la singular relación entre las tumbas kv43 y kv22

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La singular relación entre las tumbas KV43 y KV22 en el Valle de los Reyes Dentro de las tumbas reales excavadas en el Valle de los Reyes encontramos el par formado por la tumba de Tutmosis IV (KV43) y la tumba de Amenhotep III (KV22) cuyas singularidades históricas y constructivas pueden representar un ejemplo que quizás se pueda extrapolar al resto de tumbas de la din. XVIII. A diferencia de las tumbas de eje girado que les precedieron (KV34 y KV35), las pertenecientes a Tutmosis IV y Amenhotep III muestran un triple eje girado que busca una precisa orientación geográfica que sea coincidente con la orientación simbólica interior que permite el renacimiento del monarca. Podemos entender que en sus construcciones influyeron los acontecimientos político-religiosos de ambos reinados y que por lo tanto, el giro que toma la justificación monárquica hacia las teologías solares está reflejado de una forma o de otra en estas tumbas. Ambas tumbas son iniciadas por el mismo monarca, Tutmosis IV, inaugurando con la KV22 el uso del valle occidental que sólo será utilizado por los llamados reyes del periodo Amarna. Sin embargo, Tutmosis IV será finalmente enterrado en la primera de las tumbas (KV43), lo que abre dos posibilidades apuntadas por distintos autores; que la tumba KV22 se construyese para ser usada por su heredero, o que el propio monarca deseara un cambio de tumba que reflejase el nuevo giro ideológico de la monarquía. La inclusión en la iconografía de la tumba KV22 del ka de Tutmosis IV acompañando y guiando a Amenhotep III 1 ha sido interpretado como apoyo a la primera de las opciones, aunque también se puede interpretar como una deferencia de Amenhotep III hacia su padre tras el aprovechamiento de la obra y de la simbología que su arquitectura implica. Sólo un estudio de las singularidades constructivas de ambas tumbas podrá distinguir entre las dos opciones. La tumba KV43 alojó finalmente el sarcófago y el cuerpo de Tutmosis IV, aunque contrariamente a sus antecesores y sucesores, la cámara funeraria (J) no llegó a ser enlucida ni decorada con el libro de la Amduat, necesario para facilitar la resurrección del monarca 2 . Una serie de pegotes de masilla utilizados para lanzar plomadas se distribuyen a lo largo de las paredes para asegurar su correcta verticalidad 3 , lo que parece indicar la intención inicial de aplicar un enlucido sobre ellas. Sin embargo, y a diferencia de sus antecesoras, se presentan decoradas diversas paredes de la cámara del pozo (E) y de la antecámara (I) con escenas muy simples de guía y recepción del difunto 4 . La cámara del pozo (E) sólo presenta la decoración completa en la pared Este, además de un friso jeker que rodea toda la cámara y del techo estrellado 5 . Desde una esquina de la pared Sur se inicia otra escena que originalmente se extendería sobre el muro de sellado de la puerta de acceso a la cámara de carros (F) 6 , lo que implica que esta cámara se enluce y decora tras el entierro del monarca. De parecida forma, en la antecámara (I) se decora el techo y las paredes 1 Nut recibe a Amenhotep III que es acompañado por el ka de Tutmosis IV. Pared derecha (Este simbólico) de la cámara del pozo E (TMP 16452 y Piankoff & Hornung 1961, pl. XXIII). 2 La orientación simbólica sólo puede ser interpretada por la disposición de los ladrillos mágicos y por la disposición del sarcófago. En cuanto a los conocimientos mágicos para transitar por el mundo subterráneo, pudieron localizarse en escritos incluidos con la momia. 3 Ver TMP16265. 4 Sólo se presenta la nominación de los personajes representados, con una iconografía muy sencilla y repetitiva, lo que puede indicar falta de tiempo para una ejecución más completa. 5 Ver TMP y Carter & Newberry 1904, xxx-xxxiii. 6 Hoy desaparecido, originalmente representando a Anubis recibiendo a Tutmosis IV. Aunque la figura de la divinidad aparece completa, aún se puede ver la pierna y la mano del monarca que tuvo que ocupar el muro de sellado (ver TMP16273 y op.cit. Carter & Newberry 1904, xxx).

