Lecturas

sobre el

Mtodo Hakomi de

Autoestudio Asistido con base en la Atencin Plena

Escritas por

Ron Kurtz

Compiladas para su t raduccin a l espaol por Georgia Marvin

Traducidas a l espaol por Virg i l io Chvez

Ju l io de 2010

Que un ser humano ame a otro: sta es, tal vez, la ms difcil de nuestras tareas; la prueba ltima y definitiva, el trabajo para el cual todo otro trabajo no es sino la preparacin.

Rainer Maria Rilke

TABLA DE CONTENIDO

ANTECEDENTES Un poco de historia De la fuerza a los experimentos en atencin plena No violencia y hacerse cargo Trabajo con la proporcin entre la seal y el ruido La relacin sanadora

EL TERAPEUTA El desarrollo del terapeuta Calidad personal: calidez y estar despierto La danza Ser un portal Ser un contexto para la sanacin Nirodha

EL CUERPO Expresin corporal y experiencia en la psicoterapia corporal El lugar del cuerpo y de la experiencia inmediata El lugar de la experiencia en psicoterapia De la experiencia al insight

EL MTODO Ciencia, espritu, psicoterapia Es bueno para los nios? Si no es una enfermedad, entonces qu es? El ncleo del mtodo Los pasos Cmo se desarrolla el proceso El material nuclear Presencia amorosa Contacto Experimentos Hacerse cargo Silencio y seguimiento El cuidado Tcnica Por qu menos preguntas? Los hbitos como causa de falla Empoderamiento para el viaje Refinamientos del mtodo refinado

TEORAS SOBRE EL FUNCIONAMIENTO DEL CEREBRO Conferencia de Osaka Dentro y fuera de la ventana Estados mentales Realidad implcita Marcos de referencia Por qu es importante la teora de la complejidad

El hbito de ser quien eres: el inconsciente adaptativo Inteligencia Experiencia e interpretacin La inteligencia como prediccin

TRANSFORMACIN Transformaciones: organizacin de las experiencias faltantes La integracin y la experiencia faltante

ARTCULOS ADICIONALES Conferencia de Viena Algunas hermosas citas Hakomi simplificado Charla sobre estados del yo Charla sobre indicadores Conferencia de Marsella

HISTORIA

U n p o c o d e h i s t o r i a : e l d e s a r r o l l o d e u n n u e v o m t o d o d e p s i c o t e r a p i a

Comenc a hacer psicoterapia en 1970. Hacia 1979 haba desarrollado suficientes tcnicas e ideas originales como para que fuera justificado llamar nuevo mtodo a esa combinacin. El Instituto Hakomi comenz ese mismo ao. Ocho aos despus, en 1987, Swami Rama me dijo que yo tena una misin: crear un nuevo mtodo de psicoterapia. Cuando pienso en Hakomi, lo que viene a mi mente es en qu forma es un nuevo mtodo de psicoterapia? Sin embargo, antes de hablar sobre esto, me gustara darles un poco ms de historia. Mi vida como psicoterapeuta comenz mucho antes de ese encuentro. Comenz en la escuela de posgraduados, en los aos sesenta cuando yo era un estudiante de psicologa experimental. Despus del posgrado, di clases en la universidad estatal en San Francisco. Mi primer entusiasmo real con la terapia y los grupos vino de mis experiencias en un taller conducido por Will Schutz. Era algo totalmente nuevo para m y me emocion mucho con lo que l haca. Una de mis amigas del posgrado, Stella Resnick, daba clases cerca, en la universidad estatal de San Jos. Ella haba estudiado psicologa clnica y estaba en camino de convertirse en una conocida terapeuta Gestalt. Ella me anim y comenzamos a conducir juntos grupos de sensibilizacin. Tambin tom ms talleres. As es como me involucr en la psicoterapia. La mayor parte de lo que aprend se derivaba de la terapia Gestalt. Durante los dos aos siguientes di clases en la universidad estatal de San Francisco y conduje grupos junto con Stella. Despus de eso, fui a Albany, Nueva York y comenc a dar consulta privada. En la mayor parte, usaba lo que haba aprendido sobre la Gestalt. Al poco tiempo de empezar mi prctica privada, entr en terapia, primero con Ron Robbins y ms tarde con John Pierrakos, ambos terapeutas bioenergticos. Comenc a incorporar algo de Bioenergtica en mi trabajo. Antes haba ledo a Perls; ahora lea a Reich y a Lowen. Tambin me inspir el trabajo de Albert Pesso. Estas experiencias fueron el inicio del Mtodo Hakomi. Otras dos cosas tuvieron gran influencia sobre m. La primera fue la filosofa oriental. Yo haba estado practicando yoga desde 1959. En la escuela de posgraduados me interes en el Taoismo y en el Budismo. Las prcticas de trabajo sobre la conciencia se convirtieron en parte de mi vida. En 1972 comenc con macrobitica. Mi fuerte inters en la filosofa oriental y en el trabajo corporal me llev a trabajar con Feldenkrais. Tom varios talleres con Moshe y practiqu los ejercicios de piso. Tambin comenc un tratamiento de Rolfing por esas pocas. Todo esto encontr su camino hacia mis ideas, mi trabajo y mis escritos. La ltima influencia fuerte sobre mi trabajo fue mi inters de toda la vida hacia la ciencia. Yo haba sido una especie de prodigio con las matemticas y siempre am la ciencia. Hice estudios de fsica durante la licenciatura y, durante cuatro aos trabaj

como escritor tcnico en electrnica. Mi pasin ha sido la teora de sistemas, especialmente la rama que estudia a los sistemas vivientes. Estas lneas: la filosofa oriental, mi tcnica psicoteraputica y la teora de sistemas son los fundamentos de Hakomi.

De la fuerza a los experimentos en atencin plena

Las tcnicas de Bioenergtica que yo estaba usando me parecan muy enrgicas; a veces incluso violentas. Para ser coherente con las filosofas orientales que haba estudiado, quera que fueran menos violentas, de manera que comenc a buscar otras vas de acceso y de trabajo con el material emocional. Lentamente, encontr maneras de incorporar la atencin plena y las intervenciones suaves en mi trabajo. Comenc a usar de esta manera la atencin plena: Durante el trabajo con alguna persona, me haca una idea de algo que la persona crea y que la limitaba o reduca su vitalidad. Acumul gran experiencia interpretando la conducta respecto a las creencias que podran motivarla. Digamos que una persona crea que no vala nada. En un momento apropiado, yo le pedira que se pusiera en atencin plena. (A veces le enseaba a la gente cmo ponerse en atencin plena). Cuando ya estaba en atencin plena, le ofreca una frase que fuera exactamente lo opuesto de su creencia. Por ejemplo, le dira. Eres una persona valiosa. Llamaba sondas a estas frases y las utilizaba para hacer pequeos experimentos (mis antecedentes cientficos). Le dira: Que pasa cuando digo. Y entonces yo dira la frase. Yo estaba en busca de reacciones. Una persona en atencin plena no tiene problema para notar sus propias reacciones. Lentamente comenc a hacer ms y ms de estos pequeos experimentos en atencin plena. El consultante y yo observbamos las reacciones. A veces, la reaccin era intensamente emocional. As que aqu haba una manera de acceder a sentimientos profundos acerca de asuntos significativos a los que llegaba casi sin usar fuerza. Exactamente lo que yo haba estado buscando. Las frases que yo ofreca eran siempre positivas, de apoyo y potencialmente nutricias. La reaccin era resultado de que la persona no fuera capaz de aceptar la nutricin potencial. Tan pronto como yo entenda cual era algn problema nuclear, poda traerlo a la conciencia en forma corprea, no violenta, usando la atencin plena. De manera que cuando pienso en lo que hay de nuevo en el mtodo Hakomi, creo que esta es una de las cosas principales: Hakomi es la evocacin de experiencias en atencin plena. Utiliza la atencin plena de esta manera precisa. Esto no es slo otra tcnica. Es una diferencia metodolgica fundamental. Evocamos experiencias mientras el consultante est en este estado particular de conciencia. Las experiencias evocadas nos dicen qu clase de modelos mantiene el consultante acerca de s mismo y del mundo. Aun ms importante: a menudo, los modelos se esclarecen de inmediato para el consultante. Frecuentemente, este mtodo puede liberar emociones difciles de tocar de otra manera. Yo creo que esto es as porque el consultante sabe lo que est pasando. No hay trucos ni manipulaciones aqu. Entrar en un estado de atencin plena es una eleccin deliberada y no siempre fcil. El consultante la elige; elige ser vulnerable. Las personas relajan sus defensas cuando entran en atencin plena. Escogen tomar lo que surge. Si sienten emociones dolorosas en este proceso, es porque creen que vale la pena, con el objeto de entenderse a ellas mismas. Estn dispuestas a traer material doloroso a

la conciencia. No hay violencia aqu; solo la valenta de encarar lo que ya es. A un grado sorprendente, el mtodo accede a sentimientos y recuerdos mucho ms rpidamente que cualquier otro que yo haya usado.

La no violencia y el hacerse cargo

Eventualmente, reduje el nfasis en la Gestalt y en la Bioenergtica. Usaba la atencin plena para evocar emociones, recuerdos e introvisiones1. Tambin comenc a procesar las reacciones emocionales de manera diferente. Comenc a hacerme cargo de ellas. Esta es la segunda cosa que hace nico a Hakomi; nuestra manera de trabajar con las defensas, lo que llamamos hacerse cargo. Cuando se evoca una experiencia emocional, se evoca tambin los hbitos que manejan esa experiencia. (Estas reacciones de manejo, comnmente se llaman mecanismos de defensa. No me gustan las implicaciones de modelo de guerra o de enfermedad de esta terminologa; para m, es manejo). Por ejemplo, la tristeza frecuentemente se maneja cubrindose la cara, apretando los msculos del diafragma, el pecho, la garganta y los ojos, inclinando la cabeza y doblndose hacia adelante. Estas reacciones manejan la experiencia emocional; la contienen. Minimizan lo que alguna vez fue demasiado; a menudo lo evitan por completo. Yo no me opongo a estos hbitos ni trato de manera alguna de forzarlos a romperse. Yo hago exactamente lo opuesto. Doy apoyo a todas las conductas espontneas de manejo. Si una persona aprieta los hombros o se cubre la cara, yo puedo usar mis manos para ayudarlo a juntar sus hombros o a cubrir su cara. Eso es hacerse cargo. Por supuesto que primero pido permiso, e introduzco la atencin plena cuando puedo. Qu pasa cuando hago esto y lentamente, levanto mis manos y las pongo sobre las suyas, si ya estn ocultando su cara. El hacerse cargo tambin se puede hacer verbalmente. Podra suceder as: ofrezco a alguien una frase de prueba como tus sentimientos estn bien y ella escucha una voz interna que dice No!, No estn bien!. Luego puedo hacerme cargo de esa voz. Le digo a la persona lo que me gustara intentar y le pregunto si le parece bien. Luego, con ayuda de otra persona, nos hacemos cargo de la voz interior y repetimos el dilogo completo unas cuantas veces; yo digo tus sentimientos estn bien y la persona que me est ayudando dice No!, No estn bien!, mientras el consultante est otra vez en atencin plena. Esa voz de No!, No estn bien! que el consultante escucha en su cabeza es tambin una conducta de manejo que me dice que, en su modelo de vida, hay algo malo en creer que sus sentimientos estn bien. Tal vez fue castigada por sentirse sexual o demasiado alegre. No se siente segura teniendo esos sentimientos, no est bien. Ese es el modelo. Ese es el sistema de creencias, as que nos hacemos cargo de la voz que maneja esto. Usualmente, el resultado de hacerse cargo de esto es que la persona se relaja un poco y tiene un poco de distancia y una perspectiva ms amplia sobre la conducta de manejo. Escuchar este dilogo, que normalmente tiene lugar en su interior, mientras est en estado de atencin plena permite que aparezcan nuevas reacciones de partes s misma que no haba escuchado antes. Recuerdos de eventos significativos relacionados con la creencia nuclear llegan a la conciencia cuando el terapeuta cubre los ojos del consultante o cuando se hace cargo de las voces. Pueden evocarse fuertes experiencias corporales, dolor y sentimientos intensos. 1 N. del T. Insight en el original, entendido como la comprensin de asuntos que no se haban contemplado previamente.

