jung el gnostico - hoeller stephan

Upload: voces-delespacio

Post on 11-Jul-2015

11.199 views

Category:

Documents


13 download

TRANSCRIPT

  • 5/11/2018 Jung El Gnostico - Hoeller Stephan

    1/300

  • 5/11/2018 Jung El Gnostico - Hoeller Stephan

    2/300

    JUNGELGNOSTICOy

    LOS SIETE SERM.ONESA LOS MUERTOS

    STEPHAN HOELLER

    H

  • 5/11/2018 Jung El Gnostico - Hoeller Stephan

    3/300

    Colecci6n PSICOLOGIA TRASCENDENTEDirigida por Luis MaggiTitulo original: The Gnostic Jung

    Traducci6n: Servanda de Hagenllustraci6n de portada: Jan SemmelDiseiio: Bruno d'Aquinoe 1982 Stephan Hoeller 1990 para todas las ediciones en lengua castellana: Heptada Ediciones, S. A.San Isidro, 23. 28220 Majadahonda (Madrid)I.S.B.N.: 84-7892-021-8Dep6sito Legal: M-44664 1990Fotocomposici6n: Angel Gallardo, MadridImpresi6n y encuademaci6n: Talleres Graficos Peiialara, Fuenlabrada (Madrid)lmpreso en EspaiiaPrinted in Spain

  • 5/11/2018 Jung El Gnostico - Hoeller Stephan

    4/300

    A Kristofer, un verdadero hijo de H erm es,que trajo el media de fa Conjunciona m uchos, incluyendo al autor.

  • 5/11/2018 Jung El Gnostico - Hoeller Stephan

    5/300

  • 5/11/2018 Jung El Gnostico - Hoeller Stephan

    6/300

    Prefacio

    La esencia de los comentarios sobre los Siete Serm ones alos Muertos fue pronunciada por el autor en una clase depsicologfa de la religion en el Instituto para el Estudio de laReligion en Oriente y Occidente, de la Universidad de Cali-fornia en Los Angeles en el trimestre de la primavera de1977. El Prologo, Premonicion de un Mundo Ineludible deSombras, fue publicado originalmente en Perspectivas Psi-cologicas (del Instituto C. G. Jung, Los Angeles), en el mimerode primavera de 1982.El autor esta profundamente agradecido a quienes pres-taron ayuda para la realizacion del libro:La Academia de Edi.cacion Creativa, y su presidente, eldr. James C. Ingerbretser , cuya subvencion hizo posible suaparicion.El Cfrculo Ourobouro. de Beverly Hills, California, y susgenerosos anfitriones, el sr. Arthur Malvin y Sra.Irene Malvin, que especialmente creo y dono su dibujode Abraxas para este trabajo.El profesor John Algeo, quien, alleer el manuscrito, en-riquecio su calidad con valiosas sugerencias.

  • 5/11/2018 Jung El Gnostico - Hoeller Stephan

    7/300

  • 5/11/2018 Jung El Gnostico - Hoeller Stephan

    8/300

    Prologo

    Premonicion de un mundo ineludible de sombrasEra el afio 1949. Una espesa capa de nieve oscurecfa lasilueta de los esplendidos edificios barrocos de la antiguaciudad de Innsbruck. La venerable capital de la tierra delTirol parecia despoblada por la sombria fuerza del inviernoalpino. La ancha avenida nombrada en honor a la emperatrizMaria Teresa, matriarca amada de los ya desaparecidos es-tados unidos de Europa Oriental, estaba vacia de sus paseantes

    vespertinos, que habian huido de los elementos buscando re-fugio donde podian. El refugio, especialmente el que brindabacalor, era escaso. La falta de materiales de calefacci6n privabaa la mayoria de las personas y los edificios de calor. Inclusivelas hist6ricas camaras de la famosa Universidad de Innsbruckalbergaban a tiritantes masas de abrigados estudiantes, amon-tonados alrededor de profesores cuya erudicion era superadasolo por su incomodidad. Los verduleros ofrecian desanima-damente su escasa mercancia de verduras heladas, mientraslos espahies marroquies y los soldados de infanteria senega-leses del ejercito frances de ocupacion maldecian el dia enque sus generales habian decidido apostarlos en esta tierrade nieve y hielo. Sin duda era feliz aquel hombre, mujer 0nino que podia cobijarse en una habitacion caldeada en undia como este,Por una pequefia calle lateral de la zona central de laciudad, dos figuras con abrigo, sombrero y bufanda se dirigianapresuradamente a un sitio bendecido por la temperatura, el

  • 5/11/2018 Jung El Gnostico - Hoeller Stephan

    9/300

    12 STE PH AN H OE LL ERsalon publico de lectura mantenido para el enriquecimientointelectual -e incidentalmente, 0no tanto, para la comodidadffsica de la poblacion-> por el Servicio de Informacion delos Estados Unidos de America. AUi, en medio de libros yperiodicos impresos en varios idiom as, todos con los idealesde los mas ricos y generosos de los cuatro poderes ocupacio-nales, hombres cansados y con frio que se refugiaban delinviemo tiroles se reunfan con gran frecuencia. Las dos figurasa las que se hace referencia aquf eran refugiados no solo delos elementos, sino de otras formas, mas duraderas, de ad-versidad. Eran refugiados de su cercana patria, Hungrfa, quehabfan venido a residir, temporalmente, al pais hermano, lapatria imperial austriaca de los diversos pueblos de Europaoriental. El mayor de los dos compatriotas tenia una apa-riencia singularmente notable y unas credenciales igualmentenotables en los campos de la erudicion, la religion y la vidapublica. El profesor 1. era un sacerdote de la Iglesia catolicaromana, y hasta hacfa poco, un miembro de la Orden Jesuita,que abandono con la aprobacion especial de la Iglesia aunqueretuvo su condicion de sacerdote. Durante muchos afios, sele reconocio como una de las lumbreras sobresalientes delmundo academico de su pais y como el profesor mas jovenque haya ocupado un lugar en la universidad hungara, Era elautor de varios libros de filosoffa, y un reconocido expertoen existencialismo, que conocfa personalmente a Heidegger,Jaspers y Jean Paul Sartre. En 1945, su nombre fue uno delos nominados para el principal arzobispado de Hungria, quesuponfa elliderazgo de la Iglesia de toda la nacion, pero fuepasado por alto en favor del heroico y tragico prelado cardenalMindszenty, cuyo encarcelamiento escandalizaria al mundoentero durante los afios siguientes. En ese momento, el pro-fesor 1. vivfa tranquilo, practicamente retirado en Austria:una figura austera y misteriosa, conocida solo por unos pocosde sus compatriotas y que tenia contacto personal con menosaun, Uno de los escogidos con quien conversaba regularmenteera su actual compafiero en el paseo invemal, un joven yprecoz estudiante de filosoffa que aspiraba a entrar en el

  • 5/11/2018 Jung El Gnostico - Hoeller Stephan

    10/300

    PROLOGO 13sacerdocio. Este joven -que no es otro que el autor del pre-sente tratado- habfa atraido extrafiamente la atenci6n delsolitario profesor, quien parecia divertirse con su gran atrac-ci6n hacia la religi6n, junto con un pensamiento no conven-cional y una extravagancia juvenil.Me gustas, mijoven Bar6n -Ie dijo cuando se conocie-ron-, en otra epoca te hubieras convertido en un verdaderohereje y hubieras sido quemado por los dominicos. Estasprometedoras frases de bienvenida fueron el principio de unaamistad marcada por reuniones casi diarias en el sal6n delectura de la biblioteca estadounidense y, en raras ocasionesde prosperidad momentanea, en un bar tomando cafe y cofiacfrances.=-Quizas haya una sorpresa para ti esta tarde -dijo elprofesor a su compafiero.- Estamos a punto de recibir un extrafio libro que segu-ramente te interesara.-lUn extrafio libro? lCual es su contenido y quien es suautor?

    -Me han dicho que es acerca de tus viejos amigos, losherejes gn6sticos, de quienes hablas con tanto entusiasmo.Ademas, ha sido escrito por otro hombre en el que te interesas,el formidable dr. Jung.-lEI psic6logo suizo que vive al otro lado de las mon-tafias y que es famoso por ser un verdadero mago en la an-tigua tradici6n de brujas y alquimistas? -pregunt6 el jovencon entusiasmo.-El mismo. El Hexenmeister (mago) de ZUrich en per-sona.Despues de que el profesor anunciara esta intrigante no-ticia, los dos congelados viajeros entraron en el sa16nde lee-tura y, tras quitarse los abrigos cubiertos de nieve, se instalaronc6modamente en una mesa grande y vacia en un extremo dela sala. La joven bibliotecaria austriaca hizo una respetuosareverencia al Hochwurd ig es Herr (reverendo caballero) comoacostumbraba a hacerlo, mientras depositaba varias publi-caciones del material habitual de lectura del profesor delante

  • 5/11/2018 Jung El Gnostico - Hoeller Stephan

    11/300

    14 S TE PH AN H OE LL ERde el, Los dos compafieros se introdujeron en una nube etereade bienestar tranquilo y erudito aumentado en gran medidapor el agradable calor del salon, generosamente caldeadogracias a los fondos del plan Marshall. Paso una hora.

    La puerta que se abrfa y los excitados susurros de la bi-bliotecaria anunciaron la llegada del esperado portador demara villas hereticas y psicologicas, que =-segun el profe-sor 1.-debia unirseles en su grato refugio. Se les acerco unindividuo pequefio, poco atractivo, cuyas dos caracterfsticasinusuales, un enorme maletfn abultado y un cuello de clerigoque asomaba por su raido abrigo negro, pronto revelaronque no era otro que el padre Z., un sacerdote hungaro itine-rante cuya ocupacion Ie suponia frecuentes viajes por Austria,Suiza e Italia.

    EI visitante se acerco a la mesa silenciosamente y consolemnidad se incline ante el profesor.-Laudetur Jesus Christus (Alabado sea Jesucristo) -dijo,utilizando el saludo tradicional del dero monastico de Hun-grfa.-In aeternum.Amen (Por siempre. Amen) -respondieronel profesor y su compafiero con propiedad, mientras el visi-tante se instalaba en silencio en un sitio vacio de la mesaocupada por sus compatriotas. En voz baja, aunque discre-tamente audible, tuvo lugar una conversacion de considerableduracion. AI principio, y comprensiblemente, hablaron acercade asuntos cercanos e importantes para sus angustiados co-razones. Se hablo de los movimientos mas recientes de ladictadura comunista en Hungia, asi como de los ultimos arres-tos de sacerdotes y monjas, los juicios a miembros del altodero, la captura y encarcelamiento de desafortunados amigosy familiares. Las inconfesadas esperanzas de la comunidadexiliada; la posible caida de la tiranfa apoyada por los rusosa causa de presiones politic as por parte de las naciones occi-dentales; las esperanzas del Vaticano; las vacilaciones de lospoliticos del mundo entero; la promesa de los numerososrefugiados en campos y otras instalaciones a 10 largo de todala Europa occidental: esta y otras cuestiones relacionadas

  • 5/11/2018 Jung El Gnostico - Hoeller Stephan

    12/300

    PROLOGO 15

    fueron temas de discusion cargados de entrecejos fruncidosy miradas afligidas. Por fin, una vez reducidas las urgenciasy contestadas las ansiosas preguntas, llego el momenta dehacerse cargo del tan esperado asunto.-Amigo mio -dijo el profesor, revelando un portentosocaracter intencional en su voz-, esta manana me hablo deun pequefio libro del doctor Jung. i,Lo ha traido?Lenta y cuidadosamente, el padre Z. abrio su maletfn ycomenzo a buscar en sus atestados compartimentos. Despuesde algunos minutos, extrajo un volumen mas bien pequefio y10 deposito sobre la mesa donde tanto el profesor como sujoven amigo pudieran verlo con facilidad. El profesor abrioel volumen y 10 giro en un angulo donde la luz pudiera ilu-minar las paginas de la manera mas eficaz. Los tres obser-varon con extasiada atencion. Ante elIos descansaba un pe-quefio libro de costosa encuadernacion, impreso con carac-teres altamente decorativos sobre un papel artfstico queimitaba un pergamino. Las letras iniciales de los breves ca-pitulos imitaban nada menos que elaboradas iniciales de ma-nuscritos medievales, y el texto de cada pagina estaba ence-rrado dentro de un marco que dejaba amplios margenes, endonde los numeros de las paginas eran romanos. El texto dellibro estaba en aleman, como se podia apreciar con una mi-rada gracias a los antiguos caracteres gotico-germanicos, ob-soletos desde hacfa tiempo. A pesar de que el texto estaba enaleman, ellibro tenia un titulo latino, elaborado y artfstica-mente estampado en la primera pagina. Rezaba:

