alcanzar el poder; 4. Tomar como
criterio para ubicar a los amigos y enemigos del proceso, la simpatía o antipatía con el
movimiento armado. Además, se invitó a los asistentes a fortalecer en sus regiones el Frente
Democrático de Liberación Nacional, se creó una "Comisión Nacional Coordinadora", y se
llamó a fortalecer las luchas populares, en orden al derrocamiento de la dictadura y la
instauración de un gobierno democrático, popular y antiimperialista»254.
No es gratuita la afirmación que Gilberto Vieira hiciera: «Este programa expresa el anhelo
de los campesinos revolucionarios, de los comunistas que están en la lucha abierta por el
poder, que luchan por la tierra. Este programa tiene mucha influencia en el sur del Tolima,
pero también en el movimiento de Sumapaz y en el oriente del Tolima (...) No influye
lamentablemente en la mayoría de las guerrillas de entonces»255.
252 Informe del secretario general del Partido al VII congreso del PCC, citado en el informe del Secretario General al XVI Pleno del Comité Central. Agosto 1953. P 47. 253 Informe del secretario general del Partido al VII congreso del PCC, citado en el informe del Secretario General al XVI Pleno del Comité Central. Agosto 1953. P 47. 254 Eduardo Pizarro Leongómez, los orígenes, 14. 255 Arturo Alape, La paz, la violencia: Testigos de excepción (Bogotá: Planeta Colombiana Editorial, 1985), 86.
3. El momento de la recepción 95
En 1953 se registra la lucha de línea en el seno de la dirección central del PCC en medio
de la situación de reciente dictadura tras la subida del General Rojas Pinilla. Un sector
reclamaba que la dirección «en vez de perder el tiempo en Bogotá cada miembro del
Comité Ejecutivo se trasladaba a trabajar en una guerrilla»256. El sector oficial del Partido
consideraba que esto era tendencias anti-leninistas, llamaba a combatirla pero también a
cuidarse de su expresión contraria, es decir, de las desviaciones oportunistas de derecha.
Así lo decían:
«Si antes del golpe de estado del 13 de junio en determinados momentos llegó a ser el más
grave enemigo dentro de nuestras filas las desviaciones idealistas -“Izquierdistas”- que
pretendían arrastrarnos por el camino de las aventuras con la tesis de que la acción armada
era la forma principal de lucha contra la dictadura reaccionaria, en el periodo actual,
nuestro Partido, sin dejar su combate ideológico contra las tendencias sectario–
izquierdistas debe prestar también particular atención al peligro de las desviaciones
oportunistas de derecha, que pueden manifestarse en forma de falsas ilusiones reformistas
sobre el nuevo gobierno»257.
Fue en medio de ese álgido contexto de lucha de líneas en el seno del Partido Comunista
de Colombia que los receptores del modelo revolucionario chino, principalmente la
militancia campesina, integraron dialécticamente ese sistema estructurado de ideas
políticas con sus saberes campesinos, fruto de la experiencia de resistencia para confrontar
la Violencia, dando como resultado emergente una zona liberada donde se construyó poder
popular. Esa zona fue El Davis, como se verá a continuación.
3.2 Respuesta comunista a la Violencia en el Sur del Tolima
Una vez conocida la noticia del asesinato de Jorge Eliecer Gaitán el 9 de Abril de 1948, en
el Tolima se dio una amplia y variada respuesta al asesinato del líder gaitanista. Es así que
en «el sur del Tolima, y sobre todo en las áreas rulares, donde hubo considerable agitación
revolucionaria, la noticia del asesinato de Gaitán fue recibida como el anuncio del
256 La situación actual y nuestras tareas. Informe del Secretario General al XVI Pleno del Comité Central. Agosto 1953. P 61. 257 Resolución política XVI Pleno del Comité Central. Agosto 11 de 1953. P 14.
96 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
comienzo de una guerra, con cantos de clarín. Así aconteció en la fracción de La Profunda,
(Municipio de Chaparral), en el Ilarco (jurisdicción de Coyaima) y en la población de
Natagaima»258. Entre el 9 y el 19 de Abril, se da una movilización armada en el sur del
Tolima (Coyaima, Chaparral y Natagaima) que logra concretar la «remoción y reemplazo
de las autoridades, el establecimiento de Juntas Revolucionarias, la conformación de
milicias populares, la creación de Comisiones o Junta de vigilancia y Juntas de
consecución y distribución de víveres, etc. Eran expresiones políticas o embriones de
poder popular y de un nuevo orden revolucionario, tendientes a sustituir el poder y el
orden establecido»259.
Después de la ofensiva campesina vino la restauración conservadora y las venganzas hacia
los liberales gaitanistas.
«Esta persecución implacable contra los gaitanistas se traduce en pocas pero cruentas
masacres de población liberal que tienen por escenario los municipios de Anzoátegui,
Falan, Chaparral, Cunday y Rovira, todos ellos de mayorías liberales, con excepción de
Anzoátegui, que presenta una distribución electoral paritaria entre los dos Partidos. A raíz
de lo anterior, en los últimos tres municipios se organizan núcleos de autodefensa
integrados por campesinos que huyen al monte para salvar sus vidas. Estos grupos serán el
embrión de las futuras guerrillas liberales del sur del Tolima, integradas por grupos
familiares como los Loaiza, los Borja, los Vargas y los Cantillo, entre otros»260.
Con los conservadores en el poder desde 1946 y después de la muerte de Gaitán en 1948
se desata la más cuenta violencia en el campo, lo que «Pierre Gilhodes denominó como
revancha de los grandes terratenientes contra los campesinos insurrectos de años
anteriores»261. Ante estos hechos, los comunistas lanzaron la consigna de “Autodefensa de
masas” el 22 de octubre de 1949. Precisamente fueron los campesinos y los indígenas del
258 Gonzalo Sánchez. Los días de la revolución: gaitanismo y 9 de abril en provincia (Bogotá: Centro Cultural Jorge Eliécer Gaitán, 1984), 91. 259 Gonzalo Sánchez. Los días de la revolución, 115. 260 María Uribe, “Violencia y masacres en el Tolima: desde la muerte de Gaitán al Frente Nacional”, Credencial Historia No18 (1991). 261 Ver Fajardo. Haciendas, campesinos y políticas agrarias en Colombia, 1920-1980. p. 80
3. El momento de la recepción 97
sur del Tolima quienes más rápido desarrollaron la consigna. Crearon los primeros
comandos de autodefensa. El comandante Olimpo recuerda:
« El primer Comando de Autodefensa lo fundamos alegremente en Chicalá, donde estaba
la sede del Comité Comunista de Chaparral. Contemporáneamente fundamos los de otras
regiones: Buenos Aires, Irco, La Marina, Horizonte, Ambeima. Más tarde organizamos los
de otras regiones y veredas. Así sembramos de Comandos todo este flanco de la Cordillera.
Junto con Eliseo Oviedo y los hermanos Balvuena, nos acompañaron en esa tarea los
dirigentes Pedro Ramos, Eliseo Manjarrés Marco Aurelio Restrepo, Luis Alfonso
Castañeda, Jorge Peñuela, Enrique Cedeño y otros. Un poco después cooperó Isauro Yosa,
posteriormente Lister. Por suerte algunos de estos habían sido concejales de Chaparral»262.
Entonces, dado que el sur del Tolima seguía siendo base territorial del liberalismo, allí se
desató la más cruenta violencia de la policía política conocida como los “Chulavitas”. En
las regiones de Chaparral, Rioblanco, Herrera, el Limon los liberales fueron presa del
terror estatal. Familias enteras se movilizaron hacia Rioblanco a la hacienda de Gerardo
Loaiza, campesino liberal del directorio de este Partido quien tenía la orientación de
formar núcleos guerrilleros contra el gobierno conservador tal como ya sucedía en los
Llanos orientales.
Mientras los campesinos liberales se iban organizando para resistir, en las veredas del
Chaparral, bajo la dirección del Partido Comunista, se daba la organización de los grupos
de autodefensas auspiciados por militantes como Jorge Hernández Barrio, quien más tarde
asumiría el seudónimo de Comandante Olimpo. Comenta Olimpo:
«Yo hacía vida legal en Chaparral para iniciar la reorganización de la dirección clandestina
y algún género de actividades públicas. De entrada fundé “Frente Rojo”, el periódico
mimeografiado que aparecía semanalmente. Lo editábamos en la región de Chicalá y era
difundido en forma clandestina por todo el sur del municipio, en sus comienzos. Hasta el
golpe palaciego de Rojas Pinilla, no dejamos de imprimirlo ni una sola semana. Aún
262 Carlos Arango. “El Ex Comandante Olimpo y el Chaparral de los grandes”. En. FARC. Veinte años. De Marquetalia a la Uribe (Ediciones Aurora. Bogotá. 1985).
98 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
durante los bombardeos replicaba puntualmente su campaneo. Paralelo al trabajo
clandestino, en Chaparral y sus corregimientos e incluso en las haciendas adelantábamos
labores legales y actos públicos en las plazas»263.
Los primeros comandos de autodefensa crecían a la par de la organización de los
campesinos para resistir, la solidaridad era elemento clave no solo para solventar las
necesidades materiales de los combatientes, sino para levantar la moral de la resistencia.
Sigue su relato el comandante Olimpo:
«Esos primeros comandos eran unos idílicos organismos de masas que no tenían todavía
carácter de guerrillas, pues no se proponían la ofensiva ni atacar a nadie, exclusivamente
eran defensivo, políticos. Cumplían labores de vigilancia, establecían sus códigos de
señales para avisar el peligro, se comunicaban con cuernos o humo, blanco o negro según
el caso. Desde luego también utilizaban “propios” o sea enviados personales. La custodia
de su región y el adiestramiento político-militar eran las funciones primordiales de tales
comandos, la protección de los campesinos entre las agresiones de las fuerzas armadas
oficiales. Organizaban también los refugios de las familias, para el momento cuando les
cayera la fuerza pública. Eran organismos que disponían siempre de una dirección política
y militar que se encargaba, además de enseñar elementos de táctica militar y las normas
fundamentales de la guerra. ¡Qué alegría: Este trabajo era una fiesta!»264.
Ante la resistencia organizada de los campesinos en las autodefensas la ofensiva del
Estado se hizo despiadada. Los servicios de información e inteligencia realizados por los
mismos campesinos, principalmente niños y niñas, habían avisado de planes de la policía
para asaltar la región de Chicalá. Los primeros combates fueron bien librados por un grupo
de solo siete campesinos al mando político del Comandante Olimpo, pero el enemigo
siguió su avance implacable.
263 Carlos Arango, 170-171. 264 Carlos Arango 173
3. El momento de la recepción 99
«Los cerros se erizaron de fusiles enemigos. Por donde iban pasando dejaban todo en
llamas, casas, enramadas, potreros, todo. Se cargaron los productos de los campesinos: el
café, los alimentos, las ropas (…) Se llevaron todos los animales: las bestias, el ganado, los
cerdos, las gallinas. Lo que no pudieron coger, lo mataron a tiros en los potreros. Como el
enemigo se había tomado los caminos de la región, y las familias estaban enmontadas, los
sietes (ya guerrilleros) les salimos al paso en varias ocasiones, produciéndoles más bajas.
Pero de todas maneras el enemigo se convirtió en el dueño absoluto del sector. Patrullaban
de día y de noche. Nadie podía salir a un rancho, a un camino»265.
Con el control territorial por parte de la fuerza pública en los hechos se dio un despojo de
los campesinos, todas las familias de la región estaba viviendo prácticamente en la
clandestinidad, su único amparo era el verde de los montes que estaban custodiados desde
el aire por el ejército. Soportando algunas semanas, tenían que tomar decisiones para
sortear la situación. En asamblea nocturna, convocaron los destacamentos de Chicalá,
Buenos Aires, La Marina, y decidieron partir al comando de Irco, allí se concentraron
todos los comandos de autodefensa con orientación comunista e hicieron una asamblea
popular y realizaron la Primera Conferencia Guerrillera del Sur del Tolima. La conferencia
decidió que todos marcharan a las montañas del corregimiento de Rioblanco, en donde los
esperaba los guerrilleros liberales de los Loayza para llegar a acuerdos, juntar fuerzas y
combatir al enemigo en común: el Gobierno conservador. Surge así la “Columna de
Marcha” bajo la responsabilidad política del comandante Olimpo.
Manuel Marulanda Vélez menciona que la ofensiva militar contra los destacamentos
comunistas se había centrado principalmente en Chicalá, por ser el núcleo embrión desde
1949. Frente a los detalles de la orientación emitida por la Primera Conferencia Guerrillera
del Sur del Tolima dice:
«Crear lo que se denominó "La Columna Guerrillera", cuya misión era ganar altura en la
Cordillera Central, atraer la atención del enemigo para descargarle presión a los lugares de
origen del Movimiento a fin de que sus habitantes no fueran blanco de las represalias que
265 Carlos Arango 179
100 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
se ejercían contra la población civil. Pasado un tiempo prudencial, la "Columna" seria
disuelta y sus integrantes diseminados en pequeños grupos móviles entrarían en una nueva
fase operativa, apoyándose en las veredas de origen para su aprovisionamiento»266.
Pero lo que no esperaban los comunistas era que a sus tropas se les fueran sumando
familias enteras en busca de protección, tanto así que un mes después a La Lindosa
llegaron doscientas familias protegidas por cincuenta guerrilleros. Esta épica movilización,
inspirada en la Gran Marcha de Mao Tse-tung267, es de por sí migraciones internas en el
departamento del Tolima, siendo los sitios desde donde se originó el desplazamiento: Irco
dos aguas, Chicalá y Buenos Aires del corregimiento del Limón, y desde la vereda de la
marina del corregimiento de la Marina.
A esta altura de los sucesos ya no era prioridad defender los territorios, la Columna de
Marcha buscaba un fin más simple y complejo a la vez: defender la vida. Tras días de
travesía por las montañas del Sur del Tolima tuvieron que cambiar la ruta e incursionar al
fondo de la selva para resguardarse del ejército que había detectado su presencia.
«Surgieron acontecimientos para los cuales los camaradas no estaban preparados;
nacimientos, enfermedades, cansancio al correr los días, falta de alimentos. Los
campesinos se vieron obligados a recurrir a sus hábitos y a sus saberes tradicionales»268.
Así duraron varias semanas hasta que la marcha llegó a su fin. Los campesinos
descansaron en la Lindosa y de allí se preguntaron: ¿dónde podían instalar a la militancia y
a los campesinos que habían marchado con ellos? Escogieron inicialmente lo alto de una
cumbre llamada el Filo de la Culebra. «Pero debido a que La Culebra sería difícil de
defender, los camaradas se fueron para EL Davis, tierra situada en lo alto del cañón del río
Cambrí»269.
266 Manuel Marulanda Vélez, Cuadernos de campaña (Bogotá: Editorial Abejón Mono, 1973), 65. 267 Eduardo Pizarro Leongómez, los orígenes, 13. 268 Malcolm Menzies. Desde las montañas de Colombia. (Ibagué: Editorial Mabillón, 1999) 42. 269 Malcolm Menzies, 42.
3. El momento de la recepción 101
3.3 La zona liberada de El Davis, 1951-1953
El Davis es una vereda que pertenece al corregimiento de Las Hermosas, este
corregimiento junto con cuatro más (Amoya, Calarma, La Marina y Del Limon) se suma a
la Cabecera Municipal de Chaparral que se distribuye en tres comunas y 32 barrios para
completar el territorio del municipio llamado Chaparral, al sur de Tolima. El Davis está
ubicado en una cumbre montañosa entre el río Cambrí y la quebrada de La Lindosa, dos
quebradas afluentes del río Saldana. En sus tierras se dio el embrión de una nueva forma
de organización campesina, de ciudad, o ciudadela como sus integrantes lo decían, cuyo
asentamiento humano albergó cerca de cinco mil personas270 durante los años de 1951 a
1953.
La mayoría de sus integrantes eran campesinos que provenían del municipio de Chaparral
y del municipio de Río Blanco, otros eran artesanos, profesores y agricultores procedentes
de diversos lugares. La colectividad de sus integrantes venían huyéndole a la persecución
que los conservadores habían desatado en los pueblos de los departamentos del Huila y
Tolima.
El asentamiento fue producto del acuerdo entre campesinos organizados del Partido
Liberal y del Partido Comunista. En diciembre de 1950 se dio el encuentro y el acuerdo.
La reunión se realizó en un punto llamado la Gallera en la vereda La Lindosa, del
municipio de Río Blanco, en propiedades de Gerardo Loaiza, máximo líder guerrillero
liberal del sur del Tolima. Por el lado comunista se destacaba el Comandante Olimpo
quien un mes atrás había emprendido el desplazamiento de sus tropas del área de El Limón
hacia las montañas con el objetivo de atraer las tropas de la policía a hacia ellos y así
alejarlas de las familias campesinas. La ciudadela se empezó a construir en una base
territorial de influencia liberal y sobre ella los comunistas empezaron a tejer nuevas
relaciones sociales. Esta situación determinaría el futuro inmediato de El Davis.
270 María Victoria Uribe Alarcón. Salvo el poder todo es ilusión. (Bogotá: Universidad Javeriana , 2007), 80.
102 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
El largo trayecto de la Columna de Marcha le había permitido a los comunistas empezar a
construir una identidad colectiva con las familias campesinas a partir de la amenaza y el
señalamiento a quienes solo querían defender sus vidas. Así lo recuerda Isauro Yosa:
«Desde el principio tocó organizar todo muy bien: manejar tanta gente no es fácil. Nos
ayudaba estar amenazados por la tropa y señalados de comunistas por los liberales. Eso nos
hacía sentir más cerca entre nosotros y acatar la autoridad y la disciplina. Sin eso no
hubiéramos sobrevivido a tanta necesidad y a tanto asedio»271.
Esa misma autoridad y disciplina se irían a expresar en El Davis pues en el nuevo territorio
en construcción se empezaba a combinar el poder coercitivo y protector a la vez.
Concretado los acuerdos entre liberales y comunistas se emprendió la construcción del
destacamento. Con el objeto de coordinar las acciones militares se creó un Estado Mayor
Unificado del Sur, llamado Comando de El Davis, que estuvo integrado por campesinos
liberales y comunistas.
«El Estado Mayor Conjunto se reúne, discute y dispone en relación a la actividad militar;
la preparación de entrenamientos, la defensa de la región, la vigilancia de la zona y la
defensa del campamento; planifica las acciones militares de toma de poblaciones y
caseríos, los asaltos a regiones conservadoras y, elabora los planes de abastecimiento (...)
El Estado Mayor Conjunto se encargaba de la planificación y preparación de los otros
mandos»272.
La organización adoptada fue la misma que se fue generando en el largo trayecto de la
Columna de Marcha. Surgió la organización político militar para la subsistencia y
convivencia de los guerrilleros y sus familias. Se proporcionaba instrucción militar a los
destacamentos guerrilleros donde la disciplina y la profundidad política era regla; la
educación política era para todos los habitantes del “pueblo”, esto permitía que los
271 Alfredo Molano. “Isauro Yosa, el Mayor Lister”, en Trochas y fusiles (Bogotá: El Ancora Editores, 1999), 36. 272 Arturo Alape, Las vidas de Pedro Antonio Marín, Manuel Marulanda Vélez, Tirofijo (Bogotá: Planeta, 1989), 175-176.
3. El momento de la recepción 103
campesinos entendieran que sus enemigos no eran otros campesinos de igual condición
socioeconómica pero de diferente Partido político, sino el Gobierno Conservador y los
terratenientes apoyados por los Estados Unidos.
En El Davis se dio una clara división de trabajo. Militares y civil iniciaron la construcción
de alojamientos y cuarteles, se construyen las trincheras, se instala agua, se cultivó la
tierra, etc. De lo que se trataba era de construir un verdadero poblado, una ciudadela, con
toda su organización social, política, militar, económica y cultural. Para los dirigentes
comunistas empeñados en esta tarea era claro que necesitaban «dominar un espacio, crear
un territorio, explotarlo, exprimirlo a favor»273, fue así que para ampliar los territorios
cultivados o buscar alimentación en otras regiones, se crearon las llamadas comisiones,
grupo de personas para trabajar la tierra, para tumbar monte y hacer cosechas de maíz,
frijol, sembrar la caña, la yuca, el plátano. Eran más de doscientos hombres en esa tarea.
En la práctica se creó un «sistema de agricultura y ganadería colectiva destinada
exclusivamente a la subsistencia de los pobladores del Destacamento (…). Era una especie
de comunismo de guerra de un destacamento guerrillero rodeado de hostilidades
capitalistas»274.
Como toda ciudad en construcción, los campesinos edificaron sus casas de bahareque,
alrededor de un espacio abierto o plaza de armas, «lugar privilegiado de significación del
poder en la ciudad»275. Bajo la dirección de Olimpo como comisario político y de Pedro
Rumique comandante militar del destacamento,
«los campesinos construyeron un puesto de guardia de dos pisos, que servía también de
centro administrativo, donde llegado el caso, tanto el Estado Mayor Unificado como el
Comando de El Davis se reunían para deliberar. Construyeron una escuela que carecía de
maestro y una enfermería que carecía de médico. Construyeron letrinas públicas, adaptaron
lugares especiales para bañarse y lavar la ropa. Apartados del campamento, los campesinos
dispusieron lo apropiado para bodegas donde podrían almacenar los productos que
273 Fabio Zambrano, “La ciudad en la historia”, en La ciudad: hábitat de diversidad y complejidad, eds. Carlos Alberto Torres Tovar (Bogotá: Unilibrios, 2002), 131. 274 Manuel Marulanda Vélez, 53. 275 Fabio Zambrano, 140.
104 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
esperaban cosechar un día. (…) la existencia cotidiana exigía ciertas obras indispensables,
como la de disponer de una cantina donde pudiera beber juntos un café, jugos de fruta o
aromáticas; una cancha de tejo y el mercado»276.
Y no era para menos, pues los espacios de sociabilidad que iban construyendo cohesión
social eran indispensables. El Davis empezaba a convertirse en «un recipiente de
experiencias sociales, (…) un continente lleno de memoria social, la (…) piel que va
registrando las diferentes formas como se presentan los acontecimientos históricos»277.
Desde el punto de vista de la organización política la propuesta comunista fue constituir un
Frente Democrático de Liberación Nacional que agrupara a todos los campesinos,
independiente de su filiación política, que quisieran oponerse la violencia desatada desde
el gobierno. Cuenta Manuel Marulanda, quien tenía ciertas reservas con esta propuesta:
«Todos participaban en la dirección, en el ejecutivo: representantes de los jóvenes, del
Partido, del Estado Mayor, un organismo vivo y contradictorio de esa población agolpada
en El Davis (...) El frente democrático con su presidente, su vicepresidente, el tesorero, el
ecónomo, y cada cartera o el encargado ejecutaban sus tareas conforme lo diseñaba la
dirección. Asumía en todo sentido, muchas decisiones que se discutían colectivamente»278.
Además del Frente Democrático se impulsó la organización de las mujeres, niños, jóvenes.
Existía un comité de Juventudes Comunistas cuya tarea fundamental era «hacer su trabajo
en las filas de la guerrilla para conseguir militancia entre los jóvenes, con buenos ejemplos
y una educación dirigida utilizando documentos de actualidad política»279. Comenta
Manuel Marulanda que en ese entonces se empezó a conocer la radio, a conocerse los
boletines impresos, por su parte los comunistas siguieron editando el periódico “Frente
Rojo”, se impartía la instrucción política a todo el destacamento, se le prestaba atención a
la escuela para los niños y para adultos, se impartían cursos para guerrilleros de base y
para comandantes medios.
276 Malcolm Menzies, 45. 277 Fabio Zambrano, 136. 278 Arturo Alape, 178. 279 Arturo Alape, 177.
3. El momento de la recepción 105
Frente a la organización de las mujeres los testimonios se recogen de Graciela Loayza, la
hermana menor de Gerardo Loaiza, la única de los Loaiza que decidió su vida en la
guerrilla comunista:
«Existía un comité de mujeres con su dirección central y un ejecutivo y nos reuníamos algo
así como 400 mujeres, cada ocho días los sábados. La reunión se hacían para leer
materiales, revistas, libros y explicarlos; para discutir cosas relacionadas con la familia,
especialmente sobre los niños y luego se concluía en la organización de las comisiones
para lavar y planchar la ropa de los guerrilleros, comisiones para la enfermería, los
pioneros, los casinos y el aseo de la caleta que llamaban cuartel (...) la Cruz Roja era un
grupo de 10 enfermeras a las cuales previamente nos hicieron un cursillo donde nos
enseñaron a inyectar a hacer curaciones y a prestar los primeros auxilios»280.
Pero aun así, en El Davis existía una especie de machismo porque no permitían que las
mujeres salieran a la lucha. Ellas podían militar en las filas del Partido Comunista, pero no
en la guerrilla, ni siquiera las dejaban portar armas cuando siendo enfermeras salían con
los combatientes.
Para los niños también existía su propia organización: el Batallón Sucre. Se componía de
niños de 6 a 13 años, con su comité ejecutivo, sus reuniones semanales en asamblea
general y sus dos comandantes.
«La función de los comandantes (Carvajal y Crucero) consistía en darle instrucción militar
a los niños, en el conocimiento del terreno, su aprovechamiento en el combate, la defensa
personal, en la defensa anti aérea, el manejo de granadas (...) en lo político se les explicaba
quién era el enemigo, contra quien se combatía, porqué causa se combatía, la razón por la
cual caían los compañeros en lucha. Moralmente se les preparaba para resolver cualquier
dificultad; se les enseñaba a leer y escribir en la escuela»281.
280 Arturo Alape, 177-181. 281 Arturo Alape, 177.
106 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
María Victoria Uribe Alarcón en Salvo el poder todo es ilusión, cita a Luis A. Matta
Aldana282, quien ofrece datos de su vivencia infantil en el destacamento armado.
