Dominum et vivificantem

JUAN PABLO II SOBRE EL ESPÍRITU SANTO EN LA VIDA DE LA IGLESIA

Y DEL MUNDO

3. El testimonio del principio: la realidad originaria del pecado

• Ignorar que el hombre posee una naturaleza herida, inclinada al mal, da lugar a graves errores en el dominio de la educación, de la política, de la acción social (cf. CA 25) y de las costumbres.(C.E.C. 407)

I. La misericordia y el pecado El Evangelio es la revelación, en Jesucristo,

de la misericordia de Dios con los pecadores (cf Lc 15). (C.E.C.1846).

“Tú le pondrás por nombre Jesús, porque él salvará a su pueblo de sus pecados” (Mt 1, 21).

“Esta es mi sangre de la alianza, que va a ser derramada por muchos para remisión de los pecados” (Mt 26, 28).

“Si decimos que no tenemos pecado, nos engañamos y la verdad no está en nosotros. Si reconocemos nuestros pecados, fiel y justo es él para perdonarnos los pecados y purificarnos de toda injusticia” (1 Jn 1,8-9).

“Donde abundó el pecado, [...] sobreabundó la gracia” (Rm 5, 20).

• Pero para hacer su obra, la gracia debe descubrir el pecado para convertir nuestro corazón y conferirnos “la justicia para la vida eterna por Jesucristo nuestro Señor” (Rm 5, 20-21).

• Como un médico que descubre la herida antes de curarla, Dios, mediante su Palabra y su Espíritu, proyecta una luz viva sobre el pecado. (C.E.C. 1848)

• «La conversión exige el reconocimiento del pecado, supone el juicio interior de la propia conciencia, y éste, puesto que es la comprobación de la acción del Espíritu de la verdad en la intimidad del hombre, llega a ser al mismo tiempo el nuevo comienzo de la dádiva de la gracia y del amor: “Recibid el Espíritu Santo”. (D et V.)

• 34. Esto significa no sólo racionalidad y libertad como propiedades constitutivas de la naturaleza humana, sino además, desde el principio, capacidad de una relación personal con Dios, como « yo » y « tú » y, por consiguiente, capacidad de alianza que tendrá lugar con la comunicación salvífica de Dios al hombre.

• En el marco de la « imagen y semejanza » de Dios, « el don del Espíritu » significa, finalmente, una llamada a la amistad.

• 35. Por consiguiente, el Espíritu, ... conoce desde el principio « lo íntimo del hombre. Precisamente por esto sólo él puede plenamente « convencer en lo referente al pecado » que se dio en el principio, pecado que es la raíz de todos los demás y el foco de la pecaminosidad del hombre en la tierra, que no se apaga jamás.

• El Espíritu de la verdad conoce la realidad originaria del pecado, causado en la voluntad del hombre por obra del « padre de la mentira ».

• EL Espíritu Santo convence, por tanto, al mundo en lo referente al pecado en relación a este « juicio », pero constantemente guiando hacia la « justicia » que ha sido revelada al hombre junto con la Cruz de Cristo, mediante « la obediencia hasta la muerte ».

• 37. Según el testimonio del principio, Dios en la creación se ha revelado a sí mismo como omnipotencia que es amor.

• Al mismo tiempo ha revelado al hombre que, como « imagen y semejanza » de su creador, es llamado a participar de la verdad y del amor.

• Pero el hombre, bajo la influencia del « padre de la mentira », se ha separado de esta participación.

• Esta desobediencia, sin embargo, significa también dar la espalda a Dios y, en cierto modo, el cerrarse de la libertad humana ante él. Significa también una determinada apertura de esta libertad —del conocimiento y de la voluntad humana— hacia el que es el « padre de la mentira ».

• Lleva consigo también una cierta adhesión al motivo contenido en la primera instigación al pecado y renovada constantemente a lo largo de la historia del hombre en la tierra:

« es que Dios sabe muy bien que el día en que comiereis de él, se os abrirán los ojos y seréis como dioses, conocedores del bien y del mal ».

• Aquí nos encontramos en el centro mismo de lo que se podría llamar el « anti-Verbo », es decir la « anti-verdad ».

• En efecto, es falseada la verdad del hombre: quién es el hombre y cuáles son los límites insuperables de su ser y de su libertad.

• Es falseada completamente la verdad sobre quien es Dios. Dios Creador es puesto en estado de sospecha, Este trata de « falsear » el Bien mismo, el Bien absoluto.

• ¿Quién puede plenamente « convencer en lo referente al pecado », es decir de esta motivación de la desobediencia originaria del hombre sino aquél que sólo él es el don y la fuente de toda dádiva, sino el Espíritu que, « sondea las profundidades de Dios » y es amor del Padre y del Hijo?