    VII Sermones ad MortuosEl autor estaba identificado en una linea debajo del titulocomo Basilides, y el sitio donde 10 habfa escrito como Ale-jandria, la Ciudad donde se unen Oriente y Occidente.El joven se sonrojo y se puso de pie como si 10 hubieran

    golpeado. Trabajosamente y con la respiracion entrecortada,pregunto al sacerdote:

  • 5/11/2018 Jung El Gnostico - Hoeller Stephan

    13/300

    16 ST EPH AN H OE LL ER-El profesor J. nos dijo, y usted parece estar de acuerdo,que el dr. Jung escribio ellibro. Entonces, i,por que lleva el

    nombre de Basflides, el famoso hereje gnostico de Alejandria,en Egipto? i,Esta seguro de tener ellibro correcto?-Si, Baron, es ellibro correcto, los S iete Sermones a losMuertos. Deje que le relate su historia rapidamente, para quecomprenda. Fue escrito por el dr. Carl Jung en 1916 peronunca se publico. Esta es una copia excepcional de la edicion

    que Jung imprimio personalmente para el uso de algunos desus amigos mas Intimos. De hecho, Jung entrego este volumenhace tiempo a un doctor en Holanda, quien, antes de morir,10 entrego a su vez a un prelado italiano que estaba visitandouna iglesia holandesa y que se interesaba mucho por la psi-cologfa, El viejo monsignore, que ahora esta en el Vaticano,me 10 dio por razones muy similares. Como usted debe dehaber ofdo, el dr. Jung va mas alla de un interes normal porlas ensefianzas de los antiguos gnosticos; por ello, utilize elnombre de Basflides como un nom de p lume aquf en particu-lar '.-No es el unico que siente fascinacion por los gnosticos-dijo con una sonrisa el profesor 1.-. El joven Baron esbastante heretico. Pero echemos otro vistazo al libro.El texto del volumen era, con toda certeza, extravagantey fascinante, tal como 10 promena la pagina del titulo. Elprimer capitulo, llamado Sermo 1, comenzaba coil esteominoso verso en aleman:

    D ie toten kam en zuriick von Jerusalem , w o sie nicht fan-den, w as sie suchten. S ie begehrten bei m ir E inlass und ver-lang ten bei m ir Lehre und so lehrte ich sie:H oret: ich beg inne beim N ichts, das nichts ist dasselbew ie die f id le. In der U nendlichkeit is voll so g ut w ie leer. D asN ichts ist leer und volL Ihr konnt auch ebenso gut etw as

    IVer Apendice I, Nota del Traductor del aleman aI Ingles.

  • 5/11/2018 Jung El Gnostico - Hoeller Stephan

    14/300

    PROLOGO 17

    anderes vom N ichts sag en, z . b. es sei w eiss oer sehw arz oderes sei nicht, oder es sei. E in unendliches wad ew igesE ig en schaften, w eil es aile E ing eschaften h at ...

    Los muertos volvieron de Jerusalen, donde no encon-traron 10 que estaban buscando. Pidieron que se les per-mitiera verme y exigieron que yo les ensefiara, y asi lesensefie:Oidme: comienzo con la Nada. La Nada es 10 mismoque la plenitud. En el infinito estado, la plenitud es 10mismo que la vacuidad. La Nada esta a la vez llena yvacia. Se pueden tambien expresar algunas otras cosasacerca de la Nada, a saber, que es blanca 0 que es negra,o que existe 0 que no existe. Aquello que es infinito yeterno no tiene cualidades porque las tiene todas...

    Continuaron leyendo el primer capitulo, 0 serm6n, hastaque el joven se dirigi6 al profesor:-i,Que es toda esta oscuridad? Reconozco la palabraPleroma, el Plenum sobre el que escribieron los antiguos gn6s-ticos, y algunas otras ideas que he visto expresadas por losPadres que escribieron acerca, 0mas bien en contra de losgn6sticos. jNo puedo comprender este supuesto serm6n!El profesor replic6 enseguida:-Es una descripci6n de 10 Absoluto, 10 indescriptible.No es extrafio que el dr. Jung tenga dificultades con ello.i,Recuerdas la oscuridad mfstica anunciada por Dionisio elareopagita? i,0 la vaguedad poetic a de las descripciones deMeister Eckhart? Sin duda, Jung se enfrent6 a una labor conla que estos antiguos misticos tambien se habfan tropezado.jContimla leyendo!Una hoja con el encabezamiento Sermo ill atrajo luegosu atenci6n:

  • 5/11/2018 Jung El Gnostico - Hoeller Stephan

    15/300

    18 ST EPH AN H OEL LERLosmuertos se acercaron comoniebladesde suspanta-nos y gritaron: Hablanos mas acerca del Dios altfsimo.Abraxas es el Dios al que es diffcil conocer. Su poderes el mayor pues el hombre no 10 percibe por completo. Elhombre ve el summum bonum del sol,y tambien el infinum

    malum del demonio, pero no ve a Abraxas, pues es la vidaindefinible misma, que es la madre tanto del bien comodel mal.

    EI profesor 1 . interrumpio la lectura del texto.-Oh, sf, Abraxas. EI soberano gnostico universal, cuyacabeza es como la de un gallo. Cuanto mas coloridos seriannuestros cuadros y estatuas sagradas si hubieramos conser-vado alguna de estas deidades gnosticas. Con seguridad, unose cansa hasta de la imagen de Nuestro Sefior Jesucristo,especialmente aquf en Austria, donde siempre esta recubiertode pan de oro. Sin embargo, no importa. Jung realmente halogrado algo con su descripcion del antiguo dios-gallo. Debodecir que es una poesia grandiosa, como poco. jEscuchadesto!Y continuo leyendo, con voz firme, aunque suave:

    El es la plenitud, que se une a la vacuidad.Es la sagrada union;Es el amor y la matanza de el;Es el Sagrado y su traidor.Es la mas brillante luz del dfa y la mas oscura nochede locura.Verlo significa la ceguera;Conocerlo es la enfermedad;Adorarlo es la muerte;Temerle es la sabiduria;No resistirsele significa la liberacion.

  • 5/11/2018 Jung El Gnostico - Hoeller Stephan

    16/300

    PROLOGO 19Tras un breve intervalo de silencio, comenz6 una vezmas a leer en voz alta:

    As! es el terrible Abraxas.Es el ser manifiesto mas poderoso, y en ella creaci6nsiente temor de sf misma.Es la protesta revelada de la creaci6n contra elPleroma y su nada.Es el terror del hijo, que el siente contra su madre.Es el amor de la madre por su hijo.Es el deleite de la Tierra y la crueldad del Cielo.EI hombre se paraliza ante su rostro.Antes que el no existen preguntas ni respuestas.Es la vida de la creaci6n.Es la actividad de la diferenciaci6n.Es el amor del hombre.Es el habla del hombre.Es tanto el brillo como la sombra oscura del hombre.Es la realidad engafiosa,

    -Este Jung es realmente un poeta -observ6 el sacerdoteportador de grandes maletines y libros raros-. Este pasajees digno de Goethe, 0por 10menos de nuestro muy filos6ficopoeta hungaro Endre Ady, que llam6 a Dios terrible tibur6n.- Tibur6n 0 gallo, es practicamente 10mismo. Dios esterror y oscuridad tanto como amor y luz. De otra manera,lc6mo podemos explicar Auschwitz y las camaras de torturade Siberia y Budapest, dirigidas por Stalin y sus servidores?El profesor J. meneo la cabeza, y su largo pelo blancovolvi6 a arreglarse en descuidadas ondas sobre su frente.-Sin embargo, lacaso estos terribles hechos no son obradel demonio mas que de Dios? -pregunt6 el padre Z.-En absoluto, mi amigo. El doctor suizo dice con raz6nen este pequefio libro que hay incontables dioses y demonios.

  • 5/11/2018 Jung El Gnostico - Hoeller Stephan

    17/300

    20 S TE PH AN H OE LL ERE ineidentalmente, i,que es un demonio, en todo easo? LaIglesia 10 llama un angel caido, y 10 es. Sin embargo, i,dedonde cayo? Del reino de grandeza de Dios, 0del Pleromao plenitud, eomo se le llama aqui. Caer signifiea deseender,bajar de 10 alto. Entonees, los demonios son seres que handeseendido de Dios a los niveles mas bajos de la creacion,llamados infiernos. Algunos creen que la palabra diabolosen realidad significa dios pequeiio. Estos pequefios dioses ma-los, en efecto, pueden ser responsables de fomentar algunoserrores, pero la responsabilidad final de todo el bien y el maldebe recaer sobre Dios. Esa es precisamente la razon por laque el Abraxas de Jung es una imagen mas precisa de Diosque la que nosotros tenemos cuando seguimos a santo Tomasy a nuestros teologos, que dicen que el mal es solo la ausenciade bien. No es simplemente que a los campos de muertealemanes y rusos les falte el bien; es que son malvados.Llego el momenta para que el mas joven de los tres re-prendiera cautelosamente a su mayor:-Pareee, profesor, que esta vez es usted quien habla comoun hereje gnostico, Seguramente un dios que al mismo tiempoes malo y bueno se convertiria en un objeto muy poco satis-factorio para la adoracion de la gente.-Si por gente te refieres a las masas de creyentes,entonces, por supuesto, tienes razon, Sin embargo, tus amigosgnosticos de los dias pasados hubieran dieho que el conoci-miento de Dios es mas import ante que su adoracion, y paraconocer aDios tambien se debe conocer el mal.

    - Estoy de acuerdo con usted en que esto es 10 que losgnosticos hubieran dicho, pero i,que dice usted, profesor?- Me pregunto si 10 que yo diga es tan sensato comonecesario. Entonces, no digo nada.-Lo que hubiera dicho un jesuita -murmuro el padreZ., arrepintiendose enseguida de su impulsiva declaracion.-Sea como fuere, los jesuitas han sido famosos por so-brevivir cuando la mayoria sucumbe.El profesor dirigio nuevamente su atencion al libro.EI examen general del libro estaba llegando a su fin. E1

  • 5/11/2018 Jung El Gnostico - Hoeller Stephan

    18/300

    PROLOGO 21

    ultimo capitulo se expuso a la mirada de los tres lectores.Titulado Sermo VII y con el mimero de hoja XVII enromanos, comenzaba con una gran inicial ilustrada, una letraD gotica:

    D es nachts aber kam en die Toten w ieder m it kliig licherg ebiirde und sp rachen: noch eines, w ir verg assen davon zureden, lehre uns vom M e nschen. ..Por la noche los muertos volvieron nuevamente, y entrequejas dijeron: Otra cosa debemos saber, puesto que ha-biamos olvidado discutirla: ensefianos acerca del hom-bre.

    El hombre es una puerta por la que entramos desde elmundo exterior de los dioses, demonios y almas, al mundointerior; desde el mundo grande al mundo mas pequefio .El hombre es pequefio e insignificante; enseguida Ie deja-mos atras, y asi entramos en el espacio infinito, en el mi-crocosmos, en la etemidad interior.En la distancia inconmensurable brilla una estrella so-litaria en el cenit. Este es el Dios unico de esta solitariaestrella. Este es su mundo, su Pleroma, su divinidad.

