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16/5/2015 Jahar,elchicoencantadorqueseconvirtienterrorista|RollingStoneArgentina

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22.07.2013 | 15:31

Jahar, el chico encantador que se convirtien terroristal era un pibe dulce con un futuro brillante pero nadie se imagin que estaba sufriendoni que se transformara en un monstruo; la historia del culpable del bombardeo a lamaratn de Boston

Por Janet ReitmanNuestros corazones estn con las vctimas del bombardeo a la maratn de Boston y con susfamiliares. La nota de tapa de la edicin estadounidense se arraiga en la tradicinperiodstica de Rolling Stone, siempre comprometida a cubrir con seriedad yprofesionalismo los asuntos polticos y culturales ms importantes de nuestro tiempo. Elhecho de que Dzhokhar Tsarnaev sea joven y est en la misma franja de edad que muchosde nuestros lectores nos obliga todava ms a examinar las complejidades de este tema y atratar de comprender mejor cmo es que sucede una tragedia como sta. LOS EDITORES

El 19 de abril, Peter Payack se despert cerca de las 4 de la maana y vio en la televisin laimagen borrosa de las cmaras de seguridad de un chico saliendo de un supermercado. Elchico, identificado como "Sospechoso N2" en el bombardeo de Boston, le sonaba conocido,pens Payack, que es entrenador de lucha en la Rindge and Latin School de Cambridge. Porotra parte, hay un milln de chicos flaquitos con rasgos tnicos y buzos grises con capucha enBoston, y probablemente muchos en la ciudad estaban pensando que conocan al sospechoso.Payack, que haba estado cerca de la lnea de la meta el da del bombardeo y haba perdidola mitad de su audicin por el estruendo de la explosin, apenas haba logrado dormir losltimos cuatro das. Pero estaba demasiado ansioso como para volver a la cama. Ms tardeesa maana, recibi una llamada de su hijo. El chico de la foto? "Pap, es Jahar".

"Sent como si una bala me hubiera perforado el corazn", recuerda el entrenador. "Pensarque ese chico al que habamos apoyado y amado como a un hijo era responsable por todasesas muertes. Fue un shock tremendo. Era como estar en una realidad alternativa".

La gente en Cambridge pensaba que Dzhokhar Tsarnaev "Jahar" para los amigos era unchico hermoso de 19 aos algo despeinado y dulce, con ojos marrones expresivos y unaactitud un poco tmida y relajada que lo haca "el tipo de chico con el que era copado estar",segn uno de sus amigos. Haba sido el capitn del equipo de lucha de Rindge and Latindurante dos aos y un excelente alumno. Adems, era "un chico norteamericano comn y

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corriente", segn lo describen sus amigos, al que le gustaba el ftbol, el hiphop, las chicas,que estaba obsesionado con The Walking Dead y Game of Thrones y que fumaba bastanteporro.

Payack se qued mirando fijo el televisor tratando de poner en relacin a Dzhokhar, elacusado de un atentado terrorista horroroso, con el adolescente que tena el nombre"Jahar", su apodo norteamericano, bordado en su ropa deportiva. La haba usado todo eltiempo.

Una tarde, Payack habl con la CNN e hizo un llamado directo. "Jahar", dijo, "te habla elentrenador Payack. Ya basta de muerte y destruccin. Por favor, entregate".

En ese preciso momento, al oeste de Cambridge, en el suburbio de Watertown, JaharTsarnaev yaca herido en el piso de una lancha a motor estacionada detrs de una casa delistones de madera. Lo haban herido despus de la medianoche en un enfrentamientoviolento con la polica en que haba muerto Tamerlan, su hermano, de 26 aos. Durante lasprximas 18 horas, se quedara quieto en la lancha mientras amaneca y miles de oficiales dela polica rastrillaban un rea de 20 cuadras a la redonda para dar con l. Lo encontraronjusto despus de las 6 de la tarde, aunque a los agentes del FBI les llevara casi tres horasms de negociacin convencerlo de que se entregara.

