el entrenador de exito

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EL ENTRENADOR DE ÉXITO

Rainer Martens

EDITORIALPAIDOTRIBO

Créditos I-VIII 18/4/02 13:34 Página I

Quedan rigurosamente prohibidas, sin la autorización escrita de los titularesdel “copyright”, bajo las sanciones establecidas en las leyes, la reproducciónparcial o total de esta obra por cualquier medio o procedimiento, comprendidosla reprografía y el tratamiento informático y la distribución de ejemplares de ellamediante alquiler o préstamo públicos.

Título original: Successful Coaching (2ª ed)© Human Kinetics Publishers, Inc.

Traducción: Francisco Jiménez ArdanaRevisor técnico: Manuel Pombo

© 2002, Rainer MartensEditorial PaidotriboConsejo de Ciento, 245 bis, 1º 1ª08011 BarcelonaTel. 93 323 33 11 – Fax. 93 453 50 33http: //www.paidotribo.com/E-mail:[email protected]

Primera edición:ISBN: 84-8019-636-XFotocomposición: Editor Service, S.L.Diagonal, 299 – 08013 BarcelonaImpreso en España por A & M Gràfic

Créditos I-VIII 18/4/02 13:34 Página II

Prefacio a la Segunda Edición estadounidense VConvertirse en un entrenador de éxito VII

PARTE I DESARROLLANDO UNA FILOSOFÍA DEL ENTRENAMIENTO 1

Capítulo 1 Sus objetivos como entrenador 3Capítulo 2 Su estilo como entrenador 11

PARTE II PSICOLOGÍA DEL DEPORTE 17

Capítulo 3 Evaluando sus técnicas de comunicación 19Capítulo 4 Desarrollando sus técnicas de comunicación 27Capítulo 5 Principios del reforzamiento 35Capítulo 6 Comprender la motivación 43

PARTE III PEDAGOGÍA DEL DEPORTE 57

Capítulo 7 Planificando la enseñanza 59Capítulo 8 Cómo aprenden los atletas 71Capítulo 9 Enseñando las técnicas del deporte 77

PARTE IV FISIOLOGÍA DEL DEPORTE 89

Capítulo 10 Principios del entrenamiento 91Brian J. Sharkey

Capítulo 11 Condición física para el deporte 101Brian J. Sharkey

Capítulo 12 Desarrollando su programa de entrenamiento 115Brian J. Sharkey

Capítulo 13 Nutrición para los atletas 123Brian J. Sharkey

PARTE V GESTIÓN Y ADMINISTRACIÓN DEPORTIVA 135

Capítulo 14 Gestión y dirección del equipo 137Capítulo 15 Gestión del riesgo 155Capítulo 16 Auto-gestión 183

Índice

Créditos I-VIII 27/6/02 17:17 Página III

Apéndice A Un programa de orientación para los padres 195Apéndice B Federaciones deportivas españolas 201

Bibliografía 207Índice alfabético 209

El entrenador de éxitoIV

Créditos I-VIII 18/4/02 13:34 Página IV

La primera edición de este libro, Entrenando a jóvenes Atletas, es el manualsobre el entrenamiento que más se ha leído de cuantos se han escrito en Norte-américa, con casi 100.000 ejemplares vendidos desde que salió a la luz en 1981.¿Por qué cambiarle el título a un manual de tanto éxito? Porque muchos entre-nadores y gerentes deportivos interpretaron que el “jóvenes” del título se referíaa niños prepubescentes, no a atletas quinceañeros. Así, cambiando el título porel de El entrenador de éxito, sin referencia alguna a la edad, esperaba alentar alos entrenadores de todas las categorías a leer este libro.

Publicada en 1990, la segunda edición de El entrenador de éxito fue revisadaconvirtiéndose en una introducción rigurosa al arte y la ciencia del entrena-miento. El manual presentaba una filosofía positiva de la instrucción; los prin-cipios del entrenamiento según se derivan del campo de la psicología deportiva,la pedagogía deportiva y la fisiología deportiva; y útiles consejos desde el campode la gestión deportiva.

La segunda edición conservaba el contenido sumamente práctico, compren-sible y conciso de la primera edición, pero también incluía cambios significati-vos que surgieron a partir de las sugerencias constructivas de muchos entrena-dores y gerentes deportivos. Reescribí la parte de la pedagogía del deporte a finde hacerla más práctica incluso para el desarrollo de los planes de enseñanza.Añadí un capítulo para ayudar a comprender cómo los atletas aprenden lashabilidades deportivas.

También revisé las secciones sobre psicología y fisiología del deporte parainsertar nuevos e importantes descubrimientos en dichas ciencias desde quefuera escrita la primera edición. Quizá el cambio más significativo fuese la su-presión del apartado de medicina deportiva. Suprimí la medicina deportiva por-que elaboramos un curso y un libro separados bajo el título Primeros Auxilios enel Deporte.

Finalmente, añadía una sección nueva titulada gestión deportiva. Incluía ca-pítulos muy prácticos sobre la gerencia de su grupo o programa, la gestión delriesgo, el control del estrés y la planificación del tiempo. Estos capítulos no sólo

Prefacio a la segunda edición estadounidense

Créditos I-VIII 27/6/02 17:18 Página V

le ayudarán a entrenar con mejores resultados,sino también a crecer como entrenador y comopersona.

Además de actualizar el contenido de El entre-nador de éxito, hemos dado respuesta a las peti-ciones de los entrenadores, gestores y padres demás información práctica sobre cómo evitar quelos atletas consuman tabaco, drogas, alcohol yotras drogas.

La primera edición de este libro ha sido emplea-da para instruir a entrenadores de casi todos losdeportes en todas las categorías –por grupos e indi-viduales, mujeres y hombres, con contacto y sincontacto, principiantes y avanzados. En ocasioneslos gestores han comentado, “Me gusta este libro,pero me agradaría que tuviese más ejemplos relati-vos a nuestro deporte. Nuestros entrenadores novan a mencionar ejemplos de esos otros deportes.”Obviamente, no resulta posible escribir este ma-nual para cada deporte, ni creo que sea necesario.He facilitado ejemplos representativos para todaslas categorías que he enumerado. Además, El en-trenador de éxito trata sobre los principios propiosdel entrenamiento, y la mayoría de los principiosson aplicables a todos los deportes. Aun cuandoun ejemplo concreto no se adecue directamente

con otro deporte, considero que los entrenadorespueden aplicar fácilmente dicho principio a su dis-ciplina. De hecho, algunos entrenadores me dicenque hacer comparaciones entre deportes agiliza sucomprensión.

Compartí la autoría de la primera edición de es-te manual con tres amigos especiales –RobertChristina, Jack Harvey y Brian Sharkey. Aunquelos Dres. Christina y Harvey no contribuyerondirectamente en la presente edición, su coopera-ción en la primera permanece en esta revisión.Quiero expresar mi agradecimiento también aBrian Sharkey, mi antiguo mentor, por autorizarla revisión de la Parte IV, “Fisiología del Deporte.”Ted Miller invirtió muchas horas ayudándome alocalizar fuentes y a culminar los detalles del ma-nuscrito, cosa por la que deseo darle las gracias.Linda Bump, quien contribuyó considerablementeen el desarrollo de varias de las secciones, mereceun reconocimiento muy especial, y Jan ClarussoSeeley, quien hizo las veces de editor. Finalmente,quiero dar las gracias a los cientos de entrena-dores y gestores que han compartido conmigo susconocimientos sobre la formación y sus ideassobre cómo hacer que este manual sea más prove-choso.

El entrenador de éxitoVI

Créditos I-VIII 18/4/02 13:34 Página VI

¡Bienvenido al entrenamiento! Si usted no ha sido entrenador antes, leaguardan muchas experiencias nuevas. Quizás haya soñado despierto escenasen las que sus atletas le sacan del campo en hombros tras ganar el campeonato,y sus amigos y vecinos le felicitan por haber planificado una temporada perfec-ta. O tal vez sus ensoñaciones se conviertan en pesadillas –se ve a sí mismocometiendo un error táctico y algún espectador bocazas le ridiculiza. Entoncespierde los nervios y dice cosas que lamentará. Si ya ha entrenado, quizás estossueños y pesadillas, o escenarios similares, son experiencias reales para usted.

Como cualquier profesión, entrenar tiene sus altos y bajos, pero estando pre-parado, pueden ser altos en su mayor parte. Si ya posee las habilidades pedagó-gicas de un educador, la experiencia en el entrenamiento de un fisiólogo, el lide-razgo administrativo de un ejecutivo de los negocios y los conocimientos de unpsicólogo para asesorar, puede desprenderse de este libro; no le será de ayuda.Pero si no los tiene, únase a mí para descubrir qué hace que un entrenador ten-ga éxito.

¿El éxito consiste en ganar partidos? Sí, en parte, ganar constituye un aspec-to del triunfo como entrenador. Pero El entrenador de éxito es mucho más que labase para ganar partidos. Los entrenadores de éxito ayudan a los atletas adominar nuevas habilidades, a disfrutar compitiendo con otros y a sentirse bienconsigo mismos. Los entrenadores de éxito no sólo están bien versados en lastécnicas y habilidades propias de sus deportes, saben cómo enseñar estas habi-lidades a los jóvenes. Y los entrenadores de éxito no sólo enseñan a los atletashabilidades deportivas, también les enseñan y ejemplifican las habilidadesnecesarias para vivir prósperamente en nuestra sociedad.

Ser un entrenador de éxito comporta un enorme desafío. Y las buenas inten-ciones no son suficientes para tener éxito; se necesitan todos los conocimientosque pueda atesorar. El entrenador de éxito le ayudará a adquirir estos conoci-mientos instruyéndole más sobre ciencia deportiva y gestión del deporte. No tra-ta sobre le enseñanza de técnicas o tácticas para deportes concretos, aunqueambas son importantes, ciertamente. Los entrenadores de éxito necesitan tenerconocimientos tanto (a) de la ciencia y la gestión deportivas y (b) de técnicas ytácticas. En el pasado, los entrenadores ponían el énfasis en las últimas porquepoco se sabía de las primeras. Pero eso ha cambiado ahora y El entrenador deéxito le proporcionará unos cimientos firmes en la aplicación práctica de la cien-cia y la gestión deportivas.

Convertirse en un entrenador de éxito

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En este manual introductorio se instruirá so-bre tres ciencias deportivas –psicología del depor-te, pedagogía del deporte y fisiología del deporte– ysobre la gerencia deportiva. No se preocupe si setopa con términos, como pedagogía del deporte,que son nuevos para usted. Le presentaré estasciencias del deporte de manera comprensible y,eso espero, entretenida. No deseo perder su inte-rés debido a una jerga científica innecesaria, perollegar a El entrenador de éxito requiere que apren-da algunos términos nuevos. Al igual que los car-pinteros deben aprender sobre escofines, codalesy zócalos, los entrenadores de hoy en día han deestar instruidos en entrenamiento aeróbico y ana-eróbico, motivación intrínseca, glucógeno muscu-lar, grado óptimo de motivación, pliometría y ges-tión del riesgo. En este libro se informará sobretodas estas cosas y muchas más en un lenguajeque podrá comprender, y de un modo que le ayu-dará a convertirse en un entrenador de éxito.

La mayoría de los entrenadores han asimiladola experiencia del oficio mediante años de ensayo yerror. Pero, oh, ¡cómo duelen algunos de esos erro-res! El entrenador de éxito le ayudará a acortar eseproceso de aprendizaje –y a reducir esos dolorososerrores– recurriendo a la sabiduría de entrena-dores expertos y entendidos y a las investigacionesde cientos de científicos del deporte que lo hanestado estudiando en los últimos 40 años. El énfa-sis único de este libro consiste en la integración delas investigaciones de la ciencia deportiva con elconocimiento práctico adquirido por entrenadoresmuy experimentados.

Este manual, por supuesto, no contiene todala información que necesitará para ser un entre-nador de éxito. Hay mucho más que aprender.Este libro es sólo un punto de partida, unoscimientos para erigir sus conocimientos sobreciencias y gestión deportiva. Estos manuales sonsólo una fuente de información. Otro método deaprendizaje consiste en observar y hablar con

otros entrenadores. Pueden enseñarle prácticasde entrenamiento tanto eficaces como ineficaces;lo que debe hacer es distinguir entre ambas. Elentrenador de éxito le ayudará a hacerlo propor-cionándole los cimientos sobre ciencia y gestióndeportivas.

Ciertamente, otra forma relevante de aprenderes a partir de sus propias experiencias. Segúnentrena, examine sus experiencias periódicamen-te y reflexione sobre lo que está aprendiendo.¿Qué puede hacer de manera distinta para entre-nar con más éxito y qué quiere seguir haciendoigual porque da buen resultado? Algunos entrena-dores poseen 20 años de experiencia, pero hanaprendido poco porque no reflexionan y se ade-cuan a sus experiencias. Otros entrenadores talvez tengan sólo unos pocos meses de experiencia,pero aprender mucho más deprisa y se adecuan alos entrenamientos de entrenamiento que resul-tan o no provechosas.

No le llevará tanto tiempo leer El entrenador deéxito, pero puede que le lleve algún tiempo asimi-lar su contenido y tal vez incluso más poner enpráctica lo que sabe. De igual forma que un atletano aprende a jugar como defensa de la noche a lamañana, usted no aprenderá los conocimientosdel oficio en un día. Tendrá que leer y releer sec-ciones de este libro, practicar las habilidades des-critas y aprender de sus experiencias medianteanálisis concienzudos. Según emprende este au-to-estudio, verá que los entrenadores de éxito sonaquellos que pueden asimilar nuevas aptitudes,que son lo bastante flexibles como para cambiarlos viejos usos cuando es preciso el cambio, quepueden aceptar la crítica constructiva y que pue-den evaluarse críticamente a sí mismos. A lo largode El entrenador de éxito, le pediré que haga todasestas cosas. De hecho, voy a urgirle a dedicar elmismo esfuerzo a convertirse en un entrenador deéxito que el que usted espera de los atletas a losque entrena.

El entrenador de éxitoVIII

Créditos I-VIII 18/4/02 13:34 Página VIII

Su éxito como entrenador dependerá más desu filosofía como tal que de ningún otro factor.Por filosofía entiendo las creencias o principiosque guían las acciones que emprende. Es el fun-damento sobre el que se van a erigir todos susconocimientos sobre ciencia del deporte, gerenciadeportiva y técnicas y tácticas. Su filosofía comoentrenador determinará cuán sabiamente emplea-rá estos conocimientos.

La Parte I pretende ayudarle a desarrollar sufilosofía como entrenador pidiéndole que pienseen las dos decisiones más importante que tomaun entrenador. La primera decisión, tratada en el

capítulo 1, consiste en determinar qué objetivosse esforzará por conseguir cuando esté entrenan-do. En el capítulo 2, le pido que piense sobre elestilo como entrenador que empleará para conse-guir sus objetivos.

La manera en que tome estas dos decisionesformará parte esencial de su filosofía como entre-nador y, en gran medida, determinará cuánto éxi-to y diversión disfrutarán usted y sus atletas. Ob-viamente, nadie puede tomar estas decisiones porusted; sin embargo, le alentaré a tomar en consi-deración ciertas cuestiones de importancia segúndesarrolle su filosofía como entrenador.

Parte I

Desarrollando unafilosofía del entrenamiento

Capítulo 1SUS OBJETIVOS COMO

ENTRENADOR

Capítulo 2SU ESTILO COMO

ENTRENADOR

HUMM... ¿QUÉTIPO DEENTRENADORSOY?

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Esta página dejada en blanco al propósito.

Una de las dos decisiones de mayor importancia que tomará como entrena-dor compete a los objetivos que tratará de conseguir con sus atletas. Deténga-se durante unos momentos a pensar en cuáles serán sus objetivos, y anótelos.En este capítulo tomaremos en consideración primero los objetivos que se hamarcado para su grupo o atletas, y luego nos plantearemos los objetivos que seha fijado para sí mismo.

Tres objetivos principales

Los entrenadores suelen hacer una lista con numerosas metas concretasque esperan conseguir al entrenar a sus deportistas; usualmente, sus metasse engloban dentro de tres objetivos mayores:

• Tener a un grupo ganador.• Ayudar a gente joven a divertirse.• Ayudar a gente joven a desarrollarse...

a. físicamente, mediante el aprendizaje de habilidades deportivas, mejoran-do sus capacidades físicas, desarrollando hábitos saludables y evitandolas lesiones;

b. psicológicamente, aprendiendo a controlar sus emociones y desarrollan-do un sentimiento de autoestima, y

c. socialmente, aprendiendo a cooperar en un contexto competitivo y nor-mas apropiadas de conducta.

¿Cuál de estos objetivos es importante para usted? ¿Ganar? ¿Divertirse?¿Ayudar a gente joven a desarrollarse? Tal vez estime que los tres son válidos.Pero, ¿son igualmente importantes? ¿Qué pasa si debe escoger entre ellos (loque a veces tendrá que hacer)? Los entrenadores deben decidir si ir en pos dela victoria a costa, posiblemente, del bienestar y el desarrollo de un atleta.¿Cuáles serán sus prioridades?

Capítulo 1

Sus objetivos como entrenador

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El entrenador de éxito4

Evaluando sus objetivos

El escueto cuestionario que sigue le ayudará adecidirse sobre sus objetivos de cara a ganar, di-vertirse y cooperar en el desarrollo de jóvenes de-portistas.

Lea cada enunciado y las tres opciones quevienen a continuación. Decida cuál de las tresconsidera que es la más importante y escriba elnúmero 3 en el espacio en blanco que hay junto aesa letra. Luego decida qué opción es menos im-portante para usted y escriba 1 en el espacio enblanco correspondiente. Anote un 2 en el espaciorestante. Aunque pueda pensar en algunos casosen que las tres opciones son importantes, indiquecuál es la que tiene más importancia y cuál es laque tiene menos importancia de todas. Trate deresponder a cada pregunte según lo que honesta-mente siente.

1. Los mejores entrenadores son aquellos que,A. Prestan ayuda personal y se interesan

en el desarrollo de los jóvenes atletas. A. _____B. Hacen que los entrenamientos

y los juegos sean divertidos. B. _____C. Enseñan a los deportistas las habilidades necesarias para ganar. C. _____

2. Si se escribiera un artículo sobre mí, me gustaría que me describieran como,A. Un entrenador que ha contribuido al desarrollo de gente joven. A. _____B. Un entrenador gracias al cual los atletas disfrutaban jugando. B. _____C. Un entrenador ganador. C. _____

3. Como entrenador hago énfasis en,A. Enseñar habilidades que los jóvenes puedan utilizar luego en la vida. A. _____B. Divertirme. B. _____C. Ganar. C. _____

Total _____ _____ _____

Ahora vamos a puntuar el test. Sume las puntuaciones en cada columna. Cada total debería hallarseentre 3 y 9; cuanto mayor sea el total, mayor énfasis pone usted en ese resultado. Las primeras colum-nas muestran la prioridad que asigna al desarrollo de los jóvenes atletas, la segunda su prioridad encuanto a la diversión y la tercera el lugar que otorga a la victoria.

La puntuación de la mayoría de los entrenadores indica que creen que ganar es lo menos importantey que ayudar a los deportistas a desarrollarse es lo más importante. ¿Ha respondido usted del mismomodo? ¿Describe verazmente su modo de entrenar?

GANAR

ENTRENAR

DIVERTIRSE

DESARROLLARSE

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Sus objetivos como entrenador 5

Una filosofía de la victoria. Una filosofía victoriosa.

Ni una sola decisión tiene más importanciapara determinar su manera de entrenar que laprioridad que asigna a estos objetivos; en especial,el significado que otorga a la victoria. Algunos en-trenadores que afirman que ganar no es lo másimportante no se comportan de esa manera cuan-do entrenan. Por ejemplo, los entrenadores quehacen jugar sólo a los mejores atletas, que hacenjugar a atletas lesionados o que gritan despectiva-mente a los atletas que han cometido un errordemuestran que ganar es más importante paraellos que el desarrollo de los deportistas.

Sea sincero. ¿Otorga en ocasiones un énfasisexcesivo a la victoria? ¿Toma decisiones a vecesque reflejan más preocupación por ganar el parti-do que por el desarrollo de sus atletas? ¡Resultafácil hacerlo en una sociedad que concede tantovalor a la victoria!

Muchos entrenadores se enfrentan a un dile-ma sobre sus objetivos cuando entrenar. La socie-dad recompensa claramente a los ganadores.Pero la sociedad también entiende el deportecomo un medio de ayudar a los jóvenes a desen-volverse en la vida, a forjar el carácter y a desarro-llar aptitudes de liderazgo. Los entrenadores quedesean ayudar a los jóvenes a evolucionar física,psíquica y socialmente mediante el deporte amenudo se encuentran con que se les evalúa úni-camente según su historial de victorias y derro-tas. Altruistas tal vez al principio, demasiadosentrenadores veteranos se ven condicionados porlas organizaciones para las que trabajan a perse-guir el objetivo de la victoria a cualquier precio.

Esto debe cambiar, y los entrenadores debenresponsabilizarse de propiciar el cambio. Mien-tras la sociedad sea voluble en cuanto a los objeti-vos en la práctica del deporte, los entrenadoresdeben resistirse a las fuerzas que les animan aganar a cualquier precio. Los entrenadores, ahoramás que nunca, han de tener claros sus objetivoscuando entrenan.

Quiero que considere usted el siguiente objetivocomo la piedra angular de su filosofía como entrena-dor. Es un objetivo que respaldan muchas organiza-ciones deportivas nacionales, entrenadores expertosy con éxito de todas las categorías, educadores pro-fesionales y terapeutas. Es un objetivo que esperoque usted también apoye y, lo que es más importan-te, ¡que ponga en práctica! El objetivo es éste:

Los atletas primero,la victoria en segundo lugar

Lo que trato de decir con ello es muy simple:toda decisión que toma y cada comportamientoque exhiba está basado, primero, en lo que juzgaque es mejor para sus atletas y, segundo, en loque puede mejorar las opciones de victoria delatleta o del grupo.

Los atletas primero, la victoria en segundo lugares el fundamento filosófico de la carta de Dere-chos de los Atletas Jóvenes que se incluye en lapágina 6. Dedique un momento al estudio deestos derechos. Piense en cómo su manera deentrenar podría privar a un atleta de esos dere-chos, y después en cómo puede entrenar paragarantizar que todo atleta goce de ellos.

Los atletas primero, la victoria en segundo lugares un objetivo fácil de decir, pero no tan fácil decumplir. Hoy día, muchas organizaciones deporti-vas están dirigidas por directivos que exigen a losentrenadores que inviertan este objetivo –la victo-ria primero, los atletas en segundo lugar–, ya seaporque ganar es su objetivo personal o porqueestos directivos reciben la presión de otros. Losentrenadores que, con pericia, ayudan a los jóve-nes a convertirse en seres humanos mejores, peroque no llegan a ganar una cuota de partidos,a menudo desconocida, son considerados unosperdedores y, con excesiva frecuencia, despedi-dos. Ésta es la lamentable realidad del deporteactual, pero debe cambiar y cambiará. En última

Parte I 001-016 18/4/02 14:28 Página 5

instancia, no se trata de cuántos partidos se ga-nan sino de a cuántos jóvenes ha ayudado a con-vertirse en ganadores en la vida.

Así pues, ¿qué piensa hacer usted ahora si seencuentra en esta situación? Si cree que Los atle-tas primero, la victoria en segundo lugar refleja laprioridad idónea, resista la tentación de abando-nar sus principios porque la presión de ganarsupone una amenaza para su puesto de trabajo, opeor, para su autoestima. Resístase a transferiresta amenaza amenazando el bienestar de susatletas. Cíñase a sus principios y trate de conver-tir a sus objetivos a quienes le están presionando:los atletas primero, la victoria en segundo lugar.

Esforzándose para ganarTener el los atletas primero, la victoria en

segundo lugar como objetivo no significa que ga-nar carezca de importancia. El objetivo inmediatoa corto plazo de cualquier disputa es ganar. Es-forzarse por ganar ateniéndose a las reglas deljuego tendría que ser la meta de todo atleta y en-trenador. Practicar deportes sin esforzarse paraganar equivale a ser un “competidor deshonesto”,dice Michael Novak en Joy of Sports. Esforzarsepara ganar resulta esencial en una competiciónplacentera.

“Ganar no lo es todo, es lo único”, dice VinceLombardi, o eso nos han contado. En realidad,

El entrenador de éxito6

CARTA DE DERECHOSPARA LOS ATLETAS JÓVENES

Derecho a practicar deportes

Derecho a participar en una categoríaque se corresponda con la madurez

y capacidad de cada niño

Derecho a contar con el liderazgode adultos cualificados

Derecho a jugar como un niñoy no como un adulto

Derecho de los niños a compartir el liderazgo yla toma de decisiones de su práctica deportiva

Derecho a participar en entornosseguros y saludables

Derecho a la preparación apropiadapara practicar deporte

Derecho a la igualdad de oportunidadesde cara al éxito

Derecho a ser tratado con dignidad

Derecho a divertirse haciendo deporte

Nota. De Guidelines for Children’s Sports (pág. 15-31) de R. Martensy V. Seefeldt (Edes.), 1979, Reston, VA: AAHPERD. Copyright 1979,por AAHPERD. Reproducido con permiso de la American Alliance forHealth, Physical Education, Recreation and Dance, 1900 Associa-tion Dr., Reston, VA 22091.

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Lombardi no lo expresó de ese modo; esa fue laversión de un periodista. Lo que Lombardi dijo, enrealidad, fue, “Ganar no lo es todo, pero sí esfor-zarse para ganar”. Y esa declaración refleja conmayor precisión su filosofía como entrenador.

¿Tiene sentido que el énfasis en la victoria noesté en el hecho de ganar en sí mismo, sino enesforzarse por ganar? Se trata de la búsqueda dela victoria, el sueño de conseguir la meta más quela meta en sí misma lo que trae consigo la diver-sión en el deporte. Muchos atletas destacadosafirman con candidez que sus mejores recuerdosdeportivos no son las victorias mismas, sino losmeses de preparación y anticipación, y la auto-rrevelación antes y durante la competición.

Compromiso

La competición y el esfuerzo para ganar pose-en significado en otro aspecto. Hoy día, oímoshablar mucho sobre la alienación de nuestrosjóvenes, su falta de compromiso con las institu-ciones establecidas y su falta de aspiración alograr la excelencia. Lamentablemente, muchosjóvenes no encuentran actividades en su casa,escuela o lugar de culto que sean dignas de sucompromiso. Pero los jóvenes de Norteamérica sesienten atraídos por el deporte; ven en el deporteun desafío al que vale la pena dedicarse. Y ¿cuáles ese desafío? Es la competición: el compararcapacidades y esfuerzos, la pugna por ganar y elreconocimiento de la excelencia alcanzada.

Larry Smith fue uno de esos jóvenes “no com-prometidos”. Era demasiado vago o indiferentepara hacer los ejercicios escolares; solía sentarseen su casa a ver la televisión y a comer, por lo queacabó padeciendo de sobrepeso. Pero, por algunarazón, Larry se decidió a practicar el rugby, dondepor fin encontró un desafío. Para formar parte delgrupo y bajar del límite superior de peso, tuvo quemejorar sus notas y perder cuatro kilos y medio.Sus padres y profesores habían tratado de quehiciera ambas cosas durante meses, pero habíanfracasado. ¡Ahora lo hacía por su cuenta!

Recientemente, un joven de 16 años con retra-so mental recibió un premio en la televisión na-cional por sus logros destacados como nadador.Lo que resultaba digno de mención en este jovenera que a la edad de 12 años no podía hablar o lle-var a cabo las habilidades básicas de autoayuda,como son alimentarse y vestirse. Gracias a lasParaolimpiadas, aprendió a nadar y a competir, yeste desafío le extrajo de su mundo interior. Nosólo aprendió a alimentarse y a vestirse, sino

también a hablar y, aún más notable, a enseñar anadar a otros jóvenes.

Estudiando algunos de los problemas de nues-tras escuelas, el célebre educador James Cole-man observó que los grandes logros de la huma-nidad se producen cuando los individuos se com-prometen intensamente con algo, cuando única-mente su esfuerzo total concentrado puede darlugar al éxito, pero incluso entonces éste no estágarantizado. Los deportes atraen ese tipo de com-promiso, y a menudo dan como resultado grandeshazañas personales.

Sus objetivos como entrenador 7

Conducta Ética

El elemento competitivo en el deporte poseevalor incluso en otro sentido. Mediante el deporte,los jóvenes pueden formarse moralmente, puedenaprender el código básico de la ética que es trans-ferible a un código moral en la vida. El deporte decompetición –en el que ganar resulta un premiovalioso– da ocasión a que se produzcan órdeneselevados de desarrollo moral.

Por ejemplo, Sharon está jugando al tenis pordiversión con Susan, quien gana el punto tocan-do la línea de fondo. Sabiendo que el golpe hasido bueno, Sharon así lo reconoce. Susan gana.

GANAR FRENTE ACONDUCTA ÉTICA

Parte I 001-016 18/4/02 14:28 Página 7

No resulta tan difícil hacerlo cuando estás practi-cando el tenis por diversión, cuando hay poco enjuego.

Pero imaginemos a Sharon jugando el mismopartido, y la victoria comporta el prestigioso cam-peonato de la ciudad y un viaje al torneo nacio-nal. Se requiere mucho más carácter para dar laindicación adecuada en este caso.

Uno de los valores del deporte de competiciónradica en que tales decisiones morales son nece-sarias con frecuencia y los jóvenes gozan de opor-tunidades para aprender, y los adultos para mo-delar, la conducta ética apropiada. Realizar unjuicio moral apropiado a expensas de una valiosavictoria constituye una prueba real del carácter,así como una oportunidad para desarrollar elmismo.

Mantener la victoria en perspectiva

Esforzarse para ganar es importante en eldeporte. Ese proceso puede extraer lo mejor de losjóvenes: en su rendimiento, compromiso y desa-rrollo moral. Para que el deporte genere estosbeneficios, debe usted mantener la victoria dentrode la perspectiva adecuada: los atletas primero, lavictoria en segundo lugar.

Recuerde que esforzarse para ganar el partidoconstituye un objetivo importante de la disputa,pero no es el objetivo más importante de la prácti-ca del deporte. Resulta fácil perder de vista losobjetivos a largo plazo –ayudar a los atletas a evo-lucionar física, psicológica y socialmente– mien-tras se persigue la meta a corto plazo de ganar lacontienda, porque las recompensas por ganar soninmediatas y poderosas. Ganar o esforzarse paraganar nunca es más importante que el bienestarde los atletas, independientemente de los mensa-jes ambiguos que nuestra sociedad difunde. Pre-gúntese a sí mismo, ¿seré capaz de manteneresas metas a largo plazo no sólo en los entrena-mientos, sino en el calor de una contienda, nosólo cuando estoy ganando sino cuando estoyperdiendo, no sólo cuando tengo el apoyo deldirectivo, sino cuando él o ella me presiona paraganar?

Cuando se mantiene la victoria en perspectiva,los programas deportivos dan lugar a gente jovenque disfruta del deporte, que se esfuerza porsobresalir, que se atreve a equivocarse a fin deaprender y que crece con una crítica tanto enco-miástica como constructiva. Cuando se mantiene

la victoria en perspectiva, hay sitio para la diver-sión en la pugna por la victoria –o, con mayorrigor, la pugna por la victoria es divertida. Con elliderazgo adecuado, los programas deportivosdan lugar jóvenes que aceptan responsabilidades,que aceptan a los demás y, sobre todo, que seaceptan a sí mismos.

Sus objetivos personales

Espero que usted entrene porque se preocupapor ayudar a gente joven mediante el deporte.Asimismo, es probable que tenga otros objetivos:ganarse la vida, demostrar su conocimiento deldeporte, merecer el reconocimiento público, qui-zá incluso la fama. Puede que esté entrenandopor el contacto social, el amor al deporte, paradivertirse, para viajar o para estar al cargo. To-dos estos objetivos y muchos otros constituyenrazones personales apropiadas para entrenar, yes preciso que consiga usted cumplir algunos desus objetivos o, de lo contrario, es probable queabandone.

Los entrenadores, en ocasiones, niegan susobjetivos personales. Tal vez estimen que las úni-cas razones socialmente aceptables que se pue-den dar para entrenar son declaraciones altruis-tas sobre la ayuda a los atletas. Es convenientetener estos motivos altruistas, pero resulta per-fectamente idónea la pretensión de cumplir obje-tivos personales al entrenar, asimismo, siempre ycuando el logro de los mismo no sea a expensasdel bienestar de los atletas.

Para ayudarle a examinar sus objetivos perso-nales, he enumerado algunos motivos comunespara entrenar en la página siguiente. Indiquecuán importante es para usted cada uno de estosmotivos rellenando la casilla correspondiente.Añada cualesquiera otras razones que tenga en elespacio suministrado y ordénelas, igualmente.Ahora piense rigurosa y honestamente, y trate deidentificar cualquier motivo que pueda causarconflictos entre lo que es mejor para usted y loque es mejor para sus atletas.

Por ejemplo, si el reconocimiento personal o elpoder figuran entre sus objetivos personales paraentrenar, tiene que precaverse contra el situarsus objetivos por encima del interés de sus atle-tas. Será especialmente vulnerable durante lascompeticiones intensas en la persecución de susmetas a costa de sus deportistas. Este riesgo pue-de ser administrado, pero tiene que llegar a cono-cerse bien a sí mismo y a grabar firmemente en

El entrenador de éxito8

Parte I 001-016 18/4/02 14:28 Página 8

su cabeza la filosofía de los atletas primero, la vic-toria en segundo lugar.

Los entrenadores de éxito conocen la diferenciaentre sus objetivos en la disputa, sus objetivos enla participación de sus deportistas y sus objetivospersonales. Los entrenadores de éxito se esfuer-zan para ganar todas y cada una de las contien-das, aunque deben saber que una victoria es im-

probable. Los entrenadores de éxito ayudan a losatletas a desarrollarse física, psicológica y social-mente. Y los entrenadores de éxito se esfuerzanpara cumplir sus metas personales sin poner enpeligro el bienestar de sus deportistas. De hecho,los entrenadores de éxito encuentran la manerade lograr los tres objetivos.

Sus objetivos como entrenador 9

Razones personales para entrenar

Razón Sin Cierta Muy

Importancia importancia importante

Implicarme en un deporte que me gusta ❑ ❑ ❑

Ganarme la vida ❑ ❑ ❑

Contribuir a garantizar una posición pedagógica ❑ ❑ ❑

Tener poder ❑ ❑ ❑

Hacerse cargo ❑ ❑ ❑

Estar con gente que me agrada ❑ ❑ ❑

Devolver algo al deporte ❑ ❑ ❑

Ganar el reconocimiento público ❑ ❑ ❑

Disfrutar ❑ ❑ ❑

Demostrar mis conocimientos y habilidades en el deporte ❑ ❑ ❑

Viajar ❑ ❑ ❑

Ayudar a los atletas a desarrollarse físicamente ❑ ❑ ❑

Ayudar a los atletas a desarrollarse psicológicamente ❑ ❑ ❑

Ayudar a los atletas a desarrollarse socialmente ❑ ❑ ❑

__________________________________________ ❑ ❑ ❑

__________________________________________ ❑ ❑ ❑

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La segunda decisión de importancia que ha de tomar hace referencia a suestilo como entrenador. Ese estilo determinará el modo en que va a decidir quéhabilidades y estrategias enseñar, cómo se va a organizar para los entrenamien-tos y la competición, qué métodos va a utilizar para disciplinar a los jugadoresy, fundamentalmente, qué papel otorgará a los atletas en la toma de decisiones.

Tres estilos de entrenamiento

La mayoría de los entrenadores se decantan hacia uno de los tres estilos deentrenamiento: el estilo autoritario, el estilo dócil y el estilo cooperativo.

El estilo autoritario (el dictador)

En el estilo autoritario de entrenamiento, el entrenador toma todas las deci-siones. El papel del atleta es responder a todas las órdenes del mismo. Elsupuesto que subyace a este enfoque es que, dado que el entrenador posee

Capítulo 2

Su estilo como entrenador

Parte I 001-016 18/4/02 14:28 Página 11

conocimientos y experiencia, es competencia suyadecirle al deportista lo que debe hacer. El papel delatleta es escuchar, asimilar y obedecer.

Estilo dócil (la niñera)

Los entrenadores que adoptan el estilo dóciltoman tan pocas decisiones como sea posible.Constituye un enfoque del tipo lanza-la-pelota-y-diviértete. El entrenador da poca instrucción, pro-porciona una guía mínima para organizar activida-des y resuelve los problemas disciplinarios sólocuando es de absoluta necesidad. Los entrena-dores que adoptan este estilo o carecen de compe-tencia para proporcionar instrucción y orientación,son demasiado perezosos para satisfacer las de-mandas de sus responsabilidades como entrena-dor o están mal informados sobre lo que significaserlo. El estilo dócil de entrenador es meramenteuna niñera, y con frecuencia una muy deficiente.

ción a los atletas jóvenes para lograr los objetivosestablecidos, el estilo cooperativo reconoce tam-bién que los jóvenes no pueden convertirse enjóvenes adultos sin aprender a tomar decisiones.

El entrenador de éxito12

Estilo cooperativo (el profesor)

Los entrenadores que se adhieren al estilo coo-perativo comparten la toma de decisiones con losdeportistas. Aunque reconocen su responsabili-dad a la hora de proporcionar liderazgo y orienta-

Evaluación de los estilosde entrenamiento

¿Qué estilo le describe mejor: autoritario, dócilo cooperativo? Considero que el estilo dócil no esun “estilo” en absoluto y le convido a no adoptarlo.El estilo autoritario ha prevalecido en el pasado ypodemos verlo comúnmente entre los entrena-dores profesionales, universitarios y de instituto.Muchos entrenadores novatos o inexpertos adop-tan el estilo autoritario porque es el que han vistorepresentado por sus propios entrenadores uotros. Algunos adoptan este estilo porque les ayu-da a ocultar sus propias dudas en sus capacida-des. Si no permiten que los atletas les cuestionen,si pueden evitar explicar por qué entrenan como lohacen, entonces sus deficiencias no serán descu-biertas, ¡o así lo creen!

Superficialmente, el estilo autoritario parece efi-caz. Los buenos grupos atléticos necesitan organi-zación. No pueden ser dirigidos con eficacia comodemocracias participativas; el grupo no puedevotar cada decisión que hay que tomar. De hecho,

Parte I 001-016 18/4/02 14:28 Página 12

el estilo autoritario puede resultar eficaz si ganares el objetivo primario del entrenador y su natura-leza autoritaria no ahoga la motivación de losdeportistas. Pero este riesgo constituye una de lasmayores limitaciones del estilo autoritario. En vezde jugar porque están intrínsecamente motivados,los atletas pueden jugar por la adulación del entre-nador(a) o para evitar su ira. Los entrenadores queemplean el estilo autoritario impiden también quelos atletas disfruten plenamente el deporte. Loslogros son del entrenador, no de los atletas.

El estilo autoritario está siendo desestimadomás y más por entrenadores tanto de jóvenes co-mo de adultos en la actualidad, pues trata a losdeportistas como a autómatas o esclavos, no comoa seres humanos pensantes. Los entrenadores es-tán reconociendo que el estilo autoritario aliena atodos los deportistas salvo a los de gran talento, yque reduce su propia satisfacción en la relacióncon los atletas.

El estilo autoritario no es compatible con el ob-jetivo de los atletas primero, la victoria en segundolugar. Si su objetivo es ayudar a gente joven a cre-cer física, psicológica y socialmente mediante eldeporte; si su objetivo es ayudar a los deportistasa aprender a tomar decisiones; si su objetivo esayudar a la gente joven a ser independiente, en-tonces el estilo autoritario no es para usted.

Resulta obvio a estas alturas que recomiendo elestilo cooperativo de entrenamiento, porque com-parte la toma de decisiones con los atletas y fo-menta el objetivo de los atletas primero, la victoriaen segundo lugar. Algunos piensan que adoptar elestilo cooperativo significa abandonar sus respon-sabilidades como entrenador o que deja que losdeportistas hagan todo cuanto deseen. ¡Ése no esel caso en absoluto!

El entrenador de estilo cooperativo proporcionala estructura y las normas que permiten a los atle-tas aprender a fijar sus propias metas y a lucharpor ellas. Ser un entrenador del tipo cooperativono significa que se eviten las normas y el orden;dejar de estructurar las actividades del grupoequivale a descuidar una de las responsabilida-des principales del entrenamiento. El entrenadorafronta la compleja tarea de decidir qué cantidadde estructura genera el clima óptimo para el desa-rrollo de los atletas.

Imagínese manejando una barra húmeda dejabón. Si la aprieta con demasiada fuerza, se leresbala de las manos (el estilo autoritario). Si no lasujeta con suficiente firmeza, se le escapa (el estilodócil). La presión firme aunque suave, el estilocooperativo, es lo que se necesita. El entrenadorde estilo cooperativo proporciona dirección e ins-trucción cuando son necesarias, pero también sa-be cuándo resulta útil dejar que los deportistastomen decisiones y asuman responsabilidades.

Su estilo como entrenador 13

¿DEBERÍAPERMITIR QUE EL GRUPOHICIERA...

Parte I 001-016 18/4/02 14:28 Página 13

Sabemos que ser un atleta comporta algo másque unas habilidades motoras. Los deportistasdeben ser capaces de afrontar la presión, adaptar-se a situaciones cambiantes, mantener las dispu-tas en perspectiva, mostrar disciplina y mantenerla concentración a fin de rendir bien. Estos ingre-dientes son propiciados rutinariamente por losentrenadores de estilo cooperativo, pero rara vezpor los de estilo autoritario. El estilo cooperativootorga mayor confianza al atleta, lo que tiene unefecto positivo en su auto-imagen. Fomenta laapertura en el clima social-emocional y mejoratanto la comunicación como la motivación. Losdeportistas están motivados no por el miedo alentrenador, sino por el deseo de satisfacción per-sonal. Por ello, el estilo cooperativo casi siempreresulta más divertido para los deportistas.

Hay que pagar un precio, no obstante, al esco-ger el estilo cooperativo de entrenamiento. Esteestilo requiere mayor habilidad por parte del en-trenador. Comporta que los entrenadores debentener el control de sí mismos. Implica que las op-ciones rara vez son absolutamente ciertas o erró-neas. Los entrenadores de estilo cooperativo de-ben individualizar su labor mucho más que los deestilo autoritario. Finalmente, en ocasiones tienesque sacrificar la victoria en interés del bienestarde tus atletas. Cuando me ocupe de la psicología yla pedagogía del deporte, le mostraré cómo emple-ar el estilo cooperativo.

Ayudar a los deportistas a serresponsables e independientes

Defiendo el estilo cooperativo, en especial por-que hace que los atletas aprendan a ser responsa-bles de sí mismos y, por tanto, más independientes.Demasiados entrenadores, en pos de la victoria,impiden que los atletas asuman la responsabilidadpor sí mismos. Los entrenadores niegan a los de-portistas esta oportunidad no sólo tomando todaslas decisiones por ellos en los entrenamientos y enlas competiciones, sino controlando también lamayoría de los aspectos de sus vidas para mante-nerlos a punto, sin problemas y económicamentesolventes de cara a la competición. Tales entrena-dores pueden alegar que están ayudando a sus de-portistas, pero es más probable que se estén asegu-rando de no perder los servicios de los atletas.

El aspecto más difícil del entrenamiento es éste:los entrenadores deben aprender a dejar que losdeportistas aprendan. Las habilidades deportivashan de ser enseñadas de forma que tengan un sig-

nificado para el atleta, no sólo para el entrenador.Los entrenadores deben aprender a implicar a losdeportistas en lo que ellos les están enseñando–tanto los aspectos motores como mentales. Losatletas han de tener la oportunidad de iniciar elaprendizaje, y de cometer errores y de aprender deellos.

Al margen del deporte, los entrenadores debe-rían ayudar a los deportistas a convertirse enciudadanos completos –académica, económica, so-cialmente. Pero los entrenadores tienen que reco-rrer una fina línea entre ayudar a los deportistasen estos aspectos de sus vidas y controlarlos. Losentrenadores han de ayudar a los atletas a apren-der las habilidades de la vida, pero deben conce-derles suficiente independencia para que cometanerrores y aprendan de ellos.

Los entrenadores que consiguen ayudar a losdeportistas a ser responsables e independientesno son dictadores ni actúan movidos por el ego.Los entrenadores de éxito sirven como guías ycompañeros en el deporte y en la vida. Mediante elacto valeroso de compartir la toma de decisiones,pueden propiciar el desarrollo de miembros de lasociedad responsables, independientes. En últimainstancia, este logro posee mayor relevancia queganar cualquier competición.

¿Qué hace que un entrenadortenga éxito?

En el capítulo 1 mencioné que los entrenadoresde éxito deben tener conocimientos sobre las cien-cias del deporte, gestión deportiva, y técnicas ytácticas. Afirmé también que los buenos entrena-dores otorgan a los objetivos del programa la prio-ridad idónea. ¡Y traté de no ser ambiguo sobre loque creo que son las prioridades idóneas! En di-cho capítulo 6 he recomendado que, para teneréxito, los entrenadores han de adoptar un estiloque sea compatible con esos objetivos. Ahora, des-cribiré brevemente otros tres atributos de losentrenadores de éxito a los que ya he aludido:

• Conocimiento del deporte.• Motivación.• Empatía.

Conocimiento del deporte

No hay sustituto posible para el conocimientocabal de las técnicas, las normas y las tácticasdel deporte que estás enseñando. Algunas perso-

El entrenador de éxito14

Parte I 001-016 18/4/02 14:28 Página 14

nas creen que este conocimiento es menos im-portante para enseñar a los atletas principiantesque a los avanzados, pero esta suposición es fal-sa. De hecho, enseñar bien los fundamentos a losprincipiantes requiere tantos conocimientos, sino más, que entrenar a los atletas profesionales.(En realidad se requieren distintos tipos de cono-cimientos.)

La ignorancia sobre cómo enseñar las habilida-des da pie a las lesiones y a la frustración de losatletas a causa de la reiteración de los errores.Cuanto más sepa sobre las habilidades básicas desu deporte y sobre la enseñanza de estos elemen-tos básicos en la secuencia apropiada, más éxito ydiversión tendrán usted y sus deportistas.

Además, su capacidad para enseñar estas ha-bilidades le reportará gran respeto por parte de losatletas, dado que ellos la valoran. Este aspecto leotorgará la credibilidad que podrá utilizar paraenseñar a los deportistas otras cosas importantes,como la conducta ética, el control emocional y elrespeto por los demás y por sí mismos.

Haber practicado deporte anteriormente es, porsupuesto, el modo más común en el cual los entre-nadores adquieren conocimientos sobre técnicas,normas y tácticas. Pero puede que eso no le pro-porcione todos los conocimientos que necesita, niel hecho de no haber practicado un deporte signi-fica que no pueda adquirir conocimientos sobre elmismo. La mayoría de las poblaciones cuentancon medios de información sobre diversos depor-tes. Los cursos sobre técnicas se celebran con fre-cuencia en las grandes ciudades –consulte a sudirector atlético escolar, al entrenador o al tutordeportivo de los jóvenes de su comunidad paraobtener información. Se encuentran disponiblesmuchos libros y vídeos para la mayoría de losdeportes. Puede aprender, asimismo, observandoa otros entrenadores. Simplemente, recuerde queno todos los métodos son apropiados para depor-tistas de distintas edades o grados de habilidad.

Motivación

Puede tener todas las habilidades y conoci-mientos del mundo, pero sin la motivación nece-saria para emplearlos, no será un entrenador deéxito. Sólo tiene que toparse con un jovenzueloque posee la capacidad, pero no la motivación,para convertirse en un excelente deportista, paraentender plenamente la importancia de la motiva-ción.

En ocasiones, los entrenadores poseen la moti-vación necesaria para prosperar pero carecen detiempo. O, más bien, no están lo bastante motiva-

dos como para obtener tiempo y hacer lo que serequiere para convertirse en un buen entrenador.Le animo a tener dicha motivación; los jóvenesnecesitan el tiempo.

Empatía

Empatía, ¿qué es eso? Es la capacidad de en-tender fácilmente los pensamientos, los senti-mientos y las emociones de los deportistas y deexpresarles su sensibilidad. Los buenos entrena-dores poseen empatía. Pueden comprender el jú-bilo, la frustración, la ansiedad y la ira de los atle-tas. Los entrenadores que poseen empatía soncapaces de escuchar a sus deportistas y de expre-sar su comprensión de lo que se ha dicho. Nominimizan, reprenden o coartan la autoestima delos deportistas, porque saben lo que representaexperimentar la pérdida de la autoestima. Losentrenadores con empatía comunican más fácil-mente respeto por sus atletas y, a cambio, recibenmás respeto. Empatía: ¡la necesita para El entre-nador de éxito!

Su estilo como entrenador 15

Su filosofía como entrenador

Ahora ya ha pasado algún tiempo meditandosobre sus dos decisiones de mayor importanciacomo entrenador: cuáles serán sus objetivos parala participación de sus atletas y qué estilo de

PUEDOENTENDERCÓMO SESIENTE

Parte I 001-016 18/4/02 14:28 Página 15

entrenamiento adoptará para lograr dichos objeti-vos. Estas decisiones son fundamentales para sufilosofía como entrenador, pero una filosofía ex-haustiva requiere mucho más. La clave reside ensaber quién es usted y evaluar continuamente có-

mo sus experiencias de entrenador se integran ensu estructura de valores.

Ahora, antes de cerrar la Parte I, tómese unosmomentos para evaluarse a sí mismo completan-do el cuestionario “¿Qué tipo de entrenador soy?”

El entrenador de éxito16

¿Qué tipo de entrenador soy?

A continuación, siguen siete cuestiones que resumen los temas principales que hemos tomado en consi-deración en los capítulos 1 y 2. Resalte la respuesta que mejor le describa:

1. El orden de prioridad para mis objetivos como entrenador es en el mejor interés delos atletas.(1) Rara vez. (2) Normalmente. (3) Siempre.

2. Mi estilo común de entrenamiento es,(1) Dócil. (2) Autoritario. (3) Cooperativo.

3. Mi motivación para entrenar es,(1) Escasa. (2) Moderada. (3) Grande.

4. Soy capaz de mantener la victoria en perspectiva,(1) Rara vez. (2) Normalmente. (3) Siempre.

5. Mis conocimientos de las técnicas, normas y tácticas de mi deporte son,(1) Escasos. (2) Medios. (3) Abundantes.

6. Mis conocimientos sobre las ciencias del deporte (psicología deportiva, fisiología,etc.) son,(1) Escasos. (2) Medios. (3) Abundantes.

7. Mi capacidad para transmitir empatía es,(1) Escasa. (2) Moderada. (3) Grande.

Sume ahora los números que ha resaltado y evalúese a sí mismo dependiendo de la escala que sigue.Total: ________

7-10 puntos: ¡Cuidado! Representa usted un peligro para la salud de los jóvenes. Por favor, recapacitesobre su deseo de entrenar o vuelva a leer este capítulo y determine si puede mejorar su puntuación. Sidecide continuar entrenando, lea por favor el resto del libro cuidadosamente al menos tres veces.11-14 puntos: Va por buen camino, pero sin duda puede mejorar aprendiendo más. Lea este manual almenos dos veces.15-18 puntos: Ha recorrido un buen trecho para El entrenador de éxito, pero sigue habiendo posibili-dad de mejora. Determine qué es lo que tiene que mejorar y lea este libro al menos una vez.19-21 puntos: Es usted lo que los atletas necesitan. ¡No deje nunca de entrenar! ¡Puede leer los restan-tes capítulos para ver si he cometido algún error!

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La psicología deportiva se ocupa de compren-der por qué los atletas y entrenadores se compor-tan como lo hacen, a veces en relación unos conotros. Se trata de un tema complejo, dado que laconducta humana es compleja.

A lo largo de los últimos 20 años, los psicólogosdeportivos han aprendido muchas cuestiones devalor para los entrenadores, pero a éstos no les haresultado fácil tener acceso a esta información entérminos prácticos, comprensibles.

Aunque muchos aspectos de la psicología deldeporte le ayudarán a convertirse en un entrena-dor mejor, ninguno es más vital para ello queaprender a comunicarse con los deportistas ycomprender lo que les motiva para practicar de-portes. En los capítulos 3, 4 y 5 aprenderá sobrelos elementos básicos de la comunicación, tendrá

la oportunidad de evaluar sus técnicas de comuni-cación y luego aprenderá a desarrollar más esacapacidad. En el capítulo 6, se informará sobre loscomplejos factores que influyen en la motivaciónde los deportistas y, comprendiendo dichos facto-res, sobre cómo ayudar a los atletas a optimizar sumotivación.

Los entrenadores de éxito son buenos psicólo-gos deportivos. Son hábiles comunicadores y mo-tivadores. Estudie la Parte II cuidadosamente, puesle ayudará a convertirse en un buen psicólogo de-portivo y un mejor entrenador, pero recuerde queen la conducta humana hay pocos absolutos. Es-tos capítulos ofrecen recomendaciones a modo dedirectrices, no leyes. Deben ser comprendidas yempleadas no en sustitución de, sino en conjun-ción con el buen sentido común.

Parte II

Psicología del deporte

Capítulo 3EVALUANDO SUS TÉCNICAS

DE COMUNICACIÓN

Capítulo 4DESARROLLANDO SUS

TÉCNICAS DE COMUNICACIÓN

Capítulo 5PRINCIPIOS DEL

REFORZAMIENTO

Capítulo 6COMPRENDER LA MOTIVACIÓN

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Entrenar es comunicarse. Cada acto como entrenador requiere que se comu-nique. Los buenos entrenadores son comunicadores magistrales. ¿Sabía quecuando los entrenadores fracasan –son despedidos– es con mucha mayor fre-cuencia el resultado de unas técnicas de comunicación deficientes antes que deun historial exiguo de victorias y derrotas?

Como entrenador, debe ser capaz de comunicarse eficazmente en inconta-bles situaciones, incluyendo algunas como éstas:

• Cuando un padre le habla de un niño que no está jugando bastante.• Cuando explica a los deportistas cómo ejecutar una maniobra complicada.• Cuando presenta su grupo a la junta del consejo escolar.• Cuando se siente impulsado a hablar con el árbitro que acaba de pitar algo

que usted está seguro de que es incorrecto.

El propósito de este capítulo es aumentar su conciencia de la importancia dela comunicación en el entrenamiento y ayudarle a evaluar sus propias técnicasde comunicación. Aunque los entrenadores tienen que ser capaces de comuni-carse igualmente bien con los atletas, los compañeros, los padres, los gerentes yel público, me centraré en el proceso comunicativo entre el entrenador y eldeportista. Todos los principios propuestos, sin embargo, son completamenteaplicables a cualquier tipo de comunicación.

Las tres dimensiones de la comunicación

Empecemos con algunas cuestiones básicas sobre el proceso comunicativo.Las tres dimensiones de la comunicación están ilustradas en la Figura 3.1. Pri-mero, la comunicación incluye no sólo el envío de mensajes, sino también larecepción de los mismos. Muchos entrenadores creen poseer gran pericia en elenvío de mensajes, pero con frecuencia son ineficaces a la hora de recibirlos.Los entrenadores no sólo deben ser habilidosos en el envío de mensajes claros,comprensibles, sino que han de poseer una destacada capacidad de escuchar loque los deportistas les comunican como respuesta.

Capítulo 3

Evaluando sus técnicas de comunicación

Parte II 017-056 18/4/02 14:32 Página 19

COLORADO VASQUEZ
Resaltado

Figura 3.1 Las tres dimensiones de la comunicación.

Segundo, la comunicación consta de mensajesno verbales, así como de mensajes verbales. Losgestos de hostilidad, expresiones faciales de júbi-lo, maniobras intimidatorias y actos amables sontodos formas de comunicación no verbal. Se esti-ma que más del 70 % de la comunicación es noverbal. La gente tiende a mostrar mayor controlsobre lo verbal que sobre lo no verbal, y esto escierto también con respecto a los entrenadores.Dado que éstos con frecuencia son intensamenteobservados por los jugadores, los directivos y elpúblico, deben ser especialmente cautos con lacomunicación no verbal.

Tercero, la comunicación se divide en dos par-tes: contenido y emoción. El contenido es la sus-tancia del mensaje y la emoción es lo que se sienteal respecto. El contenido normalmente es expresa-do verbalmente, la emoción de modo no verbal.Los deportes competitivos, sujetos a gran presión,ponen a prueba a los entrenadores para que con-trolen tanto el contenido como las emociones quecomunican.

Los entrenadores suelen ser más diestros enlas dimensiones del envío, la verbalización y elcontenido del hecho comunicativo que en las de larecepción, la no verbalización y la emoción. Peromediante la práctica y el esfuerzo, los entrenado-res pueden desarrollar el grupo último de habili-dades comunicativas igual de bien.

Cómo comunicarse

La comunicación con los deportistas consta deseis pasos (consulte la Figura 3.2):

1. Tiene usted pensamientos (ideas, sentimientos,intenciones) que desea expresar.

2. Traduce estos pensamientos en un mensajeapropiado para su transmisión.

3. Su mensaje es transmitido a través de algúnmedio (verbal o no verbal)

4. El atleta recibe su mensaje (si él o ella está pres-tando atención).

5. El deportista interpreta el significado del men-saje. La interpretación dependerá del entendi-miento del atleta aplicado al contenido del men-saje y a sus intenciones.

6. El deportista responde internamente a su inter-pretación del mensaje.

El entrenador de éxito20

Enviar ————————————- RecibirVerbal ————————————- No verbalContenido ——————————- Emoción

Figura 3.2 El proceso comunicativo.

(1) Pensa-miento

(2) Pensamientotraducido en

mensaje

(6) Respuestainterna almensaje

(4) Mensajerecibido

(5) Mensaje

interpretado

(3) Mensajetransmitido

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A veces, esta secuencia de hechos fluye unifor-memente, con el atleta y usted comprendiendoclaramente los mensajes que ambos están envian-do. Pero, en ocasiones, surgen problemas en uno omás de los seis pasos. Veamos un par de ejemplos.

(1) Pensamiento (2) Pensamiento traducido enmensaje (3) Mensaje transmitido (4) Mensaje reci-bido (5) Mensaje interpretado (6) Respuesta inter-na al mensaje.

Ejemplo 1

ENTRENADOR (gritando): “¿Cuántas vecestengo que decirte que utilices un paso lateral?”

JOHN (sumisamente): “Lo siento. Se me olvi-dó.”

INTENCIÓN DEL ENTRENADOR: Proporcionara John información sobre un fallo técnico y ani-marle a recordar la técnica adecuada en el futuro.

INTERPRETACIÓN DE JOHN: “Piensa que soymalísimo. Quiero hacerlo bien, pero hay que acor-darse de tantas cosas. Cuanto más me esfuerzo,más nervioso me pongo y más errores cometo.Ojalá no lo tuviera encima.”

¿Qué ha ido mal en esta comunicación? La in-tención del entrenador era buena: aportar infor-mación constructiva. Pero el método que escogiópara transmitir el mensaje no lo era, ni en el con-tenido ni en la emoción. John recibió el mensajenegativamente y, en vez de ayudarle a corregir elerror, se sumó a la presión que ya sentía.

El mismo mensaje expresado a otro deportista,podría ser interpretado del modo, “Vaya, he vueltoa fallar. El entrenador está contrariado. No le cul-po. Tengo que hacerlo bien y él sólo está tratandode ayudar”. A pesar de que el entrenador no fuediestro en la transmisión del mensaje, el segundoatleta entendió la intención del técnico e interpre-tó el mensaje positivamente.

Ejemplo 2

ENTRENADORA: “Creo que has jugado real-mente bien hoy, Denise”.

DENISE (con tono de incredulidad): “Ah, jah.Gracias”.

INTENCIÓN DE LA ENTRENADORA: Felicitar aDenise por haber rendido bien con la esperanza deque lo repita.

INTERPRETACIÓN DE DENISE: “La entrenado-ra sólo lo está diciendo porque hemos ganado.Cuando perdemos, aun cuando yo juegue bien,ella nos grita a mí y al grupo”.

La idea de la entrenadora era buena, y trans-mitió con precisión el mensaje que pretendía en-viar. Desgraciadamente, la percepción que Denisehace de la intención del mensaje, no ya del conte-nido, se tuerce. Esto puede haber sido el resulta-do de mensajes previos que la han conducido acreer que ganar es más importante para la entre-nadora que las jugadoras. Dado que la entre-nadora ha perdido su credibilidad ante Denise,un mensaje bienintencionado fue recibido negati-vamente.

¿Por qué la comunicaciónes ineficaz a veces?

Las razones por las que la comunicación entreel entrenador y el atleta resulta ineficaz a veces seincluyen entre algunas de las siguientes, o entodas:

• El contenido que se desea comunicar puede sererróneo debido a la situación.

• La transmisión del mensaje no comunica lo quepretendía porque carece de la pericia verbal ono verbal necesaria para enviar el mensaje.

• El deportista no recibe el mensaje porque él oella no está prestando atención.

• El atleta, careciendo de las habilidades necesa-rias como oyente o no verbales, malinterpreta elcontenido del mensaje o no logra entenderlo.

• El deportista entiende el contenido del mensaje,pero malinterpreta su intención.

• Los mensajes enviados a lo largo del tiemporesultan inconsistentes, por lo que el deportistaestá confuso sobre su significado.

La ineficacia de la comunicación no siempre esun fallo del entrenador; puede que el problema seadel atleta, o tanto del entrenador como del depor-tista. Pero usted puede hacer mucho para evitarlos problemas de falta de entendimiento desarro-llando sus propias habilidades. Nos ocuparemosde estas habilidades una vez que usted haya eva-luado las suyas.

Evaluando sus técnicasde comunicación

A partir de entrevistas y de la observación decientos de entrenadores, he identificado ocho ha-bilidades que los entrenadores necesitan en gradosumo. Estas ocho habilidades, o más bien la falta

Evaluando sus técnicas de comunicación 21

Parte II 017-056 18/4/02 14:32 Página 21

de ellas, son representadas mediante caricaturas.Lea la descripción de cada entrenador y luegopóngase nota a sí mismo sobre las técnicas trata-das. Resalte el número que mejor le describe. Sino ha ejercido como entrenador previamente, res-ponda dependiendo de cómo se comunica en unaposición de liderazgo.

Pedro, el Pretencioso

Nunca admite un error. El pretencioso Pedro seencuentra con que no obtiene el respeto que pideporque no muestra ninguno por sus atletas.Cuando habla, ellos se desentienden porque loque dice nunca tiene mucho peso o es negativo.Pedro el Pretencioso todavía no ha aprendido queno puede exigir respeto: hay que merecerlo.

Norma, la Negativa

La mayoría de las palabras y actos de la Entre-nadora Norma son negativas, a veces incluso hos-tiles. Con frecuencia critica a sus deportistas,incrementando sus dudas y destruyendo su auto-confianza. A Norma, la Negativa le cuesta ensal-zar, pues cree que no es “propio de un entrenador”decir una palabra amable. Cuando expresa algunaamabilidad infrecuente, suele quedar oscurecidapor otros comentarios negativos.

¿Es usted decididamente positivo en los men-sajes que emite, o es como Norma, la Negativa?Ponga nota al grado en el que sus mensajes sonpositivos o negativos.

El entrenador de éxito22

¿Tiene usted credibilidad con sus atletas o escomo Pedro el Pretencioso? Ponga nota a su credi-bilidad.

1 2 3 4 5Muy poca Mucha

1 2 3 4 5Negativos Positivos

Juan, (el) Juez

Juan Juez evalúa continuamente a sus atletasen vez de darles instrucción. Cuando un jugadorfalla, el Juez, como es conocido, le culpa en vez desuministrar un comentario o información sobrecómo corregir el error. Cuando los jugadores lohacen bien, el Juez les da ánimos, pero no sabecómo instruirles para que logren grados de habili-dad superiores.

Parte II 017-056 18/4/02 14:32 Página 22

¿Proporciona usted amplios comentarios e ins-trucciones o es como el Juez? Califique el gradomayor o menor de información o juicios de valorcon que dota a su comunicación.

1 2 3 4 5Muchos juicios de valor Mucha información

Alfredo, el Inconstante

Nunca se está seguro de lo que el EntrenadorAlfredo, el Inconstante dirá a continuación. Hoy es

una cosa, mañana otra. La semana pasada castigóa Guille por pelearse, pero no a Javi, el porteroestrella. Dice a los jugadores que no discutan conlos árbitros, pero él lo hace comúnmente.

¿Es usted coherente al comunicarse, o es comoel Entrenador Alfredo, el Inconstante? Califique lacoherencia de su comunicación.

1 2 3 4 5Incoherente Coherente

Gabi, la Parlanchina

La Entrenadora Gabi es la persona más locuazque haya conocido. Da instrucciones constante-mente durante los entrenamientos, y cuando noestá gritando consejos a sus jugadores durante lacompetición, está hablando por lo bajo en las líne-as de banda. Está tan ocupada hablando quenunca tiene tiempo para escuchar a sus atletas.Nunca se le ha ocurrido que los jugadores puedanquerer decirle algo, en vez ser ella siempre quiense dirige a ellos.

Evaluando sus técnicas de comunicación 23

...PERO ...PERO ...PERO

...PERO ...PERO¿...ENTRENADORA?

¿Es usted un buen oyente o es como la Entre-nadora Gabi? Califique lo buen oyente que es.

1 2 3 4 5No muy bueno Muy bueno

Parte II 017-056 18/4/02 14:32 Página 23

Esteban, el Hierático

Esteban el Hierático nunca refleja emociones.No sonríe, ni guiña el ojo, ni da a sus atletas pal-maditas en la espalda. Ni frunce el ceño, da pata-das al suelo o les expresa su disgusto. No sabenadie lo que siente, lo que produce inseguridad enlos jugadores la mayor parte del tiempo.

o es como la profesora Galimatías? Ponga nota asu capacidad de comunicar instrucciones.

1 2 3 4 5Insuficiente Excelente

Genaro, el Golosinas

El entrenador Golosinas no parece entendercómo funcionan los principios del reforzamiento.Aunque recompensa con frecuencia a los deportis-

El entrenador de éxito24

¿Se comunica usted de manera no verbal, o escomo Esteban, el Hierático? Califique sus técnicasde comunicación de modo no verbal.

1 2 3 4 5Deficiente Buena

La Profesora Galimatías

La Profesora no es capaz de explicar nada enun nivel comprensible para los jugadores. O leshabla con un lenguaje demasiado elevado, o contantos rodeos que les produce confusión repetida-mente. Además, la Profesora, que está acostum-brada a tratar con abstracciones, es incapaz deexplicar las habilidades propias del deporte conuna secuencia lógica para que los atletas puedanasimilar los fundamentos. ¿Es usted capaz de pro-porcionar instrucciones y demostraciones claras,

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¿ENTRENADOR?

. Y POR TANTO... EL PUNTO DECONTACTO MÁS EFICAZ TENDRÍAQUE HALLARSE EN UN PUNTOIGUAL AL LOGARITMO DE LA...

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tas, refuerza la conducta equivocada en el momentoequivocado. Cuando se enfrenta a una mala acción,o deja pasar la infracción o es demasiado severo.

¿Entiende usted los principios del reforzamien-to o es como el Entrenador Golosinas? Califiquesu pericia al recompensar y castigar a los atletas.

1 2 3 4 5Poca pericia Mucha pericia

Premios de comunicación para los entrenadores

Sume ahora las siete notas y escriba aquí lapuntuación total. ____________ Averigüe en quécategoría entra su nota y acepte le recompensaque merece.

36-40 Premio Pico de Oro. Está usted destina-do al éxito.

31-35 Premio Pico de Plata. Bueno, pero puedemejorar. Siga leyendo.

26-30 Premio Pico de Bronce. Está bien, perohay mucho que mejorar. Siga leyendo con aten-ción.

21-25 Premio Pico de Cuero. Entregado a quie-nes se meten el pie en la boca con asiduidad.

8-20 El Premio Bozal. Hasta que mejore, llévelopuesto. Lea los dos siguientes capítulos cadanoche durante un mes.

Evaluando sus técnicas de comunicación 25

Si no es usted acreedor al Premio Pico de Oro,los dos siguientes capítulos le ayudarán a desa-rrollar habilidades comunicativas que necesitaadquirir.

Entrena

dor

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Esta página dejada en blanco al propósito.

En el último capítulo se ha evaluado a sí mismo con respecto a ocho habili-dades comunicativas que son vitales para prosperar como entrenador. En estecapítulo, aporto información que le ayudará a mejorar seis de esas habilidadescomunicativas:

• Fuerzar la credibilidad cuando se comunica.• Comunicarse con un enfoque positivo.• Enviar mensajes con mucha información.• Comunicarse de modo coherente.• Aprender a escuchar.• Mejorar la comunicación no verbal.

Forzar la credibilidad cuando se comunica

¿Puede pensar en alguien que tenga muy poca credibilidad ante usted? ¿Uncompañero de trabajo, un vecino, un político tal vez? ¿Conoce a entrenadorescomo Pedro, el Pretencioso? No se le da mucho crédito a casi nada de lo quedicen esas personas, ¿Pero, qué no? Probablemente, es por una de las razonessiguientes:

• Cree que no poseen conocimientos sobre lo que hablan.• Comúnmente, lo que dicen tiene poco sentido o carece de importancia para

usted.• A menudo distorsionan las cosas o, simplemente, mienten, por lo que le tiene

poca confianza.• Le hablan como si fuese estúpido o menos importante que ellos.

Capítulo 4

Desarrollando sus técnicas de comunicación

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Su credibilidad es, probablemente, el elementode mayor importancia para comunicarse con losatletas. Su credibilidad al comunicarse se ve refle-jada en las actitudes de los deportistas a tenor dela confianza que otorgan a lo que les dice. Al prin-cipio, los jóvenes le supondrán credibilidad sim-plemente porque usted ocupa el prestigioso papeldel entrenador. En adelante, sin embargo, le co-rresponde a usted mantener y consolidar esa cre-dibilidad o reducirla. Puede aumentar su credibili-dad de distintas maneras:

• Siendo un entrenador de estilo cooperativo.• Poseyendo conocimientos sobre el deporte o, al

menos, siendo honesto sobre los conocimientosque posee.

• Siendo de confianza, justo y coherente.• Expresando calidez, amistad, aceptación y em-

patía.• Siendo dinámico, espontáneo y abierto.• Empleando el enfoque positivo: el siguiente

resorte comunicativo sobre el que voy a tratar.

Comunicarse con un enfoque positivo

Una de las habilidades más importantes quepuede aprender, para entrenar o en cualquier otro

aspecto de la vida, consiste en comunicarse conun enfoque positivo. Dicho enfoque pone el énfasisen la alabanza y las recompensas para fortalecerlas conductas deseables, en tanto que el enfoquenegativo utiliza el castigo y la crítica para eliminarlas conductas indeseables. El enfoque positivoayuda a los atletas a valorarse a sí mismos comoindividuos y, a cambio, le proporciona a usted cre-dibilidad. El negativo aumenta el miedo de losdeportistas a fallar, reduce su autoestima y des-truye su credibilidad.

Emplear el enfoque positivo no significa quetodos los mensajes hayan de estar llenos de ala-banzas y comentarios efusivos. El exceso en la ala-banza hace que los jóvenes duden de la sinceridadde sus mensajes y disminuye el valor de susrecompensas. Tampoco conlleva volver la espaldaa los malos comportamientos de los deportistas.En ocasiones, los atletas tienen que ser castiga-dos, pero incluso el castigo puede ser aplicado deforma positiva (consulte el capítulo 5).

El enfoque positivo es una actitud que comuni-ca tanto en mensajes verbales como no verbales.Es una actitud que expresa un deseo de compren-der, una aceptación de los demás y una expectati-va de muto respecto. Es la actitud del entrenadorde estilo cooperativo.

Malos hábitos

Pero, ¿por qué tantos entrenadores se compor-tan como Norma, la Negativa? Una razón es quesimplemente han caído en el hábito de decir a losdeportistas sólo lo que hacen mal, en vez de lo quehacen bien. ¿Es usted así? Piense no sólo en elcontenido de sus mensajes, sino en la emociónque expresan, igualmente.

Romper con los hábitos resulta difícil, en espe-cial con hábitos arraigados como suele ser el enfo-que negativo. Si no está usted seguro de si empleael enfoque positivo o el negativo, o sobre el gradoen el que los utiliza, pida a un colega entrenador oa un amigo que le observe para que realice unaevaluación constructiva. Advertencia: se requierecoraje y un muy buen amigo.

Si le consta que tiene el hábito de usar el enfo-que negativo, necesita hacer tres cosas para cam-biar al enfoque positivo.

• Debe querer cambiar.• Debe practicar el enfoque positivo no sólo cuan-

do esté entrenando, sino en toda su comunica-ción. El enfoque positivo suele ser más difícil deemplear con los más allegados, así que practi-que con un amigo o con alguien muy apreciado.

El entrenador de éxito28

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(Quién sabe, aprender a ser un buen entrena-dor tal vez mejore sus relaciones sociales).

• Debe inspeccionarse a sí mismo u obtener ayu-da de alguien a quien le permitirá hacerle saberque los malos hábitos están volviendo a mostrarsu fea cara.

Expectativas poco realistas

Otra razón por la que los entrenadores utilizanel enfoque negativo es que tienen expectativaspoco realistas sobre las conductas aceptables einaceptables. A veces, los entrenadores se olvidande que los de 14 años no son como los de 28, o queno todos los de 16 años poseen la misma habili-dad. Cuando los entrenadores albergan expectati-vas poco realistas, rara vez reconocen los méritosde los deportistas. Si comunican su juicio crítico alos atletas –y en ocasiones lo hacen– éstos se sen-tirán frustrados y rechazados.

Es importante que los entrenadores se fijenmetas realistas no sólo con respecto al buen ren-dimiento de los deportistas, sino también sobre laconducta emocional y social de los mismos. Re-cuerde, es normal que los niños “hagan el indio” yse diviertan.

Ser realista en sus expectativas y recordar quelas personas no son perfectas le ayudará a ser laEntrenadora Paula la Positiva en lugar de Normala Negativa. Y recuerde: ¡si los atletas se compor-taran perfectamente, no le necesitarían como en-trenador!

Éxito a corto plazo

La tercera razón por la que los entrenadoresutilizan el enfoque negativo es porque, sincera-mente, creen que produce los mejores resultados,posiblemente porque lo ejemplifican muchos en-trenadores universitarios y profesionales.

El enfoque negativo funciona. Puede ayudar alos atletas a aprender las habilidades que usteddesee y motivarles para triunfar. Pero cuando lacrítica es frecuente o continua, la fuerte emociónnegativa que ocasiona en los deportistas sueleperjudicar el aprendizaje y la motivación. Los atle-tas empiezan a jugar sobre seguro, asumiendo tanpocos riesgos como sea posible para evitar la iradel entrenador. El enfoque negativo sólo resultaeficaz durante un período limitado; al cabo de untiempo los deportistas “desconectan” y el entrena-dor pierde credibilidad.

Enviar mensajes con muchainformación

Algunos entrenadores parecen creer que un sil-bato, una gorra y el título de “Entrenador” les con-vierte en Juan (el) Juez. Constantemente dan ve-redictos a los jugadores, diciéndoles si han hechoalgo bien o mal –normalmente mal. Pero no bastacon decirle a los atletas que han hecho algo mal;necesitan información específica sobre cómo ha-cerlo bien. Los entrenadores de éxito no son jue-ces; son hábiles profesores.

Algunos entrenadores se comunican como elJuez por los mismos motivos que adoptan el enfo-que negativo: puro hábito e imitación de otros en-trenadores que siguen este modelo. Otros entre-nadores se convierten en jueces porque carecen delos conocimientos técnicos del deporte que sonnecesarios para suministrar a los atletas la infor-mación que necesitan. Los entrenadores de estiloautoritario son especialmente proclives a comuni-carse como El Juez.

Ser un juez resulta peligroso; ello supone quesiempre sabe lo que está bien y lo que está mal, locorrecto y lo erróneo. Con demasiada frecuencia,los entrenadores califican algo como malo o erró-neo, para enterarse luego de que estaban equivo-cados.

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¡LA PR

ÓXIMA VEZ

QUE META

S LA

PATA

VAS A DAR

UNAS CUANTAS

VUELTAS!

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Veamos un ejemplo: un chico llega tarde alentrenamiento, por lo que el entrenador le hacedar 15 vueltas como castigo sin dejarle explicar-se. Posteriormente, el entrenador se entera deque la madre del chico llegó tarde a casa del tra-bajo y de que sobre él recae la responsabilidad decuidar de su hermana pequeña. En tales circuns-tancias, el deportista se ha comportado de mane-ra responsable.

Considere otro ejemplo: después de que unachica falle el golpe al impactar la pelota mediometro por encima de la cabeza, el entrenador gri-ta, “¡Habráse visto! ¿Qué pasa contigo? ¿No reco-noces una bola por el lanzamiento?” Aunque labateadora se equivocó al impactar la bola, el men-saje del entrenador resulta muy destructivo y noaporta información útil para la atleta.

Recuerde, el deporte tiende a evaluar a quieneslo practican mediante la competición. Por lo co-mún, los deportistas saben cuándo han jugadodeficientemente. ¿Quién necesita que le digan queha cometido un error cuando la bola le pasa entrelas piernas y anotan una carrera en su contra?Los atletas necesitan cierto margen de error, for-ma parte del aprendizaje.

Haga evaluaciones cuando esté claro que losdeportistas no saben lo que es correcto o incorrec-to. Si una conducta es buena, alábelos por ello yexplíqueles lo que hay de conveniente en la mis-ma. Y si es errónea, proporcióneles instruccionesespecíficas sobre cómo pueden mejorar.

La última temporada que el legendario entre-nador John Wooden dirigió el baloncesto de UCLA,dos psicólogos grabaron toda su comunicaciónverbal con el grupo durante los entrenamientos.Casi el 75 % de los mensajes de Wooden aporta-ban instrucciones específicas a los atletas. Losmensajes restantes eran peticiones de mayor acti-vidad en un 12 %, un 7 % de elogios y un 6 % dellamadas al orden.