    En este mundo, el hombre es el Abraxas, que crea ydevora a su propio mundo.Esta estrella es el Dios y el objetivo del hombre.Este es el Dios que le guia: en el, el hombre encuentradescanso.A el se dirige el largo viaje del alma despues de lamuerte; en el brillan todas las cosas que, de otra manera,podrian mantener al hombre alejado del gran mundo conel brillo de una gran luz.A este, el hombre deberta orar.Esta oraci6n acrecienta la luz de la estrella.

  • 5/11/2018 Jung El Gnostico - Hoeller Stephan

    19/300

    22 ST EPH AN H OEL LER

    Esta oracion construye un puente por encima de lamuerte.Aumenta la vida del microcosmos; cuando el mundoextemo se enfria, esta estrella aiin ilumina.No existe nada que pueda separar al hombre de supropio Dios, si el hombre puede simplemente desviar sumirada del espectaculo llameante de Abraxas.El hombre aqui, Dios allf, Debilidad e insignificanciaaqui, poder creativo etemo, alli,Aqui no hay mas que oscuridad y frio humedo. Alli,todo es Sol pleno.Despues de oir esto, los muertos permanecieron en si-lencio y se elevaron como el humo sobre el fuego delpastor, que cuida a su rebaiio durante la noche.

    El texto terminaba con cuatro lineas crueles tituladas Ana-gramma, que claramente suponian un intento por parte deldoctor Jung de disimular algun mensaje secreto y personal,pero que posiblemente tambien contenian una secuencia rna-gica de formulas gnosticas similares a las encontradas confrecuencia en antiguas fuentes egipcias.

    Los tres lectores se miraron unos a otros de una manerauniformemente significativa. Un frio espfritu de temor reve-rente y de asombro parecia haber aparecido en la mesa. Hastael dueiio dellibro, que conocia su contenido hacfa ya variosaiios, estaba visiblemente afectado. Ninguno hablo durantevarios minutos.

    El profesor 1. rompio el silencio:-El dr. Jung es un vidente y un mistico ala manera de

    los magos del Renacimiento. Hace tiempo ya que me di cuen-ta de que hay mucho mas en el de 10 que puede percibir elojo academico. Contrariamente a Freud, no es temeroso delos oscuros misterios del espfritu. Entre sus amigos y segui-dores, hay personas de afiliaciones e intereses no convencio-

  • 5/11/2018 Jung El Gnostico - Hoeller Stephan

    20/300

    PROLOGO 23nales y peculiares. He ofdo que uno de sus alum nos italianos fes un teosofo, mientras que un seguidor ingles, que tambien 'es doctor, se convirtio en devoto de un mago ruso-. Debe dehaber, tam bien, algun contacto entre el y el grupo fund adopor el mistico austriaco Rudolf Steiner, cuya sede centralesta en Suiza. La mayoria de nosotros sabe que el dr. Jungestaba fascinado por los fenomenos del espiritismo y que Jobtuvo su doctorado con una tesis sobre fenomenos ocultos.Algunos creen que es un pagano espiritual, mientras que otros l10 acusan de mostrar una tendencia hacia el Cristianismo.Este pequefio libro podna demostrar que estas dos opinionesson incorrectas, puesto que muestra que es una especie degnostico, 10 cualle dejaria fuera de las categorias de paganoy cristiano. Estoy realmente contento de haber lefdo este no-table documento, y le estoy agradecido, padre.

    El sacerdote de modales suaves casi no habfa tenido tiem-po de aceptar los comentarios del profesor cuando su jovencompafiero intervino en la con versa cion con mas ardor delque era habitual en el:- Y0 tam bien le estoy verdaderamente agradecido, masalla de toda medida y palabras. Sin embargo, estoy muy pre-ocupado, puesto que recuerdo que usted dijo que este libroes muy diffcil de conseguir. Ojala pudiera memorizar su con-tenido para retener cada palabra. Si existe un libro que quisieratener, es este.

    -Puede que no sea necesario que pongas tu memoria aprueba de esa manera, Baron, pues no me ire de Innsbruckhasta manana por la noche, y quizas puedas copiar estaspocas hojas sin mucha dificultad antes de mi partida. Solo tepido que me devuelvas ellibro antes de manana a las cincode la tarde. Estoy alojado en el monasterio franciscano, nolejos de aquf,

    2 Ver Roberto Assagioli en The Unfin ish ed A uto bio gra ph y o f A lice B aile y(Nueva York: Lucis Publishing Company, 1951) Y Psychological Comm entarieson the Teach ings o f Gu rd jieff a nd Ousp en sk y (Londres: Vincent and Stewart,1964).

  • 5/11/2018 Jung El Gnostico - Hoeller Stephan

    21/300

    24 ST EPH AN H OEL LE REntrego ellibro a su feliz compatriota, quien, con manostemblorosas, 10 agarro ansiosamente y con cuidado 10 guardo

    en el bolsillo intemo de su abrigo.-Lo copiare esta noche. Podra tenerlo tan temprano co-mo quiera, incluso antes de la misa matutina.Afuera, habia cafdo la temprana oscuridad del inviemo.EI salon de lectura estaba practicamente vacfo, y la biblio-tecaria obviamente se disponfa a cerrar las puertas. Despuesde desearse mutuamente buena suerte, los tres compafierosse pusieron sus abrigos y demas vestimentas contra el frio ysalieron del establecimiento. La tarde invemal los recibiocomo acostumbra y, tras un pequefio paseo, se separaronpara dirigirse cada uno a sus respectivos barrios. Un dfa no-table habfa llegado a su fin.

    Aunque no del todo. Uno de ellos realmente no estabapreparado para ver terminar el dia. Ningun caballero de lamesa redonda hubiera podido llevar el Santo Grial con masveneracion y ardiente deseo de 10 que el estudiante hungarollevaba aquella copia de los S iete S ermones a los M uertos deJung. El frio y ellento tranvia, la caminata desde la paradahasta su barrio en una zona alejada de la ciudad, las prepa-raciones freneticas de cantidades adecuadas de papel y unaresistente pluma estilografica, llegaron a convertirse en parteintegrante de un viaje a un sitio donde toda una vida detrabajo y expectativa se veria recompensada y coronada. Lacocina, lugar sagrado de operaciones culinarias y alquimicas,se convirtio rapidamente en un aposento noctumo, y el en-tusiasta escriba se sumergio con absoluta dedicacion en unade las actividades mas magicas de su joven vida.Hoja tras hoja de escritura cuidadosamente copiada co-menzaron a yacer sobre la amplia mesa de la cocina, preciadaposesion de la duefia de la casa, que tenia la costumbre deutilizarla para innumerables cosas utiles, desde cepillar a superro por la manana, preparar y servir varias comidas y plan-char ropa, hasta jugar a las cartas por la noche, con los naipesmedievales de Tarock, una variante de la baraja magic a co-nocida como Tarot. Sin embargo, esta venerable mesa nun-

  • 5/11/2018 Jung El Gnostico - Hoeller Stephan

    22/300

    PROLOGO 25

    ca habfa presenciado mayor esmero y mas ferviente devo-cion.

    Pasada la medianoche termino el trabajo. Pronto llego elmomenta de levantarse y correr al monasterio de los francis-canos. Llego cuando estes estaban en misa, y una vez acaba-da esta, entrego el precioso volumen al algo tambaleante pa-dre Z. en la puerta de la sacristfa,EI trabajo estaba terminado, pero el misterio acababa decomenzar. Un mundo ineludible de sombras habia penetradoen el mundo luminoso de la vida cotidiana.

    EI tiempo paso y el mundo cambio, pero los Siete Sermonesa los M uertos siguio siendo un objeto maravilloso y de graninteres para su antiguo copista. Trece aiios mas tarde, en lalejana California, los muertos regresaron a su entusiastaadmirador una vez mas. No vinieron de Jerusalen sino deZUrich, y aparecieron en un libro con el titulo ErinnerungenT raume Gedanken (Recu erdos, S ueiio s, P en sam ien tos) de C.G. lung. Con una copia alemana en pruebas que Ie habfaobsequiado un amigo suizo, nuestro protagonista enseguidadescubrio que el apendice de este libro contenfa el texto enaleman de los misteriosos Sermones. La pagina que introducfalos Sermones contenia una ominosa nota al pie: Para serpublicado solo en la edicion en aleman. Una vez mas, elentusiasmo del escriba se renovo considerablemente. A sumente llego con fuerza la sugerencia de que el texto alemandeberfa ser accesible para muchas buenas personas que sololeian ingles, pero a quienes no se podia privar de esta expe-riencia solo por esa razon, Ahora tenia otra tarea, menosromantica, pero aun ast, intrigante, que consistfa en la tra-duccion al ingles a partir del aleman original. Esta traduccionllego a imprimirse privadamente y se distribuyo entre un nu-mere escogido de amigos personales, practicamente comola edicion original en aleman, distribuida por el propio lung.Para entonces, por supuesto, el sabio anciano de ZUrich yKiisnacht habfa abandonado el escenario de su carrera en la

  • 5/11/2018 Jung El Gnostico - Hoeller Stephan

    23/300

    26 ST EPH AN H OE LL ER

    Tierra. Su personalidad, aun sujeta a la especulacion y a loschismes oscuros, ya habia emergido con mayor claridad queantes. La psicologia junguiana lentamente estaba ganandofuerza fuera del mundo de habla germana, y los interesesespirituales no convencionales de su fundador ya estabandocumentados en parte gracias a la aparicion de sus grandesobras acerca de la alquimia, y a su ataque gnostico a la teo-logfa convencional en su R esp uesta a Job .Sin embargo, la traduccion de los S ie te Sermones sigui6siendo un texto que estudiarfa un pequefio mimero de personascuyos intereses se encontraban en las areas del Gnosticismoy la psicologfa de lung. Durante algunos afios, fue la unicatraducci6n, siendo desconocida fuera de cfrculos especiali-zados. Otro pequefio trabajo estaba concluido, pero el misteriopermanecfa y el mundo de sombras crecfa aun mas.

    De nuevo el tiempo paso y el mundo cambio aun masque antes. La decada de los sesenta y la mayor parte de la delos setenta pasaron, y con ellas una era de turbulencia y granactividad espiritual. Se perdio la guerra de Vietnam (la iinicaguerra perdida por los Estados Unidos de America), pero laguerra contra la conciencia trivial y la escasa espiritualidadde la cultura occidental moderna estaba practicamente ga-nada. La cruzada de los nifios, que muchos se sintieron sa-tisfechos de Hamar la Era de Acuario, como las cruzadasanteriores, Iibero temporalmente el Santo Sepu1cro, dondedescansaba el poder salvador del espfritu. Los candidos nifiosde la nueva era levantaron la piedra y proclamaron que habfasurgido una grandeza inefable. Una bestia turbulenta aunquegloriosa, alguna vez vaticinada por el poeta Yeats, se acercabacon indolencia a la ciudad de Belen, para nacer alli, Lostrovadores cantaban: Los tiempos estan cambiando y, enefecto, asf fue. Las alas de los angeles estan en el aire.En estos tiempos, el dr. lung fue mas reconocido quenunca. Aunque estaba ffsicamente ausente, su presencia sesinti6 cada vez mas afio tras afio. Los psic6logos y psiquiatras