Hay mensajes importantes en lo que est haciendo el terapeuta. Si ests manejando tu tristeza apretando los hombros y comienzo a ayudarte con eso, los mensajes son: no ests solo en tu tristeza; tienes un aliado. Alguien est a tu lado, aceptando lo que t no has aceptado todava. Puede ser la primera vez que hayas recibido estos mensajes acerca de tu tristeza. Y no tienes que trabajar tan duro. Ests recibiendo apoyo. Es posible soltarse un poco. No es que tengas que abandonarte. Nadie te est forzando a soltarte. Simplemente te han ofrecido la oportunidad. Soltarte depende de ti y puedes hacerlo a tu propio paso. Puedes permitir que los sentimientos que ests manejando salgan y se expresen. Esta es otra manera en que el mtodo es no violento. Cuando nadie se te opone ni te hace sentir que ests equivocado, cuando sientes que hay alguien de tu lado, puedes ser capaz de ir mucho ms profundo en tu experiencia que si estuvieras luchando t solo por tu cuenta. El acto de hacerse cargo enva mensajes como estos: puedo ver que es difcil para ti, quiero ayudarte a manejar esta experiencia, yo te sigo, no voy a forzar nada, yo apoyo tu necesidad de controlar tu propio proceso. El hacerse cargo enva estos mensajes mediante las acciones del terapeuta, no mediante palabras. Estas acciones le hablan directamente al inconsciente de una manera que las palabras raramente lo logran. Por esta razn, el terapeuta debe ser extremadamente sensible a las reacciones del consultante al comunicarse de esta manera. El terapeuta debe seguir constantemente la conducta del consultante como ademanes, expresiones faciales y el tono de voz. El terapeuta debe leer estos signos buscando lo que dicen acerca de la experiencia del consultante. Al hacerlo, el terapeuta aprende cundo avanzar y cuando retirarse, qu es lo que ayuda y lo que no, por medio de seguir estas expresiones corporales. Cuando estas acciones son correctas, son poderosas. Cuando estn equivocadas, simplemente evocan ms conductas de manejo. Tpicamente, el apoyar las conductas de manejo conduce a sentimientos de seguridad, relajacin, sentimiento, expresin, introvisin y el movimiento de los procesos emocionales hacia su complecin beneficiosa. Estos resultados parecieran paradjicos. Una parte de la persona est tratando de manejar su experiencia, refrenarla o minimizarla. El terapeuta ofrece apoyo para eso y la experiencia de la persona avanza y se profundiza, pero eso es lo que se logra al hacerse cargo. Estos dos aspectos del mtodo, la evocacin de experiencias en atencin plena y el hacerse cargo del manejo de las experiencias evocadas en forma no violenta son los elementos que hacen de Hakomi un nuevo mtodo de psicoterapia.

Trabajo con la proporcin entre la seal y el ruido

Desde un punto de vista de sistemas, el uso de la atencin plena puede ser visto como un mtodo de hacer ms sensible al sistema. Un mtodo sensible es uno que puede detectar una seal dbil en un fondo ruidoso. Lo que se considera seal depende de lo que la persona est tratando de or (ver, entender) y el ruido es cualquier cosa que tienda a enmascarar esa seal. Si ests tratando de or a alguien hablar y hay msica tocando cerca, la seal es la charla y la msica es el ruido. Si ests tratando de escuchar la msica, la charla es el ruido. Es totalmente relativo.

Para aumentar la sensibilidad, uno debe encontrar maneras de mejorar la capacidad de detector la seal o encontrar maneras de bajar el ruido. Aumentar nuestra capacidad de detectar la seal o bajar el ruido o hacer ambas cosas. Esas son las opciones. La atencin plena lo hace de ambas maneras. Al calmar y aquietar la mente, baja el ruido. Al llevar la atencin al interior y enfocarse en la experiencia presente, mejora nuestra capacidad de detectar las sensaciones, sentimientos, pensamientos e imgenes; todas las cosas que interesan a los psicoterapeutas corporales. La filosofa oriental ensea que cuando la mente se aquieta, emerge una experiencia directa del espritu. En realidad esa seal, lo mismo que las estrellas que aparecen cuando se pone el sol, est siempre presente, pero est escondida por el ruido que hacemos. Y el mayor ruido es el clamoreo de la mente absorta en el ego. En las psicoterapias centradas en el cuerpo, las seales que se buscan se derivan de experiencias corporales. La actitud abstracta, demasiada conversacin, anlisis y especulacin pueden, todas ellas, considerarse ruido. Pero lo mismo puede pasar con la propia experiencia corporal. Toda conducta de manejo se orienta a minimizar algunas seales. Y si esas son seales en las que estamos interesados (y lo estamos), entonces, en ese sentido, la conducta de manejo est creando ruido. La atencin plena, que involucra la relajacin del manejo y del esfuerzo y aquietar la mente, baja el ruido. Estar en atencin plena significa traerte a ti mismo a una condicin sensible y vulnerable. As es como trabaja esto en psicoterapia. Si ests ocupado levantando pesas y escuchando la radio y llego y te digo vales mucho, t simplemente me vas a saludar. No vas a reaccionar mucho a mis palabras. Pero si ests en atencin plena, sensible y callado; si tu mente est abierta y sencillamente se da cuenta, la misma frase puede evocar una experiencia bastante profunda. Usar la atencin plena es una manera de bajar el ruido. La no violencia es una parte necesaria de esto porque, para que el consultante se ponga vulnerable (en atencin plena), debe sentirse seguro. As que la primera tarea de un terapeuta Hakomi es hacer que la otra persona se sienta segura. Hay muchas maneras de hacer esto, pero la ms bsica es tener un activo y profundo respeto y compasin hacia todos los seres. Entonces el otro est verdaderamente a salvo. Todo lo que tienes que hacer es transmitir tu respeto y compasin a la otra persona, lo cual suceder, en todo caso, tarde o temprano, si son autnticos y naturales. Si vas a usar la atencin plena en la terapia, la no violencia y la seguridad son absolutamente esenciales. De otro modo no trabaja. Cuando disminuye el ruido, emerge cualquier seal que est siendo enmascarada. Aparece como si surgiera de la niebla. Cuando el consultante est en atencin plena y evoca experiencias, no hay confusin sobre la fuente. Es claro para el consultante que cualquier cosa que surja es suya. Sabe que la respuesta emocional es suya propia y que se basa en sus propias creencias y en su historia. El terapeuta no le pide que crea en nada. No estn teniendo una discusin sobre lo que pudiera estar pasando. Los dos juntos estn haciendo pequeos experimentos en atencin plena y estn descubriendo los resultados. La persona se vuelve vulnerable, baja el ruido y surgen las seales. Usando este mtodo, evitamos las interpretaciones o explicarle la persona a ella misma. Ella misma descubre quin es y cmo se organiza y lo hace a su propio paso, dentro de un ambiente seguro y acompaada por un gua en el que confa. As que dos de las

ventajas principales de este mtodo son que apoya la responsabilidad personal (al mostrar con claridad cmo se organizan las experiencias por medio de modelos y creencias interiores) y que evita la confusin (estudiando y procesando las experiencias evocadas en el aqu y ahora, dejando que la persona misma descubra quin es ella en vez de teorizar sobre eso). Aqu est una de las conexiones con el Taoismo y con el trabajo Feldenkrais y con la nocin gestltica de figura y fondo: la conciencia misma baja el ruido. Cuando diriges tu atencin a algo, automticamente bajas el ruido. Cuando comienzas a poner tu atencin en algo, es ah cuando lo conviertes en la seal (la figura) y las dems cosas automticamente se desvanecen el ruido baja por s mismo. Si llevas tu atencin a tus movimientos lentos, como se hace en Feldenkrais, comienzas a notar cosas de las que antes no te dabas cuenta. La atencin desnuda da tiempo a que se desarrollen las seales. Entre ms tiempo te tomes, mayor informacin obtienes. En atencin plena, la atencin est concentrada. El ritmo es ms lento. Las preocupaciones comunes se dejan a un lado. Se pone el foco en la experiencia presente, como en el Taoismo, en Feldenkrais, en Gestalt y otras disciplinas de la conciencia.

De aquello que funciona a la espiritualidad

Constru esta terapia a partir de estos componentes porque encontr que funcionaban. Fue sobre todo por prueba y error, no con base en un plan maestro. Lo mismo que cualquier terco tonto, yo tena que averiguar por m mismo. Lea. Tena ideas. Pero nunca las acept sin primero probarlas. Cuando prob con la atencin plena y la no violencia, ambas funcionaron. Cuando creaba seguridad, la gente poda ponerse en atencin plena. Cuando haca pequeos experimentos en atencin plena, se evocaba algo importante. Era fcil, funcionaba. Me gustaba el hecho de que no fuera violento y de que estuviera lleno de compasin. Se senta bien para m. Yo no pensaba en el largo plazo. Estaba usando lo que funcionaba y en realidad no vea lo que vendra despus. Cuando constru Hakomi sobre los principios de la no violencia y de la atencin plena, esto le dio a la terapia un fuerte cimiento espiritual. Trabajar con estos principios que requieren de respeto, sensibilidad, presencia y compasin de parte del terapeuta, conduce en forma muy natural a experiencias de amor y finalmente a experiencias espirituales. El mtodo apunta en esa direccin. Hakomi ha sido llamado budismo aplicado. Tuvo en su construccin, desde el principio, esa direccin espiritual. Esto fue hacindose claro gradualmente, conforme desarrollaba el mtodo y aada tcnicas. Les voy a contar cmo sucedi. El trabajo evolucion tanto vertical como horizontalmente. Djenme explicarlo. Horizontal significa ms de lo mismo, as como poner ms computadoras por todos lados. Crecimiento vertical significa algo nuevo, como el Internet, que enlaza a todas esas computadoras. El crecimiento vertical es un cambio de forma, el surgimiento de nuevas capacidades. Si un nio aprende palabras, es crecimiento horizontal. Si aprende a unir esas palabras en oraciones, es crecimiento vertical. (El concepto de crecimiento vertical y horizontal lo tom del reciente libro de Ken Wilber Sexo, ecologa y espiritualidad). Aadir nuevas tcnicas a Hakomi fue un desarrollo horizontal. Las tcnicas estn ms o menos al mismo nivel. Aadir nuevas tcnicas es expansin horizontal. Pero la

introduccin de la atencin plena fue diferente. Era ms que slo una tcnica. Fue un salto vertical; influy en todas las tcnicas. Le dio profundidad al mtodo. Al usar la atencin plena, pude hacer cosas que no poda hacer antes. Aadir la atencin plena le dio a la terapia mayor poder y cambi la forma en que se usaban todas las tcnicas. Adicionalmente, volvi esencial a la no violencia y ese cambio hizo esencial el desarrollo personal del terapeuta.