Otro estudio demostró que los entrenadores dela Liga Menor de béisbol que suministraban ins-trucciones específicas eran mejor consideradospor sus jugadores que los que sólo proporciona-ban palabras de aliento. Esto era especialmentecierto con respecto a deportistas cuya autoestimaera escasa. Los jóvenes desean con tanto afánaprender los fundamentos del deporte que no sólole respetarán por ayudarles a aprender, sino quese respetarán a sí mismos por estar aprendiendo.

Comunicarse asiduamente con un lenguaje crí-tico propicia también que la gente de alrededor sesienta incómoda. Se vuelven cautos, incluso a ladefensiva, preguntándose siempre cómo les estánevaluando en cada momento.

Aunque hay un momento para comunicar susevaluaciones, éstas no deben dominar su interac-ción con los deportistas. Ahorre las evaluacionespara las sesiones de enseñanza cuando puedasituarlas dentro de un marco constructivo.

Una última advertencia: no evalúe a los atle-tas mismos. En vez de ello, evalúe su conducta.Antes que decirle a un jovenzuelo que ha cometi-do un error táctico: “¿Qué es lo que te pasa,Nacho?”, resulta mejor decir, “Esa decisión hasido errónea, Nacho,” comentando únicamente laconducta.

Comunicarse con coherencia

Comunicarse con coherencia mientras se ejer-ce de entrenador constituye un auténtico desafío,porque en todos nosotros hay algo de Alfredo, elInconstante. Resulta tan fácil predicar una cosa yhacer otra, o hacer una cosa un día y la contrariaal siguiente. O el cerebro puede indicarle que digauna cosa verbalmente, pero sus emociones expre-san algo distinto de modo no verbal. Cuando losjóvenes reciben estos mensajes heterogéneos, sesienten confundidos.

Contémplelo desde la perspectiva de los atle-tas. Una entrenadora les pide que muestren con-

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ESO ES. AHORAEXTIENDE LOS BRAZOSY LAS PIERNAS.

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trol emocional cuando juegan, pero luego ella leendosa una bronca temperamental a un árbitro.Un entrenador pide a los jugadores que respeten asus compañeros de grupo, pero él les trata sin res-pecto. Un entrenador enseña que la condición físi-ca es importante, pero no hace nada para mante-nerse en forma. Un entrenador dice a los deportis-tas que tengan confianza en sí mismos, luego seda la vuelta y destruye los sentimientos de amorpropio gritándoles por sus errores. Un entrenadorpenaliza a un suplente por llegar tarde a los entre-namientos, luego ignora la misma conducta en untitular. Cuando los entrenadores se conducen deesta manera, ¡no es de extrañar que los jóvenes lesconsideren hipócritas!

No mantener la palabra dada es otra forma deincoherencia que puede deparar resultados devas-tadores. Por ejemplo, usted puede prometerles alos atletas una recompensa por un buen entrena-miento y luego no concederla. Unos cuantos casosmás así y los deportistas aprenden a no confiar enusted, lo que disminuye su control sobre ellos. Sino le concede la recompensa prometida, pierde elpoder de dar recompensas en el futuro y puedeverse obligado a recurrir al castigo como forma decontrol.

Los atletas, sin embargo, no están buscandoincoherencias en sus entrenadores. Dado el granrespeto que sienten por la posición del entrenadory quienes la ocupan, la mayoría de los deportistasparte de la idea de que el entrenador no puedeequivocarse y, por tanto, tardan en constatar lasinconsistencias. Debido a lo hondo de esta con-fianza, puede resultar una experiencia abrumado-ra el momento en que un atleta reconoce a unentrenador como un hipócrita o un mentiroso.

Por supuesto, pocos entrenadores pretendenser inconsistentes o hipócritas; normalmente sue-len ser descuidados. A los entrenadores comoAlfredo, el Inconstante les resulta fácil olvidar lainfluencia que tienen sobre los deportistas queestán a su cargo. Es de suma importancia recor-dar esto: sea tan bueno como su palabra. Si deseaque su comunicación ejerza un control e influyapositivamente en los atletas, entonces debe sercoherente.

Aprendiendo a escuchar

¿Es usted un buen oyente? ¿Cuánto de lo quese dice oye en realidad? Si es usted como la mayo-ría de los oyentes sin formación, probablementeoye menos del 20 %.

Aunque escuchar puede parecer engañosa-mente fácil, en realidad es difícil. Los entrenado-res suelen ser malos oyentes porque (a) están tanocupados “dando órdenes” que nunca conceden aotros la oportunidad de hablar, y (b) asumen quelo saben todo y que sus jugadores no tienen nadaque decir que merezca atención. “A los deportistashay que verlos pero no escucharlos”, parece ser suactitud.

La escasa disposición a escuchar provoca inte-rrupciones en el proceso comunicativo. Tras fra-casar reiteradamente tratando de que les escu-chen, los atletas simplemente dejarán de hablarley, a su vez, será menos probable que le escuchen.Los entrenadores que son malos oyentes tambiénsuelen tener muchos más problemas disciplina-rios. Los deportistas pueden llegar a portarse malpara atraer tu atención, una manera drástica deobligarte a escuchar.

Mejorando su disposicióncomo oyente

Puede hacer multitud de cosas para mejorar sudisposición como oyente:

• Lo más importante, por supuesto, es reconocerla necesidad de escuchar.

• Concéntrese en escuchar. Ello significa quedebe poner su atención indivisa en lo que seestá diciendo. ¿Alguna vez le ha acusado al-guien de no escuchar? Aunque tal vez hayaoído las palabras y pueda repetirlas, no estabaescuchando realmente. Lo que el acusador(a)sentía era que no estaba con el(ella) psicológi-camente.

• Cuando escuche, busque el significado delmensaje antes que centrarse en los detalles.Especialmente en los desacuerdos, sentimos in-clinación a captar y responder a los detalles quepodemos atacar o refutar, sin prestar atención ala cuestión principal del mensaje.

• Evite interrumpir a los deportistas. En ocasio-nes interrumpimos a los demás porque antici-pamos lo que van a decir y completamos suspensamientos por ellos. Entonces respondemosa lo que creemos que iban a decir, pero tal vezmás tarde descubrimos que el mensaje originalera muy distinto. Muchos de nosotros inte-rrumpimos a quienes hablan despacio, porquesomos demasiado impacientes para oírles com-pletar sus mensajes. Recuerde que usted puede

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escuchar considerablemente más deprisa de loque una persona puede hablar.

• Respete los derechos de los atletas a compartircon usted sus puntos de vista. Es importanteprestar atención no sólo a sus miedos y proble-mas, sino también a sus alegrías y logros. Surespuesta a los puntos de vista de los atletas esimportante para modelar sus actitudes.

• Reprima la tendencia a responder emocional-mente a lo que se dice (pero sin llegar a ser co-mo Esteban, el Hierático). Reflexione sobre porqué un deportista dijo tal o cual cosa y sobrecómo puede responder constructivamente. (Séque esto es más fácil decirlo que hacerlo, ¿perono es así en la mayoría de las habilidades com-plejas?).

Escuchar activamente

Los educadores distinguen entre dos tipos deescucha: la pasiva y la activa. La escucha pasivaes lo que normalmente entendemos por escuchar,estar callado mientras otra persona habla. Aun-que la escucha pasiva es deseable en ocasiones,su limitación consiste en que el que habla no estáseguro de si le está prestando atención o com-prendiendo realmente lo que él o ella está dicien-do. Aunque la escucha pasiva comunica ciertogrado de aceptación, los atletas pueden pensarque los está evaluando. El silencio no transmiteempatía y calidez.

La escucha activa, como opuesta a la pasiva, eloír en silencio, implica interactuar con los depor-tistas suministrándoles pruebas de que compren-de. He aquí algunos ejemplos de cómo funciona:

JUGADORA: “¿Cree que podemos ganarle aeste grupo?”

ENTRENADOR: “Ellos tienen un grupo muybueno, pero nosotros también lo tenemos.”

JUGADORA: “Pero, ¿y si no jugamos bien?”

Ahora debe interpretar estas preguntas. ¿Estárealmente preocupada por la victoria del grupo, ole preocupa no ser capaz de jugar lo bastante bienella misma? En la escucha activa, no sólo averi-guas lo que el jugador está diciendo; se esfuerzapara descubrirlo. Lo lleva a cabo retornando a lajugadora lo que cree que está tratando de decir:

ENTRENADOR: “¿Te preocupa cómo puedesllegar a rendir?”

JUGADORA: “Bueno, un poco.”ENTRENADOR: “Siempre y cuando lo hagas lo

mejor posible, estaré orgulloso de ti.”

Las palabras tranquilizadoras del entrenadorhacen saber a la jugadora que su aceptación en elgrupo no depende de que rinda bien, sino de quelo intente. He aquí otro ejemplo:

GIMNASTA: “¿Cuál es la peor lesión que ha vis-to producirse en la barra fija?”

ENTRENADOR: “Una vez vi a uno salir volandoy romperse el cuello.”

El entrenador puede haber respondido a la pre-gunta sin pensar en lo que se le estaba preguntan-do realmente. El deportista puede haber estadoexpresando su preocupación por la posibilidad deuna lesión. La escucha activa por parte del entre-nador puede modificar la conversación de estemodo:

GIMNASTA: “¿Cuál es la peor lesión que ha vis-to producirse en la barra fija?”

ENTRENADOR: “No he visto muchas lesiones.¿Te preocupa hacerte daño?”

GIMNASTA: “A veces pienso en ello.”ENTRENADOR: “Con la mejora en los equipa-

mientos y la ayuda de un monitor, las posibilida-des de una lesión grave son realmente escasas.”

La escucha activa constituye una habilidad tre-menda que reúne muchas de las ideas que hemosestado tratando en este capítulo. La escucha acti-va, sin embargo, sólo funciona cuando transmitesu aceptación de los sentimientos de los atletas yque quiere comprender y ayudar. De lo contrario,resultará poco sincero, condescendiente o mani-pulador. Dado que la escucha activa permite a losdeportistas saber que sus ideas y sentimientosson respetados y comprendidos, estarán más dis-puestos a escucharle a cambio.

Mejorar la comunicación no verbal

Si alguna vez ha tenido necesidad de comuni-carse con alguien que no habla su idioma, ya sabecuán importante y cuán eficaz puede ser la comu-nicación no verbal. Se estima que el 70 % de nues-tra comunicación es no verbal. En el mundo deldeporte, sobre todo en los deportes de grupo, sur-gen numerosas situaciones en las que la comuni-cación no verbal eficiente resulta esencial para elbuen rendimiento. Es igualmente importante parasu tarea de entrenador.

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Categorías de la comunicación no verbal

La comunicación no verbal, o lo que tambiénrecibe la denominación de lenguaje corporal, sedivide en cinco categorías distintas.

• Movimiento corporal: incluye los gestos y losmovimientos de las manos, la cabeza, los pies ytodo el cuerpo. Una inclinación de la cabeza,fruncir el ceño o un movimiento de los ojos pue-de transmitir mucho en el contexto de una inte-racción en curso.

• Características físicas: físico, atractivo, altura,peso, olores corporales y demás. Su propia con-dición física, por ejemplo, transmite la impor-tancia que das a la condición física –no sólo porlo que se refiere a los jóvenes, sino a las perso-nas a lo largo de sus vidas.

• Tocamientos: palmaditas en la espalda, coger aalguien de la mano, rodear con el brazo loshombros de un jugador y demás. Éstas son con-ductas apropiadas de tocamientos que comuni-can un reforzamiento positivo.

• Características de la voz: la cualidad de la voz–su timbre, ritmo, resonancia, inflexiones ydemás. Con frecuencia no es lo que decimos,sino el modo en que lo decimos, aquello queexpresa el mensaje real. Por ejemplo, el co-mentario “Has jugado un buen partido hoy,Javi” puede decirse sinceramente, con aireaprobatorio y cualidades de la voz que indicanque lo dice en serio. O puede ser comentadosarcásticamente y con una sonrisa despectiva,indicando que quiere decir justamente lo con-trario.

• Posición del cuerpo: el espacio personal entre losdemás y uno mismo y la posición del cuerpo conrespecto al de ellos. Un ejemplo de comunica-ción mediante la posición del cuerpo es el “hom-bro frío”, la cual te indica que alguien no quierehablar contigo.

¿Es usted consciente de estas dimensiones dela comunicación no verbal, y es eficiente tanto enel envío como en la recepción de mensajes no ver-bales mediante cada una de ellas? Cualquiera quesea su habilidad en la comunicación no verbalprobablemente ha derivado en un aprender-sobre-la-marcha, en la tarea de la vida diaria.Enseñar técnicas de comunicación no verbalesmediante el lenguaje escrito o hablado únicamen-te, o aprender habilidades no verbales sin practi-carlas, no resulta fácil.

El primer paso, pues, consiste en reconocer laimportancia de los mensajes no verbales dentrodel proceso comunicativo global. Un modo de de-

sarrollar habilidades no verbales consiste en ob-servar la respuesta que le dan los demás según seenvían y reciben mensajes no verbales en ambasdirecciones. El valor de esa respuesta dependeráde su sensibilidad y receptividad a ella. Cuantomás sensible se vuelva a las señales no verbales,más probable resultará que sea capaz de expresarsus sentimientos y actitudes de modo no verbal yde entender los sentimientos y actitudes de losatletas. Éste es un aspecto importante en el desa-rrollo de la empatía, que fue comentada en el capí-tulo 2.

Usted como Modelo

Una vez más, tenga presente que todos susactos dentro y fuera del campo de juegos sonuna forma de comunicación no verbal. Vuelvo ahacer hincapié en esta cuestión porque muchosentrenadores se olvidan de que todos sus actosde comportamiento comunican, no sólo los bue-nos.

Quizás una de las cosas más importantes quecomunica mediante sus actos es el respeto, o lafalta de él, por la gente y por el deporte. El modoen que camina, el modo en que se aproxima a losdemás, sus gestos y tanto lo que dice como la for-ma en que lo dice, todo ello expresa tus actitudessobre el deporte y los demás. Los atletas impresio-nables que le tienen en gran estima se ven influen-ciados por todo cuanto haces.

Sus actos pueden enseñar a los deportistasmucho más que las habilidades y las reglas de sudeporte. Sea el primero al felicitar a los gruposrivales después de las victorias y las derrotas.Muestre a los atletas cómo quiere que se compor-ten después de haber jugado bien o mal, despuésde haber ganado o perdido. Ejemplifique el modoen que deben reaccionar cuando considera que elgrupo ha sido tratado injustamente.

En los jóvenes, considero, causa mayor in-fluencia lo que hago que lo que digo. Ya conoce elaxioma: Los actos hablan más fuerte que las pala-bras. Por ello, si desea que los atletas hagan galade deportividad, no basta con decírselo, ¡tiene quemostrárselo!

Las “normas de la casa” desarrolladas por elYMCA lo expresan convenientemente:

Habla por ti mismoNo por nadie más.

Escucha a los demásEntonces ellos te escucharán.

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Evita las recriminaciones,¿quién las necesita?

Hazte cargo de ti mismoEres responsable de tus actos.

Muestra respetoTodas las personas son importantes.

Nota. De “Introduction: The YBA Philosophy,”YBA Director’s Manual de J. Ferrell (Edic.), 1977.Copyright, 1977, por el YMCA de EE.UU. Reimpre-so con permiso.

Cuestiones fundamentales a recordar

1. Disfrutar de credibilidad entre sus atletas esesencial para que la comunicación sea eficaz.

2. Puede consolidar y mantener su credibilidadsiendo un entrenador de estilo cooperativo, es-tando bien informado sobre el deporte, siendojusto y coherente, amistoso y dinámico y emple-ando el enfoque positivo.

3. Utilizando el enfoque positivo, hará hincapié enla alabanza y las recompensas para fortalecerlas conductas deseables, en lugar de confiar enel castigo para eliminar las indeseables.

4. Puede ser de más ayuda para los deportistas ypara mantener mejores relaciones con ellos sino los juzga continuamente. En vez de ello, déinstrucciones específicas sobre cómo realizarlas habilidades.

5. Puede evitar arruinar su credibilidad y confun-dir a los atletas siendo tan coherente como pue-da en la comunicación.

6. Puede mejorar su capacidad de escuchar nosiendo siempre el único que habla y reconocien-do que lo que los deportistas tienen que decir esimportante.

7. Cuando transmita a los atletas que oye y com-prende lo que dicen, estará usando las habilida-des de escucha activa.

8. Ser diestro en las habilidades de la comunica-ción no verbal, como el movimiento del cuerpo yla posición, en las conductas de tocamiento y enlas características de la voz, resulta de sumaimportancia en su papel de entrenador.

9. Cada uno de sus actos constituye un mensajeno verbal potencialmente importante, ya quesus deportistas le ven como un ejemplo de com-portamiento.

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Dos términos suelen ser empleados para describir las consecuencias que sur-gen de nuestras conductas; reforzamiento y castigo. Cuando la consecuencia deun acto hace que sea repetido, esa consecuencia es de reforzamiento. Éste puedeser positivo (dar una recompensa) o negativo (eliminar algo indeseable). La clavereside en que la probabilidad de la conducta deseable aumenta debido a la conse-cuencia. Por ejemplo, resulta más probable que un atleta se emplee a fondo en elfuturo si él o ella es nombrado Jugador del Día en el entreno (reforzamiento posi-tivo) o queda exento de la retirada del material (reforzamiento negativo).

Cuando la consecuencia de una conducta disminuye la probabilidad de quesea repetida, la consecuencia puede ser considerada como castigo. En este caso,a un jugador que no se ha empleado a fondo se le puede requerir que retire todoel material del día. Este concepto de las conductas y sus consecuencias consti-tuye el primer principio del reforzamiento.

Éste y otros principios del reforzamiento pueden conformar una parte valiosade sus técnicas comunicativas si las aplica correctamente. Aunque los princi-pios mismos son fáciles de entender, requieren destreza en su aplicación a losdeportistas. Son más fáciles de utilizar con palomas y ratas de laboratorio, conlas que estos principios fueron desarrollados, pero los humanos no se compor-tan como palomas o ratas (no la mayor parte del tiempo, en definitiva).

¿Por qué resulta más complejo aplicar los principios del reforzamiento conhumanos? Un motivo es que no necesariamente reaccionamos a los reforza-mientos positivos y negativos del mismo modo. Por ejemplo, tener que sentarseen el banquillo por decir palabrotas puede ser un castigo para algunos jugado-res, pero puede proporcionar a otros el reconocimiento que buscan en sus com-pañeros de grupo. Resumiendo, los reforzamientos son relativos, no absolutos.Lo que constituye un reforzamiento para mí puede no serlo para usted.

Asimismo, la conducta reforzada no siempre puede ser repetida a voluntad siel atleta no posee suficiente habilidad. Por ejemplo, ser elogiado por conseguirun home run inspira un deseo de conseguir más, pero esto no significa que unjugador pueda hacerlo repetidamente. (De hecho, el jugador(a) puede empezar abuscar más reforzamiento positivo golpeando hacia la valla demasiado a menu-do en detrimento de su anotación general.)

Capítulo 5

Principios del reforzamiento

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Una tercera razón por la que los principios delreforzamiento son complejos es que se deben te-ner en cuenta todos los reforzamientos posibles,así como el modo en que la gente los valora, paracomprender de qué manera repercutirán. Porejemplo, aunque su esposa pueda reprenderle porpasar demasiado tiempo con su grupo, este refor-zamiento negativo puede tener mucho menos pesoque el reforzamiento positivo que obtiene entre-nando al mismo.

Quiero hacerle entender la complejidad de losprincipios del reforzamiento porque algunos psi-cólogos han presentado la modificación de la con-ducta como una tarea sencilla. ¡No es cierto! Aúnasí, su comprensión y aplicación de lo que se sabesobre la modificación de la conducta puede repre-sentar una parte valiosa de sus técnicas de comu-nicación.

Para que los principios del reforzamiento fun-cionen, debe usted ser coherente y sistemático ensu aplicación. Si titubea en lo que trata de refor-zar, los deportistas se comportarán de modo errá-tico en respuesta a sus heterogéneos mensajes.En el resto de este capítulo introduciré los princi-pios del reforzamiento de mayor relevancia paralos entrenadores. Para que estos principios lle-guen a ser herramientas de comunicación efica-ces, deberá estudiarlos y ponerlos en práctica conregularidad.

Utilizar las recompensas

Recompensar a los atletas no resulta tan senci-llo como suena. Primero debe determinar quécomportamientos merecen la recompensa. A con-tinuación, tiene que distinguir entre las recom-pensas planificadas y los reforzamientos acciden-tales. Finalmente, debe comprender los principiosque influyen en la frecuencia, la sincronía y eltiempo de las recompensas. Vamos a repasar cadauna de estas cuestiones.

¿Qué debo recompensar?

Recompense el rendimiento, no el resultadoCuando un jugador dispone de una línea de

avance hacia la base intermedia y quien la ocupaejecuta una gran recepción, el rendimiento esbueno (línea de avance), el resultado no lo es (unaeliminación). Cuando otro bateador golpea unabola planeadora fácil hacia el receptor izquierdo,quien pierde la bola cegado por el sol, y el bateadortermina con un doble, el rendimiento ha sido po-

bre (bola planeadora fácil), pero el resultado hasido bueno (un doble). Recompensar el doble ven-dría a reforzar la suerte, no la destreza, y no re-compensar la línea de avance puede hacer que eljugador cambie su manera de golpear en busca deun resultado más favorable.

El entrenador de éxito36

NO TE PREOCUPES POR LANZAR LA BOLA FUERA. ¡LA HAS GOLPEADOMEJOR QUE EN TODA LA TEMPORADA!

Aunque los entrenadores sepan tal vez que ten-drían que reforzar el rendimiento y no el resulta-do, en medio de la competición este principio seolvida con excesiva frecuencia. Los entrenadoresempiezan a pensar en ganar y perder (el resultado)más que en la manera en que los deportistas estánjugando (el rendimiento).

Recompense a los atletas más por suesfuerzo que por el éxito real

Cuando los deportistas sepan que usted reco-noce que se están esforzando para golpear la bola,lograr el lanzamiento o correr lo más rápido posi-ble, no tendrán miedo a intentarlo. Si un atleta sa-be que sólo les va a recompensar cuando tenganéxito, entonces puede empezar a temer las conse-cuencias del fracaso. Esto produce ansiedad en al-gunos jugadores.

Recompense cosas pequeñas en el caminohacia el logro de metas mayores

Si aguarda para recompensar únicamente laconsecución de metas mayores, tal vez nunca pre-mie a un joven; recompense pasos intermedios.(Consulte la sección sobre la formación en la pág.38-39).

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Recompense el aprendizaje y el rendimientode habilidades emocionales y sociales deigual modo que las habilidades deportivas.

Premie a los deportistas por mostrar autocon-trol, buen juicio y la capacidad de hacer frente a laresponsabilidad (pero antes tiene que cederlesdicha responsabilidad). Recompénseles, también,por mostrar deportividad, trabajo en grupo y coo-peración.

Reforzamientos accidentales

En ocasiones, la conducta de los atletas se vereforzada accidentalmente. Por ejemplo, tras eli-minar en el lanzamiento a un bateador en béisbol,me percaté de que había una roca plana justodetrás de la almohadilla de lanzamiento. A lo largode los 10 años siguiente coloqué una roca similaren la misma posición detrás de la almohadillaantes de cada partido, pero nunca volví a eliminara un bateador así. Vea cómo se pueden generar lassupersticiones en el deporte. Los atletas puedenatribuir su rendimiento a comportamientos u ob-jetos que estuvieron asociados accidentalmentecon su rendimiento, pero que no lo provocaron deningún modo. Estas supersticiones son persis-tentes, cosa que da fe del poder de los principiosdel reforzamiento.

¿Con cuánta frecuencia deberíarecompensar?

Recompense con frecuencia cuando losjóvenes están aprendiendo las nuevashabilidades

Generalmente, cuanto mayor sea la frecuencia,más rápido será el aprendizaje. Una precaución,no obstante: los premios entregados insincera-mente o con excesivo desprendimiento pierden suvalor. Tenga en cuenta que, cuando los deportis-tas están aprendiendo, el reforzamiento y el casti-go equivalen a información. Indican a los deportis-tas con exactitud lo que a usted le agrada o desa-grada, y el contenido informativo de la consecuen-cia llega a ser incluso más importante que el refor-zamiento o el castigo mismos.

Una vez que las habilidades han sido bienasimiladas, sólo necesitará reforzarlasocasionalmente

Sea cuidadoso, no cometa el error de dar porhechas las conductas positivas de los deportistas,olvidándose de reforzarles por sus logros. Se sabede atletas que rinden mal intencionadamente paraobtener el reconocimiento del entrenador.

¿Cuándo debo recompensar?

Cuando los deportistas están aprendiendo,recompénseles tan pronto como sea posibledespués de corregir conductas o de que seproduzcan sus aproximaciones

Gritar “bien” cuando un jugador ejecuta unahabilidad correctamente es lo que produce el re-forzamiento, no una charla una hora después delos entrenamientos. Sin embargo, una vez que lashabilidades han sido asimiladas y según maduranmentalmente los deportistas, resulta de menorimportancia dar premios inmediatamente despuésde que se hayan producido las conductas apropia-das, con una excepción: los atletas que tienenpoca confianza en sí mismos necesitan ser reforza-dos poco después de lograr respuestas adecuadas.

Recompense a los deportistas sólo cuando selo han merecido

Cuando los jugadores han cometido repetidoserrores, le cuestan una victoria al grupo o tienenun mal día de principio a fin, elogiarlos por algunaconducta insignificante les lleva a sentirse incom-prendidos o sutilmente manipulados. Cuando losjugadores rindan deficientemente, transmítalesempatía (comprensión) pero no simpatía (sentirlástima por ellos). Todos los atletas tienen díasmalos y apreciarán que usted lo comprenda.

Principios del reforzamiento 37

ASÍ ES COMOSE BLOQUEALA BOLA. SIUSAS ELGUANTE TEDOLERÁMENOS.

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¿Qué tipo de recompensa tendría que conceder?

Los premios que ocasionan el reforzamientoson únicos para cada atleta. Los entrenadoressuelen equivocarse seleccionando recompensasque son de su agrado en vez de las que son delgusto de los deportistas. En la Tabla 5.1, enumeroen tres categorías algunos premios comunes quesuelen ser del gusto de los deportistas. Averigüecuáles de estas recompensas y otras vienen areforzar a cada uno de sus atletas.

con preferencia a los extrínsecos. Las recompen-sas intrínsecas se nutren a sí mismas, es decir, lasatisfacción y el orgullo conducen a un deseomayor de triunfar sin premio extrínseco alguno.Los entrenadores que ponen el énfasis en lasrecompensas extrínsecas pueden encontrarse conque los deportistas quieren cantidades cada vezmás grandes, hasta que la demanda excede a laprovisión. Los trofeos pueden ser grandes; el reco-nocimiento social puede ser enorme.

Los atletas que juegan sólo por las recompen-sas extrínsecas rara vez mantienen la motivacióna largo plazo que se necesita para triunfar en eldeporte. Los atletas que disfrutan más del deportey que sobresalen en él durante un período de tiem-po más amplio poseen primariamente la motiva-ción de los premios intrínsecos.

Los entrenadores pueden ayudar a los depor-tistas a estar motivados más intrínseca que ex-trínsecamente de dos maneras. Administrandopremios intrínsecos eficientemente mediante losprincipios del reforzamiento, los entrenadorespueden ayudar a los atletas a experimentar re-compensas intrínsecas como la alegría, la satis-facción y el sentirse competente. Asimismo, losentrenadores deberían ayudar a los deportistas acomprender que, mientras que es agradable ha-cerse acreedor a los premios extrínsecos, los in-trínsecos relacionados con la participación poseenuna valía mayor.

Modelando la conducta

¿Cómo se puede recompensar la conducta si elcomportamiento adecuado no se produce? ¿Cómose puede premiar el golpeo de la bola por encimade la red si aquélla nunca la cruza? Piense modes-tamente al principio y recompense los primerossignos de conducta que se aproximen a lo quedesea. Premie luego aproximaciones más y máscercanas a la conducta deseada. En breve, empleesu poder de premiar para modelar la conducta a laque aspira.

Si estuviera enseñando a niños que tienen mie-do al agua para nadar, no debería esperar que setirasen por el lado más hondo y empezasen a nadar.En vez de ello, trazará una serie de pasos pequeños–introduciéndoles en el agua en el lado menos hon-do, haciendo que metan la cara en el agua, ense-ñándoles a flotar, a deslizarse, a batir con los pies ya respirar. Gradualmente, con su paciencia y lapráctica que ellos realizan, los jóvenes aprenden anadar. El mismo procedimiento es aplicable a mu-chos otros deportes y aptitudes sociales.

El entrenador de éxito38

Tabla 5.1 Recompensas extrínsecas

Recompensas Recompensas RecompensasTangibles personales en actividades

Trofeos Elogios Jugar un partido en vez de hacer ejercicios

Medallas Sonrisas Ser capaz de continuar jugando

Cintas Expresiones Viajar para jugarde aprobación contra otro grupo

Pegatinas Palmaditas Salir aen la espalda descansar

Dinero Publicidad Cambiar de posición con otros jugadores

Camisetas Expresiones de interés

Los premios de la Tabla 5.1 son denominadosrecompensas extrínsecas porque proceden deusted o de alguna otra fuente externa. La mayoríade los deportistas responden positivamente a lospremios extrínsecos como el elogio y el reconoci-miento de sus logros. Estas recompensas consti-tuyen reforzamientos poderosos que puede utili-zar diestramente para modelar y motivar las con-ductas.

Otro grupo de premios, aunque no están direc-tamente disponibles para ser utilizados, ejercenigualmente poderosos efectos en los atletas. Estasrecompensas son intrínsecas a la práctica del de-porte. Incluyen cosas tales como el sentirse triun-fante, disfrutar de una sensación de orgullo por lahazaña y sentirse competente. Aunque no puedaofrecer directamente estos premios a los atletas, alminusvalorar o no reconocer sus logros puede ne-garles la oportunidad de experimentar recompen-sas intrínsecas.

Los buenos entrenadores hacen hincapié enque se juegue de cara a los premios intrínsecos

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De hecho, entre las habilidades fundamentalesa la hora de entrenar se encuentra este proceso demodelar la conducta, el cual implica dos aspectos:(a) la secuencia de pasos empleados para desarro-llar la habilidad y (b) los principios del reforzamien-to para modelar la conducta. Para llegar a ser unbuen entrenador debe aprender los pasos a darpara enseñar las técnicas de su deporte. Ello impli-ca saber cómo dividir habilidades deportivas com-plejas en partes más pequeñas para optimizar elaprendizaje y, posteriormente, ayudar a los atletasa combinar estas partes en técnicas complejas.

Además de conocer los pasos a dar para ense-ñar las habilidades deportivas, debe conocer losprincipios de la formación –las reglas que gobier-nan el proceso de aprendizaje. Son demasiados losentrenadores que ignoran casi por completo estosprincipios del aprendizaje en favor del estudio delas técnicas para el rendimiento de las habilida-des. He aquí seis directrices adicionales que leayudarán a enseñar los fundamentos deportivoscon mayor eficacia mediante la formación (adap-tadas del Don’t Shoot the Dog de Karen Prior).

• Divida las técnicas en pasos más pequeños conuna gran probabilidad de ser ejecutados correc-tamente, de modo que la recompensa del éxitoresulte asequible. Luego, gradualmente, combi-ne estos pasos en habilidades más complejas.O, en un deporte en el cual la velocidad, la dis-tancia o el tiempo están implicados, eleve el cri-terio para los premios en incrementos lo bas-tante pequeños para que los atletas tengan unaposibilidad real de triunfar. El progreso conti-nuo, incluso dando pasos muy pequeños, esmejor que apresurarse demasiado para alcan-zar la correcta ejecución.

• Desarrolle un componente de una técnica cadavez, no trate de modelar dos componentes demodo simultáneo. Por ejemplo, el putt en el golfrequiere precisión tanto en la distancia como enla dirección. Puede enseñar a realizar el putt conmayor precisión si trabaja primero en una y lue-go en la otra. Cuando los deportistas no consi-guen realizar progresos en el aprendizaje de unatécnica tras una práctica considerable, suele serporque están tratando de mejorar dos o máscosas a la vez. Cuando le suceda esto, busque lamanera de descomponer más la habilidad de for-ma que pueda aislar un componente único.

• Sitúe siempre el grado actual de ejecución den-tro de un calendario variable de reforzamientosantes de pasar a grados superiores de ejecu-ción. Ésta es una regla esencial de la formación.Karen Prior explica por qué:

Una vez que la conducta es asimilada,debe empezar a reforzarla sólo ocasional-mente, en vez de hacerlo de manera cons-tante, para mantenerla en el nivel actual...Cuando pueda permitirse reforzar un niveldado de conducta sólo ocasionalmente yestar convencido aún de lograrlo, será librede emplear los reforzamientos únicamenteen los mejores ejemplos de esa conducta.Este reforzamiento selectivo “conducirá” lanorma, o conducta promedio, en la direc-ción de la mejora que busca (pág. 58).

• Cuando enseñe una técnica nueva o combinehabilidades más simples en otras complejas,relaje temporalmente el rasero para conseguirlas recompensas. Cuando los deportistas tratande aprender técnicas nuevas que no formanparte de las existentes, las viejas habilidadesbien asimiladas pueden verse perjudicadastransitoriamente.

• Si un proceso de formación no funciona, intenteotro. Me sorprende la manera en que algunosentrenadores se aferran a sistemas que es evi-dente que no están funcionando. Recuerde, losatletas difieren en el modo de aprender y no hayuna manera única de aprender correctamentecualquier técnica deportiva. Independientemen-te de la habilidad, hay muchas formas prove-chosas de modelar la conducta que se desea.

• Si el rendimiento de una habilidad bien apren-dida sufre un deterioro, revise la formación.Una técnica puede truncarse temporalmentepor muchas razones; el mejor modo de restau-rarla consiste en volver a lo básico.

Haciendo frente al mal comportamiento

Los principios del reforzamiento pueden serlede utilidad en aspectos que van más allá del des-arrollo de las técnicas. Como saben los entrena-dores experimentados, los deportistas se compor-tan mal a veces; es perfectamente natural. Puedeusted responder con un enfoque positivo o negati-vo ante esta conducta indeseable.

Extinción

Una técnica del enfoque positivo consiste enignorar el mal comportamiento, es decir, ni pre-miarlo ni castigarlo. Esto es lo que se denominaextinción, que puede resultar eficaz en ciertas cir-

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cunstancias. En algunas situaciones, castigar lasmalas conductas de los jóvenes únicamente lesanima a seguir actuando de la misma forma debi-do al reconocimiento que han obtenido. Ignorar ladesviación viene a demostrar a los jóvenes que nomerece que se le preste atención.

En ocasiones, no obstante, no puede esperarseque una conducta desaparezca. Cuando los atle-tas se ponen en peligro a sí mismos o a otros o per-turban las actividades de los demás, se hace nece-saria una acción inmediata. Indique al deportistainfractor que su comportamiento debe cesar, y queel castigo vendrá a continuación de no ser así. Si elatleta no dejar de conducirse inadecuadamentedespués de advertirle, castíguele.

La extinción tampoco da el resultado apetecidocuando el mal comportamiento supone una re-compensa en sí mismo. Por ejemplo, puede quesea capaz de no hacer una mueca de dolor si unchico le da una patada en la espinilla, pero él o ellasabe que le ha hecho daño. Ahí se encuentra larecompensa. En tales circunstancias, también esnecesario castigar una conducta indeseable.

La extinción funciona mejor en situaciones enlas que los jóvenes están buscando el reconoci-miento a través de comportamientos desviados,haciendo el payaso o significándose. Por lo común,si es usted paciente, su incapacidad para atraer suatención dará lugar a que la conducta desaparezca.

Por otra parte, tenga cuidado de no extinguircomportamientos deseables. Cuando los jóveneshacen algo bien, esperan ser reforzados positiva-mente. No premiarles dará lugar a que cesen en suconducta o a que interpreten su silencio como unreforzamiento negativo.

Castigo

Algunos educadores opinan que nunca debería-mos castigar a los jóvenes, sino que tendríamosque reforzar únicamente sus comportamientospositivos. Aducen que el castigo no funciona, quegenera hostilidad y, en ocasiones, produce con-ductas de evasión que pueden resultar en un tras-torno mayor que el problema de conducta original.Es cierto que el castigo no siempre funciona y quepuede ocasionar problemas cuando es utilizadoineficientemente, pero cuando es empleado demodo apropiado, el castigo resulta eficaz para eli-minar comportamientos indeseables sin crearotras consecuencias indeseables. Los entrenado-res deben ser capaces de utilizar el castigo de ma-nera competente, porque resulta imposible guiar alos atletas mediante el reforzamiento positivo úni-

camente. El castigo forma parte del enfoque posi-tivo cuando se siguen estas directrices:

• Emplee el castigo como un método correctivopara ayudar a los deportistas a mejorar ahora yen el futuro. No lo utilice para tomar represaliasy así sentirse mejor.

• Cuando las violaciones de las normas del grupou otras conductas desviadas se produce, im-ponga el castigo de un modo impersonal. Gritaro reprender a los atletas indica que su actitudes sólo de revancha.

• Una vez que una buena norma ha sido acorda-da, asegúrese de que los atletas que la incum-plen experimenten las desagradables conse-cuencias de su mal comportamiento. No lesamenace con el castigo. Aplíquelo.

• Dé al atleta una advertencia antes de imponerla sanción.

• Sea coherente al administrar el castigo.• No se decante por sanciones que le hagan sentir

culpable. Si no se le ocurre una consecuenciaapropiada al momento, indique al deportistaque hablará con él o ella después de pensar enello.

• Una vez que se ha acabado el castigo, no hagaque los atletas se sientan como si estuviesen enla caseta del perro. Si les ha tratado con justiciay ellos están cómodos con su decisión, hágalessentir de nuevo miembros valiosos del grupo.

• Cerciórese de lo que usted considera una san-ción no sea percibido por el deportista como unreforzamiento positivo.

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PROBLEMA

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• Nunca castigue a los atletas por cometer errorescuando están jugando.

• No utilice nunca la actividad física –dar vueltaso hacer flexiones– como sanción. Hacerlo asísolamente da lugar a que los deportistas abo-rrezcan la actividad física, algo que queremosque aprendan a disfrutar a lo largo de todas susvidas.

• Castigue con moderación. Las sanciones y lascríticas constantes hacen que los atletas vuel-van su interés hacia otra parte y estén, además,resentidos con usted.

Un modo eficaz de castigar consiste en la exclu-sión. A los deportistas suele gustarles participar,estar en la acción. Cuando se produzcan los maloscomportamientos, aísle a los infractores haciéndo-les sentarse lejos del resto de los jugadores. Ins-truya a los restantes deportistas para que ignorencompletamente a los infractores durante las ex-clusiones, las cuales pueden durar entre 5 y 30minutos.

Refuércese a sí mismo

Ha aprendido mucho sobre los principios delreforzamiento en este capítulo, puesto el énfasisde principio a fin en la aplicación de estos princi-pios en el entrenamiento de los atletas. Pero puedeaplicarse dichos principios a sí mismo, igualmen-te. Resulta fácil, cuando se entrena, llegar a estartan ocupado pasando de una tarea a otra, antici-pando la siguiente competición, que uno se olvidade reflexionar sobre sus logros. Es posible que nosiempre reciba de los demás las recompensas quemerece, así que de vez en cuando tómese tiempopara premiarse a sí mismo.

Cuestiones fundamentales a recordar

1. Aprender a utilizar los principios del reforza-miento con eficacia supone una valiosa técni-ca para la comunicación.

2. Cuando la consecuencia de algo que se haceda como resultado una tendencia a repetir laconducta, el reforzamiento está presente.Cuando da como resultado una tendencia ano repetir el comportamiento, la consecuen-cia puede ser contemplada como un castigo.

3. Premie el rendimiento, no el resultado.4. Recompense a los atletas por el esfuerzo en

vez de por el éxito real.5. Premie cosas pequeñas en el camino hacia la

consecución de metas mayores.6. Premie el aprendizaje y el rendimiento de las

habilidades emocionales y sociales de igualmodo que las técnicas deportivas.

7. Premie con frecuencia cuando los jóvenesestán aprendiendo nuevas técnicas. Premieocasionalmente cuando las técnicas han sidobien asimiladas.

8. Recompense lo antes posible tras producirsela conducta apropiada o su aproximación.

9. Conceda recompensas sólo cuando los depor-tistas se las han merecido.

10. Emplee numerosos premios extrínsecos,teniendo cuidado de no negar a los atletas laoportunidad de experimentar las recompen-sas intrínsecas del juego.

11. Enseñe a los deportistas que las recompensasintrínsecas son de mayor valía que las extrín-secas.

12. Ignorar el mal comportamiento de los atletascuando ellos pretenden llamar la atención(extinción) les enseña que comportarse demodo inaceptable no sirve para nada.

13. Debe aprender a utilizar el castigo con efica-cia, porque resulta imposible guiar a los de-portistas solamente mediante el uso del refor-zamiento positivo y la extinción.

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Esta página dejada en blanco al propósito.

Al hablar con entrenadores, con frecuencia me formulan dos preguntassobre la motivación:

• ¿Por qué están algunos atletas tan motivados y otros tan poco?• ¿Cómo podemos motivar a nuestros deportistas para que den lo mejor de sí

mismos?

A menudo, respondo haciendo una pregunta propia:

• ¿Cómo le motivo para que sea el mejor entrenador posible?

No hago esta pregunta para eludir la cuestión. En cambio, pretendo que losentrenadores examinen sus propios motivos con la esperanza de descubrir unprincipio básico de la motivación:

Las personas están motivadaspara colmar sus necesidades

Si entiende cuáles son las necesidades de sus deportistas y es capaz de ayu-darles a colmar dichas necesidades, poseerá la llave de su motivación.

Debería reunirse con cada uno de sus atletas para averiguar concretamentepor qué él o ella se ha decidido a practicar deporte esta temporada. Cuanto me-jor comprenda por qué los atletas están practicando deporte, más fácil será queentienda su conducta a lo largo de la temporada y afrontar eficientemente cual-quier problema en la motivación.

Los psicólogos deportivos han aprendido que las dos necesidades más im-portantes de los atletas jóvenes son:

• Divertirse, lo cual incluye la necesidad de estímulos y excitación, y• Sentirse respetado, lo que incluye la necesidad de sentirse competente y de

tener éxito.

Capítulo 6

Comprender la motivación

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En este capítulo, aprenderá cómo puede ayu-dar a los deportistas a satisfacer estas dos necesi-dades.

Necesidades, recompensas y motivación

Ayudando a los atletas a colmar sus necesida-des mediante la participación en los deportes, losentrenadores pueden influir en la motivación delos jugadores. Son cosas distintas las que moti-van, o premian, a los distintos jugadores en distin-tos momentos. Trofeos, medallas, dinero, elogios yviajes a un campeonato son ejemplos de recom-pensas extrínsecas –es decir, que son suministra-das a los jugadores por otros. Las recompensasintrínsecas son aquellas cosas que producen unasatisfacción interna cuando los jugadores practi-can deporte. Divertirse y sentirse competente ytriunfar son recompensas intrínsecas.

Los premios extrínsecos, como el reconocimien-to de los demás y los trofeos, pueden ser motivado-res, pero con el tiempo estas recompensas suelenperder más y más valor, mientras que los premiosintrínsecos se vuelven más y más valiosos. A dife-rencia de las recompensas extrínsecas, las intrín-secas se nutren a sí mismas. Usted, como entrena-dor, no necesita suministrarlas. Lo que debe hacer,sin embargo, es crear las condiciones en los entre-namientos y las competiciones que aportan a cadajugador la oportunidad de conseguir sus propiasrecompensas intrínsecas. Los entrenadores queson grandes motivadores saben que ellos no moti-van a los deportistas. En vez de ello, crean las con-diciones o el clima en el cual los jugadores se moti-van a sí mismos. Y utilizan hábilmente los premiospara fomentar la motivación intrínseca. Cuandolos jugadores no aciertan a conseguir los premiosintrínsecos de la diversión y el respeto, van per-diendo la motivación para jugar y se convierten encandidatos probables al abandono. Me ocuparé deluso específico de las recompensas con mayor deta-lle más adelante en este capítulo, pero por ahorarecuerde que los premios intrínsecos constituyenlas mejores motivaciones a largo plazo. Vamos aho-ra a estudiar con mayor detenimiento a dos de lasmás importantes recompensas intrínsecas: diver-tirse y sentirse respetado.

La necesidad de divertirse¿Por qué juega la gente –no sólo deportes, sino

a todo tipo de cosas? Esta pregunta ha intrigado a

los filósofos y científicos por igual durante siglos.Sólo recientemente hemos empezado a saber porqué. Cada uno de nosotros nace con la necesidadde un cierto grado de estimulación y excitación, loque a menudo es denominado la necesidad de laactivación, o lo que yo denomino, simplemente, di-versión.

Activación óptima

Cuando nuestro grado de activación es dema-siado bajo, nos aburrimos y buscamos estímulos.A esto lo llamamos “jugar” cuando el propósito pri-mario de la estimulación que buscamos es pasarlobien. En ocasiones, no obstante, nos encontramosen situaciones que resultan más estimulantes delo que nos gustaría y nos entra miedo o ansiedad.Entonces, tratamos de reducir la activación dealguna manera.

En otras palabras, las personas tienen necesi-dad de un grado óptimo de activación –ni dema-siado poco ni en exceso (consulte la figura 6.1).Este nivel óptimo de activación difiere de una per-sona a otra. Todos conocemos a individuos queparecen requerir una gran cantidad de estimula-ción y otros que se contentan con muy poco.

El entrenador de éxito44

Figura 6.1 Relación entre la diversión y la activación.

No sólo difieren los niveles óptimos de activa-ción de una persona a otra, sino que hay períodosa lo largo de la jornada en los que cada uno denosotros prefiere más o menos entusiasmo. Siusted normalmente entrena al final de la tarde ypasa a ejercitarse a primera hora de la mañana,comprobará que esto es cierto.

Poca Óptima Mucha

Activación

Div

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ón

Poc

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uch

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La experiencia fluida

¿Qué hace que la activación óptima sea tandeseable? ¿Por qué la buscamos? La respuestaradica en cómo nos sentimos cuando experimen-tamos la activación óptima, lo que un científico hadenominado la “experiencia fluida.” La fluidez seproduce cuando nos encontramos completamenteinmersos en una actividad; perdemos la percep-ción del tiempo, sintiendo que todo va bien porqueno estamos ni aburridos ni ansiosos.

Al experimentar la fluidez, nuestra atenciónestá tan intensamente absorta en la actividad quela concentración es automática. Cuando la fluideznos lleva no somos autocríticos, porque nuestrospensamientos están completamente centrados enla actividad. Dado que ni nos aburrimos ni nossentimos amenazados, sentimos que poseemos elcontrol de nosotros mismos y de nuestro entorno.Un atleta lo explicó de este modo: “Estás tan en-frascado en lo que estás haciendo, que no piensasen ti mismo como algo separado del juego.”

La experiencia fluida resulta tan placenteraque es intrínsecamente una recompensa. Noscomprometeremos en actividades por la sola razónde experimentar la fluidez, porque es divertida.Los deportes, por supuesto, son populares entrelos jóvenes porque elevan la activación hasta ungrado óptimo y, por consiguiente, son divertidos.

Pero no siempre. Para algunos jóvenes los depor-tes, simplemente, no son divertidos; no incremen-tan la activación lo bastante o generan demasiado.Los entrenadores son responsables en gran medidade hacer que los deportes no sean ni aburridos nimonótonos, ni tan amenazadores que los atletassientan ansiedad. He aquí, pues, algunos métodospara poder ayudar a los jóvenes atletas a experi-mentar la activación óptima y, por tanto, fluida.

• Equipare la dificultad de las técnicas que hande ser asimiladas o ejecutadas con la capacidadde los deportistas. La tarea puede resultar lobastante difícil como para suponer un desafío,pero no tan complicada que ellos no vean nin-guna posibilidad de éxito. Esta cuestión, de su-ma importancia, se ilustra en la Figura 6.2. Silas facultades de los atletas son grandes pero eldesafío es pequeño, se aburrirán. Si las capaci-dades de los deportistas son escasas y el desafíoes elevado, experimentarán ansiedad. Pero sisus facultades están razonablemente próximasal desafío actual, los deportistas, con mayorprobabilidad, experimentarán la fluidez y se di-vertirán.

• Haga que los entrenamientos sigan siendo esti-mulantes utilizando una gran variedad de ejer-

cicios y actividades para ejercitar las habilida-des. Además, deje que los jóvenes ayuden a ela-borar algunas de las actividades que les ayuda-rán a aprender nuevas técnicas.

• Mantenga a todos en acción en vez de dejarlosde pie esperando su turno durante largos perío-dos. Siguiendo las sugerencias que se presen-tan más adelante en este capítulo y en la ParteIII, puede conseguir que los entrenamientossean casi tan divertidas como los juegos.

• Evite la instrucción constante durante los en-trenamientos y los juegos. Deje que los de-portistas disfruten de un tiempo en el que notienen que prestarle atención y pueden volcarseen la actividad. Si usted grita instruccionesconstantemente desde las líneas de banda du-rante las competiciones, no permitirá que losatletas experimenten la fluidez.

• No evalúe constantemente a los deportistas (co-mo se trató en el capítulo 4). La experiencia flui-da no puede producirse cuando los jóvenes atle-tas están siendo continuamente evaluados yobligados a evaluarse a sí mismos, sea la eva-luación positiva o negativa. Tiempo hay parallevar a cabo la valoración, pero no cuando elpartido se está disputando.

Otras fuentes de diversión

Además de buscar la activación óptima y la flui-dez como formas de pasarlo bien, los atletas hallan

Comprender la motivación 45

Poca Mucha

Habilidad

Des

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Poc

a M

uch

a

Ansiedad

Aburrimiento

Flui

dez

Figura 6.2 Aumente la probabilidad de experimentar la fluidezequiparando la dificultad de la tarea con la capacidad de losatletas.

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diversión en el hecho de estar con otros jóvenesque comparten su interés por el deporte. Los entre-nadores que no logran determinar este incentivode la participación pueden generar inadvertida-mente un clima en el grupo que niegue a los depor-tistas la oportunidad de disfrutar de la interacciónsocial con los compañeros de grupo. Esto puedeocurrir al regimentar en exceso los entrenamientosy las competiciones, lo que reduce las oportunida-des de los jugadores de relacionarse socialmente yde implicarse en actividades espontáneas y lúdi-cas, aspectos ambos placenteros de la práctica deldeporte. Los entrenadores también pueden crearun entorno tan competitivo en el grupo que losdeportistas lleguen a sentir que están jugandounos contra otros en vez de unos con otros.

Los resultados de diversos estudios que hanexaminado las razones por las que los atletasabandonan los deportes revelan cuán importantees la diversión para ellos. Los motivos más frecuen-tes dados para el abandono fueron los siguientes:

• Encontré otras actividades más divertidas.• Perdí el interés.• No jugaba lo bastante.• Era todo trabajo y nada de diversión.• No me gustaba el entrenador.

Sustraiga la diversión de la práctica del deportey sustraerá a los atletas del deporte. Y si no aban-donan del todo, su motivación se verá gravementeperjudicada.

Así pues, ¿cómo motivará a los deportistas?Una manera destacada de hacerlo consiste enayudarles a satisfacer su necesidad de divertirsehaciendo que la experiencia deportiva resulte undesafío y un incentivo, sin que resulte aburrida oamenazadora. Otra será ayudar a los deportistas asatisfacer su necesidad de sentirse respetados.

La necesidad de sentirse respetados

Todos compartimos las necesidades básicas desentir que somos competentes, de experimentarcierto éxito, de sentir que somos personas dignas.En nuestra sociedad, pronto aprendemos quenuestra dignidad depende mucho de nuestra ca-pacidad de lograr cosas. Incluso los niños de 5años lo entienden y, por lo que se refiere a los de-portes, traducen su significado por,

Ganar = ÉxitoPerder = Fracaso

En consecuencia, la participación en los depor-tes constituye una amenaza potencial para losatletas, porque ellos identifican los logros con elrespeto por sí mismos. Ganar equivale a tener éxi-to, a ser competente, a ser una persona digna;perder equivale a ser un fracaso, a ser incompe-tente, a ser indigno.

Cuando los deportistas disfrutan de una canti-dad razonable de éxito, éste refuerza su sentido dela competencia, el cual a su vez refuerza su bús-queda ulterior de la excelencia. Pero si los atletasno consiguen experimentar el éxito, pueden cul-parse a sí mismos por el fracaso y atribuirlo a undéficit de capacidad. Con repetidos fracasos, losdeportistas pueden decidir que no tienen el éxitoasegurado, por lo que al menos protegerán su dig-nidad evitando el fracaso. Emergiendo, pues, deexperiencias tempranas de éxito y fracaso se dandos tipos de deportistas: uno que está motivadopara alcanzar el éxito y otro que está motivadopara evitar el fracaso.

Cómo piensan los ganadores

Los atletas orientados al éxito se dejan llevarpor razonamientos drásticamente distintos sobrela victoria y la derrota que los orientados al fraca-so. Marta, la Ganadora, una deportista modeloorientada al éxito, ve la victoria como una conse-cuencia de su capacidad, lo que le inspira confian-za en su capacidad para vencer de nuevo. Cuandose encuentra con un fracaso ocasional es probableque lo atribuya a un esfuerzo insuficiente; impideasí que el fracaso sea una amenaza para su auto-estima, porque no depende de su capacidad. Paratener éxito, considera Marta, simplemente necesi-ta poner mayor empeño. Por tanto, el fracaso au-menta su motivación en vez de reducirla.

El entrenador de éxito46

PONDRÉ MAYOR EMPEÑO LAPRÓXIMA VEZ. NADIE PODRÁ

DETENERME ENTONCES.

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Para Marta, un fracaso ocasional es inevitableen la práctica del deporte y no constituye un fallosuyo. De ahí que esté dispuesta a correr riesgosrazonables de fracasar –riesgos que son necesariospara alcanzar el éxito. Marta, y los atletas comoella, dirigen sus energías a los desafíos del deporteen vez de preocuparse y dudar de sí mismos. Asu-men los honores de su éxito y aceptan la responsa-bilidad de su fracaso. Ésta es una actitud saluda-ble, una actitud que ha de fomentarse en losdeportistas.

Cómo piensan los perdedores

En el lado opuesto nos encontramos con Loren-zo, el Perdedor, un atleta orientado al fracaso queestá lleno de dudas sobre sí mismo y de ansiedad.Lorenzo tiende a atribuir sus fracasos a una faltade capacidad, y sus infrecuentes éxitos a la suerteo a rivales débiles o incompetentes. Esa manerade pensar conduce el desastre; Lorenzo se culpa así mismo del fracaso, pero asume poca o ningunagloria por sus éxitos.

Los atletas como Lorenzo, el Perdedor, llegan acreer que no tienen poder alguno para cambiar sucondición porque sus primeras experiencias de-portivas les han convencido de que, por muy afondo que se empleen, el resultado siempre es elmismo: el fracaso. Concluyen, “Bueno, esforzarmeno ha servido de nada, así que mi problema debeser la falta de facultades. Por tanto, ¿para qué es-forzarme?”

Considerando que el deporte identifica tan cla-ramente a los ganadores y a los perdedores, los

atletas orientados al fracaso, como Lorenzo el Per-dedor, tienen pocas opciones de proteger su amorpropio salvo la de no participar o maniobrar paraevitar la derrota. Aunque muchos de estos jóvenesdeciden no practicar deportes, los padres, el entre-nador y la pura presión obligan a Lorenzo a seguirjugando y él ha aprendido a proteger su autoesti-ma amenazada entregándose al juego del “esfuer-zo simbólico”.

En vez de esforzarse a fondo, Lorenzo casi sinsaberlo realiza sólo el esfuerzo mínimo de formaque si falla pueda decir que no puso suficienteempeño. ¿Por qué lo hace? Porque si se esforzaseal máximo y fallase, los demás se enterarían deque carece de capacidad. No emplearse a fondoresulta menos amenazador, piensa Lorenzo, quetener que descubrir su falta de capacidad, lo quesignificaría convertirse en indigno. La tragedia dedecidir no poner todo el empeño, sin embargo, esque con ello aumenta la probabilidad del fracasoen su esfuerzo desesperado por evitarlo.

Pero la tragedia llega a ser incluso mayor. Losentrenadores suelen recompensar el esfuerzo,porque parece justo: no todo el mundo es hábil,pero todos pueden intentarlo. Aunque, para Lo-renzo el Perdedor y los atletas orientados al fraca-so como él, emplearse a fondo supone el riesgo dedescubrir que carece de destreza, por lo que no lohace. Su incapacidad de hacerlo después de reci-bir ánimos del entrenador deja a éste confuso oenojado. El entrenador lo atribuye a una falta demotivación, pero en realidad Lorenzo dista muchode no estar motivado. Contrariamente, está muymotivado... para evitar la amenaza a su amor pro-pio. Se convierte en un círculo vicioso.

Otra estratagema común de Lorenzo consisteen estar bien armado de excusas. “Me ha perjudi-cado el árbitro.” “Me duele la pierna.” “No tengo laszapatillas adecuadas.” “Me ha entrado algo en elojo.” “No me encuentro bien.” Y así sucesivamente.

Los entrenadores que tienen a Lorenzo, el Per-dedor, en el grupo suelen resolver el problema dis-poniendo algunas experiencias victoriosas paraellos. Pero, una vez que los atletas empiezan a pen-sar como Lorenzo, tienden a rechazar el éxito, loque desorienta y frustra más incluso a los entrena-dores. Aunque los deportistas orientados al fraca-so desean aceptar el éxito para mejorar su autoes-tima, lo rechazan porque temen que se espere deellos que vuelvan a triunfar. Pueden llegar a temertanto el éxito inminente que rinden mal a propósi-to para evitar ganar. Hasta que los atletas orienta-dos al fracaso no aprenden a aceptar sus propioséxitos no hay esperanza de mejorar su confianzaen su capacidad y, por tanto, su autoestima.

Comprender la motivación 47

ESPERO QUE EL PARTIDO NO DEPENDADE MIS LANZAMIENTOS

FALLIDOS... ¡LO HUNDIRÉ!

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Se encontrará tanto con Marta, la Ganadora,como con Lorenzo, el Perdedor, en su grupo, asícomo con jugadores con grados diversos de lascaracterísticas de ambos tipos de atletas. Es deespecial importancia que reconozca a Lorenzo, elPerdedor y a aquellos deportistas que tienden aser como él, de manera que no yerre el diagnósticode sus problemas de motivación. Aunque las tri-bulaciones de Lorenzo pueden parecer insupera-bles, no lo son. Describiré una solución en breve.

La profecía que se cumple

Al igual que los atletas asignan motivos a suséxitos y fracasos, lo hacen los entrenadores. Estosmotivos –atribuciones– a cambio, llevan a losentrenadores a tener ciertas expectativas con res-pecto a sus deportistas lo que, de ser expresado,podría afectar a su motivación de cara al rendi-miento. El caso de Doug ilustra cómo puede pro-ducirse esto.

Doug había jugado a baloncesto satisfactoria-mente la pasada temporada con el EntrenadorHanson, quien le daba ánimos con frecuencia enlos entrenamientos. Esta temporada, jugando pa-ra otro entrenador, el Sr. Jonson, Doug no hapodido entrar por el “buen camino.” Sin haber te-nido nunca mucha confianza, Doug empieza aatribuir su pobre rendimiento más y más a unafalta de capacidad. Llega a parecerle que el Entre-nador Jonson no tiene muy buena opinión de suscapacidades porque pasa poco tiempo ayudándoley le alienta mucho menos que el Entrenador Han-son. Según aumentan las dudas de Doug respectoa sí mismo, juega incluso peor y gradualmenteempieza a abandonar. Al cabo de un tiempo, inclu-so un buen rendimiento ocasional y los ánimos delEntrenador Johnson cayeron en saco roto.

Cuando Doug fue incapaz de dar respuesta aestos ánimos, el Entrenador Jonson se desalentócon la falta de esfuerzo de Doug, atribuyéndola ala pereza. Finalmente, con la esperanza de insu-flarle la activación perdida, el Entrenador John-son sacó a Doug del primer grupo y lo envió alsegundo. Convencido ahora más que nunca deque no sirve, Doug abandona el grupo.

El Entrenador Jonson le dijo a Doug claramen-te que sus expectativas habían disminuido rele-gando a Doug al segundo grupo. Pero los entrena-dores a menudo comunican sus expectativas deformas más indirectas. Por ejemplo, recompensanmás a menudo a los jugadores en los que tienenmayores expectativas y pasan menos tiempo conaquellos en los que han depositado pocas (“¿Porqué voy a malgastar mi tiempo con este chaval?”).Los entrenadores pueden tener una relación másestrecha con los mejores jugadores, permitiéndo-les ejercer mayor influencia en lo que está hacien-do el grupo. Aunque estos mensajes puedan serindirectos, los jóvenes los recogen fácilmente.

Cuando estas expectativas son expresadas asía los atletas, pueden convertirse en profecías quese cumplen; es decir, los deportistas pueden ac-tuar de manera que se cumpla lo que el entrena-dor ha profetizado para ellos. Estas expectativas-convertidas-en-profecías pueden, por supuesto,ser positivas o negativas.

Como es de esperar, los atletas orientados al fra-caso son los más vulnerables a las expectativasnegativas. Cuando tales deportistas, plagados ya dedudas sobre sí mismos, perciben que el entrenadorpone pocas expectativas en ellos, lo que sospecha-ban se ve confirmado: “El entrenador cree que nodoy la talla, así que ¿para qué intentarlo?” Cuandoa los atletas orientados al fracaso se les transmitenexpectativas positivas, las rechazan por las mismasrazones que rechazan el éxito ocasional.

Inversamente, los atletas orientados al éxito–cuya confianza en sí mismos es considerable–con mucha frecuencia rechazan las expectativasnegativas transmitidas por los entrenadores uotros. En lugar de hacer que se cumpla lo que leshan profetizado, se emplean incluso más a fondopara demostrar que los demás están equivocados.Las expectativas positivas, por supuesto, fortale-cen la confianza en su propia capacidad de losdeportistas orientados al éxito.

A estas alturas, quizá sienta aprensión sobre sipuede hacer algo provechoso para influir en lamotivación de sus atletas. El deportista orientadoal éxito no necesita, aparentemente, que usted lemotive, y parece que poco puede hacer para ayu-dar al joven orientado al fracaso. Pero no desespe-re, ¡siga leyendo!

El entrenador de éxito48

...HUMM ...HUMMSÍ, ¡AQUÍ HAY UNA!

1.001EXCUSAS

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Cómo aprenden los atletas a temer el fracaso

Los deportes organizados son muy distintos delos deportes de patio de colegio en los que la mayo-ría de los niños aprenden a jugar. Algunas diferen-cias son obvias: los uniformes y la regulación delas superficies de juego, las reglas y los árbitrosque las garantizan, los espectadores y los encarga-dos del marcador, y usted: su entrenador. Perodebería ser consciente de otras diferencias mássutiles. Éstas son las causas originales de que losatletas aprendan a temer el fracaso, y comprenderestas causas le ayudará a apreciar lo que prescri-bo para superar los problemas de motivación.

Énfasis en el rendimiento, no en el aprendizaje

Cuando a los jóvenes se les deja aprender lastécnicas del deporte por sí mismos –sin entrena-dores, pura presión o espectadores– tienen unamanera ingeniosa de evitar el fracaso. Cada vezque no logran sus objetivos, simplemente losreducen un poco y vuelven a intentarlo. Unascuantas prácticas y ajustes como éstos y el éxitoestá virtualmente garantizado. Pero de esa formanunca alcanzarán objetivos difíciles, objeta usted.¡Se equivoca! Cuando los jóvenes tienen éxito, demanera natural elevan sus metas para hacer quela actividad siga resultando un desafío. Así, sin laintervención de los adultos, los jóvenes tienden a

ajustar sus objetivos para congeniar dos fuerzasopuestas: fijar metas suficientemente bajas comopara evitar repetidos fracasos, aunque lo bastantealtas como para que resulten atractivas. El resul-tado es que los jóvenes tienden a mantener susobjetivos cerca de los límites superiores de sucapacidad actual. Mediante este aprendizaje auto-rregulado, los errores no son vistos como fracasos,sino como una parte natural del proceso de apren-dizaje.

Comprender la motivación 49

¡CON ESA MANERA DE PENSAR TEDESCARTAS A TIMISMA!

Pero cuando los jóvenes empiezan a practicardeportes organizados, la evaluación se vuelvepública y oficial. El énfasis pasa del aprendizaje alrendimiento. Las equivocaciones y los errores queforman parte natural del proceso de aprendizajepueden ahora ser malinterpretados como fracasosen el rendimiento.

Metas poco realistas

Algo distinto ocurre cuando los jóvenes empie-zan a practicar deportes organizados. Rápidamen-te observan que los entrenadores prefieren el ren-dimiento superior y tienden a conceder un mayorreconocimiento a los atletas que destacan. Envi-diando sus superiores habilidades y deseosos deun reconocimiento similar, estos jugadores conmenos capacidades tratan de ser como los máshabilidosos. Al hacerlo así, estos jóvenes atletaspueden fijar sus metas a demasiada altura parasu grado actual de capacidad.

ME ENCANTAPRACTICAR POR MI CUENTA. NO HAYNADIE AQUÍ QUE ME GRITE.

Y LO MEJOR DE TODO...

NO PUEDOPERDER.

Parte II 017-056 18/4/02 14:32 Página 49

Y si los deportistas mismos no establecen obje-tivos de altura poco realista, los entrenadores o lospadres lo harán con frecuencia. Los entrenadores,por ejemplo, pueden fijar el mismo objetivo de ren-dimiento para todo el grupo, pero hacerlo de ma-nera que sólo esté al alcance de los mejores atle-tas. Y los padres que aspiran a ser estrellas vica-riamente mediante sus hijos pueden, igualmente,cometer el error de convencer a sus hijos paraque persigan objetivos que están más allá de sualcance.

Independientemente de quién tenga la culpa, elresultado es el mismo: los objetivos de altura pocorealista prácticamente garantizan el fracaso.Hacen que los jóvenes jueguen a fin de lograrmetas fijadas para ellos por otros y no alcancenlas propias. Desgraciadamente, los jóvenes atletasno se dan cuenta de que tales objetivos son pocorealistas; creen que su rendimiento es escaso yerróneamente se acusan a sí mismos de no tenersuficiente capacidad y, por tanto, de ser indignos.

tas pueden comenzar a jugar para obtener sobretodo estas recompensas extrínsecas. Éstas sonconcedidas no por el logro de metas personales,sino por objetivos que otros han fijado. Una vezmás, el resultado puede ser que los deportistas seven compelidos a perseguir metas poco realistas yse condenan a sí mismos al fracaso.

El exceso de énfasis en las recompensas extrín-secas acarrea otra consecuencia negativa: puededar como resultado una adicción. Enganchado albrillo de los trofeos y medallas, estos atletas adic-tos continuamente quieren más premios y de ma-yor importancia para alimentar su hábito en au-mento. Cuando ya no se les ofrece el oro o ya noestá al alcance de sus capacidades, no ven ningúnvalor al hecho de seguir participando.

¿Cuántos adictos al atletismo hay? ¿Con cuán-ta frecuencia los trofeos y las medallas (recompen-sas extrínsecas) socavan la motivación intrínsecade los atletas para practicar deportes? No lo sabe-mos con certeza, pero no tendría por que ocurrir siayudásemos a los deportistas jóvenes a compren-der el significado de estos premios.

Puesto que las recompensas extrínsecas pue-den socavar la motivación intrínseca, no hemos deconcluir que aquéllas nunca han de ser concedi-das. Como apunté en el capítulo 5, las recompen-sas extrínsecas, utilizadas apropiadamente, cons-tituyen excelentes incentivos para motivar a losatletas que se están esforzando para aprender las

El entrenador de éxito50

BUENO, ¿QUÉ IMPORTAQUE NUNCA LE HAYANDERROTADO? ¡TUSPADRES Y YO CONTAMOSCONTIGO PARA QUE LEGANES!

Recompensas extrínsecas y motivaciones intrínsecas

En tercer lugar, cuando los jóvenes empiezan apracticar deportes organizados, las técnicas depor-tivas que han estado tratando de dominar por lapura satisfacción de hacerlo (recompensa intrínse-ca) se convierten en parte de un elaborado sistemade premio extrínsecos. Los trofeos, las medallas,las cintas, las placas, el reconocimiento en el grupode las estrellas y demás pueden provocar un cam-bio en la razón por la que los jóvenes practicandeportes, un cambio que no es deseable. En vez depracticar deportes por simple satisfacción, los atle-

¿ES ESOTODO?

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técnicas deportivas. Y, desde luego, a todos nosgusta que nos reconozcan nuestros logros y tenerrecuerdos de nuestros logros pasados.

Lo que nos preocupa no son las recompensasextrínsecas como tales, sino el significado que losatletas atribuyen a los premios. Los entrenadorestendrían que hacer saber continuamente a losatletas, mediante palabras y hechos, que las re-compensas extrínsecas únicamente son pruebasde reconocimiento para conseguir la meta supe-rior, que consiste en adquirir y ejecutar las habili-dades deportivas. Estas pruebas no hacen queuna persona sea mejor que otra, no garantizan eléxito futuro y no son la razón primordial parapracticar deportes. Los entrenadores deberían ayu-dar a los atletas a recordar que, en vez de esto, larazón más importante para participar en los de-portes es la participación misma. Cuando los atle-tas comprenden este mensaje, las recompensasextrínsecas difícilmente van a socavar la motiva-ción intrínseca para jugar el partido.

En resumen, ahora conoce tres motivos por losque la participación en los deportes organizadospuede hacer que los atletas fracasen:

• Las equivocaciones y errores que forman partenatural del proceso de aprendizaje son malin-terpretados como fracasos.

• Debido a las presiones de la competición, losatletas establecen metas ilógicamente altas que,cuando no son alcanzadas, les llevan a concluirque constituyen fracasos.

• Los atletas empiezan a jugar por recompensasextrínsecas en vez de para lograr objetivos per-sonales.

Mejorando la motivación de los atletas

Casi todo lo que he sugerido en los capítulosanteriores y trataré en los capítulos siguientes seráde ayuda directa o indirecta para mejorar la moti-vación de los deportistas. Su decisión de poner elbienestar de los atletas en primer lugar y la victoriaen segundo, junto con la adopción de un estilo coo-perativo en vez de autoritario, son prerrequisitosesenciales. Las habilidades comunicativas trata-das en los capítulos 3 a 5 también son fundamen-tales para motivar bien a los atletas. Y he especifi-cado algunos métodos con los que puede ayudar alos deportistas a colmar su necesidad de divertirse.Lo que resta es encontrar una manera de ayudar acada uno de los atletas jóvenes a sentirse respeta-do. La meta es difícil; debe hallar un modo para

que cada deportista experimente el éxito en unambiente en el cual los ganadores reales son pocosy los perdedores son mayoría.

La solución más simple consiste en eliminar laderrota; de esa forma, el círculo vicioso que origi-na atletas orientados al fracaso no podría comen-zar nunca. Por supuesto, esto no es realista; ade-más, aprender a perder tiene aspectos positivos.La solución reside en modificar el modo en que losatletas (y los entrenadores) aprenden a interpretarsus experiencias cuando pierden.

El éxito no consiste en ganar

El problema de fondo en esta cuestión de ladignidad es que los atletas aprenden de los pa-dres, los entrenadores y los medios de comunica-ción a calibrar en gran medida su autoestima apartir de si ganan o pierden. El devastador resul-tado de esta creencia es que los deportistas sólopueden mantener su sentido de la autoestimahaciendo que otros se sientan indignos. Lo másimportante que puede usted hacer como entrena-dor para mejorar la motivación de sus atletas escambiar este criterio del éxito.

Ganar es importante, pero debe convertirse ensecundario para el esfuerzo por alcanzar metaspersonales. El éxito debe ser contemplado en tér-minos de deportistas que superan sus propios ob-jetivos, no que sobrepasan el rendimiento de losdemás.

Éste es el principio fundamental para com-prender la motivación en el deporte. Vuelva a leer-lo: El éxito debe ser contemplado en términos dedeportistas que superan sus propios objetivos, noque sobrepasan el rendimiento de los demás. Esun principio fácil de enunciar, pero bastante difícilde conseguir. Si como entrenador ayuda a los atle-tas a entender y llevar a cabo este principio, harámás para ayudarles a convertirse en excelentesdeportistas –y adultos triunfadores– que medianteningún otro acto en calidad de tal.

Estos objetivos personales son hitos específicosdel rendimiento o la conducta antes que metasrelativas al resultado de ganar o perder. Los si-guientes ejemplos constituyen objetivos persona-les que se centran en el rendimiento y otras metasconductuales:

• Mi meta es saltar 15 centímetros más que lasemana pasada.

• Quiero mejorar mi revés de forma que alcancelas esquinas bien al fondo el 75 % de las veces.

• Quiero aprender a relajarme más y a disfrutarjugando.

Comprender la motivación 51

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Establecer metas personales realistas

Poniendo mayor énfasis en la consecución demetas personales, los atletas pueden adquirir elcontrol de una parte importante de su partici-pación en el deporte: su propio éxito. Aquí lo fun-damental es establecer metas realistas, pues alhacerlo así los deportistas se aseguran un gradorazonable de éxito. Con todas las presiones de lacompetición, y la influencia de los padres y loscompañeros de grupo, es el entrenador quien debeayudar a cada atleta a mantener una perspectivarealista al establecer objetivos adecuados sólopara él o ella.

Las metas del grupo no han de ser confundidascon estas metas personales. De hecho, aquéllasapenas son necesarias si uno de los objetivos per-sonales de cada miembro del grupo es realizar lamejor contribución posible, dado su nivel actualde habilidad. Fijar metas de grupo que enuncienque queremos ganar tantos partidos o tal o cualcampeonato no es de utilidad, y éstas vienen asocavar el tipo de objetivos personales que acabode describir. Las metas de grupo más apropiadasguardan relación con aprender a jugar juntos co-mo una unidad, respetándose mutuamente, condivertirse y jugar con deportividad. Conseguir es-tas metas de grupo y cada uno de los objetivospersonales es más importante que ganar. Por aña-didura, cuando los deportistas logran tanto losobjetivos individuales como los del grupo, ganarsuele ser el colofón.

Consecuencia de fijar metas personales

Cuando ganar el partido se convierte en algosecundario para lograr metas personales, los atle-tas están mucho más motivados para practicar.Los ejercicios proporcionan a los deportistas opor-tunidades de trabajar en dirección a las metaspersonales con el asesoramiento del entrenador.Los enfrentamientos no son vistos como el fin últi-mo, sino como pruebas periódicas a lo largo delcamino hacia la consecución de metas personales.Los atletas no se juzgan a sí mismos como triunfa-dores o fracasados sobre la base de la victoria o laderrota, sino en términos del logro de un rendi-miento específico y de objetivos conductuales quehan fijado.

Las evidencias de muchas fuentes indican queno sólo los atletas destacados, sino también los demenos éxito que más han disfrutado y más se hanbeneficiado del deporte, comparten este punto devista. Ellos se centran en objetivos personales, noen la derrota de los demás. La consecuencia de estaperspectiva es increíblemente provechosa. Cuandoa los deportistas se les permite establecer sus pro-pias metas, guiados por el entrenador cuandoresulta necesario para garantizar que sean realis-tas, se vuelven responsables de su propio progreso.Sienten que tienen el control y asumen los honoresdel éxito y la responsabilidad por sus fracasos.Como he enunciado antes, éste es el primer pasopara ayudar a los deportistas a motivarse.

Los entrenadores necesitan buen juicio parafijar a los atletas a establecer metas realistas,pues deben ser capaces de evaluar el grado dehabilidad de cada deportista. Y esto pone de mani-fiesto otro aspecto crucial, uno en el que tal vez hapensado ya mientras está leyendo este capítulo.

Reconocer las limitaciones de los atletas

Los deportistas no siempre rinden deficiente-mente porque carecen de motivación. El mal ren-dimiento puede ser señal de que los límites perso-nales se han alcanzado, de que los atletas estánrindiendo al máximo de su capacidad. Ni un ma-yor esfuerzo ni toda la confianza del mundo mejo-rarán su capacidad de rendimiento.

Los atletas deben aprender a aceptar de buengrado sus limitaciones sin socavar su motivaciónpara participar. Nadie es perfecto, aunque muchosdeportistas se ven amenazados por un rendimientoimperfecto, especialmente cuando los entrenado-res, los padres y los compañeros de grupo les ha-cen sentir que la perfección es necesaria para serrespetado.

El entrenador de éxito52

QUIZÁS TENGAMOSQUE SER UN POCOMÁS REALISTAS.

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Muchos atletas necesitan ayuda para aprendera afrontar sus limitaciones sin devaluarse a símismos. Los entrenadores, en vez de transmitir elabsurdo de que todos los deportistas pueden con-vertirse en superestrellas o profesionales, ayuda-rán a madurar más a los atletas alentándoles abuscar y descubrir sus límites por sí mismos. Sólode esta manera pueden los deportistas aprender amantener metas realistas. Pero si los entrena-dores hacen creen a los atletas que carecen delímites, que aceptar límites resulta despreciable,entonces los deportistas se verán compelidos ha-cia objetivos nada realistas, hacia el fracaso even-tual y quizás incluso hacia la lesión.

Experimentando el éxito

Cuando los entrenadores ayudan a los atletas aestablecer metas realistas, éstos inevitablementeexperimentan más éxitos y se sienten más compe-tentes. Llegando a ser más competentes, adquie-ren confianza y pueden abordar técnicas de difi-cultad moderada sin temer al fracaso. Descubrenque sus esfuerzos dan lugar a resultados másfavorables, y que quedarse corto casi con toda se-guridad ha sido provocado por un esfuerzo insufi-ciente. Los objetivos realistas hacen que el fracasodeje de ser una amenaza. En vez de indicar que losdeportistas no son dignos, el fracaso indica quetendrían que esforzarse más.