La maana siguiente, Payack recibi un mensaje de unode los agentes de la Unidad de Crisis y Negociacin delFBI. Le haban contado sobre el llamado de Payack portelevisin, y le dijo que lo haba nombrado mientrashablaba con Jahar. "Me parece que ayud", dijo elagente. Payack se sinti aliviado. "Tal vez que ledijeran que yo estaba pensando en l lo par un poco", dice Payack. "Tal vez se imaginaba as mismo como un mrtir para la causa. Pero de repente, aparece alguien de su pasado, unpasado que le gustaba, en el que encajaba bien, y se quebr".

Cuando los investigadores finalmente pudieron acceder a la lancha, descubrieron una diatribayihadista garabateada en las paredes. En ella, segn la acusacin de 30 cargos que se hizo afinales de junio, Jahar aceptaba la responsabilidad del bombardeo, aunque admita que no lehaba gustado matar a gente inocente. Pero "el gobierno de los Estados Unidos est matandoa civiles inocentes", escribi, refirindose probablemente a los musulmanes en Irak yAfganistn. "No puedo aceptar que tanta maldad quede impune. los musulmanes somos unsolo cuerpo, si lastiman a uno, nos lastiman a todos", continuaba, haciendo uso de unargumento tantas veces esgrimido por los militantes islmicos que se ha convertido casi en unclich. Despus se sali un poco del guin de siempre y escribi una frase que no dej lugar adudas sobre su lealtad: "Que Estados Unidos se vaya a cagar".

En los 12 aos que pasaron desde los ataques a las Torres Gemelas y el Pentgono, ha habidoms de 25 complots para atentar contra los Estados Unidos ideados por norteamericanos, lamayora de los cuales estuvieron mal planificados o infiltrados por agentes encubiertos que,en muchos casos, les proveyeron a los blancos armas u otros materiales. Algunos, incluyendoel plan para bombardear el sistema de subtes de Nueva York y el Times Square, fueronlegtimos y habran sido catastrficos si hubiesen sido llevados a cabo. Y sin embargo ningunolo logr hasta esa tarde brumosa del 15 de abril, cuando dos bombas metidas en ollas apresin explotaron cerca de la lnea de la meta en la calle Boyslon, dejando como saldo tresmuertos, entre ellos un nio de 8 aos. Ms de 300 personas resultaron heridas por losfragmentos de la bomba, y muchos perdieron una pierna, un brazo o un ojo; el escenario erade una carnicera tal que recordaba las imgenes de Bagdad, Kabul o Tel Aviv.

El pnico se apoder de la ciudad de Boston cuando se supo que los hermanos Tsarnaev noestaban, como muchos descontaban, conectados con algn grupo terrorista, sino que habanactuado de manera independiente. Emigrados de Rusia, haban vivido en Estados Unidosdurante una dcada, y en Cambridge, una ciudad tan progresista que tiene su propia"comisin de la paz", que promueve la justicia social y la diversidad. Tamerlan, al que susamigos llamaban "Tim", era un boxeador talentoso que alguna vez haba querido representara Estados Unidos en las Olimpiadas. Jahar, su hermano menor, se haba ganado una becapara estudiar en la Universidad de Massachusetts en Darthmouth, y no saba si estudiaringeniera, enfermera u odontologa; cambiaba de carrera todo el tiempo. Eranmusulmanes, por supuesto, pero tambin eran norteamericanos, sobre todo Jahar, que sehaba naturalizado el 11 de septiembre de 2012.

Desde el ataque, los amigos y conocidos de los Tsarnaev, como tambin el FBI y otrosagentes de orden pblico, han estado tratando de armar la historia de los hermanos, que seenfoca en Tamerlan, de quien ahora se sabe que estuvo en las listas de personas vigiladas deEstados Unidos y Rusia antes del 2013, aunque ni el FBI ni la CIA pudieron encontrar razonespara investigarlo un poco ms. Jahar, sin embargo, no estaba en ninguna lista. Al contrario,despus de varios meses de entrevistar a sus amigos, profesores y entrenadores, que todavase estn reponiendo del shock, la imagen que surge es la de un chico que viva una vida

Rolling Stone206

Pensar que ese chico alque habamos apoyadoy amado como a un hijoera responsable portodas esas muertes



tranquila, que no demostraba ninguna seal de enojo y menos de ser partidario de unaideologa poltica radical o de creencias religiosas profundas.

