en defensa de la política -...

6
JULIO / SEPTIEMBRE 2016 5 En defensa de la política* Agradezco muy sinceramente a todos, alumnos y asistentes a este acto de inauguración del curso, su presencia y su interés. Acabo de tener la oportunidad de expresar al rector de la Universidad Complutense nuestra satisfacción por habernos incorporado a estos cursos de verano. Nos incorporamos a una prestigiosa tradición académica a la que queremos también contribuir con la aportación de nuestros ponentes a lo largo de los próximos días. Nuestro reconocimiento a quienes con su patrocinio hacen posible estos cursos, y al equipo de la universidad con el que hemos trabajado tan eficazmente. En estas jornadas escucharemos mucho y espero que debatamos más, si es posible, de modo que traslademos a un ámbito universitario como este la indispensable conversación sobre la política que debemos mantener y extender. A unque comparezcamos por primera vez en los Cursos de Verano de El Escorial, el encuentro que inaugu- ramos hoy no supone un punto y aparte en nuestra trayectoria. Esta queda bien reflejada en doce edi- ciones del Campus FAES por el que han pasado miles de alumnos y cientos de personalidades de pri- mera fila en el mundo de la polí- tica, la economía, la comunica- ción y el pensamiento. La presencia de la fundación en este nuevo ámbito recoge toda la experiencia de esos encuentros y la pone al ser- vicio de un proyecto diseñado con propósito y densidad académicos. A esta finalidad obedece el título que hemos elegido: “Presente y futuro del debate ideológico”. No es un nombre que hayamos escogido al azar, ni que busque sintonizar con ninguna moda. Muy al contrario, la elección entronca con la preocupación capital de la Fundación FAES por las ideas en la política. Una preocupación que es la razón de ser de nuestra actividad diaria. Lo dije hace poco en el número 50 de nuestra revista, Cuadernos de Pensamiento Po- lítico, y lo repetiré de nuevo para ustedes: si las ideas son expulsadas de la política, o si en nuestra sociedad arraigan las ideas equivoca- das, en ninguno de los casos habrá regenera- ción posible. Y lo que tendremos que plante- arnos ya no será cómo regenerar la política, sino cómo rescatarla de su destrucción. JOSÉ MARÍA AZNAR Expresidente del Gobierno, presidente de la Fundación FAES * Conferencia inaugural de “Presente y futuro del debate ideológico”, curso de FAES en los Cursos de Verano de la Universidad Complutense de Madrid y del Banco de Santander en San Lorenzo de El Escorial (27 de junio de 2016).

Upload: others

Post on 12-Sep-2019

7 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

JULIO / SEPTIEMBRE 2016 5

En defensa de la política*

Agradezco muy sinceramente a todos,alumnos y asistentes a este acto deinauguración del curso, su presencia ysu interés. Acabo de tener laoportunidad de expresar al rector de laUniversidad Complutense nuestrasatisfacción por habernos incorporadoa estos cursos de verano. Nosincorporamos a una prestigiosatradición académica a la que queremostambién contribuir con la aportación denuestros ponentes a lo largo de lospróximos días.

Nuestro reconocimiento a quienes consu patrocinio hacen posible estoscursos, y al equipo de la universidadcon el que hemos trabajado taneficazmente. En estas jornadasescucharemos mucho y espero quedebatamos más, si es posible, demodo que traslademos a un ámbitouniversitario como este laindispensable conversación sobre lapolítica que debemos mantener yextender.

Aunque comparezcamospor primera vez en losCursos de Verano de El

Escorial, el encuentro que inaugu-ramos hoy no supone un punto yaparte en nuestra trayectoria. Estaqueda bien reflejada en doce edi-ciones del Campus FAES por elque han pasado miles de alumnosy cientos de personalidades de pri-mera fila en el mundo de la polí-tica, la economía, la comunica-ción y el pensamiento. La presencia de lafundación en este nuevo ámbito recoge toda laexperiencia de esos encuentros y la pone al ser-vicio de un proyecto diseñado con propósito ydensidad académicos.