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Estudio de las similitudes y cronologías de las tumbas reales de Tutmosis IV y Amenhotep III.

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Page 1: La singular relación entre las tumbas KV43 y KV22

La singular relación entre las tumbas KV43 y KV22 en el

Valle de los Reyes Dentro de las tumbas reales excavadas en el Valle de los Reyes encontramos el par formado por la tumba de Tutmosis IV (KV43) y la tumba de Amenhotep III (KV22) cuyas singularidades históricas y constructivas pueden representar un ejemplo que quizás se pueda extrapolar al resto de tumbas de la din. XVIII. A diferencia de las tumbas de eje girado que les precedieron (KV34 y KV35), las pertenecientes a Tutmosis IV y Amenhotep III muestran un triple eje girado que busca una precisa orientación geográfica que sea coincidente con la orientación simbólica interior que permite el renacimiento del monarca. Podemos entender que en sus construcciones influyeron los acontecimientos político-religiosos de ambos reinados y que por lo tanto, el giro que toma la justificación monárquica hacia las teologías solares está reflejado de una forma o de otra en estas tumbas. Ambas tumbas son iniciadas por el mismo monarca, Tutmosis IV, inaugurando con la KV22 el uso del valle occidental que sólo será utilizado por los llamados reyes del periodo Amarna. Sin embargo, Tutmosis IV será finalmente enterrado en la primera de las tumbas (KV43), lo que abre dos posibilidades apuntadas por distintos autores; que la tumba KV22 se construyese para ser usada por su heredero, o que el propio monarca deseara un cambio de tumba que reflejase el nuevo giro ideológico de la monarquía. La inclusión en la iconografía de la tumba KV22 del ka de Tutmosis IV acompañando y guiando a Amenhotep III1 ha sido interpretado como apoyo a la primera de las opciones, aunque también se puede interpretar como una deferencia de Amenhotep III hacia su padre tras el aprovechamiento de la obra y de la simbología que su arquitectura implica. Sólo un estudio de las singularidades constructivas de ambas tumbas podrá distinguir entre las dos opciones. La tumba KV43 alojó finalmente el sarcófago y el cuerpo de Tutmosis IV, aunque contrariamente a sus antecesores y sucesores, la cámara funeraria (J) no llegó a ser enlucida ni decorada con el libro de la Amduat, necesario para facilitar la resurrección del monarca2. Una serie de pegotes de masilla utilizados para lanzar plomadas se distribuyen a lo largo de las paredes para asegurar su correcta verticalidad3, lo que parece indicar la intención inicial de aplicar un enlucido sobre ellas. Sin embargo, y a diferencia de sus antecesoras, se presentan decoradas diversas paredes de la cámara del pozo (E) y de la antecámara (I) con escenas muy simples de guía y recepción del difunto4. La cámara del pozo (E) sólo presenta la decoración completa en la pared Este, además de un friso jeker que rodea toda la cámara y del techo estrellado5. Desde una esquina de la pared Sur se inicia otra escena que originalmente se extendería sobre el muro de sellado de la puerta de acceso a la cámara de carros (F)

6, lo que implica que esta cámara se enluce y decora tras el entierro del monarca. De parecida forma, en la antecámara (I) se decora el techo y las paredes

1 Nut recibe a Amenhotep III que es acompañado por el ka de Tutmosis IV. Pared derecha (Este simbólico) de la cámara del pozo E (TMP 16452 y Piankoff & Hornung 1961, pl. XXIII). 2 La orientación simbólica sólo puede ser interpretada por la disposición de los ladrillos mágicos y por la disposición del sarcófago. En cuanto a los conocimientos mágicos para transitar por el mundo subterráneo, pudieron localizarse en escritos incluidos con la momia. 3 Ver TMP16265. 4 Sólo se presenta la nominación de los personajes representados, con una iconografía muy sencilla y repetitiva, lo que puede indicar falta de tiempo para una ejecución más completa. 5 Ver TMP y Carter & Newberry 1904, xxx-xxxiii. 6 Hoy desaparecido, originalmente representando a Anubis recibiendo a Tutmosis IV. Aunque la figura de la divinidad aparece completa, aún se puede ver la pierna y la mano del monarca que tuvo que ocupar el muro de sellado (ver TMP16273 y op.cit. Carter & Newberry 1904, xxx).