Cuando le leyeron los cargos en el palacio de justicia de Boston, el 10 de julio, Jahar sonri,bostez y se sent despreocupadamente en su silla. No pareca estar al tanto de la gravedadde la situacin, y se declar inocente de todos los cargos. Por momentos, casi sonrea consuperioridad, aunque los que lo conocen dicen que no es as. "Es una actitud tpica de Jahar,como si estuviera pensando: 'Qu mierda est pasando ac?'", dice Payack, que estuvopresente en la audiencia.

Fue su entrenador quien lo ayud a encontrar su apodo, con el que reemplaz el casiimposible de pronunciar Dzhokhar con una versin ms simple y ms cool de su nombre. "Sihubiera tenido apenas una pizca radical en su pensamiento, por qu habra aceptadocambiar la ortografa de su nombre para que los chicos norteamericanos en el colegio lopudieran pronunciar?", se pregunta un viejo amigo, que piensa como el resto de su crculo."No puedo aceptar que mi amigo, el Jahar que yo conozco, sea un terrorista", aade otro."Para m ese Jahar no lo es".

"Hay chicos que tienen grietas, a los que no pods atajar antes de que se caigan, pero estepibe estaba entero, como una bola de billar. No tena ninguna grieta", dice Payack. Y sinembargo, debajo de esta fachada, haba un chico destrozado; un testigo de los esfuerzos desu familia por conseguir una vida mejor y de la tremenda amargura que sintieron cuandoesos esfuerzos no sirvieron para nada y los sueos no se concretaron. Con cada pequeadesilusin la familia se debilit hasta que finalmente se desintegr, y con ella tambin Jahar:fueron golpes chiquitos pero poderosos. Nadie se dio cuenta. "Yo lo conoca a este pibe, yera un buen pibe", dice Payack con tristeza. "Y por lo visto, tambin es un monstruo".

A pesar de que Dzhokhar Tsarnaev se cri principalmente en Estados Unidos, sus orgenes seremontan al norte del Cucaso, una regin tumultuosa que ha sufrido siglos de disturbiospolticos. Naci el 22 de julio de 1993 y pas sus primeros siete aos en Kirguistn, larepblica montaosa de Asia central. All fue donde Anzor, su padre, se haba exiliado depequeo. Anzor es de Chechenia, la ms infame de las repblicas soviticas de antao, cuyopueblo ha estado en guerra casi perpetua desde el siglo XVIII contra el poder ruso. Zubeidat,la madre de Dzhokhar, es vara, el grupo tnico musulmn predominante de Daguestn, elvecino de Chechenia al este, que lucha por su propia independencia contra los rusos desdefines del siglo XVIII. Luego de la cada de la Unin Sovitica, los nacionalistas chechenosdeclararon la independencia, lo que caus dos guerras brutales en las que el ejrcito rusomasacr a decenas de miles de chechenos y destruy Grozni, su capital. Hacia 1999, laviolencia se extendi a lo largo de toda la regin, incluyendo Daguestn.

A pesar de que el Islam es la religin predominante en el norte del Cucaso, sta no tuvomucha influencia en la vida de Anzor Tsarnaev, un hombre rudo y fuerte, que se cri en laera sovitica, cuando el culto en Kurguistn estaba prcticamente prohibido. En Daguestn,donde el islam tuvo ms acogida, muchas mujeres usan hiyabs; Zubeidat, sin embargo, tenaun corte de pelo a lo Pat Benatar. Se conocieron cuando Anzor estaba estudiando derecho yse casaron el 20 de octubre de 1986. Al da siguiente naci Tamerlan, su primer hijo.Naceran tres hijos ms, todos en Kurguistn, donde Anzor haba conseguido un trabajocomo investigador para un fiscal en Biskek, la capital del pas.

Era un puesto prestigioso, especialmente para un checheno, pero Anzor tena ambiciones msgrandes. Quera llevar a su familia a Estados Unidos, donde Ruslan, su hermano, que eraabogado, haba logrado vivir una vida de clase media alta. Despus de que Rusia invadieraChechenia en 1999, que inaugur la segunda guerra sangrienta de la dcada, a Anzor loecharon del trabajo por una purga general de chechenos que realiz el gobierno deKurguistn. Los Tsarnaev escaparon a Daguestn, tierra natal de Zubeidat, pero la guerra lespisaba los talones. En la primavera de 2002, Anzor, Zubeidat y Jahar, que entonces tena 8aos, llegaron a Estados Unidos con una visa de turismo y rpidamente pidieron asilo poltico.Ailina, Bella y Tamerlan, los otros tres hijos de la pareja, se quedaron con sus parientes.