«Menciona la existencia de una organización de niños a la que llamaban batallón Sucre y
una escuela de pioneros dirigida por la Juventud Comunista. Dice que en el asentamiento
había más de trescientos niños que se dedicaban a vigilar y a recolectar leña para cocinar, a
cosechar plátano, yuca y maíz para la alimentación de sus integrantes y a limpiar las
cementeras. Los viejos y los niños que no eran aptos para la lucha armada eran enviados a
hacer trabajos agrícolas como sembrar y desyerbar en las fincas cercanas, construir casas y
ranchos y conseguir palmas para techar las viviendas»283.
La organización militar era semejante a la de las guarniciones del ejército. Se tenían
galpones adaptados como dormitorios con su guardia que garantizaba la seguridad y el
cuidado del mismo. En El Davis la cuestión de seguridad, pero también, de vigilancia de
sus ciudadanos era bien clara: «defender a los de afuera pero controlar a los de adentro»284.
La guardia de 24 horas se turnaba para garantizar personal en todos los puestos de
vigilancia y un comando disponible. La estructura militar estaba compuesta por
compañías, escuadras y guerrillas como unidad básica. La guardia tenía centinelas,
patrullas internas y externas, y unidades para custodiar los lugares más prioritarios dentro
del destacamento de El Davis: la enfermería, el almacén de ropas, las bodegas y el sitio
para almacenar las armas. El destacamento tenía casino para la tropa, oficiales y
suboficiales.
Retomando a Manuel Marulanda podemos leer la síntesis que él plantea sobre el
destacamento del El Davis.
«Allí se dio una organización civil-militar, surgida en el proceso de crecimiento de la
acción guerrillera, en esta primera etapa, se inspiraba en el sistema de funcionamiento de
los cuarteles de tropa y la organización y dirección civil de una ciudad. Era la fusión de
282 Luis A. Matta Aldana, Colombia y las Farc-EP. Origen de la lucha guerrillera (Txalaparta: Nafarroa, 1999) 283 Uribe, 80. 284 Fabio Zambrano, 134.
3. El momento de la recepción 107
estas dos formas orgánicas adaptada a las condiciones en que se manifestó la vida en el
Destacamento y con las limitaciones objetivas y subjetivas que puedan anotarse. ¿Cuál era
su causa primordial? La existencia de una población no combatiente compuesta por
ancianos, mujeres, niños, que habían corrido al monte al lado de los guerrilleros, porque
confiaban en que los protegerían de la violencia»285.
Se podría resumir diciendo que la ramificación de todas estas organizaciones se constituyó
en la práctica como una especie de gobierno. «Cada guerrillero se iba convirtiendo en un
dirigente popular. En El Davis y en cada destacamento guerrillero teníamos al pueblo
organizado, ya fuese en Comités de Frente Democrático, ya en Comités Juveniles y
Femeninos, o en Células Comunistas, por supuesto»286.
El Davis fue posible, en parte, debido al programa político planteado por el PCC que fue
sancionado en la Primera Conferencia Nacional del Movimiento Popular de Liberación
Nacional287, allí se propuso:
«La construcción de un gobierno popular que restableciera libertades democráticas,
decretara una reforma agraria “que aplicara el principio de la tierra es para quien la
trabaja”, devolviera la integridad de las comunidades indígenas, nacionalizara las minas,
separara la Iglesia del Estado, creara un ejército nacional y democrático y adoptara una
política internacional independiente»288.
Importante resaltar que la propuesta del Gobierno Popular Democrático iba acompañada
de un “sistema de gobierno” fundamentado en la formación de Consejos Populares y en
Comités de Frente Democráticos. Adicional a eso está la concepción del poder que
aprobaba la Conferencia, pues en su planteamiento no se contemplaba esperar el “el asalto
285 Manuel Marulanda Vélez, 13. 286 Carlos Arango 183. 287 El evento también es conocido como la “Conferencia Boyacá” pero realmente fue realizada el 15 de agosto de 1952 en Viotá, Cundinamarca, con delegados de las guerrillas del Llano, Santander, Antioquia y Sumapaz. 288 Alfredo Molano Bravo, “Fragmentos de la historia del conflicto armado (1920-210)”, en Contribución al entendimiento del conflicto armado en Colombia, (Bogotá: Ediciones Desde Abajo, 2015), 603.
108 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
al poder” para emprender las trasformaciones necesarias, sino “la construcción del poder”
desde la base. La declaración decía:
«Estos principios programáticos deberán ser puestos en práctica en la medida de las
posibilidades, en las zonas liberadas, por parte de los Consejos Populares, y de las
autoridades designadas por ellos. Y serán consagrados posteriormente en una
Constituyente que sea elegida de modo directo por el pueblo colombiano»289.
Todo eso le daba coherencia a una propuesta política desde las experiencias asimiladas
fruto del proceso de “Recepción” en el seno de la militancia campesina, pero a su vez se
convertía en una debilidad para El Davis. , Las diferencias ideológicas que a finales de
1951 había dividido a El Davis en dos sectores enfrentados militarmente (El Davis
propiamente dicho, llamados “Comunes”, y el sector de La Ocasión de los liberales, o
“Limpios”) se agudizó hasta el rompimiento definitivo cuando los comunistas adoptaron el
programa de la Primera Conferencia Nacional del Movimiento Popular. En ese escenario
fue que recibieron en 1953 el golpe militar de Rojas Pinilla.
Las diferencias estaban en la concepción que cada grupo tenía de la guerra, el trato a los
conservadores, y la proyección de la lucha. Mientras los comunistas proyectaban la
transformación de la sociedad a partir de una zona liberada, los liberales no tenían un
proyecto revolucionario de transformación social. Así lo entendía Ciro Trujillo dirigente
del PCC:
«El movimiento guerrillero liberal del sur del Tolima estaba, por consiguiente, no sólo
influido y tutelado por los hacendados de la zona como en los Llanos, sino que operaban
como un agente directo de los tradicionales jefes políticos de la comarca. En esta
circunstancia, su función principal fue la de mantener la homogeneidad liberal de la región,
preservar la continua acumulación de tierras por parte de sus “ilustres” copartidarios, cuya
víctimas permanentes eran y siguen siendo los indígenas»290.
289 Declaración Primera Conferencia Nacional del Movimiento Popular. Ver anexo número 1en Eduardo Pizarro Leóngómes, Las Farc (1949-1966). De la autodefensa a la combinación de todas las formas de lucha (Bogotá: Tercer Mundo editores, 1991), 216. 290 Ciro Trujillo, Páginas de su vida (Bogotá: Editorial Abejón Mono, 1974), 228.
3. El momento de la recepción 109
Los métodos adoptados por los combatientes de El Davis y por sus destacamentos como
fue la prohibición de apropiarse individualmente de los despojos y armas arrebatadas a los
adversarios, el esclarecimiento que hacían los comunistas sobre la necesidad de evitar el
ataque a los campesinos conservadores y las discusiones políticas que se adelantaban era
rechazado por los guerrilleros liberales quienes, por el contrario, se complacían con el
godeo y en las llamadas revanchas.
Una causa básica que tuvo graves consecuencias como factor de división fue la
permanencia de la guerrilla originaria de Chaparral en un escenario de otra agrupación con
diferentes políticas. Ante este escenario, la decisión adoptada por los comunistas fue la
permanencia como fuerza independiente en un territorio en disputa y esto agudizó las
contradicciones. Así lo sintetiza Medófilo Medina al decir:
«Un problema básico que tuvo muy graves consecuencias como factor de división fue la
permanencia de la guerrilla originaria de Chaparral en un escenario ajeno a su influencia
social y política y que constituía a su vez el radio de acción de otra agrupación con
diferentes políticas. En esta situación se planteaba objetivamente dos salidas para resolver
favorablemente las dificultades: O bien la integración en una sola organización, la local, o
bien el retorno a los lugares de origen. La permanencia de la guerrilla de Chaparral como
organización independiente en esa zona de influencia liberal resultó a la postre la decisión
más negativa»291
En los primeros meses del golpe de Rojas Pinilla se sostuvo el enclave de El Davis, se creó
un nuevo destacamento guerrillero bajo la conducción de José A. Castañeda, "Richard", en
Calama, al norte de Chaparral, y se sostuvieron permanentes contactos armados con el
Ejército y con bandas de antiguos guerrilleros liberales transformados en avanzadas del
gobierno.
La estrategia ante la amnistía decretada por el gobierno militar de Rojas Pinilla y el final
del El Davis es recogida por Eduardo Pizarro en los siguientes términos:
291 Medina, 260.
110 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
«El mantenimiento del enclave de El Davis, se iba haciendo día a día insostenible. Ante
esta situación, el Comité Regional de Chaparral decide realizar la II Conferencia Regional
del Sur, el 28 de octubre de 1953, con la colaboración de la comisión Política del Estado
Mayor de El Davis. Para la adecuada transformación en autodefensa se crearon tres
comisiones "rodadas" que actuarían como destacamentos móviles, teniendo como
perspectiva la creación de movimientos de masas en zonas receptivas al influjo
comunista»292.
Aun así, desde 1951 hasta 1953, en El Davis se dio una magnifica experiencia de zona
liberada, la construcción de poder popular donde se alcanzó a configurar los cimientos de
una ciudad, los campesinos la llamaban ciudadela. Es de aclarar que esto fue posible
porque desde el lado contrario, el de las Fuerzas Militares, no estaban preparadas para
asumir las nuevas formas de lucha. En las zonas donde las guerrillas comunistas eran más
creativas los planes militares de represión fueron pobremente concebidos. Era claro que el
ejército carecía de la más elemental preparación en las guerras de guerrillas y que la
doctrina de guerra regular, lo que causaba sistemáticas bajas en emboscadas y golpes de
mano, no daban respuestas a algunas de las nuevas tácticas guerrilleras que los comunistas
colombianos leían de las experiencias del comunismo chino.
Pero esa situación también empezó a cambiar con la participación del ejército Colombiano
en la guerra de Corea. «Para los militares colombianos fue una experiencia técnicamente
modernizante. (…) según el general Valencia Tovar, la experiencia de Corea marcó
huellas decisivas en la tecnificación del Ejército y la Armada, pues en la circunstancia del
conflicto interno que desagarraba al país se habían introducido nuevas técnicas de
operación sin las cuales se hubiera agravado la inferioridad evidenciada por la Fuerza
Pública frente a la guerrilla en las primeras fases de confrontación»293.
292 Eduardo Pizarro Leongómez, los orígenes, 14. 293 Atehortúa Cruz, Adolfo León y Vélez Ramírez. Estado y Fuerzas Armadas en Colombia (Bogotá. TM Editores, 1994) 195.
3. El momento de la recepción 111
Conclusiones
Cuando el historiador Medófilo Medina analizó la experiencia de El Davis planteó lo
siguiente:
«En la práctica, la concepción predominante entre los guerrilleros comunistas del sur del
Tolima fue la de la lucha armada en la perspectiva de guerra popular prolongada. En esa
concepción el enclave de El Davis y la zona sobre la cual está influida, tendía a
considerarse con desproporcionado optimismo como zona liberada. La influencia de la
revolución China era, a este respecto, muy evidente»294.
Por su parte el grupo maoísta Proletarización hace una crítica en donde según ellos, en El
Davis solo se dio gérmenes de poder popular restringido por el “revisionismo” del PCC.
Así lo plantearon:
« En las zonas de influencia comunista se alcanzaron a dar gérmenes de poder popular, las
llamadas juntas revolucionarias, algunas de las cuales fueron dirigidas por el propio
Partido Comunista, que no supo –o mejor, no pudo por su concepción- transformarlas en
poder popular de nuevo tipo, guiado por una democracia burguesa dirigida por el
proletariado. Así pues, al no ver más que democracia burguesa de viejo tipo, dirigida por la
burguesía, las desmantela»295.
Por el contrario, esta investigación evidenció que la experiencia de El Davis fue un claro
ejemplo de como la militancia comunista del PCC que se vio interpelada por el modelo
revolucionario chino intentó adaptarlo a su propio campo. El Davis fue en los hechos una
base revolucionaria en una zona rural. En términos de la experiencia China el Davis se
asemejo a una pequeña zona bajo el poder rojo, que cumplía con los requisitos previos
para el establecimiento de “bases revolucionarias a largo plazo” en el campo 296. En su
294 Medófilo Medina, “La resistencia Campesina en el sur del Tolima”, en Pasado y presente de la violencia en Colombia. Gonzalo Sánchez (Comp) (Bogotá: CRRC, 1986), 258. 295 Proletarización, 140. 296Esos requisitos fueron enumerados por Mao así: « (1) una firme sustentación en las masas, (2) una organización de partido de primer orden, (3) un ejército rojo de fuerza adecuada, (4) un terreno favorable para las operaciones militares, y (5) fuerza económica suficiente para sostenerse a sí misma». Mao Tse-tung. La lucha en las Montañas Chingkang Vol. 1. (Pekín: Lenguajes extranjeras, 1972), 75.
112 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
interior se construía los tres instrumentos (Partido, Ejército y Frente), había dominio de un
ejército revolucionario, el establecimiento como una zona liberada contaba con la
protección de la fuerza militar que no se limitaba a la autodefensa, un territorio que
producía lo suficiente para poder mantener su población sin precisar de envíos del exterior
y un apoyo de las masas que posibilitaba mantener el poder revolucionario.
El Davis fue una nueva realidad impuesta desde afuera por la Violencia, como lo fueron
los soviets chinos297, pero a su vez «El Davis era una posible propuesta de una posible
sociedad en guerra, impulsada por una fuerza interior que rompe cualquier esquema»298.
Sin la “Recepción” del modelo revolucionario chino esa fuerza interior y El Davis hubiera
arrojado otra propuesta. El Davis fue un ejemplo de que la “Recepción” del modelo
revolucionario chino estaba permitiendo el desarrollo de “tesis maoístas” en el seno del
Partido Comunista de Colombia.
297 En el 2013 un reportaje periodístico sobre las FARC se refería a El Davis como “la zona es escogida por el PCC para su primer experimento de un soviet a la colombiana”. Ver https://colombiaopina.wordpress.com/2013/10/20/farc-a-repetir-fracaso-de-el-davis-en-el-putumayo/ 298 Arturo Alape, 188.
4. El momento de la apropiación Depositarios del pensamiento del camarada Mao Tse-tung
El momento de la apropiación, los consumidores de las ideas…
«No debemos tener ningún temor de proclamarnos depositarios del pensamiento marxista -
leninista, del pensamiento del camarada Mao Tse-tung. Debemos convertirnos en
modestos discípulos de este gran pensador marxista de nuestra época»299. Esta, que fuera
la orientación del PC de C (m-l) a su militancia una vez “re-constituido” el Partido en
1964, expresa a su vez la apropiación del modelo revolucionario chino como resultado del
largo proceso de la “Recepción” asumido por el PCC. Es así que el presente capítulo está
dedicado al proceso de apropiación del modelo de la Revolución de Nueva Democracia
por parte de militantes del PCC que adquieren una nueva interpretación del carácter de la
sociedad colombiana y el carácter de la revolución. Lo que aborda el capítulo es «el
“consumo” de un cuerpo de ideas por parte de un supuesto lector “final” al término de la
cadena de la circulación »300.
Introducción
El panorama mundial y nacional para la historia del comunismo cambió radicalmente en
1963. De la unipolaridad de la Segunda Guerra Mundial, se pasó a la multipolaridad, tanto
así que siguiendo la tesis del quiebre del siglo se puede decir que «Los más importantes
299 Partido Comunista de Colombia M-L (PC de C-ML), “Resolución política”, Documentos Vol. 1 (Medellín: Editorial 8 de Junio, 1975), 84. 300 Tarcus, 18.
114 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
desgarramientos que dieron origen a la multipolaridad mundial fueron protagonizados, en
el bloque socialista, por la República Popular China y sus diferencias con la URSS, sobre
todo en la dirección ideológica de los movimientos revolucionarios y la lucha por dirigir
"la verdadera revolución" en el Tercer Mundo»301. En la triangulación China-EE.UU-
Unión Soviética, el acercamiento progresivo de la Unión Soviética y Estados Unidos, con
su cúspide en 1959 cuando Kruschev y Eisenhauer se entrevistaron, fue el factor
determinante para que se hubiera profundizado el conflicto chino-soviético, hasta llegar a
la división total. Entendiendo la importancia del análisis de la situación internacional para
el discurso comunista, es necesario hacer una lectura de esa división para entender la
dinámica asumida por el Partido Comunista de Colombia en 1963.
Siguiendo a Donald S Zagoria302 podemos hablar de raíces históricas, factores originarios
y causas inmediatas del conflicto. Frente a las raíces históricas es de mencionar el
distanciamiento de los comunistas chinos a las orientaciones de Stalin quien siempre
insistió que deberían hacer acuerdos con los nacionalistas del Kuomintang. Cuando en
1927 el Partido Comunista de China aplica dicha orientación, el resultado fue la aplastante
ofensiva de los nacionalistas diezmando a los comunistas a su mínima expresión. El asunto
no era menor, máximo cuando el artífice del aniquilamiento del Partido Comunista en
Shanghai, aquel 12 de abril de 1927, era el joven nacionalista instruido en Moscú, Chiang
Kai-chek. En términos generales las tensiones giraban en torno a si Stalin confiaba o no en
la capacidad de los comunistas chinos en conquistar el poder, o si su interés era
únicamente por una China “anti imperialista” vigorosa, que actúese de aliada de los
soviéticos en contra de un eje Anglo-Japonés o Anglo- Alemán.
Dentro de los factores originarios se resalta el interés por los chinos de reivindicar su
proceso como propio, incluso presentando su experiencia como válida para el Tercer
Mundo y al mismo Mao a la altura de los maestros del proletariado, Marx y Lenin.
Tempranamente, en 1946, Liu Shao-chi le decía a Anna Louise Strong:
301 Ricardo Pozas Horcasitas, “El quiebre del siglo: los años sesenta”, Revista Mexicana de Sociología N° 2 (2001): 176. 302 Donald S Zagoria, El conflicto Chino Soviético 1956-1961. (Barcelona: Ediciones G.P, 1962)
4. El momento de la apropiación. 115
« El gran logro de Mao Tse-tung ha sido cambiar el marxismo de forma europea a una
forma asiática" (…) Marx y Lenin eran europeos; escribieron en las lenguas europeas sobre
las historias y los problemas europeos, rara vez discutieron Asia o China. Los principios
básicos del marxismo son, sin duda, adaptables a todos los países, pero aplicar su verdad
general a la práctica concreta de la revolución en China es una tarea difícil. Mao Tse-tung
es chino; él analiza los problemas chinos y guía al pueblo chino en su lucha por la victoria.
Él usa los principios del marxismo leninismo para explicar la historia de China y los
problemas prácticos de China (…) Mao no sólo ha aplicado el marxismo a las nuevas
condiciones, sino que le ha dado un nuevo desarrollo. Él ha creado una forma de marxismo
chino o asiático»303.
Los factores anteriormente mencionados fueron una constante con mayor o menor
presencia durante los dos primeros periodos de la política exterior de China, caracterizado
por el internacionalismo proletario y la coexistencia pacífica. Pero para 1956 las
diferencias se acentúan; a la fecha los comunistas chinos se han sentido progresivamente
desilusionados por la dirección de Kruschev al frente del comunismo internacional. La
política de des-Stalinización de Kruschev, y la política adoptada para Polonia y Hungría en
1956 provocarían críticas de Mao al líder Soviético, sobre todo por la segunda
intervención. Pero más que eso, lo que desataría un cambio significativo en las relaciones
políticas sería la negativa de Kruschev en utilizar los recientes avances tecnológicos304,
para emprender un vigoroso ataque contra los imperialistas, como lo proponía Mao.
A pesar de estas diferencias, Pekín se seguía enmarcando en el periodo descrito como
coexistencia pacífica, el así llamado espíritu de Bandung. Esto mismo explica porque las
reacciones de los chinos ante el XX Congreso del PCUS no atacaron de inmediato la
declaración que proponía una victoria del comunismo en una competencia pacífica contra
el capitalismo. Los chinos irían a insistir en la coexistencia pacífica entre países
comunistas y no comunistas, en pleno contexto de la Guerra Fría.
303 Anna Louise Strong, “The thought of Mao Tse-tung”, Amerasia (1947):161-162. 304 En 1957 la URSS daba un importante salto en materia de armamento con el Sputnik y los proyectiles intercontinentales. Contrario a la expectativa china, los rusos reforzaron lo ya planteado en 1954 por uno de sus líderes, Malenkov, quien declaró que una tercera guerra mundial sería indeseable pues ella acabaría con la civilización.
116 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
Ya para el tercer periodo de la política exterior china caracterizado como antiimperialismo
militante y surgimiento del anti revisionismo, las diferencias surgidas a partir del XX
congreso del Partido Comunista de la Unión Soviética iban a ser más notorias. De hecho,
aquel Congreso montó la plataforma para varios de los más importantes elementos de
conflicto parecidos desde entonces: diferencia sobre estrategia global, sobre relaciones
dentro del Bloque, sobre la paz y el alcance de la des-Stalización, sobre la permisible
diversidad de métodos a emplear para la construcción del socialismo y el comunismo, y
sobre la cuestión fundamental de la jefatura del campo socialista.
Es después de 1956 y a raíz del XX congreso del Partido Comunista de la Unión Soviética
que las diferencias entre China y la URSS se acrecentaron. Después del vigesimosegundo
Congreso del PCUS, en 1961, donde se criticó abiertamente a los líderes Albaneses por
parte de los soviéticos, la delegación China se retira antes de culminar el congreso, para no
volver a un congreso del PCUS. Para el año 63 cuando las diferencias se hicieron
públicas305, el PCCh «fomentaba el cisma como cuestión de política, y el PCUS respondía
tratando de dividir algunos de los Partidos pro-chinos»306; En ese contexto el interés de
China por el Tercer Mundo sería ahora más preponderante, ya no solo le interesaba
mermar la influencia de Estados Unidos, sino de la misma Unión Soviética.
Con ese sucinto contexto arriba señalado, el presente capitulo abordará en una primera
instancia el proceso de distanciamiento del PCC y el PCCh, y en la segunda parte se
continuará con el desarrollo de la lucha ideológica y política en el seno del PCC, que en el
capítulo anterior había quedado planteado en 1956. Con esos dos apartados como contexto
en el ítem tres se analizará el proceso de apropiación o “consumo” de las ideas fruto de la
“Recepción”, pero también el rechazo de esas ideas: dos escenarios de un futuro posible.
El último apartado de este capítulo centra su atención en los elementos emergente de la
305 14 de julio de 1963 el Comité Central del Partido Comunista de la Unión Soviética pública carta abierta a las organizaciones del Partido y a todos los comunistas, allí se expresa por primera vez y de forma pública las divergencias que se venían discutiendo internamente desde 1956. Esta carta es respuesta a otra carta del Partido Comunista de China fechada el 14 de junio de 1963 bajo el título de Proposición acerca de la línea general del movimiento comunista internacional, también conocida como Carta de los 25, la cual se constituyó en la plataforma política de los grupos Pro-chinos. 306 Hinton, 215.
4. El momento de la apropiación. 117
“Recepción” del modelo revolucionario chino: la diferenciación de la izquierda comunista
y por ende el surgimiento de un nuevo discurso: el discurso maoísta. Como colofón se
explora sucintamente el devenir de la tendencia pro-china en la política colombiana.
4.1 Distanciamiento del PCC y el PCCh
La larga tradición del PCC fiel a las orientaciones del Movimiento Comunista
Internacional en cabeza del PCUS y el devenir de la lucha al interior del Partido, por lo
menos desde 1945, había afianzado al PCC al lado de la Unión Soviética. Para 1963, como
lo plantea Cecil Johnson, «estaba claro para los chinos que no podían ganar a los líderes
del Partido Comunista de Colombia. Desde finales de 1962 Gilberto Vieira había
expresado públicamente su apoyo al PCUS. La delegación de Colombia que asistió a los
congresos del Partido en Hungría, Checoslovaquia, Bulgaria y Alemania Oriental a finales
de 1962 y principios de 1963 se alineó con la Unión Soviética»307.
En el primer ejemplar de la revista del Partido, Documentos Políticos de 1963, se publicó
por primera vez un planteamiento oficial sobre las divergencias en el Movimiento
Comunista Internacional bajo la responsabilidad de Gilberto Vieira. El artículo es un
resumen de la ponencia presentada por Vieira sobre problemas internacionales en el 28
pleno del Comité Central. Es importante tener presente que desde el análisis que hiciera el
PCC, y para separarse de la prensa “burguesa”, el fenómeno político no es presentado
como “conflicto chino-soviético”, sino como “divergencias”, y no entre dos Partidos
comunistas, sino en el seno del “Movimiento Comunista Internacional”; cuando éstas se
profundizaron aún más, las divergencias fueron planteadas “entre los dirigentes chinos y el
resto del Movimiento Comunista Internacional”.
Lo primero que señala Vieira es que las divergencias se enmarcan en el terreno ideológico,
relacionadas principalmente en las cuestiones de la lucha por la paz y la coexistencia
pacífica entre Estados de sistemas sociales diferentes. Agrega que es en abril de 1960
cuando el Partido Comunista de China expresó por primera vez las divergencias en público
307 Cecil Johnson, Communist China & Latin America, 1959-1967 (Columbia: University Press, 1970), 233.
118 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
en la recopilación de artículos y discursos titulada “Viva el leninismo”308, y que en eventos
internacionales más amplios (El Movimiento de partidarios de la paz, la Federación
Sindical Mundial, etc), el PCCh «hicieron diversas tentativas para imponer sus opiniones,
que comenzaron a ser respaldadas por dirigentes del Partido del Trabajo de Albania»309.
Lo cierto es que para la fecha no había ataques directos entre el PCCh y el PCUS, teniendo
a otros Partidos comunistas como “chivos expiatorios”, de tal forma que « se mantuvo una
convivencia superficial evitando los ataques directos entre ambos Partidos, encarnizándose
los chinos con los comunistas yugoslavos en lugar de con el Partido Comunista de la
URSS, y los soviéticos denunciando el aliado de Pekín, Albania, como sustituto del
Partido Comunista Chino»310.