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Norte y Este con el mismo estilo que la cámara del pozo, sellándose el acceso a la cámara funeraria con un muro sin decorar que en una posterior restauración se pigmentó de azul. Estas circunstancias pueden implicar que el trabajo en la KV43 se abandona tras la excavación de la cámara funeraria7 (J), volviéndose para realizar una rápida decoración tras la muerte y entierro de Tutmosis IV. Entre ambas obras sólo se realizará una rectificación más en la estructura de la tumba; el rebaje de las jambas de las puertas, demasiado estrechas para permitir el paso del sarcófago que alojará definitivamente el cuerpo del monarca. Más adelante, en el octavo año de reinado de Horemheb, oficiales de la necrópolis8 llevarán a cabo una restauración del enterramiento que pudo ser saqueado durante la crisis de Amarna.

Como ya se ha comentado, el sarcófago de cuarcita introducido en la KV43 planteó una serie de problemas estructurales, ya que la mayoría de las jambas de las puertas9 que comunican las diversas estancias de la tumba tuvieron que ser pulcramente rebajadas para permitir el paso de un sarcófago excesivamente ancho10. Aunque puede atribuirse el fallo a un error en la excavación o en el planteamiento de la tumba, un estudio de la evolución de la amplitud de las puertas en las tumbas de eje doblado nos indica que la anchura de paso de la KV43 es la esperada con la evolución lineal11 que se aprecia durante la din. XVIII (ver fig.

1). No pasa lo mismo con el sarcófago12, que incrementa bruscamente su anchura con respecto a la de sus predecesores pareciendo corresponder a una tumba más avanzada en estructura y en fecha. Vemos entonces que el error es producido por el sarcófago, pudiéndose entonces desvincular sarcófago y tumba e interpretar que el sarcófago finalmente introducido en la KV43 estaba esculpido en su origen para ocupar otra tumba de mayor amplitud de paso, como puede ser el caso de la KV22. No hay datos que nos permitan saber en que año de reinado se abandona la construcción de la KV43, a excepción de la interpretación que se haga de la aparición de los vasos canopos del príncipe Amenemhat y de la princesa Tinetamón13 hallados en esta tumba. Amenemhat fallece joven, antes del séptimo año de reinado de su padre14, por lo que la cámara funeraria debió de excavarse antes de esa fecha sí este príncipe fue enterrado originalmente en ella. Por otra parte, la ausencia de otro material funerario genérico asignado a ambos príncipes parece indicar que

7 El resto de la tumba está totalmente excavada, a excepción de la esquina Noreste del suelo de la cámara del pozo (TMP). 8 Grafito en la pared Sur de la antecámara (op.cit. Carter & Newberry 1904, xxxiii-iv). 9 Puertas C, D, E, G,H,I y J (TMP). 10 1,69m de ancho por 3m de largo (TMP), de cuarcita amarilla pintada de rojo imitando granito. 11 En el eje de ordenadas se ha representado la anchura media de las puertas. 12 Dado que actualmente el sarcófago de la tumba KV22 se encuentra desaparecido, su anchura se ha tomado igual a la de su tapa, restaurada por la expedición de la Universidad de Waseda. 13 Hallados por H. Carter y con números 46037-9 y 46040 en su publicación (ibid.,6-8). 14 El príncipe Amenemhat aparece representado en la tumba TT64, fechada a finales del reinado de Tutmosis IV (Vandersleyen 1995, 350) y perteneciente al Tutor del hijo del rey Amenhotep Heqerneheh, junto a sus hermanos Amenhotep (III) y Aajeperure. Ya no aparece junto a sus hermanos en la estela de Konosso (conmemorativa de una campaña en Nubia), fechada en el 7º año, 3er mes de Peret, 3er día (Cabrol 2000, 32, 74 y n.52 y op.cit. Vandersleyen 1995, 350).