Quitar énfasis a la victoria y dar mayor énfasisa la consecución de objetivos personales. Esteprincipio es la clave para satisfacer las necesida-des de los atletas de sentirse respetados, no sólode mantener su autoestima sino de desarrollarlaaún más. Es este principio lo que resulta esencialpara mejorar la motivación de todos los deportis-tas jóvenes.

De la motivación a la ansiedadMi preocupación hasta ahora ha sido exclusi-

vamente la de mantener e incrementar la motiva-ción, porque sabemos que estar motivado resultaesencial para rendir bien y disfrutar de la partici-pación. Algunos entrenadores, erróneamente,consideran que cuanta más motivación mejor, pe-ro los atletas pueden llegar a estar demasiado mo-tivados o entusiasmados.

Relación activación-rendimiento

Al igual que existe un grado óptimo de activa-ción para divertirse, hay un grado óptimo de acti-

vación para rendir bien (consulte la Figura 6.3).Cuando los atletas poseen insuficiente o excesivaactivación, no rinden tan bien como podrían ha-cerlo; pero si están activados en la medida idónea,su rendimiento puede ser el mejor.

Comprender la motivación 53

¡GRAN CARRERA! ¡ESTÁSMEJORANDO DE VERAS!

Poca Mucha

Activación

Ren

dim

iento

Poc

a M

uch

a

Figura 6.3 La U invertida que relaciona la activación con elrendimiento.

El grado óptimo de activación varía dependien-do de las técnicas deportivas. Como se muestra enla Figura 6.4, las técnicas deportivas de gran pre-cisión que requieren un control motor preciso,como el putt en el golf o cualquier habilidad en losdeportes de lanzamiento o en los bolos, se ejecu-tan mejor con grados menores de activación; losdeportes como el baloncesto, el béisbol y el volei-

Parte II 017-056 18/4/02 14:32 Página 53

bol se juegan mejor con un grado un poco mayorde activación; y las habilidades que requierengrandes movimientos musculares, como el levan-tamiento de pesas o las entradas y los bloqueos enrugby, se realizan mejor con grandes niveles deactivación. Los grados óptimos de activación tam-bién difieren considerablemente de un atleta aotro. Uno puede ejecutar mejor una técnica depor-tiva con mucho menos activación que otro.

Si un poco de motivación es conveniente, ¿porqué más no es mejor? Cuando los deportistas es-tán demasiado motivados o activados, se vuelvenansiosos y se preocupan por si serán capaces dealcanzar la victoria, en especial los atletas orienta-dos al fracaso. La ansiedad hace que los músculosse tensen, por lo que los movimientos de los atletasya no son tan uniformes y ágiles como cuando losmúsculos estaban más relajados. Los jugadorespiensan en cómo lo están haciendo en vez de con-centrarse simplemente en hacerlo. En consecuen-cia, su atención no está bien centrada en la dispu-ta, y pueden sentir que pierden el control.

Como probablemente recuerda, estas condicio-nes son justamente las contrarias a las que se nece-sitan para experimentar la fluidez. Los atletas rin-den mejor –alcanzan el máximo rendimiento– cuan-do se hallan en estado de fluidez, lo que por defini-ción representa que están óptimamente activados.

Por tanto, así como debe usted ayudar a losdeportistas a aumentar su motivación hasta ungrado óptimo, debe asimismo ayudarles a reducirlacuando están demasiado ansiosos. Para hacerlo,tiene que comprender por qué se vuelven ansiosos.

Causas de la ansiedad

La causa fundamental de la ansiedad en eldeporte se produce cuando los atletas están inse-guros de si podrán satisfacer las demandas de losentrenadores, los padres, los compañeros o ellosmismos, cuando satisfacer estas demandas es im-portante para ellos. Cuanto mayor es la inseguri-dad de los deportistas y más importante es elresultado para ellos, mayor es la ansiedad.

Algunos entrenadores no aciertan a compren-derlo y, en vez de ayudar a los atletas a sentirsemenos inseguros, les llevan a sentirse aún más.Algunos entrenadores, por ejemplo, mantienen alos jugadores en la incertidumbre de si formaránparte del grupo o de la alineación inicial, o de sivan a jugar. Otros continuamente recuerdan a losjugadores lo incierto que es ganar y les hacen sen-tir especialmente inseguros sobre sus capacida-des individuales. El entrenador, junto con los pa-dres y los compañeros de grupo, también puedenhacer que los atletas se sientan inseguros sobresu estatus social o su importancia en el grupo. Losentrenadores generan con frecuencia estos senti-mientos de incertidumbre, con la intención no deque los deportistas sientan ansiedad, sino de mo-tivarlos. Desgraciadamente, estos entrenadoresno comprenden el proceso de la motivación trata-do en este capítulo.

Son muchos los factores que hacen que eldeporte sea importante para los atletas. Como yahemos visto, ganar posee en sí mismo una granimportancia porque los deportistas asocian la vic-

El entrenador de éxito54

Poca Mucha

Activación

Ren

dim

iento

Poc

a M

uch

aGolf Baloncesto Fútbol

Figura 6.4 Grados óptimos de activación para rendir al máximo en distintos deportes.

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toria con su autoestima. Además, difundir el re-sultado del partido, añadir pompa al juego y, des-de luego, ofrecer todo tipo de recompensas extrín-secas aumenta la importancia del juego.

Algunos entrenadores parecen especialmenteinsensibles a los estados emocionales de los atletasy, por ello, no reconocen la necesidad de reducir laansiedad de algunos deportistas disminuyendo laincertidumbre y la importancia del juego. En cam-bio, pronuncian una charla previa al partido querecuerda a los deportistas la importancia del juegoy las incertidumbres asociadas con la competición.Para los atletas insuficientemente motivados, unacharla previa puede incrementar la activación has-ta el nivel óptimo. Para los deportistas que ya pose-en una activación óptima, esta arenga adicionalpuede empujarles más allá del grado óptimo de ac-tivación, creando ansiedad. Y para los atletas queya están ansiosos, ¡resulta aterrador!

La mayoría de los entrenadores, probablemen-te, dan charlas previas por tradición y como modode aliviar su propia ansiedad. Lamentablemente,hacen más mal que bien. Las charlas previasfallan porque no van dirigidas a las necesidadesindividuales de los deportistas. Aunque un atletapueda necesitar la inspiración retórica de un en-trenador, otro puede que necesite reafirmación.

Puede ayudar a los deportistas que están de-masiado ansiosos a aliviar su ansiedad hallandomaneras de reducir tanto la incertidumbre por có-mo será evaluado su rendimiento como la im-portancia que atribuyen al juego. Ya hemos descu-bierto una forma magnífica de hacerlo. Ayudar alos atletas a modificar el criterio para evaluarse así mismos, de ganar a conseguir metas personalesrealistas, constituye un gran paso hacia la elimi-nación de la amenaza que genera ansiedad. Con elénfasis en los objetivos personales, los deportistasno tratan de derrotar a un oponente de habilidaddesconocida, sino únicamente de lograr sus metasde rendimiento. Cuando los atletas dejan de aso-ciar su autoestima con la victoria y la derrota, losdeportes dejan de ser amenazadores y los atletasno temen al fracaso.

Cuestiones fundamentales a recordar

1. Los atletas están motivados para practicardeportes con el fin de satisfacer su necesidad dedivertirse y de sentirse respetados.

2. Las personas necesitan cantidades óptimas deactivación.

3. Cuando uno está óptimamente activado, esmás probable que se produzca la “experienciafluida.”

4. Puede ayudar a los atletas a experimentar laactivación óptima y, por tanto, la fluidez,equiparando la dificultad de la técnica con lacapacidad de los deportistas, haciendo quelos entrenamientos sean variados y que todoslos jugadores estén activos, evitando instruiry evaluar continuamente a los deportistas.

5. Los deportes son potencialmente amenazado-res para los atletas jóvenes porque éstosidentifican sus logros con su autoestima.

6. Los deportistas orientados al éxito ven la vic-toria como una consecuencia de su capa-cidad, atribuyendo el fracaso a un esfuerzoinsuficiente.

7. Los deportistas orientados al fracaso atribu-yen la derrota a una falta de habilidad y lasinfrecuentes victorias a la suerte, por lo quese culpan a sí mismos de la derrota, pero noasumen el honor de la victoria.

8. Los atletas orientados al fracaso tratan deproteger su amor propio desplegando sólo unesfuerzo simbólico, para que los demás nodescubran su temida carencia de capacida-des. Los entrenadores a menudo confundenesta falta de esfuerzo con un déficit de moti-vación, pero en realidad, los deportistasorientados al fracaso están muy motivadospara evitar la amenaza a su autoestima.

9. Los entrenadores desarrollan expectativas delos atletas que, cuando son transmitidas, pue-den convertirse en profecías que se cumplen.

10. Los deportistas orientados al fracaso son losmás vulnerables a las expectativas negativasde los entrenadores.

11. Los atletas pueden aprender a temer el fraca-so porque,

• las equivocaciones y errores que formanparte natural del proceso de aprendizajeson malinterpretadas como fracasos;

• las presiones de la competición hacen quelos jóvenes establezcan metas poco realis-tas que garantizan el fracaso;

• los atletas empiezan a jugar por recom-pensas extrínsecas en vez de por la conse-cución de objetivos personales.

12. El método más provechoso para poder mejo-rar la motivación de los atletas es enseñarlesque el éxito conlleva el logro de sus metaspersonales de rendimiento, en vez de las me-tas de los demás.

Comprender la motivación 55

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12. Puede usted desempeñar un papel vital paraayudar a los deportistas a establecer objeti-vos realistas, esos que motivan a los atletas adar lo mejor de sí pero reconociendo sus limi-taciones, igualmente.

13. Los deportistas rinden mejor cuando gozande activación o motivación óptimas. Dema-siado poco o excesivo entusiasmo entorpeceel rendimiento.

14. La activación óptima difiere de una técnica aotra y de un deportista a otro.

15. Los atletas se vuelven ansiosos cuando estáninseguros de si podrán satisfacer las deman-das que les exigen cuando la consecución deesas demandas resulta importante para ellos.Cuanto mayor sea la incertidumbre y másimportante sea el resultado, mayor será laansiedad.

16. Puede usted ayudar a los deportistas a aliviarsu ansiedad disminuyendo la incertidumbrey reduciendo la importancia del resultado.

El entrenador de éxito56

Parte II 017-056 18/4/02 14:32 Página 56

Pedagogía significa enseñar, y pedagogía deldeporte hace referencia a la ciencia y el arte deenseñar las habilidades deportivas –no habilida-des específicas, como fintar, lanzar o proyectarsesino el proceso que los entrenadores empleanpara enseñar todo tipo de habilidades. A partirdel estudio de la pedagogía deportiva sabemosmejor cómo los buenos entrenadores se organi-zan para la temporada, seleccionan y secuencianlas técnicas específicas que quieren enseñar,proporcionan instrucciones verbales, demues-tran las habilidades y aportan comentarios.También podemos aprender otras rutinas que losentrenadores de mayor éxito utilizan para ayu-dar a los atletas a aprender y mejorar sus habili-dades.

Entrenar bien equivale a enseñar bien. ¿Y quées enseñar bien? Engloba todo lo que ha aprendi-do en las Partes I y II –la filosofía idónea, las bue-

nas técnicas de comunicación, comprender la mo-tivación de los deportistas y un entrenador prepa-rado, motivado y empático. Todo lo anterior esimportante, pero para ser un buen profesor hacefalta más.

Primero, tiene que conocer la materia de estu-dio muy bien. No hay nada que sustituya a unabuena comprensión de las técnicas, tácticas yconocimientos asociados a su deporte específico.Pero necesita saber más que el mero ser capaz deaplicar estas habilidades como un atleta. Necesitaun conocimiento más profundo. Necesita ser ca-paz de dividir y volver a ensamblar las técnicas ylas tácticas –contemplarlas desde distintos ángu-los, aplicarlas, adaptarlas, integrarlas y evaluarlascríticamente para cada deportista.

Los entrenadores que son profesores magistra-les hacen mucho más que sólo presentar las técni-cas y tácticas; proporcionan a los deportistas un

Parte III

Pedagogía del deporte

Capítulo 7PLANIFICANDOLA ENSEÑANZA

Capítulo 8CÓMO APRENDEN

LOS ATLETAS

Capítulo 9ENSEÑANDO

LAS TÉCNICASDEL DEPORTE

PECULIAR...PEDANÍA...PCEESTRE...PEDICURA...¿QUÉ ES LAPEDAGOGÍA?

Parte III 057-088 18/4/02 14:35 Página 57

El entrenador de éxito58

conocimiento real de las mismas. Les ayudan acomprender cómo cada técnica y táctica encaja enla panorámica total del deporte. Se esfuerzan parasuministrarles datos de forma que ellos puedantomar decisiones inteligentes sobre el modo de eje-cutarlas. Con una mejor comprensión, los atletasson capaces de asumir una mayor responsabili-dad de su propio aprendizaje.

En la Parte III aprenderá lo que los entrena-dores magistrales y los científicos del deporte hanaveriguado sobre la manera de organizar mejor y

enseñar las técnicas deportivas. En el capítulo 7,aprenderá cómo desarrollar los planes de ense-ñanza que son tan esenciales para una temporadade éxitos. En el capítulo 8, le mostraré lo que sabe-mos sobre el modo en que aprenden los deportis-tas, lo que aplicado con propiedad le ayudará a serun profesor más eficaz. Y en el capítulo 9, apren-derá cuáles son los pasos específicos para enseñarlas habilidades del deporte eficientemente, inclu-yendo la forma en que los atletas corrigen los erro-res mediante útiles feedbacks.

Parte III 057-088 18/4/02 14:35 Página 58

A algunos entrenadores no les gusta planificar la parte que corresponde a laenseñanza en su labor; son gente activa y prefieren enseñar a los deportistasmediante la práctica y la competición. Pero errar la planificación equivale a pla-nificar el error. Independientemente del nivel competitivo en el que entrene, suconocimiento del deporte o sus años de experiencia, necesita una planificaciónde la enseñanza. Sin una planificación no sabrá hacia dónde se está dirigiendoy, por tanto, puede acabar donde no le gustaría encontrarse.

En este capítulo aprenderá a desarrollar dos tipos de planificaciones:

• Una planificación de la temporada.• Planes para cada sesión práctica.

Los entrenadores necesitan realizar una planificación adicional, pero eso severá en el capítulo 14, “Gestión y dirección del equipo”. En este capítulo la pla-nificación se circunscribe completamente a la enseñanza y la práctica de lastécnicas, tácticas y otras áreas de interés asociadas con el deporte.

Beneficios de la planificación

Si es usted como la mayoría de los entrenadores, ya sabe que la planificaciónes una buena idea. Pero, ¡quién tiene tiempo para planificar! Espero que ustedlo tenga, porque el tiempo que dedique a planificar le ahorrará tiempo posterior-mente, y le convertirá en un entrenador mejor.

La planificación de una temporada ayuda a garantizar que dispondrá detiempo para enseñar las habilidades clave y las estrategias de la temporada. Leayuda a estar al día, así como a tener presente lo que es importante y lo que noes importante hacer. La planificación de una temporada también repercute en elcurso de muchas temporadas. Constituye un marco de referencia para evaluarlas temporadas anteriores y desarrollar una planificación mejor para la siguien-te temporada.

Capítulo 7

Planificando la enseñanza

Parte III 057-088 18/4/02 14:35 Página 59

Reuniendo información básica para desarrollar la Planificación de la Temporada

√ ¿Cuántas sesiones llevará a cabo a lo largo de toda la temporada?√ ¿Cuántos partidos disputará a lo largo de toda la temporada?√ ¿Qué hechos especiales (reuniones de grupo, sesiones de orientación para los padres, banquetes, tor-

neos, etc.) celebrará y cuándo?√ ¿A cuántos atletas estará entrenando?√ ¿En qué rango de edad se encuentran los jugadores?√ ¿Cuáles son los niveles de habilidad y experiencia de los jugadores al principio de la temporada?√ ¿Qué instalaciones habrá disponibles para los entrenamientos?√ ¿Qué equipamiento habrá disponible para los entrenamientos?√ ¿Qué medios de enseñanza (películas, vídeos, diagramas, libros, etc.) habrá disponibles?√ ¿Cuántos entrenadores asistentes tendrá?√ ¿Qué otro personal de ayuda habrá disponible?√ ¿Qué otros factores pueden afectar a la planificación de la temporada?

Análisis de la situación

Al prepararse para confeccionar una planifica-ción de la temporada tiene que analizar la situación.Para hacerlo, le será de ayuda responder a las pre-guntas de arriba tan exhaustivamente como pueda.Puede que tenga que realizar ciertas investigacionespara responder a algunas de las preguntas.

Agenda diaria

Asimismo, al prepararse para desarrollar laplanificación de la temporada necesitará unaagenda diaria, con páginas similares a las que semuestran en la Figura 7.1. Revise las muchasopciones que hay disponibles en tiendas de artícu-los de oficina y seleccione una que le satisfaga.Ahora, recorra la agenda diaria e identifique cadauno de los días en los que piensa realizar entrena-mientos y cada uno de los días en los que estarácompitiendo. También puede ser de ayuda anotarlos días de fiesta que pueden interferir su planifi-cación. Recuerde la siguiente información:

1. Escriba “Entrenamiento 1” en la jornada delprimer entrenamiento y numere todos losdemás entrenamientos consecutivamente.

2. Registre las ubicaciones de los entrenamientossi van a variar y las sabe ahora.

3. Registre el número del partido, el oponente y lalocalización de cada encuentro en el día apro-piado.

4. Anote cualquier hecho especial, tales como lasreuniones de grupo de la pretemporada, el pro-

El entrenador de éxito60

grama de orientación de los padres, las reunio-nes de organización posteriores a la temporaday los banquetes de recompensa.Le pediré que realice otras tareas con la agenda

diaria más adelante. Ahora le conduciré a travésde los pasos a dar para confeccionar una planifi-cación de la temporada, explicando cada uno deellos y proporcionándole ejemplos.

Planificación de la temporada

Muchos entrenadores no logran desarrollarplanes de temporada funcionales porque no sabencómo elaborarlos o consideran que el proceso deplanificación les llevará mucho tiempo y será muycomplejo. Este capítulo elimina estos obstáculosen la planificación. Le mostraré un modo sencillo ymuy práctico de desarrollar una planificación dela temporada. Requerirá cierto trabajo, pero eltiempo que invierta en la planificación rendirágrandes dividendos; los atletas aprenderán más,los entrenamientos serán más divertidos y ahorra-rá mucho tiempo a largo plazo.

Los pasos para elaborar una planificación parala temporada son éstos:

1. Establecer las metas del entrenamiento.2. Seleccionar la materia a enseñar para conseguir

cada meta.3. Organizar esta materia de cara al entrenamien-

to.

Armado con esta planificación para la tempora-da, lo llevará a cabo completando dos pasos más:

Parte III 057-088 18/4/02 14:35 Página 60

4. Evalúe las habilidades y conocimientos de losatletas en la pretemporada.

5. Planifique los entrenamientos.

Paso 1. Establecer las metasdel entrenamiento

¿Qué son las metas del entrenamiento? Sonenunciados generales de lo que usted espera quelos deportistas sepan y sean capaces de hacer alfinal de la temporada. Puede tener muchas metaspara la temporada, pero las principales se englo-ban dentro de las siguientes categorías:

• Técnica: metas sobre el aprendizaje y el rendi-miento de habilidades motoras para practicar eldeporte.

• Tácticas: metas sobre el conocimiento de cuán-do y cómo aplicar las distintas técnicas.

• Reglamentarias: metas sobre el conocimientosde las normas y procedimientos básicos de arbi-traje.

• Físicas: metas sobre la enseñanza y el entrena-miento de los atletas, de forma que estén física-mente preparados para los entrenamientos ylas competiciones.

• Mentales: metas sobre la enseñanza y el adies-tramiento de los atletas, de forma que estén psi-

Planificando la enseñanza 61

5 309/056 6 310/055 7 311/054

Día Elecciones

8 312/053 9 313/052 10 314/051 11 315/050

Día Veteranos

12 316/049 13 317/048 14 317/047 15 319/046 16 320/045 17 321/044 18 322/043

19 323/042 20 324/041 21 325/040 22 326/039 23 327/038 24 328/037 25 329/036

26 330/035 27 331/034 28 332/033 29 333/032 30 334/031

Domingo Lunes Martes

1 305/060 2 306/069 3 307/058 4 308/057

Miércoles Jueves Viernes Sábado

NoviembreNotas:______________________________________________________________________________________________________________________

Figura 7.1 Ejemplo de agenda diaria.

Parte III 057-088 18/4/02 14:35 Página 61

cológicamente preparados para los entrena-mientos y las competiciones.

• Morales: metas sobre la enseñanza de los atle-tas en cuanto a deportividad y sus responsabili-dades con los demás.

Normalmente, se nos dice que las metas han deser específicas y mensurables, pero vamos a violaresa norma y, simplemente, enunciaremos que suobjetivo es éste: lograr tanto como sea posible encada categoría, dadas las oportunidades y limita-ciones con las que se topará.

He enumerado una serie de muestra de metasdel entrenamiento para un grupo de fútbol deentre 14 y 17 años. Observará que he anotado unobjetivo por cada categoría.

Metas del entrenamiento para el fútbol

Los jugadores serán capaces de demostrar losiguiente:

1. Dominio de las habilidades individuales necesa-rias para participar en los partidos en este nivel(técnica).

2. Conocimiento de las pautas defensivas y ofensi-vas del juego de grupo necesarias para partici-par con éxito en partidos en este nivel (tácticas).

3. Conocimiento amplio de las reglas y capacidadpara aplicar rápidamente este conocimiento du-rante la competición (reglamentarias).

4. Conocimiento y práctica de la buena nutrición yla salud, fortalecimiento mediante métodosseguros de entrenamiento y la resistencia nece-saria para emplearse a fondo durante los entre-namientos y la competición (físicos).

5. La capacidad de preparar psicológicamente lacompetición y de evaluarse a sí mismos según elrendimiento antes que el resultado (mentales).

6. La capacidad de mejorar la autoestima de loscompañeros de grupo, de los rivales, de losentrenadores y de los árbitros (morales).

Emplee estos objetivos a modo de ejemplo, ano-te sus metas para estas seis categorías, modifi-quelas dependiendo de su situación o úselas exac-tamente como se han enunciado aquí. Si su agen-da diaria contiene una página en blanco, empléelapara registrar sus objetivos de manera que esténfácilmente disponibles.

Paso 2. Seleccione los contenidos para cada meta

Es ahora cuando se ganará el sueldo comoentrenador. El trabajo duro a fin de elaborar unaplanificación para la temporada consiste en selec-cionar el contenido que hay que enseñar en cadauno de los seis objetivos. En las páginas que si-guen verá ejemplos de contenidos que he seleccio-nado para dos de las seis metas relativas al fútbol.Le animo a utilizar estos ejemplos como punto departida. Sea tan riguroso como pueda en la con-fección de sus listas; si no lo planifica en estemomento, no es probable que se acuerde de ense-ñarlo más adelante.

Cuando empiece a seleccionar el contenidopara las metas técnicas y tácticas, empiece res-pondiendo a la pregunta más importante: ¿Qué esesencial que los deportistas sepan para jugar elpartido o competir en un campeonato con éxito?En la mayoría de los deportes, resulta bastantefácil identificar las técnicas y tácticas esenciales.Anote ésas primero. Luego divida estos puntosprincipales en componentes más pequeños. De-pendiendo del nivel en el que entrena, puede quenecesite incluso subdividir estos componentesulteriormente.

Encontrar ayuda

Puede encontrar ayuda a la hora de seleccionarlas habilidades a enseñar en numerosas fuentes:

• Observe cómo se juega ese deporte en distintosniveles de habilidad, teniendo presente el nivelde habilidad de su grupo.

• Revise la multitud de libros y vídeos que haydisponibles sobre la enseñanza de su deporte.

• Consulte a entrenadores más experimentados.• Consulte a los entrenadores asistentes, si los

tiene.• Busque el consejo de sus atletas si son lo bas-

tante maduros y experimentados. No subestimesus conocimientos y habilidades.

Contrastar

Tras anotar el contenido que desea enseñar encada una de las seis metas, contraste cada uno delos puntos. Con respecto a los objetivos técnicos ytácticos, evalúe la idoneidad de cada punto a en-señar planteando las siguientes preguntas:

El entrenador de éxito62

Parte III 057-088 18/4/02 14:35 Página 62

Ofensivas:

Conducción:

1. Con el interior del pie.2. Con el exterior del pie.3. Conducción a máxima velocidad.4. Cambio de ritmo.5. Cambio de dirección.

Pase:

1. Pases rectilíneos.2. Pases con efecto.3. Pases cortos, bajos.4. Pases largos, altos.

Recepción y control:

1. Con el interior del pie.2. Con el exterior del pie.3. Con el empeine.4. Con el empeine superior.5. Con la puntera.

Fintas:

1. Finta del paso lateral.2. Finta del cruce.3. Finta del pase.4. Desmarcarse sin la pelota.

Tiro:

1. Con el interior del pie.2. Con el empeine.3. Con el empeine superior.4. Con la puntera.5. Con el exterior del pie.6. Siguientes disparos.

Remate de cabeza:

1. Hacia adelante.2. Hacia atrás.3. Lateralmente.

Defensivas:

1. Entrada con tackle.2. Entrada con tackle al suelo.3. Marcaje del rival con la pelota.4. Marcaje del rival sin la pelota.

Planificando la enseñanza 63

Meta 1. Técnica

Los jugadores de fútbol harán demostración de las siguientes habilidadesnecesarias para participar en los partidos con eficacia.

Meta 6. Moral

Los jugadores de fútbol demostrarán que han desarrollado atributos morales positivos en los entrenamientos y los partidos.

Habilidades futbolísticas individuales

Respeto por los demás:

1. Cortesía.2. Empatía.

Deportividad:

1. Autodisciplina.2. Juego limpio.

Trabajo en grupo:

1. Generosidad.2. Cooperación.3. Apoyo social.

Confianza:

1. Honestidad.2. Lealtad.

Parte III 057-088 18/4/02 14:35 Página 63

• ¿Poseen los deportistas la fuerza física o la re-sistencia necesarias para ejecutar la tarea?

• ¿Tienen los atletas suficiente coordinación mo-triz para empezar a aprender la tarea?

• ¿Es la tarea razonablemente segura para losatletas que están bien preparados?

Con respecto a todos los objetivos, revise la ido-neidad del contenido a enseñar planteando lassiguientes preguntas:

• ¿Contribuye la materia al objetivo de la forma-ción más eficazmente que otras opciones?

• ¿Están los deportistas interesados en aprenderla materia? De no ser así, ¿se puede generar pa-sión por aprenderla en esta categoría de edad?

• ¿Poseen los atletas suficiente madurez emocio-nal y cognitiva para empezar a aprender lamateria?

Si la respuesta a cualquiera de estas preguntases no, reemplace o elimine el punto de la lista oenseñe los prerrequisitos que prepararán a losdeportistas para aprender el contenido que ustedha seleccionado.

Ahora revise todos los puntos de nuevo, tenien-do presente las siguientes condiciones, las cualesdeterminarán cuánto podrá enseñar:

• La cantidad de tiempo disponible para los entre-namientos.

• La proporción de deportistas y entrenadores.• El grado de desarrollo físico y mental de los atle-

tas.• Las instalaciones, el equipamiento y el dinero

disponible para la temporada.

Resulta conveniente incluir en la lista algunascosas más de las que cree que será capaz de ense-ñar durante la temporada, pero sin que la planifi-cación de la temporada deje de ser realista.

Paso 3. Organizar la materiapara el entrenamiento

Una vez que ha seleccionado la materia paraconseguir sus metas de entrenamiento, tiene queorganizarla en la mejor secuencia para la ense-ñanza y el entrenamiento. Empiece ordenando lastécnicas para cada meta de formación aplicandodos criterios.

1. Enseñar primero las habilidades más básicas,por supuesto.

2. Enseñar las técnicas esenciales para que losatletas sean capaces de competir en el primerenfrentamiento.

He ordenado la materia del modo que creo quees mejor para enseñar fútbol. Mi secuencia de ins-trucciones para las metas técnica y moral se mues-tra más abajo. (Los números entre paréntesis indi-can los minutos que creo que serán necesarios paraenseñar cada punto –incidiremos en ello más ade-lante). Dado que yo nunca he jugado al fútbol ni hesido entrenador de fútbol, me resultó difícil desa-rrollar una secuencia de instrucciones para estedeporte. Por ello, consulté a entrenadores con másexperiencia y estudié varios libros de fútbol paraconfeccionar la planificación de la temporada.

Secuencia de instrucciones para la Meta 1. Técnica

1. Conducción con el interior y el exterior delpie (10).

2. Conducción en velocidad (10).3. Conducción con cambio de ritmo (10).4. Conducción con cambio de dirección (10).5. Pases cortos, bajos (15).6. Recepción y control con el interior y el exte-

rior del pie (10).7. Recepción con el empeine superior y la suela

(10).8. Pases largos, altos (10).9. Pases rectilíneos (10).

10. Fintar el pase (10).11. Fintas del paso lateral (10).12. Fintas del paso cruzado (10).13. Pases con rosca (10).14. Tiro con el interior del pie y el empeine (25).15. Tiro con el empeine superior, la puntera y el

exterior del pie (10).16. Rematar de cabeza hacia adelante, hacia

atrás y lateralmente –disparo o pase (15).17. Disparos a seguir (10).18. Marcaje del rival con y sin la pelota (25).19. Fintar para desmarcarse sin la pelota (10).20. Entrada con tackling (10).21. Entrada con tackling al suelo (10).

Secuencia de instrucciones para la Meta 6. Moral

1. Cortesía y empatía (15).2. Autodisciplina (10).3. Juego limpio (10).4. Generosidad (5).5. Cooperación (10).6. Apoyo social (10).7. Honestidad y lealtad (15).

El entrenador de éxito64

Parte III 057-088 18/4/02 14:35 Página 64

Observe que no planteo enseñar todas las habi-lidades de una categoría al mismo tiempo. Porejemplo, primero enseñaría la técnica de conduc-ción y luego la del pase. Después enseñaría dosformas de recibir la pelota seguidas de otras técni-cas de pase, y así sucesivamente. Posteriormenteenseñaría cómo fintar cuando se da el conduc-ción, se da el pase o al moverse para desmarcarsesin la pelota.

Prosiga ahora estimando el número de minutosque cree necesarios en principio para enseñar estamateria. Su estimación tendría que hacerse sobreel tiempo asignado para presentar inicialmente lamateria y ponerla en práctica en esa temporada.No es el tiempo necesario en entrenamientos pos-teriores para dominar la habilidad. Sin saber mássobre los deportistas, no puedo planificar con pre-cisión cuánto tiempo de entrenamiento necesita-rán para conseguir la meta fijada.

Ahora que he elaborado la secuencia y dedica-do tiempo para la materia en cada objetivo, deboplanificar cuándo voy a presentar el material en eltranscurso de la temporada. Para hacerlo tengoque echar un vistazo a la secuencia de la discipli-na para cada meta, luego decidir lo que los juga-dores necesitan saber en primer, segundo y tercerlugar, y así sucesivamente. Más abajo muestrocómo he secuenciado la materia para el grupo defútbol. Observe que inicialmente hago hincapié enlas reglas y las condiciones, paso a la enseñanzade las técnicas individuales y luego introduzco losconceptos de grupo. Éste, pues, es mi proyectogeneral para la enseñanza en el transcurso de latemporada de fútbol: mi planificación de la tempo-rada.

Secuencia de instrucciones para una temporada de fútbol

1. Perspectivas de éxito y modo de afrontar elfracaso.

2. Motivación intrínseca.3. Prevención de las enfermedades y las lesio-

nes, y cuidados.4. Principios básicos del entrenamiento.5. Conducción.6. Recepción y control7. Pase.8. Dimensiones del campo y señalización.9. Nombres según posición y cometidos.

10. Fintas.11. Elementos del juego.12. Remate de cabeza.13. Tirar (incluyendo el remate de cabeza).

14. Faltas mayores y menores.15. Deportividad.16. Respeto.17. Marcar a un rival con y sin la pelota.18. Desmarcarse sin la pelota.19. Elementos de una dieta equilibrada.20. Ingesta de agua y comidas previas y poste-

riores al partido.21. Entradas con tackling y tackling al suelo.22. Fijar objetivos.23. Estrategias ofensivas.24. Trabajo en grupo.25. Formaciones ofensivas.26. Componentes de la condición física.27. Equilibrio energético, sueño y descanso.28. Tipos de defensas.29. Defensas contra ciertas formaciones ofensi-

vas.30. Confianza.31. Composición del cuerpo y peso.32. Serie de jugadas ofensivas.33. Conceptos de la condición física aeróbica.34. Métodos para afrontar el estrés físico.35. Métodos para afrontar el estrés psíquico.36. Drogas y sus efectos en la salud y el rendi-

miento.

Recuerde, la lista que acaba de elaborar reflejael orden en el que inicialmente introducirá y ense-ñará cada concepto o técnica. Cada uno será tra-tado repetidamente a lo largo de la temporada.Tenga en cuenta que los atletas aprenden las ha-bilidades y mejoran el rendimiento mediante lareiteración, no en un entrenamiento único, sinoen ejercicios a lo largo de toda la temporada. Portanto, un punto puede constituir sólo una peque-ña parte de los entrenamientos de una jornada, opuede representar todo el énfasis de un ejercicio.Eso dependerá de su planificación. Finalmente,trate de equilibrar la actividad física con la mental.Aunque los deportistas necesitan tener conoci-mientos sobre diversos conceptos, evite la tenta-ción de dar meras conferencias. Los atletas songente activa. ¡Consiga que los entrenamientos si-gan estando llenos de variedad y actividad!

Siga los tres pasos –establecer metas de forma-ción, seleccionar la materia y secuenciar la disci-plina– y dispondrá de una buena planificaciónpara la temporada. Aunque le lleve algún tiempo,puede comprobar que no resulta tan difícil y reco-brará sobradamente ese tiempo cuando esté pla-nificando los ejercicios más adelante. Si ésta es suprimera planificación de la temporada, y en espe-cial si es su primera temporada entrenando, no esfácil que la planificación sea perfecta. Pero le pro-

Planificando la enseñanza 65

Parte III 057-088 18/4/02 14:35 Página 65

porciona una aproximación organizada y unamanera sistemática de refinar la planificación se-gún transcurre la temporada y para futuras tem-poradas. Ahora explicaré los dos pasos finalespara planificar la formación, de modo que estépreparado para los primeros entrenamientos.

Paso 4. Evaluar las habilidades y conocimientos

de los atletas previos a latemporada

La enseñanza idónea conlleva individualizar laformación. Para hacerlo así, tiene que saber cuálesson las habilidades y los conocimientos de losdeportistas al comienzo de la temporada. Podráentonces desarrollar los planes de entrenamientoapropiados. Asimismo, puede que esté entrenandoen una situación en la que no puede quedarse contodos los que quisieran jugar en el grupo. La eva-luación inicial es una manera de seleccionar aaquellos jugadores a los que desea conservar. Laevaluación resulta útil también si es usted respon-sable de la organización de competiciones por gru-po o individuales y quiere emparejar jugadores o

grupos según sus habilidades y conocimientos paraconseguir una competición segura y equitativa.

Muchos entrenadores evitan la evaluación de lapretemporada. No quieren dedicarle tiempo o nosaben cómo hacerlo. Además, sin una planifica-ción para la temporada realmente no saben quéevaluar. Completando los tres primeros pasos dela planificación de la temporada ahora ya sabe quéevaluar: las técnicas iniciales que va a enseñar olos prerrequisitos necesarios para esta técnicasiniciales. Y le mostraré cómo evaluar empleandouna tabla sencilla. He elaborado una tabla de eva-luación utilizando el objetivo técnico del ejemplofutbolístico (consulte la Tabla 7.1). Puede adaptarfácilmente este ejemplo a los demás objetivos desu deporte. Sugiero la escala clasificatoria de aba-jo para evaluar cada componente.

¿Qué evaluar?

No resulta práctico evaluar toda la materia queha enumerado para cada meta de formación. Dehecho, es probable que una porción de la materiaresulte tan avanzada (a ser aprendida por los atle-tas más adelante en la temporada) que en algunosdeportes resultaría peligroso hacer que los jugado-res traten de ejecutar estas habilidades.

El entrenador de éxito66

Escala clasificatoria5 = Muy bueno.4 = Por encima de la media.3 = Mediano.2 = Por debajo de la media.1 = Muy pobre/incapaz deejecutarla.NA = No es Aplicable.

Tabla 7.1 Clasificación de las habilidades seleccionadas para la Meta 1. Técnica.

Nombre de los jugadores

Materia

Conducción

Pase

Recepción y control

Finta

Tiro

Remate de cabeza (pase/tiro)

Marcaje

Entradas (tackling)

Puntuación total

Total del grupo Promedio del grupo

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Así pues, lo que he hecho en los ejemplos, y loque ha de hacer usted, es seleccionar las técnicasbásicas y lo más esencial de la materia que puedaser evaluado con certeza, a fin de determinar elgrado de competencia de cada deportista.

Si está entrenando en un nivel más avanzado,tal vez necesite identificar las habilidades previasque deben ser dominadas antes de que una perso-na pueda participar en este nivel avanzado, puesusted no las va a enseñar. Esto es muy común endeportes como la gimnasia, los saltos de trampolíny el patinaje artístico.

¿Cómo evaluar?

Puede dirigir esta evaluación de pretemporadade dos formas. Primera, puede dirigir un progra-ma formal de pruebas en el cual organiza a losatletas para que ejecuten cada una de las técnicasy les somete a exámenes escritos u orales. O pue-de evaluarles de modo más informal, mediante laobservación y la charla con los atletas con el pró-posito de hacerse con datos suficientes como pararealizar una valoración razonablemente precisa.Tiene que seleccionar el método que mejor se ade-cue a su situación.

Si esta es la primera vez que está utilizandouna planificación para la temporada, recomiendoque emplee el método informal. No es el más preci-so, pero es razonablemente bueno y práctico. Cier-tamente es mejor que no hacer ninguna evalua-ción. Tras entrenar una temporada o dos, puedetratar de realizar métodos más avanzados de eva-luación.

Paso 5. Planificación de los entrenamientos

La evaluación de pretemporada le indicarámucho sobre el modo de planificar los entrena-mientos. Estará más informado sobre lo que sabeny no saben los deportistas, sobre la disparidad dehabilidades y conocimientos en el grupo, y sobre loque tiene que resaltar en los entrenamientos. Dehecho, según analice los resultados de la evalua-ción, puede desear modificar una parte de la mate-ria y el orden en el que había proyectado enseñarlaen la planificación de la temporada.

Saque ahora la agenda diaria. Con respecto acada meta, resalte un punto y elija un día de prác-ticas para su enseñanza. Anótelo en su agenda,como se muestra en la Figura 7.2. Repítalo concada punto que quiera enseñar, trabajando desdeel extremo superior de la lista hacia abajo.

Ahora ya estará preparado para desarrollar pla-nificaciones de entrenamientos para cada una deesas jornadas. Sugiero que planifique solamenteuno o dos entrenamientos por anticipado, porquehabrá de tener en cuenta las incidencias del entre-namiento anterior, lo que ha observado y lo que losdeportistas y los entrenadores asistentes le indican.

Los elementos básicos de una planificación delos entrenamientos son éstos:

• Fecha.• Objetivo de los entrenamientos.• Equipamiento necesario.• Actividades prácticas.• Calentamiento.• Práctica de técnicas enseñadas con anteriori-

dad.• Enseñanza y práctica de nuevas habilidades.• Práctica en condiciones de competición.• Vuelta a la calma.• Comentarios del entrenador.• Evaluación del entreno.

Fecha

Registre la fecha de forma que sepa cuándoenseñó y practicó determinadas habilidades. Estole será de ayuda una vez concluida la temporada,cuando esté valorando y revisando la planificaciónde la temporada.

Objetivos del entrenamiento

Enuncie sucintamente lo que quiere que losatletas sepan o sean capaces de hacer como resul-tado de esta sesión.

Planificando la enseñanza 67

¡NO ESTÁ MAL PARASER UN SALTO DEPRETEMPORADA!

Parte III 057-088 18/4/02 14:35 Página 67

Equipamiento

Haga una lista del equipamiento (p. ej., colcho-netas, bolas, bates) que necesitará para dirigir unentrenamiento. Antes del mismo, compruebe elequipamiento que piensa utilizar para asegurarsede que es seguro, está limpio y funciona. Asimis-mo, lleve a cabo cualquier arreglo especial querequieran las instalaciones.

Actividades prácticasLas actividades comunes de una sesión de

entrenamiento y el orden en el que suelen produ-cirse se explican más abajo. Utilice la guía comouna referencia. En ocasiones, sin embargo, puedeno emplear todas estas partes o seguir el ordenque se muestra.

Debería confeccionar un calendario para cadaparte de la sesión, que le ayude a distribuir eltiempo eficientemente y a conseguir el objetivo delentrenamiento. Pero no tema hacer ajustes en elcalendario según avanza la sesión. Los deportistastal vez necesiten más tiempo ejercitándose del queusted ha asignado para dominar una técnica difí-cil. O quizá todos parezcan haberse estancado ytenga que incluir algo nuevo para motivarles.

Calentamiento

Cada práctica tendría que comenzar con uncalentamiento que ocupe 10 ó 15 minutos. Supropósito y función fisiológicos en la prevenciónde lesiones son analizados en el capítulo 11.

Practicar habilidades enseñadasanteriormente

Las técnicas que han sido enseñadas previa-mente, en especial aquellas en las que los atletas

necesitan mejorar, deberían ser ejercitadas duran-te este período, cuya duración suele ser de 20 a 40minutos. Esta práctica a menudo adoptará la for-ma de ejercicios que usted ha elaborado u obteni-do de otras fuentes. Los ejercicios tendrían que sereficaces para el aprendizaje de la habilidad, diver-tidos y seguros (consulte el capítulo 9).

Es conveniente dejar que el grupo colabore enla elaboración de los ejercicios ocasionalmente;practicarán más a fondo cuando compartan lapropiedad de un ejercicio. Sea tan creativo comopueda para impedir que éstos se vuelvan monóto-nos. Los atletas aprenden poco si simplemente re-piten los movimientos de un ejercicio con la menteajena a lo que están haciendo.

Es buena idea dedicar algún tiempo de este pe-ríodo para que los deportistas individualicen susentrenamientos. Simplemente, hágales practicaraquellas habilidades en las que necesitan trabajarmás. Permítales practicar las técnicas de la mane-ra que deseen, dando por hecho que es segura yeficaz para el aprendizaje.

Enseñanza y práctica de nuevashabilidades

Esta parte de la sesión suele durar entre 20 y30 minutos. Normalmente, sólo las técnicas prin-cipales se enseñan en una sesión única. Los pasospara mostrar una técnica nueva se encuentran enel capítulo 9.

Entrenar en condiciones de competición

Esta parte de la sesión de entrenamientos de-bería terminar en un clímax y estar dedicada a lapráctica de las habilidades en un enfrentamientosimulado. A principios de la temporada, puede de-

El entrenador de éxito68

29 30 1 2 3Sesión 6 Sesión 7 Sesión 8 Sesión 9 Sesión 10Reglamento Física Técnica Mental Táctica

– faltas menores y – elementos de una – entradas con tackling – fijar metas (tipos – estrategiasmayores. dieta equilibrada. y tackling al suelo. de metas y directrices). ofensivas

– ingesta de agua. (espaciosde losjugadores con ventaja).

Moral– deportividad.– respeto

Lunes Martes Miércoles Jueves Viernes

Figura 7.2 Ejemplo de agenda diaria para una semana de la temporada.

Parte III 057-088 18/4/02 14:35 Página 68

dicar sólo 20 minutos a esta fase de los ejercicios,pero según progresa la temporada piense en dedi-car tanto como 40 minutos a ella. Esta fase de lasesión no es un tiempo en el que se deja jugar a losdeportistas. Debe usted dirigir y controlar su jue-go para lograr objetivos específicos. La dirección yel control mencionados, sin embargo, no tendríanque resultar agobiantes, y debería concederles devez en cuando la posibilidad de jugar sin interrup-ciones.

Vuelta a la calma

Al igual que cada entrenamiento comienza conun calentamiento, la porción de actividad de lapráctica tendría que concluir con una vuelta a lacalma. (Consulte el capítulo 11 para obtener másinformación sobre cómo volver a la calma correc-tamente.)

Comentarios del entrenador

Empléelos con una duración de 5 a 15 minutospara uno o más de los siguientes propósitos.

• Revisar cómo ha sido el entrenamiento del gru-po, dirigiendo sus comentarios al grupo en vezde a jugadores concretos. Indíqueles lo que tie-nen que mejorar aún. Felicíteles por sus esfuer-zos y por lo que han hecho bien.

• De manera informal, impártales una lecciónmental o moral recordando y comentando algún

incidente que se haya producido durante elentrenamiento. Puede destacar un hecho de de-portividad notable o deficiente y cómo encaja elmismo en sus metas de formación moral. Nor-malmente, encontrará atletas más receptivos aeste tipo de información si se abstiene de darsermones y, en su lugar, fomenta la discusiónformulando buenas preguntas.

• Informe al grupo del momento y el lugar de lasiguiente sesión de prácticas, y refiérales breve-mente lo que pretende hacer. Puede incluso pe-dir sugerencias al grupo.

Evaluación de la sesión de entrenamiento

Evalúe cada sesión de ejercicios tan prontocomo sea posible una vez que haya concluido.Indique si los objetivos de rendimiento se hancumplido o no. Considere las sugerencias de losdeportistas y pida a los entrenadores asistentesque aporten sus indicaciones a esta evaluación.Luego archive cada planificación de los entrena-mientos en un cuaderno de anillas. Encontraráque estas planificaciones son de gran utilidadcuando esté proyectando la siguiente temporada.

Un formato para la planificación de los entrena-mientos que goza de popularidad entre gran núme-ro de entrenadores es el que se muestra al final dela página 70. La muestra contiene todos los elemen-tos que acabamos de revisar más columnas paralos puntos clave a enseñar y los ejercicios.

Lista para la planificación

Analice la situación.––– Entrenadores asistentes: número, historial,

filosofía.––– Personal de apoyo restante: médico del grupo,

preparador físico, etc.––– Jugadores: número, elegibilidad, edad, desa-

rrollo físico.––– Recursos para la formación: libros, vídeos, etc.––– Instalaciones: ubicación, disponibilidad, man-

tenimiento.––– Equipamiento: condiciones, cantidad, unifor-

mes, etc.

Seleccione la agenda diaria.––– Elija el estilo que mejor se adecua a la situa-

ción.––– Anote la fecha de los entrenamientos.––– Anote la fecha de los partidos.––– Anote cualquier día de fiesta que afecte al ca-

lendario.

Planificando la enseñanza 69

LA ENTRENADORASE PONE EUFÓRICACUANDO HACEMOSUNA BUENAPRÁCTICA. ¡SÍ!

Parte III 057-088 18/4/02 14:35 Página 69

Establezca metas de formación.––– Técnicas.––– Tácticas.––– Reglamento.––– Físicas. ––– Mentales.––– Morales.

Seleccione la materia para las metas.––– Habilidades.––– Subcomponentes de las habilidades.––– Cotejo de las mismas.

Organice la materia para la enseñanza.––– Habilidades básicas.––– Habilidades necesarias para la competición.––– Cantidad de tiempo para iniciar la enseñanza.––– Secuencia.

Evalúe las habilidades y los conocimientos delos atletas en la pretemporada––– Escala clasificatoria.––– Método de valoración.––– Resultados.

Transfiera la planificación de la temporada a laagenda diaria.

Elabore planes para los entrenamientos.

––– Registre la fecha.––– Anote los objetivos de rendimiento.––– Identifique y compruebe el equipamiento nece-

sario.––– Consideraciones para la planificación de los

entrenamientos:Uso máximo de las instalaciones y el equipa-miento.Contribuciones de los entrenadores asistentes.Aportaciones de los deportistas.Disfrute de un poco de éxito por parte de cadaatleta.Debilidades de los deportistas.Desgaste físico de los atletas.Creando condiciones similares a la competi-ción.Diversión para los atletas.

––– Preparar el reparto del tiempo:Calentamiento.Práctica de habilidades enseñadas con an-terioridad.Enseñanza y práctica de nuevas técnicas.Práctica en condiciones de competición.Vuelta a la calma.Comentarios del entrenador.Evaluación.

––– Reúnase con los entrenadores asistentes paradiscutir la sesión de entrenamiento.

El entrenador de éxito70

Planificación de los entrenamientosFecha: 24 de Abril.

Objetivo de la sesión: Disposición táctica ofensiva de los jugadores y ataque con superioridad numérica.

Equipamiento: pelotas, sudaderas, conos.

Actividades prácticas:

Tiempo Actividad Puntos clave a enseñar Ejercicios

10 m Calentamiento. Comprobar asistencia; repasar el Estiramientos entrenamiento de hoy. y conducción

30 m Repaso y práctica Posición correcta; entrada a la pelota, Práctica de entradas tackling. no al jugador. Cuándo contenerse con un compañero;

y cuándo tirarse al suelo. entrada con35 m Enseñanza y práctica Percepción del campo del delantero y Al primer toque; 2

del ataque con reconocimiento de las situaciones; contra 1;superioridad lograr que el defensa se lance; 3 contra 2.numérica. demarcación correcta

(dispersión/profundidad); apoyo de los carrileros.

20 m Práctica de disputa Enfatizar las habilidades revisadas competitiva. y enseñadas hoy; hacer que participen

todos los jugadores.10 m Condición física. Enfatizar la velocidad y el control. Conducción en velocidad.10 m Vuelta a la calma y Comprobar si hay algún Estiramientos y carrera lenta.

recibir indicaciones. jugador lesionado.

Evaluación:

Parte III 057-088 18/4/02 14:35 Página 70

Entrenar es enseñar, y enseñar es ayudar a los deportistas a aprender. Serácapaz de enseñarles a aprender más si comprende mejor la manera en queaprenden. Y ése es el propósito de este capítulo.

¿Qué significa aprender?

Para prepararle de cara a una travesía por la mente del atleta es necesarioque aclare un par de términos utilizados a menudo en este libro: habilidad yrendimiento. Entonces definiré qué es aprender.

Habilidad posee dos significados. Puede referirse a una tarea. Por ejemplo,podría decir, “La habilidad de disparar con rifle es infravalorada en el mundo deldeporte.” Se podría sustituir fácilmente la palabra tarea por habilidad en estafrase. Habilidad también puede referirse a la cualidad del rendimiento motriz deuna persona. Cuando digo, “Demuestra tener una excelente habilidad comotiradora,” empleo habilidad para referirme a la cualidad del rendimiento de latiradora. Si hubiera la posibilidad de confundir ambos significados, usaría tareapara expresar la primera acepción.

El rendimiento es una conducta observable que demuestra una habilidad(calidad del rendimiento), como lanzar, golpear, deslizarse, atrapar y demás.

El aprendizaje equivale a una mejora relativamente duradera en la capaci-dad de rendir que surge de la práctica. Dado que el aprendizaje no es directa-mente observable (se trata de un cambio interno), debe ser inferido a partir delos cambios en el rendimiento a lo largo del tiempo. Dado que otros factores,además del aprendizaje, pueden provocar cambios en el rendimiento, no siem-pre resulta fácil saber si un deportista ha aprendido realmente una habilidad(tarea). A veces, un atleta puede llevar a cabo una ejecución excepcionalmentebuena debido sobre todo a la suerte, o deficiente a causa de una pérdida deconcentración. La clave para saber si el aprendizaje ha tenido lugar consiste enque la mejora de el rendimiento sea relativamente duradera.

Capítulo 8

Cómo aprenden los atletas

Parte III 057-088 18/4/02 14:35 Página 71

Del esquema a los programas motores

¿Qué ocurre exactamente en el cerebro del atle-ta cuando éste aprende complejas habilidadesdeportivas? Se creía que los atletas aprendían lashabilidades desarrollando esquemas mentalesque se generaban mediante la práctica repetida dela tarea. Esta explicación daba cuenta de las habi-lidades muy simples, pero según estudiaban loscientíficos habilidades muy complejas, como eltiro a canasta en baloncesto, el lanzamiento enbéisbol y la volea en tenis, se percataron de queestas tareas constaban en realidad de muchasrespuestas distintas de un tipo similar.

Considerando que cada esquema mental seráútil sólo cuando sean idénticas las condiciones enlas que una habilidad es ejecutada, harían faltamiles, tal vez millones, de esquemas para ejecutarbien las habilidades cuando se compite. Auncuando el cerebro pudiera alojar tantos esquemas,no lograría seleccionar constantemente los patro-nes idóneos que vendrían a satisfacer la cambian-te situación en la disputa de un partido.

Abstrayendo reglas

En la actualidad, los científicos creen que losatletas aprenden complejas habilidades motorasde una manera muy distinta. Abstraen piezas cla-ve de información de cada ejecución para crearreglas sobre el rendimiento de cara al futuro. Éstees un modo mucho más eficiente de afrontar las

muchas variaciones que son posibles con respectoa las habilidades deportivas complejas.

Este proceso de abstraer información de expe-riencias concretas para crear reglas que guíen laconducta futura es la manera en que los humanosaprendemos muchas cosas. Constituye una facul-tad única de nuestro cerebro. Por ejemplo, alaprender el lenguaje, de forma que pueda ahoraleer este libro, no aprendes cada combinación po-sible de palabras para entender su significado (lahipótesis del esquema). En cambio, has aprendidoel lenguaje llegando a comprender una serie denormas que permiten usar las palabras de unamanera mucho más funcional y creativa.

Cada vez que los deportistas ejecutan habilida-des complejas, sus cerebros tratarán de abstraercuatro tipos de información sobre el movimiento.Éstas son las siguientes:

• Las condiciones del entorno y la posición desdela que se inicia el movimiento.

• Las exigencias del movimiento que se está eje-cutando, como la velocidad, la dirección y lafuerza.

• Las consecuencias del modo en que son percibi-das por los sentidos durante el movimiento ydespués del mismo.

• Una comparación del resultado real con el pre-visto según las indicaciones disponibles (infor-mación que les asesora sobre lo bien que estánrealizando la tarea).

Programa motor

Según los atletas prosiguen con los entrena-mientos, empleando las indicaciones para ajustarsus gestos, estas piezas abstraídas de informaciónson compendiadas para elaborar las reglas gene-rales en lo que es denominado un programa motor.Un programa motor consiste en un conjunto com-plejo de reglas que, cuando son llevadas a cabo,permiten que los atletas generen movimiento. Unavez que se inicia el movimiento, el patrón básico dela acción es realizado, aun cuando haya podidoser seleccionado el movimiento erróneo. Puedenaplicarse ajustes menores en la pauta básica delmovimiento, pero la pauta misma no puede sermodificada.

Por ejemplo, si trata de batear una bola lanzadaen béisbol, una vez que ha iniciado el movimientocompletará la acción básica, aun cuando más ade-lante vea que la bola está fuera de la zona de bateo.Comúnmente se creía que una vez iniciado el pro-grama motor, no se podían hacer ajustes menoresen el movimiento en respuesta a los datos observa-

El entrenador de éxito72

Parte III 057-088 18/4/02 14:35 Página 72

dos. Las evidencias demuestran ahora que sonposibles respuestas menores. Por tanto, si ve quela bola se va a salir de la zona de bateo, puede ajus-tar el movimiento para darle alcance.

Este programa motor, recuerde, es únicamenteel plan general de un movimiento; permite al atletarealizar difíciles maniobras de habilidad. Parahacer realmente el movimiento correcto, hay queañadir los detalles de la situación particular. En elbéisbol, por ejemplo, el programa motor permitegolpear diestramente una bola lanzada con rapi-dez, pero para batear un lanzamiento concreto de-bes determinar su velocidad y ubicación exactas.

Una de sus responsabilidades principales comoentrenador consiste pues en ayudar a los depor-tistas a desarrollar unos buenos programas moto-res. Muchos factores influyen en el aprendizaje delos programas motores: las características delatleta al que entrena (como su grado de madurez yexperiencia), su inteligencia motora y cognitiva, sucapacidad de atención y su motivación. El apren-dizaje de los deportistas también se verá muy afec-tado por lo que usted hace, por cómo enseña,cómo organiza los entrenamientos y cómo propor-ciona indicaciones. En el capítulo 9 aprenderámuchas cosas prácticas para mejorar el aprendi-zaje de los atletas y mejorar su magisterio.

Aprendiendo a hacer juegos malabares

Ahora posee una buena comprensión básica decómo aprenden los deportistas las habilidadesmotoras. ¿Cuándo fue la última vez que enseñóuna nueva habilidad? Tal vez haga mucho tiempo yse ha olvidado de en qué consiste aprender. Vamosa convertirle en atleta de nuevo, y yo seré el entre-nador. Voy a enseñarle a hacer juegos malabares.

Voy a suponer que nunca ha hecho malabaris-mos y que nunca ha visto a nadie hacerlos. ¿Quénecesita que yo haga para ayudarle a aprenderesta habilidad? La respuesta es obvia, por supues-to. La primera cosa que necesita es que le expliqueo demuestre el acto de hacer juegos malabares deforma que pueda saber lo que tiene que aprender.

Según empiece a practicar malabarismos, ne-cesitará también feedback sensorial, informaciónde los sentidos que le indica lo bien que está reali-zando la tarea. Por ejemplo, puede ver que estádejando caer bolas repetidamente o que no posee lasensación de cuán alto lanzarlas. No necesita que legrite al oído, “Eh, torpe, te estás haciendo un lío.”

Ésta es una cuestión importante al entrenar.Tiene que proporcionar a los atletas indicacionescuando para sus sentidos ya es evidente que están

cometiendo errores. Inversamente, resulta útil su-ministrarles reforzamiento positivo cuando sussentidos les indican que lo están haciendo correc-tamente.

En las primeras etapas del aprendizaje, el feed-back sensorial suele no ser información suficientepara optimizar el aprendizaje. Por tanto, comoentrenador suyo, puedo proporcionarle indicacio-nes útiles para ayudarle a aprender más deprisa.Por ejemplo, puedo destacar que usted no deberíatratar de fijar la vista en una bola, sino manteneruna visión de conjunto de las tres bolas. (Tendríaque resaltar también que mucha gente aprende ahacer malabarismos sin un entrenador, pero conun buen entrenador aprenderían a hacer juegosmalabares mejor, más deprisa.)

Las tres etapas del aprendizaje

Según se ejercite y conmigo como entrenador,por supuesto, pasará de ser un malabarista princi-piante a ser un experto (así lo esperamos). Al hacer-lo, transitará por las tres etapas del aprendizaje:mental, práctica y automática. Estas tres etapasaparecen ilustradas en la Figura 8.1 como un conti-nuo del aprendizaje. Es importante que comprendaestas tres etapas del aprendizaje, porque cada unarequiere diferentes estrategias de enseñanza.

Cómo aprenden los atletas 73

TRATA DE NOFIJAR LA VISTA ENNINGUNA BOLA.

Etapamental

Etapapráctica

Etapa deautomatización

Figura 8.1 Etapas del aprendizaje.

Parte III 057-088 18/4/02 14:35 Página 73

Etapa mental

Cuando empieza a aprender a hacer malabaris-mos, su objetivo es comprender lo que se requierepara ejecutar la habilidad correctamente. Llevarloa cabo implica una gran cantidad de actividadmental, según busca un esquema mental de latécnica y la estrategia correctas. Es por ello que laetapa inicial del aprendizaje es denominada etapamental.

Para ayudarle a aprender la técnica del mala-barismo debo encontrar una manera de ayudarlea comprender la secuencia de los componentes delmalabarismo. Puedo llevarlo a cabo mejor median-te la demostración y la explicación. A partir de miexperiencia como entrenador de juegos malaba-res, he aprendido que algunas personas puedenasimilar los elementos básicos en sólo unos cuan-tos minutos y a otras les lleva bastante más. (Conrespecto a quienes lo aprenden rápidamente, meatribuyo el mérito de su éxito reconociendo misincomparables capacidades como educador. Conrespecto a quienes aprenden despacio, tiendo aatribuirlo a sus inferiores capacidades para elaprendizaje.)

En realidad, me consta que obtengo mejoresresultados cuando tomo la precaución de no ense-ñar demasiado durante esta etapa mental, puesresulta fácil sobrecargar los circuitos del aprendi-zaje. No obstante, a menudo siento la tentación dehacerlo, porque soy muy bueno haciendo malaba-rismos y se me presenta la oportunidad de mos-trar lo que sé. Asimismo, a veces me pongo impa-ciente y trato de ir más deprisa de lo que usted escapaz de aprender.

Quizás sea necesario que me recuerde que vayadespacio y que sea paciente. Mi meta, mientrasusted está practicando durante esta etapa mentaltendría que ser ayudarle a desarrollar un buenproyecto para lo que necesita realizar.

Etapa práctica

La siguiente etapa del aprendizaje es denomi-nada etapa práctica. Ello no significa que usted nohaya practicado durante la etapa mental, pues lohizo, pero ahora el énfasis recae en la calidad delos entrenamientos para refinar la técnica. Pasarámucho más tiempo en esta etapa que el que invir-tió en la mental.

Durante esta etapa la energía mental necesariaserá menor, y su actividad mental cambiará de unénfasis en el aprendizaje de la secuencia de movi-mientos al perfeccionamiento de la sincronizacióny la coordinación de cada fase de la secuencia del

malabarismo. Según aprende los fundamentosbásicos o mecánicos, no sólo los errores disminu-yen, sino que el rendimiento se vuelve más con-sistente (un buen signo de que el aprendizaje seestá produciendo).

El feedback sensorial y mis útiles indicacionestambién son muy importantes durante esta etapapráctica, pero al hilo de los entrenamientos ustedmejorará progresivamente en la detección de suspropios errores. Esta importante capacidad le per-mite realizar sus propios ajustes según practica.

Mientras le entreno durante esta fase, meconsta que no es la cantidad de los entrenamien-tos sino la calidad de los mimos lo que incremen-tará el promedio de aprendizaje. Así pues, es nece-sario que realice finos ajustes en la frecuencia desus prácticas, la duración que deben tener ycuándo pasar a habilidades malabares más avan-zados. He descubierto que lo mejor es que trabajecon usted en vez de dictárselo, pues tengo la nece-sidad de considerar su capacidad de aprendizaje,su motivación y su fatiga. Puedo realizar todosestos juicios mejor con su cooperación que sinella.

Etapa de la automatización

Según continúa practicando los juegos mala-bares, la habilidad se vuelve más y más automáti-ca. En consecuencia, libera más capacidad men-tal, que podrá utilizar para centrarse en los ele-mentos más críticos del malabarismo a fin delograr una ejecución superior o de añadir una gra-cia especial o estilo.

En la fase de automatización, el rendimiento delos malabarismos es muy segura y, cuando come-te un error, frecuentemente sabe qué hacer paracorregir el problema. De hecho, en la etapa deautomatización, pensar en los malabarismos has-ta el punto de sobreanalizarlos es probable queperjudique el rendimiento. La técnica está ahoratan automatizada que cuando empieza a analizar-la durante su realización, provoca un trastorno enlo que está haciendo. Es por ello que a veces pue-do decirle que deje de pensar y deje que ocurra.

Mi cambiante papel de entrenador

Cuando se adentre en la etapa de automatiza-ción del aprendizaje de una habilidad, mi papel deentrenador se vuelve muy distinto del que desem-peñaba en las primeras etapas. En lugar de tener

El entrenador de éxito74

Parte III 057-088 18/4/02 14:35 Página 74

que decidir continuamente cómo debería mejorarel entrenamiento, es usted quien se hace más ymás responsable porque con frecuencia sabecuándo ha errado y, frecuentemente, por qué.Aunque las técnicas deportivas más complejasnunca son dominadas del todo, y aunque puedoser capaz de continuar ayudándole a aprender lascuestiones más sutiles del malabarismo, mi papelde entrenador cambia sustancialmente de entre-nar-para-el-aprendizaje a entrenar-para-el-rendi-miento. Esta distinción resulta crucial y muchosentrenadores no logran efectuarla.

rregir sus fallos mediante indicaciones constructi-vas. En su lugar, meramente me ocupo de alentar-le para que aplique un esfuerzo mayor. Confundoel objetivo como entrenador.

O considere el error contrario. Cuando ustedactúa deficientemente en el campeonato, asumoque no ha dominado la técnica tan bien como yopensaba. En consecuencia, establezco un calen-dario intensivo de entrenamientos para impartirla habilidad exhaustivamente (quizás hasta elpunto de que usted llega a aburrirse completa-mente con los juegos malabares). Su problema,en realidad, era que sufría una ansiedad extremaen su primera competición. Yo no hago nada, porsupuesto, para ayudarle a afrontar su ansiedaden el futuro porque no identifico el problema. Denuevo, he dirigido mi labor como entrenador ha-cia el propósito equivocado y no le he ayudado aresolver su problema.

Tenga presente que un atleta que se encuentraen la etapa de automatización de una habilidadpuede hallarse en una etapa anterior de otra. Paraser un buen entrenador, debe ser capaz de deter-minar cuándo el problema presente requiere queentrene-para-el-aprendizaje o que entrene-para-el-rendimiento. Cuando los deportistas se encuen-tran en las primeras etapas del aprendizaje, ustednormalmente entrenará-para-el-aprendizaje, perono siempre. Cuando las técnicas de los atletas sehayan adentrado bastante en la etapa de automa-tización, la mayor parte de las veces tendrá queentrenar-para-el-rendimiento, pero eso tampocoes un absoluto. Cuando los deportistas se hallenen la etapa práctica del aprendizaje, resulta másdifícil determinar el papel correcto.

No tengo respuestas fáciles para ayudarle asaber qué papel como entrenador hay que desem-peñar en cada momento. La decisión requierebuen juicio y relaciones de cooperación con losdeportistas, de manera que ellos le hagan saber eltipo de ayuda que necesitan.

Examinando su aprendizaje

Resulta apropiado que este capítulo finalicecon un examen para ayudarle a evaluar lo que haaprendido sobre el aprendizaje. Responda cierto ofalso a las siguientes preguntas:

1. El término habilidad puede hacer referencia auna tarea o a la calidad de el rendimiento.

2. El aprendizaje puede ser inferido de la observa-ción de un atleta ejecutando una técnica unavez.

Cómo aprenden los atletas 75

¿QUÉ PAPEL DEBODESEMPEÑAR?

ENTR

ENAD

OR-P

ARA-

EL-R

ENDI

MIENT

O.

ENTR

ENAD

OR-P

ARA-

EL-A

PREN

DIZA

JE.

Cuando entreno-para-el-aprendizaje, me preo-cupan los problemas asociados con su aprendiza-je de cómo hacer algo nuevo. Cuando entreno-para-el-rendimiento, me preocupan los problemasasociados con la realización de algo que ya sabecómo hacer pero que, por alguna razón, no estáhaciendo. Si está sufriendo un problema deaprendizaje y yo entreno-para-el-aprendizaje, oestá sufriendo un problema de rendimiento y yoentreno-para-el-rendimiento, seré capaz de ayu-darle. Pero si confundo mis papeles y entreno-para-la-ejecución cuando lo que usted necesita esayuda con el aprendizaje, o si entreno-para-el-aprendizaje cuando usted necesita ayuda en elrendimiento, seré de poca utilidad.

Vamos a considerar dos escenarios. Participausted en un campeonato de juegos malabares y suactuación es deficiente. Incorrectamente, asumoque su actuación fue mala porque no es empleó afondo en vez de porque no sabe cómo ejecutar latécnica. (Tal vez no me siento inclinado a admitirun problema de aprendizaje porque ello me refle-jaría desfavorablemente como profesor). La conse-cuencia de mi error de juicio es que no invertirétiempo tratando de enseñarle la habilidad o de co-

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3. Son las reglas informativas abstractas en elcerebro, no los esquemas mentales, lo quepermite que los deportistas realicen comple-jas habilidades motoras.

4. Un tipo de información sobre el movimientoabstraída por los atletas es el resultado decomparar los resultados reales con los pre-vistos.

5. Un programa motor generalizado es lo queemplean los deportistas para respondercorrectamente a cada hecho particular.

6. Resulta imposible proporcionar a un atletademasiada información durante la etapamental del aprendizaje.

7. El énfasis tendría que recaer en la calidad,no en la cantidad, durante la etapa prácticadel aprendizaje.

8. Los deportistas, en la etapa de automatiza-ción del aprendizaje, ejecutan mejor lashabilidades cuando analizan detenidamentecada aspecto de sus ejecuciones.

9. El papel de los entrenadores cambia depen-diendo de qué etapa de aprendizaje hanalcanzado los atletas.

10. El enfoque entrenar-para-el-rendimiento esmejor normalmente para deportistas que sehallan en la etapa mental del aprendizaje dela técnica.

El entrenador de éxito76

Respuestas: 1 = Cierto; 2 = Falso; 3 = Cierto; 4= Cierto; 5 = Falso; 6 = Falso; 7 = Cierto; 8 = Falso;9 = Cierto; 10 = Falso.

Parte III 057-088 18/4/02 14:35 Página 76

En el capítulo 9 ha desarrollado usted una planificación para la temporadaque será su guía para saber qué enseñar y cuándo hacerlo. Ha aprendido cómoelaborar una planificación de entrenamientos de modo que pueda ser lo más efi-ciente posible al enseñar. En el capítulo 8 ha adquirido conocimientos sobre elmodo en que aprenden los atletas, información esencial para ayudarle a entre-nar de manera más provechosa por ser más eficaz como educador. Ahora yaestá preparado para impartir el primer entrenamiento y para enseñar la prime-ra técnica.

Este capítulo le ayudará a ser un entrenador eficiente al explicarle los cuatropasos de que consta la enseñanza de las habilidades deportivas. Aunque estecapítulo se centra en la enseñanza de la técnica, los principios fundamentalesde la instrucción son igualmente aplicables a la enseñanza de otras materias.Éstos son los cuatro pasos necesarios para enseñar las técnicas del deporte:

Paso 1: Presentar la habilidad.Paso 2: Hacer una demostración de la habilidad y explicarla brevemente.Paso 3: Practicar la habilidad.Paso 4: Proporcionar indicaciones para corregir errores.

El capítulo se cierra con un resumen a modo de evaluación, que le ayudará aevaluar su eficacia como instructor.

Paso 1: Presentar la habilidad

Presente la habilidad con entusiasmo expresado tanto en los actos y comolas palabras. Hable claramente y utilice un lenguaje que los atletas puedancomprender: cuanto más jóvenes sean los deportistas más sencillas han de sersus palabras. Sea breve, también. Diga lo que tenga que decir en menos de 3minutos. Evite el sarcasmo, manierismos fastidiosos y un lenguaje abusivo; cre-an un entorno de aprendizaje negativo.

Hay tres factores que conforman una buena introducción:

1. Consiga la atención del grupo.2. Disponga al grupo de forma que todos puedan ver y escuchar.3. Nombre la habilidad y dé una razón para aprenderla.

Capítulo 9

Enseñando las técnicas del deporte

Parte III 057-088 18/4/02 14:35 Página 77

Consiga la atención del grupo

Desarrolle una rutina común en los entrena-mientos para iniciar cada sesión de enseñanza.Diríjase a su lugar habitual para iniciar la sesión yhaga una señal, como usar un silbato, para conse-guir la atención de los deportistas. Sitúese de caraal grupo cuando les hable.

Si hay unos cuantos atletas que no prestanatención, míreles directamente, acérquese a ellosy, cortés pero firmemente, llámelos por su nombrey pídales que estén atentos. Si esto falla, despláce-los a donde no puedan estorbar la sesión. Hablecon estos deportistas en un momento oportunomás tarde durante los entrenamientos o posterior-mente. (Consulte el capítulo 5 sobre procedimien-tos para castigar a los atletas).

Disponga al grupo de forma que todos puedan ver y oír

Cuando hable con los deportistas, asegúrese deque los sitúa de modo que puedan verle y oírle. Siestán desperdigados o apelotonados, le resultarámucho más difícil mantenerlos atentos. La Figura9.1 muestra dos buenas formaciones de grupopara la enseñanza. Cerciórese de que el fondo quetiene tras de sí está libre de distracciones visualesy de que a los deportistas no les da el sol en lacara. Procure, asimismo, seleccionar una zona deentrenamiento con un mínimo de ruidos, de formaque éstos puedan oírle.

A A A A A

A A A A A A

A A A A A

Entrenador

A A AA A

A A A AA A A

A AEntrenador

A A

Figura 9.1 Disposiciones del grupo a utilizar durante lasdemostraciones.

Nombre la habilidad y dé una razón para aprenderla

Nombrar las habilidades es importante a fin depoder referirse a ellas rápidamente. Si una técnicaes ampliamente conocida por cierto nombre, úse-lo. Si no, elija una denominación corta, descripti-va, que sea fácil de recordar.

En ocasiones, el motivo para aprender una ha-bilidad no resulta obvio, especialmente para losatletas con poca experiencia. Cuantos más com-prendan por qué están aprendiendo una técnicaconcreta y cómo encaja ésta en el diseño total parala práctica de ese deporte, más fácil les resultaráelaborar un plan mental para aprenderla. Aumen-tará, también, su motivación para aprender por-que sabrán por qué se les pide que aprendan.

Paso 2: Demostrar y explicar la habilidad

Recuerde, como vio en el capítulo 8, que lademostración y la explicación son los métodos pri-marios para ayudar a los atletas a adquirir la pla-nificación mental de una técnica. La demostraciónde la habilidad debería hacerla alguien que puedaejecutarla notablemente y a quien los atletas res-peten por su valía en el deporte. Si no puede ustedhacer la demostración de una habilidad concreta,dispone de varias alternativas:

• Practique la técnica hasta que sea capaz de de-mostrarla correctamente.

• Pida a alguien con destreza que haga la demos-tración, quizás a un jugador del grupo conmayor pericia, a un entrenador asistente o a unamigo.

• Emplee una película o un vídeo para ilustrar lahabilidad.

Si ninguna de estas alternativas resulta facti-ble y no puede proporcionar una demostraciónadecuada, reconsidere seriamente la enseñanzade dicha técnica. Si existe algún riesgo de lesiónen el aprendizaje de esta habilidad, definitivamen-te no debería enseñarla.

Una demostración y explicación eficaces cons-tan de cuatro pasos:

1. Conseguir la atención de los deportistas.2. Demostrar y explicar.3. Referirse a técnicas aprendidas con anteriori-

dad.4. Comprobar que se entiende.

El entrenador de éxito78

Parte III 057-088 18/4/02 14:35 Página 78

Conseguir la atención de los deportistas

Prepare a los atletas para la demostraciónlogrando que presten atención. Indíqueles cómose hará la demostración y en qué han de fijarse.

Demostrar y explicar

Siga estas directrices para hacer la demostra-ción:

• Ilustre la técnica al completo, justamente comosería ejecutada en una competición.

• Repita la demostración varias veces, ilustrandocómo se realiza la habilidad desde distintosángulos.

• Si la técnica es ejecutada desde un lado domi-nante, ilústrela para “diestros” y “zurdos”.

• Si la habilidad es complicada, ilustre las partesprincipales separadamente.

• Si la técnica es ejecutada rápidamente, ilústrelaa menor velocidad, de modo que los deportistaspuedan ver con claridad la secuencia de movi-mientos.

Durante la demostración, también debería ex-plicar la técnica. Recuerde que a la mayoría de losatletas les resulta más difícil convertir palabras enuna planificación mental para realizar la técnicaque guiarse por la demostración. Siga estas direc-trices en sus explicaciones:

• Antes de la demostración, destaque uno o dosfactores importantes en los que han de fijarselos atletas.

• Que las explicaciones sigan siendo sencillas ybreves.

• Asegúrese de que la explicación concuerda conlo que está siendo ilustrado.

• Disponga la explicación con el objetivo de pre-parar a los deportistas para lo que van a ver opara reforzar lo que acaban de ver.

Relacionarla con habilidades aprendidascon anterioridad

Después de haber realizado la demostracióninicial, relaciónela con técnicas ya aprendidas.¿Por qué es esto importante? Como pudo ver en elcapítulo 8, los programas de motricidad para unahabilidad consisten en reglas generalizadas. Espor ello posible transferir algunas de estas reglaspara el movimiento a la nueva técnica que se estáaprendiendo. Por ejemplo, si está usted enseñan-do el saque en el tenis, indique y muestre a susdeportistas cómo son similares estos movimientosal lanzamiento de una bola.

Comprobar que se entiende

Indague ahora para comprobar que los atletasentienden cómo se ejecuta la habilidad invitándolesa hacer preguntas o formulándolas usted. Cuandose plantea una pregunta, repítala si es necesariopara que todos puedan oírla. Que las respuestassean cortas y relevantes. No empiece a explicartodos los matices de la técnica en este punto.

Paso 3: Práctica de la habilidad

Los deportistas tendrían que empezar a practi-car la habilidad tan pronto como sea posible, des-pués de la demostración y la explicación. Se plan-tea así una decisión crítica. ¿Practicarán los juga-

Enseñando las técnicas del deporte 79

Y ENTONCES...

¡ME PREGUNTO SI HE INTENTADOHACER DEMASIADAS COSAS!

Parte III 057-088 18/4/02 14:35 Página 79

dores la técnica como un todo o la dividirán enpartes? (Obviamente, tomará esta decisión cuan-do desarrolle la planificación de las prácticas, peropropongo la cuestión aquí porque es particular-mente relevante.)

Entrenamiento global contra analítico

El método del entrenamiento global resultaobvio. Toda la habilidad se lleva a cabo intacta. Elmétodo analítico equivale, en realidad, al métodoglobal-analítico-global. Enseña el método globalcomo ha sido bosquejado, lo practica analítica-mente y luego recombina las partes en el todomediante los ejercicios.

¿Cuál es el mejor método a emplear? Cuandosea posible, es mejor practicar la técnica al com-pleto para evitar invertir tiempo en combinar laspartes para formar el todo. Sin embargo, si lahabilidad es tan compleja que los deportistas nopueden desarrollar un buen plan mental (la pri-mera etapa del aprendizaje), entonces es mejor di-vidir la técnica en partes.

¿Cuándo dividir las técnicas en partes?