A esta finalidad obedece el título quehemos elegido: “Presente y futuro del debateideológico”. No es un nombre que hayamosescogido al azar, ni que busque sintonizar conninguna moda. Muy al contrario, la elecciónentronca con la preocupación capital de laFundación FAES por las ideas en la política.Una preocupación que es la razón de ser denuestra actividad diaria.

Lo dije hace poco en el número 50 denuestra revista, Cuadernos de Pensamiento Po-lítico, y lo repetiré de nuevo para ustedes: silas ideas son expulsadas de la política, o si ennuestra sociedad arraigan las ideas equivoca-das, en ninguno de los casos habrá regenera-ción posible. Y lo que tendremos que plante-arnos ya no será cómo regenerar la política,sino cómo rescatarla de su destrucción.

JOSÉ MARÍA AZNAR

Expresidente del Gobierno,presidente

de la Fundación FAES

* Conferencia inaugural de “Presente y futuro deldebate ideológico”, curso de FAES en los Cursosde Verano de la Universidad Complutense deMadrid y del Banco de Santander en San Lorenzode El Escorial (27 de junio de 2016).

Por tanto, no cabe mejordefensa de la política que elcultivo de aquellas ideas quehan procurado libertad, igual-dad y prosperidad a nuestrassociedades. Del mismo modo,no cabe mejor manera deprestigiar la política que en-tenderla y ejercerla tal cual es:como una actividad noble,creativa, civilizadora y, porello mismo, limitada. Y nocabe mejor manera, real-mente es la única posible, dehacer la política relevantepara los ciudadanos que pen-sando la realidad y su diná-mica de cambio social, cultu-ral, tecnológico y estratégico.

Es tiempo de recordar que la política notiene la capacidad de hacer a todos los hom-bres felices, pero sí puede hacerlos desgracia-dos. No faltan ejemplos en la historia.Cuando la política desborda su cauce liberaly cae en la tentación de invadirlo todo confalsas promesas de felicidad, se convierte enel arma de los programas totalitarios.

Decía un profesor inglés, Bernard Crick,que “uno de los riesgos más grandes que co-rren los hombres libres es el de aburrirse delas verdades establecidas”. Se trata de una re-flexión que ilustra muy bien la relación quehoy mantienen las sociedades occidentalescon los valores e ideas en los que se asientasu sistema de libertades y de bienestar.

Durante años hemos dado por descontadala estabilidad política y la prosperidad denuestros países. Y ello nos ha llevado a incu-

6 JULIO / SEPTIEMBRE 2016

rrir en el error de confundir nuestro régimende libertad y cohesión social con una suertede regalo que hemos recibido graciosamente.

Hemos perdido la tensión ideológica quenos obligaba a redefinir en cada generación lostérminos del contrato social que fundó nues-tras sociedades en la posguerra. Hemos descui-dado la tarea de actualizar y traducir ese con-trato en nuevas ideas que sintonicen con lostiempos manteniendo intacto su fondo con-servador, liberal y social. Y ahora que el sis-tema se resiente y los populismos emergen pordoquier, nos encontramos inermes intelectual-

No cabe mejormanera deprestigiar lapolítica queentenderla yejercerla tal cuales: como unaactividad noble,creativa,civilizadora y,por ello mismo,limitada

mente para defender el valory el fundamento de nuestrasdemocracias.

Al hablar de verdades es-tablecidas no se trata de que-darnos a vivir en la nostalgiamelancólica de situacionespasadas. Lo difícil es hacer loque tenemos que hacer: apli-car esos principios estableci-dos a una realidad social enprofunda transformación queacusa estados preocupantes

JULIO / SEPTIEMBRE 2016 7

EN DEFENSA DE LA POLÍTICA / JOSÉ MARÍA AZNAR

de malestar; que exige nuevas expectativas;que debe afrontar desafíos intergeneraciona-les de los que dependen el futuro del bienes-tar, del empleo y de los proyectos de realiza-ción personal y libre.

¿Cuándo comenzamos a descuidar nues-tras ideas y a no defender nuestras políticas?Me atrevo a decir que el colapso del comu-nismo, la desaparición del contexto de laGuerra Fría y el llamado fin de las ideologíasnos produjo la ilusión de haber detenido,efectivamente, el reloj de la historia. En al-gunos produjo incluso la ilusión de poderprescindir de la política misma.