De lo intrapsquico a lo interpersonal.

La relacin sanadora

Yo pensaba en la psicoterapia como algo intrapsquico; que el consultante haca todo el trabajo internamente. El terapeuta sugera cosas, pero bsicamente no se involucraba como persona. Esa era mi manera de pensar. Pensaba en m mismo como en un tcnico. Mi imagen era la del samurai de la pelcula Los Siete Samuris, que era un maestro con la espada, pero que lo haca sin emociones, sin pasin, sin personalidad. Su meta era la precisin perfecta. Yo pensaba en m mismo de la misma manera, como tratando de dominar tcnicas. Sin duda estaba inspirado en una debilidad de carcter ma, pero me gustaba esa imagen: preciso, tcnico, sin sentimientos, sin involucrarme personalmente. En secreto, eso me enorgulleca. Sin embargo, eventualmente vi que las dificultades que surgan en la terapia eran resultado de mis propias limitaciones personales; algo me faltaba como ser humano. Para nada se trataba de problemas tcnicos; no era falta de dominio tcnico. Era mi ego, mi actitud inflada y mi incapacidad para comprender a la gente porque no entenda ciertas cosas de m mismo. Se trataba de la capacidad para relacionarme. Nuevamente, el foco cambi y el cambio fue vertical. Era ms profundo que la sola tcnica. Llegu a un punto donde me enfoqu por algunos aos en lo que llam la relacin sanadora. Para que se diera una relacin sanadora se necesitaba ms que slo seguridad, lo que se necesitaba era la cooperacin del inconsciente. Se requera de una relacin a nivel del inconsciente, una conexin profunda de persona a persona y eso es una calle de dos vas. No slo aprend que necesitaba la cooperacin del inconsciente; tambin aprend que tendra que ser digno de ella. Necesitaba ganrmela. La relacin sanadora requiere de dos cosas fundamentales. En primer lugar, la terapeuta tiene que demostrar que es digna de confianza, que no juzga, que es compasiva. En segundo lugar, tiene que demostrar que est presente, atenta y que realmente entiende lo que est pasando con la persona. Si la terapeuta puede demostrarle estas cosas a la persona en forma consistente, se gana la cooperacin del inconsciente. El inconsciente est esperando a alguien que pueda hacer eso. Si el consultante tiene secretos dolorosos, vergenza, confusin y dolor emocional, la terapeuta necesita una sensibilidad extraordinaria, comprensin y cuidado para convertirse en aliada del inconsciente. El inconsciente ha estado manejando este dolor durante largo tiempo. No permitir que cualquiera sea parte del proceso. La relacin sanadora se basa en ganarse la confianza y la cooperacin del inconsciente por medio de la compasin y la comprensin. Si puedes hacer esto, la terapia realmente sucede. Construir una relacin as no tiene que tomar tres meses ni tres aos. Puede tomarse quince minutos; pero crearla requiere de algo ms que habilidad tcnica.

La creacin de una relacin sanadora en terapia requiere que el terapeuta sea cierta clase de persona; una persona que sea compasiva de manera natural, capaz de ver profundamente en la gente y comprender lo que ve. Todo esto requiere un cierto estado de la mente. Podramos llamar a este estado mental como no egocntrico. El terapeuta necesita estar tan libre de hbitos centrados en el ego como sea posible al trabajar con el consultante. Darse cuenta de esto y ensear esto fue el nuevo gran salto vertical para Hakomi. Este salto estaba ms all de la atencin plena y la no violencia. Se trataba de quin era el terapeuta, del ser del terapeuta, de la conciencia del terapeuta.

EL TERAPEUTA Y LA RELACIN SANADORA

El desarrollo del terapeuta

Este nuevo paso en la evolucin vertical del Hakomi comprenda el desarrollo espiritual del terapeuta. Involucraba el desarrollo de la calidad personal; una expansin de los niveles de entendimiento e introvisin hacia niveles de conciencia ms all de lo ordinario, racional y objetivo. Para sustentar este nivel de conciencia ms elevado, necesitamos encontrar una base, una fuente de inspiracin. Necesitamos encontrar, reconocer y cultivar una fuente de nutricin espiritual (no egocntrica). Con una conexin estable a esa fuente, la confianza, la calma, la comprensin y la compasin llegan en forma natural. Fuera de la terapia, hay muchas, muchas fuentes de nutricin espiritual. Pero en el momento presente de un proceso de terapia, la fuente que uso es el consultante. Busco y encuentro la nutricin no egocntrica en algn aspecto de la persona. Esto es muy cercano a la prctica budista de buscar la semilla del Buda en cada persona. O, como dice Swami Premananda: El propsito de la vida es ver a Dios en cada persona y en cada cosa. Cuando le preguntaron cmo haca esto, contest: En el silencio. La idea es soltar el ruido del ego y ver al otro como espritu. Con esto como hbito, con esto como base, la terapia se convierte en un viaje compartido y sentido profundamente en el corazn. Al trabajar de esta manera, la compasin surge espontneamente. Con la mente quieta y atenta, la comprensin llega fcilmente. Las dos cualidades ms importantes de la relacin sanadora, la compasin y la comprensin, son el resultado natural de buscar nutrimento no egocntrico en la relacin terapeuta-consultante. El desarrollo de esta prctica es una disciplina espiritual y su fruto es la calidad personal y la plenitud del ser humano. Es esta aproximacin lo que hace de la psicoterapia una prctica espiritual. Hace algunos aos, le el libro de Michael Mahoney Human Change Processes (procesos de cambio humano).2 l citaba algunos estudios de veinte aos de duracin que mostraban que la persona del terapeuta es al menos ocho veces ms influyente que su orientacin terica o el uso de tcnicas teraputicas especficas. Yo tom esto muy en serio. Me di cuenta de que no poda ensear slo mtodos a la gente. Tena que definir, reconocer y ensear calidad personal, lo cual incluye el desarrollo espiritual. Hasta cierto punto, es el crecimiento personal y el trabajo emocional que todos tenemos que hacer. Pero, ms all de esto y especialmente cuando quieres ser de ayuda para otras personas, el desarrollo espiritual es el paso siguiente, natural y necesario. As que comenc a enfocarme al estado de la mente del terapeuta. Desarroll mtodos para explorar y apoyar el desarrollo espiritual del terapeuta. Mis entrenamientos y talleres incluyen ahora mucho trabajo y prctica sobre esto. Esto nos trae al estado

2 Mahoney, M. J. (1991). Human Change Processes: The Scientific Foundations of Psychotherapy. New York: Basic Books.

actual del desarrollo del Mtodo Hakomi. Los principios de atencin plena y no violencia fueron el comienzo del carcter nico de Hakomi y el ltimo salto vertical ha sido el foco en la prctica espiritual y en el estado de la mente del terapeuta.

Calidad personal:3 Calidez y estar despierto

Voy a hablar un poco sobre la calidad personal y cmo se enlaza con la idea del yo. Alguna vez o a Deepak Chopra decir que todos tenemos 60,000 pensamientos al da. En un da de veinticuatro horas, eso es algo as como 40 pensamientos por minuto. Dale, dale y dale! Es un nmero razonable? Por ahora aceptemos que s. Y eso no es la peor parte. Estn listos para lo peor? Agrrense! Todo eso pasa en nuestras cabezas. Noventa y nueve por ciento de todos los pensamientos son los mismos pensamientos que tuviste un da antes. Noventa y nueve por ciento de 60,000 son 57,000. Esos son los pensamientos repetitivos que tenemos da tras da, cada da. Yo tuve ayer el mismo pensamiento que estoy pensando hoy! Okey, ese es el problema. Esos 57,000 pensamientos repetitivos. Tomemos un subconjunto de ellos. Slo para este razonamiento, tomemos la mitad, 28,500. Digamos que estos son acerca de eventos inmediatos que tienes que manejar justo ahora, el da de hoy, esta semana, este mes algo as. Qu pasa con los otros 28,500? Esto es lo que pienso sobre ellos: son el pegamento que conserva la integridad del yo. Son pensamientos acerca de quien eres, sobre tu historia, tus relaciones, tu valor, tu propsito, tu nmero telefnico, la direccin de tu domicilio, etc. etc. Cosas de la identidad. Son pensamientos que asignan significado, significado personal, a los eventos de tu vida; los significados habituales que son asignados sin que ests consciente de lo que ests haciendo. Esta clase de pensamientos te conservan siendo quien eres. Si no tuvieras estos pensamientos, no tendras un yo. No hay un yo permanente, tienes que ensamblarlo y pegarlo con algo as como 20 pensamientos por minuto. El adhesivo es automtico, funciona por s mismo y es muy difcil de parar. De eso se trata la meditacin, de aquietar la mente. Bueno, de aquietar eso que est sucediendo en la mente que necesite ser aquietado. Muchos de esos pensamientos pasan a travs de la conciencia sin notarlos. No se examinan, no se cuestionan ni se recuerdan. Hay un sistema completo que genera y modifica estos pensamientos, constantemente. Muchos canales de informacin estn siendo procesados simultneamente en el cerebro, la mayora de los cuales estn fuera de la conciencia. Estos tambin son pensamientos funcionando a nivel sutil. Estos pensamientos y las estructuras que han evolucionado para organizarlos son la nica cosa que tenemos que podamos llamar un yo (en minsculas, refirindonos al yo-ego). Ahora quiero leer una cita. Es del libro Human Change Processes (procesos de cambio humano), de Michael J. Mahoney. Es la base cientfica para toda la idea de la importancia de la calidad personal en la psicoterapia. Mahoney dice:

Los estudios de la contribucin de los psicoterapeutas a la experiencia teraputica han comenzado a esclarecer que la magnitud de esa contribucin [del psicoterapeuta] slo es excedida por aquella atribuible al consultante. Despus de su extensa revisin de la

3 Dado en el grupo de entrenamiento de Ashland, Noviembre, 1991, editado en diciembre, 2007

literatura existente hace una dcada, Bergen y Lambert concluyeron que la mayor variacin en la terapia se explica por factores preexistentes del consultante como la motivacin. Los factores personales del terapeuta explican la segunda mayor proporcin de cambio, con las variables de la tcnica en un distante tercer lugar.