Para decidir si tiene que dividir la habilidad enpartes, tiene que evaluar la tarea según dosdimensiones: su complejidad y la interdependen-cia de las partes. Dos preguntas le ayudarán adeterminar la complejidad de la tarea, o cuán difí-cil puede resultar para un atleta desarrollar unbuen plan mental:

• ¿Cuántas partes comprenden la tarea?• ¿Cuánta dificultad mental implica la tarea?

A continuación, es necesario que valore cuáninterdependientes o independientes son las partesde la tarea. Es decir, cuán estrechamente estárelacionada una parte de la técnica con la siguien-te. Por ejemplo, en el saque del tenis puede sepa-rarse con gran facilidad el lanzamiento de la bola

con el marco de la raqueta. Pero resulta muy difícilseparar el marco de la raqueta y el contacto con lapelota con la conclusión.

Así pues, he aquí cómo decide si tiene que divi-dir en partes una habilidad al ejercitarla. Cuandola tarea es de poca complejidad y de gran interde-pendencia, es mejor practicarla como un todo. Encambio, el entrenamiento analítico es mejor cuan-do la tarea es muy compleja y de poca interdepen-dencia. Lo he ilustrado en la Figura 9.2, indicandocómo aplicaría yo estas reglas en el caso de algu-nas habilidades deportivas.

Puede observar que he enumerado sólo unahabilidad en la categoría del método analítico. Elloes debido a que pocas técnicas deportivas son depoca interdependencia. Sin embargo, un gran nú-mero de habilidades puede ser enseñado emplean-do una combinación de los métodos analítico yglobal.

Dónde dividirCuenta ahora con orientación sobre cuándo

dividir una habilidad en partes. Pero, ¿cómo sabedónde hacer las divisiones en la secuencia demovimientos? Ésta es otra decisión que debeaprender a tomar, tal vez con la ayuda de entrena-

El entrenador de éxito80

¿REALMENTE IMPORTACÓMO ENSEÑO?

Grande Interdependencia de las partes Pequeña

Método global Métodos global y analítico combinados Método analítico

Levantamiento de pesas Saque en tenis Secuencias de danzaTiro con arco Rutina de ejercicios de sueloLanzamiento Brazadas de nataciónCabecear un balón Swing en el golfCiclismo Lanzar una bola de béisbol

Bandeja en baloncesto

Pequeña Interdependencia de las partes Grande

Figura 9.2 La complejidad y la interdependencia determinan si las habilidades tienen que ser enseñadas por partes o como un todo.

Parte III 057-088 18/4/02 14:35 Página 80

dores más experimentados. En general, cuantomás interdependiente es el movimiento, más con-viene dejarlo intacto. Cuando analice una técnica,busque esos puntos en la maniobra que conllevanuna menor interdependencia, donde se produceuna transición de un tipo de movimiento a otro. Lamayoría de las habilidades tienen una fase de pre-paración, una fase de acción y una fase de conclu-sión. A menudo resulta posible separar las fasesde separación y de acción; no suele ser fácil reali-zar una separación entre las fases de acción y deconclusión.

Integrar las partes de nuevo en el todo

Dispone de diversas opciones a partir de lascuales seleccionar el modo específico en el que vaa enseñar una técnica dada. Estas opciones sólotienen el límite de su creatividad. Empecemosestudiando una manera de integrar las partes denuevo en el todo.

Progresión analítica. El hecho de que estédividiendo una técnica en partes no significa quedeba enseñar cada parte independientemente. Siun atleta ha logrado dominar unas cuantas partesde una habilidad, pero todavía necesitaba trabajaren otras, o si un deportista necesita trabajar en elensamblaje de las partes, puede usted seleccionareste enfoque. Para emplear el método de la progre-sión analítica, empiece haciendo que un atletapractique la primera parte de una habilidad. Lue-go, pase a la siguiente parte haciendo que el de-portista la practique junto con la primera parte.Progrese a lo largo de cada parte de la técnica has-ta que el deportista esté practicando finalmentetoda la habilidad.

Formas adicionales de enseñar las técnicas

En ocasiones, los atletas no habrán dominadosuficientes partes para que el enfoque de la pro-gresión analítica sea eficaz. En tales circunstan-cias, quizá desee que practiquen toda la habilidad.La simplificación y el centrar la atención puedenresultar formas eficaces de enseñar técnicas aestos atletas.

Simplificación. Un enfoque provechoso a lahora de enseñar consiste en simplificar la técnicaque hay que aprender. El atleta la practica al com-pleto, pero simplificada. Por ejemplo, los entrena-dores de béisbol con frecuencia eligen este enfoque

cuando ayudan a los jugadores a mejorar el golpecon el bate. En vez de batear tras un lanzamientoreal, los jugadores batean la bola proyectada poruna máquina. Este enfoque simplifica el procesode la práctica del bateo eliminando la variable dellanzamiento real, y permite que el deportista secentre más estrechamente en la mecánica de haceroscilar el bate. Una vez que la mecánica del bateoestá perfeccionada, entonces el jugador se ejercitagolpeando bolas lanzadas por un pitcher.

Focalizar la atención. Este enfoque impli-ca de nuevo practicar toda la técnica, pero a losjugadores se les instruye para que se concentrenúnicamente en un aspecto de la habilidad. Puedeinstruir a los lanzadores de disco, por ejemplo,para que ejerciten todo el movimiento, pero cen-trándose sólo en mantener el disco lo más alejadoposible del cuerpo según maniobran. Vale la penamencionar que este método tiende a funcionarmejor en atletas más habilidosos. Los que todavíaestán tratando de aprender los fundamentos deuna técnica pueden tener dificultades para cen-trarse en un único aspecto.

Principios de un entrenamiento mejor

Una vez que ha decidido si va a conducir elejercicio empleando el método global o el analíti-co-progresivo, tiene que determinar los métodosapropiados para entrenar. En muchos deportes,se utilizan los ejercicios para enseñar las partes dela habilidad y para recombinarlos en la técnicacompleta. Los siguientes principios son importan-tes para hacer que los entrenamientos resultenmás eficaces:

Principios del entrenamientoPrincipio 1: Ejercite la técnica correcta.Principio 2: Ejercite la técnica en condiciones simi-

lares a la competición tan pronto comolos atletas puedan hacerlo.

Principio 3: Haga que los entrenamientos sean cor-tos y frecuentes cuando enseñe nue-vas habilidades.

Principio 4: Emplee el tiempo de los entrenamien-tos con eficacia.

Principio 5: Haga un uso óptimo de las instalacio-nes y del equipamiento.

Principio 6: Cerciórese de que los deportistas dis-frutan de un grado razonable de éxitoen cada entrenamiento.

Principio 7: Haga que los entrenamientos sean di-vertidos.

Enseñando las técnicas del deporte 81

Parte III 057-088 18/4/02 14:35 Página 81

Vamos a profundizar en cada uno de los princi-pios.

Practicar la técnica correcta. Supongamosusted que me vio practicando un saque de voleiboly me dijo, “Oiga, ¿qué está haciendo?” Y supongaque yo le repliqué, “Pues, estoy aprendiendo ajugar a tenis.” ¿Qué pensaría usted? Suponga queluego dije, “Verá, he estado trabajando intensa-mente en esto, pero mi juego apenas está mejo-rando. ¿Tiene alguna sugerencia?” Creo que surespuesta sería obvia, “Si quiere aprender a jugara tenis, tiene que practicar el tenis,” proclamausted. Y, desde luego, tendría razón... y yo le daríalas gracias por llamarme idiota.

Utilizo este ejemplo para exagerar el principio.Uno de los errores más comunes en la concepciónde experiencias prácticas consiste en hacer quelos atletas realicen ejercicios que no les ayudan aaprender la habilidad en cuestión. En cambio, elejercicio requiere el aprendizaje de una técnicaúnica para ese ejercicio. ¿Qué enseña al jugadorde fútbol el correr a través de una serie de neumá-ticos o cuerdas? Mi respuesta es, la manera decorrer entre neumáticos y cuerdas, pero yo nuncahe visto neumáticos o cuerdas en el terreno dejuego durante un partido de fútbol.

Muchos entrenadores enseñan ejercicios con-cretos meramente porque sus entrenadores losutilizaban. Analice cuidadosamente los ejerciciosque emplea. Elija solamente aquellos que esperaque ayuden a los deportistas a aprender la habili-dad en cuestión. De lo contrario, puede que estémalgastando tiempo y esfuerzo haciendo que losatletas mejoren en la técnica equivocada.

Ejercite la habilidad en condiciones si-milares a la competición. Este principio estáestrechamente relacionado con el Principio 1. Elpropósito de muchos ejercicios es limitar la varie-dad de opciones a realizar y las respuestas a eje-cutar. Eso resulta útil cuando los deportistas es-tán aprendiendo técnicas complejas. Pero cuandose abusa de tales ejercicios y escasean las simula-ciones de la competición, los atletas no están pre-parados para llevar a cabo opciones y respuestasa las condiciones, rápidamente cambiantes, deun partido. Por ello, como ha podido ver en elPrincipio 1, cuantos más ejercicios simulen lascondiciones de la competición en las cuales lahabilidad será utilizada, más probable es que losdeportistas estén aprendiendo las técnicas ade-cuadas.

Para aplicar el Principio 2, también es impor-tante practicar la habilidad a la velocidad en queserá ejecutada durante la competición, asumiendoque pueda ser realizada con seguridad y con ungrado razonable de precisión. Con ello se produceun aprendizaje más rápido y eficaz que haciendohincapié en movimientos lentos, precisos, y au-mentando gradualmente la velocidad. Contraria-mente, si la habilidad requiere tanto velocidadcomo precisión, la práctica tendría que dar un én-fasis idéntico a ambas.

Para entrenar en condiciones similares a las dela competición, debe simular tres aspectos dife-rentes de la misma:

1. practicar las habilidades y estrategias en condi-ciones como las de la competición

2. simular el estado emocional alterado de la com-petición, de forma que los atletas se acostum-bren a habérselas con sus emociones, y

3. prepararse para afrontar cambios en el entorno,incluyendo cambios en el clima, distintos hora-rios de competición, niveles de ruidos y distrac-ciones visuales variables y, en algunos casos,cambios de altitud.

Haga que los entrenamientos sean cortosy frecuentes cuando enseñe nuevas técni-cas. Los deportistas, cuando aprenden una habi-lidad por primera vez, probablemente cometeránmuchos errores y se cansarán deprisa. Por tanto,la técnica ha de ser ejercitada con frecuencia, perono demasiado tiempo. Dicho de otro modo, cuan-do los atletas llevan a cabo un esfuerzo mental yfísico considerable para realizar una habilidad, elentrenamiento tiene que ser alternado con inter-valos de descanso o con la práctica de otra técnicaque haga uso de grupos musculares distintos yexija menos esfuerzo.

Emplee el tiempo de los entrenamientoscon eficacia. He aquí algunas pérdidas de tiem-po notables y una sugerencia o dos para mejorarel uso del tiempo:

Pérdidas de tiempoEjercicios en los que la mayoría de los atletas

pasan el tiempo esperando.El entrenador está hablando demasiado.Paso de una actividad a otra en el calendario de

prácticas.Ejercitar cosas que no ayudan a los deportistas

a jugar mejor a su deporte; seleccionar ejerciciosinútiles.

El entrenador de éxito82

Parte III 057-088 18/4/02 14:35 Página 82

Ahorro de tiempoReorganizar el ejercicio para que los atletas

estén más activos.Que las demostraciones, explicaciones e indi-

caciones sean concisas.Cerciórese de tener una planificación para

saber lo que hará a continuación, y desarrollerutinas que seguirán los atletas en el cambio deactividades.

No invierta demasiado tiempo en habilidadesque los deportistas ya conocen bien; trabaje en lasque necesitan una mayor mejoría.

Haga un uso óptimo de las instalaciones ydel equipamiento. Diseñe los ejercicios y lasformaciones prácticas para un uso eficaz de lasinstalaciones y del equipamiento. Plantéese no sóloel uso más intensivo, sino también el mejor uso.

Asegúrese de que los atletas disfrutande una cantidad razonable de éxito encada entrenamiento. Si ha fijado metas de for-mación realistas, como se trató en el capítulo 7, yha ayudado a los deportistas a establecer objetivospersonales realistas, como se trató en el capítulo6, el éxito no les resultará ajeno. Una manera idó-nea de incluir el éxito en cada entrenamiento con-siste en seleccionar las progresiones correctaspara el aprendizaje de las técnicas. Si hace que lospasos sean demasiado difíciles, entonces pocosatletas podrán alcanzar el éxito. Si éstos tienendificultades para ejecutar una habilidad correcta-mente, quizá sea mejor hacer un descanso o prac-ticar algún otro aspecto del deporte. Quizá inclusole convenga abandonar una nueva técnica com-pletamente y retomarla con frescura otro día. For-zar el proceso de aprendizaje suele acarrear el fra-caso y la frustración.

Haga que los entrenamientos sean di-vertidos. Evite las sesiones prácticas repetitivasy aburridas. Puede lograr que los entrenamientossean divertidos utilizando una variedad de ejer-cicios y reclamos. Cambiando el calendario deejercicios ocasionalmente, mostrándose entusias-ta, dejando que el grupo coopere en la planifica-ción de los entrenamientos y “jugando” durantelos entrenamientos al deporte de que se trate.

Paso 4: Corrija erroresEl entrenamiento solo no es suficiente para

aprender una técnica correctamente. Para que los

entrenamientos sean productivos, debe proporcio-nar a los atletas dos tipos de información paracorregir errores: (a) cómo ha sido el rendimientorealizado en comparación con el rendimiento de-seado y (b) cómo modificar una ejecución incorrec-ta para aproximarse más estrechamente al rendi-miento deseado. Ambos tipos de información reci-ben el nombre de feedback.

Comprender los errores

Los errores pueden ser de dos clases: errores deaprendizaje y errores de ejecución. Los errores deaprendizaje son los que se producen porque losatletas ignoran cómo realizar una técnica; es decir,todavía no han desarrollado el programa motorcorrecto. Los errores de ejecución son cometidos noporque los deportistas no sepan cómo realizar lahabilidad, sino porque cometen una equivocaciónal ejecutar lo que ya saben. Ésta puede estar cau-sada por la falta de atención o por un problemapsicológico de algún tipo. Como recordará del capí-tulo 8, debe ser capaz de distinguir los errores deaprendizaje de los de rendimiento a fin de valorar sisu papel es el de entrenar-para-el-aprendizaje oentrenar-para-el-rendimiento.

Observe y evalúe las ejecuciones

El proceso de ayudar a los atletas a corregir loserrores comienza con la observación y la evaluaciónde sus ejecuciones para determinar si los erroresson de aprendizaje o de rendimiento. Con respectoa los errores de ejecución, tiene que averiguar lasrazones por las que los deportistas no están rin-diendo tan bien como saben. Si las equivocacionesson de aprendizaje, entonces tiene que ayudarles aaprender la técnica, el foco de esta sección.

No hay nada que sustituya al buen conocimien-to de las habilidades para corregir los errores deaprendizaje. Cuanto mejor comprenda una técnica–no sólo cómo se hace correctamente sino qué cau-sa los errores de aprendizaje–, más ayuda podráprestar para subsanar los fallos. La experiencia esla manera más común de aprender a corregir erro-res, pero puede acelerar el lento proceso del apren-dizaje mediante la experiencia gracias al estudio dela biomecánica del deporte y el aprendizaje motor,así como por el estudio pormenorizado de sudeporte. El uso de cintas de vídeo para facilitar unaobservación más cuidadosa de los atletas puedetambién resultar muy provechoso.

Uno de los errores más comunes al entrenarconsiste en suministrar feedback y consejos im-precisos sobre cómo subsanar las equivocaciones.

Enseñando las técnicas del deporte 83

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No se precipite en la corrección del error; el feed-back desacertado y los consejos impropios perju-dicarán más el proceso de aprendizaje que la faltade feedback o consejos. Si no está seguro sobre lacausa del problema o sobre cómo corregirlo, conti-núe observando y analizando hasta que esté másconvencido. Como norma, ha de comprobar que elerror se repite varias veces antes de tratar de co-rregirlo.

Proporcionar feedback

Siga este breve examen verdadero-falso paracomprobar su sentido común al suministrar feed-back.

1. Postergar el feedback hasta el final del entre-namiento para no interrumpir el tiempo de los ejer-cicios.

Falso. Cuanto antes se facilite el feedback,menos probable es que los deportistas olviden conqué está asociado el feedback y que continúen lapráctica incorrectamente, con lo que la correcciónposterior será más difícil.

2. El feedback en mayor frecuencia es mejorque en menor frecuencia.

Cierto, relativamente. Cuanto mayor sea la fre-cuencia con que los atletas reciben feedback, másprocurarán corregir su rendimiento y, por tanto,más deprisa aprenderán. Según aumentan las ha-

bilidades de los deportistas, tienen que aprender aconfiar más en su propio feedback y menos en eldel entrenador.

3. Cuando un atleta está cometiendo variasequivocaciones, es mejor corregir solamente unerror cada vez.

Cierto. El aprendizaje resulta más eficaz cuan-do un deportista trata de corregir sólo un errorcada vez, lo que significa que usted debe decidirqué equivocación subsanar primero. A tal fin,empiece determinando si un error está provocan-do otro o no. De ser así, haga que el atleta intentecorregirlo primero, porque con ello eliminará laotra equivocación(es). Sin embargo, si los erroresparecen estar desconectados, haga que el depor-tista corrija el que usted cree supondrá una mayormejora cuando sea remediado. La mejora proba-blemente motivará al deportista para que subsanelas demás equivocaciones.

4. Usted y los entrenadores asistentes han deser los únicos suministrando feedback durante losentrenamientos.

Falso. Sobre todo en referencia a atletas unpoco mayores, puede permitir que se proporcio-nen feedback unos a otros. Una advertencia, sinembargo: si los deportistas van a suministrarfeedback y sugerencias para corregir errores, de-ben ser capaces de ofrecer información exacta. Esmás probable que esto suceda con respecto a téc-nicas menos avanzadas.

5. Cuando suministre feedback, no tiene quedecirle al atleta lo que ha hecho incorrectamente;limítese a aportar feedback sobre cómo hacer lahabilidad correctamente.

Falso. De hecho, feedback significa repasarexactamente lo que se ha hecho. Si el rendimientode los deportistas ha sido incorrecto, deberíausted repasar lo que han hecho mal. Luego expli-car cómo se realiza la técnica correctamente.

6. Aporte información sencilla y precisa sobrecómo puede mejorarse el rendimiento.

Cierto. Diga y muestre a los atletas lo que de-ben hacer para subsanar las equivocaciones. Ten-ga cuidado de no excederse; proporcióneles infor-mación suficiente para que puedan concentrarseen corregir un error cada vez.

7. Proporcione feedback positivo frecuente(como por ejemplo, “¡Buen trabajo!”).

El entrenador de éxito84

Parte III 057-088 18/4/02 14:35 Página 84

Falso. El feedback positivo es conveniente. Noobstante, el feedback positivo concreto es muchomás valiosa. Dicho feedback especifica lo que hasido correcto y refuerza tales aspectos para todoslos deportistas del grupo. Un ejemplo de feedbackpositivo concreto sería “Buena conclusión tras eldisparo.”

8. Emplear la vista y el sonido para proveerfeedback.

Cierto. Dado que las personas aprenden demodos distintos, a algunos les resultan más pro-vechosas las explicaciones sobre cómo mejorar, entanto que otros necesitan demostraciones. Tantolas explicaciones como las demostraciones tendrí-an que incorporar feedback específico. Por ejem-plo, podría efectuar una demostración de cómo hasido el rendimiento de un jugador, explicar qué hasido acertado y lo que considera que merecemayor atención para mejorar el rendimiento, ymostrar la corrección que le gustaría constatar.Muestre y diga a los jugadores cómo pueden mejo-rar, empleando feedback positivo y negativo.

Un enfoque positivo para corregir los errores

A lo largo de este manual le he alentado paraque utilice el enfoque positivo al entrenar a los

atletas. Ello se aplica especialmente a la correc-ción de errores. Resulta un auténtico desafío se-guir siendo positivo cuando los deportistas ejecu-tan mal repetidamente una habilidad o carecen deentusiasmo para aprender. Ciertamente, puederesultar frustrante ver a atletas que al parecer nonecesitan su consejo y continúan cometiendo lamisma equivocación. Y, cuando a un atleta noparece que le afecte, quizá se pregunte por quétendría que importarle a usted.

Sepa que es normal sentirse frustrado en oca-siones al enseñar las técnicas. Sin embargo, serun buen entrenador equivale en parte a controlaresta frustración.

Un enfoque positivo del entrenar-para-el-aprendizaje contempla los entrenamientos comola oportunidad que los atletas tienen de cometererrores. Recuerde, una equivocación no detectadaes una equivocación no corregida. Los errores leindican el progreso que los deportistas estánhaciendo en el proceso de aprendizaje. Elimine lasequivocaciones con paciencia y ayude con entu-siasmo a los atletas a corregirlos.

En ocasiones, resulta más fácil imaginar la rea-lización de un enfoque positivo en la corrección deerrores en un deporte individual que en un depor-te de grupo. Después de todo, es más fácil centrar-se en los individuos en deportes como la luchalibre, el tenis, el tiro al blanco o el patinaje. Ade-más, sus comentarios serán normalmente másprivados, por lo que el jugador no se sentirá azara-do por ellos.

Los deportes de grupo proporcionan desafíosúnicos. ¿Cómo facilitará feedback individual enun grupo empleando un enfoque positivo, prote-giendo el ego de los interesados? En vez de gritardesde el otro extremo de la pista o el campo paracorregir un error (y azorar al jugador), plantéesecambiar al jugador que ha fallado. Entonces podráefectuar la corrección en persona. Este procesoconlleva tres beneficios:

1 Los jugadores son más receptivos al feedbackporque no se les está corrigiendo delante de unaaudiencia.

2 Los demás miembros del grupo permanecenactivos, por lo que tienen que prestar atención ala discusión entre el jugador y el entrenador.Además, continúan practicando las habilidadespor sí mismos, facilitando un desarrollo adicio-nal de la técnica.

3 Dado que el resto del grupo continúa jugando,el entrenador debe efectuar comentarios correc-tivos sencillos y concisos. Así, tanto el entrena-dor como los deportistas se ahorran explicacio-

Enseñando las técnicas del deporte 85

TENEMOS UNASCUANTAS COSASEN LAS QUETRABAJAR.

Parte III 057-088 18/4/02 14:35 Página 85

nes largas, agotadoras, que carecen de valordebido a su complejidad.

Tratándose de un grupo, también podrá emplearel feedback positivo para poner énfasis o subsanaractuaciones del grupo o individuales. Estas actua-ciones y el feedback correspondiente servirán parareforzar el tipo de conducta y de juego que usteddesea ver. Emplee este enfoque únicamente enenunciados positivos. Guarde el feedback negativoespecífico para las discusiones individuales.

Escala de evaluación de la enseñanza

La escala de las páginas 87 y 88 está pensadapara ayudarle a valorar lo bien que aplica cuanto

ha leído en este capítulo. Una forma de emplearlaconsiste en ponerse inmediatamente después delos entrenamientos y rellenarla. Es incluso mejorhacer que otra persona que esté familiarizada conla información de este capítulo la complete trasobservarle en una situación práctica. Comente losresultados con su evaluador y utilícelos como guíapara mejorar como educador.

Repase las notas. A usted le agradaría, ideal-mente, tener mayoría de 1 y 2. En términos realis-tas, probablemente tendrá unos cuantos 3 y 4.Trabaje para mejorar en aquellas áreas en las queha alcanzado una puntuación de 3. Reflexionesobre las marcadas con un 4. Si ese comporta-miento no era aplicable a su sesión de ejerciciosparticular, ¿debería continuar? ¡Dedique algúntiempo ahora a realizar un esfuerzo para llegar aser el mejor profesor –y entrenador– posible!

El entrenador de éxito86

Parte III 057-088 18/4/02 14:35 Página 86

Escala de evaluación de la enseñanza

Indicaciones: Haga una anotación en la columna apropiada de la derecha para indicar con cuánta fre-cuencia emplea el principio en sus sesiones de entrenamiento.

Escala de evaluación: 1 = Usualmente o siempre; 2 = Ocasionalmente o de vez en cuando; 3 = Raravez o nunca; 4 = No es aplicable a esta práctica.

Presentando la habilidad 1 2 3 4Es entusiasta en acciones y palabras __ __ __ __

Evita el sarcasmo, los manierismos molestos y el lenguaje abusivo __ __ __ __

Emplea terminología que los atletas pueden comprender __ __ __ __

Habla con claridad __ __ __ __

Posee una rutina para iniciar los entrenamientos __ __ __ __

Consigue la atención rápidamente __ __ _ ___

Da la cara al grupo cuando habla con ellos __ __ __ __

Establece contacto visual apropiado __ __ __ __

Controla el temperamento __ __ __ __

Mantiene el tipo cuando trata con deportistas que no están atentos __ __ __ __

Utiliza una formación desde la que todos pueden ver la demostración __ __ __ __

Utiliza una formación desde la que todos pueden escuchar la explicación __ __ __ __

Sitúa la formación en un lugar que está libre de distracciones __ __ __ __

Identifica la habilidad que hay que enseñar __ __ __ __

Indica por qué la habilidad es importante para el aprendizaje __ __ __ __

Presenta la habilidad en menos de 3 minutos __ __ __ __

Demostrando y explicando la habilidadDirige la atención del grupo a la demostración __ __ __ __

Explica cómo se desarrollará la demostración __ __ __ __

Demuestra toda la habilidad como sería ejecutada en competición __ __ __ __

Es competente en la demostración __ __ __ __

Hace la demostración por la izquierda y por la derecha __ __ __ __

Demuestra la habilidad varias veces __ __ __ __

Demuestra la habilidad de forma que pueda verse desde distintos ángulos __ __ __ __

Demuestra la habilidad más despacio si es necesario __ __ __ __

Explica la secuencia principal de acciones que comprenden

la habilidad cuando es demostrada despacio __ __ __ __

Enseñando las técnicas del deporte 87

Parte III 057-088 18/4/02 14:35 Página 87

Escala de evaluación de la enseñanza (continuación)

Escala de evaluación: 1 = Usualmente o siempre; 2 = Ocasionalmente o de vez en cuando; 3 = Raravez o nunca; 4 = No es aplicable a esta práctica.

Destaca los detalles más significativos __ __ __ __

Hace que la explicación sea sencilla y breve __ __ __ __

Demuestra partes de la habilidad cuando es apropiado __ __ __ __

Demuestra brevemente y/o explica las similitudes entre habilidades __ __ __ __

Repite y responde a preguntas relevantes de forma que todos puedan oír __ __ __ __

Practicando la habilidad 1 2 3 4

Empieza a practicar la habilidad tan pronto como sea posible después de la demostración __ __ __ __

Emplea una formación que permite a la mayoría de los atletas practicar

con seguridad y eficacia __ __ __ __

Utiliza ejercicios que permiten a la mayoría de los atletas practicar con seguridad y eficacia __ __ __ __

Utiliza ejercicios que ponen el énfasis en la habilidad que se está enseñando __ __ __ __

Demuestra y explica cómo funcionan los ejercicios __ __ __ __

Indaga para asegurarse que el grupo comprende cómo funcionan los ejercicios __ __ __ __

Elimina o minimiza cualquier peligro inherente al rendimiento de la habilidad __ __ __ __

Crea un ambiente para minimizar el miedo al fracaso __ __ __ __

Mantiene el control del grupo durante los entrenamientos __ __ __ __

Se asegura que todos están progresando a lo largo del ejercicio correctamente __ __ __ __

Repite la demostración y la explicación si el grupo no puede realizar la habilidad eficazmente __ __ __ __

Emplea términos clave paso a paso si el grupo no puede ejecutar la habilidad eficazmente __ __ __ __

Indaga después de cada paso para asegurarse de que todos están

procediendo correctamente cuando la instrucción inicial no ha prosperado __ __ __ __

Repite y responde a preguntas relevantes para que todos puedan escuchar __ __ __ __

Divide la habilidad en partes cuando los atletas tienen dificultades

para dominar toda la habilidad __ __ __ __

Detiene la práctica y corrige errores comunes cuando es necesario __ __ __ __

Presenta breves explicaciones y demostraciones de errores y su corrección

cuando afronta equivocaciones comunes __ __ __ __

Proporcionando feedback para corregir errores

Observa y evalúa el rendimiento __ __ __ __

Felicita por el esfuerzo y por partes de la habilidad que han sido ejecutadas correctamente __ __ __ __

Corrige un error cada vez __ __ __ __

Proporciona feedback positivo específico __ __ __ __

Proporciona feedback negativo específico __ __ __ __

Utiliza el feedback visual de errores y correcciones __ __ __ __

Se cerciora de que los atletas comprenden la información dada __ __ __ __

Muestra paciencia con los atletas __ __ __ __

Alienta a los atletas para que continúen practicando y mejoren __ __ __ __

El entrenador de éxito88

Parte III 057-088 18/4/02 14:35 Página 88

La fisiología del deporte estudia los efectosinmediatos y a largo plazo del ejercicio y del entre-namiento en el cuerpo; aporta principios para lle-var a cabo entrenamientos seguros y saludables yprogramas de entrenamiento. El objetivo último dela fisiología del deporte es el mismo que el suyo:mejorar el rendimiento del atleta. Como usted, losfisiólogos se preguntan cómo afectan al rendimien-to la herencia y el entrenamiento; cómo los cuer-pos, sistemas y tejidos responden al ejercicio y elentrenamiento y cómo puede ser mejor dirigido elentrenamiento para optimizar el rendimiento.

¿Cuánto necesita usted, el entrenador, sabersobre fisiología del deporte? Al igual que el fisiólo-go, el entrenador dedicado nunca sabe bastante o

deja de aprender. Los siguientes capítulos aportanunos conocimientos de base sobre los que podráseguir construyendo. Como atleta y entrenador yasabe mucho sobre deporte y rendimiento. Ha ex-perimentado los efectos del ejercicio y el entrena-miento, y ha aprendido de sus propios entrena-dores. Pero en este campo en rápido desarrollosiempre hay información nueva, importante, yusted necesita conocimientos actualizados paraseguir teniendo éxito.

Tiene que ser capaz de enseñar a los atletas yde responder a sus preguntas. Ellos quieren sa-ber por qué han de realizar calentamientos y vuel-tas a la calma, cómo mejoran el rendimiento losejercicios interválicos, qué comer y cuándo, y por

Parte IV

Fisiología del deporte

Capítulo 10PRINCIPIOS DEL

ENTRENAMIENTO

Capítulo 11CONDICIÓN FÍSICAPARA EL DEPORTE

Capítulo 12DESARROLLANDO SU

PROGRAMA DE ENTRENAMIENTO

Capítulo 13NUTRICIÓN PARA LOS ATLETAS

Parte IV 089-134 18/4/02 14:37 Página 89

qué la comida basura es perjudicial para ellos.Tendrá que proporcionar información sobre res-puestas individuales al entrenamiento y el con-cepto de sobreentrenamiento. Los capítulos de laParte IV aportan algunas respuestas y, lo que es

más importante, le ayudan a desempeñar supapel de entrenador-para-el-rendimiento condu-ciendo a los deportistas a mejores actuacionescon un entrenamiento acertado y programas denutrición.

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En este capítulo se presentan importantes principios fisiológicos que debenser seguidos para que los atletas realicen firmes progresos en los entrenamien-tos y los programas de entrenamiento, y eviten caer enfermos y lesionarse.Empezaremos con los 10 principios del entrenamiento sobre los que se erigenlos programas de éxito:

Principio 1: Preparación.Principio 2: Respuesta individual.Principio 3: Adaptación.Principio 4: Sobrecarga.Principio 5: Progresión.Principio 6: Especificidad.Principio 7: Variación.Principio 8: Calentamiento y vuelta a la calma.Principio 9: Entrenamiento a largo plazo.Principio 10: Reversibilidad.

Varios de los principios explican por qué los atletas deben ser tratados comoindividuos, algunos resaltan cómo y por qué el entrenamiento influye en elcuerpo, unos cuantos describen elementos importantes de los programas dia-rios y varios explican los efectos a largo plazo del entrenamiento o del desentre-namiento. Todos son importantes.

Estudie los principios cuidadosamente, teniendo presente la responsabilidadque acepta cuando se convierte en entrenador. Recuerde que el adolescente noes un adulto pequeño, que el cuerpo no ha madurado completamente hasta quelos huesos dejan de crecer (entre los 18 y los 21 años), que las demandas delcrecimiento requieren considerable energía y descanso, y que el deporte deberíaser evolutivo, no destructivo. Los buenos entrenadores comprenden y ponen enpráctica los principios del entrenamiento. Son aquellos que no supondrán unpeligro para los deportistas, sino una ayuda.

Capítulo 10

Principios del entrenamiento

Dr. Brian J. SharkeyUniversidad de Montana

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Principio 1: PreparaciónEl valor del entrenamiento depende de la pre-

paración fisiológica de los atletas individuales. Lapreparación viene con la madurez. Como resulta-do, antes de la pubertad los atletas simplementeno están fisiológicamente preparados para res-ponder plenamente al entrenamiento.

En los deportistas prepubescentes el entrena-miento aeróbico resulta menos eficaz que en losadolescentes o en los adultos jóvenes. Las mejoresen el rendimiento pueden deberse en realidad auna mayor estatura o a mejoras en la habilidad yla eficiencia. El entrenamiento aeróbico de los at-letas jóvenes resulta ineficaz, porque las capacida-des anaeróbicas dependen de la fuerza y la madu-ración. El desarrollo de la fuerza en los atletas pre-pubescentes mejora la fuerza mediante cambiosneuromusculares (reclutamiento de fibras mejora-do, reducción de las inhibiciones), pero muestrapocas evidencias de las modificaciones en el tama-ño de los músculos que se producen después de lapubertad.

La habilidad neuromuscular, inversamente, seda en función del entrenamiento, no de la edad ola maduración. Por tanto, el entrenamiento de losjóvenes deportistas debería centrarse en el desa-

rrollo de la técnica y en la diversión. El entrena-miento más serio tendría que esperar a que res-pondiese el desarrollo de la capacidad fisiológica.Consulte la Figura 10.1 para ilustrar qué objetivosdebería destacar con atletas de distintas edades.

Como los deportistas inmaduros poseen unacapacidad menor para beneficiarse del entrena-miento, y dado que las diferencias en la madura-ción pueden representar enormes disparidades enla masa y la fuerza musculares, los atletas inma-duros suelen tener desventajas cuando compitencon jóvenes maduros en los deportes de contacto.Las categorías de peso disminuyen esta ventaja,pero no la eliminan. Busque información adicionalsobre la preparación en el capítulo 11.

Principio 2: Respuesta individual

Los atletas responden de modo distinto al mis-mo entrenamiento por numerosas razones. Entreellas están las diferencias hereditarias, la madu-rez, la nutrición, el descanso y el sueño, el gradode condición física, el entorno, la enfermedad, laslesiones y la motivación. Los entrenadores de éxitoson conscientes de las diferencias individuales y

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Figura 10.1 Etapas del entrenamiento.

6 a 10 años.

1. Despertar el interés.2. Divertirse.3. Aprender las

habilidades básicas.

11 a 13 años.

1. Versatilidad.2. Técnica correcta.3. Preparación para

un entrenamientomás intenso.

14 a 18 años.

1. Aumento de losejercicios.

2. Entrenamientoespecial (p. ej.pesas).

3. Más competición.

ADULTO

Máximo rendimiento.

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de cómo influyen en las respuestas de los depor-tistas al entrenamiento. Y son sensibles a los cam-bios en el rendimiento que puedan indicar unamala alimentación, falta de descanso, enfermedado lesión. Examinemos cada uno de los factoresque influyen en las respuestas de los atletas alentrenamiento.

Herencia

Físico, características de las fibras musculares,tamaño del corazón y los pulmones y otros facto-res que inciden en la actividad deportiva son here-ditarios. Pero, incluso en el caso de las caracterís-ticas heredadas, su expresión eventual registra lainfluencia de los factores ambientales, como ladieta y el entrenamiento. Así pues, aunque los fac-tores asociados con la capacidad aeróbica y la re-sistencia pueden estar genéticamente determina-dos hasta aproximadamente el 35%, el resto estásujeto a cambios.

Madurez

Los organismos que son más maduros puedensoportar más entrenamiento. Los atletas menosmaduros necesitan más energía para crecer ydesarrollarse, y no responden tan bien al entrena-miento (consulte el Principio 1). La maduración dalugar a músculos, huesos, ligamentos y tendonesmás fuertes, a una capacidad cardiovascular yanaeróbica mayor, a una termorregulación mejory a que las hormonas den apoyo al crecimiento y ala ejercitación.

Nutrición

El entrenamiento implica cambios en los tejidosy en los órganos, los cuales requieren proteínas yotros nutrientes. Sin la alimentación adecuada,incluso el mejor programa de entrenamiento falla-rá. Un entrenador asumió el desafío de preparar aun grupo de baloncesto del instituto de una granciudad que iba siempre el último. Pronto averiguóque estos deportistas apáticos, de escasos ingre-sos, solían saltarse el desayuno y con frecuenciaalmorzaban helados con soda y helados de nata.El entrenador instauró un programa de nutrición,les enseñó a defender y fue subcampeón el primeraño. ¡La siguiente temporada su grupo ganó elcampeonato de liga y él fue nombrado Entrenadordel Año! Este técnico, ciertamente, asimiló la im-portancia de la nutrición. Usted también puede.Consulte el capítulo 13 para seguir informándose.

Descanso y sueño

Aunque muchos atletas de instituto prospera-rán con 8 horas de sueño, otros necesitan másdescanso, en especial cuando están sometidos aun vigoroso entrenamiento. Vigile la fatiga y el es-tancamiento en los deportistas y esté atento pararecomendar descanso adicional o una jornada li-bre de prácticas. Esté particularmente alerta sientrena a atletas más jóvenes; los cuerpos en de-sarrollo necesitan más descanso.

Grado de condición física

Las mejoras en el entrenamiento son más nota-bles cuando el estado inicial de condición física espésimo. Según mejora la condición física, seránnecesarias largas horas de esfuerzo para lograrcambios pequeños. Dése cuenta de que los depor-tistas que no están en forma se fatigan con facili-dad, y que los atletas fatigados son más proclivesa la enfermedad y las lesiones.

Influencias ambientales

Los factores propios de los ambientes físico ypsicológico influyen en las respuestas de los de-portistas al entrenamiento. Por lo que a la psicolo-gía se refiere, un atleta que padece estrés emocio-nal en casa o en el colegio no necesita que unentrenador se sume a la carga. Tenga en cuenta elestrés de los deportistas. La forma en que se ocu-pe de ellos puede determinar su participaciónfutura en los deportes. No cabe duda de que influi-rá en sus respuestas al entrenamiento.

El calor, el frío, la altitud y la polución del aireconstituyen factores ambientales. El entrenadortiene que hacerse cargo de las diferencias en lacapacidad de los atletas para soportar tales facto-res de estrés y suministrar paliativos cuando lascondiciones son inclementes. Por ejemplo, un co-rredor con alergias puede experimentar problemasrespiratorios durante el ejercicio cuando hay mu-cho polen o contaminación. O un jugador de fút-bol puede sufrir los estragos del calor en una hú-meda jornada de verano. En ambos casos, los de-portistas necesitan alivio, no más esfuerzo. El falloen el suministro de alivio y un tratamiento inade-cuado puede acarrear graves consecuencias.

Enfermedad o lesión

Desde luego, la enfermedad y las lesiones in-fluirán en la respuesta de un deportista al entre-

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namiento. Su labor consiste en detectar el proble-ma antes de que adquiera gravedad. Muchas do-lencias físicas afloran durante los esfuerzos inten-sos, por lo que puede ser usted el primero en de-tectar un problema inminente. Asegúrese de quelos atletas enfermos o lesionados se han recupera-do antes de volver a los entrenamientos. La enfer-medad podría ser señal de una menor resistenciafruto del sobreentrenamiento.

Motivación

Los atletas se emplean más a fondo y progre-san más cuando están motivados, cuando perci-ben la relación entre el trabajo duro y la consecu-ción de metas personales. Los atletas que partici-pan para satisfacer los objetivos de sus padres sonfáciles de identificar. Puede que necesiten ayudapara establecer sus metas propias, aun cuandodeterminar dichas metas suponga abandonar eldeporte.

ceso se corre el riesgo de enfermar, de lesionarse ode ambas cosas. Las adaptaciones típicas al entre-namiento incluyen las siguientes:

• Respiración, función cardiaca, circulación y vo-lumen sanguíneo mejorados.

• Resistencia, fuerza y fuerza musculares mejora-das.

• Huesos, ligamentos, tendones y tejido conectivomás firmes.

Los entrenadores de la escuela y el deportejuvenil no disponen de meses de tiempo que dedi-car al entrenamiento. Con sólo unas semanas deentrenamiento antes de la primera competición,ha de saberse cómo obtener el máximo de los atle-tas. El principio de la adaptación nos indica queno se debe acelerar el entrenamiento. Lo mejorque puede hacerse es idear un programa equilibra-do y estar contento con los resultados. No trate dehacerlo todo en una temporada o, de lo contrario,es probable que cause más mal que bien. El Prin-cipio 9 ofrece sugerencias sobre cómo obtener elmáximo del entrenamiento.

Principio 4: Sobrecarga

El legendario cuento de Milo, un guerrero de laGrecia antigua, ilustra el principio de la sobrecar-ga. Milo desarrolló su fuerza levantando a un ter-nero joven cada día. Según se hizo mayor el terne-ro, Milo adquirió fuerzas. Eventualmente, según laleyenda, fue capaz de levantar al animal completa-mente crecido. El entrenamiento de Milo resultóeficaz porque ejerció una demanda progresiva so-bre el cuerpo, y las deseadas adaptaciones tuvie-ron lugar.

El entrenamiento inicial debe exceder las exi-gencias típicas diarias. Según el organismo seadapta al incremento de la carga, habría que aña-dir mayor esfuerzo. El promedio de mejora estárelacionado con tres factores, que puede recordarmediante el acrónimo FIT:

F – Frecuencia.I – Intensidad.T – Tiempo.

El principio de la sobrecarga resulta evidenteen todas las clases de entrenamiento. Gradual-mente se añade peso a una mancuerna para desa-rrollar fuerza. Los atletas de fondo incrementan eltiempo de entrenamiento y la intensidad para me-jorar el rendimiento en las carreras. La sobrecargapropicia cambios concebidos para ayudar al cuer-

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Principio 3: Adaptación

El entrenamiento induce cambios sutiles, pro-gresivos, según el organismo se adapta a exigen-cias añadidas. El Dr. Ned Fredrick, un destacadocientífico del deporte, describe el entrenamientoapropiado para el deporte como “un pasatiempoamable mediante el cual promovemos cambiossutiles en el cuerpo.” Los cambios diarios produci-dos por el ejercicio son tan pequeños como pararesultar inmensurables. Lleva semanas, y en oca-siones meses de paciente progreso lograr adapta-ciones mensurables. Tratando de acelerar el pro-

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po a afrontar las crecientes demandas en los mús-culos y otros sistemas. Estos cambios afectan alsistema nervioso, que aprende a activar fibrasmusculares con mayor eficacia; al sistema circula-torio, que mejora su capacidad de enviar más san-gre a los músculos empleados; y a los músculosmismos, donde la sobrecarga estimula la produc-ción de nuevas proteínas para ayudar a satisfacerexigencias futuras del ejercicio.

Principio 5: Progresión

Para lograr adaptaciones utilizando el principiode la sobrecarga, el entrenamiento debe atenerseal principio de la progresión. Cuando la carga deentrenamiento aumenta demasiado deprisa, elcuerpo no puede adaptarse y, en vez de ello, sederrumba. Se debe observar la progresión en los

términos del FIT, diaria, semanal, mensual yanualmente.

• Frecuencia: más sesiones.• Intensidad: más carga.• Tiempo: mayor duración.

Pero la progresión no implica efectuar incre-mentos continuos sin tiempo para recuperarse. Elorganismo requiere periodos de descanso en losque tienen lugar las adaptaciones. La Figura 10.2muestra el principio de la progresión aplicado co-rrectamente en el caso de un corredor. Observeque cada cuatro semanas se introduce un descan-so relativo o alivio de los incrementos previos en lacarga de entrenamiento. Profundizaremos en losciclos de entrenamiento de 4 semanas en el capí-tulo 12.

Cuando un entrenador apasionado permite oanima a los atletas a progresar demasiado depri-sa, lo mejor que puede suceder es que alcancen elpunto de máxima forma demasiado pronto. Perola enfermedad o la lesión es el resultado más pro-bable. El excesivo agotamiento puede suprimir elsistema inmunitario y conducir a la enfermedad. Yla causa más común de las lesiones en los depor-tes de resistencia es el resultado de un aumentode la carga de entrenamiento (distancia o intensi-dad) demasiado rápido. El mejor consejo para em-plear el principio de la progresión es éste: ¡Apresú-rese despacio!

El principio de la progresión tiene implicacio-nes adicionales para los entrenadores. El entrena-miento también tendría que progresar de,

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Figura 10.2 Progresión del entrenamiento para un corredor.

Carga de entrenamiento(hr o km).

Semana.

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• Lo general a lo concreto.• Las partes al todo y• De la cantidad a la calidad.

En el capítulo 11, doy consejos detalladossobre cómo realizar un progreso firme hacia lasmetas del entrenamiento.

Principio 6: Especificidad

El ejercicio es específico. Cada vez que uno co-rre activa las mismas fibras musculares, las mis-mas vías energéticas y las mismas fuentes de ener-gía. Si corre usted cada día que se entrena, lasadaptaciones tendrán lugar en las fibras muscula-res utilizadas durante el ejercicio. Las adaptacio-nes para soportar el entrenamiento son distintas alas que se producen como resultado del desarrollode la fuerza. Éste implica mejoras en las enzimasoxidativas y en la capacidad del músculo de que-mar grasas y carbohidratos en presencia de oxíge-no. El desarrollo de la fuerza conduce a incremen-tos de las proteínas contráctiles, la actina y la mio-sina, pero sólo en los músculos ejercitados.

Lo que esto supone es que el entrenamientoespecífico conlleva resultados específicos. No sehará mucho más fuerte con el entrenamiento deresistencia y no mejorará la resistencia con eldesarrollo de la fuerza. Además, el ciclismo no esla mejor preparación para correr, y viceversa. Elrendimiento mejora más cuando la preparación esespecífica para la actividad.

Por supuesto, cada regla o principio puede serllevado al extremo. La especificidad no implica quetenga que evitar ejercitar músculos opuestos oadyacentes. Es preciso entrenar otros músculospara evitar crear desequilibrios que podrían pre-disponer al atleta a las lesiones. Ejercitar múscu-los adyacentes también ayuda al deportista aadaptarse a los cambios en las condiciones y pro-porciona una reserva cuando las fibras muscula-res primarias se fatigan. Por ello, algo de ciclismopuede ser conveniente para un corredor a fin defomentar el equilibrio muscular, de ejercitar fibrasadyacentes y de suministrar un alivio de los apo-yos de la carrera pedestre. Sin embargo, estoscambios no pueden compensar la modalidad espe-cífica de entrenamiento de la carrera pedestre.

Principio 7: Variedad

Los programas de entrenamiento tienen quevariar para evitar el aburrimiento y mantener el

interés de los atletas. El principio de la variedadabarca varios conceptos importantes:

• Trabajo frente a descanso.• Intenso frente a suave.• Ciclos de entrenamiento.• Entrenamiento cruzado.

La adaptación se da cuando al trabajo le sigueel descanso. Descuidar la variedad conduce alaburrimiento, al estancamiento y a un rendimien-to deficiente. Las sesiones sucesivas de trabajointenso sin tiempo apropiado para descansar yrecuperarse van a impedir con toda seguridad elprogreso.

Puede lograr la variedad modificando la rutinade entrenamiento y los ejercicios. Llevar a cabosesiones de ejercicios en distintos lugares o en dis-tintas condiciones. Hacer que a una sesión larga lesiga una corta, a una intensa una relajada, a laactividad de gran aceleración los ejercicios de fon-do suaves. Cuando los entrenamientos se vuelvenanodinos, haga algo diferente. Emplee la variedadpara disminuir la monotonía y aligerar las cargasfísicas y psicológicas del entrenamiento intensivo.Puede también buscar juegos y entretenimientosvaliosos para alegrar los entrenamientos, en espe-cial con los atletas más jóvenes.

Otra forma de la variedad supone el uso deciclos de entrenamiento (por ejemplo, los ciclos de4 semanas). Cambiar las actividades de entrena-miento cada cuatro semanas para evitar el estan-camiento o para mantener el interés. Finalmente,consideremos el popular concepto del entrena-miento cruzado. Los corredores nadan o hacenciclismo para disfrutar de variedad y evitar lesio-nes por sobreuso. El entrenamiento cruzado per-mite mantener la condición física mientras losmúsculos y los huesos se recobran del entrena-miento intenso. Por ejemplo, la posición erguidapuede aportar resistencia en las pendientes paraun corredor de cross. Pero el entrenamiento cru-zado en una bicicleta no reemplazará al entrena-miento específico para un corredor.

Principio 8: Calentamiento y vuelta a la calma

Una agotadora actividad debería siempre estarprecedida del calentamiento para,

• incrementar la temperatura corporal,• incrementar la respiración y la frecuencia car-

díaca, y

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• proteger contra esguinces de músculos, tendo-nes y ligamentos.

El calentamiento tendría que consistir en ejer-cicios de estiramiento, calistenia y actividadesespecíficas del deporte con una intensidad enaumento gradual. A muchos atletas les resultamás eficaz hacer estiramientos después de calen-tar los músculos con una calistenia de ejerciciosespecíficos del deporte (por ejemplo, ejercicios debaloncesto).

La vuelta a la calma es tan importante como elcalentamiento. Detener abruptamente una activi-dad vigorosa hace que la sangre se encharque,aminora la circulación y mengua la eliminación delos productos de desecho. Puede también provo-car calambres, agujetas o problemas más graves,como el desvanecimiento. La actividad ligera y losestiramientos después del ejercicio fomentan lacontinuidad de la actividad de bombeo de los mús-culos en las venas, facilitando tanto la circulacióncomo la eliminación de los deshechos metabólicos.Es responsabilidad suya enseñar a calentar y avolver a la calma y a incluirlos en cada práctica osesión de entrenamiento (para más información,consulte el capítulo 11).

Principio 9: Entrenamiento a largo plazo

La sobrecarga gradual de los sistemas corporalesconduce a mejoras sorprendentes en el rendimien-

to, pero supone años de esfuerzo para aproximarsea la capacidad de rendimiento de primer orden. Elentrenamiento a largo plazo permite la progresióngradual, el crecimiento y el desarrollo, la adquisi-ción de las habilidades, el aprendizaje de las estra-tegias y una comprensión más cabal del deporte.

El entrenamiento a largo plazo no implica queun atleta deba abandonar todo lo demás para es-pecializarse en un deporte. Hay que alentar a losjóvenes a participar en diversas actividades. Comoentrenador, usted no debería ni esperar ni exigirun control exclusivo del tiempo de los deportistas.La necesidad de especializarse se presenta bastan-te pronto. No haga que un atleta se precipite haciala especialización sólo para satisfacer su ego.

Con el paso del tiempo, según los atletas creceny se desarrollan, comienzan a especializarse enuno o dos deportes. Un deportista con el deseo dealcanzar la cima elegirá eventualmente un únicodeporte y le dedicará toda su atención duranteaños. Son necesarios de 5 a 10 años de desarrollopara llegar a ser un atleta de elite. Tenga esto pre-sente cuando trabaje con deportistas dedicados.Incrementar la intensidad del entrenamiento de-masiado deprisa podría ocasionar una lesión delas que acaban con una carrera. No se arriesguenunca a sacrificar los objetivos personales o profe-sionales a largo plazo de un atleta solamente paraconseguir el éxito a corto plazo.

Así pues, no acelere el proceso, demasiado en-trenamiento demasiado pronto puede conducir aldesgaste mental y físico y a un abandono precozdel deporte. La excelencia premia a quienes per-sisten con programas de entrenamiento bien pla-nificados a largo plazo.

Principio 10: ReversibilidadLa mayoría de las adaptaciones fruto del entre-

namiento revierten con excesiva facilidad. Suelellevar más tiempo adquirir resistencia que perder-la. Con descanso completo en cama, ¡la condiciónfísica puede declinar a un promedio de casi un 10% por semana! La fuerza declina más despacio,pero la falta de uso provoca eventualmente atrofiaincluso en los mejor ejercitados. Los entrenadoresinteligentes comprenden el principio de la reversi-bilidad y suministran a los grupos programas demantenimiento para después de la temporada.

Falacias del entrenamiento

Antes de cerrar este capítulo sobre los princi-pios, permítaseme ocuparme de algunas falacias

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AHORA QUE HABÉIS HECHOEL CALENTAMIENTO, PODEMOSEMPEZAR EL ENTRENAMIENTO.

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populares o errores de juicio concernientes al en-trenamiento. Estos “principios”, mencionados confrecuencia, no poseen fundamento alguno deriva-do de la investigación médica o científica.

Mitos del entrenamiento

• Si no hay dolor, no hay mejora.• Hay que violentar los músculos para progresar.• A machacarse.• El ácido láctico provoca agujetas.• El músculo se convierte en grasa (o viceversa).• Correr sin aliento.

Si no hay dolor, no hay mejora

Aunque el entrenamiento serio suele ser traba-joso y a veces desagradable, no tendría que resul-tan doloroso. De hecho, los atletas bien prepara-dos pueden ejecutar pruebas difíciles en un esta-do de euforia, ajeno al dolor y libre de molestias.Los ganadores del maratón, en ocasiones, parecenterminar llenos de vitalidad; mientras que los per-dedores parecen próximos al colapso.

El dolor no es una consecuencia natural delejercicio, o el entrenamiento. Es señal de un pro-blema que no debería ser ignorado. Durante elejercicio el organismo produce opiáceos naturales,llamados endorfinas, que pueden enmascarar lasmolestias debidas al esfuerzo. Pero un deportistaque sufre auténtico dolor durante el entrenamien-to tendría que parar. Si el dolor persiste, el proble-ma tiene que ser evaluado.

La incomodidad, no obstante, puede acompa-ñar a aspectos difíciles del entrenamiento, como ellevantamiento de pesas, el entrenamiento intervá-lico intenso o el esfuerzo del fondo. La incomodi-dad es una consecuencia natural del esfuerzoanaeróbico asociado con las pesas o los intervalosy de la fatiga muscular, los microtraumas (daño enlos tejidos) y las agujetas que suceden a la ejerci-tación de fondo.

La sobrecarga, a veces, requiere trabajar en ellímite superior de la fuerza, la intensidad o laresistencia, y eso puede resultar temporalmentedesagradable. Si da como resultado el dolor, pro-bablemente es excesivo. Un lema más exacto se-ría, seguramente, ¡sin incomodidad, no hay exce-lencia!

Hay que violentar los músculos para progresar

Los microtraumas se producen a veces duranteel entrenamiento vigoroso y la competición, pero

no es una consecuencia necesaria, ni mucho me-nos deseable, del entrenamiento. Se han observa-do traumas considerables después de un maratóncon largos tramos cuesta abajo que requieren con-tracciones musculares excéntricas (contraccionesde un músculo que se alarga). Las contraccionesexcéntricas constituyen una causa principal delas agujetas, que han sido asociadas traumasmusculares, una menor producción de fuerza yuna recuperación prolongada (de 4 a 6 semanas).Tendría que resultar obvio, pues, que el traumaexcesivo no contribuye al entrenamiento, lo de-tiene.

Los levantadores de pesas pueden provocarsetraumas en los músculos por una sobrecarga depeso o repeticiones, pero eso no es necesario paradesarrollar fuerza. El libro más autorizado sobre elentrenamiento de resistencia, con más de 350referencias a la literatura científica, no hace men-ción alguna al desgarro de músculos para lograr eldesarrollo (Fleck & Kraemer, 1977). Ni el dolor nilas lesiones son consecuencias normales del en-trenamiento. Ambos han de ser evitados.

A machacarse

Este popular enunciado se oye con frecuenciaentre los culturistas que hacen numerosas repeti-ciones y series para desarrollar, moldear y definirlos músculos. El castigo al que aluden probable-mente es debido a la acidez creciente que se aso-cia con cantidades elevadas de ácido láctico en losmúsculos. Aunque esta sensación no es peligrosa,no constituye una parte necesaria de un progra-ma de fortalecimiento pensado para mejorar elrendimiento deportivo. En el capítulo 12 se des-criben programas de entrenamiento de pesas con-cebidos para mejorar el rendimiento sin que losatletas experimenten la sensación de estar “ma-chacándose”.

El ácido láctico provoca agujetas en los músculos

Esta falacia ha estado circulando duranteaños, sin hecho alguno que la sostenga. Aunquees cierto que el ácido láctico puede producirse encontracciones que derivan en agujetas, el ácidoláctico no es la causa de las agujetas. Éste es eva-cuado de los músculos y de la sangre en el plazode una hora tras el ejercicio. Las agujetas se mani-fiestan 24 horas o más después del esfuerzo,mucho después de que el ácido láctico haya sidometabolizado. Las agujetas se presentan después

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de un esfuerzo desacostumbrado o después de unparo forzoso. Probablemente, están asociadas conmicrotraumas en los músculos y el tejido conecti-vo y la hinchazón que se produce seguidamente.Los estiramientos pueden ayudar a reducir lasagujetas. Tras recuperarse de las mismas, expo-nerse adicionalmente a la actividad no causarátanta incomodidad.

El músculo se convierte en grasa (o viceversa)

Otro bulo común es que cuando un atleta dejade entrenar, el músculo puede convertirse en gra-sa. Esta idea también es una falacia. Aunque elabandono del entrenamiento conducirá a unareversión de las ganancias debidas al ejercicio, elmúsculo no se convierte en grasa más que la grasaen músculo. Los músculos están compuestos defibras largas, como espaguetis, con proteínas con-tráctiles diseñadas para acumular grasa. El entre-namiento incrementa el tamaño de las fibras mus-

culares (hipertrofia) y la falta de entrenamiento loreduce (atrofia). Ingerir demasiadas calorías haceque las células grasas aumenten de tamaño segúnalmacenan más grasas. Las células se encogencuando quemas más calorías de las que ingieres.Pero las largas y finas fibras musculares nunca setransforman en células grasas esféricas, ni vice-versa.

Correr sin aliento

Los atletas a menudo tienen la sensación dequedarse sin aire cuando corren demasiado depri-sa para su nivel de entrenamiento. La sensaciónproviene de los pulmones y refleja otra incomodi-dad del ejercicio. Sin embargo, es más probableque se deba a un exceso de dióxido de carbono quea una falta de oxígeno o aire. El dióxido de carbo-no, que se origina durante el ejercicio, constituyeel estímulo primario para la respiración. Es porello que cuando la cantidad es grande, comodurante el esfuerzo intenso, provoca señales deangustia en los pulmones. El sistema respiratorioconsidera que es más importante deshacerse delexceso de dióxido de carbono que inspirar másoxígeno. El exceso de dióxido de carbono indicaque se está trabajando por encima del nivel deentrenamiento. Familiarícese con esta sensación ycon lo que le está revelando, prolónguela y prontoquedará exhausto.

Examinando sus principios

Deseará recordar los 10 principios del entrena-miento cuando desarrolle su propio programa deentrenamiento. Un sencillo ejercicio de empareja-miento que aparece en la página 100 le servirápara constatar su aprendizaje. Empareje el princi-pio con la descripción correcta.

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¡NO RESULTA DIFÍCILAPRECIAR QUIÉN ESTÁDESARROLLANDOMÚSCULO Y QUIÉN ESTÁDESARROLLANDO GRASA!

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El entrenador de éxito100

Principio Descripción

1. ————— Respuesta Individual. A. Maduración de los atletas.2. ————— Adaptación. B. No empezar, o terminar, ejercicios vigorosos

abruptamente.3. ————— Sobrecarga. C. Ejercer una mayor exigencia sobre el cuerpo.4. ————— Progresión. D. La pérdida de las ganancias en el entrenamien-

to.5. ————— Especificidad. E. Unicidad del atleta.6. ————— Variedad. F. Ajuste a la sobrecarga.7. ————— Calentamiento/vuelta a la calma. G. Años de esfuerzo en rendimiento.8. ————— Entrenamiento a largo plazo. H. Cambiar las actividades para evitar la monoto-

nía.9. ————— Reversibilidad. I. Entrenar para satisfacer demandas concretas.

10. ————— Preparación. J. Dosificar la sobrecarga.

Respuestas: 1 = E; 2 = F; 3 = C; 4 = J; 5 = I; 6 = H; 7 = B; 8 = G; 9 = D; 10 = A

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Los atletas deben estar en forma para jugar bien y para evitar lesiones. Ledigo a la gente, “No practique deporte para estar en forma, ¡póngase en formapara practicar deporte!” Una de nuestras mayores responsabilidades comoentrenadores consiste en ayudar a los atletas a adquirir los niveles de capaci-dad energética y capacidad muscular que el deporte exige.

La capacidad energética conlleva el almacenamiento y el uso de energía paralas contracciones musculares. También implica el desarrollo de importantessistema de apoyo, entre los que se incluyen los sistemas respiratorio, cardiovas-cular y endocrino (hormonal). Mientras que otros hablan de entreamiento aeró-bico o cardiovascular, yo empleo el término capacidad energética para describirel entrenamiento de sistemas energéticos aeróbicos y anaeróbicos específicos ypara resaltar cómo dicho entrenamiento mejora el potencial de los músculos alemplear la energía disponible en el cuerpo.

La capacidad muscular comprende la flexibilidad, la fuerza, la fuerza-resis-tencia muscular, la fuerza y la velocidad. También comprende el sistema nervio-so, que controla las contracciones de los músculos y que por ello no puede serseparado del neuromuscular (nervio y músculo) o de la ejercitación para ganarhabilidad, fuerza, fuerza-resistencia muscular y fuerza. Los programas de en-trenamiento correctamente elaborados siguen el principio de la especificidad:las actividades que requieren energía y capacidad muscular tendrían que sopor-tar las habilidades implicadas en el deporte.

Iniciaré este capítulo examinando el calentamiento, seguiré con la energía ypasaré a la capacidad muscular, y concluiré con un análisis de la vuelta a la cal-ma. Resulta imposible contarlo todo cuanto hay que saber sobre estos temas enun capítulo breve, pero nos ocuparemos de lo básico. El capítulo 12 utilizaejemplos para enseñarle a desarrollar programas de entrenamiento para tiposconcretos de deportes y examina el problema del sobreentrenamiento. Segúnavance, recuerde cómo influye el principio de la preparación en las respuestasindividuales al entrenamiento.

Capítulo 11

Condición física para el deporte

Dr. Brian SharkeyUniversidad de Montana

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Calentamiento

Debería empezar cada sesión de ejercicios conun calentamiento diseñado específicamente parasu deporte. En los deportes de poca energía y granhabilidad, como el tiro con arco o con pistola, elcalentamiento tendría que incluir estiramientos yensayos de la técnica. En los deportes de granenergía, como la natación, el calentamiento ten-dría que elevar las frecuencias cardiaca y de latemperatura corporal, y comprender estiramien-tos y ensayos de la técnica. El calentamiento idó-neo es una parte esencia de la prevención de laslesiones, porque reduce la incidencia de torcedu-ras y esguinces. Y antes de la competición, el ca-lentamiento es un buen momento para revisar ypracticar importantes técnicas psicológicas (repre-sentación visual, relajación, concentración) y derepasar las estrategias para la prueba.

La sección de estiramientos de un calentamien-to reduce las agujetas y el riesgo de lesiones eincrementa el rango de movimientos en torno a lasarticulaciones. Trate de comenzar el calentamien-to sobre una superficie cómoda y haga que losatletas estiren despacio la parte inferior de la es-palda, los isquiotibiales y otros músculos procli-ves a las agujetas o las lesiones. No utilice movi-mientos desfasados de balanceos y saltos paraestirar: provocan una contracción muscular refle-ja que convierte los estiramientos en algo difícil yarriesgado. Los atletas tienen que maniobrar has-ta que sientan una ligera incomodidad, mantenerla posición hasta contar cinco y luego relajarse.

Otro enfoque eficaz es la técnica de la contracción-relajación: los atletas realizan el estiramiento,aguantan la posición y se relajan, luego contraenel músculo durante unos instantes e, inmedia-tamente, lo vuelven a estirar.

Cinco minutos de estiramientos suaves suele seradecuado. Los jugadores deberían estirar cualquiermúsculo que tienda a las agujetas o que se resientacon facilidad cuando está rígido y frío. Los múscu-los ejercitados son más fáciles de estirar, así que sidesea hacer hincapié en la mejora de la flexibilidad(como en la gimnasia, la lucha libre o, incluso, lacarrera pedestre), realice estiramientos adicionalesdespués de calentar un poco. Consulte la Figura11.1 sobre ejemplos de estiramientos populares.

Después de estirar pase a la calistenia, empe-zando con movimientos más lentos antes de reali-zar los más vigorosos como los saltos batiendo losbrazos para aumentar la respiración, la circu-lación y la temperatura corporal. Después de 5minutos, los deportistas tendrían que haber hechocalentamiento suficiente para practicar las habili-dades. Comience suavemente; no dé inicio a losejercicios de contacto o las maniobras violentashasta que los jugadores hayan calentado bien.

Capacidad energéticaLa capacidad energética es la facultad del orga-

nismo de almacenar y emplear combustibles efi-cientemente para proporcionar energía a las con-tracciones musculares particulares. Incluye tam-bién importantes adaptaciones en los sistemas desuministro y soporte (respiratorio, cardiovasculary hormonal) que transportan oxígeno y combusti-bles a los músculos y eliminan el dióxido de carbo-no y otros productos de desecho. Como entrena-dor, debería usted conocer las fuentes de energíaprincipales y las vías utilizadas en su deporte ycómo ayudar a los atletas a lograr la capacidadenergética que necesitan para competir con éxito.Debería comprender cómo los músculos usan laenergía disponible y cómo el consumo ineficientede energía acelera la fatiga. Esto es importante,como comprobará, porque las demandas de losdistintos deportes hacen que los músculos utili-cen energía de modo distinto. Equiparando losregímenes de ejercicios con las demandas de ener-gía de su deporte, ayudará a los atletas a satisfa-cer las distintas demandas con la mayor eficacia.

Vías energéticas

La energía que los músculos emplean para con-traerse proviene de dos sistemas. Uno es llamado

El entrenador de éxito102

¿CREES QUE HEMOSHECHO DEMASIADOSESTIRAMIENTOS?

Parte IV 089-134 18/4/02 14:37 Página 102

aeróbico (que significa “con oxígeno”) y el otro ana-eróbico (“sin oxígeno”). El sistema a utilizar por elcuerpo dependerá de diversos factores, entre losque se encuentra la disponibilidad de oxígeno y laintensidad y la duración de la actividad. El siste-ma anaeróbico se compone de dos partes:

• A corto plazo (menos de 30 segundos) y• El sistema energético del lactato (de 30 a 90

segundos).

Las fuentes de energía anaeróbica se empleanal principio del ejercicio, antes de que la respira-ción y la circulación se adapten al esfuerzo físico yempiecen a suministrar oxígeno a los músculos, ycuando las demandas de combustible exceden lacapacidad del organismo de generar energía aeró-bica. Durante la fase anaeróbica a corto plazo, laenergía proviene de suministros energéticos limi-tados almacenados en los músculos. En el siste-ma del lactato, la energía proviene del glucógeno

Condición física para el deporte 103

ESTANDO ERGUIDO, SUJETEEL PIE DE LA PIERNAFLEXIONADA Y TIREFIRMEMENTE HACIA ELCUERPO PARA ESTIRAR LAPIERNA. REPITA UN PAR DEVECES Y CAMBIE DE PIERNA.

CON LOS BRAZOSEXTENDIDOS, MIRANDO ALFRENTE, GIRE EL TRONCODESPACIO DE LADO A LADO.

SITÚESE DE PIE A 90 CM DE LAPARED CON LOS TOBILLOSPEGADOS AL SUELO,INCLÍNESE HACIA DELANTEDESPACIO, AGUANTE ENTRE 15Y 20 SEGUNDOS...

SALTE,TAMBIÉN,BATIENDO

LOSBRAZOSEN LOS

CALENTAMIENTOS

ADOPTE DESPACIO UNAPOSICIÓN DE ZANCADA CONLA PLANTA DEL PIEADELANTADO BIEN APOYADAEN EL SUELO, LA RODILLAEN UN ÁNGULO DE 90 % Y ELPIE RETRASADOAPOYÁNDOSE EN LA PUNTA.CAMBIE CADA 5 SEGUNDOS.

SIÉNTESE CON LAS PIERNAS EXTENDIDASHACIA DELANTE Y ESTÍRESE DESPACIOHASTA TOCARSE LAS PUNTAS DE LOS PIES.REPITA VARIAS VECES.

TIRE DE LAS RODILLAS HACIA ELPECHO Y COLÚMPIESE ADELANTE YATRÁS SOBRE LA ESPALDA.

Figura 11.1 Ejercicios de estiramiento.

Parte IV 089-134 18/4/02 14:37 Página 103

almacenado en los músculos. Las fuentes de ener-gía aeróbica son empleadas en actividades másprolongadas, de ritmo constante, como al correr.La energía aeróbica proviene de la oxidación (que-ma) de grasas y carbohidratos. Si la actividad sevuelve tan intensa que las demandas de energíaexceden la capacidad de los sistemas aeróbicos uoxidativos de suministrar oxígeno, la energía adi-cional para la contracción de los músculos surgeentonces de la descomposición anaeróbica o nooxidativa del glucógeno de los músculos. El pro-ducto que el glucógeno utiliza es el ácido láctico.

Aprovisionar los músculos anaeróbicamente re-sulta mucho menos eficaz que aprovisionarlos ae-róbicamente. Por ejemplo, cuando el glucógenomuscular se quema aeróbicamente produce 38 uni-dades de energía; utilizado anaeróbicamente sóloproduce 2 unidades de energía. La vía anaeróbicaproduce más ácido láctico, igualmente, y el excesodel mismo perjudica la capacidad del músculo decontraerse y entorpece la producción de energía, loque provoca fatiga y un mal rendimiento.

Cuando los atletas se ejercitan con un grado deintensidad que exige la producción de energía ana-eróbica, reducen velozmente las provisiones deenergía de los músculos, producen un exceso deácido láctico y aceleran la fatiga. Si prosiguen de-masiado tiempo, la ineficiente vía anaeróbica deenergía agota el glucógeno muscular y anega elmúsculo con subproductos ácidos. El deportista,entonces, debe aminorar o detener la actividad afin de reponer las provisiones de energía, eliminarlos subproductos ácidos y permitir que los múscu-los se recuperen. Afortunadamente, los músculospueden acostumbrarse, incluso en intensidadesmayores, a trabajar con mucha más eficiencia.

Adaptación energética

Tal vez resulte útil pensar en la adaptaciónenergética como en la construcción de una pirámi-de (consulte la Figura 11.2). Como puede ver, lapirámide de la adaptación se erige sobre unos sóli-dos cimientos aeróbicos.

Cimientos aeróbicos. La capacidad aeróbi-ca –la capacidad de absorber, transportar y utili-zar el oxígeno– es necesaria para los atletas en to-

El entrenador de éxito104

DESPERDICIO DECALOR MÍNIMO.

MUCHODESPERDICIO

DE CALOR.

MÁQUINA MUSCULARFUNCIONANDO

INEFICIENTEMENTE.

TRAYECTORIAANAERÓBICA.

ACTIVIDAD MUYINTENSA.

MÁQUINA MUSCULARFUNCIONANDO

EFICIENTEMENTE.

OXÍGENO YCOMBUSTI-

BLEADECUADOS

.

OXÍGENO YCOMBUSTI-

BLEINADECUA-

DOS.

TRAYECTORIAAERÓBICA.

ACTIVIDAD POCOINTENSA.

Figura 11.2 La pirámide del entrenamiento. Nota. DeTraining for Cross-Country Ski Racing (pág. 88) por B. J.Sharkey, 1984, Champaign, IL: Human Kinetics. Copyright1984, de Brian J. Sharkey. Reimpreso con autorización.

Parte IV 089-134 18/4/02 14:37 Página 104

dos los deportes. Desarrollar la capacidad aeróbi-ca ayuda a endurecer los ligamentos, los tendonesy el tejido conectivo y reduce el riesgo de lesiones,además de aumentar la solidez y resistencia nece-sarias para un entrenamiento más intenso. Colocalos cimientos sobre los que se erigirán todos losentrenamientos y el rendimiento futuros. Inclusoen el rugby (deporte predominantemente anaeró-bico, ya que la jugada promedio sólo dura unoscuantos segundos), la capacidad aeróbica ayuda alos atletas a recobrarse más deprisa entre lasjugadas y a practicar durante más tiempo antesde que se imponga la fatiga.

Pico máximo. Velocidad. Adaptación anaeróbi-ca. Umbral anaeróbico. Cimientos aeróbicos. %frecuencia cardiaca máxima.

La buena adaptación aeróbica incluye estoscomponentes:

• Actividad de poca intensidad y larga duración(como las carreras de fondo, la natación o elciclismo).

• Los intervalos naturales (medio fondo con perio-dos ocasionales de mayor intensidad).

• Esfuerzo de fuerza-resistencia (como las cues-tas al correr) una vez a la semana.

Según aumenta la resistencia, puede incre-mentar la sobrecarga aeróbica con una mayor dis-tancia o intensidad del esfuerzo. Recuerde, sinembargo, que la intensidad no debería ser tan exi-gente como para que los músculos necesiten utili-zar la trayectoria de energía anaeróbica. A losmúsculos les resulta mucho más eficaz emplearoxígeno, así que obtenga tanto como pueda de latrayectoria aeróbica antes de pasar a una ejerci-tación más intensa. Siga los principios del entre-namiento descritos en el capítulo 10. Empiecedespacio, haga uso de una progresión gradual yluego sobrecargue el sistema, primero con la dis-tancia y luego con la intensidad. Alterne sesionesde trabajo duras y suaves, y permítase el descansoy el sueño adecuados. Aporte variedad, pero no seolvide del principio de la especificidad.

Al trabajar en la mejora de los cimientos aeró-bicos, recuerde que los atletas prepubescentesdifieren de los jóvenes adultos en varios aspectos.Tanto si su capacidad aeróbica es escasa como sino lo es, no son tan eficientes y aguantan menoslas altas temperaturas. Por tanto, el entrenamien-to aeróbico intenso puede resultar más difícil yarriesgado, sobre todo en clima caluroso. Y, mien-tras que el adiestramiento de las vías de energíaaeróbica resulta menos eficaz antes de la puber-tad, la adaptación aeróbica proporciona beneficiosneuromusculares, y ayuda a los atletas a relajarse

y a ser más eficientes, empleando menos ener-gía para cubrir la distancia. Así pues, dirija laadaptación aeróbica pero prorrogue el entrena-miento intenso hasta que los deportistas alcan-cen la pubertad. Usted desea evitar el desgasteque puede derivarse de un entrenamiento exce-sivo.

Umbral anaeróbico. Como se muestra en lapirámide del entrenamiento, la segunda etapa delentrenamiento está pensado para elevar el umbralanaeróbico. El umbral anaeróbico (o del lactato)indica el grado de esfuerzo en el que los atletasempiezan a producir un exceso de ácido láctico.Designa el límite superior de la producción deenergía aeróbica eficiente. El ejercicio que excedeel umbral anaeróbico exige el trabajo de fibrasmusculares menos eficientes y de vías de energíaanaeróbica. Afortunadamente, puede ayudar a losatletas a elevar sus umbrales anaeróbicos con unentrenamiento específico:

• 4 a 6 horas de trabajo interválico de al menos 2minutos justo por debajo del umbral.

• Ejercitación fartlek (modificando la velocidad)sobre terreno natural.

• Entrenamiento rítmico (p. ej., 1 kilómetro a rit-mo de carrera).

¿Cómo sabe un deportista que él o ella se en-cuentra en el umbral o cerca del mismo? El modomás preciso (aunque caro) de averiguarlo son lascintas para correr de laboratorio y los análisis decampo del lactato. Pero con la práctica, el atletapuede aprender la sensación que produce el um-bral. Cuando respirar se vuelve difícil y el esfuerzosostenido es precario estamos ante una buenaseñal de que el umbral se acerca.

A algunos entrenadores les gusta determinarlos umbrales anaeróbicos midiendo la frecuenciacardiaca. Suelen ser del 85 al 95 % de la frecuen-cia cardiaca máxima. Ésta se calcula utilizandoesta fórmula:

Frecuencia cardíaca máxima = 220 – Edad (enaños).

(Nota: algunos prefieren emplear el índice delesfuerzo percibido para orientar el umbral del en-trenamiento. Cuando el ejercicio nos parece muyintenso, estamos cerca del umbral. Consulte latabla 11.1).

Una vez que los deportistas han aprendido aidentificar sus umbrales, deben alejarse un pocode los mismos manteniendo el ritmo y completan-do una de las tareas de entrenamiento descritaspreviamente. Un mes con ráfagas de dicho entre-

Condición física para el deporte 105

Parte IV 089-134 18/4/02 14:37 Página 105

namiento dos veces a la semana elevará el umbralde los atletas, presumiblemente ayudando a lasfibras musculares a rendir mejor aeróbicamente.

Tabla 11.1 Escala Borg del IEP

6 Ningún esfuerzo.7 Extremadamente suave.89 Muy suave.

10111213 Cierta intensidad.1415 Intenso.1617 Muy intenso.1819 Extremadamente intenso.20 Máximo esfuerzo.

Reimpreso con autorización de G. Borg, 1985, AnIntroduction to Borg’s RPE scale (Ithaca, NY: Mouve-ment Publications), 7.

tación anaeróbica se consigue incrementando pro-gresivamente la velocidad mientras disminuye ladistancia o la duración del esfuerzo. Este métodode ejercitación intermitente, también llamadoentrenamiento interválico, consiste en un intervalode esfuerzo seguido de un período de descansoactivo, como correr suavemente. El descanso acti-vo mantiene la circulación y utiliza las contraccio-nes musculares y la baja intensidad para eliminarlos productos de desecho y acelerar la recupera-ción.