Para ese entonces el 28 pleno del Comité Central del Partido Comunista rechazaba «una
vez más, de manera enérgica las incalificables calumnias de los dirigentes del Partido
Albanés del Trabajo contra el Comité Central leninista del PCUS (...) [y hace constar] su
extrañeza por el apoyo que prestan camaradas del Partido Comunista de China a las
nocivas actividades de los dirigentes albaneses contra la unidad del Movimiento
Comunista Internacional»311. Nótese que para la fecha los comunistas chinos todavía eran
considerados como camaradas.
Continúa Vieira informando que las opiniones divergentes y los procedimientos de los
chinos para expresar sus puntos de vista, imponer dice él, conllevó a convocar la
Conferencia de 81 Partidos Comunistas y Obreros, en noviembre de 1960, la cual fue
firmada por unanimidad por todos los asistentes, incluso por los Albaneses pese a que una
parte de la representación se retiró. Gilberto Vieira informa el papel asumido por la
delegación del Partido Comunista de Colombia a la hora de confrontar a los chinos. Dice
que además de defender los principios marxista leninistas, la política de paz de la Unión
308 Autores como Jon Halliday plantean que con este texto el PCCh protagonizó el «lanzamiento mundial del “maoísmo”». Ver Jon Halliday; Jung Chang, Mao: la historia desconocida (Bogotá:Taurus, 2006), 568. 309 Gilberto Vieira, “Acerca de algunas divergencias en el movimiento comunista internacional”, Documentos Políticos N° 30 (1963):1. 310 Roderick Macfarquhar; Michael Schoenhals, La Revolución Cultural China (Barcelona: Critica, 2009), 23. 311 Gilberto Vieira, Acerca de algunas.., 17.
4. El momento de la apropiación. 119
Soviética, y la unidad del Movimiento Comunista Internacional no se pasó por alto todo el
proceso de “Recepción” que el mismo Partido había realizado a la fecha para con la
Revolución China y recalca: «[se] hizo de forma fraternal y reconociendo al mismo tiempo
el gran aporte de la revolución popular china y el valor de las enseñanzas de los
comunistas chinos en cuestiones tan importantes como el frente único anti-imperialista, la
reforma agraria democrática, la rectificación en los métodos sectarios en las luchas
internas del Partido y otras semejantes»312.
Cuando las divergencias llegaron a un punto de no retorno, las dos fuerzas en contienda
lanzaron su ofensiva para ponerse a la cabeza del bloque comunista. El Partido Comunista
de China pública la carta de los 25 puntos o la Línea general del Movimiento Comunista
Internacional, el 14 de junio de 1963, la cual se constituía en base programática para los
grupos pro-chino; por su parte el PCUS respondió con la Carta abierta del Comité Central
del Partido Comunista de la Unión Soviética a las organizaciones del Partido y a todos los
comunistas, el 14 de julio de 1963, en donde decían, a manera de resumen, que «aceptar
esta “línea general” –refiriéndose a la cara de 25 puntos- significaría renunciar a la
declaración de 1960, estar de acuerdo con tesis programáticas que contradicen dicha
declaración, aprobada por 81 países. Nuestro Partido no marchará por dicho camino»313.
Eh ahí la orientación al resto de Partidos Comunistas, “No marchar por ese camino”, así lo
asumió el Partido Comunista de Colombia.
Para septiembre de 1963 la posición del Partido Comunista de Colombia se define
claramente por el ala pro-soviética. Como parte del informe y conclusiones del 29 pleno314
del Comité Central del PCC, Filiberto Barrera presenta el informe titulado Sobre las
divergencias del P. C. de China con el Movimiento Comunista Internacional315 . El informe
312 Gilberto Vieira, Acerca de algunas, 2. 313 Polémica acerca de la línea General del Movimiento Comunista Internacional (Pekín: Ediciones en lenguas extranjeras, 1965): 608. 314 En Para reconstruir los sueños se plantea que el 29 pleno del Comité Central del PCC se realizó en septiembre de 1963. En los documentos del Partido Comunista se publican los informes y conclusiones del 29 pleno en el documentos titulado La situación política nacional y la táctica del Partido Comunista, con fecha de octubre de 1963. 315 Gilberto Vieira y Filiberto Barrero. La situación política nacional y la táctica del Partido Comunista. (Bogotá: Editorial Colombia Nueva, 1963).
120 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
empieza planteando el sentimiento de desilusión para la dirigencia del PCC, pues los
objetivos inspirados en la Declaración de Moscú (1960) en la práctica no se habían
desarrollado por la continuación de las divergencias planteadas por el Partido Comunista
de China y el Partido Albanes del Trabajo desde 1957. Continúa el documento con el
análisis de la “Crisis del Caribe” y la aceptación del PCC por salvaguardar los principios
de la coexistencia pacífica de la «política de la Unión Soviética encaminada a hacer
respetar la Revolución Cubana y defender la paz»316.
Prosigue el informe con la sentencia de que el PCC no puede ser neutral, pues en la
contienda «están comprometidos los intereses del Movimiento Revolucionario
Mundial»317. La primera crítica que plantean al PCCh es por «intervenir públicamente
contra las orientaciones de Partidos hermanos como el italiano, el francés, el
norteamericano o el Soviético»318, argumentando que con eso están violando lo acordado
en 1960 al no reconocer que todos los Partidos Comunistas son independientes e iguales.
El PCC dice rechazar el paternalismo con que el PCCh se ha querido presentar como «los
únicos exponentes fieles del marxismo leninismo, (…) como los que superan todas las
concepciones hasta hoy alcanzadas»319.
Al analizar la respuesta del PCUS a la carta de los 25 puntos, el PCC recuerda en su
informe los mensajes cruzados entre el PCCh y el PCUS durante 1962 y la tentativa de una
nueva conferencia de Partidos Comunistas y Obreros del mundo, pero a su vez, manifiesta
el derrumbe de sus ilusiones ante dicha conferencia por los «procedimientos adoptados por
los dirigentes Chinos»320. De hecho esta conferencia nunca se dio.
A esta altura del debate sitúan el centro de las divergencias en la política de la
“coexistencia pacífica entre Estados de diferentes sistemas sociales”, por lo que consideran
que las declaraciones de los chinos en «perspectiva de que una guerra mundial podría traer
316 Filiberto Barrero, “Resolución sobre las divergencias en el movimiento comunista y obrero mundial”, La situación política nacional y la táctica del Partido Comunista. (Bogotá: Ediciones Colombia Nueva, 1963). 50. 317 Barrero, Resolución, 51. 318 Barrero, Resolución, 51. 319 Barrero, Resolución, 52. 320 Barrero, Resolución, 52.
4. El momento de la apropiación. 121
una “civilización mil veces superior”, aun a “costa de la mitad de la humanidad”»321, van
en dirección contraria a lo estipulado por los 81 Partidos comunistas.
En esa dirección el PCC exhorta el acuerdo de las tres potencias atómicas: Unión
Soviética, Estados Unidos y Gran Bretaña, pese a que China manifestó su oposición, en
parte porque los dejaron por fuera de los grandes. El PCC agrega a su argumentación la
política de la emulación económica de los países socialistas con los capitalistas, llama la
atención a no confundir la coexistencia pacífica ente Estados de diferentes sistemas
sociales con la coexistencia pacífica entre las clases sociales antagónicas, y por ultimo
plantean su esperanza, como parte de los principios marxista leninistas, de «excluir la
guerra mundial de la vida de la sociedad»322.
Bajo ese análisis el PCC entra a examinar la carta de los chinos. Inicialmente analizan dos
objetivos centrales de dicha comunicación: 1) «sentar nuevas bases ideológicas y políticas
al movimiento comunista y obrero mundial (...) [bombardeando] la política de coexistencia
pacífica, y lo que es más grave, estimulando a los sectores guerreristas»323; 2) mostrar de
manera unilateral que «la línea general del Movimiento Comunista Internacional
solamente se encaminara a la “coexistencia pacífica”, “la emulación pacífica” y la
“transición pacífica”, sin tener en cuenta la misión histórica de la revolución proletaria
mundial y apartándose de la doctrina revolucionaria del marxismo-leninismo»324.
El informe del PCC trata otros asuntos de la polémica. Resalta los aspectos más relevantes
de la respuesta del PCUS al PCCh en su carta del 14 de julio de 1963, opina sobre el “Caso
de Yugoslavia”, “el problema Chino-Hindú”, el asunto de “Hong-Kong y Formosa”.
Critican la tesis china del “Revisionismo del PCUS” y del “regreso del capitalismo” a la
Unión Soviética. En su defensa el PCC acoge la tesis soviética del “Estado de todo el
pueblo” y el “Partido de todo el pueblo”, bajo el argumento de que la Unión Soviética
321 Barrero, Resolución, 53. 322 Barrero, Resolución, 54, 323 Barrero, Resolución, 55. 324 Barrero, Resolución, 56.
122 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
había entrado «en el periodo de la construcción del comunismo»325, es decir, ya no había
lucha de clases pues «los restos de las clases explotadoras desaparecieron para siempre de
la escena de la vida social»326. Hoy, con la ventaja de la perspectiva histórica y conociendo
los “efectos” histórico-políticos de las decisiones tomadas en el XX congreso del PCUS
sabemos, como lo plantearon lo chinos, que la “sociedad comunista” de la Unión Soviética
se estaba derrumbando, que en su seno sí había lucha de clases, y lo que es peor, que la
nueva burguesía tenía el control del Estado. A la vuelta de 30 años el capitalismo por
dentro la había corrompido.
En el informe se criticó la falta de sinceridad por parte de los comunistas chinos, se
denuncia los métodos escisionistas y la política de los chinos de “organizar la escisión en
el mundo”. Al referirse a América Latina dicen: «se apoyan el grupos de tendencias
extremistas trosquistas, expulsados y renegados de Partidos Comunistas, como sucede en
Brasil y en otros países, inclusive Colombia (…) Así se demuestra en la práctica que los
camaradas chinos se han salido de los cauces normales de las relaciones entre Partidos
comunistas, para colocarse en el seno de todos los grupos anti Partido. En desarrollo de esa
política, están orientando el trabajo hacia la formación de nuevos Partidos»327. Con una
crítica al “Dogmatismo, sectarismo y subjetivismo” de los chinos, y a su carencia de
autocrítica, el PCC los cuestiona por creer que «ellos son los depositarios y únicos
defensores del marxismo-leninismo (…) [y que] llevan en el bolsillo esa verdad»328.
Después de discutir el amplio informe del cual se acaba de sintetizar los elementos más
sobresalientes, el 29 pleno aprobó una resolución con los siguientes aspectos:
« Rechazar la política desviacionista que en los últimos tiempos vienen realizando los
dirigentes del Partido Comunista de China (…) Condenar la actitud de los dirigentes
chinos que se lanza en una campaña de carácter escisionista (…) protestar por la actividad
desplegada por los dirigentes del Partido Comunista de China en el mundo entero,
pregonando su propia política, denigrando y calumniando al Partido Comunista de la
325 Barrero, Resolución, 59. 326 Barrero, Resolución, 60. 327 Barrero, Resolución, 65. 328 Barrero, Resolución, 68.
4. El momento de la apropiación. 123
Unión Soviética (…) y el pleno manifiesta la voluntad expresa del Partido Comunista de
Colombia de luchar por la UNIDAD DEL MOVIMIENTO COMUNISTA Y OBRERO
MUNDIAL»329.
Frente a la propaganda, el pleno no solo condenó la actitud de los chinos, sino que se
propusieron «rechazar las tendencias extremistas de los dirigentes chinos que tiene a crear la
confusión y la escisión en la filas del Partido y en otros sectores de la izquierda»330, para lo
cual, entre otras cosas, plantearon que en el terreno de la propagada ya no volverían a publicar
sus ideas, pues según ellos, «no es correcto que por nuestra cuenta se impriman y distribuyan
materiales que, como los de los dirigentes chinos, son contrarios a nuestra línea política»331.
Una vez tomada la decisión de dejar de imprimir y distribuir materiales de los dirigentes
chinos ésta se reflejó de inmediato en todos los medios de prensa. En Documentos
Políticos no volvieron a aparecer textos de los líderes chinos, en cambio se publicó para
ese año “La actitud del Partido Comunista de China y la unidad del movimiento
comunista”332 de Gilberto Vieira y un artículo titulado “El dogmatismo de los camaradas
chinos”333, de Gustavo Castro. Lo mismo pasó con Voz Proletaria, que empezó a circular
el 21 de noviembre de 1963 en reemplazo de Voz de la Democracia, clausurada por el
gobierno de Guillermo León Valencia.
Como si hubiera sido planeado, la nueva orientación asumida por el PCC para con los
chinos, es expuesta en un nuevo periódico. Es así que de los 21 artículos en el periódico
Voz de la Democracia desde 1957 a 1963, todo ello proclive a la experiencia del
comunismo chino, se pasó al número inaugurar de Voz Proletaria con un suplemento
llamado Ideología, cuyo artículo central fue escrito por Álvaro Mosquera bajo el título
329 Partido Comunista de Colombia, “Resolución sobre las divergencias en el movimiento comunista y obrero mundial”, La situación política nacional y la táctica del Partido Comunista. (Bogotá: Ediciones Colombia Nueva, 1963). 71-72. 330 Partido Comunista de Colombia, “Resolución sobre”, 72. 331 Partido Comunista de Colombia, “Resolución sobre”, 72. 332 Gilberto Vieira, “La actitud del Partido Comunista de China y la unidad del movimiento comunista”, Documentos Políticos N° 33 (1963) 333 Gustavo Castro, “El dogmatismo de los camaradas Chinos”, Documentos Políticos Nº 34/35 (1963).
124 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
“Las discrepancias con los dirigentes chinos (I)”334, donde se ratificó públicamente la
posición asumida por el PCC en su 29º pleno del Comité Central y se inicia la critica a los
planteamientos de la dirigencia china.
La situación no tuvo que ser fácil para el Partido Comunista de Colombia, pues una
simpatía construida desde antes del triunfo de los comunistas chinos, y con más intensidad
desde los últimos 14 años con el triunfo la Revolución de Nueva Democracia en China y el
inicio de la “Recepción” por parte del PCC, había cambiado, casi de repente, por lo que se
entiende las palabras de Álvaro Mosquera cuando inicia su crítica así: «la admiración que
los comunistas colombianos sentimos por el pueblo y la revolución chinos [sic] ahonda
nuestra inquietud por el rumbo escogido por sus dirigentes y nos concede autoridad para
criticar sus errores, cada vez más graves, de los lideres Pekineses»335 .
Cuatro años después de asumir la orientación del 29º pleno del Comité Central el PCC
hace un recuento del distanciamiento con los chinos en el artículo titulado “El pleno
rechaza la absurda política del grupo de Mao Tse-tung”336, y con el subtítulo
“Divisionismo del grupo maoísta”. Para la fecha el PCC ya ha caracterizado a los
dirigentes chinos, y sus críticas son más concretas hacia lo que ellos llamaron “el grupo
maoísta” «que ha desvirtuado en China la revolución socialista y el poder político del
proletariado»337.
El documento que fue resultado del pleno del Comité Central del Partido Comunista de
Colombia, en febrero de 1967, criticó lo que llaman «la nefasta actividad divisionista»
desde 1959 por parte de los dirigentes chinos, y relacionan por primera vez y de una forma
más clara las implicaciones de la posición del PCCh en el seno del PCC.
334 Álvaro Mosquera, “Las discrepancias con los dirigentes chinos”, Voz Proletaria, Bogotá, 21 de noviembre, 1963. 335 Partido Comunista de Colombia - PCC, “El pleno rechaza la absurda política del grupo de Mao Tse-tung”, Voz Proletaria, Bogotá, 2 de marzo, 1967, 10. 336 Partido Comunista de Colombia - PCC, “El pleno rechaza la absurda política del grupo de Mao Tse-tung”, Voz Proletaria, Bogotá, 2 de marzo, 1967: 10. 337 PCC, “El pleno rechaza…”, 11.
4. El momento de la apropiación. 125
La declaración dice: «Nuestro Partido fue víctima de diversas maquinaciones de esos
dirigentes chinos por hacer romper a los militantes comunistas colombianos con la línea
política elaborada colectivamente por nuestro noveno congreso [1961]»338. De igual
forma, plantearon sus críticas a los dirigentes chinos por el apoyo y la promoción de la
división de los Partidos Comunistas y la creación de nuevos Partidos con base en la carta
de 25 puntos impulsada por ellos. Al respecto el PCC dice: «El Partido Comunista de
Colombia tuvo que hacer frente a la abusiva intromisión de los mencionados dirigentes
chinos en nuestra vida interna y denunciar vigorosamente esa conducta contraria a los
intereses de la revolución y a los principios del internacionalismo proletario»339.
Continúa la declaración denunciando la «revolución cultural» y lo que considera es una
campaña antisoviética por parte de los chinos. La declaración también toca el aspecto de la
autonomía de los Partidos comunistas para criticar fuertemente a los chinos:
«Nuestro Partido procuró en todo tiempo mantener buenas relaciones, amistosas y fraternas,
con el Partido Comunista de China (…) Las relaciones con el Partido Comunista de China
no fueron rotas por nosotros ni por nuestra culpa. Los dirigentes maoístas creyeron que
tenían derecho para gobernar a nuestro Partido a su amaño, o para romper su unidad cuando
se dieron cuenta de que estábamos dispuestos a deducir por nosotros mismos y sobre la base
del análisis de las condiciones de nuestro país, el rumbo de nuestro desarrollo
revolucionario»340.
De esta manera el PCC consideró la violación a su autonomía como una «demostración de
chovinismo de gran potencia en que ordinariamente incurren los dirigentes maoístas
chinos»341, por lo que ratificaron su independencia al proclamar ante el Partido Comunista
de China, que tenían «el derecho inalienable (...) para trazar y adelantar su propia
orientación política y para trabajar por el desarrollo revolucionario colombiano»342 .
338 PCC, El pleno rechaza, 11. 339 PCC, El pleno rechaza, 11. 340 PCC, El pleno rechaza, 11. 341 PCC, El pleno rechaza, 11. 342 PCC, El pleno rechaza, 11.
126 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
4.2 Continuidad de la lucha ideológica y política en el seno del PCC
En plena ilegalización del PCC en 1956 continúo la lucha política e ideológica a su
interior:
«El 19 pleno del Comité Central al verificar el balance de la actividad del Partido, su
situación orgánica y desarrollo de sus cuadros, constata que continua haciendo daño
tendencias extrañas al Partido manifestadas en desviaciones hacia el “guerrillerismo
izquierdizante”, la espontaneidad, la pasividad en el trabajo en los centros proletarios, y el
menosprecio hacia el estudio del marxismo – leninismo»343.
Las nuevas orientaciones del PCC en el VIII congreso realizado en 1958 agudizaron las
diferencias en el seno de su militancia, que se venían acumulando en teoría y práctica. Al
comienzo del Frente Nacional el PCC orienta apoyar al sector liberal en la perspectiva de
reconquistar la legalidad bajo la tesis de construir un "gran Partido de masas". Esta táctica
política profundizó la inconformidad entre sus miembros, que veían que el Partido
empezaba a perder su vitalidad revolucionaria frente a otras fuerzas y procesos que se
estaban desarrollando simultáneamente. El grueso de la discusión radicaba en el ejercicio
de la lucha armada o la vía pacífica. La posición oficial del Partido decía:
«En la tribuna del 8° Congreso N° 1 de 1958, se señala con respecto al nacimiento del
Frente Nacional: “(…) En estas nuevas condiciones, cuando nuestro Partido ha declarado
en varios plenos del C.C. que está dedicadamente por el camino pacífico, constitucional y
legal de desarrollo de las luchas sociales y políticas, sería inconsecuente sostener en el
programa que nos proponemos derrocar al gobierno por medio de la lucha revolucionaria
del pueblo colombiano. En este sentido nuestro programa tiene que recoger las enseñanzas
que nos ha dado nuestro pueblo, decidido a costa de grandes sacrificios (…) y aplicar, a
nuestras condiciones concretas, las tesis del Vigésimo Congreso del Partido Comunista de
la Unión Soviética. Esto significa que debemos considerar la conveniencia de plantear en
el programa del Partido, en lugar de la consigna del derrocamiento del gobierno, la de la
343 Resolución política XIX Pleno del Comité Central. 1956. P 14.
4. El momento de la apropiación. 127
lucha por el camino pacífico de la revolución colombiana sobre la base de la progresiva
democratización del país, del fortalecimiento y unidad del movimiento obrero, de la
alianza obrero-campesina y del desarrollo del Frente Nacional democrático (…)” »344.
Contrario a todo lo anterior, para el grueso de los militantes que acompañaban las
guerrillas campesinas la lucha armada era inminente y necesaria para hacer la revolución.
Durante toda esta década se dan varios cambios en la escena internacional y nacional que
marcaría en rumbo de muchos militantes. El campo comunista se divide entre pro chinos y
pro soviéticos, la nueva izquierda surgida en Europa tiene su versión Latinoamericana
auspiciada por el triunfo de la Revolución Cubana, Los Estados Unidos lanzan su nueva
lucha contra el comunismo que logra unidad en el Partido Liberal y Partido Conservador.
En Colombia se vive la violencia desde 1949, la violencia más despiadada y desatada
desde el gobierno; se da la experiencia del Gobierno de Rojas Pinilla y posteriormente el
inicio del Frente Nacional.
En el seno de los comunistas se empieza a materializar la división. En 1959 surge el
MOEC como la primera organización de la “nueva izquierda” en contradicción con el
PCC; es allí donde Antonio Pinzón entraría a militar, aportando, como reflejo de su
pensamiento elaborado en el seno del PCC, sus tesis plasmadas en la obra Naturaleza de la
Revolución Colombiana345, que como ya se dijo, el PCC consideraba que “era una copia
mecánica” de Naturaleza de la Revolución China editada en 1952. Lo cierto es que en
dicha obra Antonio Pinzón, quien firma con el seudónimo de Mauricio Torres, «acudió
permanentemente a las tesis maoístas para analizar el proceso político del país»346,
asumiendo el concepto de la revolución de Nueva Democracia de Mao para la revolución
en Colombia. El siguiente pasaje lo ilustra plenamente:
344 Eduardo Pizarro Leongómez, “La guerrilla revolucionaria en Colombia”. En Pasado y presente de la violencia en Colombia, eds Gonzalo Sánchez y Ricardo Peñaranda. (Bogotá: Cerec, 1986), 395. 345 Mauricio Torres, La naturaleza de la revolución en Colombia (Bogotá: Iqueima, 1959). 346 José Abelardo Díaz Jaramillo, El movimiento obrero estudiantil campesino 7 de enero y los orígenes de la nueva izquierda en Colombia 1959 - 1969 (Tesis de Maestría, Universidad Nacional de Colombia, 2010) 96.
128 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
«Puesto que la sociedad colombiana actual es todavía una sociedad semifeudal y
semicolonial, los principales enemigos de la revolución colombiana son las fuerzas
semifeudales y las fuerzas imperialista y sus aliados nacionales. Puesto que la tarea
principal de la revolución colombiana es la de realizar una revolución NACIONAL
DEMOCRÁTICA para derribar esos dos grandes enemigos y puesto que a las fuerzas
necesarias para derrocarlos, van a contar a veces con el concurso de la burguesía nacional,
el filo de la revolución no debe ser dirigido contra el capitalismo en general y contra las
propiedades privadas capitalistas sino contra el feudalismo y contra el imperialismo y sus
aliados nacionales (la gran burguesía). En consecuencia, la naturaleza de la revolución
colombiana en la etapa actual, no es la del socialismo sino la de la democracia burguesa.
(…) Es una revolución democrático – burguesa de un tipo nuevo y particular (...) Nuestra
revolución es pues una revolución de tipo nuevo, dirigida por el proletariado que se
propone establecer en un primer período una sociedad democrática de tipo nuevo y un
estado que ejerza el gobierno de diversas clases revolucionarias, unidad entre sí».347
A la par, en el seno del PCC era expulsado Pedro León Arboleda en 1958, bajo el
argumento de representar posiciones izquierdistas. En 1959 Pedro Vásquez Rendón
difundía en el Partido el documento titulado «”Hacia un reenfoque estratégico de la
revolución colombiana”, allí insistía en la lucha armada y en la estrategia de guerra
popular campesina, por esta razón fue sancionado»348.
A puertas de iniciar los años sesenta, el Partido Comunista de Colombia se preparaba para
conmemorar su trigésimo aniversario, para lo cual el debate de cómo construir un Partido
Comunista era central. En medio de los preparativos Gilberto Vieira escribía un artículo
sobre como estudiar la experiencia del Partido, allí decía:
«El Partido Comunista de China nos ofrece magnificas lecciones que estamos tratando de
asimilar. Y sería de gran utilidad para todos nuestros camaradas el estudio detenido del
artículo de Mao Tse-tung Nuestro estudio y la situación actual, escrito en abril de 1944 y
347 Torres. P 152 348 Carlos Medina Gallego, FARC-EP Notas para una historia política1958-2006, (tesis PhD, Universidad Nacional de Colombia, 2005) 80.
4. El momento de la apropiación. 129
la Resolución acerca de algunos problemas de la historia del Partido Comunista Chino,
aprobada en abril de 1945»349.
Los textos en cuestión salieron publicados en la obra Problemas de la historia del Partido
Comunista de China350 la cual fue un esfuerzo por «asociarse a la celebración del X
aniversario de la Revolución Popular China»351.
Del estudio de estos textos, el mismo Vieira sintetizaba 11 lecciones que resumían, según
él, la sabiduría política del Partido Comunista de China en el estudio de sus problemas
históricos, con lo cual el PCC estaría en capacidad de analizar su propia experiencia.
Esas enseñanzas se vieron reflejadas en la muy autocritica síntesis histórica del PCC
titulada Treinta años de lucha del Partido Comunista de Colombia352, libro publicado por
el Comité Central para la conmemoración de los 30 años de la fundación. Desde el
principio se plantea que las enseñanzas de Mao Tse-tung contenidas en el trabajo Nuestro
estudio y la situación actual son un documento valioso para estudiar los errores del
Partido353. En lo concerniente a nuestro interés, el libro es reflejo de la apropiación de los
planteamientos del líder chino en los militantes del PCC, lo cual refuerza la opinión del
historiador Mauricio Archila al decir, por el lenguaje utilizado en 30 años de lucha, que
«todavía a principios de los años 60 se siente en el PCC un cierto peso [del] lenguaje
maoísta»354.
