A16. el comercio martes 8 de setiembre del 2015

CienCias

nos mareamos. Una inflamación o espesamiento de los líquidos del sistema causa mareos sin interven-ción externa, la llamada labe-rintitis.

Captación del sonidoLa cóclea es la que contiene el complejo sistema que seleccio-na las vibraciones y a través del nervio auditivo las envía al ce-rebro. El principal elemento de

esta parte del oído inter-no, a la vez que el más

complicado, es el lla-mado órgano de cor-ti, que se encuentra en el medio de la có-

clea. Su funcionamien-to consiste en recoger las

vibraciones transmitidas por el oído medio y clasificar sus fre-cuencias por la vibración de sus llamadas células ciliadas.

Estas son como pelos que, de acuerdo a sus dimensiones,

el tímpano hasta el nervio auditivo. Sobre la mane-ra en que la procesa el ce-rebro aún sabemos muy poco.

Oído y audiciónEn los cientos de millones de años en que el sistema auditivo de los mamíferos ha evolucionado, y aun-que funcionalmente es similar, este se ha diversi-ficado. El murciélago ha adquirido un sistema que va más allá de la gama de los demás y funciona con muy altas frecuencias y con gran precisión, como un radar acústico, con la altísima eficiencia caracte-rística de los productos de la evolución.

El perro y la mayoría de los predadores oyen has-ta 30 KHz. Los cetáceos, que viven dentro del agua, registran una mayor ga-ma de frecuencias a una gran distancia. La espe-cialización ha llevado a la diferenciación. Orejas móviles, registro de más frecuencias y una altísima sensibilidad a las menores amplitudes, son el resulta-do de la lucha por la super-vivencia.

Otros mamíferos han ido perdiendo el oído en la medida en que lo han apro-vechado menos, prescindi-do de las altas frecuencias y han estado expuestos a las altas amplitudes (soni-dos fuertes). En el caso de los humanos, nuestro oído funciona en una gama re-lativamente reducida de frecuencia.

Sin embargo, nuestra pérdida de agudeza y tole-rancia a las variaciones de amplitud se la debemos a la lustradora, al rock y al jet (entre otros). Felizmente conservamos la habilidad de seleccionar, y dentro de nuestra gama tenemos una cantidad casi ilimita-da de maravillosa música. Esperemos que los artefac-tos que inventamos no nos reduzcan la capacidad de apreciarlos.

tante es mantener un equili-brio de la presión atmosférica exterior y la interna. Para esto cuenta con un tubo, la trompa de eustaquio, que la conecta con la garganta. Es por esto que cuando tragamos sali-va sentimos un alivio en la presión del oído.

En el oído medio hay una cadena de órganos encargados de trans-mitir las vibraciones recibidas del tímpa-no. Estas son trans-mitidas por tres hue-secillos llamados martillo, yunque y estribo; este últi-mo es el hueso más pequeño del cuer-po humano: mide 3 mm x 2,5 mm. Las vibraciones que re-ciben los huesecillos las amplifican treinta veces y las transmiten a un órgano llamado có-clea, (del latín, caracol) por su forma espiral.

Oído interno y equilibrio El estribo golpea la llama-da ventana oval de la cóclea transmitiendo las vibraciones amplificadas. Esta es la infor-mación completa sobre el so-nido que, a través del tímpano, martillo y estribo, los tres hue-secillos que lo han amplificado, es recibido por el oído inter-no. Allí se encuentra el órgano auditivo más complejo, la lla-mada cóclea, por su forma de caracol.

En el oído interno también está el laberinto óseo, que tie-ne tres tubos semicirculares, cada uno en el plano de una de las tres coordenadas espacia-les. Dentro de estos arcos óseos circula un líquido que nos permite conocer la po-sición de nuestra ca-beza con relación al plano horizontal. El órgano del equilibrio que, combinado con la información visual, nos ubica en tres dimensiones.

Es por eso que cuando esta-mos en el camarote de un barco que se mueve y el movimiento de los líquidos en el laberinto no coincide con lo que vemos,

la semana pasada tratamos de des-cribir las caracte-rísticas del soni-do, vibraciones de

aire que capta nuestro oí-do. Estas vibraciones, con excepción del tono puro (sin armónicos) que da el diapasón, son complejas y varían tanto en intensidad como en frecuencia. Es más, generalmente vienen acompañadas de ondas procedentes de otra fuente cuya información no nos interesa, las que llamamos ruido.

El receptorLas vibraciones del aire, el sonido, las recibe todo nuestro cuerpo, al punto de que la fiesta de los ve-cinos a una cuadra la sen-timos en el abdomen, por los tonos bajos que emite la sección del ritmo. El so-nido que nos interesa lo procesamos a través del oí-do, un órgano sumamente complejo con una serie de componentes que, además de procesar las vibraciones del aire con la información correspondiente, contie-ne un órgano destinado al equilibrio, del cual nos ocuparemos aparte.

El órgano que llama-mos oído tiene en su parte externa a la oreja, un pa-bellón de cartílago a cada lado de la cabeza que cap-ta las ondas sonoras para dirigirlas al conducto au-ditivo. Se trata de un tubo 2,5 cm de largo dentro del hueso del cráneo, y llega a la primera barrera que pro-cesa el sonido: el tímpano. Esta es una delgada mem-brana que transmite las vibraciones del aire al oído medio, donde comienza un complejo proceso que, eventualmente, termina-rá en el cerebro, el cual es el encargado de interpre-tarlas.