  • 5/11/2018 Jung El Gnostico - Hoeller Stephan

    24/300

    PROLOGO 27

    continuaron con las ensefianzas de Freud y Skinner, delei-tandose en la libido y en los laberintos de ratas neur6ticas,pero el mundo de la literatura, la mitologia, la poesia y el deuna cultura propia de un mundo cada vez menos ilustrado,comenzaron a ser mas conscientes de Jung. Jung se habiavuelto mas importante que su terapia, mas importante aunque su psicologia analitica y, curiosamente, esta circunstanciaparecia perfectamente justa y correcta.Junto con el renacimiento de Jung y de otras figuras ytemas antes arcanos, el mundo tambien presenci6 un modestodespertar del interes por el Gnosticismo, la antigua disciplinaespiritual con la que Jung se aline6 en los S ie te S ermone s.Codices que habian permanecido enterrados durante muchotiempo salieron a la luz en Egipto, 10 cual atrajo la atenci6nde muchos estudiosos y de aiin mas legos imaginativos ycreativos. Palabras y nombres tales como P leroma , Abra xa sy Basilides ya no resultaban totalmente extrafios para un con-siderable numero de personas perspicaces y creativas. Habiallegado la hora de Jung y de los gnosticos. Habia llegado lahora de los S iete Sermones a los M uertos.Asf fue como los muertos regresaron una vez mas deJerusalen y exigieron que se les prestara atenci6n. Treintaafios habian sido su tributo entre los agentes del pequefiodrama original, que habia sido iitil para establecer el vinculoentre los Sermones y la persona que una vez los habia copiadocon devoci6n, sin imaginar cual seria su uso en el futuro. Sedijo que su coraz6n estaba destrozado por el desastroso fra-caso dellevantamiento patriotico de su pueblo en 1956, queobserve con ansiedad desde su exilio en Munich, Baviera. EIpadre Z., el portador del libro, habfa muerto de la mismamanera en que habia vivido; discreta y modestamente, siendoun humilde trabajador en una vifia extrafia. El exilio continuo,reflejando quizas ese exilio mayor al que se referian los an-tiguos gn6sticos: el exilio de las chispas de luz de la totalidadde la luz. Lejos de los Alpes tiroleses donde se encontr6 conellos por prim era vez , el otrora joven copistacontinuo sin-tiendose acechado por los muertos y por los Sermones que

  • 5/11/2018 Jung El Gnostico - Hoeller Stephan

    25/300

    28 S TE PHAN HOELLERBasilides el Sabio habfa pronunciado para ellos. El alientode compafieros nuevos en un mundo nuevo habfa avivado lallama encendida en una tarde invemal hacfa mucho tiempoy lejos de allf. Entonces, tres decadas despues de los aconte-cimientos originales que aquf se refieren, la gnosis del dr.lung, tal como se propone en sus Siete Sermones , se encuentradisponible para un cfrculo mas amplio.En todas las eras de la historia human a ha habido indi-viduos con una calidad especial de sabidurfa, de gnosis. Carllung era uno de ellos. Esta sabidurfa, como el siempre ex-presaba, no podia encontrarse en las tradiciones disponiblesde la ciencia y la religion de su epoca, 0de cualquier epoca.Solo habfa una forma, una opcion; lung debio pasar por laexperiencia original. Esta experiencia de gnosis, la Urefahrung(experiencia arcaica u original), como ella llamaba, 1 0 con-dujo al mundo de sombras de Basilides y los muertos inqui-sitivos. Aun cuando vivfa en elluminoso mundo de sus pri-meros afios, nunca pudo huir de una condicion que mas tardedescribio como la premonicion de un mundo ineludible desombras. Esta premonicion ciertamente no es una experienciaunica de lung; mas bien es compartida hasta cierto puntopor toda la humanidad. La presencia, en todas las personas,de una sensacion de este mundo de sombras pone en evidenciala naturaleza gnostic a de la vocacion humana. A pesar de suirracionalidad e improbabilidad, el elemento trascendente deuna gnosis interior esta inscrito indeleblemente en el corazonhumano; todas las trivialidades del mundo cotidiano comoresultado de la desatencion y la subsiguiente ignorancia sonincapaces de extinguir su recuerdo. La negacion de la gnosisno hace mas que afirmar, calladamente, su poder. Como ex-preso Meister Eckhart: El hombre, cuanto mas blasfema,mas exalta a Dios,El estado de olvido de la gnosis siempre conlleva unafastidiosa sensacion de privacion, que no podra calmarse hastaque se encuentre nuevamente su tinico proposito verdadero,en lugar de aquellos falsos y fingidos. Los antiguos gnosticos,de cuya tierra de sombras lung saco ala luz los SieteSermones ,

  • 5/11/2018 Jung El Gnostico - Hoeller Stephan

    26/300

    PROLOGO 29

    con frecuencia decfan que todos los deseos que siente la gente,todos sus intentos por lograr excitaci6n, felicidad y amor deesta cosa 0 aquella experiencia, no son mas que signos deuna infalible aiioranza del Pleroma, la plenitud del Sen>,que es el verdadero hogar del alma. S6lo quienes hayan en-contrado el camino pueden enseiiarlo a otros. Un hombreque ha perdido su propio camino no puede ser un buen guia,Este hecho invalida la tesis igualitaria que sostiene que losuniformados pueden ofrecer servicio al mundo siempre y cuan-do tengan buenas intenciones. A la larga, s6lo aquellos quesaben pueden ofrecer una ayuda iitil, pues son los que conocenel ~ino por haberlo recorrido ..~. G. Jung era un sanador de almas y un sanador de la "cultura. El mundo ha visto pocas veces un servidor mas efi- i Vciente de la humanidad. Esta eficiencia y sabiduria fueron elresultado no de la herencia, circunstancias, 0educaci6n, sino

    de haber recorrido el camino hacia el mund de sombrasdonde habita el conocimiento secreto del al~Recorrer estecamino y encontrar nuestro objetivo significa ir en contradel mundo y las nociones de 10 razonable y 10 probable. Junguna vez escribi6 que nuestra imagen del mundo s6lo se ajustacon la realidad cuando 10 improbable tiene un lugar en el, Esimprobable que el orden prevalezca sobre el caos y que elsentido supere a la insensatez. Sin embargo, 10 improbablesucede; es po sible y no esta fuera de nuestro alcance. En unsentido muy real, 10 improbable es la verdadera vocaci6n, elautentico destino del ser humano. Esta es la vocaci6n de laque se puede decir que nos hace humanos, pues somos menosque humanos en la medida en que la pasamos por alto 0hacemos caso omiso de ella. Los arboles y las flores, las avesy las bestias que siguen su destino son superiores al humanoque traiciona al suyo.

    El presente pr6logo, que llega ahora a su fin, tiene elcaracter de una dec1araci6n personal. Para su escritor, losSie te Sermones y la forma en que una vez los descubri6, fuerony continuan siendo el sfmbolo grandioso de un curiosa destino,a la vez profundamente personal y universal. La vida no fue,f- - = - t c : t R C ( 1 1 j'

    'J

  • 5/11/2018 Jung El Gnostico - Hoeller Stephan

    27/300

    30 ST EPH AN H OE LLE Rni podia ser igual despues de ese momenta magico en elacogedor salon de lectura de la rna ciudad de los Alpes cubier-ta de nieve. Como un volumen de escrituras sagradas 0 uncodigo de formulas transformativas de poder, las palabrastranscritas del pequefio libro misterioso cambiaron el cursode una vida. El puerto seguro de la ortodoxia habia perdidotoda su atraccion, y con ella, las instituciones de credo ytradicion honradas en toda epoca. La perdida de la fe y leal-tades convencionales podrian haber trafdo consigo los signosde un desarraigo espiritual, tan caracteristico de aquellos quesubstituyen el pensamiento por la fe, y la busqueda por latradicion. Con cuanta facilidad podemos condenamos, en unmomento asi, al destino del Holandes Errante y navegar enel oceano de la vida etemamente, de un lado a otro, aterro-rizados por sus fuertes vientos y hechizados por sus calmas,mientras buscamos siempre un puerto que nunca encontra-mos. Este no podria ser el destino de quien entra en el mundoencantado de sombras arquetipicas armado con la espada dela gnosis. De una premonicion, la vida creo una comprensiony una experiencia. Con frecuencia es asi; las realidades, queal principio no son mas que una vision intrigante aunquelejana, demuestran estar mas a mana que los suefios. Estanmas cerca que tu vena yugular, como expreso el profetadel Islam hablando con la elocuencia concisa del desierto. Elineludible mundo de sombras esta presente en la morada detodos, como ciertamente 10 estaba en la de lung. La iinicapena es que para demasiados permanece siempre invisible.Sin embargo, para aquellos que, en la vision y en el suefio, enlas magicas sincronias de la luz del dia, 0en la oscura hechi-ceria del suefio, han conectado con estas sombras, estas nosolo retienen su visibilidad, sino que realmente se conviertenen las fuentes de la existencia misma. Quiza fue esta cualidadimperativa del mundo de sombras 10 que lung deseaba ex-presar cuando dijo a Laurens van der Post: El suefio escomo una mujer. Tendra la ultima palabra asf como tuvo laprimera.Un prologo se define como la primera palabra. En otro

  • 5/11/2018 Jung El Gnostico - Hoeller Stephan

    28/300

    PROLOGO 31sentido, tambien debe ser la ultima, pues en el debe resumirseel alfa y la omega del trabajo que sigue a continuacion. EIautor no debe juzgar si estas lfneas logran cumplirlo 0 no.Todo 10 que puede hacer es alimentar la esperanza de que ellector hay a recibido una premonicion del estado de animo 0el temperamento del espiritu que fueron la fuerza motriz desu trabajo. lung dijo que solo un poeta podia comprenderle,entonces, seria apropiado concluir con unos versos del poetaA. E., otro errante en la extrafia tierra de la gnosis:

    De un mundo eternolas sombras caen sobre el Tiempo,de una belleza mas antigua que la Tierra,una escala por don de el alma puede subir.Subo por la escalera fantasmahasta una blancura mas antigua que el Tiempo.

  • 5/11/2018 Jung El Gnostico - Hoeller Stephan

    29/300

  • 5/11/2018 Jung El Gnostico - Hoeller Stephan

    30/300

    ILa Gnosis de C. G. Iung

    Una ciencia nacida del misterioEn los ultimos 25 alios del siglo xx, pocos se atreveriana negar la verdad de la afirmaci6n de que el psicoanalisis hademostrado ser una de las mas poderosas fuerzas de la culturade nuestra era. Surgido de la oscura enajenaci6n de la con-

    ciencia que caracterizo al siglo XIX, el redescubrimiento delmisterio inconsciente dentro de la mente humana se asemejaen gran medida al incentivo bfblico que hizo que el mundoentero del espfritu se irguiera ante los ojos de generacionespasadas. El fil6sofo aleman Martin Heidegger dli2 una granverdad cuando llam6 -al slgro xDu~1 mils QS.CJJIQ,QtD.Q!iQs_!ossigtosde l a - - e r a l r f b a e m a ; s i i i - e r i ! ! ? _ ~ r . g Q ~ f!!'~"pr~_cisa~nt~ enlaeIfo~detmryor oscuteCimientoAeJ~ ll!.~_Q~1spfritu cuan~ _/.d()n_acieron los dos gigantes.p.~o~e......?s d.el i.~_~y>nsCl..n.te,..N~A {/{~,/-mu.no Freud yCarl Gustav JUI_l.g,en 18"56 .y.r~pt;CU- \ \ .....V~Olenfe. 1 ( . ~ ~. Freud fue un gran descubridor, destinado a desenmascararmuch as cosas. Los psicologos, igual que el publico, todaviatardan en darse cuenta de la deuda de gratitud que tienencon el, Miembro de la antigua y estrechamente materialistaescuela de ciencia, a qui en s610 las exigencias practicas lle-varon del laboratorio de biologia a las artes de la curaci6n,Freud no pudo hacer otra cosa que usar las pautas de pen-

  • 5/11/2018 Jung El Gnostico - Hoeller Stephan

    31/300

    34 STEPHAN HOELLER

    samiento de su epoca. A causa de un tragicamente ir6nicocambio del destino, el mismisimo hombre cuyos descubri-mientos, en ultima instancia, hicieron tambalear los cimientosdel racionalismo cientffico,permaneci6, el mismo, encadenadoal dogma racionalista y reduccionista, que cuid6 y defendi6con desesperada convicci6n. Como Moises, no pudo entraren la tierra prometida hacia donde conducia a otros; asi, laconquista final recay6 sobre un hombre mas joven, un nuevoJosue de la mente, cuyo nombre era Carl Gustav Jung.