Durante sus primeros meses en Estados Unidos, Jahar ysus padres vivieron en Boston, en casa del doctorKhassan Baiev, un mdico checheno amigo de lahermana de Anzor, que recuerda que Anzor le contque lo discriminaban en Kirguistn y a veces "hasta lohaban golpeado". Esta violencia sirvi como argumentopara el pedido de asilo de los Tsarnaev, que les fueotorgado un ao despus. En julio de 2003, el resto de la familia se les uni en Cambridge.Se mudaron a un departamento chico de cuatro ambientes en la calle Norfolk 410; era unedificio poco cuidado con pintura descascarada en un barrio muy aburguesado.

Hay muy pocas familias chechenas en Boston, y los Tsarnaev fueron bien recibidos. "Tenanunos hijos preciosos", recuerda Anna Nikeava, una chechena que se hizo amiga de losTsarnaev poco despus de su llegada. "Los cuatro eran tiernos como gatitos mimosos,

"Yo lo conoca a estepibe, y era un buenpibe", dice Payack contristeza. "Y por lo visto,tambin es unmonstruo"



siempre se abrazaban y se daban besos". Y el matrimonio tambin pareca adorarse, a pesarde que Anzor, que hablaba ingls muy mal, trabajaba como mecnico y ganaba slo 10dlares por hora. El primer ao, los Tsarnaev recibieron ayuda del Estado. Pero nunca se losvio apretados, dice Anna. "Estaban muy enamorados y disfrutaban de la vida. Erandivertidos".

Las familias chechenas son muy tradicionales; Anna, una mujer clida y parlanchina quetiene alrededor de cuarenta aos, me cuenta que en su pas "las mujeres no usan pantalones,tienen que usar pollera", y que casarse con alguien de otra cultura es tab. En ese sentido,los Tsarnaev eran atpicos. Zubeidat era "muy abierta, una mujer moderna", a la que legustaban los jeans de moda, los tacos altos y las polleras cortas. "Se haba hecho elmaquillaje permanente, era muy glamorosa", dice Anna. "Y los chicos estaban siempre bienvestidos tambin".

Zubeidat adoraba a sus hijos, en especial a Tamerlan, un chico alto y musculoso que ellacomparaba con Hrcules. Jahar, por otro lado, era su beb, el preferido de su mam."Pareca un ngel", dice Anna, y le decan "JoJo" o "Ho".

"l siempre deca: 'S, mami, s', incluso cuando su mam lo retaba", dice Baudy Mazaev, elhijo de Anna, que tiene un ao y medio menos que Jahar. "Era un chico bueno, tranquilo,obediente. Mi mam siempre me deca: 'Por qu no me habls como le habla Dzhokhar a sumadre?'"

Haba cinco o seis varones chechenos de la misma edad en el crculo, pero Baudy y Jahar sehicieron muy amigos. Baudy, que ahora est estudiando en la Universidad de Boston,recuerda las reuniones familiares en el departamento decrpito del ltimo piso de losTsarnaev, donde Jahar y Tamerlan compartan un dormitorio pequeo con camas cucheta; enun cuarto todava ms chico, las hermanas compartan un colchn. Nunca haba lugarsuficiente para todos en la diminuta mesa de la cocina, as que los varones jugaban a lasescondidas o a los videojuegos en el televisor gigante del living mientras sus padres cenabany charlaban. Anzor era famoso por su risa estridente, que Jahar hered: "Era muy fuerte,cuando se rea se enteraba todo el mundo", dice Baudy.

Jahar idolatraba a Tamerlan, su hermano mayor, como el resto de los hermanos, y cuandoera chico quiso seguir los pasos de l y aprender a boxear. Pero pronto se inclin por lalucha, deporte que comparti con Baudy, un chico fuerte que competa en una categora depeso ms alta que Jahar, que pesaba 59 kilos. "Es tpico de chechenos", dice Baudy. "Cuandofui a Chechenia a visitar a mis primos, lo primero que me preguntaron fue: 'Quers luchar?'"