He bosquejado algunas sugerencias básicaspara el entrenamiento interválico en la Tabla 11.2como guía para que confeccione su programa deentrenamiento anaeróbico. De acuerdo con elprincipio de la especificidad, cierta parte del entre-namiento debe emular la intensidad de su depor-te, así que tendrá que identificar intervalos en latabla que se aproximen más estrechamente a esaintensidad. La naturaleza intermitente del entre-namiento interválico permite que los atletas seejerciten más tiempo con gran intensidad antes deceder al cansancio. Para evitar que los deportistastrabajen demasiado, siga las directrices suminis-tradas en las columnas “% de la velocidad máxi-ma” y “% de la frecuencia cardíaca máxima.” Ob-servará que cuanto más intenso es el entrena-miento interválico, mayor es el descanso sugerido.En el entrenamiento interválico el descanso es tanimportante como el trabajo. Si organiza bien eltiempo, los deportistas alcanzarán el punto álgidopara la gran competición. Pero tenga cuidado: elexceso en la adaptación anaeróbica puede condu-cir a la fatiga, el estancamiento, la enfermedad olas lesiones.

Siguiendo estas pautas, mejorará la calidad delas sesiones de entrenamiento interválico:

• Cerciórese de que el ritmo cardíaco del atleta seha recuperado hasta bajar de los 125 latidospor minuto antes de comenzar el siguiente in-tervalo.

• Detenga los intervalos cuando los atletas nopuedan seguir manteniendo la corrección en laforma.

• No programe nunca más de dos sesiones degran intensidad por semana (los partidos y lascompetición son sesiones de gran intensidad).

• No planifique más de 4 a 6 semanas de adapta-ción anaeróbica, luego aminore antes de la com-petición más importante de la temporada.

En los atletas adultos, los efectos de la adapta-ción anaeróbica son sutiles en el mejor de loscasos. Y antes de la pubertad, los beneficios ener-géticos son demasiado pequeños como para medir-

El entrenador de éxito106

El entrenamiento en el umbral anaeróbico re-sulta dificultoso para los atletas de todas las eda-des y sólo debería practicarse una o dos veces a lasemana durante la pretemporada. En particular,los deportistas prepubescentes tienen una capaci-dad menor de emplear el glucógeno muscular y deproducir ácido láctico, por lo que el entrenamientoen el umbral posee un valor limitado para ellos.Quizá desee utilizar un mínimo de entrenamientoen el umbral para ayudar a los atletas jóvenes alograr la relajación y la eficacia en este grado deesfuerzo, pero la serie manteniéndose en el um-bral únicamente vendrán a provocar fatiga, des-gaste y pérdida de interés.

Adaptación anaeróbica. La trayectoria dellactato se activa cuando se sobrecarga debido aestímulos de ejercicios cortos, intensos. La adap-

Parte IV 089-134 18/4/02 14:37 Página 106

los, si es que los hay. Las capacidades anaeróbi-cas, los depósitos de glucógeno, las enzimas anae-róbicas y los niveles de ácido láctico son menoresen los niños que en los adultos jóvenes. Debido aque el desarrollo de la capacidad anaeróbica pare-ce estar más relacionado con la madurez que con elentrenamiento, el valor del entrenamiento anaeró-bico vigoroso en los deportistas prepubescentesresulta cuestionable. El entrenamiento anaeróbicoayuda a desarrollar la habilidad muscular, la efica-cia mecánica y el aplomo psicológico. Pero aguardehasta que los atletas tengan 13 ó 15 años de edadantes de instituir los programas de entrenamientointerválico más exigentes.

Velocidad. Cuando los atletas son nuevos enun deporte deberían seguir la pirámide del entre-namiento (Figura 11.2, pág. 104) a fin de prepa-rarse para el entrenamiento de gran velocidad y elmáximo rendimiento. Los atletas experimentadospueden realizar entrenamiento de velocidad a lolargo de toda la temporada.

La velocidad es en parte heredada y en parteadquirida. El factor hereditario abarca la estruc-tura de las fibras musculares de cada uno y lascaracterísticas biomecánicas. Pero incluso los de-portistas que no han heredado una preponderan-cia de fibras rápidas o una ventaja biomecánicapueden aprender a correr, nadar o a pedalear másdeprisa. Cierta mejora en la velocidad se producecuando los atletas aprenden a relajarse y se vuel-ven más eficaces; el resto se da cuando realizanejercicios de velocidad complementados con le-vantamiento de pesas.

El entrenamiento de velocidad suele implicaresprints. Si su deporte requiere velocidad, pruebelo siguiente:

1 Esprints de aceleración (tipo más seguro): em-pezar despacio, luego acelerar.

2 Esprints huecos: empezar y acabar deprisa, irmás suave en la zona media.

3 Salidas: si son necesarios para la pista, la nata-ción o el fútbol.

En los deportes de habilidad como el balonces-to, el trabajo específico de la velocidad debe reali-zarse en la cancha, como al correr ejercicios enlínea. Y asegúrese de usar una pelota para incre-mentar la especificidad del ejercicio. ¿Se le ocu-rren ejercicios específicos de velocidad para sudeporte? Insistiré en la ejercitación de la velocidadmás adelante en este capítulo.

Pico máximo. La pirámide de entrenamientomuestra cómo los niveles de ejercitación se sumanhacia el punto álgido competitivo. Si se salta eta-pas del entrenamiento, el resultado será menosprovechoso y puede dar lugar a lesiones. Segúnavanza la temporada, debe aumentar la intensi-dad del entrenamiento. No trate de alcanzar máxi-mos rendimientos al principio de la temporada.Sírvase de los campeonatos iniciales para añadirentrenamiento, perfeccionar las técnicas y mejo-rar la velocidad. A mediados de la temporada, losdeportistas tendrían que estar a un nivel compe-titivo que pueda mantenerse hasta la prueba finalde la misma. S los atletas alcanzar este pico dema-siado pronto, pueden derrumbarse antes de queconcluya la temporada.

En la Figura 11.3 puede ver cómo las distintasformas de entrenamiento encajan en un progra-ma general. De ser posible, incluya al menos unmes de cada para el entrenamiento aeróbico, deumbral anaeróbico y anaeróbico. Si los atletas seejercitan entre temporadas, tienen que pasar almenos un mes haciendo entrenamiento aeróbicoantes de que comiencen los entrenamientos regu-lares. Los deportistas jóvenes pueden empezar latemporada sin unos sólidos cimientos aeróbicosespecíficos de su deporte; en tal caso, debe usteddesarrollarlo antes de pasar a una ejercitación deumbral anaeróbico más intensa. El capítulo 12incluye sugerencias concretas para elaborar pro-gramas de entrenamiento.

Tapering. El tapering es un período de menorentrenamiento antes de una competición impor-

Condición física para el deporte 107

Intervalo Uso Duración Duración Promedio Rep. % Vel. % frec. car.trabajo descanso trab/des máxima máxima

Largo Entren. umbral anaeróbico 2-5 min. 2-5 min. 1:1 4-6 70-80 85-90

Medio Adaptación anaeróbica 60-90 seg. 120-180 seg. 1:2 8-12 80-90 95

Corto Entren. alta intens. (anaeróbico) 30-60 seg. 90-180 seg. 1:3 15-20 95 100

Sprint Velocidad (anaeróbico) 10-30 seg. 30-90 seg. 1:3 25 + 100 100

Tabla 11.2 Sugerencias para el entrenamiento interválico

Parte IV 089-134 18/4/02 14:37 Página 107

tante. El tapering fomenta la recuperación de losrigores del entrenamiento, permite el aprovisiona-miento óptimo de energía y proporciona tiempopara curar lesiones menores. Algunos entrena-dores aceleran la preparación para las primerascompeticiones, luego permiten un tapering antesde los campeonatos finales. La longitud aproxima-da del tapering difiere en función del deporte, de laprueba (p. ej., velocidad contra distancia) y la difi-cultad de la progresión en los ejercicios. Algunosentrenadores aplican el tapering durante unoscuantos días (v. gr., los deportes de grupo, losvelocistas), otros durante una semana o más (p.ej., los nadadores, los corredores de fondo). Lalongitud probablemente depende del volumen delentrenamiento, con un tapering más largo aplica-do a volúmenes mayores de entrenamiento. Expe-rimente con los periodos de tapering para ver loque funciona mejor para sus atletas.

Capacidad muscular

La capacidad muscular engloba la fuerza, laresistencia, la fuerza y la velocidad, junto con laflexibilidad. En la Figura 11.3 puede ver cómotodos estos componentes del rendimiento atléticopueden ser imbricados dentro del programa deentrenamiento. Sin embargo, es mejor que losatletas jóvenes y los principiantes comiencen sólocon entrenamiento de resistencia, con menos car-ga y más repeticiones para evitar daños. Losdeportistas experimentados suelen realizar ejer-cicios de fuerza entre temporadas para aumentarel tamaño de los músculos y la fuerza, luego pro-ceden a añadir resistencia, energía y fuerza. Pue-den iniciar la pretemporada con ejercicios de fuer-za y luego añadir resistencia, fuerza y velocidad.

Cada componente de la capacidad muscularpuede ser mejorar mediante el entrenamiento con-

tra resistencias, en el cual una parte del cuerpo semueve contra una fuerza opuesta. La mayor resis-tencia con pocas repeticiones desarrolla la fuerza,mientras que una resistencia escasa con muchasrepeticiones desarrolla la firmeza. La resistenciase puede aplicar con pesas libres, aparatos queemplean cargas guiadas, aparatos hidráulicos oelectrónicos o con un compañero (contrafuerza).Los aparatos de pesas pueden proporcionar unaresistencia constante o variable. (Para abundar eneste terreno en expansión, lea Designing Resístan-ce Training Programs, 2ª edición [Fleck & Kraemer,1977].)

Fuerza

Al considerar la cuestión de los ejercicios defuerza, la primera pregunta que surge es, ¿cuántafuerza requiere mi deporte? Si su deporte requieremás fuerza de la que tienen los atletas, entoncesnecesitan entrenarse. Pero si no necesitan másfuerza, pase a la fuerza-resistencia, la fuerza o eldesarrollo de la velocidad.

¿Cómo sabe si su deporte exige más fuerza o sideterminados atletas necesitan más? En algunoscasos resulta obvio. Los jugadores de rugby, enespecial los zagueros, necesitan toda la fuerza quepuedan conseguir, pero los corredores de fondono. La fuerza es definida como la cantidad máximaque se puede levantar una vez. Los deportes talescomo la natación, el baloncesto y el esquí de fondoque conllevan muchas repeticiones de contraccio-nes por debajo del máximo (submáximas) exigenresistencia más que fuerza.

¿Cómo sabe si un atleta posee suficiente fuerzapara un deporte de resistencia? La experienciamuestra que la fuerza de un grupo muscular ten-dría que ser al menos 2,5 veces la resistenciaencontrada. Más fuerza no contribuirá a mejorarel rendimiento. Pero un deportista con menos de

El entrenador de éxito108

Figura 11.3 Metas del entrenamiento para la temporada. Nota. De Physiology of Fitness (2ª edic., pág. 209) por B: J. Sharkey,1984, Champaign, IL: Human Kinetics. Copyright, 1984 por Brian J. Sharkey. Modificado con autorización.

Fuera Pretemporada Principios Máximo de la de temporada de la temporada temporada

Capacidadenergética

Capacidadmuscular Fuerza Fuerza-resistencia Fuerza Velocidad

Aeró

bica

Fuer

za

Veloc

idad

Anae

róbi

ca

Anae

róbi

ca

Parte IV 089-134 18/4/02 14:37 Página 108

2,5 veces la carga necesita más fuerza para supe-rar la resistencia.

Por ejemplo, imagine a una joven nadadora queejerce 7 kilos de fuerza en una simulación delesfuerzo implicado en la brazada. Si su fuerzamáxima medida empleando una balanza o poleade pesos en ese grupo muscular excede los 18kilos (2,5 x 7), probablemente posee suficientefuerza. Si no es así, necesita un programa de de-sarrollo de la fuerza específico de su deporte.

Imagine ahora a un nadador de instituto quepuede ejercer 25 kilos en una brazada máxima.¿Posee fuerza suficiente para su deporte? Utiliceuna balanza o polea de pesos para determinar lafuerza ejercida en una brazada típica. Él ejerce 11kilos en la brazada promedio, ¿es esa fuerza sufi-ciente? La respuesta es no, porque su brazadamáxima es menos de 2,5 veces su brazada típicaal nadar (11 x 2,5 = 27,5).

La fuerza mejora cuando un músculo es sobre-cargado. Una carga lo bastante pesada como paraser levantada sólo unas cuantas veces es bastantepara sobrecargar el músculo y provocar la adapta-ción. Las adaptaciones al desarrollo de la fuerzaabarcan un incremento de las proteínas contrácti-les, un tejido conectivo más grueso, un aumentoen la capacidad de activar fibras musculares y,por supuesto, una mayor fuerza. Los atletas desexo masculino muestran un mayor aumento deltamaño muscular (hipertrofia) que las mujerescuando adquieren fuerza. La progresión gradualutilizando pesas libres, aparatos de carga o inclu-so calistenia con resistencia mejorará la fuerzacuando siga estas directrices básicas:

• Fije el aumento del peso de forma que el núme-ro máximo de repeticiones que el atleta puedahacer sea de 7, 8 ó 9.

• Haga series de 8 a 10 repeticiones por cada gru-po muscular.

• Aumente la resistencia cuando el deportistapueda hacer más de 10 repeticiones en cadaserie.

• Prácticas en días alternos, 3 veces por semana.

La calistenia (como las flexiones) es otra mane-ra de desarrollar fuerza si añade resistencia (con-trafuerza) y mantiene el número de repeticionespor debajo de 10. Algunos ejercicios calisténicos,como las dominadas, imponen un límite –sola-mente puedes hacer unos cuantos. Otros, comolas flexiones, necesitan una resistencia añadida,como la mano de un compañero en la espalda. Sino dispone de pesas libres o de aparatos de carga,haga que los atletas trabajen por parejas paraconseguir objetivos de fuerza con una forma sindesembolso económico de desarrollo de la fuerzavariable. Por ejemplo, mientras un deportista rea-liza una flexión un compañero puede aplicar unaresistencia (contrafuerza) que iguale la fuerza dela contracción. Para obtener los mejores resulta-dos, haga que los atletas completen la maniobraen 1 ó 2 segundos y vuelvan a hacer cada ejercicioen 3 series de 10 repeticiones. Consulte la Figura11.4 en busca de más sugerencias o utilice la ima-ginación para idear sus propios ejercicios de “con-trafuerza.”

Siga las pautas de fuerza y los atletas mejora-rán su fuerza en un promedio de un 1 a un 3%por semana. Cuando hayan adquirido la fuerza

Condición física para el deporte 109

¿CREE QUE NECESITOHACER ALGUNOS

EJERCICIOS DE FUERZA,ENTRENADOR?

Parte IV 089-134 18/4/02 14:37 Página 109

adecuada para su deporte, pase a la siguiente eta-pa del entrenamiento de la capacidad muscular.Pero recuerde incluir al menos una serie de ejer-cicios de gran resistencia cada semana para man-tener la fuerza.

Aunque los jóvenes atletas adquieren fuerzacon el entrenamiento contra resistencias, adquie-ren poca masa muscular antes de la pubertad.Esto sugiere que los incrementos de fuerza sedeben a cambios neuromusculares, entre los quese incluyen la activación de más fibras, aprender aejercer fuerza con mayor eficacia y reducir lasinhibiciones. Siguiendo las pautas, se incremen-tará la fuerza con un riesgo pequeño de lesión. Noobstante, cerciórese de que los atletas realizan elcalentamiento y practican correctamente, con

monitor y supervisión adecuados. Evite emplearpesas libres con mucha carga y aparatos de entre-namiento muy voluminosos con los deportistasprepubescentes. Dado que el desarrollo de la fuer-za y el músculo requieren maduración y suportehormonal, es posible lograr los beneficios neuro-musculares del entrenamiento de resistencia conpesas ligeras o unas pocas repeticiones, y minimi-zar así el riesgo de lesiones en el esqueleto inma-duro.

Fuerza-resistencia muscular

En muchos deportes, tener suficiente fuerza-resistencia muscular es más importante que unagran fuerza muscular. Hay varios tipos de fuerza-

El entrenador de éxito110

FLEXIONES CON OPOSICIÓN.

FLEXIÓN DE LAS PIERNAS.

EXTENSIÓN DEL BRAZO.

Figura 11.4 Ejercicios de contrafuerza.

FLEXIÓN DE LOS BRAZOS.

EXTENSIÓN DE LA PIERNA.

Parte IV 089-134 18/4/02 14:37 Página 110

resistencia muscular. En la Tabla 11.3 puedeusted ver cómo las repeticiones en los ejerciciosse relacionan con la fuerza y la fuerza-resisten-cia: desde la fuerza-resistencia a corto plazo(anaeróbica) hasta la fuerza-resistencia a largoplazo (aeróbica) desarrollada con cientos de repe-ticiones.

Utilice las prescripciones para conseguir el tipode fuerza-resistencia idónea para su deporte; si serequiere fuerza-resistencia a corto plazo para 1 a 2minutos de esfuerzo, emplee esa prescripción. Sila fuerza-resistencia a largo plazo casa con sudeporte, siga ese plan. En cuanto a los deportesque combinan ambas, combine varios tipos deldesarrollo de la resistencia muscular.

Al igual que el desarrollo de la fuerza, el desa-rrollo de la fuerza-resistencia ha de ser específicacon respecto a la manera en que los músculosserán usados en ese deporte. Trate de imitar losmovimientos empleados en la competición. Utili-ce las pesas libres, los aparatos de carga, lacalistenia u otros métodos o equipamiento (p. ej.,tubos de goma) para lograr los resultados apete-cidos. La fuerza-resistencia es sumamente ejerci-table y las mejoras en la capacidad de las víasenergéticas pueden incrementar la resistencia engran médida. ¡Con el tiempo, un atleta podríaprogresar de hacer 20 flexiones hasta completaslas 200 o más! A menudo, estas mejoras tannotables en la fuerza-resistencia vienen asocia-das con un rendimiento mejorado y el éxito en eldeporte.

Fuerza

La fuerza es el promedio de trabajo realizado,descrita por esta ecuación:

Fuerza = Fuerza x DistanciaTiempo

La fuerza implica tanto el vigor (fuerza) como lavelocidad (distancia dividida por el tiempo). Resul-ta esencial en muchos deportes, entre los que seencuentra el fútbol, el béisbol y el hockey sobrehielo. Desarrollar la potencia implica normalmen-te desarrollar la fuerza. Para mejorar la capacidadde salto en baloncesto o voleibol, por ejemplo, losentrenadores pueden prescribir sentadillas paradesarrollar fuerza en los músculos de los muslos.Pero las sentadillas son lentas y no del todo espe-cíficas para la habilidad neuromuscular del salto.Por tanto, el entrenamiento debe pasar a los ejer-cicios de fuerza que combinan fuerza y velocidaden un movimiento específico del deporte en cues-tión. Las siguientes pautas conducen a un desa-rrollo de la fuerza provechoso:

• Emplear un peso entre el 30 y el 60 % del máxi-mo levantamiento único del atleta.

• Instruir al deportista para que levante el peso lomás rápido posible.

• Prescribir tres series de 15 a 25 repeticiones,tres veces por semana.

• Aumentar la resistencia cuando el atleta puedarealizar 25 repeticiones en cada serie.

Condición física para el deporte 111

Fuerza esfuerzos cortos intermedia esfuerzos largosFuerza-resistencia, Fuerza-resistencia Fuerza-resistencia,

Meta Fuerza máxima Aguante con una carga Aguante con una carga Aguante con una cargapesada intermedia ligera

Prescripción MR1 7-10 MR 15-25 MR 30-50 Más de 100 Rep.3 series 3 series 2 series 1 serie3 veces/semana 3 veces/semana 3 veces/semana 3 veces/semana

Mejoras Proteínas contráctiles Cierta fuerza y Cierta resistencia y Enzimas anaeróbicas(actina y miosina) metabolismo anaeróbico metabolismo anaeróbico MitocondriasTejido conectivo (glicólisis) Leve mejora en la Utilización del oxígeno y

fuerza las grasas

No mejora Absorción de oxígeno Consumo de oxígeno FuerzaResistencia

Nota. De Physiology of Fitness (2ª edic., pág. 79) de B. J. Sharkey, 1984, Champaign, IL: Human Kinetics. Copyright, 1984 por Brian J.Sharkey. Modificado con autorización.1MR = Máximo de repeticiones.

Tabla 11.3 El continuo Fuerza-Resistencia

Parte IV 089-134 18/4/02 14:37 Página 111

Pesas. Las pesas libres no son idóneas para eldesarrollo de la fuerza. Ciertos aparatos de cargaresultan aceptables, pero el mejor equipamientoson los dispositivos isoquinéticos o de resistenciavariable que permiten cierto control de la resisten-cia y de la velocidad de contracción (p. ej., Leaper,Nautilus, Cybex). Con estos dispositivos puedeemplear la resistencia y la velocidad que necesita ymantener un programa seguro. Otro plus con estetipo de equipamiento es que los músculos no seresienten tan fácilmente. Las agujetas son provo-cadas por un trabajo demasiado intenso al princi-pio de la sesión o al bajar una carga pesada (con-traer un músculo que se está alargando). Evite lasagujetas empezando con una resistencia menor ycontracciones más lentas; luego aumente hasta laprescripción recomendada durante un período deadaptación de 2 semanas.

Pliometría. La pliometría son ejercicios deltipo de la calistenia empleados para desarrollar lafuerza. Utilizados junto con el desarrollo de lafuerza, estos movimientos explosivos aumentan lafuerza y la capacidad elástica que proporcionamás potencia para saltar y otras actividades. Dadoque el peso corporal es aproximadamente el 33 %de la fuerza máxima de las piernas, la pliometríacumple la prescripción energética descrita previa-mente.

Los atletas deberían empezar con la pliometríagradualmente para evitar lesiones y deberíanparar si sienten dolor en las piernas. Realice todoel entrenamiento sobre una superficie blandacomo la hierba o la tierra. Complete 3 series de 25ejercicios, luego aumente la resistencia añadiendoun ejercicio más difícil (p. ej., trabajar cuesta arri-ba o cargar con un chaleco lastrado). La pliometríaincrementará la fuerza entre un 8 y un 10 % ymejorará la capacidad de almacenamiento deenergía elástica. También ayuda a los atletas autilizar más fuerza con eficacia.

Los entrenadores han ideado ejercicios pliomé-tricos para la parte superior del cuerpo, emplean-do balones medicinales o combinaciones de movi-mientos (p. ej., flexión rápida, entrechocar las pal-mas de las manos y hacer otra flexión). Consulteuna buena referencia (como Radcliffe y Farenti-nos, 1985) para profundizar en este nuevo métodopara desarrollar la potencia.

Aunque la fuerza no se desarrolla rápidamenteen los atletas jóvenes, unos ejercicios de fuerzaayudarán a desarrollar la habilidad neuromuscu-lar, que consiste en un movimiento rápido contrauna resistencia. Pero el desarrollo de la fuerza, en

especial la pliometría, puede resultar muy duropara las rodillas de los jóvenes, así que modere supráctica con los atletas inmaduros.

Velocidad

Es posible que haya oído decir que los velocis-tas nacen y no se hacen, lo que es esencialmentecierto porque las fibras musculares rápidas sonheredadas. Pero todos los atletas pueden utilizarla práctica y el entrenamiento específico paramejorar los componentes de la velocidad: tiempode reacción y tiempo de acción. El tiempo dereacción equivale a la demora en el inicio de unmovimiento, y el tiempo de acción es el intervalotranscurrido entre el principio y el fin del movi-miento.

El tiempo de reacción es mejorado medianteejercicios prácticos. El entrenador experimentadoacelera las reacciones reduciendo las opcionesque los atletas deben llevar a cabo y entrenandoluego la reacción correcta (p. ej., si el extremo de ladefensa se echa sobre el quarterback optativo, éstelanza la pelota, si no corre). En la pista y en la pis-cina sólo hay una opción: cuando suena el pistole-tazo, el atleta sale. Cuantas menos opciones hay,más rápida es la reacción.

El tiempo de acción puede ser mejorado me-diante un programa de estiramientos, desarrollode la fuerza y la fuerza, ejercitación de la forma yentrenamiento específico para la velocidad. Spors-peed por George Dintiman y Robert Ward (1988)sugiere el programa descrito en la Tabla 11.4.

El entrenador de éxito112

Tabla 11.4 Programa de desarrollo de la velocidad

Componente del entrenamiento Descripción

Entrenamiento básico. Capacidad aeróbica y muscular.

Potencia/fuerza funcional. Movimientos explosivos con un 55 a 85%de resistencia.

Lanzamientos. Movimientos explosivos.

Pliometría. Movimientos explosivos, saltar/lanzar.

Aceleración con carga. Aceleración lastrada.

Velocidad/resistencia deportivas. Salida y aceleración ampliadas.

Sobrevelocidad. Exceder la velocidad máxima.

Adaptado de Dintiman y Ward (1988).

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La sobrevelocidad o desarrollo de la velocidadasistida supone lograr que los atletas se desplacendel 10 al 20 % más deprisa que la velocidad máxi-ma, por ejemplo, tirados por una cuerda elástica ocorriendo cuesta abajo. Con el tiempo, los atletasse relajan y adquieren habilidad y eficacia en velo-cidades mayores. Cerciórese de que conoce lasnecesarias medidas de seguridad antes de emple-ar este método de entrenamiento. Para desarrollarvelocidad-resistencia, incremente de modo gra-dual la longitud de la aceleración a la vez que dis-minuye el descanso entre aceleraciones. Un sabioentrenador dijo una vez, “La velocidad es un en-torno y uno debe aclimatarse a él.” Utilice el entre-namiento específico del deporte para aclimatar alos atletas a la velocidad que necesitan.

Vuelta a la calma

Sea cual fuere el tipo o nivel de entrenamientoque esté utilizando, asegúrese de que los deportis-tas realizan la vuelta a la calma después de unentrenamiento intenso. Las actividades suaves,como correr despacio, caminar o los estiramientosayudan a la circulación a eliminar los subproduc-tos metabólicos de los músculos y reduce la pro-babilidad de la rigidez y las agujetas. Puede pare-cer estupendo culminar los ejercicios de acelera-ción con una carrera viva hasta las duchas, perose trata de una opción reprobable en términosfisiológicos. Planifique una vuelta a la calma de 5minutos después de cada entrenamiento. Des-pués de correr despacio, de caminar o de hacerejercicios calisténicos suaves, haga estiramientospara reducir la posibilidad de agujetas muscula-res retardadas.

Cuestiones fundamentalesa recordar

1. Cada sesión de entrenamiento empieza conun calentamiento concebido específicamen-te para su deporte.

2. Los músculos dependen de dos fuentesprincipales de combustible para la energía,los carbohidratos y las grasas.

3. Según aumenta la intensidad del ejercicio,las vías energéticas y el combustible cam-bian:

3.1 Las grasas y algunos carbohidratos sonutilizados durante el ejercicio de pocaintensidad.

3.2 Los carbohidratos y algunas grasas sonutilizados durante el ejercicio de inten-sidad moderada.

3.3 Los carbohidratos son utilizados en losejercicios muy intensos.

4. De las dos vías principales que transportanla energía para las contracciones muscula-res, la aeróbica utiliza la energía eficazmen-te, mientras que la anaeróbica lo hace conmenos eficacia.

5. El entrenamiento de fondo lento, suave, esempleado para desarrollar una base aeróbica.

6. El entrenamiento justo por debajo del um-bral anaeróbico (o del lactato) eleva el mismoe incrementa la intensidad en la que la víade energía aeróbica del atleta es capaz desuministrar energía.

7. El entrenamiento que excede el umbral dellactato mejora las vías de energía anaeróbica.

8. La condición física consta de flexibilidad,fuerza, resistencia, fuerza y velocidad.

9. La fuerza mejora cuando un músculo essobrecargado. Los entrenadores deben ayu-dar a los atletas a decidir cuánta fuerza esnecesaria para su deporte, cómo conseguiresa fuerza y cuándo pasar a otras formas deejercitación.

10. La fuerza-resistencia a corto plazo (anaeró-bica) e intermedia mejoran con el entrena-miento completando más repeticiones conuna resistencia menor que cuando se aspiraa la fuerza.

11. La fuerza, o el índice de realización del tra-bajo, es el producto de la potencia (fuerza) yla velocidad (distancia/tiempo). Es posiblemejorar la fuerza aumentando la fuerza, lavelocidad o ambas. Las contracciones rápi-das del 30 al 60 % de la fuerza máxima aña-den fuerza.

12. Se puede mejorar la velocidad practicandoun movimiento con mayor rapidez que laque se le aplica normalmente.

13. Cada entrenamiento intenso o competicióndebería acabar con una vuelta a la calma, oactividad ligera, y estiramientos.

Condición física para el deporte 113

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Esta página dejada en blanco al propósito.

Las actividades que se planifican para los atletas durante las sesiones deentrenamiento dependen de cierto número de factores, entre los que se encuen-tran el deporte en cuestión y la edad de los atletas, la experiencia y los objetivos.Los programas para los deportistas jóvenes han de poner el énfasis en la diver-sión, las habilidades básicas y la variedad. Con madurez y experiencia, algunosatletas se concentrarán en uno o dos deportes y el entrenamiento se volverámás intenso y especializado.

Este capítulo ofrece un repaso y pautas para la elaboración del programa deentrenamiento. La información contenida aquí, junto con las sugerencias querecoja en los cursos de entrenamiento, la experiencia y los libros especializadosen deporte, le pondrán en camino en su busca del programa de entrenamientoideal.

Desarrollo del programa de energía

La elaboración de un programa de ejercicios comienza con la determinaciónde las metas, como el determinar cuántas horas de qué tipo de entrenamientodesea realizar cada día, semana y mes de la temporada. El entrenamiento pue-de organizarse en torno a las temporadas deportivas –período transitorio, perío-do preparatorio y período de competiciones– con una duración de uno a variosmeses cada una. Los programas de eentrenamiento modernos hacen uso tam-bién de periodos de entrenamiento o ciclos, en los cuales los ejercicios rotan sis-temáticamente de menor a mayor intensidad y duración. Un ciclo típico de 4semanas incorpora una sobrecarga muscular progresiva con descanso y recu-peración (consulte la Figura 12.1). Cada semana, dentro de un ciclo, y cadasesión, dentro de una semana, requiere su propio plan de actividades.

Digamos que el objetivo anual para un atleta exige 150 horas de entrena-miento (un promedio de 1 hora diaria, 6 días a la semana durante 25 semanas);usted debe repartirlo y decidir cuánto tiempo se invierte en cada sesión. Dadoque el período transitorio está designado para el entrenamiento aeróbico, podríaplanificar sesiones relativamente largas y promediar 10 horas por semana du-rante 12 semanas (10 horas x 12 semanas = 120 horas). Más tarde, puede pre-ferir lograr ese promedio de 10 horas invirtiendo 8, 10 y 12 horas por semana en

Capítulo 12

Desarrollando su programa de entrenamiento

Dr. Brian J. SharkeyUniversidad de Montana

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los tres ciclos de 4 semanas de esa temporada. Asípues, las semanas, dentro del primer ciclo de 4semanas, podrían incluir 6, 8, 10 y 12 horas deentrenamiento, con un promedio de 8 horas sema-nales. Hay que tomar decisiones similares con res-pecto a otros parámetros, como la intensidad delentrenamiento, armonizando todos los elementosen una planificación diaria lógica. Si todas estascifras producen confusión, no se desespere: sumi-nistraré directrices específicas para ayudarle en eltranscurso de la temporada, los ciclos, las sema-nas y las sesiones de ejercicios.

Pautas para el entrenamiento

Siga estas directrices para garantizar unosejercicios seguros y eficaces a los atletas:

• Base cada programa de entrenamiento en lamadurez y la experiencia del deportista. No in-corpore a un novato a un programa diseñadopara un veterano.

• Establezca objetivos para el entrenamiento (p.ej., horas o distancia por período de ejercicios,ritmo de carrera, distancia de la carrera).

• Increménte las horas o la distancia del entrena-miento no más de un 10 a 20 % por año, tempo-rada o semana (10% para los neófitos y los atle-tas menos maduros; hasta el 20 % para los atle-tas experimentados).

• Limite los ejercicios intensos (umbral anaeróbi-

co, anaeróbicos, de velocidad, y competiciones)a un 5 al 10 % de las horas totales (5 % para losnovatos, 7 % para los deportistas entrenados,10 % para los atletas de elite).

• Reduzca la intensidad del ejercicio según au-menta la distancia o viceversa.

• Incluya al menos los tres periodos (transitorio,preparatorio y de competiciones) en la planifica-ción.

• Incluya al menos dos ciclos de 4 semanas encada período (preferiblemente 3). (Consulte elejemplo de la Figura 12.1). No se sienta atado alnombre de los periodos. Puede que sea necesa-rio hacer que los atletas comiencen un ciclo pre-paratorio antes de los entrenamientos formalesdel grupo.

Plan semanal (microciclo)

Los objetivos y directrices aportan un modelogeneral, pero no se concretan en actividades dia-rias de entrenamiento. He descubierto que unplan de entrenamiento constituye una gran ayudapara elaborar planificaciones semanales y diarias.Un menú incluye las actividades esenciales paracada semana de entrenamiento. La Tabla 12.1 esuna muestra de un plan de entrenamiento paraun corredor de medio fondo.

Desarrolle usted el microciclo a partir del plan,seleccionando una o más actividades de la catego-ría apropiada para cada día. La distancia total o la

El entrenador de éxito116

Figura 12.1 Ciclos de entrenamiento.

Horas totales.

Período transitorio. Período preparatorio. Período de competiciones.

Du

raci

ón (h

ras/

sem

)

Hras. de entrenamientointenso.

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duración han de satisfacer sus objetivos para eseperíodo o ciclo. Según se interna en el período pre-paratorio, quizás necesite planificar dos sesionesal día para acomodar todas las actividades delplan. La Tabla 12.2 muestra un microciclo típicopara el período transitorio.

Los deportistas más maduros o experimenta-dos tendrían que cubrir mayor distancia, ejerci-tarse con más intensidad y trabajar la velocidad, yvarias sesiones dobles diarias. Mientras el entre-namiento avanza hacia el período preparatorio, esimportante mantener las ganancias en la condi-ción física aeróbica mientras se trabaja en incre-mentar el umbral anaeróbico. Y cuando el entre-

namiento se aproxima a la temporada de competi-ción, resulta esencial mantener tanto las mejorasen el umbral anaeróbico como en el aeróbico conlos ejercicios apropiados.

Las horas de entrenamiento dependen de laedad, la experiencia y el nivel de condición física.La Tabla 12.3 facilita directrices para determinarlas horas de entrenamiento en cada período paraun deporte de resistencia. Dado que las exigenciasde la adecuación energética también dependen deldeporte, los atletas pueden salir adelante con me-nos horas de ejercicios.

Desarrollando su programa de entrenamiento 117

Tabla 12.1 Plan de actividades para los ejercicios del microciclo del corredor

Objetivo del entrenamiento y de la temporada

Base aeróbica Umbral anaeróbico Ejerc. anaeróbicos(Período transitorio) (preparatorio) y velocidad

(período competitivo)

Distancia lenta. Intervalos largos. Intervalos medios.Cuestas. Fartlek. Esprints.Fartlek1 Entrenamiento rítmico. Esprints.Distancia media. Distancia rápida. Mantener base aeróbica.Mantener velocidad. Mantener base aeróbica. Mantener umbral anaeróbico.Intervalos naturales2 Mantener velocidad.

1Fartlek es un juego de velocidad, usualmente con un compañero, de intervalos de carreras más rápidas y más lentas. Losatletas escogen la velocidad que se adecue al terreno y a su nivel de entrenamiento.2Los intervalos naturales se sirven de los cambios del terreno para dictar el paso.

EL ENTRENADOR DICE QUEESCOJA UNO DE LA COLUMNA “A”Y OTRO DE LA COLUMNA “B..

Tabla 12.2 Ejemplo de programación del microci-clo de entrenamiento semanal para elperíodo de transición.

Día Actividad

Lunes Intervalos naturales con algunaspendientes.

Martes Medio fondo.

Miércoles Cuestas.

Jueves Fartlek.

Viernes Jornada suave con trabajo avelocidad suave.

Sábado Distancia lenta.

Domingo Descanso o alternancia.

Nota: Todos los ejercicios, salvo los de velocidad, han derealizarse por debajo del umbral anaeróbico.

” PLAN DEENTRENAMIENTO”

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Estas pautas están basadas en las exigenciasde los deportes de resistencia. En los deportes degrupo, velocidad o actividades de corta duración,puede reducirse el número de horas de entrena-miento. La Tabla 12.4 describe los objetivos bási-cos aeróbicos según la cantidad de esfuerzo conti-

nuo requerido en su deporte. Si es el rugby, conuna duración media por jugada de unos 4 segun-dos, el entrenamiento en el período transitorioaeróbico requerido para satisfacer el objetivo de lapreparación es de 1 a 2 horas o de 15 a 20 kilóme-tros por semana. La meta podría conseguirse en 3a 5 días corriendo 4,5 kilómetros cada día.

Necesidades energéticas

Puede que se haya preguntado cómo determi-nar las demandas energéticas del deporte en elque entrena. La Tabla 12.5 enumera las necesida-des energéticas y el énfasis en el entrenamiento dealgunos deportes populares (si el suyo no está enla lista, busque uno con requisitos similares).

Programa de ejemplo

Ahora voy a ensamblar un programa de entre-namiento de muestra, de forma que usted puedaver cómo funciona el sistema en un deporte ac-tual. La Tabla 12.6 proporciona un programa deuna temporada para el baloncesto, un deporte derequerimientos energéticos medios.

Aunque preferiría aportar directrices para unprograma de ejercicios de todo un año, me doycuenta que muchos entrenadores no pueden tra-

El entrenador de éxito118

Tabla 12.3 Horas de adecuación energética requeridas semanalmente para los deportes de resistencia.

Edad Período transitorio Período Período Horas1 al año

o nivel preparatorio competitivo

Menos de 15 5-6 6-7 4-5 200-300

15-17 8-9 9-10 7-8 300-400

17-21 9-12 12-14 8-9 400-600

elite 10-13 13-16 10-11 500-700

1. Basado en un programa anual.

Tabla 12.4 Metas del entrenamiento para desa-rrollar la base aeróbica

Esfuerzo continuo Metas del entrenamiento1

requerido

Menos de 10 segundos 15-20 km/semana ó 1-2 horas

10 segundos-2 minutos 20-25 km/semana ó 2-3 horas

2-15 minutos 30-45 km/semana ó 3-5 horas

5-30 minutos 45-60 km/semana ó 5-7 horas

Más de 30 minutos Más de 60 km/semana ó 7 horas

1 Los corredores y demás deportistas que se ejercitan paracompetir a pie se guían por los kilómetros semanales; losnadadores, esquiadores a campo traviesa y otrosdeportistas que no realizan carrera pedestre se guían porlas horas semanales.

Tabla 12.5 Necesidades energéticas y énfasis en el entrenamiento de los deportes populares

Deporte Necesidades energéticas Énfasis en el entrenamiento1

Béisbol, rugby, jockey, velocidad Cortas, intensas (menos de 1 minuto) Anaeróbico y velocidadBaloncesto, tenis, lucha libre Intensas (1-2 minutos) Umbral anaer. y anaeróbicoFútbol, lacrosse, medio fondo de natación y 2-10 minutos Aeróbico, umbral anaer. ypista, patinaje aeróbicoCarrera pedestre y esquí de fondo Más de 10 minutos Aeróbico y umbral anaer.

1. Recuerde desarrollar siempre la base aeróbica antes de iniciar los ejercicios intensos.

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bajar con atletas olímpicos. Así que no intentesacarle demasiado rendimiento a un deportista enun solo período. Recuerde que la descripción delentrenamiento que compartí en el capítulo 10–que el entrenamiento es un pasatiempo amableen el que convences al cuerpo para que cambiesutilmente. Este capítulo debería serle de ayudapara concebir un programa que maximice la con-dición física de los atletas en el tiempo de que dis-ponga.

Programas de acondiciona-miento muscular

La mayoría de los programas de acondiciona-miento muscular abarcan el entrenamiento conpesas (revise el capítulo 11). Mientras que los atle-tas tiempo atrás seguían el mismo régimen deentrenamiento con pesas durante meses, el ciclode ejercicios ha adquirido popularidad en los ejer-cicios con pesas. En un mismo programa, cadaciclo consta de cuatro fases, con un entrenamien-to progresivo de mayor a menor volumen y de pocaa mucha sobrecarga e intensidad. La idea quesubyace al entrenamiento de resistencia en cicloses cambiar continuamente el estímulo para conse-guir una adaptación continua. La primera faseaumenta la masa muscular, la segunda y la terce-ra fases son para la fuerza, y la fase final está pen-sada para llevar la fuerza hasta el límite superior.Cada fase puede durar de 2 a 6 semanas, con 4semanas de la longitud típica. Así pues, por ejem-plo, un ciclo completo podría abarcar 4 fases de 4semanas cada una, sumando un total de 16 sema-nas. Consulte la Tabla 12.7 para estudiar ciclosrecomendados de entrenamiento de cara a undeporte de fuerza y fuerza como el rugby.

Desarrollando su programa de entrenamiento 119

Tabla 12.6 Ejemplo de programa de mejora ener-gética para el baloncesto

Temporada: período transitorio.Énfasis en el entrenamiento: Base aeróbica (45-60 km ó 3-5horas/semana).Actividades:Fondo lento: 1 vez/semana, 8-10 km ó 1 hora.Fartlek: 1 vez/semana (variar lento y rápido), 4-6 km ó 30minutos.Medio fondo: 1 vez/semana, 6-8 km ó 30 minutos. Cuestas: 1 vez/semana, 5 km ó 30 minutos.Jugadas ensayadas (toda la cancha): 2-3 veces/semana ó 1hora.Otras actividades (p. ej., ciclismo) para adquirir una buenacondición física, resistencia en las piernas y por variar.Notas del entrenador: Aportar metas del entrenamiento yprogramas para el período transitorio.

Temporada: período preparatorio.Énfasis del entrenamiento: Umbral anaeróbico y anaeróbico.Actividades: Fartlek: 1 vez/semana (aumentando la intensidad)Intervalos medios: 1 vez/semana, 8-12 repet. De intervalosde 90 segundos.Ejercicios de aceleración: 2 veces/semana (en toda lacancha).Ejercicios de técnica de la carrera y esprints: 1 vez/semana.Intervalos largos: 1 vez/semana, 4 repet. Justo por debajodel umbral anaeróbico.Notas del entrenador: Incluir el fondo lento y las cuestascuando sea posible para mantener la base aeróbica.

Temporada: período competitivo.Énfasis del entrenamiento: Anaeróbico y velocidad.Actividades:Intervalos cortos: 1 vez/semana, 15-25 repet. De intervalosde 30-60 segundos.Ejercicios de velocidad: 1-2 veces/semana (con la pelota).Intervalos medios: 1 vez/semana, 12 repet. de intervalos de90 segundos con tiempo de recuperación reducido.Notas del entrenador: Realizar entrenamientos intensosvarios días antes de la competición para permitir larecuperación.Recordar que la competición sustituye al entrenamientodurante dicho período en la temporada.Continuar realizando algún trabajo de mantenimientoaeróbico y de umbral anaeróbico.

Tabla 12.7 Ciclos de entrenamiento para undeporte de Fuerza/Fuerza

Crecimiento Fuerza Fuerza Máximo rendimiento

Muscular (fase 1) (fase 2)

Series 3-5 3-5 3-5 1-3

Repeticiones 8-20 2-6 2-3 1-3

Intensidad Poca Mucha Mucha Muchísima

Aunque hacen falta más datos para determinarel programa ideal, los ciclos parecen eficaces y,ciertamente, resultan más interesantes para losatletas. Si el suyo es un deporte de resistencia,ajuste los ciclos de la Tabla 12.7 para que satisfa-gan las exigencias de ese deporte. Por ejemplo, elesquí de fondo es un deporte de fuerza y resisten-cia, con muchas repeticiones y desplazamientosexplosivos de los brazos y las piernas. Los ciclos deentrenamiento para este deporte podrían incluir lafuerza (de ser necesaria), la resistencia a corto pla-

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zo, la resistencia intermedia y la fuerza (15 a 25repeticiones con un 30 a un 60 % del máximo, tanrápidas como sea posible). Quizá desee revisarestas categorías de actividades de la Tabla 11.3(pág. 111). Con un poco de experimentación y unbuen registro de anotaciones, pronto sabrá quénecesita para elaborar un buen programa de acon-dicionamiento muscular para su deporte.

rante al menos 4 semanas en la pretemporada.Recomiendo tres series de cada ejercicio para losgrupos musculares importantes. Cuando la pro-gresión se estanque, cambie a otro ejercicio parael mismo músculo. Según se acerque la tempora-da, utilice ejercicios y pruebas más adaptadas adicho deporte. Igualmente, reduzca el uso de pe-sas y aparatos de carga según se adentre en elperíodo de competiciones.

Asegúrese de programar sesiones de manteni-miento de la fuerza varios días antes de la competi-ción, para permitir una recuperación completa. Enla mayoría de los deportes, un día a la semana ser-virá para mantener las ganancias de fuerza entretemporadas (son necesarios dos días para los de-portes con grandes requerimientos de fuerza).

Directrices para el entrenamiento con pesas

Siga estas pautas para garantizar un entrena-miento con pesas seguro y eficaz para los atletas:

• Enseñe técnicas de levantamiento y prepara-ción apropiadas.

• Disponga siempre a un monitor cuando estéutilizando pesas libres (dos para las pesas pesa-das).

• Insista en que los deportistas calienten y haganestiramientos antes de ponerse a levantar, y uti-lice una pesa ligera para calentar antes dellevantamiento.

• Exija a los atletas que comprueben las anillasde las pesas antes de levantarlas, las pesas quese resbalan pueden resultar peligrosas. Com-pruebe las características de seguridad de otrosdispositivos para ejercitarse.

• Enseñe a los atletas a no contener nunca elaliento durante el levantamiento. Deben exha-lar durante el esfuerzo (levantamiento) e inhalardurante la recuperación (bajada).

• Seleccione de 8 a 10 ejercicios apropiados parasu deporte.

• Desarrolle ciclos de entrenamiento de 4 sema-nas para los componentes del acondicionamien-to muscular que sus atletas necesitan.

• Alterne grupos musculares durante las sesio-nes y permita la recuperación entre las seriesdel mismo ejercicio.

• Conserve anotaciones precisas, incluyendo re-peticiones, series, fuerza, peso y demás. Lo me-jor para los deportistas es llevar cuadernos deentrenamiento detallados.

• Reduzca el entrenamiento cuando comience latemporada de competición.

El entrenador de éxito120

¡NO, NO! ESO NO ES LO QUEQUERÍA DECIR CUANDOHABLABA DE CICLOS DEENTRENAMIENTO.

Selección de ejercicios

Las exigencias de la capacitación musculardifieren según los deportes, y lo mismo ocurre conlos grupos musculares empleados. Como entrena-dor, usted tiene que conocer tanto las exigenciasde su deporte como los músculos que pone en fun-cionamiento para diseñar un programa que ejerci-te los músculos adecuados a fin de satisfacer esasdemandas. Por ejemplo, saltar es importante en elbaloncesto, por lo que un entrenador de dichodeporte tendría que planificar ejercicios que mejo-ren la fuerza y la fuerza de las piernas. Desde lue-go, los jugadores de baloncesto también necesitanresistencia para continuar corriendo y saltandopor la cancha durante todo el partido. Las sentadi-llas, los ejercicios para los gemelos y la pliometríamejorarán el salto, y muchas repeticiones mejora-rán la resistencia. El baloncesto también exigefuerza en la parte superior del cuerpo y fuerzapara rebotear y ampliar la distancia del lanza-miento, por lo que los ejercicios que desarrollanlos músculos de los brazos empleados en el rebote(los flexores) y para el lanzamiento (los extensores)son cruciales. Querrá, asimismo, desarrollar losmúsculos del tronco que ayudan para arrebatarlos rebotes a los oponentes.

Seleccione un circuito de 8 a 10 ejercicios im-portantes y haga que los atletas los realicen du-

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He aquí pautas adicionales a seguir en el entre-namiento avanzado con pesas (para los zaguerosde rugby, los levantadores de pesas, los lanzado-res y otros deportistas que realizan actividades demucha fuerza):

• Incrementar el número de repeticiones (p. ej., 5-6).

• Emplear un programa doble. Parte superior delcuerpo, L-M-V; parte inferior del cuerpo, M-J-S.

• Instruir a los atletas para que ingieran una die-ta adecuada de proteínas, sobre todo si estánperdiendo peso.

• Reduzca los ejercicios de resistencia que que-man muchas calorías.

• Modifique el programa (levantamientos, modode entrenar) cuando la progresión se estanque ocada 8 semanas, dependiendo de lo que sucedaantes.

El Programa Total

Durante el período transitorio y el preparatorio,debería usted programar un entrenamiento deacondicionamiento muscular 3 días por semana.La adecuación energética requiere 5 ó 6 sesiones ala semana, por lo que será necesario realizar am-bos tipos de ejercicios en algunas jornadas (Si nopuede llevar a cabo prácticas formales entre tem-poradas, plantéese elaborar un programa de en-trenamiento y que los deportistas se hagan res-ponsables de su preparación).

Muchos entrenadores realizan dos sesiones deentrenamiento algunos días para lograr los objeti-vos de los ejercicios. Por ejemplo, dirigen la mejoraenergética de Lunes a Sábados por la mañana y(de ser necesario) los Martes y los Jueves por latarde; los ejercicios de acondicionamiento muscu-lar están programados para los Lunes, los Miérco-les y los Viernes por la tarde. Los atletas se adap-

tan pronto a las sesiones dobles y aprecian lavariedad de los ciclos de ejercicios para la capaci-tación energética y muscular.

Cuando el período de competiciones comienza,habría que reducir ambos tipos de entrenamiento.Disminuya el volumen de la mejora energética ymodere el acondicionamiento muscular a una odos sesiones por semana, sobre todo antes de en-frentamientos importantes. Acuérdese, sin embar-go, de mantener las mejoras en la capacidad ener-gética y muscular que usted y los atletas se hanesforzado tanto en desarrollar.

Sobreentrenamiento

Es tarea suya como entrenador dirigir un pro-grama de entrenamiento eficaz. Para lograrlo,recuerde los principios del entrenamiento, Ejer-cicio, pero sin estropicio. El sobreentrenamientoresulta mucho peor que la falta de entrenamiento.El sobreentrenamiento conduce a la lesión o laenfermedad, mientras que la falta de entrena-miento, en el peor de los casos, demora la adquisi-ción del máximo rendimiento competitivo. Estéalerta a los signos del sobreentrenamiento:

• Fatiga crónica.• Irritabilidad.• Cambios de humor.• Mengua del interés por el deporte.• Pérdida de peso.• Reflejos más lentos.• Velocidad, fuerza o resistencia reducidas.• Mal rendimiento en el deporte, el colegio o el

trabajo.

Desarrollando su programa de entrenamiento 121

¡PUEDE QUENECESITE UNMONITOR!

ESTOY CANSADO, PERO EL ENTRENADORDICE QUE TENGO QUE ESFORZARMEMÁS.

Parte IV 089-134 18/4/02 14:37 Página 121

Cuando sospeche que hay sobreentrenamientoo una enfermedad inminente, hable con el atleta.Si desarrolla buenas relaciones, honestas, con susjugadores, ellos no dudarán en contárselo cuandose sientan agotados o quemados. Cuando lo ha-gan, aligere la carga de entrenamiento o deles eldía libre. Confíe en los deportistas y ellos no trata-rán de engañarle conscientemente. Si logra quelos entrenamientos sean divertidos, los deportis-tas querrán estar allí.

Algunos entrenadores enseñan a los atletas amonitorizar el estrés del entrenamiento con medi-das como éstas:

• Frecuencia cardíaca acelerada: si la cuenta deun minuto está un 10 % por encima del prome-dio del atleta, tendría que sospechar de sobre-entrenamiento. El pulso puede tomarse en lamuñeca, por el lado de la palma debajo del pul-gar, o en el cuello junto a la nuez.

• Temperatura corporal: si el pulso está acelerado,compruebe la temperatura oral. Una tempera-tura elevada podría indicar una infección. Hagaque el deportista se tome el día libre.

• Peso corporal: haga que los atletas se pesen conregularidad, siempre a la misma hora (p. ej.,después de ir al baño pero antes de tomar eldesayuno). Una pérdida de peso rápida o per-sistente podría indicar deshidratación, una die-ta inadecuada o una enfermedad inminente.Reduzca el entrenamiento del atleta hasta queel peso se estabilice.

Haga que los deportistas registren estas medi-das en sus cuadernos de entrenamiento y las eva-lúen periódicamente –aprenderán mucho sobresus cuerpos en el proceso. La mejor proteccióncontra el sobreentrenamiento consiste en una

bien desarrollada sensibilidad al propio cuerpo y acómo responde a los ejercicios. Ayude a los atletasa desarrollar su conciencia enseñándoles a perca-tarse del esfuerzo (mediante la respiración, el pul-so y el esfuerzo percibido) y la fatiga, señales váli-das que no deberían ser ignoradas. Puede ustedreforzar esta conciencia escuchando a los atletas yponiendo empeño en comprender sus preocupa-ciones.

Cuestiones fundamentales a recordar

1. Elabore metas de entrenamiento anualesidóneas según la edad, la experiencia y lamadurez de los atletas.

2. Bosqueje planes separados para el períodotransitorio, preparatorio y de competición.

3. Utilice los ciclos de entrenamiento dentro delas temporadas.

4. Desarrolle un menú de ejercicios para dirigircada semana de entrenamiento (microciclo).

5. Programe sesiones dos veces al día cuandosea necesario para conseguir los objetivosde la mejora energética y muscular.

6. Disminuya el entrenamiento con el avancedel período de competiciones.

7. Mantenga la condición física desarrolladaen la temporada anterior.

8. Esté alerta a los signos de sobreentrena-miento.

9. Enseñe a los atletas a usar cuadernos deentrenamiento.

10. Ayude a los deportistas a estar atentos a suscuerpos.

11. Preste atención a los atletas.

El entrenador de éxito122

Parte IV 089-134 18/4/02 14:37 Página 122

La mayoría de los entrenadores reconocen la importancia de la buena nutri-ción, pero encuentran dificultades para influir en los hábitos alimentarios de losdeportistas. La comida basura es tan popular y está tan disponible que resultadifícil impedir que los atletas la tomen en exceso. Además, ayudar a los depor-tistas a comer adecuadamente requiere la cooperación de los padres, de lascafeterías de las escuelas y demás responsables de la selección y la preparaciónde las comidas. Finalmente, muchos mitos crecen en torno a la nutrición y alrendimiento en el deporte y resulta difícil estar informado con exactitud.

En este capítulo se describen las bases de la buena nutrición para los atle-tas. Aprenderá usted sobre las fuentes de energía; los nutrientes; sobre una die-ta equilibrada; sobre la comida anterior al partido; sobre la pérdida y la ganan-cia de peso, y sobre los líquidos y la hidratación.

Energía

A los deportistas les resultará difícil entrenarse y rendir si su dieta carece dela energía adecuada. La mujer media (15-24 años) necesita de 2.000 a 2.400calorías de energía diaria; el hombre medio, entre 2.500 y 3.000. Las necesida-des de energía diaria dependen también de la edad y del tamaño del cuerpo –losatletas jóvenes requieren energía para el crecimiento y el desarrollo, y un cuerpomás grande necesita más energía para moverse, independientemente de laedad. Y por cada hora de entrenamiento, los deportistas pueden necesitar 500calorías adicionales de energía o más.

Cuando la dieta diaria no logra satisfacer las necesidades energéticas, elorganismo puede quemar sus propias proteínas –tejido muscular– en busca deenergía. Así pues, los deportistas deben darse cuenta de la importancia de inge-rir suficientes calorías –si no lo hacen, estarán dilapidando los efectos del entre-namiento.

Dieta de alto rendimiento

La mayoría de los norteamericanos ingieren más grasas y proteínas de lasque necesitan. Para el rendimiento atlético y la buena salud, los científicos deldeporte recomiendan una dieta que incluya más carbohidratos y menos grasas:la dieta de alto rendimiento. En la Tabla 13.1 puede comparar la dieta típica delquinceañero con la dieta de alto rendimiento.

Capítulo 13

Nutrición para los atletas

Dr. Brian J. SharkeyUniversidad de Montana

Parte IV 089-134 18/4/02 14:37 Página 123

Grasas

Aunque resulta esencial una cierta cantidad degrasas en una dieta saludable, los atletas no lasnecesitan en gran número; de hecho, el 20 % decalorías probablemente basta. Las grasas mejoranel sabor de las comidas y nos hacen sentir llenos.La ingesta de grasas de un deportista deberíamantenerse en los niveles recomendados no sólopor razones de salud, sino porque las grasas lehacen un flaco favor al rendimiento atlético. Lasgrasas tienen más calorías por gramo que ningu-na otra fuente de alimentos (consulte “Calorías enlos alimentos”). Ingerir demasiadas grasas es elmodo más fácil de aumentar el porcentaje de lagrasa corporal, y el exceso de grasa corporal puedemalograr el rendimiento en muchos deportes. Unexceso de grasas en la comida previa al partidotambién puede producir náuseas.

ProteínasLa proporción de proteínas recomendada en las

dietas de alto rendimiento es del 15 % (consulte laTabla 13.1). Los adultos regularmente activospueden pasar con un 10 % de las calorías proce-dentes de las proteínas de buena calidad, por loque muchos norteamericanos en realidad obtie-nen más proteínas de las que necesitan. Losdeportistas, sin embargo, requieren proteínas adi-cionales para el desarrollo del tejido muscular enel desarrollo de la fuerza, para la estimulación delas enzimas aeróbicas durante el entrenamientode resistencia y para la reparación de los tejidos. Ylos jóvenes atletas necesitan proteínas extra parasustentar el crecimiento natural y el desarrollo.

Las proteínas de calidad contienen un buensuministro de aminoácidos esenciales, bloques deconstrucción proteínicos que no pueden ser fabri-cados en el organismo. Aunque las proteínas ani-males constituyen una fuente mejor de aminoáci-dos esenciales, las combinaciones correctas deproteínas vegetales pueden satisfacer las necesi-dades de proteínas de los atletas. El mejor enfoquedietético consiste en ingerir variedad de alimentospara satisfacer las necesidades de proteínas yotros nutrientes. En la Tabla 13.2 se enumeranlas cantidades de proteínas suministradas poralgunos alimentos ricos en proteínas. Anime a losdeportistas a escoger fuentes con pocas grasas(por ejemplo, leche desnatada en vez de entera,quesos blandos en vez de duros).

Las proteínas no constituyen una fuente prin-cipal de energía durante el descanso o el ejercicio.Pero cuando un deportista se emplea a fondo yhace dieta para perder peso, el organismo teme lahambruna y opta por las proteínas de los tejidospara obtener energía. Para evitar la pérdida detejido muscular y para conseguir los beneficios delentrenamiento, los deportistas que estén a dietadeben cerciorarse de que ingieren las proteínasadecuadas. Los atletas que continuamente pier-den peso durante el entrenamiento deben saberque se arriesgan a perder tejido muscular, lo quepodría debilitarles y suponer un perjuicio para surendimiento. Asimismo, el entrenamiento intensomientras se está a dieta puede afectar al creci-miento de un atleta en desarrollo (Hablaré sobrela pérdida de peso más adelante en este capítulo).

El entrenador de éxito124

¡ASÍ ME GUSTA. LOSATLETAS COMIENDOAPERITIVOSNUTRITIVOS!

Tabla 13.1 Componentes de las dietas del quinceañerotípico y de la de alto rendimiento

Componente Dieta típica Dieta de alto

del quinceañero rendimiento

(% de calorías totales) (% de calorías totales)

Grasas 40 20

Proteínas 15 15

Carbohidratos 45 65

Calorías en los alimentos

Tipo de nutriente Calorías (por gramo)

Grasas 9,3Proteínas 4,3Carbohidratos 4,1

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Carbohidratos

Puede que le sorprenda constatar que los car-bohidratos son la fuente principal de energía en ladieta de alto rendimiento, pues mucha gente creeerróneamente que todos los carbohidratos “engor-dan”. Pero los carbohidratos como las patatas, elmaíz, las alubias, el arroz y los cereales integrales,el pan y la pasta son nutritivos y saludables. Loscarbohidratos son la fuente principal de energíaen todo el mundo. La gente, en algunos paísesmenos desarrollados, obtiene tanto como el 80 %de las calorías de los carbohidratos, y sufrenmuchos menos ataques de corazón que los nortea-mericanos.

El maíz, las alubias y demás carbohidratos com-plejos contienen también proteínas, vitaminas, mi-nerales y fibra, y suministran por tanto una nutri-ción más equilibrada además de la energía. Loscarbohidratos concentrados o refinados, como elazúcar de mesa, son menos convenientes porqueestán atestados de “calorías vacías” –energía sinnutrición. La miel es una fuente de azúcar natural,aunque todavía concentrada, similar en cuanto ala nutrición al azúcar de mesa, que aporta energíapero con un valor nutritivo mínimo. La fruta fresca,por el contrario, aporta tanto la energía de los car-bohidratos como la nutrición. En la Figura 13.1 semuestra la pirámide guía de los alimentos.

Resumen de la energía

La mejor dieta para el deportista, indepen-dientemente de la edad, contiene pocas grasas yes rica en carbohidratos. La actividad física regu-lar extrae energía de los carbohidratos almacena-dos en los músculos (glucógeno muscular). La die-ta rica en carbohidratos reaprovisiona los múscu-los para que estén listos de cara a la siguiente jor-nada. Los atletas que consumen dietas con pocoscarbohidratos se quedarán sin combustible en eltranscurso de un ejercicio intenso porque no tie-nen suficiente glucógeno muscular.

Según comenté en el capítulo 12, el organismoquema tanto calorías como carbohidratos duran-te la actividad, pero cuando se produce el esfuer-zo intenso reclama carbohidratos (glucógenomuscular). Si los músculos carecen de glucóge-no, no pueden sustentar las vigorosas contrac-ciones que se dan en los entrenamientos o lacompetición.

Los atletas probablemente necesitarán ayudapara aprender a elegir los alimentos apropiadospara la dieta de alto rendimiento. Las patatas sonbuenas, pero las patatas fritas de bolsa estánrepletas de grasas. Las galletas son muy apeteci-bles, pero el chocolate crujiente típico de las galle-tas contiene más del 50 % de grasas. Los deportis-tas y otros interesados en la buena salud deberíanaprender a comer carne, pescado, aves de corral,carbohidratos complejos (maíz, arroz, alubias, pa-tatas, cereales integrales, pan y pasta), muchasfrutas y verduras y productos lácteos con pocasgrasas. Deberían minimizar las grasas (lea siem-pre las etiquetas de los alimentos en busca de“grasas ocultas”), con inclusión de las salsas y loscondimentos, y ser frugales con los postres. Unabuena manera de garantizar la nutrición correctaes ingerir alimentos variados.

Nutrición para los atletas 125

Tabla 13.2 Alimentos ricos en proteínas

Alimento Cantidad Proteínas (gramos)

Alubias• y carne de cerdo 1/2 taza 8,0• lima 1/2 taza 6,0• carne roja 1/2 taza 8,0• soja 1/2 taza 10,0Ternera• salmuera 100 g 21,5• asada 100 g 24,0• filete 100 g 25,0Queso (poco graso)• americano 28 g 7,5• cottage 1/2 taza 7,5• suizo 28 g 8,5Pollo 100 g 25,0Chiles con alubias 1 taza 19,0Almejas 1/2 taza 8,0Cangrejo 5/8 taza 17,5Huevos 1 grande 6,5Pescado 120 gramos 25,0Harina• blanca 1 taza 11,5• grano entero 1 taza 16,5Jamón 120 g 21,0Cordero 120 g 22,0Langosta 2/3 taza de carne 18,5Macarrones y queso 1 taza 19,0Leche (poca grasa o desnatada) 1 taza 10,0Guisantes 1/2 taza 10,0Cerdo• loncha 1 media 15,0• lomo 120 g 20,0Pizza (queso) 1/6 de 35 cm 12,0

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Otros nutrientes

El cuerpo necesita más que energía sola parafuncionar: las vitaminas, los minerales y el aguason indispensables para ayudar a regular la quí-mica del organismo. Algunos entrenadores y atle-tas creen que los suplementos de vitaminas yminerales mejoran el rendimiento, pero esto raravez es cierto: averiguará por qué en la argumenta-ción que sigue.

Vitaminas

Las vitaminas se engloban en dos categoríasgenerales, las solubles en grasas (A, D y E) y lassolubles en agua (B y C). El exceso de vitaminassolubles en agua es eliminado por la orina, mien-tras que las solubles en grasas se almacenan enlas grasas del cuerpo. Las vitaminas ayudan adesencadenar las reacciones químicas en el siste-ma de producción de energía del organismo, sonesenciales porque ayudan a convertir los alimen-tos en energía. Cuando los atletas no ingierensuficientes vitaminas son incapaces de transfor-mar los alimentos en energía eficientemente. Peroenormes dosis de vitaminas no implican másenergía. Como he dicho antes, el exceso de vitami-nas B o C es eliminado en la orina; el exceso de A,D o E pueden ser almacenado, pero en ocasionescon resultados desagradables. El exceso de vita-mina D influye en los niveles de calcio y puederetardar el crecimiento, y las megadosis de vitami-

na A pueden resultar letales. Así pues, ingerir lascantidades recomendadas de vitaminas es funda-mental, pero más no necesariamente es mejor.

Los atletas necesitan vitaminas cuando que-man más calorías, pero el aumento de la ingestade alimentos suele hacer frente a esta necesidad.Los deportistas que llevan a cabo un entrenamien-to de suma dureza o que están perdiendo pesodeberían plantearse tomar un suplemento diariode vitaminas para garantizar que las necesidadesde las mismas quedan cubiertas. Pero, inclusoentonces, los suplementos no deberían superar lacuota diaria de vitaminas. Los suplementos noserán un beneficio para la salud o el rendimientode un deportista que ya esté tomando una dietaadecuada.

Minerales

El hierro, el zinc, el calcio, el magnesio, el yodoy el fósforo son algunos de los minerales conside-rados esenciales para la buena nutrición.

El hierro es de particular importancia para losatletas, tanto hombres como mujeres. Gran partedel hierro que es absorbido por la sangre es dedi-cado a la producción de hemoglobina para lascélulas rojas sanguíneas. El hierro de la hemoglo-bina ayuda a transportar el oxígeno de los pulmo-nes a los músculos activos. Los deportistas quesufren un déficit de hierro son proclives a la ane-mia y a un pobre rendimiento.

Sólo entre el 10 y el 20 % del hierro de los ali-mentos pasa a la corriente sanguínea, por lo que

El entrenador de éxito126

Grasas, aceites y dulces.CONSUMIR FRUGALMENTE.

Grupo de la leche, el yogur y el queso. 2-3 SERVICIOS.

Grupo de la Carne, las Aves, el Pescado,las Alubias secas, los Huevos y las

Nueces. 2-3 SERVICIOS.

Grupo de las Verduras.3-5 SERVICIOS.

Grupo de las Frutas. 2-4SERVICIOS.

Grupo del Pan, losCereales, el Arroz y la

Pasta. 6-11 SERVICIOS.

Grasas (Se dan naturalmente Azúcares y se añaden) (añadidos)

Estos símbolos muestran que las grasas y los azúcaresañadidos provienen principalmente de las grasas, los aceitesy los dulces, pero pueden formar parte de los alimentos o serañadidos, igualmente, desde otros grupos de alimentos.

Fuente: Departamento de Agricultura de los EE.UU./ Departamento de Salud y Bienestar Social de los EE.UU.

Figura 13.1 La pirámide guía de los alimentos.

Parte IV 089-134 18/4/02 14:37 Página 126

un atleta debe ingerir hasta 10 veces la cantidadque el organismo necesita. Los deportistas defamilias con pocos ingresos tienen mayores posi-bilidades de padecer una deficiencia de hierro,quizás porque comen menos carne magra, la cuales rica en hierro. Las mujeres pierden hierrodurante la menstruación, y todos los atletas son

ran grandes vasos de leche desnatada y productoslácteos ricos en calcio.

Las vitaminas y minerales clave vienen listadosen la Tabla 13.3 junto con su importancia, cuotadiaria recomendada y fuentes. Revise esta infor-mación en su empeño por mejorar la nutrición sinrecurrir a los suplementos.

Dieta equilibrada

La buena nutrición implica comer una variedadde alimentos de los grupos de nutrientes (consultela Figura 13.1). Las dietas que se concentran enun alimento o excluyen un grupo de alimentos esmuy probable que acarreen problemas. La mayo-ría de los atletas pueden satisfacer sus necesida-des alimenticias ingiriendo una dieta equilibrada,haciendo hincapié en los carbohidratos complejos.Las calorías extra necesarias para ejercitarse pue-den obtenerse incrementando la ingesta de ali-mentos. A partir de la Figura 13.1 puede elaborar-se un buen planificación de alimentación diaria.Recuerde que los problemas de la nutrición pue-den surgir de las dietas grasas, el vegetarianismoinadecuado, una falta de variedad en los alimen-tos y la pérdida de peso rápida.

Comida anterior al partido

Se le ha dado demasiada relevancia a la comidaprevia al partido; no es muy acertado. De hecho, si

Nutrición para los atletas 127

¿Suplementos?

Otros motivos para plantearse los suplementosson:

• Sistema inmunitario: las vitaminas C y E, elbetacaroteno, el B6 y el ácido fólico, así comolos minerales selenio y zinc, ayudan a mante-ner un sistema inmunitario sano.

• Antioxidantes: las vitaminas C y E y el betaca-roteno pueden ayudar a reducir el efecto delos radicales libres ocasionados por el ejer-cicio en el tejido muscular.

No obstante, las vitaminas de los alimentossiempre son más eficaces que las de los suple-mentos.

susceptibles a la pérdida de hierro o a una menorabsorción durante los entrenamientos intensos.Los dátiles, las ciruelas, los albaricoques, laspasas, las alubias y las carnes contienen hierro. Sile preocupa la ingesta de hierro de un deportista,fomente el consumo de alimentos ricos en hierro.Si el problema persiste, aliente la evaluación mé-dica del nivel de hierro del atleta.

El mineral zinc ha recibido últimamente laatención de los deportistas debido a su papel en elcrecimiento y en la reparación de los tejidos. Elzinc es necesario para el crecimiento, las reaccio-nes enzimáticas, la formación de células sanguí-neas y la reparación de los tejidos. Pero los atletasno tienen por qué malgastar dinero en caros su-plementos; pueden conseguir gran cantidad sim-plemente comiendo alimentos integrales.

La ingesta de calcio es importante porque estárelacionada con una dolencia llamada osteoporo-sis, una pérdida de la densidad del hueso que lohace proclive a las fracturas. El entrenamientovigoroso, la pérdida de peso y la ingesta inadecua-da de calcio han incrementado el riesgo de osteo-porosis y las fracturas por estrés, especialmenteen las atletas. Para ayudar a los deportistas a evi-tar este riesgo, procure que el entrenamiento sigasiendo racional, anime a los atletas a mantener unpeso corporal saludable y recomiende que ingie-

LOS CREPES SON UNA BUENA COMIDAPREVIA A LACOMPETICIÓN, PERO...

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un atleta ya toma una dieta de alto rendimiento,una comida típica probablemente será adecuada.La mayor preocupación para la comida anterior ala competición es que sea fácil de digerir y estéfuera del estómago antes de que empiece la com-petición. Los deportistas deberían comer al menos3 horas antes de una prueba y evitar la abundan-cia de grasas. Tendrían que comer lo bastantecomo para sentirse satisfechos, pero no ahítos.Los atletas nerviosos pueden salir adelante mejorcon una comida líquida de fácil digestión.

Ni el té y las tostadas ni los filetes constituyenun bocado mejor para la comida anterior a la com-petición. Antes bien, la comida previa se podríacomparar con el suministro de energía para elcoche. Un depósito medio lleno de gasolina esmucho para un viaje corto; el coche no funcionarámejor con el depósito lleno, y tampoco los atletas.

Los deportistas de fondo pueden tener diversoshábitos alimentarios previos a la competición al-gunos prefieren no comer antes de la prueba,mientras que otros comen de 3 a 4 horas antes de

El entrenador de éxito128

Tabla 13.3 Vitaminas y minerales: funciones y fuentes

Nutriente Funciones Importantes Fuentes Ingesta diaria recomendada1

Vitaminas solubles en grasas

Vit. A Visión, función inmunitaria Productos lácteos 1000/800mgBetacaroteno Crecimiento celular, antioxidante frutas, verduras

Vit. D Huesos, dientes, calcio Luz del sol, huevos, 10/10mgpescado, productos lácteos

Vit. E Antioxidante Verduras, aceites, 10/8mgnueces, vegetales

Vit. K Viscosidad la sangre Vegetales, cereales, 65/55mgfrutas, productos lácteos, carne

Vitaminas solubles en aguaVit. B1 (tiamina) Producción de energía Cerdo, granos, alubias 1,5/1,1mg

Vit. B2 (riboflavina Producción de energía Leche, huevos, pescado, 1,8/1,3mgverduras

Niacina Producción de energía Nueces, pescado, aves, 20/15mgverduras

Vit. B6 (pirodoxina) Producción de energía Carnes, granos, 2,0/1,5mgMetabolismo proteínas verduras, frutas

Ácido fólico Células blancas y rojas de la sangre, Verduras, alubias, nueces, 200/180mgARN, ADN, aminoácidos granos, carnes, frutas

Vit B12 Células sanguíneas, ARD, ADN, Carnes, productos lácteos, 2,0/2,0mgProducción de energía huevos

Biotina Metabolismo de las grasas y los Alubias, verduras, 30-100mg*aminoácidos, síntesis del glucógeno carnes

Vit C (ácido ascórbico) Curación heridas, tejido conectivo, Cítricos, verduras 60/60mgantioxidante, función inmunitaria

1 Para hombres/mujeres de 15-18 años de edad. Ingesta Diaria Recomendada (IDR), basada en los estándares de 1989fijados por el Consejo Nacional de Investigaciones de la Academia Nacional de las Ciencias.

*Dado en forma de rancho.

(continúa)

Parte IV 089-134 18/4/02 14:37 Página 128

la competición. No es necesaria una comida conmás carbohidratos de lo normal. Beber agua conalgunos carbohidratos resulta útil durante lascarreras de fondo para mantener los músculos enfuncionamiento después de que el glucógeno mus-cular haya disminuido.

Control del peso

La ganancia o pérdida de peso es principalmen-te una cuestión de equilibrio energético. Si losatletas comen regularmente más calorías de lasque queman, sobre todo calorías procedentes delas grasas, aumentarán de peso; si queman másde las que ingieren, perderán peso.

Nutrición para los atletas 129

Tabla 13.3 (continúa)

Minerales Funciones Importantes Fuentes IDR Hombre/Mujer

Calcio Huesos, dientes, Productos lácteos, 1200/1200mgviscosidad de la sangre,contracción de los músculos verduras, legumbres

Cloruro Digestión, fluidos extracelulares Sal (NaCl) en comidas 750/750mg

Cromo Metabolismo de la energía Legumbres, granos, 0,05-0,25mg*

Cobre Metabolismo del hierro Carnes, agua 1,5-3,0mg*

Flúor Huesos, dientes Agua, mariscos, té 1,5-4,0mg*

Yodo Síntesis de la tiroides Pescado, productos 150/150mglácteos, verduras, sal yodada

Magnesio Síntesis de las proteínas Granos, vegetales verdes 400/300mg

Fósforo Huesos, dientes, equilibrio Productos lácteos, carnes, 1200/1200 mgácido-básico aves, pescado, granos

Potasio Transmisión nerviosa, equilibrio Vegetales verdes, bananas 2000/2000 mgácido-básico y de fluidos carnes, productos lácteos,

patatas, café

Selenio Antioxidante Marisco, carnes, granos 50/50 mg

Sodio Función nerviosa, equilibrio de Sal (NaCl) 1100-3300 mg*fluidos y ácido-básico

Sulfuro Función del hígado Proteínas de la dieta No se ha establecido

Zinc Actividad de las enzimas Carne, aves, pescado, 14/12 mgproductos lácteos, granos, frutas, verduras.

*Dados en forma de ración.

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Peso ideal

¿Hay un peso ideal para los atletas? Sí, perodepende del deporte que practican, de su comple-xión, edad y sexo. El peso ideal de un atleta sedetermina fácilmente averiguando en qué propor-ción el peso es tejido graso y en qué proporción estejido magro (músculo, hueso y órganos vitales).Es importante recordar que las mujeres poseenun porcentaje más elevado de grasas esencialesque los hombres.

En los deportes como las carreras de fondo, losatletas rinden mejor con un porcentaje de grasacorporal relativamente pequeño (entre el 5 y el 7 %en los hombres y entre el 12 y el 15 en las muje-res). En otros deportes, el porcentaje de grasa cor-poral no es tan importante, aunque los atletasnunca deberían arrastrar un exceso de grasas.Los deportistas masculinos bien preparados tie-nen un promedio de entre un 8 y un 12 % de gra-sas; las mujeres bien preparadas, entre un 15 yun 21 %. El porcentaje de grasas nunca deberíabajar del 5 % en los chicos jóvenes o el 12 % en laschicas. El organismo necesita una cierta cantidadde grasas para mantener las membranas celula-res, aislar los nervios, proteger los órganos vitalesy facilitar el proceso metabólico.

El énfasis excesivo en el peso corporal y las gra-sas ha conducido a desórdenes alimentarios (ano-rexia nerviosa y bulimia) y a otras consecuenciasgraves para la salud. La actuación profesional re-sulta necesaria con mayor frecuencia para ayudara un atleta a recobrarse de los desórdenes alimen-tarios. Si sospecha que uno de los deportistas lopadece, consiga ayuda inmediatamente. Si noreciben tratamiento, estos trastornos pueden con-ducir a la debilitación y la muerte.