Relación ancho Puerta - ancho Sarcófago

0,50

0,70

0,90

1,10

1,30

1,50

1,70

1,90

2,10

KV20 KV38 KV34 KV35 KV43ori KV43rect KV22

Tumbas

Anc

ho (

m)

Puerta

Sarcófago

KV43ori: Anchura original de las puertas KV43rect: Anchura de las puertas con las jambas rebajadas.

fig. 1 Cuadro evolutivo de la amplitud de las puertas en las tumbas reales de la din. XVIII

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pudieron ser transferidos a la KV43 en un realojamiento posterior, quizás el señalado durante el reinado de Horemheb15. La autoría del inicio de la excavación de la tumba KV22 recae en Tutmosis IV en base a los restos hallados en los seis16 depósitos de fundación que flanquean la entrada de la tumba, apoyándose además con la mencionada presencia del ka de Tutmosis IV acompañando a su hijo en la cámara del pozo (E). Estos elementos dejan clara la implicación de Tutmosis IV en la fundación de la tumba y en la elección de su posición en el valle occidental, aunque desgraciadamente no hay ninguna documentación que permita saber que proporción de la KV22 se excavó bajo su mandato. La mayor observación de la filosofía solar en el mecanismo de resurrección real parece provocar una mayor amplitud de los corredores17 de la tumba KV22, resaltando así el recorrido realizado por la divinidad solar. Mientras que los pasillos B, C y G de la tumba de Tutmosis IV presentan unas secciones de 3,8m2, 4,4m2 y 4,4m2, se amplían a 6,7m2, 7,2m2 y 6,3m2 en la tumba de Amenhotep III (ver fig. 2). A pesar de este cambio ideológico, la similitud estructural se mantiene si se observa la longitud del eje longitudinal, en donde los corredores B y C presentan similar longitud que sus homólogos de la KV4318. Las proporciones de la cámara del pozo (E) y la cámara de carros (F) también se mantienen casi idénticas19 a las de la tumba KV43. Sin embargo, las diferencias empiezan a hacerse patentes a partir de la cámara F: las proporciones de ambas antecámaras (I) son diferentes20, al igual que las proporciones de las cámaras funerarias (J)

21. También el corredor G, más corto que el equivalente de Tutmosis IV22, parece sugerir un recorte en su diseño original con el fin de acelerar las obras23. Otra importante diferencia constructiva en la tumba de Amenhotep III es la introducción de un conjunto independiente para la inclusión de su Gran Esposa Real Tiy en la tumba real (Jc y Jcc), con un claro marcador en el dintel de su entrada que muestra la relación entre éste y la cámara funeraria real24. Su hija25 Sitamón, que alcanzará el título de Gran Esposa Real, también disfrutará de otro conjunto sepulcral (Jb y Jbb) realizado a partir de la ampliación de la cámara anexa Jb original26.

15 La sola presencia de los vasos canopos es típica de un enterramiento posterior, pudiendo ser la KV27 o KV21 su lugar de descanso original. Estas tumbas presentan un estilo de enterramiento real familiar, fechándose la primera bajo los reinados de Tutmosis IV o Amenhotep III y en la din. XVIII la segunda. 16 Recientemente la Universidad de Waseda halló un séptimo pozo sin ninguna nominación. 17 Diferencia constructiva que se seguirá en los corredores de las tumbas reales posteriores a KV22, incluso en la KV25 (sección=5,7m2) que puede ser contemporánea de Amenhotep III. 18 Corredor B: 11m en KV43 y 11,2m en KV22. Corredor C: 8,2m en KV43 y 8,4m en KV22. Los ángulos de inclinación son de unos 16,65º en la tumba de Tutmosis IV y de 17,4º en la de Amenhotep III (las medidas de ambas tumbas han sido extraídas del TMP). 19 Cámara del Pozo E: relación 1:1 y prof. de 8m en la tumba KV43 y relación 1:1,2 y prof. de 7,6m en la tumba KV22. Planta de la cámara F: 6,2x10,2 en la tumba KV43 y de 6,2x10,3m en la tumba KV22 (relación 1:1,6), ambas con la misma disposición y distancia entre columnas. 20 De 1:1,6 en el caso de Tutmosis IV y de 1:1,3 en el caso de Amenhotep III. 21 Aunque ambas cámaras incluyen seis pilares y una depresión en la sección final en donde se aloja el sarcófago, la relación de la planta en la tumba de Tutmosis IV es de 1:1,7 mientras que en la tumba de Amenhotep III es de 1:1,9. 22 De 8,2m en el caso de Tutmosis III y de 5,47m en el caso de Amenhotep III. La inclinación se mantiene en unos 17º para ambos casos. 23 Este corredor no dispone de jambas que abran paso a las escaleras H. 24 El marcador referido es un nicho para ladrillo mágico que se situó a la izquierda del sentido de la marcha. En la cámara funeraria J y en las cámaras de almacenaje Ja, Jb, Jd y Je el sentido de marcha queda marcado como entrando a ellas, mientras que en la cámara Jc de la reina Tiy lo marca como saliendo hacia la cámara sepulcral del rey (Kondo 1995, 28). La inclusión de la Gran Esposa Real Tiy en la tumba real también se da en el caso del sepulcro de su hijo en Tell el-Amarna (TA26). 25 La filiación de Sitamón está en discusión, pudiendo ser también la hermana de Amenhotep III. 26 Según se desprende de las marcas de excavación en paredes y techo (TMP).