Baudy est muy orgulloso de su herencia, y Jahar, que comparte su nombre de pila conDzhokhar Dudayev, el primer presidente de Chechenia (y el hroe de Anzor), tambin sesenta orgulloso de ser checheno. Adopt el lobo, smbolo nacional de los chechenos;aprendi los bailes tradicionales, y poda hablar checheno igual de bien que ruso. Incluso seimaginaba casndose con una chechena. "Siempre deca que las chechenas eran lindas", diceBaudy, aunque piensa que Jahar nunca conoci a ninguna, salvo las hermanas de algunosamigos.

Haba muchos Jahar en Cambridge; hijos de inmigrantes que apenas tenan una nocin muyvaga e idealizada de su tierra natal. Adems de ser una de las ciudades ms liberales,intelectuales y sofisticadas de Estados Unidos, Cambridge es tambin una de las ms diversasen trminos econmicos y tnicos. En Cambridge Rindge and Latin, la secundaria estatal dela ciudad, hay representadas ms de 50 nacionalidades, y su lema, que est escrito en lasparedes, murales y catlogos de la escuela, y proclamado por los altavoces, es "Oportunidad,Diversidad, Respeto". Casi el 45 por ciento de los alumnos vive en viviendas pblicas osubsidiadas por el Estado, en los barrios densamente poblados de clase trabajadora de laciudad. Hay zonas ms ricas, y en ellas viven los hijos de los profesores de las Universidadesde Harvard y MIT, que tambin van a Rindge, "pero no hay tantos", dice el Dr. Jeffrey M.Young, supervisor de las escuelas de Cambridge. "Lo que s tenemos son familias que estnmuy comprometidas con la actividad poltica", como las de Matt Damon y Ben Affleck, dosexalumnos famosos de la escuela. "Y despus estn los callados, a los que alentamos a queencuentren su voz".

Todos los hijos de los Tsarnaev fueron a Rindge, como le dicen al colegio, pero Jahar fue elque mejor se adapt. Aunque no hablaba casi nada de ingls cuando lleg a Estados Unidos,ya en la secundaria lo dominaba con fluidez, con apenas un resto de acento, como tambinel dialecto local. (Entre sus palabras preferidas, dicen sus amigos, estaba "sherm", que en lajerga de Cambridge significa "vago"). Jahar, o "Jizz" para los amigos, usaba zapatillas Puma,jugaba bien al bsquet y fumaba bastante marihuana, cosa que segn varios adolescentes deCambridge est bastante aceptado en esta comunidad permisiva, en que pods conseguirporro en el bao del colegio o fumar por la calle sin problemas. Era buen alumno y estuvonominado por la Sociedad de Honor Nacional en segundo ao, cuando adems se uni alequipo de lucha. "Era uno de esos chicos con talento natural", dice Payack, su entrenador,que recuerda que Jahar era un compaero solidario que soportaba entrenamientos duros sin



quejarse. En su primer ao, el equipo lo nombr capitn. Para ese momento, todos loconocan como "Jahar", nombre que sus compaeros de equipo gritaban en las peleas paraasegurarse de que los refers no lo pronunciaran mal.

"Nunca pude entender bien su nombre Dokar?Jokar?", dice Larry Aaronson, un profesor dehistoria de Rindge jubilado (dice que en un momento Jahar le pidi que le dijera "Joe").Aaronson, que es amigo de Howard Zinn, el historiador fallecido, tambin vive en la calleNorfolk, en la esquina de la casa de los Tsarnaev. "Una vez le pregunt de dnde era, y mecontest que de Chechenia. Y yo le dije: 'Chechenia? Me ests jodiendo?'", dice Aaronson."Le dije: 'Cmo hiciste para soportar el estrs?', y me contest: 'Larry, por eso vinimos aEstados Unidos, y mir qu buena suerte que tuvimos, que vinimos a parar a un lugarincreble como Cambridge!' Le encantaba esta ciudad, el colegio, la cultura del lugar, y loaprovech bien. Eso es lo que me enterneca de l: era el tpico chico de un pas en guerra,que aprovech todo lo que le podamos dar para reconstruir su vida. Y era encantador",aade.

