entre el tópico y el prejuicio. el isla.m y el mundo árabe ... · pdf filee...

12
e ENTRE EL TÓPICO Y EL PREJUICIO. EL ISLA.M Y EL MUNDO ÁRABE EN EL SISTEMA EDUCATIVO ESPAÑOL GEMA MARTÍN MUÑOZ (*) En el marco de las actividades científi- cas patrocinadas por la Agencia Española de Cooperación Internacional, y concreta- mente su sección dedicada a la Coopera- ción con el Mundo Árabe (AECI-ICMA), realizamos un proyecto de investigación entre 1994 y 1995 destinado a analizar el tratamiento de los temas sobre el Islam y el Mundo Árabe en la enseñanza media espa- ñola. Dicho trabajo se ha continuado en la elaboración de un libro, El Islam y el Mun- do Árabe. Guía didáctica para profesores y formadores, que sirviese para informar del estado de la cuestión y ofreciese una alter- nativa a la situación actual'. Como se muestra detalladamente en el libro, dicha situación arroja un balance tan negativo que exige una toma de concien- cia por parte de los formadores, tanto de los responsables de los planes de estudio como de los profesores, sobre la pésima si- tuación en que se encuentra la enseñanza de las cuestiones relativas al Mundo Árabe e Islámico, sobre el que llegan diariamente informaciones que son cuanto más fre- cuentes más superfluas y tergiversadas. Porque, hay que decir, la extensión de pre- juicios, errores y malas interpretaciones en absoluto es exclusiva del sistema educati- y o y podemos encontrar una dinámica si- milar en los influyentes medios de comuni- cación. De hecho, es bastante evidente que los temas son seleccionados en torno a las cuestiones que más cobertura mediá- tica tienen en el momento en que el texto escolar es redactado y recurriendo a la prensa como importante fuente de docu- mentación, y de ahí que se caiga en el sen- sacionalismo y se reproduzcan los clichés mediáticos en la enseñanza. El artículo que aquí presentamos reco- ge en extracto los «defectos» principales de los que adolece la enseñanza secunda- ria española con respecto a musulmanes y árabes de acuerdo con lo analizado en el libro más arriba mencionado. UNA INCORRECTA INTERPRETACIÓN DE LA HISTORIA En el origen del incorrecto tratamiento de los temas que conciernen al Islam y al Mundo Árabe reposa la arraigada tenden- cia a analizar las relaciones entre Europa y el Islam en clave de antagonismo y enfren- tamiento. Lejos de analizar las diferencias entre las partes a través del principio del (*) Universidad Autónoma de Madrid. (1) G. IvIARTIN MUÑOZ; B. VALLE SIMÓN; NI A. LÓPEZ PLAZA: El Islam y el Mundo Árabe. Guía didáctica para profesores y formadores, Madrid, Ediciones de la Agencia Española de Cooperación Internacional (Avda. Reyes Católicos, 4), 1996. Revista de Educación, núm. 316 (1998), pp. 151-162 151

Upload: phungdan

Post on 31-Jan-2018

219 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

Page 1: ENTRE EL TÓPICO Y EL PREJUICIO. EL ISLA.M Y EL MUNDO ÁRABE ... · PDF filee ENTRE EL TÓPICO Y EL PREJUICIO. EL ISLA.M Y EL MUNDO ÁRABE EN EL SISTEMA EDUCATIVO ESPAÑOL GEMA MARTÍN

eENTRE EL TÓPICO Y EL PREJUICIO.

EL ISLA.M Y EL MUNDO ÁRABE EN EL SISTEMA EDUCATIVO ESPAÑOL

GEMA MARTÍN MUÑOZ (*)

En el marco de las actividades científi-cas patrocinadas por la Agencia Españolade Cooperación Internacional, y concreta-mente su sección dedicada a la Coopera-ción con el Mundo Árabe (AECI-ICMA),realizamos un proyecto de investigaciónentre 1994 y 1995 destinado a analizar eltratamiento de los temas sobre el Islam y elMundo Árabe en la enseñanza media espa-ñola. Dicho trabajo se ha continuado en laelaboración de un libro, El Islam y el Mun-do Árabe. Guía didáctica para profesores yformadores, que sirviese para informar delestado de la cuestión y ofreciese una alter-nativa a la situación actual'.

Como se muestra detalladamente en ellibro, dicha situación arroja un balance tannegativo que exige una toma de concien-cia por parte de los formadores, tanto delos responsables de los planes de estudiocomo de los profesores, sobre la pésima si-tuación en que se encuentra la enseñanzade las cuestiones relativas al Mundo Árabee Islámico, sobre el que llegan diariamenteinformaciones que son cuanto más fre-cuentes más superfluas y tergiversadas.Porque, hay que decir, la extensión de pre-juicios, errores y malas interpretaciones enabsoluto es exclusiva del sistema educati-

yo y podemos encontrar una dinámica si-milar en los influyentes medios de comuni-cación. De hecho, es bastante evidenteque los temas son seleccionados en tornoa las cuestiones que más cobertura mediá-tica tienen en el momento en que el textoescolar es redactado y recurriendo a laprensa como importante fuente de docu-mentación, y de ahí que se caiga en el sen-sacionalismo y se reproduzcan los clichésmediáticos en la enseñanza.

El artículo que aquí presentamos reco-ge en extracto los «defectos» principalesde los que adolece la enseñanza secunda-ria española con respecto a musulmanes yárabes de acuerdo con lo analizado en ellibro más arriba mencionado.

UNA INCORRECTA INTERPRETACIÓNDE LA HISTORIA

En el origen del incorrecto tratamientode los temas que conciernen al Islam y alMundo Árabe reposa la arraigada tenden-cia a analizar las relaciones entre Europa yel Islam en clave de antagonismo y enfren-tamiento. Lejos de analizar las diferenciasentre las partes a través del principio del

(*) Universidad Autónoma de Madrid.(1) G. IvIARTIN MUÑOZ; B. VALLE SIMÓN; NI A. LÓPEZ PLAZA: El Islam y el Mundo Árabe. Guía didáctica para

profesores y formadores, Madrid, Ediciones de la Agencia Española de Cooperación Internacional (Avda. ReyesCatólicos, 4), 1996.