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A la vista de las diferencias estructurales comentadas se puede interpretar que la tumba de Amenhotep III pudo ser excavada durante el reinado de Tutmosis IV hasta la cámara de carros (F)

27, continuando el trabajo su nuevo propietario. Durante la primera fiesta Sed de Amenhotep III, celebrada en el segundo mes de shemu de su trigésimo año de reinado, se producen las divinizaciones de Amenhotep III y de su Gran Esposa Real Tiy, atestiguadas por la construcción de sus respectivos templos en Soleb y Sodeinga. El ascenso de Sitamón a Gran Esposa Real parece producirse también poco después del primer jubileo28 del rey. Por lo tanto, podemos fechar la conclusión de la cámara funeraria en su formato estándar en una fecha anterior al trigésimo año de reinado de Amenhotep III, alcanzando la estructura que ahora presenta poco después de esa fecha. En cuanto a la decoración de las cámaras más exteriores, la enfatización de la juventud29, así como el uso de una iconografía solar-funeraria en la representación del rey en la antecámara (I) y en la cámara del pozo (E)

30, permite fechar sin equívoco la decoración de estas estancias también tras el primer jubileo de Amenhotep III, en su cuarta década de reinado31. Los restos de decoración indican que, como en el caso de la KV43, los muros de sellado de la antecámara32 y de la cámara del pozo33 fueron decorados tras el entierro del rey, por lo que quizás la totalidad de la decoración de ambas estancias se realizase a título póstumo. Los últimos elementos decorativos se encuentran en la cámara funeraria, siguiendo el estilo iniciado por sus antecesores. Bajo un techo azul y estrellado, se distribuyen las doce horas de la Amduat con el clásico estilo cursivo34 además de los seis pilares que enmarcan el camino hacia el sarcófago y que presentan la recepción y guía del rey con un estilo que es coincidente con el

27 La imagen del ka divinizado de Tutmosis IV en la pared Sur de la cámara E acompañando la entrada en occidente de Amenhotep III parece apoyar que esa sección fue preparada por Tutmosis IV, o al menos, que la tumba pudo estar muy avanzada (Reeves & Wilkinson 1998, 113). 28Amenhotep hijo de Hapu, que vive al menos hasta el año 34 (Vandersleyen 1995, 395), presenta el título de Administrador del dominio de la hija del rey, esposa del rey, Sitamón a partir del año 30 (ibid.). También puede aparecer vinculada al primer jubileo, esta vez como hija real, en el templo de Amenhotep III divinizado de Soleb (Carbol 2000, 145-6), pero no aparece en otro conjunto monumental en ese templo junto a dos hermanas menores y referenciadas como hijas del rey (en base a Cailliaud 1826 v.II, pl.14). 29 Como se puede apreciar por ejemplo en los murales originales de la KV22, ahora en el museo del Louvre, N521A, N521-B y E 13100. 30 Op.cit. Piankoff & Hornung 1961, pl. XXIII-XXV. 31 Johnson 1998, 81-5. 32 Como se puede apreciar en op.cit. Piankoff & Hornung 1961, pl. XXV (1), en donde las figuras están recortadas por el dintel de acceso a la cámara J. 33 Op.cit. Johnson 1998, 71 n.50. 34 Aunque en este caso más evolucionado que en de sus antecesores, ya que aquí se representan los rasgos faciales completos en lugar de simulados con líneas.