349 Gilberto Vieira, “Algunas bases para el estudio de las experiencias de nuestro Partido”, Documentos Políticos N° 15 (1959): 15. 350 Mao Tse-tung, Problemas de la Historia del Partido Comunista de China (Bogotá: Ediciones Paz y Socialismo, 1959). 351 Igual conmemoración harían otros Partido comunistas en América Latina. En el caso específico del Partido Comunista Argentino - PCA en 1959, a propósito del décimo aniversario de la Revolución China, lanzó una “campaña nacional” de propaganda a favor de la revolución del gigante asiático, la campaña tuvo sus momentos más relevantes en la edición de las obras escogidas de Mao Tse-tung por la Editorial Platina y en el número dedicado a China de la revista cultural del PCA Cuadernos de Cultura. Ver Adrián Celentano, “Las ediciones del maoísmo argentino”. I Coloquio Argentino de Estudios sobre el Libro y la Edición (La Plata, 2012), 2013. 352 Comité Central del Partido Comunista de Colombia, Treinta años de lucha del Partido Comunista de Colombia (Bogotá: Ediciones Paz y Socialismo, 1960). 353 Comité Central del Partido Comunista de Colombia, 5. 354 Archila, 157.
130 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
Se puede resumir que para comienzos de 1960 la actitud del PCC para con la experiencia
del comunismo chino era de gran optimismo, y con deseos de continuar aprendiendo de la
revolución china. De toda la producción registrada entre 1949 y 1963 para difundir dicha
experiencia, solo en el año 1960 se registró el 42 % de la producción. Pero como ya se
dijo, los años sesenta iban a ser de quiebre de siglo, y las contradicciones en el campo
comunista, en una relación dinámica con las contradicciones en el seno del PCC y en la
situación nacional, dejo al Partido Comunista de Colombia del lado pro soviético.
Cuando el PCCh publicó el texto Viva el leninismo se hace público la polémica chino-
soviética, y todos los partidos Comunistas del mundo empezaron a alinear sus fuerzas. En
Colombia el PCC sabía que varias tesis de la revolución china tenían base social en sus
propias filas, es más, para militantes como Fred Kaim «“el maoísmo” estaba allí»355, y
para la preparación del Noveno Congreso, reconociendo que «el maoísmo estaba
sólidamente afincado en el PC, tuvieron como preparación -más que la difusión de tesis-
aislar, marginar a los "cuadros medios" y regionales, seguros delegados al congreso»356.
En ese contexto, al que se le suma el asesinato del más destacado dirigente guerrillero
comunista de la época y miembro de su Comité Central, Jacobo Prías Alape, se celebra en
el mes de junio de 1961 y en el más riguroso secreto el IX Congreso del Partido
Comunista, que aprueba por primera vez la tesis de la necesidad de combinar todas las
formas de lucha. En su resolución política se afirma:
«La revolución puede avanzar un trecho por la vía pacífica. Pero si las clases dominantes
obligan a ello por medio de la violencia y la persecución sistemática contra el pueblo, éste
puede verse obligado a tomar la vía de la lucha armada, como forma principal, aunque no
única, en otro período. La vía revolucionaria en Colombia puede llegar a ser una
combinación de todas las formas de lucha»357.
La orientación es muy significativa en relación con la “Recepción” del modelo revolucionario
chino, pues al ser el PCC un Partido claramente alineado con las tesis del PCUS, las tesis de la vía
355 Entrevista a Kaim, Fred, Cali, 17 de mayo de 2016. 356 Entrevista a Kaim, Fred, Cali, 17 de mayo de 2016. 357 Voz Proletaria, 17 de diciembre de 1965.
4. El momento de la apropiación. 131
pacífica o no pacifica para la revolución no fueron asumidas acríticamente. De igual forma es
significativa la composición del Comité Central aprobada en el IX congreso donde fue elegido
Pedro Vázquez Rendón, pese a los debates que venía sosteniendo de impulsar la lucha armada y al
interés de la posición oficial de Partido de aislarlo358.
Para inicios de 1963 el 28 pleno del Comité Central del Partido Comunista de Colombia
declaró que «en los últimos tiempos el peligro ideológico principal para el desarrollo del
Partido y para la lucha de liberación de nuestro pueblo, es el que representan las tendencias
ultra-“izquierdistas”, dogmáticas y sectarias, contra las cuales es necesario proseguir una
importante lucha de principios»359. Dichas tendencias, decía Gilberto Vieira en junio de
1963, «siguen caracterizándose por una predica dogmática y verbal de la guerra de
guerrillas como única forma de lucha adecuada e inmediata, por su menosprecio a la
acción de masas, al trabajo de organización y de educación de las masas y por su
hostilidad a la política de autodefensa de masas»360.
En el 29 pleno del Comité Central, realizado en septiembre de 1963 y publicada sus
conclusiones en octubre, se volvió a analizar la condición interna del Partido. En el marco
de las conclusiones políticas analizaron el “ultra-izquierdismo”, con sus secuelas
dogmáticas y sectarias, como el problema ideológico principal para el desarrollo del
Partido Comunista y para el avance de todo el movimiento revolucionario. La declaración
concluyó:
«La variedad "izquierdista" del oportunismo se expresa generalmente en la fraseología
súper- revolucionaria contrapuesta al trabajo paciente de organización y educación política
de las masas; en el aventurerismo que conduce al planteamiento de la lucha armada sin
contar con las masas populares y con sus organizaciones; en el terrorismo anárquico que
358 Robinson Rojas, Colombia: surge el primer Vietnam en América Latina (Santiago de Chile: Prensa Latinoamericana, 1970), 19. 359 Gilberto Vieira, Acerca de algumas, 16. 360 Gilberto Vieira, “Algunos aspectos de la crisis política nacional”, Documentos Políticos N° 32 (1963): 12-13.
132 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
malgasta energías en el juego estéril de los petardos, en el que participan también sectores
reaccionarios y se mezcla frecuentemente la provocación policiaca»361.
Al final puntualiza el llamado a los comunistas para «adelantar una intensa y elevada
campaña ideológica contra las diversas manifestaciones del oportunismo de
"izquierda"»362.
Una síntesis de este largo proceso, pero desde la orilla contraria al PCC la realizaron,
como veremos más adelante, militantes del mismo Partido que asistieron a la Primera
Conferencia de Regionales Comunistas (m-l) en abril de 1964. Los conferencistas al
considerar que en la lucha contra el revisionismo contemporáneo iba envuelto el problema
central de organizar y dirigir la revolución, o renunciar a ella, concluyeron:
« (...) En Colombia el revisionismo irrumpe de nuevo con gran fuerza apoyado por el
revisionismo internacional y desde la dirección del P.C. de C. le impone a este una línea
errada y claudicante. Su antecedente más grave fue el browderismo, que aún sigue
causando daño al P.C (...) la confusión deliberada de la vía de la revolución hecha por la
dirección revisionista del P.C. de C. tiene secuelas tan aberrantes en la línea política como
la adopción de la autodefensa pasiva como forma superior de lucha, el economismo como
objetivo estratégico de la luchas proletarias y campesinas, de la lucha por una “vida feliz”
dentro del capitalismo (...)»363.
Frente a la vida interna del Partido concluyeron:
«El atropello sistemático al centralismo democrático que se manifiesta en las violaciones a
las normas de la democracia interna, impidiendo las críticas constructivas, imponiendo
unilateralmente el criterio de la dirección, el remplazo de la lucha ideológica por las
medidas administrativas y disciplinarias, como en el caso evidente de la fijación de
361 PCC, “Conclusiones políticas del 29”, La situación política nacional y la táctica del Partido Comunista. (Bogotá: Ediciones Colombia Nueva, 1963). 46. 362 PCC, “Conclusiones políticas del 29”, 46. 363 Partido Comunista de Colombia M-L (PC de C-ML), “Tribuna del congreso marxista-leninista # 1”, Documentos Vol. 1 (Medellín: Editorial 8 de Junio, 1975) 62-63.
4. El momento de la apropiación. 133
posiciones frete a las divergencias ideológicas internacionales, negándole a la base el tema,
y sin que mediara un congreso (...)»364.
Y frente a la vida orgánica la síntesis fue: «Espíritu liquidacionista que comenzó con la
expulsión de viejos y forjados dirigentes y ha llegado hasta la disolución de organismos
zonales y regionales, como el caso del Magdalena, la Guajira, Norte de Santander y de
numerosos zonas, radios y células de otras regiones»365.
Y en términos numéricos Francisco Garnica fue muy concreto:
«Centenares de militantes y decenas de cuadros intermedios son expulsados por diferir de
la línea política, las calumnias y los consabidos epítetos de "extremo izquierdistas" ocultan
las verdaderas razones de principios. Direcciones intermedias como el Comité Regional de
Antioquia (1961); regionales enteros como el del Magdalena y la Guajira (1963); y Bolívar
(1964); locales, zonas y sectores importantes del Partido en el Valle, Santanderes, Bogotá,
Cundinamarca, Boyacá, Huila (1963-64-65); cuadros nacionales del C. C. y el 80%
(ochenta por ciento) de la Juventud Comunista de Colombia representada en los
Regionales de Bogotá, Valle, Santander del Norte, la Costa Atlántica y numerosos locales
en todo el país (1964)»366.
Hasta aquí el desarrollo de la lucha ideológica y política en el seno del PCC. En su
desenvolvimiento se evidencia que las orientaciones de “Autodefensa y lucha guerrillera”
en 1949, pasando por la de “Autodefensa Campesina” del VII Congreso en 1952, hasta
llegar a la orientación de “Combinar todas las formas de lucha” del IX Congreso en 1961
fueron contantemente debatidas por la militancia que se iba apropiando de los
planteamientos estratégicos y tácticos fruto de la “Recepción” de la Revolución de Nueva
Democracia China que el propio PCC promovió.
364 PC de C-ML, “Tribuna del congreso marxista-leninista # 1”, 64. 365 PC de C-ML, “Tribuna del congreso marxista-leninista # 1”, 64. 366 Francisco Garnica, Hacia una política revolucionaria en materia de organización, 1965. Tomado del Centro de documentos de movimientos armados (http://cedema.org/ver.php?id=3681).
134 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
4.3 La tendencia pro-china y la división en el seno del PCC
El año de 1963 sería uno de los más intensos en la vida interna del Partido Comunista de
Colombia. Desde principios de los años sesenta la militancia que cuestionó que el PCC
fuera el Partido del proletariado se empezó a agrupar en nuevas formas organizativas,
dando origen a la Nueva Izquierda Colombiana; La Nueva Izquierda, motivada por
acontecimientos internacionales como el triunfo de la Revolución Cubana, la critica a los
Partidos Comunistas burocratizados en las estructuras de poder y la polémica en el
Movimiento Comunista Internacional, se convirtió en la tendencia política que aglutinó a
los movimientos anti-electorales y pro-guerrilleros que empezaban a transformar el campo
de la izquierda colombiana con nuevos referentes ideológicos, discursos políticos, nuevos
proyectos organizativos en medio de unidades y rupturas como lo fueron: el Movimiento
Obrero Estudiantil Campesino MOEC 7 de Enero en 1959, la Acción Revolucionaria de
Colombia ARCO en 1960, el Frente Unido de Acción Revolucionaria FUAR en 1962, el
Partido Revolucionario Socialista PRS en 1962, la organización marxista Colombiana en
1962 y la Academia maoísta367 en 1963.
Pero el año 63 tenía una particularidad: las divergencias Chino-Soviéticas pasaron del
debate a la ruptura. Esa condición externa determinó, no solo la intensidad sino la
definición de la lucha interna, dado que los elementos políticos e ideológicos, en debate,
empezaban a relacionarse con la discusión internacional en el seno del Movimiento
Comunista entre los planteamientos del PCCh y el PCUS. Dentro de esa militancia de la
Nueva izquierda estaban los expulsados del PCC que al haber apropiado los
planteamientos del pensamiento de Mao fueron los encargados de debatir en teoría y
práctica, dentro y fuera del PCC, una nueva concepción revolucionaria. En ese sentido lo
que veremos a continuación es el desarrollo de la lucha de líneas al interior del Partido que
a partir de 1963, en dicho contexto internacional, devino en el incremento de expulsiones,
la división del PCC y el surgimiento de la tendencia pro-china a su interior.
367En nota de Proletarización se aclaraba lo siguiente: « En Colombia no hay ninguna organización que se haga llamar Academia Maoísta. Simplemente denominamos con este nombre a un sector de compañeros que se proclaman Maoísta, que están dispersos en varias organizaciones o no militando en ninguna, conformando una especie de Academia Maoísta». Ver Proletarización, 525-537.
4. El momento de la apropiación. 135
De los capítulos anteriores queda claro que los líderes chinos siempre tuvieron la clara
intención política de hacer de su experiencia de Revolución de Nueva Democracia un
modelo para el Tercer Mundo, de la utilización de la Diplomacia Popular como estrategia
para cumplir dicha aspiración política y que en ese sentido, no escatimaron esfuerzos para
socializar su experiencia a la militancia latinoamericana, en lo que militantes del PCC
llamaron “cursos de maoísmo informal”. Todo esto estuvo bien mientras el PCCh no
estuvo interesado en estimular y apoyar la constitución de nuevos Partidos Comunistas
marxistas leninistas, pero todo cambió cuando los chinos asumieron la orientación de
fomentar el cisma como cuestión de política y por ende estimular a los miembros pro
chinos a abandonar a los Partidos Comunistas que querían seguir una línea pro soviética.
Este fue el proceso que se vivió en Colombia.
¿Cuándo se empezó a expresar la nueva política de los líderes chinos en Colombia?
Hablando de las relaciones entre los chinos y el Movimiento Comunista Internacional,
José Cardona denunciaba que la militancia pro-china al interior del PCC, él lo llama
grupos anti Partido, «eran alimentados ideológica y financieramente por el PCCh»368, y
que dicha actitud de los chinos data por lo menos de mediados de 1963 cuando «los
camaradas dirigentes del PCCh reunieron un grupo de muchachos de la JCC [Juventud
Comunista de Colombia], que pasaba por Pekín, para hacerles una prédica abierta contra la
línea del PCC»369. A estos argumentos agrega Cecil Johnson que los tres delegados
mueren debido a que el avión en que viajaban se estrelló en la ciudad Rusa de Irkutsk, el 13
de julio de 1963370. Para la conmemoración del primer aniversario de estas víctimas, dice
Cecil Johnson, que en el periódico del Partido, Voz Proletaria371, se dio a conocer que
Ricardo Lozano, uno de los jóvenes muertos, había enviado por correo varias cartas desde
China «en el que denuncia los ataques de los camaradas chinos contra el PC de
Colombia»372.
368 José Cardona H, “Las divergencias en el movimiento comunista internacional”, Documentos Políticos N° 57 (1966): 31. 369 Cardona, 32. 370 Johnson, 231. 371 Voz Proletaria 16 de julio de 1964. 372 Johnson, 231.
136 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
Durante 1963 se registró en la prensa interna y abierta del Partido la invitación a estudiar
las conclusiones del 28 pleno sobre la situación en el Movimiento Comunista373 y asistir a
«cursillos sobre las divergencias»374, donde la militancia podría asir los planteamientos
que venía elaborando el Partido. De igual forma la prensa registró la agudización de las
contradicciones internas y el proceso de expulsión de diferentes militantes, varios de ellos
miembros del Comité Central lo cual da evidencia de la álgida lucha al interior del Partido.
En enero de 1963 el órgano interno del Comité Ejecutivo del PCC, Tareas, lanza un
llamamiento de “Atención a todo el Partido”, pues han identificado «elementos sin
autorización del Partido y que han sido atendidos y bien servidos en tareas que ningún
organismo encargó»375. El hecho lo relaciona con la influencia de enemigos que quieren
infiltrar las filas del Partido. En Tareas de junio del mismo año, se anunció el retiro del
Jorge Bayona376 integrante del CC, y en noviembre, el de Pedro Vázquez Rendón,
ratificado en el número 251 de Voz de la Democracia377. Ya para finales del año, en
diciembre, se publicitaba en la revista del Partido Documentos Políticos artículos como
“El dogmatismo de los camaradas chinos”, que reflejaban la decisión tomada por el
Partido. Para este año, y hasta antes de las decisiones del 29 pleno, se aprovechan las hojas
internas de la prensa comunista para publicitar378, en el plan de ediciones de 1963, una de
las últimas obras que de Mao editaría el Partido: Sobre el Arte y Literatura.
Antes de culminar el año 1963 Pedro Vázquez Rendón da a conocer la carta que dirigió al
Comité Central del Partido Comunista, oponiéndose a su expulsión adoptada en el 29
Pleno. La carta, que se iría a «constituir en la primera referencia programática del nuevo
373 Partido Comunista de Colombia - PCC, “Quedan algunos ejemplares de la revista Documentos del Partido”, Tareas, N° 25 (1963): 2 374 Partido Comunista de Colombia - PCC, “Cursillo sobre las divergencias”, Tareas, N° 39 (1963): 4. 375 Partido Comunista de Colombia - PCC, “Atención! A todo el Partido”, Tareas, N° 23 (1964): 1. 376 Partido Comunista de Colombia - PCC, “Para conocimiento del Partido”, Tareas, N° 26 (1963): 4. 377 Las fechas son suministradas por el mismo Pedro Vázquez en la carta remitida al Comité Central. Vea Pedro Vásquez Rendón, “Carta Abierta”, 273. 378 Partido Comunista de Colombia - PCC, “Atención agentes de la literatura del Partido”, Tareas, N° 25 (1963): 3.
4. El momento de la apropiación. 137
Partido»379 pro-chino, es fechada en Santa Marta el 3 de diciembre de 1963. Allí Pedro
Vásquez utiliza los argumentos del Comité Central del Partido Comunista de China,
consignados en la Proposición acerca de la línea general del movimiento comunista
internacional, para librar la lucha con la dirección del Partido, pues según él, la expulsión
se dio, en parte, por la defensa que hizo de la revolución y de los revolucionarios chinos.
Al final de la carta queda claro la decisión del Partido Comunista de Colombia para con
China y Mao Tse-tung, dice Pedro Vásquez: «Me honra que justamente conmigo, ustedes
hayan condenado a Mao Tse-tung y a la revolución China»380 .
Los debates que se venían concentrando en 1963 en torno al programa y la vía de la
revolución tomaron nuevos énfasis producto de la apropiación de las ideas de Mao Tse-
tung por parte de no pocos militantes del PCC: que si la tendencia del país era a la
democratización, o la fascistización; que si el peligro ideológico al interior del Partido era
el “izquierdismo”, o el “revisionismo”; que si había o no una burguesía nacional en
Colombia, que si la alianza con la burguesía nacional era fundamental, o lo era la alianza
obrero campesina; y claro está, que si era el momento de desarrollar la lucha armada para
la toma del poder o continuar en la autodefensa. Pedro Vásquez Rendón expresaba y
resumía los aspectos más relevantes de esta polémica así:
«Varias conferencias del regional del Magdalena y de la Guajira y los miembros del C.C
destacados en esa región, hemos planteado para que se discuta conforme a los estatutos: Si
es cierto, como se desprende de las apreciaciones y la práctica de ustedes, que la burguesía
colombiana es progresista (…) si la revolución que necesita el pueblo colombiano es un
simple cambio de gobierno (…) o si es un cambio cualitativo del sistema (…) Si es justo
resucitar en la mayoría de pueblo (…) el apetito electorero (…) o si hay que convertir el
abstencionismo en boicot (…) Si es permisible dar la vida para conservar la condición
existente, como aconsejan ustedes a través de la simple autodefensa, o si la eficacia de la
propia autodefensa hay que garantizarla para formas verdaderamente superiores de lucha
379 Álvaro Villarraga, Nelson Plazas, Para reconstruir los sueños: una historia del EPL (Bogotá: Fondo Editorial para la Paz, Fundación Progresar, 1994), 38. 380 Pedro Vásquez Rendón, “Carta Abierta”, En Los fundamentos del revisionismo, eds. Varios. (Medellín: Ediciones Calarcá, 1975), 280.
138 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
(…) Si la alianza fundamental de la clase obrera para la revolución es la burguesía o parte
de ella o son los campesinos y toda las demás clases explotadas»381.
Expulsado Pedro Vázquez en septiembre de 1963 su vasta experiencia como miembro del
Comité Central le dio la posibilidad de empezar a nuclear los líderes de la Nueva Izquierda
colombiana, teniendo como primer resultado la conformación del Comando de Integración
de los Movimientos Revolucionarios Colombianos - CIMREC, en octubre de 1963. Como
“Comando” su objetivo inicial era «construir un ejército»382, su conformación estaba dada
por los sectores expulsados del PCC - (Guajira, Magdalena, Bogotá y Antioquia)-, por
militantes salidos o expulsados de la Juventud Comunista del PCC, por sectores del
MOEC, ARCO, PRS y juventudes del Movimiento Revolucionario Liberal.
El fuerte liderazgo ejercido desde un principio por ex militantes del PCC como Pedro
Vázquez, Pedro León Arboleda, y más tarde Francisco Garnica generó ante la demás
militancia de la Nueva Izquierda el imaginario de que el CIMREC y los marxistas
leninistas a su interior «copiaban el esquema chino y el pensamiento maoísta»383. Lo
anterior, aunado al debate interno del CIMREC en torno a construir un nuevo Partido,
reconstituir el viejo PCC, o seguir desarrollando el trabajo de unificación de los
movimientos existentes, resultando ganadora la segunda posición, alejó a varios sectores
de la Nueva izquierda, quedándose casi sola la militancia expulsada del Partido
Comunista.
Efectivamente las aspiraciones de la militancia pro-china de ponerse a la cabeza de la
revolución y ocupar el vacío dejado por el “Partido revisionista” no eran completamente
compartidas por otras fuerzas cuya mayor preocupación era proclamar la lucha armada y la
abstención como antítesis al PCC. En la práctica fue imposible articular posiciones tan
diversas como las exponentes del foquismo, otras que priorizaban el trabajo urbano, e
incluso otras que negaban la necesidad de la dirección del Partido. Con el ingreso de
vastos sectores de la Juventud Comunista en cabeza de Francisco Garnica, expulsados en
381 Pedro Vásquez Rendón, “Carta Abierta”, 274-276. 382 Álvaro Villarraga, Nelson Plazas, Para reconstruir, 37. 383 Álvaro Villarraga, Nelson Plazas, Para reconstruir, 38.
4. El momento de la apropiación. 139
febrero de 1964, al interior del CIMREC se acentuó la «importancia de la creación del
Partido vanguardia de la revolución colombiana»384. Fue así que el CIMERC pasó de ser
“Comando” a llamarse “Comité”.
Ya como comité el CIMREC realizó la Primera Conferencia de marxistas leninista «en el
municipio de la Ceja-Antioquia entre el 5 y el 8 de marzo de 1964 con la presencia de un
grueso importante de delegados que reiteraron su compromiso de avanzar en la
reconstrucción del Partido»385. Dicha conferencia, para sorpresa y motivo de ruptura con
otros militantes no marxistas leninistas, asumió la forma de reunión constitutiva del
Partido Comunista de Colombia (marxista-leninista), conformó una dirección central de 23
miembros, y acordó la realización del X Congreso.
A esta altura de la narrativa es importante señalar que la investigación se distancia de la
fecha hito de julio de 1965, considerada por la mayoría de trabajos históricos, para
referirse al inicio del Partido Comunista Pro-chino en su X congreso, y hacemos énfasis en
que fue en marzo de 1964 cuando se reconstituyó el Partido Comunista de Colombia
(marxista-leninista), fruto de la división del Partido Comunista, en donde la tendencia pro
china a su interior empezó a tener forma organizativa, con militantes dentro y fuera del
Partido en el CIMREC, que en la práctica funcionó como «un Comité Central en la
sombra»386, tanto así, que de 1964 a 1965 no solo se tenía estructuras partidarias, órganos
de prensa, etc, sino que también habían iniciado el trabajo militar al mando de Libardo
Mora Toro.
La fisionomía del nuevo Partido Comunista, ahora como Partido Comunista de Colombia
(marxista-leninista), no implicaba para el imaginario de la militancia pro-china una
división del Partido, sino una reconstitución387, «rescatar de las manos del oportunismo
384 Proletarización, 237. 385 Partido Comunista de Colombia – marxista leninista (PC de C-ML), “Anotaciones sobre la historia del Partido Comunista de Colombia (marxista-leninista)”, Revolución, N° 506 (2015): 5. 386 Álvaro Villarraga, Nelson Plazas, Para reconstruir, 40. 387 Este mismo concepto lo asumió el Partido Comunista de Colombia – Maoísta en 2001 al decir que «Cuando decimos reconstituir queremos decir fórmalo nuevamente a partir de las experiencias anteriores como síntesis, como herederos de los comunistas en Colombia que han sido muchos en décadas», PCC-M, “Resolución N° 6”, Documentos Primer congreso del PCC-M, (Bogotá: Ediciones Estrella Roja, 2001) 21.
140 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
revisionista las tradiciones gloriosas de los comunistas colombianos»388. De hecho cuando
definieron hacer el congreso después de la reconstitución fue motivo de debate si lo
llamaban I o X Congreso. Así opinaba Raúl Marco delegado del Partido Comunista de
España (marxista-leninista) asistente al congreso: « Si declaramos que este es el primer
congreso, podrían llamarnos divisionistas. Si somos el X Congreso los divisionistas serán
quienes intenten convocarlo por encima de la mayoría del Partido»389. Esto explica porque
los estatutos aprobados en el X congreso fueron presentados como una reforma a los
Estatutos aprobados en el IX congreso del PCC.