El oído medioEl tímpano envía las vibra-ciones a una cámara de aire cuya función impor-

El sistema que nos mantiene alerta

Miles de sonidos inundan nuestro día a día. Sin embargo, el ser humano tiene la habilidad de concentrarse en procesar solo aquellos que le interesan. Millones de años de evolución han permitido a los mamíferos desarrollar un sistema auditivo especializado, así como diversificado.Tomás unger

Divulgador científico

CienCia

“ En un salón lleno de conversaciones tenemos la habilidad de escoger solo una”.

Planeta tierra

saLUD

se agotan los antídotos para mordidas de víboras en el mundo— La organización Médicos Sin Fronteras advirtió que para el 2016 las reservas del antídoto Fav-Afri-que, producido por Sanofi Pasteur, expirarán. El fármaco, que dejó de producirse en el 2014, es vital para tratar mordeduras de víboras.

arqUeoLogía

Hallan un monumento neolítico enterrado cerca de stonehenge— Investigadores hallaron cerca de 100 monolitos ente-rrados a menos de tres km del complejo arqueológico de Sto-nehenge, que conforman una pieza monumental. Podría tra-tarse del monumento neolítico más grande del Reino Unido.

internet

Los medios argentinos competirán con google en publicidad en línea— Cinco medios de comunica-ción de Argentina han formado la empresa RPA Media Place, la cual tiene como objetivos prin-cipales vender espacios publi-citarios en Internet y competir contra grandes multinacionales como Google y Facebook.

afp reuters

-rIESGO-La música rock,

entre otras cosas, ha disminuido la tolerancia a las variaciones de

amplitud.

Londres [efe]. Científicos del Reino Unido, Suecia y Estados Unidos han desarrollado una prueba de sangre que permite establecer la edad biológica de una persona, conocer el ritmo de envejecimiento y el riesgo de desarrollar enfermedades co-mo el Alzheimer. Los resultados de esta investigación han sido publicados en la revista científi-ca “Genome Biology”.

Expertos del King’s Colle-ge de Londres, que trabajaron en el análisis, afirmaron que la edad biológica es más útil que trabajar sobre la fecha de naci-miento de una persona.

El estudio no especifica qué se puede hacer para disminuir el envejecimiento, ya que se ha centrado en comparar el com-portamiento de unos 150 ge-nes en dos grupos: personas de

PreviniendoLos expertos indican que saber la edad biológica puede tener impli-cancias en la adquisición de pen-siones y seguros de enfermedad.reconociendoCon la edad biológica se sabría qué personas tienen pocas posibilida-des de enfermarse.

A TENEr EN CUENTA

Un análisis genético permite saber la edad biológica de las personas

25 años y de 65 años. Según los expertos, salud y edad son cosas que no parecen estar directamente relacio-nadas, pues llevar o no una vida sedentaria no parece afectar a la velocidad del en-vejecimiento del cuerpo.

Para el estudio, los exper-tos compararon a las perso-nas que envejecían lenta-mente y los que lo hacían de manera acelerada, lo que les permitió anticipar quiénes podían morir primero.

Esta prueba podría ayu-dar a predecir enfermeda-des neurodegenerativas.

La extensión para el navegador web Google Chrome que blo-quea los avisos publicitarios (AdBlock) ha presentado una falla que obliga a los usuarios de You Tube a ver publicidad du-rante la reproducción de los vi-deos sin poder saltarla.

Algunos de estos contenidos publicitarios pueden llegar a

Una falla en Chrome obliga a ver publicidad en You Tube

durar más de tres minutos.De acuerdo con el medio

International Business Times, las quejas sobre este error han aparecido a través de Twitter y Facebook. Asimismo, los in-ternautas indican que la forma de solucionar este error con-siste en desinstalar y volver a instalar la aplicación de You Tube o Chrome del dispositivo afectado.

Los creadores de la exten-sión AdBlock afirmó que es-ta falla solo ocurre en Google Chrome, por lo que pide a los usuarios, por ahora, cambiar de navegador.

entran en resonancia con las diferentes frecuencias y sus ar-mónicos. Estos están ubicados de menor a mayor, con los más cortos (que registran las fre-cuencias más altas) a los extre-mos y los más largos al medio.

El oído medio tiene además una función cuyo mecanismo no se conoce, y es la habilidad crucial (e invalorable en la vi-da cotidiana) de seleccionar el sonido que nos interesa. En un salón lleno de conversaciones tenemos la habilidad de esco-ger solo una, cosa que no sabe-mos si lo hace el órgano de cor-ti, el cerebro o probablemente ambos.

La gamaSi consideramos la variedad y sutileza de combinaciones ar-mónicas que distinguimos se hace difícil creer que un órgano como la cóclea pueda tener to-dos los requisitos para captar la gama de frecuencias y am-plitudes que llegan al cerebro. Sobre el resultado final no hay duda, ya que la forma más abs-tracta de sonido, como podría ser el “Concierto brandem-

burgués” de Bach, resulta agradable y distinguible al oído.

Es más, hay variantes sutiles en su interpreta-

ción que son detecta-bles por personas fa-miliarizadas con la

pieza. Esto nos da una pequeña idea de la cantidad de

funciones que llevan a cabo los procesa-dores de so-nido, desde

ilustración: jean izquierdo