Tras la caída de los últimos cascotes delMuro de Berlín ningún sistema parecía estaren condiciones de rivalizar con el binomioformado por la democracia liberal y la eco-nomía de mercado. Al mismo tiempo, la de-mocracia liberal no solo parecía el malmenor. Al contrario, se convirtió en la doc-trina filosóficamente deseable: el punto dellegada irreversible en la evolución ideoló-gica de la humanidad.

Sin embargo, el aire triunfal que presidióla victoria de la democracia liberal sobre lasllamadas democracias populares de cuño co-munista nos hizo perder de vista el caráctercontingente y mudable de los sistemas polí-ticos. Las ideas sobre las que se fundaba nues-tro sistema de libertades occidentales dejaronde ser principios vivos, activos y conectadoscon las razones históricas que las vieronnacer. Se convirtieron, de la noche a la ma-ñana, en consignas repetidas sin sentido, va-cías, sin vida e incapaces de animar una po-lítica con mayúsculas.

No es el mismoconcepto delibertad el quese desprendede la culturaliberal, queaquel que sepredica de losdiscursospopulistas

David Mudarra

Solamente hace falta echar un vistazo ala política española y mundial que nos ha de-jado el escenario posterior a la crisis para caeren la cuenta de que el sistema de libertadesque disfrutamos en el marco de la democracialiberal y representativa no es un punto de lle-gada sin retorno.

El florecimiento de discursos populistas ynacionalistas y el éxito electoral de los parti-dos que los defienden nos debería servir deadvertencia para entender que nuestro sis-tema de libertades no es un regalo, ni unmero suceso natural. Muy al contrario, debe-ría ser el acicate para entender que nuestrosistema de libertades ha costado conseguirloy requiere de un esfuerzo constante y soste-nido para defenderlo.

Y algo más. El escenario político actual de-bería servir para advertir de que los viejos de-monios de la política europea siguen vivos. Seesconden detrás de nuevos y sofisticados len-guajes y se alimentan de ladesafección que ha dejado lacrisis económica, política ysocial. Pero su objetivo y sucarga antiliberal siguen siendolas mismas.

Aunque resulte muy en-tretenido volver una y otravez sobre el microanálisiselectoral, sería preferible nodejar que los árboles nos im-pidieran ver el bosque. Hoyen Europa, punto arriba opunto abajo, con dos escañosmás o tres menos, lo que estáen juego es el consenso en elque desde la Segunda Guerra

8 JULIO / SEPTIEMBRE 2016

Mundial se han asentado la libertad, el Es-tado de derecho y el progreso económicocomo nunca en Europa lo habíamos experi-mentado. Primero, la democracia venció alnazismo. Más de cuatro décadas después,venció al comunismo. Se demostró que la li-bertad puede parecer frágil, pero es indigestapara los que quieren acabar con ella.

Ese acuerdo fundamental se encuentraresquebrajado y sometido a una estrategiaque persigue su ruptura. Una ruptura queparte de la división de la sociedad en bandosantagónicos; que busca generalizar el con-flicto; que recupera la dialéctica totalitariadel enemigo frente a la civilidad democráticade la confrontación entre adversarios.

La respuesta debe ser la firmeza frente a losintolerantes y la denuncia de la manipulaciónpopulista de la democracia. Pero no será unarespuesta suficiente si no significa también larecuperación de la política como encuentro yconversación, como ejercicio de liderazgo ycomo propuesta inclusiva a la sociedad. Unapropuesta que reclame para la política el te-rreno que no deben ocupar ni la demagogiasesgada hacia el totalitarismo ni la tecnocraciaque quiere desbordar su posición instrumentalen la gestión de los intereses públicos.

La política, así lo decían los clásicos, esuna de las empresas más nobles a las que unapersona puede dedicar su vida. Se trata de la“ciencia de las ciencias” y no de un malmenor, porque se ocupa de velar por las con-diciones sin las cuales ninguna actividad hu-mana sería posible.