Los amigos de Jahar conformaban un grupo heterogneo de chicos de zonas ricas y pobres deCambridge: negros, blancos, judos, catlicos, puertorriqueos, bengales, caboverdianos.Eran, segn me dijo uno de los padres de familia de Cambridge, "los chicos buenos":campeones de debate, deportistas de primer nivel, presidentes de su clase, en fin, unpuado de cerebritos que estudiaran en las universidades de lite de Nueva Inglaterra. Comoestudiante esforzado que era, Jahar deca que iba a estudiar en Brandeis o en Tufts,recuerda uno de los amigos de su crculo ntimo a quien llamaremos Sam, que accedi ahablar en exclusiva para Rolling Stone usando un pseudnimo. "Era uno de los chabones msautnticos que yo conoc en mi vida", dice Sam, que pas casi toda su adolescencia con Jaharjugando al bsquet o de fiesta en una zona del ro Charles conocida como el "Riv". Pasara loque pasara, "era la primera persona a la que yo llamaba si necesitaba que me llevara a algnlado, o si le quera pedir un favor. l contestaba: 'Ya voy, amigo', incluso si lo llamabascompletamente borracho a las dos o tres de la maana".

"Era un pibe muy copado", dice Will, otro amigo, que recuerda que en un ao nuevo Jaharllev a 8 o 9 personas, incluyendo uno en el bal, en su Honda Civic verde. Por supuesto quela polica los par, pero Jahar no se inmut. "Incluso cuando lo agarraban tomando", dice suamigo Jackson, "era un chico tranquilo, que siempre saba cmo haba que hablar con lapolica".

Todos concuerdan en que tena sus principios. "Nunca se la agarraba con nadie", dice Sam, yaade que al igual que su hermano, Jahar era muy buen boxeador. "Era mejor boxeador queluchador, era una bestia". Y aunque poda noquear a quien quisiera, nunca lo haca. "No eraviolento, eso es lo loco. Nunca reaccionaba de manera violenta", dice Sam.

"Era muy tranquilo", dice su amiga Alyssa, que tiene un ao menos que Jahar. Las chicasestaban locas por l, aunque sus amigos dicen que si bien se enamoraba, nunca seaprovechaba de esto. "Siempre deca: 'Relaj, pasmosla bien'", dice Sam, recordando queJahar tena una aversin casi fsica a que le prestaran atencin. "Era muy humilde, creo quesa es la mejor manera de describirlo".

Cara, una rubia linda y vivaracha de la que muchos sospechan que Jahar estabasecretamente enamorado, insiste en que eran slo amigos. "Era muy dulce. Demasiadodulce", dice con tristeza. Los dos aprendieron a manejar juntos, as que se vean mucho yfumaban porro juntos. Jahar, dice ella, tena la habilidad de moverse por diferentes grupossociales y siempre se pona en el lugar de los dems cuando alguien tena algn problema. "Esuna persona de oro, un chico genuino y bueno, que no tena problemas con nadie", dice. "Esdifcil explicarlo. Era un chico de Cambridge".

Los chicos de Cambridge, concuerdan todos, tienen una actitud ms relajada con respecto aalgunos temas que a otras personas podran ponerlos nerviosos. Hace un par de aos, porejemplo, uno de sus amigos decidi convertirse al islam, cosa que muchos vieron como algocopado, como Cara, y otros los dej indiferentes. "Pero as es la escuela a la que fuimos",dice Jackson. "Es el tipo de colegio en el que alguien puede decir 'Me convert al islam' y vosle contests 'Ok, qu copado'". Y de hecho, varios chicos se convirtieron, aade. "Estuvo unpoco de moda durante un tiempo".

Jahar nunca neg que fuera musulmn, aunque a veces lo disimulaba un poco. Ayunabadurante Ramadn, lo que significaba tambin dejar el porro, que para l era un acto deinmenso autocontrol, dicen sus amigos. "Pero lo ms religioso que alguna vez dijo fue 'Nopronuncies el nombre de Dios en vano'", dice Alyssa, que es juda. "S", dice Jackson, "tal vezera religioso, pero si l no te lo deca, no te dabas cuenta".

Hace un par de aos, otro musulmn, integrante del equipo de lucha de Rindge, particip deun grupo informal de rezo en la escuela a la hora del almuerzo, donde vio a Jahar. "No sabaque era musulmn hasta que lo vi en el grupo de rezo de los viernes", dice. "No era un temadel que hablramos".