Reconstituido el Partido se convocó, en abril de 1964, la Conferencia Nacional de
Regionales marxistas leninistas que ratificó «la reestructuración del Partido, donde se
plantea entonces el rompimiento con la vieja dirección del Partido y se entra a preparar
independientemente el Décimo Congreso»390. Con ese propósito se nombró una Comisión
Coordinadora de Regionales Comunistas Preparatoria del Congreso marxista-leninista y se
acordó publicar “Tribuna del Congreso marxista-leninista” y el Periódico “Revolución”391.
En la Tribuna # 1 aparecieron las conclusiones de la Conferencia Nacional de Regionales
marxistas leninistas.
Dado que la Conferencia Nacional de Regionales marxistas leninistas había acordado citar
el primer Comité Central, este se realizó en septiembre de 1964 de cuyas orientaciones en
su Primera Sesión Plenaria se trazó el plan de trabajo preparatorio del X congreso y se
delimitó «las áreas para el desarrollo de la lucha armada “en el campo”»392. Con esta
decisión se corregía la tendencia predominante, durante el periodo entre 1962-1964, en el
grueso de la militancia que iba marcando diferencia con la dirigencia del PCC,
caracterizada por una radicalización en el terreno militar con el objetivo político de
388 Partido Comunista de Colombia M-L (PC de C-ML), “Tribuna del congreso marxista-leninista # 2”, Documentos Vol. 1 (Medellín: Editorial 8 de Junio, 1975) 78. 389 PC de C-ML, “Anotaciones sobre la...” 6. 390 Arturo Alape, La paz, la violencia: testigos de excepción (Bogotá: Planeta, 1985), 298. 391 Hasta antes del X congreso en julio de 1965 se alcanzó a publicar 4 ejemplares de Tribuna del Congreso marxista-leninista y 6 del Periodo Revolución. 392 Álvaro Villarraga, Nelson Plazas, Para reconstruir, 40.
4. El momento de la apropiación. 141
“empujar” al Partido «a una posición consecuente con el proceso revolucionario»393; Esto
explica la reflexión de “ignorancia sobre la teoría básica de la Guerra Popular” que hiciera
la Segunda Sesión Plenaria, realizada en octubre de 1966, al recordar que: «Durante dicho
lapso participamos en casi todas las acciones e intentos por establecer la lucha urbana,
olvidando casi por entero la necesidad de la lucha en el campo»394. Con razón esta
militancia no se sumó a la resistencia en Marquetalia, para impulsar sus tesis.
La Primera Sesión Plenaria también adelantó tareas internacionales con miras a lograr
aceptación por el Movimiento Comunista Internacional. Aunque Álvaro Villarraga y
Nelson Plazas sostengan que «en esta etapa, se logró el reconocimiento de parte del
Partido Comunista Chino»395, Cecil Johnson cuestiona esta tesis al decir que «los chinos
no estaban dispuestos a aceptar el trabajo realizado en la conferencia como prueba de que
un nuevo Partido marxista-leninista se había formado en ese momento»396; la afirmación la
fundamenta en la evidencia de que el PCCh no publicó en Pekín Informa el acontecimiento
como evidencia de la fundación de un nuevo Partido, como si lo había hecho con el
surgimiento de las Juventudes Comunistas marxistas-leninistas tras la división de esta
organización juvenil en su V congreso de febrero de 1964. Este tema lo analizaremos a
continuación.
Para inicio del año 1964 las alarmas en el seno del Partido Comunista estaban encendidas.
En Tareas del mes de enero, se hizo un llamado general a «librar una seria batalla contra el
fraccionalismo y los divisionistas»397, y otro texto parecido en el mes de marzo llamando a
la «unidad del Partido»398. Todo esto como respuesta a la labor del reconstituido Partido
quien había enfilado baterías para sustraer de la base a la militancia que simpatizaba con
las tesis pro-chinas.
393 Partido Comunista de Colombia M-L (PC de C-ML), “Orientación # 1”, Documentos Vol. 1 (Medellín: Editorial 8 de Junio, 1975) 288. 394 PC de C-ML, “Orientación # 1”, 288. 395 Álvaro Villarraga, Nelson Plazas, Para reconstruir, 40. 396 Cecil Johnson, Communist China & Latin America, 235. 397 Partido Comunista de Colombia - PCC, “Hay que librar una seria batalla contra el fraccionalismo y los divisionistas”, Tareas, N° 31 (1964): 4. 398 Partido Comunista de Colombia - PCC, “La unidad del Partido y el fraccionalismo”, Tareas, N° 33 (1964): 1.
142 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
Esa política se vio reflejada más claramente en el seno de la Juventud Comunista,
expresión juvenil del PCC. En febrero de 1964 en el V Pleno del Comité Central de la
Juventud Comunista se rinde un informe bajo el título “Preparemos el asalto al poder” por
parte de Francisco Garnica, quien era secretario de la Juventud Comunista del Valle. Allí
Garnica plasma sus discrepancias con la dirección del Partido:
«En Colombia es evidente el proceso de fascistización (…), el frente nacional avanza cada
vez más hacia la dictadura abierta (…), el descontento popular crece y a las protestas
populares realizadas utilizando las “libertades democráticas” se les responde con masacre
(…), el boicot es la posición justa y ayuda a la unidad de la izquierda al contrario que las
elecciones (…), la autodefensa es la respuesta a la violencia del régimen, no puede
concebirse como la simple organización del instinto de conservación de las masas, es un
instrumento revolucionario para la toma del poder (…). el peligro ideológico fundamental
no es el “izquierdismo” sino el oportunismo de derecha, porque nuestras fallas principales
son el Burocratismo, la pasividad y las tendencias liberales»399.
En Tareas se relata los sucesos del V pleno de la Juventud Comunista de Colombia. Dicho
pleno, después de analizar la situación internacional en que se desarrollaba las luchas de la
juventud colombiana, dijo entre otras cosas que: «El V pleno demuestra su preocupación y
su rechazo ante los métodos utilizados por los camaradas400 chinos de querer interferir en
los asuntos internos de los Partidos Comunistas de distintos países y de estimular la
actividad fraccionalista de grupos de renegados, incluso en las filas de nuestro Partido»401.
El resultado de la reunión fue la sanción a Francisco Garnica, Uriel Barrera, Edison
Lopesierra, César Uribe y Fred Kaim. Dos días después, comenta el órgano de
propaganda, los sancionados dieron a conocer un comunicado constituyéndose en una
organización juvenil comunista con su propia línea. Debido a esto el Comité Ejecutivo de
la Juventud Comunista procedió a expulsarlos definitivamente. Por su cargo como
secretario de propaganda Fred Kaim siguió publicando "Estudios de la Juventud" y "De
pie la juventud" para la nueva Juventud Comunista Colombiana.
399 Proletarización, 234. 400 Fíjese bien que a esta altura se seguía usando el término camaradas. 401 Partido Comunista de Colombia - PCC, “Manifiesto de Unidad de la juventud con el Partido Comunista de Colombia”, Tareas, N° 33 (1964): 1-4.
4. El momento de la apropiación. 143
Como habíamos dicho, el PCCh es conocedor de esta división en el seno de la Juventud
Comunista y permite que en su prensa, Pekín Informa, se dé a conocer la resolución de la
nueva fuerza escindida bajo el nombre de Juventud Comunista marxista leninista. La
forma rápida en que respondieron los chinos a la noticia es reflejo de «Que los chinos no
habían perdido el interés en el cultivo de la buena voluntad de los jóvenes comunistas en
Colombia»402. Los sucesos de febrero fueron registrados el 15 de marzo de 1964 en Peking
Review número 20, bajo el título “Revisionist Line of Colombian CP Leadership
Denounced”. El equivalente en versión española apareció el 6 de mayo de 1964 en Pekín
Informa número 18, bajo el título “Condena a la línea revisionista del Partido Comunista
de Colombia”.
La nota periodística toma de la resolución adoptada por la Juventud Comunista pro-china
los aspectos que son de más interés para la política del PCCh. Así empieza la nota: «Los
miembros marxista-leninistas del Comité Central de la Juventud Comunista de Colombia
han condenado al grupo dirigente del Comité Central del Partido Comunista de Colombia
por orientar a la Juventud a lo largo de las líneas revisionistas»403. Continúa informando
que se « produjo una escisión, y los miembros marxista-leninistas realizaron una reunión y
declararon fundada la Juventud Comunista Colombiana»404, es decir, la Juventud
Comunista- marxista leninista; frente a las condenas hechas al PCC la nota resalta: «Ese
Partido, dice la resolución, rehúsa considerar la toma del Poder como el objetivo
estratégico fundamental, tergiversa la realidad del país, crea ilusiones, evoca las
posibilidades del mejoramiento de las condiciones de vida bajo el régimen burgués, y
adopta una política economista y reformista en la lucha proletaria»405. Otros aspectos que
resaltan son el llamado a “tomarse el poder”, a “no tomar parte en las elecciones de
marzo”, y a “eliminar los métodos inquisitoriales impuestos por los dirigentes del Comité
Central”.
402 Cecil Johnson, Communist China & Latin America, 232. 403 Movimiento Comunista Internacional, “Condena a la línea revisionista del Partido Comunista de Colombia”, Pekín Informa N° 18 (1964): 21. 404 Movimiento Comunista Internacional, “Condena a la línea, 21. 405 Movimiento Comunista Internacional, “Condena a la línea, 21.
144 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
Frente a esto último la resolución denuncia explícitamente las restricciones que habían
sido colocadas por la dirección central del PCC en la difusión de materiales chinos en el
Partido y la organización juvenil; pese a que el Partido se haya pronunciado en el sentido
de que ellos «no censuran la literatura china, pero tampoco la promueven», la resolución
de la nueva organización juvenil decía, a manera de denuncia que «Las restricciones tienen
por objetivo obstruir el desarrollo y la lucha ideológica, e impedir el debate necesario en
todo el Partido y la Juventud Comunista sobre las líneas revisionistas y seguidistas de sus
dirigentes [y que dichos métodos] impiden que los miembros de la Juventud Comunista
estudien libremente los diferentes puntos de vista sobre la estrategia y la táctica del
movimiento comunista internacional»406.
El resultado final del V pleno de la Juventud Comunista fue que esta se dividió. Ya hemos
expuesto los argumentos de ambas partes en sus respectivas resoluciones. El principal
exponente de la división fue Francisco Garnica desde el lado pro-chino. ÉL era un joven
dirigente que para la fecha tenía 24 años, y quien moriría un año después como miembro
del Comité Central del recién reconstituido PC de C ml junto a Carlos Alberto Morales y
Ricardo Torres. Frente a los sucesos de la Juventud Comunista se supo por parte de
Garnica que el ochenta por ciento de la militancia había sido expulsada.
Dividida la Juventud Comunista, la lucha al interior del Partido se hace más intensa. En
junio 29 de 1964 el Partido Comunista de Colombia expulsa a Carlos Arias. La sanción fue
tomada en el 30 pleno del Comité Central del PCC, pero las investigaciones a Arias por
«actividades fraccionalistas»407 se venía realizando desde el 28 pleno hasta el punto que en
29 pleno, cuando expulsaron a Pedro Vázquez Rendón, a Arias lo habían retirado de la
suplencia del Comité Central. En dicho pleno también se orientó, o decretó, la disolución
del Comité Regional del Magdalena por la presencia de «graves hechos de fraccionalismo
y de provocación contra el Partido y su Comité Central, labor dirigida por Pedro Vázquez
406 Movimiento Comunista Internacional, “Condena a la línea, 21. 407 Partido Comunista de Colombia - PCC, “Expulsado del Partido Carlos Arias”, Tareas, N° 34 (1964): 4.
4. El momento de la apropiación. 145
y Carlos Arias, antiguos dirigentes de este comité Regional»408. Todo indica que la
influencia de estos líderes pro-Chinos seguía en el regional y en la militancia de base aún
después de su expulsión.
En agosto del mismo año hay un tercer llamado de alerta en la prensa interna del Partido
para «controlar la actividad de los grupos anti-Partido»409. Posteriormente se reconoce
tácitamente que las “divergencias” son un factor determinante en el debate dado a su
interior, pero el Partido no asume el debate ideológico y político de frente, sino opta por
tomarlas como el “pretexto de los divisionistas” para tomar medidas administrativas. Es
así que Joaquín Moreno Díaz asume este argumento para decir, en Voz Proletaria que «Se
han expulsado a dos elementos que hacían parte del Comité Central, Pedro Vázquez y
Carlos Arias, no por divergencias ideológicas sino por la labor destructiva contra del
Partido»410. En las mismas páginas el PCC denunciaba los métodos de los dirigentes
chinos por debilitar los Partidos comunistas y a sus “representantes” en Colombia porque
su principal actividad «no la realizan en sectores donde no hay organización
revolucionaria, ni buscan adeptos entre las masas sin Partido, o entre otras corrientes, sino
precisamente entre las filas del Partido Comunista»411.
Y no era para menos, a la par de los sucesos en el seno del PCC de expulsiones
intensificadas, el reconstituido PC de C ML aceleraba los preparativos para convocar el X
congreso, en función de lo cual la Primera Conferencia de los Regionales marxistas
leninistas había determinado, entre otras cosas: «llamar a todos los marxistas-leninistas de
Colombia, dentro y fuera del Partido [léase del PCC] a engrosar las filas del Partido
Comunista reconstituido»412. Los frutos de esta orientación no se hicieron esperar, el
segundo número de Tribuna del congreso marxista-leninista, de noviembre de 1964, se
dedicó a exponer las conclusiones de la Conferencia Regional del PCC de Bolívar y del
408 Partido Comunista de Colombia - PCC, “Resolución sobre el Comité Regional del Magdalena”, Tareas, N° 34 (1964): 3. 409 Partido Comunista de Colombia - PCC, “Hay que controlar la actividad de los grupos anti-Partido”, Tareas, N° 34 (1964): 2 410 Partido Comunista de Colombia - PCC, “Las divergencias, pretextos de los divisionistas”, Voz Proletaria, Bogotá, 17 de septiembre, 1964: 4. 411 Partido Comunista de Colombia - PCC, “Las divergencias, 4. 412 PC de C-ML, “Tribuna del congreso marxista-leninista # 1”, 70.
146 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
pleno de la Juventud Comunista de ese mismo departamento, en donde según la editorial
sus tesis fueron aprobadas «por la abrumadora mayoría de la conferencia, con la excepción
de dos elementos»413. Uno de ellos era Carlos Romero414.
En esta entrega de Tribuna se develan claramente las fuerzas en puga por cooptar para uno
u otro lado de ambos Partidos Comunistas la militancia de base e intermedia. Dice la
editorial que las tesis aprobadas, donde el Regional del Bolívar y la Juventud Comunista se
adhieren al PC de C (m-l), demuestra «que la base honesta del Partido revisionista está
dispuesta a desenmascarar los enemigos del pueblo infiltrados en la dirección del Partido
“Comunista”, romper con ellos y agrupar sus fuerzas con la de los demás marxistas-
leninistas colombianos en nuestra común tarea de organizar la toma del poder político
estructurando un verdadero Partido Comunista de Colombia (marxista-leninista)»415.
En el mismo año 64, a mediados, el PCC había convocado su Décimo Congreso pero este
no se realizó como establecía los estatutos en parte por la necesidad de dar respuesta a la
agresión a Marquetalia, y en parte para dar espera a que la lucha interna con las tendencias
Pro-chinas se aclimataran. Pero dejar pasar el tiempo no solo aclimata sino que complejiza
la situación, así, la no realización del Décimo congreso agudizó los debates al interior del
PCC. Fue hasta 1966 que el PCC logra hacer el X Congreso. En el informe ideológico
Gilberto Vieira planteó que la desviación más peligrosa en el seno del PCC en los últimos
años había sido el “ultraizquierdismo” y la relaciona con los dirigentes del PC de China,
bajo el argumento de que «tiene, (…), sus fines particulares y tratan de imponer su línea
por no importa cuales medios»416. Dicha desviación es caracterizada como «Tesis
dogmática sobre la vía armada como única forma de lucha digna de revolucionarios,
acompañada en la práctica por la pasividad con el imperialismo yanqui y las oligarquías
dominantes (…) Insolente desprecio por la clase obrera (…) rechinante fraseología
revolucionaria, que exige de inmediato a las masas las tareas decisivas y las formas más
413 PC de C-ML, “Tribuna del congreso marxista-leninista # 2”, 71. 414 Actualmente El exconcejal y ex presidente de la Unión Patriótica, ex miembro del PCC, es esposo de Clara López Obregón, ex presidente del PDA y Ministra de Trabajo del gobierno de Santos. 415 PC de C-ML, “Tribuna del congreso marxista-leninista # 2”, 71. 416 Documentos del Décimo Congreso del Partido Comunista. Enero de 1966. Secretaria Nacional de Agitación y Propaganda, 53.
4. El momento de la apropiación. 147
elevadas de lucha»417. A estas alturas ya es evidente que se refería a la tendencia pro-china
que de su interior se despendió para reconstituir el PC de C (m-l), realizando su Décimo
Congreso en julio de 1965.
Iniciado el año de 1965 el órgano de la Comisión Coordinadora de regionales comunistas
preparatoria del congreso marxista-leninista (Tribuna) publicó su número 3 en febrero y el
número 4 en marzo donde presentaron los aspectos programáticos (estratégicos) de la
revolución y los aspectos tácticos (línea programática y organizativa), respectivamente.
El 17 de julio de 1965 se realizó el Décimo Congreso del reconstituido Partido Comunista
de Colombia marxista-leninista (PC de C (m-l)) en su mayoría por ex-militantes
expulsados del PCC. El largo proceso de lucha interna en el seno del PCC y la lenta
configuración de la posición pro-china producto de la “Recepción” del comunismo chino y
de la Revolución de Nueva Democracia llegaba a un segundo hito con la realización de
este Congreso. Contrario a lo que pasó en marzo con el primer hito de la reconstitución,
este segundo hito sí tuvo repercusión en la prensa china; todo apunta a que el PCCh ya
aceptada y daba su apoyo al surgimiento de un nuevo Partido Comunista marxista-leninista
en América Latina. Su programa salió publicado en el diario chino Jen-Min Jih-Pao, el 13
de agosto de 1965418, y el 20 de agosto en la revista Peking Review bajo el título “Political
Resolution of the l0th Congress Colombian C.P.”419; la versión en español salió en Pekín
Informa número 33 del 18 de agosto de 1965, bajo el título de “Lucha armada para la
liberación; condena a la traición del revisionismo contemporáneo” y subtitulo “El X
Congreso del PC de Colombia adopta una Resolución Política”.
Al igual que con la resolución de la Juventud Comunista marxista-leninista, los chinos
resaltaron en su prensa los elementos de la resolución del X congreso del PC de C (m-l)
que más le convenía para su debate en medio de la disputa Chino-Soviética en relación a
417 Documentos del Décimo Congreso del Partido Comunista. Enero de 1966. Secretaria Nacional de Agitación y Propaganda, 54. 418 Peter Van Ness, Revolución y política exterior china: el apoyo de Pekín a las guerras de liberación (Buenos Aires: Ediciones Líbera, 1974), 173. 419 International Communist Movement, “Political Resolution of the l0th Congress Colombian C.P.”, Peking Review Nº 34 (1965): 20-22.
148 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
puntos de vista fundamentales unánimes: «La violencia revolucionaria es la partera de la
historia. La actual situación política mundial evidencia la imposibilidad de tránsito
pacífico del capitalismo al socialismo»420; el análisis de la situación política mundial:
«Estamos ante un auge de la lucha antimperialista a escala mundial, particularmente aguda
en Asia. África y América Latina»421; los hechos contundentes en la situación
internacional: «La aparición del poderío nuclear chino, poderoso aporte a la causa de la
paz mundial que destruye el monopolio de las armas atómicas, impide el chantaje
imperialista y llena de esperanza a los combatientes populares que libran batallas
encarnizadas contra el imperialismo norteamericano»422; la lucha de las fuerzas
marxista-leninistas del mundo contra el “revisionismo”: «El X Congreso del PC de
Colombia rechaza la política divisionista de la camarilla revisionista del PCUS»423; la
situación política latinoamericana: «América Latina es para el imperialismo norte-
americano la mejor presa aún en sus manos, su retaguardia y su principal sostén. Por esto
los EE.UU. están dispuestos a impedir la liberación Latinoamericana a toda costa»424; y
por último, el análisis de la crisis estructural de Colombia: «Colombia vive una situación
insurreccional incipiente, enmarcada dentro de la situación mundial y latinoamericana de
los pueblos oprimidos»425.
Los sucesos de este congreso también fueron registrados por la prensa del PCC. En
Documentos Políticos publicaron una declaración “Contra la farsa del ꞌꞌCongresoꞌꞌ
anticomunista”. En la declaración denunciaron que: «los diarios más reaccionarios del
país, así como diversos radio periódicos, han difundido con sugestivo entusiasmo una serie
de informaciones y comunicados anónimos acerca de un supuesto “congreso comunista”
que de la manera más ridícula pretende suplantar el papel de los comités regionales del
420 Movimiento Comunista Internacional, “Lucha armada para la liberación; condena a la traición del revisionismo contemporáneo”, Pekín Informa N° 33 (1965): 17. 421 Movimiento Comunista Internacional, “Lucha armada, 17. 422 Movimiento Comunista Internacional, “Lucha armada, 18. 423 Movimiento Comunista Internacional, “Lucha armada, 18. 424 Movimiento Comunista Internacional, “Lucha armada, 19. 425 Movimiento Comunista Internacional, “Lucha armada, 19.
4. El momento de la apropiación. 149
Partido comunista de Colombia y “expulsar” a sus más conocidos dirigentes»426. Para el
PCC el “tal congreso no existió” y reiterando lo aquí dicho, en el sentido de que el Partido
no afronta el debate de frente, insiste en la declaración que los promotores del nuevo
Partido Comunista marxista leninista son «gentes de proceso de descomposición política y
moral [que] tratan de explotar para sus fines personales las divergencias en el campo
socialista y en el movimiento comunista»427 haciendo pasar lo que son debates políticos e
ideológicos sobre cómo conducir la revolución en Colombia, por « actividades
divisionistas (...) modalidad del anticomunismo irracional»428.
Reconstituido el PC de C (m-l) y habiendo realizado su Décimo Congreso, el Partido
asumió como guía ideológica el marxismo leninismo, y la lucha armada como vía
revolucionaria para la toma del poder. Al asumir que Colombia vive una situación
insurreccional incipiente, plantearon:
« Por eso la toma del poder por la vía revolucionaria, es decir, la destrucción del
aparato estatal y su reemplazo por el poder popular basado en un Frente Patriótico de
Liberación y respaldado por el pueblo en armas, es la única solución para el pueblo
colombiano (…)»429.
4.4 Discurso maoísta y el devenir de la tendencia pro-china
Como se acaba de ver, fue la apropiación del modelo revolucionario chino para el Tercer
Mundo por parte de un grueso de la militancia del PCC la que dio la base programática
para el nuevo Partido. Dicha apropiación se dio en medio de las divergencias chino-
soviéticas las cuales fueron utilizadas por militantes pro-chinos y pro-soviéticos para
promover la diferenciación en el seno de la izquierda comunista. Así lo plantea
retrospectivamente Fred Kaim: «"el maoísmo", no "llegó" como cigüeña, en paracaídas
sino que estaba en el PCC, el maoísmo se gestó en un proceso. En medio de las
426 Declaración del Partido comunista, “Contra la farsa del ꞌꞌCongresoꞌꞌ anticomunistas”, Documentos Políticos N° 55 (1965): 76. 427 Declaración del Partido comunista, “Contra la, 76. 428 Declaración del Partido comunista, “Contra la, 76. 429PC de C-ML, “Resolución política”, 27.
150 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
divergencias chino-soviéticas no se trataba de "montar el maoísmo", sino precisamente de
desmontarlo»430. Esto redunda la tesis planteada de que la “Recepción” permitió el
desarrollo del “maoísmo” en el seno del Partido Comunista de Colombia, y por ende
propició la diferenciación en la izquierda comunista y el surgimiento del nuevo discurso en
el cual todo grupo maoísta del “campo M-L” encuentra en él su génesis.
Dicho discurso era apropiado por militantes que como Pedro Vázquez Rendón fue testigo
y producto del proceso de formación del “maoísmo” en el seno del Partido Comunista de
Colombia. Nacido en 1931, su trayectoria política en el seno del PCC coincidió
cronológicamente con la “Recepción” de la Revolución de Nueva Democracia (1949-
1963) hecha por el Partido. Pedro Vázquez ingresó al trabajo juvenil del PCC en 1949 y
fue expulsado en 1963. En 1950 cuando se funda la Juventud Comunista une fuerzas con
Pedro León Arboleda en defensa de la lucha armada, para 1952 se traslada al Sur del
Tolima donde se está desarrollando la lucha guerrillera y en 1953 fue asignado a la zona de
El Davis como comisario político a nombre de la dirección central del Partido Comunista.
En 1959 difundía en el Partido el documento “Hacia un reenfoque estratégico de la
revolución colombiana”, por lo que fue sancionado, pero en 1961 lo nombraron miembro
del Comité Central en el IX Congreso del PCC. A finales de 1963, antes de su expulsión
Pedro Vásquez intensifica su influencia política en las bases del Partido, así lo recordaba
Robinson Rojas: «él y sus camaradas hacen una gira nacional de dos meses para tomar
contacto, además, con las bases de los movimientos campesinos urbanos de acción directa,
vinculados a algunos regionales del viejo partido y combatidos duramente por la dirección
nacional revisionista»431. Expulsado del Partido, Pedro Vázquez Rendón se iría a convertir
en uno de los principales responsables del discurso maoísta en el seno del nuevo Partido
Comunista.
Los fundamentos del nuevo discurso se fueron configurando durante el largo proceso de
“Recepción” en donde la militancia incorporó a su tradición política el análisis de la
experiencia de la revolución china y los debates en el campo internacional, haciendo sus
430Entrevista a Kaim, Fred, Cali, 17 de mayo de 2016 431 Robinson Rojas, 19.