Para ayudar a los atletas a conseguir el pesoapropiado para su tipo de complexión y deporte,tiene usted que ser capaz de estimar su grasa cor-poral. El más práctico de los procedimientos dis-ponibles mide las grasas justo por debajo de lapiel empleando un dispositivo conocido como tije-ras de los pliegues cutáneos. La mitad, aproxima-damente, de la grasa corporal se acumula debajode la piel; utilizando una fórmula apropiada parala edad, el sexo y el nivel de actividad de los atle-tas, puede determinar el porcentaje con una pre-cisión razonable. Enseñarle a tomar medidas delos pliegues cutáneos y a determinar el porcentajede grasas del cuerpo queda fuera del alcance deeste libro. Aunque el método es relativamentesencillo, aplicarlo requiere conocimientos de laszonas de pliegue cutáneo correctas y habilidadpara usar las tijeras.

Sin las tijeras del pliegue cutáneo o algún otrométodo para estimar el porcentaje de grasa corpo-ral, tendrá que confiar en su criterio para decidirsi los atletas tienen que ganar o perder peso (elexceso de énfasis en la pérdida de peso ha condu-cido a graves desórdenes alimentarios en losdeportistas). El peso ideal es el que hace que unose sienta bien, tener buen aspecto y permite que elatleta rinda bien. Si el peso o las grasas son dema-siado pequeños, los deportistas se volverán débi-les y apáticos. Cuando el peso es demasiado gran-de, entorpece el rendimiento y podría convertirseen un problema para la salud. Veamos ahora có-mo ganar y perder peso con seguridad.

Ganar peso

Para muchos de nosotros, ganar peso resultafácil, demasiado fácil. Pero para algunos atletas,en especial quienes están interesados en deportescomo el rugby, ganar peso puede resultar un de-safío. He aquí algunas directrices que puede utili-zar para ayudar a sus atletas a adquirir tejidomagro (músculo):

• Asegúrese de que la ganancia de peso es lenta ygradual, con una ingesta calórica que no au-mente más de 500 calorías por encima de lasnecesidades diarias. El 15 %, al menos, de la in-gesta adicional de calorías ha de provenir deproteínas de buena calidad.

• Combine el aumento en el consumo de caloríascon un programa de fortalecimiento, de formaque se adquiera músculo en lugar de grasa. Aser posible, controle la grasa corporal con la téc-nica de pesaje hidrostático más precisa.

• Incremente el consumo de calorías en 3.500 porcada 500 gramos de peso a ganar.

• Cerciórese de que los atletas evitan ingerircomidas extremadamente abundantes; antesbien, recomiende que ingieran comidas peque-ñas con mayor frecuencia (p. ej., tres comidasequilibradas y dos tentempiés nutritivos).

• Sugiera a los deportistas que consuman la por-ción más grande de las calorías a primera horade la mañana.

• Recomiende a los atletas que aumenten la in-gesta de calorías pero que eviten excesivas can-tidades de grasas animales, comidas saldas ycalorías vacías.

• De ser posible, reduzca el entrenamiento de re-sistencia que quema calorías.

• No permita que los atletas utilicen drogas (comohormonas androgénicas o esteroides anabóli-cos) para fomentar la ganancia de peso.

El entrenador de éxito130

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• Detenga el programa de aumento de peso cuan-do se alcance el peso ideal.

Conseguir el peso ideal es saludable; el excesode peso, sea grasa o músculo, es un riesgo para lasalud. El peso extra implica con frecuencia unapresión sanguínea elevada y grasas en la sangre(colesterol, triglicéridos), y eso conlleva un riesgomayor de enfermedades cardiacas. Considere cui-dadosamente si un atleta necesita ganar peso. Deser así, recuerde esto: cualquier entrenador quepermita o aliente a los deportistas a ganar masaextra es responsable de ayudar a esos deportistasa recobrar un peso corporal saludable después dela temporada. Esta responsabilidad puede exigirun programa de pérdida de peso en la postempo-rada, que haga hincapié en los ejercicios para que-mar calorías como pueden ser correr o pedalear.En su calidad de entrenador y profesor, usted nopuede eludir esta responsabilidad.

Pérdida de peso

Aunque ganar peso requiere un esfuerzo, per-derlo es incluso más difícil. Los cuatro enfoquespara perder peso son:

• Ejercicio,• Hacer dieta (supresión de calorías),• Ejercicio y dieta combinados, y• Terapia de la conducta.

Ejercicio. Indudablemente el método más eficazpara perder peso es el ejercicio. Con él quemamosmás grasa y conservamos más proteínas muscula-res, comparándolo con la supresión dietética, loque conduce a una pérdida mayor de proteínas yagua y a una pérdida menor de grasas. Los ejer-cicios aeróbicos moderados, como correr, pedale-ar, nadar o el esquí de fondo, son formas aconseja-bles de quemar 10 calorías por minuto. Otros de-portes, como el tenis, que quema 8 calorías porminuto, también son buenos porque pueden pro-longarse durante una hora o más. Caminar a pasovivo, con 5 a 7 calorías quemadas por minuto, esotra alternativa estupenda.

Hacer régimen. Una buena forma de evitar elproblema del exceso de peso es no ingerir caloríasextra, para empezar. Evite las hamburguesasgigantes, las patatas fritas y los batidos, y evitarála necesidad de quemar 1.300 calorías innecesa-rias (13 kilómetros corriendo a 100 calorías porkilómetro). La dieta para perder peso no significa

comer más o menos de ningún alimento, sino in-gerir menos calorías, en especial de las grasas ani-males, y menos comida basura, aperitivos y calorí-as sin valor nutritivo. Cuando la dieta se combinacon un vigoroso entrenamiento para perder peso,un suplemento vitamínico podría resulta prove-choso. Y cuando una pérdida de peso significativaviene acompañada de un entrenamiento intenso,la ingesta adecuada de proteínas tiene que estargarantizada para prevenir la pérdida de proteínasde los tejidos.

Nutrición para los atletas 131

Hacer régimen

Hacer régimen, sin ejercicio, es causa de sobre-peso y obesidad. El régimen conduce a una pér-dida de tejido muscular y a una disminución delritmo metabólico. Con menos músculo y un rit-mo metabólico inferior, perder peso se vuelvemuy difícil y muchos vuelven a adquirir másgrasas de las que han perdido. Combine el régi-men con el ejercicio en un programa de pérdidade peso sensato.

Ejercicio y dieta. Juntos, el ejercicio y el con-trol dietético, acelerarán la pérdida de peso ymejorarán el desarrollo de hábitos buenos y salu-dables para toda la vida. El déficit de calorías (ladiferencia entre las calorías que se ingiere y lasque se queman) no debería exceder las 1.000 calo-rías por día. Por ejemplo, un atleta que quema3.000 calorías y consume 2.500 tiene un déficit de500 calorías. En un período de 7 días, este déficitsuma 3.500 calorías, una pérdida de peso de me-dio kilogramo. Si el atleta incrementa el ejercicioen 500 calorías por día, el déficit alcanza las 1.000calorías. En 7 días, un déficit de 7.000 caloríasdaría lugar a una pérdida de peso de un kilogra-mo. La pérdida de peso nunca debería exceder elkilogramo por semana, o las 1.000 calorías dia-rias. Los deportistas que pierden peso más deprisaque el promedio indicado encontrarán dificultadespara concentrarse en los entrenamientos o lacompetición.

Terapia de la conducta. Comer es una con-ducta aprendida que a menudo requiere modifica-ción. La terapia de la conducta se sirve del registrode anotaciones y la fijación de objetivos para ayu-dar a las personas a reconocer los problemas alcomer y a dar pasos para mejorarlos. El primerpaso consiste en documentar la conducta e identi-

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ficar zonas de problemas. Los atletas con sobrepe-so deberían comer únicamente en las horas de lascomidas, sentados a la mesa. Tendrían que evitaringerir comida basura en los restaurantes decomida rápida y picar aperitivos mientras estánviendo la televisión. Deben aprender a poner me-nos alimentos en el plato y a tomar sólo un servi-cio. La terapia de la conducta suele conllevar unsistema de recompensas para el buen comporta-miento, como un premio económico o material porcada kilo perdido. Romper con los malos hábitosde comida requiere el mismo tipo de disciplina queel necesario para tener éxito en el deporte. Ayudea sus atletas a desarrollar autodisciplina, ¡y ase-gúrese de ser un buen ejemplo!

Directrices para perder peso

Considere las siguientes pautas cuando aseso-re a los deportistas a perder peso:

• Determine el peso corporal idóneo midiendo elporcentaje de grasa en el organismo (no utilicelos gráficos estándar de altura y peso).

• Controle el progreso, tanto el peso como el por-centaje de grasa corporal.

• Recuerde, hace falta un déficit de 3.500 caloríaspara perder medio kilo, y el déficit nunca debe-ría exceder las 1.000 calorías diarias; por tanto,la pérdida de peso nunca debería exceder el kilopor semana.

• Anime a los atletas a ingerir comidas equilibra-das.

• Ayúdeles a identificar y modificar conductasproblemáticas relacionadas con la alimenta-ción.

Líquidos e hidratación

El cuerpo posee un sistema elaborado paramantener el equilibrio óptimo de líquidos en lascélulas, los fluidos corporales y la sangre. Malo-grar el sistema puede acarrear graves consecuen-cias, mortales incluso.

Deshidratación

El agua pesa un kilo por litro. Los atletas pue-den sudar a un ritmo de 2 litros a la hora mientrasse ejercitan vigorosamente en un entorno caluro-so, y es común que pierdan entre 1 y 2 litros (okilogramos) durante los entrenamientos cuandohace calor.

Incluso la pérdida de agua moderada (2-3% delpeso corporal) produce un efecto notorio en el ren-dimiento, y la deshidratación que supera el 5%conlleva el riesgo de agotamiento. La deshidrata-ción no sólo priva al organismo del agua necesa-ria, altera también el equilibrio de electrolitos. Loselectrolitos, como el sodio y el potasio, están car-gados de moléculas de minerales ubicadas en losfluidos dentro y fuera de las células. Cuando ladeshidratación altera el equilibrio de electrolitos,el impulso nervioso y la contracción muscular seven afectados, y la fuerza y la resistencia disminu-yen. La resistencia se ve afectada ulteriormentepor el descenso de volumen sanguíneo a conse-cuencia de la pérdida de agua. Cuando los atletasse deshidratan intencionadamente para “dar elpeso,” corren el riesgo de disminuir la fuerza y elrendimiento, y más incluso.

Cuando se combina con una dieta baja en calo-rías, la deshidratación puede acarrear consecuen-cias graves para la salud. Para precaverse contralos problemas de la deshidratación bajo los efectosdel calor, pese a los atletas antes y después de losentrenamientos. La cantidad de pérdida de pesoindicará cuántos líquidos hay que reponer. Al co-mienzo de los siguientes ejercicios, el peso de losatletas no debe variar más de un kilo con respectoa la jornada previa antes del ejercicio. De no serasí, no les permita participar ese día.

En los deportes donde los atletas deben “dar elpeso,” trate de evitar la necesidad de rehidratarseantes de una competición. Ayúdeles a seleccionar

El entrenador de éxito132

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pesos diana racionales en la pretemporada en vezde utilizar la deshidratación para deshacerse tem-poralmente de unos pocos kilos extra. Recuerdeque los atletas jóvenes están creciendo; necesitanenergía, nutrientes esenciales y agua. Príveles deestos elementos esenciales y quizás perjudique susalud y su crecimiento. ¡Ningún deporte justificaeso!

El estrés por el calor

Al ejercitarse en un entorno caluroso, el cuerposuele mantener una temperatura segura mediantela evaporación del sudor. No es el sudor, sino laevaporación del mismo, lo que enfría el cuerpo. Siel sudor empapa el cuerpo, no tiene tiempo de eva-porarse, y el organismo sólo pierde líquidos en vezdel exceso de calor.

Recuerde que los atletas pueden llegar a perderhasta 1 ó 2 litros de sudor en cada hora de entrena-miento o competición. Este agua debe ser reempla-zada para que el organismo no se deshidrate, por-que un cuerpo deshidratado no funciona bien. Esposible mantener la hidratación en la mayoría delos deportes bebiendo uno o dos vasos de agua de225 cl antes de los ejercicios o la competición,bebiendo con frecuencia durante la actividad y con-tinuar bebiendo después (el mecanismo de la seddel cuerpo infravalora las necesidades de líquidos).

Algunos electrolitos (sodio y potasio), necesa-rios para el funcionamiento eficaz de los múscu-los, se pierden con el sudor. Sin embargo, la sal delas comidas reemplazará todo el sodio que se hayaperdido con aquél. Cualquier merma del potasiopuede ser remediada fácilmente también si losdeportistas ingieren alimentos ricos en potasio,como los cítricos y los zumos, las patatas y lasbananas.

A algunos entrenadores les gusta emplear bebi-das comerciales con carbohidratos y electrolitos.Éstas fomentan la reposición de fluidos debido aque los refrescos gustosos conducen a una mayoringesta de líquidos. Lo importante es suministrarcantidad de fluidos (agua) durante los entrena-mientos y la competición. y programar los ejer-cicios y los partidos en las horas más frescas de lajornada. Las bebidas con carbohidratos tienen suimportancia de cara a las pruebas de mayor dura-ción (más de una hora), y los electrolitos ayudan areducir la pérdida de líquidos urinaria.

Al competir en clima caluroso, puede preparara los atletas de diversas maneras:

• Condición física: la condición aeróbica mejora elsistema circulatorio, responsable de la transfe-

rencia de calor. Y como los individuos en formaempiezan a sudar antes, es menos probable quese acaloren en exceso.

• Aclimatación: entre 4 y 8 días de entrenamientoal sol prepararán a los deportistas para compe-tir en clima caluroso.

• Indumentaria: elija indumentarias y equipa-miento que faciliten la evaporación del sudor.Evite los uniformes oscuros que absorben elcalor del sol.

• Líquidos: Asegúrese de que los atletas desarro-llan buenos hábitos de hidratación; tienen quebeber antes, durante y después de los ejercicioso la competición.

• Electrolitos: anime a los deportistas a tomar re-frescos con carbohidratos y electrolitos y a co-mer alimentos ricos en potasio.

Cuestiones fundamentales a recordar

1. Los atletas pueden precisar 3.000 calorías omás al día para satisfacer sus necesidadesenergéticas.

2. La dieta de alto rendimiento para alcanzarlos mejores rendimientos deportivos y unabuena salud contiene un 20 % de grasas, un15 % de proteínas y un 65 % de carbohidra-tos.

3. La buena alimentación está garantizadacuando los atletas escogen una variedad dealimentos de los distintos grupos alimenti-cios y hacen hincapié en los que tienenpocas grasas y muchos carbohidratos.

4. Las vitaminas son esenciales para ayudar aconvertir los alimentos en energía. Una die-ta bien equilibrada aporta las vitaminas yminerales que necesita un deportista, a me-nos que se esté sometiendo a un régimen depérdida de peso.

5. Los atletas tendrían que tomar la comidaprevia a la competición unas 3 horas antesal menos.

6. La pérdida o ganancia de peso es una cues-tión de equilibrio energético. Si los atletasingieren más calorías de las que queman(especialmente calorías grasas), ganarán pe-so; si queman más de las que ingieren, per-derán peso.

7. Para ganar peso de modo inteligente, los de-portistas han de aumentar el consumo decalorías (sobre todo proteínas) de modo gra-dual y practicar la musculación.

Nutrición para los atletas 133

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8. La mejor manera de perder peso es median-te una combinación de ejercicio y supresiónde calorías (régimen) y modificando hábitosalimentarios deficientes.

9. Privar a los atletas de agua durante el ejer-cicio al sol supone un perjuicio para el ren-dimiento, agotamiento y otras consecuen-cias más graves.

10. Beber agua es la mejor manera de reponerlíquidos; los deportistas tienen que beber

con frecuencia cuando se estén ejercitandoen clima caluroso.

11. Los atletas deben reponer los electrolitos enlas comidas, ingiriendo alimentos ricos enpotasio y con refrescos que contengan car-bohidratos y electrolitos.

12. Los entrenadores han de ser un modelo decondición física, de conducta al comer y alreponer líquidos.

El entrenador de éxito134

Parte IV 089-134 18/4/02 14:37 Página 134

Ha desarrollado usted una filosofía cabal comoentrenador, comprende la psicología implicada, seestá convirtiendo en un maestro educador de lashabilidades deportivas y ha adquirido valiososconocimientos sobre el entrenamiento y la alimen-tación del cuerpo de los deportistas. Pero antes desaltar y correr al terreno de juego o al gimnasio,querrá aprender más sobre las funciones princi-pales de la gestión que probablemente tendrá co-mo entrenador.

La gestión y dirección deportiva, desde su pun-to de vista como entrenador, es el proceso median-te el cual usted asume la dirección para que elgrupo pueda lograr sus objetivos con eficiencia yeficacia. Sus responsabilidades como entrenadorincluyen el garantizar que los recursos humanos ymateriales necesarios estén disponibles y puedanser utilizados con eficacia para conseguir las me-

tas del grupo. Uno de estos recursos es usted, y enel capítulo 16 me ocuparé de la dirección de símismo: su condición física, su estrés y su tiempo.

La gestión y dirección de cualquier empresasupone al menos cinco funciones principales.Aplicadas al entrenamiento, estas funciones sonlas siguientes:

• Planificación. Como constató en la Parte III, esusted el responsable de fijar las metas de for-mación del grupo y los métodos para lograrlas.Podría ser responsable también de la planifica-ción de otras funciones asociadas con el grupo.

• Organización. Como gerente, será responsablede implantar una estructura de grupo entre losjugadores, y podría ser responsable, asimismo,del desarrollo de la estructura de su organiza-ción de apoyo.

Parte V

Gestión y Administración deportiva

Capítulo 14GESTIÓN Y DIRECCIÓN

DEL EQUIPO

Capítulo 15GESTIÓN

DEL RIESGO

Capítulo 16AUTO-GESTIÓN

GESTIÓNDEL RIESGO.

GESTIÓN YDIRECCIÓNDEL EQUIPO. AUTO-

GESTIÓN.

Parte V 135-215 18/4/02 14:40 Página 135

• Personal. Ocuparse del personal implica selec-cionar a los jugadores, a los entrenadores asis-tentes y a otros que puedan ayudar a su grupo aconseguir sus objetivos, así como entrenar,asignar tareas específicas y facilitar un entornode trabajo favorable.

• Dirección. Como entrenador, será responsablede liderar al grupo tomando buenas decisionespara lograr con éxito los objetivos del grupo.Dirigir equivale a guiar a otros –sobre todo a losjugadores y a los entrenadores asistentes– paraque le ayuden a alcanzar estos objetivos.

• Controlar. Deberá evaluar el proceso que condu-ce al logro de las metas del grupo y realizar losajustes necesarios cuando la situación cambie osurjan problemas.

Como entrenador, sus responsabilidades degestión y dirección dependerán sustancialmentede la organización para la cual es entrenador. Enun extremo del espectro, puede que usted sea laorganización. De ser esto cierto, le incumben en-tonces amplias responsabilidades administrati-vas. Por el contrario, podría ser entrenador dentro

de un gran instituto con un departamento atléticobien organizado. En este caso, el director deporti-vo tendrá muchas responsabilidades administra-tivas de la organización superior y las responsabi-lidades de usted estarán limitadas a su grupo y alos entrenadores auxiliares. La mayoría de losentrenadores prefieren responsabilidades admi-nistrativas limitadas porque ello les permite dedi-car más tiempo a entrenar a los deportistas. En laParte V nos ocuparemos de esas funciones admi-nistrativas comúnmente asignadas a los entrena-dores, asumiendo que tiene usted algún tipo deapoyo de su organización.

La Parte V versa sobre tres cuestiones vitalesen la gerencia. En el capítulo 14, daremos unrepaso a la gestión y dirección del equipo, los nu-merosos cometidos que suponen cuidarse de todoantes, durante y después de la temporada. En elcapítulo 15, aprenderá información esencial sobrela gestión del riesgo; deseará administrar el riesgono sólo para evitar pleitos, sino también para pro-porcionar un entorno seguro a los atletas. Y en elcapítulo 16, pasamos de la dirección del grupo a ladirección de sí mismo.

El entrenador de éxito136

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Las muchas responsabilidades de un entrenador que van más allá de la ins-trucción de los jugadores constituyen una fuente común de lamentaciones. Losentrenadores desearían tener menos de estas responsabilidades administrati-vas a fin de poder disponer de más tiempo para entrenar realmente. Pero ese noes el caso para la mayoría de los entrenadores. Estas funciones de la gestión delgrupo forman parte integrante de la labor. El propósito de este capítulo, pues, esayudarle a identificar estas responsabilidades administrativas y a estar prepa-rado para solventarlas. Cuanto más eficazmente lo haga, más tiempo tendrápara entrenar a los atletas.

La lista de las responsabilidades en la gestión y dirección del equipo es tanlarga que aquí no puedo abarcarla entera de una forma adecuada. Estas res-ponsabilidades, asimismo, varían en gran medida en función del deporte queentrene y de la organización para la que entrene. Por ejemplo, puede ser el ins-tructor de un club de tiro al blanco que sólo cuenta con 10 miembros o de unclub de saltos de esquí de 6 quinceañeros. No tiene auxiliares o fondos externosy unas instalaciones muy limitadas. La gerencia de cada aspecto del grupo esresponsabilidad suya. En el otro extremo, puede usted ser un entrenador en ungran instituto urbano con un departamento atlético muy organizado. Sus fun-ciones de gestión y dirección son sustancialmente menores y están claramenteespecificadas en la descripción de su labor.

Capítulo 14

Gestión y dirección del equipo

RESPONSABILIDADES

EN LA GESTIÓN Y DIRECCIÓN.

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A pesar de que las diferencias son amplias enlas distintas situaciones del entrenador, encontra-rá que este capítulo le resulta valioso para revisarcualquier responsabilidad administrativa que lecorresponda. He compilado una lista de funcionesadministrativas comunes extraída de muchasfuentes; algunas se aplican a casi cualquier de-porte y otras sólo son aplicables a deportes con-cretos. Seleccione las que le convengan, y empleedicha información como un inventario para deter-minar sus responsabilidades directivas y paraprepararse de cara a ellas.

No me resulta posible en un capítulo el identifi-car y examinar cómo resolver cada función directi-va a la luz de los requisitos específicos de sudeporte y organización. Me he centrado en lo quees necesario administrar y he escrito poco sobrecómo administrarlo. Le animo, según prosigue consu educación como entrenador, a inscribirse en elCurso de Gestión y Dirección Deportiva del PCEEpara seguir aprendiendo.

Los cuatro apartados principales de este capí-tulo son:

• Gestión y dirección de la pretemporada,• Gestión y dirección de la temporada,• Gestión y dirección en la postemporada y • Relaciones administrativas.

En las tres primeras secciones, las funcionesadministrativas principales son identificadas yexplicadas sucintamente, y luego se planteancuestiones para que usted las analice. Según valeyendo la lista de funciones, determine en quéactividades tendrá responsabilidades directivas.En los casos afirmativos, responda a las pregun-tas asociadas con su deporte, organización, grupoy situación personal. Cuando no lo sea, asegúresede que sabe quién es el responsable de esa funciónadministrativa. Aunque una responsabilidad dadapueda no ser suya, si una función no está biendirigida es probable que afecte adversamente a sugrupo. Por ello, necesita saber con quién entrevis-tarse si surgen problemas.

En este capítulo, también se enumeran activi-dades que implican un riesgo administrativo, queson examinadas exhaustivamente en el capítulo15. El capítulo concluye estudiando las relacionescon las personas con las que más va a trabajar.Esta parte del entrenamiento resulta mucho máspeliaguda que cualquier otro aspecto de la direc-ción de un grupo. Aportaré algunas pautas queespero le sean de ayuda en su trabajo con estaspersonas.

Gestión y dirección de la pretemporada

El siguiente apartado describe el conjunto delas responsabilidades administrativas de un gru-po. Cuanto más se ocupe ahora de las funcionesde las que es responsable, menos apuros directi-vos sufrirá durante la temporada.

Revise su filosofía como entrenador

Antes de cada temporada, resulta convenienteque recapacite sobre su filosofía como entrenador.Le recomiendo encarecidamente que relea la ParteI de El entrenador de éxito según vuelve a exami-nar sus respuestas a dos preguntas cruciales:

• ¿cuáles son sus objetivos como entrenador?• ¿qué estilo como entrenador adoptará para con-

seguir estos objetivos?

Elabore la planificación delentrenamiento para la temporada

Si no planifica la secuencia de ejercicios para latemporada, simplemente no podrá dar lo mejor desí como entrenador. Y el momento oportuno paradesarrollar o modificar esa planificación es duran-te la pretemporada. Para elaborar la planificaciónde la temporada necesitará responder a estas trespreguntas:

• ¿cuáles son sus metas de entrenamiento para latemporada?

• ¿qué materia va a enseñar para conseguir cadaobjetivo?

• ¿cuál es la mejor manera de organizar estamateria de cara a la formación?

Selección del personal técnico

Su implicación en la selección del personal téc-nico dependerá, por supuesto, de su situaciónparticular. Puede que el personal técnico se reduz-ca a usted, o puede ser el responsable de escoger yformar a cierto número de personas para que leayuden a dirigir estas responsabilidades de grupo.O tal vez sea el responsable del entrenamientopero no de la selección. Sea cual fuere su situa-ción, quizás tenga que responder a algunas pre-guntas:

• ¿es usted responsable de seleccionar a todo elpersonal técnico?

• ¿es usted responsable de la formación del per-sonal?

El entrenador de éxito138

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Entrenadores auxiliares

¿Dispondrá de entrenadores auxiliares? ¿Esusted el responsable de seleccionarlos o es otrapersona?

• ¿Qué espera de un entrenador asistente?• ¿Cuántos auxiliares tendrá?• ¿Cuáles serán los deberes de cada uno?

Otros puestos. ¿Qué otros puestos desea onecesita cubrir? Su situación permite la existenciade puestos formales remunerados o puede crearpuestos que sean cubiertos por voluntarios. Lospadres de los deportistas, los estudiantes de laescuela y los amigos que se preocupan por el de-porte son buenas fuentes de voluntarios. En algu-nos colegios los voluntarios designados tal vez ten-gan que recibir el visto bueno de un directivo, nose olvide de consultar al director deportivo. Estaspersonas estarán a su cargo, pero usted debecoordinar todas las actividades con el directordeportivo. (Consulte el gráfico de puestos de apoyoen busca de una lista de cargos que tal vez quieraconsiderar.)

Para encontrar a personas que ocupen esospuestos, hágase a sí mismo las siguientes pregun-tas:

• ¿qué cualidades personales apreciará en laspersonas que ocuparán cada uno de los puestosadicionales que usted elija?

• Una vez que haya seleccionado al personal,¿proporcionará a cada uno una lista de deberespor escrito?

• ¿qué debe hacer usted para ayudar a cada unode ellos a entrenar?

PUESTOS DE APOYO

Los siguientes puestos quizá le supongan unaayuda:

• Director del grupo.• Preparador físico autorizado.• Preparador físico estudiante.• Médico del grupo.• Director financiero.• Director publicitario.• Encargado de estadísticas del grupo.• Coordinador de transportes.

• ¿Necesita una reunión de pretemporada contodo el personal?

• ¿Cuál será el orden del día de esta reunión?(Consulte “Orden del día de la reunión delpersonal en la pretemporada”.)

El orden del día que aquí se presenta ha sido deprovecho para numerosos entrenadores. Es ustedlibre de adaptarlo para sus propios propósitos.

ORDEN DEL DÍA PARA LA REUNIÓN DELPERSONAL EN LA PRETEMPORADA

• Presentación del personal técnico.• Organización y filosofía del grupo.• Estructura organizativa del personal.• Responsabilidades del personal.• Conducta del personal.• Presupuesto (fondos, salarios, equipamiento,

etc.).• Procedimientos para resolver problemas.• Labores de los atletas y elegibilidad.• Procedimientos médicos de emergencia.• Relaciones atletas-personal.• Conducta de los atletas.• Cuestiones relacionadas con los padres.• Planes para la reunión inicial del grupo en la

pretemporada.• Planes para la reunión con los padres de los

deportistas.• Entrenamiento de la temporada y calendario de

competiciones.• Trámites para viajar. • Nuevas informaciones (entrenamiento, estrate-

gia de juego, etc., de los cursos de verano, laliteratura especializada u otras fuentes).

Gestión y dirección del equipo 139

MENGANO,ZUTANO,PERENGANO,MO...

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Entrenamiento del jugador

Estará mucho mejor preparado para trabajarcon los jugadores cuando empiece la temporada sila planifica por anticipado. Considere las cuestio-nes siguientes, que le ayudarán a dirigir mejor asu grupo:

Reclutar jugadores. ¿Es usted responsablede reclutar o encontrar jugadores? ¿Cómo dará aconocer su grupo a los deportistas potenciales?¿Qué puede hacer usted para fomentar la partici-pación? ¿Existen normas para reclutar que debausted seguir?

Sistema de comunicación. ¿Cómo se co-municará con los jugadores a lo largo de toda latemporada? ¿Existen procedimientos claros parala comunicación? (Consulte el árbol de comunica-ción a modo de ejemplo).

El entrenador de éxito140

¡VAYA, SÓLO MEQUEDAN 35 LLAMADASPOR HACER!

EJEMPLO DE ÁRBOL DE COMUNICACIÓN

Un grupo es con frecuencia una organización compleja que engloba a muchas personas además delprimer entrenador y los jugadores. Para que semejante organización funcione eficaz y productivamentenecesita una comunicación interna ordenada. Sigue una ilustración de muestra de organización comuni-cativa:

Primer entrenador

Directordeportivo

Director financiero

Encargado detransportes

Conductores

Encargados decomprar billetes

Vendedores

Estadísticosauxiliares Entrenadores

atléticos Estudiantes

Encargado debilletes

y descuentos

Encargado de estadísticas

Fisioterapeutaautorizado

Jugadores

Director publicitario

Médico delgrupo

Ojeadores Capitanes

Preparadorfísico A

Entrenador auxiliar B

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En este árbol de comunicaciones, el primerentrenador sólo hace tres llamadas. Cada uno delos entrenadores asistentes contactados por el pri-mer entrenador realiza, entonces, dos o tres lla-madas. A partir de ahí, se ven implicados otroshasta que todos los que forman parte de la organi-zación han sido informados. Es probable que loscapitanes del grupo dividan aún más sus respon-sabilidades de contactar mediante llamadas. Laestructura de esta división dependerá del deportede que se trate.

Su situación puede ser muy distinta. Examinesus necesidades cuidadosamente. Cerciórese deque incluir en el árbol gerentes ante los que searesponsable.

¿Dispone de un tablón de anuncios fácilmenteaccesible donde pueda situar sus avisos? ¿Tieneun sistema de comunicaciones para cancelacioneso cambios de última hora? ¿Dispone de procedi-mientos de comunicación para emergencias? Siquiere permanecer en contacto con el grupo y elpersonal técnico entre temporadas, ¿tiene un sis-tema de comunicación para hacerlo?

Elegibilidad. ¿Conoce los requisitos de elegibi-lidad para los jugadores? ¿Sus jugadores los cono-cen y los comprenden? ¿Sus jugadores satisfacencualquier requisito que exista para la edad, elpeso, el sexo, los años de participación, el grado dehabilidad o los estándares académicos? Si susjugadores deben satisfacer estándares académi-cos, ¿dispone usted de algún modo de controlarsus notas en el transcurso del año escolar?

Normas de grupo. ¿Desea que haya una seriede normas de grupo? Siendo así, ¿de qué tipo?(Consulte “Cuestiones a considerar para las Nor-mas de Grupo”). Recomiendo suministrar unacopia por escrito de las normas de grupo a todoslos atletas y sus padres.

CUESTIONES A CONSIDERAR PARALAS NORMAS DE GRUPO

• Lenguaje de los jugadores.• Asistencia a los entrenamientos y los partidos.• Conducta en los entrenamientos y los partidos.• Interacciones con los árbitros.• Disciplina ante el mal comportamiento.• Conducta cuando se viaja.• Compartimiento en el vestuario.• Vestimenta cuando se entrena, se compite y se

viaja.

• Protección de los objetos de valor.• Pautas de seguridad.• Visitantes en los entrenamientos.• Reembolso para gastos.• Consumo de drogas y alcohol.• Toques de queda.• Criterio para las recompensas.• Problemas con las autoridades.

Cuaderno de anotaciones del equipo.¿Necesita un cuaderno de anotaciones para cadajugador? ¿Qué debería figurar en el mismo? (Con-sulte “Contenido potencial de un Cuaderno deanotaciones para el Grupo”.)

CONTENIDO POTENCIAL DE UN CUADERNODE ANOTACIONES PARA EL GRUPO

• Resúmenes de las tradiciones del grupo, logrosdestacados del grupo y los jugadores, y la tem-porada precedente.

• Enunciado de la filosofía del personal técnico.• Metas y objetivos para la temporada.• Normas de grupo y consecuencias por violarlas.• Pautas de conducta en la escuela, y durante los

entrenamientos y partidos.• Uso y cuidado del equipamiento y las instalacio-

nes.• Examen médico y requisitos del seguro.• Expectativas de mantenimiento de la salud (die-

ta, sueño, etc.).• Explicación de los riesgos inherentes al deporte.• Prevención de lesiones, tratamiento y prácticas

de rehabilitación.• Sugerencias para la práctica mental.• Calendario y números de teléfono de los miem-

bros del personal técnico.• Calendario de entrenamientos y protocolo.• Calendario de la temporada (con un breve infor-

me sobre los oponentes, si es posible).• Calendario de las reuniones sociales programa-

das del grupo.• Criterios para seleccionar y evaluar a los miem-

bros del grupo.• Método para seleccionar al capitán(es) del gru-

po.• Recompensas y criterios de selección.• Espacio para añadir más información según

avanza la temporada.

Gestión y dirección del equipo 141

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Reunión de grupo de la pretemporada.¿Necesita reunirse con el grupo antes de los pri-meros entrenamientos? ¿Cuál será el orden deldía de la reunión? (Consulte “Ejemplo de orden deldía para la reunión del grupo en la pretempora-da”.)

EJEMPLO DE ORDEN DEL DÍA PARA LAREUNIÓN DEL GRUPO EN LA PRETEMPORADA

• Repaso del programa.• Presentación de los entrenadores y mención de

sus responsabilidades.• Filosofía del entrenamiento.• Presentación de los jugadores.• Requisitos de eligibilidad.• Normas de grupo.• Expectativas sobre la conducta de los jugadores.• Riesgos del deporte.• Importancia de seguir las indicaciones del per-

sonal técnico.• Selección de los jugadores (para el grupo y para

los puestos iniciales).• Calendario de entrenamientos de la temporada

y el período de competiciones.• Planificaciónes de contingencia para el mal

tiempo en los deportes al aire libre.• Funciones sociales del grupo.• Comidas previas al partido.• Eventos para recaudar fondos (necesidades y

opciones).

Habilidad inicial y evaluación de los co-nocimientos. ¿Ha desarrollado herramientas deevaluación para determinar las habilidades de losjugadores y sus conocimientos como se comentóen el capítulo 7? ¿Cuándo evaluará a los jugado-res? Con qué propósito lo hará, ¿para preparar suinstrucción?, ¿para clasificarlos por categorías?,¿para asignarles posiciones? ¿Prescindirá de juga-dores basándose en sus evaluaciones? ¿Docu-menta las evaluaciones de forma que pueda justi-ficar las decisiones en la selección?

Capitán del grupo. ¿Habrá capitanes de gru-po? ¿Quién debería hacer la selección, usted o elgrupo? ¿Cuáles son las responsabilidades de uncapitán de grupo? (Consulte “Muestra de los debe-res de los capitanes de grupo”.)

MUESTRA DE LOS DEBERES DELOS CAPITANES DE GRUPO

• Comentar las preocupaciones de los jugadorescon el entrenador.

• Presentar las ideas y las sugerencias de los ju-gadores.

• Organizar las actividades del grupo lejos del en-torno deportivo.

• Mostrar liderazgo dentro y fuera del campo.• Ser un ejemplo de dedicación, académica y de-

portivamente.• Ser un jugador de grupo.• Demostrar deportividad.• Animar a otros jugadores.• Atenerse a las normas de grupo y al código de

conducta.• Mantener una actitud positiva.• Colaborar para que los entrenamientos sean

divertidos.• Intervenir en los conflictos entre los miembros

del grupo.• Hacer frente a los jugadores que violen las nor-

mas de grupo e informar a los entrenadores delas violaciones si fuera necesario.

• Comunicarse eficazmente con los árbitros.

Sistema de recompensas. ¿Dispondrá us-ted de un sistema de recompensas? ¿Con qué pro-pósito? ¿Cómo funcionará el sistema de recom-pensas? (Consulte “Ejemplo de Sistema de Recom-pensas”.)

EJEMPLO DE SISTEMA DE RECOMPENSAS

• Diplomas para diversos tipos de grados y logros.• Reconocimiento al “Jugador de la Semana” o

“Jugador del Mes”.• Cartas para los miembros del grupo que reúnan

ciertos criterios en el transcurso de la temporada.• Honores específicos para el rendimiento en

cada partido, enfrentamiento o reunión (p. ej.,el mayor porcentaje de primeros servicios acer-tados en tenis),

• Publicidad destacando al atleta que demuestreel mayor esfuerzo en los entrenamientos cadasemana.

• Hacer publicidad del jugador suplente más va-lioso en el periódico del colegio cada semana.

• Admitir un “jugador de prácticas de la jornada”para dar el nivel de la siguiente sesión de ejer-cicios.

El entrenador de éxito142

Parte V 135-215 18/4/02 14:40 Página 142

Calendario

El calendario tal vez no sea responsabilidad su-ya. Pero aun cuando no confeccione usted el ca-lendario, querrá comprobar que está completo. Sile corresponde la elaboración del calendario, heaquí algunas cuestiones para que se oriente.

Antes que nada, ¿sabe quién organiza los en-frentamientos (incluyendo amistosos y exhibicio-nes), los entrenamientos, las instalaciones y losarbitrajes? Si es usted el responsable de organizarlos enfrentamientos, ¿conoce las normas queregulan la duración de la temporada y el númerode competiciones? ¿Cuántas disputas quiere pro-gramar, y contra quién, cuándo y dónde? ¿Iniciarápronto el proceso de la programación? ¿Necesitacontratos, o son suficientes los acuerdos verbales?¿Necesita organizar las instalaciones en las que secelebrarán las disputas? ¿Es responsable de laprogramación de los enfrentamientos de pretem-porada? Si tiene que contactar con los árbitros,¿cómo va a identificar a individuos cualificados yqué procedimientos hay que seguir? ¿Necesitacontratos con los árbitros? ¿Son voluntarios ocobran? ¿Su agenda diaria (comentada en el capí-tulo 7) satisface sus necesidades por lo que serefiere al registro de anotaciones?

Instalaciones

El entrenador no suele ser el responsable de lasinstalaciones para los entrenamientos y la compe-

tición salvo, quizás, para programarlas. Respondaa estas preguntas, sin embargo, para asegurarsede que sabe lo necesario.

¿Qué instalaciones hacen falta para los entre-namientos y disputas? ¿Es usted el responsablede organizarlas? ¿Debe preparar las instalacionesde prácticas para su uso? ¿Inspecciona regular-mente las instalaciones en busca de peligros (con-sulte la lista para la inspección de las instalacio-nes del capítulo 15)?

¿Es responsable de preparar las instalacionespara competir? Siendo así, ¿qué hay que hacer pa-ra prepararlas? Si no, ¿con quién se pone en con-tacto si no están preparadas adecuadamente? ¿Dequé alternativas dispone cuando hay mal tiempo,si confía en las instalaciones al aire libre para losentrenamientos regulares?

Equipamiento y suministros

Los entrenadores suelen comprar el equipa-miento o dan un impulso considerable al proceso.Considere las siguientes cuestiones para adminis-trar el equipamiento y los suministros.

¿Es usted responsable de la compra del equi-pamiento y los suministros? ¿Cuál es el estadoactual del inventario y del mantenimiento del uti-llaje? ¿Hay procedimientos para la rotación deuniformes, reposición del equipamiento o grandescompras de equipamiento? ¿Qué utillaje y qué su-ministros espera necesitar para la temporada?¿Dispone de suficiente presupuesto para com-

Gestión y dirección del equipo 143

YO HE UTILIZADOESTA ZONA EN LOSTRES ÚLTIMOSDÍAS. YO HE

RESERVADO EL GIMNASIO.

TODAS LAS TEMPORADASPOR ESTAS FECHAS YODISPONGO DEL GIMNASIO.

GIMNASIO 4

Parte V 135-215 18/4/02 14:40 Página 143

prarlos? ¿Necesita la aprobación de alguien parallevar a cabo la compra? ¿Qué equipamiento de-ben adquirir los atletas? ¿Tiene que darles ins-trucciones sobre lo que comprar y cuánto gastar?¿Dónde comprará los artículos que necesita? ¿Hayfactores a considerar además de la calidad, el cos-te y el servicio al realizar las compras? ¿Está elutillaje identificado apropiadamente? ¿Dispone deprocedimientos para repartir el equipamiento y losuniformes? ¿Cómo se asegurará de que el utillajeha sido probado convenientemente y de que losatletas saben utilizarlo bien? ¿Qué útiles audiovi-suales necesitará durante la temporada? ¿Cómose encargará de que estén disponibles? ¿Quésuministros le harán falta? ¿Es muy grande elnúmero de existencias que necesita tener a mano?¿Lleva un registro adecuado del equipamiento ylos suministros?

Gerencia fiscal

Tal vez su responsabilidad en asuntos financie-ros sea escasa, aparte de aprobar los gastos y pre-sentar recibos para los reembolsos. No obstante,muchos entrenadores son responsables no sólo detodos los gastos ocasionados, sino también derecaudar el dinero que se gastará. He aquí algu-nas cuestiones que ha de plantearse relativas a lasresponsabilidades financieras:

¿Es usted responsable de garantizar parte otodos los fondos del grupo? Si es así, ¿cómo va aconseguirlos? ¿Se ocupará de desarrollar y mante-ner el presupuesto del grupo? (Consulte “Fuentesde financiación para los grupos deportivos”.)

Si no es responsable de recolectar fondos, ¿co-noce su presupuesto? ¿Comprende el sistemapara aprobar y realizar todos los gastos? ¿Quiénguarda el dinero y cómo tiene usted acceso al mis-mo? ¿Qué registro hay que llevar para gastar eldinero? ¿Quién puede gastarlo?

Gestión del riesgo

Sus deberes son numerosos a la hora de gestio-nar el riesgo que los jugadores y el personal técni-co pueden arrostrar. Aunque tal vez pueda delegarparte de las actividades de la gestión del día a día,es usted responsable como primer entrenador decomprar que las funciones delegadas se llevan acabo.

¿Programa los entrenamientos de cada día ba-sándose en un plan maestro para la temporada?¿Se mantiene al día en cuanto a las nuevas técni-cas para entrenar en su deporte? ¿Proporcionainstrucciones claras, completas y concisas a los

atletas? ¿Inspecciona regularmente las instalacio-nes en busca de riesgos potenciales y toma medi-das para eliminarlos? ¿Inspecciona personalmen-te el resto del utillaje y se ocupa de las reparacio-nes necesarias? ¿Es consciente de los peligros deuna competición desigual? ¿Ha recibido forma-ción para suministrar primeros auxilios para laslesiones deportivas? ¿Mantiene un registro apro-piado de expedientes médicos? ¿Efectúa una su-pervisión general de todas las instalaciones queusan los deportistas y supervisión específica delas actividades con mayor riesgo de lesiones? ¿In-forma a los padres y a los atletas de los riesgosinherentes al deporte? ¿Dispone de una planifica-ción de emergencia para dirigir las operacionescuando se produce una lesión grave?

En el capítulo 15, cada uno de los debereslegales recibe explicación y se sugiere cómo cum-plimentarlos. Se incluye una variedad de formula-rios de muestra para ayudarle a documentar elcumplimiento de sus deberes legales.

Programa para orientar a los padres

Deseará reunirse con los padres de los depor-tistas antes de la temporada. Esto le permitiráestablecer un sistema de comunicaciones, expre-sar sus objetivos para el grupo, alertar a los pa-dres sobre el riesgo inherente al deporte y hacerlessaber lo que espera de ellos. En el Apéndice A sepresenta una descripción completa de un progra-ma para orientar a los padres.

Gestión y dirección de la temporada

Finalmente, llega la temporada. Usted la haplanificado minuciosamente y ahora está ansioso

El entrenador de éxito144

FUENTES DE FINANCIACIÓN PARALOS GRUPOS DEPORTIVOS

• Presupuesto de organizaciones patrocinadoras.• Pruebas o proyectos para recaudar fondos.• Cuotas de participación.• Donaciones de los medios.• Ingresos por taquilla y descuentos.• Ventas por publicidad (anuncios en programas,

en el dorso de las entradas, etc.).• Cuotas por las actividades de los estudiantes.• Petición personal de donaciones.

Parte V 135-215 18/4/02 14:40 Página 144

por entrenar a su grupo y disputar los partidos.Pero sus responsabilidades administrativas nohan acabado. Esta sección le ayudará a determi-nar sus responsabilidades directivas de la tempo-rada.

Dirección de los jugadores

Le corresponden una serie de responsabilida-des continuas en la dirección de los jugadoresdurante la temporada. Estas funciones constitu-yen la, en ocasiones, no tan atractiva tarea deentrenar.

¿Conoce sus deberes en la supervisión de losjugadores durante la temporada? Ésta forma par-te de su responsabilidad en la gestión del riesgo.Estas funciones de supervisión se tratan con deta-lle en el capítulo 15 (Consulte “Responsabilidadesde supervisión de los entrenadores”).

¿Qué hará si un jugador del grupo se mete enproblemas con la justicia durante la temporada?¿Está preparado para disciplinar a los atletas queviolen las normas de equipo o se comporten malde cualquier otro modo? ¿Está preparado parahacer frente a problemas por abuso de determina-das sustancias?

RESPONSABILIDADES DE SUPERVISIÓNDE LOS ENTRENADORES

• Reunir formularios para el examen médico delos jugadores.

• Inspeccionar las instalaciones de juegos.• Garantizar que los jugadores son parejos en el

tamaño, la madurez física y las capacidades.• Asegurarse de que todos los jugadores disponen

del equipamiento adecuado y saben cómo usarlo.• Estar al tanto de todos los estándares de seguri-

dad para el equipamiento en cuestión.• Inspeccionar con frecuencia el utillaje y las ins-

talaciones para certificar la seguridad.• Enseñar las habilidades en la secuencia apro-

piada.• Cerciorarse antes de competir que todos los

atletas conocen las normas del deporte y cómose emplean los aparatos implicados.

• Prohibir a los atletas que realicen cualquieractividad potencialmente peligrosa o empleencualquier aparato potencialmente peligroso sinsupervisión.

• Exigir a los atletas que cumplan las normas deldeporte en todas las ocasiones.

• Permitir que participen sólo los deportistas sa-nos y sin lesiones.

• Negarse a celebrar las sesiones prácticas cuan-do las condiciones climáticas puedan resultarpeligrosas para la salud de los jugadores.

• Asegurarse de que los jugadores realizan un ca-lentamiento y ejercicios de flexibilidad suficien-tes antes de entrenar.

Planificación de los entrenamientos

Ya conoce la necesidad de planificar los entre-namientos, pero ahora que se encuentra en plenatemporada, ¿está destinando tiempo suficientepara elaborarlos? Plantéese estas preguntas a lahora de elaborar el proyecto.

¿Está siguiendo la planificación de la tempo-rada, aunque realice ajustes basándose en losprogresos de los jugadores? ¿Busca indicacionesde los jugadores y los auxiliares? ¿Está desarro-llando planificaciones para los entrenamientosque funcionan? ¿Lleva un registro de anotacio-nes de esas planificaciones para futuras referen-cias?

Equipamiento y suministros

Siguen unos cuantos temas administrativosmás para ocuparse del equipamiento y los sumi-nistros mientras transcurre la temporada. ¿Tienerespuestas para estas preguntas?

¿Quién es el responsable del mantenimientodel utillaje? ¿Inspecciona usted regularmente elequipamiento de protección y el resto del utillajeque pueda provocar lesiones? ¿Quién es respon-sable de limpiar los uniformes y demás indumen-taria, y cada cuánto tiempo? ¿Cuál es el procedi-miento para reemplazar el equipamiento roto, per-dido o robado? ¿Quién controla el uso de los sumi-nistros y determina cuándo encargar repuestos?

Gerencia fiscal

Con suerte, no será usted quien soporte la car-ga de recaudar dinero durante la temporada. Perole competen algunas responsabilidades ineludi-bles. Compruebe que está cumpliendo con sus de-beres respondiendo a estas preguntas:

¿Está pendiente del presupuesto y ateniéndosea él? ¿Está observando el sistema para realizargastos? ¿Está llevando los registros que usted o laorganización necesitarán?

Gestión y dirección del equipo 145

Parte V 135-215 18/4/02 14:40 Página 145

OjearTal vez no sea tan competitivo como para estu-

diar a sus oponentes, pero se trata de una activi-dad común en muchos deportes. He aquí algunascuestiones a considerar si pretende hacer infor-mes:

¿Quién realizará el informe? ¿Quién se ocupa-rá de los entrenamientos si es usted quien va deojeador? ¿De qué competiciones hará un informe?¿Dispone de un formulario de observación están-dar? ¿Cómo utilizará la información que recoja?¿Llevará a cabo el estudio de los rivales directa-mente o contemplando vídeos? ¿Cuánto cuesta elestudio? ¿Se trata de un gasto justificado? ¿Puedeincluir ese gasto en el presupuesto? ¿Existen nor-mas o una ética no escrita que impongan restric-ciones al estudio?

Transporte

El transporte de los atletas y demás personasrelacionadas con el grupo constituye otra actividadde considerable riesgo. Así pues, profundizaremosen la forma de administrar este riesgo en el capítu-lo 15. Pero, mientras identifica sus funciones, res-ponda a estas preguntas sobre el transporte:

¿Es usted responsable de organizar el trans-porte? ¿Utilizará vehículos privados o transportespúblicos? ¿Quién conducirá? ¿Los conductorescuentan con la licencia y el seguro apropiados?¿Se permite a otras personas, aparte de los juga-dores, viajar con el grupo si utilizan el transportepúblico? ¿Es usted consciente de sus responsabi-lidades legales al transportar a deportistas? ¿Per-mitirá a los jugadores viajar a o desde los partidoscon familiares o amigos? Siendo así, ¿qué procedi-mientos seguirá?

Dirección de las competiciones

Es posible que tenga muchas responsabilida-des de gestión y dirección antes, durante y des-pués de las competiciones. Contestando a las pre-guntas de abajo, podrá constatar si está prepara-do para resolverlas. Encontrará un repaso másdetallado sobre la dirección de las competicionesen el manual de la PCEE, Event Management forSportDirector (Human Kinetics, 1996).

Preparación general ¿Ha organizado usted lasinstalaciones? ¿Ha verificado la asistencia de losárbitros y dispuesto que alguien les reciba y leslleve a la zona de vestuarios? ¿Ha organizado un

servicio de portería, celadores, acomodadores, en-cargados del marcador, locutores y demás perso-nal necesario para dirigir la competición? ¿Ha dis-puesto que se preparen programas para la mis-ma? ¿Ha instruido a su personal sobre sus obliga-ciones? Si en su deporte hay contacto, ¿ha dis-puesto que haya presentes un médico y una am-bulancia? ¿Ha hecho disposiciones para el grupovisitante, incluyendo a alguien que les reciba y seocupe de sus necesidades? Si espera una granmultitud, ¿qué medidas de control es necesarioque tome para dicha multitud? ¿Está listo paraser utilizado todo el equipamiento de competición?

Preparación anterior al enfrentamiento¿Ha desarrollado su estrategia para la disputa?¿Ha elegido la alineación inicial y planificado lassustituciones? ¿Ha preparado a los jugadores pa-ra la rutina anterior al enfrentamiento que deseaseguir, incluyendo el calentamiento? ¿Se reunirácon el grupo antes de la disputa? De ser así, ¿quéquiere comunicarles?

Durante el enfrentamiento ¿Está preparadopara dirigir su propia conducta de modo que influ-ya positivamente en los jugadores y represente ala organización de forma favorable? ¿Está prepa-rado para dirigir el comportamiento del personaltécnico y de los jugadores de manera que repre-senten bien a la organización? ¿Qué piensa hacersi un árbitro comete un error? ¿Y si un jugador sehace daño? ¿Y si los jugadores se pelean? ¿Y si elpúblico actúa incorrectamente? ¿Cómo observarála disputa para tomar mejor las decisiones tácti-cas? ¿Cómo registrará sus observaciones sobre elgrupo y los jugadores individuales para darles unuso formativo posterior? ¿Qué va a hacer con elgrupo entre periodos?

Actividades después del enfrentamiento¿Qué mensajes quiere comunicar a los jugadoresen caso de victoria? ¿Y de derrota? ¿Quién super-visará los vestuarios? ¿Quién remunerará a losárbitros? ¿Qué hará respecto a la partida del gru-po visitante? ¿A quién tiene que dar las gracias?¿Qué obligaciones tiene para con los medios decomunicación?

Publicidad

La mayoría de los grupos deportivos quierenpublicidad, pero tiene usted que decidir qué tipo

El entrenador de éxito146

Parte V 135-215 18/4/02 14:40 Página 146

de publicidad resulta apropiada para su grupo.Luego tiene que ocuparse del proceso de la publi-cidad de manera que obtenga lo que desea. Lassiguientes preguntas le ayudarán a encargarse deeste aspecto del entrenamiento:

¿Cuánta y qué tipo de publicidad quiere parasu grupo? ¿Necesita un gerente de publicidad?¿Cómo consigue la cobertura de los medios de co-municación? (Consulte “Directrices para trabajarcon los medios de comunicación deportivos”.)

¿Desea establecer una política sobre cómo losmedios de comunicación han de ponerse en con-tacto con el grupo? ¿Desea publicidad adicional,como hablar con grupos locales, un folleto del gru-po o catálogo para los medios de comunicación,carteles y demás? ¿Cómo organizará dicha publi-cidad?

DIRECTRICES PARA TRABAJAR CON LOSMEDIOS DE COMUNICACIÓN DEPORTIVOS

• Suministre a los medios de comunicación infor-mación sobre los jugadores (nombre, altura, pe-

so, posición, etc.) y una previsión de las pers-pectivas del grupo antes de la temporada.

• Invite a los medios de comunicación a una “jor-nada fotográfica” en la pretemporada.

• Sea accesible: deje que los medios sepan cuán-do y dónde se le puede localizar.

• Ofrezca a los periodistas reflexiones con las quequizá no estén familiarizados con respecto atácticas o estrategias de su deporte.

• Anime a los jugadores a conceder entrevistas enmomentos que resulten convenientes tantopara ellos como para los medios.

• Instruya a los jugadores en el modo de comuni-carse apropiadamente con los medios.

• Esté disponible y coopere con los medios des-pués de una competición.

• Contacte con los medios locales e incluso na-cionales para promocionar a un jugador desta-cado o un logro del grupo.

• Asegúrese de que los pases de prensa estén pre-parados antes del partido y de que se les recibi-rá bien.

• Trate de disponer un spacio y comodidades ade-cuadas para los medios en los partidos.

• Asigne a alguien que esté familiarizado con laforma de pronunciar y escribir los nombres delos jugadores para que ayude a los periodistas ylocutores.

• Sugiera historias apropiadas de interés huma-no relacionadas con varios miembros del grupo.

• Disponga que las copias de las estadísticas ofi-ciales del partido sean distribuidas cuantoantes a la prensa después de la disputa.

Gestión de la postemporada

Se ha jugado el último partido, la temporada haterminado, pero para usted aún no. Tiene ante sívarias responsabilidades administrativas de pos-temporada, que pueden solventarse fácilmentedando respuesta a las siguientes funciones:

Evaluación del programa

Por encima de todas las actividades de la pos-temporada, necesita evaluar el programa. Consi-dere las zonas enumeradas en “Ejemplo de consi-deraciones sobre la evaluación del programa” paraque le ayude a cumplir esta tarea.

Gestión y dirección del equipo 147

EH... EH... ¿QUÉDEBERÍA DECIRLES?

Parte V 135-215 18/4/02 14:40 Página 147

¿Posee un modo sistemático de evaluar a losjugadores? (Recuerde que en el capítulo 7 se ad-junta uno.) ¿Posee un modo sistemático de eva-luar al personal técnico? ¿Repasará las metas deentrenamiento ahora que todavía se acuerda biende los hechos de la temporada? ¿Cuál es la mejormanera de registrar los cambios que desea haceren su programa para el año que viene?

Dirección de los jugadores

Mientras van partiendo los jugadores despuésde la temporada, usted deseará ocuparse de diver-

sas cuestiones. Las preguntas siguientes le ayu-darán a programar estas actividades:

¿Cuál será el orden del día de la reunión finalcon el grupo? (Consulte la “Muestra de orden díapara la reunión de postemporada del grupo”).

MUESTRA DE ORDEN DEL DÍA PARA LAREUNIÓN DE POSTEMPORADA DEL GRUPO

• Resumen de la temporada.• Repaso de las metas y los objetivos.• Reconocimiento del esfuerzo de los jugadores

durante la temporada.• Despedida a los jugadores que se marchan.• Cambios en el personal técnico.• Perspectiva para la siguiente temporada.• Cambios planificados para el entrenamiento o

la estrategia para la siguiente temporada.• Campamentos y cursos intensivos entre tempo-

radas.• Pruebas o proyectos para recaudar fondos entre

temporadas.• Programar una excursión entre temporadas.• Preparación entre temporadas.• Citas para consultas personales jugador-entre-

nador.

¿Cuándo devolverán los jugadores el equipa-miento? ¿Cuándo y cómo presentará a cada juga-dor la evaluación final? ¿Esbozará objetivos paraque los deportistas trabajen en el período transito-rio? ¿Prescribirá un programa de puesta a puntofísica en el período transitorio? ¿Hasta qué puntose implicará, si lo hace, en el progreso académicode los jugadores? ¿Ayudará a los deportistas quese gradúen a obtener becas? ¿Pedirá a los jugado-res que evalúen el programa? (Consulte “Ejemplode formulario de evaluación del programa para losjugadores”).

Instalaciones y equipamiento

Si tiene responsabilidades en este ámbito, en-tonces querrá desarrollar maneras eficaces de ha-cerles frente. He aquí algunas cuestiones que leayudarán a ocuparse de esta función de la pos-temporada:

¿Qué necesita hacer para cerrar la instalación?¿A quién ha de informar de cualquier reparaciónnecesaria? ¿Cuál es el procedimiento para la devo-lución del grupo? ¿Quién es responsable de com-

El entrenador de éxito148

EJEMPLO DE CONSIDERACIONES SOBRELA EVALUACIÓN DEL PROGRAMA

Área de evaluación Escasa Suficiente Buena

• Capacidad de alcanzar ❑ ❑ ❑

los objetivos-metas del grupo.

• Adecuación y ❑ ❑ ❑

reforzamiento de las normas de grupo.

• Relaciones ❑ ❑ ❑

entrenador-jugador.• Rendimiento ❑ ❑ ❑

de los jugadores.• Actitud de los jugadores. ❑ ❑ ❑

• Contribución de los ❑ ❑ ❑

entrenadores auxiliares.• Gestión del tiempo ❑ ❑ ❑

del personal técnico.• Comunicación entre ❑ ❑ ❑

los miembros del personal técnico.

• Calendario de oponentes ❑ ❑ ❑

de la temporada.• Procedimientos ❑ ❑ ❑

en los entrenamientos.• Métodos de ❑ ❑ ❑

acondicionamiento.• Prevención de lesiones ❑ ❑ ❑

y cuidados.• Sistema de seguimiento. ❑ ❑ ❑

• Métodos y procedimientos ❑ ❑ ❑

para viajar.• Estado del presupuesto. ❑ ❑ ❑

• Instalaciones y ❑ ❑ ❑

equipamiento.• Suministro y distribución q q q

del equipamiento.

Parte V 135-215 18/4/02 14:40 Página 148

probar el equipamiento por si necesita reparacio-nes, y de registrar lo que hay que hacer? ¿Quiénse hará responsable de repararlo? ¿Dónde sealmacena el equipamiento? ¿Quién prepara elinventario final y dónde se guarda hasta que hagafalta la próxima temporada?

Registro de anotaciones

A lo largo de todo el capítulo se le ha urgido allevar un registro. Ahora que la temporada ha fina-lizado, es necesario que verifique que los registrosestán completos y que son entregados a quiencorresponde o archivados a buen recaudo. Planté-

Gestión y dirección del equipo 149

EJEMPLO DE FORMULARIO DE EVALUACIÓN DEL PROGRAMA PARA LOS JUGADORES

Tenga la bondad de responder a las siguientes preguntas sinceramente, expresando sus verdaderossentimientos sobre cada tema. Esta evaluación es importante para el éxito de nuestro programa. Por loque necesitamos feedback que refleje con exactitud la labor que estamos haciendo en cada fase del mis-mo. No es necesario que firme con su nombre este formulario. Simplemente, responda con sinceridad acada cuestión y devuelva el formulario lo antes posible. Agradecemos el tiempo dedicado a completar esteinventario y su contribución al programa como jugador.

1. El programa, No Sí Comentariosa. ¿le ha ayudado a desarrollarse físicamente? ___ ___ ___________________b. ¿a desarrollar sus habilidades? ___ ___ ___________________c. ¿le ha enseñado estrategias? ___ ___ ___________________d. ¿ha aumentado sus ganas de jugar? ___ ___ ___________________e. ¿le ha permitido divertirse? ___ ___ ___________________f. ¿ha mejorado su autoconfianza? ___ ___ ___________________g. ¿ha repartido las recompensas con equidad? ___ ___ ___________________h. ¿ha suministrado equipamiento adecuado y seguro? ___ ___ ___________________i. ¿ha mostrado inquietud por los jugadores lesionados? ___ ___ ___________________j. ¿ha suministrado cuidados idóneos a los lesionados? ___ ___ ___________________k. ¿incluye normas de grupo apropiadas y justas? ___ ___ ___________________l. ¿exige demasiado a los jugadores? ___ ___ ___________________

2. Los entrenadores,a. ¿se han organizado bien? ___ ___ ___________________b. ¿han sido buenos educadores? ___ ___ ___________________c. ¿han sido justos? ___ ___ ___________________d. ¿han merecido su respeto (buenos modelos)? ___ ___ ___________________e. ¿se han prestado a dialogar? ___ ___ ___________________f. ¿han sido flexibles? ___ ___ ___________________g. ¿han sabido elogiarle cuando lo merecía? ___ ___ ___________________h. ¿han sido honestos? ___ ___ ___________________i. ¿han sido razonables ante sus demandas? ___ ___ ___________________ j. ¿se han preocupado por todos los jugadores? ___ ___ ___________________

Incluya, por favor, comentarios adicionales sobre lo anterior.

Ofrézcanos cualquier otro comentario sobre el programa.

Parte V 135-215 18/4/02 14:40 Página 149

ese estas preguntas para llevar a cabo esta fun-ción administrativa:

¿Están completos los registros de los jugado-res, incluyendo las direcciones actuales, de mane-ra que pueda comunicarse con ellos entre tempo-radas? ¿Ha guardado todos los registros de losexámenes médicos? ¿Ha hecho copias de todos losinformes sobre accidentes? ¿Tiene copias de todaslas peticiones de reparación de instalaciones inse-guras o equipamiento dañado? ¿Ha actualizadotodas las anotaciones de elegibilidad? ¿Ha resumi-do y organizado todas las participaciones, el rendi-miento individual y los registros con los resulta-dos del grupo? ¿Ha hecho anotación de un inven-tario adecuado de todo el equipamiento y lossuministros? ¿Ha hecho balance del presupuestoy preparado todos los informes financieros nece-sarios? ¿Necesita actualizar cualquier otro regis-tro? ¿Dónde guardará los registros?

IDEAS PARA EL PROGRAMA DELBANQUETE DE LOS PREMIOS

• Reciba al grupo y a los entrenadores en su casa.• Haga que los padres y los miembros de la comu-

nidad inviten a una cena en la cafetería del cole-gio.

• Celebre un bufé costeado por una organizacióncívica o patrocinador con el grupo y los entrena-dores como invitados de honor.

• Haga que alguien popular, como un entrenadoruniversitario, dé una conferencia.

• Planifique una reunión con antiguos miembrosdel grupo.

• Venda entradas para pagar los trofeos, la comi-da, a un conferenciante invitado y el uso deunas instalaciones.

• Negocie con un restaurante de moda para utili-zar su sala de banquetes a cambio de publici-dad gratis para la siguiente temporada.

• Realice una cinta de vídeo con los mejores mo-mentos de la temporada.

• Haga que el capitán o algún otro miembro delgrupo resuma la temporada.

• Llegue a un acuerdo con otros grupos para cele-brar una conferencia o un banquete de todaslas disciplinas deportivas.

• Establezca la tradición de traspasar responsa-bilidades de los estudiantes de último año a losdemás jugadores (como la voluntad o legado delgraduado).

¿Quién organizará y pagará el banquete? ¿Aquién, aparte de los jugadores, quiere felicitar ycómo?

Relaciones administrativas

No hace falta ser un genio para comprobar quela gestión de un grupo engloba múltiples tareas.Puede usted tener mayor éxito como entrenadorreclutando a personas que le ayuden y trabajar,entonces, eficazmente con ellos. Ocuparse delinventario u organizar el transporte resulta com-parativamente fácil ante el desafío de trabajar conotra gente. En esta sección de cierre aporto algu-nas directrices para trabajar con los entrenadoresasistentes, los gerentes, los árbitros, el personalmédico y los padres. Dichas pautas se centran enla especial naturaleza de su relación con cada unade estas personas.

El entrenador de éxito150

¡SÉ QUE ESASANOTACIONESESTÁN POR ALGUNA PARTE!

Premios y diplomas

Antes de la temporada decidió si entregaríarecompensas de algún tipo a los jugadores. Si de-cidió que ofrecería premios, ahora debe seguiradelante. Estas preguntas le ayudarán a progra-mar esta tarea:

¿Quién estudiará los registros para determinarquién recibe qué recompensa? ¿Celebrará un ban-quete de postemporada para la entrega de los pre-mios? (Consulte “Ideas para el programa del ban-quete de los premios”.)

Parte V 135-215 18/4/02 14:40 Página 150

Su objetivo es desarrollar relaciones laboralespositivas, de forma que los individuos no sólocumplan con su trabajo sino que disfruten lo queestán haciendo y tengan una sensación de satis-facción. Un objetivo fácil de enunciar pero, confrecuencia, muy difícil de lograr. Le será más sen-cillo desarrollar estas relaciones positivas si adop-ta el estilo cooperativo que traté en el capítulo 2, ytrabaja con el personal técnico de la misma mane-ra que le he urgido a trabajar con los atletas. Erijaestas relaciones sobre unos cimientos de respetomutuo.

Entrenadores asistentes

Muchos empiezan entrenando como asistentes,en puestos que sirven como aprendizaje para asi-milar los numerosos cometidos de un entrenador.Las relaciones que establezca con los auxiliarestendrán un gran impacto no sólo en lo que ellospueden hacer por el grupo sino en lo bien que lesayudará a aprender la profesión de entrenador. Heaquí unas cuantas pautas para ayudarle a esta-blecer relaciones efectivas con sus entrenadores:

• Hasta donde sea posible, asigne a los auxiliarespuestos para los que estén calificados y por losque tengan interés.

• Especifique las responsabilidades claramente yhaga que tengan sentido.

• Dentro de un orden, ayude a los asistentes aprepararle de cara a sus deberes. Asegúrese deque entienden su filosofía como entrenador yque espera su adhesión a la misma.

• Implique a los auxiliares en la toma de decisio-nes tanto como sea posible. Sus puntos de vistapueden ser de provecho, y aprenderán y estaránmotivados participando en el proceso.

• Suministre a los asistentes evaluaciones forma-les e informales a lo largo de la temporada.

• No permita que se produzcan situaciones en lasque los jugadores traten de enfrentarle con losasistentes.

• Reconozca las aportaciones de los auxiliares algrupo durante y después de la temporada.

Gerentes

Tal vez tenga la fortuna de disponer de undirector deportivo o gerentes que le ayuden con lasmuchas funciones administrativas bosquejadasen este capítulo. De ser así, deseará cultivar unarelación de cooperación. A continuación, se deta-llan unas cuantas directrices importantes parafomentarlas:

• Cerciórese de que comprenda lo que se esperade usted y qué procedimientos ha de seguir antediversas funciones administrativas.

• Organícese; eleve sus peticiones de asuntoscontrolados por el directivo con tiempo suficien-te para que sean procesadas.

• Mantenga a los gerentes informados mediantecomunicados formales e informales e invítele(a)a asistir a los entrenamientos y los partidos.

• Lleve los registros requeridos y manténgasedentro del presupuesto.

• Reconozca las contribuciones del directivo a lasconquistas del grupo durante y después de latemporada.

• Si un directivo no está cumpliendo sus respon-sabilidades y, por tanto, está perjudicando a sugrupo, hable directa aunque cortésmente con élo ella. No empiece a rezongar ante otros y dé piea que sus puntos de vista le sean comunicadosa través de otras personas.

• Evite pasar por encima del directivo a menosque la situación sea extrema y haya tratado deresolver cualquier problema directamente antes.

Árbitros

Los colegiados pueden ejercer gran influenciaen la competición. Ningún entrenador desea verun partido mal arbitrado porque a los deportistasse les niega la oportunidad de realizar una compa-ración justa de sus habilidades. Por ello, sin es us-ted responsable de seleccionar a los árbitros, elijaa los mejores que puedan encontrar. Siga enton-ces estas pautas para trabajar con ellos:

1 Esté preparado para la llegada de los colegiadosantes de la competición. Usted, o alguien aquien designe, debe recibirles, mostrarles losvestuarios si los necesitan y familiarizarles conlas instalaciones.

2 Trate a los árbitros como a usted le gustaría sertratado, y exija lo mismo al personal técnico y alos jugadores.

3 Evite el acosar constantemente a los colegiadosdesde las bandas. Rara vez resulta una ayudapara su causa, distrae a los árbitros en el de-sempeño de sus deberes y le resta integridad.

4 Si cuestiona la interpretación de una norma,exprese su descontento al árbitro en el momen-to apropiado y de la manera apropiada. En mu-chos deportes se especifica cuándo pueden ha-blar los entrenadores con los árbitros y quétemas tiene permitido cuestionar.

5 Evite las tácticas intimidatorias. Dan un muymal ejemplo para los jugadores, el personal téc-

Gestión y dirección del equipo 151

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nico y los espectadores. Si se deja llevar pordicho comportamiento, le resultará difícil impe-dir que el personal técnico y los jugadores ha-gan lo mismo. El resultado puede ser más deuna situación muy desagradable.

• Ayude a los árbitros de todas las formas posi-bles a reforzar las reglas que protegen el bienes-tar de los jugadores.

• Agradezca a los colegiados su trabajo despuésdel partido. Aun cuando considere que han con-tribuido a la derrota de su grupo, mantenga unarelación respetuosa. Si los árbitros hacen malsu trabajo, no vuelva a contratarlos, o escribaun informe sobre sus deficiencias a la personaencargada de contratarlos.

1 Es necesario que comprenda con claridad lacalificación del personal médico que trabaja conusted. En el caso de recuperadores físicos, ¿tie-ne la persona en cuestión el certificado de laAsociación Nacional de Recuperadores Físicos ydispone, por tanto, de una amplia experienciacomo preparador deportivo, o es un estudianteen prácticas con unos conocimientos muy limi-tados? Es usted responsable de verificar que losrecuperadores físicos no desempeñen funcionespara las que no están cualificados.

2 El personal médico tiene que saber con exacti-tud cuáles son sus responsabilidades. ¿Respon-den primero a todas las lesiones? ¿Quién decidesi un jugador lesionado con anterioridad puedevolver a jugar?

3 No interfiera o trate de influir en las decisionesmédicas tomadas por los facultativos o los pre-paradores físicos cuando se están desenvolvien-do dentro de sus competencias. Si algo parececontradecir claramente el sentido común, bus-que entonces otra opinión médica.

4 Pida al personal médico que no interfiera encuestiones no médicas que sean responsabili-dad suya, de forma que no ofrezcan un asesora-miento impropio o traten de actuar entorpecien-do sus funciones administrativas. Pero convén-zase de que el personal médico puede ser unafuente valiosa de información sobre los proble-mas del grupo.

5 Los médicos y los recuperadores físicos necesi-tan reconocimiento, recompensas y motivación.Deles atenciones, reconocimiento y respeto y lesencontrará ansiosos por ayudar al grupo a con-seguir sus objetivos.

Padres

Algunos padres desean implicarse ampliamen-te en la práctica deportiva de sus hijos, quizádemasiado; otros no se implican lo bastante. Esnecesario que propicie la participación adecuadadando a los padres pautas claras sobre sus come-tidos y sobre lo que espera de ellos. Le recomiendoencarecidamente que dirija un programa de orien-tación para los padres en la pretemporada (con-sulte el Apéndice B). Descubrirá que un programade orientación es una sabia inversión para erradi-car los conflictos entre padres y entrenadores delos que ha oído hablar con frecuencia. He aquíunas directrices adicionales que le ayudarán arelacionarse eficientemente con los padres:

• Recuerde que los padres son los responsablesúltimos de los hijos. Le están cediendo a sus

El entrenador de éxito152

LOCAL. VISITANTE.

Personal médico

Si es usted entrenador en un deporte de con-tacto o colisión, querrá sin la menor duda estable-cer una relación laboral con un médico. Enmuchos deportes, también resulta provechosodisponer de un preparador físico. En caso contra-rio, quizá no disponga de este personal de apoyo ynecesite unos conocimientos básicos de primerosauxilios y rehabilitación física y cómo conseguirun servicio de atención de emergencias. Si va adisponer de un médico y de un recuperador físicoen el grupo, he aquí algunas pautas para que lasrelaciones con ellos sigan siendo productivas:

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descendientes para una cierta actividad y unperíodo de tiempo determinado. Respete la res-ponsabilidad última de los padres en el bienes-tar de sus hijos no sintiéndose amenazadocuando le pregunten por la participación de losatletas.

• Los padres, por su parte, tienen que respetar suposición. Es de esperar que no se inmiscuyanen sus funciones de entrenador a menos quehaya una causa razonable para que sospechenque su hijo o hija se está exponiendo a un riesgofísico o psíquico innecesario o que no está sien-do tratado con equidad.

• Mantenga informados a los padres e implíque-les constructivamente. Los padres pueden ocu-par muchos de los puestos de apoyo descritoscon anterioridad.

• No permita que los atletas le enfrenten a suspadres. Normalmente, podrá evitar este proble-ma hablando directamente con los progenito-res.

• Ayude a los padres a conocer sus responsabili-dades con respecto al equipamiento, los unifor-mes, las remuneraciones, las comidas previas a

la competición, el transporte y, especialmente,el comportamiento durante el partido.

• Informe a los padres directa e inmediatamentesi surge un problema grave que afecta a su hijoo hija (lesión, robo, drogas, indisciplina, rendi-miento nulo o cualquier otro problema discipli-nario).

• No a todos los padres les preocupará mucho eldesempeño de su hijo o hija, ni responderántodos como usted esperaría, pero sigue siendosu deber informarles y pedirles su ayuda.

Conclusión

En este capítulo se han tratado las funcionesque puede encontrarse realizando como entrena-dor. No es nada excepcional para leer en la cama(a menos que tenga problemas para dormirse),pero mientras va preparándose con miras a susresponsabilidades como entrenador, este capítulopuede ser de considerable ayuda para usted a lahora de solventarlas. Consúltelo periódicamentesegún se aproxima cada fase de la temporada.

Gestión y dirección del equipo 153

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Esta página dejada en blanco al propósito.

Puede que éste sea un tema sobre el que no le apetece leer nada, pero másvale que lo haga. En el deporte, como el resto de nuestra sociedad, hacen mellaalgunas tendencias inquietantes.

• La gente está ansiosa por demandarse unos a otros.• Las personas parecen poco dispuestas a aceptar la responsabilidad de sus

propios actos y acuden al juzgado para obtener compensaciones.• Los tribunales parecen menos preocupados por quién ha cometido una falta

que por quién puede permitirse mejor pagar los daños.

La exposición al riesgo y la responsabilidad son inherentes al entrenamientodeportivo, sobre todo en los deportes de contacto. En consecuencia, los entrena-dores están siendo demandados en mayor número que nunca, a veces por moti-vos ridículos y frívolos.

Aunque pueda describirse la crisis de la responsabilidad como algo negativo,ha tenido el efecto positivo de hacer que el deporte sea más seguro. Sus obliga-ciones legales como entrenador, como han sido prescritas últimamente pornumerosos veredictos judiciales, implican una conducta prudente y profesionalpara proteger a los atletas y a otras personas. En este capítulo, aprenderá cuá-les son sus obligaciones legales y cómo cumplir con ellas. Cuando emprende lasacciones apropiadas para satisfacer estas obligaciones legales está gestionandoel riesgo.

Cuando oímos hablar de frívolos juicios legales contra entrenadores compe-tentes y, ocasionalmente, de algún veredicto contra un entrenador que desafíaal sentido común, nos sentimos atropellados por el sistema legal. Unos pocosentrenadores han arrojado la toalla debido a nuestro imprudente sistema dejurisprudencia. Pero yo recomiendo un enfoque alternativo sobre este sistema,al parecer injusto.

Como todos los entrenadores saben, la mejor defensa es un buen ataque. Asípues, no se centre en protegerse contra las demandas judiciales. Antes bien,inicie su programa de gestión del riesgo adoptando la filosofía del PCEE, los atle-tas primero, la victoria en segundo lugar. Su deseo es administrar el riesgo por-que quiere hacer lo que es mejor para los deportistas. Céntrese en el aspectopositivo de ayudar a los atletas a jugar con seguridad y es muy probable queeluda los litigios.