    i.Quien era Jung y c6mo llev6 a cabo la coronaci6n de laexploraci6n psiquica? i,Cuales fueron las fuentesde esta per-cepci6n profetica dentro de los lugares mas reconditos delalghUmana? i,De d6nde obtuvo su sabiduria?10 largo de la extensa vida de Jung (26 de julio de1 .75a"6(fe Junio de 1%1), la gente se asombr6 con las alu-siones curiosamen .....0~12 ' icas e su ra ajo. Aqufha5i'a unreIiOineno'hasta ahora desconoci 0en 0 dela intelectualidad desde el Siglo de las Luces. Se desenterraronde sus tumbas milenarias simbolos e imagenes de poderes

    oscuros y antiguos. Sabios taofstas y lamas tibetanos prestaronlos tesoros de sus biisquedas arcanas a la hechiceria del mo-demo Hermes suizo. Desaparecieron las preocupaciones mun-danas y personalistas del psicoanalisis anterior, con sus trau-mas de la nifiez y sus caprichos infantiles, y los dioses antiguosya no fueron considerados como las mascaras glorificadasde placeres y terrores pueriles. Como Venus, que surgio dela espuma del mar, 0Atenea, que brot6 de la frente de Zeus,los arquetipos 10 hicieron de la p rim a m ateria del inconscientecolectivo; los dioses una vez mas caminaron con los hombres.Por encima de estas aguas creativas primordiales de la psique,se movia el espfritu de un hombre, el genio de Jung. Bienpodian maravillarse los ilustrados y sorprenderse los sabios,pues habia llegado una nueva era de la mente.Aquellos que estaban enterados de las disciplinas y teoriasarcanas de la tradici6n de la realidad altemativa, a vecesllamadas la filosofia perenne, 0 teosofia (sabiduria divina),pronto vieron con claridad que existian ciertos paralelismos

  • 5/11/2018 Jung El Gnostico - Hoeller Stephan

    32/300

    LA GNOSIS DE C. G. JUNG 35entre las ensefianzas de Jung y 10 que ellos conocian, desdehacia mucho, como el camino de la iniciaci6n. Como el cono-cido poeta y diplomatico esoterico Miguel Serrano observeen su pequefio trabajo original, C . G . Jung y Hermann Hesse,era como si hubiera un segundo lenguaje debajo del primeroen todas las obras de Jung. E I analista se transformaba en unhierofante de los misterios, mientras que el paciente se con-vertfa en un ne6fito 0discipulo. La enfermedad se revelabacomo una condici6n dividida 0 incompleta, y la salud comoun estado de plenitud espiritual.lta nsico~ analftica co-Illenz6 a a_r.arecer comQ_l!g_Q!al~iiiiIiVictnoy el 1 1u,!!!y'ers()l._gn_.fl_e~!!..l!!!-m

  • 5/11/2018 Jung El Gnostico - Hoeller Stephan

    33/300

    36 ST EPH AN H OE LL ERenteramos de que entre 1912 y 1917 Jung paso por un intensoperiodo de experiencias que involucro una tremenda inun-dacion de su conciencia desde adentro, por parte de fuerzasque el llamo arquetipicas, pero que en epocas anteriores hu-bieran sido percibidas como divinas 0 demoniacas. Jung co-munico en secreta cierta cantidad de informacion acerca deestas experiencias a varios de sus colaboradores, pero indu-dablemente experimento mas de 10 que jamas revelo, de he-cho, mas de 10 que jamas se revelara. El gran explorador confrecuencia llamaba a esta experiencia, 0mas bien ciclo deexperiencias, suNekyia, usando el termino con el que Homerodescribio el descenso de Odiseo a los infiernos 1. Se nos hadicho que en esta epoca se aparto de la mayoria de las ac-tividades externas, con excepcion de algunas de sus practicaspsiquiatricas. Incluso se ha afirmado que durante este periodono leyo ningun libro, 10 cual significa un gran acontecimientoen la vida de un estudiante tan avido de todas las formas dela literatura. A pesar de no leer, sf escribio, Sus trabajos deesta epoca estan compuestos por los registros de sus extrafiasexperiencias interiores que llenaron 1.330 hojas escritas amano, ilustradas por el mismo. Su escritura en esta epoca setrasformo en la usada en el siglo XIV; pinto sus ilustracionescon pigmentos que el mismo fabrico a la manera de los ar-tistas de tiempos pasados. Hizo encuadernar en cuero rojoalgunos de sus mas preciosos dibujos y escrituras, y los colocoen un lugar de honor entre sus pertenencias; desde entoncesse los conocio como el Libra Raja. Segun testigos oculares,los trabajos de este periodo de su vida se dividen en doscategorias distintas;algunos son luminosos y angelicales,mien-tras que otros son oscuros y demonfacos en su forma y con-tenido. Sentimos la tentacion de decir que Jung, como otrosmagos, paso por experiencias que pertenecian a las categoriasde Invocacion Teurgica de dioses y de Evocacion Goeticade espfritus, y que llevo un registro magico de cada una.

    1 Ver James Kirsch, Remembering C. G. Jung, en Psychological perspesti-ves, vol. 6, p. 57.

  • 5/11/2018 Jung El Gnostico - Hoeller Stephan

    34/300

    LA GNOSIS DE C. G. JUNG 37

    Por mas fascinantes que sean en sf mismos estos hechosacerca de la temprana transformaci6n de lung, su verdaderaimportancia se revel a s6lo cuando nos damos cuenta de quela mayor ~parie..'Jie.sijJiab.~.:Ci~!itifico~-sr-no todo, puedeestar basado en revelaciones visionarias. E l muy repetidoadjetivoemplrtco~ quecaracfenza las fuei11es del trabajo delung, aparece asf bajo una luz enteramente nueva. La cienciapsico16gica de lung estaba, sin duda, basada en elementosempfricos, pero estos no eran principalmente de naturalezaextema, sino qu~ consistian en las exaeriencias y experimentosque llevaba a_.c.a.briIDsupropiO mUll: 0 secreto, en la 8 tegiunesocultas a e s u inconsciente mas profundo. Por supuesto, lungnoeSC1entmco en eI senbdo mas estricto de la palabra enla actualidad, pues no controlaba variables ni realizaba ex-perimentos minuciosos y repetibles. Su ciencia consisti6en desarrollar un cuerpo sistematizado de conocimiento ob-tenido gracias a la observaci6n, estudio y descubrimiento deprincipios y significados detras del area de sus estudios, usan-do patrones cientificos objetivos. El (y Freud) tienen un acep-table y modemo aliado cientifico en la fenomenologia, cuyosdefensores consideran los varios modos de conciencia humanacomo su informaci6n principal y construyen hip6tesis, teoriasy explicaciones basadas en ellos,Puede resultar util recordar que Freud llevo a cabo lamayor parte de su investigaci6n de una manera parecida a lade lung. El gran doctor vienes descubri6 los secretos de lossuefios analizando los suyos, y fue, quizas, el unico psicoana-lista que nunca se someti6 al analisis de otro, con excepci6nde una breve discusi6n sobre algunos de sus propios suefioscon lung en su viaje comun a los Estados Unidos. lung nofue el unico en buscar la compafiia de ocultistas y misticosno convencionales, pues Freud era un avido visit ante de adi-vinos y foment6 una importante amistad con un cientificoextravagante llamado Wilhem Fliess-. Sentimos la tentaci6n

    2 Ver Ernest Jones, Life and W orks of S igm und Freud (Nueva York: BasicBooks, Inc.).

  • 5/11/2018 Jung El Gnostico - Hoeller Stephan

    35/300

    ('

    t, \38 S TE PH AN H OE LL ER

    de describir a Jung como un antirracionalista sumamenteracional. Sin embargo, ambos buscaban 10 mismo: Mas luz(el famoso Mehr Licht de Goethe) con respecto a los misteriosde la psique.

    En 1917, al concluir el gran descenso a su infierno per-sonal y espiritual, Jung se enfrento a una ominosa eleccion,Pudo haber tornado sus revelaciones tal como se le presen-tab an, quizas publicandolas como una especie de tomo reli-gioso extraordinario, uniendose asi a los grandes escritoresocultistas de su epoca, como H. P. Blavatsky y Rudolf Steiner.En cambio, Jung decidio permanecer dentro del campo desu disciplina cientffica escogida, es decir, el psicoanalisis,aunque sin dejar de utilizar las 1.330 hojas del misterioso yarquetipico material revelatorio para enriquecer su labor cien-tifica. Existe una buena razon para sospechar que Jung, a 10largo de toda su vida, siguio enriqueciendo este registro deciencia secreta e incorporando elementos de el en sus nume-rosos libros, a medida que 10 consideraba apropiado. Existeuna evidencia incontrovertible de que hizo esto en el caso desu primer gran trabajo creado tras su transformacion personal,es decir, su libro Tipos Psico logicos, publicado en 1921. Cuan-do tuvo tos convulsa contagiosa y debio ser aislado de suspacientes usuales, dicto el manuscrito de su trabajo a un ritmoincrefblemente frenetico, y completo las primeras 583 paginasen un lap so de seis semanas. Posteriormente, confeso al poetaholandes Roland Holst que habia escrito T ipo s P sicologicosbasandose enteramente en el material contenido en 30 paginasde su Libro R ojo-.Como era de esperar, Jung mantuvo un contacto constantecon las fuentes misteriosas que inspiraron su Libro R ojo a 10largo de su vida. Siguio siendo un revelador inspirado -al-gunos dirian perturb ado- por el resto de sus dias, Su laborcientifica nunca fue un compartimento de su existencia quepudiese ser separado de su vida mistica y profetica; las dos

    3 Anunciado por G. Quispel en una conferencia en el primer CongresoPanarion de especialistas junguianos, Los Angeles, 1975.

  • 5/11/2018 Jung El Gnostico - Hoeller Stephan

    36/300

    LA GNOSIS DE C. G. JUNG 39

    estaban intima e inexorablemente relacionadas. Jung, el mis-~z..Suiaba ~jnspiraba a lung, el cientifico, mi@trasJl!!e el'~e~!~o y el p~~oIO~~_p~?e~r~.i()D~~~~..~~brio y s~ntidoCO~~fi]~a.ra-1>~~~.~~!abtI1.~~~.y_.hac!!_1~~ deIos .dtmeSY]I~QlQlllOaIquetip~~n pracncos. ASlfue.concebida y llevada a cabo la memorable'oora ae Carl Jung.Tanto en su contenido como en su intencion, fue un ejemplodel precioso principio de coniuncto oppositorum; la union depolaridades que siempre produce el elixir del significado ul-timo.

    Jung nunca ofrecio al publico el corpus que contiene susexperiencias originales sobre el inconsciente surgidas a partirdel periodo de su gran transformacion. La actitud de susherederos parece ser quizas aun mas reservada en este aspectode 10 que 10 habia sido la de Jung.Al escribir estas paJahras(~82hParece dificil gue se satisfaga, a cottg plazo, cualquier i ; !esperanza 0expectativa ue odamos alimentar con r to I-. .. , este material. Por consiguiente, nos.que-! { idamosc(m los (rabajOS~l~I!!!hcos de Jun_gy muy POCOJllas.Sin embargo;-en"esnrcategoria de mas encontramos, por 10menos, un documento extremadamente notable que nos dicemucho acerca de las fuentes de la psicologia de Jung. Es unpequefio trabajo, apenas mayor que una breve monografia,aunque el significado de su contenido puede convertirlo contoda facilidad en un articulo de suma importancia para elestudio del mensaje y la mision de Jung. La obra a la que nosreferimos se conoce como los Siete Sermones a los Muertos.Predica a los Muertos

    Carl Jung solo permitio la publicacion de un fragmentoaislado de la enorme cantidad de material arquetipico queescribio bajo una misteriosa inspiracion en la primera etapade su carrera. Fue escrito en un corto periodo de tiempo, enalgun momenta entre el 15 de diciembre de 1916 y el 16 defebrero de 1917. Segun las declaraciones de Jung que apa-

  • 5/11/2018 Jung El Gnostico - Hoeller Stephan

    37/300

    40 ST EPH AN H OE LLE Rrecen en sus fragmentos autobiograficos, solo le llevo trestardes escribirlo '. La creacion de este pequefio libro fueanunciada por acontecimientos sobrenaturales y se vio col-mada de fenomenos de naturaleza parapsicologica, En primerlugar, varios de los hijos de Jung vieron y sintieron entidadesespectrales en la casa, mientras que el mismo sintio una at-mosfera ominosa a su alrededor. Uno de los nifios tuvo unsuefio de colorido religioso y amenazante, en el que figurabanun angel y un demonio. Luego -era una tarde de domingo-la campanilla de la puerta sono violentamente. Se la podiaver moverse con frenesi, pero nadie visible era responsablede tal acto. Una multitud de espfritus parecfa llenar lahabitacion, de hecho, la casa, y nadie podia siquiera respirarnormalmente en el vestfbulo infestado de fantasmas. El dr.Jung exclarno con voz temblorosa y preocupada:-Por el amor de Dios, l,que es todo esto?