Revista de Educación, núm. 316 (1998), pp. 151-162 151

Page 2: ENTRE EL TÓPICO Y EL PREJUICIO. EL ISLA.M Y EL MUNDO ÁRABE ... · PDF filee ENTRE EL TÓPICO Y EL PREJUICIO. EL ISLA.M Y EL MUNDO ÁRABE EN EL SISTEMA EDUCATIVO ESPAÑOL GEMA MARTÍN

conflicto de intereses y de analizar las relacio-nes culturales a través del concepto de la in-terpenetración entre civilizaciones, lainterpretación histórica que ha predominadoha partido mayoritariamente de la visión dedos realidades antinómicas, destacándose loque de belicoso hubiera entre ellas. De ahíque se presente el transcurrir histórico comouna dinámica continua de enfrentamientos:la lucha de Bizancio contra el Imperio islámi-co; de los reinos cristianos contra Al-Áncialus;de los turcos otomanos contra Europa; delnacionalismo árabe o islámico contra Occi-dente. De hecho, los manuales inciden enuna presentación cíe la Historia maniquea-mente repartida entre «buenos» y «malos»que recuerda más a un ejemplar de «Haza-ñas bélicas» que a un texto escolar.

La rivalidad en términos de hegemoníapolítica y económica entre la cristiandadmedieval y el imperio árabo-islámico es in-terpretado recurrentemente en torno al en-frentamiento civilizacional, llevando a laconciencia occidental a percibir al mundomusulmán en términos de hostilidad y des-confianza. Así, mientras el cristianismo y eljudaísmo han sido integrados en Occiden-te en eso que se conoce comúnmentecomo «civilización jucleo-cristiana», al Is-lam se lo ha dejado al margen de dicho re-conocimiento cultural a pesar de habercontribuido con un rico patrimonio filosó-fico y científico a la emergencia del Rena-cimiento europeo que, a su vez, abrió laspuertas al Siglo de las Luces.

Los prejuicios recreados en torno a lapresentación de la confrontación islamo-cris-tiana en España, en las Cruzadas o contra elturco, así como más tarde en el supuesto an-tioccidentalismo de los movimientos socio-políticos árabes o islámicos han penetrado elinconsciente colectivo de Occidente de for-ma tan profunda que exigen una gran inver-sión en tiempo y esfuerzo para que puedanser alguna vez extirpados.

Valgan algunos de las más significati-vas muestras de esta realidad presentes enlos manuales españoles. Por ejemplo, setiende a incidir en casi todos los textos enla idea de «ruptura» y «destrucción» de launidad mediterránea a causa del avancedel Islam, sin faltar, en ocasiones, los tintesculpabilizadores:

Los romanos consiguieron hacer del Medi-terráneo el centro más importante de todasu economía, convirtiendo nuestro2 maren la gran vía de comunicación entreOriente y Occidente. Con la llegada de losmusulmanes en el siglo VIII, esta unidadquedará rota, ya que los musulmanes con-trolarán las rutas comerciales del mar hastael siglo XL 1M29, p. 1391Los árabes rompen la unidad del Medite-rráneo. La expansión del Islam se realizaen el siglo VII a costa del Imperio bizanti-no que pierde gran parte de sus territoriosen Oriente. [M141, p. 180]Sin duda, la emergencia del Imperio

islámico trajo consigo un nuevo y durade-ro orden mediterráneo que transformó laestructura comercial hasta entonces exis-tente, pero ello no significa que exista unarelación directa causa-efecto entre la ex-pansión árabe y el declive comercial euro-peo. Al menos los historiadores no se hanpuesto cle acuerdo en ello y para algunos,por el contrario, el Imperio islámico habríavuelto a crear, tras la disgregación del Im-perio romano, un ámbito comercial unita-rio que benefició su reactivación. Sinembargo, muchos manuales optan sin ma-tices por la controvertida teoría del histo-riador belga Henri Pirenne, el cualconsideraba, según expuso en su libro Ma-boina y Carlomagno (1937), que el finaldel Imperio romano de Occidente no ha-bría modificado en nada el statu quo co-mercial del período romano y que no fuesino la conquista islámica de buena partede este mar la que rompió la unidad co-mercial existente hasta entonces, haciendo

(2) La cursiva de los textos es nuestra.

152

Page 3: ENTRE EL TÓPICO Y EL PREJUICIO. EL ISLA.M Y EL MUNDO ÁRABE ... · PDF filee ENTRE EL TÓPICO Y EL PREJUICIO. EL ISLA.M Y EL MUNDO ÁRABE EN EL SISTEMA EDUCATIVO ESPAÑOL GEMA MARTÍN

que el Mediterráneo se dividiese en dospartes encerradas en sí mismas y sin ape-nas vínculos comerciales entre sí, lo quehabría significado, siempre según Pirenne,el retroceso urbano y la estructura feudalpara Europa. Esta visión ha sido muy cues-tionada y en gran medida superada pero,cuando menos, los libros de texto deberíanaportar la pluralidad de interpretacioneshistóricas existentes en lugar de dar porverdadera una sola de ellas.

Por otro lado, la gran extensión que seconcede al estudio de la mal llamada «Re-conquista» en relación con el escaso trata-miento que se le concede al estudio deAl-Ándalus no se justifica en ningún senti-do dada la amplitud, riqueza e importanciade la España musulmana. Es más, no se es-tudian tampoco los reinos cristianos per sesino en su relación bélica con los andalu-síes, y muchas veces con tintes épicos.Como tampoco se enseñan las continuasrelaciones e intercambios existentes entredichos reinos y Al-Ándalus ni la conviven-cia pacífica que existió entre ambas comu-nidades tanto en el lado cristiano como enel musulmán. Al final el estudiante imaginauna España medieval en continuo estadode guerra y de amenaza islámica, y, enconsecuencia, difícilmente puede asumircomo parte de su patrimonio histórico ycultural lo árabe-musulmán.

La Reconquista es el fenómeno más apa-rente de un conjunto de hechos que supo-nen la creación de los fundamentos de lasociedad española tal como ésta va a ca-racterizarse, en algunos aspectos, hastanuestros días. [S 46, p. 145]En España la lucha para liberar los territo-rios cristianos del dominio musulmán re-cibe el nombre de Reconquista.EFP11, p. 169]La Reconquista es la larga lucha que losbispanocristianos mantuvieron contralos musulmanes para hacerse con el do-minio de la Península. Duró casi ocho si-glos y se acompañó de la repoblaciónde las tierras que se conquistaban.[FP8, p. 79]

Esa herencia cultural llena de prejui-cios lleva a los autores de los manuales aasumir al Islam como amenaza, en lugarde distanciarse científicamente del objetode estudio a fin de garantizar la objetivi-dad. Así, lejos de explicar que en el Medi-terráneo se enfrentaban dos grandespotencias rivales entre sí representadas porla Europa cristiana, principalmente a travésdel Imperio de los Austrias, y por el Impe-rio turco otomano, que había asumido larepresentación y defensa del Islam tras ladesaparición del califato 'Abbasí, los textosse expresan en tono agresivo y se implicanvergonzosamente en la historia que estáncontando. Los manuales presentan la situa-ción asumiendo que el peligro y la amena-za provenían sólo del Imperio turcootomano. ¿Es que la Europa cristiana lide-rada por los Austrias no representaba unpeligro para el Imperio musulmán turco ysu liderazgo político y económico en elMediterráneo?