4. El momento de la apropiación. 151
propias interpretaciones, de tal forma que cada militante iba sintetizando el conocimiento
allí asociado y resignificándolo a partir de su propia práctica. Es así que el discurso que
surgió y diferencia a la izquierda comunista en Colombia tiene sus propias
particularidades, se puede decir que es el resultado del interés de la militancia que, afines
con las tesis chinas, intentaba leer la realidad colombiana y proponer una Línea Política
General para la revolución.
A manera de resumen, se puede decir que los elementos centrales de la diferenciación
fueron:
«A diferencia de la dirección [el PCC], que planteaba que la tendencia del país era a la
democratización, esta corriente [el PC de C (m-l)] diría todo lo contrario: la tendencia es a
la fascistización (...) Si la dirección planteaba que el peligro fundamental en el seno del
Partido Comunista era el “izquierdismo”, los compañeros de esta corriente diría que era el
revisionismo (...) Mientras la dirección enunciaba la cuestión de las formas de lucha de una
manera ambigua y abstracta y pacifista, estos compañeros entran a enunciar de una vez la
necesidad de la lucha armada para hacer la revolución (...) Si la dirección había llevado a
participar constantemente a la organización en la lucha electoral, los reestructuradores
dirían que las elecciones no sirven para la toma del poder (...) Si el Partido Comunista se
había aliado con un sector de la burguesía partiendo de que hay una burguesía nacional que
es ganable para la revolución, estos compañeros dirían que aquí no hay burguesía nacional
(...) mientras que para el Partido Comunista la alianza con la burguesía era fundamental,
estos compañeros se oponen a dicha alianza y dicen que la fundamental es la obrero-
campesina»432.
Y los elementos centrales del nuevo discurso se pueden leer en el siguiente párrafo:
«Esta línea señaló [se refieren al X Congreso] la necesidad de impulsar, con decisión total
la lucha armada por el poder político para el pueblo colombiano, representado en el Frente
Patriótico de Liberación y encabezado por el Partido. Indicó que la violencia
revolucionaria, organizada y dirigida conscientemente, desempeña la forma principal de
lucha en las condiciones colombianas y al servicio de ellas deben ponerse todas las demás
432 Proletarización, 232-233.
152 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
formas de lucha de las masas. Rubricó la seguridad de que si construimos la alianza
obrero-campesina dirigida por la clase obrera y si en torno a ella movilizamos el resto del
pueblo colombiano, coronará con la victoria de la revolución patriótica, popular y
antiimperialista que reclaman las condiciones concretas de nuestra realidad social»433
En extenso, los elementos centrales del discurso maoísta están consignados en documentos
fundantes del nuevo Partido. El congreso de reconstitución del PC de C (m-l) aprobó el
proyecto de programa expuesto en los materiales preparatorios y publicados en Tribuna
del congreso. Por eso la resolución política decía: «el X Congreso del Partido Comunista
de Colombia aprueba el contenido fundamental de los documentos presentados a la
discusión central (...) y ordena la edición corregida y ordenada de estos materiales con un
lenguaje más preciso y sencillo»434.
Una vez constituido el nuevo Partido Comunista en la resolución política se leen claves
importantes en relación al análisis que se hacía de la situación mundial, nacional y la vía
de la revolución. Al caracterizar la revolución de Colombia como patriótica, popular y
antiimperialista en marcha al socialismo, y enmarcada dentro en lo que definieron como la
época del paso del capitalismo al socialismo, plantearon: «(…) las guerras de liberación
son justas, necesarias e inevitables (…) la violencia revolucionaria es la partera de la
historia. La actual situación política mundial evidencia la imposibilidad de tránsito
pacífico del capitalismo al socialismo (…)»435. Ésta clara posición en contra de los
planteamientos de la URSS y el PCC sobre caminos no violentos devino en que el nuevo
Partido en una primera etapa asumiera posiciones foquistas al reivindicar del Che Guevara
opiniones como que: «no hay que esperar a que se den toda las condiciones. El foco
insurreccional puede crearlas (…) la guerrilla no es autodefensa pasiva. Es defensa con
ataque y, desde el momento en que se plantea como tal tiene como perspectiva final la
conquista del poder político»436.
433 PC de C-ML, “Orientación # 1”, 242. 434 PC de C-ML, “Resolución política”, 7. 435 PC de C-ML, “Resolución política”, 8. 436 PC de C-ML, “Resolución política”, 21.
4. El momento de la apropiación. 153
Dicha posición los llevó a que frente a la situación nacional la resolución planteara de una
forma desmedida que: «Colombia vive una situación insurreccional incipiente (…) la toma
del poder por la vía revolucionaria, es decir, la destrucción del aparato estatal y su
reemplazo por el poder popular basado en un Frente Patriótico de Liberación y respaldado
por el pueblo en armas, es la única solución para el pueblo colombiano»437. Al considerar
la situación como pre insurreccional se emite la orientación de todos los marxistas
leninistas en un solo Partido, todos los combatientes populares en un solo Ejército
Revolucionario y todos los revolucionarios en un solo Frente Patriótico de Liberación. Los
argumentos eran que la situación pre insurreccional se reflejaba, según ellos, en un ascenso
de masas que adopta las formas violentas de lucha, expresadas en acciones obreras,
campesinas y estudiantiles, también incluían en sus análisis el factor consciente con
acciones revolucionarias a la ofensiva como la de Simacota del ELN y la de Iinzá por parte
de las FARC, y la misma reconstrucción del nuevo Partido.
Frente a la propuesta de constituir el Ejército Popular de Liberación - EPL este tenía una
diferenciación con expresiones armadas como el ELN y las FARC. Lo primero es que el
EPL no es concebido en sus orígenes como el ejército del Partido, sino como el
instrumento de unidad de todos los revolucionarios para ejercer la lucha armada, en donde
el Partido aportaría con su propio brazo armado. De allí que en una parte de la resolución
se plantee, «a los combatientes del ELN y de las fuerzas campesinas revolucionarias en
armas los llamamos a coordinar su acción con el brazo armado del Partido y a unir sus
fuerzas para crear el embrión del Ejército Popular de Liberación»438. Lo segundo es que el
Ejército Popular de Liberación como instrumento de unidad es el brazo armado del Frente
patriótico de Liberación, lo cual significaba que este se supedita a la misión del Frente, es
decir, la toma del poder por la vía armada. Así el Partido ratifica el carácter del ejército y
de la violencia como medio y no como fin en la perspectiva de que la lucha armada era la
forma superior de lucha de las masas.
437 PC de C-ML, “Resolución política”, 23. 438 PC de C-ML, “Resolución política”, 38.
154 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
Lo anterior corresponde a la declaración de re-constitución del PC de C (m-l). Todos esos
debates fueron ratificados, algunos rectificados y otros profundizados en las “Conclusiones
políticas en el Frente Militar” o Línea militar que el Partido emitió a partir del II pleno del
Comité Central en diciembre de 1965, bajo el título “Llevar Hasta la Victoria la Guerra del
Pueblo Colombiano”. La línea militar y el asunto de la vía de la revolución fue lo primero
que abordó el Partido después del X congreso, pues de todos los debates en medio de la
lucha de líneas en el seno del Partido, el de la vía de la revolución era el central. En dicho
pleno los debates dieron como resultado la expulsión de Fred Kaim y Alfonso Cuellar, y
la consolidación del discurso maoísta a favor del camino armado, deslindando
enfáticamente del PCC.
En la nueva Línea Militar se evidencia la primera vez que un Partido Comunista en
Colombia trata la tesis del líder Chino Mao Tse-tung sobre la “Guerra Popular” al
rectificar el enfoque del foquismo. Allí se exponen ampliamente todos los asuntos
concernientes a los objetivos, a la dirección, a la estrategia y la táctica de la guerra
popular, e incluso a los asuntos particulares de las formas de organización, los
combatientes, las armas, etc. El documento define la guerra como una “Guerra Popular por
el poder político” y establece siete condiciones básicas que debe tener cada zona donde se
piense desarrollar la guerra popular:
«1. Existencia de un volumen adecuado de masas populares con un mínimo de
organización (…) 2. Presencia de contradicciones de clase particularmente agudas. (…) 3.
Existencia de uno o más núcleos de Partido en capacidad de impulsar la lucha política y
militar de las masas. (…) 4. Movilización adecuada del pueblo. (…) 5. Conformación de
un pequeño grupo de hombres con el conocimiento y entrenamiento elementales necesarios
para ponerse al frente de la lucha armada. (…) 6. Capacidad política de ese grupo humano,
principalmente en los aspectos políticos, estratégicos y militares de la revolución
colombiana. (…) 7. Condiciones mínimas de seguridad en el terreno, dotación mínima de
elementos de combate, sin que la iniciación de la lucha dependa de la calidad de las armas,
4. El momento de la apropiación. 155
pues un apertrechamiento completo y adecuado sólo puede lograrse a través de la
guerra»439.
Recogiendo la propia experiencia que vivió Pedro Vázquez Rendón en la Zona Liberada de El
Davis, en la Línea Militar se planteó, a manera de síntesis, orientaciones para constituir
“Bases Liberadas”. Estas eran entendidas como base de apoyo, «una región donde el
enemigo ha sido liquidado, en donde se tiene ya prácticamente el poder, en done puede
organizarse el poder popular y cumplir por lo menos parcialmente sus programas»440. Y al
igual que lo planteado por Mao para la Zona de Base Rural, el PC de C-ML planteó las
siguientes condiciones para crear una base de apoyo:
« (1) Poseer una buena fuerza armada; (2) haber derrotado en una región al enemigo; (3)
Haber liquidado en lo fundamental a los enemigos internos de la región; (4) Haber
realizado profundas reformas principalmente de la tierra; (5) Tener movilizadas y
organizadas a la mayor parte de las masas; y (6) Contar con un gobierno popular»441.
Durante 1966, Pedro Vázquez Rendón viaja a China a conocer de cerca la experiencia de
la "Gran Revolución Cultural Proletaria China", y fundamenta su posición sobre la vía de
la revolución colombiana. A su regreso Vázquez Rendón convoca el III Pleno del Comité
Central, en el mes de febrero de 1967, el resultado fue plasmado en la Resolución Política
sobre la línea de masas publicado en la revista teórica del Partido, Orientación.
Consolidada la posición maoísta en la dirección del Partido, esta se ve reflejada en el
capítulo III de la Línea de masas donde aparece una visión de las etapas hasta el
comunismo, el carácter de la sociedad, el carácter de la revolución, un análisis de las clases
y un programa mediato e inmediato del Partido.
En la Línea de masas se lee: «Colombia es un país con relaciones de producción
predominantemente capitalistas entrelazadas en lo fundamental con remanentes feudales,
439 PC de C-ML, “Orientación # 1”, 295. 440 PC de C-ML, “Orientación # 1”, 308. 441 PC de C-ML, “Orientación # 1”, 308 - 309.
156 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
dependiente del imperialismo norteamericano que deforma y entorpece su desarrollo»442.
En esta dirección caracterizan el Estado colombiano como «burgués, terrateniente, pro
imperialista»443, y al gobierno imperante en Colombia como una «dictadura sanguinaria de
la oligarquía y el imperialismo»444.
Caracterizada la sociedad está determinaría el carácter de la revolución la cual es definida
así: «nuestra revolución es patriótica, popular, anti-imperialista, en marcha al
socialismo»445, y por ende el carácter del Estado que perseguían, es decir una «Dictadura
popular de las clases y estamentos de clase expresados en el Frente Patriótico de
Liberación-FPL, con hegemonía del proletariado, dentro de la República Popular de
Colombia»446. Decía el nuevo Partido Comunista que la dirección hegemónica del
proletariado aseguraría la marcha ininterrumpida de la revolución colombiana hacia el
socialismo.
A esta altura se identifican aspectos diferenciadores del nuevo discurso con las posturas de
los líderes chinos que vale la pena señalar. Pese a que el PC de C (m-l) identifica el
carácter de la revolución propuesta dentro de la Revolución de Nueva Democracia, una de
las tres clasificaciones hechas por Mao (Revolución Socialista, Revolución Burguesa de
viejo tipo, y Revolución de Nueva Democracia), hacen énfasis de que no se trata de una
revolución tal y como había sucedido en China, pues allá la Revolución de Nueva
Democracia obedecía a una sociedad semifeudal y semicolonial y como ya se dijo, para el
PC de C (m-l) la sociedad colombiana era predominantemente capitalista entrelazada con
remanentes feudales. No es el alcance de esta investigación valorar si dicha caracterización
correspondía con las realidades concretas de la Colombia de los años 60, sino valorar la
442 Partido Comunista de Colombia M-L (PC de C-ML), “Orientación # 5”, Documentos Vol. 2 (Medellín: Editorial 8 de Junio, 1975) 198. 443 PC de C-ML, “Orientación # 5”, 198. 444 PC de C-ML, “Orientación # 5”, 198. 445 PC de C-ML, “Orientación # 5”, 198. 446 PC de C-ML, “Orientación # 5”, 200.
4. El momento de la apropiación. 157
lectura crítica que hacían del modelo chino. Es más, el debate del carácter de la sociedad
colombiana y de la revolución aún está abierto en el seno de las fuerzas maoístas447.
Continuando con el nuevo discurso maoísta, el PC de C (m-l) planteó que la fuerza social
de la revolución era «El Frente Patriótico de Liberación, FPL como una alianza
revolucionaria de clases para la toma y el ejercicio del poder político»448, dicho frente
tiene como fuerza fundamental y dirigente el proletariado de la ciudad y del campo, el
cual, «a través del Partido» asume su papel de fuerza directriz dentro del FPL. Completan
la estructura del FPL los campesinos pobres, los semi proletarios de la ciudad y del campo
como fuerza principal, constituyéndose así la alianza fundamental: «Alianza Obrero-
Campesina»449. Por último está la pequeña burguesía y el sector de la pequeña burguesía
superior que ampliaba la alianza del FPL. Todo esto traía implícito que las fuerzas de la
revolución eran: «los proletarios de la ciudad y del campo, los semi-proletarios de la
ciudad y del campo, los estamentos medios e inferiores de la pequeña burguesía de la
447 Para el Grupo Comunista Revolucionario, GCR, la revolución será de Nueva Democracia en su primera etapa y la vía estratégica es la de la guerra popular. El carácter de la primera etapa de la revolución está definido por el carácter semicolonial y semifeudal de la sociedad y los alineamientos sociales y de clase que resultan de esto. “GCR, La revolución de nueva democracia: necesidad y posibilidad (Bogotá: 2012)”. Para la Unión Obrera Comunista, UOC, la sociedad colombiana es capitalista y semicolonial y por ende el carácter de la revolución es Socialista, donde la vía de la revolución es la guerra popular como forma superior de lucha política de las masas. “UOC, Programa para la revolución en Colombia (Bogotá: 2015)”. El Partido Comunista de Colombia Maoísta, PCC-M planteaba hasta el 2007 que siendo la sociedad colombiana hoy una sociedad neocolonial capitalista burocrática con semifeudalismo, la lucha por transformar el carácter de nación oprimida, por confiscar el capitalismo burocrático y confiscar el monopolio sobre la tierra en manos de los terratenientes requiere de la revolución de Nueva Democracia. “PCC-M, Documentos I Congreso PCC-M (Bogotá: 2001). En el II Congreso se puso de manifiesto que las categorías de Capitalismo Burocrático y de semifeudalismo debían de estudiarse en relación a los cambios en el país y en el mundo. En este Congreso se deja de lado la concepción de Guerra Popular Prolongada por considerar que el país es urbano-regional por lo cual definió unos escenarios de lucha más acordes con la realidad del país y por lo consiguiente más cercanos a la visión de proceso insurreccional. Sin embargo el Congreso no cambió la caracterización de la sociedad y de la revolución. En la Conferencia Nacional Táctica de 2011 ya se habla de Tercera Fase del imperialismo y de los cambios ocurridos en el mundo y también en Colombia, que han creado las condiciones para concluir la discusión sobre como caracterizar a Colombia y cuál sería el carácter de la revolución y sus tareas. Entrevista a, dirigente del PCC-M, Bogotá, 1 de mayo de 2016. 448 Partido Comunista de Colombia M-L (PC de C-ML), “Orientación # 5”, Documentos Vol. 2 (Medellín: Editorial 8 de Junio, 1975) 200. 449 PC de C-ML, “Orientación # 5”, 207.
158 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
ciudad y del campo»450, y que la «pequeña burguesía superior de la ciudad y del
campo»451 eran las fuerzas ganables para la revolución.
A la par de definir los amigos también definieron los enemigos de la revolución, ellos son:
«El imperialismo norteamericano como el enemigo principal. La burguesía colombiana,
socia menor del imperialismo en la empresa de explotación de nuestro pueblo y de nuestra
riquezas. Los latifundistas, grandes propietarios de tierra»452.
A aquí hay un nuevo elemento diferenciador con los líderes chinos. Concebir a la
burguesía nacional en el campo de los amigos o los enemigos. Pese a que el III Pleno
llegó a plantear que los campesinos ricos (expresión de una burguesía nacional en el
campo) podrían ser aislados, la resolución final fue enfática en plantear que la burguesía
colombiana hacia parte de los enemigos de la revolución. En la experiencia China la
burguesía nacional no era concebida enemiga en términos absolutos, en periodos álgidos
sectores de ella era amiga de la revolución. Este punto que fue determinante para
posteriores divisiones con cierta militancia que sí le otorgaba posibilidad de alianzas con la
burguesía colombiana no estaba exento de dudas en el seno del mismo PC de C (m-l). En
1968 decían: «De aparecer un sector burgués progresista dentro del proceso que vivimos
en el futuro sólo la práctica podrá determinarlo, y para esa oportunidad, no será nuestro
Partido quien lo desconozca»453.
El conjunto de las orientaciones del II y III pleno de Comité Central, junto con el viaje de
Pedro Vásquez a China en 1966 fue afianzando a este dirigente como el más claro
defensor de las tesis maoístas en el seno del nuevo Partido Comunista. Esto se ve
claramente reflejado en la concepción política que él asumió al considerar que la
construcción del ejército revolucionario debería darse a la par de la creación de “Órganos
de Poder” con participación de las masas. Fue así que el trabajo militar estuvo orientado y
supeditado a la construcción y consolidación del Partido entre los campesinos.
450 PC de C-ML, “Orientación # 5”, 201. 451 PC de C-ML, “Orientación # 5”, 202. 452 PC de C-ML, “Orientación # 5”, 200. 453 Partido Comunista de Colombia M-L (PC de C-ML), “Orientación # 6”, Documentos Vol. 2 (Medellín: Editorial 8 de Junio, 1975) 285-286.
4. El momento de la apropiación. 159
Antes que destacamentos armados se habían organizado células y toda la red partidaria. A
partir de esto y para coordinar el trabajo de la producción, la organización y la
movilización, se crearon las Juntas Patrióticas de Liberación. En una asamblea campesina
convocada el 11 de noviembre de 1967, se elige a Julio Guerra como Presidente y Pedro
Vásquez, Vicepresidente de la Junta Patriótica. Todo este trabajo reflejaba la posición de
Pedro Vásquez de «desarrollar el concepto de guerrillero como reformador social»454 .
La Juntas Patrióticas organizaba milicias y guerrillas locales para la defensa de las veredas,
e incluso garantizaba la protección a los pequeños comerciantes de la región que
realizaban el intercambio básico. En perspectiva, Pedro Vásquez orientaba al Partido hacia
la creación de bases de apoyo (o zonas liberadas con una economía, política y cultura
nueva). Una vez creada la organización política entre la población se produjeron los
levantamientos campesinos contra los terratenientes de la región y sus guardias. Son
famosos en el imaginario de los militantes los levantamientos del Llano del Tigre, del Sinú
y de Río Verde, los del alto San Jorge y Río sucio; con estos destacamentos se constituyó
el primer frente de guerra del EPL "Francisco Garnica".
«Es en febrero de 1967 que se constituye el EPL, allí juramos bandera Pedro Vásquez,
Caraballo,- Ferreira, Pastor, como unos ocho compañeros más y yo. Tres mujeres: la gorda
María, Virginia y Cecilia. Dos costeñas y una del Valle. En ese momento nacemos
simplemente como el EPL, a los pocos días se adopta el nombre de Francisco Garnica,
destacamento Francisco Garnica»455.
Teniendo presente que en términos programáticos el PC de C (m-l) planteó que la etapa
revolucionaria inmediata era la revolución patriótica, popular, antiimperialista en marcha
hacia el socialismo, hay que reconocer que la unidad en torno al nuevo discurso no fue
plena, y no era para menos, pues líneas arriba se ha señalado que la configuración del
nuevo Partido reunión una gama variopinta de militancia con diferentes experiencias y
entendimientos. Esto necesariamente se tenía que ver reflejado en el programa.
454Álvaro Villarraga y Nelson Plazas, 45. 455 Entrevista con Carlos Aníbal Cauca, “Lino”, uno de los fundadores y ex comandantes del EPL. Bogotá. Enero de 1993. En Álvaro Villarraga y Nelson Plazas, 43.
160 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
Además de la posición oficial de la revolución como Patriótica, Popular, Antimperialista,
en marcha al Socialismo, como se acabó de ver, después del congreso se presentaron dos
posiciones que se apoyaban en unos u otros aspectos de las definiciones del X congreso456.
Una afirmaba que la etapa primera de la revolución colombiana era "socialista"; la otra
sostenía que la sociedad colombiana era semifeudal y semicolonial, sustentaba la
existencia de una burguesía progresista y por tanto caracterizaba la revolución como de
Nueva Democracia (democrático burguesa de nuevo tipo), tal y como había sido la
revolución China457.
Esas diferencias en términos programáticos que reflejaban falta de unidad política, traía
implícito otras más grandes de índole estratégico y táctico, que pasaron rápidamente a
divisiones. En 1967 se desprendió un primer sector del PC de C (m-l) para formar la
organización llamada Guerra Popular (G.P.); era el «(…) sector de jóvenes [que] había
salido del Partido Comunista influenciados por la revolución cubana y formaron a ARCO,
el cual se fusionó con la revista "Estrategia", dando origen al P.R.S, y que en esta
organización romperían con los "teóricos" y al disolverse, pasarían a engrosar al Partido
Comunista (m-l)»458. Salen del Partido porque planteaban que la revolución en Colombia
era de carácter socialista.
Para los primeros meses de 1968 se ha cristalizado una división más. Las diferencias con
este nuevo sector habían surgido en el II pleno del CC en torno al carácter de la revolución
y la existencia o no de una burguesía nacional. «El sector que disiente de la política de la
dirección y de la mayoría de militancia continuó por un tiempo llamándose Partido
Comunista de Colombia (m-l) y elaborando y distribuyendo los órganos de propaganda
como "Revolución", "Pensamiento M-L", pero sacados por él. (...) Al poco tiempo
desistieron de llamarse Partido Comunista (m-l) y conformaron los “Grupos M-L de
456 Aureliano S, “Borradores y Esbozos de Programas 1a. parte”, Contradicción Nº 10 (1992): 72-83. 457 Visto hoy en retrospectiva, estos planteamientos configuraron el surgimiento de un nuevo polo del maoísmo al cual se le puede hacer el seguimiento hasta el tiempo presente. Desde los Grupos marxista-leninista de 1968, hasta el Partido Comunista de Colombia Maoísta, PCC-M reconstituido en el 2001, pasando por la Liga ML (1971), Grupo Comunista Revolucionario (1984), y Organización Comunista de Colombia, OCC-MLM (1989). La elaboración de sus programas políticos conservan en esencia el tipo de revolución caracterizada como de Nueva Democracia. 458 Proletarización, 332.
4. El momento de la apropiación. 161
Antioquia”»459. Este sector que se desprendió, desde el punto de vista programático,
abogaba por una revolución anti feudal y antiimperialista, reivindicaba la existencia de
una burguesía nacional (revolucionaria) por tanto caracterizaba la revolución como de
Nueva Democracia, tal como había sucedido en China460.
En aras de argumentar su planteamiento, los Grupos ML elaboraron un material donde
caracterizaban la sociedad como semifeudal, allí se decía:
«El que la mayor parte de la población sea campesina y explotada por los terratenientes
feudales, es la base que define a nuestra sociedad como semifeudal. El que la mayor parte
de la población viva dentro de un régimen semifeudal, es el hecho que indica que
Colombia es un país predominantemente semifeudal, y no capitalista, pues lo importante
aquí es saber no solamente cuanto se produce o que se produce, sino, y principalmente,
como se produce y bajo qué condiciones se produce»461.
En la IV Conferencia Nacional de los Grupos ML se unifican todos ellos en una
organización centralizada: la Liga ML de Colombia, en noviembre de 1971. Una vez
constituida la nueva organización ésta ratificó la concepción de los grupos ML sobre el
carácter de la sociedad y de la revolución. Modificaron el planteamiento de la clase
principal, que para los Grupos ML era los obreros, por el campesinado. Señalaron la
Guerra Popular como la que llevaría al éxito la revolución.
El PC de C (m-l) continúo su propia marcha. Ya desde 1967 había iniciado la Guerra
Popular en la región selvática y montañosa del Alto Sinú y San Jorge, al noreste del país;
allí bajo la dirección de Pedro Vásquez se habían creado las Juntas Patrióticas de
Liberación y el Ejército Popular de Liberación - EPL. Pero pocos años después la unidad
no consolidada desde su nacimiento se expresaría en una profunda división a su interior
con la aparición de tres sectores, que a la postre los llevaría a una segunda crisis entre los
años 1974 y 1975.
459 Proletarización, 347. 460 Este grupo estaba representado por Jaime Builes, Aumerle de la Vega y Carlos Arias. Como fracción se le conoció con el epíteto de "la aldea de los tres traidores", frase proveniente de la historia política del PCCh. 461 Grupos ML, Colombia: Neocolonial y Semifeudal (Bogotá: Edición 8 de junio, 1975), 50.