    La respuesta llego en un coro de voces espectrales:-Hemos vuelto de Jerusalen, donde no encontramos 10que buscabamos.Con estas palabras comienza el tratado, cuyo titulo estaen latin: Septem Sennones ad Mortuos. Luego continua enaleman con el sub titulo: Siete exhortaciones a los muertos,escritas por Basflides en Alenjandrfa, la ciudad donde se unenOriente y Occidente,Incluso una lectura superficial del tratado revela que estaescrito siguiendo el estilo del Gnosticismo del siglo II,y empleaen gran medida la terminologfa de esta epoca. EI subtitulomismo revel a el nombre del famoso sabio gnostico Basflides,que ensefio en la Alejandria del Egipto helenistico entre losafios 125-140 d.C. aproximadamente. De hecho, Jung pareceatribuir la autorfa del documento a Basflides, 10 cual sugierea algunos que utilize un medium y (0) escritura automatica,Con respecto a ello, es necesario recordar que durante muchossiglos fue habitual que los autores de literatura espiritual no

    4 Ver C. G. Jung, Recuerdos, Sue iios , Pensamien tos, Aniela Jaffe, ed. SeixBarral, Barcelona, 1964.

  • 5/11/2018 Jung El Gnostico - Hoeller Stephan

    38/300

    LA GNOSIS DE C. G. JUNG 41frrmaran sus trabajos con sus propios nombres, sino que losatribuyeran poeticamente a quien ellos consideraban queocupaba una posicion superior a la suya. Asi, el celebre Zohardel corpus cabalistico esta atribuido a Rabbi Shimon benJochai, siendo desconocido su verdadero autor. Es muy pro-bable que C. G. Jung haya utilizado este tradicional ejerciciode humildad poetic a al usar el nombre de Basflides comoautor de los Sermones. Sin embargo, Jung admitio librementey enfatizo el elemento parapsicologico presente en los feno-menos ocurridos en torno a la creacion del tratado, hasta elpunto de aplicarles las palabras de Goethe en la segundaparte de Fausto: [Sale al exterior, esta en el airel Una cosaes cierta: esta es una obra inusual, escrita bajo circunstanciasmuy inusuales.La importancia de los S ie te Se rmones dentro del contextodel pensamiento jungiano es algo sobre 10 que las opinionesdifieren. Cuando se pregunto a Jung acerca de ello, pasadosbastantes afios, refunfufio y 10 llamo una indiscrecion ju-venil. Algunos de sus discipulos mas conservadores, comoAniela Jaffe, tienden a perpetuar el mito de una indiscre-cion juvenil, mientras que otros sienten algo muy diferente.M. L. von Franz, sin uuda una discipula muy importante,afirmo que cuando Jun ~ se referia a la publicacion de losSermones como una locura juvenil, no estaba calificando sucontenido. Un grupo de especialistas junguianos, reunidosen el primer Congreso Panarion en Los Angeles, California,en 1975, convinieron que los S ie te Se rmones son nada menosque la fuente y el origem>del trabajo de Jung. Y la exposicionconmemorativa del centenario de C. G. Jung, que recorrio elmundo en 1975, incluia la primera pagina de la edicion ori-ginal de los Sermones, y los describia de la siguiente manera:Los Sep tem Sermones ad M ortuos son un resumen de lasexperiencias de Jung con las imageries del inconsciente. Aunmas significativamente, el propio Jung declare respecto al ' ,contenido del L ibro R ojo y los Sermones, que todas sus obras,toda su actividad creativa habian surgido de esas visiones ysuefios iniciales, y que todo 10 que logro en su vida posterior-

  • 5/11/2018 Jung El Gnostico - Hoeller Stephan

    39/300

    42 STE PH AN H OE LL ERmente ya estaba contenido en ellos '. [Estas palabras diffcil-mente pueden referirse a una indiscrecion juvenil!lung publico este breve y poetico tratado para satisfacera un circulo de amigos Intimos. H. G. Baynes enseguida tra-dujo al ingles el texto en aleman. Fue incluido en el apendicede la edicion original en aleman de R ecuerdos, S ueitos, P en-samientos, publicada por Rascher Verlag en Zurich, en 1962,pero se omitio en la edicion inglesa publicada simultanea-mente por Pantheon Books. Esta omision deliberada solopuede explicarse como una evidencia mas de la conocidasospecha que tienen los europeos sobre los puebos anglopar-lantes y su tendencia a malentender y malinterpretar cualquiercosa que raye en 10 mfstico y 10 oculto. Sin embargo, unvolumen separado, disefiado artfsticamente, de los Sermonestambien fue publicado por Stuart & Watkins en Londres conla traduccion de Baynes. Asi, en la actualidad hay variasediciones en circulacion que garanizan una luz adicionalsobre el texto mismo.

    Realmente hubo acontecimiento ;en el curso de la carrerade lung por los que pudo haberse errepentido de la indiscre-cion juvenil de publicar su pequefi ) volumen de visiones ar-quetfpicas, Uno de estos incidentes tuvo que ver con el for-midable Martin Buber -con aspecto de Jehova=-, que nuncase llevo bien con lung y que, ar'emas, logro alejar a uno delos discfpulos de Jung de su orbita y atraerlo hacia el. Estediscipulo desleal, cuyo nombre era Martin Trub, entrego aBuber una copia de los Sermones, cuya ira, propia del AntiguoTestamento, alcanzo tremendas proporciones alleer 10 que61 consideraba que eran las herejias gnosticas de lung. Unay otra vez, Buber ataco a Jung, y en su libro E clipse de D iosle acuso severamente de ser un gnostico. lung se indigno porello e hizo una replica algo ambigua, negando y, por asf de-cirlo, al mismo tiempo afirmando su propio Gnosticismo>.

    5 Ver C. G. Jung, Recuerdos, Sue iios . Pensamientos. Para la historia completade la publicacion, ver Nota del Traductor en el Apendice I.6 Anunciado en el primer Congreso Panarion.

  • 5/11/2018 Jung El Gnostico - Hoeller Stephan

    40/300

    LA GNOSIS DE C. G. JUNG 43

    Otra curiosa historia tiene que ver con el ganador del premioNobel, el autor aleman Hermann Hesse y su memorable nove-la Demian, en la que incluyo muchos temas explfcitamentegnosticos (notablemente, aparecen algunas referencias al diosgnostico arquetipico Abraxas, con un tratamiento similar alque dio Jung a la misma figura en los Sermones). Estando elGnosticismo totalmente en el aire durante el perfodo de en-treguerras, el tipo de Gnosticismo que Hesse adopto en De-mian resulta tan junguiano que muchos sospecharon que habfauna conexion. En efecto, un analista junguiano llamado Langtrato a Hesse mas 0menos en el afio 1916 y facilmente pudohaber proporcionado una copia de los Sermones al entoncescreciente genio literario. Continuo existiendo una simpaticaconexion entre Jung y Hesse durante varias decadas que fueluego inmortalizada por el diplomatico y poeta chileno MiguelSerrano en su bello volumen C . G . lung y Hermann Hesse.Parece que el pequefio libro de Gnosticismo poetico, originadoa partir de la visita de los muertos a Jung en 1916, tuvo unamayor influencia y provoco una mayor respuesta de 10 queel propio Jung jamas hubiera imaginado. Sin embargo, todasestas respuestas trataban un tema, a la vez oscuro y contro-vertido que, por supuesto, era el Gnosticismo '.

    lQue son los gnosticos?Las palabras gnostico y Gnosticismo no son ciertamente

    usuales en el vocabulario contemporaneo. De hecho, maspersonas estan familiarizadas con el antonimo de gnostico,que es agnostico, que literalmente significa no conocedor 0ignorante, pero que figurativamente describe a una personasin fe en la religion pero que toma a mal que 10 llamen ateo.Sin embargo, los gnosticos existian mucho antes que los ag-nosticos y, en general, parecen haber sido una categoria de7 Ver la parte III del presente trab a jo para mas deta lles de la relaci6 n de

    Hermann Hesse con Jung y los S iete S erm on es a lo s M u erto s.

  • 5/11/2018 Jung El Gnostico - Hoeller Stephan

    41/300

    44 STEPHAN HOELLER

    personas mucho mas interesante que los segundos. En unadefinicion por contraste a los no conocedores, se considerabanconocedores -gnostikoi en griego- 0sea, aquellos que tienengnosis conocimiento. Los gnosticos vivieron, la mayoria, du-rante los primeros tres 0cuatro siglos de la llamada era cris-tiana. La mayor parte de ellos no se hubieran puesto el nombrede gnosticos, sino que se hubieran considerado cristianos 0,extraordinariamente,judios, 0pertenecientes a las tradicionesde los antiguos cultos de Egipto, Babilonia, Grecia 0Roma.No eran sectarios 0miembros de una nueva religion especf-fica, como decfan sus detractores, sino mas bien personasque compartian una cierta actitud ante la vida. Esta actitudconsitiria en la conviccion de que los seres humanos puedenacceder a un conocimiento directo, personal y absoluto delas verdades autenticas de la existencia y, adernas, de que ellogro de tal conocimiento siempre debe constituir la metasuprema de la vida humana. No consideraban este conoci-miento, 0gnosis, como un conocimiento racional de tipo fi-losofico, ni siquiera como un conocimiento filosofico de laverdad, sino mas bien como uno que surge en el corazonintuitiva y misteriosamente y , por 10 tanto, se le llama, por 10menos, en una obra gnostica el Gno sis k ard ia s (el Evangeliode fa Verdad), el conocimiento del corazon. Este, obviamente,es un concepto religioso que, a la vez, es altamente psicolo-gico, pues el significado y el proposito de la vida no parecenser ni la fe, con su enfasis en una confianza ciega y unarepresion igualmente ciega, ni extrovertidas obras de bien,sino mas bien una percepcion y transformacion interior; enuna palabra, un proceso psicoanalitico.Si imaginamos a los gnosticos como los primeros psicoa-nalistas, entonces se percibe inmediatamente por que la en-sefianza y la practica gnosticas eran radicalmente distintas ala ensefianza y la practica de la ortodoxia judia y cristiana.El conocimiento del corazon, por el que luchaban los gnos-tieos, no podia obtenerse haciendo un trato con Yave; cerran-do un tratado 0alianza que garantizase al hombre bienestarffsico y espiritual a cambio de cumplir con un reglamento