En consecuencia, los manuales se ex-presan de la siguiente manera:

Durante el siglo XVI un poderoso Estadomusulmán, el Imperio turco, amenazaba ala cristiandad por el Este y por el Sur. [S70,p. 138].La constante amenaza del Imperio otoma-no fue uno de los obstáculos insalvablespara el triunfo del proyecto imperial [deCarlos V]. [548, pp.140-141]Ante la amenaza del expansionismo mu-sulmán se alió con la Santa Sede y Veneciamediante la formación de la Liga Santa.Esta obtuvo un rotundo éxito en la batallade Lepanto (1571). 1S48, p. 142]La frontera con los turcos fue una constan-te amenaza. Los turcos fueron también unaamenaza en otro frente: el Mediterráneo(...). Desde su capital en Constantinopla(ellos la llamaban Estambul), los turcos(...). [M25, p. 224]

En período contemporáneo, otro buenejemplo lo constituye la presentación de lacuestión palestina. Los manuales tienden acentrar el tema en la narración de los prin-cipales acontecimientos bélicos, es decir,

153

Page 4: ENTRE EL TÓPICO Y EL PREJUICIO. EL ISLA.M Y EL MUNDO ÁRABE ... · PDF filee ENTRE EL TÓPICO Y EL PREJUICIO. EL ISLA.M Y EL MUNDO ÁRABE EN EL SISTEMA EDUCATIVO ESPAÑOL GEMA MARTÍN

las guerras árabe-israelíes que han tenidolugar, mientras escasean los elementos ex-plicativos sobre los orígenes del conflicto,sus causas, su evolución, los problemas so-ciopolíticos que ha traído consigo y la ex-istencia de una realidad palestina, la cualtiende a ser «diluida» en las referencias alos árabes sin explicar su entidad por símisma:

El fin del mandato británico en Palestina,el plan de partición del territorio acordadopor la ONU en 1947, y el nacimiento delEstado de Israel, dio origen a una inmedia-ta guerra entre éste y los Estados Árabes en1948-49, y continuó con otras en 1956,1967 y 1973 que acabaron con victorias is-raelíes (...) El tradicional conflicto entre Is-rael y los países árabes, tras las cuatroguerras sucesivas —la inicial en 1948-49, lade la crisis de Suez de 1956, la de los SeisDías la campaña del Sinaí en 1967, y la úl-tima del Yom Kippur en 1973— entró enuna nueva fase al firmarse entre Egipto eIsrael los acuerdos de Camp David en1978-79, bajo el patrocinio norteamerica-no, quedando la Organización para la Li-beración de Palestina (OLP) como la únicafuerza en lucha activa contra Israel. 1C1,p.368-3691En 1967 se había reavivado el permanenteconflicto árabe-israelí. Egipto cerró la sali-da del golfo de Akaba. La respuesta israelífue la fulminante «guerra de los seis días».A la derrota militar, responden los árabescon la intensificación del terrorismo, quealcanza un momento escalofriante al ocu-rrir la matanza de los atletas olímpicos ju-díos en Munich en 1972... (C4, p. 4611En 1967 estalla la tercera guerra entre ju-díos y la Liga Árabe, «La Guerra de los SeisDías». 102, p. 5371

Por otro lacio, sería necesario corregirla tendencia a incidir de manera recurrenteen la animadversión árabe contra los ju-díos expresada como si fuese un senti-miento con-natural en ellos ajeno a ladifícil relación entre ambas partes. Unido aello, se utiliza un vocabulario muy pocoapropiado, recurriendo a la palabra «odio»de manera abusiva. Es decir, no se plantea

la cuestión de manera que se expliquen lasrazones de las respectivas experiencias his-tóricas vividas, causa del enfrentamientoentre ambos pueblos y su mutua animad-versión. Por el contrario, la cuestión sepresenta como si fuese exclusiva de la par-te árabe sin explicar la política agresiva yexpansionista del Estado israelí y su hosti-lidad hacia palestinos y árabes:

El mundo árabe tiene un enemigo común: elestado de Israel. Una organización guerrille-ra, «Al-Fatah», se propuso infructuosamentedestruirlo. Las naciones árabes se han en-frentado en cuatro ocasiones al estado judíocon la muy difícil ambición de derrotarlo ydestruirlo como Estado. 1S6. p. 3561Las naciones árabes se han solidarizadocon el drama de los refugiados palestinos:el odio hacia Israel es el primer elementode unión entre el mundo árabe.(M13, p. 1841El interés de Israel por ampliar su exiguoterritorio inicial, así como el temor cons-tante a un ataque de los países vecinos(enemigos declarados de la existencia delEstado de Israel), frente al cual le sería di-fícil defender su territorio, han llevado alos judíos a repetidos ataques contra lospaíses árabes. 1C 17, p. 4051

Se denota una mayoritaria identificaciónde los autores de los manuales con Israel,mientras se abusa en la explicación históricadel mundo árabe contemporáneo en funciónde su odio a Israel. Así, el origen y evolucióndel socialismo árabe, el panarabismo o laLiga Árabe son básica, y erróneamente, ex-plicados en relación con la existencia de Is-rael. Incluso algunos manuales asumencomo verdadera la visión sionista del conflic-to, lo cual es una forma parcial y subjetiva deplantear el tema a los estudiantes:

Conceptos. Sionismo: movimiento judíointernacional que propugna la creación yconsolidación de un Estado hebreo en Pa-lestina. Diáspora: Dispersión del pueblo ju-dío por el mundo, iniciada con sue.xpulsión de Palestina bajo el Imperio Ro-mano y mantenida hasta la actualidad.(C17, p.. 4061

154

Page 5: ENTRE EL TÓPICO Y EL PREJUICIO. EL ISLA.M Y EL MUNDO ÁRABE ... · PDF filee ENTRE EL TÓPICO Y EL PREJUICIO. EL ISLA.M Y EL MUNDO ÁRABE EN EL SISTEMA EDUCATIVO ESPAÑOL GEMA MARTÍN