As que de todos los factores que hacen efectiva a la terapia, el ms importante es el consultante. Lo que Bergen y Lambert llaman factores preexistentes del consultante.4 La segunda cosa ms importante son los factores personales del terapeuta. Mahoney le llama personhood [aqu traducida como calidad personal]. Es de ah que tomamos el concepto. La calidad personal es la clase de presencia que traes al trabajo tu capacidad de concentracin y de atencin hacia el otro, tu sabidura y comprensin, tu experiencia, tu calidez y compasin estas son las cosas ms importantes que aportas al proceso de terapia. Con ella estableces la relacin sanadora, con tu calidad personal5. La tercera cosa ms importante son las tcnicas y el mtodo, que ocupan un distante tercer lugar. En una revisin ms reciente de Lambert de las investigaciones sobre este asunto, se obtuvieron resultados an ms asombrosos. Cuatro grandes proyectos de investigacin en las universidades de Pittsburgh, Johns Hopkins, VA y McGill encontraron que el impacto teraputico atribuible al psicoterapeuta era ocho veces mayor que el asociado a las tcnicas de tratamiento. No importa el mtodo que uses, tu calidad personal cuenta ocho veces ms. Mahoney dice que La persona del terapeuta y las alianzas teraputicas que es capaz de alentar y cocrear son mucho ms importantes para la calidad y efectividad de sus servicios profesionales que el mtodo y la tcnica. La calidad personal del terapeuta y la relacin sanadora son ms importantes que el mtodo y las tcnicas. El libro de Mahoney se llama Human Change Processes [procesos de cambio humano]. El punto decisivo es que los humanos pueden ayudar a otros humanos a cambiar. La forma ms importante en que podemos hacer esto es mediante la calidad de nuestras relaciones personales. Esta es la influencia ms poderosa sobre la calidad de nuestras vidas y el ritmo y la direccin de nuestro desarrollo. La calidad de nuestras relaciones! Eso es lo que cambia a la gente. Ahora quiero decir algunas cosas sobre la relacin sanadora y el impulso del consultante hacia la sanacin. El impulso hacia la sanacin es aceptado universalmente en las disciplinas espirituales y la filosofa de todos los tiempos. Podemos aceptarlo a ese nivel. Sin embargo, si quieres leer un artculo cientfico sobre esto, hay uno de Joseph Weiss en el Scientific American, de agosto de 1989, titulado Unconscious Mental Functioning [funcionamiento mental inconsciente]. Weiss trata lo siguiente: (1) qu motiva a los consultantes y cmo esperan sanar; (2) que el inconsciente est organizado de manera lgica y organizada para dirigir esta sanacin6; y (3) los consultantes ponen a prueba al terapeuta para determinar si es capaz de aceptar cosas del consultante que necesitan ser aceptadas para que proceda el proceso de sanacin (Por eso es que la calidez es tan importante). Voy a darles otra cita, esta es de Jean Liedloff. Jean Liedloff vivi con los indios Icuanna de Sudamrica durante largo tiempo. Ella estudiaba sus prcticas de crianza de 4 Para el mtodo refinado, que incluye reconocer al trabajo como autoestudio. 5 Estas son las cualidades que se convirtieron en la Presencia Amorosa. 6 sta se convierte ms adelante en la naturaleza del inconsciente adaptativo.

nios y escribi un libro llamado The Continuum Concept. Ella regres a los Estados Unidos, comenz a dar terapia y encontr, despus de un tiempo, algo universal entre sus consultantes. Ella dice que siempre encuentras informacin sobre las diferencias entre la gente, como las categoras del DSM3, los tipos de Freud, los tipos de Jung, etc. Pero, dice ella, es difcil encontrar algo sobre las cosas en comn, luego aade:

Not algo curioso acerca de los adultos neurticos normales como nosotros ("Normal Neurotics Like Us" es el ttulo de un artculo suyo que apareci en Mothering Magazine.) Lo que estbamos experimentando no era para nada una variedad de problemas, sino la misma dificultad. Aunque los detalles y los grados de dao diferan, la enfermedad era la misma. Se manifestaba como una sensacin profunda de estar equivocado, de no ser suficientemente bueno, no ser digno de amor, de ser decepcionante, incompetente, insignificante, no merecedor, inadecuado, malvado, malo o de alguna otra forma incorrecto.

Para los adultos neurticos normales (como nosotros) hay un sentido profundo, un pensamiento que se est repitiendo una y otra vez, aunque no le pongas atencin. Estoy mal, hay algo mal en m. (Piensa en el Pecado Original o en el simple pecado!). Lo que es ms. Esta creencia, este sentimiento, seguramente ha pasado por generaciones de nuestras familias y nuestra cultura y se desarroll en nosotros como parte de nuestras relaciones tempranas. A ahora es una pieza central y estable de la fuente burbujeante de los pensamientos, mayormente inconscientes, que hacen de nosotros un yo. Liedloff encuentra luego una solucin sencilla para este problema.

Al darme cuenta de esto, busqu palabras para describir cmo deberan sentirse los seres humanos acerca de ellos mismos para vivir ptimamente, para sentirse en casa dentro de sus propias pieles y representarse ellos mismos con precisin ante los otros. Pens en el pueblo Icuanna y llegu a las palabras merecedor y bienvenido. La gente necesita sentirse merecedora y bienvenida, no vejada, enojada o apologtica acerca de su propia existencia.

Los sentimientos que probablemente emergen cuando te crees merecedor y bienvenido son exactamente lo que estamos tratando de ayudar a nuestros consultantes a sentir. Valiosos, merecedores de la felicidad, merecedores del inters de los dems, perteneciendo. Bienvenidos y deseados, la gente ests feliz de verte, te sientes seguro con ellos, aceptado. Voy a plantear que la calidad personal del terapeuta transmite, en forma silenciosa y constante, que el consultante es bienvenido y digno de respeto y esto da lugar a un sentimiento de seguridad y al proceso de liberarse de cargas. Es un argumento sencillo. Cuando espontnea y naturalmente, por tu sola presencia, actas de manera que ayude a alguien a sentirse valioso y bienvenido, tu calidad personal es teraputica. Hace veinticinco aos, cuando le a Reich por primera vez, me impresion fuertemente lo siguiente: Cuando la terapia falla, es siempre por falla del terapeuta. Siendo judo y muy orientado al logro, lo tom como la verdad. Me ayud a aprender lo que tena que aprender. Si algo iba mal en una sesin de terapia, pensaba en lo que haba hecho mal. Por supuesto, siempre me senta un poco culpable. No fue sino hasta que le el libro de David Reynolds sobre la psicoterapia en Japn, The Quiet Therapies [las terapias silenciosas], y llegu al siguiente pasaje, que me sent un poco aliviado: cuando la terapia falla, es siempre por falla del consultante. Ahora ya saba: siempre es falla de

alguien. As que entre Reich y Japn, tenemos una contrastante e importante diferencia de opinin. Ah, la cultura! En su libro, Reynolds nombra dos cosas que hacen neurticos a los consultantes, que los definen como neurticos, neurticos normales, como nosotros. Las dos cosas son: (1) la mente del consultante est demasiado enfocada en l mismo, es una mente egosta, preocupada por uno mismo, enfocada en s mismo (2) La mente del consultante va a un paso equivocado. Va demasiado rpido, no est en calma, centrada, arraigada, capaz de concentrarse. O est atascada en alguna rumiacin obsesiva o en un ritual compulsivo (palabras de Reynolds). O est descontrolada o est atascada. Demasiado rpido o demasiado lento. Estas son las marcas de la neurosis: una mente preocupada con s misma, que va demasiado rpido o demasiado lento. Un aspecto importante de la calidad personal del terapeuta es la habilidad para aquietar sus agendas neurticas enfocadas en s mismo y estar verdaderamente tranquilo, atento y presente para otra persona. Una persona con baja autoestima no puede apartarse a un lado; es la persona cuya vala no est en cuestin, una persona que est confortable con quien es y con sus relaciones, que no siente que algo est mal con ella misma, que est tranquila, clida y presente. Gente come esa puede prestar atencin a otro, puede ayudar a otro a sentirse bienvenido y valioso. Sus pensamientos pueden ser sobre el otro. No tienen que alimentar un hbito de 30,000 pensamientos por da para recrear historias de recreacin de s mismo. La ltima cosa sobre la que hablar hoy comienza con otra cita, del maestro tibetano de meditacin Chgyam Trungpa Rimpoche. Es de un artculo que l escribi titulado Becoming a Full Human Being [Convertirse en un ser humano pleno].7 La calidad personal tambin puede llamarse ser plenamente humano.

El trabajo bsico de los profesionales de la salud en general y de los psicoterapeutas en particular es convertirse en seres humanos plenos e inspirar esta plenitud humana a la gente que se siente hambrienta respecto a su vida.

Es fundamental. Convertirse en seres humanos plenos! (Nietzsche: Convirtete en lo que eres!) No hacemos esto slo para nosotros; lo hacemos tambin para los dems. La calidad personal beneficia a todos. No es un mtodo; no es algo que slo hacemos con los consultantes como parte de las sesiones de terapia. Ni siquiera lo hacemos. Es algo en lo que nos hemos convertido, algo que hemos hecho con nuestras vidas. En forma semejante, podras decir esto: el trabajo bsico de los msicos es ser musicales. Eso no es acerca de aprender notas y acordes, melodas y armona. Es sobre la persona. Y la calidad personal no es acerca de un mtodo teraputico. Es acerca de traer nuestra inherente humanidad a su plenitud. Si la base del ser es incondicionadamente buena,8 entonces la calidad personal se mantiene de pi sobre esa base de vala y calidez. La humanidad plena da significado a nuestras vidas personales y profesionales. En el resto del artculo, Trungpa habla sobre dos caractersticas del ser humano pleno; dos temas generales de lo que entra en el ser humano pleno. La calidez es la primera cosa. La segunda es el estar despierto. Calidez y estar despierto. Estas cualidades que