  • 5/11/2018 Jung El Gnostico - Hoeller Stephan

    42/300

    LA GNOSIS DE C. G. JUNG 45como los esclavos. Tampoco se podia lograr la gnosis sim-plemente creyendo con fervor que el acto de sacrificio de unhombre divino en la historia podia descargar el peso de laculpa y la frustracion de nuestras espaldas, y asegurar unabeatitud perpetua mas alla de los confines de la existenciamortal. Los gnosticos no negaban la utilidad de la Torah 0la magnificencia de la figura del Christos, el Dios supremoungido. Consideraban que la Ley era necesaria para un ciertotipo de personalidad que requiere reglas para 10 que hoypodria llamarse la formacion y el fortalecimiento del egopsicologico. Tampoco negaban la grandeza de la mision delmisterioso personaje a quien, en su disfraz, los hombres co-nocieron como el Rabi Jehoshuah de Nazareth. La Ley y elSalvador, los dos conceptos mas venerados de los judios ycristianos, se convirtieron para los gnosticos en simples mediospara un fin mayor que los trascendia. Estos se transformaronen incentivos y recursos que podian, de alguna manera, con-ducir al conocimiento personal que, una vez logrado, no re-quiere ni ley ni fe. Para ellos, como para Carl Jung variossiglos despues, la teologia y la etica eran solo puntos de apoyoen el camino hacia el autoconocimiento.Diecisiete 0 18 siglos nos separan de los gnosticos. Du-rante estos siglos, el Gnosticismo se convirtio en una fe nosolo olvidada (como uno de sus interpretes, G. R. S.Mead, lallamo), sino tambien en una fe y una verdad reprimida. Alparecer, casi ningun grupo ha sido tan implacable y consis-tentemente temido y odiado durante casi dos milenios como10 fueron los infelices gnosticos, Los libros de texto de teologiaaiin se refieren a ellos como los primeros y mas perniciososde todos los herejes, y la era del movimiento ecumenico pa-rece no haber extendido ninguno de los beneficios del amorcristiano hacia ellos. Mucho antes de Hitler, el emperadorConstantino y sus crueles obispos iniciaron una persecucionimplacable contra los gnosticos, que continuo imparable a 10largo de la historia. La ultima persecucion importante con-cluyo con la muerte en la hoguera de mas de 200 gnosticosen 1244 en el castillo de Montsegur en Francia, aconteci-

  • 5/11/2018 Jung El Gnostico - Hoeller Stephan

    43/300

    46 ST EPH AN H OEL LE R

    miento que Laurence Durell describio como las Termopilasdel alma gnostica. Sin embargo, algunos representantes impor-tantes de las victimas del ultimo holocausto no han conside-rado a la minorfa religiosa mas perseguida de la historiacomo una compafiera de desgracia, como 10 indican los ata-ques de Martin Buber a Jung y al Gnosticismo. Judios y cris-tianos catolicos, protestantes y ortodoxos orientales (y, en elcaso de la gnosis maniquea, incluso zoroastricos, musulmanesy budistas) han odiado y perseguido a los gnosticos con per-sistente determinacion.

    l,Por que? l,Fue solo porque su antinomismo 0negligenciafrente a la ley moral escandalizo a los rabinos, 0porque susdudas acerca de la encarnacion flsica de Jesus y su reinter-pretacion de la resurreccion enfurecio a los sacerdotes? l,Fueporque rechazaban el matrimonio y la procreacion, comodicen algunos de sus detractores? l,Fueron aborrecidos a causade su libertinaje y orgfas, de los que eran acusados? l,0 podrfaser que los gnosticos en realidad tenfan algun conocimiento,y que este conocimiento los volvio extremadamente peligrosospara las clases seglares y eclesiasticas?

    No es facil contestar a esta pregunta, pero, sin embargo,debemos intentarlo. Los gnosticos se diferenciaban de la ma-yoria de la humanidad no solo en detalles de creencia y pre-ceptos eticos, sino en su vision mas esencial y fundamentalde la existencia y su proposito. Su divergencia era radical enel verdadero sentido de la palabra, puesto que se remontabaa la raiz (latin: radix) de las suposiciones y actitudes de lahumanidad ante la vida. Sin tener en cuenta sus creenciasreligiosas y filosoficas, la mayorfa de las personas alimentanciertas suposiciones inconscientes que pertenecen a la con-dicion humana y que no surgen de las fuerzas concentradasy formulativas de la conciencia, sino de un prof undo substratoinconsciente de la mente. Esta mente esta gobernada por labiologia mas que por la psicologfa; es automatic a, y no estasujeta a elecciones y conocimientos conscientes. La mas im-port ante de estas suposiciones, que puede resumir a todas lasdemas, es la de creer que el mundo es bueno y que nuestra

  • 5/11/2018 Jung El Gnostico - Hoeller Stephan

    44/300

    LA GNOSIS DE C. G. JUNG 47

    participacion en el es de alguna manera deseable y, en ultimainstancia, beneficiosa. Esta suposicion conduce a muchasotras, todas mas 0menos caracterizadas por la obedienciahacia condiciones extemas y hacia las leyes que parecen go-bemarlas. A pesar de los incontables acontecimientos ilogicosy malevolos de nuestras vidas, las increfbles secuencias, losdesvios, las redundantes demencias de la historia humana,tanto colectivas como individuales, creemos que es nuestraobligacion avanzar con el mundo, puesto que es, despues detodo, el mundo de Dios, y como tal debe de ocultar significadoy bondad detras de sus operaciones, aunque sean muy dificilde percibir. Por 10 tanto, debemos continuar cumpliendo connuestro rol dentro del sistema de la mejor manera posible,como nifios obedientes, maridos diligentes, mujeres cumpli-doras, camiceros, panaderos, candeleros de buena conducta,aferrandonos a la esperanza de que de alguna manera surgirauna revelacion de conocimiento en esta vida conformista sinsentido.No es asi, dijeron los gnosticos, El dinero, el poder, losgobiemos, el crear familias, el pago de impuestos, la inter-minable cadena de trampas bajo la apariencia de las cir-cunstancias y las obligaciones; nadie rechazo esto en toda lahistoria de la humanidad con mas fuerza ni mas inequfvoca-mente que los gnosticos, Ellos nunc a esperaron que ningunarevolucion politic a 0economic a pudiera eliminar 0,de hecho,eliminara a todos los elementos injustos presentes en el sis-tema en el cual esta atrapada el alma humana. No rechazabanun gobiemo 0 forma de posesion en favor de otra; mas bienrechazaban la predominante sistematizacion de la vida y laexperiencia. Por ello, los gnosticos eran, en efecto, conoce-dores de un secreto tan mortal y terrible que los gobemantesde este mundo -PQr ejemplo, los poderes seglares y religiosos,que siempre se aprovecharon de los sistemas sociales esta-blecidos- no podian permitirse ellujo de dejar que se cono-ciera este secrteto y, menos atin, dejar que se proclamarapriblicamente en sus dominios. Sin duda, los gnosticos sabianalgo, y era 10 siguiente: que Ia vida humana no cumple sus

  • 5/11/2018 Jung El Gnostico - Hoeller Stephan

    45/300

    48 STEPHAN HOELLER

    designios dentro de las estructuras y sistemas sociales, puestoque todos ellos son, en el mejor de los casos, solo oscurasproyecciones de otra realidad mas fundamental. Nadie llegaa su propia individualidad siendo 10 que la sociedad quiereque sea 0 haciendo 10 que la sociedad quiere que haga. Lafamilia, la sociedad, la Iglesia, el comercio y la profesion, laslealtades polfticas y patrioticas, y las reglas y mandamientosmorales y eticos, en realidad no conducen en absoluto alverdadero bienestar espiritual del alma humana. Por el con-trario, la mayoria de las veces son jaulas que nos impidenalcanzar nuestro verdadero destino espiritual.Este aspecto del Gnosticismo fue considerado hereticoen tiempos pasados, y aiin hoy se le llama con frecuencia lanegacion del mundo y la antivida, pero es, simplemente,tanto una buena psicologia como una buena teologia espiritualporque es el sentido comtin. El politico y el filosofo socialpueden considerar al mundo como un problema que debesolucionarse, pero el gnostico, con su discernimiento psico-logico, 10 reconoce como una situacion dificil de la que de-bemos liberarnos a traves del conocimiento. Pues los gnos-tieos, igual que los psicologos, no tienen como objetivo latransformacion del mundo, sino la transformacion de la mente,con su logica consecuencia: una actitud diferente hacia elmundo. La mayoria de las religiones tienden a afirmar unaactitud familiar de internalismo en teoria, pero, como resul-tado de su presencia dentro de las reglas de la sociedad, enla practica siempre 10 niegan. Las religiones, en general, co-mienzan como movimientos de liberacion radical que siguenunas lfneas espirituales, pero inevitablemente terminan siendolos pilares de las mismas sociedades que son las carcelerasde nuestras almas.Si queremos lograr la gnosis, el conocimiento del corazonque libera a los seres humanos, debemos desembarazarnosdel falso cosmos creado por nuestras mentes condicionadas.La palabra griega kosmos, igual que la hebrea olam, aunquesiempre se las traduce erroneamente como mundo, en realidaddenotan mas el concepto de sistema. Cuando los gnosticos

  • 5/11/2018 Jung El Gnostico - Hoeller Stephan

    46/300

    LA GNOSIS DE C. G. JUNG 49

    decfan que el sistema a su alrededor era malo y que habiaque alejarse de el para conocer la verdad y descubrir el signi-ficado, actuaban no solo como los precursores de innumera-bles margin ados y enajenados desde san Francisco hasta losbohemios y hippies, sino tambien como precursores de con-ceptos psicologicos redescubiertos por el psicoanalisis mo-demo. Jung rescato un antiguo conocimiento gnostico cuandodijo que el extrovertido ego humano primero debe tomarplena conciencia de su propia aliena cion del gran Self antesde poder empezar a regresar a un estado de union mas intimacon el inconsciente. Hasta que no seamos plenamente cons-cientes de la falta de adecuacion de nuestro estado extrover-tido y de su falta de aprehension con respecto a nuestrasnecesidades espirituales mas profundas, no lograremos ni si-qui era una pizca de individuacion, a traves de la que emergeuna personalidad mas amplia y mas madura. El ego alienadoes el precursor y una precondicion inevitable del ego indivi-duado. Como Jung, los gnosticos no rechazaron a la tierramisma, a la que reconocieron como una pantalla sobre laque el demiurgo de la mente proyecta su engafioso sistema.Hasta tal punto que encontramos una condena del mundo enobras gnosticas, y el termino usado es inevitablemente kosmos,oeste eon pero nunca la palabra ge (Tierra), que considerabanneutral, ni buena ni mala.

    Los gnosticos confiaron en este conocimiento, el que te-nemos en nuestro corazon, frente a la aridez espiritual y a latotal insuficiencia de los regfrnenes y valores establecidosdel mundo extemo, para construir tanto una imagen del seruniversal como un sistema de deducciones coherentes a lasque se debe llegar a traves de esa imagen. (Como es de es-perar, esto 10 llevaron a cabo menos en terminos de filosofiay teologia que de mito, ritual y cultivo de las cualidades mi-topoeticas e imaginativas de sus almas.) Como tantas personas

    8 Self, como concepto te6rico junguiano: la esfera completa de factoresarquetipicos y transpersonales d e la psiq ue, qu e actu an com o fu erz a unificadorao trascendental. El si-mismo.

  • 5/11/2018 Jung El Gnostico - Hoeller Stephan

    47/300

    5 0 ST EPH AN H OE LLE Rsensibles y meditativas antes y despues de su epoca, se sin-tieron extrafios en una tierra extrafia; una semilla abandonadade los mundos lejanos de luz infinita. Algunos, como la ju-ventud alien ada de la dec ada del sesenta, se retiraron a viviren comunidades y residencias solitarias, marginadas de lacivilizacion. Otros, mas numerosos quiza, permanecieron enmedio de la gran cultura metropolitana de las grandes ciu-dades como Alejandrfa y Roma, cumpliendo, en apariencia,sus roles dentro de la sociedad, mientras que en realidadservian a un amo diferente en el mundo, aunque no del mun-do. La mayorfa de elIos poseian preparacion, cultura y riqueza,y, sin embargo, eran conscientes del hecho innegable de quetodos estos logros y tesoros empalidecian ante la gnosis delcorazon, el conocimiento de las cosas que son. No es sor-prendente que el mago de Kiistnacht, que desde su tempranainfancia busco y encontro su propia gnosis, se acercara aestas extrafias y solitarias personas, estos peregrinos de laetemidad de regreso a su hogar entre las estrellas.