Este texto hace suya la visión sionistade la historia, la cual busca legitimar las as-piraciones judías sobre Palestina procla-mando su presencia en el Levante orientaldesde antes de Cristo, lugar donde, por lodemás, estaban asentados todos los pue-blos semitas y no sólo el judío. En cual-quier caso, este hecho no puede justificarla inmigración de judíos en Palestina en elsiglo XX ignorando los derechos de lospueblos allí asentados secularmente sóloporque sus ancestros estuvieron en esazona hace más de mil arios. Así mismo de-finir de .recompra» la adquisición de tierraspor los judíos que inmigraron a Palestina aprincipios de siglo apunta en el mismosentido:

Con el renacimiento en el siglo XIX de lasnacionalidades, también el colectivo judíocobra conciencia de su estado. Ha nacidoel sionismo. Desde 1901 se creó un FondoNacional para la recompra de las tierras dePalestina. [S27, p. 272]

ETNOCENTRISMO CULTURAL

En los manuales se tiende de maneraostensible a convertir los ideales occiden-tales en la referencia única y a oponerlos alos existentes en el Islam. Es decir, no seestudia el Islam por sí mismo sino desdesus relaciones con Occidente. Así, los te-mas no son estudiados de acuerdo con loshechos y factores que han sido o son másimportantes para su devenir histórico y suconformación social sino en la medida enque Occidente se ha visto afectado por loocurrido en esa parte del mundo. Esto eslo que explica, entre otras cosas, la despro-porcionada atención dedicada a la cues-tión del petróleo y las crisis petroleras.

El «occidentalismo» de los textos con-duce a valoraciones en que el «pro-occi-dentalismo» de los regímenes es el criterioque rige la valoración positiva de éstos.Así, se llega a tratar con una cierta benevo-lencia a Arabia Saudí en contra de Irán:

En 1988 Arabia Saudita, uno de los paísesmoderados y que lleva una política máspro-occidental, ha roto relaciones diplo-máticas con Irán, debido al soporte que dael dirigente iraní, el ayatollah Jomeini, almovimiento del radicalismo islámico.1M14, p. 1721

A la vez que, por este mismo criterio,se llega a ensalzar el despótico régimendel Chah de Persia en contra de la revolu-ción islámica:

Irán, cuyos sectores sociales medios se ha-bían impregnado de occidentalismo ycuya economía había experimentado ungran progreso moderno en tiempos del shaReza Pahlevi, cae bajo la dominación deJomeini apoyado por los fanáticos chiítas.Visceralmente hostil a los Estados Unidos,Jomeini se vuelve también contra la Uniónsoviética a raíz de la invasión del Afganis-tán y desencadena la guerra contra los«herejes sunnitas» del Irak. [C4, p. 460]Una de las naciones árabes que ha experi-mentado una convulsión política más pro-funda ha sido Irán. Jomeini representa laderecha más dura del islamismo. En el ex-traño régimen que ha instaurado se aplicacon toda severidad la ley islámica, y se pre-dica el odio a los Estados Unidos («el granSatán»). [S6, p. 52]

En el origen de esta visión etnocéntri-ca está la sobredimensionada atención quese concede a todo aquello que choca anuestra cultura: la prohibición del consu-mo de cerdo, la poligamia, la guerra santa,el velo en las mujeres, etc. Sin embargo, noalcanzan la misma difusión otros princi-pios de justicia social, humanismo e iguali-tarismo, que son fundamentos básicos dela religión y cultura islámicas. De la mismamanera, tampoco se concede la mismaatención a aquellas otras religiones y cultu-ras con reglas distantes de las nuestras(como todas las exigencias gastronómicasde la religión judía), ni se explica que lapoligamia es una institución matrimonialcompletamente en desuso en la mayorparte de los países musulmanes, o que lamanida «guerra santa» es una intenciona-

155

Page 6: ENTRE EL TÓPICO Y EL PREJUICIO. EL ISLA.M Y EL MUNDO ÁRABE ... · PDF filee ENTRE EL TÓPICO Y EL PREJUICIO. EL ISLA.M Y EL MUNDO ÁRABE EN EL SISTEMA EDUCATIVO ESPAÑOL GEMA MARTÍN

da e incorrecta traducción cle «yihad», quesignifica «el necesario esfuerzo que todomusulmán debe realizar para expandir ydefender el Islam» y que su uso como pro-cedimiento cle legitimación política a tra-vés de la religión es igualmente utilizadoen muchas sociedades y no sólo en las mu-sulmanas.

Finalmente, hay que señalar que conrespecto a la familia y a la situación de lamujer en el Mundo Islámico se manifiestanfrecuentemente tendencias etnocéntricasque suelen olvidar que la estructura pa-triarcal se ha desarrollado en todas las so-ciedades mediterráneas, no siendo, portanto, la desigualdad entre los sexos exclu-siva del mundo musulmán:

Modelo autoritario: es la familia «tronco».Los hijos casados viven con sus padres. Noaceptada en Occidente, es típica de lospaíses árabes. 1S31, p. 371

Las diferencias entre la evolución ex-perimentada por las sociedades europeas ypor las árabes e islámicas en período con-temporáneo proviene de las diferentes ma-neras en que el proceso cle modernizaciónse ha desarrollado en Occidente y en elMundo Árabe e Islámico. Sin embargo, envez de aportar elementos de comprensiónsobre el tema se suele caer en los tópicosy en lo anecdótico, sin que, a veces, faltecierta sorna en ello:

Después de catorce siglos se ha decididoen Arabia Saudita que no es justo casarse«a ciegas», teólogos islámicos han deci-dido que las mujeres pueden «desvelar»sus caras a sus futuros esposos. 1M111,p. 2081La poligamia fue prevista por Mahotna.De todos modos, no hizo más que inter-pretar una costumbre que era tradicionalentre los árabes (...) se garantizaba unrápido incremento de la demografía ne-cesaria para la pujanza del Islam. En elmundo islámico es preceptivo que lasmujeres se cubran totalmente, incluso elrostro. 1M13, p. 1861

Así mismo, el tópico del velo asociadoa la mujer musulmana es una generaliza-ción que no se atiene a la pluralidad de lassituaciones existentes, si bien es utilizadocomo uno de los revulsivos que con másfacilidad incitan al rechazo de la culturamusulmana.