fig. 2 Plantas de KV43 (arriba) y KV22 (abajo), con la

identificación del TMP

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de la cámaras del pozo (E) y la antecámara (I), pudiéndose fechar por tanto en la última década del reinado de Amenhotep III. Los dinteles de las puertas de acceso a las cámaras funerarias de las reinas se mantienen bajo la decoración de los textos de la Amduat, dentro del nivel de pigmentación oscura que representa el renacimiento ctónico del rey35, por lo que no permite definir si la decoración de la Amduat fue anterior o posterior a la excavación de estas cámaras. En cuanto al interior de estas cámaras, sólo la perteneciente a la reina Tiy (Jc) presenta enlucidas las paredes y el pilar con un inicio de decoración de friso jeker36.

Pocos elementos de entre la decoración de la cámara funeraria pueden servir de comparación para poder determinar la fecha en que se realiza la decoración de las paredes con la Amduat. Sólo el ornamento superior de éstas y de las columnas con frisos jeker ofrece un elemento común para comparar. Los frisos que adornan la cámara del pozo y la antecámara son muy similares, singularizándose por la representación convexa de la parte inferior del jeker � (ver fig. 3)

37. Por otro lado, tanto los jeker de las columnas como los que componen el friso que corona la representación de la Amduat en las paredes se muestran más estilizados y con la parte inferior cóncava, más semejantes a los utilizados en las tumbas de sus predecesores. Estos dos tipos de frisos pueden señalar distintas órdenes o periodos de trabajo y por lo tanto, que la decoración de la cámara funeraria se ejecute en diferente momento que la decoración de las cámaras más externas. La escasa documentación hallada sobre el entorno laboral de la tumba KV22 se centra en la cuarta década38 del reinado de Amenhotep III, pudiendo quizás relacionarse con los dos periodos correspondientes a la ampliación y a la decoración de la cámara funeraria. Como resumen, podemos sugerir que las obras en la tumba KV22 iniciadas por Tutmosis IV se interrumpen hasta una fecha próxima al primer jubileo de Amenhotep III, que las retoma tarde y al parecer con cierta celeridad39. Las razones de la tardanza en continuar la obra de su padre en la KV22 pueden estar quizás relacionadas con las razones que impulsó a este monarca a construir un Templo de Millones de Años en la zona menfita40. Una vez pasado el primer jubileo, se adaptarían las cámaras de las reinas41, procediendo más tarde a la decoración de la cámara funeraria42. Finalmente, y a título póstumo, se sellaría la tumba a medida que se realiza la decoración de las cámaras más exteriores. 35 Op.cit. Piankoff & Hornung 1961, pl. XXVI (1). A diferencia de la puerta de las cámaras auxiliares Ja, Jd y Je que se encuentran a unos 40cm del suelo, las puertas de las cámaras Jb y Jc se hallan al nivel del suelo (TMP). 36 TMP. 37 Digitalización a partir de las imágenes del TMP y de op.cit. Piankoff & Hornung 1961. 38 Etiquetas de vino en la tumba anexa KVA correspondientes a los años 32 y 37 (Reeves & Wilkinson 1998, 113). 39 En base al acortamiento del corredor G. Esta reanudación de las obras puede estar vinculada al espectacular programa constructivo que se impulsa por esas fechas en las dos orillas tebanas. 40 Op.cit. Vandersleyen 1995, 366 y Urk. IV, 1680-1. "El templo de Nebmaatre unido a Ptah", construido y administrado por el intendente Amenhotep llamado Huy, relacionado familiarmente con el visir Ramose (TT55). Amenhotep llamado Huy lo designa en su estatua (Urk.IV 1793-1801) como una fundación de Millones de Años con estatua cultual situada en la zona inundable, como su homólogo tebano. Depende del dominio real y suministra vino a Malqatta desde el año 26 al 37 (op.cit. Cabrol 2000, l 254-5). Posiblemente iniciado en su segundo año de reinado, su construcción puede extenderse hasta el año 30 (op.cit. Johnson 1998, 65 n.10). 41 ¿Año 32? (en base a las etiquetas de vino halladas en la KVA). 42 ¿Año 37? (en base a las etiquetas de vino halladas en la KVA). Dado que Amenhotep III reina hasta su trigésimo octavo año, esta fecha podría explicar el estado inconcluso de la decoración en la cámara de la reina Tiy (Jc).