7 En Wellwood, John. 1983. Awakening the Heart. Boston, MA: Shambala 8 Una idea fundamental del budismo.

comunican tu verdadero sistema de creencias mejor que cualquier cosa que pudieras explicar, son los verdaderos motores del mtodo. La calidez es gozar a los otros y ser inspirado por ellos, amarlos y apreciarlos. El Dalai Lama dice que su religin es la amabilidad. Amabilidad. Reconocer las necesidades y los deseos del otro y tener el impulso de ayudar, de aliviar su dolor, de celebrar momentos de dulce afecto, de cercana y de armona, estar listos para abrazar y dar consuelo. Estar despierto es entender las bromas y seguir los eventos que se se desplieguen ante ti. Es ver las conexiones. Es concentracin y foco. El autoestudio usando la atencin plena es el entrenamiento bsico para estar despierto. Es sobre el ritmo de avance. Sobre la fuente de tu informacin. Es real? Es historia o experiencia? Es sobre tener espacio y tiempo para apreciar. Es sobre tomarte tu tiempo y asimilar las cosas. Es espaciosidad. No puedes estar despierto si ests reactivo, si vas tan rpido que slo puedes reaccionar. Eso no es estar despierto. Si ests excesivamente enfocado, esforzndote y orientado a metas, si tienes que desconectar todo lo dems porque tienes ciertas metas que ests impaciente por alcanzar y te mueves a una velocidad que no te deja tiempo para detenerte y conectarte contigo mismo y con los dems tiempo para ayudar entonces no ests despierto. Ests corriendo dormido. Puede que hagas muchas cosas, pero no ests despierto, y si no ests despierto, por supuesto que no ests a cargo. Swami Ajaya hace esta analoga: ests manejando un auto pensando que ests a cargo de la situacin pero nunca has volteado a ver quien va en el asiento trasero. De cierta manera, no eres ms que el chofer. Algunas gentes piensan que slo ests hacindola de chofer para tus genes mientras que ellos a su vez estn buscando hacer ms con ellos mismos. A pesar de esto, tienes la posibilidad de alcanzar la calidad personal. Eres el resultado de muchos procesos habituales que trabajan fuera de la conciencia.9 Tus deseos y pensamientos como descubrirs cuando los estudies son a veces muy tontos o dolorosos y, a menudo, totalmente irracionales. Estos procesos estn slo sucediendo. T no fabricas deliberada ni conscientemente tu yo. Se hace por medio de hbitos y nadie en particular lo est haciendo. El ser plenamente humano consiste en desarrollar un yo que vea todo esto con claridad y que pueda equilibrar y armonizar las muchas condiciones que coexisten dentro de cada uno de nosotros. En atencin plena, entre el pensamiento y el acto, tienes la posibilidad de notar y cambiar tu mente. Entre el impulso y el hecho est la posibilidad de la libertad. En palabras de Leidloff: Al reemplazar las creencias falsas por verdaderas se resuelven las distorsiones que han impedido que la conducta espontnea de una persona le sirva para su mejor inters. Reemplazar las creencias falsas por verdaderas te permite ser espontneo de nuevo, actuar espontneamente en beneficio de tus mejores intereses. Despus de haber hecho suficiente trabajo de autoestudio y cambio, despus de haber reemplazado creencias de estar mal por otras de calidez y estar despierto, tu conducta espontnea se orienta a tus propios y mejores intereses. Cuando ramos infantes, tomamos lo que se convertira en nuestras creencias nucleares sin tener mucho de dnde elegir acerca de ellas. Si

9 Nuevamente, esto era antes de que se hubiera descrito el inconsciente adaptativo.

tomamos las equivocadas, si creemos que no somos valiosos o bienvenidos, entonces nuestra conducta espontnea no ser en nuestro propio y mejor inters (y probablemente de nadie). Pero si aunque sea por una vez, contienes deliberadamente todo impulso de actuar bajo de esas creencias, comienzas a ser capaz de cuestionarlas, de dudar y desafiarlas y eventualmente reemplazarlas. La calma y la claridad son resultado de este largo proceso. El cristianismo lo llama gracia y el budismo despertar. Como los sabios y poetas, puedes ser espontneo porque en tu espontaneidad estars actuando en tu propio inters y probablemente en el de todos. Tu calidad personal les servir a todos. Es el mismo proceso por el que nos hacemos terapeutas. Aprendemos acerca de nosotros mismos. Construimos hbitos y espontneamente servimos a nosotros mismos y a los dems. Construimos relaciones sanadoras y amorosas espontneamente simplemente con ser nosotros mismos. Cuando trabajo con la gente, dejo mucho tiempo para que se desenvuelvan. Dirijo muy poco al comienzo. Espero a que ellos me dirijan. Tengo tiempo para simplemente estar ah; mucho tiempo. Para apreciar. Para ser curioso. Para ver la humanidad del otro. Para ver su belleza an cuando yo sienta su sufrimiento. Reconozco y demuestro que estoy con ellos, siguiendo sus experiencias, notando y aceptando su vala as como su dolor. Cuando entiendo algo acerca de ellos, lo demuestro tambin! No slo digo que entend; lo demuestro. Mi inters natural en ellos motiva que yo busque entenderlos y pueda ser, para ellos, una seal de su propia vala. Mi entendimiento detona el de ellos mientras avanzamos por las etapas de su autoestudio. Soy un terapeuta porque mi trabajo bsico es con la calidad personal. Quiero convertirme en un ser humano pleno. Plenamente despierto, plenamente amoroso. Eso quiero para m. Y eso quiero para todos.

Ron Kurtz Ashland, 1991 &, 2007

La danza10 He estado leyendo de nuevo el libro de Moshe Feldenkrais The Elusive Obvious [Ttulo en castellano: La dificultad de ver lo obvio]. Lo haba ledo hace aos y era tan elusivo que no lo entend para nada. Esta vez, entend algo, as que djenme decirles lo que dice Moshe en su introduccin. Es importante para nosotros. El habla sobre cmo aprendi a trabajar con la gente. Estaba estudiando con un hombre llamado Heinrich Jacoby y Jacoby le dio esta analoga como una descripcin de su trabajo. Jacoby dijo: Supongamos que hay una mujer que realmente sabe bailar bien; est en un saln de baile y nota a un hombre que no est bailando. Se acerca y lo invita a bailar y l contesta No, la verdad es que no s bailar Ella insiste, ven, ven y logra que l lo intente. Simplemente comienzan a bailar. Sin instrucciones. Ella no le dice qu pasos hacer ni nada. l aprende simplemente movindose con ella y sintiendo sus movimientos. Eventualmente, l comienza a sentir los ritmos y los movimientos. Comienza a moverse con ella y despus de un rato digamos quince o veinte minutos l est bailando, Eso es lo que Jacoby le cont a Moshe. 10 Charla en Ashland en marzo de 2003

Moshe dice que as es como l hace terapia. Comienza a bailar con el sistema nervioso de la persona. Mueve el cuerpo de la persona hasta que el sistema nervioso de la persona agarra el baile que est haciendo Moshe con l. No es instruccin en el sentido verbal. Moshe no le habla a la persona. Puede ser una versin fsica de la resonancia lmbica. Tal vez sea resonancia del cerebelo. Yo lo llamara un intercambio de sensibilidades. Al interactuar de esta manera, la persona aprende una nueva y mejor manera de usar su cuerpo. Aprende sintiendo y siendo sentido por alguien que conoce una mejor manera. Podemos hacer una analoga con nuestro propio trabajo y con la psicoterapia en general. Vista de esta manera, se vuelve ms interesante y ms gozosa. El terapeuta slo est siendo quien es, como quiera que sea. El consultante est aprendiendo a ser con el terapeuta. Estn aprendiendo a ser uno con otro, pero el terapeuta tiene un entrenamiento especial y habilidades para estar con la gente. As que los dos aprenden a relacionarse de una manera que los cambia a ambos. Bailar con un experto te ensea a bailar. Estar en terapia con un experto desarrolla tu capacidad para estar en atencin plena, para estar calmado, para entenderte a ti mismo, para liberarte de recuerdos dolorosos y de acciones irreflexivas, para relacionarte en formas realistas y satisfactorias. La terapia vista de esta manera es un baile entre un maestro y un estudiante. No es una danza de movimientos; es una danza de estados de la mente. Si ests en un estado mental compasivo, si ests en presencia amorosa, esto ayuda al consultante a abrirse y a sentirse a s mismo. Ayuda a los consultantes a liberar emociones y recuerdos a la conciencia. Esta aproximacin es diferente de la liberacin de bloqueos musculares del cuerpo. Esa clase de liberacin es parte de la manera de trabajar de las psicoterapias corporales. Esa aproximacin comenz con Wilhelm Reich, con base en su idea de la coraza muscular. Los psicoterapeutas corporales buscan bloqueos de la expresin, especialmente bloqueos de la expresin emocional. As que cuando vas con un terapeuta bioenergtico, golpeas la cama para expresar y sentir tu ira (Es una idea vieja en fisiologa: el sentir sigue a la accin). El terapeuta bioenergtico te mira y dice Okey, hagamos esto! Hace que te dobles apoyando la espalda en un banco para liberar los bloqueos y expresar miedo y cosas as. Si ven signos de ira no expresada, harn algo muy fsico para favorecer su expresin. Para ellos la expresin est bloqueada fsicamente. En Gestalt, el mtodo es pedir al consultante que exagere sus acciones. En ambos casos estn buscando una manera de traer las emociones a la conciencia. En Hakomi, slo hacemos algo de eso. Trabajamos para traer creencias dolorosas a la conciencia y los recuerdos, ideas y emociones que las acompaan. Estamos interesados en estas ideas y recuerdos, no porque estn en su mayor parte fuera de la conciencia, que lo estn. Estamos interesados en ellas porque controlan lo que puede pensarse, percibirse y tomarse como nutrimento emocional. Para nosotros, lo principal son los bloqueos para tomar las cosas saludables y nutricias del mundo y hacernos conscientes de los motivos inconscientes que nos impiden hacerlo as. Esto tambin llega espontneamente a la conciencia cuando el terapeuta y el consultante estn en los estados mentales correctos. Nunca me gusto la idea de golpear la cama y lo hice bastante. Nunca toqu mi ira de esa manera, soy demasiado buen muchacho. La toqu cuando John Pierrakos me estaba