Capítulo 15

Gestión del riesgo

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El sistema legal

No puedo convertirle en abogado, pero debeentender los fundamentos de nuestro sistemalegal, y especialmente la negligencia. La Figura15.1 muestra una sinopsis del sistema legal norte-americano.

Determinar la negligencia

En nuestro sistema legal, cualquiera puededemandar a otra persona por negligencia. Si leponen un pleito por negligencia y el caso va a jui-cio, el tribunal determinará si ha sido usted negli-gente, y emitirá su veredicto a partir de cuatrocuestiones clave:

• ¿Tenía realmente un deber legal para con laparte damnificada en esta situación?

• ¿Falló en el cumplimiento de este deber?• ¿Ha recibido un daño la parte hacia la que

usted tiene un deber legal?• ¿Falló en el cumplimiento del deber que ha pro-

vocado el daño?

Para que le consideren negligente, la respuestaa las cuatro preguntas tiene que ser sí.

Una defensa frecuente en los casos de negli-gencia en el deporte es que la lesión se produjodebido al riesgo inherente de ese deporte y no a unfallo del entrenador a la hora de cumplir un deberlegal. Por ejemplo, se le han dado instruccionesapropiadas a una chica joven para que salte deltrampolín, la tabla está en excelentes condicionesy la piscina es lo bastante honda. Cuando la chicaejecuta un tirabuzón y medio interior, se golpea lacabeza contra la tabla, lo que ocasiona una lesióngrave. Si no hay otros factores implicados, sulesión es el resultado de un riesgo inherente al sal-to de trampolín, no a una negligencia por su parte.

Una segunda defensa común es que la partedamnificada, con frecuencia un atleta, puede ha-ber contribuido a la lesión por su conducta, porejemplo al no seguir las instrucciones. Puede serque usted haya fallado en el pleno cumplimientode sus deberes legales y que el deportista tambiénhaya contribuido a que se produzca la lesión. Estoconoce como negligencia contributiva, y en muchosestados si un atleta contribuye de la forma quesea a la negligencia, es posible que no le acusen denegligencia. Recientemente, sin embargo, son máslos estados que han adoptado la negligencia com-parativa en sus leyes, por las cuales la negligenciade cada parte implicada es comparada en térmi-nos porcentuales. Normalmente, un jugador queha contribuido a la negligencia en más de un 50 %no puede ser resarcido por los daños.

Proceso de gestión del riesgo

El objetivo de la gestión del riesgo es crear elentorno más seguro posible para los atletas ydemás personas, y evitar pleitos. Los cuatro pasos

El entrenador de éxito156

Figura 15.1 El sistema legal norteamericano.

Responsabilidadlegal

Ley civil

Agravios

tratos

Propiedad

Personas

Ley criminal

La responsabilidad legal hace referencia a loscompromisos y deberes entre las personas queson exigibles desde los tribunales. Como puedever en la Figura 15.1, las ofensas a la ley puedenser civiles o criminales. Bajo la ley civil, las faltaslegales se clasifican como agravios o como respon-sabilidades contractuales. En este capítulo no nosvamos a ocupar de la ley criminal o contractual,sino que nos centraremos en la jurisprudenciasobre los agravios, la cual es aplicable a la mayo-ría de los pleitos que afectan a los entrenadores.

Negligencia

La ley sobre agravios se ocupa de determinar siuna persona ha dejado de observar un deber legal.Como entrenador, usted tiene ciertos debereslegales que cumplir. Si no lo hace y dicha falta dacomo resultado una lesión, puede ser enjuiciado porla ley de agravios. El término legal para el incumpli-miento de sus deberes legales es negligencia.

Al entrenar, es usted negligente si no pone enpráctica la pericia y los conocimientos que poseencomúnmente el resto de los entrenadores al traba-jar con aquellos hacia quienes tiene un deberlegal. La negligencia puede producirse debido a unacto inapropiado o a la omisión de un acto.

Parte V 135-215 18/4/02 14:40 Página 156

a dar para administrar el riesgo se muestran en laFigura 15.2.

Identificar el riesgo

En este paso, usted determina los riesgos pro-bables a los que se enfrenta cuando entrena a sugrupo. Puede determinarlos repasando cuidado-samente los nueve deberes legales tratados en laspáginas 159-176. En sentido amplio, tiene queconsiderar la participación, la actividad, el entor-no, el equipamiento y los métodos de entrena-miento y supervisión al identificar los riesgos.Cuando revise estos deberes legales, tome nota delos que crea que constituyen los mayores riesgosen su situación.

Evaluar el riesgo

El segundo paso en la gestión del riesgo consis-te en asignar la probabilidad de que un riesgodeterminado pueda ocasionar una lesión y la posi-ble gravedad de ésta. Empiece por determinar sies probable que una determinada lesión se pro-duzca frecuentemente, infrecuentemente o raravez. A continuación, decida si la gravedad de lalesión y su impacto financiero van a ser grande,mediano o pequeño, donde grande representa unalesión grave con un impacto financiero elevado ypequeño significa una lesión leve con escaso im-pacto financiero.

Seleccionar un enfoque

El tercer paso consiste en decidir qué enfoqueadaptar para cada riesgo. Consulte la Figura 15.3

en busca de un enfoque recomendado en virtud dela frecuencia con la que ha determinado que esprobable que se produzca una lesión, y cuántagravedad revestirá y cuál será su impacto finan-ciero. Para emplear el gráfico, localice primero lacolumna que representa su respuesta a la fre-cuencia probable en la que se producirá (fre-cuentemente, infrecuentemente o rara vez). Luegolocalice la hilera que representa su respuesta a laprobable gravedad de la lesión o impacto (grande,mediano o pequeño). El recuadro en el que la fila yla columna se intersecan contiene un curso deacción que tal vez decida emprender para dichoriesgo.

Por ejemplo, si ha seleccionado “frecuentemen-te” para la periodicidad y “grande” para la grave-dad, el gráfico le sugeriría que evite o transfiera elriesgo. El significado de cada uno de estos enfo-ques recibe explicación en el siguiente apartado.

Aplicación del enfoque

El paso final consiste en aplicar el enfoque queha seleccionado para cada riesgo. Dispone almenos de cuatro opciones:

• La primera opción no está incluida en la Figura15.3. Puede eliminar el riesgo eliminando elpeligro, cumpliendo con sus deberes compe-tentemente o no comprometiéndose en dichaactividad.

• Puede evitar el riesgo reduciendo la probabili-dad de que el mismo se convierta en una lesión:tomando medidas para proteger a los atletas delos riesgos potenciales. Puede llevarlo a caboalmohadillando paredes u objetos que sobresa-len, dando reiteradas advertencias y proporcio-nando instrucciones de seguridad.

• Puede aceptar el riesgo. Si considera que éste esmenor, puede decidir sobrellevarlo. Dicho deotra forma, puede determinar que los beneficiosde seguir adelante a pesar el riesgo superan alos costes potenciales de evitarlo.

• Puede transferir el riesgo de diversas maneras:por ejemplo, (a) en vez de conducir su propiocoche al transportar a los atletas, puede utilizarel vehículo del colegio o un transporte público,(b) puede transferir el riesgo financiero contra-tando un seguro contra los costes de la respon-sabilidad (consulte las páginas 180-181 paraabundar en la información sobre el seguro) o (c)bajo ciertas circunstancias, puede trasladar losriesgos inherentes mediante acuerdos de parti-cipación (consulte la página 176). Dado quemuchas pólizas de seguros han llegado a tener

Gestión del riesgo 157

Figura 15.2 Una planificación en cuatro pasos paraadministrar el riesgo.

Identificacióndel Riesgo

Evaluacióndel riesgo

Selección delenfoque

Aplicacióndel enfoque

Parte V 135-215 18/4/02 14:40 Página 157

un precio ultrajantemente elevado, algunas or-ganizaciones han tenido que cancelar progra-mas deportivos porque no podían permitirse elseguro necesario para transferir el riesgo.

Recuerde, no puede transferir sus deberes le-gales, pero puede transferir el riesgo en parte o ensu totalidad.

Inmunidad

Un chico de Nueva Jersey de 10 años de edadque había jugado de segunda base durante la tem-porada regular fue transferido al borde exterior delcampo en la preparación de un partido con todaslas estrellas. Durante los entrenamientos en elexterior del campo, el chico calculó mal una sola,la cual le golpeó en el ojo y le causó un daño per-manente. Los padres demandaron a los entrena-dores por un total de 750.000 $, acusándoles denegligencia por situar al chaval en una posición enla que no estaba acostumbrado a jugar.

Los entrenadores fueron capaces de documen-tar que el chico había jugado en el borde del cam-po la temporada anterior. No obstante, la compa-ñía de seguros decidió llegar a un acuerdo amisto-

so por un total de 25.000 $. La consecuencia in-mediata fue el aumento astronómico de las cuotasde los seguros y gran número de entrenadoresabandonando airados. Eventualmente, la legisla-ción de Nueva Jersey aprobó la primera ley queproporcionaba inmunidad a los entrenadores vo-luntarios contra litigios por negligencia frívolos yordinarios.

Más de una docena de estados han aprobadolegislaciones similares. En cada estado, esta nue-va forma de la ley del Buen Samaritano proporcio-na a los entrenadores voluntarios inmunidad con-tra pleitos frívolos, pero no contra negligencias debulto. Por supuesto, los tribunales deben decidirsi un pleito es frívolo o implica una negligencia co-mún o flagrante.

Aunque la intención de dicha legislación espositiva, estas leyes de inmunidad hacen que seplanteen dos cuestiones importantes. Primero,proporcionan inmunidad sólo a los voluntarios, noa los entrenadores remunerados, y segundo, lamayoría no necesita entrenadores que posean ins-trucción para asegurar la inmunidad. De hecho,parece ser que a los entrenadores que han recibi-do instrucción formal para entrenar no se les pue-de conceder inmunidad.

Puede ver cuál es la consecuencia indirecta.Los entrenadores remunerados que han recibido

El entrenador de éxito158

Figura 15.3 Seleccionar un enfoque.Adaptado, con autorización, de Van Der Smissen, B., Legal Liability and Risk Management for Public and Private Entities,Vol. 2 (Cincinnati, OH: Anderson Publishing), § 23.31. © 1990 Anderson Publishing.

Evitar o transferir

Transferir

Aceptar

Transferir

Transferir o aceptar

Aceptar

Transferir

Transferir o aceptar

Aceptar

Frecuencia con que se produce

Frecuente Infrecuente Rara vez

Grande

Mediano

Pequeño

Gra

ved

ad d

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educación formal para hacer su trabajo no recibenla misma protección contra litigios caprichososque los voluntarios sin formación. ¿Animará estoa los entrenadores voluntarios a no recibir forma-ción y ser así menos capaces de gestionar el riesgode los deportistas a su cargo? La respuesta aúnestá por determinar.

Si Los atletas primero, la victoria en se-gundo lugar es su filosofía, entonces querrá ha-cer todo lo posible para proteger a los atletas.Ello requiere que se convierta en un entrenadorcon la mejor formación posible. Por tanto, mien-tras que estas nuevas leyes de inmunidad pro-porcionan alguna protección contra los riesgos,usted no debería confiar en esta protección.Confíe, antes bien, en sí mismo para procurarun entorno seguro siendo un entrenador compe-tente.

Deberes legales de los entrenadores

En los últimos 20 años, en virtud de miles delitigios, los tribunales han definido y continúandefiniendo sus deberes legales como entrenador.Estos deberes pueden variar de estado en estadoy pueden cambiar mientras los pleitos deportivosprosiguen sin mengua. En esta sección, describi-ré los deberes mejor establecidos y, al menos,algunas de las acciones que puede emprenderpara cumplir con tales obligaciones. En realidad,en gran parte de este libro se le aconseja directao indirectamente cómo cumplir con sus respon-sabilidades legales. Los casos de estudio que pre-sentan cada uno de los deberes están basado encasos reales de los tribunales.

Sus nueve deberes legales

Deber 1: planificar apropiadamente la actividad.Deber 2: proporcionar instrucción adecuada.Deber 3: proporcionar un entorno físico seguro.Deber 4: proporcionar equipamiento adecuado

e idóneo.Deber 5: equiparar a los deportistas.Deber 6: examinar a los atletas en busca

de lesiones o incapacidad.Deber 7: supervisar la actividad de cerca.Deber 8: advertir de riesgos inherentes.Deber 9: proporcionar auxilios de emergencia

apropiados.

Deber 1: planificar apropiadamentela actividad

Gestión del riesgo 159

Una joven entrenadora de gimnasia enseña-ba a una niña de 7 años cómo hacer el pino elprimer día de entrenamientos. La niña sufrióuna lesión grave en el cuello cuando se calló alintentarlo por segunda vez. La entrenadora fuedemandada y la acusaron de negligencia, por-que no había preparado a la niña con ejerciciosde fuerza adecuados y técnicas de equilibrio.

Comprenda sus deberes. Los tribunales hanfallado repetidamente que los entrenadores tienenla obligación de programar apropiadamente lasactividades para que los atletas participen bajosupervisión. Recorrerá un buen trecho en el cum-plimiento de este deber si lleva a cabo lo que sedescribe en el capítulo 7, “Planificando para ense-ñar.”

Entre sus deberes esenciales, se encuentraenseñar las habilidades del deporte en la progre-sión adecuada. Evite enseñar técnicas avanzadasdemasiado pronto sólo porque algunos de los me-jores deportistas estén preparados o porque seestá aburriendo. Practicar habilidades avanzadaspuede resultar peligroso y le pueden hallar negli-gente, como le sucedió a la entrenadora de gimna-sia, si no sigue una progresión razonable. “Unaprogresión razonable” cuya evaluación como taldependerá de la progresión empleada por otrosentrenadores prudentes y la preparación de losatletas individuales.

Para cumplir sus deberes de planificación de-be considerar el grado de desarrollo de cada de-portista y su condición física actual. No cumplirásu deber con propiedad si prescribe el mismo pro-grama para todos los atletas. Así pues, al menosal principio de la temporada, examine la prepara-ción de los deportistas con un examen o un siste-ma de calificación detallado. No sólo se trata deuna buena rutina para programar los ejercicios,sino que proporcionará un registro escrito vali-dando su esfuerzo por planificar las actividadescorrectamente.

Cumpliendo con su deber

1. Elabore una planificación para la temporadautilizando la progresión apropiada para los atle-tas.

Parte V 135-215 18/4/02 14:40 Página 159

2. Examine a los jugadores para determinar sucapacidad física y grado de habilidad en su de-porte.

3. Desarrolle sesiones prácticas por escrito que seciñan a las recomendaciones del capítulo 7.

4. Adapte sus sesiones a las necesidades indivi-duales de los deportistas.

5. No se desvíe de su programa sin una buenacausa.

6. Guarde todas las anotaciones de sus sesiones yexámenes.

Deber 2: proporcionar instrucciónadecuada

siderado negligente. Aunque multitud de jugado-res avanzados de béisbol se deslizan con la cabezapor delante, dicha técnica no está aceptada comoel modo correcto de enseñar el deslizamiento.

Si es usted el primer entrenador, su deber for-mativo no puede ser delegado. Si solicita a los en-trenadores auxiliares o a atletas con mayor habili-dad que enseñen, debe supervisar la instrucción yes responsable de que sea correcta.

Cumpliendo con su deber

1. Manténgase al día de los estándares formativosactuales de su deporte y empléelos.

2. Enseñe las habilidades, estrategias y normas enconcordancia con los métodos comunes de sudeporte y el grado de desarrollo de los atletas.

3. Dote a sus instrucciones de claridad, rigor yconsistencia. Proporcione el feedback adecuadosobre el progreso de los deportistas.

4. Sea consciente de que como primer entrenadorsigue siendo responsable de supervisar la ins-trucción para asegurarse de que es correcta sidelega la tarea de instruir a los deportistas.

Deber 3: proporcionar unentorno físico seguro

El entrenador de éxito160

Las entradas arpón, una forma de entradaen rugby en la que la cabeza del defensa es“arponeada” hacia el pecho de quien lleva elbalón, era el modo aceptado de bloquear en los60. Pero surgieron muchas lesiones cervicalesa consecuencia de esta técnica, y después deque diversos estudios demostrasen lo vulnera-ble que es la espina dorsal en esta entrada, latécnica dejó de recomendarse, sobre todo a losjugadores universitarios. Desgraciadamente, elentrenador universitario Mike Douglas ignora-ba que la entrada arpón estuviese contraindi-cada. Era la manera en que él había aprendidoa bloquear y, por tanto, la manera en que loenseñaba. El uso de esta técnica provocó unatetraplegia a su defensa central y un pleito de2,8 millones de dólares contra Mike y su uni-versidad.

Comprenda sus deberes. Es su deber enseñarlas técnicas correcta y exhaustivamente para quelos deportistas no se lesionen y sus acciones nolesionen a otros. La instrucción exhaustiva inclu-ye la enseñanza de las habilidades y las estrate-gias necesarias para el rendimiento correcto, asícomo de las normas del juego.

En general, la ley insta a que enseñe a los de-portistas en concordancia con procedimientosaceptados en el deporte y permite variaciones in-dividuales siempre y cuando no sean radicales opeligrosas. Por ejemplo, puede utilizar diversosenfoques para enseñar el deslizamiento con lospies por delante en béisbol, pero si enseña el desli-zamiento con la cabeza por delante y el deportistase lesiona, tiene muchas posibilidades de ser con-

Tras un aguacero corto pero intenso, el te-rreno de juego para el béisbol infantil estabademasiado embarrado como para hacer el en-trenamiento, por lo que la entrenadora EllenArcher trasladó al grupo a un campo de hierbagrande. Kelly Smith tropezó en un hoyo y serompió la pierna por cuatro sitios. El pleitoresultante imputó a la entrenadora Archer denegligencia por no inspeccionar apropiada-mente la instalación de juegos.

Comprenda sus deberes. Practicar deportessupone un riesgo inherente en cualquier entornofísico, pero como entrenador es usted responsablede inspeccionar regular y exhaustivamente lasinstalaciones. La frecuencia dependerá de la acti-vidad. La regla de oro es: cuanto mayor sea el ries-go, más frecuentes serán las inspecciones. Si pre-tende ser un buen directivo del riesgo, le reco-miendo que elabore una Lista de Inspección deInstalaciones para su deporte, similar a la de laspáginas 161-164. Adapte la muestra a su deporte.

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Lista de inspección de las instalaciones

Nombre ___________________________________________________________________________________________Fecha de la inspección _____________________________________________________________________________Nombre y ubicación de las instalaciones ____________________________________________________________

Nota: este formulario constituye una lista incompleta suministrada como ejemplo. Utilícela para elaboraruna lista específica para sus instalaciones.

Condición de las instalaciones

Trace un círculo en torno a la S (sí) si la instalación está en buenas condiciones o en torno a la N (no) siprecisa que se haga algo para que sea aceptable. En el espacio que sigue, detalle lo que hay que hacer.

Gimnasio

S N Suelo (filtraciones, abombamientos, secciones sueltas)_________________________________________

S N Paredes (sin vandalismo) _____________________________________________________________________

S N Luces (funcionan todas) ______________________________________________________________________

S N Ventanas (seguras) ___________________________________________________________________________

S N Techo (impacto adverso del clima)_____________________________________________________________

S N Escaleras (bien iluminadas)___________________________________________________________________

S N Gradas (estructura de soporte en condiciones)_________________________________________________

S N Salidas (funcionan las luces)__________________________________________________________________

S N Aros de baloncesto (nivelados, anclados firmemente)___________________________________________

S N Tableros de baloncesto (sin grietas, limpios) ___________________________________________________

S N Colchonetas (limpias, bien almacenadas, sin defectos) _________________________________________

S N Verticales, proyecciones ______________________________________________________________________

S N Enchufes de pared (bien cubiertos)____________________________________________________________

S N Interruptores de luz (funcionan todos)_________________________________________________________

S N Sistema de calor/frío (control de la temperatura)_______________________________________________

S N Conductos, radiadores, tubos_________________________________________________________________

S N Termostatos _________________________________________________________________________________

S N Alarmas contraincendios (comprobadas regularmente)_________________________________________

S N Direcciones indicadas para evacuar el gimnasio en caso de incendio ___________________________

S N Extintores (comprobados regularmente)_______________________________________________________

Otros (lista)

(continúa)

Gestión del riesgo 161

Parte V 135-215 18/4/02 14:40 Página 161

Lista de inspección de las instalaciones (continúa)

Vestuarios

S N Suelo _________________________________________________________________________________________

S N Paredes _______________________________________________________________________________________

S N Luces_________________________________________________________________________________________

S N Ventanas _____________________________________________________________________________________

S N Techo_________________________________________________________________________________________

S N Duchas _______________________________________________________________________________________

S N Sumideros ____________________________________________________________________________________

S N Bancos _______________________________________________________________________________________

S N Taquillas______________________________________________________________________________________

S N Salidas _______________________________________________________________________________________

S N Surtidores de agua ____________________________________________________________________________

S N Servicios ______________________________________________________________________________________

S N Vestuario del entrenador ______________________________________________________________________

Otros (lista)

______________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

Terreno(s)/zona de juegos exterior

Superficie

S N Demasiado húmeda o demasiado seca _________________________________________________________

S N Longitud de la hierba__________________________________________________________________________

S N Libre de escombros____________________________________________________________________________

S N Libre de hoyos y socavones ____________________________________________________________________

S N Libre de tubos, alambres, cables que sobresalen________________________________________________

S N Marcadores de líneas __________________________________________________________________________

Tribunas

S N Montículo de lanzamiento _____________________________________________________________________

S N Banquillos ____________________________________________________________________________________

S N Pista y vallas de advertencia ___________________________________________________________________

S N Laterales______________________________________________________________________________________

S N Aspersores____________________________________________________________________________________

S N Basura _______________________________________________________________________________________

S N Vallas de seguridad____________________________________________________________________________

S N Surtidores de agua ____________________________________________________________________________

S N Cobertizos de almacenamiento_________________________________________________________________

(continúa)

El entrenador de éxito162

Parte V 135-215 18/4/02 14:40 Página 162

Zona de mantenimiento

S N Instalación eléctrica ___________________________________________________________________________S N Sistema de calor-frío __________________________________________________________________________

Otros (lista)

______________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

Piscina

S N Equipamiento reparado________________________________________________________________________

S N Sanitarios_____________________________________________________________________________________

S N Control de deslizamiento en palancas y trampolines ____________________________________________

S N Normativa y reglas de seguridad expuestas _____________________________________________________

Iluminación: adecuada visibilidad.

S N Sin destellos __________________________________________________________________________________

S N Penetra hasta el fondo de la piscina ____________________________________________________________

S N Luz de salida en buen estado __________________________________________________________________

S N Los vestíbulos y los vestuarios reúnen los requisitos exigidos____________________________________

S N Interruptores de la luz correctamente empotrados ______________________________________________

S N Posee generador de emergencia para respaldar el suministro eléctrico común ____________________

Salidas: accesibles, seguras.

S N Tamaño, número adecuados___________________________________________________________________

S N Puertas con autocierre_________________________________________________________________________

S N Puertas con autoclausura _____________________________________________________________________

S N Tiradores seguros _____________________________________________________________________________

S N Sin obstáculos o escombros____________________________________________________________________

S N Oficinas y sala de almacenamiento cerrados____________________________________________________

Flotadores

S N 50 cm de diámetro ____________________________________________________________________________

S N Longitud de la cuerda 15 m____________________________________________________________________

Bicheros

S N Uno a cada lado _______________________________________________________________________________

S N Longitud 4 m__________________________________________________________________________________

S N Fatiga del metal _______________________________________________________________________________

S N Buen estado de reparación ____________________________________________________________________

(continúa)

Gestión del riesgo 163

Parte V 135-215 18/4/02 14:40 Página 163

Sillas de los socorristas (continúa)

S N Visibilidad sin obstáculos______________________________________________________________________S N Altura suficiente para ver el fondo de la piscina _________________________________________________

Marca de seguridad en el punto de ruptura del nivel de la piscina (fondo)

S N Boyas de colores brillantes_____________________________________________________________________S N Cuerda de 7/8 cm_____________________________________________________________________________

Botiquín de primeros auxilios

S N Inventario y reposición regular_________________________________________________________________

Camilla, dos sábanas y soporte cervical

S N Inventario y reposición regular_________________________________________________________________

Teléfono y luces de emergencia y guía de direcciones públicas

S N Accesibles ____________________________________________________________________________________

S N Direcciones a utilizar expuestas con claridad ___________________________________________________

S N Surtidos por los generadores de emergencia así como por el sistema de energía común ___________

S N Números de emergencia en la horquilla del teléfono o receptor___________________________________

Procedimientos de emergencia

S N Señal expuesta en una zona muy visible________________________________________________________

Pista

Superficie

S N Libre de escombros____________________________________________________________________________

S N Libre de agujeros y socavones__________________________________________________________________

S N Círculos de lanzamiento _______________________________________________________________________

S N Vallas_________________________________________________________________________________________

S N Surtidor de agua ______________________________________________________________________________

Otros (lista)______________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

Recomendaciones/observaciones: ____________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

El entrenador de éxito164

Parte V 135-215 18/4/02 14:40 Página 164

Tiene usted también la obligación de descubrirelementos de riesgo y hacer lo que esté en su ma-no para reducirlos. Cuando no pueda eliminar unpeligro, como una roca que sobresale en un terre-no de juego o una pared demasiado cercana a lalínea de fondo en una pista de baloncesto, es res-ponsable de intentar reducir el riesgo y de advertira los jugadores. Puede colocar un trapo de colorbrillante sobre la piedra o acolchar la pared, y ad-vertir a los jugadores para que las eviten. Una vezmás, se espera que haga lo que un entrenadorprudente haría en la misma situación.

Cuando se tope con unas instalaciones que nosatisfacen las normas establecidas por la juntadirectiva de su deporte, tiene el deber de notificaral director de las instalaciones que son insegurasy de recomendarle una manera de corregirlo. Si eldirector de las instalaciones y usted ignoran dichanormativa, deben ponerse en contacto con la jun-ta directiva de su deporte (ver Apéndice B).

Recuerde, asimismo, que el entorno físico pue-de cambiar cuando esté entrenando o compitien-do, tanto en interior como en exterior. Las superfi-cies de juego que resbalan por la lluvia, los fuertesvientos y los relámpagos pueden hacer que losentornos al aire libre se vuelvan inseguros rápida-mente. Aunque los cambios son menos probablesen el interior, las instalaciones también puedenvolverse inseguras muy deprisa si se produce unaavería en el control de la luz, el calor o la hume-dad. Debe comprobar continuamente si hay cam-bios en el entorno, a fin de determinar si es seguropara los deportistas, y tomar las medidas que co-rrespondan en el caso de que sea asín.

Cumpliendo con sus deberes

1. Compruebe y ponga remedio a las situacionesde peligro mediante inspecciones regulares delas instalaciones de juegos y de las zonas de ca-lentamiento, entrenamiento y vestuarios.

2. Elabore una Lista de Inspección de las Instala-ciones para la infraestructura y el equipamientoutilizados en su deporte. Utilícelas regularmen-te y manténgala al día.

3. Modifique todos los elementos de riesgo quepueda; reduzca el peligro si no puede eliminar-lo. Advierta a los jugadores del peligro y notifi-que al director de las instalaciones sobre elmodo de corregir el peligro mediante recomen-daciones por escrito.

4. Comunique normas precisas sobre el uso de lasinstalaciones. Exponga las reglas, recuérdese-las a los jugadores y refuércelas con coherencia.

5. Controle el entorno sujeto a cambios y si haypeligro tome una decisión juiciosa sobre la con-tinuidad de los ejercicios.

Deber 4: proporcione equipamientoadecuado e idóneo

Gestión del riesgo 165

Robert Bloom creyó que estaba haciendouna buena compra cuando adquirió nuevasmascarillas de plástico para su grupo de joc-key. Las mascarillas fueron montadas en loscascos por el encargado de mantenimiento delcolegio, pero no se le dieron instrucciones decómo hacerlo. Cuatro semanas después del ini-cio de la temporada Brad Kosnick fue golpeadoen la máscara por un stick alzado, el cual que-bró la mascarilla y le clavó una esquirla deplástico en el ojo izquierdo, y en el tribunal elfabricante de la mascarilla, el entrenador y elcolegio fueron sancionados por negligencia.

Comprenda sus deberes. Su obligación eneste punto es la misma, en general, que en elDeber 3. Es responsabilidad suya no sólo propor-cionar equipamiento adecuado e idóneo, sino ex-plicar igualmente su uso correcto y cualesquieracaracterísticas destacables. Por ejemplo, la misiónde un casco de rugby es proteger al jugador, perousado incorrectamente puede resultar peligrosotanto para el jugador como para quienes le rode-an. De igual forma, los aparatos de gimnasia hansido diseñados para ser tan seguros como sea po-sible en determinadas pruebas, pero usados inco-rrectamente pueden resultar peligrosos.

Como en el caso de las instalaciones, debe ins-peccionar el equipamiento regularmente. Si estágastado o roto, es su deber retirarlo del uso o ha-cer que sea reparado apropiadamente. Utilice lasListas de Inspección del Equipamiento de GranTamaño y del Equipamiento Personal de las pági-nas 166 y 167 para inspeccionar rutinariamenteel equipamiento del grupo.

Cuando adquiera equipamiento, tiene que com-prar lo mejor que pueda permitirse y cerciorarse deque satisface las normas del Comité OperativoNacional sobre Estándares y Equipamiento Depor-tivo. El utillaje tiene que ser adquirido teniendo encuenta el grado de habilidad y la edad de los depor-tistas. Cuando el equipamiento es adquirido por eljugador o por el colegio, su responsabilidad legal esmenor en cuanto a si satisface estos estándares osi es seguro.

Parte V 135-215 18/4/02 14:40 Página 165

El entrenador de éxito166

Lista de Inspección del Equipamiento de Gran Tamaño

Fecha de la inspección:Equipamiento inspeccionado:Condición actual:Inspector:

Satisfactorio Insatisfactorio Comentarios

Limpio __________ ____________ ___________________

Libre de óxido __________ ____________ ___________________

Libre de esquirlas o bordes afilados __________ ____________ ___________________

Todos los componentes

(originales de fábrica) en su sitio __________ ____________ ___________________

Todos los componentes

(del servicio técnico) en su sitio __________ ____________ ___________________

Todos los componentes funcionan __________ ____________ ___________________

Todas las reparaciones realizadas

por personal autorizado __________ ____________ ___________________

Tornillos y tuercas bien apretados __________ ____________ ___________________

Situado correctamente para su uso __________ ____________ ___________________

Asegurado correctamente para su uso __________ ____________ ___________________

Almohadillado colocado según especificaciones __________ ____________ ___________________

Recibido por: ________________________________________________________________________________________

Fecha: ______________________________________________________________________________________________

Trabajos de reparación programados para: ___________________________________________________________

Reparaciones finalizadas en fecha: ___________________________________________________________________

Firma del supervisor: ________________________________________________________________________________

Siguiente fecha de inspección: _______________________________________________________________________

Gran parte de la responsabilidad relativa alequipamiento recae en el fabricante, en parte porla política de “insolvencias” que afecta a los liti-gios. No obstante, es su deber comprobar que elutillaje se adecua apropiadamente y es utilizadosegún las especificaciones del fabricante.

También es usted responsable de comprobarque el equipamiento esté almacenado adecuada-mente. Dejarlo, como en el caso de las pesas o los

trampolines, en zonas no clausuradas o sin vigi-lancia es una invitación a la lesión y al pleito.

Cumpliendo con su deber

1. Compre el mejor equipamiento que pueda per-mitirse, considerando la edad y la habilidad delos atletas.

2. Enseñe a los deportistas cómo arreglar, usar einspeccionar el equipamiento. Anímeles a devol-

Parte V 135-215 18/4/02 14:40 Página 166

ver cualquier útil que no reúna condiciones oparezca defectuoso.

3. Inspecciónelo con regularidad; cuanto mayordesgaste sufra el equipamiento, con mayor fre-cuencia tendrá que examinarlo.

4. Permita sólo a personas cualificadas que insta-len, arreglen, ajusten y reparen el utillaje. Talvez quiera insistir en que un enviado del fabri-cante instale todo el equipamiento (p. ej., cas-cos, almohadillas y protectores bucales).

5. Advierta a los jugadores sobre los útiles poten-cialmente peligrosos y proporcione instruccio-nes verbales y escritas sobre su uso.

6. Esté atento a los cambios en el equipamien-to manteniéndose al día sobre los estándaresaceptados.

Deber 5: equiparar a los deportistas

Gestión del riesgo 167

Lista para la Inspección del Equipamiento Personal

Fecha de la inspección:______________________________________________________________________________

Equipamiento inspeccionado: _______________________________________________________________________

Estado del equipamiento al ser distribuido:_________________ Nuevo _____________ Reacondicionado

Estado del equipamiento ahora: _____________________________________________________________________

Inspector: __________________________________________________________________________________________

Satisfactorio Insatisfactorio Comentarios

Limpio __________ _______________________________

Libre de óxido, esquirlas y bordes afilados __________ ____________ ___________________

Todo ajusta apropiadamente __________ ____________ ___________________

Todas las partes integrales en su sitio __________ ____________ ___________________

Todas las partes operativas funcionan __________ ____________ ___________________

Ninguna modificación

a las especificaciones de fábrica __________ ____________ ___________________

Todas las reparaciones hechas

por personal autorizado __________ ____________ ___________________

Recibido por: ________________________________________________________________________________________

Fecha:_______________________________________________________________________________________________

Trabajos de reparación programados:_________________________________________________________________

Reparaciones finalizadas en fecha:____________________________________________________________________

Firma del supervisor: ________________________________________________________________________________

Siguiente fecha de inspección ________________________________________________________________________

Randy Brooks era un jugador de rugby de 52kilos que irritaba al entrenador Jack Venís consu continuo mal comportamiento y sus fanfa-rronadas sobre habilidades infundadas. Un día,después de una hora de provocaciones por partede Randy, el entrenador Venís organizó un ejer-cicio de blocajes uno contra uno y emparejó aRandy con Tom McNab, un defensa de 93 kilos yel jugador más fuerte del grupo. Randy, en elejercicio, sufrió una conmoción cerebral grave yfue hospitalizado. El tribunal sancionó al entre-nador Venís por negligencia dada su impruden-te decisión al emparejar a los jugadores.

Parte V 135-215 18/4/02 14:40 Página 167

Comprenda sus deberes. Este deber es perti-nente sobre todo en deportes de contacto y coli-sión, pero afecta también a los deportes en los quese arrojan bolas o golpean a otros jugadores.

En el deporte es común emparejar a los atletassegún la edad, dando por supuesto que serán detamaño y experiencia similares. Pero, sin duda,todos sabemos que esto no es necesariamentecierto. Dos chicos, con una edad cronológica de 12años, pueden diferir en 5 ó 6 años de edad biológi-ca (madurez física). Un chico puede pesar 30 kilosy tener una edad biológica de 9 años, mientrasque otro pesa 70 kilos y tiene una edad biológicade 15. Emparejar a estos dos jugadores en undeporte de contacto resulta, obviamente, peligro-so, y los tribunales han fallado que los entrena-dores que lo han hecho son negligentes.

Su deber es ocuparse de que los jugadores nosean colocados en situaciones donde estén en tandesventaja que el riesgo de lesión aumente. Asípues, no sólo ha de tener en consideración la edadal emparejar a los chavales. También debe teneren cuenta la talla, la madurez física, la habilidad yla experiencia.

Tendría que evitar, igualmente, que atletas congrados de entrenamiento sustancialmente distintocompitan unos contra otros. Si entrena a un gru-po mixto debe poner especial en no crear desigual-dades. Recuerde, los hombres y las mujeres de lamisma edad probablemente diferirán en tamaño,madurez, habilidad y experiencia.

Las desigualdades también pueden producirsecuando los atletas vuelven a la competición des-pués de graves lesiones. Los entrenadores debenemplear el buen juicio para reintroducir a los atle-tas gradualmente en la plena intensidad de losentrenamientos y la competición. Deben teneridéntica consideración hacia cualquier deportistacon una discapacidad.

Cumpliendo con su deber

1. Empareje a los jugadores según la talla, la habi-lidad y la experiencia, así como la edad, demodo que no se encuentren en situaciones enlas que el riesgo de lesión aumenta.

2. Refuerce las normas de la elegibilidad; con fre-cuencia tienden a producir competiciones equi-tativas.

3. Modifique la estructura del ejercicio o el entre-namiento cuando las desigualdades en la capa-cidad no sean fácilmente corregibles.

4. Esté especialmente alerta a las desigualdadesentre los sexos, de los atletas se recuperan delesiones y de aquellos con discapacidades.

Deber 6: examine a los atletas en buscade lesiones o incapacidad

El entrenador de éxito168

TENEMOS QUE HACER MEJORESEMPAREJAMIENTOS.

Andy Jacobs quedó inconsciente duranteunos 30 segundos cuando fue derribado a la col-choneta por su oponente en una pelea de luchalibre en el Instituto. Pasados 15 minutos, Andyinsistió en que se encontraba bien y solicitó con-tinuar compitiendo. Su entrenador accedió conrenuencia. Andy murió 20 minutos después delenfrentamiento de una hemorragia cerebral. Losmédicos que declararon en el juicio establecie-ron inequívocamente que el entrenador no ten-dría que haber permitido que Andy volviese a lacolchoneta. El jugado imputó al entrenador denegligencia.

Comprenda sus deberes. Le competen tresresponsabilidades importantes a fin de cumplircon esta obligación:

• Debe asegurarse de que la salud del atleta essatisfactoria para participar en su deporte alprincipio de la temporada.

• Debe determinar si una enfermedad o lesióndurante los entrenamientos o la competiciónreviste la gravedad suficiente como para que laparticipación sea suspendida.

Parte V 135-215 18/4/02 14:40 Página 168

• Debe asegurarse de que un deportista lesionadoestá listo para volver a jugar.

Estas responsabilidades no son suyas sola-mente, sino compartidas con los padres y losmédicos. De hecho, los buenos gestores del riesgotransfieren al grupo médico una parte tan grandecomo sea posible de las responsabilidades, aun-que a menudo no pueda hacerse.

La Academia Norteamericana de Pediatría(ANP) recomienda que los atletas pasen exáme-nes físicos al menos cada 2 años. Por tanto, notodos los deportistas pueden necesitar un reco-nocimiento médico de pretemporada para su dis-ciplina, pero si deben aportar evidencias dehaber pasado un examen médico previo a la par-ticipación en los últimos 2 años. Un buen exa-men debe analizar las condiciones enumeradasen la página 170. Tiene que asegurarse, asimis-mo, de que usted o la agencia de patrocinio dis-ponen de un expediente de cada atleta con unhistorial médico completo similar al que semuestra en las páginas 171-172. Algunos esta-dos y organizaciones exigen que se rellenen for-mularios específicos. Consulte al director depor-tivo para cerciorarse de que está utilizando unformulario apropiado.

Debe decidir, igualmente, si los atletas con con-diciones médicas especiales pueden jugar y si hayque poner restricciones a su participación. LaTabla 15.1 (páginas 173-174) describe las pautasde la ANP para la participación de los jóvenes concondiciones especiales. Aunque esta tabla resultaútil a modo de referencia, es importante que unmédico tome la decisión de si un atleta con espe-ciales consideraciones puede formar parte de sugrupo.

Entrenando a deportistas con disca-pacidades. Cuando se plantee si un deportistaes físicamente capaz de participar en su grupo, esimportante que tenga en cuenta las implicacionesde la Federación Española de deporte para mi-nusválidos físicos y psíquicos. La Federación es-tablece:

Ningún individuo será discrimina-do debido a discapacidades en el ple-no e igualitario disfrute de los bienes,servicios, instalaciones, privilegios,ventajas o acomodos en cualquier lu-gar de acomodo público por personaalguna que posea, arriende u opereun lugar de acomodo público. Los be-

neficios proporcionados por los disca-pacitados no pueden ser separados odiferenciados de los proporcionadospor otros, a menos que sean tan efi-caces como los proporcionados porotros.

En la actualidad, los requisitos específicos seestán debatiendo. Pero la intención de la Federa-ción es suministrar a las personas con discapacida-des las mismas oportunidades para participar quelas que pueden permitirse quienes no las padecen.Antes de decidir excluir a algún deportista de for-mar parte de su grupo debido a una discapacidad,asegúrese de discutir la cuestión con el directordeportivo o el directivo jefe para plantear las impli-caciones de la Federación Española de deporte paraminusválidos físicos y psíquicos (AND).

Atletas lesionados. Cuando los deportistasse lesionan durante los entrenamientos o la com-petición, tiene que evaluar el riesgo de hacerlesvolver a jugar. Cuando hay un médico presentepuede transferir esa responsabilidad, pero a me-nudo no habrá ninguno a mano. Recomiendo en-carecidamente que realice un Curso de LesionesDeportivas para aprender a realizar diagnósticosmejores.

El Curso de Rehabilitación Deportiva le ayuda-rá a determinar cuándo resulta seguro para unatleta volver a la actividad. Como norma general,sin embargo, si el atleta ha recibido tratamientomédico por una lesión, el médico debe certificarque el deportista está preparado para volver a laacción.

Cumpliendo con su deber

1. Exija evidencias de que todos los atletas hanpasados exámenes físicos previos a su partici-pación en los últimos 2 años.

2. Siga las directrices de la Federación Española dedeporte para minusválidos físicos y psíquicos(AND) para determinar si y en qué condicioneslas personas con condiciones especiales puedenparticipar.

3. Lleve un historial médico de todos los deportis-tas inscritos.

4. Emplee el buen juicio para identificar a atletasque están lesionados o lo bastante enfermoscomo para no poder participar.

5. Obtenga la aprobación de los padres y los médi-cos antes de permitir que deportistas gravementeenfermos o lesionados vuelvan a la actividad.

Gestión del riesgo 169

Parte V 135-215 18/4/02 14:40 Página 169

Autorización:

A. Autorizado.B. Autorizado después de completar evaluación-rehabilitación de C. No autorizado por: ❑ Colisión.

❑ Contacto❑ No contacto ___ Vigoroso ___ Moderadamente vigoroso ___ No vigoroso

Debido a: ________________________________________________________________________________Recomendación:_______________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________Nombre del Médico __________________________________ Fecha _______________________________________Dirección _________________________________________ Teléfono ________________________________________Firma del Médico _____________________________________________________

El entrenador de éxito170

Altura________ Peso_________ Presión sanguínea________/________ Pulso_________

Visión D 20/___ I 20/___Corregida: S N Pupilas_________

Normal Hallazgos anormales Iniciales

Cardiopulmonar

Pulsos

Corazón

Pulmones

Fase del bronceado 1 2 3 4 5

Piel

Limitado

Abdomen

Genitales

Esqueletico-muscular

Cuello

Hombros

Codos

Muñecas

Manos

Espalda

Rodillas

Tobillos

Pies

Otros

Evaluación física previa a la participación

Examen físico Fecha____________

Nombre____________________________________________ Edad______ Fecha de nacimiento______________

Com

ple

to

Lim

itad

o

Parte V 135-215 18/4/02 14:40 Página 170

Gestión del riesgo 171

Historial médico

HistorialNombre___________________________________________Sexo___ Edad ___ Fecha de nacimiento ______Curso_______________ Deporte ______________________ ____________________________ Personal médico ___________________________________ _____________________________ __________________

Dirección_______________ Teléfono del médico_________

Explique las respuestas afirmativas:................................................................................ Sí No1. ¿Ha sido hospitalizado alguna vez?........................................................................... ❑ ❑

¿Ha sido operado alguna vez?................................................................................... ❑ ❑

2. ¿Está tomando actualmente medicamentos o píldoras? ............................................ ❑ ❑

3. ¿Sufre algún tipo de alergia (medicinas, abejas o la picadura de otros insectos)?....... ❑ ❑

4. ¿Se ha desmayado alguna vez durante o después del ejercicio?................................. ❑ ❑

¿Ha sentido mareos alguna vez durante o después del ejercicio?............................... ❑ ❑

¿Ha sentido dolor en el pecho alguna vez durante o después del ejercicio? ................ ❑ ❑

¿Se cansa más deprisa que sus amigos durante el ejercicio?..................................... ❑ ❑

¿Ha tenido alguna vez la presión sanguínea alta? ..................................................... ❑ ❑

¿Le han dicho alguna vez que tiene un murmullo en el corazón? .............................. ❑ ❑

¿Ha sentido alguna vez que se le aceleraba el corazón o que éste sesaltaba algún latido?................................................................................................ ❑ ❑

¿Ha muerto alguien en su familia por problemas de corazón o de muerte súbita antes de los 50 años? .................................................................................... ❑ ❑

5. ¿Sufre problemas en la piel (picores, erupciones, acné)? ........................................... ❑ ❑

6. ¿Ha sufrido daños alguna vez en la cabeza?.............................................................. ❑ ❑

¿Ha caído alguna vez sin sentido o inconsciente?...................................................... ❑ ❑

¿Ha sufrido alguna vez un ataque?........................................................................... ❑ ❑

¿Ha sentido alguna vez un pinchazo, quemazón o un pinzamiento en un nervio?...... ❑ ❑

7. ¿Ha sentido alguna vez calor o calambres en los músculos? ..................................... ❑ ❑

8. ¿Tienes problemas para respirar o tose durante o después de la actividad? .............. ❑ ❑

9. ¿Lleva algún accesorio especial (almohadillas, corrector dental, collarín, protector bucal, protector ocular, etc? ...................................................................... ❑ ❑

10. ¿Ha tenido problemas alguna vez con los ojos o la visión?......................................... ❑ ❑

¿Lleva gafas o lentes de contacto o progresivas? ...................................................... ❑ ❑

11. ¿Alguna vez ha sufrido un esguince-torcedura, una dislocación o fractura o se le ha hinchado repetidamente o ha tenido algunas otras lesión en huesos o articulaciones?................................................................... ❑ ❑

❑ Cabeza ❑ Hombros ❑ Muslos ❑ Cuello ❑ Codos ❑ Rodillas ❑ Pecho❑ Antebrazos ❑ Espinilla/corva ❑ Espalda ❑ Muñecas ❑ Tobillos ❑ Caderas ❑ Pies

12. ¿Ha tenido algún otro problema médico? ................................................................... ❑ ❑

13. ¿Ha tenido algún problema médico o lesión desde el último chequeo? ............... ❑ ❑

14. ¿Cuándo se vacunó por última vez contra el tétanos? _______________________________ ¿Cuándo se inmunizó por última vez contra el sarampión?________________________

15. ¿Cuándo tuvo su primer período menstrual? _______________________________________ ¿Cuándo tuvo su último período menstrual? _____________________________________ ¿Cuál fue el mayor lapso entre periodos el año pasado? ..........................................

(continúa)

Parte V 135-215 18/4/02 14:40 Página 171

Deber 7: supervisar la actividadde cerca

• inmediatamente accesible para la actividad ylisto para inspeccionar todo el programa siste-máticamente;

• alerta a situaciones que puedan resultar peli-grosas para los jugadores y para tomar medidasa fin de protegerles; y

• listo para reaccionar de inmediato y apropiada-mente a las emergencias.

La supervisión específica consiste en la inspec-ción directa en el lugar inmediato a una actividady está más orientada a la acción. Tiene que pro-porcionar supervisión específica cuando enseñanuevas técnicas y seguir con ella hasta que losatletas comprenden las exigencias de la actividad,los riesgos implicados y su propia capacidad paradesenvolverse a la luz de estos riesgos. La supervi-sión específica también es aconsejable cuandoobserve que los jugadores están violando las nor-mas o se produce un cambio en la condición de losmismos.

Como norma general, cuanto más peligrosa seala actividad más específica será la supervisión re-querida. Esto sugiere que hará falta una supervi-sión más específica con los deportistas más jóve-nes y menos experimentados.

Como parte de sus deberes de vigilancia, se es-pera que anticipe situaciones potencialmente peli-grosas y que esté en posición de ayudar a impedirque ocurran. Ello requiere que conozca bien sudeporte, en especial las normas destinadas a faci-litar la seguridad de los atletas.

El entrenador de éxito172

Historial médico (continúa)

Explique las respuestas afirmativas:

Por la presente declaro que, hasta donde sé, mis respuestas a las preguntas anteriores son correctas.

Fecha ______________________

Firma del atleta ___________________

Firma del padre/tutor __________________

La entrenadora de baloncesto en el Institu-to, Sue Emmerling, se hallaba en una sesiónde prácticas trabajando en ejercicios de veloci-dad cuando un estudiante asistente hizo queacudiera a las oficinas por una llamada telefó-nica importante. El grupo siguió con los entre-namientos, pero se volvió temerario y el ejer-cicio degeneró en una pelea amistosa. Dosjugadoras chocaron; una se fracturó la mandí-bula y se le rompieron varios dientes. La entre-nadora Sue fue demandada y la encontraronculpable de negligencia por no cumplir con sudeber de supervisar al grupo adecuadamente.

Comprenda sus deberes. Sus deberes de vigi-lancia requerirán una supervisión general enalgunos momentos y una supervisión más concre-ta en otros. La supervisión general consiste enestar en la zona de la actividad para poder ver y oírlo que está sucediendo. La supervisión general serequiere en todas las zonas de preparación, comoen los vestuarios y en las instalaciones de juegoantes y después de los entrenamientos. Se esperaque esté:

Parte V 135-215 18/4/02 14:40 Página 172

Gestión del riesgo 173

Tabla 15.1 Lista de Condiciones Incapacitadoras de la Academia Norteamericana de Pediatría

Contacto Sin contacto

Contacto/ Contacto Vigoroso Moderadamente No vigoroso

colisión limitado/colisión vigoroso

Inestabilidad atlantoaxial No No Sí* Sí Sí

* Natación (ni mariposa, ni braza

ni saltos de inicio).

Enfermedad aguda * * * * *

* Requiere evaluación individual (p. ej.,

contagio a los demás, riesgo de que

empeore la enfermedad).

Cardiovascular

Miocarditis No No No No No

Hipertensión

Leve Sí Sí Sí Sí Sí

Moderada * * * * *

Grave * * * * *

Enfermedad cardíaca congénita ✟ ✟ ✟ ✟ ✟

* Requiere asesoramiento individual

✟ Los pacientes con afecciones leves

pueden permitirse un abanico de actividades

físicas completo; los pacientes con

afecciones moderadas o graves o en

postoperatorio han de ser evaluados por

un médico.

Ojos

Ausencia o pérdida de función en un ojo * * * * *

Desprendimiento de retina ✟ ✟ ✟ ✟ ✟

* La Disponibilidad de la Sociedad

Norteamericana para el Examen de

Materiales ha concluido que los protectores

Oculares pueden permitir a los competidores (Continúa)

que participen en la mayoría de deportes,

pero esto debe valorarse en términos

individuales.

✟ Consulte al oftalmólogo.

Hernia inguinal Sí Sí Sí Sí Sí

Riñón (ausencia de uno) No Sí Sí Sí Sí

Hígado (dilatado) No No Sí Sí Sí

Trastornos músculoesqueléticos

neurológicos * * * * *

Historial de trauma grave en la cabeza * * Sí Sí Sí

o en la columna, repetidas conmociones

cerebrales o craneotomía.

Desorden convulsivo

Bien controlado Sí Sí Sí Sí Sí

Deficientemente controlado No No Sí Sí Sí✟✟

* Requiere evaluación personal

✟ Ni natación ni levantamiento de pesas

✟ Ni tiro al blanco con arco ni con rifle (continúa)

Parte V 135-215 18/4/02 14:40 Página 173

El fallo en la adecuada supervisión es una delas fuentes más comunes de litigios en el deporte.No puede tomarse esta obligación legal a la ligera,aunque tampoco se espera que inspeccione perso-nalmente cualquier acción o que garantice laseguridad de los deportistas. En un juicio, el tri-bunal considerará la actividad, el tipo de supervi-sión realizada, y la ubicación y la competencia delentrenador para determinar la negligencia. Re-cuerde que se espera que el grado de supervisiónsea proporcional al riesgo de lesión que se conoceo que se puede anticipar razonablemente.

Cumpliendo con su deber

1. Proporcione siempre supervisión general entodas las instalaciones y zonas de juego que sugrupo esté utilizando.

2. Proporciones supervisión específica cuando en-señe nuevas técnicas y cuando aumente el ries-go de lesión.

3. Conozca su deporte tan bien que pueda antici-par situaciones potencialmente peligrosas y po-nerse en situación, para impedir que ocurran.

4. Utilice carteles, rótulos y señales para comple-mentar la supervisión, no para reemplazarla.

5. No perdone el comportamiento temerario o de-masiado agresivo que amenace la seguridad delatleta.

El entrenador de éxito174

Tabla 15.1 (Continúa)

Contacto Sin contacto

Contacto/ Contacto Vigoroso Moderadamente No vigoroso

colisión limitado/colisión vigoroso

Ovarios (ausencia de uno) Sí Sí Sí Sí Sí

Insuficiencia pulmonar * * * * *

Asma Sí Sí Sí Sí Sí

* Se le puede permitir que compita si

si la oxigenación sigue siendo satisfactoria

durante una prueba de estrés gradual

Anemia de células falciformes Sí Sí Sí Sí Sí

Piel (furúnculo, herpes, impétigo, * * Sí Sí Sí

Costras).

*Ni gimnasia con colchoneta, ni

artes marciales, lucha libre o deportes de

contacto hasta que desaparezca el contagio.

Bazo (dilatado) No No No Sí Sí

Testículos (ausente o inmovilizado) Sí* Sí* Sí Sí Sí

* Ciertos deportes pueden requerir

una copa protectora.

Parte V 135-215 18/4/02 14:40 Página 174

Deber 8: advertir de riesgos inherentes 2. Utilice anuncios escritos, folletos, vídeos y reite-radas advertencias para asegurarse de que losatletas comprenden los riesgos y son conscien-tes de ellos.

Deber 9: proporcionar auxiliosde emergencia apropiados

Gestión del riesgo 175

Jill Donovan, jugador de hockey hierba, sedesmayó durante un entrenamiento un díacaluroso, tórrido. El entrenador Ellis no consi-guió reconocer los síntomas comunes de unainsolación grave y, por tanto, en vez de buscarasistencia médica inmediata, dio instruccionesa Jill para que se sentase a la sombra de unárbol mientras continuaban los entrenamien-tos. Cuando Jill entró en estado de choque otromiembro del grupo urgió al entrenador Ellispara que buscase ayuda, pero éste hizo oídossordos a la súplica. A la mañana siguiente, Jillmurió: el entrenador Ellis fue imputado denegligencia en el juicio que siguió por no sumi-nistrar auxilios de emergencia apropiados.

Comprendiendo su deber. Tiene el deberde proporcionar o garantizar asistencia médica alos atletas lesionados a los que entrena. Si la asis-tencia médica no se halla disponible de formainmediata, tiene la obligación de proporcionar pri-meros auxilios apropiados. Todos los entrena-dores deberían completar un curso general de pri-meros auxilios como el que ofrece la PCEE.

Para cumplir con su deber de proporcionarasistencia médica tiene que elaborar una planifica-ción de emergencia por escrito de fácil acceso. Enla página 177, aporto un ejemplo de un programasemejante, el cual ha de incluir lo que se hace deinmediato, quién se pone en contacto con la ayudamédica de emergencia y cómo transportar a unatleta lesionado, quién se pone en contacto con lospadres y las autoridades del colegio y cómo llevar acabo un informe sobre la lesión. Conozca este plany sígalo cuando se produzca una emergencia.

Siempre que sea posible, transfiera el riesgoasociado con las emergencias a personas máscualificadas. Tenga a un médico del grupo presen-te siempre que sea posible y contrate a un prepa-rador físico si puede permitírselo. Cuando se pro-duzca una lesión, proporcione únicamente los pri-meros auxilios para los que esté cualificado y lue-go, inmediatamente, consiga asistencia médica.No haga ni más ni menos que eso.

Bill Edgar, un chaval de 16 años, recibióuna compensación de 1,8 millones de dólarestras sufrir una parálisis permanente en béis-bol. Trató de anotar lanzándose de cabezahacia el catcher. El entrenador, uno de losacusados en el pleito, fue hallado negligentepor no advertir que esta maniobra podía oca-sionar lesiones graves.

Comprenda sus deberes. Es usted respon-sable de suministrar instrucciones relativas a laseguridad en el deporte. Por ejemplo, se esperaque enseñe a los atletas cómo reaccionar en situa-ciones potencialmente peligrosas. Cuando un chi-co de 10 años se lesionó jugando al fútbol porquechocó con otro jugador, yendo ambos en busca deun balón suelto, el tribunal falló que el entrenadorincurrió en negligencia porque no enseñó lo quepodía ocurrir en esta situación previsible y poten-cialmente peligrosa.

Aunque no pueda proteger a los atletas detodos los riesgos en el deporte, ellos deben saber,comprender y apreciar los riesgos inherentes aldeporte y ser capaces de asumirlos. No queda cla-ro cuánta comprensión se requiere, pero pareceser que una advertencia quizá no sea suficiente.Sus advertencias han de ser exhaustivas, claras yreiteradas.

Entre las formas aceptadas de advertir a losdeportistas de los riesgos inherentes al deporte seincluyen éstas:

• Colocar señales que describan los riesgos ycómo ejecutar adecuadamente las técnicasdeportivas.

• Reunión con el grupo para explicar los riesgos,seguida de repetidas advertencias en los entre-namientos y las competiciones.

• Incluir el tema de los riesgos en el cuaderno deanotaciones del grupo y en los programas deorientación de los padres.

• Emplear acuerdos de participación, suscritospor los padres y los atletas, para explicar losriesgos en términos específicos (consulte el for-mulario de muestra de la página 176).

• Mostrar películas o cintas de vídeo que ilustrenlos riesgos.

Cumpliendo con su deber

1. Advierta a los atletas de los riesgos inherentesal deporte para que los conozcan, los compren-dan y los aprecien.

Parte V 135-215 18/4/02 14:40 Página 175

Explicación de los riesgos inherentes al fútbol y acuerdo de participaciónNota: El atleta y ambos padres o los tutores legales (si existen) deben firmar este formulario antes de

que ningún atleta participe en prácticas interescolásticas deportivas o partidos. Si el padre o tutor hafallecido, tenga la amabilidad de indicarlo en el renglón apropiado.

El fútbol es un emocionante deporte que suele implicar fuertes contactos con el suelo o con otros juga-dores. También es frecuente practicar este deporte al sol, en estaciones húmedas. Debido a estas condi-ciones inherentes al deporte, la práctica del fútbol expone a un deportista a muchos riesgos de lesión:entre las que se incluyen, sin limitarse a ellas, la muerte; la parálisis debida a daños graves en el cuello oen la espalda; lesiones cerebrales; daños en los órganos internos; lesiones graves en los huesos, los liga-mentos, las articulaciones y los tendones; y deterioro general de la salud. Tales lesiones pueden acarrearno sólo una pérdida temporal de las funciones, sino igualmente un daño grave en las facultades físicas,psíquicas y sociales, incluyendo la capacidad de ganarse la vida.

En un esfuerzo por conseguir que el deporte del fútbol sea lo más seguro posible, el personal técnicoinstruirá a los jugadores sobre las reglas del fútbol y la mecánica correcta de las habilidades. Es vital quelos atletas sigan las instrucciones del entrenador sobre las técnicas, las normas de entrenamiento y lapolítica del grupo para reducir la posibilidad de lesiones graves. Las normas y la política del grupo apare-cen enumeradas en el cuaderno de anotaciones del grupo que cada atleta recibe en la reunión de pretem-porada.

Hemos leído la información previa concerniente a los riesgos de jugar al fútbol. Comprendemos y asu-mimos todos los riesgos asociados con los ejercicios, los entrenamientos y la participación en dicho depor-te. Convenimos en no emprender acciones legales, reclamaciones o demandas por responsabilidad penalcontra el Instituto de Enseñanza _____________________________________________________ y sus empleados,representantes, entrenadores, voluntarios y agentes, relativas a la participación en cualquier actividadcon el grupo de fútbol del colegio, cuyo nombre es ________________________________________________.

Al firmar este formulario, asumimos los riesgos inherentes al fútbol y renunciamos a cualquier acciónlegal futura por parte de nuestros herederos, legatarios, albaceas, gerentes, apoderados, miembros de lafamilia o nosotros mismos.

Fecha: ___________________________________________________________________________________________Firma de la madre (o tutor legal): __________________________________________________________________Firma del padre (o tutor legal): ____________________________________________________________________

El entrenador de éxito176

Cumpliendo con su deber.

1. Proteja al atleta lesionado de daños ulteriores.2. Proporcione primeros auxilios adecuados.3. Trate de mantener o reanimar empleando RCP

cuando sea necesario.4. Proporcione alivio y confort al atleta.5. Inicie la planificación de emergencia y transfiera

la responsabilidad del tratamiento al personalmédico cualificado.

Otras obligacionesAcaba de repasar las nueve obligaciones másimportantes de los entrenadores que le ayudarána gestionar el riesgo de lesión de sus atletas y suspropias responsabilidades legales. Hay varias obli-

gaciones adicionales que también merecen suatención.

Mantenga sus expedientes en orden

Puede reducir el riesgo de perder un pleito si susexpedientes están en orden. Uno de los más im-portantes es el de las lesiones (hay un ejemplo deformulario en las páginas 178-179). Este formula-rio debería completarse después de cualquier le-sión importante, es decir, cualquier lesión puedeprovocar que pierda como mínimo una práctica.

Los expedientes que le aconsejo mantener enorden, en referencia a sus nueve obligaciones le-gales, son los siguientes:

• evaluaciones temporales y periódicas de los ju-gadores.

• programas de la temporada y de las prácticas.

Parte V 135-215 18/4/02 14:40 Página 176

Planificación de emergencia para hockey sobre hierba

Acciones inmediatas:

1. La entrenadora principal, permanecerá con la deportista y la ayudará a mantener la calma. Mantendrá,igualmente, al personal no médico lejos de la zona.

2. No mover a la atleta lesionada hasta que la posibilidad de un daño grave (especialmente en la cabeza, elcuello o la espalda) sea descartado. Si la entrenadora principal decide que resulta seguro mover a ladeportista, será trasladada sólo cuando todas las lesiones hayan sido estabilizadas. Se utilizarán pro-cedimientos adscritos a la instrucción de primeros auxilios.

3. La entrenadora principal proporcionará primeros auxilios hasta que llegue la asistencia médica.4. La entrenadora auxiliar, hará venir a la enfermera del colegio o contactará con el Servicio de Urgencias

Médicas (061) inmediatamente.

Si se activa el (061):

1. El número de teléfono del Servicio de Urgencias Médicas es el 061. El teléfono de la oficina de educaciónfísica permanecerá accesible todo el tiempo.

2. La entrenadora auxiliar suministrará la información siguiente al empleado de la SUM:2.1. Su nombre, su puesto y el nombre del colegio.2.2. El nombre y la edad de la atleta, y la lesión que se sospecha.2.3. Las señas del campo y las direcciones para acceder al mismo.2.4. Cualquier información adicional requerida.

Importante: No cuelgue el teléfono hasta que el empleado del SUM no haya colgado.3. La entrenadora auxiliar se dirigirá entonces a la entrenada del colegio y conducirá al personal médico

hasta el campo.4. La directora del alumnado, sacará la tarjeta de emergencia de la deportista, la cual incluye los números

de teléfono de los padres e información importante del historial médico. Anotará, asimismo, los nom-bres de los adultos que han sido testigos de la lesión para el formulario en el que se da parte de lalesión.

5. La entrenadora principal se pondrá en contacto con lo padres tan pronto como el personal médico hayaexaminado a la atleta y la haya preparado para que sea trasladada a un centro médico. La deportistaserá trasladada al centro médico únicamente en un vehículo del SUM. No se emplearán vehículos delcolegio o personales.

6. La entrenadora principal informará entonces al director deportivo sobre la puesta en marcha la planifi-cación de emergencia.

En cualquier caso de lesión:

1. La entrenadora principal rellenará el informe sobre la lesión. Los nombres de los testigos adultos fue-ron recogidos previamente por la directora. Esta información será incluida en el informe.

2. Copias archivadas del informe de la lesión para el director deportivo, el director y la enfermera del cole-gio. Guarde una copia archivada con el expediente del grupo y otra como registro personal.

3. La entrenadora principal acompañará al personal médico para determinar cualquier labor que tengaque realizar en el proceso de recuperación y rehabilitación.

Números de teléfono importantes:

Empleado del (SEM): 061Cuerpo de bomberos: 062Departamento de policía: 091Director: 93 1234567Director deportivo: 93 1234567

Gestión del riesgo 177

Parte V 135-215 18/4/02 14:40 Página 177

Formulario para informar de la lesión

Fecha del informe _____________________1. Nombre ___________________________________ Señas domicilio ______________________________________2. Organización ___________________ Sexo M F Edad______ Deporte_________________________3. Hora del accidente: Hora __________ ___________ _____________ Fecha: _____________________4. Lugar del accidente: __________________________________________________________________________5. Naturaleza de la lesión: (examinar)

Abrasión ❑ Conmoción cerebral ❑ Punción ❑ descripción del accidente

Amputación ❑ Corte ❑ Quemadura ❑

Asfixia ❑ Dislocación ❑ Arañazos ❑

Mordedura ❑ Fractura ❑ Electrocución ❑

Contusión ❑ Laceración ❑ Torcedura ❑

Ampolla ❑ Envenenamiento ❑ Otros ❑

(especificar)

Parte del cuerpo lesionada: (examinar)

Abdomen ❑ Ojo ❑ Pierna ❑

Tobillo ❑ Cara ❑ Boca ❑

Brazo ❑ Dedo ❑ Nariz ❑

Espalda ❑ Pie ❑ Cuero cabelludo ❑

Pecho ❑ Mano ❑ Diente ❑

Oreja ❑ Cabeza ❑ Muñeca ❑

Codo ❑ Rodilla ❑ Otros ❑

¿Qué objeto o sustancia fue la causa de la lesión?_____________________________________________________

¿Cómo entró en contacto con el atleta la causa de la lesión? ___________________________________________

6. ¿Llevaba puesto equipamiento deportivo? Sí ❑ No ❑ Tipo de equipamiento ____________________

7. Grado de la lesión: Muerte ❑ Daño permanente ❑ Incapacidad temporal ❑ No incapacitado ❑

8. Entrenador encargado cuando ocurrió el accidente (nombre) ________________________________________

Presente en la escena del accidente: No ❑ Sí ❑

9. Acciones inmediatas emprendidas:

¿Medidas de primeros auxilios tomadas? Por (nombre) ________________________________________________

Enviado al médico Por (nombre) ______________________________________________________________________

¿Cómo fue trasladado? ______________________________________________________________________________

Nombre del médico __________________________________________________________________________________

10. Enviado al hospital Por (nombre) _________________________________________________________________

¿Cómo fue transportado? ____________________________________________________________________________

Nombre del hospital ______________________________________________________________________

El entrenador de éxito178

Parte V 135-215 18/4/02 14:40 Página 178

Formulario para informar de la lesión (continúa)

11. ¿Fueron notificados los padres u otras personas? No ❑ Sí ❑ ¿Cuándo? _____________________________¿Cómo? ________________________ Nombre de la persona notificada ____________________________________¿Por quién? (anotar nombre) _________________________________________________________________________

12. Período de restricción de la actividad ___________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

13. Acciones correctivas emprendidas o recomendadas para prevenir incidentes futuros ___________________________________________________________________________________________________________________

14. Testigos: 1. Nombre ____________________________ Señas ________________________________________

Observaciones:

Firmado: (Director del deporte juvenil) ___________________________ (Entrenador) _______________________

Gestión del riesgo 179

• Calendario de la temporada.• Autorizaciones de exámenes médicos.• Planificación de emergencia.• Acuerdos de participación del jugador.• Registros de elegibilidad.• Informes de lesiones.• Otros catálogos de seguridad.

Proporcionar transporte seguro

La mejor manera de transportar a los atletas,en términos de consecuencias penales, es median-te transportes públicos. Les transfiere así la res-ponsabilidad a ellos y a menudo son los que ofre-cen un viaje más seguro y conveniente.

La siguiente mejor opción es utilizar un vehícu-lo que pertenezca al colegio o a una agencia para lacual usted entrena. Asegúrese de que quien con-duzca el vehículo tiene la licencia apropiada si serequiere una calificación especial.

La última opción deseable es conducir su pro-pio automóvil. Si transporta a los deportistas ensu coche, cerciórese de tener la licencia y el seguroadecuados y que el vehículo se encuentra en per-fecto estado. Algunas pólizas de seguros invalidanla sección de la responsabilidad personal si el con-ductor es indemnizado por transportar a otros. Sisu colegio o agencia patrocinadora le pide queconduzca su coche, averigüe si le proporciona al-guna cobertura de seguro.

Siga el procedimiento correcto

Se espera de usted que proteja los derechosconstitucionales de los atletas, entre los que seincluyen:

• El derecho a un trato justo y a no estar someti-do a normas arbitrarias o caprichosas.

• El derecho a la libre expresión (es decir, que nopuede imponer requisitos irracionales relativosa la vestimenta o al estilo de peinado, por ejem-plo).

• El derecho a no ser discriminado debido a laraza, el sexo o la religión.

Estos derechos complementan y afirman laCarta de Derechos de los deportistas que se dio aconocer en la página 6.

Curso del proceso justo. Muchas aso-ciaciones estatales y otras organizaciones deporti-vas han impuesto requisitos específicos en cuantoal proceso que debe seguir para satisfacer los de-rechos de los atletas a un proceso justo. Consulteal director deportivo los requisitos específicos quele atañen. Estos procesos suelen constar de lostres pasos siguientes:

1. Proporcionar a los atletas informes sobre cargoso faltas y el castigo a imponer.

2. Permitir a los deportistas argumentar su ver-sión de los hechos.

Parte V 135-215 18/4/02 14:40 Página 179

3. Suministrar un registro por escrito del veredicto.

En casos menores, estos requisitos puedensatisfacerse diciendo a los atletas qué normas hanviolado y qué castigo será impuesto, y haciendouna pausa entonces para permitirles responder.En el caso de faltas mayores, quizá tenga que pro-porcionar un informe escrito sobre la violación y elcastigo, dirigir una vista formal, y continuar conun informe escrito de las recomendaciones a par-tir de esa vista. Uno de los problemas más fre-cuentes que padecen los entrenadores es quereaccionan demasiado deprisa, sin dar a los atle-tas la oportunidad de responder hasta que ha sidoimpuesto un castigo. Puede evitar la mayoría delos problemas con el procedimiento a seguir cer-ciorándose de dar a los deportistas la posibilidadde manifestar su versión de los hechos.

Formación apropiada de los entrenadores

A estas alturas, resulta obvio que los entrena-dores tienen la responsabilidad legal de haberrecibido la formación idónea para cumplir consus obligaciones. Cuando un entrenador no harecibido formación, el riesgo de lesión para losdeportistas y de pleito para el entrenador y laagencia que lo patrocina aumenta enormemente.Los tribunales insisten en que ya no es posibleaceptar que se ponga a una persona sin la debidapreparación en el puesto de entrenador parasupervisar a los atletas.

Como primer entrenador usted también es res-ponsable, junto con la agencia que le patrocina, decertificar que los asistentes están cualificados. Siemplea a auxiliares sin instrucción, debe propor-cionar una supervisión directa y estrecha hastaque demuestren su competencia.

Según va adquiriendo reconocimiento la profe-sión de entrenador, la instrucción obligada y lacertificación se están aproximando rápidamente ala realidad. Aunque la certificación no es unagarantía de competencia, equivale a un gran pasoen la dirección correcta. Y aunque la certificaciónno garantiza la protección contra las demandas dejuicio, ayudará a defenderse contra las mismas.

Renuncias y acuerdos de participación

Con el incremento de los litigios en el deporte,muchas agencias de patrocinio han optado poremplear renuncias de responsabilidad para pro-

curarse absolución o indemnización (impunidad)a sí mismas. La renuncia o abandono es un con-trato firmado por quienes participan o sus padresque pretende transferir la responsabilidad de laagencia de patrocinio al participante. Las renun-cias poseen un valor legal limitado por diversasrazones:

• Los menores no pueden suscribir contratos ylos padres no pueden renunciar al derecho delos menores a pleitear.

• Los tribunales rechazan los contratos que elu-den la negligencia.

• Exigir una renuncia previa a la participación enun deporte es considerado comúnmente unaviolación de la política pública.

Aunque las renuncias puedan tener algún va-lor psicológico para disuadir a quienes las han fir-mado de plantear una demanda, no confíe en ellascomo parte de su planificación para administrar elriesgo. Antes bien, tenga en cuenta el uso de losacuerdos de participación, que no son contratossino documentos firmados que establecen que losatletas,

• comprenden los peligros inherentes al deporte• aprecian las consecuencias de los riesgos impli-

cados, entre ellos la posibilidad de lesión ymuerte;

• conocen las reglas y procedimientos del deportey la importancia de seguirlos; y

• conscientes detodo lo anterior, solicitan participar en dicho deporte.

Los acuerdos de participación deben ser total-mente explícitos, las normas a seguir deben serenumeradas y los riesgos posibles deben ser deta-llados claramente. Los acuerdos de participaciónno pueden impedir los pleitos o absolverle de laacusación de negligencia, pero establecen con cla-ridad que usted ha cumplido su deber de advertir.Recuerde, los deportistas no pueden asumir elriesgo de algo que ignoran; los acuerdos de partici-pación detallan los riesgos inherentes al deporte.Un ejemplo de dicho acuerdo (para el fútbol) apa-rece en la página 176.

Seguros

En nuestra judicializada sociedad, los segurosson esenciales para administrar el riesgo. Simple-mente, no debería entrenar sin un seguro de res-ponsabilidad, y las agencias de patrocinio no ten-drían que permitir que nadie entrenase sin él.

El entrenador de éxito180

Parte V 135-215 18/4/02 14:40 Página 180

El mero hecho de saber que posee un seguro nobasta. Tiene que conocer la cobertura específica.Antes de la siguiente temporada, averigüe en laagencia de patrocinio o en el colegio si tiene unacobertura de responsabilidad y en qué consiste.Obtenga respuestas a estas preguntas:

• ¿Qué hechos quedan cubiertos?• ¿Qué propiedad queda cubierta?• ¿Qué actividades cubre?• ¿Qué lugares cubre?• ¿Qué pérdidas están cubiertas?• ¿Qué porción de la pérdida pagará la asegura-

dora?• ¿Qué período de tiempo cubre?• ¿Qué condiciones especiales quedan excluidas?• ¿Qué medidas hay que emprender después de

una pérdida?• ¿Cuál es la cobertura relativa al transporte

cuando se utiliza un vehículo de la agencia? ¿Ysi es su vehículo particular?

Si la agencia de patrocinio no posee coberturade seguros o usted considera que es inadecuada,pague su propio seguro de responsabilidad. Dis-pone al menos de tres opciones para hacerlo:

• Puede añadir esta cobertura a su póliza de pro-pietario por un importe relativamente pequeño.

• Si trabaja para una organización profesional(Federación Deportiva, Asociación de deportepara todos, etc.) puede que ésta ofrezca un se-guro personal por una módica cantidad.

• Puede adquirir una póliza personal de segurospor su cuenta.

La póliza debe proporcionar un mínimo de 1millón de euros de cobertura así como el pago delas costas asociadas con la investigación y ladefensa judiciales. Revise las pólizas cuidadosa-mente, pues difieren ampliamente en la coberturapor las primas cargadas.

Asimismo, algunas pólizas son sólo secunda-rias, lo que significa que proporcionan coberturaúnicamente después de que alguna otra pólizaexistente pague. Mientras que algunas de estaspólizas constituyen suplementos útiles, otras tie-nen tantas exclusiones que su cobertura real que-da muy limitada.

Resumen

1. El mejor modo de evitar los pleitos es adoptarun enfoque positivo y hacer lo que es mejor paralos deportistas.

2. La responsabilidad legal es una obligación odeber hacia otros que puede ser reforzada porlos tribunales. La negligencia es un término le-gal por no cumplir una responsabilidad o deber.

3. La negligencia es concluyente sólo cuado se dancuatro condiciones: usted tiene un deber legal;fracasa en el cumplimiento de un deber legal; seha producido un daño a alguien hacia quienusted tiene una obligación y su fallo en el cum-plimiento del deber ha provocado el daño.

4. Debe servirse de estos cuatro pasos para admi-nistrar el riesgo: identificar el peligro, evaluarlo,seleccionar un enfoque e implementar el enfo-que.

5. Algunos estados tienen leyes de inmunidad pa-ra proteger a los entrenadores voluntarios. Losentrenadores remunerados no suelen estar cu-biertos.

6. Tiene usted nueve deberes legales. Incluyen laobligación de,

6.1 Planificar la actividad apropiadamente.6.2 Proporcionar instrucción adecuada.6.3 Proporcionar un entorno físico seguro.6.4 Suministrar equipamiento adecuado y apro-

piado.6.5 Equiparar a los atletas.6.6 Examinar a los deportistas en busca de le-

siones o incapacidad.6.7 Supervisar la actividad de cerca.6.8 Advertir sobre los riesgos inherentes.6.9 Proporcionar asistencia médica idónea.

7. Puede reducir aún más el riesgo llevando anota-ciones apropiadas, proporcionando un trans-porte seguro, ateniéndose al proceso debido yrecibiendo una formación idónea como entrena-dor.

8. Los acuerdos de participación son preferibles alas denuncias.

9. Asegúrese de tener una póliza de seguros de almenos 1 millón de euros.

Gestión del riesgo 181

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Esta página dejada en blanco al propósito.

La de entrenador es una profesión en la que se ayuda. Un principio cardinalde los profesionales de la ayuda es, “Cuida de ti mismo primero a fin de cuidarde los demás.” Ser entrenador es una profesión de ayuda exigente, y cuantomejor sea su condición mental y física, más capaz será de ayudar a los atletas.Tras el capítulo 15, en el que se le ha animado a cuidar de su grupo, en estecapítulo se le anima a cuidar de sí mismo. Evaluará lo bien que gestiona elestrés, el tiempo y la salud. Luego, le orientaré en la dirección adecuada paramejorar estas habilidades.

Gestión del estrés

Bill Adler es un entrenador de baloncesto de instituto en un gran colegio delextrarradio, y necesita ayuda desesperadamente para hacer frente al estrés. Billha tenido un éxito modesto, si éste se define en virtud de las victorias-derrotasde su grupo. Sus jugadores ganaron el campeonato de liga hace 2 años, pero hatenido una temporada muy descorazonadora este año.