Sin embargo, hoy la política está bajo sos-pecha. Se percibe en la calle y así lo dicen los

La política notiene lacapacidad dehacer a todoslos hombresfelices, pero sípuede hacerlosdesgraciados.No faltanejemplos en lahistoria

JULIO / SEPTIEMBRE 2016 9

EN DEFENSA DE LA POLÍTICA / JOSÉ MARÍA AZNAR

indicadores sociales. Sola-mente hace falta mirar las en-cuestas para ver que nuestrassociedades no ven a los repre-sentantes políticos como unasolución a los problemas queacucian al país, sino comoparte –y parte importante–del mismo problema.

La mejor manera de de-volver el crédito a la políticaespañola es volver a la granpolítica, a la política que segana el respeto, a una políticainspirada por las más altasideas. Porque si jugamos a me-nospreciar el poder de lasideas, o a creer que es posiblehacer política sin ellas, tendremos que asumirlas consecuencias.

En la célebre conferencia “Dos conceptosde libertad”, el filósofo Isaiah Berlin nos re-cordaba que el tema central de la política,desde la antigüedad hasta hoy, sigue siendodar respuesta efectiva a una serie de pregun-tas muy simples, pero de poderosas implica-ciones: “¿Por qué no puedo vivir comoquiera?”; “¿Por qué debo obedecer a otra per-sona?”; “Si no obedezco, ¿puedo ser coaccio-nado?”; ¿Por quién, hasta qué punto, en nom-bre de qué y con motivo de qué?”.

La historia política de Occidente, bienpuede decirse, es la historia de las opcionesque se han tomado a la hora de dar respuestaa estas preguntas. Y esas opciones han ejem-plificado una elección entre unas ideas yotras. Pues las ideas orientan, dan contenidoy dotan de identidad al poder político.

No es el mismo, desde luego, el conceptode libertad que se desprende de la cultura li-beral, que aquel que se predica de los discur-sos populistas. Y otro tanto ocurriría si pusié-semos a prueba el desarrollo histórico deideas como la propiedad, la patria, la justiciao la igualdad, por citar algunas.

Termino reiterando mi apelación a queemprendamos esa conversación sobre la po-lítica que debe ser conversación a la vez cí-vica y nacional. Tenemos que hablar del Es-tado, de la sociedad civil, del mercado, deEuropa, del pluralismo cultural, de la nación.Estas jornadas que tenemos por delante quie-ren ser una parte, modesta pero comprome-tida y rigurosa, de esa conversación a la queapelamos.

Queda abierto el curso “Presente y futurodel debate ideológico” del programa de loscursos de verano 2016 de la UniversidadComplutense de Madrid”.

La mejormanera dedevolver elcrédito a lapolíticaespañola esvolver a la granpolítica, a unapolíticainspirada porlas más altasideas

PALABRAS CLAVEEspaña • Política • Libertad • Democracia

• Populismo

FAES, Fundación para el Análisis y los Estudios Sociales tiene el placer de informar que todos los números pasados

de Cuadernos de Pensamiento Político están disponibles en la red a través de JSTOR, el sistema de archivo digital

sin ánimo de lucro, así como en la propia página web de nuestra Fundación.

Los usuarios y las instituciones que accedan a la sección Arts & Sciences VI Collection de JSTOR podrán leer,

buscar, descargar e imprimir las versiones completas en PDF de todos los artículos pasados de nuestra revista,

desde su primera edición en 2003 hasta el año de publicación más reciente.

La Fundación FAES está orgullosa de poder colaborar con JSTOR en la conservación y amplia difusión de la

literatura histórica de nuestra revista.

JSTOR es una organización sin interés lucrativo dedicada a ayudar a la comunidad académica a descubrir, emplear y

desarrollar un amplio abanico de contenidos intelectuales que se almacenan en un Archivo digital de confianza.

C U A D E R N O S D E P E N S A M I E N T O P O L Í T I C O D I S P O N I B L E E N J S T O R

P a r a m á s i n f o r m a c i ó n s o b r e J S T O R p o r f a v o r v i s i t e ‹w w w . j s t o r . o r g ›

P a r a m á s i n f o r m a c i ó n s o b r e F A E S p o r f a v o r v i s i t e ‹w w w . f u n d a c i o n f a e s . o r g ›