162 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
Cuando el Partido se fraccionó en Comité Central, Tendencia marxista leninista maoísta y
Línea Proletaria la discusión programática estaba así462: El Comité Central argumentaba
que el Programa no estaba en discusión, es decir, la revolución seguía siendo Patriótica,
Popular, Antimperialista, en marcha al Socialismo. La Tendencia marxista leninista
maoísta consideraba que en general el Programa era correcto. Sus divergencias estaban en
la aplicación de la línea y en la falta de actualización de la táctica. La Línea
Proletaria463argumentaba que era necesaria la restauración ideológica, política y orgánica
del Partido; Aunque consideraba que el Programa era correcto en general, veía la
necesidad de revisarlo en algunos aspectos para lo cual planteaba continuar la
investigación de la sociedad.
Nuevamente la militancia que quedó como PC de C (m-l) continúo su marcha, y se puede
decir que hasta antes de la muerte de Mao Tse-tung esta militancia resolvía los problemas
candentes de la revolución colombiana a la luz de la experiencia china, «con las citas y
fórmulas maoístas»464. Pero el acercamiento de China a Estados Unidos y su identificación
de interés contra los soviéticos en el Sudeste de Asía, que implicó la tesis de la llamada
“teoría de los tres mundos” y su desenvolvimiento en el sentido que el enemigo principal
del primer mundo era el “social imperialismo soviético”, más el apoyo de China a
Pinochet en Chile y a Geisel en Brasil, generó un distanciamiento entre el Partido
Comunista de China y los Partidos Comunistas marxista leninista de América Latina, entre
ellos al PC de C (m-l).
En 1978 el PC de C (m-l) firma una declaración conjunta con el Partido Comunista
Revolucionario de Chile, el Partido Comunista marxista-leninista del Ecuador y el Partido
Bandera Roja de Venezuela donde se distancia de la política tercermundista propiciada por
el Partido Comunista en China. La declaración decía:
«La teoría de "los tres mundos", sólo es posible comprenderla como un esfuerzo de la
dirección revisionista que se ha apoderado del poder en China, para aprovechar la
462 Aureliano S, “Borradores y Esbozos de Programas 1a. parte”, Contradicción Nº 10 (1992): 72-83 463 Surgida en el regional Carlos Alberto Morales, y de la cual la revista Contradicción de los años 90 y la Unión Obrera Comunista (mlm) se declaran públicamente sus herederos ideológicos y políticos. 464 Álvaro Villarraga, Nelson Plazas, Para reconstruir, 135.
4. El momento de la apropiación. 163
contradicción entre el imperialismo norteamericano y el social-imperialismo soviético,
buscar aliados en el mundo, y hacerse un espacio en un posible nuevo reparto del planeta
(...) La teoría de "los tres mundos", ha sido combatida firmemente por el Partido del
Trabajo de Albania, con el camarada Enver Hoxha a la cabeza. Está en total oposición a la
línea internacional formulada por el camarada Mao Tse-tung y los marxista-leninistas
chinos en su polémica pública contra el revisionismo soviético»465.
Para ese momento la política del PC de C (m-l) no cuestionaba los planteamientos dejados
por el mismo Mao, «pero la discusión empezó y el punto de arrancada fue precisamente, la
“teoría de los tres mundos” (...) El reconocido pro maoísta PC ML pasó a ser entonces
“línea Albania”»466. De 1978 hasta 1980 se desarrolló una profunda discusión ideológica
en el seno de la organización, un serio cuestionamiento a la historia vivida. Como
resultado, en el XI Congreso del Partido realizado en abril de 1980, se rompió con el
maoísmo y con su influencia que consideraron «nociva»467.
En dicho Congreso el PC de C (m-l) sintetizó las principales contradicciones surgidas con
el PCCh en torno a los siguientes planteamientos:
«El mantenimiento, por parte del PCCh, de relaciones con elementos renegados,
expulsados de nuestro Partido (...), la promoción, por parte de los dirigentes chinos, de
diversas organizaciones oportunistas y anticomunistas (...), la propaganda al servicio de las
organizaciones oportunistas (...), la utilización del Instituto Colombo-Chino como un
puente para el establecimiento de relaciones con las clases dominantes (...), la utilización
oportunista de los cursillos Políticos que, tras el ropaje de “ayuda internacionalista”,
sirvieron para impulsar sus opiniones, aún en contra del criterio de nuestro Partido (...), y
la posición inmodificable del PCCh de rechazo a las críticas justas»468.
Al final, después de hacer el análisis de la obra teórica y práctica de Mao Tse-tung y del
Partido chino y el trabajo del Partido en los 15 años transcurridos desde el X Congreso,
465 Archivo Chile, “Declaración de cuatro Partidos marxista-leninista de América Latina. septiembre 1978”, Archivo Chile // http://www.archivochile.com/pp/pcr/pcr00020.pdf (consultado el: 1, mayo, 2016). 466 Álvaro Villarraga, Nelson Plazas, Para reconstruir, 137. 467 Sobre la historia del EPL, http://www.pcdecml.org/index.php?option=com_content&view=article&id=97%3Anotas-de-comandancia-sobre-la-historia-del-epl&catid=57%3A2008&Itemid=135&limitstart=1(consultado el: 20, Junio, 2012). 468 PC de C-ML, Conclusiones XI Congreso, 204.
164 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
concluyeron: « [Reconocemos] autocríticamente la influencia ejercida por el llamado
“Pensamiento Mao Tse-tung” en nuestra teoría y en nuestra práctica»469. Señalan que esa
influencia, que había tenido sus expresiones concretas en formulaciones políticas de
estrategia y táctica, en la educación de los militantes y en el conjunto de la práctica
partidaria, «llegó a configurar una desviación maoísta en el Partido, contra la cual se
centró la lucha de todo el Partido a partir de la identificación del carácter revisionista del
“Pensamiento Mao Tse-tung”»470.
Conclusiones
A manera de conclusión podemos decir que las diferencias en el seno del PCC en torno al
rumbo del desarrollo revolucionario en el contexto nacional y de la posición asumida en el
contexto internacional, en medio de la disputa chino-soviética, no se lograron resolver con
sentido de unidad. Lo que eran dos maneras de pensar la solución de los problemas
nacionales, terminaron en dos posiciones antagónicas con mutuas descalificaciones por
reivindicar quien era la más revolucionaria.
Desde el lado oficial del PCC se emprendió una campaña de aislamiento y expulsiones a la
militancia que defendían más firmemente los principios marxistas leninistas apoyados a
nivel internacional en las ideas y la figura de Mao Tse-tung; el PCC optó por resolver la
lucha interna con medidas administrativas de expulsiones masivas, haciéndolas pasar por
problemas disciplinarios y no debates ideológicos y políticos. Por el otro lado, las
posiciones marxistas leninistas que empezaban a diferenciarse con la posición oficial del
Partido, la «facción maoísta» que se dio en el seno del PCC471, se dejó cautivar por la
política china que «alentaba a los miembros pro-chinos a que abandonaran los Partidos
Comunistas que querían seguir una línea pro soviética»472. El resultado final: la
469 PC de C-ML, Conclusiones XI Congreso, 207. 470 PC de C-ML, Conclusiones XI Congreso, 207. 471 La expresión es de un dirigente del PCC quien reconoce la configuración de una corriente política maoísta en el seno del Partido. Ver Álvaro Oviedo, “maoísmo y Trotskismo en Colombia”, Estudios marxistas Nº 13 (1977): 72. 472 Marisela Connelly, “La influencia del pensamiento de Mao en América Latina”, Estudios de Asia y África Vol. 18, Nº 2 (1983): 215.
4. El momento de la apropiación. 165
diferenciación de la izquierda comunista en Colombia y el surgimiento de un nuevo
discurso.
Cuando Gilberto Vieira sintetizó del pensamiento de Mao Tse-tung la forma de resolver
las diferencias en el seno de los Partidos en el sentido de que: «Todos los análisis, críticas
y debates del Partido acerca de sus problemas históricos deben considerar la unidad como
punto de partida y como meta final»473, había logrado un aprendizaje que
desafortunadamente no utilizaron.
En diciembre de 1965 el PC de C (m-l) decía: «No debemos tener ningún temor de
proclamarnos depositarios del pensamiento marxista - leninista, del pensamiento del
camarada Mao Tse-tung. Debemos convertirnos en modestos discípulos de este gran
pensador marxista de nuestra época»474. Meses después, «el III pleno ordenó editar,
distribuir y estudiar las obras del camarada Mao y de los demás clásicos del marxismo»475,
dos años después, para 1967, ya se registraban las diez primeras ediciones de la serie El
pensamiento marxista leninista, que contenían «ocho obras del camarada Mao y dos del
camarada Lenin»476. Así empezaba una nueva etapa de la “Recepción” de la Revolución
de Nueva Democracia.
473 Vieira, 15. 474 PC de C-ML, “Resolución política”, 84. 475 Partido Comunista de Colombia M-L (PC de C-ML), “Resolución comité ejecutivo”, Documentos Vol. 2 (Medellín: Editorial 8 de Junio, 1975), 316. 476 PC de C-ML, “Resolución comité”, 307.
5. Conclusión final Maoísmo y anti maoísmo dos aportes del PCC
¿Qué puede determinar el proceso de formación de otra línea política en el seno de un
Partido Comunista? Esta pregunta incita a pensar en la principal implicación de la
“Recepción” del modelo de la Revolución de Nueva Democracia propiciada por el PCC: la
conformación del discurso maoísta en el seno de Partido Comunista de Colombia.
Si se parte de 1949 cuando se exaltaba la revolución china hasta 1963 cuando se
agudizaron las contradicciones al interior del PCC, y se dan las expulsiones masivas de
militantes de todos los niveles, e incluso de las organizaciones generadas como la Juventud
Comunista-JUCO, se está hablando de 14 años de lucha política e ideológica que, yendo a
la par del proceso de “Recepción” determinó que los resultados en el terreno teórico y
práctico para nada estuvieran previstos.
Durante esos 14 años de “Recepción” el Partido Comunista de Colombia hizo su mejor
esfuerzo por dotar a su militancia de los materiales impresos necesarios donde podría
consultar y asimilar las lecciones de la Revolución de Nueva Democracia. Ese proceso de
“Recepción” se logró, en gran medida, porque los intelectuales del Partido Comunista de
Colombia tradujeron los primeros escritos de Mao Tse-tung del inglés, francés y ruso,
ratificando dos aspectos significativos para el comunismo: la importancia de la prensa
como organizador colectivo, como el andamio que sirve para edificar el Partido, y el papel
de los intelectuales orgánicos, los cuadros revolucionarios capaces de asumir las más
ingentes tareas.
168 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
De 1949 a 1963 el Partido Comunista tuvo que sortear una vida política nacional muy
compleja: la primera477 y segunda guerra478 en el marco del periodo de la Violencia entre
1949 a 1953 y 1954 a 1956 respectivamente; la ilegalización del Partido479 y como
consecuencia la persecución a su militancia; el gobierno militar de Rojas Pinilla; la
exclusión política del Frente Nacional; y la lucha anticomunista en el terreno internacional
con sus voceros nacionales representados en el Partido Conservador y las fuerzas fascistas.
Todo esto que dificultaba la “Recepción”, en medio de una difícil situación económica
para el Partido, era a su vez una oportunidad por dicha apuesta, pues los elementos que
hacia parte del contexto partidario: ilegalización, exiguo trabajo clandestino en las
ciudades, guerra desatada en las zonas de influencia campesina y debate en torno a la
autodefensa, se convirtió en un caldo de cultivo para que las ideas y experiencias del
modelo revolucionario chino tuviera asidero, y por ende, motivos para su circulación.
Ante los problemas que enfrentaba la militancia del PCC la experiencia china parecía dar
nuevas respuestas. El triunfo del PCCh fue entendido como el triunfo del marxismo
leninismo aplicado a las condiciones concretas de China. La victoria de una revolución
agraria, una revolución democrática, antiimperialista era motivo de júbilo para todo
comunista que se desenvolvía en medio de la Guerra Fría, pues fortalecía el campo
socialista. Ese júbilo lo sintieron todos los militantes comunistas, de allí que todos
simpatizaran con la revolución china en Colombia, incluso el mismo Gilberto Viera «era
un simpatizante del maoísmo»480.
La luz de esta investigación preocupada por la conformación de nuevos discursos en el
seno de la izquierda, ilumina un pasado donde la militancia del PCC tuvo la oportunidad
de conocer el modelo de Revolución de Nueva Democracia en contexto, la campesina del
477 La primera guerra también conocida como el primer periodo de autodefensa y lucha guerrillera. La periodización es ofrecida por Eduardo Pizarro Leongómez, “Los orígenes del movimiento armado comunista en Colombia (1949- 1966)”, Análisis Político N° 7(1989). 478 El concepto de primera y segunda guerra en el marco del periodo de la Violencia es tomado de Guzmán Campos, Germán, Orlando Fals, Borda y Eduardo Umaña Luna, La violencia en Colombia. Estudio de un proceso social, Monografías sociológicas No. 12, Bogotá, Facultad de Sociología, Universidad Nacional, coedición con Ediciones Tercer Mundo, 1962. 479Según Acto Legislativo 6 de 1954 expedido un 14 de septiembre. 480 Álvaro Delgado, 171.
5. Conclusiones. 169
Sur del Tolima la de implementarlo en uno nuevo, y en general toda la militancia la de
interpelarlo (apropiación y rechazo) desde su propia experiencia. La “Recepción” permitió
fortalecer las posiciones marxistas-leninistas apoyadas en el pensamiento de Mao Tse-tung
como referente internacional, gestándose así una corriente de pensamiento al interior del
Partido que ofrecía nuevas soluciones a los problemas nacionales de la revolución. Con el
devenir de la lucha interna en el PCC, y con el hecho de que las divergencias Chino-
Soviéticas pasaran del debate a la ruptura, la corriente de pensamiento se fue
constituyendo en línea política. Es decir, la “Recepción” del modelo revolucionario chino
viabilizó la conformación del discurso maoísta en el seno de PCC, y no su penetración. Era
la conformación de un nuevo discurso.
La posición oficial del PCC asumida a favor del ala soviética en medio del cisma
comunista significó la expulsión de las “tesis maoístas” en el seno del Partido Comunista
de Colombia. Fue así que la “Recepción” permitió la diferenciación de la izquierda
comunista y la conformación de un nuevo discurso político en donde todos los grupos
maoístas del llamado “campo M-L” en Colombia sitúan su génesis. Como todo resultado
emergente, este fue inesperado.
¿Cómo explicar este proceso? Álvaro Oviedo, dirigente del PCC, explicaba que el PC de C
(m-l) «surgió directamente de la labor fraccional propiciada por los maoístas en los años
sesenta en el seno del Partido Comunista de Colombia»481; por su parte, Álvaro Mosquera,
también del PCC, lo planteó como el reflejo en Colombia de la «ruptura de los dirigentes
chinos con el marxismo–leninismo y su expresión práctica: el movimiento comunista
internacional»482.
Desde la orilla maoísta el grupo “Proletarización” planteó que «en el seno del Partido
Comunista se venía gestando una tendencia revolucionaria que conformó el Partido
Comunista (M-L)»483, y explicó la situación así:
481 Álvaro Oviedo, El maoísmo hoy (Bogotá: Editorial Colombia Nueva Ltda., 1981), 74. 482 Álvaro Mosquera, marxismo y maoísmo. Problemas de la lucha ideológica (Bogotá: Ediciones Suramérica, 1977), 74. 483 Proletarización, 166.
170 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
«En el seno del Partido Comunista se venía desarrollando una lucha interna entre las
posiciones revolucionarias y la línea revisionista. Esta lucha fue agudizada y estimulada
por la polémica mundial entre las fuerzas marxistas y las revisionistas, particularmente la
efectuada entre el Partido Comunista Chino en defensa del marxismo y el Partido
Comunista de la Unión Soviética en favor del revisionismo (...) las causas externas
tuvieron un mayor peso que las internas, aunque estás fueron la base»484.
En ese sentido la explicación de Proletarización rompe con la ortodoxa marxista dándole
más peso a las condiciones externas, pues desde la explicación del cambio para la
dialéctica materialista, «las causas externas son las circunstancias de los cambios y las
causas internas la base de los cambios; las causas exteriores obran por conducto de las
causas internas»485, es decir, las contradicciones internas desempeñan el papel decisivo.
Por su parte el investigador Frank Molano explica que: «El maoísmo fue el resultado de la
formación de una sensibilidad colectiva revolucionaria que se configura desde los años 50
como una doble oposición: por una parte frente al sistema político y al modelo económico
(...) y por otra parte como ruptura frente a la tradición política de los grupos de la izquierda
secular, especialmente del Partido Comunista»486. En dicha formación resalta, de varios
factores externos e internos, que la ruptura chino-soviética «no fue solo un reflejo
mecanicista de lo externo en lo interno, sino una manera en que se enfrentaron de forma
dramática, dos maneras de pensar la solución de los problemas nacionales, en el seno del
Partido Comunista desde fines de los años 50 y que culminaría con una gran ruptura a
mediados de los años 60»487. En dicha explicación no aclara como se dio esa “fusión” y esa
“asimilación”.
Esta investigación aporta en ese sentido al demostrar que la “Recepción” permitió conocer
y apropiar la experiencia china implicando más libertad para la militancia y por ende más
complejidad en las nuevas discusiones surgidas del conocimiento allí incorporado, que
cada militante lo iba sintetizando y resignificando desde su propia experiencia y, claro
484 Proletarización, 232. 485 Mao, La Nueva Democracia China, 209. 486 Frank Molano Camargo, 22. 487 Frank Molano Camargo, 22.
5. Conclusiones. 171
está, desde la cultura política de la izquierda. También se dieron lecturas dogmáticas, e
incluso otras para quienes la experiencia de la revolución china pasó desapercibida.
En síntesis, la “Recepción” se estableció como el instrumento a través del cual la
condición externa: la experiencia china de una revolución triunfante y la misma ruptura
chino-soviética, se constituyó en una condición interna y determinante a la hora de definir
la vía de la revolución en Colombia. Esto debido a la clara intención política del PCC de
estudiar y asimilar las lecciones del Partido Comunista Chino.
El ejercicio consiente del PCC de usar la experiencia china para poner en debate el
carácter de la sociedad colombiana, y el carácter de la revolución, además de la
construcción del partido, todo esto a partir de la escogencia de los títulos, artículos, las
crónicas de prensa y en términos generales la labor de propaganda, determinó que el
debate de la vía de la revolución en Colombia, en el seno del PCC, ya no era el mismo una
vez iniciada la “Recepción” de la Revolución de Nueva Democracia China.
Así pues, el nuevo discurso que surgió de la “Recepción” no fue un mero proceso de
trasmisión y adopción desde fuera, tampoco de simple influencia, ni mucho menos traslado
mecánico de lo dicho por los chinos, sino la emergencia fruto de la sensibilidad que tenía
la militancia marxista-leninista en el seno del Partido Comunista ante las condiciones
presentes de un momento histórico de conmoción nacional e internacional -el quiebre del
siglo-, gracias a lo cual, se mantuvieron continuidades, y sobre todo se introdujeron
rupturas y quiebres en la línea del tiempo del Partido. La diferenciación que se dio y el
discurso que surgió a partir de la “Recepción” era uno de los futuros posibles o probables.
Surgido el nuevo discurso, empieza una disputa por llenar de significado los conceptos de
“marxismo-leninismo” y “maoísmo”. Para los militantes que conformaron el Partido
Comunista de Colombia - marxista leninista (PC de C-ML), el concepto maoísmo no era
de uso cotidiano, ellos se identificaban como marxistas-leninistas. Veían en Mao al «más
grande estrategia y genial guía de nuestro tiempo»488, y su obra “La Nueva Democracia”
488 Partido Comunista de Colombia M-L (PC de C-ML), “Orientación # 2”, Documentos Vol. 2 (Medellín: Editorial 8 de Junio, 1975) 24.
172 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
como el «enriquecimiento del marxismo-leninismo»489, es más, eran conscientes y
reconocían el “pensamiento Mao Tse-tung”, también llamado por ellos el pensamiento del
camarada Mao, «defendiéndolo como el marxismo-leninismo de nuestra época»490, pero
pese a todo eso, nunca se definieron maoístas. Marginalmente utilizaron la expresión
«marxismo-leninismo-maoísmo»491cuando estaban discutiendo con la militancia expulsada
en medio de la división de 1968.
A la par de esto, surgía el “maoísmo” como categoría de análisis desde la academia en
Estados Unidos y como término despectivo, sinónimo de anti marxismo, desde el debate
ideológico en medio del conflicto chino-soviético. Alineado con el PCUS y a partir de los
cuatro artículos de Álvaro Mosquera, entre noviembre de 1963 y marzo de 1964 bajo el
título “Las discrepancias con los dirigentes chinos”, el PCC iniciaba la tarea de llenar de
nuevo contenido el concepto “maoísmo”.
Las publicaciones alusivas a las diferencias con los dirigentes chinos continuaron y
aumentaron. Salieron artículos explicando las divergencias el Movimiento Comunista
Internacional492, otros que intentaban buscar explicaciones al “caso chino”, denunciando la
primera prueba nuclear de China, el reclamo de territorios conquistados por antiguos
emperadores chinos, los conflictos fronterizos de China, las críticas de la Unión Soviética
a la dirigencia China, el inicio de la lucha contra Liu Shao-chi por parte de los Guardias
Rojos, entre otros artículos. En ese devenir se lee por primera vez, el 15 de diciembre de
1966, el término maoísta cuando se reproduce una crítica de los comunistas soviéticos a la
«política maoísta»493 de la Revolución Cultural494.
489 PC de C-ML, “Orientación # 6”, 294. 490 Partido Comunista de Colombia M-L (PC de C-ML), “Orientación # 3”, Documentos Vol. 2 (Medellín: Editorial 8 de Junio, 1975) 76. 491 PC de C-ML, “Orientación # 6”, 277. 492 José Cardona H, “Las divergencias en el movimiento comunista internacional”, Documentos Políticos N° 57 (1966) 493 Partido Comunista de Colombia - PCC, “Los comunistas soviéticos critican nuevos errores de los dirigentes de la China”, Voz Proletaria, Bogotá, 15 de diciembre, 1966: 9. 494 Lo cual sería muy tardío en comparación con otros Partidos de América Latina. Por ejemplo «el Partido Comunista de Argentina - PCA, en 1963 publica La posición de los marxistas leninistas frente a los cismáticos trostkizantes del P. C. Chino, un folleto de unas sesenta páginas que reproduce el informe contra el maoísmo, redactado por el líder del comunismo argentino Victorio Codovilla. El texto es significativo
5. Conclusiones. 173
Desde la propia producción del Partido Comunista, Álvaro Mosquera escribió un
interesante artículo cuatro años después de que publicara “Las discrepancias con los
dirigentes chinos”, donde concentra los principales temas de debate con los líderes
orientales495 y se adentra en una explicación de la Revolución Cultural «como una cortina
de humo para escudar la lucha de los bandos por el control del poder supremo»496. Uno de
esos bandos, dice Mosquera, es el grupo Mao Tse-tungista. Esta singular forma de llamar
al grupo de Mao recuerda lo dicho por críticos del maoísmo al decir que la expresión
«ideas maotsetunianas» apareció en el IX congreso del PCCh para mostrar a Mao «como
un interpretador original, como un continuador que ha desarrollado las tradiciones
marxistas»497. A su vez, Mosquera brinda la antesala para que el PCC iniciara la
utilización, en marzo de 1967, del término “maoísta” en forma despectiva.
Hasta 1963 los significantes «Revolución China» y «Mao Tse-tung» iban construyendo el
significado de revolución, comunismo en el Tercer Mundo, Nueva Democracia, incluso,
ejemplo a seguir. Es importante recordar que para el PCC el proceso revolucionario chino
era entendido como el triunfo del marxismo-leninismo. Pero después de 1963 con el
rompimiento de lazos entre China y la Unión Soviética, ambos lados trataron de utilizar las
redes del Movimiento Comunista Internacional para ganar adherentes y en la prensa del
Partido Comunista no solo disminuyó drásticamente la publicaciones chinas, sino que los
significantes se llenaron de otros contenidos, ahora, hablar de «Revolución China» y «Mao
Tse-tung» traía implícito el significado de ruptura, izquierdismo, sectarismo, chovinismo,
porque, además de usar —seguramente por primera vez en el espacio local— la expresión “maoísmo”, bosqueja una caracterización del “enemigo maoísta” que perdura en las décadas siguientes». Ver Adrián Celentano, “El maoísmo argentino entre 1963-1976. Libros, revistas y periódicos para una práctica política”, Políticas de la memoria Nº 14 (2013): 152. En el caso del Partido Comunista de Chile los primeros pronunciamientos contra el maoísmo lo hizo Luis Corvalán, miembro del Comité Central, el 6 de junio de 1963. Ver Luis Corvalán, “Diferencias de opinión con los camaradas chino”, Principios (septiembre-octubre de 1963). Citado por Humberto Garza Elizondo, China y el Tercer Mundo (México: Colegio de México, 1975) 196. 495 Los debates son: La guerra y la paz; Las relaciones entre esta y el socialismo; Entre la democracia y la conquista del poder por la clase obrera; El carácter de nuestra época y su contradicción fundamental; Las vías de la revolución; El culto a la personalidad; La edificación socialista; La concepción del Estado y del Partido; Dogmatismo y revisionismo. 496Álvaro Mosquera, “Más bien ‘Revolución’ de la ignorancia”, Voz Proletaria, Bogotá, 16 de febrero, 1967. 497 M. Altaiski y V. Gueórguiev, Crítica de las concepciones filosóficas de Mao Tse-tung (Moscú: Editorial Progreso, s.f.), 27.
174 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
hegemonismo, anticomunismo y antisovietismo. El resultado fue el concepto de
“maoísmo” como resumen de todo lo anterior, de tal forma que antes de que un grupo o
Partido que se reivindicara como maoísta498 hubiera generado las condiciones para el uso
de este concepto, el Partido Comunista de Colombia lo había desacreditado convirtiéndolo
en sinónimo de antimarxismo.
Esto nos permite plantear que el Partido Comunista de Colombia no solo protagonizó el
proceso de formación del discurso maoísta desde su interior, sino que al haberlo
expulsado, y asumido por la militancia del PC de C-ML como marxismo-leninismo,
también fue responsable del proceso de formación del discurso anti-maoísta. Es decir,
antes que el maoísmo se fortaleciera, se fortaleció primero el anti-maoísmo en Colombia.