me empujando con tanta fuerza en la cara que de repente y espontneamente decid matarlo en el acto. As es como l lleg a mi furia. Ni por un segundo pens en las consecuencias. Si l no se hubiera ido al rincn ms alejado de la sala antes de que yo pudiera abrir los ojos y poner mis manos alrededor de su cuello, yo ya estara rompiendo piedras con un marro (lo cual estoy seguro de que se hubiera convertido en una expresin de ira). John, desde el rincn opuesto de la sala, solo dijo el asesino. Pues bien, acert. Y tambin estoy agradecido! Lo sent como regresar a casa. Despus de eso me hice mucho menos temeroso; ms dispuesto a tomar riesgos. Ahora, de regreso a mi tema: En vez de tomar accin para llegar a la conciencia y al entendimiento (un proceso que tambin funciona), trabajamos para crear un estado mental que tiene los mismos resultados. El estado es la atencin plena y un estar dispuesto a experimentar con nuestras propias reacciones. El terapeuta est en un estado mental amoroso, curioso y creativo. El consultante est en un estado mental vulnerable y observador de s mismo. Debe existir una clase de armona entre estos estados. Crear esa armona es la primera tarea del terapeuta. Tambin se la llama construir una relacin sanadora. Podra con igual facilidad ser llamada la danza. Para trabajar de esta manera se requiere de una clase de fe. La mujer de la historia de Jacoby tena fe en que el hombre podra aprender a bailar simplemente bailando con ella. Fe en la inteligencia y en la sinceridad de l. Tambin tenemos esa clase de fe, y en la bondad innata de la gente, y en su habilidad para sanar heridas emocionales. As como la gente sana fsicamente, sana emocionalmente. Una manera de hacerlo es estar con gente que pueda danzar con el dolor emocional, con creencias que causan sufrimiento. Conocemos esa danza. La gente llega a psicoterapia por toda clase de razones. Aqu est lo que obtienen del mtodo Hakomi. Esta es la danza que bailamos: Ayudamos a la gente a descubrir cmo organizan habitual e inconscientemente las experiencias dolorosas. Les ayudamos a experimentar nuevas y ms satisfactorias maneras de ser y hacer. Cuando hacemos esto, las personas aprenden a entenderse a ellas mismas y a cambiar. Para apoyar el autodescubrimiento, usamos la atencin plena. Para la atencin plena, necesitamos seguridad. Para la seguridad necesitamos la presencia amorosa. Todo ello es parte de la danza. Tambin necesitamos ver y sentir quien es el consultante. Para ello tenemos que entrenarnos. Necesitamos enfocarnos en lo no verbal. En el narrador, no slo en la narracin. La comunicacin verbal es casi siempre algn tipo de historia. O es anlisis y explicacin. Es abstracta, no es experiencia presente, o es una bsqueda de causas. Nada de eso ayuda cuando estamos tratando de descubrir cmo organizamos la experiencia. Lo que ayuda es traer la atencin a la experiencia presente y experimentar con ella. Danzar con ella. El estado de nimo y las emociones del consultante cambian de momento a momento, al igual que su postura, expresiones faciales, tono de voz y ademanes. Como terapeuta que est buscando algo con qu hacer experimentos, ste es tu campo de inters. De lo que ves y escuchas en el momento presente, puedes fcilmente encontrar algo con qu experimentar. Puedes trabajar con cualquier cosa que parezca interesante o fuera de lo comn. A cada momento, la experiencia est siendo organizada. Enfocarse en una

experiencia en s misma nos pone en contacto con las creencias y recuerdos que la estn organizando Para ayudar a los consultantes a experimentar maneras ms satisfactorias de organizar su experiencia, descubrimos las clases de nutrimento emocional que generalmente estn disponibles pero no se toman. Es como encontrar los pasos de baile que el consultante todava no aprende o teme dar. Cuando descubrimos algo de este tipo, experimentamos con ello ofreciendo ese nutrimento exacto. Eso es lo que el consultante descubre eventualmente, que l puede hacer y sentir esas cosas que alguna vez parecieron imposibles y que se sienten bien. La experiencia faltante es un paso de baile que temamos dar, que ni siquiera habamos imaginado. Una vez que aceptamos el nutrimento emocional, practicamos un poco. Qu experiencias apoyamos? Apoyamos un balance entre la expresin satisfactoria y espontneas y no violentas de todas las emociones. Sin embargo, enfatizamos lo que en Budismo se llama las emociones superiores: la amabilidad amorosa, la alegra emptica y la ecuanimidad. Esa es la danza ms dulce que existe.

Ser un Portal Portal (nombre) Una entrada o un medio de entrada11 Aqul que quiere hacer el bien, toca a la puerta; aqul que ama encuentra la puerta abierta. Sri Rabindranath Tagore Thakur (1861-1941) Donde rige el amor, no hay poder y donde predomina el poder, falta el amor.

Carl Jung La deteccin de una persona como segura o peligrosa dispara conductas prosociales o defensivas neurobiolgicamente determinadas Stephen Porges12

Porges usa msica limitada en su rango de frecuencias al rango de la voz humana y la hace escuchar por medio de audfonos para disparar lo que ha llamado sistema de acoplamiento social. En situaciones normales, de todos los das, este sistema funciona para reforzar la comunicacin entre un ser humano y otro. Este complejo sistema neurobiolgico se activa cuando la situacin demanda este tipo de comunicacin y cuando la situacin se percibe como segura. La razn por la que puede activarse el sistema de acoplamiento social por medio de msica de rango limitado es que escuchar esta msica causa que el odo medio de una persona estreche su rango de audicin a estas mismas frecuencias. Esta accin del odo medio es slo una de las funciones del sistema de acoplamiento social. (Otras incluyen sonrer y mirar directamente a alguien, dando lugar a la regulacin del sistema nervioso en apoyo de todas las conductas prosociales). Porges habla de la funcin del odo medio como un portal del sistema. Es la entrada a un estado de la mente, basado en una configuracin especfica del sistema nervioso completo, un estado de la mente que es prosocial y no defensivo. Porges trata a nios autistas activando su sistema de acoplamiento social mediante la estimulacin del odo medio. A menudo, en slo unas cuantas sesiones de cuarenta y cinco minutos cada una, se activa el SES y cambia la conducta del nio de distante y defensiva a una ms social y relajada. Vi a Porges trabajar con una mujer que estaba siendo estimulada por un equipo de msica de rango limitado. Vi los cambios que podan suceder en media hora. Cuando termin la mujer, me puse los audfonos y escuch la misma grabacin que ella haba escuchado. Sent los cambios que produjo en mi: me sent muy amoroso hacia todos los que haba en el cuarto. Despus de unos diez minutos, me quit los audfonos e hice algo de trabajo de Hakomi con la misma mujer con la que Porges haba trabajado. Despus de diez o quince minutos, que incluyeron algunos momentos intensos entre nosotros, sus sentimientos cambiaron de un nivel basal de tristeza, aislamiento, soledad, enojo y desaliento a un sentimiento de conexin conmigo un estado clido, apreciativo y nutricio: el acoplamiento social. En este estado, fue capaz de experimentar lo que para ella eran sentimientos nuevos, positivos y esperanzadores. Porges, quien haba estado mirndome trabajar, me dijo despus algo as como eres un portal. Debo haber puesto cara de extraeza porque l aadi, igual que la msica.

11 The American Heritage Dictionary of the English Language: Fourth Edition. 2000. 12 Neuroception: A Subconscious System for Detecting Threats and Safety, http://bbc.psych.uic.edu/pdf/Neuroception.pdf

l quera decir que mi conducta haba puesto a funcionar al sistema de acoplamiento social de la mujer. Mis conductas: mi tono de voz, mis expresiones faciales, mi ritmo, mi actitud, mi presencia completa con ella; el hecho de que mi atencin nunca decay, la amabilidad constante que yo senta y demostraba todo esto era de modo tal que ella haba cambiado el estado de su mente. Me gusta llamar a esta clase de acoplamiento presencia amorosa. Algo en m; un sentimiento deliberado y constante de compasin por la persona que tena enfrente me dio el potencial de evocar su acoplamiento social. Me convert en la entrada para que ella pudiera pasar de un estado de la mente a otro. Yo era un portal. No es nada nuevo que nos activemos unos a otros, que las emociones sean comunicables. El miedo o la rabia pueden propagarse en una multitud o intensificarse en una discusin entre dos personas. No hay nada nuevo en esto. Tampoco es nuevo que podemos ser portales para los estados amorosos, prosociales de unos con otros. Lo que es nuevo e importante reconocer es que la presencia amorosa puede ser una poderosa fuerza de cambio en la vida diaria o como parte de la psicoterapia. Un terapeuta cuyo estado de la mente sea la presencia amorosa ofrecer a los consultantes un portal a travs del cual sus percepciones, estados de nimo y autoconocimiento pueden cambiar en formas positivas. Lo ms importante no es el poder de cambiar a la gente. No es tcnica ni mtodo ni confrontacin, razn, cognicin o condicionamiento. La cosa ms importante es justamente lo que siempre ha sido: abrirse uno mismo para incluir el ser y el bienestar de otro. Lo importante, lo efectivo, es abrirte, convertirte en un portal por el que el amor presente en ti puede dar la bienvenida al amor que ha estado esperando en otro.

Sonranse unos a otros, sonre a tu esposa, sonre a tu marido, sonre a tus hijos, sonranse unos a otros no importa de quien se trate y eso ayudar a que crezca el amor entre ustedes. Madre Teresa

Quiero comenzar con la cosa ms importante que tengo que decir: La esencia de trabajar con otra persona es estar presente como un ser viviente. Y esto es afortunado porque si tuviramos que ser inteligentes o buenos o maduros o sabios, probablemente estaramos en problemas. Pero lo que importa no es eso. Lo que importa es ser un ser humano con otro ser humano para reconocer a la otra persona como otro ser humano. An si es un gato o un pjaro, si ests tratando de ayudar a un pjaro herido, la primera cosa que tienes que saber es que hay alguien ah y que tienes que esperar a que esa persona, el ser que est ah, est en contacto contigo. Eso me parece la cosa ms importante.

The Primacy of Human Presence por E. T. Gendlin

Ser un contexto para la sanacin.13 Experiencias faltantes14

Qu son: Cuando los conceptos mentales de una persona acerca de s misma o del mundo estn distorsionados, incompletos o sobregeneralizados, es a menudo porque le faltan las experiencias que le daran conceptos ms exactos. Si el mundo slo le ofrece trato rudo a una persona, entonces le falta la experiencia del cuidado suave y el concepto de ese trato en el mundo real es recibido con incredulidad. Falta la experiencia, en gran parte porque la idea de esa experiencia es increble o, de alguna otra manera, inaceptable. El dolor asociado con la falta de algo como el cuidado y la amabilidad se mantiene a raya impidiendo el sentimiento de anhelo por todo ello. El esfuerzo para mantener a raya esos sentimientos consume energa y, en el mejor de los casos, hace difciles las relaciones amorosas ordinarias. Hay dos tipos de experiencias faltantes: un tipo es muy general y es el de relaciones amorosas, seguras, cuidadosas; la clase de relaciones a las que la teora del apego se refiere como seguras. Me referir a ellas como la experiencia faltante general. El segundo tipo tiene muchas variaciones, cada una ms especfica y limitada, como que no crean en uno o que no le presten atencin.