Su amigo Theo, que tambin luchaba con Jahar, no est completamente de acuerdo. "Yocreo que l tena reverencia por el islam", dice. Hubo una ocasin en particular, hace un parde aos, en la que Jahar se puso muy incmodo cuando James, el amigo que se habaconvertido, empez a hablar de la religin. "No se enoj, pero medio que lo call", recuerdaTheo. "Y me pareci que l se tomaba su religin muy en serio. No era algo pasajero paral".

Sin embargo, "nunca hubo ninguna advertencia de esto", dice una de sus profesoras dehistoria, que, como muchos otros, pidi permanecer en el anonimato dada la sensibilidad delcaso. En su clase, la preferida por muchos de los alumnos de Rindge, se debate sobre temasde poltica contempornea como la globalizacin y la crisis en Medio Oriente, pero Jahar,dice ella, nunca demostr tener una posicin poltica propia, "ni siquiera cuando se le pedaque opinara". Alyssa, a la que le encantaba esta clase, est de acuerdo: "Una de laspreguntas que nos hacemos es 'Qu es el terrorismo? Cmo podemos, en calidad denorteamericanos, definirlo culturalmente? Cules son sus causas? Podemos justificarlas?' Yestoy segura de que Jahar nunca nos dijo que estuviera a favor del terrorismo, jams".

Excepto una vez.

"Una vez me dijo que los actos terroristas estaban justificados", dice Will. Fue en primerao; los chicos haban estado comiendo en un bar llamado Izzys y hablaban sobre religin.Con algunos amigos como Will y Sam Jahar hablaba del Islam y les haba confesado queodiaba a la gente que por ignorancia igualaba el Islam con el terrorismo; adems, habadefendido el Islam argumentando que era una religin pacfica y diciendo que la yihad eraslo un esfuerzo personal, nada ms. Esta vez, recuerda Will, "me acuerdo de que le dijeque algunos aspectos de la religin eran dainos, y mencion los ataques del 11 deseptiembre".

En ese momento, dice Will, Jahar no quiso seguir hablando. Will le pregunt por qu."'Porque no te va a gustar lo que pienso', dijo l. As que le insist un poco, y me dijo que lepareca que esos actos estaban justificados por lo que Estados Unidos hace en otros pasestan frecuentemente, como tirar bombas todo el tiempo".

Para ser justos con Jahar, reconocen Will y los dems, sus opiniones sobre la poltica exteriorde Estados Unidos no eran tan distintas de las que sostena mucha gente que ellos conocan."En trminos de poltica, yo dira que l es tan antinorteamericano como cualquier pibe enCambridge", dice Theo. Sin embargo, Will pens que era mejor no seguir discutiendo. "Yopensaba: 'Wow. Este pibe piensa as de verdad? No puedo seguir hablando de esto'". Nuncams se habl del tema.

En retrospectiva, el comentario de Jahar sobre el 11 de septiembre podra ser consideradodentro del contexto de lo que los criminlogos llaman "un derrame": una pequea grieta enuna fachada construida con cuidado que, si es reconocida (y por lo general no lo es), brindapistas sobre el mundo interior de la persona. "En los casos que a m me toc entrevistar, esclave pasar por alto su fachada exterior y concentrarse en el interior de la persona, que esmuy difcil", dice Tom Neer, un agente retirado de la Unidad de Anlisis de Comportamientodel FBI y socio fundador del grupo Soufan, consultor del gobierno en temas relacionados alantiterrorismo. "Mucha gente tiene una personalidad pblica y una privada; pero muchostienen adems un lado secreto. Y ese lado secreto es algo que protegen con mucho cuidado".

Haba muchas cosas sobre Jahar que sus amigos yprofesores no conocan, cosa que no es demasiado rarapara los inmigrantes, que viven vidas altamentebifurcadas, alternando sus personalidades tnicas ynorteamericanas constantemente. "Nunca vi a suspadres, y ni siquiera saba que tena un hermano", dice Payack, que se preguntaba por qu lafamilia de Jahar nunca lo iba a ver a las competencias, como al resto de sus compaeros. "Sisos el hermano mayor y quers a tu hermano, por qu no lo vas a ver cuando pelea?"