Otra tendencia que trasluce el egocen-trismo de lo propio a Occidente es el pro-ceso de deslegitimación religiosa y culturaldel Islam que se observa en nuestro siste-ma educativo. Con respecto al primero, sutratamiento como religión se caracterizapor no reconocerlo como continuación delmonoteísmo judío y cristiano. De ahí quese dé una visión muy historicista, de mane-ra que Mahoma es reconocido como refor-mador social y estadista y no tanto comoprofeta y mensajero de Dios. La experien-cia religiosa de Mallo= es puesta en dudao minimizada. Los manuales se resisten areconocer como revelación divina la predi-cación de Mahoma, y, por lo tanto, conce-der al Islam el mismo rango religioso queal Cristianismo. En este sentido, se llega aplantear que el Islam fue fundado por Ma-!toma y a afirmar que el Corán fue escritopor él. Así mismo se utilizan en muchasocasiones conceptos que implícitamenteplantean la duda sobre el carácter divinodel mensaje transmitido por Mahoma:

El musulmán cree que realmente [El Corán]lo escribió Dios y no Mahoma. [M73 p.1911Mahoma se consideró enviado por Alá.1M13 p. 179 y M14, p. 48]

Una razón similar explica la preferen-cia a utilizar siempre el término «Alá» y no«Dios». La palabra árabe «Allah» (castella-nizada muchas veces en Alá) significa elDios único y por tanto define al mismoDios de cristianos y judíos. La tendencia a«diferenciar» al Dios musulmán conser-vando la palabra árabe es también una ma-nera de no reconocer la vinculación de lareligión islámica con la tradición judeo-cristiana. La incorrecta definición del Islamcomo «mahometanismo» y de los musul-

156

Page 7: ENTRE EL TÓPICO Y EL PREJUICIO. EL ISLA.M Y EL MUNDO ÁRABE ... · PDF filee ENTRE EL TÓPICO Y EL PREJUICIO. EL ISLA.M Y EL MUNDO ÁRABE EN EL SISTEMA EDUCATIVO ESPAÑOL GEMA MARTÍN

manes como «mahometanos» tiene la mis-ma explicación: convertir el Islam en unhecho estrictamente relativo a Mahoma yno a Dios.

Así mismo, la rama chií del Islam esparticularmente denostada como violentay radical, y ello se debe a una falsa identi-ficación de todos los chiíes con la «satani-zada» revolución iraní por el hecho de queesta rama del Islam es mayoritaria en Irán.Las abusivas consideraciones negativasque manifiestan los textos sobre la revolu-ción iraní se extienden a todos los chiles:

Irán cae bajo la dominación de Jomeiniapoyado por los fanáticos chiítas. (C4, p.4601Los chiítas, secta religiosa islámica que sóloadmite el Corán como norma de vida yque se caracteriza por su rigor moral.1154139, p. 2401Los shiítas constituyen una secta según lacual el último imán no murió y vive escon-dido en algtin lugar del inundo, aunquesiempre existe un hombre inspirado quepuede tener comunicación con él. Jomeinies para sus seguidores este hombre inspi-rado. 1S6, p. 521Los fundamentalismos islámicos, en su ma-yor parte pertenecientes a la secta chiíta, seconvirtieron a fines de los 70 en uno de lossectores dirigentes del Islam, gracias a lapersonalidad del ayatolah Jomeini, quienconsiguió movilizar a los iraníes contra elsha. [C17, p. 476]

Las visiones culturalistas tampoco es-tán ausentes en el tratamiento de los te-mas. Queda puesto de manifiesto que estámuy extendida la percepción deterministadel Islam. Cuando se trata de entenderprocesos políticos y sociales del mundomusulmán, éstos se limitan a ser explica-dos como manifestaciones de religiosidadextrema. Así, por ejemplo, la revolucióniraní ha sido asumida en el imaginario his-tórico occidental como una exclusiva ex-presión fanática de fervor religioso,ignorando todos los factores sociales, polí-ticos y económicos que gestaron este he-cho revolucionario. El fenómeno del

islamismo es por el mismo motivo reduci-do a una irracional regresión religiosa sinque se consideren en ningún momento lascausas de su emergencia y extensión entrelas poblaciones musulmanas, lo que real-mente significa hoy día para esas socieda-des y los elementos de ruptura con elorden tradicional que sociológicamenteproducen. Y el terrorismo y la guerra cuan-do están implicados en ellos los musulma-nes tienden a ser explicados comoconsecuencia misma del Islam (y su su-puesta «connatural inclinación» a la Yihad)y no como resultado de situaciones políti-cas o socioeconómicas precisas.

Este método de análisis se alimenta dela enraizada visión determinista que del Is-lam se tiene en Occidente. Todo ocurrepor la sola razón de que «son musulma-nes». Así, los comportamientos colectivose individuales de los pueblos que formanparte de las tierras del Islam, lejos de inter-pretarse teniendo en cuenta su geografía ysu historia local, su estructura social o suexperiencia humana, se explican desde laabstracción islámica. Todo ello desembocaen una visión del mundo musulmán comoun universo inmóvil y estático al que se lecierran las puertas del cambio social y elprogreso.

En ocasiones, la confusión y la amal-gama de los hechos y acontecimientos, ysu sensacionalista tratamiento, desembo-can en grandes errores de bulto, identifi-cando, por ejemplo, la toma del poder cleGaddafi en 1969 con el islamismo, e inclu-so convirtiendo a Saddam Husein en líderde la revolución islámica o adjudicando ala tendencia islamista los atentados deRoma y Atenas de 1985 relacionados éstoscon sectores de la resistencia palestina:

El acontecimiento internacional más rele-vante de la década de los setenta tuvo lu-gar en Oriente Medio y concretamente enIrán, con la llegada al poder de los funda-mentalistas musulmanes. La victoria delfundamentalismo no se limitó a Irán. An-tes, en 1969, el coronel Gaddafi había lo-