13 De un taller de nivel 1, Bozeman, 2009. 14 Ms sobre esto en las pginas 42, 73, 79-81, y 109, del Training Handbook de febrero de 2009

Cmo funcionan en terapia: En este mtodo de terapia, trabajamos con ambos tipos. Para el tipo ms general, organizamos nuestra atencin y nuestro estado mental (pensamientos y sentimientos) para proporcionar al consultante precisamente esa experiencia relacional positiva. Llamo a este estado de la mente y del ser del terapeuta presencia amorosa. De manera que, a todo lo largo del proceso de terapia, el terapeuta ofrece y proporciona la experiencia faltante ms general. Frecuentemente esto ya tendr beneficios importantes. Este ofrecimiento es el contexto emocional para el proceso entero y este ofrecimiento es la mejor oportunidad de ayudar a los consultantes a entrar en el trabajo difcil de enfrentarse a su dolor emocional. En tanto que esta experiencia faltante general est trabajando en el fondo, el proceso va hacia adelante y busca signos del segundo tipo. Trabajamos deliberadamente para traer los conceptos y recuerdos aquellos que mantengan la visin de qu experiencias son posibles para el consultante a la conciencia del presente. Una vez que el material inconsciente est totalmente consciente, trabajamos para desafiar los conceptos y proporcionar una experiencia fuerte de lo que ha estado faltando por tanto tiempo. Experiencias fuertes como las que cambian la imagen del consultante de s mismo y del mundo. Es como si entrara la luz en un lugar oscuro. Si ests perdido en un lugar vasto, abierto, desconocido, en oscuridad total y un relmpago revela las montaas, en un momento sabes donde ests. De la misma manera, una experiencia de lo que era faltante e imposible revela que el mundo tiene esa posibilidad para ti. Te mostrar y t te sentirs aliviado y jubiloso de que lo que para ti faltaba y era irreal es muy real y presente y a la mano para que lo tengas. Muy a menudo, estas experiencias faltantes son parte de experiencias inconclusas y dolorosas. Estas se discuten en un artculo separado, con ese ttulo. El proceso de traer stas a la conciencia presente les permite completarse. Cuando las experiencias faltantes o inconclusas se hacen conscientes y se procesan, requieren el lugar y el tiempo para completarse e integrarse. Acerca del Toque de Consuelo15 Cuando haces un experimento efectivo, obtienes resultados. Obtienes un resultado til de una o dos clases: (1) un resultado emocional o (2) una introvisin [te das cuenta de algo significativo que no habas contemplado]. (A veces estn combinados). Si la emocin es intensa, tu camino es ofrecer y, si tu ofrecimiento es aceptado, proporcionar consuelo fsico.16 Esto significa que tocas a la persona en la espalda o en el brazo, a veces en la pierna. Tu ofrecimiento puede ser no verbal. La respuesta del consultante tambin. Slo si es claro que es aceptable para el consultante ser tocado. Con los nuevos consultantes, les doy una pgina de informacin sobre cmo van a ser las sesiones y la idea de tocar se discute ah. 15 Ms sobre esto en las pginas 5, 10 y 18, del Training Manual de febrero de 2009 16 Siempre debes pedir permiso. Lo mejor es tocar a los consultantes cuando ests grabando la sesin o cuando ests usando asistentes. La mayora de los psicoterapeutas han sido entrenados para evitar el contacto fsico con los consultantes. En California es ilegal. Puedes usar, si la tienes, una mano de trapo con mango.

Una clase especial de tocamiento comprende el hacerse cargo de algn aspecto de las conductas espontneas de manejo del consultante si l lo acepta. Si tienes permiso, ofreces apoyar los cambios espontneos de postura y las tensiones. Estas reacciones espontneas son maneras en que el inconsciente adaptativo maneja las experiencias emocionales que son intensas para el consultante. Lo que sea que el consultante haga para manejar sus emociones, apoyas eso. Por ejemplo, si el consultante se cubre la cara con las manos, puedes hacer que un asistente ponga sus manos sobre las del consultante. Si la conducta de manejo es muy fuerte por ejemplo, si todo el cuerpo del consultante se pone muy tenso, con los hombros levantados y hacia adentro y las piernas juntas y apretadas, el pecho y el plexo solar muy apretados entonces podras usar a tus asistentes para hacerse cargo de esas reas, apretando fuerte al consultante exactamente en esas reas. Cuando el estado del consultante expresa tristeza y dolor lo mejor es el abrazo suave. Es mientras los consultantes son consolados en silencio cuando estn llorando que llegan los recuerdos y la introvisin y ocurre espontneamente la integracin. Esto es lo que pienso sobre la sanacin prototpica. Imagnate esto: Una nia pequea, jugando cerca de su madre, corre y tropieza, se cae y se lastima la rodilla, se hace un raspn. Comienza a llorar y busca a su madre a su alrededor y corre hacia ella. Su madre la levanta y la abraza. La mam le dice Ay, te caste. Duele mucho, verdad? Con sus palabras y por medio de su voz amorosa y tranquilizante, le comunica su comprensin y empata. La nia llora un poco y se va calmando. Su madre la besa en la cabeza, le revisa el raspn, encuentra agua, humedece un pauelo y le limpia cuidadosamente el raspn. Mientras le limpia, le dice a veces, cuando corremos, si no tenemos cuidado, nos podemos caer y lastimarnos. Ahora, la nia ya est calmada y tiene cosas que pensar acerca de correr y caerse y tener cuidado. La nia piensa mientras las dos se sientan juntas, abrazndose. Despus de un rato, la nia est lista para jugar de nuevo. Cuando comienza a alejarse, corre un poco ms despacio que la vez pasada. Est teniendo ms cuidado. Su madre la mira y le dice Muy bien, despacito y con cuidado. Para la nia, el incidente termin. El dolor ha bajado. Ha tenido lugar un aprendizaje, en un contexto totalmente amoroso. Ha ocurrido una sanacin. Reducir el sufrimiento y confortar de esta manera es ms o menos la meta de todo nuestro trabajo.

Nirodha

El yoga es la contencin [nirodha] de las modificaciones de la mente. Patanjali (Sutras del Yoga)

La tercera noble verdad del Buda es Nirodha. Esta palabra significa confinar. Rodha significaba originalmente un bordo de tierra. Ni significa abajo. La imagen es estar abajo y detrs de un bordo de tierra o de rodear algo con un bordo de tierra a manera de confinarlo y protegerlo. Aqu estamos hablando acerca del arte de contener un fuego.17

En el segundo sutra de Patanjali, el que cit ms arriba, nirodha se traduce a menudo como inhibicin en vez de contencin. Algunas de las palabras que arroja un diccionario de sinnimos para inhibicin son: coercin, fuerza, compulsin, presin, restriccin, represin. El sentido de todas ellas es demasiado severo. Por otra parte, si tratas con la palabra contener, obtienes: abrazar, moderar, englobar, abarcar. Esto se aproxima mucho ms al sentido del nirodha de Patanjali. La idea bsica es la proteccin. La inhibicin suena mucho ms a opresin. Cuantas veces se ha ejercido la opresin explicndola como proteccin! Sin embargo, la contencin involucra al menos un poco de inhibicin; tal vez de una clase ms amable. La primera noble verdad afirma que la afliccin es inevitable. La segunda, que tendremos reacciones a las aflicciones cuando sucedan. La tercera, nirodha, afirma que cuando ocurren estas reacciones, debemos practicar la contencin de las pasiones que surjan. La cuarta noble verdad es sobre cmo se hace eso. El autoestudio por medio de la atencin plena es parte de ello. Entender y seguir los dictados de estas nobles verdades trae la libertad, la paz y la alegra. El mensaje es este: la afliccin es parte de la vida. No puedes escapar de ella sin escapar de la vida. La vida est llena de cosas que necesitamos contener. Balance es otra buena palabra, por ejemplo evitando que nuestra temperatura corporal se vaya a uno u otro extremo, haciendo algo para balancear los cambios inevitables del clima. El Budismo y el Yoga son disciplinas espirituales, prcticas que tienen el objetivo de tener experiencias de paz, amor y comprensin que cambien nuestra vida. Buda deca que al despertar, entendi todo. Estas experiencias, nos cuenta, llegan al contener las pasiones que surgen como reaccin ante el dolor inevitable y las prdidas que afligen a todos los seres sensibles. Est bien amar y sentir alegra; slo entrnate para estar listo para mantenerte ntegro, para contenerte cuando lleguen los cambios inevitables. Entrnate! Para el Buda, el camino de en medio es el correcto; el que se aleja de los extremos, en equilibrio entre el fuego y el hielo; una temperatura moderada y una vida moderada. Se requiere contener las pasiones. Simplemente mira los horrores que brotan de lo que no se contiene: el odio, por ejemplo, o la avaricia. Son stas reacciones a la afliccin? Yo creo que s. De qu otra manera se avivan estas cosas, sino es mediante el dolor? Despus de aos de prctica, despus de mirar y contener las pasiones y las imgenes, 17 Brazier, David. (2002). The Feeling Buddha: A Buddhist Psychology of Character, Adversity and Passion. New York, NY: Palgrave Macmillan

los recuerdos y los pensamientos que alimentan el fuego, despus de todo ello llega una alegra dulce y confiable. Como psicoterapeuta, una de mis tareas es ayudar a la gente a contener sin reprimir, cmo expresarse sin extremos. Yo ayudo a la gente a traer recuerdos dolorosos a su conciencia. Esto se acompaa a menudo de fuertes emociones. Cuando esto sucede, ayudo a la persona a experimentar esas emociones sin dejar que se apoderen por completo de sus mentes y sus cuerpos. Mantenerlos de esta manera ayuda a la persona a entenderlos y a encontrar el sentido que los hace surgir. Mediante esto, se hace posible la solucin y el cambio. Un proceso no contenido es probable que refuerce el patrn. La sanacin mental y emocional comienza al aceptar que el dolor emocional es parte de la vida; que necesita atencin y consuelo. El dolor, si le damos tiempo y atencin, nos dir qu hacer. La contencin est en el corazn de la relacin sanadora. Los consultantes aprenden a manejar su sufrimiento sin huir de l o sentirse abrumados. De esta manera obtienen comprensin y la libertad para cambiar. El consultante reprimido encuentra la manera de expresarse. El consultante que pierde el control encuentra la manera de calmarse. El mtodo, al igual que el ctuple sendero, es un camino hacia la paz. Comienza con aquello que es real en este momento y pasa en forma segura por las etapas que llevan a la liberacin y la comprensin. Ayudar a esto requiere algo ms que ser experto. Por supuesto que requiere experiencia pero tambin algo ms. Yo dira que requiere de una amistad inteligente; de la clase que comparte el dolor y que mantiene una sensacin espaciosa y segura en la que uno puede recordar y percibir sus sensaciones. Es fuerte y gentil como un amigo amoroso que nos acoge en sus brazos cuando nos invade un gran dolor. Nos da cobijo cuando damos salida a nuestra pena y nuestro dolor para luego hacer acopio de la fuerza que necesitamos para seguir adelante. Nos cobija de los vientos de la distraccin y nos mantiene a salvo de interrupciones y de la necesidad de mantener una imagen pblica. Nos protege como un bordo de tierra protege al fuego del viento.