Theo tambin se lo preguntaba. "Una vez le pregunt por qu no iban, y me dijo que cuandoboxeaba de chico, nunca haba perdido ninguna pelea, y entonces no quera que su padre loviera perder". Sonaba creble: Jahar era muy habilidoso como luchador, pero nunca le dedicel tiempo suficiente como para volverse el mejor. "No era una de sus prioridades", diceTheo. Por otra parte, tampoco le importaba mucho perder. "Otros chicos, cuando pierden, seenojan muchsimo: piensan que el refer los perjudic, a veces tiran una silla. O lloran, sequedan de malhumor", dice Payack. Jahar se retiraba de la colchoneta con indiferencia."Pona cara de 'Bueh, qu vamos a hacer, lo intent'".

Cuando llega el ltimo partido de la temporada, todos los luchadores de quinto ao deRindge llevan a sus padres o a algn pariente para que los acompaen al gimnasio, les denuna flor y se saquen una foto juntos. Jahar no llev a nadie. "Uno de los entrenadores loacompa a recibir su flor", dice Payack. Esto tampoco pareci molestarle a Jahar, y si lemolest, nunca lo dijo. "No tens que contarle todos tus secretos a tus amigos para ser

Me pareci que l setomaba su religin muyen serio. No era algopasajero para l



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ntimos", dice Jackson.

La familia de Jahar exista en una esfera completamente separada del resto de su vida.Jackson, que viva cerca, a veces vea a Anzor arreglando un auto; otros conocan a sushermanas a travs de sus propios hermanos ms grandes. Y siempre circulaban historiassobre Tamerlan, que haba sido dos veces campen de boxeo amateur. Pero nadie conoca aTamerlan en persona, y casi nadie del colegio haba ido a la casa de los Tsarnaev. "Nunca, niuna sola vez", dice Jackson. Uno de los amigos de Bella, la hermana mayor de Jahar, diceque el departamento de la calle Norfolk "daba la sensacin de que las visitas no eran muyfrecuentes".

Algunos indicios demuestran que los problemas de la familia Tsarnaev iban ms all de laadaptacin a la vida norteamericana. Anzor, que sufra de artritis crnica, dolores de cabezay de estmago, tena mal carcter, tal vez producto de los abusos que haba sufrido enKirguistn. A un vecino de la calle Norfolk le pareca "un tipo infeliz", que les ladraba a losvecinos porque estacionaban mal y hasta les sacaba las palas de las manos cuando le parecaque no estaban limpiando las calles nevadas de manera correcta. A pesar de su conducta,trabajaba muchsimo. "Me acuerdo de sus manos", dice Baudy. "A veces haba estadoarreglando autos al aire libre, con el fro que hace en Boston, sin guantes, y tena unosnudos gruesos en los nudillos por la artritis. Pero le encantaba. Para l su rol consista endarle de comer a su familia".

Zubeidat era una mujer emprendedora y trabaj como asistente de salud a domicilio, aunquedespus cambi a cosmetloga; haca limpiezas de cutis en la peluquera del barrio y msadelante abri un negocio en su casa. "Nunca se comprometa", dice Baudy, al que le caabien la madre de Jahar, si bien la vea como la tpica luchadora. "Quera hacerse rica rpido.Deca cosas como: 'Estoy tardando demasiado con esto. Mejor voy a probar otra cosa".

Pero el dinero nunca lleg. En 2009, la salud de Anzor se deterior, y ese agosto losTsarnaev, que haca cinco aos que ya no reciban ayuda del Estado, empezaron a recibirsubsidios otra vez en forma de estampillas para comprar comida y dinero en efectivo. Estaincapacidad para mantener a su familia puede haber contribuido a esa debilidad como padreque algunos que conocen a Anzor le atribuyen, a diferencia de Zubeidat, que era muycontroladora.

Ella era una madre dedicada y "nunca aceptaba ningn consejo sobre sus hijos", dice Anna."Pensaba que eran los chicos ms inteligentes y hermosos del mundo". En especial Tamerlan."Era el preferido en la familia. En cierto sentido, era como el padre. Tenan que hacer lo quel dijera".

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jahar, el chico encantador que se convirtió en terrorista _ rollingstone argentina

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