157

Page 8: ENTRE EL TÓPICO Y EL PREJUICIO. EL ISLA.M Y EL MUNDO ÁRABE ... · PDF filee ENTRE EL TÓPICO Y EL PREJUICIO. EL ISLA.M Y EL MUNDO ÁRABE EN EL SISTEMA EDUCATIVO ESPAÑOL GEMA MARTÍN

grado el poder en Libia. La revolución islá-mica llegó también a Afganistán, lo queprovocó la invasión soviética del país en 1979.[FP, p. 2041Queda por ver hasta dónde se va a alterarel mundo tras la inestabilidad que estácreando la Revolución Islámica, cuyo últi-mo líder es Sadam Hussein y su Guerra delGolfo. 1M15, p. 1411Ya en 1929 Hassan el-Banna había funda-do la Hermandad Musulmana, cuyo objeti-vo era volver a la pureza de las raícescoránicas y rechazar toda la «contamina-ción de Occidente». Más tarde, en la déca-da de los setenta, surgen variosmovimientos integristas islámicos y los«hermanos musulmanes» desencadenancampañas contra la laicización y la extran-jerización del mundo islámico con presio-nes de tipo legal y acciones terroristas.Dueño del poder en Libia, Gadafi apoya la-revolución islámica- y numerosos atenta-dos siembran el desorden y el terror, paracoaccionar a aquellas autoridades musul-manas que consideran claudicantes (asesi-nato de Anuar el-Sadat, revuelta contraAssad), o contra las potencias exterioresenemigas (atentados antiisraelitas en losaeropuertos de Roma y Atenas en 1985).1C4, p. 4601

En general, cabría decir que no se ex-plica el tema a los alumnos sino que se lesadoctrina de manera tan burda que, en elfondo, no hace sino generar en ellos unapercepción acumulativa muy negativa ha-cia todo lo que proviene de las tierras delIslam y sus pobladores.

Unido a esto, es también muy frecuen-te que la Arabia donde surgió el Islam sepresente en un contexto socio-históricolleno de clichés y tópicos en torno al carác-ter rudimentario, violento y agresivo de lasociedad tribal árabe:

Los árabes (...) estaban habituados a laguerra. Sus creencias eran muy primitivas.[FP, 81El nacimiento de esta religión se produjoen la mitad del siglo VII, en Arabia, un de-sierto tropical donde coexistían tribus debeduinos seminómadas, individualistas ybelicosas. [51, p. 116]

Al margen de otras consideraciones,habría que señalar que la tendencia a juz-gar en términos culturalistas negativos a lassociedades nómadas y tribales constituyeuna actitud excluyente y etnocéntrica, ba-sada en la consideración de que civiliza-ción y humanismo van ligados sólo asedentarismo.

NEGACIÓN DE LA CONTRIBUCIÓNÁRABE A LA PERSONALIDADNACIONAL ESPAÑOLA

La experiencia anclalusí constituye unade las particularidades de la historia de Es-paña dotando a ésta de una rica vivenciacultural. Sin embargo, la historiografíaoficial se ha caracterizado por la resisten-cia a asumir la España musulmana, y portanto la cultura árabo-islámica, comocomponente de la personalidad culturalhispana y de su identidad. De ahí que sehable frecuentemente de «presencia delos musulmanes en España» o de los«musulmanes en España», convirtiendoocho siglos de nuestra historia en algoajeno y provisional:

La presencia musulmana en España seprolongó hasta 1492, es decir, ochocientosaños. [M141]Los musulmanes vivieron en la Penínsuladurante ochocientos años. [M92, p. 110]

Así mismo, los textos colocan el adjeti-vo «hispano» a lo cristiano y visigodo y loenfrentan a simplemente «árabes» o «mu-sulmanes» como significativamente mues-tran los ejemplos siguientes:

La Reconquista es la larga lucha que loshispanocristianos mantuvieron contra losmusulmanes para hacerse con el dominiode la Península. [FP 8 (p. 79)1La cultura musulmana representada en Al-Ándalus; la cultura cristiana representadapor los hispano-visigodos. [M 106 p. 210]

158

Page 9: ENTRE EL TÓPICO Y EL PREJUICIO. EL ISLA.M Y EL MUNDO ÁRABE ... · PDF filee ENTRE EL TÓPICO Y EL PREJUICIO. EL ISLA.M Y EL MUNDO ÁRABE EN EL SISTEMA EDUCATIVO ESPAÑOL GEMA MARTÍN

En el fondo de todo ello late una vi-sión histórica arraigada en nuestro paísque hace de la España cristiana la conti-nuadora de la línea romano-visigoda, quehabría sido interrumpida por la invasiónárabe y recuperada por la España de losReyes Católicos tras la expulsión de judíosy moriscos. En consecuencia, se observaen los textos la asunción de que la Españacristiana, con su esfuerzo «reconquista-dor», es la que ha transmitido la «españo-lidad» y de la que procede nuestra entidady personalidad cultural actual.

La enseñanza media no sólo deberácorregir estas tendencias erróneas y quetanto daño han hecho, sino que sería reco-mendable incluso explicar a los estudian-tes que esta visión tradicionalista denuestra Edad Media ha sido la que ha pre-valecido a lo largo de siglos, heredera de lavisión oficial basada en la exaltación de launidad de España llevada a cabo por losReyes Católicos, y que dicho análisis histo-riográfico sólo se basa en el hecho de ha-ber sentido la llegada de los árabes a laPenínsula Ibérica como un corte que des-vió lo que debería haber sido el devenirhistórico de España. Además de haber fal-seado la realidad de nuestra historia, hacontribuido a que en España se haya forja-do un injusto menosprecio hacia lo árabe ylo musulmán.

Así mismo, hay que señalar que juntoa la valoración negativa y excluyente de laEspaña musulmana, también es percepti-ble en algunos manuales otra línea de aná-lisis identificada con otra corrientehistoriográfica española, la representadapor Menéndez Pidal y compartida por lacorriente más tradicional de los arabistasespañoles (Ribera, Asín, García Gómez...),que a nuestro parecer es igualmente inco-rrecta y, en su fondo, late también la exclu-sión. Para este sector de historiadores, loandalusí es asumido como propio sólo porlo que de «español» tenía. En esta visión,se construye la historia en base a la teoríade que los árabes y bereberes que llegaron

a la Península eran muy pocos y habríansido enseguida «civilizados» por la ricacultura hispana, levantando una cultura es-pañola propia que poco tenía que ver conel Norte de África ni el Oriente musulmán.De esta manera lograban aislar a la Españamusulmana del conjunto árabe e islámicogeneral, y así sí podía ser asumida comoespañola. Por ello la especificidad hispanade la muwaxaja, que contiene la jarcha enlengua romance, es el legado literario ára-be andalusí más apreciado:

Porque si esa lírica primitiva se escribió yse literalizó fue sólo en Andalucía; fueusando un alfabeto no latino, libre de lascostumbres y precisiones habituales en laescritura occidental, y fue sirviendo a unaliteratura que no dependía en nada de lasprácticas poéticas arraigadas en el arte lati-no decadente. «La cultura islámica, en suansia por apropiarse los productos de lasmás extrañas civilizaciones, en su vorazpoder asimilatorio, pudo embelesarse conesos cantos mozárabes de inculta y cauti-vante hermosura, incorporándoselos comoquintaesencia vivificadora de la muwas-chaba, una nueva poesía árabe». CantosRománticos andalusíes, Ramón MenéndezPidal. (Citado en FP18, p. 631

Sin embargo, la teoría de la «hispani-zación» social de los árabes y beréberesllegados a la Península conservando tansólo una pátina de cultura oriental es muycuestionable desde diversos puntos de vis-ta. De un lado, lejos de engullir a árabes ybereberes en estructuras de la organiza-ción social nativa, los muladíes fueron asi-milados por la estructura social agnática delos conquistadores. Por otro lado, no hubouna fusión de culturas de la que se generóuna cultura hija diferente sino más bien laasunción cultural de los neomusulmanesde los valores árabes y orientales. Lo quese ha querido interpretar como fusión cul-tural no fue sino la disolución de la mino-ría árabe en la masa de muladíes creándoseuna sociedad islámica que reemplazó almodelo de Estado inicial gobernado poruna minoría árabe.

159

Page 10: ENTRE EL TÓPICO Y EL PREJUICIO. EL ISLA.M Y EL MUNDO ÁRABE ... · PDF filee ENTRE EL TÓPICO Y EL PREJUICIO. EL ISLA.M Y EL MUNDO ÁRABE EN EL SISTEMA EDUCATIVO ESPAÑOL GEMA MARTÍN

Con respecto a la expulsión de los mo-riscos hay que señalar, que si bien se llegaa hablar en algunos textos de las conse-cuencias negativas, económicas y sociales,de la expulsión, en ningún caso se hablade la tragedia humana que ello supusopara quienes eran españoles, e inclusocristianos, y fueron expulsados de su tierray desposeídos de sus bienes, así como delnivel de intransigencia, persecución e into-lerancia religiosa que lo provocó, y quemarcaría toda nuestra historia socio-cultu-ral posterior representada en la Inquisi-ción. Por el contrario, lo que sí aparecenson lamentables ejemplos de justificaciónde la expulsión por la incapacidad de losmoriscos a asimilarse, llegándose a califi-car a los moriscos de «minoría disidente» o«quiste inasimilable»:

Carlos I, en 1525, había concedido a losmoriscos españoles un plazo de cuarentaaños para el abandono de sus prácticas. Elplazo expiraba, pero los moriscos se man-tuvieron como un quiste inasimilable. fS46,p. 2541

E incluso pronunciarse de la siguientemanera:

Cuando se afirma que los Reyes Católicosreimplantaron el Tribunal de la Inquisicióno firmaron los decretos de expulsión de ju-díos y moriscos, se puede llegar al error depensar que éstas son medidas de una polí-tica autoritaria sin conexión social. 1S47 p.1281

CONCLUSIONES

En los programas escolares emana unsistema de valores que, lejos de permitir alestudiante conocer las relaciones históricasentre la civilización islámica y la europea,y de explicar los elementos culturales delas sociedades árabes, inciden en lo con-flictivo y antagónico.

De ahí la importancia de incentivar uncambio de criterio en la enseñanza del Is-lam y el Mundo Árabe en nuestros sistemas

educativos que, lamentablemente, si-guen heredando hasta hoy día esa falsametodología.

En términos generales, dos son las in-terpretaciones que mayoritariamente pre-dominan en el análisis de las cuestionesreferentes al mundo musulmán, y que lejosde ser exclusiva de los formadores alcanzaa medios de comunicación, observadores yalgunos especialistas en la materia. De unlado, se tiende inexorablemente a convertirlos ideales occidentales en la referenciaúnica y a oponerlos a los existentes en elIslam. De esta actitud se deriva un acerca-miento a la civilización islámica no en símisma sino desde lo que hay en ella dedistinto o conflictivo con respecto a Occi-dente. Por otro lado, cuando se trata deentender procesos políticos y sociales delmundo musulmán, éstos se limitan a serexplicados como manifestaciones de reli-giosidad extrema. Así, por ejemplo, la re-volución iraní ha sido asumida en elimaginario histórico occidental como unaexclusiva expresión fanática de fervor reli-gioso, ignorando todos los factores socia-les, políticos y económicos que gestaroneste hecho revolucionario. El fenómenodel islamismo es por el mismo motivo re-ducido a una irracional regresión religiosasin que se consideren en ningún momentolas causas de su emergencia y extensiónentre las poblaciones musulmanas, lo querealmente significa hoy día para esas socie-dades y los elementos de ruptura con elorden tradicional que sociológicamenteproducen. Y el terrorismo y la guerra cuan-do están implicados en ellos los musulma-nes tienden a ser explicados comoconsecuencia misma del Islam (y su su-puesta «connatural inclinación» a la Yibad)y no como resultado de situaciones políti-cas o socioeconómicas precisas. Este méto-do de análisis se alimenta de la enraizadavisión determinista que del Islam se tieneen Occidente. Todo ocurre por la sola ra-zón de que «son musulmanes». Así, loscomportamientos colectivos e individuales

160

Page 11: ENTRE EL TÓPICO Y EL PREJUICIO. EL ISLA.M Y EL MUNDO ÁRABE ... · PDF filee ENTRE EL TÓPICO Y EL PREJUICIO. EL ISLA.M Y EL MUNDO ÁRABE EN EL SISTEMA EDUCATIVO ESPAÑOL GEMA MARTÍN

de los pueblos que forman parte de las tie-rras del Islam, lejos de interpretarse tenien-do en cuenta su geografía y su historialocal, su estructura social o su experienciahumana, se explican desde la abstracciónislámica. Todo ello desemboca en una vi-sión del mundo musulmán como un uni-verso inmóvil y estático al que se le cierranlas puertas del cambio social y el progreso.

Si se tiene en cuenta que son casi milmillones el número de musulmanes en elmundo y que el Mundo Árabe hace fronte-ra con nuestro país, es difícil de compren-der que no se inviertan esfuerzos porofrecer una educación objetiva, serena,profunda y respetuosa de una cultura, dis-tinta de la occidental, pero no por ello in-compatible. Y más aún, cuando en Europaviven más de veinte millones de musulma-nes que, lejos de ser un elemento «extra-ño», forman parte cada vez más de lacultura europea. Por ello, uno de los gran-des desafíos del futuro pluricultural denuestro continente es lograr la coexistenciapacífica y respetuosa de todas las comuni-dades presentes en su suelo. España, porsu parte, desde finales de los años ochentaacoge una población inmigrante magrebíen crecimiento, para cuya feliz integraciónes necesario que se dé a conocer de mane-ra digna y respetuosa la cultura árabe ymusulmana que representa.