fig. 3 Comparativa de distintos frisos jeker

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Aunque no se dispone de la parte inferior del sarcófago, los trabajos de la Universidad de Waseda han conseguido reconstruir la tapa de granito que lo cerraba. Con esta tapa se inaugura el uso del granito rojo en los sarcófagos reales43 del Imperio Nuevo en lugar de la cuarcita, a menudo enrojecida con pinturas44. Sin embargo en este caso, la ausencia de la cuba del sarcófago nos impide saber si se talló en el mismo material que la tapa o si seguía la costumbre de sus predecesores de usar cuarcita amarilla45.

También resulta novedosa la representación de la diosa Nut alada en el interior de la tapa, que presenta unas medidas de 1,33x3m que podemos entender idénticas a las de la cuba del sarcófago. La anchura que presenta asegura que no se producirían problemas durante su introducción en la cámara funeraria a través de unas puertas con una anchura media de 1,95m46. Su longitud es coincidente con la del sarcófago de Tutmosis IV (KV43), siendo

éste par de sarcófagos los únicos que coinciden en envergadura47 de entre los de la dinastía XVIII, además de ser los de mayor tamaño hasta el reinado de Siptah en la din. XIX. Vemos en el gráfico adjunto (fig. 4) que la evolución de la anchura de las puertas y de la anchura de los sarcófagos en reinados consecutivos se mantiene lineal y proporcionada48 si consideramos que el sarcófago correspondiente a la tapa hallada en la tumba KV22 pertenece al diseño original de la tumba KV43, y si el sarcófago hallado en la tumba KV43 pertenece al diseño original de la tumba KV22. Si así fuese, y vistas las singulares proporciones que adopta la nueva tumba y su inusual localización, se demostraría que Tutmosis IV abandona su tumba perfectamente diseñada y acabada (KV43) en beneficio de otra (KV22) como respuesta a un cambio de ideología vinculada al estamento monárquico. Esta solución también implica que Tutmosis IV no inicia la excavación de la tumba KV22 con la intención de ofrecérsela a su heredero, cosa que por otra parte sería un caso único en el valle.

43 Seguirá el sarcófago de Tutanjamón y los sarcófagos de Ajenatón (rosa y gris), Ay, Horemheb, Rameses I, Setos II o Siptah (los de Setos II, Rameses II y Mineptah se tallaron en calcita). 44 Caso de los sarcófagos de Tutmosis I, Hatshepsut, Tutmosis III, Amenhotep II y Tutmosis IV. 45 Parecido al caso de Tutanjamón, con cuba de cuarcita amarilla y tapa de granito rojo (pintado de amarillo). 46 +0,09m –0,32m. 47 Se desconoce la longitud de los sarcófagos de Rameses II, Mineptah y Setos II, siendo el resto de longitud inferior. Así, el sarcófago de Tutmosis I mide 2,49m, el de Hatshepsut 2,45m, el de Tutmosis III 2,35m, el de Amenhotep II 2,47m, el de Ajenatón 2,88m, el de Tutanjamón 2,75m, el de Ay 2,96m, el de Horemheb 2,72m, el de Rameses I 2,75m y el de Setos I 2,84m (medidas del TMP). 48 Directamente proporcionales en un 99% (Pearson=0,99).

Relación Propuesta

0,50

0,70

0,90

1,10

1,30

1,50

1,70

1,90

2,10

KV20 KV38 KV34 KV35 KV43ori KV22

Tumbas

Anc

ho (

m)

Puerta

Sarcófago

fig. 4 Cuadro evolutivo de la amplitud de las puertas en las tumbas reales de la din. XVIII considerando el sarcófago de KV22 como original de

KV43 y viceversa.

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Referencias bibliográficas: - Cabrol, A., Amenhotep III le magnifique, Mónaco 2000. - Cailliaud, F., Voyage à Méroé, au Fleuve Blanc, au-delà de Fazoql, dans le Midi du

Royaume de Sennâr, à Syouah et dans Cinq Autres Oasis: Fait dans les Années 1819, 1820, 1821 et 1822, text. vol. I-IV, lám. vol. I-II, París 1826.

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