A Bill le encanta el baloncesto, fue un buen jugador en la universidad y hatrabajado duro para conseguir su posición actual. La gente de la comunidad ydel colegio es entusiasta del baloncesto, en algunos casos tal vez demasiado. Billcree que muchos miembros influyentes de la comunidad y de la dirección delcolegio esperan más de él e incluso él, espera mucho más de sí mismo y tampo-co está satisfecho con su rendimiento.

Bill ha tenido problemas con los jugadores. “Es que no parece que les impor-te como a los deportistas de antes,” comenta con enfado a su mujer. Cuanto másles presiona, menos parece que respondan. Trabaja largas horas, pero se sienteinfravalorado por el director deportivo y el del colegio así como por los líderes dela comunidad.

Bill estuvo en gran tensión durante la mayor parte de la última temporada.Se preocupaba constantemente sobre si estaba haciendo jugar a los deportistasadecuados, lo que podía hacer para mejorar su rendimiento y sobre cómo estabala gente juzgando su labor. El estrés ha afectado a su matrimonio y ahora perci-be que su mujer no le apoya tanto como solía hacerlo. “Ella no entiende la pre-sión a la que estoy sometido,” se dice Bill a sí mismo.

Varias horas antes y a lo largo de cada partido, Bill es un caso de baloncestoemocional. Está tenso y agitado, y el ritmo cardíaco y la presión sanguínea sedisparan. Tiene poco aguante. Se irrita fácilmente cuando algo no va bien. Leresulta difícil concentrarse y, en consecuencia, se “atasca” cuando tiene que to-

Capítulo 16

Auto-gestión

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mar importantes decisiones tácticas durante elenfrentamiento. Posteriormente, cuando se calmaun poco, a menudo corrige sus tácticas a posterio-ri, cosa que únicamente sirve para renovar su sen-sación de estrés.

entrenadores llegan a estar tan estresados por es-tas mismas exigencias. ¿Por qué, entonces, expe-rimenta tanto estrés un entrenador y otro ve di-chas exigencias como un desafío? La respuestaradica en cómo los distintos individuos percibensus situaciones.

Bill ve su situación muy negativamente.Percibe que los jugadores no se están relacionan-do bien con él. Percibe que la dirección y la comu-nidad no valoran su difícil labor. Percibe que sumujer no entiende su suerte. Percibe que... Y asísucesivamente. Pero otro entrenador en la mismasituación podría percibirla de modo muy diferente.

La cuestión –la cuestión más importante a en-tender sobre el estrés– es que éste no viene provo-cado por una situación exigente, sino por la mane-ra en que la persona interpreta la situación. En elcaso de Bill, la situación ciertamente juega un pa-pel importante moldeando las percepciones deBill, pero él tiene varias opciones para interpretassus circunstancias. Bill podría ver su situacióncomo normal para un entrenador de baloncesto ydescartar la presión por conseguir más victorias.O podría contemplarla como el desafío de la profe-sión y entenderla positivamente. Lo cierto es quela situación sola no dicta el estrés. Sin embargo, lamayoría de la gente que sufre estrés tiende a con-siderar su situación como la causa, no su inter-pretación de aquélla.

El entrenador de éxito184

Bill ha dejado que su salud se deteriore. Havuelto a fumar después de dejarlo hace 2 años yha ganado casi 20 kilos desde la época de la uni-versidad. No puede encontrar tiempo para hacerejercicio porque siempre está metido en proyectos.Pasa mucho tiempo preocupándose. De hecho, latarea de preocuparse está absorbiendo una partede sus energías tan grande que apenas le sobrapara el resto del trabajo. La verdad sea dicha, Billya no está disfrutando como entrenador, lo queuna vez fuera su pasión.

Bill está claramente estresado y no lo está lle-vando bien. Es un problema endémico de los en-trenadores. En los últimos 10 años, muchos en-trenadores famosos han abandonado debido a lasimplacables presiones que reciben. Dick Vermell,Ara Parseghian, Sonia Hogg, Jack Hartman, JohnMadden, Al McGuire y Earl Weaver son unoscuantos de los entrenadores más notorios que fue-ron incapaces de administrar el estrés y, conse-cuentemente, se vieron obligados a abandonar laprofesión que les entusiasmaba.

Causas del estrés

La vida de Bill contiene muchas fuentes posi-bles de tensión. Pocos cuestionarían las tremen-das exigencias ejercidas sobre los entrenadores ensituaciones similares a la de Bill. Pero no todos los

QUÉ DESASTRE.NUNCA GANAREMOS.

¡ESTO VA A SERDIVERTIDO!

Parte V 135-215 18/4/02 14:40 Página 184

Examinando su tendencia al estrés

Antes de continuar, plantéese los siguientesenunciados para evaluar su propia tendencia aexperimentar estrés y su capacidad para hacerlefrente. Éstas no son pruebas con validez científica;son meramente instrumentos para ayudarle a serconsciente de su tendencia a experimentar estrésy de su capacidad para manejarlo cuando entrene.Registre el número que experimente, pues refleja-rá su lugar en la escala de puntuación de cadaenunciado.

Ahora, sume las puntuaciones de cada escala.Un individuo con una tendencia media a experi-

mentar estrés y capacidad media para hacerlefrente logrará una puntuación de 30 en cadaprueba. Las puntuaciones ideales serían muypequeñas en el Análisis de la tendencia al estrés ymuy alta en el Análisis de la capacidad de saliradelante, lo que indica que es proclive a sentirpoco estrés y que lo maneja bastante bien cuandole afecta. Las puntuaciones muy altas en la ten-dencia al estrés y muy bajas en la capacidad deafrontarlo sugieren la necesidad de examinar elestrés que experimenta como entrenador. Lea lasiguiente sección para averiguar lo que puedehacer para habérselas mejor con el estrés.

Auto-gestión 185

Prueba de la tendencia al estrés de los entrenadores

1 2 3 4 5Rara vez es cierto Ocasionalmente cierto Casi siempre es cierto

1. ______ Me preocupa que mis jugadores no me respeten.

2. ______ No duermo bien debido a los entrenamientos y a los partidos.

3. ______ Cuando entreno, me preocupa cometer errores.

4. ______ Casi siempre me siento cansado durante la temporada.

5. ______ Me cuesta mucho sosegarme después de los partidos.

6. ______ El calendario de la temporada hace que me sienta abrumado.

7. ______ Me preocupa que los jugadores se desmanden.

8. ______ Me preocupa que los padres o los aficionados puedan criticar mi labor.

9. ______ Antes de los partidos estoy muy nervioso.

10. ______ Me pongo frenético cuando entreno.

Prueba de la capacidad de salir adelante de los entrenadores

1 2 3 4 5

Rara vez es cierto Ocasionalmente cierto Casi siempre es cierto

1. ______ Normalmente, encuentro algo positivo que comentar sobre un mal entrenamiento o partido.

2. ______ Mantengo la ira y otras emociones bajo control cuando entreno.

3. ______ Casi nunca me inquietan los asuntos laborales estando en casa.

4. ______ Considero que entrenar resulta un desafío, pero no me abruma.

5. ______ No pierdo los estribos cuando un jugador o un árbitro comete un error.

6. ______ Confío en estar haciendo una labor buena y digna como entrenador.

7. ______ Los colegas, la familia y los amigos me apoyan y están ahí cuando quiero comentar un pro-blema.

8. ______ Entiendo que yo, como entrenador, no puedo controlarlo todo.

9. ______ Cuando algo malo o inesperado sucede durante la temporada, no puedo adaptarme a ellosin grandes dificultades.

10. ______ Me reservo un rato cada día para mí mismo, para hacer ejercicio, relajarme o estar solo.

Parte V 135-215 18/4/02 14:40 Página 185

Gestionar el estrés

Entrenar resultará estresante de vez en cuandopara casi todos los individuos, pero lo que importaes la forma de manejar el estrés. Si no es adminis-trado, el estrés conduce al desgaste, que se produ-ce cuando el entrenador siente que no hay “sali-da,” no hay amortiguadores y no hay sistema deapoyo para el estrés que experimentan reiterada-mente.

Veamos qué puede hacer Bill para afrontar elestrés. Tiene dos opciones. Puede cambiar susituación o puede cambiar sus percepciones: suinterpretación de la situación a la que se opone.

Es ajustado a la razón tratar de cambiar lassituaciones que se percibe como negativas. Billpodría tratar de hablar con los gerentes, con losjugadores y con su esposa para lograr que apre-cien lo que está tratando de hacer. Puede encon-trarse con que ya lo hacen y que ha percibido lasituación incorrectamente. O, si escoge no hablarcon ellos, puede buscarse otro empleo, dejar lacomunidad o, tal vez, dejar a su mujer. Estas ac-ciones podrían eliminar el estrés. En cambio, dadoque Bill tiene tendencia a percibir las cosas demanera negativa, podría encontrarse pronto enotra situación en la que perciba las circunstanciasmuy negativamente y, una vez más, se sienta es-tresado.

Otra opción por la que Bill puede decidirse escambiar la manera en que interpreta su situa-ción. Esto no es fácil de hacer, pero suele resul-tar más sencillo que cambiar la misma. Los psi-cólogos han descubierto que el modo más eficazde gestionar el estrés consiste en modificar lamanera negativa de pensar habitual por unasideas más realistas y constructivas. Hay muchosprogramas de gestión del estrés disponibles paraque la gente como Bill cambie sus planteamien-tos negativos.

Queda fuera del alcance de este libro describirlos muchos, y a veces complejos, métodos paraafrontar el estrés. Mi propósito es ayudarle adeterminar si tiene un problema de estrés y orien-tarle para que encuentre ayuda, en tal caso. Lamedida más importante es reconocer que estápadeciendo estrés y que éste en parte es provoca-do por su manera de interpretar la situación. Unavez que lo ha reconocido, a menudo puede empe-zar a cambiar sus percepciones por sus propiosmedios o gracias a un programa de autoayuda.

He aquí algunos recursos asistenciales paracontrolar el estrés:

• Lea algún libro sobre cómo controlar el estrés yaplíquese las técnicas que describe; también las

puede aplicar a sus atletas. Si usted las domi-na, podrá emplearlas con más eficacia en losdeportistas.

• Corrija sus pensamientos negativos.• Escuche grabaciones y visualice vídeos que

contengan programas de gestión del estrés.• Si el estrés es enorme y cree que no podrá re-

solver el problema solo o que estos programasde autoayuda no sirven, entonces busque con-sejo profesional. No es una pérdida de la digni-dad buscar ayuda cualificada cuando se tieneun problema. Todos podemos ayudarnos unosa otros. Usted puede ayudar a muchos jóvenessiendo un entrenador eficiente, y un psicólogopuede ayudarle a afrontar el estrés. De esa for-ma, podrá continuar ayudando a gente jovenmediante el deporte. Recuerde, tiene que cui-dar de sí mismo para poder cuidar de los de-más.

Libros

Benson, H., y Klíper, M: .Z: (1976). The relaxationresponse. Nueva York: Avon.

Girdano, D. y Everly, G.S. (1986). Controllingstress and tensión. Englewood Cliffs, NJ: Pren-tice-Hall.

Jacobson, E. (1976). You must relax. (5ª edic.).Nueva York: McGraw-Hill.

McGuigan, F.J. (1981). A guide to stress and ten-són control. San Diego, CA: U.S. InternationalUniversity Institute for Stress Management.

Morgan, W.P., y Goldston, S.E. (1987). Exerciseand mental health. Washington: Hemisphere.

Pelletier, K. (1977). Mind as healer, mind as slayer.Nueva York: Dell.

Payne, R. A. (1999). Técnicas de relajación. Barce-lona: Editorial Paidotribo

Perreaut - Pierre, E. (2000). Sofrología y éxitodeportivo. Barcelona: Editorial Paidotribo

Selye, H. (1975). Stress withour distress. NuevaYork: New American Library.

Selye, H. (1978). The stress of life. Nueva York:McGraw-Hill.

Medios audiovisuales

Keeping cool: How to deal with stress. Mount Kis-co, NY: The Center for the Humanities.

Stress: The time bomb within. Mount Kisco, NY:The Center for the Humanities.

The stress mess. Pasadena, CA: Barr Films.

El entrenador de éxito186

Parte V 135-215 18/4/02 14:40 Página 186

Otras directrices para manejar el estrés

• Escuche las críticas constructivas a modo defeedback, pero no permita que los “aguafiestas”le incordien.

• Cuando surja un problema, afróntelo rápida-mente en vez de dejar que se convierta en unafuente de preocupación constante.

• No se deje llevar por el pánico y saque de quiciolas circunstancias.

• Planifique “días de asueto” periódicos cuandousted y el grupo terminen con el ejercicio ruti-nario normal.

• Aprenda a reírse y a no tomarse su labor tan enserio.

• Súmese a las sesiones de relajación con los ju-gadores.

• Reserve tiempo para sí mismo a diario. Resultasorprendente cómo el disponer de tiempo y es-pacio propios puede llegar a rejuvenecerse.

Gestión del tiempo

Nunca se encontrará con una persona másdeliciosa y solícita que Sandy Gross, una progra-madora de ordenadores de la central local de elec-tricidad en Medford. Sandy también es la entrena-dora de natación del Medford High School y, enverano, en el Medford Swin Club, puestos que haocupado en los últimos 2 años. Sandy está soltera,pero sale regularmente con Rick, con quien haceejercicio a menudo jugando a raqueta o a tenis.

La vida de Sandy es intensa o, sería más preci-so decir, caótica, por el poco tiempo que dedica agestionar las habilidades. Sandy no puede decirque no cuando le piden que eche una mano, lo queda como resultado que tiene más cosas que hacerde las que puede abarcar, aun cuando administra-se bien su tiempo. Además de su trabajo a jornadacompleta y los entrenamientos nocturnos de 4:30a 6:00 p. m., esta semana Sandy dará una charlaen el instituto local juvenil y va a arbitrar un parti-do de voleibol de clubes porque no han podidoencontrar a nadie más.

Como Sandy no enseña en el colegio, las nada-doras y el director deportivo la llaman al trabajocuando surge un problema. La programación deordenadores requiere una intensa concentración yestas llamadas, que se producen con frecuenciadada su deficiente gestión del tiempo, suelen en-torpecer su labor considerablemente. En conse-cuencia, está teniendo problemas para cumplircon los plazos de entrega y la semana pasada sujefe le expresó su preocupación por su rendimien-

to laboral. Sandy espera resolver el problema dedi-cando más horas en vez de poner freno a las lla-madas telefónicas, porque considera que tiene queestar disponible para su grupo. Pero, ¿de dónde vaa sacar tiempo extra?

Sandy está tan ocupada que no dedica tiempoa programar bien sus jornadas. Anoche recibióuna llamada de Rick, quien estaba molesto porqueella le dejó plantado ayer cuando quedaron paracomer. Ella se perdió el almuerzo porque el direc-tor atlético la había llamado para informar de queSandy no había preparado los formularios deregistro para la próxima reunión cuadrangular.Así que ella se precipitó hacia el colegio en su horade comer para ocuparse de ellos. Aunque no dijonada, el director deportivo obviamente estaba des-contento; el registro tardío le había costado 100 $extra al colegio, y a él le había costado su horapara almorzar.

Las sesiones entrenamiento de Sandy nuncahan sido planificadas formalmente. Siguen de cer-ca las sesiones de ejercicios de su antiguo entre-nador colegiado. Trata de conseguir que todas sepongan a nadar y entonces da respuesta a los pro-blemas. Casi nunca imparte sesiones de instruc-ción formales: observa para ver si se producenerrores o espera hasta que una nadadora le pide

Auto-gestión 187

Parte V 135-215 18/4/02 14:40 Página 187

ayuda, y entonces intenta solventar el problema.Este enfoque desorganizado deja a las nadadorasy las auxiliares sin saber qué hacer.

De hecho, Sandy nunca ha asignado a Pat, suasistente, responsabilidades específicas. Pat sabeque Sandy está trabajando demasiado y trata deser útil preguntando en qué puede ayudar. PeroSandy está tan desorganizada que no puede dele-gar trabajo a Pat con eficiencia. En su constanteprecipitación, Sandy no logra ver cómo Pat sesiente más y más aislada por su frustración antela falta de rumbo.

Causas de la gestión deficiente del tiempo

Sandy es una persona inteligente que quieretener éxito. ¿Por qué, entonces, no puede adminis-trar mejor su tiempo? Los expertos han identifica-do cinco causas comunes de gestión deficiente deltiempo:

Confiar en el “Tiempo Mítico.” Se trata de laerrónea creencia en que más tiempo después, porlo que puede prorrogarse el trabajo que hay porhacer. Cuando uno confía en el tiempo mítico, sees proclive a malgastar el tiempo de que se dispo-ne para completar el trabajo.

Infravalorar las exigencias de tiempo.Cree continuamente que puede hacer más de loque es capaz de hacer en realidad, porque esmenos eficiente de lo que cree o tiene menos tiem-po libre que el que reconoce. No se percata de quegran parte de la jornada está dedicada a tareasrutinarias; no consigue esperar lo inesperado. Noprograma las llamadas telefónicas, ni el papeleo,ni las conversaciones con los atletas y los auxilia-res, ni las solicitudes de información, pero todoello forma parte de la rutina diaria de un entrena-dor.

Se acumula la faena. No acierta a completaruna tarea antes de abordar otra. Según pasa deuna tarea a la siguiente se va retrasando más ymás, y no consigue cumplir con sus compromisos.Cuando se desesperan, los remolones empiezan ahacer el trabajo a la ligera, cometiendo errores y,en ocasiones, haciendo que otros pierdan tiempo,dinero y oportunidades.

Saltar de una faena a otra. Salta de unatarea a otra debido a la falta de concentración, aun exceso de fechas límite que cubrir y a un esca-so sentido de la prioridad. Tiene una buena idea,pero la pierde porque no la anota y hay demasia-das cosas en su cabeza para recordarla.

Ignorar la realidad. No acierta a reconocersus limitaciones. Quiere estar en todo; cuando lagente solicita sus servicios se siente halagado yentiende que el compromiso es una oportunidadpara mejorar en lo personal o para ayudar a otros.Ignora, asimismo, la realidad en el hecho de quesu falta de organización afecta adversamente aotros.

Evalúe su capacidad de gestionar el tiempo

Quienes se organizan mal, como Sandy Gross,crean entornos que resultan improductivos e in-gratos, no sólo para sí mismos sino también paralos que traban con ellos. Para determinar lo bienque administra el tiempo, complete el cuestionariode autoevaluacion de este apartado. Puede esti-mar su eficacia en la gestión del tiempo respon-diendo cabalmente a las preguntas de la página189.

El entrenador de éxito188

PUEDO REALIZAR MI PLANIFICACIÓN EN UNA HORA MÁS O MENOS.

PLANIFICA-

CIÓN DE LA

TEMPO-

RADA

Parte V 135-215 18/4/02 14:40 Página 188

Escala de gestión del tiempo

Auto-gestión 189

1. ¿Hasta qué punto planifica su tiempo?1 2 3 4 5Siempre Frecuentemente A veces Rara vez Nunca

2. ¿Hasta qué punto establece prioridades y se atiene a ellas?1 2 3 4 5Siempre Frecuentemente A veces Rara vez Nunca

3. ¿Hasta qué punto pierde el tiempo al teléfono?1 2 3 4 5Nunca Rara vez A veces Frecuentemente Siempre

4. ¿Hasta qué punto pierde el tiempo por visitas innecesarias o conversaciones improductivas?1 2 3 4 5Nunca Rara vez A veces Frecuentemente Siempre

5. ¿Hasta qué punto malgasta el tiempo en reuniones?1 2 3 4 5Nunca Rara vez A veces Frecuentemente Siempre

6. ¿Hasta qué punto pierde el tiempo debido a una tramitación ineficiente del papeleo?1 2 3 4 5Nunca Rara vez A veces Frecuentemente Siempre

7. ¿Hasta qué punto se compromete a demasiadas cosas?1 2 3 4 5Nunca Rara vez A veces Frecuentemente Siempre

8. ¿Hasta qué punto evita las decisiones y lo deja todo para el último momento?1 2 3 4 5Nunca Rara vez A veces Frecuentemente Siempre

9. ¿Hasta qué punto delega trabajo?1 2 3 4 5Siempre Frecuentemente A veces Rara vez Nunca

10. ¿Hasta qué punto salta de una tarea a otra?1 2 3 4 5Nunca Rara vez A veces Frecuentemente Siempre

Sume ahora la puntuación de las diez pregun-tas y compare con la escala de la página 190.Emplee la comparación como una guía para deter-minar la necesidad de desarrollar su capacidad degestionar aún más el tiempo.

Si la puntuación es alta en su capacidad de or-ganizarse, hay que darle la enhorabuena. Los en-trenadores que conocen la importancia del tiempo

siempre están buscando la forma de mejorar, aun-que sea mínima. Así pues, siga leyendo. Puede queencuentre una o dos cuestiones de valor, o tal vezse acuerde de algo que ya sabía pero que ha des-cuidado últimamente. Si ha obtenido una puntua-ción menor de lo que esperaba, estudie cuidadosa-mente las siguientes directrices para perfeccio-nar sus habilidades organizativas. También puede

Parte V 135-215 27/6/02 17:22 Página 189

plantearse seguir un Curso de Gestión del Tiem-po, el cual le enseñará mucho más sobre cómo lle-gar a organizarse mejor.

Mejorar su gestión del tiempo

• Reserve tiempo regularmente para planificar.Cualquier esfuerzo por administrar el tiempo esconsecuencia de la planificación.

• Planifique ahora definiendo claramente susmetas para el futuro inmediato. Apunte los pla-nes semanales y revíselos al menos una vez aldía. Tache las tareas que hayan sido completa-das.

• Fije metas realistas. Es bueno apuntar alto, pe-ro no tanto que los objetivos resulten imposiblesde conseguir. Sea realista no sólo en el númerode tareas que asume, sino en el tiempo quededica a cada una de ellas.

• Determine qué tareas deben hacerse y cuántotiempo llevará cada una. Conceda a todas lasdemás una prioridad menor y trabaje en ellassólo cuando las tareas “forzosas” hayan sidocompletadas. Tenga cuidado al conceder prio-ridades a las tareas; la gente tiende a evitarlas que son importantes pero no son de suagrado.

• Fije límites. No asuma más trabajo a menos quesepa que dispondrá de tiempo libre para com-pletar las tareas “forzosas”.

• Desarrolle sistemas para completar el trabajorutinario eficazmente.

• Controle el tiempo hasta donde sea posible. Dis-ponga periodos en los que se encuentra inacce-sible salvo para una emergencia. Informe a losdemás de que este es su tiempo para realizar untrabajo que se le será útil para serles útil.

• Desarrolle la facultad de concentrarse.• Facilite su propia concentración organizando

una zona de trabajo libre de distracciones. A ser

posible, emplee esta zona sólo cuando esté tra-bajando para asociarla con la tarea. Ponga elresto de las tareas fuera de la vista para evitarsentirse tentado a saltar de una a otra.

• Recuerde detalles importantes anotándolos porescrito.

• Fije y mantenga las fechas límite.• Delegue tareas en otros cuando sea posible.

Asegúrese de que saben lo que hay que hacer ycuándo hay que hacerlo. Controle lo que delegapara cerciorarse de que se completa a tiempo.

• Anime a los demás a no hacerle perder el tiem-po. Aprenda a dar por terminado conversacio-nes en persona y por teléfono. A su vez, no hagaperder el tiempo a los demás.

• Aprenda a realizar transiciones entre tareas.• Gestione el estrés; mejorará su utilización del

tiempo: administre el tiempo con eficacia; redu-cirá su estrés.

• Deténgase y rehágase cuando se sienta abru-mado. Reestablezca sus objetivos, desarrolle losplanes y establezca prioridades en el trabajo.

• Encuentre tiempo para sí mismo. Conserve lasalud; le ayudará a administrar el tiempo y elestrés.

Gestión de la salud

Paul Horn vive para ser entrenador de luchalibre; da un significado a su existencia. Entrena a30 o más chavales de entre 10 y 15 años para elGreenville Wrestling Club, una organización afilia-da a USA Wrestling. Pero Paul no concluirá la tem-porada; se está recuperando de un ataque cardía-co que sufrió hace 2 semanas en el almacén deultramarinos donde trabaja.

Paul nunca creyó que pudiera pasarle a él,especialmente a los 41 años. Él no es muy nervio-so, una personalidad Tipo A. De hecho, es un tipotranquilo y le gusta la buena vida... demasiado.Cuando Paul practicaba la lucha libre su peso erade 74 kilos; ahora pesa 110 kilos y mide 1,77 me-tros. una vez que dejó de competir, Paul abandonótodas las actividades y, como siempre había esta-do controlando el peso, empezó a comer todas lascosas de las que se había estado privando duranteaños.

A Paul no sólo le gusta la comida, disfruta conla cerveza. No es nada insólito que se beba un lotede seis en una tarde. Los luchadores ironizansobre su panza cervecera, que emplea con habili-dad cuando lucha informalmente con alguno delos chicos. Pero no lucha a menudo con ellos, pri-mero porque su peso supone un riesgo de lesión

El entrenador de éxito190

Rango Capacidad

de administrar

el tiempo

10 a 15 Sobresaliente

16 a 20 Superior

21 a 25 Buena

26 a 30 Regular

31 a 50 Escasa

Parte V 135-215 27/6/02 17:24 Página 190

para los más chicos más pequeños, y segundoporque está exhausto después de menos de unminuto de ejercicio.

Paul se ha fumado dos paquetes de cigarrillosdiarios durante casi 20 años. Aunque no lo supohasta que sufrió el ataque cardíaco, tenía la pre-sión alta y un colesterol de 275, bien por encimadel máximo de 200 recomendado.

Paul sabía que no se estaba cuidando comodebería, pero como exatleta no creía que un ata-que cardíaco pudiera afectarle. Hacía años que seestaba diciendo a sí mismo que tendría que dejarde fumar y perder algo de peso, pero también legusta su estilo de vida. Ahora el médico le ha di-cho que debe cambiar, que ha tenido suerte de queeste ataque no resultará fatal.

Causas de una gestión deficiente de la salud

No es necesario un título en medicina parahaber anticipado lo que le ocurriría a Paul Horn.Podía verse venir el ataque cardíaco, pero Paul nolo hizo, ni otros mil Paul. La gente cree que no leva a ocurrir a ellos. De los dos millones de defun-ciones en los Estados Unidos en 1988, el 49% porciento fueron debidas a dolencias cardiacas coro-narias –principalmente ataques de corazón, apo-plejía y trastornos relacionados con la hiperten-sión.

Ese millón casi de personas no fueron escogi-das fortuitamente para sufrir una enfermedadcardíaca. Algunas de ellas murieron aún cuandoadministraban su salud bastante bien. Estabanentre los infortunados los que heredan una pro-

pensión a la dolencia cardíaca coronaria. Peromuchas de esas personas no gestionaban bien susalud. De hecho, abusaban de sus cuerpos al nohacer frente a las tres causas principales de do-lencia cardíaca coronaria:

• Fumar.• Presión sanguínea alta.• Exceso de colesterol.

Toda esta “buena” vida incrementó su riesgo deataque cardíaco 5 veces y el de apoplejía 11 vecespor encima de quienes hacen frente a estos tresfactores que afectan a la salud.

Si quisiera aumentar sus posibilidades de seruno de ese millón de defunciones cada año, comahasta tener un sobrepeso considerable, mantén-gase físicamente inactivo, beba gran cantidad dealcohol regularmente y padezca estrés con fre-cuencia. Sus probabilidades de sufrir un ataquecardíaco o apoplejía aumentarán 21 veces porencima de lo normal.

La buena noticia es que no tiene por qué pasar-le a usted. Puede adoptar un estilo de vida saluda-ble, que consista en,

• Ejercicio regular, • ingerir la dieta de alto rendimiento,• mantener un peso moderado,• controlar la presión sanguínea,• no fumar,• beber alcohol con moderación y• gestionar el estrés.

Tal vez crea que las dolencias cardiacas coro-narias sólo han de preocuparle cuando sea mucho

Auto-gestión 191

¡ESTO SÍ QUE ES VIDA!PATATAS FRITAS.

Parte V 135-215 18/4/02 14:40 Página 191

más mayor. En estudios de los EUA sobre lasbajas de la Guerra de Vietnam, el 45% o más delas autopsias revelaron síntomas de la enferme-dad y el 5% sufrieron dolencias cardiacas corona-rias graves. Si tiene más de 20 años y fuma, y tie-ne la presión alta y mucho colesterol –aun cuandono dé síntomas de ello ahora– probablemente estádesarrollando una enfermedad cardíaca corona-ria. Esta dolencia no afecta súbitamente a las per-sonas mayores; es una enfermedad acumulativade su estilo de vida.

Muchos entrenadores gestionan muy bien susalud. Constituyen modelos de estilo de vida salu-dable, no sólo para los atletas sino para la comu-nidad. Es usted digno de aplauso si se encuentraentre estos entrenadores. Pero si no lo está, puedellegar a estarlo aprendiendo a administrarse a símismo. Los entrenadores alegan más abajo diver-sos motivos para adquirir malos hábitos relativosa la salud. Comprender estas razones puedenayudarle a reconocerse y a darse ánimos paraadquirir un estilo de vida más sano.

Motivos de los entrenadores para no administrar bien su salud

“La verdad es que no me di cuenta de lo mal queestaba tratando a mi cuerpo. Ahora que he dejadode fumar, he perdido peso y me estoy ejercitandonormalmente, veo lo bien que puedo sentirme y lomal que me sentía antes.”

“Es el modo en que viven todos los que me rode-an y lo que yo he hecho durante la mayor parte demi vida. No creo que pueda cambiar todos esoshábitos.”

“No he pensado mucho en mi propia condiciónfísica hasta que mi hermano me hizo un comentariosobre mi pérdida de tono muscular. He estado tanocupado asegurándome de que los deportistasestán en forma que me he descuidado a mí mismo.Supongo que, de alguna forma, pensaba que allograr que ellos estuviesen en forma algo se mepegaría. Ridículo, ¿no?”

“El único rato que tengo para entrenar es justoantes o después de los entrenamientos. Pero noquiero hacerlo entonces porque me fastidiaría queel grupo viese lo desentrenado que estoy.”

“Yo he sido un atleta aplicado y tengo un cuerpofuerte. No tengo por qué preocuparme por misalud.”

“Quiero perder peso, dejar el tabaco y parar debeber, pero no me veo cambiando. Supongo que asíes como soy y que así son las cosas.”

Todos estos son motivos por los que los entre-nadores no adoptan estilos de vida activos. Las

razones pueden no ser lo bastante buenas parajustificar que los entrenadores pierdan la salud ose arriesguen a morir, pero son lo bastante fuertescomo para que los entrenadores no adquieranestilos de vida más sanos. Si va usted a dirigir a sugrupo, su estrés y su tiempo, por qué no adminis-tra también su posesión más importante: la salud.La evidencia es inequívoca: el estilo de vida sanono sólo añade años a su vida, sino vida a sus años.Gracias a una mejor gestión de la salud, será ca-paz de entrenar durante más años y tendrá ener-gía para hacerlo con más éxito.

También quiero animarle a que administrebien su salud porque representa un modelo im-portante para los deportistas. Cuando los entre-nadores pierden la condición física, la mala ges-tión de sí mismos sugiere a los atletas que la saludy la condición física sólo son relevantes cuandouno se está entrenando para la competición. Losdeportistas pueden llegar a pensar que cuando elentrenador ya no les obligue a estar en forma, en-tonces también ellos pueden abandonarse y ad-quirir malos hábitos. Por supuesto, éste no es elmensaje que usted quiere expresar; pero si advier-te a los atletas que sigan cuidándose después dehaber completado su participación en los deportesorganizados, recuerde que sus actos hablarán convoz más alta que sus palabras.

Evalúe sus hábitos de salud

Si ha estudiado este manual minuciosamente,ha reflexionado mucho sobre sí mismo y sobrecómo va a entrenar. Quiero que ahora piense en lasalud y se evalúe a sí mismo. Sea sincero. Ponganota a sus hábitos de salud según se comportanormalmente en el formulario de la página 193.

Sume las puntuaciones de cada categoría yanote esas cifras en los tres espacios en blanco“puntuación de la categoría”. Finalmente, mire enlas escalas siguientes y encuentre sus puntuacio-nes. ¿Hay alguna categoría en la que haya sacadouna puntuación especialmente baja? Tal vez seaeste aspecto de la salud el que necesita su aten-ción.

Mejorando la salud

Si el examen de sus hábitos de salud indicaque hay margen para la mejorar, el primer pasoconsiste en decidir si está dispuesto a hacer algoal respecto. ¿Se preocupa lo bastante por sí mismocomo para reducir el consumo excesivo de alco-hol? ¿Posee suficiente autodisciplina para dejar de

El entrenador de éxito192

Parte V 135-215 18/4/02 14:40 Página 192

fumar? ¿Puede ocuparse de sí mismo además desu grupo para vivir más tiempo y mejor? Las pres-cripciones para lograr un estilo de vida más sanoson sencillas. El desafío consiste en aceptar latarea administrativa más difícil de todas: gestio-narse a sí mismo. Haga frente al desafío con éxitosiguiendo estas pautas para mejorar la salud:

1. Tome tres comidas al día a intervalos regulares,ingiriendo no más calorías de las que consumedurante la jornada.

2. Tome un desayuno nutritivo.3. Siga la dieta de alto rendimiento: 20 % de gra-

sas, 15 % de proteínas y 65 % de carbohidratos.

Es especialmente importante que limite la in-gesta de grasas.

4. Realice ejercicios regulares al menos tres vecesa la semana durante 20 ó 30 minutos de vigoro-sa actividad.

5. Duerma 7 u 8 horas cada noche.6. Pierda peso de forma que la grasa corporal no

sea más del 19 % en los hombres y del 25 % enlas mujeres.

7. Deje de fumar. Provoca cáncer y fomenta lasenfermedades cardiacas coronarias.

8. Controle la presión sanguínea, manteniéndolapor debajo de 140/90.

Auto-gestión 193

Evaluación de los hábitos de salud de los entrenadores

1 2 3 4 5No es cierto Rara vez es cierto A veces es cierto A menudo es cierto Muy ciertoEjercicio y condición física1. _______ Realizo normalmente ejercicios calisténicos y estiramientos. 2. _______ Realizo un ejercicio vigoroso durante 20 ó 30 minutos o más al menos tres veces a la semana.3. _______ Rara vez estoy cansado o falto de aliento debido a las actividades normales diarias.4. _______ Trato de dedicar tiempo a la actividad física cada día.5. _______ Normalmente camino, subo escaleras o voy en bicicleta hasta lugares a los que podría ir sin

hacer ejercicio._______ Puntuación de la categoría.

Dieta y control del peso1. _______ Ingiero una dieta equilibrada.2. _______ Suelo escoger alimentos frescos y naturales con pocas calorías.3. _______ La mayor parte de los alimentos que como son nutritivos, no comida basura con mucha azúcar,

grasas y sal.4. _______ Casi nunca ingiero alimentos fritos y grasientos en los restaurantes de comida rápida.5. _______ Estoy dentro de los 5 kilos de margen de mi peso ideal.

_______ Puntuación de la categoría.

Añadidos1. _______ No fumo.2. _______ Rara vez bebo más de 1 ó 2 cl de alcohol al día.3. _______ No suelo tomar medicamentos a menos que el médico diga que es necesario.4. _______ Restrinjo mi ingesta de café, coca-cola y otras fuentes de cafeína.5. _______ No consumo drogas.

_______ Puntuación total.

Puntuación de la categoría Estado de salud puntuación total Estado de salud

25-21 Fantástico 75-63 Robusto20-16 Bueno 62-48 Razonable15 ó menos Mediocre 47 ó menos Agotado

Parte V 135-215 18/4/02 14:40 Página 193

La manera de seguir algunas de estas directri-ces es evidente. Otras quizá requieran mayoresconocimientos, por lo que he enumerado las mejo-res referencias que conozco.

Referencias para un estilo de vida saludable

Carlson, B., y Seiden, O.J. (1988). Healthwalk.Golden, CO: Fulcrum.

Dickman, S.R. (1988). Pathways to wellness.Champaign, IL: Life Enhancement Publications.

Johnson, P.B. (1988). Fitness and you. Phila-delphia: Saunders College Publishing.

Katch, F.I., y McArdle, W.D. (1988). Nutrition,weight control and exercise (3ª edic.). Philadelphia:Leal y Febiger.

Miller, D.K., y Allen, T.E. (1982). Fitness: A life-time commitment (2ª edic.). Minneapolis: Burgess.

Sharkey, B.J. (1997). Health and Fitness. (4ªedic.). Champaign, IL: Human Kinetics.

Wilmore, J.H. (1986) Sensible fitness. Chanm-paign, IL: Leisure Press.

Resumen

Cuando se gestione mejor a sí mismo –el estrés,el tiempo y la salud– administrará mejor al grupoy, por tanto, se convertirá en un Entrenador deÉxito. Revise las siguientes cuestiones adminis-trativas para estimular la memoria:

1. Su percepción, no las exigencias reales, de unasituación es la clave para saber si va a experi-mentar estrés.

2. Puede gestionar el estrés cambiando la situa-ción y su interpretación de ella y utilizando téc-nicas de relajación.

3. Las cinco causas principales de una deficientegestión del tiempo son confiar en un tiempomítico, infravalorar las exigencias de tiempo, laacumulación de tareas, saltar de una faena aotra e ignorar la realidad.

4. Un estilo de vida saludable incluye el ejercicioregular; una dieta apropiada; el control del pe-so, la presión sanguínea y el estrés; una ingestade alcohol limitada y no fumar.

5. Estando sano, no sólo vivirá más tiempo y ten-drá más energía para El entrenador de éxito,sino que supondrá también un buen modelo aseguir para sus atletas.

El entrenador de éxito194

¡NUNCA MÁSVOLVERÉ AABANDONARME DE ESA MANERA!

Parte V 135-215 18/4/02 14:40 Página 194

Desarrollar buenas relaciones laborales con los padres de los atletas es casitan importante como mantenerlas con los atletas mismos. Con un poco de suparte, puede lograr que los padres trabajen con usted y aprecien sus esfuerzos.La clave consiste en informarles sobre su programa y escuchar sus preocupa-ciones. He descubierto que muchos de los problemas tradicionales entre padresy entrenadores pueden evitarse cuando los entrenadores celebran un programade orientación de los padres en la pretemporada. Este programa puede facilitarcierto número de propósitos útiles:

• Permitir que los padres comprendan el objetivo del programa.• Permitir que los padres se familiaricen con usted, la persona responsable de

su hija o de su hijo.• Informar a los padres sobre la naturaleza del deporte y sus riesgos potencia-

les.• Explicar las reglas de grupo, normativas y procedimientos.• Hacer saber a los padres lo que se espera de los deportistas y de ellos.• Permitirle comprender las preocupaciones de los padres.• Establecer líneas claras de comunicación entre usted y los padres.• Obtener ayuda de los padres para organizar las actividades de la temporada.

Descuidar la orientación de los padres resulta tentador para los entrenadoresacaparadores. Puede que usted se sienta incómodo hablando con un grupo deadultos. Y ha firmado para ser entrenador, no para ocuparse de los adultos, ¿noes cierto? Pero, a pesar del apremio de su renuencia, la orientación de los padreses importante y valiosa. Los entrenadores veteranos conocen la importancia deuna comunicación con los padres abierta y honesta, para un programa un pro-grama deportivo de éxito y divertido. En este capítulo se ofrecen ideas para pro-yectar y llevar a cabo el programa de orientación de los padres.

Planificando el programa

¿Cuándo habría que celebrar la reunión? Si ya ha identificado a la mayoría de los atletas, organice la reunión antes de

la temporada. Si no lo ha hecho, celébrela tan pronto como sea posible despuésde la primera sesión de entrenamientos. Escoja un momento en el que la mayo-ría de los padres puedan asistir, e invíteles personalmente por teléfono o porcarta. Puede incluso considerar la idea de hacer que la reunión sea obligatoria

Apéndice A

Un programa de orientaciónpara los padres

Parte V 135-215 27/6/02 17:25 Página 195

El entrenador de éxito196

dada la importancia de la información que va aexponer.

¿Cuánto debería durar la reunión?Dos horas o menos tendrían que ser apropia-

das para cumplir con los objetivos enunciados.

¿Deberían asistir los deportistas a la reunión?

Los entrenadores tienen opiniones encontradasal respecto. Algunos creen que inhibe la comuni-cación entre los padres y el entrenador, mientrasque otros consideran que fomenta la comunica-ción entre los padres, el entrenador y los atletas.Ésta es una decisión a tomar en virtud de su filo-sofía como entrenador.

¿Dónde habría que celebrar la reunión?Escoja un lugar accesible. Asegúrese de que la

sala es idónea para sus propósitos, está bien ilu-minada y dispone de espacio suficiente y asientosconfortables.

¿Cómo habría que conducir lareunión?

Primero, esté bien preparado y organizado.Empiece puntualmente y agilice el programa. Apartir de entrevistas con padres y entrenadores,hemos desarrollado el formato siguiente –quizádesee emplearlo para conducir el programa deorientación de los padres.

Orden del día del programade orientación de los padres

Presentaciones (10 minutos)Preséntese a sí mismo y a cualquier entrenador

auxiliar. Aporte alguna información sobre sí mis-mo –por qué está entrenando, su experiencia de-portiva, qué hace para ganarse la vida– y cuente alos padres lo que le acredita para recibir su con-fianza. Haga que los entrenadores asistentes des-criban sus responsabilidades para ayudar a lospadres a conocer sus cometidos y a sentirse cómo-dos con ellos.

Filosofía del entrenamiento (10 minutos)

Un breve repaso de su filosofía del entrena-miento resultará útil. Quizá quiera releer la Parte Ide este libro para prepararse. Cerciórese de trataral menos los puntos siguientes:

• El valor de su deporte; es decir, cómo esperaque beneficie a los atletas.

• Los métodos que emplea para enseñar las habi-lidades; puede describir un entrenamiento tipo.

• El énfasis que otorga a la victoria, la diversión yel desarrollo físico y psicológico.

• Qué espera de cada deportista; podría comentarcualquiera de las normas de grupo o de las pau-tas que sigue.

Y ASÍ, PADRES... COMO LEDIJE A VINCE LOMBARDI,“GANAR NO LO ES TODO.”

Demostración (25 minutos)

Los padres quizá no sepan mucho todavíasobre su deporte. Para ayudarles a comprenderloy apreciarlo, haga una demostración y expliquelas habilidades, la puntuación y las reglas. Utilicea todo el grupo o emplee a algunos jugadores paraque le ayuden en la demostración. Haga que éstasea sencilla, mostrando cómo se juega y se puntúaen esta disciplina deportiva. Si no puede organizaruna demostración, quizás pueda localizar unabuena película o vídeo. Muchas agencias deporti-vas nacionales tienen recursos que usted podríatomar prestados.

La demostración es un momento oportuno pa-ra hablar sobre el equipamiento en su deporte.Ponga el énfasis en la seguridad cuando se ocupedel equipamiento y las normas, y no se olvide demencionar el papel del árbitro para garantizar laseguridad de los atletas.

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aportado algunos comentarios a cada preguntapara ayudarle a preparar las respuestas. Tenga encuenta que no todas las preguntas son pertinen-tes en todos los deportes.

¿Son necesarios los exámenesmédicos para que los chavalescompitan?

La mayoría de los colegios y organizaciones tie-nen una política al respecto. Si usted no la tiene,debería elaborarla. La mayoría de las organizacio-nes médicas recomiendan un examen al menoscada 2 años. Puede que sean necesarios exámenesmás frecuentes para personas con problemas mé-dicos específicos.

Pida a los padres que le hagan saber cualquierdolencia que puedan tener sus hijos y no figurenen el historial médico (p. ej., un solo riñón, pérdi-da de memoria previa). Explique que su intenciónno es apartar al chico de la actividad, sino garanti-zar una participación segura.

¿Quién decide cuándo está listo unatleta para jugar después de unalesión?

Sería preciso consultar a un médico ante cual-quier lesión grave. El facultativo deberá, entonces,permitir que el deportista vuelva a participar.Como entrenador, le asiste el derecho de retirar alos atletas de la competición si cree que no estánpreparados. Anime a los padres a comentar el pro-greso de la rehabilitación y sus preocupacionescon usted.

¿Qué expectativas hemos de albergarsobre nuestro hijo o hija?

Los entrenadores desempeñan papeles signifi-cativos para ayudar a los padres a cobijar expecta-tivas razonables con respecto a sus hijos. Sonsumamente frecuentes los problemas que resul-tan cuando los entrenadores y los padres tienenexpectativas distintas. Los padres a veces sobrees-timan las facultades de sus hijos y, cuando losatletas no consiguen lo que los padres desearían,éstos puede parecer que culpan a los hijos o alentrenador. El tema del que probablemente habla-rá más con los padres durante la temporada es elde las mutuas expectativas sobre los deportistasrelacionadas con el desarrollo de las habilidades yel tiempo de juego.

Un programa de orientación para los padres 197

Riesgos potenciales (20 minutos)

Cerciórese de que los padres conocen los riesgospotenciales de la práctica de su deporte. A nadie legusta oír hablar de lesiones, pero es su deber infor-mar a los padres de los riesgos inherentes. Ellosdeben tomar decisiones sobre la participación desus hijos estando enterados. Puede considerarlocomo parte de la orientación. Asegúrese, sin em-bargo, de ser explícito sobre los riesgos deportivos.Haga que la charla sea amena contando a los pa-dres qué precauciones toma para minimizar la pro-babilidad de una lesión.

Rasgos específicos de su programa (15 minutos)

Ahora está preparado para describir el progra-ma específico que va a dirigir. He aquí algunosdetalles que los padres querrán conocer. Puedeque se le ocurran otros:

• ¿Cuánto tiempo pasarán con usted sus hijos ohijas?

• ¿Con cuánta frecuencia y cuándo se ejercita elgrupo?

• ¿Cuánto dura la temporada?• ¿Cuántos partidos habrá?• ¿Cómo decide quién juega y quién no?• ¿Con cuánta frecuencia viaja el grupo y quién

paga los gastos?• ¿Qué equipamiento tiene que adquirir cada

deportista?• ¿Dónde hay equipamiento disponible y cuánto

cuesta?• ¿Qué normas ha establecido usted?• ¿Qué normas del colegio, la liga u organizacio-

nes influyen en la participación?• ¿Cómo va a disciplinar a los jugadores?• ¿Cuál es su política sobre los viajes de la familia

durante la temporada?

Otros pormenores concretos de su programapueden ser tratados también en este momento.Quizá quiera hablar sobre la cuestión de las dro-gas, el seguro y los proyectos para recolectar fon-dos, por ejemplo.

Sesión de preguntas y respuestas (20-45 minutos)

Hasta ahora es usted quien ha estado hablan-do principalmente. Deje ahora que los padreshagan algunas preguntas. Sigue una lista concierto número de preguntas importantes. Hemos

Parte V 135-215 18/4/02 14:40 Página 197

El entrenador de éxito198

¿Deberíamos asistir a las sesiones deentrenamiento y a las competiciones?

Haga saber a los padres cuál es su políticasobre el hecho de que contemplen las sesionesprácticas. Ciertamente, en circunstancias norma-les, usted desea que asistan a los partidos. Si poneen cuestión la asistencia de un padre en particu-lar a las competiciones, fije una reunión paracomentar sus preocupaciones. Su objetivo es ayu-dar tanto a los padres como a los atletas a interac-tuar positivamente en las competiciones.

¿Deberíamos hablar con nuestrohijo(a) durante los partidos?

Esta pregunta abre la puerta al tema másamplio del comportamiento de los padres durantelas pruebas competitivas. Considere el desarrollode unas pautas para la conducta de los padres,sugiriendo tal vez que se abstengan de entrenar alos deportistas y de gritar observaciones negativasdesde la línea lateral y que alaben el esfuerzo, noel resultado.

¿Necesita mi hijo alguna comidaespecial previa al partido?

Los atletas deberían ingerir una comida bienequilibrada al menos tres horas antes de la com-petición, evitando los alimentos ricos en grasas(consulte el capítulo 13).

¿Podemos hacer algo en casa parafacilitar el desarrollo físico denuestro hijo o el aprendizaje delas habilidades deportivas?

Tendrá que decidir si desea que los padrescomplementen su labor. Muchos entrenadores seoponen a ello a menos que los padres estén cualifi-cados específicamente, porque pueden enseñarlas habilidades de modo incorrecto y hacer que latarea del entrenador sea más difícil.

¿Qué hacemos cuando nuestro hijopierde? ¿Y cuando gana?

Los padres desempeñan una labor importantea la hora de ayudar a los hijos a interpretar sus

experiencias deportivas. Pueden ayudar a unapersona joven a comprender el significado deganar y perder, la experiencia de la frustración enel aprendizaje y la necesidad de desarrollar auto-confianza, el deseo de triunfar y la autoestima. Lasexperiencias deportivas pueden abrir canales decomunicación entre padres e hijos si los primerosmuestran interés en la participación de sus hijos.Ayude a los padres a comprender las intensasemociones asociadas con el deporte. Algunos cha-vales pueden llorar cuando pierden.

¿Qué expectativas podemos albergarsobre usted?

En parte habrá respondido a esto durante todala tarde, pero quizá quiera resumir lo que lospadres pueden esperar de usted. Recuerde quedurante toda la temporada los padres le estaránobservando, sea directa o indirectamente a travésde sus hijos, y compararán lo que dice con lo quehace realmente.

¿Cómo nos ponemos en contacto conusted si tenemos un problema?

Diga a los padres cómo pueden contactar conusted. Quizá quiera programar reuniones adicio-nales. A algunos entrenadores les gusta celebrarreuniones individuales a mitad de la temporada yluego celebrar un banquete de postemporada parareconocer los logros de todos los jóvenes.

Una última sugerencia

Al final de la temporada, invite a todos lospadres a evaluarle a usted y al programa. Pídalesque resalten cuestiones que han ido bien y reco-mienden qué se puede mejorar. El siguiente for-mulario de evaluación es una herramienta a con-siderar. Dé copias a todos los padres y pídales quelas devuelvan. ¡Sus indicaciones pueden ayudarlea convertirse en un entrenador mejor!

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Un programa de orientación para los padres 199

Formulario de evaluación de los padres para la postemporada

A. Evalúe el grado en el que cree que su hijo(a) ha conseguido lo siguiente (rodee uno con un círcu-lo):

Muchísimo Un poco NadaMi hijo(a) se ha divertido 1 2 3 4 5Mi hijo(a) ha aprendido los fundamentos deportivos 1 2 3 4 5

B. Evalúe el grado en el que cree que su hijo(a) ha cambiado en los siguientes aspectos (rodee unocon un círculo):

Mejoró/ Sin Declinó/ No sémedró cambios disminuyó

Condición física M SC D NSAprende a cooperar M SC D NSAutoconfianza M SC D NSDeseo de continuar practicando este deporte M SC D NSDesarrollo de la autoestima M SC D NSAprendizaje de las habilidades específicas de este deporte M SC D NSCapacidad de liderazgo M SC D NSDeportividad M SC D NSDesarrollo de iniciativas M SC D NSAprender a competir M SC D NS

C. ¿Cómo lo ha hecho el entrenador en las siguientes cuestiones (rodee uno con un círculo):

Excelente Bueno Regular Insuficiente Mediocre No séHa tratado a nuestro hijo(a) con equidad E B R I M NSHa mantenido la victoria en su perspectiva E B R I M NSHa tomado precauciones de seguridad E B R I M NSHa organizado prácticas y partidos E B R I M NSSe ha comunicado con ustedes E B R I M NSHa sido eficiente al enseñar las habilidades E B R I M NSHa alentado a su hijo(a) E B R I M NSHa reconocido a su hijo(a) como un individuo único E B R I M NSHa respetado a su hijo(a) E B R I M NS

D. Tenga la bondad de participarme comentarios adiciones en el espacio en blanco de abajo y en eldorso. Quizá tiene algunas críticas constructivas o elogios que desea compartir.

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Esta página dejada en blanco al propósito.

Organizaciones específicamente deportivas

Los siguientes grupos pueden suministrarle información para el perfeccionamiento de su deporte. Losnombres de las sedes directivas nacionales de los deportes olímpicos aparecen en negrita.

Apéndice B

Federaciones deportivas españolas

ACTIVIDADESSUBACUÁTICASSANTALO 15- 3º 1ª08021, [email protected] http://www.fedas.es

AERONÁUTICACARR. DE LA FORTUNA S/N (EDIF. RACE)28044, [email protected] http://www.sportec.es/www/fae/main.htm

AJEDREZCOSLADA ,10, 4º dcha.28028, [email protected] http://www.feda.org

ATLETISMOAVDA. VALLADOLID, 81 1º28008, MADRID

91.548 24 2391.547 61 [email protected] http://www.sportec.com/rfea

AUTOMOVILISMOC/ ESCULTOR PERESEJO, 68 BIS28023, [email protected] http://www.bme.es/fea/

BÁDMINTONFERRAZ, 16 6º B28008, [email protected] http://www.fesba.com

BALONCESTOAVDA. DE BURGOS, 8-A-9º.EDIF.BRONCE28036, [email protected] http://www.feb.es

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BALONMANOFERRAZ, 1628008, [email protected] http://www.rfebm.com

BEISBOLY SOFTBOLCOSLADA, 10 4º IZDA.28028, [email protected] http://www.rfebeisbolsofbol.com

BILLARALCANTARA, 4828006, [email protected] http://www.rfeb.org

BOLOSFERNANDO EL CATOLICO, 5428015, [email protected]

BOXEOFERRAZ, 1628008, [email protected]

CAZAFRANCOS RODRIGUEZ, 70- 2º28039, [email protected] http://www.fedecaza.com

CICLISMOFERRAZ 16, 5º28008, [email protected] http://www.rfec.com

COLOMBOFILIAELOY GONZALO, 34 7º IZDA28010, [email protected] http://www.realfe.com

COLUMBICULTURAXIMENEZ DE SANDOVAL, 8 ,2ª46003, [email protected] http://www.terra.es/personal3/columbicultura

DEPORTES PARA CIEGOSMONTE IGUELDO, 1228018, [email protected]

DEPORTESDE INVIERNOARROYOFRESNO, 3 A28035, MADRID91.376.99.3091.376.99.31Secretario: [email protected] Estatal: [email protected] Competición: [email protected]://www.rfedi.es

DEPORTESSORDOSMAGNUS BLIKSTAD, 54. ENTLO. A 33207, GIJÓ[email protected]

ESGRIMAFERRAZ,16 , 6º DCHA28008, [email protected] http://www.sportec.com/rfee

ESPELEOLOGÍAAYALA, 160 ,4º, DCHA.28009, MADRID

El entrenador de éxito202

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[email protected] http://www.fedespeleo.com

ESQUÍ NÁUTICOPLAZA UNIVERSIDAD, 4-2º-1ª08007, [email protected]

FÚTBOLALBERTO BOSCH, 1328014, [email protected] http://www.futvol.com

(AGRUPACIÓN ESPAÑOLA DE) FÚTBOL AMERICANOC/ SEPULVEDA, 93,2ª,1ª08015, [email protected] http://www.mccaen.com/futbolamericano

GALGOSBARQUILLO, 3828004, [email protected]

GIMNASIAFERRAZ, 16 7º IZDA28008, [email protected] http://www.sportec.com/www/rfegim

GOLFCAPITAN HAYA, 9 5º28020, [email protected] http://www.golfspainfederacion.com

HALTEROFÍLIAFRANCOS RODRIGUEZ, 70 - 5 IZDA

28039, [email protected]

HÍPICAPZA. MARQUES DE SALAMANCA, 228006, [email protected] http://www.rfhe.com

HOCKEYJUAN BRAVO, 51, 1º INTER. DCHA.28006, [email protected] http//:www.rfeh.com

JUDOFERRAZ, 16,7º IZDA28008, [email protected]://www.rfejudo.com

KÁRATEPRINCESA, 22, 3º IZDA28008, [email protected] http://www.fek-karate.com

KICKBOXINGC/ ASTURIAS S/N. ALCORCON28922, [email protected]

LUCHAS OLÍMPICAS Y D.A.GENERAL MOSCARDO, 3228020, [email protected]

MINUSVALIDOSFÍSICOSFERRAZ, 16, 1º IZDA28008, MADRID

Federaciones deportivas españolas 203

Parte V 135-215 18/4/02 14:40 Página 203

[email protected] http://www.fedmf.com

DEPORTES PARA DISCAPACITADOS INTELEC-TUALESPASEO DE LA CASTELLANA, 113, 4º IZDA.28046, [email protected]

MONTAÑA Y ESCALADAFLORIDABLANCA, 75 ENTLO 208015, [email protected] http://www.fedme.es

MOTOCICLISMOGENERAL PARDIÑAS, 71 1º28006, [email protected] http://www.rfme.com

MOTONÁUTICAAVDA. AMERICA, 3328002, [email protected]

NATACIÓNJUAN ESPLANDIU, 128007, [email protected] http://www.rfen.es

(AGRUPACIÓN ESPAÑOLA DE) CLUBES DEORIENTACIÓNC/ GRAN VIA, 66, 8º OFIC 1728013, [email protected] http://www.arrakis.es/~aeco1

PADELLUIS DE SALAZAR, 928002, [email protected] http://www.padelfederacion.es

PARALÍTICOSCEREBRALESGENERAL ZABALA, 29, ENTREPL.28002, [email protected] http://www.fedpc.org

PATINAJEALBASANZ, 52 1º IZDA.28037, [email protected] http://www.fep.es

PELOTALOS MADRAZOS, 1128014, [email protected] http://www.federaciondepelota.com

PENTATLONMODERNOMALLORCA, 237, BIS 1º 2ª08008, [email protected]

PESCANAVAS DE TOLOSA, 3,1º28013, [email protected]

PETANCARODRIGUEZ SAMPEDRO, 2 ,5º of. 50428015, [email protected] http://www.fepetanca.com

El entrenador de éxito204

Parte V 135-215 18/4/02 14:40 Página 204

PIRAGÜISMOANTRACITA 7 - 3º28045, [email protected] http://www.sportec.com/fep

POLOALCALA, 54 2º IZDA.28014, [email protected] http://www.rfepolo.org

REMONUÑEZ DE BALBOA, 16 1º IZDA28001, [email protected] http://www.federemo.org

SALVAMENTOY SOCORRISMOSAN ALEJANDRO, 1028005, [email protected] http://www.fess.es

SQUASHALBERTO ALCOCER, 26, 1º H28036, [email protected]://www.rfes.es

TAEKWONDOONDARROA, 8 BAJO48004, [email protected] http://www.fetaekwondo.es

TENISAVDA. DIAGONAL, 61808021, BARCELONA93.200.53.5593.202.12.79

[email protected] http://www.fedetenis.es

TENIS MESAFERRAZ, 16,1º IZDA28008, [email protected] http://www.rfetm.com

TIRO A VUELOJUAN ALVAREZ MENDIZABAL, 6928008, [email protected]

TIRO ARCONUÑEZ DE BALBOA, 13 ,1º IZDA28001, [email protected] http://www.federarco.es

TIRO OLIMPICOSOMBRERERIA, 2228012, [email protected] http://www.sportec.com/rfedeto

TRIATLONFERRAZ, 16 , 3º DCHA.28008, [email protected] http://www.triatlon.org

VELALUIS DE SALAZAR, 928002, [email protected] http://www.rfev.es

VOLEIBOLAUGUSTO FIGUEROA, 3 2º28004, MADRID91.701.40.9191.701.40.94

Federaciones deportivas españolas 205

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[email protected] http://www.rfevb.com

RUGBYFERRAZ, 16, 4º DCHA28008, [email protected] http://www.sportec.com/rugby

SURFAV.SALVADOR DE MADARIAGA, 68 - 10ºG15008, A CORUÑ[email protected] [email protected] http://www.fesurf.net

El entrenador de éxito206

Parte V 135-215 18/4/02 14:40 Página 206

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Bibliografía

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Parte V 135-215 18/4/02 14:40 Página 208

Esta página dejada en blanco al propósito.

AAcademia Norteamericana de Pediatría (ANP),169,173-174Ácido láctico, 98, 104Actitud, en la comunicación, 28-29Activación

óptima, 44y rendimiento, 53-54

Adaptación, durante el entrenamiento, 94Administración

del equipo, 137-153de la salud, 190-194de uno mismo, 183-194

Administración del equipoantes de la temporada, 138-145después de la temporada, 147-150durante la temporada, 145-147en sus relaciones, 150-153

Administración del tiempo, 187-190Administración fiscal

en la pretemporada, 144-146en la temporada, 145-146de los enfrentamientos, 146-147del riesgo, 155-181

Administradores, 151Agravios (responsabilidad contractual), 156Alcanzar el tope en el entrenamiento, 107Aliento, quedarse sin, 99Análisis de la situación, 60Ansiedad,

causas de la, 54-55y sobreactivación, 53-54

Aparatos de carga de resistencia variable, 112Aparatos de carga isoquinéticos, 112Aprendizaje, por parte de los atletas. Consultetambién Enseñanza

fases del, 73-74papel de los entrenadores en el, 74-75

proceso del, 72-73definición del, 71errores en el, 83evaluación del, 75-76

Árbitros, 151-152Ataques cardiacos, 191Atletas. Consulte Jugadores

CCadena comunicativa, 140-141Calcio, 126, 127Calentamientos

durante el entrenamiento, 96-97, 102durante las prácticas, 68

Calibradores del pliegue cutáneo, 130Calistenia y fuerza, 109Campeonatos

administración de los, 146-147asistencia de los padres a los, 201

Carbohidratos, dieta de, 125Carta de Derechos de los Jóvenes Atletas, 6, 179Castigo, 35, 40-41. Consulte también RefuerzoCharlas estimulantes, antes del partido, 55Ciclos de entrenamiento (periodos), 96, 115, 116,119Coherencia en la comunicación, 30-31Colecta de fondos, 144Coleman, James, 7Colesterol, suero, 191Comidas previas al partido, 124, 127-129, 201Competición durante las prácticas, 68-69, 82Complejo de carbohidratos, 125Compromiso entre los atletas jóvenes, 7Comunicación

no verbal, 20, 32-34con los jugadores, 140-141contenido de la, 20desarrollo de las técnicas para la, 27-34

Índice alfabético

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dimensiones de la, 19-20emociones en la, 20envío y recepción de mensajes, 19-20fallo de la, 21necesidad de la eficacia en la, 19proceso de la, 20-21verbal y no verbal, 20, 32-34

Condición físicarelativa a la energía, 101, 102-108energética, 101, 102-108impacto en la eficacia del entrenamiento, 93muscular, 101, 108-113

Condiciones médicas incapacitadoras, 173-174Conducta

ética y desarrollo moral de los atletas jóvenes,7-8modificación de la. Consulte Moldear medianteel Refuerzo, 38-39y mala conducta, 39-41

Conocimiento del deporteentre los atletas, 66-67entre los entrenadores, 14-15

Consulta de la Estandarización Antropométrica,Manual de, 130Control del peso, 129-132Control, 136Credibilidad en la comunicación, 27-28Cuidado de los atletas, 79, 81

DDesarrollo de la fuerza

para los atletas jóvenes, 92, 109-110y acondicionamiento muscular, 108-110y resistencia, 108, 110-111

Desarrollo de la potencia en los atletas jóvenes, 112y acondicionamiento físico muscular, 111-112

Desarrollo de la velocidaden el acondicionamiento energético, 107en el acondicionamiento muscular, 112-113

Desarrollo de los atletas como objetivo delentrenamiento, 3, 5-6, 14Deshidratación, 132-133Dieta. Consulte también Nutrición equilibrada,127

para ganar peso, 130-131para perder peso, 131de alto rendimiento, 123-124previa al partido, 124, 127-129, 202

Diferencias de género en el desarrollo de la fuerza,109Dintiman, George, 112Dirigir, 136Disposición del equipo para el aprendizaje, 78Diversión

durante las prácticas, 83necesidad de la, 44-46

Dolor durante el entrenamiento, 98Drogas para ganar peso, 131

EEjercicios

de estiramiento, 102, 103de resistencia, 110y pérdida de peso, 131

Electrolitos, equilibrio de los, 132, 133Elegibilidad de los jugadores, 141Empatía por los atletas, 15Energía

aeróbica, 102-104anaeróbica, 103-104necesaria para los deportes, 118vías de la, 102-104y nutrición, 123-126

Enfermedadcoronaria, 191-192evitar la, 91impacto en la eficacia del entrenamiento, 93-94por sobreentrenamiento, 121-122

Enseñanzacambio de rol del entrenador en la, 74-75de las técnicas, 77-88evaluación de la, 86-88planificación de la, 59-70, 138, 159-160responsabilidades legales en la, 160y cómo moldear la conducta, 38-39

Entorno, impacto en la eficacia delentrenamiento, 93Entradas arpón, 160Entrenadores. Consulte también Entrenadorasistente, 139, 151

administración de la salud para los, 190-194administración del estrés para los, 183-187administración del tiempo para los, 187-190auto-administración de los, 183-194como modelo para las conductas no verbales,33-34posiciones de apoyo para los, 139

Entrenamiento. Consulte también Desarrollo de laenergía; acondicionamiento muscular;sobreentrenamiento

a largo plazo, 97adaptación durante el, 94calentamiento y vuelta a la calma durante el,96-97, 102, 113de los preparadores, 180especificidad del, 96etapas del, 92falacias del, 97-99

El entrenador de éxito210

Parte V 135-215 18/4/02 14:40 Página 210

metas de la temporada para el, 108preparación para el, 92principios del, 91-100programas para el, 115-122progresión del, 95-96respuestas individuales al, 92-94reversibilidad del, 97sobrecarga por, 94-95, 98variación en el, 96y mejora, 94

Entrenamiento aeróbicocomo fundamento de la pirámide delentrenamiento, 104-105de los atletas jóvenes, 92, 105

Entrenamiento anaeróbicocomo parte de la pirámide de entrenamiento,106-108de los jóvenes atletas, 92, 106

Entrenamiento con pesasciclo de entrenamiento para el, 119programa para el, 119-121selección de ejercicios para el, 120directrices para el, 120-121

Entrenamiento cruzado, 96Entrenamiento fartlek, 105Entrenamiento interválico, 106Entrenamiento relativo a la energía, 104-108

directrices para el, 116ejemplo de programa para el, 118-119necesidades energéticas para el, 118plan semanal para el, 116-118programa para el, 115-119

Entrenar [Su Deporte] Eficazmente, 62Entrenar [Su Deporte] Exitosamente, 62Entrenar. Consulte también Administración delriesgo; Enseñar;

estilos al, 11-14evaluar los objetivos en la administración delequipo, 4evaluarse a uno mismo para, 16filosofía para, 15-16, 138, 200objetivos al, 3-9y objetivos personales, 8-9

Equipamientoinspección del, 166, 167para las prácticas, 68, 83responsabilidad de los entrenadores relativa

al, 143-144, 145, 148-150, 165-167Equipo

administración del, 137-153calendario del, 142-143capitán del, 142cuaderno de anotaciones para el, 141reglas para el, 141reunión previa a la temporada del, 142

sistemas de recompensas para el, 142, 150transporte del, 146y preparación del jugador, 139-142

Errores, corrigiendo los, 83-86en el rendimiento, 83

Escuchar, en la comunicación, 19-20, 31-32mejorar la técnica para, 31-32activa y pasiva, 32

Especificidad del entrenamiento, 96Estado de forma muscular, 101, 108-113.Consulte también Esteroides anabólicos, 131Estilo autoritario en el entrenamiento, 11-12Estilo cooperativo al entrenar, 12, 13-14Estilo sumiso al entrenar, 12Estrés

por el calor, 133administración del, 183-187causas del, 184evaluar la vulnerabilidad al, 185-186por el calor, 133por el entrenamiento. Consulte

SobreentrenamientoEtapa automática del entrenamiento, 74Evaluación

de la enseñanza, 86-88de la técnica comunicativa, 21-25de la técnica de los atletas en pretemporada,66-67de las sesiones prácticas, 69de los equipos, 142de los estilos al entrenar, 12-14de los hábitos de salud, 192-193de los riesgos, 157del aprendizaje, 75-76del rendimiento, 83-84por parte de los jugadores, 148, 149por parte de los padres, 201-202

Exámenes físicos para los jugadores, 168-172,200Éxito

consecución por parte de los atletas, 53durante las prácticas, 83medido a modo de victorias, 51

Expectativasde los padres, 201y motivación de los atletas, 48, 200-201

Experiencia fluida, 45Extinción, 39-40Fase mental, del aprendizaje, 74Fase práctica del aprendizaje, 74Feedback

y aprendizaje, 72, 73, 74y corrección de errores, 84-85

Fisiología deportiva, 89

Índice alfabético 211

Parte V 135-215 18/4/02 14:40 Página 211

FFIT (frecuencia, intensidad, tiempo), 94, 95Fósforo, 126Fracaso, temor al, 49-51Fracturas por estrés, 127Fredrick, Dr. Ned, 94Fumar, 191, 192, 194

GGanar

énfasis excesivo en, 5esforzarse por, 6-7filosofía respecto a, 5-8mantener la perspectiva sobre el hecho de, 8motivación para, 46-48y éxito, 51

Glicógeno muscular, 104Grasa. Consultar Grasa corporal.Grasa corporal

medición de la, 130y músculo, 99y peso, 130

Grasa, dieta, 124

HHartman, Jack, 184Herencia, impacto en la eficacia delentrenamiento, 93Hidratación y líquidos, 132-133Hierro, 126-127Hipertrofia, 109Hogg, Sonia, 184Horario de las prácticas, 82-83Hormonas androgénicas, 131Hormonas para ganar peso, 131Huesos e ingesta de calcio, 127

IIncomodidad durante el entrenamiento, 98Individualidad en el entrenamiento, 92-94Información en la comunicación, 29-30Informes, 150, 176-179Instalaciones, 143, 160-165. Consulte tambiénEquipamiento.

JJugadores

comunicación con los, 140-141dirección después de la temporada de los, 148dirección en la temporada de los, 145elección de los, 141emparejamiento de los, 167-168evaluaciones por parte de los, 148, 149reclutamiento de los, 140recompensas para los, 142, 150

salud de los, 168-172, 173-174seguimiento de los, 146

LLesión

evitar la, 91, 102, 175impacto en la eficacia del entrenamiento, 93-

94, 98informe sobre la, 178-179planes de emergencia para la, 175-176, 177por sobreentrenamiento, 121-122responsabilidad legal del entrenador con

respecto a la, 168-172, 200Leyes del buen samaritano, 158Limitaciones, necesidad de reconocer las, 52-53Líquidos e hidratación, 132-133Lombardi, Vince, 6-7

MMadden, John, 184Madurez, impacto en la eficacia delentrenamiento, 93Magnesio, 126Malabarismo, aprendizaje del, 73McGuire, Al, 184Menú del entrenamiento, 116-117Metas

de los programas de entrenamiento, 115en la instrucción, 61-66poco realistas, 49-50realistas, 52y motivación, 49-50, 52

Milo (antiguo atleta griego), 94Minerales, dieta, 126-127, 128-129Mito del entrenamiento de “Lanzarse a la quema”,98Modo entrenar-para-el-aprendizaje, 75Modo entrenar-para-el-rendimiento, 75Motivación intrínseca, 50-51Motivación, para entrenar, 15, 43Motivación, para los atletas. Consulte también Recompensas

comprender las bases de la, 43-44impacto en la eficacia del entrenamiento, 94mejora de la, 51-53y ansiedad, 53-55y miedo al fracaso, 49-51y necesidad de divertirse, 44-46y necesidad de sentirse útil, 46-48y recompensas, 44

Músculosmitos en el entrenamiento sobre los, 98-99traumas en el entrenamiento de los, 98

El entrenador de éxito212

Parte V 135-215 18/4/02 14:40 Página 212

NNegligencia comparativa, 156Negligencia contributiva, 156Novak, Michael, 6Nutrición

e hidratación, 132-133impacto en la eficacia del entrenamiento de la,93y comidas previas al partido, 124, 127-129,201y control del peso, 129-132y dieta equilibrada, 127y energía, 123-126y nutrientes, 126-129y salud, 193-194

OOrganizar, 136Osteoporosis, 127

PPadres

implicación en los equipos de los, 153programas de orientación para los, 144-145,

198-202Parseghian, Ara, 184Participación en acuerdos y renuncias, 176, 180Pedagogía deportiva, 57Perder, 47-48. Consulte también GanarPeriodización. Consulte Ciclos de entrenamientoPersonal médico, 152, 168-172, 175-176, 201Pesas libres, 112Pesas, 112Peso. Consulte Peso corporalPeso corporal

aumento del, 130-131control del, 122controlando el, 129-132 ideal, 130pérdida de, 131-132

Pirámide del entrenamiento, 104Pirámide guía alimentaria, 126Planificación

beneficios de la, 59de la administración, 135, 159-160de la enseñanza, 50-70, 138, 159-160de la temporada, 69, 65, 138diaria, 60, 68evaluación de los atletas en la, 66-67lista de comprobación de la, 69-70materia sujeta a la, 62-66para las prácticas, 67-69, 70, 145pasos en la, 61-70y fijar metas, 61-64

Pliometría, 112

Poblaciones especiales, organización deportivapara las, 209Potasio, 132Prácticas

actividades durante las, 68calentamiento para las, 68competición durante las, 68-69, 82de las técnicas, 68, 79-83el todo contra la parte, 80-81equipamiento para las, 68, 83evaluación de las, 69éxito durante las, 83fechas de las, 67horario de las, 82-83mejora de las, 81-83objetivos de las, 67planificación de las, 67-69, 70, 145rutina para las, 78supervisión por parte de los padres de las, 201vuelta a la calma después de las, 69

Preparación para el entrenamiento, 92Preparadores, certificación de los, 152Presión sanguínea alta, 191,194Presupuesto y administración fiscal, 144, 145-146Primeros auxilios, 175-176, 196Prior, Karen, 39Programación de las competiciones del equipo,142-143Programas motores, 72-73Progresión en el entrenamiento, 95-96Proteínas, dieta, 124-125Proveerse de personal, 136, 138-139Publicidad, 147

RReclutamiento, de los jugadores, 140Recompensas

extrínsecas, 38, 44intrínsecas, 38, 44para los jugadores, 142, 150frecuencia de las, 37momento de las, 37tipos de, 37-38uso apropiado de las, 36-37y motivación, 38, 44, 50-51

Refuerzoaccidental, 37emplear recompensas, 36-38modelar la conducta, 38-39para el entrenador, 41principios del, 35-41

Reglas, extracto de las, 72Rendimiento

evaluación del, 83-84

Índice alfabético 213

Parte V 135-215 18/4/02 14:40 Página 213

definición del, 71énfasis en el, 49

Reposo, impacto en la eficacia del entrenamiento,93Resistencia

muscular, 108, 110-111y fuerza, 108-110, 110-111

Responsabilidad legal, 156Responsabilidad. Consulte Administración delriesgoResponsabilidades contractuales (agravios), 156Reversibilidad del entrenamiento, 97Riesgo, administración del,

como responsabilidad de los entrenadores,144, 155, 159-180

e inmunidad, 158-159proceso de, 156-158y negligencia, 156y renuncias, 176, 180y seguros, 180-181

Ritmo cardiaco, medición del, 105, 122

SSeguimiento de los jugadores, 146Seguridad, 160-165Seguros, 180-181. Consulte tambiénAdministración del riesgoSentirse digno, necesidad de sentirse, 46-48, 51Servicios de emergencia, 175-176, 177Simplificación de las técnicas, 81Sobrecarga

en el desarrollo de la fuerza, 109por el entrenamiento, 94-95, 98

Sobreentrenamiento, 121-122Sodio, 132Sudar, 133Sueño, impacto en la eficacia del entrenamiento,93Supervisión, proporcionar adecuada, 172-174Suplementos vitamínicos, 126, 127

TTapering, en el entrenamiento, 107-108Técnicas

corrigiendo las, 83-86definición de las, 71demostración de las, 78-79 enseñanza de las, 77-88practicando las, 68, 79-83, 92presentación de las, 77-78simplificación de las, 81

Temperatura corporal, control de la, 122Temperatura. Consulte Temperatura corporalTerapia de la conducta y pérdida de peso, 132Transporte

durante la temporada, 146seguro, 179

UUmbral anaeróbico, 105-106

VVariación en el entrenamiento, 96Variedad en la dieta, 127Vermell, Dick, 184Vitaminas, dieta, 126, 127, 128-129Vuelta a la calma

después de las prácticas, 69después del entrenamiento, 96-97, 113

WWard, Robert, 112Weaver, Earl, 184Wooden, John, 30

YYodo, 126

ZZinc, 126, 127

El entrenador de éxito214

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Rainer Martens ha practicado deporte toda suvida. Ha sido entrenador en los ámbitos juvenil, deinstitutos de enseñanza y universitario, y ha estu-diado el deporte como investigador científico.Director ejecutivo oficial y presidente de HumanKinetics, también es el fundador de la PCEE. Psi-cólogo del deporte reconocido internacionalmente,Martens es autor de más de 80 artículos eruditosy 15 libros, entre los que se incluyen CoachingYoung Athletes, Joy and Sadness in Children’sSports, Competitive Anxiety in Sport, Youth SportDi-rector Guide y Parent Guide to Little League Base-ball. También ha sido un destacado orador en másde 100 conferencias por todo el mundo y ha dirigi-do más de 150 talleres de trabajo y cursos intensi-

vos para entrenadores y atletas de todas las cate-gorías.

Después de recibir su doctorado en EducaciónFísica en la Universidad de Illinois, en Cham-paign-Urbana, 1968, Martens fue miembro deesta facultad durante 16 años. Actual presidentede la Academia Norteamericana de Kinesiología yEducación Física, ha sido reconocido por su con-tribución al deporte infantil por SAY Soccer y laNational Recreation and Park Association. Tantola Emporia State University de Kansas (donde selicenció en Filosofía y Letras) como la Universi-dad de Montana (donde culminó un máster) hanhonrado a Martens con el Premio al Alumno Dis-tinguido.

Sobre el autor

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