EL CUERPO Y LA EXPERIENCIA EN LA PSICOTERAPIA

Experiencia y expresin corporal en la psicoterapia corporal18,19

Voy a hablar sobre dos aspectos de la Psicoterapia Corporal: En primer lugar, sobre el papel y la importancia de la expresin corporal y en segundo, sobre la experiencia. Los psicoterapeutas corporales dan mucha atencin a las expresiones corporales de sus consultantes. Esta focalizacin, entre otras cosas, da a la psicoterapia corporal el gran poder que tiene. Esto es as porque estas expresiones revelan y dan acceso a esas estructuras inconscientes20 que tienen los ms profundos efectos en la conducta y en la experiencia. Estas estructuras contienen los modelos que mantenemos acerca de quines somos, qu podemos esperar del mundo y, por consiguiente, cmo tenemos que comportarnos. Estos modelos se forman tempranamente en la vida, se vuelven habituales y funcionan, cmo todos los hbitos, fuera de la conciencia. Aunque sean inconscientes, tienen una fuerte influencia sobre la conciencia y, en gran medida, controlan lo que podemos y lo que no podemos experimentar. Entre las cosas que controlan estn esas expresiones corporales a las que les prestamos atencin. Voy a llamar a estas estructuras mentales internas creencias nucleares. Aunque no estn almacenadas como expresin de hechos, cmo lo estn las creencias normales, funcionan como tales. Los hbitos, que operan sin eleccin consciente, funcionan como si fueran la expresin de creencias y hay un valor en darles nombre a estas creencias. Para el cambio psicolgico profundo, tiene que cambiar se que, habitual e inconscientemente, pensamos que somos. Nuestras creencias inconscientes acerca de lo que podemos esperar del mundo tienen que cambiar. Tiene que suceder un cambio en las estructuras inconscientes que mantienen estas creencias nucleares. Consecuentemente, como terapeutas, necesitamos entender a nuestros consultantes a ese nivel. A pesar del hecho de que estas estructuras inconscientes tengan muchos componentes no verbales, tales como recuerdos, imgenes y hbitos de expresin; puede ser de mucha ayuda pensar en ellas como creencias. Esto ayuda al terapeuta a traducir las expresiones corporales en aseveraciones que pueden verse como suposiciones que no se han cuestionado. Aunque estn codificadas slo como hbitos emocionales y corporales, las estructuras inconscientes son, en efecto, la expresin de creencias. Funcionan como si la persona creyera en algo que hace que estos hbitos y reacciones emocionales sean apropiados para esa creencia. Este trabajo de observar las expresiones 18 Este artculo aparece en alemn en The Handbook of Body-Psychotherapy. Publicado en 2005. Halko Weiss y Gustl Marlock, Eds. Frankfurt: Hogrefe Verlag. 19 Algunos ejemplos seran la terapia Reichiana, la Bioenergtica, Hakomi, la Somtica Integrativa Hakomi, la Biodinmica, Core Energetics, Pesso Boyden System Psychomotor. Vea estos dos sitios web para mayor informacin: http://www.ahpweb.org/rowan_bibliography/chapter12.html y http://www.usabp.org/definition.htm 20 Estas estructuras inconscientes son conocidas por muchos nombres: sistemas contextuales, modelos mentales, esquemas cognitivos, etc. En este corto artculo, estar usando el trmino creencias nucleares y material nuclear.

corporales e inferir creencias nucleares a partir de ellas es una de las tareas ms importantes de un psicoterapeuta corporal. Debido a su naturaleza inconsciente y a su armazn emocional, las creencias nucleares se mantienen en forma activa y, cuando se las desafa, se defienden vigorosamente. Ya sean beneficiosas o perjudiciales, estn profundamente incrustadas. Han estado con nosotros por largo tiempo. Las aprendimos muy temprano en las interacciones con quienes nos tuvieron a su cuidado y otros seres cercanos. Son la esencia de nuestros patrones ms duraderos de ser y de hacer, el ncleo de nuestro carcter y el material del que estn hechos nuestras personalidades y estilos de vida. Ms que cualquiera otra cosa, ellas son lo que somos. Ellas dirigen al yo como a una orquesta. El efecto placebo es un buen ejemplo de la influencia poderosa que pueden tener las creencias. En ausencia de eventos emocionales poderosos o de prcticas especiales, las creencias nucleares permanecen sin ser examinadas. Paradjicamente, son al mismo tiempo muy influyentes y muy desconocidas.

Los peces sern los ltimos en descubrir el agua. Albert Einstein.

No slo es que no pensemos en ellas; es que pensamos por medio de ellas. Las vivimos!

El mundo completo de la experiencia pasada toma cuerpo en el presente en forma de actitudes de carcter. El carcter de una persona es la sumatoria de todas las experiencias pasadas El doctor no necesita reconstruir un momento traumtico; el momento traumtico contina existiendo en cada respiracin del paciente, en cada gesto que hace. 21

Para trabajar con las creencias nucleares de la forma menos violenta, primero debemos trabajar par establecer sentimientos de confianza y de seguridad. Como las creencias ms profundamente arraigadas son sobre nuestras identidades y nuestro lugar en el mundo, traerlas a la conciencia es tan fuerte como poner nuestras identidades personales en duda. Para aproximarse siquiera a este material, se necesita un alto nivel de confianza. Una vez que se ha establecido la seguridad,22 podemos proceder con el trabajo de traer el material nuclear del consultante a la conciencia, trabajando con las emociones que son parte de l y traduciendolo tanto como podamos en expresiones de hecho. Nombrndolas. En primer lugar, la experiencia es importante por dos razones: una, que la experiencia siempre es un ejemplo de las creencias en accin. La experiencia es organizada por hbitos y emociones que son aspectos de las estructuras internas. De manera que, al seguir con cuidado los signos externos de la experiencia presente, el terapeuta puede comenzar a discernir el material nuclear que influye en ella. En segundo lugar, el consultante no slo necesita entender su conducta como quieren que creamos las teoras del insight la persona necesita nuevas experiencias para sentir cmo sera un cambio de creencia. Hablar sobre nuestro pasado y sobre lo que nos gustara no sustituye la experiencia viva de un cambio. Y puede ayudarse a que sucedan estos cambios justo en la sesin de terapia, donde se los puede apoyar y reforzar.

21 Reich, Wilhelm, (1949) Character Analysis New York: Noonday Press. 22 Kurtz, R. (1990) Body-Centered Psychotherapy. Mendocino, CA, LifeRhythm.

Las experiencias evocadas como sentimientos, sensaciones y tensiones corporales, recuerdos e imgenes, no siempre son entendidos con claridad por los consultantes. Encontrar sus significados es una parte importante de cambiarlos. Al pensar en ellos como creencias y al verbalizarlos, avanzamos mucho hacia entenderlos. Para comenzar el trabajo de hacer consciente lo inconsciente, buscamos indicaciones de la influencia de estas creencias nucleares en las expresiones habituales, no verbales. Trabajamos para entender qu creencias estn siendo expresadas mediante estas conductas. Usamos tcnicas diseadas para evocar experiencias fuertes y claras que hagan obvias para el consultante las creencias organizadoras. Por ejemplo, a una persona con el hbito de nunca pedir ayuda y una creencia oculta de que uno nunca puede esperar esa ayuda, podemos pedirle simplemente que est tranquila y note lo que experimenta cuando le decimos no ests sola. Habiendo hecho cosas como sta cientos de veces, puedo decirte que casi siempre evoca una intensa experiencia de tristeza o de incredulidad. No todas las expresiones corporales son tiles para esto. Los gestos momentneos, de corta duracin y las expresiones faciales que aparecen y pasan en un momento, son ms tiles como indicadores de la experiencia presente. Este canal de comunicacin puede ser visto como un comentario no verbal sobre el estado presente de la persona y generalmente opera cerca de la conciencia.23 Estas expresiones son ellas mismas un lenguaje, un lenguaje que habla sobre los estados de nimo inmediatos, los sentimientos, actitudes y an ideas. (Si ustedes han visto a Marcel Marceau, saben lo efectivo que puede ser este lenguaje). La comunicacin animal es semejante.24 Es posible reconocer indicadores de creencias nucleares poniendo mucha atencin a las expresiones de corta duracin, pero las expresiones ms habituales y de largo plazo revelan las creencias ms antiguas y ms profundas.25 Al hacer contacto con estas creencias o al evocarlas, usualmente evocamos experiencias en los consultantes y estas experiencias y el trabajo que hacemos con ellas es lo que hace tan poderosa a la psicoterapia corporal. Aunque las expresiones corporales habituales como los patrones de habla, el tono de voz, las expresiones faciales caractersticas, los ademanes, posturas, tensiones y patrones de movimiento son todos indicadores confiables de las creencias nucleares, debe notarse sin embargo que no todas las creencias nucleares necesitan cambiar. Slo algunas de ellas causan sufrimiento innecesario; la gran mayora son muy tiles y benignas. Las que causan sufrimiento pueden tener una gran influencia y, usualmente, son fciles de reconocer. El dolor, el miedo, la desilusin, la tristeza, la frustracin, el enojo, la confusin, la sensacin de estar perdido, enajenado, todas pueden leerse en las expresiones corporales habituales. Cuando una de estas es prominente y persiste, esto sugiere que hay una creencia nuclear que necesita cambiar. Un ejemplo muy sencillo y

23 Un ejemplo de expresin corporal de corto plazo sera ste: una persona diciendo s, lo entiendo mientras que al mismo tiempo mantiene sus brazos hacia los lados, ligeramente abajo, con las manos abiertas y las palmas hacia arriba. Verbalmente est diciendo que entiende, en tanto que su cuerpo est haciendo el comentario pero no puedo hacer nada al respecto. Un ejemplo de una expresin de largo plazo sera el hbito de hablar siempre rpido y fuerte, como si esperara que los otros no fueran generosos con su atencin. 24 Charles Darwin escribi sobre esto en The Expression of the Emotions in Man and Animals [la expresin de las emociones en el hombre y los animales. 25 Ms adelante en este artculo se trata con ms detalle las creencias y las estructuras inconscientes.

comn es el hbito de no mirar nunca directamente al terapeuta. La cabeza est siempre en ngulo hacia el terapeuta y los ojos tienen una mirada un poco de soslayo para compensar. Esta clase de hbito sugiere temor y desconfianza y refleja la creencia de que uno debe protegerse de ser lastimado emocionalmente. Por supuesto que el dao ya sucedi y le ha dado forma al hbito que estamos observando.26 Una vez que ha sido reconocido, los mtodos psicolgicos profundos como Hakomi aplican tcnicas para hacer conscientes estas creencias.27 Debido a que no son fcilmente accesibles y a que son sistemas contextuales, estos modelos inconscientes son como prisiones. Traerlos a la conciencia es algo as como fugarse de la crcel. Debido a que estas creencias estn cargadas emocionalmente y a que son limitantes, anticuadas e inexactas, el proceso puede ser difcil y doloroso emocionalmente. La buena noticia es que hacerlas conscientes viene acompaado del descubrimiento de que las cadenas y barrotes de esta prisin son todas construcciones de la mente. Con esto llega el alivio y una sensacin de libertad. Y ah comienza el cambio verdadero. El siguiente es un corto resumen del mtodo.

El terapeuta mantiene un enfoque activo en las expresiones corporales del consultante tales como ademanes, postura, tono de voz, coloracin, expresin fa