Sin embargo, con la imagen de la cul-tura árabe y musulmana que se transmite alos estudiantes españoles, los esfuerzospor inculcar solidaridad, igualdad, acepta-ción del otro (que en el entorno españolese «otro» es mayoritariamente el inmi-grante magrebí, árabe y musulmán) no en-contrarán el éxito que tal empresa merecey requiere.

Es necesario acortar el desfase existen-te entre los programas transversales demulticulturalidad planificados en contradel racismo y la xenofobia con respeto alos inmigrantes y la manera en que se en-seña la cultura de éstos, porque a nuestrosestudiantes les estamos transmitiendo un

doble lenguaje: el inmigrante ha de seraceptado e integrado mientras su patrimo-nio cultural e histórico son degradados yerigidos, en muchas ocasiones, como riva-les del occidental.

CATALOGACIÓN DE LOS MANUALESCITADOS EN EL TEXTO

M-29: EDEBE. Sociales. 7 EGB. 1992.M-141: ANAYA. Bóveda. Ciencias So-

ciales. 6 EGB. 1983.S-46: EDELVIVES. Geografía e Historia.

3 BUP. 1989.FP-11: EDITEX. Formación Humanís-

tica. 1/1Curso. 1986.FP-8: SANTILLANA. Formación Hu-

manística. 1/2 Curso. 1990.S-70: ESLA. Historia. 1 BUP. 1992.S-48: ANAYA. Geografía e Historia de

España. 3 BUP. 1993.S47: ECIR. Geografía e Historia de Es-

paña. 3 BUP. 1991.M-25: VICENS. Ciencias Sociales. Nue-

vo País. 7 EGB. 1984.C-1: SM. Mundo Contemporáneo.

COU.C-4: EDELVIVES. Ha del Mundo Con-

temporáneo. COU.C-12: ECIR. Ha del Mundo Contempo-

ráneo. COU.C-12: ECIR. Ha del Mundo Contempo-

ráneo. COU.C-17: ANAYA. Historia del Mundo Con-

temporáneo. 1990. COU.S-27: ALHAMBRA. Geografía. 2 BUP.

1989.M-14: EDEBE. Sociales. 8 EGB. 1990.M-13: EDELVIVES. Mundo Actual. 8

EGB. 1990.M-15: SM. Sociales. 8 EGB. 1992.M-111: ESLA. Ciencias Sociales. 8 EGB.

1993.C-4: EDELVIVES. Historia del Mundo

Contemporáneo. COU.

161

Page 12: ENTRE EL TÓPICO Y EL PREJUICIO. EL ISLA.M Y EL MUNDO ÁRABE ... · PDF filee ENTRE EL TÓPICO Y EL PREJUICIO. EL ISLA.M Y EL MUNDO ÁRABE EN EL SISTEMA EDUCATIVO ESPAÑOL GEMA MARTÍN

S-6: V. VIVES. Historia de las Civiliza-ciones y del Arte. Occidente. 1 BUP. 1989.

S-31: EDELVIVES. Geografía Humanay Económica. 2 BUP. 1993.

M-139: ANAYA. Bóveda. Ciencias So-ciales. 8 EGB. 1984.

C-17: ANAYA. Historia del Mundo Con-temporáneo. 1990. COU.

S-1: S.M. Mundo. 1 BUP. 1991.M-106: ESLA. Ciencias Sociales. 6 EGB.

1991.FP-18: ANAYA. Lengua Española. 2 FP.

1 Grado. 1992.

BIBLIOGRAFÍA

BESSIS, S.; BELHASSEN, S.: Mujeres del Ma-greb, el desafío, Madrid.

BALTA, P.: Islam: civilización y sociedades,Madrid, Siglo XXI de España, 1994.

HOURAN1, A.: Historia de los pueblos árabes,Barcelona, Ariel, 1992.

IBN BATTuTA.: A través del Islam, Madrid,Alianza Editorial, 1989.

PMIER, J.: Para conocer el Islam, Estella(Navarra), Verbo Divino, 1989.

MANZANO MORENO, E.: Historia de las socie-dades musulmanas, Madrid, Síntesis,1992.

MARÍN, M.: Individuo y sociedad en al-Án-dalus, Madrid, Ma'pfre, 1992.

MARTÍN MUNOZ, G. Mujeres, Denzocracia yDesarrollo en el Magreb, Madrid, Fun-dación Pablo Iglesias, 1995.

— Argelia, la revolución frustrada, Ma-drid, Cuadernos del Mundo Actual, 49.Historia 16, 1994.

— El Egipto de Naser, Madrid, Cuadernosdel Mundo Actual, 24. Historia 16,1994.

MARTÍN MUÑOZ, G; VALLE SIMÓN, B; LÓPEZPLAZA W A: El Islam y el Mundo Árabe.Guía didáctica para profesores y for-madores, Madrid, Ediciones de laAgencia Española de Cooperación In-ternacional, 1996.

MARTÍNEZ CARRERAS, J.: El Mundo Árabe eIsrael, Madrid, Istmo, 1991.

MARTÍNEZ MONTÁVEZ, P.: Pensando en laHistoria de los Árabes, Madrid, Canta-rabia, 1995.El reto del Islam, Madrid, Temas deHoy, 1997.

MERNISSI, F.: El miedo a la modernidad: Is-lam y Democracia, Madrid, Edicionesdel Oriente y el Mediterráneo, 1992.

MORALES, A. J.: Historia del Arte Islámico,Barcelona, Planeta, 1995.

RUIZ DE ALMODÓVAR, C.: El Movimiento Fe-minista egipcio, Granada, Universidadde Granada, 1989.

SA1N,IS J.: Así nació el Islam, Madrid, (Cua-dernos de Historia 16; riQ 21). Grupo16, 1989.

SOLAR, D.: El laberinto de Palestina. Un si-glo de conflicto Árabe-israelí, Madrid,Espasa, 1997.

SOURDEL, D.: La civilización del Islam clási-co, Barcelona, Editorial Juventud.1981.

VIGUERA MOLINS, M. J.: Los Reinos de Taifasy las invasiones magrebíes: Al-Ándalusdel s. XI al s. XIII, Madrid, Mapfre,1992.

162