498 Si bien el PC de C-ML desde su constitución se asume en el campo pro-chino, nunca se denominó maoísta, solo llegaron a considerarse marxistas-leninistas, pensamiento de Mao Tse-tung hasta 1980, cuando en el XI congreso abandonaron a Mao. Fue solo hasta 1973 cuando del seno del PC de C-ML surgió una facción que empezó a revindicar el maoísmo y se llamó la tendencia marxista leninista maoísta. Por otros lado, según Proletarización (página 340), en 1968 se dio un movimiento estudiantil en la Universidad Nacional de Bogotá que se caracterizó por el ser el primero en su género dirigido por fuerzas que se planteaban como marxista-leninista-maoísta, entre las que participaron organizaciones como Testimonio, Mural de Pueblo, el Frente de Estudios Sociales.
6. Anexo 1 (La biblioteca ideal)
AÑO TITULO EDICION AUTOR NOTA
1948 Fundamentos de la revolución China
Ediciones Vanguardia Mao Tse-tung
Este texto aparece en las obras de Mao con el título La situación actual y nuestras tareas, el 25 de diciembre de 1947
1951 El partido de la revolución china
Gráficas Centauros Liu Shao-chi
El texto es traducido del inglés por Anteo Quimbaya. La Obra originaria se llama "Sobre el partido".
1952 La naturaleza de la revolución china
Gráficas Centauros Mao Tse-tung
Traducido del inglés por Gilberto Viera en marzo de 1952. El título, La naturaleza de la revolución china no es original del trabajo de Mao. De igual forma, el texto solo es la parte quinta - El carácter de la revolución china- del capítulo dos del trabajo completo de Mao titulado La revolución china y el partido comunista de china.
1952
La doctrina de Mao Tse-tung sobre la aplicación del marxismo leninismo a la revolución china
Gráficas Centauros Chen Po-ta
Artículo del libro La Nueva Democracia (1952) traducido por Anteo Quimbaya del Ruso en agosto de 1952
1952 Sobre la nueva democracia
Gráficas Centauros Mao Tse-tung
Artículo del libro La Nueva Democracia (1952), traducido del francés por Gilberto Viera en septiembre de 1952.
176 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
1952 A propósito de la contradicción
Gráficas Centauros Mao Tse-tung
Artículo del libro La Nueva Democracia (1952), traducido del francés por Francisco Mujica, en 1952. El original fue tomado del órgano central del Comité Central del partido Comunista de Francia
1952
La Constitución Provisional de la República Popular de China
Gráficas Centauros China Artículo del libro La Nueva
Democracia (1952)
1952 La situación presente y nuestras tareas
Gráficas Centauros Mao Tse-tung Artículo del libro La Nueva
Democracia (1952)
1952 La dictadura de la democracia popular
Gráficas Centauros Mao Tse-tung Artículo del libro La Nueva
Democracia (1952)
1952 A propósito de la práctica
Gráficas Centauros Mao Tse-tung Artículo del libro La Nueva
Democracia (1952)
1957 El sectarismo de puesta cerrada y el aventurerismo
Documentos políticos
Liu Shao-chi Revista Documentos Políticos
1957 Carta al comité central
Documentos políticos
Liu Shao-chi Revista Documentos Políticos
1957
Respuesta al camarada B. M. Rivero sobre el dogmatismo
Documentos políticos
Liu Shao-chi Revista Documentos Políticos
1957 La experiencia del frente único de china (1)
Documentos políticos A.I Mikoyan
Revista Documentos Políticos
1957 La experiencia del frente único de china (2)
Documentos políticos A.I Mikoyan
Revista Documentos Políticos
1957
Sobre el problema de las justas soluciones de las contradicciones que existen del pueblo
Documentos políticos Mao Tse-tung
Revista Documentos Políticos
1958 Sobre las clases de la sociedad china
Documentos políticos Mao Tse-tung Revista Documentos Políticos
1958 Sobre las clases de la sociedad china
Documentos políticos Mao Tse-tung Revista Documentos Políticos
6. Anexo 1 (La biblioteca ideal) 177
1958 La revolución China y el partido comunista de china
Ediciones Suramerica Mao Tse-tung Artículo del libro La Nueva
Democracia (1958)
1958 Sobre la nueva democracia
Ediciones Suramerica Mao Tse-tung Artículo del libro La Nueva
Democracia (1958)
1958 Una moral militante
Ediciones Suramerica Liu Shao-chi Libro que pertenece a la
colección fundamentos
1958 La nueva democracia
Documentos políticos C. Correa Reseña publicada en la revista
Documentos políticos
1959 Nuestra experiencias
Documentos políticos Liu Shao-chi
1959 Nuestro estudio y la Situación Actual
Ediciones Paz y Socialismo
Mao Tse-tung
1959
Resolución acerca de algunos problemas de la historia del Partido Comunista de China
Ediciones Paz y Socialismo
Mao Tse-tung
1959 Cómo ser un buen comunista Liu Shao-chi Manual de educación del
Partido Comunista # 5
1960 Primero de enero de 1959. Cuba
Documentos políticos Liu Shao-chi Revista Documentos Políticos
1960
Lecciones de la lucha revolucionaria en China
Documentos políticos A Pineda Reseña publicada en la revista
Documentos políticos
1960 Diez años que cambiaron a china
Documentos políticos A Pineda Reseña publicada en la revista
Documentos políticos
1960
Algunas enseñanzas del partido comunista de China
Documentos políticos A Pineda Reseña publicada en la revista
Documentos políticos
1960 Algunas enseñanzas del partido comunista
Ediciones Paz y Socialismo
Mao Tse-tung
178 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
de China
1960
Lecciones de la lucha revolucionaria en China
Ediciones Paz y Socialismo
Mao Tse-tung
1960 Sobre arte y la literatura
Ediciones Paz y Socialismo
Mao Tse-tung
1960
El triunfo del marxismo-leninismo en China
Ediciones Paz y Socialismo
Liu Shao-chi
Artículo del libro El gran salto adelante. Diez estudios sobre la república Popular China (1960). Escrito para la revista Problemas de la paz y del socialismo, en celebración del décimo aniversario de la fundación de la República Popular China, 14 de septiembre de 1959.
1960 El gran decenio Ediciones Paz y Socialismo
Chou En-lai Artículo del libro El gran salto adelante. Diez estudios sobre la república Popular China (1960).
1960
Mantener en alto la bandera roja de la línea general del partido y las ideas militares de Mao Tse-tung, avanzar a pasos agigantados
Ediciones Paz y Socialismo
Lin Piao Artículo del libro El gran salto adelante. Diez estudios sobre la república Popular China (1960).
1960 La gran unidad del pueblo chino
Ediciones Paz y Socialismo
Ding Siao-ping Artículo del libro El gran salto adelante. Diez estudios sobre la república Popular China (1960).
1960
Un decenio de lucha por la causa de la paz en el mundo y el progreso de la humanidad
Ediciones Paz y Socialismo
Chen Yi Artículo del libro El gran salto adelante. Diez estudios sobre la república Popular China (1960).
1960
Sobre el gran salto adelante en la construcción socialista de China
Ediciones Paz y Socialismo
Li Fun-chun Artículo del libro El gran salto adelante. Diez estudios sobre la república Popular China (1960).
1960 Las comunas populares son el resultado
Ediciones Paz y Socialismo
Li Ching-chuan Artículo del libro El gran salto adelante. Diez estudios sobre la
6. Anexo 1 (La biblioteca ideal) 179
inevitable del desarrollo social en China
República Popular China (1960).
1960
Un comunista debe ser un marxista leninista, no un compañero de viaje del partido
Ediciones Paz y Socialismo
Kang Sheng
Artículo del libro El gran salto adelante. Diez estudios sobre la república Popular China (1960).
1960
La significación internacional de la victoria del pueblo chino
Ediciones Paz y Socialismo
Wang Chia-siang
Artículo del libro El gran salto adelante. Diez estudios sobre la república Popular China (1960).
1960
El Partido Comunista de China, máximo dirigente del pueblo chino en la construcción del socialismo
Ediciones Paz y Socialismo
Liu Tan-tao
Artículo del libro El gran salto adelante. Diez estudios sobre la República Popular China (1960).
1960 Cómo ser un buen comunista
Ediciones Paz y Socialismo
Liu Shao-chi
1960 las luchas internas en el partido
Ediciones Paz y Socialismo
Liu Shao-chi
1960 Sobre arte y la literatura
Ediciones Paz y Socialismo
Mao Tse-tung
1963 El dogmatismo de los camaradas chinos Gustavo Castro Revista Documentos Políticos
1963
La actitud del Partido Comunista de China y la unidad del movimiento comunista
Documentos políticos Gilberto Vieira Revista Documentos Políticos
1963 Las discrepancias con los dirigentes chinos (I)
Voz Proletaria
Álvaro Mosquera
El articulo sale en el número inaugurar de Voz Proletaria en forma de suplemento llamado Ideología
1965 Mao Tse-Tung en la revolución China
Ediciones Vanguardia Chen Po-ta Traducido del inglés por
Guillermo Cazares L
7. Bibliografía
Archivo Prensa del Partido Comunista de Colombia
A Pineda. «Lecciones de la lucha revolucionaria en China.» Documentos Políticos 19
(1960).
Buenaventura, Nicolás. ¿Qué pasó camarada? Bogotá: Ediciones Apertura, 1992.
—. «Memoria de Anteo Quimbay.» Documentos Políticos 86 (1970).
Cardona H, José. «Las divergencias en el movimiento comunista internacional.»
Documentos Políticos N° 57 (1966).
Castro, Gustavo. «El dogmatismo de los camaradas Chinos.» Documentos Políticos Nº
34/35 (1963).
Chen, Po-ta. «La Doctrina de Mao Tse-tung sobre la aplicación del marxismo-leninismo a
la revolución China.» PCC. La Nueva Democracia China. Bogotá: Graficas
Centauros, 1952. 58-59.
Chia-hsiang, Wang. «La significación internacional de la victoria del pueblo chino.» PCC.
En El gran salto adelante. Diez estudios sobre la República Popular China, eds.
Partido Comunista de Colombia. Bogotá: Paz y Socialismo, 1960.
Correa, Carlos. «La nueva democracia.» Documentos Políticos 11 (1958).
Liu, Shao-chi. El Partido de la Revolución China. Bogotá: Gráficas Centauros, 1951.
182 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
—. «El sectarismo de puesta cerrada y el aventurerismo.» Documentos Políticos 4 (1957).
—. «El Triunfo del marxismo leninismo en China.» PCC. El gran salto adelante. Diez
estudios sobre la República Popular China. Bogotá: Paz y socialismo, 1960.
—. «Nuestras experiencias.» Documentos Políticos 14 (1959).
—. «Primero de enero de 1959. Cuba.» Documentos Políticos 17 (1960).
—. «Respuesta al camarada B. M. Rivero sobre el dogmatismo.» Documentos Políticos 5
(1957).
Deng, Siao-ping. «La gran unidad del pueblo chino y la gran unidad de los pueblos del
mundo.» PCC. El gran salto adelante. Diez estudios sobre la República Popular
China. Bogotá: Paz y socialismo, 1960.
Liu, Shao Chi, Chou En Lai y Otros. El gran salto adelante. Diez estudios sobre la
república Popular China. Bogotá: Ediciones Suramérica, 1960.
Mikoyan, A.I. «La experiencia del frente único de china (1).» Documentos Políticos 5
(1957).
—. «La experiencia del frente único de china (2).» Documentos Políticos 6 (1957).
Mosquera, Álvaro. «Las discrepancias con los dirigentes chinos.» Voz Proletaria 21 de
noviembre de 1963.
Mosquera, Álvaro. Marxismo y maoísmo. Problemas de la lucha ideológica. Segunda
Edición. Bogotá: Ediciones Suramérica, 1977.
—. «Más bien ‘Revolución’ de la ignorancia.» Voz Proletaria (1967).
Oviedo, Álvaro. El maoísmo hoy. Bogotá: Editorial Colombia Nueva Ltda, 1981.
—. «Maoísmo y Trotskismo en Colombia.» Estudios marxistas Nº 13 (1977).
Bibliografía 183
Partido Comunista Colombia - PCC. «Constituida Sociedad de Amigos de China.» Voz de
la democracia 5 de septiembre de 1959.
—.«Declaración del Partido comunista. “Contra la farsa del ꞌꞌCongresoꞌꞌ anticomunistas”.»
Documentos Políticos N° 55 (1965).
Pineda, A. «Algunas enseñanzas del partido comunista de China.» Documentos Políticos
18 (1960).
—. «Diez años que cambiaron a china.» Documentos Políticos 18 (1960).
Tierra. «El imperialismo Japonés y la Revolución China.» Tierra marzo de 1938.
Mao, Tse-tung. Lecciones de la lucha revolucionaria en China. Bogotá: Ediciones Paz y
Socialismo, 1960.
—.Declaración en apoyo de la resistencia del pueblo dominicano contra la agresión
armada de los EE.UU, Pueblos de todos los países, unidos para derrotar a los
agresores norteamericanos y a todos sus lacayos. Pekín: Ediciones en lenguas
extranjeras, 1966.
—. Fundamentos de la revolución China. Bogotá: Editorial Cultura Ltda, 1948.
—. Importantes charlas del presidente Mao Tse-tung con personalidades de Asia, África y
América Latina. Pekin: Ediciones Lengua Extranjera, 1960.
—. La nueva democracia. Bogotá: Ediciones Suramérica, 1958.
—. La Nueva Democracia China. Bogotá: Centauros, 1952.
—. Naturaleza de la revolución china. Bogotá: Gráficas Centauros, 1952.
—. Obras escogidas Tomo 1. Pekín, 1968: Ediciones en Lenguas Extranjeras, 1968.
—. Problemas de la Historia del Partido Comunista de China. Bogotá: Ediciones Paz y
Socialismo, 1959.
184 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
—. «Sobre el problema de las justas soluciones de las contradicciones que existen del
pueblo.» Documentos Políticos 7 (1957).
—. «Sobre las clases de la sociedad china.» Documentos Políticos 12 (1958).
Vásquez, Álvaro. «Contra el dogmatismo y el revisionismo.» Documentos Políticos 15
(1959).
Vieira, Gilberto. «Algunos aspectos de la crisis política nacional.» Documentos Políticos
N° 32 (1963): 12-13.
—.«Acerca de algunas divergencias en el movimiento comunista internacional.»
Documentos Políticos N° 30 (1963).
—. «Algunas bases para el estudio de las experiencias de nuestro partido.» Documentos
Políticos 15 (1959).
—. «Algunas bases para el estudio de las experiencias de nuestro Partido.» Documentos
Políticos N° 15 (1959).
—. Informe al XVI pleno del Comité Central. Bogotá, 1953.
—. «La actitud del Partido Comunista de China y la unidad del movimiento comunista.»
Documentos Políticos N° 33 (1963).
Vieira, Gilberto y Filiberto Barrero. La situación política nacional y la táctica del Partido
Comunista. Bogotá: Editorial Colombia Nueva, 1963.
Archivo del Partido Comunista de Colombia
Barrero, Filiberto. «Resolución sobre las divergencias en el movimiento comunista y
obrero mundial.» Viera, Gilberto y Filiberto Barrero. La situación política nacional
y la táctica del Partido Comunista. Bogotá: Ediciones Colombia Nueva, 1963.
Bibliografía 185
Partido Comunista de Colombia. «Hay que controlar la actividad de los grupos anti-
Partido.» Tareas, N° 34 (1964).
—.«Allanada la Editorial ‘Centauro’ Detenido el c. Filiberto Barrero.» La Verdad 31 de
enero de 1953: 1-4.
—.« “Para conocimiento del Partido”.» Tareas, N° 26 (1963).
—. « ¡Atención! A todo el Partido.» Tareas, N° 23 (1964).
—. «Atención agentes de la literatura del Partido.» Tareas, N° 25 (1963).
—. Conclusiones políticas del 29. La situación política nacional y la táctica del Partido
Comunista. Bogotá: Ediciones Colombia Nueva, 1963.
—. «Conclusiones políticas del XIII pleno.» enero de 1950.
—. «Cursillo sobre las divergencias.» Tareas, N° 39 (1963).
—. Documentos del décimo congreso del Partido Comunista. Bogotá: Secretaria Nacional
de Agitación y Propaganda PCC, 1966.
—. «El pleno rechaza la absurda política del grupo de Mao Tse-tung» Voz Proletaria 2 de
marzo de 1967.
—. «Expulsado del Partido Carlos Arias.» Tareas, N° 34 (1964).
—. «Hay que librar una seria batalla contra el fraccionalismo y los divisionistas.» Tareas,
N° 31 1964.
—. «Informe del Secretario General al XVI Pleno del Comité Central.» Agosto de 1953.
—. «La Radio Nacional sirve de antena a la agencia de calumnias ‘La Voz de América’.»
La Verdad 14 de febrero de 1953: 1-3.
—. «La situación actual y nuestras tareas.» Informe del Secretario General al XVI Pleno
del Comité Central. 1953.
186 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
—. «La unidad del Partido y el fraccionalismo.» Tareas, N° 33 (1964).
—. «Las divergencias, pretextos de los divisionistas, Bogotá.» Voz Proletaria 17 de
septiembre de 1964.
—. «Las mentiras de la “Voz de los EE. UU. De América” y los caudillos de “Diario de
Colombia”.» 1953. Hoja volante.
—. «Manifiesto de Unidad de la juventud con el Partido Comunista de Colombia.» Tareas, N° 33 (1964).
—. «Quedan algunos ejemplares de la revista Documentos del Partido.» Tareas, N° 25
(1963).
—. Resolución sobre las divergencias en el movimiento comunista y obrero mundial. La
situación política nacional y la táctica del Partido Comunista. Bogotá: Ediciones
Colombia Nueva, 1963.
—. «Resolución sobre el Comité Regional del Magdalena.» Tareas, N° 34 (1964).
—.«Resolución del VI Congreso del Partido Comunista de Colombia.» 1949
—. «Resolución política XIX Pleno del Comité Central.» 1956.
—. «Resolución política del XIV pleno.» Marzo de 1951.
—. Treinta años de lucha del Partido Comunista de Colombia. Bogotá: Ediciones Paz y
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—. Treinta años de lucha del Partido Comunista de Colombia. Segunda Edición.
Medellín: la Pulga, SF.
Viera, Gilberto y Filiberto Barrero. La situación política nacional y la táctica del Partido
Comunista. Bogotá: Editorial Colombia Nueva, 1963.
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enero de 1965. 14 de septiembre de 2015. <http://cedema.org/ver.php?id=3681>.
Partido Comunista de Colombia- PC de C-ML. «Anotaciones sobre la historia del Partido
Comunista de Colombia (marxista-leninista).» Revolución, N° 506 (2015).
—. «Conclusiones XI Congreso.» Colombia, 1980.
—. Documentos Vol.2. Vol. 2. Medellín: Editorial 8 de Junio Ltda, 1975.
—.Resolución política Documentos Vol. 1. Medellín: Editorial 8 de Junio, 1975.
—.«Orientación # 1.» Documentos Vol. 1. Medellín: Editorial 8 de Junio, 1975.
—. «Orientación # 6.» Documentos Vol. 2. Medellín: Editorial 8 de Junio, 1975
—. Resolución comité ejecutivo. Documentos Vol. 2. Medellín: Editorial 8 de Junio, 1975.
—. Sobre la historia del EPL. 2009. 20 de junio de 2012.
<http://www.pcdecml.org/index.php?option=com_content&view=article&id=97%
3Anotas-de-comandancia-sobre-la-historia-del-
epl&catid=57%3A2008&Itemid=135&limitstart=1 (>.
—.Tribuna del congreso marxista-leninista # 1, Documentos Vol. 1. Medellín: Editorial 8
de Junio, 1975.
—. Tribuna del congreso marxista-leninista # 2”, Documentos Vol. 1. Medellín: Editorial 8 de Junio, 1975.
Crónica sobre El Davis
Alape, Arturo. La paz, la violencia: Testigos de excepción. Bogotá: Planeta Colombiana
Editorial, 1985.
188 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
—. Las vidas de Pedro Antonio Marín, Manuel Marulanda Vélez, Tirofijo. Bogotá:
Planeta, 1989.
Arango, Carlos. «El Ex Comandante Olimpo y el Chaparral de los grande.» FARC. Veinte
años. De Marquetalia a la Uribe. Bogotá: Ediciones Aurora, 1985.
Marulanda Vélez, Manuel. Cuadernos de campaña. Bogotá: Editorial Abejón Mono, 1973.
Molano, Alfredo. «Isauro Yosa, el Mayor Lister.» Trochas y fusiles. Bogotá: El Ancora
Editores, 1999.
Trujillo, Ciro. Páginas de su vida. Bogotá: Editorial Abejón Mono, 1974.
—. Páginas de su vida. Bogotá: Editorial Abejón Mono, 1974.
Vélez, Manuel Marulanda. Cuadernos de campaña. Bogotá: Abejón Mono, 1973.
Entrevistas
Dirigente Partido Comunista de Colombia maoísta. Entrevista Dirigente de PCC-M
Rodolfo Hernández. 1 de mayo de 2016.
Fred, Kaim. Entrevista a Kaim Fred Rodolfo Hernández. 17 de mayo de 2016.
Pinzón, Antonio. Historia de vida Rodolfo Hernández. Bogotá, 02 de Noviembre de 2012.
Historia de maoísmo en Colombia
Archila, Mauricio. «El maoísmo en Colombia: la enfermedad juvenil del marxismo-
leninismo.» Controversia 190 (2008): 148-197.
Hernández, Rodolfo. «El Davis, génesis del maoísmo en Colombia: incidencia del
pensamiento Mao Tse-tung en el sur del Tolima.» Goliardos, Revista estudiantil de
Investigaciones Históricas N° 16 (2012): 77-87.
Bibliografía 189
—. «La difusión del comunismo chino en Colombia 1949-1963: El aporte editorial del
Partido Comunista de Colombia-PCC.» Goliardos, Revista estudiantil de
Investigaciones Históricas N° 18 (2014): 70-91.
—. Los polos del maoísmo en Colombia: de los Grupos ML al PCC-M, los herederos de la
revolución de Nueva Democracia. s.f.
<http://historiadelmaoismoencolombia.blogspot.com.co/2012/10/los-polos-del-
maoismo-en-colombia.html>.
Molano, Frank. «El imaginario maoísta (1965-1982). Como mentalidad revolucionaria en
la izquierda Colombiana.» Tesis Maestría en Historia, Universidad Nacional de
Colombia. Bogotá, 2004.
Villarraga, Álvaro y Nelson Plazas. Para reconstruir los sueños: una historia del EPL.
Bogotá: Fondo Editorial para la Paz, Fundación Progresar, 1994.
Tesis de investigación.
Díaz Jaramillo, José Abelardo. «El movimiento obrero estudiantil campesino 7 de enero y
los orígenes de la nueva izquierda en Colombia 1959 - 1969.» Tesis de Maestría.
Bogotá: Universidad Nacional de Colombia, 2010.
Jaramillo, José Abelardo Díaz. «El movimiento obrero estudiantil campesino 7 de enero y
los orígenes de la nueva izquierda en Colombia 1959 – 1969”.» Tesis de maestría.
Bogotá: Universidad Nacional, 2010.
Medina Gallego, Carlos. «FARC-EP Notas para una historia política1958-2006.» Tesis
PhD, Universidad Nacional de Colombia. 2005.
Molano, Frank. «El imaginario maoísta (1965-1982). Como mentalidad revolucionaria en
la izquierda Colombiana.» Tesis Maestría en Historia, Universidad Nacional de
Colombia. Bogotá, 2004.
190 Los orígenes del maoísmo en Colombia: La Recepción de la Revolución de Nueva Democracia 1949-1963
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Colombia.» Pekín Informa N° 18 (1964).
—. «IV Conferencia Nacional del PC del Perú Condena el Revisionismo.» Pekín Informa
N° 21 (1964): 19-22.
Artículos y documentos. «Bolivia: la lucha armada es la única vía.» Pekín Informa N° 18
(1967).
—. «Decidido a hacer del pensamiento de Mao Tse-tung la guía para la acción:
declaración emitida por el Movimiento de Izquierda Revolucionario de Uruguay.»
Pekín Informa N° 31 (1968).
—. «El órgano del PC de Colombia (M-L) llama a todo el Partido a aplicar creadoramente
el pensamiento de Mao Tse-tung a la práctica revolucionaria colombiana.» Pekín
Informa N° 19 (1968): 25-27.
—. «El órgano del PC de Colombia (M-L) llama a todo el Partido a aplicar creadoramente
el pensamiento de Mao Tse-tung a la práctica revolucionaria colombiana.» Pekín
Informa N° 19 (1968): 25-27.
—. «Ha sido expulsado el Grupo Revisionista del Partido Comunista Peruano.» Pekín
Informa, N° 6 (1964).
—. «La situación interna brasileña y las tareas del Partido Comunista del Brasil.» Pekín
Informa N° 23 (1965): 16-18.
—. «Lecciones del golpe militar del Brasil.» Pekín Informa N° 19 (1964): 31-35.
Bibliografía 191
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contemporáneo.» Pekín Informa N° 33 (1965).
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(1968): 19-20.
—. «Resolución del Comité Central del Partido Comunista del Brasil: respuesta a
Jruschov.» Pekín Informa N° 15 (1963): 44-45.
—. «Resolución política aprobada en la VI Conferencia Nacional del Partido Comunista
del Brasil.» Pekín Informa N° 51 (1966): 21-26.
—. «Resoluciones políticas del Primer Congreso del Partido Comunista Revolucionario de
Chile.» Pekín Informa, N° 35 (1966): 23-26.
—. «Reunión de militantes marxista-leninistas del PC de Chile condena el revisionismo de
la dirección del Partido.» Pekín Informa N° 15 (1964): 13-15.
—. «Se funda el Partido Comunista Revolucionario de Chile.» Pekín Informa N° 31
(1966).
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