    Iung y el GnosticismoDesde el principio de su carrera psicoanalitica hasta elmomenta de su muerte, lung mantuvo un activo interes porlos gnosticos y sintio una gran afinidad con ellos.'~a el12 de

    agosto de 1912, lung escribia una carta a Freud acerca delos gnosticos en la que llamaba a la concepcion gnostic a de

    o Sofia una manera de dar cuerpo a una antigua sabidu1a quepodria volver a aparecer en el psicoanalisis modemgJNo lefaltaba literatura para estimular su interes en los griosticos,ya que muchos estudiosos del siglo XIX en Alemania se con-sagraron a los estudios gnosticos, En parte como una reaccioncontra los rigores de la Alemania de Bismarck y sus efectosconformistas tanto intelectuales como teologicos, un granmimero de excelentes estudiosos (Reitzenstein, Leisegang yCarl Schmidt, entre otros), asi como escritores y poetas ima-ginativos (Hermann Usner, Albrecht Dieterich) ahondaron

  • 5/11/2018 Jung El Gnostico - Hoeller Stephan

    48/300

    LA GNOSIS DE Co GoJUNG 51

    en la ciencia gnostic a, como 10 hicieron algunos miembrosde la intelectualidad francesa (M. Jacques Matter, AnatoleFrance). Todos los biografos de Jung mencionan su agudointeres por los asuntos gnosticos, Su antigua colega, BarbaraHannah, que transmitio sus palabras acerca de los gnosticos,cita una de las declaraciones mas reveladoras con respectoa ellos: ~_como siJ?~r fin hubiera encontrado un cfrculode amigos gue me entendlan>~_J::(nnlsrinlm6grafa-famOien1!ienciona que Jung se intereso por Scho enhauer recisa-

    "m!nt~ _PO_!.9!!~ e recordaba a ~s ~os~ticos con su en~ el gufcimienta. de! mundo. am lenooservaoqueaprobaba completamente el hecho de que Scho-penhauer no hablaba de la providencia bondadosa y sabiade un Creador, ni de la armonia del Cosmos, sino que expresosin rodeos que un defecto fundamental yacfa bajo el dolorosocurso de la historia humana y la crueldad de la naturaleza;la ceguera de la Voluntad creadora del mundo ... De masesta decir que estas son declaraciones absolutamente gnos-ticas. Como su interes por Schopenhauer se remonta a suinfancia, podemos deducir que Jung fue, en muchos aspectos,un gnostico natural, que poseia Ia acti!!Id ..&!?-os.!_icaunantes de couoter las t;..n.:~~o0!~L9n9sticismQ. o-7\~~Tung, aesde muy temprano, tuvo accesoa cierta cantidad de literatura erudita y poetica que estimulosu interes por el Gnosticismo, no tuvo a su disposicion ningiinmaterial original de naturaleza gnostica. Como tantos otros,Jung debio confiar en los relatos fragmentarios y, sobre todo,falsamente distorsionados de los padres de la iglesia anti-gnostica, especialmente Ireneo e Hipolito, para documentarsesobre los gnosticos, La pes ada maquinaria del saber acade-mico, con extrema lentitud y hasta renuncia, todavia intentabaubicar los tres codices coptos (Codice de Agnew, Codice deBruce y Codice de Askew) que se enmohecfan en diferentesmuseos esperando ser traducidos y publicados. El hecho deque Jung fuera capaz de deducir tanto conocimiento y extraertanta informacion valiosa sobre el G nosticism o de las pole-micas de los padres de la iglesia buscadores de herejias, puede

  • 5/11/2018 Jung El Gnostico - Hoeller Stephan

    49/300

    52 S TEPHAN HOELLERser considerado como una especie de milagro en sf mismo.La contribucion de Jung a los estudios gnosticos en generaly a una interpretacion esclarecedora y contemporanea delGnosticismo en particular, es trascendental por su alcance eimportancia. Es lamentable, aunque no especialmente sor-prendente, que esta contribucion aun no sea apreciada por elcreciente mimero de especialistas en Gnosticismo dentro delcampo de estudios bfblicos, en vista de que la mayorfa deestos estudiosos son el resultado de escuelas de la divinidady escuelas de religion de tendencias ortodoxas y religiosas.Ademas, la mayorfa de ellos carecen de cualquier apreciacionseria de la psicologia, especialmente del tipo de psicologfaque Jung defendia. Se ha dicho que la guerra es demasiadoimportante para confiarla a los generales, y serfa igualmentejusto decir que el Gnosticismo es una tradicion demasiadovaliosa para entregarla a sofistas bfblicos estudiosos de pa-labras coptas. La falta de atencion concedida a Jung poralgunos de los miembros de este grupo de estudiosos es aunmas increfble, ya que la influencia de Jung es casi la unica, resp_gnsable_

  • 5/11/2018 Jung El Gnostico - Hoeller Stephan

    50/300

    LA GNOSIS DE C. G. JUNG

    Aunque probablemente habian sido escritos originalmenteen griego, escribas gn6sticos los habian traducido al copto,lengua dem6tica del Egipto helenistico. Como sin duda sonescasos, tanto los especialistas en copto como las personasinteresadas en el Gnosticismo, la traducci6n de estos textosse llev6 a cabo a paso de.tortuga. Luego, practicamente ocu-rri6 un milagro. En diciembre de 1945, inmediatamente des-pues de la Segunda Guerra Mundial, un campesino egipcio,cuando cavaba en busca de fertilizante en las cercanias de !unas cuevas en la cadena montafiosa de Jabal al- Tarif cercadel Nilo en el Alto Egipto, se tropezo con una coleccionentera de c6dices gn6sticos. Estos tesoros, al parecer, forma-ron parte de la biblioteca del vasto complejo monastico fun-dado en esa zona por el padre del monaquismo cristiano, elsantificado monje copto Pachomius.;omo sus antecesores, el hallazgo de Nag Hammadi tard6mucho en ver la luz del dfa. Sin embargo, los pesados metodos

    de los estudiosos se aligeraron en gran medida gracias a lainfluencia de un hombre que no era ni un especialista encopto ni un experto biblico, sino simple mente un arque6logodel alma humana. Por supuesto, este hombre no fue otro queCarl Jung. Jung se intereso desde el principio por el hallazgode Nag Hammadi, y fue su antiguo amigo y colaborador, elprofesor Gilles Quispel, quien encabez6 la traduccion y pu-blicaci6n de los textos de Nag Hammadi. El10 de mayo de1952, cuando las crisis politicas y las disputas academicashabian detenido todo el trabajo concerniente al manuscrito,Quispel adquiri6 uno de los c6dices en Bruselas, y fue deesta parte de la gran biblioteca de donde se hicieron la ma-yorfa de las primeras traducciones, induciendo asf a la co-munidad cientffica a que acelerara su ya atrasado trabajo.Este c6dice, llamado el C6dice de lung, fue entregado al Ins-tituto Jung en ZUrich con ocasion del octogesimo cumpleafiosdel dr. Jung, y fue, por 10 tanto, el primer texto del hallazgode Nag Hammadi en ser examinado por estudiosos y legosfuera del turbulento y no c:~rativo ambiente del Egiptode la decada de los cincuenta. EI propio profesor Quispel

    53

    o

  • 5/11/2018 Jung El Gnostico - Hoeller Stephan

    51/300

    54 S TE PH A N H O EL LE Rdecla ro pub lic amen te que lung habia sido muy uti! para atraerla atencion hacia la inapreciable coleccion de los manuscritosde Nag Hammadi y para su publicacion. Existe una buenarazon para sospechar que sin la influencia de lung esta co-leccion habria sido condenada al olvido por culpa de la apa-rentemente activa conspiracion y negligencia de los estudio-sos. (Para mas detalles de la historia de la Biblioteca de NagHammadi y las conexiones de lung con ella, ver: H. C. Puech,G. Quispel, W . C. Van Unnik: The lung Codex, Londres, M.R. Mowbray, 1955.)

    i.Cual era la verdadera opinion de lung acerca del Gnos-ticismo? Contrariamente a 10que ha SUC~dO con la mayoriade los estudiososhasta hace muy poco u g nunc a creyoo qu~. el_G!!.~sticis~.~.Euese una herejia nsuana de lossi-gros II y III."Taiiipoco presTo"alencl0n a las intermmablesdisp'l1Ili~,!~pettosacerca'delo~]QS1b)es htmnes ffidios,iraroes, gri~~s u Oli'OS'tte~(rsticismo. Antes que cuagUierotra aut?,rida~_e~,,~E~!i~[~.(f~I

  • 5/11/2018 Jung El Gnostico - Hoeller Stephan

    52/300

    LA GNOSIS DE C. G. JUNG

    era, sin duda, muy grande. Esta vision del Gnosticismo nopermanecio confinada en los trabajos de lung, sino que prontoentre en el mundo de los estudios gnosticos por medio de sucolaborador, anteriormente mencionado, Gilles Quispel, quienen su importante trabajo Gnosis a ls Weltrelig ion (1951) de-fendio la tesis de que el Gnosticismo no expresa ni una filo-sofia ni una herejia, sino una e xpe rie nc ia re lig io sa e spe cfjic aque luego se manifiesta en un mito y (0) un ritual. Es lamen-table, sin duda, que, mas de 25 afios despues de la publicacionde este trabajo, tan pocos hayan apreciado sus significativasimplicaciones.En vista de estas consideraciones, naturalmente podrfamospreguntarnos: lEra lung un gnostico? Personas mal aconse-jadas, como Martin Buber, han respondido que sf a esta pre-gunta, implicando con ello que lung no era ni un cientfficorespetable ni un buen hombre dentro del significado religiosoortodoxo del termino, Como resultado de este uso despectivodel termino gnost ico, muchos de los seguidores de lung, y enocasiones el propio lung, han negado que el fuera un gnostico.Un ejemplo mas bien tfpico de estas evasivas fue la declara-cion que hizo Gilles Quispel cuando expreso que lung noera un gnostico en el sentido corriente del termino, Sin em-bargo, es muy dudoso que haya habido jamas un solo gnosticoen el sentido corriente del term ino. El Gnosticismo no es unconjunto de doctrinas, sino una expresion mitologica de unaexperiencia interior. En terminos de la psicologfa junguiana,podrfamos decir que los gnosticos expresaron en un lenguajepoetico y mitologico sus experiencias dentro del proceso deindividuacion, Al hacerlo, produjeron materiales de gran ri-queza y muy importantes que contenfan profundas percep-ciones de la estructura interna de la psique, el contenido delinconsciente colectivo y la dinamica del proceso de indivi-duacion, Como el propio lung, los gnosticos describieron nosolo los aspectos conscientes y los inconscientes de la psiquehumana, sino que exploraron empfricamente el inconscientecolectivo y aportaron descripciones y formulaciones sobrediversas imagenes y fuerzas arquetfpicas. Como expreso lung,

    55

  • 5/11/2018 Jung El Gnostico - Hoeller Stephan

    53/300

    56 STE PH AN H OELL ERlos gnosticos tuvieron mucho mas exito que los cristianosortodoxos al encontrar una expresion simbolica apropiadadel Self, y sus expresiones simbolicas son similares a las queJung formulo. A pesar de que Jung no se identifico abierta-mente con el Gnosticismo como escuela religiosa, asi comotampoco se identifico con ninguna otra denominacion reli-giosa, no caben dudas de que hizo mas que nadie por dilucidarel eje central de las imagenes gnosticas y la practica simbolica,Vio en el Gnosticismo una expresion particularmente valiosade la lucha universal del hombre por recobrar la plenitud.Como no hubiera sido ni practice ni modesto de su partedecirlo, no hay duda de que esta expresion gnostica de laurgente necesidad de plenitud fue reproducida solo una vezen l